16
2016ko abenduaren 07a Gaur egungo informazioa ಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊ Actualidad informativa 07 de diciembre de 2016

2016ko abenduaren 07a Gaur egungo informazioa · Padres despedidos por pedir una reducción de jornada En 2015, se acogieron a la reducción de jornada 261.400 personas. ... de jornada

  • Upload
    hadang

  • View
    213

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

2016ko abenduaren 07a

Gaur egungo informazioa

ಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊಊ

Actualidad informativa

07 de diciembre de 2016

07 de diciembre de 2016

Economía

Padres despedidos por pedir una reducción

de jornada

En 2015, se acogieron a la reducción de jornada 261.400 personas. De

ellas, el 95,3% fueron mujeres y el 4,7% restante, hombres

El pasado 31 de agosto, a las 10:30 horas de la mañana, presenté en la asociación para la que

trabajaba como jefe de prensa un escrito para solicitar una reducción de jornada para poder ir a

recoger a mi hija a la salida del colegio. Cuatro horas después, tenía ante mí una carta de

despido. En la misma,se alegaban motivos económicos y la reducción del volumen de trabajo en

mi departamento. El motivo real, como luego me confirmaron durante la conversación en la que

me comunicaron el despido, que tengo grabada íntegra, fue, de forma literal, que no podían

tener “a un tío en prensa que se vaya a su casa a las 15:30 horas”.

La historia íntegra de mi despido la conté en mi blog personal hace unas semanas. Más de

50.000 personas leyeron la entrada y cientos de ellas me dejaron comentarios y me enviaron

correos electrónicos contándome las suyas o las de personas cercanas, dándome gracias por

hacerlo público y mandándome muestras de ánimo y apoyo a raudales. Entre ellos muchos

hombres para una realidad que hasta ahora parecía reservada a las mujeres, que son quienes más

solicitan acogerse a este tipo de derechos y las que más siguen teniendo que sufrir despidos,

acoso laboral y estancamiento de sus carreras por la incomprensión de quienes dirigen las

empresas.

Según datos del Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades, dependiente del

Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, el año pasado se acogieron a la reducción

de jornada por cuidado de niños o de adultos enfermos 261.400 personas en España. De ellas, el

95,3% fueron mujeres (249.200) y el 4,7% restante hombres (12.200). El dato, siendo sangrante,

mejora en mucho el de justo una década antes (2005), por ejemplo, cuando de las 292.800

personas en reducción de jornada solo el 2,1% (6.200) eran hombres.

Visibilizar una realidad

“No sé si hay muchos o pocos hombres que se acogen a este derecho, pero lo importante es que

los hay y que están dispuestos a dar la cara para cambiar las cosas. Es necesario dar visibilidad a

sus casos para que se naturalice la implicación de los hombres en los cuidados y las tareas del

hogar y que cada vez sean más”, asegura Usúe Madinaveitia, fundadora de los movimientos

proconciliación #mamiconcilia y #papiconcilia. En este último, ya cuentan con 70 testimonios

de padres, incluidos, 12 de directivos.

Para Madinaveitia, el hecho de que un hombre sea despedido por querer ejercer sus derechos

para conciliar “es noticia, y es necesario que así lo sea, porque todavía es algo poco habitual,

como lo es el que un hombre peleé por la conciliación familiar”. Su argumento refrenda un poco

mis sensaciones personales tras pedir la reducción de jornada. Por un momento, me pareció que

el cerebro de mis jefes cortocircuitaba al ver que un hombre les pedía una reducción para ejercer

de padre. Y la realidad es que una vez dado el paso, te vuelves tan vulnerable como las mujeres.

“Mi conclusión es que la discriminación laboral por embarazo o maternidad ha evolucionado

hacia la discriminación laboral por tener hijos, lo cual es muy triste porque que sigamos

teniendo hijos nos interesa a todos como sociedad para invertir la pirámide demográfica”,

afirma la fundadora de Mamiconcilia.

