CLEPSIDRA JOHN ASHBERY

Tro1duecw.: JUUETA fOMOONA DE SUCRE

1 lohn Ashbery naci6 en R~sIU, EskJd,o 4eNaet,l(J }'ork, ni 1927. Su primu libro depoem4~, Sorne Tmes, obtuvo el premio dela $er~ ck pl>e$fa en la UnWersid4d de Yale, en1956. Entre sw libros posleriores cksS4n: Riversand ~Iounlains (1967), Fragment (1969), ThaDouble Dre~m o Spring (1967) Y Three Poems(1972). s~ le conoce como uno de los inicuUJresde la llamada 44Escuel de Nuet'4 York", ti 14cual perkne~n. lam.biba FrMk O'Hara, KennethKoch y James Schu.,ler, con quien ha publicadoen colaboraci6n 1Ut0$ 7t4TTalitW. Quiz U4 Idd po('.la ms compkjo r a la vez vinuoso dedicha t!scuela. que, entre otros ra.~gos, se c:arac-tt'1i~1, por ~u.~ corri'spondencic.., con. 1M fenovtlCio-nt."..s plsticas que se procliasban. en Ws EstadosUnidos h~ia los aos cin.cu('n~ crnlran40 suaClifJidad na 14 retJUla Ar' News, en la qr..e U>dos

ell~ ejercieron. la crlicd 1 16 reflain estticas.Ashberr IlivU) largos aos en Par,s, m dondeernprend~ el eJtudio de la obra de RaymondRoussel. 1:."1 IlOI6ble. por lo d~ su deudtJ conla poesa francesa contempornea, upecitlbMntecon P~rre Re~rdr cuya infbuncz es $Obre toloperN"plihfe en sus pri~os pMma.J. Indwo mu-choJ crlicos lo han con.siclerado como un lejanodiscpulo del surrealismo. En algunos de sus mscomplejos poe77UU, no se percibnl tambin afini-daJeJ con MaUar~ y GUA con JIalby?

,

Su ltiTOO libro, puhlicado en 1975, es SeuPorlrait in a Convex Mirror, que es tambin elttulo del poema ms ezlemo y cenlral del oolu~men, De l ha dicho el critico narold Bloom: uLaJ

tlilit~ultaJt.s qll~ pr~~nt4 ~e 1Ul#.1:0 libro son/& legilimaJ de rotUJ gran pocsa- la pro/un,didad de la emoel6n. 14 individualidad Je 16seluihiliJ6d 1 la visin, '1 ~l poder del entendi-

m~nlo sobre el lengooje ,. el un.Weno d~ lomuerte", No el la primera toe: que Bloom seocupa de Ashbe,.,, En Tbe Anxiety of Influence(1973), libro donde eJtableoe una Irama de rela-cione.s enue poel& de diJtin14.s geneT(KwneJ. U,considera no slo como el continuador de la obrade Irallace StevenJ siilO sobre todo COTOO su inlerUJrlllOT ,nJ pertinentP.. upol'.t.ry it me $uhjl>('l o/lI,e pvem", haba afirmado Stet'ens en uno de SUJgrandes textos de lo.~ aos treinta (UThe Manwith 'he Blue GuiulT"). Es fcil dutemil' qu~este postulado sigue operando en la poesa de

A.~hber.,.. '1 muy agudamenle en el poema quepre~ntamo$ aqu, perteneC?1tle al libro Rivenaud Mountains,

11 Clep$idra ~ un poema sobre la awencJ:en l se enITenl~1t una T~litUJd ex:ema, ~'regada en su mm~l'k':1tJ, pura UtkmperJ.e

ensimiJma

a una concien.cia en OCIiIud platnico, que quiere~tTuir la rtulical a1leTida.d de k;) ~ est4 funade dla ., encontrar su relacin con el $U. Pero la

$u~rfici~ de lo real Je ktpliega G d m~ma,indiferente a 14 mirat14 que busca fijarla, clOJi.ficarla en categoras; t011UJ formas mltiples q~burlM los esfuerzt qzu pretenden agotarla conpalabras ,. no ofrece asickro 4lguno pues t.rasella no hay nada, es pura contingen.cia. lA concit!nCia, ,.1 ul~copio en el poema, trata de re-ducir a escala /rumaIUJ el mundo circundantepara alcanzar un punto lijo. una r~McUSn, pero"mUJ fumu invisible con..ctan1em~nJe d~tru,.e '1renueva las pretlione.s" ,. as el mundo del tele.$copio acaoo siempre por cont;erlirs,. m "un po'.villo muy fino" que n.adtl puP.dP. d,..cirnM.

