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FONOLOGÍA FUNCIONAL DEL ESPAÑOL EUGENIO MARTÍNEZ CELDRÁN Universidad de Barcelona 5.1. Principios teóricos 5.1.1. ¿Qué estudia la fonología? La fonología es la disciplina lingüística que estudia la estructura de los elementos que integran la segunda articulación del lenguaje y su organización en los mensajes. Una estructura es un conjunto de unidades que cumplen una función 1 distintiva y que están dispuestas de forma trabada de modo que cada una de ellas contribuye a mantenerla. El estudio de esa estructura implica delimitar cuántas unidades la constituyen, buscando todas aquellas que cumplan la función distintiva y, luego, supone también determinar las relaciones existentes entre ellas. La estructura se muestra en forma de cuadro que tiene la misión de presentar gráficamente la trabazón de las unidades que lo componen. Las unidades fonológicas pertenecen a la segunda articulación del lenguaje porque participan de los significantes de los signos lingüísticos que como tales forman la primera articulación 2 . Dichas unidades no son significativas; es decir, en sí mismas no mantienen ningún lazo de unión con la semántica; pero sí sustentan relaciones estrechas con los niveles próximos: la fonética, de donde extraen las cualidades necesarias para definir sus propios elementos distintivos y la morfología a la cual sirven de expresión para sus unidades significativas. 1 L. Hjelmslev (1939) decía que “el objetivo del lingüista es postular, para cada hecho particular, una razón funcional” (p. 109). Este objetivo es el de la lingüística llamada funcional que surgió en Europa en la década de 1920 y que se centró en el llamado Círculo Lingüístico de Praga, cuyos principales animadores fueron entre otros: N.S. Trubetzkoy, R. Jakobson, A. Martinet, etc. En esta línea se sitúa este capítulo de fonología española. 2 A. Martinet (1965) es el que ha expuesto de forma más clara esta doble perspectiva del lenguaje: una primera articulación compuesta por signos mínimos, denominados monemas (o morfemas), y una segunda

Martínez Celdrán, Eugenio (2000) - Introducción a La Fonología Funcional. en M. Alvar, Introd. Ling-esp

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  • FONOLOGA FUNCIONAL DEL ESPAOL

    EUGENIO MARTNEZ CELDRN Universidad de Barcelona

    5.1. Principios tericos

    5.1.1. Qu estudia la fonologa?

    La fonologa es la disciplina lingstica que estudia la estructura de los elementos que integran la segunda articulacin del lenguaje y su organizacin en los mensajes. Una estructura es un conjunto de unidades que cumplen una funcin1 distintiva y que estn dispuestas de forma trabada de modo que cada una de ellas

    contribuye a mantenerla. El estudio de esa estructura implica delimitar cuntas unidades

    la constituyen, buscando todas aquellas que cumplan la funcin distintiva y, luego,

    supone tambin determinar las relaciones existentes entre ellas. La estructura se muestra

    en forma de cuadro que tiene la misin de presentar grficamente la trabazn de las

    unidades que lo componen.

    Las unidades fonolgicas pertenecen a la segunda articulacin del lenguaje porque participan de los significantes de los signos lingsticos que como tales forman

    la primera articulacin2. Dichas unidades no son significativas; es decir, en s mismas no

    mantienen ningn lazo de unin con la semntica; pero s sustentan relaciones estrechas

    con los niveles prximos: la fontica, de donde extraen las cualidades necesarias para

    definir sus propios elementos distintivos y la morfologa a la cual sirven de expresin

    para sus unidades significativas.

    1 L. Hjelmslev (1939) deca que el objetivo del lingista es postular, para cada hecho particular, una

    razn funcional (p. 109). Este objetivo es el de la lingstica llamada funcional que surgi en Europa en la dcada de 1920 y que se centr en el llamado Crculo Lingstico de Praga, cuyos principales animadores fueron entre otros: N.S. Trubetzkoy, R. Jakobson, A. Martinet, etc. En esta lnea se sita este captulo de fonologa espaola. 2 A. Martinet (1965) es el que ha expuesto de forma ms clara esta doble perspectiva del lenguaje: una

    primera articulacin compuesta por signos mnimos, denominados monemas (o morfemas), y una segunda

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    5.1.2. Las unidades fonolgicas

    Todas las unidades lingsticas se caracterizan por mantener dos tipos de

    relaciones: paradigmticas y sintagmticas. Cualquier lengua posee dos aspectos que

    hay que destacar: el sistema y el decurso. El sistema consiste en la estructura que

    permite la emisin de mensajes. El decurso se manifiesta en la lnea que sigue cada uno de esos mensajes que se han hecho efectivos en el momento de utilizar la lengua. Sistema y decurso se presuponen mutuamente y no se puede estudiar el uno sin el otro.

    Las relaciones paradigmticas son las que establecen las unidades en el sistema,

    aunque se hacen patentes en una posicin determinada del mensaje, por el hecho de que la aparicin de una de esas unidades en el decurso excluye cualquiera de las dems de su

    propio paradigma. Las relaciones sitagmticas son las que sostienen las unidades que

    han aparecido efectivamente en el mensaje. Si alguien dice llevo mi saco aqu, tomando el significante saco /"sako/ observaremos que /s/ mantiene relaciones

    paradigmticas con /t/, /k/, /x/, etc.: taco, caco, jaco.... fonemas que podran haber ocupado el lugar de la /s/ en el mensaje; /a/ se relaciona paradigmticamente con /e/, /u/, etc.: seco, suco...; /k/ con /p/, /J/, etc.: sapo, sayo...; y /o/ con /a/, /e/, etc.: saca, saque...

