sueños, magia y virtualidad

Marzo de 2010 - México

Universidad la Salle–Costa Rica - Universidad Veracruzana-México

Doctorado en Educación con Énfasis en Mediación Pedagógica

Grupo 10: Educación Virtual

Enrique Romero Pedraza

Lector oficial

Dr. Francisco Gutiérrez Pérez

Tesis Doctoral

Sueños, magia y virtualidad

¿se puede soñar despierto?

Sueños, magia y

virtualidad ¿se puede soñar despierto?

Enrique Romero Pedraza

Sueños, magia y virtualidad:

es ir al encuentro de dos caminos unidos desde el inicio de los tiempos, los sueños y la magia, y unirlos

en un espacio de vida, la virtualidad. Ese espacio/vacío de vida que es capaz de despertarnos en el sue-

ño eterno de vivir nuestros sueños y darle sentido a nuestras vidas.

Sueños, Magia y Virtualidad ¿se puede soñar despierto?

Dedicado a:

A mi esposa Ivette

Por todo su amor, confianza y apoyo, sin ella mis sueños no serian

reales, mis hijos.

A mis hijos Mary Kate y Enrique

Por enseñarme que la vida es un juego continuo y mostrarme su mundo

lleno de magia y sueños.

A Gonzalo y Lulú, mis padres que me mostraron su mundo espiritual y

lleno de amor, gracias por la vida.

A mis hermanas y hermanos que me han acompañado desde mi niñez

cuidando mis sueños y despertándome cada vez que me quedaba

dormido.

A mis abuelos que me mostraron sus mundos llenos de amor por la

tierra, recostado en su regazo aprendí a soñar.

A todos mis compañeros y amigos, virtuales y reales que me

acompañaron y compartieron su vida, sus aventuras en este proceso de

vida.

Gracias a todos por la hacer de mi vida un aventura, y por permitirme

aparecer en sus vidas, en el acto mágico de existir.

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Atar el cordel de una cometa a

la raíz de un árbol, tomar con

las manos el cordel ,

cerrar los ojos, para que

emprendamos el vuelo y nos

trasportemos a ese mundo

mágico.

Saltar llenos de emoción

significa un nuevo viaje, algo

que se espera, algo que

desprende de nosotros a

nuestro mago interior y que lo

hace salir al reencuentro con su

mago exterior, que es el

mismo, pero en otro mundo.

Esa es la intención de

una cometa cuando comienza

su vuelo y asciende al cielo:

establecer un contacto con ese

mundo de los sueños al que

sólo se puede llegar soñando.

Añorar la infancia es el

pretexto para volver a ser

niños, para permitirnos ser

quienes en realidad somos.


¿ y si fuéramos solo

un sueño?

Sueños, magia y virtualidad ¿se puede soñar despierto?

¿Sabes por qué

desaparecemos ?

¿Y si la vida fuera

una chifladura?

El árbol de los

sueños El ser arte o

el arte de ser

El mentor: El ser que nos

muestra una forma de vida

Soñar que eres es desper-

tar quien eres

Magia: acto que hace posible des-

pertar al mago interior a la vida

Elefante marrón: ¿Cómo recuer-

dan los sueños que son sueños?

El cometa mágico: la conexión mágica

al mundo de los sueños El mundo mágico de los sueños:

El lugar donde la vida se vuelve sueño

Virtualidad: acto mágico

que le da existencia al ser

Despertares: Sincronizando

lo virtual y lo real, en el ser.

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Notas al lector:

Hola amigo lector, antes de que te adentres a leer este texto qui-

siera decirte algunas cosas de mí, para que entiendas el trasfon-

do de lo que leerás.

Primero quiero aclararte que la virtualidad de la que voy

a escribir y tú vas a leer, no es esa virtualidad relacionada con

la tecnología, tampoco es esa virtualidad que tiene que ver con

los medios electrónicos, ni el internet. Si tu idea era leerla para

ser virtual con tecnología, creo que te fallé.

La virtualidad que conocerás es esa que se manifiesta en ca-

da acto de vida, en la cotidianidad de la vida. Donde cada palabra,

cada contacto, cada interacción, cada intención, cada afecto, cada

pensamiento y cada respiración, se conectan entre sí para dar lugar,

a la magia de vivir. Donde la virtualidad es la vida misma, contigo

como medio para llegar a ella, esta virtualidad tiene que ver con el

ser humano que esta alrededor de la tecnología para no decir

detrás, y que es el que le da vida a esa interacción mágica.

La magia de la que leeremos, no es aquella que saca co-

nejos de la chistera, ni desparece y aparecen cosas, entonces no

encontraras la forma de desaparecer conejos y aparecer flores,

te volví a fallar.

La magia que conocerás es aquella que cambia la forma,

es decir aquella que transforma pero no a los objetos, si no a los

seres humanos. Esa magia, es aquella que se manifiesta en ca-

da acto cotidiano, en cada acto vida, y que es capaz de relacio-

nar al ser con la naturaleza y el cosmos. Esa relación, la cual

nos fuimos distanciando y que es necesario legitimarla para que

la magia de la vida cotidiana sea real.

El sueño que leerás en este texto, no es aquel que ocupa-

mos para descansar, ni tampoco esperes una interpretación de

aquello que sueñas. Es más si quieres que te enseñe a soñar y

saber porque muchos sueños no los recordamos, te volví a fa-

llar.

El sueño que del que conversaremos es de aquel que se

crea y recrea en cada acto cotidiano, en ese sentido hablaremos

de disoñar y ensoñar como espacios que nos permiten conectar-

nos con nosotros en el acto de soñar despierto. Esto es muy in-

quietante dirás ¿Cómo soñar despierto? En este texto se hilaran

las historias para responder a esta pregunta que nos permita

despertar de ese sueño, y darnos cuenta de nuestra conciencia

de nuestro ser, en cada acto de vida.

En ese sentido la búsqueda del Mago cotidiano, no es

aquel vestido de negro con un sombrero, ni aquel viejo con bar-

ba larga y con un atuendo del Merlín. No tiene disfraz, se le

puede encontrar en cada ser humano, ya que su presencia es

esa esencia que transforma, el mago de lo cotidiano eres

tú. Aquel que es capaz de disoñar y ensoñar su

vida, y tiene el coraje de arriesgarse transfor-

mar su vida, donde cada respiro, pensamien-

to, afecto, interacción, … sea mágico.

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Sueños, magia y virtualidad

El origen de todo esto es la siguiente pregunta: ¿se puede soñar despierto?

Atentos a la lectura intento describir un camino a las respuestas

Lo real es el sueño; la vida de vigilia es lo falso

Mctaggart, Lynne.

¿Se puede soñar despierto?

Esa es la pregunta y la intencionalidad, es la chifladura:

la conexión de tres espacios distantes y a la vez cercanos los

sueños, magia y virtualidad.

Buscar la pauta que conecta a la virtualidad como espa-

cio de vida y aprendizaje de manera integral a partir de los sue-

ños y la magia, es la intención de este texto. Donde las estrate-

gias de búsqueda de vida en la virtualidad tienen que ver con el

descubrir y encontrar al ser que vive en la virtualidad.

Los sueños y la magia, como elementos esenciales hacia

el pensamiento mágico que es el medio de transporte que nos

llevan a ese espacio mágico de vida, la virtualidad.

¿Cuál es la pauta que conecta al ser con su virtualidad?

―En lo profundo de los bosques tropicales del Amazonas, los

indios Achuar y Huaorani se reúnen para su ritual diario. Ca-

da mañana, los miembros de la tribu se despiertan antes del

amanecer y, una vez reunido en esa hora crepuscular en la que

el mundo se llena de luz, comparten sus sueños.

No se trata sólo de un pasatiempo interesante, de una

oportunidad para contar historias: para los Achuar y los

Huaorani, el sueño no pertenece únicamente al que sueña, sino

que pertenece colectivamente al grupo, y el soñante individual

es simplemente el receptáculo que el sueño decide tomar pres-

tado para conversar con toda la tribu. (Hechizo, interacción)

Estas tribus conciben los sueños como un mapa para las

horas de vigilia, pues predicen lo que les va a ocurrir colecti-

vamente.

En los sueños, se conectan con los ancestros y con resto

del universo. Lo real es el sueño; la vida de vigilia es lo falso.”

―Descripción de los indios amazónicos del estudio llevado a cabo por el instituto de Ciencias Noéticas, que apareció en el artículo de M. Schlitz, <<On consciosness, causation and evolution>>, Alternative Therapies, julio de 1998; 4(4): 82-90. Mctaggart, L. (2007) El Campo. Ed Sirio, Barcelona, España. P. 175.

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El mapa para las horas de vigilia, los puentes que unen los sueños, la magia y la virtualidad

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¿Y si fuéramos solo un sueño?

Ser un sueño, es realmente interesante y motivador, es como

ver caer unas hojas de un árbol en el otoño, y observar esas

hojas multicolores transformarse mariposas en el mismo ins-

tante que surcan el aire y caen.

Ser un sueño nos permite ser virtuales dentro de este

espacio de vida, siendo simbióticos con nuestra esencia natu-

ral. ―cuando soñamos, nos encontramos más en el mundo

interior, y cuando despertamos en el mundo exterior. Cuando

nos damos cuenta de que existen ambos mundos, o de que

provienen del vacío más profundo y fundamental, o álef, so-

mos capaces de explotar la creatividad y de tener vidas crea-

tivas.‖ (Alan,2008:55)

Una vidas creativas gestadas desde el vacío relacional

de encuentro, donde la magia y los sueños se unen para dar

origen a nuestra existencia, donde nuestra relacionalidad e

implicación le dan sentido a nuestros actos de vida. ¿se pue-

de soñar despierto?, es una pregunta que nos permite recono-

cernos y legitimarnos en este espacio de vida, como viajeros

en el tiempo, despertándonos para redescubrirnos el este dia-

logo espiritual, dando presencia a nuestra esencia, haciéndo-

nos presentes en este acto mágico de soñar. Siendo un sueño,

siendo vida.

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El misterio de este sueño o un sueño misterioso


Si te llama la atención el tema, ―sueños, magia y virtualidad‖, en

un doctorado en Educación, quizá sea porque no estamos acostum-

brados a leer cosas tan distantes del acto educativo y mas en edu-

cación virtual. Misterioso en su pensar y en su forma, en el cual

sabemos las consecuencias de los sueños, de la magia y la virtuali-

dad pero no en que consiste, ese es el misterio, el que nos atrae a

querer conocer y a aprender, como dice Swimme Brain hablando

de misterio en su libro, el universo es un dragón verde.

Te explicaré cual es la intención de tejer este tema y el por-

que reunir lo que siempre estuvo unido y que fuimos separando en

nuestras vidas. Mencionar por quienes estoy aquí escribiendo esta

tesis, es legitimar mi vida, mis historia y mis campos, de sentido,

akásico y mórfico, en la cual no quisiera omitir sus aportaciones y

su compañía para que estas palabras estén escritas.

¿Por qué en un doctorado en Educación se debe permitir

hablar de sueños, magia y virtualidad?, en primer lugar este no es

cualquier doctorado, es un doctorado de la tercera cultura, es un

doctorado que busca la legitimación del ser en el acto educativo así

como la reconexión con esos espacios de vida en los cuales hemos

ido desapareciendo y que van en un proceso de extinción.

Sueños, magia y virtualidad la mezcla alquímica apasionante

que busca conocer las estrategias de vida en la virtualidad. Los puen-

tes, rutas y caminos que cada instante se hacen presentes en nuestra

cotidianidad, que desconocemos y pasan desapercibidos. Busca los

caminos para que el ser humano pueda despertar ese ser interno que

llevamos dentro, el niño para unos, yo lo llamo mago,. El cual es la

misma esencia que transforma con su presencia el acto cotidiano de

vivir, acercándonos a ese ser mágico, ensoñatico y virtual que somos.

Te preguntarás: ¿Qué tiene que ver los sueños, la magia y la virtua-

lidad con la educación y la educación virtual?

El acto educativo no distingue si es real o virtual, no existe

diferencia, por que la esencia es la misma, la forma como se esta-

blece y se da vida, siendo estas formas virtuales en su construcción

y reales en su interacción, por lo tanto somos virtuales antes de ser

reales. El acto educativo no distingue en que realidad esta, si no la

forma mediática de hacer llegar el aprendizaje al ser que siente y

vibra con su aprender, en ese sentido somos autopoiéticos.

Hasta ahora solo conocemos las formas de enseñar y apren-

der que hemos aprendido de este paradigma de pensamiento, don-

de el aprendiente desaparece del acto educativo, y con él desapare-

cen sus intereses, pasiones, sueños, magia, es decir su virtualidad o

virtualidad es.

Aparecer al aprendiente en el acto educativo hace posible el

acto mágico. Al hacer, su ser presente en el aprendizaje, hace que

aparezca su espiritualidad, su conciencia, sus sueños, su magia, su

intuición, su implicación y relacionalidad, esos hilos mágicos que

tejen los sueños y las virtualidades.

Para que suceda el acto mágico, se debe de trasformar la ma-

nera de ver, sentir, escuchar, oler e interactuar con ese elemento

alquímico mas importante del aprendizaje que es el ser humano.

Cuando te enfocas en la búsqueda de estrategias de aprendizaje de

hacer posible el acto educativo, sucede la magia, los sueños cobran

vida y se hace presente tu virtualidad, en la realidad del aprender.

Las palabras mágicas que le dan sentido a esta propuesta

son: Sincronicidad, incertidumbre, recursividad, armonía, reso-

nancia, hado, caos, fractalidad, interconexión, vibración, orden

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implicado, energía, trasformación… son algunos elementos a

considerar en este trabajo.

Antes de ser real debes de ser virtual, para ser virtual debes

reconocer el ser mágico que eres, donde tu campo akásico, ese

campo de interacciones históricas que nos conecta al torrente de

información de las humanidades; El campo mórfico, ese campo de

interacciones orgánicas y celulares que nos ubican en un contexto

de aprendizaje especie-al; El campo de sentido, ese que es y son el

resultado de lo que eres en esta monada o ser contextual. La mona-

da, ese espacio contextual donde las almas moran y recrean sus

vidas.

Ahora tiene sentido la frecuencia y la resonancia familiar

para poder establecer los vínculos hacia algo mágico, el ser. Somos

la simbiosis de conciencias, de espiritualidades, de emociones, de

sensaciones, de frecuencias, de resonancias y de sincronías familia-

res, que el simple hecho de nacer en nuestras familias nos llena de

esa esencia que nos hace seres únicos y mágicos. Sin el reconoci-

miento de ser simbiótico que somos nuestra interacción con la vida

no tiene sentido mágico, por que no nos vemos dentro de ese espa-

cio y desaparecemos de ese campo de sentido, sentirse parte de la

tribu, de la familia, del grupo, de la comunidad, del cosmos, nos

hace seres en relación directa con la vida, donde todas nuestras in-

teracciones tienen un sentido mágico.

Soy un ser afortunado al nacer en una familia de doce her-

manos y de unos padres amorosos. Haber conocido y conversado

con mis bisabuelos que a sus noventa años te contaban su vida, era

como conocer el nacimiento de mi esencia, mis abuelos maternos

me enseñaron lo que es ser en esa sencillez de la vida. Mis abuelos

paternos me acompañaron en esa travesía de conocer y reconocer-

me en el campo enseñándome a cultivar la tierra y mi abuela a cul-

tivar mis sueños y mis magias, al ser curandera me guio en el arte

de percibirme en su regazo al alimentar mi espiritualidad. Ese es el

contexto de mi monada o nicho vital mágico, donde cada vez que

regreso es para cargarme de energía, como las luciérnagas en el

valle de la luz del bosque.

Este espacio no estaría completo si aquello que hizo

despertarme de este letargo, de este adormilamiento cotidia-

no. Mi esposa y compañera de vida, ese ser que complemen-

ta mi vida, ese ser que le da energía, vibración, amor, senti-

do y confianza a mis sueños, que al disoñar nuestro hogar

como ese lugar de aprendizaje y cobijo de nuestras vidas

hace que esa recursividad surja a través de nuestros hijos.

Ellos son los hacedores de sueños, los que hacen que nuestra

vida tenga ese elemento alquímico que hace todo posible, el

amor. Su niñez a inundado con esa luz nuestros espacios co-

tidianos, nos han despertado al amanecer de los juegos, al

encanto de disfrutar cada instante, al acto de ver y vivir en el

Aleph, en el Satori, en el despertar de nuestra infancia, don-

de todo puede suceder y todo tiene sentido, la magia de vivir

tus sueños, despierto.

Porque escribir poéticamente, para mi fue un descubrimien-

to de ser, sentir y escribir, que fui conociendo mientras avanzaba

en los cursos del doctorado, ahora es un hábito y una forma de

acercarme a la vida, desprendiendo en cada palabra escrita el polvo

de las hadas que hace resonar y vibrar en tu mente, pro-evocando

tus sueños, tu magia y tu virtualidad. Escribir prosaicamente por

otro lado es la forma en que estamos acostumbrados a mirar los

textos, categorizándolos, corrigiéndolos, buscando el punto, la co-

ma y la referencia. Esta estará cuidada para que lo prosaico y lo

poético construyan este texto. La prosa será la que me acerque a tu

ser lógico y la poesía me acercará a tu ser mágico.


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Morín en este sentido en su libro, Tierra Patria menciona:

La poesía no es sólo una variedad de literatura, es también

un modo de vida en la participación, el amor, el fervor, la

comunión, la exaltación, el rito, la fiesta, la embriaguez, la

danza, el canto, que, efectivamente, transfiguran la vida pro-

saica hecha de tareas prácticas, utilitarias, técnicas.(...) Fer-

nando Pessoa decía que en cada uno de nosotros hay dos

seres, el primero, el autentico, es el de sus ensoñaciones, sus

sueños, que nace en la infancia y prosigue toda la vida; el

segundo, el falso, es el de sus apariencias, sus discursos y

sus actos. Podríamos decir de otra forma: en nosotros co-

existen dos seres, el del estado prosaico y el del estado poé-

tico; esos dos seres constituyen nuestro ser, son sus dos po-

laridades, necesarias una para la otra: si no hubiera prosa

no habría poesía, el estado poético no se manifiesta como

tal sino en relación con el estado prosaico. Tenemos que

actuar para que el estado secundario llegue a primario. Hay

que tratar de vivir no sólo para sobrevivir sino también para

vivir. Vivir poéticamente es vivir para vivir. (Morin, 1993)

La pauta que conecta al ser humano con otro ser humano son

las estrechas relaciones entre ambos seres y con nuestra tierra, esa

relación estética y amorosa en la cotidianidad, la parte afectiva,

emotiva, poética, el juegos, los cantos, los ritmos, la danza, la pin-

tura, la fiesta, la embriaguez, la poesía.

Esa poesía capaz de transformar nuestro campo de sentido,

de darle dirección a ese campo akásico, con la intención de cono-

cer y reconocernos dentro de este campo de posibilidades, la cual

inunda nuestro campo de las formas y vibraciones, ese campo

mórfico, que es capaz de pro-evocar en su aleteo de una mariposa

las metamorfosis del ser humano. Esa que lo haga despertar su ma-

gia, ese ingrediente especial, que inunde el campo mórfico, el cam-

po akásico, el campo de sentido, el elemento alquímico que hace

su sueño real, la confianza.

Este es el camino, esta es la ruta que nos lleve a soñar des-

piertos, donde el sueño cobra sentido y se convierte en la mariposa

azul, esa que nos puede revelar los misterios del universo, como las

palabras mágicas, y ser capaces de percibir al observar a la maripo-

sa azul.

Ahora nos espera un gran árbol de los sueños con ese color

azul turquesa majestuoso, él deseoso de que sueñes, y mientras un

elefante marrón cuida y cultiva sueños.

Ahora tomemos el hilo de ese cometa mágico que vuela en

los cielos y atémoslo a las raíces de ese gran árbol, cerremos los

ojos y a soñar. Sueña y vive tus sueños, yo como el mentor de sue-

ños te esperaré aquí a que despiertes tu mago interior.

Felices sueños.

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¿Por qué sueños, magia y virtualidad?

Si la pregunta era ¿y si fuéramos solo un sueño? Entendiendo por-

que siendo un sueño somos capaces de implicarnos en ese espacio

de vida, legitimando nuestro ser, dando sentido a nuestra mónada

contextual, como ese espacio del cual emergemos como el ser arte

que somos, poéticos. Y como ese ser lógico y prosaico que pensa-

mos.

Al comenzar el doctorado mi tema era, estrategias de

búsqueda para el proceso de autoorganización en medios digitales.

El tema nació de la necesidad de conocer las diferentes maneras de

buscar información en la red, era como identificar los esquemas

mentales y elegir la mejor manera de encontrar información. Si lo

vemos de manera mecánica es como conocer los diferentes proce-

dimientos o métodos para llegar lo más rápido posible a la infor-

mación. Es un tema novedoso y creativo, decía, pero aquí que re-

suelvo en la educación en medios digitales.

Con la simple búsqueda lógica pensaba que era más que

suficiente, para poder enseñar a los alumnos las diferentes maneras

de llegar a la información. Pero eso no resolvía el problema, seguía

obteniendo los mismos resultados, limitados a la forma de pensar.

Información vista desde un punto de vista y profesión, incluso ca-

rente de sentido. Fue entonces que apareció la autoorganización,

misma que me metió en problemas, ya que desde mi visión mate-

rialista y mecánica del mundo pensé que la información se podía

autoorganizar, ya que en sí misma, la información tiene un orden y

una jerarquía, y si se ve así, el proceso de autoorganización es dife-

rente, no tiene nada que ver con la información, sino con el ser que

la crea, la construye, la piensa, la siente, la gestiona, el ser humano.

Entonces pensar en términos de información está bien con

una buena estrategia de búsqueda para llegar a la información, pero

el problema no es llegar, si no el sentido que tiene esa información

para la persona la busca.

¿Entonces el problema no es encontrar la información si

no el sentido de la información?

Nuestra manera de buscar información es lógica, es nuestra

manera de pensar y mirar las cosas. Solo vemos la información que

se acerca a lo que pensamos que es, y esa es la manera en la que la

observamos. Eso nos ha resuelto la vida, de alguna manera, somos

objetivos y exactos, y eso para nosotros es tener el control, ese es

el fundamento de la ciencia. Nos volvemos más en reproductores y

difusores de información, que en creadores.

¿y cuál es la diferencia entre un creador y un usuario de la

información? La diferencia entre un ser creador ―artista‖ y un ser

usuario de esa información radica que uno crea, piensa, siente,

intuye y plasma en algún medio, su conocimiento, experiencias y

aprendizajes de vida.

Y un usuario, solo usa de manera utilitaria, sin un sentido

de transformación. Nos lleva a no sentir pensar los que estamos

haciendo, a solo concretarnos a recolectar la información por

hacerlo, somos simples obreros, es decir solo actuamos sin saber

que es ese objeto que tenemos enfrente de nosotros, ya que carece

de significado y de sentido.

Es cierto que las tecnologías de la comunicación e infor-

mación nos acercan más a información de todo el planeta, pero

nos alejan más de ese significado que tiene. Y es que la sobre

información nos lleva a no saber qué es y que podemos hacer,

Pp. 212-216, Tierra Patria, Edgar Morin, 1993, Ed. Kayros


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con la información. Sin pensar, solo usamos el resultado de

nuestra búsqueda, sin darnos cuenta de la vibración de la infor-

mación.

Los maestros nos hemos convertido en voz de McLuhan

en informadores, que en constructores de información y hemos

convertido a los alumnos o interlocutores en simples reproductores

de información. Y es que con los medios de comunicación como la

televisión, el radio y el internet uno puede acceder a mucha infor-

mación pero a ningún conocimiento.

Ya que el conocimiento se construye en el ser mismo, el

que le da significado, sentido e interpretación, sin ese proceso la

información es solo eso, información ausente de sentido. El proce-

so de autoorganización comienza con el sentido o intención, la

construcción de la información es solo el final de ese proceso.

Ahora es necesario saber cuál es ese proceso de autoorganización

y que tiene que ver los sueños, la magia y la virtualidad.

Para hacer un pastel de manzana desde el inicio, uno debe

primero crear el universo. Carl Sagan

Explicar el proceso de autoorganización en este senti-

do es entender y conocer como el ser humano realiza este

proceso. La incertidumbre es el método de Morin, la Teoría

del Caos es la forma en que la explica Brigs y Peats. El or-

den implicado es el camino que nos enseña Bohm. La sim-

biosis es como la explica Margulis. La conciencia y espiri-

tualidad son los caminos de varios autores como Boff, Dalai

Lama, Chopra, Wolf. La Sincronicidad, el campo, mórfico y

akásico. La autopoiesis y la relacionalidad de Maturana y

Varela. Los caminos del Arte de Cosachov.

Mi camino integrado por la resonancia de los campos, aká-

sico, mórfico y de sentido, a través de la búsqueda de los sueños,

magia y virtualidad, donde adquieren sentido, y tienden los puentes

para conocer al ser que se encuentra alrededor de la tecnología y

que es necesario reconectarlo al cosmos. Como diría Sagan para

volver a crear el pastel de manzana, es necesario darle sentido a ese

Universo que habita y que fue perdiendo la conexión, sentido e

identidad.

La tecnología se convierte ahora en la herramienta que nos

acerca al espacio exterior de la información, el mismo que nos

aleja más de nuestro contraespacio interior. Al centrarnos en ese

espacio físico, queda ausente nuestro contraespacio interior, ese

que le da a nuestra virtualidad su identidad. Perdiéndonos en un

mar de información carente de significado y de sentido de vida,

teniendo dos posibilidades de autoorganizar nuestra manera de

percibir y construir nuestro conocimiento, la forma pasiva y la for-

ma activa.

En este sentido la forma pasiva o como dice José Antonio

Marina, la pasividad limita nuestras posibilidades de actuar,

nos debilita y somete a servidumbres varias, enmohece nues-

tras capacidades y suele intoxicarnos de comodidad. La im-

potencia es un sino. Esta actitud nos es natural en el ser

humano, es aprendida… somos intrínsecamente activos, cu-

riosos, exploradores, inventores. Y cuando no lo somos, es

que algo no funciona bien en nuestro entorno o en nosotros

mismos. Marina (2007:18)

La forma activa, nos permite buscar en el interior del ser

humano de los elementos que lo hacen único, resonante, sincró-

nico, creativo, interconectado, explorador, co-creador y auto-

poietico. Esa búsqueda de la energía que nos mueva al lado ac-

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tivo del infinito ese que no se ve, que alimenta nuestra virtuali-

dad, nuestro contexto de vida y que nos da vida. permitiéndo-

nos ver las posibilidades infinitas de realización, de sueño y de

magia.

El lado activo elimina los obstáculos de nuestras mentes

atrapadas en los límites de nuestras creencias y enseñanzas.

Esos límites que son un lugar para la comodidad, la apatía,

el pesimismo, la rutina, la cotidianidad, lo convencional, lo

impuesto, el miedo, la violencia, el sometimiento, el desin-

terés, los problemas, las dificultades. (Dyer, 2006) en fin lo

que nos atrapa en este esquema mental de pensamiento del

paradigma actual.

La forma pasiva de ser, sentir y vivir, en nuestra virtualidad

nos somete a mirarnos débiles, vacuos, estáticos sin movimiento,

prisioneros de nuestras redes mentales, de pensamientos como en-

fermedad, malestar, inferioridad, intoxicándonos de comodidad,

donde solo vemos limites a lo que somos, creativos, activos, curio-

sos, exploradores, inventores, buscadores de emociones, capaces

de darle sentido al vivir mágico y de ensueño, que nos lleve a des-

pertar de un largo sueño, ser siendo su propio sueño.

Mirar la vida con una actitud pasiva nos somete creer que

tu vida se guía por el miedo a la muerte, la separación de los de-

más, una actitud competitiva y la necesidad de dominar y ganar.

Dyer (2006:147)

La forma activa nos permite movernos al lado activo

del infinito, el lugar donde los sueños, la magia, y la virtua-

lidad, se manifiestan y le dan fuerza a la intención y sentido

a nuestra magia de vivir ya que como dice Dyer en el poder

de la intención:

mantenerse en el lado activo de la infinitud, donde existe el

eterno suministro de energía de la creación. Sueña noche y

día en lo que tienes intención de hacer, y de ser, y esos sue-

ños interpretarán tus intenciones. Los soñadores son los sal-

vadores del mundo. Igual que el mundo visible se sostiene

gracias al invisible, las manifestaciones del hombre se nu-

tren de las visiones de nuestros soñadores solitarios. Sé uno

de esos soñadores … En el lado activo de la infinitud tienes

plena conciencia de estar en un cuerpo que va a morir…

cuando trasladas tu conciencia a este lado empiezas a notar

sucesos milagroso en tu vida cotidiana. (Dyer, 2006)

La infinitud activa e inactiva, son parte del mismo infinito, el

reconocerlas nos acerca más a la comprensión de nuestro sentido

de vida.

Lo que trataré ahora es de hilar mi camino de descubrimien-

to, curiosidad, amor, pasión, alegría, magia y sueños, que integran

mi virtualidad, la cual espero contagiarte para que encuentres tu

propia virtualidad y la amplifiques, la enmagies, la ensueñes, la

relaciones, la interconectes con ese ser cósmico, y entres en un es-

tado de encaje que le de sentido a tu vida, despertando dentro de tu

sueño, para que hagas tu sueño real.

Lo real no es realidad para mí, el ser real es un ser integral en

sí mismo, es un ser que experimenta su espiritualidad y su ser sien-

do, es un ser mágico que vive y sueña, es un ser implicado con su

vida y explicado en sus actos, es un ser libre, creativo, curioso, in-

ventivo, hologramático, holístico, autopoietico y mágico. Diferente

al ser en la realidad, quien experimenta la realidad, con todo esa

carga contextual del paradigma de pensamiento mecánico que le

da forma y que controla su ser real.


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¿Por qué escribir sueños, magia y virtualidad?

Esa pregunta es la búsqueda de la pauta que conecta al ser con

la virtualidad. Ese espacio de encuentro, creación y co-creación

de vida, energía y espiritualidad. Donde la costumbre de vivir en

la velocidad, la competencia, la inmediatez, lo light, lo sin esfuer-

zo, lo material, en la busca de un sueño que no es nuestro, un sue-

ño creado por la cotidianidad de vivir en un paradigma creado por

newton y descartes, donde desaparece el ser humano de la vida.

La búsqueda de la reconexión con los sueños, la magia y la

virtualidad nos permitirá no sentirse cumpliendo un requisito, de

escribir al muy formal, encerrado en explicar algo que no se puede

explicar, que se tiene vivir. Ya que ese cumplimiento, de la expli-

cación se pierde al ser que siente, que vibra, que crea y recrea su

vida, ese hacedor de sueños y ese ser artista de la vida, ese mago

de lo ordinario.

Explorar los sueños, la magia y la virtualidad, como ese lado

activo del infinito, buscamos la manera de enfocarnos y permitir-

nos ser creativos, resonantes, emotivos, sin sujetarnos y liberarnos

para escribir lo que se vive y siente, en la vida cotidiana.

Los maestros se quejan continuamente de sus alumnos cali-

ficándolos de apáticos, indiferentes, desmotivados y limitados en

sus esquemas mentales, sin sentido en lo que hacen. Creo que de-

bemos comenzar la transformación con nosotros mismos y salir de

esos esquemas que no nos permiten ser, sentir y vivir el aprendiza-

je. Sabiendo que es difícil, convivir con esas voces, ya que están

enraizadas en nuestra conciencia desde antes de nacer, manifestán-

dose en nuestro pensamiento resonando, en la cultura, en nuestras

creencias que son los que nos atrapan cuando queremos salir.

Ahora adquiere sentido la fabula de los cangrejos japoneses

y los cangrejos mexicanos, que no son más que mis mismas limita-

ciones, creencias y esquemas mentales, las que no nos permiten

tomar el sol. Además de la importancia que tiene nuestra mónada

contextual, nicho vital, nuestros campos akásico, mórfico y de sen-

tido, como esos espacios de los cuales somos las semillas que vir-

tualmente nos convertimos cuando despertamos a la vida. Ya que

su energía, confianza, fe, magia, espiritualidad, magia y sueños,

son los que alimentan nuestro ser virtual.

En este punto germinal y recursivo me doy cuenta de la im-

portancia que tiene la legitimidad, la confianza y la fe que nuestro

campo tiene para que ese ser mágico aparezca, como el acto de

hacerse presente como ese ser único que es, en la cotidianidad

mágica de vivir.

Entiendo y comprendo, cuando se dice regresar a la unidad,

al ser autentico, a la unidad, al punto de encaje, al ser uno con el

universo. No es otra cosa que reconocerse a si mismo, como viaje-

ro en el tiempo y espacio, y darse cuenta que lo único que tenemos

es el ahora. Es el instante, es tiempo kairos, el tiempo fractal, don-

de todo adquiere sentido, ―el acto de sentir con todo tu ser el con-

tacto con tu mundo, virtual y real‖, ese instante que nos lleva a ser

un Mago de lo Ordinario, de lo cotidiano, ese que vive en el sueño,

en la magia y en la virtualidad.

Somos el efecto mariposa de nuestros campos de sentido

y el sentido de esos campos son nuestros sueños, la magia surge

cuando aparecemos en el acto mismo de vivir, haciendo posible

el acto mágico de despertar. La pregunta esta en el aire


16




¿Cómo construir un reloj inverso?

¿Cuál es real y virtualmente mi intención al escribir esta tesis sobre

sueño, magia y virtualidad? y ¿Qué dio origen a esta propuesta?

Miro mis fotos, mis cuentos, mi interacción con mis hijos,

esposa, hermanos, padres, amigos, compañeros y alumnos. Y sien-

to que lo que siempre he buscado son respuestas a esta realidad tan

discordante y tan asincrónica con la vida.

Por un lado esta ese bienestar tanto espiritual y físico y por

otro lado vivimos en un mundo donde todo parece tan lejano de

ese sueño de ser real en la realidad. Donde el único mundo que nos

queda, es nuestro mundo virtual que nos da la forma cuando nace-

mos y que olvidamos cuando entramos en esa sincronía con la vida

cotidiana, en el mundo en el que habitamos y vivimos.

Un mundo donde la única constante es, este paradigma

científico, el cual nos da la forma y estructura a este pensamiento

mecánico, lógico y ajustado como un reloj, para que todo funcione

a imagen y semejanza a las reglas y normas impuestas por él.

Si pensamos como se nos va la vida, día a día, minuto a mi-

nuto, segundo a segundo, de instante en instante, quizá solo vería-

mos los rastros de ellos cuando en algún momento del tiempo nos

detengamos y miremos hacia atrás en alguna imagen, que es lo que

hemos ido dejando en esta vida. Lo cotidiano u ordinario,

¿Se podría pensar fuera de este paradigma de pensamiento?,

pensar fuera de la caja.

Pensar de manera diferente, es pensar en que las agujas de

un reloj que se mueven hacia la derecha, puedan revertir las mane-

cillas su movimiento y girar en sentido contrario. Y no es para ir

hacia atrás en el tiempo, si no para tener otra mirada del mismo

tiempo. Un reloj avanzando hacia la derecha y otro hacia la iz-

quierda, donde solo conocemos una mirada de esta realidad, esa

mirada que es nuestro paradigma de pensamiento, avanzando en

sentido de las agujas del reloj.

¿Cómo poder pensar de manera diferente? ¿Cómo construir

un reloj inverso?


17



Quizá el simple hecho de pensar cómo hacerlo, con eso esta-

mos en problemas, y digo en problemas porque estamos acostum-

brados a mirar el tiempo de esa forma. La apertura que necesita-

mos para su realización viene de esa necesidad humana de cono-

cer. Y es ese conocer el que nos ha permitido avanzar. Esa aventu-

ra misteriosa que se llama vida, es la que nos coloca en el lado infi-

nito de la creación, de un pensamiento, libre, flexible, humano.

Y ¿si de repente hubiera un reloj inverso, que pasaría?

Empezaríamos a mirar de otra manera, aunque la modifica-

ción en nuestra vida no tendría mucho impacto, pero si en nuestra

ampliación del mundo. Cuando a los relojeros les preguntas si han

hecho algún reloj inverso, la respuesta es que no. Cuando les dices

como lo harían lo más fácil es decirte que voltearían la maquinaria.

Cuando le haces la misma pregunta tus aprendientes, no pueden

creer que exista tal cosa, pero cuando lo intentan comienzan a rom-

per sus marcos de referencia y a tratar de hacer posible ese sueño.

Y digo sueño por qué es lo que a uno le mueve a conocer algo nue-

vo, que puede ser real como la magia.

Al comenzar a invertir las manecillas del reloj, resulta una

aventura misteriosa, ya que el simple hecho de abrir el reloj, impli-

ca romper con la forma de pensar que solo los relojeros pueden

hacerlo, ya que vivimos en un mundo donde todo está resuelto, es

decir solo nos acomodamos a tener la mayor de comodidades, sin

preguntarnos jamás las cosas que podemos hacer. Vivimos en una

burbuja, como el chico de la burbuja plástico, Vinny Barbarino,

quien pasa sus días protegido de cualquier contacto con el mundo

externo para no llegar a contagiarse por algún virus común, que

para él pudiera ser mortal.

— ¿y qué pasa con su mundo interior?

— ¿Se podrá contagiar y contaminar?

Esto te suena familiar, ¡no toques!, ¡no corras!, ¡no te

aventures!, ¡no conozcas!, ¡no preguntes!.

La vida de Siddhartha, que vivió hace miles de años sin

duda es un ejemplo de esto, vivió desde su nacimiento en un

mundo ideal, disoñado y realizado por su padre el Rey Sudd-

hodana, el cuál hacia cambiar sus pañales cada vez que los en-

suciaba por pañales nuevos de seda.

Esto le permitiría al príncipe vivir en un mundo donde todo es-

tuviera a su alcance, y el crecer solo conociendo lo que el rey

quería que conociera, viera, mirara, sintiera, oliera, pensara y

viviera. Te suena familiar.

— ¿Y los problemas de la vida?

— ¿Y las enfermedades?

— ¿Y los alimentos?

— ¿Y la miseria?

— ¿Y los ancianos?

Siddhartha, viviendo en ese mundo real y mágico, donde

todo era bueno y hermoso, no tenía la necesidad de contemplar

otra cosa que no fuera de ese espacio. Sucedió que cuando niño en

el jardín conoció a un anciano enfermo. Y fue entonces cuando

comenzó a preguntarse sobre la enfermedad, la ancianidad y la

muerte. Su padre al enterarse mando a sacar de su reino a todo lo

que hacía a su hijo sufrir.

El Siddhartha creció y se caso, tuvo un hijo, pero en su

vida seguían persiguiéndole esas preguntas, la búsqueda de una

respuesta fue lo que lo llevó a decidir salir al mundo a conocer

esos problemas y a vivirlos, ya que no se conformaba con mi-

18




rarlos y tocarlos, él quería conocer su origen, para liberar a los

seres humanos de esos problemas y enfermedades. Lo último

que sabemos de Siddhartha es cuando alcanzo la iluminación, mis-

ma que le permitió conocer cuál es la cura para esos males, algo

que no está fuera del ser humano, y si está arraigado muy en el in-

terior de cada ser humano, su espíritu.

Sin embargo nuestra búsqueda apenas comienza, es curioso

como hace miles de años se haya emprendido una aventura para

encontrar que la raíz de todos los ―males‖ y se concluye que se en-

cuentre en el interior, y no en el exterior. ¿pero que es lo que se

busca?, ¿qué es esa raíz de los males?

La iluminación es desde la espiritualidad lo absoluto, es de-

cir lo que se encuentra absuelto de toda atadura, la energía, la espi-

ritualidad, la luz. El camino de la construcción del reloj inverso,

quizá sea solo una posibilidad de la búsqueda< de un pensamiento

que rompa este paradigma actual, que nos permita salir de la bur-

buja de plástico y del reino ideal.

Sin duda lo que siempre tratamos de expresar es nuestra

visión de las cosas, y es esa visión la que nos permite construir

nuestro mundo ―interior y exterior‖, que es uno solo, hasta aquí

son casi cuarenta y un años transcurridos, y bueno falta camino

por recorrer, esto que leerás es solo una vista más de este hori-

zonte, que me ha tocado vivir. Espero poder transmitirte mi

edad, no en cuanto al tiempo si no en cuanto a la vida que se

queda plasmada.

A veces eh estado a punto de ya no escribir, de ya no de-

cir lo que tengo que decir, y sin embargo al abrir la puerta de la

vida cotidiana, me encuentro con seres carentes de ese sentido

que signifique su existencia. Con compañeros de aprendizaje

que a falta de una pasión que les permita expresarse, son copias

al carbón de personas que no son ellos.

Intento plasmar algunas ideas de cómo poder ser virtual y

real transitando la cotidianidad de la vida, no creo que se pueda

llegar a ser místico, espiritual y virtual, sin antes ser ordinario.

Ser un mago de lo cotidiano, es lo que espero se pueda percibir

al final de esta búsqueda, donde la vida diaria tenga el sentido

de lo ordinario, de lo cotidiano, de lo sencillo, de lo simple, de

lo palpable, del contacto, de lo expresivo, de lo recursivo, de lo

poético, de lo sincrónico, de creativo, de autoorganizado, de lo

virtual y de lo real. <<


19



¿Por qué nos negamos a soñar despiertos?

─ Si te dijera que conozco un lugar donde un Elefante casa sueños

vive, ¿me creerías? Le dice un niño de 4 años a su padre

─ ¿Un Elefante caza sueños? Existe ese Elefante, responde el pa-

dre asombrado

─ Si Papá, un Elefante caza sueños, ¿me creerías, si conociera el

lugar donde vive?

─ Hijo, claro que te creería. Pero, ¿un elefante no crees que sea

muy pesado para cazar sueños?

─ ¿Pesado?, Dices, ¿que no pueda volar?, no te preocupes Papá.

Es un Elefante mágico tiene unas alas grandes y es muy veloz.

─ ¿Tiene alas grandes y es veloz?

─ si Papá, es un Elefante color marrón, surca por las nubes a una

velocidad que no se puede ver.

─ ¿no se puede ver?, Entonces, ¿Cómo caza los sueños?

─ hay Papá, mira, mientras los niños juegan, sueñan que son su-

perhéroes, en ese momento el Elefante caza ese sueño y lo lleva a

un lugar, donde existe un árbol muy, muy grande, al llegar con ese

sueño lo suelta en el árbol y se convierte en una hoja más de ese

árbol. Lo malo es que la última vez que visite al árbol de los sue-

ños, se le habían caído muchas hojas. El Elefante, se pone triste

porque dice que esos sueños caen cuando los niños dejan de soñar,

y al no tener vida, caen. Y los depredadores de sueños esperan que

caiga esa hoja de sueño para poder alimentarse, pero de ellos te

contaré en otra ocasión.

─ ¿Papá, porque te quedaste mirando al cielo?

─ ummm déjame ver, estoy buscando a ese Elefante marrón en el

cielo, ¿dime hijo es allá arriba en el cielo donde viven?

─ De verdad Papá, ¿quieres saber donde vive?

─ Si, hijo, enséñame donde vive ese Elefante caza sueños, quiero

saber, yo alguna vez, tuve sueños me gustaría saber si todavía pue-

de ese elefante llevar un sueño mío a ese árbol.

─ El niño, tomo a su Papá de la mano, lo llevo donde un cometa

hecho de papel de china lo esperaba para volar.

─ Espera hijo, que pasa, para que el cometa.

─ No preguntes nada Papá, sígueme quiero que veas esto.

En ese momento el Papá despertó en el lugar donde el Elefante

marrón lo llevaba a él y a su hijo sobre si, volando libremente

hacia el árbol de los sueños. Tan tan, esta historia apenas comien-

za…


Es mas fácil vivir en un mundo ya construido, que atreverse a

transformar uno, buscar nuevos mundos es transgredir lo estableci-

do y enfrentarse a la incertidumbre y al caos, aprender a vivir en

esos mundos,... somos buscadores de emociones, sensaciones y

sueños.

20




¿Sabes por qué desaparecemos ?

Reconocer el sueño del que venimos nos da la posibilidad de

ver al sueño que nos dirigimos, y disoñar nuestra vida a partir

de nuestros sueños. ¿sabes por qué desaparecemos?

A la orilla del mar se encontraban dos cestas de cangre-

jos, una de cangrejos japoneses y otra de cangrejos mexicanos,

el sol comenzó a salir, fue entonces que tuvieron la necesidad

de tomar el calor del sol, se dice que los cangrejos japoneses

comenzaron a salir sobre la cesta, el primer cangrejo fue apoya-

do por los demás, y el siguiente apoyado por el primero, hasta

que todos estuvieron tomando el sol. En la cesta de los cangre-

jos mexicanos, al tratar de salir el primer cangrejo a tomar el

sol, sucedió que estaba a punto de llegar a la cima de la cesta y

otro cangrejo ¿lo apoyo?, no, lo jaló y lo bajó y no pudo llegar

a su destino, otro trato de salir a tomar el sol, y sucedió lo mis-

mo fue jalado por los demás, y al pasar el tiempo, esa fue la

tónica, el sol se ocultó y los cangrejos nunca tuvieron la oportu-

nidad de tomar un poco de sol.

Esta es solo una de tantas historias que se cuentan, cual-

quier parecido a la realidad es pura coincidencia.

¿Qué ocurrió en la forma de ser, sentir, mirar, tocar, y

percibir de los cangrejos mexicanos para desaparecer y apare-

cer en la vida de los otros y puedan tomar el sol?

21


¿Por qué desaparecemos?

Es una pregunta inquietante, ya que nos miramos en el espejo, y

seguimos aquí, es mas las personas nos siguen viendo. Seguimos

conversando, caminando y haciendo nuestra vida cotidiana normal.

¿Qué ocurrió en la forma de ser, sentir, mirar, tocar, y perci-

bir de los cangrejos mexicanos para desaparecer y aparecer en la

vida de los otros y puedan tomar el sol?

Es otra pregunta que nos lleva a pensar que se puede tener

otra posibilidad. Que los cangrejos puedan ser cooperativos, parti-

cipativos y que perciban al otro como legitimo otro y que puedan

ayudarlo a tomar el sol y al final del día todos disfruten de un rico

baño de sol.

¿eso es un sueño?, ciertamente lo es, pero también puede ser

una realidad. Y si es una realidad, ¿será que estas soñando despier-

to?

Desaparecer del discurso y del dialogo cotidiano, es una

constante, estamos mas preocupados por nuestra individualidad, el

no involucramiento, que el simple hecho de cooperar, participar

con alguien mas en una comunidad nos implica con esa comuni-

dad. Carecemos de esa magia que nos lleve a transcender nuestra

individualidad y convertirnos en una comunidad.

Piensa mal y acertarás, es una frase que nos permite recono-

cernos en esta manera tan natural del ver la vida, que nos permite

vivir en este paradigma de pensamiento, donde comenzamos a des-

aparecer del umbral de la vida. Sometiéndonos al sueño de otros,

perdiendo nuestro sentido, valores y a veces nuestra dignidad, sien-

do deslegitimados en nuestros contextos o nichos vitales, tanto fa-

miliares, escolares, religiosos, sociales y culturales.

Pensar mal y acertar. No es que pensemos mal, ni de manera

errónea sino que este pensamiento, está basado en el método

científico, lo que ha sido la verdad en la ciencia, es el que nos ha

llevado a pensar de esta manera, sin explorar nuevas redes de pen-

samiento asociativo que pregunten por el ser, sentir y vivir en del

ser humano su entorno físico y virtual. Esta manera de pensar solo

busca, algo de lo que no se deba tener duda, fenómenos que tengan

más certezas que incertidumbre, dejando de lado al ser humano

dentro de estos entornos.

El paradigma mecanicista se basa en una visión de la natura-

leza como una máquina, la cual describe al ser humano como un

reloj, es decir separado el cuerpo de la mente, y visto como un ob-

jeto en el cual se puede dividir en piezas. La visión mecanicista,

mira al ser humano, como ser con corazón frío y duro.

Esta manera de percibir la realidad, la describe Bohm y Peat

de la siguiente manera la cultura occidental se encuentra hoy en

estado de declive, ello se debe básicamente a la rigidez y frag-

mentación de nuestra manera de pensar y de actuar, las teorías

que los sustentan son las de Descartes, con sus aportaciones en el

método científico, matemáticas y geometría, así como Newton con

su teoría de la gravedad lo que se ha llamado los fundamentos de la

física clásica. Qué es la forma de pensamiento que aún domina la

gran parte de la vida profesional y humana en nuestra actualidad.

De esta manera vemos que el pensamiento en este paradig-

ma es más mecánico, orientado a dividir los pensamientos y pro-

blemas en tantas partes como fuera posible y luego ordenarlas de

22




Pensar en una posibilidad de salir de esta linealidad y para

tratar de buscar un camino, me llevo a encontrar en una librería un

libro llamado El libro de los mapas mentales el autor es Tony

Buzán. Al principio me llamo la atención el titulo, ya que buscaba

algo que me sacará de la forma de pensar lineal y encontré una res-

puesta a mi pregunta. Comencé a leer este libro con detenimiento y

escuche que me decía, tienes que cambiar de forma de pensar, tie-

nes que dejar lo que hacías antes para descubrir la parte creativa de

tu ser, ahora ya no pensarás, escribirás y leerás como antes lo hac-

ías, ahora vas a realizarlo de manera diferente.

Esto causó incertidumbre ya que me preguntaba ¿como es

que tengo que hacer todo?, ¿Es posible transformar mi forma de

pensar? ¿cómo puede ser? si me han enseñado a realizar las cosas

de una manera en las escuelas, ¿cómo voy a pensar de manera di-

ferente si mis maestros me han enseñando a recitar y aprenderme

todo de memoria? ¿cómo voy a escribir de manera diferente? si

invertí mucho tiempo para no salirme de los renglones y hacer la

letra derechita, para ahora usar un cuaderno sin rayas, sin color y

además comenzar a dibujar y pintar como un niño y expresar lo

que escriba a través de gráficos, si no se me permitió en mi educa-

ción hacer esto, ¿como comenzar a desaprender y aprender a

aprender?

En este contexto de cambio, recuerdo la siguiente pregunta

relacionada con nuestra forma de realizar las cosas en la educa-

ción:

¿Cuál de estas dos afirmaciones es verdadera?

1.- Cuanto mas se educa a las personas, mas llegan a pare-

cerse entre sí, como si fueran clones. 2.- Cuando mas se educa a las personas, tanto mas va au-

mentando la peculiaridad de sus redes asociativas.

manera lógica, lo que se llamo pensamiento analítico. Que es el

que nos domina hasta nuestros días. Este pensamiento mecanicista

desapareció de su discurso el pensamiento estético, ético, valorati-

vo, en esencia el ser humano.

Esta forma de pensar del paradigma newtoniano esta repre-

sentado por la rigidez del pensamiento, es decir una forma de pen-

sar lineal, un pensamiento basado en la certeza de la ciencia, y no

de la conciencia humana. Coincidiendo con varios autores que es-

criben sobre la vacuidad y el sin sentido del ser humano en la coti-

dianidad, David Bohm menciona, esta manera de pensar provoca

un estado de insatisfacción, aburrición, apatía y frustración intelec-

tual; base de la destructividad.

En la vida diaria es curioso encontraros con estas estructuras

de pensamiento en la cotidianidad por ejemplo en el hogar para

hacer los quehaceres domésticos, los dejamos a la mujer, ya que es

la forma como nos educaron, y aunque los hombres tenemos tam-

bién las habilidades para hacerlo. De la misma manera en nuestros

trabajos nos volvemos hiper especialistas y dependientes y si le

agregamos la actitud de no me corresponde y no me toca, creamos

un ambiente laboral cansado, desmotivado y adecuado a una co-

modidad virtual y una falta de cooperación, pereza mental en las

actividades. Transformándose en ambientes hostiles y de falta de

interés hacia los demás, provocado por estas estructuras invisibles

de pensamiento fragmentado, es decir no pensamos en la comuni-

dad o totalidad, solo en nosotros mismos.

¿Puede ser reversible esta forma de percibir la vida? es decir

podemos aprender a pensar en múltiples dimensiones para realizar

las actividades de las que dependemos y comenzar a despertar

nuestro lado creativo para su desarrollo e involucrarnos con los

demás.


23



He encontrado que la respuesta, que se relaciona con la pri-

mera afirmación es el pensamiento mecanicista, es decir la estruc-

tura de pensamiento que se desprende de aquí es más mecánica

relacionada con el pensamiento analítico, fundamentada en el pen-

samiento científico. Nos han educado mas para ser clones, no en

una educación centrada en el ser humano, si no en las necesidades

económicas y sociales surgidas del pensamiento cartesiano, que

busca la apropiación de los recursos naturales para su explotación,

y para realizarlo necesita recursos humanos preparados para reali-

zar las diferentes actividades destinadas a este objetivo. En otras

palabras, nos han educado más para parecernos entre sí como si

fuéramos clones, con las mismas miradas, creencias, verdades ab-

solutas, que es imposible el cuestionamiento ante tales leyes uni-

versales.

Recuerdo que una vez una compañero de la escuela me de-

cía, ¿tú crees en la historia?, le respondí que sí, y me decía, ¿tú es-

tas seguro de que lo que ocurrió en la independencia, es cierto?, y

mí respuesta fue sí, y me preguntó ¿en qué basas tu verdad?, mi

respuesta fue, en lo que me dijo el maestro y en los libros que lee-

mos. Y él me dijo, ¿que de cierto hay en lo que esta escrito? y ¿lo

que nos dijo el maestro no es verdad?, ¿él vivió allí?, ¿él vio lo que

paso?, a lo cuál me lleno de incertidumbre y de dudas. Lo único

cierto es que ahora tengo mas preguntas que mi compañero. En

ese momento no encontraba relación con nada, ya que me encon-

traba dentro de una institución educativa y estaba en formación.

Hoy siento, que en las escuelas los alumnos seguimos ajustándo-

nos a las reglas absolutas e inamovibles del conocimiento y de la

información que nos muestran donde la idea es seguir creyendo,

aprendiendo y recitando todo lo que nos enseñan sin cuestiona-

mientos al sistema.

Continuando con las afirmaciones, la segunda, “Cuando más

se educa a las personas, tanto más va aumentando la peculiaridad

de sus redes asociativas‖, esta es para mí la respuesta más acertada

a la búsqueda de un ser diferente a un Clon, la cual es una posibili-

dad de un nuevo ser, y no una copia bizarra de algo o alguien. Esto

se parece más al pensamiento de un ser holista, integrado a su en-

torno, independiente, espiritual y creativo.

La pregunta sería ahora, ¿Ser Clon o no Ser?

Esta manera de percibir la vida, es una forma muy cómoda

de mirar y sentir el mundo, misma que nos va alienando en el sin-

sentido de la vida, y sentirnos vacíos en nuestra cotidianidad, per-

diendo el significado de la vida.

¿Qué mas se ha extraviado del ser humano?

Buscando como el hombre vive, vemos que según las apre-

ciaciones de Leonardo Boff, la ética y la moral vigentes hoy son

las del capitalismo. La ética capitalista dice: bueno es lo que per-

mite acumular más con menos inversión y en el menor tiempo po-

sible. La moral del capitalismo se basa en emplear la menor can-

tidad de gente posible, pagar menos salarios e impuestos y explo-

tar mejor la naturaleza. El menciona que la razón de la crisis en

principios y valores es la producida por este paradigma, el cual ha

modificado a su antojo las costumbres y la cultura humana, para

originar un ser guiado por su pensamiento capitalista.

La ética y moral no son hechas a favor de los valores huma-

nos, por lo que la causa de nuestros problemas es que somos, pen-

samos y vivimos con una ética y moral capitalista, pero ¿por qué

me siento pobre, en el capitalismo?

24




La respuesta sería, que la pobreza del ser humano esta en la

crisis de sentido, generada por la obsesión por el poder y la com-

plicidad con el sistema. Donde el desastre ecológico solo es pro-

ducto de su pérdida de conciencia tanto humana como ecológica,

quedándose sin principios, valores, creatividad y sentido de la vida.

¿Pero que mas he perdido? Esta visión de las fracturas humanas y

espirituales, nos dejan con una gran frustración e impotencia, ya

que hemos perdido lo que significa el ser humano y sus principios

y valores que lo mantendrían cohesionado, interconectado, en sin-

cronía y sintonía con la naturaleza, como al árbol que ofrece sus

ramas para la vida animal, sus troncos para subir al cielo, sus raíces

para alimentar la tierra, es decir el que ha perdido mas aquí somos

nosotros, hemos confundido el camino.

Ahora la pregunta, ¿será posible regresar y enderezar el ca-

mino?, como dicen ―árbol que crece torcido jamás su tronco ende-

reza‖, pero el tronco que nos nutre es el mismo, tal ves no es cam-

biar el tronco, si no enderezar las ramas, es decir tender ramas que

nos lleven a recuperar ese tesoro de significados y a resignificar la

vida.

¿Y que mas tenemos perdido?

También hemos extraviado la ternura en sus diferentes ámbi-

tos de la vida, se ha dejado de ser tierno ya que la cotidianidad no

nos permite sentir, llorar, soñar, vivir y expresar esa ternura. En

nuestras estructuras mentales ha desaparecido la ternura, porque

siendo parte del sistema se le ha inculcado no sentir, se ha vuelto

analfabeta afectivo lo que le causa enfermedades y sufrimiento, ha

aprendido a esconder sus emociones ya que no considera necesario

exteriorizarlas.

Se hace prisionera a la emoción para dar libertad a la razón.

Se esconde el corazón desapareciendo la magia de la sonrisa que

emerge sincera del espacio interno del ser, sus sueños.

La Isla humana

Siento que el sentido de la vida se manifiesta de muchas maneras y

que la forma como nos hemos acostumbrado a verla es solo desde

el punto de vista material, y no podemos ver mas allá de esa visión

porque es la forma como nos bombardean todos los días, en todos

los medios de comunicación, como parte del sistema de domina-

ción capitalista, ellos son los medios por los cuales nos inculcan

formas de comportamiento, de ser, sentir y de vivir. Somos seres

aislados en la materialidad, y nuestra isla no tiene contacto con lo

humano, emocional, espiritual y ecológico, entendiendo solo lo

que pasa en mi localidad y no en lo global, como dice Varela, de-

bemos aprender a pasar de una situación local y trascender a lo

global, como parte de esta colectividad, y si no has visto otras cre-

encias, culturas, y formas de vida, te quedas con esa visión frag-

mentada del mundo, en una isla humana, en la cual no admites mas

formas de convivir con lo material.

Esta forma de mirar nos transforma en seres agotados, ago-

biados, sin sentido y desanimados, algo así como ―aplatanado‖ co-

mo dirían en mi rancho. Preguntándonos ¿Qué me pasa?, ¿Por qué

me siento así?, ¿este no es mi estado normal?, es como si estuviera

recibiendo una fuerte dosis de desinterés y falta de sentido; Es co-

mo caer en la trampa del hombre de negocios como diría el princi-

pito, en la cotidianidad.

Esa cotidianidad, la del trabajo rutinario, has este informe,

revisa estas cosas, estar en una reunión, preparar clase, revisar pro-


25

La Isla humana


yectos, problema de virus en los equipos, discos dañados, direccio-

nes de maquinas bloqueadas, clases extra a mi carga de trabajo

normal, terminan por bloquearte.

Estos mismos bloqueos los vemos en los aprendientes todos

los días, que para reconocerlos en el acto educativo necesitamos

que se hagan las siguientes preguntas, ¿Quién soy?, ¿Qué me gus-

ta?, ¿Qué no me gusta?, ¿Cómo aprendo?, ¿Cuál es mi pasión?,

con la esperanza de encontrar respuestas fuera de lo normal, pero

sin embargo solo se puede recolectar respuestas cuadradas, sin in-

terés y sin sentido. Y mi pregunta fue, ¿será que a mis alumnos

también los atrapo la cotidianidad?

Una maestra me comentaba en una clase: no se que les hace-

mos en la escuela, que acabamos con su creatividad, todos

en los primeros semestres vienen con muchas ganas y muy

creativos, y ahora en los últimos semestres se muestran apá-

ticos, desinteresados, sin motivación para comerse el mun-

do.

Una reflexión que representa muy bien el mundo en el

que vivimos, un espacio/vacío en el cual el ser humano ha ido

desapareciendo y con el sus emociones, su ternura, su ser inter-

no, su magia, sus sueños.

