8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 1/190
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 2/190
EL NUEVO TESTAMENTO
Y SU MENSAJE
Comen tario para la lec tura espir i tua l
Serie dirigida por
WOLFGANG TRILLING
en colaboración con
KARL HERMANN
SCHELKLE y HEINZ
SCHÜRMANN
3/1
EL EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS
ALOIS STOGER
EL EVANGELIO
SEGÚN SAN LUCAS
TOMO PRIMERO
BARCELONA
EDITORIAL HERDER
1979
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 3/190
Versión castellana de
ALEJANDRO ESTEBAN LATOR ROS.
de la obra de
ALOIS STÓGER,
D as Ev ange l i um nac h Lukas , 1.
Tei ,
dentro de la serie «Geistüc he Schríftlesung»
Patmos-Verlag, Dusseldorf
Tercera edición 1979
IMPRIMATUR: Barcelona, 25 de febrero de 1975
t RAMÓN DAUMAL S E RRA, obispo auxiliar
© Patmos-Verlag, Dusseldorf
I Editorial Herder S.A., Provenza 388, Barcelona (España) 1970
ISBN 84-254-0609-9
Es moniDAD
DEPÓSITO LEGAL:
B. 19.876-1979
PRINTBD IN
Smrw
GRAFESA
-
Ñapóles, 249
-
Barcelona
I N T R O D U C C I Ó N
1.
San Lucas dejó a la humanidad dos l ibros: el
Evangelio
y los
Hechos
de los
apóstoles.
En la
introduc
ción
del
segundo
se
dice: «Escribí
mi
primer relato,
oh Teófilo, acerca de todo lo que Jesús hizo y enseñó hasta
el día en que fue arrebatado a lo a lto , después de dar ins
trucciones por medio del Espíritu Santo a los apóstoles
que se había elegido» (Act l , l s) . Designa el Evangelio
y los Hechos con el término l egos . Lo que liga a ambos
libros es la palabra de Dios. Es también lo que enlaza las
dos épocas
de que
tratan
los dos
escritos:
el
tiempo
de
Jesús
y el
tiempo subsiguiente
de la
Iglesia.
La
obra his
tórica de Lucas quiere presentar la palabra de Dios que
fue proferida por medio de Jesús y que sigue actuando en
la predicación misionera cristiana. Esta idea está formu
lada en cierto modo en las siguientes palabras de los
Hechos: «Nosotros , pues, os anunciamos que la pro
mesa hecha
a los
padres, Dios
la ha
cumplido
en
favor
de
los
hijos,
que
somos nosotros , suscitando
a
Jesús . . .»
(Act 13,32s).
El Evangelio
es
punto
de
par tida
y
base para
el
acon
tecer que se desarrolla en los Hechos de los apóstoles.
En efecto, la palabra que envió Dios es la acción salva
dora
de
Jesucristo
en
Judea
(Act
10,36s).
La
historia
de
5
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 4/190
Jesucristo es, por tanto, la palabra de Dios. El h ech o
de Cristo es una palabra que habla en la predicación apos
tólica. Lucas presentó en los Hechos de los apóstoles el
acontecimiento de Cristo como cumplimiento de la palabra
profética que había sido dirigida a los padres, y como
punto de partida de la predicación misionera. En Jesu
cristo está ya delineado todo lo que los Hechos refieren
sobre la palabra de Dios. El evangelista diseñó una imagen
de Cristo que presenta a Jesús como la palabra de Dios.
La clave para la inteligencia del Evangelio nos la ofrecen
los Hechos de los apóstoles.
Se describe a Jesús como projeta «poderoso en obras
y en palabras». Es más que profeta; es el profeta de los
últimos tiempos, el Santo de Dios, el Hijo de Dios. Su
palabra es, por tanto, revelación final, palabra decisiva,
definitiva. La fuerza de lo alto, el Espíritu Santo, es el que
sugiere en los últimos tiempos el lenguaje de salvación
que abre las bocas y los corazones de todos (Act 1,8;
2,4). Con este Espíritu fue ungido Cristo desde el prin
cipio, este Espíritu recibieron los apóstoles de Cristo
elevado a la diestra del Padre. Gracias a él actúan los
testigos con gran fuerza y refuerzan la palabra mediante
signos y prodigios que el Señor hace que se produzcan por
su mano (Act 4,33s; 14,8s), así como anteriormente Jesús,
ungido por el Espíritu, había tenido poder sobre las en
fermedades, los demonios, la muerte y el pecado.
La palabra del Señor se propaga por toda la región
(Act 13,49). C rece (Act 6,7), «crece y se multiplica» (Act
19,20) y se muestra poderosa. Los Hechos de los apósto
les no quieren exponer otra cosa que el cumplimiento de
la promesa del Resucitado: «Recibiréis la fuerza del
Espíritu Santo que sobre vosotros vendrá; y seréis tes
tigos míos en Jerusalén, en toda Judea y Samaría, y hasta
los confines de la tierra» (Act 1,8). El evangelio pre-
6
senta ya el comienzo de esta expansión, de esta propa
gación de la palabra de Dios hasta los confines de la
tierra. La palabra de Dios vino del cielo a una ciudad de
Galilea, a Nazaret, allí comenzó a actuar después del bau
tismo y llenó toda la región de Palestina. San Lucas no se
cansa de repetir cómo la palabra de Dios tiende a propa
garse por todas partes. La voz de Jesús pasó de Palestina
a las regiones limítrofes de los gentiles; las muchedumbres
acuden a Jesús de todas partes.
Lucas presentó a Jesús como cam i nan te . Es un cami
nante en la historia de la infancia, en su actividad en Ga
lilea, en su gran «viaje», incluso como resucitado (24,13ss).
Jesús camina de Galilea a Jerusalén, donde es elevado al
cielo, para enviar la virtud del Espíritu Santo, que arma a
los apóstoles como a testigos itinerantes.
La palabra anunciada por Dios por medio de Jesu
cristo, es
la palabra de los apóstoles .
Los servidores de
Dios hablan palabra de Dios (Act 4, 29). Atestiguan lo
que han visto y oído (Act
1,2.22).
El Evangelio habla de
estos testigos, refiere cómo fueron ganados y elegidos en
Galilea y cómo acompañaron a Jesús hasta que fue ele
vado al cielo. Las secciones en que se habla de la activi
dad en Galilea se cierran cada vez con otros tantos lla
mamientos de discípulos (5,lss; 5,27ss) y con actividades
de los mismos
(8,1 ss; 9,1 ss;
9,49ss). Todos los que han
recibido la palabra de Dios se convierten a su vez en
apóstoles y heraldos de la palabra. Así, al extenderse la
palabra de Dios se multiplica también el número de los
discípulos.
Según los Hechos de los apóstoles, la palabra de Dios
es p a l ab ra d e sa l vac i ó n (Act 13,26) y de vida (Act 14,3;
20,32). Así es también palabra de «conversión a Dios y
de fe en nuestro Señor Jesucristo» (Act 20, 21) y de per
dón de los pecados (Act 3, 19; 13,38; 26,18). La palabra es
7
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 5/190
llamamiento de Dios, bajo la forma del hecho de Jesús;
a este llamamiento se debe responder con fe y conversión.
Este llamamiento debe oírlo, percibirlo, creerlo (Act 4,4)
cada uno en particular. Si lo hace, experimentará salva
ción, consolación, paz. La prehistoria y la cimentación
de esta acción de la palabra en la predicación misionera de
los Hechos de los apóstoles la ofrece el Evangelio, que
nos habla del poder y fuerza salvífica de la palabra de
Jesús.
2. Los cristianos de la primera generación es taban
convencidos de que a la resurrección de Jesús no tarda
ría en seguir su segunda venida y la resurrección general
de los muertos (Rom 13,11; ITes 4,15).
Esta esperanza de la próxima venida de Cristo no se
realizó. Cuando escribía Lucas su Evangelio y los Hechos
de los Apóstoles había ya hecho estragos la persecución de
los cristianos por Nerón, los romanos habían tomado Jeru-
salén, el templo había sido destruido por las llamas, pero
la segunda venida de Cristo no había tenido lugar. Los
Hechos de los apóstoles dan que pensar: «No os co
rresponde a vosotros saber los tiempos o momentos que
el Padre ha fijado por su propia autoridad» (Act 1,7). En
tre la ascensión de Jesús y su segunda venida se ha de
intercalar un período de tiempo más largo de lo que se
había creído en un principio, un período que ha de tener
sentido en el transcurso de la historia de la salvación. Los
cristianos no pueden sencillamente cruzarse de brazos y
estarse mirando al cielo: «Hombres de Galilea, ¿qué ha
céis ahí parados mirando al cielo? Este mismo Jesús que
os ha sido arrebatado al cielo volverá de la misma mane
ra que le habéis visto irse al cielo» (Act 1,11). Hay que
cumplir un gran encargo de Jesús: «Recibiréis la fuerza
del Espíritu Santo que sobre vosotros vendrá, y seré is tes
t igos
míos en Jerusalén, en toda Judea
y
Samaría, y hasta
8
los confines de la tierra» (Act 1,8). La historia de la
salvación desde el principio del mundo hasta la segunda
venida de Cristo transcurre, según esta concepción de
Lucas, en tres épocas. La primera es e l t iempo de la pro
m e s a , en el que Dios preparó a su pueblo, mediante la
ley y los profetas, para la salvación venidera (16,16). Esta
época terminó con Juan el Bautista. La segunda época es
el tiempo de la realización, la del cumplimiento, el «año
de gracia del Señor» (4,19), e l t iempo de Cristo, que se
extiende desde el comienzo de su vida en la tierra hasta
el momento de su ascensión al cielo. Puede llamarse tam
bién la mitad o punto medio de los tiempos. En este pe
ríodo de tiempo se realizó, por lo menos incipientemente,
en un pequeño espacio y por breve tiempo, el compren
dido entre los emperadores romanos Augusto y Tiberio,
lo que se había predicho en el tiempo de la promesa. Se
cumplió con creces lo que Dios había realizado por me
dio de los profetas. Los demonios son vencidos, la en
fermedad y la muerte superadas, se anuncia a los pobres
la buena nueva, se perdonan los pecados, está presente
el amor de Dios. A este punto medio de los tiempos sigue
un tiempo para el que Jesús envió fuerzas e incluso el
Espíritu Santo. En este tiempo se extiende la palabra de
Dios hasta los confines de la tierra. Es e l t iempo de la
Igles ia, que fue fundada ya en el segundo período, en la
mitad de los tiempos, y que ahora se va desarrollando.
Las tres épocas se hallan en relación mutua. La mitad
de los tiempos es realización del tiempo de la espera; por
eco se prepara y se interpreta mediante la Sagrada Escritura
(24,44-47). Lucas cita raras veces la Sagrada Escritura, pero
en los pasajes del Evangelio que son exclusivos de él
es con frecuencia su exposición un tejido en el que
están entrelazados numerosos hilos del Antiguo Testa
mento. Los acontecimientos del tiempo de Jesús se ex-
9
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 6/190
plican a la luz del Antiguo Testamento. De la palabra de
Dios reciben el sentido que Dios mismo les había prefija
do , se hace visible el plan de Dios que él realiza con la
historia de la salvación. Mientras que el tiempo de la es
pera mira hacia adelante a la mitad de los tiempos, el
tiempo de la Iglesia mira a la misma con una mirada re
trospectiva. En este tiempo medio está contenido todo
aquello de que vive el tiempo de la Iglesia. El Espíritu
Santo, que es la fuerza de la Iglesia, era también la fuer
za de Jesús, que con él fue ungido, por él oró, enseñó,
obró; movido por él, caminó a través del país. La vida
de Jesús es para la Iglesia el arquetipo de la vida. Sus su
frimientos son también los de los discípulos, sus expe
riencias son también las experiencias de la Iglesia. El
Evangelio da la clave de la doctrina y de la vida de la
Iglesia. Lucas escribe su Evangelip para que Teófilo pue
da procurarse certeza histórica acerca de aquello sobre lo
que ha sido instruido (1,4). Lo que Jesús vivió y enseñó,
hay que realizarlo día tras día (9, 23).
3. Dios es el que ac túa a través de todas las épocas
de la historia. Lucas quiere narrar las grandes gestas de
Dios en la historia, siendo así historiador y narrador. Je
sús tiene que llevar a cabo el plan salvador de Dios. Lucas
insiste más que los otros evangelistas en esta necesidad.
El Resucitado habla así a los discípulos: «¡Oh, torpes y
tardos de corazón para creer todo lo que anunciaron los
profetas ¿Acaso no era necesario que el Cristo padecie
ra esas cosas para entrar en su gloria?» (24,25s). Jesús
obra con la autoridad de Dios. Su obra es manifestación
de Dios. Esto fluye del coloquio del Hijo con el Padre, que
se lo ha dado todo: poder y doctrina. De esta unión con
Dios recibe Jesús sabiduría, decisión en la elección de los
discípulos, la gloria de la filiación divina en el bautismo,
en la transfiguración y en la resurrección.
10
Dios quiere mostrarse como el que actúa a través de
todas las épocas de la historia de la salvación. Ésta no
viene de los hombres, sino de Dios. «En la tierra paz en
tre los hombres, objeto del amor de Dios» (2,14). Lo que
e homb re aporta , y debe aportar , es su pobreza . El pro
grama de la acción salvifica de Jesús está contenido en el
pasaje de la Escritura que se leyó en la sinagoga y del que
dijo Jesús -que se había cum plido en aquella hor a: «El
espíritu del Señor está sobre mí, porque me ungió para
anunciar el Evangelio a los pobres; me envió a procla
mar libertad a los cautivos y recuperación de la vista a
los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos, a procla
mar un año de gracia del Señor» (Is 61,ls; 58,6). De aquí
viene el que el evangelio de Lucas sea el evangelio de los
pobres que viven en pobreza social, de los pecadores, de
los adeudados, de las mujeres que están humilladas y no
gozan de plena consideración social, de los que lloran.
Jesús mismo forma parte de los pobres. Viene de Naza-
ret, nace en un establo, no tiene dónde reclinar la cabeza.. .
E i m agn i f i cu t de la humilde esclava (1,46-55) es indica
ción del tiempo de la salud que comienza con Jesús. Dios
sale por los humildes, los desvalidos y los pobres. El que
está pagado de su propio poder cierra su corazón para
con Dios, y Dios se cierra al que se le cierra. A través
de todas las épocas de la historia de la salvación exige
Dios que sean pequeños los que quieren recibir su salud.
El hombre se hace pequeño con la convers i ó n . E l
tiempo de salvación es tiempo de misericordia con todos.
Ahora bien, el presupuesto para recibir la salvación es la
conversión: «No he venido a llamar a los justos, sino a
los pecadores, para que se conviertan» (5,32) «Para que
se conviertan» es un añadido de Lucas. El hombre se hace
cargo de su situación mediante la palabra de Dios; ésta
le informa sobre el juicio venidero y le descubre que es
11
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 7/190
pecador. La preparación para la venida de Jesús, es con
versión, arrepentimiento
y
paciencia.
Si Dios
es el
que obra
en el
tiempo
de la
salud, enton
ces
le
corresponde
la
a l ab anza .
Los
relatos
de los
prodi
gios realizados
por
Jesús acaban repetidas veces
con la
alabanza
de
Dios.
Las
alabanzas
más
extensas
de
Dios
por sus ob ras salvíficas son el benedictus y el magníf icat .
Pero también
el
pueblo
que se
entera
del
nacimiento
de
Jesús (2,20),
al
igual
que
Isabel (l,41ss), alaba
a
Dios.
A
las
obras
de
Jesús
se
responde
con
alabanzas
de
Dios (4,15; 13,13; 18,43). Después
de la
resurrección
del
hijo
de la
viuda
de
Naím, estalla
el
pueblo
en un
canto
de alabanza que reza así: «Un gran profeta ha surgido entre
nosotros; Dios ha visitado a su pueblo» (7,16; cf. 1,68).
Jesús juzga conveniente
que los
sanados alaben
a
Dios
(17,15.18).
Las
ob ras salvíficas
de
Dios
por
medio
de Je
sús apuntan
al
reconocimiento
de
Jesús
y en
definitiva
a
la alabanza
de
Dios. «Cuando
el
centurión
vio lo
suce
dido,
glorificaba
a
Dios, dic iendo: "Realmente , este hom
bre era un justo" » (23,47). También los Hechos de los
apóstoles ponen
de
relieve
la
asociación entre obra salva
dora
de
Dios por Cristo, conversión
y
a labanza: «Si, pues,
Dios
les
otorgó
el
mismo don que
a
nosotros cuando creí
mos
en el
Señor Jesucristo, ¿quién
era yo
para poder
im
pedírselo
a
Dios?
Al oir
esto,
se
tranquilizaron
y
glorifi
caron
a
Dios, diciendo: Según esto, Dios
ha
dado también
a
los
gentiles
la
conversión
que
conduce
a la
vida»
(Act
l l ,17s) .
En el
templo comienza
el
Evangelio
de
Lucas,
y
en
el
templo termina.
La
liturgia
de la
oblación
del in
cienso
es la
introducción
del
gran hecho salvador,
el
culto
sinagogal
en
Nazaret inaugura
la
actividad pública
de Je
sús,
las asambleas de la Iglesia naciente se efectúan en el
templo
de
Jerusalén.
«Y
estaban continuam ente
en el
tem
plo, bendiciendo
a
Dios» (24,53).
12
S U M A R I O
P r o p ó s i t o del evange l i s t a 1,1-4).
P A R T E P R I M E R A : EL C O M I E N Z O DE LA
SALVACIÓN 1,5-4,13).
I. La promesa
(1,5-56).
1 . Anunc iac ión
del
bau t ista (1 ,5-25) .
a ) De un
suelo santo (1 ,5-7) .
b) A n u n c i a d o
en una
hora sagrad a (1 ,8-12) .
c) Un
niñ o s anto (1 ,13-17).
d)
F i d e l i d a d
a la
promesa (1 ,18-23) .
e)
Cum pl imien to ( 1 ,24- 25).
2.
A n u n c i a c i ó n
de
Jesús (1 ,26-38) .
a ) L l e n a de gracia (1 ,26-29).
b)
P r om esa l l ena
de
gracia (1 ,30-34) .
c )
C o n c e p c i ó n
por
gracia (1 ,35-38) .
3.
E ncu en t r o ( 1 , 39- 56).
a ) Las mad r es ag r ac i adas ( 1 , 39 - 45) .
b)
C á n t i c o de M ar ía (1 ,46-55).
c )
P e r m a n e n c i a
y
regreso (1 ,56) .
I I . Nac imiento e in fanc ia
(1,57-2,52).
1 . Juan el Baut ista (1 ,57-80) .
a )
N a c i m i e n t o
e
impos i c ión
del
nombre (1 ,57-66) .
h)
C á n t i c o
de
Zac ar ía s (1 ,67-79) .
c) I n f anc i a de Jua n (1 ,80) .
2.
N a c i m i e n t o
de
Jesús (2 ,1-20) .
a )
N a c i d o
en
Belén (2,1-7) .
b) D a d o a conocer por el cielo (2,8-14).
c)
A n u n c i a d o por los pasto res (2 ,15-20) .
3.
I mpos i c ión
del
n o m b r e
y
p r esen t ac ión
de
Jesús (2 ,21-40) .
13
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 8/190
a )
I m p o s i c i ó n
del
nom br e ( 2 ,21) .
b)
P r e s e n t a c i ó n en el tem plo (2 ,22-24) .
c )
T e s t i m o n i o del profe ta (2 ,25-35) .
d)
T e s t i m o n i o de la profet isa (2 ,36-38).
e )
R e g r e s o
a
Nazaret (2 ,39-40) .
4 . El n i ñ o de doce años (2 ,41-52) .
a )
J e s ú s en el templo (2 ,41-50) .
b)
De n u e v o en Na zar et (2 ,51-52).
III.
Preparación a la ac t iv idad públ ica de Jesús
3,1-4,13)
1.
El
Bau t ista (3 ,1-20).
a ) El comienzo (3 ,1-6) .
b)
P r e d i c a c i ó n del Bau t ista (3 ,7-17) .
c)
Fin del Bau t ista (3 ,18-20) .
2.
P r e p a r a c i ó n de Jesús pa r a su mi s ión 3,21-4,13).
a )
B a u t i s m o
de
Jesús (3 ,21-22) .
b) El nuevo Ad án ( 3 ,23 - 38) .
c)
T e n t a c i ó n de Jesús (4 ,1-13) .
PA R TE SEG U N D A : A C TIV ID A D DE J E S Ú S EN G A L I L E A 4,14-8,50).
I. Comienzos
de la
predicación
4,14-6,16).
1. Presentación (4 ,14-5 ,11) .
o ) E p íg r a f e 4,14-15).
b) En Na zar et (4 ,16-30).
c ) En C a f a r n a ú m 4,31-44).
d)
Los pr im eros discípu los (5 ,1-11) .
2.
O b r a s
de
pod er (5 ,12-5 ,39).
a )
C u r a c i ó n
del
lepros o (5 ,12-16).
b) P e r d ó n de peca dos (5 ,17-26).
c)
Vocac ión de un pub l ican o (5 ,27-39).
3.
P a l a b r a
de
auto r ida d (6 ,1-19).
a )
Ar r a nca r e sp igas
en
sábado (6 ,1-5) .
b)
C u r a c i ó n en sáb ado (6 ,6-11) .
c)
Vocac ión de los doce (6 ,12-19).
II . Profeta, poderoso en palabras y en obras
(6,20-8,3) .
1.
La
nue va do ctr ina (6 ,20-49).
a ) B i e n a v e n t u r a n z a s y conminac iones ( 6 , 20 - 26) .
h)
A m o r a los enem igos (6 ,27-36).
c)
No juzguéis (6 ,37-38) .
d)
Verdadera rel igiosidad (6 ,39-49) .
2. La acc ión s a lvador a de Jesús (7 ,1-8 ,3) .
a ) C u r a c i ó n
del
c r i ado
del
centu r ión (7 ,1-10) .
14
b)
R e s u r r e c c i ó n
del
hijo
de la
v iuda
de
N aí m (7 ,11-17).
c)
M e n s a j e
del
Bau t i s t a
a
Jesús (7 ,18-35) .
d) C o n v e r s i ó n de la pec ado ra (7 ,36-50) .
3.
Muje r es que se r v í an a Jesús (8 ,1-3) .
III. Más que
profeta
(8 ,4-9 ,17) .
1. En pa l ab r as ( 8 , 4 -21 ) .
a )
P a r á b o l a
del
sem brad or (8 ,4-15).
b) P a r á b o l a de la lám para (8 ,16-18).
c)
La ve r dad er a f ami l ia de Jesús 8,19-21).
2.
En
obra s (8 ,22-56).
a )
La t empes t ad ca lm ada ( 8 ,22 - 25) .
b) El
e n d e m o n i a d o
de
Ge ras a (8 ,26-39).
c) Poder sob r e la e n f e r m e d a d y la muer te (8 ,40-56) .
3.
La acc ión de los doce (9 ,1-17) .
a )
La misión (9 ,1-6) .
b)
Juicio
de
Her o des ace r ca
de
Jesús (9 ,7-9) .
c)
Regr eso
de los
após to l es
y
p r imer a mul t i p l i cac ión
de
panes
(9,10-17).
IV .
El Mesías su fr iente
(9,18-50).
1 . Mesías
y
siervo
de
Ya hve h (9 ,18-27) .
a )
Conf es ión
de
Pe dro (9 ,18-20).
b)
P r i m e r a n u n c i o de la pasión (9 ,21-22) .
c)
Seguir a Cr i s to en la pasión (9 ,23-27) .
2.
Man i f es t ac ión del Me sías su f r iente (9 ,28-43).
a )
T r ansf igu r ac ión
de
Jesús (9 ,28-36) .
b) C u r a c i ó n de un epi lépt ic o (9 ,37-43a) .
3.
La vía d o l o r o s a del Mesías (9,43£>-50).
a )
Segundo anunc io de la pasión (9,43¿>-45).
b)
Segu imien to
de
Cr i s to
a la luz del
a n u n c i o
de la
pas ión
(9,46-48).
c )
Uso del n o m b r e de Jesús (9 ,49-50) .
P A R T E T E R C E R A : C A M I N O DE J E R U S A L É N (9,51-19,27).
I.
El comienzo
(9,51-13,21).
1. El M a e s t r o en m a r c h a y sus discíp ulos (9 ,51-9 ,62) .
a )
R e c u s a c i ó n
de
alojam iento (9 ,51-56).
b) L l a m a m i e n t o s de discípulos (9 ,57-62) .
2.
Mis ión de los setenta (10 ,1-24).
a )
Des ignac ión y misión (10 ,1-16) .
b)
Regreso (10 ,17-20) .
c) Júb i lo
de
Jesús (10 ,21-24) .
15
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 9/190
3. Obra s y palabras (10,25-42).
a )
Amor al prójimo (10,25-37).
b) Escuchar la palabra (10,38-42).
4. La nueva oración (11,1-13).
a ) La oración de los discípulos (11,1-4).
b) El amigo imp ortun o (11,5-8).
c ) Certeza de ser escuchad os (11,9-13).
5. El Mesías y sus adversario s (11,14-54).
a ) El más fuerte (11,14-28).
b) La señal (11,29-36).
c) El verdadero Mae stro de la ley (11,37-54).
6. Los discípulos en el mu ndo (12,1-53).
a )
Confesión intrépida (12,1-12).
b)
Desapego de los bienes (12,13-21).
c) Confianza en Dios (12,22-34).
d) Vigilancia y fidelidad (12,35-53).
7.
Llam amiento a la conversión (12,54-13,21).
a ) Las señales del tiempo (12,54-59).
b) Los acontecimientos invitan a la conversión (13,1-9).
c )
Se inicia la era de salvación (13,10-21).
16
TEXTO Y COMENTARIO
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 10/190
P R O P Ó S I T O D E L E V A N G E L I S T A
1,1-4
San Lucas comienza con un prólogo que se adapta al uso
literario de los escritores de su época
*.
En un período amplio
y cuidadosamente elaborado se habla de lo que ha dado pie para
escribir la obra, de su contenido, fuentes, método y fin. Con ello
se trata de hallar acceso al mundo del helenismo.
1
En v is ta de que muchos emprendieron e l trabajo de
com p oner un re l a to d e lo s sucesos q ue s e h an cum p l id o
entre nosotros,
2
según n os l o s t ransm i ti eron l o s q ue fueron
test igos oculares y luego servidores de la palabra,
3
tam
bién yo, después de haber invest iga do co n exact i tud todos
esos sucesos d esd e su or i gen , m e h e d e term i nad o a e scr i
bírte los ordena damen te, i lustre Teóf ilo , * a fin de que c o
nozcas bien lu sol idez de las enseñanzas que has recibido.
El Evangelio de Lucas tiene precedentes y modelos. Ha
utilizado el Evangelio de Marcos y tiene afinidad con el
evangelio de san Mateo. Muchos emprendieron e l traba
jo...
es sin du da una fórmula exigida por la estruct ura
literaria del prólogo. Quien escribe un Evangelio empren-
1. Cf. el prólogo del médico Dioscórides (en tiempo de Nerón) a sü
libro de medicina: «Dado que no sólo muchos antiguos sino también
modernos han escr ito sobre la preparación y la vir tud de los medicamentos. . . ,
quer ido Ario , yo también voy a intentar . . .»
19
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 11/190
de una gran obra. Lucas sólo se permite afrontar esta
empresa porque otros lo han hecho también ya antes que él.
El autor va a escribir sobre
s u c e s o s
que Dios había
preanunciado y que ahora se están cumpliendo entre los
cristianos a quienes escribe Lucas. «Dios ha enviado el
mensaje a los hijos de Israel y ha anunciado el Evangelio
de paz por medio de Jesucristo» (Act 10,36). Este men
saje, esta palabra que anuncia y aporta salvación, tuvo
comienzo con Jesucristo (Heb 2,3), que es el punto medio
de la historia y la obra salvífica de Dios. Comenzando por
Galilea, se extendió la palabra a toda Judea, es decir, Pa
lestina; después de la ascensión de Jesús al cielo, la anun
ciaron en toda Judea y Samaría y hasta los confines de la
tierra (Act 1,8), los apóstoles, con la virtud del Espíritu
Santo. Desde entonces no se ha detenido esa palabra, no
ha cesado de extenderse anunciando y aportando la sal
vación que Dios había prometido.
La fuente de la narración de Lucas y de sus predece
sores es la
tradic ión
de la Iglesia que se remonta a testi
gos oculares. Éstos presenciaron y vivieron los grandes su
cesos de la historia de la salvación. Sólo podía ser heraldo
del mensaje de Cristo después de su ascensión al cielo
quien hubiera sido testigo «todo el tiempo en que anduvo
el Señor Jesús entre nosotros, a partir del bautismo de
Juan hasta el día en que nos fue arrebatado» (Act 1,21
s).
Estos testigos de «todas las cosas que hizo Jesús en la
región de los judíos y en Jerusalén» (Act 10, 39) fueron
también servidores de la palabra. Dios los autorizó y los
equipó para que se pusieran al servicio de la grandeza di
vina de la palabra. Bajo la palabra proclamada por los
testigos y servidores de la palabra se halla la palabra de
Jesús, en la que Dios nos habla a nosotros.
San Mateo comienza su Evangelio con estas pala
bras : «Genealogía de Jesucristo», y Marcos: «Principio del
20
evangelio de Jesucristo». Los autores se mantienen ocul
tos tras su obra. San Lucas se declara sin reparos:
Me he
de terminado.
Su obra deberá figurar en la bibliografía,
ha de ocupar un puesto en el mundo de los libros. Ade
más, su autor dio a la tradición un sello más personal que
sus predecesores, aun conservando la forma original de
la predicación de Jesús. Escribe como helenista culto,
como médico y discípulo de Pablo (Col 4, 14). Los evan
gelistas quieren, con el fervor de su fe, encender también
en otros un fervor semejante, pero siempre manteniéndose
fieles a lo transmitido por tradición.
Lucas, como investigador de la historia, quiere em
prender su obra con
exacti tud.
Sigue los acontecimientos
remontándose hasta el
principio
e
invest iga todo
lo que
está garantizado por los testigos oculares. Finalmente tra
ta de narrar seguidamente y por orden todo lo que ha
recogido. Ha puesto en todo el mayor empeño. Entre los
Evangelios es el de Lucas el que más se acerca por la for
ma a una exposición histórica de la vida de Jesús. Lucas
es el «historiador de Dios». Pero tampoco él quiere limi
tarse a escribir una historia o una biografía de Jesús, sino
que tiene la intención de anunciar una buena nueva que
aproveche para la salvación.
La obra está dedicada al
i lustre Teófi lo.
¿Quién era
este Teófilo, este «amado de Dios»? ¿Se llamaba así? ¿Le
dio Lucas este nombre porque era realmente «amigo de
Dios»? ¿Qué personalidad se oculta bajo este nombre?
En todo caso debía de ser un hombre de influencia, un
alto funcionario; de lo contrario no se le daría el cali
ficativo de «ilustre» (cf. A ct 23,26). Era un hom bre aco
modado y de prestigio. Se le dedica el Evangelio para po
nerlo bajo su protección, a fin de que alguien corra con
los gastos de copiarlo y propagarlo. Como la palabra
hecha hombre se hizo dependiente de hombres, así tam-
21
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 12/190
bien la palabra de Dios en el libro debe contar con ser
vicios humanos.
La predicación de la fe por la Iglesia había desper
tado en Teófilo la fe. Lucas quiere, con su Evangelio, dar
a esta fe certeza y
seguridad histórica.
Nuestra fe no se
apoya en mitos y en leyendas inventadas, sino en hechos
históricos. Lo que se cree y se vive en la Iglesia tiene su
último fundamento en Jesucristo, que actuó en este mun
do en una hora histórica.
22
Parte primera
EL COMIENZO DE LA SALVACIÓN
1,5-4,13
El tiempo en que fue preanunciada la salvación llega
a su término con Juan Bautista; el tiempo en que se rea
liza lo anunciado y prometido comienza con Jesús. Juan
es «el mayor entre los nacidos de mujer; sin embargo, el
más pequeño en el reino de Dios es mayor que él» (7,28).
Jesús está por encima del Bautista.
Tres veces se comienza con Juan y tres veces se con
tinúa con Jesús. Cada comienzo de Juan sirve a Jesús: la
anunciación (1,5-56), el nacimiento y la infancia (1,57-
2,52), la actividad pública (3,1-4,13). Los relatos trans
curren de manera análoga, pero los informes acerca de
Jesús superan a los relatos sobre Juan incluso en su as
pecto externo, por lo que se refiere a su extensión. Jesús
tiene que crecer, Juan tiene que disminuir (Jn 3,30).
Jesús fue preparado por el Bautista; el Bautista es
heredero de grandes personalidades de la historia de Is
rael, de Sansón, de Samuel, de Elias. Palabras del An
tiguo Testamento con que se diseñan estas personalida
des sirven también para presentar a Juan y a Jesús. La
historia de la salvación no destruye lo que ella misma ha
creado, sino que echa mano de ello y lo lleva a la per
fección. La luz brilla cada vez con mayor claridad hasta
que despunta el día. Dios obra cada vez con mayor po-
23
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 13/190
der: «Haré nuevamente con este pueblo extraordinarios
prodigios, ante los que fallará la ciencia de los sabios y
será confundida la prudencia de los prudentes» (Is 29,14).
Cristo es la realización de la historia de la salud.
I.
L A P R O M E S A
(1,5-56).
El mismo mensajero de Dios, Gabriel, anuncia el nacimiento
de Juan (1,5-25) y el de Jesús (1,26-38); ambos se encuentran al
encontrarse las madres (1,39-56).
1.
ANUNCIACIÓN DEL BAUTISTA (1,5-25).
a )
De un suelo santo (1,5-7).
5
En t iempos de Herodes , rey de Judea, había u n
sacer
dote l lama do Zaca rías, del turno de Abías. Su mujer era
de la descendencia de Aarón y se l l amaba I sabe l .
6
Am
bos eran autént i camente re l ig iosos ante Dios , l l e vando
una conduc ta in tachable en conformidad con todos l os
mandamientos y órdenes del Señor.
7
Pero no ten ían h i jos ,
porque I sabe l era e s tér i l ; además, eran ambos de avan
zada
edad.
Las obras salvíficas de Dios se llevan a cabo en la his
toria de los hombres. También el libro de Judit comienza
en forma análoga a la historia de la infancia de Jesús:
«En los días de Arfaxad» (Jdt 1,1). La historia sagrada
requiere un estilo bíblico. Los
días de Herodes
caen en el
tiempo que va del 40 al 4 a.C. Mientras que el nacimiento
de Juan se asocia al tiempo de Herodes, rey de Judea
(Palestina), el nacimiento de Jesús tiene lugar en el tiem-
24
po del emperador Augusto, que reinaba sobre «el mundo
entero» (2,1). Juan está todavía encerrado en la estrechez
de Judea, Jesús trae la salvación al mundo entero.
La anunciación de Juan está envuelta en claridades de
santidad. El Bautista se halla en el umbral del tiempo
de la salvación y es el presagio de la santificación venide
ra. Cuando Dios establezca su reinado en Cristo, santificará
su nombre (11,2; Ez 20,41). La manifestación de la gloria
de Dios es también la manifestación de su santidad.
Los padres de Juan cuentan entre los santos del país.
El padre es
sacerdote del turno de Abías,
y la madre tiene
por antepasado al sumo sacerdote
Aarón.
El matrimonio
de ambos respondía a los imperativos sagrados de la ley
sacerdotal: el sacerdote tomaba por esposa a la hija de un
sacerdote
2
. En Israel se propaga el sacerdocio por genera
ción. Juan es sacerdote, está consagrado al servicio de Dios,
es santo. Sin embargo, realizará este servicio de Dios muy
diferentemente que su padre...
Zacar ías
(«Dios se acordó») e
I sabe l
(«Dios juró»)
son santos, porque son justos delante de Dios. Observan
todos los preceptos de la ley de Dios. La descendencia y
vocación sagrada se vive en la obediencia a la voluntad
de Dios. La santidad es obediencia a Dios.
Grandes figuras de la historia sagrada habían sido hijos
de
madres estéri les,
don y presente de D ios, fruto d e la
intervención divina en la naturaleza fallida: Isaac (Gen
17,16), el juez Sansón (Jue 13,2), Samuel (ISam 1-2). Tam
bién Juan había de ser una de estas figuras. La exposición
de la anunciación de Juan está inspirada en la historia de
la anunciación de estos grandes hombres. Juan fue un
hijo otorgado por la gracia de Dios, consagrado a Dios y
santificado de manera nueva.
2. H . L . STBACK - P . BILLERBECK, Kom m e nt ar s um NT aus Ta l m ud und
Midrasch
n , M u n i c h
2
1956, p . 69s.
25
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 14/190
b)
Anun ciado en una hora sagrada (1,8-12).
8
Sucedió, pues , que mientras é l e s taba de serv ic io de
lante de Dios , según e l orden de su turno ,
9
le tocó en
suer te , conforme a la cos tumbre l i túrg ica , en trar en e l
santuar io de l Señor para o frecer e l inc ienso ,
10
y mientras
ofrec ía e l inc ienso , todo e l concurso de l pueblo es taba
orando fuera .
ll
Entonces se le aparec ió un ánge l de l Se
ñor , pues to en pie , a la derecha de l a l tar de l inc ienso .
12
Zacarías, al verlo, se turbó, y lo invadió el miedo.
La historia del precursor de Jesús comienza
e n e l s a n
tuario del templo.
Sólo los sacerdotes pueden entrar en
él .
el pueblo ora fuera. El mismo sacerdote puede entrar
únicamente cuando le toca en suerte desempeñar el mi
nisterio sagrado cerca de Dios.
Dios está cerca de su pueblo en el templo. Sin embar
go ,
sólo está permitido acercarse a Dios-al que es llamado
por él: por elección y suerte. El Dios santo es el Dios le
jano, inaccesible.
La anunciación de Juan tiene lugar mientras se está
orando solemnemente . El
sacr i f ic io de l inc ienso
simboliza
la oración que se eleva a Dios. «Séate mi oración como
el incienso, y el alzar a ti mis manos, como oblación ves
pertina» (Sal 141,2). El sacerdote remueve las brasas ar
dientes del incensario de oro y se postra en adoración.
Fuera está orando el pueblo: «Venga el Dios de la mise
ricordia al santuario y acepte con complacencia la obla
ción de su pueblo»
3
. Grandes momentos de la historia de
la salvación, también en la vida de Jesús, tienen lugar du
rante la oración: la manifestación en el bautismo, la trans-
3.
BlLLERBÉCK II , | ) . 79 .
26
figuración, la elección de los apóstoles, la aceptación de
la pasión en el huerto de los Olivos, la muerte.
Aparece un ánge l de l Señor .
El comienzo de la buena
nueva viene del cielo. El ángel se deja ver a la derecha del
altar del incienso. El lado derecho presagia salvación (Mt
25,33s). Todo lo que allí sucede fuerza a un silencio sa
grado, induce a reflexionar, es antiquísimo lenguaje reli
gioso que indica ya el sentido de lo que se va a realizar.
La aparición produce en Zacarías
turbación y miedo.
Es el sentimiento numinoso ante lo divino. Dios es el Otro,
el Inaccesible. «¡A y de m í, perdido soy , pues he visto a
Dios» (Is 6,5). El mensajero de Dios está envuelto en el
resplandor de la tremenda gloria y santidad de Dios. La
anunciación
d&
Juan tiene lugar en el recinto inaccesible
del templo, en el orden riguroso del culto divino, atmós
fera en que se respira el tremendo poder del Santo, en el
mundo del espíritu del Antiguo Testamento.
c )
Un niño santo (1,13-17).
13
Pero e l ánge l le di jo: No temas , Zacarías; que tu
orac ión ha s ido escuchada: tu e sposa Isabe l t e dará un
hijo,
a l que l lamarás Juan.
14
Para t i s erá mot ivo de gozo
y a legr ía , y muchos se a legrarán de su nac imiento .
Cuando una figura o aparición celestial —Dios mis
m o,
un ángel, Cristo— interpela a un hombre, inicia su
alocución con las palabras de aliento:
¡No temas
Dios
quiere animar a los hombres, no deprimirlos.
En este momento se ven
cumplidas
la s
orac iones
de Zacarías: su ruego de tener descendencia y su ruego de
que se vieran cumplidas las promesas mesiánicas. El tiem
po final es el cumplimiento y la consumación de todas las
27
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 15/190
esperanzas y anhelos de la humanidad. Las plegarias de
los hombres tienen su última realización en el tiempo
final.
Dios fija el nombre del niño: con él da su misión y su
poder. El nombre que ha de llevar el niño significa: D i os
es misericordioso. El tiempo de la visita de Dios por gra
cia es inminente, y Juan ha de proclamar la proximidad
del tiempo de la salvación.
Su nacimiento desencadenará una a l egr ía e sca to tó g i ca
y un júbilo de salvación. No sólo los padres se alegrarán,
sino también muchos, la gran multitud de las comunida
des creyentes. Juan tiene una misión en la historia de la
salud. Cierra el tiempo de las promesas y anuncia el nue
vo tiempo de la salvación, que aporta júbilo y gozo. La
comunidad cristiana primitiva de Jerusalén celebra el cul
to divino «con alegría y sencillez de corazón, alabando a
Dios» (Act 2,46).
15
Porque será grande a los ojos del Señor, jamás be
berá v ino ni bebida embriagante y estará l leno de Espí
ri tu Santo desde e l seno de su madre.
Será grande a los ojos del Señor. Su posición en la his
toria de la salvación lo hace descollar por encima de todas
las grandes figuras de la historia sagrada. Estas personali
dades vivían en la espera del reino de Dios y de la salva
ción, Juan la toca ya como con las manos y proclama su
alborada (cf. Le 7,28).
En su vida no se quedará Juan atrás con respecto a los
grandes del pasado. Los consagrados a Dios no b eb en b e
bidas embriagantes: así Sansón (Jue 13,2-5.7), así el pro
feta Samuel (cf. ISam 1,15s). De los sacerdotes consagra
dos a Dios se dice: «No beberás vino ni bebida alguna
inebriante tú ni tus hijos, cuando hayáis de entrar en el
28
tabernáculo de la reunión, no sea que muráis. Es ley per
petua entre sus descendientes» (Lev 10,9). La vida de
Juan está consagrada a Dios, a Dios que viene a su pueblo.
Como Juan estará l leno de Espír i tu Santo, será pro
feta que anuncie la palabra y la voluntad de Dios. Otros
se vieron equipados como profetas ya en edad madura,
cuando fueron llamados; Juan, en cambio, es profeta ya
desde el primer momento de su vida, «desde el seno de su
madre». El tiempo de la salvación se anuncia también
mediante la plenitud del Espíritu Santo. Desde Sansón,
pasando por Samuel y hasta Juan se va avanzando en es
piritualización y en profundidad. Sansón no se corta el
cabello, Samuel no bebe bebidas inebriantes. Juan guarda
sólo lo segundo, pero su vida entera está llena de Espí
ritu Santo.
16
Hará que muchos hi jos de I srael vuelvan al Señor,
su D i os ;
17
e irá delante de é l con e l espír i tu y e l poder
d e E l i a s , p ara h acer q ue e l corazó n d e l o s p ad res vue l va
hacia los hi jos , y que los rebeldes vuelvan a la sensatez
de los buenos, a f in de preparar al Señor un pueblo bien
dispuesto.
Dios manifiesta su gracia en Juan. Lo envía como pre
dicador de la conversión del tiempo final. Juan hará que
se conv i er tan , que vuelvan al Señor muchos hijos de Is
rael, pueblo elegido de Dios, que se habían alejado de su
Señor y Dios. El retorno a Dios apartará del pecado,
cambiará los sentimientos interiores, ordenará la vida se
gún la voluntad de Dios. Juan será precursor, heraldo del
Señor que va a venir . El Antiguo Testamento aguarda
la venida de Dios. Ahora se cumple lo que había predicho
el profeta Malaquías: «Ved que yo mandaré el profeta
29
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 16/190
Elias antes de que venga el día de Yahveh, grande y te
rrible» (Mal 3,23). El niño que ha de nacer no es Elias
que vuelve a aparecer (cf. Jn 1,21), sino que desempeñará
su misión con el espíritu y la eficacia de Elias.
El hijo de Zacarías preparará el camino para la reno
vación de la alianza. Realizará lo que predijo Malaquías
para el fin de los tiempos: «Pues he aquí que voy a en
viar mi mensajero, que preparará el camino delante de
mí.. . Él convertirá el corazón de los padres a los hijos, y
e l corazón de los hi jos a los padres ,
no venga yo a dar
toda la tierra al anatema» (Mal 3,1.24). Con él serán los
hombres reunidos en un pueblo, y este pueblo uno será
unido con Dios. Dios manifiesta su gracia en Juan, puesto
que mediante él hará que su venida sea tiempo de salva
ción y no juicio riguroso. Por eso envía a Juan, para que
prepare al Señor un pueblo
bien dispues to .
La transfor
mación de los israelitas alejados de Dios en auténticos
miembros del pueblo, y la de los injustos en justos, es
preparación de un pueblo bien dispuesto para el Señor.
d)
Fidelidad a la promesa (1,18-23).
18
Entonces Zacarías dijo a l ánge l: ¿En qué conoceré
es to? Porque yo ya soy v ie jo , y mi mujer , de avanzada
edad.
19
El ánge l le contes tó: Yo soy Gabr ie l , e l que es tá en
la presenc ia de Dios , y he s ido env iado para hablar con
t igo y anunc iar te e s ta buena not ic ia .
Zacarías exige un signo, al igual que los hombres de
los antiguos t iempos de Israel . Así Abraham, después
de la promesa de que recibirá Canaán como herencia, pre
gunta: «Señor , Yahveh,
¿en qué conoceré
que he de po
seerla?» (Gen 15,7s). Gedeón quiere un signo de que Dios
30
mantendrá su palabra (Jue 6,36ss), y así también el rey
Ezequías cuando le promete Dios que prolongará su vida
(2Re 20,8). Los judíos piden señales (ICor
1,22).
El hom
bre teme ser engañado. Dios concede signos, pero quiere
que el hombre aguarde el signo que él le dé, y que
esté dispuesto a creer aun sin signos. «Bienaventurados
los que no vieron y creyeron» (Jn 20,29).
De la veracidad de la promesa es garante el mensa
jero de la anunciación. Se llama
Gabriel,
«Dios es podero
so».
Puede cumplir lo que promete su palabra. El mensa
je proviene de la más íntima proximidad de Dios. Gabriel
es uno de los siete ángeles que están junto al trono, en
presencia de Dios (Tob 12,15; Ap 8,2). Este ángel fue el
que en la hora del sacrificio vespertino (Dan 9,21) formu
ló a Daniel la revelación de las setenta semanas de años,
después de que él le había rogado insistentemente (9,4-19):
«Setenta semanas están prefijadas sobre tu pueblo y so
bre tu ciudad santa para acabar las transgresiones y dar
fin al pecado, para expiar la iniquidad y traer la justicia
eterna, para, sellar la visión y la profecía y ungir una san
tidad santísima» (Dan 9,24). Ahora va a realizarse todo
esto. Juan va a introducir el tiempo de la salvación. El
poder del pecado se quiebra, se restablece la voluntad de
Dios,
se cumplen las promesas, se unge un nuevo lugar
santísimo, que es Cristo mismo.
20
Pero mira: t e vas a quedar mudo y s in poder hablar
has ta e l día en que se rea l icen es tas cosas , por no haber
cre ído en mis pa labras , las cua les se han de cumplir a su
t iempo.
v
En la repentina
pérdida de la palabra
y del oído (l,62s)
se hace tangible la intervención divina. Con la falta de fe
y la exigencia de un signo, que provoca a Dios, el anun-
31
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 17/190
ció de la salvación se convierte en castigo. Con tal exi
gencia de signos tropieza la oferta salvífica de Dios a su
pueblo por medio de Jesús y se convierte en juicio (11,
29s). Todas las personas que en la historia de la infancia
aceptaron con fe el mensaje de salvación, saltan de gozo
y se convierten en mensajeros del gozo de este mensaje.
La duda con que se exigen signos mata la alegría y cierra
la boca del júbilo y del apostolado.
El signo de castigo se da por terminado cuando se
realiza la promesa. La duda de Zacarías y la exigencia de
signos por los judíos faltos de fe no pueden impedir la ve
nida de la salvación. Cuando nace Juan se extingue la
cu l p a d e Z acar ías . Cuando vuelva a venir Cristo al fi
nal de los tiempos, también Israel, en su calidad de pueblo
de Dios, logrará la salvación y hablará alabando a Dios,
después de haber callado como mudo a lo largo del tiem
po de la Iglesia (Rom ll ,25s) .
21
Entre tanto, e l pueblo estaba esperando a Zacarías ,
y se ex trañaba de que se entretuviera tanto dentro del
san tuar i o .
22
Cuando, por f in , sa l ió, no podía hablarles , y
en tonces com p rend i eron q ue h ab ía t en i d o en e l san tuar i o
alguna v is ión; é l intentaba expl icarse por señas, pues se
gu ía m ud o .
El Señor había ordenado a Moisés: «Habla a Aarón
y a sus hijos, diciendo: De este modo habréis de bendecir
a los hijos de Israel; diréis: Que Yahveh te bendiga y te
guarde. Que haga resplandecer su faz sobre ti y te otorgue
su gracia. Que vuelva a ti su rostro y te dé la paz» (Núm
6,23-26). La bendic ión es respuesta de Dios a la oración.
El pueblo había orado y aguarda la bendición. Ya no se
le bendice. Se alumbra una nueva fuente de bendición: la
32
salud mesiánica lleva en sí toda bendición (Ef l,3s) . Dios
mismo bendice a su pueblo otorgándole el tiempo de salud.
Los sacerdotes tenían la costumbre de no prolongar las
acciones sagradas a fin de que el pueblo no se inquieta
se. La proximidad de Dios se les antojaba peligrosa a los
hombres del Antiguo Testamento. De la mudez del sacer
dote se concluye que ha habido alguna aparic ión de Dios.
La manifestación de Dios es salvación y ruina. Para los
que dudan es ruina, para los que creen es salvación. Aho
ra bien, la manifestación neotestamentaria comienza con
Juan: «Dios es misericordioso.»
El pueblo nota en Zacarías que Dios le ha hablado. No
puede captar el sentido de la revelación, pues Zacarías no
podía hablar. Los acontecimientos salvíficos tienen nece
sidad de una palabra que los esclarezca y los interprete.
Dios otorga la salvación y la palabra interpretativa: me
diante el nacimiento de Jesús, mediante su muerte, mediante
sus sacramentos. . .
23
Y cuando terminaron los días de su servic io l i túrgi
c o , se ret iró a su casa.
No todos los sacerdotes tenían su domicilio en Jeru-
salén; muchos vivían en las ciudades de Palestina. Había
pasado ya la semana del servicio litúrgico. Zacarías se
m arch ó d e l a c i ud ad san ta .
Llevaba consigo un gran
secreto, la realización de su anhelo, el signo de que no se
había engañado y de que Dios mantendría su palabra .
Aunque castigado por Dios, volvió a casa con confianza:
Dios es misericordioso.
La anunciación tuvo lugar durante la liturgia del tem
plo.
Dios dio respuesta a las súplicas de aquel templo, de
sus sacerdotes y de su pueblo. Todavía un poco de tiem
po,
y el templo experimentará su máximo esplendor. Dios
33
NT, Le I, 3
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 18/190
mismo vendrá y lo llenará con su gloria. ¿Anunciarán al
pueblo este gozo los sacerdotes del templo? ¿O se que
darán mudos porque no creen?
e ) Cum plimiento (1,24-25).
24
Después de aquel los días , su esposa I sabel con cibió,
y s e m anten ía ocu l ta d uran te c i nco m eses , d i c i é nd ose :
25
A s í l o h a h ech o e l S eñ or conm i go , cuand o l e h a p are
c i d o b i en acab ar con m i d escré d i to an te l a gen te .
Isabel forma parte de aquella serie de mujeres que
eran estériles, pero que por disposic ión div ina concibieron
d e m anera na tura l : Sara, que fue madre de Isaac (Gen
17,17) , Manué, madre de Sansón (Jue 13,2) , Ana, madre
de Samuel (ISam
1,2.5).
Dios les abrió el seno materno
(Gen 29,31), que antes había estado cerrado (ISam 1,5).
María concibe sin concurso de varón por la virtud del
Espíritu Santo. Isabel pertenece todavía al Antiguo Testa
mento; con María se inaugura la «nueva creación» de
Dios, en la que el hombre no puede hacer otra cosa que
aguardar y recibir confiadamente la salvación.
Dios ordena y combina los hechos de la historia sin
privar de libertad al hombre. Isabel se mantuvo ocu l ta
d uran te c i nco m eses .
Nadie tenía noticia de su estado. En
el sexto mes fue María remitida a Isabel por el mensajero
de Dios: «Ya está en el sexto mes la que llamaban estéril»
(1,36).
Isabel era para María un signo otorgado por Dios.
¿Por qué se mantuvo oculta Isabel? La madre del con
sagrado a Dios v i ve com o consagrad a a D i os . Para la
madre de Sansón era esto voluntad de Dios: «Ha venido
a mí un hombre de Dios. Tenía el aspecto de un ángel de
Dios muy temible.. . Él me dijo: Vas a concebir y a parir
34
un hijo. No bebas, pues, vino ni otro licor inebriante y
no comas nada inmundo, porque el niño será nazireo de
Dios desde el vientre de su madre hasta el día de su muer
te» (Jue 13,6s). Semejante vida exige retiro. En una hora
grande recurre Isabel a un recuerdo bíblico para conocer
la voluntad de Dios.
Los días de esperanza y expectación los llena Isabel
con oración. Da gracias a Dios:
Así lo ha hecho e l Señor
c o n m i g o . Una y otra vez recuerda la acción de Dios: Ha
puesto los ojos en mí. Recuerda su humillación: Me ha
quitado el oprobio de la esterilidad. Ella misma ha expe
r imentado la histor ia de su pueblo: «Acuérdate de todo
el camino que Yahveh, tu Dios, te ha impuesto estos cua
renta años por el desierto, para castigarte y probarte, para
conocer los sentimientos de tu corazón. . . Ahora , Yahveh,
tu Dios, va a introducirte en una buena tierra, tierra de
torrentes, de fuentes, de aguas profundas, que brotan en
los valles y en los montes» (Dt 8,2-7).
2.
ANUNCI ACIÓ N DE JE S ÚS
(1,26-38).
El relato de la anunciación de Jesús es una obra maestra en
la forma, un «Evangelio áureo» en el contenido. Tres veces habla
el ángel, y tres veces responde María. Tres veces se dice lo que
Dios pretende hacer con María, y tres veces se expresa su actitud
ante la oferta de Dios. El ángel entra donde está María (1,26-29).
Anuncia el nacimiento del Mesías (1,30-34) y revela la concep
ción virginal (1,35-38).
a ) Llena de gracia (1,26-29).
26
E n e l s ex to m es , e l á nge l G ab r i e l j ue env i ad o d e
parte de Dios a un a c iudad de Ga l i lea, l lamada Nazaret ,
35
27
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 19/190
a una v irgen , desposada con un hombre l lamado José,
de l a c a s a de
David.
El nombre de la v irgen era María .
La anunciación de Jesús llama la atención hacia la
anunciación de Juan.
En e l sexto mes . . .
Juan sirve a Je
sús. La concepción de la estéril remite a la concepción
virginal de María . Aunque Jesús vendrá más tarde , es ,
sin embargo, anterior a él (Jn 1,27).
El mensajero de la anunciación es una vez más
Ga
briel.
Viene de la presencia de Dios. Se inicia un movi
miento del cielo a la Tierra. Gabriel fue enviado por Dios.
No se limita a aparecer, como en la anunciación de Juan,
sino que viene. Lo que ahora comienza es un venir de
Dios a los hombres en la encarnación.
En la anunciación de Juan termina la misión del ángel
en el templo de Dios, en el espacio sagrado, reservado,
inaccesible. En la anunciación de Jesús termina la misión
del ángel
en una c iudad de Gal i lea ,
en la «Galilea de los
gentiles» (Mt 4,15), en la parte de tierra santa que pasaba
por ser no santa, a la que parecía haber descuidado Dios,
de la que «no había salido ningún profeta» (Jn 7,52). En
un principio no se menciona el nombre de la ciudad, como
si no quisiera venir a los labios. Finalmente sale a relucir
eJ nombre:
Nazaret.
La ciudad no tiene relieve alguno en
la historia. La Sagrada Escritura del Antiguo Testamen
to no mencionó nunca este nombre, la historiografía de los
judíos (Flavio Josefo) no tiene nada que referir sobre esta
ciudad. Un contemporáneo de Jesús dice: «¿Es que de
Nazaret puede salir algo bueno?» (Jn 1,46). Dios elige lo
insignificante, lo bajo, lo despreciado por los hombres.
La ley de la encarnación reza así: «Jesús.. . se despojó a
sí mismo» (Flp 2,7).
La historia de Juan comienza con el sacerdote Zaca
rías y su esposa Isabel, que era de la estirpe de Aarón; la
36
historia de Jesús comienza con una
m u c ha c ha ,
quizá de
unos 12 ó 13 años. Estaba
desposada,
como convenía a
una joven de aquella edad. El prometido de María se lla
maba
José.
Todavía no la había llevado a su casa y
todavía no había comenzado la vida conyugal. La desposa
da era virgen. José era de la casa de David. Dios lo dis
puso todo de modo que el hijo de María fuera hijo de la
virgen, hijo legal de José, descendiente de la estirpe regia
de David. Dios lo dispone todo en su sabiduría.
El nombre de la v irgen era María .
Así se llamaba tam
bién la hermana de Aarón (Éx 15,20). No sabemos lo que
signif ica este nombre: ¿Señora? ¿Amada por Yahveh? . . .
Pero el nombre adquiere consagración y brillo tan luego
resuena por primera vez en la historia de la salud. La
misión del ángel que está en la presencia de Dios termina
en María .
28
Y entrando e l ánge l a donde e l la e s taba, la sa ludó:
¡Alégrate , l lena de grac ia El señor es tá cont igo , bendita
tú eres entre las mujeres
4
.
Para la anunciación de Juan aparece el ángel y está
sencillamente ahí; en la anunciación de Jesús
entra
el ángel
donde está María y la saluda. El nacimiento de Juan se
anuncia en el santuario del templo, el nacimiento de Jesús
en la casa de la Virgen. En el Antiguo Testamento mora
Dios en el templo, en el Nuevo Testamento establece su
morada entre los hombres. «La Palabra se hizo carne y
puso su morada entre nosotros» (Jn 1,14).
El ángel saluda a María; a Zacarías no lo saludó. Sa-
4. Las palabras «bendita tú entre las mujeres» no son seguras según la
cr ít ica textual; pueden haberse introducido aquí a par tir de 1 ,42. Razones
estil íst icas abogan por la autenticidad; ambas fórmulas de saludo resultan
paralelas .
37
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 20/190
luda a esta muchacha de Nazaret, aunque en Israel un
hombre no saluda a una mujer. El saludo se expresa con
dos fórmulas. Cada una consta de saludo y de interpela
ción. La primera es: «¡Alégrate, llena de gracia » Los que
hablan griego saludan así: ¡Alégrate Lo s que hablan ara-
meo saludan como saludó Jesús a sus discípulos después
de la resurrección: «¡Paz con voso tros » (Jn 20,19.26).
¿Cuál es la idea de Lucas cuando pone en boca del ángel
este saludo: «Alégrate»?
En Lucas, la historia de la infancia (1-2) está llena de
palabras y de reminiscencias de la Biblia veterotestamen-
taria: es una pintura con colores tomados del Antiguo
Testamento. También Mateo emplea para su histor ia de
la infancia pruebas del Antiguo Testamento. Introduce los
textos con fórmulas solemnes, mientras que Lucas
narra
con textos tomados de l Ant iguo Tes tamento .
No indica sus
fuentes, sino que nos deja a nosotros la satisfacción de
descubrirlas y nos invita a reconocer a la luz de la pala
bra de Dios los hechos que él ha podido saber por la
tradición.
Con esta exclamación:
¡Alégrate ,
saluda el profeta
Sofonías a la ciudad de Jerusalén cuando contempla el
futuro mesiánico. «¡Ca nta, hija de Sión ¡Da voces jubilo
sas,
Israel ¡Alégrate y regocíjate de todo el corazón, hija
de Jerusalén » (Sof 3,14). Análogamente Joel: «No temas,
tierra, alégrate y gózate, porque son muy grandes las cosas
que hace Yahveh» (Jl 2,21; cf . Zac 9,9). «¡Alégrate » era
una fórmula fija, litúrgica y profética, que se utilizaba a
veces cuando el oráculo profético tenía un desenlace fa
vorable. Ahora saluda el ángel a María con esta fórmula
mesiánica.
El ángel la llama
l lena de grac ia .
Los padres de Juan
son irreprochables, porque observan la ley de Dios; María
goza de la complacencia de Dios porque está colmada de
38
su gracia. Dios le ha otorgado su favor, su benevolencia,
su gracia. Ella «ha hallado gracia ante Dios». En la inter
pelación profética, con cuyas primeras palabras ha salu
dado el ángel a María, se desarrolla este favor divino:
«El Señor ha descartado a tus adversarios y ha rechazado
a tus enemigos; el Señor está en medio de ti . No verás más
el infor tunio. . . No temas. . . El Señor , tu Dios, está en me
dio de ti como poderoso salvador. Se goza en ti con trans
portes de alegría, te ama con delirio.. .» (Sof 3,15-17).
María es la ciudad en medio de la cual (en cuyo seno)
habita Dios, el rey, el poderoso salvador. Ella es el resto
de Israel, al que Dios cumple sus promesas, es el germen
del nuevo pueblo de Dios, que tiene Dios en medio de
ella (cf. Mt 18,20; 28,20).
El segundo versículo de la salutación comienza con las
pa labras :
El Señor es tá cont igo .
Grandes figuras de la
historia sagrada habían oído estas mismas palabras, que
habían de sostenerlos y animarlos: Moisés, cuando en el
desierto fue llamado por Dios para ser guía y salvador
de su pueblo. El ángel del Señor se le apareció en una
llama de fuego, que ardía de una zarza (Éx 3,2). Cuando
se creía incapaz de responder a su vocación, le dijo Dios:
«Yo estaré contigo, y ésta será la señal de que estoy con
tigo.. .» (Éx 3,12). Algo parecido sucedió al juez Gedeón:
«Apareciósele el ángel de Yahveh y le dijo: Yahveh está
contigo, valiente héroe.. . Gedeón le dijo: Si he hallado
gracia a tus ojos, dame una señal de que eres tú quien
me habla» (Jue 6,12.15-17). Con este saludo se sitúa Ma
ría entre las grandes figuras de salvadores de la historia
sagrada. Dios le ha otorgado su gracia especial y su pro
tección.
Al saludo sigue de nuevo la alocución:
Bendita tú
entre las mujeres.
También estas palabras son venerandas
y están santificadas por una antigua tradición bíblica. La
39
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 21/190
heroína Jael, que aniquiló al enemigo de su pueblo, es
elogiada con estas mismas palabras: «Bendita Jael entre
las mujeres» (Jue 5,24). A Judit, que terminó con el opre
sor de su ciudad natal, dice el príncipe del pueblo Ozías:
«Bendita tú, hija, sobre todas las mujeres de la tierra por
el Señor, el Dios Altísimo.. . Hoy ha glorificado tu nom
bre, de modo que tus alabanzas estarán siempre en la boca
de cuantos tengan memoria del poder de Dios» (Jdt 13,
18s). María cuenta entre las grandes heroínas de su pue
blo; ella ha traído al Salvador que nos librará de todos
los enemigos (cf. Le
1,71).
29
Al o ir estas palabras, e l la se turbó, pregun tándose
qué querría s igni f icar este saludo.
El saludo había terminado. María se turbó por la pa
labra del ángel. Zacarías se turbó por la aparición del
ángel, María se turba por su palabra. La humilde mucha
cha se turba por la grandeza del saludo.
Se preguntaba qué podía significar aquel insólito sa
ludo. Dado que oraba y vivía entre los pensamientos de
la Sagrada Escritura, tenía que surgir en ella un ba
rrunto de la grandeza que se le anunciaba con aquellas
palabras .
b) Promesa llena de gracia (1,30-34).
30
En tonce s e l áng el le di jo: No temas, María; porque
h as h a l l ad o grac i a an te D i os .
31
Mira: c on cebirás e n tu
seno y darás a luz un hi jo, a quien pondrás por nombre
Jesús.
Moisés (Éx
3,1
ls) y G edeón (Jue 6,15s) y Sión (Sof
3,16s) e Israel tenían necesidad de ser alentados así: Dios
40
quiere salvar. «No temas, pues yo estoy contigo» (Is
43,5) . Todos ellos temían el encargo de Dios, porque se
daban cuenta de su flaqueza. No de otra manera María.
La gracia de Dios la asistirá. Por medio de María toma
Dios la iniciativa de llevar a término la historia de la
salud. H as h a l l ad o grac i a an te D i os . Dios es quien hace
lo grande precisamente en los pequeños. «Cuando me sien
to débil, entonces soy fuerte» (2Cor 12,10).
El poder de la gracia hará cosas asombrosas: Mira.
E ángel anuncia para qué ha elegido Dios a María. Las
palabras de la anunciación evocan la profecía con que el
profeta Isaías anunció al Emmanuel («Dios con nosotros»):
«Mira: la virgen concebirá y dará a luz un hijo y le
pondrá por nombre Emmanuel» (Is 7 ,14; cf . Mt
1,23).
Las palabras de la anunciación que se referían a Juan,
fueron dirigidas a Zacarías y hacían referencia a la mu
jer. En la anunciación de Jesús se dirige el ángel sola
mente a María: ésta concebirá, dará a luz e impondrá el
nombre . No se menciona ningún hombre , ni ningún padre .
Se prepara el misterio de la concepción virginal.
Tú concebirás e n e l s e n o . ¿Por qué decir esto? Tam
poco la Sagrada Escritura habla así. Sin embargo, el pro
feta Sofonías había dicho dos veces: El Señor en medio
de ti . Esto se realizará de una manera nunca oída. Dios
morará en el interior, en el seno de la virgen. Estará con
ella (Emmanuel) . María será el nuevo templo, la nueva ciu
dad santa, el pueblo de Dios, en medio del cual mora él.
El niño ha de llamarse J esús . Dios fija este nombre,
María lo impondrá. No se da explicación del nombre, como
tampoco se explicó el nombre de Juan. Todo lo que se
dice de ellos explica sus nombres. Dios quiere ser sal
vador por medio de Jesús: «El Señor, tu Dios, está en
medio de ti como poderoso salvador» (Sof 3,17).
41
32
La respuesta al mensaje de Dios es una pregunta.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 22/190
Éste será grande y será l lama do Hijo de\ Al t ís imo;
y e l Señor Dios le dará e l trono de David, su padre,
33
re i
nará p or l o s s i g l o s en l a casa d e J acob y su re i nad o no
tendrá jin.
Juan será «grande a los ojos del Señor». Jesús es gran
de sin restricción y sin medida. Será llamado y será Hijo
del Altísimo. El nombre reproduce el ser. El Altísimo es
Dios.
El poder del Altísimo envolverá a María en su
sombra; por esto, su hijo se llamará Hijo de Dios.
En el niño que se anuncia se cumple la profecía que
el profeta Natán hizo al rey David de parte de Dios, y
que como estrella luminosa acompañó a Israel en su his
toria: «Cuando se cumplan tus días y te duermas con tus
padres, suscitaré a tu linaje, después de ti , el que saldrá
de tus entrañas, y afirmaré su reino. Él edificará casa a mi
nombre, y yo estableceré su
trono para s iempre.
Yo seré
para é l un padre , y é l será para mí un hijo . . . Permanente
será tu casa y tu reino para siempre ante mi rostro, y tu
trono estable por la eternidad» (2Sam 7,12-16). Jesús será
soberano de la casa de David y a la vez Hijo de Dios. Su
reinado permanecerá para siempre.
R em ará p or l o s s i g l o s en l a casa d e J acob . En él se
cumplirá lo que se dijo del siervo de Yahveh: «Poco es
para mí que seas tú mi siervo para restablecer las tribus
de Jacob y reconducir a los supervivientes de Israel. Yo
haré de ti luz de las naciones para llevar mi salvación
hasta los confines de la tierra» (Is 49,6). Jesús reunirá
al pueblo de Dios, e incluso los gentiles se le incorpora
rán. Fundará un reino que abarque el mundo, los pueblos
y los tiempos.
34
Pero Ma ría pregun tó a l ánge l: ¿Cómo va a ser esto,
p ues to q ue y o no conozco varó n?
42
Zacarías pregunta (1,18), y también María. Zacarías pre
gunta por un signo que le convenza de la verdad del men
saje;
María cree en el mensaje sin preguntar por un signo.
Zacarías creerá cuando vea resuelta su pregunta; María
cree y sólo después busca solución a la pregunta que se
le ofrece.
La pregunta de María hace caer en la cuenta de la
imposibilidad humana de conciliar maternidad y virgini
dad. María ha de ser madre , como lo ha comprendido
por el mensaje del ángel: Concebirás en tu seno y darás
a luz un hijo. Pero al mismo tiempo es virgen: N o c o n o z c o
varó n , no tengo relaciones conyugales. La pregunta de
María sirve a la vez también de introducción a la explica
ción divina que ha de hallar este misterio (1,35). No va
mos a detenernos precisamente a investigar a qué situa
ción externa e interna, a qué estado de ánimo se debió
el que María hiciera esta pregunta. Se ha investigado el
Evangelio en este sentido
5
. ¿Y qué se ha logrado? En
5. En Oc cidente se ha sostenido con frecuencia desde san Agustín hasta
nuestros días la opinión de que María había hecho un propósito (voto) de
mantenerse perpetuamente virgen, pero que se había desposado a f in de tener
un protector de su virginidad; que por ello dijo al ángel: «¿Cómo va a ser
esto , puesto que yo no conozco varón?» Contra esto se objeta: Tal voto
(propósito) de virginidad no era conocido en el AT ni se consideraba como
un ideal; si había esenios que vivían en celibato , no lo hacían por un
respeto a la virginidad o al celibato basado en motivos religiosos, sino porque
se tenía poca estima de la mujer y del matr imonio y se veía en éste un
impedimento para el estudio
y
cumplimiento de la ley. Que los desposor ios
con José tengan el signif icado alegado, es cosa que no se desprende del texto .
Por estos reparos af irman hoy no pocos: María, con su pregunta, expresó su
sorpresa y extrañe za: ¿Cómo era posible que fuera mad re
e n t onc e s ,
ya que
- todav ía no la ha bía llev ado su esposo a su casa ? En efecto , estaban prohi
bidas las relaciones conyugales entre quienes sólo estaban unidos por espon
sales . También esta hipótesis se basa en presupuestos nada seguros. El ángel
no dijo: La concepción va a tener lugar inmediatamente; María dijo senci
llamente : «puesto que yo no conozco varón», pero no dijo: «puesto que yo
no conozco todavía varón». También se ha intentado esta otra solución:
María cuenta entre las personas piadosas del país y , como Zacar ías e Isabel ,
como Simeón y Ana, esperar ía el cumplimiento de las promesas mesiánicas .
43
En esta concepción y en esta acción de Dios se supera
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 23/190
lugar de una solución clara e indubitable, nuevos enigmas.
La pregunta no debe constituirse en punto de partida de
un análisis psicológico de la virgen desposada, bajo la
impresión del anuncio de su maternidad. También Lucas
consignó la pregunta y no le dio ninguna explicación. La
pregunta le parecía importante; en efecto, llama la aten
ción. Nosotros mismos nos hacemos también esta pre
gunta : ¿Cómo se puede conciliar virginidad y maternidad?
c ) Concepción por gracia (1,35-38).
35
Y e l ánge l le respondió: E l Espír i tu Santo ven drá
sobre t i y e l poder del Al t ís imo te env olverá e n su so m
bra; por eso, e l que nac erá será san to, será l lamado Hijo
de Dios.
La acción de Dios es increíblemente nueva. Hasta
aquí se trataba de personas ancianas y estériles, a las que
se otorgó de manera maravillosa lo que la naturaleza sola
no había sido capaz de lograr. Ahora se trata de una virgen
que ha de ser madre sin ninguna cooperación humana.
Jesús ha de recibir la vida «no de sangre (de varón y
de mujer) ni de voluntad humana (de los instintos), ni de
voluntad de varón, sino de Dios» (Jn
1,13)
e
,
de la virgen.
Como virgen que era, pensar ía en la que había de ser la madre del Mesías .
Así habr ía meditado también Is 7 ,14, profecía que habla de la madre virgen
del Mesías . En esa situación oye el mensaje del ángel y da como respuesta:
«¿Cómo va a ser esto , pues entonces (en ese caso, en el caso del cumplimiento
de la profecía) no conozco (no puedo conocer) varón?» También esta hipó
tesis se basa en presupuestos que no están fundados en et texto , y en pre
tendidas explicaciones filológicas que tampoco autoriza el contexto.
6. Según un a antigua lectura reza así Jn 1 ,13: «A todos los que lo
recibieron, a todos los que creen en el nombre de aquel que no de sangre. . .
sino de Dios nacieron, les dio potestad de llegar a ser hijos de Dios.» A pesar
de los buenos testigos, esta lectura no parece ser genuina; en efecto , siendo
la más fácil, no se explica cómo, a pesar de su alto valor apologético, no se
ha impuesto f rente a la otra lectura. Aun cuando el Evangelio de san Juan
44
todo lo que hasta ahora había sucedido a los grandes de
la historia sagrada: a Isaac, Sansón, Samuel, Juan Bau
tista. ¿Quién es Jesús?
El Espír i tu Santo vendrá sobre t i . Fuerza divina, no
fuerza humana, será la que active el seno materno de Ma
ría. El Espíritu Santo es una fuerza que vivifica y ordena.
«La tierra estaba confusa y vacía.. . , pero el espíritu de
Dios se cernía sobre la superficie de las aguas» (Gen 1,2).
«Si mandas tu hálito (tu espíritu) son creados (los vivien
tes)» (Sal 104,30). El milagro de la concepción virginal
y sin padre, de Cristo, es la suprema revelación de la li
bertad creadora de Dios. Un nuevo patriarca surge por la
libre acción creadora de Dios, pero con la cooperación de
la vieja humanidad, por María. Jesús es Hijo de Dios como
ningún otro (3,38).
El poder del Al t ís imo te envolverá en su sombra.
L a
nube que oculta al sol, envuelve en sombras y es a la vez
signo de fertilidad, porque encierra en sí la lluvia. Del
tabernáculo en que se manifestaba Dios en el Antiguo
Testamento se dice: «La nube cubrió el tabernáculo, y la
gloria de Yahveh llenó la morada» (Éx 40,34). Cuando
fue consagrado el templo en tiempos de Salomón, una
nube lo envolvió: «Los sacerdotes no podían oficiar por
causa de la nube, pues la gloria de Dios llenaba la casa»
(IRe 8,11). La gloria de Dios es luz radiante y virtud
activa. Dios no está inactivo en el templo, sino que mora
en él desplegando su acción. La gloria de Dios, que es
fuerza, llena a María y causa en ella la vida de Jesús. En
Jesús se manifiesta la gloria de Dios mediante la encarna-
no se puede aducir como testimonio explícito del nacimiento virginal de
Jesús, sin embargo, la complicada formulación de Jn 1 ,13 muestra que la
filiación divina de los fieles por gracia tiene su modelo en el nacimiento
virginal de Jesús.
45
ción que se produce de María. María es el nuevo templo,
momento nada podía afectarle tanto, para nada tenía tan
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 24/190
en el que Dios se manifiesta a su pueblo en Jesús, María
es el tabernáculo de la manifestación en el que habita el
Mesías, el signo de la presencia de Dios entre los hombres.
La concepción virginal por el espíritu y la virtud del
Altísimo indica que Jesús, e l q ue nacerá será san to , Hijo de
Dios. A Jesús se le llama santo (Act 2,27), es el Santo
de Dios (4,34). Jesús, en cuanto concebido y dado a luz
gracias al Espíritu, es desde el principio, desde su misma
concepción, poseedor del Espíritu. Juan poseyó el Espí
ritu desde el seno materno, los profetas y los «espiritua
les» son penetrados del Espíritu durante algún tiempo.
Jesús supera a todos los portadores de Espíritu. Por el
hecho de poseer el Espíritu desde el principio, puede tam
bién comunicar el Espíritu (24,49; Act 2,33).
Jesús es llamado Hijo de Dios, y lo es. Por haber na
cido gracias a la virtud del Altísimo, por eso es Hijo del
Altísimo (1,32; 8,28), Hijo de Dios. No es hijo de Dios
como Adán es también hijo de Dios (3,38) mediante crea
ción por Dios, sino por generación, no como los que aman,
que reciben como gran recompensa ser hijos del Altísimo
(6,35), sino desde el principio, desde la concepción.
36
Y ahí está tu parienta I sabel: también e l la , en s u
vejez, ha concebido un hi jo; ya está en e l sex to mes la
que l lamaban estéri l ,
37
p orque no h ay nad a i m p os ib l e
para Dios.
María , contrar iamente a Zacarías , no pidió ningún
s i gno que acreditara su mensaje, todavía más difícil de
creer, sino que creyó sin signo alguno; pero Dios le otor
gó un signo. Dios no exige una fe ciega. Apoya con un
signo la buena voluntad de creer.
Dios da un signo que se acomoda a María. En aquel
46
ta comprensión como para la maternidad. También ha
concebido Isabel, que era tenida por estéril. Éste es e l sex to
m es . Los signos de la maternidad son manifiestos, son
signos de la maravillosa intervención divina.
No hay nada imposible para Dios (literalmente: «La
palabra de Dios nunca carece de fuerza»). Lo que dice
el ángel a María, lo dijo ya Dios a Abraham: «¿Por qué
se ha reído Sara, diciéndose: De veras voy a parir , siendo
tan vieja? ¿Hay algo imposible para Yahveh?» (Gen
18,13s). La palabra de Dios está cargada de fuerza, es
eficaz. La fe de María se ve apoyada por el hecho salví-
fico efectuado en Isabel, por el testimonio de la Escritura
acerca de Abraham. La entera historia de la salvación y
la vida de la Iglesia es signo.
Desde Abraham e Isaac , pasando por Isabel y Juan,
se extiende un arco que llega a María y Jesús. La fuerza
que sostiene la historia de la salud y la acción salvadora
de Dios, que comenzó en Abraham, alcanzó en Juan su
cumbre veterotestamentaria y halló su consumación en Je
sús,
es siempre la p a l ab ra d e D i os , q ue nunca carece d e
fuerza. Abraham recibe de Sara un hijo porque ha halla
do gracia a los ojos de Dios (Gen 18,3). María recibe su
hijo porque ha hallado gracia (1,30). María se reconoce
hija de Abraham en la fe y en la gracia; en su hijo se
cumplen todas las promesas, que se habían hecho a
Abraham y a su descendencia (Gal 3,16).
María está emparentada con Isabel . Así también Ma
ría debe descender de la tribu de Leví y estar emparenta
da con el sumo sacerdote Aarón. Jesús pertenece a la
tribu de Leví por su descendencia de María, y por su
posición jurídica es tenido por hijo de José y, por consi
guiente, por descendiente de David (y de Judá). En los
tiempos de Jesús estaba viva la esperanza de que vendrían
47
dos Mesías: uno de la tribu de Leví, que sería sacerdote,
Y Abraham dijo: «Aquí está tu siervo». Desde el princi
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 25/190
y otro de la tribu de Judá, que sería rey
7
. Sin embargo, el
plan de Dios era que Jesús reuniera en su persona la dig
nidad sacerdotal y la regia. ¿Hasta qué punto pensaba
Lucas en esto? En todo caso su imagen de Cristo tiene
más rasgos sacerdotales que regios, su Cristo es salvador
de los pobres, de los pecadores, de los afligidos.. .
83 a
D i jo en tonces M ar ía: H e aq u í l a e sc lava d e l S eñ or;
h á gase en m í s egún tu p a l ab ra .
El mensaje de Dios ha sido transmitido, la reflexión
de María ha cesado, el signo se ha ofrecido; ahora se
aguard a l a re sp ues ta . Dios suscita anhelos, atrae, solicita,
elimina resistencias, persuade, pero no fuerza nunca. Ma
ría ha de dar su consentimiento con libre decisión.
Por el mensaje comprendió María la voluntad de Dios.
Esta voluntad la cumple como e sc l ava d e l S eñ or . La volun
tad de Dios lo es para ella todo. La historia de la salva
ción comienza con el acto de obediencia de Abraham. El
Señor le dijo: «Salta de tu tierra.. . para la tierra que yo
te indicaré . Yo te haré un gran pueblo. . . Fuese Abraham
conforme le había dicho Yahveh» (Gen 12,1-4). Según
una tradición judía , dijo Dios a Abraha m: «¡Abrah am ».
7. La asociación de realeza y sacerdocio en una persona per tenece a los
tiempos más antiguos. Se esperó también para el futuro. Según Éx 19,6 , es
Israel un «reino de sacerdotes y un pueblo santo». El profeta Zacar ías recibe
el encargo de coronar al sumo sacerdote Josué (Zac 6 ,9-14) . La coronación
del sumo sacerdote significa que se le confía el peder civil. En la época de
los Macabeos se realiza esta asociación: «Los judíos y sacerdotes resolvieron
instituir a Simón por pr íncipe y sumo sacerdote para siempre, mientras no
aparezca un profeta digno de fe» ( IMac 14,41) . Por inf lujo macabeo se halla
esta asociación, ante todo, en el Testamento de los doce patriarcas. En el
judaismo tardío distinguieron además los textos de Qumrán y el documento
de Dama sco, entre un Mesías sace rdotal y un -Mesías regio, un Me sías de la
tr ibu de Leví y otro de la tr ibu de Judá, estando el Mesías regio subordinado
al Mesías sacerdotal .
48
pio hasta el fin, los preceptos de Dios exigen obediencia.
Cristo entró en el mundo con un acto de obediencia (Heb
10,5-7), y con un acto de obediencia salió de él (Flp 2,8).
El hombre sólo puede lograr la salvación si obedece:
«N o tod o el que me dice: ¡Señor, Señor , ent rará en el
reino de los cielos, sino el que cumple la voluntad de mi
Padre que está en los cielos» (Mt 7,21).
En la frase de María no hay ningún «yo». Dios lo es
todo para María. El término y la consumación del tiempo
de la salud bajo la soberanía de su Hijo tendrá lugar
cuando Cristo, al que el padre lo ha sometido todo, lo
someta todo a aquel que todo se lo ha sometido, de modo
que «Dios lo sea todo en todos» (ICor 15,28).
38 b
Y e l ángel se ret iró de su presencia.
Las palabras se ret iró enlazan los dos cuadros de las
anunciaciones; en efecto, también de Zacarías se dice que
se retiró a su casa (1,23). Ambos cuadros tienen una es
tructura común, ambos invitan a la comparación por su
semejanza y sus diferencias. En el comentario se ha pro
curado penetrar en ellas. De estas consideraciones resuena
siempre una cosa: Jesús es el mayor.
Una vez que María expresó su obediencia, quedó ter
minada la misión del ángel. No se dice cómo se verificó la
concepción. Ante lo más grande se recomienda el silencio.
Lo que no expresó Lucas, lo formuló Juan en estas pala
bras: «Y la Palabra se hizo carne» (Jn
1,14).
NT, Le I , 4
49
Al término de la marcha entra María en casa de
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 26/190
3.
ENCUENTRO (1, 39-56).
El encuentro entre María e Isabel enlaza las dos narraciones
de la anunciación de Juan y de Jesús, pero también las dos narra
ciones del nacimiento y de la infancia. Gracias al encuentro con
Isabel adquiere María una inteligencia más profunda del mensaje
que le ha dirigido Dios (1,39-45) y canta un cántico de alabanza
a la acción salvífica de Dios (1,46-55). Con unas breves palabras
sobre la permanencia de María junto a Isabel y sobre su regreso
(1,56) se cierra este relato que respira admirable intimidad y
calor religioso.
a) Las m ad res agrac i ad as (1,39-45).
39
P or aq ue l lo s d ías , M ar ía s e p uso en ca m i no y s e fue
con p res t eza a una c i ud ad d e l a reg i ó n m ontañ osa d e
Judá.
40
En tró en ca sa de Zaca rías y saludó a I sabel .
La marcha tuvo lugar por aquel los días , poco después
de la anunciación. El camino lleva a Nazaret a una ciu
dad de Judá, situada en la región montañosa limitada por
el Negeb, el desierto de Judá y la Sefalá. Según una vieja
tradición, estaba situada la ciudad en el emplazamiento de
la actual En-Karim, a unos seis kilómetros y medio al
oeste de Jerusalén. El camino que tuvo que recorrer María
desde Nazaret exigía tres o cuatro días de marcha.
María se fue a la región montañosa con presteza. E l
viaje era incómodo, y sin embargo fue María con pres
teza. Aquí se inicia la gran marcha que llena la obra his
tórica de Lucas, el evangelio y los Hechos de los Após
toles. La Palabra de Dios efectúa una marcha del cielo a
la tierra, de Nazaret a Jerusalén, de Jerusalén a Judea
y Samaría y hasta los confines de la tierra, sin tener en
cuenta las dificultades, siempre con presteza.
50
Zacarías y sa l ud a a Isabel. También esto se hace con pres
teza. Sólo saluda a Isabel, a quien Dios la ha remitido.
En el camino no saluda a nadie. Procede como los men
sajeros que enviará Jesús y que recibirán el encargo: «No
saludéis a nadie por el camino» (10,4). La historia de la
infancia contiene las líneas fundamentales de la acción
de Jesús; la acción de Jesús es modelo para la vida de
la Iglesia.
14
Y a pena s oyó ésta e l sa ludo de Ma ría, e l n iño sal tó
d e gozo en e l s eno d e I sab e l , l a cua l q ued ó l l ena d e E s
píritu Santo.
En el saludo de María, que lleva al Mesías en su seno,
la salud mesiánica alcanza a Isabel y, a través de su ma
dre , a Juan. El niño
sa l ta d e gozo en e l s eno m aterno .
E l
movimiento natural del niño se convierte en signo del gozo
que suscita el encuentro con el portador de la salud. Este
signo tenía un significado más profundo que el movimien
to de los gemelos Esaú y Jacob en el seno de Rebeca.
«Chocaban entre sí en el seno materno los gemelos, lo que
le hizo exclamar: Si esto es así, ¿para qué vivir? Y fue a
consultar a Yahveh, que le respondió: Dos pueblos llevas
en tu seno. Dos pueblos que al salir de tus entrañas se
separarán. Una nación prevalecerá sobre la otra. Y el ma
yor servirá al menor» (Gen 25,22s). Dios dirige la historia
de los hombres aun antes de que nazcan. El profeta Jere
mías consigna la palabra de Dios: «Antes que te formara
en las entrañas maternas te conocía; antes que tú salieses
del seno materno te consagré y te designé para profeta de
pueblos» (Jer 1,5).
Isabel quedó l lena de Espír i tu Santo. Cuando Mar ía
entra en la casa y se oyen sus palabras de saludo, se ini-
51
cia la bendición del tiempo de salud. Dios dirá a sus
«Habiéndose puesto en marcha, David y todo el ejército
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 27/190
mensajeros: «Y en cualquier casa en que entréis, decid
primero: Paz a esta casa. Y si allí hay alguien que mere
ce la paz, se posará sobre él vuestra paz» (10,5s). En
la casa de Zacarías se efectúa en el estrecho ámbito de la
histeria de la infancia lo que se efectuará en Jerusalén
después de la resurrección del Señor: «Y sucederá en los
últimos días que derramaré mi Espíritu sobre toda carne.
Y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas» (Act 2,17;
Jl 3,1-5). La historia de la infancia de la Iglesia es la
renovación de la historia de la infancia de Jesús.
42
Y exclamó a vo z en gri to: ¡Bendita tú entre las mu
jeres y bendito e l fruto de tu v ientre
43
¿Y de dónde a
mí esto: que la madre de mi Señor venga a mí?
u
P orq ue
mira: apenas l legó a mis oídos tu saludo, e l n iño sal tó de
g o z o e n m i s e n o .
