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Asociacin Latinoamericana de Estudios de Asia y frica
XIII Congreso Internacional de ALADAA
Polticas del Sur
Entre la utopa nacional y el imaginario de construccin de nacin Alfonso Julin Montalvo Peate
Stalin Ballesteros Garca
Resumen
La nacin colombiana se ha construido desde sus inicios a raz del grito de
independencia efectuado el 20 julio 1810, desde ese momento hasta la actualidad, han
surgido diferentes procesos que han reconstruido la sociedad colombiana. En
consecuencia, la realidad poltica actual se debe a momentos que han generado
procesos de transformacin de la sociedad, pero sobre todo de apropiacin de una
memoria histrica impuesta por el establecimiento estatal.
El objetivo de este trabajo es sugerir que ha habido una construccin hegemnica y
homogeneizante del pasado en la que otras historias son subsumidas y de alguna
manera negadas en el discurso sobre lo nacional y que la campaa de conmemoracin
del bicentenario apunta en esa direccin. Para lograrlo, este trabajo se divide en tres
partes; la primera desarrollaremos el concepto de nacin y su discusin en Colombia
desde la nocin moderna hasta la multitnica y pluricultural. En la segunda parte,
muestra la conceptualizacin de utopa segn Fals Borda para poder desarrollar las
diferentes cosmovisiones de identidad nacional y los momentos de subversin que han
surgido de manera alterna en Colombia; y concluir con la relacin de estos conceptos
en momentos histricos relevantes en Colombia.
Asociacin Latinoamericana de Estudios de Asia y frica
XIII Congreso Internacional de ALADAA
Polticas del Sur
Entre la utopa nacional y el imaginario de construccin de nacin Alfonso Julin Montalvo Peate
Stalin Ballesteros Garca
La nacin colombiana se ha construido desde sus inicios a raz del grito de
independencia efectuado el 20 julio 1810, desde ese momento hasta la actualidad, han
surgido diferentes procesos que han reconstruido la sociedad colombiana. En consecuencia,
la realidad poltica actual se debe a esos momentos como, las revoluciones liberales; la
hegemona conservadora; la violencia y el frente nacional y la constitucin de 1991 entre
otros sucesos de igual importancia, desde los cuales se han generado procesos de
transformacin de la sociedad, pero sobre todo de apropiacin de una memoria histrica
propuesta (impuesta) por el establecimiento estatal. Hoy en da la conmemoracin del
bicentenario parece centrarse en resaltar la independencia como un elemento aglutinador de
la identidad nacional. Dentro de ese imaginario de sociedad se propone la aceptacin de la
realidad poltica actual como escenario culmen del progreso de la sociedad colombiana.
Esta construccin de identidad nacional alrededor del bicentenario, parecera estar
orientada a la homogenizacin de la lectura de la historia nacional y sus consecuencias,
basada en una propuesta hegemnica de construccin de una memoria histrico-poltica
dirigida a consagrar una idea del deber ser nacional.
El objetivo de este trabajo es indicar que ha habido una construccin hegemnica y
homogeneizante del pasado en la que otras historias son subsumidas y de alguna manera
negadas en el discurso sobre lo nacional y que la campaa de conmemoracin del
bicentenario apunta en esa direccin. Para lograrlo, este trabajo se divide en tres partes; la
primera desarrollaremos el concepto de nacin y su discusin en Colombia desde la nocin
moderna hasta la multitnica y pluricultural. En la segunda parte, muestra la
conceptualizacin de utopa segn el maestro Fals Borda (2008) para poder desarrollar las
diferentes cosmovisiones de identidad nacional que se han propuesto en Colombia a lo
largo de los doscientos aos republicanos y concluir con la relacin de estos conceptos en
momentos histricos relevantes en Colombia. Y as, poner sobre la mesa el debate sobre la
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conmemoracin: doscientos aos de libertad y democracia vs doscientos aos de bsqueda
de emancipacin
1. Introduccin.
Es indispensable resaltar la tendencia de la humanidad, en la bsqueda de la
emancipacin del ser humano (mejorar su ethos). Aceptando este principio, por condiciones
propias de las desigualdades creadas por la conquista, fueron apareciendo en el Nuevo
Mundo fuerzas de diversa ndole y origen ideolgico y tico, en pro de la transformacin
social.
Tres siglos aproximadamente permaneci el dominio de Espaa sobre los nuevos
territorios, en los cuales se construy un ethos social que rompa el orden de los pueblos
originarios y adaptando sus estructuras sociales y de produccin.
