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¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? En cuanto tu saludo llegó a mis oídos la criatura saltó de alegría en mi vientre. ¡Dichosa tú que has

¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? En cuanto tu saludo llegó a mis oídos la criatura saltó de alegría en mi vientre. ¡Dichosa tú que

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¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor?En cuanto tu saludo llegó a mis oídos la criatura saltó de alegría en mi vientre.

¡Dichosa tú que has creído! Lc 1, 39-45

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“Dios se hizo vida en su vientre, porque antes se había hecho verdad en su mente” (San Agustín)

LA DONCELLA DE LA ESPERANZALA DONCELLA DE LA ESPERANZA

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El evangelio de hoy evoca el encuentro de María con su

pariente Isabel, también gestante de un niño

que será el precursor del Mesías.

Los vientres de las dos mujeres parecen

transparentes.El niño que gesta Isabel

aparece arrodillado ante el niño que

gesta María.

Retablo catedral vieja de Salamanca

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Isabel dirige a María tres elogios:

““Bendita tú entre las mujeresBendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre”.y bendito el fruto de tu vientre”.

La dicha de la madre proviene esta vez La dicha de la madre proviene esta vez de la grandeza del hijo, que es fuente de salvaciónde la grandeza del hijo, que es fuente de salvación

para los que creen en él.para los que creen en él.

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““¿ Quién soy yo para que me visite¿ Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor?”la madre de mi Señor?”

La conciencia de la La conciencia de la presencia del Señor nos presencia del Señor nos

lleva a descubrir nuestra lleva a descubrir nuestra in-dignidad.in-dignidad.

En María, como nueva En María, como nueva Arca de la Alianza, se Arca de la Alianza, se

revela a Isabel la revela a Isabel la presencia santa de Dios.presencia santa de Dios.

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““Dichosa tú que has creído,Dichosa tú que has creído, porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá”.porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá”.

Si el evangelio se cierraSi el evangelio se cierra con una bienaventuranza con una bienaventuranza

a los que han de creer a los que han de creer sin haber vistosin haber visto

(Jn 20, 29), (Jn 20, 29),

se abre con esta otra dirigida se abre con esta otra dirigida a la Madre del que nos hará ver.a la Madre del que nos hará ver.

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““TÚ QUE HAS TÚ QUE HAS CREÍDOCREÍDO””

Todas las bienaventuranzas, aun dirigidas

a los pobres, a los mansos, los compasivos o los pacificadores,

proclaman la dicha de la fe y de la felicidad de los que se han atrevido a confiar en el Señor.

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“LO QUE TE HA DICHO EL SEÑOR SE CUMPLIRÁ”

La palabra de Dios ha sido definitiva en la vida de María.La palabra de Dios ha sido definitiva en la vida de María.Ella la había aceptado plenamente.Ella la había aceptado plenamente. “ “Hágase en mí según tu palabra”.Hágase en mí según tu palabra”.

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Dios y Padre nuestro, tú has elegido a Maríacomo destinataria de tu palabra de vida y madre de tu Hijo Jesús. Que por la gracia del Espíritu que le reveló tu voluntad nosotros seamos fieles al don de la fe. Amén

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José Román Flecha Andrés Palabra del Señor, Salamanca , Editorial.Secretariado Trinitario,2007

Presentación: Antonia Castro Panero