Programa de Trabajo

Depto. de Biología Celular y Tisular, Facultad de Medicina, UNAM

Andrés Eliú Castell Rodríguez, Profesor Titular A, T.C. Def.

Febrero 10/2009

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Antecedentes La World Federation for Medical Education presentó en Copenhague, en el mes de

octubre de 1999, un documento sobre estándares internacionales para la Educación Médica de pregrado.1 El documento persigue tres objetivos fundamentales: a) estimular a las facultades de medicina para que formulen sus propios planes para el cambio y la mejora de la calidad educativa, de acuerdo con las recomendaciones internacionales; b) establecer un sistema de evaluación y acreditación de las facultades de medicina de ámbito nacional e internacional con el propósito de garantizar unos estándares mínimos de calidad para sus programas; c) salvaguardar la práctica de la medicina y la utilización del potencial humano de los médicos y su creciente internacionalización, mediante estándares internacionales bien definidos para la Educación Médica.

El propósito de la declaración anterior contiene como premisa básica que la educación médica es un instrumento fundamental para modelar un ejercicio médico que satisfaga las necesidades sociales de salud. En consecuencia, nosotros como Facultad de Medicina, debemos de asumir la responsabilidad, nacional y social, para formar médicos de calidad, altamente cualificados desde un punto de vista científico y técnico, pero también capacitados humana, social y éticamente para hacer frente a los retos que presenta la práctica médica en un país en transición como el nuestro, teniendo en mente que estamos en un mundo globalizado y cada vez más complejo.

Por otro lado, el marco de formación médica de nuestra facultad obedece al espíritu de la Universidad Nacional Autónoma de México, establecido en su Ley Orgánica, en la que las funciones de docencia, investigación y extensión de la cultura, constituyen la especificidad de su tarea social, emprendida para formar profesionales, docentes, investigadores y técnicos que se vinculen a las necesidades de la sociedad, así como para renovar los conocimientos científicos y tecnológicos que requiere el país. Estos objetivos se encuentran íntimamente vinculados entre sí y para su logro es indispensable el buen ejercicio de la función docente.2

La enseñanza de la medicina es compleja y uno de los mayores desafíos que plantea la formación del médico reside en el hecho de que debe atender el amplio espectro del saber humano que se extiende desde las moléculas hasta la comunidad. Como es bien sabido, las escuelas de medicina no siempre están a la altura de tan ambiciosas expectativas y, con frecuencia, quienes se han formado en una, adquieren, en el mejor de los casos, sólo una cierta competencia técnica en los aspectos biológicos. En general, nuestros alumnos no se apropian de una visión del hombre y del mundo, que debiera ser el rasgo característico que imprima una buena universidad.

Por otro lado, el esquema de nuestro país ha sido profundamente desfavorable al haber privilegiado, a partir de los años 50, a la medicina de alta especialidad y de haber aniquilado a la medicina general, con el consecuente encarecimiento de la atención médica. Considero que este es el problema fundamental en nuestro medio: el fracaso de la medicina general. Si la medicina general estuviera cumpliendo sus funciones, muchos enfermos que están llegando a los Centros Médicos o a hospitales especializados muy caros, no llegarían, sino que serían resueltos a nivel de medicina general y esto es un problema de ética de la organización de la enseñanza del país, porque mientras haya probablemente más de 50 escuelas de medicina que están graduando médicos generales, mal preparados, la medicina general del país va a ser ineficiente como lo es en el momento actual.

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Por otro lado, y de manera particular, cuando se analizan los datos de evaluación de alumnos de la materia de Biología Celular y Tisular, los resultados arrojan un alto índice de reprobación. En la materia de Biología Celular y Tisular, en el periodo 2001-2002 hubo un índice de reprobación del 45%. En el periodo lectivo 2002-2003 existió un índice de reprobación del 40.23%. Esta situación no ha cambiado de manera sustancial en los últimos años, para muestra de ello se adjuntan las comparaciones de los datos del periodo 2002-2003 con los del periodo 2007-2008 en la tabla 1.

Comparación de porcentaje de aprobación y reprobación de la asignatura de Biología Celular y Tisular en dos periodos

2002-2003 2007-2008

Inscritos en el curso 1311 1276

No presentaron examen final

103 56

Total de alumnos que presentaron examen final

1208 1220

Aprobados

722 (59.77)

711 (58%)

No aprobados 486 (40.23%) 509 (42%)

Tabla 1. En los datos presentados en la tabla es necesario considerar que en el ciclo 2002-2003, 77 alumnos no fueron sumados al total de alumnos reprobados. Esos alumnos no fueron contabilizados porque no presentaron examen final, sin embargo presentaron dos o más exámenes departamentales y por ello fueron calificados con una nota reprobatoria. Es de notar que si estos alumnos fueran considerados el porcentaje de reprobación aumentaría. En el caso del ciclo 2007-2008 se consideraron todos los alumnos con calificación reprobatoria. En ambos periodos los alumnos exentos están contabilizados junto con los que aprobaron el examen final en el rubro de aprobados. Datos tomados de la coordinación de enseñanza del Depto. de Biología Celular y Tisular, Fac. Medicina, UNAM.

Sería una manera muy simple de abordar este problema estableciendo que el alto índice

de reprobación de la Materia de Biología Celular y Tisular se debe a que los alumnos no estudian. Considero que hay otros motivos que comentaré más adelante.

Por lo anterior, los datos ya comentados debieran hacernos reflexionar profundamente con respecto a la manera en que estamos enseñando la medicina y cada materia en particular, en especial las ciencias básicas. En última instancia, formar médicos es cultivar personas capaces de ocuparse por el otro que sufre, provistas de un saber técnico pero actuando desde su "ser" de personas completas. Por ello, resulta esencial que, al intentar el imprescindible mejoramiento de las habilidades éticas, sociales y de comunicación de nuestros futuros médicos, no terminemos por diluir su educación científica. Si no imprimimos precozmente en nuestros estudiantes la convicción de que, crecientemente, las ciencias básicas tendrán una enorme importancia para el desarrollo de su práctica clínica, ellos perderán la capacidad de actuar en un mundo que cambia aceleradamente y ni siquiera podrán evaluar críticamente la nueva información. Es cierto, la medicina no es ciencia, pero se fundamenta en ella.3

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De allí que el mayor problema de la educación médica actual sea conseguir el equilibrio entre una educación basada en la ciencia y una que introduzca nuevas aproximaciones para formar médicos más atentos al cuidado del otro, a sus necesidades y a las cuestiones sociales. Por lo anterior, es necesario tener, como departamento de esta facultad, una misión y unos objetivos claros, que por supuesto, deben de estar de acuerdo con la misión y los objetivos de esta Facultad. Por ello, me permito hacer las siguientes propuestas en cuanto a la Misión y a los Objetivos que debe de tener el departamento de Biología Celular y Tisular. Es necesario aclarar que se buscará que estas declaraciones tengan el consenso más amplio posible Propuesta de Misión del Departamento de Biología Celular y Tisular

El Departamento de Biología Celular y Tisular impartirá una enseñanza de calidad de la histología y la vinculará con otras disciplinas básicas y clínicas buscando un equilibrio entre la formación científica y el aprendizaje de habilidades y destrezas con el propósito de coadyuvar en la formación médica integral de excelencia. Asimismo, se aplicará en incrementar el conocimiento en la biología celular a través de investigación original y de frontera y tratará de relacionarla con la práctica clínica. Por último, divulgará el conocimiento generado en diferentes foros, especializados o no, con el propósito de informar a la sociedad en general. Propuesta de Objetivos para el Departamento de Biología Celular y Tisular: Docentes 1. Proveer de un conocimiento amplio de la estructura y función básica de los tejidos del

cuerpo. 2. Proveer un entendimiento de la organización de los tejidos e identificar como están

integrados en órganos, aparatos y sistemas, relacionándolo con el conocimiento de otras materias básicas.

