16
El conocimiento humano y sus fuentes luminosas desde la Antigüedad hasta el Medioevo _______________________________________ Martín Olszanowski UNIVERSIDAD DEL NORTE SANTO TOMÁS DE AQUINO Centro de Estudios de filosofía y teología de la Orden de Predicadores Materia: HISTORIA DEL PENSAMIENTO I Prof.: Lic. Cecilia Inés Cibeira AÑO 2013

TP HP1 Martín 2013 - Luz

Embed Size (px)

DESCRIPTION

la luz y el conocimiento en la edad antigua y medieval

Citation preview

  • El conocimiento humano

    y sus fuentes luminosas desde la Antigedad hasta el Medioevo

    _______________________________________

    Martn Olszanowski

    UNIVERSIDAD DEL NORTE SANTO TOMS DE AQUINO

    Centro de Estudios de filosofa y teologa de la Orden de Predicadores Materia: HISTORIA DEL PENSAMIENTO I

    Prof.: Lic. Cecilia Ins Cibeira AO 2013

  • Imagen de tapa Vitraux, S. Alberto Magno, Patrono del estudio de las Ciencias Naturales St. Dominic's Priory Church - Londres

  • Un poco de ciencia aleja de Dios pero mucha ciencia devuelve a l

    Louis Pasteur

  • NDICE

    PRESENTACIN ........................................................................................................................... pg. 5 1. Teoras sobre el origen del mundo ......................................................................................... pg. 5 2. Teoras sobre el sentido de la vista ......................................................................................... pg. 7 3. La luz y las formas de conocimiento Formaciones culturales .............................................. pg. 8 4. Cultura rabe: recopilacin, desarrollo e influencia ............................................................... pg. 9 5. Pensamiento medieval cristiano sobre lo lumnico ................................................................ pg. 9 6. Revelacin y misterio .............................................................................................................. pg. 12 7. Conclusiones ........................................................................................................................... pg. 13 BIBLIOGRAFA ............................................................................................................................. pg. 14

    Platn y Aristteles - Panel de mrmol

    Luca della Robbia, 1437-9

    Museo dell' Opera del Duomo, Florencia

  • 5

    PRESENTACIN

    En el presente trabajo se analizar histricamente a la imagen en tanto forma de conocimiento humano y a la luz

    como medio que hace posible al mismo. Se responde a un intento de generar un panorama abarcativo y a la vez

    bastante resumido de los diversos abordajes acerca de la temtica elegida en su trayectoria durante el

    pensamiento antiguo y medieval.

    Tomando como puntos de partida a dos teoras en las cuales Platn y Aristteles difieren (Teoras sobre el origen

    del mundo y Teoras sobre el sentido de la vista) se ir elaborando, a modo de viaje o de paseo, un tejido

    cronolgico en base a la presentacin de los desarrollos propuestos al respecto por abundantes autores, tanto

    filosficos como cientficos y religiosos.

    Paralelamente, y cuando sea oportuno hacerlo, se agregarn comentarios que versen sobre las distintas formas de

    conocimiento y los tipos posibles de verdades logradas mediante cada una de ellas; sto, con el objetivo de

    explicar conceptualmente la estructura en la que se ordenan los desarrollos propuestos.

    1. Teoras sobre el origen del mundo

    Diversos relatos sobre el origen del mundo y del universo fueron formulados en todas las culturas antiguas, pero

    es recin en la antigua Grecia donde se comenz a aproximar hacia relatos basados en una filosofa integral que

    explique el mundo aparente a los sentidos como una imagen de una instancia superior o ms perfecta. Estas

    primeras formas fueron heredadas por pensadores judeo-cristianos que las armonizaron con su doctrina de

    Creacin, concepto que no aparece en los helnicos.

    La propuesta ms importante de Platn (427-347 aC) en el mbito de las ciencias especulativas fue la teora de las

    Formas. stas, segn su teora, son realidades en s mismas, modelos universales, independientes de la mente que

    las conoce y se hallan separadas del mundo material. Tienen su origen debido a una realidad suprema en la que se

    hayan contenidas: el Bien (asimismo un Forma pero ms que ellas). Platn se refiri a esta Forma Bien como El

    Bien es Uno1, aunque el Bien platnico no es un Dios que gobierna ni ordena el universo. En su Timeo presenta

    la figura del Demiurgo o Artesano que forma el universo material hacia un fin bueno partiendo de una materia

    preexistente y de acuerdo al modelo que contempla del mundo inmutable de las Formas.2 Segn la teora, el

    Artesano comenz con la figura plana ms simple, el tringulo, para formar los slidos geomtricos regulares.

    stos conformaran los cuatro elementos (fuego, aire, tierra y agua) y a partir de ellos se formaron todas las otras

    cosas materiales. Este Artesano entonces se halla limitado por el modelo que debe copiar y la materia que emplea.

