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La venia “Sería necesario duplicar la plantilla de jueces en España” ENRIQUE VALDÉS Decano del Colegio de Abogados de Oviedo Diciembre 2011 REVISTA OFICIAL DEL COLEGIO DE ABOGADOS DE OVIEDO © MADE IN SYLDAVIA ARTíCULOS ENTREVISTAS REPORTAJES Agustín Azparren Carlos Carnicer Román Suárez Blanco David Villagrá Ramón Durán Palacio de Justicia Turno de oficio

La Venia Diciembre 2011

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Revista La Venia

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Page 1: La Venia Diciembre 2011

La venia

“Sería necesario duplicar la plantilla de jueces en España”

ENRIQUE VALDÉS Decano del Colegio de Abogados de Oviedo

Diciembre 2011

REVISTA OFICIAL DEL COLEGIO DE ABOGADOS DE OVIEDO

© M

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SYLD

AVIA

artículos

ENtrEVIstas

rEportajEs

agustín azparrencarlos carnicer

román suárez Blanco

David Villagráramón Durán

palacio de justiciaturno de oficio

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3empresarios de asturias ¦

La venia

“Sería necesario duplicar la plantilla de jueces en España”

ENRIQUE VALDÉS Decano del Colegio de Abogados de Oviedo

Diciembre 2011

REVISTA OFICIAL DEL COLEGIO DE ABOGADOS DE OVIEDO

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agustín azparrencarlos carnicer

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David Villagráramón Durán

palacio de justiciaturno de oficio

en PORTADAentrevista

con el decano del colegio

de abogados de oviedo

PáginA 10

ReViSTA OFiCiAL DeL COLegiO De AbOgADOS De OVieDO

Schultz, 5 33003 OviedO (ASturiAS)teléfOnO: 985 21 23 70

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MArQuéS de SAntA cruz, 9 5ºe33007 OviedO985 22 95 76

[email protected]

d. l. AS-xxxxxx-2011

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entrevistas

reportajes

opinión

ENRIQUE VALDÉS “los jueces son clave. Habría que duplicar la plantilla”

LA CIUDAD JUDICIAL DE OVIEDO, EN LA ENCRUCIJADA

CARLOS CARNICER Presidente del consejo general de la abogacía española

ROMÁN SUÁREZ BLANCO abogado. expresidente de caja rural de asturias

DAVID VILLAGRÁ “apostamos por llamaquique para el distrito judicial”

CENTRO DE ESTUDIOS, EL CORAZÓN DEL COLEGIO

AGUSTÍN AZPARREN Magistrado de la audiencia Provincial de asturias

RAMÓN DURÁN “la ley de acceso a la abogacía es una oportunidad irrepetible”

LA JUSTICIA GRATUITA EXPERIMENTA UNA DEMANDA CRECIENTE

La venia26

NÉSTOR Humor50

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4 5¦ la venia la venia ¦

En un mundo ultracomunicado, se ha hecho imprescindible la necesidad de se-leccionar la calidad de los mensajes, su pertinencia y, en definitiva, su validez práctica en cualquier ámbito. En una profesión tan singular y tan decisoria en la sociedad como la de la abogacía, es incuestionable que las inquietudes, los pro-yectos, las dudas y las opiniones se plasmen en todos los soportes posibles para

que obtengan el eco deseado y la respuesta adecuada. Y fundamentalmente para que sean conocidos por un colectivo que se ha preciado siempre de mantener el esfuerzo del aprendi-zaje día a día. Así, en la era de las nuevas tecnologías y de la revolución de la comunicación electrónica, el Colegio de Abogados de Oviedo se marca como proyecto de futuro inmediato la adaptación de sus infraestructuras de funcionamiento a los nuevos tiempos, pero sin des-deñar en modo alguno la existencia de un órgano de intercambio de conocimientos como la revista tradicional.LA VENIA intenta conciliar todos estos conceptos en un formato clásico, como lo es el de la revista que tiene en sus manos. Un soporte con vocación de complementariedad comunica-tiva y con el claro objetivo de ser un lugar de encuentro entre los colegiados, con el rigor, la calidad y el deseo de servicio acordes con la categoría de la profesión.El espíritu que mueve a los editores, los responsables del Colegio de Abogados de Oviedo, no puede ser otro que el de apoyar la consolidación de la vertebración de la profesión entre sus miembros con su participación activa en el proyecto, y con la pretensión de que la publica-ción sea un elemento de interactuación que aporte novedades desde el debate y el seguimien-to de la evolución de la profesión hasta la exposición de todos los puntos de vista respecto a la temática que pueda ocupar o preocupar en cada momento al abogado. LA VENIA, abierta a todos los colegiados, intenta concitar las firmas más pertinentes para cada tema y recabar la experiencia de los profesionales en un foro abierto al conocimiento y al estudio permanente, características éstas que han ido siempre estrechamente ligadas al quehacer profesional de los abogados. LA VENIA invita a los colegiados a participar en el proyecto desde esa modesta vocación de lugar de encuentro y de apoyo a la intensa labor de una profesión que tiene un peso radical-mente específico en nuestra sociedad.

Un lugar de encuentro

editOriAl

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6 7la venia ¦¦ la venia

La crisis que padece la sociedad nos atenaza ya desde hace cuatro años, arruinando la vida de millones de

personas y es una amenaza que puede poner en riesgo el Estado y el bienestar de la ciudadanía. Pero no debe poner en peligro el esta-do de la Justicia. La conquista del denominado Estado de Bienestar merece un gran esfuerzo para que llegue a todo el mundo y solo será posible en un Estado de Justicia. El Estado Social y de Derecho es responsable de la igualdad y ésta es tributaria de la Justicia. Los exclui-dos no son sólo los reconocidos y colectivamente afectados, sino to-dos aquellos que no pueden acce-der al ejercicio de sus derechos por carecer de medios para asesorarse o litigar. Las conquistas sociales no son privilegios sino derechos. Por encima de que también la cri-sis nos esté afectando a los aboga-dos, el hecho de que las víctimas sean los sectores más desfavoreci-dos, los últimos eslabones de la ca-dena, nos legitima a los abogados para dar nuestra opinión sobre las

posibles soluciones a la crisis a tra-vés de la Justicia.Retrocediendo la mirada hacia la historia de la humanidad pode-mos comprobar que casi nunca los grandes avances de la civilización alcanzados mediante el Derecho se han producido en momentos de prosperidad y bienestar. Al revés. Durante o tras durísimos momen-tos históricos de terror, penurias económicas, dolor y muerte se aprobaron la Declaración de De-rechos del Buen Pueblo de Virgi-nia (1776), la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciu-dadano de 1789 o la Declaración de Derechos Humanos de 1948, sin olvidar la más importante para nosotros: la Constitución de Cá-diz, que se elaboró también en una ciudad asediada por los franceses y en estado de guerra.Desde la Abogacía estamos siem-pre dispuestos a mejorar conjunta-mente con jueces, fiscales y secre-tarios judiciales la Administración de Justicia para que sea más ágil, fundada, previsible, accesible, con un leguaje inteligible o para conti-nuar demandando mayores recur-

sos económicos en Justicia. Du-rante décadas la Administración de Justicia ha quedado desengan-chada de los procesos moderniza-dores del Estado, en vía muerta y ajena al ritmo del cambio político y social. Se ha parcheado muchí-simas veces su estructura, pero el sistema para la Administración de la Justicia no consigue coger el paso de la sociedad a la que sirve. Y normas tan vitales para impartir justicia como la Ley de Enjuicia-miento Criminal (1882) o el Có-digo Civil (1889), pensados para la sociedad del siglo XIX, siguen vigentes en pleno siglo XXI.Por ello, es un clamor social afron-tar de una vez por todas reformas radicales en nuestra Administra-ción de Justicia para racionalizar los marcos de actuación institu-cional, acabar con la desincroni-zación informática y la descoordi-nación competencial y, sobre todo, ganar eficiencia en aquellos asun-tos que más preocupan y afectan a los ciudadanos. Reivindicamos la presencia activa de la Abogacía en todo lo que afecta a la necesaria reforma de la Justicia.

Carlos CarniCer

(zaragoza, 1948) está al frente

del Consejo general de la abogaCía

española (Cgae) desde

julio de 2001, habiendo

sido reelegido

en 2006

conquistas conseguidas retos por alcanzar

opinión

cArlOS cArnicer dÍez

Cuatro ex ministros de Justicia, Juan Alberto Belloch, Ángel Ace-bes, José María Michavilla y Juan Fernández Aguilar, también han coincidido, durante la celebra-ción del X Congreso Nacional de la Abogacía en Cádiz, en que es necesario un pacto de Estado con-sensuado y en el que se escuche la voz de los abogados para afrontar una profunda reforma de la Justi-cia.También es hora de decir ¡basta ya! ante a las desconsideraciones de las Administraciones frente al derecho fundamental a la asis-tencia jurídica gratuita. La Ley 1/1.996 impone a las Adminis-traciones públicas, la obligación de remunerar dignamente a los abogados que prestan el servicio de justicia gratuita. La Aboga-cía es consciente de la crisis pero denunciamos el constante y fla-grante incumplimiento de la Ley. Las retribuciones que perciben nuestros compañeros no son dig-nas, en buena parte del territorio español no se han actualizado los baremos desde el año 2003. No es justo. Como tampoco lo es el per-manente retraso en los pagos.Debemos buscar soluciones ima-ginativas para garantizar la máxi-ma eficacia del actual modelo de justicia gratuita, que es el mejor del mundo, el más eficiente y el más justo. El turno de oficio es voluntario para los más de 36.000 abogados que trabajan los 365 días del año, las 24 horas del día, pero también es la última esperanza de la Justicia para cientos de miles de ciudadanos, auténticos perdedo-res de la crisis.Otro de los grandes asuntos que debemos abordar es la regulación legal del Derecho de Defensa. Desde siempre, la Abogacía mues-tra su compromiso con la tarea de crear, afirmar y preservar este de-recho fundamental, que no es una formulación utópica sino que se

materializa día a día en la mejor de las justicias al alcance de los hom-bres. No son pocas las amenazas a la que se ve sometido el Derecho de Defensa. En la defensa de la Defensa no queremos ni podemos ser neutra-les y buscamos, a través del dere-cho y de la política institucional, el respeto y aplicación de las múl-tiples garantías que al ciudadano reconoce el Estado de Derecho, denunciando públicamente viola-ciones como la intervención de las comunicaciones.El anteproyecto de Ley de Enjui-ciamiento Criminal y de la Ley orgánica que regula el estatuto del investigado, presentados por el an-terior ministro de Justicia, dejaron de ser viables en la pasada legisla-tura. Los nuevos responsables po-líticos deben ser conscientes de la necesidad de regular este derecho fundamental para los ciudadanos.No dejaremos de realizar la legí-tima defensa de este derecho fun-damental mediante la proyección institucional de nuestra voz en los

diferentes canales y estrados para hacer oír nuestras opiniones en éste y en todos los proyectos de ley que nos afectan a nosotros, a nues-tros clientes o a los ciudadanos en general.Y todo ello pasa por una mayor autoexigencia en nuestra pro-fesión. Se ha logrado una gran conquista como es la largamente reclamada Ley de Acceso a la Abo-gacía, que entró en vigor el pasado 31 de octubre. Vamos a equiparar la formación de los abogados con la de los mejores juristas, porque, gracias al curso de acceso vamos a inyectarles el gusto por la concor-dia, el Derecho y la Justicia. Los estudiantes de hoy serán mejores abogados mañana. Es un primer paso. También tenemos que inci-dir en la formación continuada de todos los profesionales. Nuestro objetivo es garantizar a la ciuda-danía una defensa de la máxima calidad que propicie, además, la mejor y más eficiente Administra-ción de Justicia. Que por nosotros no quede.

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En algunos estados de EEUU existe un sis-tema de acceso a la Justicia denominado ‘multi-door’, o de múl-

tiples puertas. Consiste en que al ciudadano que quiere litigar se le ofrecen varias opciones que cons-tituyen las distintas puertas por las que puede acceder para resolver su litigio. De este modo puede elegir que el caso lo resuelva un juez, so-meterse al arbitraje o finalmente entrar por la puerta de la media-ción.Uno se imagina un edificio con tres puertas en el cual el litigante ha de decidir a través de cuál de ellas va a encontrar el mejor camino para resolver su conflicto, imagen que recuerda algunas escenas de la lite-ratura o de la cinematografía.A diferencia de la ficción, donde existe un desconocimiento de lo que puede encontrarse el protago-nista tras cada puerta, en el sistema ‘multi-door’ americano el ciuda-dano recibe previamente la infor-mación sobre las ventajas e incon-venientes de acceder por la puerta

más adecuada. Incluso puede con-tar con las opiniones de aquellos que han pasado con anterioridad por ese mismo dilema. Así, en una encuesta realizada en tres estados de EEUU a personas que se habían sometido a sistemas alternos de resolución de conflictos, hacien-do uso del sistema ‘multi-door’, el 90% se declaraba completa o parcialmente satisfecho y el 92% manifestó que volvería a utilizar el sistema.En España, la Administración de Justicia no ofrece la posibilidad ‘multi-door’. Los edificios judicia-les suelen tener una única puerta y aunque los accesos al arbitraje y a la mediación existen, sus puer-tas no están en el propio edificio judicial. Una gran parte de la po-blación ni siquiera sabe dónde se encuentran y muchos no saben de su existencia.

Tendencia a la judicializaciónAun conociendo la existencia de tales vías, los ciudadanos españo-les optan generalmente por acudir a las puertas de los juzgados, lo

que sin duda no es la mejor elec-ción. Existe una clara tendencia a la judicialización que genera un constante incremento de la litigio-sidad en España, tan solo frenada en este último año por los efectos perversos de la larga duración de la crisis que ha llevado a invertir la tendencia normal: en vez de in-crementarse las reclamaciones, la prolongación de la mala situación económica ha terminado por re-ducir la litigiosidad en casi todos los órdenes jurisdiccionales.Contrasta esta afición desmedida por acudir al amparo de los órga-nos jurisdiccionales con el hecho de la mala imagen que tienen los ciudadanos de la Administración de Justicia, como se refleja en la úl-tima encuesta de opinión del Cen-tro de Investigaciones Sociológicas que coloca a la Administración de Justicia como el servicio público peor valorado. Un 72% de la po-blación opina que funciona nada o poco satisfactoriamente.Tal imagen negativa, que tiene algo de cierto, no se corresponde totalmente con la realidad. En par-

agustín azparren

naCió en la laguna en 1952. en la

aCtualidad ejerCe Como magistrado

de la seCCión primera de

la audienCia provinCial de

asturias

las puertas de la Justicia

opinión

AGuStÍn AzpArren lucAS

te está provocada por las noticias negativas que se publican en los medios de la Administración de Justicia. Las encuestas sin embar-go señalan que tienen mejor ima-gen de la Administración de Jus-ticia quienes han acudido alguna vez a los tribunales que quienes, por seguir el símil aquí utilizado, no han cruzado nunca la puerta de la Justicia.