3. Interrelacionar los datos de biología celular e histológicos con los datos clínicos más relevantes para los médicos en la práctica clínica.

4. Proveer de casos clínicos con material didáctico y utilizando diferentes metodologías de enseñanza con el propósito de entender como la estructura y la función normal se alteran en la enfermedad.

5. Buscar que los alumnos de pregrado al término de sus estudios sigan cursos de posgrado en el interior del departamento.

6. Tener foros de actualización continua para los profesionales de la materia, así como para los estudiantes de pregrado, médicos generales y especialistas que lo requieran.

Investigación: 1. Realizar, en el área de biología celular, investigación original y de calidad. 2. Relacionar los trabajos de investigación con el proceso de enseñanza buscando, en la

medida de lo posible, aplicaciones clínicas. 3. Propiciar que profesionales en el área de ciencias de la salud se integren a proyectos de

investigación con el propósito de que se formen maestros y doctores en el área.

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Difusión: 1. Publicar los trabajos de investigación, científica y docente, en revistas de circulación

internacional. 2. Publicar artículos de difusión para estudiantes de pregrado, médicos generales y

especialistas 3. Realizar presentaciones orales en diferentes foros, especializados o no, con el propósito de

dar la mayor difusión posible. Análisis de la Situación Departamental

Con base en el instrumento llamado FODA (Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas) los consejeros técnicos y profesores del departamento de Biología Celular y Tisular realizaron un análisis de la situación departamental en dos años diferentes, 2004 y 2008.4 Esos estudios han sido útiles para identificar la situación académica del departamento. Quisiera referirme en especial a las debilidades y amenazas en los rubros de docencia, investigación y difusión, y a continuación realizar propuestas en cada uno de ellos. Por otro lado, considero que la docencia es la función prioritaria de la Facultad; por ello, su cuidado y fortalecimiento es esencial en la formación de los médicos de nuestro país. Las funciones de investigación y extensión de la cultura son importantes, pero deben de estar en una prioridad secundaria. DOCENCIA Considero que el problema más grave que tenemos en la docencia es que no existe un programa actualizado de la materia. En realidad, el programa actual data de 1991-1992. Por otro lado, tampoco se ha realizado un desglose mayor de los objetivos del programa, dando como resultado que los objetivos actuales son muy generales y no proporcionan un criterio confiable de enseñanza y/o de evaluación. Es de notar que, aunque la materia cambió de nombre en el año de 1993,5 el programa que se enseña sigue siendo el de “Histología” del plan 1985. De hecho, los profesores siguen ese programa. Quizás esta sea una de las razones del alto índice de reprobación en la materia ya que no existe un consenso preciso entre los contenidos (objetivos) básicos que el departamento considere como mínimos para evaluaciones departamentales teóricas y prácticas. Es importante notar que el conocimiento en el campo de la materia se ha incrementado y no se han actualizado los objetivos y, por otro lado, el problema se agrava ya que no existe una reflexión al interior del departamento con el propósito de revisar la utilidad de los contenidos para que tengan una relevancia clínica. Es evidente que no existe una evaluación continua del programa de la materia.

Por otro lado, el cuadro de profesores con experiencia ha disminuido de manera importante debido a renuncias y jubilaciones y existe una dificultad para cubrir las plazas de profesores en los horarios de media mañana, porque para los médicos clínicos es difícil que vengan por las otras actividades que tiene en los hospitales. La mayor parte de esas plazas han sido cubiertas por personal interno del departamento en la que la mayoría son biólogos.

Visto así el panorama, es necesario crear un programa de actualización docente en contenidos y en didáctica con el objeto de mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje de la materia. Por último, no hay un comité docente que diseñe, evalúe y valide los exámenes departamentales y finales. Tampoco existe una instancia académica que evalúe el proceso de

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enseñanza-aprendizaje y el ejercicio docente de los profesores. Es cierto, existen en el departamento proyectos de investigación educativa, sin embargo, estos trabajos tienen poco impacto al interior del departamento y no se han utilizado como instrumentos de retroalimentación en la enseñanza de la asignatura. Es claro que se necesita una reflexión académica acerca de la actividad docente y de la vida académica propiciada por el departamento para mejorar en varios aspectos. Propuestas Docentes: 1. Elaborar un programa de la materia de Biología Celular y Tisular basado en competencias.

La medicina es una actividad humana encargada de velar, en el sentido más amplio de la palabra, por la salud del ser humano, lo que implica que el médico debe de poseer competencias de diferente índole: diagnósticas, terapéuticas, éticas, sociales, etc., que le permitan desarrollar su práctica con calidad. Por lo anterior, es de vital importancia dotar a los estudiantes de medicina con las habilidades necesarias para que desarrollen una buena práctica médica.

Hablar de la formación de los médicos es uno de los procesos más difíciles de abordar ya que se trata de una tarea compleja y multidisciplinaria donde el futuro médico debe de realizar un proceso de integración mental en dos planos: uno horizontal, entre materias básicas con básicas y materias clínicas con clínicas, y otro vertical entre materias básicas y materias clínicas. Lo anterior debe ser con el propósito de formar médicos que atiendan los problemas de salud. Considero que la mejor manera de propiciar esta interdisciplinariedad esa a través de una enseñanza de la medicina basada en competencias.

La educación basada en las competencias finales o en el producto final no es un concepto nuevo ni una fase de la tecnología educativa. La educación basada en las competencias finales pone énfasis en el producto final y define lo que habrá de exigir al alumnado al final del proceso educativo, pero no establece como ha de enseñar el profesorado ni como ha de aprender el alumnado. Las competencias finales determinan aquello que se ha de enseñar y ayudan a identificar aquello que es esencial. Tener una idea clara de las competencias finales deseadas no significa, en ningún caso, ser rígido en la metodología docente que se ha de utilizar.

Tener claras estas competencias finales es importante, si tenemos en cuenta que nuestro producto final ha de ser un médico que sea capaz de entrar en el sistema de formación de especialistas del servicio de salud pública y que esté preparado, desde el primer momento, para ejercer una medicina general de calidad.

También se han hecho intentos por determinar las competencias más importantes, esenciales y efectivas para la práctica de la medicina y que deben formar parte del entrenamiento a nivel de pregrado. Se mencionan entre ellas: el diagnóstico y el tratamiento, la comunicación efectiva con los pacientes, la solución de problemas, la educación continua y la orientación hacia la ética médica,6 todo ello como parte de las medidas que tendrán que ser consideradas en la educación del médico para el siglo XXI.