    Su discpulo Aristteles (384-322 aC) no concuerda con la teora de las Formas de su maestro. Para Aristteles, a

    diferencia de Platn, la finalidad de las cosas es inmanente, es decir, est dentro de ellas; es un impulso natural lo

    que mueve a todas las cosas a lograr su perfeccin y ocupar su lugar en el orden jerrquico del universo. Pero

    Aristteles no da explicacin alguna acerca del motivo por el cual el universo posee un orden. En su cosmogona,

    presenta dos regiones diferenciadas por su dinmica desigual: la regin central dentro de la esfera de la Luna

    (incluyendo el planeta Tierra) es la regin del movimiento y la decadencia; mientras que la regin ms grande y

    exterior es la esfera de las estrellas fijas, eternas e indestructibles y que tienen un perpetuo movimiento circular

    que es el principal impulsor de todo el resto de las esferas csmicas interiores. Propone que dicho movimiento

    circular eterno se produce por obra de un motor inmvil, una inteligencia eterna, plenamente actual, que no tiene

    posibilidad de cambio o movimiento. Sin embargo, no puede decirse de esta inteligencia eterna posea una

    voluntad capaz de actuar providencialmente y menos an que sea el posterior Creador de las religiones

    abrahmicas, sino ms bien que es una parte (no absoluta sino suprema) del Todo universal.

    1 Armstrong Introduccin a la Filosofa Antigua pg. 72

    2 Platn Timeo pg. 164

  • 6

    Cabe remarcar que algunos contemporneos de estos pensadores, es el caso de Euclides de Mgara, afirmaban

    que el Bien (platnico) es una sola cosa con muchos nombres y que se lo puede llamar con igual propiedad

    sabidura, inteligencia (trmino aristotlico) o Dios. Siguiendo esta lnea de asociaciones Jencrates (396-314

    aC), perteneciente a un grupo de pensadores platnicos posteriores, plantea que las Formas proceden de la

    Inteligencia.3 Tambin haciendo uso de asociaciones Albino (s. II aC), filsofo del platonismo medio, identifica a la

    Inteligencia suprema con el Demiurgo del Timeo que actualiza y proporciona una existencia eficiente a dos

    poderes intermediarios entre el mundo superior y el inferior: una inteligencia segunda o Dios (identificada con el

    motor inmvil aristotlico) y un Alma del mundo tomada asimismo del Timeo. Haciendo un no-tan-pequeo salto

    en el viaje histrico, se puede ubicar en este segmento a Marcin de Snope (85-160 dC) escritor griego converso al

    cristianismo en cuya doctrina teolgica conviven dos dioses: un Dios Bueno que vive en el Cielo Supremo (Dios del

    Nuevo Testamento) al cual se contrapone un Dios Justo, creador y dueo del mundo material (Dios del Antiguo

    Testamento, sangriento y vengativo) inferior al anterior. Debido a esta formulacin, Marcin fue excomulgado por

    su padre que era obispo de Snope, luego readmitido a la Iglesia de Roma en 139 y declarado hereje y vuelto a ser

    excomulgado y expulsado de Roma en 144.

    Las filosofas helensticas influyeron en gran manera sobre el cristianismo tanto directa como indirectamente. Es el

    caso de la influencia de estas filosofas sobre el judasmo helenizado con su gran exponente en Filn de Alejandra

    (15aC-45 dC). Estaba determinado a interpretar la Revelacin juda del libro del Gnesis4 bblico armonizndola con

    las doctrinas filosficas griegas. Para ello utiliz el mtodo de la interpretacin alegrica con la intencin de extraer

    algn sentido filosfico de los mitos divinos. Utiliz este mtodo de un modo muy amplio, tanto que el sentido

    literal de su exgesis desaparece casi completamente. Se puede hallar aqu la doctrina juda de un nico Dios

    creador y rector del universo que, sin embargo, en su accin de gobernar no lo hace directamente, sino a travs de

    potencias intermedias asociadas con el Logos griego y de las cuales no se hace una descripcin pormenorizada. Por

    el contrario, se definen claramente dos ideas caractersticas no-griegas en el pensamiento de Filn: la idea de una

    Creacin como libre acto de emanacin realizado por Dios y la idea de una parte superior del alma humana, el ojo

    del alma, que despierta como de un sueo para ver la luz divina5 colocndose as la inteligencia humana en el

    mbito de lo supraintelectual y posibilitando un retorno hacia Dios mediante un proceso de iluminacin. De la

    escuela de la misma Alejandra surge tambin el telogo cristiano Tertuliano (155/60-222/23) que tambin, como

    Filn y los apologistas, hace uso de todo tipo de metforas para referirse al Dios cristiano basadas en la idea de

    emanacin: el sol, el rayo, la fuente.6 San Justino (100/114-162/168), al igual que otros Padres de la Iglesia, alude

    al respecto que no se trata aqu de meras metforas sino que son stas analogas formalmente probatorias,

    certezas morales y formas de encontrar el conocimiento ltimo mediante la fe y la verdad intelectual.

    Es as como la tradicin judeo-cristiana es la que predominantemente aport el objeto luminoso al anterior corpus

    de teoras helensticas. Lo hizo muy probablemente debido a que la luz aparece ms que reiteradas ocasiones en

    las Sagradas Escrituras relacionada enfticamente con Dios, se Creacin y sus atributos derivados.

    En el S. III se produce una cumbre en el pensamiento pagano reinterpretado del platonismo en manos del griego-

    egipcio Plotino (205-270). El primer principio de Plotino era lo que denominaba Uno o Bien, del que proceden en

    forma de emanacin -en orden jerrquico- la Inteligencia divina, el Alma y el universo material. Ese proceso

    emanativo, en una explicacin ms precisa, distingue dos momentos: una primera instancia de emanacin de lo

    inferior y posteriormente, la segunda instancia cuando lo inferior se vuelve contemplativamente hacia lo Uno

    (iluminacin). Aqu se puede ver una fuerte concordancia con la propuesta de Filn de Alejandra. Lo Uno es

    trascendente, es la luz encima de la luz (Enadas, Libro V, 3, 12).7 Las influencias de su pensamiento y la de sus

    3 Armstrong Introduccin a la Filosofa Antigua pg. 244

    4 En el libro del Gnesis se exponen dos narraciones sobre la creacin: Gn 1,1-2,4 y Gn 2,5-25. En el primero de estos relatos y al primer da, Dios crea la luz luego del cielo y de la tierra en Gn 1,3-5

    3Entonces Dios dijo: Que exista la luz. Y la luz existi.