"El nus herrn.No de J.()$ uni","so$ lU) ~s m4.cque un montn de escombros apilados al azar',h:/Ma dir.ho Iferr.lito. En A.fhhp.r,.. fI..s/e. tIZnT,c.\w wl'encia ck necesidad ll~ a la conciendaa JU1ccne /luiJ4 kJmbi~n r libre. La I/nY1 a"excluir el conocimiento de ~a otra vida f'Olunuu';a, y as mantener sus races en' lo oscuro"pora cllfregarsc de lleno a la presencia inmediata.(Jholir el hiato entre e1l4 "! $U objeto 1. por es14va, alcanzar la ferdad: ese momento -dkcAshbery- en qut! "tu pelo se (.()nvierte realmentet.on las ram(Js de un Tbol con la luz derramn-dose sobre ellos". No importa que e.fa verdadM $ea m4s que "k;) poquito qll~ t".$taha pr~fntu./a merabk totalidad convocad4 ~n un momenrocualquieu/', y no importa que sea precaria r

..

que Cdda uno de SUS instantes "se duipe en 10$remolas confines de 14 rwcJ,'. Para que ~n, dpoema ocurra ~l encuentro enJTe conciencia rrealidad, para que sea posible el intercambio, lamirad.4 ("permilir senderOJ niffladl).f hada la mi.rada de su esJar aUr'), ha')' que abandonar lasignificacin y proceder por alusiOO, As. la minuciosidad a,~rbal, la precisin que va cercando alo real desemboca en la imprecuin, en la inJ~terminacin, i'.n 14."danza del TU) dl'.Jcubrimienlo',Aqu t4mbin, dicA() en tbmMs de Foucault, ellenguaje Ira rolo su viejo parenlesco con J$ co-,~, ,. /0$ palabras vienen a cerrarse sobre .suna/.uTakza de signo. Conckncia '1 realidad sehacen UruJ sola cosa, indisoluble: kn~uaje. Comose obserr;a en Clepsidra: .. ," no debe ol~iclarseqUf1 14 rUllurale14 ele este vaco, esla..f previsio-'Iles, es qlU! sl() podian suceder aqu~ en estapgina", (fna red de signos que se relacionanCQn..figo mis71W.

El acto polico, por tanto, es el nico actocapaz de ~/rt.nlar$e a la sea,-era inemin delroos, a la obstinada alleridad del mundo. AUllql,eloJo termine ('.o1nO para el persmtaif! de Rorgesque trata de dibujar un mapa con ros r montarcu y bosque$ ,. lo que logra es un dibujo de .supropia car~ la conciencia, al abandonar sus pre-rrogal:as ---ese im~rIJlismo de que hab14baSarlrc- Uega finalmente a integrarse a 14 totalidad, es esa lOtaliJad r ya no sobra naela ("met'eO a mi rnmo en esa tolalidcJ'). A trav~

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dellengua;e ya n~ es ms q~ "un JUlgrama transoparente", un espacw compartido r COTTU1, re~rtado erUTe do$ tiempos.

l\'i la c.oncietKUz ni l4 realidad Jran gan4d.o14 holal14. l",inguna de 143 dOJ con.~tilure a laotra: ambas son p~ma, le"guaj~ la verdad qu~por un in.'14nle ka. enca~ antes de que vengana mndificarla "los rO$lrO$ dI! 14 tarde"

Julieta Fombona de Sucre

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JHN ASHBERY

CLEPSIDRA

No ha el cielo? De regreso de haber movido a la otraAutoridad recientemente cada, extrado tantaLuz severa como necesitas ahora para el caminoQue tomas. La razn de que slo sucediese desdeQue t despertaste est dejando que el vapor se disipeDe esas nubes cuando el paisaje circundanteSon parajes lomados que habr que tener en cuentaDentro del total para que pueda haber ms aire: o sea,Ms adecuacin en el resultado no deducido, que tierra.Esto requiere nunca acercarse ms al principioBsico que opera detrs, que a la perturbadaEntidad de un espejismo. Los vaivenes a medias percibidos yA medias deliberados de frondas que surgen de las ociosas hondurasQue son el verano. Y la expansin en pequeas corrientes de aire.La respuesta despierta con facilidad, saeteando desdeLa mentira hasta el momento buscado, apenas llamado a ser

