Los cortesanos de “El tranvía”

I Acto

Partida de Ajedrez

Ingenuo: la juventud necesita un mesías, uno que rompa las tinieblas de lo pos moderno, que alce la voz para decir que no todo es válido; no es válido matar, no es valido robar, no es válido callar, ni el arte ni la verdad han muerto, lo que pasa es que nuestros corazones se han cansado de buscar…

Leonardo:Lo que necesitamos saber para estar tranquilos es que tenemos la certeza necesaria, que si bien la verdad es inalcanzable, al menos la certeza es suficiente…

ing-suficiente ¿para quién? ¿de qué sirve la certeza a un marinero cuando la tormenta amenaza con devorar su barco? Si la certeza es el naufragio, estamos todos perdidos-

leo- pero ¿para qué buscas la paz? ¿no sabes que ese es el fin del mundo? Mira, sigue habiendo malos gobiernos y pueblos mansos, ¿paz? ¿verdad? ¿justicia? ¿te parece acaso que ya está resuelta la última labor del hombre? ¿te parece que ya todo está dicho? Porque si es así entonces perdimos y si es así y la verdad no existe, ¿qué verdad buscas? ¿qué justicia escuchará la verdad si esta ha perecido? El mesías, la resurrección de la verdad…

ing-la resurrección de la verdad podría traer muchos muertos…

leo-sí, pero no más que los que ha provocado su ausencia

ing-Ayer estaba en una biblioteca antigua y después pasear por sus pasillos, después de leer algunos títulos y oler la polilla, salí lleno de esperanza, pensé que esto era el hijo de la tierra, el único y legítimo hijo de la tierra, pues ¿en qué otro lugar están presentes los que deberían estarlo?

leo-acaso ¿en los cementerios?

ing-pero algunos murieron en el mar y otro en los cielos, sin embargo su memoria está aquí, amarillenta, llena de rimas y premisas, de cálculos y teoremas, de obras y versos.

leo-el arte necesita un mesías digno, de sus antiguos apóstoles

ing-el arte necesita artistas.

leo-¿qué es un artista?

ing-eso amigo, es lo que aún no estoy seguro decirte y no preguntes ya por el arte, cosa imposible sería hablar del juez sin saber qué es la justicia

leo-pero algo debes saber sobre el arte para decir que necesita un mesías

ing-es que ya todo son líneas y puntos, conceptos e “innovaciones”

leo-entonces pon curvas y triángulos, argumentos y premisas

ing-¿será que la posmodernidad es un pretexto para ser mediocre?

leo-¿y no buscar la verdad?

ing-sí, creo que es eso

leo-¿entonces el mesías del arte tiene qué ser el némesis de la desidia?

ing-el némesis de la posmodernidad debe ser el amor

Leo-¿cómo carajos llegamos ahí?

ing-no sé, bueno, el amor siempre nos salva de todo ¿no?, o ¿no es por amor que daríamos la vida? ¿por amor no hemos dado la última gota de sudor para levantar las preseas? ¿no es por amor que la humanidad soporta sus heridas? ¿no es por amor que el maestro enseña las letras?

leo-sí, pero en ¿qué sirve el amor al arte y a la verdad?

ing-que si por amor daría uno todo, por amor a la verdad y al arte, uno buscará la forma de colmarlos de gloria, de honrarlos y máxime si el arte y la verdad son para los que amamos, como el hermano y el padre, el indigente y el solidario, para el académico y para el campesino, porqué ¿quién podría vivir sin música? ¿quién no se alegra con un baile?

leo-pero el amor no es arte y tampoco justicia porque entonces sería arte y justicia

ing-por eso mismo es el mesías de ambos, porque ¿quién podría salvarse a si mismo?

loe-creo que si nadie puede salvarse a si mismos, entonces no merece ser salvado.

ing-pero es que ni el amor, ni el arte ni siquiera la verdad ni la justicia merecen ser salvadas por si mismas

leo-es evidente que no, pero ¿tú por qué lo crees así?

ing-porque no son cosas, son más bien cosas que hace el hombre, y antes de salvar al arte y al amor o la justica y la verdad, habría que salvar al hombre…

leo-entonces la posmodernidad es el hecho de que…

ing-de que el hombre está a salvo no estándolo…

leo-¿cómo es eso?