    4Dios vio que la luz era buena,

    y separ la luz de las tinieblas;5 y llam Da a la luz y Noche a las tinieblas. As hubo una tarde y una maana: este fue el primer da.

    5 Dr. FOSBERY, ANBAL ERNESTO, La doctrina de la iluminacin y el medioevo pg. 70-71

    6 Armstrong Introduccin a la Filosofa Antigua pg. 271

    7 ibd. pg. 295

  • 7

    discpulos directos Porfirio (232-304) y Jmblico (250-330) calan muy profundo en el cristianismo, particularmente

    en San Agustn de Hipona (354-430). Asimismo el filsofo neoplatnico Proclo (410-485) tambin plantea la idea

    de emanacin que influir poderosamente en el Pseudo-Dionisio Areopagita, telogo cristiano del S. VI, supuesto

    discpulo del apstol Pablo. En sus escritos resalta notablemente el objeto lumnico como bien participado por Dios

    a sus creaturas. Se refiere en forma continua al rayo supraescencial que da luminosidad, la luminosidad de los

    alumbrados, rayo solar, la luz es a partir del bien, participacin luminosa, la luz es origen y medida de los

    objetos sensibles, efusin de luz, la luz convierte y revierte hacia s misma todo lo que puede ver, moverse y

    ser alumbrado, a partir de ella son las deiformes potencias de los ordenamientos anglicos8.

    Esta idea de emanacin lumnica fue radical dentro del platonismo y se ver reflejada tambin en otros mbitos de

    su filosofa, como por ejemplo en la descripcin del sentido humano de la vista.

    2. Teoras sobre el sentido de la vista

    Las primeras propuestas elaboradas sobre este asunto surgieron en la antigua Grecia9 con la formulacin paulatina

    de dos grandes posturas al respecto. Ambas se nutren del complejo y vasto sistema cosmolgico formulado por

    Empdocles (495-435 aC) en la que el elemento pasivo se halla representado por los cuatro elementales: fuego,

    aire, tierra y agua10

    ; el primero de ellos asociado al fenmeno lumnico en tanto su precursor u origen.

    Una de las propuestas se denomina la teora de la emisin o emanacin cuyas primeras conjeturas pueden

    rastrearse ya en Pitgoras (582-507 aC) al plantar que la luz emana del ojo en forma de rayos luminosos que se

    propagan en lnea recta y suponer que esta emanacin choca con los cuerpos y en consecuencia, la visin es el

    resultado de este choque.

    Ms tarde, Platn replante este asunto siguiendo a sus antecesores. Plante que mientras nuestros ojos, emitan

    pequeas partculas de luz, asimismo desde el objeto tambin se emanaba una sutil capa o "eidola"; y era el

    contacto entre el fuego visual emitido por el ojo y esta emanacin del objeto lo que produca la sensacin de la

    vista.

    Cuando la luz del da encuentra la corriente del fuego visual unindose ntimamente lo semejante a su semejante, se forma en la direccin de los ojos un cuerpo nico donde se confunden la luz que sale de dentro y la que viene de fuera. 11

    La otra de las posturas denominada teora de la intromisin puede vislumbrarse ya en los denominados atomistas,

    entre ellos Leucipo y Demcrito. Se plante una teora de la visin que deba encajar en un marco de pensamiento

    para el que la percepcin sensorial requera contacto fsico. Demcrito (460-360 aC) propuso que de los objetos

    emanaba una sutil capa de tomos que forman una imagen del objeto (equivalente a la eidola platnica) y

    consider que esos tomos se dirigen hasta los ojos para provocar la visin. Demcrito supuso adems que los

    cuerpos emitan tomos de distintas formas y tamaos que portaban diferentes aspectos de su imagen.

    Estos conceptos de los atomistas fueron tomados un siglo despus por Aristteles en su obra De sensu et

    sensibilibus. En su opinin, la luz ingresa a los ojos habiendo hecho su recorrido desde el objeto y luego

    atravesando el ter12

    , quinto elemento que aade a los de Empdocles y que segn su teora es necesario para que

    los cuerpos estn en contacto fsico. Adems se plante cuestiones derivadas de estas teoras tales como: si los

    objetos emiten imgenes, qu ocurre cuando stas se cruzan en el aire?, cmo puede caber la imagen de un

    8 Pseudo-Dionisio Areopagita, Los nombres divinos

    9 http://intercentres.edu.gva.es/iesleonardodavinci/fisica/Vision/Luz-vision03.htm Pgina web del Instituto IES Leonardo da Vinci (Madrid)

    10 Armstrong Introduccin a la Filosofa Antigua pg. 34-35

    11 Platn Timeo pg. 188

    12 Armstrong Introduccin a la Filosofa Antigua pg. 142

  • 8

    gran objeto en la pupila del ojo?13

    An as, sus explicaciones se mantuvieron slo en el mbito de la especulacin y

    carecan de certeza emprica.

