140
DIRECCIÓN DE EDUCACIÓN ABIERTA Y A DISTANCIA Y VIRTUALIDAD LICENCIATURA EN EDUCACIÓN BÁSICA CIENCIA,TECNOLOGÍA Y SOCIEDAD MÓDULO EN REVISIÓN

Ciencia,Tecnología y Sociedad

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Este módulo Ciencia, tecnología y Sociedad es un compilado de conocimientos que contribuye a la formación de los docentes de educación básica. Promueve a la reflexión de los docentes en formación sobre los efectos del auge de la ciencia y la tecnología en la sociedad.

Citation preview

DIRECCIÓN DE EDUCACIÓN ABIERTA Y A DISTANCIA Y VIRTUALIDAD

LICENCIATURA EN EDUCACIÓN BÁSICA

CIENCIA,TECNOLOGÍA Y SOCIEDAD

MÓDULO EN REVISIÓN

CCOORRPPOORRAACCIIÓÓNN UUNNIIVVEERRSSIITTAARRIIAA DDEELL CCAARRIIBBEE

““CCEECCAARR””

CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

PPRROOGGRRAAMMAA DDEE LLIICCEENNCCIIAATTUURRAA EENN EEDDUUCCAACCIIÓÓNN

BBÁÁSSIICCAA

DDIIVVIISSIIÓÓNN DDEE EEDDUUCCAACCIIÓÓNN AABBIIEERRTTAA YY AA DDIISSTTAANNCCIIAA

SSIINNCCEELLEEJJOO,, 22001122

2

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

CCOORRPPOORRAACCIIÓÓNN UUNNIIVVEERRSSIITTAARRIIAA DDEELL CCAARRIIBBEE

““CCEECCAARR””

CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

COMPILADOR

JUAN CARLOS GÓMEZ GÓMEZ

PPRROOGGRRAAMMAA DDEE LLIICCEENNCCIIAATTUURRAA EENN EEDDUUCCAACCIIÓÓNN

BBÁÁSSIICCAA

DDIIVVIISSIIÓÓNN DDEE EEDDUUCCAACCIIÓÓNN AABBIIEERRTTAA YY AA DDIISSTTAANNCCIIAA

SSIINNCCEELLEEJJOO,, 22001122

3

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

TABLA DE CONTENIDO

INTRODUCCIÓN 5

CONTEXTO TEÓRICO 6

PROPÓSITOS DE LA ASIGNATURA 7

INSTRUCCIONES PARA EL MANEJO DEL MÓDULO 8

UNIDAD UNO

INTRODUCCIÓN A LOS ESTUDIOS DE LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA

PRESENTACIÓN 9

CCOOMMPPEETTEENNCCIIAASS AA DDEESSAARRRROOLLLLAARR 1100

DDIINNÁÁMMIICCAA PPAARRAA CCOONNSSTTRRUUIIRR EELL CCOONNOOCCIIMMIIEENNTTOO 1111

EEVVAALLUUAACCIIÓÓNN IINNIICCIIAALL –– AATTRRÉÉVVEETTEE AA OOPPIINNAARR 1122

1.1 . Conceptualización de la Ciencia, Tecnología, Sociedad e Innovación 13

1.2 . Historia de la ciencia y la técnica 17

1.3 . Relación Ciencia, Tecnología, Educación y Desarrollo. 49

RESUMEN 57

EVALUACIÓN DE LA UNIDAD 58

UNIDAD DOS

LA CULTURA TECNOLOGÍA Y LA SOCIEDAD

PRESENTACIÓN 59

CCOOMMPPEETTEENNCCIIAASS AA DDEESSAARRRROOLLLLAARR 5599

DDIINNÁÁMMIICCAA PPAARRAA CCOONNSSTTRRUUIIRR EELL CCOONNOOCCIIMMIIEENNTTOO 6600

EEVVAALLUUAACCIIÓÓNN IINNIICCIIAALL –– AATTRRÉÉVVEETTEE AA OOPPIINNAARR 6611

2.1 Concepto y antecedentes históricos de la Cultura, 62

la Tecnología y la Sociedad

4

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

2.2 La responsabilidad social y ética de científicos, 65

tecnólogos y administradores de la ciencia y de la tecnología

2.3. La era de la información: globalización técnica y cambio social 78

2.4. Sociedad: población, estilos de vida, política 80

RESUMEN 93

EVALUACIÓN DE LA UNIDAD 95

UNIDAD TRES

RESPONSABILIDAD SOCIAL Y DESARROLLO CIENTÍFICO

Y TÉCNICO

PRESENTACIÓN 96

CCOOMMPPEETTEENNCCIIAASS AA DDEESSAARRRROOLLLLAARR 9977

DDIINNÁÁMMIICCAA PPAARRAA CCOONNSSTTRRUUIIRR EELL CCOONNOOCCIIMMIIEENNTTOO 9988

EEVVAALLUUAACCIIÓÓNN IINNIICCIIAALL –– AATTRRÉÉVVEETTEE AA OOPPIINNAARR 9999

3.1. Economía y sistema científico-técnico 100

3.2. La democratización de la ciencia y de la tecnología 103

3.3. Indicadores y evaluación del conocimiento científico

y su impacto social 112

3.4. Tecnología y competitividad 125

3.5. La educación ante el desarrollo de las tic 130

RESUMEN 134

EVALUACIÓN DE LA UNIDAD 136

BIBLIOGRAFÍA 137

BIOGRAFÍA DEL COMPILADOR 138

5

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

INTRODUCCIÓN

Los avances en la ciencia y la tecnología no se han dado siempre con la

misma magnitud así como su impacto social. Hasta antes del siglo XX el

auge y evolución de las actividades humanas no han tenido alto crecimiento

en producción científica y tecnológica. Sólo desde este siglo sus avances se

han dado en mayor proporción, por encima de las artes, la música, y otras

actividades del hombre. Este desarrollo de gran magnitud ha afectado

significativamente las formas de vida humana y también en ciertos niveles la

vida animal, vegetal y el comportamiento de los fenómenos ambientales a

nivel global.

Los efectos del desarrollo de la ciencia y la tecnología a lo largo de la

historia de la humanidad, independientemente de que hayan áreas de

ciencias y tecnologías en los planes de estudios institucionales o de que las

personas sean o no alfabetas, han tenido su impacto afectando todo el

planeta y quizás han traspasado las fronteras planetarias con los equipos

tecnológicos que orbitan la Tierra. Por esta razón es importante el estudio de

la ciencia, la tecnología y la sociedad como unidad temática en los

programas de Educación Superior.

La vida de todas las personas en el mundo, está afectada, por un sinnúmero

de productos y equipos que a través de la ciencia y la tecnología se han

creado, descubierto o inventado. Estos avances han provocado cambios en

los ámbitos laboral, social, político y económico. Las sociedades según la

tecnología que poseen han logrado controlar, explotar y comercializar sus

productos, han generado nuevas relaciones sociales entre países y entre

sus habitantes internamente. Han permitido crear nuevas fuentes de

ingresos, desaparecer otras, se ha masificado la producción en serie. Lo que

ha provocado también cambios en los oficios y la creación de nuevas

profesiones.

6

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Todos estos temas son de preocupación para los académicos, los

empresarios y para los gobernantes, dado que el desarrollo de la sociedad

con la tecnología genera cambios en el comportamiento humano, en sus

relaciones y a su vez se convierten en soporte para que la ciencia avance,

es decir lo uno lleva a lo otro, de igual manera en el sentido contrario.

CONTEXTO TEÓRICO

Este módulo Ciencia, tecnología y Sociedad es un compilado de

conocimientos que contribuye a la formación de los docentes de educación

básica. Promueve a la reflexión de los docentes en formación sobre los

efectos del auge de la ciencia y la tecnología en la sociedad.

Se espera que la temática abordada en este módulo permita al estudiante

asumir con criterio formal y actitud científica los problemas y situaciones que

sobrevengan como producto de la dinámica social que se vive en los

ambientes pedagógicos de actualidad.

Se tratan tópicos sobre la direccionalidad de los efectos de la evolución de la

sociedad hacia el progreso científico y tecnológico y en sentido contrario los

efectos provocados en la vida en sociedad por los avances en la ciencia y la

tecnología.

7

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

PROPÓSITOS DE LA ASIGNATURA

1. Reconocer las incidencias de la ciencia y de la tecnología en la

sociedad.

2. Reflexionar y predecir los posibles alcances de la ciencia y su impacto

en la vida de los seres en el planeta, así como los cambios sociales

causados por sus efectos.

3. Asumir posición sobre los efectos ambientales del desarrollo

tecnológico y científico, de manera que se generen acciones

educativas encaminadas a preservar el equilibrio natural en el planeta.

8

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

INSTRUCCIONES DE MANEJO

Amigo(a) Estudiante:

El módulo ha sido diseñado para el trabajo autodirigido, de manera que el

estudiante pueda trabajarlo de manera independiente en tiempo y espacio

para posteriormente discutirlo en sesiones con presencia del tutor o CIPAS.

El lector podrá desarrollar en este módulo las actividades que se proponen al

final de cada capítulo, encontrará lecturas complementarias para una mejor

comprensión y profundización de los temas desarrollados.

La realización de talleres es fundamental para la interiorización de los

conceptos. Así mismo, la solución a los interrogantes permitirá enriquecer

las respuestas en los grupos de trabajo.

Se recomienda a cada estudiante, complementar la información desarrollada

en este documento, consultando los textos referenciados en la bibliografía.

Así mismo, se sugiere que:

1. Considere el módulo como una herramienta que le permitirá fortalecer sus

conocimientos en materia de ciencia, tecnología y su impacto en la sociedad.

2. Prepare cada uno de los temas con antelación a la reunión con el tutor, de

manera que en la sesión presencial con el tutor plantee preguntas e

inquietudes al respecto.

3. Siga los contenidos programáticos de cada unidad, para que encuentre

sentido a la aplicación de los preceptos teóricos en las situaciones

contextualizadas que se le plantean.

4. Complemente sus actividades con la consulta de documentos, revistas, sitios

Web, bases de datos y bibliotecas en modalidad presencial y virtual, etc.,

que fortalezcan el estudio de los temas propuestos en el módulo.

5. Desarrolle las actividades propuestas en el módulo luego de tener claro los

conceptos básicos que se enumeran en la sección de autoevaluación.

Pregunte, discútalos con sus compañeros o tutor y, después de su

comprensión, continúe con el estudio del módulo.

9

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

UUNNIIDDAADD 11

11.. INTRODUCCIÓN A LOS ESTUDIOS DE LA CIENCIA Y LA

TECNOLOGÍA

PRESENTACIÓN

En esta unidad se hace una presentación general, conceptual e integral de

ciencia, tecnología y sociedad “CTS”, con el apoyo teórico documental e

investigaciones, se presentan conceptos y reflexiones de autores respeto de

los avances científicos-tecnológicos y su impacto en la sociedad.

Temática que por mucho tiempo no había tenido o sido objeto de estudios

académicos e investigativos, pero por los efectos en el comportamiento

humano y en los cambios ambientales que se han generado han sido

tenidos en cuentas en las agendas de científicos, religiosos, empresarios,

ecologistas, políticos y gobernantes en todo el mundo. Se desarrollan

temáticas relacionadas con el origen y conceptos de CTS, factores de

transformación en las formas de producción del conocimiento en la

sociedad contemporánea, historia de la ciencia y la técnica, finalizando con

la relación Ciencia, Tecnología, Educación y Desarrollo.

11

10

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

COMPETENCIAS A DESARROLLAR

Con el desarrollo de esta unidad el estudiante:

Interpreta los referentes conceptuales de la Ciencia, Tecnología,

Sociedad e Innovación

Analiza los factores de transformación en las formas de producción

del conocimiento en la sociedad contemporánea

Argumenta sobre la responsabilidad social y ética de científicos,

tecnólogos y administradores de la ciencia y de la tecnología

Valora la producción del conocimiento científico y tecnológico en los

avances de la humanidad.

Argumenta sobre los problemas sociales de la ciencia, tecnología e

innovación y su importancia en el contexto social

Propone proyectos de investigación susceptibles de soluciones

tecnológicas.

11

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

DINÁMICA PARA CONTRUIR EL CONOCIMIENTO

AACCTTIIVVIIDDAADD PPRREEVVIIAA:: (Trabajo independiente)

1. Lea comprensivamente la Unidad uno en forma individual.

2. Responda de manera escrita la Evaluación Inicial, “Atrévete a Opinar”

3. Haga una síntesis sobre la temática tratada en la unidad.

4. Analice detenidamente todos los términos que aparecen en esta

unidad, en caso de no tener claridad sobre alguno investigar sobre

ellos.

5. Elabore un análisis general sobre toda la Unidad, para que afiance lo

leído.

AACCTTIIVVIIDDAADD EENN GGRRUUPPOO (CIPAS)

1. Reunidos en sus grupos de estudios (CIPAS), socializan la temática

de la Unidad uno con los resúmenes elaborados de manera individual

e independiente.

2. Socialicen las respuestas de la Evaluación Inicial, que respondieron

de manera individual.

3. Desarrollen los ejercicios que se encuentran en el desarrollo de la

Unidad y discútanlos en el grupo de estudios. Estos ejercicios deben

ser socializados en la sesión junto con todos los compañeros de

grupo y entregados al tutor.

12

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Evaluación inicial – ATRÉVETE A OPINAR

1.

Explica: ¿Cuál es su concepto sobre los términos ciencia, técnica y tecnología?

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

2.

Exprese. ¿Cómo inciden la ciencia y la tecnología en la sociedad?

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

3.

¿Por los avances en la ciencia y las tecnologías describe características de la sociedad del futuro?

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

13

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

1.1. CONCEPTUALIZACIÓN DE LA CIENCIA, TECNOLOGÍA,

SOCIEDAD E INNOVACIÓN1

Ciencia, Tecnología y Sociedad (CTS). ¿Qué aporta de nuevo este enfoque?

Si CTS fuera solamente la suma de unos resúmenes comprimidos de esos

tres conceptos, las objeciones relacionadas a su relatividad, estarían

justificadas y, no tendría sentido su presencia en el pensum educativo de

manera diferenciada. Sin embargo, CTS es algo más que la suma de esos

tres términos. Supone una nueva aproximación o perspectiva sobre esos

conceptos que pone el acento en sus relaciones recíprocas, en las

complejas interacciones y en el impacto que generan en el comportamiento,

en el hacer y ser de las personas que hacen parte de la sociedad

reflejándose en las relaciones e interacciones sociales surgidas entre éstas,

debido a los desarrollo científicos y tecnológicos que, en la actualidad, se

dan vertiginosamente en los distintos contextos sociales.

Nuestro mundo es muy diferente al de hace cien o quinientos años. Esto es

algo obvio y comúnmente aceptado. Pero lo verdaderamente distinto, lo que

hace nuestro mundo y nuestro tiempo diferente de los anteriores, es el grado

de desarrollo que ha alcanzado la ciencia; hay quienes hablan del siglo XX

como el siglo de la ciencia y la tecnología, o, para ser más exactos, la

tecnociencia o el complejo científico-tecnológico, como también se las

conoce hoy. Bueno, ¿y qué? Alguien podría decir que en nuestro tiempo la

ciencia y la tecnología han avanzado mucho, pero que eso es lo normal. Eso

es lo que le ha sucedido a todas las ramas del saber y a otras muchas

actividades humanas como la música, la pintura, el cine, la arquitectura, la

poesía, etc. Que la ciencia y la tecnología modernas hayan avanzado mucho

no debería extrañarnos, es lo normal cuando va pasando el tiempo; y no

debería ser considerado como algo singular, sucede en todos los ámbitos de

la actividad humana. Sin embargo, en el siglo XX ha sucedido algo muy

1 GORDILLO, Mariano Martín, ARRIBAS, Ramírez Ricado, Otros. Módulo 1 Ciencia,

Tecnología y Sociedad. 2003

14

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

especial con la ciencia y la tecnología que no ha pasado con el resto de las

actividades humanas. El desarrollo tecnocientífico ha sido de tal magnitud y

naturaleza que ha afectado radicalmente a las formas de vida social. Alguien

podría obviar el desarrollo en los diversos ámbitos del arte a lo largo del siglo

XX considerando que no ha afectado a su vida y quizá podría tener razón.

Pero nadie podría decir que no ha sido influido por el desarrollo de la ciencia

y la tecnología, porque éstas, a diferencia de otras actividades humanas, se

imponen a todo el mundo. Nadie que viva en sociedad puede escapar a los

efectos del desarrollo que se ha producido en la ciencia y la tecnología a lo

largo del siglo XX. Independientemente de que haya o no materias de

ciencias y de tecnologías en las instituciones escolares y de que existan o no

en los currículos educativos contenidos específicos de CTS, todas las

formas de vida humana están y van a seguir estando afectadas por la

tecnociencia.

Por ello, las relaciones entre la ciencia, la tecnología y la sociedad deberían

importar de una forma muy directa a todos los ciudadanos al margen de las

inclinaciones o afinidades personales que puedan sentirse ante los

contenidos que tratan.

La sociedad está invadida por los productos de la ciencia y tecnología. De

entrada, la vida social está afectada por lo más obvio, lo que se ve todos los

días y a todas horas: los artilugios. El horno microondas, el teléfono celular,

la televisión, la Internet, las naves espaciales, los medicamentos, los

automóviles, como tantas otras cosas, son ejemplos de artefactos

tecnológicos actuales. En esto de los cacharros es donde quizá sea más

evidente una de las ideas predominantes en nuestro tiempo: la sociedad, o

sea la gente, avanza.

Suele considerarse que cada vez se vive mejor porque cada vez se tienen

más y mejores artefactos que liberan a los seres humanos de los trabajos

más duros y monótonos. De hecho, los grandes avances tecnológicos de la

medicina hacen que hoy se viva más y mejor que antes (o, al menos, así es

15

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

en las sociedades más desarrolladas, porque en el tercer mundo, esos

progresos de la tecnología sanitaria no llegan en el mismo grado, la mayoría,

sigue viviendo igual de poco e igual de mal; incluso dentro de los países más

ricos sigue habiendo quienes viven en su particular tercer mundo, sin que les

lleguen los dones benefactores del progreso tecnocientífico). Pero, además

de los artefactos y productos materiales derivados del desarrollo de la

ciencia y la tecnología que proporcionan bienestar a las sociedades (o a

algunas sociedades) existen también otros efectos de la tecnología y de la

ciencia, no por menos visibles menos importantes para la vida en sociedad.

Hay también otras máquinas y otros artefactos tecnológicos que no tienen

una naturaleza material, pero que son tan artificiales y tan construidos como

los artilugios que se pueden ver y tocar. Las llamadas máquinas sociales son

también productos tecnológicos (en este caso, de las tecnologías de

organización social) que afectan a la vida en sociedad, tanto, como los

artefactos tangibles.

En una fábrica o en un ejército, además de las máquinas diseñadas para la

producción y la destrucción, respectivamente, hay otras máquinas también

artificiales y no menos importantes que las cadenas de montaje o las armas

para el logro de los fines de cada una de esas instituciones. El reparto de

jerarquías y la organización de las funciones entre obreros, ingenieros,

supervisores y administradores en el caso de la fábrica o entre soldados,

mandos y estrategas en el del ejército, son tan importantes o más que la

calidad de los artilugios materiales de los que se disponga. Pero no son

éstos los únicos ejemplos de máquinas sociales o tecnologías de

organización social que afectan cotidianamente a nuestras vidas. Los

restaurantes de comida rápida, las iglesias, los lugares de diversión, los

centros comerciales y hasta las mismas escuelas son escenarios artificiales

en los que las tecnologías de organización social producen notables efectos

sobre las formas de vida de los seres humanos.

16

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Esta frontera difusa entre las tecnologías materiales y la vida social sólo se

percibe cuando se amplían los conceptos de tecnología y de artefacto

tecnológico a las diversas formas posibles de organización social, las cuales

son tan artificiales, tan artefactuales, como los objetos materiales. Así, lo

tecnológico es también lo que transforma y construye la realidad social.

La importancia de la tecnociencia en la vida social actual podría seguir

mostrándose indefinidamente a través de numerosos ejemplos más o menos

evidentes para todos. ¿Quién no ha oído hablar de clonación, de alimentos

transgénicos, de vacas locas, de viajes espaciales o de genes que

supuestamente determinan la obesidad o la inteligencia? Los periódicos

sorprenden todos los días con noticias sobre estas cuestiones y tanto la

televisión como el cine prometen mundos futuros donde todo será

transformado por los efectos del desarrollo de la ciencia y la tecnología. Sin

embargo, al mismo tiempo que hay quienes auguran el advenimiento en el

futuro de un mundo feliz gracias al progreso tecnocientífico, cada vez más

gente es partidaria de una vuelta a la naturaleza, prescindiendo de todo lo

artificial y lo tecnológico.

En el cine hay muchas películas futuristas en las que aparecen fantásticas

tecnologías que solucionarán todos los problemas, pero también en muchas

otras películas se presenta, de forma más pesimista, un futuro en el que las

tecnologías provocarán graves catástrofes como guerras hipertecnológicas o

desastres naturales provocados, voluntaria o accidentalmente, por la

actividad tecnológica descontrolada o por el desmedido afán de algunos

científicos locos.

Lo único que parece unir a esos dos puntos de vista, optimista y pesimista,

sobre la tecnociencia es que tanto los tecnófilos (que piensan que todos los

problemas serán resueltos por los avances científico-tecnológicos) como los

tecnófobos (que consideran que todos los problemas son provocados por las

tecnologías) entienden que la sociedad y los individuos poco pueden hacer

ante la ciencia y la tecnología, como no sea admirarlas o detestarlas. Así,

17

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

tecnoapocalípticos y tecnointegrados coinciden en que los ciudadanos no

pueden intervenir en la orientación del desarrollo de la ciencia y la tecnología

ya que tales decisiones están en manos de los expertos en ciencia y

tecnología.

Frente a estas imágenes tópicas y radicalizadas de la ciencia y la tecnología,

la perspectiva CTS, defiende que las relaciones de la sociedad con ellas no

deben reproducir las tradicionales relaciones de los profanos con la sagrada

divinidad (sea ésta un dios -para los tecnófilos- o un demonio -para los

tecnófobos). El enfoque CTS que estudia las relaciones entre ciencia,

tecnología y sociedad, pretende introducir una racionalidad laica al analizar

la interacción entre esos tres ámbitos. Favorecer una percepción más

ajustada y crítica de los temas de ciencia y tecnología, así como de sus

relaciones con la sociedad, será el primer objetivo de la perspectiva CTS. El

segundo, de carácter más práctico, será promover la participación pública de

los ciudadanos en las decisiones que orientan los desarrollos de la ciencia y

la tecnología a fin de democratizar y acercar a la sociedad las

responsabilidades sobre su futuro.

1.2. HISTORIA DE LA CIENCIA Y LA TÉCNICA2

Toda sociedad humana produce conocimiento y utiliza técnicas para resolver

sus problemas. La ciencia es el saber conceptual oficial de una sociedad, el

cual es utilizado para comprender el mundo, para suministrar explicaciones,

relatos coherentes, clasificaciones lo más organizadas posibles de los seres,

los objetos, los acontecimientos de la vida humana. La ciencia nace como

una parte especializada del lenguaje verbal en la cual ese lenguaje se vuelve

más preciso y coherente que el lenguaje de uso diario. Se desarrollan

clasificaciones organizadas conceptualmente y conceptos cada vez más

generales y abstractos y de cada vez más amplia aplicación. Así surgen las

taxonomías y las teorías explicativas.

2 Antonio Mejía Umaña – Agosto de 2005

18

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

La técnica es un saber hacer relacionado con objetos inanimados. Está

relacionada con el desarrollo y uso de artefactos (objetos que son producto

de la acción humana). Esos artefactos pueden ser para uso directo (vestido,

adorno, techo); o pueden ser herramientas, utensilios, objetos útiles en la

consecución de fines directos; o pueden ser herramientas para fabricar

herramientas y así sucesivamente en progresivos grados de elaboración. El

conjunto de artefactos que utiliza una sociedad es la base de su saber

técnico. Ese saber técnico puede ser tan sencillo que solo incluya un

centenar de utensilios, o puede ser más elaborado e incluir miles o millones

de ellos. El modo de vida de la sociedad determinará esa cantidad. En una

sociedad con un desarrollo técnico muy elaborado un solo dispositivo puede

tener miles de elementos.

A medida que aumenta el número de utensilios y dispositivos técnicos, se

van haciendo evidentes unos principios técnicos básicos, unos

procedimientos básicos, unos materiales fundamentales que se combinan de

muchas formas diferentes para dar origen a diferentes productos. Esos

elementos básicos caracterizan el desarrollo técnico de una sociedad y por

eso las primeras comunidades humanas se clasifican por los materiales que

usaban en Edad de Piedra, Edad del Bronce, Edad del Hierro. Una vez se

conocen los procedimientos para dar forma a los metales (al hierro, por

ejemplo) se multiplicarán los objetos para diferentes usos, que utilizan estos

materiales. Una vez se descubra un principio técnico, este se tratará de

aplicar de muchas formas. Por ejemplo, una vez se haya descubierto que el

filo de los objetos corta, o que una vara se puede usar como palanca, surgen

muchas aplicaciones de cada uno de los principios y luego aplicaciones que

combinan diferentes principios y conocimientos básicos sobre técnicas de

fabricación o de utilización de algún tipo de materiales.

Se descubren técnicas que se vuelven básicas para el desarrollo de otras

técnicas, como puede ser el caso de las técnicas de medición de longitudes,

de volúmenes, de pesos o el uso del dibujo técnico para representar lo que

19

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

se va a construir o fabricar. Aparecen artefactos para desarrollar artefactos y

conjuntos integrados de varios artefactos. Este tipo de articulación de las

técnicas es lo que se denomina la tecnología de una sociedad. Es decir, que

tecnología es simplemente un conjunto más o menos articulado de técnicas.

El repertorio técnico y tecnológico que necesita - y que a su vez es capaz de

usar - una sociedad depende mucho de su forma de vida. El grado de

desarrollo tecnológico de una sociedad se puede dimensionar contando el

número de artefactos (hechos por los humanos), el nivel de elaboración e

interrelación de esos artefactos, el número máximo de elementos que puede

tener un dispositivo, la cantidad de diferentes materiales que se usan, la

cantidad de diferentes técnicas de fabricación.

En este punto debemos observar, que a lo largo de este curso se usará la

palabra técnica solamente para referirse al saber hacer relacionado con

objetos inanimados. Para el saber hacer relacionado con los seres vivos,

bien sean vegetales, animales o humanos se usará la palabra método en

vez de técnica y metodología en vez de tecnología. En ese sentido será

incorrecto usar la palabra técnica para referirse, por ejemplo, al método de

respiración utilizado para relajarse, o a la serie de pasos que se usan para

adiestrar una mascota, o a los diferentes métodos de injerto. Obviamente,

esos métodos pueden estar asistidos por artefactos provenientes de la

técnica. Puedo usar un reloj para medir el tiempo de relajación, puedo usar

correas y huesos artificiales para adiestrar a un perro, puedo usar el arado

para oxigenar la tierra y cultivar maíz.

El saber técnico tuvo un cambio cualitativo cuando el ser humano inventó la

aldea y el modo de vivir sedentario. Cuando esa aldea se hizo más estable y

se convirtió en ciudad la posibilidad de guardar muchos utensilios se hizo

inmensa y empezaron a aparecer más y mejores materiales. Además la

ciudad llevó a una mayor especialización en el trabajo, empezaron a

aparecer especialistas en cada una de las actividades, lo cual facilitó el

descubrimiento de más procedimientos básicos y más principios técnicos. La

20

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

casa es un gran artefacto, compuesta por un número grande de elementos y

la ciudad puede verse como un sistema coordinado de muchos artefactos,

como un superartefacto, un gran dispositivo construido por el ser humano.

Obviamente no solo hubo un gran salto técnico y tecnológico al aparecer la

ciudad. Las relaciones humanas se volvieron mucho más complejas, el

lenguaje se hizo más elaborado. Fue necesario que el humano fuera

consciente de la organización social que se daba a sí mismo, por lo que

surgió la política y el derecho. El derecho con su serie de normas y

preceptos dio además un primer modelo para interpretar la realidad. La

naturaleza también debía seguir leyes. El derecho fue por lo tanto

predecesor de la ciencia. En resumen, la invención de la ciudad fue uno de

los mayores descubrimientos de la humanidad. No en vano muchos autores

afirman que las dos invenciones principales de la humanidad, que nos

separan del resto de primates, son el lenguaje verbal y la ciudad. Con el

progresivo desarrollo de la ciudad el mundo del humano se vuelve cada vez

más un mundo construido por la misma especie; cada vez más su hábitat se

limita a ser solamente lo que la especie misma ha construido.