Lo que somos hoy es un ser humano que sigue los patro-

nes o pautas de comportamiento del chip de la modernidad y el

capitalismo, donde la pauta es desaparecer y aparecer al ser

consumidor, donde: El consumidor de hoy es un elitista. Es hijo

del hiperindividualismo. Aprendió en la cultura del supermer-

cado y el llamado al cambio de toda la publicidad, en el abuso

de lo revolucionario como costumbre, en la docilidad de la te-

levisión para someterse a la estupidez de los grandes grupos,

que tienen el poder inmenso‖.

En la sociedad de consumo, o consumes o te consumen, o

eres activo o eres pasivo. Leer parece pasivo, pero eso

depende de que leas. Hay libros que abren la cabeza.

Hay líneas que aumentan tu memoria y tu capacidad de

movimiento y de captura de nuevas señales. Hay libros

que miran hacia el pasado y libros que parecen del pasa-

do y son la flecha invencible hacia el devenir infinito de

la conciencia humana

Marina, 2006 ?

26


La Isla humana


¿Y si la vida fuera una chifladura?

Tener una vida creativa, es reconocer que existe algo latente en

nosotros que le da sentido a nuestras vidas. Es ser capaz dar vida a

la magia y los sueños, haciendo posible que nuestra virtualidad

surja. Esa virtualidad que nos permite expresarnos poética y pro-

saicamente, y de repente despertar al sueño de la vida, el de ser

siendo curiosos, exploradores, creadores de espacios de vida, don-

de nuestras mentes navegan libres en la incertidumbre con la chi-

fladura como brújula y con la vida como sueño.

¿y si la vida fuera una chifladura?

En el sentido del paradigma actual sería una locura. Sin em-

bargo visto desde el paradigma emergente es una posibilidad de

transformar nuestra manera de percibir y de crear nuestro espacio

de vida, en ese sentido una chifladura es un intento de mostrar algo

que uno solo ve en sueños, y no solo eso, es buscar mas allá de

esos sueños y tratar de hacer real aquello que se sueña, se sueña

aquello que se cree y aquello que se cree se crea.

Un espacio/vacío donde la chifladura es una creación que

esta mas allá de la simple presencia, es la esencia. Es la esencia

que le da presencia a aquello que soñamos, la cual no se puede ver,

solo se puede sentir; Una chifladura es una dirección en el tiempo

y un espacio en el infinito; Es un agujero negro, blanco y de colo-

res, que nos permite ver a través del espejo de nuestro interior.

Es la búsqueda intensa que nos lleva a realizar una vida llena

de sorpresas y aprendizajes.

27


La chifladura como forma de vida

En un mundo ajustado y aceitado como las manecillas de un reloj,

donde solo se puede ir hacia la derecha de segundo en segundo y

no se nos permite mirar hacia el lado izquierdo, donde los segun-

dos transcurren de la misma manera, en el mismo tiempo, solo

aprendemos una sola mirada, y sin embargo el mundo se expande

y se disuelve al mismo tiempo.

La chifladura como forma de vida, es una búsqueda constan-

te de la construcción del reloj inverso, del aprendizaje de los can-

grejos para tomar el sol, de la construcción de un proceso de pen-

samiento autoorganizado y autopoiético que nos permita vivir

nuestros sueños, enmagiando nuestro existir, creando una forma de

vivir, ser siendo su propia chifladura.

Siendo tu propia chifladura te permites crear tu virtualidad

donde el reloj inverso existe. Y la posibilidad de tomar el sol de

manera colectiva y armónica es posible, entonces una chifladura es

soñar despierto y de manera genuina construir nuestra vida. Es al-

canzar nuestros sueños y hacerlos reales soñando cada instante. Es

respirar y sentirse satisfecho. Es robarle al universo un suspiro. Es

el inicio y fin de cada instante. Es la extensión del tiempo. Es la

intensidad de explorar nuestros sentidos y sentir la lluvia en el ros-

tro. Es quitarte el calzado, caminar descalzo y sentir el roció.

Soñar despierto es una chifladura; Es en un parpadeo soñar y

despertar en otro mundo. Es fundirse y confundirse en la cotidiani-

dad de la vida; Es sentirse lleno en este vacío de sentido; Es bailar

con los ojos cerrados y con el corazón abierto; Es cantarle al oído

al viento y soplar un cascabel en invierno; Es sentir como el tiem-

po hace un alto y el espacio se detiene para dar paso a la virtuali-

dad, haciendo realidad nuestros sueños, despertando nuestro ser.

La gran bifurcación

¿es real o virtual la chifladura? Existe un pequeño problema

para hacer de nuestra vida una obra de arte, una chifladura o de

vivirla de manera creativa, y es nuestra manera de ser, donde la

chifladura es real cuando se despierta y se hace real el sueños,

si pero el problema es que mientras no es real, es virtual, es

decir debemos entender primero el origen de esa realidad para

trascender lo virtual en real.

El filosofo Ervin Laszlo, en su libro la gran bifurcación, nos

menciona que el homo sapiens ha llegado a depender de la inteli-

gencia para la existencia. Y ahora que nos enfrentamos una serie

de acontecimientos a nivel global, es su inteligencia la que nos

tiene en esta problemática, por el afán de querer controlar y some-

ter a la naturaleza.

28




La palabra bifurcación al igual que caos, es una palabra

compleja, que significa una manera curiosa en que los sistemas

complejos se comportan en el mundo real. Donde el desafió con-

siste para el ser humano en moldear las bifurcaciones que sacuden

la época actual de modo que resulten en una época inteligente, de

bienestar y libertad, y no en una era oscura de privación y depen-

dencia.

Para poder aparecer en este acto mágico de la vida se necesi-

ta entender que se tiene que aprender a cuidar la salud de su entorno,

donde al ser humano le es urgente una transformación en su ser, sentir

y vivir en la cotidianidad, donde la transformación debe de darse desde

el origen, ya que es la forma de ser la que nos ha orillado a este enfer-

medad social actual, la enajenación, la cual nos coloca en la gran

bifurcación donde la posibilidad es la transformación del ser.

Nos acostumbramos a vivir, a sentir, a pensar, a escuchar, a

ser de esta manera, que ahora que miramos hacia atrás, solo vemos

los rastros que hemos dejado, sin embargo esta vida cómoda y de

alguna manera llena de cosas materiales, de ir mas rápido que el

tiempo y de romper el vinculo que nos une a la naturaleza, hemos

extraviado el rumbo, el sentido de la vida. sintiendo que la vida es

la competencia de nosotros mismos. Estamos como el equilibrista

en la cuerda floja, no nos damos cuenta que nos podemos caer, y si

caemos no nos daríamos cuenta que estamos cayendo. ¿Será que

hasta que estemos en la tierra nos demos cuenta que estamos en

ella?

Una de las expresiones de esta competencia y perdida del

vinculo con nuestro sentido de vida, la encontramos de manera

cotidiana en eventos a los que asistimos y participamos, les comen-

to, he asistido con mi familia a eventos comunes de muchos padres

de familia para acompañar a nuestros hijos, el día del niño, ver a

los delfines en una feria y la celebración del día de las madres, y

así enumeraría infinitamente varios eventos.

Ahora imagina la situación, estas formado por horas, minu-

tos, segundos en una fila tratando se ser paciente y consciente de

los niños, los adultos y de ti. Te pasas esperando que se habrán las

puertas y de repente, no sabes por que la gente se comporta sin

sentido de vida. La gente llega tarde y no hace fila, se inventa una

fila alterna para entrar, no lleva boleto de entrada y exige se le de

uno, se empuja para tratar de ganar lugar, y así seguiría enlistando

su comportamiento, hasta que al final se arremolina en la entrada,

se empuja, se golpea. Un ejemplo cotidiano de un ser carente de

sentido ―humano‖, donde no le importa lo que le pase al otro, por-

que para ellos desaparece el otro e incluso el mismo.

Lo cierto que esta enfermedad de la cotidianidad, nos llevará

algún día a un evento desafortunado, donde nadie importa mas que

yo y solo yo. La esencia del ser humano, se transgrede y no nos

importa que pase al otro, solo importa lo nuestro, ese malestar so-

cial, implica una cultura enajenada, un sociedad con problemas de

salud social, tan intensos que nos llevan a perder la esencia y senti-

do de vida.

Conversando con un amigo biólogo, comentábamos que los

cambios que se necesitan en la naturaleza, en la vida y en el ser, no

se dan por mandato, ni por normas, ni por dogmas. Esta transfor-

mación se produce a través de la legitimación y reconocimiento del

otro como legitimo otro, y despertando a esa conciencia que nos

permita relacionarnos, dándole presencia así dentro de nuestra coti-

dianidad. Un ejemplo sucede a nivel celular donde una célula al

interactuar y se relacionarse con otra para unirse y compartir infor-

mación se necesita del convencimiento, del acercamiento, de la


29



magia, la pasión, el sueño compartido que las lleve a las dos a

mostrarse, conocerse, reconocerse, convivir, compartir, cooperar,

ensoñar, gozar, y aprender juntas.

La complejidad de la vida se hace presente como parte del

aprendizaje, al presentarnos la realidad tal cual es, ayudándonos a

revelar no solo las incertidumbres inherentes a las propias estruc-

turas de nuestro conocimiento, si no también los agujeros negros

de incertidumbres en las realidades presentes. (autor)

Al desaparecer del dialogo cotidiano de vivir uno dejar de

percibir, perdiendo la sensibilidad y el sentido de relación e inter-

conexión, con los actos cotidianos que nos llevan como humanidad

a reconocernos y legitimarnos, adormeciéndonos en el sin sentido,

y en el desconocimiento del otro, rompiendo la relación natural

que nos une, misma que nos a llevado a la bifurcación de la huma-

nidad, donde los problemas se sienten y perciben dejando a nuestro

paso los estragos de nuestros excesos, deforestación, aguas conta-

minadas, erosión, violencia, guerras, e internamente padeciendo un

paradigma anclado al pensamiento material y newtoniano, donde

el ser humano desaparece.

Me observo desde mi formación como administrador y miro

muchos huecos causados por la fragmentación del conocimiento y

por las islas o parcelas de poder. Dentro de mi área de formación

se me fue formando para hacer a las organizaciones, ―eficaces y

eficientes‖ pensar en términos de resultados, de recursos, y hacer

mas con menos, no importando las consecuencias.

Se me enseño a dividir el trabajo, a hacer estructuras organi-

zacionales funcionales en términos de resultados, a ordenar a las

personas en organigramas y en tramos de autoridad, responsabili-

dad y control ficticios, donde los presupuestos financieros eran los

que les daban vida o semivida a los departamentos creados. Cada

gerente, director, jefe, subjefe, coordinador era rey de su mancha

de poder, y digo mancha por que esa dependía que tanto tramo de

acción se le daba entre comillas. Esas islas de poder casi nunca

trabajan juntas, a menos que tuvieran que realizar algo, y solo se

reunían para ese cometido y después se desaparecía la unión.

Ahora que me miro siento que he transcendido mi forma de

inicial y creo de crear y de creer que es bueno ya que me permite

pensar, hacer, crear posibles alternativas de solución basadas en

una manera de percibir la realidad de manera diferente, ya que al

encontramos con estructuras educativas y organizacionales cro-

nológicamente viejas, con situaciones y experiencias obsoletas que

no permiten una evolución hacia nuevos escalones que les permi-

tan desarrollarse, debido a las viejas formas de hacer y pensar las

situaciones, y que de alguna forma representan una realidad que no

corresponde a la realidad educativa y organizacional actual.

Las técnicas y metodologías administrativas propuestas hace

algunos años, en nuestros días no son tan aplicables ya que resultan

de alguna manera obsoletas, a los nuevos entornos y problemática,

los entornos se han vuelto inestables y la materia prima para estos

contextos son totalmente diferentes y la aplicación de estas técni-

cas y teorías, resulta insuficiente. Además se encuentran tan inmer-

sas en esas teorías y conocimientos que no permiten, incursiones a

nuevas formas de hacer las cosas. Porque se vive encerrados en

paradigmas totalmente discordantes a la realidad.

Libros muy interesantes sobre medicina, arte y los nego-

cios, como son Lánzate al vació, entre el cielo y la tierra y el

nuevo juego de los negocios, tienen un punto común, el ser

humano. En Payan en su libro ―lánzate al vació‖ trata de enten-

der de manera integral al organismo que siente, se emociona y

30




se autoorganiza, autoregulando sus ritmos internos y adaptán-

dose a la vida. Mónica Cosachov en el libro ―entre el cielo y la

tierra‖, nos muestra la visión bioritual del arte, la expresión del

ser dentro de sus actos mágicos y de alquimia, mismos que son

los puentes al conocimiento. La miríada de los negocios de Se-

rra en el libro ―el nuevo juego de los negocios‖, resulta inquie-

tante y a la ves hace posibles todas esas preguntas hechas hace

ya algún tiempo por mí, ahora surgen nuevamente como una

de las posibilidades de transformación en esta era planetaria.

En el centro de esta bifurcación se encuentran las tecno-

logías misma que nos permite plantearnos nuevos escenarios,

Manuel Castells en su libro: La galaxia Internet, menciona que

"Internet no es ni una utopía ni una distopía, es el medio que

nosotros nos expresamos -mediante un código de comunicación

especifico que debemos comprender si pretendemos cambiar

nuestra realidad, en la que un 50% de la humanidad sobrevive

con menos de dos dólares al día y la mitad de la población no

ha hecho o recibido una llamada telefónica en su vida. La nece-

sidad de la economía de flexibilidad en la gestión y de globali-

zación del capital, la producción y el comercio, derivada de una

nueva estructura social basada en las redes‖.

Educar, ¿para qué?, esa es la pregunta, la respuesta parece

más distante, pero esa creo es la clave para entender como en

medio de estos espacios relacionales, (Maturana) cotidianos

(Gutiérrez), son donde el ser se desarrolla y vive. y es en estos

espacios don su esfuerzo y energía, son los que de alguna ma-

nera autoorganizan su vivir.

Al creer desaparecer de los espacios cotidianos, nos cen-

tramos en el consumismo y la satisfacción económica los cuales

rigen el proceso de pensamiento, y es difícil conocer y recono-

cer, restándole importancia al ser. Para poder trascender debe-

mos de encontrarle el sentido de ser, sentir y vivir, en este espa-

cio sincrónico, relacional y resonante, tomando en cuenta el

efecto mariposa, de nuestras acciones y creaciones cotidianas.

En este sentido para tomar conciencia y aprender en estos es-

pacios relacionales se debe estar de cuerpo presente, haciendo

posible que el ser aparezca, abriéndonos al encuentro de nues-

tro ser consciente, aprendiente, autoorganizado y creador, un

ser creativo y mágico.

Sin embargo esto es posible solo si desaprendemos lo

aprendido y re-aprendemos transformando nuestros modelos

mentales. Ya que los modelos mentales tienen que ver con lo

que sentimos y lo que hacemos, no con lo que decimos, que

puede ser diferente. Los modelos mentales determinan lo que

percibimos y lo que hacemos en consecuencia. Chris Argyris

dice que muchas veces las personas al conversar asumen actitu-

des defensivas, que dificultan la conexión entre la verbalización

y la realidad, entre lo que piensan (o se hace) y lo que se dice.


31



El modelo mental actual es el denominado maquina

de newton, orientado a la eficiencia cuyas características

son certeza, predictibilidad, jerarquía, división del trabajo,

fragmentación, empleados pasivos, un punto de vista, com-

petencia, estructuras rígidas, reactivos. Este modelo mental

prioriza cuidar y cultivar y racionalizar el pasado, - recur-

sos, estructura, bienes que no hay que perder – y proyectar

el futuro matemáticamente, esto es a través de un cuidadoso

y seudo proceso de estimación del mañana basado en la ex-

periencia de la compañía.

Danah Zohar propone el enfoque cuántico (Zohar,

1997) cuyas características son incertidumbre, cambio rápi-

do, redes no jerárquicas, multifuncionalidad, enfoque holís-

tico, empleados socios, muchos puntos de vista, comple-

mentación, respuesta y flexibilidad, experimental. Estos es-

quemas mentales parecieran Chips implantados en nuestro

pensamiento, el cuál nos limita a solo observar lo que no es

permitido, o nos permitimos.

Transformar nuestra manera de percibir la vida, los

sueños, la magia y la virtualidad, nos permite aparecer en la

cotidianidad, haciendo posible el acto mágico de vivir.

Los modelos mentales son las imágenes, supuestos e

historias que llevamos en la mente acerca de noso-

tros, los demás, las instituciones y todos los aspectos

del mundo. Como un cristal que distorsionara sutil-

mente nuestra visión, los modelos mentales determi-

nan lo que vemos. (Senge, 1990).

La vida como expresión de sueños

Sin expresión no hay educación, el educando que no logra expresar-

se es porque se le mantiene reprimido. El dar y encontrar sentido no

es solo cuestión de comprensión, sino sobre todo, de expresión.

Esto significa que se ha logrado la claridad, coherencia, segu-

ridad, riqueza y belleza en el manejo de las diferentes formas del

lenguaje. Esta es una regla de oro de la mediación. (p48). esto nos

lleva a la razón de ser y al interés de la ecopedagogía que es la for-

mación de la ciudadanía planetaria y a la creación y promoción de

una cultura de sostenibilidad. (p6) ahora esto se hará en el redescu-

brir y en la recuperación armónica de una nueva manera de ver, en-

focar y vivir nuestras relaciones con el planeta Tierra y con todo lo

que esa conciencia planetaria supone: tolerancia, equidad social,

igualdad de géneros, aceptación de biodiversidad y promoción de

una cultura de la vida desde la dimensión ética. (p8).

Donde la ecopedagogía de aprender es una búsqueda de un

significado al proceso de aprendizaje a través de la interacción, res-

peto y armonía recuperando esa conciencia planetaria a través del

aprendizaje cotidiano y con un sentido integral de la vida.

Y si la vida es una expresión de sueños, cada uno de nosotros

seria parte de ese gran sueño de la humanidad, donde cada uno de

nuestros sueños llenan el bosque de arboles de sueños. Haciendo el

acto de vida, un acto de soñar despierto, expresando nuestro ser,

donde el sentido y la intención es mágico al sacudirse el polvo deja-

do por los hábitos cotidianos que nos llevan a perdernos, es más una

búsqueda constante de nosotros mismos en este espacio /vacío de la

vida.

32




La ruta que seguí, es una ruta hechiza, adaptada a mi mo-

nada contextual, es decir nutrida por mis preguntas y por mis

mentores, este es el camino que emprendí en esta búsqueda de

tratar de romper esquemas mentales para poder navegar por la

incertidumbre de la vida, ya que los caminos cambian a cada

instante.

El nodo que es el punto de partida fue la estrategia de la

pregunta en la cual me permitió apropiarme del sentido de este

doctorado el de la autoorganización. La estrategia de la pregun-

ta de (Wagensberg) se fue ampliando en los siguientes cursos,

con el proceso de pensamiento (Krishnamurti), la resonancia

mórfica (Sheldrake), la pedagogía de la pregunta (Assman), El

método, estrategia y alea (Morin). Los mapas del conocimien-

to, y su visión del arte (Cosachov), los modelos mentales (Serra

y Senge).

Y a nivel personal camine a través del re-conocimiento de

los sentidos, el cuento, la intuición, la pasión de aprender, la

magia de aprender, el sueño de aprender, la conciencia de

aprender, ecopedagogía de aprender, la autoorganización en la

virtualidad. Un sueño me llevó a un cuento, y donde ese cuento

se trasformo en un sueño virtual, para dar paso a mi realidad,

resignificando mi relación con la naturaleza y la vida misma,

esa es para mi la ecopedagogía de aprender en medios digitales,

es disfrutar y gozar con todos los sentidos, vivir apasionada-

mente, vivir enmagiado, vivir el sueño y disoñarla vida, im-

plicándome en mi proceso de aprendizaje a través de mi con-

ciencia, percibiendo y transformándome en mi vida cotidiana.

Y el vació relacional surgió ―este vacío tiene que ver con

sentir-pensar un espacio de aprendizaje, de encuentro, de pa-

sión, de magia y de sueños. Donde el ser humano sea el que le

de vida a estos vacíos, donde se puedan pensar y expresar los

sentimientos, las emociones y donde el yo virtual es real, es un

vacío/espacio para encontrarle sentido no sólo a los medios di-

gitales sino a la condición humana. Para llegar a ser posible es-

te ―lugar‖ es necesario conversar, dialogar en la construcción y

deconstrucción de la condición humana, no tan sólo la que está

detrás de la tecnología o la que está alrededor de la tecnología,

sino al modo de ser humano que decide estar en ambas y tras-

cender‖.

Ahora no se trata de un vacío relacional de encuentro sino

de la emergencia que nos lleva a la transformación del ser, la

salud espiritual de la vida, esa que se expresa en el contraespa-

cio de la educación y que es necesaria para transitar a otros es-

tados de conocimiento.


33



El sueño de la vida

¿Cuándo se vive se sueña o se sueña cuando se vive?

— ¿Papá, porque tienes ojos?

La pregunta que le lleva a mi hijo a entender porque tengo

ojos.

— ¿Por qué tengo ojos?

Mi respuesta fue para mirarte, sentirte, pensarte, tocarte, escucharte

y amarte.

Cuando a las cuatro de la madrugada despiertes de tu sueño,

y en el sueño entres en un estado de encaje, donde todas las piezas

se acomodan y te den la entrada al mundo del mago, al mundo del

saber, el lugar donde encuentras la alquimia, donde tienes que vi-

vir y escribir lo que ocurre.

Escucho, siento, vibro en el sueño y ahora ya no paro más

mi mente simplemente la dejo fluir, volar como la sabia naturaleza

que coquetea con la vida. Esa que hace crecer la parra de manera

fluida, armónica, sincrónica y vibrante dando vida a la vida.

Lanzarse al vacío ahora es volar en el mundo del mago, en la

percepción total de la vida, siendo niño. La inocencia es la esencia

de la alquimia, la cual se ha ido perdiendo en ese encuentro azaro-

so con uno mismo, nombrando cosas, significando cosas, concreti-

zando y encerrando la vida en los límites del pensamiento. El vacío

es la inocencia, allí donde todo puede ocurrir la magia de sentirse,

vivirse, ensoñarse. O sueñas o te sueñan.

Y es en esta búsqueda de la virtualidad donde la vida co-

La búsqueda de la virtualidad:

la vida comienza como un sueño.

La vida comienza como un sueño, que al despertar el amanecer

hace levantarse al sol y mirar desde el horizonte la vida. El regazo

de la abuela te hace soñar y te conecta mágicamente con tu ser,

abriendo tus sentidos al mundo de los sueños. La magia del soñar

despierto te hace vivir la magia de un niño mientras duerme. La-

zarse al vacío de la vida y volar hacia donde el viento lleve esta

vez a tu cometa en el horizonte, es comenzar la vida como un sue-

ño y tocar las estrellas.

Todo comienza como un sueño.

Un sueño que nos lleva caminar en medio del bosque en

busca de las hadas que nos lleven al encuentro con esos seres

mágicos que nos muestren la manera mágica de ver la vida. Sin

embargo por mas que nos adentremos a ese bosque, no podremos

mirar a esos seres, porque nuestros ojos carecen de esa mirada que

nos lleven a ver mas allá de nuestra presencia.

El sueño de nuestros padres al concebirnos era de habitar un

mundo ideal, construido para nosotros, sin embargo el mundo de

que ahora habitamos no se acerca en nada a ese construido por

nuestros padres, ya que ese es su mundo.

Y nuestro mundo ¿cuál es?

34


La búsqueda de la virtualidad: la vida comienza como un sueño.


mienza como un sueño, donde encuentras unas palmaditas, una

sonrisa, el amor de un niño, donde en el juego, en la pasión, en el

disfraz, en el regocijo de cambiar, de mutar día con día, momento a

momento entras en sincronía en el mundo del mago, el cual no está

en otro lado más que entrar en la inocencia, en el estado de amor,

juego, creación de tu propia vida.

Es en el encuentro del espacio de la virtualidad donde coin-

cides con tus emociones, con tus sensaciones y puedes transgredir

el espacio tiempo. Es el encuentro del elemento de la alquimia, que

se encuentra dentro de ti. Es encontrar ese elemento que transfor-

ma la vida y al encontrarlo hallas en el arte de vivir.

La búsqueda del dragón plata, del pez mágico que cambia de

color y se transforma, esta en el mundo del mago, allí donde se

disoña la vida, y se construyen los sueños, en la sutileza de la ino-

cencia de ser niño. Ahora cuando miro a mi hijo con tus ojos cerra-

dos cuando duerme con tus manitas en tu mejilla y con una gran

sonrisa, sintiendo esa armonía y cercanía con tus sueños. Escucho

su respirar tranquilo y de repente al escuchar una risita mientras

sueña, me da la entrada a ese umbral infinito de los sueños, donde

los dos somos niños y dormimos disoñando juntos.

Un sueño es un espacio o dimensión en el cual es posible crear y

vivir en el. ¿y si la vida fuera una chifladura? ¿y si la vida fuera

solo un sueño? Me gustaría vivir ahí.

Masaru Emoto, en su libro ―La vida secreta del agua‖, menciona

que el acto de vivir es un acto de fluir, y que en ese fluir esta una

forma diferente de ver la vida. La importancia de vivir en sintonía

con el ritmo de la vida y el flujo de la naturaleza, explica que la

vibración, la frecuencia, la resonancia mediante la intensión u ora-

ción hacen maravillas en un elemento tan sutil como es el agua,

imagínate que hará en el ser humano que es 90% agua. Dice que al

igual que agua necesita retroalimentación y del flujo de energía

constante, para no estancarse y morir, dice que la circulación en el

ser humano es la llave para abrir las compuertas a un nuevo día a la

raza humana, ya que dice que todo comienza por la circulación y

es el agua quien nos muestra el camino.

Y si el sueño es el que le da la energía a la circulación en el ser

humano, la vida estaría sostenida por el sueño de vivir.


35

La búsqueda de la virtualidad: la vida comienza como un sueño.


Descubriendo mi virtualidad

Cuando me atrapa la cotidianidad esa que absorbe y que no me

permite pensar, solo ser, simplemente me dejo llevar por la co-

rriente y dejo que me absorba. Quitarme de encima a esos yoes

que soy yo, y que de repente aparecen con sus necesidades de

ser, sentir y vivir, no me dejan más remedio que dejarlos ser.

Ahora cuando ellos ya gastaron toda la energía, y que ya satisfi-

cieron sus necesidades, ese yo que soy, está cansado, adormila-

do, pero necesita expresarse.

Te preguntarás cuáles son esos yoes, y cual es, ese que

soy. Los yoes son esos hábitos, creencias, pensamientos, mie-

dos y esas necesidades que de alguna manera bloquean mi ser

interior, esa necesidad de ser y estar en esta vida en el contacto

en la interacción con lo ordinario, con mis hijos en sus activida-

des, con mi esposa en la convivencia y conmigo en esos ratos

de descanso. Sin embargo estoy yo, el que necesita reflexionar,

sensar y escribir eso que ocurre, que enmagia la vida.

Quizá creas que estoy enloqueciendo, y que lo que te digo

no tiene lógica, tal vez creas que necesite un descanso para no

salirme mucho del tema, sin embargo al hablar de sueños, ma-

gia y virtualidad, necesito conocer quién soy yo, y descubro

que eso es lo que soy. Soy lo real que es el que escribe y soy lo

virtual que es lo que piensa, siente, vive y le da presencia a esta

esencia, soy la unidad de los dos. Para ser autentico debo de

reconocer que existen, el reconocerlos y legitimarlos me da la

pauta para expresar ese ser que soy.

Para escribir esto fue necesario desenchufarme de la ma-

trix. Es decir quitar la conexión con la red tecnológica, que me

hacia estar sin estar. Fue necesario leer y releer libros y algunas

notas que en el transcurso me fueron aclarando hacia donde

tenía que ir. Se por mi intuición y por la magia de vivir, que

este texto ya fue escrito en algún lugar del tiempo y el espacio,

y que esto que estoy tecleando, es solo la expresión de ese es-

crito, es decir al hacerlo real lo virtual y lo virtual real, hay un

vaciamiento de ese texto que fluye a través de mis dedos a estas

letras. Su significado en este lenguaje, no es otra cosa que el

encaje del tiempo y el espacio, en la relación con la vida.

A través de las lecturas pude darme cuenta, que muchas

cosas que fui pensando en el presente y que las manifestaba co-

mo mías, fueron teniendo sentido para muchos autores en el

pasado, y las fueron escribiendo en la sincronía con el tiempo,

de tal manera que era curioso leerlas mientras pensaba. Quizá

no tenga sentido escribir, quizá no tenga sentido pensar, ya que

lo que piense y escriba, alguien en algún lugar a través de esa

conciencia cósmica, es capaz de escribir y pensar lo mismo.

36




Al escribir sobre sueños, magia y virtualidad, quiero en-

contrar un lugar, que le dé sentido y significado, a ese ser único

que eres tú, un ser capaz de crear y recrear la realidad a través

de sus sueños, y que es capaz de transformar su vida a través de

la magia de vivir, este texto está dedicado a ese ser que puede

soñar despierto, a ese ser que desde que se levanta vive una vi-

da de ensueño, a ese ser que disoña su vida en la oscuridad el

infinito y que se atreve a cruzar el vacío para mostrarse en toda

su autenticidad, ese ser que merece el nombre de Mago de lo

ordinario, ese ser eres tú.

Un ser capaz de fundirse y confundirse con el universo.

Un ser capaz de asumir su responsabilidad y compromiso

con la vida.

Un ser que busca ser autentico, el original de su vida.

Un ser que sueña lo que es su vida y que permite que al-

guien diseñe sus sueños.

Un ser que se permite ser el mismo, porque él, es el único

que puede lograr sus sueños.

Un ser sencillo, sensible y humilde en su pensar.

Un ser que es perfecto y extraordinario, que no necesita

decir quién es, por que ya es.

Un ser que esta siempre llegando en esa recursividad de

la vida.

Un ser que se reconoce así mismo en cada contacto con la

vida y en cada interacción con las vidas.

Un ser que dignifica y legitima su ser y el de los demás.

Un ser que se regocija en cada momento de su vida.

Un ser que le da forma al ser que eres tú.

Ahora al descubrir que la virtualidad es la forma en que

miramos, sentimos, olemos y palpamos, descubrimos aquello

que le da sentido y significado a nuestras vidas. Al hablar de

virtualidad seguramente viene a tu mente las computadoras, los

hologramas tridimensionales, los guantes de realidad virtual,

los avatares y todos esos adelantos tecnológicos, que nos per-

miten comunicarnos e interaccionar con los otros seres, a través

de estas extensiones de nuestros sentidos. Esa apreciación está

muy bien, pero eso solo es la presencia de nosotros con la tec-

nología de por medio.

Sin embargo el ser que crea y recrea esa tecnología se

pierde en medio de esa interacción tecnológica. Esa pérdida se

basa en la despersonalización de esa interacción, de esa caren-

cia de sentido y de esa ausencia de la presencia humana en es-

tos medios. Te preguntaras, ¿si esta pérdida es originada por el

uso de la tecnología?, la respuesta es no. Sin embargo se agudi-

za y se percibe con el uso de la tecnología.

¿Qué es lo que agudiza y que se percibe como perdida de

sentido?, es una pregunta interesante, porque en la vida diaria,

en la cotidianidad se percibe esa misma ausencia. ¿Entonces

esa ausencia no tiene que ver con la tecnología? Eso es real, es

decir el origen de esta ausencia de nuestra presencia en estos

medios, no tiene que ver con el uso de la tecnología. Más bien

tiene que ver con esa presencia en nuestra cotidianidad, su ori-

gen está dentro de nuestro interior, y es que hemos perdido

nuestra presencia en el mundo real.

Al hablar de nuestra presencia, alguna vez te has pregun-

tado ¿Cuál es tu presencia?, ¿Cómo se manifiesta? ¿Tu presen-

cia es real o es virtual? A eso que le llamamos presencia no es

otra cosa que lo que manifestamos de manera integral al expre-

sarnos mediante nuestra interacción con los demás seres, que

puede ser mediante el lenguaje y el contacto.


37



Nuestra presencia es única e integral, y es esa presencia la

que nos hace auténticos. Al hablar de autenticidad es la forma

en que el ser se manifiesta desapegado de toda estructura que

no se es, es decir es el mismo ser que crea y recrea su ser, ya

que mediante esta se manifiesta su sentido y significado. La

ausencia de esa autenticidad lo lleva a seguir patrones mentales,

los cuales no corresponden a su esencia, si no que es una copia

de alguien más y que de alguna manera sigue esos patrones sin

un sentido.

El sentido de nuestra vida, se lo da el conjunto de cons-

trucciones que hacemos a partir de nuestra vida, y que es lo que

manifestamos.

38




El árbol de los sueños La naturaleza cuando nos vio durmiendo bajo las estrellas hace

miles de años, quiso cobijarnos, así es que le dio a los árboles la

capacidad de acercarse a nosotros y por medio de sus raíces los

hizo soñar y conectarse con su esencia. Los hombres ahora

dormían bajos los árboles, se guarecían y acurrucaban en sus

raíces, y se arrullaban con el sonido de sus ramas mientras el

aire soplaba. Ser árbol, ahora tenia sentido en su vida, su co-

nexión con la naturaleza, un espacio para descansar, un rincón

donde acurrucarse, un espacio donde sus sueño podían germinar,

crecer, madurar y cobrar sentido, así nació el árbol de los sue-

ños.

Un espacio natural donde los sueños tengan un sentido,

una emoción, una pasión, un ensueño, el árbol de los sueños.

Un sitio donde la conexión con nuestra esencia es real y

virtual, real por que podemos tocarla y virtual por que podemos

soñarla. Un espacio donde las ausencias, las presencias, los olvi-

dos, los recuerdos tienen sentido, ese que nos lleva a la recupe-

ración de nuestro ser.

Un espacio natural que alimente y cobije nuestros senti-

dos, que llene nuestros pulmones. Un espacio que nos lleve a

entender nuestras crisis y así evitar la erosión humana, espiri-

tual, de valores y climática. Un espacio que nos recuerde de

donde venimos, que nos muestre nuestra naturaleza, vida, sue-

ños, colores, formas y nos permita reconectarnos con el acto

mágico de existir.

39


El árbol azul turquesa

Se dice que la vida es un suspiro de un mar que recorre las llanuras

en busca de un árbol que le dé una sombra del sol intenso de pri-

mavera. Y es en ese lugar, donde crecen los higos de arroces azu-

les que alimentan a las golosas sensaciones de amor del invierno.

Sabes ese lugar es el lugar donde las mariposas cósmicas

descansan sus alas color plata hechas de rayos de sol de verano y

pinceladas de ámbar del árbol rosado de la noche. Es debajo de ese

árbol donde los caballos alados color membrillo corren y sueñan

con sus zapatos de plomo y sus plumas color carmesí amarillo.

Si te imaginas esas alas inmensas, de esos alados caballos,

cuida tus sueños porque allí descansa entre las ramas un enorme

Elefante marrón al que le gusta cazar bajo la luna llena esos sueños

que corren risueños sobre los lagos de hielo sabor turquesa.

Esos sueños escurridizos que gozan trinando bajo el atarde-

cer rojizo de las montañas en forma de piña. Yo los miro pasar

deslumbrando el horizonte en forma de nubes y de aves majestuo-

sas. Esos sueños van cargados de montañas azules y rosas que rie-

gan alegría como si fuera lluvia de amor.

Ese árbol, tiene un nombre curioso, le llaman ―Inocencia‖, se

dice que es el elemento alquímico donde se cuecen las emociones

y las sensaciones sensan las miradas de los corazones de los niños.

Es ese elemento color magenta que se inventa un sabor dulce cuan-

do al mirar por el espejo de los sentimientos cambia de forma y se

transforma en un ser mágico.

Será la Mariposa cósmica, el Caballo alado o el Elefante ca-

za sueños.

Se le ha visto en forma de una mirada sabor granada, se le ha

sentido en el suave vaivén de las ramas del árbol azul del monte de

las luces amarillas. Se le ha escuchado en el ladrido del perro jil-

guero que trina al atardecer de los pingüinos. Se le sentido en la

lengua del fuego, cuando al morder un pedazo de turrón de azúcar,

sabe a alegría de vida. Se le ha intuido en el sentir de un suspiro

que llegó de un mar que recorre las llanuras en busca de un Árbol

azul turquesa.

Ese árbol azul turquesa. Es donde descansan los sueños y la

vida .

Ese es el hogar de la magia de vivir, donde el ser que ali-

menta su vida, eres tú.

40

El árbol de los sueños

El árbol azul turquesa


El sentido de la conexión con nuestra naturaleza

¿Qué sentido tiene el árbol en nuestra vida?

¿Qué sentido tiene la conexión con la naturaleza para nosotros?

¿Qué hace que un árbol sea mágico y que sea la conexión mágica

con nuestra esencia?

Hemos caminado cerca de ellos, nos alimentamos y toma-

mos todo de ellos, que de repente hemos olvidado nuestra co-

nexión con ellos. Al olvidarnos de que existen desaparecen de

nuestro umbral y con ello nuestro espacio natural donde nuestros

sueños cobran sentido.

¿Te has preguntado alguna vez a donde van los sueños cuan-

do sueñas?

Es una pregunta curiosa, pero a la vez mágica. Saber el lugar

de los sueños, es como encontrar la magia de soñar, y es que el

espacio donde los sueños cobran sentido, es el árbol de los sueños.

Ese espacio donde los sueños crecen como hojas de ese gran

árbol. Los sueños dependiendo su madurez hacen que él árbol cam-

bien en cada instante de color y de forma, mimetizándose en el

paisaje, dándole vida. A veces es un árbol verde, amarillo, naranja,

rojo y azul turquesa, los cuales son el reflejo del espejo de cada

sueño.

Un árbol mágico donde solo crecen sueños es maravilloso.

Sueños como hojas de color verde, como los brotes de un nuevo

sueño; Sueños como hojas de color amarillo, que son sueños con

energía tomando fuerza; Sueños de hojas color naranja que son

aquellos los cuales comienzan a contagiarse y a madurar; Sueños

como hojas color rojo los cuales ya no necesitan de ti, regularmen-

¿Los árboles tienen ética?

Buscando una respuesta, como dice Jorge Wagensberg hay dos

opciones, una es ver el mundo como un mundo de preguntas y mi

tarea es buscar las respuestas. Y la otra es ver el mundo como un

mundo de respuestas y a mi me toca descubrir las preguntas. En

este sentido optare por la segunda, y las preguntas que le hago a la

naturaleza son:

¿Y si fuera árbol, cuáles serian mis principios y valores?

¿Los árboles tienen ética y moral?

¿Por qué son hermosos?

¿Cómo crecen en la naturaleza?

¿Qué determina su estructura?

¿Cómo sienten, como piensan y como viven?

¿Los árboles tienen espíritu?

Una de las respuestas la reza una leyenda bajo un

árbol:

―como todos los árboles, mientras viva, ayudaré a agregar

oxigeno y limpiar el aire que respiramos todos. También

daré cobijo, protección y hospedaje a muchos animales y

ofreceré con gusto mi sombra y belleza a la gente que quiera

acercarse a mí. Aunque me veas aquí solo, recuerda que mis

hermanos forman los bosques que permiten que el agua ali-

mente a la tierra y que sólo así puede formar manantiales y

ríos, de los que tomamos el agua que bebemos. Si nos cui-

das, todos podremos vivir mejor aquí, en este mundo‖

En mi niñez, en la cima de un cerro de mi pueblo llamado La

Orduña, Coatepec, Ver. Existía un árbol ―El Vigilante‖, así le

llamábamos, era impresionante y asombroso, con una altura como


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de cincuenta metros en medio del cerro. Para mí era el símbolo de

la grandeza de la naturaleza, y lo veía con respeto. Al pasar los

años ese árbol nos sirvió para jugar, bajo sus raíces, había una cue-

va la cual nos guarecíamos de la lluvia y algunas veces hasta dor-

mimos cobijados por esas raíces. Sin embargo a ―alguien‖ se le

ocurrió la grandiosa idea de llenar esa cueva, con cascarilla de

café, la cascarilla de café al degradarse, comienza a pudrirse y a

soltar calor por la descomposición, ―El Vigilante‖ comenzó a mo-

rir, ya que sus raíces habían sido quemadas, y ese árbol que una

ves fue un símbolo de la naturaleza, al pasar el tiempo fue solo le-

ña para quemar en las casas.

Esta es una de tantas historias de la vida en la naturaleza, de

árboles, ríos, lagunas, manantiales, e incluso montañas, mares y

hasta países, que han sido degradados y mutilados en aras de la

―modernidad‖, las preguntas ahora cambian para encontrar alguna

respuesta de lo que ha ocurrido en desconexión con la naturaleza

del ser árbol:

¿Qué mal hacia ese árbol?

¿Cuál fue su crimen para asesinarlo de esa manera?

¿Por qué seguimos destruyendo nuestro hábitat?

¿Cuál es el esquema mental hace perder esa conexión?

¿Cuáles son los principios y valores que nos sustentan como

seres humanos?

¿Cuál es nuestra ética ecológica y humana?

Como vemos, los árboles y los demás seres vivos en la natu-

raleza se rigen por principios y valores universales, los cuales les

hacen creer, crear y convivir con los demás. ¿Qué nos ocurrió? Y

¿Cuál es nuestra forma de ser, sentir y vivir en este mundo?.

Perdiendo la esencia de la naturaleza

Quizás una de las respuestas a nuestra forma de ser, sentir y vivir

en este mundo, es que hemos perdido el significado de los valores

ecológicos y humanos, donde lo que menos nos preocupa es la na-

turaleza. Nos sentimos con el poder suficiente para tomar y hacer

de la naturaleza todo lo que nos plazca, al fin si es de todos. Esto es

lo que se nos ha hecho creer y sentir.

Hemos ido perdiendo nuestra esencia, al desligarnos de

nuestro nicho vital natural, al mismo tiempo nos alejamos cada vez

más de ese ser humano interconectado y dependiente de la natura-

leza, nublándonos la vista los valores económicos, en los que no

entran ningún valor que tenga que ver con la ecología y lo huma-

no. Pensamos que todo en la naturaleza se puede regenerar y que

con el dinero lo podemos lograr, y esta forma aislada de pensa-

miento basada en la comodidad es lo que nos impide ver que tan

mal estamos, pensando y viviendo en este sociedad cada vez mas

enajenada con el confort y el poder. Y cada vez más alejada de la

naturaleza y de la espiritualidad de su ser.

Como le diría el zorro al principito:

—Adiós —dijo el zorro—. He aquí mi secreto, que no puede

ser más simple: sólo con el corazón se puede ver bien; lo

esencial es invisible para los ojos.

—Lo esencial es invisible para los ojos —repitió el principi-

to para acordarse.

—Lo que hace más importante a tu rosa, es el tiempo que tú

has perdido con ella.

—Es el tiempo que yo he perdido con ella... —repitió el

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principito para recordarlo.

—Los hombres han olvidado esta verdad —dijo el zorro—,

pero tú no debes olvidarla. Eres responsable para siempre de

lo que has domesticado. Tú eres responsable de tu rosa...

Los hombres hemos olvidado esta verdad, de que lo esencial es

invisible para los ojos, entendiendo como verdad los principios y

valores que nos mantienen interconectados a la naturaleza, como

parte esencial de nuestro ser. ¿Qué mas hemos perdido en este

mundo? Un mundo como lo pensamos y creamos, en este paradig-

ma de pensamiento.

Perdiendo el sentido de la vida

La búsqueda de principios y valores humanos como la confianza,

la espiritualidad, el respeto, la vida, el amor, serán los que nos gu-

íen en este caminar, para entender esta ausencia de sentido y com-

prender que ocurre dentro de la virtualidad del ser, que le da senti-

do a su realidad de existir.

Una explicación es este paradigma que prevalece en nuestras

mentes y que forma parte de nuestra cotidianidad, el cual coloca a

la ciencia delante de la naturaleza, y a la cultura del capital o

económica por delante del ser humano. Esta visión limitada y frag-

mentada ha generado múltiples problemas, uno de los cuales es la

perdida de lo que significa la naturaleza y del hombre como una

totalidad, ya que los ve separados, así mismo el hombre mismo ve

separada la mente de su cuerpo.

En la sociedad, los problemas como el del agua potable y la

producción de alimentos en las ciudades, los graffitis en las calles,

la violencia, corrupción, deforestación, el racismo e inmigración,

problemas laborales, que ocasionan en el ser humano un caos en

sus creencias y espiritualidad, los cuales dan origen a enfermeda-

des como el estrés, las adicciones, y en sus familias problemas de

desintegración, divorcios y violencia; en los niños y adolescentes

problemas de aprendizaje, de educación, de atención y de sentido

de vida.

Todos estos problemas provocan en el ser humano un vació

existencial el cual como dice Víctor Frankl ―suele manifestarse en

forma de aburrimiento y apatía. Mientras que el aburrimiento es

indicativo de una pérdida de interés en el mundo, la apatía revela

una total falta de iniciativa a la hora de hacer algo en el mundo, de


43



cambiar un aspecto del mundo‖.

En este extravió, hemos perdido la capacidad de asombro,

ahora una flor es una simple flor, y no la vemos como un organis-

mo vivo como parte de una totalidad, y lo mismo le paso al árbol,

que se pierde su esencia y conexión en esta sociedad carente de

significados ecológicos y humanos. Esto coloca al hombre en una

perdida de su creatividad, sus sueños, su magia y su virtualidad,

que lo mantendrían alerta retroalimentándose en esta sociedad, al

perder esa miríada, su sentido de la vida desaparece y con ella sus

valores y principios, ya que su inteligencia colectiva no se ve mas,

como antes en las vida comunitaria y su sentido de unidad pasa a

formar parte de lo perdido con esas estructuras mentales capitalista

y consumistas.

En medio de este caos existencial, el hombre se percibe co-

mo el reflejo de su manera de pensar y vivir en este paradigma. El

ser humano ahora se encuentra prisionero del tiempo, del capitalis-

mo, del consumismo, de sus necesidades de comodidad y confort,

de su trabajo, de sus emociones creadas, de sus deseos de comprar

y vender, y no vivir, ya que el sistema ha cuidado todo esto al gra-

do de ofrecer justificaciones para cada manera de actuar.

En este sentido hemos extraviado el manual del ser humano,

el que nos decía en caso de perder el sentido de la vida, oprima

este botón. Y sin embargo tenemos el manual del confort, el cual

nos da una gama interminable de productos y servicios todos con

el ―poder de su firma‖, pero conseguir cada cosa en este mercado

es una competencia económica, alcanzable para unos cuantos e

inalcanzable para los demás.

Entendiendo el problema de sentido del ser humano en este para-

digma surge la necesidad de reconectarnos y restablecer los puen-

tes que nos lleven a recuperar y legitimar nuestra presencia conec-

tada a la naturaleza y con ella recuperar nuestra virtualidad y con

ella nuestro sueños y la magia de vivir.

La perdida del proceso de vida

Darle sentido a lo que haces, es darse cuenta de lo que ocurre, es

no perder el foco de atención, no es ver el error sino la oportunidad

para continuar. ¿Cuál es el sentido, el deseo, el sueño, la pasión y

la magia de la vida? ¿Cuál es la razón por la que haces las cosas?

Alguna vez te has preguntado: ¿Como has pasado por la vida

hasta hoy? No te pasa que de repente todo pasa desapercibido que

no ves, no hueles, no degustas, no escuchas, no sientes, que pierdes

tu proceso de aprendizaje. Cuando pierdas tu proceso de vida, trata

de localizar el punto donde tienes que decidir que hacer y siente

con todos los sentidos, las posibilidades de aprender, lo único que

necesitas es darte cuenta en el momento en que suceden las cosas.

Cuando pierdes el sentido de la vida, sientes como que la

vida se nos va en un estado de stand by, es decir como en estado de

espera para estar alerta de los momentos de disfrute y gozo de

aprendizaje. Este estado de espera inducido por los sistemas que

nos regulan la vida, mismos que se encuentran en situaciones cada

ves más caóticas, sin un plan b previsto para cuando las cosas se

salgan de control.

En esta búsqueda por la recuperación de nuestro ser, donde la per-

dida de sentido, con nuestra virtualidad como brújula que nos guie,

surge la pregunta:

¿El ser es sostenible o es sustentable?

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Esta es una pregunta que busca el equilibrio integral entre el ser

humano con la naturaleza; y su integración e interacción a la vida.

La película de ―la canción de Hiawatha‖, es sin duda un ejemplo

de este equilibrio, una película donde un sueño les predice la vida,

es decir la virtualidad del sueño construye la realidad del destino

de cómo puede rescatar a toda su tribu. En la virtualidad del sueño

Hiawatha tubo que pedir ayuda a los animales y emprender el ca-

mino para encontrar aquello que los llevara a recuperar a sus igua-

les. En medio del caos natural el tuvo que emprender un viaje ayu-

dado por los animales, el podía lenguajear e interactuar con ellos,

llevándolo a descubrir un tesoro que se hallaba resguardado por un

Oso. Un tesoro que salvo a su tribu. A Hiawatha lo salvo su pa-

sión, su sueño, su magia y su conciencia de su ser, su virtualidad.

Esa virtualidad que se construye día a día, de instante en instante,

de sueño en ensueño, de momentos mágico, de la búsqueda cons-

tante de la energía que le da sentido a su vida.

¿El ser es sostenible o es sustentable? La respuesta tiene que

ver mas con un compromiso y responsabilidad individual, dando

sentido a nuestra vida, llevándonos a una transformación de signi-

ficados y valores, los cuales se dan en ese recuperar a ese ser sus-

tentable y en armonía con el medio ambiente, ser siendo Hiawatha.

En este sentido no basta con cerrar la llave del agua para ser sus-

tentable, como se piensa, es mas que eso, ya de acuerdo a nuestra

manera de percibir nuestra realidad encierra un significado econó-

mico, político y hasta educativo, que ha veces pareciera una moda,

donde muchos la toman de bandera para sus discursos, y no signi-

fican su dimensión real, sin embargo para otros los menos adquiere

una dimensión mas orientada a la convivencia con la naturaleza.

―Una cuestión de conciencia, si: de esto se trata. La buena noticia

es que todos y cada uno de nosotros estamos dotados de ella y que,

por consiguiente, todos y cada uno de nosotros podemos hacer

algo por cambiar las cosas. Y que en la suma de la reflexión de

cada uno y de sus consecuencias practicas en nuestros distintos

ámbitos de actuación, personales y colectivos, está sin duda una

de las vías más sólidas de solución para muchos de los males que

nos aquejan como sociedad, como civilización, como especie. Lasz-lo, E. 2004: XVI

Una piedra que calma la sed

Una vez caminando con mi abuelo en el campo de regreso a casa

después de un arduo día de trabajo en su finca de café, caminába-

mos en un camino de piedras pequeñas bajo un sol de medio día,

después de caminar ya varios kilómetros, me decía.


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— ¿Tienes sed, hijo?

— si abuelo tengo sed, pero no trajimos agua y todavía queda ca-

mino por recorrer.

— Te voy a enseñar un truco para que tu boca nunca se seque y

tengas saliva para poder tragar mientras llegamos. — me decía mi

abuelo mientras comenzó a buscar algo en el camino—, el sol nos

daba en todo el cuerpo, su calor que a veces es tan extremo que no

tienes una sombra donde meterte. Mientras mi abuelo buscaba en

el camino, yo miraba al cielo azul, y como el calor sobre el camino

hacia como espejos, en los cuales podías ver un manantial en me-

dio del camino. Estaba tan extasiado perdido mirando el reflejo en

ese espejo, cuando mi abuelo grito.

— aquí esta, esto es lo que buscaba — y continuo diciendo—

— Enrique, toma esto y mételo debajo de tu lengua.

— ¿que es esto abuelo? pregunte, a lo que mi abuelo respondió,

— es una piedra, pero debes elegir una pequeña que puedas meter

detrás de la lengua, de esa forma tu boca nunca se secará y hará

que siempre tengas saliva para tragar, recuérdalo siempre hijo,

cuando tengas necesidad de caminar mas de lo debido y que no

tengas agua para tomar, basta con una piedra detrás de tu lengua

para llegar a donde tengas que llegar.

Con la piedra detrás de mi lengua, seguimos caminando, yo estaba

intrigado si realmente funcionaria, pero que curioso, al cabo de

unos segundos comencé a salivar más, y más, que mi boca co-

menzó a refrescarse. Por fin después de algún rato en medio del

calor, llegamos a una Higuera y mi abuelo hizo a un lado las hojas

y dejo la tierra limpia que tenía un color café oscuro, y me dijo

siéntate un rato aquí. Al sentarme me sentí muy fresco y comencé

a sentir mi cuerpo bajar el calor.

El, por otro lado busco en la Higuera a una Bromelia de

grandes hojas, la tomó y de allí se desprendieron algunas gotas de

agua y le pregunte:

—¿Qué haces abuelo?— el me dijo, aquí los animalitos tie-

nen sus provisiones de agua.

—Mira, — al mirar dentro de la bromelia pude ver que había

agua, y yo brinque de alegría, por haber encontrado agua—,

el me dijo.

—Esta agua solo la vamos a tomar para refrescarnos pero no

la vamos a tomar. Así es que solo humedécete tus labios y

moja tu nuca y tu frente, no la tomes, porque puedes enfer-

mar si hay algunos bichos, y yo le dije pero tengo mucha

sed.

Mi abuelo entonces saco un Paliacate de su pantalón y me dijo

haber colócate debajo y bebé solo y un poco, así es que comenzó a

caer el agua que del Paliacate se filtraba.

— Gracias abuelo, — mi abuelo sonrió y me dejo caer el

agua sobre la cara y comenzó a reír—, mientras me quitaba

el agua de la cara y comencé a reír.

Nos quedamos un rato debajo de la Higuera dejando que nos re-

frescáramos y respirando profundamente, el aire comenzó a soplar

y a bañarnos de frescura. En eso escuchamos un silbato de una

fábrica que nos decía que era la una de la tarde, y mi abuelo me

dijo. Vamos hijo, apresurémonos que ya es hora de comer. Claro

abuelo vamos que ya tengo hambre.

¿qué es sostenible y que sustentable?, emprendo la aventura de

conocer y reconocer el significado en mi vida, aunque creo que lo

sostenible y sustentable son palabras creadas por el sistema econó-

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mico para darle un nombre a todas esas cosas que no tenemos res-

puesta, o que se convierten en moda para justificar nuestro descui-

do.

Con lo que me ha enseñado mi abuelo Antonio, se que la

sustentabilidad del ser es conocer y reconocer que la naturaleza

esta integrada al ser humano y no separada de él. Se que para cal-

mar tu sed, solo necesitas encontrar una piedra en el camino y una

Bromelia sobre un árbol. Se que para refrescarte basta con sentarte

bajo una buena sombra y descansar. Lo cierto es que hemos errado

el camino en ves de caminos de tierra tenemos caminos de cemen-

to, en ves de Bromelias en árboles tenemos supermercados y pos-

tes, en ves de sombras en la tierra bajo de un árbol, tenemos pisos

de concreto y asfalto debajo de unas enormes estructuras que en

ves de dar sombra, consumen energía.

Una panza de rey

Esperaba para hacer un tramite en el banco cuando se saludaron

dos personas uno le decía al otro.

—¿Te ha ido muy bien verdad?, tocándole la panza,

— ¡Si!, esta panza es el resultado de la comodidad.

La respuesta me llamo la atención, y esta persona explicaba que la

panza era gracias a su bienestar es decir a la forma en que llevaba

su vida, su trabajo, el estar sentado, el comer en restaurantes y el

vivir como rey, y explicaba —siempre tienes alguien que te sirve,

y te satisface en tus gustos— es decir mientras tengas dinero, el, le

dará vida a todas tus exigencias, ya que el mercado se ha encarga-

do de que siempre haya alguien que proporcione un producto o

servicio. La vida de reyes es esa la de pedir, y lo que deseas te es-

tará esperando.

Esta carrera desenfrenada por el consumismo, es lo que ha origina-

do a un ser humano carente de conciencia de si mismo y de lo que

le rodea. Se mantiene desintegrado de la vida sin prestar atención a

su ser, perdiendo el sentido de la vida y perdiéndose en el proceso

de aprendizaje, para el carece de sentido lo que hace y para que lo

hace, solo actúa como autómata programado para lo que el siste-

ma le dicte que hacer, sentir y vivir en este mundo virtual, creando

una realidad sin razón y sin sentido, engañándose así, de que lo que

hace, siente y vive tiene sentido.

El perder el sentido equivale a perder el proceso de vida, es decir

llega el momento en que tus elecciones y decisiones están goberna-

das por personas, que no eres tú. Donde una marca de bebidas te

dicen que tomar, como tomarlo y cuando tomarlo. Otras marcas de


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comida te dicen que menú comer, cuando y como comerlo. Las

marcas de ropa te dictan la forma "moda" de que vestir, como y

cuando usarlo. En las escuelas te dicen como hablar, leer, pensar y

escribir. En tu religión te dicen cuando y como orar. Y en nuestras

familiar nos dicen que creencias y costumbres.

¿Y con que nos quedamos?

Con nuestra conciencia, esa que aparentemente es nuestra pero sin

embargo obedece a ciertas reglas morales y éticas, que fueron ver-

tidas en nuestro embudo de vida desde que nacimos e incluso antes

de hacerlo, con eso que ya hay hasta estimulación temprana, para

cuando prendamos nuestro localizador en el mundo y en el espa-

cio/tiempo, nos demos cuenta que nuestra vida carece de sentido, y

es que de alguna manera nos han ido vacunando para ser indivi-

dualistas, egoístas, ególatras, sin intereses reales, carentes de pa-

sión, de sueños de magia y de conciencia propia.

Nos programan para ser, sentir y vivir como clones, es decir

para reproducir el sistema. Con esta programación se mantiene el

―status quo‖ en el sistema y no se permite pensar fuera de ese espa-

cio/vacío, controlan nuestra vida sin permitirnos vivir de manera

libre y con un sentido de vida, que nos permita mirar nuestro refle-

jo en el espejo de nuestra vida.

La Energía sigue al pensamiento; nos movemos no más allá de lo

que podemos imaginar. Aquello que asumimos, esperamos, o cree-

mos crea y da color a nuestra experiencia. Expandiendo nuestras

más profundas creencias sobre lo que es posible, cambiamos nues-

tra experiencia de la vida. Nuestras vidas están moldeadas no tan-

to por nuestras experiencias, sino por nuestras expectativas.

George Bernard Shaw

Mirar el horizonte

Un primero de enero de año nuevo hice una locura que fue esperar

salir el sol en la cima de un cerro, después de celebrar con mi fami-

lia la llegada del año y con mis amigos cantar y jugar en una fogata

a las cuatro de la mañana en vez de irme a dormir, me dije voy a

esperar el sol de este año. Así que tome a mi perro Jack, y me fui a

esperar el nuevo día del nuevo año.

Esperar, te suena conocido, resulta que la palabra mágica

―esperar‖ forma esperanza, y esperanza es el estado mental y de

animo que nos llena de gozo para emprender el viaje hacia algo

mejor. Esperamos cuando queremos algo, imaginamos, creamos,

cantamos y olemos ese instante mágico que nos lleve a conocer

eso que esperamos. Cuando en la sala maternidad esperamos a que

se prenda la luz del nacimiento de un hijo, es impresionante la for-

ma en que esperas, es mágico el momento. Cuando ves a tu hijo

por primera vez, es simplemente genial, cuando tocas sus manos,

rosas su rostro y te grabas su primera sonrisa, y lo miras dormir,

con esa paz y armonía, eso te llena la vida.

Cuando esperas por alguna cita con alguien especial, prepa-

ras tus mejores diálogos, tus mejores historias, te miras en el espe-

jo, platicas contigo, practicas tus gestos, tus sonrisas y te preparas

para ir al encuentro de ese ser especial. Ir al encuentro de tu ser es

un instante que ilumina tu espíritu, esa luz de esperanza se trans-

forma en la atracción de tus emociones y sentimientos para llevar-

los a un futuro que deseas estar, eso es formidable, ya que la espe-

ranza te transforma en ese ser mágico creador de encuentros. Sue-

les sonreír, gritar, correr, disfrutar, cantar, escribir, recitar, amar,

querer y respirar.

