Textos guía para el inicio de la campaña M200A

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Es un compilación que abarca textos de Marx y Engels, Lenin y Mao. Además de José Carlos Mariátegui. Es de mayo del 2012 pero fue vuelto a editar a inicios del 2013 por el Instituto Internacional del Estudios Marxistas.

Citation preview

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 1

    CITAS GUA

    INICIO DE GRAN CAMPAA

    MARX 200 AOS Instituto Internacional de Estudios Marxistas

    IIEM

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 2

    Edicin preparada para el inicio de la Gran Campaa Marx 200 aos (2012-2018), por el Instituto Internacional de Estudios Marxistas. Setiembre 2012.

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 3

    CITA PRINCIPAL

    Estudiar marxismo para la revolucin Nuestros camaradas deben comprender que si estudiamos el marxismo-leninismo, no es para lucirnos, ni porque ste encierre algn misterio, sino exclusivamente porque es la ciencia que conduce la revolucin proletaria a la victoria. Hasta la fecha, todava hay no pocos que consideran ciertas frases sueltas de las obras marxista-leninistas como una panacea ya preparada, que, una vez adquirida, permite curar cien enfermedades sin ningn esfuerzo. Estas personas padecen de una ignorancia infantil, y nuestro deber es darles ilustracin. Son precisamente tales ignorantes los que miran el marxismo-leninismo como un dogma religioso. Les debemos decir lisa y llanamente: "Su dogma no sirve para nada." Marx, Engels, Lenin y Stalin han reiterado que nuestra doctrina no es un dogma, sino una gua para la accin. Sin embargo, tales gentes prefieren olvidar esta afirmacin, la ms importante entre las importantes. Se podr decir que los comunistas chinos han ligado la teora con la prctica slo cuando sepan aplicar la posicin, el punto de vista y el mtodo marxista-leninistas y las enseanzas de Lenin y Stalin concernientes a la revolucin china y, partiendo de un serio estudio de la realidad histrica y la prctica revolucionaria de China, den un paso adelante para realizar, en todos los terrenos, creaciones tericas que respondan a las necesidades de nuestro pas. Es intil hablar de la integracin de la teora con la prctica, aunque eso se repita durante cien aos, si no se la traduce en accin. Para llevar a cabo la lucha contra la manera subjetiva y unilateral de enfocar los problemas, tenemos que romper el subjetivismo y la unilateralidad dogmticos. (Mao Tse-tung)

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 4

    CITAS FUNDAMENTALES

    I. Volcarse a la clase obrera, proletarizarse; educar a la clase y al pueblo en la teora marxista y la lucha de clases. Jams olvidarse de la lucha de clases.

    Londres, 18 de marzo de 1872. Al ciudadano Maurice Lachtre. Estimado ciudadano: Apruebo su idea de editar por entregas la introduccin de El Capital. En esta forma, la obra ser ms asequible a la clase obrera, razn ms importante para m que cualquiera otra. Tal es el lado bueno de la idea; he aqu ahora el reverso de la medalla: el mtodo de anlisis empleado por m y que nadie hasta ahora haba aplicado a los problemas econmicos, hace que la lectura de los primeros captulos resulte bastante penosa, y cabe el peligro de que el pblico francs, impaciente siempre por llegar a los resultados, ansioso por encontrar la relacin entre los principios generales y los problemas que a l directamente le preocupan, tome miedo a la obra y la deje a un lado por no tenerlo todo a mano desde el primer momento. Yo no puedo hacer otra cosa que ensear de antemano este peligro y prevenir contra l a los lectores que buscan la verdad. En la ciencia no hay calzadas reales, y quien aspire a remontar sus luminosas cumbres, tiene que estar dispuesto a escalar la montaa por senderos escabrosos. Reciba usted, estimado ciudadano, la seguridad de mi devota estimacin. (Carlos Marx, Prlogo y nota final a la edicin francesa de El Capital, pg. xxv)

