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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
MINISTERIO DEL POPER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN SUPERIOR
COLEGIO UNIVERSITARIO DE ENFERMERÍA
“CENTRO MEDICO DE CARACAS”
CÁTEDRA: TÉCNICAS Y PROCEDIMIENTOS BÁSICOS DE ENFERMERÍA
EL PULSO
Facilitador (a):
Lic. Daria González
Integrantes Grupo Nro. 3:
Gómez, K´issy Nro. 5310
Mayobre, Pedro Nro. 5308
Mendoza, Karen Nro. 5315
Rivas, Scheila Nro. 5338
Salazar, Margaret Nro. 5407
Caracas, 02 de Mayo de 2012
1
INDICE
Pp.
Introducción…………………………………………………………………… 3
Desarrollo
El Pulso
Concepto……………………………………………………………………… 4
Tipos……………………………..……………………………………………… 5
Zonas de Localización………………………………………………………… 6
Valores Normales……………………………………………………………… 8
Factores que Afectan el Pulso……………………………………………… 9
Conclusión……………………………………………………………………… 12
Bibliografía……………………………………………………………………… 13
2
INTRODUCCIÓN
El siguiente trabajo tiene como objetivo, analizar los conceptos y las
diversas teorías que se presentan con respecto al tema central de nuestra
investigación. A través del desarrollo se obtendrá una explicación breve pero
significativa de lo que es el pulso, por supuesto centrándonos directamente
en el área que nos compete, que es, sin duda alguna la enfermería.
Se hizo hincapié en indagar varias fuentes, para ampliar nuestros
conocimientos y otorgar diversidad a la investigación, que no tiene otro fin, si
no el de entender de forma minuciosa este tema tan amplio. A lo largo de la
exploración se estableció el orden, tomando en consideración el concepto en
primer lugar, siendo éste la base del aprendizaje de cualquier materia, por
otra parte contaremos con una detallada explicación de lo que son los tipos
de pulso y las zonas en las que se localiza, inclusive destacando aquellas
que son más utilizadas por tener las propiedades que se necesitan para
facilitar el proceso al tomar el pulso.
En ese mismo sentido y siguiendo el orden de las ideas, se incluye
dentro de este trabajo un cuadro de lo que representa en general los valores
normales del pulso en bebés, niños, adultos, adultos mayores y deportistas
indicando las edades de estos y lo debe ser en cada caso. Como parte final,
pero no menos importante, se destaca aquellos factores que pueden afectar
los valores normales del pulso y los nombres científicos que se le dan a los
resultados anormales.
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DESARROLLO
El Pulso
Concepto
El corazón bombea sangre hacia todo el cuerpo en un ritmo constante.
Para ello contrae sus ventrículos. Esta contracción produce una onda que se
propaga a lo largo de las arterias y origina su dilatación. Cuando oprimimos
una arteria contra el hueso (en las zonas donde las arterias son
superficiales), se perciben suaves golpeteos caudados por esa dilatación: su
sucesión se conoce como pulso arterial.
También podemos indicar de manera más sencilla que el pulso
representa el número de veces que una arteria se dilata a causa de la
contracción cardiaca durante un minuto. Podemos conseguir que sufre
alteraciones cuando el volumen de sangre que bombea el corazón
disminuye, o cuando hay cambio de elasticidad en las arterias; es decir en el
momento en que estás se contraen o se dilatan. Cuando el número de
pulsaciones corresponde al promedio de la edad, se llama pulso normal.
Estableciendo otra referencia se puede decir que la palabra pulso
proviene del latín pulsus, y se define como el latido de las arterias que se
produce por la circulación de la sangre bombeada por el corazón. Con la
onda de distensión provocada por el avance de la sangre, la arteria se
expande y dicho movimiento puede percibirse en diversas partes del cuerpo,
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siendo más perceptible en los sectores corporales donde las arterias se
encuentran más cerca de la piel.