Antes de iniciar la enseñanza basada en competencias será necesario formar profesores con competencia laboral para que puedan proporcionar enseñanza basada en competencias en un futuro inmediato.7 Por otro lado, será necesario seguir las recomendaciones de la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo (OECD)

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de la cual México es miembro, en el sentido de que si bien es adecuado evaluar el conocimiento adquirido, será indispensable evaluar la eficiencia externa del sistema de entrenamiento como un todo, la habilidad para realizar una tarea o función, (OECD, 1996); así como de la UNESCO, que al establecer los cuatro pilares para la educación del siglo XXI (aprendiendo para discernir, aprendiendo para hacer, aprendiendo para vivir juntos, aprendiendo para ser), en lo que corresponde al aprender para hacer, recomienda pasar de la habilidad a la competencia.8

Existen tres niveles de competencias necesarias para un médico de calidad. Estas competencias están mostradas en la tabla 2.

Competencias Técnicas

Competencias Académicas Nivel conceptual o de pensamiento crítico

Competencias de desarrollo personal

Lo que el médico ha de ser capaz de hacer (Hacer lo que es correcto)

De que manera aborda el médico su práctica (Hacer lo que es correcto de manera correcta)

El médico como profesional (Lo que es correcto hacerlo de manera correcta por la persona correcta)

Tabla 2: Nivel de competencias definido por Harden9,10. En el año de 2008, el Consejo Técnico de la Facultad de Medicina de la UNAM aprobó 8 competencias para los egresados de la facultad de Medicina14. Las competencias referidas son: 1) Profesionalismo, aspectos éticos y responsabilidades legales.

Aplica los conocimientos de la historia de la medicina y de la evolución de los valores éticos y científicos en su ejercicio profesional.

Actúa de manera congruente con los valores profesionales de humanismo, excelencia, altruismo, responsabilidad, honestidad e integridad para la toma de decisiones éticas en la atención de la salud de los pacientes, sus familias y la comunidad, dentro del marco legal.

Protege la integridad física y moral de los pacientes, con una actitud de empatía y tolerancia hacia los valores, creencias y características socioculturales de las personas.

Preserva la confidencialidad del paciente en el proceso de la atención médica. 2) Comunicación efectiva.

Demuestra intercambio efectivo de información con los pacientes, los familiares de los pacientes y otros profesionales.

Maneja habilidades de expresión verbal, no verbal y escrita en forma clara y comprensible en diferentes escenarios, adecuándose a la diversidad cultural de las personas.

Demuestra capacidades para la escucha activa, asertividad y empatía, con el fin de lograr una relación médico-paciente constructiva, eficaz y respetuosa.

Desarrolla actividades educativas, de orientación y asesoría con pacientes y familiares, colegas, estudiantes y la comunidad.

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3) Conocimiento y aplicación de las ciencias biológicas, sociomédicas y clínicas en el ejercicio de la medicina.

Aplica el conjunto de conocimientos y habilidades de las ciencias biomédicas, sociomédicas y clínicas en la atención integral del paciente.

Demuestra una visión integral y coherente de los diferentes niveles de organización y complejidad en los sistemas implicados en el proceso de salud-enfermedad del ser humano.

4) Habilidades clínicas de diagnóstico, pronóstico, tratamiento y rehabilitación.

Realiza los procedimientos clínicos y clínico-quirúrgicos pertinentes para la solución de los problemas más frecuentes de salud incluyendo el uso fundamentado de los exámenes de laboratorio y gabinete necesarios para establecer el diagnóstico, formular el pronóstico, proporcionar el tratamiento, y cuando corresponda instituir acciones de rehabilitación y referencia apropiadas.

5) Pensamiento crítico, juicio clínico, toma de decisiones y manejo de información.

Maneja el método científico y otras formas de pensamiento lógico, para investigar problemas de salud y sus causas.

Identifica, recupera, integra y aplica de manera crítica y reflexiva, los conocimientos provenientes de diversas fuentes de información, evaluando su relevancia y potencial transferencia al contexto de su práctica.

Utiliza habilidades cognitivas en la toma de decisiones para la prevención y solución de problemas de salud.

6) Salud poblacional y sistemas de salud: promoción de la salud y prevención de la

enfermedad. Aplica el conocimiento epidemiológico en el estudio del proceso salud-enfermedad para

elaborar el diagnóstico integral de los pacientes, las familias, la comunidad y grupos específicos, a fin de llevar a cabo intervenciones de promoción de la salud y prevención de la enfermedad, de acuerdo con lo señalado en las normas y programas de salud institucionales.

Conoce los principios de organización y funcionamiento de los sistemas de salud. 7) Aprendizaje autorregulado y permanente.

Reconoce sus capacidades y límites en relación con los conocimientos y la experiencia. Mantiene en forma permanente las acciones de aprendizaje independiente y colaborativo

necesarias para su educación continua y desarrollo profesional, evaluando sus logros y las diversas fuentes de conocimiento.

8) Desarrollo y crecimiento personal.

Reconoce sus alcances y limitaciones personales, admite sus errores y demuestra creatividad y flexibilidad en la solución de problemas.

Ejerce el liderazgo de manera efectiva en sus escenarios profesionales, demostrando habilidades de colaboración con los integrantes del equipo de salud.

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Cultiva la confianza en sí mismo, la asertividad, la tolerancia a la frustración y a la incertidumbre e incorpora la autocrítica y la crítica constructiva para su perfeccionamiento personal y el desarrollo del equipo de salud.

Utiliza los principios de administración y mejoría de calidad en el ejercicio de su profesión. De acuerdo con lo anterior, en el depto. de Biología Celular y Tisular, con la impartición de la asignatura podemos contribuir al logro de las competencias finales de la siguiente manera:

A través de las estrategias docentes desarrolladas en el aula contribuiremos directamente a la Competencia 2: Comunicación efectiva con relación a manejar habilidades de expresión verbal y escrita en forma clara y comprensible en diferentes escenarios, lograr un intercambio efectivo de información y el desarrollar actividades educativas e intercambio efectivo de información con otros profesionales.

Los contenidos de la asignatura contribuirán de manera directa a la Competencia 3: Conocimiento y aplicación de las ciencias biológicas, sociomédicas y clínicas en el ejercicio de la medicina demostrando una visión integral de los diferentes niveles de organización y aplicando conocimiento y habilidades de las ciencias biomédicas.

Las prácticas de la asignatura contribuirán de manera directa a la Competencia 4: Habilidades clínicas de diagnóstico, pronóstico, tratamiento y rehabilitación primordialmente en relación con el uso fundamentado de los exámenes de laboratorio y gabinete necesarios para establecer el diagnóstico.

El desarrollo de las prácticas de la asignatura contribuirán de forma directa a la Competencia 5: Pensamiento crítico, juicio clínico, toma de decisiones y manejo de información con relación al manejo del método científico y otras formas de pensamiento lógico, en la identificación, recuperación, integración y aplicación de manera crítica y reflexiva de los conocimientos provenientes de distintas fuentes de información, evaluando su relevancia y potencial transferencia al contexto de su práctica y en la utilización de habilidades cognitivas para la toma de decisiones.