El contexto de ese momento es necesario recordarlo, sobre todo en este escenario, dado
el movimiento insurreccional, la motivacin se enaltecera por lo que los franceses invadan
Espaa. Desde estos inicios de subversin-insurreccin hasta lograr en la batalla de Boyac
el 7 de agosto nace lo que hoy conocemos como Colombia, pero lejos de ser un Estado que
ha ido en las lneas del progreso y crecimiento poltico, econmico, social, ha estado bajo el
constante enfrentamiento de elites, que sometan al resto de la sociedad a los despojos del
resultado de la pugna de sus intereses. Es as, como entre las elites que se construyen en la
repblica y/o heredan de la colonia, surgen enfrentamientos polticos y econmicos desde
sus inicios como pas. Tales enfrentamientos se van a mantener durante estos 200 aos. Sin
embargo, surgen movimientos populares transformadores, emancipatorios y
revolucionarios que buscan de manera independiente la construccin de una nueva utopa;
que son reprimidos o finalmente buscan estrategias para agruparse con las elites ms
progresistas, para sobrevivir o lograr avances en pro de esa utopa. Esta situacin se va a
hacer ms patente sobre todo en cuatro momentos, las revoluciones liberales; la hegemona
conservadora; la violencia y el frente nacional; y la constitucin de 1991.
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2. Nacin, de la modernidad a la interculturalidad.
La construccin e idealizacin de la nacin colombiana y su sentimiento de
nacionalismo encuentra sus inicios en la justa independentista que se dio el 20 julio 1810
momento en el cual se efecta el grito de independencia. Desde ese momento y hasta la
actualidad se abre una serie de proceso polticos, elementos e imaginarios culturales que
constituyen lo que se entiende y ha entendido por nacin. En nuestra bsqueda para
acercarnos y tratar entender este concepto se nos presentan dos posturas tericas sobre esta
nocin, que son expuestas por Ingrid Bolvar desde sus ejercicio titulado Cuadernos de
Nacin, Nacin y sociedad contempornea, en el se nos muestra una nacin moderna y
una nacin primordialista o culturalista.1 Manifestemos estas dos titulaciones desde lo
planteado por Bolvar quien desde su teorizacin entiende que la primera denominacin
atiende una nacin de carcter relacional, [] lo que define a la nacin es un tipo
especifico de relacin con el poder poltico y su capacidad de delimitar un territorio
(Bolvar, 2001:10).
La segunda categorizacin de nacin surge desde una mirada culturalista o
primordialista como lo indica Bolvar. Desde esta ptica se plantea una nacin que da
[] cuenta de un grupo social que se afirma como totalidad, con base en una serie de
vinculaciones tnicas, raciales o histricas y sin conceder mayor preeminencia a su relacin
con el poder poltico predominante (Bolvar, 2001:10)
Es posible que desde estas dos pticas la idea nacin colombiana tenga sus diferentes
aproximaciones en relacin a lo planteado. En relacin con la segunda idea, esta se puede
entender desde esa bsqueda de una afinidad tnica, racial o histrica en donde el
colombiano busca construir pas o nacin a partir del encuentro con su otro coterrneo,
quien tambin responde a esos procesos de memoria y apropiacin.
1 Estas titulaciones o planteamientos son tomados del texto mencionado de Ingrid Bolvar, quien hace estas
distinciones de nacin desde autores como Anthony Smith y C. Jaffrelot.
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En relacin a la segunda idea de nacin que es concebida como modernista desde
donde se piensa la nacin desde un poder poltico en relacin a un territorio que debe ser
defendido ante los otros que no hacen parte de este y a sus mismos habitantes, es posible
que desde ah se empiezan a construir sujetos nacionales, amarrados a ideales y procesos
polticos especficos definidos. Para mostrar uno de estos procesos traigamos a colacin la
consagracin de la constitucin nacional de 1991 como carta de navegacin con la cual el
pas desde sus diferentes esferas debe hacer el ejercicio poltico de construir nacin bajo
unos mismos lineamientos.
Desde lo anterior y en relacin al desarrollo de la nacin colombiana y el ejercicio de
conmemoracin del bicentenario en Colombia, encontramos otra definicin de nacin que
hace referencia a ese sentido de memoria histrica y colectiva que parece activarse a travs
de la campaa publicitaria y actividades pedaggicas impulsadas por dicha conmemoracin.