Sea como sea, esta realidad, que antes acostumbraba a quedar recluida en el ámbito doméstico y

vivida como un fracaso por parte de la persona despedida, empieza a salir a la luz. “Lo bueno es

que también empiezan a ser noticia las mujeres que sufren discriminación laboral. Estos casos

abundan, y abundaban, pero no trascendían. Se vivían con vergüenza, con miedo a

denunciarlos”, asegura Usúe. Ahí están dos casos recientes como el de la exjefa de prensa de

Albert Rivera en Ciudadanos, ninguneada y defenestrada tras volver de su baja de maternidad; o

la de la trabajadora de CC. OO. despedida por pedir una reducción de jornada, a la que ahora un

juez ha dado la razón, obligando al sindicato a readmitirla y a pagarle una indemnización de

60.000 €.

Cuando ejercer como padre se traduce en despido

Eduardo Martínez Flores, padre de tres hijos de 20, ocho y seis años, fue despedido por burofax

certificado y urgente el pasado 11 de octubre. ¿Su delito? Solicitar una reducción de su jornada

para poder estar presente dos tardes en las que sus hijos lo necesitaban. La respuesta de la

Asociación de Mujeres para la Formación y el Desarrollo (AMFORMAD), para la que estaba

empleado como autónomo en un programa público de intervención en violencia filioparental,

financiado por la Consejería de Bienestar Social de Castilla la Mancha, fue fulminante. “Es

paradójico que una entidad que lleva años trabajando en la intervención con familias en

situaciones de violencia, no tenga una política laboral clara y transparente de conciliación y de

igualdad”, asegura.

Para Eduardo, que tiene acumulado a sus espaldas un amplio recorrido sindical en la

Administración Pública, la igualdad y la conciliación, son unas reivindicaciones “de menor

entidad a lo largo del tiempo”. Al final, por tanto, más que de hombres o mujeres, se trataría de

una cuestión “de mentalidad, de pedagogía, de visibilización de las tareas de los cuidados, de la

gestión y responsabilidad de un hogar, de los vínculos familiares, de análisis crítico de los roles

de género, de ruptura y cambio con las tradiciones, con los papeles privilegiados asignados a los

hombres”.

Comparte su visión Nacho Caballero, que tras dos décadas al frente de una empresa

de clipping que él mismo se encargó de fundar, fue despedido tras una serie de desencuentros

con la conciliación como telón de fondo: “Creo sinceramente que es un tema de mentalidad.

Con un plus de gravedad si eres hombre por el machismo imperante. Debo decir que ninguno de

mis compañeros que fue padre en los mismos años que yo, adoptó ni por asomo medidas

similares. Cogieron el permiso de paternidad y punto”.

El conferenciante y escritor tuvo “la transgresora idea” de juntar 15 días de vacaciones con sus

bajas de paternidad, algo que fue “mal visto” en su empresa desde el principio. Luego rizó el

rizo, y con su segunda hija pidió la hora de lactancia: “Mi jefa me dijo que jamás había faltado a

ningún evento escolar de su hijo. Véase: entierro de la sardina, baile de Navidad y similares. A

diferencia de mi exjefa, yo no quería estar solamente en los días señalados del cole de nuestros

hijos”.

Mano dura con las empresas que no concilian

“No creo demasiado en la bondad de la anticuada clase empresarial que domina nuestra

economía”, afirma Nacho Caballero, que aboga por “mano dura y sanciones”. También por

hacer un esfuerzo en asociar horarios prolongados con personas ineficientes, una asociación que

ya rige en otros países europeos, pero no en España: “Mi exjefa hace cinco meses nos dijo en

una reunión, presumiendo, que había días que se iba a casa a las dos de la mañana. Esto en

2016”.