El empleo de las estrategias docentes desarrolladas durante el curso y la promoción de actividades fuera del aula de modo directo contribuirán a la Competencia 7: Aprendizaje autorregulado y permanente con relación al mantenimiento de forma permanente de acciones de aprendizaje independiente y colaborativo necesarias para su educación continua y desarrollo profesional.

Aunado a lo anterior, es necesario tener competencias finales de la asignatura. Así, algunas de las competencias técnicas y académicas que propongo para la materia de Biología Celular y Tisular son las siguientes:

saber describir la célula e identificar los diversos organitos celulares saber establecer las relaciones entre las estructuras intracelulares y las funciones que realizan conocer las estructuras y las funciones básicas de las células del organismo humano, con la aplicación de los conceptos y el lenguaje bioquímicos

saber caracterizar a cada tejido del organismo y como se agrupan para la formación de órganos, aparatos y sistemas, relacionándolos con su función y patologías correspondientes.

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conocer y describir la estructura macroscópica y microscópica normal de los diversos sistemas y aparatos

conocer y describir las funciones normales de los diversos sistemas y aparatos del organismo, en los diversos niveles de organización (desde el organismo intacto hasta los niveles celular, subcelular y molecular)

conocer los mecanismos homeostáticos y de regulación de los diversos sistemas y aparatos conocer las alteraciones de la estructura macroscópica y microscópica de los diversos órganos y la relación con su función

conocer las bases teóricas de los métodos diagnósticos en la patología de los diversos aparatos y sistemas (en especial el diagnóstico anatomopatológico y métodos de diagnóstico de patología molecular

conocer las indicaciones de la biopsia y la citología saber como se han de obtener las muestras para los estudios citológicos y anatomopatológicos más habituales y como conservarlas adecuadamente

conocer los conceptos básicos del diagnóstico anatomopatológico saber qué información puede obtenerse de una biopsia, de una citología y de una punción por aspiración con aguja fina

Por otro lado, considero que debe de haber otras competencias que, aunque no son

propias de la materia, debieran ser consideradas:

Los alumnos han de ser capaces de: reconocer la necesidad de la investigación para la progresión del conocimiento conocer la relación entre investigación básica y clínica conocer la necesidad de la colaboración entre los dos tipos de investigación en equipos multidisciplinarios.

También deben de aprender: la metodología científica a desarrollar un proyecto de investigación como llevar a cabo un análisis de imágenes tanto en situaciones de diagnóstico como de investigación.

la construcción de una base de datos y de su utilización con los paquetes estadísticos más habituales

Es evidente que estas competencias deben de tener el mayor consenso posible de los

profesores. Este consenso también se buscará con profesores de materias clínicas. Por otro lado, es necesario desglosar estas competencias en objetivos de aprendizaje que

sean adecuados para el logro de las competencias de la materia y de la carrera. Así, es necesario realizar una revisión profunda de los objetivos de la materia en la que participen de manera colegiada los profesores. A manera de propuesta sugiero el siguiente objetivo general de la asignatura:

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El alumno será capaz de describir la estructura histológica normal de las células, tejidos y órganos humanos relacionándola con su función y distinguiéndola de las alteraciones estructurales patológicas.

A continuación propongo algunos lineamientos generales a tomar en cuenta al momento de

actualizar el programa de la materia de Biología Celular y Tisular a. El Perfil del Médico que queremos formar. b. Mayor integración básico-clínica: Se tendría que implementar seminarios

interdisciplinarios, la presentación más temprana de temas clínicos en el programa de la materia y la implementación de casos clínicos que muestren la aplicación del conocimiento de la biología celular y la histología en la clínica.

c. Incorporación de nuevas temáticas al programa actual. d. Darle prioridad al estudio de las enfermedades prevalentes en nuestro país. Al mismo

tiempo debiera dársele prioridad a la atención primaria de la salud. e. En relación a la metodología del aprendizaje: el sistema de enseñanza-aprendizaje

debiera fomentar el razonamiento y la capacidad interpretativa del estudiante e incentivar su capacidad de resolver problemas.

f. En relación a la metodología de la evaluación del aprendizaje: Debiéramos reflexionar si el tipo de examen que estamos aplicando para los exámenes departamentales y finales por opción múltiple es el adecuado para lo que queremos que evalúe a los estudiantes. También es necesario tener una visión de que los profesores deben de formarse para evaluar. Considero que las áreas a evaluar debieran ser: conocimientos, actitudes y destrezas y el método de opción múltiple no es adecuado para esto. Una combinación de métodos sería más ajustada a la realidad y más efectiva.

g. Formación de los estudiantes al comienzo de sus estudios y a lo largo de la carrera. Esto implica una formación médica continua.

El programa de la asignatura debe, además, de tener las siguientes características11:

Estar centrado en el estudiante Promover que se formen estudiantes activos con habilidades de evaluación crítica, destrezas de aprendizaje de por vida, capaz de reconocer y mejorar las fuentes de información.

Estimular la capacidad para identificar los problemas de salud prioritarios y ofrecer soluciones adecuadas a los mismos.

Promover la habilidad de integrar los conceptos de la materia de Biología Celular y Tisular a la realidad de los procesos de salud.

Insistir en relacionar las estructuras celulares y tisulares con los mecanismos fisiológicos y bioquímicos, propiciando un entendimiento de mecanismos y conceptos, no de memoria para pasar exámenes.

2. Propuesta de cambio de prácticas de la materia de Biología Celular y Tisular

Las prácticas que se realizan en el departamento consisten en la revisión de laminillas de diferentes células, tejidos y órganos. En estas prácticas se busca que el alumno aprenda a identificar la estructura microscópica normal. Lo anterior está bien, pero considero que la práctica debe de estar relacionada, además de con lo normal, con la práctica clínica, con el

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propósito de propiciar un aprendizaje significativo. En ese sentido, la propuesta es que los alumnos revisen material normal y al mismo tiempo se les presente un breve caso clínico o una laminilla con alguna patología fácil de identificar, en la que ellos puedan reconocer los datos de normalidad y anormalidad. También, se le pedirá un reporte de práctica que deberá contener un análisis breve basado en los mecanismos fisiopatológicos de la relación entre las estructuras microscópicas normales y las lesiones observadas.

Por otro lado, es necesario tener un manual departamental acorde con el nuevo tipo de prácticas y con los objetivos actualizados del programa.

3. Propuesta de evaluación del programa por competencias de la materia de Biología Celular

y Tisular La evaluación es un proceso continuo que necesariamente debe de llevar al

mejoramiento de la calidad de la enseñanza. Sin embargo, es uno de los procesos educativos más difíciles de realizar. Como ya apunté en otro lado, el docente debe formarse para evaluar, y esta formación en evaluación no sólo debe de incluir la evaluación del conocimiento de los alumnos, sino la evaluación del mismo proceso de aprendizaje y del programa de la materia.

En el departamento, buscando el consenso de los profesores, se tendrán que crear instrumentos que evalúen las competencias y en la materia. En este momento es difícil decidir qué instrumento utilizar, sin embargo, el instrumento más adecuado debiera de poseer los siguientes criterios12:

a. credibilidad (¿mide lo que deseamos medir?) b. comprensividad o validez del contenido (¿considera las cosas más importantes?) c. confiabilidad (¿mide el mismo componente bajo diferentes situaciones y repite el

mismo resultado?) d. validez (grado en que mide lo que deseamos medir) e. factibilidad (costo y facilidad de su aplicación).