Tasa de resolución ‘uno’En Asturias incluso hay menos motivos de queja, sin llegar al eslo-gan que un compañero utiliza en sus correos corporativos: “Astu-rias paraíso judicial”. El hecho de que sea la Comunidad Autónoma española con mayor número de jueces por número de habitante produce entre otros efectos que Asturias sea la única Comunidad con una tasa de resolución de asuntos con valoración ‘uno’, lo

El magistrado Agustín Azparren realiza en este artículo un singular análisis de la posición del ciudadano ante la Justicia y de su valoración sobre la administración de la misma. El autor toma como base de su

argumento el sistema ‘multi-door’, propio de algunos estados de EEUU.

que significa que los jueces astu-rianos resolvemos al año el mismo número de asuntos que ingresan en dicho periodo.Evidentemente, hay países don-de la Justicia está bastante mejor valorada. En Finlandia, Austria o Nueva Zelanda alcanzan valo-raciones cercanas al notable, sin embargo las condiciones en que se desarrolla la justicia en dichos países no es comparable con Espa-ña. Bastaría con reseñar un dato para demostrar la desigualdad de condiciones de trabajo entre los países con mejor imagen en justi-cia y España: si Asturias es el terri-torio judicial con mayor número de jueces por 100.000 habitantes y con clara diferencia respecto al resto de Comunidades, todavía se necesitarían 60 jueces más en nuestro territorio para igualarnos a Alemania, por ejemplo.A pesar de que el mejor acceso

para resolver y pacificar los con-flictos es la mediación y a pesar de la mala consideración que los ciudadanos tienen del servicio público de la Justicia, no parece que este dato constituya una seria preocupación para la población española si acudimos nuevamen-te a los resultados de las encuestas del C.I.S. Los problemas que más preocupan a los españoles son, por este orden, el paro, la situación económica y la clase política, con notable diferencia respecto al res-to. La Administración de Justicia tan solo viene mencionada por el 1,4% de los encuestados y ocupa el lugar 21 de esta lista de problemas.Aunque entrar por la puerta de la Justicia no sea la decisión más acertada para resolver los conflic-tos, los ciudadanos que accedan por ella, y en mayor medida si son asturianos, no se van a encontrar al otro lado el abismo.

asturiases la

coMunidad con Mayor núMero de jueces Por núMero de Habitantes

la venia ¦¦ la venia

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10 11la venia ¦¦ la venia

“La figura del juez es clave,por eso sería necesaria la

duplicación de su plantilla”

Enrique Valdés Joglar (Anayo, Piloña, 1955) es Licenciado en Derecho por la Universidad de Oviedo, y Decano del Colegio de Abogados de Oviedo desde 2007. En esta entrevista realiza

su personal radiografía del estado de la Justicia española y sus próximos retos, además de una rápida declaración de intenciones para su segundo mandato al frente del Colegio.

entrevista

enriQue vAldéS jOGlAr

N ueva etapa al frente del Colegio. Siempre ha hablado de

continuidad en el trabajo realizado hasta la fecha…Efectivamente, así es. Durante los primeros cuatro años hemos sentado las bases de nuestro pro-grama de gobierno colegial y lo hemos desarrollado en un alto grado. Durante este segundo pe-riodo procuraremos cumplirlo al 100%, sin perjuicio de ir resol-viendo los nuevos retos que se va-yan presentando, pues la sociedad, la justicia y la abogacía evolucio-nan permanentemente y, a veces, de forma muy rápida.

Uno de los retos mas importantes que asume el Colegio es el Turno de Oficio. ¿Cómo se encuentra la salud de este servicio al ciudadano?Existe un alto grado de consen-so sobre el hecho de que España cuenta con uno de los mejores sistemas de Justicia Gratuita del mundo, lo que no significa que no deban y puedan mejorarse mu-chos aspectos del mismo. Resulta sorprendente que existan tan po-cas quejas sobre su funcionamien-to por parte de los usuarios de las prestaciones, así como que mu-chas de ellas carezcan de funda-mento. Sin embargo, disfunciones que desde el Colegio detectamos no merecen la crítica de los usua-

rios, lo que a veces dificulta su solución. En consecuencia, puede afirmarse que la salud del servi-cio es buena pues, aunque tenga algunas “enfermedades”, ninguna de ellas es “mortal”. Y ello a pesar de que algunas son endémicas, como es el caso de las menguadas retribuciones que los abogados del Turno de Oficio perciben, aunque otras, como el retraso en el pago de las mismas por los gobiernos, pueden calificarse de “estaciona-les”, y se deben a la crisis económi-ca que el país está atravesando.

¿Qué considera usted que debe mejorar en el ámbito de la Justicia?Toda obra humana es susceptible

de mejorar, por lo que la Justicia también lo es, aunque si compara-mos su estado actual con el de hace treinta años vemos que la mejora ha sido sustancial. Siempre que se aborda esta cuestión suele caerse en el tópico de la “falta de medios humanos y materiales”, lo que, siendo cierto, no es la única cau-sa. La Administración de Justicia, como administración pública que es, tiene problemas similares a los que tienen éstas, como es el caso de la motivación de los empleados públicos, pues resulta muy difícil conseguir esfuerzos adicionales de alguien que tiene el puesto de tra-bajo asegurado de por vida y que sus retribuciones y su carrera pro-fesional no dependen de su ren-dimiento. Los abogados debemos esforzarnos permanentemente para que nuestros clientes queden satisfechos. Si no lo hacemos, los clientes eligirán a otros compañe-ros y tendremos que abandonar la actividad. Para los trabajadores públicos no existe ese riesgo, pues su empresa actúa en régimen de

to de vista, el evento merece una valoración alta, aunque me consta que no todos los asistentes tienen la misma opinión. No obstante, aunque cada uno tiene su propio criterio, considero que si algunos congresistas no quedaron satisfe-chos fue debido a que sus expec-tativas eran demasiado altas y, por ello, difíciles de alcanzar.

La crisis está afectando a toda la sociedad española. ¿En que medida repercute en la Justicia?Dado que la crisis es económica, su repercusión la vemos en la falta de medios para ejecutar las refor-mas pendientes, que exigen au-mento de las plantillas y mejora de los medios materiales. Pero en los despachos de abogados la crisis repercute en las dificultades exis-tentes para percibir los honorarios devengados por los servicios que se prestan, pues trabajo sigue exis-tiendo.

Más jueces. ¿Es fundamental para la agilización de la Justicia?

monopolio. Si al ciudadano no le prestan un servicio satisfactorio en el Juzgado nº1, no puede acu-dir al nº2, tiene que continuar en el que le ha correspondido. Los trabajadores públicos consideran que para lo que cobran trabajan demasiado, lo que es cierto en muchos casos, pero en otros no es así, pues, con su productividad, en el sector privado algunos se-rían despedidos de inmediato. El debate sobre la motivación laboral está presente en todo el mundo, y debemos profundizar en el mis-mo, por la trascendencia que tiene sobre la productividad del sector público de la economía.

Asistió usted al Congreso Nacional de la Abogacía celebrado en Cádiz. ¿Cómo lo valora? Sí, nuestro Colegio tuvo una rele-vante presencia en dicho Congre-so, no solo de miembros de la Jun-ta de Gobierno, sino también de otros compañeros que no perte-necen a la misma. Desde mi pun-

enrique valdés, en su despacho en el colegiode Abogadosde Oviedo.

Quienes tienen Poder no necesitan

tanto a la justicia coMo

Quienes no lo tienen

el abogado

debe esforzarse

todos los días Para

satisfacer a los clientes

© MADE IN SYLDAVIA

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12 13la venia ¦¦ la venia

Aunque todos los trabajadores de los órganos judiciales son muy importantes, la figura clave es la del juez. Por ello, sería necesario que se duplicara la plantilla de los existentes en España, con el fin de que tengan tiempo para leer detenidamente las alegaciones de las partes y para analizar el resul-tado de las pruebas practicadas, poniendo así fin a situaciones en que se inadmiten pruebas y se impide realizar conclusiones a los abogados de las partes por falta de tiempo. Aún admitiendo que la formación teórica y la experiencia del juez medio es superior a la del abogado medio, cuando ocurren estos hechos nos quedamos con la sensación de que no es posible que si a los abogados nos llevó una semana dominar el pleito, al juez le baste media hora para hacerlo. Con prisas acertar en la solución es difícil, excepto que el juez sea un superdotado.

¿Qué objetivos se marca para 2012?Los objetivos de la Junta de Go-bierno los establecemos para los cuatro años de nuestro mandato, pues un año es poco tiempo. No obstante, en 2012 se aprobarán la Ley de Servicios Profesionales y el nuevo Estatuto General de la Abo-gacia, lo que nos exigirá estudiar sus textos a fondo para poder apli-carlos de inmediato.

¿Qué le pide al nuevo ejecutivo del Gobierno español? Le pido que, a pesar de la crisis y de la escasa rentabilidad electo-ral que produce la justicia, no se ceben en ella a la hora de aplicar los recortes, porque para los es-pañoles de a pie la tutela judicial efectiva es la única posibilidad que tienen para defender sus derechos e intereses legítimos. Los ciudada-nos que tienen poder no necesitan tanto a la justicia como los que no

lo tienen, pues aquellos disponen de otros medios para obtener sus propósitos, pero éstos no.

Concentración, comodidad de las sedes judiciales…La concentración de las oficinas judiciales en el mismo edificio o, al menos, en la misma zona de las poblaciones es un bien para todos: funcionarios, profesionales y ciu-dadanos. Cuando se trata de re-fundir partidos judiciales para que desaparezcan los de Juzgado único la cuestión tiene otras perspecti-vas que los políticos no pueden ol-vidar pues, aunque ello sea bueno para el servicio público de la Jus-ticia, ha de evitarse dejar a deter-minados pueblos sin Juzgado, sin Centro de Salud, sin Instituto de Enseñanza Media, etc, porque es-tos servicios son muy importantes para la economía local.

Compaginar decanato con su actividad diaria profesional, ¿se lleva bien?Es una gran satisfacción que un grupo de compañeros interesados en la vida colegial me hayan pro-puesto encabezar la candidatura que estaban promoviendo a la Junta de Gobierno y a la Asamblea Permanente de nuestro Colegio. Y esa satisfacción es mayor aún, si cabe, cuando la candidatura ob-tiene más de la mitad de los votos emitidos, sobre todo si compi-te con otras cuatro. Por lo tanto, aunque el cargo no está retribuido y me exige muchas horas (calculo que un 20% de mi tiempo de tra-bajo) lo desempeño de buen gra-do, no con resignación, sino con entusiasmo, pues no podría ser Decano a la fuerza. Mi actividad profesional la llevo a cabo en un despacho familiar con mi esposa y mis dos hijos (abogados), con mi sobrina (graduada social) y con mi hermana (secretaria), así como con otros abogados dependientes

en régimen laboral, uno de los cuales lo contraté cuando accedí al Decanato para poder compensar el tiempo que yo no podía dedicar al despacho. En esta situación la respuesta a ¿se lleva bien? es que sí, desde mi punto de vista, pues algunos compañeros me dicen que debo tener una adicción grave para estar dispuesto a soportar el coste económico de un colabora-dor para poder ser Decano.

Ha sido un año con un importante número de colegiaciones en el ICA Oviedo. ¿Qué consejo puede ofrecer a los nuevos letrados?Ha sido un año, el 2011, con mu-chas altas de colegiados. Y espero que también lo sea el 2012 y par-te del 2013, pues el 30 de octubre de dicho año finaliza el periodo transitorio establecido por la Ley

de Acceso a la Abogacía para que puedan colegiarse los Licenciados en Derecho con título anterior al 30 de octubre de 2011. Aunque después se prevé una caída sustan-cial de las nuevas colegiaciones.Los consejos que puedo ofrecer a los nuevos letrados que empiezan el ejercicio profesional son los que repito en las Juras cuando, al final del acto, me dirijo a ellos para fe-licitarlos y animarles. Los conse-jos son: que cumplan las normas deontológicas de la profesión, que no dejan nunca de formarse jurí-dicamente y que administren bien su despacho, cumpliendo con sus obligaciones fiscales, laborales, de previsión social y de marketing, pues el éxito de los abogados de-pende del público, por lo que no basta con trabajar bien, ya que re-sulta necesario que nuestros clien-tes lo perciban así.

valdés afronta su segundomandatocomo decano del colegio.

© M

AD

E IN

SYLD

AVIA

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Una vieja aspira-ción del esta-mento judicial, la agrupación de todas sus sedes

en un solo edificio o un complejo bien conectado, parecía que al fin iba a hacerse realidad hace cinco años. En el año 2006, cuando el Principado de Asturias recibió las transferencias de los edificios de la Administración de Justicia de manos del Estado, el Gobierno re-gional comenzó a estudiar la po-sibilidad de dar una solución. Si no definitiva, al menos, suficiente para un plazo largo.

Nacía entonces como proyec-to concreto el Palacio de Justicia de Oviedo, destinado a resolver la dispersión de los diferentes órga-nos judiciales y también a acoger

la nueva Oficina Judicial de la ca-pital asturiana -ya puesta ahora en marcha como proyecto piloto en otras localidades-.

Las alternativas eran escasas, dada la gran necesidad de espacio que requería el proyecto. La ubica-ción en los terrenos del viejo Hos-pital Central Universitario de El Cristo (HUCA) presentaba varios obstáculos urbanísticos, pero el principal era esencialmente uno: la existencia del propio hospital. En tanto no se terminara y pusiera en marcha el nuevo HUCA en La Cadellada, obviamente no se po-drían liberar los enormes terrenos que ocupa el complejo hospitala-rio.

De modo que el Gobierno vol-vió la vista hacia otros lugares que tuvieran el tamaño y la ubicación adecuada –no muy lejos del cen-tro de Oviedo, o al menos razona-

blemente cerca-. En pleno boom inmobiliario, el Principado no dis-ponía de suelo propio suficiente y comprarlo era extremadamente caro, así que se fue perfilando la idea de construir el nuevo Pala-cio de Justicia en la zona conocida como El Vasco, un área liberada de la antigua estación ferroviaria de Feve por la operación Cintu-rón Verde de Oviedo, y entonces, como ahora, en manos privadas, por lo que la propuesta era nego-ciar un alquiler.

La idea consistía, por tanto, agrupar los 46 órganos judiciales que actualmente se encuentran dispersos en distintas sedes de la ciudad, en un total de 25.000 me-tros cuadrados. El sitio parecía idóneo: muy cerca de los palacios de Valdecarzana y Camposagra-do, en la Plaza Porlier, que segui-rían siendo la sede institucional

CIUDAD DE LAJUSTICIA DE OVIEDOuna vieja demandaEl Gobierno asturiano busca, desde que se produjo la transferencia

del Estado, un lugar adecuado para solucionar la dispersión y la falta crónica de espacio que sufren los organismos judiciales en Oviedo.

el gobierno regional

busca una soluciÓn

desde 2006

el suelo del Huca y

llaMaQuiQue Parecen ser las oPciones

del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA), y con una edificabilidad alta. Tanta como para albergar la actividad de 700 profesionales, ya que además de magistrados, fiscales, secretarios judiciales, funcionarios y personal laboral, debía disponer de instala-ciones para la Unidad de Policía Adscrita del Principado, com-puesta por unos 80 funcionarios y ubicada en un local de alquiler.