La ciudad más antigua de que se tenga registro arqueológico, es Jericó, sus

vestigios tienen 12.000 años de antigüedad, aproximadamente. Con la

aparición de las primeras ciudades en Asia y Europa se desarrollaron las

edades de los metales, del cobre, el oro y el bronce primero y luego (al

menos en Europa y Asia), del hierro. Las primeras grandes civilizaciones

euroasiáticas coincidieron con el paso de la Edad de Bronce a la Edad del

Hierro aproximadamente unos 3.000 años antes de nuestra era. Hace 2.000

años ya existía una ciudad (Roma) con un millón de habitantes. El desarrollo

de la ciencia y la tecnología en Roma, en las demás ciudades del imperio

romano y en toda el área de influencia de esta red de ciudades, fue muy

grande. La sociedad urbana romana se extendió por Europa y sus

alrededores constituyéndose en un sistema interconectado que articuló

grandes áreas y fue el sistema social, político, económico, tecnológico,

cultural y militar más grande y complejo de la antigüedad, el cual anticipó el

actual hábitat artificial que construyó la especie encima del hábitat natural

21

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

donde vivimos los seres humanos de la actualidad. También existieron

grandes ciudades en China, en el lejano oriente, en América, en África, sin

embargo seguiremos principalmente el curso de los acontecimientos en

Europa y en el Cercano Oriente, ya que fue en esta región donde

posteriormente se logró el desarrollo que dio origen a las actuales ciencia y

tecnología occidentales que se han difundido por todo el planeta.

Tanto la ciencia como el saber técnico son patrimonios de toda la sociedad

que las crea y existe una parte de esos saberes que es compartida por un

amplio número de sus integrantes. Sin embargo, en la medida en que la

especialización de labores avanza, se forman núcleos más o menos

cerrados dentro de los cuales se tiene un dominio más amplio de esos

saberes. Los sacerdotes primero y los filósofos después van haciéndose

dueños del saber conceptual teórico, del conocimiento oficial avanzado de la

ciencia. Los artesanos primero y luego el conjunto de técnicos,

constructores, tejedores, ceramistas, ferreros, van apropiándose del saber

práctico que aprovechan otros especialistas en otras labores como los

pastores, los agricultores o los soldados. En las sociedades urbanas de la

antigüedad se tenían ya redes sociales complejas que manejaban los dos

tipos de saberes. En Roma se dio una especialización avanzada en la cual

existían filósofos, escribanos, legisladores, políticos, historiadores,

sacerdotes y adivinos, astrónomos y naturalistas, que manejaban todos ellos

el saber verbal conceptual.

Por otra parte estaban los que hacían el trabajo físico, que básicamente eran

esclavos, o en todo caso, no eran ciudadanos romanos. Sólo aquellos más

sobresalientes en su oficio, en su arte, en su técnica podían aumentar su

fortuna, su importancia social e incluso convertirse en ciudadanos romanos

como muchos gladiadores, soldados y constructores famosos. Tal es el caso

de Vitruvius, eminente arquitecto romano del siglo I, al que se atribuye el

acueducto romano y quien escribió diez volúmenes en latín sobre las

técnicas de construcción y sobre el arte de la arquitectura, que luego

pasaron a la posteridad como la primera enciclopedia técnica del mundo. En

22

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

la sociedad romana y en las sociedades esclavistas en general, se dio una

división de labores tal que las actividades relacionadas con los artefactos y

el mundo físico estaba reservado a los esclavos y ciudadanos no romanos y

el trabajo intelectual, el conocimiento conceptual, las artes liberales (de los

hombres libres), el derecho, la política eran para los ciudadanos romanos.

Ese carácter subordinado no permitió que el saber técnico se uniera al saber

de la ciencia, ya que esos dos tipos de saberes estaban, en principio, en

manos de clases diferentes de la sociedad.

En Europa fue necesaria la caída del Imperio Romano y el auge de los

pueblos provenientes del norte (francos, germanos, normandos y

posteriormente los pueblos escandinavos como los vikingos) para que el

conocimiento técnico y el científico empezaran a acercarse y se diera un

gran impulso al desarrollo de la tecnología. En los países donde la cultura

latina y la cultura proveniente de esos pueblos (los llamados bárbaros en

tiempos del imperio romano) se pudieron fundir, surgieron los maestros

artesanos medievales con cada vez mayor inteligencia práctica, lo que

finalmente produjo en Europa, siglo 18, lo que terminó llamándose la

Revolución Industrial, ese desarrollo de “dedos inteligentes y cabezas

duras”.

Simultáneamente, surgieron los científicos con espíritu cada vez más

práctico, desde Francis Bacon hasta James Watt que se fueron acercando

cada vez más a los problemas de la producción propios del saber técnico,

aportando ideas y nuevos principios que desarrollaron la metalurgia, la

construcción de máquinas, el desarrollo de instrumentos de medición y

dieron bases matemáticas y geométricas a la precisión en la construcción de

obras civiles y en la fabricación de todo tipo de artefactos. Científicos

prácticos que precedieron a los Faraday y a los Pasteur que posteriormente

darían lugar a los científicos empresarios o emprendedores como Thomas

Alva Edison a principios del siglo XX o Bill Gates en sus finales. La ciencia

europea cada vez más sistemática y rigurosa dio una base cada vez más

sólida a partir de los siglos 17 y 18 para la articulación de las técnicas en la

23

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

tecnología europea. La tecnología cada vez más elaborada y compleja dio a

su vez un renovado empuje a la ciencia, realimentándose mutuamente. La

ciencia y la tecnología europeas lograron así unos niveles de elaboración

nunca vistos antes en la historia de la humanidad.

Durante muchos siglos en occidente, al igual que en las demás sociedades

humanas la ciencia estuvo basada en el criterio de autoridad. Solo al término

de la Edad Media algunos científicos europeos comenzaron a romper con

ese criterio y postularon la comprobación experimental mediante medición y

uso del lenguaje geométrico y matemático como el criterio para sostener su

autoridad. Esa ruptura fue posible por contar con utensilios de una técnica

refinada como relojes y telescopios. El éxito de la física estableció el modelo

matemático- experimental como paradigma en la ciencia; luego la química

empezó a realizar mediciones del aire, del agua en todos sus estados, del

calor y la presión y establecer leyes matemáticas para predecir el resultado

de otras mediciones en otras condiciones. Cuando se introdujeron

clasificaciones de plantas y animales que tenían una base conceptual

relacionada con la observación detallada de las partes que las componen y

de sus diferentes funciones y se empezaron a cuantificar algunas

propiedades, la biología también entró en un modelo similar de ciencia.

Los siglos XIX y XX han presenciado el cada vez mayor acercamiento entre

los saberes de la ciencia, de las técnicas, de la medicina y la biología, el

comercio, las finanzas, la publicidad, la psicología y la sociología hasta

producir la paradójica situación actual en la cual cada vez hay más saberes

especializados sobre áreas cada vez más pequeñas y simultáneamente se

están produciendo paradigmas generalizantes, transversales a muchos

saberes que tienen que dar cuenta tanto de los conceptos más generales

como de los desarrollos más detallados y locales. Surge la tecnociencia

como una fusión del saber práctico y el teórico y se generaliza el surgimiento

de saberes locales que tiene que articularse con un lenguaje universal. Sin

embargo todavía la humanidad está muy lejos de haber logrado esas

síntesis, como se ilustra muy bien en la dificultad aún hoy existente de

24

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

integrar el desarrollo científico- tecnológico europeo, hoy extendido en todo

el mundo, con los conocimientos milenarios de Oriente o con la compleja

sabiduría de los pueblos amazónicos.

La construcción simbólica colectiva que trata de modelar sectores cada vez

más amplios de la naturaleza y de la vida humana es cada vez más

intrincada y compleja. La ciencia occidental ha tenido bastante éxito en el

modelamiento del mundo inanimado y en la predicción del comportamiento

de complejísimos dispositivos que ha construido a partir de la combinación

de artefactos más simples. Ha logrado con sus artefactos observar, medir e

intervenir en la vida de los seres animados. Ha tratado de duplicar con

modelos nacidos del método analítico cartesiano toda la complejidad de la

vida, considerando los millones de átomos y partículas elementales en que

ha subdividido la realidad. Pero a pesar de poder construir modelos con

números cada vez mayores de partículas y elementos, la complejidad de lo

viviente, del individuo humano y de las sociedades humanas se le desliza

entre los dedos. Uno de los primeros científicos en advertir la necesidad de

nuevos paradigmas fue Ludwig von Bertalanffy, padre de la Teoría General

de Sistemas. Sin embargo, muy temprano en la transición del siglo XIX al XX

ya Nietzsche había vislumbrado los grandes problemas de la ciencia y la

filosofía que hoy enfrenta occidente.

En cualquier caso, en la sociedad mundial seguirán subsistiendo técnicas

individuales, técnicas locales, técnicas de un grupo de personas, como

siguen subsistiendo interpretaciones divergentes del conocimiento oficial de

la sociedad, más o menos estructuradas y organizadas (el Candomblé y la

Macumba, por ejemplo). Sería totalmente inconcebible pensar que ya no

existe ninguna diferencia entre técnicas, tecnología y ciencia y que todos

estos desarrollos se van a fundir en una sola cosa. El ser humano vive cada

día más en un mundo construido por él mismo, el cual puede en buena

medida diseñar y controlar pero nunca debe aspirar a conocer y controlar

completamente el planeta y las fuerzas grandes y pequeñas de la

naturaleza. Además, aún le queda a la especie una tarea gigantesca que

25

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

desarrollar, que es conocer y aprender a actuar adecuadamente sobre el

mundo de la vida, sobre el mundo del individuo humano y sobre la sociedad

humana. Aún queda mucho trabajo muy importante por hacer.

Historia de la ciencia en Colombia3

Las investigaciones sobre el desarrollo de la ciencia en Colombia se

encuentran apenas en su fase inicial. Aunque existe una copiosa literatura

sobre algunos aspectos de las prácticas profesionales, ante todo de la

medicina y la ingeniería, y aunque los estudios sobre historia de la

educación han producido resultados notables, las deficiencias metodológicas

de la mayoría de los trabajos publicados muestran la urgencia de un trabajo

más sistemático y riguroso. Es preciso superar los estudios en los que

apenas se enumera una serie de practicantes notables de una disciplina, sin

que sea posible establecer realmente qué hicieron, cuáles fueron sus

relaciones con el ambiente científico internacional, en qué medida realizaron

una incorporación exitosa de metodologías ya desarrollas en otras partes del

mundo, hasta qué punto sus trabajos superaron un nivel puramente imitativo

y repetitivo y condujeron a aportes en sus áreas respectiva. Y es importante

que se desarrolle una historia de la actividad científica que tenga en cuenta

las complejas relaciones de esta con el estado de desarrollo general del

país, tanto desde el punto de vista social y económico como desde el punto

de vista de las mentalidades, los prejuicios y saberes del sentido común que

entran en conflicto con una actitud científica moderna. Por último, las

condiciones mismas de actividad científica -la existencia de instituciones

científicas, laboratorios, grupos de trabajo, publicaciones, posibilidades de

debate y crítica y de acceso al saber internacional— requieren un estudio

preciso y sobrio en los últimos años, con el apoyo de Colciencias, un grupo

multidisciplinario ha hecho algunos avances notables en este sentido,

aunque los primeros resultados que se conocen son desiguales, se

3 MELO, Jorge Orlando. Conferencia de divulgación leída en Santa Marta. Bogotá,

Colombia. 1987. file:///C:/Documents%20and%20Settings/JUAN%20CARLOS/Escritorio/CTS%20ag16/Historia%20de%20la%20ciencia%20en%20Colombia.htm

26

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

concentran en el periodo mejor conocido -el siglo XVIII- y revelan a veces un

dominio limitado de la literatura histórica general sobre el país, lo que

dificulta la localización precisa de los procesos científicos en la trama

histórica colombiana. Una revisión de estos materiales, así como los trabajos

clásicos de historia de la ciencia, permite sin embargo señalar algunos

elementos centrales del desarrollo científico colombiano y destacar algunas

características generales de éste, aunque en forma todavía muy provisional.

Resulta evidente que el desarrollo de la ciencia en Colombia es ante todo el

resultado de un proceso de aprendizaje y transferencia a partir de los países

avanzados. Por una parte, se apoya en la incorporación de tecnologías

productivas a la industria o la agricultura nacional. Tales tecnologías, al

generalizarse, se convierten en la base de una demanda de profesionales

que eventualmente configuran un grupo social amplio que ofrece un clima

viable para el desarrollo científico; su aplicación requiere además que estos

profesionales tengan una formación en la cual los conocimientos científicos

resultan base necesaria para la acción puramente tecnológica. Por otra

parte, el proceso de aprendizaje se ha dirigido específicamente a procurar

que el país adopte los resultados y métodos propios de la ciencia occidental.

La incorporación de tecnología ha sido determinada en forma relativamente

clara por el desarrollo económico nacional, y ha sido habitualmente el

resultado de decisiones empresariales o gubernamentales tomadas dentro

de márgenes muy estrechos, pues se trata de adquirir entre tecnologías ya

plenamente desarrolladas y probadas en otros países, aquellas que resulten

adecuadas a las posibilidades de mercado y a las estructuras de costos de

determinadas ramas de la actividad productiva nacional. La adopción de

metodologías y conocimientos científicos se ha hecho ante todo mediante el

impulso al sistema educativo nacional y el acceso a centros de formación

superior en los países avanzados. En ambos procesos —la incorporación de

tecnologías y la adquisición de los elementos de la ciencia moderna— han

desempeñado papel muy notable inmigrantes extranjeros, cuya formación,

dado el desnivel muy grande entre las instituciones educativas nacionales y

27

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

las de los países avanzados, era más sólida y rigurosa que la de la inmensa

mayoría de colombianos formados en el país.

El hecho de que el flujo tecnológico y el sistema educativo hubieran estado

ligados a centros internacionales en forma directa e independiente, está

relacionado con uno de los rasgos esenciales del desarrollo de la ciencia en

el país: su escasa vinculación con el sistema productivo nacional. La

demanda directa de innovación tecnológica o de conocimiento científico

hecha por el sector productivo a los científicos nacionales ha sido ínfima,

pues ha podido satisfacerse en forma más rápida y menos costosa mediante

la adquisición de esas tecnologías en el exterior. De este modo, el desarrollo

científico ha tendido a vincularse esencialmente al sistema educativo, pero

un sistema educativo sin lazos estrechos con las demandas de la producción

o con la solución de problemas nacionales. Esto ha dado al desarrollo de la

ciencia una aparente gratuidad e irrelevancia, y ha colocado con frecuencia

a los científicos en una posición defensiva: deben justificar, de un modo u

otro, su pertinencia para un país que no la ve como evidente.

Esto ha generado varios tópicos relativos tanto a la utilidad de la ciencia

como a la orientación que ésta deba tener. Ejemplo recurrente ha sido el

debate acerca de la ciencia básica, la ciencia aplicada, el desarrollo

tecnológico, etc. Las formas de este debate y las distintas posiciones de los

participantes, así como las decisiones de política que a veces se han tomado

sobre este asunto, muestran cómo estos argumentos se polarizan

precisamente en la medida en que la escasa actividad científica no produce

resultados en un sentido o en el otro. Quienes desean respuestas urgentes a

los problemas nacionales tienden a despreciar las necesarias relaciones

entre la actividad tecnológica y un cuerpo científico básico, y quienes se

orientan a la ciencia básica tienden a desconocer la red de procesos que en

todo el mundo avanzado vinculan la investigación desinteresada con el

desarrollo histórico general de un país, con todos los aspectos prosaicos de

la producción, los ingresos y la asignación de recursos. En forma paralela, el

sistema educativo ha sido visto por los dirigentes nacionales como una

28

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

alternativa orientada a preparar a los estudiantes para el trabajo productivo,

o a crear las bases para un desarrollo científico autónomo o independiente.

En el primer caso, se tiende a privilegiar la expansión de la escuela primaria,

el desarrollo de escuelas de artes y oficios o aprendizaje tecnológico y el

estímulo a profesiones definidas a partir de las exigencias del mercado de

trabajo.

En el segundo caso, la prioridad va a las instituciones de educación superior,

a los centros de investigación y a carreras con orientación científica o

humanística. Por supuesto, consideraciones políticas alteran esta tipología,

al menos durante amplios períodos de la historia nacional: el liberalismo del

siglo XIX, empeñado en generar una lealtad ciudadana a instituciones laicas,

prefirió impulsar la educación elemental y la formación de maestros, dejando

la formación superior al libre juego del mercado y la actividad privada. Y el

partido conservador, pese a su predilección por una educación para el

trabajo que fuera al mismo tiempo escuela de moralidad, impulsó

vigorosamente instituciones de educación superior como parte de un

proceso de control y orientación ideológicos de los grupos dirigentes.

Más recientemente, la expansión del sistema universitario ha permitido un

complejo entrecruce de tendencias, que se ven ya menos excluyentes entre

sí: la formación para el trabajo y la formación científica empiezan a aparecer

como congruentes, al menos en los propósitos de las instituciones

superiores.

Ahora bien, dada la desvinculación tradicional entre sector productivo y

ciencia y entre sector productivo y sistema educativo, el desarrollo de este

último, que es en fin de cuentas el que está creando las bases para una

actividad científica autónoma, ha sido el resultado no tanto de una política

científica, del deseo o el interés por desarrollar la ciencia, como de un

proceso impulsado por demandas de status social y de formación

estrechamente profesional. En los niveles inferiores, la educación fue ante

todo una educación en la ideología y los valores de los grupos directivos del

29

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

país: civilismo liberal —en competencia con escuelas estrechamente

confesionales— en el siglo XIX, civilismo de fuerte contenido religioso y

moralista en la primera parte del siglo XX. La educación secundaria fue

igualmente irrelevante para la producción o la ciencia: ha sido ante todo,

hasta muy recientemente, antesala para el acceso a la universidad de los

hijos de la élite, que confirmarían con un título profesional su derecho a

dirigir el país y su deber de hacerlo dentro de ciertos marcos de servicio a la

comunidad.

La primera fase de la expansión del sistema de educación secundaria y

universitaria, que lo abrió a las clases medias en formación, y que se

extiende hasta mediados de la década de 1960, mantuvo en vigencia las

motivaciones tradicionales, e hizo que fracasaran todos los esfuerzos por

diversificar en forma substancial el bachillerato: éste siguió siendo

"humanístico", apenas un escalón en el proceso de formación del carácter y

la personalidad para acceder al título de "doctor" que validaría una nueva

posición social para los que lo obtuvieran.

Por lo anterior, los aspectos pasivos del sistema educativo originados en su

carácter periférico —se enseñaba una ciencia desarrollada en otra parte, por

maestros y docentes ajenos a la investigación y la producción de

conocimientos— se consolidaban en una enseñanza que sólo era —cuando

lo era— formalmente científica, en cuanto los contenidos que se transmitían

coincidían con los que aparecían en los textos y manuales de los países

avanzados, pero que seguía sin tener las condiciones propias del

pensamiento científico. La ciencia era un conjunto de conocimientos que

debía memorizarse, cuya validez dependía del principio de autoridad y cuya

utilidad en muchos casos se orientaba a su capacidad para reforzar el

pensamiento tradicional: hasta la década de los cincuenta la biología servía

en el bachillerato para refutar la teoría de la evolución y lo poco que se

aprendía en clase de física o psicología debía enmarcarse en apologética o

filosofía, dentro del tomismo aguado de los textos del padre Rafael Farías.

30

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Sin embargo, dentro de este sistema educativo y fuera de él, hubo en los

últimos doscientos años un proceso de incorporación creciente de la cultura

científica universal. Pero este proceso fue en buena parte el resultado de la

actitud voluntarista de individuos o grupos restringidos, que trataron, en sus

respectivos campos, de aprender realmente de la ciencia extranjera, de

aplicar metodologías desarrolladas en otras partes a problemas genuinos del

país, de impulsar las actitudes científicas en el sistema educativo, de

conformar grupos de investigadores que crearan las bases para una

dinámica más autónoma de aprendizaje, reproducción y creación del

conocimiento científico. Por eso una nueva historia de la ciencia en

Colombia tendrá al menos algo en común con la historia "hagiográfica"

hecha hasta ahora; será en buena parte la historia de pioneros, de

entusiastas que tras formarse usualmente en el extranjero, trataron de

reproducir en el país las condiciones para el trabajo científico. Por supuesto,

muchos fracasaron, y esa historia de la ciencia deberá ser también la historia

de esos fracasos y de sus razones: de los obstáculos ideológicos sociales,

económicos, institucionales que han bloqueado la acción de muchos

científicos, enfrentados a condiciones precarias de dotación, a prejuicios

religiosos o políticos y ante todo, al desinterés general de un país para el

cual la ciencia ha sido marginal y, cuando se ha necesitado extranjera.

Este proceso de doscientos años fue ante todo de aprendizaje y

consolidación de las bases para un trabajo autónomo (que no independiente,

dada la necesaria relación de toda ciencia actual con la comunidad científica

internacional), y sólo en forma muy tenue de creación de saber. La

búsqueda de este aspecto ha dado a muchos estudios tradicionales un

curioso sabor, pues en ellos se trata de subrayar ante todo la genialidad de

científicos colombianos que lograron, en sus doscientos años de soledad, sin

la formación adecuada ni los instrumentos requeridos, inventar una y otra

vez lo que ya estaba inventado en otras partes. Sin embargo, es fácil advertir

como en aquellos momentos en que empezó a consolidarse una comunidad

científica nacional, una parte notable del esfuerzo estuvo dirigido a la

realización de una especie de inventario, científicamente orientado, de la

31

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

realidad nacional. La Expedición Botánica, la Comisión Corográfica, las

oficinas públicas que realizaron el inventario geológico nacional, son buenos

ejemplos de una actividad científica productiva, en la que la ausencia de

condiciones propicias no impidió la generación y creación de conocimientos

válidos y relevantes.

En los últimos cincuenta o sesenta años, justamente, el papel creciente del

estado, que requiere para la ejecución de sus funciones administrativas o

para el manejo de sus recursos, un conocimiento más exacto de éstos, ha

llevado a conformar núcleos de actividad científica separados de las

universidades: las labores desarrolladas por varios de los institutos públicos,

en su mayor parte de inventario, han formado parte esencial de la actividad

científica reciente, y han dado la base para la consolidación de varias

disciplinas investigativas.

Los grandes hitos

1. La época colonial. La llegada de los españoles produjo una ruptura

prácticamente total, en el terreno de las formas de conocimiento, con las

culturas indígenas. Durante los primeros dos siglos de la dominación

española, los conquistadores impusieron a las poblaciones indígenas y

africanas, y ante todo a la creciente población mestiza, los valores religiosos

ideológicos que regían en España. Estos valores resultaban bastante

extraños, cuando no hostiles, a la ciencia moderna que surgía entonces en

Europa. Para conservar la ortodoxia, amenazada por el protestantismo y el

pensamiento racionalista y mecanicista que empezaba a apoderarse de los

científicos, España trató de mantenerse aislada de Europa, y este

aislamiento impidió la incorporación de las formas nacientes de pensamiento

científico en las colonias americanas. Las instituciones universitarias se

centraron en la teología y el derecho, que conducían a las únicas

profesiones válidas: el abogado y el sacerdote. Por lo tanto, ninguna

disciplina científica hizo parte de la enseñanza universitaria, y el

32

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

mantenimiento de la educación superior no requería la existencia de

"científicos".

Esta situación se mantuvo hasta la década de 1760. Los esfuerzos

españoles por revitalizar la economía colonial hicieron poner la atención en

tecnologías que elevaran la producción. La separación de oro y plata, la

búsqueda de sistemas de explotación de minas de veta, la mejora de

alambiques y trapiches planteaban problemas que requerían conocimientos

científicos para su solución, a diferencia de las tecnologías tradicionales,

apoyadas en un saber transmitido en el lugar de trabajo.

En la década de 1760, en el contexto de un rápido desarrollo económico

local, las autoridades y los dirigentes intelectuales empiezan a adoptar una

ideología de progreso apoyada en el conocimiento útil, que da valor a las

ciencias —la matemática, la química, la física, la astronomía, la botánica—

en !a medida en que permiten un dominio mayor de la naturaleza y por lo

tanto un desarrollo productivo más acelerado. Dos figuras se destacan

entonces: José Celestino Mutis, llegado en 1761 como médico del virrey,

traerá al país la medicina de la época, la física, la cosmología copernicana y

newtoniana y la matemática moderna.

El mayor impacto de la actividad se logró mediante la organización de la

Expedición Botánica, en la cual un puñado de criollos pudo hacer un

ejercicio de práctica científica moderna, al participar en el esfuerzo por

recoger y clasificar la flora y la fauna locales, así como por conocer la

geografía del país. Francisco Antonio Moreno y Escanden, un criollo que

ocupaba la fiscalía de la Real Audiencia, impulsó la modificación del sistema

universitario, para quitar el monopolio educativo a las órdenes religiosas y

establecer una universidad pública, en la cual tendrían lugar de preferencia

las ciencias exactas y se desterraría el dogmatismo escolástico. Aunque la

universidad pública no pudo establecerse, un plan elaborado por Moreno —

tal vez con la colaboración de Mutis— estuvo en vigencia entre 1774 y 1779,

y en su breve aplicación cambió el clima intelectual de la universidad y

33

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

contribuyó a la formación de la élite científica que participó en la Expedición

Botánica.

Este esfuerzo, que conformó un primer grupo de criollos con intereses

científicos y una formación básica, no logró sin embargo consolidarse.

Aunque José Félix de Restrepo mantuvo una enseñanza moderna durante

varios años en el seminario de Popayán, y aunque se formaron individuos

con vocación y talento científico tan claro como Francisco José de Caldas,

las agitaciones políticas y sobre todo las luchas de independencia

destruyeron las condiciones para la actividad científica. Muchos de los

intelectuales fueron ejecutados por los españoles -Caldas, Jorge Tadeo

Lozano, José María Cabal, Miguel Pombo, etc.-, mientras otros se orientaron

a la política o la actividad jurídica —Francisco Antonio Zea, José Félix de

Restrepo, Lino de Pombo.

2. La república incipiente. El establecimiento de una república

independiente no afectó la ideología de los sectores dirigentes, quienes

siguieron proclamando la importancia de los conocimientos útiles para el

desarrollo de la nueva nación. Sin embargo, los esfuerzos por crear un

sistema educativo con buena base científica y por impulsar la actividad

científica tropezaron con múltiples dificultades. Los conflictos ideológicos

relacionados con las formas que debía adoptar el estado atrajeron la

atención de los jóvenes que iban a las universidades, y las ideologías

jurídicas y políticas reemplazaron en las nuevas generaciones la

preocupación por el saber científico.

A pesar del optimismo inicial sobre las posibilidades de desarrollo

económico, los años de 1820 a 1850 son de estancamiento, y esto limita

tanto los recursos del estado como el interés de los empresarios por la

adquisición de nuevas tecnologías. Los sistemas escolares se diseñan a

partir de concepciones ideológicas generales y resultan con frecuencia

claramente desligados de las posibilidades reales del país; son, por otra

34

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

parte, modificados con mucha frecuencia, lo que rompe la continuidad de los

pocos esfuerzos que se estaban haciendo.

Una de las expresiones del interés gubernamental por la adquisición de una

base adecuada de conocimientos útiles estuvo en la búsqueda de expertos

extranjeros. Así, en la década del veinte se trajeron varios científicos

franceses para tratar de establecer una escuela avanzada de minería, donde

se enseñaría: química, matemáticas, botánica, física, astronomía, anatomía,

etc. La escuela no logró funcionar, y los sabios franceses hicieron unos

pocos estudios que apenas vinieron a divulgarse a mediados del siglo. En la

década del cuarenta, dentro del marco de una reforma de la educación

superior que pretendía debilitar la atracción por el derecho y fortalecer la

enseñanza científica, vinieron varios profesores franceses de química,

matemáticas y ciencias naturales. Los estudiantes, los padres de familia y

las autoridades locales se opusieron con vehemencia a estudios que

juzgaban sin ningún interés, no pudieron conformarse laboratorios

adecuados y al fin pocos resultados se dan de ese esfuerzo.

A mediados del siglo el gobierno contrató al geógrafo italiano Agustín

Codazzi, quien logró conformar y dirigir una expedición —La Comisión

Corográfica—, que hizo un primer estudio amplio de la geografía,

colombiana. A más de Manuel Ancízar, quien hizo el relato geográfico

conocido como Peregrinación de Alpha, participaron en la expedición José

Jerónimo Triana y Santiago y Felipe Pérez, y en ella hicieron su aprendizaje

científico. El interés por la geografía condujo a la publicación de las primeras

obras de conjunto sobre el país escritas por colombianos (en la década de

los treinta se había publicado la geografía de Feliciano Montenegro Colón y

un extenso artículo de Lorenzo María Lleras que salió anónimo en la

Enciclopedia Británica): la Memoria sobre la Geografía y la política de la

Nueva Granada de Tomás Cipriano de Mosquera (1853) y los trabajos

derivados de la misma expedición, como la geografía de Santander,

publicada en 1857, y los diversos libros de Felipe Pérez.

