Sujeto en la Conciencia y de la misma

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  • 7/23/2019 Sujeto en la Conciencia y de la misma

    1/7

    U n

    1 ;

    p1

    1

    4 .

    SUJETO DE LA CONCIENCIA,

    SUJETO DEL DISCURSO, SUJETO*

    Es el ser social el que determina la concien-

    cia y no la conciencia la que determina el

    ser social.

    KARL MARX

    Mi exposicin es el resultado de la interpenetra-

    cin de conceptos que provienen principalmente

    de dos fuentes. Por una parte, recurrir a las

    posiciones tericas que he desarrollado con algu-

    nos colaboradores en

    Psicologa: ideologa y cien-

    cia

    publicada hace ya tres aos. Por otra, recu-

    rrir a los que puedo aportar a aquellas tesis

    gracias al reciente desarrollo del materialismo his-

    trico, la lingstica y el psicoanlisis, lcidamente

    ubicados y abordados en el fecundo texto de Mi-

    chel Pcheux,

    Les vrites de La Palice

    [Las ver-

    dades de Perogrullo].

    En

    Psicologa: ideologa y ciencia

    decamos que la

    conciencia, como versin laica del alma (psique),

    fue el primer objeto de estudio de la psicologa y

    le fijbamos una fecha arbitraria de nacimiento, a

    partir del pienso, luego existo cartesiano. Sea-

    lbamos la variedad y la ambigedad de las defi-

    niciones propuestas para este objeto y la referencia

    final a una experiencia ms o menos inasible, ms

    o menos inefable, que cada quien tiene de s mis-

    mo_y de lo que le rodea, y que cada uno supone

    con

    .

    caractensfiarsimilares en su prjimo. Mos-

    trbamos la oposicin tradicional entre las tesis

    empinstas de la conciencia, que avalan su estudio

    = Este trabajo fue ledo en un simposio sobre La con-

    ciencia organizado por la Asociacin Mexicana de

    Epistemologa en el Instituto Nacional de Neurologa,

    en febrero de 1978. Posteriormente fue publicado en un

    volumen titulado

    La conciencia: el problema mente-ce-

    rebro

    Mxico, Editorial Trillas, 1979, pp. 227-234 .

    [69]

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    P,p 69-19

  • 7/23/2019 Sujeto en la Conciencia y de la misma

    2/7

    70

    ACIA UNA TEORA DEL SUJE

    de laboratorio por el mtodo

    e la introspecc

    apto para alcanzar los contenidos de la cona

    cia y las funciones de la mente , y las posicion

    intuicionistas idealistas, que _acentan el cara

    intencional de la conciencia, su condicin de a

    a travs del cual el sujeto se manifiesta en y

    da un mundo. Tal vez no destacbamos con s

    ciente claridad y desde un principio que es

    t

    posiciones la conciencia como contenido y la co

    ciencia como acto, coinciden en lo fundamental:

    afirmacin de que al menos el eje y el cen

    de 14 vida psquica del sujeto, sino _toda, pasa-

    ( la conciencia. Coincidencia que deslumbra cuand

    se oye lo que no se ha dicho: que esta concienci

    es siempre conciencia de un sujeto producido hi

    tricamente en

    l seno de una

    ormacin soci

    dada

    na cierta coyuntura histrica, ideol

    gica poltica

    econmicosocial, y

    ue

    1E- Can

    ci ~o mejor dicho_para no sustancializarla,

    fenmenos

    conscientes)__no_podra

    er

    margen o independientemente del proceso de con

    tittiadri de ese sujeto, de quien los fenoinen

    conscientes (Inflan parte.

    Nuestra exposicin continuaba con el_anlisi_s

    eljessoutre-ito ck_la nocin de conciencia.Au

    se iniciara en 1900 con la publicacin de

    La

    f i n t

    pretacin de los sueos

    Y es que

    en este

    a mp

    desde el punto de vista terico, nuestro siglo s

    ha caracterizado por el cuestionamiento cada

    ms radical de la nocin de conciencia, enfre

    tando ese par de opuestos solidarios que son

    empirismo y el trascendentalismo de la concienci

    (roguemos por su eterno descanso en la histori

    de la filosofa).