Los problemas, por tanto, que se pretendía solucionar eran en primer lugar la enorme confusión que para el ciudadanos supone acceder a la ubicación correcta, la antigüedad y poca funcionalidad de algunas de las instalaciones –por no decir todas- y la falta de espacio.

A ellos se suma la menciona-da puesta en marcha de la nueva Oficina Judicial, el aumento sos-

tenido de población en el ámbito del partido judicial de Oviedo; la especialización de los órganos ju-diciales; la necesaria mejora de la ratio juez por habitante; el aumen-to de la litigiosidad o los cambios normativos en estudio con respec-to a la intervención del Ministerio Fiscal en la Instrucción.

Nueva Oficina JudicialUna ley orgánica promulgada

parcela de el vasco, el lugar

donde se había previsto ubicar

el nuevo palacio de justicia, un

proyecto ya desestimado.

Por gUiLLeRMO gUiTeR

la venia ¦¦ la venia

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16 17la venia ¦

en el año 2003 intentaba poner solución a las tradicionales limi-taciones de funcionamiento de los órganos judiciales. El modelo vigente hasta ahora parte de la agrupación en el juzgado de las figuras del juez y secretario junto con la oficina judicial, compuesta por funcionarios con diversas ta-reas, con función exclusiva para el órgano. Esto quiere decir que cada juzgado tiene su propio di-seño de oficina. La ley propone una nueva estructura que separa los elementos más directamente relacionados con el órgano (juez, secretario y un pequeño número de funcionarios, integrantes de la Unidad Procesal de Apoyo Direc-to) y el resto de funcionarios, que pasan a formar parte del Servicio Común de Ordenación del Proce-dimiento, con tareas homogéneas asignadas no ya para un único órgano, sino para un conjunto de ellos. Se optó de esta manera por un sistema flexible de organiza-ción de la Oficina Judicial y opti-mizar tanto los recursos como el funcionamiento.

La entrada en vigor de la ley requería evidentemente la refor-ma física de las sedes judiciales y erradicar la actual dispersión de sedes, algunas de las cuales aco-gen tan solo uno o dos órganos unipersonales. Por un lado, era necesario integrar en los órganos los magistrados titulares y los se-cretarios judiciales, junto con las respectivas Unidades Procesales de Apoyo Directo; separadamen-te habrían de proyectarse las de-pendencias necesarias para los servicios comunes de los órganos judiciales, tanto colegiados como unipersonales.

La asunción de las compe-tencias en materia de Justicia por parte del Principado de Asturias coincidió también con la renova-ción de la organización de los ser-vicios de la Justicia en España, que

cifras y datos700

funcionarios trabajan

en las sedes disPersas de

oviedo 25.000

Metros cuadrados ocuPan los

Órganos judiciales

180.000 asuntos se

traMitan en asturias

cada aÑo

Por qué estorba la memoria

Gerardo IGlesIas

Gerardo IGlesIas

Represión y guerrilla en Asturias1937-1952

‘Por qué estorba la memoria’ es un alegato en favor de la reparación y la justicia debidas a las víctimas de la

represión franquista. Gerardo Iglesias realiza un viaje duro y descarnado por los años de la guerrilla en Asturias.

“Un libro que narra 22 historias relatadas con estremecedores detalles por los familiares que sobrevivieron y los testigos, incapaces de olvidar”.

El País

“El libro es todo un homenaje a los maquis asturianos”.

La Voz de Asturias

“Gerardo Iglesias amplía la visión sobre los fugaos con una escritura ágil, casi periodística, y una admitida simpatía por los derrotados. No podía ser de otra manera”.

La Nueva España

“Sólo Gerardo Iglesias podría escribir un libro tan necesario, por su conocimiento en primera persona de lo que cuenta”.

El Comercio

[email protected]

Novedad editorialSede histórica de la Audiencia, en la plaza porlier. estos edificios seguirán alber-gando órganos judiciales.

¦ la venia

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E IN

SYLD

AVIA

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19la venia ¦¦ la venia18

culmina con la aplicación de la nueva Oficina Judicial. Esto obligó a las comunidades autónomas a impulsar la construcción de nue-vas instalaciones, como se hizo en Barcelona, por ejemplo.

Si bien en Asturias se hicieron esfuerzos en este sentido, como la puesta en marcha del Palacio de Justicia de Gijón, el Instituto de Medicina Legal de Asturias, el Juzgado de Villaviciosa o el de Pravia, todas ellas nuevas infraes-tructuras, Oviedo seguía siendo la asignatura pendiente. Aquí debía enmarcarse el proyecto de El Vas-co, manteniendo la ubicación del TSJA en su emplazamiento histó-rico.

Un recorrido lógicoUna consecuencia adicional no desdeñable sería, por otra parte, la liberación de los espacios ocupa-dos con el consiguiente ahorro en

profesionales y usuarios, la cons-trucción de un complejo judicial con perfil propio y único en la ca-pital permitiría no solo consolidar la capitalidad administrativa de la ciudad, sino ampliarla.

La solución y una derrotaDe modo que El Vasco fue la elec-ción, con los parabienes del es-tamento judicial. Se trata de una parcela de 15.000 metros cuadra-dos propiedad de Jovellanos XXI, la sociedad que realizó el palacio de Congresos de Buenavista bajo diseño de Santiago Calatrava. Ese emplazamiento ya había sido ob-jeto de varios proyectos fallidos, entre ellos una sede nueva para el ayuntamiento, un museo para la ciudad o tres torres rascacielos.

Según el proyecto que en su momento presentó el Principado, se pretendía ejecutar en unos dos años y medio unas obras que cos-

oCho emplazamientos

1Palacio de Camposagra-do en el que se ubican

la Presidencia y Secretaría de Gobierno del TSJA, las salas de lo Civil y Penal y la Sección 2ª de lo Contencio-so Administrativo.

2 Palacio de Valdecarzana, Sección 1ª de la sala de

lo Contencioso Adminis-trativo, Sala de lo Social y Fiscalía del TSJA.

3Palacio de Justicia (calle comandante Caballero),

en el que están la Audiencia Provincial, 9 juzgados de 1ª Instancia, 4 juzgados de Ins-trucción, 4 juzgados de lo Penal, juzgado de Violencia sobre la Mujer, juzgado de Guardia, Decanato, Registro Civil y otros servicios co-munes, Fiscalía y el Instituto de Medicina Legal.

4Edificio judicial de Llamaquique, 5 juzgados

de lo Contencioso Adminis-trativo, 6 de lo Social y dos juzgados de lo Mercantil.

5Local de la Calle Jovellanos, Juzgado de

Vigilancia Penitenciaria.

6Local de La Ería, con el juzgado y la fiscalía de

menores.

7 Doctor Bellmunt y Burriana, donde están

los juzgados de 1ª Instancia números 10 y 11.

8 Local de la calle Pedro Masaveu nº 1, juzgado

de lo Contencioso Adminis-trativo número 6.

tarían 180 millones de euros. De hecho, las obras comenzaron. A partir de su finalización, se paga-ría a los propietarios de la parcela un arrendamiento anual. Todo es-taba previsto y los trabajos funcio-naban a buen ritmo.

Sin embargo, la Administra-ción no contó con una denuncia de IU de Oviedo, que elevó a ins-tancias europeas la ejecución del nuevo Palacio de Justicia al enten-der que, dado que el Principado no era titular de los terrenos, las obras debían haber salido a con-curso como una licitación ordi-naria. En efecto, así lo apreciaron los jueces y el Gobierno hubo de desistir.

Ahora, los responsables polí-ticos deberán volver a plantearse como ubicación el viejo hospital; un llamado distrito judicial en Llamaquique -parece lo más pro-bable- u otra ubicación.

juzgados de lo Social, conten-cioso y Admi-nistrativo en llamaquique.

alquileres.¿Qué alternativas había a El Vas-co? No muchas. El Ayuntamiento de Oviedo llegó a plantear una parcela en la urbanización La Flo-rida, ubicada en la zona oeste de la capital, de unos 10.000 metros cuadrados y con una edificabili-dad escasa. Tampoco a los jueces les resultaba muy atractivo alejar-se del centro de Oviedo. También estaba la mencionada parcela del HUCA, que implicaba una com-pleta reordenación urbanística de la zona. Era un viejo sueño de los gobiernos regional y municipal utilizar la enorme superficie agru-pada del hospital, el cuartel de po-licía de Buenavista (obteniéndolo del Ministerio de Interior median-te una cesión u otra fórmula) y la plaza de Toros, cerrada y en ruina. En principio, parecía una buena idea, pero se veía excesivamente lejana en el tiempo: al ritmo esti-

mado de construcción del nuevo HUCA, no habría sido posible iniciar las obras antes de 2017 y si a eso se añaden al menos otros tres años de trabajos, no estaría listo antes de 2020.

Otros lugares posibles: la Fá-brica de Gas y la fábrica de Armas de La Vega, con problemas añadi-dos de calificación patrimonial y, en el caso de La Vega, con la opo-sición frontal de los sindicatos.

Tanto el Gobierno asturiano como los propios profesionales de la justicia fueron siempre cons-cientes de la necesidad de agluti-nar en un edificio emblemático todos los servicios centrales de la administración de Justicia asturia-na de Oviedo, que están disemina-dos por la ciudad, en esto no había duda.

Además de satisfacer las de-mandas de los ciudadanos, con una mejora de las prestaciones a

taMbiÉn se barajaron

Parcelas en la florida,

la fÁbrica de gas y la vega

una denuncia

de iu acabÓ con el

Proyecto de jovellanos

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20 21la venia ¦

“El Principado apostará por la zona de llamaquique

para el distrito judicial”

David Villagrá Álvarez (Oviedo, 1978) es, desde finales del pasado mes de agosto, el nuevo director general de Justicia del Gobierno del Principado. David Villagrá es

licenciado en Derecho por la Universidad Pontificia de Comillas y en el momento de su nombramiento ejercía como juez en Almería.

entrevista

dAvid villAGrÁ ÁlvArez

E n qué momento están las transferencias de competencias del Estado al

Principado de Asturias? ¿Falta mucho por hacer en este sentido?La transferencia de las compe-tencias en materia de Justicia en el Principado se cristalizó en los años 2006 y 2008. Durante los mismos se han ido corrigiendo las iniciales disfunciones que un cambio tan profundo en la forma de gestión lleva aparejado.

Los recursos para este área de lo público nunca

parecen suficientes. ¿Es posible aumentar la partida presupuestaria en este contexto de crisis?Es cierto que la inversión pública en esta materia nunca parece su-ficiente, máxime si se tienen en cuenta las profundas reformas que está experimentando la Adminis-tración de Justicia durante los últi-mos años y las que están por venir. A la hora de abordar los presu-puestos de 2012 se incrementarán aquellas partidas que en los últi-mos años resultaron insuficientes, como por ejemplo la destinada a sufragar el gasto en materia de asistencia jurídica gratuita, la cual se vio superada en casi un 100%, minorando aquellas otras que no resulten imprescindibles.

¿Qué relación tiene actualmente con los funcionarios de Justicia? ¿Existe un diálogo fluido?La relación con los empleados pú-blicos presenta una doble vertien-te. Por un lado, la Dirección Gene-ral de Justicia viene manteniendo reuniones periódicas con todas las organizaciones sindicales, las cuales nos trasladan las reivindi-caciones, quejas y sugerencias que consideran oportunas. Y por otro, existe un contacto directo con los funcionarios en las continuas vi-sitas que se están realizando a las distintas sedes judiciales desde el mes de septiembre.

Recientemente, este colectivo se quejó de estar “peor que nunca” desde la transferencia, con los

Por gUiLLeRMO gUiTeR

salarios más bajos del país.Efectivamente, cuando se negoció el traspaso de los medios perso-nales y económicos en materia de Justicia en el año 2008 en favor del Principado no se recogieron determinados complementos, al contrario de lo que se hizo en otras Comunidades Autónomas. Esta circunstancia es puesta de relieve continuamente por todas las organizaciones sindicales en las reuniones a que antes hacía re-ferencia. No obstante, dada la co-yuntura económica en la que nos encontramos, no es el momento adecuado para abordar esos te-mas, tal y como se les ha respon-dido. Esto no impide para que en el momento en que mejore la situación desde la Dirección Ge-neral se trate de compensar dicha situación.

También aseguran que cada vez tienen más funciones y responsabilidades, que en sus nóminas no cuentan con un complemento autonómico y que se les han retirado ayudas sociales.Esta pregunta hay que ponerla en conexión con la anterior. Todo de-riva del momento en que se nego-ciaron las transferencias. Esto hay que retomarlo en el momento en que mejore la situación económi-ca general.

Insisten en que se saquen a convocatoria pública de comisiones de servicio aquellas plazas que quedan vacantes con una duración conocida superior a 6 meses.No hay que olvidarse de que las comisiones de servicio tienen una finalidad muy concreta, como es cubrir determinadas plazas cuan-do concurren determinadas cir-cunstancias de urgencia y necesi-dad. No se debe confundir con un concurso de traslado. No obstante,

en los PresuPuestos

del 2012 se auMentarÁn las Partidas

Que resultan insuficientes

el gasto en justicia gratuita es necesario. garantiza derecHos

ciudadanos

¦ la venia© MADE IN SYLDAVIA

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en esta materia cada caso es valo-rado individualmente.

¿Tiene intención de poner en marcha un portal web para funcionarios?Sobre esta materia y otras de aná-loga naturaleza se están teniendo distintas reuniones con empresas del sector informático que cul-minarán, con toda seguridad, con avances en la materia.

Los ciudadanos demandan cada vez más la realización de trámites a través de internet. ¿Es posible agilizar algún trámite judicial por esta vía? ¿Baraja algún proyecto en este sentido?Hay que potenciar la posibilidad de realizar desde casa trámites propios del Registro Civil. Sobre este tema ya se está trabajando en la actualidad, con varios proyectos

órgano de control de los juzgados y tribunales.

En Oviedo, por ejemplo, depende de la agrupación de juzgados, prevista para 2013. ¿Es posible mantener esta fecha?A día de hoy, con los proyectos que están sobre la mesa para Ovie-do, se puede mantener esa fecha. Lo cual no impide que se puedan modificar las circunstancias a la vista de futuros acontecimientos.

En cuanto al nuevo Palacio de Justicia, que el anterior Gobierno había previsto instalar en la parcela de Jovellanos, ¿ha previsto este Gobierno alguna alternativa? ¿Quizá algún terreno de propiedad pública, como puede ser el del viejo hospital?El Principado apostará por la zona de Llamaquique para el estableci-

sobre la mesa. Respecto a la rea-lización de trámites con los Juz-gados, el asunto es más complejo de lo que parece, no sólo por la posibilidad material de hacerlos, sino porque hay que asegurarse de que se salvaguarden todos los de-rechos de los ciudadanos.