ing-tú puedes tener la verdad, porque la verdad no existe, igual puedes hacer arte porque cualquier creación es arte, pero según esto el político y el artista son humanos por igual. El problema está aquí, en creer que todo es válido, porque entonces todo será válido, lo que necesitamos es revivir a la verdad

leo-pero te acusarán de fascista

ing-tal vez

leo-y si lo logras se burlarán de ti…

ing-tal vez…

leo-si fracasas te matarán…

ing-tal vez…

leo-O peor aún te olvidarán…

ing-¡todo menos eso! El humano sólo será humano buscando la verdad, pero si sólo encuentra mentiras, al menos nadie podrá negar su búsqueda, en cambio el que no busca la verdad si la llega a encontrar por casualidad, será como haberla robado, pues no se puede comer el pan que no se trabaja…

leo-y en todo caso sería una mentira, supongo que si no trabajas la verdad no tienes derecho a hablar de ella, quizá por eso nadie habla de ella..

ing-será culpa de los relativistas y pragmáticos

leo-claro, ¿de qué sirve? ¿cuántas ganancias reporta? ¿a cuánto cotiza?

ing-sospecho que de existir un banco donde la moneda sean secretos los más ricos serían los gobernantes, los filósofos y algunos poetas, y es que la mentira tiene sus palacios en los secretos y el silencio.

leo-entonces quizá el mesías deba llegar gritando

ing-entonces el mesías ha estado dormido mucho tiempo o quizá es un león al que han desprovisto de garras y colmillos, como a la justicia le quitaron la verdad y le pusieron precio.

leo-pero ¿y al arte que le han quitado?

ing-nada, pero al artista todo, empezando por el amor, porque el amor ya tiene otra ideología, por eso creo que tenemos que rescatar al amor para rescatar al arte…

leo-pero ¿por qué insistes en el amor como mesías?

ing-porque el odio mata lo que amamos, el amor lo que odiamos, el silencio mata a la verdad y aunque el ruido no sea la verdad, anuncia que hay un camino, un algo, algo más que una certeza.

leo-recuerda “el amor es el silencio más fino, el más tembloroso, el más insoportable…”

ing-por eso mismo. El amor tembloroso e insoportable el que mató a la verdad, el que calla para hacerse amante, no, el amor ya ha callado demasiado, el amor nos llamará a nuestras trincheras, A nuestras lujurias, a nuestro arte y a la vez a la verdad, a la única que se base en el amor; la verdad del arte.

leo-bellas palabras, ¿pero significan algo?

ing-¿cómo? ¿no has entendido?

leo-lo que entiendo es que amas la libertad, el amor, la verdad, la justicia, pero lo que no entiendo es ¿por qué es una obligación del artista, del arte o del político o la política o del hombre mismo amar la verdad, la libertad, el amor?

ing-es necesario porque, porque, pues porque es la mejor forma de perder el tiempo

leo-al fin, ¿lo ves? Tú no tienes cosas que perder por eso dices esas cosas

ing-claro que tengo cosas que perder, pero no son cosas que cuesten , sino que valen

leo-¿cómo qué cosas?

ing-como la juventud que me ha llevado a cientos de camas, la belleza que he visto caminar en las calles de mi ciudad y que deleitan mis ojos más que mil bellas pinturas, o la música que inunda todo de belleza y hace más bello incluso el cielo azul, esas cosas que disfrutaría el hombre de no tener automóviles, computadoras o vaqueros, creo que sobre todo tengo vida, es decir tiempo, y no encuentro mejor forma de usarlo que amando y hacer del amor un motor para todo.

leo-romántico, de nadie, para nadie sirves y a nadie beneficia tu amor, creo que tu mesías no podrá salvar al mundo

ing-pero al menos , de eso estoy seguro ; salvará a muchos de sí mismos.

