Proyección del pensamiento de Unamuno

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    O vence el espritu o adis, gnero humano

    Adaptacin de una frase atribuida a Paul Valry ( 1871-1945):L'esprit doit l'emporter,ou c'en est fait du genre humain

    Proyeccin del pensamiento de Unamuno sobre la biologa actual

    Emilio CervantesIRNASA-CSIC. Apartado 257. Salamanca. [email protected]

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    Proyeccin del pensamiento de Unamuno sobre la biologa actual

    Resumen

    A partir de una conocida frase de Unamuno se ponen de manifiesto puntos crticos de labiologa moderna. Para ello, en primer lugar se presenta la frase y se explica en elcontexto de la obra de Unamuno y de su actitud para con la ciencia, actividad humana ala que el autor concede una gran importancia y de la cual advierte un peligro potencialpor su posible participacin en el proceso de deshumanizacin del hombre y lasociedad. La biologa actual presenta sntomas de aislamiento y deshumanizacin quese ponen de manifiesto cuando se analizan a la luz del pensamiento de este importantefilsofo existencialista cristiano.

    Abstract

    From a well known quote of Unamuno, critical points of modern biology are revealed.For this, first the quote is introduced and explained in the context of Unamunos workand his attitude towards science, a human activity to which the author gave greatimportance and of which he advertised a potential danger due to its participation in theprocess of de-humanization of mankind and society. Todays biology presentssymptoms of isolation and de-humanization that are revealed when analysed in the lightof the thought of this important existencialist christian philosopher.

    Palabras clave: Biologa, Ciencia, Filosofa, Humanismo, Unamuno.

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    (La verdad indirecta.) Con su clebre exclamacin Que inventen ellos! don Miguelde Unamuno hizo un afortunado experimento psicoanaltico, aunque seguramente sinquererlo ni advertirlo, pues, a travs de la reaccin que acert a suscitar con el gestodesdeoso que tal frase arrojaba a la cara de sus contemporneos, demostr lo que

    aparentemente no intentaba demostrar, esto es, hasta qu punto la tecnologa esliteralmente un dios, o la ms reciente encarnacin de dios. En efecto, la reaccin que elataque-pues como ataque fue tomado-provoc y an sigue provocando no es la normalante una opinin que parezca discutible e incluso que se tenga por francamenteequivocada, sino una reaccin descomedida, exacerbada, escandalizada, como elrechazo que slo puede provocar la necesidad de ceguera y voluntad de cerrazn que espropia de la fe. Si la confianza en la tecnologa fuese una sensata y razonableconviccin y no un estlido apremio fidestico, la frase de Unamuno suscitara a losumo una repulsa semejante a la que suelen merecer la astrologa o la cartomancia, perono ese compulso exorcismo, tan automtico y atemorizado como el de quienes entiempos de ms slida fe religiosa se santiguaban apresuradamente ante el vibrante,

    vigoroso y ominoso restallar de la blasfemia.

    Rafael Snchez Ferlosio. P 152. Vendrn ms aos malos y nos harn ms ciegos. EdDestino, col. ncora y Delfn. Barcelona, 1993.

    Introduccin

    La frase de Unamuno a la que se refiere Rafael Snchez Ferlosio en el prrafoprecedente ha puesto los pelos de punta a cientficos e investigadores espaoles durantegeneraciones, contribuyendo a colocar al filsofo por derecho propio en el pedestal delos autores malditos de la ciencia ibrica, en oposicin con sus adalides en cuyo altar,Don Santiago Ramn y Cajal ha ocupado a lo largo de dcadas el lugar preferente.