35

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Durante este período, pocos colombianos se dedicaron a alguna forma de

práctica científica estricta. Algunos botánicos continuaron sus actividades de

recolección de ejemplares y de enseñanza. El observatorio astronómico,

creado en 1803, mantuvo alguna actividad, y don Benedicto Domínguez

preparó inexorablemente los calendarios anuales. Don José Manuel

Restrepo publicó las primeras obras históricas, apoyándose en un extenso

material documental y en su propia participación en muchos de los sucesos

estudiados en sus obras. Pero la figura más importante fue sin duda Joaquín

Acosta (1800-1852) quien, originalmente dedicado a la vida militar, dedicó un

viaje a Europa entre 1825 y 1830 a asistir a cuanto curso estuvo a su

alcance: física, química, matemáticas, geología, astronomía, medicina,

historia y hasta baile y chino. Acosta, al volver al país en 1831, fue

nombrado profesor de química de la Universidad Central. Al comienzo tuvo

sesenta estudiantes, pero poco duró el entusiasmo. Acosta fue designado

también miembro de la Academia Nacional, entidad de promoción científica

creada por el gobierno en 1.826 y reorganizada en 1832. Además, ejerció en

forma casi continua la dirección del Observatorio Astronómico del Museo

Nacional, desde 1832 hasta 1841, y fue profesor de mineralogía en el

Colegio del Rosario. La guerra de 1839 lo volvió a la milicia y la política, y ya

coronel fue enviado especial a los Estados Unidos y Secretario de

Relaciones Exteriores en 1843-45. No lo alejó la política de su afán de

aprender, y en 1845 viajó de nuevo a Europa, a dedicarse otra vez a seguir

cursos y a diversas tareas de divulgación científica.

En 1847 publicó un detallado mapa del país, el más preciso y completo

hasta entonces. El año siguiente editó una cuidadosa obra de investigación

histórica, el Compendio Histórico del Descubrimiento y Colonización de la

Nueva Granada. Basada en manuscritos, constituyó una de las primeras

muestras de historia científica en el país. En 1849 publicó dos volúmenes de

estudios de J. B. Boussingault y Desirée Roulin, dos de los jóvenes

franceses que habían venido en los veintes; reeditó también el Semanario

del Nuevo Reino de Caldas. Al volver al país en 1849 se le ofreció un cargo

en el Colegio Militar, pero prefirió dedicarse a sus propios estudios. Hizo

36

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

mediciones meteorológicas y publicó cartas astronómicas para los

almanaques de 1851 y 1852. Hombre rico, trajo equipos y libros de Europa

que donó a la Biblioteca Nacional.

En resumen, durante estos primeros años de vida independiente tienen lugar

los esfuerzos frustrados del gobierno por impulsar la enseñanza de las

ciencias, en un nivel que correspondería al de la educación secundaria,

como requisito para el ingreso a la universidad o como parte importante de la

formación militar. La carencia de docentes preparados, el elevado costo de

traerlos, la falta de laboratorios, y la escasa importancia social de la ciencia,

en un país en el que la única aspiración de los jóvenes de clase alta era la

obtención del doctorado en derecho (y poco a poco, en ingeniería y

medicina), crearon barreras muy elevadas para quienes pretendían que la

ciencia era esencial para el desarrollo del país.

La práctica científica propiamente dicha no alcanzó siquiera los niveles

logrados bajo la Expedición Botánica y los años del Semanario. Sólo en el

terreno de la historia emerge una disciplina creadora, y en la geografía se

inicia un esfuerzo riguroso de descripción e inventario del país. Las

matemáticas, la astronomía, la química, la física, reciben aplicaciones poco

complejas en el país, sin que exista un verdadero trabajo científico en ellas.

3. La consolidación de las profesiones. Entre 1850 y finales de siglo el

proceso principal es el de la consolidación de dos profesiones que requieren

una base científica: la ingeniería y la medicina. Ambas habían tenido algunos

representantes modernos desde finales del período colonial, pero todavía a

mediados del siglo XIX la mayoría de los médicos e ingenieros se habían

formado en el exterior o eran ellos mismos extranjeros.

Varios intentos de formación profesional en estas ramas tuvieron lugar, sin

mayores éxitos. Uno de los esfuerzos más notables ocurrió en el gobierno de

Tomás Cipriano de Mosquera, quien dio gran apoyo a un Colegio Militar y

lanzó un programa de obras públicas que generó una inesperada demanda

de ingenieros, en parte satisfecha con la llegada de varios europeos. La

37

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

escuela militar funcionó razonablemente entre 1848 y 1854, bajo la

orientación, ante todo, de Lino de Pombo, y pese a su nombre, se dirigió

más bien a preparar ingenieros civiles que miembros del ejército. Sus

alumnos contribuyeron a la tarea de la Comisión Corográfica y realizaron

trabajos gráficos elementales, como un mapa de Bogotá. Sin embargo, la

escuela tropezó con la hostilidad de los liberales, que veían en ella un

ejemplo de elitismo, de militarismo y centralismo, y propusieron varias veces

su abolición.

Como dijo un representante a la Cámara, ellos no querían "obstáculos,

requisitos que conducían a la injusticia y promovían el favoritismo", ni

querían que existieran títulos, especialidades o condecoraciones. Este

igualitarismo radical impidió que la escuela, cerrada durante la crisis política

de 1854, tuviera el apoyo requerido para su reapertura. Sin embargo,

durante su breve existencia se entrenaron en ella algunos de los más

importantes ingenieros nacionales del resto del siglo —Como Manuel Ponce

de León, Juan Nepomuceno González Vásquez (que completó sus estudios

en Francia) y otros— quienes mantuvieron la enseñanza matemática en los

colegios bogotanos y luego, en 1868, organizaron la Facultad de Ingeniería

de la Universidad Nacional. Su práctica profesional consolidó la ingeniería,

en un contexto de auge de las obras públicas —caminos, puentes,

ferrocarriles, telégrafos—, de esperanzas entusiastas de desarrollo

económico y de apertura de algunas industrias con requerimientos técnicos

complejos.

La actividad del Observatorio Astronómico estuvo también por muchos años

en manos de ex alumnos del Colegio Militar, como Indalecio Liévano.

Mientras tanto en Antioquia la minería formó los primeros ingenieros locales,

y en 1874 la Universidad de Antioquia creó la Facultad de Ingeniería Ovil; en

1885 el gobierno de Núñez ordenó la creación de una Escuela Nacional de

Minas, la cual vino a abrirse en 1888.

38

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

En el campo médico, la práctica profesional estuvo dominada por extranjeros

hasta mediados de siglo. A partir de estos años regresó al país un grupo

relativamente numeroso de médicos formados en París entre los cuales se

destacó especialmente Antonio Vargas Reyes. Ya en 1852 había tratado de

editar un periódico científico, La Lanceta, que sólo llegó al número seis. En

1864, y hasta 1867, editó la Gaceta Médica de Colombia que inició la larga

serie de revistas médicas publicadas en Colombia, y que fue seguida en

1870 por la Revista Médica de Bogotá y en 1887 por los Anales de la

Academia de Medicina de Medellín. Las campañas de Vargas Reyes y otros

colegas tuvieron bastante que ver con la reorganización de la Universidad

Nacional en 1867; Vargas Reyes fue el primer rector de la Escuela de

Medicina, abierta en 1868. Desde este momento el país contó con un centro

permanente de formación médica al cual se añadieron pronto las escuelas

de Medellín, Popayán y Cartagena, todas orientadas por el modelo de la

Universidad Nacional. Desde entonces hasta finales de siglo se consolida

una enseñanza médica moderna orientada por las escuelas dominantes en

Francia -la escuela clínica o anatomía-clínica— A partir de entonces las

ciencias naturales encuentran un lugar de práctica en las facultades de

medicina, aunque la investigación propiamente dicha se restringe a algunos

aspectos de la medicina.

A finales de siglo comienzan a aparecer algunas nuevas concepciones sobre

la enfermedad, que conducen al desarrollo de la bacteriología. Esta hace

imprescindible la conformación de laboratorios de análisis, como el

Laboratorio Samper Martínez, creado en la década de 1910, cuyas prácticas

están en la base de avances tanto en las ciencias biológicas como en la

química.

Buena parte de la consolidación de estas profesiones se debió a

colombianos que hicieron sus estudios en el extranjero. A raíz del cierre de

las universidades en 1851, muchos de los padres de los grupos acomodados

prefirieron mandar sus hijos a Estados Unidos y Europa. Curiosamente, a

pesar de que sus propios valores los habían llevado a la política y el

39

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

derecho, muchos insistieron en que sus herederos aprendieran ciencias

útiles, ante todo las ligadas a la ingeniería. Así, Eustasio Santamaría -quien

sería Ministro de Relaciones Exteriores a fines de siglo-, estudió química en

Francia y Alemania. Vicente y Pastor Restrepo, después de estudiar minería

y metalurgia, abrieron los primeros laboratorios químicos en 1858. A fin de

siglo, José María Villa se graduó como ingeniero en los Estados Unidos, así

como Tomás Herrán y los hermanos Tulio y Pedro Nel Ospina.

Una de las actividades de preparación científica que se generalizó con la

reorganización de la Universidad Nacional fue la de las tesis de grado.

Aunque no han sido estudiadas en forma detallada es posible advertir que al

menos algunas de las que se realizaron en Medicina se enfrentaban a

problemas locales con una metodología científica adecuada, y contribuían al

conocimiento de la epidemiología local, de las condiciones de vivienda y

alimentación de determinados grupos sociales, etc. Esto contrastaba con las

tesis realizadas en las facultades de derecho, las cuales desde el comienzo

estuvieron marcadas por rasgos claramente ajenos a todo espíritu científico,

la especulación sin bases, la retórica descontrolada, la copia de textos

ajenos sin los reconocimientos debidos.

La falta de claridad en el planteamiento de los problemas y la erudición

puramente libresca caracterizaron desde entonces -y siguen haciéndolo hoy-

la producción de los estudiantes de las escuelas de derecho. Esta

experiencia investigativa inicial se continuó en muchos casos en los

docentes de las escuelas de medicina de la primera mitad de este siglo.

Profesores como Luis Patino Camargo, Federico Lleras Acosta, Roberto

Franco. Luis Montoya y Fiórez, Emilio Robledo, José María Lombana

Barreneche, Alfonso Esguerra y muchos más, publicaron los resultados de

trabajos de investigación sobre enfermedades locales o características

biológicas del hombre del país que, dentro de parámetros modestos,

constituían aportes científicos válidos y rigurosos. Esta actitud fue muy

explícita en la Facultad de Medicina de la Universidad de Antioquia, que

desde su fundación en 1871 impulsó el estudio de las enfermedades del

40

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

país, la medicina indígena y la realización de monografías sobre flora

regional, y en la Escuela Nacional de Minas, cuyas tesis avanzaron el

inventario geológico y minero de Antioquia, propusieron soluciones a los

problemas locales de transporte (Alejandro López propuso en 1899 el túnel

de La Quiebra en su disertación de grado, lo cual sólo fue adoptado dos

décadas después), etc.

La actividad científica propiamente dicha estuvo limitada durante la segunda

mitad del siglo XIX a áreas muy precisas. El Observatorio Astronómico

continuó realizando mediciones y observaciones en forma más exacta, bajo

la dirección de José María González Benito, un ingeniero formado en

Europa. Un amplio número de científicos europeos recorrieron el país, ante

todo realizando estudios geológicos y geográficos (H. Karstner, A. Hettner,

A. Stübel, W. Reiss). En el área de la botánica que tenía algo de tradición,

José Jerónimo Triana, formado en la Comisión Corográfica, viajó a Europa y

desarrolló allí, apoyado por el gobierno, una notable carrera científica.

Publicó una introducción a la flora colombiana y diversos estudios, entre

ellos uno muy detallado sobre las quinas nacionales. Otros colombianos

hicieron contribuciones menores en esta misma área de la botánica.

También en Europa se desarrolló la mayor parte de la actividad científica de

dos colombianos que alcanzaron reconocimiento por la calidad de su trabajo:

Ezequiel Uricoechea, quien hizo contribuciones a la prehistoria colombiana y

a la filología, y el gramático y filólogo Rufino José Cuervo, iniciador del

Diccionario de Construcción y Régimen. La historia, que había alcanzado un

alto nivel en el período anterior, con José Manuel Restrepo y Joaquín

Acosta, se convirtió en gran parte en arma de debate político y apologética

religiosa, como en las obras de José Manuel Groot y José María Samper;

sólo a finales del siglo pasado y comienzos de éste, bajo los estímulos de

una orientación más positivista, que se advierte en las obras de Vicente

Restrepo, Gustavo Arboleda, Ernesto Restrepo Tirado y otros, vuelve a

orientarse en una dirección que pretende ser científica.

41

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

El gobierno mantuvo la actitud ya antigua de estimular estudios que pudieran

ofrecer perspectivas de utilidad para el país. Por eso creó en 1881 una

nueva expedición científica, la Comisión Científica Permanente. Fue

entregada a la dirección de José Carlos Mano, un francés cuyas

calificaciones no parecen haber sido adecuadas y cuyos informes, que

subrayaban la búsqueda de minerales explotables, entre los que promovió

los carbones de la Guajira y el Valle y los hierros de La Pradera en Boyacá,

fueron sujetos a violenta critica por parte de los científicos locales.

Particularmente interesante fue el informe de Jorge Isaacs sobre los

indígenas de la Sierra Nevada, que reinauguraba una tradición etnográfica

perdida ya casi por completo. A esto se añadió el envío de cuatro

estudiantes a Europa, los cuales enviaron reportes sobre motores de gas,

técnicas mineras, electricidad, producción artificial de diamantes y otros

temas similares.

Algunos elementos de institucionalización de la actividad científica surgieron

durante estos años, además de la consolidación de la enseñanza profesional

en las universidades. Por una parte, se crearon sociedades científicas con

actividad permanente, como la Sociedad de Medicina y Ciencias Naturales

(1873) y se regularizaron publicaciones como los Anales del Observatorio

Astronómico (1880) y los Anales de Ingeniería (1887).

4. La primera mitad del siglo XX. El avance de la ciencia durante el siglo

XX, y en especial a partir de 1910, está marcado por el surgimiento de la

industria moderna, con su impacto sobre profesiones como la ingeniería y la

economía y por la creciente presencia del estado, como usuario del

conocimiento, como empleador de científicos y como orientador de un

sistema educativo en constante aumento. El estado reforzó su capacidad de

intervención en la vida nacional ante todo a partir del gobierno de Rafael

Reyes, proceso que tuvo momentos de aceleración en la década de 1920

(especialmente en la administración del ingeniero Pedro Nel Ospina),

durante los gobiernos de Alfonso López Pumarejo y Eduardo Santos y bajo

la administración del también ingeniero Mariano Ospina Pérez.

42

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

El gobierno creó oficinas e instituciones a las que encargó actividades de

información y análisis, y nombró para manejarlas a científicos ante todo

extranjeros, aunque poco a poco fueron pasando a la dirección de

colombianos que habían completado su formación en universidades

europeas o norteamericanas. Durante los primeros treinta años de este siglo

se consolidó en primer lugar la geología, centrada en la Oficina de

Longitudes dirigida por Ricardo Lleras Codazzi y luego en la Comisión

Científica Nacional (1916), puesta bajo la dirección de una serie de

científicos alemanes (Robert Scheibe, Emil Grosse, Otto Stutzer, Enrique

Hubach) y en el Servicio Geológico Nacional. La Escuela Nacional de Minas

formó también, bajo la orientación de Tulio Ospina Vásquez, una notable

generación de ingenieros con vocación geológica, como Juan de la Cruz

Posada. Por otra parte, desde 1941 el Instituto Geofísico de los Andes,

vinculado a la Universidad Javeriana, realizó el registro sismológico del país.

Por su lado, las compañías petroleras realizaron estudios geológicos cuyos

resultados, por lo regular, quedaron fuera del alcance de los científicos

colombianos.

En otros campos, se crea el Laboratorio Químico Nacional, cuyas funciones

de rutina en áreas de minería agricultura y drogas, permiten el ejercicio de

una actividad química permanente; algunos de los principales impulsadores

de la química hacen parte de su planta de personal. Crea también el

gobierno el Instituto Geográfico Militar (1934) que se convertiría luego en el

Instituto Geográfico Agustín Codazzi; la sección de biología vegetal del

Ministerio de Economía (1938) y adquiere el laboratorio Samper Martínez

(1925).

En el terreno educativo, comienza una diversificación de las profesiones,

sobre todo de aquellas vinculadas a la ingeniería. Ya desde finales del siglo

pasado se había dado una marcada divergencia entre las orientaciones de

las facultades de ingeniería de la Universidad Nacional, en Bogotá y la

Escuela Nacional de Minas, de Medellín. Mientras la primera, bajo la

43

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

influencia de Julio Garavito Armero, astrónomo y matemático, propugnaba

por una formación matemática elevada, con independencia de su aplicación

profesional, la Escuela de Minas inicialmente independiente y luego parte de

la Universidad de Antioquia bajo la influencia de Tulio y Pedro Nel Ospina y

luego de José María Villa, de Alejandro López y otros, propugnaba por una

ingeniería vinculada a la solución de problemas nacionales, capaz de usar

materiales locales, con un curriculum pragmático, que formara al ingeniero

para su actividad práctica e incluso para una actividad empresarial.

Curiosamente, a pesar del énfasis pragmático de la Escuela de Minas, que

llevó al desarrollo de cátedras de economía, estadística, ingeniería industrial,

etc., y que permitió formar una generación de ingenieros preocupados por la

explotación minera de Antioquia por las vías de comunicación y

estrechamente libados a la modernización tecnológica de Colombia, ya para

la década de 1930 se había convertido en uno de los centros de excelencia

en la formación matemática en el país.

En todo caso, en Antioquia se creó desde 1904 una Escuela de Agronomía.

Alrededor de esta nueva línea profesional, y con el apoyo oficial, se

establecieron en el país algunas granjas experimentales, que iniciaron la

investigación en esta área: algunos antecedentes tímidos se habían dado a

finales de la década del setenta y comienzos de los ochentas en el Instituto

Nacional de Agricultura dirigido por Juan de Dios Carrasquilla y Carlos

Michelsen U

En el área de las ciencias sociales, poco avanzó el país hasta la década de

1930. En efecto, aunque desde 1880 Rafael Núñez había propugnado el

estudio de la sociología en Colombia, con la idea de que sería una disciplina

conservadora, que ayudaría a mostrar la necesidad y regularidad de los

procesos sociales y la arbitrariedad de los amantes de las revoluciones, y

había impulsado su enseñanza en la Universidad Nacional por don Salvador

Camacho Roldan, no pasó esta ciencia en sus primeros años de ser una

reiteración libresca de ideologías extranjeras. Los escasos análisis sociales

del país pertenecen, ante todo, a pensadores políticos y sociales que se

44

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

enfrentan a algunos problemas nacionales con sentido común, buena

información y algún apoyo teórico. Entre estos análisis sociales hay que

recordar ante todo al ingeniero Alejandro López, autor del libro Problemas

colombianos (1927).

En la década del 30, la Escuela Normal Superior de Bogotá, dirigida por

José Francisco Socarrás, se convirtió por una década larga en una Facultad

de Ciencias Sociales de alta calidad, aprovechando un elevado número de

docentes europeos que habían escapado del fascismo español o habían

migrado en esos años. Allí se formaron sistemáticamente, por primera vez

en el país, lingüistas, antropólogos, historiadores y otros científicos sociales:

por allí pasaron Roberto Pineda Duque, Jaime Jaramillo Uribe, Luis Duque

Gómez, Virginia Gutiérrez de Pineda, y muchos más que, durante los

cincuentas y los sesentas, contribuirían en forma substancial a la

consolidación de la ciencia social en Colombia.

Los procesos de institucionalización científica que tuvieron lugar durante la

primera mitad del siglo resultan muy difíciles de presentar en forma sucinta,

y estuvieron ligados a la creciente densidad del medio académico, a los

procesos de urbanización, a la necesidad de intercambio de información en

un país con varios núcleos culturales importantes, al crecimiento de las

universidades, etc. En todo caso, en estos años se constituyeron varias

sociedades científicas, y los primeros centros de investigación, como la

Academia Colombiana de las Ciencias Exactas, Físicas y Naturales (1933),

la Sociedad de Ciencias Naturales (1912), el Instituto de Ciencias Naturales

de la Universidad Nacional (1940) y el Instituto Geofísico de los Andes

(1941). Además, fuera de las revistas que sobrevivían del período anterior,

surgieron los Anales de Ingeniería (1913), la Revista de la Academia

Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales (1936), Caldasia

(1940) y la Revista Colombiana de Química (1944).

Finalmente, la Universidad Nacional tuvo en 1936 una importante

reorganización, que unificó bajo una sola administración y en un solo

campus las escuelas profesionales dispersas. Dentro de la nueva sede, se

45

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

crearon las facultades de Química (1939) y posteriormente de Ciencias

(1946).

5. El período reciente. El país que retornó a la vida republicana en 1957

presentaba rasgos que indicaban un proceso incipiente pero muy acelerado

de transformación económica, social y cultural. La urbanización tomó ritmos

impensados, al calor de una elevadísima tasa de crecimiento y de flujos

migratorios muy altos muy altos Las necesidades políticas del régimen que

reemplazó al gobierno de Rojas Pinilla llevaron a dar prioridad a la

expansión de la educación entre los programas sociales, lo que condujo a un

crecimiento sin antecedentes de la educación universitaria, que casi podría

definirse como la aparición de una verdadera universidad por primera vez en

la historia nacional. Los elementos tradicionalistas del pensamiento, tanto

entre los intelectuales como en las mentalidades populares, perdieron

mucho peso o se transformaron drásticamente. Los sectores de la élite

intelectual adoptaron una mentalidad laica que dejaba atrás la subordinación

del pensamiento científico a las necesidades de la ortodoxia religiosa. El

rápido desarrollo industrial generó nuevas demandas profesionales -

economistas, ingenieros químicos, ingenieros de petróleos, ingenieros

industriales, ingenieros eléctricos, etc.- aunque siguió sin exigir producción

científica. Y el fortalecimiento del estado, que alcanzó su punto más fuerte

bajo la administración de Carlos Lleras Restrepo - amplió las funciones

científicas estatales y dio mayor autonomía y poder a los institutos científicos

o tecnológicos adscritos al gobierno.

Por supuesto, algunos de estos institutos y casi todos estos procesos

hundían sus raíces en los períodos anteriores. En 1955, bajo el régimen

militar, se creó lo que sería el Instituto de Investigaciones Tecnológicas, y en

1959 se trató de vincular al país a las tecnologías de la era atómica con la

creación del Instituto de Asuntos Nucleares. La creación de nuevas

profesiones se hizo en buena parte por fuera de la Universidad Nacional,

que comenzó a perder paulatinamente el cuasi monopolio de la educación

que había tenido hasta los treintas, aunque mantuvo una hegemonía clara

46

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

hasta finales de la década de los sesentas. La nueva situación. ya anunciada

por la creación de carreras como Ingeniera Química, que apareció antes en

la Universidad Pontificia Bolivariana, la Universidad de Antioquia y en la

Universidad del Valle que en la Nacional, está más bien caracterizada por la

existencia de cuatro grandes centros universitarios de carácter público, de

un nivel similar (Universidad Nacional, Universidad de Antioquia, Universidad

Industrial de Santander y Universidad del Valle), de una universidad privada

con vocación investigativa (Los Andes) y varias universidades privadas en

las que algunas de sus escuelas tienen una actividad científica reconocible

(Javeriana, Rosario, Bolivariana, etc.).

Estos años recientes presentan en el terreno de la práctica científica

propiamente dicha, varios rasgos que me veo obligado a presentar en forma

puramente enunciativa:

1. La aparición, por primera vez, de un sistema universitario que dedica

parte importante de sus recursos y da condiciones, estrechas pero reales,

para la práctica científica en sentido estricto, es decir, para la investigación,

con independencia de las exigencias directas de formación de profesionales.

2. El surgir de un grupo profesional vinculado laboralmente a las

universidades (ante todo públicas) con intereses directos en la práctica

científica: los profesores de tiempo completo. Este profesorado, resultado de

las reformas de la década del sesenta y de las recomendaciones de

misiones extranjeras, así como de la expansión de las universidades, ha

llegado a ver en la investigación una de sus actividades legítimas y

necesarias.

3. La aparición de esbozos de una política científica nacional, y la creación

de un organismo de apoyo a la actividad científica (Colciencias, 1969).

4. El refuerzo de las actividades de investigación de los organismos

estatales y semiestatales (Instituto Colombiano Agropecuario, Cenicafé, etc.)

47

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

y la aparición de centros de investigación privados, apoyados por la industria

(Cenicaña).

5. La consolidación de varias ramas de actividad científica. En la década de

los sesentas y setentas la historia alcanzó un nivel de producción y discusión

crítica que la colocaron por primera vez a niveles internacionales (Jaime

Jaramillo Uribe, Germán Colmenares, etc.). Algo similar ocurrió con la

sociología (Orlando Fals Borda, Virginia Gutiérrez de Pineda) y la

antropología (Gerardo Reichel Dolmatoff, sobre todo). En otras ramas

sociales se destacó la contribución, de impacto internacional, del ingeniero

Álvaro López Toro a la demografía matemática. La economía formó para

finales de los sesentas y de allí en adelante un grupo numeroso de

estudiosos de alto nivel, tanto en la vertiente neoclásica como en las nuevas

corrientes marxistas, cuyos trabajos han alcanzado el nivel de las

contribuciones internacionales normales.

6. El desarrollo de algunas áreas de investigación muy avanzadas, alrededor

de la actividad pionera de un grupo reducido de científicos con buenas

vinculaciones internacionales. En las ciencias médicas se han hecho

notables los aportes de genetistas e inmunólogos.

7. La creación de una situación de investigación habitual, una especie de

"normalidad científica" en áreas como la biología, las ciencias médicas

básicas, la química y algunas ramas de la física: en estas áreas existen

proyectos de investigación que enfrentan problemas nuevos, hay un

personal con calificación adecuada e instalaciones mínimas —laboratorios,

bibliotecas, revistas, sociedades científicas— que permiten trabajar en

condiciones que al menos hacen posible un diálogo con la comunidad

científica mundial.

Todo lo anterior permite señalar el período de 1960 a 1980 como el de

despegue de la actividad científica propiamente dicha en el país. Sin

embargo, cabe mencionar algunas limitaciones de esta actividad:

48

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

1. El espíritu investigativo, es aún muy débil, incluso entre el profesorado

universitario. Buena parte de las publicaciones y de los proyectos se hacen

por motivos gremiales: alcanzar remuneraciones determinadas por

escalafones que premian las publicaciones y las actividades investigativas.

Como muchos de los profesores vinculados en la primera etapa de este

período no tenían experiencia ni formación científica, criterios políticos y

formas de clientelismo han subsistido en las universidades, aunque hay

razones para creer que se están debilitando.

2. Las revistas y publicaciones del país son de una calidad muy baja en

términos generales. En parte se debe esto a la falta de tradición y a celos

institucionales, que han llevado a la absurda proliferación de revistas "de

universidades", de contenidos misceláneos, o la multiplicidad de revistas de

"facultad", irregulares, con una distribución inadecuada y en buena parte

limitada a unos lectores cautivos parroquiales y, por supuesto, sin ningún

reconocimiento científico fuera del país: ¿cuáles revistas colombianas

figuran en los índices normales internacionales? Otra razón obvia de la baja

calidad de mucha revista universitaria es la necesidad de publicar los

artículos producidos en la propia institución, para que los colegas mejoren

sus sueldos y para evitar los conflictos que provoca no publicar sus artículos.

3. Del mismo modo, buena parte de los proyectos de investigación en

marcha son irrelevantes, repetitivos, mal planeados o nunca se concluyen.

La actividad científica aparente, medida por los proyectos aprobados porque

las universidades o por COLCIENCIAS, es muy superior a la que realmente

se hace, y a falta de análisis de los resultados de la investigación en el país,

es fácil detectar ésto cuando se analizan las publicaciones.

4. Es preciso reiterar un lugar común, y es que los recursos asignados a la

actividad científica, de cualquier manera que se midan —incluso colocando

en ella la actividad rutinaria de los funcionarios del Catastro o de la CVC,

como se hace en las cuentas oficiales— son muy bajos, lo que se refleja en

laboratorios pobres, bibliotecas con colecciones incompletas y saltonas de

49

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

revistas científicas, proyectos que fracasan por falta de algún elemento

necesario e innumerables trabas burocráticas, que pretenden obligar a un

uso más cuidadoso de los recursos escasos pero sólo conducen al

desperdicio de tiempo y al aumento de los costos.

5. El hecho de que la comunidad científica que investiga y publica sea

apenas una porción todavía minoritaria del profesorado universitario que

cree y siente que debe o tiene que investigar, lleva a la proliferación

sospechosa de encuentros y simposios sobre las metodologías, las

condiciones y la situación de la investigación y en el campo de las ciencias

sociales, a un florecimiento parasitario de problemas filosóficos y

epistemológicos, de marcos teóricos y de modas que "agencian" las últimas

novedades y jergas extranjeras.

Actividad:

Respecto de las dos lecturas anteriores realiza un cuadro donde se

observe de manera paralela el desarrollo de la ciencia en el mundo y en

Colombia.

1.3. RELACIÓN CIENCIA, TECNOLOGÍA, EDUCACIÓN Y

DESARROLLO4.