En medicina, el pulso de una persona será la pulsación que provoca la
expansión de sus arterias, o la medida de frecuencia cardiaca, como
consecuencia de la circulación de la sangre que bombea el corazón y el
número de latidos de este por minuto.
Para tomar el pulso se pueden elegir diferentes zonas del cuerpo, se
apoyan los dedos índice y medio o mayor sobre el punto elegido,
presionando suavemente, si se perciben los latidos, significa que el corazón
del individuo está funcionando, para saber si tiene un pulso normal, se
cuentan la cantidad de latidos percibidos en un minuto.
Tipos
Pulso bigeminado: se caracteriza porque se palpan secuencias de dos
latidos, el primero normal, y el segundo de menor amplitud (habitualmente el
segundo latido corresponde a un extrasístole).
Pulso céler: es un pulso amplio, de ascenso y descenso rápido. Se
encuentra principalmente en insuficiencias de la válvula aórtica, de magnitud
importante. Una maniobra que sirve para reconocer esta condición es
levantar el antebrazo del paciente sobre el nivel del corazón, palpando el
antebrazo, cerca de la muñeca, con todos los dedos de la mano: el pulso se
hace aún más notorio (pulso en “martillo de agua”; pulso de Corrigan).
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Pulso dicroto: se caracteriza por una pequeña onda en la fase
descendente. Se ha descrito en cuadros de fiebre tifoidea, pero, en la
práctica clínica, es casi imposible de palpar.
Pulso filiforme: es un pulso rápido, débil, de poca amplitud. Se
encuentra en pacientes con hipotensión arterial, deshidratados, o en colapso
circulatorio (shock).
Pulso paradójico: corresponde a una disminución del pulso arterial
durante la inspiración junto con una ingurgitación de las venas yugulares. Se
puede captar palpando el pulso radial mientras el paciente efectúa una
inspiración profunda (el pulso se palpa en ese momento más débil) o usando
un esfigmomanómetro (es significativo si ocurre una disminución de la
presión sistólica sobre 10 mm de Hg o sobre el 10% del valor habitual). Esta
situación se encuentra en taponamientos cardíacos por derrames pleurales
de gran cantidad o pericarditis constrictiva (ambas condiciones limitan la
capacidad de expandirse del corazón), un enfisema importante o embolias
pulmonares masivas.
Pulso parvus et tardus: lo de “parvus” se refiere a que es de poca
amplitud, y “tardus”, que el ascenso es lento. Se encuentra en estenosis
aórticas muy cerradas (es una condición bastante difícil de captar).
Pulso alternante: se caracteriza porque se aprecia una secuencia de
un pulso de amplitud normal, seguido por otro de menor amplitud, en el
contexto de un ritmo regular. Se ve en insuficiencias cardíacas muy
avanzadas.
Zonas de Localización
Pulso carotídeo: se busca en el recorrido de las arterias carótidas,
medial al borde anterior del músculo esternocleidomastoídeo. En las
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personas mayores no conviene presionar mucho sobre la arteria, ni
masajearla, por el riesgo que pueda desprenderse una placa de ateroma.
Pulso axilar: se palpa profundo en la fosa de la axila, por detrás del
borde posterior del músculo pectoral mayor.
Pulso braquial: se palpa sobre la cara anterior del pliegue el codo,
hacia medial. Se conoce también como pulso humeral.
Pulso radial: se palpa en la cara anterior y lateral de las muñecas,
entre el tendón del músculo flexor radial del carpo y la apófisis estiloide del
radio.
Pulso femoral: se palpa bajo el pliegue inguinal, hacia medial.
Pulso poplíteo: se palpa en la cara posterior de las rodillas, ya sea
estando el paciente en decúbito dorsal o prono. Puede convenir efectuar una
palpación bi-manual.