    La frase, tal y como se repite frecuentemente, es: Que investiguen ellos!,aunque, en su forma originalmente pronunciada por Unamuno habra sido: Queinventen ellos!, haciendo alusin a su rechazo por la investigacin cientfica moderna,como indicando que en Espaa podemos hacer cosas, si no mejores, s diferentes que lainvestigacin cientfica e igualmente necesarias. Pero, Qu hay de firme en lamencionada frase? Se trata de una ancdota puntual y sin importancia en la dilatadavida de don Miguel? O, por el contrario, contiene la llave de una idea esencial en su

    pensamiento y en su actitud ante la vida de gran proyeccin en la actualidad? Comoexplicar, me inclino por la segunda opcin. La frase no es casual ni anecdtica sinoque representa un punto de vista muy firme y asentado sobre una posicin slida delfilsofo y que, adems, tiene hoy una enorme importancia. Espero que despus de lalectura del texto que sigue, el lector est de acuerdo conmigo en que deberamosreflexionar tanto sobre la frase en s, como sobre lo que viene detrs de ella; eseexperimento al que se refera Snchez Ferlosio que podra contener una seria ypremonitora advertencia ante los caminos que est tomando la ciencia actual. Encualquier caso, antes de utilizarla a diestro y siniestro, deberamos plantearnos surelacin con la actitud de la ciencia, su significado y su papel en el desarrollo de lasociedad contempornea.

    Este texto se ha escrito para dar una respuesta a estas cuestiones. Para ello, enprimer lugar, presentamos la frase en su entorno textual y en el de la filosofa de

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    Unamuno y en relacin con su modo de entender la ciencia y la vida. A continuacinvemos en qu medida su sombra se puede proyectar sobre la biologa actual.

    El presente anlisis parte de dos premisas: 1) La contribucin real de la cienciaal conocimiento y la comprensin del mundo depende de la actitud de los cientficosfrente al conocimiento y a la filosofa, actividad de la cual no pueden ser ajenos. 2) Es

    hora de poner punto final a la lamentable disyuntiva entre ciencias y letras. Elconocimiento es uno y es, como tal, integrado e indisoluble, necesario para el serhumano.

    La frase en su contexto: El sentimiento trgico de la vida.

    La frase Que inventen ellos!, aparece en el captulo 12 y final del texto Delsentimiento trgico de la vida, titulado: Conclusin. Don Quijote en la tragicomediaeuropea contempornea, en el siguiente prrafo:

    No ha mucho hubo quien hizo como que se escandalizaba de que, respondiendo yo alos que nos reprochaban a los espaoles nuestra incapacidad cientfica, dijese, despusde hacer observar que la luz elctrica luce aqu, y corre aqu la locomotora tan biencomo donde se inventaron, y nos servimos de los logaritmos como en el pas donde

    fueron ideados, aquello de Que inventen ellos!, expresin paradjica a que norenuncio. Los espaoles deberamos apropiarnos no poco de aquellos sabios consejosque a los rusos, nuestros semejantes, diriga el conde Jos de Maistre en aquellas susadmirables cartas al conde Rasoumouski, sobre la educacin pblica en Rusia, cuandole deca que no por no estar hecha para la ciencia debe una nacin estimarse menos;que los romanos no entendieron de artes ni tuvieron un matemtico, lo que no lesimpidi hacer su papel, y todo lo que aada sobre esa muchedumbre de semisabios

    falsos y orgullosos, idlatras de los gustos, las modas y las lenguas extranjeras, ysiempre prontos a derribar cuanto desprecian que es todo.Que no tenemos espritu cientfico? Y qu si tenemos algn espritu? , se sabe si elque tenemos es o no compatible con ese otro?.

    Mas al decir Que inventen ellos!, no quise decir que hayamos de contentarnos conun papel pasivo, no. Ellos a la ciencia de que nos aprovecharemos, nosotros a lonuestro. No basta defenderse, hay que atacar.Pero atacar con tino y cautela. La razn ha de ser nuestra arma. Lo es hasta del loco.

    Nuestro loco sublime, nuestro modelo, don Quijote,..

    No parece, por lo tanto, que la frase sea un error ni un simple desliz, sino queUnamuno se tom la molestia de explicarla y justificarla en el ltimo captulo yconclusin de una de sus obras principales. Para el autor, el carcter del espaol, tantodel individuo como de la lengua, es ms dado a la reflexin filosfica que a la prcticacientfica y ambas actividades deben entenderse en un mismo contexto, el delconocimiento humano, en el cual deben ser complementarias, o ms en general todavaen el contexto de las aspiraciones del ser humano. En otros captulos de la misma obra,queda bien clara esta importante idea. As por ejemplo, en su primer captulo tituladoEl hombre de carne y hueso dice:

    Si, si, lo veo; una enorme actividad social, una poderosa civilizacin, mucha ciencia,

    mucho arte, mucha industria, mucha moral, y luego cuando hayamos llenado el mundode maravillas industriales, de grandes fbricas, de caminos, de museos, de bibliotecas,

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    caeremos agotados al pie de todo eso y quedar, para quin? Se hizo el hombre parala ciencia, o se hizo la ciencia para el hombre?. (p 31)

    La tarea de la ciencia podra actuar como palanca para un proceso dedeshumanizacin del hombre que es advertido como un peligro. El hombre tiene una

    necesidad de conocimiento general, integrado. El cientfico que no muestra unainquietud general por el conocimiento y el destino humano, por la virtud, es decir, unavocacin filosfica no es, para don Miguel, hombre completo, sino un elemento de unengranaje; por el contrario el filsofo tiene que ser, necesariamente, un hombre:

    Si un filsofo no es un hombre, es todo menos un filsofo; es, sobre todo, un pedante,es decir un remedo de hombre. El cultivo de una ciencia cualquiera, de la qumica, dela fsica de la geometra, de la filologa, puede ser, y aun esto muy restringidamente ydentro de muy estrechos lmites, obra de especializacin diferenciada; pero la filosofa,como la poesa, o es obra de integracin, de concinacin, o no es sino filosofera,erudicin pseudo-filosfica(p 34)

    La ciencia tiene un origen y una funcin muy claras. Su mercantilizacin no esalgo reciente:

    Las necesidades de la vida fuerzan y tuercen a la ciencia a que se ponga al servicio deellas, y los hombres, mientras creen que buscan la verdad por ella misma, buscan dehecho la vida en la verdad. Las variaciones de la ciencia dependen de las variacionesde las necesidades humanas, y los hombres de ciencia suelen trabajar, querindolo osin quererlo, a sabiendas o no, al servicio de los poderosos o al del pueblo que les pideconfirmacin de sus anhelos.Pero es esto realmente un peso muerto y una grosera materia de la ciencia, o no esms bien la ntima fuente de su redencin? El hecho es que ello es as, y torpeza grande

    pretender rebelarse contra la condicin misma de la vida(p 43)

    El racionalismo que acompaa a la ciencia no es suficiente para satisfacer lasinquietudes humanas:

    S, Lucrecio quiso concluir, solucionar y, lo que es peor, quiso hallar en la razn

    Consuelo. Porque hay tambin una abogaca anti-teolgica y un odium anti-theologicum. Muchos, muchsimos hombres de ciencia, la mayora de los que se llamana s mismos racionalistas, lo padecen.

    La conciencia humana ha de estar siempre por encima de la ciencia y de latecnologa:

    He de volver a hablaros de la suprema vaciedad de la cultura, de la ciencia, del arte,del bien, de la verdad, de la belleza, de la justicia.., de todas estas hermosasconcepciones, si al fin y al cabo, dentro de cuatro das o dentro de cuatro millones de

    siglos-que para el caso es igual-, no ha de existir conciencia humana que reciba lacultura, la ciencia, el arte, el bien, la verdad, la justicia y todo lo dems as? (p 113)

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    O tambin:

    No s porque tanta gente se escandaliz o hizo que se escandalizaba cuando

    Brunetire volvi a proclamar la bancarrota de la ciencia. Porque la ciencia en cuantosustitutiva de la religin, y la razn en cuanto sustitutiva de la fe, han fracasadosiempre. La ciencia podr satisfacer, y de hecho satisface en medida creciente, nuestracrecientes necesidades lgicas o mentales, nuestro anhelo de saber y de conocer laverdad; pero la ciencia no satisface nuestras necesidades afectivas y volitivas, nuestrahambre de inmortalidad, y lejos de satisfacerla, contradcela. La verdad racional y lavida estn en contraposicin. Y hay acaso otra verdad que la verdad racional?. (p.120)

    Y algo ms adelante:

    Porque la ciencia destruye el concepto de personalidad, reducindolo a un complejoen continuo flujo de momento, es decir, destruye la base misma sentimental de la vidadel espritu, que, sin rendirse, se revuelve contra la razn (p. 125).