¿Qué resultado está dando la nueva Oficina Judicial? ¿Va a seguir su ritmo previsto de implantación?La experiencia que se está ob-teniendo en las ocho ciudades españolas que han implantado el nuevo modelo de Oficina Judi-cial no ha convencido al Consejo General del Poder Judicial, que hace meses recomendó paralizar su implantación. Está misma de-cisión se adoptó en el Principado de Asturias en el mes de septiem-bre, retomándose la implantación cuando lo considere oportuno el

miento de lo que se denominaría un distrito judicial. En un radio muy pequeño de distancia se aglu-tinarían todas las sedes judicia-les de la capital, salvo el Tribunal Superior de Justicia. Para adoptar esta decisión se han valorado mul-titud de criterios; tanto de como-didad para el ciudadano y los pro-fesionales, como de funcionalidad y economía.

¿Puede eso significar, una vez que se lleve a cabo, una agilización de los juicios y conseguir ‘desatascar’ algo el enorme contingente de casos pendientes?La concentración de sedes judi-ciales en Llamaquique facilitará el trabajo de los profesionales, pero no contribuirá a ‘desatascar’ los juzgados, de la misma manera que tampoco lo haría si se concentra-sen todos los juzgados en un solo edificio.

Recientemente se ha dicho que el Tribunal Superior de Justicia de Asturias está al límite de sus posibilidades. ¿Cuál es su opinión al respecto? El TSJA, como otros muchos órganos judiciales, soporta una carga de trabajo muy superior a la recomendable. La solución al problema no pasa, en mi modes-ta opinión, por la creación de más órganos, sino en la adopción de reformas estructurales en la Jus-ticia mucho más amplias, para adaptarla al siglo XXI.

El Ejecutivo pronostica que este año 2011 el gasto destinado a los abogados de oficio duplicará la dotación inicial porque el anterior gobierno presupuestó una cifra dos millones de euros por debajo del gasto real . ¿Es un gasto imprescindible?El gasto en justicia gratuita es im-prescindible ya que garantiza el

derecho a la tutela judicial efectiva de todos los ciudadanos, así como el principio de igualdad de armas.

¿Se ha incrementado el turno de oficio debido a la crisis? Sin duda la crisis ha tenido que ver en el progresivo aumento del gasto en justicia gratuita durante los últimos cinco años.

¿Está la Justicia excesivamente politizada, poco separada de los poderes ejecutivo y legislativo, que nombra sus órganos de gobierno nacionales y le asigna sus recursos?La influencia de la política en los órganos superiores de la carre-ra judicial es innegable. Desde la propia carrera judicial, se ha tra-tado durante los últimos años, de fomentar la despolitización de la misma, pero ésta no será posible sin un gran pacto de Estado.

¿Cree que los recientes cambios políticos nacionales van a favorecer el desbloqueo de la renovación de altas instancias judiciales?El nombramiento de los nuevos miembros del Tribunal Consti-tucional lleva años bloqueado al no existir acuerdo en relación a sus candidatos. Es evidente que la nueva situación política que se cristalizará este mismo mes con-tribuirá a la renovación de los miembros de dicho órgano.

¿Ha tenido contacto con el actual gobierno central? ¿Cree que las relaciones serán fluidas con el próximo ministro del PP, sea quien sea?El único contacto con el anterior Gobierno ha sido a través de su Delegado de Gobierno en Astu-rias. La relación con el próximo Ministro de Justicia será muy fluida, como no puede ser de otra manera.

david villagrá, en su despacho de la dirección General dejusticia.

villagrá cree que las relaciones con el próximo ministro serán fluidas.

la venia ¦¦ la venia

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24 25

Al frente del Centro de Estudios está Fernando Castro, que hace aquí ba- lance de la ac-

tividad del Centro de Estudios durante el presente ejercicio, el de 2001. A la hora de enjuiciar la labor realizada a lo largo de este año que termina, Castro advierte que no puede dejar de estar teñi-do de una cierta subjetividad y, como es obvio, no puede evitar una opinión positiva. ¿Mejorable?, para Fernando Castro tal vez sí, “pero positiva, sin duda. Creo en cualquier caso que difícilmente se podría pedir mayor rendimiento a un Centro de Estudios que tan sólo tiene dos años y medio de existencia y que en este tiempo puede presentar un balance for-mativo tan extenso”. El respon-sable del Centro matiza que este balance positivo “no es atribuible

en exclusiva a mi labor como di-rector, sino al empeño de la Junta de Gobierno por sacar adelante este proyecto como lo demuestra el hecho de que el secretario de la Junta sea al mismo tiempo coordi-nador general del Centro, y desde luego, a los compañeros y compa-ñeras que dedican su tiempo y su esfuerzo a colaborar con nosotros en la organización de las activida-des formativas”. Fernando Castro siempre ha dicho que se trata de un “proyecto colectivo” en el que todos tienen siempre algo que de-cir y que aportar.

Castro explica los criterios a la hora de programar cursos, confe-rencias y demás actividades y afir-ma que “hacemos lo posible por dar satisfacción a las sugerencias de los compañeros, lo que muchas veces no es sencillo, pero siempre lo intentamos, bien a través de las conferencias de los jueves, o bien

organizando cursos específicos sobre materias concretas, como hemos hecho con la Nueva Ofici-na Colegial, el Curso de Mercantil, el Derecho Deportivo o el Inglés Jurídico”.

Sin duda, el grado de satisfac-ción de los colegiados es elevado. El mantenimiento de ese nivel resulta una agradable dificultad a juicio de su responsable que asegura que efectivamente “no es fácil, pero tenemos la gran suerte de que podemos contar con jueces y magistrados, fiscales y compa-ñeras y compañeros que están en la mejor disposición de colaborar activamente en las actividades del Centro, como lo demuestra el plantel de ponentes que a lo largo de este año y de los anteriores, han participado en las conferencias de los jueves y en los cursos específi-cos que hemos podido organizar. En todo caso, es indudable que

CENTRO DE ESTUDIOS un proyecto de formación permanente en el colegioEl Colegio de Abogados de Oviedo creó en 2009 el Centro de Estudios, concebido como un instrumento dirigido a hacer efectivo tanto el cumplimiento de las exigencias legales para el acceso a la prestación de los servicios del Turno de Oficio y Asistencia Jurídica Gratuita, cuanto a garantizar la formación continua y especializada de los abogados.

“es indudable Que el

centro serÁ lo Que entre

todos seaMos caPaces de construir”

el Centro será lo que entre todos seamos capaces de construir y, al menos hasta ahora, el grado de participación y de colaboración de los colegiados permite augurar un futuro brillante”.

De cara a las actividades para el próximo año, Fernando Cas-tro asegura que se mantendrá el formato de las conferencias de los jueves, “que se han destacado como foco formativo esencial en nuestro Colegio. Las seguiremos grabando y, sin duda, las emitire-mos en directo en cuanto poda-mos resolver algunos problemas técnicos”. El responsable del Cen-tro adelanta también que se llevará a efecto el II Curso de Especialista en Derecho Concursal a lo largo del primer semestre. Castro con-fía en que el segundo semestre se pueda tener definitivamente or-ganizado “un curso importante sobre Ordenación del Territorio y Medio Ambiente en el que esta-mos trabajando. Pero, al margen de estos objetivos ya definidos, es evidente que surgirán nuevos pro-yectos e iniciativas que ahora ni si-quiera imaginamos pero sin duda realizaremos”.

La dinamización del Colegio depende en gran parte de las con-ferencias, cursos y charlas organi-zados por el Centro de Estudios, por lo que cada vez la exigencia es mayor. Así lo ratifica, aunque tam-bién lo matiza, Fernando Castro para quien está claro que la crea-ción del Centro de Estudios “ha sido un acierto indiscutible de la Junta de Gobierno. No sólo por-que ha supuesto poner en marcha un proyecto de formación perma-nente que hasta ahora no existía, sino porque, sólo las conferencias de los jueves, han sido un elemen-to esencial para potenciar eso que se ha dado en llamar vida cole-gial. Muchos compañeros y com-pañeras están encontrando en la actividad del Centro de Estudios

fernando castro, responsable

del centro de estudios del colegio.

algo que contribuye a justificar la existencia y a explicar la necesidad de un Colegio profesional como el nuestro y si a este efecto positivo añadimos los resultados forma-tivos, es obvio que la experiencia

sólo puede ser positiva. Por todo ello, no creo que deba preocupar-nos en exceso una mayor exigencia pues estoy seguro que esa mayor exigencia tendrá como contrapar-tida una mayor participación”.

la venia ¦¦ la venia

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26 27la venia ¦¦ la venia

“La ley de acceso a la abogacía es una oportunidad

irrepetible para la formación”

Ramón Durán está a punto de concluir su labor como decano de Derecho de la Universidad de Oviedo. Su siguiente parada será la de Defensor del Universitario,

un nuevo reto que afronta con ganas e ilusión. En esta entrevista analiza la situación de la enseñanza de Derecho y de la justicia en general.

entrevista

rAMÓn durÁn rivAcObA

E mpecemos por lo más genérico, ¿Cuál es la situación actual de la justicia en

nuestra comunidad?Contestar a esta pregunta desde la Universidad me parecería un atrevimiento. Como Magistrado suplente de la Audiencia sí me atrevo a decir que la Administra-ción de Justicia en el ámbito del Principado de Asturias funciona razonablemente. Gracias al impul-so de los responsables y de los pro-fesionales que trabajan desde sus respectivas funciones —jueces, fiscales, secretarios y demás agen-tes auxiliares de la Justicia— los

índices de resoluciones y senten-cias han hecho descender de for-ma muy satisfactoria los retrasos, y hoy contamos con una justicia más ágil y efectiva. Naturalmen-te, siguen existiendo retos, como la dispersión de sedes judiciales, que según mis noticias van siendo abordados, con proyectos de futu-ro de interés.

Como Decano de Derecho, ¿en qué cuestiones se puede mejorar en cuanto a formación?La formación de los juristas cons-tituye un reto de dimensiones y proyección crecientes. El Espacio Europeo de Educación Superior, conocido vulgarmente como pro-ceso de Bolonia, nos aporta nue-vas perspectivas para implantar

una formación más individuali-zada y participativa, con mayores dosis de carácter práctico, que se van poniendo en marcha. Por des-gracia, las estrecheces de la crisis nos han obligado a emprender este novedoso plan a coste cero y con abundantes alumnos en las aulas, lo que dificulta enorme-mente la tarea, pero creo que per-manecemos en la senda correcta.

Derecho es una de las carreras más demandadas -este año la matrícula en primero se incrementó con 450 nuevos estudiantes- ¿Cuáles son las causas?En periodos de crisis, sobre todo en el mercado laboral de nuestros jóvenes, que sufren una tasa de

Por JUDiT SAnTAMARTA

paro espantosa, el único camino sostenible es el de la formación. Pero esto se afirma no solo des-de un punto de vista negativo, que ante la carencia de un futuro profesional se refugien en las au-las, sino desde la perspetiva de la mejora de sus oportunidades. Los graves problemas de competitivi-dad de nuestra economía exijen mayores esfuerzos en el terreno de la preparación de nuestros es-tudiantes y que acudan a solicitar trabajo en óptimas condiciones de preparación. A eso se añade que, frente a la incertidumbre, se prefieran ca-rreras con salidas profesionales más seguras, como las que ofrece Derecho, que une al ejercicio libre de la profesión en sus distintas vertientes, numerosas oportuni-dades de acceso a la función pú-blica en múltiples tipos de oposi-ciones. Pienso que la Universidad no forma parte del problema por el que atraviesa nuestra sociedad, sino por el contrario constituye un capítulo, y no pequeño, de la so-lución.

Tras cinco años desde que se publicó la norma, por fin este año entró en vigor la ley de acceso a la abogacía. ¿Qué le parece?Desde la Conferencia de Deca-nos de las Facultades de Derecho españolas, que he tenido el honor de presidir en este periodo, hemos puesto de relieve que parece razo-nable instaurar un modelo que nos haga homogéneos con el entorno europeo en el acceso a las profe-siones jurídicas de corte liberal, el llamado ejercicio libre. Sin embar-go, han existido discrepancias en su concreta formulación. Siempre pensé que resultaba mucho más adecuado un sistema alternati-vo de master y examen, frente al acumulativo que la ley contempla. He de afirmar que los numero-

Entre otras cuestiones, contempla la obligación de cursar un máster o un posgrado. Usted se mostró de acuerdo con esta decisión. ¿Por qué motivos? En el plan Bolonia, la formación de nuestros universitarios con-templa una doble fase. La primera es el Grado, que ha disminuido su periodo a los cuatro años, con un contenido más generalista; y

ramón durán, decano de derecho de la universidad de Oviedo.

sos contactos con los Ministerios de Justicia y Educación y con los sectores profesionales implicados, Abogacía y Procuraduría, nos han permitido ir limando asperezas y que la implantación razonable del nuevo sistema puede ofrecer solu-ciones satisfactorias para todos, y en especial para la defensa de jus-ticiable y la mejora en su desarro-llo, pues de eso se trata.

la forMaciÓn de

los juristas constituye

un reto creciente

enPeriodos

de crisis el único caMino sostenible es la forMaciÓn

“© MADE IN SYLDAVIA

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28 29¦ la venia la venia ¦28

la segunda complementaria es el Posgrado o Master oficial, de ca-rácter especializado. En periodos de crisis como el presente —y fu-turo, me temo que al menos a me-dio plazo—, la formación consti-tuye el gran valor que se ofrece a nuestros jóvenes. Establecer en el acceso a las profesiones jurídicas un Master supone también darles los mayores niveles de formación y titulación posible, lo que no es una mala noticia pecisamente, sobre todo si se produce a precio público. Pretendemos que el acce-so a las profesiones de abogado y procurador no se reduzcan a unos cursos que les permitan realizar un examen, sino que resulte una formación reglada y oficial, con marchamo de Master que les ha-bilite para más oportunidades en el mercado laboral.

¿Están ya concretados los contenidos de este máster, se sabe en qué van a consistir?En Asturias contamos por fortuna con amplia experiencia en materia de formación de abogados y pro-curadores gracias a la Escuela de Práctica Jurídica, que ha funcio-nado muy satisfactoriamente, gra-cias a la colaboración de los pro-fesionales de las distintas ramas del Derecho y de la Universidad. En la Facultad no pretendemos ni deseamos formar abogados, sino juristas en sus dimensiones más amplias posibles. La Escuela, sin embargo, forma de manera más específica profesionales del foro y nosotros colaboramos muy gus-tosamente con la tarea. Estamos ante una oportunidad irrepetible de ofrecer a nuestros jóvenes un Master con la colaboración de to-dos los colegios profesionales de Asturias que garantice condicio-nes óptimas de formación. Pienso que, al margen de lo que nos pu-diera distanciar por intereses lo-calistas, debemos aprovechar este

reto con generosidad y altitud de miras.

