Los Verbos Pronominales

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Los verbos pronominales Justo Fernndez Lpez

VERBOS CON VALOR REFLEXIVO y VERBOS PRONOMINALESYa las Gramticas de la RAE de 1771 y 1796 proponan llamar pronominales a los verbos que se conjugan con los pronombres personales tonos (clticos) sin que el sujeto y el complemento directo sean referentes (reflexivos): Los verbos que nunca se usan sin pronombres personales, no debieran llamarse recprocos, ni reflexivos, sino pronominales.

Desde la publicacin de la Gramtica de la lengua castellana (1847) de Andrs Bello se habla de verbos reflexivos y cuasireflexivos o pseudoreflexivos. Andrs Bello introdujo el trmino de construccin cuasi-refleja para hacer referencia a las oraciones que, si bien no tienen un sentido inequvocamente reflexivo, se asemejan a las oraciones reflexivas. El trmino abarca, a todas las construcciones pronominales de carcter no reflexivo: medias o anticausativas (La pobre mujer se emocion al recibir el ramo), pasivo-reflejas (Se registraron todas las habitaciones), impersonales-reflejas (Se come muy bien en este restaurante), as como oraciones constituidas por un verbo inherentemente pronominal (Este chico se queja de todo).

La Gramtica de Alcina Franch / Blecua (1975: 5.5) ya adverta que la reflexividad no es un rasgo relevante para clasificar un verbo por su significado.

El Esbozo de una nueva gramtica de la lengua espaola (Madrid, 1977: 3.5.4) hace notar que el DRAE califica como pronominal a todo verbo o acepcin que se construya en todas sus formas con pronombres reflexivos: La calificacin de reflexivos, que el mismo Diccionario aplicaba antes uniformemente a estos verbos, no era propia para todos estos matices significativos o expresivos. En cambio, la de pronominal, aunque atiende nicamente a la forma, abarca los significados reflexivos y los que no lo son.El Diccionario de la lengua espaola de la RAE, a partir de la decimonovena edicin (1970), ya no califica el verbo lavarse ni alegrarse como reflexivo, sino como pronominal. Y todos los verbos que se pueden conjugar con los pronombres reflexivos (clticos), tengan sentido reflexivo puro o no, llevan la abreviatura: U. t. c. prnl. (= usado tambin como pronominal).A pesar del cambio de nomenclatura de la RAE, algunos gramticos, como Marcos Marn (1980: 13.8) siguieron clasificando los verbos como transitivos, intransitivos, reflexivos, reflexivos formales o gramaticales y recprocos.

En el Glosario de la terminologa gramatical. Unificada por el Ministerio de Educacin y Ciencia. Madrid, 1986, 153, publicada por Alonso Marcos, se define el verbo transitivo como aquel cuya accin pasa a una persona o cosa distinta del sujeto que la ejecuta. Para Alonso Marcos, los verbos transitivos pueden usarse en forma reflexiva y en forma recproca. De modo que los as llamados verbos reflexivos son simplemente verbos transitivos en los que el objeto directo tiene el mismo referente que el sujeto.Gmez Torrego (Manual de espaol correcto, Madrid, 1991, pp. 89-90) es ms explcito: El verbo con valor reflexivo no es un verbo pronominal, sino un verbo transitivo con el que los pronombres tonos actan como objeto directo o indirecto.

Para Rafael Lapesa (Estudios de morfosintaxis histrica del espaol. Madrid, 2000, pp. 817 ss.), los as llamados verbos reflexivos propiamente dichos son simplemente verbos transitivos en los que el significado del verbo reflexivo es el mismo que cuando es transitivo o de accin, solo que su complemento directo tiene el mismo referente que el sujeto de la accin. Sin embargo, para las otras construcciones en las que no hay un objeto directo correferente con el sujeto, Lapesa cita la calificacin de cuasi-reflexivos de Andrs Bello, y los denomina reflexivos interiores porque presentan en forma reflexiva (pronominal) un sentido distinto al que cuando son transitivos, cosa que no ocurre con los reflejos propiamente dichos.

Finalmente, la RAE, en la Nueva gramtica de la lengua espaola (2009), clasifica los verbos, segn sus funciones sintcticas, en transitivos, intransitivos y copulativos. Algunos transitivos y muchos intransitivos puede ser, a su vez, pronominales. Los as llamados verbos reflexivos no forman ninguna clase especial, son simplemente verbos transitivos cuyo objeto tiene el mismo referente que el sujeto. Desde el punto de vista semntico, los verbos se pueden agrupar en dos grandes clases semnticas: clases aspectuales y clases nocionales. El morfema pronominal tono que caracteriza a los verbos pronominales no es argumental, por lo que no le corresponde propiamente una funcin sintctica. As, el morfema se no constituye el complemento directo de despertar en El nio se despert, sino un segmento que forma parte de la constitucin lxica del verbo despertarse. Los mismos pronombres pueden ser tambin reflexivos, y en tal caso se interpretan como argumentos. (RAE: NGLE 2009, 41.7.1c)Extendiendo las propiedades sintcticas del verbo a las oraciones, se pueden dividir estas en transitivas, intransitivas y copulativas. Las llamadas oraciones reflexivas pueden ser transitivas, intransitivas y copulativas, en lo que coinciden con las recprocas. No constituyen, pues, una clase distinta, sino clasificaciones cruzadas de los tipos anteriores.Un mismo verbo puede ser:1. transitivo no reflexivo: Pedro golpea a Juan.2. transitivo de accin refleja: Pedro se golpea (a s mismo).3. transitivo de accin recproca: Pedro y Juan se golpean el uno al otro.4. pronominal intransitivo no reflexivo: Pedro se golpe en un brazo al caer.5. pronominal transitivo: Pedro se golpe la cabeza contra la pared.