    La actitud de Unamuno frente la Ciencia

    Que inventen ellos!, no es pues, la nica expresin de Unamuno que representa unaactitud hostil, o cuando menos de reserva crtica, ante la ciencia. Acabamos de ver queen su obra clave El sentimiento trgico de la vida, la preocupacin por la ciencia seexpresa de modo contundente en casi todos los captulos. En definitiva, el autormanifiesta su opinin segn la cual la ciencia no es un remedio universal para lasinquietudes y preguntas del hombre y duda, no solo de la espiritualidad de susplanteamientos, sino en general de su solidez para tomar las riendas en un sistema deconocimientos verdaderamente integrado, humano y capaz. Otras manifestaciones deestas inquietudes se ven a lo largo de su obra (Teira, 2002). Por ejemplo, en su carta aFernando Mgica, de 28 de diciembre de 1904, escribe:

    Cada da me interesan ms los hombres de espritu y menos los de mera ciencia...

    Los breves ratos que mi Quijote me deja leo a Kierkegaard, en dans Eso es unhombre! / Acabar por mandar todo lo dems a paseo y no estudiar sino filosofa pura y cosas de religin. Es lo que aqu, en Espaa, hace ms falta. Y combatir lospracticistas todos y a los que nos vienen con tecniqueras

    Unamuno ve en la ciencia un peligro potencial que amenaza las cualidadeshumanas de libertad y voluntad y por eso justifica la actitud tradicional de la Iglesia, ala defensiva frente a nuevos avances cientficos, como se manifest en los casos de lasrespuestas de las autoridades eclesisticas a Galileo, la doctrina darwinista de Evolucinde las Especies y, ms an, en la incompatibilidad expresada por Pio IX con lacivilizacin actual. Que inventen ellos, no es el fruto de un puntual y anecdtico

    cabreo sino ms bien la expresin de un sentimiento, sincero y honesto, profundo yconvencido. Quizs una expresin extrema de su modo de entender el mundo en el cual

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    la ciencia no es lo ms importante y del que don Miguel dej abundante constancia a lolargo de sus escritos. Pero, Cmo se entiende esta frase y cul es su importancia ante elpanorama actual de la biologa?

    El pensamiento de Unamuno y la biologa de hoy

    La ltima edicin del libro de texto de bioqumica de McKee y McKee (2003) se titula:Bioqumica. La base molecular de la vida. En el ttulo nada hay de sorprendente parala mayora de los alumnos y profesores de bioqumica. Para el bioqumico, labioqumica estudia la base molecular de la vida. La cosa empieza a ser algo mssorprendente cuando uno de los valientes bilogos que se han atrevido a ser crticoscon las actitudes generalizadas de la actual biologa y en particular con el darwinismo,el autor Michael J. Behe, en el prefacio a su libroLa caja negra de Darwin dice:

    La ciencia moderna ha aprendido que la vida, en ltima instancia, es un fenmenomolecular: Todos los organismos estn constituidos por molculas que actan como lastuercas y tornillos, los engranajes y las poleas de los sistemas biolgicos............En consecuencia, la ciencia de la bioqumica tiene por misin la exploracin del

    fundamento mismo de la vida.

    Y ms adelante:

    las partes ms importantes de los seres vivientes son demasiado pequeas para servistas

    Pero, quin le ha dicho a Behe que la vida es un fenmeno molecular? Acasoel Fausto de Goethe es un fenmeno verbal? Seguro que Unamuno nunca admitira queEl Quijote tuviese su fundamento en las palabras o que stas sean sus partes msimportantes. Los descubrimientos de la fsica de partculas estn ms prximos al puntode vista de Unamuno que al de Behe y, en general, al compartido por muchos bilogos,porque a ningn fsico de partculas se le ha odo decir que las partculas cuanto mspequeas son ms importantes para la constitucin de la materia. La definicin de lamateria depender de nuestro punto de vista, pero no por reducir la escala de loobservado, aumentar la importancia de la observacin. Aumentar, eso s, el precio delexperimento y la necesidad de tener una influencia social que nos permita la