Mi sensación tras el despido es que la justicia laboral va muy lenta, lo que provoca que muchas

personas acepten acuerdos y no lleguen hasta el final por no alargar indefinidamente un proceso

que paraliza tu vida. Esos acuerdos suelen salir muy baratos a las empresas, que al final se

mueven con total impunidad. También, en mi caso, tratándose de una asociación que vive de

fondos públicos, me resulta descorazonador que las administraciones no pongan más requisitos

en este aspecto para acceder a las subvenciones o a los contratos públicos. Mi visión la

comparte Eduardo Martínez Flores: “Las administraciones deben garantizar que las empresas o

entidades con las que trabajan dispongan de un plan de igualdad y de medidas de conciliación.

Y que las mismas se cumplan”.

Para el ordenanza, y delegado sindical y de prevención de riesgos laborales, en España y en el

Derecho continental, a diferencia del anglosajón, “funcionamos por obligaciones legales y

sanciones, algo que dice muy poco a nuestro favor”. En ese sentido, considera que “hace falta

educación feminista y poner encima de la mesa los horarios laborales para ajustarlos más a las

necesidades personales y familiares”. En cuanto a las empresas, señala a la necesidad de un

cambio de mentalidad: “una persona que trabaja en la empresa no solo tiene una parte laboral,

tiene otras necesidades que hay que cuidar, tener en cuenta, promocionar, potenciar”. Para ello

deberían estar los convenios colectivos y los planes de igualdad, que en palabras de Eduardo

“han de incorporar medidas claras, transparentes y públicas para toda la plantilla sin excepción,

desde los cargos más altos hasta llegar a todo el personal”.

“La gente vive acojonada en sus trabajos. El que se mueve, no sale en la foto. Por eso gente

como nosotros somos noticia”, concluye Nacho Caballero. La gran noticia será que algún día

dejemos de serlo.

PADRES QUE SÍ CONCILIAN

En 2015, de las 36.195 personas que se encontraban en situación de excedencia por cuidado

de hijos, solo 2.416 eran hombres, apenas un 6,66%. Eran, no obstante, 600 más que en

2014. Y casi mil más que en 2013. Este año se ha sumado a ellos Enrique Herrero,

diseñador en una gran empresa de desarrollo digital. “Tengo la suerte de formar parte de

una empresa que se preocupa por el bienestar de sus empleados y en ese sentido no tengo

miedo a ningún tipo de discriminación futura o represalias. De hecho, están implantando un

programa de igualdad de oportunidades y conciliación para continuar mejorando en esa

línea”, afirma.

Antonio Díaz Rebaque, por su parte, es informático y ejerce como software designer en una

multinacional sueca. Hasta la fecha, con sus dos hijos, se ha podido aprovechar de la

flexibilidad horaria en su empresa y de la posibilidad de teletrabajar. A eso ha unido unos

meses de excedencia y una reducción de jornada que disfruta en la actualidad. “No he

tenido ningún problema aparte del inherente a una reducción de jornada o a una excedencia

desde el punto de vista económico o de beneficios sociales. Parece que las empresas nos

"regalan" algo por pedir excedencia o reducción. Y no. Hay un coste económico elevado. Es triste que me tenga que sentir un privilegiado teniendo en cuenta ese coste”, reflexiona.

Entiende Enrique Herrero que el retorno de este tipo de medidas “es muy difícil de medir

desde el punto de vista del empresario”, pero se muestra convencido, aspecto en el que

coincide con Antonio Díaz, de que todas redundan en “un mayor grado de compromiso” de

los trabajadores con la empresa y con el trabajo que deben desarrollar: “Cuando sabes que

gozas de cierta flexibilidad para adaptar tu trabajo a los imprevistos de la vida personal, se

reduce el estrés que sufriríamos de otra manera trabajando fuera de casa mientras vivimos

solos en una ciudad como Madrid. Por mi experiencia diría que la calidad del trabajo

mejora notablemente cuando quien lo hace está satisfecho con las condiciones en que debe afrontarlo”.