t= y ya henchido, como una catarata

:;: Que martillea a diferentes niveles. Cada momentodel enunciado es el verdadero; asimismo ninguno es verdadero,Slo lo es el rebotar de aire a aire, un gestoSinuoso que esconde a la verdad detrs de un mensajeCongruente, como el aire esconde al cielo, aunque, de hecho estDespedazndola miembro a miembro en este mismo momento: peroEl cielo ya present su alegato y es ste un tipo de no ausenciaCasi tan grcil como uno u otro tena derecho a esperar: ya seTrate de la forma de algn creador que momentneamente se haDado vueha, combinando el distanciamiento con el respeto, de modo que las pIezasSe presentan como partes de un espectro, independientesAunque simblicas respecto a sus espaciadas horas de llegada;Ya sea por otra parte que todo ello tenga que considerarseComo mala suerte. Una recurrente blancura comoEl rostro del placer de la piedra, exhibiendo a guisaDe fosas nasales lo que slo es polvo. Pero el argumento,Esa es su manera, ya los ha dejado atrs: es,

Segn quiere hacernos creer, el alboroto blanco ms allLo que importa: chillidos informes, estallidos,Giros artificiosos y tonos de voz llamadosPor sombras ms altas hacia alguna nube de creenciaO hacia su circunferencia no enunciada. Pero la luzYa se ha ido de all tambin y pueden muy bien serLneas contractndose en un plano. Se oyen tantas cosasacerca de su accin ulterior que finalmente parece queSomos nosotros, el que lo tomemos en cuenta ms bien,La respuesta que suscit la pregunta, yQue esta ltima, como una persona despertndose sobre una almohadaTiene la sensacin de haber soado todo aquello,De regresar para participar en ese sueo, hastaQuedar agotada la ltima palabra: esto constituye ciertamenteUna suerte de paz, como redes secndose al sol,El que tengamos que avanzar hacia todo aquelloHace ms o menos una hora. Mientras se mantenga all

~ Lo desears en tanto su jirn de pared se sumergeMs hondo como ahuecado por la luz del sol queLo cubre cabalmente; es a la vez un espejismo y lo poquitoQue estaba presente, la miserable totalidadConvocada en un momento cualquiera, como tus ojosy todas las cosas de que hablan, tus manos por ejemplo, conAcentos perdidos ms all de todo sueo de desearlos otra vez.Tener esto de donde regresar constantemente-Nada ms, en verdad, que sorpresa ante tu ausenciay la preparacin para continuar el dilogo enEsas misteriosas y cercanas regiones que sonPrecisamente la hora de su promocin.Vindolo, tal como era, dividiendo ese tiempoEnarbolando remos coloreados contra el oleajeDe un futuro de desunin slo por abolir la confusiny permitir senderos nivelados hacia la mirada de su estarAll con admiracin, fue entonces, cuando eran estos

Momentos lo que eran la verdad, aunque cada uno se disipaseEn los remotos confines de la noche. PeroNo fue su ceguera, ms bien, y no se deba staAl hecho de estar tan adentrados el uno en el otro queNinguno de los dos llegara nunca a ver su camino con claridad otra vez?Esto no estremeca a la imaginacin mientras permanecieseEn ese estado, comparable al de la exclusin de la luz de las estrellasQue empapaba cada instante de ese ser, en una forma egosta,Como si su tiempo redondo slo fuese el reversoDe algn propsito ms oculto y vengativo que se dara a conocerUna vez que su resultado hubiese ms o menos establecidoLa apariencia del horizonte. Pero la condicinDe esos momentos de elasticidad sin tiempo y de cegueraSe vea secretamente juntada de modoQue sus caminos pudiesen cruzarse de nuevo y separarseSlo para juntarse de nuevo en una asuncin final alzndose como un gritoy no tener fin en el descubrimiento de la naturaleza

00 Declamatoria de la distancia recorrida. Todo esto noDeja de tener pequeas variaciones y sorpresas, peroUna fuente invisible constantemente destruye y renueva las previsiones.Entonces es su permanencia meramente una funcin deLa seguridad con que es entendida, esa seguridadQue, dicho sea de paso, incide tanto en el condicionamientoDe cualquier resultado? Sin embargo no hubo ninguna afirmacinAl comienzo. Slo hubo un yermo sin aire,Un grito mudo configurndolo todo en proyectadosEfectos posteriores abandonados por haber desempeado el papelQue se les destinaba, aunque no debe olvidarse que la naturalezaDe este vaco, de estas previsiones,Es que slo podan suceder aqu, en esta pgina mantenidaDemasiado cerca para ser legible, llena de borrones,Si descontamos que pusieron fin a todo en la transparente esfera deLo propuesto hace apenas un instante, alejndose en espiralesy su gesto disolvindose finalmente en el clima.