45
¡Bienave nturada tú, que has creído;
p orq ue s e cum p l i rá n l a s p a l ab ras q ue s e t e h an anunc i ad o
de parte del Señor
Isabel, l lena del Espír i tu Santo, habla en una moción
extática, bajo el influjo de Dios, en forma litúrgica so
lemne, como cantaban los levitas delante del arca de la
alianza (ICró 16,4). Es pregonera de la salud, servidora
del Señor que se presenta en su casa. El Espíritu Santo le
da a conocer el misterio de María.
La profetisa recoge la alabanza del ángel y la con
firma: Bendita tú entre las mujeres. A ñad e la razón d e es
ta bendición: Y bendito e l fruto de tu v ien tre. Se le
predica bendición porque antes ha sido bendecida por
Dios con la abundancia de todas las bendiciones que es
tán compendiadas en Cristo (Ef 1,3).
¿De dónde a mí esto? Análogamente habló David
cuando había de llevar el arca de la alianza a Jerusalén:
52
que lo acompañaba partieron en dirección a Baalá de
Judá, para subir el arca de Dios, sobre la cual se invoca
el nombre de Yahveh Sebaot, sentado entre los querubi
nes. Pusieron sobre un carro nuevo el arca de Dios y la
sacaron de casa de Abinadab, que está sobre la colina.. .
David y toda la casa de Israel iban danzando delante de
Yahveh con todas sus fuerzas con arpas, salterios, adufes,
flautas y címbalos.. . Atemorizóse entonces David de Yah
veh y dijo: ¿Cómo voy a llevar a mi casa el arca de
Yahveh? Y desistió ya de llevar a su casa el arca de Yah
veh a la ciudad de David, y la hizo llevar a casa de
Obededón de Gat, y Yahveh le bendijo a él y a toda su
casa. Dijéronle a David: Yahveh ha bendecido a la casa
de Obededón y a cuanto tiene con él por causa del arca de
Dios» (2Sam 6,2-11). Parece que este texto influyó en la
exposición de Lucas. María fue considerada como el
arca
d e l a a l i anza d e l N uevo T es tam ento . Lleva al Santo en su
seno, la revelación de Dios, la fuente de toda bendición, la
causa del gozo de la salvación, el centro del nuevo culto.
El saludo de María tiene por respuesta los jubi losos
sal tos del n iño. Erumpe el júbilo del tiempo mesiánico de
salvación, que el profeta había descrito con estas pala
bras:
«Saldréis y saltaréis como terneros que salen del
establo (a los que se han soltado las cadenas)» (Mal 3,20).
El tiempo de salvación es tiempo de alegría.
El cántico de alabanza que entona Isabel termina con
palabras de felicitación para María. Bienav enturada tú,
que has creído. María es madre de Jesucristo , porque ha
dado el sí en santa obediencia. Cuando aquella mujer del
pueblo bendijo a Jesús diciendo: «Bienaventurado el seno
que te llevó y los pechos que te criaron», dijo él: «Bien
aventurados más bien los que escuchan la palabra de Dios
y la guardan» (ll ,27s). Con un acto de fe comienza la
53
historia de la salvación de Israel: Abraham se marcha
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 28/190
con su mujer a una tierra desconocida, únicamente por
que Dios lo ha llamado y le ha prometido bendecirle con
gran descendencia (Gen 12,1-5); con un acto de fe co
mienza la historia de la salvación del mundo: María creyó
las palabras de Dios: que ella sería la virgen madre del
Mesías.
b)
Cántico de Ma ría (1,46-55).
Por el mensaje del ángel, por las palabras de Isabel llena de
Espíritu Santo y por la Sagrada Escritura, en la que hablaron
uno y otro, reconoce María que el Señor ha hecho en ella grandes
cosas. Su responsorio (cántico de respuesta a la Sagrada Escritura)
es un himno a la acción salvífica de Dios con su pueblo, que ha
alcanzado ahora su consumación. Con cánticos semejantes canta
también la Iglesia naciente las grandes gestas de Dios: «Diaria
mente perseveraban unánimes en el templo, partían el pan por
las casas y tomaban juntos el alimento con alegría y sencillez de
corazón» (Act 2,46s). Pablo amonesta a los Efesios: «No os
embriaguéis con vino, en lo cual hay desenfreno, sino dejaos
llenar de Espíritu, recitando entre vosotros salmos, himnos y
cánticos espirituales, cantando y salmodiando de todo vuestro
corazón al Señor» (Ef 5,18s).
El Evangelio hímnico de María comienza con un cántico de
alabanza de Dios (1,46-48), canta al Dios poderoso, santo y mise
ricordioso (l,49s), las leyes fundamentales de su acción salvadora
(1,51-53), y termina con unos versos que ensalzan la fidelidad de
Dios a las promesas (l ,54s). Lo que María experimentó fue, es
y será el obrar salvífico de Dios. La historia de la salvación es
luz de la vida.
46
Dijo en tonc es María:
Canta mi a lma la grandeza de l Señor ,
47
y
mi espír i tu sa l ta de gozo en Dios , mi sa lvador;
48
porque puso sus o jos en la humilde c ondic ión de su
esc lava .
54
Y as í ahora me l lamarán bienaventurada todas las gene
rac iones .
El Señor, mediante la acción salvadora realizada en
María ha venido a ser Dios su
sa lvador .
Resuena el nom
bre de Jesús (Mt
1,21).
Por Jesús ha venido Dios a ser el
salvador .
La alabanza de Dios y el gozo mesiánico escatológico
penetran las profundidades de María,
su alma y su espíritu.
Las gestas salvíficas de Dios suscitan en ella una jubilosa
liturgia de alabanza.
María se cuenta entre los
de humilde condic ión ,
los
pequeños y los pobres, a quienes profetas y salmos prome
ten con frecuencia la salvación. «Que no ha de ser dado el
pobre a perpetuo olvido, no ha de ser por siempre fallida la
esperanza del mísero» (Sal 9,19). «Porque así dice el Al
t ísimo, cuya morada es e terna , cuyo nombre es santo: Yo
habito en la altura y en la santidad, pero también con el
contrito y humillado, para hacer revivir los espíritus hu
mildes y reanimar los corazones contritos» (Is 57,15).
Jesús recoge estas promesas en sus bienaventuranzas:
«Bienaventurados los pobres en el espíritu, porque de
ellos es el reino de los cielos» (Mt 5,3). «Tú eres el Dios
de los humildes, el amparo de los pequeños, el defensor de
los débiles, el refugio de los desamparados, y el salvador
de los que no tienen esperanza» (Jdt 9,11).
La felicitación de María, que ha comenzado Isabel,
no tendrá ya fin.
Todas las generac iones
se unirán al coro
de alabanzas de María. Como no tendrá fin el reinado del
Rey que es su Hijo, así también la Madre del Rey será
alabada por siempre y en todas partes.
4
*
Porque g randes cosa s hizo en mi favor e l Poderoso .
Santo es su nombre ,
55
50
y su m isericordia se extiende de g eneración en gene
Dios interviene en favor de los
humildes ,
de los
débi
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 29/190
ración para aquellos que le temen.
Poder, santidad y misericordia
son los rasgos más lu
minosos de la imagen de Dios en el Antiguo Testamento.
En Dios hay una fuerza viva, que pugna por exteriori
zarse, que quiere hacer propiedad suya todo lo que hay en
el mundo, demostrándose así Dios como el Santo (Ez
20,41). Como Dios es el Dios santo, es también el Dios
misericordioso. Es el salvador y redentor del resto santo,
porque no es hombre , sino Dios. Las obras de poder de
Dios son amor misericordioso.
51
Despleg ó el poderío de su brazo,
dispersó a los engre ídos en los proyec tos
de
su corazón;
52
a los potentado s derribó del trono,
y e levó a los humildes;53
a los hambrientos los co lmó de bienes ,
y despidió a los r icos con las manos vac ías .
María expresa lo que tiene experimentado su
pueblo .
«Afligiéronse los egipcios y nos persiguieron, imponiéndo
nos rudísimas cargas, y clamamos a Yahveh, Dios de nues
tros padres, que nos oyó y miró nuestra humillación,
nuestro trabajo y nuestra angustia, y nos sacó de Egipto con
mano poderosa y brazo tendido, en medio de gran pavor ,
prodigios y portentos, y nos introdujo en este lugar, dán
donos una tierra que mana leche y miel» (Dt 26,6-9). La
historia de la salvación conduce a María, el centro de la
Iglesia (cf. Act 1,14).
Los que
se cre ían grandes y r icos ,
fueron derr ibados:
el faraón cuando la salida de Egipto, los enemigos de Is
rael en la época de los jueces, los poderosos soberanos de
Babilonia . . .
56
le s
y de los
pobres .
En cambio, debe temblar quien quiera
ser de los grandes y poderosos intelectual, política y so-
cialmente. El que está pagado de su propio poder cierra
su corazón a Dios, y Dios se cierra a los que se le cierran.
El pobre, en cambio, abre su corazón a Dios, su único
refugio y seguridad, y Dios se vuelve hacia él.
Las condiciones para entrar en el reino de los cielos
son las bienaventuranzas de los pobres , de los que l loran y
de los que t ienen hambre .
María cumple lo que se requie
re para poder entrar en el reino de los cielos.
Jesús mismo vivirá también de esta ley de la historia
salvadora proclamada por María después de haberlo con
cebido. Porque se humilló será ensalzado (Flp 2,5-11).
54
Tomó bajo su amparo a su s iervo Israe l ,
acordándose de su miser icordia ,
55
como había prometido a nues tros padres ,
a Abraham y a su l ina je para s iempre .
La gran hora de María es también la gran hora de su
pueblo. Al comienzo de su cántico habló María de la
salud que Dios le había preparado, al final habla de la sa
lud que alborea para su pueblo. Lo que sucedió en María
se realiza en la Iglesia de Dios. En María está represen
tado el pueblo de Dios.
E l
s iervo de Dios
es el pueblo de Israel. «Pero tú
Israel, eres mi siervo; yo te elegí, Jacob, progenie de
Abraham, mi amigo. Yo te traeré de los confines de la
tierra y te llamaré de las regiones lejanas, diciéndote:
Tú eres mi siervo, yo te elegí y no te rechazaré» (Is
41,8s). Ahora va a tener cumplimiento la misericordia de
Dios y la fidelidad a las promesas. María se reconoce una
con el pueblo de Dios. La historia de su elección termina
57
en la historia de su pueblo, y la historia de su pueblo
en el lenguaje de los cánticos del Antiguo Testamento.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 30/190
llega a la perfección en su propia historia.
La promesa de la salud se hizo a Abraham y a su
descendencia (Gen 12,2). Abraham recibió la promesa, Ma
ría toma posesión de la realización, el pueblo de Dios
recibirá los frutos. María, con el fruto de su seno, es el
corazón de la historia de la salud.
El cántico de alabanza de la madre virgen recoge el
cántico de alabanza de la estéril, a la que Dios ha otor
gado descendencia. Ana,
madre de Samuel ,
cantó: «Mi
alma salta de júbilo en Yahveh; Yahveh ha levantado mi
frente y ha abierto mi boca contra mis enemigos, porque
esperé de él la salvación. No hay santo como Yahveh, no
hay fuerte como nuestro Dios.. . Rompióse el arco de los
poderosos, ciñéronse los débiles de fortaleza, los hartos
pusiéronse a servir por la comida, y se holgaron los ham
brientos.. . Levanta del polvo al pobre, de la basura saca
al indigente, para hacer que se siente entre los príncipes
darle parte en su trono de gloria.. . Él atiende a los pasos
de los piadosos, y los malvados perecerán en las tinieblas.
No vence el hombre por su fuerza» (ISam 2,1-10). El
cántico de María no es imitación del cántico de Ana, pero
ambos cantos están alimentados por la acción de Dios en
la historia salvífica.
La formación del niño se ha mirado siempre como
obra de Dios. Cuan do Eva dio a luz a Caín, dijo: «He
alcanzado de Yahveh un varón» (Gen 4,1). Todavía más
fue alabada como obra de Dios la maternidad de las esté
riles. La maternidad de María aventaja a todas las demás.
Es la madre virginal del Mesías, en el que son benditos to
dos los pueblos de la tierra. En su maternidad se ve co
ronada toda maternidad, y toda maternidad lleva en sí
algo de esta maternidad.
Las agradecidas meditaciones de María se expresan
58
Los cantos de su pueblo son su canto, y su canto viene
a ser el canto del pueblo de Dios. La Iglesia incluye el
cántico de la Virgen en la oración de vísperas, cuando
mira , meditando, a l día transcurr ido.
c )
Permanencia y regreso (1,56).
56
María se quedó con e l la unos t res meses , y lueg o
regresó a su casa .
Isabel se mantuvo oculta después de la concepción.
En el sexto mes llegó María; entonces era ya patente que
había concebido. María permaneció allí unos tres meses.
Probablemente se había marchado ya cuando nació Juan.
Éste pertenece todavía a los tiempos viejos, Jesús perte
nece a los nuevos. El nacimiento de Juan, que cae toda
vía en el tiempo de las promesas, debe estar rodeado de
todos los signos de este tiempo.
María permaneció con Isabel unos tres meses. Estuvo
en su casa poco más o menos el mismo tiempo que había
estado el arca de la alianza en Guirgat Járim. Sólo
po c o
más o menos .
El historiógrafo no quiere forzar los hechos
a fin de que las aserciones religiosas puedan presentarse
como realización o cumplimiento. Las aserciones sobre
María no son invenciones, sino que están basadas en la
historia, a la cual da sentido la palabra de Dios.
El regreso a su casa muestra que José todavía no la
había tomado consigo. Ahora volvía a caer sobre ella el
velo que ocultaba su misterio. Los rayos de la gloria sólo
habían brillado por breve tiempo. Así va Jesús a través
de su infancia y de su acción, así la Iglesia.. .
59
L a c ircuncis ión se llevaba a cabo al octavo día del
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 31/190
II .
NACIMIENTO E INFANCIA (1,57-2,52).
1.
JUAN EL BAUTISTA
(1,57-80).
a ) Nacimiento e imposición del nomb re (1,57-66).
57
A Isabe l le l l egó e l t iempo del a lumbramien to, y
dio a luz un hi jo.
58
C uand o sus vec i nos y p ar ien te s s e
en teraron d e l a gran m i ser i cord i a con q ue l a h ab ía favo
recido e l Señor, se a legraban con e l la .
El nacimiento de Juan está envuelto en alegría. Isa
bel se alegra, y con ella los vecinos y parientes. Es la
alegría de haber nacido un niño, y de una madre que era
tenida por estéril y era además de edad avanzada. Esta
alegría ignora todavía la hora de la historia de la salva
ción que ha sonado con este nacimiento.
La alegría del corazón se desborda en un cántico de
alabanza: E l S eñ or l a h a favorec i d o con gran m i ser i cor
dia. El reconocimiento agradecido de los grandes hechos
misericordiosos de Dios proporciona alegría, no sólo al
que ha sido objeto de la misericordia de Dios, sino también
a los que lo reconocen y ensalzan. «Y si, además, soy
derramado en libación sobre la ofrenda y el ministerio li
túrgico de vuestra fe, me alegro y me congratulo con todos
vosotros. De igual modo, alegraos también vosotros y con
gratulaos conmigo» (Flp 2,17s).
59
A los echo días fueron a c ircun cidar al n iño y qu e
rían ponerle e l nombre de su padre: Zacarías .
60
nacimiento. Así lo exigía la ley: «Esto es lo que has de
observar tú y tu descendencia después de ti: circuncidad
todo varón. Circuncidaréis la carne de vuestro prepucio,
y ésa será la señal del pacto entre mí y vosotros. A los
ocho días de nacido, todo varón será circuncidado» (Gen
17,10ss; cf. Lev 12,3).
A la circuncisión va ligada la imposic ión del nombre
(2,21). El derecho de fijar el nombre del niño y de im
ponérselo corresponde al padre y a la madre, pero tam
bién los huéspedes podían tomar parte en la elección del
nombre (Rut 4,17). Como el joven Tobías se había lla
mado como su padre (Tob 1,1.9), así querían que el niño
se llamase Zacarías, como su padre. En la vida religiosa
influye mucho la tradición y el uso. Pero la cuestión de
cisiva es ésta: ¿Cuál es la voluntad de Dios? No siempre
elige Dios lo tradicional, la vieja usanza, el camino tri
l lado . . .
so
p
ro
su
m ad re in t erv ino d i c iend o: D e n i ngun a m a
nera: s i no q ue s e h a d e l l am ar J uan .
61
Y le repl icaron:
¡Pero s i nadie hay en tu famil ia que l leve ese nombre
02
Pregun taron, pues, por señas a su padre cómo quería
que se le l lamara.
Isabel e l ige
el nombre de Juan porque con espíritu
prefético conoce la voluntad de Dios (1,41). Los parientes
lo juzgan todo según las usanzas. Ahora alborea un tiem
po nuevo. Isabel ha percibido el aura de lo nuevo. Juzga
en forma nueva, y esto se hace extraño a ¡os que están
completamente enraizados en lo antiguo. El espíritu va
por nuevos caminos, que no siempre son fáciles de com
prender. En la naciente Iglesia vendrá también sobre los
gentiles: «Se maravillaron los creyentes de origen judío
61
que habían venido con Pedro de que también sobre los
Del pequeño círculo de los vecinos y parientes de la
casa sacerdotal sale y
se ext iende
por toda la montaña de
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 32/190
gentiles se hubiera derramado el don del Espíritu Santo»
(Act 10,45). El Espíritu no guía siempre conforme a los
planes de los hombres, sino también contra ellos.
63
Él pidió un a tabl il la y e scr ibió: Juan e s su nombre .
Y se quedaron todos admirados .
64
Y en aque l momento
se le abrieron los labios , se le desató ¡a lengua y comenzó
a hablar , bendic iendo a Dios .
Entonces se escribía en tablillas recubiertas de cera.
Isabel y Zacarías están de acuerdo en la elección del
nombre. Al pueblo le extraña la decisión y se admira. La
voluntad y la palabra de Dios sitúa a los que ha elegido
ante la necesidad de salirse de lo acostumbrado: a Abra-
ham, a Moisés, a los profetas. ¿Qué experimentará Cristo
cuando sea anunciada su buena nueva? «Nadie que haya
probado el vino viejo quiere el nuevo; porque dice: El
viejo es mejor» (5,39).
La
impos ic ión de l nombre
revela el misterio de la mi
sión del niño que acaba de nacer; en efecto, el nombre del
niño significa: Dios es misericordioso. El tiem po del casti
go ha terminado para Zacarías; ya no tiene necesidad de
signo. Las graves palabras que pronuncian los labios abier
tos y la lengua suelta, son alabanza de Dios. En el naci
miento del P recursor se anuncia — todavía en un círculo
reducido— el tiempo de salvación, tiempo para procla
mar los grandes hechos de Dios.
65
Y un t emor se apoderó de todos sus vec inos , y todas
es tas cosas se comentaban por toda la reg ión montañosa
de Judea;
66
y cua ntos las o ían , las grababan en su corazón
preguntándose: ¿Pues qué l legará a ser es te n iño? Porque ,
e fec tivamente , la mano de l Señor es taba con é l .
62
Judea
¡a not ic ia
de los acontecimientos extraordinarios.
La noticia y el mensaje de salvación pugna por extenderse
a espacios cada vez más amplios. Tiene el destino y la
fuerza de conquistar el mundo. El que es alcanzado por
ella se convierte también en su heraldo (8,17).
No basta , sin embargo, con haber experimentado y
oído los hechos portadores de la salud. Deben además
grabarse en e l corazón.
El que los percibe tiene que enfren
tarse con ellos en su interior. En el niño Juan se revela
el poder, la guía y la dirección de Dios. Quien tome esto
en serio y lo considere en su interior se asombrará y se
preguntará: ¿Por qué sucede esto? ¿Por qué acompaña a
este niño la poderosa mano de Dios? ¿Quién da solución
a estas preguntas? En la historia de la infancia hay hom
bres llenos de Espíritu que interpretan los acontecimientos
por los pensamientos y palabras de la Escritura.
¿; Cántico de Zac arías (1,67-79).
Z acar í as i n t e r p r e t a con su cán t i co
la hora de h is tor ia de la
sa lvac ión
que ha sonado con Juan . E l cán t i co b r o t a del r epe r to
r i o p r op io de aque l t i empo . E l e sp í r i t u de Dios i l umina a Z aca
r ías sobre la misión de su hi jo y sobre el futuro que con él se
anunc i a . A laba a Dios con pa l ab r as an t iguas , do t adas de nuevo
con ten ido . L a p r imer a pa r t e de l cán t i co es un sa lmo esca to -
lógico que ensalza los grandes hechos de Dios en la histor ia de
la salvación (1 ,68-75) . La segunda par te es un cánt ico natal icio
que f o r mula pa r ab i enes po r e l d í a de l nac imien to y anunc i a l a
misión del niño (1 ,76-79) .
67
En tonces Zacarías , su padre , quedó l leno de l
Espí
ritu Santo y habló como profeta diciendo:
6K
Bendito el Señor Dio s de Israel,
63
\x>rque ha venido a ver a su pueblo y a traerle e l rescate ,
' ' " y nos h a susc i tad o un cuerno d e sa l vac i ó n
Visitación, redención, salud, soberano de la casa de David:
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 33/190
en l a cusa d e David, su s iervo,
7U
com o l o h ab ía p rom et id o p or b oca d e sus san tos p ro je tas
desde t iempos ant igu os: . ..
Cuatro de los cinco libros de los Salmos se cierran con
estas palabras: «Bendito el Señor, Dios de Israel»
8
. Todos
los salmos proclaman las obras de Dios en la creación y en
la historia de la salud. La respuesta humana a las obras
divinas no puede ser sino la a l ab anza d e D i os . Lo que se
anuncia con el nacimiento de Juan, es remate y corona
miento de todos los grandes hechos de Dios, que como
Dios de Israel actúa en la historia, se ha escogido a Israel
entre todos los pueblos como pueblo de su propiedad, lo
ha guiado en forma especial y lo ha destinado a ser una
bendición para todos los pueblos.
El profeta habla del futuro, como si ya estuviese pre
sente. Dios quiere intervenir en la historia de su pueblo
aportando la salvación por medio del Mesías venidero,
quiere enviar un poderoso salvador ( cuerno d e sa l vac i ó n)
y preparar la obra redentora. Con el nacimiento de Juan
se ha acercado el tiempo de la salud, su venida ha adqui
rido tal certeza, que se considera ya presente. Van a cum
plirse las promesas proféticas del tiempo pasado, que
anuncian el rey soberano y Mesías de la estirpe de David.
«Juró Yahveh a David esta verdad y no se apartará de
ella: Del fruto de tus entrañas pondré sobre tu trono.. .
Ciertamente eligió Yahveh a Sión, la adoptó por morada
suya: Ésta cera para siempre mi mansión; aquí habitaré,
porque la he elegido.. . Aquí haré crecer el poder de Da
vid y prepararé la lámpara a mi ungido» (Sal 132,11 ss).
8. Sal 40,14; 71,18; cf. 88 , 53; 106,48.
64
todo da a entender que se cumplen los grandes anhelos y
esperanzas. Juan es el precursor del portador de la sal
vación.
71
S a l varnos d e nues t ros enem i gos ,
y d e m anos d e tod os aq ue l l o s q ue nos od i an;
11
tener misericordia con nuestros padres,
y aco rdarse de su santa a l ianza , .. .
El Mesías salva a Israel de la opresión de sus enem i
g o s y de tod os l o s q ue l o od i an . La salvación que realizó
Dios en su pueblo cuando lo liberó de la esclavitud de
Egipto, se cumple ahora de manera mucho más grandio
sa. «Gritó (Dios) al mar rojo, y éste se secó, y los hizo
pasar entre las olas como por tierra seca. Los salvó de las
manos de los que los aborrecían y los sustrajo al poder
del enemigo» (Sal 106,9s).
Cuando alborea el tiempo mesiánico, también los padres
de Israel, los antepasados del pueblo israelita, experi
mentan la misericordia; porque todavía viven y se inte
resan por las suertes de su pueblo. «Vuestro padre Abra-
ham se llenó de gozo con la idea de ver mi día; lo vio, y
se llenó de júbilo» (Jn 8,56). Ahora se realiza la alianza
que concluyó Dios con Abraham. «He aquí mi pacto
contigo: Serás padre de una muchedumbre de pueblos. . .
Te daré pueblos, y saldrán de t i reyes. . . Mi pacto lo esta
bleceré con Isaac.. . Y se gloriarán en tu descendencia
todos los pueblos de la tierra» (Gen 17,4.6.21; 22,18). El
Mesías es la realización de todas las promesas e institu
ciones, de todas las esperanzas y ansias de la antigua alian
za. Él es aquel a quien miran los que ya murieron y viven
en el otro mundo, los que todavía viven y los que han de
venir . Él es el centro de la humanidad.
65
NT. Le I . 5
73
. . .de aquel juramento, que juró a nuestro padre Abraham,
para que podamos llevar una vida tranquila y pacífica
con toda religiosidad y dignidad» (ITim 2,1
s).
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 34/190
d e conced ernos
74
q ue , l ib erad os d e m ano s d e enem i gos ,
pudiéramos servir le s in temor,
75
en piedad y rect i tud, en su presencia , po r tod os nues
tros días.
Dios habla a Abraham: «Por mí mismo juro. . . que por
no haberme negado tu hijo, tu unigénito, te colmaré de
bendiciones y multiplicaré tu descendencia como las es
trellas del cielo y como las arenas de las orillas del mar,
y se adueñará tu descendencia de las puertas de sus ene
migos» (Gen 22,16s). Todo lo que obliga moralmente a
los hombres a cumplir sus promesas, todo esto se dice
de Dios: hizo promesas, contrajo un pacto de alianza, in
cluso pronunció un juramento. Con el envío de Cristo
cumple Dios aquello a que se había obligado. Los suspi
ros y c lamores de los hombres no resuenan en el vacío.
Dios los oye y los satisface en Cristo, que no es solamen
te el centro de todas las esperanzas humanas, sino tam
bién el centro de todos los designios divinos relativos a
los hombres.
Cuando Israel es sustraído al poder de sus enemigos,
queda libre para dedicarse al servicio de Dios. Puede ser
v ir a Dios en su presencia y con ello cumplir su misión
sacerdotal que tiene que desempeñar entre los pueblos;
porque Dios les dijo: «Seréis para mí un reino de sacerdo
tes y una nación santa» (Éx 19,6). El Mesías procura al
pueblo de Dios espacio y libertad para celebrar el culto
divino. Pero este espacio libre lo rellena también con la
adoración de Dios del final de los tiempos (cf. Jn 4,2-26).
«Ante todo, recomiendo que se hagan peticiones, oracio
nes, súplicas, acciones de gracias por todos los hombres:
por los reyes y por todos los que ocupan altos puestos,
66
El servicio y culto divino consiste en sant idad y jus
t ic ia . El alma de la acción litúrgica es la entrega a la
voluntad de Dios, una conducta santa. «Ofrece a Dios sa
crificios de alabanza y cumple tus votos al Altísimo. E in
vócame en el día de la angustia; yo te libraré, y tú cantarás
mi gloria» (Sal 50,14s).
76
Y tú, n iño, has de ser profeta del Al t ís imo,
porque irás delante del Señor a prepararle sus caminos,
77
p ara dar a su p ueb l o co noc i m i en to d e l a sa l vac i ó n ,
mediante e l perdón de sus pecados,
7 8 a
pe r las entrañas misericordiosa s de nue stro Dios, .. .
Juan es profeta de Dios y el que prepara el camino
al Señor. He aquí que voy a enviar mi mensajero (Mal
3,1) . . . Una voz gr ita : «Abrid una calzada en el desier to»
(Is 40,3). . . Jesús sobrepuja a Juan, como el Hijo del
Altísimo sobrepuja al profeta del Altísimo, y el Señor al
que le prepara el camino. E l q ue v i ene e s D i os mismo.
El judaismo tardío ve el futuro reino de Dios en estrecha
relación con el reino futuro del Mesías. En Jesús viene
Dios . . .
La preparación del camino se efectúa mediante el don
del conocimiento de la salvación. El pueblo de Dios conoce
la salvación porque la experimenta prácticamente. Dios
se la da a conocer al otorgársela (Sal 98,2). Ahora bien, la
salvación consiste en el p erd ó n d e l o s p ecad os . Aquel a
quien se le perdonan los pecados se ve liberado y resca
tado de un poder que ata más que las manos de los enemi
gos y de los que odian (1,17). El tiempo de salvación para
el que Juan prepara es el t iempo de la misericordia de
nuestro Dios. La acción reveladora de Dios en los últi-
67
mos tiempos es exuberancia de su corazón misericordioso.
Para el final de los tiempos se aguarda que Dios envíe
c )
Infancia de Juan 1,80).
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 35/190
su misericordia a la tierra
9
. Ahora se cumple esto. «El
Señor es compasivo y de mucha misericordia» (Sant 5,11).
78 b
. ..por las cua les vendrá a verno s la aurora de lo
alto,
79
para i luminar a los que yace n en t in ieblas y sombra de
muerte,
para enderezar nues tros pasos por la senda de la paz .
Por la misericordia de Dios viene la «aurora de lo
alto»,
e l Mesías . «Yo, Yahveh. . . te he puesto para luz de
las gentes, para abrir los ojos de los ciegos, para sacar
de la cárcel a los presos, del fondo del calabozo a los que
moran en tinieblas» (Is 42,6s). El Mesías, el sol de la sa
lud, trae a los hombres salvación, trae redención a los
oprimidos por e l pecado y por la muerte . «El pueblo que
andaba en tinieblas, vio una luz grande; sobre los que ha
bitaban en la tierra de sombras de muerte resplandeció
una brillante luz» (Is 9,1).
La Iglesia
reza el cántico
de Zacarías cada mañana
cuando al salir el sol se disipan la noche y las tinieblas. Lo
reza también junto al sepulcro. En efecto, sobre toda la
noche de la muerte brilla la aurora de lo alto, Cristo, que
con su resurrección venció el señorío del pecado y de la
muerte, y trae la restauración de todo en un nuevo uni
verso (Ap 21,3s).
9. Testam ento de Zabulón 8,2.
68
80
El n iño crec ía y se robus tec ía en espír i tu , y moraba
en los des ier tos has ta e l momento de manifes tarse a Israe l .
De Sansón se dice: «La mujer dio a luz un hijo y
le puso el nombre de Sansón.
Creció
el niño, y Yahveh le
bendijo, y comenzó a mostrarse en él el espíritu de Yah
veh» (Jue 13,24s). Con estas palabras de la Biblia se
diseña la imagen del joven Juan. No se habla expresa
mente de la bendición del Señor. El crecimiento corporal
y mental están bajo la bendición del Señor en Sansón y
en Juan, que son hombres de Dios. Van madurando con
vistas a su misión.
En e l des ier to
se prepara Juan para recibir la investi
dura de su cargo. Lejos de los hombres, en la proximidad
de Dios se va armando para su quehacer futuro. Del de
sierto era esperado el Mesías
10
. Israel tomó posesión de
la tierra prometida después de su permanencia en el de
sierto. Juan se fue al desierto de Judá. Qué hizo allí y a
quién se unió, son cosa que ignoramos. Cuando se des
cubrieron las grutas de Qumrán y se hizo luz sobre la
vida de sus moradores gracias a los escritos que se halla
ron, pareció que también se iba a esclarecer el enigma de
la estancia de Juan en el desierto. Sin embargo, no consta
que Juan tuviera relaciones con la secta de Qumrán. Con
ellos le une la ardiente espera del Mesías. Pero se hace
difícil creer que el sacerdote Zacarías enviara a su hijo
entre gentes que, como protesta contra el sacerdocio del
templo, se habían retirado a la soledad, para prepararse,
sin templo y sin culto, para la venida del Mesías.
10. Cf . Mt 24,26; Act 21,38
69
La entera vida de Juan está determinada por su mi
nisterio. Desde el seno de su madre es elegido, vive en el
todo el mundo; la exaltación del niño recién nacido fue dada
a conocer por los testigos de la proclamación divina; aunque,
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 36/190
desierto, seguramente bajo el impulso divino: Dios mis
mo le
in troduce en su min is ter io .
Todo esto tiene lugar
delante de Israel; el Mesías y su pueblo llenan su vida.
Dios lo había elegido para estos dos.
2.
NACIMIENTO
DE
JESÚS (2,1-20).
En tiempos del emperador romano Augusto, que reinaba en
todo el mundo de entonces, nace Jesús en Belén, como lo había
anunciado el profeta Míqueas (Miq 5, 1; Le 2,1-7). En una noti
ficación solemne anuncian ángeles del cielo quién es este niño
recién nacido y qué importancia tiene la hora de este nacimiento
en la historia de la salvación (2,8-14). Los pastores anuncian y
propagan la fe que había surgido en ellos gracias al mensaje, a
los signos y lo que habían visto (2,15-20).
Pablo nos transmitió un antiguo himno sobre la encarnación,
la muerte y la resurrección de Jesús, que se cantaba en la cele
bración litúrgica: «Cristo Jesús, siendo de condición divina, no
hizo alarde de ser igual ji Dios, sino que se despojó a sí mismo,
tomando condición de esclavo, haciéndose semejante a los hom
bres. Y presentándose en el porte exterior como hombre, se
humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y
muerte de cruz. Por lo cual Dios, a su vez, lo exaltó y le con
cedió el nombre que está sobre todo nombre, para que, en el
nombre de Jesús, toda rodilla se doble.. . y toda lengua confiese
que Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre» (Flp 2,6-11).
La historia de la infancia de Jesús está sostenida por los mismos
pensamientos que este himno. Jesús se despojó y se humilló cuan
do nació, pero Dios exaltó a este niño mediante la solemne noti
ficación de los ángeles, y en el punto culminante de la narración
(2,10) resuena la confesión: «Un Salvador, que es el Mesías, el
Señor.» Como a la cruz del despojo de sí y de la humillación
siguió la proclamación de Dios por los ángeles, así al nacimiento
en la pobreza sigue la solemne notificación por mensajeros celes
tiales de Dios. Ahora bien, la exaltación del Crucificado fue acom
pañada de la proclamación del Evangelio por los apóstoles por
70
como corresponde a la historia de la infancia, no al mundo en
tero,
sino únicamente a un pequeño grupo. La historia de navi
dad lleva el sello del Evangelio, del que dice Lucas: «Entonces
(antes de la ascensión al cielo) les abrió la mente para que enten
dieran las Escrituras; y les dijo: Así está escrito: que el Mesías
tenía que padecer, que al tercer día había de resucitar de entre
los muertos, y que, en su nombre, había de predicarse la conver
sión para el perdón de los pecados a todas las naciones, comen
zando por Jerusalén. Vosotros sois testigos de esto» (24,45-49).
Lucas, historiógrafo de Dios, tenía el mayor empeño en situar
el nacimiento de Jesús, con la notificación divina, en las circuns
tancias históricas concretas, en pintarlo con colores de la época
y en referirlo a la historia del mundo. Así como la historia de la
pasión y de la resurrección pertenece, como hecho histórico, a la
historia del mundo, así también la historia del nacimiento. El pe
sebre y la cruz son los puntos cardinales del hecho salvador en
Cristo; hay correspondencia mutua entre ambos. Lo que allí
sucedió cumplió lo que había preanunciado la Escritura. «Cristo
murió por nuestros pecados según las Escrituras, fue sepultado y
al tercer día fue resucitado según las Escrituras» (ICor 15,3).
También nació según la Escritura. Hay detalles en el relato de
navidad que dejan algunas cuestiones en suspenso. Lucas no
escribe conforme al exacto método moderno de la ciencia his
tórica. Su objetivo principal no era describir el marco histórico
en que tuvo lugar el nacimiento de Jesús; lo que le importaba
en primer lugar era el Evangelio, la buena nueva encerrada en
este acontecimiento. Una vez más hay que remitir al punto cul
minante del relato (2,10). Allí se dice: Os traigo una buena noti
cia de gran alegría. También aquí es el relato del nacimiento una
anticipación del anuncio de la pasión y de la resurrección. «Os
recuerdo .. el evangelio que os anuncié (como buena nueva).. . ,
porque os transmití , en primer lugar, lo que a mi vez recibí: que
Cristo murió...» (ICor 15,1-3). A datos menos claros no quere
mos dar más importancia que la que les dio san Lucas. El Evan
gelio que presenta el nacimiento histórico de Jesús es también
para nosotros el punto decisivo del relato de navidad. De lo
contrario podría suceder que nos contentáramos con un marco
vacío.
71
a ) Nacido en Belén (2,1-7).
to.
que reina sobre el mundo, se pone, sin tener concien
cia de ello y conforme al designio de la divina Providen
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 37/190
1
Sucedió, pue s, que por aqu el los días sa l ió un edicto
d e C é sar A ugus to p ara q ue s e h i c i era un censo d e l m und o
en tero .
2
Este primer cen so tuvo luga r mientras Quirínio
era gobernador de Sir ia.
3
Y todo s iban a empadrona rse,
cad a cua l a su p rop i a ciudad.
El historiador Lucas sitúa la historia de la salvación
en el transcurso de la historia universal. El emperador
romano A ugus to (30a.C. -1 4 d.C.) reina sobre la tierra
entera, sobre los países comprendidos en el imperio ro
mano. La inscripción de Priene (del año 9 a.C.) celebra
el nacimiento de Augusto. Se dice que Augusto «dio nuevo
aspecto al mundo entero: éste se habría arruinado si en
él, que ahora nace, no hubiese brillado una suerte común.
Rectamente juzga quien en este natalicio reconoce el co
mienzo de la vida y de toda fuerza vital. . . La Providen
cia que gobierna toda vida colmó a este hombre de tales
dotes para bien de los hombres, que nos lo envió como
salvador a nosotros y a las generaciones venideras.. . En
su aparición se han colmado las esperanzas de los ante
pasados; él no sólo ha sobrepujado a todos los pasados
bienhechores de la humanidad, sino que hasta es impo
sible que surja uno mayor. El nacimiento del Dios ha
introducido en el mundo la buena nueva que con él se
relaciona. Con su nacimiento debe comenzar un nuevo
cómputo del t iempo» ". El añ o 27 a .C. Augusto recibió del
senado el título honorífico de Sebastos , es decir , Augusto,
con lo cual fue declarado digno de adoración.
Mediante una disposición suya, el emperador Augus-
11. Cf. G . KITTEL, Theol.
Worterbuch
*u m
NT
n , p . 721s.
72
cia, al servicio del verdadero Salvador del mundo, en
quien se cumple lo que los hombres habían esperado de
Augusto y que él pudo dar hasta cierto grado, pero no
en toda su plenitud.
Augusto ordenó que se constituyera un censo
12
. Éste
abarcaba dos cosas: un registro de la propiedad rústica y
urbana (para fines del catastro) y una estimación de sus
valores para el cálculo de los impuestos. La orden del em
perador alcanzó a Palestina por medio del gobernador de
Siria, Quirínio. Herodes el Grande, que entonces reinaba
todavía en Palestina, hubo de aceptar aquella disposición,
12. Según e l Momtmentum Ancyrani tm, Augusto ordenó hacer tres veces
el cómputo de los ciudadanos romanos (cf . C.K.
BARRETT, Die Unu weít des NT.
Ausgewahtte Quel len, Tubinga 1959, p . 12ss) . Indicaciones de diversas fuen
tes histór icas permiten deducir que hacia el año 8 a.C. se hicieron censos de
la población en diversas par tes del imperio romano, por ejemplo, en las Galias
el año 9 a.C. Aun prescindiendo de Le 2 ,1 , de las fuentes histór icas resulta
más que verosímil un registro de la población de todo el imperio romano.
El procurador de Judea dependía del gobernador de Sir ia. Publio Suipicio
Quir ínio , siendo gobernador de Sir ia, l levó a cabo el censo de la población
hacia el año 6 d .C, lo cual dio lugar a una sublevación del pueblo. Fuera
de Le 2 ,2 , nadie informa sobre un censo en Palestina por Quir ínio en tiempo
anter ior a.C. Es cosa demostrada que Quir ínio actuaba ya en Sir ia a.C. ;
no aparece claro si era gobernador . Desde all í dir igió un censo en Apamea.
Parece que tenía un puesto directivo en todos los asuntos del Próximo Oriente
en colaboración con las autor idades provinciales romanas. En las palabras
de Le 2
t
Z ¿se ha de ver una «inexactitud cronológica de un escr itor distante
de los hechos narrados»? Aunque se pueden hacer objeciones, la solución
del problema parece ser la siguiente: el censo que emprendió Quir ínio el
año 6 d .C. parece haber comenzado ya antes de C. (el año 8 a.C) . Los
trabajos del censo duraron bastante t iempo. En Egipto, donde los censos de
la población eran ya práctica antigua, duraban todavía cuatro años por los
tiempos de Cristo . En Palestina se l levaba a cabo por pr imera vez, por lo
cual se hizo más lentamente. La pr imera etapa consistió en el registro de la
propiedad rústica y urbana, la segunda en la estimación que f i jaba los im
puestos que se habían de pagar efectivamente. La pr imera etapa del registro
tuvo lugar par el t iempo del nacimiento de Jesús; de ella habla Le 2 , ls; la
segunda etapa, que era mucho más desagradable para el pueblo y provocó
la sublevación por tratarse de la estimación de los impuestos , tuvo lugar el
año 6 d .C. Cf . E . STAUFFEJI, Jesús. Gestal t und Geschichte, Berna 1957,
p. 26-34; H.U. INSTINSKY, Das Jahr der Geburt Christ i , Graz 1957.
73
pues era rey por gracia del emperador. Aquel censo fue
el primero que se hacía entre los judíos. Tuvo lugar
e n
tú, Belén de Éfrata, pequeña para ser contada entre las
familias de Judá, de ti me saldrá quien señoreará en Is
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 38/190
t iempo de Quir in io , gobernador de Sir ia .
¿Por qué hace
notar Lucas todos estos detalles? Quería sin duda deter
minar exactamente el tiempo. Pero con ello se pone tam
bién de relieve que Palestina había perdido su libertad.
Todos fueron a empadronarse. Según noticias que se
hallaron en Egipto, gentes que estaban fuera del país, tuvie
ron que ir a inscribirse a su lugar de residencia; también
las mujeres debían comparecer con sus maridos ante los
funcionarios
13
. Cada cual se dirigió a su ciudad, en la
que tenía alguna propiedad. Así, José tuvo que ir a Belén.
4
También José, por ser de la casa y familia de
David,
subió desde Gal i lea , de la c iudad de Nazare t , a Judea, a
la c iudad de
David,
que se l lama Be lén ,
5
para empadro
narse con María , su esposa , que es taba enc in ta .
José fue con María a Belén. Sin duda tenía allí alguna
posesión. En tiempos de Domiciano había en Belén pa
rientes de Jesús, que eran labradores. Los descendientes
de David habían poseído tierras en Belén. Lucas no hace
mención de esto. A él le interesa más el que María y José
tuvieran que ir a Belén. Llama a este lugar la ciudad de
David; José era de la casa y familia de David. Todo esto
suscita recuerdos religiosos. El Mesías tiene que nacer en
Belén; procede de la casa de David y poseerá el trono de
su padre . El profeta Miqueas lo había predicho: «Pero
13.
El papiro procede del año 104 d.C. y fue hallado en Fa yyu m; m ues
tra condiciones análogas a las que presupone Le, y también Jos mismos tér
minos técnicos. En él se lee: «Gayo Vibio Máximo, gobernador de Egipto ,
dice: Dado que se avecina la tasación de la propiedad, tenemos que ordenar
a todos los que por alguna razón se hallan fuera de su circunscr ipción que
regresen a su hogar patr io a f in de efectuar la tasación de vigor y de aplicarse
al debido cultivo del campo» A.
DEISSMANN,
Licht vom Osten, Tub inga
2
-
8
1909,
p. 20 l s .
74
rael, cuyos orígenes serán de antiguo, de días de muy
remota antigüedad» (Miq 5,1). Dios pone la historia del
mundo al servicio de la historia de la salvación; subordi
na a sus eternos designios la orden de Augusto.
A María se la llama
esposa
de José; éste la había lle
vado ya a su casa, pues de lo contrario, según la usanza
galilea, no habría podido viajar sola con José. José con
vivía con María, pero sin llevar vida conyugal. Estaba
enc in ta:
era virgen y futura madre. Con ello se expresa lo
que el relato de la anunciación había ocultado con el velo
del misterio.
6
Y mientras e s taban
allí,
le l legó a e l la e l t iempo de l
a lumbramiento .
7
Y dio a luz a su hijo pr imogénito , lo
envo lv ió en pañales y lo acos tó en un pesebre , por no ha
ber s i t io para e l los en la posada.
El relato del nacimiento es introducido solemnemente
en el estilo de la Biblia.
Mientras
María y José estaban en
Belén, llegó el tiempo del alumbramiento. Jesús está sujeto
a la ley de Augusto y a la ley de la naturaleza. Era obe
diente .
El nacimiento se refiere con sobriedad, con sencillez,
objetivamente , en pocas palabras . Dio a luz a su hijo .
María trajo al mundo a su hijo con verdadera maternidad.
De Isabel se dice: Dio a luz un hijo (1,57); de María: Dio
a luz a
su
hijo.
La concepción virginal resuena en todas partes. Dio
a luz a su hijo primogénito. ¿Se dice esto por que fuera
Jesús el primero de varios hijos varones? La palabra no
exige necesariamente esta interpretación. Una inscripción
funerar ia del año 5 d.C. hallada en Egipto da buena prue-
75
ba de ello. Una mujer joven difunta, llamada A rsinoe, se
expresa así: «En los dolores de par to del pr imogénito me
de valerse por sí mismo, acostado en un pesebre. Se des
pojó,
se humilló y tomó la forma de esclavo. «Conocéis
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 39/190
condujo
el
destino
al
término
de la
vida»
14
.
El
hijito úni
co,
pr imogénito, de Arsinoe , era a la vez el unigénito.
Lucas elige este título porque Jesús tenía los deberes y
derechos del primogénito (2,23) y porque era el portador
de las promesas.
María presta a su hijo los primeros servicios ma ternos.
L o e n v o l v i ó
en
p añ a l e s .
Los
niños recién nacidos
se en
volvían fuertemente en jirones de tela a fin de q ue no pu
dieran moverse; se creía que así crecerían derechas las
extremidades.
Lo
acos tó
en un
pesebre, como en el que
comen los animales. Este detalle de q ue el niño recién na
cido tuviera como primera cuna un pesebre lo explica el
evangelista con estas palabras:
Por no
haber s i t io para
e l l o s en la p osad a . María
y
José, llegados
a
Belén, habían
buscado alojamiento
en un
albergue
de
caravanas
(un
khan).
Era éste un lugar, por lo regular al descubier to ,
rodeado de una pared con una sola e ntrada. En el interior
había a veces alrededor un pórtico o corredor de colum
nas, que en algún tram o pod ía estar cerrado con pared,
formando un local algo grande o var ios pequeños. En
medio, en el patio, estaban los animales; las personas se
cobijaban
en el
pórtico, estando reservados los espacios ce
rrados a los que podían permitirse aquel «lujo». Cua ndo
María sintió
que se
acercaba
su
hora ,
no
había allí lugar
para ella. Se fue a un sitio que se utilizaba como establo; en
efecto, donde había un pesebre debía de haber un esta
blo . El Señor prometido es un niño pequeño, incapaz
14.
J.-B. F R E Y , La signifi cation du terme TIQWTÓTOXOQ d'apres une ins-
cription Juive, ,
«Bíblica»
11
(1930) 373-390, donde
se
hallará
el
texto
y el
comentar io .
15. Según
una
an t igua t r ad ic ión ( Jus t ino
t 165;
Or ígenes
t 254)
nació
Cristo
en una
g r u t a :
«En
Belén
se
mues t r a
la
gruta; all í nació ,
y el
pesebre
en
la
gruta, all í
fue
envuelto
en
pañales .» Esta g ruta
fue
profanada
con el
76
la gracia de nuestro Señor Jesu cristo: cómo por nosotros
se hizo pobre, siendo rico, para que vosotros fuerais en
riquecidos con su pobrez a» (2Cor 8,9). En el albergue no
había sitio para él. «El Hijo del hombre no tiene dónde
reclinar la cabeza» (9,58). «Vino a los suyos, y los suyos
no le recibieron» (Jn 1,11).
b) Dado a conocer por el cielo (2,8-14).
8
H ab ía unos p as tores en aq ue l l a m i sm a reg i ó n que
p asab an
la
noch e
al
aire l ibre, v ig i lando
por
turno
su
rebaño.
Los pastores eran gentes despreciadas. Tenían
la
mala
fama
de no
tomar
muy a la
letra
lo
tuyo
y lo
mío;
por
esto mismo no se aceptaba su testimonio en los tribuna
les. Los pastores, los recaudadores de impuestos y los pu
blícanos eran tenidos por incapaces, entre otras cosas, de
actuar como jueces y como testigos, ya que eran sospe
chosos en cuestiones de dinero
1<;
. Dios elige a los despre
ciados y a los pequeños; son capaces, ap tos para recibir
la revelación y para la salvación.
El ganado menor — contrar iamente
al
ganado
ma
yor — pasaba todo el t iempo, de día y de noche, en los
pastos desde la fiesta de pascua hasta las primeras lluvias
de otoño, es decir , desde marz o hasta no viembre. Por la
noche se llevaba a los animales a apriscos o majadas para
culto
de
Tamm uz-Adonis ,
lo
cual
se
debió seguramente
al
hecho
de ser el
lugar
sagrado para
los
cr istianos. Bajo
el
reinado
de
Constantino
se
edificó sobre
la gruta
la
iglesia
del
Nacimien to .
ORÍGENES, Contra- Celsum 1,51 (PG 11,
756); JUSTINO, Diálogo
con
Trifón
78,5 (PG 6, 657).
1 6. BlLLERBECK II , p. 113s.
77
que estuvieran protegidos contra los ladrones y contra las
bestias feroces. Del cuidado y protección del ganado se
y de v ictoria (evangel ium). Juan Bautista toma a su cargo
este anuncio del ángel. «Anunciaba el Evangelio al pue
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 40/190
encargan los pastores, que se hacían cabanas con ramas
para protegerse contra la intemperie y para el reposo noc
turno
17
. Los pastores, en su calidad de v i g i l an te s , son
de esas personas que observan lo que pasa a su alrede
dor, que están preparados a cada hora del día y de la
noche. Precisamente esa actitud es decisiva en el tiempo
final. «¡Y aun si llega (el señor) a la segunda o a la ter
cera vigilia de la noche, y los encuentra así (en vela), ¡di
chosos aquellos » (12,38).
9
Y un ánge l del Señor se les presen tó, y la g loria del
S eñ or l o s envo l v i ó en c l ar i d ad . E l l o s s i n t i e ron un gran
temor.
10
Pero e l ángel les d i jo: No tengáis miedo. Porque
mirad: os t ra i go una b uena no t i c i a q ue s erá d e grand e
alegría para todo e l pueblo.
n
H oy , en l a c i ud ad d e D a
vid, os ha nacido un Salvador, que es e l Mesías , e l Señor.
n
Y esto os servirá de señal: encontraré is un niño envuel
to en p añ a l e s y acos tad o en un p eseb re .
Dios mismo da a conocer a los pastores por medio de
su ángel lo grande de la hora del mundo que ha comen
zado con el nacimiento de Jesús. De repente e inespera
damente aparece el á n g e l en medio de una luz deslum
bradora. Con resplandores de luz se manifiesta la gloria
de Dios (Éx 16,10). Los pastores se ven envueltos en ese
resplandor que dimana de los ángeles y que tiene su ori
gen en Dios. En el ángel les está cercano Dios y su reve
lación. El temor es la reacción de los hombres ante la
proximidad de Dios.
El ángel anuncia a los pastores un m ensa je d e a l egr ía
17. BlLLEKBECK II, p. 114sS.
78
blo» (3,18). Jesús continuará este anuncio: Tiene que
anunciar a otras ciudades el Evangelio del reino de Dios
(cf. 8,1), pues para ello le ha ungido Dios, «para anunciar
e evangelio» (4,18). A Jesús suceden los apóstoles en el
encargo de «anunciar el Evangelio de Jesucristo» (Act
5,42). La hora del nacimiento de Jesús es el comienzo de
la buena nueva de gozo y de victoria, del Evangelio. Es
traído al mundo de parte de Dios; en él se manifiesta la
gloria de Dios.
El Evangelio del ángel no produce temor, sino g r a n
alegría. Lo que ha asomado ya dondequiera que se ha
anunciado el tiempo de la salvación (l,14.46s.48.68) se
produce ahora todavía en mayor abundancia. Estalla la
alegría. Los pastores son los primeros que reciben esta
gran alegría. Ésta acompañará siempre a la predicación
del Evangelio; porque el Evangelio anuncia y trae la sal
vación y con ella la alegría. «Volvieron, pues, los setenta
llenos de alegría diciendo; ¡Señor, hasta los demonios se
nos som eten en tu n omb re » (10,17). Incluso la persecu
ción por este Evangelio desencadenará la alegría: «Y lla
mando a los apóstoles (los miembros del sanedrín), des
pués de azotarlos, les ordenaron que no volvieran a hablar
del nombre de Jesús, y los soltaron. Ellos, pues, salían
gozosos de la presencia del sanedrín, porque habían sido
dignos de padecer afrentas por el nombre de Jesús» (Act
5,40s). Esta alegría alcanzará, no sólo a los pastores, sino
a todo el pueblo. Los pastores son las primicias de los que
reciben la alegría del tiempo de salvación; su gozo es
fuente de una oleada de alegría que se extenderá a Israel
y a l mundo entero.
¿Cuál es el objeto de esta buena nueva de gran ale
gría? H o y ha nacido. . . A éste hoy han mirado todas las
79
promesas; hoy se ven cumplidas. Hoy se ha cumplido la
Escritura» (4,21). El tiempo del cumplimiento y del fin
Habla el lenguaje de su tiempo, pues quiere hablar en for
ma realista y al alcance de todos. Conoce la expectación
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 41/190
ha comenzado.
El niño que ha nacido es
e l Sa lvador , e l Mes ías , e l
Señor.
El título fundamental es Salvador. Jesús, después
de su exaltación, es anunciado por Pedro como Señor y
Mesías. «Sepa, por tanto, con absoluta seguridad toda la
casa de Israel que Dios ha hecho Señor y Mesías a este
Jesús a quien vosotros crucificasteis» (Act 2,36). Jesús
(«Yahveh es salvación») es Salvador, el Señor es el Señor
divino, el Mesías es el ungido, el rey. El núcleo de la pro
fesión de fe de la cristiandad: «Jesucristo es Señor» (Flp
2. 11), viene de Dios por boca de los ángeles. Esta pro
fesión conviene ya a Jesús desde el día mismo de su na
cimiento.
En la c iu da d de
David. Es significativo que el lugar
del nacimiento de Jesús no se designe con su nombre co
rriente, Belén, sino con el nombre de dignidad de la his
toria de la salvación. Para que naciera Jesús en la ciudad
de David, subió José de Galilea, de la ciudad de Nazaret,
a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén (2,4).
Allí tenía David su patria, y José su ciudad, porque era
de la casa y familia de David. Jesús es «hijo de David»,
en él se cumplen las promesas de que se había hablado
desde la anunciación (l,32s).
El mensaje del ángel está compuesto de tal forma que
trae a la memoria la inscripción de Priene. Augusto es en
viado como
sa lvador .
Pone término a todas las querellas.
El natalicio del Dios emperador era para el mundo el co
mienzo de las buenas nuevas de alegría; las que siguen son
las noticias de la declaración de mayor edad del príncipe
heredero y sobre todo de la subida al trono del empera
dor. Al mensaje del culto al emperador contrapone el Nue
vo Testamento el solo Evangelio del nacimiento de Jesús.
80
y la esperanza de los hombres, y responde con el Evan
gelio del nacimiento del niño en el estado y en el pe
sebre.
Los pastores reciben
s ig n o s ,
por los que podrán reco
nocer la verdad del mensaje: un niño pequeño, envuelto
en pañales, acostado en un pesebre. Por estos tres signos
reconocerán al Señor Jesucristo. Todo esto está en con
tradicción con la expectación judía, en contradicción con
lo que dice el mensaje. ¿Un niño desvalido, Salvador del
mundo? ¿El Mesías, un niño envuelto en pañales? ¿El
Señor, acostado en un pesebre? Al recién nacido se aplica
lo que se dijo del Crucificado: Es escándalo para los ju
díos y necedad para los gentiles (ICor
1,23).
Pero «lo
necio de Dios es más sabio que los hombres, y lo débil
de Dios, más poderoso que los hombres» (ICor 1,25).
13
Y de repente , aparec ió con e l ánge l una mult i tud
de l e jérc i to ce les t ia l que a lababa a Dios , dic iendo:
14
Glo
r ia a Dios en las a l turas , y en la t ierra paz en tre los hom
bres, objeto de su amor.
Al mensaje se añade la alabanza; el anuncio termina
en un responsorio hímnico de una multitud de los ejér
citos celestiales. Numerosos ángeles rodean al único que
anuncia la buena nueva. Los ejércitos celestiales son — se
gún la concepción de los antiguos— las estrellas, orde
nadas en gran número en el cielo y trazando sus órbitas,
pero también los ángeles que las mueven. Los ángeles for
man la corte de Dios, que es llamado también Dios
Sebaot
(Dios de los ejércitos). Al introducir al primogénito en el
mundo, dice Dios: «Adórenlo todos los ángeles de Dios»
(Heb 1,6). Los ángeles se interesan vivamente en el acon-
81
NT,
Le I, 6
tecer salvífico. Son «espíritus al servicio de Dios, envia
dos para servir a los que van a heredar la salvación»
(Heb 1,14).
había concluido Dios con Israel y que es renovada por
Jesucristo. «La alianza es alianza de paz» (Is 50,10). La fe
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 42/190
El canto de los ángeles es una aclamación mesiánica.
No es deseo, sino proclamación de la obra divina, no es
ruego, sino solemne homenaje de grat i tud. En dos frases
paralelas se expresa lo que el nacimiento de Jesús signifi
ca en el cielo y en la tierra, para Dios y para los hombres.
Dado que el cielo y la tierra están afectados por este na
cimiento, tiene éste un significado de alcance universal.
Con el mensaje de navidad cobra nu evo giro el universo.
El cielo y la tierra son reunidos por Jesús.
G l or i a a D i os en l a s a l turas . «Dios habita en las altu
ras.» En el nacimiento de Jesús, Dios mismo se glorifica.
En él da a conocer su ser. Jesús es revelación acabada de
Dios, reflejo de su gloria (Heb 1,3); él anuncia la sobera
nía de Dios, la trae y la lleva a la perfección; en él se
hace visible el amor de Dios (Jn 3, 16). Al final de su vida
podrá decir: «Yo te he glorificado sobre la tierra, llevando
a término la obra que me habías encomendado que hicie
ra» (Jn 17,4).
En la t ierra paz a los hombres, objeto de su amor. En
la tierra viven los hombres. Por el recién nacido reciben paz.
Jesús es príncipe de la paz. «Porque nos ha nacido un
niño,
nos ha sido dado un hijo, que tiene sobre su hom
bro la soberanía y que se llamará maravilloso consejero,
Dios fuerte, Padre sempiterno, Príncipe de la paz, para
dilatar el imperio y para una paz ilimitada, sobre el trono
de David y sobre su reino, para afirmarlo y consolidarlo
en el derecho y en la justicia desde ahora para siempre.
El celo de Yahveh Sebaot hará esto» (ís 9,5). La paz en
cierra en sí todos los bienes salvíficos. La paz es restau
ración con creces de todo lo que los hombres habían
perdido por el pecado; la paz es fruto de la alianza que
82
es reconciliación, gozo consumado; la predicación de Je
sús es «Evangelio de la paz» (Ef 6,15). Él mismo es la paz.
Los hombres reciben paz porque Dios les ha mostra
do su complacencia, su favor, su am or . Jesús garantiza a
los hombres la complacencia y el amor de Dios. Sólo por
éste puede salvarse el hombre. En un salmo de la secta
de Qumrán se cantaba: «En tu cólera están (fundados)
todos tus castigos, y en tu bondad la plenitud del perdón
y de la misericordia con todos los hijos de tu compla
cencia»
18
. El himno angélico extiende la complacencia
divina a todos los hombres. Por razón de Jesús puede al
canzar a todos la voluntad salvífica de Dios, con tal que
muestren deseo de salvarse. «Porque así dice el Altísimo,
cuya morada es eterna, cuyo nombre es santo: Yo habito
en la altura y en la santidad, pero también con el contrito
y humil lado, para hacer revivir los espír i tus humil lados y
reanimar los corazones contritos.. . Por la iniquidad de su
violencia, me irrité, y ocultándome, le castigué sañudo.
El rebelde seguía por los caminos de su corazón. Sus ca
minos los conozco yo, y le sanaré y le conduciré y le con
solaré. Yo pondré cantos en los labios afligidos. Paz, paz
al que está lejos y al que está cerca, dice Yahveh; yo le
curaré. Pero los malvados son un mar proceloso, que no
puede aquietarse, y cuyas olas arrojan cieno y lodo. No
hay paz, dice Yahveh, para los impíos» (Is 57,15-21).
El anuncio solemne del ángel exaltó al niño recién na
cido como rey Mesías, el canto de los coros de ángeles lo
celebra como príncipe de la paz, Salvador y sacerdote, que
reconcilia y reúne el cielo con la tierra. El niño en el pe
sebre es sacerdote y rey del tiempo de la salvación.
18. 1Q H I I , 8ss.
83
El canto de los ángeles tiene relación con la aclama
ción del pueblo, que acompañaba a Jesús en su en trad a
cedió.
Al acontecimiento sigue la palabra notificante. Pa
blo confiesa: «A mí, el menor de todo ' el pueblo santo,
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 43/190
en Jerusalén al comienzo de la semana de su pasión; el
pueblo clamaba: «¡Bendito el que viene, el rey, en el nom
bre del Señor ¡Paz en el cielo y gloria en las alturas »
(19,38)
19
.
La paz y la gloria que reinan en el cielo deben
realizarse también en la tierra por Jesús. La entrada triun
fal de Jesús en Jerusalén, donde le aguardan la muerte y
¡a exaltación, se consuma como obra saívífica: se da a ios
hombres la paz y la gloria del cielo. Esta aclamación del
pueblo se entiende como grito de oración, así como' decía
el orante judío: «La paz que reina en sus alturas, nos
proporcionará paz a nosotros y a todo el pueblo de Israel.»
Lo que comenzó por el nacimiento de Jesús, será llevado
a término por su muerte . La entrada de Jesús en el mundo
tiene su consumación en la entrada en Jerusalén y en la
parusía. Belén, Jerusalén y mundo son las grandes etapas
de la redención. Jerusalén está en medio con la «elevación»
(9,51) en la cruz y la ascensión al cielo...
c ) Anu nciado por los pastores (2,15-20).
15
Y cuan d o l o s á nge l e s l o s de jaron y s e fueron a l c i e
lo , l o s p as tores s e d ec ían unos a o t ros : P asem os a B e l é n ,
a ver e so q ue h a suced i d o , l o q ue e l S eñ or nos h a d ad o a
c o n o c e r .
16
F ueron con p res teza y e ncon traron a M ar ía y
a fosé , y a l n iño acostado en e l pesebre.
El mensaje que transmitió Dios no es sólo palabra,
sino,
a l mismo tiempo, acontecimiento: M ensa je q ue su -
19. La tradición del texto dice: «E n el cielo», pero quizá debiera de cir :
«en la t ierra»; la falta se debe probablemente a una falsa resolución de
abrev ia tu r as .
84
si me ha dado esta gracia: la de anunciar a los gentiles el
Evangelio de la insondable riqueza de Cristo y dar luz
sobre la economía del misterio escondido desde los siglos
en Dios» (Ef 3,8s). La misma ley vige para Pablo que
para los pastores. «A mí, el menor.. . el Evangelio de la
insondable riqueza de Cristo.. . la economía del misterio»
(la salvación que se da en Cristo); esto se aplica a todos
los mensajeros que dan a conocer la economía y la reali
zación de los divinos designios salvadores.
Una vez que los pastores hubieron recibido la buena
nueva, habían de ser también testigos de lo que vieron.
Creyeron y pudieron luego ver con sus propios ojos lo
que habían creído. «Bienaventurada tú , que has creído. . .»
Van con presteza, como María, a cumplir el encargo de
Dios. La oferta de la salvación no sufre dilaciones. Los
hombres comienzan a volverse hacia el niño en el pese
bre.
En Jesús está la salvación y la gloria de Dios.
Los pastores encontraron lo que buscaban conforme al
signo y mediante la guía de Dios, que siempre guía de tal
manera, que el hombre encuentra. Lo que vieron con los
ojos fue a M ar ía y a J osé , y a l n i ñ o acos tad o en e l p e se
bre. Esto y nada más: nada de la madre virgen, nada de
las grandezas que había expresado acerca de este niño el
mensaje del ángel. Pero vieron a este niño, iluminados
por la revelación de Dios. El signo de que la revelación
de Dios se ha hecho realidad histórica, está delante de
ellos en María y José, y en el niño acostado en el pese
bre.
El esplendor del Evangelio de navidad viene de la
interpretación divina del nacimiento histórico de Jesús,
pero el portador de este esplendor es el niño que ha
nacido.
85
17
Al ver lo, ref ir ieron lo que se les había dicho a cerca
de este n iño.
18
Y tod os l o s q ue l o oy eron q ued aron ad
m i rad os d e l o q ue l e s con tab an l o s p as tores .
19
María, por
había sido confirmado por Isabel, es ahora profundizado
por los pastores. No sólo se asombra, sino que c o n s e r v a
tod as e s ta s p a l ab ras en e l corazó n . Oyó la palabra de la
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 44/190
su p ar te , conservab a tod as e s ta s p a l ab ras en su corazó n y
las meditaba.
¿Qué efecto produce la vista con fe del hecho salva
dor? Los pastores han visto y refieren, dan a conocer lo
que han visto. El contenido de su anuncio es éste: Lo que
se les había dicho acerca de este niño; el hecho histórico
del nacimiento de Jesús y l a s p a l ab ras q ue s e l e s h ab ían
d i ch o acerca d e e s t e n i ñ o . Así se efectúa siempre el anun
cio,
la proclamación del Evangelio: «Os doy a conocer . . .
e l Evangelio . . . , que Cristo murió por nuestros pecados
según las Escrituras» (ICor 15,1-5).
No todos pueden ver con sus ojos el acontecimiento:
sólo los testigos predestinados por Dios
2 0
. Los otros oyen
el mensaje de estos testigos. Como fruto inmediato del oír
se recoge la admiración. Lucas es el evangelista que con
más frecuencia hace notar que los hechos y palabras de
Jesús despertaban admiración. El que experimenta la re
velación de lo divino, se admira, sea que con fe y temor
reverencial se asombre ante lo divino, o que admire lleno
de presentimientos, o que rechace con crítica y sin com-
orensión. El que se asombra cuando se le presenta la re
velación divina, todavía no cree: está en el atrio de la fe:
ha recibido un impulso que puede suscitar fe, pero tam
bién provocar duda . ¿Puede or iginar más que asombro
la predicación de los mensajeros de la fe? La decisión de
creer es asunto personal de cada uno.
También María recibe de los pastores un mensaje so
bre su hijo. Lo que le había dicho al ángel Gabriel y
20. Cf . Act 10,40-43.
86
manera que Dios quiere. En ella cae la semilla en buena
tierra. La semilla que cae en «la tierra buena son los que
oyen la palabra con un corazón noble y generoso, la re
tienen y por su constancia dan fruto» (8,15). Constante
mente oye María algo nuevo sobre su niño. ¿Quién puede
decir de una vez todas las riquezas que encierra este niño,
de modo que el hombre comprenda? La r iqueza que está
contenida en la revelación de Cristo, sólo puede comuni
carse cada vez por partes. Pero las partes deben compa
rarse y combinarse. La fe madura combina los diferentes
elementos, ordena y encuadra lo nuevo en lo que ya se
posee. Lo que experimentó María en la anunciación, en
la visita a Isabel y en el momento del nacimiento, fue
para ella fuente inagotable de meditación, de sus decisio
nes,
de oración, de alabanza, de gratitud, de gozo y de
fidelidad. María es el prototipo de todos los que perciben
la palabra y la acogen como es debido, el prototipo de
los creyentes y consiguientemente el prototipo de la Igle
sia, que acoge a Cristo con la fe y lo lleva en sí.
20
Y los pastores se volv ieron, g lori f icando y a la bando
a Dios por todo lo que habían v is to y oído, ta l como se
l e s h ab ía anunc i ad o .
Dios había elegido a éstos, los más pobres de to
dos, que estaban en vela, para que recibieran el mensaje
del nacimiento del Salvador. Los constituyó en testigos del
Mesías recién nacido y los pertrechó para que fueran he
raldos de la buena nueva. Ahora los hace volver a su vida
cotidiana. Los pastores se vo l v i eron .
A partir de entonces g l or i f i can y a l ab an a l S eñ or . Dios
87
actúa mediante la venida y la acción de Jesús; pues
Dios está con él. Realiza prodigios, milagros y signos por
observancia de la obediencia a la ley se hace patente su glor ia en
la ci rcuncisión (2 ,21) y en el templo (2 ,22-39) .
E l camino de l n iño Jesús en e l seno de su madr e va de Naza-
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 45/190
medio de Jesús. El asombro por los grandes hechos de
Dios acompaña la entera vida de Jesús, en quien se re
conoce la acción de Dios. Cuando Jesús recorre Palestina
erumpe un júbilo de alabanza de Dios
2 1
. Incluso cuando
muere en la cruz y clama con gran voz: «Padre, en tus
manos encomiendo mi espíritu», glorifica a Dios el cen
turión que lo había oído (23,47). Con tal glorificación de
Dios comienza y termina el Evangelio. Después de la as
censión volvieron los discípulos a Jerusalén llenos de ale
gría y glorificaban a Dios continuamente en el templo
(24,53). Cuando en la primitiva liturgia cristiana se hacían
presentes los hechos de Jesús mediante la palabra y la
fracción del pan, los creyentes terminaban respondiendo
con alabanzas a Dios (Act 2,47).
Una vez más se dejan notar los efectos de esta litur
gia de la alabanza y de la glorificación. Lo q ue h ab ían
v i s to y o íd o , t a l com o se l e s h ab ía anunc i ad o . Los hechos
salvíficos y su interpretación divina, que forman el centro
del culto cristiano, llevan a la glorificación y a la alabanza
de Dios. Para esto se escribió el Evangelio de Lucas: para
que Teófilo y con él la Iglesia se persuadan de la certeza
de aquello sobre lo que se les había instruido y que en
el culto cristiano se hace presente y se celebra: Dios que
causa la salud por Jesús.
3. IMPOSICIÓ N DEL NOMBRE Y PRESENTACIÓN DE JES ÚS
(2,21-40).
Con e l n iño Jesús se p r ocede conf o r me a l a s d i spos i c iones de
l a l ey
2 2
. «Nació de mujer , nació bajo la ley» (Gal 4 ,4) . En la
21 .
Le 5 ,25s; 7 ,16; 9 ,43 ; 13 , 13; 17,15; 18,42s.
22 .
Cf . 2 ,21.22-24.27.39.
88
ret , la pequeña e insignif icante ciudad de Gal i lea , donde fue
conce b ido , a Be l én , l a c iudad de Dav id , don de nac ió — en po br eza
y g lo r i a—, y de a l l í a Je r usa l én , a l a c iudad de su «e l evac ión»
(9 ,51) . Con esto se l lega al punto culminante del relato de la
in f anc i a . L a ac t i v idad púb l i ca de Jesús segu i r á e l m i smo camino :
de Ga l i l ea a Je r usa l én , donde muer e y es g lo r i f i cado .
Como Juan , en e l momento de l a impos i c ión de l nombr e , e s
ce l eb r ado en l a s pa l ab r as p r o f é t i cas de su pad r e , a s í t ambién
Jesús adqu ie r e t odav ía mayor esp l endor g r ac i as a l E sp í r i t u San to ,
que habla por boca del profeta y de la profet isa . Juan es cele
b r ado en casa de Z acar í as , Jesús , en cambio , en e l t emplo . Jesús
es mayor que Juan .
a ) Imposición del nom bre (2,21).
21
C uand o se cum p l i eron och o d ías y h ub o q ue c i r
cunc i d ar oí niño, le pusieron por nom b re J esús , com o l o
h ab ía l l am ad o e l á nge l an te s d e s er conceb i d o en e l s eno
materno.
Con su nacimiento fue introducido Jesús en la existen
cia humana («lo envolvió en pañales»), en la estirpe de
José, en el pueblo israelita, en la historia de los pobres y
de los pequeños, en la obligación de la ley.. .
La ley mosaica regula la vida del israelita, por días,
semanas y años. C uand o se cum p l i eron och o d ías y hubo
que circuncidar al niño, recayó sobre Jesús por primera
vez la obligación de la ley: Jesús era «obediente» (Flp 2,8).
El Evangelio no dice expresamente que se efectuó en
Jesús la circuncisión. El orden de la ley y su cumplimiento
es el marco en que se desarrolla la vida entera de Jesús.
Con él se cumple la ley, se realiza su pleno sentido. Con
esta obediencia erumpe lo nuevo y grande.
89
A la circuncisión está ligada la i m p os i c i ó n d e l nom
bre. Dios mismo fijó el nombre de este niño pequeño. Se
le llamó como había dicho el ángel. Con el nombre fija
prescripción de la ley tenía por objeto recordar la acción
salvadora con que Dios sacó maravillosamente a Israel de
la miseria de Egipto. «Y cuando tu hijo te pregunte ma
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 46/190
Dios también la misión de Jesús: Dios es Salvador. En
Jesús trae Dios la salvación. «Jesús pasó haciendo bien y
sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios
estaba con él» (Act 10,38).
b) Presentación en el templo (2,22-24).
22
C uand o se cum p l i eron l o s d ías d e l a p ur if icac i ó n d e
e l l o s s egún l a l ey d e M oi sé s , l o l l e varon a J erusa l é n , p ara
presentarlo a l Señor,
23
con form e a l o q ue e s tá e scri to en
la ley del Señor: Todo varón primogéni to será consagra
do al Señor;
24
y para ofrecer un sacri f ic io , como lo dice
también la ley del Señor: un par de tórtolas o dos pi
ch ones .
La ley de la puri f icación establecía: «Cuando dé a
luz una mujer y tenga un hijo, será impura durante siete
días (estará excluida de los actos del culto); será impura
como en el tiempo de su menstruación. El octavo día será
circuncidado el hijo, pero ella quedará todavía en casa
durante treinta y tres días en la sangre de su purificación;
no tocará nada santo ni irá al santuario hasta que se cum
plan los días de su purificación» (Lev 12,1-4).
También con Jesús se practicó la purificación. Se dice,
en efecto: Cuando se cumplieron los días de la purifica
ción d e e l l o s . «Purificación» tal vez signifique aquí c o n
sagrac i ó n . La ley ordena acerca del primogénito: «Cede
rás a Yahveh todo ser que sea el primero en salir del seno
materno, así como el primogénito de los animales que ten
gas; los machos pertenecen a Yahveh» (Éx 13,12). Esta
90
ñana: ¿Qué significa esto?, le dirás: Con su poderosa
mano nos sacó Yahveh de Egipto, de la casa de la ser
vidumbre. Como el faraón se obstinaba en no dejarnos
salir , Yahveh mató a todos los primogénitos de la tierra
de Egipto, desde los primogénitos de los hombres hasta
los primogénitos de los animales; por eso yo sacrifico a
Yahveh todo primogénito de los animales y redimo todo
primogénito de mis hijos» (Éx 13,14s). Los animales de
bían ofrecerse en sacrificio; el hijo primogénito varón era
rescatado. El precio del rescate era de cinco siclos
2 3
. Este
precio podía pagarse en todo el país a cualquier sacerdote.
María hizo la oferta prescrita para la purificación. Ésta
consistía en un cordero de un año en holocausto y un pi
chón o una tórtola como sacrificio expiatorio. Los que no
disponían de medios para ofrecer una cabeza de ganado
menor, ofrecerían un par de tórtolas o dos pichones, uno
en holacausto y otro como sacrificio expiatorio
2 i
. María
hizo la oblación de los pobres. Dios había mirado a su
humilde esclava. María, José y Jesús contaban entre los
pobres . . .
En el Evangelio no se dice expresamente que Jesús fue
rescatado con la suma prevista. Fue llevado al templo
para ser
p resen tad o .
Mediante la presentación es consa
grado a Dios y declarado posesión suya. Ana, madre de
Samuel, llevó al templo el niño que había concebido, aun
que era estéril, y lo consagró al servicio de Dios. Dijo:
23 .
I"Júm 3,47; 18,16. El sido es una moneda judía qu e recibió su nombre
del sistema de pesos. Según el sistema monetar io fenicio , que fue introducido
en Israe l probableme nte en tiempos de Salomón, un siclo de plata pesaba 1/15
del siclo de oro (109g/15); esta moneda servía de norma para las contr ibu
ciones que se pagaban al santuar io (cf . Éx 30,13) .
24. Cf. Lev . 12,6-8.
91
«Quiero yo dárselo a Yahveh, para que todos los días de
su vida esté consagrado a Yahveh» (ISam 1,28). Samuel
era un hombre consagrado a Dios, Juan Bautista estaba
vación mesiánica. Simeón es profeta. Dios le ha dado el
Espíritu Santo, y así su palabra es revelación divina. Si
meón tiene esta ventaja respecto a los demás profetas:
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 47/190
consagrado a Dios, por lo cual no bebía nada inebriante.
Jesús está todavía más consagrado a Dios. Es santo, por
que n ació de la- virgen por la virtud del E spíritu Santo
(1,35). Es siempre el Santo de Dios, enteramente consa
grado a Dios, entregado al servicio de Dios. La presenta
ción en el templo pone de manifiesto lo que hasta enton
ces estaba oculto acerca de él. . .
c )
Testimonio del profeta (2,25-35).
25
Viv ía en tonces en Jerusa lén un hombre l lamado Si
m eó n;
que era hombre honrado y piadoso , que esperaba
e l consue lo de Israe l; e l Espír i tu Santo res idía en é l;
2 6
y
le había s ido reve lado por e l Espír i tu Santo que no mor i
r ía s in ver antes a l ung ido de l Señor .
Como los pastores en Belén, instruidos por el ángel
de Dios, publican la grandeza del niño recién nacido, así
también en el templo dos figuras de profetas, Simeón y
Ana, iluminados por el Espíritu Santo, dan testimonio del
significado salvífico de este niño. En Simeón produjo abun
dantes frutos la piedad veterotestamentaria. Simeón era
fiel a la ley y temeroso de Dios. La ley y la sabiduría, cuyo
principio es el temor de Dios, habían dado la impronta a
su conducta. Él aguarda el consuelo de Israel, la salud
mesiánica, y a aquel que la ha de traer. Dios anuncia para
el futuro: «Cantad, cielos; tierra, salta de gozo; montes,
que resuenen vuestros cánticos, porque ha consolado Yah
veh a su pueblo, ha tenido compasión de sus males»
(Is 49,13). Dios consolará a su pueblo consumando la sal-
92
antes de morir verá todavía al Ungido del Señor, al Me
sías. Los otros profetas lo anuncian para un futuro remo
to , él goza ya de su presencia.
27
Mov ido, pues, por el Es píritu, fue al templo, y cuan
do entraban los padres con e l n iño Jesús para cumplir la
dispos ic ión de la ley con respec to a é l ,
28
Simeón lo tomó
en sus brazos y bendijo a Dios .
Simeón,
mov ido y gu iado por e l Espír i tu ,
fue al tem
plo en el momento en que era introducido Jesús. Mientras
se cumple con la ley antigua, viene Simeón a conocer al
Mesías, y los padres reciben la revelación profética acer
ca del niño. El templo y la ley, el culto y la revelación de
te antigua alianza apuntan hacia el Mesías y conducen a él.
Allí está Simeón, iluminado por el Espíritu y penetra
do de fe;
toma a l n iño en sus brazos y bendice a Dios .
Es
la imagen del que ha recibido la salud. Simeón acoge al
niño como se acoge a un huésped amigo, con todo res
peto y amor. Así también deben ser acogidos los enviados
de Dios. En los apóstoles viene Jesús mismo, en su pala
bra está él presente (Mt 10,40). El comienzo de tal aco
gida respetuosa y amante es la fe, y el fin es la alabanza
de Dios, la bendición de aquel que ha dado toda ben
dición.
Y dijo:
29
Ahora, Señor , según tu promesa
puedes de jar ir se en paz a tu s iervo;
30
porque v ieron mis o jos tu sa lvac ión ,
31
la que preparas te a la v is ta de todos los pueblos:
93
-
i2
l uz p ara i l um i nar l a s na c i ones
y gloría de tu pueblo I srael .
i l um i nar l a s nac i ones . Ahora se cumple lo que se había
preanunciado: «Levántate y resplandece, que ya se alza
tu luz, y la gloria de Yahveh alborea para ti , mientras
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 48/190
La alabanza del profeta es el eco que responde a la
revelación acerca del niño que tiene el anciano en sus
brazos. Su cántico, el canto vespertino de su vida, está
sostenido por las palabras y el espíritu del libro de
Isa ías
2 3
. Los hombres iluminados por el espíritu saben
interpretar rectamente la Escritura y juzgar acerca de los
acontecimientos salvíficos.
Dios es Señor, e l hombre es s iervo. La vida es una
dura servidumbre. Quizá hubo de soportar Simeón cosas
duras por razón de sus esperanzas mesiánicas. La muerte
acabará ahora con esta relación de servidumbre. Se ha
realizado el anhelo de una vida. Le es dado ver con los
ojos del cuerpo al Salvador y Redentor, sin tener que con
tentarse con reconocerlo de lejos en las visiones proféticas.
«Dichosos los ojos que ven lo que estáis viendo» (10,23).
Puede partir de la vida en paz, con el corazón satisfecho,
agraciado con la salvación que trae Jesús. Su vida es una
vida l lena , porque ha visto a Jesús. . .
Jesús es el Mesías enviado por Dios para la salvación.
Es lo que dice su nombre: Salvador. En él ha preparado
Dios la salvación a la vista de todos los pueblos. Ahora
se cumplen las palabras de Isaías: «Yahveh alza su santo'
brazo a los ojos de todos los pueblos, y los extremos con
fines de la tierra ven la salvación de nuestro Dios» (Is
52,10). Con esto no se dice todavía que todos los pueblos
participen en la salvación. Pero cuando el Señor muestre
la salvación a la vista de todos los pueblos, ¿qué sucede
rá entonces?
El niño que lleva Simeón en b razos e s una l uz p ara
25 . Cf . acerca del v . 30: Is 40, 5; 52,10; acerca del v . 32: Is 42,6;
46 , 13;
49,6 .
94
está cubierta de sombras la tierra y los pueblos yacen en
tinieblas. Sobre ti viene la aurora de Yahveh y en ti se
manifiesta su gloria. Las gentes andarán a tu luz, y los
reyes, a la claridad de tu aurora» (Is 60, 1-3). «Yo te
hago luz de las gentes para llevar mi salvación hasta los
confines de la tierra» (Is 49,6; cf. 42,6). En Israel alborea
la luz que es Jesús, pero más allá de Israel ilumina tam
bién a los pueblos gentiles. Atraídos por esta luz acuden
las naciones al pueblo de Dios iluminado, en el que habi
ta el Mesías.
Era también inevitable que Israel recibiera gloria por
Jesús.
De él dimana por Jesús el resplandor de Dios y los
pueblos glorifican a Israel. Lo que ya se había insinuado
en el cántico de María y en el cántico de los ángeles, lo
publica ahora el anciano profeta en toda su amplitud,
apoyándose en la predicción de Isaías: Dios otorga en
Jesús la salud al mundo entero. «Todos han de ver la sal
vación de Dios» (3,6). «Sabed pues, que a los gentiles ha
sido ya transferida esta salvación de Dios, y ellos la es
cucharán» (Act 28,28).
33
Su padre y su madre estaban maravi l lados de las
cosas que se decían de é l .
También María y José , los más próximos a Jesús en
tre todos los hombres, tienen necesidad de la palabra re
veladora para poder comprender lo que Dios ha hecho en
Jesús para los hombres, «el Evangelio de la insondable ri
queza de Cristo» (Ef 3,8). Por mucho que sea lo que se
perciba de esta riqueza, todavía es más lo que se sustrae
a la comprensión.
95
También los padres de Jesús se m arav i l l an y s e a som
bran. Sin embargo, no están en el atrio de la fe, sino que
creen. Su fe descubre y reconoce las profundidades de la
erigido por Dios. Sólo el que se decide por Jesús pertenece
verdaderamente a l pueblo de Dios.
Jesús es signo, señal, porque sitúa al hombre ante la
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 49/190
sabiduría y del amor divinos. Se maravillan, penetrados
de respeto y reverencia. De las profundidades de su cora
zón emocionado brota alabanza a Dios y vida religiosa.
34
Simeón los bendijo; lu ego di jo a Ma ría, su m adre:
Mira: éste está puesto para caída y resurgimiento de mu
chos e n I srael , y para ser ial que se rá objeto de con tradic
c ión,
35
y a t i una espada te atravesará e l a lma, para que
q ued en p a ten te s l o s p ensam i en tos d e m uch os corazones .
María y José llevaron bendición a Simeón por medio
del niño. «Bendito Dios, Padre de nuestro Señor Jesu
cristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en
los cielos, en Cristo» (Ef 1,3). El anciano profeta bendice,
en cambio, a los padres .
Jesús es una f i gura en q ue s e c i f ra l a d ec i s i ó n , la di
visión de los campos. «Él será piedra de tropiezo para las
dos casas de Israel, lazo y red para los habitantes de Je-
rusalén. Y muchos de ellos tropezarán, caerán y serán
quebrantados, y se enredarán en el lazo y quedarán co
gidos» (Is 8,14s). Pero también se aplica a Jesús: «Yo
he puesto en Sión por fundamento una piedra , piedra pro
bada , piedra angular , de precio, sólidamente asentada . El
que en ella se apoye, no titubeará» (Is 28,16). Para esto
destinó Dios a Jesús: para que todo Israel tome en él su
decisión. El que es uno con él, se ve levantado, salvado;
en cambio, el que está en contradicción con él, cae en la
perdición. No por ser Israel el pueblo elegido de Dios re
cibe la salud y logra la salvación, sino porque toma su
decisión optando por Jesús. Lo que salva en el juicio no
es la pertenencia a Israel, sino la decisión por el signo
96
decisión. Es objeto de contradicción. La entera historia
de la revelación está llena de contradicción. San Pablo lo
expresa con la frase profética: «Todo el día estuve con
las manos extendidas hacia un pueblo indócil y rebelde»
(Rom 10-21; cf. Is 65,2). San Esteban, después de com
pendiar la historia de la salud, saca esta conclusión:
«¡Gentes de dura cerviz e incircuncisos de corazón y de
oídos Siempre estáis resistiendo al Espíritu Santo. Com o
vuestros padres, igual vosotros» (Act 7,51). Toda contra
dicción contra Dios se recoge en la contradicción contra
Jesús.
María, madre de Jesús, está incorporada a la suerte de
su Hijo. Y a ti... Simeón se dirige a ella. El oráculo pro
fetice según el cual Jesús es una señal que será objeto
de contradicción, se dirige en primer lugar a María. La
contradicción de que será objeto Jesús, le afectará tam
bién a ella. U na e sp ad a t e a t ravesará e l a l m a. Por los ata
ques contra Jesús, ella misma sentirá dolor en el alma.
María es la madre dolorosa que está en pie junto al Cru
cificado. Todavía no se habla de la cruz, pero ésta es la
última consecuencia de la contradicción.