Nos referimos aqu a la definicin proporcionada por Ernest Renn, quien en su conferencia
titulada Que es nacin? Cristianismo y judasmo, pronunciada hace dos siglos
aproximadamente, plantea:
Una nacin es un alma, un principio espiritual. Dos cosas que, a decir verdad, no son ms que
una sola, constituyen esta alma, este principio espiritual. Una se halla en el pasado, la otra en el
presente. Una es la posesin en comn de un rico legado de recuerdos, la otra el consentimiento
actual, el deseo de vivir en comn, la voluntad de continuar haciendo valer la herencia indivisa
que se ha recibido. El hombre, seores, no se improvisa. La nacin, como el individuo, es la
culminacin de un largo pasado de esfuerzos, sacrificios y devocin. El culto de los antepasados
es el ms legtimo de todos, ellos han hecho de nosotros lo que somos. Un pasado heroico,
grandes hombres, la gloria, (me refiero a la verdadera) he ah el capital social sobre el que
asentamos una idea nacional. Poseer glorias comunes en el pasado, una voluntad comn en el
presente, haber hecho grandes cosas juntos, querer hacerlas todava, he ah las condiciones
esenciales para ser un pueblo2
2 Conferencia pronunciada en la Sorbona, el 11 de marzo de 1882. En: Ernest Renn, Qu es una nacin?
Cristianismo y judasmo. Contemporneos ilustres. Consejos del sabio. Editorial Elevacin, Buenos Aires,
1947. Primera parte, pp. 23-42.
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Desde esa idea carismtica y casi esencialista de nacin planteada por Ernest Renn,
quien entiende esta como un todo enmarcado en procesos del pasado y del presente que
ayudan a esa afirmacin colectiva e individual de la construccin del ideal de nacin.
3. De la utopa en Colombia: subversin y cambio social.
Para esta parte del trabajo nos sustentaremos principalmente en la propuesta de Orlando
Fals Borda en su libro La subversin en Colombia, el cambio social en la historia. En
este libro Fals Borda plantea las concepciones utpicas que sobre Colombia se han vertido
en distintos momentos y las define como motores de accin insurreccional que van a
sustentar la subversin y de ah las cosmovisiones de la identidad nacional que se han
mantenido en pugna en Colombia.
Segn Fals Borda (2008) en Colombia se han presentado como flujo normal de la
historia diferentes propuestas de la transformacin de la sociedad colombiana, para as
poder alcanzar una sociedad soada (utpica). Para la conceptualizacin de la utopa, Fals
se basa en ideologa y utopa de Karl Mannheim (1941) y Die Revolution de Gustav
Landahuer (1919). Fals Borda resalta la necesidad de tener presente que la utopa puede no
alcanzarse por completo y es lo que llama utopa relativa, a diferencia de la utopa absoluta
que es la que se logra completa y perfectamente. Si bien la relativa no se alcanza
completamente si se mantiene en ella una porcin ideolgica, por lo tanto hay un proceso
de prdida o decantacin en la transicin que va de una utopa a su realizacin (Fals 2008).
La construccin de un nuevo orden social implica el cambio del establecimiento, del
status quo, no necesariamente completo, por ende sin que ninguna utopa se pueda alcanzar
de lleno, antes bien la realizacin de la utopa deja al descubierto inconsistencias,
contradicciones e hipocresas de las sociedades humanas (Mannheim 1941). De ac que el
orden social vigente, o la topa caracterizada por la estabilidad y autoridad propias de
instituciones tradicionales en un periodo determinado de tiempo. (Landahuer 1919)
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Fals Borda resalta el acuerdo entre Manheim y Landahuer en que las utopas se ganan
parcialmente, dejando residuos en las topas y ordenes sociales o produciendo utopas
relativas. Basado en lo anterior Fals Borda afirma que existe un periodo histrico durante el
cual la antigua topa no existe ms y tampoco se ha alcanzado la nueva. Este periodo
conflictivo () lleva de la relativa estabilidad de la primera topia a la relativa estabilidad
de la segunda, (Fals Borda 2008) alcanzando as pasos o escalas a lo que es el cambio
social. Sin embargo, surge el interrogante de cules son los elementos sociales que
intervienen en ese periodo, adems de los elementos dialecticos del proceso de decantacin
de una utopa absoluta.