    Posteriormente se comenzaron a hacer estudios ms pormenorizados sobre las propiedades de la luz que aportan

    datos fundamentales sobre las teoras del sentido de la vista. Es el caso de Euclides (325-265 aC) llamado el padre

    de la geometra debido a la gran relevancia de su obra Elementos. En otra obra suya llamada ptica analiza

    propiedades de la luz, postulando que la misma tiene una trayectoria en lneas rectas. Adems, describe el

    fenmeno de reflexin lumnico. Claudio Ptolomeo (100-170 dC) por su parte en el campo de la ptica explor

    tambin las propiedades de la luz, sobre todo de la refraccin y la reflexin. Su obra ptica es un tratado sobre la

    teora matemtica de las propiedades de la luz. As tambin merecen ser nombrados los trabajos del ingeniero y

    matemtico Hern de Ajendra (s. I dc) en el campo de la geometra y la ciencia helenstica. Las obras de Euclides

    fueron editadas y comentadas por Ten (335-405), ltimo director de la Biblioteca del Serapeo o segunda

    Biblioteca de Alejandra y padre de la gran matemtica Hipatia.

    La solucin a la disputa entre las dos propuestas sobre la teora de la visin tendr que esperar algunos siglos ms

    y, a pesar de los avances en los estudios realizados mediante la geometra y la matemtica griegas, vendr de la

    mano de los rabes en su propia revisin respecto de estos estudios.

    3. La luz y las formas de conocimiento Formaciones culturales

    Estas teoras que utilizaron la luz como medio de explicacin de procesos complejos tanto en su dinmica

    intrnseca como narrativa (como es el caso de la luz como sujeto en los relatos del origen del mundo) y tambin la

    usaron como objeto de estudio particular (ptica) responden a distintas formas de conocimiento humano. Cada

    una de estas diversas formas de conocimiento puede respectivamente lograr distintas formas de verdad,

    enmarcadas en orden jerrquico.

    Se parte gnoseolgicamente desde lo real ms inmediato, es decir, la simple aprehensin mediante los sentidos

    externos -en el caso de este trabajo- la vista, sensible a la luz, capta las realidades aparentes (que se van

    apareciendo al cognoscente) en el mundo. Se pasa luego al plano de los sentidos internos del ser humano que

    primeramente produce imgenes (representaciones de las apariencias (re-presentacin = actualizacin). Toman

    parte a continuacin en esta breve descripcin las potencias intelectuales, que producen una reflexin de lo

    representado de forma integrativa, esto es razonar.

    La luz frecuentemente fue utilizada como medio posible para el conocimiento humano. Uno de los casos ms

    paradigmticos fue el de San Agustn en su Teora de la Iluminacin. Entiende, entre otras, que el conocimiento de

    la realidad exterior slo es posible para el hombre si la luz de la verdad divina14

    le es participada por Dios. De

    alguna manera (no explicitada por Agustn) las Formas verdades eternas presentes en la mente de Dios- son el

    origen del pensamiento humano: es la luz de Dios que resplandece en nuestra mente.15

    La expresin de los razonamientos requiere un lenguaje que se valga de elementos interpretables como las

    palabras (que se usan para emitir juicios que devienen en proposiciones argumentativas). El lenguaje, de esta

    forma, hace manifiesto las enunciaciones sobre lo sensible. Y, a gran escala, los diversos lenguajes utilizados por

    una sociedad (que responden a las variadas formas de conocimiento que los sujetos en ella pueden realizar) son el

    sustento primordial de lo que ampliamente se define como su cultura.

    13

    http://intercentres.edu.gva.es - Pgina web del Instituto IES Leonardo da Vinci (Madrid) 14

    Dr. FOSBERY, ANBAL ERNESTO, La doctrina de la iluminacin y el medioevo pg. 109 15

    Armstrong Introduccin a la Filosofa Antigua pg. 349

  • 9

    4. Cultura rabe: recopilacin, desarrollo e influencia

    La bsqueda de una identidad cultural por parte de los pueblos islmicos de la Pennsula Arbiga en Oriente Medio

    tuvo una etapa muy particular que comenz en el S. VIII con el impulso poltico-econmico de la Dinasta de reyes

    Abbasidas. Es as que en el S. IX la ciudad de Bagdad (capital de la actual Repblica de Irak) se convirti en un

    importante centro cultural y cientfico.16

    En esta sociedad teocrtica (y muchas veces con tendencia fideista) todo

    tipo de conocimiento se ordenada en torno a su religin, y a la teologa como mxima forma de conocimiento.

    Pero surgen en esta poca pensadores rabes que comienzan a ser ms aprehensivos de las culturas

    mediterrneas, particularmente la griega. Respecto de esto, en su obra Kitab fasl al-maqal (Sobre la armona

    entre Religin y Filosofa) Averroes (Ab l-Wald Muhammad ibn Ahmad ibn Muhammad ibn Rushd) (1126-1198)

    opina que los estudios teolgicos deben realizarse de la mejor manera, a travs del razonamiento demostrativo y,

    para poder dominar este instrumento, el pensador religioso debe llevar a cabo un estudio preliminar de lgica de

    los maestros de la antigedad, independientemente del hecho de que no sean musulmanes. As pues se debera

    proceder a filosofar correctamente. Tambin propone que para cada hombre la Ley ha previsto un camino hacia la

    verdad de acuerdo a su naturaleza, a travs de mtodos demostrativos, dialcticos o retricos.17