Pese a que ambos trabajan en empresas que facilitan la conciliación de sus empleados,

siguen siendo unos rara avis en sus entornos laborales. Enrique, de hecho, ha sido el primer

hombre en su empresa en solicitar una excedencia: “La mayor parte de los padres ven una

excedencia como algo bonito y deseable pero que no es para ellos. Queda aún mucho

camino por recorrer para que los cuidados se contemplen como una alternativa igual de

buena que el trabajo fuera de casa”, asegura. Opinión que comparte Antonio, que también

es un caso único en su empresa: “Es muy curioso porque muchos de mis compañeros,

hombres y mujeres, me han dicho que qué bien hago, y que qué bien que me quedo con los

peques. Pero luego muchos de ellos han sido padres y madres y no lo hacen, aunque está claro que cada uno tiene sus circunstancias”.

07 de diciembre de 2016

Economía

Sólo el 10% de las empresas tiene un plan de

igualdad conforme a la ley

Manifestación del Día de la Mujer Trabajadora

En España el sueldo anual de ellas equivale al 76,7% del de los hombres.

El porcentaje de mujeres en los consejos de administración de las empresas del Ibex

35 es de apenas un 20%.

La igualdad no existe en las empresas españolas, sigue siendo un espejismo nueve

años después de que las Cortes aprobaran la Ley Orgánica 3/2007 para la Igualdad

Efectiva de Mujeres y Hombres (LOIEMH): sólo el 10% de las compañías que están

obligadas a aplicarla lo hacen o, de otro modo, el 90% le da la espalda.

De acuerdo con la norma, las empresas que superen los 250 empleados deben

implantar un plan de igualdad.Pero ni el riesgo de sanciones económicas ni la

responsabilidad corporativa ni los beneficios sobre la productividad y la

competitividad son argumentos de suficiente peso para que nueve de cada 10 grandes

empresas se pongan al día con sus obligaciones en este tema, según un estudio de la

consultora Leialta.

«Nos hemos encontrado con mucho desconocimiento de la ley por parte de las

compañías y con una gran falta de concienciación», asegura Yalenny Florentini,

directora de Leialta y coordinadora del informe.

Hay quien considera que hablar de desigualdad laboral entre hombres y mujeres es

anacrónico e irreal apelando al argumento de la incorporación femenina al mercado de

trabajo. Sin embargo, aunque dicha incorporación es cierta, las condiciones de unos

y otras son diferentes: los tipos de contrato, las jornadas o la remuneración

atestiguan el desequilibrio.

Del total de los ocupados a tiempo parcial (2.697.100 personas), un 72,1% son mujeres

y un 27,8% son hombres; también es superior la tasa de temporalidad femenina

(27,2%) comparada con la masculina (26,7%). A nivel de sueldos, en España existe

una brecha salarial del 14% y el salario promedio anual de ellas es el 76,7% del

de ellos, de acuerdo con la Encuesta de Estructural Salarial 2014 (la última publicada

por el INE). Pero hay más. Las proyecciones basadas en los datos del Informe Global de

la Brecha de Género 2015 apuntaban que el abismo en los sueldos podría cerrarse en

un plazo de 118 años, es decir, en 2133, pero el proceso se ha ralentizado y el periodo

se ha ampliado hasta 2186.

El tablero laboral está diseñado en masculino: hay segregación horizontal -hablamos

de trabajos de hombres y trabajos de mujeres-, las iniciativas igualitarias escasean y

son ellas quienes se acogen en mayor proporción a las medidas de

conciliación. No es casual. Las mujeres siguen soportando la mayor carga del cuidado

doméstico, algo a veces incompatible con los horarios y las extensas jornadas

laborales. En esa dicotomía, las féminas priman el desarrollo familiar por encima

del laboral, de ahí las tasas de parcialidad y la menor presencia en puestos de

responsabilidad, la llamada segregación vertical.