Segn Fals Borda, Colombia y Amrica Latina se encuentran en uno de sus periodos de
transicin entre ordenes sociales, cuando se quiere descartar una utopa de 400 aos para
buscar a empujones una nueva sociedad. Hacindose evidente, interrelacin entre grupos
econmicos e ideologas que generan bien una promocin o frustracin de movimientos
sociales. En Colombia, se destacan metas hacia las cuales se han movido las sociedades,
utopas inspiradoras que animan la accin para llegar a la tierra prometida, pero que al fin
se condicionan y/o decantan por la realidad propia de contexto, dejando residuos en la
historia con la impronta de las tensiones producidas.
4. Nacin como utopa o Utopa nacional?
La nacin colombiana como producto de la elite o su cooptacin, genera una relacin de
poder en el que da trato de subalternos a los dems, la no elite. La nacin como artefacto
cultural de la clase burguesa, en palabras de Anderson, o segn Gellner; un alto grado de
elaboracin de las culturas y su existencia homogenizada, estandarizada regulada por la va
de procedimientos de homogeneizacin impuesta por un sector con cultura ms
desarrollada. La nacin, comunidad construida y articulada en unas relaciones de poder en
las que no todos participan en igualdad de condiciones. Para Colombia hay cuatro
momentos histricos de vital importancia que contraponen la utopa nacional y la
construccin del imaginario de nacin, entre su sentido emancipatorio y la imposicin
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hegemnica y homognea. Estos momentos son, las revoluciones liberales; la hegemona
conservadora; la violencia- frente nacional y la constitucin de 1991.
Revoluciones liberales: Si bien la independencia tiene profundas races en el
pensamiento liberal y en el avance del mismo en Europa, Colombia ha estado en constante
negociacin y enfrentamiento de sus elites, lo que mantuvo un orden seorial hasta
mediados del siglo diecinueve. As, la propuesta utopa liberal, que se da desde 1794, toma
fuerza e influye en la independencia y deja condiciones propicias para que pueda surgir una
subversin Liberal entre los aos 1848-1867. Las reformas liberales propendieron por
construir una nacin como comunidad tica y cultural, inspirada y en aoranza de lo
ciudadano europeo-civilizado, una sociedad blanca, culta y capitalista.
Hegemona Conservadora: Producto de los cambios del siglo diecinueve se reconstruye
la sociedad colombiana, lo que Fals Borda denomina el orden burgus, en medio de las
disputas de poder de liberales y conservadores, se consolida el ordenamiento de la nacin
desde y sobre la burguesa reciente, que ya se consolidaba. Posterior a este orden burgus
deviene el periodo de tiempo que se recuerda como la poca de la regeneracin, entendida
como la intencin poltica por consolidar la unin nacional y hacer frente al caos y
anarqua social que se desprenda de enfrentamiento entre las fuerzas conservadoras y
liberales que desataron la guerra civil conocida como La Guerra de los Mil Das. En este
choque de fuerzas diametralmente opuestas en la concepcin de la sociedad, los
conservadores surgen victoriosos imponiendo una nacin catlica, de habla hispana y de
predominio de la raza hispnica, entendida ms en trminos culturales que biolgicos.
Violencia frente nacional: a pesar de la opresin y hegemona impuesta por los
conservadores durante el primer tercio del siglo XX, surge una subversin socialista, que se
encuentra desde las huelgas obreras como la de la masacre de las bananeras en 1928 y que
produjo cambios a gobiernos liberales en la dcada de los 30. Esto imprime topias propias
de la lucha y negociacin entre socialistas y liberales, alcanzando como lo denomina Fals.