    infraestructura para realizarlo, pero a la hora de definir qu es la materia o qu es la vidala definicin que ms nos guste ser al final un problema terico, lingstico y entoncesestaremos prximos a un problema de esttica y un poeta podr definir la materia con elmismo derecho que un fsico. As, despus de haber ledo a Unamuno, y reconocer conl la importancia del lenguaje (Cervantes, 2007), cabe preguntarse: Tiene la vida unabase molecular? Don Miguel respondera airado que no. Otro rotundo No sera larespuesta de un enojado Soren Kierkegaard, al que Unamuno llam su hermano y que esuno de sus autores predilectos, pero claro, esto es ya ir muy lejos en el tiempo y es queKierkegaard ni siquiera haba odo hablar de las molculas. Ahora bien, amboshumanistas, Kierkegaard y Unamuno, saban muy bien dnde hallar una respuestaacerca del significado de la vida: En s mismos. Estaban equivocados Unamuno y

    Kierkegaard?, Estoy yo cometiendo un grave error al escribir este texto por mezclar lavida de los bilogos con la vida de los filsofos?

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    No creo. Porque, a diferencia de lo que hoy se ensea en las facultades debiologa, la vida (slo hay una vida) podra no tener una base molecular. Dicho de otromodo, nadie ha demostrado nunca que la vida tenga una base molecular. Las molculasson componentes de la vida cuando sta se analiza por mtodos apropiados, pero endefinitiva, la nica experiencia verdadera que yo tengo de la vida es mi propia vida y

    por eso tengo que estar ms de acuerdo con Kierkegaard y con Unamuno que con quienpiense que la vida son molculas en accin. El lenguaje es muy importante tambin enla ciencia y el problema se puede y se debe reducir a trminos lingsticos, de anlisisdel lenguaje. Veamos cmo. En primer lugar es necesaria una definicin de la expresinbase molecular. Diremos que la vida tiene una base molecular si, y solo si, las formasde vida ms complejas tienen su origen nicamente en la evolucin de las ms simples.Pero esto est cada vez ms lejos de ser demostrado. Aunque se admita que toda la vidasobre la tierra procede de la evolucin de formas primitivas, moleculares, que porsucesivas asociaciones adaptativas dieron lugar a clulas y luego a organismos mscomplejos (Maynard Smith y Szathmry, 1997), es importante saber distinguir que estoes un consenso admitido, pero no probado. Las lneas que separan lo admitido y lo

    probado marcan en ciencia cada vez un terreno ms grande e importante. La evidenciaexperimental reciente apoya estas ideas basndose en criterios estructurales, pero no lasdemuestra; y sospecho que nunca podr demostrarlas. El Mtodo Cientfico no hapodido demostrar que la compleja serie de transiciones que los bilogos tericosexplican haya ocurrido en la naturaleza y mucho menos que sean la nica causa delorigen de los organismos complejos. Las demostraciones se referirn siempre a losucedido en condiciones experimentales. Es decir, aportando pruebas de que aquellopudo haber ocurrido, no de que efectivamente haya tenido lugar. Es crucial el entenderlo que es el Mtodo Cientfico y su alcance, siempre limitado cuando se trata de lacomprensin de los hechos del pasado. Por otra parte, hoy, cuando se considera que laevolucin de las especies es un hecho, resulta paradjico constatar que, por una parte,no se sabe definir qu es una especie ni tampoco, por otra parte, es fcil precisar quconjunto de circunstancias deben concurrir para considerar algo un hecho. La definicinclsica de especie dice que es un conjunto de individuos que comparten una serie decaractersticas comunes y que pueden reproducirse entre ellos. Pero en la naturaleza nohay pruebas experimentales posibles, cada cosa ocurre una sola vez y quin nos dicecmo se reprodujeron todos los organismos hace setecientos millones de aos?