    Muchos de estos atrevidos pensadores eran verdaderos polmatas, avezados en religin, medicina, derecho,

    msica, matemticas y ciencias de la naturaleza. Se sustentan en la idea de que la verdad demostrativa y la verdad

    de las Escrituras no pueden estar en conflicto. Es el caso de Al-Kindi (Ab Ysuf Yaqb ibn Ishq al-Kind) (801-873)

    cuyo estudio sobre la ptica qued plasmado en su obra De Aspectibus -en latn- (Sobre la vista) y de Al-Hacen

    (Ab Al al-Hasan ibn al-Hasan ibn al-Haytam) (965-1040). Este ltimo realiz importantes contribuciones a los

    principios de la ptica (ptica geomtrica) y a la concepcin de los experimentos cientficos. Entre muchsimas

    obras escribi su Kitab al-Manazir (Libro de la ptica) y su Risala fi l-Daw (Tratado sobre la luz). Se ocup

    tambin de estudiar fenmenos luminosos atmosfricos, tales como el arcoris. Asimismo, llev a cabo estudios

    referidos a los fenmenos de reflexin y refraccin de la luz, y al empleo de las lentes. Construy lo que hoy se

    conoce como cmara oscura, un dispositivo ptico capaz de obtener la proyeccin de una imagen sobre su

    superficie interior. Es l quien -basndose en estos propios experimentos de reflexin, lentes y de la cmara

    oscura- determina que la teora correcta sobre el sentido de la vista es la de intromisin, determinando que ni los

    ojos ni los objetos poseen luz propia, sino que la luz parte de una fuente lumnica, se refleja el en objeto y llega

    posteriormente al ojo. Escribi al respecto el primer tratado amplio sobre lentes, donde describe la imagen

    formada en la retina humana debido al cristalino. La influencia de saberes y de mtodos de Al-Hacen fue vastsima

    tanto en su propia cultura como en el occidente cristiano posterior.

    En su propia cultura, se presenta Al-Farisi (Kamal al-Din Abul Hasan Muhammad Al-Farisi) (1260-1320) un

    destacado matemtico y fsico persa. Propuso la primera explicacin matemtica sobre el fenmeno del arcoris,

    estudi en profundidad la refraccin de la luz, la dioptra y las cmaras oscuras. Su obra Tanqih al-Manazir es una

    revisin de la ptica de Al-Hacen.

    5. Pensamiento medieval cristiano sobre lo lumnico

    Mientras tanto, el mundo occidental cristiano contemporneo a esta cultura rabe viva crisis institucionales y

    levantamientos populares que se daban continuamente en Roma en tiempos del emperador Otn-III del Sacro

    Imperio Romano Germnico. Fue influido profundamente por la educacin de su tutor, Gerberto de Aurillac (945-

    1003) quien estudi en Barcelona y con maestros rabes en Crdoba y Sevilla, dando gran importancia a las

    matemticas y ciencias naturales18

    y que posteriormente fue nombrado Sumo Pontfice de la Iglesia Catlica de

    Occidente con el nombre de Silvestre II. En accin conjunta, se propusieron renovar culturalmente al imperio. Con

    este precedente socio-cultural es que se siembran en Europa Occidental las semillas que darn vida a partir de los

    16

    Susana Gallardo, Historia de la luz pg. 33 17

    http://es.wikipedia.org/wiki/Averroes 18

    http://ec.aciprensa.com/wiki Enciclopedia Catlica online

  • 10

    S. XI y XII a las primeras universidades (Bolonia, 1088; Pars, 1150 y Oxford, 1167), a la vez institutos de enseanza

    y centros de produccin de saber.

    Un factor importante que influy en el florecimiento intelectual del periodo fue la actividad cultural de las

    nuevas rdenes mendicantes, especialmente los Dominicos y los Franciscanos. Al contrario de las rdenes

    monsticas, volcadas hacia la vida contemplativa en los monasterios, estas nuevas rdenes estaban dedicadas a la

    convivencia entre el mundo laico y buscaban defender la fe cristiana por la predicacin haciendo uso de la razn.

    La integracin de estas rdenes en las universidades medievales les proporcionaba la infraestructura necesaria

    para la realizacin de sus estudios acadmicos y adems el contacto con otras comunidades cientficas. Lo ltimo

    queda reflejado en el lema de la Universidad de Pars: Hic et ubique terrarum (Aqu y en todas partes del

    mundo); mientras que el de la Universidad de Oxford pone en relieve el objeto lumnico: Dominus illuminatio

    mea Salmo 27 (El Seor es mi luz). Esta asociacin de lo divino con lo lumnico en el lema de la Universidad de

    Oxford da cuenta de una tendencia que naca en aquel occidente medieval con respecto a las temticas de

    estudio: muchos pensadores cristianos asociados con la teologa (y su mtodo filosfico) comenzaron a avocarse

    simultneamente al estudio del universo puramente fsico (como un campo muchas veces independiente y

    separado de la teologa) entendido como un rea de estudio esencial en s misma, as como un fundamento para la

    obtencin de otros saberes.