    Las cuatro unidades mantienen relaciones sintagmticas entre ellas por el orden en que

    han ido apareciendo; ordenadas de otra manera, hubiramos obtenido significantes

    como: cosa, caso, ocas, caos, etc.

    La operacin que ha permitido establecer cuntas unidades existen en un

    significante como el anterior se denomina conmutacin. La operacin consiste en ir

    cambiando una unidad por otra y en comprobar si vara el significado de la palabra. La

    conmutacin demuestra que existe esa unidad al mantener relaciones paradigmticas

    con otras unidades. A estas relaciones se les denomina relaciones de oposicin. La /k/ de

    saco se opone a /p/, /J/, /f/, etc. Y se dice que una unidad contrasta con otras que

    mantienen relaciones sintagmticas con ella; por ej. /k/ y /o/. As, pues, una consonante se opone a otra y contrasta con una vocal.

    Oposicin y contraste determinan cuntos subsistemas se han de considerar en el

    sistema fonolgico. Las unidades que se opongan forman parte del mismo subsistema y

    aquellas que slo contrasten pertenecern a subsistemas diferentes. Est claro que no

    articulacin constituida por unidades mnimas tambin carentes de significado, denominadas fonemas, que forman parte de los significantes de los signos lingsticos.

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    pueden oponerse aquellas unidades que aparezcan en contextos diferentes. El contexto

    est determinado por la slaba que constituye el sintagma fnico mnimo3. En saco

    existen dos slabas: CsVa+CkVo. Pero la slaba en general no se limita al ncleo (V) y al margen (C). Las siguientes slabas ofrecen estructuras distintas: las (CVC), plan (CLVC), piano (CSV-), griego (CLSV-), clusula (CLVS-), etc. (donde C=consonante, L=lquida, S=semivocal, V=vocal); se puede observar que en L slo conmutan /l/ y /|/: abres/hables; en S slo conmutan /j/ y /w/: ingenio/ingenuo4. En cambio en V conmutan cinco unidades: /p_so/ : /i, e, a, o, u/. Y en C conmutan diecinueve: /ca_a/: /p, t, k, c, b,

    d, J, g, f, s, T, x, m, n, , l, , r, |/5. Las unidades de L se considera que no tienen

    diferencias con las equivalentes que aparecen en C, porque no existen diferencias

    fonticas notables entre ellas. Por el contrario, las unidades de S: /j/ y /w/, s presentan diferencias fonticas considerables con las vocales respectivas /i/ y /u/. Lo cual aconseja mantenerlas separadas.

    Ha llegado el momento de dar un nombre a la unidad fonolgica, definirla y

    caracterizarla de modo conveniente. Se denomina fonema a cada uno de los segmentos que la conmutacin permite aislar y que se muestra en oposicin con otros de su mismo

    subsistema o paradigma. Por tanto, se define como la unidad mnima segmentable de la

    segunda articulacin que cumple una funcin distintiva. Sirve para distinguir un

    significante de otro prximo, de ah que la conmutacin se efecte mediante parejas mnimas del tipo saco/sapo, saco/seco, etc. Saco se opone a poco por dos fonemas, por

    tanto ya no es una pareja mnima, como tampoco lo seran saco/supe o saco/tejo...

    5.1.3. Distintividad y redundancia

    Hasta aqu hemos estudiado dos unidades bsicas; una paradigmtica: el fonema,

    y otra sintagmtica: la slaba. Pero tambin interesa examinar la relacin entre el fonema

    y sus realizaciones fonticas.

    3 Es una definicin de E. Coseriu, 1973, p. 178.

    4 Un anlisis completo de la slaba tiene que reconocer todas estas posiciones sintagmticas y no

    confundir, por ej. lquidas y semivocales. As, pues, no conmutan /l/ y /j/ en /pjno/ y /plno/, ya que en otras palabras pueden aparecer una al lado de la otra, por ej. clientela, pliego..., lo cual demuestra que pertenecen a paradigmas diferentes, como sucede con vocales y consonantes. Tambin podemos decir que lquidas y semivocales contrastan, no se oponen. En piano/plano existen dos conmutaciones: 0j/l0; es decir, la ausencia de /l/ y presencia de /j/ ( en piano) frente a presencia de /l/ y ausencia de /j/ (en plano). No es una pareja mnima en realidad, de lo contrario se estara haciendo un anlisis muy superficial, sin tener en cuenta la estructura silbica. 5 Alguna de las palabras no existen, por ej, cafa, pero eso no tiene ninguna importancia, pues se siguen

    las normas fonolgicas del espaol. Adems la oposicin s se dar con otras parejas: gafas/gasas.

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    Hemos afirmado que el fonema era una unidad mnima segmentable; esto

    significa que, como segmento aislado de la cadena fnica, forma una unidad en s

    mismo, pero el anlisis no puede detenerse ah, pues el segmento est compuesto de un

    conjunto de rasgos distintivos (o pertinentes). R. Jakobson (1976:430) afirmaba que el fonema no es otra cosa que un haz de elementos diferenciales constantes. Cul es la

    diferencia entre la /k/ de saco y la /p/ de sapo? La diferencia consiste en el rasgo [velar] de la primera frente al [labial] de la segunda. [Velar] y [labial] son esos elementos diferenciales de los que hablaba Jakobson y que la tradicin ha acabado llamndolos

    rasgos distintivos. En la definicin de Jakobson existen los dos conceptos claves que

    conviene delimitar: a) diferencial y b) constante. Existen muchos rasgos en la descripcin de un sonido cualquiera; el fonema tendr que quedarse slo con aquellos

    que sean diferenciales; es decir, con aquellos que de forma exclusiva sirvan para oponerlo a los dems fonemas de su subsistema. Por otra parte, esos rasgos sern

    constantes, lo cual significa que siempre identificarn a ese fonema y que no podrn

    variar por ninguna circunstancia. Hay rasgos que son constantes pero no diferenciales.