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Mirar el horizonte


Ir al encuentro del año nuevo es ir a recibir el sol, la luz, la

emoción, el calor, la atención, la intención, la oración, es describir

ese paisaje que se transforma de un oscuro, a un claro de sol, de

esos grises a esos amarillos intensos, de ese frío a ese calor. Cuan-

do al leer y escribir, sobre como el ser humano va perdiendo su

esencia, me siento deprimido y veo un futuro desolador, siento,

creo, amo, quiero, escribo, canto, respiro y cierro los ojos, y "miro

al horizonte" y sabes veo ese sol brillar sobre esas montañas salir

como todos los días, ese sol que nunca falla y siempre esta dis-

puesto a salir, a pesar de las inclemencias del tiempo, del frío in-

vernal, de la locura de la vida, de ese caos vial, de esa desenfrena-

da carrera por tener y querer mas y acumular riquezas, y perder el

sentido de la vida, "la vida misma".

Mirar el horizonte, es mi forma de mirar, oler, degustar, es-

cuchar, crear, creer y sentir, que detrás de esas montañas de caos

hay un sol de esperanza, que espera por nosotros. Así es que el fu-

turo no es tan malo si voy al encuentro de ese alguien especial, y

preparo mis mejores diálogos, mis mejores historias, me miró en el

espejo y platicas contigo, practicas tus gestos, tus sonrisas y te pre-

paras para ir al encuentro de ese ser especial, "Tú"

Después de este encuentro, abrí los ojos mire un horizonte

brillante, una luz roja, naranja y amarilla ilumino mi ser y le dio

calor a mi corazón, respire y respire el nuevo día, le dije a mi perro

Jack, volvamos a casa, salí corriendo y gritando de alegría, era lo

que esperaba, ese alimento para el alma y vivir con esperanza.

"Como los antiguos alquimistas, viajero, tú puedes transmutar la

duda en confianza, y el miedo en coraje. Nuevas expectativas traen

nuevas alternativas. No esperes que las experiencias te lo confir-

men. Crea una visión positiva de qué te gustaría y seguro que lo

conseguirás."

Dan Millman

“La conciencia es ubicua/ la siento a veces en el pecho/ pero tam-

bién está en las manos/ en la garganta, en las pupilas/ en las rodi-

llas en los pulmones/ pero la conciencia más conciencia/ es la que

se instala en el cerebro/ y allí ordena prohíbe festeja/ y hasta reco-

rre interminablemente/ los archipiélagos del alma (...)‖.

Benedetti

"esperanza es el arte de esperar" y "la esperanza abarca toda la

vida".

Francisco Gabilondo Soler, Cri Cri

Brindo, dijo otra voz, por la esperanza / que la vida nos lanza, / a

vencer los rigores del destino, / por la esperanza, nuestra dulce

amiga, / que las penas mitiga / y convierte en vergel nuestro cami-

no. / Brindo porque ya hubiese a mi existencia / puesto fin con

violencia / esgrimiendo en mi frente mi venganza; / si en mi cielo

de tul limpio y divino / no alumbrara mi sino / una estre-

lla brillante: mi esperanza.

Aguirre Fierro

La vida de Buda, que sucedió hace unos miles de años, nos mues-

tra como inicio su historia como Siddharta, y como siendo el here-

dero de un rey sanguinario, el encuentra su camino en el tiempo, y

como es que su padre le crea un mundo virtual con todos los lujos,

inerte, sin cambios. Un mundo irreal por que borro todo rastro de en-

fermedad, pobreza y vejez por todo su reino, para hacerle creer a su

hijo, que ese mundo mágico era real. Sin embargo Siddharta crece y se

da cuenta que fuera de ese reino la vida era diferente y decide abando-

nar su hogar, su nicho virtual creado para lanzarse a la búsqueda de su

ser, así comienza su caminar, creando y cocreando su realidad, tocan-


49

Mirar el horizonte


do la vida, la muerte, el hambre, la enfermedad, la pobreza, la miseria,

la violencia y sus creencias, mirando, oliendo, tocando, degustando

y escuchando la vida, la cual era totalmente diferente a como había

sido, ahora vivía en mundo real, en movimiento, incierto y muy

vacío, no de vacuidad si no de relación y de sentido.

Le estoy enseñando a mi hijo las letras escribiéndoselas en

los dedos y en las palmas de la mano, y mi esposa se enoja porque

enseño así al niño, a lo que respondo, es para que el toque y sienta

las letras, de esa manera el niño se relaciona directamente con el

sentido de las palabras y crea su realidad, su relación con su expre-

sión, su creatividad, su virtualidad.

Entendiendo el vacío como la posibilidad de crear un espacio de

relación y contacto con la vida, en este sentido Illia Prigogine en

una entrevista menciona que —la mecánica cuántica tenía vacíos y

son los vacíos en los que son necesarias las nuevas ideas… donde

la existencia es, en cierta medida, excitaciones del vacío— un vac-

ío, como el espacio donde las posibilidades son reales y virtuales,

donde la magia de transformar hace posible el sueño de hacer posi-

ble lo imposible, donde la virtualidad hace posible la realidad.

La existencia humana toma lugar en el vacío/espacio relacio-

nal del conversar. Esto significa que, aún y cuando desde

una perspectiva biológica nosotros somos homo sapiens,

nuestra manera de vivir, es decir, nuestra condición humana,

toma lugar en nuestra forma de relacionarnos unos con otros

y el mundo que generamos en nuestra vida diaria a través del

conversar. Maturana y Verden-Zöller (1993)

Dialogar y conversar en la cotidianidad es el espacio/vacío donde

se construyen las relaciones humanas, tanto virtuales como reales.

Para que este dialogo creativo y expresivo se lleve a cabo necesita

del compromiso, —hasta donde quieres involucrarte—, de valores,

—sentir-pensar— es un asunto de ética —ser uno mismo—, es

hay/arte —arte de expresar—, y para que cobre vida necesita

energía, sueños, magia y virtualidad.

50


Para apreciar un árbol



―Que pauta conecta al cangrejo con la langosta?, ¿y a la

orquídea con el girasol?, ¿Y que es lo que une a todo aque-

llo entre sí?, ¿y a todos ellos conmigo?, ¿y a Ud. conmigo?,

¿y a todos nosotros y aquellos con la ameba por un lado, y

con el esquizofrénico que encerramos por el otro? ¿…cuál

es la pauta que conecta a todas las criaturas vivas entre

sí?‖

¿Qué es un árbol?

—Si esa es la pregunta ¿Cuál es la respuesta?

Siempre me ha llamado la atención su estructura, tanto que me he

preguntado si crecen de arriba hacia abajo, y no de abajo hacia arri-

ba. Me llama la atención su color de hoja en la primavera y como

en un lapso de unos cuantos días pasan de colores amarillos, rojos,

cafés, verdes, verdes, verdes.

Su color verde, ¿de donde viene ese color?, y porque no azu-

les o moradas. Su tronco por que es muy fuerte, ¿será que son los

múltiples sentidos de la tierra por donde se comunica y conecta

con el universo?, ¿sus azares o flores por qué huelen tan rico?, ¿su

fruta por que sabe tan dulce?, ¿Quién les pone el sabor a esas na-

ranjas, guayabas, nísperos, duraznos?, ¿Por qué sus ramas tienen

múltiples brazos?, ¿será que buscan alimento en el aire?, ¿las ra-

mas le permiten respirar y atrapar agua para comer?, ¿Por qué las

aves se refugian en sus ramas y hojas?, ¿Por qué se escucha un

murmullo al pasar el aire entre sus hojas, que pareciera que can-

tarán?.... existe una pregunta más para conocer a un árbol, seguro

que si, así es que si la tienes házmela saber.

Una vez mi abuelo me comentaba que donde hubiera un

árbol de Sauce, por sus plantas se hallaría un río. La respuesta no la

sé, pero cada vez que veo un Sauce, es curioso pero no solo hay

uno, si no una línea de ellos, como diciendo aquí donde estoy, bajo

mis plantas fluye un rió subterráneo que me nutre. ¡Asombroso no¡

¿Qué es un árbol para ti? ¿Cuál es tu relación con ellos?

¿Cuál es la pauta que conecta al ser humano con el árbol?

No lo había notado pero creo que la respuesta de mi pasión

por los árboles esta en mi admiración, asombro, aprendizaje, vida,

amor, creación, emoción, sentimiento, alegría, paz y respeto que

les tengo. Y es por ello, que siempre que voy al parque con mi fa-

milia llevó mi cámara fotográfica, al mirar por la lente me quedo

atónito al observar la belleza de los árboles que cubren con su ver-

dor todo el parque, disparo mi cámara queriendo atrapar cual caza-

dor de sueños el color, la textura, el olor, las formas, su estructura,

sus voces, su emoción en una foto y que creen, ¡lo logré! tengo

unas lindas fotos de esos árboles majestuosos.

En mi bosque privado tengo mi colección de ellos, en este

bosque crece un sinfín de variedades, desde los frutales hasta los

que dan una sombra increíble, tengo árboles rosas, azules, morados

y hasta blancos, me doy el lujo de tener varios colores.

He aprendido mucho de ellos, me han acompañado en mi

vida, y cada vez que veo alguno, lo observo y trato de guardarlo en

mi memoria. Ahora adquiere sentido mi vida con los árboles, la

admiración, el reconocimiento, la legitimación, el aparecerlos en

mi aprendizaje es el punto donde la reconexión con la naturaleza

tiene sentido, descubriendo la pasión de observar, oler, comer, con-

versar, mirar, encanto, asombro, aprender, ser, vivir, sentir, pen-

sar…. Vivir y El ser árbol.


51



Mi esperanza es que ahora al ver un árbol, miraras un espa-

cio natural de vida, que es como nuestro nicho vital el cuál nos da

energía y alimenta, es como cruzar el umbral de nuestro nicho vital

donde se desvanece nuestro ego y se entra en sintonía y armonía,

con nuestra naturaleza. Es entrar a la cueva de cristal del Mago, es

transportarnos al lugar que solo es posible estar, ver y sentir como

se transforma nuestro cuerpo y ser, con el simple acto de estar en

un espacio natural, un árbol, un sueño, eso es mágico.

El vinculo creado entre los árboles y nosotros es tan ancestral, que

dependemos de ellos tanto que sin su presencia, no tendríamos

esencia, su esencia natural nos protege y nos permite conectarnos

al mundo de los sueños.

Cuando crees en algo se vuelve real y eso también es lo que

hace a una persona real. Como sueña y como comparte sus

sueños. Cuando están contigo o incluso después que se han

ido. Porque los sueños son para siempre.

De la película sueños mágicos

La esencia natural es descubrirte en medio de una hoja de roció.

Es el encontrarte en un haz de luz. Es el sentirte entre las hierbas.

Es el escucharte en el sonido de la cascada. Es olerte en el aroma

del atardecer. Es la magia de vivir en el instante donde la natura-

leza se funde contigo.

Para reconectarnos con la esencia natural, es necesario gene-

rar un cambio en los modelos mentales, esta manera que percibi-

mos y enmarcamos la realidad, en este sentido el proceso de pensa-

miento es el resultado de los modelos mentales establecidos por los

sistemas económico, político, social y educativo. Estos sistemas

tejen las conexiones ocultas que nos han traído al sistema actual, el

cual nos mantiene encerrados en estereotipos como parte de nues-

tra cultura.

La vida sistemática del mundo actual no nos da la opción de

vivir libres, con emoción, esperanza, valentía y fe de ser, sentir y

vivir. manteniéndonos atrapados en el sin sentido, acumulando

posesiones y títulos, para ser alguien en el sistema. La única op-

ción para transformarnos es construyendo puentes hacia las islas

del conocimiento, que nos permitan compartir, convivir, vivir, dis-

frutar y entender la vida en comunidad.

Ahora la esperanza de un espacio de coincidencias donde mí

sentir pensar vibra y resuena en la creación de un horizonte donde

todo es posible, sin apegos, sin ataduras, creyendo que una trans-

formación, es posible.

―Encontrar sentido a la vida es saber responder día con día y mo-

mento a momento al por qué vivimos‖ (p75)

52




Si al mirar, solo ves pero no miras; hueles pero no olfateas; tocas

pero no sientes; si al comer solo tragas pero no degustas y si al

escuchar solo oyes pero no escuchas de mirar, de oler, de sentir, de

escuchar, de degustar. Entonces has extraviado tu magia, al poner

límites a tus pensamientos, sueños, sentidos e intuición perdiendo

tu tesoro mas preciado, tu conciencia de niño. Esa que hace creer e

ir por la vida asombrándote, comprometiéndote y sorprendiéndote

en cada instante.

Los principios matrísticos. Ternura. Confianza. Intuición. Amor.

Vida. El gen del Amor, —Gen Ero—, es Ternura por que ―crea su

espacio psíquico como su espacio relacional, al vivir en la intimidad

de su contacto corporal como simple resultado de convivir e total

aceptación y confianza en este contacto corporal‖ Es Confianza por

que se aprende a vivir desde la infancia en espació de integración

reconocimiento, aceptación y creatividad, dando significado a su

aprendizaje. Es Intuición al despertar e interactuar con todos los

sentidos, percibiendo el amor, la fe, la poesía y el sentir como la

base de su aprendizaje. Es Amor por que a través de ese espacio

relacional es capaz de desarrollar su ser emocional. Es Vida porque

la vida es aprendizaje, y ese es el sentido de vivir, aprendiendo con

sentido. Añadiría a estos principios matrísticos, la magia, la pasión

y el sueño, como complementos de la búsqueda del sentido de la

vida, siendo estos las ondas expansivas hacia el conocer y recono-

cer de ser en el aprendizaje.


53



El árbol mágico, un árbol azul turquesa que tiene la

magia de transformar la vida a través de el descanso

en su sombra.

Una vida plástica nos lleva a perder el sentido de la

vida desvinculándonos de la naturaleza, olvidándo-

nos de lo esencial aquello que nos conecta con nues-

tra propia naturaleza de ser. La vida de buda nos

muestra esa búsqueda de sentido, creer en la gente,

dando sentido a lo que somos y a lo que soñamos.

Donde el sueño de cazar una mariposa nos permite

integrarnos a la naturaleza, reconociéndonos y legi-

timándonos, creyéndonos parte de algo tan grande

como el universo.

Permitiéndonos contemplarnos dentro de ella,

dándonos la posibilidad de expresarnos y mirar el

horizonte entre las ramas del árbol de los sueños,

haciendo crecer nuestros sueños.

54




El ser arte o el arte de ser

Limpia tu pincel de pelo de camello para comenzar a pintar la

siguiente escena. Esa era una frase que nunca dijo mi maestro

de pintura. Cuando en su clase, nos decía como combinar los

colores y las formas para darle vida a esos mundos dentro de un

lienzo blanco, lo curioso es que nunca eran los mismos mundos

los que se pintaban, algo se transformaba en cada trazo, de ma-

nera paulatina e imperceptible, pero trazo a trazo los colores,

las formas, las luces, las sombras, los claros, los oscuros, van

dejando ver el paisaje que esta entre el lienzo y la pintura, la

vida de los trazos. Donde el arte da paso al ser que crea esos

mundos a través de su mirada, hechizando la vida de aquel que

es tocado con su poema de vida, el arte de ser.

El ser arte antes de ser, sin duda tiene que ver con mirar nuestro

origen y preguntarnos quienes somos, y cual es nuestra inten-

ción en la vida y el sentido de ser. Donde el in-genio, el nivel

de conciencia nos lleva a mirar desde lo sagrado, lo espiritual

nuestro/o arte/magia esa que se autoorganiza en cada instante y

que es capaz de despertarnos para mirar nuestro ser en el arte

de vivir con todos los sentidos como ese viajero del tiempo que

somos, donde el hallarnos es nuestro sueño.

Ser arte antes de ser, soñar antes de despertar para que al des-

pertar seamos sueños.


55


¿Qué eres antes de ser?

Crear un mundo es crear un sueño,

Crear un sueño es crear un poema,

Crear un poema es crear una historia,

Crear una historia es crear una vida.

Saber que pintar, es como saber que se esconde dentro de cada co-

lor, es entender y comprender el rumbo del pincel como la clave

para encontrarse y reencontrarse con la fantástica imagen que está

detrás del lienzo. Donde tomar el pincel y bañarlo de un color no

contemplado y plasmarlo en la imagen pareciera un error, sin em-

bargo en la pintura representa una oportunidad de ser, sentir, emo-

ción e intuición. Que nos dice que la imagen tomará un nuevo

rumbo, imprevisto, incierto, misterioso y mágico.

Así es como encontramos a esos majestuosos árboles morados,

azules y rosas. Valles en el horizonte entre azules, platas y dora-

dos. Mares amarillos, rojos y verdes. Esos, que solo se ven en el

interior del artista y que al mostrarlos enmagian al que los mira y

lo transporta a ese lugar mágico, donde se construyen los sueños.

¿Los sueños preceden a la vida?

Es una pregunta, inquieta, resonante, misteriosa y mágica. Quizá la

pregunta antes de esta sería.

¿Para vivir hay que soñar?

Si la respuesta es afirmativa entonces nuestra vida fue precedida

por un sueño. Y ¿si somos un sueño de nuestros padres? entonces

aun no nacemos. y ¿si aun no nacemos? ellos tampoco, ya que se-

rian el sueño de sus padres y así infinitamente. Y si esto no fuera

un sueño, ¿si somos lo que soñamos? entonces estamos despiertos

viviendo el sueño de nuestros padres, el sueño de la vida, el sueño

de la humanidad. Curioso, por que vista la vida de esa manera tie-

nen sentido algunas cosas, pero ¿Quién soñó la lluvia que esta allá

afuera en este momento?


Crear un sueño es crear una vida,

Crear una vida es despertar del sueño.

Cuando a los ochenta años, recorramos nuestra vida y la miremos

como un mapa, donde los trazos son nuestras historias de vida, en-

tonces estaremos recurriendo a nuestro elefante marrón para pedir-

le recupere nuestros sueños del árbol azul turquesa. Lo que guarda

una memoria, ese sería el titulo quizá de nuestras vivencias. Donde

cada cabello dorado se tiñe de un color especial, que al contar los

recuerdos de amor, de ternura y de emoción, de vida, se pintan del

color de cada instante, que se matiza al compartir su vida, su es-

pacio, sus sueños. Estos mismos colores crean el sueño de vida del

ser arte, disoñando el mundo que quería compartir con los demás.

Donde magia, pasión e intuición la llevaron a construir un mejor

espacio de vida y aprendizaje.

El ser arte o el arte de ser, comienza con un sueño,

continua con la vida mágica transformando cada acto cotidiano,

para dar paso a la realidad que es lo que queda después de haber

soñado.


Crear un sueño es crear un poema,

Crear un poema es crear una historia,

Crear una historia es crear una vida.

56




El arte de ser

El arte da paso al ser que crea esos mundos a través de su mira-

da, hechizando la vida de aquel que es tocado con su poema de

vida.

No se trata de seguir una idea impuesta; se trata de en-

contrarte a ti mismo y de expresarte a tu manera. Esa es

la razón por la cual tu vida es un arte. Tolteca significa

«artista del espíritu». Los toltecas son los que pueden

expresarse con el corazón, los que aman incondicional-

mente…La vida no es más que un sueño, y si creas tu vi-

da con amor, tu sueño se convierte en una obra de arte.

Miguel Ruiz

Ser un artista del espíritu es entrar en un estado de comprensión

de la armonía y sintonía de la vida, es estar en el umbral del –

satori- donde todo la compresión de la vida surge en un estado

de no mente y de presencia total, donde los relámpagos de la

comprensión se forman en la misma vida de iluminación.

El estado de satori o de presencia, es la vista del artista, donde

el mira mas allá de las formas externas, algo que no se puede

nombrar, un sabor, un olor, un ritmo, una emoción, una sensa-

ción, una sincronía y armonía con su sensar la vida. Donde su

ser se regocija en un estado de esencia profunda, un dejavu,

shaktipat, contraespacio, infinitud activa, agujero negro, un

dragón plata, una entrada a la cueva del mago, el mundo de los

sueños, allí donde el vacío relacional cobra vida y donde la in-

finitud activa se revela y donde el espíritu se hace presente.

En esta espiral alquímica de la vida surgen las palabras mági-

cas: Arte. Conciencia. Sueño. Libertad. Espiritualidad. Creativi-

dad. Alquimia. Vida. Arte. Donde la palabra con más resonan-

cia, esencia y magia es la palabra –alquimia- la cuál inunda de

su totalidad, energía y movimiento. Dando forma al aprendizaje

flexible, moldeable risueño y escurridizo.

El permitirnos aparecer en el acto mágico de vida, nos

da la oportunidad de expresar nuestro arte, el arte de

vivir nuestra propia vida.

Expresar la vida en términos de los autores es abandonar nues-

tra esencia de artistas, es dejar de lado nuestros sueños por los

de otras personas. Ser alquimista de nuestro propio destino im-

plica coraje de transformar nuestros ambientes internos o vir-

tuales y los externos o reales. El reto como seres humanos es

transformarnos en un buscador, un buscador de los elementos

alquímicos que nos lleven a vivir nuestro arte.

El ser arte o el arte de ser 57



Ser alquimista de mi propia vida, es vivir apasionadamente la

magia de vivir, transformando mis ambientes internos y exter-

nos y ofreciendo mi arte a los seres con los quien convivo, tra-

tando de ser vibrante y resonante en cada acto de magia que

hago, en ese sentido ser artista es ser alquimista.

el ser sueño. O en el sueño ser.

El compromiso y responsabilidad que quiero expresar es algo que

he ido construyendo y que ahora me doy cuenta, que cada día es

más urgente hacer llegar mi punto de vista a las personas acerca de

la vida. Llevar un color diferente que nos permita observarlo y sen-

tirlo como una posibilidad más.

Luchar por escribir, es como des-atarse las manos para expresar lo

que siento y vivo, sin embargo esa lucha no es con alguien más,

sino conmigo mismo, ese que me bloquea y que me encierra en esa

in-expresión, y sin embargo cuando escribo algo, me entiende y

me deja seguir.

Conocerse uno mismo, es la entrada a conocer a los demás, sin

embargo cuesta la vida entender quien es el que respira y quien es

el que aspira, que se nos va la vida contemplar un amanecer en

unos segundos.

Lo que escribiré lleva una intención de resonar en tu corazón y que

haga timbrar un sonido que te permita entender su frecuencia y

entrar en resonancia con esa sensación de vida.

Escribir la tesis del doctorado, no imagine que fuera tan difícil de

imaginar, de pensar, de sentir, de soñar, de vivir. Y es que a cuatro

meses de dejar de escribir con una actitud constante de llenar un

curso, de repente se me dejo libre y dentro de esa libertad me en-

contré navegando en un mar de incertidumbre y cada vez más dis-

tante de ese punto de inicio. Ahora entiendo lo que decía macha-

do,,, cuando dice-. Caminante no hay camino, se hace camino al

andar,…

Un tolteca es un artista del amor, un artista del

espíritu, alguien que, en cada momento, en cada

segundo, crea el más bello arte: el arte de soñar.

La vida no es más que un sueño, y si somos artistas,

crearemos nuestra vida con amor y nuestro sueño se

convertirá en una obra maestra de arte.

Miguel Ruiz, ―La maestría del amor‖



58


¿el ser sueño. O en el sueño ser.


Sin embargo siento que al lugar que llegue al final, me da la pauta

para plantear que es posible la unión de la magia y los sueños en el

espacio de la virtualidad. Y digo que es una posibilidad más dentro

de esta falta de sentido, en un mundo cada vez más lejos de su ori-

gen y cada vez más cerca de su fin, en el sentido de quedarse vacio

de vacuidad, y no vacio de infinitud como lo es la virtualidad. Esa

desconexión con su ser interno tan alejado de la realidad humana y

sincrónica con su ser, lo tiene alejado de su frecuencia que le per-

mita resonar como esa célula que permea en la membrana de su

vecina, que le permite interactuar en esa legitimidad celular.

Esta es una ruta más que se plantea en el marco de la educa-

ción virtual, para recuperar el ser en la tecnología. Sabiendo que la

distancia recorrida puede ser más placentera y de aprendizaje, si

trazamos y establecemos esos puentes con el arte del ser, recupe-

rando la magia y los sueños de vivir en la virtualidad.

Donde la virtualidad es el espacio de vida y aprendizaje, los

sueños y ensueños son los posibilidad de vida y la magia a través

del desarrollo y reconocimiento del ser mágico, es el puente a ese

lugar de magia y sueños, donde el ser que crea y recrea esa vida es

el ser humano.

Legitimar nuestro ser a través del reconocimiento de nues-

tros talentos de magos, nos permitirán construir ese espacio de vida

y aprendizaje.

¿Qué es necesario, para recuperar al ser?

Se necesita un punto de encaje, una pauta que conecte ese contra

espacio, de vida y aprendizaje —virtualidad—, que es para mí el

sueño. La magia parece ser el punto de encaje y la pauta que co-

necta a ese lugar mágico de encuentro. Ese lugar donde se constru-

ye el ser en la vida. El lugar en que todas las noches tenemos acce-

so al dormir, esa segunda vida, o primera vida. Porque antes de

nacer dormimos, antes de despertar dormimos, antes de mirar dor-

mimos, antes de oler cerramos los ojos y dormimos, antes de sabo-

rear dormimos, antes de vivir dormimos.

Y es en ese dormir, en el que soñamos las texturas, los olores, los

sabores, la ternura, el amor y la vida.

¿Si lo puedes soñar entonces lo puedes vivir?

Soñar que tocas es tocar;

soñar que miras es mirar;

soñar que hueles es oler;

soñar que comes es comer;

soñar que escuchas es escuchar;

soñar que sientes es sentir;

soñar que sueñas es soñar.

Será que la vía para llegar a la vida de ensoñación es la de creer y

crear continuamente la vida.

Soñando despierto, despierto soñando.

Lo buscado.

Si lo puedo soñar, lo puedo pensar y

si lo puedo pensar lo puedo hacer.




Leo y releo, converso y me sumerjo en cada ola de emoción y sen-

sación, y esta es una búsqueda constante. —la curiosidad—, es mi

ruta.

Será que el sueño aun no es tan claro, y que por eso no puedo ver

el sueño, será que cada sueño da paso al siguiente sueño y por eso,

no es claro, si no que tiene un tinte de emoción y sensación que lo

hace no visible por mucho tiempo.

Será como el sueño de la mariposa azul cuando quería tomarle una

foto, se movía tan rápido, que de repente termine siendo el sueño

de la mariposa, y llegó a hechizarme y encantarme tanto que termi-

ne en un santuario en Costa Rica donde el sueño se convirtió en

real, eso sí que es soñar.

O será, como es que conocí a mis hijos, en un sueño recurrente

donde miraba a una niña correr en una casa y a un niño dormir en

su cuna, donde no sabía donde era, hasta que mi realidad alcanzo a

mis sueños.

Será que sigo recostado en el pasto de mi rancho en la Orduña, ti-

rado en medio del cruce de varios caminos, a mis 6 años mirando a

las nubes, preguntándome que significa soñar y perderse en la in-

mensidad del espacio.

Será que aquel que vuela hacia las estrellas soy yo y el que cae al

mar y se regocija en el agua es mi espíritu que navega libre y flexi-

ble entre las olas de la vida.

O será quizá que sigo sentado bajo el árbol del cerro, con mi perro

Jack, mirando desde lo alto el pueblo, las montañas, las nubes y el

infinito, preguntándome como los pioneros, que es lo que hay

detrás de esas montañas, esas nubes, esas estrellas.

Será que soy parte de muchas vidas, de muchos espacios, y que

cada vez que parpadeo en el semáforo me conecto a ese torrente de

sueños, en el cual se recrea mi vida, y que cada vez que cierro los

ojos en caída libre me encuentro conectándome con mi ser, en el

ser sueño. O en el sueño ser.

Hoy descubrí que yo soy mis hijos, que al igual que yo disfruto de

la vida, y sueño que sueño. Ellos son mis sueños y que cada con-

tacto, nos sincronizamos ensoñaticamente en la vida.

Disoñar nuestros sueños con nuestra familia, con mi esposa hemos

construido nuestros espacios de vida, amor y aprendizaje, primero

en pareja y luego ampliándola a nuestros hijos. Que al mirarlos y

educarlos nos encantamos de lo que ellos nos enseñan.

Eso que hemos perdido al ir madurando y ser hombres y mujeres

de provecho, esos que al ser profesionistas y padres nos llevan a

vivir dentro pautas de referencia con nuestra cultura.

Nuestros hijos, los niños, son nuestra pauta que nos conectó de

nuevo a ese torrente, de sueños, magia, juegos, emociones, sensa-

ciones, alegría, amor, … y vida. Esa que con el crecer en cada mo-

mento nos dan el regreso a ser niños, sus historias que nos transfor-

man, eso es la magia de vivir, la búsqueda del ser arte.

60




La magia del ser en la cotidianidad

Es todo un reto escribir algo sincrónico, creativo, curioso, mágico

que nos lleve a vivir en el mundo de los sueños en nuestra vida y

construir la virtualidad. El mundo de los sueños visto no como un

mundo de fantasía, descontextualizado de la realidad, sino un espa-

cio de vida y aprendizaje que nos reconfigure y nos lleve una trans-

formación como seres humanos en relación con el universo.

La búsqueda del sentido de vida en medio de crisis existen-

ciales, es fundamental desarrollar una propuesta que muestre los

aleteos de un camino que nos lleve a encontrar la magia de vivir.

Cuando uno escucha un mundo de sueños, rápidamente vie-

ne a nuestra mente el acto de dormir y cerrar los ojos. Y cuando

digo mundo de sueños vamos mas allá de ese simple acto, y nos

ubicamos en un espacio/vacio de encuentro con nuestro ser, mismo

que a partir de su holomivimiento, hado, nos da la energía para

construir nuestro ser real en la virtualidad.

Los sueños, es quizá la parte más difícil de explicar y de plasmar

en un lienzo lo que uno tiene que decir. Quizá, si apago mi ser ra-

cional y lo comienzo a explicar mi ser sensorial y espiritual será

más fácil, ya que lo que he descubierto en mi vida, no sé si sea al-

go extraordinario, pero para mí es un alimento que me permite vi-

vir en cada momento la intensidad de la vida, la magia de vivir.

Pensar racionalmente nos coloca en un espacio limitado por nues-

tras creencias, paradigmas, conocimientos, cultura, contexto y mar-

cos de referencia científicas, que nos llevan a imponer límites a

nuestro pensamiento.

Pensar espiritualmente, nos coloca mas allá de los limites y nos

lleva a reconocer nuestro ser integrado a nuestro cuerpo, legitiman-

do a nuestro ser interno, ese que le da vida a la vida en convivencia

con nuestro universo. Donde las cosas ocurren sin ninguna explica-

ción científica, pero si con una intención espiritual en contacto con

la energía universal, dentro del campo de posibilidades.

El sentido a diferencia de la intención, es buscar la mediación pe-

dagógica que me permita comunicar mis hallazgos y construir un

puente entre ese ser desvinculado con su relación con la vida, y

establecer dentro de ese vacío relacional de encuentro los enlaces e

interacción con un sentido de vida y aprendizaje a través de la ma-

gia, los sueños y la virtualidad.

Permitiendo adueñarse de los mapas de aprendizaje tanto teórico,

lúdico y mágico a través de cuentos e historias, que nos lleven a

encontrar la pauta que conecta los sueños con la vida.

Un texto que de entrada al mundo de los sueños, o de ensueño a las

personas, que les permita plantearse preguntas y reflexiones sobre

su vida y aprendizaje. En ese sentido este texto se teje con vida,

pasión, intuición, sentidos, conciencia, espiritualidad, salud y vida.

Sueño que puede ser un texto que se retroalimente continuamente

desde el ser, ya que el es el único que puede transformarse a través

de la interacción relacional con su nicho vital interno y externo.

Donde la construcción de la virtualidad es fundamental para llegar

a atrapar los sueños y la magia de la vida.

Cuida tus sueños porque un elefante marrón, el elefante caza sue-

ños se los puede llevar al árbol azul turquesa, al árbol de los sue-

ños.




Hacer un sueño realidad es una utopía, hacer una utopía realidad es

un sueño, entonces no buscare la utopía, ni la realidad, ni el sueño.

Buscaré la vida de los sueños que le permitan a la utopía crear las

posibilidades necesarias para hacer virtual los sueños.

Las rutas hacia esas posibilidades ahora dependen de las palabras

mágicas, que engarcen este texto y que tengan la vida de las pala-

bras a través de los enlaces, pautas e interacción mágica con el ser.

Ser mago es ser sueño. Ser sueño es ser magia. Y ser magia es ser

virtual.

Al dibujar una flor llamada ―Ave de Paraíso‖, sucedió que

cuando la estaba pintando, yo no veía el Ave, solo podía ver la

Flor.

Y la pregunta fue.

¿Por qué le llaman Ave de Paraíso?

Por curiosidad di vuelta al dibujo de la Flor, no lo podía creer,

la Flor entro en una metamorfosis, es decir se transformo en

una hermosa Ave, con las alas abiertas, daba la impresión de

cobrar vida y empezar a volar.

Mi encuentro con el arte

La naturaleza nos muestra el arte en cada segundo, en una hoja,

en las nubes, en el aire, en el rocío, en sol, en la tierra, en los

árboles, en las flores, y en nosotros mismos, todo es arte y el

arte es todo.

Cuando era niño tome una rara costumbre de quedarme

acostado en el pasto mirando las nubes pasar en los cielos, y me

ponía a imaginar que figuras de animales y cosas hacían las nu-

bes, tanto tiempo que a veces despertaba con el rostro de mi

padre o mis hermanos, que querían ver si estaba respirando o

que me pasaba.

Me encantaba ver los matices de azul del horizonte, los

matices de amarillos y rojos al ocultarse el sol, y para mi era

impresionante, había veces que me quedaba hasta que salían las

estrellas, algunas noches tenia tanta suerte que podía mirar has-

ta las nubes de estrellas, el arte en la naturaleza es tal, que uno

62




llega a perder el sentido de apreciar y asombrarse de las cosas.

Una ves mi abuelo me invito a hacer un trazado de una

finca de café, para mi ha sido una gran experiencia, y es que de

lo alto, parecen hechas con regla, ya que se ven tan simétricas

que no entiendes como pueden hacerse con tal grado de exacti-

tud. Recuerdo que mi abuelo llevaba solo unos 50 metros de

mecate y una vara de un metro de largo, la cual era la medida

que deberían quedar separadas las plantas, al principio yo no

entendía como mi abuelo le haría, pensaba que esas cosas solo

la hacían los ingenieros, mi visión se transformo al verlo subir-

se a un árbol y planear el trazo de la finca de café.

El me comenzó a mostrar el como hacer el trazado en un

terreno tan discontinuo, el cuál después de unas horas habíamos

terminado, nos quedo tan bien que desde cualquier parte que

quisieras mirarlo tenia simetría y armonía, hoy en día todavía

puedes apreciar esas líneas pero no con puntos, sino con árboles

y plantas de café. Para mi eso fue una obra de arte.

Cuando tenia dieciocho años fue cuando conocí la pintu-

ra, me inscribí en un curso que era dos veces por semana, re-

cuerdo que mi clase era de las seis treinta a las ocho de la no-

che, al principio iba en ese horario, pero me gusto tanto que le

pregunte al maestro si me dejaba llegar a las cuatro para apro-

vechar el tiempo, después mi horario era de cuatro a ocho.

¿Por qué me llamaba la atención la pintura?

Me preguntaba: ¿si todos podríamos pintar o solamente era una

habilidad de unos cuantos? me gustaba ver pinturas pero no tenia ni

idea como se combinaban los colores y que va primero el sol o el hori-

zonte, el árbol o las hojas, las nubes o la lluvia, la manzana o el gusa-

no, el lago o el ganso, la luz o la sombra, el agua o el cielo.

Aprendí que para que hubiera lluvia debías tener nubes,

que para que hubiera olas debería haber mar, que para que vola-

ra un ave debería tener plumas, que para que existiera una pin-

tura debería de pintarla, y que para que mi pintura fuera vista

debería haber alguien a quien mostrarla, ahora se que para que

la realidad exista debe haber un observador.

La pintura me mostró que no hay pintura fácil, que antes

de mojar el pincel debes de soñar lo que va a hacer, que antes

de soñar debes de vivir, y que para vivir debes de sentir, es de-

cir la esencia de los trazos de la pintura es la emoción y la in-

tensión que pones en cada pincelada.

Recuerdo que mi primer cuadro fue una pintura de unos

gansos en un lago, el cual trate de hacer de una estampa que

encontré. Antes de comenzar el cuadro el maestro me dijo que

preparara la superficie del lienzo que iba a pintar, con dos ma-

nos de pintura blanca, para pintar sobre ella, esto requiere pa-

ciencia, así es que un día lo dedique a preparar el lienzo para

plasmar mi pintura. Me enseño que el arte es esperar, y prepa-

rarte para empezar.

Luego me explico que solo ocuparía los cinco colores pri-

marios, blanco, negro, azul, amarillo y rojo, y solo con esos de-

bería de pintar todos los colores, para era increíble. Otra cosa

que me explico, es que cuando pintara no me presionara por

terminarlo, que nos llevaría como tres meses hacerlo. Dudando

de lo que el me decía, no lo creía, yo quería terminarlo en una

semana.

Comencé a pintar el ganso en primer plano, y mi maestro

me dijo que primero debería pintar el fondo, es decir las monta-

ñas, las nubes y el cielo. Y que había comenzado a pintar por el


Mi encuentro con el arte


final, pero como no quería volverlo a hacer trate de no estrope-

ar mi ganso, así es que llevaba una franela para limpiar y borrar

cada ves que se me pasaba el pincel. A mi maestro esa actitud

le daba risa, pensaba que la pintura era detalle a detalle desde

que comienzas.

Así con esa manera de pensar el arte, tome el pincel del

numero cero, que es el más delgado, para hacer los primeros

trazos, al cabo de un tiempo llegue a ver mi error y que equivo-

cado estaba. Paso la primera semana, y para mí, el cuadro de

mis gansos estaba terminado, y le pregunte al maestro.

¿Ya me lo puedo llevar?

Mi maestro respondió —no, Enrique, aun no, por el mo-

mento, le falta mucho, déjalo así, y la próxima clase que regre-

ses obsérvalo y veras que aun le falta—, esa respuesta me hacia

enojar por no haber terminado, camino a mi casa reflexionaba

que había hecho, y por las noches soñaba como continuar con

el cuadro, los trazos, los colores, los matices, los pinceles, … y

así pasaba el tiempo.

La siguiente clase, llegaba y tal como me decía el maes-

tro, veía incompleto el cuadro, así que me pasaba otras cuatro

horas con mis pinceles pequeños para hacer las plumas y no

pasarme con los colores y los trazos, y seguía con mi franela

borrando y secando. En fin se paso un mes y seguía con el cua-

dro, al mes y medio de estar trabajando ya había cambiado de

color de cielo, montañas, plumas y árboles, que me sentía des-

contento pero lo veía interminable.

A los tres meses de estar trabajando 8 horas a la semana

en mi cuadro, me di por vencido y le dije al Maestro, ya no veo

nada que pintar, ya no se que le falta, ya me lo puedo llevar, a

lo que el maestro me dijo:

— haber Enrique, préstame el pincel mas grande que tengas, y

destapa las pinturas

— ¿Todas?, me dijo que sí, y me dije, ya me lo va a echar a

perder.

Me dio mucho miedo, de lo que le iba a hacer a mi cua-

dro, y le dije —no me lo valla a estropear—, mi maestro solo

sonrió, tomo el pincel numero dieciséis el mas grande, acto se-

guido metió el pincel sin limpiar en cada color y me dije, —ya

me arruino mi cuadro,

Con una habilidad increíble, comenzó a dar trazos a las

alas del Ganso que me tarde tres meses en hacer pluma por plu-

ma, y el en un solo trazo con el pincel lleno de pintura de dife-

rentes colores, las alas comenzaron a salir, y mis ojos no lo

podían creer. En un minuto mi Ganso casi volaba y se salía del

cuadro, de la misma manera le dio movimiento al agua del lago,

a las plumas de los otros gansos del fondo y a las nubes.

Al final de esos trazos maestros, me dijo, listo muchacho,

ahora ya te puedes llevar. Hasta ahora cuando tengo la oportu-

nidad de pintar, recuerdo esa clase magistral de pintura, que

trato de imitar esos trazos, y parecen mágicos y saben que, si

funcionan.

64


¿Mi encuentro con el arte


La flor hamburguesa

Mi hija Mary Kate que a los cinco años, una ves que la llevaba

a la escuela, ella me decía que si le podía enseñar a dibujar flo-

res, y le dije que sí. Así que le enseñe como un corazón, una

estrella, una mariposa se podían convertir en flores, añadiendo

un tallo y hojas, a lo que ella quedo encantada, y ahora sus flo-

res inundan sus dibujos.

Otro día que íbamos de nuevo a la escuela se quedo vien-

do unas flores raras en el camino, parecían a una escobeta, y

ella le llamo a esa flor, la flor escobeta, le pregunte entonces.

—¿conoces las flores hamburguesas?, ella me respondió

— hay Papá estas bien loco, esas flores no existen.

Al otro día al llegar de la escuela me dijo, —Papá, le pre-

gunte a mis maestras y a mis amigos que si conocían la flor

hamburguesa y se rieron y dijeron que no existían, les pregunte

a mis tíos si conocían esas flores y también me dijeron que no

existían—, entonces le pregunte.

— ¿Hija, quieres conocer las flores hamburguesas?

— Papá estas bien loco.

— Ven te voy a enseñar una flor hamburguesa, la lleve al jardín

y se las enseñe.

Después le explique como dibujarla en una hoja de papel, pri-

mero dibujamos la hamburguesa, alrededor de la hamburguesa

unos pétalos, un tallo y ahí estaba la flor hamburguesa. Mi hija

quedo impresionada tanto que al día siguiente llevo una flor

real a la escuela y se las enseño a los maestros y compañeros y

a partir de ese momento esa flor existe.

La existencia se da cuando se trasciende la virtuali-

dad del artista creador de mundos, de espacios, de vacíos

llenos de posibilidades, que expanden nuestro mundo y

transforman nuestra vida. Las flores hamburguesas exis-

ten cuando la gente cree en ellas, si no las percibe con sus

sentidos, desaparecen como el acto mágico de la ausen-

cia, siendo presentes solo en el acto mágico de existir.

Existes cuando te piensan, cuando te tocan, cuando de

huelen, cuando te miran, cuando te paladean, cuando eres

creado — Cree Hado, creado por una energia, por un

movimiento creativo del artista — eres visto por la

miriada del observador.


La flor hamburguesa


La flor hamburguesa es una flor llamada ―Mozote‖, su

centro parece un pan de hamburguesa —pero con pelitos— y

con los pétalos cobra vida esa flor. Se que para mi esa flor era

real, ya que es la forma en que veo la vida, a mi hija le costo

verla por que no creía se existencia, a sus compañeros mas difí-

cil de creer y a sus maestras era imposible pensarla. Ahora ca-

da ves que las vemos en el camino a la escuela, decimos —mira

esa flor hamburguesa— y ya sabe de que hablamos.

La búsqueda de un ser artístico es la búsqueda de algo que le

un significado a nuestra vida, a través de la existencia de no

mundos, de espacios, de vacíos, de contraespacios, creados por

el artista para vivir en ellos, en este caso de algo que no esta en

nuestros marcos de referencia, esto es mas difícil de encontrar

debido a que no somos capaces de ver mas allá de lo que cono-

cemos.

El ver la vida a través de formas y figuras diferentes,

nuestra vida cobra un significado diferente. Será que una de las

estrategia para enseñar nuevos significados, es decir que desde

el arte nos permitirá ver más allá de una simple flor.

El arte es:

Libertad porque solo siendo libre puedes crear

Es creatividad por que siendo creativo puedes fluir

Es fluidez por que solo fluyendo puedes ser sensible

Es sensibilidad por que siendo sensible puedes asombrarte

Es asombro por que solo con la capacidad de asombro puedes

inspirarte

Es inspiración por que solo inspirándote puedes entrar en un

estado de rapto

Es un trance, por que solo en un estado alterado de conciencia

puedes evocar

Es evocación ya que solo en la evocación puedes manifestarte

Es manifestación ya que mediante la manifestación puedes fu-

sionarte

Es fusión, ya que es mediante la fusión puedes trascender

Es trascendencia ya que mediante la trascendencia puedes re-

conciliarte

Es reconciliación ya que con la reconciliación puedes reflexio-

nar

Es reflexión ya que mediante la reflexión puedes lograr armoni-

zar

Es armonía ya que mediante la armonía llegas a cohesionarte

Es cohesión ya que en esta cohesión llegas al espíritu

Es espiritualidad, con el espíritu puedes llegar a la oración

Es oración ya que mediante la oración te sintonizas con Dios

Dios es la explicación del arte en la naturaleza y el universo.

Arte es Amor y el Amor es la Vida.

66


La flor hamburguesa


Hay/arte a ti mismo

Es una expresión que nos lleva al paso antes del proceso de au-

toorganización, —entendiendo como proceso de autoorganiza-

ción, como la forma como nuestras estructuras en el ser huma-

no se acomodan, informan, conocen, reconocen, legitiman, en-

magian, disoñan, suenan, y buscan una intención, un sentido,

un significado en su vivir, que le da energía, movimiento y

emoción a su aprendizaje—, ese camino que es la entrada al

mundo del mago, del artista, del mentor, del inventor, del des-

cubridor, del pensador, del soñador, de la virtualidad del ser,

del ser siendo.

Es la expresión que crea mundos y espacios de vida y aprendi-

zaje mucho mas profundos que el simple acto de preguntarse

por uno mismo, sino que nos lleva a revelarnos quienes real-

mente somos y quienes no somos, como el reconocimiento de

uno mismo en el acto mismo de existir.

Es entrar en un estado de trance, donde el mundo se pierde, y se

crea uno en el cual ―existes‖, existes por que le das presencia a

esa esencia de tu ser, tu virtualidad, esa que te alimenta y que es

capaz de trascender esos mundos lógicos y sin sentido, esos

mundos ordenados sin ningún orden, esos espacios en regla

hechos a la medida de esta realidad.

Una forma de hallarnos es conocer lo que nos alimenta y da energ-

ía interna, como nuestras pasiones, aficiones, las cosas que nos

gusta e interesa hacer, esas cosas que son una expresión de nuestro

ser virtual, que solo sabemos nosotros y que a través de la expre-

sión de ellas y la interacción, los demás logran mirarnos, y recono-

cernos en nuestras obras, como el artista que vive en nosotros.

Me encanta la fotografía, es una de mis pasiones, Rupert Shel-

drake, biólogo ingles autor de la teoría de resonancia mórfica,

en uno de sus textos escribe que hay que ser un aficionado, para

poder descubrir el encanto de disfrutar y gozar aquello que

haces. Mi encuentro con la fotografía fue azaroso, en mi niñez

mi padre me pidió le tomará una foto con una de mis hermanas

recién nacida, fue entonces cuando mire por el lente de la

cámara fotográfica, que al ver ese mundo quede tan impresio-

nado, que me encanto la vista a través del cristal, es como en-

trar a un mundo alterno, diferente, en el cual se le puede robar

al tiempo un instante y guardarlo en un agujero de ese tiempo

para mirarlo eternamente. Una fotografía es para mi como el

cuaderno de campo de un viajero del tiempo, el cual registra en

una imagen como el pintor en el lienzo un instante en el espa-

cio/tiempo único e irrepetible.

Ahora cada vez que tomo mi cámara fotográfica, me encuentro

en un espacio de disfrute y goce, el cual me sumerge en apren-

dizaje para la vida, esta reflexión no se si sea un salto de rana o

quántico, lo que si es que me encuentro aprendiendo a través de

la mirada fotográfica como enano, dice Garner como un niño de

cinco años, gracias a mi hija, y a mí hijo, a mi esposa, a mis

alumnos que se atreven a jugar conmigo y a mis amigos que me

acompañan en este aprendizaje a través de la fotografía.

Hay/arte a ti mismo es una palabra que salió en el curso de me-

diación pedagógica al mostrarle a Francisco Gutiérrez unas fo-

tos, el me dijo en esas fotos hay/arte es decir te hallas en el Ar-

te. Este creo es paso fundamental que da existencia al ser en el

proceso de aprendizaje, donde la magia cobra vida, y los sueños

cobran sentido, al establecer el puente entre el ser y su sentido

de aprendizaje, mismos que le dan significado a todo lo que


Hay/arte a ti mismo


toca, es como la pintura de un pintor, es como el poema de un

poeta, es como la partitura de un músico, es como la fotografía

de un fotógrafo, es como la escultura de un escultor, es como

un sueño antes de despertar, es la totalidad del ser antes del pro-

ceso de autoorganización.

Recursividad … donde los efectos que produce se vuelven so-

bre si mismos regenerando la organización del dicho ser… la

recursión propicia el surgimiento de nuevas organizaciones a

través de la continua regeneración

(Morin, 2006:11)

Como el estratega de mi aprendizaje de vida me encuen-

tro descubre que descubre, con esa pasión que me hace inquisi-

tivo, esta cadena de preguntas que me llevan a estar siempre

llegando, como dice Krishnamurti, y no para esta necesidad de

descubrir, porque el bucle recursivo me alimenta con cada res-

puesta.

El método como estrategia, que Morin plasmó en su libro:

Educar en la Era planetaria. Para el pensamiento complejo la

realidad es compleja, cambia y se transforma, el sujeto apren-

diente, en su proceso de aprendizaje, debe ser capaz de apren-

der, inventar y crear su viaje al conocimiento.

―El obstáculo para el aprendizaje del conocimiento no es el

error, sino la fijación de un conocimiento envejecido. A esta

visión compleja del método se le puede llamar estrate-

gia‖ (Morin, 2003)

Para Morin, ―La estrategia encuentra recursos y rodeos, realiza

inversiones y desvíos. La estrategia es abierta, evolutiva, afron-

ta lo imprevisto, lo nuevo. La estrategia improvisa e innova. La

estrategia se despliega en las situaciones aleatorias, utiliza el

alea, el obstáculo y la adversidad para alcanzar sus fines. La

estrategia saca provecho de sus errores. La estrategia necesita

competencia, iniciativa decisión y reflexión‖.

Es un estar siempre llegando, Krishnamurti Es la recursividad, Morin Es vivir compasión, Dalai Lama Es una respuesta, cuál es la pregunta, Asmman y Wagensberg Es la reflexión de la acción, la enacción de Varela Es la autopoiesis, de Maturana y Varela Es un darse cuenta, Joos Kuitenbrouwer y Maturana

68


Hay/arte a ti mismo


La esencia del mago es la transformación y el sincrodestino,

Chopra

La magia de la pasión ahora pasa a formar parte del proceso de

autoorganización en medios digitales, porque esa es la chispa

que prende la llama de nuestra vida. Es la motivadora y hacedo-

ra de nuestros sueños, sin ella no se puede decir que se esta vi-

vo, es la que me tiene aquí escribiendo, reflexionando y co-

creando mi conocimiento. En espacios/vacíos virtuales es el

núcleo generador de conversaciones, platicas, vivencias, cuen-

tos, y vida.

Conciencia, pensamiento y sueño

Surge una resonancia en cada una de las palabras conciencia,

pensamiento y sueño, que es imposible a partir de este momen-

to separarme de su esencia, y frecuencia, dentro de este apren-

dizaje. Peat en su libro: Sincronicidad puente entre la mente y

la materia menciona — la relación de la conciencia y el orden

implicado en nuestra forma en que nuestro pensamiento se for-

ma en la conciencia y esta conciencia la que se manifiesta en

nuestros sueños.— la conciencia como esa hacedora de sueños,

mismos que se hacen reales en la medida que despertamos.

La conciencia en general es mucho más parecida al or-

den implicado que a un orden mecánico de sucesión… los

pensamientos parecen fluir los unos de los otros. Un pen-

samiento se forma en la conciencia y puede ser enrique-

cido por muchas asociaciones y sentimientos distintos.

Luego puede disolverse en otro pensamiento rela-

cionado, o la mente puede apartarse repentinamente

hacia algo que a primera vista es inconexo, pero, al in-

vestigarlo más a fondo, tiene una conexión sutil con el

primer pensamiento.

El orden del movimiento del pensamiento es, por lo

tanto, más parecido al de los plegamientos implicados

explicados que a cualquier analogía mecánica. … Al

igual que los procesos de orden implicado implican un

concepto del espacio en que los objetos pueden ser si-

multáneamente interiores y exteriores entre sí, las imáge-

nes de un sueño están contenidas en sí y están en un pro-

ceso continuo de transformación y desplegamiento.

En este sentido, por lo tanto, nuestros pensamientos

son las formas explicadas arrojadas por los movimientos

fundamentales de los órdenes implicados en la mente.

Al leerlo, mirarlo, sentirlo, olerlo, degustarlo, escucharlo, cierro

los ojos y sonrió, y resulta agradable regresar nuevamente al

punto recursivo con algunas respuestas que se entretejen en el

texto y es que las palabras que resuenan en mi son, anhelo, con-

ciencia, transformación, unidad, armonía, conciencia, pensa-

miento, orden implicado, movimiento de pensamiento, sueños,

imágenes plegadas y trasformación.

Mismas que tienen que ver con la forma en que el ser

humano manifiesta su ser en la cotidianidad, donde el arte de

ser o el ser arte, es una manifestación de su expresión y creati-

vidad que es capaz de darle sentido a su vida, dando origen al

ingenio de las personas mismo que ha permitido un avance en

nuestra civilización, y es mismo ingenio el cual no se le permite

estar encerrado y creyendo en las mismas cosas.

El ser creativo e ingenioso obedece a un compromiso in-

terno —autoorganización — que le permite explorar y amplifi-




car sus frecuencias con el saber. Es aquel que le permite ir mas

allá de su tiempo, y mirar fuera del espacio, lanzándose al vac-

ío, en ese lugar donde se construyen los sueños, donde la ma-

gia cobra vida y donde su conciencia se hace presente. Ese lu-

gar es este instante.

El reconocimiento del instante tiene que ver con el proce-

so continuo de transformación y desplegamiento, que dan for-

ma a nuestro pensamiento. Y es en esta búsqueda de algo que

tenga que ver con transformación y con la esencia del ser, al

leer la pregunta ¿Qué es la espiritualidad?

En el libro de espiritualidad de Leonardo Boff, esta pre-

gunta se le hizo al Dalai Lama y el respondió de manera muy

sencilla —La espiritualidad es aquello que produce en el ser

humano una transformación interior.

En este contraespacio mágico, místico, allí donde mero-

dea la locura llegó al punto germinal de mi aprendizaje y mi ser

dice ¡Eureka, esa era la respuesta que buscaba!, sin embargo

esa no era la pregunta que hacia. Esto me lleva a replantear mi

búsqueda, y realmente no es lo sagrado que busco, si no lo que

origina en las personas una -transformación interior- una forma

de ver la vida de manera diferente, la espiritualidad. Yo creo

que por eso encontré a Grof, con su concepto de ―emergencia

espiritual‖ y en la somnolencia encontré el hoyo del conejo, o

el despertar de los sentidos, que no es otra cosa que el punto de

encaje. La conexión con la totalidad, el ser místico.

70






— ¿Papá, Papá porque vuelan las nubes allá arriba en el cielo?

La respuesta de un padre se hace esperar, prepara un discurso

acerca de la evaporación del agua, de la temperatura del aire,

del cambio climático. El cual es interrumpido por la voz misma

de su hijo.

— Papá, Papá, ya se no me digas, las nubes están llenas de aire

por eso vuelan, si eso es… y el niño se aleja cantando y brin-

cando.

El niño le muestra al padre un mundo nuevo para él, simple,

sencillo, libre, de ensueño y mágico. El guía, el mentor, el

aprendiz, es el ser que nos muestra una manera de vivir. Los

abuelos, los padres, los maestros, la esposa, los hijos, herma-

nos, amigos e incluso las personas que se preocupan por poner-

te piedritas en el camino y trabas en la vida.

El camino a caminar es diferente para cada ser, sin em-

bargo se muestra como una búsqueda de sentido de vida, que

nos lleve a descubrir nuestro ser interior, creando y cocreando

espacios de vida, reconociendo en cada instante el ser contex-

tual que somos. En este descubriendo y búsqueda es que ese ser

especial aparece como parte de nuestra vida, curioso porque

siempre nos acompaña y esta cerca de nosotros, se mimetiza y

se transforma para estar siempre cerca de nosotros.

71


¿Qué es un mentor?

Enseñar un modo de vida es sin duda el mejor aprendizaje que po-

demos dar. Y sin embargo hoy en día estamos atrapados en este

paradigma que nos ata al mismo mundo, a la misma mirada sin per-

mitir mirar los mundos que existen en este. Esa es la tarea del men-

tor, el de mostrarnos esos mundos a través de su mirada, olfato,

tacto, voz, emoción, pasión, intuición, magia y sueños.

Mientras lees este texto, alguien te observa, alguien te pien-

sa, presientes su presencia, te inquieta pensarlo, pero no te asustes,

ese que te ve a través del espejo interior es tu mago interno, el que

te acompaña es alguien del que te hablaré, es el mentor.

Un mentor es aquel ser que es capaz de mostrarnos mundos

invisibles para nuestros sentidos, es un ser capaz de enseñarnos la

vida a través de nuestros sueños, un ser que nos muestra nuestros

miedos, fortalezas, pasiones, para encontrarnos y transformar nues-

tra manera de ser, sentir y mirar nuestra virtualidad.

Un mentor es un ser que nos toca todos los días, y nos mues-

tra una manera de mirar a través de sus ojos, de oler a través de su

olfato, de tocar a través de su tacto, de cantar a través de su voz, de

sentir a través de su emoción, de vivir nuestro sueños a través del

mundo mágico, de encontrar nuestra magia a través del encanto de

vivir.

Un mentor es un ser que crea y recrea mundos que son espa-

cios de vida y aprendizaje, para que veamos lo que nunca hemos

visto y volar libremente como una mariposa en el universo.

Un mentor es un ser que nos permite disfrutar, explorar, go-

zar, soñar y enmagiarnos. Nos permite viajar, volar caminar, oler,

tocar, soñar, apasionarnos, amar, mirarnos, ser niños y aparecer en

el acto cotidiano de aprender.

Un ser que nos permite equivocarnos, confundirnos, alejar-

nos, descubrirnos, explorarnos, reconocernos, dignificarnos, legiti-

marnos, asombrarnos y expresarnos.

Ahora te diré quien es ese mentor, un mentor es un mago, un

ser capaz de mimetizarse, alienarse y mezclarse en nuestra vida,

como la esencia del aroma de la naturaleza. Toma la forma de per-

sonas conocidas a nuestro alrededor, seres cercanos a nosotros,

abuelos, padres, hermanos, hijos, maestros.

Este ser nos ayuda a reencontrarnos, descubriendo nuestro

mago interior permitiéndonos regresar al origen de nuestro ser,

entrando en sincronía y sintonía con el ser espiritual, viviendo la

vida como una chifladura, una intención, una emoción, un juego,

una poema, una escultura, una pintura, una historia, una vida.

Un mentor nos lanza al vacío para que nuestras alas se abran

y disfrutemos en caída libre nuestra vida a través de su mirada.

72

El mentor: El ser que nos muestra una forma de vida



Sonrisa alquímica

La sonrisa alquimia es Conexión espiritual del ser,

¿Cuál es ese elemento mágico que transforma al ser?

La inocencia, es el elemento de la alquimia de vivir.

Una voz de un niño es un movimiento de las alas de un dragón

plata en el horizonte de la infinitud. Su sonrisa es la playa don-

de descansan las emociones después de un rico baño de ternu-

ra y amor. Su inocencia baña el valle de la abuela regalándole

una sonrisa, La Abuela vacía en la semilla el elemento alquími-

co de su vida, el elemento mágico que los lleve a la unión al-

química del espíritu.

Palabras mágicas, que sin explicación te darán la respuesta a la

―sonrisa alquímica‖. Sonrisa. Ternura. Sincronía. Fluidez. Con-

tacto. Afecto. Calor. Unidad. Milagro. Alquimia. Sueño. Pa-

sión. Magia. Sentidos. Intuición. Posibilidad. Espíritu. Infini-

tud. Totalidad. Alquimia. Amor. Nacimiento. Mirar. Oler. Ser.