La contradicción de que es objeto Jesús y el dolor que
experimenta María tiene una finalidad fijada por Dios:
para que queden p a ten te s l o s p ensam i en tos d e m uch os
corazones . La decisión que se toma ante la señal que es
Jesús, descubre las profundidades ocultas de los senti
mientos humanos. Por Jesús, que está l igado con María ,
se formula un juicio contra la humanidad. «Y ésta es la
condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres
amaron más las tinieblas que la luz, porque las obras de
ellos eran malas» (Jn 3,19). El Dios encarnado es señal
97
NT, Le I, 7
que sería objeto de contradicción, pero aún lo será más
el Crucificado. María, la madre que lo engendró como
hombre sujeto al sufrimiento, sufre con él de la con
cidad. Los nombres no carecen de significado. Lo que
significan estos nombres emana de las personas y de sus
palabras y lo sumerge todo en el resplandor de la ale
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 50/190
tradicción. La unión con ella es la señal, objeto de contra
dicción; el escándalo es la humanidad de Jesús
2 8
.
María y Jesús no se deben separar. Esta inseparabili
dad continúa en la Iglesia y en Jesús. Ambos juntos son
la señal de la decisión, de la manifestación del estado inte
rior del hombre, de si uno es hombre de obediencia o de
desobediencia, hombre de contradicción o de entrega.
d) Testimon io de la profetisa (2,36-38).
36
También estaba a l l í una profeti sa, Ana, h i ja de
Fanuel , de la tr ibu de Aser. Ésta era ya de edad muy avan
zada. Casada desde jovenci ta, había v iv ido con su marido
s i e t e añ os ;
37
y era una v i ud a q ue l l egab a y a a l o s och en
ta y cuatro. No se apartaba del templo, s irv iendo a Dios
noch e y d ía con ay unos y orac i ones .
Al profeta se añade la profet i sa. Israel tuvo siempre
también mujeres dotadas de espíritu. La teología rabínica
cuenta sie te de ellas " . Está anunciado que en los últi
mos tiempos profetizarán los hijos y las hijas de Is
rael. «Aun sobre vuestros siervos y siervas derramaré mi
espíritu en aquellos días, y hablarán proféticamente» (Jn
3,2; Act 2,18). A la grave palabra del juicio, de la contra
dicción y de la espada siguen palabras de consolación y
de aliento. El nombre de la profetisa y los de sus antepa
sados significan salvación y bendición. Ana quiere decir:
Dios se ha compadecido; Fanuel, Dios es luz; Aser, feli-
26 .
Cf . Le 4 ,22; 7 ,23; 23,35.
2 7 .
BlLLERBECK II , p . 140 .
98
gría, de la gracia y del favor de Dios. El tiempo mesiá-
nico es un tiempo de profusión de luz.
An a está, como Simeón, formada por la piedad vetero-
testamentaria. Su avanzada ancianidad demuestra la com
placencia de Dios que reposa en ella; en el momento del
encuentro con Jesús tenía Ana más de cien años. Su vida
er a ord enad a y cas ta . Había casado todavía jovencita, su
matrimonio duró siete años, y su casta viudez doce veces
m á s :
ochenta y cuatro años en total
2 8
. Su vida estaba de
dicada a la oración, a las visitas al templo (asistencia al
culto) y al ayuno, noche y día. Vivía completamente para
Dios,
en la presencia de Dios. Ana es presentada como
modelo luminoso de las viudas cristianas. «La viuda de
verdad, la que está desamparada, tiene su esperanza pues
ta en Dios y se dedica a las súplicas
y
oraciones, día y
noche» (ITim 5,5) .
38
P resen tá nd ose en aq ue l m i sm o m om ento , g l or i fi cab a
a D i os , y h ab l ab a d e l n i ñ o a tod os ¡os que e sp erab an l a
l iberación de Jerusalén.
Ana es t e s t i go d e l a gran h ora d e grac i a del templo.
Con la luz del Espíritu Santo reconoce al Mesías en el
niño que llevaba María al templo. Glorificó a Dios, como
alternando en un responsorio con Simeón. Como había
reconocido la venida del Mesías y quedó llena de gozo, se
convirtió en apóstol. No cesaba de hablar de él a todos
los que esperaban al Redentor. Su mensaje halla límites
en la mayor o menor disposición para aceptarlo. La pala-
28 . Cf . Jdt 8 ,4ss; 16,22s.
99
bra de la revelación debe aceptarse, como se acoge a un
huésped . . .
Jesús es la l iberación de Jerusalén. Con la aparición
e ) Regreso a Nazaret (2,39).
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 51/190
de Jesús en el templo se inicia la liberación de todos los
enemigos (1,68.71): mediante la gracia de Dios que per
dona. Jesús mismo es la liberación, la redención (24,21).
En él está presente la salvación escatológica.
La historia de la infancia ha llegado a su punto cul
minante. En el templo de Jerusalén se revelan dos cosas:
la contradicción contra Jesús y la aceptación creyente, con
denación y salvación, caída y resurgimiento. Se cumple lo
que había predicho Malaquías: «En seguida vendrá a su
templo el Señor a quien buscáis, y el ángel de la alianza
que deseáis. Ved que viene ya» (Mal 3,1). Este día es día
de juicio: «¿Y quién podrá soportar el día de su venida?
¿Quién podrá mantenerse firme cuando aparezca? Porque
será como fuego de fundidor y como lejía de batanero»
(Mal 3,2). El día es también día de salvación. «Entonces
agradará a Yahveh el sacrificio de Judá y de Jerusalén,
como en los días pasados y como en los años antiguos»
(Mal 3,4). De Jerusalén, donde se erige en el templo la
señal, irradia la luz para la iluminación de los gentiles, se
pone de manifiesto la gloria de Israel. Esto sucede ahora
que Jesús es llevado al templo, esto sucederá todavía más
cuando sea «elevado» en Jerusalén, es decir , cuando sea
exaltado a la gloria. Entonces será reunido el nuevo pue
blo de Dios, y sus mensajeros partirán de Jerusalén al
mundo a fin de reunir a los pueblos en torno a la señal
de Cristo.
100
39
Y d esp ué s d e cum p l ir lo tod o según l o q ue m and ab a
la ley del Señor, se volv ieron a Gal i lea, a su c iudad de
Nazaret.
Jesús fue manifestado en Jerusalén a la sazón en que
cumplía obedientemente con la ley. «Nacido bajo la ley»
(Gal 4,4), Dios lo glorificó por los profetas. La obedien
cia lo exaltará y lo glorificará de tal modo que el univer
so confiese que Jesucristo es Señor (Flp 2,11).
Pasada la gran hora de Jerusalén, es llevado Jesús de
nuevo a Galilea, a su ciudad. De la gloria de Dios vuelve
otra vez a la ciudad que había pasado sin pena ni gloria
por la historia de Israel. Nazaret era su ciudad, la ciudad
de María y de José. Jesús sigue a su madre, y ésta a José,
su esposo. Una vez más está Jesús bajo la obediencia.
«Nacido de mujer» (Gal 4.4). su vida es un despojarse de
la gloria de Dios mediante la vida de obediencia.
40
El n iño c recía y se robustecía, l l enándo se de sa bi
duría, y la gracia de Dios res idía en é l .
El hombre completo necesita fuerzas corporales y es
pir i tuales ,
la sabiduría y la gracia de Dios. Pablo desea
a los Tesalonicenses: «Vuestro espíritu, vuestra alma y
vuestro cuerpo sea custodiado irreprochablemente para
la parusía de nuestro Señor Jesucristo» ClTes 5,23). Jesús
iba creciendo en fuerzas físicas y se robustecía en el espí
ritu. Está colmado de sabiduría a fin de poder vivir con
forme a la voluntad de Dios.
La dinámica del crecimiento y del desarrollo mental
es también un signo en la infancia de Jesús. Sobre su vida
101
reposa la gracia, e l f avor d e D i os , que es el sol que brilla
sobre todo crecimiento, la fuerza que origina toda diná
mica. También del niño Juan se dijo que crecía corporal
42
Y cuand o cum p l i ó l o s d oces añ os , sub i eron a l a f i e s ta ,
s egún l a cos tum b re ,
43
y , terminados aquel los días , a l re
gresar e l los , e l n iño Jesús se quedó en Jerusalén, s in que
44
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 52/190
y espiritualmente (1,80), pero no se habló de sabiduría y
gracia de Dios. Jesús es más grande que Juan ya desde
la infancia.
4. E L NIÑO DE DOCE AÑOS
(2,41-52).
a ) Jesús en el templo (2,41-50).
41
I ban sus p ad res tod os l o s añ os a J erusa l é n p or l a
f iesta de pascua.
El clima religioso en que creció Jesús era el de la pie
dad veterotestamentaria. Parte importante de ésta eran
las peregrinaciones ai templo. «Tres veces cada año cele
braréis fiesta solemne en mi honor. Guarda la fiesta de
los ácimos.. . También la solemnidad de la recolección,
de las primicias de tu trabajo, de cuanto hayas sembrado
en tus campos. . . También la solemnidad del f in del año y
de la recolección, cuando hubieres recogido del campo
todos sus frutos. Tres veces en el año comparecerá todo
varón ante Yahveh, tu Dios» (Éx 23,14-17). La sagrada
familia hacía más de lo que exigía la ley. En efecto, tam
bién María hacía la peregrinación, aunque ésta no obli
gaba a las mujeres. El niño los acompañaba para irse
acostumbrando al cumplimiento de la ley
2 9
. Según la pres
cripción de los doctores de la ley, el muchacho que había
cumplido los trece años estaba obligado a cumplir con
todos los preceptos de la ley.
29 . BlLLERBECK II, p. 144 .
1 2
l o no taran sus p ad res . C reyend o e l l o s q ue e s tar ía en l a
caravana , h i c i eron una jornad a d e cam i no . Luego s e p u
s i eron a b uscar l o en tre l o s p ar i en te s y conoc i d os ;
45
pero,
com o no l o encon traron , s e vo l v i eron a J erusa l é n en b us
ca de é l .
La fiesta pascual de los ácimos duraba siete días. La
vuelta sólo se podía emprender pasado el segundo día de
la fiesta; la sagrada familia se quedó allí la semana en
tera. Al final emprendieron la vuelta María y José. Se
viajaba en una caravana. La fila no era compacta: iba
dividida en grupos de parientes y conocidos. Esta manera
de peregrinar juntos aumentaba la seguridad y daba a la
vez cierta libertad de movimientos. El niño Jesús se des
prendió de la guía y solicitud materna, con que María lo
rodeaba durante la infancia. Se quedó en Jerusalén.
Había terminado la primera jornada de viaje. Las fa
milias se reunieron. Se echó de menos a Jesús. Comenzó
la búsqueda . La decisión de Jesús es un enigma. . .
46
Y re su l tó q ue a l o s t re s d ías l o encon traron en e l
templo, sentado ante los doctores , escuchándolos y hacién
d o l e s p regun tas .
47
T od os l o s q ue l e o ían , s e q ued ab an
asom b rad os d e su ta l en to y d e sus re sp ues tas .
Los pórticos del atrio exterior del templo eran utili
zados por los doctores de la ley para dar lecciones. El
método didáctico de los rabinos era la discusión. Según
un dicho judío, se llega al conocimiento de la ley mediante
la investigación de los colegas, mediante la discusión de
los discípulos. Se pregunta y se responde, se escucha y se
103
añade algo
30
. Jesús está probablemente sentado en el
suelo en medio de los doctores. El asombro de los doc
tores de la ley confirma el conocimiento de la misma que
es algo que consterna a los padres. Jesús los sitúa cons
tantemente ante nuevos misterios, más que los otros niños.
Es que la conciencia que tiene de sí supera a la de cual
quier ser humano.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 53/190
tiene Jesús. Más tarde se le interpelará como a maestro
y por tal se le tendrá (10,25). Entonces se admirará el
pueblo de su doctrina y asegurará que enseña con autori
dad y no como los doctores de la ley (Mt 7,28s). Sus
adversarios preguntarán extrañados: «¿Cómo sabe éste
de letras, sin haber estudiado?» (Jn 7,15). Él proclama
la voluntad de Dios en forma nueva y directa; reivindica
ser el único maestro de la voluntad divina. «Uno sólo es
vuestro maestro» (Mt 23,8), a saber, Cristo. Algo de esta
vocación docente asoma ya en el templo en Jerusalén.
48
Al ver lo , se queda ron profundamen te impres iona dos;
entonces su madre l e d i jo: Pero , h i jo: ¿Por qué l o has
hecho así con nos otros? Mira que tu padre y yo , l lenos
de an gust ia , t e e s tábamos buscan do.
Las palabras de María son expresión espontánea del
dolor
y de la
angustia^durante
las largas horas de la bús
queda. María es una verdadera madre. La exposición tan
sencilla y tan natural en nada disimula los sentimientos
humanos.
Jesús ha obrado por su cuenta. María le habla como
a niño, aunque ya es un muchacho. Hasta ahora no había
hecho nada a espaldas de su padre y de su madre; por
eso lo buscan ahora con tanta aflicción. En él hay enig
mas.
¿Por qué lo has hecho así con nosotros? La relación
del niño con su padre y su madre parece ser como la de
todos los niños. Cuando el niño se va haciendo mayor, sur
gen enigmas. La seguridad de sí con que se expresa Jesús
30 . Aboth vi, 5s.
104
49
Pero
él les contestó ¿Por qué me buscabais? ¿No
sabía i s que ten ía que e s tar en l as co sas de mi Padre?
50
El los , s in embargo, no comprendieron l o que l e s había
dicho.
Las primeras
pa labras
que los Evangelios ponen en
beca de Jesús nos muestran una
profunda conciencia
de sí
mismo; son unas palabras que desligan a Jesús de toda de
pendencia humana y lo ponen por encima de toda inteli
gencia limitada, unas palabras que indican ya el rumbo de
su vida. También en esto supera Jesús a Juan. Mientras
que éste es ya hombre cuando siente su vocación (1,80),
Jesús conoce ya la suya en los umbrales de la juventud.
No sin razón se sitúa la narración entre las dos menciones
de la sabiduría de Jesús (2,40.52); Jesús tiene sabiduría
porque es Hijo de Dios. «El justo pretende tener la cien
cia de Dios y llamarse hijo del Señor» (Sab 2,13).
Jesús tiene que estar
en l as cosas de su Pa dre .
Con
esta expresión se refiere Jesús al templo. El templo está
consagrado a Dios, en él está Dios presente. Jesús llama
Padre a Dios, en su lengua materna
Abba.
Así llaman los
niños pequeños a su padre carnal. También más tarde
conservará Jesús esta designación de Dios. De esta expre
sión filial hace el fundamento de sus relaciones, y de las
de los suyos, con Dios
31
. Sobre la vida de Jesús se cierne
una necesidad que rige su actuación (4,43), que lo lleva
al sufrimiento y a la muerte y por tanto a su gloria (9,22;
17,25).
Esta necesidad tiene de ser en la voluntad de Dios
31 . Cf. Rom 8,15; Gal 4,6.
105
consignada en la Sagrada Escritura, voluntad que él sigue
incondicionalmente.
Jesús debe estar en las cosas de su Padre. Se refiere
al templo, pero no lo menciona. Con su venida, el anti
b)
De nuev o en Naza ret (2,51-52).
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 54/190
guo templo pierde su posición en la historia de la salud.
Un
nuevo templo
viene a ocupar su lugar; el templo está
allí donde se realiza la comunión de Padre e Hijo. En la
vida de Jesús ocupa Jerusalén un puesto destacado. En
Jerusalén ha puesto él la mira. Allí se cumple la volun
tad del Padre en su muerte y en su exaltación. Así se
edifica una nueva Jerusalén con un nuevo templo. «Y vi
la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que bajaba del cielo
de par te de Dios. . . y oí una gran voz que procedía del
trono, la cual decía: Aquí está la morada de Dios con los
hombres, y morará con ellos, y ellos serán su pueblo, y
Dios mismo con ellos estará» (Ap 21,2s).
Tampoco María y José
entendieron es tas pa labras .
A lo largo de la historia de la infancia recibe María reve
lación sobre su hijo por ángeles, profetas y por la Sagrada
Escritura. Las palabras que se le dirigen las combina ella
para formar una imagen cada vez más completa. Aun
después de la revelación y de la meditación quedan enig
mas.
Sólo gradualmente se levantan los velos que encu
bren los abismos del amor de Dios y de su ungido. A cada
descubrimiento sigue un nuevo enigma: El nacimiento en
el establo, su infancia, su vida con los parientes y con el
pueblo, sus f racasos, sü muerte en cruz . . . Nosotros tene
mos constantemente necesidad de la palabra revelada y de
la meditación sobre Jesús y sobre el acontecer salvífico.
Por muy familiar que se nos hiciera Jesús, aun entonces
nos quedarían obscuridades y enigmas. El acceso a Jesús
será siempre en la tierra la fe. Ahora bien, la fe no es
todavía visión.
1 6
51
Bajó c on ellos y regresó a Nazaret, y vivía sujeto
a e l los . Pero su madre conservaba todas es tas pa labras
en su corazón.
La gran vivencia había pasado; él estaba en lo que es
de su Padre; de este mundo de su comunión con el Padre
se proyecta un rayo de luz sobre sus palabras de revela
ción. Ahora comienza un nuevo descenso. Nazaret es la
ciudad a la que tiene que bajar: en la predicación, ahora
al comienzo de su actividad.. .
Es taba
sujeto
a e llos: a José y a María . Guardaba la
verdad de su filiación divina mostrándose obediente. Con
la obediencia se prepara para su glorificación después del
bautismo. «Testigos de estas cosas somos nosotros y el
Espíritu Santo que Dios ha concedido a los que le obe
decen» (Act 5,32).
Los acontecimientos de la historia de la infancia tie
nen carácter de revelación; son hechos y palabras. María
los conservaba en su corazón (cf. 2,19). Llenaban su espí
ritu y se convertían en luz de su vida. Nadie, fuera de su
madre, podía ser testigo de la historia de la infancia. Ella
era el testigo fidedigno, pues conservaba en el corazón todo
lo sucedido. Lucas menciona estos hechos porque lo in
vestigó todo comenzando desde el principio.
52
Y Jesús iba progresando en sa biduría , e s ta tura y
grac ia ante Dios y los hombres .
Lo que se dice con las palabras lo confirma también
la elección de los términos: según el texto original, Jesús
pasa de infante (2,12.16) a niño (2,17.27.40) y a muchacho
1 7
(2,43). Ahora ocupa el primer puesto el crecimiento en
sabiduría.
No sólo Dios le otorga gracia, sino también los
hombres. Jesús crece en el sentido de la comunión con
los hombres.
1 . EL BAUTISTA (3,1-20).
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 55/190
Del joven Samuel se dice que
iba crec iendo
y se hacía
grato tanto a Yahveh como a los hombres» (ISam 2,26).
Lucas habla de Jesús con palabras de la historia de Sa
muel. Con este hombre comienza la serie de los profetas:
«Y todos los profetas, desde Samuel en adelante, cuantos
hablaron, anunciaron también estos días (de Jesucristo)»
(Act 3,24; cf . 13,30). Jesús tiene que esperar hasta que
llegue la hora en la que el crecimiento alcance la meta;
entonces se presentará como profeta que superará a todos
los profetas por la sabiduría de su conocimiento de Dios.
I I I . PREPARACIÓN A LA ACTIVIDAD PÜBUCA
D E J ESÚ S
(3,1-4,13)
Una vez más se ven contrapuestos Juan y Jesús. Juan lleva
a cabo su misión (3,1-20); se muestra la preparación de Jesús para
su obra (3,21-4,13); Jesús es hijo de Dios, nuevo Adán, que opta
decididamente por la voluntad de Dios.
Aquí, como en la historia de la infancia, se muestra que Jesús
sobrepuja a Juan, pero ahora se añade algo nuevo. Juan lleva
a cabo la última preparación para el tiempo de la salud, que está
en puertas, pero él no pertenece todavía a este tiempo. Jesús
está equipado para realizar el tiempo de la salud. Juan concluye
su obra, Jesús comienza la suya. 1.a actividad de Juan se cierra
según la exposición de Lucas antes del relato del bautismo de
Jesús, con el que comienza la actividad pública de Jesús. Lucas
preferirá volver una vez más sobre lo narrado, antes que ligar
la actividad de Jesús y la de su precursor. Con Juan termina el
tiempo del preanuncio y de la promesa, y con Jesús comienza el
tiempo del cumplimiento.
108
a )
El comienzo (3,1-6).
En una hora bien determinada de la historia del mundo, en
una situación que reclama liberación, en una zona del gran impe
rio romano (3,1-2), comienza la preparación para el tiempo de
la salud por Juan (3,3-6).
1
En e l año dec imoquin to de l imperio de Tiberio César ,
s iendo Ponc io Pi lo to procurador de Judea, Heredes t e -
trarca de Galilea, su hermano Filipo tetrarca de Iturea y
de ¡a Traconí tide , y L isan ia s t e trarca de Abilene , ^duran
te e l sumo sacerdoc io de Anas y de Caifas . . .
La historia de la salvación transcurre dentro del ámbito
y del acontecer de este mundo, pero sin identificarse con
lo que nosotros llamamos historia del mundo o historia uni
versal. La aparición y actuación de Juan es el preludio
inmediato del acontecimiento salvífico que se inicia con
la venida del Mesías. Las indicaciones cronológicas se
hacen en el
es t i lo de la Bibl ia .
Ahora comienza historia
sagrada. Análogamente indica Oseas el tiempo en que re
cibió la palabra del Señor: «Palabra de Yahveh dirigida
a Oseas, hijo de Beri, en tiempos de Ozías.. .» (Os 1,1).
El tiempo de la salvación comienza el año 15 del rei
nado del emperador romano Tiberio (14-37 d.C) , es decir ,
el año 28/29 de nuestra era. Entonces era Poncio Pilato
procurador de Judea (26-36); Herodes Antipas, te trarca de
Galilea (4 a. C. - 39 d. C ); su herm ano Filipo, tetrarca
de Iturea y de la Traconítide, que están situadas al norte
y al este del lago de Genesaret (4 a.C. - 34 d. C ). Lisania s
era tetrarca de Abilene al noroeste de Damasco, en el
Antil íbano (Lisanias murió entre e l 28 y e l 37 d.C) . Las
109
indicaciones de Lucas se han visto confirmadas por ins
cripciones y por historiadores antiguos. Además de las
autoridades civiles se indican también las religiosas: el
sumo sacerdote en funciones José Caifas (18-36 d.C),
norte del lago de Genesaret. El imperio romano se había
anexionado más o menos r igurosamente estas regiones.
Por su parte, Jesús no traspasará sino muy raras veces
los límites de Palestina, pero su mensaje conquistará toda
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 56/190
junto al que gozaba de gran prestigio su suegro Anas, que
le había precedido en el cargo.
Si Lucas hubiese querido únicamente fijar el tiempo,
un dato hubiera sido más que suficiente. El primero, que
es e l más claro y más determinado. ¿Por qué , pues, añade
los otros? Con ellos se trata de presentar las condiciones
políticas y religiosas, el
ambiente e spir i tua l
en que se cum
plen las promesas de Dios. Palestina está bajo dominio
extranjero. El soberano del país es el emperador Tiberio,
del que los histor iadores romanos trazaron —con razón
o sin ella— el retrato de un soberano desconfiado, cruel,
amigo del placer
32
. La par te meridional del país , Judea
y Samaría , es desde el año 6 a .C. provincia romana. El
gobierno del procurador Poncio Pilato era, según el pare
cer de los judíos, inflexible y sin consideraciones; se le
achaca venalidad, violencia, rapiña, malos tratos, vejacio
nes, continu adas ejecuciones sin sentencia judicial y una
crueldad sin límites e intolerable
3 3
. Los soberanos de la
casa de Herodes eran idumeos, soberanos por la gracia
de Roma. Los dos sumos sacerdotes se dieron maña para
conservar largos años su posición mediante ardides di
plomáticos. Se comprende que se suspire por el rey de
la casa de David. También Zacarías aguardaba la libera
ción de las manos de todos los que nos odian (1,71).
E l
ámbito geográfico
que delimita Lucas con sus in
dicaciones es el campo de acción de Jesús. En éste se des
arrolla la historia sagrada: en Galilea y en Judea, al
32 . Ct. T Á C I T O ,
Anales
v i , 51 (BARRET T, n r . 7 ) .
33. FLAVIO JOSEFO, Bel lum lut luicum n , 169-177 (BARKETT, n r . 114) ;
FILÓ N , Le g . ad G a i um 299-305.
110
la gran extensión sujeta a la soberanía del emperador
romano Tiberio. Los Hechos de los apóstoles descr iben
la carrera victoriosa de la palabra de Dios que había co
menzado en Palestina.
2 b
. .. la pa labra de Dio s fue dirigida a Juan, hijo de
Zacarías , que es taba en e l des ier to .
3
Y él fue por toda la
reg ión de l Jordán, predicando un baut ismo de convers ión
para perdón de los pecados .
La
pa labra de Dios fue dir ig ida
a Juan, como sucedía
a los profetas del Antiguo Testamento. El Bautista rea
nuda la acción de los grandes enviados de Dios del tiempo
anterior y enlaza con la tradición profética, no con la
literatura apocalíptica soñadora y fantástica, con la sabi
duría humanística, con los rigorismos legalistas farisaicos,
con tradiciones teológicas rabínicas ni con esperanzas de
reinados propias de ambientes zelotas. La palabra de Dios
lo llama, le confiere su ministerio y es la fuerza que do
mina su vida . «Llegóme la palabra de Yahveh, que decía:
Antes que te formara en las entrañas maternas te cono
cía.. . irás a donde yo te envíe y dirás lo que yo te man
de . . . Mira que pongo en tu boca mis palabras . Hoy te doy
sobre pueblos y reinos poder de destruir , arrancar, arrui
nar y asolar; de levantar, edificar y plantar» (Jer
1,4-10).
E l
campo de acc ión
del Bautista es toda la zona del
Jordán, la región de la depresión meridional del Jordán.
En esta región es predicador itinerante. Su campo de
acción es reducido; Jesús, en cambio, actuará en toda la
región de Palestina. Los apóstoles llevarán más allá de
111
este espacio, al mundo entero, la palabra de Dios. El ám
bito de la palabra crece; ésta tiende a llenarlo todo.. .
Juan es pregonero; va por delante de su Señor y anun
cia lo que va a suceder. El mensaje que él anuncia es el
de su pueblo, que retorna en caravana de Babilonia a la
patria. Una voz se levanta en el desierto por el que avan
za la comitiva e invita a preparar un camino real. Esta
palabra dirigida a los que regresan a la patria se entiende
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 57/190
bautismo de conversión y perdón de los pecados. La c o n
vers ión es el prerrequisito; con ella se vuelve el hombre
hacia Dios, reconoce su realidad y su voluntad, se aparta
de sus pecados y los reprueba; en esto consiste esencial
mente la conversión y el arrepentimiento.
E l b au t i sm o, la inmersión en el Jordán, acompañada
de una confesión de los pecados (Me 1,5), sellará esta
voluntad de conversión y al mismo tiempo otorgará el
perdón de los pecados por Dios. Al que se convierte le
da la certeza de que su conversión es valedera y es reco
nocida por Dios y consiguientemente tiene capacidad para
salvar del juicio venidero. El que ha recibido el bautismo
se halla pertrechado y preparado para formar parte del
nuevo pueblo de Dios de los últimos tiempos. Desde lue
go , una cosa se requiere: que la conversión sea sincera
y vaya acompañada de un cambió de vida . Lo que así
anuncia Juan es algo nuevo y grande. Va a iniciarse lo que
tanto se había esperado: Dios cumple sus promesas.
4
Como está escri to en e l l ibro de los oráculos del pro
feta I saías: Voz del que c lama en e l des ierto: Preparad e l
cam i no d e l S eñ or , h aced rec tas su s s end as .
5
T od o b a
rranco será re l lenado, y todo montículo y col ina serán
rebajados; los caminos tortuosos se enderezarán y los
e scab rosos s e n i ve l ará n .
6
P orq ue tod a c arne h a d e ver
l a sa l vac i ó n d e D i os .
El profeta Isaías ve en una visión una espléndida pro
cesión a través del desierto. Dios, e l S eñ or , va en cab eza
112
ahora en forma nueva. La voz del que clama en el desierto
es Juan. El Señor —el Mesías— viene , y con él su pue
blo. La preparación del camino se entiende en sentido re-
ligiosomoral; se llama a penitencia, conversión y retorno
a Dios, bautismo de penitencia para el perdón de los pe
cados. Obra verdaderamente gigantesca: trazar un camino
por el desierto; transformar los corazones.
T od a carne h a d e ver l a sa l vac i ó n d e D i os . El tiempo
de la salvación está alboreando. Dios lo prepara para «toda
carne», para todos los hombres. Va a cumplirse e l anun
cio profético de Simeón: Una «luz para iluminar las na
ciones» (2,32). El predicador de penitencia y conversión,
el precursor Juan tiene una misión para todos los tiempos.
Hay que preparar con penitencia un camino a la salvación
del Señor.
b) Predicación del Bautista (3,7-17).
Juan predica. Como predicador de penitencia exhorta a la
conversión (3,7-9); como predicador moral invita apremiantemente
a la renovación de la vida (3,10-14), y como profeta anuncia al
que va a venir (3,15-17). Su mensaje echa mano de los temas de
los profetas: la conversión, la amenaza con la cóler'a de Dios, la
urgencia de hacer obras y de llevar frutos de penitencia, la exhor
tación al comportamiento social, la destrucción de la segundad
de la salvación de Israel como pueblo y como nación, el anun
cio del Mesías.
NT. Le I, 8
113
Predicación de penitencia (3.7-9).
7
Decía , pues , a las muchedumbres que a cudían para
pared fuera mordido
por
la serpiente» (Am 5,19). Lo
único que salva es la reforma de la vida, la nueva vida
con nuevas obras .
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 58/190
que las baut izara: Raza de v íboras , ¿quién os ha enseñado
a hu ir de l inminente cas t igo?
8a
A ver s i dais frutos pro
pios de convers ión .
Al hombre se le hace difícil cambiar verdaderamente
de vida. Para poder evitarlo recurre a ritos y ceremonias
sagradas, se pone bajo la protección de una comunidad
que pasa por santa, difiriendo la conversión para más
tarde. A todas estas posibilidades cierra Juan la puerta.
¿Qué quedará , pues?
El recurso a ritos sagrados. Las gentes se dirigen en
masa al desierto, quieren bautizarse, se dejan sumergir
en las aguas, pero la cosa no pasa de ahí . Nada de pen
sar en cambiar de vida. Juan los increpa: ¡Raza de víboras,
engendro del demonio Su vida pon e al descubier to que
hacen las obras del demonio, el pecado; como le imitan,
son sus hijos, su engendro.
Cosa buena es el bautismo, pero debe inducir a refor
mar la vida. Juan formula normas conocidas, fáciles de
entender, pero difíciles de reducir a la práctica: «No
puede pasar por justo el que encubre la obstinación de
su vida y, siendo hijo de las tinieblas, (sólo) mira hacia
el camino de la luz», como se dice en Qumrán
34
. «La con
versión y las buenas obras son como un escudo que protege
de los castigos», dicen los rabinos
3 5
.
Nadie puede escapar a la sentencia de condenación.
«Es como quien huyendo del león diera con el oso; como
quien al refugiarse en casa y poner su mano sobre la
3 4 . 1 Q S n i , 3 .
35 .
Aboth iv , 11 .
114
Sb
No comenc éis a dec ir en vues tro in terior: Tenemos
por padre a Abraham. Os asegu ro que poderoso e s Dios
para sacar de es tas piedras hijos de Abraham.
Refug iarse en la segur idad nac iona l de la sa lvac ión ,
«en la santa comunidad de los e legidos». . . El judío rehuye
la reforma personal de la vida, fiándose de su descen
dencia de Abraham. Dice: «Un circunciso no va al in
fierno.» Aunque sea pecador, incrédulo y rebelde contra
los mandamientos de Dios, se le dará el reino eterno, por
que t iene por padre a Abraham. Al f in y a l cabo, Dios
no puede dejar de cumplir sus promesas a Abraham y a
su descendencia.. . Cierto que Dios es fiel a sus promesas,
pero ahora surge una nueva filiación de Abraham, que no
depende de la comunidad de sangre, sino que es suscitada
y creada por Dios. Dios puede sacar de las piedras del
desierto hijos de Abraham. Éstos tendrán los sentimien
tos que se esperan de los hijos de Abraham, éstos harán
las obras que quiere Dios.
9
Ya es tá apl icada e l hacha a la ra íz de los árboles .
Y todo árbol que no da fru to bueno será cor tado y arro
jado a l fuego .
¡La convers ión para más tarde
El t iempo apremia . La
conversión no sufre dilación. El hacha ya está aplicada a
la raíz del árbol, que va a ser cortado. De un momento
a otro se levanta en el aire, se deja caer de golpe y . . .el
árbol se derrumba. Juan anuncia que ya son inminentes
la venida del Señor y el juicio.
115
El juicio es
t iempo de recolección.
En la recolección
se recogen los frutos. El tiempo de recolección es tiempo
de decisión. El árbol que no da frutos buenos se corta y
se echa al fuego. El próximo juicio de Dios recogerá los
Los p ub l í canos * encarnan codicia y avidez de poseer,
falta de honradez, traición al propio pueblo, estando como
estaban con frecuencia al servicio de un régimen extran
jero. Tampoco ellos están excluidos del camino de la
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 59/190
frutos de la vida. El que no pueda aportar nada, incu
rrirá en sentencia de condenación, caerá en el fuego del
infierno.
Predicación a las diferentes clases sociales (3,10-14).
10
E n tonce s l a gen te l e p regun tab a: P ues ¿ q ué t enem os
q ue h acer?
u
É l l e s r e sp ond ía: E l q ue t enga d os tún i cas
d é una a l q ue no l a t i ene ; y e l q ue t enga a l i m en tos , h aga
otro tanto.
La verdadera conversión mueve siempre a hacer esta
pregunta:
P ues ¿ q ué t enem os q ue h acer?
La predicación
de san Pedro tocó los corazones de los oyentes, que de
cían: «¿Qué tenemos que hacer, hermanos?» (Act 2,37).
La pregunta por las obras es la que pone el sello al valor
de la conversión.
Las obras en que se manifiesta la reforma de vida y
la verdad de la conversión son las obras de s i ncero am or
al prój imo, la partición con los demás de lo que se tiene.
«El que tiene dos túnicas dé una al que no la tiene.. .»
Juan no exige que se dé la única que se tiene. No exige
a las multitudes que realicen sublimes actos de heroísmo,
sino misericordia y amor al prójimo con obras, sentimientos
sociales.
12
L l egaron tam bi é n uno s p ub l i cónos p ara b au t izarse y
le pregun taron: Maes tro, ¿qué tene mos que hacer?
n
Él
les contestó: No ex i jáis más de lo que tené is señalado.
116
salvación, no están borrados. Toman en serio la invitación
a la penitencia y están dispuestos a cambiar de vida. Con
esto se ha logrado lo principal.
Juan no les exige que renuncien a la profesión de pu
blícanos. Deben renunciar a
enriquec erse frau dulentame nte.
El derecho les permite exigir un determinado suplemento
sobre el tipo de impuestos prescrito por el Estado. Por
eso les dice Juan: «No exijáis más de lo que tenéis seña
lado.» Jesús procederá más tarde de manera análoga con
el publicano Zaqueo. A pesar de las murmuraciones de
los judíos entró en casa de éste rico jefe de publica-
nos. Zaqueo mismo quiere restituir lo que ha adquirido
con fraude y quiere repartir sus bienes con los pobres. Jesús
le dice: «Hoy ha llegado la salvación a esta casa; pues
también éste es hijo de Abraham» (19.1-10).
14
T am b ié n unos so l d ad os l e pregun taron: Y noso tros ,
¿qué tenemos que hacer? Y les respondió: No hagáis ex
tor s i ó n a nad i e n i l o d enunc i é i s f a l sam ente ; s i no con ten
taos con vues t ra p aga .
Los soldados son probablemente mercenarios del ejér
cito de Herodes Antipas. A los judíos les estaba prohibido
el servicio militar. Por eso estos mercenarios serían gen
tiles.
La eficacia de la predicación del Precursor va más
allá de los límites del judaismo.. . La pregunta de los
soldados presupone extrañeza. Y nosotros ¿qué. . . Pero to-
* Los publícanos o cobrado res de tributo s, pero no eran fu nciona rios del
Estado, sino simples par ticulares a quienes se cedía en arrendamiento este
servicio o empleados de éstos . Nota del traductor .
117
da estrechez se ha superado. «Toda carne ha de ver la
salvación de Dios.»
Los pecados propios de la profes ión de los soldados
son robo con violencia, extorsión con falsas denuncias,
La predicación del Bautista hace crecer en el pueblo
la expectación de la próxima venida del Mesías. Se va
extendiendo la idea de si J uan s erá e l M es ías . En ciertos
ambientes se presentaba al Bautista como el salvador en
3<i
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 60/190
abuso de la fuerza. La raíz de tal proceder está en la
codicia. Hay que dar de mano a los excesos. En lugar del
ansia de enriquecerse hay que contentarse con la paga.
A pesar de la inminencia del severo juicio, no se exige
nada extraordinario. No hay que cambiar la profesión:
ni siquiera la profesión de soldado o de publicano. Tam
bién Pablo proclama a pesar de la proximidad del tiempo
final: «Por lo dem ás, que cada uno viva según la con
dición que el Señor le asignó, cada cual como era cuando
Dios le llamó. Esto es lo que prescribo en todas las Igle
sias» (ICor 7,17). Tampoco se exigen especiales práct icas
ascét icas: no se exige entrar en la secta de Qumrán, ni
formar parte de la comunidad de los fariseos, ni adoptar
la rigurosa ascética del Bautista (Me 1,6). Juan sigue la
predicación profética: «¿Con qué me presentaré yo ante
Yahveh y me postraré ante el Dios de lo alto? ¿Vendré
a él con holocaustos, con becerros primales? ¿Se agradará
Yahveh de los miles de carneros y de las miríadas de arro
yos de aceite? ¿Daré mis primogénitos por mis prevarica
ciones, y el fruto de mis entrañas por los pecados de mi
alma? ¡Oh hom bre Bien te ha sido declara do lo que es
bueno y lo que de ti pide Yahveh: hacer justicia, amar
el bien, humillarte en la presencia de tu Dios» (Miq 6,6-8).
Proclamación mesiánica (3,15-17).
15
Comp el pueblo estaba en expectación, porque todos
p ensab an en su corazó n acerca d e J uan s i no s er ía e l
Mesías. . .
118
viado por Dios . La historia de la infancia ha puesto ya
deliberadamente a Juan y a Jesús en la debida relación
querida por Dios. Juan es grande, pero Jesús es el ma
yor , Juan es profeta y preparador del camino, pero Jesús
es el Hijo de Dios y el que reina en el trono de David
para siempre.
16
J uan d ec l aró an te tod os : Y o os b au t i zo con agua ;
pero v iene e l que es más fuerte que yo, a quien ni s iquiera
soy d i gno d e d esa tar l e l a correa d e l a s sand a l i a s ; é l o s
baut izará con Espír i tu Santo y fuego.
Jesús es e l más fuerte . Juan se reconoce indigno de
prestar a Jesús el más humilde servicio de esclavos. Los
esclavos debían soltar al amo las correas de las sandalias;
una persona libre tenía esto por indigno de su condición.
¿Quién es Juan al lado de Jesús? El gran Bautista recono
ce la grandeza de Jesús.
La fuerza de Jesús se manifiesta en su obra. Juan bau
tiza sólo con agua; Jesús, en cambio, con Espír i tu Santo y
fuego . El Mesías da el Espíritu Santo prometido para los
últimos tiempos, y lo da con la mayor profusión a los que
están prontos a convertirse; en cambio, a los que no quie
ren convertirse les aporta el fuego, el fuego del juicio.
Jesús ejecuta la sentencia de salvación o de condenación.
Juan bautiza solamente con agua. Su obra es prepara
ción para los acontecimientos escatológicos; ella misma no
es acontecimiento escatológico.
36 . Cf. Jn 1,6-8.15.19ss.
119
17
Tiene e l b ie ldo en la mano para l impiar su era y para
recoger e l t r i go en su granero; p ero l a p a ja l a q uem ará en
fuego q ue no s e ap aga .
19
Pero He rodes, e l te trarca, a quien Juan reprendía
por lo de Herodías, la mujer de su hermano, y por todas
l a s m a l d ad es q ue h ab ía com et i d o ,
20
a tod as e l l a s a ñ ad i ó
también ésta: que encerró a Juan en la cárcel .
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 61/190
Jesús es e l juez del f in de los t iempos. El labrador de
Palestina lanza con una pala contra el viento el trigo que
después de trillado está mezclado con la paja en la era.
El grano, que pesa más, cae al suelo, mientras que la
paja es llevada por el viento. Así limpia la era, separando
el trigo de la paja para recogerlo después en el granero.
La paja se quema. El Mesías viene a juzgar, separa a los
buenos y a los malos, lleva los buenos al reino de D ios y en
trega los malos al fuego inextinguible de la condenación.
Tiene ya el bieldo en la mano. Este «ahora» del tiempo final
hace que el anuncio de Juan descuelle por encima de todos
los anuncios de los profetas.
c ) Fin del Bautista (3,18-20).
lñ
C on e s ta s y o t ras ex h ortac i ones a nunc i ab a e l E van
gel io a l pueblo.
El relato de la actividad de Juan contiene sólo una
parte de ésta. Las exhortaciones de Juan son buena nueva,
Evangelio. Juan es mensajero de gozo, que anuncia la
suspirada salvación de los últimos tiempos. Por esto es
su mensaje de gozo. Lo que Jesús anuncia y trae no
es perdición, sino salvación. También la predicación de
penitencia de Juan está al servicio de la salvación, y por
esto es Evangelio, buena nueva. La historia de Juan es
comienzo del Evangelio
8 7
.
37 . Cf. Me 1,1; Act 10,36s.
12
Juan no silenció la palabra de juicio de Dios ni siquie
ra ante el poderoso señor de la región. Herodes Antipas
no observa las leyes del matrimonio, comete crímenes y
es asesino de profetas (cf. Me 6,17s).
El Bautista recapitula en su obra y en sus suerte lo
que hicieron y sufrieron los profetas, y lo sobrepasa. Está
situado en la inmediata proximidad del gran día del jui
cio y de la salvación.
Con su caut iverio queda suspendida la acción del Bau
tista. La voz que clama en el desierto enmudece en la
fortaleza de Maqueronte. La época de las predicciones y
de las promesas llega a su fin, y comienza la época de la
realización. Entre el Bautista y Jesús hay una profunda
fisura en la historia de la salvación: «La ley y los profetas
llegan hasta Juan; desde entonces se anuncia el Evange
lio del reino de Dios» (16,16). «Juan bautizó con agua,
pero vosotros seréis bautizados con Espíritu Santo» (Act
1,5; 11,16). En la Iglesia no debe enmudecer la voz de
Juan, puesto que prepara la venida de Jesús, que todavía
ha de manifestarse al fin de los tiempos.
2. PREPARACIÓ N DE JES ÚS PARA SU MISIÓ N (3,21-4,13).
a ) Bautismo de Jesús (3,21-22).
21
Mientras se bau t izaba todo e l pueblo y Jesús, ya
baut izado, estaba en oración, se abrió e l c ie lo ,
22
y e l Espí
ri tu San to descen dió sobre él en forma c orporal , como un a
121
paloma, y v ino una voz de l r íe lo: Tú eres mi hijo; hoy te
he engendrado
ss
.
El
baut ismo de Jesús
sólo se menciona de paso; se ha
ma corporal , en forma de paloma. Según Lucas, e l acon
tecimiento del Jordán es un hecho que se puede observar.
La
pa loma
desempeña gran papel en el pensamiento reli
gioso.
El Espíritu de Dios se cernía sobre las aguas cuan
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 62/190
lla en segundo término. La proclamación divina que glo
rifica a Jesús ocupa el primer plano del relato. Dios se
manifiesta después del bautismo, pero este hecho va prece
dido de una
triple humillación.
Jesús es uno del pueblo,
uno de tantos que acude a bautizarse; se ha convertido
en uno cualquiera. Jesús recibe el bautismo de conversión
y penitencia para el perdón de los pecados como uno de
tantos pecadores . Ora como oran los hombres que t ienen
necesidad de ayuda. El bautismo de penitencia y la ple
garia preparan para la recepción del Espíritu. Pedro dice:
«Convertios, y que cada uno de vosotros se bautice en el
nombre de Jesucristo para remisión de vuestros pecados,
y recibiréis el don del Espíritu Santo» (Act 2,38). El
padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo
pidan (Le 11,13). El Espíritu Santo es enviado y opera
mientras se ora.
La triple humillación va seguida de una
triple exalta
c i ó n . El cielo se abre sobre Jesús. Se espera que en el
tiempo final se abra el cielo que hasta ahora estaba ce
rrado: «¡Oh si rasgaras los cielos y bajaras, haciendo
estremecer las mo ntañas » (Is 64,1). Jesús es el Mesías.
En él viene Dios. Él mismo es el lugar de la manifestación
de Dios en la tierra, el Betel neotestamentario (cf. Jn
1,51),
donde se abrió la puerta del cielo y Dios se hizo
presente a Jacob (Gen 28,17).
El Espír i tu Santo descendió sobre Jesús .
Vino en for-
38 . En L e es doble la tradici ón del texto de la voz del cielo; 1) como
en Me y Mt: «Tú eres mi Hijo amado; en ti me he complacido»; o bien;
«Éste es mi Hijo amado, en quien me he complacido» (Mt 3 ,17; cf . Is 42,1) ;
2) v . supra, conforme a Sal 2,7. Parece ser que se ha acomodado el texto
de Le a Mt-Mc.
122
do comenzó la obra de la creación. La imagen de esta
representación la ofrecía la paloma que se posa sobre
sus crías. La voz de Dios se comparaba con el arrullo
de la paloma. Si se buscaba un símbolo del alma, elemen
to vivificante del hombre, se recurría a la imagen de la
paloma, considerada también como símbolo de la sabi
duría. De ahora en adelante, el Espíritu de Dios hace en
Jesús la obra mesiánica, que causa nueva creación, reve
lación, vida y sabiduría.
Jesús, como engendrado por e l
Espíritu,
posee el Es
píritu (1,35). Lo recibirá del Padre cuando sea elevado a
la diestra de Dios (Act 2,33), y ahora lo recibe también.
El Espíritu no se da a Jesús gradualmente, pero las dife
rentes etapas de su vida desarrollan cada vez más la pose
sión del Espíritu. Dios es quien determina este desarrollo.
La voz de Dios declara a Jesús, Hijo de Dios. Como
es engendrado por Dios, por eso es ya su Hijo (1,32.35).
Después de su resurrección se le proclama solemnemente
como tal: «Dios ha resucitado a Jesús, como ya estaba es
crito en el salmo segundo: Hijo mío eres tú; hoy te he
engendrado» (Act 13,33). La voz del cielo clama aplicando
a Jesús este mismo salmo que canta al Mesías como rey y
sacerdote. En el «hoy» de la hora de la salvación lo da
Dios a la humanidad como rey y sacerdote mesiánico.
A esta hora miraban los tiempos pasados, a ella volvemos
nosotros los ojos.
123
b) El nuevo Adán 3,23-28).
23
T en ía J e sús , a l com enzar , com o unos t re i n ta añ os y
hijo de Matat, hijo de Leví,
30
hi jo de Simeón , hi jo de
Judá, hi jo de José , h i jo de Jonam, hi jo de El iaquim,
31
hijo
de Mel tá, h i jo de Menú, hi jo de Matatá, h i jo de Natam,
hijo de David,
32
hijo de Jesé, hijo de Jobed, hi jo de Booz,
33
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 63/190
era, segú n s e creía, h i jo de José . ..
Jesús estaba equipado mesiánicamente desde lo alto,
pero también desde abajo estaba pertrechado con todo lo
que humanamente lo capacitaba para su misión. Al co
mienzo de su actividad pública tenía unos treinta años.
A los tre inta años estaba el sacerdote capacitado para el
ministerio (Núm 4,3); a esa edad fue elegido José en Egip
to para su alta misión (Gen 41,46); David fue elevado al
trono (2Sam 5,4); Ezequiel recibió la vocación profética
(Ez 1,1). Cuando comenzó Jesús su ministerio, que abarca
la realeza, el sacerdocio y el profetismo, había alcanzado la
plenitud de la edad requerida. Había pasado ya el tiem
po del crecimiento y del fortalecimiento.
Para el alto ministerio que asume Jesús se requiere un
origen legítimo y un auténtico á rb o l genea l ó g i co . Esto lo
recibe de José, su padre legal. José no es el padre natural,
sino que como tal era tenido por la opinión pública. El
misterio de la concepción virginal permanecía oculto. Dios
da a Jesús todo lo que necesita para que los hombres no
puedan hallar en él motivo justificado de escándalo.
24
. ..hijo de E li, hijo de Ma tat, hijo de
Leví,
hi jo de
Melquí , h i jo de Janay , h i jo de José ,
2S
hi jo de Matatías ,
hi jo de Amos, h i jo de Naúm, hi jo de Eslí, hi jo de Nagay,
26
hi jo de Maa t, h i jo de Matatías , h i jo de Seméin, h i jo de
Josed. hi jo de Yoda,
21
hi jo de Joan ún , h i jo de Resá, hi jo
de Zorobabel , h i jo de Salat ie l , h i jo de Nerí,
2H
hi jo de
Melquí , h i jo de Adí, h i jo de Cosam, hi jo de Elmadam , hi jo
d e E r ,
29
hi jo de Jesús, h i jo de E l iezer, h i jo de Jorim,
124
hijo de Sala, h i jo de Naasón, hi jo de Amin abad, hi jo
de Admín, hijo de Arní, hi jo de Esrom, hi jo de Farés, h i
jo de Judá,
M
hi jo de Jacob, hi jo de I saac, h i jo de Abra-
ham, hi jo de Taré , h i jo de Nacor,
35
hi jo de Seruc , h i jo de
Ragáu, hi jo de Falek , h i jo de Éber, h i jo de Sala,
36
'
hijo
de Caina m, hi jo de Arfaxad, hi jo de Sem, hi jo de No é,
h i jo d e Lam ec ,
37
hi jo de Ma tusalém, hi jo de Hen oc, h i jo
de Jéret , h i jo de Malelee l , h i jo de Cainam,
38
hi jo de
Enós, hijo de Set, hijo de Adán, hijo de Dios.
Lucas no dio la clave para la mejor inteligencia de la
tabla genealógica, como lo había hecho Mateo con su
observación de las tres series de catorce generaciones cada
una (1,16), pero él también la utiliza para formular aser
ciones soteriológicas sobre Cristo. El árbol genealógico
de Lucas no se remonta sólo hasta Abraham, como en
Mateo, sino que continúa hasta Adán y su creación por
Dios. Jesús es el Mesías de los judíos, pero también el
S a l vad or d e l m und o . Está en relación, no sólo con David
y Abraham, sino también con Adán. Por él se cumplen las
promesas hechas a Abraham y a David; en él son ben
decidos todos los pueblos. Él es el rey Mesías, cuyo reino
no tiene fin, pero también el padre y patriarca de la nue
va humanidad
:1
".
El árbol geneológico de Lucas es incompleto, como lo
es también el de Mateo. Ahora bien, ¿por qué se hizo pre
cisamente esta selección que se registra en el árbol ge
nealógico? La tabla genealógica de Lucas contiene once
3M. L 'f . R o m 5 .U -2 1 ; lC o r 1 5 .2 2 . Iv - t ' J .
125
veces siete miembros: tres veces siete van de Jesús a Zo-
robabel; tres veces siete, de Salatiel a David; dos veces
siete, de David a Isaac, y tres veces siete, de Abraham
hasta Adán. Los períodos están separados por etapas im
portantes de la historia de la salvación: la cautividad de
su plenitud. Por eso está también plenamente bajo la guía
de Dios (4,14). Lleva a cabo su peregrinación y su acción
en armonía con el Espíritu que actúa en él, y con la virtud
del mismo. El bautismo remite a la tentación y viceversa.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 64/190
Babilonia, la monarquía, la elección, la creación. Jesús
es cumplimiento y meta de la historia de nuestra salud.
Los jefes de los once grupos son: Dios, Henoc, Sala,
Abraham, Admín, David, José , Jesús, Salatie l , Matatías ,
José. Según el esquema del apocalipsis de las «doce se
manas»
40
, el tiempo final comienza con la duodécima
semana del mundo. Jesús comienza el tiempo final. Aunque
estas explicaciones puedan parecemos a nosotros un juego
ocioso, los antiguos veían expresadas en ellas verdades
profundas. A nosotros nos importa el enunciado de la
verdad no el camino por el que se llegó a él.
c ) Tentación de Jesús (4,1-13).
1
Jesús, l l eno del Espír i tu Santo, reg resó del Jordán y ,
en e l Espír i tu, era guia do por e l des ierto ^durante cua
renta días , s iendo tentado por e l d iablo.
Jesús está lleno del Espíritu. Posee el Espíritu, no
«con medida» (Jn 3,34), como los profetas, sino en toda
40.
Desde el siglo n a.C. se comenzó en algunos ambientes a calcular el
«fin», es decir, la fecha del comienzo de la época mesiánica. A este objeto
algunos dividieron en per íodos el curso de la histor ia. 4Esd (que fue escr ito
después de la destrucción de Jerusalén el año 70) : «El mundo ha perdido
cier tamente su juventud; ios t iempos se aproximan a la vejez. La histor ia
del mundo está cier tamente dividida en doce par tes; ha l legado hasta la
décima y hasta la mitad de esta décima. Quedan todavía dos después de la
mitad de esta décima par te» ( traducido de P. RIESSLER,
Altjüdisches Schriftum
ausserhalb der Bibel , Augsburgo 1928, p . 306s) . Cf .
BILLERBECK
I V / 2 ,
p.
986s.
126
Jesús es guiado por e l des ierto en el Espíritu. En la
extensión del desierto, vacía de hombres, nada le separa
de Dios. Allí busca el silencio de la oración (5,16) y el
trato a solas con el Padre. Como Hijo de Dios se deja
guiar en el Espíritu. «Todos los que se dejan guiar por el
Espíritu de Dios, éstos son hijos suyos» (Rom 8,14).
Jesús no es impelido al desierto por el Espíritu (Me
1,12), sino que él mismo va. No es conducido por el Es
píritu, sino que se deja guiar en el Espíritu. El Espíritu
no actúa en él a la manera, digamos, como actuó en los
jueces, en un Otoniel (Jue 3,10), en un Gedeón (6,34), en
un Jefté (11,29). Sobre ellos vino el Espíritu, los pertrechó
para una gran obra y volvió a abandonarlos cuando ésta
se vio cumplida. En Jesús actúa de otra manera. No es
arrastrado por el Espíritu, sino que él mismo dispone del
Espíritu. Jesús no posee sólo un don transitorio del Espí
ritu, sino que lo posee establemente, siempre, como nacido
que es del Espíritu; por esto obra siempre en él y puede
también comunicarlo a su Iglesia ".
La permanencia en el desierto duró cuarenta días.
Durante este tiempo fue tentado por e l d iablo. Las tres
tentaciones que se relatan hacen el efecto de ilustraciones
de la constante lucha secreta con los adversarios. Jesús
anuncia la soberanía de Dios y la aporta; con ello se ve
también llamado a desplegar su mayor energía el adver
sario de la soberanía de Dios. Juntamente con el reino
de los demonios se subleva contra la obra de Jesús que
es causa de su destrucción.
41. Le. 24 ,49; Act 2 ,33.
127
lb
N o com i ó nad a en aq ue l l o s d ías , p asad os l o s cua l e s ,
tuvo hambre. Di óle entonc es e l d iablo: Si eres Hijo de
Dios, d i a esta piedra que se convierta en pan.
4
Pero Je
sús le contestó: Escri to está: No de sólo pan v iv irá e l
hombre.
ca no es el del despliegue de poder, sino el de obedecer
y de servir, el de escuchar y aguardar toda palabra que sal
ga de la boca de Dios.. .
5
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 65/190
Jesús, lleno y penetrado del Espíritu, vive sin comi
da ni bebida. Pasados los días del ayuno, tiene hambre. El
diablo se sirve del hambre como tentación. Como diablo,
como detractor que es, quiere trastornar las buenas rela
ciones entre Dios y Jesús. Éste es siempre su plan. El
tentador toma pie de la voz de Dios en el bautismo: Al
fin y al cabo eres Hijo de Dios. Tú tienes poder ilimitado,
con una palabra de autoridad puedes saciar tu hambre.
La réplica de Jesús pone de manifiesto en qué está
la tentación: No de sólo pan v iv irá e l hombre. No se
trata sólo de guardar y conservar lo terreno. Las palabras
de la Escritura que cita Jesús están tomadas del libro del
Deuteronomio (8,3). Con estas palabras hace Moisés pre
sente a su pueblo su maravilloso mantenimiento por Dios
en el desierto: «Él te afligió, te hizo pasar hambre, y te
alimentó con el maná, que no conocieron tus padres, para
que aprendieses que no sólo de pan vivirá el hombre, sino
de cuanto procede de la boca de Yahveh» (de lo que pro
viene de la palabra del Señor). Mediante el hambre hubo
de ser educado el pueblo de Dios en la confianza en Dios
y en la obediencia.
Jesús es Hijo de Dios; tiene plenos poderes. Si ahora
su Padre le deja sufrir hambre, quiere llevarlo a la con
fianza y a la obediencia, pero no quiere que haga uso pura
su ven ta ja p ersona l del poder que tiene como Hijo
de Dios. Jesús es Hijo de Dios, pero en abatimiento, en
humillación y en obediencia, es Mesías, p ero a ' la vez
siervo de Dios. El camino que conduce a la gloria rnesiáni-
128
Y l l e vánd o l e h ac i a una a l tura , le m os tró en un m o
m ento tod os l o s r e i nos d e l m und o .
6
Y le d i jo e l d iablo:
Te daré todo este poderío y e l esplendor de estos re inos,
porque me ha s ido entregado, y se lo doy a quien yo quie
ra .
7
Si te postras, pue s, delante de mí, todo eso se rá tuyo.
s
Pero Jesús le respondió: E scri to está: Adorarás al Señor
tu Dios y a é l so lo darás cul to.
El diablo aparece aquí como príncipe de este mundo
(Jn 12, 31), como «dios de este mundo» (2Cor 4,4), como
antidiós pero en su soberbia debe al mismo tiempo confe
sar su dependencia. Todo esto me ha sido entregado.. . por
Dios.
No tiene plenos poderes propios, sino un poder que
le ha
sido
transmit ido, no es Dios, s ino «mona de Dios».
Conforme a la revelación, no hay otro Dios, Dios no tiene
igual, él es el único: a él solo adorarás, a él solo darás culto.
En un abrir y cerrar de ojos presenta el tentador, como
por encantamiento, ante los ojos de Jesús tod os l o s r e i nos
d e l m und o y su esplendo r. ¡Un espejismo Lo lleva a lo
alto .
¿Dónde? ¿Lo eleva en éxtasis? Satán hace la misma
oferta que Dios: «Tú eres mi Hijo, hoy te he engendra
do yo. Pídeme y haré de las gentes tu heredad, te daré en
posesión los confines de la tierra» (Sal 2,8; cf. Le 3,22).
También aquí resuena velamente: Si eres Hijo de Dios.
Con el esplendor y la gloria que pone Satán ante los
ojos de Jesús, pero que de hecho sólo es engaño y apa
riencia, quiere apartarle de Dios, hacerle abandonar a
Dios, inducirle a negar la profesión fundamental de fe y
la raíz de la vida religiosa de su pueblo. Al tentador opo
ne Jesús la palabra de la Escritura: «Adorarás al Señor tu
129
NT .
Le I. y
Dios y a él solo darás culto» (Dt 6,13). Jesús mantiene
en pie la soberanía de Dios. Él es siervo de Dios, no siervo
de Satán.
9
Lo l l e vó l uego a J erusa l én , l o p uso sob re e l a l ero
al Hijo de Dios, que ha sido ungido por Dios y es ahora
armado para su obra mesiánica. Con todos los medios
diabólicos: con compasión hipócrita, con artilugios y ma
gia, trastrocando la Sagrada Escritura quiere inducirlo a
desobedecer a Dios. Las tres tentaciones repiten tres veces
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 66/190
del templo y le d i jo: Si eres Hijo de Dios, t írate de aquí
ab ajo;
10
pues escri to está: Man dará en tu favor a los án
ge l e s p ara q ue t e guard en cu i d ad osam ente ;
n
y también:
T e tom ará n en sus m anos , no s ea q ue t rop i ece tu p i e con
una p i ed ra .
n
Pero Jesús le respondió: Está dicho: No
tentarás a l Señor tu Dios.
El alero del templo es quizá un mirador que sobre el
muro exterior del templo sobresalía sobre la calle. Allá
es conducido Jesús. Se le invita a arrojarse abajo para
hacer prueba de la protección de Dios que le está asegu
rada por la palabra misma de Dios (Sal 91,11), para cer
ciorarse de su elección, de su filiación divina, del poder
que tiene de Dios y cerca de Dios.
Jesús descubre lo que significa tal requerimiento: ten
tar a Dios. Se trata de abusar de ia protección prometida
y así tentar a Dios, forzarle a intervenir en su favor. Jesús
quiere servir a Dios, no servirse de él, disponer de él,
quiere obedecerle , no sometérselo. . .
La tentación en el alero del templo de Jerusalén es la
última según Lucas. Los caminos de Jesús llevan a Jeru
salén; él tiene la mira puesta en Jerusalén (9,51). Allí
muere y allí es glorificado, allí se humillará como siervo
de Dios, será obediente hasta la muerte. Allí experimen
tará la protección de Dios en la forma más acabada, pues
Dios le resucitará y exaltará. Él no provoca esta exalta
ción protectora de Dios, sino que la aguarda.
Las tentaciones de Jesús son ten tac i ones m es i á n i cas .
El adversario de la soberanía de Dios quiere hacer caer
13
que Jesús se mantuvo obediente. En su calidad de segundo
Adán es tentado como lo fue el primero. El primero falló,
el segundo sale victorioso. «Al igual que por la desobe
diencia de un solo hombre la humanidad quedó constitui
da pecadora, así también por la obediencia de uno solo la
humanidad quedará consti tuida justa» (Rom 5,19) .
Las tentaciones de Jesús continúan en sus d i s c íp u l os
(cf. 22,28ss). También la Iglesia vive en medio de estas
tentaciones. Jesús levanta los ánimos cuando son tentados
los discípulos, pues él también fue tentado. Él muestra
cómo hay que vencer las tentaciones: mediante la Sagra
da Escritura, que es profesión de fe, oración y fuerza, la
«espada del Espíritu» (Ef 6,17).
13
Y acab ad as tod as l a s t en tac i ones , e l di ab l o s e a l e jó
hasta un t iempo señalado.
La acción de Jesús comienza con la v ictoria sobre e l
d em on i o . El tiempo de la salud, que es inaugurado por
Jesús,
es un tiempo en que se ve encadenado el demo
nio. Jesús dice: «Yo estaba viendo a Satán caer del cielo
como un rayo» (10,18). No tiene ya poder hasta un tiempo
señalado. El tiempo de Jesús es un tiempo exento de Satán.
Donde actúa Jesús, tiene que retirarse el demonio; la vic
toria sobre el tentador se obtiene mediante la fiel adhe
sión a Jesús.
Pero sólo hasta un t iempo señalado suspende Satán
las tentaciones de Jesús. Al comienzo de la historia de la
pasión se lee: «Satán entró en Judas» (22,3). Los enemi-
131
go s
de
Jesús tienen poder sobre
él,
porque
se
inicia
el po
der de las tinieblas (22,53). En tanto no había llegado su
hora , era intangible para sus adversar ios
42
. Jesús es clava
do
en la
cruz
por los
príncipes
de
este mundo, pero pre
cisamente
con
esta muerte
que él
acepta obediente como
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 67/190
siervo de Dios que es. vence la soberanía de Satán
43
.
14
P o r la fuerza del espír i tu, volv ió Jesús a Gal i lea.
La actividad mesiánica debía comenzar en Galilea, se
gú n el designio de Dios. En Galilea recibió Jesús la vida.
En Galilea comienza el camino de su preparación mesiá
nica, en Galilea comienza también su obra mesiánica. El
Espíritu Santo le ha dado la existencia, el Espíritu le di
rige al Jordán y por el desierto; también el Espíritu le
guía cuando lleva a cabo su obra mesiánica. Una obe
diencia humilde y la virtud del Espíritu Santo nos revelan
el misterio
de la
acción
de
Jesús.
42. Le 4, 30; Jn 7 ,30.45; 8,59.
43.
Cf. ICor 2,6; Jn
12,31.
132
Parte segunda
ACTIVIDAD DE JESÚS EN GALILEA
4,14-8 ,50
I. COMIENZOS DE LA PREDICACIÓN (4,14-6.16).
Pedro dijo
al
centurión Cornelio: «Vosotros conocéis
lo que
ha venido a ser un acontecimiento en toda Judea. a partir de
Galilea después del bautismo que Juan predicó: Jesús de Naza-
ret, cómo Dios lo ungió con Espíritu Santo y poder, y pasó
haciendo el bien y sanando a todos los oprimidos por el diablo,
porque Dios estaba
con él.
Nosotros somos testigos
de
todas
las
cosas
que
hizo
en la
región
de los
judíos. . .»
(Act
10,37).
Lo que
aquí se resume en pocas frases acerca de la actividad de Jesús,
es ilustrado en el evangelio. Tres veces comienza Lucas (4,14;
5,12; 6,1) y tres veces cierra la actividad de Jesús con llama
mientos de testigos 5,lss; 5,27ss; 6,12ss).
1.
PRESENTACIÓN
(4,14-5,11).
a )
Epíg rafe (4,14-15).
14
P o r la fuerza del espír i tu, volv ió Jesús a G al i l ea , y
las not ic ias sobre
él se
di fundieron
por
toda
la
región.
E n el Jordán es Jesús «ungido con Espíritu Santo y
con poder»; por la fuerza de este Espír i tu comienza su
acción, como había comenzado su vida por la virtud del
133
Espíritu. El Espíritu lo dirige a Galilea; allí había co
menzado su vida. El ángel había sido enviado por Dios a
una ciudad de Galilea (1,26). En Galilea comienza tam
bién su acción. En la despreciada «Galilea de los gentiles»
brota la salvación por la virtud del Espíritu.
En todas partes adonde llega la fama de Jesús, co
mien za su glorificación; su. fama tiene por e co sus
a la
banzas .
El espacio adonde se extenderá su fama será el
mundo entero; todos, todos literalmente, le glorificarán. El
Espíritu de Dios no descansa hasta que «toda lengua con
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 68/190
La acción en virtud del Espíritu causa admiración y
fama,
que se extiende por toda la región circundante. El
Espíritu extiende ampliamente su acción; su virtud quiere
transformar el mundo, santificarlo, ponerlo bajo la sobe
ranía de Dios. La acción que comienza en Galilea se ex
tenderá hasta los confines de la tierra. Cuando Jesús haya
alcanzado en Jerusalén la meta de su actividad que co
mienza en Galilea, partirán los discípulos en la virtud del
Espíritu, y la noticia de Jesús llenará el mundo entero.
15
En s e ña ba e n l a s sin a g o g a s de e l l o s , c o n g r a n a p la u
so por parte de todos.
La primera actividad de Jesús consiste según Lucas
en
enseñar ,
según Marcos en proclamar al modo de un
pregonero: «Se ha cumplido el tiempo; el reino de Dios
está cerca; convertios y creed en la buena nueva» (Me
l,14s). Lucas piensa: con la venida de Jesús está ya pre
sente el tiempo de la salvación: Jesús no lo proclama
como pregonero, sino que enseña lo que es y lo que aporta
este tiempo de salvación.
Las
s in a g o g a s
con su liturgia semanal de la palabra y
de oración son el sitio indicado para la actividad docen
te de Jesús. Su doctrina es también exposición de la
Escritura; ahora se cumplen las predicciones y promesas
proféticas. Los apóstoles procederán como Jesús cuando lle
ven al mundo la palabra de Dios, comenzando por las si
nagogas proclamarán el cumplimiento de las promesas
(cf. Act 13,16-41).
134
fiese que Jesucristo es Señor para gloria de Dios Padre»
(Flp 2,11). La palabra de Dios se lanza a la carrera para
la glorificación de Dios.
b)
En Nazaret (4,16-30).
16
L legó a Nazare t, donde se había criado, y según lo
ten ía por cos tumbre en tró en la s inago ga e l día de sábado
y se levantó a leer .
n
Le en tregaron e l l ibro de l profe ta
Isa ías; lo abr ió y encontró e l pasaje en que es taba es
crito: ...
En una ciudad de Galilea llamada
Nazare t
(1,26) fue
concebido Jesús, fue criado, llegó a ser hombre y hubo de
comenzar su obra según la voluntad del Espíritu. Sus co
mienzos recibieron la impronta de esta ciudad, que care
cía de importancia y era incrédula, que se escandalizó de su
mensaje y trató de quitarle la vida. Sus comienzos son
comienzos de la nada, de la incredulidad, del pecado, de
la repulsa . . . Y sin embargo comenzó.
Jesús comenzó por lo que era usanza consagrada en
la liturgia de la sinagoga, el sábado, en el orden del rito
observado en el culto. «Nació bajo la ley» (Gal 4,4), como
lo ha mostrado el relato de la infancia. Su tiempo es tiem
po del cumplimiento de todas las predicciones y prome
sas.
La historia de la salvación no destruye lo comenza
do , sino que lo lleva a su perfección última.
En la liturgia del sábado se recitaban oraciones y se
135
leía la Sagrada Escritura. Los libros de la ley (los cinco
libros de Moisés) se leían en forma continuada, los libros
proféticos estaban dejados a la libre elección. Todo israeli
ta varón tenía el derecho de ejecutar esta lectura y de
añadirle una exposición, unas palabras de exhortación.
el pasaje. La primera y la segunda línea hablan de dota
ción con el Espíritu y de encargo recibido de Dios; las
otras cuatro líneas hablan de la obra del portador de la
salvación. La primera y la última línea y las dos del me
dio se corresponden; la primera y la última hablan del
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 69/190
Como señal de que quería hacer uso de tal derecho se le
vantaba de su asiento. J esús s e p uso en p i e . Con esto
comienza el ritual de la lectura de la Escritura, que la
rodea como un marco, como el engaste rodea a la piedra
preciosa. Lucas describe hasta los últimos detalles del ce
remonial: le fue entregado el libro del profeta Isaías; él
lo abrió. Acaba la lectura, enrolló el libro, lo entregó al
ayudante y se sentó. Jesús se amolda al ritual. La Escri
tura contiene la palabra de Dios; por eso merece respeto
y se debe tratar santamente.
El pasaje que leyó estaba tomado del libro del profeta
Isaías. Jesús lo halló, no casualmente, sino bajo la guía
del Espíritu Santo, con el que estaba ungido y en cuya
virtud obraba. Isaías era el profeta de los que aguardaban
en tiempos de Jesús. María lo oyó en la anunciación,
Simeón se inspiró en él, el Bautista reconoce por él su
misión, con él reanimaban las gentes de Qumrán. Tam
bién Jesús expresa su misión por medio de él.
18
El espír i tu del Señor e stá sobre m í, porque me un
g i ó p ara anunc i ar l a b uena nueva a l o s p ob res ; m e env i ó
a proclamar l ibertad a los caut ivos y recuperación de la
v is ta a los c iegos; a poner e n l ibertad a los oprimidos.
v
- a proclama r u n a ño de grac ia del Señor.
Las palabras son de Isaías 61 , J
s.
Sólo se ha cambiado
una línea. «A poner en libertad a los oprimidos» (Is 58,6)
está en lugar de «para sanar a los de corazón quebranta
d o » . Con esta modificación queda muy bien articulado todo
136
anuncio y del mensaje, las del medio, de la actividad sal-
vífica del Señor. El portador de salvación actúa de pala
bra y de obra, es salvador y mensajero de victoria.
La salvación se dirige a los pobres. El tiempo de sal
vación que anuncia el profeta es un año de gracia, como
el año del jubileo, del que se dice: «Santificaréis el año
cincuenta, y pregonaréis la libertad por toda la tierra para
todos los habitantes de ella. Será para vosotros jubileo, y
cada uno de vosotros recobrará su propiedad, que vol
verá a su familia»
44
.
20
En rol ló lueg o e l l ibro, lo entregó al ayudante y se
sen tó . E n l a s i nagoga , t od os t en ían l o s o jo s c l avad os en
él .
21
E n tonces com enzó a d ec ir l e s : H oy se h a cum p l i do
este pasaje de la Escri tura escuchado por vosotros.
A la lectura de la Escritura sigue la instrucción (Act
13,15). Está comprendida en una frase lapidaria de gran
fuerza y énfasis. Hoy se ha cumpl ido este pasaje de la
Escri tura. En ca beza de la frase está el «hoy» *\ al qu e
habían mirado los profetas, en el que se cifraban los gran
des anhelos: ahora está presente. Mientras pronuncia Je
sús estas palabras, se inicia el suspirado año de gracia. El
tiempo de salvación es proclamado y traído por Jesús. Es
lo increíblemente nuevo de esta hora. Las piadosas usan
zas y las palabras de la Escritura, que eran promesa tienen
ahora cumplimiento.
44 .
Lev 25,10. Restauración del orden divino.
45 . Cf . Le 2 ,1 1; 19,5 .9; 2 3 , 4 3 ; 2Cor 3 ,14; Heb 4 ,7 .
137
E s c u c h a d o p o r v o s o t ro s .
Que ha comenzado el tiempo
de salvación y que ya está presente el portador de ella, es
algo que sólo se puede saber mediante la audición de este
mensaje; no se ve ni se experimenta. El mensaje exige la
fe, la fe viene de oir, es respuesta a una interpelación.
venido al final del tiempo de la preparación, había sido
ungido con el Espíritu y había comenzado a cumplir su mi
sión. La gracia de Dios había llegado a su plena eclosión.
Todos se manifestaban en su favor, te s t imoniando que sus
palabras expresaban la gracia de Dios y suscitaban la gra
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 70/190
La predicción que ahora se cumple es el programa de
Jesús, que no lo ha elegido él mismo, sino que le ha sido
prefijado por Dios. Él es enviado por Dios; por medio de
é visita Dios mismo a los hombres. Hoy ha tenido lugar
la visita salvadora, que no se debe desperdiciar.
Jesús actúa de palabra y de obra, enseñando y sanan
do . El tiempo de gracia ha alboreado
para los pobres ,
los
cautivos y los oprimidos. Precisamente el Jesús del Evan
gelio de san Lucas es el salvador de estos oprimidos. El
gran presente que hace Jesús es la libertad: liberación de
la ceguera del cuerpo y del espíritu, liberación de la pobreza
y de la servidumbre, liberación del pecado.
En tanto mora Jesús en la tierra, dura el apacible y
suspirado «año de gracia del Señor». En él tenían pues
tos los ojos las gentes antes de Jesús, hacia él vuelve la
Iglesia los ojos. Es el centro de la historia, la más grande
de las grandes gestas de Dios. En el gozo y en el esplen
dor de este año queda sumergido lo que Isaías había dicho
también sobre este año: «Para publicar el año de perdón
de Yahveh y el día de la venganza de nuestro Dios» (Is
61,2). El Mesías es ante todo y por encima de todo el que
imparte la salvación, y no el juez que condena.
22
Y todos se
manifestaban
en su favor y se marav i l la
ban de l as palabras l l enas de gracia sa l idas de su boca , y
dec ían: ¿Pero no e s és te e l h i jo de José?
Jesús había crecido en gracia ante Dios y ante los hom
bres (2,52). Ahora se hallaba en pie ante ellos el que,
138
cia de los hombres. «La gracia salvadora de Dios se ha
manifestado a todos los hombres» (Tit 2,11). «Dios estaba
con él» (Act 10,38). Ésta es la primera impresión y la pri
mera vivencia de quien conoce a Jesús. Así lo experi
mentaron Nazaret y Galilea, como lo experimentan toda
vía hoy los niños, los que están exentos de prejuicios u los
que ansian la salvación, cuando se acercan al Evange
lio de Jesús.
Sin embargo, en el momento siguiente, surge el escán
dalo:
¿Pero no e s és te e l h i jo de José?
Lo humano de su
existencia es ocasión de escándalo, su palabra, que era es
timulante se hace irritante. Se acoge con aplauso el men
saje, pero se recusa al portador de la salvación contenida
en el mensaje. De lo humano, en que se revela la gracia
de Dios, nace la repulsa. El hombre se exaspera porque
un hombre pretende que se le escuche como a enviado de
Dios.
La patria de Jesús lo recusa, porque es un compa
triota y no acredita su pretensión de ser salvador en
viado por Dios. Mucho más escándalo suscitará su muerte.
El mismo escándalo suscitan los apóstoles, la Iglesia y
quienquiera que siendo hombre proclama el mensaje de
Dios.
23
En tonces é l l e s d i jo: Segu ramente me diréi s e s te
proverbio: Médico, cú rate a t i mismo : haz también
aquí,
en tu tierra, todo l o que hemos o ído que h ic i s te en Cafar-
n a ú m .
24
Y añadió: Os l o a segu ro: Ning ún profe ta e s b i en
acog ido en su t i erra .
139
Los nazarenos quieren
una
señal de que Jesús es el
salvador prometido. Una vez más asoma la exigencia de
signos. El hombre se sitúa ante Dios formulando exigen
cias:
exige que Dios acredite la misión de su profeta en
la forma que agrada al hombre. Ahora bien, ¿se ha de
El profeta no obra por propia decisión, sino confor
me a la
dispos ic ión de Dios
que lo ha enviado. Acerca de
los dos profetas Elias y Elíseo dispuso que no prestaran
su ayuda maravillosa a sus paisanos, sino a gentiles ex
tranjeros. Jesús no debe llevar a cabo los hechos salvíficos
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 71/190
inclinar Dios ante el hombre? Dios da la salud, pero sólo
al que se le inclina con obediencia de fe y aguarda en si
lencio. Dios exige la fe, el sí con que se reconozcan sus
disposiciones. Pero los nazarenos no creían, no tenían fe
(Me 6,6).
Es que Jesús, según el modo de ver humano, debía acre
ditarse también en su patria con milagros, como los había
hecho en Cafarnaum. El
médico
que no puede curarse a
sí mismo se juega su prestigio y destruye la confianza y
la fe que se había depositado en él. ¿De qué le sirve su
capacidad si ni siquiera se la sabe aplicar a sí mismo? Los
nazarenos desconocen a Jesús porque juzgan con crite
rios puramente humanos. Jesús es profeta y obra por en
cargo de Dios. Su modo de obrar no está pendiente de lo
que exijan los nazarenos; él no emprende lo que le apro
vecha personalmente, sino únicamente lo que Dios quie
re que haga.
Las sugerencias de los nazarenos eran las sugerencias
del tentador. Los nazarenos desconocen a Jesús porque
no reconocen su misión divina.
25
Os digo de
verdad:
Muchas v iudas ha bía en Israe l
en t iempos de El ias , cuando e l c ie lo se cerró a la l luv ia
durante t res unos
y
se is meses , de suer te que sobrev ino
una gran hambre por toda la reg ión;
26
pe r o a n in g u n a de
e l las jue env iado El ias , s ino a Sarepta de Sidón, a una
mujer v iuda.
21
Y muchos leprosos había en Israe l en
t iempos de l profe ta El í seo; pero n inguno de e l los fue cu
rado,
s ino Naamán, e l s ir io .
14
en su patria, sino que debe dirigirse a país extraño. Dios
conserva su libertad en la distribución de sus bienes.
Los nazarenos no tienen el menor
derecho a formular
exigenc ias
de salvación por ser compatriotas del portador
de la misma y por tener parentesco con él. Israel no tiene
derecho a la salvación por el hecho de que el Mesías
es de su raza. La soberanía de Dios, que Jesús proclama
y aporta, salva a los hombres objeto de su complacencia.
La salvación es gracia.
Elias
*
y Elíseo hacen en favor de extranjeros los mi
lagros de resucitar muertos y de curar de la lepra. Jesús
resucitará a un muerto en Naím (7,11 ss) y lib rará de la
lepra a un samaritano (17,12ss). Lo que decide no son los
vínculos nacionales, sino la gracia de Dios y el ansia de
salvación, acompañada de fe. Jesús comienza por anun
ciar el mensaje de salvación a sus paisanos, pero una vez
que éstos lo rechazan, se dirige a los extraños. Pablo y
Bernabé dicen a los judíos: «A vosotros teníamos que
dirigir primero la palabra de Dios; pero en vista de que la
rechazáis y no os juzgáis dignos de la vida eterna, nos
dirigimos a los gentiles» (Act 13,46s).
Jesús reanuda la acción de los grandes profetas. La
impresión que dejó Jesús en el pueblo se expresa así: «Fue
un profeta poderoso en obras y palabras ante Dios y ante
todo el pueblo» (24,19). Por medio de Jesús visita Dios
misericordiosamente a su pueblo, como lo había hecho
46. Según 1 Re 18,1 no llegó la sequía a los tres a ños ; de tre s año s y
medio habla también Sant 5,17. Se redondean los números como en la lite
r a tu r a jud ía .
141
por medio de los profetas. Pero la suerte de los profetas
es también la suerte de Jesús.
28
C uand o l o oy eron , t od os l o s q ue e s tab an e n l a s i na
goga se l l enaron d e i nd i gnac i ó n;
29
se l e van taron y l o sa
beza de la actividad de Jesús. Es la obertura de la acción
de Jesús. Se insinúan en ella numerosos motivos, que lue
go se registran y se desarrollan en el Evangelio y en los
Hechos de los Apóstoles . . .
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 72/190
caron fuera d e l a
ciudad,
y lo l l evaron hasta un precipic io
d e l a co l i na sob re l a q ue e s tab a ed i f i cad a su ciudad, c o n
intención de despeñarlo.
30
P ero é l , p asand o en m ed i o d e
el los , se fue.
El que se presenta como profeta debe acreditarse con
signos y milagros (Dt 13,2s). Jesús no se acredita. Por
esto se creen los nazarenos obligados a condenarlo y a
lapidarlo como a blasfemo. El castigo por blasfemia se
iniciaba de esta manera: el culpable era empujado por la
espalda desde una altura por el primer testigo. La entera
asamblea se constituye aquí en juez de Jesús, lo condena
y quiere ejecutar inmediatamente la sentencia. Se anuncia
ya el fracaso de Jesús en su pueblo. Es expulsado de la
comunidad de su pueblo, condenado como blasfemo y en
tregado a la muerte.
En este caso, sin embargo, Jesús escapa al furor de sus
paisanos. No hace milagro alguno, pero nadie pone las
manos sobre él. No ha llegado todavía la hora de su muer
te . Dios es quien dispone de su vida y de su muerte. Ni
siquiera la muerte de Jesús puede impedir que sea resu
citado, que vaya al Padre, que viva y ejerza su acción para
siempre.
Jesús abandona definitivamente a Nazaret y emprende
el camino hacia los extraños. No los paisanos, sino extra
ños serán los testigos de las grandes obras de Dios por
Jesús. Dios puede sacar de las piedras del desierto hijos
de Abraham.
Lo sucedido en Nazaret fue puesto por Lucas en ca-
142
c ) En Cafarnaúm (4,31-44).
31
Bajó a Cafarnaúm, c iudad de Gal i lea. Y los sábados
se p on ía a enseñ ar l e s .
32
Y se q ued ab an a tó n i to s d e su
manera de enseñar, porque su palabra iba revest ida de
autoridad.
Nazaret está situada sobre una colina, C afarnaúm a la
orilla del lago. Jesús bajó. Una vez que ha sido repudiado
por su ciudad natal, en la que se había criado, elige una
ciudad extraña, Cafarnaúm, como su nueva patria (Mt
4,13). La palabra de Dios parte de Galilea. No sin razón
se llama a Cafarnaúm c i ud ad d e G a l i l ea . En Galilea se
reúnen los primeros discípulos, los testigos de la Iglesia;
se los llama también «galileos» (Act 2,7). Los planes sal-
víficos de Dios alcanzan lo que quieren, aun a pesar del
repudio de los hombres.
En Cafarnaúm actúa Jesús de la misma manera que
en Nazaret . E n s e ñ a el sábado en la sinagoga durante la
iiturgia e interpreta la Escritura en el nuevo sentido del
cumplimiento actual de las promesas. Su enseñanza im
pone y causa asombro. La palabra de Jesús tiene poder,
autoridad, pues Jesús habla en la virtud del Espíritu. La
palabra de Dios es fuerza creadora. «La palabra de Dios
es viva y operante» (Heb 4,12).
33
H ab ía en l a s i nago ga un h om b re q ue t en ía e sp ír i tu
d e d em on i o i m p uro y q ue com enzó a gr i tar a grand es vo-
143
ees :
34
¡E h ¿ Q ué t enem os noso tros q ue v er con t i go , J e sús
Nazareno? Yo sé bien quién eres: e l santo de Dios.
A la palabra llena de autoridad se añade la acción
poderosa. El espíritu que dominaba al poseso era un es
Las amenazas de Jesús tienen fuerza divina. «Las co
lumnas del cielo tiemblan y se estremecen a una amenaza
suya» (Job 26, 11). También los demonios tienen que in
clinarse ante Jesús, que pronuncia contra ellos la amena
za de Dios.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 73/190
píritu maligno, un d em on i o q ue vue l ve i m p uros a los que
domina. La imagen de los posesos que trazan los evange
listas no responde exactamente a la de enfermos menta
les.
Los malos espíritus ejercen influjo en los hombres.
En los posesos se manifiesta a fin de cuentas cuál es el
estado del hombre sin redención.
El demonio no puede soportar la presencia de Jesús.
El poseso, impelido por el mal espíritu, grita a grandes
voces. Jesús de Nazaret, el «santo de Dios», y los espíri
tus impuros forman un contraste inconciliable. El tiempo
de la salud que ahora se anuncia trae la ruina de los ma
los espíritus.
El mal espíritu hace una profesión de fe acabada: Je
sús de Nazaret, e l san to d e D i os (Jn 6,69). El santo de
Dios es el Mesías. «El que nacerá de ti será santo, será
llamado Hijo de Dios» (1,35).
Jesús de Nazaret es llamado «el santo de Dios» por
los ángeles del cielo y por los demonios del infierno. ¿Y
per los hombres? «Dios lo exaltó, y le concedió el nom
bre que está sobre todo nombre, para que en el nombre
de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra
y en el abismo, y toda lengua confiese que Jesucris
to es Señor, para gloria de Dios Padre» (Flp 2,9ss). ¡Qué
camino para que los hombres le confiesen
35
P ero J esús l e i ncrepó : E nm ud ece y sa l d e e s te h om
bre. Entonces e l demonio, echándolo por t ierra delante de
el los , sa l ió de é l , s in haberle causado ningún daño.
144
La profesión de fe del demonio es rechazada. «La fe,
si no tiene obras, está muerta en sí misma. Más aún, algu
no dirá: Tú tienes fe, yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin
las obras, y yo te mostraré por las obras mi fe. ¿Tú crees
que hay un solo Dios? Haces bien. También los demonios
creen y tiemblan» (Sant 2,17-20). La profesión de fe debe
ir acompañada de obras que agraden a Dios y de la ala
banza de Dios.
El demonio se resiste, pero de nada le sirve su arreba
to . N o p ued e causar n i ngún d añ o . Lucas usa una expre
sión médica. Aprecia el alcance de lo que ha hecho Jesús.
Jesús tiene fuerza sobrehumana. Una fuerza que sobrepu
ja incluso las fuerzas demoníacas. Dios obra por él, el
santo de Dios, por el cual Dios se demuestra como
el santo, el completamente otro, el poderoso.
36
T od os q ued aron l l enos d e e s tup or y l o com entab an
unos con o t ros d i c i end o: ¿ Q ué p a l ab ra e s e s ta , q ue m an
da con autoridad y fuerza a los espír i tus impuros, y sa
l en?
37
Y su fama se ex tendía por todos lo s lugares de la
com arca .
La acción poderosa de Jesús infunde asombro y res
peto .
Las gentes hablan sólo entre s í , «unos con otros».