    En la actualidad, la conciencia ha dejado de se

    I objetaste Ja psicologa (pero, es que la psicolo

    tiene objeto?) y, lejos de estar en el centro de

    vida psquica, lejos de ser el punto de partid

    para explicar a travs de ella la vida del sujet

    ( pienso, luego existo ) es,

    or el contrario

    efecto._La conciencia es, entonces,

    -.4

    6 que a p

    tir de la existencia del sujeto corno 'integrado e

    RUJETO DE LA CONCIENCIA

    1

    una formacin sociohistrica, puede llegar a en-

    tnderse en su proceso de determinacin, tanto si

    se le considera desde la perspectiva empirista de

    la psicologa tradicional, desde la perspectiva tras-

    ceridentalista de la fenomenologa o desde la pers-

    pectiva reduccionista del emergentismo fisicista.

    O es que hay todava quien necesita que se le

    recuerde que es el ser social el que determina

    la conciencia y no al revs?

    Por cierto, la tan trada y llevada frase de Marx

    que he elegido como epgrafe, tan apropiada para

    esta circunstancia, no significa que esa conciencia

    determinada por el ser social surja de l nada. La

    actividad biolgica de las estructuras nerviosas su-

    periores, sobra decirlo, constituye el imprescindi-

    ble soporte para que pueda haber fenmenos cons-

    cientes. Pero s es necesario decir que todo el

    saber que ptieda alcanzarse sobre el funcionamieriiil

    to nervioso, con todo lo til y con todo lo nece

    s

    sa-

    rio que es ese saber en el campo de la biologa, no

    ha

    -

    ce y no puede hacer avanzar el conocimiento

    de Interrtrrifinacton

    de la conciencia. Pude res-

    ponder a la pregunta del cmo se producen estos

    fenmenos y cmo pueden ser modificados, es de-

    cir de los

    presupuestos

    de la. actividad y del mo-

    vimiento de las representaciones. Pero nada Duele_ (\

    decire

    _la motivacin_y la organizacin de tales -11

    representaciones.

    Puesto que la coyuntura de este simposio parece

    exigirlo, me permitir una analoga mecnica: entre

    el cerebro y las representaciones del sujeto expre-

    sadas como discurso existe la misma relacin que

    hay entrea

    rara cinematogrfica _y_ _a pelcula

    fl

    ilmada7Z0uerriralguterehTendeia produccin

    de

    -

    T.Tra pelcula a partir del estudio de la cmara

    empleada

    y

    de su actividad? Arriesgara una luxa-

    cin de los hemisferios pensando si la cmara

    produce

    la pelcula, si el proyector

    produce

    los

    movimientos de la cmara, si se puede

    reducir

    la

    comprensin de la pelcula al funcionamiento de

    la cmara, si la pelcula

    emerge

    de la cmara, si

    hay un

    paralelismo

    entre cmara y pelcula, si la

  • 7/23/2019 Sujeto en la Conciencia y de la misma

    3/7

    72

    ACIA UNA TEORA DEL SUJETO

    pelcula es un

    epifenmeno

    de la cmara o s es

    inmanente a

    su funcionamiento, o bien, si deben

    comprenderse

    monsticamente

    como una sola cosa

    o

    dualsticamente

    como dos cosas distintas, etc.