Atendiendo a las conclusiones del informe, el porcentaje de mujeres en los consejos

de administración de las empresas que cotizan en el Ibex 35 es de apenas un

20%. La UE estableció como objetivo «no vinculante» que ese porcentaje escalara al

40% en 2020 y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) recomienda que

sea de al menos un 30%. Ésta es la meta que persigue también la plataforma Isotés, un

grupo independiente de mujeres profesionales que trata de incentivar la presencia

femenina en puestos directivos.

Sara Bieger, su presidenta y socia directora de la firma Leaders Trust International en

España, cree que «llega un momento en la vida de las trabajadoras en el que

muchas eligen ralentizar su carrera para compatibilizar vida laboral y familiar,

de forma que se quedan en los mandos intermedios» y se alejan de la dirección. «A esto

se suma un sistema de valoración a nivel empresarial que nos perjudica», añade

Florentini.

Usúe Madinaveitia, creadora de la plataforma Mujeres Directivas y artífice del

movimiento #mamiconcilia, coincide en el estereotipo del hombre poderoso como uno

de los lastres para la presencia femenina en puestos de liderazgo empresarial. «Al

haber más hombres en esos cargos, los que deciden son ellos y no es raro que elijan a

otros, de igual a igual, para promocionarlos».

El resultado es un desprecio del talento femenino que conlleva consecuencias

económicas y corporativas. El equilibrio entre hombres y mujeres en las plantillas

mejora los beneficios, genera un mayor compromiso de los empleados y fomenta

la innovación y la creatividad, en opinión de Alejandra Ramírez Cuenca, directora de

la agencia de innovación Be Global.

Ramírez reconoce «avances» en los últimos años y las cifras lo corroboran. El número

de puestos en los consejos de las empresas del Ibex ocupados por mujeres

asciende a 91, 12 más que en 2015, según el IV Informe de las Mujeres en los

consejos del Ibex 35 realizado por la consultora Atrevia y la escuela de negocios IESE.

A esa cifra se suma la incorporación de Petra Mateos-Aparicio al consejo de Técnicas

Reunidas, que hasta marzo era la única firma del índice sin presencia femenina a ese

nivel. Por el contrario, Red Eléctrica presume de tener el consejo más paritario de

los 35.

El peso relativo de las mujeres en estos órganos ha pasado del 17,32% en 2015 al

19,83% en 2016, si bien la media de la UE se sitúa en el 21,2%. «Hay quien critica las

cuotas, pero son necesarias», asegura la responsable de Leialta. «Hay que generar

conciencia social y trabajar de manera transversal en la sociedad para avanzar

hacia la igualdad efectiva», completa la responsable de Be Global.

Bieger reclama educación y sensibilidad, «que se hable mucho de esto para que las

empresas sepan que existen opciones» para fomentar el equilibrio y conseguir que la

igualdad deje de ser una ilusión.

La previsión de cifras de vacunación entre los españoles se sitúa alrededor

del 65%

La vacunación contra la gripe puede

evitar hasta un 20% de las bajas

laborales

La vacunación contra el virus de la gripe podría evitar entre un 15-20 % de bajas

laborales en otoño e invierno, según datos de la compañía especializada en prevención de

riesgos laborales Unipresalud (www.unipresalud.com). Para evitar las ausencias

laborales por este motivo, la compañía ha iniciado su campaña de prevención por la que

calculan que pasarán unos 3000 trabajadores.

En esta campaña 2016 – 2017, la previsión de cifras de vacunación entre los españoles se

sitúa alrededor del 65% en el grupo de edad mayor o igual a los 65 años y superar el 30%

en el grupo de los profesionales sanitarios, según datos del Ministerio de Sanidad,

Servicios Sociales e Igualdad.