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 5

    Trabajadores! A vosotros dedico una obra en la que he intentado describir a mis compatriotas alemanes un cuadro fiel de vuestras condiciones de vida, de vuestras penas y de vuestras luchas, de vuestras esperanzas y de vuestras perspectivas. He vivido bastante tiempo entre vosotros, de modo que estoy bien informado de vuestras condiciones de vida; he prestado la mayor atencin a fin de conocerlas bien; he estudiado los diferentes documentos, oficiales y no oficiales, que me ha sido posible obtener; este procedimiento no me ha satisfecho enteramente; no es solamente un conocimiento abstracto de mi asunto lo que me importaba, yo quera veros en vuestros hogares, observaros en vuestra existencia cotidiana, hablaros de vuestras condiciones de vida y de vuestros sufrimientos, ser testigo de vuestras luchas contra el poder social y poltico de vuestros opresores (Federico Engels, La situacin de la clase obrera en Inglaterra, Introduccin) Y si el proletariado, en general, tiene necesidad de enterarse de los grandes aspectos de la crisis mundial, esta necesidad es an mayor en aquella parte del proletariado, socialista, laborista, sindicalista o libertaria que constituye su vanguardia; en aquella parte del proletariado ms combativa y consciente, ms luchadora y preparada; en aquella parte del proletariado encargada de la direccin de las grandes acciones proletarias; en aquella parte del proletariado a la que toca el rol histrico de representar el proletariado peruano en el presente instante social; en aquella parte del proletariado, en una palabra, que cualquiera que sea su credo particular, tiene conciencia de clase, tiene conciencia revolucionaria. Yo dedico, sobre todo, mis disertaciones, a esta vanguardia del proletariado peruano. Nadie ms que los grupos proletarios de vanguardia necesitan estudiar la crisis mundial. Yo no tengo la pretensin de venir a esta tribuna libre de una universidad libre a ensearles la historia de esa crisis mundial; yo la estudio con vosotros. Yo no tengo en este estudio sino el mrito modestsimo de aportar a l las observaciones personales de tres y medio ao de vida europea, o sea de los tres y medio aos culminantes de la crisis, y los ecos del pensamiento europeo contemporneo. (J.C. Maritegui, Historia de la crisis mundial, pg. 18)

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 6

    Marx y Engels, grandes representantes del proletariado internacional. Escultura en el centro de Berln, capital de Alemania.

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 7

    II. Objetivo del estudio, disparar al blanco. Anlisis concreto de la situacin concreta. Se estudia para resolver problemas y cumplir tareas. Por lo tanto, en nuestro Partido hay dos formas de subjetivismo: el dogmatismo y el empirismo. Cada uno de stos ve slo una parte y no el todo. Si no tenemos cuidado, si no comprendemos que esta unilateralidad es un defecto ni hacemos todos los esfuerzos por corregirlo, ser fcil que tomemos un camino equivocado. De estas dos formas de subjetivismo, sin embargo, es el dogmatismo el que en la actualidad constituye un mayor peligro para nuestro Partido. Pues los dogmticos pueden tomar fcilmente el disfraz de marxistas para asombrar, cautivar y poner a su servicio a los cuadros con un pasado obrero o campesino, para quienes es difcil descubrirlos; tambin pueden asombrar y cautivar a la juventud ingenua e inexperta. Si superamos el dogmatismo, los cuadros con conocimientos librescos se unirn de buen grado a aquellos que poseen experiencia prctica, y estarn dispuestos a estudiar los fenmenos reales; entonces surgirn muchos buenos trabajadores que integren la teora con la experiencia, as como tericos autnticos. Si superamos el dogmatismo, los camaradas con experiencia prctica tendrn buenos maestros que les ayuden a elevar sus experiencias al nivel de la teora y de este modo evitarn caer en el error de empirismo. Adems de las ideas confusas sobre lo que es un terico y un intelectual, entre muchos camaradas hay otra idea confusa acerca de lo que significa "unir la teora con la prctica", frase que siempre tienen a flor de labios: Hablan todos los das de "unir", pero lo que en realidad quieren decir es "separar", porque no hacen ningn esfuerzo por unir. Cmo unir la teora marxista-leninista con la prctica de la revolucin china? Dicho en lenguaje corriente, esto se logra "disparando la flecha al blanco". Cuando uno dispara una flecha, tiene que apuntarla a un blanco. La flecha es al blanco lo que el marxismo-leninismo a la revolucin china. Algunos camaradas, sin embargo, "disparan sus flechas sin tener un blanco" o tiran al azar; es fcil que esas personas perjudiquen a la revolucin. Otros no hacen ms que darle vueltas y ms vueltas a la flecha que tienen en sus manos, exclamando sin cesar: "Qu flecha tan bonita! Qu flecha tan bonita!", pero nunca quieren dispararla. Estos son aficionados a las antigedades, y casi no tienen nada que ver con la revolucin. La flecha del marxismo-leninismo tiene que ser disparada al blanco de la revolucin china. Si este punto no es aclarado, el nivel terico de nuestro Partido nunca se elevar y la revolucin china jams triunfar.

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 8

    III. Mtodo de estudio. Tericos e intelectuales proletarios.

    Marx y Engels, y todos los grandes marxistas, participaron en la lucha de clases de su tiempo. De ah que fueran perseguidos y deportados.

    Qu son, pues, conocimientos relativamente completos? Todo conocimiento ms o menos completo se forma en dos etapas: la primera, el conocimiento sensorial, y la segunda, el conocimiento racional, que es una etapa superior de desarrollo del primero. Qu tipo de conocimientos son los adquiridos por los estudiantes en los libros? Suponiendo que todos sus conocimientos fueran verdaderos, no son, sin embargo,