Borda un orden social-burgus. En este orden social-burgus se logr incluir en las polticas
estatales exigencias propias de las luchas de las clases menos favorecidas, evidenciando la
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lucha entre la utopa socialista y la imposicin de una nacionalidad blanca, catlica e
hispana. Sin embargo, la elite conservadora aprovecho las diferencias al interior del partido
liberal y alcanz el poder nuevamente, promoviendo una violencia interpartidaria entre los
seguidores de cada uno de los partidos. Tal situacin se agrav el 9 de abril de 1948 con el
asesinato de Jorge Eliecer Gaitn, caudillo liberal de estirpe socialista. Este magnicidio se
recuerda como el climax del enfrentamiento entre los conservadores y liberales, generando
al poca conocida como la violencia; periodo de tiempo que da origen a las guerrillas
liberales, guerrillas que dieron origen a las guerrillas que hoy en otro espectro ideolgico
aun existen en Colombia. Debido a tal caos social hubo una interrupcin al rgimen
impuesto por los conservadores con Laureano Gmez en la presidencia. Los militares
retiraron del poder al presidente Laureano Gmez Castro, instaurando una junta militar bajo
la presidencia del Gral. Gustavo Rojas Pinilla
Al enfrentamiento entre los partidos polticos se logr una solucin entre las elites, en
Benidorm Espaa, La violencia entre facciones partidarias disminuy, gracias al acuerdo
entre las elites partidarias del conservadurismo y el liberalismo, en el acuerdo conocido
como frente nacional donde se comprometan a turnarse el poder durante un periodo
presidencial (4 aos) entre los candidatos oficiales de partido (liberales entre el 58 - 62 y
66-70 y conservadores entre el 62-66 y 70-74). Esta sucesin de poder, resolva el conflicto
entre las elites polticas y econmicas del pas, pero no resolva el conflicto en el sector
rural ni en sus bases populares. La ausencia de soluciones a las causas sociales del conflicto,
mantiene y fortalece los actores armados en contra del Estado, profundizando as el
conflicto, a la vez que se fortaleca el bipartidismo.
Constitucin de 1991. El frreo bipartidismo, que exclua la participacin poltica a
dems organizaciones diferentes al partido liberal y el partido conservador, adems de las
condiciones internacionales generadas por sucesos la guerra fra, la revolucin cubana, el
proceso de descolonizacin entre otros, deriv en el incremento de movimientos populares
y subversivos (FARC, ELN, EPL, M19) los cuales generaron diferentes procesos de
negociacin que no lograban ser culminados. Fue hasta finales de los aos ochenta, que los
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acuerdos de paz derivaron en la construccin de una nueva constitucin, la carta poltica de
1991.
Producto de este pacto social se redefine la identidad nacional, de la concepcin tnica y
elite de nacin (primordialista), se llega a la concepcin de nacin multitnica y
pluricultural, que como reza en su articulado: Colombia es un Estado social de derecho,
organizado en forma de Repblica unitaria, descentralizado, con autonoma de sus
entidades territoriales, democrtica, participativa y pluralista, fundada en el respeto de la
dignidad humana, en el trabajo y la solidaridad de las personas que la integran y en la
prevalencia del inters general(Art 1 CPC. 1991). Elementos, que demuestra en la nacin
colombiana, el afn de reconocer y plantearse como una repblica unitaria, pluralista y
democrtica. Se plantea una nacin pensada dentro del marco de contradicciones a raz de
los diferentes fenmenos culturales y polticos que se dan dentro de la construccin de pas,
que el fondo, y analizndolo desde los ltimos gobiernos en el pas, el concepto de nacin
est encaminado a pensarse como una elemento de homogenizacin, quizs como lo
plantea Bolvar quien nos recuerda que:
En la Asamblea Nacional Constituyente se expresaron numerosas diferencias entre la visin de
la nacin como comunidad tnica y como comunidad de ciudadanos, comunidad poltica
imaginada. Pero ms all de las diferencias entre ellas se debe destacar que en cualquiera de los
casos- la referencia a la nacin implica un tipo concreto de homogenizacin. As pues, la nacin
se define a partir de reconocimiento privilegiado de aquello que nos hace iguales a nosotros
y que, al mismo tiempo nos hace distintos y distinguibles de los otros. Para aquellos que
conciben la nacin como una comunidad tnica, la homogeneidad descansa en la etnicidad:
existencia de una lengua, una raza, una cultura, comunes a sus distintos miembros. En tanto que,
para los que conciben la nacin como una unidad de ciudadanos, la homogeneidad, lo comn
que configura el nosotros, reposa en la mente de cada uno, que se imagina en comunin con
otros (Bolvar y Gonzales. 2002)
El enfrentamiento entre los otros y el nosotros, da pi a un nuevo ethos social, producto
del enfrentamiento entre la construccin de una identidad de nacin y la utopa presente en
cada una de las subversiones que resurgen a lo largo de los 200 aos de repblica.
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Bibliografa:
-Fals Borda, Orlando. La subversin en Colombia, el cambio social en la historia. CEPA 2008
Bogot.
-Bolivar Ingrid Cuadernos de Nacin, Nacin y sociedad contempornea. Bogot 2010
-Ernest Renn, Qu es una nacin? Cristianismo y judasmo. Contemporneos ilustres. Consejos
del sabio. Editorial Elevacin, Buenos Aires, 1947