Ventajas de la prevención

Evitar posibles enfermedades o complicaciones derivadas del virus especialmente en

aquellos grupos de riesgo, son algunas de las ventajas de pasar por un centro médico para

vacunarse. Las consecuencias para la salud laboral de contraer el virus se ven reflejadas

en el coste para la empresa y una disminución de la productividad, lo que conlleva un

aumento del número de bajas laborales.

«Es necesario mantener la atención y la prevención al máximo nivel para combatir los

efectos del virus de la gripe. Esperamos concienciar más a la población de la necesidad y

los beneficios de vacunarse», afirma el Dr. Sergio Franco, Responsable Desarrollo

Negocio Salud Laboral.

Grupos de riesgo

Personal sanitario, enfermos de asma, diabéticos, embarazadas y personas mayores de 65

años son algunos de los grupos de riesgo que deben prestar más atención durante esta

época del año. Para complementar la prevención, lavarse las manos o taparse la boca al

estornudar o toser pueden ser algunos consejos sencillos que se pueden seguir en el día a

dia.

Equipos &talento.com

El multitasking, un riesgo para la

productividad del trabajo La UOC asegura que hacer varias tareas al mismo tiempo resulta ineficaz en

términos de eficiencia

La capacidad que tiene un profesional de trabajar en varias tareas está, hoy en

día, muy valorada por las empresas. De hecho, en la mayoría de las ofertas de

trabajo es un requisito imprescindible. Pero, en cambio, varios estudios

internacionales -como los de las universidades Stanford y Harvard- alertan de

que la multitarea (multitasking) provoca una reducción de la productividad y

conlleva un coste para la economía global de 450.000 millones de dólares en al

año.

Diego Redolar, neurocientífico de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), afirma

que “cuando se hacen varias tareas a la vez, la eficiencia de la ejecución merma de

una manera muy acentuada”. Unos efectos negativos de los que también alerta Pilar

Ficapal, experta en organización del trabajo y recursos humanos de la UOC, quien

revela que la intensidad y la sobrecarga cognitiva o las interrupciones en la

realización de una tarea concreta “pueden hacer caer la concentración, convertirse

en una fuente de estrés y dificultar la creatividad y la eficacia profesional”. “La

multitarea puede llevar a adoptar conductas inadecuadas en la organización del

tiempo y ser reactivos ante las circunstancias que nos rodean, porque no hay nada

planificado”, añade.

Ahora bien, como explica Mar Sabadell, experta en prevención de riesgos laborales de

la UOC, la influencia en el rendimiento depende de la modalidad de tareas que

concurren en el multitasking. "Los niveles de activación cerebral no son los

mismos cuando la tarea responde a estímulos tácticos o señales visuales o

auditivas. La multitarea será menos efectiva cuando las tareas comparten modalidad,

por lo que hablar y escuchar al mismo tiempo es menos efectivo que escuchar una

información y completar un informe ", asegura.

En las organizaciones flexibles, la multitarea puede generar rendimientos

mejores

“Hay que tener en cuenta todo el conjunto de características organizativas,

estratégicas y culturales de las empresas en las que se valora la capacidad para la

multitarea”, advierte Ficapal. Aunque la investigación, en este sentido, aún incipiente,

en las empresas más abiertas, innovadoras y flexibles, que organizan y gestionan

los recursos humanos teniendo en cuenta los resultados de los proyectos y la

polivalencia de los trabajadores, “la multitarea tiene más posibilidades de generar

rendimientos mejoresque las empresas con unas estructuras más rígidas y

tradicionales”, remarca.

Los supertaskers, una especie aparte

“Hay personas a las que no afecta de la misma manera la multitarea y queson muy

buenas haciendo dos tareas o más a la vez: son las llamadas supertaskers”, explica

el neurocientífico de la UOC. Una investigación liderada por Nathan Medeiros-Ward

(2015) ha demostrado que los supertaskers se caracterizan por el hecho de sumar

de manera más eficiente dos regiones de la corteza cerebral, la corteza cingulada

anterior y la corteza prefrontal, en comparación con los otros participantes del estudio.