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 9

    conocimientos conseguidos por medio de su experiencia personal, sino teoras establecidas por sus antecesores, fruto de la sntesis de las experiencias de stos en la lucha por la produccin y en la lucha de clases. Por supuesto, es absolutamente necesario que los estudiantes adquieran este tipo de conocimientos; no obstante, debe entenderse que, en cuanto a ellos concierne, estos conocimientos son en cierto sentido unilaterales, algo que ha sido comprobado por otros, y no por ellos mismos. Lo ms importante es saber aplicar estos conocimientos en la vida y en la prctica. Por eso, aconsejo a aquellos que tienen slo conocimientos librescos pero que todava no han tenido contacto con la prctica o han adquirido poca experiencia en ella, que se den cuenta de sus propias deficiencias y sean un poco ms modestos. Cmo hacer que se conviertan en autnticos intelectuales aquellos que slo poseen conocimientos librescos? La nica manera es que participen en el trabajo prctico y se conviertan en trabajadores prcticos, y que quienes se ocupan del trabajo terico estudien problemas prcticos de importancia. As se lograr este objetivo. Lo dicho no dejar de enfadar a algunos, que dirn: "Segn su explicacin, ni el propio Marx puede ser considerado como intelectual." A eso responder: Estn en un error. Marx no slo tom parte en la prctica del movimiento revolucionario, sino que tambin cre la teora de la revolucin. Partiendo del ms simple elemento del capitalismo, la mercanca, hizo un estudio minucioso de la estructura econmica de la sociedad capitalista. Millones y millones de personas vean y utilizaban a diario la mercanca, pero estaban tan acostumbradas a ella que no se daban cuenta de lo que representaba. Slo Marx la estudi cientficamente. Hizo un enorme trabajo de investigacin de su transformacin real y dedujo una teora completamente cientfica de algo que exista universalmente. Estudi la naturaleza, la historia y la revolucin proletaria y cre as el materialismo dialctico, el materialismo histrico y la teora de la revolucin proletaria. De este modo, Marx lleg a ser el intelectual ms completo; representa la cima de la sabidura humana, y es fundamental la diferencia que existe entre l y aquellos que slo tienen conocimientos librescos. Marx realiz investigaciones y estudios detallados en medio de la lucha prctica, formul generalizaciones y luego comprob sus conclusiones llevndolas a la lucha prctica. He ah lo que llamamos trabajo terico. Nuestro Partido necesita que muchos camaradas aprendan a realizar esta labor. Ahora tenemos en nuestro Partido un gran nmero de camaradas que pueden aprender a hacer estudios tericos de este gnero, y la mayor parte son inteligentes y promisorios; debemos darles importancia. Pero ellos deben guiarse por los principios correctos y no repetir los errores del pasado. Tienen que desechar el dogmatismo y no quedarse en frases sacadas de los libros (Mao Tse-Tung)

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 10

    IV. Crisis mundial y defensa del marxismo

    El Amauta, Jos Carlos Maritegui. Aqu con obreros e intelectuales. El neo-revisionismo se limita a unas pocas superficiales observaciones empricas, que no aprehenden el curso mismo de la economa, ni explican el sentido de la crisis post-blica. Lo ms importante de la previsin marxista la concentracin capitalista- se ha realizado. Social-demcratas como Hilferding, a cuya tesis se muestra ms atento un poltico burgus como Caillaux (V. O va la France) que un teorizante socialista como Henri de Man, aportan su testimonio cientfico a la comportacin de este fenmeno. Qu valor tienen al lado del proceso de concentracin capitalista, que confiere el ms decisivo poder a las oligarquas financieras y a los trust industriales, los menudos y parciales reflujos de manera escrupulosa registrados por un revisionismo negativo, que no se cansa de rumiar mediocre e infatigablemente a Bernstein, tan superior, en forma evidente, como ciencia y como mente, a sus presuntos continuadores? En Alemania, acaba de acontecer algo en que deberan meditar con provecho los teorizantes empeados en negar la relacin de poder poltico y poder econmico. El Partido Populista (Deustche Volkspartei) castigado en las elecciones, no ha resultado, sin embargo,

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 11

    mnimamente disminuido en el momento de organizarse un nuevo ministerio. Ha parlamentado y negociado de potencia a potencia con el Partido Socialista, victorioso en los escrutinios. Su fuerza depende de su carcter de partido de la burguesa industrial y financiera; y no puede afectarla la prdida de algunos asientos en el Reichstag, ni an si la social-democracia los gana en proporcin triple (JCM, Defensa del marxismo) Yo participo de la opinin de los que creen que la humanidad vive un perodo revolucionario. Y estoy convencido del prximo ocaso de todas las tesis social-democrticas, de todas las tesis reformistas, de todas las tesis evolucionistas. Antes de la guerra, estas tesis eran explicables porque correspondan a condiciones histricas diferentes. El capitalismo estaba en su apogeo. La produccin era superabundante. El capitalismo poda permitirse el lujo de hacer sucesivas concesiones econmicas al proletariado. Y sus mrgenes de utilidad eran tales que fue posible la formacin de una numerosa clase media, de una numerosa pequea-burguesa que gozaba de un tenor de vida cmodo y confortable. El obrero europeo ganaba lo bastante para comer discretamente y en algunas naciones, como Inglaterra y Alemania, le era dado satisfacer algunas necesidades del espritu. No haba, pues, ambiente para la revolucin. Despus de la guerra, todo ha cambiado. La riqueza social europea ha sido en gran parte, destruida. El capitalismo, responsable de la guerra, necesita reconstruir esa riqueza a costa del proletariado. Y quiere, por tanto, que los socialistas colaboren en el gobierno, para fortalecer las instituciones democrticas; pero no para progresar en el camino de las realizaciones socialistas. Antes, los socialistas colaboraban para mejorar, paulatinamente, las condiciones de vida de los trabajadores. Ahora colaboraran para renunciar a toda conquista proletaria. La burguesa para reconstruir a Europa necesita que el proletariado se avenga a producir ms y consumir menos. Y el proletariado se resiste a una y otra cosa y se dice a s mismo que no vale la pena consolidar en el poder a una clase social culpable de la guerra y destinada, fatalmente, a conducir a la humanidad a una guerra ms cruenta todava. Las condiciones de una colaboracin de la burguesa con el proletariado son, por su naturaleza, tales que el colaboracionismo tiene, necesariamente, que perder, poco a poco su actual numeroso proselitismo. El capitalismo no puede hacer concesiones al socialismo. A los Estados europeos para reconstruirse les precisa un rgimen de rigurosa economa fiscal, el aumento de las horas de trabajo, la disminucin de los salarios, en una palabra, el