La perspectiva CTS se enfrenta a la visión tradicional o concepción

heredada de la ciencia, según la cual la actividad científica tiene como fin el

descubrimiento de nuevos conocimientos sobre la realidad, con lo que sería

objetiva y neutral. Para esta concepción, la historia de la ciencia consistiría

en la acumulación constante de saberes de forma independiente de otros

factores del entorno. Por último, desde esos planteamientos la tecnología no

sería más que la aplicación a la práctica de los conocimientos producidos

por la ciencia. Por el contrario la perspectiva CTS defiende otra

Consideración de las relaciones entre ciencia y sociedad que podría ser

4 GORDILLO, Mariano Martín, ARRIBAS, Ramírez Ricado, Otros. Módulo 1 Ciencia,

Tecnología y Sociedad. 2003

50

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

resumida en las tres premisas y la conclusión del llamado silogismo CTS. La

primera premisa afirma que la actividad tecnocientífica es también un

proceso social como otros; la segunda pone de manifiesto los efectos para la

sociedad y la naturaleza de la actividad tecnocientífica; la tercera premisa

supone la aceptación de la democracia, y de ellas se deriva una conclusión

final: es necesario promover la evaluación y el control social de la actividad

tecnocientífica. En todo caso, en los enfoques CTS se dan dos tradiciones

principales: una se centra en la primera premisa y la otra desarrolla más la

segunda, aunque ambas comparten la conclusión del silogismo.

Es algo comúnmente aceptado que entre la ciencia, la tecnología y la

sociedad se dan diversas relaciones. De hecho, los tópicos tecnófilos o

tecnófobos muestran algunas de las percepciones más habituales sobre

esas relaciones. La perspectiva CTS pretende superar esas visiones

maniqueas de la ciencia y la tecnología acercándolas a la sociedad para

promover la participación ciudadana en las decisiones más importantes

sobre las controversias relacionadas con estos temas. Sin embargo, los

enfoques CTS son relativamente recientes, de las últimas décadas del siglo

XX. Antes de aparecer una reflexión en clave social sobre la ciencia y la

tecnología había ya un gran desarrollo tecnocientífico que apenas era

analizado desde el punto de vista de sus relaciones con la sociedad que lo

propicia y sobre la que tiene tan importantes efectos. Con anterioridad a los

estudios CTS ha habido muchos estudios dedicados a aclarar en qué

consiste la actividad científica, qué se entiende por método científico, en qué

se distingue una ciencia de algo que no lo es, cómo avanza el conocimiento

científico, etc. Seguramente las ideas más o menos intuitivas que

comúnmente se tienen sobre lo que es la ciencia, tienen mucho que ver con

lo que esos estudios han planteado, aunque generalmente no se sepa

concretamente quién lo dijo ni cuándo. En realidad esta visión de lo que es la

ciencia es la más extendida entre los medios de comunicación, es la que

inspira muchas de las noticias relacionadas con estos temas que aparecen

en la televisión y en los demás medios. Este conjunto de ideas suele ser

51

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

conocido como visión tradicional de la ciencia, concepción heredada o

positivismo por quienes gustan de los nombres más técnicos.

La concepción heredada sobre la ciencia considera, en primer lugar, que la

actividad científica es de carácter cognoscitivo, es decir, que su único fin es

producir nuevos conocimientos para ampliar el campo estudiado por cada

ciencia. Al identificarse la ciencia con el desarrollo de conocimientos, la

actividad científica tendría dos elementos esenciales: el sujeto que conoce

(el científico) y el objeto de ese conocimiento (la realidad en cada campo de

conocimiento). Se entiende que la labor del científico consistiría en descubrir

o develar nuevas verdades en el campo de la realidad sobre el que trabaja

su ciencia. El científico es, por tanto, un descubridor, alguien que con sus

intuiciones, sus métodos y sus experimentos es capaz de develar y mostrar

aquello que hasta el momento ha permanecido ignorado: los elementos de la

naturaleza y las leyes que gobiernan su funcionamiento. En la medida en

que el científico descubre la realidad, su actividad será objetiva. Es decir, los

conocimientos aportados por los científicos no estarán influidos por su

subjetividad como individuos pertenecientes a una sociedad concreta (con

sus intereses, opiniones o ideologías) sino que serán objetivos, al proceder

del propio objeto de su trabajo: de la propia realidad.

Esta manera tradicional de entender la actividad científica supone que la

evolución o la historia de la ciencia no es más que la descripción de cómo se

han ido acumulando conocimientos objetivos. Por ello, los filósofos

tradicionales de la ciencia no han prestado demasiada atención a las

cuestiones históricas o a las relaciones entre la actividad científica y los

contextos sociales en los que se desarrolla, suponiendo que la ciencia es

neutra en relación con los factores ideológicos presentes en los contextos

históricos y sociales. La historia de la ciencia no depende, según estos

planteamientos, más que de ella misma, con lo que la sociedad no es motivo

de estudio en relación con la ciencia. De hecho, ni siquiera la tecnología

merecería una reflexión específica según esta perspectiva tradicional. A lo

largo del siglo XX ha habido muchas más ideas para entender cómo

52

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

funciona la ciencia cuáles son las reflexiones para comprender la esencia de

la actividad tecnológica. La filosofía de la ciencia está incomparablemente

más desarrollada que la filosofía de la tecnología.

Y ello es así porque tradicionalmente se ha considerado que la tecnología es

simplemente la aplicación a la actividad productiva de los conocimientos

desarrollados en el ámbito científico. La tecnología no sería más que ciencia

aplicada y, por tanto, la reflexión teórica sobre la actividad científica serviría

también para entender la actividad tecnológica. Frente a este punto de vista

tradicional, lo que se conoce como perspectiva CTS supone una ruptura con

estas ideas habituales sobre la ciencia y la tecnología. J. A. López Cerezo

resume el carácter de los estudios CTS en un silogismo que se basa en tres

supuestos o premisas principales de las que se deriva una consecuencia

práctica:

En primer lugar, se considera que el desarrollo tecnocientífico depende no

sólo de la propia ciencia o tecnociencia sino que también hay que tener en

cuenta factores culturales, políticos, económicos, etc. En relación con esto

se afirma también que no hay dentro de las tecnociencias algo así como un

saber oculto o inaccesible al no experto.

En segundo lugar, se afirma que la política científico-tecnológica, es decir, el

conjunto de decisiones sobre cuestiones tecnocientíficas (por ejemplo, la

autorización para utilizar un nuevo medicamento, la construcción de un tipo

determinado de central energética en cierto lugar, la posibilidad de

establecer un mapa genético de una especie, etc.) es algo que contribuye

esencialmente a modelar las formas de vida y la organización institucional.

Todas estas cuestiones son un asunto público de primera magnitud.

En tercer lugar, se supone que se comparte un compromiso democrático

básico, en el sentido de admitir el juego de las mayorías y asumir el diálogo

como forma de relación social.

53

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

La consecuencia que se sigue de estas afirmaciones es que se debería

procurar y favorecer la valoración y el control públicos por parte de los

ciudadanos sobre el desarrollo tecnocientífico. Esto significa proporcionar las

bases educativas para una participación social formada y también crear los

mecanismos institucionales que hagan posible tal participación. Éste es uno

de los objetivos básicos de los estudios CTS.

La primera premisa ha sido más intensamente desarrollada por los estudios

CTS que tienen un mayor componente teórico y que se han dedicado a

investigar los aspectos sociales implícitos en la actividad de la ciencia y la

tecnología. La segunda premisa se refiere a aspectos más prácticos, a los

temas derivados de los movimientos sociales que han reivindicado en los

últimos años una mayor participación pública y democratización de las

decisiones sobre los temas tecnocientíficos.

Concepción heredada

La ciencia es una forma de conocimiento que devela o descubre la

realidad

La ciencia es objetiva y neutral. No hay intereses o factores subjetivos

entre sus contenidos

La historia de la ciencia consiste en la acumulación de conocimientos

objetivos al margen de condicionantes externos

La tecnología es la aplicación práctica de los conocimientos científicos

Perspectiva CTS

Premisa 1: El desarrollo tecnocientífico es un proceso social como

otros.

Premisa 2: El cambio tecnocientífico tiene importantes efectos en la

vida social y en la naturaleza.

54

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Premisa 3: Compartimos un compromiso democrático básico

Conclusión: Se debe promover la evaluación y control social del

desarrollo tecnocientífico

55

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Lectura Complementaria

Vannevar Bush y Unabomber, dos norteamericanos con actitudes diferentes

hacia la ciencia y la tecnología

Por encargo del Presidente Roosevelt, Vannevar Bush, un científico

norteamericano que dirigió la Oficina de Investigación y Desarrollo, elaboró

en 1945 un informe titulado “Ciencia. La última frontera”. En él puso las

bases de lo que sería la política científica de su país durante la segunda

mitad del siglo XX. Con ingenuo optimismo Vannevar Bush defendía el

modelo lineal de las relaciones entre ciencia, tecnología y sociedad: más

ciencia implica más tecnología y más tecnología implica más progreso

nacional y bienestar social. Es la famosa política del cheque en blanco a la

ciencia por la que los políticos deben conceder autonomía completa a la

ciencia e invertir en ella para esperar que, como fruta madura, se desarrollen

los avances tecnológicos que siempre conducirán al progreso del país. Sin

duda, Vannevar Bush encarna los planteamientos ideológicos de muchas

personas que, dentro y fuera de ella, consideran que cualquier actividad

científica será siempre socialmente beneficiosa y por ello debe ser apoyada

sin pedir cuentas sobre sus resultados.

Pocos años antes de que Vannevar Bush elaborara su informe nacía

Theodore Kaczynski quien llegaría a ser profesor de matemáticas en la

Universidad de Berkeley y el modelo más emblemático del científico

renegado. A finales de los años setenta abandona su brillante carrera

científica y emprende otra carrera pública que le hace más famoso: la del

terrorista anticiencia conocido como Unabomber. Entre 1978 y 1996 envía

bombas a diferentes personalidades de la universidad con el resultado de 3

muertos y 23 heridos. Los motivos de su campaña terrorista los expone en

un manifiesto de 67 páginas titulado “La sociedad industrial y su futuro” que

consigue que sea publicado en 1995 por el New York Times y el Washington

Post. En dicho manifiesto Unabomber considera que la sociedad actual vive

en un estado de frustración, incertidumbre y pérdida de libertad provocada

56

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

por la ciencia y la tecnología ya que las decisiones son tomadas por una élite

con poder tecnológico que está muy alejada de la mayoría social. Frente a

esta situación Unabomber propone como única solución una revolución que

acabe con esta sociedad tecnológica. Coherente con sus planteamientos

tecnófobos vivió durante casi veinte años, hasta su detención y condena a

cadena perpetua, como un ermitaño con una única relación con la actividad

técnica: la preparación de bombas caseras que enviaba a investigadores

universitarios y grandes empresas tecnológicas.

Vannevar Bush y Unabomber compartían una visión radicalizada acerca de

las implicaciones sociales de la ciencia y la tecnología. El primero

consideraba que se debía invertir en ciencia y tecnología con la seguridad de

que esa inversión produciría siempre el progreso nacional y social con sólo

dejar hacer a los científicos su propio trabajo. El segundo consideraba que la

ciencia y la tecnología eran el principal enemigo de la sociedad y por ello

emprendió una alocada carrera en la que intentó no dejar hacer a los

científicos su trabajo enviándoles bombas. Es evidente que la conducta de

Unabomber es completamente repudiable, de hecho cumple condena a

cadena perpetua por ella. Pero ¿lo es menos la de Vannevar Bush? La

tecnofobia de Unabomber le convirtió en un terrorista, pero la tecnofilia de

Vannevar Bush le llevó a participar activamente en el Proyecto Manhattan

con el que se preparó la bomba atómica.

57

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

RESUMEN

Ciencia, Tecnología y Sociedad trata de una perspectiva o movimiento que

pone el acento en la existencia de importantes interacciones entre ellos. A lo

largo de la historia, la ciencia y la tecnología han tenido gran importancia en

las formas de vida social (del mismo modo que, históricamente, las formas

de vida social han sido también determinantes del desarrollo tecnocientífico),

sin embargo ha sido en las últimas décadas cuando la interacción entre

ciencia, tecnología y sociedad ha sido más intensa y ha comenzado a

constituir un tema de reflexión sustantivo. La ciencia y la tecnología

condicionan a comienzos del siglo XXI las formas de vida humana en el

planeta, incluso las otras formas de vida natural. Ante esta situación hay

quienes consideran a la ciencia y la tecnología como los verdaderos

demonios de la modernidad. Frente a estos tecnófobos también hay quienes

sostienen que todo mal en el mundo tendrá su solución tecnocientífica, por lo

que lejos de ser algo diabólico, la ciencia y la tecnología tienen las virtudes

salvíficas que antiguamente se asignaban a los dioses. Tecnofilia y

tecnofobia son, por tanto, las dos actitudes sociales acríticas que se suscitan

ante la ciencia y la tecnología.

En cualquiera de los casos es de significativa importancia el estudio de la

ciencia, la tecnología y la sociedad, reconocer sus alcances a lo largo de las

historia, sus impactos sociales y sus proyecciones en búsqueda de una

cultura científica de las acciones humanas que propendan por la calidad y

preservación de la vida en el planeta.

58

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

EVALUACIÓN DE LA UNIDAD

Atendiendo a los temas desarrollados en esta unidad.

1. Realiza un diagrama donde se muestre cronológicamente el

desarrollo histórico y evolución de la ciencia y la tecnología en el

mundo.

2. Describe cinco aspectos que han sido benéficos para la humanidad

respecto de los desarrollos científicos y tecnológicos hasta la época

actual.

3. Describe cinco aspectos que han sido dañinos para la humanidad

respecto de los desarrollos científicos y tecnológicos hasta la época

actual.

4. ¿Qué acciones según su criterio se deben ejecutar para mitigar el

impacto negativo de la explotación y uso de las tecnologías en el

mundo?

5. Explica las relaciones entre la economía de un país y sus avances en

materia científica y tecnológica.

59

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

UNIDAD 2

22.. LA CULTURA, LA TECNOLOGIA Y LA SOCIEDAD

2.1. PRESENTACIÓN

Se estudia en esta unidad la relación cultura, tecnología y sociedad, sus

efectos en las distintas esferas de la actividad humana. Se plantea la

evolución de las distintas actividades humanas con los avances en la ciencia

y la tecnología. La forma como se han generados problemas de orden ético

y moral en razón a los cambios de conducta y oportunidades que tiene el

científico y el profesional para actuar de buena o mala fe, según sus

especialidades en cada una de las distintas ramas de la ciencia.

Se hace un esbozo de las características de la sociedad actual y de las

posibilidades que le han dado al hombre las tecnologías de la información

las comunicaciones

COMPETENCIAS A DESARROLLAR

Explica la evolución de la cultura, la ciencia y la tecnología a través de la

historia de la humanidad.

Reflexiona y expresa sus posiciones respecto de la ética de los científicos y

tecnólogos de la época actual, con formación incidida con las nuevas

tecnologías.

Representa la caracterización de la sociedad de la información en un mundo

globalizado.

Establece limitaciones y riesgos de las sociedades con el uso de las nuevas

tecnologías de la información y las comunicaciones

22

60

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

DINÁMICA PARA CONTRUIR EL CONOCIMIENTO

AACCTTIIVVIIDDAADD PPRREEVVIIAA:: (Trabajo independiente)

1. Lea detenidamente la Unidad dos de manera individual.

2. Responda de manera escrita la Evaluación Inicial, “Atrévete a Opinar”

3. Realice mapas conceptuales o esquemas sobre la temática tratada en

la unidad.

4. Analice detenidamente todos los conceptos propuestos en la unidad y

profundice sobre ellos en otras fuentes.

AACCTTIIVVIIDDAADD EENN GGRRUUPPOO (CIPAS)

1. Reunidos en sus grupos de estudios (CIPAS), lean nuevamente la

Unidad dos socializan los resúmenes elaborados de manera individual

e independiente.

2. Reelaboran las respuestas de la Evaluación Inicial “Atrévete a

Opinar”.

3. Realice síntesis o resúmenes de las lecturas que se encuentran en el

desarrollo de la Unidad dos y discuta sus puntos de vista en el grupo

de estudios. Las reflexiones y acuerdos deben ser socializados en la

sesión junto con todos los compañeros de grupo y presentados al

tutor.

61

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Evaluación inicial – ATRÉVETE A OPINAR

1.

Explica: ¿Cómo cambia la cultura de la sociedad con los avances científicos y tecnológicos?

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

2.

Exprese. Tres comportamientos éticos del científico, del profesional y tecnólogo en la sociedad actual

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

3.

Describe cuatro limitaciones en la sociedad para acceder en forma equitativa a las nuevas tecnologías en el mundo

globalizado.

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

62

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

2.1 CONCEPTO Y ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LA CULTURA, LA

TECNOLOGÍA Y LA SOCIEDAD5

Las técnicas utilizadas por el hombre para resolver su vida material

(sobrevivir, alimentarse, cobijarse, vestirse...) constituyen una parte esencial

del patrimonio de la especie, desde la época de la hominización. Sin

embargo, tan sólo hoy en día es cuando parece evidente que el impacto de

la tecnología sobre la sociedad es una de las características más

significativas de los tiempos en que vivimos. Este impacto es masivo y

controvertido en las sociedades capitalistas más desarrolladas, y tiene unas

connotaciones contradictorias en los países en vías de desarrollo.

La tecnología aparece hoy en un primer plano, como centro de unos debates

en los que muchas veces se discute acerca de las técnicas, cuando lo que

habría que hacer es discutir acerca de políticas. La tecnología no es una

variable independiente que determina a todas las demás, sino que en cada

problema suelen existir diversas soluciones técnicas, entre las cuales hay

que optar a la luz de cuestiones económicas, sociales, culturales o

ideológicas.

La Tecnología ha penetrado con fuerza en el sistema educativo obligatorio,

con unos resultados que todavía es prematuro evaluar. La falta de recursos

dedicados a la reforma educativa y el clima de fracaso que planea sobre sus

resultados han posibilitado la contra-reforma auspiciada por el gobierno

conservador, que puede perjudicar a la Tecnología en beneficio del

renacimiento anunciado de las asignaturas de Religión y de Filosofía. Por

otro lado, en Cataluña y España la demanda de estudios técnicos de nivel

universitario se mantiene al alza, pese a la caída de la natalidad, lo cual

5 QUADERNS D’HISTÒRIA DE L’ENGINYERIA VOLUM V 2002-2003.

http://upcommons.upc.edu/revistes/bitstream/2099/733/1/editorial.pdf (Diciembre 4 de 2011, 2:31PM)

63

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

refleja una percepción social de que las profesiones técnicas tienen un lugar

respetable en el mercado de trabajo.

Pero esta misma sociedad, que orienta a sus hijos hacia las profesiones

técnicas y que utiliza masivamente artefactos y procesos cada vez más

complejos tecnológicamente, adopta mayoritariamente, en relación con la

técnica, una actitud distante y recelosa, cuando no de hostilidad y de temor.

El ciudadano que usa pero no comprende la tecnología abdica muchas

veces de sus responsabilidades, delegando en el "experto" o en el

"tecnócrata" la capacidad de decisión en aquellos asuntos de fuerte

contenido tecnológico, que hoy en día son prácticamente todos.

Las universidades –y en particular, las politécnicas– que pueden contribuir al

progreso de nuestra sociedad proporcionándole conocimientos,

procedimientos y personas técnicamente competentes, están moralmente

obligadas a hacer algo más: en primer lugar, a hacer asequible al ciudadano

medio los conocimientos técnicos necesarios para que pueda intervenir con

conocimiento de causa en aquellos asuntos en los que media alguna

cuestión de carácter tecnológico, es decir, para que se haga posible un

control democrático de la tecnología. En segundo lugar, a poner de

manifiesto la dimensión cultural de la tecnología, sus ideales y sus valores,

así como los peligros que comporta su desarrollo desligado de los intereses

sociales y humanos de la mayoría.

No seremos nosotros quienes pretendamos quitar complejidad a todas estas

cuestiones, pero quisiéramos contribuir al debate poniendo de manifiesto la

utilidad de La Historia. En ella no encontraremos la solución a nuestros

problemas, que ha de salir de nuestros análisis específicos y de nuestros

debates actuales, pero ignorar la experiencia pasada, las situaciones

conceptualmente semejantes que han tenido lugar en el pasado es un error,

sobre todo cuando, en casi todas las argumentaciones, hay siempre

referencias históricas, no siempre verídicas ni afortunadas.

64

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Durante los últimos doscientos cincuenta años, es decir, desde que la

Revolución Industrial comenzó a socavar los cimientos de una sociedad que

en lo esencial había permanecido estática durante siglos, venimos

conmocionándonos por los efectos de la aparición y asimilación de las

sucesivas nuevas tecnologías: los artefactos mecanizadores de la hilatura y

de la tejeduría, la máquina de vapor, el ferrocarril, el telégrafo, el ascensor,

el refrigerador doméstico y un extenso etcétera que hoy culmina en la

biotecnología o en las nuevas (¿hasta cuándo serán nuevas?) tecnologías

de la información y de la comunicación (TIC).

Todas las encrucijadas en las que las sociedades del pasado se han visto

obligadas a elegir un nuevo camino, debido a la aparición de un nuevo

procedimiento o artefacto técnico, han sido singulares e irrepetibles, pero

presentan una matriz cuyos elementos tienen ciertas características

semejantes. Como dice el profesor Basalla, en un universo artefectual

caracterizado por la diversidad, se producen las novedades, estimuladas por

una combinación de varios y muy diversos factores: económicos, sociales

(incluyendo los intereses militares), técnicos, culturales... En cada caso la

sociedad sólo selecciona una parte de estas novedades, respondiendo a las

influencias de factores del mismo tipo (económicos, sociales, etc.) y,

mediante un complejo proceso que consta de diversas etapas, convierte una

invención en una innovación, que será más tarde aplicada a la producción o

a los servicios.

Aún cuando – repetimos – cada situación es distinta e irrepetible, el

conocimiento de la trayectoria seguida históricamente por la ciencia y la

técnica, del impacto que las actividades técnicas han ejercido sobre la

sociedad y sobre las ideas de cada época y, recíprocamente, del modo

mediante el cual la sociedad ha condicionado el avance de la técnica, puede

ser un referente para los análisis del presente y una base para tomar

decisiones sobre el futuro. Más, si se considera el futuro como la historia

proyectada.

65

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

2.2 ÉTICA DE CIENTÍFICOS Y TECNOLÓGOS6

La responsabilidad profesional es el tipo más común de responsabilidad

moral que surge del conocimiento especializado que posee una persona.

Una profesión es una ocupación que involucra el aprendizaje de un cuerpo

especializado de conocimiento que sirve de base a una conducta profesional

que incide en el bienestar de otros seres humanos. El uso de este

conocimiento involucra responsabilidades morales asociadas con la

profesión de que se trate. Si bien algunas de estas responsabilidades

morales pueden formularse por medio de reglas de conducta que especifican

lo que es permitido, obligatorio o prohibido, el tema de la responsabilidad

profesional no puede reducirse a reglas. Un buen científico no sólo sigue los

lineamientos explícitos que rigen la conducta de un buen experimento en

una cierta área, tiene que ejercer su juicio en muchas ocasiones sin poder

recurrir a reglas pertinentes que determinen su situación. Muchas veces

tiene que decidir qué hacer para lograr un cierto resultado, o para equilibrar

diferentes tipos de objetivos o expectativas en el ámbito del tipo de actividad

en el que la persona se considera que es un experto y en ámbitos en donde

no.

Una conducta responsable no consiste meramente en llevar a cabo ciertos

actos y no llevar a cabo otros, muchas veces una conducta responsable

involucra saber cuando delegar la responsabilidad de llevar una cierta acción

a cabo. El problema de qué es una conducta responsable es un aspecto muy

importante que debe tener en su ser un ingeniero, un científico o un

tecnólogo, pero que generalmente, en la mayoría de los países, no es parte

de su educación. Si bien en el pasado, el aprendizaje de que si una

conducta profesional responsable, podía o no requerir una educación

especial, hoy en día, esto es cada vez mas importante sobre todo por la

6 MARTÍNEZ, Sergio F. Ética de científicos y tecnólogos. Instituto de Investigaciones

Filosóficas, UNAM. 2009. http://www.itescam.edu.mx/principal/sylabus/fpdb/recursos/r71473.PDF

66

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

importancia creciente que tiene el desarrollo de tecnologías especializadas

en las diferentes profesiones, tecnologías cuyo uso responsable requiere de

algo más que entrenamiento para saber usar un aparato. A mediados de

siglo se discutió mucho la responsabilidad de los físicos en la generación de

la tecnología que llevó a la construcción de bombas atómicas. Hoy en día se

discute mucho acerca de la responsabilidad de los científicos que están

desarrollando las técnicas de clonación de animales, pero una mínima

educación respecto al uso responsable de la tecnología en muchas otras

áreas que han recibido menos atención debería de ser un tema central en la

formación de profesionales.

Tomemos el caso de la tecnología de la información que se basa en el

desarrollo de las computadoras. La gran mayoría de profesionales utilizan

computadoras, pero muy pocas veces se habla del tipo de problemas éticos

que genera el uso del computador (sobre lo que diremos algo más adelante).

Siendo esto así, el desarrollo de cursos en ética para ingenieros y científicos

no debería responder meramente a una preocupación por evitar que un

ingeniero o un científico se meta en problemas éticos que puedan

desencadenar otro tipo de problemas, problemas legales, por ejemplo.

La ética para científicos e ingenieros debería de partir del reconocimiento de

que la educación de un ingeniero debe de incluir no sólo la enseñanza de

técnicas para resolver problemas, sino también la enseñanza acerca de

cómo hacer juicios que incorporen diferentes tipos de valores, beneficios y

riesgos, y esto requiere un conocimiento mínimo de las consecuencias que

pueden tener ciertas decisiones así como un conocimiento básico de las

maneras en las que el riesgo puede medirse, y los problemas éticos que

plantea la medición del riesgo. Este tipo de educación es cada vez más

importante porque la evaluación de riesgos, y la manera como diferentes

tipos de valores pueden o deben entrar en esas evaluaciones, es un proceso

muy difícil que generalmente se deja a las “intuiciones” de los estudiantes y

a los avatares de la práctica profesional, pero que en un mundo tan complejo

67

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

como en el que vivimos actualmente debe de estudiarse sistemáticamente.

En la última sección de este módulo veremos un ejemplo de ética

medioambiental que va a ayudarnos a ver la complejidad del tipo de

decisiones que muchas veces tiene que tomar un ingeniero.

Es importante hacer una distinción entre responsabilidad oficial y

responsabilidad profesional. La descripción de un puesto de trabajo

especifica responsabilidades oficiales, hay otras responsabilidades oficiales

que generalmente se aprenden conforme uno se va empapando del trabajo.

El aceptar un puesto de trabajo implica aceptar las responsabilidades

oficiales asociadas con el trabajo en cuestión. En la medida que esta

aceptación de responsabilidades puede entenderse como una promesa de

cumplir con las obligaciones que lleva consigo el puesto estas

responsabilidades pueden entenderse como obligaciones o

responsabilidades morales. Por supuesto que la responsabilidad moral de un

profesional no se limita a las responsabilidades oficiales, es más, uno de los

temas más interesantes de la ética profesional es precisamente el estudiar y

buscar solución a conflictos entre las responsabilidades oficiales y otros tipos

de responsabilidad u obligación moral. Otro tipo importante de

responsabilidad que es importante distinguir del concepto de responsabilidad

moral es el concepto de responsabilidad legal. Una responsabilidad moral

puede estar reforzada por una ley, en cuyo caso es también una

responsabilidad legal, pero no tiene por qué estarlo. Hay responsabilidades

legales que pueden entrar en conflicto con responsabilidades profesionales.

Por ejemplo, para derribar un edificio uno requiere de una licencia de

demolición, pero en ciertas condiciones es posible que la inminencia de un

colapso nos obligue moralmente a proceder con la demolición aunque no se

haya conseguido la licencia.

La relación entre estos diferentes tipos de responsabilidades es crucial para

entender muchos aspectos y limitaciones de la ética profesional. Por

ejemplo, la posibilidad de atribuir responsabilidad a una industria química de

la contaminación del agua de una comunidad requiere que la decisión de

68

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

deshacerse de los deshechos contaminantes de manera inapropiada pueda

ser atribuida a la compañía, y que por lo tanto la compañía, y no el gerente

de turno sea considerada responsable del hecho.

El tipo de responsabilidad que permite esta atribución es la responsabilidad

oficial. La idea es que una compañía es una estructura de decisiones

análoga a una persona y que las personas que allí trabajan llevan a cabo su

trabajo como parte de sus obligaciones y responsabilidades oficiales de

acuerdo con los valores y criterios de la compañía. Por supuestos que la

compañía puede tratar de argumentar que, por ejemplo, la persona que tiró

los desechos lo hizo en total incumplimiento de su responsabilidad oficial, en

cuyo caso esa persona podría considerarse legalmente responsable, pero no

la compañía.

En diferentes países es más o menos fácil atribuirle responsabilidad a una

compañía en este tipo de actos, pero cada vez se está generalizando la idea

que debe de ser posible hacer este tipo de atribuciones para que las

empresas se comporten de manera responsable.

Es común hacer una distinción entre sociedades académicas y colegios

profesionales. Las sociedades académicas se enfocan de manera

predominante a la promoción de los fines académicos propios de una

disciplina, mientras que los segundos juegan un papel importante en la

regulación institucional de una disciplina. Las primeras tienden a ser

sociedades internacionales, mientras que los segundos son propios de los

diferentes países. La sociedad iberoamericana de filosofía es una sociedad

académica, mientras que el colegio de médicos en España es un ejemplo del

segundo tipo. Las sociedades puramente académicas no tienen un código de

conducta, las sociedades profesionales casi siempre lo tienen.