Evidentemente tendremos que diseñar instrumentos que evalúen las competencias con fines de certificación (titulación) o de retroalimentación de la enseñanza.

Otra manera de evaluar es traducir las competencias de la materia en objetivos generales (como lo señala el Marco Institucional de Docencia de la UNAM2) que son más operacionales. Los objetivos son fácilmente evaluables ya que pueden ser medidos en términos de conductas observables.

4. Propuesta de actualización del personal docente

Nuestra actividad educativa está poderosamente influida por lo que sucede en un contexto social más amplio. Por esa razón, educamos mucho más por lo que nos ven hacer nuestros estudiantes que por lo que les decimos. De allí que la actividad que desarrollamos como profesionales y las características del ámbito en el que la llevamos a cabo, adquiera tanta importancia al convertirse en el modelo de vida que ofrecemos a nuestros alumnos. Por ello, en cuanto a los docentes, es necesario complementar su formación y que estos se comprometan con metodologías de enseñanza activa.

Una de las acciones prioritarias a desarrollar será la actualización docente de los profesores en dos áreas: en didáctica y en contenidos. Esto es muy necesario ya que, como

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se comentó con anterioridad, se han incorporado profesores con poca experiencia docente. Para ello se desarrollará un programa que contenga temas de tendencias educativas, recursos didácticos, métodos de evaluación, enseñanza basada en competencias, etc., además de otro programa en el que se aborden temas de actualización en biología celular e histología, correlaciones básico-clínicas, casos clínicos con un enfoque básico, etc. Para realizar estos programas de actualización se pedirá la ayuda de especialistas en el campo de la docencia y la investigación y la clínica.

5. Propuesta de Formación de Equipos Docentes

Otro problema detectado en la docencia es el incremento en profesores no médicos. Es cierto que los profesionales de otras carreras pueden aportar conocimientos y experiencias a la investigación que se desarrolla en nuestro departamento, pero no al de la medicina clínica, que considero el más importante dada la problemática de nuestro país. En nuestro departamento existen 12 biólogos y un veterinario impartiendo la materia, si nosotros adecuamos un programa basado en competencias ¿cómo podrían ellos impartir las experiencias clínicas necesarias para realizar una integración básico-clínica? Considero que la solución es la de formar equipos docentes integrados por un médico básico o clínico y un biólogo. Así, cuando el equipo imparta la clase podrá entonces realizar las integraciones básico-clínicas.

6. Propuesta de definir una política de incorporación de personal académico a la docencia.

Es cierto que en el Estatuto del Personal Académico de la UNAM13 en los artículos 36 y 39 al 44 se establecen los criterios para que ingrese el personal de asignatura como el de carrera, sin embargo, deben de establecerse criterios adicionales para aquellos profesionales que se incorporen a la docencia del departamento. Estos criterios de selección pueden incluir méritos científicos, docentes y en su caso asistenciales, en relación con la misión y los objetivos de la Facultad de Medicina y del Departamento de Biología Celular y Tisular.

Los criterios adicionales serán definidos junto con el Colegio de Profesores de Histología buscando el mayor consenso posible.

7. Propuesta de evaluación de profesores del Departamento de Biología Celular y Tisular

Así como debiera haber una política de incorporación de personal académico, también debieran existir criterios de permanencia de los profesores del departamento. Ciertamente es necesario realizar evaluaciones del profesorado ya que es un proceso que debe orientarse fundamentalmente a la estimación del nivel de calidad de la enseñanza a fin de contribuir progresivamente a su mejora. Además, el proceso de evaluación debe concebirse igualmente como estrategia adecuada para fundamentar la investigación sobre el proceso de enseñanza-aprendizaje en el ámbito universitario en el que nos desarrollamos, en cuyos resultados debieran basarse las pautas sugeridas para la necesaria innovación metodológica.

Hasta ahora la única evaluación que se realiza es la que efectúan los alumnos tomando en consideración una serie de parámetros. Este tipo de evaluación está bien, sin embargo debieran aplicarse, además, otros instrumentos que permitan apreciar la calidad docente

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desde otros puntos de vista. Esto es necesario ya que la evaluación de los alumnos pudiera estar sesgada si el profesor es muy complaciente con ellos. Por otro lado, esta evaluación se proporciona a los profesores sólo en forma numérica, por lo que no se lleva a cabo una retroalimentación para el profesor.

Otros elementos a tomar en cuenta pudieran ser: cursos de actualización docente o de contenidos tomados en el año, un examen de contenidos con calificación aprobatoria, una evaluación docente realizada por otros profesores o por el Colegio Académico de Histología, etc.

Si la evaluación del aprendizaje en los alumnos no es fácil, tampoco la evaluación de los profesores será fácil. Por una parte el instrumento y/o instrumentos que se diseñaran debieran contar con características de objetividad, validez y contextualización de la evaluación a las metas y programas de la Facultad de Medicina de la UNAM; por el otro, quizás pudiera encontrarse cierta resistencia a la evaluación por parte de los profesores, por lo que se debe de buscar el apoyo de la Dirección de la Facultad, de la Secretaria de Educación Médica y la opinión del Colegio Académico de Histología.

8. Propuesta de fortalecimiento de la Coordinación de Enseñanza

Es necesario fortalecer la coordinación de enseñanza. En la actualidad sólo hay una persona a cargo de la situación docente en el departamento: el coordinador de enseñanza. En la actualidad, la Coordinadora de Apoyo Psicopedagógico está colaborando con la Coordinación Revisora del Plan de Estudios en la Secretaría General. Hay alumnos pasantes de la carrera de medicina que auxilian a la coordinación de enseñanza, sin embargo el número varía año con año, y para el año lectivo actual y el siguiente sólo hay una. Considero que en el departamento de Biología Celular y Tisular se debe de estimular la investigación en educación médica con especial referencia al desarrollo curricular, las competencias técnicas en materia de metodología docente, diseño de programas de evaluación e implantación de modelos de desarrollo profesional de los docentes en medicina. También es necesario fortalecer el diseño de los exámenes departamentales, finales y extraordinarios y crear una base de datos extensa y confiable de reactivos. Además, es necesario elaborar material didáctico en forma de imágenes digitales con el objetivo de utilizarlas en la impartición de la asignatura, y de material biológico (laminillas histológicas). Estas últimas son rotas frecuentemente por los alumnos y deben de reponerse las colecciones de manera constante. La situación se agrava ya que hay que atender lo administrativo, asistir a juntas y un gran etcétera. Por lo anterior, es necesario fortalecer la coordinación de enseñanza con personal que colabore de manera formal y permanente en las actividades de la coordinación.

9. Propuesta de fortalecimiento del curso de instructores del Departamento de Biología Celular y Tisular

El curso de instructores del departamento de Biología Celular y Tisular ha tenido siempre una gran tradición y ha formado, a lo largo de 49 años, a un gran número de profesores que se han integrado a la planta docente. Sin embargo, el curso ha decaído desde hace varios años, en cuanto a la calidad de los ponentes y del programa que se desarrolla en el mismo. Las razones de este decaimiento son varias, sin embargo, el curso podría ser fortalecido con

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un apoyo decidido y absoluto de quien fuera designado como jefe(a) del departamento, además se deberá incentivar a los profesores para que participen en el mismo. Los profesores que participaran podrían recibir cierto puntaje, además del reconocimiento, para la evaluación de profesores, por ejemplo. Además sería necesario establecer un programa con bastante antelación que estuviera sujeto a revisiones posteriores con el propósito de mejorarlo.