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 12

    restablecimiento de conceptos y de mtodos econmicos abolidos en homenaje a la voluntad proletaria. El proletariado no puede, lgicamente, consentir ese retroceso. No puede ni quiere consentirle. Toda posibilidad de reconstruccin de la economa capitalista est, pues, eliminada. Esta es la tragedia de la Europa actual. La reaccin va cancelando en los pases de Europa las concesiones econmicas hechas al socialismo; pero, mientras de un lado, esta poltica reaccionaria no puede ser lo suficientemente enrgica ni eficaz para restablecer la desangrada riqueza pblica, de otro lado, contra esta poltica reaccionaria, se prepara, lentamente, el frente nico del proletariado. Temerosa a la revolucin, la reaccin cancela, por esto, no slo las conquistas econmicas de las masas, sino que atenta tambin contras las conquistas polticas. Asistimos, as, en Italia a la dictadura fascista. Pero la burguesa socava y mina y hiere as de muerte a las instituciones democrticas. Y pierde toda su fuerza moral y todo su prestigio ideolgico (JCM, Historia de la crisis mundial, pgs. 22-23)

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 13

    V. Sectarismo y poltica de prximos y queridos.

    Hay otra cosa que se llama sectarismo. Cada localidad tiene sus intereses generales como localidad, cada pas tiene sus intereses generales como pas y lo mismo ocurre con el globo terrestre. Ahora no vamos a referirnos a lo que est fuera de la Tierra, pues todava no hay vas de comunicacin para all. Si un da se descubre que en Marte o Venus hay habitantes, abordaremos el problema de unirnos con ellos formando un frente nico. Ahora nos limitaremos a la cuestin de la unidad del Partido, en el pas y en el mundo entero. Nuestro principio es unirnos con todos aquellos que contribuyan en algo a la causa de la paz mundial y del progreso de la humanidad, sean quienes fueren, sean comunistas extranjeros o personalidades extranjeras no comunistas. Ante todo debemos unirnos con las decenas de Partidos Comunistas que existen en la Unin Sovitica. (Mao Tse-tung. dem.) Basta por hoy acerca de la lucha contra el subjetivismo, lucha que tiene por objeto rectificar el estilo de estudio en todo el Partido. Me detendr ahora en la cuestin del sectarismo. Gracias a que nuestro Partido se ha templado durante veinte aos, el sectarismo ya no domina en su seno. Sin embargo, an se encuentran supervivencias en las relaciones tanto internas como externas del Partido. Las tendencias sectarias en las relaciones internas conducen al exclusivismo respecto a camaradas del Partido y obstaculizan la unidad y cohesin internas de ste, mientras las tendencias sectarias en las relaciones externas llevan al exclusivismo respecto a los no comunistas y obstaculizan la tarea del Partido de unir a todo el pueblo. Slo extirpando estos dos males, podr nuestro Partido avanzar sin obstculos en su gran obra de conseguir la unidad de todos nuestros camaradas y de todo nuestro pueblo. Cules son los residuos del sectarismo en el seno del Partido? Principalmente los siguientes: Primero, la pretensin de "independizarse". Algunos camaradas slo ven los intereses parciales y no los generales; en todo momento destacan indebidamente aquellas secciones de trabajo de las cuales son responsables, y siempre tienden a supeditar los intereses generales a los parciales. No comprenden lo que significa el centralismo democrtico en el Partido, ni se dan cuenta de que el Partido Comunista necesita no slo democracia sino, sobre todo, centralismo. Olvidan que,