Leo: jaque mate

Ing: la muerte llega cuando debe de llegar, justo tengo que irme, espero verte pronto

Leo: seguro habrá una resurrección

Ing una muy grande, espera noticias mías

Fin del primer acto

II Acto

Salón de baile

Ella: ¿podemos parar? Es que me duelen un poco los pies

Él: pero es que disfruto tanto bailar contigo, anda, sólo una pieza más

Ella: está sólo una más, pero sólo una más

(bailan)

Él: pensaba decirte algo poético, pero no puedo, es patético, tu belleza opaca todas las demás bellezas, así que mejor dime algo tú

Ella: jajaja mira que son las cosas, sabes me gustaría seguir todo esto del coqueteo, pero esta noche en especial no puedo, es patético, mi tristeza opaca todas las sonrisas

Él: ¿qué cosa tan grave acecha tu ánimo?

Ella: no es que aceche mi ánimo, acecha a la vida misma, es un felino que teje la noche, es un ojo, es todo lo obscuro y a la vez algo tan propio

Él: ¿de qué hablas?

Ella_ es la vida amor, es la vida y la muerte, que se escapa como río que llora su propia partida, y uno a veces es río y a veces es balsa, pero en noches como esta el río llega hasta el mar y todo se hace confuso cuando dar un beso en las aguas de delta, que no es sal pero tampoco gloria. Nada amor, nada, permite que te explique; esta noche tpú y yo debimos hacer el amor después de beber y bailar, como los preescribe el dios, pero hoy no puedo ignorar que el mar se hace un con el cielo y llenamos con más sal sus aguas, son las pónticas riberas que llegan al delta, es la vida que se hace muerte y el amor que sobrevive como fantasma, ¿es qué acaso la vida es tan poca cosa que lo único que nos queda es tratar de aferrarnos a ella?

Él: ¿eres universitaria?

Ella: no, soy sólo una vagabunda, sé que no lo parezco, pero no tendría que parecerlo, pero igual que muchos no tengo puerto fijo, después de todo; es doloroso nacer sin anclas.

Él: pero hay que izar las velas

Ella: pero ¿hacia dónde?

Él: supongo que algún lado han de llegar

Ella: el problema es que uno nunca llega, a veces uno cree llegar y entonces es necesario volver a partir, ay debí ser marinera, pero no, en vez de eso soy una nostálgica, quizá sea mejor así, no me gusta mucho el pescado

Él: y ¿qué sí te gusta?

Ella: recordar, pero lo evito por salud mental, no puedo permitirme quedar loca antes de los treinta

Él: ¿y por qué te gusta recordar si te lastima tanto?

Ella: es que, creo que al final es cierto…

Él: ¿qué?

Ella: matamos lo que amamos, lo demás no ha estado vivo nunca, es verdad, a veces uno sólo puede sobrevivir a través de la muerte de lo amado porque sólo entonces uno muere, como sacrificio y entonces cuando muere el amor ninguno puede sobrevivir, ninguno que haya amado de verdad, recordar eso me gusta, porque me da la impresión de que no amé y entonces parece como si el sufrimiento no fuera demasiado, ni el dolor tan pesado, es agradecer que sobreviví al amor.

Él: es como si un barco condenado a muerte huyera, por eso te deshiciste de tus anclas, por eso no quieres regresar a puerto, temes volver a amar, a volver a morir, crees que los cupidos son centinelas del edén. Pero ni hoy ni ayer se acabará la muerte, nosotros moriremos después de esta noche porque no tenemos tanto amor que darnos…

Ella: no somos puerto

Él: pero somos gaviotas

Ella: somos polvo y sumbra

Él: aprovecha el día et dame basia, deinde centum

Ella: te odio y amo

Él: ¿por qué?

Ella: no sé, pero lo siento y me atormenta.

Él: ¿eres poeta?

Ella: no, soy mujer

Él: osea la patrona de todos los poetas

Ella: algo así, al menos de los poetas de bajo presupuesto

Él: me pone entre la espada y la pared

Ella: ¿yo? ¿por qué?

Él: porque me gustaría invitarle un buen trago pero no me sería lícito hacerla mi musa

Ella: pero podría hacerme usted otra cosa

Él: ¿a sí? ¿cómo qué le gustaría que se haga por vos?

Ella: un favor

Él: diga usted ¿qué favor?

Ella: podría llevarme al cementerio

Él: ¿al cementerio? Claro, pero puedo preguntarle ¿por qué a un cementerio?