La emoción les impide hablar alto. La admiración, el
asombro, el sobrecogimiento, el silencio respetuoso son
pasos preparatorios para la fe, son el camino del recono
cimiento de Dios y de su revelación.
Lo que se admira es la palabra. La palabra de Jesús
145
NT, Le I, 10
tiene fuerza y autoridad, tiene poder divino. ¿Qué clase de
palabra es ésta? Preguntar con asombro es el camino que
lleva al conocimiento de Jesús.
La palabra poderosa halla eco. Su fama se extiende
por todos los lugares de la comarca. La palabra tiende a
extenderse, quiere llenar espacios cada vez mayores. El
i m p on i end o l a s m anos a cad a uno y l o s curab a .
41
Tam
bién los demonios sal ían de muchos, gr i tando así: Tú eres
e l Hijo de Dios. Pero é l les increpaba y no les permitía
decir eso, porque sabían que é l era e l Mesías .
Expresamente se dice que Jesús es el Salvador de to
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 74/190
eco de la palabra de Jesús es la alabanza de Jesús por los
hombres.
3íi
S a l i ó d e l a s i nagog a y en tró en casa d e S i m ó n. La
suegra d e S i m ó n se encon trab a a tacad a d e f i eb re grand e
y le supl icaron por e l la .
39
E i nc l i ná nd ose sob re e l l a , i n
crepó a la fiebre, y ésta se le qui tó. Inmediatame nte e l la
se levantó y les servía.
La enferma está acostada en una estera. Jesús se acer
ca como un médico a su cabecera. Se inc l inó sobre e l la .
La misma palabra conminatoria que al demonio se dirige
también a la fiebre. La palabra produce efecto. Inmedia
tamente sobreviene la curación. Nada puede oponerse a
la palabra de Dios, pronunciada por Jesús.
La suegra de Simón, una vez curada, s irve a la mesa.
Se organiza una comida, y la que ha sido curada la sirve.
La enfermedad había desaparecido al instante y totalmen
te . En Cafarnaúm, en casa de Simón, halla Jesús un nue
vo hogar. «Mi madre y mis hermanos son aquellos que
oyen la palabra de Dios y la ponen en práctica» (8,21).
La casa de Simón se equipara a la sinagoga. Aquí, como
allí, lleva a cabo la palabra de Dios las obras salvíficas.
La palabra sale de la sinagoga y pasa a las casas de los
hombres.
40
Al pone rse e l so l , todos lo s que tenían en fermos de
d i ver sas d o l enc i a s s e l o s l l e varon a é l ; en tonces é l l e s i b a
146
dos en todas las cosas. «Todos han de ver la salvación
de Dios»: así lo había anunciado el Bautista. La gracia de
Dios desborda en Jesús. A cada uno de ellos les iba im
poniendo las manos. La curación se efectúa por la virtud
del Espíritu al que Jesús poseía. La imposición de manos
es comunicación de la fuerza que hay en él y que sana.
A cad a uno imponía las manos. Con esto se expresa la
bondad de Jesús: se interesa por todos al interesarse por
cada uno.
Los d em on i os se resisten a Jesús. Gritando su nom
bre quieren desvirtuarlo. En la antigüedad se creía que
se podía expulsar a l demonio pronunciando su nombre .
La magia del nombre que los hombres emplean contra los
demonios, dirigen éstos contra Jesús. En la lucha que se
desencadena entre Jesús y los demonios una vez que se ha
iniciado el tiempo de salvación, sale Cristo triunfante,
pese a todas las intentonas de los poderes diabólicos.
La grandeza de Jesús se muestra en el título de Hijo
d e D i os ; se le da este título porque él es el Mesías (el
Ungido). Cristo fue desde un principio ungido con el Es
píritu, por lo cual se llama también Hijo de Dios (1,35).
Pero Jesús no los dejó hablar. No quiere recibir la confe
sión de demonios. La confesión de que Jesús es el Hijo
de Dios, el Mesías, el santo de Dios, se alcanzará por el
camino de la muerte de Cristo (Flp 2,8ss). La imposición
de las manos y la palabra son las manifestaciones de po
der del Espíritu que obra en Cristo.
147
42
C uand o am ane c i ó , sa l i ó y s e fue a un l ugar d es i erto ,
l a s m u l t i t ud es l o and ab an b uscand o; l l egaron h as ta é l e
i n t en tab an re t ener l o , p ara q ue no s e a l e jara d e e l l o s .
43
P ero
é l l e s d i jo : T am b i é n a o t ras c i ud ad es t engo q ue anunc i ar
l a b uena nueva d e l r e i no d e D i os , p ues p ara e s to h e s i d o
env i ad o .
**
E i b a pred icand o p or l a s s i nagoga s d e J ud ea .
d) Los primeros discípulos (5,1-11).
1
Sucedió, pue s, que mientras é l es taba de pie junto a l
l ago d e G enesare t , e l p ueb l o s e fue ago l p and o en torno a
é l . para oir la palabra de Dios.
2
E n e s to v i o d os b arcas
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 75/190
Jesús no deja que le retengan en Cafarnaúm, S u v i d a
es una p eregr i nac i ó n . Dos veces se expresa esto. Marcos
habla de la oración de Jesús en la montaña (Me
1,35),
Lucas gusta de referirse a la oración solitaria de Jesús;
pero en esta ocasión renuncia Lucas a hablar de ello. Je
sús camina sin demora. La palabra necesita extenderse,
Jesús no permite que nadie ni nada le detenga.
Jesús no puede atarse a una ciudad. Tiene que cami
nar. Esta es su misión, tal es la neces i d ad que impone el
designio divino. La palabra de Dios es para él un encargo
que le impele a buscar amplios horizontes. Ni las ventajas
personales ni las muchedumbres del pueblo deciden de
su vida, sino únicamente la palabra, en último término
Dios.
La acción de Jesús consiste en proclamar la buena
nueva de que el re i no d e D i os está presente. Esta nueva
debe llenar la tierra entera de los judíos. El campo de
acción se extiende: de Nazaret a Cafarnaúm y a la región
circundante, de aquí a Judea, nombre con que se designa
la tierra entera de Palestina. En todas las sinagogas re
suena su mensaje, pero sólo en las sinagogas, en el pue
blo de Israel. Sólo cuando sea exaltado, se verá entera
mente libre de límites su proclamación.
148
a tracad as a l a or i l l a d e l l ago; p ues l o s p escad ores h ab ían
sa l i d o d e e l l a s y e s tab an l avand o l a s red es .
3
S ub i ó a una
de estas barcas, que era de Simón, y le rogó que la apar
tara un p oco d e l a or i l l a ; s e s en tó y enseñ ab a a l a s m u l
t i tudes desde la barca.
Es por la mañana, junto al lago de Genesaret. Jesús
está de pie en la orilla y anuncia la palabra de Dios. E l
pueblo se agolpa en su derredor, lo asedia. Entonces sube
a una b arca de las que estaban atracadas allí, se sienta en
la barca como maestro y enseña a las masas del pueblo
que escuchaban desde la orilla. La palabra de Dios atrae
a los hombres, y los atrae en grandes masas.
La barca a que sube Jesús era de Simón. Jesús lo ha
bía conocido ya, había estado en su casa, había curado
a su suegra y había sido su huésped. Ahora aprovecha
sus servicios, para sí y para el pueblo. También Simón co
noce a Jesús, su poder de curar y el poder de su palabra.
El que se adhiera a Jesús tan pronto como se siente lla
mado por él, es algo que ha sido bien preparado y resulta
comprensible. La palabra poderosa de Dios se posesiona
del hombre humanamente .
4
Cua ndo terminó de ha blar, d i jo a Simón: Nave ga
mar adentro y echad vuestras redes para pescar.
5
Y res
pondió Simón: Ma estro, toda la noc he hemos estado bre
gand o , p ero no h em os p escad o nad a; s i n em b argo , en v i r
tud de tu palabra, echaré las redes.
6
Lo hic ieron así , y
149
recog i eron tan grand e can t i d ad d e p eces , q ue l a s r ed es e s
tab an a p un to d e rom p erse . ' 'E n tonces h i c ieron s eñ as a
l o s com p añ eros q ue e s tab an en l a o t ra b arca p ara q ue
v i n i eran a ay ud ar l os ; acud i eron y l l enaron tan to l a s d os
barcas, que cas i se hundían.
recibe el signo que se amolda a su vida, a su inteligencia
y a su vocación. Dios procede con él como con María.
Así procede Dios con su pueblo. La salvación exige fe,
pero Dios apoya la fe con sus signos.
s
C uand o S i m ón P ed ro l o v i o , s e e ch ó a l o s p i e s d e
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 76/190
Jesús dirige una palabra imperiosa a Simón. La orden
lo destaca de las muchedumbres del pueblo, incluso de
los que están con él en la barca. Le da la preferencia y lo
distingue entre todos. Las largas redes (de 400 a 500 me
tros) formadas por un sistema de tres redes, han de arro
jarse al lago, allí donde hay profundidad. Para ello hacen
falta por lo menos cuatro hombres. La orden representa
una prueba para la fe de Pedro. Según cálculos humanos
basados en una larga experiencia de los pescadores, es
inútil echar ahora las redes. Si no se ha capturado nada
durante la noche, que es el tiempo de la pesca, ahora
— por la m añ ana — se pescará mucho menos. La elec
ción y la vocación exigen fe, aunque no se comprenda,
exigen «esperanza contra toda esperanza» (Rom 4,18).
Así creyó y esperó María, así también Abraham
47
.
Simón reconoce que la palabra de Jesús ordena con
autoridad y que es capaz de realizar lo que no se puede
lograr con fuerzas humanas. Maestro, en v irtud de tu pa
labra.. . La interpelación «Maestro» es característica del
Evangelio de Lucas. Con ella se reproduce el título de
doctor o de rabí. Con ello quería evidentemente indicar
Lucas que Jesús enseña con autoridad y con fuerza im
perativa.
La fe en la palabra imperiosa del Maestro no se ve
frustrada. Las redes estaban a punto de romperse debido
al peso de los peces. Como Pedro no exige ningún signo,
47 . Ro m
4 , 18-21;
Gen 15,5 .
150
Jesús, d ic iéndole: Apártate de mí, Señor, que soy hombre
p ecad or .
9
E s q ue un e norm e e s tup or s e hab ía ap od erad o
de é l y de los que con é l es taban, ante la redada de peces
q ue h ab ían p escad o .
lü a
I gua l m ente l e s suced i ó a S an t i ago
y J uan , h i jo s d e Z ebed eo , q ue e s tab an asoc i ad os con
Simón.
Simón ve en Jesús una manifestación (epifanía) de
Dios
4 B
. Ha visto y vivido el milagro, el poder divino que
actúa en Jesús. La manifestación de Dios suscita en él la
conciencia de su cond i c i ó n d e p ecad or , de su indignidad,
el temor del Dios completamente otro, del Dios santo. La
manifestación del Dios santo a Isaías remata en esta con
fesión del profeta: «¡Ay de mí, perdid o soy , pues siendo
hombre de impuros labios . . . , he visto con mis ojos a l Rey,
Yahveh Sebaot» (Is 6,5). La admiración por Jesús atrae
a Simón hacia él, la conciencia de su pecado le aleja de
él . En la palabra «Señor» expresa la grandeza de aquel
al que ha reconocido en su milagro.
Lucas no emplea ya sólo el nombre de Simón, sino
que añade también el de Pedro.
Simón Pedro:
Simón, la
roca. En esta hora en que Simón opta por creer en la pa
labra de Jesús, se sientan las bases para la promesa futura:
48 . En la epifanía se hace Dios de repente visible o audible en el mun do,
de modo que la persona que la exper imenta puede responder le. De los mate
r iales de tradición que util iza Lucas para su Evangelio y para Jos Hechos
elige descr ipciones de epifanías (por ejemplo: Le 3 ,21ss; Act 5 , l
c
; 12,17) ,
porque sus destinatar ios procedentes de la gentil idad eran especialmente sen
sibles a éstas .
151
«Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia»,
como también para la vocación de Pedro, de fortalecer a
los hermanos: «Tú, en cambio, confirma a tus hermanos»
(22,32), y para la transmisión del cargo pastoral (Jn
21,15ss). Con la fe se prepara Pedro para ser roca.
El estupor y sobrecogimiento por la pesca inesperada
Así procedió Dios también con los profetas. Simón, jun
tamente con Santiago y Juan arrastraron las barcas a la
orilla y abandonaron el oficio de pescador; lo dejaron todo:
barca, redes, padre, casa. La vida comienza a adquirir
nuevo contenido.
Sigu ieron a Jesús como disc ípu los ,
como
los discípulos de los rabinos seguían a su maestro para
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 77/190
se había apoderado no sólo de Pedro, sino también de los
dos hijos de Zebedeo, Santiago y Juan. Lucas se fija sólo
en estos tres, aunque seguramente había también un cuar
to para manejar la red. Simón, Santiago y Juan son los
tres apóstoles preferidos, los testigos de las íntimas reve
laciones de Jesús, de la resurrección de la hija de Jairo,
de la transfiguración y de la agonía en el huerto de los
Olivos. Santiago y Juan estaban ya unidos con Simón en
el oficio de la pesca, eran sus asociados y colegas. Sobre
la vieja comunidad edifica Jesús una nueva.
10 b
Pero Jesús dijo a Simón: No tengas miedo. Desde
ahora serás pescador de hombres .
n
Y cuando a tracaron
las barcas a la or i l la , de jándolo todo, le s igu ieron .
Jesús quita el temor a Pedro y le da su encargo. Lo
mismo sucedió cuando el ángel transmitió a María el en
cargo de Dios. El temor reverencial del Dios santo es fun
damento de la vocación, en la que Dios quiere mostrarse
el Santo y el Grande.
Así como Pedro hasta ahora había cogido en la red
peces del lago, en adelante pescará
hombres para e l re ino
de Dios .
Los encerrará como con una llave. ¿Se insinúan
aquí las palabras acerca de la llave del reino de los cielos,
que un día recibirá Pedro? La palabra promete, llama y
va acompañada de poderes.
El llamamiento de Jesús obra con autoridad. Jesús
llama a los que quiere y los constituye en lo que él quiere.
152
apropiarse su palabra, su doctrina y su forma de vida. Lo
que desde ahora llena su vida es Jesús, el reino de Dios,
la pesca de hombres. Simón vivió en Jesús la epifanía de
Dios, se reconoció pecador y recibió la vocación para la
obra salvadora. El tiempo de salvación ha comenzado:
conocimiento de la salvación mediante el perdón de los
pecados (1,77). La soberanía de Dios se revela en la aco
gida de los pecadores.
El comienzo de la actividad en Galilea está consagra
do a
Simón Pedro.
Jesús se ha visto repudiado por la ciu
dad de sus padres, pero en los límites de la tierra de Gali
lea lo acoge Pedro y se le adhiere. La expulsión del
demonio en la sinagoga, la curación de la suegra, los nume
rosos milagros al atardecer delante de su casa tienen
remate y coronamiento en la pesca milagrosa. Los lugares
de su vida pasada, en los que había orado, había vivido
con su familia, había trabajado, son ahora, mediante los
hechos salvíficos de Dios, liberados de su miseria, dé la
influencia del diablo, de la enfermedad y de la pena, del
fracaso. Ahora se ve Pedro segregado de todo lo anterior
y en adelante será pescador de hombres para el reino de
Dios, al servicio de Jesús y de su palabra poderosa.
153
2.
OBRAS
"DE
PODER
(5,12-5,39).
a ) Curación del leproso (5,12-16).
12
E s tab a
él en una
c i ud ad
y
había al l í
un
hombre
misericordia . Tocándolo
lo
introduce
en su
comunióhy
en
la comunión con los hombres, en la comunión con Dios.
Se apropia las palabras de la súplica y se identifica con la
solicitud del leproso. Su voluntad lo limpia de la lepra y
con ello
lo
restituye
a la
comunión
con
Dios
y al
culto.
Por
la
palabra
de
Jesús queda limpio
el
leproso
y es
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 78/190
cubierto de lepra. Al ver éste a J esús , se postró ante él y
l e supl icó: Señor, si quieres , puedes dejarme l impio.
13
Y
extendiendo él la m a n o , lo tocó, d ic iéndole: Qu iero, qu eda
l impio.
E
inmediatamente
la
lepra desapareció
de él.
Jesús actúa
en una de las
ciudades
que
visita
en su
viaje
de
misión (4,44).
El
leproso
se le
presenta
en una
ciudad.
Los
leprosos
no
debían acercarse
a las
c iudades.
«El leproso, manchado de lepra, llevará rasgadas sus ves
tiduras, desnuda la cabeza, y cubrirá su barba , e irá cla
mando : ¡ Inmundo , Inmundo Todo el t iempo que le dure
la lepra será inmundo.
Es
impuro
y
habitará solo; fuera
del campamento tendrá su morada» (Lev 13,45s). Estaba
cubierto de lepra: así lo hace constar Lucas, el médico.
La lepra era incurable. El que se veía atacado por la en
fermedad, era tenido por muerto.
El pobre hombre , en medio de su aflicción, no se
cuida de la ley, del ostracismo a que está condenado ni
de
la
amarga experiencia
de la
incurabilidad.
El
poder
de
Jesús significa para
él más que la ley y que la
muerte .
Postrándose confiesa
su
miseria,
con su
súplica expresa
su confianza. Hace
su
profesión
de fe:
cree
que en
Jesús
actúa
la
fuerza
de
Dios. Puedes dejarme l impio. Implora
la compasión de Jesús : Si quieres . . . Jesús es la esperan
za de su vida. De su voluntad depende su existencia: en
comunión con Dios, con los hombres, en la v ida . . .
Jesús obra
con
compasión. Ext iende la m a n o y lo toca,
con
lo
cual pasa
por
encima
de la ley,
pero practica
la
154
declarado
tal.
Jesús posee
el
poder
del
profeta Eliseo,
que curó
al
leproso Naamán; posee también
la
autoridad
de
los
sacerdotes
de
Israel
que
declaran limpios
a los le
prosos. Jesús
les es
superior , puesto
que su
sola palabra
limpia y declara limpio.
14
E n t o n c e s le m and ó que a nad i e lo di jera, s ino: Ve
a presentarte al sacerdote y a ofrecer por tu puri f icación,
s e g ú n lo man dó M oisés, para que les s irva de test imonio.
15
Pero
su
fama
se
ex tendía cada
día más, y
num erosas
mult i tudes acudían para oír lo y para ser curad as de sus
enfermedades.
16
Él,
sin
em b argo ,
se
quedaba ret irado
en
los des iertos y oraba.
Jesús
no
hace
los
milagros
con
fines lucrativos
ni
bus
cando
la
propia gloria. «Pasó haciendo
el
bien
y
sanando
a todos
los
oprimidos
por el
diablo, porque Dios estaba
con
él» (Act
10,38).
Según prescribía la ley, el leproso sanado debía pre
sentarse al sacerdote para ser declarado limpio (Lev 13,49)
y ofrecer
el
sacrificio
por la
purificación
(Lev
14,1-32).
Jesús quiere que se cumpla la ley; él mismo era obediente
a la ley. Los sacerdotes tenían que recibir un testimonio
de que se había iniciado el t iempo de la salvación, puesto
qu e el profeta había anunciado que el tiempo de la salud
aportaría curación
de las
enfermedades
49
.
Vi .
U 35,5 (cf.
61,1J .
155
La fama de Jesús y de su acción salvífica se va exten
diendo cada vez más. Jesús prohibió hablar al leproso,
lo cual no impidió que se propagara la noticia. La pala
bra lleva en sí una fuerza que la mueve a extenderse pro
gresivamente. Atrae a multitudes de pueblo cada vez ma
yores, que quieren participar de la palabra y de la obra
dio,
delante de Jesús.
20
Cuando
él v io
la fe
de aque l los
hombres , di jo: Hombre , perdonados t e son tus pecados .
Jesús ejerce su actividad en una casa. La multitud está
tan apiñada, que no es posible pasar por la puerta para
llegar a Jesús. Se descubre el terrado y por la abertura
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 79/190
salvadora de Jesús.
Jesús se retira a la soledad, a orar. Su acción procede
de la comunión con su Padre en la oración. Jesús actúa
porque Dios está con él (Act 10,38). Su comunión en la
oración remite a una comunión más profunda.
b)
Perdón de los pecados (5,17-26).
17
Un día , mientras é l enseñaba, e s taban a l l í s en tados
unos far iseos y doc tores de la ley , que habían ven ido de
todas las a ldeas de Gal i lea y de Judea, y de Jerusa lén .
Y una fuerza del Señor le asist ía para curar.
Enseñar y curar es actividad de Jesús que proviene de
la fuerza de Dios. La fama de la enseñanza y de las cu
raciones se propagó por toda Palestina, llegando a todas
y cada una de las aldeas; los fariseos y los doctores de la
ley, que se hallan por todo el país, polemizan con él. An
tes de que Jesús en persona haga este camino: Galilea,
Judea, Jerusalén, le ha precedido ya su fama. Ha alarma
do ya a los que al término de este camino lo condenarán.
18
En tonces unos hombres , que t ra ían en una ca mil la a
uno que es taba para l í t ico , t ra taban de in troduc ir lo y po
ner lo de lante de é l .
19
Y n o enco ntrando por dónde in tro
duc ir lo por causa de la mult i tud, subieron a l t errado y ,
por en tre las t e jas , lo pus ieron , con su camil la , a l l í en me-
156
se introduce a un enfermo. Las casas de Palestina tenían
un techo plano, un terrado que se podía perforar (Me 2,4).
Lucas habla de
tejas.
Piensa en una casa griega.
Jesús está presente en su Iglesia como Señor que fue
exaltado y vive como tal. Pero al mismo tiempo vive tam
bién en el recuerdo de la Iglesia la imagen del Jesús
que vivió en la tierra. ¿Cómo podemos pensar al Cristo que
vive cerca del Padre? ¿Cómo podemos imaginárnoslo?
Desde luego, tal como vivía y obraba en la tierra. La ima
gen de Jesús se nos hace más accesible si él se nos pre
senta en un mundo que nosotros comprendemos, en el que
nosotros vivimos: Lucas lo situó en el mundo griego.. .
Al paralítico le son
perdonados los pecados .
La pala
bra con que se declaraba el perdón lo causaba también,
puesto que en Jesús obra la fuerza del Señor. Jesús le per
dona cuando ve su fe. Los hombres habían puesto toda
su esperanza en Jesús; creían que su proximidad causaría
la curación del paralítico. Los particulares son incorpora
dos a la comunidad; la comunidad los sostiene. Se aguar
daba la curación del cuerpo, y se recibió la curación de
los pecados. Según las ideas judías, la curación del cuerpo
dependía de la purificación de la culpa. ¿Acaso pensaba
Lucas en esto? Jesús cura todos los males del hombre.
La enfermedad y los pecados.
21
Y los e scr ibas y los fariseos c omenzaron a pen sar:
Pero ¿quién es és te , que es tá dic iendo blas femias? ¿Quién
puede perdonar pecados , s ino Dios so lo?
157
Quien se arroga derechos de Dios, blas fema contra Dios .
Sólo Dios tiene el derecho y el poder de perdonar los
pecados. El pecado se comete contra Dios; así también
sólo él puede perdonarlo. El razonamiento era correcto.
¿Pero no habrían debido también considerar si Dios no
puede conferir este poder a aquel a quien ha de conferir
que Dios ha comunicado todo poder
5 0
. Jesús es profeta que
tiene conocimiento de los corazones y poder para curar
a los enfermos; pero es más que profeta, porque posee
el poder de perdonar los pecados, porque es Hijo del
hombre , a l que se ha dado todo poder .
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 80/190
todo poder?
¿Quién es éste? La pregunta encierra ya la negativa.
Es una pregunta despectiva. Este Jesús no puede tener el
poder de perdonar pecados. No se plantea la cuestión de
la misión de Jesús, y ni siquiera se piensa en la posibili
dad de que Dios hubiera podido transmitir este poder a
Jesús. La posición de los nazarenos reaparece en los fa
riseos y en los doctores de la ley. Sólo la fe en la misión
divina puede reconocer a Jesús el poder de perdonar los
pecados. La apariencia humana no debe ser obstáculo
para esta fe.
22
Pero , cono c iendo Jesús los pensamientos de aquél los ,
le s respondió: ¿Qué es lo que es táis pensando en vues
tro corazón?
23
¿Qué es más fácil decir: Perdon ados te
son tus pecados , o dec ir: Levántate y anda?
u
Pues para
que sepáis que e l Hijo de l hombre t iene poder en la t ierra
para perdonar pecados
—
dijo a l para l í t ico
— :
Yo te lo
mando; levántate , toma tu camil la y ve te a tu casa .
Jesús tiene poder para perdonar los pecados. Dios le
ha dado participación en su poder. Dios tiene el poder de
conocer los corazones. Conoce las reflexiones de sus ad
versarios. Esto es poder divino. Tiene el poder de curar a
los enfermos, que en este caso es lo más difícil, puesto
que la curación puede comprobarse. El que puede lo más
difícil, mejor podrá lo más fácil. Él tiene el poder de
perdonar los pecados, porque es Hijo del hombre, al
158
25
E inmediatamente se levantó de lante de e l los , tomó
el lecho e n que había es tado tendido y se marchó a . su
casa , g lor i f icando a Dios .
26
Todos quedaron como fuera
de s í y g lor i ficaban a Dios , y l lenos de t emor exc lamaban:
¡Hoy hemos v is to cosas incre íbles
En las acciones del que ha sido curado se demuestra su
alegría por la curación. Todo lo que hace va acompañado
de la
g lor i f icac ión de Dios .
La acción de Jesús se inspira
siempre en la glorificación de su padre. «Yo te he glo
rificado sobre la tierra, llevando a término la obra que
me habías encomendado que hiciera» (Jn 17,4).
Todos los testigos del milagro están impresionados
hasta lo más hondo de su alma. Están fuera de sí, penetra
dos de temor, de asombro. También la emoción del alma
suscita glorificación de Dios. Los grandes hechos de Dios
en la historia de la salud van a parar en la
g lor i f icac ión
de Dios .
Dios se glorifica en ellos.
El día en que sucedió lo increíble, que rebasa todas
las expectativas, aparece aquí como algo singular. ¿Qué
día es este hoy? «Hoy ha experimentado la salvación todo
el pueblo.» Hoy se ha realizado el pasaje de la Escritura
relativo al salvador que está ungido con el Espíritu. Hoy
ha sucedido algo increíble, inaudito. Se ha iniciado el
tiempo de salvación. ¿Pero ve esto el pueblo?
50. Cf . Dan 7,13 ; Le 10,22.
159
c ) Vocación de un publicano (5,27-39).
27
Después de esto, sa l ió y v io a un pu bl icano , l lamado
Leví, en su despacho de cobrador de impuestos , y le d i jo:
S i gúem e .
28
Y éste , dejándolo todo, se levantó y lo s iguió.
¿De qué espíritu deben estar penetrados los discípulos
de Jesús? ¿Qué debe notarse en los apóstoles? ¿Qué en los
cristianos que han percibido el llamamiento de Jesús? La
mirada retrospectiva al tiempo de salvación que ocupa el
punto medio de los tiempos, da a la Iglesia la orientación
en su camino. En la divisoria entre la vida antigua y la
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 81/190
La narración de nuevos actos de poder vuelve a ce
rrarse con la vocación de un discípulo. Esta vez es el lla
mado un publicano. Éstos eran odiados por su trato con
los gentiles, por su arbitrariedad y su codicia. Se los tenía
por pecadores públicos, a los que se debía evitar . Sin em
bargo, Jesús llama para discípulo suyo a uno de esos pu
blícanos; lo llama a seguirle de su despacho, del ejercicio
de su ocupación impura. Al paralítico pecador da Jesús
la curación, al publicano pecador le da la vocación como
discípulo El pecado no es ya una barrera que se oponga
a la salvación. El que aporta la salvación perdona los pe
cados a fin de que ésta pueda recibirse.
La mirada de Jesús y la palabra que l lama son tan
poderosas que el publicano abandona todo lo que posee,
a lo que había servido hasta ahora y a lo que había su
cumbido, y se hace discípulo de Jesús. El cambio radical
de vida es consecuencia del llamamiento de Jesús.
29
E n tonces Lev í l e d i o un gran b anq ue te en su casa;
y as is t ía gran número de publ ícanos y otros más, que esta
b an a l a m esa con e l l o s .
30
Los far i s eos y su s e scr i b as m ur
muraban y decían a los discípulos: ¿Por qué coméis y
b eb é i s con l o s p ub l í canos y p ecad ores?
31
Y J esús l e s con
testó: No neces i tan médico los sanos, s ino los enfermos;
32
no h e ven i d o a l l am ar a l o s ju s to s , s i no a l o s p ecad ores ,
p ara q ue s e conv i er tan .
160
nueva da Leví una gran recep c i ó n . El banquete se celebra
en honor de Jesús. Están invitados Jesús, sus discípulos
y los amigos de Leví: sus colegas y otros que tienen igual
mente trato con publícanos. En las conversaciones que se
tienen durante el banquete se ve cómo se ha de entender
la condición de discípulo de Jesús. Lucas gusta de presen
tar a Jesús como invitado en el banquete
5 1
. En la litera
tura griega se designan como symposion (conversación
durante la comida) diálogos de profundo sentido. A Jesús
se le sitúa en el mundo griego. Los Evangelios son histo
ria, pero a la vez historia «deshistoricizada». En ellos
habla a su comunidad el Señor exaltado. A través de lo
único e irrepetible que tiene lugar en el tiempo reconoce
la Iglesia lo que tiene vigencia para siempre y en todas
partes .
Los fariseos y los escribas de espíritu farisaico mur
muran. Sentarse a la mesa con pecadores, con gentes nada
honorables, con transgresores de la ley, es, a juicio de
los fariseos, algo que viola el orden legal. Los fariseos, los
íntegros querían conservar santo al pueblo apartándolo
de todo lo que no es santo. Para esto les servía la rigurosa
aplicación de las leyes de pureza. Lo que en la ley sólo
obligaba a los sacerdotes en funciones, se extendió al pue
blo entero. La misma finalidad persiguen los fariseos man
teniéndose alejados de los pecadores públicos. Jesús sigue
un camino diferente: no la exclusión y el alejamiento,
51 . Le 7 ,36ss; 13,38ss; 14, lss; 19, lss ; 24 ,29ss .
161
NT, Le I , 11
sino la curac ión de lo que es pecaminoso. Por esto es nece
sario el trato en común con los pecadores. Jesús no exclu
ye de la salvación a los pecadores, sino que va en su bus
ca, no les impide que reciban la salvación, sino que se la
ofrece y trata de ganarlos.
Jesús sigue el método del
médico .
Si un médico quisie
bebiendo.
34
En tonces Jesús le s respondió: ¿Aca so podéis
obl igar a que ayunen los inv i tados a bodas mientras e l e s
poso es tá con e l los?
35
Tiempo l legará en que le s será
arrebatado e l e sposo , y en tonces , en aque l los días , ayunarán.
Jesús y sus discípulos toman parte en banquetes . Los
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 82/190
ra ocuparse de los sanos y apartarse de los enfermos, en
tonces no habría entendido su profesión. Lo mismo puede
decirse de Jesús. Su misión es la de salvar, la curación
de las dolencias del cuerpo, pero todavía más la salud me
diante el perdón de los pecados. El tiempo de la salud
es el tiempo de la misericordia con todos los pobres, los
que están lastimados y abatidos. Ahora bien, el presu
puesto para salvarse es la conversión. Jesús vino a
l lamar
los pecadores a convers ión .
La
sant i f icac ión de los disc ípu los
no consiste en que
se aparten de los pecadores, sino en ofrecer la salvación
a todos, sean justos o pecadores, no en la preocupación
llena de inquietud por la propia salvación, sino en el amor
que se atreve a todo.
L a
murmurac ión
de los fariseos somete a crítica huma
na la acción de Dios en Jesús. Sus adversarios estiman
el proceder de Jesús conforme a sus propios criterios.
Desconocen que Jesús ha sido enviado por Dios, que ha
venido a buscar y llamar a los pecadores, no a los justos.
Sólo la fe en que Dios habla y obra en Jesús puede supri
mir el escándalo. Porque Jesús obra en forma nueva, in
creíblemente paradójica. Los fariseos no pueden compren
derlo,
porqué no reconocen que con él se ha iniciado el
tiempo de salvación.
33
En tonces le di jeron: Los disc ípu los de Juan ayunan
con frecuenc ia y hacen orac ión; igua lmente también los
de los far iseos . Pero los tuyos se lo pasan comiendo y
162
fariseos y los escribas ejercen crítica. Ésta va en primer
lugar contra los discípulos, pero en último término contra
Jesús mismo. Los que se sienten responsables de la santi
dad del pueblo, Juan Bautista y los fariseos,
a y u n a n c o n
frecuenc ia y hacen orac ión .
Estas dos cosas van de la
mano. Los días de fiesta son días de oración; en efecto,
el ayuno sirve de base a la oración. El ayuno empequeñece;
Dios escucha a los menesterosos y a los pequeños. ¿Por
qué no ayunan los discípulos de Jesús? ¿Por qué no se
atiene Jesús a nuevos ayunos y a nuevas oraciones?
Los fariseos desconocen la importancia de la hora que
acaba de sonar . Aquí hay algo nuevo. Esto nuevo vive
conforme a reglas nuevas. Estamos en t iempo de boda:
no va a convertirse en t iempo de ayuno. . . A nadie se le
ocurre obligar a ayunar a los
invitados a bodas.. .
El tiem
po de salvación que se ha iniciado, lo compara Jesús con
tiempo de bodas y tiempo de alegría. Ha llegado el sus
pirado y apacible año del Señor. En este tiempo son más
propios los banquetes que los ayunos.
Así pues, ¿no está en contradicción con este tiempo de
alegría que ayunen los discípulos de Cristo y los cristia
nos?
En aque l los días ayunarán.
Los discípulos ayunan
en memoria de la muerte del Señor. Cuando se les quite
violentamente el esposo, entonces ayunarán en señal de
luto. Cristo alude a su muerte violenta. En su calidad
de Mesías es el esposo. En aquellos días ayunarán los discí
pulos,
no sólo el día en que se les sea arrebatado Jesús,
sino durante todo el tiempo en que ya no habite visible-
163
mente entre ellos, en el tiempo que se extenderá desde
la «elevación» de Jesús hasta su segunda manifestación.
Este tiempo está marcado por la alegría, porque la salva
ción ha llegado ya. Pero al mismo tiempo está marcado
por la tristeza, porque Jesús ya no está visiblemente pre
sente, sino que es esperado.
cas religiosas externas. Lo nuevo que anuncia Jesús no
consiste simplemente en verter o en echar un remiendo
de algo nuevo en lo viejo. Los tiempos mesiánicos son
algo nuevo, nunca oído son un nuevo nacimiento, presu
ponen en el hombre vuelta atrás, conversión, modificación
total del modo de pensar. Por ello no puede tratarse sim
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 83/190
En el comportamiento de los adversarios se deja notar
ya que Jesús será arrebatado con violencia a sus discípu
los.
En un principio sus adversarios piensan desfavorable
mente de él, luego lo critican abiertamente porq ue — d i
cen — está m inando la devoción y la disciplina; en cuanto
al futuro, aparece ya claro que Jesús será descartado con
violencia. La repulsa comienza con pensamientos, luego
pasa a las palabras para terminar en obras . . .
36
Les dec ía también un a parábola: Nadie corta un tro
zo d e un ve s t i d o nuevo p ara ech ar un rem i end o en un
vest ido v iejo: en ta l caso, rompería e l nuevo, y a l v ie jo
no l e i r ía b i en e l r em i end o sacad o d e l nuevo .
37
T am p oco
ech a nad i e v i no nuevo en od res v i e jo s ; en ta l caso , e l v i no
nuevo reventaría los odres y se derramaría, y los odres
se echarían a perder.
38
H ay q ue ech ar e l v ino n uevo en
od res nuevos .
39
Y n ad i e q ue h ay a p rob ad o e l v i no v i e jo
quiere e l nuevo; porque dice: El v ie jo es mejor.
¿Qué es lo que distingue a los discípulos de Jesús?
Los fariseos y sus escribas pensaban que la renovación
religiosa consistía en separarse rigurosamente de todo lo
que es impuro, en nuevas prácticas religiosas: ayunos
y oraciones. A las antiguas prácticas religiosas había que
añadir otras nuevas. Jesús piensa de otra manera. Tales
métodos no tienen valor. Esto se muestra gráficamente
en la parábola del remiendo y del vino en los odres. De
ben renovarse las actitudes interiores, no sólo las prácti-
164
plemente de añadir a lo antiguo algunas prescripciones y
prácticas nuevas.
Los judíos están acostumbrados a lo antiguo, Jesús
trae algo nuevo. Nadie
q ue h ay a p rob ad o e l v i no v i e jo
quiere el nuevo. La palabra de Jesús encierra una cierta
melancolía. Nada es tan difícil como la verdadera conver
sión, la transformación interior. Lo antiguo es más có
modo. Jesús exige desprendimiento de uno mismo. Los
discípulos lo abandonaron todo: éste es el distintivo de
la verdadera condición de discípulo. El publicano lo hizo.
El banquete que se celebra es ciertamente cosa más gran
de que el ayuno de los fariseos. Es despedida de lo anti
guo y comienzo de lo absolutamente nuevo.
3.
PALABRA
D E
AUTORIDAD
(6,1-19).
a ) Arran car espigas en sábado (6,1-5).
1
U n sá b ad o i b a é l a t ravesan d o un cam p o d e m i ese s ,
y su s d i s c íp u l os arrancab an e sp i gas y , d esgraná nd o l as en
t re l a s m anos , s e l a s com ían .
2
Algun os fariseos les d i jeron:
¿Por qué hacé is lo que no está permit ido en sábado?
Los pobres podían coger espigas de los campos si te
nían hambre. «Si entras en la mies de tu prójimo, podrás
coger unas espigas con la mano» (Dt 23,25). Las espigas
se frotan y se desgranan con las manos, y luego se comen
165
los granos que quedan. Algunos fariseos vieron esto y
llamaron la atención a los discípulos. Según su interpre
tación de la ley, era esto infringir el reposo sabático.
Coger espigas se contaba entre las faenas de la reco
l ecc i ó n , y éstas se incluían entre los veintinueve trabajos
principales, que a su vez se subdividían en trabajos sub
alternos, todos los cuales infringían el reposo sabático. Si
panes ofrecidos a Dios, eran en número de doce y perma
necían durante una semana sobre una mesa en el santuario
del templo como ofer ta presentada a Dios. Nadie podía
comerlos fuera de los sacerdotes, una vez terminada la se
mana. Sin embargo, David y sus compañeros los comieron
una vez que tenían hambre y no había otro pan a su alcance.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 84/190
se trabaja en sábado inadvertidamente, entonces hay que
advertir al transgresor que debe ofrecer un sacrificio de ex
piación. En cambio, si el reposo sabático se infringe, pese
a la presencia de testigos y a aviso previo, entonces la trans
gresión se paga con lapidación. En nuestro caso se dirige
el aviso inmediatamente a los discípulos, pero en realidad
se aplica a Jesús.
3
E n tonce s J e sús l e s r e spond i ó : ¿ E s q ue n i s i q u i era h a
bé is le ído lo que hizo David, cuand o tuvo h am b re é l y l o s
q ue e s tab an con é l :
4
que entró en la casa de Dios y , to
m and o l o s p anes o j rec i d os a D i os , l o s q ue só l o a l o s sacer
dotes es l íc i to comer, comió de e l los y los repart ió también
en tre su s com p añ eros?
La tradición de los conflictos sabáticos tenía la máxima
importancia para las comunidades cristianas que comenza
ban a celebrar el domingo como día de descanso en lugar
del sábado. Esta transformación se había consumado ya
cuando san Lucas escribía su Evangelio. Para él eran im
portantes los motivos en que se fundaba la nueva idea de la
ley del sábado. Estos motivos muestran la autoridad de
Jesús que con su palabra proclama la voluntad de Dios,
Jesús conoce el método dialéctico de las disputas en
las escuelas judías y responde con una contrapregunta. Al
hacerlo se remite a la Escritura (ISam 21,1-7), autoridad
reconocida y suprema. Los panes «de la proposición», los
166
Con todo, nadie reprochó esto a David, ni el sacerdote
Abimelec, que dio el pan a David, ni los escribas y doctores
de la ley. Por consiguiente, la necesidad excusa la transgre
sión de la ley. Los discípulos no violan, por tanto, la ley
al frotar y desgranar espigas el sábado porque tienen ham
bre.
En la interpretación de la ley no se ha de atender
sólo a la letra de la ley, sino a la vo l un tad d e D i os . Ahora
bien, Dios no dio la ley del culto para afligir a los hombres.
La compasión con los hombres le importa más que la obser
vancia de la ley cultual. El sábado no ha de impedir que se
preste ayuda al necesitado. Dios quiere misericordia, no
sacrificios (Mt 12,5-7).
5
Y añadió: Señor del sábado es e l Hijo del hombre.
Jesús,
en su calidad de Hijo del hombre, al que ha sido
dado por Dios todo poder, tiene también el poder de dis
poner del reposo sabático y de su interpretación. Interviene
en la esfera más sagrada de Dios, en el derecho de Dios a
perdonar pecados, en el reposo sabático, que es figura del
descanso de Dios después de la creación (Gen 2,2s), en el
ámbito de su glorificación, en el culto divino.. . Hace uso de
su autoridad para librar a los hombres de su aflicción. Dios
deja que por medio de Jesús se intervenga en su esfera más
sagrada, porque se ha iniciado el tiempo de salvación, que
es tiempo de misericordia para los hombres. «En la tierra
paz entre los hombres, objeto de su amor.»
167
b)
Curación
en sábado 6,6-11).
6
Otro sábado entró en la s inagoga y se puso a enseñar .
Y había a l l í un hombre cuya mano derecha es taba seca .
7
Los escr ibas y los far iseos lo e spiaban para ver s i lo cu
raba en sábado y encontrar de qué acusar lo .
o de condenación. Aquí aparecerá un nuevo principio de
interpretación de la ley: lo que ha de decidir no es ya la
ley, sino el hombre afectado por la ley. Se sitúa en el centro
al hombre, no la letra de la ley. En la cuestión del sábado
se trata del hombre, de su salvación o de su ruina.
9
En tonces le s di jo Jesús: Yo os voy a preguntar: ¿Es
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 85/190
Lucas procura dar datos exactos: era
otro sábado;
Jesús enseñaba en la sinagoga; la mano derecha estaba
seca; los que lo observaban eran los fariseos y los escribas.
Jesús actúa en una hora única en la historia
de
la salva
ción, en tiempo y lugar determinados, en circunstancias
concretas. La mirada retrospectiva al punto medio de la
historia de la salvación es decisiva para la vida cristiana.
La vida de Jesús y su palabra histórica ordenan la vida y
el tiempo de la Iglesia hasta su segunda manifestación.
La interpretación farisea de la ley sólo permitía curar
en sábado cuando había peligro inminente de muerte. La
mano seca no representa un peligro inminente de muerte.
¿Qué hará Jesús al ver la aflicción de este hombre? Sus
adversarios intensifican la hostilidad del comportamiento.
En el primer conflicto sabático observan sólo como casual
mente que los discípulos infringen la ley, ahora
espían
a
Jesús para ver si pueden cogerle en infracción para llevarlo
ante los tribunales. ¿Qué decisión tomará Jesús en esta
situación en que se ve amenazado?
8
Pero é l , que le s conocía los pensamientos , di jo a l hom
bre que t en ía la mano seca: Levántate y ponte ahí en medio ,
y és te se levantó y se puso
allí.
El enfermo está ahora
en medio de e l los ,
como un acu
sado ante el tribunal, en espera de sentencia de absolución
168
l í c i to en sábado hacer bien o hacer mal; sa lvar una v ida
o dejarla perder?
La cuestión se plantea en presencia del hombre que está
en medio de todos con su dolencia y su ansia de curación.
El caso particular es subordinado a una cuestión de prin
cipio: ¿Es lícito en sábado
hacer bien
o es necesario
hacer
mal?
La omisión del bien es un mal.
¿Quién querrá decir que la ley del sábado prohiba que
se haga el bien y exija que se haga el mal? El sábado es
para los judíos, no sólo día de reposo, sino también día
destinado a hacer bien y día de alegría. La comida de
día de fiesta, el estudio de la ley y la práctica del bien lo
convierten en día de fiesta y de alegría. Para viajeros nece
sitados había que tener comida preparada . ¿Habría que
olvidar todo esto? Jesús vuelve a restablecer el verdadero
sentido del sábado. Ha de ser un día en el que se disfrute
y se proporcione alegría a los demás. Se realiza el sentido
del sábado haciendo bien a personas que sufren, usando mi
sericordia. «Misericordia quiero y no sacrificios» (Os 6,6).
Jesús sitúa a sus adversarios ante esta alternativa:
¿Se
ha de sa lvar
una vida
en sábado,
o se ha de dejar que se
pierda? El texto griego no habla de la vida, sino del
a lma,
que es vida y algo más: vida consciente. El hombre que
está en medio quiere vivir , vivir sano, no sólo vegetar,
quiere sentir gozo de vivir . ¿Es esto posible a un hombre
que tiene seca la mano derecha, que no
puede
trabajar y
169
tiene que vivir de la ayuda ajena? El reposo sabático se
explica por la comparación con el reposo de Dios una vez
terminada la obra de la creación: «Acuérdate del día del
sábado para santificarlo. Seis días trabajarás y harás tus
obras, pero el séptimo día es día de descanso, consagrado
a Yahveh, tu Dios, y no harás en él trabajo alguno» (Éx
de todas las cosas de que habló Dios por boca de sus san
tos profetas desde antiguo» (Act 3,21). Mediante la curación
muestra Jesús que le está permitido restaurar el sentido del
sábado según la mente de Dios, ya que él mismo aporta la
restauración de todas las cosas. El sábado es figura del gran
reposo sabático de Dios (Heb 4,8ss), que se iniciará cuando
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 86/190
20,8ss). Pero el descanso de Dios no consiste en no hacer
nada, sino en vivir la obra, en gozar de ella. «Dios se gozó
en su obra» (Sal 104,31). El sábado es día en que se vive la
vida, en que se goza de la obra, día de glorificación de
Dios. ¿No se ha de restablecer mediante la curación este
sentido más profundo del sábado? ¿En vez de la vida ha
bría que elegir la ruina?
10
Y mirando en derredor a todos e l los , di jo a l hombre:
Ext iende tu mano. Él lo hizo , y la mano se le quedó sana.
11
Pero ello s, l leno s de furia, disc utían entre s i qué podrían
hacer contra Jesús .
La mirada de Jesús gira en su derredor. Alcanza a
todos y a cada uno . *Ni uno siquiera respond e. N o querían
reconocer su error y su sinrazón ni podían sustraerse a la
sabiduría de Jesús. La idea que tenían de Dios les dictaba
la autoridad de la letra de la ley, mientras que Jesús pro
clamaba la voluntad de Dios. Jesús tiene una idea de Dios
distinta de la suya. Su Dios es el Dios de la misericordia,
el Dios que se acerca a los hombres; el Dios de ellos es el
inaccesible, que está sencillamente por encima de los hom
bres.
Se ha iniciado ya el apetecido y apacible año del
Señor, y Dios visita a su pueblo por medio de Jesús.
La m a no
vo lv ió a quedar sana .
La restauración del uni
verso forma parte del cuadro de los t iempos mesiánicos. Lo
que ahora comienza será llevado a perfección. «El cielo
debe retener (a Jesús) hasta los tiempos de la restauración
170
sean restauradas todas las cosas y todo haya alcanzado su
acabada perfección.
El odio impide pensar y reflexionar con lucidez. Los
adversarios,
c iegos de fur ia ,
quieren impedir la acción
de Jesús. Discuten entre sí qué pueden hacer para acabar
con Jesús. ¿Quién puede levantarse contra el poder y la
fuerza del espíritu de Dios? Los adversarios, por no creer,
caen en ceguera.
c )
Vocación de los doce (6,12-19).
12
Por aque l los días , sa l ió é l hac ia e l monte para orar y
pasó la noche en orac ión ante Dios .
El relato de las obras de poder de Jesús se cierra de
nuevo con un llamamiento. Los adversarios quieren acabar
con Jesús. Sin embargo, su obra ha de perdurar . Él mismo
se cuida en estos días de que no perezca su obra, para lo
cual elige a los doce apóstoles. Prepara la gran hora con
oración a Dios. Ora
en e l monte ,
separado de los hombres,
solitario, cerca de Dios. Su oración se prolonga toda la
noche . La s t inieblas cubren el mun do, tod o desaparece ante
la grandeza de Dios. Dios ocupa el centro de su oración.
13
Cuando se hizo de día , llamó junto a s í a sus
discí
pulos y e scog ió de en tre e l los a doce , a los cua les dio e l
nombre de apóstoles:. . .
171
La oración lo ha unido con Dios. La voluntad de Dios
es su voluntad. La elección con los apóstoles la lleva a
cabo conforme a la voluntad de Dios. Entre el grupo de dis
cípulos que le han seguido, elige a
do c e .
El número de
doce responde al número de los patriarcas del pueblo de la
alianza del Antiguo Testamento. Aparece un nuevo pueblo
de Dios.
quieren indicar cierta organización en el colegio apostó
lico;
tres secciones, cada una de cuatro apóstoles.
La lista de Lucas está marcada por
rasgos espec ia les .
Pone en cabeza el grupo de los tres discípulos cuya elec
ción ha narrado antes (5,1-11). Presenta a Andrés como
hermano de Simón (Mt 10,2). Al otro Simón se le da el
apelativo de Zelota, seguramente porque pertenecía al par
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 87/190
Jesús los llama
após to les ,
enviados. A ellos se les apli
ca el principio jurídico judío: El enviado de una persona
es como ella misma (Jn 13,16). Los dice han de ser los re
presentantes jurídicos y personales de Jesús.
La organización de la primitiva Iglesia cristiana se re
monta a Jesús. Los miembros de la comunidad son los dis
cípulos. Sobre ellos están los doce. El primer cuadro de la
Iglesia lo traza Lucas con las palabras siguientes: «Entra
ron (en Jerusalén) y subieron a la habitación donde solían
parar Pedro y Juan (sigue la lista de los apóstoles). . . Todos
ellos perseveraban unánimes en la oración con algunas mu
jeres, con María, la madre de Jesús, y con los hermanos de
éste» (Act l ,13s).
14
Simón, a l que también llamó Pe dro, Andrés, su her
m a n o ,
Sant iago , Juan, Fe l ipe , Barto lomé,
15
Mateo , Tomás,
Sant iago de Aljeo , Simón l lamado e l Ze lo ta ,
i e
Judas de
Santiago y Judas Iscariote, e l que fue traidor.
Las listas de los apóstoles
5 2
tienen rasgos comunes.
Siempre va en cabeza Pedro, y Judas Iscariote, al fin. El
primero, quinto y noveno lugar lo ocupan siempre los mis
mos nombres; Simón, Felipe y Santiago de Alfeo. Dentro
de los grupos así formados se repiten siempre los mismos
nombres, aunque en distinto orden. Parece ser que las listas
52 . 111 10,2-4; Me 3.16-19; Act 1,13.
172
tido de los Zelotas, que profesaban un fanático nacionalismo
judío y querían establecer por la fuerza el reino de Dios.
En el tercer grupo se designa a Santiago como hijo de Al-
feo. A Judas Iscariote (el hombre de Cariot) se le llama
traidor. Poco se nos dice de la procedencia, carácter y pre
cedentes de estos hombres. Lo más importante no son los
datos biográficos, sino la elección y llamamiento por Jesús
y su destino de ser los patriarcas del nuevo pueblo de
Dios y los representantes de Jesús.
17
Cuan do bajó con e l los , se de tuvo en una explanada,
donde había un grupoMumeroso de disc ípu los suyos , y una
gran mult i tud de pueblo , de toda Judea y Jerusa lén , y de l
litoral de Tiro y de Sidón,
18
los cua les habían l legado a l l í
para o ír lo y quedar sanos de sus en fermedades; igua lmente
los a tormentados por espíri tus impuros que daban curados .
K
Todo e l pueblo quer ía toca r lo , porque sa l ía de é l una
fuerza que daba la sa lud a todos .
Como Moisés , también Jesús baja del monte, de la co
munión con Dios, al pueblo. Dios está con él. En torno a
Jesús están reunidos los apóstoles, los discípulos, el pueblo,
tres círculos que se forman alrededor de Jesús. El centro
lo forma Jesús, de él irradia fuerza, él está ungido con el
Espíritu. Quien está en contacto con estos círculos, y por
ellos con Jesús, recibe las bendiciones del tiempo de sal
vación.
173
El territorio del que acuden a Jesús las muchedumbres
abarca toda la tierra de Judea, con Jerusalén por capital,
y la
zona costera
de Tiro y Sidón. Estas regiones no se de
signan como zonas de misión en los Hechos de los apóstoles.
Las comunidades cristianas de estas regiones las hace re
montar Lucas a Jesús mismo. La noticia de la actividad de
Jesús ha alcanzado ya a todo el país e influye más allá
1. LA NUEVA DOCTRINA
(6,20-49).
También Lucas incorporó a su Evangelio, como Mateo, un
discurso que se designa como sermón de la montana
53
. La redac
ción de Lucas contiene apenas la tercera parte de la redacción
de Mateo; del análisis literario se desprende que la redacción de
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 88/190
de los límites de Palestina.
En las profecías del Antiguo Testamento late la con
vicción de que Israel, Jerusalén y Sión son el soporte de la
salud, al que todos los pueblos acuden para recibir ley e ins
trucción, luz y gloria de Dios. En Jesús se cumple la pro
mesa. Él está ahí, y de él dimana poder de curación y de
instrucción. En torno a él se reúnen los padres del nuevo
pueblo, provistos del poder y del espíritu de Cristo; en
torno a ellos los discípulos, tocados y llamados por la pala
bra de Jesús, finalmente las muchedumbres, que son curadas
y reciben la salud si lo tocan . El Espíritu que lo ha ungido
opera en todos los que se reúnen en su derredor. Es la
imagen de la Iglesia.
PROFET PODEROSO EN OBR S Y P L BR S
6 , 2 0 - 8 , 3 )
La impresión que dejó Jesús la expresan los dos discípulos
que se encuentran con el Resucitado en el camino de Emaús:
«Jesús Nazareno... un hombre que fue profeta poderoso en obras
y palabras ante Dios y ante todo el pueblo» (24,19).
74
Lucas no es sólo un extracto del sermón de la montaña de Mateo.
Ambas se remontan a una fuente común, ambos la pusieron al
servicio de su presentación del Evangelio. Aunque Mateo refiere
cuidadosamente las palabras del Maestro, sin embargo, asimila
la palabra profética al discurso de un legislador. Lucas conservó
más pura la proclamación profética de Jesús. El curso de las
ideas es más sencillo en Lucas y presenta más cohesión. En gene
ral conserva la forma originaria y así nos ofrece un fragmento
precioso de la más antigua tradición.
a)
Bienaventuranzas y comunicaciones (6,20-26).
Jesús abarca a sus discípulos con su mirada. El discurso que
va a dirigirles se aplica a los discípulos, a todos los que le siguen.
Una hora solemne comienza, en la que se emite un anuncio pro-
fético. La salud se anuncia a los pobres, las conminaciones van
dirigidas a los ricos. Cada una de estas dos estrofas se cierra con
53 .
En la composición de su sermón de a montaña (Mt 5,17-48) muest ra
Mateo que la «justicia mayor» que se pide a los discípulos consiste esencial
mente en el amor, que halla su más acabada expresión en el amor de los
enemigos.
En seis antítesis se hace resaltar la nueva predicación de Jesús
frente a la ley del Antiguo Testamento. Le no habla ya de diferencia entre
la justicia causada por la ley y la justicia creada por Cristo; al discípulo no
se le dice ya que tiene que sobrepasar lo que se había dicho a los antiguos y
que su cumplimiento de la voluntad de Dios ha de ser más elevado que la
justicia de los fariseos. En la Iglesia emancipada de la ley judaica se pre
senta el precepto del amor de Jesús como la ley de los discípulos sin más,
sin la menor polémica contra la ley del Antiguo Testamento. La pieza prin
cipal del sermón de la montaña en Le habla sólo del amor. Ahora bien, el
precepto del amor se presenta como amor de Jos enemigos. En esto se distingue
la esencia del amor, tal como lo entiende Jesús. Es posible que en esto
quedara todavía algún resto de la polémica; en efecto, en Mt se formula el
imperativo del amor a los enemigos como antítesis frente a la f rase : «Habéi s
oído que se dijo: Amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo» (Mt 5,43).
175
una bienaventuranza, que se aplica a los discípulos, o una con
minación.
20
Y é l , l evan tando los ojos hacia sus discípulos decía:
B i enaven turad os l o s pob res , p orque vues t ro e s e l r e i no d e
D i os .
21
B i enaven turad os l o s q ue ah ora t ené i s h am b re ,
p orq ue s eré i s sac i ad os . B i enaven turad os l o s q ue ah ora
los pobres: Bienaventurados vosotros. Los felicita, y con
toda seriedad. En efecto, Dios les da lo más grande que
él mismo ha prometido y que conoce la historia de la sal
vación: el reino de Dios. Cuando Dios tome posesión de
su reino, todo estará en orden. Entonces serán saciados
los hambrientos, no con manjares de la tierra, sino con
una comida que aventajará a toda comida de la tierra. «Se
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 89/190
l loráis, porque reiréis.
Los
pobres,
lo s
hambrientos
y los
q ue l l oran
son los
mismos: los pobres y los que sufren necesidad, que en la
tierra son tenidos por los últimos. En efecto, el que es
pobre no tiene nada con que saciar su hambre; el que
es pobre, es impotente y ve cómo se halla indefenso y sin
protección. Los pobres, los hambrientos y los que lloran,
de quienes habla Jesús, no poseen bienes materiales y su
fren miseria, pero esperan en Dios, confían a Dios su mi
seria y la reciben como la suerte que les es asignada
por Dios.
Jesús les levanta los ánimos y les da su palabra de
c o n s u e l o . Israel ha experimentado en su historia que Dios
toma bajo su protección a los oprimidos y a los pobres, si
ellos ponen en él su esperanza. En el tiempo de la opre
sión en Egipto y en la cautividad de Babilonia era Israel
pobre y oprimido, y Dios se encargó de su pueblo. «Yahveh
ha consolado a su pueblo, ha tenido compasión de sus
males» (Is 49,13). Dios vuelve los ojos precisamente a los
que son pobres y miserables. «Inclina, Yahveh, tus oídos
y óyeme, porque estoy afligido y soy un menesteroso»
(Sal 86,1). Este proceder de Dios continúa también en el
tiempo de salvación anunciado por Jesús. A los pobres se
anuncia y se trae la buena nueva (4,18).
Pobreza, hambre, lágrimas por la miseria es un estado
agobiante, ;•• sin embargo, Jesús llama bienaventurados a
176
rán saciados con la contemplación de su gloria» (Sal
17,15). Los que lloran reirán, pues Dios consolará a todos
los afligidos (Is 61,2). «Cuando restaure Yahveh la suerte
de Sión, estaremos como quien sueña. Se llenará entonces de
risas nuestra boca y de alegres cantares nuestra lengua.
Dirán entonces las gentes: ¡Magníficamente ha obrado con
estos Yahv eh . . .L os que en llanto siembran, en júbilo
cosechan» (Sal 126,1-6).
El reino de Dios se promete a los pobres, porque los
pobres están abiertos a Dios, han puesto su esperanza en
la hora en que Dios tomará posesión de su reino, porque
pueden dirigir libremente la mirada a Dios, ya que no
han sucumbido a la ilusión de los que piensan que con
la propiedad y el bienestar todo está asegurado.
22
B i enaven turad os s eré is cuand o l o s hom b res o s o d i en
y cuand o os ex c l uy an , o s i n su l t en y p roscr i b an vues t ro
nombre como maldi to por causa del Hijo del hombre.
23
Alegrao s e n aqu el día y sal tad de go zo; porque
mirad:
vues t ra recom p ensa s erá grand e en e l c i e l o . P orq ue d e l a
misma manera trataban los padres de e l los a los projetas .
La cuarta bienaventuranza va dirigida a los discípulos
p ersegu i d os . La comunidad de los discípulos se considera,
al igual que Israel, como la comunidad de los pobres, es
un pequeño rebaño (12,32), impotente, expuesto a la con
tradicción y a la persecución. Los discípulos confiesan que
177
NT, Le I, 12
Jesús es e l Hijo del hombre , a l que Dios ha dado todo po
der : el de perdonar los pecados, el de interpretar en forma
nueva el reposo sabático contra la interpretación de los
fariseos. Todo esto acarrea odio, exclusión de la comuni
dad de la sinagoga, ultrajes, ser borrados de la lista de
la sinagoga (excomunión).. . Odio, persecución, exclusión,
muerte como un criminal: todo esto recae sobre Jesús, y
estáis repletos , porque habéis de tener hambre ¡Ay de los
que ahora reís , porque habéis de gemir y l lorar
Al anuncio de la salud, a las bienaventuranzas, siguen
la s c o m u n i c a c i o n e s . Jesús echa mano de la proclamación
profética (Is 5,8-23). Las conminaciones no son todavía
condenación definitiva, del tiempo final, sino un aviso que
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 90/190
por Jesús lo sufren también todos sus discípulos.
¿Es motivo de tristeza esta suerte de los discípulos? No.
También a estos pobres, a estos que tienen hambre y llo
ran les grita Jesús: ¡B ienave n turad os voso tros A l egraos
y sal tad de gozo. Tal suerte de los discípulos es motivo
de alegría. Vuestra recompensa es grande en el cielo. Al
discípulo de Jesús, que experimenta la pobreza de los
perseguidos, se le dará el reino de Dios con todos sus
bienes.
El reino de Dios es un presente que depende de la
libre disposición de Dios, es gracia. Pero es también g r a n
recom p ensa .
Dios pone condiciones para la admisión en
su reino: fe en Jesús, adhesión a él, perseverancia y firme
za en la persecución, aceptación de la suerte que acom
paña a la condición de discípulo. Sólo el que cumpla estas
condiciones será agraciado por Dios con su reino.
Los discípulos siguen las huellas de los profetas . Co
mo estos fueron perseguidos — porque como boca de Dios
pronunciaban su palabra y la realizaban en la vida—,
aunque también tienen participación en el reino de Dios
(13,28), así también sufrirán persecución los discípulos.
Si los discípulos que siguen a Jesús lo representan y son
como su boca, son comparados con los profetas, entonces
¿quién es Jesús?
24
En cambio: ¡Ay de v oso tros, lo s ricos , porque ya
tené i s vues t ro consue l o
2S
¡Ay de vo sotros, los que ahora
178
quiere poner en guardia y llamar a la conversión y a la
reflexión.
Los
r icos,
lo s
que están repletos
y los que
ríen,
son
los que poseen los bienes de la tierra y pueden disfrutar
de ellos. El que es rico puede saciar su hambre, tiene lo
que desea con avidez, puede reír y estar alegre. Es que
nada le falta. Sin embargo, Jesús les dirige la conmina
ción ¡Ay de vosotros Ante Jesús y su palabra , todas
las cosas se invierten. El rico está en peligro por el hecho
de ser rico. Cae en un estado de seguridad falaz y no bus
ca el apoyo de su vida donde verdaderamente está, en
Dios,
sino donde no está, en la posesión de bienes de la
tierra. «Guardaos muy bien de toda avidez: pues no por
estar uno en la abundancia depende su vida de los bienes
que posee» (12,15). Los pobres están abiertos a la buena
nueva, al Evangelio del reino de Dios y hallan la salva
ción. Los ricos están sordos, cerrados a Dios y se encami
nan a la ruina; porque, ¿qué es lo que les falta?
Los ricos no tienen nada más que esperar, puesto que
ya se les ha pagado y liquidado lo que proporciona el reino
de Dios: tienen consuelo, están repletos y ríen, porque
sus deseos están satisfechos. Los pobres carecen de con
suelo, tienen hambre y lloran; a ellos se les dará la recom
pensa cuando venga el reino de Dios. La cuenta entre
Dios y los ricos está saldada, la cuenta entre Dios y los
pobres está todavía abierta.
Abraham dice e l r ico epulón: «Hijo, acuérdate de que
179
ya recibiste tus bienes en vida, mientras Lázaro, en cam
bio,
los males; ahora, pues, él tiene aquí el consuelo, mien
tras tú el tormento» (16,25). El ahora de la existencia
presente se acerca a su fin; lo decisivo es lo que ha de
venir, lo que Dios trae con poder y se inicia ya en la pro
clamación de Jesús. El ahora es fugaz e insignificante, el
después es la magnitud que todo lo sobrepasa. ¿De qué
cambio, en peligro de no poder ya, en cada momento,
esperar de Dios su existencia. Tales discípulos están ame
nazados como los ricos.
Los verdaderos discípulos caminan sobre las huellas
de los profetas y están expuestos al repudio y a la perse
cución por parte de los hombres. Los discípulos que no
experimentan contradicción alguna tienen que ponerse en
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 91/190
aprovechará ser ricos cuando sobrevenga esta inversión
de todas las cosas? La carta de Santiago explica la amo
nestación dirigida a los ricos: «Y ahora vosotros, los ri
cos,
llorad a gritos por las calamidades que os van a
sobrevenir . Vuestra riqueza está podrida; vuestros vesti
dos, consumidos por la polilla. Vuestro oro y vuestra plata,
enmohecidos, y su moho servirá de testimonio contra vos
otros, y como fuego consumirá vuestras carnes. Habéis
atesorado para los días últimos. Mirad: el jornal de los
obreros que segaron vuestros campos, y que les habéis
escamoteado, está clamando, y los clamores de los sega
dores han llegado a los oídos del Señor de los ejércitos.
Habéis disfrutado en la tierra, os habéis entregado al
placer; habéis cebado vuestros corazones para el día de la
matanza» (Sant 5,1-5).
26
¿ A y cuand o tod os l o s h om b res h ab l en b i en d e vo s
otros Porque de la misma ma nera trataban los padres de
el los a los fa l sos profetas .
El último «¡ay » se aplica de nuevo a los discípulos,
pero a los discípulos que escapan a la persecución y son
acogidos por los hombres con hermosas palabras, con pa
labras de reconocimiento y de halago. Estos discípulos son
ricos, no con riquezas y posesiones materiales, sino ricos
de espíritu. Están asegurados humanamente, no están en pe
ligro de perder la honra, el bienestar, la vida. Están, en
180
guardia. Están en peligro de seguir los pasos de los fa lsos
profetas , que no suscitaban contradicción, que decían pa
labras halagüeñas y dejaban a los hombres en paz sin
mencionarles el Santo de Israel
5 4
. ¿Pero cómo acabaron
los falsos profetas?
Aunque uno sea discípulo, aunque crea y aunque viva
en la Iglesia, debe tomar como l l am ad as dirigidas a él
mismo las bienaventuranzas y las conminaciones, debe
preguntarse si teme el «¡ay » porque es de los que poseen,
si oye con satisfacción el «bienaventurados» porque no
posee, y debe constantemente efectuar la inversión que
expresan estas breves exclamaciones. Son inversión de
todos los valores, derrumbamiento de todas las fortalezas
que el hombre se construye, «ocaso de los dioses», de
todos los poderes en que confiamos y en que nos apoya
mos. Las bienaventuranzas y los ayes conminatorios abren
de un empujón la puerta del reino de Dios, en el que se
halla lo que no pueden proporcionar los bienes del mundo
y que sólo Dios dará cuando se posesione de su reino.
b) Am or a los enemigos (6,27-26).
La pieza principal del sermón de la montaña habla únicamen
te del amor. Éste no paga el mal con mal, sino el mal con bien
(6,27-31), no es amor que espera ser correspondido (6,32-34), sino
que es benéfico, está pronto a perdonar y da con alegría (6,35-38).
54 . Cf . Is 30,9ss; Jer 23,17ss .
181
27
Pero yo os digo a vo sotros , los que me es táis e scu
chando: Amad a vues tros enemigos; haced bien a los que
o s o d ia n ;
28
bendec id a los que os maldicen; orad por los
que os ca lumnian .
Los ricos a quienes van dirigidos los ayes y las amo
nestaciones no están presentes. Jesús se dirige de nuevo
por los otros. Amor es vivir para otro, incluso para el que
odia, maldice y maltrata.
El amor a los enemigos no consiste únicamente en per
donar el mal que se nos ha hecho. Aquí no se habla de
perdonar; se da por supuesto. Los discípulos de Jesús
hacen francamente
todo lo que aprovecha a l enemigo.
E l
discípulo responde al odio con el bien, a la maldición con
bendición, a los malos tratos con oración por el que mal
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 92/190
a los discípulos que le escuchan. A éstos habla con auto
ridad: Yo os digo a vosotros. Su palabra es anuncio de
Dios, él habla como quien tiene autoridad, no como los
escribas y los fariseos (Mt 7,28).
Jesús redujo la ley al cumplimiento de la voluntad
de Dios, al precepto del amor: «Amarás al Señor, tu
Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus
fuerzas y con toda tu mente, y a tu prójimo como a ti
mismo» (10,27). El camino hacia el amor de Dios con
todo el corazón ha quedado despejado con las bienaventu
ranzas y las conminaciones. Pero ahora se habla del
amor al prójimo.
También el Antiguo Testamento conoce el precepto
del
amor al prójimo:
«Ama a tu prójimo como a t i mismo»
(Lev 19,18). Jesús destaca este precepto de entre todos
los demás y le da una importancia capital. Lo interpreta
en forma nueva. El prójimo son todos, hasta los enemi
gos. De esta interpretación radical del amor del prójimo
incluso como amor de los enemigos arranca en Lucas la
ética del sermón de la montaña.
Por
vues tros enemigos
se entiende aquí los enemigos
del grupo de los discípulos, los calumniadores, persegui
dores, enemigos de cada uno de los discípulos. En éstos
se piensa en particular. Jesús exige amor. ¿Puede haber
un precepto del amor? ¿Puede imponerse la simpatía, pue
den adquirirse sentimientos y afectos? El amor que pres
cribe Jesús consiste en hacer bien, en bendecir , en orar
182
trata. El que ama al enemigo, haciéndole bien no sólo se
pone a sí mismo a su servicio, sino también a Dios, del
cual implora lo que él mismo no es capaz de hacer. En el
discípulo no debe haber ningún rincón de su ser que no
esté penetrado del amor a su enemigo: la acción exterior,
los deseos y las palabras, el corazón, en el que tiene su
asiento la oración.
29
Al que t e pegue en una mej i l la , presénta le también
la o tra , y a qu ien in ten ta qu itar te e l manto , no le impidas
l levarse también la tún ica .
30
Dale a todo e l que t e pida ,
y no rec lames nada de qu ien in ten ta qu itar te lo tuyo .
El amor al prójimo se hace difícil. Nosotros nos rebe
lamos contra la injusticia, queremos tomar venganza cuan
do se nos hace alguna injusticia, queremos tener a raya
el mal pagando en la misma moneda: Como tú a mí, yo
a ti , «ojo por ojo, y diente por diente» (cf. Mt 5,38). Jesús
exige que no se responda al mal con mal, sino que no se
oponga resistencia al mal y se venza el mal con el bien.
Estos principios se aplican al mal que se nos hace en la
persona: al que te pegue en una mejilla. . . , y también a
los perjuicios que se nos ocasionan en los bienes: a quien
intenta quitar te e l manto. . .
La generosidad del discípulo de Jesús no ha de cono
cer límites: Dale
a todo e l que t e pida ,
sin consideración
183
de nacionalidad, de comunidad de creencias, de posición
personal, de dignidad: no te canses de dar. Jesús va toda
vía más lejos: No se ha de reclamar la propiedad que se
nos quita con astucia y violencia. Quien sufre tales daños
no ha de defenderse, no ha de tratar de recobrar lo pro
pio . ¿Ha de convertirse la injusticia en derecho?
¿Podemos oir con calma esta exigencia de Jesús? ¿No
etcétera. Esto sería desconocer el sentido de las palabras
de Jesús. Los ejemplos son realizaciones ejemplares de un
comportamiento. Lo que él quiere es este comportamiento,
quiere que el discípulo trate de realizarlo y de ponerlo
en práctica en las múltiples circunstancias de la vida.
31
K d e l a m i sm a m anera q ue q ueré i s q ue o s t ra ten l o s
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 93/190
se rebela algo en nuestro interior? ¿No se suscita en nos
otros la resistencia porque la cosa nos inquieta? ¿No se
sacrifica la personalidad con sus derechos? ¿No se abren
de par en par las puertas a la irrupción del mal? ¿No se
deja el campo libre al desarrollo de los bajos instintos de
los hombres malvados?
Los ejemplos de Jesús nos suenan como algo tan sor
prendente , tan paradójico, tan chocante , porque los hom
bres se atienen en sus relaciones a normas completamente
diferentes. Ponen de manifiesto cuan contrario a Dios es
el comportamiento del hombre cuando el reino de Dios
no se ha posesionado de él y lo ha transformado. Nos
otros creemos que el mal se desarraiga si le oponemos re
sistencia, si pagamos mal con mal. Jesús, en cambio, anun
cia que el mal se vence con el bien; él trae el reino de
Dios, y con la suma de todo el bien que en él se despliega
se logra el triunfo del bien sobre el mal.
La manera como se expresa Jesús es gráfica, está
llevada al extremo; es que quiere suscitar en nosotros
inquietud, despertarnos, espolearnos, transformarnos. Los
ejemplos son meros ejemplos: lo que importa es el compor
tamiento a que nos invita. No da lecciones acerca de de
beres morales en las que se analicen todas las condicio
nes y todos los reparos, todo «sí» y todo «pero». Con su
palabra no quiere promulgar un nuevo código compuesto
de cuatro artículos: Primero: Al que te pegue en tu
mejil la . . . Segundo: A quien intente quitar te e l manto. . . ,
184
hombres, tratadlos también vosotros a e l los .
¿Cómo se ha de poner en práctica el amor de los ene
migos, qué debo hacer a mi prójimo? ¿Y también a mi
enemigo? Maestros de sabiduría y maestros de la ley entre
los judíos y entre los paganos formularon sobre este parti
cular la reg l a á urea . El viejo Tobías da a su hijo esta
instrucción: «Lo que no quieras para ti , no lo hagas a
nadie» (Tob 4,15). El doctor judío Hilel se expresa en
términos parecidos: «Lo que no te agrada a ti , no lo ha
gas a tu prójimo; esto es toda la ley, todo lo demás es
explicación.» En la sabiduría griega se conocía esta re
gla desde muy antiguo. Los estoicos la expresaron en esta
forma: «L o que no quieras que te hagan a ti , no lo hagas
tú a nadie.» El hombre lleva constantemente consigo el
código y la pauta de su comportamiento con los semejan
tes. Lo que uno desea y lo que uno necesita le enseña lo
que ha de hacer. Jesús enuncia en nueva forma esta regla
áurea : D e l a m i sm a m anera q ue q ueré i s q ue o s t ra ten
los hombres, tratadlos también voso tros a e l los . Los otros
dan como regla que no se ha de hacer al prójimo nada
que sea desagradable; Jesús da como regla que se ha de
hacer el bien al prójimo, incluso al enemigo. Ahí está la
gran diferencia: no sólo no hacer mal, sino hacer bien.
El discípulo de Jesús no se ha de contentar con no hacer
mal, sino que ha de hacer bien, todo el bien que él mismo
desea para sí. El amor de nosotros mismos se hace ley y
185
medida de nuestro amor al prójimo, amor que debe estar
pronto a amar incluso al enemigo. «Amarás a tu prójimo
como a t i mismo.»
32
Y s i am á i s a l o s q ue o s am a n , ¿ q ué grac i a t enéi s?
P orq ue tam b i é n l o s p ecad ores am an a q u i enes l o s am an .
33
Y s i h acé i s b ien a l o s q ue b i en o s h acen , ¿ q ué grac i a
t ené i s? T am b i é n l o s p ecad ores h acen l o m i sm o.
34
Y s i
Jesús promete recompensa al amor.
¿Qué gracia te
né is? Dios reconoce las obras del hombre, da su gracia a
aquel cuyas obras le son agradables.
35
V oso tros , en cam b i o , am ad a vues t ros enem i go s , h a
ced e l b ien y prestad s in esperar nada. Entonces será
gran de vuestra reco mpensa , y seré is h i jos del Al t ís imo;
q ue é l e s b ueno au n con l o s d esagrad ec i dos y m a l vad os .
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 94/190
prestáis a aquel los de quienes esperáis cobrar, ¿qué gracia
tené is? También los pecadores prestan a los pecadores, pa
ra recibir de e l los lo correspon diente .
Los discípulos de Jesús deben cumplir la voluntad de
Dios más radicalmente que todos los demás. No deben
llevar ya una vida como la que llevan los pecadores. Son
sal de la tierra, luz, ciudad sobre la montaña (Mt 5,13ss).
Su amor no debe por tanto ser únicamente un am or
q ue e sp era s er corresp ond i d o . Si sólo amaran a aquellos
de quienes reciben muestras de amor, no harían ventaja
a los pecadores. Deben amar incluso cuando no se ven
compensados y correspondidos por los hombres. Deben
amar porque tal es la voluntad de Dios. «Cuando vayas
a dar una limosna, que no sepa tu izquierda lo que hace
tu derecha, para que tu limosna quede en secreto, y tu
Padre, que ve en lo secreto, te dará la recompensa» (Mt
6,3s).
El amor se manifiesta haciendo bien, prestando.. . Don
de surge una necesidad, allí está el que ama. El amor que
exige Cristo es amor de obras: «Hijitos, no amemos de
palabra ni con la lengua, sino de obra y de verdad» (Un
3,18). El amor puede ser un precepto, porque es amor de
obras. Puede desarrollarse en aquel que se mantiene abier
to al otro y a su necesidad. Quien piensa en el otro, tie
ne fuerza para amar.
186
S i n e sp erar nad a .
Éste es el distintivo del amor de los
discípulos. Ni reconocimiento por parte de los hombres, ni
alabanza, ni compensación. El amor no es cálculo. Brota
de lo más íntimo de uno y se desarrolla. Incluso cuando
el discípulo da prestado, no da para volver a recibir , sino
sólo por deseo de ayudar. Dado que en el amor a los ene
migos hay que renunciar a toda esperanza de correspon
dencia y de amor, por eso tal amor es el que mejor y más
genuinamente representa el amor del discípulo de Jesús.
Lo que mueve al discípulo a amar es sólo la voluntad de
Dios, su reino, Jesús, el Maestro, y su palabra.
El discípulo que cumple el precepto de amar a los
enemigos, recibe gran recompensa . Es l lamado hijo del
Al t ís imo. Este título recibió Jesús en la anunciación del
ángel. «Éste será grande y será llamado Hijo del Altísi
mo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre»
(1,32). El que cumple el precepto de amar a los enemigos,
tiene participación en la filiación y en el reino de Jesús.
La filiación divina no es sólo una esperanza para el fin
de los tiempos; se da ya cuando se vive el amor a los
enemigos. Con el amor desinteresado, que no se contenta
con corresponder al amor, el discípulo se hace semejante
a Dios mismo, porque Dios es b u e n o a u n c o n l o s d e s a g r a
d ec i d os y m a l vad os . Es hijo del Altísimo que con su amor
infinito está por encima de toda la agitación de los hombres.
187
36
S ed m i ser i cordi osos , com o m i ser icord i oso e s vu es
tro Padre.
Es misericordioso quien se deja afectar por la miseria
del hombre, el que está abierto a la necesidad ajena y
presta ayuda donde halla a alguien oprimido por la carga.
Jesús anuncia que Dios es Padre misericordioso. El rei
no de Dios comienza con el anuncio del Evangelio a
de Dios,
porque anuncia el
reinado del Altísimo,
que es
nuestro Padre lleno de misericordia.
c ) N o juzguéis
6,37-38).
37a
No juzgué is , y no se ré is juzgados; no c on dené is , y
no s eré i s cond enad os .
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 95/190
los pobres, de la liberación a los cautivos, de la vista a los
ciegos, del alivio y libertad a los que están agobiados.
Jesús, al que Dios envió para proclamar y aportar el tiem
po de salvación, va por el país derramando beneficios. Per
dona los pecados y se interesa por los pecadores, habla
de la alegría del Padre celestial por los pecadores que en
este tiempo de gracia vuelven a él (5,11-32)
55
.
La misericordia del Padre enseña al discípulo lo que
él mismo ha de hacer; Jesús exige lo que los judíos llama
ban «imitación de Dios». «Como Dios viste a desnudos
(Gen 3,21), viste tú también a desnudos. Como Dios visita
a enfermos (Gen 18,1), visita tú también a enfermos.. .
Como Dios es llamado misericordioso y clemente, sé tú
también misericordioso y clemente y da a todos sin com
pensación. . . Como Dios es l lamado bondadoso. . . sé tú
también bondadoso»
50
.
El amor tiene dos normas conforme a las cuales se
puede apreciar y comprobar el amor. El deseo del propio
corazón (ama a tu prójimo como a ti mismo) y la mise
ricordia del Padre celestial. Las dos normas son una; en
efecto, el discípulo es hijo del Altísimo, imagen de
Dios. Jesús vuelve a restaurar en el hombre la imagen
55 . Cf. Le 15,4-10; 7,36-47; 18,10-14; 19,1-10. En la invita ción de Jes ús
a los pecadores y en su trato con ellos se expresa fundamentalmente la misión
de Jesús .
5 6 . BILLE RBE CK i , p . 3 7 2 .
188
El comienzo del amor y de la misericordia con los
hombres está en que no nos constituyamos en sus jueces.
El que investiga si el otro merece misericordia y amor, si
es o no «digno», peca ya contra el precepto del amor; en
efecto, el amor da porque se compadece de la necesidad
del otro.
La función del juez se desarrolla en dos actos: en juz
gar y en condenar. De uno y otro nos disuade Jesús. Aquí
no se trata del ejercicio de la potestad judicial en un com
plejo social, sino de juzgar con el pensamiento y con
palabras cuando no se ha recibido tal encargo. Las pala
bras de Jesús no vedan el enjuiciamiento moral de la
acción; lo que prohiben es que se declare culpable al que
ha puesto la acción.
Jesús formuló el imperativo de la misericordia y del
amor al prójimo. «Amad a vuestros enemigos.» «Sed mi
sericordiosos.» De esto se pedirá cuenta en el juicio de
Dios. El que se constituye en juez de los otros, provoca el
juicio de Dios sobre sí mismo. Mi comportamiento con
los otros será la norma del comportamiento de Dios
conmigo.
37 b
Perdona d y s eré is perdona dos;
38 a
dad y se o s da rá;
una b uena m ed i d a ap re tad a , b i en re l l ena , r eb osan te , e ch a
rá n en vues t ro regazo .
189
La culpa y la transgresión que ha cometido el otro con
tra nosotros podría ser un obstáculo para el amor y la
misericordia. Jesús indica dos maneras de superar el obs
táculo: perdonar y dar . Cuando se perdona se derr iban las
barreras que se levantan entre el yo y el tú. Cuando se da,
se tienden puentes.
Una vez más se formula el imperativo bajo la ame
naza del juicio. Y se ré is perdona dos; . .. y se os dará. Dios
Las palabras sobre el amor de los enemigos se pronun
cian con vistas al juicio final. Pero no rematan en la jus
ticia vindicativa de Dios, sino en lo desmesurado de su
bondad. Todas las sentencias se pronuncian con el mismo
ritmo, pero cuando se habla de dar, se encarece la pro
mesa : Y se os dará una medida colmada. Así el centro
de gravedad se desplaza de la severidad a la bondad de
Dios,
del juicio a la bendición, de la amenaza a la prome
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 96/190
adaptará su proceder judicial a nuestro comportamiento.
El resultado del juicio se pone en nuestras manos. «Per
dónanos nuestros pecados, pues también nosotros perdona
mos a todo el que nos debe» (11,4).
Vendrá el día de la paga. Para el que haya dado será
un día de abundantísima recolección. Dios es como un
labrador que asigna magnánimamente la paga a sus traba
jadores. Se medirá con la fanega. El labrador avaro llena
la medida y pasa luego el rasero por encima para no dar
más de lo que se había a justado. El labrador magnánimo
aprieta el trigo en la medida, la sacude, para que se llenen
los huecos y se pueda echar todavía más y hasta añade
algo hasta que rebose la medida. Dios se asemeja al la
brador magnánimo. Es e l más generoso pagador . Su re
compensa no es el salario merecido, sino regalo de su
generosidad. La idea de recompensa o de salario no debe
inducir a rebajar lo infinito del amor de Dios. Lo que da
Dios es infinitamente superior a la prestación. «Alegraos
y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en
el cielo.»
38 b
Pues co n la medida con qu e midáis seréis medidos.
Dios no tiene medida en dar, pero sólo da al que a su
vez ha dado. Podemos también decir que Dios perdona
sin medida ni tasa, pero sólo al que a su vez ha perdonado.
190
sa, del temor a la esperanza.
En la conclusión vuelve a insinuarse la amonestación:
medida por medida . El que da poco, recibirá poco; e l que
da con abundancia —todavía se percibe la imagen de la
magnanimidad divina—, recibirá con abundancia . La mi
sericordia infinita de Dios en el juicio no es una misericor
dia sin condiciones. El que dé y perdone a los hombres,
recibirá abundantemente el don y el perdón de Dios; el
que no dé ni perdone a los hombres, no puede esperar
don ni perdón de Dios.
d) La verdadera religiosidad (6,39-49).
39 a
Le s propuso también una parábola.
Con esta breve observación se introduce una nueva
sección del discurso. Parábola es el título exacto, pues se
refieren cinco breves parábolas. Con ellas se quiere hacer
reflexionar. A lo que ya se ha dicho — a l discurso p ro-
fético (6,20-26) y al de exhortación (6,27-38)— se añade
la predicación en parábolas. Los discípulos deben ser per
sonas que aman, deben vivir para los otros. En el sermón
de la montaña de san Mateo se caracteriza la misión de
los discípulos con las imágenes: sal de la tierra, luz que
ilumina a todos, ciudad sobre la montaña (Mt 5,13-16).
191
Allí aparece como algo innatural y reprobable que no se
brille delante de los hombres a fin de que éstos vean las
buenas obras y glorifiquen al Padre. También en el ser
món de la montaña del Evangelio de Lucas se presupone
tal fuerza luminosa de la vida de los discípulos. ¿Pero
cómo han de estar pertrechados los discípulos para llevar
a cabo esta obra apostólica? Deben ser buenos maestros
(6,39-42), el ser y la palabra deben ser uno (6,43-45), la
el discípulo no tiene nada que hacer sino aceptar lo trans
mitido. El discípulo de Jesús transmite lo que ha recibido
de Jesús. ¿Cómo estaría a la altura de la responsabilidad
que tiene de los otros si no estuviera armado con la pala
bra de Jesús, si no se la hubiera apropiado?
41
¿Por qué te pones a mirar la paja en e l o jo de tu
hermano, y no t e f i jas en la v iga que en tu propio o jo
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 97/190
acción debe acompañar los sentimientos (6,46-49).
39 b
¿Acaso puede u n c iego gu iar a o tro c iego ? ¿No
caerán los dos en e l hoyo?
40
No hay disc ípu lo que es té
por enc ima de l maes tro; pues e l per fec tamente ins tru ido
será, a lo más , como su maes tro .
Las palabras de Jesús sobre el guía ciego iban dirigi
das contra los fariseos. Éstos se presentaban como guías
del pueblo en materia de religiosidad. Con cuidado me
ticuloso estudiaban la ley y trataban de observarla. Sin
embargo, eran
guías c iegos ,
pues estaban cerrados a la
más grande revelación de Dios y se hacían inaccesibles
a la palabra de Dios proclamada por Jesús. Los discípulos
de Jesús vienen ahora a ocupar el puesto de estos guías
ciegos. Las palabras de Jesús que se referían a los fariseos
y a los escribas, se aplican también a los discípulos, si ellos
mismos son ciegos.