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 14

    dentro del centralismo democrtico, la minora debe subordinarse a la mayora, el nivel inferior al superior, la parte al todo, y todo el Partido al Comit Central. Chang Kuo-tao, por ejemplo, pretendi "independizarse" del Comit Central y termin por traicionar al Partido y convertirse en agente del Kuomintang. Aunque el sectarismo de que hablamos ahora no es tan particularmente grave, debemos prevenirlo y acabar con toda manifestacin de desunin. Debemos alentar a los camaradas a tener plenamente en cuenta los intereses del todo. Cada miembro del Partido, cada seccin de trabajo, cada palabra y cada accin deben tener como punto de partida los intereses de todo el Partido. No ser tolerada en absoluto ninguna violacin de este principio. (Mao Tse-tung)

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 15

    VI. Lucha contra el oportunismo y el revisionismo

    V. I. Lenin, en una extraordinaria escultura. Aqu aparece junto a Marx y Engels. La dialctica de la historia es tal, que el triunfo terico del marxismo obliga a los enemigos a disfrazarse de marxistas. El liberalismo internamente podrido, intenta renacer bajo la forma de oportunismo socialista. El perodo de preparacin de las fuerzas para las grandes batallas lo interpretan en el sentido de renuncia a esas batallas. El mejoramiento de la situacin de los esclavos para la lucha contra la esclavitud asalariada lo interpretan en el sentido de que los esclavos pueden vender por unos cntimos su derecho a la libertad. Se predica cobardemente la paz social (esto es la paz con los esclavistas), la renuncia a la lucha de clases, etc. Los oportunistas tienen muchos adeptos entre los parlamentarios socialistas, entre las diversas. del movimiento obrero y los intelectuales simpatizantes (Lenin. Vicisitudes histricas de la doctrina de Carlos Marx, 1913)

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 16

    Se suplanta la dialctica por el eclecticismo: es la actitud ms usual y ms generalizada ante el marxismo en la literatura socialdemcrata oficial de nuestros das. Estas suplantaciones no tienen, ciertamente, nada de nuevo; han podido observarse incluso en la historia de la filosofa clsica griega. Con la suplantacin del marxismo por el oportunismo, el eclecticismo, presentado como dialctica, engaa ms fcilmente a las masas, les da una aparente satisfaccin, parece tener en cuenta todos los aspectos del proceso, todas las tendencias del desarrollo, todas las influencias contradictorias, etc., cuando en realidad no da ninguna interpretacin completa y revolucionaria del proceso del desarrollo social (Lenin, El Estado y la revolucin, 1917) Cuando se habla de lucha contra el oportunismo, no hay que olvidar nunca un rasgo caracterstico de todo el oportunismo contemporneo en todos los terrenos: su carcter indefinido, difuso, inaprensible. El oportunista, por su misma naturaleza, esquiva siempre plantear los problemas de un modo preciso y definido, busca la resultante, se arrastra como una culebra entre puntos de vista que se excluyen mutuamente, esforzndose por estar de acuerdo con uno y otro, reduciendo sus discrepancias a pequeas enmiendas, a dudas, a buenos deseos inocentes, etc., etc. (Lenin, Un paso adelante, dos pasos atrs, 1904)

    En todo caso, estamos convencidos de que la experiencia en la revolucin y la contrarrevolucin en Rusia ha confirmado la correccin de la lucha de veinte aos de nuestro Partido contra el terrorismo como tctica. Pero no se debe olvidar que esta lucha se realiz en estrecho contacto con la lucha implacable contra el oportunismo, que tenda a rechazar todo empleo de la violencia por las clases oprimidas contra los opresores. Siempre hemos apoyado el uso de la violencia en la lucha de masas y en relacin con esa lucha (Lenin, 1916) Pero su (del revisionismo) rasgo tpico y caracterstico es darse al capricho del momento, inhabilidad para levantarse contra el estilo del da, escasa visin poltica y pusilanimidad. El oportunismo es el sacrificio de los intereses de largo plazo y sustanciales del Partido a sus intereses momentneos, pasajeros y secundarios.

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 17

    Una determinada elevacin de la actividad industrial, un relativo florecimiento del comercio; un ligero aliento del liberalismo burgus, y el oportunista comienza a gritar: no asusten a la burguesa, no la rehuyan, abandonen la fraseologa sobre la revolucin social! (Lenin, 1906) El complemento natural de las tendencias econmicas y polticas del revisionismo era su actitud ante la meta final del movimiento socialista. El objetivo final no es nada; el movimiento lo es todo; esta frase proverbial de Bernstein expresa la esencia del revisionismo mejor que muchas largas disertaciones. Determinar el comportamiento de un caso para otro, adaptarse a los acontecimientos del da, a los virajes de las minucias polticas, olvidar los intereses cardinales del proletariado y los rasgos fundamentales del rgimen capitalista, de toda la evolucin del capitalismo, sacrificar estos intereses cardinales en aras de las ventajas reales o supuestas del momento: esa es la poltica revisionista. Y de la misma esencia de esta poltica se deduce, con toda evidencia, que puede adoptar formas infinitamente diversas y que cada problema un poco nuevo, cada viraje un poco inesperado e imprevisto de los acontecimientos aunque este viraje slo altere la lnea fundamental del desarrollo en proporciones mnimas-, provocar siempre, inevitablemente, esta o la otra variedad del revisionismo (Lenin, Marxismo y revisionismo, 1903) No son pocas las veces en que la burguesa logra sus objetivos, durante cierto tiempo, por medio de una poltica liberal, que es, como observa con razn Pannekoek, una poltica ms astuta. Parte de los obreros, parte de los representantes se dejan engaar a veces por las aparentes concesiones. Los revisionistas declaran anticuada la doctrina de la lucha de clases o comienzan a aplicar una poltica que de hecho, significa una renuencia a la lucha de clases. Los zigzagues de la tctica burguesa originan un reforzamiento del revisionismo en el movimiento obrero y muchas veces provocan en el seno de ste discrepancias que suelen llevar a la escisin. (Lenin, 1910)