Ella: a estas horas no hay lugar más tranquilo para hablar con la conciencia

Él: ¿no prefiere usted que la lleve a un hotel o a su casa? Quizá deba descansar, no creo que sea bueno que alguien de su belleza y fragilidad ronden tan noche por un cementerio

Ella: no, en serio, ¿podría hacerme usted ese favor o mejor llamó a un taxi?

Él: claro, claro , pues vamos

Ella: gracias

(sale primero ella)

Él: nunca lo he hecho en un cementerio y aunque la mujer es rara, también es un cuero.

Fin del segundo acto

Tercer Acto

El cementerio

Ella: gracias buen amigo, efímero amante, espero verte algún día más por el salón, pero por ahora me gustaría ir sola

Él: ¿cómo que sola? Hay muchos bandidos que pueden hacerte daño, deja que te acompañe

Ella: no, de hecho tú eres el único cerca, y por tanto el único al que debo temer, por favor, vete, ya te dije que otro día en el salón te veré

Él: bueno, pero dame tu número, para estar en contacto

Ella: muy bien, toma, es mi tarjeta

Él: gracias, Esperanza, mira ¡qué bonito nombre!

Ella: gracias, es más bien una ironía

Él: será, bueno mi nombre es Jesús, como el mesías

Ella: sí, como tantos profetas

Él. Bueno, hasta luego, espero verte pronto (sale de escena)

Ella: bueno ahora sólo queda esperar, ¿dónde estará? fue aquí , aquí enterramos a los chicos. Sí, fue aquí, no podría olvidarlo.

(llega el ingenuo)

Ingenuo: dicen que hay que mirar con los ojos al suelo, dicen que si miras las estrellas los baches de esta ciudad te harán tropezar

Ella: lo que no dijeron es que quien no mira las estrellas no tiene para que caminar

Ingenuo: hace tanto que murió

Ella: hace tanto que la noche se hizo eterna

Ingenuo: ¿recuerdas su nombre o acaso no ha muerto?

Ella: ha muerto y sí, recuerdo su nombre

Ingenuo: entonces no ha muerto

Ella: ¿recuerdas cómo fue?

Ingenuo: sí, por muchas semanas la habían estado siguiendo, a todos lados, pero no sospechaba porque la perseguían en bicicleta, ¿desde cuándo se persigue a los poetas en bicicleta? Sólo sabemos que el último lugar que visitó fue el de su amante

Ella: tu hermano

Ingenuo: sí, ahí está aún su bicicleta, encadenada al árbol, sólo eso quedó, mi hermano la esperaba pero nunca la oró subir.

Ella:¿por qué a ella?

Ingenuo: no lo sé, era alguien inofensiva, bueno me rompió el corazón y habrá roto algunos vidrios pero nunca lastimó a nadie, sólo fue libre

Ella: ese es un precio muy caro en nuestro mundo

Ingenuo: pero decidió pagarlo, aunque no debería costar la vida

Ella: a veces uno no tiene opción, a veces uno solamente lucha por lo que es y lo que cree

Ingenuo: por eso no ha muerto, por eso su piedra sigue doliendo, es como una agonía, como si no se decidiera a morir, como si lo único que estuviera muerto fuera lo que no resiste.

Ella: sí, su muerto vino como un incendio a devorar las sombras que lo apagaron

Ingenuo: de las sombras nace la lumbre

Ella: de las sombras, los nombres que aún viven, que respiran y que como semillas vuelven a la tierra lo que a la tierra le quitaron; vida y muerte, ser o no ser, he ahí el dilema, si al final la muerte es común, ¿por qué no la vida y también la lucha? A veces pareciera que le tememos a la muerte, y es ella quien menos distinciones tiene entre las clases. Aunque a veces su diplomacia duele…

Ingenuo; la felicidad de haber existido se opaca con su final…

Ella: pero un fin es comienzo de otras

Ingenuo: y ahora que ha muerto ¿qué?

Ella: visitar su tumba los domingos y días feriados, poner una veladora en la ofrenda y marchar por su memoria

Ingenuo: ¿y ya?