Fue un largo camino para regresar de la tristezaDe ese primer encuentro: Un triunfo a medias, un sentimiento imaginarioQue todava protega sus acontecimientos y pausas, comoUn telescopio protege su vista de montaas distantesy todo lo que incluyen, el ir y venir,Movindose con correccin hacia niveles ms altos, preparndose aPasar la noche all donde se detienen minsculas figuras cuandoSobreviene la oscuridad, junto a algn torrente clamorosoEn un paisaje vaco aunque personal, que, por aadidura, tieneLa ventaja de ser lo que circunda sin insistencia, el propioAliento tan honorablemente ofrecido y aceptado en el mismo espritu.Haba, de hecho, placer en esos altos muros.Cada momento pareca ahondar hacia atrs en los siglosEn busca de provecho y modales, y una antigua manera de mirar queContinuamente configuraba una sonrisa en esos labios. O eraComo detenerse a la orilla de un puerto temprano en una maana de veranoCon las discretas sombras que proyectan las aguas por todas partes

y un sentimiento, otra vez, de vaco, pero tambin de abundanciaPor la manera como todo aquello est organizado, en qu milagrosa escala,Lo que se entiende de veras por una escala humana, con figuras de gigantesNo mucho ms grandes que los hombres que han venido a presentarles. su peticin:Un momento que se ofreca no slo a s mismo, sinoTambin los medios de preservarlo, de no convertirse en polvoO gestos en algn lugar ms allSino de hacerse complicado como el torrenteEn nuevos pasajes oscuros, lgrimas y risas queSon una seal de vida, de vida distante en este caso.y sin embargo, como pasa siempre, llegara un momento en queLos actos ya no bastasen y la calmaDe esta verdadera progresin se endureciese en jironesDe otro tipo de calma, volviendo a la conclusin, sus premisasEstablecidas antes de haber llegado a ningn acuerdo formal, y de ah,Un escrito que era la sombra de la inmensa razn detrs de todo estoComo otro cuerpo rgido detrs del que sabemos es nuestro.

y fue en vano que las lgrimas borronearan ahora el contrato, ya queHaba sido libremente establecido y aceptado como garantaContra la mismsima condicin que ahora trataba tan eficientementeDe asentar. Haba reducido aquel otro mundo,El redondo del telescopio, a una suerte de polvo muy finoTan diminuto que el espacio no poda recordarlo.De all en adelante cualquier indicio de emocin se veaCortado de raz por el solaz y la seguridad, aun una cierta elegancia,Como los aparejos de un barco, que, despus de todo,Son las cosas ms normales del mundo. S, quiz, pel'o las palabras"Despus de todo" son importantes para entender la casiExagerada severidad de la condicin, y por qu, pese a ello,Pareca poco probable que la validez de la continuacinDe lo anterior quedase reinstaurada por mucho tiempo."Despus de todo", esto tambin podra ser posible, como en efectoMuchas cosas diferentes son posibles en el ngulo creciente delDa cuando ste viene a sonrosarse de placer y crecimiento,

~ De modo que la luz se sumerge en s misma, se hace oscura y pesadaComo una superficie manchada de tinta: haba algo no delTodo bueno o correcto en el aspecto que tomabanLas cosas recientemente: no haba sido el propsitoDe toda esta nueva construccin el proporcionarUn mbito protegido para los intercambios a los que cada cualAdjudicaba un inters tan vital, y no se estaba ahora dando aires de palacio?y sin embargo su pelo nunca haba sido tan largo.Era una sensacin de bienestar, si se quiere, como si el ms pequeoy distante impulso hubiese vuelto ultrasensible a toda la superficie,Pero su ferocidad era todava aquiescenciaAnte la naturaleza de esta bondad ya pasaday era una suerte de dulce reconocimiento de cmoEl pasado es tuyo, para conservarlo invisible si se quierePero tambin para hacer con l absurdas lucubracionesy prolongar as la danza del nodescubrimientoEn edificaciones frgiles y vanas que son no obstante

El mapa de tus deseos, irreprochable, ms allDe la locura y del dedo de la noche que se aprOXIma, SI es queDeseas ordenarlo de esta manera. Tus actosSon centinelas contra esta calladaInvasin. Que tengas larga prosperidad y que tus aos seanLos estertores de lo que an ahora se est agotando a s mismoEn un ltimo esfuerzo por burlarnos; slo podra ser un mapaDel mundo: de esas pennsulas que en su derrota se conviertenEn prolongaciones de nuestra renuencia a acercarnos, pero tambinDe das esplndidos cuya memorable sucesin de acontecimientosDe all en adelante y para siempre nos veremos tentados a rememorar. No estoyHablando de un intento parcialmente exitoso de serOpuesto: cualquiera puede leer esa pgina, basta conPonrsela ante los ojos. Digo ahora algo mucho ms amplio,La suma integral de todos los aspectos individuales que puedenLlegar a ser legibles alguna vez en lo que est afuera, tanto en las rocasy el follaje como en el invisible aspecto del distante