    Una nasal como /m/ es siempre [sonora]. Este es un rasgo constante pero no diferencial, pues lo que diferencia a /m/ de /p/, por ej., es su nasalidad y lo que la diferencia de /n/ o // es su punto de articulacin [labial]; por tanto, su sonoridad no es diferencial y no debe entrar en la caracterizacin del fonema. En cambio, s deben entrar en el haz su

    labialidad y su nasalidad, porque ambas son diferenciales y constantes. El fonema /s/ de

    saco que se opone tanto a la /t/ de taco como a la /b/ de Baco es [sordo]; pero este rasgo no es constante pues en mismo se convierte en [sonoro] por preceder a una consonante sonora. Es decir, /s/ puede tener una realizacin sorda en unos contextos y sonora en

    otros; por tanto, esos rasgos no pueden entrar a formar parte de los rasgos distintivos del

    fonema, que han de ser constantes.

    Los rasgos diferenciales y constantes se denominan distintivos. Existe una forma

    objetiva de determinar la distintividad y es mediante la probabilidad. La teora de informacin ya midi la distintividad y redundancia a travs de la probabilidad.

    Pr(A)=n/N: la probabilidad de un suceso A es igual al cociente de elementos favorables (n) y el nmero total de dichos elementos (N). -Qu probabilidad existe de que una nasal sea sonora en el sistema fonolgico espaol? -Cuntas nasales hay? Tres

    -Cules son sonoras? Todas. Entonces, Pr(sonora)=3/3=1.

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    Cuando la probabilidad es igual a uno, entonces el elemento o rasgo es

    redundante. Qu probabilidad existe de que una nasal sea labial? Nasales son tres y labiales slo una, entonces Pr(labial)=1/3=0,3. Cuando la probabilidad es mayor que cero y menor que uno, entonces el elemento o rasgo es pertinente o distintivo. Cero

    indica la imposibilidad y uno la certeza. Cualquier rasgo distintivo ha de poder ser

    elegido libremente frente a otro u otros en el juego de las oposiciones de fonemas; por tanto, no puede tener ni probabilidad cero, ni uno. La probabilidad de que una nasal sea

    sorda en espaol es cero: no existen6.

    Cuando un fonema, como /s/, posee variantes como [s] y [s 3]; es decir, sorda y sonora, a esas variantes se les suele denominar alfonos. El estudio del sistema debe

    delimitar perfectamente lo que es la unidad distintiva: el fonema, de lo que son las

    variantes de realizacin: el o los alfonos. De modo que uno de los objetivos del estudio fonolgico es establecer cuadros de fonemas que manifiesten de forma rigurosa el

    entramado de rasgos distintivos que caracterizan a los fonemas y que rechacen cualquier

    rasgo redundante. Y, por otra parte, tambin se deben proporcionar cuadros de alfonos

    caracterizados por todos los rasgos fnicos, sin atender ahora a si son distintivos o

    redundantes; sta es una distincin que atae slo a la fonologa, no a la fontica, una de

    cuyas misiones es la descripcin de los alfonos.

    5.1.4. Economa y sistematicidad

    Los sistemas lingsticos tienden a presentarse de forma sistemtica7; es decir,

    suelen repetir los mismos rasgos para una serie o series de fonemas, lo cual representa

    una economa extraordinaria, pues unos nueve rasgos distinguen 19 fonemas

    consonnticos, por ej., que sirven para formar un ilimitado nmero de palabras. La solucin ms econmica es la mejor. Este hecho nos lleva a excluir del sistema rasgos que slo sirvan para identificar a un fonema, si existen otros rasgos que lo puedan

    diferenciar y lo incorporen con ventaja. /c/8 es fonticamente una africada, pero en el

    6 Vid. Lyons, 1968, pp. 85 y ss.

    7 Se trata de uno de los principios del estructuralismo lingstico que explica E. Coseriu (1973, p.227). El

    dice expresamente al respecto: un sistema es econmico si utiliza al mximo los rasgos distintivos que lo integran; y entre varios sistemas, el ms econmico ser el que con menos rasgos estructure el mayor nmero posible de oposiciones y, por ende, de unidades. 8 Transcribimos con la oclusiva palatal del AFI el fonema que se representa fonticamente con la

    africada [tS].

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    sistema espaol es la nica africada que existe, si encontramos un medio de alinearla

    con una serie de fonemas, habremos obtenido una solucin econmica y, por tanto, la

    mejor9. En muchas lenguas las africadas se comportan como las oclusivas y pueden ser alineadas con ellas sin forzar la descripcin del sistema; lo cual nos permite eliminar de

    la descripcin un rasgo antieconmico que slo le afecta a ella.