Ella: no, también luchar por sus luchas, por lo de siempre, porque desde siempre a los mismos nos va igual. Luchar por sus sueños, hacerlos nuestros, unirlos a los nuestros, ver en sus pasos un camino ¿no es lo que hizo?

Ingenuo: si para marcar historia debes morir como la han muerto, ¿qué clase de padres somos de la paz entonces?

Ella: para progresar, hoy más que nunca américa debe ser la patria de los sueños y las autopías

Ingenuo: ¿cómo va a ser américa la patria de la utopía si por cuna tiene fosas?

Ella: pero no puedes enterrar los sueños, ni la voz, tampoco puedes enterrar la luz

Ingenuo: pero la luz no derriba muros

Ella: pero señala caminos, y en cuanto empecemos a ver que nuestro camino es el mismo, entonces la luz derribará muros y hará puentes

Ingenuo: ¿y cómo se hará eso?

Ella: yo sólo soy una mujer, no hay mejor maestro que el tiempo y la necesidad, algo se nos ocurrirá

Ingenuo: el caso es que ese “algo” nunca llega, ¿y si no convertimos en la generación pulque, que sólo le falta un grado para ser carne?

Ella: si pasa eso, entonces sí, habremos muerto, pero no, aún seguimos y hay mucho camino, cuando pienses en lo posmoderno del asunto, piensa que aun tenés que trabajar, ir a la escuela, pagar impuestos y ya resuelta la cosa filosofía, res deinde philosophia, o en otras palabras: primero equivócate y luego piensas en qué te equivocaste, ahora acción directa

Ingenuo: aquí está la pala que me pediste

Ella: bueno sí te la pedí yo, pero tú vas a escarbar

Ingenuo: ya le lo sabía, pero has traído en qué llevártelo

Ella: orita hablo a los de café, que echen una mano, el juez ya está ahí, les ha costado mucho trabajo llevarlo de buena gana hasta allá

Ingenuo: entonces no perdamos tiempo, ya le he dicho a Leonardo dónde nos veremos

Ella: nunca he confiado en el profesor ese

Ingenuo: yo sí, pero no estoy de acuerdo con él, por eso quiero que vaya, además no tenemos que estar de acuerdo en todo, si no somos amantes, y aunque lo fuéramos sería aburrido, ¿yo qué sé?

Ella: vale, mientras no interfiera.

Fin del tercer acto

Cuarto Acto

La corte de los milagros

Acto cuarto

(Una cafetería, con un letrero grande: Los cortesanos del tranvía)

Juez: orden, orden, orden en la sala, bien ahora que pase el acusado

Pintor: pero es que no tenemos acusado

Juez: y ¿entonces por qué estamos aquí?

Pintor: eso sería bueno saberlo, ¿no lo sabe usted?

Juez: pues no, honestamente no, y si alguien no me explica que está pasando yo me largo

(entra el acusado)

Poeta: yo soy, soy yo, sólo yo, soy solo, yo solo. Solo. Yo.

Juez: usted quién es?

Poeta, yo soy al qué acusan

Juez: y quien lo acusa

Poeta; yo mismo

Juez; de modo que es usted confeso

Poeta; no, soy poeta, pero también culpable

Juez; qué delito ha cometido?

(Entra el sepulturero)

Sepulturero; se ha robado un cuerpo, un joven y su novia lo vieron con el occiso en las manos, la familia fue notificada del robo, y yo levante el acta. La familia pide todo el peso de la justicia y la devolución del cuerpo

Juez; de modo que usted no ha regresado el cuerpo?

Poeta: pero es que ya no puedo, es que, cómo le explico, verá, el cuerpo revivió

Juez; cómo que revivió?

Poeta; sí, como Lázaro

Juez; pus eso no puede ser posible

Poeta; sí es posible

Juez; pues demuéstrelo

Poeta; tendrán que esperar

Juez; cuánto tendremos que esperar a su muerto viviente?