El fortalecimiento del curso de instructores tendría un doble fin: a. La formación de cuadros nuevos de profesores con experiencia, y que al

término de los años de internado y servicio social pudieran reintegrarse a la docencia en el departamento.

b. La formación de líderes, no sólo en el área de la biología celular y la histología, sino en la medicina, ya que la idea es imbuirles de un espíritu de la búsqueda de la excelencia en todos los sentidos. Ciertamente, este es un proceso que requiere tiempo, pero debe de llevarse a cabo.

Es necesario tomar en cuenta que los instructores son “profesores titulares” en

formación, así que deberá de establecerse un curso de formación permanente para ellos con temas de docencia, de contenidos y de integración básico-clínica.

Por otro lado, es necesario crear un espacio dentro del departamento para que los instructores puedan estudiar, revisar laminillas, dejar su pertenencias, descansar, etc., con el propósito de que se integren más al departamento y puedan vivir más de cerca las circunstancias departamentales.

He de hacer notar dos cosas: 1) que en el pasado curso de instructores (Junio/2008) que coordiné la asistencia fue excelente y no hubo deserción de alumnos en el curso. Además, la motivación imbuida a los instructores fue grande y todas las conferencias programadas fueron dictadas. Así, es claro que con una programación y supervisión adecuada es posible fortalecer el curso de instructores; 2) este año tendremos la celebración del 50 curso de instructores lo cual es un logro dentro de la facultad, ya que es el curso más longevo y de mayor tradición. Se tiene programado realizar una magna celebración con tal motivo.

10. Propuesta de seminarios de integración básico-clínicos para alumnos

En la facultad, por diferentes instancias se ha procurado la revisión de casos clínicos que tienen como fin producir una integración en un sentido horizontal (entre ciencias básicas) y vertical (básico-clínico). Me parece que estos ejercicios son excelentes oportunidades para que los alumnos de primer año observen como se llevan a cabo los ejercicios clínicos que se desarrollan cotidianamente en la práctica médica hospitalaria, sin embargo, también cabría la posibilidad de que se implementaran, por parte del departamento, seminarios de integración básico-clínicos, en los que se podrían revisar temas específicos de biología celular e histología relacionándolos con algunas patologías. En ninguna manera sería una competencia para la revisión de casos clínicos, más bien seria una integración en otro nivel de enseñanza. Estos seminarios podrían llevarse a cabo después de cada tema dependiendo de la respuesta de los alumnos y del material necesario que se pudiera obtener.

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11. Propuesta de realización de la semana de la Biología Celular y la Histología Se podría realizar esta semana en el auditorio principal de la facultad con la participación

de expertos en seminarios y ponencias magistrales. Por otro lado, los alumnos participarían con trabajos en el área de biología celular e histología en diferentes categorías como podrían ser: la creación de software, carteles científicos y de docencia, trabajos orales libres, etc. También se podría pedir apoyo a alguna editorial para que obsequiaran libros de la materia para premiar a los mejores trabajos en cada categoría y al mismo tiempo entregar reconocimientos a los participantes. Para esta actividad se buscará tener el apoyo de la Dirección y la colaboración de los profesores del departamento. El propósito de esta actividad sería propiciar la creatividad de los alumnos, así como de darles la oportunidad de que se preparen en un terreno en el que posteriormente tendrán que participar: los congresos médicos.

12. Propuesta de enseñanza médica continua

El médico debe estudiar durante toda su vida. Los programas educacionales son indispensables si el médico desea estar al corriente del progreso de la medicina y si desea mantener los conocimientos y la experiencia necesaria para prestar una atención de alta calidad. Los avances científicos son esenciales para una atención médica adecuada. Nuestra facultad, como parte de una Universidad Nacional, junto con los hospitales y las sociedades profesionales comparten la responsabilidad de desarrollar programas de educación médica continua y de ponerlos a disposición de todos los médicos.

La demanda de asistencia médica, de prevención de las enfermedades y de consultas en materia de salud exige el más alto nivel de enseñanza médica universitaria, post universitaria así como de formación médica continúa. Así, se podrían implementar cursos que apoyaran la formación de especialistas, especialmente de patología o de otras especialidades que así lo necesiten. Es de notar que varios consejos médicos, que certifican a los residentes recién graduados, piden que los examinados sepan hacer diagnósticos microscópicos de ciertas patologías.

INVESTIGACIÓN En primer término quisiera referirme a las debilidades y amenazas del área de investigación encontradas por medio de los FODAs intradepartamentales4, y a continuación quisiera sugerir algunas propuestas. La mayoría de los profesores indicó que existe una escasísima vida académica. Hace años existía un seminario departamental semanal de extraordinaria calidad en el cual se presentaban los trabajos de investigación del departamento y se invitaba con frecuencia a investigadores externos. En la actualidad, hay un seminario departamental mensual, pero la percepción es que hace falta más vida académica. Además, falta una difusión de los trabajos de investigación al interior del propio departamento. Es cierto que se colocan las portadas de los artículos publicados en el tablero de anuncios del departamento, pero en realidad esa acción no es suficiente para difundir los trabajos al interior del departamento. Por otro lado, existe una falta importante de recursos para realizar investigación, de tal suerte que, por ejemplo, los materiales mínimos de consumo general son aportados escasamente por el departamento. Además, se necesita apoyo para acudir a congresos y para cubrir costos de publicación de los

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artículos cuando se requiere. También se requiere más apoyo administrativo para tareas como limpieza de laboratorios y recolección de animales sacrificados en algunos experimentos. Lo anterior genera una gran molestia entre el personal académico. Aunque en el departamento hay alumnos de posgrado inscritos en diferentes programas sería deseable que hubiera más para fortalecer aún más al departamento. En la actualidad hay 8 profesores de carrera de tiempo completo y una profesora asociada B de ½ tiempo, situación que también sería aconsejable incrementar. Por otro lado, en el departamento es necesario fomentar la interdisciplinaridad entre los grupos de investigación del departamento. Por último, es necesario promover una autoevaluación al interior del departamento de las actividades de los profesores de carrera y es necesario supervisar y apoyar los proyectos de investigación. Propuestas en Investigación:

1. Propuesta de fortalecimiento de la coordinación de investigación La coordinación de investigación deberá ser atendida por una persona que genere una

gran comunicación entre los profesores de carrera. Por otro lado, es necesario realizar actividades académicas de mayor impacto y más frecuentes que involucren a los diferentes grupos de investigación. Por ejemplo, invitar a investigadores de renombre a impartir conferencias magistrales; propiciar la interacción con otros grupos de investigadores de otras escuelas, facultades e institutos de la UNAM, de hospitales y de otras universidades; propiciar la reflexión acerca de temas como la ética de la ciencia, el futuro de la investigación y la relación entre investigación básica y aplicada, entre otras.