Sentir. Sensar. Semilla. Afecto. Efecto. Estrella. Cosmos. Uni-

verso. Intimidad. Ser. Transformación. Espiritualidad. Explora-

ción. Inocencia. Vacío. Espacio. Magia. Alquimia. Sensaciones.

Emociones. Caoslor. Dinergía. Calor. Energía. Movimiento.

Profundad. Eternidad. Alquimia. Fecundidad. Creatividad. Ino-

cencia.

Ahora estas palabras son como magnetos o atractores co-

mo menciona Mónica Cosachov, en su libro el Arte de apren-

der, menciona —El atractor es como un magneto, es el que de-

termina la posición del sistema y lo hace jugar con una deter-

minada forma de equilibrio, de allí nace un conocimiento, una

relación posible. Luego el mismo sistema gira cuando aparece

otro atractor y el foco de atención se dirige a otro lugar. Es así

como el sistema cerrado se va ordenando a través de puntos de

atención.— En este sentido un artista, “el mentor”, “la mento-

ra‖, el ser que guía el hilo de la vida, es mas que un creador de

relaciones, que le da movimiento al lenguaje, a la alquimia de

la vida, transformándonos en cada relación con la vida.


73

Sonrisa alquímica


El ser mago de la cotidianidad

Este mago de la cotidianidad es el que se manifiesta en cada

interacción, en cada contacto, en cada respiro y en cada rose

con su membrana de vida. Es la autopoiesis, es poesía, es movi-

miento, es energía, es la magia, es la vida. El crea y recrea su

vida, en sus sueños, donde se da la libertad de soñar su realidad.

El disoña su sueño cotidiano, recreando en su vida, ese

espacio de interacción. En ese sentido el mago de la cotidiani-

dad se funde y se confunde en cada acto, del ser al hacer. El

mago simplemente es.

El soñar despierto, parece una metáfora a la que todos

recurrimos cuando nos mofamos de no estar presente en la rea-

lidad, sin embargo esa visión es muy limitada al pensamiento

racional. El soñar despierto, es más amplio e infinito, es una

posibilidad en la física cuántica, que varias culturas la utiliza-

ban para hacer su vida diaria.

El soñar despierto es un acto cotidiano que tiene que

ver con nuestro nivel de conciencia, ese que nos indica que tan

involucrado esta nuestro ser en ese sueño. Un hacedor de sue-

ños como somos nosotros, es un ser que es capaz de crear y re-

crear espacios de vida y aprendizaje desde su estado infinito de

conciencia, y los materializa en los sueños.

El sueño al carecer de límites, se mueve en un espacio y

tiempo infinito. No existen los límites, simplemente se es, sin

embargo para el mago cotidiano esto cobra sentido cuando es

capaz de manifestar su sueño en su vida diaria, y nótese que no

digo realidad. Ya que la realidad tiene un significado muy am-

plio y depende de nuestras percepciones y del sentido que le

demos, en ese sentido los escenarios reales que se manifiestan

son solo el resultado de los sueños anteriores que ocurren antes

de despertar.

El soñar despierto implica, nuestra construcción del ser

en la virtualidad del sueño que se manifiesta en la vida diaria.

Esta implicación es real, en este sentido es la energía que hace

realidad nuestros sueños, esa implicación es necesaria ya que es

la diferencia entre hacer las cosas con un sentido, y hacer las

cosas sin sentido. Hacer las cosas sin sentido y sin significado

no existe una conexión con nuestro ser virtual, es decir no hay

una manifestación de nuestra conciencia en los actos cotidia-

nos.

El hacer las cosas con sentido, con una intención, es la

manifestación de nuestro ser. ¿Cuántos actos cotidianos de los

que hacemos en nuestra vida diaria, son con sentido? La res-

puesta tiene que ver con hacer un alto y dar una miríada a nues-

tra vida. Este acto de mirar, sentir y vivir hace que tomemos

conciencia de quienes somos.

Esa emoción de sentirte parte de algo infinito, hace que

vivamos nuestra virtualidad real. Al asumir tu responsabilidad y

compromiso con tu vida, te das cuenta que estas aquí y ahora,

donde este estado de presencialidad te permite fluir y resonar

en tu medio ambiente y en las vidas que tocas. Esa manifesta-

ción mágica de tu vida se hace palpable desde que te levantas,

hasta que te duermes, e incluso en el sueño. Al ser lo único que

tienes y darte cuenta quien eres, te da la posibilidad de ser real

y virtual, ser un mago de la cotidianidad.

Cuando tus sueños se conectan con tu vida diaria se pro-

74




duce el mayor hechizo y encantamiento del universo, entras en

la frecuencia y resonancia del ser mágico que eres, al entrar en

esa dimensión de encuentro con tu ser real y tu ser virtual, esa

conexión te hace único y autentico, y ese lapso solo dura un

segundo. En el momento que te das cuenta de ese hechizo ese

instante fue. Se cuenta que Buda, el tiempo cuando llego a la

iluminación, fue solo en un parpadeo, cuando él se fundió con

el universo y pudo entender el sentido de su búsqueda.

Esa búsqueda quizá sea la que me tiene aquí escribiendo esta

chifladura para mi, una locura para otros, y es que no hay una pre-

gunta más grande que sea ¿Quién soy? Y ¿Qué hago aquí?.

El despertar de este sueño colectivo, que nos seduce y que

nos da todo sin necesitarlo, nos crea un sin sentido, y nunca nos

preguntamos qué es y de quien son nuestros sueños, y esos real-

mente nuestra vida.

Esta búsqueda del ser en la virtualidad, es sin duda una locu-

ra tratar de localizarlo en e infinito del universo, pero no es una

locura buscar a uno mismo en esa dimensión de ensueño y de vida.

Este camino que fui recorriendo tiene la intención de mostrarte que

si lo piensas es, y si lo sueñas es, es más si lo vives, es. Entonces tú

puedes ser. Para hacer posible este sueño. Fue necesario despertar

de este sueño, y comenzar a trazar rutas que me acercaran un poco

a ese mago de lo cotidiano. Supongo que hay varios caminos para

llegar a él, los caminos que he recorrido son solo pocos, pero me

imagino que puede haber más, ya que la vida es infinita.

— Un cuento es un sueño que nos contamos a nosotros mismos,

para re encantar nuestra vida.

—

— Un sueño es un cuento que soñamos que puede ser real y lo

hacemos para vivir y darle sentido a la vida.

— Caminando sin un destino es probable que te canses de ese

camino. Caminar sin un camino es probable que no conoz-

cas tu destino. Sin un destino el camino se hace cansado.


75



¿Buscas la vida?

entonces no te balances, no te muevas, no lo permitas, y por enci-

ma de todo no gires en sentido contrario a la vida, y no te dejes

llevar por la vida de los demás.

Busca el significado de tú vida, encuéntralo y no lo sueltes, sujéta-

lo a tu espíritu, recuerda que tú vida son tus sueños y todo lo que

amas.

Vivir la cotidianidad con valores re signi-

ficados

Nuestra sociedad moderna se ha encargado de excluir a los pobres,

a los desposeídos, lo femenino, lo ecológico, y interiormente todo,

lo que es doloroso, lo reprimido, lo no integrado, Carl Jung lo

llamó la sombra. Se trata de transformar esta sombra en una luz

que integre todo lo que hemos extraviado, que hemos ocultado,

suprimido de la vida personal y colectiva, de modo que se puede

alcanzar la totalidad. Significa que papel de la humanidad es ser

siervo, más que la condición de señores, participando y convivien-

do como una totalidad, mas que un ser aislado y fracturado.

Vivir con valores resignificados, es la forma que propone

Francisco Gutiérrez, desde su visión nos describe una manera de

percibir y nos comenta que cotidianidad nos presenta a cada ins-

tante múltiples posibilidades de convivencia ética, con los demás

como la convivencia con la familia, los vecinos, amigos y con to-

dos los que se cruzan en nuestras vidas, y que el compartir, escu-

char a los demás en nuestros ratos de ocio, en nuestro trabajo, nos

ayuda a vivir de forma ética, y creativa es decir, estar atentos a to-

das las posibilidades de convivencia amorosa con los demás.

En este sentido la cotidianidad se convierte en el espacio en

el cual todo es posible porque el construir la realidad, construyén-

donos a nosotros mismos, depende tanto de la realidad como de la

configuración que a cada instante le demos a nuestro devenir vital,

solo por nuestra responsabilidad como seres humanos podremos

llegar a esa red ininterrumpida de configuraciones vitales.

Masaru Emoto en su libro: La vida secreta del agua, mencio-

na que cuando era niño el mar se lo tragó, cuando había salido a

76


Vivir la cotidianidad con valores re significados


nadar con un amigo, cuando regreso a su casa le comentó a su

Mamá, a lo que su mamá le dio el siguiente consejo, ―Puedes flotar

si simplemente te entregas‖, si te dejas que el agua te levante en

vez de resistirte, ella te alzará y te llevará, lo único que debes hacer

es moverte suavemente a la dirección que deseas que ella te impul-

se.

Mediante el arte nos mostramos y nos permitimos abrir

nuestros sentidos a la vida y a la sensibilidad. Jorge Wagensberg

considera que el arte como una forma de conocimiento basado en

el principio de comunicabilidad de complejidades no necesaria-

mente inteligibles.

El arte en este sentido para que sea una forma de conoci-

miento el observador debe se reflexionar su percepción del arte, y

si para el comunica algo y es capaz de trasmitirles una emoción

entonces la obra existe. La reflexión de la intención del autor/

artista en su obra, si el observador es capaz de codificar y encon-

trarle un significado el se apropiará de lo que el autor quiso comu-

nicar, solo en ese momento se puede hablar de una transferencia,

cuando el observador es capaz de evocar la obra y comunicarla en

ese momento el se convierte en autor de su propia obra.

La intuición, el despertar de los sentidos

Le pregunte a mi esposa, ¿Qué es la intuición?, ella me dice que es

como el sexto sentido de las mujeres, es como algo que sabes pero

que no cuentas con fundamentos para explicarlo, que simplemente

lo sabes, es como el sentido que le dice a la Madre lo que le pasa a

su hijo, sin explicaciones, sin preparación, sin planearlo y que solo

sucede en la espontaneidad.

Intuición es, el no pensar lógicamente, es el uso instintivo

del pensamiento, es la previsión de una situación, es olfatear

el siguiente paso, es la astucia del zorro, es la sagacidad del

Gepardo, es distinguir y comprender con claridad, es adivi-

nar el paso siguiente, es no reflexionar y examinar las cosas,

es el hacer del ser.

La mediación pedagógica es el tratamiento de contenidos y

formas de expresión de los diferentes temas a fin de hacer

posible el acto educativo, dentro de un horizonte de una

educación concebida como participación, creatividad, ex-

presividad y relacionalidad. (Gutiérrez, 1995).

Un mentor, en este sentido es un creador de mundos posibles, co-

mo seres pensables. ...mientras despierto y pienso que escribir, doy

paso al sueño …


77

Vivir la cotidianidad con valores re significados


De la resistencia a la continuidad

Un viejo artesano de Arcos de china, cuenta que cuando es-

tallo la revolución cultural en su país el tenía ocho años de edad,

recuerda que ellos tenían que romper todos los Arcos y vestigios

de su actividad como artesanos para no ser castigados y muertos.

Comenta que guardaron un arco desensamblado en papel encerado

en medio de la leña de su casa, si alguien los hubiera descubierto o

acusado, toda su familia hubiera muerto, ese era el destino de quie-

nes mantuvieran un vestigio de su arte de ser.

Después de veinte años, su país comenzó a liberarse y a re-

cuperar su cotidianidad, fue entonces el tiempo propicio para sacar

el arco de entre la leña donde estaba escondido y le dijo a su padre

que le enseñara el arte de hacer arcos, después de aprender ese arte

de su mentor, el comenta esa historia, ahora las personas le pregun-

tan ¿Por qué hace los arcos? y el responde que continua haciendo

arcos no para perfeccionarlos si no para darle continuidad a su cul-

tura.

La continuidad es interrumpida por los limites de un gobier-

no, que controla la realidad, pero que la virtualidad del ar-

tista es escondida, hasta que surge la liberación y es capaz

de trascender su arte, donde un mentor le muestra a su

aprendiz s mundo donde el arco cobra, sentido, significado,

movimiento, energía… vida.

Un monje tiene que parar sus pensamientos antes de meditar,

cuando se esta en un retiro espiritual para reconocerse de si mismo

es básico el parar tu mente. Esta acción le permite liberarse de las

imágenes del mundo real, de la mente conceptual y entrar en sin-

cronía y armonía con tu mente natural. Este reconocimiento es va-

lorar la comprensión y expresión de uno mismo.

Mi pensamiento me lleva a un arroyo con una corriente de

agua increíble, donde hay una gran roca en el centro, pienso, siento

e intuyo que hay dos caminos en la roca en medio del arroyo, uno

es el camino de la resistencia que da la roca a la corriente, la cual

provoca corrientes de caos, incertidumbre y el otro camino es pa-

sando por el caos y la incertidumbre es la continuidad. La piedra

en el arroyo se asemeja a nuestra manera de pensar llena de prejui-

cios y la corriente al pensamiento libre flexible, que se alimenta de

la incertidumbre y el caos, para dar paso a la continuidad del ser.

La continuidad en el arte marcial ―tai chi‖, es el paso suave

de una postura a otra, favoreciendo la circulación de la

energía, en esta continuidad sin interrupción todo se mues-

tra completo y continuo, circular y continuo.

78


De la resistencia a la continuidad


La pasión de aprender

Aprender sobre la vida, transforma la vida.

Aprender sobre el bosque, trasforma el bosque.

Aprender sobre la música, transforma la música.

Aprender sobre los sentidos, transforma los sentidos.

El aprender transforma la sensibilidad, el olor, el sabor, el

sonido, el mirar de las cosas. La pasión de aprender te mueve, te

hace interesar, te hace buscar, te hace oler, mirar, tocar, escuchar y

saborear la vida, ampliando en cada contacto tu conocimiento.

Si aprendes música, escucharas la misma melodía pero ahora

la música se trasformará, el sonido será el mismo pero el significa-

do de cada nota y de cada acorde será amplificado; Ahora con tu

ser amplificado por tu pasión identificaras los acordes, identificaras

los instrumentos, las notas, la textura, el color, la emoción de la

música; Paladearas las voces, los instrumentos, las armonías, los

espacios, los vacios y los silencios; Sentirás la vibración, la fre-

cuencia de las notas nunca escuchadas, esto es la pasión por la

música.

La pasión te llena de energía, fuerza, alegría, emoción y pa-

sión. La pasión requiere de aprendizaje, y si la pedagogía es propi-

ciar espacios de aprendizaje debemos ser mediadores de experien-

cias de aprendizaje.

El contagio de la pasión viene nuestros mentores, esos que

nos contagian su manera de vivir con magia y sueños, de mundos

posibles, espacios de ensueño. A ellos les debemos el mundo que

existe y el que no existe, sin ellos no tendríamos un lugar donde ir

y donde estar.

El origen de mi pasión

Mi madre, mi padre y mis abuelos como mis primeros mentores de

vida, esos seres que me mostraron su manera de percibir el mundo

en el que vivimos, son los que me inspiraron a hablar de este tema,

además de mi esposa, mis hijos, mis maestros, mis amigos y los

seres contextuales a mi vida, aquellos que sin tocarme y sin cono-

cerme, me reconocen como su mentor, mis aprendientes.

Mi mirada se amplifico y se contagio al ver a mi madre cui-

dar con esmero, dedicación sus plantas y conversar de ellas con tal

pasión. Trabajar en el campo con mi padre y sembrar tres semillas

de maíz con la siguientes palabras mágicas ―una para el animalito

y una para el caminante y una para nosotros‖ con un significado

tan profundo que termine aprendiendo el porque la pasión de sem-

brar, acompañar a mi abuelo y escucharlo contar historias con tal

realismo que hasta podía ver los personajes.

El acurrucarme en el regazo de mi abuela, para sentir su ca-

lor, cariño y que me contará su vida con tal intensidad que no nece-

sitará cuentos para dormir.

Degustar de una de mis mentoras de literatura contar con tal

pasión El Periquillo Sarmiento, que no te quedaba más remedio

que aprendértelo.

Jugar con mis amigos los encantados, las canicas, el trompo

con tal pasión que el tiempo se extendía que una tarde parecía eter-

na. Cantar, correr, bailar, mirar, brincar con mis hijos con tal inten-

sidad que me contagian de su energía esa vitamina H, que tanto

nos hace falta. A todos ellos les debo haberme contagiado de su

pasión.


79

El color, olor, sonido, sabor y textura de la pasión


El color, olor, sonido, sabor y textura de la

pasión

¿De que color es la pasión?, ¿a que huele la pasión?, ¿Qué forma

tiene la pasión?, ¿Cómo de escucha la pasión?, ¿Cómo se siente la

pasión?, ¿tiene sabor la pasión?

Krishnamurti en el apartado ―Pasión por todo‖ de El libro de la

vida plasma a la pasión con el color que la veo y dice:

La mayoría de nosotros emplea la pasión sólo en relación

con una cosa: el sexo; o bien uno sufre apasionadamente, o

trata de resolver ese sufrimiento. Pero yo uso la palabra

pasión en el sentido de un estado de la mente, un estado del

ser, un estado de nuestra esencia interior -si es que hay tal

cosa- que siente con mucha fuerza, que es altamente sensi-

ble, tan sensible a la suciedad, a la escualidez, a la pobreza,

como a las enormes riquezas con su corrupción, a la belleza

de un árbol, de un pájaro, del fluir del río, del estanque que

refleja sobre sí el cielo nocturno.

Es indispensable sentir todo esto intensamente, enér-

gicamente. Porque sin pasión la vida se torna vacua, super-

ficial, y no tiene mucho sentido. Si usted no puede ver la be-

lleza de un árbol y amar ese árbol, si no puede sentir afecto

por él, usted no está viviendo.

En este sentido, el color de la pasión paso de rojo a un azul

marino intenso y sensible. Su olor a aire fresco, limpio y suave. Se

escucha como una nota musical y como una cascada en un rió, tan

intenso y con energía. Se siente con todos los sentidos, porque al

igual que la intuición, hay que tener en estado de encendido el tac-

to, el gusto, el oído, la vista y el olfato, para sentir-pensar holistica-

mente. Su sabor a veces dulce y a veces amargo, pero que se dis-

fruta en cada papilla gustativa.

¿Para que nos sirve, ser, sentir, vivir y gozar la pasión, con

esa energía e intensidad que se menciona?. La respuesta esta en la

intencionalidad, sentido y significado de la pasión en nuestra vida,

ya que a través de esta podemos ser inquisitivos y como un interro-

geitor estar en sintonía y en frecuencia de una mente apasionada.

Krishnamurti en "El libro de la vida" en el apartado de “una men-

te apasionada es inquisitiva‖ menciona:

Una persona apasionada que siente con gran intensidad no

se satisface tan sólo con alguna insignificante ocupación,

tanto si es la de un primer ministro como la de un cocinero,

o la que prefieran.

Una mente apasionada inquiere, explora, observa, investi-

ga, exige; no trata de encontrar algún objeto para satisfacer

su descontento y echarse a dormir.

Una mente apasionada busca a tientas, se abre paso en la

oscuridad, no acepta ninguna tradición; no es una mente

afirmada en sí misma, una mente que ha llegado, sino que es

una mente oven que está siempre llegando.

Después de conocer, explorar observar, preguntar, investigar, ima-

ginar, cuestionar. Miro de mirar, de tocar, de sentir, de oler, de

degustar y de escuchar que ese es mi núcleo generador que andaba

buscando, la pasión de aprender o aprender con pasión.

80


El color, olor, sonido, sabor y textura de la pasión


La pasión como contagio tiene que ver con el nivel de implicación

con nuestra forma de vida. Un mentor nos muestra los mundos, los

caminos, las rutas, nos da la pauta que conecta a nuestro aprendiza-

je y es capaz de guiarnos a través de los mares de incertidumbre y

encontrar en nosotros la chispa que enciende nuestra pasión, y que

nos lleva a una transformación interior, logrando despertarnos de

este sueño de la realidad y dar forma a nuestro sueño virtual de

existir. Donde el existir hace manifestarnos como esos artesanos de

nuestra propia vida, haciendo posible el acto mágico de aparecer

en este mundo. Su mundo.

La pasión del estratega

El obstáculo para el aprendizaje del conocimiento no es el

error, sino la fijación de un conocimiento envejecido. A esta

visión compleja del método se le puede llamar estrategia.

(Morín, 2003)

Para Morín: La estrategia encuentra recursos y rodeos, rea-

liza inversiones y desvíos. La estrategia es abierta, evoluti-

va, afronta lo imprevisto, lo nuevo. La estrategia improvisa

e innova. La estrategia se despliega en las situaciones alea-

torias, utiliza el alea, el obstáculo y la adversidad para al-

canzar sus fines. La estrategia saca provecho de sus errores.

La estrategia necesita competencia, iniciativa decisión y re-

flexión.

Un mentor en este sentido nunca nos muestra una estrategia,

siempre nos muestra un mundo completo pero sin rutas, nos mues-

tra lo maravilloso del sol, su color y su calor, pero no nos dice que

tan lejos esta. Nos mantiene en una búsqueda permanente de ese

algo que nos lleve a encontrarnos, pero no nos dice como hacerlo.

Un mentor nos muestra una forma de vida, pero el que tiene

que vivirla somos nosotros, llenándonos nuestra mochila de viaje

con obstáculos, adversidades, errores e incertidumbres. Para que a

través de ellas surfear en el mar de la vida, en esa continuidad, en

esa liquidez encontrando en cada paso, una nueva ruta la cuál no es

siempre la misma, evolucionando nuestras respuestas dentro de esa

incertidumbre que nos lleve a establecer los puentes y las pautas

que nos conecten al conocimiento, al aprendizaje, a la magia de la

vida.


81



La estrategia no se puede reducir a un programa, ni a viven-

cias y aprendizajes individuales, esta nos ayuda a encontrar el sen-

tido de la vida, pero de una manera colectiva a través de la interac-

ción. Una forma de vida que nos permite descubrirnos con esa pa-

sión de aprender que nos permite ser inquisitivos, como un inte-

rrogeitor, en esta cadena de preguntas que nos llevan a estar siem-

pre llegando —una mente oven— y esto no para, siempre esta flu-

yendo porque el bucle recursivo nos alimenta con cada respuesta.

Tiene ahora un significado y sentido el método como estrate-

gia, que Morin plasmo en la Educar en la Era planetaria. Para el

pensamiento complejo la realidad es compleja, cambia y se trans-

forma, el sujeto aprendiente, en su proceso de aprendizaje, debe

ser capaz de aprender, inventar y crear su viaje al conocimiento.

En la estratega el ser humano debe ser capaz de conocerse y

reconocerse como un ser aprendiente de su vida y de su proceso de

aprendizaje. Viviendo con la incertidumbre como base de su

aprendizaje y mediante la pasión encontrar las rutas y los atajos

que le permitan apropiarse del conocimiento y de su proceso de

aprendizaje. Dentro de esta sincronicidad debe ser, sentir y com-

partir su aprendizaje con sus membranas sociales para poder evo-

lucionar a otros estados de conocimiento aprovechando la resonan-

cia mórfica del aprender.

Dicha resonancia debe de entrar en una frecuencia interior

—nuestra pasión— que nos lleve a gozar, interesarse y generar su

aprendizaje y su conocimiento para entrar en sintonía con su auto-

construcción de su ser, permitiéndose ser un buscador de respues-

tas, yo digo atrapador de sueños, que le permitan navegar por la

incertidumbre y entrar en esos bucles de aprendizaje, aprovechan-

do su ser, sentir, y vivir en la virtualidad.

La pasión como ingrediente de la estrategia ahora pasa a for-

mar parte del proceso de autoorganización, porque esa es la chispa

que prende la llama de nuestra vida. Es la motivadora y hacedora

de nuestros sueños, sin ella no se puede decir que esta vivo, es la

que nos permite escribir, reflexionar y co-crear nuestro conoci-

miento.

El acto de —enmagiar, es decir el acto de ser, sentir y vivir

con todos los sentidos el lenguaje del otro, manifestándose desde

su ser y que es capaz de provocar un acto que puede ser posible

pero no real, eso es la magia de enmagiar.— cobra una dimensión

increíble, capaz de llenar el vacío relacional mas profundo y per-

mitirnos reconocer el ser aprendiente, con nuestro mentor cerca de

nosotros acompañándonos en cada paso de nuestra vida.

Deepak Chopra, en su libro sincrodestino menciona:

Cuando aprendemos a vivir desde el alma, ocurren varias

cosas. Tomamos conciencia, de los exquisitos patrones y

ritmos sincrónicos que gobiernan la vida... El temor y la an-

siedad desaparecen cuando observamos el mundo conforme

se desarrolla. Identificamos la red de coincidencias que nos

rodea y nos damos cuenta de que hasta los sucesos más pe-

queños tienen un significado. Descubrimos que al prestar

atención e intención a estas coincidencias, podemos conse-

guir resultados específicos. Establecemos contacto con to-

dos y con todo lo que existe en el Universo y reconocemos el

espíritu que nos une a ellos. Revelando la maravilla oculta

en nuestro interior y nos deleitamos en nuestra gloria recién

descubierta. Conscientes, convertimos nuestra vida en la

expresión infinitamente creativa para la que fue creada, y

con ello vivimos nuestros sueños más profundos y nos acer-

camos a la iluminación. Este es el milagro del sincrodestino.

(Chopra, 2006:9)

82




Morin menciona: El método no puede formarse más que du-

rante la búsqueda: solo puede formularse después, en el mo-

mento que el término del camino vuelve a ser un nuevo pun-

to de partida, es un siempre estar llegando. Es una experien-

cia que equivale a la de los viajes de los místicos de donde

vuelve cambiado.

La mirada de la sincronía

En este punto recursivo y germinal donde la sincronicidad nos per-

mite crear nuestro propio método de aprendizaje, a través de las

interacciones con nuestro contexto —Identificamos la red de coin-

cidencias que nos rodea y nos damos cuenta de que hasta los suce-

sos más pequeños tienen un significado. Descubrimos que al pre-

star atención e intención a estas coincidencias, podemos conseguir

resultados específicos. — se abre ante nuestros un mundo sincróni-

co y mágico, en el que entramos a un nivel de resonancia tal que

nuestro campo de sentido se manifiesta explorando cada acto de

vida, conectándonos con nuestra esencia permitiéndonos percibir

las coincidencias que se ensamblan en nuestra presencia, como un

acto mágico, a continuación te explico.

El mentor nos indica, cuando uno esta en sincronía con su

intención aparecen al encontró de nosotros algo relacionado con

esa intención. Claro para esto ocurra debes de creer.

Los grandes descubridores e inventores de la humanidad

llegan a un punto donde el intelecto no puede penetrar, y

todos dicen haber tenido un momento de intuición sobre co-

mo continuar con sus investigaciones –cuando dejaban a un

lado el trabajo intelectual- cuando hacían justo lo contra-

rio. Arquímedes, por ejemplo llego a la teoría de la densidad

de la materia jugando en el agua en su bañera. Cuentan que

salió de la bañera desnudo, corriendo por las calles como

un loco gritando: <¡lo he descubierto, lo he descubierto!>

Recuerda esto: si eres una persona que basa su fe y su espe-

ranza en el intelecto, si eres estrictamente racional, entonces

no esperes ningún milagro, es inútil‖

Para hacer magia hay que ser apasionado.

Para ser apasionado hay que ser intuitivo.

Para ser intuitivo hay que despertar a los sentidos.

Para despertar los sentidos debes ser Mago, y

para ser Mago debes de ser, sentir, creer, crear y

vivir en la magia.


83

La entrada al mundo del mago



Si la magia es la vida, ¿cómo entrar a la vida?, ¿Cómo entrar el

mundo del mago?

‖El sendero del mago no existe en el tiempo — está en todas

partes y no está en ninguna parte. Nos pertenece a todos y

no le pertenece a nadie. .. Hay un mago dentro de cada uno

de nosotros un mago que lo ve y lo sabe todo… se debe

aceptar como un acto de fe (creer y crear) este tipo de

aprendizaje espontáneo ha sido el centro de mi vida diaria:

observar y esperar a oír lo que mi gula interior tiene que

decir.

No existe otra forma de aprendizaje más fascinante.

…¿Por qué necesitamos seguir el sendero del mago? Para

elevamos sobre lo ordinario y lo confuso, y encontrar la cla-

se de trascendencia que solemos relegar al campo de lo

mítico, pero que en realidad tenemos a mano, aquí y ahora.

Estar vivos significa ganamos el derecho a decir lo

que deseamos decir, a ser lo que deseamos ser, y a hacer lo

que queremos. … El propósito de aprender de un mago es

encontrar al mago que llevamos dentro. Una vez hallado el

guía interior, nos habremos encontrado a nosotros mis-

mos‖.

Un mago puede convertir el temor en alegría, la frus-

tración en realización. Un mago puede convertir lo tempo-

ral en eterno. Un mago puede llevarnos más allá de nues-

tras imitaciones hacia lo ilimitado. (Chopra, 2006)

A lo largo de este camino he descubierto que ser sensible, es

decir activando todos los sentidos puedo ver, oler, degustar, palpar

y escuchar las diferentes tonalidades de la vida, dándole un dife-

rente sentido a la información. A partir de saber escuchar a los sen-

tidos pude despertar la intuición, ese sexto sentido que se activa

cuando los demás sentidos aprenden a aprender sintiendo, donde la

vista envía a la intuición los cambios de matices para poder estar

alerta a las modificaciones y poder prever situaciones y disfrutar

esos detalles imperceptibles de la vida.

La intuición como la guía del aprendizaje nos hace mas re-

ceptivos al estar alerta todos los sentidos, viendo lo invisible, escu-

chando lo in-escuchado, oliendo lo inoloro, degustando lo insaboro

y palpando las emociones, eso es a través de reconocer las vibra-

ciones de lo que se aprende. Algo dentro de ese vibrar se manifestó

como la pasión, ese sentimiento pensamiento capaz de dar movi-

miento al ser, sentir y vivir con todos los sentidos.

La pasión como ese estado de la mente, del ser y de nuestra

esencia interior que nos hace altamente sensibles, para darnos cuenta

del sentido y la dirección de nuestro proceso de pensamiento. Siendo

este proceso de autoorganización del ser, el encargado de dar dirección

a nuestros sentidos, intuición y pasión en la vida. La recursividad

nuevamente apareció dando una resonancia renovadora en este apren-

dizaje, donde la magia como acto de ser, sentir y vivir con todos los

sentidos el lenguaje del otro, manifestándose desde su ser y que es ca-

paz de provocar un acto que puede ser posible pero no real, se transfor-

ma uno en un aprendiz de mago de la vida. Dándole un sentido mági-

co al aprendizaje.

En este punto miro a mi alrededor y siento que el poder de la

atracción me lleva al hado, esa energía capaz de emitir frecuen-

cias a el tono del sueño, y por que el sueño. Este tema surgió desde

mi primer trabajo, cuando me preguntaba cual era una de las estra-

tegias para cambiar de manera de pensar de los cangrejos.

84




El punto recursivo

El sueño me trajo aquí y es que soñar es lo que más disfruto, soñar

despierto, despierto soñando y sueño que despierto. Este camino lo

emprendí con una pregunta:

¿Por qué los cangrejos mexicanos no pueden tomar el sol?

A esta pregunta yo la llamo ―punto recursivo‖ —en re-

flexión a la recursividad de Morin— el cual lo defino como el pun-

to donde el ser se da cuenta y se reconoce como parte de su natura-

leza. Es el sitio en el espacio tiempo, donde el ser humano se da

cuenta de su ser y en el cual existe una resonancia que le indica un

punto de encuentro entre su conciencia y su realidad. Es el punto

inicial y final del proceso de aprendizaje donde la pregunta en-

cuentra una respuesta y se regresa a replantearse y complementarse

para volver a la búsqueda de otra respuesta. Es una onda energética

lanzada al universo para la recolección del aprendizaje.

La mujer como mentor de nuestro apren-

dizaje

La mujer en un mundo cada vez mas caótico juega un papel impor-

tante en nuestro aprendizaje, es nuestra primera interacción con la

vida, es nuestra guía en los primeros años, desde que nacemos es-

tamos unidos a ella y en nuestro desarrollo ella nos acompaña, co-

mo madre, como abuela, como esposa, como hermana, como ami-

ga, como compañera, como pareja.

Su mano siempre al lado de la nuestra para poder caminar, y

cerca de nuestra boca para aprender a comer, cerca de nuestro co-

razón para amar, cerca de nuestro oído para escucharnos, cerca de

nuestro interior para conectarnos con nuestro ser espiritual. Ellas

son nuestros primeros pasos, pensamientos, sensaciones, afectos,

presencias y ausencias.

Viendo la película el orden y el caos, surgió la pregunta ¿la

mujer es el orden en el mundo? Algunas respuestas son: Es el or-

den y el caos, mucho mas es caos. Y el desorden también. Orden y

desorden dialógico. Es orden y caos a la vez, también luz y som-

bra. Es vivir de acuerdo al rol social asignado al género femenino.

Su ausencia en la vida provoca caos.

Cuenta la historia que a Arquímedes le habían encargado de

saber cuanto pesaba el Oro, para lo cual estuvo pensando como

hacerlo, su esposa al ver su proceso, y ver que no descansaba y se

desesperaba, le dijo:


85

La mujer como mentor de nuestro aprendizaje


— ¿Por qué no tomas un baño y descansas? Arquímedes a

petición de su esposa, tomo ese baño y estando en la bañera

resolvió su pregunta de cómo medir el peso del Oro, por me-

dio del volumen en el agua.

La clave de esta historia es la esposa. —Si escuchas a tu esposa te

dará una perspectiva. Eso significa que necesitas un descanso. Sino

tomas un baño no llegarás a ningún lado. No habrá orden solo ca-

os.— texto tomado de la película ¿y tu que sabes?

Ahora entiendo el proceso de autoorganización, como un

proceso que inicia desde nuestra gestación, desde el soplo de vida

que nos lleva a formarnos dentro del vientre de nuestra madre y

dentro de la virtualidad de cada ser en el que nos hacemos presen-

tes desde antes de nacer. Donde nuestros mentores disoñan nues-

tras vidas, preparando el mundo para recibirnos, nuestro hogar, la

ropa, la comida, las creencias, las costumbres, las reglas. Nuestro

ser contextual nace a la vida desde el momento en que somos ges-

tados en su ser.

Explorar la equidad y el género para mí ha sido muy agrada-

ble, pero muy difícil de conocer y reconocer algunas cuestiones del

paradigma actual, que me causan ruido al momento de pensar en el

Género. Leo y releo, y en cada paso encuentro algo, se mueve, se

modifica, se transforma mi forma de mirar y sentir.

Es curioso por que no creo en el Género, y la respuesta es

que siento que es un concepto creado para fragmentar el conoci-

miento del hombre y la mujer. Por que hablar de hombre y porque

de mujer, es fascinante la forma como el significado de transforma

en el tiempo. Y es precisamente la historia la que nos habla por un

lado del matriarcado y del patriarcado, donde a los dos les ha toca-

do jugar un rol importante en el desarrollo de la cultura.

En esa evolución e involución de los extremos feminismo y

masculinidad, se tienden como dos polos en los que cada ser mani-

fiesta su unión y reunión con lo juicios y prejuicios que les hacen

aliarse y alinearse en esas frecuencias de lo que hoy es el Genero.

La frecuencia del Genero, como en la resonancia mórfica de Shel-

drake, en la cual la memoria evolutiva va sintonizando esas vibra-

ciones y frecuencias para ser, el ser, que hoy somos, somos la

construcción de nuestros pensamientos y emociones que viajan a

través del espacio y el tiempo, para llegar ser parte de nosotros.

Es cierto que la autoorganización se basa en estructuras de

pensamiento que nos hacen actuar de cierta manera y que responde

ante ciertos impulsos del medio ambiente, por lo que el proceso se

dice que se autoorganiza, cuando de adapta y amolda a los estímu-

los del medio ambiente sin perder su esencia. Es decir puede el

medio transformarse de una manera rápida y sin embargo el ser

vivo permanece atento a los cambios y transforma su estructura de

acuerdo a los cambios en el medio, sin afectar su ser interno.

¿Y que tiene que ver con el Genero con el mentor?

Aparentemente es un tema diferente, pero no, esta mas relacionado

y tiene mucho que ver. Si consideramos que los procesos de pensa-

miento son los que de alguna manera modulan y modelan nuestro

actuar, entonces estamos ante la base de nuestro pensamiento, un

mentor inicial que es nuestra madre. Si el Género es un Gen, es

decir una forma de representar nuestro ser, sentir y vivir, que nos

hace parte de esta realidad entonces ese es el responsable de la ma-

nera en que percibimos nuestro mundo.

86


La mujer como mentor de nuestro aprendizaje


¿Qué puedo hacer para no perder el proce-

so de aprendizaje?

Esa es la pregunta que un mentor tiene que responder a sus apren-

dices, pero que ocurre la respuesta al momento de explicarse se

transforma, mimetiza, flexibiliza, adapta, modela, se dispersa,

aprender, innova, se desarrolla, crea, crece y evoluciona cual estra-

tegia, es decir se disipa y al mismo tiempo explota en posibilidades

infinitas de energía, convertidas en una mirada, en un mundo, en

un espacio de aprendizaje.

— La respuesta esta en el juego de las ranas, dice el mentor

El juego de las ranas, es un juego donde en un lago están tres

ranas verdes de un lado una en cada piedra y en el otro lado están

tres ranas rojas igual una en cada piedra, una piedra al centro de los

dos grupos las separa. La meta es pasar todas las ranas rojas al lado

de las ranas verdes con la condición de solo saltar al espacio vació,

y no dejar juntas dos ranas por que si no el juego se cierra.

Para explicar y ver las diferentes estrategias y buscar solu-

ciones, el juego tiene que jugarse, es decir tratar de llegar a la solu-

ción, sin embargo una vez que se ha resuelto el juego, individual-

mente o en grupo es muy común que no lo podamos hacer nueva-

mente.

En clase intentamos solucionarlo, y esto fue lo que paso, al-

guien se arriesgo a jugar; y perdió su oportunidad al cerrar el jue-

go. Comenzamos de nuevo esta vez el grupo comenzó a dar la so-

lución en cuestión de dos minutos todos brincaban de contentos ya

que el juego se había resuelto, acto seguido les pedí lo hicieran

nuevamente, para validar la teoría de que se les había olvidado el

proceso. Y sucedió no una vez sino diez veces lo intentaron nueva-

mente y seguían equivocándose.

Como guía de su aprendizaje les pedí que se fijaran que era

lo que hacían mal, descubran el error, que les lleve a aprender, de-

ténganse, analicen, reflexionen, sientan pero por encima de todo no

se pierdan el proceso, miren, olfateen, sientan, escuchen y degus-

ten cual es el punto donde esta el error o aprendizaje, disfruten el

viaje, mientras mueven sus ranas.

Siendo mentores de nuestro aprendizaje, el aprendizaje gru-

pal nos ayuda a detectar los detalles sincrónicos de las ocurrencias

y borrosidades de nuestro proceso de aprendizaje. Denle sentido a

lo que hacen, para que se den cuenta de lo que ocurre —que ocurre

sincrónicamente en el contexto— cuando pierden el foco de aten-

ción, no vean el error si no la oportunidad para seguir en el juego.

¿Se parece el juego a algo que les haya pasado? Les pregun-

te para que se dieran cuenta del proceso, les pedí que dieran diez

cosas trascendentales que les hayan ocurrido en su vida para que

ellos estuvieran en la clase. Es decir que me dijeran porque habían

tomado la decisión de estudiar, porque era importante la clase, cual

era el sentido que les hacia estudiar, y cual era el deseo ―sueño‖,

―pasión‖, ‖magia‖ en su vida, para estar aquí. Ellos se quedaron

mirando por que pareciera que al igual que a mi, no le encontraban

sentido a lo que hacían, o de repente no lo podían nombrar, es mas

enmarcar en limites para sujetar su conciencia de aprender. Como

el ser que le da sentido y significado a su existencia, existir como

el acto mágico de aparecer como creadores de nuestro aprendizaje.

No les ha pasado que se suben al autobús o a su auto y se

disponen ir a su casa de regreso, llegan a casa y no se dan cuenta

como llegaron. De repente todo pasa desapercibido que no vemos,


87

¿Qué puedo hacer para no perder el proceso de aprendizaje?


no olemos, no degustamos, no sentimos…pierden el proceso de

aprender. Fue entonces que le encontramos otro sentido a un sim-

ple juego, que no están tan simple si no complejo, ya que al jugarlo

aprendemos conscientemente.

El juego después de haberles comentado el sentido de jugar-

lo, les pedí que no perdieran el proceso, y que localizaran el punto

donde tenían que decidir que hacer, les comente que las posibilida-

des son precisamente eso, estrategias de búsqueda para que ellos

aprendan con sentido, lo único es que tienen que darse cuenta en el

momento en que sucede. Continuamos el juego, y de repente al-

guien dijo yo puedo hacerlo, y se lanzo a resolver el juego y lo re-

solvió muy rápido, a lo que le dije que ahora cualquiera podría re-

solverlo, porque el grupo había aprendido de los errores y había

cobrado sentido el juego para todos.

La resonancia mórfica es la forma como las especies apren-

den y evolucionan en su sentir pensar. El aprendizaje grupal cobra

sentido en la medida que el grupo se da cuenta que tiene que tomar

decisiones y aprender, en otras palabras la conciencia colectiva,

toma dirección en el aprendizaje.

Un juego de ranas, yo diría un juego que busca el sentido del

aprendizaje, jugando, creando, sintiendo, oliendo, degustando, mi-

rando, tocando, emocionándose, dándole sentido y dirección auto-

rregulada, autoorganizada al aprendizaje integral, la conciencia de

aprender, es estar de cuerpo presente en el momento de vivir.

El ser que esta dentro de ti

Para darse cuenta de lo que esta ocurriendo con nuestro

entorno, es necesario mirar al otro, oler al otro, sentir al

otro, pensar al otro, escuchar al otro y vivir al otro, esto es

creer y crear en el otro nuestros ser, sentir y vivir.

El ser que esta dentro de ti como energía que te guía, es esa

conciencia que teje y desteje la trama pensamientos, pero que esta

en estado de apagado o esperando activarse, que para observarlo

necesita el impulso que le de la vida, la alegría y la emoción y la

magia de vivir, es decir rescatarlo de ese letargo mental, dándole

esa fluidez, continuidad y armonía como la corriente de un rió.

88


El ser que esta dentro de ti


Un mentor nos acompaña al descubrimiento de nuestra esen-

cia y nos guía en este camino, para transformar nuestra mirada y

vislumbrar un mundo lleno de posibilidades donde la vida, el de-

seo, la magia, los sueños, sean los que me guíen en este mar de

sueños, despertándonos nuestro ser.

Maturana dice: A los sentidos no hay que mirarlos aislados,

en el ser vivo son el espacio relacional con una doble vía, la

interacción exterior y la que se da en el vivir. Los sentidos

son dimensiones de encuentro, con el medio y con el fluir.

Las cosas surgen en esa relación con el vivir, con el otro,

con las circunstancias y la existencia fisiológica, mismo que

construye la realidad que percibimos.

En la vida cotidiana es mediante las emociones es co-

mo nos relacionamos con el todo, estas constituyen las dife-

rentes clases de relación. Tenemos una cultura que nos da

ciertas indicaciones de conductas racionales que deben pa-

sar por las emociones, decidir desconectado de la emoción

es imposible, vivimos separados de lo emocional, unas emo-

ciones acotan el ver, como la ambición y el enojo, disminu-

yen la visión de la habilidad sensorial.

El amor es una clase particular de relación, donde dos seres

se aceptan en un legitimidad, se ven, conversan, amplían su

visión del mundo, las cuales hay cosas que no se ven, dentro

de sus dimensiones de la realidad, la cual es la realidad que

ellos viven.


89

El camino del Mago, emergencia o deli-

El camino del Mago, emergencia o delirio

Stanislav Grof autor del libro Emergencia Espiritual, nos habla

acerca de las transformaciones y los niveles de conciencia que el

ser humano necesita para su transformación. He experimentado

algunas cosas pero no pasaba de allí, resulta que ha estado dando

vueltas el asunto en mi cabeza, y ayer al cenar me comí un pan

que yo creo estaba descompuesto, por que en la madrugada me

levante de urgencia.

En esa somnolencia y en ese padecimiento corporal, entre

como en una locura de pensamiento, comenzaron a detenerse en

mi mente imágenes y situaciones sin un orden aparente, cuando de

repente, recuerdan la parte de la película ¿y tu que sabes? donde

la chica esta recostada en su habitación y de repente se duerme y

se transporta a una isla, en donde se supone fue la situación donde

llevan los barcos de los colonizadores, y los indios no los veían

porque no tenían registrado la imagen de un barco en su pensa-

miento ese paradigma, conocimiento, experiencia y aprendizaje.

Es entonces cuando el mentor de su sueño, le pone el dedo en la

frente, y como es como ella comienza a mirar, tocar, degustar, escu-

char y oler de manera vertiginosa el AHORA, creo entender cuales

son las ventanas de la percepción de Huxley, y es también lo que Cas-

taneda dice con el punto de encaje entre el Tonal y el Náhuatl y es

también el camino del Mago como dice Chopra. En pocas palabras, es

la entrada a la conciencia y al universo infinito de la Totalidad, donde

te fundes y confundes con el Universo, es un estado de ensoñación

donde puedes acceder al conocimiento de la humanidad, campo akási-

co. Tal ves sea un Delirum Demen, o un estado alterado de salud, un

desequilibrio mental, pero al mirar eso, grite Eureka, Eureka, encontré

el camino del Mago.

Sueños, Magia y Virtualidad ¿se puede soñar despierto? 90



La necesidad espiritual va mucho más allá de la coherencia

y la precisión intelectual; se trata de la necesidad de encon-

trar una relación entre nosotros mismos y el resto del ser.

Dosey

En ese encuentro con el resto de nuestro ser, uno se acerca y

se aleja del ser interior, contraespacio del ser, el cual nos permite

ver la nitidez de nuestros sentimientos pensamientos, el cual es

capaz de despertar nuestra emergencia espiritual.

Donde la salud espiritual del la vida, debería ser la primera es-

trategia de búsqueda, así como la última en medios digitales, ya que

esta nos llevaría a encontrar la espiritualidad aquello que transformar el

interior del ser humano, donde se conoce y reconoce la intuición, la

magia, la pasión, los sueños y la conciencia la cuál nos llevaría al pun-

to de encaje energético entre el ser interior y ser exterior, que es la au-

toorganización del ser humano. Esta salud y vida de nuestro interior

en medios digitales se manifestará en un ser intuitivo, capaz de trans-

formar y transformarse en ese contraespacio de encuentro.


Soñar que eres es

despertar quien eres

De pequeño al recostarme en el pasto y mirar hacia el cielo, miraba

las nubes pasar por entre los rayos del sol, y desplegar sus formas

entre el desafío del viento. Cúmulos en forma de animales comen-

zaban a desfilar mientras las miraba, una danza en medio del cielo

del verano, mientras un sueño nacía en mi ser. Al cerrar los ojos

soñaba en volar en medio de esas nubes y surfear por su superficie,

al despertar corría por el prado, sintiéndome volar entre esas nubes.

Soñar que eres es despertar quien eres, un soñador.

Nota: continuar, soñar que eres es despertar quien eres, …‖dime lo

que sueñas y descubrirás quien eres‖, tus sueños son el reflejo de

tu vida, son tu alma al descubierto, es tu espíritu latiendo, es tus

células vibrando, son tus sentidos tocando todo y es tu vida alcan-

zando tus sueños.

91


¿Se puede volar entre las nubes?

Es la pregunta de un niño cuando tirado en el pasto observa el cielo

y siente como cae hacia arriba, esa sensación de volar en el suelo,

es lo que nos lleva a soñar, y preguntarnos si es posible volar entre

las nubes.

La respuesta es sencilla para una mente atrapada en sus pa-

trones de pensamiento mecánico y lineal, y la respuesta es no. Ese

no es rotundo y fuera de discusión y hay de aquel que sueñe con

pescar entre las nubes por que agua no falta, solo que los peces

nunca subirían hasta allá arriba o ¿si?.

Un niño al soñar libre y fluido, en ese pensamiento encuen-

tra miles de pretextos para seguir con esa idea, y es esa pregunta la

que lo persigue aun cuando despierta. Soñando siempre esta en las

nubes y las nubes bajan a llevarlo a ese mundo de los sueños, don-

de todo es posible. Si lo puedes pensar, lo puedes hacer.

Los pies de un niño no están anclados a la tierra, ellos están

mas allá de la vida y de un tiempo real, se deslizan por entre los

agujeros del tiempo y entre las ventanas de la realidad, esas que

siempre están abiertas y les permiten salir sin tocar.

¿se puede volar entre las nubes?

A falta de alas, un cometa. Encuentra siempre la manera de

llegar a las nubes a través de un papel, unas varillas de otate, un

poco de pegamento, unas tiras de trapo viejo y un hilo hecho nu-

dos, con el cual mira, siente, vibra y se comunica en las nubes sin

dejar el suelo. Lo desliza entre las nubes, surfea sobre ellas, y sien-

te la vibración de la emoción de estar, sin estar entre las nubes.

Un cometa en las manos de un niño, es el sueño hecho reali-

dad de volar entre las nubes sin dejar el suelo. Es un pintor, un es-

cultor, un artista que realiza su obra, soñando despierto.

Es la mirada ampliada y mirar mas allá del espacio, del tiem-

po, de las distancias, de los colores y de las formas y crear un mun-

do posible.

¿se puede volar entre las nubes?

La respuesta es si. Transformando nuestra manera de mirar,

de sentir, de vivir, de soñar la magia hace nuestros sueños posibles,

soñar despierto es la respuesta para mirar el cielo y surfear en las

nubes de la mano de un cometa.

Un cometa que es la conexión con ese mundo mágico, un

espacio de vida en el que podemos explorar nuestra virtualidad en

busca de los sueños que nos lleven a despertar de un largo letargo

de estar sin estar, donde soñar en él es la condición para soñar que

eres y despertar quien eres.

Un soñador.

Hay/arte La búsqueda de la inocencia,

Es encontrar el estado puro del arte,

Es encontrar el elemento eterno de la vida

Es la alquimia de vivir.

92

Soñar que eres es despertar quien eres



La vibración de los sueños:

Cuando a las cuatro de la madrugada despiertes de tu sueño, y

en el sueño entres en un estado de encaje, donde todas las pie-

zas se acomodan y te den la entrada al mundo del mago, al

mundo del saber, en ese lugar donde encuentras la alquimia

donde no tienes más que fluir y si puedes escribir lo que ocurre,

ya que atrapar un sueño es como querer atrapar un haz de sol y

encerrarlo en un frasco, descubriendo que es un sueño.

Escucho, siento, vibro en el sueño y ahora ya no paro más

mi mente simplemente la dejo fluir, volar como la sabia natura-

leza que coquetea con la vida. Esa que hace crecer la parra de

manera fluida, armónica, sincrónica y vibrante dando vida a la

vida.

Lanzarse al vacío ahora es volar en el mundo del mago,

en la percepción total de la vida, siendo niño. La inocencia es la

esencia de la alquimia, la cual se ha ido perdiendo en ese en-

cuentro azaroso con uno mismo, nombrando cosas, significan-

do cosas, concretizando y encerrando la vida en los limites del

pensamiento. El vacío es la inocencia, allí donde todo puede

Y es en esta búsqueda de mis preguntas que encontré unas palma-

ditas, una risa, en el amor de mi hijo, en el juego, en la pasión, en

el disfraz, en el regocijo de cambiar, de mutar día con día, momen-

to a momento. Encontré el mundo del mago, el cuál no esta en

otro lado más que entrar en la inocencia, en el estado de amor, jue-

go, creación de tu propia vida.

Es en el encuentro del espacio/vacío donde no hay lugar para

otra cosa que fluidez, sincronía y armonía; Es coincidir con tus

emociones, con tus sensaciones y transgredir el espacio tiempo; Es

el encuentro del elemento de la alquimia, que se encuentra dentro

de ti; Es encontrar ese elemento que transforma la vida, ese mismo

que encuentras y hallas en el arte de vivir.

La búsqueda del dragón plata, del pez mágico que cambia de

color y se transforma, esta en el mundo del mago, allí donde se

disoña la vida, y se construyen los sueños, en la sutileza de la ino-

cencia de ser niño.

Ahora cuando miro a mi hijo con los ojos cerrados cuando

duerme con sus manitas en su mejilla y con una gran sonrisa, sin-

tiendo esa armonía y cercanía con tus sueños. Escucho su respirar

tranquilo y de repente al escuchar una risita mientras sueña, me da

la entrada a ese umbral infinito de los sueños, donde los dos somos

niños y dormimos disoñando juntos nuestra vida.

Un día Merlín había pasado horas contemplando el estan-

que, el niño —Arturo— no resistió la tentación de pregun-

tarle qué era lo que miraba.

—No lo sé con exactitud, contesto Merlín. Vi una libélula y

quise mirarla más de cerca. Se atravesó en mi camino como

sueño fugaz, pero al cabo de un momento olvidé si la libélu-

la era mi sueño o si yo era el de ella.

"El sueño es un juego breve de las formas. Es el mundo: real en

términos relativos pero no absolutos. Y está el soñador, la reali-

dad absoluta en la cual van y vienen las formas. El soñador no es

la persona es parte del sueño. El soñador es el sustrato en el cual

aparece el sueño, la dimensión atemporal detrás del tiempo, la

conciencia que vive en la forma y está detrás de ella. El soñador

es la conciencia misma, es lo que somos.

Tolle, Eckhar(2005:188)


93



—"¿no es obvia la respuesta?", preguntó Arturo.

— Merlín le propino un golpecito en la cabeza y le dijo:

Tú crees que tus sueños existen aquí adentro. Pero como yo

me encuentro en todas partes, ¿cómo puedo saber cuál parte

de mí sueña a otra?

… El mago observa los ires y venires del mundo, pero su

alma habita en el ámbito de la luz. El paisaje cambia, el ob-

servador permanece igual. El cuerpo es sólo el sitio al que

los recuerdos llaman hogar.

Chopra, El sendero del Mago

Mariposas al vuelo

Uno de mis sueños recurrentes es fotografiar al vuelo a una Mari-

posa Azul, que de niño le llamábamos Azulosas, ignoraba cual era

su nombre real, pero eso no importaba, lo que importaba es la es-

trategia para tomarle una fotografía a una mariposa azul.

Les platico que esas mariposas las había visto una vez que

cazaba mariposas con una vara, las cuales revoloteaban por el patio

de mi casa en la primavera, que era temporada en el año que era

impresionante ver una cantidad inmensa de mariposas volando so-

bre charcos, y curioso pero siempre seguían el camino de los hom-

bres y las mujeres, ese camino que se hace al andar, esas veredas

donde se caminaba para llegar a algún lugar, donde las huellas de

los pasos dejaban una estela de lodo, tierra descubierta y humedad,

el alimento de las mariposas.

Las mariposas azules, —ahora se su nombre, se llaman

Morphos, un nombre sincrónico y mágico, que tiene que ver la pa-

labra mágica trasformación mutar la forma— las cuales eran como

el trofeo mas preciado para cualquier cazador de mariposas, era el

sueño de cualquier niño, capturarla. Era por así decirlo imposible,

por que, que yo recuerde jamás ningún niño pudo hacerlo, eran

relatos de quienes decían que habían podido obtener una, y conta-

ban su hazaña como lo habían hecho, al final quedabas asombrado

por la habilidad y destreza de lograr ese sueño.

Así que al dormir, siempre aparecía con mi red, buscando en

los caminos y lugares que conocía, y que no conocía en busca de la

mariposa azul. Una vez en un sueño desperté caminando, llegue a

una barranca donde solía caminar con mi abuelo, y allí vi miles de

94




mariposas azules, las cuales vuelan muy rápido, nunca se paran a

descansar, su camino es incierto, siempre vuelan solas, y son muy

hermosas. En el sueño corría tras una de ellas por entre árboles,

plantas de café, iba tan extasiado que no me di cuenta y de repente

se me acabo el camino y salte al vacío del barranco, en ese salto

me di cuenta que no tenia miedo, me sentía libre y podía volar, eso

fue grandioso porque así pude volar tras ella, la rapidez de sus mo-

vimientos hizo que me diera cuenta que era veloz también, después

de volar por varios minutos en el sueño me encontré junto a esa

mariposa azul. Y la mariposa me pregunto.

¿Por qué me persigues con tanta insistencia con tu red?

¿Qué esperas de mí?

¿Quién eres tú que quieres atraparme?

¿Para qué me quieres?

Yo sin poder hablar, disfrutaba y gozaba ese momento tan

hermoso de mi sueño, que por un momento olvide para que vola-

ba, que hacia tras la mariposa, que esperaba al cazarla, por que

quería atraparla, y para que la quería. En eso, escuche queme de-

cían,

—¡ Enrique, Enrique, levántate que se te hace tarde para ir a

la escuela, despierta, despierta!, Mi Mamá, trataba de des-

pertarme, y me dijo

—Hay chiquito como siempre estas soñando que persigues a

esas mariposas.

Con mis manos en los ojos tratándome de quitar las lagañas,

le decía emocionado.

— Mamá, tu crees que pude alcanzar a la mariposa, y volaba

muy rápido, y ..y...y... y ... ¿ya desperté, Mamá?, ¿Ya no es-

toy soñando?

—Mi Mamá, Vamos hijo, levántate, ya es un nuevo día, así

es que a vivir tus sueños, y ve a buscar tus mariposas.

No sabia si soñaba despierto o despierto soñaba, lo que si es

que cuando mi sueño se cumplió y era tan real, desperté. ¿para que

desperté?

¿Cuáles son tus mariposas azules?

¿Cuáles son tus sueños?

¿Cuál mariposa persigues en tu vida?

El sueño es la puerta más pequeña para penetrar en el san-

tuario más recóndito y profundo del alma y acceder a esa

noche cósmica primordial en la que descansa desde mucho

antes de que existiera un ego consciente y que se extiende

mucho más allá de lo que el ego consciente podrá jamás

alcanzar. Carl Gustav Jung, Recuerdos, sueños y pensa-

mientos


95

Mariposas al vuelo


¿A donde van los pensamientos cuando

mueres?

Hace poco tuve un sueño con mi abuelo, en ese sueño conversaba

con él de diferentes cosas, cuando de repente el me pregunta ―oye,

—¿tu sabes a donde van los pensamientos cuando mueres?— y

entonces yo le comenzaba a explicar de donde están localizados

los pensamientos en el cerebro y que Danah Zohar ya había busca-

do desde la inteligencia espiritual con sus experimentos, donde se

alojaba el alma. En eso que lo veo que se iba, y ya no lo pude dete-

ner, y desperté. Pero saben, hasta ese momento me di cuenta, que

mi abuelo no estaba en este mundo, si no que el había dejado de

existir desde hace ya algunos años, y me dije, ¿porque me pre-

gunto eso de los pensamientos?, ya la pregunta debería haber sido

al revés, yo le hubiera preguntado a él, ¿Dónde se fueron sus pen-

samientos cuando el murió?, La respuesta no la tengo, pero si sue-

ño otra ves con él, le preguntare.

Leyendo los principios y valores del nuevo paradigma, pue-

do intuir que cuando uno muere adonde posiblemente van los sue-

ños, los valores, los principios y los pensamientos. Y creo que ellos

no se van si no que se quedan en nuestro contexto, con los demás

seres vivos, que fuimos capaces en vida de despertar en ellos una

conciencia colectiva, y dialogando y compartiendo la vida, es co-

mo los heredamos a los demás, donde lo espiritual es realmente lo

que no te llevas, si no permanece.

Por eso es que cuando pienso en mi abuelo que ya no es-

ta, soy capas de recordarlo y sus pensamientos —principios y

valores heredados— yo los tengo, y son parte de mí, son lo que

pienso, lo que sueño, lo que siento, lo que vivo, lo que creo, es

decir es mi esencia.

¿Cómo aprendo?

Esa es la pregunta que emerge de manera espontánea, esta es la

manera en el que proceso de aprendizaje se vuelve activo, pri-

mero leo algo que me gusta, eso lo hago a destiempos, a des-

horas y sin un guión, me gusta disfrutar las historias y comen-

zar a leer de atrás hacia delante para intuir la trama, eso me

emociona.