Pulso pedio: se palpa en el dorso de los pies, lateral al tendón
extensor del ortejo mayor. Una palpación transversal a la dirección de la
arteria, con dos o tres dedos, puede facilitar ubicar el pulso
Pulso tibial posterior: se palpa detrás de los maléolos internos de cada
tobillo
Pulso abdominal: pulso de la aorta abdominal.
Pulso alternante: pulso que a la palpación se nota lleno y elástico
debido a una fuerza de contracción cardiaca superior a la normal.
Pulso anacroto: pulso caracterizado por un descenso transitorio de
amplitud en la curva de la elevación primaria. Se observa en la estenosis
aortica.
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Pulso anadicroto: pulso caracterizado por dos descensos transitorios
de amplitud en la curva de la elevación primaria.
Pulso bigemino: pulso anómalo consistente en la sucesión de dos
latidos cercanos seguidos por una pausa durante el cual no puede palparse
el pulso.
Pulso cuadrigemino: pulso en el cual se produce una pausa por cada
cuatro segundos.
Pulso dicroto: pulso arterial con dos pulsos separados, por lo general
el segundo es más débil que el primero.
Pulso lleno: pulso de gran volumen y baja presión.
En este mismo orden de ideas cabe destacar las zonas o los puntos
que se eligen con mayor frecuencia para tomar el pulso, según sea el lugar
escogido recibe el nombre de; temporal (en la arteria temporal), carotídeo (en
la arteria carótida, ubicada en el cuello), humeral (en el antebrazo por encima
del codo), radial (en la muñeca, en la base del dedo pulgar), femoral (por
debajo del pliegue inguinal), pedio (en el dorso del pie), apical (en el lado
izquierdo del tórax, a la altura del pezón mamario), poplíteo (en la zona
posterior de la rodilla).
Valores Normales
Según sea el caso en el que se encuentra el individuo, en estado de
reposo o haciendo ejercicio, emocionalmente estable o inestable, de su
condición física, entre otros factores, se reflejarán en el momento en el que
se toma el pulso, sin embargo hay referencias que indican, según la edad,
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los valores estándares donde debe posarse el pulso del individuo sano y
estable.
A continuación se clasifica en un cuadro estos valores indicando la
edad, el grupo etario y lo que corresponde en pulsos por minuto.
VALORES NORMALES DEL PULSO
Grupo Etario y Edad Pulso por Minuto
Recién Nacidos (0 – 30 meses) 100 – 150
Bebés (3 – 6 meses) 90 – 120
Bebés (6 – 12 meses) 80 – 120
Niños (1 – 10 años) 70 – 120
Adultos 60 – 100
Ancianos 60 o menos
Deportistas 60 o menos
* Valores establecidos según MedlinePlus, información de salud para usted. Un servicio de la
Biblioteca Nacional de Medicina de EEUU.
Factores que Afectan el Pulso
Hay una cantidad enorme de factores que de alguna u otra manera
afectan los valores normales del pulso en un individuo, por tanto cuando se
hace una valoración del mismo debe tomarse en cuenta lo siguiente:
Edad: conforme aumenta la edad, la frecuencia del pulso disminuye
paulatinamente.
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Sexo: tras la pubertad, la frecuencia del pulso en el varón es algo
inferior a la de la mujer.
Ejercicio: normalmente, el ejercicio físico aumenta la frecuencia del
pulso. En los deportistas profesionales ese aumento suele ser, en promedio,
menor que en las demás personas, debido a que son mayores el tamaño, la
potencia y la eficiencia del corazón.
Fiebre: la frecuencia del pulso aumenta: a) en respuesta a la
disminución de la tensión arterial que se produce como consecuencia de la
vasodilatación periférica que acompaña a la elevación de la temperatura
corporal y b) como consecuencia del aumento del metabolismo basal.
Medicamentos: algunos fármacos reducen la frecuencia del pulso y
otros la aumentan.