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 18

    El carcter relativamente pacfico del perodo comprendido entre 1871 y 1914 [45 aos] ha alimentado el oportunismo, primero como estado de nimo, luego como tendencia y, finalmente, como grupo o sector de la burocracia obrera y compaeros de ruta pequeoburgueses. Slo pudieron tales elementos subordinar al movimiento obrero reconociendo de palabra los objetivos revolucionarios y la tctica revolucionaria. Slo pudieron conquistar la confianza de las masas jurando que todo el trabajo pacfico no era sino una preparacin para la revolucin proletaria. Esa contradiccin era un tumor que alguna vez habra de reventar y ha reventado. Ahora toda la cuestin consiste en decidir si, como hace Kautsky y Cia, hay que intentar introducir nuevamente ese pus en el organismo, en aras de la unificacin (con el pus), o si, para contribuir a la completa curacin del organismo del movimiento obrero, es menester eliminar toda esa podre del modo ms rpido y cuidadoso, aunque ese proceso produzca temporalmente agudo dolor (Lenin, 1916)

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 19

    VII. Burocratismo e indolencia ante el padecimiento de las masas

    Mao Tse-tung, en un cuadro de la Gran Revolucin Cultural Proletaria.

    Algunos cuadros dirigentes ignoran los sufrimientos de las masas populares, desconocen la situacin de los organismos de abajo que se hallan algo alejados de sus despachos, y no tienen noticia de que, entre los cuadros a nivel distrital, territorial y cantonal, existen elementos malvados, culpables de numerosos casos de autoritarismo y violacin de la ley y de la disciplina; o, aunque conocen algo de esos elementos y casos, se muestran insensibles, no se indignan ante ellos ni los consideran una cosa grave y, en consecuencia, no toman medidas enrgicas para apoyar a las personas rectas y castigar a los elementos malvados, estimular las acciones encomiables y terminar con las fechoras. Veamos por ejemplo, el tratamiento que se da a las cartas procedentes de las masas. Segn los informes recibidos, el gobierno popular de cierta provincia tiene amontonadas ms de setenta mil cartas sin haber abordado los problemas que planteamos. El burocratismo y el autoritarismo no slo hasta ahora han sido un grave mal para nuestro Partido y nuestro gobierno, sino que lo seguirn siendo durante largo tiempo. Visto el problema desde el ngulo del origen social, se trata de un reflejo en

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 20

    el Partido y el gobierno de los vestigios del estilo de trabajo reaccionario (estilo antipopular, kuomintanista) de las clases gobernantes reaccionarias en su relacin con el pueblo. Vistos desde el ngulo del trabajo de direccin y los mtodos de direccin de nuestros organismos partidarios y gubernamentales, el problema es que la asignacin de las tareas no va acompaada de una explicacin de las pautas y lmites de cada poltica ni de lo que debe ser el estilo de trabajo, o sea, que a los cuadros se los niveles medio e inferior se les asigna tareas sin darles, al mismo tiempo, reiteradas indicaciones acerca de las pautas y lmites de cada poltica ni del correcto estilo de trabajo. (Mao Tse-tung, Contra el burocratismo, el autoritarismo y la violacin de la Ley y la disciplina, 1953) Si algunos, cansados de vivir, practican el burocratismo, reprendiendo a las masas cada vez que las ven, sin dirigirles nunca una palabra cariosa ni resolver sus problemas, sern indudablemente, derribados. En la actualidad existe este peligro. Dado el caso de que alguien se divorcie de las masas y se niegue a solucionar sus problemas, los campesinos lo golpearn con sus prtigas, los obreros los echarn a las calles y los estudiantes armarn alborotos. Cada vez que ocurra algo as, lo primero que se debe hacer es afirmar que se trata de una cosa buena. Es as como yo veo esto. Hace unos pocos aos, se decidi construir un aeropuerto en cierto lugar de la provincia de Hunan. Pero, se oblig a los campesinos del lugar a mudarse, sin antes haberlos acomodado debidamente ni haberles explicado con claridad las razones. Los campesinos protestaron: Ni los mismos pjaros dejaran de lanzar unos chillidos si ustedes, armados de una vara, hurgaran y derribase sus nidos Tambin tu, Teng Siao-ping, tienes un nido; no lanzaras gritos si yo te lo destruyera? Entonces, las masas de all dispusieron tres cordones de defensa: el primero, formado por nios, el segundo por mujeres y el tercero, por hombres jvenes y de edad madura. Todos los agrimensores fueron expulsados y el problema termin con el triunfo de los campesinos. Posteriormente, gracias a que se le habl con buenas razones y se les acomod como es debido, aquellos accedieron a mudarse y el aeropuerto pudo construirse. No son pocos los hechos como ste. Ahora, hay quienes consideran que, estando el Poder en sus manos, pueden echarse a dormir sobre los laureles y hacer y deshacer a su antojo. Si las masas se levantan contra ellos y los golpean con piedras y azadas, mi opinin ser que lo tienen merecido y lo aplaudir con todas mis ganas. (Mao Tse-tung)