El discípulo de Jesús ha de ser consciente de su res
ponsabil idad. No puede ser c iego. ¿Cuándo, pues, no es
ciego? Cuando está instruido como su maestro. El Maes
tro es Jesús. Es un maestro que no es superado por nin
gún discípulo: maestro singular y único.
No hay disc ípu lo que es té por enc ima de l maes tro .
Este dicho se verifica en la escuela de los doctores de la
ley, puesto que el maestro transmite lo que ha recibido, y
192
t ienes?
42
¿Cómo puedes dec ir le a tu hermano : Hermano,
déjame que t e saque la paja de l o jo , cuando tú mismo no
ves la v iga que t ienes en e l tuyo . ¡Hipócr ita Sácate pri
mero la v iga de l o jo , y en tonces verás c laro par t í sacar la
paja de l o jo de tu hermano.
Para ser fiel a su misión debe el discípulo corregir a
los que yerran y faltan, y ayudarlos a despojarse de sus
faltas. Las palabras de Jesús presuponen la solicitud por
los hermanos, por los que tienen la misma fe. San Mateo,
al hablar del orden en la Iglesia, nos conservó unas pa
labras que prevén el proceso de tal corrección fraterna:
«Si tu hermano comete un pecado, ve y repréndelo a solas
tú con él. . .» (Mt 18, 15ss). La corrección entraña peligro.
Un peligro es el de medir con una falsa medida. El amor
propio desfigura la verdad. La imagen de
la paja y la v iga
es un cuadro de vivos colores. Las más pequeñas faltas
del otro se ven aumentadas, las mayores faltas propias se
disminuyen. Sólo puede haber corrección cuando uno re
nuncia a tenerse por justo y a querer imponerse.
El segundo peligro de la corrección está en la
hipo
cresía.
El que corrige al otro da a entender con ello que
quiere vencer el mal en el mundo. Pero si ni siquiera lo
vence en sí mismo, entonces surge una lamentable discre
pancia entre el interior y el exterior. Se emprende la lu
cha contra lo malo en el otro. Pero, ¿y en uno mismo?
193
N T L e I 13
Sácate primero la viga del ojo. Comienza primero la co
rrección por ti mismo, con lo cual se sientan las bases para
la corrección del otro.
En el discípulo de Jesús ha comenzado a influir el
reino de Dios. Pero esto presupone conversión y arrepen
timiento. El arrepentimiento reconoce la propia culpa y
el propio pecado, comienza por condenar las deficiencias
del propio corazón; así puede uno acercarse al hermano
45
E l h om b re b ueno , d e l b uen t e soro de su corazó n saca
l o b ueno , y e l m a l o , d e su m a l t e soro saca l o m a l o . P ues
del rebosar del corazón habla su boca.
Aquí cambia la imagen. El corazón, sede de las deci
siones morales y religiosas del hombre, se puede compa
rar con un t e soro . Del núcleo de la personalidad, sede de
las decisiones morales y religiosas depende que las pala
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 98/190
con paciencia, con perdón y generosidad.
43
Porque n o ha y árbol buen o qu e dé fruto podrido;
ni tampoco árbol podrido que dé fruto buen o. ^Cada
á rb o l s e conoce p or su f ru to ; p ues d e l o s e sp i nos no s e
cosech an h i gos , n i s e v end i m i an uvas d e un zarza l .
El peligro de la hipocresía sólo se vence si hay armo
nía entre los sentimientos interiores y la acción exterior.
Las manifestaciones externas, las obras y las palabras, son
buenas cuando es bueno el fondo interior del que pro
vienen. Para los fariseos y los escribas es buena una acción
si está en consonancia con la ley; Jesús, en cambio, la llama
buena si procede de un interior bueno. El corazón, sede
de los pensamientos, de los deseos y sentimientos, es la
fuente de los buenos y malos pensamientos, palabras y
obras, es el centro de la decisión moral. «De lo interior,
del corazón de los hombres, proceden las malas intencio
nes,
fornicaciones, robos, homicidios . . .» (Me 7, 21ss). Aho
ra bien, ¿cuándo es bueno el corazón?
Las palabras y las acciones que proceden del hombre
dan a conocer cuál es su estado interior. Descubren el co
razón del hombre, como los frutos dan a conocer la natu
raleza y la calidad de un árbol. Los espinos no producen
higos . . .
194
bras y las acciones sean buenas o malas, de que el hom
bre mismo sea bueno o malo. El discípulo de Jesús, que
ha de ser luz para los otros, debe poseer un corazón al
que rebose todo bien. Este reb osar se muestra en pala
bras y acciones. El buen orden de la conciencia es prerre-
quisito del cristiano apostólico.
Ahora bien, ¿cuándo es e l corazón un arca , un tesoro
que sólo contiene bien y del que sólo sale bien? ¿ C uá n
do es bueno e l inter ior del hombre? ¿Cuándo está en or
den su conciencia? Según el Evangelio, no por el mero
hecho de manifestar el hombre su ser natural. Sólo cuan
do el hombre está completamente transformado por Jesús,
e l Maestro, es también bueno su corazón. Cuando la pala
bra de Jesús es asimilada por este corazón, cuando se han
posesionado de él el reino de Dios y su justicia, entonces
es el corazón un arca de la que rebosa el bien. Una vez más
se formula como imperativo fundamental de Jesús el arre
pentimiento, e l re torno a Dios. El hombre bueno es e l que
mediante la conversión se pone en la debida relación con
Dios. No es el arrepentimiento en cuanto tal el que hace
al hombre interiormente bueno, sino Dios y su reino; sólo
que el reino de Dios presupone que se retorne a Dios, que
se aparte uno de la culpa, que se haga pequeño.
46
¿Por qué me l lamáis: ¡Señor, Señor , y no hacé is lo
q ue o s d i go?
195
Jesús hace el mayor hincapié en la intención con que
se ha de producir la acción. Pero esto no quiere decir que
no dé importancia a la acción exterior. Exige la acc i ó n
como fruto de la intención.
Los discípulos lo invocan como Señor. Así llamaban
a sus maestros los discípulos de los doctores de la ley.
Para los discípulos que le seguían era Jesús el rabí, el
maestro y doctor. Pero no es su Señor sólo en este sen
en s egu i d a s e d errum b ó , y e l d e sas t re d e aq ue l l a casa fue
completo.
Para ser discípulo de veras, que es lo que conduce a
la salvación, es necesario ir a Jesús, reconocer que es él
quien decide y ser el discípulo que oye sus palabras, las
acepta y las pone en práctica. En la vida de la Iglesia des
pués de la exaltación de Cristo quiere esto decir: ser uno
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 99/190
tido; para ellos es más. Por él habla Dios. El pueblo de
cía: «Un gran profeta ha surgido entre nosotros» (7,16).
Después de pascua predicó Pedro: «Dios ha hecho Señor
y Mesías a este Jesús a quien vosotros crucificasteis» (Act
2,36). «Señor» expresa lo más alto y más elevado en
cuanto a dignidad. Quien leía la traducción griega del An
tiguo Testamento hallaba el nombre de Dios, Yahveh,
traducido por «Señor». Todo esto está implícito cuando
se dice: ¡Señor, Señor El Señor es el que pronun cia las
palabras del sermón de la montaña.
El Señor tiene derecho de libre disposición, él manda,
es juez. Su palabra tiene fuerza de ley divina. Ahora bien,
sería la mayor contradicción llamar a Jesús Señor, reco
nocer su palabra y su voluntad y, sin embargo, no hacer
nada. La pregunta de Jesús quiere despertar al oyente y
hacerle reflexionar.
47
O s voy a d ec i r a q u i én s e p arece tod o e l que v i ene
a mí y oye mis palabras y las pone en práct ica.
48
S e p a
rece a un h om b re q ue , a l p onerse a cons t ru i r una casa ,
cavó y ah ond ó , y p uso l o s c i m ien tos sob re l a roca; cuan
do l legó la crecida, e l torrente se precipi tó contra aquel la
casa, pero no pudo derribarla, por estar bien construida.
49
E n cam b i o , e l q ue o y e p ero no p rac ti ca , s e parece a un
h om b re q ue s e p uso a cons t ru i r una casa a f l or d e t i e rra ,
s in c imientos; cuando e l torrente se precipi tó contra e l la ,
196
con Cristo sacramentalmente, aceptar con fe la palabra de
Cristo, que pervive en la Iglesia, y vivir del sacramento
y de la palabra.
Las dos parábolas las coloreó san Lucas conforme a
la mentalidad de los griegos. Describió la construcción de
manera diferente que san Mateo (Mt 7,24-27), que se li
mita a decir: «Construyó su casa sobre la roca»; «cons
truyó su casa sobre la arena». Según san Lucas se cava
cuidadosa y laboriosamente para echar los cimientos, o
bien no se cava en absoluto y se construye la casa sobre
la tierra, sin cimientos. La irrupción de la catástrofe es
en Mateo auténticamente palestina: «Cayó la lluvia, se
precipitaron los torrentes, soplaron los vientos y batieron
contra la casa aquella.» Lucas, en cambio, dice: «Cuan
do el torrente se precipitó.. .» También la palabra de Dios
continúa encarnándose en la tradición; se amolda a los
hombres, desciende a los hombres, para penetrar comple
tamente en ellos y en el mundo en que viven.
Las parábolas y las palabras que las preceden no de
jan la menor duda de que el sermón de la montaña debe
ponerse en práctica. La salud o la perdición depende de
que se practiquen o no las palabras de este discurso. Las
palabras finales: E l d esas tre d e aq ue l l a casa fue com p l e to ,
van más allá de la imagen para pasar a la realidad. El
que oye las palabras, pero no las practica sufre gran ca
tástrofe en el juicio final.
197
Atendiendo a estas palabras ¿habremos de decir que
el sermón de la montaña sólo trata de hacernos compren
der que somos pecadores perdidos? Cierto que se trata
de esto, pero no sólo se esto. ¿Trataba sólo de trazar la
imagen del hombre que ha experimentado el nuevo na
cimiento del mundo porque se ha realizado plenamente
el reinado de Dios? Én el sermón de la montaña se tiene
sin duda presente el reino de Dios. Comienza, en efecto,
2.
LA ACCIÓN SALVADORA DE DIOS
7,1-8,3).
En el sermón de la montaña ha hablado Jesús como maestro
que enseña con autoridad y poder; ahora se nos muestra como
salvador poderoso. Su poder de sanar y de salvar tiene una ampli
tud ilimitada: otorga su favor a un pagano (7,1-10), resucita a
un muerto (7,11-17), se revela como el salvador prometido de
los enfermos y de los pecadores (7,18-35) y perdona a la pecadora
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 100/190
con la promesa de este reino y termina con el juicio. Las
exigencias del sermón de la montaña (el hombre del amor,
el hijo del Altísimo.. .) se realizarán plenamente cuando se
realice plenamente el reino de Dios. Pero el sermón de la
montaña se proclama como condición de la entrada en
el reino de Dios. Con la venida de Jesús se ha iniciado
en el mundo el reino de Dios, y el que va a Jesús, oye su
palabra y la practica, tiene también participación en sus
fuerzas. El qu e dice a Jesús : «¡Señor, Señor », está bajo
el reinado del Señor, pero no por ello se le dispensa de
obrar .
La constante actitud de retorno a Dios pone los ci
mientos para una vida regida por las palabras del sermón
de la montaña. Preserva de la hipocresía, que pone sim
plemente las palabras en la boca, pero no las realiza en
uno mismo, crea el buen corazón del que pueden proce
der las buenas obras, y mueve a poner en juego todas las
fuerzas para cumplir la voluntad de Dios descubierta en
la palabra. En un corazón abierto mediante la conversión
a Dios hay lugar para el reino de Dios, se despliega el
amor, mediante el cual el hombre vive para Dios y para
los semejantes. La misericordia de Dios que se revela en
su reino, penetra a este hombre, que así viene a ser hijo
del Altísimo.
198
(7,36-50). El resultado de su actividad se muestra de nuevo en
los discípulos (8,1-3).
a )
Curación del «ria do del centurión (7,1-10).
1
Después de t erminar todos sus discursos an te e l pue
blo,
entró en Cafarnaúm.
2
Un centur ión ten ía en fermo y
a punto de mor ir un cr iado a l que es t imaba mucho.
3
C u a n
do oyó hablar de Jesús , le env ió unos anc ianos de los
judíos , para rogar le que v in iera a sa lvar a su cr iado.
*
Al
l legar és tos ante Jesús , le supl icaban con mu cho in terés ,
dic iendo: M erece de verdad que le hagas es te favor:
5
por
que ama a nues tro pueblo , y é l nos ha edif icado la s i
n a g o g a .
Cafarnaúm, como ciudad fronteriza que era, tenía pues
to de aduanas (Me 2,13s) y guarnición. Herodes Antipas,
al igual que su padre, tiene en su ejército de mercenarios
gentes de todo el mundo: sir ios , tracios , germanos, galos .
El centurión era pa g a n o . Cuando enferma de muerte su
criado, hace todo lo que está en su mano para curarlo.
Siendo pagano, se cree
indigno
de presentar personalmen-
su petición a Jesús y por esto le envía como mediadores
a unos ancianos de los judíos. Con humildad reconoce
la disposición de Dios, según la cual la salud debe llegar
a los gentiles a través de los judíos. Su compasión, su hu-
199
mudad y su obediencia lo predisponen para recibir el men
saje salvífico de Cristo.
El centurión era uno de aquellos paganos a los que
ya no satisfacían los mitos politeístas, cuya hambre reli
giosa no se saciaba con la sabiduría de los filósofos y que,
por consiguiente, simpatizaban con el monoteísmo judaico
y con la moral que de él derivaba. Era temeroso de Dios,
profesaba la fe en el Dios único, tomaba parte en el culto
judío, pero todavía no había pasado definitivamente al
palabra, y que mi cr iado se cure .
8
Porque también yo,
aunque no soy más que un subalterno , t engo so ldados bajo
mis órdenes, y le digo a uno: Ve, y va, y a otro: Ven, y
viene, y a mi criado: Haz esto, y lo hace.
El centurión cree que Jesús está en relación especial
con Dios; él, pagano impuro y pecador, se tiene por
in
digno
de hallarse en presencia de Jesús. Con parecida emo
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 101/190
judaismo. Buscaba la salvación de Dios. Su fe en el Dios
único, su amor y su temor de Dios lo manifestaba en el
amor a l pueblo de Dios
y en la solicitud por la sinagoga,
que él mismo había edificado. Sus sentimientos se expre
saban en obras.
Los
anc ianos de los judíos ,
miembros dirigentes de la
comunidad, ven en Jesús a un hombre por e l que Dios hace
favores a su pueblo. Están convencidos de que Dios
sólo otorga tales favores a su pueblo, pero esperan que haga
una excepción con el centurión por lps méritos que se
ha granjeado con eL pueb lo de Dios, y qu e se mu estre
también clemente con el pagano. Sin embargo, estiman que
la pertenencia a Israel es condición necesaria para la sal
vación (Act 15,5). Las condiciones
-
para entrar en el reino
de Dios y para la salvación están formuladas en las bien
aventuranzas. Bienaventurados los pobres , los que t ienen
hambre , los que l loran. . . Ni una palabra sobre la per te
nencia a Israel y a la sinagoga. Jesús es profeta para to
dos, también para los paganos, como Elias y Elíseo.
6
En tonces Jesús se fue con e l los . Pero , cuan do es ta
ba ya cerca de la casa , e l cen tur ión le mandó unos amigos
para dec ir le : Señor , no t e moles tes ; porque yo no soy dig
no de que en tres bajo mi t echo;
7
por eso yo mismo tam
poco me sent í digno de presentarme ante t i . Pero di lo de
2
ción ante la santidad de Dios que se manifiesta en Jesús,
no podía soportar Pedro la presencia de Jesús. Al dirigirse
uno al Dios santo, siente su propia falta de santidad. Esto es
ñuto del retorno a Dios y de la penitencia, camino de la
salvación. «Convertios; el reino de Dios está cerca.
Los ancianos de los judíos consideraban necesaria la
presencia de Jesús para la curación del enfermo. En cam
bio, el centurión atribuye eficacia a la sola
pa labra
de
Jesús. Por su experiencia del mundo militar la considera
como orden de mando y acto de autor idad. Tal palabra
causa lo que expresa. Independientemente de la presencia
del que la profiere hace llegar a todas partes el poder sal
vador. Con esta palabra basta para que se expulsen los
poderes malignos y se reciba la salvación. La palabra, sin
embargo, no está desligada de la actividad general de
Cristo. En ella se presenta la palabra y la obra de Jesús.
La palabra de Dios nos capacita para experimentar ,
percibir y recibir la revelación de Dios y su acción salva
dora en Jesús. La palabra no es sólo una parte de su
acción, sino el fundamento que todo lo sostiene. Desde que
fue exaltado Jesús, su palabra se extiende por el mundo
en la obra apostólica de la Iglesia; en ella obra el Espíri
tu Santo. Jesús está lejos de nuestros ojos, pero su pala
bra está ahí, y en ella causa él nuestra salvación
57
.
57. Cf. Act 26,18; 10,36; 1,8.
201
9
Cuan do Jesú s oyó estas palabras, quedó a dmirado de
é l , y vu el to hac ia la mul t i tud que le seguía, d ijo: Os digo
que ni en I srael encontré tanta je .
10
E n tonces l o s e nv i ad os
vo l v i eron a l a casa y encon traron a l c r i ad o y a sano .
Ni en Israel. . . Estas palabras reproducen lo que escri
be san Mateo: «Os lo aseguro: En Israel , en nadie en
contré una fe tan grande (Mt 8,10). Por su larga historia,
b) Resurrección del hijo de la viuda de Naím (7,11-17).
11
A c on t i nuac i ó n s e fue a una c i ud ad l l am ad a N aím ,
y con é l iban sus discípulos y una gran mul t i tud.
n
C u a n
d o se acercó a l a p uer ta d e l a ciudad, se encon tró con q ue
l levaban a enterrar un muerto, h i jo único de su madre,
q ue era v i ud a , y b as tan te gen te d e l a c i ud ad l a acom
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 102/190
por la ley y los profetas estaba Israel preparado para la
venida del Mesías; vino el Mesías, pero no halló fe. El
pagano cree, y halla lo que busca, y proporciona la cura
ción a su criado. Las bienaventuranzas del sermón de la
montaña han descubierto la actitud fundamental del hom
bre, que es necesaria para la salvación. ¿Qué es lo que se
ha mostrado? Las bienaventuranzas piden una actitud
interior, del corazón, una apertura para con Dios, que es
posible a todos, sean judíos o gentiles. La palabra de Jesús
tiene virtud para traer a todos la salvación, con tal que
se reciba con fe.
El criado enfermo queda curad o y se ve salvado de la
muerte, que sólo asoma al principio y al fin de la narra
ción, pero que está constantemente en el fondo del cuadro.
Por encima de los poderes malignos que empujan al en
fermo a la muerte, está la misericordia de su señor, el
amor del centurión a Israel y a su Dios, la mediación del
judaismo, la fe humilde del centurión, pero sobre todo la
potente palabra de Jesús; la Iglesia, en la que está encar
nado lo que vive en el centurión. Con profundo sentido
hace la Iglesia que se recen las palabras del centurión
cuando Jesús se acerca a los fieles en la eucaristía trayen
do su salvación.
2 2
pañaba.
Naím estaba situada en el camino que partiendo del
lago de Genesaret y pasando al pie del Tabor por la lla
nura de Esdrelón, conducía a Samaría . Naím era sólo una
pequeña aldea , aunque Lucas habla de una ciudad. A la
entrada de la ciudad se encuentran dos comitivas, la que
va encabezada por el dispensador de vida, y la comitiva
que va precedida de la muerte. En un sermón después de
Pentecostés pronunció san Pedro estas palabras: «Vos
otros, pues, negasteis al santo y al justo, y pedisteis que
se os hiciera gracia de un asesino (Barrabás) al paso
que disteis muerte al autor de la vida, a quien Dios resucité
de entre los muertos» (Act 3,14s).
El difunto era hi jo único de su madre, la cual era
v i ud a . El marido y el hijo habían muerto prematuramente ,
y la muerte prematura era considerada como castigo por
el pecado. El hijo facilitaba la vida a la madre. En él te
nía protección legal, sustento, consuelo. La magnitud de
la desgracia halla misericordia en la gran multitud de la
ciudad que la acompañaba . Podían consolar la , pero nadie
podía socorrerla.
13
Al ver la e l Señor, s int ió compasión de ella y le dijo:
No l lores más.
M
Y
l l egá nd ose
al féretro, lo tocó; los que
lo llevaban, se pararon. Entonces dijo: ¡Joven Yo te lo
2 3
mando: levántate .
15
Y e l d i jun to se inco rporó y come nzó
a hablar, y Jesús lo entregó a su madre.
Jesús se sintió lleno de com p as i ó n . Él mismo predica
y trae la misericordia de Dios con los que se lamentan y
lloran. Dios toma posesión de su reino mediante su mi
sericordia con los oprimidos.
El cadáver yace en el jéretro, envuelto en un lienzo.
El gesto de tocar el féretro, como escribe Lucas conforme
En Jesús se hizo patente el poder de Dios. La mani
festación de Dios suscita temor. El temor y asombro por
la acción poderosa de Dios es comienzo de la glorificación
de Dios.
La glori f icación de Dios por los testigos proclama dos
acontecimientos salvíficos: a ) ha surgido un gran profeta.
Dios interviene decisivamente en la historia; Jesús es, en
efecto, un gran profeta, b) Dios ha visitado benignamente
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 103/190
a la concepción griega, es para los que lo llevan una señal
para que se paren. Jesús llama al joven difunto, como si
todavía viviera. Su llamada infunde vida. «Dios da vida
a los muertos, y a la misma nada llama a la existencia»
(Rom 4,17). Con su palabra poderosa es Jesús «autor de
la vida» (Act 3,15).
El joven vive, se incorpora y comienza a hablar. J esús
l o en trega a su m ad re . La resurrección de los muertos es
prueba de su poder y de su misericordia. El poder está al
servicio de la misericordia. Poder y misericordia son sig
nos del tiempo de salvación. Por sus entrañas misericor
diosas visita Dios a su pueblo para iluminar a los que
yacen en tinieblas y sombras de muerte (l,78s).
Lo entregó a su madre. Así se dice también en el libro
de los Reyes (IRe 17,23), que cuenta cómo Elias resu
citó al hijo difunto de la viuda de Sarepta. Jesús es pro
feta, como Elias, pero aventaja a Elias. Jesús resucita a
los muertos con su palabra poderosa; Elias con oraciones
y prolijos esfuerzos.
16
T od os q ued aron sob recog i d os d e t em or y glori f ica
ban a Dios, d ic iendo: Un gran projeta ha surgido entre
no sotros; Dios ha v is i tado a su pueblo. " Y esta fama
acerca de é l se ex tendió por toda la Judea y por toda la
reg i ó n cercana .
2 4
a su pueblo. Ahora se realiza lo que había anunciado pro-
féticamente en su himno el padre del Bautista: «Bendito
el Señor, Dios de Israel, porque ha venido a ver a su
pueblo y a traerle el rescate, y nos ha suscitado una fuer
za salvadora en la casa de David, su siervo» (l,68s). La
fama de Jesús se extendió por toda Palest ina y por la re
g i ó n c i rcunvec i na . El que ha escuchado la palabra de Dios
la propaga. La palabra acerca de Jesús tiende a llenar el
mundo .
c ) Mensaje del Bautista a Jesús (7,18-35).
Lucas reúne tres fragmentos de tradición para representar la
grandeza de Jesús mediante la grandeza del Bautista. El Bautista
pregunta por la misión de Jesús (7,18-23), Jesús se pronuncia sobre
la misión del Bautista y con ello sobre su propia misión (7,24-30),
y habla de la actitud del pueblo frente al Bautista y frente a él
mismo (7,31-35).
18
L l evaron a J uan sus d i s c íp u l os l a no ti c i a d e tod as
es tas cosas . E n tonces J uan l l am ó a d os d e e l l o s
1 9
y l o s
env i ó a p regun tar a l S eñ or: ¿ E res tú e l q ue t i ene q ue ve
nir , o hemos de esperar a otro?
20
L l egá nd ose a é l aq ue
l los hombres, le d i jeron: Juan e l Baut is ta nos ha enviado
a t i para preguntarte: ¿Eres tú e l que t iene que venir , o
hemos de esperar a otro?
205
Juan está en la cárcel. Por sus discípulos le llega la
noticia de las poderosas obras y de la predicación de Je
sús.
Estas noticias inducen a Juan a
env i ar a d os d e sus
discípulos
al Señor para preguntarle si es o no el Mesías.
¿Quién es Jesús? Lucas, y sólo Lucas en este lugar ,
escribe:
Los envió a preguntar a l Señor.
Aquí se expresa
toda la fe de la primitiva Iglesia acerca de Jesús. La pro
fesión de fe dice, en efecto: «Jesucristo es Señor» (Flp
v e n ,
los cojos andan, los leprosos quedan l impios, los
sordos oyen, los muertos resuci tan, y se anuncia la buena
nueva a l o s p ob res ,
23
y bienave nturado aquel qu e en mí
no encuentre ocasión de tropiezo.
Hechos históricos y la palabra proféticamente divina
dicen quién es Jesús. El tiempo de la salud comienza a
realizarse. Los enviados son testigos de las
curac i ones m i
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 104/190
2,11). Como tal lo constituyó Dios después que llevó a
término su obra en la tierra, después que padeció y mu
r ió , y después que Dios lo resucitó y lo exaltó. A este
conocimiento conduce el largo camino que va desde la
predicación del Bautista hasta la resurrección y el envío
del Espíritu Santo. Ahora bien, este
Señor
nos dice dónde
termina y dónde debe terminar este camino.
Por el
q ue t i ene q ue ven i r
entendía el Bautista una fi
gura mesiánica, no a Dios mismo, y designa a Jesús como
el que ha de venir . «Viene el que es más poderoso que
yo» (3,16) . «En medio de vosotros hay uno al que no
conocéis, el que viene detrás de mí» (Jn l ,26s) . «Un poco,
un poco nada más, y el que ha de venir vendrá, y no tar
dará» (Heb 10,37). El Bautista describió a este que ha de
venir como juez, que tiene ya el bieldo en la mano, que
bautiza con fuego y espíritu, juzga y comunica nueva vida.
¿Qué ha s ido de él? El Bautis ta m anda a pregun tar : ¿Eres
tú el que tiene que venir o
hemos de esperar a otro?
A Lucas le interesa esta pregunta, no precisamente el es
tado de ánimo del Bautista que late en la pregunta. ¿Quién
es Jesús?
21
E n aq ue l m om ento curó a m uch os d e sus en ferm e
dades y males , y de espír i tus mal ignos, y a muchos c iegos
les concedió la gracia de ver.
22
Y respondiendo les d i jo:
Id a contar a Juan lo que habéis v is to y oído: los c iegos
206
l agrosas
que lleva a cabo Jesús. Libra de muchas enfer
medades, quita dolencias, que se conciben como castigos
de Dios (azotes) , y salva de los malos espíritus. Se desta
ca expresamente la curación de ciegos, pues éstos se con
sideraban muertos. Jesús aporta la transformación de las
cosas: libra de la enfermedad y de la miseria, trae recon
ciliación con Dios y quebranta el dominio de los malos
espíritus.
Lo que este acontecer significa en la historia de la sal
vación, lo dice el encargo que da Jesús a los mensajeros;
está expresado con palabras de la Escri tura, tomadas de
Isaías ,
el profeta de la expectación de la salvación en
tiempos de Jesús. «Entonces oirán los sordos las palabras
del libro, y los ciegos verán sin sombras ni tinieblas»
(Is 29,18). «Entonces se abrirán los ojos de los ciegos, se
abrirán los oídos de los sordos. Entonces saltará el cojo
como un ciervo, y la lengua de los mudos cantará gozo
sa» (Is 35,5s) . «El espíritu del Señor, Yahveh, descansa
sobre mí , pues Yahveh me ha ungido. Y me ha enviado
para anunciar la buena nueva a los pobres» (Is 61,1) . Je
sús actúa en vez de Dios en favor de los hombres. No vie
ne como soberano y juez, sino como siervo de Dios, que
quita las enfermedades y la culpa de los hombres; como
mensajero de gozo, que anuncia a los pobres la buena nue
va; como sumo sacerdote, que reconcilia y une con Dios.
La manera de presentarse «el que tiene que venir»
2 7
produce escándalo. B i enaven turad o aq ue l q ue en m í no
encuen tre ocas i ó n d e t rop i ezo .
La idea del que había de
venir , tal como lo entreveían los discípulos de Juan, tal
como lo concebían los fariseos, debe comprobarse me
diante la comparación con los hechos que pone Dios, y
mediante la palabra que profiere Dios por los profetas.
B i enaven turad o aq ue l que no se cierra a la acción de Dios
en Jesús, aunque ésta no responda a la idea que uno mis
mo se ha formado.
falta ir al desierto; más bien había que ir a ver las cortes
de los príncipes helenistas. Juan llevaba un vestido de pelo
de camello con un ceñidor de cuero a la cintura; su ali
mento consistía en langostas y miel silvestre (Mt 3,4s).
¿Quién es Juan? ¿Un asceta? ¿Un profeta? El pueblo
ve en él un profeta que pregona la voluntad de Dios (Mt
21,16). Todos tenían a Juan por profeta (Me 11,32). Su
padre Zacarías predijo que sería profeta del Altísimo
(1,76).
Una comisión investigadora enviada por el sane
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 105/190
24
C uand o l o s env i ad os d e J uan s e fueron , com en zó é l
a h ab l ar d e J uan a l a gen te : ¿ Q ué sa l i s t e i s a ver en e l
d es i er to : una cañ a ag i tad a p or e l v i en to?
25
Si n o, ¿qué
sal is te is a ver: un hombre vest ido con ropajes ref inados?
B i en sab é i s q ue l o s q ue v i s t en sun tuosam ente y v i ven con
l u jo h ab i tan en l o s p a l ac i o s rea l e s .
26
P ues en tonces , ¿ q ué
sal is te is a ver: a un profeta? Pues s í , yo os lo digo y mu
ch o m á s q ue a un p ro fe ta .
Con una manera de hablar popular, gráfica y sin arti
ficio, con preguntas insistentes invita Jesús a su auditorio
a entrar dentro de sí y a reflexionar sobre la misión del
Bautista. El que la comprende, llega también a compren
der lo que significa el modo de presentarse Jesús.
¿Quién es Juan? ¿Por qué acudían a él las multitudes
al desierto? ¿Qué es lo que ha dado lugar a este movi
miento? ¿No irán a ver las cañas del Jordán.. . ni a un
hombre que se pliega y se adapta a todo viento como una
caña? Juan era un hombre valiente y firme y decía de
lante de grandes y pequeños lo que le ordenaba su misión.
¿Era esa firmeza de carácter lo que arrastraba a las mul
titudes hacia él?
¿O era acaso el espectáculo de un príncipe fastuoso
lo que llevaba a las gentes al desierto? Para esto no hacía
2 8
drín le había dirigido esta pregunta: «Eres tú el profeta?
(J n 1,21). En su predicación se repite la predicación de
los profetas; Juan anuncia el castigo de Dios, exige con
versión radical y habla de la salud venidera. Como pro
feta se enfrenta con el señor de la región (Me 6,17ss) y
procede como Samuel frente a Saúl (ISam 15,10ss), como
Natán frente a David (2Sam 12), como Elias frente a Acaz
(IRe 21,17ss). Jesús confirma esta impresión: Sí, es un
profeta. Pero con eso no está dicho todo. Consciente de
su autor idad dice Jesús:
Y o os d i go , m uch o m á s q ue un
profeta. ¿Quién es Juan?
27
Éste es aquel de qu ien está escri to: He aquí que en
vío ante t i mi mensajero, e l cual preparará tu camino de
lante de t i .
28
Y o os d i go: en tre l o s nac i d os d e m u jer, no
h ay n i nguno m ay or q ue J uan; s i n em b argo , e l m á s p e
q ueñ o en e l r e i no d e D i os e s m ay or q ue é l .
En Juan se cumple el oráculo del profeta Malaquías:
«Pues he aquí que voy a enviar a mi mensajero, que pre
parará el camino delante de mí.» Así dice el texto del
profeta, pero la tradición que acepta Lucas adapta el
oráculo a la realización. Dios habla a otro, que es envia
do por él, que viene en nombre de Dios y aporta el tiem
po final: E nv ío an te t i m i m ensa jero . Juan es el prepara-
209
N T ,
Le I. 14
dor del camino del portador de la salvación de los últimos
tiempos, preparador enviado por Dios. Cierra la serie de
los profetas y los supera. Es el profeta que está situado en
el alborear del tiempo mesiánico.
Con conocimiento y autoridad lo llama Jesús el más
grand e d e l o s h om b res . Ve la grandeza de un hombre en
su servicio a la causa de la salvación. Juan prepara la ve
nida del portador de ella. El relato de la infancia de Juan
hablaba ya de esta grandeza: Juan fue anunciado por el
d e J uan .
30
Pero los far iseos y los doctores de la ley frus
traron e l p lan de Dios respecto de e l los mismos y no re
c ibieron e l baut ismo de aqué l .
Mediante el bautismo de conversión para el perdón
de los pecados prepara Juan el camino al que tiene que
venir . Dios mismo es quien establece el bautismo de peni
tencia como camino de salvación para todos. Todo el pue
blo lo necesita, y a todo el pueblo se ofrece.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 106/190
ángel, su nacimiento estuvo rodeado de gozo por la salva
ción, desde un principio posee el Espíritu y está consagra
do a Dios, sobrepuja a Samuel y viene como otro Elias.
Descuella por encima de todos los hombres, incluso por
encima de todas las grandes figuras de la historia de la
salvación.
Sin embargo, la grandeza de Juan tiene sus límites.
E l m á s p eq ueñ o en e l r e i no d e D i os e s m ay or q ue é l . El
más pequeño es Jesús. Jesús sirve a todos los hombres,
se hace pequeño ante Juan al hacerse bautizar por él,
no se presenta como soberano, sino como humilde siervo
de Dios. A juicio de algunos discípulos de Juan, era él el
menor en comparación con Juan. Él aporta el reino de
Dios. Con él alborea el tiempo de la realización y se cierra
el tiempo de las esperanzas, en el que todavía vivía Juan.
En el empequeñecimiento es Jesús el más grande. El reino
de Dios alborea en los pequeños
5S
.
29
Y a l oír lo todo e l pueblo, inc luso los publ ícan os re
conoc i eron to s d es i gn i os d e D i os y rec i b i eron e l b au t i sm o
58 . Del 28 se dan diferentes explicaciones. La que hemos dado se halla
ya en los padres de la Iglesia y hoy vuelve a sostenerse. La otra explicación
dice: el más pequeño es un discípulo de Jesús que tiene parúcipación en el
reino de Dios, feste es mayor que Juan, porque vive ya en el t iempo en qt:e
se inaugura el reino de Dios, mientras que Juan per tenece todavía al t iempo
de la espera.
210
E l p ueb l o ,
que era despreciado por los fariseos y los
escribas por su ignorancia de la ley, y l o s p ub l í canos , que
pasaban por pecadores y eran despreciados como parias,
daban razón a Dios y se plegaban a su designio salvífico,
se convertían, hacían penitencia e iban a bautizarse. En
cambio, los fariseos y los escribas rechazaban el bautismo
de Juan, y así dejaban sin vigor para ellos el designio sal
vífico de Dios. Los sin ley y los pecadores aceptan la
oferta de Dios para la conversión, los fariseos y los escri
bas la recusan. Los que son segregados por los fariseos
son acogidos en la comunidad de salvación; los que se
apartan de los otros considerándose ellos mismos como
comunidad de salvación, desprecian la acogida en la ver
dadera comunidad mediante la penitencia. La oferta de
salvación que se extiende a todos exige la conversión
de todos. El camino lo fija para todos el designio de Dios,
nadie puede fijárselo por su propia cuenta. Juan, con su
actividad, aporta división y juicio; con esto anuncia tam
bién la acción de Jesús.
31
¿A quién, pues, compa raré lo s hombres de esta ge
nerac i ó n , y a q u i en s e p arecen?
n
S e p arecen a l o s n i ñ os
sen tad os en l a p l aza y q ue gr i tan unos a o t ros aq ue l l o q ue
d i ce : O s tocam os l a f lau ta y no h ab é i s b a i lad o; en tonam o s
cantos lúgubres y no habéis l lorado.
211
¿Por qué no se acepta el designio salvífico de Dios?
¿Por qué es rechazado Juan, y en definitiva también Je
sús? La razón de esto la pone al descubierto la parábola
de los n iños caprichosos . Algunos niños juegan en la pla
za de una ciudad. Los unos quieren jugar a bodas, los otros
a entierros. Los unos tocan la flauta e invitan a la dan
za; los otros entonan cantos lúgubres, lloran y sollozan, pero
los primeros persisten en querer jugar a bodas. ¿Quién
puede aprobar tal terquedad? Así también los hombres
del hombre,
que trae los tiempos finales; porque Dios le
ha dado todo poder, todo dominio, dignidad y realeza,
dominio imperecedero sobre todos los pueblos, razas y
lenguas, realeza que no será destruida (Dan 7,14) .
35
Pero la sab iduría jue recon oc ida por todos su s h i jos .
Por muy enigmáticos que puedan parecemos los ca
minos de Dios en la historia de la salvación, no son arbi
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 107/190
quieren algo distinto de lo fijado por el designio divino.
El impedimento para recibir la salvación es el propio yo.
La conversión aparta al hombre de sí mismo y lo vuelve
hacia Dios y su voluntad. El camino de la salvación está
en apartarse de sí y volverse a Dios.
33
Porque ha l l egado Juan e l Baut is ta , que n i come pan
ni bebe v ino , y decís: ¡Está endemoniado
34
L legó e l Hi jo
de l hombre, que come y que bebe, y decís: Éste es hom
bre comi lón y bebedor, amigo de publ ícanos y pecadores .
La caprichosa terquedad de los contemporáneos de
Jesús se muestra en el juicio que formulan sobre él y
Juan . A l Bautista lo tienen por demasiado severo y lo
creen loco. A J e s ú s lo creen poco santo y lo tienen por
un vividor sin religión, que traba amistad con publícanos
y pecadores . Lo l laman «comilón y bebedor» , aunque
Lucas usa unos términos más suaves que los de Mateo
(Mt 11,19). Juan se presenta como predicador de conver
sión y de penitencia, Jesús como dispensador de la sal
vación para todos, y en particular para los que pasaban
por perdidos y no tenían esperanza alguna en Israel.
En uno y otro se revela el designio salvífico de Dios.
Juan el Baut i s ta , profeta de los últimos tiempos, prepara
el camino para el salvador. Jesús, en cambio, es el Hijo
212
trarios, son
sabiduría de Dios .
Jesús vino de distinta ma
nera de como se lo imaginaban los discípulos de Juan,
de como lo enseñab an los fariseos y los doctores de la ley, de
como lo esperaban los diferentes partidos en Israel. El
Bautista vino de distinta manera de como se figuraba Is
rael al preparador del camino de la salvación venidera;
porque no era Elias que volvía a aparecer , sino otro que
se presentaba a la manera de Elias. «Si así lo queréis»,
era Elias. La Iglesia es distinta de como quieren muchos;
los santos son distintos de como los hombres los imaginan.
La sabiduría de Dios en sus obras sólo la puede reco
nocer como sabiduría el que es
hijo de la sabiduría,
que,
por decirlo así, ha nacido de la sabiduría, el que es trans
formado y penetrado por la sabiduría, el que piensa y
juzga como la sabiduría.
Que el pueblo sencillo reconociera a Juan como pre
cursor del Mesías y no se escandalizara de Jesús, no es
obra humana, sino don de Dios, comunicación de la sa
biduría por Dios. Por esto dice también Jesús dando gra
cias: «Te bendigo, Padre, . . . porque has ocultado estas
cosas a sabios y entendidos, y las has revelado a la gente
sencilla» (10,21). La sabiduría humana no sirve para el
conocimiento y la aceptación de los planes salvíficos de
Dios; es Dios mismo quien tiene que hacernos el don
de su sabiduría y de su revelación.
213
Las dos afirmaciones: B i enaven turad o aq ue l q ue en
m í no encuen tre ocas i ó n d e t rop i ezo , y : La sabiduría fue
reconocida por todos sus hi jos , se completan mutuamente .
El juicio puramente humano encuentra tropiezo en los de
signios salvíficos de Dios; la sabiduría divina da la razón
de ellos. El hombre que haya de reconocer en Juan y en
Jesús el comienzo de la salvación tiene necesidad de la
sabiduría divina, tiene que renunciar al pensar puramente
humano. Tiene que dar marcha atrás, tiene que reformar
Jesús se p uso a l a m esa . Estaba invitado a comer en
casa de un fariseo. Aprovecha también esta oportunidad
para enseñar; Simón le da el nombre de maestro. Jesús
procede de distinta manera que el Bautista. Éste vive en
el desierto, lejos de los hombres, como asceta riguroso;
quien quiera oírle, tiene que ir a buscarlo al desierto. Jesús
despliega su actividad en las ciudades, donde viven los
hombres, en las casas, en invitaciones y fiestas. Juan cita
a los hombres a juicio, Jesús les trae la salvación.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 108/190
su modo de pensar, no debe tomarse a sí mismo por me
dida de las cosas, sino a Dios, tiene que salir de sí mismo
y dejarse iluminar por la palabra de Dios, despojarse de
la sabiduría humana y hacerse niño. Dios, en efecto, hace
que se anuncie a los pobres la buena nueva.
d) Conversión de la pecadora (7,36-50).
Sólo Lucas refiere que Jesús se sentó a la mesa con fariseos.
Le gusta de hablar de conversaciones habidas a la mesa. Durante
la comida se trata de lo que separa a Jesús y a los farseos: la
actitud frente a los pecadores (7,36ss), las leyes de pureza (ll,39s),
el reposo sabático (14,lss). Las disputas se convierten en conver
saciones habidas junto a la mesa (14,7ss).
El clima es distinto que en Mateo, más griego, más humano,
más estimulante.
36
Cierto fariseo lo inv i tó a comer con é l . En tró, pues,
J e sús en l a casa d e l f ar i s eo
y
se p uso
a
l a m esa .
37
Y en
esto, una mujer pecadora que había en la ciudad, al saber
q ue é l e s tab a com i end o en l a casa d e l f ar i s eo , l l e vó con
s i go un f rasco d e a l ab as tro l l eno d e p er fum e ,
3 8
y po
niéndose detrás de é l , a sus pies , y l lorando, comenzó a
bañárselos con lágrimas, y con sus propios cabel los se los
i b a s ecand o; l uego l o s b esab a y l o s ung ía con e l p er fum e .
214
La casa en que se celebraba un banquete estaba abier
ta aun a los no invitados. Podían mirar, deleitarse con la
vista del espectáculo, participar en las conversaciones de
los comensales. Así pudo entrar también la mujer que era
conocida como pecadora en la ciudad. Parece ser que
era una meretr iz
5 9
.
La mujer muestra que profesa a Jesús una veneración
sin límites. Llora profundamente conmovida. Besar los
pies era señal de la más humilde gratitud, como la que
se tiene, por ejemplo, a uno que salva la vida. La mujer se
suelta los cabellos, aunque era ignominioso para una mu
jer casada soltarse los cabellos delante de hombres. Con
los cabellos destrenzados seca los pies de Jesús. Se olvida
de sí misma, no escatima nada y se entrega totalmente al
sentimiento de gratitud a Dios. ¿Por qué todo esto? Jesús
va a aludir a los antecedentes de esta conmoción interior.
39
Viendo esto e l far iseo que lo había inv i tado, se de
cía para s í: S i éste fuera profeta, sabría quién y qué c lase
de mujer es ésta que le es tá toca ndo: ¿Es una pecadora
40
En tonces tomó Jesú s la palabra y le d i jo: Simón, tengo
59 .
«Pecadora» puede ser también una mujer que — ella o su marido —
ejerce una profesión poco honrosa, como la de publicano, vendedor ambulante,
cur tidor , o que desprecia la ley. Sin embarco, sus manifestaciones de dolor
hacen pensar más bien en una culpa muy personal .
215
que dec ir te una cosa . Y é l contes tó: Pues din te la , Maes
tro.
4 1
Cier to pres tamis ta t en ía dos deudores: e l uno le
debía qu in ien tos denar ios , y e l o tro , c incuenta .
n
C o m o
no podían pagar le , a los dos le s perdonó la deuda. ¿Cuál,
pues , de e l los lo amará más?
43
Simón le respondió: Su
pongo que aque l a qu ien más perdonó. Entoces Jesús le
dijo: Bien has juzgado.
Simón ha oído lo que el pueblo dice de Jesús, que es
de los dos estará más agradecido? En arameo no hay pa
labra especial para decir «agradecer». La gratitud se ma
nifiesta en el deseo de dar algo por lo que se ha recibido,
en el amor. La pecadora a los pies de Jesús expresa gran
agradecimiento con sus demostraciones de amor.
¿No debía Simón quedarse pensativo reflexionando
sobre la segunda parte de la parábola? Al que se han per
donado cinco denarios . . . Él también es deudor . Pero no
tiene conciencia de su deuda. Por eso ama poco. Aquí
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 109/190
profeta.
Ahora ha podido formarse un juicio por sí mis
mo.
Imposible que sea profeta, puesto que un profeta
posee el don de escudriñar los corazones de los hombres
y no tiene trato con los pecadores. Juzga al profeta se
gún la doctrina de los fariseos, según su propia prudencia
y sabiduría, no según la sabiduría y los pensamientos de
Dios.
Sin embargo, Jesús posee el
conoc imiento de los cora
zones
propio de los profetas, pues conoció los pensamien
tos de Simón. El que mantenga relaciones con los peca
dores no se opone a su proximidad con Dios. En efecto,
el tiempo de salvación es tiempo de la buena nueva para
los pecadores, tiempo de perdón y de misericordia. Tene
mos que remontarnos a la palabra de Jesús, y por ella a
los pensamientos de Dios, para enjuiciar los «dogmas»
que nos hemos fabricado nosotros mismos y conforme a
los cuales queremos juzgarlo todo, incluso los designios
de Dios . . .
Simón desprecia a la mujer como pecadora y se cons
tituye en su juez. ¿Qué pensar de esto? Jesús es profeta y
conoce los corazones de los hombres y el designio de
Dios. La parábola se aplica a la situación. Se compara la
culpa o deuda del pecado con la deuda pecuniaria. ¿Cuál
de los dos a quienes se ha perdonado amará más al que
ha perdonado? Más obvio habría sido preguntar : ¿Cuál
216
asoma el dicho del sermón de la montaña acerca de la
paja y la viga en el ojo.
44
Y vo lv iéndose hac ia ¡a mujer , di jo a Simón: ¿Ves
es ta mujer? Cuando entré en tu casa , no me dis te agua
para los pies : e l la , en cambio , me los ha bañado con lá
gr imas y me los ha secado con sus cabe l los .
45
N o m e
dis te un beso; e l la , en cambio , desde que en tré, no ha ce
sado de besarme los pies . *
6
No me ung is te la cabeza co n
ace ite ; e l la , en cambio , ha ung ido mis pies con per fume.
47
Por lo cua l , yo t e lo digo , le quedan perdonados sus
pecados , sus muchos pecados , porque ha amado mucho.
Porque aque l a qu ien poco se le perdona, e s que ama poco .
Las miradas de Jesús se posan en la pecadora arrepen
tida . También Simón debe de mirar la . Es un cuadro que
va a sensibilizar la enseñanza. La mujer ama mucho. To
das las demostraciones de hospitalidad: lavar, los pies, be
sarlos, ungir la cabeza, todo esto lo ha practicado ella en
forma personal, con humildad y entrega: lava los pies con
sus lágrimas y sus cabellos, unge, con ungüento precioso
que ella misma se había procurado, no la cabeza, sino los
pies;
ha amado mucho, personalmente conmovida hasta
lo más íntimo. ¿Y el fariseo?
Tú no me diste. . .
No has
cumplido conmigo ni siquiera los deberes normales de la
217
hospitalidad y de la cortesía. El amor de esta mujer, a
la que se desprecia como pecadora, es un amor que desbor
da de gratitud por la bondad desbordante de Dios. Se
deshace de sí, se olvida de sí, Dios lo es todo para ella.
Le quedan perdonados sus pecados , porque ha amado
m u c ho .
Es cierto que son incompatibles el amor y el pe
cado. «El amor cubre multitud de pecados» (IPe 4,8).
«Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida ,
porque amamos a nuestros hermanos» (Un 3,14) . «Al
reverso de la precedente, que así queda más iluminada.
El que se fía de su justicia y cree que no tiene, o que ape
nas tiene necesidad de perdón, se halla en peligro. A este
no le induce la angustia de la culpa a acoger con ansia,
con gozo y gratitud la buena nueva de la misericordia de
Dios; a este se le pasa muy fácilmente inadvertido el amor
desbordante que se manifiesta en el reino de Dios. Los
pobres son llamados por Jesús bienaventurados, y los
ricos tienen que oir: ¡Ay de vosotros Simón se halla en
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 110/190
que me ama, mi Padre lo amará» (Jn 14,21). El amor borra
los pecados. A ella se le perdonan los pecados, los mu
chos pecados, porque ha amado mucho.
Después de la parábola parecía que había de sacarse
la conclusión: porque se le ha perdonado mucho, por eso
ha amado mucho. ¿Cómo se dice , pues: Quedan perdona
dos sus pecados porque ha amado mucho? Los enigmas,
las paradojas, hacen reflexionar. El amor de la pecadora
es , al mismo tiempo, motivo y consecuencia del perdón.
Porque por las palabras de Jesús ha comprendido que él
anuncia con autoridad el perdón de los pecados, por eso
ama, y porque ama recibe el perdón. La palabra del per
dón de los pecados proferida por Jesús causa lo que expre
sa. Ahora bien, para ser palabra eficaz debe al mismo
tiempo infundir el amor, ya que sin amor no se perdonan
los pecados. Este amor que se infunde al pecador, hace
que él ame, lo convierte en amante. El amor es la nueva
forma de su vida, y con ella se borra su pecado.
Aquel a qu ien poco se le perdona, e s que ama poco .
¿Hay, pues, que tener muchos pecados para que se per
done mucho y se ame mucho? Esto se parecería a lo que
se reprueba como absurdo en la car ta a los Romanos:
«Permanezcamos en el pecado para que la gracia se mul
tiplique» (se muestre en toda su fuerza), Rom 6,1. Ni tam
poco se quiere aludir al fariseo Simón; la frase es el
218
peligro si se tiene a sí mismo por justo y, en cambio, des
precia a la pecadora . Su amor es pequeño, porque . . . é l
e s jus to . . .
Jesús no borra la diferencia entre deuda grande y pe
queña. Llama pecado al pecado. Pero entabla su lucha
contra el pecado de manera diferente que la de los fariseos.
Éstos excluyen a los pecadores del santo pueblo de Dios
y se apartan de ellos; Jesús, en cambio, anuncia y trae el
perdón, hace a los pecadores santos y los introduce en
el pueblo de Dios. Esto se efectúa por cuanto él anuncia el
amor, que es don y precepto a la vez: el amor a Jesús y
por él a Dios, como el que tiene la pecadora, el amor al
hermano, como se insinúa en la parábola del siervo des
piadado al que se retira el perdón porque no perdona a
su hermano y no lo ama. El amor entraña perdón: e l
amor de Dios a los pecadores, el amor de los pecadores
a Dios y a los semejantes.
48
Lueg o dijo a e l la: Perdonados t e son tus pecados .
45
Y comenzaron a dec ir en tre s í los comensa les : ¿Quién
es és te , que has ta perdona pecados?
50
Pero é l di jo a la
mujer: Tu je te ha salvado; vete en paz.
Jesús formula el perdón del pecado. El perdón se ha
producido y permanece. Jesús lo anuncia y lo efectúa.
219
«El Hijo del hombre tiene poder para perdonar pecados»
(5,24).
Jesús es maestro, profeta, y más que profeta. Dios
mismo le ha conferido el poder de perdonar pecados.
¿Quién es éste , que hasta perdona pecados?
Lo que salvó a la mujer fue la je . El perdón se pro
mete a l amor . «Mucho se le perdona , porque ha amado
mucho.» Ahora bien, la mujer alcanzó el amor porque
oyó la palabra de Jesús, se la aplicó a sí misma y la acep
tó con fe. Fe y amor van de la mano. Pero una y otro van
b u e n a n u e v a , nueva de alegría y de v ictoria, como heraldo
y pregonero del reino de Dios que se aproxima. Sus actos
están al servicio del mensaje, y son signo y expresión del
reino de Dios, que alborea.
En su camino le acompañan l o s d oce . Están con él. La
comunión con él les crea la base para oir y para apren
der, para predicar y actuar en el pueblo. Jesús con los
doce forma el núcleo del nuevo pueblo de Dios.
2
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 111/190
dirigidos en primer lugar a Jesús. A nadie se le ha ocu
rrido jamás pensar en un amor a Jesús que lo venere, le dé
gracias y lo adore, y a la vez sea capaz de mantenerse
sin fe, en lugar de hacer creyente al hombre ante todo y
sobre todo.
Jesús designa el perdón del pecado como salvación y
paz. Jesús es el portador de la salvación y de la paz. En
esta sección del Evangelio hay dos mujeres profundamente
afligidas: la viuda de Naím y la pecadora. Las dos son li
bradas de su aflicción. Jesús es el salvador de todo sufri
miento agobiante. Él consuela a los que lloran, a la mujer
que llora por su hijo difunto, a la mujer que llora por su
pecado. Jesús se muestra aquí el salvador de las mujeres.
3 . MU JE RE S QUE SERVÍAN A JE SÚ S
(8,1-3).
1
Posteriormente, é l con t inuaba su camin o
po r
c i ud ad es
y a l d eas , p red i cand o y anunc i and o en e l l a s e l E vange l i o
del re ino de Dios; con é l iban los doce.
Jesús es huésped y caminante infatigable. Pasa la vida
por los caminos. Recorre las grandes y pequeñas aglomera
ciones, ciudad por ciudad, aldea por aldea. El Evangelio
está llamado a recorrer el mundo. Jesús va c l am and o l a
22
Y a l gunas m ujeres q ue h ab ían s i d o cu rad as de espí
ri tus mal ign os y de enfermedades: María, la l lamada Mag
d a l ena , d e l a cua l h ab ían sa l i d o s i e t e d em on i os ;
3
J uana ,
la mujer de Cuza, adminis trador de Herodes; Susana y
o tras m uch as , l a s cua l e s l o s s erv ían con sus p rop i os b i enes .
Entre los que seguían a Jesús se contaban también
mujeres. Los rabinos excluían a las mujeres del círculo
de sus discípulos. No las juzgaban aptas para el estu
dio de la ley. «El que enseña a su hija la ley, le enseña el
vicio.» El centro del círculo que rodea a Jesús no lo ocupa
la ley, sino él mismo, que vino para salvar a los pobres y
despreciados, a los parias y a los ignorantes de la ley.
El séquito de las mujeres da testimonio de la voluntad y
la misión de Jesús, que pone al alcance de las mujeres la
doctrina y la salvación.
El grupo de las mujeres que seguían a Jesús se com
ponía de algunas que habían sido curadas de malos espí
ritus y de enfermedades, y de otras muchas. En el centro
de la narración hallamos tres nombres. M aría M agd a l e
n a , de la que habían salido muchos demonios, J u a n a , la
mujer de Cuza , administrador de Herodes, y Susana . Es
tas mujeres son un eco del vasto influjo de la actividad de
Jesús en Galilea. Se siente a Jesús como salvador. No se
habla de llamamiento de las mujeres a seguir a Jesús como
221
discípulas. Las mujeres no reciben encargo de enseñar y de
desplegar actividad. Servían a Jesús y a los doce
c o n s u s
b i enes . Con esto adquiere libertad de acción el núcleo del
nuevo pueblo de Dios, por el que la palabra fue llevada
al mundo.
Estas mujeres, sirviendo con sus propios bienes pro
porcionaron gran ayuda no sólo para el desarrollo de la pa
labra de Dios en tiempo de Jesús, sino también para la
futura labor misionera de la Iglesia. Lo que habían comen
III . M A S Q U E P R O F E T A (8,4-9,17)
1. EN PALABRAS (8,4-21).
a ) Parábola del sembrad or (8,4-15).
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 112/190
zado las mujeres galileas se continuó en la propagación del
mensaje de Jesús por el ancho mundo. Aquellas mujeres
sirvieron de ejemplo a otras numerosas que servirían con
sus bienes a los pregoneros de la palabra: Lidia (Act
16,14), Príscila (Act 18,2), Síntique y Evodia (Flp 4,2),
Cloe (ICor
1,11),
Febe (Rom 16,ls) .
En Galilea reúne Jesús los test igos de su actividad. Le
siguen en su predicación de una parte a otra, y estarán
junto a él al pie de la cruz (23,49). María de Magdala, Jua
na y otras tendrán noticia de la resurrección por el mensaje
de los ángeles y serán enviadas a los apóstoles con este
mensaje (24,10).
Por las ordenaciones del judaismo de la época se echa
de ver que la mujer no era considerada como miembro de
la comunidad; podía participar en el culto, pero no estaba
obligada a ello. El culto sólo tenía lugar cuando estaban
presentes por lo menos diez hombres, mientras que no se
tenía en cuenta a las mujeres. Las mujeres galileas per
tenecen al
núcleo primit ivo de la Igles ia.
Lucas dejó de
ellas como un monumento conmemorativo: «Todos ellos
perseveraban unánimes en la oración, con algunas muje
res,
con María, la madre de Jesús, y con los hermanos de
éste» (Act 1,14).
222
Se pronuncia la parábola del sembrador (8,4-8), cuya inter
pretación es don de Dios (8,9-10), que se otorga en primer lugar
a los discípulos (8,12-15). Según Marcos, la parábola del sem
brador inaugura la predicación en el lago. De ésta no dice nada
Lucas. En Marcos es el lago el centro de la actividad docente de
Jesús; en Lucas sólo una vez aparece Jesús en el lago. La expo
sición está puesta al servicio de una idea de la historia de la
salvación. Jesús actúa en el interior del país, en el estrecho
ámbito de Palestina; después de recibir el Espíritu Santo aban
donarán los apóstoles aquella tierra y se harán a la mar para
llevar la palabra de Dios por el ancho mundo. El tiempo de
Cristo en la historia de la salvación está limitado a Palestina y
al periodo de tiempo de Cristo mismo, mientras que el tiempo
de la Iglesia se extiende al mundo entero y dura hasta la segunda
venida de Cristo. No obstante, el tiempo de Cristo es el punto
medio de los tiempos, es cumplimiento y realización de lo antiguo
y raíz y fundamento de lo venidero.
4
R eun i d a m uch a g en te , y l o s que i b an a cud i end o a él
d e cad a ciudad, les d i jo mediante una parábola:
5
Sal ió e l
sembrador a sembrar su semil la . Y según iba sembrando ,
parte de la semil la cayó al borde del camino; fue pisotea
d a y l o s p á jaros d e l c i e l o s e l a com i eron .
6
Otro poco cayó
sobre la piedra; y , después de nacido, se secó, por no tener
h um ed ad .
7
Otro po co cayó en medio de la s zarzas; y
cuan d o l a s zarzas crec i eron jun tam ente , l a ah ogaron .
Ha
Y
otro poco cayó en t ierra buena; y , después de nacido, l l egó
a dar fruto a l c iento por uno.
223
En la parábola se tiene ante la vista un sembrador
típico. Han pasado las lluvias de otoño: es el período de
mediados de noviembre a diciembre. El sembrador lleva la
semilla en un saco colgado del cuello o en el ruedo levan
tado de su túnica. Sale de casa y va al campo, que está
en barbecho y todavía no se ha arado. Allí paso a paso,
según camina, va lanzando a voleo los granos, con un am
plio movimiento del brazo. Después de sembrar se labra la
tierra a fin de que quede envuelta por ella la semilla. Siem
solo dato. Se atiene al más alto, desatendiendo la imagen en
beneficio de la realidad representada por ella. En efecto,
en la tierra de montaña no se suele cosechar más del
s ie te por uno.
Lucas cambió más de una vez el texto de su fuente y
con ello abandonó también el terreno de la realidad pa
lestina. Pensó que así podía hacer más accesible y com
prensible la parábola a sus destinatarios. Más que la
fidelidad a la letra le interesa que se entienda la verdad
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 113/190
bra el labrador su s i m i en te : trigo o cebada; en su simiente
está encerrada parte del destino de su vida.
Las suertes de la semilla dependen del terreno. El
campo está situado en terreno montañoso sobre el lago
de Genesaret. Por el campo en barbecho se han marcado
caminos. En algunos puntos escasamente cubre el mantillo
las rocas calcáreas. Hay cardos de la altura de una perso
na. Parte de la semil la cayó al borde del camino. El sem
brador no tiene que preocuparse de dónde cae la semilla,
pues también el camino se revolverá cuando se pase con
el arado.
Lucas no se crió en Galilea. Por eso dice que la
semilla fue pisoteada. A esto hay que añadir los pájaros
que se comieron parte de la semilla. El evangelista escribe
en estilo bíblico: las aves del cielo (Gen 1,26). Otro poco
cayó sobre la piedra. La ligera capa de mantillo que cubre
escasamente las rocas se caldea pronto. La planta brota
pujante, pero no tarda en secarse por falta de humedad.
Parte de la semilla cayó también en medio de las
zarzas.
También éstos se revuelven después de la siembra. Sin
embargo, al germinar el trigo, crecen también con fuerza
y lozanía los cardos y ahogan las tiernas plantas nacidas
de los granos.
Marcos habla de un rendimiento del treinta, sesenta y
hasta del ciento por uno. Lucas se contenta con dar un
224
significada. Los Evangelios quieren ser, ante todo, procla
mación de la fe a determinadas personas en una situación
determinada, y no sólo reproducción literal de lo que se
dijo y sucedió. Sin embargo, Lucas se limitó sólo a re
tocar un poco. El respeto a la historia vedaba modificar
notablemente el cuadro, pero la proclamación permitía lo
que aprovechaba al fruto del Evangelio. Lucas mira re
trospectivamente al tiempo de Jesús, pero el tiempo de
Jesús ha de determinar el tiempo de la Iglesia. El evan
gelio tiene que tener vida, no ha de ser algo abstracto y
estereotipado.
8b
Dicho esto, exclama: E l que tenga oídos para oir ,
q ue o i ga .
9
E n tonce s su s d i s c íp u l os l e pregun taron q ué
signi f icaba esta parábola.
10
Él les con testó: A voso tros se
os h a conced i d o conocer l o s m i s t er i o s d e l r e i no d e D i os ;
a los demás, en parábolas, para que v iendo, no vean, y
oy end o , no en t i end an .
Jesús invita a prestar atención, a recogerse para oir su
palabra, a reflexionar. E x c l am ab a . Es mensajero y heraldo
del tiempo de la decisión. Las muchedumbres están toda
vía presentes. Los discípulos preguntan por el significado
de la parábola. La situación que pinta Marcos parece
haberse abandonado deliberadamente . Los discípulos no
225
NT, Le I, 15
están solos con Jesús. Piden la explicación de la parábola
para sí mismos y también para el pueblo.
El reino de Dios es un
misterio,
es designio de Dios,
que estaba oculto (Mt 13,35), pero que se revela al final de
los tiempos. Jesús trae el reino de Dios, por Jesús se hace
presente el misterio del reino de Dios, se inicia el tiempo
de salvación. El que comprende que Jesús es el porta
dor del acontecimiento final, comprende también los mis
terios del reino. Este conocimiento, esta comprensión no
es fruto de la penetración personal, sino don de Dios.
A v o s
más no es infranqueable. Los discípulos preguntan por el
sentido de la parábola para sí mismos y
para e l pueblo ,
delante del cual interrogan a Jesús. La explicación que
reciban de Jesús la transmitirán también a los demás. La
gracia del conocimiento se da por medio de ellos también
a los otros, con tal que éstos sean receptivos y hayan hecho
penitencia. Pedro dice en su sermón después de la ascen
sión del Señor: «Sepa, por tanto, con absoluta seguridad
toda la casa de Israel que Dios ha hecho Señor y Mesías
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 114/190
otros se os ha concedido. . .
por Dios.
El conocimiento de que con Jesús se ha inaugurado el
reino de Dios distingue de los demás a los discípulos. A los
discípulos se ha dado comprender las parábolas que ha
blan del reino de Dios. Para los demás las parábolas ve
ladas, de modo que v iendo, no vean , y oyendo, no en t ien
d an . Las parábolas de Jesús dan cierto conocimiento
general del reino de Dios, aunque sin descubrir el misterio
de que el reino ha llegado ya en Jesús. Se ve algo, pero
no se ve lo esencial, se oye algo, pero no se oye lo esen
cial. Lo esencial consiste en reconocer que está ya pre
sente el reino de Dios y que Jesús es el portador del tiem
po final.
El profeta Isaías habló de que habrá quienes viendo no
vean, y oyendo no oigan. ¿Por qué conocen los discí
pulos los misterios del reino y por qué los otros no? El
evangelista no estudia psicología de la fe y de la incredu
lidad, sino que muestra la última razón teológica. Así está
fijado por el designio de Dios, tal como aparece en la Es
critura. Dios, sin embargo, no condena a nadie a la incre
dulidad
s in cu lpa por par te de l hombre .
El que viendo
no ve, y oyendo no oye, se ha endurecido frente a la
palabra de Dios.
La brecha que se abre entre los discípulos y los de-
226
a este Jesús a quien vosotros crucificasteis. Al oir esto, se
dolieron de corazón y dijeron a Pedro y a los demás após
toles:
¿Qué tenemos que hacer , hermanos? Pedro les res
pondió: Convertios , y que cada uno de vosotros se bautice
en el nombre de Jesucristo para remisión de vuestros pe
cados, y recibiréis el don del Espíritu Santo» (Act 2,36ss).
11
És te e s e l sen t ido de la parábola: la semil la e s la
pa labra de Dios .
n
Los de l borde de l camino son los que
escuchan; pero luego v iene e l diablo y se l leva de su co
razón la pa labra, para que no crean y se sa lven .
13
L o s de
sobre la piedra son los que , a l o ir , rec iben con a legr ía la
pa labra, pero no t ienen ra íz; son los que creen por a lgún
t iempo, pero en e l momento de la t en tac ión se re t iran .
14
Lo que cayó en tre zarzas son los que oyeron; pero co n
las preocupac iones , las r iquezas y los placeres de la v ida ,
s e v a n a ho g a n do y n o l l e g a n a m a du r a r .
15
Lo de la t ierra
buena son los que oyen la pa labra con un corazón noble y
generoso , la re tienen y por su con s tanc ia dan fru to .
La pa labra de Dios
es la palabra acerca del reino de
Dios, la palabra acerca de Jesucristo, portador del reino
de Dios, e l Evangelio . Como palabra que procede de Dios,
tiene fuerza, crece y produce efecto en nosotros. El úl
timo fruto de esta palabra es la salvación. La palabra de
227
Dios es palabra de reconciliación, de salvación, de gracia,
de v ida , de ve rdad . . .
6 0
.
A fin de que la palabra lleve fruto en el hombre y al
cance la meta, debe formar una comunidad de vida con los
hombres. En lugar de las palabras:
Los de l borde de l
camino son los que . . .
habríamos aguardado algo así com o:
La semilla que cayó en el camino significa la palabra de
Dios.. . Bajo la fórmula algo extraña late evidentemente
la idea: Los hombres son el campo en que se siem
de vida griego (ka lckagathia: belleza y bondad moral) .
El hombre de bien se amolda a la voluntad de la divini
dad. El hombre naturalmente bueno lleva en sí la mejor
base para la acción de la palabra de Dios. La palabra debe
aceptarse y retenerse, pese a las tentaciones y a las ame
nazas. Es necesario fructificar con paciencia, con cons
tancia, día tras día, con perseverancia y firmeza. Pese a
todos los ataques, se realiza y se vive la palabra de Dios.
La palabra de Dios transforma al hombre, pero no sin la
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 115/190
bra, y a la vez la semilla que tiene que crecer. La palabra
entra como en combinación con los hombres, transforma
al hombre y le da una nueva configuración. La imagen
exacta del hombre no es el terreno, sino lo que en él
crece, que vive a la vez del grano de semilla y de la sus
tancia de la tierra.
El desarrollo y la fructificación están
amenazados de
pe l igros .
Los peligros vienen del demonio, de la incons
tancia, de la tentación a desertar, de las preocupaciones
cotidianas, de la riqueza y de los placeres. En las expli
caciones están entretejidas amargas experiencias, por las
que había tenido que pasar la Iglesia en la predicación
de la palabra y que todavía son impedimentos que se
oponen constantemente al pleno desarrollo de la pala
bra de Dios.
Si la palabra ha de llevar fruto, debe predicarse, oírse,
recibirse en el corazón y creerse. «¿Cómo podrán tener
fe en aquel de quien no oyeron hablar? ¿Y cómo van a
oir sin que nadie lo proclame? ¿Y cómo podrán procla
marlo, sin haber sido enviados?» (Rom 10,14s).
Para que la palabra logre el mejor desarrollo posible,
hay que cumplir tres condiciones: el corazón ha de ser
bello y bueno. Aquí se oye como un eco del ideal moral
60-
2Cor 5 ,19; Act 13,26; Act 14,3; 20,32; Flp 2 ,16; 2Cor 6 ,7 .
cooperación del hombre .
Mientras se proclama y se recibe la palabra, están en
acecho los enemigos de la salvación, tratando de impedir y
anular su crecimiento. Quien proclama la palabra de Dios
en el mundo debe contar con estos adversarios, aunque
estos tampoco perdonan al que la recibe. La lucha se
desencadena a todos los niveles: mientras
se rec ibe ,
mien
tras
se desarro l la
y antes del
resultado definit ivo.
No sin
razón se pone al fin la palabra «constancia».
b)
Parábola de la lámp ara (8,16-18).
16
Nadie enc iende una lámpara para cubrir la con una
vas i ja o para poner la debajo de la cama, s ino que la pone
sobre un cande lero , para que los que en tren vean la luz .
17
Porque nada hay ocu l to que no haya de quedar manif ie s
to ;
n i secre to que no haya de ser conoc ido y sa l ir a la luz .
Mediante la explicación de la parábola se ha produ
cido luz, ha brotado conocimiento, se ha hecho patente
algo que estaba oculto. ¿Cómo han de servirse los discí
pulos de este conocimiento, de la palabra que les ha des
cubierto el misterio? A la manera de un hombre que en
ciende una luz. No la cubre con una vasija o la pone
229
debajo de la cama, sino que la pone sob re un cand e l era ,
bien alta, para que todos puedan verla. Quien ha recibido
la palabra de Dios con su fuerza de iluminar, debe utili
zarla en servicio de los demás. El iluminado debe a su vez
iluminar. Lo oculto pugna por manifestarse, lo secreto
quiere ser conocido. Sería antinatural que los discípulos
escondieran y ocultaran lo que se les ha revelado y lo
que ellos han conocido. Lo que han experimentado en el
pequeño círculo de Jesús debe darse a conocer al gran
público. La acción apostólica es una «ley natural» del dis
del conocimiento del Evangelio, propagarlo, hace más
ricos en conocimiento y en posesión de la fe. Dar equi
vale a adquirir más.
c ) La verdadera familia de Jesús (8,19-21).
19
V i no a ver l e su m ad re y su s h erm anos; p ero no l o
graban l legar a é l , por causa de la mul t i tud.
20
E n t o n c e s
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 116/190
cípulo de Cristo.
18
Mirad, pues, cómo escucháis , porque al que tenga,
se l e d ará , y a l q ue no t enga , aun aq ue l l o q ue p arece
tener se le qui tará.
La parábola de la semilla ha puesto de manifiesto
cuánto importa la manera có m o se oy e . Los discípulos han
de anunciar lo que han oído. Deben llegar a apropiárselo
interiormente, debe ser como un capital con que trabajar.
Por lo regular les sucederá como en la vida de un comer
ciante. Si tiene capital, lo aumentará, pues le dará posibi
lidad de multiplicar las operaciones y las ganancias. El
que no tenga nada, no sólo no ganará nada, sino que aun
lo poco que crea tener y que se le va gastando ya, aca
bará por perderlo.
El conocimiento de la revelación de Dios, que se nos
confía, es como un capital con el que hay que trabajar, es
un conocimiento que se debe enseñar, comunicar, sacar
a la luz pública. Si se hace así, entonces D i os acrec i en ta
e l conoc i m i en to . Si no se trabaja, quita D ios incluso lo
poco que se poseía en apariencia. El conocimiento religio
so que no se da a conocer, que no se vive y se proclama,
es una posesión aparente, que va desapareciendo. Vivir
23
l e av isaron: Tu madre y tus hermanos están ahí fuera y
quieren verte .
21
Pero é l les con testó: M i madre y mis
h erm anos son aq ue l l o s q ue oy en l a p a l ab ra d e D i os y l a
ponen en práct ica.
Jesús está asediado por el pueblo. Su madre y sus her
manos quieren ver sus obras maravillosas, quieren verle
a él. Pero esto no es precisamente lo que importa. Desde
que Jesucristo está sentado a la diestra del Padre, no po
demos ya entrar personalmente en contacto con él, no
podemos ya verlo con los ojos, no podemos ya presenciar
su acción.
Jesús mismo dice qué es lo que importa: oír y poner
en práct ica la palabra de Dios. Nosotros tenemos la pala
bra de Dios. Los discípulos la siembran todavía en el
mundo. Por Jesús fue tra ída la palabra de Dios a l mundo,
hizo una carrera triunfal por el mundo, nos llegó también
a nosotros. En la palabra está la acción salvífica de Jesús,
él está presente como portador de salud. «Bienaventurados
los que no vieron y creyeron» (Jn 20,29).
El que escucha y pone en práctica la palabra de Dios,
es m ad re y h erm ano d e J e sús . No son los lazos de la san
gre los que proporcionan la comunión con Jesús, sino el oir
y poner en práctica la palabra de Dios. La Iglesia es edifi
cada por la palabra de Dios. Ésta es el alma de la Iglesia, y
231
la Iglesia es su fruto. De la palabra de Dios brota siem
pre Iglesia viva. Ésta viene a ser familia de Cristo oyendo
y guardando la palabra de Dios.
En la historia de la infancia se presenta ya a
la madre
de Jesús
como la tierra buena que oye y hace, pone en
práctica la palabra de Dios. Es esclava del Señor, que oye
la palabra de Dios y se pone a su disposición como es
clava (1,38). Guarda cada palabra y la medita en su co
razón (2,19). Lleva la palabra a Isabel, y su anuncio la hace
precipita con fuerza asoladora de los montes a la cálida
depresión formada por el lago. La barca se llena de agua,
el peligro rodea a los discípulos por todos lados. La doble
llamada — ¡Maestro, M aestro — indica lo apurado y ur
gente de la situación. Sin embargo, no pronuncian la me
nor palabra de queja; sencillamente:
¡Que nos hundimos
A Lucas le gusta la dignidad y la mesura; tiene a raya
las excitaciones y expresiones violentas de la pasión.
2 4b
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 117/190
tan rica, que desborda en un cántico (1,46-55). María es
el corazón bueno, que retiene la palabra y lleva fruto
con constancia. María es madre de Jesús, no sólo porque le
dio la vida humana, sino también porque oyó y puso en
práctica la palabra de Dios.
2 . EN OBRAS (8,22-56).
a ) La tempestad calmada (8,22-25).
22
Un día subió é l con sus disc ípu los a una barca y le s
dijo: vamos a pasar a la o tra or i l la de l lago . Y navegaron
hac ia dentro .
23
Mientras naveg aban, é l se durmió. De
pronto se desencadenó sobre e l lago una fuer te borrasca .
y se iban l lenando de agua has ta encontrarse en grave
pe l igro .
24 a
Acercáronse a é l y lo desper taron dic iendo:
¡Maes tro , Maes tro , que nos hundimos
Jesús está
so lo con sus disc ípu los ,
como en los dos
grandes milagros siguientes. A los discípulos se les revelan
los misterios del reino de Dios. Cuando Dios asume su
soberanía, se manifiesta esto en obras de poder.
Los discípulos se hallan
en extrema neces idad.
El Se
ñor , único que podría ayudarles , duerme. La borrasca se
232
En tonces é l se levantó, increpó a l v ien to y a l o lea je
de l agua, y se apac iguaron, y sobrev ino la ca lma.
25
L u e
go le s dice: ¿Dónde es tá vues tra f e? El los , l lenos de t emor
y de admirac ión , se preguntaban unos a o tros: ¿Pero qu ién
es és te , que has ta manda a los v ien tos y a l agua, y le
obedecen?
E l
poder de Dios
se manifiesta en Jesús. Dios es el
que sosiega el alboroto del mar, el que apacigua las olas,
el que calma el furor de los pueblos (Sal 65,8). Lo que las
generaciones pasadas experimentaron de parte de Dios
vuelve a reproducirse ahora por Jesús: «Clamaron a Yah-
veh en su peligro, y los libró de sus angustias. Tornó el
huracán en céfiro, y las olas se calmaron. Alegráronse
porque se habían encalmado, y los guió al deseado puerto»
(Sal 107,28ss).
En Jesús está presente a los discípulos el poder salví-
fico de Dios. ¿Dónde estaba su fe cuando casi desespera
ban? Él los había enviado al lago; él es el dueño que les
había confiado aquel trabajo y él permanecía con ellos.
Quieren pasar e l lago. Cuando su palabra lo ordena , deben
tener valor, pues el poder de Dios está en él. En este sen
tido, toda epifanía de Dios quiere aportar paz y alegría.
Jesús es la aparición de Dios en los últimos tiempos y
lleva consigo la plenitud de la salvación.
233
Los discípulos tienen un presentimiento: se llenan de
temor y asombro. Son presa de un temor reverencial.
Sólo se preguntan unos a otros. El viento y las olas le
obedecen. Él es Señor y Maestro. Pero ¡qué Señor ¿Qué
señor de este mundo es capaz de imponer obediencia a
la naturaleza desencadenada? Sólo Dios le manda con au
toridad, y ella obedece. ¿Quién es Jesús?
b)
El endem oniado de Gerasa (8,26-39).
por las grutas sepulcrales, rehuye la sociedad humana, la
vida; vive intencionadamente allí donde a otros les in
vade el terror, donde la muerte está en su casa.
28
Cuando v io a Jesús , se echó a sus pies y di jo a
grandes gr i tos: ¿Qué t ienes tú que ver conmigo, Jesús ,
Hijo de l Dios a l t í s imo? Por favor t e ruego que no me
atormentes .
29 a
Es que Jesús e s taba man dando a l e spír i tu
inmundo que sa l iera de aque l hombre .
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 118/190
26
Arribaron a la reg ión de los geraseno s , que es tá en
la r ibera opues ta de Gal i lea .
21
Y apen as él saltó a t ierra,
le sa l ió a l encuentro , procedente de la
ciudad,
un hombre
que es taba pose ído por demonios y que desde hac ía bas
tante t iempo no se cubría con ves t ido n i v iv ía en casa
a lguna, s ino en los sepu lcros .
El acontecimiento tiene lugar en la r ibera s i tuada
frente a Gal i lea ,
en el país de los gerasenos, en tierra de
gentiles, en la zona que está en poder de los demonios.
Allí han de ser iniciados los discípulos en los misterios
del reino de Dios, en el poder de Jesús sobre los demonios.
Jesús no despliega su acción en tierra pagana; se limita
a curar a un endemoniado. En esta excursión tienen que
abrirse los ojos de los discípulos, de modo que comprendan
que no puede hacerle resistencia ni siquiera el poder reu
nido de los demonios, en su misma zona de influencia de
las colonias paganas.
E l
horror de los poderes demoníacos
se hace visible
en el poseso. Éste tiene demonios que lo llenan, lo impul
san, lo dominan. En él sofocan todo sentimiento humano
normal. El poseso no lleva vestidos, no vive en casa al
guna, no tiene morada; como no tiene paz ni sosiego, anda
234
Los
demonios se rebe lan
contra Jesús en el poseso,
porque saben que tiene poder sobre ellos. Fuerzan al po
seso a echarse a los pies de Jesús. Las reglas mágicas de
los antiguos prescriben que se bajen los ojos al acercarse
la divinidad, que se mire al suelo para poder ejercer con
tra ella una presión tanto más eficaz. Los demonios lo
intentan con la fórmula de conjuro: ¿Qué tienes tú que
ver conmigo? No hay nada entre nosotros, vete por tus
caminos, nosotros vamos por los nuestros . Gritando su
nombre practicaban un exorcismo y tratan de tener a raya
el poder de Jesús. Por eso le gritan:
Jesús, Hijo del Dios
alt ís imo,
y le ruegan e imploran su misericordia: No me
atormentes . Recurren al poder supremo de Jesús y a l mis
mo tiempo a sus sentimientos humanos. Jesús, visto por
los demonios. . .
2 9 b
Porque en muchas ocas iones lo forzaba de ta l manera
que , aunque lo a taban con cadenas y le ponían gr i l los en
los pies para tener lo su je to , é l rompía las a taduras ,
y
e l
demonio lo empujaba hac ia lugares des ier tos .
30
Jesús le
preguntó: ¿Cuál e s tu nombre? Él contes tó: Leg ión. Porque
eran muchos los demonios que habían en trado en é l .
3l
Y
le rogaban que no le s mandara ir se a l abismo.
32
Había por
allí,
pac iendo en e l monte , un a gran piara de numerosos
235
cerdos; los demonios le supl icaron que le s permit iera en
trar en ellos, y él se lo permitió.
33
Sa l ieron , pues , de aque l
hombre los demonios y en traron en los cerdos; y la piara se
arrojó con gran ímpetu a l lago por un prec ipic io y se ahogó.
Una vez más vuelve a describirse la triste condición del
endemoniado. A Lucas le gustan los re la tos por duplicado.
La prepotencia de los demonios se hace visible en el po
der y en la fuerza bruta del poseso. Tiene demonios. Esto
parece una cosa anodina. Pero en muchas ocasiones se
de los animales. Los demonios tienen poder, pero un poder
puesto al servicio del caos y de la destrucción. El reino
de Dios abarca la creación entera. Desde que Satán fue
derrotado en la tentación, tiene que reconocer el señorío de
Dios sobre e l mundo. Los demonios rogaron a Jesús que
les permitiera entrar en los animales. Reconocen el se
ñorío de Jesús sobre la creación.
34
Cuando los porqueros v ieron lo que había sucedido,
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 119/190
han apoderado de él los demonios, lo han arrastrado y
lo han manejado a su antojo como instrumento inerme de su
perniciosa inquietud. En accesos de furor rompe las ca
denas que se le habían echado. Va desolado por los de
siertos. ¿Qué logran los hombres con encadenarlo? ¿Qué
puede la custodia humana, qué pueden las tentativas hu
manas de poner en orden la fuerza desencadenada de un
hombre endemoniado?
El nombre del demonio revela un poder siniestro: L e
g i ó n . En el ejército romano contaba la legión unos 6000
hombres. No un demonio solo, sino muchos dominan al
poseso. La legión es una fuerza organizada, compacta,
coordinada , dispuesta a l a taque . Las legiones romanas do
minan el mundo mediterráneo. Los demonios forman un
reino, el reino contrario a Dios.
Revelando el nombre reconocen los demonios la
s u pe
r ior idad de Jesús
y abandonan al poseso. Confiesan que
Jesús es su dueño, su juez, el Señor que sella su reproba
ción definitiva. Ante él su poder se convierte en impotencia,
que sólo es capaz de confesar suplicante su incapacidad.
Tercera prueba del poder demoníaco: La entera pia
ra, poseída por los demonios, se precipita montaña abajo
y va a acabar
a ho g a da e n l a s a g u a s de l l a g o .
En la antigua
demonología se hace remontar a los demonios la rabia
236
sa l ieron huyendo y l levaron la not ic ia a la c iudad y a los
caser íos .
35
Las gentes ac udían a v er lo que ha bía suce
dido;
l legáronse a Jesús y encontraron a l hombre de l que
habían sa l ido los demonios , sen tado ya , ves t ido y en su
sano ju ic io , a los pies de Jesús , y quedaron l lenos de es
p anto .
36
Los que lo habían presenc iado contaban a los
demás cómo e l endemoniado había s ido curado.
37
En t o n c e s
toda la mult itud de la reg ión de los gerasenos le pidió a
Jesús que se a le jara de e l los ; pues e s taban dominados
por un miedo enorme. Entró, pues , en una barca y se
volv ió.
En el centro de la escena se halla
Jesús ,
y a sus pies,
como un niño de escuela, el poseso sanado, que ahora
está vestido y ha recobrado la razón. Gracias a Jesús se
ha vuelto de nuevo verdaderamente humano. Cuando se im
pone la autoridad a los demonios, se produce orden y
gran calma. Jesús es el Salvador, el Redentor, en el que
la creación trastornada vuelve a restablecerse y a orde
narse. El orden se manifiesta en el hecho de que el que
había estado poseído se sienta a los pies de Jesús y escu
cha su palabra.
El temor reina en torno a Jesús y al que ha sido cu
rado. Los testigos de lo sucedido huyen arrastrados por
el miedo y lo cuentan por todas partes. Los que oyeron
237
la noticia salieron de la ciudad y acudieron a ver lo que
había sucedido. Toda la gente de la región circundante
se pone en movimiento, va a donde está Jesús y se ve
asaltada de gran temor. La acción de Jesús arrastra olea
das de gente cada vez mayores. Sin embargo, su poder
tiene efectos inquietantes: sólo causa temor, nada de es
peranza. El poder de Jesús es inquietante e infunde temor
cuando no se le reconoce como Salvador y Redentor por
medio de la palabra.
La multitud no quiere tener nada que ver con el mo
lo que desea el que ha sido sanado. En vano lo pidió a
Jesús, aunque reiteraba una y otra vez su súplica. La eco
nomía de la salvación exigía aún otra cosa. Jesús lo
despidió.
Jesús, sin embargo, no le rehusa totalmente: Vuelve
a tu casa, le dice, y refiere todo lo que Dios ha hecho con
tigo.
Todo lo que Jesús le permite, se mantiene dentro
de los límites de su actividad personal. Se evita todo lo
que pueda hacer suponer misión o encargo de Jesús. Su
campo de acción es su casa, su familia; su proclamación
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 120/190
lesto huésped que se impone como señor sobre todo lo que
hay de inquietante en los demonios. Durante unos mo
mentos se ha tocado con la mano que bajo el acontecer
de este mundo laten otros poderes y otras fuerzas. Ahora
bien, el hombre es arrastradora esta esfera de lo siniestro
y temeroso. «Revestios de la armadura de Dios, para que
podáis resistir contra las asechanzas del diablo; porque
vuestra lucha no es contra carne y sangre, sino contra.. .
los dominadores de este mundo de tinieblas, contra los
seres espirituales de la maldad que están en las altu
ras» (Ef 6,1 ls) . Jesucristo es para nosotros la armadura
de Dios.
38
El hombre de qu ien habían sa l ido los demonios le
rogaba que le permit iera acompañar lo; pero é l lo despidió
dic iéndole:
39
Vue lve a tu casa , y re fiere todo lo que Dios
ha hecho cont igo . El hombre se fue y pregonaba por toda
la c iudad lo que Jesús había hecho con é l .
El hombre que había sido salvado deseaba ser uno de
los apóstoles de Jesús, de los que se dice: «Constituyó a los
doce, para que estuvieran con él y para enviarlos a pre
dicar, con poder para arrojar a los demonios» (Me 3,14s).
Estar con Jesús
es lo esencial del apostolado, y esto es
238
se limita a narrar. No debe en absoluto hablar de Jesús,
sino solamente de Dios. Sin embargo, el hombre lo con
vierte todo en mensaje de carácter cristiano: su esfera de
acción es la gran ciudad; él no se limita a referir, sino que
a n u n c ia
como los apóstoles, como pregonero, habla de lo
que ha hecho
Jesús ,
no de lo que ha hecho Dios. El men
saje cristiano erumpe con fuerza incontenible, incluso en
quien se ve todavía contenido por Jesús. Nada está oculto
que no se haya de hacer manifiesto. ¿Qué será, pues, cuan
do Jesús haya resucitado y haya sido exaltado, cuando
se abran las fronteras que separan de los paganos? ¿Cuan
do los paganos se conviertan en apóstoles? Jesús no sólo
vence a los poderes demoníacos que tienen encadenados
a los hombres, sino que a los que se ven librados de las
cadenas los convierte en pregoneros del reino de Dios y
en testigos de su poder sobre los demonios.
c)
Poder sobre la enfermedad y la muerte (8,40-56).