Poeta; ha acertado usted, vive pero morirá, no estaba muerta, pero morirá

Juez: de modo que es ella

Poeta: nunca pudo ser él

Juez; podría explicarme bien, o tendré que remitirlo

Poeta; mire ahí viene

(entra la verdad)

Verita: hola, estoy vivo

Juez: eso nos parece a todos

Verita: mi credencial y mi acta de defunción

Juez; es evidente que es una falsificación o que esto es una broma de mal gusto, por falta de respeto a la autoridad, por desperdiciar recursos del erario público y por hacerme perder el tiempo, no hay condena para esto, pero debería, son ustedes unos locos

Poeta; sí, exacto, me declaro culpable, ¿ya entendió? Somos unos locos

Juez: sí, están locos, ahora fuera de mi oficina

Sepulturero: pero señor no es una broma, es real, es ella,

Juez: cómo que es ella:

Sepulturero: Sí, es ella, es la verdad, ¿no lo ve?

Juez: la verdad de qué?

Sepulturero, poeta, verita: la verdad

(entra la corte del tranvía)

Músico: lo declaramos cuerdo

Unísono) sí, maldito cuerdo,

Música: lo condenamos a estar loco

Juez: lo están logrando

Poetiza: matamos lo que amamos

Músico: lo demás no ha estado vivo nunca

Poeta: nadie está tan cerca

Verita: a ninguno otro hiere

Música: una ausencia, un olvido, a veces menos

Sepulturero: matamos lo que amamos

:Bufón: que cese la asfixia de respirar con un pulmón ajeno

Estudiante: porque el aire no basta para los dos

Estudiante: y no basta la tierra si los cuerpos están juntos

Poeta: la ración de esperanza es muy poca y el dolor no se puede compartir

Juez, con respeto señores esto no es un circo

Poeta: sí sí lo es, y a usted le toco ser payaso, pero venga, que aún faltan cuarenta y tres,

Poetiza: y trescientas

Estudiante: y veinte mil

Músico: y cien mil más

Juez: qué, qué falta?

Poetiza: canciones, orgasmos, borracheras, bailes, poemas, risas, llantos, dolores, alegrías, victorias, fracasos, que ya no serán.

Música: hijos, historias, bicicletas, tamales, hoteles, escuelas, campeonatos, taxis, carreras, carreritas, prisas, arriba, abajo, también sueños

Bufón: ¿usted sueña señor juez?

Sepulturero: cómo crees que va a soñar

Poetizza: los corruptos tienen serpientes en vez de brazos

Músico: y las venas del cuello se le hinchan también como serpientes para asfixiarlos,

Verita: los corruptos no pueden dormir, porque si se duermen se los comen los gusanos,

Bufona: encuentran alacranes bajo sus sábanas

Música: y les cae en la noche el espanto

Múscio ; y su cama flota como sobre un lago

Unísono: corruptos sin dios y sin diablo, salen temblorosos de sus cuevas, hambrientos a cazar estudiantes,

Juez: aquí las quejas se meten por escritos señores

Poeta: también las actas de defunción, y las de aprehensión, y las renuncias

Verita: pero yo quiero demandar a alguien

Juez: a quien

Verita: ¿cómo se llama?

Juez: me va a demandar a mi?

Verita: no se puede?

Juez: pues sí, sí se puede, pero tiene que presentar cargo y pruebas y la información para que proceda

Verita: y con quién se hace eso?

Juez: conmigo

Verita:: bien señor quiero demandarlo

Juez: de qué

Verita: de asesinato de lesa humanidad

Juez: a quien maté

Verita: a la verdad

Juez: verdad quién?

Verita: así, Verdad, a secas

Juez: esa persona no existe señorita

verita: tal vez no la conozca

juez: tal vez, bueno, qué pruebas presenta

verita: (cuenta) a todos los que están a sala como testigos

juez: testigos de qupé?

verita.: del asesinato

juez: y pruebas físicas?

Verita: el cadáver

juez: dónde está?

Verita: no sé

Juez: bien, su caso no procede, algo más?

Verita: sí, que confiese

(todos)

Sí que confiese, que confiese, que confiese,

Juez no, voy a confesar nada, fuera de la sala antes de que llame al orden público

Poeta: llámelos

Juez: (llama por teléfono)

Poetiza: convoco a todos a buscar el cuerpo, buscarla con vida, esto no se puede quedar así

Música: sí, vamos a buscarla todos, alguno la hallará

Músico: pero cómo la buscamos?