    Discusin intil y archivada. Escuchndola, el pen-

    sador mnimamente advertido por la 'dialctica

    materialista se da cuenta de qu se trata: de eludir

    y de escamotear la historia. La discusin entre los

    partidarios de la cmara y los partidarios de la

    pelcula, entre

    los fans

    del cuerpo y los

    fans

    de la

    mente y los

    fans de

    la sntesis cuerpo-mente, tiende

    a obturar, a escotomizar el hecho de que, dejando

    de lado el que sin cmara

    no

    hay pelcula y que

    sin cuerpo no hay fenmenos conscientes,

    es l

    historia

    el proceso que

    tiene

    lugar en una forma-

    cin social, la que determina que sea sa y no otra

    la pelcula producida, que sea se y no otro el

    funcionamiento requerido de la cmara para pro

    ducir esa pelcula. Es ese tercer trmino, const

    Mido por la formacin sedal y los procesos bis

    tricos que en ella tienen lugar, el que determina

    y pone en accin a los otros dos. Y el que se oculta

    tras un debate donde lo falso no

    est en

    las res-

    puestas sino en los trminos de la pregunta, hoy

    ociosa, acerca del cuerpo y la mente.

    Pero el estudio de la conciencia como efecto no

    slo debe partir de la presuposicin epistemidogic

    de la actividad biolgica de

    aS

    ltraturas ner

    stpTt -

    mi:-

    C

    Hay un problema terico

    -

    de so-

    lucin ms difcil, que es el siguiente: as como

    es imposible concebir

    os fenmenos con

    cebir

    iiirarebro, es tambin ime concebir

    o

    consciente humano sin la integracin del ittat

    un sistema lingstico que ordena para cl el mun

    do y su pereepein as decir que existir, _exist

    como hombre, si nifica

    xistir en un mundo don

    los o te os no tienen existencia natural sino,stu

    i son propuestos por la cultura, en y a travs de

    lenguals

    del sistema de la lengua. Por_tanto

    conciencia determinada por el ser social presup

    qe tan-t

    M i _

    t

    ra

    -

    xistencia

    e un sistema de,

    Sin los cuales no podra haber fenmenosconseie

    SUJETO DE LA CONCIENCIA

    3

    tes humanos. De esta manera, y pasando desde la

    comprobacin emprica a un punto de vista gno-

    seolgico, el anlisis de la determinacin de tales

    fenmenos conscientes humanos presupone el saber

    de la ciencia lingstica. (El problema terico

    que

    no porrnCs sino dejar planteado es el de la me-

    dida en que esta estructura del sistema de la lengua

    impone sus leyes a los [procesos conscientes, inci-

    diendo de alguna manera en_ su curso y en sus

    caraeterfs ticas.)

    El hecho es que los fenmenos conscientes no

    pueden tener existencia empirica_sino

    --j

    -

    rfar-

    m a "d

    --

    irciaciones eTtre representacionei

    --

    -

    labia. Sir existenciaes una existencia de la-

    gaje y no puede abordrsele sino a partir_de su

    obTeTWacin como discurso. Y

    g

    discurso es

    siempre discurso de un silicio, lo que nos remite

    ineluctablement del sujeto de la conciencia , del

    sujet de esa abstraccin nacional, efecto del ser

    social, a la cuestin del sujeto del discurso como

    corpus

    concreto, a partir del cual podremos abor-

    dar al sujeto que ya no ser el sujeto de la con-

    ciencia ni tampoco el sujeto del discurso sino el

    sujeto a sec;s en toda su complejidad que

    hace

    .de sus fenmenos conscientes y de lo_que dice en

    su discurso aspectos meramente parciales, porcio-

    nes flotantes del iceberg de una estructura com-

    pleja, donde lo ineonsciente y lo no dicho de su

    discurso aparecen como condicionantes v delimi.

    tadores de lo consciente_y

    de

    lo s dicho.

    As, el problema que se plantea es el de la im-

    prescindible conceptualizacin del sujeto en sus

    determinaciones. Obviamente, esta teora del suje

    to no puede hacerse desde lo consciente, desde el

    discurso y desde la representacin que el sujeto

    tiene

    de

    s mismo. Contra las..p.sie_ologaL_ todas

    ellas subjetivistas, es necesario constituir una teo-

    ra descentrada y descentradora de la subjetividad.