    Poco sabemos acerca de las leyes que rigen la evolucin y cabran mltiplesexplicaciones que no pueden, de momento, ser refutadas. El debate toma la forma deuna dialctica de besugos entre los llamados Creacionistas y los llamados

    Evolucionistas, dos bandos enfrentados en una dialctica imposible en la que cadauno utiliza un lenguaje diferente cuando no opera movido por intereses de cualquiertipo, en general ajenos a la realidad del problema que consiste, ni ms ni menos, que enla bsqueda del conocimiento basada en la correcta utilizacin del lenguaje. Aunquedicho debate es muy activo en Estados Unidos y en el entorno del idioma ingls, tal vezpodra ser ms productivo en espaol, y cuando los participantes tuviesen una basehumanista. Esta afirmacin est basada en la lectura de Unamuno, cuyos textosdemuestran que el nuestro es un idioma apropiado para la cuestin. Una cosa es hacerciencia y otra, bien diferente, saber qu es la ciencia. Con su frase-bomba-experimento,Unamuno quera decir que, en espaol, se hace mejor lo segundo. Por ejemplo, enespaol podremos captar mejor que en ingls que la palabra Creacionismo es absurda y

    que fue inventada por el darwinismo con objeto de tener un enemigo al que podervencer (Cervantes, 2009).

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    Se supone que las bacterias son formas de vida antiguas sobre la Tierra y que, deellas, derivaron las plantas y los animales a partir de dos series evolutivasindependientes. Las cianobacterias, organismos de gran autonoma ya que pueden tomarel carbono y el nitrgeno del aire (porque poseen las estructuras necesarias para lafotosntesis y la fijacin del nitrgeno atmosfrico respectivamente), han dejado

    abundantes restos fsiles que demuestran que fueron muy abundantes en pocas pasadasSe supone que deben de haber sido las responsables del enriquecimiento en oxgeno dela atmsfera (como consecuencia de su actividad fotosinttica; Junge y Clausen, 2006).La actual Teora Endosimbitica propone que, por asociaciones simbiticas con otrasformas de vida, las cianobacterias habran derivado en los cloroplastos de las clulasvegetales (Mereschowsky, 1920). Esta Teora ha recibido un fuerte impulso en aosrecientes (Okamoto y Inouye, 2005). Pero la biologa moderna ha demostrado la enormeplasticidad y capacidad dinmica de los genomas y lo mismo que se supone que lasclulas vegetales pueden proceder de simbiosis entre distintos tipos celulares , tambinpodra ocurrir el proceso inverso, es decir que, a partir de clulas vegetales, endeterminadas condiciones pudiesen liberarse elementos ms sencillos conteniendo

    informacin para la organizacin de estructuras menores, pero no,...... normalmente setiende a suponer que siempre la evolucin opera en direccin de menor a mayorcomplejidad. Por el contrario, en su artculo publicado en Nature Genetics, Melamed ycols. (2004) describen la existencia de secuencias de DNA similares en los genomas desalmnidos y en Schistosoma, un gusano parsito. Su artculo se titula: Evidence forlateral gene transfer from salmonids to two Schistosome species, cuando en realidad lomismo podra haber tenido lugar la transferencia en sentido contrario. Curiosamenteparece que, cuando se trata de apoyar una hiptesis ya establecida, la transferencia deinformacin va en una direccin; pero cuando no hay hiptesis que apoyar, entonces latransferencia debe ser siempre del organismo ms complejo al ms sencillo. Siemprehay que respetar la estabilidad de lo establecido y en su defecto, la de lo ms complejo.

    Decir la evolucin de las especies, en su forma comnmente admitida enbiologa, es sinnimo de decir que todas las especies proceden de formas primitivas devida sobre la tierra, primero moleculares y luego celulares. Pero ha sido demostradoesto con el mismo poder de conviccin que, por ejemplo, la Deriva Continental enGeologa? Pienso que no, porque quedan otras posibilidades abiertas. Se admite hoy laposibilidad de que molculas o formas primitivas de vida podran viajar a travs delespacio en meteoritos (Jakowsky, 1999). Muchas bacterias presentan formas deresistencia (esporas) capaces de sobrevivir en condiciones de temperatura y presinelevadas y es posible, admitmoslo, porque no hay ninguna evidencia en contra, que