Bufón: pues con lo que hacemos,

Ufona: qué ahcemos, locuras, amor, locuras

Poeta: hagamos una locura

Poetiza sí, mmmm ya sé, una revolución

Músico: sí vamos a revivir a los muertos,

Leonardo: cómo los van a revivir?

Ingenuo: esto es lo que te decía, la gran revolución ha llegado, ahor a la verdad regresa de la muerte,

Leonardo, me parece que sólo se ha hecho algo incongruente, lleno de vacíos y espacios en esta trama, ¿por qué mejor no volvemos a buscar el amor?

Ingenuo: el camino es el amor, creo que aún no lo entiendes, el amor nunca fue la meta, Leonardo también estás muerto?

Leonardo: tal vez, tal vez sí esté muerto

Poeta: pero calma, tomad sus copas y btindemos

Juez: aquí no se puede beber

Poetiza: pero ya ni por qué revivimos al muerto?

Jeuz: cuál muerto?

Estudiante: pues piénselo juez, quién había meurto?

Poetiza: la verdad juez, la verdad!

Juez: qué no sé!

Verita, es usted idiota,, no también ha muerto, usted está muerto

Juez: yo no estoy muerto

(todos) esta meurto, esta muerto,e sta meurto, esta muerto

Poetiza: vivamus atque amemus

Músico: suscribo

Bufpon: suscribo

Música suscribo

Poeta suscribo

Verita disiento, aú nos faltan cuarenta y tres

Leonardo pero a ellos no los podemos revivir, sólo revivir su verdad, luchar por su verdad, es más; luchar por la verdad, luchar por el amor a la verdad, porque mentiras hay muchas , de baja calidad y de presupuesto extraooridnarios, no están solos, no estamos solos, nunca podrán vaciar un vaso con una cuchara, y el agua revivirá y llenará el vaso. La verdad no está muerta, la verdad que enterraron es semilla

Unisono: los quisieron matar pero no sabían que eran semillas

Poetiza: Este genocidio debe parar, esta farsa debe parar, hoy más que nunca la vedad debe estar viva, hoy más que nunca hay que aceptarlo: la verdad existe, pero no la hemos alcanzado, mientras haya búsqueda habrá vida.

Leonardo: te veo triste, qué pasa?

Verita: hay golpes tan fuertes en la vida, yo no sé, golpes, como si del odio de dios, como si ante ellos la resaca de todo lo sufrido se empozará en el alma, yo no sé

Leonardo, lo sé, pero abandona el dolor, abandona las anclas que son navajas, abandona los puertos, mientras haya vida, mientras haya amigos, mientras haya peligro en la paz debemos abandonar las tranquilas revueltas, debemos vivir y matar

Verita, ya ha muerto mucho}

Leonardo: matar a los fantasmas y a los estultos, a los suicidas y a los utópicos, a los corruptos y a los políticos, pero debemos vivir y luchar por los poetas y los músicos, por las rameras y las monjas, por las enfermeras y los enfermos, por el casco de santo tomás, y por la autonomía unviersitaria

Poetiza: por las patas rajadas y las indígenas, y los secuestrados y violadas, por los niños y los ancianos, por los jóvenes y sus locuras, por su derecho a vivir, sólo eso

Verita:Es el final?

Leonardo: lo es?

Ingenuo: no, esto no es el fin

(todos callan y se ponene de rodillas)

Poetiza: me rompieron las piernas

Poeta: me quitaron los dientes

Poetiza: al final de la tarde ya no tenía dignidad

:poeta: ni vida:

Poetiza: pero no dije tu nombre:

Poeta: no podía pensar en darte este dolor

Poetiza: el dolor no se puede compartir

Poeta: defender la vida como una trinchera

Poetiza: defenderla de la retórica y la muerte

Poeta: porque la verdad no está meurta

Poetiza: a mi me mataron.

Poeta: a ti también, pero no te has dado cuenta

Poetiza: vienen por todos

Poeta: eso no es mentira

Poetiza: no preguntes por quién doblan las campas, las campanas doblan por ti

Salen todos, sólo ingenuo está en el centro:

Fin de la obra