    Unlas...,,satutkaLe la subjetividad (P-

    cheox), do a n

    'e t

    zdsasas

    y

    s

    I

    discursoaarezean

    corno

    estructurados

    COMO tia-

    i

    it

  • 7/23/2019 Sujeto en la Conciencia y de la misma

    4/7

    74

    to enounicos

    la

    naltq.

    Es el momento de volver a nuestras tesis de

    Psicologa: ideologa

    y

    ciencia-

    Plantebamos all

    que los procesos sociales e histricos que tenan

    lugar en determinada formacin social, dominada

    por un cierto modo de produccin y con un cierto

    desarrollo de las fuerzas de produccin, emitan

    un requerimiento de sujetos que deban integrarse

    a dicha estructura social para llevar a cabo esos

    procesos (por ejemplo, el trabajo, la- guerra, la

    educacin). Hacamos notar que los procesos so-

    ciales, procesos sin sujeto, creaban los lugares don-

    de todos los sujetos habran de inscribirse y que

    ese requerimiento exiga la produccin (social) de

    los sujetos aptos, es decir con el adecuado sistema

    de representaciones (conciencia) y de comporta

    -

    mientos (conducta); de los sujetos ideolgicos, ca

    paces de ubicarse en el lugar de sujeto existente.

    Para ello era necesario un trabajo de constitucin

    del sujeto a partir de esa realidad emprica, ms

    mtica que biolgica, que es el individuo humano

    o, con mayor propiedad, el sujeto-soporte de la

    ideologa. Althusser ha establecido que la ideolo-

    ga finte ela a los individuos como suietos y que

    esta interpelacin es onstitu ente del sitc1

    1

    efecto ieo loa elemental, a parlisdelacal podr

    hacerse posible c

    efectlide_olgico

    Todo modo de produccin exige la produccin de los

    sujetos capaces de producir en ese modo de pro-

    duccin. Tesis_fundamental: elSllega

    serlo por unas experiencias singulares ni por su

    clesrrollraliribirrfciTiiilC-Tamatfuracin neer

    lgica nipor eh Zeiltiki-di-lina libertacreseneial

    sino ue est ~atila como tal a artr de re

    1

    querinuen os emitidos or l

    a tructuraaciti,

    ejecuta os or las insti - i+

    -

    Ar 1. aparato

    ideolgIcosi11

    e1

    e ado,_ziencio los fundamentales

    el modo capitalista de produccin la famili

    educutinlla reli '

    mas,

    ileinoSansl. al sujettleolticco ubicad

    SUJETO DE LA CONCIENCIA

    5

    en su lugar correspondiente y ms o menos adap-

    tado a l. Este sujeto ideolgico se expresa a travs

    de una cantidad prcticamente infinita de propo-

    n-

    iones, puestas gramaticalmente en primera per-

    sona, tanto del singular como del plural, que

    expresan la relacin imaginaria que l mantiene

    con sus condiciones reales de existencia. A este

    conjunto de afirmaciones subjetivas lo designba-

    mos con el nombre de ideologa de sujeto, me-

    diante la cual se expresa la identificacin_ o en

    su caso, la contraidentificacin del sujeto con el

    lugar a l

    -

    asignado en la estructura sociohistrica.

    Voy a permitirme en este momento una breve

    digresin. La falacia mayor del conductismo con-

    siste en postular a la conducta como resultado

    de una interaccin organismo-medio,, que se ex-

    presara constantemente a travs del par estmulo-

    respuesta. La evidencia de ambos pares se presenta

    como indiscutible, pero lo que se deja de lado, el

    verdadero secreto de este par organismo-medio, es

    que dicho organismo, cuando del hombre se trata,

    es un ser histrico producido no por un medio

    natural sino por cierta organizacin social huma-

    na. Tal organizacin social es estructurante de los

    sujetos humanos y de sus comportamientos. Por

    tanto, lat

    s_viclencia.iiel ,Par_organismo-medio es

    ocultamiento del yroceso a travs del cual se rea-

    lizan los procesos sociales. La_zejacin_eitieriordn-

    terior no es, como se plantea siempre, una relacin

    de oposicin sino una relacin de untinuidad

    segn

    l

    modero

    de la cinta de Moebius. Es la

    7

    sociedad con s

    determinacin en ltima instancia

    por lo econmico la que acta a travs de las con-

    ductas (y de los fenmenos conscientes) del sujeto

    que ella misma ha producido.