    5.2. El sistema fonolgico del espaol

    5.2.1. Presentacin

    En los apartados anteriores, ya hemos constatado que, mediante la conmutacin,

    hemos podido aislar cinco fonemas voclicos, dos semivoclicos y diecinueve

    consonnticos. Estas tres clases vienen determinadas por su distinta distribucin

    sintagmtica, pues sus relaciones son de contraste, no de oposicin; es decir, /p/ y /a/,

    por ejemplo, no pueden nunca oponerse, porque pertenecen a paradigmas diferentes. As, pues, vocal, semivocal y consonante son rasgos que describen paradigmas

    diferenciados dentro del sistema. El sistema es, pues, un conjunto de paradigmas o subsistemas. Las lquidas, que podran formar otro paradigma aparte en la posicin

    semimarginal de la slaba, no van a ser consideradas porque su realizacin fontica no

    difiere en absoluto de las mismas que aparecen en la posicin marginal. En cambio

    vocales, semivocales y consonantes poseen diferencias fonticas notables entre ellas.

    Dentro de las consonantes estableceremos tambin dos subparadigmas, pues es

    diferente el nmero y la composicin interna de las unidades que aparecen en el margen

    anterior de la slaba y las que aparecen en el margen posterior; o sea, en principio de

    slaba o posicin explosiva y en final de slaba o posicin implosiva.

    9 Jakobson y Halle (1956:24) apoyan esta afirmacin cuando dicen expresamente: hallamos la solucin

    ms econmica y, por tanto, la mejor.

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    5.2.2. Vocales

    anteriores posteriores

    altas i u

    medias e o

    baja a

    Las vocales no presentan ningn problema para su clasificacin en cuanto a sus

    rasgos distintivos. Cada una de ellas est caracterizada por dos rasgos, con excepcin de

    /a/ en la que el rasgo [bajo] es el nico que la identifica sin ningn lugar a dudas. En cuanto a la variacin alofnica, hay que decir que no es demasiado

    sistemtica. T. Navarro Toms (1918) distingui alfonos por abertura para cada una de los no bajas, segn unos contextos precisos; pero estudios acsticos posteriores10 han demostrado que las diferencias existentes entre ellas no son tan sistemticas; es decir, no

    se presentan siempre en los mismos contextos, de modo que se ha de abandonar esa

    variacin. /a/ no tendra alfonos de abertura, sino de posterioridad; tampoco esto se ha

    demostrado plenamente. S existe, en cambio, una nasalizacin evidente cuando las

    vocales van entre nasales o en principio absoluto trabadas por una nasal: ["ne)na], [ 33e)n la "sala]...

    /i/ y /u/ poseen adems dos alfonos cada una de ellas : [i-j] y [u-w]; cuando siendo vocales entran en contacto en el decurso con otras vocales no altas, se convierten

    en semivocales: si[i] vienes, pero si[j] eres; su[u] libro, pero su[w] amigo, etc...

    5.2.3. Semivocales

    El argumento mayor para considerarlas fonemas, es el de su conmutacin entre

    ellas o por cero en la posicin prenuclear o postnuclear: nieve/nueve, quieto/cueto,

    coito/coto, pauta/pata, etc..

    Clasificacin:

    anterior posterior

    j w

    10 Vanse algunos de esos trabajos en R. Monroy, 1980, pp. 49 y ss.

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    La posterior posee un solo alfono: [w]. En cambio, la anterior tiene un alfono semivoclico [j] y otro consonntico [J] cuando sigue otra vocal: rey[ej], pero reyes["reJes]. Est claro que los alfonos [j] y [w] pueden representar a dos fonemas diferentes: vocales o semivocales, lo cual no implica ningn problema puesto que el

    contexto y la alternancia determinan cundo se trata de un fonema u otro11. Si [j] alterna con [i]: si vienes/si eres, entonces el fonema es /i/. Si alterna con la consonante: rey/reyes entonces se trata de /j/. Si no existe alternancia posible, entonces es semivocal siempre. Creemos que no existe alternancia, por ejemplo, en palabras como: fiero, fuego, causa, peine...En el habla ordinaria es imposible que el diptongo se destruya. Consideramos que es absolutamente artificial la pronunciacin con hiato de palabras

    como esas; sencillamente no sera pronunciacin espaola12.

    5.2.4. Consonantes

    Antes de presentar el cuadro de consonantes, tenemos que revisar los rasgos

    distintivos que debemos utilizar, pues existen muchas incoherencias en los cuadros de

    fonemas que suelen presentar los distintos autores13.

    Un cuadro de fonemas debe ajustarse a los principios tericos presentados con antelacin; por tanto, han de cumplir con dos criterios que los resume:

    1. Cada fonema del cuadro estar caracterizado de forma exclusiva por rasgos

    constantes que cumplan una funcin distintiva.

    2. Cada rasgo utilizado ha de caracterizar el mayor nmero posible de fonemas

    para conseguir una mxima economa.

    A) El primer criterio exige analizar los alfonos de cada fonema para desechar los rasgos variantes y quedarnos slo con los invariantes y distintivos:

    11 Al estructuralismo europeo no le preocup el hecho de que un alfono pudiera representar a dos

    fonemas diferentes. En cambio, el estructuralismo americano s sent un principio, llamado de biunivocidad, que prohiba ese fenmeno. 12

    Vase toda la discusin sobre el estuto fonolgico de las semivocales en E. Martnez Celdrn, 1989, pp. 78 y ss. Est claro que muchos autores no las consideran fonemas, vid. E. Alarcos, 1950, 97 y ss.