~ Eter y en el puo de hierro que se cierra bruscamente sobre el tuyo.Me veo a m mismo en esta totalidad, y entretantoNo soy ms que un transparente diagrama de modales yPalabras de uso privado con la certeza de estar a punto de caer.'Y aun esta migaja de vida te la debo tambin a tiPor estar tan cerca como para excluir todo conocimiento de esaOtra vida voluntaria, y mantener as sus races en lo oscuro hastaTu madurez cuando tus cabellos se convertirn realmente en las ramasDe un rbol con la luz derramndose sobre ellos.Esto intensifica los ecos de tal manera queForma un pasaje para absorber todo movimiento correcto.As cualquier direccin adoptada resultaba ser la correcta,Pues conduca primero a ti, y a tra~s de ti aM mismo que est ms all de ti y que es la misma cosa que el espacio,O sea los vehculos balbucientes que permanecen ocultos,Devorando el cielo con toda sinceridad porque la diferenciaNunea puede quedar compensada: entonces por qu no examinar la distancia?

Pareca que haba estado repitiendo la miama frase estpidaUna y otra vez durante toda su vida; entretantoDestinos infantiles haban madurado suavemente; iba aHaber una reunin o recoleccin de stos esa misma tarde.Ll, por supuesto, estaba fuera de todo eso por haberse quedadoAlegremente despierto tendido en las tibias orillas de ese prado o lo que fuereCuyo centro empezaba a agitarse oscuramente, pero an ms porTener la progresin de los minutos al aceptarla como se aceptan las gotas de lluviaCuando se juntan en un chaparrn, y sin preocuparse por el buen tiempo que vendr despus.Por qu no podra cualquier msica o cualquier clima permanecer igualSin ningn crecimiento? Debera haber un equilibrio invariable deSatisfaccin que mantuviese todo en su lugar, cuidando deLas memorias atrofiadas, ayudndolas a mantenerse por s solasy a retornar al mundo, sin. volverse nunca hacia atrs a considerarLo que podran haber sido, aun cuando al hacerloHubiesen podido slo por esa vez ser la verdad que, invisible,

!:; Nos rodea sin embargo como el aire y es la fuerza que se interpone

~ Entre el ms pequeo de nuestros pasos y las no~as que tomamos sobre ellos.Porque todo es relativo esPor 10 que nunca veremos en esa esfera de la sah' duda pura yDel entretenimiento mucho ms que las sombras a tientas de una incompletaExistencia anterior tan cercana que quema como la boca queSe cierra sobre todo tu esfuerzo igual al momentoDe la muerte, pero se queda, estampando con rabia y fuego el designio deSus intenciones en la morada de tu cerebro, hasta queDespiertas a solas con la certeza de queNo fue un sueo como nico indicio de por qu las paredesSe te echan encima y las ventanas ya no hablanDel tiempo sino que son ellas mismas, transparentes guardianes queInventaste para lo que haba que ocultar. Lo cual ahoraHa crecido, o se ha movido ms all, como existeUno cuando no hay nadie que la mire, y estaExistencia socava a la tuya. Quiz se te mantiene aquSlo para que en alguna otra parte la peculiar luz del

Propsito de alguien pueda fulgurar inesperadamente en los agudosAngulas de las habitaciones. No es pues un asuntoDe no haber vivido en vano. Lo que se quiere es que esta distanteImagen de ti mismo, tu verdadera forma de ser, sea la pruebaDe cmo te ves a ti mismo, y a despecho de que hayas o noVacilado, se podra presumir que has ganado, que estaRepresentacin ptrea y externaDevuelve el eco entero de lo que queras decirSin que sobre nada, desde esa circunferencia ahora encendidaDe ex-posibilidades convertidas en hechos presentes, y tDebes llevarlas como vestiduras, movindote en la sombra deTu existencia nica y doble, despertndote con la intactaApreciacin de ella, mientras la maana est todava quieta y antes de que el cuerpoSea modificado por los rostros de la tarde.

CWldrrDOI de OifuOn/&rit MBRt.."VES" 1\."9 9.Eebudo pool' 1.. f)r\il G..o",.1 de C..hu,. deJI Cobrru.tciD ck-1 Diltrito FtdM'.tl )' lwnd.&ru.Imp'rMl f"Il I~ Il1!prl'lUI ~flJlll,.lf..1 d.o c..r.II'."~ ti lIlN ele JIWV) de 197a.ro1cul VCa.ezul'lol.

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