Una profesión involucra requerimientos éticos relacionados con la

responsabilidad por el bienestar de otros con respecto a dimensiones que

aprovechan el conocimiento especializado del profesional. El llevar a buen

69

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

término esta responsabilidad no puede meramente codificarse en reglas,

requiere del despliegue de una capacidad de juicio que permita conjugar

toda una serie de consideraciones en el proceso de decidir qué hacer para

alcanzar ciertos objetivos. Requiere entender las consecuencias de ciertos

actos y ser capaz de poner en la balanza diferentes tipos de valores y

riesgos involucrados. Un elemento crucial y distintivo del despliegue de esa

capacidad de juicio en el caso de la responsabilidad profesional es un sólido

conocimiento del área en la cual se es experto, y en particular requiere

desarrollar la habilidad de saber cuáles son los límites de ese conocimiento,

y por lo tanto, los límites de la responsabilidad profesional. El cumplimiento

de una responsabilidad es un conocimiento habilidoso, un conocimiento

corporalizado en una habilidad análoga a la que tiene un buen dibujante para

darnos una idea de un paisaje en unos cuantos trazos sobre un papel. Así

como puede enseñarse a dibujar mejor, así también, puede enseñarse a

cumplir mejor con una responsabilidad profesional.

La responsabilidad ética de las diferentes profesiones varía dependiendo del

tipo de actividad a la que se dediquen los profesionales, y generalmente los

aspectos más problemáticos se articulan sistemáticamente en códigos

profesionales de conducta que emiten las sociedades que legalmente

representan a las diferentes profesiones.

Hay lineamientos comunes a muchas profesiones. Por ejemplo, no sólo los

médicos, sino los abogados y los ingenieros, así como los científicos, tienen

la obligación de no divulgar sin consentimiento información confidencial

relativa a los pacientes, clientes, empresas o universidades a los que sirven.

Por otro lado, hay reglas que son muy importantes en ciertas profesiones y

no en otras. Por ejemplo, en los códigos de ética de un colegio de ingenieros

siempre hay una prohibición de aceptar sobornos, pero no hay tal prohibición

en los códigos de abogados o médicos o científicos. Esto no quiere decir que

un médico no deba aceptar un soborno de un paciente, pero esta no es una

situación usual, o que se perciba como particularmente problemática para el

cumplimiento de la responsabilidad profesional, y por lo tanto no se

70

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

considera necesario incluirla explícitamente en un código de conducta

profesional. El paciente podría querer convencer a su esposa rica de que

está muy enfermo y que por lo tanto deben de irse a vivir a otro lado y

ofrecerle al médico una cantidad de dinero por hacer un certificado médico

incorrecto. Esto podría suceder, pero no es algo que esté por lo general

expresamente prohibido en un código de ética médica. Es obvio que a un

abogado no tiene mucho sentido prohibirle aceptar regalos de distribuidores

de computadoras, pero si tiene sentido prohibirle a un médico cierto tipo de

regalos de empresas farmacéuticas.

En los EE.UU. hay ahora una serie de reglas que restringen mucho la

posibilidad de que un médico pueda reclutar pacientes para los

experimentos que tienen que llevar a cabo las compañías farmacéuticas

para que una nueva droga sea aprobada. Estas restricciones se generaron

debido a que se pensó que el reclutamiento de pacientes por los médicos,

quienes recibían varios cientos, o incluso miles de dólares por paciente que

reclutaban, entraba en conflicto con lo que debe de ser preeminente en la

práctica médica, el bienestar personal de los pacientes concretos. El diseño

de muchos experimentos obliga a que algunos pacientes estén en un grupo

de control en donde en lugar de una supuesta medicina reciben un placebo.

Algo similar sucede con las prohibiciones en los códigos de ingenieros para

aceptar cierto tipo de regalos de clientes o potenciales clientes. Se piensa

que se corre el riesgo de que esos regalos jueguen un papel en decisiones

que deben de tomarse desde una perspectiva estrictamente profesional.

Debido a que en algunas culturas puede considerarse muy rudo el no

aceptar un regalo muchas sociedades profesionales de ingenieros

consideran aceptable que un regalo se acepte pero que ese regalo luego se

done a alguna sociedad de beneficencia o a un fondo común de la compañía

en la que labora el ingeniero.

71

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Si bien muchas veces se piensa que tener una conducta éticamente correcta

consiste en actuar de acuerdo a un conjunto de reglas que especifican lo que

debe y no hacerse en casos específicos, la ética profesional es un buen

ejemplo de cómo la conducta éticamente correcta no puede caracterizar por

reglas generales. Las diferentes profesiones requieren de diferentes tipos de

códigos de conducta, y la caracterización de lo que es éticamente

responsable requiere que se tomen en cuenta las condiciones de las diferentes

prácticas profesionales

Así pues, es claro que los estándares de conducta ética profesional no

pretenden ser exhaustivos, esto es, no pretenden cubrir todos los casos de

conducta ética que pueda presentarse, mas bien pretenden recalcar los

lineamientos éticos apropiados en situaciones que de manera recurrente

aparecen en el ejercicio de una profesión en un momento histórico

determinado, y en una sociedad en particular. Por supuesto que las fuertes

interacciones que hay en el desarrollo de la ciencia y la tecnología en los

diferentes países tienden a generar problemas similares en muchas

sociedades, y a la vez se tiende a requerir cada vez más que se tomen en

cuenta diferencias culturales en la formulación de los códigos de conducta

profesional.

El ejemplo de Robert Millikan.

Robert Millikan fue un físico de la Universidad de Chicago que ganó el

premio Nobel en física por experimentos que midieron la carga eléctrica del

electrón a través de una medición de la carga eléctrica de gotas minúsculas

de aceite. Para llegar a establecer el resultado de su investigación Millikan

llevó a cabo una selección de datos. Todos los días medía la carga eléctrica

de una cierta cantidad de gotitas, pero a veces decidía no tomar en cuenta

las mediciones de todo un día, o algunas de las muestras en un día. Esta

selección, sin embargo, no respondía a una metodología clara.

72

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Millikan descartó algunos datos porque hubo interferencia de polvo, o porque

según el las gotas no se habían separado bien pero no había ninguna

justificación que sería aceptable de acuerdo a los criterios para la selección

de datos que prevalecen hoy día. Sin lugar a dudas, un buen experimentador

como Millikan llega a conclusiones a través de razonamientos que son

difícilmente caracterizables de manera explícita, que apelan a lo que muchos

llaman la “intuición” de un buen experimentador.

En su famoso trabajo de 1910 Millikan descarta los valores obtenidos para

varias gotas con comentarios como el siguiente: “si bien todas las

observaciones dieron valores de e dentro de un 2% de la media final, las

incertidumbres de las observaciones eran tales que las hubiera descartado

de no estar de acuerdo con los resultados de las otras observaciones, y por

lo tanto me sentí obligado a descartarlas.”

La manera tan directa en la que Millikan habla sobre su manera de

seleccionar los datos deja claro que cuando escribió su trabajo de 1910 no

tenía la intención de engañar a nadie.

Tres años después Millikan escribe otro trabajo en el que él se refiere

nuevamente a sus experimentos con gotas de aceite y dice explícitamente

que él no ha hecho “una selección del grupo de gotas sino que representa

todas las gotas del experimento durante 60 días consecutivos”.

La discusión del trabajo de Millikan por Holton se encuentra en sus libros

The Scientific Imagination, Cambridge U. Press 1978, y Einstein, history and

Other passions, American Institute of Physics, 1994.

Como lo hace notar Holton, este enunciado de Millikan es simplemente falso,

y según Holton, Millikan debía saber que era falso cuando lo hizo. Ahora

bien, lo mas interesante de este caso no es la mentira de Millikan, que pudo

73

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

haberse debido a un lapso de memoria, algo muy entendible, sino la manera

como el caso ha sido tratado en la literatura sobre el fraude en la ciencia.

Por un lado, hay escritores que piensan que Millikan cometió fraude y otros

que piensan que no, pero muy pocas veces se trata de entender que los

criterios aceptables para la selección de datos son cambiantes y, que es

muy difícil juzgar a una persona con respecto a criterios que eran ajenos a la

comunidad en donde tuvo lugar la selección de datos.

Es importante tener en cuenta que hay problemas morales que surgen de

cambios en los estándares de lo que constituye una práctica correcta (tanto

en investigación como en actividades profesionales). No es raro encontrar

profesionales o científicos que recuerdan vívidamente cambios que han

tenido lugar en los estándares de su disciplina. Un ejemplo de un cambio

drástico es la manera como han cambiado los estándares de conducta

respecto al medio ambiente.

Hasta hace tres o cuatro décadas, era totalmente aceptable descartar

materiales dañinos al medio ambiente sin pensar en las consecuencias. El

aceite de los automóviles se tiraba por las coladeras sin que nadie pensara

que había algo mal en esta práctica. Muchas explosiones atómicas de

prueba tuvieron lugar sin pensar en las consecuencias dañinas para

poblaciones cercanas, cuando incluso ya habían gentes que estaban

previniendo de las posibles consecuencias a largo plazo.

Hoy en día este tipo de conductas sería impensable, o en todo caso sería

muy criticada. Los códigos de conducta de las sociedades profesionales

tienden a reflejar estos cambios en los valores o en las maneras en que los

valores se implementan.

El tema de la responsabilidad profesional en el trabajo científico no se limita

al tema de la conducta en una investigación, ni mucho menos al tema de la

selección de datos.

74

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Otros temas relacionados son los concernientes con la seguridad en el

trabajo de un laboratorio y la preocupación por las personas y animales

involucrados en una investigación. Mas en general, es importante tener en

cuenta que vale la pena hacer una distinción entre discusiones acerca de

temas éticos generados por la investigación científica y temas éticos más

asociados con otros aspectos de la conducta científica. El tema de la ética

en la ciencia no se restringe al tema de la ética de la investigación. El trabajo

científico es mucho más que la investigación que directamente resulta en el

avance del conocimiento, y todos esos otros aspectos de la conducta

científica generan importantes problemas éticos.

La selección de datos es una práctica legítima e indispensable del quehacer

científico siempre y cuando se haga de acuerdo con criterios legítimos. Estos

criterios cambian a lo largo del tiempo. Por ello, es importante recalcar que

cualquier selección de datos debe hacerse de manera totalmente transparente

al lector-evaluador

El científico como experto social. Como se planteó en la segunda sección,

la responsabilidad profesional es el tipo más común de responsabilidad

moral que surge del conocimiento especializado que posee una persona.

Este conocimiento especializado hace del profesional un experto en una

determinada área de conocimiento. Este conocimiento experto es reconocido

legalmente de varias maneras. Por una parte un profesional en la medida

que ejerce su profesión está legalmente facultado para llevar a cabo ciertas

actividades que inciden en el bienestar de los demás, por ejemplo, un

ingeniero civil es considerado un experto en la construcción de edificios o en

la construcción de una presa.

Un médico es considerado un experto en diagnosticar enfermedades o en

curarlas. Si un ingeniero decide poner un consultorio para curar gente muy

posiblemente, aunque eso depende mucho de los países, terminaría en la

cárcel, porque no tiene licencia para curar gente sino para construir edificios.

75

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Es interesante notar que la manera como los científicos se reconocen como

expertos legalmente ha cambiado dependiendo del tipo de concepción

predominante acerca de la naturaleza del conocimiento científico. En

muchos sistemas judiciales y, en particular en los sistemas anglosajones de

justicia, es muy importante el testimonio de expertos científicos en la

presentación y justificación de la evidencia. Hasta hace relativamente poco

se pensaba que un experto científico sólo podía rendir testimonio como

experto en cuestiones en las que no había prácticamente desacuerdo en la

comunidad de expertos respecto al tema. Esta política reflejaba la idea que

el conocimiento científico era acumulativo y que el conocimiento tendía

fuertemente a ser reconocido como tal unánimemente una vez que pasaba

una etapa de desarrollo.

En la medida que el científico podía rendir testimonio experto en un juicio era

sobre esos temas en los que ya no había desacuerdo. Hoy en día, sin

embargo, en varios estados los criterios para aceptar a un científico como

experto en un juicio han cambiado. Puesto que está muy generalizada la

tendencia de que el conocimiento científico en realidad es un conjunto de

opiniones cambiantes sobre muchos temas, un experto no tiene porqué

restringirse a rendir testimonio sobre cuestiones que todos sus colegas

considerarían indiscutibles. Puede rendir testimonio a partir de teorías que

no sean totalmente compartidas, todo lo que es necesario es que haya una

subcomunidad significativa que sustenta las ideas en cuestión.

Un tipo de situación que es cada vez más común y que puede ser un modelo

de la manera como los científicos pueden funcionar como expertos sociales

más allá del papel que pueden jugar en un juicio legal es el siguiente. A

principios de los años ochenta en una pequeña comunidad en Aspen

Colorado se descubrió que el suelo estaba fuertemente contaminado por

plomo. La agencia gubernamental que supervisa los problemas del medio

ambiente en los EE.UU., la famosa EPA, por sus siglas en inglés, llevó a

cabo una serie de estudios y en 1986 propuso que debería de removerse

76

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

más de un metro de suelo en toda el área residencial y cambiarla por un

suelo no contaminado. La EPA hizo una reunión y notificó a los residentes

de su decisión. Los residentes empezaron a movilizarse y a pedir estudios

por parte de otras instituciones y llegaron a la conclusión que la EPA no

parecía tener evidencia sustancial de que hubiera algún impacto negativo en

la comunidad por la presencia de plomo en el suelo. Generalmente se

asume que sobre todo los niños menores de 6 años están muy propensos a

contaminarse con el plomo en el suelo porque juegan en el suelo y no se

lavan las manos muy seguido. Lo sorprendente del estudio promovido por la

comunidad fue que si bien el suelo estaba contaminado los niveles de plomo

en la sangre de los residentes, incluyendo los niños, estaban incluso muy

por debajo de la media nacional.

No obstante, la EPA seguía queriendo imponer lo que la agencia

consideraba era la medida más apropiada para promover la buena salud de

los ciudadanos, remover cerca de un metro de suelo. Finalmente se acordó

hacer un estudio independiente por parte de un comité de expertos que sería

acordado por las partes, tanto la EPA como los residentes tenían derecho de

vetar a alguien sin tener que dar razones. El comité técnico finalmente

seleccionado tenía la tarea de revisar los documentos existentes acerca del

nivel de plomo en el suelo y el impacto en la salud de los habitantes, y

recabar y evaluar el testimonio de residentes de Aspen y de la EPA.

La tesis defendida por EPA era que el plomo estaba en el suelo y que eso

era un riesgo, si había causado daño hasta ahora eso no era importante. Los

residentes sostenían que mientras no vieran claro que podía causar daño no

procedía la remoción del suelo.

El comité de técnicos finalmente llegó a un veredicto. Se corroboró que los

estudios que mostraban que la población tenía un bajo nivel de plomo en la

sangre era en efecto representativos de la población, y varios expertos

trataron de mostrar que esto se debía a que la manera como el plomo se

presentaba en el suelo era poco asimilable.

77

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Los miembros del comité no consideraban totalmente convincente este

tipo de argumento, ni muchos otros que se presentaron, tomándolos

uno a uno, pero si consideraron convincente el hecho que todos estos

argumentos apuntaban en la misma dirección para el caso concreto

que estaba en consideración.

Hay estudios que muestran que los niños bien nutridos tienen menos riesgo

de contaminarse con plomo proveniente del suelo. Otros estudios sugieren

que cuando el suelo está predominantemente cubierto por pasto u otro tipo

de vegetación el riesgo de contaminación por plomo disminuye. Todos estos

factores permitían explicar los bajos niveles de plomo en la sangre y

permitían predecir que para esa comunidad el riesgo de que la situación

cambiara era despreciable. Se concluyó que si bien había una mínima

probabilidad de que en el futuro el plomo en el suelo se constituyera en una

amenaza para la salud de la comunidad esta probabilidad era despreciable.

La comunidad en cuestión era tal que todas las condiciones requeridas para

que la asimilación del plomo del suelo no fuera un problema se cumplían.

Por ello llegaron a la conclusión que la remoción del suelo no era necesaria

para preservar la salud de la población y se recomendó tener un programa

de monitoreo constante de la situación.

Este es un ejemplo de cómo los científicos pueden jugar un papel importante

como expertos sociales en un sentido que claramente permite ayudar a una

comunidad a llegar a una decisión respecto a un tema en el que la decisión a

tomar requiere de la capacidad para identificar y evaluar riesgos de una

manera novedosa, en situaciones en las que no se pueden aplicar reglas

simples para tomar decisiones apropiadas.

Este no es el tipo de tarea para la que los científicos están entrenados, pero

que cada vez puede ser más importante tener. Nuevamente, desarrollar esta

capacidad de los científicos requeriría no simplemente aprender a resolver

problemas sino poder integrar una gran diversidad de valores en el

78

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

planteamiento de los problemas. La ética sería desde esta perspectiva no

simplemente una ayuda para saber conducirse en sociedad sino una

herramienta para que los científicos puedan jugar un papel más responsable

en la construcción de una sociedad futura.

2.3. LA ERA DE LA INFORMACIÓN: GLOBALIZACIÓN TÉCNICA Y

CAMBIO SOCIAL

La cambiante sociedad actual, a la que llamamos sociedad de la

información, está caracterizada por los continuos avances científicos

(bioingeniería, nuevos materiales, microelectrónica) y por la tendencia a la

globalización económica y cultural (gran mercado mundial, pensamiento

único neoliberal, apogeo tecnológico, convergencia digital de toda la

información...). Cuenta con una difusión masiva de la informática, la

telemática y los medios audiovisuales de comunicación en todos los estratos

sociales y económicos, a través de los cuales nos proporciona: nuevos

canales de comunicación (redes) e inmensas fuentes de información;

potentes instrumentos para el proceso de la información; el dinero

electrónico, nuevos valores y pautas comportamiento social; nuevas

simbologías, estructuras narrativas y formas de organizar la información...

configurando así nuestras visiones del mundo en el que vivimos e influyendo

por lo tanto en nuestros comportamientos.

La sociedad de la información también se denomina a veces sociedad del

conocimiento (enfatizando así la importancia de la elaboración de

conocimiento funcional a partir de la información disponible), sociedad del

aprendizaje (aludiendo a la necesidad de una formación continua para

poder afrontar los constantes cambios sociales), sociedad de la

inteligencia (potenciada a través de las redes - inteligencia distribuida-).

LA SOCIEDAD DE LA INFORMACIÓN. La "sociedad de la

información", modelada por el avance científico y la voluntad de

globalización económica y cultural, tiene entre sus principales

rasgos una extraordinaria penetración en todos sus ámbitos de

los medios de comunicación de masas, los ordenadores y las

79

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

redes de comunicación. En ella la información, cada vez más

audiovisual, multimedia e hipertextual, se almacena, procesa y

transporta sobre todo en formato digital, con ayuda de las TIC.

Como destaca Castells (1997), frente a una primera revolución industrial

sustentada en la máquina de vapor, y una segunda apoyada en la utilización

masiva de la electricidad, la actual tercera revolución (que supone el auge

del sector terciario) tiene como núcleo básico y materia prima la

información y nuestra creciente capacidad para gestionarla, especialmente

en los campos de tratamiento de la información simbólica a través de las TIC

y el tratamiento de la información de la materia viva mediante la ingeniería

genética y la biotecnología. Hay que tener en cuenta que históricamente,

siempre que han incrementado las capacidades de comunicación de las

personas, a continuación se han producido cambios sustanciales en la

sociedad.

Por otra parte, estamos en una sociedad compleja donde la rapidez y el

caudal de la recepción de las informaciones aumentan sin cesar, de una

manera que no está en armonía con el ritmo del pensamiento y de la

comprensión de la naturaleza humana. En muchos casos, la actual

capacidad de innovación tecnológica (que conlleva una profunda

transformación de las personas, organizaciones y culturas) parece ir por

delante de la valoración de sus riesgos y repercusiones sociales.

80

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

En la sociedad de la información aparece una nueva forma de cultura, la

cultura de la pantalla (cada vez podemos hacer más cosas ante la pantalla)

que, como decía Arenas (1991), se superpone a la cultura del contacto

personal y la cultura del libro. Además, junto al entorno físico, real, con el

que interactuamos, ahora disponemos también del ciberespacio, entorno

virtual, que multiplica y facilita nuestras posibilidades de acceso a la

información y de comunicación con los demás.

Frente a esta nueva cultura tecnificada y "massmediática", Humberto Eco

(1993) distingue dos posiciones extremas de los ciudadanos:

- Los apocalípticos, que la consideran una "anticultura" decadente y

desintegradora de la moral. Así, Jean Baudrillard (2000), postula que la

sociedad actual, dominada por los ordenadores y máquinas electrónicas que

convierten la vida en virtualidad, está enferma; y Giovanni Sartori (1998),

afirma que cuando sustituimos el lenguaje abstracto por el lenguaje

perceptivo (concreto), estamos empobreciendo nuestra capacidad de

entender y pasamos de "homo Sapiens" a "homo videns"

- Los integrados, que ven de manera optimista esta nueva cultura.

2.4. SOCIEDAD: POBLACIÓN, ESTILOS DE VIDA, POLÍTICA

El triunfo de las ideas globalizadoras y neoliberales en el seno de una

sociedad agitada por un vertiginoso desarrollo científico y tecnológico

nos está trasladando a "otra civilización", y el escenario en el que se

desarrollan nuestras vidas va cambiando cada vez más de prisa.

Muchas han sido las circunstancias que han preparado el terreno para el

advenimiento de esta "nueva era”, pero el hito que señalará un antes y un

después en nuestra historia es sin duda la "apoteosis" de Internet en la

década de los noventa. Ahora ya podemos afirmar que estamos en la

"sociedad de la información"; especialmente nosotros, ciudadanos de uno de

81

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

los países más avanzados del mundo. En realidad TODOS estamos en la

sociedad de la información, tanto los países más avanzados como los más

pobres, lo que ocurre es que muchos cientos de millones de personas,

aunque aún no disfrutan de sus ventajas, si padecen sus consecuencias.

Esta nueva "cultura", que conlleva nuevos conocimientos, nuevas maneras

de ver el mundo, nuevas técnicas y pautas de comportamiento, el uso de

nuevos instrumentos y lenguajes..., va remodelando todos los rincones de

nuestra sociedad e incide en todos los ámbitos en los que desarrollamos

nuestra vida, exigiendo de todos nosotros grandes esfuerzos de adaptación.

Algunos de los principales aspectos que caracterizan la "sociedad de la

información" son los siguientes:

- Omnipresencia de los "mass media" y de las nuevas tecnologías de la

información y la comunicación (TIC), con sus lenguajes audiovisuales e

hipermediales, en todos los ámbitos de la sociedad: ocio, hogar, mundo

laboral... Todos necesitamos saber utilizar estos instrumentos tecnológicos.

Ahora la transmisión de noticias y de todo tipo de información a través del

planeta es inmediata, y los ordenadores e Internet se han hecho

herramientas imprescindibles para la mayoría de los trabajos que

realizamos, incluso para disfrutar de muchas formas de ocio (videojuegos,

Internet…). Y por si fuera poco, en unos pocos años todo esto quedará

integrado en los nuevos "teléfonos móviles de internauta", y lo tendremos

siempre a nuestro alcance en el bolsillo.

- Sobreabundancia de información a nuestro alcance. Cada vez nos

resulta más fácil acceder a todo tipo de información (TV, prensa, Internet...),

pero precisamente la abundancia de datos que tenemos a nuestro alcance

(no todos ellos fiables y bien actualizados) nos hace difícil seleccionar en

cada caso la información más adecuada. Por otra parte, la información se

nos presenta distribuida a través de múltiples medios: mass media, Internet,

bibliotecas...

82

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Esta competencia de "saber" buscar, valorar y seleccionar, estructurar y

aplicar la información para elaborar conocimiento útil con el que afrontar las

problemáticas que se nos presentan, es uno de los objetivos de la educación

actual.

- Continuos avances científicos y tecnológicos en todos los campos del

saber, especialmente en bioingeniería, ingeniería genética, nuevas

tecnologías... El conocimiento se va renovando continuamente, velozmente.

Y fuerza cambios en la forma de hacer las cosas, en los instrumentos que se

utilizan... Las nuevas generaciones se encuentran con muchos

conocimientos distintos a los que presidían la vida de sus predecesores.

Todos necesitamos estar aprendiendo continuamente.

- El fin de la era industrial. La mayor parte de la población activa de los

países en los que se ha consolidado la "sociedad de la información" trabaja

en el sector servicios, y casi siempre con una fuerte dependencia de las

nuevas tecnologías para realizar su trabajo. Terminó la era industrial en la

que el sector secundario (la producción industrial de bienes materiales) era

el más importante de la economía. Ahora los intangibles "información y

conocimiento" son valores en alza, indispensables para el progreso de las

empresas…, y también para asegurar el bienestar de las personas.

- Libertad de movimiento. La "sociedad de la información", sustentada por

la voluntad de globalización económica y cultural, trae consigo una creciente

libertad de movimiento. Muchas fronteras se diluyen y aumenta la libertad

para los movimientos internacionales de todo tipo: personas, mercancías,

capitales..., y sobre todo información. Cada vez son más las profesiones que

exigen frecuentes desplazamientos por diversos países y especialmente el

dominio de varias lenguas. El inglés ya resulta casi indispensable.

- Nuevos entornos laborales. Las nuevas tecnologías revolucionan la

organización de los entornos laborales y abren grandes posibilidades al

teletrabajo. Crece continuamente el número de personas que desarrollan

83

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

buena parte de su trabajo en casa, ante un ordenador conectado a Internet:

telecomercio, telebanca, teleformación...

En el siguiente cuadro, se observan en detalle los perfiles de nuestro nuevo

mundo:

CARACTERÍSTICAS DE LA SOCIEDAD ACTUAL

ASPECTOS SOCIOCULTURALES

Continuos

avances

científicos.

Incesantes descubrimientos y nuevos desarrollo

científicos: nuevas tecnologías para la información y la

comunicación (telefonía, informática, etc.), ingeniería

genética, nanotecnología, nuevos materiales...

Redes de

distribución de

información de

ámbito mundial

Las redes de distribución de información permiten

ofrecer en cualquier lugar en el que haya un terminal

(ordenador, teléfono móvil, televisor...) múltiples

servicios relacionados con la información. No

obstante, lo que para algunos países son grandes y

veloces "autopistas de la información", para otros

apenas son simples caminos de tierra y barro.

La sociedad se basa en amplias redes de

comunicación y en la capacidad de los individuos para

actualizar su conocimiento en un mundo que cambia

vertiginosamente.

Omnipresencia de

los medios de

comunicación de

masas e Internet

Con los "mass media " (prensa, radio, televisión...) e

Internet las noticias de, información, formación y ocio

llegan cada vez a más personas. La información se

mueve casi con absoluta libertad por todas partes;

lo que ocurre en un punto del planeta puede verse

inmediatamente en todos los televisores del mundo

(hay canales de TV – como la poderosa cadena

americana CNN <http://www.cnn.com/>, que emiten

noticias durante todo el día).

Esto supone una verdadera explosión cultural que

84

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

hace más asequible el conocimiento a los ciudadanos,

pero a la vez, crece el agobio por el exceso de

información y la sensación de manipulación

ideológica por los grupos de poder que a través de

los "mass media" configuran la opinión pública y

afianzan determinados valores.

Nuevos patrones

para las

relaciones

sociales

Las omnipresentes TIC imponen nuevos patrones

sobre la gestión de las relaciones sociales: nuevas

formas de comunicación interpersonal, nuevos

entretenimientos...

Mayor

información del

estado sobre los

ciudadanos.

No solamente son los ciudadanos los que pueden

acceder a un mayor volumen de información a través

de Internet; el estado aumenta la información de que

dispone sobre los ciudadanos (cámaras de vídeo en

las calles, centralización de datos en Hacienda...), y

está en condiciones de ejercer un mayor control sobre

ellos.

Integración

cultural

Tendencia hacia un "pensamiento único" (sobre todo

en temas científicos y económicos) debida en gran

parte a la labor informativa de los medios de

comunicación social (especialmente la televisión), la

movilidad de las personas por todos los países del

mundo y la unificación de las pautas de actuación que

exige la globalización económica.

Se va reforzando la sensación de pertenecer a una

comunidad mundial, aunque los países más

poderosos van imponiendo su cultura (idioma,

instrumentos y procesos tecnológicos...) amenazando

la identidad cultural de muchos pueblos.

Aceptación del

"imperativo

tecnológico"

Según el "imperativo tecnológico", la fabricación y

utilización de herramientas es el factor determinante

del progreso de la humanidad. Por ello se aceptan los

85

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

nuevos instrumentos como modernos e inevitables,

renunciando muchas veces a conducir el sentido de

los cambios y del progreso. Como afirma Joana Mª

Sancho "las tecnologías artefactuales, simbólicas y

organizativas transforman de manera insospechada

no solo el mundo que nos rodea, sino nuestra propia

percepción del mismo y nuestra capacidad para

controlarlo".

"Hay que tener ordenador y saber inglés"

Formación de

megaciudades.