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 21

    VIII. Estilo de clich para intimidar a la gente.

    Mao Tse-tung se caracteriz por su profundo respeto al pueblo chino y al debate de ideas. No por la intimidacin y la amenaza como mtodos de discusin. Tambin por eso las masas le guardan un gran cario.

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 22

    El segundo cargo contra el estilo de clich del Partido es que se da nfulas con miras a intimidar a la gente. Algunos artculos escritos en ese estilo no slo son largos y vacos, sino que se muestran presuntuosos para intimidar a la gente, lo que lleva en s un veneno de la peor especie. Escribir artculos largos y vacos puede calificarse de un acto infantil, pero darse nfulas con la intencin de intimidar a la gente es ms que eso: es prcticamente una canallada. Criticando a personas de este tipo, Lu Sin dijo: "Insultar e intimidar no es en modo alguno luchar."3 Lo que es cientfico jams teme a la crtica, porque la ciencia es verdad y no tiene miedo a la refutacin. Pero el subjetivismo y el sectarismo que se expresan en artculos y discursos en estilo de clich del Partido, tienen un miedo mortal a la refutacin; son de una gran cobarda, y por eso asumen una actitud presuntuosa para intimidar a la gente, calculando que con amenazas pueden reducirla al silencio y "volver triunfantes a la corte. La presuncin, lejos de reflejar la verdad, constituye un obstculo para ella. La verdad no asume una actitud presuntuosa para intimidar, sino que habla y acta con honestidad y sencillez. Antes, en los artculos y discursos de muchos camaradas solan aparecer dos expresiones: "lucha despiadada" y "golpes implacables. Estos procedimientos son totalmente necesarios para hacer frente al enemigo u oponerse a las ideologas enemigas, pero es errneo utilizarlos para tratar con nuestros propios camaradas. Sucede con frecuencia que en el Partido se infiltran enemigos e ideologas enemigas, como se seala en el punto 4 de la Conclusin del Compendio de Historia del Partido Comunista (bolchevique) de la URSS. Contra esa gente sin duda debemos recurrir a la lucha despiadada y a los golpes implacables, pues esos malvados usan estos mismos procedimientos contra el Partido; si los toleramos, iremos derecho a caer en sus trampas. Pero no debemos emplear estos medios para tratar con los camaradas que hayan cometido errores ocasionalmente, caso en el cual es necesario utilizar el mtodo de la crtica y la autocrtica, sealado en el punto 5 de la Conclusin de la obra citada. La razn por la cual en el pasado aquellos camaradas gritaban en favor de la "lucha despiadada" y los "golpes implacables" contra los camaradas que cometan errores ocasionalmente, es que, por un lado, no hacan ningn anlisis del blanco de su ataque, y por el otro, se daban nfulas para amedrentar a la gente. Esta tctica de intimidacin es inadmisible, no importa a quin le sea aplicada, porque es completamente ineficaz si se emplea contra el enemigo, y no puede sino causar perjuicio si se utiliza contra los propios camaradas. Es una tctica a la que suelen recurrir las clases explotadoras y los lumpemproletarios, pero el proletariado no la necesita. Para el proletariado, el arma ms afilada y eficaz no es otra que una seria y combativa actitud cientfica. El Partido Comunista no vive de la intimidacin, sino de la verdad del marxismo-leninismo, de la bsqueda de la verdad en los hechos, de la ciencia. Huelga decir que es infame la idea de alcanzar fama y buena posicin dndose nfulas. (Mao Tse-tung)

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 23

    IX. Autocrtica y crtica. La autocrtica de la vanguardia ante sus errores sirve para sacar lecciones y educar con ellas al proletariado y al pueblo.