Me gusta mirar, el día, la naturaleza, a mis hijos, a mi fa-

milia, en ese mirar miro por la lente de una cámara fotográfica

y me gusta robarle al tiempo sus historias y guardarlas en una

fotografía, la cual me permita disfrutar ese momento.

Me gusta escuchar, el silencio, la música, las voces, las

pláticas y las palabras, para ampliar mas ese gusto tomo mi gra-

badora y grabo aquello que me encanta para disfrutarlo en mi

tiempo de escuchar.

Me gusta hacer, que mis manos toquen y sentir las textu-

ras, el agua, escribir historias, tomar un pincel y pintar lo que

mis ojos y mi conciencia ven, eso amplia mi tacto, reflejándolo

en un dibujo.

Me gusta oler, desde que me levanto, hasta que me duer-

mo, oler mi comida, degustar en mi paladar una mandarina, oler

su cáscara y comérmela, ¡eso es genial!

Me gusta reflexionar, leer dos o tres líneas de algo, escu-

char la radio, hacerme una pregunta simple, para eso mis hijos

me ayudan, construyo, intuyo, saboreo, como, miro, tiento y

otra vez, creo que así aprendo y me aprehendo de la vida, todo

para que no se me escape y tenga que contarme al dormir, ¡ah!

porque el dormir es lo que mas disfruto, así que no me inte-

rrumpan que estoy soñando, shhhhh.

96


¿A donde van los pensamientos cuando mueres?


La pasión de soñar

Una ves que les fui dar una platica a unos jubilados, acerca del

tema planeando para el futuro me impacto conocer sus puntos

de vista, unos decían que caso tenia planear para el futuro ya

que ellos ya no tenían que planear, ya habían vivido su vida, ya

tenían hijos, nietos y hasta bisnietos, muchos ya hasta varias

esposas y esposos, casas, coches y todo lo habido en la vida,

pero me decían que no le encontraban sentido a la vida. Que a

no tenia caso planear.

¿En que momentos pierdes el sentido por la vida?

¿En que basas tu aprendizaje, emoción y pasión por la vida?

¿Por qué a esta edad aun no le encuentras el sentido?

Después de la platica me invitaron a desayunar con ellos,

estando en la mesa me comentaron algo, que a ellos les dio risa,

pero a mi me dejo una experiencia de vida increíble. —Dijo

uno de ellos, todos los días al levantarme miro el periódico y lo

primero que veo, son las esquelas de ese día.—Y yo pregunte

¿por qué ve las esquelas, no son deprimentes?, — bueno las

miro para saber si no aparezco en una de ellas. ¿Qué …? Si las

miro y si no me encuentro en ella, confirmo que sigo vivo, y

comienzo mi día.— A esta expresión todos comenzaron a reír,

claro yo también me solté a reír, solo que se me acabo la risa

cuando en mi reflexión, en mi autoconstrucción y autoorganiza-

ción de mi pensamiento, sonaron las palabras, sentido de vida,

vida, esquela, risa.

Y emergieron las preguntas:

¿Cuál es el precio que tienes que pagar por seguir tus sueños?

¿Cuál es costo que tienes que pagar por aprender o enseñar?.

Invertir, tiempo, emoción, comprensión, compañía, alum-

nos, fortalecer, encontrar, conocer, pasión, sorprendizaje, el

plus, creatividad

¿Estamos dispuestos a correr el riesgo?

Que hacer cuando el alumno esta en el umbral de la crea-

tividad, impulsado y provocado por el aprendizaje, donde se

sienten seguros y sin temor, justo donde los necesitas.

―comienza con la forma de pensar y de soñar, y continúa

con la forma de vivir‖


97

La pasión de soñar


Miedo, confianza, libertad

Para soñar necesitas ser libre, y esa libertad te da la fluidez, ya

que los miedos se presentan en cada momento, en cada paso

que damos, y sin esa libertad de pensar, de conocer, de recono-

cer, no podremos llegar a ese nivel de conciencia que nos per-

mita reflexionar en nuestro ser. Nelson Mandela en su discurso

al tomar el poder decía.

Nuestro miedo más profundo no es creer que somos inadecua-

dos. Nuestro miedo más profundo es saber que somos podero-

sos más allá de la mesura. Es nuestra luz, no nuestra oscuridad, lo que nos asusta. Nos preguntamos: "¿Quién soy yo para sen-

tirme brillante, atractivo, talentoso, fabuloso?" Pero en reali-

dad: ¿Quién eres tú para no serlo? Tu eres un niño de Dios.

Tu juego a ser insignificante no sirve al mundo. No hay

nada de iluminación en hacerte menos con el fin de que otras

personas no se sientan inseguras a tu alrededor.

Todos podemos brillar, tal como lo hacen los niños. To-

dos nacimos para manifestar la gloria de Dios que se encuentra

en nuestro interior. Esta gloria no está dentro de unos cuantos, está dentro de todos nosotros. Y cuando permitimos que nues-

tra propia luz brille, inconscientemente damos la oportunidad a

otras personas para hacer lo mismo. Conforme nos vamos libe-rando de nuestros miedos, nuestra presencia libera a otros au-

tomáticamente.

El Hado de los sueños

Una violeta blanca es el centro de mi atención a partir de ella

me enfoco y surge la pregunta, ¿Por qué me cuesta escribir so-

bre la equidad de genero en educación?, la respuesta pasa por

mi pensamiento, la reflexiono, la mastico y me quedo fundido

en el universo, tal como lo hace una estrella antes de ser fugaz.

Me levanto, camino y miro al cielo, observo la noche y

miro esa estrella fugaz pasar por el horizonte y siento vibrar mi

ser y pido un deseo. Ese deseo se transforma en la vibración

del sueño El hado de los sueños, siendo el hado la energía, mo-

vimiento y la onda expansiva que se abre camino en el univer-

so. Este sueño es en el que convierto al cerrar mis ojos, respirar

profundamente y vibrar mi ser. Busco esa frecuencia que me

lleve a buscar el sentido del sueño.

Trato de abrir los ojos, los abro pero me veo fuera de mí.

Mi cuerpo yace en mi cama descansando y yo me observo des-

de arriba. ¿Qué esto me pregunto?, si el que esta allá en la cama

dormido soy yo, ¿quién es el que observa?, ¿será que estoy de-

ntro de mi sueño, soñando? Miro a mi alrededor y observo mi

recamara, si que se ve diferente desde aquí arriba, me observo y

soy yo mismo pero un poco transparente. ¿Qué hago aquí afue-

ra, si esto es afuera?. De repente una voz me sorprende es una

voz, calida y armoniosa. Y me dice –bienvenido al mundo de

los sueños-, ¿que es lo que te trajo aquí? Preguntó. No sabia

que responder, solo tartamudeé, ―el sueño‖.

Muy bien, respondió, ahora como tu guía en este mundo

antes de que despiertes, exploraremos tus sueños, tú solo sueña,

98




sueña, sueña. De repente me quede nuevamente dormido en mi

sueño, y me encontré con el sueño de Raymundo. Este mas que

ser un sueño, es pensamiento recursivo, es un onda enviada al

universo a través de un sueño, deseo, pensamiento y pregunta y

que regresa a mí cada vez que hay una respuesta para él, eso es

fabuloso por que mi pensamiento se autoorganiza para seguir

soñando.


99

El Hado de los sueños

Hado/movimiento/onda

Hado, es una frecuencia vibratoria en todo y se afecta dependien-

do de la conciencia que tengamos de ello, si todo es energía todo

esta vibrando. Las palabras son vibraciones, la conciencia afecta

a la materia. La fuerza de pensamiento crea la realidad que deci-

dimos experimentar. La mente atrae siempre lo que piensa, es un

proceso interno que esta a nuestro alcance.

Hado o Jadou, es un ideograma de onda y movimiento,

también significa energía, los físicos cuánticos le llaman Quan-

tum, los orientales le llaman Chi o Ki, fluir de energía, también le

llaman Prana. En el catolicismo le llaman espíritu santo y en

otras disciplinas mente universal, en el mundo chamánico le lla-

man intento.

Alejandro Ariza dice: ―el ser humano tiene la oportunidad

de co-crear su propia realidad para darle forma a su vida, para

cambiar nuestra vida debemos afectar nuestra realidad, debemos

de vibrar a una frecuencia mas alta, cambiando nuestro estado de

conciencia haciendo uso de la fuerza de nuestro pensamiento.

Un pensamiento en voz de Ramta, en su video ―crea tu

día‖ dice: un pensamiento es un momento congelado de una co-

rriente de conciencia que el cerebro procesa y lo pone en un pa-

quete llamado neurona, que luego aumenta por medio de la me-

moria asociativa … un pensamiento es una estructura por medio

de la cual se modela la realidad, es la arquitectura de la realidad,

así es que cuando creas tu día, lo diseñas por medio del pensa-

miento y en la medida que observas el pensamiento, este se con-

vierte en la forma en que se modela la realidad misma de modo

que las aventuras del día realmente se basan en tus pensamientos.



La relación de la conciencia y el orden implicado en nuestra

forma en que nuestro pensamiento se forma en la conciencia y

esta conciencia la que se manifiesta en nuestros sueños.

La conciencia en general es mucho más parecida al orden

implicado que a un orden mecánico de sucesión. La «corriente de

conciencia» descrita por William James no se experimenta como

una sucesión causal de ideas, una detrás de otra como los vagones

descritos en el capítulo 2, sino que los pensamientos parecen fluir

los unos de los otros.

Un pensamiento se forma en la conciencia y puede ser enri-

quecido por muchas asociaciones y sentimientos distintos. Luego

puede disolverse en otro pensamiento relacionado, o la mente pue-

de apartarse repentinamente hacia algo que a primera vista es inco-

nexo, pero, al investigarlo más a fondo, tiene una conexión sutil

con el primer pensamiento.

El orden del movimiento del pensamiento es, por lo tanto,

más parecido al de los plegamientos implicados explicados que a

cualquier analogía mecánica. Esto se puede observar con mayor

claridad en los sueños, donde el control de la «lógica» o

«razón» no es tan aparente. En los sueños, una imagen puede

desplegarse y recorrer el sueño para revelar una hueste de otras

imágenes plegadas dentro de él. Al igual que los procesos de

orden implicado implican un concepto del espacio en que los

objetos pueden ser simultáneamente interiores y exteriores en-

tre sí, las imágenes de un sueño están contenidas en sí y están

en un proceso continuo de transformación y desplegamiento.

En este sentido, por lo tanto, nuestros pensamientos son

las formas explicadas arrojadas por los movimientos fundamen-

tales de los órdenes implicados en la mente.

(Peat, 2000:122 )

Al leerlo, mirarlo, sentirlo, olerlo, degustarlo, escucharlo,

cierro los ojos y sonrió, y resulta agradable regresar nuevamen-

te al punto recursivo con algunas respuestas que se entretejen

en el texto y es que las palabras que resuenan en mi son, an-

helo, conciencia, transformación, unidad, armonía, conciencia,

pensamiento, orden implicado, movimiento de pensamiento,

sueños, imágenes plegadas y trasformación.

100


Miedo, confianza, libertad


El sueño de las diferencias o el sueño de

las similitudes

Dee Hock, en su libro la era caordica escribe estar confundido

por aquello que es diferente, es estar confundido por todo, el

sueño del ser humano en un principio fue el de vivir y convivir

con las fuerzas de la naturaleza, solo tomando lo que necesitaba

para vivir pensaban con el corazón, como dice Ochwia Bianco

un jefe piel roja en una platica con Carl Jung. Ahora ellos están

locos, dicen que piensan con su cabeza, al hablar de los hom-

bres blancos.

El sueño del hombre es el conocimiento, inteligencia,

razón, abstracción, objetividad, generalización y categorías. El

sueño de la mujer es intuición, sensibilidad, emoción, concre-

ción, subjetividad, detalles y la multidimensionalidad. Y mi

pregunta es:

¿El sueño del ser humano es todo junto o solo es la parte que

desarrolla y vive?

A simple vista el categorizar a los hombres como hombres y a

las mujeres como mujeres aparecen las diferencias y las simili-

tudes. En una platica con una compañera de trabajo me decía

que la mujer era la que le resolvía todo al hombre, —decía

que el hombre no pueden pensar, sin antes haber resuelto todo

en su casa, y que la mujer siempre se encargaba de eso. Por eso

el hombre podía dedicarse a hacer más cosas, por que ella le

resolvía la vida.— Y las preguntas surgieron.

¿Por qué el hombre siempre regresa a su casa?

¿Quién respalda a un hombre?

¿Qué encuentra en su casa?

La mujer le da fuerza, lo reconforta, lo escucha, alimenta

sus sueños y regresa a su casa porque la mujer es su equilibrio.

Fantástico, entonces las diferencias son el equilibrio entre ellos.

El genero, esta implícito en lo que hacemos, platicamos

en nuestro hacer cotidiano, por lo tanto no nos podemos separar

de él. El nicho vital donde esos dos seres se complementan

hablando de incompletud. el ser humano es un ser incompleto

es el hogar. El hogar se constituye en su fuente de su energía

hado, donde se crean, cocrean, procrean, crecen sus sueños y al

mismo tiempo aprenden, enseñan, conversan, dialogan y se au-

toconstruyen día a día en ese relacionar y compartiendo, su ser,

su sentir y su vivir.

Lo implicado en el genero es la historia de cada persona

lo explicado en el genero el es la conciencia de la vida. El sue-

ño de uno es la vida del otro y la vida es el sueño de uno mis-

mo.

El sueño de los dos, es disoñar juntos. —Disoñar es sentir

la vida en todas sus expresiones, sentirla viceralmente y amarla,

gozarla, defenderla. Disoñar es hacer un alto, mirar hacia atrás,

ubicar el punto de partida, imaginar nuestro paraíso, abrir el

espectro de caminos, elegir uno, recorrerlo e intentar hacer pro-

pia la felicidad— ese es un principio rizomático donde se mani-

fiesta la chifladura es: disoñar sueños.


101

El sueño de las diferencias o el sueño de las similitudes


Disoñar es lo que hacen quienes diseñan sus vidas de

acuerdo a sus propios sueños Morin dice: el genio aflora en la

brecha de lo incontrolable, allá por donde merodea la locura.

Al hablar de la masculinidad se suele pensar que el géne-

ro es exclusivo de la mujer, el cuestionar las normas de la mas-

culinidad es parte de la búsqueda de una alternativa de desarro-

llo, esto solo se puede lograr cambiando las relaciones entre

hombres y mujeres en todos los ámbitos, modificando y trans-

formando las relaciones con nosotros mismos.

Aleteos de Mariposa

Sabía que mi sueño tenía resonancia, sabia que mi campo

mórfico iba a ser amplificado, pero lo que no sabía era hasta

donde la conciencia de aprender me llevaría a aprender de la

vida de los demás y más aun de sus sueños. Ese sueño comenzó

cuando escribí el texto —mariposas al vuelo— en el curso 8,

que si miras ese 8 acostado es mas que una coincidencia es una

mariposa y además se parece al infinito, ∞, coincidencia o con-

sistencia o mas bien resonancia.

Al mostrar el texto a una amiga me dijo, —oye espera,

esto se parece a algo que acabo de ver, ¿has visto la película de

la Mariposa Azul?— ¿existe tal película?, sé me hace que me

estas cotorreando, es imposible.

Y ella me respondió, —claro que existe, la acabo de ver—,

¿de verdad?, y comencé a sentir, cosquillas, y mariposas en el esto-

mago, al saber que un hado se extendía en el lenguaje y la emoción

de encontrar rutas o puentes en la interacción de seres.

Curiosidad. Emoción. Magia. Sueño. Alegría. Energía.

Hado.

La mariposa azul ya no es un sueño, ella vino a mi. En la

vida nos convertimos en atractores de nuestros propios sueños,

o los sueños nos atraen la vida, ¿Qué será que se es?, es como

lo que Jana, le dice a Pette en la película, cuando ella le dice:

— ¿Porqué? ¿Porqué? ¿Porqué? ¿Porqué la mariposa azul

es tan importante?

— Pette, ¿La mariposa azul? Porque es la mariposa azul

es un milagro.

— Sí, pero... Esto también es una mariposa azul.

(Mostrándole un escarabajo)

— Pette, No, un escarabajo rinoceronte.

— Tú eres una mariposa azul. Yo soy una mariposa azul.

Todo es una mariposa azul

— Pette, ¿Todo? No, sólo la mariposa azul es una mari-

posa azul.

La mariposa Azul, después del sueño que tuve, vino a

través de una película que no conocía, por sincronicidad el

cuento se parece a la película, —sin antes haber visto la pelícu-

la— y ahora se integra como una ampliación de mí, es curioso

pero al verla, me miro en los ojos de Pette, y al mismo tiempo

del entomólogo, y de la madre y de la niña. La mariposa azul

es todo.

Pedí a mis alumnos ver la película, como efecto maripo-

sa, de mi emoción y sentir pensar. También les lleve la película

102





103


a mis amigos del rizoma y a mi familia, es decir el sueño de

Pette se reprodujo en mas y mas personas, a eso le llamo la

conciencia de aprender, por que aprendo cuando pienso, cuan-

do veo, cuando siento, cuando converso, cuando comparto,

cuando dialogo y cuando sueño, ¡ah por que soñar es lo que

mas disfruto!.

¿Qué hago aquí?

Alguna vez te has preguntado, ¿Qué hago aquí? Cuando en algún

lugar del mundo, y en algún tiempo te detienes. Miras a tu alrede-

dor, cierras y abres los ojos y miras colores, luz, sol, energía, alegr-

ía, felicidad. Respiras, llenas tus pulmones de aire, olores, aromas,

como de tierra mojada al caer la lluvia. Paladeas en tus labios una

gota de agua que ha bajado del cielo para refrescarte. Extiendes tus

manos y sientes caer sobre tus dedos unas gotas de lluvia, y otras

mas caer por tu cabello, tu rostro, tus ojos y tu cuerpo.

Escuchas sobre el tejado el golpeteo de las gotas cayendo y

resbalando hasta hacer ese riachuelo que baja por tus pies descal-

zos. Caminas dos pasos con los ojos cerrados, escuchando, olien-

do, degustando y tocando el lodo, mueves los dedos de tus pies

descalzos y sin abrir los ojos tratas de atrapar ese instante, ese mo-

mento, ese tiempo, ese lapso de vida, y te apresuras a guardarlo en

tu memoria para que no se te escape esa magia de vivir.

Esa magia de no dejar escapar los momentos, la pasión,

los sueños, los sentidos, la intuición y que hace que despierte

esa conciencia que nos conecta con el todo, con el universo,

con la vida, con la tierra a través de los pies descalzos.

Y ¿Cómo llegué aquí? A este lugar mágico, te pregun-

tarás. Para haber llegado hasta aquí has dejado de ser quien

eras, y te has quedado descalzo disfrutando el correr por tus

pies el agua. Te has desapegado de esa vida material de la mo-

dernidad y has entrado al nivel de la conciencia. ¿Cómo hice

este recorrido?, ¿Qué paso en mi vida? ¿Qué vientos me traje-

ron a este sitio? Esas son algunas preguntas que me asaltan y

que me traen aquí.


el sistema nervioso humano para crear una forma nueva que incorpora elementos de formas anteriores. Bateson dice que nuestros modelos men-tales dan forma a las ondas sonoras de nuestro lenguaje, pero esas ondas sonoras moldean a su vez los modelos mentales de alguien más.

Este punto se convierte para los arquetipos en un centro universal relativo, en verdad un proyecto de un nuevo cosmos. Las esferas celestes, al dirigir sus fuerzas contraespaciales hacia el punto germinal físico, punto que para ellas constituye su infinitud, lo alimentan y sostienen desde todos los lados. Este proceso concierne al futuro, como si esas fuerzas percibieran, en cada punto germinal vivo, algo potencial que se ha de desarrollar en el tiempo.

Como esto sucede a nivel de cada punto germinal, habrá que tener en cuenta que, en los fenómenos de la naturaleza, la realidad no se compone de un solo espacio, si no de una cantidad infinita de espacios físicos y cósmicos que se interpenetran. Incluso en los fenómenos abióticos no po-demos considerar un solo espacio, si no un número infinito de ellos. Dondequiera que surja un punto germinal en el mas amplio sentido , don-dequiera que dentro del calor viviente e incubador, una semilla se esté preparando para recibir las ideas formativas del Cosmos, allí se moldeará un contraespacio, alrededor de ese punto central, que será su infinito, su absoluto. (Frigols,2007:90)

Grof, S. (1999) La mente holotropica, Ed. Kairos, Barcelona, España.

Maxwell, Jonh (2006),Atrevete a Soñar … y luego haz tu sueño realidad,

Lider Latino, Nashville, Tennessee

Toyoko Matsuzaki, en su libro “El poder Curativo del Hado” dice: La palabra hado se ha utilizado para expresar un tipo de energía vital pues qi tiene varios significados, entre ellos “aire”, “emoción” y “sentimientos”. Literal-mente hado significa “movimiento ondulatorio” o “vibración”, ampliando el significado, hado es el aire mismo en la madre naturaleza.

Un sueño es.. Un sueño es un ideal que involucra un sentido de posibilidades más que de probabi-lidades, de potencial más que de límites. Un sueño es una fuente de pasión, dándo-nos dirección y llevándonos a grandes alturas. Es una Expresión de optimismo, es-peranza y valores lo suficientemente grande como para capturar la imaginación y comprometer el espíritu. Los sueños se nos adhieren y nos mueven. Son capaces de levantarnos a nuevas alturas y de hacernos vencer limitaciones impuestas por noso-tros mismos. –Robert Kriegel. Asesor de negocios.

Morin menciona, El método no puede formarse más que durante la búsqueda: solo puede formularse después, en el momento que el término del camino vuelve a ser un nuevo punto de partida, es un siempre estar llegando. Es una experiencia que equivale a la de los viajes de los místicos de donde vuelve cambiado. Marianne Williamson - Citado por el líder sudafricano Nelson Mandela. http://carmenlobo.blogcindario.com/2005/11/00184-nelson-mandela.html

Pp51. simiente de primavera. (disoñadores del futuro, ADC Colombia, 1996.)

Transforma, “transformación”, Richard Newbold, El octavo día, pp. 173, dice: Una “transforma” no es una simple transposición del contenido de un recipiente a otro; no equivale a la marca sobre una superficie, ni a la impre-sión de las ondas luminosas en la retina de un ojo o en la película de una cámara. Aunque su forma se asemeja a la perturbación que crea, una “transforma” combina necesariamente información nueva con información previamente existente en el receptor. Ambas se funden inevitablemente en

104




Magia: acto que hace posible despertar al mago

interior a la vida

Sentado bajo un árbol, al que le llamaba el vigilante. Imagínate-

lo en medio de un cerro, con un tronco de unos veinte niños

tomados de las manos, la vista del paisaje impresionante. Cuen-

ta mi abuelo que su vegetación y altura, en días de lluvias lo

hacían acumular nubes sobre el, antes de dispersarse en el valle.

El árbol vigilaba las nubes que pasaban y avisaba cuando iba a

haber alguna tormenta al moverse cuando el viento soplaba en-

tre sus ramas.

Mi perro y yo, casi siempre subíamos a él para contem-

plar desde sus raíces esas impresionantes nubes y escuchar el

silbido del viento. ¿ves el árbol? ¿sientes el aire? ¿escuchas el

susurro entre las ramas? Esto es un acto magia, el acto que hace

posible despertar el mago interior a la vida. Ser siendo, ser es-

tando, ser viviendo, así de simple.

Nota: magia, acto, despertar, mago, interior, vida, cotidianidad,

ver, sentir, escuchar, oler, sentidos, nacer, atención, disfrutar,

sonreír, soñar, dormir, mundo, aprender, respirar, sonido, sabor,

color, desaparecer, espacio, paradigma, nicho vital, niño, ar-

monía, empatía, ceguera, magia.

105


Magia es vivir con todos los sentidos cada

acto de vida

Desde que nacemos vivimos unidos a nuestro mago interno,

atento disfruta cada instante de nuestra vida, sonríe, duerme,

sueña, mira, se emociona, balbucea, canta. Espera cada día para

regocijarse con lo que el mundo le muestra, aprende que cada

mirada, respiro, contacto, sonido y sabor es parte de ese mundo

increíble, la vida.

Sin embargo esa magia, se va desvaneciendo al entrar en

contacto con el deber ser del paradigma actual, ocultándola y

solo mostrándola cuando el espacio de vida, el ambiente de

aprendizaje, la resonancia de nuestro nicho vital, nos hace ser,

en nuestra esencia, es allí donde nuestro mago interior se mues-

tra.

Alegría, ingenio, imaginación, creatividad, emoción, can-

to, juego, ternura, sencillez, armonía, simpatía, libertad, fluidez,

magia, sueños, son algunos rasgo de ese mago interno, que uno

lo puede ver, en los niños, en ese mundo tan armonioso, que

crean y recrean, en el cual ellos son los que crean actos mágico

que hacen posible despertar a su mago interior a la vida.

Al perder la mirada mágica nos volemos ciegos a los mo-

mentos mágicos de la vida, que desde el amanecer se nos mues-

tra con esa belleza, y esa sutileza del sol saliendo en el horizon-

te, de un ave cantando en el alba, de un abrazo de tu hijo, de la

alegría de tu perro al saludarlo, de un beso de tu pareja, de un

sentirte vivo.

Al perder el contacto mágico nos volvemos intocables a

los destellos de la luz del sol, a las gotas del roció de la maña-

na, al viento que sopla, al abrazo amoroso y a las sonrisas. Con

nuestra coraza que nos protege nos alejamos cada vez mas del

afecto y el contacto con la vida.

Al perder el olfato mágico anulamos el aroma de la hierba

al amanecer, del jazmín con su fresco aroma en el atardecer, del

olor del cuerpo al despertar, de las ramas de pino y del olor de

los alimentos. Nos alejamos de aquel que disfruta cada respiro,

cada suspiro que llena sus pulmones del aroma de la vida.

Al perder el gusto por lo dulce, desparecen los postres. Al

desaparecer el gusto por lo salado, se oculta el mar. Al desapa-

recer lo acido, los limones de quedan en el limonero. Lo amar-

go, lo picoso, lo suave, lo duro, se queda en el alimento que es-

pera comer nuestro mago interno.

Al perder nuestra voz, nos volvemos sordos, anulamos

nuestro canto y aprendemos a callar. Ya no cantamos mas, por

que perdemos el ritmo y el tono de la voz que nos hacia hablar,

cantar y orarle a la luna y a las estrellas, pidiéndole a Dios que

nos regrese al mago interior, ese que vive cada acto de vida con

todos sus sentidos, y que es capaz de hacer, mirar, sentir, oler y

gritar, MAGIA.

106

Magia: acto que hace posible despertar al mago interior a la vida

Magia es vivir con todos los sentidos cada acto de vida


¿El agua cura? o ¿cura el agua?

La pregunta esta en el aire, y parece que tiene alguna res-

puesta. Creo que esa es mi búsqueda constante, la de crear una

que otra respuesta y creer, que existe.

Le comentaba a mi hija, el sábado que cumplió sus seis

años. El día anterior le dije que teníamos que comprar una bol-

sa de regalo. Le decía que debía ponerla a lado de su cabecera

en su cama porque el Hada de los sueños vendría y cuando ella

durmiera, el Hada le dejaría obsequios en esa bolsa.

Al día siguiente ella estaba feliz, al observar en la bolsa de

regalos, que el Hada de los sueños, llego mientras dormía y le llevo

unos muñecos de peluche, dinero y una paleta de chocolate. Súper

feliz por sus regalos bajo con su bolsa a desayunar, y ella me dijo,

—Papá les voy a decir a mis amigos que el Hada de los sueños

existe, y que el día de su cumpleaños le traerá algo.—Ella con una

sonrisa y con mucha emoción en sus palabras mágicas.

—¿Papá les puedo contar a mis amigos?

Le respondí, claro solo toma en cuenta que algunos no te

creerán, pero cuéntales y si no te creen no te sientas mal,

esto es cuestión de creer, de crear y de creer.

Si me preguntas hija, ¿si el Hada de los sueños existe?, yo

te diré que sí, ya que ella esta pendiente de tus sueños y te los

concede, solo no dejes de soñar. Sale hija, le di un abrazo de

Oso y un beso, y le desee feliz cumpleaños, ese fue mi regalo

para mi hija.

El creer en la magia, es lo que me acerca más a mis

hijos. El dejar de creer en la magia me aleja mas de mi

ser.

Viendo el la película del "ilusionista", me transporto al

sitio donde hacia su acto de ilusionismo, sentando en una de las

butacas pude ver, como de una naranja cortada a la mitad, saca-

ba una semilla, acto seguido la vertió en una maceta y la semi-

lla comenzó a crecer hasta dar frutos, y para comprobarlo el

lanzo a la gente las naranjas, y que creen, yo tome una de ellas.

¿Me creen? —esto es un acto de creer y crear.

¿El agua cura? o ¿cura el agua? — Regreso a mi pregunta, co-

mo esa recursividad de la pedagogía del aprendizaje. En los

últimos días que me he sentido físicamente mal, y les comenta-

ba de mi malestar a mis amigos del grupo. Acto seguido mis

amigos me enviaron unos mensajes que comenzaron a bañarme

de buena vibra y comencé a sentirme mejor. En la noche al ba-

ñarme, comencé a orar, y mi intención la pase a el agua con que

me bañaba, le decía:

"agua hermosa, que me bañas, sáname, cúrame, baña mi

cuerpo con tu bondad y límpiame de este malestar", eso

lo repetí mientras el agua corría por mi cabeza hasta lle-

gar a mis pies.

Y que creen, funciono, me sentí genial, y descanse como

enano. —es una expresión que usamos para decir que descansa-

mos como niños— ¿El agua cura? o ¿cura el agua?, la respuesta

la estoy creando, cree-yendo, co-creando, y como el Hada de

los sueños, existe, mientras crea, sienta, huela, escuche, mire,


107

¿El agua cura? o ¿cura el agua?


toque, piense y sea. Cuídense mucho, crean en el Hada de los

sueños, creen y recreen su vida, cada día como un niño que aun

sueña

La magia del ser siendo..

Papá, mi deseo es ser hada por solo un día.

Ese es el deseo de mi hija

Y yo le digo que es hada desde el momento que apareció

en nuestras vidas, ya que su vida nos ha transformado en

la convivencia con su magia de vivir

hija eres el hada de la vida, gracias por tu magia

Y surgen nuevamente las palabras mágicas que me guían

en este aprendizaje como abejas alborotadas en su panal en bus-

ca del néctar para su miel

Magia. Transformación, Letargo. Provocación. Intuición. Enac-

ción. Pasión. Alquimia. Magia. Amalgama. Confluencia. Perfu-

me. Acorde. Armonía. Sincrodestino. Frecuencia. Resonancia.

Sentido. Magia. Búsqueda. Sugestivo. Tentador. Encantar. Ma-

gia. Ilusión. Deseo. Vida. Amor. Niñez. Cuento. Enmagiar.

Amigos. Magia. Interés. Pasión. Caos. Orden. Caordia. Creer.

Crear. Soñar. Recursividad. Magia. Sincronía. Armonía. Reso-

nancia. Lenguajear. Sorprendízaje. Transformación. Reconocer.

Interacción. Sendero. Sincrodestino. Magia. Intención. Emo-

ción. Escuchar. Compartir. Convivir. Sueño. Alquimia. Educa-

ción. Aprender. Autopoiesis. Grupo. Magia.

El porque de la magia

Siento que hemos dejado de creer, vamos en la vida sin asom-

brarnos, sin comprometernos, sin sorprendernos y sin algo que

nos atrape cual cazador de sueños. Les decía a mis alumnos que

yo soy la generación que se les dio información del calenta-

miento global, del problema de la basura y del agua, pero el

único detalle fue que no me educaron para ser esa persona ca-

paz de cuidar el ambiente.

…… . .

El encanto de encantar, no de cantar si no de enmagiar-

nos. El compartir el pan, la vida, su energía, su frecuen-

cia, su resonancia, sus acordes, sus miradas, sus respi-

ros, su magia, su voz y silencios nos hace cada vez mas

entender, comprender, reflexionar y apropiarnos de nues-

tra vida.

¿Por qué nos perdemos de estos encantamientos en la vida?

¿Por qué hemos abandonado esa fantasía y la magia de creer?

¿Por qué perseguimos lo que no somos y somos lo que no per-

seguimos?

108


La magia del ser siendo..


Saben creo que la vida es cíclica, y que de vez en cuando

se abren y cierran los círculos de la vida, es decir hay veces que

nos inspiramos y nos fluye por los dedos esa Magia de escribir.

Hay veces que nuestra emoción es tan intensa que nos nace la

Magia de expresar. Hay veces que somos mas compartidos y

humanos. Otros días el Sol, la sonrisa, el agua, el aire y la vida

nos tocan de manera tal que la magia hace su trabajo de sentir-

nos vivos.

----------------------------

Hoy extravié mi magia, y la respuesta es, que he tratado

de ser racional, y explicarme que eso llamado magia y que cre-

en, se me escurrió en las manos, cual agua que fluye en el río,

se me escapó en el aire cual viento invernal, se fue en un suspi-

ro cual instante. Se me escapó en un susurro del bosque. Se me

escapó en un pensamiento, en un afecto, en un suspiro, en un

contacto.

Alguien la ha visto de oler, de sentir, de tocar, de escu-

char, de soñar, de crear, y de creer a mi magia. Escucho un algo

entre mis letras que me dice, que no trate de definir la Magia,

por que esa es la trampa de no verla. Y ¿cómo se sienta, piensa,

escucha, degusta la magia?

Creo que la magia es como los pensafectos, tan

emocionante que necesitas sentir-la, lo y las. Es como el

aprender en grupo, tan silenciosa para el oído medio

que necesitas estar en el sueño Alfa para sentirla es de-

cir "soñando".

Es como el degustar, tan intenso el sabor y tan in-

cierto el ingrediente, que necesitas cerrar los ojos y via-

jar en el tiempo para atrapar el momento.

Es como el sentir-pensar, que debes de perder el

sentido y dejar de pensar para que puedas sentir la ma-

gia de pensar.

Es como la Interacción, que necesitas compartir,

conversar con todos los sentidos para atrapar el momen-

to del con-tacto.

Es como la autopoiesis grupal y la autoorganiza-

ción, que necesitas digerirte, disolverte y amalgamarte

dejando atrás el ego y presentarte como un ser mágico,

compartiendo tu magia.

Cada respiración, cada paso, cada pensamiento,

Magia. Dar un paso: magia. Uno a uno nuestros pasos

nos mantienen en equilibrio, si pierdo la magia caigo. Es

un equilibrio brillante, increíblemente bello, erguido, co-


109



mo ser humano.

Cada respiración: magia. Un pase mágico del am-

biente a mi cuerpo, entra el universo a mi cuerpo, me

fundo con el elemento, es parte mía y me hace vivir. Tan

solo treinta segundos sin él y muero. Tan solo treinta se-

gundos sin él.

Pensar en ti: magia. Para recordarte millones de

neuronas, en una milésima de segundo se organizan y

reorganizan, envían señales mágicas para lograr un pen-

samiento y transformar mi cara con una sonrisa porque

te recuerdo (Pérez, 2007)

Yo creo que la magia existe cuando se le truena el

empacho a un niño, o cuando se salvan de un accidente

de manera milagrosa, o cuando andas bien depre y de

pronto aparece alguien que te dice una linda frase y

¡pas ! se te evapora la depre... en fin cualquier cosa que

por inesperada te sorprende y tiene un efecto sobre tu

estado de animo e incluso en tu percepción del mundo.

Creo que enmagicarse requiere de saborear el mo-

mento sin prejuicios, el prejuicio es el enemigo numero

uno de la magia.

La gente esta como urgida de certidumbres y certe-

zas, frente a un hecho inmediatamente trata de tener una

explicación lógica y razonable, es decir intelectualiza

rápidamente.

La magia requiere de la intuición, la capacidad de

asombre y de una imaginación que por definición no tie-

ne limites convencionales, magia es cuando aparecemos

todos a la reunión y nos divertimos y reímos con ganas y

espontáneamente, por que lo que rodea a este grupo es su

filiación afectiva con los demás, el todo nuestro no esta

completo si no estamos todos, ¡hagamos nuestra magia!

(Márquez, 2007)

Transformarse en la convivencia es la entrada al mundo

del mago es la transformación del ser en la magia de vivir. En

esta sincronía con mi tema me detuve a mirar, escuchar y oler

110




La magia de escuchar y de expresar

El semáforo se puso en rojo, eran las nueve veinticinco de un

día común y corriente, eso pensaba en mis adentros, mientras

escuchaba la radio, digo escuchaba porque el auto llevaba los

cristales abajo y solo se escuchaba de oír la radio. Antes de fre-

nar en el semáforo no me percate de que hubiera gente, así es

no percibí nada extraño solo mire el semáforo para tratar de pa-

sar cuando pasara a color verde.

Mientras seguía mi pensamiento el paso del tiempo, oigo de

oír un toc toc, en el cristal. Me asomo, era un viejito como de se-

tenta años el cual me extendió la mano, por lo que supuse que

quería una ayuda. Mira de ver dentro del auto si llevaba algo que

darle alguna moneda, tome cinco pesos y abrí la ventana y se los

di, el extendió la mano y me dio las gracias. Volví a mirar el semá-

foro y distraído en mi vida, volvieron a tocar el cristal toc, toc.

Para mi sorpresa era el mismo señor, y en eso comenza-

ron mis preguntas, —¿que necesitará?, ¿por qué me toco de

nuevo?, ¿será que necesita otra cosa? — Así que puse atención,

el acto seguido comenzó con una plática.

— Fíjese que cuando venia en el autobús, hace rato, cho-

caron dos carros aquí en la avenida, parece ser que es-

tuvo muy fuerte porque no dejaban pasar los coches. Yo

tardé mucho en llegar aquí, y bueno a muchos se les ha

de haber hecho tarde, ya ve como el clima estuvo bien feo

ayer, el aguacero estuvo terrible.....

Sin mirar el semáforo, me dispuse a escuchar de sentir, de

vivir, de tocar, de mirar, de oler, de degustar. Después de haberlo

escuchado, el sonrió y el semáforo cambió a Verde, nos despedi-

mos, —que le valla muy bien señor—, —que Dios lo bendiga, me

dijo— y cada quien siguió su curso.

¿Qué fue lo que realmente necesitaba el Señor?

¿Qué fue lo que busqué en el auto para darle?

¿Qué fue lo que los dos obtuvimos?

¿Qué fue lo que me llevo de él?

¿Qué fue lo que él se llevó de mí?

Al mirar, solo vemos pero no miramos; Al oler, solo olfatea-

mos pero no sentimos; Al tocar, solo ponemos limites pero no pal-

pamos; Al probar, solo tragamos pero no degustamos; Al escuchar,

solo oímos sonidos pero no escuchamos de mirar, de oler, de tocar,

de degustar, de escuchar con el oído medio.

A veces necesitamos que alguien nos escuche y solo busca-

mos un pretexto para llamar la atención; A veces buscamos en el

auto algo material que dar pero nunca buscamos algo espiritual que

compartir; A veces tratamos de sacar ventaja de lo que conversa-

mos y olvidamos compartir nuestros seres; Lo que me llevo de esta

interacción es un pretexto para aprender y compartir con un ser, su

vida, su emoción, su sentimientos, sus pensafectos, eso es la magia

de escuchar; espero y ese es un deseo e intención que hago al uni-

verso, que el simple hecho de haberlo escuchado sea suficiente

para llenar esas ganas de ser escuchado. A mi me encanto de en-

magiar el acto de escuchar.

El semáforo paso a rojo, me detuve, un mago apareció en

mi ventana para transpórtame a la magia de escuchar, el semá-

foro cambió a verde, es tiempo de continuar, pi, piiiii sonó un

claxon de un coche de alguien que llevaba prisa


111

La magia de escuchar y de expresar


La mariposa azul es todo

Sensacional tener esa apertura de pensamiento, que solo vivien-

do en la naturaleza te das cuenta de la trama que se entreteje

entre todos los seres, la mariposa no existiera, si no existiera el

escarabajo, no existiera sin el bosque, no existiera sin las llu-

vias, no existiera sin las frutas, no existiera sin el sueño de Pete,

es en una palabra todo, es totalidad, es sincronía, armonía, sue-

ño.

Es aprendizaje, porque solo viajando se traza el mapa

del conocimiento, Mónica Cosachov, dice

… es el mecanismo que impulsa el deseo, es un gran en-

granaje, un modelo especial de vehículo que nos otorga

las herramientas y la capacidad para viajar.

Si fuera posible obtener esa capacidad, ella sería

parte del estudio sagrado, potente generadora de alqui-

mias, un engranaje muy especial debe ser aquel que lo

saca a uno de un lugar y lo lleva a otros, que lo arrastra

del sentido singular de una técnica, lo conecta con otra y,

por arrastre, con otra.

Una técnica para hacer puentes… es un tubo de

conexión o palabras tubo, las cuales al entrar en estado

de ebullición entran a un estado de resonancia, la cual es

un propulsor de viajes.

Este viaje de aprendizaje, con sentido, con conciencia me

trajo de regreso con la retroalimentación del curso 8, con la pre-

gunta ¿Conoces la película La Mariposa Azul? Es mucho

más que un sueño, y yo digo que mas que ser sueño, se convir-

tió en una ensoñación, que don Juan el Chaman, que menciona

Carlos Castañeda dice ensoñar es percibir más de lo que cree-

mos posible.

Creo de crear y de creer, que la película aun no termina,

que sigo atrapado en la noche oscura llena de luciérnagas giran-

do alrededor mío, buscando una respuesta, sigo corriendo tras

el sueño de atrapar esa mariposa azul. Y surge la pregunta que

alimenta mi deseo de aprender.

¿Te estás transformando? o ¿Se trata de una transforma-

ción soñada? Esa una linda pregunta, y digo linda porque me

baña con un Hado —energía— que me impulsa a continuar los

puentes para construir mis sueños.

Así es que ahora soplemos a nuestra cabeza de león, vea-

mos a donde nos llevan esas semillas con el impulso, deseo,

energía y transformación. Corramos tras una de ella para disfru-

tar el viaje y explorar.

La palabra mágica Fe

En este caminar, donde la conciencia me atrapo en su vórtice

para saber mas acerca de ella, llego a mi un libro llamado inteli-

gencia espiritual de Dan Millman que por el alea, sincronici-

dad, sincrodestino o resonancia tuve que leer, degustar, oler,

escuchar, sentir, pensar y soñar. Inconcebible

El libro apareció cuando vi la película El camino del Gue-

rrero del mismo autor, donde narraba la vida de un gimnasta, el

mismo, el cual sufrió un accidente, el cual le deshizo su pierna

en cuarenta pedazos. Los doctores decían que era imposible que

112




se restableciera y mucho menos que pudiera competir. Algo

milagroso pasa para que él después de un año estuviera compi-

tiendo y dándole un giro a su vida.

Narra la forma en que el se restablece a través de un

hecho milagroso que pasa en su vida, que le hacen cobrar con-

ciencia del ahora, como la forma de darse cuenta, de su exis-

tencia y de sus capacidades para salir adelante. En esa dirección

consciente de aprendizaje apareció la palabra felicidad, la cual

nos baña de ese Hado, energético que todos buscamos, ya sea

en nuestra vida cotidiana como en la espiritual, como parte de

nuestro ser siendo.

Felicidad. Fe

Fe, es esperanza, esperar, vivir, milagro, sueño, pasión, amor,

vida, sentir, pensar, oler, degustar…

La Fe es nuestra conexión directa a la sabiduría Univer-

sal, recordándonos que sabemos más de lo que hemos oído, leí-

do o estudiado – que sólo tenemos que mirar, escuchar, y con-

fiar en el Amor y la sabiduría del Espíritu Universal que opera

a través de todos nosotros. La Fe le pide al Alma que vaya más

lejos de lo que puede ver. William Clarke

Felicidad. Incertidumbre

Libertar, emoción, pasión, sueño, magia, asombro, creatividad,

esperanza...fe

Fe significa vivir con incertidumbre, viajero, -sentir tu

camino a través de la vida, dejando que tu corazón te guíe como

una linterna en la oscuridad. No hay seguridad absoluta excepto

en la fe absoluta. Esto no significa que todas las circunstancias

irán a favor de ti o que la justicia Divina siempre opere para

herir o curarte. Todo tipo de eventos, maravillosos y terribles,

pueden suceder en este mundo. Nuestra pequeña mente no

siempre puede ver el marco completo de los acontecimientos o

saber lo que es para nuestro bien mayor. Por tanto, a pesar de la

inseguridad y confusión de la vida, cuando puedas aprender a

vivir con fe, como una flor, confiando en el Espíritu Santo tra-

bajando acorde a un deseo más allá del alcance de nuestra men-

te, verás el Espíritu Santo operando en todas partes, en cada

uno y en todos. (Pág. 15)

Felicidad. Confianza

Cielo, amor, libertad, armonía, sincronicidad, pensamiento,

magia, nubes, blancas, azules, verdes...confianza

"La confianza en uno mismo," ella me ofreció, "se desa-


113



rrolla naturalmente, a partir de tu propia experiencia; aprendes

a desarrollar, equilibrar e integrar la confianza en tus instintos

corporales, las intuiciones de tu corazón, y las habilidades de tu

mente, accediendo de esta manera a tu propia Inteligencia Espi-

ritual." (Pág. 15)

Felicidad. Proceso de aprender

Padre, madre, hijo, hija, amor, pasión, ternura, placer, emo-

ción, magia, cuidado, vida, hogar, esperanza, fe

"Sí, pero mientras permanecía estirada en el suelo, en-

contré una piedra maravillosa, que me la hubiera perdido si no

me hubiera caído. Por tanto, ya ves, tener fe no significa ser

infalible y que todas las cosas vayan a favor tuyo. La fe incluye

la voluntad de ampliar tu abanico, cometer errores, y aprender

de ellos –en otras palabras, confiar en el proceso de los aconte-

cimientos, en el proceso de tu vida. Cuánto más confíes de esta

manera en tu Inteligencia Espiritual, más trabajarás junto a Ella

directamente como una fuerza viviente de tu vida." (Pág. 16)

Entonces, ¿que es la felicidad? felicidad es alegría, Por-

que siendo alegre puedes vivir con esperanza. Es esperanza por

que solo esa actitud de apertura, flexibilidad, autoconstrucción,

de esperar... tu fe se puede ampliar, esperando... la vida, el

amor, la pasión, la ternura, la emoción, la esperanza y la fe.

Ahora lo difícil será definir Felicidad, por que para mi es

fe y esperanza ¿para ustedes ti que es? A lo mejor, se da uno

cuenta que felicidad es recursiva, dialógica, incierta, caótica...

dice Payan, "un sistema de alta complejidad los cuales son

sinónimos de vitalidad, de vida cambiante en todo momento.

Para acercarse a ellos se debe tratar de comprenderlos, de pen-

sarlos, de interactuar con ellos, de volverse objeto y sujeto al

mismo tiempo, recordando que el observador es a su vez otro

sistema de alta complejidad" (Pág. 71)

Una ves al despedirme de mi hija en la escuela le dije -

hija, cuídate mucho y pórtate bien -una maestra me dijo, "¿ya le

dijiste que es portarse bien?", ops.. a esa pregunta no tuve res-

puesta, y la mastico todos los días al despedirme de ella, ya

que cambia, muta en cada momento... ¿cuestión de valores, de

insigh, de conciencia?

La recuperación

Estamos en un punto en la historia humana que necesitamos

redescubrir algunas verdades importantes que de alguna

manera hemos olvidado. De hecho podría ser nuestra última

oportunidad. Por lo que debemos de vivir en sintonía con el

ritmo de la vida y el flujo de la naturaleza, dejando hermosa

a la tierra para futuras generaciones.

Masaru Emoto, La vida secreta del agua

Se debe de dar una recuperación de la conciencia, una

revaloración de la naturaleza y de lo humano, y esto se dará

cuando se logre trascender e implicarse en ese movimiento

energético que nos lleve a identificarnos dentro de este espacio

vivencial con la naturaleza, dentro de ella y no fuera de ella,

dándole sentido a esa interacción que nos lleve a rescatarnos.

Para vivir en armonía con los demás seres vivos del pla-

neta deberíamos aprender a pensar como piensa la natu-

raleza. Bateson, 1999

114


La recuperación


La recuperación del equilibrio dinámico (la energía), es

fundamental para poder direccionar nuestros esfuerzos, la recu-

peración del proceso de aprendizaje (la conciencia), a través de

una reconciliación con el cosmos, un cambio de percepción y

mentalidad del ser, sentir, crear y vivir.

El ser humano vive éticamente cuando renuncia a estar

sobre los otros para esta junto con los otros. Cuando se

hace capaz de entender las exigencias del equilibrio

ecológico, de los seres humanos con los otros seres

humanos y cuando, en nombre del equilibrio, impone

límites a sus deseos, el respeto al otro, con la aceptación

de las diferencias, en la solidaridad y potenciación de la

singularidad, conduce a recorrer el camino de profunda

reflexión y compromiso. Boff.

El modo de mirar las cosas llamado ecología de la mente es

tomar un fragmento del proceso mental y sus relaciones con la

ecología mental más amplia en que reside y compararlo, en com-

pañía de sus relaciones ecológicas, con ecología de procesos men-

tales de una región diferente de la mente...es comparar el pensa-

miento con evolución y epigénesis de ambos. Bateson.

Tantos siglos, tantos mundos, tanto espa-

cio y coincidir.

Después de este viaje al llegar a casa mi hijo Quique, me dice,

- ¡Papá, volviste!! y me dice y ¿por que Volviste!!

No tuve respuesta, y solo le di un gran abrazo y un beso,

y miro a mis adentros y mi respuesta fue volví, porque vengo

reencantado de volver, de ver, mirar, tocar, olfatear, degustar,

soñar, de crear... así es volví el cual es un ir y venir... la vida es

eso, el volver a vivir, esa para mí es la respuesta, simplicidad y

la conciencia de ser niño.

En donde el proceso de autoorganización cobra una

energía impresionante, ya que la conciencia es la fuerza que

mueve al ser internamente y si el no es capaz de reconocerse en

el proceso de vida, y aprehenderse de la magia de vivir, no

podrá transformarse, es decir no habrá autoorganización que le

permita esa metamorfosis, ahora entiendo que para ser sustenta-

ble debes ser ético contigo mismo, y no basta con cerrar la llave

del agua y separar la basura.

El hombre ―podrá ser montaña, mar, aire, camino, árbol,

animal‖ cuando sea conciente de ser un ser planetario.

Ahora que regreso nuevamente a mi punto recursivo, re-

novado de espíritu, y retroalimentado con la magia de vivir, de

ser un ser planetario.

La autoorganización en la virtualidad


115

Tantos siglos, tantos mundos, tanto espacio y coincidir.


La autoorganización en la virtualidad es la creación y

cocreación de vínculos que nos llevan a la vivir la vida

real en la virtualidad, es el vacío relacional de encuentro

donde convergen la magia, la pasión y los sueños, es el

enredarse en el coaprendizaje, es ser, sentir y vivir la ne-

cesidad de relacionarse por el simple placer de vivir.

…..

Imagínate que puedes viajar en el tiempo por un momen-

to, y que puedes transgredir el espacio-tiempo, y que pue-

des entrar a micromundos o espacios de encuentro con

alguna situación, con la condición de ―No tocar‖, como

consigna. El no tocar se convierte en la creación de limi-

tes a nuestro aprendizaje dentro de este vacío relacional

de encuentro, por que hay un riesgo, y ese riesgo es, que

si se te ocurre tocar algo en ese viaje, a partir de ese mo-

mento, estarás siendo gestor de otro micromundo contigo

como cocreador de ese espacio relacional, que ha sido

tocado por tu ser, tu magia, tu pasión y tu conciencia,

tomando sentido de aprendizaje reciproco, a partir de

ahora estas involucrado con tu aprendizaje para la vida.

Emergencia: transformar al ser humano

En esta enacción, aparece el libro En busca del ser, de Christi-

na y Stanislav Grof donde ellos vuelcan sus años de experiencia

personal y profesional sobre estos estados de transformación en

el ser humano. Y exploran surgimiento de la espiritualidad con

todas sus complicaciones y vicisitudes, la cuál llaman emergen-

cia espiritual, ellos mencionan que los conflictos internos aso-

ciados a una emergencia espiritual no siempre son síntomas de

una enfermedad, sino que pueden ser la manifestación de un

movimiento interior que es curativo e impulsa a la evolución.

Ellos mencionan, si se comprende y trata a las emergen-

cias espirituales como etapas difíciles de un proceso natural de

desarrollo, éstas pueden resultar curativas tanto emocionales

como psicosomáticamente, para producir cambios en la perso-

nalidad y convertirse en la solución para muchos problemas de

la vida. En la actualidad, mucha gente está atravesando profun-

das transformaciones personales relacionadas con la apertura

espiritual.

En circunstancias favorables, este proceso resulta en una

curación a nivel emocional, un cambio radical en la escala de

valores, y una profunda percepción de la dimensión mística de

la existencia. Estos cambios para algunos son graduales y rela-

tivamente suaves, para otros pueden ser tan dramáticos y velo-

ces que interfieran con su efectivo funcionamiento diario. Estas

transformaciones para muchos profesionales de la salud con

una visión tradicional no reconocen el potencial positivo de es-

tas crisis: las ven como manifestaciones de una enfermedad

mental y las tratan con medicación supresiva.

Cristina y Stanislav Grof, nos dicen que el desarrollo es-

piritual es una capacidad de evolución innata en todo ser huma-

no. Es un movimiento hacia la unidad; el descubrimiento de

nuestro verdadero potencial. Tan común y natural corno el na-

cimiento, el crecimiento físico y la muerte, es una parte integral

de nuestra existencia. Así mismo ellos visualizan el surgimiento

de la espiritualidad y crisis mundial, donde la relevancia que

tienen las emergencias espirituales para la actual situación

mundial es de gran importancia.

116


Emergencia: transformar al ser humano


El efecto de decir una palabra mágica

Decir una palabra mágica, es desprenderme de ti mismo e impreg-

nar con tu esencia estas palabras, con la intención de que te sientas

en ellas, pienses, sueñes, y tu presencia se manifieste. Donde el

efecto de decir una palabra mágica sea ese de estar presente en tus

pensamientos, vibrando en la misma frecuencia de las palabras.

¿Cuál es el secreto que guardan las palabras, y que efecto tienen?

Cuando nuestra conciencia transita de una emoción hacia

nuestro ser, la energía y la vibración que manifiesta se transforma

en una palabra, en una serie de signos que al darle vida con nuestro

lenguaje ocurre algo extraordinario, su fuerza es tan grande que es

capaz de mover montañas y crear mundos.

Las palabras guardan muchos secretos, entre ellos la reso-

nancia de nuestra vida y la frecuencia de nuestras emociones, su

lectura transforma nuestra mirada y su canto encanta nuestras al-

mas.

El contacto con esas palabras hacen que se cree el mundo

encerrado en ellas, al descifrar su contenido nuestro interior crea

un espacio donde todo es posible, a través de los enlaces con su

esencia e interacción con otras presencias, dan origen a nuestros

sueños, esos que recrean nuestra realidad.

¿Qué energía tienen las palabras y que vibración que el sim-

ple hecho de entrar en contacto con ellas el ser humano es capaz de

sanarse o enfermarse?

¿Qué misterio es el que poseen ya que estructuran un len-

guaje, un idioma, una sociedad, una cultura, una humanidad, un

paradigma?

¿Qué llave es la que puede abrir la magia de su esencia?

Si descubres el efecto de decir estas palabras, entonces es-

tarás en el mundo de los sueños, despertando a tu mago interno de

este letargo, abriendo tus ojos a la vida que viene de la vibración

de tu corazón y del efecto de decir una palabra mágica.

La forma de acceder al sueño es a través de la magia de las

palabras, donde se transforma nuestra realidad y se entra en la vir-

tualidad, donde tu vida cobra sentido.

Dialogando

Mi padre me enseño que las palabras y las letras guar-

dan todos los secretos del universo, que en sus formas y

sonidos podía encontrar todo y ver mas allá de mi, hacia

algo especial.

Deseo. Intuición. Sensación. Historia. Felicidad. Emo-

ción. Pensamiento. Pasión. Vida. Calor. Verdad. Miedo.

Emoción. Tristeza. Alegría. Felicidad. Corazón. Cons-

trucción. Alma. Conocer. Amar. Recordar. Pasión. Emo-

ción. Pasión. Caminar. Recordar. Amar. Correr. Abrazar.

Pensar. Sentir. Llorar. …

¿Qué es una palabra mágica?

¿Qué hechizo encierran en su existencia?

¿Quién le da vida, el que la escribe, el que la lee, el que la pro-

nuncia, el que la escucha, el que la toca, el que la huele, el que


117



la paladea, o el que sin escucharla lo baña con su intención es-

piritual de salud a través de una oración?

En esta búsqueda de la magia: el acto que hace posible

despertar al mago interior a la vida, buscaremos en la cotidiani-

dad de la vida, esa magia que da existencia a las palabras mági-

cas. Donde los eventos del mundo por distantes que sean, guar-

dan relaciones maravillosas que los hacen parte de la unidad

universal. A esto lo llaman "efecto mariposa":

la luna se roba al mar, un rumor hace caer la bolsa de

valores, un electrón se comunica con otro electrón lejano

en un "enmarañamiento cuántico" perfecto, el recuerdo

de un día en el parque con el abuelo forja nuestra adul-

tez, un domingo de juego con una amante nos convierte

en escritores; en fin, una palabra puede cambiar el mun-

do.

Donde el potencial para generar las mayores trans-

formaciones posibles está en el detalle y no siempre so-

metido a las leyes de la obediencia. Prologo del libro

"Lánzate al Vació", de Julio César Payán de la Roche.

De la resonancia del libro, cual abejas salen disparadas

estas palabras para dar origen a una reflexión...observa, lee,

siente, piensa, lee, mira, huele, palpa, reflexiona y escribe.

Lánzate al vació. Camino. Mente. Ampliada. Limitada. Utopía.

Alternativo. Libertad. Adaptación. Error. Común. Perspectiva.

Emoción. Biodiversidad. Paciente. Memoria. Solidaridad. Con-

ciencia. Abismo. Humanidad. Transformar. Formativo. Amoro-

sidad. Eclosión. Complicidad. Conciencia Universal. Observa-

do. Onda. Partícula. Recreación. Sabiduría. Indagación. Eco-

nomía. Desapego. Prejuicios. Endocasualidad. Reencantar.

Adicción. Ignorancia. Conciencia Colectiva. Solidaridad. Impo-

sibilidad. Conocimiento. Mono cien. Proceso. Vital. Transfor-

maciones. Seres Vitales. Enmarañamiento. Enritmarse. Efecto

Mariposa. Honestidad. Borrosidad. Vació. Conciencia.

De las leyes de la lengua y la lengua de las leyes, Yadira

Calvo, compendio de lecturas, Genero, teoría feminista y nues-

tros paradigmas, nos dice hablando del lenguaje del genero.

Las palabras se engarzan como cerezas en nuestra mente

y prefiguran muchas de nuestras ideas en el fondo como

decía Heidegger, no somos nosotros quienes hablamos a

través del lenguaje si no el lenguaje el que habla a través

de nosotros. (A. García Meseguer).

Es el lenguaje, hablando por nuestro medio; diciendo mu-

chas veces lo que no queremos o de la forma en que no desea-

mos; limitándonos la manera de percibir el mundo y percibirnos

a nosotros mismos; expresando el pensar y el sentir de una cul-

tura que fue amasando palabras y construyendo la sintaxis con

criterios excluyentes que dejaron por fuera al género al que per-

tenezco.

Nuestra relación con el mundo esta mediatizada por el len-

guaje, que las palabras son puntos de confluencia que nos permiten

adoptar una actitud frente a las cosas y que la gramática de cada

lengua, como señala Lee Whorf, no es el instrumento para expresar

ideas, si no que les da forma. Ahora bien si nuestra cultura es reco-

nocidamente sexista, si para ella las mujeres y lo femenino valen

menos, significa nada y califican peor, esta visión del mundo se

refleja y perpetúa a través del lenguaje.