La población se agrupa en grandes aglomeraciones

urbanas (megaciudades) donde muchas veces son

necesarios desplazamientos importantes para ir a los

lugares de trabajo y de ocio

Baja natalidad (en

los países

desarrollados)

En los países desarrollados hay una notable baja de

natalidad (Unión Europea), en tanto que en algunos

países en desarrollo (China) se toman medidas para

contener una tasa de crecimiento excesivo.

Mientras otros países siguen sin tomar ninguna

medida y con unas tasas de natalidad que desbordan

sus posibilidades (México, norte de África).

Nuevos modelos

de agrupación

familiar

Aumenta el porcentaje de personas que viven solas

(solter@s, divorciad@s, viud@s...) y aparecen nuevos

modelos de agrupación familiar (monoparental,

homosexual...). El patriarcado entra en crisis.

El alto índice de separaciones y divorcios genera los

consiguientes problemas para los hijos.

Mayor presencia

de la mujer en el

mundo laboral

Mayor incorporación de la mujer al trabajo, dedicando

menos tiempo a la familia. Las posibilidades de

actuación social de la mujer se van igualando a las del

hombre en la mayoría de los países, aunque en otros

(como los países musulmanes) este proceso se ve

fuertemente dificultado por sus tradiciones religiosas.

86

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

En muchos casos la mujer sufre el desgaste de una

doble jornada laboral: en el trabajo y como ama de

casa.

Necesidad de

"saber aprender"

y de una

formación

permanente

Ante la imposibilidad de adquirir el enorme y creciente

volumen de conocimientos disponible, las personas

debemos saber buscar autónomamente la información

adecuada en cada caso (aprender a aprender)

Las nuevas generaciones se van encontrando con

muchos conocimientos nuevos respecto a los que

presidieron la vida de la generación anterior. Las

personas necesitan una formación continua a lo largo

de toda la vida para poder adaptarse a los continuos

cambios que se producen en nuestra sociedad. No se

trata de simples "reciclajes", sino de completos

procesos de reeducación necesarios para afrontar las

nuevas demandas laborales y sociales.

Relativismo

ideológico

Tendencia a un relativismo ideológico (valores, pautas

de actuación...) que proporciona una mayor libertad a

las personas para construir su propia personalidad,

aunque se enfrentan a la falta de referentes estables

sobre los que construir su vida.

También emergen nuevos valores que muchas

veces se oponen abiertamente a los valores

tradicionales, creando desconcierto en una gran parte

de la población. Se da gran importancia al momento

presente y a la inmediatez (éxito fácil...), al "tener"

sobre el "ser"....

Disminución de la

religiosidad

Fuerte disminución del sentimiento religioso y del

poder de las iglesias tradicionales, aunque proliferan

las sectas pseudoreligiosas.

Se refuerzan los planteamientos integristas

musulmanes.

87

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Grandes avances

en medicina

Grandes avances en la prevención y terapia

sanitaria, consecuencia de los desarrollos científicos

en ingeniería genética, nanotecnología, láser...

Aumento progresivo de la esperanza de vida.

ASPECTOS SOCIOECONÓMICOS

Crecientes

desigualdades en

el desarrollo de

los países

Aumentan las desigualdades de desarrollo

(económico, tecnológico, de acceso y control a la

información...) entre los países del mundo. Desde una

perspectiva objetiva, parece que cada vez hay menos

pobres, pero en cambio los pobres cada vez son

más pobres. Además, el modelo económico de los

países desarrollados resulta ya insostenible para el

planeta y desde luego inaplicable a todos los países.

La concentración de riqueza en unas pocas familias

resulta cada vez más escandalosa. Actualmente las

250 personas más ricas del mundo poseen la misma

riqueza que el 40% más pobre de la población del

planeta (2.000 millones de personas)

Globalización

económica y

movilidad.

Se va consolidando una globalización de la economía

mundial que supone el desarrollo de grandes

empresas y grupos multinacionales actuando en un

mercado único mundial.

Las mercancías y los capitales se mueven con gran

libertad por todo el mundo (dinero electrónico). Las

personas en general también.

Medios de

transporte rápidos

y seguros

Constante mejora (rapidez, seguridad, capacidad) de

los medios de transporte (transporte aéreo, trenes

de alta velocidad, carreteras...), que conjuntamente

con Internet hacen posible el desarrollo de la

economía globalizada

Continuos

cambios en las

Los continuos avances científicos y tecnológicos

introducen continuos cambios en las actividades

88

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

actividades

económicas.

Tendencia a las

organizaciones en

red

económicas, en la producción, en la organización del

trabajo y en las formas de vida en general de las

personas. La formación permanente resulta

indispensable para poder adaptarse a las nuevas

situaciones.

Frente a las organizaciones jerárquicas verticales de

la etapa industrial, se tiende a las organizaciones en

red (redes variables que se configuran según los

proyectos)

Uso de las nuevas

tecnologías en

casi todas las

actividades

humanas

Progresiva introducción de las nuevas tecnologías en

casi todas las actividades humanas, avaladas por su

marcada tendencia de costes decrecientes y a la alta

productividad que conlleva su uso.

Se hace necesaria una alfabetización científico-

tecnológica de todos los ciudadanos para que

puedan adaptarse a las modificaciones en la

organización del trabajo y en muchas actividades

habituales que supone el uso intensivo de estas

tecnologías.

Incremento de las

actividades que

se hacen a

distancia.

Van aumentando progresivamente las actividades que

se pueden hacer a distancia con el concurso de los

medios telemáticos: teletrabajo, teleformación,

telemedicina, telebanca...

Valor creciente de

la información y el

conocimiento

Valor creciente de la información y del conocimiento

que se puede elaborar a partir de ella. Información y

conocimiento van adquiriendo una creciente

relevancia económica como factor de producción (el

uso de tecnología aumenta la productividad) y como

mercancía (servicios de acceso a la información para

la formación, el ocio...).

Crecimiento del

sector servicios

En un próximo futuro, la gran mayoría de la

población activa sociedad no va a estar

89

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

en la economía concentrada en producir alimentos ni en fabricar

objetos, sino en ofrecer servicios: procesar

información o atender a las personas. Estamos

pasando de un consumo basado en los productos a

un consumo basado en los servicios,

especialmente, en los servicios relacionados con la

creación, proceso y difusión de la información.

Consolidación del

neoliberalismo

económico

El fenómeno de la globalización va acompañado de

una ideología político-económica de corte neoliberal

que considera positiva la globalización económica y

del mercado, pero no ve tan necesaria la

globalización política, ya que considera que el mejor

funcionamiento de la economía es aquel en el que hay

pocas interferencias políticas.

Se producen grandes concentraciones de poder

financiero.

Profundos

cambios en el

mundo laboral.

En la sociedad actual, donde la información y los

conocimientos constituyen el elemento sobre el cual

se desarrollan muchas de las actividades laborales, y

donde las herramientas para recibir, tratar y distribuir

la información están en todas partes (empresas,

domicilios, locales sociales, cibercafés...), la

organización del trabajo en general está sufriendo

cambios profundos que apuntan hacia nuevos

sistemas de trabajo flexible (mayor autonomía,

teletrabajo) y nuevas fórmulas contractuales (en

vez de retribuir el tiempo de dedicación, se retribuye el

trabajo realizado).

Se valoran los trabajadores cualificados, con iniciativa

y capacidad de adaptación tecnológica y organizativa.

Aumentan el paro

y los fenómenos

Los incrementos de productividad que conlleva la

integración de las nuevas tecnologías en los procesos

90

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

de exclusión productivos es uno de los factores que genera paro,

especialmente en los trabajos menos cualificados. Es

un escenario que se podría caricaturizar diciendo que

tenemos un crecimiento continuado de la riqueza

total y un crecimiento paralelo del paro.

La imposibilidad de acceder ala Red supone

analfabetismo y marginación.

Creciente

emigración desde

los países más

pobres a los más

ricos

Hay una creciente emigración de población de los

países más pobres y con conflictos (África,

Sudamérica) hacia los países ricos (Europa, Estados

Unidos), los cuales aún no han articulado mecanismos

para integrarla o promover zonas de desarrollo en los

países de origen que inhiban la marcha. En muchos

países desarrollados se configura una sociedad

multicultural

Toma de

conciencia de los

problemas

medioambientales

La humanidad toma conciencia de las amenazas que

se ciernen sobre el medio ambiente a causa de la

incontrolada actividad económica, pero aún no se han

puesto medios suficientes para remediarlo. Las

conferencias mundiales que se convocan para

abordar el tema no cuentan aún con el apoyo

decidido de los países más poderosos y

desarrollados, que además son los que contaminan

más.

Consolidación del

"estado del

bienestar"

Consolidación del "estado del bienestar" entre la

mayoría de países desarrollados (educación y sanidad

gratuita, pensiones de jubilación...), aunque en

algunos países aparecen ciertos indicios de recesión

de los logros conseguidos

ASPECTOS POLÍTICOS

91

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Paz entre las

grandes

potencias, pero

múltiples

conflictos locales

Pese a la situación de paz entre las grandes potencias

mundiales (especialmente tras la caída del muro de

Berlín, símbolo de la guerra fría entre la URSS y

USA), hay numerosos conflictos latentes o

declarados entre pueblos, grupos étnicos y grupos

resentidos por pasadas injusticias de tipo económico o

social

Se multiplican los

focos terroristas

Se multiplican los focos terroristas y poderes mafiosos

en todo el mundo, y se configura un terrorismo capaz

de desafiar a cualquier estado.

Debilitación de los

Estados

Los Estados no pueden controlar todo lo que ocurre

en el ciberespacio global que carente de fronteras,

escapa de cualquier control político y pasa a ser

controlado por políticas técnicas y económicas de

grandes empresas multinacionales.

Consolidación de

la democracia

La democracia se va consolidando en casi todos los

países del mundo (quedan muy pocas dictaduras) “de

jure” aunque no “de facto”.

No obstante se observan indicios de debilitamiento

de la democracia (grupos fascistas, fanatismos,

populismo, corrupción...) en algunos de los países

donde la democracia estaba más consolidada, y en

general los ciudadanos que disfrutan de democracia

se quejan de su imperfecto funcionamiento

Tendencia al

agrupamiento de

los países

Hay una tendencia de los países al agrupamiento en

grandes unidades político-económicas, como en el

caso de la Unión Europea, al tiempo que dentro de los

estados resurgen los nacionalismos que reclaman

(a veces con violencia) el reconocimiento de su

identidad.

De todas ellas, Manuel Castells (1997) destaca como principales

características de la sociedad actual:

92

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

- Revolución tecnológica (y creciente auge de la tecnología móvil).

No obstante existe una enorme brecha entre nuestro sobredesarrollo

tecnológico y nuestro subdesarrollo social.

- Profunda reorganización del sistema socioeconómico

(globalización). La nueva economía se sustenta sobre 3 pilares: la

información, la globalización y la organización en red (frente a las

anteriores organizaciones jerárquicas verticales).

- Cambios en el mundo laboral: frente al trabajador ejecutor (sin

capacidad de iniciativa que se limita a hacer un trabajo genérico no

especializado), el trabajador cualificado ("trabajador autoprogramable",

con capacidad para cambiar tanto en lo tecnológico como en lo

organizativo, para definir objetivos y transformarlos en tareas) se

considera como el gran factor para la creación de valor en las empresas

- Cambios sociales: crisis de la familia patriarcal y creciente

multiculturalidad.

93

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

RESUMEN

Desde que la Revolución Industrial comenzó a socavar los cimientos de una

sociedad que en lo esencial había permanecido estática durante siglos,

venimos conmocionándonos por los efectos de la aparición y asimilación de

las sucesivas nuevas tecnologías: los artefactos mecanizadores de la

hilatura y de la tejeduría, la máquina de vapor, el ferrocarril, el telégrafo, el

ascensor, el refrigerador doméstico y un extenso etcétera que hoy culmina

en la biotecnología.

Estos cambios y/o avances han obligado a la sociedad a elegir un nuevo

camino, debido a la aparición de un nuevo procedimiento o artefacto técnico,

de la diversidad de cambios científico-tecnológicos la sociedad sólo

selecciona una parte de éstas, respondiendo a las influencias de factores del

mismo tipo (económicos, sociales, etc.) y, mediante un complejo proceso,

convierte una invención en una innovación, que será más tarde aplicada a la

producción o a los servicios.

Otro tema que afecta a la sociedad cada vez más globalizada y genera

cambios en los comportamientos, es la responsabilidad profesional que

adquiere una persona en función del conocimiento especializado por el que

se considera un experto.

Ingenieros, científicos y tecnólogos tienen diferentes maneras de entender

esa responsabilidad y de desplegarla socialmente a través de instituciones.

Es importante notar que esa responsabilidad profesional no puede verse

como ejemplificación de un conjunto de reglas que se aplican de manera

diferente en las diferentes profesiones. La responsabilidad propia de cada

profesión responde a condiciones históricas cambiantes y los intentos por

parte de los propios profesionales por hacer explícitos los principios básicos

que regulan éticamente una profesión.

94

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

El uso de la Internet ha generado una serie de reflexiones acerca del

concepto de autoría intelectual que está siendo plasmado en diferentes

códigos de conducta ética profesional y que en pocos años habrán

modificado de manera importante los estándares para la atribución de

autoría.

Finalmente, se resumen los principales aspectos que caracterizan la

"sociedad de la información": Omnipresencia de los "mass media" y de las

nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC),

Sobreabundancia de información a nuestro alcance, continuos avances

científicos y tecnológicos en todos los campos del saber, especialmente en

bioingeniería, ingeniería genética, nuevas tecnologías... El fin de la era

industrial, la libertad de movimiento y entre otros, los nuevos entornos

laborales. Características que a su vez generan cambios en la dinámica

social y por ende en el comportamiento de toda actividad humana que sea

tocada por la modernidad.

95

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

EVALUACIÓN DE LA UNIDAD

Responde las siguientes inquietudes.

1. ¿Qué cambios en las costumbres se han dado en su comunidad con

el auge de las nuevas tecnologías?

2. ¿Qué actividades se daban que en la actualidad han caído en desuso

o se han extinguido?

3. ¿Cuáles son las dificultades que se presentan en su comunidad para

acceder a las nuevas tecnologías?

4. ¿Cómo se podrían resolver esas limitaciones de acceso a las nuevas

tecnologías?

5. Describe las características de las nuevas formas de trabajo

generadas por el auge de las nuevas tecnologías de que tratan las

lecturas propuestas en esta unidad.

96

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

UNIDAD 3

RESPONSABILIDAD SOCIAL Y DESARROLLO

CIENTÍFICO TÉCNICO

3.1 PRESENTACIÓN

“Si bien la ciencia y la tecnología nos proporcionan numerosos y positivos

beneficios, también traen consigo impactos negativos, de los cuales algunos

son imprevisibles, pero todos ellos reflejan los valores, perspectivas y

visiones de quienes están en condiciones de tomar decisiones concernientes

al conocimiento científico y tecnológico". Núñez J, J (2007)

Actualmente constituye una paradoja comprobar que el potencial científico y

técnico es suficiente para mejorar considerablemente la calidad de vida, la

solución de grandes problemas existenciales básicos como la alimentación,

la salud, condiciones de vida, comunicación, la cultura en general, etc., y sin

embargo, la mayor parte de la población mundial no ha logrado satisfacer

sus necesidades materiales elementales. Más, en una parte considerable de

la sociedad, independientemente de su carácter social, arraiga un

sentimiento de inseguridad, atribuyéndole a la ciencia y la tecnología la

responsabilidad por los males que sufre el mundo de hoy, desde lo ecológico

hasta aquellos fenómenos que afectan de forma directa y visible al hombre:

desempleo, desigualdades, enfermedades provocadas, peligros de

destrucción por explosiones o guerras con armas cada vez más sofisticadas.

33

97

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Se desarrolla en esta unidad el tema de la responsabilidad social del

profesional de la ciencia y la tecnología, la cual es parte inseparable del

contenido de la Ética de la ciencia, asunto muy debatido, en el cual se ha

avanzado mucho en la identificación de todo un conjunto de problemas

éticos que genera el desarrollo de la ciencia y la tecnología y, en particular,

los problemas morales que se derivan de las ciencias biomédicas y

nucleares, enfatizando en los conflictos y dilemas éticos que emanan de las

ciencias antes mencionadas.

http://www.monografias.com/trabajos85/responsabilidad-social-del-profesional-

ciencia-y-tecnologia/responsabilidad-social-del-profesional-ciencia-y-

tecnologia.shtml#laresponsa

COMPETENCIAS A DESARROLLAR

En esta unidad el estudiante:

Explica los cambios generados por los avances científicos y tecnológicos en

las economías de los países sin distingo de su estado de desarrollo socio

económico.

Describe cómo la ciencia y la tecnología ha incidido en el comportamiento

social de las poblaciones, en la toma de decisiones para elegir y ser elegidos

Reconoce el conocimiento como insumo para la producción de bienes y

servicios en el ámbito competitivo actual.

Describe variedad de situaciones en que las tecnologías son aprovechadas

en escenarios educativos.

98

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

DINÁMICA PARA CONTRUIR EL CONOCIMIENTO

AACCTTIIVVIIDDAADD PPRREEVVIIAA:: (Trabajo independiente)

1. Lea detenidamente la Unidad tres de manera individual.

2. Responda de manera escrita la Evaluación Inicial, “Atrévete a Opinar”

3. Elabore resumen sobre la temática tratada en la unidad el cual le

ayudará a comprender mejor el tema.

4. Analice detenidamente todos los conceptos que aparecen en esta

unidad, en caso de tener dudas plantéela en su CIPAS.

5. Elabore un análisis general sobre toda la Unidad, para que afiance lo

leído.

AACCTTIIVVIIDDAADD EENN GGRRUUPPOO (CIPAS)

1. Reunidos en sus grupos de estudios (CIPAS), estudien la Unidad tres

2. Una vez revisada esta unidad, socialicen los resúmenes elaborados

de manera individual e independiente.

3. Socialicen las respuestas de la Evaluación Inicial “Atrévete a opinar”

4. Formular y presentar ante el tutor las preguntas y conclusiones más

relevantes relacionadas con las temáticas tratadas en esta unidad.

99

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Evaluación inicial – ATRÉVETE A OPINAR

1.

Explica: ¿Cómo influyen los avances científicos y tecnológicos en el crecimiento económico de un país o

comunidad?

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

2.

¿Cuáles son las ventajas y desventajas de la ciencia y la tecnología en la democracia o formas de organización

política de los países en el mundo?

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

3.

¿Describe los recursos y utilidades de las tecnologías y avances científicos en la educación ofrecida por las

instituciones educativas de un país?

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

100

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

3.1. ECONOMÍA Y SISTEMA CIENTÍFICO-TÉCNICO7

Durante los últimos años la innovación tecnológica ha cambiado la estructura

económica de las economías avanzadas desde varias dimensiones, aunque

como principal ventaja se señalan las múltiples sinergias que genera sobre

el resto de la economía (OCDE, 1998). En primer lugar, se pueden destacar

los cambios sectoriales, derivados de un aumento de la preponderancia de

los subsectores intensivos en tecnología. En segundo lugar, además de la

propia inversión en I+D, cabe remarcar los cambios en el proceso inversor,

derivados de la nueva formación de capital en intangibles, y, en tercer lugar,

se puede referenciar los cambios en las relaciones comerciales, resultado

del aumento de las interdependencias para el comercio tecnológico, la

inversión directa y la colaboración entre empresas.

A parte de los importantes cambios generados en la producción, las

tecnologías de la información y la comunicación (TIC) han cerrado un círculo

virtuoso (Greenspan, 1999) desde la demanda. Así, los aumentos de

productividad derivados de la inversión tecnológica consolidan nuevos

patrones de consumo asociados a la diversificación productiva, lo que en un

contexto de inflación baja y aumento de la riqueza retroalimenta el trinomio

inversión tecnológica - nueva producción - consumo.

Aunque la inversión tecnológica no es una cosa nueva, los economistas

hablan de un cambio estructural. ¿Qué elementos se han incorporado al

proceso productivo en general y desde la inversión tecnológica en particular

para hablar de cambio? Un repaso de la teoría económica del crecimiento

nos permitirá tener más elementos de juicio.

7 VILASECA, Requena Jordi y TORRENT, Sellens Joan. Tecnología y economía: una aproximación a la interpretación económica del conocimiento. UOC. 2011 http://www.uoc.edu/web/esp/art/one/0104013/one04.html

101

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Como se ha comentado, la teoría económica del crecimiento hace años que

analiza el impacto sobre el crecimiento económico de la tecnología. Sin

embargo, teniendo en cuenta la diversidad de los modelos de crecimiento

económico de corte neoclásico, a grandes rasgos se puede considerar que

tienen una característica común: la consideración que los avances de renta y

producción agregadas tienen la causa fundamental en los incrementos de la

cantidad de factores productivos (capital y trabajo) utilizados por una

economía, lo que no incluye la consideración del cambio técnico como un

elemento primordial en la explicación del crecimiento económico.

A partir de las aportaciones de Schmookler (1966) y Mansfield (1968)

definimos la tecnología como el "fondo social de conocimiento de las artes

industriales" y la tasa de progreso tecnológico como "la tasa a la cual

aumenta este estock de conocimientos".

La manifestación del cambio tecnológico en progreso técnico se evidencia

de varias formas, que se pueden agrupar según los tres grandes grupos

siguientes:

Que se produzcan más bienes (outputs) utilizando las mismas

cantidades de factores (inputs). O que se pueda obtener la misma

cantidad de un bien con cantidades menores de uno o más factores.

Que los productos existentes mejoren de calidad.

Que se produzcan bienes completamente nuevos.

Cuando un invento nos dirige a "una nueva técnica para producir un

determinado bien que ya existe", definimos la invención de proceso,

mientras que un invento que "cambia la forma -entendida en el sentido

amplio, no sólo de apariencia- de los bienes ya existentes o genera bienes

completamente nuevos" definimos la invención de producto. Una vez un

invento "se aplica al conjunto de las actividades económicas", se define la

innovación, que puede ser también de proceso o de producto.

102

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

En el campo macroeconómico y en el análisis del papel que tiene el cambio

técnico en la explicación del crecimiento económico han surgido en los

últimos años cuatro preguntas fundamentales:

¿Qué grado de importancia tiene el progreso técnico y tecnológico en

la explicación del crecimiento económico?

La respuesta a esta pregunta incorpora una vertiente teórica y una vertiente

empírica. Desde el punto de vista teórico el progreso técnico ha tenido un

papel marginal en la teoría económica hasta épocas muy recientes. En el

análisis clásico solamente Marx, que situó la innovación como característica

fundamental en el estudio de las leyes de evolución del capitalismo y en la

caída de la tasa de beneficio, y Schumpeter (1952), que mediante su estudio

de los racimos de innovación también situó el progreso técnico en el centro

del desarrollo capitalista, realizaron aportaciones importantes que, sin

embargo, quedaron al margen de las principales corrientes de la teoría

económica convencional.

A partir de la década de los cincuenta -con el trabajo seminal del Slow-, los

economistas recobraron el interés por la importancia del progreso técnico en

la explicación del crecimiento económico. En realidad, se ha pasado del

hecho que no se considerase la importancia del análisis económico al hecho

de ver como un número creciente de autores juzga el progreso técnico como

un elemento que impregna la actividad económica.

Schmookler lo identifica como el dominio creciente del hombre sobre la

naturaleza y Mansfield empieza su famoso manual de la manera siguiente:

"Sin duda, el cambio tecnológico es uno de los determinantes más

importantes de la configuración y la evolución de la economía. El

cambio tecnológico ha mejorado las condiciones de trabajo, ha

permitido la reducción de las horas de trabajo, ha proporcionado un

103

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

incremento de la producción de bienes nuevos y viejos, y ha aportado

muchas dimensiones nuevas a nuestra manera de vivir."

The Economics of Technological Change , E. Mansfield y E.

Mansfield( 1968)

En resumen, el estudio de la importancia del progreso técnico en la

explicación del crecimiento económico nos interesa desde dos vertientes. En

primer lugar, desde la determinación de modelos teóricos que incorporen la

importancia de los procesos de innovación y, en segundo lugar, desde el

estudio de la adaptación de estos modelos para la investigación empírica del

efecto del progreso técnico en el mundo real.

3.2. LA DEMOCRATIZACIÓN DE LA CIENCIA Y DE LA TECNOLOGÍA8

Tanto la ciencia como la democracia constituyen procedimientos que la

sociedad cultiva para validar formas del accionar colectivo. La investigación

científica respalda, por ejemplo, acciones bélicas o sanitarias; las decisiones

democráticas también. Pero los respectivos criterios de validación son, en

principio, diametralmente opuestos. Suele repetirse que en la ciencia no se

vota, aserción obvia cuya contrapartida -quizás no tan obvia- sería “en la

democracia no se demuestra ni verifica”. La ciencia tiene como ideal

normativo el alcanzar la verdad mediante procedimientos que combinan la

experiencia y la razón. La democracia -como lo dice una de las

formulaciones más antiguas y elocuentes, la oración fúnebre que en el siglo

V AC Tucídides atribuyó a Pericles- apunta a garantizar a todos la justicia

mediante leyes forjadas de acuerdo a procedimientos que “favorecen a los

más en lugar de a los menos”.

8 AROCENA, Rodrigo. Sobre la democratización de la ciencia y la tecnología. Quantum:

revista de administración, contabilidad y economía, ISSN 0797-7859, Vol. 2, Nº. 1, 2007 , págs. 7-14.

104

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Establecer por votación las causas de una enfermedad constituiría la

negación de la ciencia. Definir desde la academia la reforma de la salud

constituiría la negación de la democracia. Sin desmedro de ello, hay espacio

para sostener que los ideales definitorios y las disposiciones espirituales que

inspiran a la ciencia y a la democracia no son tan contrapuestos como suele

darse por descontado.

Esbozaremos algunos argumentos en esa dirección, que tienen sentido

especialmente si, en vez de la ciencia como conocimiento y de la

democracia como régimen, nos interesamos por la investigación científica y

la democratización como procesos desplegados a lo largo del tiempo,

intrínsecamente cambiantes.

Reconocer algunas similitudes entre ambos puede ser de valor para las

prácticas en uno y otro caso, así como también, y fundamentalmente, para el

gran terreno de encuentro de tales prácticas que es la educación.

La similitud a la que nos referimos la sugiere ya el origen común de la

ciencia propiamente dicha y de la democracia, allá por el siglo VI AC, en las

ciudades griegas, donde los mismos grupos buscaban averiguar, mediante

la observación y la discusión racional, cuáles son las leyes que rigen el

cosmos y cuáles las que deben regir a la polis.

El ideal de la ciudad griega, que alumbró la construcción de la democracia

ateniense, es el de una comunidad de seres humanos que, desde valores

compartidos, afronta problemas intercambiando abiertamente argumentos

con la expectativa de llegar a soluciones cuya validez sea alta y

comprensible, de donde es aceptable para muchos, si no para todos. ¿Es

muy distinto el ideal de la comunidad científica? Ambos ideales, en la visión

de ellos que aquí se defiende, tienen en común la relevancia de la

comunicación y un postulado de igualdad, que por cierto dan lugar a

prácticas diferentes en uno y otro caso. Todos sabían en Atenas que la

influencia política de Pericles no era igual a la de otro ciudadano cualquiera

105

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

pero, a la hora de definir una cuestión, sus puntos de vista prevalecían si era

capaz de comunicarlos convincentemente a un número suficiente de

personas interesadas en el punto, todas las cuales tenían igual incidencia en

la votación definitoria. Ningún simpatizante de la Real Sociedad ignoraba

que la influencia de Newton no era igual a la de otro cualquier aficionado a la

ciencia pero, a la hora de establecer un resultado nuevo, su propuesta

prevalecía si era capaz de comunicarla convincentemente a otros cuya

capacidad básica para llegar a entenderla, si estaban dispuestos a dedicar a

ello el tiempo suficiente, se asumía en principio igual.

Como apunte al pasar, cabe señalar que la reflexión epistemológica “post

positivista” tiende a caracterizar al conocimiento científico, más que por su

objetividad, por su intersubjetividad, vale decir, por su capacidad de ser

comunicado convincentemente entre seres que, más allá de todas sus

diferencias naturales y culturales, comparten el atributo básico de la razón

humana. Allí radica el cimiento de la pretensión “universalista” de la

democracia que, sin ignorar especificidades y valorando pluralidades, es una

fuente de inspiración para la práctica en comunidades diferentes y en

distintos ámbitos de la vida colectiva.

La vinculación entre razón humana, ciencia y democracia impone destacar

que la sobrevaloración de esa razón constituye un gran obstáculo tanto para

la democratización como para la investigación. Nadie expresó esa tendencia

permanente de la historia con la brillantez de Platón, que -en textos

literariamente maravillosos y duraderamente sugerentes- presentó lo que

cabe llamar la razón orgullosa, todopoderosa y única fuente de

conocimientos, reservada a unos pocos, los que pueden llegar a ser sabios

y, por eso mismo, deben ser los dirigentes o “guardianes” de la ciudad.

Esa concepción liquida a la democracia y esteriliza a la ciencia. Pero no

constituye un asunto del pasado. En sociedades de base científica, si en vez

de los ideales similares de la investigación y la democratización, los que

cobran fuerza son sus reales contraopositores, se ahondarán las diferencias

106

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

entre las minorías que “saben” o controlan a los que saben y las mayorías, lo

que irá en desmedro probablemente de la ciencia y seguramente de la

democracia. Tales riesgos impulsan a bucear en ciertas tendencias

profundas de la evolución social, buscando sustentos para alternativas

diferentes.