Y en esa formación entra también la realización de prácticas, no solo en despachos de abogados, sino en juzgados, administraciones públicas... ¿Se han decidido ya con base a qué criterios se asignará a cada estudiante a un destino? Esa era una de las cuestiones que más preocupaban a los alumnos cuando se aprobó la Ley en 2006...En este asunto, como Decano me ha correspondido defender los derechos de nuestros alumnos y pienso que se ha hecho lo me-jor posible. No en vano he tenido reuniones con la representación

de los estudiantes y asambleas abiertas para informarles sobre aspectos de la ley que incompren-siblemente se les han hurtado en su conocimiento efectivo. El Mas-ter contemplará una primera fase de 60 créditos de docencia y otra de 30 de prácticas. El periodo de prácticas tendrá una importan-te implantación en despachos de abogados y procuradores, a cuyo propósito se firmarán los corres-pondientes convenios con los Colegios profesionales, a los que quiero agradecer aquí la excelen-te disposición que muestran al respecto. En cuanto a otras insti-tuciones públicas y privadas, se-guirán idéntico modelo de conve-niar con nosotros. Hay que decir que la Facultad de Derecho tiene

firmados numerososos acuerdos que permiten que nuestros alum-nos hicieran el practicum externo sin ningún tipo de dificultad y en condiciones de práctica mucho más adecuadas que cuanto antes sucedía. Debo reconocer en este punto la excelente respuesta que las distintas instituciones han te-nido a nuestra voluntad de cola-boración, sobre todo en beneficio de los alumnos.

Más allá de la realización del master, ¿Qué más cuestiones novedosas contempla esta ley?Como sabemos bien los juristas, no solo compone la disciplina del acceso a las profesiones jurídicas la ley correspondiente, sino su reglamento, que a mi juicio se ha

retrasado de forma inoportuna. Gracias a las largas negociaciones que se han mantenido, estimo que se ha logrado un texto cuya im-plantación razonable tiene visos de buenas perspectivas. Algunos inconvenientes pueden obstaculi-zar su puesta en práctica, como el sistema de cuotas que contempla para los docentes del Master. Me hubiera gustado un régimen mu-cho más abierto, sin mínimos para profesores y abogados y procura-dores, pues, a mi juicio, los profe-sionales del Derecho —también jueces, fiscales, secretarios, nota-rios, registradores y otros opera-dores jurídicos—, deben de tener una preponderancia en la forma-ción de los profesionales del foro. Asimismo, debemos avanzar en la definición del examen habilitador, que no debe suponer una reite-ración de las enseñanzas propias del Grado, que han superado ya los alumnos, sino volcarse sobre aspectos prácticos y de deontolo-gía profesional. Por tanto, todavía queda no poco camino que reco-rrer para la perfecta y adecuada definición del horizonte próximo. Posiblemente su desarrollo nos ofrezca oportunidades para corre-gir disfunciones posibles y diseñar un mecanismo justo y eficaz para los fines que se persiguen.

¿Se puede deducir que hasta ahora los licenciados en Derecho no salían lo suficientemente preparados de la Facultad?De ninguna manera puedo admi-tir semejante prejuicio. Es más, garantizo que los licenciados con-seguían una formación más com-pleta que los actuales alumnos del Grado, entre otras cosas por-que sus estudios duraban 5 años, por los 4 actuales. La docencia en nuestra facultades se ha esforzado por adecuarse a los nuevos reque-rimientos laborales, de manera

que se incide más ahora en los estudios prácticos. No en vano, el practicum, que antes era sólo interno en la Facultad, ahora se desarrolla para quien lo solicite de manera externa, en distintas ins-tituciones públicas y privadas de contenido jurídico. Asimismo se ha emprendido una intensa tarea para ofrecer a quienes puedan so-licitarlas distintas oportunidades de prácticas profesionales.Además, la implantación de las técnicas auxiliares de apoyo a la docencia se han ido consoli-dando de forma generalizada. Igualmente, hemos emprendido un ambicioso plan de movilidad estudiantil nacional e internacio-nal, que ha duplicado a lo largo de mis mandatos el número de plazas Erasmus y Seneca ofertadas a los alumnos. Estas movilidades son extraordinariamente valoradas en el mercado laboral, por el dominio de idiomas, la capacidad de adpta-ción y el aprendizaje de otros siste-mas jurídicos.

Años atrás las universidades miraban con recelo los cambios en el acceso a la abogacía. ¿Qué ha cambiado desde entonces?Dudo mucho que sea cierta la premisa. Creo que la forma de ins-taurarse los cambios a veces no ha sido lo más razonable o prudente posible. Establecer una vacatio le-gis de 5 años para una ley que no requería semejante periodo era la mejor prueba de que se tuvo la sensación de que se podía come-ter un cierto abuso en la implan-tación del nuevo sistema. Sembrar la duda sobre la calidad de nuestro sistema educativo universitario es el mayor error que se cometió, entre otras cosas, porque todos los abogados y procuradores en ejer-cicio han pasado por las mismas aulas, con un resultado de éxito que ellos mismos prodrán testifi-car. No falta lógica en el deseo de

el decano de derecho será

el próximo defensor del

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MÁs Pronto Que tarde

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uniformar el modo de acceso a las profesiones jurídicas con los paí-ses de nuestro entorno, pero debe realizarse de forma ponderada y sin introducir la sospecha sobre carencias que nunca han existido. La mejora es posible y en ello es-tamos. Hay que disipar cualquier indicio de corporativismo que desmerecería del esfuerzo que nuestros profesionales emprenden por avanzar en la modernización de su tarea y cometidos.

La Facultad de Derecho de la Universidad de Oviedo tiene cada vez más prestigio, usted llegó a compararla con el MIR. ¿Se avanza por ese camino de convertirla en un referente?En el panorama de la docencia superior en España existían diez universidades clásicas con tradi-ción y experiencia contrastada. Asistimos luego a un verdadero proceso localista que produjo cen-tros universitarios dispersos por doquier, muchas veces al margen de los requerimientos de calidad necesarios. El gasto público en este aspecto ha sido tremendo y ahora el Ministerio impulsa fu-siones en frío de los Centros. No tiene mucho sentido que existan muchas decenas de facultades de Derecho en universidades públi-cas y privadas en nuestro país. En el caso de Asturias, nuestra Facul-tad tiene una historia de más de 400 años en la formación de juris-tas. Esta solera también se mide en términos de calidad contrastada. En realidad lo que sostuve es que si diseñamos un Master conjunto entre todos los Colegios profesio-nales de Asturias y la Universidad podríamos contar con un centro de formación que tiene antece-dentes muy válidos y mucha expe-riencia que podría avalar nuestros estudios como un referente nacio-nal. Aludí a que en nuestra Comu-nidad existe una academia priva-

da de preparación para el MIR que cuenta con un enorme prestigio y me pregunto si seremos capaces de hacer un Master oficial de ac-ceso a la Abogacía con semejante éxito.

Surgen nuevos delitos, como los relacionados con Internet o las redes sociales. ¿La justicia avanza con el tiempo? ¿Y la enseñanza de Derecho?Como es bien conocido, el mundo moderno y las nuevas tecnología ofrecen avances maravillosos, so-bre todo en las llamadas autopistas de la información. Sin embargo, comporta el reto de saber contro-lar algunos extremos de su empleo que puedan producir distorsiones a los derechos de los usuarios. Evi-dentemente sería utópico pensar que el Derecho puede reaccionar de inmediato y con eficacia plena ante dichos fenómenos emergen-tes, pero, sin embargo, la justicia siempre se abre paso más pronto que tarde y existen instrumentos que oponer a los abusos. Mi ex-periencia dicta que ordinariamen-te idean antes los abogados que los legisladores las fórmulas más oportunas para hacer efectivo el derecho de defensa que tienen en-comendado.Asimismo, en el ámbito pedagó-gico las nuevas tecnologías han sido un recurso muy adecuado para avanzar en una docencia mucho más participativa e inte-grada. Nuestros alumnos poseen una destreza en este campo que resulta muy oportuna para vehi-cular la enseñanza de la manera más exitosa, para lo cual el proce-so de Bolonia ha sido un escenario muy propicio. De hecho, nuestros alumnos llevan años disponiendo de Sala de Vistas, Aula Aranzadi, Aulas Informáticas, Aulas equipa-das para la docencia aisistida por ordenador, sitos web para el profe-sorado y los alumnos, etc.

ramón durán en el patio del edificio

histórico de la universidad de

Oviedo.

Nací el 11 de marzo de 1919 en San Miguel de Mones, un pueblecito de la provincia de

Orense, en el municipio de Pe-tín y partido judicial del Barco de Valdeorras. Entonces el pueblo te-nía unos 500 habitantes, hoy sólo tiene unos 40. Mi padre murió en 1920 a causa de la gripe. Mi madre quedó viuda cuando yo tenía 13 meses y mi hermano, 2. Vivíamos los tres con mi abuelo en una casa de labranza, con pocas posibilida-des económicas. Mi madre tenía una panadería, que ella misma regentaba. A los nueve años y me-dio comencé a estudiar el primer curso de la Carrera Eclesiástica en un seminario menor, situado en el hermoso pueblo de Las Ermitas, en Orense. Allí cursé cuatro cur-sos de Latín, luego me trasladé al Seminario Mayor de Astorga, en León, donde estudié tres cursos de Filosofía y dos de Teología, que conmuté por los de Bachillerato, realizando el Examen de Estado en la Universidad Central de Madrid en el año 1940. Ese mismo año fui destinado a Cangas del Narcea como Maestro de Primera Ense-ñanza en prácticas durante dos

cursos, siendo posterior y sucesi-vamente designado como Director Interino y Director en propiedad, por oposición, del Grupo Escolar y, posteriormente, de los Colegios Masculinos de dicha enseñanza en la misma localidad. A mi petición fui jubilado en 1981, después de 40 años de ejercicio. En 1949, como teniente de alcalde del Ilmo. Ayun-tamiento de Cangas del Narcea compré el Palacio del Conde de To-reno para sede del Consistorio por el precio de 1.560.000 de pesetas, a pagar en 12 años. Previas las prác-ticas correspondientes, en 1948 me di de alta como Procurador de los Tribunales, adscrito al Colegio Ofi-cial de Procuradores de Oviedo y ejerciendo en los Juzgados de Can-gas del Narcea hasta el 27 de julio de 1961. En el curso de 1951-52 inicié los estudios de la carrera de Derecho, que finalicé en el curso 1956-57, como alumno libre, en la Universidad de Oviedo. Me di de alta como abogado el día 28 de ju-lio de 1961 en el Ilustre Colegio de Abogados de Oviedo y, posterior-mente, en los Colegios de Aboga-dos de Madrid (1976), León (1977) y Valladolid (1978), a los que sigo adscrito, dándome de alta tempo-ral en otros colegios de abogados, cuando así los requerían los asun-tos litigiosos encomendados. Entre los años 1958 y 1960 realicé los cursos del Doctorado, obteniendo el grado de Doctor en Derecho en

julio de 1963, previa tesis sobre “Derecho Español de Minas”, que se publicó en el año 1964 en dos tomos de 1.367 páginas por la Edi-torial Revista de Derecho Privado. Esto facilitó que las empresas mi-neras solicitasen mis servicios, que aún hoy vengo prestando respecto de las que hasta esta fecha no ce-rraron sus explotaciones y a cuyos empresarios doy las gracias y les fe-licito por su gran tesón y esfuerzo para mantener sus empresas en ac-tividad. Ejercer como abogado es muy ilusionante, aunque cada día más difícil, porque aparte de tener siempre en contra un compañero adversario en el buen sentido de la palabra, hay que tener en cuenta la multiplicidad de disposiciones le-gales que constantemente se están publicando, y sobre todo para los despachos unipersonales, como es el mío, dedicados a toda clase de asuntos profesionales. Estoy orgu-lloso de seguir ejerciendo la profe-sión de abogado. Aprovecho esta oportunidad para expresar, de nuevo, mi agradeci-miento al Excmo. Sr. Decano del muy Ilustre Colegio de Abogados de Oviedo y a su Junta de Gobier-no, porque como consecuencia de su Acuerdo y Solicitud me fue con-cedida por el Excmo. Sr. Ministro de Justicia la Cruz Distinguida de 2a Clase de la Orden de San Rai-mundo de Pefíafort. Muchísimas gracias.

Florentino QueVeDo

es abogado. miembro

desde 1951 del Colegio

de abogados de oviedo,

lleva toda la vida

dediCándose a la

profesión

toda una vida

opinión

flOrentinO QuevedO veGA

Don Florentino Quevedo realiza en el siguiente artículo un recorrido por su larga peripecia vital y profesional como muestra de la intensidad y la riqueza que puede atesorar el ejercicio de la abogacía.

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La justicia será gra-tuita cuando así lo disponga la Ley, y, en todo caso, respecto de quienes acrediten

insuficiencia de recursos para liti-gar”. Poco más de una veintena de palabras, que figuran así en el artí-culo 119 de la Constitución Espa-ñola, son el punto de partida para todo un sistema complejo y eficaz, que garantiza la justicia gratuita y establece diferentes sistemas de turnos en busca de la asistencia de un abogado a todo aquel que lo necesite.

Pero, ¿cuáles son los entresi-jos del acceso a la justicia gratui-ta? ¿Cómo puede solicitarla un

ciudadano que crea cumplir los requisitos necesarios para acoger-se a ella? ¿Cuál es la labor de un abogado en estos casos? Para ex-plicar todo esto, nadie mejor que Ignacio Cuesta Areces, la persona que, durante años, llevó el tema en el Colegio de Abogados de Ovie-do y que aún hoy sigue adscrito al turno de oficio.

Cuesta explica que el mecanis-mo para saber cómo un ciudada-no accede a la justicia gratuita está recogido en la Ley 1/1996, de 10 de enero, de Asistencia Jurídica Gratuita, que, según dispone en su artículo 1, será de aplicación ge-neral en todo tipo de procesos ju-diciales, incluidos los recursos de amparo constitucional, así como al asesoramiento previo al proceso.

“Es aquí –comenta Ignacio Cues-ta- donde se determina que, con carácter general, tendrán derecho a la justicia gratuita todos aquellos solicitantes que por unidad fami-liar sus ingresos no superen el do-ble del IPREM”. Es decir, aquellas familias cuyos ingreses anuales no superen los 14.910 euros. Ex-ceptuando en una cuestión penal, todos aquellos solicitantes han de aportar una documentación que acredite estos ingresos. “Declara-ción de la renta, nóminas, ingresos del paro…, lo que sea necesario en cada caso”, explica Cuesta.

En este sentido, este letrado es muy conciso: “Se examina con-cienzudamente cada solicitud y se hace un control férreo sobre todas las solicitudes, para garantizar que

JUSTICIA GRATUITAuna garantía por derecho

El acceso a la justicia de todos los ciudadanos está recogido en la Constitución Española. Para los propios letrados supone todo

un reto que se encuentra plenamente unido a la parte vocacional de su profesión.

el acceso a la justicia

gratuita se soMete a

un control fÉrreo

la crisis Ha Provocado

un auMento en el

núMero de solicitudes

quien acceda a la justicia gratui-ta cumpla los baremos exigidos”. Para ello, el propio Colegio de Abogados de Oviedo realiza un primer estudio del que surge una valoración. “Si entiende que el so-licitante es merecedor de la justi-cia gratuita se hace una asignación provisional. Si no, se le deniega, pero también con carácter pro-visional”, dice Cuesta. Tras esto, se envía el caso a la Comisión de Asistencia de Justicia Gratuita del Principado de Asturias. Es este ór-gano el que finalmente confirma o revoca la decisión.