118




La cultura, fue creando prohibiciones a puños para las

mujeres sobre el uso del idioma, devaluando su habla y descali-

ficando su palabra, denigrándola como cháchara vacua e insen-

sata…. esta imposición de normas, mandatos y órdenes trans-

mitida y perpetuada desde los griegos y latinos hasta nuestros

días. Y esta orden tiene que ver con el uso de la palabra, con la

aceptación de la cultura.

Esto significa colocar a las mujeres en posición de des-

ventaja en el idioma y por lo tanto en el grupo social. Se trata

de una soga de doble nudo que tiene que ver con el modo en

que la lengua se posesiona de nosotras y con la escasa autoridad

que se nos concede, no ya modificarla, sino siquiera hablarla.

Sueño. Deseo. Querer. Estar. Tener. Sentidos. Intuición. Pasión.

Magía. Pensamiento. Sueño. Ensoñar. Disoñar. Gen. Ero. Co-

munidad. Despertar. Hombre. Mujer. Ser. Vivir. Recursividad.

Sueño. Miedo. Confianza. Libertad. Soñar. Anhelo. Transfor-

mación. Unidad. Armonia. Sueño. Conciencia. Pensamiento.

Sueño. Implicación. Equidad. Genero. Mujer. Hombre. Sueño.

Lenguaje. Autoorganización. Proceso. Aprendizaje. Autocons-

trucción. Sueño. Hado. Persona. Compromiso. Sueño. Amor.

Vida. Valores. Transformación. Hado. Vibración. Onda. Fre-

cuencia. Olas. Ver. Sentir. Sueño. Resonancia. Inhalar. Exhalar.

Sincronización. Influencia sutil. Interacción. Similitud. Flujo.

Circulación. Sueño.

Ecología. Pedagogía. Ecopedagogía. Aprendizaje. Conciencia.

Proceso. Valores. Naturaleza. Búsqueda. Conciencia. Reconci-

liación. Tierra. Árbol. Animales. Cosmos. Espiritualidad.

Energía. Alma. Conciencia. Cambio. Recuperación. Agua. Tie-

rra. Humanidad. Energía. Mística. Conciencia. Equilibrio. Ar-

monía. Percepción. Sustentabilidad. Compromiso. Valores. Sig-

nificados. Ser. Comunidad. Conciencia. Ecopensar. Biopensar.

Pensamiento. Holista. Totalidad. Conciencia. Pasión. Magia.

Sueño. Energía. Conciencia. Vida. Niño. Fluidez. Esperanza.

Sencillez. Sorpresa. Esperanza. Vivir. Conciencia. Mirada.

Horizonte. Sentido. Sueño. Ilusión. Coincidencias. Conciencia.

Proceso. Cotidianidad. Pedagogía. Ecología. Ambiente. Natura-

leza. Mariposa. Sueño. Niño. Conciencia. Autoorganización.

Esquemas mentales. Transformación. Metamorfosis. Concien-

cia. Ecopedagogía.


119



Vacío, relacional, convivencia, tiempo, espacio, autoorganiza-

ción, vida, virtual, vacío, paradigma, creación, cocreación, es-

pacio, real, virtualidad, relación, vacío, ser, enredarse, coapren-

dizaje, placer, vivir, vacío, encuentro, enlace, conexión, link.,

pasión, magia, conciencia, esencia, energía, vacío, relación,

araña, molino, agua, real, dialogo, ser, virtual, real, vacío, pla-

nes, pasado, día, red, posibilidad, virtualidad, relacionalidad,

encuentro, vacío, digital, ecopedagogía, intuición, aprendizaje,

incertidumbre, sentidos, emoción, tecnología, cocreación,

búsqueda, excitación, vacío, ideas, creatividad, vida, energía,

involucramiento, sentir.pensar, ética, hay/arte, expresión, sue-

ños, magia, conciencia, vacío, momento, instante, vacío, corpo-

reidad, frecuencia, ingenio, creatividad, vida, emoción, encuen-

tro, relación, ser, virtual, real, tecnología, educación, vacío, bo-

rrosidad, posibilidad, creación, relacionalidad, autoorganiza-

ción.

Salud. Espíritu. Vida. Búsqueda. Sagrado. Transformación. In-

terior. Ser. Emergencia. Espiritual. Intuición. Sentidos. Pasión.

Magia. Sueños. Conciencia. Punto de encaje. Energía. Tonal.

Náhuatl. Autoorganización. Conexión. Vida. Totalidad. Salud.

Vida. Sensaciones. Pertenencia. Conexión. Cosmos. Esencia.

Profunda. Contraespacio. Polaridad. Invariancia. Infinito. Inter-

ior. Totalidad. Vida. Salud. Espíritu. Vacío. Relacional. Curio-

sidad. Punto germinal. Relación, salud. Intención, vibración.

Frecuencia. Magia. Palabras. Vida. Salud. Dialogo. Búsqueda.

Encaje. Puente. Adecuado. Espiritual. Magia. Vida. Salud. So-

nidos. Vibración. Universo. Música. Coherencia. Interior. Sin-

fonías. Esperanza. Vida. Salud. Sentimiento. Pensamiento. Sa-

nar. Magia. Vida. Salud. Camino. Mago. Emergencia. Delirio.

Espiritual. Shaktipat, destrabar. Emociones, respiración. Genio.

Éxtasis. Muerte. Vida. Totalidad. Contraespacio. Ying. Yang.

Sagrado. Vida. Salud. Educación. Transformación. Conexión.

Totalidad. Despertar. Tejido. Vida. Salud. Espíritu. Vida.

Búsqueda. Ser. Interior. Contraespacio. Vida.

120




Palabras mágicas o

la magia de las palabras

En este punto germinal surge el dialogo constante con mi

búsqueda de la palabra, la palabra de encaje, la palabra puente,

la palabra adecuada, la palabra sagrada, la palabra espiritual, la

palabra mágica. Esa palabra que me lleve a descubrir el color,

el sabor, la forma, el sonido, la textura y la emoción del ser en

su lenguaje. En esta búsqueda me encontré con el maestro Jorge

Carvajal en el contraespacio del libro, un arte de curar, en su

pagina 105, en ese lugar entablo la siguiente conversación con

él, acerca de ―La magia de la palabra‖.

Hola Jorge, puedo hacer una pregunta

Claro, Enrique dime

—¿Jorge que es la magia de las palabras?

—Mira, la magia de las palabras, en voz del hombre

siempre hay algo más que palabras y sonidos.

— haber, explícame por favor

— Si, mira, hay una energía portada en ellas, existe un

mensaje detrás del contenido aparente, algo que integra el

pensamiento del pensador y que nos permite escuchar

mucho más que palabras.

— Quieres decir que hay una energía interna en las pala-

bras, las cuales se transforman cuando el que las emite, le

inserta su esencia, su magia y su conciencia, es decir su

ser en ellas

— Si es algo parecido a una vibración, como dice Emoto

con las palabras adecuadas, las cuales encienden y apagan

la vibración de todo lo que hay en el universo, alinean

nuestras ondas, hacen vibrar el pensamiento y que

además se pueden ver en formación de cristales de agua.

— Jorge, eso suena genial, pero dices que eso nos permite

escuchar algo más que palabras.

— Correcto Enrique, la palabra se convierte en música

que nos habla del estado de animo, de la coherencia inter-

ior, de dolores ocultos; la palabra que resuena en nuestro

interior despierta sinfonías dormidas, temores, solidarida-

des o esperanzas.

— Eso me recuerda al orden implicado de Bohm y a los

místicos de Ken Wilber, Alan Watts y al Dalai Lama con

la conciencia del ser.

—Pues algo hay de eso Enrique , pero no te distraigas por

que si te preocupa nombrar las cosas, la magia desaparece

y comienza el significado a rotular lo mágico.

—Muy bien, ahora pondré mi atención en lo que me di-

gas y tratare de sentir la energía y vibración de tus pala-

bras.

— Mira, al hablar, vibran las cuerdas de nuestra concien-

cia; al escuchar, oímos como el sonido revela el instru-

mento de nuestro cuerpo. Pensamiento y sentimiento

plasmado en sonidos, la palabra es una melodía terapéuti-

ca por excelencia.

— es decir que el hablar y escuchar es esencial para des-

cubrir la conciencia, y ellas son el instrumento para en-

viar nuestro sentimiento pensamiento en ellas.

—¿Sentimiento pensamiento?, Enrique no lo había pensa-

do pero ellos son capaces de acompañar, perdonar, conso-


121

Palabras mágicas o la magia de las palabras


lar. Cuando brota del corazón del hombre, la palabra es

un canto a la vida, es la encarnación de una fuerza sana-

dora.

— Lo que quieres decir Jorge, ¿es que una palabra, puede

sanar al ser humano?, ahora recuerdo que en el rito de la

eucaristía en la misa católica cuando el sacerdote dice,

―bienvenidos todos a la mesa del señor, y las personas

responden, señor yo no soy digno de que tu vengas a mi,

pero una palabra tuya basta para sanar mi alma‖.

— Imagínate enrique, si la vibración del sonido en una

palabra guardara relación con la vibración de aquello que

pretende nombrar, las palabras serian todas mágicas.

—Ahora que lo mencionas, es algo que yo he estado bus-

cando precisamente, que es lo que hace mágicas a las pa-

labras, y ahora siento esa vibración y esa frecuencia de lo

que dices.

—Las palabras mágicas Enrique, deben ser usadas como

si fueran tus mejores amigas. Por ello la palabra justa,

aquélla que se dice en el momento y en el lugar adecuado,

es un arte; es la circunstancia especial de la terapeuta, la

palabra puede ser sagrada.

— ¿Sagrada, a que te refieres con eso Jorge?.

— Te explico, una silaba puede cambiar el rumbo de la

vida. Un terapeuta busca el eco de la voz de su paciente

en su propio corazón, y sus propias palabras no son más

que palabras del que sufre revestidas con armónicas de

amor.

— Entonces el Terapeuta que le habla a su paciente puede

sanarlo con sus palabras, cuando el las pronuncia en sin-

cronicidad en su malestar y las seduce con su Hado de

amor.

—A que te refieres Enrique con seducir con su Hado de

amor.

—Si Jorge, es como cuando una madre reconforta a su

hijo, es decir que entra en una conexión con su ser a

través de su energía amorosa, y las palabras son cubiertas

con ese amor de madre hacia su hijo. La seducción de las

palabras es la armonía de su voz.

— Si parece ser que esa es la intención, ya que las pala-

bras que la madre menciona a su hijo al reconfórtalo, re-

sultan sagradas en la voz de su madre. Por ejemplo, el

médico no sabe cuanto representa en la vida del paciente

y su familia su sabia y fría exposición. Muchas veces los

pacientes condenados a muerte sobreviven largamente a

sus médicos. Para otros, la vida se convierte en un morir-

se lentamente por obra y gracia de un diagnostico inopor-

tuno.

— Lo que dices es cierto en muchos casos, ya que he sa-

bido de cómo es que las personas dependen mucho de

esas sabias palabras para enfrentar sus enfermedades y

como hacerles frente a ellas, ellos tienen en sus manos la

forma de transformar sus vidas.

— Así es enrique, en este sentido un diagnostico no es un

veredicto de salvación o condenación, pero el lenguaje

cotidiano frecuentemente lo ponemos en tales términos.

No se trata de decir mentiras o verdades piadosas. Se trata

de saber, en forma relativa, donde estamos para continuar

nuestro camino. Un hombre no es un número o un por-

centaje; es la combinación de infinitas posibilidades en la

que aún el milagro es probable.

122




— Jorge, es muy clara tu explicación, sin embargo me

podrías decir en donde queda lo espiritual en esta relación

entre el médico y el paciente.

— La posibilidad de un milagro depende de la armonía

vibratoria entre el paciente y el médico, donde el médico

tiene las palabras mágicas para que suceda un posible mi-

lagro. Las palabras tienen su propia música. Podemos de-

cir algo de mil modos, o no decirlo de diez mil maneras.

Pero siempre, en uno u otro caso, habrá una manera amo-

rosa de hacerlo. Esa podría ser la conexión espiritual, la

manera amorosa de tratar al paciente.

—Entonces, ¿el médico es un ser místico que lleva a los

pacientes a un contraespacio de la enfermedad?

— Los pacientes no nos piden que les mintamos. Simple-

mente que los acompañemos, porque algo en su concien-

cia siempre intuye la verdad.

La palabra no puede ser el cuchillo que corte los

hilos de la esperanza o que niegue el derecho íntimo a

creer o buscar recursos suplementarios. Puede ser una

forma de ser místico, no lo se, pero espiritualmente si es-

tas conectado por alguna red misteriosa con el otro ser

humano.

—¿De que manera acompañas a los pacientes?

— A los pacientes se les acompaña con palabras que pue-

den ser un ¡animo!, una oración, o un dejar que la conver-

sación intrascendente lleve implícito el mensaje que no se

puede decir brutalmente.

— Que complicado se hace tratar con pacientes y en su

situación inestable emocional y físicamente.

— Cuando un médico le dice a un paciente que va a ter-

minar por su artritis en una silla de ruedas, es porque no

sabe cuantas peligrosas toxinas siembran en el cuerpo sus

palabras. No hay que ofrecer tampoco el paraíso. Solo

fluir y permitir que también el tiempo, ese viejo aliado de

los sabios, nos vaya dando su veredicto cambiante día a

día.

— Sabes Jorge, ahora entiendo el poder vibratorio de una

palabra adecuada y mágica dicha en el momento apropia-

do.

— Así es Enrique, ese es el verdadero significado de las

palabras mágicas, despertar la magia interna del ser

humano para que desde el interior su percepción y estruc-

turas mentales entren en sintonía y sincronía con su sana-

ción.

— Jorge muchas gracias por tus palabras y por acompa-

ñarnos en este aprendizaje de vida y salud.

— El gusto fue mío, el poder expresar la magia de trans-

formar al ser humano mediante la magia de las palabras.

En este constraespacio, emerge el siguiente punto germi-

nal, el cual origina una modificación en mi sentir pensar,

y ahora las palabras vibran con su propia energía e im-

pregnan el ambiente de su olor, color, forma, sonido y

textura además de su sentimiento pensamiento es decir su

espiritualidad, su encaje, su sincronicidad con la vida,

produciendo en mi ser una transformación, que narro a

continuación.


123



La virtualidad del ser interior,

¿creas o crees en la magia?

Una vez se acercaron un niño, un adulto y un viejo a un Mago

a preguntarle, ¿Qué era la magia?

El mago observo al niño, al adulto y al viejo, y tomó una naran-

ja que llevaba en su bolsa, y le pregunto al niño.

─ ¿niño, que ves en esta naranja?

─ El niño respondió, color naranja y redonda

Entonces el Mago, le hizo la misma pregunta al adulto

─ ¿adulto, que observas en esta naranja?

─ El adulto respondió, una naranja solamente

El mago miro al viejo que los acompañaba y le hizo la misma

pregunta

─ ¿viejo, que ves en la naranja?

─ El Viejo respondió, veo vida, armonía y dulzura

El Mago entonces, tomo la naranja en sus manos y les pidió al

niño, al adulto y al viejo que le soplarán a la naranja, ellos se

miraron y soplaron a esa fruta. Entonces la fruta cayó en el sue-

lo, y desapareció la fruta y solo quedaron 3 semillas.

El Mago, las tomó, y le dio una a cada uno, y les preguntó:

─ ¿niño, que ves en esta semilla?

─ el niño, sorprendido por lo que acaba de hacer el Ma-

go, dijo, Magia.

¿adulto, que ves en la semilla?

— El adulto sin sorpresa alguna, dijo umm una semilla

¿viejo, que ves en la semilla?

— El viejo, con los ojos iluminados como si el tiempo se

hubiera detenido, solo respondió, veo, amor, vida y crea-

ción.

El Mago ante las respuestas de esas tres personas, tomó las se-

millas y les dijo, cuando vinieron me preguntaron ¿Qué era la

magia?, ahora sus respuestas me dicen que es magia para uste-

des, pero la magia es aquella que eres capaz de crear creyendo.

Le dijo al niño, — niño, toma esta semilla y siémbrala, riégala

todos los días y en cada momento, es la semilla de la magia de

la vida, no la extravíes,— el niño sonriente, se retiró cantando y

silbando.

Le dijo al adulto, — adulto, toma esta semilla y siémbrala, rié-

gala todos los días y en cada momento, es la semilla que te dará

vida, recupera la magia de la vida, busca tus sueños, tus deseos

y mira más allá de la semilla.— El adulto, tomo la semilla, dio

las gracias al mago, no sin antes preguntarle.

— ¿Cuál magia tengo que recuperar?

El Mago respondió. — Tú vive cada instante como ese niño

que corre, juega, canta y baila, sin preguntar el porqué de las

cosas, si no el encanto de ellas.— El adulto se despidió pensati-

vo y trato de cantar y chiflar mientras caminaba.

124


La virtualidad del ser interior, ¿creas o crees en la magia?


Le dijo al viejo, — toma esta semilla y siémbrala, riégala todos

los días y en cada momento, esta semilla guardará tus sueños,

tus anhelos, tus risas, tus pensamientos, tu experiencia y tu vi-

da. Comparte tu magia de la vida, con tu hijo que le hace mu-

cha falta y juega con tu nieto, que él es el Mago.

El Viejo miro al mago a los ojos y en el se vio a su mis-

mo y dijo, he envejecido y me doy cuenta que la vida es solo es

este instante. El Mago se despidió del viejo, cruzaron un abrazo

y solo dijo.

Tú eres mi reflejo. ¿tu crees o creas en la magia?

¿Qué es la magia?

La magia no necesita explicarse, sólo necesita creerse,

sentirse, sensarte y vivirse. No se puede explicar algo en

lo que no se cree. Para creer debes de crear. Para crear

debes de desaprender lo que conoces y re aprender lo

que vives. Para re aprender lo que vives debes entender

cuál es el instante de creación. Para entender cuál es el

instante de creación debes de conectarte con tu ser inter-

no y buscar la ingenuidad, (in-genio-unidad), que es la

entrada a ese mundo mágico de encuentro. Donde ese

instante te lleve a la unidad del genio, el mundo del ma-

go, donde la magia cobra vida, y ese instante es este ins-

tante. Estas adentro y tú eres la magia.

Recuperar esa magia interna que todos llevamos dentro, y

que esta oculta dentro de ti. La magia eres tú, soy yo y somos

todos. Los creadores de este mundo mágico son la sintonía y

sincronía de las vibraciones, emociones, sentimientos, pensa-

mientos y vida.

La magia se manifiesta a través de la emoción y alegría,

es una respuesta de su corazón.

La magia es espontanea, sincera, sin prejuicios, no lineal,

ilógica y emotiva. Para reconocerla hay que estar atento a lo

maravilloso de la vida. Cuantas veces tratamos de encontrarle y

dar una explicación a las cosas, siendo que las cosas tienen una

respuesta que no es la nuestra.


125



¿Por qué son tan escurridizas las pequeñas cosas de la vida?

La magia de aprender en cada momento, es estar alerta

con todos los sentidos para mirar, oler, degustar, escuchar y

palpar ese momento. Vivir la magia es encontrar un matiz, una

textura, un sonido, una frecuencia, una resonancia, expresión, la

recursividad que solo viviendo enmagiado se puede lograr. La

resonancia interna que solo da la magia de vivir, de sentir, de

transformarse día a día.

Cuando aprendemos a vivir desde el alma, ocurren va-

rias cosas. Tomamos conciencia, de los exquisitos patro-

nes y ritmos sincrónicos que gobiernan la vida... El temor

y la ansiedad desaparecen cuando observamos el mundo

conforme se desarrolla. Identificamos la red de coinci-

dencias que nos rodea y nos damos cuenta de que hasta

los sucesos más pequeños tienen un significado. Descu-

brimos que al prestar atención e intención a estas coinci-

dencias, podemos conseguir resultados específicos. Esta-

blecemos contacto con todos y con todo lo que existe en

el Universo y reconocemos el espíritu que nos une a

ellos. Revelando la maravilla oculta en nuestro interior y

nos deleitamos en nuestra gloria recién descubierta.

Conscientes, convertimos nuestra vida en la expresión

infinitamente creativa para la que fue creada, y con ello

vivimos nuestros sueños más profundos y nos acercamos

a la iluminación. Este es el milagro del sincrodestino.

(Chopra, 2006:9)

Ahora se amplifica su significado a través de la continui-

dad, donde la incertidumbre, la sorpresa y la magia son grandes

aliadas junto con la pasión de aprender, navegando a través de

estos mares de incertidumbre, llenando de emoción y pasión

por aprender dentro de un proceso de aprendizaje continuo.

126




El elefante marrón ¿Cómo recuerdan los sueños que son sueños?

Cuando nuestros sueños se crean en nuestras células a

través de la vibración del universo, es entonces que el

pulso de la creación les da vida, en ese proceso de

creación de mundos, nacen como peces en el mar,

germinan como semillas aguardando a el sol para po-

der crecer. Nuestros sueños son como hojas de un

gran árbol de los sueños los cuales enmagian su exis-

tir, en el momento que los recordamos los hacemos

presentes. El color, su aroma, su frecuencia, su reso-

nancia, su energía, su magia, es lo que los mantiene

vivos y les da su esencia, pero recuerda a tus sueños

para que elefante marrón los pueda encontrar.

Nota: elefante marrón, longevidad, sabiduría, memo-

ria que regresa su esencia, volador de gran peso, coti-

diano, natural. La conexión libre, creativa y mágica.

Agricultor de vidas, de mundos, de espacios, de esen-

cias y conciencias, re encantador de vidas


127


El elefante marrón: la memoria, los recuerdos, la conciencia de niño

Si busco algo y no lo encuentro, no significa que la cosa

busca no exista. No ver algo no es lo mismo que apreciar

su no existencia. Dalai Lama.(2006)

¡Alto! prohibido sentir, la perdida de la sensibilidad

En la búsqueda del sentido del arte en las cosas, es tan incierta,

que a veces nuestros sentidos nos engañan y no siempre lo que

vemos es la realidad, la cuestión es, —¿qué es lo que a un niño

le permite ver algo que a nosotros los adultos nos cuesta trabajo

ver, sentir y vivir?,— será que hemos extraviado la sensibili-

dad.

La visión de los niños acerca de su realidad, no tiene nada

que ver con nuestra visión. Pareciera o esperamos tener todas

las respuestas, pero esas son la búsqueda del sentido del arte en

la cotidianidad. Esa búsqueda de una vibración en las imágenes

capaz de encontrarle un significado, eso hace que la imagen

exista.

Reflexionando la manera como n niño mira la vida, hay algo

que le nombran insigth, para Bohm, —La acción del insigth es in-

mediata, total y no analizable; su esencia no puede ser captada por

el pensamiento.— La plática con mis hijos sobre las imágenes,

fotografías, dibujos, su apreciación del arte en la cotidianidad, ellos

me comparten su forma de ver la vida, la cual es lo que es, siente y

vive, sin prejuicios, sin critica, solo vive y lo disfruta. Mis hijos

ahora son mis acompañantes en este proceso doctoral, por que

ellos me han enseñado muchas cosas que yo he ido perdiendo.

Al entablar este dialogo con ellos, tuve que escucharles y

prestarles atención, en este sentido Krishnamurti, menciona —

El arte de escuchar consiste en escuchar de manera que todo se

acomode en su sitio correcto en forma natural.— El significa-

do de esa palabra Arte significa: poner las cosas donde pertene-

cen.

El Arte de mirar consiste en observar sin distorsión, ob-

viamente. Si existe cualquier distorsión no hay observación... la

distorsión es causada por cualquier forma de motivo, propósito,

una dirección...

Al abrir los sentidos y sintonizarte con la el sentir de los

demás, al escuchar el significado de la vibración de la vida, se

van abriendo nuevos caminos y detalles que escapan de nuestra

visión. La imaginación de los niños siempre va mas allá de sim-

ples marcos de referencia, y vuelan como el ave de paraíso al

lugar donde solo los niños pueden llegar, a la isla de la fantasía

en un segundo, donde pueden transformar su realidad, en una

virtualidad mágica.

Me encanta como piensan los niños, como viven y como

son, creo que ese encanto es el que hemos perdido, y bueno co-

mo diría Bohm — la fuente de nuestros problemas yace dentro

de la estructura del pensamiento mismo. Esto puede parecer

extraño, pues nuestra cultura se enorgullece de que el pensa-

miento es su máximo logro.— donde nuestra visión fragmenta-

da de la vida, solo nos permite ver lo que es nuestra realidad

fragmentada por la ciencia.

128


El elefante marrón, la memoria, los recuerdos, la conciencia de niño


¿Sabias que el helado produce calor?

Le pregunte a mi hija: ¿Sabias que el helado produce calor?

Mi hija me dice — hay papá los helados no producen calor, so-

lo refrescan,— fue entonces que le pregunte a su Mamá,

¿verdad mamá que los helados no producen calor?

No conozco la respuesta de mi esposa, pero creo que los hela-

dos producen calor, porque cada vez que me acuerdo de un

helado, vienen a mi momentos con mis hijos y esposa en el par-

que, sentados con nuestro helado de limón con mamey y al re-

cordar aparece en mi un calor, la alegría, la felicidad, el sabor,

el disfrute, el gozo, la emoción y mi cuerpo se llena de energía

de color naranja, que le da ese calor.

Ser mas que un niño

Un niño y su … papá, maestro, abuelo, mamá, hermano, amigo,

… juegan a las escondidas, se oculta, se disfraza y se prepara,

¿para qué?, para sorprender y sorprenderse. El juego es de ida y

vuelta, cuando el niño se oculta se prepara para sorprender es

decir es dueño del juego, y el papá lo busca con mucha emo-

ción e intención, en ese momento el papá tiene preguntas y du-

das, pero al encontrarlo el se adueña del juego y el niño sor-

prende al papá con un buuuu. ¡Te asuste verdad!, dice el niño al

papá cuando esta a punto de ser encontrado, corren, gritan, se

abrazan, se emocionan, viven, cantan, bailan y aprenden.

El Sorprendizaje

Te preguntarás ¿que es un sorprendizaje?, ¿para que sirve?,

¿con qué se come?, ¿Cómo se huele?, ¿Cómo se escucha?,

¿Cómo se ve?, ¿Cómo se siente?, ¡ha! esas son buenas pregun-

tas, la respuesta espero salga en estas líneas, aclaro que se me

ocurrió esta palabra ignoro si ya existe, y si ya existe me da

mucho gusto y si no, pues me permitiré expresarla. Un sor-

prendizaje es un estado de latencia entre dos seres, el cual se

expresa con todos los sentidos, al sorprenderse el uno al otro en

una relación de juego, con-vivencia, expresión, emoción, inten-

ción y aprendizaje. Entonces un sorprendizaje es capaz de hacer

que aprendas con todos los sentidos a través de una sorpresa.

¡Suena bien!

El balbucear el aprendizaje es como enseñar a hablar a un

niño, el cual se encuentra limpio y vació de prejuicios, que le

permiten, inventar, fantasear, parafrasear. La flexibilización

del pensamiento en los alumnos, es limpiar las telarañas y redes


129



de prejuicios y comenzar a trabajar desde el punto de inicial. Es

importante prestar atención en a la primera etapa la de el calen-

tamiento es decir la de la flexibilización del pensamiento como

base para la construcción y apropiación del conocimiento ya

sea en una educación tradicional, a distancia o en medios digi-

tales, así como la de establecer una correcta interacción entre el

interlocutor y el autor, compartiendo, guiando, conversando

siendo el mediador del aprendizaje.

Ops, como se me fue a olvidar el proceso

Era un jueves común y corriente, metido en mi cotidianidad de

la vida como siempre levantar a mis hijos, cambiar a Quique,

peinarlo y bajar a hacer el desayuno para ir a la escuela. Mien-

tras mis Kate de seis años y Quique de casi dos juegan un poco

yo me dispongo a hacer su desayuno para vallan con algo en el

estomago al jardín de niños. Después de este ritual el cuál me

lleva a entenderlos, sentirlos, escucharlos, mirarlos y conversar

un poco, llega el momento de partir a la escuela.

Le dije angustiado a mi hija, Kate no se te olviden las

mochilas, mientras yo subo al coche mis cosas, tu ayúdame a

ponerle los zapatos a tu hermano, así es casi todos los días. El

camino a la escuela es siempre un momento muy agradable y

de mucho aprendizaje, ya que siempre cantamos, platicamos o

les cuento alguna historia.

Los jueves que me toca dar clase y mientras manejaba le

comentaba a mi hija.

— ¿Adivina hija que voy a hacer hoy con mis alumnos?

— ¿qué vas a hacer, Papá?, responde mi hija

— Vamos a construir un auto, fue mi respuesta

— ¿Un auto, Papá?

— Si, un auto con tarjeta de cartón, tijeras y pegamento y

lo pintaremos con crayones.

— En serio Papá, ¿y hacen el manual del auto tus alum-

nos?

— ¡Ops!, ¿el manual?

— Si, Papá, el manual para saber como hacer el auto y

que no se les olvide como se hace y puedan hacer mas

autos.

— No hija, nunca les pido que hagan el manual para rea-

lizar el auto, —a mis adentros me dije, como se me olvi-

do algo tan sencillo e importante, olvidarme del proce-

so— y solo concentrarme en el producto final.

Reflexiono y me pregunto, ¿que me paso?, ¿Cómo se me fue a

olvidar ese detalle del manual?, ¿Qué fue lo que mi hija le hizo

decirme lo del manual?, ¿será esta cotidianidad que me absorbe

que no me permite ver, sentir, oler, escuchar, degustar y palpar

esas pequeñas cosas, que me permiten aprender?.

Esto es un sorprendizaje, ya que me sorprendió y

aprendí mi hija con su pregunta exacta y aprendí de ella a no

olvidarme del proceso de aprendizaje. Aprendí sorprendiéndo-

me.

¿Cuántas veces solo pensamos en el final del proceso sin dar-

nos cuenta del aprendizaje dentro de ese proceso?, es esto que

ocurre y que solo puedo ver lo que me interesa y no me doy

130




cuenta de lo importante del proceso, será que aún no vació mi

mochila del paradigma anterior y sigo pensando en términos de

resultados y no de procesos.

Es curioso, pero como hemos perdido esa visión en el

proceso de aprendizaje, concentrándonos solo en el re-

sultado y no vivir el proceso, como la parte esencial del

ser al hacer, es decir, el ser como parte esencial del

hacer cotidiano.

A partir de la pregunta de mi hija, les pedí a mis alumnos que

por favor reflexionaran sobre el proceso de desarrollo de su au-

to y que lo describieran para tener su manual para que la próxi-

ma vez que quisieran hacer su auto, lo pudieran hacer. La chis-

pa de mi hija, el aprendizaje de la vida, o sorprenderte del pen-

samiento libre y fluido de un niño.

La magia del perfume

La película del perfume, menciona:

Igual que un acorde musical, el acorde del perfume con-

tiene cuatro esencias o notas cuidadosamente selecciona-

das por su afinidad armónica. Cada perfume contiene

tres acordes, la cabeza, el corazón y la base. Se necesitan

doce notas en total.

El acorde principal o cabeza contiene la primera

impresión que dura solo minutos antes de abrir paso al

acorde del corazón, el tema del perfume, ese dura varias

horas, y al final el acorde base. La huella del perfume

que dura varios días.

Los egipcios creían que solo se puede crear un per-

fume verdaderamente original al añadir la nota extra.

Una esencia al final que realzará y dominará las otras.

La leyenda dice que un ánfora fue encontrada en la

tumba de un faraón y cuando la abrieron se esparció un

perfume después de tantos miles de años. Un perfume de

tal belleza y a la vez tanto poder que por solo un instante

todas las personas de la tierra creyeron que estaban en el

paraíso.

Se identificaron doce esencias, pero la trece la vi-

tal, nunca se determinó

Al leer esta nota le pregunte a mi esposa que era un acor-

de, que ella estudio música y me respondió, — Un acorde es un

conjunto de dos a cuatro notas que se tocan al mismo tiempo.

— Con esto pude entender y aprender cuál es la magia del per-

fume. La esencia trece es la magia, la que atrapa al que lo hue-

le, la que provoca y es capaz de transportar al mundo de los

sueños, despertando nuestra virtualidad. El perfume es mágico,

porque es capaz de transformar nuestros sentidos.


131



El sueño de Raymundo

Eran las 8 de la mañana de un lunes normal, el acto a la bandera

nos recibía al entrar a la escuela, como siempre de uniforme

para hacer los honores a la bandera. Los niños de seis años está-

bamos listos para entrar a primer año de clase. Raymundo era

niño gordito y bajito todos lo conocíamos por Mundo, ese mun-

do redondito y chiquito.

Mundo tenia una habilidad increíble para un niño de esa

edad, sabia escribir de manera extraordinaria y dibujaba mejor,

recuerdo que el nos dibujaba siempre la S que Superman lleva

en su pecho de manera perfecta, que pensabas que el mismo le

hacia a Superman la de su traje. Era increíble verlo como dibu-

jaba y pintaba, nosotros encantados, pero la maestra de primer

año no.

Los súper poderes de mi amigo para dibujar fueron cada

vez mermándose cuando de repente nos comenzaron a enseñar

matemáticas, sus dibujos ya no resonaban con las matemáticas.

Y ni que decir con el español, la historia y las ciencias. Era ver

como a un superhéroe con la dosis suficiente de criptonita se

fuera opacando su fuerza.

El sueño de mundo de crecer, aprendiendo se fue hacien-

do cada vez mas distante. La distancia entre la maestra y el, se

fue haciendo cada vez mas grande. El no sabia como resolver

sus sumas y restas, pero si sabia dibujar, el no sabia como la

historia se fue desarrollando, pero si sabia dibujar, el no sabia

como la ortografía le daba vida a las palabras, pero si sabia di-

bujar. El no sabía que era la ósmosis, pero si sabia dibujar.

El sueño de Mundo de ser un gran dibujante, se desdibujo

cuando la educación lo dejo fuera por no saber sumar, escribir y

entender la ciencia. Para mi maestra el era un burro, para mi era

un genio del dibujo. El sueño de Raymundo, se quedo archiva-

do en algún lugar del tiempo en una carpeta donde sus dibujos

cobran vida, el reprobó algunas veces de año, y con algunos

problemas termino la primaria.

Desde mis seis años me pregunte:

¿Qué hubiera pasado si la maestra hubiera enfocado a

Raymundo desde el dibujo a aprender?

¿seria posible aprender desde el dibujo Matemáticas, Es-

pañol y Ciencias?

¿Por qué en la escuela nos prohíben tanto y solo aprende-

mos lo que los maestros quieren?

¿Por qué los sueños de niños no son la realidad de los

adultos?

¿Por qué los maestros no somos cazadores de sueños y

soñamos con esas presas?

Me quedo con esta pregunta:

—¿Por qué los sueños de niños no son la realidad de los

adultos?

132




Conciencia de niño

— ¿Alguna vez has visto a un niño de tres años despertar?

— ¿has visto su energía al jugar?

— ¿has sentido su emoción, pasión y magia?

— ¿has palpado su expresión y has escuchado su sentir pen-

sar?

Esa conciencia de vivir como un niño es la que hemos ido

extraviando con la vida, esa donde tiene sentido la vida a través

del vivir en la fluidez, la paciencia, la esperanza, la sencillez, la

sorpresa, y la magia de vivir.

El niño despertaba de un profundo sueño, abría los ojos y

miraba a su papá junto a él todavía durmiendo, el con una son-

risa que semejaba paz, amor, armonía y ensueño. Le pregunto

—¿que haces papá?,— el Papá, no lo escuchaba porque estaba

esperando despertar a la misma hora de siempre, para comenzar

su día. Levantarse, ponerse sus chanclas, ir al baño y terminar

de despertar. Mientras que el niño solo lo observaba.

¿Que estará haciendo mi papá en su sueño? — se repre-

guntaba el niño,— mientras lo observaba, el comenzaba a can-

tar algo que apenas se entendía, a sus tres años. El solo puede

cantar algunas estrofas de una canción que se inventa a si mis-

mo en cada palabra, en cada verso. Eso es fantástico, no tener

un chip instalado de tener que repetir la misma canción de

siempre, con puntos, con comas, con escalas musicales y con

voz de artista, el niño simplemente canta, inventa y se alegra la

vida.

El papá en cambio, antes de cantar se fija que este solo, que la

canción sea una que se sepa porque no esta dispuesto a equivo-

carse aunque el este solo, ya que su chip le recordaría que estar-

ía cantando mal, que no se sabe la canción, es mas que no sabe

pronunciarla, que no sigue el ritmo, y además que no tiene voz

de artista entonces para que esforzarse en cantar, el simplemen-

te calla, no inventa y sigue esperando la canción.

Y mi Papá, que no se da cuenta que ya amaneció, ¿Por

qué sigue dormido? — dice el niño, consciente de su tiempo y

de su espacio, mientras lo seguía observando dormir.— Enton-

ces observa a la ventana y observa un haz de luz, que se filtra

por entre las cortinas y comienza a gritar.

Mira Papá, mira, despierta, observa, Papá. Mira que boni-

ta luz, es como una espada de un caballero, mira que larga y

que colores.. Oye papá que es lo que tiene esa espada, señalan-

do el haz de luz. Son como pedacitos de sol que van y vienen,

mira que bonitos y se mueven mucho. —Mientras el niño se

alegraba, gritaba y observaba el haz de luz, el papá solo seguía

durmiendo,— ni el haz de luz hacia despertar.

Conciencia de niño es cantar sin importar que, es reír y

disfrutar el instante, es inventar y atrapar en el tiempo su voz y

decir algo, es refrescarse, es sorprenderse, es vivir y alegrarse la

vida, es ser feliz con lo que hace, ah por que el es el niño.

¿Y tú que conciencia tienes? y pregunto esto por que al

parecer esta es la brújula que hemos extraviado, que nos ha de-

jado en un sin sentido y en un hacer en nuestra cotidianidad las

mismas cosas y de la misma manera. Como que se antoja recu-

perar esa simplicidad, esa sencillez, esa sonrisa y carcajada flui-

da, sin miedo y sin ataduras, para disfrutar el momento, esa

conciencia de niño.


133



Los cielos están llenos de elefantes vola-

dores

En el comienzo de los tiempos, los cielos estaban llenos de ele-

fantes voladores. Demasiado pesados para sus alas, a veces ca-

ían con estrépito entre los árboles y asustaban a los demás ani-

males. Todos los elefantes voladores grises migraron a las fuen-

tes del Ganges. Acordaron renunciar a sus alas y establecerse

en la tierra. Cuando mudaron millones de alas cayeron a la tie-

rra, la nieve las cubrió y así surgió el Himalaya. Los elefantes

azules cayeron al mar y sus alas se convirtieron en aletas. Son

las ballenas, los elefantes sin trompa de los océanos. Sus pri-

mos son los manatíes, los elefantes sin trompa de los ríos. Los

elefantes camaleón conservaron sus alas, pero acordaron nunca

más volverían a posarse en la tierra. Cuando se van a dormir los

elefantes camaleón, siempre tienden en el mismo lugar del cielo

y sueñan con un ojo abierto. Las estrellas que ves por la noche,

son los ojos que no parpadean de los elefantes dormidos, los

cuales duermen con un ojo abierto para poder vigilarnos mejor.

Ashes and Snow en la Ciudad de México

134




La cometa mágica la conexión mágica al mundo de los sueños

Las vacaciones de verano son siempre bienvenidas

por su especial encanto, porque en esta estación del

año la naturaleza nos regala unas hermosas tardes

que se adornan con nubes majestuosas y unos vien-

tos increíbles.

Entonces, un extenso campo es el espacio ideal

para volar cometas. Atar la cola, balancear los tiran-

tes y desenredar el hilo son las partes del ineludible

ritual que debemos cumplir antes de lanzar nuestra

cometa al cielo.

Siempre comienzan así el sueño y la conexión

mágica con ese mundo.

135


La cometa mágica:

La conexión con el mundo de los sueños

En un día de verano, una cometa, unos metros de hilo y unas

hojas de papel con trazos fueron encontrados debajo del árbol

azul turquesa, por unos niños que iban a volar las suyas en la

cima de la montaña.

Se dice que en esa cima donde vivía el árbol de color sin-

gular era donde las cometas cobraban vida, y que su vuelo per-

mitía mirar lo que ellas contemplaban desde las alturas; tam-

bién se contaba que había en el árbol unos seres mágicos que

hacían soñar y ver cosas extraordinarias. A ese lugar solamente

podían llegar los niños, pues los adultos habían dejado de creer

en esas historias, y también de crearlas.

A uno de los niños le llamó la atención la cometa y el hilo

abandonados; la cometa parecía cansada y sin aliento, y el hilo

estaba hecho una madeja desordenada, como si aquella hubiera

sido bajada al suelo rápidamente.

―¿Qué habrá ocurrido?‖, fue la pregunta que se hicieron los ni-

ños, mientras se acercaban de manera curiosa a la cometa.

En eso, el viento comenzó a soplar y las hojas de papel

con trazos misteriosos comenzaron a volar alrededor del árbol,

como si danzaran. Los niños gritaron: ―¡Vamos, que no se vue-

len; agárrenlas!‖, mientras corrían y saltaban tras ellas. Luego

de alcanzar las hojas una a una, observaron que había en ellas

anotaciones y dibujos, de modo que las ordenaron tratando de

leer lo que estaba escrito en ellas, preguntándose a quién perte-

necían.

Mientras descifraban los dibujos, un viento huracanado

comenzó a soplar y el árbol empezó a estremecerse. En eso, la

cometa remontó el vuelo. Los niños, al ver que se iba, se apode-

raron del cordel que la tenía sujeta para evitarlo, pero la come-

ta, debido al viento, comenzó a volar sin cesar. Los niños solta-

ron más cordel a la cometa hasta que éste se acabó. Ya no había

más cuerda. Para impedir que se soltara, ataron el cabo a una de

las raíces del gran árbol, pero entonces la cometa comenzó a

girar en el aire, como si disfrutara volar.

Era tan fascinante verla tan contenta que los niños olvida-

ron sus propias cometas, de modo que se sentaron a observar el

vuelo majestuoso de la cometa, tan armonioso que las nubes

parecían danzar en el horizonte al ritmo de aquélla.

Uno de los niños leyó en una de las hojas lo siguiente:

―Atar el cometa a la raíz del árbol, tomar el hilo con tus manos,

cerrar los ojos y soñar‖. Junto a esas palabras había un dibujo

de una cometa atada a la raíz del árbol. Los niños se miraron

entre sí y se extasiaron tanto con el vuelo de la cometa que to-

maron con sus manitas el hilo y cerraron los ojos.

Al hacerlo, sintieron que comenzaban a elevarse por el hilo has-

ta la Cometa. Mientras ascendían, ésta cobró vida y les dijo:

―No tengan miedo. Mientras estén sujetos al hilo, nada les pa-

sará. Solamente déjense llevar.

Los niños, emocionados, seguían elevándose. Con su mi-

rada interior vieron el horizonte y el mundo que dejaban bajo

sus pies; gritaban de emoción al ver alejarse el árbol y la colina,

y comenzaron a contemplar todo desde el cielo. Desde ahí, el

árbol parecía una isla azul en medio del bosque.

136




― ¡Vean lo pequeña que parece nuestra casa! ¡Hasta se puede mirar

el mar! ―gritaban los niños excitados.

Cuando llegaron a donde estaba la cometa, ésta les dio la bien-

venida y les dijo:

―Gracias, queridos niños, por volverme a atar al árbol.

Los niños le preguntaron quién era.

―Antes de darles una respuesta, súbanse encima de mí. Les

mostraré algo.

Los niños subieron a la cometa asustados por la altura, ―al mis-

mo tiempo‖ emocionados de estar tan lejos de la tierra y tan

cerca de las nubes. Después, la cometa descendió y se posó len-

tamente en un lugar maravilloso.

―¿Qué es este lugar tan increíble? ¿Qué es este mundo?

―preguntaron los niños mientras descendían de ella.

―Es el mundo de los sueños ―respondió la cometa.

―¡El mundo de los sueños! ¡Así que en verdad existe!

―exclamaron los niños, gritando y saltando de alegría.

―¡Claro que existe! ―respondió la Cometa sonriendo.

―¡Fantástico! ―dijo uno de los niños mientras caminaba emo-

cionado―. Mi abuelo me contaba muchas historias sobre este

lugar, pero mis padres me decían que eran sólo ideas locas. En

la escuela, mis amigos, cuando les contaba esas historias, me

decían lo mismo.


137



―¡Y nuestros maestros igual! ―gritaron los otros niños mien-

tras corrían de un lugar a otro saltando y disfrutando ese lugar.

―¡Miren, miren ese elefante marrón y esos caballos alados!

Los niños jugaron y jugaron e inventaron nuevos personajes en

ese lugar asombroso, en ese espacio infinito de sus sueños, don-

de todo lo que imaginaban ocurría. Era tanta su felicidad que no

se percataban del paso del tiempo, pues en ese lugar no existía.

La Cometa los llamó, ―niños vengan‖ había llegado el momen-

to de regresar.

―Amiguitos, ya es tiempo de irnos ―les dijo―. Pero antes de

que regresen al mundo real, responderé a sus preguntas. Me

preguntaron quién era. Pues bien, soy una cometa buscadora.

―¿Una cometa buscadora? ¿Qué es eso? ―preguntaron los ni-

ños.

―Les contaré ―respondió la cometa. Un ser buscador es un

niño como ustedes. Es alguien que tiene sueños y preguntas que

responder. Es alguien que busca una manera diferente de perci-

bir la vida, y la alimenta con su alegría y su magia. Sólo los ni-

ños poseen ese poder, de modo que únicamente ustedes pueden

llegar a este lugar.

Yo me convertí en una cometa mágica hace muchos años. Un

niño como ustedes solía venir a este lugar a volarme cuando

salía de la escuela, y entonces platicaba conmigo y me contaba

sus sueños. De pronto, un mago apareció en el árbol, sobre una

rama. Escuchaba ahí lo que ese niño me decía y las historias

que me narraba. Una vez se rió tanto de una de las historias,

que cayó de la rama. El niño quedó aterrado, pero al ver al ma-

go reír, comenzó también a reír sin cesar. El mago se presentó

al niño, y le dijo:

―Yo soy el mago que habita en el puente.

―¡Así que tú eres el mago del puente! ―dijo el niño sorprendi-

do.

―Así es, amigo mío, y tú eres el niño que tiene en su poder uno

de mis frijoles mágicos.

―Es cierto. Lo encontré una vez que iba cruzando el puente, y

desde entonces siempre lo traigo conmigo.

―Pues bien, ese fríjol es la conexión conmigo.

―¿Y qué haces aquí, en el árbol azul turquesa? ―quiso saber el

niño.

―¿Cuál árbol azul turquesa? ―preguntó el mago, simulando no

entender lo que el niño decía.

Ese árbol era un sauce común, verde, grande y majestuoso, pero

cuando el mago cayó de él ya no fue azul, sino verde y muy

normal. El niño quedó sorprendido.

El mago entonces le dijo:

―El árbol cambia de color cuando el niño que viene a él tiene

sueños e historias que contar; es entonces cuando crea y recrea

esos mundos mágicos que comparte; es entonces cuando yo

aparezco en el árbol, y éste cobra vida y se transforma en el

árbol de los sueños, es decir, en el árbol azul turquesa.

138




El niño, poniendo la mano sobre su barbilla y caminado por las

raíces del árbol, dijo entonces:

―Ummm. Ahora entiendo por qué, cuando les cuento estas co-

sas a mis padres, amigos y maestros, me dicen que estoy loco,

ya que ellos sólo ven un árbol verde cuando miran por su venta-

na. Pero, ¿por qué mi hermanita me ha dicho que puede ver ele-

fantes marrones, caballos alados y muchas luces cuando mira

hacia acá, y dice entonces ―azul, azul‖? ¿Ella también lo puede

ver?

―Por supuesto que tu hermanita lo puede ver, porque es una

niña con tantos sueños e historias que contar como tú.

―¿Y mis abuelos también? Porque cuando ven este árbol por

su ventana, siempre sonríen y dicen: ―¡Qué bello es ese árbol de

sueños!‖, y entonces suspiran. ¿Ellos lo pueden ver con su co-

lor azul?

―Claro, amigo mío. Los niños y los abuelos son los seres que

lo alimentan con su magia de vivir. Por casualidad, ¿tu abuelo

tiene un pañuelo azul? ―preguntó el mago.

―Sí; siempre lo lleva consigo. Dice que es un pañuelo mágico.

Y ahora que lo mencionas, mi abuelo me traía aquí cuando yo

era muy pequeñito, a volar esta cometa. Porque es la cometa de

mi abuelo. Él siempre me decía que la atara a la raíz del árbol,

que tomáramos del hilo y cerráramos los ojos, y yo entonces

me quedaba dormido y soñaba que subía en la cometa hasta las

nubes y que ella me transportaba a un lugar mágico. Pero tú,

mago, ¿como sabes todo esto?

―Ah, te explicaré. Yo extravié mi pañuelo aquí, en este árbol,

una vez que encontré a un niño parecido a ti volando y platican-

do con su cometa. Ese pañuelo es precisamente el mismo que

tiene tu abuelo.

―Ahora entiendo. Mi abuelo me contó que había encontrado

ese pañuelo justamente en este árbol, y que un mago hizo que

esta cometa se volviera mágica.

―Ahora que sé quién tiene mi pañuelo azul ―sonrió el mago―,

te contaré luego la historia de ese pañuelo.

―Mira, mago, mi abuelo me dio estas hojas en las que dibujó

algo. Me dijo que son los pasos que han de seguirse para entrar

al portal mágico.

―Te invito a conocer ese portal ―dijo el mago―. Sólo sigue los

pasos descritos siempre que quieras ir ahí: ―Ata la cometa al

árbol y sujeta el hilo con tus manos, cierra los ojos y sueña‖.

La cometa terminó aquí su relato mientras los niños sonreían.

―Así que soy una cometa buscadora porque cada niño que vue-

la conmigo inventa y crea personajes e historias, y yo en cada

vuelo doy vida a esos personajes; busco en sus sensaciones,

preguntas, pensamientos, emociones, intuiciones, resonancias,

sentidos, pasiones, magia, sueños, conciencia, espiritualidad y

transformaciones. Así, creo y recreo en ellos la alquimia de

habitar sus sueños dándoles vida, haciéndolos reales.

―¡Guau!, ¡genial!, ¡fabuloso! ―exclamaron los niños.

En eso estaban cuando sintieron que la cometa comenzaba a

descender y que regresaban al árbol azul turquesa.


139



―¡Miren, amigos, vamos ya de regreso! El árbol sigue siendo

azul. ¿Quién estará haciendo bajar a la cometa si todos estába-

mos en el mundo de los sueños?

La Cometa seguía descendiendo y los niños pudieron divisar a

dos figuras bajo el árbol. Eran un niño y un ser vestido de azul.

La conexión mágica con el mundo de los sueños

¿Qué hace mágica a una cometa?

¿Por qué es necesario hacer el ritual antes de volar en ella?

¿A qué llamamos conexión mágica?

¿Por qué conectarse con el mundo de los sueños?

Curiosamente, las cosas que recordamos con mayor ansia

son aquellas que nos hacen viajar a los lugares más hermosos

de nuestra infancia, donde nuestra conexión con la naturaleza

es directa. El encanto de vivir con todos nuestros sentidos es

tal que nuestro corazón resuena y emite frecuencias emociona-

les y sensaciones capaces de transformar el simple acto de volar

una cometa.

Basta con atar el cordel de una cometa a la raíz de un

árbol, asirlo después y cerrar los ojos, para que emprendamos el

vuelo y nos trasportemos a ese mundo mágico.

Cerrar los ojos y abandonarnos al vuelo es la única ins-

trucción que debemos cumplir para lograrlo. Saltar llenos de

emoción significa un nuevo viaje, algo que se espera, algo que

desprende de nosotros a nuestro mago interior y que lo hace

salir al reencuentro con su mago exterior, que es el mismo, pero

en otro mundo.

Esa es la intención de una cometa cuando comienza su

vuelo y asciende al cielo: establecer un contacto con ese mundo

de los sueños al que sólo se puede llegar soñando. Añorar la

infancia es el pretexto para volver a ser niños, para permitirnos

ser quienes en realidad somos.

Perdidos en este mundo, extraviamos la llave que nos lle-

va al horizonte de nuestra magia, ésa que nos conecta con nues-

tra esencia, y olvidamos entonces esos momentos mágicos que

nos acercan a todo aquello que nos hace gozar, disfrutar, vibrar,

divertirnos, encantarnos… estar vivos.

140




pensar —¿no es así?— y no proyectaros vosotros mis-

mos, vuestro pensamiento, en lo por venir, creando un

Dios que os agrade; eso sería demasiado pueril.

En primer término, pues, tendríais que comprender

el proceso de vuestro pensar. Esa, a no dudarlo, es la

única manera de descubrir algo nuevo, ¿no es cierto?

Un buscador antes de intentar descubrir que es lo que

busca, debe encontrarse y legitimarse, mientras no se compren-

da no se tendrá ninguna base para el pensamiento, efecto o ac-

ción, y todo proceso será en vano. Se debe dar significado al

proceso total de uno mismo. El buscador se convierte en lo bus-

cado, y ahora lo buscado es uno mismo, eso para mi es impor-

tante, ya que primero debo de entender, comprender y reflexio-

nar quien soy, en mente y espíritu y no separado, para poder

emprender esta búsqueda de respuestas.

El hilo de nuestra conexión es ese que nos lleve como la

cometa a conectarnos con nuestro ser interior, en ese contraes-

pacio de vida que le permitan recuperar su esencia que nos

mantiene unidos a la naturaleza de manera espiritual, y ser uno

con la totalidad.

El hilo de nuestra conexión

Batteson, con su visión de la naturaleza y del ser humano nos

llevan a conocer más acerca de la interrelación e interconexión

del ser humano con su entorno.

Boff, nos muestra como a través de la fortaleza espiritual

y la interrelación con la naturaleza nos permite tener un conoci-

miento de ella, para vivir espiritualmente con los demás y su

entorno de una manera armónica y ecológica.

Gutiérrez, Briggs y Peat, como nos muestran que aun en

medio de esta crisis existencial del ser humano que nos ha lle-

vado a una falta de sentido de la vida y a un extravió de princi-

pios y valores a causa del sistema económico social actual, es

posible recuperar y darle un nuevo significado a la vida.

Sin embargo para encontrar el hilo de nuestra conexión

existen caminos por donde transitar y también cuales son las

herramientas para mediar este camino y poder influir sutilmente

en todas las personas en las que podamos enseñar, pero tene-

mos que comenzar por nosotros mismos.

Krishnamurti dijo en su libro ―La libertad primera y última‖:

Suponed que nunca hubierais leído un libro sobre reli-

gión o psicología, y que tuvierais que hallar el sentido, la

significación de la vida. ¿Cómo emprenderíais la tarea?

Suponed que no hubiera Maestros, ni organizacio-

nes religiosas, ni Buda, ni Cristo, y tuvierais que empezar

desde el principio. ¿Cómo emprenderíais la tarea?

Tendríais primero que comprender el proceso de vuestro


141

El hilo de nuestra conexión


La Magia de un sueño nos predice la vida.

La vida es un acto de soñar despierto.

Si despierto y estoy soñando, ¿será que aun sigo soñando?

Soñando despierto y despierto soñando.

Lo implicado del genero en mi conexión

La implicación con mi conciencia hace transformar mi proceso

de pensamiento, mi ser se autoorganiza con mi sentir pensar, y

mi mirada desde la equidad del genero en este momento es la

que presento, que digo que esa visión será afectada por el nivel

de conciencia. Mi versión de la equidad de genero, con mis im-

plicaciones de conciencia de un ser emocional mas que racio-

nal. Donde el observador afecta a lo observado dependiendo

sus pensamientos, emociones, sensaciones, afectos, defectos,

juicios, prejuicios, femenino, masculino, amor, equidad, len-

guaje, costumbres, su ser, su vida, sus sueños…

Niño. Niña. Niño. Niño. Niña. Niña. Niño. Niña. Niña.

Niña. Niña. Niño. Hablar de genero para mí es hablar de vivir

con mis once hermanos, si once, imagínate convivir, conversar,

jugar, llorar, reír, comer, platicar, cantar, bailar, caminar, apren-

der y soñar. Desde mi sentir la equidad se fue dando en el vivir

y el genero en el hacer. Bisabuela, abuela, madre, hermanas,

esposa e hija son las mujeres con las que me han tocado vivir.

Bisabuelo, abuelos, padre, hermanos, hijo y yo mismo, son los

hombres con los que he crecido.

He tenido la gran fortuna de conocer y reconocer a mis

Bisabuelos, unas personas excepcionales las cuales vivieron

hasta los noventa y seis y noventa y cuatro años, con mis abue-

los jugué, trabaje y platique. Mis abuelas me arrullaron en su

regazo, comí y me acompañe de sus vidas. Mis padres mis ami-

gos, los seres que me han acompañado a su manera y me han

nutrido de la naturaleza, ternura, compañía, confianza y la for-

taleza. Mis hermanos y hermanas, compañeros, amigos, con-

142




fianza, fortaleza, apoyo, cooperación, juegos y aprendizajes. Mi

esposa, amiga, compañera, ternura, cariño, amor, mujer, niña,

juegos, platicas, dulzura, pasión, sueños, vida. Mis hijos, ternu-

ra, pasión, juego, placer, gozo, energía, magia, cuentos, dulzu-

ra, aprendizaje, sueños, preguntas, vida, ser y vivir. Conmigo,

amigo, creatividad, intuición, sentidos, pasión, magia y sueños.

Cada quien es su historia, su vida, sus experiencias y sus

sueños. Y —si la vida es sueño y los sueños, sueños son— El

Gen Ero, como yo lo llamó el Gen del Amor, cada quien va con

su historia de amor, su genero. El genero es la vida del ser, sus

sentidos, su intuición, su pasión, su amistad, su pensar, su afec-

to, sus defectos, su ternura, su confianza … su ser, sentir y vi-

vir.

Su Gen del Amor, lo lleva consigo toda su vida, y ese gen

se autoorganiza y se autoconstruye en su conversar con la vida,

— como resultado de la búsqueda del equilibrio dinámico en

ese autoorganizarse como seres vivos.— Este Gen se transfor-

ma y regenera en su interactuar en sus vivencias. Su aprendiza-

je de basa en aprender con todos los sentidos, vivir enmagiado,

aprendiendo en cada momento. Su aprendizaje es gratificante y

divertido, encontrándole sentido a la vida. La pasión es la base

de su aprendizaje, ella lo mantiene motivado y enmagiado.

El contacto con sus iguales y diferentes le producen rela-

ciones sinérgicas, propiciando un aprendizaje para la vida. Al

mismo tiempo se compromete y responsabiliza y se amalgama

con el aprendizaje de los demás, siendo cómplice de su aprendi-

zaje. Esa implicación con su conversar, aprender y vivir lo lleva

a replantearse a si mismo cada momento. Es recursivo ya que

esto le permite, autoorganizarse en un Gen más flexible y crea-

tivo, autoconstruyéndose en el vivir.

Ternura. Confianza. Intuición. Amor. Vida. El gen del

Amor, —Gen Ero—, es Ternura por que crea su espacio psíqui-

co como su espacio relacional, al vivir en la intimidad de su

contacto corporal como simple resultado de convivir e total

aceptación y confianza en este contacto corporal. Es Confianza

por que se aprende a vivir desde la infancia en espació de inte-

gración reconocimiento, aceptación y creatividad, dando signi-

ficado a su aprendizaje. Es Intuición al despertar e interactuar

con todos los sentidos, percibiendo el amor, la fe, la poesía y el

sentir como la base de su aprendizaje. Es Amor por que a través

de ese espacio relacional es capaz de desarrollar su ser emo-

cional. Es Vida porque la vida es aprendizaje, y ese es el sen-

tido de vivir, aprendiendo con sentido.

Añadiría a estos principios matrísticos, la magia, la pa-

sión y el sueño, como complementos de la búsqueda del sen-

tido de la vida, siendo estos las ondas expansivas hacia el cono-

cer y reconocer de ser en el aprendizaje.


143



Descubrir tu conexión

La conciencia de aprender es:

Descubrir cuál es el sentido de la vida, eso le da la energía al

sueño de vivir.

El reconocer donde se encuentra le da el punto de partida a la

recursividad.

El sentido de la vida nos da el impulso y el coraje para lanzar-

nos a la búsqueda de nuestros sueños a través de la comunica-

ción y la integración.