    Es el caso de Robert Grosseteste (1175-1253), escolstico y cientfico ingls, fundador de la Escuela Franciscana de

    Oxford y obispo de Lincoln (Canterbury). Entendi plenamente la visin aristotlica del doble camino para el

    pensamiento cientfico: generalizar de observaciones particulares a una ley universal; y despus hacer el camino

    inverso: deducir de leyes universales a la previsin de situaciones particulares. Adems, basndose en los

    cientficos rabes, introdujo en occidente la nocin de experimento controlado y lo relacion a su concepcin de

    ciencia demostrativa. Y el mtodo que elige preeminentemente es el matemtico, siguiendo a Boecio (480-524)

    en esta postura, en tanto que la matemtica sera la ciencia base para todo pensamiento cientfico y lo deja en

    claro en su obra De lineis, angulis et figuris: Mathematical reasoning in the natural sciences. Segn Grosseteste,

    Es muy importante la utilidad de considerar el estudio de las lneas, de los ngulos y de las figuras, porque es

    imposible conocer la filosofa natural sin ellas: valen absolutamente para todo el universo y sus partes.19

    Esta preponderancia de la matemtica en las ciencias queda muy clara en su utilizacin para el estudio de la luz.

    Segn Grosseteste, la luz es una sustancia corprea pero enormemente prxima a lo incorpreo siendo su

    principal propiedad engendrarse a s misma perpetuamente; generada en un punto, se expande en forma esfrica

    en todas las direcciones, de modo instantneo. En su expansin se va enrareciendo hasta llegar a un lmite y por

    extenderse en las tres dimensiones del espacio la luz engendra la corporeidad. En su difusin extiende consigo la

    materia de la que es inseparable. De este modo la luz es la primera forma creada por Dios en la materia prima a la

    que va unida y constituye as el principio del universo.

    Grossete es punto medieval de confluencia entre el cientificismo rabe-aristotlico y el pensamiento agustiniano-

    platnico. As, en su obra De luce, On the metaphysics of light identifica a esta luz (sustancia corprea) con la luz

    metafsica y distingue tres tipos de luz: lux (Dios), radium (rayos de luz) y lumen (el aire lleno de luz). Conforme a

    esta concepcin divina de la luz, afirma que sta se puede predicar con mayor precisin de los seres espirituales

    que de los corporales.20

    En la misma lnea franciscana de este pensador ingls se ubican Roger Bacon (12141294) y John Peckham (1230-

    1292), ambos religiosos que tomaron su herencia filosfica y cientfica. No solo desarrollaron su pensamiento en

    ciencias fsicas, sino que tambin expusieron su postura metafsica, antropolgica y gnoseolgica. Fue de especial

    19

    E. Gilson, La filosofa en la Edad Media - pg. 438 20

    Dr. FOSBERY, ANBAL ERNESTO, La doctrina de la iluminacin y el medioevo pg. 138

  • 11

    relevancia las oposiciones en estos campos de saber entre el espritu de la orden franciscana frente al espritu de

    la orden dominica que prevaleca en el continente.

    San Alberto Magno (1193/12061280) en la universidad de Pars tradujo, coment y clasific textos antiguos,

    especialmente de Aristteles. Aadi a estos sus propios comentarios y experimentos, aunque no conceba los

    experimentos como los pensadores de la Escuela de Oxford, especialmente en el uso de la matemtica, sino que

    en su opinin la experimentacin consista en observar, describir y clasificar. Este gran trabajo enciclopdico

    sent las bases para el posterior de su discpulo Santo Toms de Aquino (1225-1274). Toms se enfrenta en

    reiteradas controversias contra los insulares franciscanos, especialmente en asuntos metafsicos y gnoseolgicos.

    Es, en definitiva, la defensa a una visin propia del cosmos que Toms ha de asumir integrando los elementos

    aristotlicos y, manteniendo sin embargo, la ordenacin platnica.21

    Conoce la metafsica de la luz que proponen

    los franciscanos, segn la cual sta viene a ser la sustancia primera de todas las cosas, y muestra su desacuerdo

    con ella diciendo que esa emanacin es contraria a la revelacin divina: Dios crea directa e inmediatamente todas

    las cosas. Si la respuesta es tajante, es porque estaban en juego verdades fundamentales de la revelacin.22

    Sus refutaciones y opiniones las resea en el comentario al De Anima. Dice que los que opinan que la luz es

    corporal, lo hacen movidos por el hecho de que es comn decir que la luz transita por el aire y que es rechazado

    lo que los rayos separan entre s (lumen y radium respectivamente en el pensamiento de Grosseteste). Su

    respuesta se apoya en el carcter significativo de la luz, es decir su manifestacin. Propone que aquellas ideas han

    tenido un carcter metafrico: as siendo lo propio de la luz corporal manifestar las cosas sensibles, se puede

    decir anlogamente que se da una luz espiritual ordenada a la manifestacin intelectual.23

    En definitiva, la luz

    para Toms no es ni una sustancia corporal ni espiritual, sino una qualitas activa corporis caelestis, per quan agit

    (cualidad activa de un cuerpo celeste, por la cual obra).24

    De esta manera, a travs de una explicacin analgica,

    Toms responde a la Escuela Franciscana de Oxford para proteger las verdades fundamentales de la revelacin,

    pero por la forma en que se prosigui con los estudios fsico-matemticos en el campo de la ptica, puede decirse

    que continu primando la idea de una luz en el sentido materialista (todava hasta nuestros tiempos).