Asistencias al detenidoPero, ¿a través de qué vías llegan las solicitudes a la Oficina del Tur-no de Oficio del Colegio de Abo-

gados de Oviedo? Esto depende del tipo de solicitud. “Si es penal, casi en su totalidad deriva de asis-tencias al detenido”. Quien lo ex-plica es Juan Arribas, responsable de dicha oficina. Y lo aclara: “Suele pasar que un abogado, durante su guardia, atiende a un señor y lue-go, el mismo colegiado continua con ese procedimiento”. En cuan-to a los procedimientos civiles, se realizan a instancias de la parte. Es decir, que un ciudadano lo haya solicitado, o bien dirigiéndose a una oficina de Servicio de Orien-tación Jurídica o a un juzgado o en el propio colegio.

Estos casos requieren de una pulcritud máxima por parte del solicitante. Lo explica Arribas: “Es muy importante que la persona

presente la documentación de-bidamente, las seis última nómi-nas, la vida laboral, el certificado del paro o lo que sea pertinente”, y añade que, “si no lo hace, noso-tros tiramos de los datos online, y esto puede ser perjudicial para él, porque a lo mejor estos datos no están actualizados, y resulta que los ingresos que obtenemos son superiores a los que realmente tie-ne”. Esto supondría un problema para el solicitante, porque hasta que la Comisión no tome una de-cisión firme, no se puede recurrir. “Puede pasar que nosotros, basán-donos en datos antiguos, hayamos denegado una justicia gratuita a alguien que tenga derecho a ello. Esta persona puede recurrir, pero sólo una vez que la Comisión haya

la carta de derechos y

deberes de la justicia Gratuita, en la Oficina del turno de Oficio.

Por JUDiT SAnTAMARTA

la venia ¦¦ la venia

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adscribe al turno de oficio lo hace por una cuestión sobre todo voca-cional”. La opinión es muy simi-lar a la de Juan Luis Mancisidor, otro de los abogados del turno, “por supuesto que no rentabiliza mucho, y que los honorarios son mucho menores que cuando es de pago, pero también es verdad que al principio, cuando empiezas casi de cero y no eres muy conocido es una buena manera de empezar”, dice. Y añade que “habrá gente que está por el tema económico pero no creo que sean muchos. Yo, por mi parte, lo tengo claro, si me tocara la lotería seguiría en el tur-no, es una cuestión vocacional, y aunque está bien que nos paguen, porque gratis no trabaja nadie, no deja de ser un servicio, una forma de ayudar a personas que de otra manera no podrías”.

Incremento importanteEl trabajo de estos letrados cobra en estos tiempos más importancia si cabe que la que tenía hace unos años. Y es que, en época de rece-sión económica, los asuntos en la Oficina del Turno de Oficio del Colegio de Abogados de Oviedo se han multiplicado. Hasta sep-tiembre de este año, el número de asuntos tramitados por abogados de oficios, reconocidos por la Co-misión de Asistencia Jurídica del Principado de Asturias rondaba los 9.700 expedientes, sólo 600 menos que en todo el año 2010. Si se remonta la vista atrás, el au-mento resulta aún más esclarece-dor. En 2006 los asuntos tramita-dos rondaban los 4.000; 4.500 en 2007; 5.400 en 2008, y 6.900 en 2009.

Pero, ¿a qué responde esta ten-dencia al alza? Ignacio Cuesta ex-plica que son varios motivos. Por un lado, obviamente, la crisis, más asuntos de ejecución hipotecaria o de desahucios, por ejemplo. Por el otro, cambios en el código pe-

cifras y datos900

abogados del colegio

de oviedo inscritos en el turno de

oficio

9.697exPedientes traMitados

en los nueve PriMeros

Meses del 2011

14.910 ingresos

MÁxiMos al aÑo Para acceder a la justicia

gratuita

nal, que han provocado que hayan aumentado el número de juicios relacionados con asuntos de tráfi-co, como en el caso de las alcoho-lemias. Y por último, y claramente relacionado con el primer motivo, el hecho de que hay más personas que, por bajos ingresos, tienen derecho a la justicia gratuita. Por su parte, Juan Arribas explica que “los procedimientos penales más habituales son los juicios rápidos por alcoholemias, tráfico o delitos menores, así como procedimien-tos abreviados por delitos de la baja delincuencia habitual”. En el civil, los casos más habituales son los procedimientos de familia y se han incrementado los procedi-mientos de reclamaciones de can-tidad, así como las ejecuciones hi-potecarias y desahucios, mientras que en el orden administrativo fi-guran por encima de los demás las expulsiones y extranjerías.

juan Arribas, en la Oficina del turno de Oficio del colegio de Abogados de Oviedo.

ignacio cuesta, en su despacho.

decidido, y en este tiempo, ha po-dido celebrarse el procedimiento”, comenta Arribas. Y añade: “lo importante es que todo el mundo tiene que darse cuenta de que la justicia gratuita es una petición de ayuda, y que como tal, tiene que estar debidamente documentada”.

El Colegio de Abogados de Oviedo tiene más de 900 aboga-dos adscritos al turno de oficio. Además de ellos, hay unos 300 que se encargan del turno especial de violencia de género y más de 730 forman parte del turno de asis-tencia al detenido. Ignacio Cuesta explica que el sistema del turno de oficio, gestionado por los propios colegios de abogados, es lo que permite que la gente que carece de recursos tenga derecho a la justicia gratuita.

Luis Pérez es uno de estos abogados que está adscrito al tur-no de oficio. Para él, la experien-cia es más que positiva: “Trabajar en el turno es muy gratificante. Por un lado, por el tipo de asun-tos que te entran, muchos de ellos difícilmente te entrarían al despa-cho por un asunto privado. Y por otro, el trato con la gente, suelen ser clientes que se muestran muy agradecidos con tu trabajo”, ex-plica. Lo cierto es que, con toda probabilidad, el valor más impor-tante del turno de oficio para los abogados que lo practican se en-cuentra precisamente en el plano vocacional de la profesión, puesto que económicamente no está es-pecialmente bien remunerado. En este sentido, Ignacio Cuesta cuenta que “las remuneraciones se realizan a través del Principado, y es cierto que son muy bajas”, pero añade que “en este tema, entra en juego un componente de servicio público, que es importante tam-bién”. Y Luis Pérez le da la razón. “Bueno, quizá es una labor un poco altruista, con una remune-ración pequeña, pero si uno se

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“La justicia electrónica supondrá una gran mejoría en

tiempo, en dinero y en derechos”

El abogado Ramón Robles González es el responsable del área de Comunicación, Nuevas Tecnologías y Relaciones Internacionales del Colegio de Abogados de Oviedo. En esta entrevista analiza sus

cometidos y explica sus proyectos de futuro.

entrevista

rAMÓn rObleS GOnzÁlez

U no de los cometidos que ha asumido en esta etapa como miembro de la

Junta de Gobierno, el de Nuevas Tecnologías y Comunicación, ¿qué importancia tiene para el Colegio?Capital. Tendemos hacia la admi-nistración de justicia electrónica y el Colegio estaba francamente atrasado en esta materia. Cuando accedimos a la Junta de Gobierno en 2007 era todo desolador, la pá-gina web, los servidores, los pro-gramas y aplicaciones, las copias de seguridad, las conexiones ina-lámbricas... etcétera. O sea, todo. Había que empezar de cero y así se replanteó.

¿Qué decisiones se tomaron?La primera y fundamental, la con-tratación de un informático que permitiera sustituir la dependen-cia de una empresa externa, que entendía no respondía a las expec-tativas colegiales. No había pro-yecto de nada. Se subsistía en el día a día. Por tanto, se diseñó una hoja de ruta consistente en la crea-ción de un programa de gestión colegial informatizando sectores como biblioteca, deontología, contabilidad, etcétera, que pudiera interrelacionar con la web, lo que obligó a construir una nueva web, más accesible y funcional. A su vez, dotarnos de servidores con las pertinentes medidas de seguridad, de las que se carecía, y permitir el trabajo en red de todo el personal

del colegio. Modificar los sistemas informáticos de las delegaciones y los de comunicaciones, pues nos encontramos con delegaciones que tenían cabinas telefónicas de moneda, ninguna tenía adsl o wifi, ni correo electrónico, por tanto, ni en consecuencia, posibilidad de comunicarse con el Colegio en Oviedo. En fin, hubo que adoptar muchas decisiones.

¿Resulta complicado adaptar el Colegio a los tiempos que vivimos tecnológicamente hablando?El Colegio asume cambios pero con parsimonia, no se aceptan de forma radical, y hasta los más apa-rentemente sencillos de aceptar, como por ejemplo ir avanzando

en las comunicaciones tecnoló-gicas (correos, newsletter...) y en todo lo que suponga el uso del ordenador en la comunicaciones, requiere tiempo. Es una profesión que lleva emparentada con el pa-pel y la máquina de escribir mu-chos años.

¿Qué objetivos se ha propuesto para estos años en este aspecto?Nosotros tenemos que seguir avanzando en la informatización de tal manera que el abogado pueda actuar, comunicarse y re-solver mediante el ordenador, y el Colegio debe aportar las herra-mientas necesarias. Estamos con un proyecto de digitalización de la documentación que permitirá accesos y consultas de documen-

actualidad?Claro que es vital, es innegable. Además es el futuro y no le pode-mos dar la espalda. Desde luego el Colegio no puede darle la espalda

¿Son conscientes los abogados asturianos de la importancia de utilizar las nuevas tecnologías? ¿En qué grado considera que las utilizan en la actualidad los letrados?Creo que sí, son conscientes, aun-que el Colegio de Abogados debe-ría realizar una labor más expli-cativa, un mayor esfuerzo. Cuesta inicialmente hacer propia una aplicación pero cuando le vemos la funcionalidad, es difícil vivir sin ella. ¿Quién sale hoy de casa sin el teléfono móvil?

ramón robles, abogado y miembro delcolegioovetense.

tación, completar la intranet para que cualquier compañero de los que ejercen fuera de Oviedo pue-da acceder al Colegio de forma virtual acabando con ese aisla-miento a que se ven sometidos y, desde luego, estamos a la espera de la evolución de las aplicaciones y programas de la administración de justicia, cual LexNet, que ya está ahí, llamando a la puerta.

Promover la interoperatividad entre los sistemas de información, consultar y tratar toda la información en las instituciones relacionadas con la justicia: Ministerio de Justicia, Comunidades Autónomas, Consejo General del Poder Judicial, ¿resulta vital en la

esta ProfesiÓn

lleva ligada al PaPel y a la MÁQuina de escribir

MucHos aÑos

no debeMos desdeÑar

Que Hay otra abogacía, la

institucional, Que nos abre MÁs caMinos

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Agilización de la justicia en nuestro país. Sorprende que la justicia no se haya adaptado al igual que otros sectores públicos a las nuevas tecnologías. ¿Quizá por la mayor complejidad de lo tratado?Porque obliga de forma casi si-multánea a varios operadores: jueces, abogados, procuradores, funcionarios..., lo que requiere una interoperatividad exenta de problemas. Tengamos en cuenta que hablamos de documentos vin-culados a plazos procesales, donde las garantías de notificación y re-cepción son básicas. Y además, esa operatividad no puede comparti-mentarse, no sólo es la justicia en Asturias, todos tenemos procesos en tribunales de otras demarca-ciones. Es posible obviamente, pero no con la premura deseada.

Internet es en la actualidad un medio utilizado por millones de personas. ¿Existe un vacío legal que lo legisle?Depende en el qué y en el para qué. Los delitos informáticos no dejan de ser delitos y a veces tie-nen encaje en figuras ya reguladas (estafa, injurias...), por lo que la discusión se centra en si internet es el medio. Otra cosa muy distin-ta el uso de internet. Si con ello se pretende escalar hacia delitos por demás propios de la globalización y entramos en ciberataques que producen resultados muy críticos, la respuesta puede ser otra.

¿Cómo debemos utilizar internet? ¿Qué cuestiones debemos observar para no encontrarnos con situaciones desagradable?De forma racional, tanto para la vida profesional como para la per-sonal. Tengamos en cuenta que in-ternet tiene mucho de autorregu-lación y somos nosotros quienes graduamos qué, cómo y cuánto

de nuestra intimidad estamos dis-puestos a ceder y compartir en in-ternet. Pero con esa racionalidad y las pertinentes medidas de seguri-dad no deberíamos encontrarnos situaciones desagradables.

¿Se multiplican las demandas por operaciones fraudulentas, intromisión en la vida privada, difamaciones en la red…?Sí. Y el crecimiento será exponen-cial en tanto en cuanto más perso-nas accedan al uso de internet. No debe de extrañarnos. Hay perió-dicos digitales, blogs, chats, foros y las propias redes sociales. Y ahí

existan medios disponibles y por ello exigibles y no dependa del cri-terio de cada Juzgado. Llegará.

Su otro cometido como miembro de la Junta se refiere a las relaciones internacionales….Sí. Hay otra abogacía, la institu-cional que no debemos desdeñar. Deberíamos ser muchos más los compañeros que conociesen la existencia de organizaciones in-ternacionales de la abogacía, sus fines y objetivos, la rentabilidad que podemos obtener a través del conocimiento, la posibilidad de hermanarnos con Colegios de otros países que puedan resultar de interés para nosotros, la posi-bilidad de acompañar a delega-ciones de empresarios asturianos cuando viajen al extranjero, algo que ya hacen por ejemplo los compañeros de Barcelona, acudir a otros países para conocer a nues-tros colegas y abrir vías de colabo-ración, lo cual ya hemos hecho con Turquía a través del CGAE, la posibilidad de que compañeros jó-venes vayan becados a trabajar en otros países, lo cual hemos hecho con Italia. En fin, abrir los ojos a otras posibilidades que están más allá de nuestras pequeñas fronte-ras y en cuyo esfuerzo, hay mucho que ganar y nada que perder.

Por último, diagnostique nuestra justicia, la española…Habría mucho que hablar, porque aunque no es la misma que hace 15 o 20 años, hay problemas estruc-turales que subsisten. Creo que va cambiando, pero de manera muy lenta, casi imperceptible. Yo creo, y lo creo sinceramente, que esa justicia electrónica supondrá con los años, cuando todo esté ensam-blado y rodado, una gran mejoría para todos, en tiempo, en dinero, en derechos. Lo que no acierto a calibrar es si alguna vez la justicia, llegará a ser la “niña bonita”.

hay mucho cazador, mucho pesca-dor y mucho incauto.

Algunos abogados, cada vez más, se quejan de los problemas que plantea la Ley 1/2000 de Enjuiciamiento Civil para presentar pruebas electrónicas en los juicios…No hay infraestructura adecuada y es el propio abogado quien debe llevar un portátil o una tablet para visionar determinada prueba y a riesgo de ver desechada su peti-ción. La administración de justi-cia electrónica será una realidad cuando todo esté sincronizado,

ramón robles en su bufete de

abogados de Oviedo.