    esporas bacterianas, semillas u otras formas de vida resistentes, hayan realizado viajesespaciales. Seran alternativas remotas pero no imposibles y, en cualquier casosuficientes para descartar cualquier explicacin que se pretenda como la nica posible.La hiptesis de evolucin nica de plantas a partir de cianobacterias queda pordemostrar. Y se me dir: pero hombre, si en el genoma de las plantas existen secuenciasque demuestran un origen compartimentalizado que apoya la Teora Endosimbintica.Y yo podr contestar: De acuerdo, existen secuencias parecidas a las propias decianobacterias y otras parecidas a secuencias de otros tipos de bacterias, pero eso nodemuestra que la evolucin haya procedido siempre, nica y exclusivamente en estadireccin; podra haber sido, de vez en cuando, al revs; haber presentado oscilaciones,porque en la naturaleza no es raro que los fenmenos tengan ritmos oscilatorios. La

    biologa evolutiva se basa en cimientos dbiles. En parte por haber dado la espalda alregistro fsil, precisamente por su confianza en la bioqumica. En parte por utilizar un

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    lenguaje gravemente contaminado por intereses (competicin, seleccin natural y elpropio concepto de evolucin, proceden de una visin imperialista decimonnica).

    Admitimos que cada especie deriva puntualmente de una especie anterior y que,en general, el proceso ha sido en sentido de una mayor complejidad pero el registro fsil

    no siempre confirma tales suposiciones. El principal argumento parece ser que locomplejo tiene que derivar necesariamente de lo ms simple. Pero a m ese argumentopodra no convencerme porque, aunque efectivamente pueda haber ocurrido as una ymil veces, esto no implica que exista una nica vez en la que, excepcionalmente, nohaya sido as. La historia de la vida sobre la tierra, lo mismo que la estructura ntima deltomo, parece refractaria a un anlisis reduccionista; Su estudio ha dado importantessorpresas y puede todava contener muchas ms. Todava hoy, la mejor fuente para laobservacin y el anlisis de la vida resulta ser la vida de uno mismo. De ah surgenecesariamente la necesidad de cuestionar las grandes teoras en boga, las grandes ideasaceptadas, que cuando son sometidas a un riguroso anlisis resultan ser, con frecuencia,el fruto de una pobre imaginacin al servicio de una ciencia extremadamente

    especializada y mercantilizada, tal y como la predijo Unamuno.

    Conclusin

    En sus Elegas a Duino, en la IX Elega, Rilke nos habla del significado de la existenciahumana. Segn el poema, estamos aqu porque lo de aqu nos necesita, lo evanescentenecesita a los ms evanescentes. Es decir nuestra existencia no tiene una base molecularsino tica, moral.

    No por la felicidad (nicht weil Glck ist),esa precipitada ventaja de una prdida cercana (dieser voreilige Vorteil eines nahenVerlusts).

    No por curiosidad, o por ejercicio del corazn (Nicht aus Neugier, oder zur bung desHerzens),que existira tambin en el laurel,... (das auch im Lorbeer wre,),sino porque estar aqu es mucho, y porque todo (Aber weil Hiersein veil ist, und weil)lo de aqu nos necesita , lo evanescente (uns scheinbar alles das Hiesige braucht, diesesSchwindende,)lo que de una manera rara nos toca. (das selstam uns angeht.)

    A nosotros, los ms evanescentes. Una vez (Uns, die Schwindendsten. Einmal jades)cada cosa, solo una vez. Una vez y no ms. Y nosotros tambin (nur einmal. Einmal undnichtmehr. Und wir auch)una vez. Nunca jams. Pero este (einmal. Nie wieder. Aber dieses)haber sido una vez, aunque solamente una vez: (einmal gewesen zu sein, wenn auch nureinmal:)haber sido terrestre, parece irrevocable. (irdish gewesen zu sein, scheint nicht

    widerrufbar.)

    Para Unamuno, la vida humana tiene un significado moral. Para Rilke tambin. Ypuesto que yo no puedo admitir que haya una vida para la biologa y otra para la

    Filosofa o para ser vivida y pensada porque la vida es nica y evanescente tengo unatendencia a pensar que su significado, de existir, solo podra ser moral. La biologa no

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    ha demostrado, de momento, que esto sea un error, pero mientras tanto, por suespecializacin y dependencia econmica, obliga a pensar de otra manera.

    Referencias

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