Hay dos modos de conciencia:

Una es la luz, y otra paciencia.

Una estriba en alumbrar un poquito el

hondo mar;

otra, en hacer penitencia con caña o red,

y esperar el pez, como pescador.

Dime tú,

¿Cuál es la mejor?

¿Conciencia de visionario que mira en

el hondo acuario peces vivos, fugitivos,

que no se pueden pescar, o esa maldita

faena de ir arrojando a la arena, muer-

tos, los peces de mar?

Antonio Machado.

Donde todo esta conectado con el todo, ejerciendo un

efecto hacia nuestro saberes, poderes y placeres.

O creas o te crean.

Es un recuperar el ser, sentir, pensar, afectos, defectos,

errores y conciencia, en este mundo mas inhumando, llevado

por el caballo del capitalismo, la religión, la política y la educa-

ción que va en un desenfreno hacia alguna parte menos hacia

donde deberíamos ir.

El punto de reconexión o el punto recursivo como lo re-

conozco es donde regreso cada vez a alimentar mi pasión, mi

intención, mi magia y mis sueños, allí donde el sentido se agu-

diza para decirme que estoy consciente de mi aprendizaje.

El molino de agua es real o es virtual

En una ocasión, tomaba algunas fotos en la hacienda Zimpi-

zahua, Veracruz. Una hacienda dedicada hace ya algunos años

al cultivo y producción de café, actualmente habilitada como

hotel y con espacios para eventos. Caminaba buscando algunas

tomas cuando un amigo se acerco y me dijo:

— ¿Ya le tomaste una foto a ese molino de agua?

— ¿Cuál molino? respondí

— Ese que se ve molino. Ven sígueme.

Fui donde el molino de agua, se escondía de mi vista,

Detrás de unos muros se podía ver un gran molino de agua que

alimentaba a las despulpadoras de café. Comencé a tomarle fo-

tos, después de ver a mi amigo tan emocionado, le pedí que se

parara junto al molino para tomarle una foto.

Al mirar por la lente mire diferente, mire un molino

detrás de mi amigo y a él frente a el derechito para la foto, la

144


Descubrir tu conexión


tome pero me dije algo falta. Como que entre esa misma pose y

cambiando de fondo y escenario, no habría ninguna diferencia

fotográfica. Así es que se me ocurrió hacer algo y le pedí que se

acercara más al molino de agua, y que lo tocará, —el se acerco

al molino de agua y lo toco—, y le dije:

Sabes a partir de este momento vas a estar unido a ese

molino, por que no importa lo que ocurra, habrás esta-

blecido una relación directa con él. —A partir de ese mo-

mento ese molino deja de ser virtual, se vuelve relacio-

nal, es decir la red de la realidad crea un nodo contigo—

, ahora cada ves que veas las dos fotos, en una estarás

virtualmente en cualquier lugar y detrás de ti un escena-

rio que cambia, y en otra estarás unido a ese escenario

como parte de él, habrás trascendido la virtualidad para

pasar a ser real, ese momento.

¿Entonces es hasta que tocas las cosas las haces reales? puede

ser. ¿y que pasa con las cosas cuando las creas y recreas en tu

mente? ¿son virtuales o reales?, si las ves, las hueles, las escu-

chas, las sientes, las degustas y las vives. Ah, ese es otro caso

para la araña.

Todo lo que ocurre en la mente, es el resultado de nuestras

representaciones, vivencias, experiencias, cultura, amor,

ternura, genero, educación, religión, principios, valores,

expresión, lenguaje, corporeidad, escritura, juego, naturale-

za, árbol.. en fin nuestra relación con los demás.

¿La vida es una relación? Si es así entonces todos somos

relaciones. Y si todos somos relaciones, entonces todo esta co-

nectado por alguna relación. Como la pauta que nos conecta

con la totalidad.

La salud espiritual la reconexión a la vida

En la búsqueda de lo sagrado encontré aquello que transforma

el interior del ser humano, la espiritualidad. Buscando la espi-

ritualidad encontré la emergencia espiritual que me llevó a en-

tender el porque de la intuición, la magia, la pasión, los sueños

y la conciencia, la cuál me llevó al punto de encaje energético

entre el ser interior —tonal— y ser exterior —nahualt—, que es

para mí la autoorganización del ser humano. El lugar donde la

conexión con la totalidad te lleva a la vida.

Cuando la concepción de espíritu humano se entiende

como la manera de conciencia en que el individuo tiene

una sensación de pertinencia, de conexión, con el cosmos

como un todo, se vuelve claro la percepción ecológica es

espiritual en su esencia más profunda.

Capra, Ecología Profunda en ―La trama de la vida‖

En esta sincronicidad y sintonía de la vida. Recuerdo la siguien-

te historia, resulta ser que en una granja un granjero tenía una

gallina echada a punto de nacer sus pollitos, cuando en eso

llegó, el hijo del granjero un niño como de cinco años. El Papá

observaba como nacían los pollitos, tomando a su hijo en bra-

zos le comenzó a enseñar cuál era el proceso de nacimiento de

un pollito, le explicaba como picoteaban el huevo primero para

nacer.

El niño observaba y escuchaba lo que le decía su padre y

veía como sufrían y tardaban los pollitos al nacer, en su proceso

de su nacimiento les llevaba tiempo y esfuerzo hacerlo. Sin em-


145



bargo el niño quería ayudarlos. Faltaba que naciera el último

pollito, solo pudo picar un poco el huevo, el niño angustiado y

sin decirle nada a su papá, tomo el huevo en la mano y co-

menzó a ayudar al pollito a salir del cascarón, comenzó con

romper mas el cascarón y a quitarlo, al cabo de unos minutos el

pollito estaba fuera de su nicho vital, todo húmedo y agachado

temblando, entonces el niño lo dejo en el nido pero no se podía

parar, y le pregunto a su Papá:

—Papá mirar este pollito ¿por que no puede pararse?

El Papá con mucha sorpresa e impotencia, miro como el

pollito necesitaba de su cascaron para seguir viviendo, así que

le acerco un foco para calentarlo y para que pudiera madurar, y

no se quedará en su proceso de nacer.

Después de hacer eso le explico a su hijo. — Hijo, gracias

por ayudar al pollito pero, en vez de hacerle un bien al ayudar-

lo, le estabas haciendo un mal.— El niño no entendía y se puso

triste y el Papá continúo. Mira hijo el proceso de nacer, es un

proceso largo que a un pollito le lleva días desde que se forma

en el huevo hasta que llega su día de nacer, en ese día desde

que rompe el huevo que es el primer paso, comienza su cuerpo

a hacerse mas fuerte, en cada picotazo y acomodo de su cuerpo

para nacer, su alas, sus patitas, su corazón, sus plumas se van

madurando y haciendo mas fuertes.

Cuando termina de romper el cascaron de huevo tiene que

esperar a que el liquido que lo cubre, se seque y sus plumas

estén listas para darle calor, es un proceso que les lleva a veces

todo el día. Y cuando están listos ellos salen, felices, contentos

y listos a comer. Ese esfuerzo interno les hace establecer una

conexión con su vida.

Sin embargo cuando les quitas esa —intención— ese pro-

ceso de vida, el de aprender a romper el huevo, madurar, secar-

se y salir de huevo. Les quitas la experiencia de ser, sentir y

vivir, y los limitas a no vivir ese proceso, por lo que cuando

nacen, nacen sin ninguna relación con su proceso de vida, des-

vinculados de su nacer y de su relación e interconexión con el

huevo que les dio cobijo mientras crecían en el internamente.

Los dejas desvinculados de lo sagrado de su existir.

El niño comenzó escuchaba a su Padre mientras observa-

ba como el Pollito se secaba bajo el foco y de repente comenzó

a gritar y a brincar de alegría al ver al pollito levantarse y piar,

e ir con su mama y hermanos en la granja. El niño dijo —

gracias Papá, a partir de ahora solo esperare y ayudare solo

cuando sea necesario.

La conexión de la vida al nacer

¿Será que nos han hecho una cesárea con lo sagrado de la vida?

Es decir desde que nacemos en vez de hacernos un bien nos

hacen un mal, ya que al nacer desvinculados con la naturaleza

perdemos esa relación que nos une a nuestro medio ambiente, y

a nuestra madre, eso creo se llama Ecología Profunda.

Lo que separa a los seres humanos —de cualquier

otra cosa—del medio ambiente natural. El ve al mundo

como una colección de objetos aislados, mas como una

red de fenómenos que están profundamente interconecta-

dos e interdependientes. La ecología profunda reconoce

el valor intrínseco de todos los seres vivos y a los seres

146




humanos apenas como el hilo principal en el tejido de la

vida. En el último análisis, la percepción de la ecología

profunda es la percepción espiritual o religiosa.

Cuando la concepción de espíritu humano se en-

tiende como la manera de conciencia en que el individuo

tiene una sensación de pertinencia, de conexión, con el

cosmos como un todo, se vuelve claro la percepción

ecológica es espiritual en su esencia más profunda.

No es de sorprender el hecho que la nueva visión

emergente de la realidad se basa en la percepción de la

ecológica profunda y consistente con la llamada filosofía

perenne de las tradiciones espirituales, la necesidad de

hablar con respeto a la espiritualidad de los místicos

cristianos, de los Budistas, o de la filosofía y cosmología

subyacente a las tradiciones nativas norte-americanas.

Cuenta mi madre y mi abuela que cuando nací, mi madre sufrió

mucho y que mi abuela tuvo complicaciones para recibirme,

realmente no recuerdo nada solo lo que ellas me comentaron.

Soy el tercero de doce hijos, y me cuenta mi madre que

cuando nací no esperaba que naciera con tantas dificultades. Mi

abuela Juliana, fue una curandera que aprendió el oficio de traer

al mundo a los niños, sin ser Cigüeña. Me dice mi madre que

mi abuelita aprendió de un médico y el cual le enseño ese arte

de ser Partera. Mi abuela por tu parte, era un ser místico. física-

mente regordeta, risueña, con el pelo largo y canoso, muy fuer-

te, siempre con un excelente sentido del humor, y con historias

maravillosas al conversar, disfrutaba de la vida como una niña

de tres años.

Mi abuela era mi tonal como dice Carlos Castaneda, ese

espíritu que alimenta al espíritu, era mi lugar de encuentro con

mí ser, sentir, y pensar. Ella mora en lo sagrado de mi vida, mi

propia vida, siento ser parte de ella, cuando cierro los ojos sien-

to su alegre y sencilla presencia en mi ser.

Cuando nací, ella me recibió con muchas dificultades ya

que venia de pies y con mi mano derecha estaba agarrando mi

pie izquierdo, eso era lo mas complicado de ver en un parto.

Como diría mi abuela, — ¿Cómo le harías para ayudar a un ni-

ño en estas condiciones a nacer?— Pienso en esta pregunta, y

ahora veo de donde nació esa pasión por la vida, ahora siento

de donde viene mi esencia, ahora escucho de donde viene mi

intuición y mi conciencia de vivir.

Mi abuela al recibirme en este mundo con emoción,

alegría, sabiduría y mas aun enderezar mi posición en vientre

de mi madre para nacer, sentir su ser al nacer, inundarme de

amor y abrazos, que te ayude a nacer tu abuela, creo que es el

mejor recibimiento en esta vida. A partir de ese momento mi

vida estuvo vinculada a mi abuela, tanto que ella ha sido mi ins-

piración en la vida, ella siempre me apoyo para ser lo que soy.

Ella es mi vínculo con mi proceso de vida.

El rizoma de la vida llega a su punto germinal, donde lo

sagrado, la vida, el proceso de vida, nacer, crecer, morir, nos

conecta al tejido de la vida, al cosmos y donde la percepción

ecológica es espiritual y profunda.

Si yo fuera pollo y me ayudarán a nacer me faltaría mi

vinculo con mi ser, pero si fuera humano y me recibieran con

amor de abuela tendría un vinculo sagrado con mi esencia de

ser.


147



Un abrazo, un beso, un arrullo, una palmadita, un susurro,

mi salud, mi vida y mi aprendizaje desde que nací, mi mano

derecha estaba agarrando mi pie izquierdo, eso era lo mas com-

plicado de ver en un parto.

Como diría mi abuela, ¿Cómo le harías para ayudar a un niño

en estas condiciones a nacer? Eso solo lo puede responde mi

sagrada Abuela.

Ahora que el reencuentro con nuestro interior, nos hace co-

nectarnos con lo sagrado de nuestro ser espiritual, la cometa mági-

ca se eleva rumbo al mundo de los sueños, donde el ser que le da

vida a esa magia de vivir eres tú, donde solo basta atar la cometa a

la raíz del árbol azul turquesa , tomar con las manos el hilo , cerrar

los ojos y elevarse al mundo donde todo es posible, al mundo de

los sueños, nuestra conexión con nuestro ser interior.

Lo humano surge con el vivir en el lenguaje como el mo-

do cotidiano de coexistencia.. Xi

Simiente de primavera, pp 80

Simiente de primavera pp 36

La idea de estrategia va unida a la de alea: alea en el

objeto —complejo—, pero también en el sujeto, puesto

que debe tomar decisiones aleatorias, y utilizar los aleas

para progresar. La estrategia es indisociable de arte. El

arte, es hoy, indisociable para el descubrimiento científi-

co, y será cada vez más indispensable para la ciencia,

puesto que el sujeto, sus cualidades, sus estrategias,

tendrán un papel cada vez mayor. Donde alea significa

en latín juego de dados, juego de azar, riesgo, suerte e

incertidumbre. Y el aleador significa jugador de profe-

sión, es decir, aquel que puede aprovechar las aleas para

sus fines. Educar en la era planetaria, Pág. 27.

Un buen médico es un político, un guerrero, un sacerdote

o un maestro, ya que toma en cuenta la justicia, el coraje,

la fe y la sabiduría en sus decisiones. (Margolis,

2003:113)

Chopra nos narra dentro de su libro el sendero del mago, las carac-

terísticas de un buscador y nos da la respuesta a la pregunta,

— ¿Cómo puede una persona reconocerse como buscado-

ra?, preguntó Percival.

—Las marcas internas del buscador son las siguientes: el

impulso de dar brota de un amor desinteresado y de la

compasión, sin desear nada a cambio, ni siquiera gratitud;

148




la intuición se convierte en una guía digna de confianza

para la acción, reemplazando a la racionalidad pura; se

vislumbra un mundo nunca visto como la realidad supe-

rior; aparecen insinuaciones de Dios y de inmortalidad.

Estas señales llegan acompañadas de un goce ma-

yor de la soledad, de una mayor confianza en uno mismo

independientemente de la aprobación de la sociedad, de

indicios del Ser y de la disposición a confiar.

Los patrones adictivos comienzan a desaparecer. La

meditación y la oración se vuelven parte de la vida coti-

diana. Sin embargo, a medida que todas esas manifesta-

ciones alejan a la persona del mundo material, ésta co-

mienza a encontrar, paradójicamente, una conexión más

profunda con la naturaleza, más comodidad con su cuerpo

y mayor aceptación de los demás.

Esto se debe a que el espíritu no es el contrario de la ma-

teria. El espíritu lo es todo y la aparición de éste en su vida me-

jorará las cosas, incluso aquéllas que parecen contrarias.

Imaginen sus vidas como un cuadro en movimiento

proyectado sobre una tela blanca. Mientras están dominados

por el ego, ustedes fijan su atención en las figuras en movi-

miento, las cuales ven como reales. Cuando aparece en esce-

na el buscador, comienzan a percibir la irrealidad de las fi-

guras. Pero con el nacimiento del vidente, se dan la vuelta

para mirar la luz. Ahora ven la imagen de ustedes mismos

como realmente es: una proyección débil hecha real por la

aguda necesidad del ego de dar importancia a la mente y el

cuerpo atrapados en el tiempo. Chopra Deepak, el sendero

del mago. (versión digital), pp51.

Cuando un ser humano nace, su mente y su cuerpo emo-

cional están completamente sanos. Quizás hacia el tercer

o cuarto año de edad empiecen a aparecer las primeras

heridas en el cuerpo emocional y se infecten con veneno

emocional. Pero, si observas a los niños de dos o tres

años y te fijas en su manera de comportarse, verás que

siempre están jugando.

Los verás reírse sin parar. Su imaginación es muy

poderosa y su manera de soñar una auténtica aventura

de exploración. Cuando algo va mal reaccionan y se de-

fienden, pero, después, sencillamente se olvidan y vuelven

a centrar su atención en el momento presente para seguir

jugando, explorando y divirtiéndose.

Viven el momento. No se avergüenzan del pasado y

no se preocupan por el futuro. Los niños pequeños expre-

san lo que sienten y no tienen miedo a amar.

Por eso los momentos más felices de nuestra vida

son aquellos en los que jugamos como si fuéramos niños,

cuando cantamos y bailamos, cuando exploramos y crea-

mos con el único propósito de divertirnos.

Cuando nos comportamos como niños nos resulta

maravilloso porque se es el estado normal de la mente

humana, la tendencia natural. Somos inocentes, igual que

los niños, y para nosotros es normal expresar amor.

Ruiz,()La maestría del amor. p.9.


149


Sueños, Magia y Virtualidad ¿se puede soñar despierto? 150



Cuando percibes las cosas con los ojos del amor, puedes

conectar tu voluntad con la voluntad de otro soñador, y

entonces, el sueño se convierte en un solo sueño.

Cuando percibes con amor te conviertes en uno con los

pájaros, con la naturaleza, con una persona, con todo.

Sólo así serás capaz de ver con los ojos del águila o ex-

perimentar la transformación a cualquier otro tipo de

vida. Con tu amor te conectas con el águila y te convier-

tes en sus alas o en lluvia o en nubes.

Ahora bien, para conseguir esto, necesitas eliminar

todo el miedo de tu mente y percibir con los ojos del

amor. Tienes que desarrollar tu voluntad hasta que se

haga tan fuerte que sea capaz de captar la otra voluntad

y convertirse en una sola, ya que haciéndolo así, tendrás

alas para volar.

O, si eres el viento, serás capaz de ir de aquí para allá,

harás que desaparezcan las nubes y que brille el sol. Este

es el poder del amor.

‖ Ruiz, () la maestría del amor, Pp59


El mundo mágico de los sueños: El lugar donde la vida se vuelve sueño

Imagina un perro en forma cuadrada y un gato en forma de es-

fera, una pelota triangular y murciélago en forma de rombo,

que habitan un mundo en el que todo brilla y es acuático a la

vez. Si lo puedes imaginar lo has construido, ese mundo no esta

afuera, esta en tu mente, vive dentro de ti y de manifiesta así de

real en tu virtualidad, un mundo mágico, donde la vida se vuel-

ve sueño y despertar en el, es como abrir los ojos a la mirada

infantil de un niño de cuatro años. Eres bienvenido al mundo

mágico de los sueños.

Nota: mundos, sueños, mundo mágico, lugar de vida, creación,

creencias, elefante marron, dormir, atrapar, germinar, desarro-

llar, crecer, madurar, sendero, luz, brillo, color, matiz, orificio,

universo, sincronía, interacción, hechizo, encanto, mentor,

hacedor de sueños, contagio, despertar, mago, música, canto,

juego, sueño.

151


Un elefante marrón esta siempre atento esta cuando dormitas, para

que en el momento de soñar, el rápidamente atrape tu sueño y lo

lleve volando al lugar donde el sueño germine, se desarrolle, crez-

ca y madure, ese lugar es el bosque de los árboles mágicos, que se

encuentra en el mundo de los sueños.

Saber donde ir cuando eres un sueño, es caminar hacia tu

espacio natural donde vivir es soñar.

Si lo puedes creer, lo puedes mirar y si lo puedes mirar los

puedes crear, acostumbrado a mirar mundos reales, uno va olvi-

dando esos mundos llenos de vida, aventuras, risas, disfrute, gozo,

ritmo, canto, juego y música.

Alejándose entre el sendero del espacio mágico que le da

sentido a tu mirada, a tu sentir, a tu intuición, a tus sentidos, a tu

magia, a tus sueños. Optamos siempre por las mismas miradas que

son compartidas por todos. Las mismas respuestas a las mismas

preguntas, donde nada cambia donde el color con que se matiza la

vida es el mismo que todos miran.

Recuerdas cuando un haz de luz cruzaba por algún orificio

del techo de tu casa, y te encantaba observar como el polvo danza-

ba en medio de ese haz de luz, automagiamente creabas un mundo,

donde ese polvo se transformaba en seres diminutos que viajaban

por el universo en busca de su alimento.

Crear esos mundos, nos sincronizaba con nuestro ser el cuál

era capaz de vivir, la magia de esa interacción al encantarse de ese

polvo de estrellas.

Cómo hacedor de mundos, somos mentores y al mismo

tiempo habitantes de esos mundos, lo curioso que todos esos mun-

dos están aquí en este. Un mentor debe ser capaz de hechizar con

sus palabras mágicas a esos seres que los escuchamos y que es ca-

paz de transportarnos a ese mundo, contagiándonos de ese sentido,

de esa magia, de ese sueño, de esa vida.

Un mentor nos muestra esos mundos mágicos donde la vida

se vuelve sueño y el despertar es el vivir. Soñando despierto, des-

pierto soñando.

152


El lugar de los sueños



Un día un hombre se despertó con una rara sensación de

haber dormido demasiado, así es que se dispuso a salir a respirar

profundamente el aire del último suspiro del invierno. Al abrir la

puerta se dio cuenta que aun no amanecía, y se pregunto ¿increíble

siento que he dormido demasiado, que pasa?

Al mirar al cielo, descubrió el cielo inundado de estrellas, al

quedarse observando el firmamento, vio una nube de estrellas, la

contemplo por tanto tiempo que de repente sintió como se elevaba

hacia el cielo, el en ese momento solo disfrutaba el momento de

ascensión, sin embargo cuando sintió que llegaba a la luna tuvo

miedo y miro hacia abajo, y al ver la tierra tan distante comenzó

a caer, a caída libre, cerró los ojos y .. "grito ahhh, grítese como el

coyote del corre caminos"

En la caída recordó que estaba durmiendo, y despertó de

su sueño.

Entonces al darse cuenta que se seguía en la cama dur-

miendo, sintió que había dormido demasiado, y se levanto, se dis-

puso a salir a respirar profundamente el aire del último suspiro del

invierno. Al abrir la puerta se dio cuenta que aun no amanecía, y se

pregunto ¿increíble siento que he dormido demasiado, que pa-

sa? Además creo que esto ya lo viví.

Al mirar al cielo, descubrió el cielo inundado de estrellas,

al quedarse observando el firmamento, vio una nube de estrellas,...

y volvió a decir, esto ya lo conozco pero recuerdo que venía cayen-

do desde la luna, fue entonces... que regreso a la caída libre, y grito

ahhh de nuevo" pero esta vez no cerró los ojos, esta vez abrió sus

ojos y extendió los brazos y comenzó a disfrutar la caída, el aire

comenzó a elevarlo por las nubes, estaba disfrutando tanto que no

se dio cuenta, que estaba sobre el mar, fue entonces que al mirar

hacia abajo, miro el mar profundo y comenzó a caer, y cerró los

ojos y .. "grito ahhh, grítese como el coyote del corre caminos"

En la caída recordó que estaba durmiendo, y ... Despertó

de su sueño.

Entonces al darse cuenta que se seguía en la cama dur-

miendo, sintió que había dormido demasiado, y se levanto, se dis-

puso a salir a respirar profundamente el aire del último suspiro del

invierno. Al abrir la puerta se dio cuenta que aun no amanecía, y se

pregunto ¿increíble siento que he dormido demasiado, ¿qué pa-

sa? Además creo que esto ya lo viví.

Al mirar al cielo, descubrió el cielo inundado de estrellas,

al quedarse observando el firmamento, vio una nube de estrellas,...

y volvió a decir, esto ya lo conozco pero recuerdo que estaba via-

jando por las nubes y al mirar al mar, me dio miedo y comencé a

caer, fue entonces... que regreso a la caída libre, y grito ahhh de

nuevo", esta vez abrió los brazos y se inclino para entrar al agua, el

disfruto la entrada al mar, y comenzó a sentir su frescura, su color

azul profundo, su aroma a sal salada, su sonido de arpa tropical, su

sabor a manzana mediterránea y su emoción de una inmensa alegr-

ía y confianza, fue entonces que en medio de esa profunda sincron-

ía, escucho.

— Papá date prisa, el semáforo cambio a verde y necesito

llegar a la escuela.

El mundo mágico de los sueños: El lugar donde la vida se vuelve sueño 153



— El Papá, fue cuando de repente se dio cuenta que solo

había parpadeado, y en ese parpadeo viajo al espacio infinito de los

sueños, su conexión con sus sueños fue tan profunda, que solo bas-

to cerrar los ojos y fue entonces... que regreso a la caída libre, y

grito ahhh de nuevo"..

Ahora el que sueñas eres tú y estoy en tu sueño así es que

agárrate que esto es una caída libre, así es disfruta la vida, porque

es la vida, si no un sueño continuo...ahora estas en mi mundo, el

mundo de los sueños.

Esa es mi búsqueda, la del estado de ensueño continuo, el

lado activo del infinito, el satori, el mundo del mago, ahora tus

sueños son parte del árbol de los sueños.


Son las seis de la mañana de un día lluvioso, a fuera de la ventana

las gotas suenan contra el cristal, el agua a comenzado a filtrarse

por entre los espacios. La luz del día comienza a escurrirse por las

pareces como unas guías de una planta trepadora. Al mirar a mi

lado Ivette, mi esposa respira profundamente todavía dormida. Mi

hija Kate aun duerme profundamente en su recamará, siento escu-

char su respiración. De repente un grito ensordecedor me despierta

de este letargo.

— ¡Papá, papá, mira, mira, ese arcoíris

Mi hijo, quique, me observaba en mis meditaciones, y de un

salto, estaba sobre mi y tomándome con sus manitas mi rostro me

hizo voltear a ver el arcoíris, — ¡mira papá, allí está, míralo, no es

fantástico!

Mientras yo me preguntaba, — ¿será que aun sigo soñando,

o será que ya desperté?— al ver a mi esposa, a mi hija y a mi hijo

cerca de mí, pensaba que estaba soñando. Pero al ver a ese arcoíris

formarse en la ventana y a mi hijo gritar, —¡mira papá, allí está,

míralo, no es fantástico!— supe que mi sueño era real.

Si soñar despierto es estar vivo, entonces quiero estar vivo

para despertar soñando.

Son las once con quince de la noche de un tres de mayo aun,

estoy frente a la computadora escribiendo lo que he soñado, escu-

cho azotar una puerta de la casa de junto, unos perros ladrar alrede-

dor de la casa. Mi hijo Quique después de haber pintado, recorta-

do, cantado, y volar en su columpio está profundamente dormido.

154




Ivette después de un cereal que baje a prepararle con un poco de

leche se encuentra viendo unos programas de televisión que repi-

ten después de diez años, que justo le decía que vamos a tener diez

años de casados, y sonreímos, la deje recostada mientras iba con

mi hija Kate a su recamará, ya que eran casi las once y no podía

dormir.

Aquí es donde comienza esta historia, porque es la vida, sino

historias que contar, pero ojo, por que su protagonista es un soña-

dor.

Mi hija estaba viendo en la televisión un película donde la

trama era acerca de una adolescente que tenía un diario y en el da-

ba vida a unos personajes que eran sus amigos y compañeros de

escuela, pero lo hacía de una manera que se burlaba de ellos, ella

es descubierta y el diario lo llegan a conocer todos. Kate me decía

que no podía dormir, me decía — ¿quédate papá a dormir conmi-

go?— y le pregunte —¿tienes miedo a dormir hija?—, y ella me

respondió que sí. Fue entonces que yo recordé que a excepción de

un sueño recurrente cuando niño, de soñar con la bruja del cuento

de blanca nieves, cuya ilustración venía dibujada en una caja de

colores de la primaria, esa era mi pesadilla recurrente. Mientras

todos mis sueños eran sueños realmente que me gustaba estar y

vivir en ellos. Ahora que escribo esto, no sé si aun sigo estando en

uno de esos sueños y tú como parte de este sueño.

Le comentaba a mi hija, que mis sueños eran no muy fantásti-

cos pero si algo mas ordinarios y cotidianos pero que me hacían soñar.

Mi niñez estuvo llena de carencias materiales, pero estuvo superada

por el amor de mis padres y hermanos y el cobijo de mis abuelos.

Mis sueños eran muy simples y sencillos, como el de tener

unos zapatos nuevos, de estrenar un pantalón, de ponerme una ca-

misa nueva, de tener un perro y una bicicleta. Eso me hacia su-

mergirme en la emoción de vestirme en el sueño y jugar con mi

perro. Cuando despertaba, sonriendo casi siempre por la emoción.

Otras veces en mis sueños, disoñaba formas diferentes de jugar

futbol, beisbol y otros juegos, tanto que me divertía mucho jugan-

do en el sueño, que cuando despertaba no aguantaba ver a mis ami-

gos para comenzar a practicar esas formas de jugar.

Cuando niño, siempre me gustaba acostarme en el pasto bo-

ca arriba para mirar las nubes, mientras el viento hacia figuras y se

divertía. Observando el viento me quedaba dormido mientras soña-

ba como subía sobre esas nubes y pensaba como se vería la gente

desde arriba.

No sé si aun estoy sobre el pasto, con los ojos cerrados, o

sigo escribiendo, el tiempo me trajo de regreso son las once cua-

renta y sigo atado a este cuerpo, a este espacio y este tiempo.

En este momento Ivette, Kate y Quique ya están dormidos,

yo mientras ellos descansan te contaré que he descubierto, después

de muchas horas de lectura y de muchos días de tratar de encontrar

una forma de explicarte lo que me ha traído hasta aquí, mi tema:

sueños, magia y virtualidad. Quiero decirte que lo que he encontra-

do me llena de emoción y alegría, lo que he estado buscando por

muchos años por fin tengo una pista de ello. Y digo una pista por

que siento que esto seguirá creciendo como ese universo en expan-

sión, como esa vida que se manifiesta y como ese infinito de

energía que se manifiesta en cada momento.

Quiero decirte que me di cuenta, que adonde valla, a donde

este, esto que experimento seguirá su ritmo y movimiento. Se

mueve como la mariposa azul en un sueño, rápida, fugaz, alegre,

vivaracha, resonante, sincrónica y mágica. En ese sentido sigue su




flujo de energía libre y suspirante. La cual cuando estoy a punto de

tocarla y tomarla, me siento tan extasiado llegando que pierdo el

sentido del tiempo y del espacio, y de nuevo vuela. Es una pachan-

ga esto, una locura, una chifladura tratar de atraparla, ya que siem-

pre se transforma en un sueño fantástico y agradable. Donde conti-

nuar es siempre la opción, ya que en cada vuelo su transformación

me lleva a mundos y espacios nunca vistos pero ya visitados, que

cuando me encuentro en ellos, es como entrar en un estado de rap-

to, ya que surge el encantamiento de seguir explorando esos mun-

dos, esos personajes, esas historias y de no parar de leer y de en-

magiar mi vida.

En esos viajes de descubrimiento tomo tantas notas, que no

sé que voy a hacer con ellas, es vivir en esos mundos visitados e ir

de la mano de nuestro mentor de sueños, el cual nos guía y nos

acompaña en cada viaje de descubrimiento.

Son ya las once con cincuenta y siete, se escucha el motor

de un auto, y una música tocar, es domingo y alguien tiene fiesta,

mientras los perros a lo lejos ladran y el tic tac de un reloj, no deja

de marcar el tiempo, me duele la espalda, me voy a levantar un

momento, no sin antes decirte que llegar hasta aquí, ha sido una

travesía, la cual te contaré en las siguientes líneas, claro antes te

contaré mi último descubrimiento es sobre la pauta de Bateson, la

que conecta al cangrejo con el esquizofrénico que llevamos dentro.

Este camino no comenzó desde mi niñez acostado sobre el

pasto al mirar el cielo y descubrir que las nubes se movían y pre-

guntarme —¿si podía se puede viajar sobre de ellas?—, eso me

llevó a volar en un avión. Un sueño recurrente donde perseguía

una mariposa azul, ese sueño me llevo a Costa Rica, a vivir mi sue-

ño.

Unas pregunta preguntas de unos sueños son las siguientes:

¿Quién es esa niña que aparece en mi sueño? ¿Quién es esa mujer

que comparte su vida conmigo? ¿Quién es ese niño que cada día se

disfraza de un superhéroe?, quiero decirte que estas preguntas me

las hice muchos años atrás, antes de tener a mi familia en mis sue-

ños, yo ya los había visto.

Dando clase me di cuenta que los jóvenes de ahora, no hay

algo que les interese, les encante, les enmagie, les apasione y los

haga soñar mientras aprenden. La falta de sentido de sus estudios

los hace estar sin estar, y solo ser alguien porque alguien se los di-

ce y no por ellos mismos, están desmotivados, atrapados en un es-

quema mental que los mantiene apáticos. Mis pregunta s fueron:

— ¿cuál es la pauta que conecta a su problema con su vida?

— ¿a qué se debe esa falta de sentido?

— ¿Cómo transformar ese ser para que viva su aprendizaje con

sentido?

Estas preguntas me llevaron a descubrir que hay un paradig-

ma que hace clones en vez de seres únicos y auténticos, donde la

falta de legitimación y respeto los hace perderse en ese sin sentido.

Y mi pregunta fue:

— ¿Qué estrategias de búsqueda de vida serán las que lleven

a transformarles?.

Mientras tanto en este camino mi mentor de sueños se mantenía

alerta a mi sueño de vida. Francisco Gutiérrez lo considero mi mentor de

sueños, un mentor de sueños es aquel ser que nos conoce, nos percibe,

siente, presiente, intuye y guía en nuestros sueños. El en mi proceso se dio

cuenta de algo y me lo planteo, su planteamiento fue: — ¿se puede soñar

despierto?— Sé que para muchos esta pregunta es muy común y la res-

puesta sería, claro que se puede, ahora la pregunta sería.

156




¿Si se puede soñar despierto, como se puede hacer?.

Quiero decirles que hacer la conexión entre sueños, magia y

virtualidad, con la pregunta ¿se puede soñar despierto?, con la in-

tención de descubrir la pauta que conecta a los alumnos con su

sentido de aprendizaje, en las estrategias de vida en la virtualidad.

Fue un camino muy complejo, muy cansado, muy apasionante,

mágico y de sueños. Que me trae hasta este descubrimiento claro

para mí en esta búsqueda, no quiero decir que sean los únicos ca-

minos, o la verdad, si no que es una posibilidad más en un mundo

infinito de posibilidades.

Descubrí que mi búsqueda se resume en la fe. La fe como el

metadato que concentra la manera de percibir el mundo virtual que

vivimos y que hace posible crear y creer el mundo real que soña-

mos. Los esquemas mentales que se manifiestan en la construcción

de la realidad vista desde el espejo.

La fe como la forma de liberar ese ser atrapad en su forma su

ser, sentir y vivir.

Son las doce cuarenta y siete, voy a dormir.

Pasionaria para despertar

¿Cuál es la dosis de pasionaria para la vida? Y ¿Cómo recuperar el

proceso de sorprendizaje?, estas preguntas emergieron al escuchar

la exposición de un compañero de trabajo sobre ansiolíticos, y le

preguntaba —¿Qué pasaría si les diera eso a mis alumnos en clase?

— Y me respondió que depende el uso, ya que los pondría mas

despiertos por que los sacaría de su depresión, pero — ¿y después

que harías con ellos en clase?— todos atentos y despiertos.

Ese es el verdadero reto de la educación, despertar el

interés y la pasión de las vidas que tocamos como educado-

res, imagínate una explosión de creatividad en una comuni-

dad de seres aprendientes, tu como guía de su viaje de des-

cubrimiento. Pero no con químicos si no descubriendo su

magia interna a través de la reconexión con su ser virtual a

través de sus sueños.

En clase e intentado algunas actividades que me han asom-

brado y nos hemos asombrado mutuamente, entrando en una fre-

cuencia de sorprendizaje continuo, y eso créanme es mas que dar-

les dosis de pasionaria. Ahora antes de iniciar cualquier curso de-

dico mas sesiones para conocernos y reconocernos como seres

aprendientes, en este reconocer hemos aprendido a saber quienes

somos, como aprendemos, reconocer nuestros sentidos, compren-

demos nuestra realidad, nos acercarnos a la creatividad grupal

construyendo puentes al conocimiento, entrando en un nivel del

resonancia mórfica en clase.

Crear un espacio de aprendizaje diferentes a los cotidianos,

como mentor tenemos que crear los mundos que los aprendices




deben recrear es un desafío para una educación cuadrada, y en-

marcada en un currículo.

La actividades de hacer autos, mapas mentales, resignificar

los sentidos, el cuento virtual, hasta resolución de juegos virtuales,

esto no tiene nada de extraordinario, lo que si fue asombroso fue

cuando de manera emergente les comencé a decirles ocho números

al azar, acto seguido les pedí que los anotaran en sus cuadernos de

aprendizaje, en ese momento no me percate que uno de mis quince

alumnos había salido, fue entonces que les pedí que cada uno dije-

ra un numero en voz alta a la clase, del uno al cien, sin dar tiempo

les pedí a todos que anotaran los números que recordaran, cuando

el alumno que había salido entro, en eso recordé lo de la resonan-

cia mórfica de Sheldrake y me dije:

¿Será que el alumno que salió este en la misma frecuencia que

pueda recordar o aprender de esa memoria evolutiva?

Entonces que le digo, —¿podrías escribir en tu cuaderno ca-

torce números al azar del uno al cien sin repetirlos, y la clase se me

quedo mirando, y les comente esperen en un momento les explico.

Y el suspenso entro en la clase. Le pedí a mi alumno que dijera sus

catorce números y que levantaran la mano sus compañeros si decía

el numero que habían dicho cuando el había salido, lo que siguió

después no lo podíamos creer, fue un sorprendizaje colectivo, ya

que él fue capaz de repetir casi la tercera parte de los números de

todos, fue asombroso.

Emergió otra pregunta —¿y si metemos a otro alumno que

no fuera de la clase y que no este contagiado, será que sucederá lo

mismo?— entro el alumno externo a clase, le pedimos que escri-

biera sus catorce números al azar del uno al cien y ¿adivinen que

ocurrió?, ¿adivinan?

Resulta que le dimos las gracias y salió de la clase, teníamos

sus catorce números, y los comencé a decir a la clase y fue algo

interesante le atino a una cuarta parte de los números, y les expli-

que que lo que había sucedido se conocía como resonancia mórfi-

ca. El explicarme a mi mismo lo que había ocurrido y a mis alum-

nos nos dejo ¡asombrados!, y bueno dando vueltas como trompos

chilladores por que descubrimos la resonancia mórfica o aprendi-

zaje por frecuencias en clase, fue genial.

Eso que ocurrió creo que son las dosis de pasionaria en clase el

atrapar sus sentidos y crear un ambiente de aprendizaje colectivo.

A un niño le daría alas, pero le dejaría que él solo apren-

diese a volar. A los viejos les enseñaría que la muerte no

llega con la vejez, sino con el olvido. Tantas cosas he

aprendido de ustedes, los hombres... He aprendido que to-

do el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber

que la verdadera felicidad está en la forma de subir la es-

carpada. García Márquez

Quizás con este trozo de poema no necesite respuesta mis pregun-

tas, ahora como enmagiar mi vida para aprender viviendo en la

magia.

158




La magia de la vida

Acto 1

Me levanto con sueño, y camino a buscar una silla para sen-

tarme y terminar de despertar

Acto 2

Se escucha una voz en la recamara, es mi hijo que grita

¿dónde estas Mamá?, de manera insistente

Acto 3

Voy a verlo ya que su Mamá no se encuentra, y el me dice

¿Mamá fue a trabajar?

Acto 4

Lo cargo y lo saco de su cuna, con un gran abrazo...

Ese simple acto de soñar, despertar, escuchar, gritar, insistir, comu-

nicar, abrazar, abrazar, ese amigos es el mejor acto de magia de la

vida.

La Magia de un sueño nos predice la vida.

La vida es un acto de soñar despierto.

Si despierto y estoy soñando

Será que aun sigo soñando

Soñando despierto y despierto soñando

Anhelo, transformación, unidad y armonía

Grof menciona en su libro La mente holotrópica, un médico al

experimentar un estado alterado de conciencia y reconocerse de-

ntro del vientre de una madre como feto, llego a esta reflexión :

El anhelo de un estado de satisfacción total, como el que

puede experimentarse en un buen útero o en un rapto de

éxtasis místico, por ejemplo, parece ser la fuerza motivadora

última de todo ser humano. … El único camino para satis-

facer ese anhelo es el de volver a conectarnos con esa faceta

de nuestro inconsciente. Comprendió entonces súbitamente

el mensaje de tantos maestros espirituales de que la única

revolución posible consiste en la transformación interior

de cada ser humano.

Mientras revivía los recuerdos positivos de su existen-

cia fetal experimentó una sensación de unidad con todo el

universo... Perdió la sensación de individualidad, su ego se

disolvió y se transformó en todo lo existente… Se convirtió

en pez nadando entre aguas cristalinas, fue mariposa revo-

loteando sobre las laderas de las montañas, se transformó

en gaviota precipitándose sobre la superficie del océano.

Fue océano, animal, planta, nube y, a veces, lo fue todo al

mismo tiempo.

Luego no sucedió nada concreto, sólo una sensación de

unidad con la naturaleza y el universo bañado en una luz do-

rada cuya intensidad se amortiguaba lentamente. La experien-

cia finalizó y regresó de mala gana a su estado habitual de con-

ciencia. Mientras esto ocurría, sentía que acababa de atravesar

una experiencia trascendente y que jamás volvería a ser el mis-

mo. La armonía y la aceptación era total y tenía una visión glo-

bal indescriptible de la existencia.




Es curioso pero la transformación interior de cada ser huma-

no, parece ser una de las respuestas, sin embargo estas respuestas

llevan a un orden implicado que tiene que ver con nuestra percep-

ción de la vida y del rol de genero, ese que llevamos con nosotros

como parte de nuestra experiencia de vida en la cotidianidad.

¿Donde estas?

Ayer viendo una película llamada El octavo día, surgió una re-

flexión sobre el aprender a vivir con sentido. Los protagonistas de

esta película son dos hombres, uno con síndrome de Down que

vive en un instituto para deficientes mentales y el otro un ejecutivo

de una compañía el cual se dedica a dar pláticas para motivar a

vendedores.

Uno dentro de su mundo viviendo a su manera, libre y flui-

da, decidiendo que hacer en el momento que esta viviendo, y el

otro dentro de su mundo viviendo a la manera del sistema, atado a

los estereotipos, formas y maneras de vivir de un ejecutivo, atrapa-

do en su sentir, pensar, afectos y siguiendo el ritmo del sistema.

Uno con mucho amor que dar y recibir y el otro con mucho amor

que quería dar y no podía recibir.

Una vez el ejecutivo al llegar a su casa, ve que ya no están

sus hijas y su esposa. Se da cuenta que su vida esta en problemas,

donde el sistema económico y social lo han dejado sin familia. El

hombre de negocios sigue un modelo mental de comportamiento

en el apego y atado a su ritmo de vida, de levantarse a la misma

hora, de desayunar lo mismo, de sonreír frente al espejo, de escu-

char el mismo noticiero, de hacer los mismos rituales para no salir-

se de su circulo vicioso, él se ve convertido en un ser mas del siste-

ma, reproduciendo los mismos patrones sociales y culturales.

Dentro de esa deflexión de llegar a su casa y no encontrar a

su familia, entra en crisis y mientras llora, y se desapega del status

quo de hombre de negocios y establece una conexión con el ser

humano que vive, siente, huele, escucha, llora, se emociona y dis-

fruta ser.

Hay una escena en la cual el hombre comienza a ver cual

fue el problema con su familia, ya que su esposa y sus dos hijas, se

habían ido de su casa, dentro de su reflexión, aparece su esposa en

una esquina de su casa con el siguiente dialogo.

Harry: Siempre he hecho lo que se esperaba de mí. Estoy

cansado.

No podías irte así sin decirme nada.

Debías decirme por qué.

No sé por qué.

¡Julie!.

Te aseguro que si supiera lo que va mal...,

Te lo diría pero...

No lo sé.

Julie: No es culpa tuya, soy yo...

Tengo miedo de que...

que mi vida sea nada más que esto.

Harry: ¿esto, qué?

Julie: Esto. Necesito saber. Quién soy. Yo.

160




Harry: Pero tú eres tú. Debes creer en ti...

Julie: No uses tu sistema conmigo, Harry.

Es tu sistema de venta.

Te has convertido en tu sistema de tanto usarlo.

Te has convertido realmente en eso.

Después de ver esa escena me pregunto, ¿Por que tiene mie-

do su mujer de ser, más que esto? ¿Hay algún sentido de aprender

de la vida? ¿Cuál es ese sistema en el que te conviertes? ¿Por qué

un hombre con síndrome de Down vive libre y fluido y el hombre

de negocios vive atrapado en un estereotipo? ¿Qué aprendí de ver

este pasaje de la vida?.

Esto, será la vida sistemática que no te da opción de vivir,

libre, con la emoción, la esperanza, la valentía y la fe de ser, sentir

y vivir. Y te mantiene atrapado en el sin sentido, acumulando pose-

siones y títulos, para ser alguien en el sistema. O creas o te crean.

La mesa de los mundos posibles

Mi intencionalidad busca fomentar los cambios y formación de la

ecología profunda a nivel de la conciencia, con la magia de vivir,

misma que es solo un pequeño impulso para llegar a una ciudadan-

ía ambiental, esperando de esperanza, rescatar los procesos cotidia-

nos en la magia de vivir, recuperando nuestros sueños, magia y

virtualidad.

He ido en donde la mariposa Azul, donde un sueño de perse-

guir una mariposa con mi cámara, me llevo en donde estaba el sue-

ño. Donde el mago aparece y le da vida a los espacios, y el espa-

cio es el mundo donde existe, en la vida de los sueños y en los sue-

ños de la vida, dice la canción de coincidencias.

Soy vecino de este mundo por un rato

y hoy coincide que también tu estas aquí

coincidencias tan extrañas de la vida

tanto siglos, tantos mundos, tanto espacio y coincidir.

Si navego con la mente en los espacios

o si quiero a mis ancestros recordar

agobiado me detengo y lo imagino

tantos siglos, tantos mundos, tanto espacio y coincidir .

Si en la noche me entretengo en las estrellas

y capturo la que empieza a florecer

la sostengo entre las manos mas me alarma

tantos siglos, tantos mundos, tanto espacio y coincidir.


La mesa de los mundos educativos posibles


Si la vida se sostiene por instantes

y un instante es el momento de existir

si tu vida es otro instante no comprendo

tantos siglos, tantos mundos, tanto espacio y coincidir.

Coincidencias, no lo sé, estoy mas que enmagiado de ser,

sentir, estar y vivir en los sueños reales es decir en las coinciden-

cias del arte de ensoñar. Ensoñar es el arte de vivir tus sueños, es

decir donde la realidad es el sueño y el sueño es la realidad, fantás-

tico en verdad. Coincidencias, presencias, constancia, persistencia,

ignorancia y paciencia tienen la misma coincidencia, la vida. Y si

la vida se mantiene por instantes, y un instante es un momento de

vivir... entonces vivir el instante es la coincidencia de la vida, en el

instante que quieres, deseas, sueñas, ensueñas y estas en el vivir.

El vivir esta experiencia de viajar a Costa Rica, fue fantásti-

ca, es una experiencia que rejuvenece el espíritu, es una en-amor-

arte, es una seducción a los sentidos, es una respuesta a la atracción

de tus sueños. En ese lugar conocí La mesa de las coincidencias,

donde se disoñan los mundos educativos posibles, un lugar mági-

co donde se disoñan los sueños, es un lugar en el cual entras en un

estado de creación.

Imagínate en ella se sientan a comer seres fantásticos como

Boff, Assman, Hinkelammert por nombrar algunos. Además se

sirven comidas exquisitas que se degustan con un rico Té verde, en

esa mesa llegan toda clase de artistas, pintores, escritores, poetas,

fotógrafos por mencionar, donde el arte es parte del conocer y re-

conocer, esa mesa es real y cuando viajes a Costa Rica, tienes que

sentarte allí por que es mágica. Te doy una pista para que sepas de

que mesa hablo, es la mesa de unos magos de la vida, Francisco y

Cruz.

Sheldrake menciona en su libro De perros que saben que sus amos

están camino a casa, pp 345

Los medios por los cuales la información o un modelo-

actividad se transfiere de un sistema anterior a otro posterior

del mismo tipo se denomina resonancia mórfica.

La resonancia mórfica implica la influencia de lo se-

mejante sobre lo semejante, la influencia de los modelos de

actividad sobre los modelos de actividad subsiguientes, —

creatividad evolutiva, campo mórfico— influencia que se

transmite a través del espacio y del tiempo. Las cuales no se

debilitan con la distancia y el tiempo, pero que solo provie-

nen del pasado y no del futuro.

Cuanto mayor sea la semejanza, mayor será la influen-

cia. Esto es la base de la memoria inherente a los campos en

todos los niveles de complejidad.

162


La mesa de los mundos educativos posibles


Virtualidad: acto mágico que le da existencia al ser.

Mirando a un jardinero con tanto empeño limpiar sus plantas,

aterrar otras, podar algunas rosas y arboles, cortar unas frutas,

recoger algunas verduras, y comerse un rico zapote mamey. Me

preguntaba —¿qué es aquello que el jardinero cultiva? ¿Son

sus plantas, son sus frutas, son sus verduras, son sus sueños, es

el campo de posibilidades, es su vida, es su virtualidad?.

Todos y cada uno de esos actos que alimentan su vida,

cada paso sincrónico con su ser, al hacer, cada contacto, cada

relación, cada interacción, cada respiro, cada frecuencia. Todos

ellos y uno a la vez, hacen que su existencia de lugar a su ser,

como ese acto mágico que hace posible que el, sea el. Su vir-

tualidad.

Nota: virtualidad, vacio, espacio, campo de posibilidades, vida,

sueños, esencia, presencia, arte, niñez, desaparición, imagina-

ción, el rizoma, el sueño de el ser, legitimar, aparecer, sentido,

existencia, aprendizaje, soñar despierto es aparecer nuestra vir-

tualidad, con todo lo que somos interiormente. Despertar nues-

tro mago interno

163


El acto mágico que le da existencia al ser

— ¿La virtualidad es entonces la aparición del ser en su vi-

da?

— ¿no es que desde el momento que vive ya existe?

— ¿si ya existe porque tiene que aparecer?

— ¿será que el ser esta desaparecido?

— ¿Por qué esta desaparece?

Acostumbrados a no estar, desaparecemos, nos volvemos

invisibles, pasamos desapercibidos para los demás, tanto tiem-

po que de repente hasta para nosotros mismos.

La virtualidad es como el acto mágico de hacer posible tu ser

en el espacio de vida, es decir descubrir el sentido para lo cual rea-

lizas cada acto es unir en ese instante tu ser con tu hacer. Es apare-

cer como el creador de sueños, magia y virtualidades. Por que no

hay una sola virtualidad, ella en si misma encierra posibilidades de

infinitas virtualidades, o virtualidades infinitas.

Cada virtualidad es un mundo, es un espacio de creación,

de ser, de estar, de soñar y de hacer posible un acto de vida.

Como el jardinero no existiría sin jardín, dentro de ese

espacio es el ser que hace posible que las plantas crezcan, las

cuida, las alimenta, les da agua, les da amor, les da ternura, les

habla, les canta, entra en sintonía con su espacio, haciendo po-

sible un acto natural de magia.

El jardín sin un jardinero, no sería su jardín, sería un es-

pacio más sin interacción, sin emoción, sin una esencia que le

diera presencia a su cuidador, su hacedor de sueños, su alimen-

to, la vida del jardín.

Hacernos presentes en el acto de crear, hace posible que

la energía se despliegue por los mares de incertidumbre y que el

mundo en el que habitamos se expanda como el universo en el

vacio de posibilidades.

Nuestra esencia en cada acto es fundamental para que es-

te se impregne de nuestro interior, conciencia, alma y espíritu.

Este contacto hace que el espacio tenga su propia vida.

Imagina a un niño en un juego, sin su esencia, solo con su

presencia, solo se limitaría a patear la pelota, sin sentido e ima-

ginación. Ahora míralo con toda su esencia en el mismo juego,

encarnando a sus sueños en cada golpe de la pelota, corriendo

como el jugador de pelota que es, con todo su ser dándole vida

a la pelota, disfrutando el instante, gritando corriendo y siendo

uno con su pelota, siendo el juego.

Imagina a un escultor, esculpiendo con técnica su escultu-

ra, impecable, perfecta pero sin esencia. Ahora imagina a un

artista esculpiendo la misma pieza, dándole forma a esas líneas

rectas, fundiéndose en su obra, plasmándole su pasión, su emo-

ción, su sueño, su magia, su ser.

Esa obra tendría su virtualidad que le dará la esencia de

su ser. Donde el ser artista es ir mas allá de la presencia y apa-

recer en el acto mismo de crear y creer en su obra, ser siendo su

obra. Siendo virtual.

Donde la virtualidad es el acto mágico que le da existen-

cia a su ser.

164




La magia y la virtualidad

Al mirar, solo vemos pero no miramos

Al oler, solo olfateamos pero no sentimos

Al tocar, solo ponemos limites pero no palpamos

Al probar, solo tragamos pero no degustamos

Al escuchar, solo oímos sonidos pero no escuchamos de

mirar, de oler, de tocar, de degustar, de escuchar con el

oído medio.

La virtualidad, es esa dimensión de encuentro, que es mágica

porque sólo sabiéndolo te das cuenta de la capacidad de asom-

bro, de amor, de ternura y de encuentro con tu ser interno, ese

que alimenta tu espíritu, tus sueños, tu pasión, tu intuición… tu

magia.

Vivimos una vida tan acelerada que solo nos daremos

cuenta del monje que camina a nuestro lado cuando nos deten-

gamos un instante y observemos la vida tal cual es, simple y

sencilla. La virtualidad está vinculada al contacto con esa vida,

esa es la relacionalidad del ser en la vida, mientras no toques la

vida ella no te tocará a ti, tu relacionalidad solo se limitará al

contacto tanto interno como externo, un ser autopoietico es un

ser relacional.

¿Dónde está tu virtualidad? Esta es una pregunta funda-

mental, tal vez creas que se encuentra en algún lugar en el cibe-

respacio en tu cuenta de correo electrónico, o guardada en una

agenda de un teléfono celular, o en una cinta de vídeo o de au-

dio, o tal vez en un libro. Esos son solo reflejos de tu virtuali-

dad, de tu contacto con la vida, y que las hace presentes cuando

te expresas.

La virtualidad en este sentido es lo que creas y recreas,

son tus valores, tus emociones, tus sensaciones, son tus sueños,

es tu magia, tu vivir, es la totalidad, así como la mariposa azul,

tu virtualidad es todo y nada a la vez. Es ese yo virtual que se

manifiesta en nuestra relación con la realidad.

¿Y qué tiene que ver la magia con la virtualidad? La

magia de manera simple, es la entrada a ese portal de encuen-

tro. Es la que amplifica y transforma tu ser cuando le das senti-

do y significado a la vida. La magia es significar y ver en el

vacío la posibilidad de ser y crear. Es ser y existir en el contac-

to.

¿Cómo llegue a estas reflexiones?

Empezamos por preguntarnos por el universo

Avanzamos al cosmos

Llegamos a la vida

Buscamos en el ser

Encontramos el vacío

Preguntamos por la relacionalidad

Nos encontramos con la espiritualidad

Tratamos de entender la trama de la vida en la interacción

Encontramos un contraespacio

Sentimos la realidad

Encontramos al aprendizaje

Y preguntamos de nuevo por todo


165

La magia y la virtualidad


Un proceso necesario

El proceso de autoorganización lo veo no como un proceso

más, si no como un proceso necesario para cualquier actividad

del ser humano, tomando la idea de Krishnamurti del proceso

de pensamiento, creo que es una de las piezas fundamentales

para que esto ocurra, unido a la creatividad, sincronicidad, fre-

cuencia, sintonía y armonía del Arte.

El holismo al hablar de espiritualidad en la totalidad del

proceso, nos permite ver como el paradigma holográfico, todo

unido a todo.

La contemplación te eleva a ver más allá de tu realidad, y

ver los detalles hermosos de la vida, en una nube, en una flor,

en una hoja, en el vuelo de las aves, en el canto de una madre,

en el brillo del sol, en un amanecer o atardecer, en la vida.

La paciencia te hace ser la liebre del cuento, pero para

disfrutar el arte de vivir debes ser la tortuga y ser consistente,

flexible y paciente.

La sensibilidad, la esencia de la pintura y el arte esta en la

sensibilidad y en la emoción que pones cuando pintas y realizas

cualquier actividad artística, ya que ella es capas de emitir

energía y frecuencias que serán resonancia hacia las personas

que disfrutan tu obra.

El arte es para disfrutarlo toma su tiempo realizar las co-

sas, que no por querer comerse el pastel mas rápido sabe mejor.

El asombro, al asombrarme como niño de las cosas, hoy

hemos perdido por completo nuestra capacidad de asombro,

solo recuperando al niño podemos recuperar el arte.

Al ver la vida de manera diferente, miro ahora el arte en

las cosas y las hago con esa intensidad, emoción, energía, estas

tendrán el toque del Arte.

Para que un acto de magia tenga el sentido de mágico debe de

ser creíble, sincrónico y resonante, es decir estar en sintonía y

armonía con el universo de tal manera que fluya, pero ojo, no

lo atrapes, por que es Mágico.

166




Me doy cuenta que la recursividad de las lecturas me han

llevado a reaprender en cada regreso a mi intencionalidad. En

ese acto recurso de mirar y sentir descubrí que la Magia se ma-

nifiesta con diferentes nombres a causa de tratar de nombrarla

se mimetiza cual gota de agua en un mar de incertidumbre, la

forma en la que ha aparece es un siempre cuando se esta a pun-

to de llegar, como recursividad, compasión, pedagogía de la

pregunta, enacción, autopoiesis, sincrodestino, un darse cuenta

y la transformación.

Dice Morin:

hay que despertar el amor por la materia que se enseña y

por la gente a quien se enseña…. es dentro de esta resu-

rrección trinitaria del amor, de la misión y de la fe que

uno podrá formar los ciudadanos del tercer milenio.

Sin los sentidos, sin intuición, pasión, sueños y sin magia

no hay aprendizaje multidimensional, es decir un aprendizaje

para la vida, donde la educación como dice Morin, sea un ele-

mento articulador del saber, que contextualice el conocimiento

y logre hacerlo pertinente, un saber estratégico que permita

afrontar las incertidumbres.

Esta manera de percibir el mundo desde mi intencionalidad

de buscar el acto mágico que da existencia al ser, es despertar a la

creatividad de la vida y hacer posible que la expresión de su virtua-

lidad de dirección a sus sueños. En este sentido mi intencionalidad

puede ser una contracorriente en la forma en que nos percibimos

alrededor del uso de la tecnología y la interacción los medios digi-

tales, ya que visto desde el paradigma actual de la educación vir-

tual, el ser humano tiende a desaparecer en medio del acto educati-

vo, solo repite, sigue instrucciones y reproduce el sistema, desapa-

reciendo así su creatividad, su inventiva, su inteligencia y su ser.

Esa contracorriente se manifiesta en la manera de pensar,

sentir, interactuar y vivir cada acto educativo en el uso de la

tecnología y en la interacción en medios electrónicos.

La manera que me he transformado cual enmagiamiento y

al mismo tiempo he sembrar la semilla en mis alumnos es im-

partir mis clases de una manera dinámica, diferente, provocati-

va, intencionada y creativa. Miro ahora con todos los sentidos

para encontrar un acto de magia en que cada momento de mi

vida..

Ahora he dejado mi cámara fotográfica y me dedicado a

disfrutar la vida, me he dejado encantar por la magia de los se-

res que me rodean. Ahora no espero mas bien busco, observo,

miro, siento, intuyo, me apasiono y la magia surge.


167



Mirando al futuro

Tuve un sueño, en ese sueño mostraba a mis alumnos sus pro-

yectos finales, y les decía que me gustaba trabajar con ellos,

porque era un grupo extraordinario, y que los felicitaba por su

esfuerzo y la manera que habían desarrollado su ensayo, en eso

estaba cuando desperté.