40
Al vo lver Jesús , fue bien acog ido por la mult i tud;
pues todos lo e s taban esperando.
41
Y entonces l legó un
hombre l lamado Ja iro , que era j e fe de la s inagoga, y
echándose a los pies de Jesús , le supl icaba que fuera a
239
s u c a s a ,
42 a
p orq ue t en ía una h i ja ún i ca , d e unos d oce añ os ,
q ue s e e s tab a m ur i end o .
El pueblo de Israel aguarda a Jesús y l o a c o g e ; la
masa de los paganos lo habían expulsado. A través de
la historia de la salvación había preparado Dios a Israel
para esperar al Salvador venidero; los paganos carecían
de sentido para ello.
Jairo, jefe de la sinagoga, se siente impotente ante el
Hace doce años que sufre. Padece
f l u jo d e sangre ,
por lo
cual es ritualmente impura y se ve esquivada por las gen
tes.
Ha gastado todos sus bienes en médicos. Nadie ha
podido curar la : Terr ible palabra: incurable . . .
La única esperanza que le había quedado era Jesús.
No podía como Jairo salir de entre la muchedumbre y
presentarse a Jesús, echarse a sus pies y hablarle de su
aflicción. Era impura y podía contaminar a otros
0 1
, pues
padecía flujo de sangre. Se acercó a Jesús por detrás en
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 121/190
poder de la muerte. Su profundo dolor resuena en pala
bras como éstas: hija única, objeto de todo el cariño del
padre , d e d oce añ os , en pleno desarrollo, madura ya
para e l matr imonio, se estaba muriendo. Aquí no puede
nada el poder humano. Jesús es la última esperanza del
padre. La súplica va acompañada de humilde postración a
los pies de Jesús. Le rogó que fuese a su casa, contraria
mente al centurión de Cafarnáum. En Israel está Jesús
en su casa.
42 b
Mientras iba andan do, la s gen tes lo apretujaban.
43
E n e s to , una m ujer q ue p ad ec ía f l u jo d e sangre d esd e
hacía doce años, y que no había podido ser curada por
nad i e ,
44
ace rcándose por detrás, le tocó la borla del man to,
e i nm ed i a tam ente ce só su f l u jo d e sangre .
Una vez más comienza el relato recordando la simpa
tía del pueblo por Jesús. Las gentes lo «apretujaban».
En el original se usa la misma palabra que cuando se ha
bla de los cardos que ahogan la semilla (8,14). El pueblo
había aguardado a Jesús como al gran protector , ahora lo
posee; lo ha recibido cordialmente, ahora lo apretuja y
casi lo ahoga.
Una vez más se destaca de la multitud una persona que
sufre,
una m ujer .
La historia de su enfermedad es triste.
24
medio de aquel gentío y le tocó la borla del mantq. Los
judíos debían, conforme a la ley, llevar borlas en el ruedo
de sus vestidos, a fin de tener presentes todos los manda
mientos del Señor (Núm 15,38s). Jairo rogó a Jesús que
fuera a su casa. Probablemente pensaba que la curación
sólo podía efectuarse mediante imposición de las manos.
La mujer busca el contacto con Jesús, aunque sólo sea
tocando el último extremo de su vestido.
I nm ed ia tam ente ce só e l f lu jo d e sangre . Así habla el
médico. Sin medicamentos, sin palabras , por e l mero con
tacto alcanza la mujer lo que durante largos años había
intentado en vano el arte de la medicina. Lucas, que era
médico, suavizó el juicio tan duro de Marcos sobre los
médicos; suprimió lo que había hallado en esta fuente:
a pesar de los médicos, no había conseguido ninguna me
joría, sino que más bien iba de mal en peor (Me 5,26).
Aunque también él reconoció que en este caso se había
mostrado impotente la ciencia médica. Como médico que
era pronuncia un dictamen pericial: Inmediatamente cesó
el flujo de sangre.
45
E n tonce s p regun tó J esús : ¿ Q ui én m e h a tocad o?
Como todos negaban haber s ido e l los , Pedro le contestó:
61. Ct. Lev 12.1ss ; 15,19s>,.
241
Maestro, es la mult itud la que te oprime y te apretuja.
46
Pero Jesús repl icó: Me ha tocado a lgu ien; porque yo
me he dado cuenta de que una fuerza ha sa l ido de mí .
^ Cu ando la mujer v io que había sido descubier ta , se acer
có toda temblorosa y echándose a sus pies, ref irió delante
de todo e l pueblo por qué mot ivo lo había tocado y cómo
había quedado curada repent inamente .
48
Él le dijo: Hija,
tu f e t e ha sa lvado: ve te en paz .
restablecimiento de su salud. Es que la paz es orden. Pero
la fe le ha dado una paz de la que la curación de la en
fermedad sólo es imagen externa.
49
Todavía es taba é l hablando, cuan do l lega un o de
casa de l j e fe de la s inagoga para av isar a és te: Ya ha
muerto tu hija: no moles tes más a l Maes tro .
50
Pero Jesús ,
al oírlo, le dijo: No temas; sólo ten fe, y se salvará.
51
L l e
gó a la casa y no permit ió que nadie en trara con é l , fuera
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 122/190
Lo que había sucedido ocultamente, lo saca Jesús a
la luz pública. Sabe lo que ha tenido lugar.
Me ha tocado
a lg u ie n .
U na
fuerza ha salido de mí.
No es el contacto
físico lo que produce la curación, sino la fuerza o virtud
de que él dispone. Sólo él lo sabe, no el pueblo, ni tam
poco Pedro. Jesús es maestro y Señor en un sentido mucho
más profundo de lo que se figura Pedro. Antes mandó a
las olas, ahora manda al flujo de sangre. Los milagros son
manifestaciones del poder y del imperio de Jesús; Jesús
es maestro que goza de autoridad y de poder.
La mujer que ha sido curada y que se mantenía oculta,
sale a la luz pública. Reconoce la proximidad de Dios en
Jesús, sabe que no puede seguir oculta, se estremece por
temor de lo divino que se había manifestado y se echa a
los pies de Jesús.
Proc lama como obra de Dios
lo que le
había sucedido, y lo hace en presencia de todo el pueblo.
Hasta aquella mujer tímida y retraída, movida por la
obra de Dios que había ejecutado Jesús con ella, se con
vierte en pregonera de los grandes hechos de Dios delante
del pueblo.
La curación de la mujer no fue debida al hecho de to
car el vestido de Jesús, sino a la fe.
Tu fe t e ha sa lvado.
La fe es contacto salvífico con Jesús, Salvador y Reden
tor. La mujer es hija gracias a la fe: por ella entra en
la casa y en la comunidad de Jesús. Ha hallado la paz, el
242
de Pedro, Juan y Sant iago , además de l padre y la ma
dre de la n iña .
52
Todos l loraban y se lamentaban por e l la .
Pero él dijo: No lloréis más; no ha muerto, s ino que está
durmiendo.
53
Y se bur laban de é l , porque sabían que es
taba muerta.
Ni siquiera la muerte pone límites al poder de Jesús,
que está dispuesto a resucitar a la muchacha difunta si el
padre está dispuesto a creer.
Sólo ten fe, y se salvará.
L a
fe es condición para salvarse. «Cree en el Señor Jesús, y
serás salvo tú y los de tu casa» (Act 16,31).
La resurrección de la difunta quiere reservarla Jesús
a un reducido grupo de testigos. Entre ellos se cuentan
tres de los apóstoles:
Pedro,
el primero de los apóstoles,
los dos hermanos Juan y Santiago, y además los padres de
la muchacha. De la misma manera que el Señor resuci
tado de entre los muertos no se hizo visible a todo el
pueblo, sino únicamente a los testigos prefijados por Dios
(Act 10,41), así también Jesús quiso hacerse visible como
señor de la muerte, no a todos, sino únicamente a testigos
especialmente elegidos. En este misterio del reino de Dios
no están iniciados todavía ni siquiera todos los apóstoles,
puesto que es algo que hace referencia a la resurrección, y
a la pasión y muerte de Jesús.
Todos l loraban y se lamentaban. En el entierro aun
243
de los más pobres tenía que haber por lo menos dos flau
tistas y una plañidera, que ejecutaran la
l am entac i ó n p or
el d i funto. El canto fúnebre se canta alternativamente,
acompañado de palmadas al son de panderetas y matracas.
La lamentación comenzaba después de la muerte en la
casa mortuoria y continuaba hasta la inhumación. Todos
lloraban y se golpeaban el pecho en señal de dolor. Jesús
hace cesar la lamentación. La n i ñ a no h a m uer to , s i no q ue
está durmiendo. Ve la muerte con los ojos de Dios y ha
bla como boca de Dios. Ante el poder de Dios ha perdido
El precepto del silencio afecta sólo a los padres, evi
dentemente no a los tres apóstoles que estaban presentes.
En cuanto a éstos, es natural que den a conocer lo que
estaba oculto. Tienen que anunciar el misterio del reino
de Dios, del que forma parte la resurrección de los muertos,
la cual tiene su modelo en la resurrección de Jesús.
Jesús ha demostrado su poder frente a poderes ante los
cuales se siente impotente el hombre. Ha calmado la natu
raleza alborotada, ha quebrantado el poder de los demo
nios y vencido la fuerza de la muerte y de la enfermedad
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 123/190
la muerte su poder.
Se burlaban de é l ,
porque sabían que
estaba muerta. La multitud no paraba mientes en que Je
sús pudiese tener poder sobre la muerte. Sabían que la
niña estaba muerta. Según la experiencia humana, la muer
te no devuelve su presa. La multitud reía, se burlaba fun
dada en su saber humano, pero el padre tenía que creer
contra toda experiencia humana.
54
Pero é l , tomándola de la man o, di jo en a l ta vo z: Niña,
levántate .
55
Ysu espír itu volv ió a e l la y se levan tó in me
d i a tam ente ; en tonces m and ó q ue l e d i eran d e com er .
56
S us
padres quedaron l lenos de estupor; pero é l les encargó que
a nadie di jeran lo sucedido.
El retorno de la vida gracias al gesto y a la palabra
de Jesús se describe de tres maneras. El espíritu (el alma)
vo l v i ó a l a n i ñ a . En la muerte se separa el espíritu del
cuerpo. Jesús dice antes de morir: «En tus manos enco
miendo mi espíritu» (23,46). La niña se l e van ta; fuerza
vital penetra sus miembros. T i ene q ue com er . El comer
convence de la realidad de la vida. Con la resurrección de
Jesús sucederá lo mismo que se efectúa en esta niña. Su
espíritu retornará, Jesús se levantará y comerá y beberá
con sus discípulos.
244
incurable. Esto sucedió porque en él obraba el poder de
Dios; Jesús es la manifestación de Dios en la tierra. Pedro
lo llama dos veces Maestro, los demonios lo invocan como
Hijo de Dios. Jesús es Salvador y Redentor. Con los tres
milagros alcanza el punto culminante de su actividad en
Galilea. ¿Qué hay todavía que pueda amedrantar a los
hombres, supuesto que crean? Jesús quita el temor a los po
deres hostiles al hombre: a la naturaleza desencadenada,
a los demonios desencadenados, y al poder de la muerte.
La salvación viene por Jesús. El que cree, goza de su
poder salvador. Comienzan a hacerse realidad las espe
ranzas de las bendiciones propias de los últimos tiempos.
3. LA ACCIÓN DE I.OS DOCE (9,1-17).
a ) La misión (9,1-6).
1
Conv ocó a los doce y les d io po der y potestad sobre
todos los demonios y para curar enfermedades.
2
Y los
envió a predicar e l re ino de Dios y a curar.
Jesús convocó a l o s d oce . Éstos forman juntos una uni
dad, reunida en torno a él. Jesús quiere extender su acción
245
por medio de ellos. Por eso les transmite el poder y la
potestad que él mismo posee (4,36). Los envió, como él
mismo había sido enviado, a proclamar el reino de Dios
y a curar enfermos, como señal de que el reino está pró
ximo. Los apóstoles que lo han acompañado hasta ahora
deben en adelante efectuar solos lo que él mismo ha he
cho. La actividad de Jesús se amplía y se multiplica. Aho
ra se inicia ya la separación de los discípulos de su
Maestro. Después de la exaltación de Jesús irán los após
toles por el mundo, proclamarán el mensaje de Cristo
ped que cambia con frecuencia de alojamiento perjudica
y se perjudica. Jesús no quiere que sus apóstoles busquen
la menor ventaja personal. Sólo debe preocuparles su
misión. Ahora bien, la casa en que se hospeden ha de ser
un centro de actividad. La palabra de Dios no conoce
reposo. Ha impulsado a Jesús a llevar a término su obra,
y así ha de impulsar también a los apóstoles.
Los apóstoles no deben perder tiempo con los que no
los reciban. Deben abandonar tales ciudades y tratarlas
como tratan los judíos a las ciudades paganas. Hay que
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 124/190
y realizarán sus poderosas obras salvíficas.
3
Y les d i jo: Nada toméis para e l camino: n i bastón, n i
a l forja, n i pan, n i d inero, n i tengáis cada uno dos túnicas.
Jesús da órdenes a los apóstoles. Con ellas les retira
todo aquello a que no querría renunciar ningún caminante:
bastón, alforja, provisiones, dinero, hasta vestidos para
cambiarse. Dios, a cuyo servicio están, cuidará de ellos;
su único pensamiento debe ser el de su misión. Cuando
Jesús, al final de su actividad, los invite a mirar atrás al
tiempo de su misión, reconocerán que no les ha faltado
nada (22,35). Todavía no se ha producido la separación
entre Jesús y el pueblo. Los apóstoles participan de la
amable acogida que se dispensa a Jesús mismo (8,40.42).
4
E n cua l q u i er ca sa en q ue e n tré i s, s egu i d a l o jad os en
el la , y sea de al l í vuestra part ida.
5
Y s i a lg u n o s n o o s
reciben, sal id de la c iudad aquel la y sacudid e l polvo de
vuestros pies , en test imonio contra e l la .
Jesús da por supuesto que los apóstoles van por las
c a s a s y que en ellas desempeñan su misión. Una vez que
los acogen en una casa, no deben cambiar a otra. El hués-
246
romper toda relación con ellas. Los judíos solían
sacudir
e l p o l vo d e l e s p i e s an te s de abandonar t ierra pagana y
entrar en la tierra santa. La actividad de los apóstoles es
juicio. Para las ciudades que los desechen han de ser tes
tigos de cargo. Su actividad es inicio del tiempo final.
6
Part ieron, pues, y recorrían todas las a ldeas, a nun cian
d o e l E va nge l i o y curand o p or d oq u i er.
La actividad de los apóstoles consiste en proclamar
l a b u e n a n u e v a . Los enfermos son curados, como señal de
que ya se ha iniciado el tiempo de salvación. Lo que Jesús
comenzó programáticamente, lo que obró en Galilea, es
ahora llevado lejos por los apóstoles. De esta acción por
el mundo hablará Lucas en particular. Éste es el marco
en que se sitúa la acción salvífica. Los apóstoles recorren
ted as l a s a l d eas . Jesús ha actuado en las ciudades, los após
toles llenan con el mensaje de Jesús todas las aldeas y las
casas.
Todas las a ldeas: era un trabajo poco menos que
sistemático. La frase termina con la palabra «por doquier».
La tierra entera se ve envuelta en la alborada del reino de
Dios,
llena de proclamación y de virtud salvífica. Por do
quier: tal es el impulso de la palabra del reino de Dios.
247
b)
Juicio de Hero des acerca de Jesús (9,7-9).
7
Oyó habla r de todos estos su ceso s e l te trarca He
rod es y and ab a m uy p erp l e jo p or causa d e q ue unos d e
cían: Es Juan, que ha resuci tado de entre los muertos.
8
Y o tros: Es El ia s , que se ha aparecido. Y o tros, en f in:
E s a l gún p ro fe ta d e l o s an ti guos , q ue h a re suc i tad o .
La fama de Jesús llega hasta la corte del tetrarca He
que hubiese sido trasladado. Los filósofos de Atenas se
mofaban cuando Pablo les hablaba de la resurrección de
los muertos: «Te oiremos hablar de esto en otra ocasión»
(Act 17,32), y cuando ante el procurador Festo se defen
dió invocando la resurrección de Jesús, oyó esta respues
ta: «Tú estás loco, Pablo; las muchas letras te han sorbido
el seso» (Act 26,24). Herodes reflexionaba fríamente:
A Juan lo decapité yo. Así que ya no vive. El que ha
muerto, muerto está .
Pero la pregunta está ahí: ¿ Q ui é n e s J e sús? Las cosas
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 125/190
rodes Antipas. ¿Quién es Jesús? Esta pregunta se la hacen
el pueblo, los cortesanos y el mismo tetrarca. Esta pre
gunta deja perplejo y desconcertado a Herodes.
Los que rodeaban a Herodes obtienen varios informes.
Las diferentes opiniones en el pueblo tienen un fondo
común: Jesús es e l profeta que se aguarda antes de los
últimos tiempos. Sin embargo, a lo que parece, nadie se
atrevía a afirmar que Dios había suscitado en él un nuevo
profeta. Ha resucitado y ha vuelto a aparecer alguno de
los antiguos profetas. La creencia popular piensa en un
verdadero y maravilloso retorno del profeta con el mismo
cuerpo que había tenido en su vida mortal. Se habla de
Juan Bautista, cuya predicación había reanudado Jesús,
se habla de alguno de los profetas de otros tiempos, final
mente de Elias , que —como se dice— no había muerto,
sino únicamente había sido trasladado del mundo y cuyo
retorno se aguarda al final de los tiempos.
9
P ero H erod es d ec ía : A Juan lo decapité yo; enton ces,
¿ q u i é n e s é s t e , d e q u i en o i go ta l e s cosas? y and ab a d eseoso
de verlo.
Herodes no creía nada de lo que se decía de resu
rrección y de reanimación, ni de reaparición de alguien
248
inauditas que ha dicho y hecho reclaman explicación. ¿Có
mo hallar la? Única esperanza: H erod es and ab a d eseoso d e
verlo, de presenciar alguno de sus milagros (23,8). Con la
experiencia ocular espera poder formarse un juicio defi
nitivo. Quiere ver sus obras, su persona, quiere hablar
con él. . . ¿Basta todo esto para conocer a Jesús? Herodes
quiere formarse un juicio sobre Jesús interesarse interior
mente por su reivindicación. El camino para llegar al co
nocimiento de Jesús no es el de la investigación experi
mental, sino el de la fe. Conocer los misterios del reino de
Dios, entre los que se cuenta también el portador de salud,
es un don de Dios.
c ) Regreso de los apóstoles y primera mu ltiplicación de
los panes (9,10-17).
10
R egresaron l o s ap ós to l e s y con taron a J e sús tod o
lo que habían hecho. Él los tomó consigo y se ret iró a
so l a s h ac i a una c i ud ad l l am ad a B e t sa i d a .
¿Cómo terminó la actividad de Jesús incrementada por
los apóstoles? Salió a la luz la pregunta acerca de Jesús.
Produjo inquietud hasta en la corte. Los apóstoles regre-
249
san y refieren lo que han hecho. ¿Qué habían logrado?
¿Cómo terminó la actividad en Galilea? Jesús se ret iró
a s o la s
con los apóstoles. Herodes representaba un peli
gro. Había mandado decapitar a Juan. La exposición de
Lucas apunta hacia adelante, al proceso de Jesús. El pue
blo no alcanzó el verdadero conocimiento de Jesús. La más
intensa actividad no logró el resultado que se habría podi
do esperar. El fin fue el retiro a la soledad, al borde más
extremo de la tierra de Israel, hacia Betania, ciudad al
nordeste del lago de Genesaret. Jesús tomó consigo sólo a
que vayan a las a ldeas y caser íos de l contorno, a f in de que
encuentren a lo jamiento y comida, pues aquí e s tamos en un
lugar despoblado.
n
Él le s respondió: Dadles vosotros de
comer . Pero e l los repl icaron: No tenemos más que c inco
panes y dos peces; a no ser que va yamos no sotros mismos
a comprar a l imentos para todo e l pueblo .
14
Pues había
unos c inco mil hombres . Dijo en tonces a sus disc ípu los:
Haced que se s ien ten por grupos de unos c incuenta cada
u n o .
1S
Lo hic ieron as í y se sen taron todos .
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 126/190
los apóstoles: estos representaban lo único que podía con
siderarse como un éxito.
11
Pero a l darse cu enta de e l lo la ge nte , lo s igu ieron .
Él los acog ió y le s hablaba de l re ino de Dios , a l mismo
t iempo que devo lv ía la sa lud a los que t en ían neces idad de
curac ión .
Hasta entonces había buscado Jesús al pueblo, per
sonalmente o por medio de los apóstoles; ahora le busca
el pueblo a él. Antes se decía que el pueblo le acogía, aho
ra acoge él al pueblo. Jesús no interrumpe su actividad.
De nuevo habla del reino de Dios y de nuevo realiza cura
ciones. Sin embargo, se observa cierta reserva: curaba
a
los que t en ían neces idad de curac ión .
Pero todo sigue
envuelto en la atmósfera luminosa de la infatigable bon
dad del Señor. Acogía amablemente al pueblo. Habla y
cura sin cesar, infatigablemente, hasta el caer de la tarde,
hasta que va declinando el día. Lo que hacía Jesús era
también la primera instrucción sobre el modo como de
ben comportarse los apóstoles con el pueblo al que él busca.
12
Comenzaba ya a dec l inar e l día , cuando se le acer
caron los doce y le di j eron: Despide ya a l pueblo , para
250
Se trataba de proporcionar al pueblo en el desierto
albergue y alimentos. Como solución de esta dificultad
proponen los apóstoles:
Despíde los .
Se sienten responsa
bles del pueblo. ¿Pero era la verdadera solución la que
ellos proponían de alejarlos de Jesús? La verdadera so
lución sólo puede consistir en que el pueblo vaya a Jesús.
Jesús encarga a los apóstoles que se cuiden del pueblo.
Dadles vosotros de comer .
¿Pero cómo? Cinco panes y dos
peces para cinco mil hombres, sin contar las mujeres y los
niños. . . Había otra posibil idad: la de comprar la comida
para aquella muchedumbre . ¿Pero cómo reunir los me
dios para ello? Los discípulos se reconocen incapaces de
remediar la necesidad. No pueden hacer nada si no inter
viene el Señor. Sólo pueden reconocer su apuro. Pero esto
era necesario, pues sólo a los pobres y a los débiles se da
el reino de Dios.
Los discípulos tienen que contribuir a la comida mila
grosa. Se les ordena que hagan que la gente se s ien te en
grupos de a c incuenta .
Jesús quiere preparar un banquete .
A la sazón de la salida de Egipto estaba dividido el cam
pamento israelita por miles, por centenas, por cincuentenas
y decenas. «Moisés eligió entre todo el pueblo a hom
bres capaces, que puso sobre el pueblo como jefes de mi
llar , de cincuentena y de decena» (Éx 18,25).
L a R e g la
251
d e guerra , del mar Muerto, contiene la misma organiza
ción de los destacamentos militares en la guerra santa de
los hijos de la luz °
2
. El banquete pascual que se acercaba
exigía agrupaciones de comensales. Se despiertan reminis
cencias del gran pasado del pueblo y también esperanzas
para el futuro. La gran muchedumbre que se había pues
to en movimiento, debido también a la predicación de los
apóstoles, se reúne ahora y se organiza como comunidad del
reino de Dios. Vuelven a repetirse los grandes tiempos
del Éxodo; estamos ante los acontecimientos salvíficos de
los últimos tiempos.
con sus apóstoles y que tiene su consumación en el reino
que se espera.
Jesús bendijo los panes. Según Lucas no pronunció
la acción de gracias sobre el pan, como era costumbre en
tre los judíos, sino que lo bendijo. Así se atribuye a la
bendición de Jesús la alimentación de los muchos con
aquellos pocos panes. Los discípulos repartieron la comida.
Otorgó a los discípulos el que presidieran. Jesús es el da
dor, los discípulos los distribuidores. Todo procede de
Jesús;
los apóstoles son los mediadores enviados por él.
Proclaman la buena nueva, curan enfermos y sacian al
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 127/190
16
Tomó, pues, los c inco panes y los dos peces , l eva n
tó los ojos a l c ie lo , pronunció la bendic ión sobre e l los ,
los part ió y los iba dando a los discípulos para que los
s irv iesen al pueblo.
ll
Comieron todos hasta quedar sa
c iados, y se recogieron, de lo que les sobró, doce canas
tos de pedazos.
Jesús actúa como padre de familia en medio de la gran
comunidad que está sentada a la mesa. Como tal, tomó en
sus manos los panes y los peces, los bendijo, y partió el
pan. Con esta comida reúne como comunidad de comen
sales de los últimos tiempos a la comunidad aunada se
gún el antiguo orden del campamento. Él mismo designó
como banquete la comunidad en el reino de Dios (22,30).
El evangelista pone de relieve los cuatro actos puestos por
Jesús al comienzo de la comida, porque en la comida
milagrosa se insinuaba ya la celebración eucarística de la
antigua Iglesia con su ritual. Con la comida en el desierto
se representa anticipadamente el tiempo de la salvación.
Viene a ser realidad en el banquete que celebra el Señor
62 . 1QS 2 ,21 ; CD 13 ,1 .
252
pueblo . . .
Todos quedaron saciados. Los pedazos de pan res
tantes se recogieron en canastos como los que llevaban
consigo los soldados romanos como ración alimenticia del
día. Cada uno de los doce apóstoles recogió todavía un
canasto lleno. La comida no es un alimento que escasa
mente sacia, sino un banquete abundantísimo. Se inicia
la exuberancia del tiempo mesiánico. Jesús dio de comer
a su pueblo como segundo Moisés —como un Moisés
más grande— en el desier to . Con poder y amor preparó
una comida y los apóstoles colaboraron con sus servicios.
Con esto alcanza su punto culminante la revelación
en Galilea. Jesús es el portador de la salud de los últimos
tiempos. ¿Pero fue reconocido como tal?
253
IV . EL MESÍAS SUFRIENTE 9,18-50),
1. M E S Í A S Y S IE R VO D E Y A H V E H (9,18-27).
a ) Confesión de Pedro (9,18-20).
18
E s tab a é l un d ía h ac i end o orac i ó n en u n l ugar ap ar te ;
y los discípulos estaban con é l . Y les preguntó ¿Quién
20
Él les d i jo: Pero voso tros, ¿quién decís
qu e
soy yo?
T om and o l a p a l ab ra
Pedro, dijo: El Mesías de Dios.
La actividad en G alilea
dividió
al
p ueb l o y
a
los dis
cípulos . A los discípulos se dieron a conocer los misterios
del reino de Dios. Pudieron presenciar los grandes hechos
de Jesús en los que se manifestaba su dominio sobre la
naturaleza desencadenada, sobre los demonios y la muerte.
Les fue dado cooperar en la milagrosa multiplicación de
los panes. Jesús tiene derecho a esperar de ellos un juicio
distinto del formulado por el pueblo.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 128/190
d i cen l a s gen te s q ue soy y o?
K
E l l o s l e r e sp ond ieron:
Unos, que Juan e l Baut is ta, otros, que El ias , y otros, que
a l gún p ro je ta d e l o s an t i guos h a re suc i tad o .
Jesús orab a en la soledad antes de situar a los discí
pulos ante grandes decisiones. Así lo hizo cuando la elec
ción de los apóstoles (6,12), así lo hace también ahora
que se dispone a iniciarlos en el misterio de su misión
(9,18), así lo hará también antes de que asistan a la pasión
y muerte de Jesús (22,32s). Cada uno de estos momentos
tiene un sentido de formación de Iglesia. La Iglesia está
incorporada a la oración de Jesús.
La pregunta de Jesús quiere verificar el resultado de
su actividad en Galilea y a la vez sentar las bases para
la acción ulterior. La doctrina sobre el reino se concentra
en su misión y en su posición en la historia salvífica. Los
discípulos conocen también las opiniones del pueblo sobre
Jesús, que habían llegado hasta la corte de Herodes. Los
discípulos se las enumeran al Maestro. Jesús es tenido por
el profeta de los últimos tiempos; representa el retorno
de uno de los profetas que habían de preparar para el
tiempo final.
254
La pregunta que hizo Jesús a los apóstoles, se les
había planteado con frecuencia: como pregunta que a
ellos mismos se les había ofrecido ya en el asombro y en
el sobrecogimiento, y en los títulos que le daban: Maes
tro,
Señor, profeta. Hasta aquí han dejado hablar al pue
blo.
La pregunta que
#
ahora se les dirige los sitúa ante
una respuesta clara y decisiva. Pero vosotros, ¿quién decís
que soy yo?
Pedro responde en nombre de los apóstoles. Su llama
miento representa en Lucas el comienzo de los llamamien
tos de discípulos. Pedro ocupa el primer lugar en la lista
de los apóstoles; juntamente con Juan y Santiago, a los
que es antepuesto, ha sido testigo de la resurrección de la
hija de Jairo.
La confesión de Pedro designa a Jesús (literalmente)
como ung i d o d e D i os , que quiere decir también Cristo o
Mesías. El título empalma con la predicción de Isaías:
«El espíritu del Señor, Yahveh, descansa sobre mí, pues
Yahveh me ha ungido. Y me ha enviado para predicar la
buena nueva a los abatidos.. .» (Is 61,1). Jesús es el por
tador del tiempo de la salud, provisto del espíritu de Dios,
el que publica el año de perdón del Señor (Is 61,2).
255
b) Primer anuncio de la pasión (9,21-22).
2 1
Pero é l , con severa adver tenc ia , le s ordenó qu e a na
die dijeran esto.
22
El Hijo de l hombre
—
a ñ a d i ó
—
t iene
que padecer mucho; será reprobado por los anc ianos , por
los sumos sacerdotes y los e scr ibas , y ha de ser l levado a
lu muerte; pero al tercer día t iene que resucitar.
Jesús prohibe severamente a los discípulos que comu
niquen a nadie la confesión de Pedro. Es que ésta recla
ma todavía un complemento esencial: e l Hijo de l hom
El comienzo de la actividad de Jesús en Galilea estaba
presidido por el pasaje de la escritura relativo al salvador
ungido por el Espíritu (Is 61,1); Pedro vuelve sobre esta
profecía aplicada a Jesús. Pero Jesús la completa con
Is 53, que habla del siervo de Yahveh que sufre y expía
por los pecados de los hombres. La acción y la misión de
Jesús se comprende por la palabra de Dios. Como Hijo
de Dios es ambas cosas: Salvador de los últimos tiempos
y siervo sufriente de Yahveh.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 129/190
bre.. . ha de ser llevado a la muerte.
Jesús no insiste en el
t í tulo que le ha otorgado Pedro: ungido de Dios. Habla
más bien del
Hijo del hombre,
como él mismo se designa.
Este Hijo del hombre tiene que sufrir mucho, tiene que
ser reprobado y llevado a la muerte. Aquí se oye el eco
de oráculos proféticos sobre el siervo de Yahveh: «Tomó
sobre sí nuestras enfermedades y cargó con nuestros do
lores» (Is 53,4). «Despreciado, desecho de los hombres,
varón de dolores.. . , ante quien se vuelve el rostro, menos
preciado, estimado en nada» (Is 53,3) . «Fue arrebatado
por un juicio inicuo, sin que nadie defendiera su causa
cuando era arrancado de la tierra de los vivientes y muer
to por las iniquidades de su pueblo» (Is 53,8). En este so
meterse a la pasión cumple él los designios de Dios expre
sados en la Sagrada Escritura; por esto
debía
suceder
todo así. El profeta da su profundo significado a esta pa
sión y a esta muerte: es una pasión y una muerte expia
toria; el Hijo del hombre intercede por muchos, por to
dos (cf. Is 53,12). El tercer día resucitará. «Sacado de una
vida de fatigas contempla la luz, sacia a muchísimos con
su conocimiento. Por eso yo le daré por parte suya mu
chedumbres y recibirá muchedumbres por botín» (cf. Is
53,1
ls) .
256
c )
Seguir a Cristo en la pasión (9,23-27).
23
Decía luego a todos: El que qu iera ven ir en pos de
mí , n iegúese a s í mismo, cargue cada día con su cruz y
s ígame.
24
Pues qu ien qu iera poner a sa lvo su v ida , la per
derá; pero qu ien pierda su v ida por mí , la pondrá a sa lvo .
25
Porque ¿qué provecho saca un hombre gana ndo e l mun
do entero s i se echa a perder o se daña a s í mismo?
El discípulo de Jesús
va en pos de Jesús ,
sigue a Je
sús. Puesto que él se somete a la pasión y a la muerte,
también el discípulo tiene que estar dispuesto a seguir por
amor de Jesús e l camino de la pasión y de la muerte . Ser
discípulo es seguirle en la pasión.
Seguir a Jesús en la pasión consiste en
n e g a r s e u n o a
s í mismo y cargar con la cruz .
Dado que los discípulos
siguen al Maestro que es entregado a la muerte, deben estar
dispuestos a no conocerse ya a sí mismos, a decir un no
a sí mismos y a su vida, a odiar su propia vida (14,26)
y a cargar con la cruz como Jesús
6 3
. Más aún, a dejarse
63 .
«Carg ar con su cruz» lo entendió se guram ente Le en el sentido de
que el discípulo debe estar dispuesto , como Jesús, a tomar sobre sí ios opro
bios,
loa dolores y la muerte que acompañan a la cruz. ¿Cómo se explica en
257
NT, Le I , 17
clavar en la cruz, que entonces se consideraba como la
manera más ignominiosa, más cruel y más horrorosa de
morir . El seguimiento en la pasión exige prontitud para
sufrir el martirio (6, 22).
Al decir que el discípulo ha de cargar con la cruz
añade Lucas : cad a d ía . El martirio es cosa que sucede
una sola vez, mientras que el seguimiento de Jesús en la
pasión debe reanudarse cada día. «Por muchas tribula
ciones tenemos que pasar para entrar en el reino de Dios»
(Act 14,22). El que se declara por Jesús, el que vive según
su palabra y cumple la voluntad de Dios tal como él la
turo y la segura esperanza de salvación. Se salva, no el que
quiere ponerse en salvo, sino el que practica la entrega;
no se pone en salvo el que se apega nerviosamente al pro
pio yo y a sus propios deseos, sino el que se da. No salva
la vida y el propio yo el que lo protege con ansiedad, sino
el que se entrega generosamente.
Con un cálculo muy sobrio, en c ierto modo mercan t i l,
invita Jesús a su seguimiento en la pasión. El que quiera
seguir al siervo sufriente de Yahveh, a Jesús, debe estar
pronto al martirio, a muchas tribulaciones, a perjudicarse
a sí mismo. Tal seguimiento plantea una decisión. Por un
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 130/190
proclamó, ha de tropezar con oposición desde fuera y
desde dentro. Los hombres odiarán y escarnecerán a los
discípulos por causa del Hijo del hombre (6,22). Hay que
dar una negativa decidida a las preocupaciones excesivas,
a la riqueza y al ansia de placeres, a fin de que no se
ahogue la palabra de Dios (8,14).
Jesús da fuerzas para negarse a sí mismo y para car
gar con la cruz. Con lo que parece echarse a perder a sí
mismo se logra salvar la vida. Por el camino de la pasión
y de la cruz entra Jesús en la gloria de la resurrección.
También para los discípulos, después de seguir a Cristo en
la pasión viene la gloria de la vida eterna. Una paradoja
acuñada por Jesús. Quien pone a salvo la vida, la pierde;
sacrificándola, se gana. Quien se aferra desesperadamente
a la vida y no quiere perder nada de lo que hace la vida
más bella y más aceptable, el que rechaza todo lo que le
resulta desagradable, éste pierde la vida en el mundo fu-
labios de Jesús este «cargar con la cruz»? En la predicción de la pasión sólo
habló de que le dar ían muerte. ¿Quería con las palabras dir igidas a los
discípulos determinar más en concreto su muerte violenta como muerte en
cruz? ¿O acaso no habló todavía de cruz, sino quizá de «yugo» (Mt 11,
29),
o de una señal de per tenencia (cf . Ez 9 ,4-6: tau, T) , mientras que después
de la muerte de Jesús, una vez entendidas mejor las cosas , se puso el tér
mino «cruz»? En todo caso, la antigua li teratura judía no tiene ninguna
locución que corresponda a las palabras de Jesús.
258
lado está como ganancia la preservación de la vida terre
na y la satisfacción del ansia de gozar, por el otro lado el
logro de la vida eterna, verdadera satisfacción del ansia
de vivir , en el reino de Dios. El que no quiera seguir al
Cristo de la pasión, tampoco podrá entrar en el reino de
Dios.
¿Cómo se ha de efectuar la elección? Lo decisivo es
la salvación de uno mismo. ¿Qué provecho saca el hom
bre ganand o e l m und o en tero , si se echa a perder a sí
mismo? Lucas se sirve de dos expresiones: se ech a a p er
der o se daña, a s í mismo. También adapta estas palabras
de Cristo a la vida cristiana de cada día. No todo lo que
no puede conciliarse con seguir a Jesús y con su palabra,
destruye la vida eterna; algunas cosas sólo la dañan. Aun
lo que sólo la daña debe descartarse con serena ponde
ración.
26
P orq ue s i a l guno s e avergü enza d e m í y d e m i s p a
labras, e l Hijo del hombre se avergonzará de é l cuando
venga en su g l or i a , y l a d e su P ad re , y l a d e l o s san tos
á nge l e s .
21
Os lo digo de verdad: H ay a l gunos d e l o s aq u í
p resen te s q ue no ex p eri m entará n l a m uer te s i n q ue vean
el re ino de Dios.
259
El Hijo del hombre vend rá en su g l or i a , y l a d e su
Padre, y la de los santos ángeles .
Vendrá como juez del
universo. Jesús mismo es este Hijo del hombre que viene
a juzgar. Estas palabras de Jesús sobre el Hijo del hom
bre asocian su anuncio de la pasión y su venida en la glo
ria de Dios, su Padre. Entonces, en el juicio, todo depen
derá de si uno goza o no de la aprobación del Hijo del
Hombre, de si el Hijo del hombre lo mira como suyo o
más bien se avergüenza de él y lo repudia.
El pensamiento en el Hijo del hombre que ha de venir
y que es juez debe dar fuerzas para seguirlo en su camino
nido el reino. Sin embargo, todavía no es visible. Con todo,
algunos de los discípulos presentes —Pedro, Santiago y
Juan— verán en la montaña el reino de Dios en la gloria
de Jesús transf igurado
S5
. Estos testigos que ven el reino de
Dios en Jesús, son para nosotros garantes de que Jesús
vendrá, visible para todos, en la gloria de Dios
6 6
.
2.
MANI FE ST ACIÓ N DE L ME S ÍA S SUFRI ENT E (9,28-43).
a )
Transfiguración de Jesús (9,28-36).
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 131/190
con la cruz a cuestas. Ahora es Jesús un crucificado, un
criminal , un par ia , uno que se ve abandonado. Un ciuda
dano romano no podía ser crucificado; la cruz era el cas
tigo de los infames, de los esclavos, de los desertores
a
* .
Quien se declara por este Jesús y hace de su palabra el
orden de su vida, cae como Jesús en el oprobio. El hombre
se defiende contra la deshonra y la calumnia, por lo cual
cae en la tentación de avergonzarse de Jesús y de sus pa
labras , de abandonarlo, de apartarse de él . Jesús quiere ,
con sus palabras conminatorias, poner en guardia contra
la negación y la apostasía. Seguir a Cristo y reconocerlo
cubierto de oprobios es lo que salvará en el juicio.
A las palabras conminatorias sigue, en discurso pro-
fético, una palabra de p rom esa d e sa l vac i ó n . Jesús es el
Hijo del hombre y trae el reino de Dios. El que se de
clare en favor de Jesús y de su palabra, verá y experi
mentará el reino de Dios. Esta promesa es tan cierta, que
algunos de los que aquí están presentes no experimentarán
l a m uer te s i n q ue vean e l r e i no d e D i os . El reino de Dios
está ya aquí (17,21). Con la proclamación de Jesús ha ve-
64. Juicio de CICERÓN sobre la crucif ixión: «La pena más cruel e igno
miniosa» (Verres v , 64 ,16 5); «el castigo más extremo y bajo de la esclavitud»
(Werres V, 66,169) .
260
28
Uno s ocho días después de estos discursos, tomó
cons i go a P ed ro , a J uan y a S an t i ago , y sub i ó a l m onte
para orar.
La transfiguración se pone en relación con la confesión
de Pedro y el subsiguiente anuncio de la pasión: och o d ías
después de estos discursos.
La transfiguración representa
y confirma lo que ha anunciado Jesús. El monte es el
lugar de las epifanías de Dios. En el monte de Dios,
Horeb, vio Moisés a Dios en la zarza ardiente (Éx 3).
Israel vio el monte Sinaí completamente cubierto de humo
porq ue el Señor había descendido a él en el fuego (Éx 19,18).
Para Lucas no tiene importancia dónde está situado el
monte de la transfiguración ni cómo se llama. Lo que en
cambio le importaba era decir que Jesús subió al monte
para orar.
Antes de recibir de los discípulos la confesión
de Mesías y antes de comenzar la revelación de su pasión
65.
Esta an tigua opinión, sostenida especialmente por los padres de la
Iglesia, fue seguramente también la idea de los evangelistas , aunque es poco
probable que fuera este el sentido pr imigenio. Lo que con esto quer ía decir
Jesús, es cosa que ignoramos (cf . R.
SCHNACKENBURG,
Gol tes Herrschaft und
Reich,
Fr iburgo de Brisgovia
2
1961, p . 142-144) .
66. Cf . 23,42; 2Pe l ,16ss .
261
y muerte , había orado Jesús en la soledad. Ahora que va
a hacerse visible aquello de que ha hablado, vuelve otra
ver a orar. La proclamación y la manifestación de Jesús
supone su oración, la comunión con el Padre. Aquello de
que habla a los hombres lo trata primero con el Padre.
Los
tres discípulos
a los que toma consigo habían sido
también testigos de la resurrección de la hija de Jairo.
También serán testigos de su agonía en el huerto de los
Olivos. Antes de que lo vean en su angustia mortal les
hace el presente de contemplarlo como triunfador del po
der de la muerte. Él tiene poder sobre la muerte de la
sión del centurión. Del bautismo arranca un arco que, pa
sando por la transfiguración, se extiende hasta la resurrec
ción. El camino de la gloria es la confesión de la propia
nada en la oración, la cual se experimenta sobre todo en
la muerte. En la oración se expresa la prontitud para la
entrega a la voluntad de Dios, se sientan las bases para el
don de la glorificación por Dios.
30
Y he aquí que dos hombres conv ersaban con é l; eran
Moisés y El ias ,
31
que , aparec idos en g lo r ia , hablaban de
la muerte que había de sufrir él en Jerusalén.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 132/190
muchacha; transfigurado, triunfa también de su propia
muerte. Sólo elige tres, porque tres testigos son más que
suficientes para la prueba de una verdad (Dt 19,15). Pro
bablemente sólo toma a tres para que le acompañen al
monte, porque la glorificación de Jesús debe ser un mis
terio de fe hasta su venida gloriosa, como también el re
sucitado sólo apareció a los testigos señalados de antema
no por Dios (Act 10,41).
29
Y mientras e s taba orando, e l aspec to de su ros tro
se t rans formó, y su ropaje se vo lv ió de una blancura des
lumbrante.
El mundo divino se muestra en resplandores de luz.
«Tú te cubres de luz como con un manto» (Sal 104,2;
ITim 6,16). La gloria de Dios brilla como un relámpago
y penetra entera la persona de Cristo, hasta sus vestidu
ras. Jesús se manifiesta como el Cristo de Dios, como ha
de venir un día con el poder y el esplendor de un soberano.
Lo que confesó Pedro se hace ahora visible.
Dios manifestó a Jesús,
mientras
éste
oraba,
Durante
la oración vino el Espíritu sobre él en el bautismo. Oran
do muere, y ya comienza a brillar su gloria en la confe-
262
El resplandor de la gloria de Dios envuelve también a
los
dos hombres
que se aparecen y los muestra como figu
ras celestiales. Los evangelistas ven en ellos a
Moisés y
E l ia s .
De los dos se decían que habían sido trasladados
al cielo. Ambos son «profetas, poderosos en obras y en
palabras», ambos fueron puestos en estrecha relación con
la venida del Mesías: Elias fue preparador del camino del
Mesías, Moisés fue su imagen y modelo según el dicho
de los doctores de la ley: Como el primer redentor (Moi
sés), así el segundo (el Mesías). Ambos son figuras de la
pasión. Los Hechos de los apóstoles presentan a Moisés
como siervo de Dios incomprendido y repudiado (Act
7,17-44), Elias se queja ante Dios de que sus adversarios
conspiran contra su vida (IRe 19,10). La imagen de Elias
asoma ya en la resurrección del hijo de la viuda de Naím,
la de Moisés en la multiplicación de los panes para dar
de comer al pueblo en el desierto. Las dos grandes figuras
del Antiguo Testamento brillan en el resplandor de la glo
ria de Dios, pero ambos tuvieron que pasar antes por el
sufrimiento. En ellos se diseña el camino de Jesús: por
la pasión a la gloria de Dios, por el destino del siervo de
Dios al divino esplendor del Mesías.
263
Las dos grandes figuras del Mesías hablaban de la
muerte que había de sufr ir é l en Jerusalén.
Ambos con
firman el anuncio de la pasión y de la muerte. El sufri
miento y la muerte forman parte del designio trazado por
Dios mismo, hacía mucho tiempo, en la Escritura, en la
ley y en los profetas. Tenía que cumplirse en Jerusalén
6 7
:
la muerte y la glorificación. Allí termina su camino y co
mienza su gloria. La muerte de Cristo en Jerusalén es el
punto central de la historia salvífica. Hacia este punto
miran los grandes hombres del tiempo anterior, hacia él
mira también la Iglesia. La muerte de Jesús en Jerusalén
sión. Sólo l o s q ue ve l an en orac i ó n comprenden este ca
mino.
Pedro quiere retener la aparición en tres t iendas. Cuan
do Dios viene al hombre, habita en la tienda. Así sucedía
en el desierto cuando Dios moraba con su pueblo en el
tabernáculo de la Alianza, y así se dice también en for
ma figurada con respecto al tiempo final: «Aquí está la
tienda de Dios con los hombres; y morará con ellos: y
ellos serán sus pueblos, y Dios mismo con ellos estará»
(Ap 21,3) .
Pedro piensa que se ha iniciado ya el reino de
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 133/190
es el comienzo del tiempo final; este, en efecto, lleva a
perfección lo que había comenzado en la muerte.
32
P ed ro y sus c om p añ eros e s tab an cargad os d e sueñ o .
Pero, una vez bien despiertos , v ieron la g loria de Jesús
y a l o s d os h om b res q ue con é l e s tab an .
33
Y c uand o é s tos
se disponían a separarse de é l , d i jo Pedro a Jesús: ¡Maes
tro
¡Q ué b ueno s er ía q ued arnos
aquí
Vamos a hacer tres
t iendas: una para t i , otra para Moisés y otra para El ias .
Esto di jo s in saber lo que decía.
¿Hay que ver conexiones entre el monte de la trans
figuración y el monte de los Olivos, en el que la pasión
comenzó? En ambos lugares están dormidos los tres dis
cípulos y testigos elegidos, mientras Jesús ora. Cuando
«se levantó de la oración, fue hacia sus discípulos y los
encontró dormidos por causa de la tristeza» (22,45). En
el monte de la transfiguración despiertan y perciben su
gloria; en el monte de los Olivos son despertados por el
Señor, y a continuación aparece ya el traidor (22,47). El
camino de la gloria pasa por el sufrimiento, por la pa-
67 .
Le 9 ,51 ; 13 ,22 ; 17 , 11; 18 , 31; 19 , 11; 24,36-53; Act 1 ,4-13; 2 .
264
Dios,
que ha comenzado ya la era mesiánica, que Dios y
sus santos habitan ya en su pueblo, por lo cual es conve
niente que los tres discípulos estén allí . En efecto, ahora
podían ellos construir las tiendas. ¡Cómo se reflejan en
las representaciones humanas los grandes hechos salvífi-
cos de Dios
El apóstol no sab ía l o q ue d ec ía . Con Jesús ha apare
cido la gloria mesiánica, pero sólo por pocos momentos.
Todavía no se puede retener. Antes hay que andar el ca
mino hasta Jerusalén, donde aguarda la muerte . Tampo
co los discípulos pueden todavía retener la gloria, también
a ellos les es necesario caminar: tienen que partir a través
de la muerte. Esta ley se aplica, no sólo a los tres, sino a
todos los discípulos a través del tiempo de la Iglesia. To
davía no podemos retener (Jn 20, 17), sino que debemos
seguir caminando con constancia decidiéndonos una y
otra vez por la palabra de Dios. . .
34
Mientras é l hablaba as í , se formó un a nu be qu e los
envo l v i ó , y q ued aron a terrad os cuand o se v i eron d en tro d e
e l l a .
35
Y de la nube sal ió una voz que decía: Éste es mi
Hijo, e l e legido; escuchadlo.
265
La nub e es señal de la presencia de Dios
6 8
, que con
fiere gracia o que castiga. Acompaña al pueblo de Dios
en su peregrinación por el desierto (Éx 14,20). envuelve
al monte Sinaí cuando desciende Dios en la figura del
fuego para manifestar su voluntad (Éx 19,16ss). Una nube
llenó el templo cuando fue consagrado; en él se posa la
gloria de Dios (IRe 8,10ss). El comienzo del tiempo final
está acompañado de nubes
89
. La nube que en el monte de
la transfiguración envuelve a Moisés y a Elias manifiesta la
presencia de Dios, la gloria divina de Jesús, la anticipa
ción del tiempo final. «Entonces aparecerá su gloria, y
asimismo la nube, como se manifestó al tiempo de Moisés
(23,35). La voz de los enemigos recusa la reivindicación
mesiánica por causa de la pasión. Cristo es el elegido, no
sólo en la pasión, ni tampoco sólo a pesar de la pasión,
sino precisamente por la pasión. Dios lo ha elegido, lo ha
hecho Hijo de Dios y ungido de Dios, porque él va a la
gloria a través de la pasión y la muerte.
E scuch ad l o . La voz de Dios repite lo que había dicho
Moisés sobre el profeta venidero: «Un profeta os susci
tará Dios, el Señor, de entre vuestros hermanos como a
mí; lo escucharéis en todo lo que os hable. Todo el que no
escuche a tal profeta será exterminado del pueblo» (Act
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 134/190
y cuando Salomón pidió que el templo fuese gloriosamente
santificado» (2Mac 2,8). A los discípulos se ha dado a co
nocer el «futuro de Dios».
Sobre el monte de la transfiguración se alza u n n u e v o
san tuar i o . Dios establece en forma nueva su presencia en
tre los hombres, erige un nuevo templo. Ya no es el tem
plo de Jerusalén el lugar de la manifestación y del culto
de Dios, sino Jesús, al que apuntaba el Antiguo Testa
mento. Cristo, que pasando por la pasión y la muerte ha
sido glorificado, es presencia, manifestación y centro del
nuevo culto divino.
Desde esta nueva tienda de Dios entre los hombres da
Dios mismo su revelación y con su palabra declara que
Jesús es su Hijo, e l e legido. En él se cumple lo que había
profetizado Isaías acerca del siervo de Yahveh: «He aquí
a mi siervo, a quien sostengo yo,
m i e l eg i d o ,
en quien se
complace mi alma. He puesto mi espíritu sobre él, y él
dará la ley a las naciones» (Is 42,1). Los enemigos de Je
sús se mofarán de él junto a la cruz diciendo: «Que se
salve a sí mismo, si él es el ungido de Dios, el elegido»
68 . Ci . 1 ,35; Éx 16,10; 19,9 .
69 .
Sof 1 ,15; Ez 30,18; 34,12; Jl
2,2.
266
3,22s; Dt 18,15.19). La ley que promulga Jesús a los tres
apóstoles en el monte de la transfiguración reza así: Por
la pasión y la muerte, a la resurrección y a la gloria. Ésta
es la ley de Cristo, la ley de sus discípulos, la ley de la
Iglesia, la ley de los sacramentos y de la vida cristiana.
36
Y a l acab arse d e o i r l a voz , encon traron a J e sús so l o .
El los guardaron s i lencio y , por entonces, a nadie ref ir ie
ron nada de lo que habían v is to.
La epifanía dura poco. Encontró a Jesús so l o . Jesús,
«siendo de condición divina, no hizo alarde de ser igual
a Dios, sino que se despojó a sí mismo, tomando condi
ción de esclavo, haciéndose semejante a los hombres»
(Flp 2,6s). Descendió del Padre a Nazaret, después de la
epifanía del bautismo se dirigió al desierto, tras la gran
revelación en Nazaret fue a Cafarnaúm... estaba solo, in-
ccmprendido . . .
Los discípulos, mientras estuvo Jesús con ellos, no
h ab l aron a nad i e d e l o q ue h ab ían v i s to . Ven el reino de
Dios y sus misterios. Pero el mayor misterio es éste: que
la gloria del reino se inicia con la muerte de Jesús, que el
salvador da la salvación por el camino del sufrimiento.
267
¿Quién estaba maduro para soportar este misterio del rei
no de Dios?
b)
Curación d e un epiléptico (9,37-47a>.
37
Al día s igu ien te , cuando bajaban de l monte , le sa l ió
a l encuentro una gran mult i tud.
38
Y de pronto , un hom
bre que es taba entre la mult i tud se puso a gr i tar: ¡Maes
tro,
fí jate en mi hijo, por favor Es mi ún ico hijo.
39
Pero
un espíritu se apodera de él, y de repente grita y lo agita
boca del muchacho, lo agita de una parte a otra y le hace
echar espumarajos (segunda fase), finalmente lo echa al
suelo, y el muchacho, después del ataque, está fatigado y
magullado (tercera fase). Estos síntomas revelan epilepsia.
El médico Lucas no cayó en la tentación de hacer en su
evangelio investigaciones de ciencia médica. La enferme
dad es a tr ibuida a demonios. Lucas nos pone en la mano
el Evangelio como Evangelio que proclama la salvación
sin cuidarse de investigaciones médicas.
Se ha agravado el desamparo del padre y de su hijo,
porque no habían hallado remedio ni siquiera donde lo
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 135/190
con v io len tas convu ls iones , hac iéndole echar espumarajos ,
y cuando a duras penas se aparta de é l , lo de ja todo ma
g u l la do .
*°
He rogado a tus disc ípu los que lo arrojaran,
pero no han s ido capaces .
El
monte
es el lugar de la manifestación de Dios. Al
pie de la montaña se halla la masa del pueblo. De Moisés
se refiere: «Estuvo Moisés con el Señor cuarenta días y
cuarenta noches, sin comer y sin beber, y escribió Yahveh
en las tablas los diez mandamientos de la ley. Cuando
bajó Moisés de la montaña del Sinaí traía en sus manos
las dos tablas del testimonio, y no sabía que su faz se
había hecho radiante desde que había estado hablando
con Yahveh» (Éx 34,28s). Pero abajo, al pie de la mon
taña se entregaba a la idolatría. Jesús, un segundo Moisés.
De en medio de la multitud grita un padre a Jesús. Le
llama maestro. Quiere que Jesús mire a su hijo. Era hijo
único, como el hijo de la viuda de Naím (7,12), y como
la hija de Jairo (8,42). Lucas, como médico, describe el
estado del muchacho con conocimiento de causa y con
especial interés (cf. Me 8,18). Los síntomas de la enfer
medad muestran tres fases: El mal espíritu se apodera
del muchacho (primera fase), inmediatamente grita por
268
habían esperado. Los apóstoles que no habían subido a la
montaña , no habían podido hacer nada a pesar de la fuer
za y poder de que estaban investidos. ¿Por qué?
41
Jesús respondió: ¡Oh generac ión incrédula y perver
t ida ¿Hasta cuándo tendré que es tar con voso tros y so
portaros? Trae aquí a tu hijo.
La queja de Jesús reproduce la queja de Moisés: «Él
(Dios) es la roca. Sus obras son perfectas. Todos sus ca
minos son justísimos. Es fidelísimo y no hay en él iniqui
dad. Es justo, es recto. Indignamente se portaron con él
sus hijos, generación malvada y perversa» (Dt 32,4s).
«¿Hasta cuándo voy a estar oyendo lo que contra mí mur
mura esta turba depravada, las quejas contra mí de los
hijos de Israel?» (Núm 14,27). Jesús está bajo la impre
sión de la transfiguración. El Padre ha revelado su condi
ción de Mesías, lo ha destacado entre todos como a Hijo
de Dios elegido, ha hecho llamamiento a creer en su pa
labra. ¿Y con qué se encuentra ahora? Halla a los demo
nios con sus estragos, a los discípulos con su fe flaca, al
pueblo incrédulo y torcido (Act 2,40). Jesús, en la gloria y
poder de Dios, tiene en su mano el destino del hombre,
269
y a la vez se queja de la sordera del pueblo. Él es Hijo y
siervo sufriente de Dios. Su camino, al ser incomprendido,
podría causarle «hastío» (Me 14,33). Sin embargo, está
dispuesto a mostrar misericordia. Trae aquí a tu hi jo.
Como Hijo elegido y ungido de Dios que es, quiere apor
tar salvación, quiere estar siempre disponible para reme
diar la miseria del pueblo.
42
Cuan do éste se acercaba , e l demonio lo t iró por t ie
rra y l o ag i tó con v i o l en tas convu l s i ones . E n tonces J e sús
increpó al espír i tu impuro y curó al muchacho; luego se
l o d evo l v i ó a su p ad re .
43 a
T od os q ued aron l l enos d e a som
3.
LA VÍA DOLOROSA DEL ME SÍ AS
(9,436-50)
a ) Segundo anu ncio de la pasión (9,436-45).
43 b
Mientras todos e staban ma ravi l lados de todas las
cosas que hacía, d i jo a sus discípulos:
u
G rab ad b i en en
vuestros oídos las palabras que os voy a decir: El Hijo
del hombre ha de ser entregado en manos de los hombres.
T od os e s tab an m arav i l l ad os d e tod as l a s cosas q ue
hacía. Con esto se cierra la actividad en Galilea. Una vez
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 136/190
bro ante e l poder admirable de Dios.
El demonio es expulsado, la enfermedad curada, el
padre aliviado. En la acción de Jesús se manifiesta la
grand eza d e D i os . En la montaña de la transfiguración se
ha mostrado como un relámpago la majestad y la gloria
de Dios; en la miseria de los hombres afligidos se mues
tra su omnipotencia. Los hombres llaman Maestro a Je
sús y confiesan que él pone de manifiesto, hace visible la
grandeza de Dios; el Padre en el cielo lo ha llamado ele
gido,
Mesías, Hijo de Dios. En la montaña le rodean las
grandes figuras de la historia antigua y los tres apóstoles
elegidos; abajo, los discípulos de poca fe, la «generación
incrédula y pervertida» de los hombres, el muchacho epi
léptico, poseído por el demonio. Gran obra de Dios que
envía al elegido, para que se interese por la miseria.. . El
camino de la gloria conduce a Jesús por la miseria y el
sufrimiento de los hombres, que él toma sobre sí.
27
más se cava una profunda zanja entre todos y los discípu
los.
Los discípulos no pueden dejarse arrastrar por las es
peranzas del pueblo. No sucederán hechos todavía mayo
res,
sino que tendrá lugar la entrega del Hijo del hombre
en manos de los hombres; éstos harán con él lo que quie
ran. ¿Quién es el que lo entrega? Dios. Tal es su designio.
A través de la admiración general mira Jesús a este de
signio de Dios. En esta profecía de la pasión no se dice
nada de la resurrección.
45
Pero e l los n o c omprendían ta les palabras; y eran
tan obscuras para e l los , que no captaban su sent ido, y s in
embargo, les daba miedo de preguntarle acerca de e l las .
Las palabras de la profecía son claras, pero lo que
quieren decir es misterioso y oscuro. El Hijo del hombre
será entregado en manos de los hombres. El Mesías, que
tiene todo poder, será entregado al capricho de los hom
bres . Dios lo ha dispuesto así. «El Señor cargó sobre él
(el siervo de Yahveh) la iniquidad de todos nosotros» (Is
53,6). ¿Por qué ha de pasar por la pasión el camino
de Jesús a la gloria? ¿Por qué ha de ser este el camino de
271
sus discípulos y de su Iglesia? A los discípulos l e s d ab a
m i ed o p regun tar l e acerca d e e s ta s p a l ab ras ,
porque en su
interior se rebelaban contra la muerte de Jesús, pero sa
bían que Jesús reprobaba tales pensamientos (Me 8,32).
Lucas inserta una explicación en la fuente de que toma
estas palabras. E ran ob scuras p ara e l l o s , de modo que no
las comprendían. Dios había echado un velo sobre este
misterio, de modo que no podían percatarse de él. Les
descubrirá este misterio cuando resucite Jesús. En la ma
ñana de pascua dirán los mensajeros de Dios: «No está
aquí , s ino que ha resucitado. Acordaos de cómo os anun
ció,
cuando estaba todavía en Galilea, que el Hijo del
discípulos. Estos no expresan lo que les preocupa inte
riormente; el ansia de dominar se tiene escondida o se
disimula tras una máscara. Los dominadores de los pue
blos se hacen llamar «bienhechores» (22,25). El hombre
no quiere ser entregado en manos de los hombres, no
quiere que puedan disponer de él, sino que quiere dispo
ner de los otros y dominarlos. La suerte de Jesús contra
dice a los pensamientos del corazón humano, los discípu
los del Hijo del hombre entregado en manos de los
hombres tienen que modificar su modo de pensar y refor
marlo conforme al espíritu de Cristo.
Jesús hace que se le acerque un niño p eq ueñ o , que
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 137/190
hombre había de ser entregado en manos de pecadores y
había de ser crucificado, pero que al tercer día había de
resucitar . Entonces. . . recordaron sus palabras» (24,6ss) .
La humillación de Jesús sólo se comprende por su glori
ficación. El gusto del sufrimiento sólo se halla cuando se
ha gustado la glorificación.
b) Seguimiento de Cristo a la luz del anuncio de la pa
sión (9,46-48).
46
Surgió en tre e l los la cuest ión ace rca de quién ser ia
el mayor de todos.
47
E n tonces J e sús , pene trand o l o s p en
sam i en tos d e su corazó n , t om ó a un n i ñ o , l o p uso jun to a
s í
48
y l e s d ijo : Q u i en acog e a e s te n i ñ o en m i nom b re , e s
a m í a q u i en acoge , y q u i en m e acoge a m í , acoge a aq ue l
que me envió, porque e l que es más pequeño entre todos
vosotros, ése es grande.
El ansia de ser el mayor entre los otros, de dominar
los, de disponer de ellos, responde a una i nc l i nac i ó n muy
arraigada en el corazón del hombre, también en el de los
272
recibe a su lado un puesto honorífico, es antepuesto y
preferido a los discípulos. Todas las miradas se fijan en
este niño. Jesús ha acogido con honor a este niño y
formula la mayor promesa para el que aco ja a un n i ñ o pe
queño y le dedique sus servicios. El que quiera ser grande,
debe ponerse al servicio de loi más pequeños. Lo que
hace grandes no es dominar, sino servir , servir a los pe
queños, a los despreciados.
Al niño se le debe acoger en nom b re d e J e sús , en aten
ción a é l . Esto no es sólo acto de humanidad, sino tam
bién acto propio de quien es discípulo de Jesús. La humi
llación de uno mismo y el servicio propio de los discípulos
de Jesús se efectúa a imitación de aquel que se humilló
a sí mismo. El discípulo se entrega en manos de los hom
bres para que dispongan de él, porque Jesús fue entrega
do por Dios y él mismo se entregó.
Grandes cosas se prometen a quien sirva. El servicio
prestado al niño es serv i c i o p res tad o a J e sús , y el servi
cio prestado a Jesús es servic io prestado a Dios. Los pe
queños, Jesús y Dios se ponen en una misma línea; a tra
vés del pequeño se mira a Jesús, a través de Jesús, a Dios.
El servicio insignificante, obscuro, prestado a un niño es
273
N T , Le I, 18
como el de quien acoge y alberga a Dios, y aporta las ven
tajas que concede Dios a quien le alberga a él mismo. El
servicio a los más pequeños de la comunidad se convierte
en servicio, en culto a Dios. Jesús, por el hecho de entre
garse en manos de los hombres, realiza el culto querido
por Dios . . .
Cuando Jesús es entregado en manos de los hombres,
se efectúa esto a fin de que los pequeños, los débiles y
los no redimidos sean a c o g i d o s y albergados por Dios.
El que se apropia los sentimientos de Jesús, no sólo se
entrega como siervo en manos de los hombres, sino que
logra ser acogido por Jesús y halla albergue y comuni
nom b re y q uer íam os i m p ed ír se l o , p orq ue no and a con
noso tros .
50
Pero Jesú s le contestó: No se lo impidáis , que
quien no está contra vosotros, en favor vuestro está.
La respuesta de los discípulos a las palabras de Jesús
sobre el servicio es la preocupación ambiciosa por los
puestos elevados. Uno de los más allegados a Jesús, Juan,
que con frecuencia es nombrado por Lucas juntamente
con Pedro y constantemente es antepuesto a su hermano,
tampoco entiende las palabras de Jesús acerca del hacerse
pequeños. El seguimiento de Jesús, que se entrega en
manos de los hombres para servirlos, hace tropezar con
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 138/190
dad con Dios. Ahora bien, la comunidad con Dios en Je
sús es la Iglesia. «Él (Cristo) constituyó a unos apóstoles;
a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, para el
perfeccionamiento del pueblo santo, para la obra del mi
nisterio, para la edificación del cuerpo de Cristo» (Ef
4, 1 ls) .
El que con su servicio al más humilde se constituye
él mismo en el más humilde y bajo, ése es verdaderamente
grande . E l m á s p eq ueñ o en tre tod os voso tros , é se e s gran
de . Jesús, el más grande, que fue entregado en manos de
los hombres a fin de que dispusieran de él, trastorna todas
las normas. Los pequeños vienen a ser los mayores, los
humildes se convierten en señores, los dominadores se
hacen esclavos. Esta revolución de los corazones tiene lu
gar en nombre de aquel que, siendo Hijo de Dios, fue
entregado en manos de los hombres.
c ) Uso del nom bre de Jesús (9,49-50).
49
En tonce s Juan , toma ndo la palabra, d i jo: Mae stro,
h em os v i s to a uno q ue e s tab a ex p u lsand o d em on i os en tu
274
nuevas y nuevas sorpresas causadas por las mociones del
corazón.
Entre los judíos había gentes que con oraciones expul
saban los demonios de los posesos (exorcistas). Como los
discípulos tenían éxito expulsando demonios en nombre
de Jesús, uno de aquellos exorcistas intentó expulsar de
monios también en nombre de Jesús, aunque no per tene
cía al grupo de los discípulos. La invocación del nombre
de Jesús se demuestra eficaz aun fuera de la comunidad de
los discípulos.
El exorcista extraño causa desazón a los discípulos.
Consideran su propia posición como una elección que los
coloca por encima de todos los demás. Lo que hace el ex
traño lo consideran como algo que merma su grandeza.
Ellos quieren dominar, no servir . Se quejan al maestro:
No anda con nosotros . Quienquiera que trabaje por Jesús
y por su obra , no debe ser impedido, aunque no per tenez
ca al grupo. La elección no debe servir a la ambición y al
egoísmo, sino a Jesús y al alivio de los afligidos. El que es
elegido para seguir a Jesús, es elegido para servir .
El exorcista extraño no es adversario de los apóstoles,
puesto que invoca el nom b re d e J e sús . Por eso se le debe
275
considerar como aliado. No ambición, sino objetividad; no
celo por la propia posición, sino promoción de la obra de
Jesús: esto es lo que debe inspirar la actitud de los após
toles. El servicio promueve la obra, la ambición la en
torpece.
Jesús se sirve de un proverbio que se había hecho co
rriente desde la guerra civil de los romanos: «Te hemos
oído decir que nosotros (los hombres de Pompeyo) tene
mos por adversarios nuestros a todos los que no están con
nosotros, y que tú (César) tienes por tuyos a todos los
que no están contra ti .» Jesús da razón al dicho de César.
El exorcista extraño procede como uno de los discípulos:
La actividad de Jesús en Galilea ha llegado a su tér
mino. El breve relato acerca del exorcista extraño hace
que asomen una vez más no pocas cosas de este período.
Jesús es reconocido por el pueblo — incluso p or el exor
cista judío, que no es su discípulo — com o salvador de
los poderes demoníacos. El exorcismo, que se efectúa bajo
la invocación de Dios, se verifica ahora en nombre de Je
sús. Jesús actúa como profeta de Dios. Es más que pro
feta. Jesús es el Hijo de Dios y el siervo sufriente de
Yahveh, que se pone al servicio de los hombres sin cui
darse de su propia honra. ¿Quién puede creer esto? Los
apóstoles lo han reconocido como ungido de Dios, pero
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 139/190
en nom b re d e J e sús . Amplía el círculo a que se extiende
la acción de los mismos. «En todo caso, como quiera que
sea, por hipocresía o por sinceridad, Cristo es anunciado,
y de esto me alegro» (Flp
1,18).
¿Cómo puede todavía
haber aquí lugar para envidias?
Quien no está contra vosotros, en favor vuestro está.
Esta frase de Lucas es algo diferente de la de Marcos:
«Quien no está contra nosotros, en favor nuestro está.»
'Aquí está Jesús unido con los discípulos, en Lucas está
separado. La meditación creyente acerca de Jesús se ha
hecho más consciente de su elevada superioridad
70
. ¿No
tenemos necesidad de la doble configuración de la frase?
¿De la unión con Jesús y de la separación reverente? ¿De
la proximidad confiada y de la distancia respetuosa?
70 .
Se habla de una tendencia pedagógica en el evangelio de Lucas.
Éste pasa por alto casi todos los pasajes de Me que parecen per judicar a la
dignidad de Jesús: Me 3,20s. (Jesús fuera de sí) , Me 13,32 (Jesús ignora
el día de la parusía) . También se omiten o se modif ican los pasajes en que
Jesús hace preguntas o recibe informaciones (compárese Me 1,30 y Le 4 ,38;
Me 3,3 y Le 6,8; Me 5',30-32 y Le 8,45s; Me 6,38 y Le 9,13; Me 9,33 y
Le 9,47) . Tampoco habla Lucas de fuer tes manifestaciones de sentimientos
humanos : compárese Me 1,41.43 y Le 5 ,13; descr ipción de la agonía en el
huerto de los Olivos, Me 14,32-42 y Le 22,40-46, etc. J.
SCHMID,
E l E v a n
ge l i o s e gún s an Luc as (Comentar io de Ratisbona) Herder , Barcelona 1968,
p.
30-31.
276
¿pueden concebir que sea también el siervo sufriente de
Yahveh? Todas las secciones de la actividad en Galilea
se han cerrado con la misión apostólica. Tampoco esta
sección se cierra de otra manera. La obra de los apóstoles
es realizada por uno que no es de los de Jesús, pero que
obra en su nombre. El mensaje y la obra de Jesús pugnan
por hacer saltar todas las barreras y por poner a todos
a su servicio.
277
Parte tercera
CAMINO DE JERUSALÉN
9,51-10,27
Jesús abandona Galilea
y se
pone
en
marcha hacia Jerusalén,
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 140/190
donde sufrirá y será glorificado. En este camino se muestra Jesús
como maestro profético, que a la vista de su muerte proclama
su mensaje, que será confirmado por Dios mediante la resurrección.
En tres pasajes se menciona principalmente el viaje a Jeru
salén. Jesús toma
la
decisión irrevocable
de ir a
Jerusalén (9,51).
Ib a
de
ciudad
en
ciudad
y de
aldea
en
aldea, enseñando
y
enca
minándose hacia Jerusalén (13,22). Mientras caminaba hacia Jeru
salén, pasó por Galilea y Samaría (17,11). En Jerusalén se
desarrolla la fase decisiva del hecho salvífico; la pasión y la resu
rrección están ligadas inseparablemente. Para expresar esta aso
ciación usa Lucas el término «elevación» (9,51). Con los relatos
del viaje (9,51-10,42; 13,22-35; 17,11-19)
van
asociadas enseñanzas
de Jesús (11,1-13,21; 14,1-17,10; 17,20-19,27),
que por
tener
un
marco general sin determinación de lugar ni de tiempo, poseen
un significado permanente. En el camino hacia su meta muestra
Jesús a sus discípulos «caminos de vida» (Act 2,28).
I. EL COMIENZO (9,51-13,21).
1. EL MAESTRO EN MARCHA, Y S U S DISCÍPULOS 9,51-9,62).
a ) Recusación
de
alojamiento (9,51-56).
51
Y suced i ó que, al cumpl irse el tiempo de su e l eva
ción, tomó la decis ión irrevocable de ir hacia Jerusalén.
279
Dios asignó a Jesús una medida determinada de días
en la tierra. Esta medida se va cumpliendo con el flujo
del tiempo. La vida de Jesús termina con su e l evac i ó n " .
La palabra significa ascensión y muerte; precisamente esta
ambigüedad es apropiada para expresar lo que aguarda a
Jesú s en Jeru salé n: la pasión y la glorificación, sufrimien
tos y muerte, resurrección y ascensión. Jerusalén prepara
a Jesús la muerte, pero, por designio de Dios, también la
gloria.
Jesús tomó la decis ión irrevocable de ir hacia Jerusa
lén .
Nada puede apartarle de este camino de la muerte.
«El Señor, Yahveh, me ha socorrido, y por eso no cedí
blo.
Por eso se dice en estilo solemne: Envió por delante
unos m ensa jeros ,
detrás de los cuales va él. Su expedi
ción es camino hacia la gloria, el camino real de la cruz.
El camino más corto de Galilea a Jerusalén pasa por
Samaría. Jesús escoge este camino y pone la mira en Je
rusalén.
Los mensajeros tienen que prepararle alojamiento. Je
sús va acompañado de un grupo bastante grande: con
él iban los doce, muchas mujeres, cierto número de dis
cípulos, entre los cuales elige los setenta.
Entre los samaritanos y los judíos existían tensiones
religiosas y nacionales. Los samaritanos son descendientes
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 141/190
ante la ignominia e hice mi rostro como de pedernal, sa
biendo que no sería confundido» (Is 50,7). Jesús va hacia
Jerusalén fortalecido con la fuerza de Dios, como fue for
talecido el profeta cuando le encargó Dios anunciar sus
amenazas contra Jerusalén: «Tú, hijo de hombre, no los
temas ni tengas miedo a sus palabras, aunque te sean
cardos y zarzas y habites en medio de escorpiones. No
temas sus palabras, no tengas miedo de su cara, porque
son gente rebelde» (Ez 2,6). Jesús sabe también la glorifi
cación que allí le aguarda. Sigue su camino con confianza.
52
Y en vió por delante un os men sajeros. Fueron éstos
y entraron e n una aldea de somántan os, con é l f in de pre
pararle a lojamiento.
53
Pero no lo quis ieron recibir, por
que su aspecto era como de ir hacia Jerusalén.
Jesús va hacia Jerusalén como profeta y Mesías por
medio del cual Dios visita misericordiosamente a su pue-
71 . El térmi no del origina l griego significa «elevac ión al cielo», conforme
al verbo transitivo «elevar» (Act 1,2.11.22; Me 16,19; ITim 3,16; Eclo 48,9;
49,14) y también la muerte (Salmos de Salomón 4 ,18) ; el término es equí
voco a la manera de «glorificación» en Jn (cf. , por ejemplo, 13,31).
280
de tribus asiáticas, que se asentaron allí cuando el reino
del norte, Israel, fue conquistado por los asirios (722 a.C),
y de la población autóctona que se había quedado en el
país.
Habían adoptado la religión israelita de Yahveh,
pero edificaron "un templo propio sobre el monte Garizim
y se distinguen de los judíos también en otras muchas
cosas (cf. 2Re 17,24-41). Los judíos despreciaban a los
samaritanos como pueblo semipagano y evitaban el trato
con ellos (Jn 4,9). Entre ambos pueblos hubo repetidas
veces fricciones. Cuando oyeron los samaritanos que Jesús
se dirigía hacia Jerusalén, despertó la oposición y rehusa
ron el alojamiento a Jesús.
Al comienzo de su camino en este mundo, al comien
zo de la actividad galilea en Nazaret, al comienzo del ca
mino hacia Jerusalén «no había lugar para él en la p osa
da».
Los caminos de Jerusalén en este mundo terminarán
cuando tenga que salir de la ciudad de Jerusalén para ser
crucificado, pero esta salida será a la vez el comienzo de
su gloria.
54
Cuan do v ieron esto los discípulos Sant iago y Juan,
le d i jeron: Señor, ¿quieres que mandemos bajar fuego del
281
c i e l o p ara q ue l o s consum a?
5S
Pero Jesú s, volv iéndos e
hacia e l los , los reprendió.
56
Y se fueron a otra aldea.
A S an t i ago y J uan exaspera la negativa dada a Jesús.
Se acuerdan de que Elias pidió que bajara fuego del
cielo sobre los que lo despreciaban y el fuego cayó del cielo
y los consumió (2Re
1,10-14).
Jesús es más que Elias
(9,19.30). ¿No se debía castigar este desprecio de Jesús por
la aldea samaritana? Están convencidos de que su maldi
ción será escuchada inmediatamente por Dios, puesto que
Jesús les ha conferido poder (9,5). ¿Puede Dios tolerar
que el Mesías, el Santo de Dios, se vea expuesto al repudio
b)
Llamam ientos de discípulos (9,57-62).
57
M i en tras e l l o s i b an s i gu i end o ad e l an te , uno l e d i jo
p or e l cam i no: T e s egu i ré a d ond eq u i era q ue vay as .
58
Y
Jesús le contestó: Las zorras t ienen madrigueras, y las
aves del c ie lo n idos, pero e l Hijo del hombre no t iene
donde recl inar la cabeza.
Este desconocido elige por su cuenta su maestro, al
igual que los discípulos de los rabinos. Su decisión de
hacerse discípulo de Jesús en el momento en que éste se
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 142/190
y a la arbitrariedad de los hombres? Los discípulos mues
tran cuánto trabajo les cuesta entender al Mesías sufriente.
De todos modos, preguntan a Jesús si han de formular la
maldición. La oposición humana contra los sufrimientos
del Mesías es vencida por la palabra de Jesús. Sólo ésta
puede esclarecer y hacer soportable el misterio del repu
dio del Santo de Dios por los hombres.
Jesús reprende a los discípulos. El reproche se expli
ca en algunos manuscritos con estas palabras añadidas:
¿No sabéis de qué espír i tu sois? Los discípulos debían
tener los sentimientos de Jesús. Él ha sido ungido para
traer a los pobres la buena nueva, a los ciegos la vista.. .
(4,18).
El Hijo del hombre no ha venido para perder, sino
para salvar (19,10). Los apóstoles son enviados para que
salven, no para que destruyan; para que perdonen, no
para que castiguen, para que rueguen por los enemigos en
el espíritu de Jesús, no para que los maldigan (23,34).
S e fueron a o t ra a l d ea . No se dice si era una aldea
samaritana o galilea. Lo decisivo no es el camino, sino
la meta, no el repudio por parte de los hombres, sino la
acogida por Dios, no el alojamiento en este mundo, sino
la patria en Dios.
282
ve repudiado en su camino hacia Jerusalén, es incondicio
nal y magnánima. T e s egu i ré a d ond eq u i era q ue vay as .
Ha entrevisto el elemento fundamental del seguimiento
exigido por Jesús: la absoluta disponibilidad.
Jesús se encamina hacia su «elevación», hacia su muer
te violenta . Es un repudiado, descar tado por los hombres,
sin hogar, un caminante que actúa sin reposo. El Hijo del
h om b re no t i ene d ond e rec l i nar l a cab eza .
La condición
de discípulo significa comunión de suertes con Jesús. Esto
merece consideración. Para el hombre es duro carecer de
patria y de hogar, no tener un albergue donde reposar
tranquilo. Hasta los animales más inquietos, las zorras y
l a s ave s , tienen donde acogerse y lo buscan. «Ninguna
zorra acaba al borde de su guarida», reza un proverbio
judío.
El discípulo de Jesús debe estar dispuesto a pere
grinar, a ser expulsado, a renunciar al abrigo del hogar.
59
A otro le d ijo: Sigú eme. Éste respondió: Permíteme
que vaya primero a enterrar a mi padre.
m
P ero J esús l e
repl icó: Deja que los muertos ent ierren a sus muertos;
pero tú, vete a anunciar e l re ino de Dios.
283
El llamamiento para ser discípulo viene de Jesús mis
m o.
Esto es lo corriente. «Llamaba a los que quería»
(Me 3,14). «No me habéis elegido vosotros, sino que yo
os elegí» (Jn 15,16). El que aquí es llamado está pronto,
pero no inmediatamente. Quiere tan sólo acabar todavía
lo que t iene entre manos: enterrar a su padre. Enterrar
a los muertos es en Israel un deber riguroso. Hasta a los
sacerdotes y levitas se les impone en el caso de sus pa
rientes, aunque les estaba severamente prohibido conta
minarse con un cadáver. Este deber dispensa de todos los
preceptos que imponía la ley. Parece por tanto plenamente
justificado el permiso que pide este hombre.
61
También dijo otro: Te segu iré, Señor; pero permíte
me que vaya primero a despedirme de los míos.
62
P ero
J esús l e r e sp ond i ó : N i nguno q ue h a ech ad o l a m ano a l
arado y mira hacia atrás, es apto para e l re ino de Dios.
También este tercero, como el primero, se ofrece es
pontáneamente como discípulo. Llama S eñ or a Jesús y se
muestra dispuesto a reconocer el pleno derecho de Jesús
a disponer de él; está pronto a seguirle incondicionalmen
te . El primer discípulo quiere seguir a Jesús a dondequie
ra que vaya, el segundo oye el llamamiento de la fuerza
que resucita y reanima, el tercero reconoce a Jesús como
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 143/190
Sin embargo, Jesús no permite la dilación. Quiere que
se le siga incondicionalmente. La respuesta parece falta
de piedad, completamente ajena a los sentimientos, poco
menos que impía para la religiosidad de los judíos. Jesús
explica su negativa con una frase áspera y penetrante:
Deja que los muertos ent ierren a sus muertos. El llama
miento a seguir a Jesús como discípulo lleva de la muerte
a la vida. El que no es discípulo de Jesús, que no ha acep
tado su mensaje del reino y de la vida eterna, está en la
muerte. El que se ha adherido a Jesús ha pasado a la vida
por su palabra del reino de Dios. Dos mundos que no
tienen ya nada que ver entre sí.
El discípulo sólo tiene una cosa que hacer: A nunc i ar
el re ino de Dios. Esto está por encima de todo. La pro
clamación del reino precede a todo lo demás y no con
siente dilación. Jesús está en camino; su misión de pro
clamar el reino de Dios no sufre verse postergada. Él tiene
puesta la mira firmemente en la «elevación». La gloria que
le espera lo dispensa de todas las obligaciones de la pie
dad. Más importante es anunciar la vida y resucitar a los
muertos en el espíritu que enterrar a los muertos corpo-
ralmente .
284
Señor. El que quiera ser discípulo de Jesús debe ir tras
él , debe estar poseído por el llamamiento creador de Dios
y ponerse plenamente a disposición de Jesús.
También este tercero que está dispuesto a seguir a
Jesús pide que se le haga una concesión. Quiere despe
dirse de los suyos. Pide lo que también Elíseo pidió a
Elias:
«Déjame ir a abrazar a mi padre y a mi madre, y
te seguiré. Elias respondió: Vuélvete, pues ya ves lo que
he hecho contigo. Alejóse de Elias, y cuando volvió cogió
el par de bueyes y los ofreció en sacrificio; con el yugo
y el arado de los bueyes coció la carne e invitó a comer
al pueblo, y levantándose, siguió a Elias y se puso a su
servicio» (IRe 19,20s). Jesús no exige más que lo que el
profeta exigía a su discípulo. No le permite que vaya a
despedirse. La proclamación de Dios no sufre «si» ni
«pero», reclama desprendimiento de los familiares, des
pego hasta de lo que exige el corazón.
Al discípulo no sólo se le muestra de qué debe sepa
rarse, sino también adonde debe dirigirse. El discípulo
debe entregarse completamente a la obra de Jesús, sin
reservarse nada para sí. Con un proverbio se muestra grá
ficamente esta plena disponibilidad sin la menor restric-
285
ción. El arado palestino es difícil de guiar, y todavía más
en la tierra laborable en los alrededores del lago de Ge-
nesaret. La faena de arar exige plena entrega a la tarea.
La proclamación del reino de Dios sólo puede ser confia
da a aquel que por razón de la comunión de vida con
Jesús se separa de la propia familia, se desprende de todo
aquello a que antes estaba apegado su corazón y vive en
teramente, sin dividirse, la obra de que se ha encargado.
El reino de Dios plantea al hombre la exigencia de la
entrega total del pensar y del querer, sin divisiones.
La plena sumisión al Señor es sumisión a la palabra
del reino de Dios. A esta palabra sirve el Señor, a la
los discípulos testimonio de que Jesús es el anunciador del
reino de Dios en los últimos tiempos. Porque el reino
de Dios viene con Jesús, y Jesús con el reino de Dios.
Lo que exige en concreto esta docilidad y disponibilidad
incondicional, lo fija en los tres llamamientos la situación
particular y el llamamiento de Dios.
2. M ISI Ó N DE LOS SETENTA (10,1-24).
a )
Designación y misión (10,1-16).
1
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 144/190
misma sirve el discípulo del Señor. La palabra del reino
encierra también la muerte y la gloria de Jesús. Quien
vive para esta palabra, debe representarla en su vida y
con ésta dar testimonio de la misma. En las tres senten
cias de Jesús se exige una y otra vez que se renuncie a te
ner hogar en este mundo. El hogar ofrece dónde reclinar
la cabeza, el hogar está improntado por la piedad con el
padre y la madre, el hogar implica abrigo y protección
de los que están en su casa. El discípulo de Cristo debe,
como Jesús, despedirse, caminar, sin dilación ni interrup
ción, pues Jesús tiene puesta la mira en Jerusalén, donde
le aguarda la muerte, pero también la gloria de Dios,
donde uno se halla verdaderamente en su casa.
La docilidad y disponibilidad incondicional es la base
del seguimiento exigido por Jesús. Ya no se entiende en
función de la relación entre maestro y discípulo vigente
entre los doctores de la ley. Aquí llama el Señor con
omnímoda autoridad, autoridad que no tiene igual, auto
ridad que no poseyó ninguno de los profetas, sino única
mente aquel a quien Dios ha dado todo poder. En los
discípulos ha de hacerse visible este Señor; con su segui
miento, su obediencia incondicional y su entrega total dan
286
Después de esto, des ignó e l Señor a otros setenta y
los envió por delante , de dos en dos, a todas las c iudades
y lugares adonde é l tenía que ir .
2
Y les decía: Muc ha es
la mies , pero pocos los obreros; rogad, pues, a l dueño de la
mies que envíe obreros a su mies .
La misión de los doce va dirigida á Israel. Jesús de
signó además públicamente a otros setenta
72
, que fueron
enviados también. Para la antigua Iglesia tenía la mayor
importancia saber que además de los doce había otro gru
po que tenía encargo misionero. Además de los doce tie
nen también otros el nombre de apóstoles y llevan a cabo
la misión de Jesús.
La elección del número setenta hace referencia a los
setenta pueblos de que se compone la humanidad según
la tabla etnográfica de la Biblia (Gen 10). Jesús y su
mensaje llaman a la humanidad. Los doctores de la ley
estaban convencidos de que la ley se había ofrecido pri-
72 . La tradición textual vacila entre 70 y 72; en todo caso es exacta la
referencia a la tabla etnográf ica (de que se habla a continuación) , pues tam
bién en Gen 10 existe la misma inseguridad: el texto hebreo dice 70 pueblos,
los Setenta leen 72.