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    a) /b, d, g/: es bien sabido que estos fonemas poseen dos alfonos en distribucin complementaria: uno es oclusivo [b, d, g] y otro aproximante [B, D, V ]. Esto implica que el rasgo [oclusivo] no es constante y, por tanto, no puede caracterizar a estos fonemas13. b) /T, s/: los fonetistas14 describen dos variantes en distribucin complementaria de estos fonemas: [T, s] sordos y [T3, s 3] sonoros. Lo cual implica que el rasgo sordo/sonoro no sea pertinente, puesto que no es constante.

    c) La neutralizacin de p/b, t/d y k/g tambin pone reservas a la oposicin sordo/sonoro para estas parejas15. Se sabe que dejan de oponerse en el margen silbico posterior; es decir, en la posicin implosiva de la slaba, donde slo suelen presentarse

    las sonoras, lo cual conlleva el cambio de sentido de la marca, pues sordo est marcado

    negativamente y sonoro positivamente. Se dice que un rasgo (o fonema que lo posee) est marcado positivamente cuando es ms particular y exclusivo y que est marcado

    negativamente (o que es neutro) cuando es ms general e inclusivo. Adems, el positivo est caracterizado por la presencia de algo de lo que carece el negativo. En el caso de los

    rasgos sordo/sonoro, se considera que sonoro es positivo porque consiste en las

    vibraciones de las cuerdas vocales, mientras que el sordo es simplemente la negacin de

    dichas vibraciones. Por el contrario, el rasgo tenso implica una mayor rigidez de las

    articulaciones de los sonidos, en tanto que el rasgo laxo carece de esa rigidez, lo cual

    hace que sea el negativo o neutro de la oposicin. En el caso de la neutralizacin de p/b,

    t/d y k/g, resulta que en alemn, por ej., predominan en final absoluto [p, t, k]; es decir, estos son los ms generales e inclusivos; entonces, lo que predomina es el rasgo sordo,

    que es negativo; pero, si la neutralizacin es a favor de [B, D, V], como suelen decir los fonetistas16 para el espaol, entonces si consideramos que se oponen por sordo/sonoro el

    positivo sera el neutro, lo cual es un contrasentido, pues el neutro ha de ser siempre

    negativo. Por tanto, tenemos que cambiar esta pareja por la otra concomitante17:

    13 Vase una revisin crtica de esos cuadros en E. Martnez Celdrn, 1996b.

    14 Vase al respecto T. Navarro Toms, 1918 ; E. Alarcos Llorach, 1950; M. J. Canellada y J. K.

    Madsen, 1987 y E. Martnez Celdrn, 1991. 15

    El concepto y el funcionamiento de la neutralizacin, as como el concepto de marca puede verse en Coseriu, 1973, pp. 186 y ss. La neutralizacin de estos fonemas ya la plante claramente E. Alarcos, 1950. 16

    T. Navarro Toms (1918), por ejemplo, deca para la [t] final de slaba que aparece nicamente con su propio sonido de oclusiva sorda en pronunciacin fuerte o enftica. En la conversacin normal se reduce en estos mismos casos a una D sonora y fricativa pr. 78. Lo mismo aproximadamente suele decir para [p] y [k]. 17

    Se sabe que [p, t, k] son [sordas, tensas] y [b-B, d-D, g-V] son [sonoras, laxas].

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    tenso/laxo, para que el ms general e inclusivo, el laxo, sea el que funcione en la

    oposicin.

    Los apartados a, b, y c nos obligan a cambiar la clasificacin tradicional de estos

    fonemas para adecuarla a las exigencias del primer criterio.

    1. p, t, k

    2. b, d, g

    3. f, T, x

    La diferencia entre las series 1 y 2 es, pues, el grado de tensin, 1 es [tenso] y 2 [laxo]. Esto es, [laxo] es un rasgo negativo y cuadra muy bien con la neutralizacin de las parejas p/b, t/d, k/g, pues el neutro [b-B, d-D, g-V] se corresponde con el negativo. [p, t, k] slo podrn aparecer en la posicin de neutralizacin en un discurso enftico en el

    que predomina la tensin, pero en el habla corriente no aparecern nunca.

    1 y 2, adems, han de tener algo comn para poderlas reunir en un archifonema

    que se oponga a 3:

    p-b/f; t-d/T; k-g/x.

    Si el rasgo oclusivo es variante para /b, d, g/, entonces no puede caracterizar a

    cada archifonema o al conjunto /p-b, t-d, k-g/. Qu tienen en comn? La carencia de una gran franja de ruido, que es lo que caracteriza a las fricativas f, T, x. Los sonidos propiamente oclusivos tienen una breve zona de ruido en la explosin; las aproximantes

    carecen de ruido. En cambio todas las fricativas poseen una zona de ruido que supera las

    100 ms.; esta es la diferencia entre estos fonemas: el ruido. Adoptaremos el trmino

    [suave] como rasgo para indicar carencia de ruido o ruido de poca duracin y [ruidoso] para los sonidos con una gran duracin de la zona de ruido18. Por tanto,

    18 En Martnez Celdrn (1989), se utiliz la oposicin mate/estridente (en lugar de suave/ruidoso

    respectivamente); ahora para obviar ciertas reticencias por el uso de esos rasgos, ya que de hecho se especializaron en dos tipos de fricativas diferentes, hemos preferido cambiarlos por sinnimos: en M Moliner (1966), estridente se opone a suave, por una parte, y es sinnimo de ruidoso, por otra, lo cual

  • 11

    1. p, t, k tensas > suaves 2. b, d, g laxas

    3. f, T, x ruidosas

    Todas ellas son [obstruyentes] frente a las nasales, laterales y vibrantes que son [sonantes]. A estos nueve fonemas, que forman un grupo muy especial, hay que aadir tres ms que los colocaremos en el cuadro junto a los dems, pero que carecen de la trabazn interna que muestran los nueve primeros: /c, J, s/.