En términos históricos, es relativamente reciente la conversión del

conocimiento científico y tecnológico como palanca fundamental del

crecimiento económico. Ese proceso ha tenido lugar en paralelo con el

avance acelerado de la especialización y la división del trabajo. A esta última

atribuyó Adam Smith el papel central en “la riqueza de las naciones”, en su

célebre obra sobre el tema, publicada en 1776, el año inicial del ciclo de

revoluciones políticas que abriría el camino a la democracia política

moderna.

Por entonces ya estaba tomando cuerpo la Revolución Industrial. La

parcelación de las tareas productivas y la concentración de quienes la

realizan en un mismo ámbito, características de la organización

manufacturera del trabajo, abrió camino a la introducción de máquinas

alimentadas por una fuente común de energía. El tránsito de sociedades de

base agraria a sociedades de base industrial fue desencadenado por el salto

revolucionario en materia de uso de la energía que supuso la introducción de

la máquina de vapor. Las chimeneas llegaron a ser el símbolo de la

institución característica de la sociedad emergente, la fábrica, y ésta se

constituyó en un puente extraordinario para conectar invención e innovación.

La vinculación entre, por un lado, la generación de nuevos conocimientos o

procedimientos y, por otro lado, la transformación de las prácticas

productivas, avanzó en una alimentación recíproca con la expansión de la

industria moderna. Cuando esa simbiosis estaba todavía en ciernes, Marx y

Engels, anunciaron en el Manifiesto Comunista de 1848, que la ciencia

devenía en fuerza productiva directa. Ese texto brillante fue afiebradamente

escrito para estar pronto a tiempo para la revolución que los autores

107

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

anticipaban y, que efectivamente tuvo lugar ese año, dando lugar a una

brevísima “primavera de los pueblos” que, sin embargo, dejaría duraderas

consecuencias para la construcción de la democracia, particularmente en lo

que se refiere a la reivindicación del sufragio universal.

Era prematura la previsión marxista acerca del papel de la ciencia, pero

hacia 1900, ya contaba con sólidos sustentos en la realidad, emergiendo de

las dinámicas entretejidas de la generación de conocimientos y las

transformaciones institucionales. Entre estas últimas, dos tuvieron particular

incidencia en ese proceso. Una fue la que se ha dado en llamar la

Revolución Académica, definida por la incorporación a la universidad de la

misión de investigar, como tarea adicional y conectada a la misión definitoria

de enseñar. Semejante transformación revolucionó efectivamente lo que era

en gran medida una decadente corporación medieval, convirtiéndola en la

más gravitante forja de, a la vez, nuevos investigadores y nuevas

investigaciones. La otra transformación que corresponde destacar en este

contexto es el surgimiento del laboratorio empresarial de Investigación y

Desarrollo (I+D), que al decir de Jorge Sábato, marcó el pasaje de la

producción artesanal de tecnología a su producción fabril. Ambas

transformaciones de carácter institucional impulsaron la llamada Segunda

Revolución Industrial de las décadas finales del siglo XIX, cuya principal

característica ha sido bautizada como el matrimonio de la ciencia y la

tecnología o, en la formulación menos usual pero quizás más elocuente de

David Noble, el matrimonio de la ciencia y las artes útiles. Ese fue un factor

esencial de la impresionante expansión del empleo y la producción industrial

que el siglo XX habría de conocer.

La industrialización no ha dejado de expandirse y, en esta primera década

del siglo XXI, su aceleración en China e India trastoca el panorama

económico internacional. Pero varias décadas antes, en los países de más

temprana industrialización, diversos indicios, como la disminución del

proletariado industrial en el conjunto de la población asalariada, anunciaban

ciertas alteraciones de tendencias.

108

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

En 1973, Daniel Bell publicó “La sociedad post-industrial”, obra sólida y

controvertible presentada como un ensayo de prospectiva que, de hecho,

anuncia el tránsito a una sociedad de base científica. En su visión, la fábrica

iría perdiendo la centralidad que tuvo en las sociedades de base industrial y

la universidad se convertiría en una institución central. Esa evolución surgía

como consecuencia natural del creciente influjo de la ciencia y la tecnología,

así como del paralelo proceso de expansión de la educación superior.

En los años siguientes cobró gran vigor la democratización política. Ya era

tiempo de volver a interrogarse acerca de las relaciones entre ciencia y

democracia. En el histórico año de 1989, uno de los más influyentes

ideólogo político de la segunda mitad del siglo XX, Robert Dahl, al reflexionar

sobre la democracia en los tiempos por venir, hizo particular hincapié en los

riesgos que pueden generar los expertos: cuando el conocimiento se

expande vertiginosamente y parece desbordar las posibilidades de

comprensión de la mayoría de la gente, quienes se especializan en alguna

temática determinada pueden llegar a arrogarse la potestad de decidir en la

materia, haciendo realidad el papel antidemocrático asignado a los

“guardianes” en la concepción de Platón.

El mundo siguió girando. Entre 1996 y 1999, en su “Suma” sobre la Era de la

Información, Manuel Castells, describió con gran enjundia una nueva

Revolución Tecnológica, de envergadura no menor a la de aquella

“Revolución de la Energía” que abrió el camino a las sociedades de base

industrial. Intentando evitar la confusión entre información y conocimiento,

cabe decir que la Revolución de las Tecnologías de la Información, como

proceso social múltiple, terminó de abrir la vía de acceso a la llamada

sociedad del conocimiento o, mejor quizás, a la sociedad de base científica,

anticipada por Marx.

Dicha revolución ha multiplicado las capacidades para generar, manejar y

transmitir información, en particular, alimentando con ella mecanismos e

109

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

instrumentos, a la vez que ha disminuido drásticamente los tiempos que

tales tareas insumen. Consiguientemente, ha tenido lugar un verdadero salto

cualitativo en las posibilidades de generar y usar conocimientos. Jugando un

poco con la idea del matrimonio entre ciencia y tecnología (C&T), cabe

sugerir que esa fue durante cierto tiempo una pareja de tipo tradicional, con

roles bastante diferenciados y estables, de modo que era por lo general la

ciencia ya “bien establecida” la que se usaba para modificar la tecnología,

así que era por la vía de ésta sobre todo que aquélla incidía en la producción

de bienes y servicios; al presente, C&T ha devenido una “pareja moderna”,

con roles menos separados, de modo que una investigación científica -

orientada a contestar Parece indiscutible que el creciente papel del

conocimiento está modelando una nueva estructura del poder, tanto a escala

geopolítica global como a la escala social de cada país o región alguna “¿por

qué?”- suele encontrarse con una rápida respuesta a algún “¿cómo hacer?”

y así pasar a desenvolverse en el campo de la tecnología; la recíproca no es

menos frecuente. Así, es cada vez más la ciencia en proceso de

construcción la que tiene impactos directos en la producción, como lo

ilustran notablemente las ciencias de la vida. Sin dejar de ser “investigación

fundamental”, la ciencia es ya una gran “fuerza productiva directa”.

Como elocuentemente lo describe Castells, la Revolución de las Tecnologías

de la Información se ha entretejido con una impresionante reestructura del

capitalismo. Dicho autor, Touraine y otros, recurren a una clave interpretativa

que es un eje principal del libro citado de Daniel Bell; a saber: Marx, subrayó

agudamente las conexiones entre el nivel de las fuerzas productivas y el

carácter de las relaciones de producción, pero supuso que dichas

conexiones son tales que a un cierto nivel de las primeras corresponde

necesariamente una única configuración de las segundas, necesidad que la

historia no ha confirmado.

Así, durante el siglo XX, contemplamos al menos dos tipos de sociedades

cuya base la constituían las fuerzas productivas de la industria, pero con

diferentes relaciones de producción, capitalistas unas y propias del

110

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

“socialismo de Estado” las otras. En esta perspectiva, lo que emerge en el

Norte es una sociedad capitalista de base científica. No es de extrañar pues

que la privatización del conocimiento -que se extiende rápidamente de la

tecnología a la ciencia sea una tendencia mayor en una sociedad capitalista

cuya fuerza productiva fundamental tiende a ser el conocimiento científico y

tecnológico.

Como quiera que sea, parece indiscutible que el creciente papel del

conocimiento está modelando una nueva estructura del poder, tanto a escala

geopolítica global como a la escala social de cada país o región.

Las relaciones de dominación -de unas naciones sobre otras, de algunos

grupos sociales sobre los demás- tienen cada vez más que ver con el

acceso al conocimiento y al control sobre su generación y uso. Para quienes

nos develan el subdesarrollo persistente de nuestros países y las fisuras

sociales, ésta es una cuestión mayor.

La democratización de la ciencia, para que “favorezca a los más en lugar de

a los menos”, supone un compromiso ético que debe orientar tareas

múltiples en por lo menos cuatro dimensiones:

(i) filosófica, (ii) colectiva y relacional, (iii) republicana, y (iv) comunitaria.

(i) En la dimensión filosófica, hay que cultivar una razón modesta, la que se

pone en juego en las prácticas de la investigación y permite obtener

verdades significativas, pero frecuentemente provisionales y siempre

parciales.

Esta postura se ubica en las antípodas de la pretensión soberbia -que se

remonta a Platón- según la cual la ciencia puede conocerlo todo, lo que

implica que algunos científicos tienen la última palabra en los debates

sociales.

111

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

(ii) La dimensión colectiva y relacional parte de reconocer que el

conocimiento ha llegado a tener la enorme gravitación que conocemos a

través de un proceso de especialización, comparable a la división del trabajo

destacada por Adam Smith. Ese proceso se ha acelerado tanto que, en

realidad, el conocimiento no puede sino ser patrimonio de colectivos,

posibilidad que sólo puede devenir realidad a partir de la riqueza de la

comunicación y las relaciones de cooperación entre mucha gente.

(iii) La noción de “cosa pública” implica que la república existe en la medida

en que las grandes cuestiones que a todos afectan son objeto de debates y

decisiones de carácter público. Dado el peso de la ciencia y la tecnología en

lo que hace a la producción y a la destrucción, a los riesgos y a las

oportunidades, la agenda ciudadana debe incluir ciertas cuestiones

fundamentales para la orientación de la investigación, los problemas que

recibirán mayor atención, el tipo de soluciones que han de procurarse.

Ésta es la dimensión republicana de la democratización de la ciencia.

(iv) La notoriamente creciente vinculación de C&T, con desigualdad y con la

apropiación privada del conocimiento impone reivindicar la vocación

“comunal” de la investigación, que por cierto constituía el primer rasgo de la

ética científica en la clásica formulación de Merton. La dimensión

comunitaria de la democratización de la ciencia la ilustran ejemplos como los

siguientes, que consideramos clave en la lucha contra el subdesarrollo:

impulsar un Nuevo Desarrollo sustentado en la incorporación de

conocimientos y calificaciones de alto nivel a todas las actividades

productivas de bienes y servicios; vincular estrechamente a las políticas de

investigación e innovación con las políticas sociales; promover la

generalización de la enseñanza avanzada.

112

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

3.3. INDICADORES Y EVALUACIÓN DEL CONOCIMIENTO CIENTÍFICO

Y SU IMPACTO SOCIAL9

La investigación y el desarrollo tecnológico, así como la innovación,

constituyen categorías sumamente influyentes en el crecimiento científico,

económico y social de cualquier país.

En los diversos sistemas sociales y a nivel regional, los fondos destinados al

fomento de la investigación y la innovación se han incrementado

anualmente. Por un lado, este incremento, y por otro, la necesidad de

obtener resultados verdaderamente útiles y de impacto social, demandan un

replanteamiento de la dirección que debe asumir la evaluación de la

investigación y el desarrollo (I+D) y la innovación para apoyar la toma de

decisiones en materia de ciencia y tecnología, especialmente con respecto al

establecimiento de prioridades en la distribución de los recursos financieros.

Esta dirección de los procesos de evaluación se asume como consecuencia

lógica de la propia expansión y orientación de la ciencia y la tecnología hacia

el beneficio social. Dicha orientación tiene sus orígenes en el siglo XVII, con

las primeras ideas de Francis Bacon, al respecto, cuando proclamó la

revolución de la ciencia en función del bienestar de los seres humanos.

Siglos después, el informe de Vannevar Busch, en 1945, titulado Ciencia, la

frontera sin fin, considerado un documento fundacional de la moderna

política científica, planteaba la necesidad de que la ciencia cumpliera su

misión ante la sociedad, que satisfaciera las necesidades sociales del pueblo

norteamericano, en un contexto de guerra mundial.

Estas primeras ideas constituyen uno de los sustentos básicos de la política

científica y tecnológica actual. La evaluación debe orientarse, por tanto, al

9 MILANÉS, Guisado Yusnelkis, SOLÍS, Cabrera Francisco Manuel; NAVARRETE, Cortés

José. versión impresa ISSN 1024-9435. ACIMED v.21 n.2 Ciudad de La Habana abr.-jun. 2010. http://scielo.sld.cu/scielo.php?pid=S1024-94352010000200003&script=sci_arttext

113

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

desarrollo de nuevos indicadores y metodologías que permitan avanzar en el

conocimiento en la medida en que estas promesas se cumplan.

Precisamente evaluar ese cumplimiento y en qué medida es, en términos

muy generales, lo que podría denominarse como el análisis del "impacto

social de la ciencia y la tecnología".

Tradicionalmente, se ha evaluado el denominado impacto científico o del

conocimiento sobre la base de los resultados de la actividad científica y

tecnológica, y para esto se ha utilizado el análisis de los niveles de citación

que reciben los trabajos científicos. Este tipo de impacto se analiza desde y

en la comunidad científica, entre los mismos agentes generadores y

consumidores de conocimientos científicos. Se centra, por tanto, en el

impacto que ejerce la ciencia sobre la propia ciencia o en el conocimiento y

no comprende las dimensiones sociales referidas a la economía, salud,

medio ambiente, seguridad social, pobreza, empleo, etcétera.

Con respecto al impacto económico, se han revisado fundamentalmente los

efectos directos de la innovación en la productividad y la competitividad de

las empresas, y se han asociado con variables como ventas, costos,

productividad, empleo, etcétera. En este tipo de impacto los usuarios son las

empresas, y la perspectiva central es la constitución de un actor económico

o la presencia de un mercado. La relación de indicadores propuestos por

organismos internacionales, como la Organization for Economic Co-

operation and Development (OECD) y la Red de Indicadores de Ciencia y

Tecnología -Iberoamericana e Interamericana- (RICYT) en los manuales de

OSLO y Bogotá, respectivamente, evidencia un campo en proceso de

consolidación.

Sin embargo, la ausencia de indicadores concretos sobre una base

conceptual sólida y normalizada para medir cuál es el impacto y contribución

real de lo que se investiga e innova en la sociedad, a pesar de lo complejo

que puede resultar, porque se trata del uso, difusión y apropiación social del

114

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

conocimiento, demanda de los organismos internacionales el fomento de la

investigación en este terreno.

Nos proponemos, por tanto, tratar las principales nociones de impacto,

asociado esencialmente con el «campo social»; identificar los principales

enfoques metodológicos y las dimensiones de análisis para su evaluación y,

por último, reflexionar en torno al estado actual de los indicadores con este

propósito.

CONDICIONANTES Y ENTORNO FAVORECEDOR10

En los últimos años, el enfoque de las políticas en ciencia y tecnología ha

cambiado. Se observa una sustancial transformación en la forma de

entender estas políticas de innovación tecnológica surgidas a inicios de los

años 80. En una segunda fase de estas políticas, se impuso la preocupación

por la dimensión no tecnológica necesariamente, y se identificaron las

barreras del modelo lineal de la innovación*, todas ellas responsables de la

denominada "paradoja europea".

Inicialmente, la inclusión del componente social en el modelo lineal era muy

modesta. El crecimiento del conocimiento científico tenía solo como

resultado la generación de un desarrollo tecnológico y económico. Se trataba

de una investigación científica autorregulada. No fue hasta la década de los

años sesenta que se integraron los primeros estudios sociales de la ciencia y

la tecnología y aportaron los primeros indicios de que su desarrollo podía

afectar la sociedad como consecuencia del impacto ambiental y su uso

militar; se generalizó entonces la preocupación por estos estudios.

Paulatinamente, comenzó a observarse una preocupación por el impacto de

las políticas de ciencia e innovación en el bienestar y la calidad de vida de

10

MILANÉS, Guisado Yusnelkis, SOLÍS, Cabrera Francisco Manuel; NAVARRETE, Cortés José. versión impresa ISSN 1024-9435. ACIMED v.21 n.2 Ciudad de La Habana abr.-jun. 2010. http://scielo.sld.cu/scielo.php?pid=S1024-94352010000200003&script=sci_arttext

115

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

los ciudadanos. Esto se correspondería con una tercera fase en las políticas

de innovación, auspiciada por organizaciones como la Comisión Europea,

que se caracteriza por estar dirigida prioritariamente hacia objetivos sociales.

Incluso, desde un enfoque institucional, la responsabilidad social gana

relevancia en un entorno donde prima la competitividad, la innovación y,

sobre la base de la generación, la producción, la transferencia y la

apropiación social del conocimiento. El propio modelo de los sistemas de

innovación nacionales, así como otros relacionados con la producción de

conocimientos, tienen una mayor orientación a las demandas e interrelación

y comunicación entre actores sociales, y conciben a la ciencia y la

innovación en un contexto social relevante.

Desde una perspectiva política, la necesidad de vinculación de la ciencia y la

tecnología con la sociedad es un tema recurrente en las declaraciones

políticas y gubernamentales. Se evidencia indiscutiblemente un mayor

protagonismo de los programas de ciencia y sociedad, en las acciones de

promoción y gestión de la investigación y la innovación. Incluso, el cambio

tecnológico ha involucrado los criterios sociales. Estas contribuciones

permiten establecer un nuevo concepto de cambio tecnológico

fundamentado en la co-evolución de la tecnología y la sociedad, en el que ni

la tecnología puede entenderse como determinante del cambio social, ni es

posible "como guía de acción política" apostar por modelos simplistas de

orientación del cambio tecnológico hacia fines sociales. El objetivo es más

bien diseñar estrategias para articular la inteligencia colectiva que incluyan la

evaluación de impacto social de forma que los sistemas de innovación, cada

vez más complejos, puedan responder a las demandas socioeconómicas.

Otra condicionante favorecedora es el propio hecho de que la sociedad

misma tenga un interés en buscar nuevos modelos capaces de integrar

cultura científica, gestión tecnológica y de la innovación y participación

social. Según la Comisión Europea (2002), el apoyo político a la creación de

una cultura científica es una prioridad que debe combinarse con la

116

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

articulación de una política tecnológica más próxima a los ciudadanos y un

incremento de la responsabilidad social y ética en la producción de nuevos

conocimientos.

Por otro lado, habría que mencionar el "desarrollo sostenible" como un

nuevo concepto, que parte de una visión integradora de diversos factores

sociales en los cuales se apoya la ciencia. Moñux (2005), señala que su

influencia se sustenta sobre la base de que este concepto es capaz de

aglutinar un consenso en torno a los límites del crecimiento y de integrar, de

forma efectiva, las dimensiones social, económica y ambiental. El desarrollo

sostenible está llamado a presidir la evaluación social de la I+D y la

innovación.

Las condicionantes anteriores permiten hablar de una necesidad emergente

de estudios de evaluación de la ciencia y la tecnología. Evaluar en qué

medida la ciencia y la tecnología responden a los objetivos sociales y a su

misión principal ante la sociedad, implica necesariamente estudiar los

posibles impactos a distintos niveles de análisis (micro, meso y macro).

Los principales organismos internacionales en el desarrollo de indicadores

de ciencia y tecnología enfocan y priorizan el desarrollo de posibles

medidas, en el contexto de estrategias o enfoques metodológicos, con el

objetivo de intentar acercarse a la evaluación de los impactos sociales. La

RICYT organiza desde 1997, un taller de desarrollo de indicadores con este

propósito, además de financiar proyectos de investigación con el objetivo de

obtener acercamientos, lineamientos metodológicos y dimensiones de

análisis para la obtención de posibles indicadores.

La Comisión Europea, por su parte, ha dinamizado los objetivos socio-

económicos como prioridad esencial de la investigación en el continente. Y

así, ha incluido la evaluación del impacto socioeconómico como uno de los

aspectos prioritarios de sus programas macro (PM). En una de sus

publicaciones plantea:

117

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

"El impacto socioeconómico no debe considerarse únicamente como uno

más junto a otros componentes en el marco de una evaluación multi-criterio

(…), sino que es el criterio que debe emplearse para valorar el éxito o

fracaso último de las actividades de investigación...".

Concretamente, en el Séptimo Programa Macro, la Comisión Europea

incentiva el desarrollo de proyectos de investigación que elaboren e

implementen metodologías a partir de una serie de indicadores para la

evaluación del impacto de la investigación en la sociedad.

No obstante, aún el camino está lleno de incertidumbres y desafíos,

fundamentalmente por los problemas conceptuales que implica la medición

de impactos y, de manera especial, de impactos sociales.

SOBRE LA NOCIÓN DE IMPACTO

La categoría de impacto se ha distinguido como una unidad importante

dentro de los procesos evaluativos, porque su noción se asocia con los

efectos que pueden producir la ciencia y la tecnología en determinado

sistema social. El término, según Orozco Castro, Olaya, Chavarro,

Bohóquez, Suárez y Villaveces (2005), hace alusión a una acción

premeditada con efectos deseados que pueden lograrse o no.

Los efectos significan o determinan la existencia de un cambio, de una

transformación cualitativa, estructural en un grupo social o en la sociedad en

general. Y estos cambios pueden ser, tanto positivos, como negativos; por

eso, los impactos adquieren este mismo carácter.

Muchas veces son difíciles de percibir, e incluso a veces no se obtiene

ninguno; por ejemplo, en los años 60, un estudio demostró que de 70. 000

proyectos americanos en educación, solo 70 tuvieron una influencia

significativa en las políticas y prácticas educacionales. Los cambios más

118

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

fácilmente visibles son los que se asocian con la economía; sin embargo, los

más difíciles e importantes son aquellos que afectan las condiciones de vida

de las personas.

La noción de impacto se relaciona estrechamente con los conceptos de

resultados y logros. El término resultado cubre el espectro de salidas, logros

e impactos. El impacto se mide constatando los resultados y colocándolos

en correlación con la intención inicial. No obstante es válido aclarar que la

evaluación por impacto se asocia, no con los resultados propiamente dichos,

como pudiera considerarse, sino con los beneficios o efectos de dichos

resultados. Como afirman Quevedo, Chía y Rodríguez (2002), el impacto es

un beneficio logrado, medible, que aportó a la economía, favoreció a alguien,

mejoró algo.

Para Molas Gallart, Tang y Morrow S (2000), el impacto puede ser, según su

naturaleza, directo o indirecto. El indirecto no influye directamente, pero tiene

influencias a corto o largo plazos. A este tipo de impacto, Estebánez (2002),

le denomina impacto potencial. Ambos autores, aún con formas distintas de

denominarlos, coinciden en que las contribuciones indirectas afectan de

manera significativa las decisiones y políticas.

Otra cualidad importante relacionada con el impacto y con la propia

naturaleza indirecta del impacto de la investigación es el factor tiempo. En

muchas ocasiones esto constituye un problema para la identificación de los

posibles impactos, porque algunos pueden tomar un largo tiempo en

producirse, y pueden ocurrir incluso luego de haberse terminado el

desarrollo del proyecto de investigación. Sin dudas, la medición puede verse

afectada y habría que considerar, por tanto, interrogantes como: ¿cuál es el

momento correcto para medir los impactos?; ¿qué tiempo debe esperarse

para efectuar la medición? o ¿cuánto tiempo puede durar la medición?

El impacto de la ciencia y la tecnología en sí mismo encierra desafíos y

complejidades importantes. La multidimensionalidad y la multicausalidad

119

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

constituyen variables a considerar en una posible medición de impactos. Con

respecto a la multidimensionalidad del impacto, el mismo Kostoff (1995),

plantea:

"El impacto de programas de investigación involucra la identificación de

una variedad de expresiones de conocimiento que se producen, así como

los cambios que estas expresiones originan en una multitud de diferentes

blancos potenciales de investigación -otras áreas de investigación,

tecnología, sistemas, operaciones, otras misiones organizacionales,

educación, estructuras sociales, etcétera. Mientras algunos impactos pueden

ser tangibles, muchos otros pueden ser intangibles y difíciles de identificar,

mucho menos cuantificar…".

Por otro lado, la multicausalidad conlleva una dificultad importante. Esto

significa que cada uno de los resultados o posibles impactos puede

depender de muchas causas, según Albornoz M, Estébanez ME, Alfaraz C

(2005), algunas explícitas y otras implícitas, unas bien identificadas y otras

desconocidas. El análisis de posibles causas es significativo en una

evaluación, porque implica un examen de la unidad o fracción de análisis, los

objetivos planteados, recursos invertidos, actividades realizadas por un lado

y, por el otro, variables externas relacionadas con dicha unidad social de

análisis, algo que resulta en muchas ocasiones una tarea bastante difícil.

A pesar de esta multiplicidad de dimensiones, la ciencia y la tecnología no

tienen que responder necesariamente a todas las necesidades sociales.

Implican, por tanto, una comprensión de los factores importantes y la

desagregación de las posibles dimensiones del "campo social" a partir de las

cuales sea posible analizar los efectos de la ciencia y la tecnología en

determinado marco de estudio.

120

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

IMPACTO SOCIAL DE LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA

Intentar comprender con mayor profundidad en qué medida el conocimiento

científico y tecnológico afecta determinadas áreas a las cuales se le

denominan "social" —según Albornoz M, Estébanez ME, y Alfaraz C (2005),

aquellas entendidas en las llamadas políticas sociales o de "bienestar

social"— abre el camino para intentar medir estos efectos y lo convierte en

un mecanismo o herramienta pertinente y favorable para las políticas de

ciencia, tecnología e innovación.

Sobre la base de lo planteado por Kostoff (1998), sobre este tópico, habría

que considerar interrogantes que los políticos y gestores de la ciencia y la

innovación se hacen o deberían hacerse:

¿Cuál es la utilidad real (social, económica, cultural, medio ambiental) de

la ciencia y la innovación?

¿La ciencia y la tecnología están atendiendo las necesidades más

urgentes de la sociedad?

¿Es viable determinar la incidencia de la producción y difusión de nuevos

conocimientos en los procesos sociales?

Pero ¿cuál es la connotación o alcance del llamado "campo social"?. La

ciencia y la tecnología impactan en dimensiones sociales muy variadas: en

la propia ciencia o en el conocimiento, la economía, la política, la comunidad

(en términos de sociedad civil), los diversos dominios institucionales (salud,

educación, bienestar y seguridad social, ley); la cultura y los valores, medio

ambiente, generación de empleo etcétera. El alcance de este impacto

estaría en función de la definición de "campo social" empleada y la

delimitación y desagregación de sus respectivas dimensiones de análisis.

Las dimensiones, destinos, ámbitos o formas de impactos posibles como

definen algunos autores, deben delimitarse a partir de los objetivos y el

alcance de la investigación que se realice.

121

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

El impacto social de la ciencia y la tecnología, como todo tipo de impacto,

implica identificar cambios, transformaciones. Según Quevedo V, Chía J,

Rodríguez A (2002): "… el impacto de la ciencia y la innovación tecnológica

pudiera concebirse como el cambio o conjunto de cambios duraderos que se

producen en la sociedad, la economía, la ciencia, la tecnología y el medio

ambiente, que mejoran sus indicadores, como resultado de la ejecución de

acciones de I+D+I que introducen valor agregado a los productos, servicios,

procesos y tecnologías".

Para Albornoz (1999), en la conceptualización del impacto social se incluyen:

el impacto de los conocimientos científicos y tecnológicos en la sociedad, la

incidencia de la ciencia y la tecnología en el plano cultural; y la existencia de

"redes" o "cadenas" intermediarias entre los centros productores de

conocimientos y los actores sociales demandantes. Además, el impacto de

las políticas de ciencia y tecnología.

Lo cierto es que en general es un campo aún poco definido con respecto a

su alcance y sumamente complejo, porque se trata de procesos

relacionados con el conocimiento —un recurso intangible y difícil de medir—

en contextos sociales. Su evaluación es necesario tratarla a partir de los

procesos concretos relacionados con el uso, difusión, vinculación y

transferencia, circulación y apropiación social del conocimiento por parte de

los actores que reciben el beneficio: una empresa, un educando, un médico,

un paciente, una entidad del estado, la población, etcétera.

Sobre esta base, Estebánez (2002), enfatiza en la complejidad del impacto

social al considerar que la multiplicidad de factores que intervienen y el

carácter complejo de las vinculaciones entre fuentes de conocimiento y el

cambio social subyacen en la dificultad de descifrar la dinámica de los

impactos. La medición del impacto social resulta mucho más multifacética

por las muchas aristas de la dimensión social.

122

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

En este sentido, la transferencia de conocimientos y su medición

desempeñan un papel clave. Las nuevas funciones de la universidad dan

muestras de esto. Trasmitir el conocimiento generado a los sectores

productivos y sociales en la generación de innovaciones se ha convertido en

su tercera misión, en total interacción con el resto de los actores de los

sistemas de ciencia, tecnología e innovación.