287
meramente a todos los pueblos, pero sólo Israel la había
aceptado. El tiempo final realiza y lleva a término el plan
primigenio de Dios.
El Señor des ignó e inv is t ió a los mensajeros, con
lo cual les dio encargo oficial y dio a su misión carácter
jurídico. Son enviados de dos en dos, pues tienen que ac
tuar como testigos. Si dos testigos están de acuerdo sobre
una cosa, entonces su testimonio tiene plena fuerza y
validez jurídica (Dt 19,15; Mt 18,16). Los discípulos van
delante del Señor; son sus pregoneros y tienen que pre
parar su llegada. Van por delante de él
a tod as l a s c i ud ad es
y l ugares . Se traspasan los límites de Galilea, pero la
acción está todavía restringida a Palestina. Sin embargo,
la gracia de Dios. «Por la gracia de Dios soy lo que soy»
(ICor 15,10). «Lo que cuenta no es el que planta ni el que
riega, sino el que produce el crecimiento, Dios.. . Porque
somos colaboradores con Dios; y vosotros sois labranza de
Dios, edificio de Dios. Conforme a la gracia que Dios me
ha dado.. . puse yo los cimientos» (ICor 3,7-10).
3
I d. M i rad q ue o s env ío co m o cord eros en m ed i o d e
l ob os .
4
No l levé is bo lsa, n i a l forja, n i sandal ias; n i sa lu
dé is a nadie por e l camino.
Id . Con esto se expresa la misión. Es misión, encar
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 145/190
estos límites se borrarán cuando el Señor haya subido al
cielo.
La m i es e s m uch a . Los hombres son comparados con
una mies que ha de recogerse en el reino de Dios. El
campo de misión que tiene delante Jesús en Palestina, es
el comienzo de un campo de recolección mucho más vasto,
que se extiende al mundo entero. Jesús conoce a los
muchos que tienen buena voluntad. Para el grande y apre
miante trabajo hay sólo pocos obreros. Los llamamientos
de discípulos han mostrado que hasta en hombres llenos de
fervor y de buena voluntad se echa de menos la entrega
total .
Dios es el d ueñ o d e l a m i e s . Dispone de todo lo re
lativo a la mies. La acogida en el reino de Dios es obra
y gracia suya. Él da también las vocaciones de los discí
pulos. Por eso invita Jesús a orar para que despierte Dios
en el hombre el espíritu de los discípulos que con entrega
total e indivisa ayuden a introducir a los hombres en el
re ino de Dios. La oración por los obreros de la mies man
tiene constantemente despierta en los apóstoles y discí
pulos la conciencia de haber sido llamados y enviados por
288
go de partir , caminar y obrar. El aprovisionamiento es
sorprendente . Sencil lamente: Id . Lo pr imero y pr incipal
de este aprovisionamiento es el hecho de ser enviados por
Jesús mismo, lo cual implica que el poder de Dios también
los acompañará y armará .
Se retira a los discípulos todo aprovisionamiento y to
da defensa humana. Son enviados indefensos, com o cord e
ros en m ed i o d e l ob os .
Israel se conoce como «oveja
entre setenta lobos», pero confía también en que su gran
pastor lo salva y lo custodia. Los setenta enviados por
Jesús son el núcleo del nuevo Israel. A los sufridos e iner
mes se promete el reino de Dios (Mt 5,3ss). Jesús envía
a los discípulos como pobres. Cuando no se tiene bolsa,
alforja ni sandalias, es uno totalmente pobre. La pobreza
es condición para entrar en el reino de Dios (6,20) y dis
tintivo de los que lo anuncian. Los discípulos deben tener
constantemente ante los ojos su misión y no dejarse dis
traer por nada. N o sa l ud é i s a nad i e p or e l cam i no . La en
trega total a la misión no consiente las complicadas y
largas fórmulas de cortesía de Oriente. En Lucas todos
los mensajeros tienen prisa: María, los pastores, Felipe
(Act 8,30).
289
NT, Le I, 19
Jesús mismo y los tres llamamientos de discípulos al
comienzo del relato del viaje han mostrado ya lo que
caracteriza a los discípulos: de valimiento y mansedumbre
frente a la hostilidad, falta de hogar y pobreza, entrega
total a la misión de anunciar el reino de Dios. Las figu
ras primigenias de este anuncio son Jesús, los doce, los
setenta discípulos.
5
Y en cu alquier c asa en que e ntré is , decid primero:
P az a e s ta casa ,
6
Y s i a l l í hay algu ien qu e me rece la paz,
se posará sobre é l vuestra paz; pero de lo contrario, re
tornará a voso tros .
7
P erm aneced , p ues , en aq ue l l a casa ,
com i end o y b eb i end o d e l o q ue t engan; p orq ue e l ob rero
municado Moisés: Descendió Yahveh en la nube y habló
a Moisés: tomando del espíritu que residía en él, lo puso
sobre los setenta ancianos, y cuando sobre ellos se posó
el espíritu, pusiéronse a profetizar y no cesaban» (Núm
11,26). «Los hijos de los profetas, habiéndole visto (a
Elíseo), dijeron: El espíritu de Elias reposa sobre Elíseo»
(2Re 2,15). La paz y el espíritu son los dos grandes dones
saludables de los últimos tiempos. Aun cuando no se en
cuentre nadie que se abra a la salvación y se muestre digno
de ella, no por eso carece de eficacia la palabra de salu
do;
la paz retorna a los mensajeros. «Por mí lo juro: sale
la verdad de mi boca y es irrevocable mi palabra» (Is
45,23). El saludo de paz no es una fórmula vana.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 146/190
m erece su sa l ar i o . Y no o s m ud é i s d e una casa a o t ra .
El método de misionar es natural y sencillo. Los mi
sioneros van de casa en casa. La misión cristiana se ex
tiende de la casa a la ciudad. P az a e s ta casa: esto es saludo
y don. El anuncio y la proclamación comienza con defe
rencia y cortesía. Un consejo rabínico reza: «Adelántate en
saludar a todos.» La pa z que aporta el misionero de la
salvación no da sólo salud y bienestar, que es lo que se
sobrentiende en el saludo cotidiano «paz», sino el don de
la salvación de los últimos tiempos. Los enviados cum
plen la misión de Jesús, de la que se dice: «Tal es el
mensaje que ha enviado (Dios) a los hijos de Israel anun
ciando el Evangelio de paz por medio de Jesucristo»
(Act 10,36).
Las palabras de saludo producen lo que expresan, si
topan con alguien que ha sido elegido por Dios para la
salvación, alguien que «merece la paz». El nacimiento
de Jesús trae la paz a los hombres, objeto del amor de
Dios. La paz se p osa sobre aquel que la recibe, como el
espíritu sobre los setenta ancianos, a los que lo había co-
290
Al don que aportan los predicadores corresponden los
hijos de la paz con hospitalidad. La primera casa en que
sean acogidos los discípulos, debe ser para éstos como su
propia casa. P erm aneced , p ues , en aq ue l l a casa . N o os
m ud é i s d e una casa a o t ra . El gran objetivo de los mi
sioneros es el mensaje del reino de Dios. Lo decisivo no
debe ser el bienestar personal, el buen trato y los cuidados
de la hospitalidad. El que cambia de alojamiento muestra
que el valor supremo no es para él la palabra de Dios,
sino su propia persona. Perjudica y se perjudica. Desacre
dita a su huésped y se desacredita él mismo. No debe vio
larse la ley sagrada de la hospitalidad.
Los discípulos deben comer y beber de lo que se les
ofrezca. No deben preocuparse pensando que molestan
indebidamente a quien les da hospitalidad. El quehacer
de los enviados no debe verse entorpecido por preocupa
ciones de la tierra. Lo que reciben es justa compensación
por lo que ellos aportan: su don es mayor. «El obrero
merece su salario» (ITim 5,18). «Si nosotros hemos sem
brado para vosotros lo espiritual, ¿qué de extraño tiene
que recojamos nosotros vuestros bienes materiales?» (ICor
291
9,11). Pero los discípulos deben también contentarse con
lo que se les dé.
8
En cua lqu ier c iudad donde entréis y os rec iban, co
med lo que os presenten ,
9
curad los en fermos que haya
en e l la , y dec idles : Es tá cerca de vosotros e l re ino de Dios .
10
Pero , en cua lqu ier c iudad donde entréis y no qu ieran
rec ibiros , sa l id a la plaza y
decid:
u
Hasta e l po lvo de vues
tra c iudad que se nos pegó a los pies , lo sacudimos sobre
vosotros . Sin embargo, sabedlo bien: ¡e l re ino de Dios es tá
cerca
n
Os aseguro que habrá menos r igor para Sodoma
en aque l día que para esa
ciudad.
¿Y si una ciudad no acoge a los discípulos? Entonces
han de expresar públicamente (por las calles) y solemne
mente su separación y su anatema. Los judíos
s a c u de n
e l po lvo
de sus pies cuan do vienen de tierra de gentiles y
ponen los pies en la tierra santa de Palestina. Con esto
se quiere significar que no existe vínculo alguno entre Is
rael y los gentiles. Una ciudad que no acoge a los enviados
de Cristo rompe los vínculos que la unen con el pueblo de
Dios, desconoce la gran hora que ha sonado: Habéis de sa
ber que el reino de Dios está cerca y que con él se acerca
el juicio. Los mensajeros no anuncian que el reino de Dios
está presente, sino que se acerca. Todavía es posible dar
marcha atrás, pero ésta es ya la última posibilidad.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 147/190
La actividad de los discípulos es misión en las casas y
en las ciudades. Una ciudad que los acoge muestra buena
disposición. Los discípulos deben realizar aquello para
que han sido enviados.
Comed lo que os presenten .
Los
discípulos no deben preocuparse de si los alimentos son
cultualmente puros o impuros. Así parece haber entendido
Lucas estas palabras, aunque difícilmente sería esta la
intención de Jesús. Para la misión entre los gentiles era
de gran importancia esta libertad de conciencia
T3
. La cu
ración de los enfermos que se encargaba a los discípulos
debe preparar para la hora de la historia de la salvación
que ellos anuncian, debe demostrar en la práctica su po
deroso alborear. Deben proclamar con la palabra eso a
que preparan las obras:
Es tá cerca e l re ino de Dios .
El
acercarse Jesús es acercarse el reino de Dios. Por eso dice
Jesús: «Si yo arrojo los demonios por el dedo de Dios,
es que el reino de Dios ha llegado a vosotros» (11,20).
«El reino de Dios está en medio de vosotros» (17,21). Je
sús mismo es el reino de Dios.
73 . Cf . ICor 10,27; Act 15.
292
El que rechaza el anuncio del reino de Dios y así se
cierra a Jesús, se atrae la sentencia de condenación. El
desenlace de este juicio es más terrible que la condenación
que se pronunció contra Sodoma. El juicio sobre esta ciu
dad nefanda ha venido a ser proverbial. La culpa de quien
rechaza a Jesús y los bienes del reino de Dios es mayor
que la culpa de Sodoma. La proclamación de los men
sajeros de Jesús ofrece la gracia más grande y sitúa ante
una decisión de conciencia cuya última consecuencia es
la salvación o la sentencia condenatoria.
13
¡Ay de ti, Corozaín ¡Ay de ti, Betsaida Porque ,
s i en Tiro y Sidón se hubieran rea l izado los mismos mila
gros que en vosotras , ya hace t iempo que , sen tados , cu
bier tos de saco y cen iza , se habrían conver t ido .
M
Por eso ,
en e l ju ic io habrá menos r igor para Tiro y Sidón que para
vosotras .
15
Y tú , Cafarnaúm, ¿es que t e vas a encu mbrar
hasta el c ie lo? ¡Hasta el inf ierno serás precipitada
Las ciudades de Corozaín, Betsaida y Cafarnaúm for
maban al norte del lago de Genesaret un triángulo, en el
293
que se había desarrollado con la mayor intensidad la acti
vidad de Jesús. De ella se destacan los milagros en que
se manifestó la virtud divina de Jesús. El centro de gra
vedad de la acción de Jesús estaba en Cafarnaúm.
En e s t a
ciudad se reproduce lo que se dijo acerca del rey de Ba
bilonia: «Tú, que decías en tu corazón: Subiré a los
cielos; en lo alto, sobre las estrellas de Dios, elevaré mi
trono; me instalaré en el monte santo, en las profundida
des del aquilón. Subiré sobre la cumbre de las nubes y
seré igual al Altísimo. Pues bien, al sepulcro has bajado,
a las profundidades del abismo» (Is 14,13-15). Jesús elevó
a Cafarnaúm al rango de «su ciudad» (Mt 9,1). A ella,
como a las otras dos ciudades, ofreció Jesús salvación,
de otra manera , por eso juzgará con una medida inexora
blemente justa, a unos con suavidad, a otros con severidad.
Conforme a este castigo que se anuncia a las ciudades
galileas puede calcular
c a da c iu da d
lo que le sucederá
si repudia a los enviados de Jesús. Éstas palabras las pro
nunció Jesús a l abandonar Galilea , donde había trabajado
en vano. Lo que había de ser salvación se convierte en
sentencia de condenación, porque no se prestó atención
al llamamiento a la conversión. La amenaza de castigo
formulada por Jesús y sus enviados es un último llama
miento de Dios dir igido al duro corazón humano.
16
Quien a voso tros e scucha, a mí me escucha; y qu ien
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 148/190
poder y gloria. Las exaltó y quería darles participación
en el reino de Dios. Los milagros que se realizaron en
ellas estaban destinados a hacer reflexionar, a hacer re
conocer la voluntad de Dios, a situarla en el centro de
su vida, a abrir sus corazones y predisponerlos para la
conversión. Pero las tres ciudades dejaron de cumplir lo
que exigía la oferta de gracia por Dios. Jesús las amenaza
con el juicio. Cuanto más grande era la gracia que se les
había demostrado, tanto más se les ha de pedir en el jui
cio final.
Tiro y Sidón,
las dos ciudades paganas, que eran con
sideradas como completamente orientadas hacia lo de la
tierra
74
, no recibieron esta gracia de las ciudades galileas.
Jesús sabe que sus habitantes habrían hecho penitencia,
cubiertos de saco y de ceniza, si Dios las hubiera visitado
con su oferta de gracia. En señal de luto y de penitencia
llevaban las gentes una túnica de crin y se sentaban sobre
la ceniza o la esparcían sobre la cabeza. Precisamente por
que sabe Dios que otros habrían usado de la gracia muy
74 .
Léase I s 23 , 1-11; Ez 26-28.
294
a vosotros desprec ia , a mí me desprec ia; pero qu ien me
desprec ia a mí, desprec ia a aque l que me env ió.
El enviado es como el que lo envía. En los enviados
viene Jesús, y en Jesús viene Dios. La palabra que pro
nuncian los enviados, la pronuncia Jesús, y la palabra
de Jesús la pronuncia Dios. Aceptación o repudio de la
palabra de los enviados es aceptación o repudio de la pa
labra de Jesús, aceptación o repudio de la palabra de
Dios. «Quien a vosotros recibe, a mí me recibe; y quien a
mí me recibe, recibe a aquel que me envió» (Mt 10,40).
«El que no honra a l Hijo, tampoco honra al Padre que
lo envió (Jn 5,23).
Entre los
env iados , Jesús y Dios
existe una cadena
cuyos eslabones no se pueden separar. Jesús es el media
dor. Para su mediación con el pueblo se sirve de los en
viados. El hombre es conducido a la salvación por me
dio de hombres. Cristo se reveló a Saulo, que, sin embargo,
recibió este encargo: «Levántate y entra en la ciudad, y
se te dirá lo que has de hacer» (Act 9,6). También él es
enviado al mediador humano, aunque no se menciona a
295
este por su nombre, pues lo que importa no es el men
sajero, sino la palabra anunciada. Los mensajeros son
«servidores de la palabra» (1,2) . Entre oir y desoír, o des
preciar , no se da término medio. Nadie puede permanecer
indeciso frente a la palabra de Dios. El que no está en
favor de Jesús, está contra él. El que no oye la palabra,
no la acepta y no la obedece, la desprecia.
b)
Regreso (10,17-20).
17
Volv ieron , pues , los se ten ta l leno s de a leg r ía dic ien
do :
¡Señor , has ta los demonios se nos someten en tu nom
sobre los poderes satánicos.
Yo es taba v iendo a Satán
caer de l c ie lo como un rayo.
En las expulsiones de demo
nios veía constantemente Jesús que había quebrantado el
poder de Satán. ¿Cuándo sucedió esto? De esto no dice
nada la palabra. Pero sí da a entender que es imponente
el triunfo sobre Satán. La exposición recuerda las pala
bras de Isaías sobre la imponente caída de Nabucodonosor,
rey de Babilonia . «Tú. . . dominador de las naciones. . . a l
sepulcro has bajado, a las profundidades del abismo» (Is
14,12.15). Esta victoria sobre Satán es fruto de la muerte
de cruz de Cristo y de su glorificación: «És te es el mo
mento de la condenación de este mundo; ahora el jefe de
este mundo será arrojado fuera» (Jn 12,31). Es posible
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 149/190
bre
, 8
Él le s dijo: Yo es taba v iendo a Satán cae r de l c ie lo
como un rayo.
De todo lo que experimentaron los setenta en su viaje
de misión, sólo destacan una cosa: el
poder sobre los
poderes demoníacos .
Hasta los demonios nos obedecen.
No sólo las enfermedades se les sometían, no sólo los
hombres obedecían la palabra de Dios; el colmo era la
sumisión de las fuerzas satánicas. Volvieron llenos de
alegría, porque habían experimentado el reino de Dios,
que se había iniciado con Jesús. Los discípulos interpelan
a Jesús con el nombre de
Señor;
a l pronunciar su nombre
habían recibido señorío sobre los demonios. Gracias al
Señor alcanza el poder de los enviados hasta el mismo
reino de los poderes y potestades que ejercen invisible
mente su influjo pernicioso sobre este mundo. El poder
de Jesús y de sus discípulos domina no sólo sobre lo te
rreno, sino también sobre la esfera que influye en la de
terminación del curso de lo terreno.
En las expulsiones de demonios practicadas por los
discípulos se hace visible el triunfo del reino de Dios
296
que Lucas pensara en las tentaciones en que fue derrotado
el demonio. Con esta victoria de Jesús quedó sacudido
para siempre el poder de Satán, aunque todavía no defini
tivamente. Definitivamente quedará despojado de su poder
en el tiempo final, pero ya ha comenzado lo que era la
gran esperanza del tiempo final: «Entonces aparecerá
su reino en toda su creación, y entonces se acabará con
Satán y se quitará la tristeza»
75
.
19
Mirad que os he dado poder para caminar sobre
serpientes y e sc orpiones , y con tra toda la fuerza de l ene
m i go ,
s in que nada pueda haceros daño.
20
Sin embargo,
no os a legréis de eso: de que los e spír i tus se os sometan;
s ino a legraos más bien de que vues tros nombres es tán ya
inscr i tos en los c ie los .
También los doce toman parte en el triunfo de Jesús
sobre Satán; lo que se aplica a los doce quiere extenderlo
Lucas también a los setenta, a todos los que colaboran en
75 . Assumptio Moysis 10 ,1 .
297
la obra de Jesús. Tienen
poder sobre serpientes y escor
piones . Precisamente estos animales taimados, que cons
tituyen una amenaza para la vida, se consideran en la Bi
blia y en el lenguaje influido por la Biblia, como instru
mentos de Satán. El Salvador que se espera salvará de
serpientes y de escorpiones, y de malos espíritus. El Me
sías,
protegido por el ángel de Dios, camina sobre víboras
y áspides y huella al león y al dragón (Sal 91,13). Cuando
envió Jesús a los doce les dio también participación en
este poder; de esta investidura les queda como resultado
permanente el no estar ya a merced del poder de Satán,
sino bajo la soberanía de Dios.
Lo que se dice sobre el poder de caminar sobre ser
rada de Dios, se imaginan tales listas de ciudadanos, en
las que están inscritos los elegidos de Dios; seguramente
se identifican con lo que se llama el libro de la vida
7G
. El
motivo de alegría que está por encima de todo es el hecho
de poder participar en el reino de Dios, de alcanzar la
vida eterna y de estar en comunión con Dios.
c )
Júbilo de Jesús (10,21-24).
21
En aque l momen to , Jesús se e s tremec ió de gozo e n
el Espíritu Santo y exclamó: Yo te bendigo, Padre, Señor
de l c ie lo y de la t ierra; porque has ocu l tado es tas cosas a
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 150/190
pientes y escorpiones se amplía con la explicación que
sigue: Los doce tienen
poder contra toda fuerza de l ene
m i go . Satán utiliza su fuerza para dañar a los hombres;
su hostilidad no puede ya dañar, una vez que asoma el
reino de Dios. Hay aquí un poder más grande y más
fuerte. ¿Qué puede, pues, ya dañar? El canto triunfal de
san Pablo tiene aquí su explicación: «Sin embargo, en
todas estas cosas vencemos plenamente por medio de aquel
que nos amó. Pues estoy firmemente convencido de que ni
muerte ni vida, ni ángeles ni principados, ni lo presente
ni lo futuro, ni potestades, ni altura ni profundidad, ni
ninguna otra cosa podrá separarnos del amor de Dios,
manifestado en Cristo Jesús, Señor nuestro» (Rom 8,37-39).
La inauguración del reino de Dios es un motivo de
gozo todavía más profundo que el poder sobre los malos
espíritus y el quebrantamiento del señorío de Satán. Para
los discípulos, la suprema razón de alegrarse es su elec
ción y predestinación a la
v ida e terna .
Las ciudades de
la antigüedad tienen listas de ciudadanos. El que está ins
crito en la lista goza de todas las ventajas que ofrece la
ciudad. También en el cielo, donde se representa la mo-
298
sabios y en tendidos , y las has reve lado a la gente senc i l la .
Sí, Padre, así lo has que rido tú.
Con el retorno de los discípulos y con el relato del
mismo están asociadas una acción de gracias (10,21), unas
palabras de revelación (10,22), y una fórmula de felici
tación (10,23). En el mismo momento en que regresaron
los discípulos
se e s tremec ió de gozo
Jesús. Estaba pene
trado del júbilo del tiempo final y del tiempo de sal
vación que se anunciaba en la victoria sobre Satán y en
la comunicación de la vida eterna. Jesús, portador de la
salvación, fue ungido por el Espíritu, por lo cual salta
de gozo y ora
en e l Espír i tu Santo .
Su oración es debida
al influjo del Espíritu Santo; así oran Zacarías (1,67),
Isabel (1,41) y María (1,47). La vida de Jesús está soste
nida por el Espíritu. «Todos los que se dejan guiar por
el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios» (Rom 8,14).
En calidad de Hijo de Dios pronuncia Jesús su acción de
gracias, su revelación y su fórmula de felicitación.
76 . Sal 69,29: «Sean borrados del l ibro de la vida, no sean inscr itos
entre los justo s»; cf . Éx 32,S2s; Is 4 ,3 ; 56,5; Da n 12, 1; Ap 3,5; 13,8 , etc.
299
La oración de acción de gracias comienza con una in
terpelación y termina con un encarecimiento. En el medio
se halla el motivo de la acción de gracias.
La interpelación contiene alabanza de Dios y acción
de gracias. Jesús alaba a Dios y con ello le da gracias.
Reconoce interiormente la disposición divina y, alabando
a Dios, expresa la unidad que reina entre su voluntad y
la divina.
Yo te bendigo:
te doy un sí con todo mi corazón.
La acción de gracias y la alabanza de Dios se realiza de
la mejor manera en la entrega a la voluntad de Dios.
Todas las oraciones de Jesús que nos han sido transmi
tidas por la Escritura comienzan con la invocación:
Pa
parte del «pueblo maldito», de la hez de la tierra, que no
tenían el menor conocimiento de la ley, eran ignorantes
y, por tanto, ni siquiera se recataban del pecado. Así, un
doctor de la ley del tiempo de Jesús decía: «Un igno
rante no teme el pecado, y un
am ha arez
(uno que no
conocía la ley a la manera de los doctores de la ley) no es
piadoso.» La primitiva Iglesia hubo de experimentar que
persistía esta elección de Dios en cuanto a revelar y a
ocultar. En Corinto no pertenecían a la Iglesia muchos
ricos, sabios y de alta alcurnia, sino los pobres, los necios,
los plebeyos, los que no eran nada en este mundo (ICor
1,26ss).
Jesús alaba y bendice a Dios por el plan salvífico
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 151/190
dre.
Esta palabra responde al arameo
abba
(Me 14,36),
palabra balbuceada por los niños pequeños cuando se di
rigían a su padre. Jesús habla en singular intimidad con
Dios,
su Padre, pues regularmente nadie osaba decir
abba
a Dios, aunque también se le llama Padre
(ab). A
la in
vocación llena de confianza se añade el calificativo ma
jestuoso de Señor del c ielo y de la t ierra.. Dios creó el
universo entero, y así dispone del universo entero. La
confianza y la reverencia son los pilares de la oración.
Dios ha ocultado y ha revelado. El motivo principal
de la alabanza no es el haber ocultado, sino el haber re
velado. Pero Dios oculta también por el hecho de no
revelar a todos ¿Qué es lo que ha revelado y ocultado?
Los mis ter ios de l re ino de Dios
(8,10), la inauguración del
reino de Dios en Jesús, la victoria sobre Satán, la elección
para el reino de Dios.. . Dios ha ocultado esto a los sa
bios y entendidos y lo ha revelado a los menores sujetos
a tutela, a los ignorantes, a los que no son nadie. En
tiempos de Jesús eran los sabios y los entendidos los doc
tores de la ley, que se designaban como sabios y pruden
tes;
lo s
menores , su je tos a tu te la ,
eran los que formaban
3
según el cual da la revelación del reino precisamente a
los pobres. Por el hecho de que estos aceptan el mensaje
de Jesús, se cumple lo que se le había prefijado como
programa de su vida: «Anunciar la buena nueva a los
pobres» (4,18).
La oración de acción de gracias vuelve al comienzo
con encarecimiento. Sí, Padre: con esto se resume gozosa
mente lo que se había expresado hasta aquí. Jesús no
revoca nada, sino que ratifica el designio de Dios con
su voluntad, alabanza y acción de gracias.
As í lo has
querido tú.
El designio de Dios, que está fundado en su voluntad,
en su beneplácito, decide el querer de Jesús. Toda ver
dadera oración termina con un sí a la voluntad de Dios, en
la victoria de la voluntad de Dios sobre la voluntad del
orante, en la entrega al beneplácito de Dios. Cuando Jesús
da un sí al designio salvífico de Dios, que no elige a los
sabios y entendidos, a los fuertes y poderosos, sino a
los ignorantes, débiles y pequeños, da también un sí a la
cruz. Su mira está puesta en Jerusalén, donde le aguarda
su «elevación». No busca nada, sino el beneplácito de Dios.
301
22
T od o m e l o h a con f i ad o m i P ad re . Y na d i e con oce
quién es e l Hijo, s ino e l Padre; n i quién es e l Padre, s ino
el Hijo y aquel a quien e l Hijo quiere revelárselo.
La oración empalma con las palabras de revelación.
Jesús habla de su relación con Dios. T od o l e h a s i d o con
f iado por el Padre. Le ha sido confiado lo que él anuncia.
Lo que Dios ha confiado a Jesús, no es sólo la palabra,
puesto que con la palabra está asociada la acción y el
poder. Como Hijo del hombre que es, todo le ha sido con
fiado por Dios: todo poder, todos los reinos de este mun
do, todos los hombres. «Se me ha dado todo poder en el
cielo y en la tierra» (Mt 28,18). Lo que Satán había ofre
única y exclusiva. Es una comunión singular, en la que
nadie puede tener participación fuera del Padre y del Hi
jo . Lo que se dice acerca de esta comunión recíproca entre
Jesús y Dios, se expresa por la relación de Hijo a Padre.
También esta se da entre Jesús y Dios de una forma que
no se repite entre otro hombre y Dios. Lo que expresa
esta «perla» de todas las aserciones de Cristo sobre la
relación de Jesús con Dios, se halla con frecuencia for
mulado en el Evangelio de san Juan: «Yo soy el buen pas
tor: yo conozco las mías, y las mías me conocen a mí,
como el Padre me conoce a mí, y yo conozco al Padre»
(Jn 10,14s). El Padre conoce al Hijo, y el Hijo conoce
al Padre, porque todo lo que Cristo llama suyo es también
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 152/190
cido a Jesús en la tentación, se lo confía el Padre, porque
dice sí a su voluntad. El Padre ama al Hijo, y todo lo ha
puesto en sus manos (Jn 3,35). La relación de Jesús con
el Padre es la re lación de Hijo a Padre. Como el Hijo lo
ha recibido todo del Padre, de la misma manera Jesús
lo ha recibido de Dios.
Jesús y el Padre están en la más estrecha comunión.
N ad i e conoce q u i é n e s e l H i jo , s i no e l P ad re; n i q u i é n e s
e l Padre, s ino e l Hijo. Cuando nosotros conocemos a
alguien, pensamos en él, recibimos su influencia, y él
recibe la nuestra: recibimos de él y le damos, estamos en
comunión con él, comunión que marca la existencia por
ambos lados. Que el Padre conozca al Hijo y el Hijo al
Padre se debe a que el Padre y el Hijo viven en la más
íntima comunión. Jesús y Dios se conocen recíprocamente:
el Padre conoce quién es el Hijo, y el Hijo, quién es el
Padre. La vida consciente del Hijo está marcada por la co
munión con el Padre, como la vida del Padre lo está por
la comunión con el Hijo. Dado que nadie conoce quién
es el Hijo, sino el Padre, y nadie conoce quién es el
Padre, sino el Hijo, la comunión entre Padre e Hijo es
3 2
del Padre , y lo que es del Padre , es también suyo: «Todo
lo mío es tuyo, y lo tuyo mío, y así soy yo glorificado»
(Jn 17,10). Jesús y el Padre son «uno» (Jn 10,30).
También conoce quién es el Padre aquel a quien el
Hijo quiere revelárselo. Jesús tiene también poder para
dar participación en su propio conocimiento del Padre.
El Hijo puede revelar este conocimiento a quien quiere
revelárselo. Por sí mismo no puede el hombre tener este
conocimiento. Cuando Jesús revela a una persona que
Dios es el Padre de Jesús, y lo hace en forma singularí
sima y en la más íntima comunión, entonces le da también
participación en la comunión en que él mismo vive con el
Padre, le da participación en la vida eterna. «Esta es la
vida eterna, que te conozcan a ti y al que tú enviaste» (Jn
17,3). El poder que se ha dado a Jesús lo utiliza él para
otorgar el conocimiento del Padre y con ello dar vida eter
na (Jn 17,2). La oración de Jesús es una eflorescencia del
conocimiento mutuo del Padre y del Hijo, diá logo que
procede de este conocimiento, júbilo del alma por esta
mutua comunión de conocimiento. Aquel a quien Jesús
revela quién es el Padre, llega a una oración semejante,
3 3
que es un clamar «abba» (Rom 8,15; Gal 4,6), que es
una exuberancia del conocimiento de fe y proviene del
fondo de la comunidad de don con el Padre y el Hijo.
El fondo más íntimo del que brota el diálogo del alma
con Dios es la unión con él según el arquetipo de la unión
de Jesús con Dios, del Hijo con el Padre.
23
Y vue l to hac ia sus disc ípu los , le s di jo a so las: Di
chosos los o jos que ven lo que es táis v iendo.
24
Porque yo
os digo: muchos proje tas y reyes qu is ieron ver lo que
vosotros e s táis v iendo y no lo v ieron , y o ir lo que vosotros
es táis oyendo, y no lo oyeron.
Oir lo que vosotros e s táis oyendo.
Sólo ver no basta.
Al ver debe añadirse el oir . Sólo se puede ver debidamente
a Jesús cuando se oye lo que dice sobre él la revelación.
Ver los acontecimientos históricos y oir lo que la revela
ción de Dios dice sobre ellos: esto es lo que da al cris
tiano el verdadero conocimiento que proporciona gozo.
3.
OBR AS Y PALABRAS (10,25-42).
Jesús va por el país dispensando beneficios y anunciando la
palabra de Dios. Los discípulos sólo están pertrechados con el
amor al prójimo, que se extiende al mundo entero (10,25-37), y
en la palabra, que se recibe escuchando a Jesús.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 153/190
Sólo a los discípulos reveló el Hijo quién es el Padre.
Los inició en su singularísima relación con el Padre. La
entera historia salvífica aguardaba la satisfacción de este
anhelo. Los profetas miraban y escudriñaban sólo desde
muy lejos qué nos es aportado por la salvación y quién es
el que nos la trae. La soberanía de los
reyes
era caduca y
perecedera, imperfecta y limitada; ellos miraban al rey
cuya soberanía no tiene límites. Los profetas eran porta
dores de la palabra divina, los reyes eran administradores
del poder divino. Jesús reúne en sí a ambas prerrogativas,
la palabra y la autoridad, la palabra llena de autoridad.
Dichosos los o jos que ven lo que es táis v iendo.
Los
discípulos deben ser y permanecer conscientes de la gra
cia de que Dios les haya revelado el conocimiento del
Mesías y el comienzo del tiempo de salvación. En estas
palabras resuena también el júbilo de la Iglesia primitiva,
que transmitió estas palabras, porque ella misma estaba pe
netrada del gozo del don de la fe. A los pequeños y a los
ignorantes se reveló lo que se negó a los sabios y a los en
tendidos. Los discípulos son dichosos porque son peque
ños y pobres .
3 4
a )
Am or al prójimo (10,25-37).
25
En tonces se levantó un doc tor de la ley que , para
tentarlo, le pregunta: Maestro, ¿qué debo hacer para he
redar la v ida e terna?
26
Él le co ntes tó: ¿Qué es lo que
es tá escr i to en la ley? ¿Cómo lees tú?
21
Y él le respon
dió:
Amarás a l Señor , tu Dios , con todo tu corazón, con
toda tu a lma, con todas tus fuerzas y con toda tu mente ,
y a tu prój imo como a t i mismo.
28
Jesús le di jo: Bien
has respondido; haz esto y vivirás.
Jesús ha hablado de la victoria sobre Satán, los dis
cípulos mismos han experimentado el reino de Dios, sus
nombres están inscritos en las listas de ciudadanos del cie
lo , son llamados dichosos porque están viviendo el tiem
po de la salvación: nada más normal que preguntar qué
hay que hacer para
entrar en la v ida e terna .
Asunto ser io ,
cuestión candente, que el rico planteó a Jesús (Me 10,17)
y que dirigían a los doctores de la ley sus discípulos.
305
«Rabí, enséñanos los caminos de la vida, para que por
ellos alcancemos la vida del mundo futuro» ".
El doctor de la ley preguntó a Jesús
para tentarlo.
L o
interpela como maestro y doctor, y quiere probarlo y ver
qué puede responder a su pregunta candente. Hace la
pregunta como la hacían los judíos y pregunta por las
obras .
Las obras exigidas por la ley, salvan; lo que se tiene
en cuenta son las obras, no la actitud interior. ¿Qué obras
y qué preceptos son los que importan? Los doctores de
la ley hablaban de seiscientos trece preceptos (doscientos
cuarenta y ocho mandamientos y trescientas sesenta y cinco
prohibiciones).
La respuesta a la pregunta del doctor de la ley indica
dades de la revelación necesitan ser compendiadas y pre
sentadas sistemáticamente a fin de que sirvan para la vida
religiosa.
E l p recep to d e l am or a D i os (Dt 6,5) con entrega de
todas las potencias del alma a Dios, con una existencia
dedicada a él sin reserva, era formulado diariamente ma
ñana y tarde por los judíos del tiempo de Jesús en su
profesión de monoteísmo. Este precepto liga al hombre
con Dios hasta en lo más profundo de su ser. Con este
precepto está asociado el precepto del amor al prójimo
(Lev 19,18). El amor a uno mismo se presenta como me
dida del amor al prójimo.
Con esto se dice mucho. La actitud fundamental del
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 154/190
l a l ey m i sm a, la ley escrita de la Sagrada Escritura. Jesús
halla la respuesta en la ley, en la que se da a conocer la
voluntad de Dios. La ley muestra el camino para la vida
eterna. Los doctores de la ley habían tratado de compen
diar los mandamientos y prohibiciones tan numerosos, re
duciéndolos a unas cuantas leyes. Un medio de lograrlo era
la «regla áurea»: Lo que a ti no te agrada, no lo hagas
a tu prójimo; esto es toda la ley, todo lo demás es ex
plicación (rabí Hilel, hacia el año 20 a.C). Otro doctor
de la ley indicaba el precepto del amor al prójimo (Lev
19,18).
El doctor de la ley que interrogó a Jesús resumía
toda la ley en los mandamientos del amor de Dios (Dt
6,5) y del amor del prójimo (Lev 19,18), al igual que
Jesús (Me 12,28). Esta manera de compendiar la ley no
debía de ser conocida para el judaismo del tiempo de
Jesús". Jesús da la razón al doctor de la ley por hallar
compendiada la ley en estos dos mandamientos. Las ver-
77. BlLLERBECK 1 , p . 808 .
78 . En el Testam ento de los doce patr iarcas (escr ito judío no exentu de
añadiduras cr istianas) , Testamento de Isacar 5 ,2 , se dice: «Amad sólo al
Señor y a vuestro prójimo.»
306
hombre debe ser el am or . El hombre que cumple la vo
luntad de Dios y corresponde a su imagen, no es el que
piensa únicamente en sí sino el que existe para Dios y para
el prójimo. Dios es el centro del hombre, pues lo ama
con toda su alma y con todas sus fuerzas. El amor a sí
y el amor al prójimo está absorbido por esta entrega total
a Dios. En el amor del prójimo se ha de expresar el amor a
sí mismo y la entrega a Dios.
Todas las leyes dadas por Dios arrancan de este pre
cepto del amor y desembocan en él como en su meta. El
amor es el precepto más importante, el que todo lo abarca y
todo lo anima. El amor es el sentido de la ley. Si se expone
la ley de tal manera que se viole el amor o no se le per
mita desarrollarse, se comete un error. Toda ley, incluso
las establecidas en la Iglesia, debe servir al amor. Para
llegar a la vida no basta el conocimiento del mandamiento
más importante y decisivo. Se requieren también las obras.
Haz esto y vivirás.
29
Pero é l , queriendo just i ficarse, pregun tó a Jes ús:
¿Y quién es mi prój imo?
3 7
Los fariseos cuidaban mucho de su prestigio. Se jus
t i f icaban. «El fariseo, erguido, oraba así en su interior:
¡Oh Dios Gracias te doy, porque no soy como los de
más hombres.. .» (18,11). Jesús les echa en cara que se
justifican delante de los hombres (16,15). ¿Merecía repro
che el doctor de la ley cuando preguntaba, aunque sabía
lo que hay que hacer para alcanzar la vida eterna? ¿No
había todavía bastantes preguntas que reclamaban solución,
aunque eran claros los mandamientos más importantes?
El doctor de la ley hace una pregunta que no había ha
llado todavía una solución clara y decisiva. ¿Quién es mi
prójimo? ¿Dónde están los límites del precepto del amor?
La ley extiende el amor a los compatriotas y a los extran
jeros que viven en Israel (Lev 19,34). En el judaismo
Jericó (350 m bajo el nivel del mar) está mil metros
más bajo que
Jerusalén
(740 metros sobre el nivel del
mar) . El camino solitario y rocoso (unos 27 kilómetros)
va por una región en que abundan los barrancos. Asaltos
de ladrones se refieren desde la antigüedad hasta la edad
moderna . Un hombre bajaba a Jericó. No se menciona su
nacionalidad ni su religión. Era un hombre. Esto basta
para el amor. Es posible que los l ad rones fueran guerri
lleros celotas fanáticos que se ocultaban en las grutas y
escondrijos de aquella región y vivían de la rapiña, pero
que no quitaban a sus compatriotas más que lo que nece
sitaban para vivir y, sobre todo, no atentaban contra la
vida si ellos mismos no se veían atacados. Aquí aparece
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 155/190
tardío se restringió el amor de los extranjeros a los ver
daderos prosélitos (gentiles que habían aceptado la fe en
un solo Dios, se circuncidaban y observaban la ley). Los
fariseos excluían también del amor al pueblo ignorante
de la ley. Se negaba el amor a los contrarios al partido.
La ley de Dios deja por tanto cuestiones pendientes. Sólo
el espíritu de Dios puede resolverlas en la debida forma.
30
Jesús co nt inuó dic iendo: Un hombre bajaba de Je-
rusalén a Jericó, y cayó en manos de ladrones, que, además
de haberlo despojado de todo y mol ido a golpes, se fueron,
dejándolo medio muerto.
Jesús cuenta un relato. El Evangelio de Lucas narra
cuatro más de este estilo. Las parábolas comparan el
obrar divino con el humano. La acción de Dios se hace
comprensible a partir de lo que hace el hombre. En cam
bio ,
en estos relatos se presenta el hombre a los hombres
para que examinen su comportamiento tomando como nor
ma al hombre mostrado por Jesús.
308
la víctima de los ladrones en un estado lastimoso: des
pojado de todo, molido a golpes, medio muerto. El hom
bre debió sin duda defenderse cuando se vio asaltado por
los ladrones.
31
C asua l m ente , b a jaba un sacerd o te p or aq ue l cam i no ,
y,
al ver lo, cruzó al otro lado y pasó de largo.
n
I gua l
mente, un lev i ta que iba por e l mismo s i t io , a l ver lo,
cruzó al otro lado y pasó de largo.
33
P ero un sam ar i tano
que iba de camino, l l egó hasta é l , y , a l ver lo, se compa
deció;
34
se ace rcó a él , l e ven dó las heridas, ung iéndolas
con ace i t e y v i no , l o m ontó en su p rop i a cab a l gad ura , l o
l l e vó a l a p osad a y s e ocup ó d e cu i d ar l o .
35
Al día s iguien
te ,
sacó dos dena rios y se los dio a l posa dero, d ic iéndole:
Ten cuidado de é l ; y lo que gastes de más, yo te lo pagaré
cuand o vue l va .
Jericó era una ciudad sacerdotal. Sacerdotes y levitas
(servidores del templo, cantores) habían desempeñado su
ministerio en el templo y volvían a casa. Con gran efecto
se repite: Al ver lo cruzó al otro lado y pasó de largo.
309
Por qué pasaron de largo sacerdotes y levitas no se dice
en la narración. Quizá porque les pareció que e l hombre
tan malherido estaba muerto y no quisieron tocarlo, pues
el contacto con un cadáver causaba impureza legal (Lev
21,1). ¿Quizá porque temían caer también en manos de
los ladrones? ¿O porque no querían detenerse? En todo
caso les movía más su propio interés que la compasión por
el miserable, si es que la sentían. En su calidad de sacer
dotes y levitas servían a Dios, eran personas que encarna
ban el precepto del amor a Dios. Pero ¿el amor al próji
mo? Se establecía separación entre culto y misericordia.
Los samaritanos son enemigos del pueblo judío. No
hay contacto entre unos y otros. Se odia por las dos par
tes. Una vez más vuelve a decirse: Al verlo. Pero inme
Jesús le pregunta: ¿Cuál de estos tres te parece que v ino
a s er p ró j i m o d e l q ue h ab ía ca íd o en m anos d e l o s l a
d rones?
En la pregunta del doctor de la ley ocupa el cen
tro el que pregunta; en la pregunta de Jesús, el necesitado
de socorro. Según el precepto de la ley, tal como lo inter
preta Jesús, es prójimo todo el que tiene necesidad de
ayuda. Nada tienen que ver aquí la nación, la religión, el
par tido. Todo hombre es prójimo. Donde la necesidad
llama a la misericordia, también llama a la acción el pre
cepto del amor del prójimo.
Jesús no dio una respuesta abstracta, teorética. No
dijo: El prójimo es cualquier persona que se halla en es
trechez y necesita ayuda. Da más bien una indicación
práctica. La pregunta de Jesús se refiere a la acción, y la
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 156/190
diatamente viene la mutación: Se com p ad ec i ó . Esta com
pasión no es estéril. El samaritano obra como se debe
obrar en esta situación. Cuidadosamente se describen los
seis actos de amor que se practican con la mayor sencillez
y naturalidad, no sólo en el momento presente, sino hasta
la curación del herido. Los dos denarios dados al posa
dero era lo que se pagaba a los jornaleros por dos días
de trabajo. No es mucho. En efecto, en Italia, hacia el
año 140 a.C. se pagaba 1,32 denarios al día por la pen
sión completa. Lo que hace el samaritano no es precisa
mente un acto heroico, pero sí todo lo que era necesario
para salvar al desgraciado.
36
¿Cuál de estos tres te parece que v ino a ser prójimo
d e l q ue h ab ía ca íd o en m anos d e l o s l ad rones?
37
El doctor
de la ley respondió: El que pract icó la misericordia con
é l . Díjole Jesús: Pues anda, y haz tú lo mismo.
La pregunta de Jesús suena como algo inesperado. El
doctor de la ley había preguntado: ¿Quién es mi prójimo?
310
acción se rige conforme a las circunstancias. Al responder
el doctor de la ley no pudo menos de confesar: El que
practicó la misericordia con él. Jesús invita a obrar: Haz
tú lo mismo. El amor al prójimo es amor de obrar . «Hi-
jitos, no amemos de palabra ni con la lengua, sino de
obra y de verdad» (Un 3,18) . «Si un hermano o hermana
se encuentran desnudos y carecen del alimento diario, y
alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y har
taos,
pero no les dais lo necesario para el cuerpo, ¿de
qué servirá esto?» (Sant 2,15ss).
Los dos ministros del culto divino solemne sirvieron
ciertamente a Dios, pero no al prójimo que se hallaba en
la necesidad. El samaritano los aventaja en el cumpli
miento de la ley.. . Jesús echa mano de la doctrina profé-
tica: «Misericordia quiero, y no sacrificio» (Os 6,6).
La mejor preparación para el cumplimiento del pre
cepto del amor al prójimo es un corazón accesible a la mi
seria, el sentir misericordia o, como lo expresa la sencilla
psicología de la Biblia: el «conmoverse las entrañas» a la
vista de la miseria humana. Cuando un hombre se siente
311
mal al ver la miseria, está preparado para el amor. «Bien
aventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán
misericordia» (Mt 5,7).
El mayor impedimento es el corazón endurecido. La
misericordia debe convertirse en amor de obras, tal como
lo exige el momento. El precepto del amor no puede des
menuzarse en artículos. Lo que la realidad muestra, exige
y hace posible, eso debe hacerse. Así obró el samaritano
en su situación. Así se pone en práctica la entrega a la
voluntad de Dios. En efecto, el que ama prácticamente y
sabe responder a todo llamamiento de la miseria humana,
ése es obediente a Dios.
por nombre Lidia, traficante en púrpura, de la ciudad de
Tiatira, que adoraba a Dios, y a la cual el Señor abrió el
corazón para atender a lo que Pablo decía. Una vez que
se hubo bautizado ella y los de su familia, nos rogó di
ciendo: Si me habéis juzgado fiel al Señor, entrad y que
daos en mi casa. Y nos forzó a ello» (Act 16,14s).
39
T en ía e l l a una h erm ana l l am ad a M aría , l a cua l s en ta
da a los pies del Señor, escuchaba su palabra.
40
Marta,
en tre tan to , and ab a m uy a taread a con l o s m uch os q ueh a
ceres del servic io; por f in , se presentó y di jo: Señor, ¿es
q ue no t e i m p or ta q ue m i h erm ana m e d e je so l a p ara s er
v ir? Di le , pues, que venga a ayudarme.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 157/190
b) Escuchar la palabra (10,38-42).
38
S i gu i end o e l l o s su cam i no , en tró Jesús en c i er ta a l
dea; y una mujer l lamada Marta lo recibió en su casa.
El comienzo de esta narración tiene semejanza con
la primera del relato del viaje. Se pone de relieve el ca
minar de Jesús. Aquí halla Jesús lo que no había hallado
en la aldea de Samaría: alojamiento. No se nos dice dónde
se hallaba esta aldea ni cómo se llamaba. Según la tradi
ción de san Juan se trataba de Betania (Jn 11,1), que
estaba situada cerca de Jerusalén. Esto no podía decirlo
Lucas, aunque lo supiera. En efecto, Jerusalén es la meta
de la expedición, que sólo se podía alcanzar cuando hu
biera llegado la hora de su muerte y de su ascensión
al cielo.
Una mujer l lamada Marta lo recibió en su casa. Jesús
se hospedó en la casa a fin de que fuera oída su palabra.
Como Marta, también otras mujeres acogieron y alojaron
a los mensajeros del Evangelio: «Escuchaba una de ellas,
312
María, hermana de Marta, se sentó a los pies de Jesús.
Estaba sentada, como Pablo a los pies de Gamaliel, su
maestro (Act 22,3). Jesús es maestro, María su discípula.
Los doctores judíos de la ley no explican la ley a las
mujeres. El Maestro, en cambio, que es también Señor,
anuncia su doctrina también a la mujer (8,2). Lucas pre
senta el hecho con palabras que procedían de la comu
nidad primitiva: Jesús es el Señor, María escucha la pa
labra. La Iglesia es la comunidad de los que no cesan de
oir la palabra del Señor (8,21). Jesús se ve honrado en
su visita de dos maneras. María está sentada, sin hacer
nada, a los pies del Señor y escucha sin pestañear su pa
labra. M arta and ab a m uy a taread a , preocupada por el
servicio de la mesa. Jesús es honrado con las obras de
un amor que presta servicios y con el hecho de escuchar
su palabra, como lo dijeron los padres de la Iglesia: con
la vida activa y con la vida contemplativa. Marta sirve a
Jesús atareada con muchos quehaceres, María sirve sin
atarearse con muchos quehaceres, como dice san Pablo
cuando recomienda la virginidad: «Y esto lo digo miran-
313
do a vuestro provecho, no para tenderos un lazo, sino
para una digna y solícita dedicación al Señor» (lCor 7,35).
Marta no comprende que María esté escuchando sin
hacer nada, pues hay que preparar la mesa para los hués
pedes. El servicio de la mesa le importa más que el ser
v ic io de la palabra, que consiste ante todo y sobre todo
en escuchar. No comprende que Jesús quiere ser primera
mente el que da, no el que recibe; no comprende que ha
sido enviado para anunciar la salvación y que la mejor
manera de servirle consiste en oir y cumplir su palabra
de salvación. Habla a Jesús con un ligero acento de repro
che y quiere que María deje de escuchar la palabra para
dedicarse al servicio de la mesa. Da demasiada impor
tancia a su servicio y rebaja el hecho de escuchar la pala
buena parte. Jesús presenta la audición de la palabra como
lo único necesario. No dice que Marta habría debido pre
parar un solo plato (o pocos) a fin de poder oir la pala
bra de Dios; más bien no habría debido preparar nada ,
pues sólo una cosa es necesaria: oir la palabra que anun
cia Jesús. El primer puesto corresponde a lo divino. «Ama
rás a tu Dios con todo tu corazón, con todas tus fuer
zas.. .» También la lucha de Jesús contra el amor a la
riqueza proviene de su preocupación, de su temor de que
Dios no sea el único pensamiento que domine la vida del
hombre. Para mostrar a los hombres que sólo una cosa
es necesaria envió a sus mensajeros sin bolsa, sin alforja
y sin calzado. Él mismo sólo tiene un manjar: hacer la
voluntad del que le envió (cf. Jn 4,31 34).
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 158/190
bra de Jesús, antepone las obras al hecho de oir la
palabra .
41
Pero e l Señor le contestó: Ma rta, Marta, por mucha s
cosas t e a janas y t e ag i ta s ; s i n em b argo , una so l a cosa e s
necesar i a . M ar ía h a e scog i d o l a b uena p ar te , q ue no s e l e
ha de qui tar.
La repetic ión del nombre: Marta, Marta, proviene de
simpatía, de solicitud y de amor. Jesús no deja de apreciar
lo que hace, pero en las palabras con que designa su ac
tividad muestra también cómo la enjuicia. Su acción es
solicitud inquieta e inquietud solícita, dejando de lado lo
principal. «Buscad su reino (el de Dios), y estas cosas se
os darán por añadidura» (12,31). La palabra de Dios no
puede llevar fruto si el que oye es retenido por una in
quieta solicitud (8,14).
U na so l a cosa e s necesar i a
7 0
; María ha escogido la
79 . La tradición ha corregido mucho de] versículo 42: 1) (Sólo) poco es
necesar io = no te preocupes por preparar muchos platos; 2) poco o sólo una
314
Oir la palabra es l a b uena p ar te . La palabra toma y
da la salvación, la vida eterna. La buena parte, como tal,
no se ha de quitar. La salvación dura siempre. En las
palabras de Jesús a María laten sin duda las palabras del
salmo: «La porción de mi herencia y de mi copa eres tú,
Yahveh; tú eres el que cuida de mis suertes. En delicias
me cayeron las medidas y mi herencia me place» (Sal
15,5s). Jesús llama bienaventurados a los que oyen la pa
labra de Dios y la guardan (11,28).
Aunque no se puede negar que son también grandes e l
servicio de la mesa y todas las obras de caridad, puesto
que ,
según la palabra de Cristo, son servicios prestados
a él mismo (Mt 25,40), sin embargo, no por eso hay que
rebajar y descuidar el hecho de escuchar la palabra. Con
forme a esta palabra dejaron los apóstoles de servir a los
pobres a la mesa a fin de quedar libres para la proclama
ción de la palabra y confiaron a los diáconos el servicio
cosa es necesaria = con
IH>CO
nos basta; tú te fatigas demasiado; 3) el pasaje
se supr ime por completo;
4)
la traducción que presentamos en el texto parece
responder al texto or iginal; cf . Mt 6 ,33.
315
de los pobres (Act 6,ls) . El relato de la acción del buen
samaritano tiene su necesario complemento en el relato
de la visita a Marta y a María.
4.
LA NUEVA ORACIÓ N
(11,1-13).
Hasta 13,22 no se vuelve ya a hablar del viaje. En el relato
del viaje están intercaladas enseñanzas de Jesús. Jesús trae el
nuevo mensaje del Padre y del Espíritu Santo, y con ello una
nueva oración (11,1-13); se anuncia a sí mismo como nuevo por
tador de salud, que es ciertamente otro y enseña de manera
distinta de lo que habían imaginado los dirigentes en Israel (11,
14-54);
el seguimiento de este Mesías cobra nueva y propia forma,
de la que se habla en un conjunto de palabras y sentencias de
los discípulos de Jesús quieren poseer una oración que
fluya de la proclamación del reino de Dios y esté marcada
por el hecho salvífico, cuyos testigos han venido a ser
ellos.
La palabra de Jesús abría nuevas perspectivas, crea
ba nuevas esperanzas, anunciaba una nueva ley. ¿No de
berá también transformar la oración? La oración es la ex
presión de la fe y de la esperanza, de la vida religiosa.
2
Él les d i jo: Cu ando vayáis a orar, decid: Padre, san
t i f icado sea tu nombre; venga tu re ino.
La oración*
1
comienza con la invocación: Padre,
ab b a . Así habló Jesús en la oración a Dios (Me 14,36),
así podían también hablar a Dios sus discípulos (Gal
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 159/190
Jesús (12,1-53). El nuevo tiempo que aporta Jesús exige a todos
la conversión (12,54-13,21).
a ) La oración de los discípulos (11,1-4).
1
Un día estaba é l orando en c ierto lug ar. Cuan do ter
minó, le d i jo uno de sus discípulos: Señor, enséñanos a
orar, como también Juan en señó a sus discípulos .
Por lo regular ora Jesús en la soledad
8 0
, en un monte
(6,12; 9,28.29), separado de sus discípulos (9,18). No se
nos dice cuándo y dónde oró Jesús en el caso presente;
la mirada no debe distraerse de lo esencial: la doctrina
sobre la oración.
Juan Baut is ta
había enseñado a orar a sus discípulos.
La oración había de corresponder a la novedad de su
predicación, había de ser un distintivo que uniera a sus
discípulos entre sí y los separara de los demás. También
80. Me 1,35; Le 5 ,16; Mt 14 , 23; Me 16,46.
316
4,6;
Ro m 8,15). Jesús introduce a sus discípulos en su
relación con Dios. La invocación ab b a , padre querido,
empalma quizá con oraciones de los niños judíos. Un ju
dío no osaba nunca decir la palabra abba hablando con
Dios; caso que llamara a Dios Padre se servía de la pala
bra
a b
o
a bi
(padre mío), que no pertenecía al arameo
corriente, sino que estaba tomada del lenguaje solemne
de la oración en la liturgia. La palabra abba ilustra la
81. La oración que enseña Je sús a sus discípulos se nos ha transmitid o
en dos formas, en la forma de Mt 6,9-13, y en la de Le 11,2-4. Cada uno
de los evangelistas la reproduce según la fórmula que en su tiempo se usaba
en una u .otra de las comunidades cr istian as que ellos conocían. Am bas formas
son copia f iel , aunque no li teral , de la oración de Jesús. La forma de Mt es
más solemne, formalmente más acompasada, más li túrgica; la de Le es más
breve y personal . Es de suponer que ésta se aproxima más a la forma or igi
nar ia, pues se propender ía más bien a alargar que a acor tar el texto vene
rando. Una explicación circunstanciada del padrenuestro se halla, entre otros ,
en H . SCHÜRMANN, Das Gebet des Herrn, Leipzig , *1961; Fr iburgo de Br i s -
govia
2
1962; H. VAN
BUSSCHE, Das Vaterunser,
Maguncia 1963 ; J .
ALONSO.
Expl icación exeyética de las pet ic iones del padrenuestro, «Sal Terrae» 41
(1953) 326-333; 395-402; 659-664); El problema l iterario del padrenuestro,
«Estudios bíblicos» 18 (1959) 63-75; J.
STAUDINGER, El sermón de la mon
taña: , Herd er , Barcelona 1962, p . 140-170; J .
SCHMIDT,
£ / Ev ange l i o s e gún
s an M at e o , Herder , Barcelona 1967, p . 178-198.
317
singularísima relación de Jesús con Dios. El tiempo de
la salvación aporta también esto: «Yo me preguntaba:
¿Cómo voy a contarte entre mis hijos y a darte una tierra
escogida, una magnífica heredad, preciosa entre las pre
ciosas de todas las gentes? Pensaba yo que me llamarías
«Padre mío» y no volverías a apartarte de mí» (Jer 3,19).
«Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán
llamados hijos de Dios» (Mt 5,9).
Sant i f icado sea tu nombre. Estas palabras no son de
seo,
sino ruego. Se invoca a Dios rogándole que santifique
su nombre. Mediante la fórmula impersonal se atrae la
atención más al obrar de Dios que a la persona del orante.
El ruego es expresión de un anhelo ilimitado de la santifi
cación definitiva del nombre divino. El nom b re es Dios,
ha llegado ya (4,19). Los discípulos son llamados dichosos
porque están viendo lo que con tanta ansia habían aguar
dado los profetas y los reyes (10,23s). Sin embargo, Jesús
enseña a orar y a pedir que venga el reino, el señorío de
Dios. Lo que ha traído Jesús es tiempo de salvación pero
a su vez no es sino comienzo de lo que ha de venir . Lo que
es el reino se puede ver por lo que Jesús trajo con su
vida; la vida de Jesús es, en efecto, la manifestación de
la salud en un determinado lugar en el transcurso de la
historia de la salvación. La magnificencia de lo que ya
se ha descubierto hace que sea tanto más ardiente el ruego
de que venga el reino de Dios. El reino vendrá cuando
venga Jesús mismo. El ruego de que venga el reino se
identifica con el ruego de que venga Jesús. «Ven, Señor
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 160/190
en cuanto él mismo se revela, Dios en su obrar salvífico,
Dios para nosotros. Dios se sant i f ica cuando mediante
la revelación de su poder se manifiesta como el completa
mente otro. «Yo santificaré mi nombre grande, profanado
entre las gentes, profanado por vosotros en medio de
ellas, y sabrán las gentes que yo soy Yahveh, dice el
Señor, Yahveh, cuando yo me santificare a sus ojos por
causa de vosotros» (Ez 36,23). Dios se santifica cuando
mediante la revelación de su misericordia se manifiesta
como Padre, cuando se revela a los pequeños y los con
vierte en niños pequeños, cuando alborea el reino de Dios.
V enga tu re i no . La petición de que sea santificado el
nombre es preparación para esta otra petición. La petición
de que venga el reino es la verdadera petición del padre
nuestro, así como la doctrina del reino de Dios ocupa el
centro de la predicación de Jesús. El reino de Dios es
el señorío de Dios. Cuando Dios se posesione de su reino,
cuando imponga su señorío, quedará vencido Satán y
habrá comenzado el tiempo de salvación. Esta revelación ha
aparecido ya en Jesús. El «año de gracia del Señor»
318
nuestro», Maraña tha (ICor 16,22).
3
D anos cad a d ía nu es t ro p an co t i di ano;
4
y perdóna
nos nues t ros p ecad os , pues tam b i én n oso tros p erdonam o s
a tod o e l q ue nos d eb e; y no nos l l e ve s a l a t en tac i ó n .
Los discípulos viven en el período intermedio entre
el tiempo de salvación, inaugurado por Jesús, y su segunda
venida. En este tiempo intermedio están todavía oprimi
dos por la angustia de la existencia, por la culpa y por
la tentación. Cuando se inicie plenamente el tiempo de
salvación con la venida de Jesús, pasará toda angustia y
toda aflicción. Así también estas peticiones de la segunda
parte del padrenuestro son, en definitiva, peticiones de que
venga el reino de Dios.
D anos cad a d ía nues t ro p an co t i d i ano . El pan significa
todo lo necesario para la vida en la tierra. Pedimos el pan,
porque es un don de Dios. «En gracia, amor y miseri
cordia da él (Dios) pan a toda carne, porque su gracia
permanece eternamente.. . él da de comer y provee a to-
319
dos , y otorga bienes a todos, y prepara manjares para
todas sus criaturas. Seas alabado, Señor, que nos alimen
tas» (oración judía para antes de las comidas). El dis
cípulo pide nuestro pan, el pan que tanto necesita el hom
bre,
él y la comunidad; no ora en la estrechez del yo,
sino en la amplitud de los hijos del Padre. El pan coti
diano es el pan necesario para cada día. El discípulo
sólo pide lo necesario. «No me des pobreza ni riqueza,
dame aquello de que he menester» (Prov 30,8). Cada día:
El discípulo ha de confesar cada día ante el Padre su ne
cesidad y pedirle cada día su pan cotidiano. Debe orar
incesantemente (18,1).
P erd ó nanos nues t ros p ecad os . El discípulo sabe que es
pecador. Aun cuando lo haya hecho todo, no es todavía
que reparar , resti tuir . Esto lo hace perdonando a los que
se han hecho culpables contra él.
N o nos l l e ve s a l a t en tac i ó n .
En la explicación de la
parábola del sembrador habla Lucas de algunos que du
rante algún tiempo creen, pero luego decaen en el tiempo
de la tentación, cuando irrumpen tribulaciones y persecu
ciones por la palabra de Dios (8,13). La tentación es ame
naza para la fe, peligro de apostasía. La petición brota del
conocimiento de la propia debilidad y de la prepotencia
del mal. Las tres peticiones de liberación de la miseria
humana son también confesión de esta miseria. El hom
bre que confiesa su miseria ante Dios, tiene la promesa
de que le alcanzará el reino de Dios. Bienaventurados los
pobres , los hambrientos, los que l loran. . . El padrenuestro
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 161/190
más qu e un siervo inútil (17,10). Tiene que confesar: Ten
ga Dios misericordia de mí (18,13). El pecado es en la
Biblia desobediencia contra Dios: «Contra ti solo he pe
cado» (Sal 51,6). Por eso también sólo por Dios puede ser
perdonado. Dado que el tiempo de salvación proclamado
por Jesús, es tiempo de perdón y de misericordia, por eso
podemos pronunciar con confianza esta petición. Precisa
mente en el Evangelio de Lucas, el gozo de Dios en
perdonar es rasgo incomparable y sumamente caracterís
tico de la proclamación del reino de Dios por Jesús.
Jesús proclamó: Perdonad y seréis perdonados (6,37).
Quien perdona a su hermano puede esperar que también
Dios le perdone a él. La voluntad de perdonar al hermano
es condición de la misericordia de Dios en el juicio. Los
discípulos son tales si están penetrados de la misericor
dia del Padre. «Sed misericordiosos como vuestro Padre
es misericordioso» (6,36). Por eso, cuando el discípulo
pide perdón de sus pecados, añade: pues también nosotros
p erd onam os a tod o e l q ue nos d eb e . El que peca contra
otro se carga con una deuda que tiene que saldar. Tiene
32
es la oración de aquellos en quienes ha alboreado y albo
rea el reino de Dios.
La entera existencia humana se presenta a Dios como
una existencia angustiosa. El presente: danos cada día;
el pasado: perdónanos; el futuro: no nos lleves a la ten
tación. El re ino de Dios produce una gran mutación, y
ésta tiene su garantía en Dios, que se santifica y muestra
su poder , que , como ab b a , es Dios para nosotros .
b) El amigo impo rtuno (11,5-8).
5
Y l e s añ ad i ó : Sup onga m os q ue uno d e vo so tros t ie
ne un am i go y acud e a é l a m ed i anoch e p ara d ec i r l e :
Amigo, préstame tres panes, aporque un amigo mío ha
l legado de v iaje a mi casa, y no tengo qué ofrecerle;
7
y que e l otro desde dentro le responde: No me molestes;
la puerta ya está cerrada, y mis hi jos y yo estamos en la
cam a; no p ued o l evan tarm e p ara d á r te l o s .
8
Os digo que,
aunq ue no s e l e van te a d á rse l o s p or s er am i go suy o , s e
321
l evan tará al meno s po r su importunidad y le dará cu an tos
neces i ta.
En Palestina se viaja con frecuencia de noche, porque
durante la noche hace fresco. Cada día, antes de la salida
del sol, la mujer cuece el pan (en forma de delgadas tortas)
para el consumo del día; por eso no hay allí panaderías.
T res p anes son la comida para una persona. En las pe
queñas aldeas se sabe quién tiene paa de repuesto. Aten
der al huésped es un deber sagrado. El hombre al que se
pide el favor se disgusta. Se le llama «amigo», pero él no
responde en los mismos términos. La casa sólo tiene una
habitación. La puerta está atrancada con una gran viga.
De lecho sirve una estera que se extiende por la no
Dios es bondadoso: no hay hombre que se le pueda com
parar. Da no sólo lo que se le pide, sino todo lo que uno
necesite. De esta manera procedió también Jesús con la
mujer cananea (Mt 15,21ss) y con el ciego de Jericó
(18,33ss).
c ) Certeza de ser escuchados (11,9-13).
9
Pues bien, yo os digo : Pedid y os darán; bu scad y
encontraré is; l lamad y os abrirán.
w
Porque todo e l que
pide, rec ibe, y e l que busca, encuentra, y a i que l lama,
le abren.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 162/190
che.
Los niños duermen con los padres. Abrir por la noche
es muy fatigoso y ruidoso: todos tienen que levantarse.
No sin razón se habla varias veces de l evan tarse . El de
cir «no puedo» significa: no tengo gana.
Al f in no tendrá más remedio que . levantarse y dar lo
que le p ide
el amigo. Jesús da la razón de ello: Si ya no
por la amistad, al menos por la molestia y la importuni
dad. No por amor al vecino, sino por amor al descanso
nocturno. Así somos los hombres. Y Dios ¿cómo es? Si
el discípulo reflexiona sobre su propio comportamiento,
se le ocurrirá cómo se comportará Dios con él. Como el
amigo, después de todo, acaba por atender al amigo que
le pide con insistencia e importunidad, así Dios también
escucha al que le pide sin cejar, importunamente. Un doc
tor de la ley dice: «El importuno vence al Maligno,
¡cuánto más al Dios todo bo nd ad »
8 2
. Se ha prometido
que será escuchada la oración perseverante y confiada,
que n o cede aunque no sea , escuchada inmediatamente .
8 2 . BlLLEXBECK I, p. 45 6.
322
Jesús asegura que Dios escucha la oración. Al pedir
responde el recibir , al buscar el encontrar, al llamar el
abrir . Dios no se muestra sordo al hombre, no se le es
conde. Dios ama a los hombres.
El que ora pide, busca y llama. El hombre recurre a
Dios como pobre , como extraviado, como sin hogar . El
que se sabe y se siente pobre, extraviado, sin hogar, halla
el camino de la oración y de Dios. El bien que, según la
predicación de Jesús, puede saciar todas las ansias del
hombre, que ocupa el centro de todas las promesas, es el
reino de Dios. La primera condición para entrar en el reino
de Dios es la confesión de la propia pobreza. En la oración
se abre el reino de Dios.
En este pasaje no se dice qué es lo que se pide, qué
es lo que se busca, por qué y dónde se llama. Lo impor
tante es la act i tud de pedir , de buscar, de llamar. Todo el
que adopta esta actitud halla lo que pide, lo que busca y
lo que desea cuando llama. La oración pone al hombre en
la actitud de conversión, lo hace consciente de la propia
insuficiencia, le hace poner su esperanza en Dios. La ora-
323
ción convierte al hombre en un hombre que, por razón de
su consciente pequenez, espera ser agraciado con lo mayor.
11
Pues ¿hay entre v oso tros a lgú n pa dre, que, s i su
h i jo l e p i d e un p escad o , en l ugar d e un p escad o l e d é una
serpiente?
n
O, s i p ide un huevo, ¿ le dará un escorpión?
13
Y s i v oso tros, que so is malos, sa bé is dar a vue stros
h i jo s cosas b uenas , ¿ con cuá nta m á s razó n e l P ad re q ue
está en e l c ie lo dará Espír i tu Santo a los que le p iden?
Es inconcebible que un padre no responda con cosas
buenas a los ruegos de su hijo. Tanto más habrá que decir
esto de Dios. Los hombres son malos, Dios es bueno. Si
un padre de la tierra es bueno con su hijo que le pide,
Espíritu Santo. El don que se da a los discípulos que viven
en el período intermedio entre el tiempo de salvación de
Jesús y su venida al fin de los tiempos, es el Espíritu
Santo. Éste es el don salvífico en el tiempo de la Iglesia.
Para poder alcanzarlo se necesita la oración.
Hay estrecha conexión entre oración, Padre (abba) y
Espíri tu Santo. Lo nuevo que enseña Jesús sobre la ora
ción está relacionado con su proclamación del reino de
Dios. Es Padre de todos los hombres, lo es para todo el
que ora. Pero esto nuevo está relacionado también con
el carácter del tiempo de salvación; éste es un tiempo que
lleva la impronta del Espíritu Santo. El portador de la
salvación está ungido con el Espíritu Santo, su potente
obra es causada por el Espíritu; su don, que contiene to
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 163/190
¡cuánto más habrá de serlo Dios
Al fin y al cabo, el padre no se burla de su hijo nece
sitado, no le hace un mal juego, no comete con él un aten
tado criminal. Dar una piedra en lugar de pan es una
burla, dar una serpiente en lugar de un pescado es un
mal juego, dar un escorpión en lugar de un huevo es
un atentado criminal. Un padre no abusa del desvalimiento
de su hijo pequeño, que no sabe distinguir todavía (a la
vista) entre una piedra y un pan, entre un pescado pare
cido a una serpiente (por ejemplo, una anguila) y una ser
piente, entre un escorpión apelotonado y un huevo. Pre
cisamente porque el niño es pequeño e indefenso, le pro
diga el padre todo cuidado y cariño.
El buen don que da el Padre al que le pide, es el
Espíri tu Santo.
Este don lo envía el Padre desde el cielo.
El Espíritu Santo es el presente celestial. Por el actúa
Jesús. Convierte a los discípulos en lo que deben ser. Toma
su pensar y su obrar bajo su dirección. Por él cumplen
ellos la voluntad de Dios. Según Mateo, da Dios cosas bue
nas (Mt 7,11), los bienes de salvación; según Lucas el
324
dos los demás dones, es el Espíritu Santo. La oración está
sostenida por el Espíritu Santo, y como oración así in
fluida por el Espíritu, está marcada por la confianza en
el Padre . «El Espír i tu viene en ayuda de nuestra debil i
dad. Porque no sabemos cómo pedir para orar como es
debido; sin embargo, el Espíritu mismo intercede con
gemidos intraducibies en palabras» (Rom 8,26).
5. E L ME S ÍA S Y SUS ADVE RSARIOS (11,14-54).
a ) El más fuerte (11,14-28).
14
E s tab a é l ex p u l sand o a un d em on i o q ue era m ud o;
y ap enas sa l i ó e l d em on i o , com enzó a h ab l ar e l m ud o , d e
suer te q ue l a s gen te s s e ad m i raron .
15
Pero de entre e l las
algunos di jeron: Es por arte de Beelzebul , príncipe de
los demon ios, por quien éste arroja los demon ios. ^Ha
bía también otros que, pata tentarlo, rec lamaban de é l
una s eñ a l v en i d a d e l c i e l o .
325
Nos hallamos ante el hecho escueto de la curación de
un poseso. El demonio ha salido del poseso, y éste, que
er a
m ud o ,
comienza a hablar. Jesús ha expulsado al de
monio. A éste se le llama mudo porque se creía que la
enfermedad del poseso respondía a la naturaleza del de
monio que la había causado. La curación por Jesús des
pierta la admiración de las gentes. ¿Cómo es esto posible?,
se preguntan. ¿Quién es Jesús, que tiene poder para arro
jar a los demonios?
La curación es un hecho incontrovertible. ¿Cómo se ha
de explicar? La admiración y extrañeza del pueblo abre
un camino para la fe: Jesús obra con el poder de Dios, es
el Mesías. En Lucas no se formula esto, pero antes de que
asomen tales aserciones surge ya la crítica. Jesús no obra
Jesús posee el don de escudriñar los corazones, y así
conoce los pensamientos de sus críticos. Como se ve, Lu
cas no pone el menor empeño en conciliar las diferentes
tradiciones que él combina en el texto: los críticos expre
san sus opiniones; J esús conoce sus p ensam i en tos . Lucas
utiliza los fragmentos de tradición para formular enseñan
zas importantes, no para presentarnos cuadros bien ajus
tados .
Se refutan las críticas formuladas contra las expulsio
nes de demonios, que constituyen el punto central de todos
los relatos de curaciones. Como los demás milagros de
Jesús ,
no son magia, no son artilugios practicados con la
ayuda del demonio. La primera razón de esta verdad la
toma Jesús de una reflexión sobria y serena. Los demo
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 164/190
por el poder de Dios, sino por el poder del príncipe de
los demonios, al que se daba el nombre de Beelzebul .
Precisaba alejar al pueblo de Jesús. Contra la fe en el
Mesías, que se está fraguando, se formula esta objeción:
Jesús no produce la señ a l esperada, que lo habría de acre
ditar como Mesías, la señal del cielo, como detener el sol
o la luna, o una señal de los astros. Las expulsiones de
demonios y las curaciones milagrosas no se valoraban como
tales señales. A Jesús se le mide con patrones humanos
preconcebidos, se prescribe a Dios lo que tiene que hacer,
cómo ha de convencer a los hombres.
17
Pero é l penetró su s pensamien tos y les di jo: Todo
re i no d i v i d i d o en b and os q ued a d evas tad o , y una casa s e
derrumba sobre otra.
K
Si , pues, Satán está div idido con
tra s í mismo, ¿cómo subsis t irá su re ino? Porque estáis d i
c iendo que yo arrojo los demonios por arte de Beelze
bul .
19
Pero s i yo arrojo los demonios por arte de Beelzebul ,
¿por arte de quién los arrojan vuestros hi jos? Por eso
el los mismos serán vuestros jueces .
326
nios constituyen un reino, la contrapartida del reino de
Dios.
No es de creer que el príncipe de los demonios com
bata contra su propio reino.. . Esto sería una guerra civil,
y las guerras civiles aniquilan los reinos, acaban con las
gentes y destruyen las ciudades.
Jesús toma otra razón de la práctica del exorcismo ju
daico.
Vuestros hi jos , hombres del pueblo, ex p u lsan d e
m on i os . Esto lo intentaban con oraciones, palabras y fór
mulas de conjuro que se hacían remontar a Salomón.
Hay, pues, otros medios de expulsar los demonios sin re
currir a la ayuda de Beelzebul. Jesús defiende su propia
revelación con consideraciones tomadas de la experiencia
humana y religiosa.
También nosotros tenemos el deber de recurrir a to
das las consideraciones que nos suministra la experiencia
humana, la ciencia y la vida religiosa, para tratar de re
futar las críticas contra los hechos de la revelación. La
revelación no está en contradicción con la razón ni con
las leyes de la vida humana y del mundo.
327
20
Pero s i yo expulso los demonios por e l dedo de Dios,
e s q ue e l r e i no d e D i os h a l l egad o a voso tros .
Jesús expulsa los demonios con la virtud de Dios. El
d ed o d e D i os es símbolo de la fuerza de Dios. Cuando
Moisés provocó las plagas de Egipto, decían los adivinos
de los egipcios: «El dedo de Dios está aquí» (Éx 8,15).
A Dios le basta con mover su dedo para que surjan obras
imponentes. El cielo es obra de los dedos de Dios (Sal
8,4). El triunfo sobre el señorío de Satán con el poder de
Dios que actúa en Jesús, muestra que ha llegado ya el
re i no d e D i os .
Éste está ya presente, aunque todavía no
se ha desarrollado plenamente. Se ha inaugurado ya el
tiempo de la salvación, el reino de Dios ha reportado ya
la victoria sobre el reino de Satán. De ello son señal las
ros y el botín que se reparte. Esto tiene también lugar en
las expulsiones de demonios. Satán dominaba en paz;
ejercía su señorío sobre los hombres y nadie podía su
plantar lo . Ahora ha cambiado todo. Las expulsiones de
demonios muestran que Satán tiene que entregar su botín,
los hombres a quienes dominaba . Está por tanto vencido.
Jesús podía decir en tono triunfal: «Yo estaba viendo a
Satán caer del cielo como un rayo» (10,18). Según Lucas,
esta victoria tuvo ya lugar en la lucha entablada en la
tentación del desierto (4,13). Las palabras repartirá el
botín traen a la memoria el oráculo de Isaías: «Mi siervo
libra a muchos de la culpa y carga con nuestras iniquida
des. Por eso yo le daré por par te suya muchedumbres, y
recibirá muchedumbres por botín; por haberse entregado
a la muerte y haber sido contado entre los pecadores»
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 165/190
expulsiones de demonios.
2 1
Mientras un hombre fuerte y bien armado está gua r
d and o su p a l ac i o , su s b i enes e s tá n s eguros .
22
P ero cuan d o
venga contra é l otro más fuerte y lo venza, le qui tará las
armas en que conf iaba y repart irá e l botín.
23
Q u i e n n o
es tá conm i go , e s tá con tra m í; y q u i en conm i go no recoge ,
desparrama.
La acción del Mesías se concibe como una guerra. La
lucha se entabla entre Satán y el Mesías. Se toma de los
hechos bélicos una imagen. Hay un palacio, una fortale
za guardada por un hombre fuer te . Éste está armado de
pies a cabeza , con coraza , yelmo, escudo y lanza . Todo
está en seguridad. Viene uno más fuerte y ataca. El fuer
te queda vencido. Se le quitan las armas. Todo lo que se
encuentra, se toma como botín y se reparte. La segura
posesión ha terminado. La idea fundamental de la pará
bola está en el contraste entre los bienes, que están segu-
328
(I s 53,1 ls) . De todos m odos, si se hubiese aludid o ex pre
samente a este pasaje, no se habría omitido la muerte
que arrebata aún mejor botín a Satán. El re ino de Dios
se inició cuando Jesús comenzó su actividad, se profun
dizó cuando murió en la cruz y resucitó, se establecerá
plenamente cuando Jesús venga en su gloria. Pero en la
medida en que se va estableciendo el reino de Dios, se
va derrumbando el poderío de Satán.
El combate mesiánico fuerza a cada cual a optar por
Cristo o con tra Cristo . No tolera neutralidad. La nece
sidad de tomar partido se expresa en un proverbio que
procede de la guerra civil romana*
3
. El que no toma par
t ido por Jesús, es contrar io suyo. A esto se añaden unas
palabras tomadas de la vida pastor il . El pastor que no re
coge las ovejas , las desparrama. «Y así andaban desparra
madas mis ovejas por falta de pastor, siendo presa de to
das las fieras del campo» (Ez 34,5s).
83 .
Cf . el comentar io a 9 ,50.
329
24
Cuan do e l espíri tu impuro sale del hombre, v uga
por los des iertos buscando reposo, y , a l no encontrarlo,
d i ce : M e vo l veré a l a casa d e d ond e
salí.
25
Y a l l l egar a
el la , la encuentra barrida y arreglada.
26
E n tonce s va ,
toma consigo otros s ie te espír i tus peores que é l , entran en
l a casa y s e i n s ta l an allí, y resul ta que la s i tuac ión f inal
de aquel hombre es peor que la de antes .
El demonio expulsado se comporta como un hombre
que ha sido echado de su casa. Jesús no ofrece una psi
cología de Satán, ni tampoco una exposición de las ideas
del pueblo sobre las maquinaciones de los demonios, si
se exceptúa la convicción de que el desierto es el lugar
donde habitan los demonios. El relato tiene carácter de
parábola. El que ha escapado al señorío de Satán, no por
¿Qué es lo que salva de la recaída? ¿Qué es lo que
preserva del nuevo señorío de Satán? B i enaven turad o e l
s eno q ue t e l l e vó .
La alabanza de la madre se dirige al
Hijo. La felicidad y el honor de una mujer está en los
hijos que ha engendrado y criado. La mujer del pueblo
— no llevada d e la crítica, como alg unas o tras — está su
mamente impresionada por la grandeza de Jesús. Jesús
vence el poderío de Satán y trae la salvación. La gloria
del hijo se extiende también a su madre.
Sí, b ienaventurada. A la madre de Jesús hay que lla
marla bienaventurada. Pero esta alabanza pronunciada por
la mujer podría también interpretarse falsamente. La sola
maternidad corporal no es la razón de la bienaventuranza.
Más bien hay que llamar bienaventurado al q ue e scuch a
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 166/190
ello debe creerse inexpugnable y completamente seguro.
E l e s tad o f i na l d e una p ersona que se ha convertido puede,
si no persevera como tal, ser peor que el estado anterior
a la conversión. La antigua Iglesia tomó muy en serio
esta verdad. La carta a los Hebreos pone en guardia con
tra la apostasía en términos que podrían ser mal inter
pretados, pero que el autor se permite usarlos para mos
trar la tremenda gravedad del caso: «Realmente, a los
que ya una vez fueron iluminados, gustaron el don celes
tial, fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, gustaron
la buena palabra de Dios y los portentos del siglo futuro,
pero vinieron después a extraviarse, es imposible reno
varlos otra vez llevándolos al arrepentimiento» (Heb 6,4-6).
27
Mientras é l es taba dic iendo estas cosa s, una mujer
levan tó la voz en medio de la mul t i tud y di jo: Bienav en
turado e l seno que te l l evó y los pechos qué te cr iaron.
2S
Pero é l con testó: Bienaven turados más bien los que es
cuch an l a p a l ab ra d e D i os y l a guard an .
33
la palabra de Dios y la guarda. Oir, guardar y seguir la
palabra de Jesús, la palabra anunciada por él, eso es lo
que preserva de recaer bajo el dominio del demonio.
María escuchó, creyó y guardó la palabra de Dios.
Hay que felicitarla porque es madre de Jesús, vencedor de
los demonios y portador de salvación, pero todavía más
porque escuchó la palabra de Dios y la guardó.
b) La señal (11,29-36).
Jesús rechaza las exigencias de signos, de señales (11,
29-30),
llama a la conversión (11,31-32), expone la nece
sidad de ser iluminados por la fe (11,33-36). Jesús no se
da a conocer por señales del cielo; él mismo es el signo o
la señal que presupone iluminación interna para ser re
conocida.
29
Crecía la muchedu mbre cada v ez más, y é l se puso
a dec i r : E s ta gen erac i ó n e s una generac i ó n p erversa; p i de
331
una señal , pero no se le dará más señal que la de Jonás.
3 0
P orq ue as í com o J oná s fue una s eñ a l p ara l o s h ab i tan
tes de Nínive, así también lo será e l Hijo del hombre para
es ta generac i ó n .
Jesús se pronuncia acerca de la exigencia de señales.
Ha crecido todavía la muchedumbre que se apiña en tor
no a Jesús. La razón más profunda de la exigencia de se
ñales , el no contentarse con lo que Cristo ha hecho con
poder y para asombro del pueblo, es la desobediencia a
la palabra de Dios, que anuncia Jesús. Lo primero que
hay que hacer es convertirse, reformarse interiormente.
Sólo el que escucha y acepta de buena gana la palabra de
Jesús ,
está capacitado y pronto para captar las señales
que hace Dios por Jesús como señales de que se ha inau
ees señal o signo que conduzca a la fe y a la salvación,
sino signo que condenará la incredulidad. Con esta señal
previno Jesús a sus adversarios en el juicio ante el sane
drín: «Pues sí, lo soy (el Mesías, el Hijo del Bendito); y
veréis al Hijo del hombre sentado a la diestra del Poder y
viniendo entre las nubes del cielo» (Me 14,62). El Hijo
del hombre es la señal que aparecerá en el cielo, a cuya
aparición se golpearán el pecho todas las tribus de la tie
rra (Mt 24,30).
31
La re i na d e l sur com p arecerá en e l ju i c i o con l o s
hombres de esta generación y los condenará, porque e l la
v ino desde los conf ines de la t ierra para oir la sabiduría
de Salomón, y aquí hay uno que es más que Salomón . Lo s
habitantes de Nínive comparecerán en e l ju ic io con esta
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 167/190
gurado ya el reino de Dios. Cuando Jesús explicó las
curaciones ante los discípulos de Juan como signos del tiem
po de salvación, dijo, amonestando a los oyentes: «Bien
aventurado aquel que en mí no encuentre ocasión de tro
piezo» (7,22s). Jesús no realiza en Nazaret las señales que
se le exigen, porque sus compatriotas no creen (4,23ss).
Jesús se ve en la necesidad de decir a la multitud que
pide signos: Esta generación es una generación perversa,
porque no quiere creer.
A esta generación incrédula dará Jesús una señal: la
señal de Jonás. Jonás fue tragado por el pez, que al ter
cer día lo devolvió de nuevo. Como quien ha sido devuelto
a la vida es presentado por Dios a los ninivitas como señal
para que se conviertan. Como lo fue Jonás para los nini
vitas, también Jesús será señal para esta generación per
versa e incrédula. Jesús resucitará y retornará como Hijo
del hombre para celebrar juicio. Cuando aparezca en po
der y gloria, nadie podrá dejar de reconocer que Dios le
ha dado todo poder. En realidad, esto no será ya enton-
332
generac i ó n y l a cond enará n , p orq ue e l l o s se conv i r t ie ron
ante la predicación de Jonás, y aquí hay uno que es más
que Jonás.
Los contemporáneos de Jesús están endurecidos contra
la sabiduría y la llamada de Dios a la conversión. Por eso
sólo se les da la señal que los ha de condenar en el juicio
final. Jesús mismo, que obra con el poder de Dios, sería
señal suficiente que podría conducirlos a la fe; pero no
quieren creer en él. Los gentiles, la reina del Sur, los hom
bres de Nínive, acusarán a los contemporáneos y compa
triotas de Jesús cuando comparezcan con ellos en el juicio
final. La re i na d e S ab a buscó y acogió con avidez la sabi
duría de Salomón (IRe 10,1),
los n iniv i tas
tomaron en
serio la predicación de penitencia de Jonás (Jon 3,5). Is
rael se hizo culpable ante Dios de haber rechazado a Jesús
y de haber exigido señales. Las obras salvíficas que Dios
realiza exigen buena voluntad, fe, aceptación. Repudiar
las es culpa. Lo que el pueblo necesita es la conversión,
333
la imitación de la reina del sur y de los ninivitas, que
aceptaron de buena voluntad la sabiduría y la predica
ción de penitencia.