Hipovolemia: las pérdidas de sangre por el sistema vascular suelen
elevar la frecuencia del pulso. En los adultos, la disminución del volumen de
sangre circulante produce un reajuste de la frecuencia cardíaca destinada a
aumentar la tensión arterial hasta que el cuerpo compensa la pérdida de
volumen sanguíneo. Habitualmente, los adultos pueden perder hasta el 10 %
de la volemia circulante sin sufrir efectos adversos.
Estrés: en respuesta al estrés, la estimulación del sistema nervioso
simpático incrementa la actividad cardíaca en su conjunto. El estrés aumenta
la frecuencia y la potencia del latido cardíaco. El miedo y la ansiedad, así
como los dolores intensos, estimulan al sistema simpático.
Cambios de postura: cuando una persona se sienta o se incorpora, la
sangre suele acumularse en los vasos venosos que se encuentran en
declive. Ese estancamiento produce una disminución transitoria del retorno
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sanguíneo hacia el corazón, que va seguida de una disminución de la tensión
arterial y de un aumento de la frecuencia cardíaca.
Enfermedades: algunas enfermedades, como ciertas cardiopatías o
los procesos que reducen la oxigenación tisular, pueden alterar la frecuencia
del pulso en reposo.
Los resultados anormales en la medición del pulso pueden ser los
siguientes; la frecuencia cardíaca en reposo consistentemente alta se
denomina taquicardia, por otra parte a la frecuencia cardíaca en reposo que
está por debajo de los valores normales se le denomina bradicardia.
Asimismo al pulso que es muy firme se le llama pulso saltón y es el que dura
más allá de unos cuantos minutos.
Un pulso que es difícil de sentir puede ser indicio de obstrucción en la
arteria. Estas obstrucciones son frecuentes en personas con diabetes o
ateroesclerosis a raíz del colesterol alto. El médico puede ordenar un
examen, conocido como estudio doppler, para evaluar esta situación
potencialmente grave.
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CONCLUSIÓN
La realización de esta investigación ha dejado enmarcado los
pequeños detalles, pero muy importantes, que hay que conocer y manejar de
manera práctica dentro de la profesión de enfermería, pues va de la mano
con el día a día del profesional, el trabajo a realizar con el paciente, las
anomalías que hay que notar y anotar, para ejecutar de manera loable lo que
será nuestro desempeño, con esto se quiere hacer una pequeña referencia
al mar de conocimiento que se abre desde ahora y al que podemos tener
total acceso, se ubicaron los parámetros para realizar la labor de tomar el
pulso a todo el que lo requiera dentro de nuestra competencia, y hacer
énfasis en lo verdaderamente importante, la calidad de servicio, la vocación y
la empatía por nuestro semejante.
Es evidente entonces que requerimos los conocimientos mencionados
en este trabajo, y que gracias a esta investigación hemos dado un paso más,
acercándonos al camino del saber de dónde provienen nuestras obligaciones
en la profesión, las razones, los conceptos y las teorías más relevantes.
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BIBLIOGRAFÍA
Referencias Bibliográficas:
1. MATURANA, Silvia (2008) Primeros Auxilios, cómo actuar en
situaciones de emergencia. Montevideo, República Oriental del
Uruguay. Arqueotipo Grupo Editorial.
2. LM Editores Ltda (2011) Manual Práctico de Enfermería. Buenos
Aires, Argentina. MMX MANECOR S.A.
3. ROYCE Editores S.A. (2010) Diccionario Lexus de Medicina y
Ciencias de la Salud. México D.F., México. LEXUS Editores
Referencias Electrónicas:
4. Medline Plus (2011) Pulso, disponible:
http//www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/article/003399.htm
5. Manual de Semiología (2007) Pulso Arterial, disponible:
http//escuela.med.puc.cl/publ/manualsemiologia/180pulsoarterial.htm
6. Wikipedia, La Enciclopedia Libre (2012) Pulso, disponible:
http//es.wikipedia.org/wiki/Pulso
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