Itzcovitz V, Fernández P, Albornoz M (1998), sobre la importancia de la

transmisión para la obtención del impacto comentan: "... Para que un

conocimiento producido como resultado de la actividad de I+D pueda llegar a

sus potenciales usuarios, no sólo es necesario que se perciba su necesidad,

sino que también es imprescindible que sea efectiva su transmisión".

Esta mirada sobre la base de la dimensión social del conocimiento —aún

una mirada subjetiva e intangible— demanda la necesidad de intentar buscar

elementos operativos con el fin de poder desarrollar metodologías

adecuadas e instrumentos de medición. Esto implica delimitar los aspectos

clave en un posible análisis de impacto social. En este sentido y

apoyándonos en los talleres realizados por la RICYT y otros autores,

podemos delimitar, inicialmente, los siguientes:

Nivel de análisis en el impacto: Es necesario distinguir tres niveles de

análisis en el impacto. El nivel micro se centra en los grupos de investigación

donde los proyectos constituyen unidades de análisis y posibles impactos

importantes. Es decir, los logros se miden intentando "contactar" lo buscado

como posibles impactos de esos proyectos y lo obtenido. Los mayores

efectos sociales se identifican a partir de la acción de varios proyectos de un

grupo. El nivel meso o intermedio se refiere a los programas, o instituciones,

áreas temáticas y este nivel, en muchas ocasiones, se establece a partir de

los resultados del nivel micro. Sin embargo, el nivel macro se considera el

nivel nacional o regional, es decir los efectos que el avance de la ciencia y la

tecnología surte sobre la estructura social de grandes ciclos.

123

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Ámbitos de impactos: Constituyen los sectores claves hacia los cuales

debe dirigirse el esfuerzo fundamental de los resultados de la ciencia y la

innovación tecnológica. Pueden denominarse además formas o destinos de

impacto. En principio es posible distinguir a un nivel general, las esferas de

lo económico y lo social. Indiscutiblemente esta primera clasificación macro

permite identificar a un nivel específico, otras instancias especialmente

relevantes para el análisis. Lo económico se ha tratado en la literatura

sobremanera a partir de las dimensiones propuestas en los manuales de la

OECD y Bogotá para la innovación tecnológica; sin embargo, para el alcance

de lo social, habría que abordar algunas categorías del desarrollo en esta

esfera referidas en otros trabajos, relacionados con la pobreza, salud,

educación, asentamientos humanos, diversos aspectos demográficos, entre

otros, por lo que la relación con los organismos gubernamentales y el

desarrollo social, puede constituir un instrumento de ayuda. Se considera

clave incorporar el medio ambiente, la cultura y la generación de empleos.

Algunos autores consideran también como destinos o formas de impacto el

que se produce sobre la misma ciencia o en el conocimiento. En este

sentido, el desarrollo de nuevas disciplinas o comunidades de práctica, la

formación y asesoría científica, el desarrollo de nuevos productos y servicios

generados a partir del uso y apropiación del conocimiento científico

tecnológico, desarrollo de nuevas metodologías y conformación de políticas,

constituyen posibles formas de impacto a medir. En el análisis de las

posibles consecuencias sociales de la producción científica de los

investigadores a un determinado nivel de análisis, resulta significativo

intentar traducir estos resultados en ofertas nuevas, transferencias al

sistema productivo, capacidades de desarrollo científico tecnológico, así

como otros posibles retornos de los proyectos de investigación que se

traduzcan en un beneficio social aún a nivel institucional.

Fuentes de información o canales sociales de difusión: La identificación de

las fuentes para el análisis del impacto social además de incluir los clásicos

resultados de los investigadores como publicaciones, patentes, informes

técnicos, memorias de proyectos otros, habría que considerar el uso de otras

124

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

fuentes indirectas y menos convencionales. Debe tenerse en cuenta como

elemento significativo, las diferentes salidas y canales sociales de la

investigación y la innovación, desde las redes sociales, publicaciones,

artículos en prensa, guías para las prácticas clínicas (en el caso de la

medicina), la propia movilidad de los investigadores, mecanismos de

transferencia, los trabajos de asesoría y consultoría, etcétera. Habría que

considerar, en un estudio orientado a establecer el impacto real en la

población, otras fuentes generadas por organismos sociales que se orientan

hacia la defensa de las necesidades sociales. Un informe del Programa de

las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Banco Interamericano

de Desarrollo (BID), referenciado además por la propuesta de la RICYT,40

las clasifican en cuatro estratos fundamentales: asociaciones de afinidad,

organizaciones de base, funciones empresarias y organizaciones de apoyo.

Estas instituciones generan una serie de informaciones, proyectos e

informes sobre áreas atendidas, grados de actividad por áreas, entre otros,

de potencial utilidad en un estudio de impacto social de la ciencia y la

tecnología. El reto para el desarrollo de posibles metodologías y la

generación de indicadores implicaría además de intentar identificar una

cobertura de fuentes y canales sociales representativas de la difusión de la

investigación para el dominio de análisis, la operacionalización para poder

obtener variables de forma lo más estructuradas posible.

Procesos y actores productores de conocimientos: Identificar los

principales procesos y actores que intervienen en la transmisión y difusión

del conocimiento científico y tecnológico permite potenciar y orientar ciertas

actividades de los investigadores hacia las problemáticas sociales. De

manera general que pudieran identificarse, en un intento por acercarse a una

tipología general: las acciones de diseminación del conocimiento desde el

propio sistema científico y tecnológico, las actividades de vinculación y

transferencia desde los sectores científicos hasta los sectores sociales, la

circulación de conocimientos por canales socializadores (redes sociales,

medios masivos de comunicación, sistemas educativos y de asesorías,

125

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

movilidades sociales de los científicos, …) y, por otro lado, los actores y

procesos en el momento de apropiación y utilización social del conocimiento.

Estos actores o usuarios del conocimiento, que lo utilizan para la realización

de determinadas actividades, pueden clasificarse de manera general en

"intermediarios" y "finales". Los primeros emplean el conocimiento para la

generación de nuevos bienes y servicios para el mercado con determinado

fin mientras que los segundos se orientan en lo fundamental a la misma

población que se ve involucrada directamente como beneficiaria del

conocimiento científico (por ejemplo, cambio de hábitos de consumo y

mejoría de su calidad de vida). En los últimos años, se han producido

esfuerzos crecientes en la conceptuación y análisis del impacto social sobre

la base de modelos simplificados de intermediación entre la producción de

conocimiento y su utilización social, aún cuando no se aprecia un consenso

y normativa con respecto a una metodología y un respectivo sistema de

indicadores lo suficientemente probados y consolidados.

3.4. TECNOLOGÍA Y COMPETITIVIDAD11

Es un hecho que hoy en día los sistemas económicos han venido adoptando

la característica de "intensivos en conocimiento" mucho más que en el

pasado. Esto ha hecho que la producción y uso de conocimiento se

encuentren en el núcleo de las actividades intensivas en valor agregado, y

que la innovación se encuentre en la base de las estrategias de las firmas y

las naciones para el crecimiento y la competitividad. En este contexto, el

conocimiento es un insumo, que se combina con capital, trabajo y otros

insumos para producir bienes y servicios siendo así, una fuente de

productividad total de los factores. Pero el conocimiento es también un

producto del conocimiento existente y de inversiones en actividad innovativa.

Una tipología funcional para el análisis del cambio técnico es la provista por

la trilogía schumpeteriana: invención (la generación de nuevas ideas),

11

http://www.banrepcultural.org/blaavirtual/ciencias/sena/cursos-de-capacitacion/politicanal/politica3.htm. Diciembre 5 de 2011.

126

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

innovación (el desarrollo de estas ideas a través del uso o explotación en el

mercado de una tecnología) y la difusión (la dispersión de la nueva

tecnología a lo largo de su mercado potencial). Valga mencionar que la

innovación no se encuentra asociada únicamente con grandes cambios

tecnológicos y por tanto no puede ser reducida a los avances más

espectaculares, tales como naves espaciales, desarrollo de nuevos

materiales o desarrollo de multimedia de última generación. Al contrario, en

la actualidad se ha convertido en una actividad en la cual todo negocio ha de

estar involucrado, explícita o implícitamente.

Según diversos análisis adelantados en firmas innovadoras, la innovación

mejora el desempeño de las firmas dado que el resultado de las actividades

de innovación hace a una firma más competitiva, a la vez que el proceso de

innovación transforma las capacidades internas de una firma. La gran

velocidad del cambio tecnológico y la rápida acumulación de nuevos

conocimientos significan que las firmas que no sean capaces de incorporar

nuevos conocimientos tienen un rezago fundamental en términos de

productividad y competitividad. Investigaciones académicas, estudios

directos y evidencia indirecta de estudios de productividad han coincidido en

el reconocimiento de que si bien la gran mayoría de firmas no hacen

innovaciones radicales, ciertamente todas pueden y deben hacer por lo

menos, innovaciones incrementales o esforzarse por adoptar nuevos

productos y procesos ideados por otros en ausencia de invención propia; ello

obviamente sin perder de vista que en el largo plazo innovación e invención

son complementos.

Dada la complejidad y el alcance de la innovación como proceso

desarrollado al interior de las organizaciones y con el concurso de las más

diversas funciones, en el campo gerencial se ha abierto paso el concepto de

gestión de la innovación, cuya aplicación, una vez es reconocido el papel de

la innovación en la administración de la empresa es hoy una necesidad; esto

en la medida en que permite al negocio internalizar el proceso de innovación

127

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

y la forma en la cual nuevos productos, servicios y procesos de producción

pueden ser desarrollados y difundidos.

Es claro que la innovación es una actividad compleja y diversificada, con

muchos componentes que interactúan entre sí, a nivel nacional y

organizacional. La innovación, entendida como la aplicación exitosa de

conocimientos o técnicas de nuevas formas o para nuevos propósitos, tiene

que ver con la organización de un negocio para explotar nuevas

oportunidades rentablemente. La innovación es clave para todos los

negocios, bien sea que estos usen o no alta tecnología.

La innovación requiere una actitud mental que siempre busca mejorar,

responder a las necesidades del cliente, que apunta a ir por delante del

competidor y permanecer allí; en este sentido más que una opción, la

innovación es hoy una necesidad imperiosa para garantizar la supervivencia

en mercados globales turbulentos y con dinámicas cambiantes.

En este orden de ideas, habría también que resaltar el modelo de Leontieff

[1966], quien trató de explicar los cambios en las relaciones de producción

intersectorial con los llamados coeficientes técnicos, resultantes de la

matriz inversa de las tablas insumo-producto de los países.

En su trabajo, Romer [Op. cit] incluye una completa reflexión sobre este

aspecto. En términos de política pública, esta característica implica por

parte de los gobiernos la necesidad de acometer políticas de ciencia y

tecnología, concebidas como respuesta a la disminución en los incentivos

y otras fallas de mercado como el riesgo y los costos de transacción que

afectan la innovación.

En este sentido, el trabajo de la vertiente económica "neo-schumpeteriana"

o "evolucionaria" se basa en los postulados fundamentales de Schumpeter

(y Marx) según los cuales el capitalismo es un sistema económico

caracterizado sobre todo por la conmoción causada con las innovaciones

técnicas y organizacionales.

128

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Así, para Schumpeter, la invención no implica innovación, siendo la

innovación la que confiere al capitalismo sus elementos dinámicos.

Por ejemplo, tres inventos principales en la industria de los

semiconductores (el transistor [1947], el circuito integrado [1959] y el

microprocesador [1971]) dieron lugar a un gran número de nuevas

generaciones sucesivas de tecnología en áreas como el procesamiento de

datos, unidades de memoria, etc.

Citado por Neely y Hii [1998:29]

"Para planear, desarrollar e implementar capacidades tecnológicas y

configurar y conseguir los objetivos estratégicos y operacionales de una

organización".Ver TFMT, [1987].

Baumol [1990], provee ejemplos descriptivos de economías en las que se

hicieron grandes invenciones, a lo que no siguió un crecimiento sostenido.

Aunque hubo una producción directa de conocimiento en esas economías,

hubo muy poco esfuerzo dedicado a imitar e implementar estas ideas ya

que a menudo, los sistemas sociales de esas economías desestimulaban

la implementación de éstas. Quizás el caso más persuasivo es el caso de

la -- antigua China, que a pesar de ser la cuna de muchos inventos (como

la pólvora o el papel), las remuneraciones más sustanciales en riqueza y

prestigio eran conferidas a la burocracia de letrados (en materias como el

confucionismo caligrafía, etc.), mientras que las empresas de negocios

eran vistas con cierta desaprobación social.

En la metodología seguida por el Foro Económico Mundial en la última

edición del Reporte Global de Competitividad para la obtención del índice

de tecnología de los 59 países estudiados, un país está en mejor posición

en la medida en que "la economía se distinga por ser innovadora en sí

misma o por la activa atracción de Transferencia de Tecnología a su

interior". Países como Singapur, Irlanda. Luxemburgo, México y Brasil son

ejemplos de economías que si bien no se destacan por un desarrollo de

capacidades inventivas propias de clase mundial, si han logrado atraer

para si con éxito flujos considerables de IT, lo que les permite estar en

primeras posiciones en el ranking tecnológico.

129

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Por ejemplo, Honda exportaba inicialmente sus vehículos a los Estados

Unidos. Luego transfirió plantas de manufactura, y finalmente exportó

automóviles hechos en los Estados Unidos para ser vendidos en Japón.

Así por ejemplo, en diversos procesos de manufactura, algunas partes

subensambladas son elaboradas en el país origen para ser ensambladas

en productos finales en el país anfitrión. Esta modalidad generalmente

incluye el suministro de personal para contribuir con el proceso de IT.

Un ejemplo es el caso de Japón, Corea del Sur y Taiwán en las industrias

electrónicas, de fabricación de vehículos y acero, por ejemplo.

El término ingeniería reversa, se refiere a las actividades emprendidas

para determinar cómo funciona un producto, o para aprender las ideas y

absorber la tecnología empleada originalmente en el desarrollo de un

producto. La ingeniería reversa es un enfoque sistemático para el análisis

del diseño de artefactos o sistemas existentes y puede usarse para el

estudio del diseño de un proceso o como el paso inicial para su rediseño.

Los factores considerados por este autor incluyen: esperanza de vida,

nutrición, disposición a asumir riesgos, entorno geográfico, desempeño

pasado, costos laborales, ciencia y tecnología, religión, valores sociales,

instituciones y derechos de propiedad, resistencia a la innovación, política

y estado, guerra, apertura a nueva información, factores demográficos.

Para una revisión de las condiciones que explican la eficiencia de los SNI

en los casos de países como Alemania, Estados Unidos, Japón y Corea,

ver Freeman [1995] y Nelson y Wright [1992].

Citado por Neely y Hi [1998; 19]

Ya desde el periodo entre la I y II Guerra Mundial , esa coordinación

estaba bien avanzada a un alto grado de refinamiento, en cuanto los

currículos de las instituciones educativas llegaron a estar estrechamente

adaptados a los requerimientos de las "posiciones" que los graduados

asumirían y viceversa. Al respecto, Nelson y Wright [1992], citan como

ejemplo, al MIT, que desde 1919, lanzó su programa cooperativo en

ingeniería eléctrica, un programa que dividía el tiempo de los estudiantes

entre cursos en el Instituto y tiempo en General Electric, quien contrataba

130

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

la mitad de los estudiantes luego de su graduación. A este programa se

unieron AT&T, Bell [abs, Western Electric y otras firmas.

Citado por Blackman [1999].

3.5. LA EDUCACIÓN ANTE EL DESARROLLO DE LAS TIC12

Si las nuevas tecnologías crean nuevos lenguajes y formas de

representación, y permiten crear nuevos escenarios de aprendizaje, las

instituciones educativas no pueden permanecer al margen, han de conocer y

utilizar estos nuevos lenguajes y formas de comunicación.

Ahora bien, hay que ser conscientes de que la utilización de lenguajes y

sistemas de representación diferentes a la lengua oral y escrita requiere una

infraestructura costosa (aparatos audiovisuales, informáticos...) que no

están al alcance de muchas escuelas y un saber que, en algunos casos, no

tiene el profesorado. Por otra parte, las condiciones de los alumnos para

tener acceso a estas tecnologías son muy diferentes, como desigual es

también la disposición psicológica y cultural para utilizarlas, comprenderlas y

darles sentido.

Asumiendo esta situación, resulta inexcusable conseguir que los centros se

vayan dotando de recursos, las jóvenes promociones de maestros tengan

una mayor formación en el uso de los nuevos medios y las condiciones de

los alumnos sean compensadas a favor de la igualdad de oportunidades.

Al hablar de la integración de las nuevas tecnologías en la educación es

necesario hacer referencia a la relación que ha de establecerse entre el uso

de nuevos medios y la innovación educativa. Algunos trabajos han tratado

de identificar las fases en el uso de las TIC. La diferenciación de las

sucesivas etapas por las que pasa el profesor en la integración de las TIC

puede resultar de utilidad tanto para hacer diagnósticos de las situaciones en

12

GARCÍA, Valcárcel Ana. EDUCACIÓN Y TECNOLOGÍA. Universidad de Salamanca. Diciembre 2009. http://web.usal.es/~anagv/arti1.htm.

131

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

las que nos encontramos como para diseñar estrategias formativas. A este

respecto hay una propuesta muy interesante, elaborada por el Departamento

de Educación de Victoria, Australia (1998), que presenta una matriz de

desarrollo de competencias para el uso de las tecnologías en el aprendizaje

(Skill Development Matrix) identificando seis áreas: Uso y manejo de

tecnología, uso de aplicaciones básicas, uso de software de presentaciones

y publicaciones, uso de multimedia, uso de tecnologías de comunicación y

uso de tecnologías de aprendizaje en las principales áreas de conocimiento.

Para cada una de estas áreas se establecen los objetivos y estrategias para

tres etapas de desarrollo:

La primera etapa se describe como la exploración de las nuevas

posibilidades que ofrecen las tecnologías para el aprendizaje,

desarrollo de nuevas habilidades y la comprensión del papel que

pueden jugar las TIC en el aula.

La segunda etapa se dirige a perfeccionar las habilidades

personales, la incorporación de las TIC en la enseñanza y el

desarrollo de prácticas de clase que integran las tecnologías del

aprendizaje.

La tercera etapa supone el desarrollo de habilidades avanzadas,

exploración de las posibilidades innovadoras para la clase del uso de

la tecnología y la posibilidad de compartir el conocimiento y las

habilidades con otros.

Las experiencias llevadas a cabo nos indican que los proyectos y

experiencias de innovación apoyadas en el uso de tecnologías distintas de

las impresas chocan con los hábitos y cultura tradicional del sistema escolar.

La incorporación de los materiales digitales presumiblemente tendrá que

superar múltiples resistencias y dificultades. Pero hay que conseguir cuanto

antes que en la educación escolar los ordenadores sean tan normales e

“invisibles” (Gros, 2000), como la pizarra o los libros, para que el uso de las

nuevas tecnologías no sea un fenómeno excepcional, sino una actividad

cotidiana en la vida académica de los centros educativos. En buena lógica,

132

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

un método de enseñanza apoyado en el uso de una variedad de materiales

(libros, cuadernos, discos multimedia, Internet,...) requiere el desarrollo de

actividades de aprendizaje notoriamente distintas, de un método organizado

en torno a los materiales impresos y del libro de texto en particular.

Tal como pone de manifiesto el informe de la OCDE (2003, p.79), existe una

fuerte tensión entre los currículos tradicionales, basados en contenidos bien

definidos que el alumnado debe aprender y saber reproducir y el enfoque

abierto que promueven las TIC. Los tipos y modos de estructuración del

pensamiento de los sujetos que actúan con materiales electrónicos tendrán

que ser necesariamente distintos de los que poseen los lectores habituales

de documentos escritos. Es indudable que el empleo en la escuela de estos

nuevos recursos implicará una mayor integración de la institución escolar en

el contexto de la sociedad de la información o era digital. Se trata de

escolarizar las tecnologías, llevarlas a las aulas y darles sentido y utilidad

pedagógica.

Ahora bien, el uso de hipertextos, multimedias, de discos o de webs no

significa automáticamente un aumento de calidad pedagógica de la

enseñanza, sólo significa incremento de la multiplicidad de medios y de

oferta de nuevas formas de organización y representación de la información.

La calidad y potencialidad educativa no radica en el maquillaje sino en su

interior (en el grado de apertura y configurabilidad del programa, en el estilo

de interacción, en el modelo de enseñanza y aprendizaje subyacente) así,

como en su adecuación curricular a los objetivos, contenidos y metodología

de la situación de enseñanza en los que se utilicen.

La simple presencia de tecnologías novedosas en los centros educativos no

garantiza la innovación en su significado real. La innovación debe ser

entendida como el cambio producido en las concepciones de la enseñanza y

en los proyectos educativos. La posibilidad de hacer lo de antes aunque

mediante otros procedimientos (más rápidos, más accesibles, más simples)

no representa una innovación. De ahí que se hayan de entender los

133

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

proyectos educativos, en los que se expresan las concepciones pedagógicas

en las que los profesores basan su quehacer docente, como el contexto de

integración de las nuevas tecnologías, es decir, la integración curricular de

las TIC habrá de plantearse como algo vinculado y condicionado por una

opción propiamente educativa y no al revés.

134

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

RESUMEN

La manifestación del cambio tecnológico en progreso técnico se evidencia

de varias formas, que se pueden agrupar según los tres grandes grupos

siguientes:

Que se produzcan más bienes utilizando las mismas cantidades de

factores. O que se pueda obtener el mismo bien con cantidades

menores de un o más factores.

Que los productos existentes mejoren de calidad.

Que se produzcan bienes completamente nuevos.

Cuando un invento nos dirige a "una nueva técnica para producir un

determinado bien que ya existe", definimos la invención de proceso,

mientras que un invento que "cambia la forma -entendida en el sentido

amplio, no sólo de apariencia- de los bienes ya existentes o genera bienes

completamente nuevos" definimos la invención de producto. Una vez un

invento "se aplica al conjunto de las actividades económicas", se define la

innovación, que puede ser también de proceso o de producto.

La ciencia como la democracia constituyen procedimientos que la sociedad

cultiva para validar formas del accionar colectivo. La investigación científica

respalda, por ejemplo, acciones bélicas o sanitarias; las decisiones

democráticas también. Pero los respectivos criterios de validación son, en

principio, diametralmente opuestos. Suele repetirse que en la ciencia no se

vota, es decir, “en la democracia no se demuestra ni verifica”. La ciencia

tiene como ideal normativo el alcanzar la verdad mediante procedimientos

que combinan la experiencia y la razón. La democracia -como lo dice una de

las formulaciones más antiguas y elocuentes, la oración fúnebre que en el

siglo V AC Tucídides atribuyó a Pericles- apunta a garantizar a todos la

justicia mediante leyes forjadas de acuerdo a procedimientos que

“favorecen a los más en lugar de a los menos”.

135

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

Tradicionalmente, se ha evaluado el denominado impacto científico o del

conocimiento sobre la base de los resultados de la actividad científica y

tecnológica, y para esto se ha utilizado el análisis de los niveles de citación

que reciben los trabajos científicos. Este tipo de impacto se analiza desde y

en la comunidad científica, entre los mismos agentes generadores y

consumidores de conocimientos científicos. Se centra, por tanto, en el

impacto que ejerce la ciencia sobre la propia ciencia o en el conocimiento y

no comprende las dimensiones sociales referidas a la economía, salud,

medio ambiente, seguridad social, pobreza, empleo, etcétera.

El impacto social de la ciencia y la tecnología, como todo tipo de impacto,

implica identificar cambios, transformaciones. Según Quevedo V, Chía J,

Rodríguez A (2002): "… el impacto de la ciencia y la innovación tecnológica

pudiera concebirse como el cambio o conjunto de cambios duraderos que se

producen en la sociedad, la economía, la ciencia, la tecnología y el medio

ambiente, que mejoran sus indicadores, como resultado de la ejecución de

acciones de Investigación, desarrollo e innovación, que introducen valor

agregado a los productos, servicios, procesos y tecnologías".

Finalmente y en materia educativa, La simple presencia de tecnologías

novedosas en los centros educativos no garantiza la innovación en su

significado real. La innovación debe ser entendida como el cambio producido

en las concepciones de la enseñanza y en los proyectos educativos. La

posibilidad de hacer lo de antes aunque mediante otros procedimientos (más

rápidos, más accesibles, más simples) no representa una innovación. De ahí

que se hayan de entender los proyectos educativos, en los que se expresan

las concepciones pedagógicas en las que los profesores basan su quehacer

docente, como el contexto de integración de las nuevas tecnologías, es

decir, la integración curricular de las TIC habrá de plantearse como algo

vinculado y condicionado por una opción propiamente educativa y no al

revés.

136

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

AUTOEVALUACIÓN DE LA UNIDAD

Ateniendo a las lecturas propuestas en el desarrollo de la unidad y

consultando con otras en la web o cualquier otra fuente:

1. Describe los cambios en los aspectos socioeconómicos y políticos

que haz observado en tu comunidad en los últimos 10 años.

2. ¿Cuáles son los nuevos valores éticos y morales que se fortalecen o

pueden ser objeto de vulneración en la convivencia o comportamiento

social de nuestras comunidades con el auge de la ciencia y la

tecnología?

3. ¿Que soluciones sugieres para minimizar la brecha tecnológica entre

los estratos socioeconómicos de nuestra sociedad, incididos por la

falta de acceso a los beneficios de la ciencia y las tecnologías?

4. ¿Qué ventajas se presentan con el aprovechamiento de las

herramientas tecnológicas en los centros e instituciones educativas de

nuestro país o de cualquier otro en el mundo?

5. En materia ecológica ¿cómo crees que inciden los avances científicos

y tecnológicos en el progreso o no de la humanidad?

137

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

BIBLIOGRAFÍA

AROCENA, Rodrigo. Sobre la democratización de la ciencia y la tecnología.

QUANTUM • Volumen II Nº 1 / Octubre 2007.

http://www.quantum.edu.uy/abstracting/art1.pdf

GARCÍA, Valcárcel Ana y MUÑOZ, Repiso. EDUCACIÓN Y TECNOLOGÍA.

Universidad de Salamanca).Diciembre 2009.

http://web.usal.es/~anagv/arti1.htm

López Cerezo J. (1999). Los estudios de ciencia, tecnología y sociedad,

Revista Iberoamericana de Educación Número 20 (Mayo-Agosto 1999) 217-

225 pp. http://www.campus-oei.org/salactsi/cerezorie20.htm

Latour Bruno. “Dadme un laboratorio y levantaré el Mundo” en K. Knorr-

Cetina y M. Mulkay (eds.), Science Observed: Perspectives on the Social

Study of Science, Londres: Sage, 1983, pp. 141-170. http://www.campus-

oei.org/salactsi/latour.htm

Winner Langdon. ¿Tienen política los artefactos? En: Publicación original:

"Do Artifacts Have Politics?" (1983), en: D. MacKenzie et al. (eds.), The

Social Shaping of Technology, Philadelphia: Open University Press, 1985.

http://www.campus-oei.org/salactsi/winner.htm

López Cerezo J. (1999). Los estudios de ciencia, tecnología y sociedad,

Revista Iberoamericana de Educación Número 20 (Mayo-Agosto 1999) 217-

225 pp. http://www.campus-oei.org/salactsi/cerezorie20.htm

Hernán Jaramillo, S. y Albornoz, Mario (Compiladores), En el universo de la

medición. La perspectiva de la ciencia y la tecnología. Documento en PDF,

http://www.oei.es/ctsiima/POCI_Barre_Unidad_2.pdf

138

MMÓÓDDUULLOO DDEE CCIIEENNCCIIAA,, TTEECCNNOOLLOOGGÍÍAA YY SSOOCCIIEEDDAADD

BIOGRAFÍA DE AUTOR

DISEÑO Y COMPILACIÓN: JUAN CARLOS GÓMEZ GÓMEZ

ESTUDIOS RERALIZADOS

Cursa Segundo semestre de Maestría en Tecnología Educativa. Unab –

Tecnológico Monterrey. Bogotá-México. 2011.

Especialista en Docencia. Corporación Universitaria del Caribe CECAR –

Sincelejo. 2009.

Especialista en Informática y Telemática. Fundación Universitaria del

Área Andina. 2008

Especialista en la Enseñanza de las Ciencias Naturales. Uniatlántico –

CECAR. 2005.

Experiencia Laboral:

Docente de tiempo completo de la Institución Educativa Los Palmitos.

1991 – 2011.

Catedrático y Tutor de CECAR. 2006 – 2011.

Director de Diplomados de Grado en CECAR. 2009

Rector Gimnasio Altair de La Sabana. Sincelejo 2010-2011

DIRECCIÓN DE EDUCACIÓN ABIERTA Y A DISTANCIA Y VIRTUALIDAD

LICENCIATURA EN EDUCACIÓN BÁSICA

CIENCIA,TECNOLOGÍA Y SOCIEDAD

Carretera Troncal de Occidente - Vía Corozal - Sincelejo (Sucre)Teléfonos: 2804017 - 2804018 - 2804032, Ext. 126, 122 y 123Mercadeo: 2806665 Celular: (314) 524 88 16E- Mail: [email protected]