Las palabras de Jesús son también revelación de sí
mismo. Jesús es
más que e l sabio Sa lomón,
más que Jo
ñas, profeta y predicador de penitencia. Es maestro de
sabiduría y profeta que sobrepuja a los más grandes maes
tros de sabiduría y profetas; es el maestro de sabiduría y
profeta de los tiempos finales. La sabiduría de la vida que
él anuncia es la última sabiduría de Dios; la voluntad de
Dios que proclama, es voluntad de Dios que decide, de cuya
aceptación dependen la salvación y la ruina final.
33
Nadie enc iende una lámpara y la pone en un lug ar
escondido o debajo de l
almud,
s ino sobre e l cande lera ,
M a s .
35
Mira , pues , n o sea qu e la luz que hay en t i s ea
t inieblas.
¿A que se debe que los contemporáneos de Jesús no
reconozcan la luz que él es, no crean en él, no acepten y
sigan su palabra? Esto no se debe a deficiencias de la
luz, sino a que los contemporáneos son malos. La culpa
está en el hombre, no en Dios o en Jesús.
El cuerpo del hombre se concibe aquí como una casa.
Los ojos son las ventanas, que dejan que penetre la luz
en la casa, de modo que el cuerpo entero quede ilumina
do.
Cuando e l o jo está enfermo, cuando no ve distinta
mente o ve doble, todo resulta oscuro. Del modo de ser
del hombre depende el que la luz se reconozca o no como
tal. Jesús sólo es reconocido como el maestro de sabidu
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 168/190
para que los que en tren vean la luz .
Jesús es la señal que ha dado Dios al mundo. Él es
la luz del mundo (Jn 8,12), no escondida por Dios, sino
puesta por él a la vista de todos y presentada de tal for
ma que ilumine a los hombres. La palabra y la obra de
Jesús fueron proclamadas en toda la tierra de los judíos,
con sabiduría y poder fueron el asombro de todos. Me
diante la misión de Jesús y la manera de presentarlo hizo
Dios todo lo necesario para que pudiera reconocerse el
resplandor de su luz, su divina misión de maestro de sa
biduría y de profeta de los últimos tiempos. La revela
ción de Jesús está adaptada al hombre de tal manera
que éste pueda alcanzar el conocimiento de la sabiduría
de Dios y venir con ella a convertirse.
34
La lámpara de l cuerpo e s tu o jo . Cuan do tu o jo
es tá sano , también todo tu cuerpo es tá i luminado; pero
cuando es tá en fermo, también tu cuerpo queda en t in ie -
334
ría y predicador de conversión en los últimos tiempos, si
el interior del hombre es sencillo, si su corazón y todo su
ser está entregado sencillamente a Dios; entonces puede
aceptar la luz que Dios ha encendido en Jesús. En cam
bio, el que se constituye a sí mismo en centro, el que no
da razón a Dios, sino que se hace él mismo medida y cri
terio de todo, no tiene órgano para percibir la voluntad de
Dios que se revela en Jesús.
Mira, no sea que la luz que hay en t i s ea t in ieblas .
E l
hombre ha sido creado para la verdad de Dios. Tiene en
sí luz, tiene fuerza para reconocer la revelación de Dios
como tal. «La luz de Yahveh es el espíritu del hombre»
(Prov 20,27). Se requiere la solicitud del hombre, para
que esta luz no se convierta en tinieblas. El hombre re
cibe luz porque Jesús apareció como portador de luz, pero
él debe ser receptivo para la luz.
En las bienaventuranzas mostró Jesús cómo se ha de
conservar la receptividad. «Bienaventurados vosotros, los
pob res . . . » , «¡Ay d e vosotros , los r icos. . . »
335
36
Por consigu iente , s i tu cu erpo entero es lumino so, s in
que tenga parte a lguna obscura, todo é l resplandecerá,
i gua l q ue cuand o l a l á m p ara t e i l um i na con su re sp l and or .
El que en su interior no pone ningún impedimento a
la luz que envía Dios por Jesús, aquel cuyo cuerpo es
todo luz, ése es iluminado por Jesús como por un relám
pago,
ése es penetrado de luz por la abundancia de su
revelación.
Jesús es luz, luz radiante, él comunica la abundancia
de la sabiduría divina, él aporta la revelación del tiempo
final, que es la plenitud de todas las revelaciones de los
profetas. No solamente da la revelación, sino también el
conocimiento de que Dios se revela en él. «Nadie conoce
al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo quiere re
denación; en Lucas todavía no se ha consumado la ruptura defi
nitiva, y las palabras son una exhortación apremiante a la con
versión. Mateo dejó el discurso para el final de la actividad
pública de Jesús, Lucas la presentó como tema de conversación
junto a la mesa.
37
Apenas terminó de hablar, un fariseo lo inv i ta a co
mer en su casa; entró, pues, y se puso a la mesa.
38
E l f a
r i s eo s e ex trañ ó cuand o v i o q ue no s e h ab ía l avad o an te s
d e l a com i d a .
39
Pero e l Señor le d i jo: De mane ra que
vosotros los far iseos puri f icáis por fuera la copa y e l p la
to ,
pero vuestro inter ior está l leno de rapacidad y mal ic ia.
40
¡Insen satos ¿Acaso e l que hizo lo ex terior n o hizo tam
bién lo inter ior?
41
Dad más bien l imosna de lo que tené is ,
y todo lo vuestro quedará puri ficado.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 169/190
velarlo.» Jesús es señal que se acredita ella misma como
señal, como el relámpago se da a conocer como tal por
su brillo. Estas palabras de Jesús acaban llenas de pro
mesas. Cuando la luz de Jesús se apodera del hombre,
éste se ve penetrado e inundado de luz.
c ) El verdadero M aestro de la ley (11,37-54).
Los fariseos y los escribas ejercían pod erosísimo influjo.sobre
el pueblo. Se creían ser los verdaderos sucesores de los profetas
y de los maestros de sabiduría. Pero no lo son ellos, sino Jesús;
en efecto, presentan como voluntad de Dios lo que no lo es;
así,
por ejemplo, en la cuestión de la pureza (11,37-41). Sobre
los fariseos (11,42-44) y los escribas (11,45-52) respectivamente
formula Jesús tres conminaciones amonestadoras. La conjura de
los escribas y de los fariseos contra Jesús muestra cuan faltos
están de sabiduría divina y de sentido para conocer la voluntad
de Dios (ll ,53s). Palabras análogas a las que consigna Lucas se
hallan también en Mateo. Ambos utilizan una tradición común.
En Mateo se presenta el discurso como sentencia judicial y con-
336
Durante su camino es invitado Jesús a la mesa. La
primera comida era la del mediodía, que procedía de la
usanza romana. Importantes enseñanzas se ref ieren aquí
como conversaciones habidas junto a la mesa. Los fariseos
daban gran importancia a las prescripciones relativas a
la pureza legal. Antes de comer había que lavarse las
manos (Me 7,2). La vajilla de comer y beber se limpiaba
con un cuidado escrupuloso. Jesús no se atiene a la pres
cripción de lavarse las manos, de lo que se ex traña el
fariseo que lo había invitado. El que realmente quería
pasar por religioso debía ante todo cumplir con las pres
cripciones de los fariseos sobre la pureza. De la crítica
del comportamiento de Jesús toma él pie para hablar de
la pureza delante de Dios.
¿Quién es puro delante de Dios? Los fariseos tenían
por puro delante de Dios al que observa las prescripciones
rituales de pureza, el que limpia el exterior del vaso y
del plato. A Dios, en cambio, le importa la pureza moral ,
de la que los fariseos se preocupan muy poco. Vuestro
337
NT .
u i . ::
inter ior está l leno de rapacidad y mal ic ia. Cuando la con
ciencia está limpia de injusticia y de comportamiento in
moral, entonces es el hombre puro delante de Dios. Dios
quiere una conciencia pura.
Por el hecho de preocuparse los fariseos por lo exte
rior, pero no por lo interior, descuidando así la conciencia,
obran como insensatos, como gentes que no poseen la ver
dadera sabiduría, que no reconocen a Dios y lo descuidan.
Los fariseos ponen la religiosidad en exterioridades, no
en la conciencia del hombre. Dios no sólo hizo lo exterior,
las cosas visibles, sino también lo inter ior, el corazón del
hombre, la conciencia, por cuya calidad es como todo
viene a ser bueno o malo
S i
. Por eso es un error y desco
nocimiento de la debida actitud para con Dios dar tanta
importancia a la limpieza exterior de la vajilla, en lugar
8
hortal izas , y fa l táis a lu just ic ia y a l amo r de Dios Esto
es lo que ha bía que pract icar, y aquel lo n o omit ir lo.
43
¡Ay de voso tros, far iseos, pues deseáis oc upar e l pri
m er as i en to en l a s s i nagogas y acap arar l o s sa l ud os en
las plazas
44
¡Ay de vo sotros, que sois como sepulcros s in
i nd i cac i ó n a l guna , sob re l o s cua l e s p asan l o s h om b res
s in saberlo
En forma plástica, con un lenguaje tomado de la vida
práctica, se expresan tres reproches formulados como c o n
m i nac i ones exhortatorias: los fariseos cumplen la ley con
la mayor escrupulosidad en cosas pequeñas, pero la in
fringen cuando se trata de imperativos de importancia.
Al exterior se muestran irreprochables, pero interiormente
están muy lejos de cumplir verdaderamente la ley. Los
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 170/190
de pensar en la pureza moral del interior de la persona \
Dios ,
creador de la conciencia, dispone también sobre ésta.
Exige que el hombre se le entregue totalmente.
La pureza del interior se obtiene con l i m osnas , con
amor que se traduce en obras. Lo que hay en los vasos
y en los platos, eso se debe dar como limosna; entonces
será todo puro en vosotros. Lo que Dios quiere del hom
bre es un corazón puro; el corazón se purifica mediante el
amor fraterno. La frase: Y todo lo vuestro quedará puri
f icado, es precursora de la osada frase: Ama y haz lo
que quieras. El amor cumple toda la ley.
42
Pero ¡ay de vo sotros, far iseos, que os preocupáis
por e l d iezmo de la menta, de la ruda y de toda c lase de
84 . Mt 23,25s contrapone el inter ior y el exter ior de las vasijas . Le, en
cambio, el exter ior de las vasijas y el inter ior del hombre; Mt ofrece segu
ramente la forma or iginar ia del texto .
85 .
El versículo 40 es obscuro. Otros lo exponen así: Uno que ha pre
parado lo exter ior , no ha preparado también su inter ior . Dios Quiere que re
prepare el interior, la conciencia; esto no se obtiene limpiando por fuera las
vas i jas , l as manos . . .
338
reproches tienen un tenor muy general, y hasta es posible
que hubiera fariseos que se guardaran de tales actitudes.
Cuando se exige a una persona algo grande y difícil, como
lo exigía sin duda la observancia de la ley mosaica, y
cuando el hombre quiere influir en los otros, entonces se
corre peligro de dar una sensación exterior de irrepro-
chabilidad, aunque sin cumplir lo último de las prescrip
ciones.
Jesús quiere que la ley se cumpla enteramente, tam
bién en lo pequeño. E s necesar i o p rac t i car l o . Según Jesús,
el cumplimiento de la ley exige tres cosas: lo que es más
importante en la ley debe cumplirse también en la vida
como lo más importante; éste es el precepto de la cari
dad, del amor (10,27):
e l derecho del hombre y e l amor
a D i os . Éstos son los dos mandamientos y los dos impe
rativos a que apuntan todos los demás. Lo que mueve
al cumplimiento de la ley no ha de ser la vanagloria, sino
la voluntad del Padre que está en el cielo. «Tened cuida
do de no hacer vuestras obras delante de la gente para que
339
os vean; de lo contrario no tendréis recompensa ante vues
tro Padre que está en los cielos» (Mt 6,1). No basta con
cumplir exteriormente la ley de manera irreprochable,
sino que se exige la transformación interior del corazón
conforme a la voluntad de Dios. La voluntad de Dios
reclama la reforma del corazón. La ley debe escribirse en
el corazón, de modo que el hombre quede penetrado y
transformado por la voluntad de Dios hasta lo más ínti
mo de su ser. Jesús aporta el nuevo cumplimiento de la
ley, del que habían hablado los profetas (Jer 31,33s; Ez
36,26ss).
Los fariseos buscan su seguridad en observar exterior-
mente con toda exactitud su propia interpretación de la
ley; en atender a lograr la aprobación de las personas de
votas y a evitar exteriormente con la mayor escrupulosi
45
Un doctor de la ley le d ice enton ces: Mae stro, d i
c i end o ta l e s cosas , nos o f end es tam b i é n a noso tros .
**
P ero
que echáis sobre los hombres cargas cas i imposibles de l le
var , p ero voso tros no l a s tocá i s n i s i q u i era con uno d e
vues t ros d ed os
47
¡Ay de v oso tros, que edi f icáis los sepul
cros de los profetas , a quienes mataron vuestros padres
^Con e l lo , vosotros sois tes t igos y sol idarios de las ac
c iones de vuestros padres, porque e l los los mataron, pero
vosotros les edi f icáis sepulcros.
49
Por eso di jo también la
sabiduría de Dios: Yo les voy a enviar profetas y apósto
les ,
d e l o s cua l e s m atará n a unos y p ersegu i rá n a o t ros ,
50
p ara q ue s e p i d a c uen ta a e s ta generac i ó n d e l a sang re
de todos los profetas que ha s ido derramada desde la
creac i ó n d e l m und o:
51
desde la san gre de Abel hasta
l a sangre d e Z acar ías , a se s i nad o en tre e l a l tar y e l san tua
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 171/190
dad todo escándalo. A ellos se les aplica la amonestación
que dirigió Jesús a los discípulos: «¡Ay cuando los hom
bres hablen bien de vosotros Porqu e de la misma ma
nera trataban los padres de ellos a los falsos profetas»
(6,26).
La salvación para los fariseos es la palabra de Dios
pronunciada por Jesús, el profeta de los últimos tiem
pos.
Si reconocieran a Jesús estarían salvos. Ahora bien,
ésta es su fatalidad, que se justifican ante sí mismos y
ante los hombres, pero no aceptan lo que les dice Jesús.
La ley no sirve de nada si no alborea en una persona el
reino de Dios mediante la palabra de Jesús. Como los
fariseos no reconocen a Jesús como el verdadero legisla
dor y maestro de sabiduría, por eso no cumplen tampoco
la ley. Pasan por alto precisamente lo que consideran
como el contenido vital de la ley. La verdadera relación
para con Dios y el entero cumplimiento de la voluntad de
Dios no puede verificarse sino por Jesús.
34
rio. Sí , os d igo que se pedirá cuenta a esta generación.
52
¡Ay de vo sotros, doctores de la ley , porque os l levaste is
la l lave del saber Voso tros no en traste is , y a los que e s
taban para entrar se lo impediste is
8e
.
Los fariseos son los discípulos sumisos y crédulos de
los doctores de la ley. Lo que éstos enseñan lo ponen
ellos en práctica en la vida. Los reproches contra los fari
seos recaen también sobre los doctores de la ley. Éstos se
equiparan a los profetas y exigen que se los oiga como
a éstos, como a Moisés, como a la ley misma. «Están sen
tados en la cátedra de Moisés» (Mt 23,2). El doctor de
la ley llama Maestro a Jesús, pero al mismo tiempo le
reprocha que ofende a los doctores de la ley, que blasfe
ma contra Dios cuando los critica. La intangible santidad
de la ley le hace increíble que Jesús le ataque.
Al igual que contra los fariseos, también contra los
86 . Los versículos 53 y 54 nG son textu alm ente segu ros.
341
doctores de la ley se formulan t re s conm i nac i ones . De la
ley que Dios había dado para el bien y para la salvación
de los hombres, hacen ellos una carga insoportable me
diante su doctrina y exposición de la ley y mediante la
cerca que ponen alrededor de la misma, pero ellos mis
mos saben muy bien esquivar las obligaciones mediante
interpretaciones sutiles. A los profetas, que por razón de
la palabra de Dios fueron asesinados por sus abuelos, les
erigen monumentos, con los que quieren expresar que
ellos no tienen nada que ver con aquellos hechos pasados,
pero al mismo tiempo quieren matar al mayor de los
maestros y de los profetas, a Jesús. Se arrogan el derecho
exclusivo de explicar la Escritura y la voluntad de Dios, y
de esta manera llevar al conocimiento de Dios y consi
guientemente a la vida eterna, pero al mismo tiempo
tos a los profetas asesinados. Los sepulcros de Amos y
Habacuc eran meta de peregrinación en los días de Jesús.
Aparentemente son indicio de hasta qué punto por aque
llos días se apreciaba la palabra de Dios y a los que la
habían anunciado. ¿Pero qué sucedía en realidad? Jesús
es más que profeta, y precisamente los que erigen monu
mentos a los profetas maquinan contra la vida de Jesús.
Vosotros sois test igos de las acciones de vuestros padres,
pero vosotros edi f icáis . . . Los doctores de la ley son tes
tigos de cómo ahora se presenta un profeta de Dios, pero
lo repudian y así se muestran solidarios de los asesinos
de los profetas . Y sin embargo er igen monumentos. . .
Quien no reconoce a Jesús como Mesías no puede com
prender la revelación de Dios y la historia de la sal
vación.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 172/190
repudian a Jesús e impiden que otros lo reconozcan y así,
mediante su mensaje y su obra, alcancen el conocimiento
y la vida eterna.
Las conminaciones que afectan a los doctores de la ley
tienen su razón más profunda en el repudio de Jesús. Él
puede decir de sí mismo: «Mi yugo es llevadero, y mi
carga ligera» (Mt 11,29). Él es el profeta de Dios, que
compendia y sobrepasa la palabra de todos los profetas.
Él tiene la llave del conocimiento, porque él da el cono
cimiento. «Nadie conoce quién es el Padre, sino el Hijo
y aquel a quien el Hijo quiere revelárselo» (10,22). La
culpa más grave que pesa sobre ellos es que ellos mismos
no reconocen a Jesús y además impiden al pueblo reco
nocerlo. Es grande la responsabilidad de los que ostentan
la autoridad de Dios.
El segundo de los tres reproches ofrece una breve his
toria de las suertes de los que anunciaron la palabra de
Dios. Los profetas la anunciaron y fueron asesinados. En
la época de Jesús erigen los doctores de la ley monumen-
342
¿Cómo es posible que sean repudiados los pregoneros
de la palabra de Dios, que sea repudiado Jesús, el más
grande de todos los profetas? La Escritura no investiga
las razones psicológicas de los hombres, sino que se con
tenta con indicar la más profunda razón teológica: la
sabia permisión de Dios. Lo predijo la sabiduría de Dios:
la Sagrada Escritura. Como aconteció a los profetas del
pasado, así está aconteciendo también a Jesús, y así acon
tecerá a los apóstoles enviados por Jesús. El hombre se
rebela contra las exigencias de Dios. La historia de las
revelaciones de Dios desde el principio hasta el fin da
testimonio de que los hombres de Dios son entregados a
la muerte. Al comienzo de la Biblia está la figura de Abel
(Gen 1), que fue asesinado por su hermano, al final de la
Biblia, que según el canon véterotestamentario se cierra
con el libro de las Crónicas, está el asesinato de Z acar ías
(2Cró 24,20s). Los manejos de los homicidas de los hom
bres de Dios van creciendo en impiedad y en brutalidad.
Abel fue abatido en pleno campo, Zacarías entre el altar
343
de los holocaustos y el templo, en un lugar de asilo. El
punto culminante de esta historia de la resistencia contra
la palabra de Dios será la muerte violenta de Jesús, que
le aguarda al término de su viaje a Jerusalén.
La historia de Israel termina con la destrucción de
Jerusalén. Esta catástrofe es explicada como castigo por
el violento repudio de la palabra de Dios. Se pedirá cuen
ta de la sangre de todos los profetas . La historia del mun
do es la historia de la palabra de Dios entre los hombres.
Todos los desmanes de los doctores de la ley tienen su
raíz aquí: en que no pusieron como centro de todo la pa
labra de Dios, sino su propia sabiduría.
6. LOS DISCÍPULOS EN EL MUNDO (12 ,1 -53 ).
1
Y m i en tras l a m u l t it ud s egu ía aum en tand o p or m i
l lares , hasta e l punto de atropel larse unos a otros, prime
ro com enzó a d ec i r a su s d i s c íp u l os : G uard aos d e l a l e
vadura de los far iseos, que es la hipocresía.
2
P ues nad a
h ay ocu l to q ue no s e d escub ra , y nad a secre to q ue no s e
c o n o z c a .
3
Por lo cua l , todo lo que di ji s te is en la obscu
ridad será oído a plena luz, y todo lo que hablaste is a l
oído, en las habitaciones más escondidas, será proclamado
desde las terrazas.
Va en aumento el número de los que se interesan por
Jesús y por su palabra. Se cuentan por millares. Se apiñan
hasta atropellarse. Primero habla Jesús a los discípulos
antes de dirigir su palabra a las masas (12,54). Los discí
pulos han de ser intermediarios entre Jesús y el pueblo.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 173/190
Jesús es el más fuerte, la señal, el profeta que anuncia la
voluntad de Dios. Reúne discípulos que sufrirán la misma suerte
que le espera en Jerusalén. Lucas, reuniendo fragmentos de tra
dición, compone una instrucción de los discípulos. Jesús reclama
una confesión intrépida (12,1-12), libertad frente a los bienes de
la tierra y frente a la ansiosa preocupación por la vida (12,13-34),
vigilancia y fidelidad con vistas al Señor que ha de venir, que
obliga a una decisión (12,35-53).
a ) Confesión intrépida (12,1-12).
Mediante breves observaciones enlaza Lucas las pala
bras de Jesús, dividiendo el discurso en tres partes: los
discípulos deben estar penetrados de la palabra de Dios
hasta lo más íntimo de su ser (12,1-3); deben hacer su
confesión sin el menor temor de los hombres, pues Dios
se cuida de ellos (12,4-7); a los confesores animosos les
promete Jesús los más altos bienes (12,8-12).
344
Cuando los discípulos estén penetrados de la palabra de
Dios, podrán también llevar su mensaje a las masas.
La levadura era considerada como un poder oculto ,
algo pernicioso y con efectos perniciosos, algo así como
el mal instinto. Este poder es en los fariseos la hipocre
s ía
8 7
: se muestran al exterior distintos de lo que son. Los
discípulos deben guardarse de esta simulación. Deben ser
interiormente lo que enseñan y anuncian al exterior. Ade
más, ¿de qué les sirve la simulación? Lo ocu l to s e d escu
br e y lo secreto llega a conocerse. Los sentimientos
ocultos pugnan por salir a la luz pública. Lo primero y
fundamental que exige Jesús a sus discípulos es la transfor
mación interior.
Si el discípulo se transforma interiormente por la pa
labra de Dios, su convicción y sus sentimientos se abrirán
camino para salir a la luz pública. Lo que se ha dicho
ocultamente al pequeño grupo pugna por salir a la luz,
87 . La hipocresía se echa en cara a los far iseos especialmente en Mt;
cf . Mt 23,13.15.23.27.29.
345
a hacerse público. Aunque los discípulos abarquen un
campo de acción aparentemente pequeño y restringido,
no deben preocuparse, sin embargo, temiendo que su
acción no llegue a ex tenderse ampl iamente. Si, por ejem
plo,
en tiempos de persecución sólo pueden transmitir su
mensaje en las horas nocturnas y en lugares obscuros en
voz baja, deben tener, sin embargo, plena seguridad de
que la palabra de Dios tiene poder y propende a salir a
la luz sin que ninguna fuerza del mundo pueda sofocarla.
La palabra de Dios está cargada de fuerza.
4
A voso tros o s l o d i go , am i gos m íos : N o t engá i s m ie
d o a l o s q ue m atan e l cuerp o , p ero d esp ué s d e e s to no
p ued en h acer m á s .
5
Os voy a indica r a quién habéis de
temer: temed a quien, después de haber matado, t iene
muerte. No hay que temer a los que pueden matar el cuer
po, pero no pueden ejercer el menor influjo en la vida
eterna.
A Dios hay que temer,
a Dios, que puede preci
pitar en el infierno, que después de esta vida ha de decidir
sobre la salvación y la perdición. Jesús contrapone un
temor a otro. Más hay que temer a Dios que a los
hombres.
El temor de Dios no es lo único que ha de fortalecer
en las angustias de muerte. Dios mira a los discípulos y
no los olvida. D i os s e cu i d a d e l o m á s p eq ueñ o e i m p er
cept ible . Se cuida de los pájaros del campo y de los ca
bellos de la cabeza. Todo le interesa. Si Dios se cuida de
estas pequeneces, mucho más se cuidará de los discípulos
de Jesús. La confianza en la amorosa providencia de Dios
da valor para soportar hasta lo más difícil, porque tam
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 174/190
poder para arrojar a la gehenna. Sí , os lo repi to: a ése
habéis de temer.
6
¿ A caso n o s e ven d en p or d os a se s c i nco
pajari l los? Sin embargo, n i uno de e l los queda olv idado
an te D i os .
7
M á s aún , h as ta l o s cab e l l o s d e vues t ra cab e
za están todos co ntados. ¡No tengáis miedo Valé is más
que muchos pajari l los .
Los discípulos de Jesús son sus am i gos : A ellos ha de
dicado su amor, los ha iniciado en los secretos de su
mensaje; ellos participarán también en su suerte. «Vos
otros'sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. Ya
no os llamo siervos, porque el siervo no sabe qué hace
su señor; os he llamado amigos, porque todo lo que oí
de mi Padre os lo he dado a conocer» (Jn 15,14s). Jesús
quiere decir verdades serias a los suyos. Por eso comien
za por recordarles su amistad. Camina hacia Jerusalén,
donde será «elevado». También los discípulos tendrán
adversarios, que los amenazarán con la muerte.
Con una serena reflexión se les quitará el temor a la
346
bién esto entra en el plan de la amorosa solicitud de Dios.
8
P ero yo o s d i go: D e tod o aq ue l q ue s e d ec l are en m i
favor delan te de los hombres, e l Hijo del hombre también
se d ec l arará en favor suy o d e l an te d e l o s á nge l e s d e D i os .
" Pero aquel qu e me n iegu e ante los hombres, también é l
s erá negad o an te l o s á nge l e s d e D i os .
10
Y a tod o e l q ue
diga una palabra contra e l Hijo del hombre, le será per
d onad a; p ero a aq ue l q ue b l as fem e con tra e l E sp íri tu S an
to , no s e l e p erd onará .
n
C uand o os h agan com p arecer
an te l a s s i nagogas , l o s p od eres y l a s au tor i d ad es , no o s
preocupéis de cómo os defenderé is o con qué , o de qué
habéis de decir .
u
Porque e l Espír i tu Santo os enseñará
en aq ue l m om ento l o q ue conv i ene d ec i r .
A los discípulos se les exige confesar a Jesús, confe
sión que está amenazada de persecución. Para quitar a sus
discípulos el miedo de los hombres, les recuerda Jesús el
juicio futuro. Por el juez se entiende a Dios, aunque no
347
se menciona expresamente a él, sino sólo a su corte, los
á nge l e s . No se pronuncia el nombre de Dios. Los ángeles
notifican la presencia del Dios innombrable e inaccesible.
En este juicio, el Hijo del hombre es abogado de los
buenos ante el divino juez. Aquel en cuyo favor se decla
re ,
será salvado; aquel en cuyo favor no se declare, estará
perdido. Que el Hijo del hombre intervenga en favor de
alguien o no, depende de que uno confiese a Jesús en la
tierra. La confesión o la negación de Jesús en la tierra
tendrá su repercusión en el juicio final.
Dios, el Hijo del hombre y Jesús se hallan en la más
estrecha relación.
Todo e l que se declare en mi favor, tam
bién e l Hijo del hombre se declarará en favor suyo. Jesús
parece distinguir entre él mismo y el Hijo del hombre.
¿No deben, sin embargo, estar lo más íntimamente liga
cia de condenación no se atribuye directamente a Jesús;
en efecto, Jesús es, en primer lugar, salvador.
Todavía se dicen otras palabras terribles y estimulan
tes a la vez, palabra que ha de fortalecer a los discípulos.
El discípulo, para quien Jesús es amigo y abogado, está
bajo la acción del Espíritu Santo, al que enviará Jesús
cuando haya sido exaltado. La confesión de Jesús por el
discípulo mediante la palabra y la imitación, es impuesta
como un deber por el Espíritu Santo, pero también es
apoyada y sostenida por él. Las palabras, tal como las
reproduce Lucas, se refieren al futuro de los discípulos.
Cuando reciban al Espíritu Santo y por el hecho de reci
birlo,
se les exigirá una relación con Cristo y una confe
sión de Cristo distinta de la de quienes no hayan recibido
el Espíritu Santo. A todo el q ue d i ga una p a l ab ra con tra
el Hijo del hombre, le será perdonada. Jesús vive como
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 175/190
dos,
puesto que se dice: Todo el que se declare en mi fa
vor delante de los hombres, el Hijo del hombre también
se declarará en favor suyo delante de los ángeles de Dios?
Quien mejor explica estas palabras es quien entiende por
ellas que Jesús se reconoce como el llamado por Dios a
colaborar como Hijo del hombre en el juicio. Pero tam
bién Dios y el Hijo del hombre están ligados entre sí.
Todo el que en el juicio se declare por el Hijo del hombre
delante de Dios, se salvará; el que no lo reconozca, será
condenado por Dios. Así pues, Dios ha dado poder a l
Hijo del hombre, un poder decisivo sobre los hombres
ante él mismo. Dios, el Hijo del hombre, Jesús: ¿en qué
relación se hallan entre sí?
La acción salvadora de Jesús es hasta tal punto asun
to suyo, que si bien Lucas escribe: «El Hijo del hombre
también se declarará en favor suyo delante de los ángeles
Dios», en cambio no escribe que el Hijo del hombre ne
gará al que no se haya declarado en favor de Jesús. Se
dice impersonalmente. También él será negado. La senten-
348
hombre entre hombres, es Hijo del hombre en humildad.
El que sólo le juzga con sus capacidades puramente hu
manas y sólo lo ve como hombre, es posible que no sea
consciente de su transgresión al ultrajar a Jesús, Hijo del
hombre . Dios le perdonará . Cuando va a morir Jerús ora:
«Padre, perdónalos, pues no saben lo que hacen» (23,34).
En cambio, no se perdonará a l que b l as f em e con tra e l
Espír i tu Santo. Un discípulo que ha reconocido a Jesús
como el Hijo del hombre (exaltado), blasfema contra el Es
píritu si niega a Jesús o se separa de él. En efecto el
Espíritu Santo es el que ha causado en él la confesión de
que Jesús es el Hijo del hombre, al que Dios da todo po
der. El que así armado con el Espíritu dice una palabra
contra Jesús, ése ultraja al Espíritu Santo. Este pecado
no se perdona. El perdón de los pecados y la salvación
sólo pueden lograrse mediante la fe en Cristo.
Acerca del Espíritu Santo se dice también una pala
bra estimulante. Cuando por causa de su fe comparezcan
349
los discípulos
unte
los tribunales
judíos y paganos ,
el Es
píritu Santo se encargará de cómo hayan de defenderse.
En este caso, el discípulo no dirá nada ofensivo para Je
sús,
sino que más bien dará un testimonio en el que res
plandezca la gloria de Cristo. Jesús promete para ese caso
la asistencia del Espíritu Santo. Él enseñará a los discípu
los lo que conviene decir
8 8
.
El discípulo confiesa su fe delante del Dios trino:
delante de Dios Padre, del Hijo del hombre y del Espí
ritu Santo. Lo imponente y tremendo del Dios trino se
halla delante de él, pero también su virtud confortadora.
La dignidad del discípulo se hace visible en lo serio de la
responsabilidad que pesa sobre él, pero también en la so
licitud de que es objeto por parte de Dios.
El derecho sucesorio judío estaba regulado por la ley
mosaica. Se supone una situación agrícola, en la cual el
hermano mayor hereda los bienes raíces y dos tercios de
los bienes muebles (Dt 21,17). En el caso que se propone
a Jesús, parece ser que el hijo mayor no quiere entregar
absolutamente nada. Dado que el derecho sucesorio estaba
regulado por la ley, fácilmente se recurriría al dictamen
y a la decisión de los doctores de la ley. El hombre del
pueblo acude a Jesús, al que trata como a doctor de la
ley, a fin de que en el asunto de su herencia dé un dicta
men y con su autoridad ejerza influjo sobre su hermano
injusto. Jesús es considerado como acreditado doctor de
la ley, que se presenta y actúa con autoridad.
Cuando el pueblo acude a Jesús con sus miserias del
cuerpo y del alma, lo halla dispuesto a socorrerle. En cam
bio,
el hombre que se presenta con su pleito hereditario
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 176/190
b)
Desap ego de los bienes (12,13-21).
El hombre no deja de ser hombre por el hecho de seguir a
Cristo; como hombre, está amenazado por la preocupac.'ón por
los bienes de la tierra. Por eso el discípulo de Jesús debe adoptar
la debida posición frente a estos bienes. Jesús se niega a hacer
de arbitro en una cuestión de repartición de herencia (12,13-14),
pone en guardia contra la avidez y la codicia (12,15) y con una
parábola muestra cómo se asegura verdaderamente la vida (12,
16-21).
13
Díjole un o de la mult itud: Mae stro, dile a mi her
mano que reparta conmigo la herenc ia .
14
Pero é l le con
testó:
¡Hombre ¿Quién me ha con st ituido juez o partidor
entre vosotros?
88 . Act 4 ,8ss; 5 ,29ss; 7 ,55ss; cf . 2Tim 4, 16s: «En la pr imera vista
de mi causa nadie se presentó a favor mío, sino que todos me abando
naron . ¡Que no se les tome en cuenta Pero el Señor me asistió y me dio
fuerzas , de tal manera que por medio de mí la proclamación quedó plenamente
realizada y llegó a oídos de todos los gentiles, y yo mismo fui rescatado de
las fauces del león.»
350
tropieza con una repulsa.
¡Hombre
Aquí esta palabra
suena áspera y dura. Jesús no quiere ser juez ni arbitro
en los asuntos de los hombres. Las palabras con que lo
expresa traen a la memoria las que fueran respondidas
a Moisés cuando quiso dirimir una querella entre dos he
breos: «¿Y quién te ha puesto a ti como jefe y juez entre
nosotros?» (Éx 2,14). En su obrar se inspira Jesús en las
decisiones expresadas por la palabra de Dios en la Sa
grada Escritura. La palabra de la Escritura le muestra
también los inconvenientes que tiene el constituirse arbitro
en tales asuntos.
Con su palabra se niega Jesús a intervenir para poner
orden en las condiciones perturbadas de este mundo y a
decidir con su autoridad en favor de este o del otro orden
social. Su misión y la conciencia de su vocación que le
da la voluntad de Dios, la dejó ya bien establecida reite
radamente al comienzo de su actividad en Nazaret y to
davía antes en la tentación en el desierto. Ha sido en-
351
viado para anunciar a los pobres el Evangelio, para
llamar a los pecadores (5,32), para salvar a los que esta
ban perdidos (19,10), para dar su vida en rescate (Me
10.45).
para traer al mundo la vida divina (Jn 10,10).
15
E n tonce s l e s d i jo : G u ard aos m u y b i en d e tod a av i
d ez , p ues no p or e s tar uno en l a ab und anc i a , d ep end e su
v i d a d e l o s b i enes q ue p osee .
Toda ansia de aumentar los bienes es enjuiciada como
un peligro del que han de guardarse bien los discípulos.
E l
ans i a d e p oseer
descubre la ilusión de creer que la
vida se asegura con los bienes o con la abundancia de los
mismos. La vida es un don de Dios, no es fruto de la
posesión o de la abundancia de bienes de la tierra y de
la riqueza. De hecho, no es el hombre el que dispone
gura con los bienes. El rico labrador revela su ideal de
vida en el diálogo que entabla consigo mismo: vivir es
disfrutar de
la
vida:
com er ,
beber y pasarlo bien;
vivir
es disponer de una larga vida: p ara m uch os añ os ; vivir es
tener una vida asegurada: ah ora d escansa . ¡Ética del bien
estar ¿Cóm o puede alcanzarse este ideal de vida? A l m a
cenaré : hay que asegurar el porvenir . Varían las formas
de esta seguridad. El labrador edifica graneros. ¿El mo
derno hombre de negocios. . .? La economía de este labra
dor no tiene otro sentido que el de asegurar la propia vida.
La entera forma humana de proyectar flaquea. El
hombre no tiene en su mano la vida como dueño y señor.
No puede contentarse con hablar consigo mismo: Dios
interviene también en el diálogo. Este hombre debería
también tra tar con otros hombres, pero le importan tan
poco como Dios mismo. El hombre es i n sensa to si piensa
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 177/190
de la vida, sino Dios.
16
Lu ego les di jo esta parábola: Un hombre muy r ico
ten ía una f i nca q ue l e d i o una gran cosech a .
ll
Y discurría
p ara s í d e e s ta form a: ¿ Q ué voy a h acer s i y a no t engo
d ó nd e a l m acenar m i s cosech as?
18
Y añadió: Vo y a ha cer
esto: derribaré mis graneros para edi f icar otros mayores;
así podré almacenar al l í todo mi tr igo y mis bienes.
19
Y
diré a mi a lma: Alma mía, ya t ienes muchos bienes a lma
cenad os p ara m uch os añ os ; ah ora d escansa , com e , b eb e
y pásalo bien.
20
E n tonce s l e d i jo D i os : ¡ Insensa to E s ta
m i sm a noch e t e van a rec l am ar tu a l m a; y tod o l o q ue
has preparado, ¿para quién va a ser?
2 1
A s í su ced erá co n
aq ue l q ue a t e sora r i q uezas p ara s í , p ero no s e h ace r i co
ante Dios.
La narración de un ejemplo presenta gráficamente lo
que se ha expresado con la sentencia: la vida no se ase-
352
así, como si la seguridad de su vida estuviera en su mano
o en sus posesiones. El que no cuenta con Dios, práctica
mente lo niega, y es insensato (Sal 14,1). Que nuestra
vida no se asegura con la propiedad y con los bienes lo
pone al descubierto la muerte. T e van a rec l am ar tu a l m a:
los ángeles de la muerte, Satán por encargo de Dios.
¡Esta misma noche El rico había contad o con mu chos
a ños . . .
La riqueza que el hombre acumula para sí, con la
que quiere asegurarse la existencia terrena, no le aprove
cha nada. Tiene que dejársela aquí, en manos de otros.
«Muévese el hombre cual un fantasma, por un soplo
solamente se afana; amontona sin saber para quién»
(Sal 39,7). Sólo el que se hace rico ante Dios, el que
acum ul a t e soros q ue D i os reconoce
como verdadera ri
queza
del hom bre, saca provecho. "El querer el hom bre
asegurar nerviosamente su vida por sí mismo lleva a
perder la vida, sólo la entrega a Dios y a su voluntad
353
NT, Le I. 23
la preserva. ¿Cuáles son los tesoros
qu e
se acumulan con
vistas a Dios?
c ) Confianza en Dios (12,22-34).
22
Lueg o d i jo a su s d i s c íp u l os : P or e so o s d i go: N o
os afané is por la v ida; qué vais a comer; n i por vuestro
cuerp o: con q ué l o va i s a ve s t i r .
23
P orq ue l a v i d a va l e m á s
que e l a l imento y e l cuerpo más que e l vest ido.
24
Fi jaos en
l o s cuervos : no s i em b ran n i s i egan , n i t i enen d esp ensa
ni granero; s in embargo. Dios los a l imenta. ¡Cuánto más
va l é i s voso tros q ue l a s ave s
25
¿Quién de voso tros, po r
m uch o q ue s e a jane , p ued e añ ad i r una h ora a su ex i s t en
c i a?
26
Pues, s i n i s iquiera lo mínimo podéis , ¿por qué
a fanaros p or l o d em á s?
21
Fijaos en los l ir ios: cómo ni h i
En esta armazón fundamental se insertan motivos que
pueden librar de la preocupación angustiosa y calmar la
búsqueda inquieta. Se habla del cuervo y de las flores
del campo con todo su esplendor. El ojo «sano» y puro
de Jesús (cf. 11,34) descubre a Dios en los pájaros y en
las flores y en todo reconoce su solicitud y su amor. En
la última estrofa no se habla ya de Dios, sino del Padre,
que sabe lo que nos hace falta.
Para el rico significan los bienes un gran peligro: el
de olvidar a Dios y de vivir sólo para conservar y acre
centar la riqueza, en la que ha cifrado su seguridad. Pero
también el pobre está amenazado. Su preocupación es su
sustento cotidiano. Uno y otro, el rico y el pobre, están
expuestos al peligro de dejarse absorber por el cuidado
de las cosas de la tierra y dejar a un lado el cuidado más
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 178/190
l an n i t e j en . P ero y o o s d i go: n i S a l om ó n en tod o su
esp l end or s e v i s t i ó com o uno d e e l l o s .
28
Pues s i Dios v is te
así , la h ierba que hoy está en e l campo y mañana se echa
al horno, ¡cuánto más hará por vosotros, hombres de poca
fe
29
Igualme nte, no andéis busca ndo qu é habéis de co mer
y de beber; no os inquieté is por eso.
30
P ues tod as e sas
cosas b uscan ans i o sam ente l o s p aganos d e l m und o; p ero
vuestro Padre sabe bien que tené is neces idad de e l lo .
31
E n cam b i o , b uscad su re i no , y e s ta s cosa s s e o s d arán
por añadidura.
El hombre conserva su vida, no gracias a sus pose
siones, sino con la ayuda de Dios. Hasta qué punto esta
frase libera y da satisfacción, se expresa por medio de
un poema didáctico en tres estrofas. La primera y la
segunda estrofa tratan de librar al hombre de la preocu
pación angustiosa, la tercera tiene por objeto orientar
hacia el debido fin la búsqueda y las ansias del hombre.
354
importante, el de buscar el reino de Dios. En estas pa
labras habla Jesús de una preocupación que desasosiega,
que se apodera completamente del hombre, que procede
de la ilusión de creer que el hombre puede asegurar su
vida con los bines de la tierra. La frase decisiva, según
la cual se ha de entender el poema entero, se halla en el
versículo 10 31: b uscad e l r e i no , y e s ta s cosas s e o s d a
rán por añadidura. En Mt se dice: «Buscad primera
mente el reino.» Ésta es la redacción destinada al pueblo.
Lucas, en cambio, suprime el primeramente, pues escribe
para los discípulos, que siguiendo a Cristo deben renun
ciar a toda posesión, a fin de estar completamente libres
para escuchar la palabra de Jesús y proclamar su men
saje (10,4).
La preocupación por las cosas de la tierra no debe
hacer olvidar la búsqueda del reino de Dios. Por eso Dios
mismo se encarga de que el hombre no se deje dominar
por la solicitud por la subsistencia. Jesús proclama la
providencia paternal de Dios. Lo que dice Jesús se com-
355
prende fácilmente, pero estas palabras sólo se pueden
vivir si sé creen. Los hombres de poca fe no lo compren
den ni se aventuran a ello. En la primera estrofa hay dos
razones que tienen por objeto librar de la preocupación
afanosa por la comida, la bebida y el vestido. Nosotros nos
preocupamos por el alimento y por el vestido, pero no te
nemos en nuestra mano la vida a que deben servir estas
cosas.
Los cuervos, que eran tenidos por pájaros impuros
por los judíos (Lev 11,15; Dt 14,14) y de los que se
decía que son los animales más abandonados de la tierra,
pues son descuidados hasta por sus mismos padres (Sal
147,9; Job 38,41), son alimentados por Dios sin que ellos
mismos tomen medidas preventivas. ¿No se cuidará Dios
mucho más del hombre, que al fin y al cabo vale más
que un cuervo?
También la segunda estrofa, que habla dos veces de
existencia terrena fuera independiente de Dios y sólo el
hombre debiera cuidar de ella.
La tercera estrofa no habla ya de preocupaciones afa
nosas, sino del buscar, del empeño desasosegado, de una
vida suspendida entre el temor y la esperanza. Lo que
ha de buscar el discípulo de Cristo no debe ser la co
mida y la bebida.
L o s pa g a n o s
tienen esa preocupación.
En ellos se comprende, pues no creen en el Padre, que
cuida de los discípulos, que son sus hijos. Los paganos
no tienen conocimiento de las promesas de Dios, por lo
cual se preocupan por la vida de la tierra. El discípulo
conoce una preocupación mayor, la del reino de Dios,
que es lo único que busca.
Jesús quiere dar a Dios y a su reino la preferencia
ante todas las cosas y librar al hombre de la preocupación
agobiante que atormenta al que piensa que sólo puede y
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 179/190
las preocupaciones afanosas, quiere inducir al abandono
de Jas preocupaciones y a Ja confianza en Ja
prov idenc ia
de Dios
m ediante la consideración d e. la propia vida y
de la naturaleza. Por., muc ho cu idado que pong a el hom
bre, no puede prolongar su vida (o aumentar su estatura).
Quizá sea la frase deliberadamente ambigua; en todo caso
es una verdad escueta, que todos tenemos que reconocer. Si
nosotros no podemos modificar lo más mínimo la duración
de nuestra vida, o nuestra estatura, ¿por qué nos preo
cupamos tanto por lo demás, por la comida y por el vesti
do , que son mucho menos que la duración de la vida o
que la estatura? Los espléndidos lirios en las praderas de
Galilea son testigos luminosos de la magnánima solicitud
de Dois. El fasto del «rey sol» de Israel queda muy por
debajo del esplendor de las flores, y sin embargo, las
flores del campo no son sino pobres hierbas. El que se
preocupa angustiosamente por su subsistencia, carece de
fe ; cree en la providencia divina, pero vive como si la
356
debe asegurar su existencia humana. Los discípulos de
Jesús, que viven del Evangelio, saben que
n o s e l e s g a r a n
tiza
una vida sin fatiga, una jauja, si buscan sólo el reino
de Dios. También los santos pasaron hambre y sufrieron
fatigas y necesidad (2Cor ll ,23ss). Cualquier cosa que
Dios disponga sobre el discípulo, siempre viene del Padre,
que quiere darle lo más grande de todo, el reino, en el que
está contenida la plenitud de las bendiciones.
32
No temas , pequeño rebaño: que vues tro Padre ha
ten ido a bien daros e l re ino .
El grupo de los discípulos es un pequeño rebaño. El
pueblo de Dios de los últimos tiempos se compara con
un rebaño. A pesar de su pequeño número, de su insigni
ficancia, de su impotencia y de su pobreza, ha de recibir
de Dios el reino, el poder y el señorío sobre todos los
reinos. Porque es el pueblo santo del Altísimo (Dan 7,27).
357
Este pequeño rebaño vive en el amor de Dios, que es
su Padre. Por el designio de Dios, que tiene su más pro
funda y única razón en el beneplácito de Dios, este pe
queño rebaño está llamado a lo más grande. Jesús dijo
que el reino debe ser la única preocupación del discípulo;
pero tampoco esta preocupación ha de ser angustiosa.
No temas. El amor eterno del Padre asegura el reino a los
discípulos. «¿Qué me separará del amor de Dios, mani
festado en Cristo Jesús?» (Rom 8,39). La seguridad de
la vida está en manos del Padre, en su beneplácito, en
su amor: Paz a los hombres, objeto del amor de Dios.
33
Vended vue stros biene s para darlos de l imosna .
H aceos d e b o l sas q ue no s e d esgas tan , d e un t e soro i na
go tab l e en l o s c i e l o s , d ond e no h ay l ad ró n q ue s e acerq ue
n i p o l i l l a q ue corroa .
34
Porque do nde está vuestro tesoro,
ha expuesto mucho por el reino de Dios, piensa en el
reino de Dios. El que tiene su tesoro y su riqueza en
el cielo, está en el cielo con su corazón y con sus anhelos.
Para quien mediante limosnas se procura un tesoro en el
cielo,
el reino de Dios representa el centro de su vida.
d) Vigilancia y fidelidad (12,35-53).
El discípulo de Jesús tiene la mira puesta en la venida de su
Señor. En la época en que Lucas escribía su Evangelio, no espe
raban ya los cristianos la próxima venida de Jesús, sino que con
taban ya con espacios más largos de tiempo. Entre el tiempo de
la acción salvífica de Jesús y su venida gloriosa transcurre el
tiempo de la Iglesia. Los cristianos que viven en este tiempo
de la Iglesia miran retrospectivamente a la vida de Jesús en la
tierra, y prospectivamente a su futura manifestación. Las pre
ocupaciones fundamentales del tiempo final del cristiano que
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 180/190
al l í es tará también vuestro corazón.
Ha quedado pendiente la cuestión de cómo han de
atesorarse riquezas con vistas a Dios (12,2f) . V end ed vues
tros bienes
y con lo que obtengáis dad limosna, con lo
cual acumularéis un tesoro en el cielo. Este tesoro no se
pierde. De él no se puede decir: Todo lo que has pre
parado, ¿para quién va a ser? El arca no será agujereada
ni agrietada, el tesoro mismo no disminuye, no está ex
puesto a ladrones y a fuerzas destructoras. Lo que ame
naza los tesoros de la tierra, el dinero, los vestidos pre
ciosos y cosas semejantes, no puede dañar al tesoro del
cielo. Lo que hace el hombre con vistas a Dios, no se
pierde; una vida que se ha vivido con la mira puesta en
Dios se convierte en vida eterna.
El hombre tiene el corazón apegado a aquello por lo
que ha aventurado mucho. El que ha vivido con la mira
puesta en Dios, tiene el corazón puesto en Dios; el que
358
aguarda la pronta venida de Cristo, no deben faltar tampoco al
cristiano que vive en el tiempo de la Iglesia, puesto que nadie
sabe cuándo vendrá el Señor. Lucas habla de algunas de estas
actitudes fundamentales: el cristiano debe ser vigilante (12,35-40);
en particular, los dirigentes de la Iglesia son exhortados a la fide
lidad (12,41-48). Como el tiempo de la primera venida de Cristo
fue un tiempo de decisión, asi también el cristiano debe concebir
su vida como decisión por la voluntad de Dios (12,49-53).
35
T ened b i en ceñ i da l a c i n tura y encen d i das l a s l á m
p aras
3 6
y sed com o l o s q ue e s tá n e sp erand o a q ue su
señor regrese del banquete de bodas, para abrir le inme
d i a tam ente cuand o vue l va y l l am e .
37
D i ch osos aq ue l l o s
cr i ad os a q u i enes e l s eñ or , a l vo l ver , l o s encuen tre ve
lando. Os lo aseguro: é l también se ceñirá la c intura, los
h ará p onerse a l a m esa y s e acercará a s erv i r l o s .
3 8
F a u n
s i l l ega a l a s egund a o a l a t e rcera v i g i l i a d e l a noch e , y
l o s encuen tra a s í , ¡d i ch osos aq ue l l o s
39
E n tend ed b i en
es to : s i e l d ueñ o d e casa sup i era a q ué h ora va a l l egar
359
el ladrón, no dejaría perforar su casa.
40
Estad también
voso tros p rep arad os , q ue a l a h ora en q ue m enos l o p en
sé is vendrá e l Hijo del hombre.
Los discípulos deben estar en vela y preparados para
la venida de Jesús, cuya hora nadie conoce. Una imagen
de tales disposiciones se halla en un criado que aguarda
a su señor, que ha de volver de un banquete de bodas a
alguna hora de la noche. Cuando llame el señor, deberá
estar ya el criado a la puerta para abrir , dejar pasar y
conducir al señor a su casa. Para esto está allí el criado
y lleva la túnica recogida; como cuando se está de cami
no, se trabaja o se combate, tiene ceñida la c intura y sos
tiene en la mano una l á m p ara encend i d a . Si no llevase la
túnica recogida no podría ir prontamente a la puerta, y
si tuviera que ir primero a buscar la lámpara y encen
tos constantemente. El ladrón cava un corredor debajo
de las paredes de la casa que se levanta sobre la tierra
sin cimientos. Si el dueño de la casa supiera cuándo va
a venir el ladrón, impediría la perforación. Si el discípulo
de Cristo supiera exactamente cuándo va a venir el Señor,
se prepararía para salirle al encuentro. Nosotros sabe
mos con seguridad que el Señor ha de venir , pero no
sabemos cuándo. ¿Qué se sigue de esto?
41
Dijo en tonce s Pedro: Señor, ¿a quién dir iges esta
p ará b o l a: a noso tros o a tod os?
42
El Señor con testó:
Quién es , pues, e l adminis trador f ie l
y
sensa to , a q u i en
el Señor pondría a l frente de sus cr iados, para darles la
ración de tr igo a su debido t iempo?
43
D i ch oso aq ue l c r i a
d o a q u i en su s eñ or , a l vo l ver , lo encuen tra h ac i énd o l o
así .
M
De verdad os digo: lo pondrá al frente de todos sus
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 181/190
derla , pondría de mal humor a su señor . Esto, aplicado
al discípulo, significa que a cada momento debe estar
equipado moralmente de tal forma que pueda inmedia
tamente acudir a la llamada del Señor cuando venga a juz
gar, que debe ser claro y luminoso como el sol y sin
tropiezo moral, cargado de frutos de justicia por Jesu
cristo, para gloria y alabanza de Dios (Flp l,10s).
El discípulo que está pronto es felicitado, es llamado
dichoso por Jesús. Entre dos bienaventuranzas se ex
presan los bienes que aguardan al siervo que está siempre
en vela, incansable y fiel. El Señor le serv i rá a l a m esa
(22,27). Cambio completo de la situación: el siervo es
señor, y el Señor es siervo. Dios hace participar de su
gloria a los que velan. La gloria del reino de Dios se com
para con frecuencia con un banquete de bodas, que Dios
prepara para los que acoge en su reino. Dios honra a los
invitados sirviéndolos y les da participación en su gloria.
Una tercera pareja de sentencias exhorta a estar pron-
360
b i enes .
4S
Pero s i a quel cr iado di jera pa ra s í: Mi señor
está tardando en l legar, y se pusiera a pegar a los cr iados
y a las cr iadas, a comer y a beber y a em b r i agarse , ** l le
gará e l s eñ or d e e se cr i ad o e l d ía q ue m enos l o e sp era y a
la hora en que menos lo piensa, lo part irá en dos y le
as i gnará l a m i sm a suer te q ue a l o s d es l ea l e s .
47
Aquel cr ia
d o q ue , h ab i end o conoc i d o l a vo l un tad d e su s eñ or , no
preparó o no actuó conforme a esa voluntad, será cast i
gad o m uy severam ente .
48
E n cam b i o , e l q ue no l a cono
ció, p ero h i zo cosas d i gnas d e cas t i go , s erá cas t i gad o
con m enos s ever i d ad . P ues a aq ue l a q u i en m uch o se l e d i o ,
m uch o se l e h a d e ex i g i r , y a l q ue m uch o se l e h a con
f iado, mucho más se le ha de pedir .
Pedro es portavoz del grupo de los discípulos. Como
tal lleva también su nombre de oficio, Pedro, piedra.
Con su pregunta distingue entre los discípulos y el pue
blo .
Los apóstoles tienen una posición particular en la
361
casa de Jesús, en su comunidad, pero también tienen una
responsabilidad particular. La posición responsable de los
jefes en la Iglesia se considera con vistas a la venida del
Señor como juez: «A los presbíteros que están entre
vosotros, exhorto yo, presbítero como ellos, con ellos
testigo de los padecimientos de Cristo y con ellos parti
cipante de la gloria que se ha de revelar: Apacentad el
rebaño de Dios que está entre vosotros.. . Y cuando se
manifieste el jefe de los pastores, conseguiréis la corona
inmarchitable de la gloria» (IPe 5,1-4).
Lo que se exige a los apóstoles se expresa con una
parábola. El Señor de una casa está ausente, lejos. Du
rante el tiempo de su ausencia encarga a un capataz que
cuide de atender con justicia y puntualidad a la servi
dumbre. Para este cargo se requiere fidelidad y sensatez:
fidelidad porque el capataz sólo es administrador, no se
presente la venida del Señor, si cuentan con que el Señor
puede venir a cada momento, si no olvidan que tienen
que rendir cuentas al Señor.
La tentación puede consistir para el administrador en
que se diga: El Señor está tardando, todavía no viene.
Los instintos egoístas y los impulsos del capricho le se
ducen llevándolo a la infidelidad. Lucas parece haber
dado a esta observación sobre la tardanza del Señor una
importancia mayor de la que tenía en la redacción origi
naria de la parábola. Es posible que en la época en que
vivía Lucas más de una autoridad en la Iglesia dejara
que desear tocante a la fidelidad, a la vigilancia y a la
sensatez, diciéndose: el Señor está tardando. La venida
del Señor en un plazo próximo no se había cumplido.
Entonces se pensaba: A lo mejor ni siquiera viene. El
hecho de que Jesús ha de venir es cierto. Cuándo ha de
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 182/190
ñor, por lo cual debe obrar conforme la voluntad del señor;
sensa tez , porque no debe perder de vista que el señor
puede venir de repente y pedirle cuentas. Si este capataz
obra con conciencia, es felicitado, pues el señor quiere
encomendarle la administración de todos sus bienes. Si,
en cambio, obra sin conciencia e indebidamente, maltrata
a la servidumbre y explota su posición de manera egoísta
para llevar una vida sibarítica, le espera duro castigo.
Según la usanza persa, se le parte el cuerpo con una
espada .
La interpretación de la parábola, tal como la entendía
Lucas, se desprende ya de la descripción del cuadro. El
criado es administrador. Los apóstoles están al frente de
la casa del Señor y llevan las llaves (11,52). «Que los
hombres vean en nosotros servidores de Cristo y admi
nistradores de los misterios de Dios» (ICor 4,1). En el ad
ministrador se busca «que sea fiel» (ICor 4,2). Los após
toles se comportarán con fidelidad y prudencia si tienen
362
venir , es cosa que se ignora. Con la venida de Jesús está
asociado el juicio, en el que cada cual ha de rendir cuen
tas de su administración. En comparación con la certeza
de que ha de venir el Señor y de los bienes que aportará
su venida, pasa a segundo término el conocimiento de la
fecha exacta de su venida. Al Evangelio no le interesa
precisamente la descripción de los hechos del tiempo final,
sino la certeza de que han de tener lugar. Los dirigentes
de la comunidad no deben ceder a la tentación por el
retraso de la parusía.
Al siervo fiel y prudente se le pone al frente de todo
lo que posee el Señor. La gloria del tiempo final consiste
en una actividad intensificada, en un reinar juntamente
con el Señor. En cambio, el siervo malo es castigado;
se le asignará la misma suerte que a los desleales: será
entregado a las penas del infierno.
¿Nos dices esta parábola a nosotros o a todos? Así
había preguntado Pedro, porque pensaba que los apóstoles
363
tenían la promesa segura y que no estaban en peligro.
Había oído lo que había dicho el Maestro sobre el pe
queño rebaño, al que Dios se había complacido en dar el
reino.
También el apóstol debe dar buena cuenta de sí
con fidelidad y sensatez, si quiere tener participación en
el reino. También para él existe la posibilidad de castigo.
La sentencia depende de la medida y gravedad de la
culpa, del conocimiento de la obligación, y de la respon
sabilidad. Los apóstoles han sido dotados de mayor co
nocimiento que los otros, por lo cual también se les
exige más y también es mayor su castigo si se hacen cul
pables . El que no habiendo conoc ido la vo luntad de l
Señor
hace algo que merece azotes, recibirá menos golpes.
No estaba iniciado en los planes y designios del Señor,
y por ello no será tan severa la sentencia de castigo. Pero
será también alcanzado por el castigo, aunque menos,
hija , y la hi ja contra la madre; la suegra contra la nuera ,
y la nuera contra
la suegra.
Jesús aportó el tiempo de salvación. ¿Qué se puede
percibir de esto? El tiempo de salvación se anuncia como
tiempo de paz; el Mesías es portador de paz. ¿Qué se
ha producido en realidad? Falta de paz, discordia hasta
en las mismas familias. Los discípulos no deben, sin em
bargo, perder la cabeza. El tiempo que se ha inaugurado
con Jesús es en primer lugar tiempo de decisión. Jesús
tiene que cumplir una misión que le ha sido confiada por
Dios. La misión reza así: Echar juego sobre la t ierra ,
traer el Espíritu Santo con su fuerza purificadora y re
novadora
S9
. Jesús tiene ardiente deseo de que se veri
fique este envío del Espíritu. Pero antes debe él
ser bauti
zado con un baut ismo,
debe pasar por sufrimientos que
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 183/190
pues al fin y al cabo conocía cosas que hubiera debido
hacer , pero no las ha hecho. Todo hombre es considera
do punible, pues nadie ha obrado completamente confor
me a su saber y a su conciencia. La medida de la exi
gencia de Dios a los hombres se regula conforme a la
medida de los dones que se han otorgado a cada uno.
Todo lo que recibe el hombre es un capital que se le con
fía para que trabaje con él.
49
Fuego v ine a echar sobre la t ierra . ¡Y cuánto de
sear ía que ya es tuv iera ardiendo
50
T e n g o u n ba u ti s m o
con que he de ser baut izado. ¡Y cuánta es mi angus t ia
has ta que es to se cumpla
51
¿Pensáis que he ven ido a po
ner paz en la t ierra? Nada de eso
—
o s lo d ig o y o
— ,
s ino discordia .
52
Porque desde ahora en a de lante , en una
casa de c inco personas , e s tarán en discordia t res contra
dos y dos contra tres:
53
e l padre es tará en discordia con
tra el hijo, y el hijo contra el padre; la madre contra la
364
lo azoten como oleadas de agua. Está penetrado de an
gustia hasta que se cumpla la pasión mortal. La agonía
de Getsemaní envía ya por delante sus mensajeros. La
salvación del tiempo final no viene sin los trabajos de la
pasión. El ansia por salvarse debe infundir ánimos para
soportar las angustias de la pasión. La elevación al cielo se
efectúa a través de la cruz. Jesús está en camino hacia
Jerusalén, donde le aguarda la gloria que seguirá a la
muerte .
El Mesías es anunciado y esperado como portador de
paz. Es el príncipe de la paz; su nacimiento trae paz a los
hombres en la t ierra
9 0
.
L a p a z
es salvación, orden, unidad.
Ahora bien, antes de que se inicie el tiempo de paz y de
salvación hay falta de paz, división y discordia, incluso
donde la paz debería tener pr incipalmente su asienta El
profeta Miqueas se expresó con las palabras siguientes
89 . Se dan muy r ana das exp l icaciones del v . 49 .
90. Is 9 ,5s; Zac 9 ,10; Le 2 ,14; Ef 2 ,14ss .
365
acerca del t iempo de infortunios y discordias que ha de
preceder al tiempo de salvación: «El hijo deshonra al
padre ,
la
hija
se
alza contra
la
madre ,
la
nuera contra
la suegra,
y los
enemigos
son sus
mismos domésticos.
Mas
yo esperaré en Yahveh, esperaré en el Dios de mi salva
ción,
y mi
Dios
me
oirá»
(Miq
7,6s). Ahora tiene lugar
la división. Acerca
de
Jesús
se
dividen
las
familias, acer
ca
de él
deben decidirse
los
hombres (2,34). Esta división
y separación es señal de que han comenzado los aconteci
mientos finales,
que a
cada cual exigen decisión.
7. LLAMAMIENTO A LACONVERSIÓN (12,54-13,21).
Jesús
se
dirige ahora
a las
multitudes,
ya no a los
discípulos.
Si los discípulos estaban en peligro de desconocer la importancia
por donde
se
halla
el mar, se
piensa acer tadamente
que
va
a
llover;
si
sopla viento
del sur, de la
par te
del
desierto,
se concluye
que va a
hacer calor.
El
per íodo
de
tiempo
que ofrece ahora Dios en el transcurso de los t iempos,
tiene también
sus
señales:
el
pueblo acude
en
masa
a
Jesús,
éste habla
con
autor idad
de
profeta,
se
expulsan
demonios, se practican curaciones maravil losas . . . El pue
bl o
que,
acerca
del
tiempo
y de
todo
lo que
sucede sobre
la
haz de la
tierra
y en el
firmamento, tiene penetrante
fuerza de observación y se forma un juicio exacto acerca
del significado de los acontecimientos, carece de este
juicio cuando
se
trata
de
acontecimientos concernientes
a Jesús
y a la
salvación.
Ni
siquiera
se
toma
la
molestia
de verificar el significado del t iempo. Los hombres son
hipócritas.
Saben interpretar también estas señales, pero
hacen como
si no las
entendieran.
No
quieren interpretar
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 184/190
y el signiñcado del tiempo (12,52), mucho más lo está todavía
el pueblo.
Las
señales
que
acompañan
al
tiempo
de
Jesús deben
interpretarse rectamente (12,54-59). Lo que tiene lugar en este
tiempo, exige a todos conversión (13,1-9). Este tiempo es tiempo
de salud
que
comienza
sin
aparato
y
ocultamente, pero
que en
el futuro tendrá dimensiones arrolladuras (13,10-21).
a )
Señales
del
tiempo (12,54-59).
54
Decía también
a las
mult i tudes: Cuando ve is
que
u n a n u b e
se
levanta
por
poniente ,
en
segu ida dec í s :
Va
a l lover ,
y así
s u c e de .
55
C u a n do s o p la
el
v ien to
sur, de
cís:
Va a
hacer ca lor ,
y lo
ha c e .
56
¡Hipócritas Sabéis
aprec iar
el
aspec to
de la
tierra
y del
c ie lo; ¿cómo, pues ,
no aprec iáis
el
momento presente?
El pueblo,
al
observar
el
t iempo, sabe
muy
bien dis
tinguir
las
señales . Cuando asoma
una
nube
por
poniente ,
366
este tiempo como señalado
por
Dios para
la
decisión,
precisamente porque rehuyen el tomar decisión, no quie
ren convertirse, sino seguir
con su
vieja forma
de
vida.
La voluntad
les
impide juzgar.
57
¿Y por qué no
juzgáis también
por
vosotros mismos
lo
que es
justo?
58
C u a n do
vas,
pu e s ,
a
presentarte
al
magistrado
con tu
contrario, trata
de
arreglarte
con él
po r
el
c a m in o ,
no sea que te
arrastre hasta,
el
juez,
y
e l juez
te
entregue
al
ejecutor,
y el
e jecutor
te
meta
en
la
cárce l .
59
Te
digo
que no
saldrás
de
allí hasta
que
pa g u e s
el
ú l t imo cuadrante .
Es necesario examinar y enjuiciar rectamente el tiem
po ; éste es, en efecto, un tiempo de decisión, del que
depende el futuro. Quien no toma la debida decisión se
expone a perderse e ternamente . Choca que las gentes no
atr ibuyan por sí mismas, para su propio bien, toda su im-
367
portancia al debido enjuiciamiento de la hora presente.
¿Por qué no juzgáis? ¿Y por qué no obráis conforme al
recto juicio? Ahora es todavía posible ponerlo todo en
regla.
Una nueva parábola ayudará a juzgar rectamente del
tiempo y a hacer lo que es debido. Tú vas con tu con
trario a un proceso. Todavía existe la posibilidad de
negociar con él de recurrir a su bondad, de tratar de ga
narle la voluntad y así librarte de él. Una vez que ha
comenzado la vista de la causa, el pleito sigue su camino.
Todo procede automáticamente . Ya no t ienes manera de
influir . Lucas tiene presente el proceso judicial romano;
escribe para los paganos. Nadie ignora lo duro e inexora
ble del orden jurídico. Del magistrado pasa el acusado
ante el juez, del juez al ejecutor de la sentencia, del eje
cutor a la cárcel, y de la cárcel no sale hasta que haya
9 1
Mientras hablaba Jesús del significado de la hora
presente como de un tiempo de decisión fijado por Dios, se
presentaron algunos, probablemente galileos,
qu e
le re
f ir ieron cómo el procurador romano, Pila to , había man
dado degollar a algunos galileos en el atrio del templo
mientras ofrecían sacrificios. Acerca de este hecho no
tenemos información fuera del relato evangélico. Sin em
bargo, no parece imposible en la historia de la adminis
tración de Pilato. Los galileos propendían a la lucha, so
bre todo si estaban afiliados al partido de los celotas, que
querían imponer con la fuerza un cambio político. Pilato
era duro y cruel. La acción era tanto más horrorosa, por
cuanto la sangre de los sacrificantes se había «mezclado»
con la sangre de los sacrificios. La cruel ejecución de los
galileos tuvo lugar en una fiesta de pascua; en efecto,
debido al gran número de víctimas, los hombres mismos
inmolaban los corderos, cuya sangre derramaban los sacer
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 185/190
pagado el últ imo cuadrante . Lo único indicado en esta
situación es intentar la conciliación antes de llegar al
tribunal, y lograr así librarse del contrario.
b) Los acontecimientos invitan a la conversión (13,1-9).
1
E n aq ue l t i em po se presen taron unos p ara anun c i ar l e
l o d e l o s ga l i l eos , cuy a sangre h ab ía m ezc l ad o P i l o to con
la de los sacri f ic ios que e l los ofrecían.
2
Él les respondió:
¿Pensáis que eso s gal i leos , por haber sufr ido semejan te
suerte , eran más pecadores que todos los demás gal i leos?
3
N ad a d e e so
—
os l o d i go y o
— ;
p ero , s i no o s con
vert ís , todos pereceré is igualmente.
91 .
El texto or iginal dice lepton, la moneda más
pequeña
de aquellos
tiempos, equivalente 1/80 de denar io . El denar io
er a
el jornal corr iente de
un peón.
368
dotes sobre el altar . Las gentes estaban horrorizadas al
ver derramada sangre humana, profanados los sacrificios,
y a los romanos atentando incluso contra lo que estaba
consagrado a Dios.
Las gentes refirieron a Jesús lo sucedido, seguramente
porque pensaban que también él quedaría impresionado y
hasta quizá podría intervenir . Se preguntaban por qué
Dios había dejado matar a aquellos galileos mientras sa
crificaban y creían que la explicación estaba en que eran
pecadores y habían recibido el castigo que merecían sus
pecados. Los judíos decían: No hay castigo sin culpa;
las grandes catástrofes presuponen graves pecados. Jesús
enfoca el acontecimiento referido a la luz de su predica
ción acerca del sentido del tiempo presente. Aquí no niega
la conexión entre pecado y castigo. Lo que no es correcto
es concluir de este hecho que aquellos galileos castigados
hubieran sido más pecadores que los demás galileos. To -
369
NT, Le 1, 24
d os son p ecad ores , todos son reos del castigo de Dios.
Por eso todos tienen necesidad de convertirse y de hacer
penitencia si quieren librarse de la condenación que les
amenaza .
4
Y d e aq ue l l o s d i ec i och o so b re l o s cu a l e s cay ó l a to
rre de Si loé y los mató, ¿pensáis que eran más culpables
que todos los demás habitantes de Jerusalén?
5
N ad a d e
e so — o s l o d i g o y o — ; pero, s i no os convertís , todo s
pereceré is de la misma man era.
Tampoco de esta desgracia tenemos noticias extra-
evangélicas. La muralla sur de Jerusalén corría hacia el
este hasta la fuente de Siloé. Probablemente había allí
un torreón de la mural la . Podemos conjeturar que este
torreón se había derrumbado durante las obras de con
cluso todas las catástrofes que se producen en el tiempo
son una llamada a entrar dentro de nosotros mismos,
anuncian la necesidad de volverse a Dios. Es endureci
miento de los hombres el no convertirse a pesar de las
pruebas. «El resto de la humanidad, los que no fueron
exterminados por estas plagas, no se convirtieron de las
obras de sus manos, de modo que no dejaron de adorar
a los demonios y a los ídolos de oro, de plata, de bronce,
de piedra y de madera, que no pueden ver ni oir ni andar.
Y no se convirtieron de sus asesinatos, ni de sus male
ficios, ni de su fornicación, ni de sus robos» (Ap 9,20s).
6
E n tonces l e s p rop on ía e s ta p aráb o l a: U n h om b re
ten ía p l an tad a una h i guera en su v i ñ a; fue a b uscar f ru to
en e l l a , p ero no l o encon tró .
7
Dijo, pues, e l v iñador: Ya
h ace t re s añ os q ue e s toy v i n i end o a b uscar f ru to en e s ta
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 186/190
ducción de aguas ejecutadas por Pilato. Todavía se re
cordaba la catástrofe. En este suceso se trata de una
desgracia que no se debió directamente a intervención hu
mana. En tal caso era todavía más obvio pensar que se
trataba de un castigo de Dios. Jesús no niega el carácter
de castigo del accidente. Sin embargo, lo sucedido es un
aviso y un llamamiento a la conversión. Los dieciocho
habitantes de Jerusalén que habían sido víctimas de la
catástrofe no eran más culpables que los demás habitantes
de la ciudad.
Los acontecimientos de la época no son interpretados
por Jesús políticamente, sino sólo en sentido religioso. Da
do que Jesús está penetrado de la idea de que se ha ini
ciado el tiempo final, enjuicia el tiempo con normas pro
pias de los tiempos finales. Lo que sucede en el tiempo
es evocación del tiempo final, las catástrofes políticas y
cósmicas son señales de la catástrofe del tiempo final.
El tiempo final exige decisión, conversión, penitencia. In-
37
higuera y no lo encuentro. Córtala. ¿Para qué va a estar
ocupado inút i lmente e l terreno?
8
Dícele e l v iñador: Señor,
déjala todavía este año; ya cavaré yo en derredor de e l la
y le echaré est iércol ,
9
a ver s i da fruto e l año que v iene ;
de lo contrario, entonces la cortarás.
' En las viñas de Palestina se suelen plantar también
árboles frutales. Su cuidado, al igual que el de las cepas,
está confiado al viñador que está al servicio del dueño
de la viña. Las viñas eran lugar propicio y preferido para
las h i gueras ; por eso se explica que el propietario de la
viña espere frutos de la higuera. Sin embargo, tres años
había esperado en vano. Hay que arrancar el árbol que
absorbe inútilmente los humores de la tierra. Sin em
bargo, el hortelano quiere hacer todavía una última tenta
tiva bondadosa, a su árbol preferido quiere tratarlo con
preferencia. Si esta última prueba resulta inútil, entonces
se podrá arrancar ese árbol que no da fruto.
371
También esta parábola está destinada a interpretar el
tiempo de Jesús. Es el último plazo de gracia qu e el Hijo
de Dios recaba de su Padre. La elección de la imagen
evoca la acción de Dios en la historia de la salvación. Los
profetas habían comparado ya a
Israel
con una viña. «La
viña de Yahveh Sebaot es la casa de Israel, y los hom
bres de Judá son su plantío escogido» (Is 5,7). La histo
ria de la salvación ha alcanzado ahora su meta. El tiempo
final ha alboreado, el juicio amenaza, se ofrece la última
posibilidad de conversión, la acción de Jesús es el último
ruego dirigido a Dios para que tenga paciencia, es la úl
tima y fatigosa tentativa de salvación. El tiempo de Jesús
es la última posibilidad de tomar decisión causada por el
amor de Jesús. Su obra es intercesión por Israel y junta
mente acción infatigable encaminada a conducir a Israel
a la conversión.
c)
Se inicia la era de salvación 13,10-2 1).
10
Un sábado, e s taba é l enseñando en u na s inago ga.
11
Y prec isamente había una mujer que desde hac ía die
c iocho años t en ía una en fermedad por causa de un
espí
r i tu , y e s taba toda encorvada, s in poder enderezarse en
m a n e r a a lg u n a .
l2
Cuando la v io Jesús , la llamó junto a
sí y le dijo: Mujer, ya estás libre de tu enfermedad;
n
y
le impuso las manos . Inmediatamente se puso derecha,
y daba g lor ia a Dios .
u
El j e fe de la s inagoga, indignado
porque Jesús había curado en sábado, dir ig iéndose a l pue
blo, dec ía: Se is días hay a la semana para trabajar; venid,
pues , en e l los para ser curados , pero no prec isamente en
sábado.
l5
Pero el Señor le con testó: ¡Hipócritas ¿Aca so
cua lqu iera de vosotros , en sábado, no desata de l pesebre
su buey o su asno , para l levar lo a beber?
16
Pues en ton
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 187/190
Todo lo que tiene lugar en el tiempo de Jesús es
iluminado por el hecho salvjfico que se ha iniciado con
Jesús; todo: los hechos políticos, las catástrofes históri
cas, la acción de Jesús. El tiempo final ha llegado. Es la
oferta hecha por Dios para que se tome decisión, es in
vitación a la conversión y a la penitencia. Como Juan,
también Jesús predica que hay que hacer penitencia, que
no hay que dejarlo para más tarde, que hay que dar fruto
con el cambio de vida y con las obras. Jesús va más lejos
que Juan. Aunque sabe que el juicio se acerca y que va
a caer sobre Jerusalén la sentencia de destrucción; sin
embargo, interviene en favor de su pueblo, ofrece amor,
sacrificio y vida por Israel, a fin de que todavía se salve.
Jesús es intercesor en favor de Pedro (22,32) y de Is
rael (23,34).
372
ces ,
a és ta , que es hi ja de Abraham, a la que Satán ten ía
atada desde hace diec iocho años , ¿no había que desatar la
de es ta a tadura, aunque fuera en sábado?
n
Y mientras
él dec ía es to , todos sus adversar ios se sen t ían avergonza
dos;
pero e l pueblo en tero se a legraba de todas las mara
villas realizadas por él.
El tiempo de Jesús es un tiempo de decisión otorga
do por Dios: comienzo de la eterna perdición, comienzo
de la salvación eterna. La curación de la mujer encorva
da es señal del alborear del tiempo de salvación. En po
cos rasgos, pero con profundo sentido, se representa lo
que significa el
t iempo de Jesús .
Delante de Jesús, la gran
miseria: una mujer que lleva dieciocho años bajo el do
minio del mal espíritu, enferma, encorvada, sin posibili
dad de erguirse, completamente inclinada hacia la tierra,
sin dirigir la mirada hacia arriba. Jesús se enfrenta con
373
NT. le I . 24»
esta miseria: mira a la mujer lleno de compasión, la llama,
le dirige su palabra, le impone las manos. Con esto se es
boza todo lo que Jesús hacía siempre. La salvación albo
rea en esta muje r: ella se ve libre de las cadena s de Sa
tán y de la enfermedad, se yergue y cobra alientos, se ve
en libertad para glorificar a Dios. Lo que la primera apa
rición en la sinagoga había mostrado en forma progra
mática, se cumplió también ahora: «Proclamar libertad
a los cautivos y recuperación de la vista a los ciegos»
(4,18). La salud está aquí.
Pero el jefe de la sinagoga no conoce las señ a l e s d e l
t iempo.
Es uno de esos hipócritas que saben interpretar
correctamente las señales en la tierra y en el firmamento,
pero se hacen refractarios al alborear del tiempo de sal
vación y por eso no interpretan tampoco debidamente las
señales que se producen. Su interpretación de la ley, su
aferrarse encarnizadamente a la tradición humana, su inac
hombres la interpretación de la ley. Por eso dice también:
Hallaréis descanso para vuestras almas, porque mi yugo
es suave y mi carga ligera (Mt 11,28). El sábado se con
vierte en día de gozo para todo el pueblo. Es la fiesta de la
conclusión de la obra de la creación, la glorificación de
Dios en la consideración de lo que había sucedido. «Y
vio Dios que era muy bueno todo cuanto había hecho» (Gen
1,31). La obra de la creación halla su consumación en la
obra salvífica del tiempo final; en la acción salvífica
/
d e
Jesús se ha dado al sábado su más profundo sentido. E l
p ueb l o en tero s e a l egrab a d e tod as l a s m arav i l l a s que se
habían realizado en él. «Aún le queda al pueblo de Dios
un reposo sabático. Porque el que entra en el reposo
de Dios, también él descansa de sus obras, como Dios de
las suyas propias» (Heb 4,9-11). Al final no se halla el
juicio, sino la redención y salvación definitiva del hombre,
a condición de que quiera hacerse accesible al amor de
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 188/190
cesibilidad al amor y a la misericordia con una persona
afligida le quita la posibilidad de comprender debida
mente el tiempo. Los adversarios de Jesús acaban con
fundidos: ante el pueblo y todavía más en el juicio de
Dios.
El nuevo sentido que da Jesús al sábado ilumina también
el tiempo de salvación que él anuncia y aporta. La ley del
reposo sabático se pone al servicio del hombre, en él se
glorifica Dios mostrando misericordia a los hombres. El
hombre vuelve a recuperar dignidad; no debe posponerse a
los animales (al buey y al asno). Ahora se cumplen las
grandes promesas que había hecho Dios a Abraham al
comienzo de la historia de salvación. La mujer es tratada
como hi ja-de Abraham. Se quebranta el dominio de Satán,
el hombre se ve libre de las cadenas que le habían echado
Satán y su séquito: el pecado, la enfermedad y la muerte.
Jesús redime de la pesada carga que había impuesto a los
374
Dios.
18
Decía, pues: ¿A qu é se parece e l re ino de Dios, y
a qué lo compararé?
l9
S e p arece a u n grano d e m os taza
que un hombre tomó y echó en su huerto; creció y se
convirt ió en árbol , y los pájaros del c ie lo anidaron en sus
ram as .
20
Y nue vame nte di jo: ¿A qué compararé e l re ino
d e D i os?
21
S e p arece a un p oco d e l e vad ura q ue una
mujer tomó y mezcló con tres medidas de harina hasta
que fermentó toda la masa.
La fórmula introductoria que dice que el reino de
Dios
se parece a un grano d e m os taza .. . a un p oco d e
l evad ura , quiere decir que con el reino de Dios sucede
como con.. . Lo que se compara es el contraste entre la
pequenez de los comienzos y el grandioso final. El grano
de mostaza es la más pequeña de todas las semillas en el
375
mundo entero (Me 4,31), del tamaño de una cabeza de
alfiler. Si se echa en la tierra y crece, se hace como un
árbol, tan grande que los pájaros pueden anidar en sus
ramas. En el lago de Genesaret alcanza el arbusto de mos
taza una altura de dos metros y medio a tres. Algo pare
cido se puede decir de la levadura. La mujer hacía cada
mañana el pan para la familia. La víspera metía la leva
dura dentro de la masa . Muy poco, un puñado basta para
gran can tidad d e harina (3 medidas = 36,44 litros). Du
rante la noche fermenta toda la masa gracias a ese poco
de levadura. Se compara el comienzo insignificante y ocul
to con el grandioso resultado final.
E l
re ino de Dios
se ha iniciado con la acción de Jesús.
Jesús lo anuncia y lo aporta, lo promete a los discípulos.
También los discípulos lo anuncian. La acción de Jesús
muestra que el reino de Dios está presente: sus curacio
nes,
sus expulsiones de demonios son señales del alborear
re sólo al comienzo y al fin, sino también al tiempo inter
medio. El grano de mostaza se desarrolla y se convierte
en un gran árbol, la levadura está oculta en la masa has
ta que todo llega a fermentar; no está inactiva. El período
que va desde la entrada de Jesús en el cielo hasta su ve
nida en gloria no está abandonado por la actividad del
reino de Dios. El reino de Dios ha venido y todavía tiene
que venir, está visible en la acción de Jesús y todavía está
en camino, es real y todavía tiene que realizarse.. . Cierto
es que la acción de Jesús es presencia del reino de Dios,
Cierto también que la consumación ha de aguardarse to
davía; en cambio, sobre el período intermedio entre el
principio y el fin no se ha dicho nada claro, porque Jesús
se fija ante todo en el principio y en el fin. Sin embargo,
crece . . . No hay poder capaz de detenerlo.
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 189/190
del reino de Dios. Pero esto no sucede de modo que
cada cual pueda decir: Aquí está el reino de Dios. Sólo
lo descubre el que tiene la sabiduría de Dios. Sólo la fe
es el camino para llegar a este conocimiento. El reino de
Dios es todavía un misterio en el que no son iniciados
todos, sino solamente los discípulos. Los discípulos deben
todavía orar para que venga el reino (11,2). Los discípu
los que tienen participación en el reino son todavía un
pequeño rebaño (12,32). Como en el caso del grano de
mostaza y de la levadura es pequeño el principio, pero con
la seguridad de que el reino vendrá con gloria y grandeza.
Brota de comienzos pequeños. Ahora sólo ha alcanzado
a pocos, pero un día lo penetrará todo.
Jesús,
con su predicación y su acción, trajo el reino de
Dios. Su tiempo es tiempo de salud, aunque con un co
mienzo pequeño e imperceptible. Una día alcanzará el
reino de Dios su gran desarrollo. La parábola no se refie-
376
377
El Nuevo Testamento y su mensaje
E ste comen ta r io a l Nuevo T es t amen to , des t i nado a l a l ec tu r a es
p i r i t ua l , p r e t ende hace r que l a pa l ab r a de l a s Sagr adas E sc r i t u r as
sea d i r ec t amen te f ecunda pa r a l a v ida de l c r i s t i ano , en t odos sus
aspec tos . Cons t a de l o s s igu i en t es vo lúmenes :
1.
W .
TRILLING,
E l E v a n g e l i o s e g ú n s a n M a te o . Dos vo lúme nes
(2.
a
edición ) de 288 y 352 páginas .
2.
R.
SCHNACKENBURG, E l E v a n g e l i o s e g ú n s a n M a r c o s .
D o s v o
lúmenes ( 2 .
a
edición) de 224 y 348 páginas.
3.
A .
STOGER, E l E v a n g e l i o s e g ú n s a n L u c a s .
Dos vo lúmenes
(3 .
a
edición) de 380 y 244 páginas.
4.
J.
BLANK,
E l E v a n g e l i o s e g ú n s a n J u a n . T r es vo lúmenes ( en
preparación el 1 .° y el 3 .° ; 300 páginas el 2 .°) .
5.
J.
KÜRZINGER,
Los hechos de los apósto le s . Dos vo lúmen es
(2.
a
edición ) de 332 y 216 página s.
6 . K.
KERTELGE,
Car ta a los Romanos.
248 pág inas ( 2 .
a
ed i c ión ) .
a
8/17/2019 Stoger Alois - El Nuevo Testamento Y Su Mensaje 03 - El Evangelio Segun San Lucas.pdf
http://slidepdf.com/reader/full/stoger-alois-el-nuevo-testamento-y-su-mensaje-03-el-evangelio-segun-san 190/190
7.
E .
WALTER, Pr imera car ta a los Cor int ios .
304 p . (2 . ed . ) .
8 . K .H .
SCHELKLE, Segunda car ta a los Cor intios .
248 p . (2 .
a
ed . ) .
9. C.
SCHNEIDER, Car ta a los Gálatas .
160 págin as (2 .
a
ed . ) .
10.
M .
ZERWICK,
Car ta a los E fe s ios . 192 pág inas (2 .
a
ed i c ión ) .
11.
J.
GNILKA, Car ta a los F i l ipenses .
84 pág inas (2 .
a
ed i c ión ) .
12.
F .
MUSSNER, Car ta a los Colosenses .
(2 .
a
edición) .
A .
STOGER,
Car la a F i lemón.
160 pág inas .
13.
H .
SCHÜRMANN, Primera car ta a los Tesa lon icenses .
104 pá
ginas. (2 .
a
ed i c ión ) .
14.
H . A .
EGENOLF,
Segunda car ta a los Tesa lon icenses .
108 p .
15.
J.
REUSS,
Primera car ta a T imoteo. 100 pág inas (2 .
a
ed . ) .
16.
J.
REUSS, Segunda car ta a T imoteo.
% pág inas .
17.
J.
REUSS. Carta a Tito,
80 pág inas ( 2 .
a
ed i c ión ) .
18.
F . J .
SCHIERSE, Car ta a los Hebreos .
156 pág in as ( 2 .
a
ed . ) .
19.
O .
KNOCH,
Car ta de Sant iago. 128 pág inas (2 .
a
ed i c ión ) .
20.
B .
SCHWANK, Pr imera car ta de san Pedro.
148 pág inas
21 .
A .
STOGER, Car ta de san Judas. Segunda car ta de san Pedro.
132 páginas (2 .
a
edición) .
22.
W .
THÜSING,
Las car tas de san Juan.
236 págin as (2 .
a
ed . ) .
23.
E.
SCHICK, E l apocal ips is .
288 pág inas . 2 .
a
edición) .