Ese día se me ocurrió la locura de hacer un ejercicio de

visualización, así es que me preparé, compre unos fólder y les

puse diez hojas en blanco. En el transcurso del día se me fue

ocurriendo que hacer, así es que al llegar a clase, les pedí que

tomaran cada uno un fólder. Todos se quedaron sorprendidos y

preguntaban que íbamos a hacer, un examen o algo. Les pedí

que hicieran lo que les pidiera que las preguntas las hacíamos

al final.

Les pedí pusieran su nombre al fólder, cerrarán los ojos,

y visualizaran lo siguiente: Imagínen que todos tienen un terre-

no de siete por quince metros en lo alto de una colina y detrás

de esa colina tienen unas montañas y un volcán, en ese terreno

van a construir la casa de sus sueños, así es que vean cuantos

cuartos, recamaras, baños, jardín, cocina y todo lo que ustedes

quieren y desean tener.

Después de esa visualizar la casa de sus sueñes, conté

diez para que abrieran los ojos, les pedí que tomaran una hoja

y dibujaran esa casa, les di un minuto para terminarla, así es

que comencé a contar sesenta segundos para que dibujaran. Lo

mágico y curioso, es ver el disoñar de seres, a veces apáticos,

desinteresados y faltos de creatividad, que muchas veces nos

quejamos, ahora tuvieran la oportunidad de darle existencia a

sus sueños, como ese abrir la ventana a la virtualidad y dejar

que entre como ese haz de sol por la mañana.

Llegue a los sesenta segundos y seguían haciendo trazos,

emocionados, como fuera de este mundo, entrando en sincronía

y armonía con su virtualidad, como permitiéndose ser, en un

espacio tan cerrado como un aula, y explorar sus sueños sin sa-

lirse de esta realidad educativa, soñar despiertos es la expre-

sión.

Extasiados en el mundo de los sueños, el elefante marrón,

iba y venia del árbol azul turquesa en busca de esos recuerdos

y trazos de dibujos sin terminar, era un disfrute como su men-

tor, mirar sus rostros mirar hacia dentro de ellos y dibujar lo

que se permitían mirar, sentir, disfrutar y ensoñar. Por un mo-

mento todos parecían niños de jardín de niños y al mismo tiem-

po unos ancianos llenos de jubilo, dibujando su vida. ¿ese será

el tiempo Kairos, fractal e infinito, el no tiempo? donde la co-

nexión directa con el universo, que te permite fundirte en ese

espacio vacío, donde el ser que lo llena eres tú.

Seguí contando, estaban como perdidos en ese mundo

que no se percataron llegué a trescientos segundos y seguían

dibujando. Lo que comenzó siendo un terreno de siete por quin-

ce, sobre una colina y al fondo una montaña, dibujando primero

un cuadro con divisiones al cabo del tiempo ya tenían jardín,

muebles, árboles, mascotas, niños y una mecedora, les tuve que

pedir que pararán y decirles que me daba mucha emoción y

gusto ver que eran unos soñadores, fue una experiencia increí-

ble.

Después de ese ejercicio, les pregunte:

168


Mirando al futuro


— ¿Quieren ir al futuro a ver lo que entregarían como

proyecto final?

Se miraron entre sí y con una expresión de asombro dije-

ron —¿Cómo?— y les dije, vamos a cerrar los ojos y voy a

contar diez cuando termine de contar ubíquense en la fecha y

la hora de entrega de su ensayo. Muy bien, ya estamos en la

fecha y la hora especifica, ahora mírense en ese escenario y sin

abrir los ojos, miren su fólder que tienen en las manos, ábranlo

y miren la portada.

— ¿Qué les parece?

— ¿Les gusta lo que están entregando, o no les gusta?

— ¿Qué le hace falta?

Ahora pasemos a ver la introducción, léanlo rápido. Pase-

mos al índice del trabajo, miren su contenido — ¿Qué les pare-

ce, se sienten contentos con lo que ven, que les faltó? — Ahora

veamos como desarrollaron su tema, mírenlo — ¿tiene coheren-

cia, contiene lo que ustedes querían? — Pasen a las referencias,

a la conclusión y a sus anexos.

Ahora volvemos a contar diez y vamos a regresar al aho-

ra, respiren profundamente, abran los ojos.

— ¿Qué les pareció ir a mirar el futuro?

Tienen una hora para plasmar lo que vieron en su proyec-

to final en las hojas en blanco.

El ejercicio de visualizar su ensayo en el futuro, fue muy

gratificante para mí y para mis alumnos, ya que nos dio la opor-

tunidad de direccionar nuestro sueño. Es decir sentir y vivir en

el futuro lo que ellos harían, los mantuvo en la atracción de lo

que ellos tenían que hacer.

Un alumno me dijo, cuando se llego el tiempo de entregar

el proyecto dentro de su reflexión. Maestro como le hizo para

que pudiéramos sacar fuerzas de no se donde para poder entre-

gar el ensayo, mi respuesta fue, ustedes fueron los que guiaron

su aprendizaje, yo solo fui el mentor de sus sueños.

A esta reflexión me surgieron las siguientes preguntas:

— ¿Es posible aprender a soñar para educar?

—¿Los sueños de los alumnos pueden ser las guías de la

educación?

—¿Puede un maestro disoñar los sueños de sus alumnos?

— ¿Se podrá ensoñar la educación?


169

El que busca ...


El que busca ...

El que busca encuentra y lo que encontré al explorar los sueños

y el genero fue genial, estoy mas que encantado, me doy cuen-

ta que soy co-creador de estas estructuras de pensamiento que

nos rigen y afectan nuestra forma de ser, sentir y vivir, y es el

acto de ser consiente el que nos puede transformar.

Aprender a disoñar nuestros sueños nos da la posibili-

dad de existir y hacer aparecer nuestra virtualidad en el

acto educativo, permitiéndonos soñar despiertos.

Me encuentro con que la base de nuestros pensamientos

es nuestro nivel de conciencia con respecto a la equidad y gene-

ro, misma que se manifiesta en nuestros nichos vitales, familia,

hogar, salón de clase y comunidades de aprendizaje virtuales y

reales. Con la consigna que la única revolución posible consiste

en la transformación interior de cada ser humano.

Somos la construcción de nuestros pensamientos y emo-

ciones que viajan a través del espacio y el tiempo para llegar

ser parte de nosotros, modelan nuestra realidad misma que ge-

nera una frecuencia en la manera de percibir al otro como legi-

timo otro. Donde los valores matrísticos se manifiestan en la

convivencia, la interacción y en el contacto del conversar.

El disoñar es sentir la vida en todas sus expresiones,

abriendo el espectro de caminos por recorrer, pero eso se debe

hacer juntos en el conversar, en el dialogo, en la autoconstruc-

ción, en ese relacionar compartiendo su ser. Es un hecho que la

base de la virtualidad se basa en la interacción misma que pro-

voca miles de posibilidades de construcción conjunta de cono-

cimiento, misma que se perdiendo la individualidad y disol-

viendo el ego, compartiendo nuestro ser de una manera traspa-

rente. Y solo soñando juntos hombre y mujer, pueden ser los

disoñadores de su futuro.

La transformación interior de cada ser humano en la vir-

tualidad, tiene que ver con nuestra percepción de la vida y del

rol de género, esa implicación de la conciencia, transforma el

proceso de pensamiento del ser, se autoorganiza con su sentir

pensar, y su mirada desde la equidad del misma que se ve afec-

tada por el nivel de conciencia.

Es momento de despertar del sueño, al contar diez,

abrirás los ojos y despertarás, listo…uno, dos, tres….nueve y

diez, ahora abre los ojos, y mira la vida, cuéntame cual fue el

sueño de tu mariposa y tu casa de los sueños. Yo mientras tan-

to, cerraré los ojos, respiro, así es que a dormir de nuevo y a

soñar. Zzzzzz.

La realidad surge de una realidad virtual.

A la generación actual se le llama la generación del videojuego,

una generación basada en el aprendizaje a través de la interac-

ción con la tecnología, y es esta realidad que vivimos sin dar-

nos cuenta nos aleja más de los demás, aprendiendo a vivir solo

en una realidad virtual.

La realidad surge de la sensorialidad, es lo que vivimos,

lo que esta, además de no distinguir entre una ilusión y la

percepción, uno no sabe cuando tiene una ilusión ya que

percibe, entiende y comprende esa realidad.

Entrevista a Maturana,

170


La realidad surge de una realidad virtual.


La realidad Virtual, es una ampliación y extensión de

nuestros sentidos. Vivimos en realidades virtuales ya que basta

una interfaz y una conexión a esa realidad para interactuar con

ella. La realidad virtual es un engaño de los sentidos, de reali-

dades construidas artificialmente con las cuales interactúa.

Nuestra estructura mental arrastra una serie de saberes,

poderes y placeres que estructuran la realidad que vivimos, en

ese sentido estamos programados para actuar a imagen del pa-

radigma actual, el cual nos ha inculcado el pensar de manera

individual y no solidaria, acostumbrados a que nos dirijan, nos

digan que hacer y que decir.

El paradigma emergente, nos habla de regresar a vivir en

comunidad, compartiendo y siendo cómplice de este tipo de

vivir con los otros. Los ambientes, entornos o contextos donde

los seres humanos nos relacionamos e interactuamos son los

que determinan nuestra manera de actuar.

Los ambientes virtuales de aprendizaje en ese sentido son

el medio en el cual nos relacionamos e interactuamos con los

demás, introduciéndonos en una dimensión de encuentro, sien-

do cocreadores de nuestro aprendizaje, tanto individual y colec-

tivo.

El aprendizaje en estos medios digitales, surge de manera

emergente y espontánea, al sentirse miembro del grupo virtual.

Sentirse parte del grupo, nos cohesiona en las actividades, la

interacción provoca cambios en la estructura, pero al mismo

tiempo un aprendizaje colectivo, rico en experiencias, comenta-

rios, preguntas, respuestas y conocimientos compartidos.

En la virtualidad se puede interactuar de manera indivi-

dual y de manera grupal. Las actividades individuales no nos

permiten apropiarnos del conocimiento y experiencias de los

demás, ya que nuestro pensamiento es aislado y desvinculado.

El realizar actividades de manera grupal, nos permite acompa-

ñar, compartir, conocer, proponer, apropiación del tema y inter-

acción a través de nuestras intervenciones, propiciando un

aprendizaje colectivo, integral y flexible.

Esta relación de encuentro, interacción, conexión y reci-

procidad necesita del reconocimiento del otro como legitimo

otro, conversar como parte de la interacción emocional y de

aprendizaje, permitirse acompañar en el proceso de aprendizaje,

compartir saberes, poderes y placeres como parte de la interac-

ción cognitiva en el grupo, enriquecer y ampliar la relación de

convivencia y connivencia a través de los sentidos, aprendiendo

a vivir en comunidad. Siendo virtual primero para ser real.

A la virtualidad, se le ha visto hasta ahora como una di-

mensión textual, y con la integración de los multimedios simu-

lando la vida en la pantalla, sin embargo en la cotidianidad si

eliminas algún sentido producirás oscuridad, sordera y empo-

brecimiento en los sentidos.

Las dimensiones sensoriales enriquecen y amplían la con-

figuración de la convivencia relacional. En este vacío relacional

de encuentro es donde emerge la pregunta:

¿Qué es la autoorganización en la virtualidad?


171



Si bien esta generación en la que vivimos se llama la genera-

ción de videojuegos, y en el libro homo videns para Saotori, es

un espacio relacional mediado por la tecnología, y es en esta

generación que va perdiendo el contacto afectivo con lo real, y

se centra mas en relaciones virtuales, esas que llenan sus mi-

cromundos como dice Varela, donde los links a las relaciones

emotivas y el fluir como lo llama Maturana, se va aislando para

dar paso a la vida virtual.

Esa vida que se crea en el vacío y en la cual se es, se

siente y se vive.

Un día sin red, una reflexión posible

¿El ser humano por un rato?

Esto lo escribí el tres de noviembre del dos mil seis, y creo que

aun no ha pasado nada nuevo, hasta ahora y eso es darse cuenta

que hay un espacio vació, o borroso entre esa fecha y este día.

La costumbre de llegar al trabajo y antes de saludar e in-

teractuar con los demás, esta el ritual de llegar, prender el re-

gulador, la computadora, esperar a que prenda y conectarme a

la red. Todo este ritual para decirme que estoy conectado.

¿Qué estar conectado a la red?

Y ¿Qué es estar desconectado de la red?

Son dos preguntas fundamentales y complementarias una de la

otra, la primera es el escenario ideal de una interacción cotidia-

na, que no necesita más que una conexión verdadera a la tecno-

logía. La segunda es el escenario no ideal de la interacción coti-

diana, que necesita que la conexión sea falsa a la tecnología.

Estos mundos sincrónicos y asincrónicos, paralelos y singu-

lares, son las posibilidades para nuestro ser hoy en día dependiente

de las Tecnologías. Casos como, el transporte es un caos porque el

sistema de semáforos se calló, el transporte metropolitano no opera

porque el sistema eléctrico se ha caído, el caos una sucursal banca-

ria por que no hay sistema, el caos en una tienda de autoservicio

porque las terminales no tienen sistema, el caos en nuestro hogar

porque nuestra línea telefónica, de televisión por cable o satélite,

nuestra línea de celular, de repente se quedan sin señal.

172




Es curioso pero nuestra dependencia hacia el uso de las

tecnologías nos hace seres en relación intrínseca con ella, ella

no depende de nosotros, pero nosotros nos hemos acostumbra-

do a vivir mediante ella. La tecnología es la que dicta los rit-

mos de las ciudades, es la que dicta los tiempos, es la que opti-

miza nuestro rendimiento, es la ilusión de una mejor calidad de

vida.

¿Pero, que es la vida con tecnología?

Y ¿Qué es la vida sin tecnología?

Estas preguntas son una constante y la diferencia cuando de desa-

rrollo, actualidad y modernidad se habla. Se traduce en sociedades

desarrolladas y en vías de desarrollo o subdesarrollado, es decir el

no poseer tecnología es un estatus bajo socialmente hablando y el

contar con tecnología nos hace sociedades desarrolladas. Entonces

la vida cobra un poder social con la tecnología, es decir ahora la

tecnología pasa a ser parte de nuestra vida cotidiana, y los que no

posean esa tecnología serán subdesarrollados.

A saber que la tecnología junto con un sistema económi-

co dictan las reglas del juego, eso es un hecho que no se cues-

tiona, pero sin embargo la pregunta sería, —¿qué es la vida sin

tecnología?— Existimos seres humanos que sin el uso de la tec-

nología seguimos realizando nuestras actividades, ya que el

vínculo que nos relaciona con la tecnología es circunstancial a

las actividades pero no es un vínculo estrecho que nos haga de-

pendientes de ella. Es decir se puede vivir sin tecnología, la res-

puesta es, si, para algunos y para otros, su realidad les dice que

no. Ahora que sabemos que vivir sin tecnología es posible, la

pregunta es:

¿La tecnología existirá sin que la usemos?

La tecnología existe en el momento que se hace presente en

nuestras vidas mediante la acción es de decir, el uso de estas

tecnologías las hace visibles en nuestra realidad, recuerdo cuan-

do aparecieron los teléfonos de monedas, era increíble que con

una moneda de veinte centavos pudieras hacer una llamada te-

lefónica de un minuto. Después que se hizo habitual, se cambio

a monedas de un peso y ahora era mas caro el uso, pero seguía-

mos usándolo ya que era una necesidad comunicarse, pero el

medio se volvía mas caro.

Lo curioso fue cuando comenzaron a desaparecer esos

teléfonos para dar paso a los teléfonos de tarjeta, las famosas

tarjetas inteligentes, las cuales te costaban mas caras pero te

permitían llamar por varios minutos a menor costo y por que lo

curioso, ¡ah! por que si estas acostumbrado a usar una tecnolog-

ía de una manera, y de repente te cambian su uso, resulta medio

raro el volver aprender su uso, a tal grado que desconfiamos de

la maquina.

¿Cómo va descontar la llamada de la tarjeta?

¿me va a robar mi dinero?

¿Cómo puede uno traer dinero en una tarjeta?

Y varias dudas mas, a tal grado de desconfianza, que esperába-

mos que alguien llegara a llamar para ver que llamara para po-

der uno hacer una llamada. Actualmente esos teléfonos se están

extinguiendo para dar paso a la nueva generación de teléfonos

con tarjeta de crédito e incluso con otro tipo de tecnología.

Regresando a nuestra pregunta, — ¿la tecnología existirá

sin que la usemos?— la respuesta es tuya, cuantos avances tec-

nológicos existen actualmente que existen sin que los usemos,


173

Un día sin red, una reflexión posible ¿El ser humano por un rato?


como los ipods, celulares con video, radio y cámara fotográfica,

ipaqs, y demás, pero una ves que los usamos en nuestra cotidia-

nidad pasan a ser herramientas útiles, de las cuales se mantiene

cierta dependencia, como la red.

¿Que pasa cuando no hay Red?

Los efectos cuando no hay red, si pudieran compararse son co-

mo estar aislados. Ahora la pregunta seria, — ¿de que se siente

uno aislado?, y ¿Por qué ese aislamiento?— pareciera que

nuestra dependencia de la red es tal que de repente te sientes sin

la extensión de tus sentidos.

De repente si hablas, ya no hay nadie que te escuche; Si es-

cribes ya no hay nadie que te lea; Si dibujas o pintas, no hay nadie

que mire tu obra; Si compones o tocas ya no hay nadie que te escu-

che. Le hemos dado tanto poder a la red, que de repente se convier-

te en el medio para interactuar, la cual nos hace sordos los senti-

dos, pasando a tomar un estado de latencia, esperando a que llegue

una señal y nos conecte. Ahora la pregunta seria:

¿Qué pasa en nuestros sentidos sin la red?

Los sentidos siguen igual, solo que nuestra realidad virtual se

comienza a deformar y transformar, mas bien a regresar a su

estado sin red, y que es esto, no es otra cosa más que comenzar

la interacción física, a falta de la red comenzamos a desdoblar-

nos y doblarnos de nuestro aprendizaje, a un pensamiento mas

humano y sin red. Es decir nuestros sentidos comienzan a des-

entumirse de tanta tecnología y comenzamos a ver al otro ser

humano, comenzamos a recuperar aquello que hacíamos sin

red. A conversar, dialogar, y dirigirnos a los otros de manera

personal.

Y por la otra parte comienza a aparecer nuestro yo real,

ese que sufre de malestares relacionales como los psicológicos

o las neurosis. A falta de la red comenzamos a sacar nuestro yo

el que sin red se vuelve violento, agresivo, en ausencia de esa

droga cotidiana, los correos, los mensajes sin sentido y con sen-

tido, las cadenas, las presentaciones, la lectura del diario, las

noticias, la consulta a google, la bases de datos, las compras, el

escuchar música, en fin a poner nuestro sentir en la red.

Nuestros sentidos de adaptan y flexibilizan a su estado

anterior a la red, que es el estado natural del ser humano en su

contexto habitual del diario vivir, tal ves la red vino a resolver

un problema de comunicación, acercándolo mas a nosotros y a

los otros, pero vino a traernos un problema, será posible desco-

nectarnos totalmente de la red, cuando esta deje de funcionar. O

en ausencia de esta red, aparecerán otras redes e interacciones

que den paso a la evolución de los medios, esa seria otra re-

flexión posible.

174


Un día sin red, una reflexión posible ¿El ser humano por un rato?


La relacionalidad del ser en la virtualidad

Este acercamiento es desde la relacionalidad donde la auto-

poiesis la producción de unidades vivas, definida como:

El proceso de producción de componentes en que cada

miembro de la clase es un sistema dinámico definido co-

mo una unidad por las relaciones que lo constituyen co-

mo parte de la red de producción a partir de: Participar

recursivamente a través de sus interacciones en la gene-

ración y realización de la red de procesos de producción

de componentes que lo producen y, por que se constitu-

yen, en esta red de procesos de producción de componen-

tes, como una unidad en el espacio en que éstos existen

realizando sus propias fronteras (Maturana 1999)

Y donde los entornos relacionales cobran vida, la ecopoiesis,

definida como:

Proceso de generación de relaciones de manera recursi-

va centrada epigenéticamente —Espiral— de manera de

reproducir pautas de identidad y agenciamiento morfo-

genéticamente para un contexto de significado. La unidad

eco se relaciona con y la unidad eco_auto se relaciona

con y en si respectivamente.

La generación de entorno procesa configuraciones

de participación y pertenencia. Centrados en niveles

sistémicos de organización, la ecopoiesis es a la clase

como la autopoiesis es al miembro. Es decir, tomando

como unidad al organismo-entorno, el organismo es au-

topoiético respecto de la unidad, pero la unidad como

emergente organismo-entorno es ecopoiética.

Este lió lo estoy armando, siento e intuyo que es difícil

de atrapar, que tiene que ver con la forma en que pensamos y

sentimos, eso es real, que tienen que ver con la ética, es virtual

que es bueno o malo, o malo bueno, es sentir, que si es adecua-

do o inadecuado, es ser, ¿pero entonces que se es?

Es menester liberarse de todas las cosas falsas que cons-

truyeron las generaciones pasadas y vernos sin la carga

de la imitación, el mero recuerdo de un ideal proyectado

desde el pasado hacia el futuro que solo mutila la creati-

vidad de la mente y el corazón. Al engendrar temor, am-

bición y envidia queremos ser alguien y la demostración

de poder sobre los demás nos da la satisfacción: el iluso-

rio sentimiento de que somos alguien.

Quiero permitirme hacer una aportación desde la relacio-

nalidad del ser en la virtualidad, a partir de la construcción del

ser, esa relacionalidad la componen, sus sentidos, su intuición,

su pasión, su magia, su conciencia y sus sueños. Y digo su, por

que no es mi, ni nuestra, si no es la construcción individual de

su Yo Virtual como lo define Varela:

Un patrón global coherente que emerge a través de com-

ponentes locales simples, dando la apariencia de tener

una localización central cuando tal localización no puede

ser encontrada, y aún así esencial como nivel de interac-

ción para la conducta de la unidad como un todo.

Es decir somos un reacomodo de sensaciones, pensafec-

tos, interacción, lenguaje, es decir de nuestra relacionalidad.

Suena loco verdad, lo cierto es que cualquier cosa que diga es

pensar en los que ya escribieron algo sobre eso y seguir sus

huellas, quisiera despegarme tantito de eso y permitirme ver el


175

Medios digitales, computación, informática y educación virtual.


futuro de la relacionalidad en al red, o la autoorganización en

la virtualidad, que es mas real que lo real, por que pasa por la

mente del ser humano.

La mente es el producto final de hacer conocido lo desconoci-

do. Rampta en el libro quienes somos

Medios digitales, computación, informáti-

ca y educación virtual.

Jugando fútbol con mis amigos un sábado por la tarde, hace

veinte años. Se acerco una amiga a ofrecerme una beca para

estudiar computación, a lo que dudando acepte y ella después

de llenar unos formularios me dijo, ya esta. Estas anotado para

ir a tus clases de computación de cuatro treinta a cinco todos

los días. Algo que no sabia hasta donde llegaría ese efecto ma-

riposa que ocurrió hace veinte años, ahora cuando hace unos

días presentamos un portal web caordia, la red autónoma para

un movimiento político pedagógico.

¿Y cual es ese efecto mariposa te preguntaras? ¿Qué tiene

que ver estudiar computación con una presentación de un portal

Web? Ese efecto es la transformación de ese en quien me he

convertido. Estudie computación con mucho interés, no tenia

muchos recursos para estudiar, así es que con mucho esfuerzo

logre ser programador analista.

Se me enseño a programar computadoras sin computado-

ras, te preguntaras como. Resulta que como no había suficientes

computadoras seis para sesenta alumnos solo nos permitían

usar las una vez a la semana. He conocido desde las main fra-

me, que ocupan pisos completos, he trabajado en terminales,

cuyo unidad central de proceso CPU, esta ubicada en otro edifi-

cio, comencé a usar computadoras, en sus primeras versiones,

8086, que se usaban con disco de cinco pulgadas y conocí las

de que usaban discos de ocho pulgadas. Luego la explosión de

las computadoras caseras, desde la 286, 386, 486, Pentium y

sus versiones I, II, III y IV, ahora las core duo, las de dos núcle-

os como les llaman, que no son otra cosa que equipos simulan-

do dos corazones, ops. Con este recorrido pensaras que soy

muy grande y que ha pasado mucho tiempo, ¿verdad?

Realmente no ha pasado mucho, solo el suficiente para

poder entender y aprender de estas cosas, lo que si que nos han

acostumbrado a la novedad tecnológica que aun no terminamos

de digerir la tecnología actual, cuando ya otra tecnología nueva,

hace su aparición en nuestras vidas, haciéndonos olvidar la tec-

nología anterior. Esta carrera por tener lo nuevo nos lleva a una

excesiva necesidad por el uso de esa tecnología que se nos olvi-

da el ¿para que? ¿Por qué? ¿Cómo? He visto que la tecnología

no basta para agilizar las cosas, el ser humano sigue teniendo

las mismas carencias aun con tecnología.

He dado clases para usar computadoras, Internet, a pro-

gramarlas y desarrollar sistemas, pero no cambia la forma de

ver, sentir y vivir con y sin tecnología.

— No por tener la mejor computadora te hace mejor persona

— No por tener la mejor televisión, veras de diferente mane-

ra

— No por tener el mejor equipo de sonido, escucharas mejor

— No por tener la mejor batería de cocina, serás un mejor

cocinero

— No por tener la mejor crema para tu piel, sentirás mejor

176


Medios digitales, computación, informática y educación virtual.


¿Entonces cuál seria la forma de ser, sentir y vivir en este mun-

do virtual?

Ahora doy un curso que se llama estrategias de búsqueda

y evaluación de información en medios electrónicos, el cual

pareciera que es la forma como se busca la información en In-

ternet, si piensas desde el viejo paradigma, así será.

Si piensas desde el nuevo paradigma es: la ruptura de es-

quemas mentales para generar estrategias de búsqueda de

aprendizaje, conocimiento, pensamiento, magia, sueño, con-

ciencia y vida en la cotidianidad mundo real, para entender co-

mo encontrar un sentido humano a la búsqueda de información

en los medios digitales.

Donde la computadora se usa solo al final del proceso y

los medios digitales son solo las herramientas para llegar a la

información siendo el usuario final el encargado de realizar pa-

ra que sirve la información y la tecnología. Trabajamos mucho

en la construcción y deconstrucción del pensamiento, haciendo

primero al humano que esta alrededor de la tecnología y no al

humano que esta dentro de la tecnología.

Es entonces un recuperar el ser, sentir y vivir humano,

antes de entrar al proceso de búsqueda.

En este sentido, la autoorganización tiene que ver con el grado

de relación y de involucramiento con nuestro ser, sentir y vivir.

Es una oportunidad de crear en este vacío, o entorno virtual.

Pienso que la autoorganización tanto en lo real como en lo vir-

tual, es la creación y cocreación de espacios relacionales con

los demás seres.

¿Hasta donde quieres mojarte cuando tocas el agua?, la

respuesta sería, que es cuestión de hasta donde no quieres estar

seco. Paradójicamente es un vacío relacional, ya que es el espa-

cio de encuentro, que uno provoca mágicamente, al evocar to-

dos los sentidos en la relación. Donde nada sucederá si no tie-

nes la intención-relación, de relacionarte con tu sentir, pensar,

escuchar, oler, degustar, mirar, pensar, existir,… ser.

¿Hasta donde quieres ir en el hoyo del conejo?

¿Hasta donde quieres aprender?

¿Hasta donde quieres involucrarte?

¿Hasta donde quieres comprometerte?

Eso tiene que ver con los sueños, la magia, la pasión, la

conciencia del ser en la virtualidad, tanto en la vida real, como

en la vida virtual. Y si viajas en el tiempo, por favor no toques

nada, porque si lo tocas entraras en relación total y eso puede

afectar el futuro, eso es una relación.


177

La autoorganización en la virtualidad


El contraespacio, según el principio de polaridad es un

espacio opuesto o polar al físico, este será un espacio

determinado por la invariancia de un punto en el infinito

único. Este punto tendrá, también él, las funciones de un

infinito, aunque ello no significa que esté alejado infinita-

mente de nosotros, puesto que la aplicación de un criterio

tal equivaldría a pensar en él en terminitos de espacio

físico. El contraespacio tiene el carácter de un infinito

interior. Tendremos la ocasión de encontrarlo si no bus-

camos hacia el exterior, sino hacia el interior, sumer-

giendo nuestra mirada en el foro interno de la región

espacial en cuestión. Mientras que el espacio físico está

regido desde el exterior por un plano que lo abarca todo,

el contraespacio está regido desde el interior por un pun-

to en el infinito que lo religa todo.

Frigols, F. (2007)

178




Despertares: Sincronizando lo virtual lo real, en el ser.

La virtualidad hasta hoy se ha visto como el mirar la virtualidad de la

misma manera, es ver como la realidad te roba tus sueños y hace desapa-

recer al ser, y con el, la magia de vivir. Por lo que es necesario un nuevo

desafío que haga aparecer esa sincronicidad entre lo virtual y lo real del

ser, haciendo posible despertar la virtualidad del ser en el acto educati-

vo.

¿Que diferencia existe entre las virtualidades?

Hasta ahora solo hemos visto la virtualidad desde el punto de vista de

las nuevas tecnologías de información y comunicación, como se han ido

adaptando y adoptando los contenidos temáticos, sin ninguna resonancia.

Vemos proyectos de universidades virtuales que después de varios años de-

sisten de su proyecto por que no saben que ocurre por que los individuos no

usan sus sistemas, es mas los usan pero no aprenden. Y es que para que una

persona aprenda necesita que suceda el acto educativo. Y para que esto sea

real debe aparecer la virtualidad del ser que haga posible el acto mágico que

de existencia al ser.

La virtualidad de que te mostrare es, a mi parecer una posibilidad

mas, un campo de sentido de una manera de ver, mirar y tocar al individuo

que esta alrededor de la tecnología, de propiciar espacios educativos que den

lugar al ser humano, para que el cree y recree sus actos mágicos.

Un individuo que aparece en esos espacios como creador de su propio

aprendizaje, de sus propias rutas que le den sentido a su ser interior, su vir-

tualidad.

179


El mundo como yo lo veo ó el mundo como el me mira

Si al despertar de tu reposo reconoces que lo que miras es algo

que has soñado, y te permites disfrutar sin juzgar lo que vives,

solo fluyendo en esa libertad del aire, en ese calor del fuego, en

esa humedad del agua, en esa frescura de la tierra, y descubrir

que eres el quinto elemento de esta alquimia de la vida, enton-

ces estarás soñando despierto.

Donde cada acto cotidiano es un acto de vida, es un acto

de aprendizaje transformando cada respiro en una mezcla alquí-

mica, en una sincronía de tu ser con el universo, dando lugar al

nacimiento del mago interno, que es capaz de mirar mas allá de

la presencia. Donde la magia, el sueño, la pasión, la intuición,

la espiritualidad… le dan sentido a su existir.

Esto se parece a soy mi chifladura… checar

El universo tiene cierta resonancia que cuando se encuen-

tra con tu ser es capaz de generar sensaciones y emociones que

no puedes describir con palabras, si no que son sentires que te

hacen entrar en mundos sincrónicos y armónicos, donde todo lo

que observas esta vibrando, mutándose, transformándose en

cada respiro.

Nuestro universo simbiótico, renaciendo en cada instante

mostrando la magia de la vida, donde cada célula da vida a or-

ganismos que en si mismos es la totalidad y la unidad de su ser.

El contagio: el virus de la virtualidad

¿Me permites contagiarte?

Sabes hoy mi mentor de los sueños, me diagnostico de un

terrible mal, que afecta todo tu cuerpo y que lo recorre en todos sus

sistemas nervioso, circulatorio y cardiovascular, es un mal que

afecta a personas que regularmente parecen comunes.

Lo peor de este padecimiento es que es muy contagioso,

claro para que ocurra el virus debe de tocarte, pero algo que lo hace

resistente, es que no viaja ni por el aire, ni por la sangre, ni por la

saliva, es el más nocivo de todos los habidos y por haber, ya que se

aloja dentro del ser, y los últimos descubrimientos es que es un

mal que viene desde nuestros ancestros, imagínate desde las caver-

nas, y que el ser humano moderno lo logro desactivar ya que New-

ton se le ocurrió como hacer tal cosa.

El tuvo la grandiosa idea de aislarlo, pero algunos se conta-

giaron antes de vacunar a la mayor cantidad de personas posible, el

incluso se contagio de ese virus, solo que a él por ser el primero no

lo tomaron en cuenta. A los demás contagiados incluso los quema-

ron en hogueras por la inquisición, otros más fueron acusados de

herejía.

Ese virus se esparció por muchos lugares del planeta, se

escuchaba que las personas que lo tenían les daba por inventar co-

sas, y por soñar despiertos. Soñar despierto, era el peor de los

síntomas detectados, ya que les daba por jugar con cualquier cosa

que cayera en sus manos, dibujaban en la tierra con una vara, y les

daba por construir cosas extrañas.

180


El contagio: el virus de la virtualidad ¿Me permites contagiarte?


Se dice que los niños en los primeros años de su vida, tie-

nen esa enfermedad, pero que con una cierta dosis de sometimien-

to y con el transcurso de los años, la escuela los vacuna, a tal grado

que los síntomas desaparecen por allá de los seis años. Y es seguro

ya que en la adolescencia se adormecen sus sentidos y en la juven-

tud se les olvida que existen, y comienzan a desaparecer. La des-

aparición es la cura para este mal de la humanidad.

Pero hay un riesgo, curiosamente en los sueños, ese mal

aparece, es decir se olvidaron anular los sueños en esas vacunas,

así es que las personas tienen sueños, y vive allí la enfermedad,

solo que como es el espacio del sueño todos estamos a salvo, hasta

que no descubran como soñar despierto.

Aquí se pone bueno.

Te cuento que desde que Newton dividió al ser humano en

mente y cuerpo, las enfermedades solo se habían visto desde esa

perspectiva, desde el cuerpo. La mente se separó, pero comenzaron

a vacunar a los individuos para que no pensaran de manera ilógica,

así que inventaron la lógica, la ciencia. La cual decía hasta no ver

no creer entonces todas las cosas que tuvieran ese sentido eran las

que se validaban y creían. Cualquier cosa que se sintiera, soñara e

imaginara, no tenia sentido.

Así se nos educo, con un razonamiento científico, total los

avances de la humanidad se dan por la ciencia y no por la concien-

cia. Así se pensaba.

Lo que no imaginaban es que ese virus se mutaba en cada

segundo y era imposible de localizarlo, fue llamado el virus de la

virtualidad VV o V2, un virus muy letal, su código afortunada-

mente permanece oculto, así que, ni con las pruebas de ADN, y

con el genoma humano, es imposible de descifrarlo.

Se dice que el código de acceso permanece resguardado

por los magos, no los que aparecen conejos de la chistera, si no los

alquimistas, los seres capaces de trasformar la vida de los demás a

través de sus enseñanzas. Así es que ese virus se activa en esas per-

sonas y que al contagiarlo es capaz de transmutar el virus para no

ser localizado, ese virus de la virtualidad, puede transformar la ma-

nera de ver y sentir la vida, a tal grado que puedes despertar dife-

rente de lo que eras, y es capaz de sacar la esencia de tu presencia.

Y eso es dar un salto de rana.

A muchos años de desaparecer el virus de la virtualidad, se

han encontrado vestigios de muchos seres contagiados, desde Galileo

hasta Einstein en la ciencia, desde los Beatles hasta los Rolins Stone,

desde los cazadores pintando sus sueños de cacería en las cavernas

hasta Dalí, Picasso, Siqueiros, Moret y arquitectos diseñando los edifi-

cios de ensueño en Balí y Dubay. Desde de los sueños de Ícaro de vo-

lar sobre el laberinto hasta el sueño de los hermanos Writh de volar un

avión, pasando por las maquinas voladoras de DaVinci.

Desde que los antiguos Mayas, Egipcios, Aztecas, Incas

soñaban al ver la Luna en ir caminar en su superficie, hasta los que

disoñaron e hicieron posible ese acto mágico de ir en un cohete y

caminar en la superficie lunar.

Desde los sueños de Holleri de su máquina sumadora, de

Von Newman con su maquina lógica hasta los sueños de IBM y

Bill Gates de hacer posible una maquina computadora, pasando

por los autómatas rusos que replicaban actos humanos, con los

humanoides.

Desde los sueños de Julio Verne el cual pudo ver el futuro

antes de haber vivido, hasta lo que es Harry Potter con sus aventu-

ras, pasando por los sueños de los grandes escritores como Shakes-

peare hasta García Márquez.


181



Desde los sueños de los griegos al definir lo que en ese en-

tonces era un átomo hasta el famoso buscador de la partícula de

Dios en el acelerador de partículas.

En fin en todos los campos de nuestra vida, un sueño y un

soñador se han unido para hacer posible esas realidades. Soñar des-

pierto entonces fuera de ser un virus dañino, es un virus evolutivo,

transformador, autoorganizado en su hacer y autopoietico en su

vivir.

¿me permites contagiarte?

Esa es la pregunta, y es que me encuentro terriblemente

contagiado. Te comento como ocurrió, mi abuela tuvo mucho que

ver, ya que era una curandera, así es que desde que me trajo al

mundo me relaciono con su quehacer y su vivir, claro yo no curo.

Mi abuelo por su parte, me instruyo en mi niñez de las cosas de la

vida en el campo y el amor a la naturaleza. Mi madre por su parte

hizo lo suyo al alimentar mis sueños y hacerme buscar en las estre-

llas mi vida. Mi padre con su pasión por las cosas que hacia, y su

compañía en el caminar, me hizo saber que las cosas son posibles.

Mis hermanos en sus juegos y su compartir me hicieron ver doce

visiones diferentes de la vida. Mi esposa me ha enseñado que para

hacer algo posible debes hacer las cosas como mujer, es decir

hacerlas no pensarlas. Y mis hijos han sido mis maestros en el arte

de encontrarme, de aparecer mi virtualidad.

Ellos activaron el virus de la virtualidad que llevaba dormi-

do mucho tiempo, y que solo en sueños podía verlo, sentirlo, pero

no sabia que era. Ellos son la entrada a mi virtualidad, a través de

ellos, aparece el virus y se hace presente. Fueron ellos los causan-

tes de que viva con tantas emociones, que disfrute tanto mis actos

de vida, que juegue, disfrute y goce de nuevo ser niño. Ver el mun-

do a través de sus ojos es mirar colores, formas y sabores diferen-

tes. Es vivir en cada momento el universo que es este y que se an-

toja alargarlo hasta el infinito. Donde el sentido de mi vida es todo

lo que ellos son y lo que soy con ellos.

Me di cuenta del virus a partir de comenzar a leer a perso-

nas que tenían el mismo mal, David Bhom al hablar del orden im-

plicado, Krishnamurti en su búsqueda del ser y la pasión, Edgar

Morin en su método a través de la incertidumbre, Maturana y Va-

rela desde la Biología del ser, la legitimación y autoorganización

del ser. Sheldrake, Emoto, Mctarge y Lazlo su búsqueda a través

de los campos mórficos, cero y akasico, Gutiérrez, Prieto y Prado a

través de su visión pedagógica de la educación y muchas personas

más que me muestran que se puede soñar despierto, por que sus

vidas son esa manera diferente de ver la realidad, y es la que los

hace soñar despiertos, donde el sueño es su vida misma.


Algo que hago frecuentemente es contagiar a las personas

sin permiso y es que no me doy cuenta si no que de repente me

encuentro danzando sincrónicamente en el sueño, que termino

hablando y apareciendo mi ser en la conversación. A mis apren-

dientes de los cuales aprendo de manera intuitiva fui buscando la

manera de encontrarle sentido a su aprendizaje para mostrarles la

manera de poder transformar su presencia y que aparecieran en el

acto educativo. Ahora se que eso que hacia se le llama mediación

pedagógica, que no es otra cosa la de hacer posible el acto educati-

vo mediante la transformación de su manera de percibir la vida, a

través de la su experiencia, reflexionando su ser en el hacer.

Para hacer esto posible era necesario que yo apareciera, y

hacer aparecer a ellos en este acto mágico de aprender.


182





183


Si al leer este texto, te viste en alguna parte entonces estas

contagiado. Si es así entonces eres una persona que disfruta cada ins-

tante de su vida. Que hace su acto de aparición en sus actividades es

decir, sabe que cuales son sus pasiones, las cosas que hace y le dan

energía, se enfoca en ellas y a través de ella construye sus sueño. Re-

gularmente te gusta inventar cosas, recetas, hacer cosas manuales,

dibujar, pintar, tomar fotos o hacer música, eres un artista, creativo,

imaginativo el cual disfrutas y gozas las cosas que haces.

Y si al dormir te gusta contarte un cuento con tu vida.

Si al hacer algo sonríes, te emocionas, gritas, cantas, bailas y

respiras profundamente, arrancándole un suspiro al universo.

Entonces estas soñando.

Pero ten cuidado, no te pellizques porque estas despierto y

eso duele, porque estas vivo.

La vida es el mejor síntoma de que tienes el virus de la virtua-

lidad, ya que te sientes pleno, satisfecho, libre como un cometa en el

cielo en busca de nuevos aires para volar hacia sus sueños.

Vuela, revolotea, papalotea, cometa juguetón, que estas so-

ñando despierto, despierto soñando.

Y adivina, ya estas contagiado.

Así es que sonríe, emociónate, grita, canta, baila, respira pro-

fundamente y arráncale un suspiro al universo. Bienvenido a mi mun-

do, la vida de un mago.

Sueños, magia y virtualidad: ¿se puede soñar despierto?


Atrapado en mi virtualidad, descubriendo al que respira.

Mas le valía a la virtualidad no haberla sacado del lugar donde

estaba, por que a partir de que ella existe, muchas cosas han

dejado de tener sentido.

Ven-ser, es una palabra que no es vencer, de vencido sino

de llamar al ser, es curioso, pero mi ser se siente atrapado como

en un juego de ajedrez frente a una maquina, es decir. Todos

mis movimientos están vigilados, y escaneados como decimos

en idioma informático. Todos los momentos , ideas, pensamien-

tos están siendo sondeados por mi cerebro, el mismo que toma

control de mis creencias y acciones.

Pero mis emociones se dirigen a otro lado, mi cerebro

reptil el de la supervivencia, sigue activo, respirando y dándo-

me vida. resulta que al instalarme frente a la maquina, surge un

engaño de querer avanzar en lo que estoy haciendo, escribir,

reflexionar, leer y formular preguntas. Sin embargo en el mo-

mento en que pienso en eso, se lanza como un virus un progra-

ma en mi cerebro, que toma el control de mis impulsos y co-

mienza a bloquearme, comienza a buscar alguna música que le

gusto, comienza a ver paginas sin sentido, deporte, imágenes,

historias superfluas y sin un rumbo fijo. Si le interesa una pelí-

cula entonces se pone a verla sin mas ni mas, cuando me doy

cuenta han pasado varias horas y sigo sin seguir.

Ahora que lo he satisfecho, ya no hay tiempo para escri-

bir, solo soñar y descansar. Así es que aprovechare cuando mi

cerebro descanse, yo soñare con mi otro cerebro ese el que me

hace escribir esto, ese que se permite escapar y reírse del otro.

Tratando de salir. Es muy difícil, espero que después de haber

jugado la ultima partida de ajedrez, de haber bajado el ultimo

184



álbum musical, de haber visto las ultimas imágenes y videos,

pueda dedicarme a mi, este rato de inspiración.

Solo quería escribirlo, para decirme que puedo apagar mis pen-

samientos, y entrar en sincronía con la magia de la Sincronici-

dad en el sueño, cuando digo apagar, no es otra cosa que reco-

nocerme y legitimarme, sabiendo que le que se sabotea soy yo.

Todos ellos soy

¿Como estas? Seguramente bien, quizá te encontré en algún

lugar y nos cruzamos al caminar, o tu en tu auto y yo caminan-

do.

— Era el hombre de saco azul atrás de tu auto, era el niño

con el globo que corriendo casi te tira el folder que lleva-

bas en la mano.

— Era la mano del anciano que tomaste para ayudarlo a pa-

sar la calle.

— Era la niña que te ofrecía un chicle en el semáforo.

— Era el limpia parabrisas que a falta de agua solo limpiaba

con su franela tu espejo y te sonría.

— Era la lluvia la que al atardecer te hizo correr del parque

mientras observabas con tu familia unas lindas marione-

tas.

— Era el señor de los helados que te dio un helado doble por

ser su cliente especial.

— Era tu novia que te enviaba un mensaje por el celular el

cual te decía como estas. Era tu tía que te visitaba después

de varios meses de no verte.

— Era tu esposo que te esperaba en la esquina con tus hijos

mientras comprabas la comida.

— Era el policía que reportaba un accidente para que la am-


:-) Un mentor es….

Para el tintero o para los sueños

:-) Un maestro es….

Un ser capaz de despertar los sueños de sus aprendices y llevar-

los a lugares de ensueño donde todo es posible.

Es el aprendiz más apasionado que se puede encontrar, el que

lo encuentra tiene el un lienzo vacío que solo es llenado con

más pasión.

Es un ser dispuesto a compartir sus conocimientos, no se reser-

va para mañana lo que el alumno puede aprender, más bien lo

reta a ir mas allá de esos sueños.

Es un ser que duda de lo que sabe y les permite a sus acompa-

ñantes dudar de él, no se permite un conocimiento verdadero

sino que busca la verdad del conocimiento

Es un ser que se le puede encontrar, no en una biblioteca, ni en

un laboratorio, ni con los más influyentes, a el lo encuentras en

un parque caminando con un helado de limón en una mano y

con la otra tomado de un niño.

Es un ser que se permite ser y explorar desde la luna hasta las

células procariotas, ahora que piensas en la procariota y te pre-

guntas que es, estas explorando la luna.

Es un ser con una energía impresionante que es capaz de trans-


185


bulancia te auxiliara.

— Era el sacerdote que escuchabas en el templo mientras

meditabas.

— Era el locutor que te dedicaba una canción en la radio

mientras te recostabas en el autobús.

— Era el cantante que en el oído escuchabas con tus audífo-

nos mientras corrías.

— Era el perro que cruzaba la calle mientras mirabas cam-

biar el semáforo.

— Era el sol de verano tan intenso como para provocarte

sed.

— Era el patín con el cual tropezaste antes de caer.

— Era el niño que te sonreía mientras su madre lo cargaba

en un reboso en el mercado.

Creo que después de tantas pistas sabes quién soy. Adivi-

naste, soy yo. Si yo el que vive en ti y que hace este sueño rea-

lidad. Soy todos ellos y al mismo tiempo uno mismo. Soy tus

sueños, tu magia, tu virtualidad.

Para encontrarme basta mirar hacia dentro, mirar la coti-

dianidad de la vida para que yo aparezca, ese ser que hace reali-

dad esa interacción con la vida, y que sin embargo la mayor

parte de nuestra vida ni me vez, porque me escurro, me mimeti-

zo, me amalgamo con las cosas que haces, con las vidas que

tocas, que todas ellas soy yo.

Este instante en el que escribo en este teclado, en esta

computadora, y tu del otro lado me lees en otro espacio y tiem-

po que no este mío, que es ese tuyo, estás dando vida a este tex-

to, el cual se conecta sincrónicamente con tu vida, sabes es es-

tupendo saber que me lees, porque esa es la magia de los sue-

ños, la que da vida a tu vida.


mitirla y busca siempre la forma de hacer llegar su frecuencia a

las antenas receptoras y está siempre en contacto con su ser.

Es un ser que las preguntas son su forma de vivir, de conocer, y

de re encantarse, no hay aprendizaje sin preguntas.

Es un ser que hace muchas notas, no sabe para qué, pero si sabe

que su vida se anota en esa hoja en blanco, que llena un álbum

de su aprendizaje, si por casualidad las encuentras y las unes,

encontraras los mapas que te llevará a su esencia.

Es un ser que mira con los ojos cerrados y abre su mente para

dejar entrar la luz y la oscuridad.

Es un ser que siente y presiente cada latido celular

Es alguien capaz de transformar su mirar, y hacer que los de-

más vean sus palabras, que se transforman en seres mágicos al

ser pronunciadas.

La magia de soñar o el soñar en la magia es su estrategia de vi-

da, ya que se permite jugar en ese juego de crear e inventar ca-

da instante.

La virtualidad es su mundo, un mundo que crea y recrea y que

es capaz de conectarse con ella cada vez que parpadea, solo así

se puede soñar despierto.

Cosas, para no olvidar

En sintonía con el tema, me encontré con la mirada de Eckhart

Tolle, en el libro: la nueva conciencia como el, la menciona,

con el vivir el ahora, esta relación con la magia y los sueños es

tan cercana que la virtualidad se hace presente, en cada momen-

to.

Hemos olvidado descansar, y honrar el lugar donde pisa-

mos. Olvidando permanecer plenamente, en el cual si solo ca-

minamos y estamos en un lugar por estar, es como ocupar un

espacio-vacío sin una intención de vivir el momento, ya que no

percibimos la totalidad.

Serénate, mira y escucha, quizá esa sea la manera de fre-

nar un poco la vida. Mete el cluch y el freno para ir frenando

poco a poco. En la cotidianidad nos acostumbramos a ir veloz-

mente que no nos damos cuenta de el lugar que pisamos y de

donde estamos, de repente nos sorprende la vida con algún ma-

lestar físico, o accidente, que solo es ese momento en que apa-

rece nuestro yo interno, para decirnos que aquí estamos, se hace

presente, se dignifica y se legitima en ausencia de su presencia.

Hemos apagado nuestros sensores, vamos por la vida en

automático, sin sentir la vida.

La búsqueda es ser uno mismo, es ser tus sentidos, emo-

ciones, creencias, aprendizajes, es ser completamente.

Hemos olvidado ser uno mismo, somos replicas de al-

guien mas y nos percibimos divididos, separados y fragmenta-

dos.

186




Hemos perdido nuestra identidad, vivimos a través de

imágenes mentales de si mismos, preocupados, atados, apega-

dos de quienes somos. Protegiendo y potenciando virtualizando

esas imágenes que hemos fabricado.

Somos dependientes a lo que el espejo refleja de nosotros

que a nuestro reflejo del espejo, esa imagen debe de encajar en

los marcos de referencia, para que se de una aceptación de la

imagen. Ese apego a esa imagen produce un vacío del ser, al

concentrarse en lo material y en la imagen de si.

Un ser de imágenes mentales que es creado y creido con

las imágenes de los libros, la televisión, el cine, la radio, que

nos construyen, la cultura, la religión. Esas imágenes nos atan a

una vida armada y creada, que nos estaciona en satisfacer esas

imágenes de quienes somos.

Nos creamos y recreamos a imagen y semejanza, sin pre-

guntarnos ¿quienes somos real y virtualmente y a donde va-

mos?

Imágenes tan empotradas en nuestro ser que es difícil

pensar fuera de la caja. Olvidándonos de ser libres de nuestros

pensamientos, imágenes, sueños, llevándonos a perder nuestra

magia.

La magia en este sentido tiene que ver con la pasión de

vivir, la energía y movimiento de la vida y la continuidad y

hado de ser.

Hemos olvidado jugar en la incertidumbre, somos prede-

cibles, sin emociones, sin sensaciones.

¿Qué es un mago sin magia?

Imagínate un globo sin aire, un rio sin cause, un ave sin alas, un

árbol sin hojas, una cuadro sin color, una guitarra sin sonido, un

mar sin agua, un viento sin nubes.

¿Qué es un mago sin magia?

Quizá lo mas parecido a el, seria un silbido en la llanura sin sonido,

o un pastel sin sabor, una flor sin olor, un amanecer sin color, un

sol sin calor. Y sin embargo estaría allí para ti, para brillar, sonreír,

brincar, cantar y jugar.

Un mago sin magia es un ser sin memoria, sin algo a que

atarse, a que sujetarse como ese brillo del sol en el alba. Un ser sin

magia es un ser que ha perdido su ángel, no ese que viene con sus

alas blancas a ser el guardián de tus sueños, si no ese ángel que da

luz a tu ser. Un mago es un ser de luz, transparente.

Un ser transparente es, un ser capaz de llenar el vacío del

invierno y calentar las aguas para formar las nubes en el horizonte.

Un ser transparente es, un ser que sin ser mar inunda de co-

lor azul los cielos, descubriendo las estrellas en la noche.

Un ser transparente es, un ser que siendo lluvia baña las

montañas con su frescura y es capaz de hacer crecer hojas del viejo

árbol de manzana.

Un ser transparente es, un ser capaz de sincronizarse con los

sonidos del viento y estremecer con sus truenos los tulipanes en el

verano. Y es que para ser transparente basta con ser.


187



¿Los sueños preceden a la vida?

La búsqueda de la respuesta que nos lleve a entender si los sue-

ños preceden a la vida, es detenernos en este instante y mirar si

nuestra vida no ha sido mas que eso, un sueño de existir.

Es en ese espacio interior de los sueños donde se encuen-

tran los seres mágicos que crean las historias de vida, donde un

elefante marrón nos muestras el campo de posibilidades, nues-

tro registro akásico, vivencias, historias y experiencias, sueños

y a través de las palabras mágicas y actos mágicos de vida, se

crean y recrean en nuestra vida.

¿los sueños preceden a la vida?

Una pregunta que suele plantearse al final del camino, y

¿por qué no ahora?, ¿o en cualquier momento de nuestra vida?

una pregunta que es un punto crucial como lo plantea Capra, es

como la recursividad de Morin, es la Sincronicidad de Peat, el

sincrodestino de Chopra, como el despertar de conciencia del

Lama, Bohm, Krishnamurti, Grof, es como la magia de ser en

sintonía con nuestros sueños. Es darse cuenta que la magia de

los sueños existe en el ahora, Tolle, Ruiz.

Es compartir vida, nuestro espacio y sueños. Es crear al-

rededor de nosotros nuestro sueño de vida, disoñando el mundo

que queremos compartir. Donde magia, pasión e intuición nos

llevan a construir un mejor lugar y un espacio de vida y apren-

dizaje.

Todo comienza como un sueño al nacer, continuamos con

una vida de magia, transformando cada bifurcación en un opor-

tunidad, ahora nuestra vida se ve llena de esos sueños hechos

realidad, donde la realidad es lo que queda después de haber

soñado.

¡Curioso no! Los sueños preceden a la vida.

Donde el ser qué busca el sentido del ser en el ser mismo. Lo

encuentra en una vida plagada de sueños.

Que hay detrás de esta tesis, quizá estas líneas nunca las es-

criba porque el simple hecho de pensarlas sea una inercia men-

tal de lo que no se escribe y ocurre detrás de una tesis. Otro ti-

tulo sería lo que no se escribe pero se vive cuando se escribe

una tesis. Siento que he crecido como ser humano en el trans-

curso de las lecturas y escritura de los diferentes ensayos, y

quizá sea ese ejercicio de reflexión el queme tiene aquí escri-

biendo, lo que no se escribe al hacer una tesis.

Para escribir unas palabras, unas líneas, un párrafo, una

cuartila, a veces pasan días e incluso semanas, o meses. Y la

pregunta es porque tardamos tanto en hacernos presentes, y es

que es eso precisamente, la presencia de la esencia que se ocul-

ta, se retrae, se esconde a meditar y solo es capaz de expresarse

por nuestros dedos, cuando siente la vibración de nuestras emo-

ciones que se permite salir a alumbrar nuestra existencia.

Esa luz interna es muy difícil de percibir y de entender,

esa inspiración y expiración de la vida van tan juntas y tan uni-

das que el simple hecho de que aparezca una oculta a la otra y

al mismo tiempo la desnuda y deja ver su presencia.

188





189


Citar, Leer, Comentar y sentir Te.

No se trata de seguir una idea impuesta; se trata de encontrarte a ti mismo y de expresarte a tu manera. Miguel Ruiz

Expresar la vida en términos de los autores es abandonar nuestra esencia de artistas, es dejar de lado nuestros sueños por los de otras perso-

nas. Ser alquimista de nuestro propio destino implica coraje de transformar nuestros ambientes internos o virtuales y los externos o reales. El

reto como seres humanos es transformarnos en un buscador, un buscador de los elementos alquímicos que nos lleven a vivir nuestro arte.

En este sentido, mi camino fue en caída libre, el descubrir la pregunta ¿se puede soñar despierto?, me llevó a un lugar donde solo se

puede llegar si haces aparecer en tu vida, tu Virtualidad, esa esencia que trasciende tus actos de vida y le da presencia a tu ser, siendo mági-

co. Por que esa magia es la que transforma la manera de ser, sentir y vivir en esa Virtualidad siendo reales. Donde despertar de ese sueño

profundo que creo nuestra existencia es un compromiso con los sueños mas profundos que la dan intención a tu existencia — un mapa para

las horas de vigilia —, ese sentido, ese significado de vida, que hace mágico cada acto de vida.

En la conferencia ―Hay que abortar el sistema educativo‖ Francisco Gutiérrez decía: El docente, dejaría de ser docente para convertir-

se en alguien que promueve el aprendizaje, es decir, hacer "pedagogía" de verdad, en todo el sentido de la palabra.

Todo está en los discos duros... el inicio del cambio de paradigma está en revisar el porqué los maestros están tan empeñados en ense-

ñar. "¿Qué es lo que estamos enseñando? No enseñamos nada. Todo lo que nosotros podemos enseñar ya está en los discos duros.

Desde que nació la imprenta con Gutemberg ya todo estaba en los libros, y ahora la información está en la computadora. Todo lo que

yo pueda enseñar hoy está metido ya en un ordenador y en programas informáticos, es decir que está resuelto el problema de la infor-

mación. ¿O quién que diga que es capas de poder captar toda la información que tiene en su mano? Ahí es donde el educador entra a

jugar un papel importante porque su misión es transformar esa información en conocimiento. La información está, pero ¿Qué hace-

mos con ella?".

Aunque leí muchos libros, mire muchas películas, escuche miles de canciones, escuche a muchas personas, compartir mis intentos de

libros, jugué, pinte, dibuje y trace muchos mapas con todos los seres con quien interactuó. El acompañamiento virtual por parte de estos au-

tores, los cuales conversan conmigo y eran mentores de mi aprendizaje. Sin embargo sería muy extenso, citar a mis maestros virtuales, que

son mis mentores reales, No los cito para justificar, No los cito para que exista mi sueño, por que si mi sueño hace real mi virtualidad, enton-

ces mi virtualidad es real, y es entonces que sucede que aparezco en el acto mágico de la vida, donde se sincroniza el sueños, magia y virtua-

lidad, soñando despierto.

El permitirnos aparecer en el acto mágico de vida, nos da la oportunidad de expresar nuestro arte, el arte de vivir nuestra propia vida.


El aprendizaje del emocionar es transferible. Esta expe-

riencia peculiar de darse cuenta de que se pertenece o se

es parte de un ámbito de identidad más amplio que el

propio de una vida individual estrecha, es lo que usual-

mente se es parte de un ámbito de identidad más amplio

que el propio de una vida individual estrecha, es lo que

usualmente se connota en diferentes culturas cuando se

habla de una experiencia mística o espiritual.

Amor y juego, pp39

190



Sueños, magia y virtualidad:

es ir al encuentro de dos caminos unidos desde el inicio de los

tiempos, los sueños y la magia, y unirlos en un espacio de vida,

la virtualidad. Ese espacio/vacío de vida que es capaz de des-

pertarnos en el sueño eterno de vivir nuestros sueños y darle

sentido a nuestras vidas.

¿Cuáles son tus sueños?

Pidámosle al cosmos para disfrutar los sueños que soñamos

juntos sobre la Educación que soñamos.

Francisco Gutierrez



191


¿ y si fuéramos solo

un sueño?

Sueños, magia y virtualidad ¿se puede soñar despierto?

te pregunto amigo interlocutor

¿Ya despertaste?

Si es así a soñar despierto

¿Sabes por qué

desaparecemos ?

¿Y si la vida fuera

una chifladura?

El árbol de los

sueños El ser arte o

el arte de ser



Soñar que eres es despertar

quien eres

Magia: acto que hace posible des-

pertar al mago interior a la vida

Elefante marrón: ¿Cómo recuer-

dan los sueños que son sueños?

El cometa mágico: la conexión mágica

al mundo de los sueños

Virtualidad: acto mágico

que le da existencia al ser

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sueños, magia y virtualidad