2. Propuesta de atención y captación de alumnos de posgrado.

Existe un desbalance importante en relación con los profesores de carrera y los técnicos que hay en el departamento. El balance es a favor de estos últimos. Es claro que es necesario fortalecer la investigación en el departamento y una de las maneras sería captando alumnos (de preferencia médicos) para que realicen estudios de posgrado. Quizás una fuente de alumnos pudieran ser los estudiantes que ya tomaron el curso de instructores y que se encuentran dando clases en el departamento. Otra posible fuente podrían ser los alumnos de programa AFINES y del programa NUCE y los alumnos pasantes de servicio social. Además, es necesario tener un programa de entrenamiento y seguimiento intradepartamental, aparte de los cursos que toman de manera obligatoria y de las instancias académico-administrativas que controlen su progresión en los programas de posgrado. Lo anterior propiciaría que los alumnos se sintieran cobijados, además del innegable valor de poder conocer las diferentes metodologías y otras enseñanzas que podrían recibir. El propósito de esta acción es que estos alumnos se pudieran integrar al departamento como profesores de carrera. Esta tipo de acciones los podría desarrollar la coordinación de investigación del departamento.

También es necesario fortalecer el curso de especialización en microscopía electrónica en el cual el departamento participa junto con la Facultad de Ciencias de la UNAM.

3. Evaluación del personal académico (profesores de carrera y técnicos académicos)

Aunque es cierto que existen diferentes instancias que evalúan el trabajo de los profesores de carrera, así como el de los técnicos académicos, por ejemplo el SNI, el PRIDE

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y el Consejo Técnico, también debiera de existir un instrumento de evaluación intradepartamental para este tipo de personal académico. El propósito de tales evaluaciones es de propiciar que se realice una investigación de alta calidad y se eficienten los recursos humanos y materiales.

4. Propuesta de formación de una red de investigación intradepartamental

Cada vez nos enfrentamos a mayores problemas con los recursos económicos que se asignan para investigación, por ello, es deseable la formación de una red que fomente la interdisciplinaridad en el interior del departamento, lo cual propiciaría dos cosas: a. La utilización eficiente de recursos y, sobre todo, de equipo que es caro. b. El fortalecimiento de las líneas de investigación propias. Muchas de las publicaciones

que se realizan en el departamento son producto de colaboraciones con otros departamentos de la UNAM o con otras instituciones. Considero que las líneas de investigación propias del departamento debieran ser fortalecidas, y una manera es la de formar una red de cooperación entre los profesores de carrera.

5. Propuesta de actualización de los profesores de carrera y técnicos académicos

La mayoría de los profesores de carrera y técnicos académicos son expertos en un campo particular de la biología celular y la histología, sin embargo, es necesario que los profesores y los técnicos conozcan otros campos del conocimiento lo cual propiciaría una mayor interdisciplinaridad. Además, existen temas que no han sido tratados suficientemente como el de la gestión de la investigación. A la mayoría de los profesores, se les enseña a investigar, pero no se les enseña a gestionar recursos para realizar sus investigaciones. Por ello es necesario que este tipo de temas sean tratados por la importancia que revisten.

6. Poseer una política sobre la relación entre las actividades de investigación y de educación

y sobre su integración Es preciso no olvidar que estamos en una facultad de medicina, cuya principal prioridad

es la docencia. Por ello, es necesario que se reflexione acerca de la relación entre la investigación y la docencia, buscando, en la medida de lo posible, aplicaciones clínicas del conocimiento generado en la investigación.

Es necesario puntualizar, que se incentivará la búsqueda de recursos externos en fundaciones privadas y públicas y en organismos gubernamentales nacionales e internaciones. Por otro lado, es necesario optimizar los espacios asignados a investigación y procurar mantenimiento a algunas áreas que así lo necesitan. También es necesario tener los recursos para dar mantenimiento a equipos que así lo requieren. DIFUSIÓN La difusión o extensión de la cultura es una parte importante de la vida académica de la Universidad, y así es el caso para la vida del Departamento de Biología Celular y Tisular. En la tabla 3 se muestra el número de artículos publicados por año en el departamento del periodo de 1995 a 2002. Es de notar que la productividad en artículos en el departamento es

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alta en relación con el número de profesores de carrera (a partir de este año hay 8 profesores de tiempo completo y una de1/2 tiempo, en los años pasados permaneció en 5 el número de profesores de tiempo completo). Cabe aclarar que de los 8 profesores de tiempo completo 5 son jefes de laboratorio.

Por otro lado, también es importante destacar que la productividad año con año es importante, e incluso durante el año de paro de estudiantes (1999) y el año posterior al mismo (2000), la productividad fue mayor. Quizás una de las razones es que hubo más tiempo para escribir.

DEPTO. BIOLOGÍA CELULAR Y TISULAR

AÑO

Proyectos Artículos

arbitrados Artículos no arbitrados

1995 13 7 1

1996 14 5 4

1997 15 2 0

1998 3 2 0

1999 33 15 0

2000 29 19 1

2001 19 12 0

2002 23 9 0

2003 - - -

2004 - 9 3

2005 - 7 3

2006 - 10 3

2007 - 6 5

2008 - 12 3

PROM 18.6 8.8

TOTALES 115 23

Tabla 3. Productividad del Departamento de Biología Celular y Tisular en los últimos 14 años (1995 a 2008). Los datos del año 2003 no los tuve disponibles, por ello no están colocados. Tomado de los informes de Director de la Facultad de Medicina, años 1995 a 2002 a 2008.

Aunque existe una buena producción en revistas indizadas de buen factor de impacto, es necesario atender las siguientes prioridades en este rubro:

1. Poseer una política de colaboración con otras instituciones educativas y científicas, así como con los foros y asociaciones para el debate y la investigación en educación médica y en investigación científica, tanto a nivel nacional como internacional.

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2. Organizar eventos académicos nacionales e internacionales que tengan que ver con la biología celular y la histología tanto en condiciones de normalidad como de patología.

3. Incentivar la vinculación con otras universidades, tanto nacionales como extranjeras, y con organismos del sector salud que nos permitan, como departamento, desarrollar proyectos de investigación científica y educativa en un plano de cooperación.

4. Promover y apoyar la asistencia del personal académico a foros de discusión, debate, congresos, seminarios, etc., para divulgar el trabajo científico y educativo del departamento.

5. Incentivar y apoyar la publicación de los resultados de las investigaciones del personal académico del departamento.

ADMINISTRACIÓN

Es necesario realizar un diagnóstico de la administración del departamento de Biología Celular y Tisular. Sin embargo, la directriz que debe de existir es la de que las decisiones sean tomadas con una base académica y no administrativa-laboral.

Por otro lado, desde hace algún tiempo, y recientemente también, se ha jubilado personal administrativo y es urgente que se cubran distintas plazas como la de tres secretarias, la de un auxiliar de intendencia, la del chofer del departamento y la de tres auxiliares de laboratorio. Es de notar que algunas de estas plazas tienen años que no se cubren.