Los Millennials son los nativos digitales con mayor facilidad multitarea

En los Millennials (grupo de edad de 18 a 34 años) se ha puesto de relieve su

capacidad de multitarea. “Disponen de competencias técnicas, metodológicas,

sociales y digitales por su contacto permanente con las diferentes formas de

tecnología y de comunicación, lo que les ha proporcionado esta capacidad y un

aprendizaje en la simultaneidad de diferentes tareas”, afirma Ficapal.

Redolar explica que el funcionamiento de las redes neuronales del cerebro es

diferente entre los nativos digitales y los que no lo son. “Estos últimos están

acostumbrados a trabajar de manera lineal, en cambio, los Millennials lo hacen de

manera paralela sin provocarles tanto estrés”, señala.

Pero, la sociedad tiende, en general, a trabajar de manera paralela y hay que irse

preparando en este sentido. Ficapal explica que la capacidad para afrontar este nuevo

escenario está vinculada "con la voluntad y con la disposición de mejorar la

empleabilidad a través del desarrollo de nuevas competencias, de la capacidad de

anticipación y adaptación a los cambios, y de la flexibilidad personal".

Cómo combatir los efectos negativos del multitasking

El 98% de los profesionales de todo el mundo dedica una parte del tiempo a la

multitarea, según un estudio de Accenture, y un tercio confiesa que las

distracciones continuas les hacen disminuir la capacidad de concentración y la

calidad del trabajo. “Para combatirlo, es aconsejable que los profesionales hagan

pausas de entre cinco y diez minutos cada hora o cada hora y media”, explica el

neurocientífico. Aparte de la pausa, que es crítica, "la cafeína y el azúcar, con una

dosis adecuada, también pueden ayudar".

Para reducir los efectos negativos de la multitarea, Ficapal explica que hay que crear

las condiciones de trabajo para que las tareas se lleven a cabo en un contexto

de trabajo de calidad. “Los empleadores deben ser capaces de identificar las

habilidades de los trabajadores y los requerimientos concretos del entorno donde se

ha de actuar, y aprovechar el potencial de las personas con esta capacidad para

plantearles proyectos con objetivos alcanzables, que les permitan poner en práctica

una variedad significativa de habilidades y faciliten su bienestar emocional. Este hecho

puede dar resultados favorables en cuanto a atracción y retención de los individuos

en la organización y reducir la rotación laboral”.

Dado que muchas tareas a la vez pueden provocar un cansancio mental adicional

(estrés, ansiedad, etc.), Pedro Vidal, profesor de Derecho laboral de la UOC, explica

que estas situaciones requieren "una evaluación de los riesgos psicosociales de los

trabajadores designados para estos trabajos".

En algunos convenios colectivos se establece una política de descansos específica

por razones de seguridad y salud. Los más extendidos son los relacionados con

las pantallas de visualización (evitar problemas visuales, problemas musculares,

fatiga mental, etc.). El ejemplo más conocido, en este escenario, es el Convenio

colectivo de ámbito estatal del sector de la atención multicanal (contact center; antes

telemarketing), que dice que "el personal de operaciones que lleve a cabo la actividad

en pantallas de visualización de datos, debe tener una pausa de cinco minutos por

cada hora de trabajo efectivo".

RRHHpress.com

El uso de las TIC provoca consecuencias

negativas a más de un tercio de los

trabajadores

Recursos Humanos RRHH Press. El Observatorio de prevención de riesgos

laborales y la Universidad Jaume I han llevado a cabo un estudio para conocer el

uso que se hace de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) y sus

consecuencias psicosociales, en especial sobre el tecnoestrés, aquel derivado de la

introducción y uso de nuevas tecnologías en el trabajo.