    Las traducciones de Aristteles que principalmente utiliza Toms para sus estudios son las que solicita a su

    hermano de hbito Guillermo de Moerbeke (12151286). La razn de la peticin se debi a que las copias latinas

    en circulacin tenan su origen en Espaa y procedan de versiones sirias traducidas al rabe desde el griego

    original. Aristteles se convirti tras todas estas traducciones en una fuente de errores teolgicos y filosficos a

    merced de sucesivas malinterpretaciones. Las traducciones de Moerbeke fueron tambin utilizadas por su amigo

    Witelo (1237-1280/1314), quien fue un fraile polaco, telogo, fsico, filsofo natural y matemtico. La mayor obra

    conocida de Witelo sobre ptica, Perspectiva, estaba dedicada a Guillermo. Muy influenciado por la obra de Al-

    Hacn, influenci asimismo poderosamente a cientficos posteriores, en particular a Johannes Kepler, Tycho

    Brahe, Galileo Galilei y Christian Huygens. El tratado de Witelo tambin contiene bastante material

    sobre psicologa, delineando visiones que se aproximan a las nociones modernas de asociacin de ideas y

    de subconsciente. Witelo argument que existen cuerpos intelectuales y corpreos, emanando desde Dios en

    forma de luz divina. La misma luz es, para Witelo, la primera de todas las entidades sensibles, y sus visiones sobre

    la luz son similares a las sostenidas por Roger Bacon.

    Una historiografa que no reconoce esta produccin y gestacin filosfica, cientfica y teolgica suele denominar a

    la Edad Media como edad oscura25

    . En tanto que opuestos, la oscuridad no tiene entidad en s misma como s lo

    tiene la luz, sino que es falta de ella. Sin embargo, por lo visto anteriormente, la Edad Media dista mucho de ser un

    perodo en el cual no se haya hecho una profunda revisin de las ideas, y en particular sobre la luz (ciencia

    emprica y gnoseologa), adems de proponer nuevas consideraciones filosficas.

    21

    Dr. FOSBERY, ANBAL ERNESTO, La doctrina de la iluminacin y el medioevo pg. 153-154 22

    ibd. pg. 160, 161, 164 23

    ibd. pg. 173 24

    ibd. pg. 168, 178 25

    Por ejemplo en el nombre de la obra sobre la Alta Edad Media de Isaac Asimov: The Dark Ages, 1968

  • 12

    6. Revelacin y misterio

    Fsica y metafsica abordan la cuestin de la luz; una y otra ciencia no pueden estar en desacuerdo al tratar de

    describir el mismo mundo real de la cosa. Las diferencia, ms all del mtodo y el lenguaje utilizados, las distintas

    preguntas que se formularon a lo largo de su historia como ciencias separadas. Mientras que las ciencias

    particulares se preguntan por las causas prximas, la metafsica, en tanto disciplina filosfica, lo hace por las

    causas primeras (en el orden de la eficiencia) y ltimas (en el orden gnoseolgico). Y, como se dijo anteriormente

    en el apartado 3, diferentes formas de conocimiento pueden respectivamente lograr distintas formas de verdad,

    enmarcadas en orden jerrquico. Sin embargo, los tipos de verdad sobre la luz a las que llegan las ciencias

    particulares (mediante hiptesis y comprobaciones experimentales) y tambin la metafsica filosfica (a partir de

    su mtodo especulativo) son verdades parciales (leyes de la naturaleza); es decir, aquellas que, si bien brindan

    certezas (conocimientos seguros y claros de algo), no alcanzan para explicar a la cosa definitivamente, la cosa en su

    totalidad.

    Es cierto que si se reflexiona filosficamente en base a nuevos descubrimientos cientficos se puede llegar a

    perfeccionar esa verdad particular, logrando as principios comunes cada vez ms generales. Y tambin

    corresponde a las ciencias particulares especificar profundamente las especulaciones filosficas sobre

    determinada temtica. Es as como los debates entre fsicos y metafsicos sobre la luz planteados en la poca

    medieval dieron pie la ciencia moderna que desarroll en gran medida todo lo que se conoce actualmente sobre

    este tema.

    En un abordaje antropolgico, el ser humano cognoscente, al conseguir verdades particulares que le den certezas

    pero que no explican la cosa en su totalidad, trata de superar la frontera que existe entre lo cognoscible y lo

    incognoscible. Esto lo puede hacer conocindose cada vez mejor a s mismo y a sus formas y mtodos,

    actualizando paso a paso esa frontera. No obstante, de todas formas se llega a verdades particulares. Es este el

    punto de inflexin en el cual el ser humano debe aceptar su finitud en todo sentido (tambin como sujeto

    cognoscente). Como seres humanos finitos necesitamos un camino de conocimiento desde lo ms puramente

    sensible material hasta lo ms plenamente inmaterial y para ello ponderamos la interaccin de diversas formas de

    conocimiento para llegar a una verdad trascendental, aquella que abarque a la cosa en su plenitud. Es as como la

    razn nos deja a las puertas de la fe sobrenatural. Y el acto propio al que invita la verdad trascendental es la visin

    contemplativa (cabe destacar el uso analgico del lenguaje de ver la verdad a la luz de su origen); se contempla el

    misterio ya que no se lo puede aprehender porque su naturaleza es dual: una parte revelada y otra parte oculta.

    Una vertiente iniciada en la Antigedad que representa este pensamiento es la Teologa Apoftica o negativa

    (precursores de ella fueron Plotino, San Agustn y Pseudo-Dionisio): cuyo lema central es que toda afirmacin

    sobre Dios es insuficiente. Esto, no solo pone de manifiesto la imposibilidad por parte de los lenguajes humanos

    para expresar la parte oculta del misterio, sino tambin su limitacin (debida a la finitud inherente al humano)

    para enunciar lo revelando.