    Esta digresin es pertinente ya que as sucede

    tambin con el discurso en primera persona, tanto

    del singular como del plural. La ideologa de

    la

    Conciencia--y tambin la ideoloa ft

    gSen_da

    Ihrfstica suponen que el sujeto es fuente 37_9step

    4r iscurso citse

    suponen_

    es autnomo .37_que_p_u_ecie

    .

    0 3 1

    -

    Pre

    sar

    se recurriendo, a la infinita variabilida'a

    HACIA UNA TEORA DEL SUJETO

    ue han de ser trascen

    or

  • 7/23/2019 Sujeto en la Conciencia y de la misma

    5/7

    76

    ACIA UNA TEORA DEL. SUJETO

    moraishfolfalskica

    sintctica

    y sem ntica que

    el

    sistema de la lengua

    pone a su disposicin. Aqu,

    el.

    el liar

    _~p_Iablant,

    115Trna

    lingun

    tico, se

    produceelj

    0 _

    que ea, el

    par

    organis~dio Al noue

    5agade egari

    a

    des

    roceso 'de con ' :

    del aldietp

    1

    e:. s

    osigions-ssQl-l

    - Itanaj, hecho

    de

    q,ue___Llaki

    A

    s

    jerlae est limitado

    en

    su

    decir_na___14z_

    dilliei ' y por lo no

    decade_stesu_insercin en 1

    sociedad humana zn general

    _y en esa_ forma

    solala_particular. Extremando un poco ms la

    cosas, pero sin incurrir en una inexactitud, ah

    .

    mara que no habla ' j e 1

    e hablado po

    1

    el

    lugar de suieto_ 1

    eo

    ggicg__que.

    avenido

    oct_iaH

    r- Y, sin embargo, desde una perspectiv

    cor.

    Stisi2155cica, habla. Perci

    hahla_loils

    de

    au

    o d

    .si c'

    - - - o l

    ia~, ese un punto de referencia al q

    aluda el maestro Xirau:

    Ese que est ah. e

    4,0 Sfrepte,

    baceIg_roismo que yo pero

    - s >

    revs que yo, soy yo. Habla desde esa

    esneenlaLdonde se reconoce _a al mismo y dond

    eso

    -era

    er reconocido qp

    t.

    r otro

    hu m ano as con'

    fue

    reconocido en los primeros meses

    de .s

    en _el momento de alcanzar la_integracin

    de

    sensil

    kones

    cinestsieas de_ su

    cuerpo fragmein

    _

    detla i

    nsue

    el espejo le

    (levuelve,

    de la e_o

    firma 1 que

    le da

    qu ien lo sostiene y_ del nom ,

    propio que le han puesto de

    una vez y para '

    pro

    en_ el =Mento

    en que naci,.

    As

    una

    ilnaun humana integrada en el e

    yac'

    l mlde reexistente de la

    mnincWo

    estan

    _pregnante

    perm ite identific

    a

    rse co

    m

    o o

    ante un_ t,

    reconoce corno t

    se

    ue lo con

    y

    _tsssa eri99imag

    _en del espejo d

    unno_eit.