    Esos nueve mantienen un conjunto de relaciones que se ha llamado haz de correlaciones. Se dice que existe una correlacin cuando las oposiciones son bilaterales,

    proporcionales y privativas. Esa correlacin es perfecta cuando, adems, son

    neutralizables.

    p/b: t/d: k/g constituyen una correlacin. Son bilaterales porque cada una de esas

    parejas tiene una base de comparacin (esto es, un conjunto de rasgos distintivos) nica en el sistema; es decir, no la posee ningn otro fonema del sistema; por ej. p/b es [obstruyente, suave, labial]. No existen otros fonemas que posean exactamente esos mismos rasgos: /m/ es sonante; /f/ es ruidosa; /t/ o /d/ no son labiales, etc.

    Son proporcionales, pues todas ellas se oponen entre s por tensa/laxa. La

    proporcionalidad se puede indicar diciendo: /p/ es a /b/, como /t/ es a /d/, como /k/ es a

    /g/.

    Son privativas ya que tenso/laxo se oponen por algo positivo: la tensin; esto es,

    la mayor energa y duracin de esos sonidos, frente a algo negativo: la ausencia de

    tensin o relajacin; o sea, la menor energa y duracin de esos sonidos: en definitiva, la ausencia de la fuerza suplementaria, que poseen /p, t, k/, en la articulacin de /b, d, g/.

    Adems se neutralizan en la posicin implosiva; es decir, dejan de oponerse dando como resultado tres archifonemas compuestos por los rasgos que comparte cada

    pareja neutralizada: /B/ (p-b): [obstruyente, suave, labial] /D/ (t-d): [obstruyente, suave, dentoalveolar] /G/ (k-g): [obstruyente, suave, velar]

    justifica nuestra eleccin. Adems, el mismo DRAE (1992) define ruidoso diciendo: que causa mucho ruido.

  • 12

    /B, D, G/ vuelven a repetir la correlacin con los fonemas /f, T19, x/,

    respectivamente, pero sin la neutralizacin, con lo cual se articula un haz de

    correlaciones, que podemos representar con una figura geomtrica como la siguiente:

    p t k B D G

    b d g

    f T x

    /c, J, s/ no se integran en el haz porque las dos primeras no son neutralizables; no

    obstante, las colocaremos en el cuadro, pues el alfono de /c/ no posee tanto ruido como

    las fricativas, que hemos denominado [ruidosas]; los alfonos de /J/ carecen de ruido: ambos fonemas, pues, son [suaves] desde este punto de vista y se oponen entre ellos por [tenso/laxo]. /s/ se opone a las otras dos por ser [ruidosa].

    El criterio n 1 todava hay que utilizarlo en el caso de las nasales, laterales y

    vibrantes, es decir, las sonantes. Todas ellas poseen rasgos constantes, pero no

    distintivos. Por ejemplo, todas son [sonoras] fonticamente, pero ese rasgo no es funcional en la medida en que no se opone a un equivalente sordo. No existen nasales,

    laterales o vibrantes sordas. Por tanto, es un rasgo constante, pero no opositivo: tiene

    probabilidad igual a 1. Adems, habr que eliminar de los cuadros las casillas vacas que

    no cumplen ninguna funcin: no existen nasales velares, es una casilla con probabilidad

    igual a cero: hay que eliminarla. Tampoco existen laterales labiales, ni velares. Y en las

    vibrantes la nica casilla por punto de articulacin es la dentoalveolar, lo cual significa

    que ese rasgo ser constante pero no opositivo en las vibrantes, pues su probabilidad es

    igual a 1. Qu probabilidad existe de que una vibrante sea dentoalveolar? Pr(dent)=2/2=1; es decir, hay dos vibrantes y ambas son dentoalveolares: es el mismo argumento en cada caso examinado.

    B) El segundo criterio hay que aplicarlo en varias ocasiones para eliminar rasgos que caracterizan a un solo fonema:

    19 En los dialectos que no poseen este fonema, /s/ ocupa su lugar en el haz de correlaciones.

  • 13

    a) [labiodental], slo existe /f/ como tal, que se opone a los dems, que son tambin labiales, por otros rasgos: ruidoso, obstruyente. Es antieconmico seguir

    mantenindolo. /f/ comparte con /p, b, m/ que los labios participan en su articulacin;

    por tanto, se puede clasificar con ellas como [labial]. b) [interdental], slo existe /T/, que tiene otras diferencias con los dems de forma equivalente a /f/. Puede ser clasificado como dentoalveolar como sus ms

    prximos: /t, d, n, l/, todos ellos pertenecen a un mismo punto de articulacin desde un

    punto de vista fonolgico. /s/ es fonticamente alveolar, pero su apicalidad le

    proporciona un carcter acstico denso igual que a las prepalatales /c, J/, por lo que no

    es descabellado clasificarla con ellas. Es cierto que en estos casos la denominacin de

    los rasgos no coincide plenamente con la realizacin articulatoria de cada uno de los

    sonidos por los que se exteriorizan los fonemas, pero fonolgicamente se ha de atender

    ms al comportamiento estructural de los fonemas que a su estricta articulacin;

    adems, se podra decir que s hay una coincidencia acstica. Un cuadro de alfonos

    complementar la clasificacin fonolgica y cada elemento, sea fonema o alfono,

    quedar en su sitio. Lo que no es admisible es la mezcla de ambas cosas proporcionando

    un cuadro fontico de fonemas. El cuadro de fonemas ha de ser completamente

    fonolgico; es decir, nica y exclusivamente con rasgos distintivos.

    c) [africado], slo existe /c/ como africada fonticamente hablando. Pero una africada divide su duracin entre el silencio y la fricacin; por tanto, no posee nunca

    tanto ruido como una fricativa. Puede ser clasificada como [suave] sin ningn problema.