    La actitud de un partido poltico ante sus errores es una de las pruebas importantes y ms fieles de la seriedad de ese partido y del cumplimiento efectivo de sus deberes hacia su clase y hacia las masas trabajadoras. Reconocer abiertamente los errores, poner al descubierto sus causas, analizar la situacin que los ha producido y examinar los medios de corregirlos; esto es lo que caracteriza a un partido serio, en esto es lo que consiste el cumplimiento de sus deberes, esto es, educar e instruir a la clase primero y despus a las masas. (V.I. Lenin) Pienso que es inadecuada toda idea que lo lleve a uno a echrselas de sabelotodo y omnipotente como Dios. As las cosas, qu actitud debemos tomar para con los camaradas que incurren en errores? Hacer anlisis y adoptar el mtodo dialctico y no el metafsico. Hubo un tiempo en que nuestro Partido se vio sumido en la metafsica el dogmatismo-, que anul por completo a todos aquellos que no agradaban a los dogmticos. Ms tarde, criticamos el dogmatismo y poco a poco fuimos aprendiendo algo ms de dialctica. El concepto fundamental de la dialctica es la unidad de los contrarios. Si se lo acepta, cmo se debe entonces tratar a los camaradas que han cometido errores? En primer lugar, luchar contra ellos a fin de liquidar completamente sus ideas errneas y, en segundo, ayudarles. O sea, primero, luchar y, segundo, ayudar. Partiendo de la buena voluntad, ayudarles a corregir sus errores de modo que tengan una salida (Mao Tse-tung, Mtodo dialctico para la unidad interna del Partido, 1956) En un pas de democracia popular como el nuestro, no se debe incluir en la Constitucin artculos inadecuados como sos. No se trata aqu de que hayamos suprimido, por razones de modestia, artculos que debieran figurar en la Constitucin. En lo que a la ciencia se refiere, nada tienen que ver con ella ni la modestia ni la inmodestia. La elaboracin de una constitucin es un trabajo cientfico. No debemos creer en nada que no sea la ciencia, valga decir, no debemos

  • CITAS GUA PARA INICIO DE CAMPAA MARX 200 AOS IIEM

    Pgina | 24

    tener fe ciega en nada. Trtese de quin se trate, de un chino o de un extranjero, de una persona muerta o de una viva, lo correcto es correcto, y lo incorrecto, incorrecto; todo lo contrario a esto equivale a fe ciega. Hay que romper con ella. Antiguo o contemporneo, en lo que debemos creer es en lo correcto y no en lo incorrecto; no slo no creer en lo incorrecto, sino criticarlo. Esta s es una actitud cientfica. (Mao Tse-tung, Sobre el proyecto de Constitucin, junio 1954) El Congreso debe continuar fomentando las bellas tradiciones de nuestro Partido en lo ideolgico y en el estilo de trabajo, combatir eficazmente el subjetivismo y el sectarismo y luchar contra el burocratismo. Hoy no me detendr en el burocratismo, sino en el subjetivismo y el sectarismo. Estas dos especies, una vez barridas, vuelven a aparecer y, al reaparecer, hay que barrerlas de nuevo. Lo que se llama cometer un error es precisamente errar en lo subjetivo, significa que el pensamiento est fuera de lugar. Nada o muy poco se ha hablado de este problema en los numerosos artculos de crtica a los errores de Stalin. Por qu Stalin incurri en errores? Porque, frente a algunos problemas, lo subjetivo en l no concordaba con la realidad objetiva. Ahora, en nuestro trabajo se dan a menudo cosas semejantes. El subjetivismo supone partir, no de la realidad objetiva ni de las posibilidades reales, sino del deseo subjetivo. Lo que se estipule, lo que se consigne en los documentos de nuestro congreso debe, dentro de lo posible, corresponder o aproximarse a la realidad de China. Al mismo tiempo, debemos criticar, a la luz de nuestras experiencias anteriores, los conceptos reidos con la realidad, criticar y golpear el subjetivismo. Esta tarea ya la planteamos hace varios aos. Lo que combatimos hoy es el subjetivismo en la revolucin y la construccin socialistas. En el pasado, durante la revolucin democrtica, sufrimos por largo tiempo las consecuencias del subjetivismo y lo pagamos caro, con la prdida de casi todas las bases de apoyo y de ms del 90% de las fuerzas revolucionarias. No fue sino en ese momento cuando empezamos a tomar conciencia. Este problema slo se esclareci a travs de la campaa de rectificacin de Yenn, en la que acentuamos la necesidad de investigar y estudiar y de basarse en la realidad (Mao Tse-tung, Fortalecer la unidad del partido, continuar sus tradiciones, 1956)

    INICIO DE GRAN CAMPAAEstudiar marxismo para la revolucinI. Volcarse a la clase obrera, proletarizarse; educar a la clase y al pueblo en la teora marxista y la lucha de clases. Jams olvidarse de la lucha de clases.II. Objetivo del estudio, disparar al blanco. Anlisis concreto de la situacin concreta. Se estudia para resolver problemas y cumplir tareas.III. Mtodo de estudio. Tericos e intelectuales proletarios.IV. Crisis mundial y defensa del marxismoV. Sectarismo y poltica de prximos y queridos.VI. Lucha contra el oportunismo y el revisionismoVII. Burocratismo e indolencia ante el padecimiento de las masasVIII. Estilo de clich para intimidar a la gente.IX. Autocrtica y crtica. La autocrtica de la vanguardia ante sus errores sirve para sacar lecciones y educar con ellas al proletariado y al pueblo.