    Est sntesis, qu e toda

    proposicin referida a

    fenmerm ea

    -

    ciente

    itEllye

    o

    presenta com o evidencia, com o fuen te de tosa

    dene a,

    s el elemento yo en el

    cual el

    se reconoce as mismo desconociendo_ su

    SUJETO DE LA CONCIENCIA

    7

    cin originaria. Este_Se'rmino yo, eje. va _en Des-

    cartes

    y siempre despus en la psicologa

    ele_la

    conciencia, opeaegflctra' (utili-

    zando la expresin de Paul Henry),

    como una

    evidencia 1:00

    istica sueignada por el uso que

    implica la irrupcin de otro discurso del discurso

    del

    -

    Otro en el discurso ima inariamente asu

    por

    -

    el sujeto como Bropio. es e ese punto

    privilegiado se lija con el resto de las

    representa-

    ciones preconscientes a

    disposicin

    del sjeto.

    Esto

    sque caras enza a los fenmenos

    -ons-

    cientes

    humanos. Slo el humano es un yo de dis-

    curso que pue de acceden

    -

    a la reversibilidad con

    un t

    plantendose ambos como eventualmente

    excluidos con relacin a u n

    l.

    Volviendo a la frase

    tan usada en este simposio para dirigirse a la

    conciencia, tengo un dolor , frase que se analiza

    siempre obviando la referencia al trmino

    yo como

    si se tratase de una mera experiencia de dolor,

    tal como puede padecerla un animal y olvidando

    que ese dolor expresado puede ser presagio de

    una grave enfermedad qu e se teme, com o respuesta

    a la ingratitud del amigo o como modo de man-

    tener a distancia a un invitado indeseable pero

    que, en todo caso, es incomprensible sin la refe-

    rencia al

    yo

    que as se expresa y al conjunto de

    sus circunstancias sociales.

    A bundando en e ste aspecto

    ej

    wieto

    que se re-

    conoce en el espejo y if,_ se reconoce a s mismo

    kel reconocimiento del ettraltumano es un su-

    bolque,

    como diee__Pcheux

    ha sido objeto de

    tilscurso ajeno y destinatario de ese discurso antes

    e que l pudiese, por su cuenta, hablar.

    Cuando

    sujeto llega a

    hipia_lo

    hace ya

    -

    desde una

    entificadn OibIdinal y jurdica) alcanzada

    con

    cierto

    ugar de sujeto y con un cierto signifi-

    nte, su nombre propio, que le fueron iinp_uffistos

    r la estructura familiar _(y_ _social) en la ue l,'

    en n

    000 no

    pregunta por a yo untad

    t aquituera de lugar habr de inch' sby_bn

    ber_o, s poer o

    pensar

    -

    in poerlo decir,

    gsJ

    5

    no decible sobre s mismo lo que constituir

  • 7/23/2019 Sujeto en la Conciencia y de la misma

    6/7

    SUJETO DE LA CONCIENCIA

    7

    cin originaria. Est; termino

    yo.

    eje. ya en Des-

    carteti siempre despus en la psicologa de la

    conciencia, opejsuni un credo

    utili-

    zando la expresin de Paul Henry), c292,q_ano

    evidencia line

    Wstica sancjonoda ,,pqr el uso que

    irrElTEE

    -Ta

    -

    Trru cin de otro discurso del discurso

    del tro, en el discurso imaginariamente asumido

    po r

    -

    el sujeto como ro lo. 'Y desde ese punto

    privilegiado se lig

    con e resto de las representa-

    ciones preconscientes a disposicio

    r

    l del sujeto.

    Esto es lo que caracteflifl 1Fis

    -

    enora

    nos cons-

    cientes humanos, Slo el humano es un

    yo

    de dis-

    curso que puede acceder a la reversibilidad con

    un

    t

    plantendose ambos como eventualmente

    xcluidos con relacin a un

    l.