    Se determina entonces que el criterio necesario para ordenar jerrquicamente las verdades se desprende, en base

    al misterio, de las certezas presentes en lo revelado. En un marco realista, la Revelacin propiamente dicha

    comprende las diversas maneras en que lo sobrenatural (Dios) se da a conocer. Esta accin queda manifiesta

    verdicamente y sin errores en las Sagradas Escrituras debido a su carcter de inspirado en lo divino. Las verdades

    trascendentales presentan actualmente el mensaje de salvacin26

    , acto comprendido como perfeccin totalizadora

    del ser humano en su conocer y en su existir. Y es por este motivo de salvacin que la Biblia no necesita presentar

    un lenguaje propiamente cientfico.27

    Es ejemplo de esto ltimo que en el libro del Nuevo Testamento (libro

    concebido en tiempos todava de la Antigedad) se presenta a Jess como la luz del mundo (Jn 8, 12b) y como

    imagen del Dios invisible (Col 1, 15a), quien es el nico que posee la inmortalidad y habita en la luz inaccesible, a

    quien ningn hombre vio ni puede ver (1Tm 6, 16a).

    26

    Luis Heriberto Rivas, Los libros y la historia de la Biblia. Introduccin a las Sagradas Escrituras pg. 24 27

    ibd. pg. 22

  • 13

    7. Conclusiones

    Platn, cuando no puede explicar algo mediante su dialctica, recurre al mito como gnero literario (por ej.

    Alegora de la Caverna, lenguaje metafrico con una enseanza o moraleja) aunque en este caso no se puede

    hablar de la presentacin de una verdad fctica con este gnero literario.

    Aristteles, en cambio, ante la misma imposibilidad de una explicacin lgica, prefiere dejar planteado el problema

    y de ninguna manera abandonar su propio mtodo objetivo en el discurrir de su obra. Con su Lgica, gana

    precisin gramtica y, sin embargo, pierde un gnero literario (metafrico, subjetivo). De esta manera el lenguaje

    lgico-matemtico es el que propiamente hace desuso (nfasis negativo en la prdida del gnero literario) de lo

    subjetivo.

    Realidad como misterio (parte revelada y parte oculta). Paso del mito al logos y luego hacia las ciencias

    particulares. Platn vive en logos pero a la vez usa al mito, transita una frontera. En el mismo territorio habita la

    reinterpretacin neoplatnica. Aristteles la traspasa y se niega determinadamente a volver atrs. Los rabes lo

    siguen y dan el primer gran paso en la descripcin proto-cientfica de ciertos fenmenos fsicos - asimismo

    Grosseteste y Bacon- pero tambin ellos transitan una frontera. Toms responde armonizando ciencia y

    revelacin, se queda en la analoga y no matematiza determinsticamente el fenmeno lumnico.

    Esta secuencia cronolgica de formas de conocimiento (mito, logos, ciencias) fueron concebidas durante largos

    procesos de pensamiento humano una luego de la otra -como evolucin de su antecesora o, en su defecto, como

    su contrapartida- pero no se fueron desechando a medida que surgan herederos: continuaron haciendo cada vez

    ms clara la parte revelada del misterio. Slo nos fueron acercando a las puertas de aquella parte oculta. Esa es la

    Gran Frontera humana, no traspasable haciendo uso de las ciencias que se derivan de la simple aprehensin; slo

    mediante un conocimiento intuitivo (visin contemplativa) se la puede vislumbrar. Sin embargo, no es solo

    inherente al sujeto esta accin contemplativa sino que hay una dependencia necesaria de gracia divina.

    La realidad de la luz se nos presenta con esta doble dimensin que comparte con el misterio: una parte revelada y

    otra oculta que escapa a nuestros sentidos y nuestra razn. Llamamos imgenes a aquella actualizacin de la luz

    que se manifiesta (al decir de Toms); no obstante, la parte oculta (no se habla aqu de oscuridad) no podemos

    siquiera nombrarla racionalmente.

  • 14

    BIBLIOGRAFA

    en orden de aparicin

    ARMSTRONG, A. H., Introduccin a la Filosofa Antigua

    Ed. EUDEBA, Bs.As., 2010

    PLATN, Obras completas de Platn puestas en lengua castellana por primera vez Tomo 6 Timeo

    Medina y Navarro Editores, Madrid, 1871

    Dr. FOSBERY, ANBAL ERNESTO, La doctrina de la iluminacin y el medioevo

    Universidad FASTA ed., Mar del Plata, 2011

    PSEUDO DIONISIO AREOPAGITA, Los nombres divinos

    Ed. Losada, Bs.As., 2007

    SUSANA GALLARDO, Historia de la luz

    Ed. Capital Intelectual, Bs.As., 2007

    TIENNE GILSON, La filosofa en la Edad Media

    Ed. Gredos, Madrid, 1965

    LUIS HERIBERTO RIVAS, Los libros y la historia de la Biblia. Introduccin a las Sagradas Escrituras

    Ed. San Benito, Buenos Aires, 2001

  • El Triunfo de Santo Toms de Aquino (San Tommaso d'Aquino, fra Platone ed Aristotele, trionfa su Averro)

    Benozzo Gozzoli, (1468-1484) Muse du Louvre, Paris