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Alfredo Menén-dez explica que el paso de ser guar-da forestal en Pi-cos -“guarda de la

Montaña de Covadonga”, matiza- a ejercer la abogacía es, aunque pa-rezca extraño, el resultado de una evolución personal y profesional. En los años en que se convirtió en guarda de Picos “quería hacer algo en favor de la conservación de la naturaleza”. Allí conoció a Laura, su mujer, a la que le unía el amor por la montaña asturiana y con quien emprendió ese camino de trabajo en favor de la protección del medio natural. “La misma vocación que nos llevó a trabajar por la naturaleza, nos llevó a con-vertirnos en juristas. La verdad es que descubrimos que poco o nada se podía hacer en el seno de una Administración insensible con los temas medioambientales”. Un ac-

cidente de montaña fue la causa que, finalmente, llevó a Alfredo Menéndez a hacer del Derecho su exclusiva ocupación profesional.

El hecho de ejercer la profe-sión en Cangas de Onís otorga a Alfredo Menéndez un cono-cimiento de la zona rural que le lleva a considerar diferencias con el ejercicio de la abogacía en las ciudades: “Considerando que el Derecho es un instrumento regu-lador de las relaciones sociales y que éstas tienen sus propias pecu-liaridades en la zona rural es lógi-co que los abogados que ejerce-mos en ella nos enfrentemos con supuestos que no son frecuentes en la ciudad”. Menéndez destaca, entre esos supuestos, el régimen de la propiedad, las relaciones de vecindad y los usos del suelo, “que influyen directamente en la clase de pleitos a los que nos enfrenta-mos en el oriente de Asturias”.

La relación con las fuerzas de seguridad, que se presupone estrecha en la profesión, tiende a ser más directa en zonas como en la que ejerce Alfredo Menéndez, que así lo corrobora, “aunque es-tas relaciones tan cercanas tienen sus luces y sus sombras. Sin duda son positivas cuando la obligato-ria proximidad no impide un res-peto mutuo y una colaboración”. Sin embargo, Menéndez asegura que no es infrecuente que surjan tensiones cuando “los abogados advertimos conductas y actitudes censurables en las fuerzas de segu-ridad, originadas por el particular conocimiento que sus agentes tie-nen de las circunstancias persona-les de los vecinos en municipios pequeños, lo que les hace perder la necesaria objetividad y guiarse por prejuicios, algo que, desde lue-go, no ocurre en el anonimato de las grandes ciudades”.

LA LEY NATURALde guarda de picos a abogado en cangas

Alfredo Menéndez Prieto (Candás, 1964) es Licenciado en Derecho por la Universidad de Oviedo. Fue guarda forestal del Parque Nacional de los Picos de Europa entre los años 1988 y 2004, y actualmente es abogado en

ejercicio, junto a su mujer, Laura López Varona, en Cangas de Onís.

MenÉndez considera su llegada a la

abogacía una evoluciÓn Personal

las carencias en las zonas rurales son

de Medios HuManos y Materiales

Los problemas con los que se enfrenta un abogado en partidos judiciales pequeños, “aunque sue-ne a tópico”, son la falta de medios materiales y humanos. Por mucho que los funcionarios lo intenten suplir a base de un encomiable esfuerzo “no es suficiente”. Me-néndez apunta que “la saturación y el caos que se vive en el ámbito de la jurisdicción voluntaria en el juzgado de Cangas de Onís es un claro ejemplo de ello”. El aboga-do considera que son problemas de difícil solución en estos mo-mentos de crisis. Unos momentos que se definen en la adaptación a la precariedad: “En el ámbito interno del despacho debemos adaptarnos necesariamente a las circunstancias económicas que vivimos”. Menéndez afirma que son conscientes de que los clientes pueden tener dificultades a la hora de afrontar los costes de litigios

con grandes cuantías, “lo que nos obliga a ajustar al máximo nues-tros honorarios profesionales”.

Alfredo Menéndez destaca un delito concreto vinculado a la zona rural asturiana: “Es sobrada-mente conocido el hecho de que existen ganaderos que provocan incendios forestales con el úni-co objetivo de conseguir pastos a costa de destruir nuestro patri-monio natural”. Menéndez explica que pese al gran trabajo que reali-

za en Asturias el Fiscal de Medio Ambiente, “sigue siendo un grave problema que los poderes públi-cos deberían afrontar seriamente”.

En materia de Justicia, Alfre-do Menéndez pide al nuevo Go-bierno que contribuya a sentar las bases necesarias “para conseguir un poder judicial realmente inde-pendiente y para alcanzar una ver-dadera división entre poderes, que es todavía la asignatura pendiente de nuestro Estado de Derecho”.

Alfredo Menéndez, en

su despacho de cangas

de Onís.

la venia ¦¦ la venia

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“Lo más importante es haber estudiado muchísimo

y seguir haciéndolo”

Nacido en Oviedo, licenciado en Derecho y casado con Sol Martínez-Covisa, compañera también de profesión, Ignacio Álvarez Buylla pasa por ser un ‘todo terreno’ al que sedujeron especialmente, el Civil y el Mercantil. Una de sus pasiones, el deporte, también tiene traslado

a la abogacía, ya que buena parte de sus pleitos se centran en el Derecho Deportivo.

entrevista

iGnAciO ÁlvArez-buyllA

E stá escrito que la ex-periencia es un gra-do. ¿lo es aún más en la abogacía?La experiencia claro

que es importante en toda activi-dad profesional y en todas las fa-cetas de la vida cotidiana. Ahora bien, yo soy un enamorado de ese célebre principio de la abogacía que dice que “el Derecho se apren-de estudiando y se ejerce pensan-do”, por lo que tan importante o más que la experiencia práctica es el estudio para adquirir un pleno conocimiento de la dogmática ju-rídica. No conozco ningún buen profesional del Derecho que no domine la dogmática jurídica y sin dominarla, no nos engañemos, no podremos ser un buen abogado o

un buen juez o un buen registra-dor.

La crisis pasa factura a la sociedad. ¿En qué manera lo hace con los abogados?Creo que todo profesional libre, lo mismo médico, que arquitecto, que abogado está sufriendo la cri-sis. Los abogados la sufrimos de una manera especial porque hay mucho trabajo y la mitad de di-nero ganado que antes. Ahora, in-cluso los mejores clientes con los pleitos de importancia pelean el precio del arrendamiento de nues-tro servicio profesional, y aunque nuestra obligación es de medios y no de resultado, cada vez el cliente trata de vincular más los honora-rios al resultado del pleito, el cual

siempre tiene un cierto compo-nente aleatorio. Pero además, no quieren soltar un euro hasta que no finalice el pleito

Posee usted una dilatada experiencia profesional. ¿Qué debe mejorar en el mundo de la justicia?Yo creo que en España, y en es-pecial en Asturias, tenemos unos jueces excepcionales y yo cada vez que leo las sentencias, gane o pierda, me parecen generalmente muy buenas. La calidad técnica de nuestros jueces es impresionante, y no quiero que suene a pelotilleo, pues tengo muy buenos amigos en la judicatura y no necesito ha-cer de palmero para acercarme a ellos y gozar de su amistad y de

su magisterio. Ahora bien, lo que creo que falla son los Juzgados, es decir que las Oficinas Judicia-les funcionan mal y tampoco es porque el personal sea malo, que hay de todo, sino porque es en la Administración Pública en la que yo percibo peor organización, mas falta de método y orden en el trabajo y más falta de respeto al cumplimiento del horario, lo cual lleva, aunque a ellos desde dentro les cueste percibirlo, a una falta de productividad sin parangón.No soy partidario de más juzga-dos, sino de más jueces por Juz-gado y que traten, junto con los Secretarios, además de hacer su trabajo técnico, de someter a la oficina judicial a más orden, mejor método y mayor productividad.

¿Cuáles son las claves para hacerse un hueco en esta complicada y difícil profesión?Es importante ser conocido, tam-bién ser agradable en el trato con la clientela, personal judicial, pro-curadores y clientes, pero lo más

así como la Administración de Justicia sale regular, la abogacía sale bien parada y el nivel de sa-tisfacción de la clientela y de los jueces con respecto a los abogados es de notable alto.Ahora bien, soy partidario del cumplimiento de las exigencias de la Ley de Acceso a la profesión porque no todo el mundo nada más licenciarse en Derecho está capacitado para ser declarado apto para el ejercicio, y no solamen-te por falta de experiencia, sino porque no todo el mundo logró el mismo nivel de conocimiento teó-rico y científico en la Universidad. Yo no conozco a ningún buen es-tudiante de Derecho que no haya llegado a ser rápidamente un buen profesional y, sin embargo, entre los malos estudiantes sí los hay que posteriormente han llegado a adquirir un gran nivel de cono-cimientos y de experiencia, pero cuesta más esfuerzo y más tiempo. El poso de conocimiento y facili-tad jurídica que deja el buen ren-dimiento y la aplicación en la Uni-

importante es haber estudiado muchísimo y seguir estudiando porque con el conocimiento y la dogmática es muy difícil no ha-cerlo bien en esta profesión. Y cuando lo haces bien porque sabes Derecho y piensas en profundi-dad los problemas, en una ciudad como Oviedo o como Gijón o Avi-lés, el reconocimiento de la buena labor corre como la pólvora. Sa-biendo mucho Derecho se ganan pleitos y ganando pleitos la gente se entera y te busca sin necesidad de demasiada actividad publicita-ria y comercial.

¿Qué nivel ofrece la abogacía española?El nivel creo que es bueno pues yo nunca me he encontrado enfren-te en los pleitos que defiendo con ningún “pufo” y siempre, con ra-zón o sin razón, cada compañero que tengo de contrario, me hace sudar tinta.Además ya no es solamente mi opinión, sino que en las encuestas y en los barómetros de opinión,

ignacio Álvarez buylla, en su despachode Oviedo.

aHora incluso los

Mejores clientes

Pelean el Precio

no soy Partidario

de MÁs juzgados,

sino de MÁs jueces Por

juzgado

¦ la venia la venia ¦

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versidad, creo que no tiene precio.

¿Resulta vital para el abogado la especialización?No tengo muy claro que la espe-cialización sea imprescindible, aunque creo que esta opinión es ir un poco a contracorriente ya que la mayoría de los profesionales mantienen que es bueno especia-lizarse. Yo no soy un especialista y sin embargo sí tengo más trabajo en asuntos de Derecho Privado, aunque creo que hay que saber de todo porque el Ordenamiento Jurídico es uno y los Principios Generales del Derecho se extraen de todo el Ordenamiento Jurídico, aunque no cabe duda que es muy difícil ser buen jurista sin dominar el Derecho Civil.

Ha lidiado usted en varias ocasiones con temas futbolísticos. Clubes que entran en suspensión de pagos, deudas milmillonarias… ¿Cuál considera, hablando de las sociedades anónimas deportivas, que es la responsabilidad de sus gestores?Yo ya he escrito y conferenciado bastante sobre este tema y he sido protagonista jurídico en varios pleitos de acreedores de clubes deportivos y sociedades anónimas deportivas contra sus administra-dores sociales.La Ley de Sociedades de Capital es de plena aplicación a las so-ciedades anónimas deportivas y sus administradores sociales son responsables por sus actos impru-dentes en la gestión y asimismo por llevar y mantener la infracapi-talización de las compañías.Creo que hay que accionar más contra los administradores so-ciales de las sociedades anónimas deportivas que promueven con-cursos voluntarios de acreedores con el único objeto de instrumen-talizar a los jueces de lo mercantil

tengo la suerte de tener amistad personal con varios de ellos aun-que, eso sí, fuera de estrados, ya que trabajando guardamos el recí-proco respeto y la distancia propia de este tipo de trabajo.Cuando falleció mi padre, en mar-zo de 1.981, yo tenía 24 años y estaba empezando. Entonces per-tenecía a la Asesoría Jurídica Cen-tral de Banco Herrero, y la perso-na que más me ayudó a estudiar y a prepararme y más me aconsejó fue don José Álvarez Domínguez que en aquel momento era el pre-sidente de la Sala de lo Civil de la Audiencia Territorial, y que es el padre de José Ignacio Álvarez Sán-chez, actual presidente de nuestra Audiencia Provincial.Don José (todos sus amigos le lla-man Pepe, pero yo no soy capaz de quitar el don José por el gran respeto y admiración profesional y personal que le tengo a pesar de quererlo como al mejor amigo y como a un padre) fue un crack de la judicatura que, además, cuando se jubiló, no tuvo ningún reparo, por su gran afición al Derecho y al trabajo, en darse de alta en nuestro Colegio de Abogados como ejer-ciente y trabajar como abogado.Soy amigo de su hijo y tengo es-pecial debilidad, por amigo y por respeto admiración profesional, por José Ignacio Pérez Villamil y por Agustín Azparren. También admiro y aprecio mucho a José Manuel Barral.De los jueces de primera instancia (con los de Instrucción tengo me-nos trato) tengo muy buena rela-ción con todos los de Oviedo, pero aprecio y admiro especialmente a Pablo Martínez Hombre, Eduardo García Valtueña, José Antonio Lo-renzo (Juez de 1ª Instancia nº 6 de Oviedo) y a Virginia Otero Chi-nicci... Y en cuanto a los de Gijón me parece un magistrado excep-cional técnicamente Juan Carlos Llavona y tengo especial debili-

para no pagar salarios atrasados a sus deportistas profesionales y no sufrir la sanción estatutaria de los descensos de categorías o expul-siones de las Ligas Profesionales. Asimismo creo que la Agencia Estatal Tributaria y la Seguridad Social deberían ser más exigentes y rigurosos en el ejercicio de estas acciones de responsabilidad con-tra tales gestores.

Cuénteme, ¿cómo es la relación con los jueces?Mi relación personal es magnífica con todos los jueces y magistrados que conozco y además en Oviedo

dad, aunque suele ser criticado y es discutido por muchos, por Án-gel Luis Campo, Magistrado-Juez de Familia.Tampoco puedo dejar de mencio-nar a Javier García, recientemente jubilado como Magistrado de la Sala de lo Social del Tribunal Su-perior de Justicia, que es verda-dero amigo y maestro y que fue el único superviviente en el acciden-te de tráfico en el que falleció mi padre junto con Agapito Melchor y Jaime Valdés Hevia.Y finalmente me paree un autén-tico fenómeno (es Magistrado de carrera, fiscal y Catedrático de De-recho Civil, con lo que ello supone de esfuerzo realizado y de dogmá-tica y ciencia acumulada) Eduar-do Serrano (Lalo para sus amigos y admiradores). Era muy amigo de mi padre y conmigo siempre ha sido un auténtico señor.