    Volviendo a la frase

    tan usada en este simposio para dirigirse a la

    conciencia, tengo un dolor , frase que se analiza

    siempre obviando la referencia al trmino

    yo

    como

    SI se tratase de una mera experiencia de dolor,

    I como puede padecerla un animal y olvidando

    e ese dolor expresado puede ser presagio de

    grave enfermedad que se teme, como respuesta

    la ingratitud del amigo o como modo de man-

    r a distancia a un invitado indeseable pero

    , en todo caso, es incomprensible sin la refe-

    cia al

    yo

    que as se expresa y al conjunto de

    circunstancias sociales.

    undando en este aspecto eiajetqsie se

    se reconoce a s mismo

    econocimiento del otro_ humano es un su-

    ue, como dice ,Pcheux, ha sido objeto de

    o

    a'eno destinatario de ese discurso antes

    diese or su cuenta,_ hablar. Casando

    a hablor lo hace ya desde una

    clon

    libidinal y jurdica) alcanzada con

    o

    1 ar de s '

    on un cierto signifi-

    u nombre

    i ue le fueron finpuestos

    familiar (y socia e la qu l,

    areiinTaTior la voluntad

    lugar), habr

    ,

    e incluine_y_ sin

    ens

    oderlo decir. Es

    cible sobre s mismo lo que constituir

    76

    ACIA UNA TEORA DEL. SUJETO

    morfolgica, fonolitiea,tilctica y_ semntica que

    el sistema de la lengua pone

    s

    a su disposicin. Aqu,

    eelrjar_sujetoifill

    TMa lin f

    s.151192ie

    p

    no efecto id 16 ' sLue_ell_ejlpor

    ?

    orgoismitme-cliO. Al no cuestii

    ___.1 a-

    aaria

    .

    I

    \ C e

    sum

    -

    e e c y 1 t

    1 . . _

    1

    ;

    ll-

    .11'a g..1 e_

    ;

    g 1 . _

    1 dicls...yparip_ jwSge_su_inserejn en

    sociedad humazgp_seileial y_en esa forrpoc

    ra .

    te est lin n su decir_por__

    sogiaLaParticulor. Extremando un poco ms 1

    cosas, pero sin incurrir en una inexactitud, af

    , mara que el_no habla sici In.:,91,_ hablado P

    , el.SugaiL c

    _e_rj,e.to ic

    r_&-g-

    ig.P____que_l_

    n_

    VC.n

    ilo

    \___,Ioctipl:- Y, sin embargo, desde una perspecti

    conductistangjea, habla. Pero

    de

    au

    o d

    . - k _

    ,.B

    inarn,aLla, ese un punto de referencia al q

    aluda el maestro Xirau: Ese

    est ah'

    t) frente_mi2/_.L9L---

    e li,s_e_

    _l_Q- . .mismo qu e yo per

    1,s,-, revs 1-

    __SSY.21..._192-19.. Habla desde esa '

    eswr.ular--_daleslieS2noce a s

    _y

    ead

    ro humano as co

    fue reconocido en ins....iraPeies_de s

    a

    erLej__St_o de alcanfor lo. ..integracin d i

    sensaciones cu

    jestskasur:5u cuerpo [rapte, ...,

    de la ima,gee_SaPS.152-19-Teyqe_l, d

    fa

    :

    ir-

    niel& _que le da_quien_lo sostiene Lefel no

    pr2pi__ ave le 1

    ,.__lest

    ,tipa

    -

    vez y para

    pre._ en el _m_q_mento

    aci. As

    una itna et

    gLiniaisitegrslospel es

    I ,

    Z

    va_c_ja_1112.0--gDTIIdflustade la

    VI/ mat2.ukr-Qada-----4-11,...otto.

    Gestt_

    pre

    permite identificarse como uno ante un tu

    reconoce como

    t

    se

    .

    y qiaS_

    eonsaita el__

    elkirnagen del aspe

    i

    __12ik--15

    i .