    CUADRO DE FONEMAS CONSONNTICOS

    Obstruyentes labial dentalveol palatal velar suaves tensas p t c k laxas b d J g ruidosas f T s x

    Sonantes labial dentalveol palatal nasales m n laterales l

    vibrantes tensa r laxa |

  • 14

    Representacin arbrea

    Hay que reconocer que la representacin del sistema fonolgico mediante

    cuadros es la ms extendida y tradicional, pero probablemente no sea la ms adecuada

    cuando el cuadro no es absolutamente homogneo y, por otra parte, no representa la

    verdadera jerarqua de los rasgos. En cambio, la representacin en forma de rbol obvia estos inconvenientes. En esta representacin los rasgos tienen plena justificacin - por ej. obstruyente/sonante con estructuras muy diferentes- y la obtencin del contenido fonolgico de cada fonema es inmediata. Adems queda manifiesta de forma clara cada

    oposicin fonemtica bien sea mediante una sola pareja de rasgos por modo o por punto, bien sea por dos parejas: modo y punto: ej. p/b: tensa/laxa; p/m: obstruyente/sonante; etc. parejas que slo se oponen por modo; p/k: lb/vl20 o m/n: lb/dt, parejas que slo se oponen por punto. Frente a estas cabe la oposicin mediante dos parejas de rasgos: p/s: suave/ruidoso y lb/pl.

    Subsistema fonolgico de inicio de slaba: posicin explosiva:

    consonantes

    obstruyentes sonantes

    suaves ruidosas nasales laterales vibrantes

    tensas laxas tensas laxas

    lb dt pt vl lb dt pt vl lb dt pt vl lb dt pt dt pt

    p t c k b d J g f T s x m n l r |

    Nota: r/| no se oponen si la slaba es inicial de palabra, porque | posee distribucin defectiva al no poder mostrarse en esa posicin.

    La jerarqua surge de forma natural del sistema al tener en cuenta los criterios de invariacin y economa, no ha sido impuesta de forma convencional.

    20 Donde lb=labial; dt=dentoalveolar; pt=palatal y vl=velar.

  • 15

    Frente al subsistema anterior, podemos obtener otro que incluya los

    archifonemas, ya que stos aparecen principalmente en el margen posterior de la slaba.

    Los fonemas que no pueden manifestarse en esta posicin tienen distribucin defectiva.

    Subsistema fonolgico de final de slaba: posicin implosiva:

    consonantes

    obstruyentes sonantes

    suaves ruidosas nasal lateral vibrante

    lb dt vl dt pl

    B D G T s N l R

    Obsrvese que son posibles las oposiciones entre archifonemas o de stos con

    los fonemas que pueden presentarse en esa posicin silbica: acto/apto/harto/alto o corte/coste, etc. Si la slaba es final de palabra an se reduce ms el inventario, puesto

    que las obstruyentes suaves no suelen aparecer en esa posicin21.

    5.2.5. Archifonemas, fonemas y alfonos del sistema consonntico espaol CONSONANTES Obstruyentes: archifonemas B D G22

    fonemas p b t d k g

    alfonos p b B t d D k g V

    21 La nica que puede aparecer es /-d/, aunque existe la posibilidad de que /-d/ al final de palabra posea

    un alfono cero, ya que en la mayor parte de dialectos actuales ese fonema final de palabra no tiene ninguna realizacin fnica, ej. verdad [be|"Da], pero fonolgicamente /beR"dad/; a pesar de ello, vuelve a aparecer cuando se coloca en plural verdades o se aade un sufijo verdadero. Por otra parte, en grandes zonas castellanas, en esa misma posicin, se sustituye por /T/. No consideramos, en esta ocasin, que haya neutralizacin, sino una mera sustitucin.

  • 16

    fonemas c J f T23 s x

    alfonos tS dj J f T T3 s s324 x X

    Sonantes: archifonema N

    alfonos m n n1 n n N N

    fonemas m n

    archifonema R

    fonemas r | l 25

    alfonos r | l 1 l l

    Todos los archifonemas aparecen slo en el margen posterior de la slaba:

    posicin implosiva, siempre que no sea final absoluto. En este caso slo podrn aparecer

    los archifonemas /N, R/. Adems de los archifonemas /B, D, G/, ya examinados, hemos

    incluido el nasal /N/, neutralizacin de /m-n/, y el vibrante /R/, neutralizacin de /r-|/.

    Hemos excluido // de la neutralizacin, porque este fonema no tiene alfonos en la

    posicin implosiva. Por esto mismo hemos excluido una posible neutralizacin de /l-/.

    Tanto // como // tendrn una distribucin defectiva; es decir, no aparecern nunca en

    la posicin implosiva26.