Es muy necesario el que se le proporcione mantenimiento en el piso a algunas áreas comunes como el pasillo de profesores, algunos laboratorios, aulas, etc. Sin embargo, la prioridad más urgente en este rubro es el buscar una correcta organización y renovación del material didáctico consistente en preparaciones histológicas, ya que este está deteriorado e incompleto. También es necesario contar con algunos videoproyectores (mínimo seis) para la impartición de la asignatura de Biología Celular y Tisular. Estos videoproyectores deben de estar fijos en las aulas. Por otro lado, se necesitan 6 cámaras de buena calidad para ser conectadas a microscopios y a los videoproyectores con el objeto de facilitar la explicación de las laminillas histológicas durante las prácticas.

En cuanto a mantenimiento de microscopios, es necesaria una revisión a fondo de ellos y muchos necesitan ser cambiados por que la óptica ya no es útil.

La página Web del departamento necesita ser organizada y actualizada con urgencia para que pueda servir de enlace con la comunidad estudiantil, con otras universidades e institutos y con la población en general con fines de enseñanza y difusión. Por otro lado, son necesarios recursos didácticos que pueden estar en la página Web como tutoriales y casos clínicos.

Es necesario establecer, al igual que con el personal académico, criterios de evaluación del personal administrativo, con el propósito de lograr la calidad en el trabajo.

Siempre será importante buscar el consenso más amplio posible, por lo que sugiero la creación de un Consejo Asesor Departamental, para que junto con el Jefe(a) de Departamento analice los procesos de evaluación del personal académico, el proceso de evaluación de la enseñanza y del programa de la materia. Así mismo, ayudaría a establecer los criterios específicos de ingreso y permanencia de los profesores del departamento, así como otro tipo de decisiones académicas. Este Consejo Asesor Departamental podría estar formado por: los consejeros técnicos del depto., el coordinador de enseñanza, el coordinador de investigación,

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un representante de los profesores de asignatura, un representante de los ayudantes de profesores, un representante de los técnicos académicos, un representante de los profesores de carrera y el decano del departamento. Una vez que la decisión haya sido consensuada en el Consejo Asesor, se llevaría al Colegio de Profesores para que sea analizada otra vez y que se pueda llegar al mayor consenso posible. Otra ventaja sería que se estaría pidiendo la opinión de los profesores, lo cual generaría un buen clima, propicio para el cambio de las estructuras académicas, del plan de estudios, y laboral en general.

Con respecto al Colegio de Profesores, es de notar que desde hace 5 años no se reúne y que es necesario reactivarlo con el propósito de que se fomenten actividades académicas al interior del departamento.

Es importante establecer y consolidar procedimientos de revisión y actualización continua del departamento en su estructura, proceso y resultados para adaptarlos al desarrollo científico, socioeconómico y cultural de la sociedad, a las necesidades de la comunidad, a los cambios sociales y a las necesidades cambiantes de la propia facultad de medicina. En este sentido, el Jefe(a) del Departamento tendrá la obligación de seguir la pauta marcada por la Dirección de la facultad. En la siguiente hoja sugiero un organigrama del departamento de Biología Celular y Tisular.

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Comentarios finales: Considero que la Biología Celular y Tisular es una materia que tiene grandes aplicaciones clínicas. De hecho, está presente en los hospitales en diferentes y variadas formas. Sólo quisiera mencionar tres: Las sesiones anatomopatológicas, la práctica de varias especialidades como la dermatología y los exámenes que aplican los distintos Consejos de las Especialidades al momento de certificar a los especialistas. Es por ello, que en el departamento de Biología Celular y Tisular se debe de dar un gran énfasis al proceso de integración de esta materia con la clínica. Por otro lado, existen, quizás, dos grandes retos para el futuro:

1. La formación de médicos generales de calidad que ejerzan su profesión como tales o que accedan a las especialidades, pero desarrollándose en un plano de competencias técnicas, preventivas, diagnósticas, éticas y personales que les permitan ser los líderes que nuestro país necesita. Ciertamente la Academia de Medicina está trabajando en el diseño de estas competencias en conjunto con el Sector Salud, por ello sería deseable que el programa de estudios se adecuara a ese perfil. Así, es preciso apostar al futuro a través de una educación de calidad para el médico y dotarlo de las herramientas intelectuales para que se desenvuelva en el escenario complejo, y tan enriquecedor, de la profesión médica.

2. Un sistema de evaluación constante que estime la eficacia del proceso educativo, de los programas, de la actividad de los profesores, del desempeño de los alumnos, de la investigación, todo ello con el objeto de incrementar la calidad en todos los aspectos.

Es cierto que en el departamento de Biología Celular y Tisular hay grandes problemas, que

deben ser resueltos en este orden, primero los docentes, después los de investigación, y por último, los de la extensión de la cultura, pero, sin lugar a dudas, existe un gran potencial en la gente que labora allí, y ese es el principal valor que posee el departamento, con el cual esos problemas podrán ser resueltos.

Por último, considero que nuestro compromiso fundamental es con los estudiantes, y cualquiera que sea nuestra actividad, debe de resultar en un beneficio para ellos.

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Referencias: 1. Declaración de Granada sobre Estándares en la Educación Médica de Pregrado.

Veinticuatro de octubre de 2001, Granada, España. 2. Marco Institucional de Docencia. Universidad Nacional Autónoma de México. Aprobado

en la Sesión de la Comisión de Trabajo Académico del Consejo Universitario el 30 de Septiembre de 2003.

3. Jaim Etcheverry G., Tendencias en la Enseñanza de la Medicina: Mitos y Realidades. Tomado de una conferencia dictada en la Cátedra de Biología Celular e Histología, Facultad de Medicina, Universidad de Buenos Aires, 1999.

4. Análisis de la Situación Académica del Departamento de Biología Celular y Tisular de la Facultad de Medicina de la UNAM, 4 de Noviembre de 2003. Entregado al Director Sr. Dr. José Narro Robles. Análisis de la Situación Académica del Departamento de Biología Celular y Tisular de la Facultad de Medicina de la UNAM. Entregado en Abril de 2008 a la Subcomisión para la Certificación de la COMAEM.

5. Plan Único de Estudios, Carrera de Médico Cirujano, Facultad de Medicina, UNAM, 1993. 6. Finocchio LJ, Bailiff PJ, Grant RW, O’Neil EH. Professional competencies in the changing

health care system: Physicians views on the importance and adequacy of formal training in medical school. Academic Medicine 1995; 70 (11): 1023-1028.

7. Islas FJ, Thierry GDR. La competencia laboral del instructor de capacitación y desarrollo, Instituto Politécnico Nacional. Documento de trabajo 1996.

8. Delors JL. The treasure within. Report to UNESCO of the international commission of education for twenty first century, 1996.

9. Harder RM, Stevernson M, Downie WW, Wilsin GM. Assesment of clinical competence using objective structured examination. British Medical Journal 1975; 1: 447-451.

10. Harden RM, Gleeson FA. Assesment of clinical competence using and objective structured clinical examination (OSCE). Medical Education 1979; 13: 41-54

11. Venturelli, José. Educación Médica: Nuevos enfoques, metas y métodos. OPS, OMS. 1997.

12. Norman GR. Why evaluate? Pedagogue. Perspectives on Health Sciences Education 1994; 5 (1): 1-6.

13. Estatuto del Personal Académico de la Universidad Nacional Autónoma de México, edición 2003.

14. Consejo Técnico Facultad de Medicina, UNAM. Septiembre de 2008.