    En sntesis, que toda prz).a9...sin referid

    fennmenb Tcnlcinte JiTc

    -

    tlye__nn_

    presenta con

    _A2_CIS

    eleia, como fuente de

    i dencia, quess_SLelS7rnento yo en el cual e

    se reconoce a si mismo desconocierigo_s

  • 7/23/2019 Sujeto en la Conciencia y de la misma

    7/7

    78

    ACIA UNA TEORA DEL SUJETO

    el

    aria que tan difcil

    de asir resulta para to o el que se acerca a la me-

    tapsicologa psicoanaltica. Esto reme

    n

    del ci

    cu

    sezi

    es,

    tin de que

    np

    t su'etado en e

    -

    del ro ue

    hbr

    .

    ue, arr ad.

    a

    --

    r14 - d eante su

    eseo no ue

    d

    ocer en su

    desar or

    er clseo

    o. e p antea aqui I

    cuesu n

    4,141,

    su'e

    ra a ent ea ena

    to

    de ego

    achastq,

    -t-nral

    Issiltigin y que, e

    no es

    consecuencia,susP Igto en el momento mismo

    enunciarla.

    No puedo extenderme como quisiera, en torno

    la tesis de la constitucin del individuara

    cora

    jeto por la ideologa a travs de los

    os id

    lgicos del estado y de la configuracin de st

    por la lucha de clases, as como de las condicio

    para su transformacin. S quiero hacer notar q

    la coyuntura ideolgica en un cierto espacio

    tiempo histricos determina un campo,

    iser

    erto es

    que puede ser pensado y lo que puede

    por cada sujeto hablante dentro de esa coyunt

    espaciotemporal, atendiendo a su posicin, esto

    al lugar de sujeto ideolgico que ocupa. Y que

    sujeto, con la correspondiente ilusin de yo a

    noma y autor de su discurso, nada sabe de e

    lmites que se extienden, dicho de modo esqu

    tico,

    por fuera

    ocupando el territorio de lo qu

    ideologa encubre y de l que la ciencia _an

    ha producido, y por

    den t

    o

    ro

    llenando todo el

    po de lo inconsciente sometido por el Yo (en

    tido psicoanaltico) a la represin.

    a'

    e la

    Se

    que aparece como eje vertebrador de todos los

    cursos autorizados por la ideologa y que se

    sentan como transparentes, como portadores

    de su propio sentido, como ventanas abiertas

    las palabras sobre las cosas. La utiliz '

    len ua comn su esto inst

    nto de 1.

    catin, consagra esos e ectos cotidianos del

    SUJETO DE LA CONCIENCIA

    9

    nocimiento de los objetos y le las situaciones co

    descosait

    epanlluis

    n.

    -

    marco - e 'referencia en el que

    de as eterminaciones discursivas. o indecible

    pue e u

    yo

    s

    -

    expre a cRin

    - -

    IP

    fi

    ----entae diScurso norante

    e o nada s

    e

    Quedan dos problemas que por razones de espa-

    cio no podr desarrollar:

    1]

    Cmo se produce esta ilusin de autonoma

    del yo, cul es su fundamento y cul es el lugar

    de la libertad en este planteamiento de las deter-

    minaciones discursivas?

    2]

    Cmo puede llegar a decirse algo nuevo si

    lo decible est ya enmarcado por lo indecible?

    Preferira reformular la segunda pregunta en es-

    tos trminos: qu papel tienen las rupturas epis-

    temq1Pgicas, la_ produccin

    de nuevas

    verdades en

    la transformacin de las subjetividades humanas?

    De nuevo, esta pregunta no puedo responderla

    ahora, pero tal vez podamos empezar a pensar

    entre todos a partir de una sentencia de Lacan,

    ;

    que quisiera que quedase como eplogo de mi

    exposicin respecto de la frase de Marx que tom

    como epgrafe.

    Es que a una nueva verdad, no es posible

    contentarse con darle su lugar, pues de lo

    que se trata es de tomar nuestro lugar mil

    'Jacques Lacan,

    Ecrits

    cit., p. 521

    [Escritos 1 cit.

    2 0 6 3 .

    e