El análisis, en el que han participado 855 personas de diferentes países (55,5 % de

España y resto de otros países de América Latina), pone de relieve que el 97 % de los

encuestados usan las TIC para la realización de su trabajo y/o tareas

profesionales.

Así mismo, se constata que la implantación y uso de las TIC no solo tiene carácter

laboral, sino que se ha extendido al ámbito académico y personal. En concreto,

más de un 73 % de los encuestados hacen uso de las TIC con fines lúdicos o de ocio,

y un 64 % usan las TIC con fines académicos.

Exceso de uso. El 54,5 % utilizan continuamente las tecnologías

Un 34 % de las personas que participaron en el estudio consideran que el uso

excesivo de las TIC les produce problemas o consecuencias negativas, como el bajo

rendimiento en el estudio o trabajo, tensión, fatiga visual, posturas inadecuadas,

discusiones de pareja, no salir con sus amigos, etc.

Por otro lado, en relación al factor psicosocial del contenido del trabajo, un 27,38 % de

los encuestados realizan tareas rutinarias, y un 51,58 % consideran que trabaja con

mucha información y datos.

En relación con los factores psicosociales de carga y ritmo de trabajo, un 31,87 %

afirman trabajar con plazos ajustados, y un 24,79 % trabajar contra reloj. Esto tiene

especial relevancia cuando se analiza el grado de implantación y uso de las TIC en el

ámbito laboral.

Preocupados por dar respuesta a las tecnologías de origen laboral

Las demandas laborales asociadas especialmente a la información y comunicación en

las organizaciones se han incrementado, y así se constata en el estudio, ya que el 65

% de los encuestados aseguran estar de acuerdo, muy de acuerdo o absolutamente

de acuerdo en estar tan preocupados por dar respuesta a las tecnologías de origen

laboral (contestar mails, teléfono…) que olvidan sus asuntos personales.

Además, un 32 % de los encuestados son tecnoadictos, ya que, con frecuencia o

siempre, se sienten mal si no tienen acceso a las TIC (mail, móvil, internet), al igual

que le sucede a un 28 % de los participantes en el estudio, que reconocen sentir un

impulso interno que les obliga a usar las TIC en cualquier momento y lugar.

INFORMAZIO TEKNIKO ETA ZIENTIFIKOA

________________________________________

INFORMACIÓN TÉCNICA Y CIENTÍFICA

¿Puede un pulsómetro acortar la incapacidad temporal de los pacientes con

cardiopatía isquémica?

Resumen:

Es habitual que los cardiólogos recomienden el uso de pulsómetros en

determinados pacientes con cardiopatía isquémica que quieren retomar la práctica

deportiva. Actúan como un elemento de seguridad que permite regular la

intensidad del ejercicio. Al igual que el pulsómetro es una herramienta que ayuda a

compatibilizar la cardiopatía isquémica con la práctica de determinados esfuerzos

físicos deportivos ¿podría ser una herramienta que ayude a compatibilizar la

cardiopatía isquémica con la realización de determinados esfuerzos físicos

laborales? En aquellos casos en los que médicamente existe una recuperación

suficiente para la reincorporación laboral pero el paciente mantiene dudas al

respecto, el uso del pulsómetro podría proporcionarle esa seguridad que facilitase la

reincorporación laboral.

“La investigación sobre los procesos de Integración laboral de personas

con Discapacidad en entornos ordinarios. Un estudio de casos cualitativo”

Resumen:

En este artítulo se revisa la situación laboral de las personas con discapacidad en

nuestro contexto y las características metodológicas de las principales

investigaciones que abordan esta temática. A continuación se analiza una

investigación centrada en los procesos de integración laboral de personas con

discapacidad en el entorno ordinario. La finalidad de este análisis es valorar el

potencial del método de estudio de casos cualitativo para la investigación orientada

a la mejora de las prácticas educativas en general y para el estudio de los procesos

de inserción laboral de personas con discapacidad en particular.