¿Y con el resto de compañeros?Ahora somos tantos dados de alta como ejercientes que ya no conoz-co ni tengo trato con la mayoría, pero con los que tengo relación profesional y personal la relación es magnifica.Tengo, por supuesto, íntimos ami-gos dentro de la profesión y tengo que destacar la amistad forjada desde hace muchísimos años, aparte de con los que fueron com-pañeros de Licenciatura, con los que comenzamos jugando juntos al fútbol y viajando y conviviendo en el equipo de fútbol de nuestro Colegio de Abogados.Aparte de ser de lo mejor del mundo en cuanto a resultados deportivos, tiene un conjunto de personas y familias que nos quere-mos y hemos forjado una relación de amistad, tanto a nivel personal como de las familias respectivas, que es sensacional y que ayuda a ser más feliz y en la relación pro-fesional.Creo recordar que hace ya 20

años que hicimos el primer via-je importante juntos a Túnez al primer Mundial de Abogados y aquello fue inolvidable, repitiendo después viajes a Hungría, Irlanda, Turquía, Marruecos, etcétera. Esto te hace más amigo y logra una re-lación y una unión especial, ade-más de ser compañeros de profe-sión. Los pleitos, aunque seamos contrarios, son especiales.Carlos Álvarez Naves, José Ramón Alonso, los hermanos Paredes, Toni Santos, Toni Urrutia, Inda-lecio Talavera, Rafa Abril, José Ig-nacio Villamil, Fernando Ferreiro, Fredi Martínez Nora, Pedro Serra-no, Eduardo Meana, Robert, Mar-cos Fanjul, etc. (como tantos que no puedo citarlos a todos) y otros que no son abogados y que tam-bién compiten con nosotros.

Imagínese que tiene delante a un recién licenciado, un nuevo

colegiado listo para afrontar su futuro profesional en la abogacía. ¿Qué consejos le ofrece?Que piense mucho más en estu-diar que en el dinero y que cuan-do piense en sus primeros dineros como abogado que lo haga para poder comprar más y más libros jurídicos para leer, que todo lo que se compre y se estudie es poco. Además tiene que tener paciencia porque el producto del estudio no suele ser inmediato.Debe tratar de competir sana-mente con los jueces en el sentido de pensar que ellos han sido casi todos magníficos estudiantes y opositores y hay que estudiar para igualarlos y poder trabajar y expo-ner en los juicios en igualdad de conocimiento con ellos. Creo que esa aspiración y competencia sana le harán mejorar.De no haberse dedicado a

ignacio Álvarez buylla consulta unos libros de referencia en su despacho.

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ejercer como abogado, ¿cuál cree que hubiese sido su profesión?Yo preparé el programa de juez de distrito porque mi padre, a pesar de haber sido muy buen estudian-te en la carrera, me obligó a ir re-pasando temas y temas para me-jorar en mis conocimientos por lo que podría estar en la judicatura y lo cierto es que aunque mis ami-gos querían que preparara oposi-ciones a Registros o a Notarías e incluso alguno de ellos tenía tanta confianza en mí que me ofreció subvencionarme (el ya trabajaba) mientras preparaba el programa y, a cambio, se incorporaba, una vez accedido al cargo, como oficial y socio conmigo. Yo de no haber

comprensión, dedicación, que re-quiere esta profesión para poder tener un mínimo éxito profesional y un mínimo rendimiento econó-mico, hace que ella a su vez cada vez me respete más y comprenda y se haga partícipe de mi esfuerzo que también lo es en beneficio de toda la familia.

De toda la saga de los Álvarez-Buylla que se dedican al ejercicio de la abogacía a quien destacaría?Tanto Celso como Carlos, como Alfonso son profesionales exce-lentes pero yo tengo especial de-voción por mi hermano Ricardo que aparte de compañero y socio es amigo porque nos llevamos solamente 12 meses en la edad y siempre hemos tenido los mismos amigos comunes. Además, y en cuanto a lo que más él se dedica, que es el Derecho Penal, creo que es de lo mejor del país, no sólo de Asturias.

Y para finalizar y tras el reciente fallecimiento de Justo de Diego ¿Cuál es su opinión acerca de esta pérdida?Yo hablando de Justo no puedo ser objetivo porque era de los mejores amigos y compañeros de mi padre y, tanto cuando murió Manuel Herrero como ahora con la muer-te de Justo, se fueron los amigos que quedaban vivos de aquella reunión de compañeros de todos los lunes a la hora de la cena en la que participaba mi padre, Manuel Herrero, Justo, Agapito Melchor y Jaime Valdés Hevia. Justo fue ejemplo y maestro de todos y el Decano por excelencia de nuestro Colegio, pero además de su re-cuerdo y de su espíritu inmortal, queda en Oviedo y en la profe-sión su hijo Justo que ya mejora a su padre y que es un fenómeno como abogado (el mejor) y como amigo.

sido abogado en ejercicio hubiera sido juez y además creo que val-dría para ello. Ahora bien, a día de hoy habría perdido mucho dinero y quizás calidad de vida de mi fa-milia.Por eso a los jueves hay que res-petarlos y admirarlos porque hay que saber mucho Derecho y te-ner una vocación tremendas y ser muy desprendido y nada egoísta.

Su esposa también está dada de alta en nuestro Colegio y trabaja con usted en el despacho. ¿Cómo se lleva el ser marido, colega y socio?Esta situación también la vive nuestro Decano con su esposa, ambos compañeros míos de toda la carrera en la Facultad de Dere-cho, y mi hermano Plácido que es Procurador y trabaja con su espo-sa que también lo es. Es cierto que mi mujer y yo trabajamos juntos en el despacho, aunque ella le de-dica alguna hora menos que yo, pero el resto lo completa en dedi-cación a las dos hijas que tenemos y toda la familia con lo que al final trabaja, al menos, las mismas ho-ras que yo.Ella trabajaba en Banca e incluso estando yo en el Banco Herrero y recién nombrado subdirector general y Jefe de la Asesoría Ju-rídica, la ficharon procedente del Banco de Santander de Negocios y después de pasar por Riesgos y por Banca de Empresas, cuando yo me fui del Banco y compré el despacho en calle Uría, decidimos ambos que lo mejor era que dejara el banco y se incorporara al des-pacho donde desempeña muchas labores de todo tipo, entre ellas la gerencia y organización de toda la actividad. Yo llevo más de 30 años con Sol y cada día la quiero más, la admiro más y no paro de agra-decerme el haberme cruzado con ella en la vida. Además al com-probar ella el esfuerzo de estudio,

¦ la venia

En estos tiempos, en que el hombre alcan-za el cosmos con la naturalidad propia del momento tecno-

lógico que vivimos, demorar tres días un viaje aéreo de América a Europa puede sonar anacrónico, sea cual fuere la razón; sin embar-go, ese es el tiempo que tardé en llegar a España el año 2007. Con-cordarán conmigo, que este evento no fue precisamente un presagio auspicioso del futuro que me es-peraba en las acogedoras tierras de Cervantes y de Jovellanos.Aunque por motivos profesionales y de estudio, previo a mi llegada a España, había conocido otros con-tinentes y sus culturas, África, Eu-ropa y América, el año 2007 fue el tiempo en que por primera vez me encontraba aquí, concretamente, en Langreo, Asturias.Pese a la familiaridad del idioma, no dejó de sorprenderme las dife-rencias de matices de la lengua ma-terna que compartimos, así como la arquitectura de sus poblaciones y contra cierto prejuicio, la calidez y hospitalidad de sus gentes. Era similar pero diferente a la vez. Gra-cias a mi familia política, pude ir

compenetrándome de lo auténtico y propio de la variedad de costum-bres de esta parte de España, y lo más importante, entenderla.Como venía de un ambiente labo-ral jurídico, uno de mis primeros intereses fue conocer el fenómeno jurídico legal y la percepción ciu-dadana de la Justicia, entendida como sistema institucional, por lo que asistí a conferencias en Gijón, colaboré con un despacho en León y empecé a leer algo de la profusa cuanto variada producción biblio-gráfica especializada. La consecuencia inmediata de es-tas actividades fue la decisión de convalidar mi título de abogado boliviano en España, ya que en mi criterio, lo conceptual y sustanti-vo del derecho son casi similares en nuestros países, diferencián-dose más bien, en lo procesal y cierta terminología forense de-bido a lo acentuado de la orali-dad de las actuaciones judiciales españolas en contraposición a lo escritural que aún subsiste en La-tinoamérica.Luego de averiguar los requisitos previos y cumplir con las forma-lidades legales de ambos países, pude rendir el examen de cono-

cimientos que me permitió de-mostrar mi idoneidad y capacidad profesional. Debo confesar que en muchos momentos de mi prepa-ración, sentí que estaba de vuelta en la facultad de derecho con los textos de rigor.Lo gratificante en lo personal fue obtener la calificación que me permitió solicitar formalmente el reconocimiento de mi título pro-fesional, culminando este proceso con la jura respectiva como co-legiado, en el Ilustre Colegio de Abogados de Oviedo, a la cual, me honro en pertenecer.Hoy, y en retrospectiva, puedo afirmar que, en absoluta oposición al mal “presagio” de mi llegada, el destino y los esfuerzos propios me permiten ejercer la abogacía plenamente y con esperanza de un futuro promisorio.No quisiera terminar esta breve reseña sin agradecer a mi com-pañera y esposa Mercedes quien alegró el hogar con el nacimiento de nuestros dos hijos gemelos Car-los Alberto y Franz Rodrigo, a mis suegros Alberto y María Merce-des, quienes me apoyaron siempre y desde el primer momento. Gracias Asturias, gracias España.

ruDy laruta llegó de

bolivia en 2007 para

Convalidar su título de

abogado en españa.

aCtualmente ejerCe en langreo,

donde reside

experiencias de unabogado boliviano

opinión

rudy lArutA

la venia ¦

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Incluso en épocas como ésta, sobrevive como figura también habitual el aboga-do solo. Tiene su despacho desperdigado por las calles

de la gran, de la pequeña ciudad, de las villas y de los pueblos peque-ños. Se anuncia con una placa que puede ser discreta, apenas visible, como avergonzada de sí misma o descomunal como un grito que avisa a cualquiera que pase que justamente allí hay un abogado deseoso de acreditar su solvencia profesional.El abogado solo casi siempre, don-dequiera que lo veáis, os parecerá obsesionado, absorto. Es que traba-ja durante 24 horas y pico de cada día. No tiene ayudantes ni es pro-bable, sobre todo si es moderno, pasantes. Ha pasado la tarde y par-te de la noche, como el viejo Hidal-go hacía con los libros de caballe-rías, hurgando él en colecciones de jurisprudencia clásicas o en intrin-cadas bases de datos, las noches de claro en claro y los días de turbio en turbio. No encontró el caso, sino, a todo más, otros de cierta analogía, pero con sutiles diferencias que le han hecho dudar, y ahora, cuan-do sería hora de ocio y descanso, la letra impresa y el seco lenguaje jurídico lo persiguen y agobian. Está descubriendo esa relación a la vez maravillosa e intrincada de la ley, general y clara, con el caso concreto, lleno de señales y signos

que lo identifican, separan, hacen casi siempre único y necesitado de ajuste, enfoque y solución peculiar, también única y diferente, en que la justicia y la equidad coincidan.No lo sabe, pero está ejerciendo y ejercitando una de las más difíciles profesiones, tan vieja como la his-toria de la civilización y tan intrin-cada y apasionante como ella. Está aprendiendo a incardinarse como si fuera su problema con el de su confiado cliente. Sabe que enfren-te habrá otro como él o tal vez un despacho colectivo, empeñados en discutir sus puntos de vista y des-montar sus razones, y que al final del camino iniciático del proceso que debe seguir cuidando las for-mas, habrá alguien que le dará o quitará la razón y premiará así o despreciará todo el trabajo hecho con tanto esfuerzo y la ilusión que puso en haber encontrado el modo de mejor y mayor aproximación a la verdad del caso. Y al día siguien-te de que todo eso haya ocurrido, cuando sepa que la sentencia es firme e inapelable, sin más recurso para él o para su antagonista, debe-rá olvidarse de cuanto no haya sido experiencia y despojarse de la per-sonalidad invasora del cliente.Defiéndelo como propio, pero gánalo o piérdelo como ajeno, le habrá aconsejado alguien, algún maestro, en su día, y ten en cuen-ta que haya triunfado tu tesis o la ajena, lo importante es que los an-

tagonistas reales del pleito, es decir, tu cliente y su adversario, hayan tenido la oportunidad de com-parar sus razones y obtenido una decisión imparcial respecto de su conflicto de intereses.El abogado solo, en la soledad de su despacho, rodeado de libros abiertos, ordenadores implaca-bles, si acaso con la débil lucecita de un amigo o un compañero se-guramente incapaces de entender del todo su angustia, pero sin po-der compartirla con la integridad agobiante de sus dudas, se irá ha-ciendo sentencia a sentencia, auto, diligencia, fracaso o acierto tras otro, haciendo o destruyendo, que de todo hay en la viña, pero si es capaz de resistir, un día, alguien le pondrá una insignia del Colegio, en presencia de otros como él fue, recordatoria de veinticinco o de cincuenta años de ejercicio profe-sional. Y si para entonces ha sido fiel a sí mismo, tendrá dos sensa-ciones paralelas, como dos esca-lofríos: una la de que visto ahora, desde el índice de los asuntos tra-bajados, fue apasionante y al fin y al cabo tampoco tan difícil, y la otra de haber contribuido con sin-gular eficacia nada más ni menos que al equilibrio social indispensa-ble para una convivencia humana, necesaria para la subsistencia de la sociedad en que han de vivir los humanos para sobrevivir a pesar de todo.

román suárez

blanCo es abogado. fue

presidente de Caja

rural de asturias

durante más de 35 años

el abogado solo

opinión

rOMÁn SuÁrez blAncO

¦ la venia

La propuesta de este mes es un restaurante relativamente nuevo -abrió hace pocos meses, aunque ya está

teniendo un considerable éxito- y, desde luego, muy innovador den-tro de la oferta gastronómica de la capital asturiana. Es el Blanco Sa-tén (calle Llano Ponte, 36, Oviedo. Tlf. 985 110 983), un restaurante que ofrece viernes y sábado noche música en directo además de una cuidada y selecta cocina.

Los impulsores de esta sala han querido aunar un ambiente distin-guido, conseguido gracias a una decoración inspirada en motivos musicales, con una cocina sabrosa

e innovadora, basada en productos de cali-dad.

Mezcla de tradi-ción y cocina ela-borada en su justa medida, la carta de Blanco Satén presenta entrantes tan atractivos como caramelos de mor-cilla y manzana con salteado de judías a la sidra; ensaladas y primeros platos ligeros y delicio-sos como el carpaccio de solomillo con virutas de foie y queso; potajes y guisos de cuchara contundentes como los grabanzos con bogavante y pixín o arroz con pitu de caleya y verdines; pescados finos como la

l u -bina al cava y carnes como el solomillo de

ternera con sal- teado de boletus

y salsa de trufa. Y los postres caseros,

todo un lujo.

*Descuento de un 10% del precio en platos de carta para miembros del Colegio de Abogados de Oviedo, excepto cenas de viernes y sábados. Oferta válida hasta el 28 de febrero de 2012.

BLANCO SATÉN Melodías y elegancia

la propuesta

Solomillo de canguro, una

‘delicatessen’ de blanco Satén.

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nestor

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