    22 En el margen silbico posterior, es frecuente en amplias zonas castellanas que el archifonema se

    sustituya por el fonema /T/, cuando el grafema es c, y por /x/, cuando el grafema es g. Tambin puede desaparecer en algunas palabras. 23

    Este fonema slo existe en la Pennsula Ibrica de forma general en todos los dialectos menos en andaluz, donde puede encontrarse todo tipo de fenmenos: ceceo, seseo, distincin, etc... En Latinoamrica y Canarias no existe, se sustituye por /s/. 24

    Est bastante generalizado en la mayor parte de dialectos no castellanos, un alfono aspirado [] que aparece en el margen posterior de la slaba. Por otra parte, en la zona de Castilla se pronuncia apical y, en los dems dialectos, predorsal. [s] es generalmente alveolar, pero se dentaliza ante cualquier dental. 25

    Es bien sabido que este fonema est desapareciendo del sistema fonolgico espaol y que es sustituido por /J/, fenmeno que se denomina yesmo. 26

    Es muy tentadora la idea de proponer una correlacin de las parejas m/n, /l, r/|. As lo hice yo mismo (E. Martnez Celdrn, 1989, p. 93), pero anteriormente ya lo haba propuesto Amado Alonso, como indica S. Gili Gaya (1975, p. 88). Para ello tendramos que describir estas parejas con una misma marca, que podra ser tenso/laxo; es decir, que la correlacin es de tensin. Obsrvese que el elemento ms general e inclusivo, como se muestra en la distribucin defectiva y en la neutralizacin, es el laxo de cada pareja: /n, l, |/.

  • 17

    Los esquemas anteriores indican que los archifonemas poseen todos los alfonos

    que hemos colocado al final de las ramas del rbol y los fonemas slo poseen aquellos

    que conectan con ellos directamente. En las nasales, est claro que muchos de los

    alfonos son exclusivos del archifonema no de los fonemas de forma individual, ya que

    todos esos alfonos aparecen en la posicin implosiva por la ley fontica que indica que

    toda nasal se asimila al punto de articulacin de la consonante siguiente.

    CUADRO DE ALFONOS27

    Modo\ punto bilabial labiodent (inter)dent alveol. palatal velar(uvul.) oclusiva p b t d k g fricativa f T T3 s z x (X) aproximante B D J V africada tS dj nasal m n1 n (n) N lateral l1 l (l2) vibrant.S/M |\r Las situadas a la izquierda, segn vemos el cuadro, son sordas y tensas; las de la derecha, sonoras y laxas, a excepcin de r que es sonora y tensa..

    VOCALES Y SEMIVOCALES

    fonemas i e a o u j w

    alfonos i i ) j e e) a a) o o) u u) w j J w

    5.2.6 Prosodia

    Todava es necesario hablar de dos elementos que tienen carcter fonolgico en

    espaol: el acento y la entonacin. Ambos suelen denominarse elementos

    suprasegmentales y esta caracterstica los diferencia claramente de los fonemas y

    archifonemas que son segmentales, como se ha dicho.

    27 Se encontrar una descripcin fontica detallada de todos los alfonos en E. Martnez Celdrn, 1996a.,

    pp 42 y ss.

  • 18

    El acento cubre toda la slaba de la palabra ponindola de relieve frente a sus

    vecinas. Tiene un carcter sintagmtico, no paradigmtico, puesto que el oyente lo que

    hace es contrastar esquemas silbicos dentro de la palabra o sintagma:

    lmite, limite, limit

    trmino, termino, termin

    depsito, deposito, deposit

    ...

    Como se ve, funcionan tres esquemas acentuales: con relieve en la antepenltima

    slaba (esdrjulo); penltima (grave o llana) y ltima slaba (agudo). A pesar de tener estas tres posibilidades, hay que decir que las palabras llanas son las que ms abundan

    estadsticamente de forma que constituye la posicin no marcada. Y, por otra parte,

    limita bastante el poder distintivo del acento en espaol. El acento, adems, no tiene un

    correlato nico y claro desde el punto de vista fontico; segn las circunstancias de la

    frase, puede prestar esa mxima relevancia de una slaba la duracin, el cambio de F0 o,

    incluso, la intensidad, aunque parece demostrado que esta ltima es la menos influyente

    en el carcter acentuado o no de una slaba.

    La entonacin consiste en un suprasegmento que se manifiesta sobre las slabas

    finales de cualquier grupo fnico. Podramos caracterizarla con tres rasgos binarios

    como los siguientes: [interrogativo], [enftico], [suspensivo]. As, un grupo fnico u oracin de tipo enunciativo vendra caracterizada por ser: [-interrogativa, -enftica, -suspensiva]; una oracin interrogativa sera [+interrogativa, -enftica, -suspensiva]; una exclamativa sera: [-interrogativa, +enftica, -suspensiva]. Un grupo interior de frase compuesta podra caracterizarse por ser: [-interrogativa, -enftica, +suspensiva], etc.28 Fonticamente, estos rasgos se basan en el movimiento de la meloda

    proporcionada por el tono fundamental de las ltimas slabas de los grupos fnicos, de

    modo que el rasgo [interrogativo] se basar en un descenso [-] o ascenso [+] considerable del nivel medio de F0. El [ enftico] se basar en la existencia o no de movimientos circunflejos en ese final del grupo. Y el [suspensivo] es la continuacin, ms o menos montona y sin cambios significativos.

    28 Cfr. F. J. Cantero (1995).

  • 19

    REFERENCIAS BIBLIOGRFICAS

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