verbotransitivocon complemento directo: Come algo antes de salir.

transitivo con valor reflexivocomplemento y sujeto tienen el mismo referente: Me afeito.

transitivo con valor recprocointeraccin entre dos personas: Se aman y se admiran mutuamente.

transitivo pronominalNo me creo esa historia.

intransitivosin complemento directo: No comas tan de prisa.

intransitivo pronominalEsas manchas solo se van con leja.

pronominal inherenteArrepentirse de un pecado.

pronominal con un dativo expresivo de intersEl pulgn se ha comido el rosal. La luz se est comiendo el color de los muebles.

VERBOS TRANSITIVOS DE ACCIN REFLEXIVAEl trmino reflexivo se refiere solo a la identidad, en la realidad designada, entre sujeto y objeto directo o indirecto de una oracin: Luis se lava. Luis se lava la cara.El pronombre reflexivo indica que la accin expresada por el verbo pasa, como complemento, al mismo sujeto que la realiza. Es decir, es una palabra que repite el grupo del sujeto, en funcin de complemento.

Los pronombres reflexivos son me, te, se, nos, os, se. Si van precedidos de preposicin, sus formas son: m, ti, s (l o ella), nosotros, nosotras, vosotros, vosotras, s (ellos, ellas).

Desde el punto de vista sintctico, el pronombre reflexivo reproduce como complemento directo o indirecto a la persona que funciona como sujeto de un verbo usado como reflexivo.

Yo me lavo.Juan se lava.l se lava la cara.Se re de s mismo.Os res de vosotros mismos.Hay que evitar interpretar todo verbo pronominal con se como un verbo reflexivo. Si digo Me avergenzo de lo que hice, no significa que yo me avergenzo a m mismo (agente), sino que siento vergenza de lo que hice (paciente).

Se tiende a pensar que todo verbo que en infinitivo lleva un se encltico es un verbo reflexivo: morirse, asustarse, alegrarse. En realidad los verbos reflexivos propiamente dichos no existen. nicamente existen verbos utilizados como tales, ya que todos los verbos pueden usarse tambin de forma reflexiva cuando el sujeto resulta ser al mismo tiempo el objeto o el beneficiario de la accin que realiza: Lavarse, afeitarse, peinarse, lavarse la cara, afeitarse la barba, peinarse el pelo. Cuando no es este el caso, se trata de un verbo pronominal.

Algunos gramticos tradicionales aadan al paradigma de los tipos de oraciones que se distinguen en funcin de la naturaleza del predicado las oraciones REFLEXIVAS. No obstante, estas oraciones pueden ser

transitivas

Se cuida a s mismo,

intransitivas

Solo confa en s mismoy copulativas

Siempre es igual a s mismo,

en lo que coinciden con las recprocas.

As pues, no constituyen una clase distinta, sino clasificaciones cruzadas de los tipos anteriores [transitivas, intransitivas y copulativas]. En general, predomina en la actualidad la opinin de que las propiedades especficas de algunos componentes de las oraciones no determinan necesariamente TIPOS ORACIONALES: la presencia de una negacin, la ausencia de un sujeto lxico o la de un complemento directo, la relacin entre un pronombre y su antecedente, la presencia de un cuantificador comparativo, etc., son sin duda rasgos sintcticos relevantes, y deben analizarse de manera exhaustiva en relacin con los dems componentes de esas estructuras. Sin embargo, no constituyen caractersticas gramaticales que hayan de definir de manera obligatoria un PARADIGMA ORACIONAL. (RAE: NGLE 2009, 1.13.k)

Las estructuras de doblado pronominal solo son compatibles con la interpretacin reflexiva: Se llama a s mismo Campen. Los complementos como por s solo suelen elegir la interpretacin media o intransitiva de los verbos pronominales, en los contextos en los que se admite. (RAE: NGLE 2009, 41.13h)

La variante por s mismo (sin ayuda de otros) supone un comportamiento activo por parte del sujeto, lo que no implica que el verbo sea transitivo en lugar de pronominal. La oracin La puerta se abri por s misma (en lugar de ... por s sola) resultara extraa.

La forma tpicamente reflexiva se, realmente solo aparece cuando el elemento idntico al sujeto es el objeto directo o el indirecto. Pero tambin hay formas reflexivas en otras funciones: consigo, como circunstancial de compaa; y s, o s mismo, cuando el elemento nominal idntico al sujeto es trmino de preposicin: Juan no puede valerse por s (mismo); el elemento s mismo ha logrado una cohesin fuerte, y a la vez supone un cierto grado de nfasis frente a las formas simples, sobre todo cuando reduplica a se como objeto directo o indirecto: se estuvo golpeando a s mismo largo rato. Valor enftico semejante al de la reduplicacin de otros pronombres tonos: te lo digo a ti.

Sin embargo, cuando el elemento nominal idntico al sujeto va introducido por una preposicin que no es a, es posible la alternancia entre s y l, forma pronominal no-reflexiva (l puede reforzarse tambin con mismo): Juan solo habla de l (mismo) Juan slo habla de s (mismo); en la primera frase hay ambigedad, puesto que l puede referirse al sujeto o a otra persona (aunque con l mismo la referencia al sujeto parece ms clara). Tal hecho no se da con a: *Juan se golpea a l mismo. (Cano Aguilar 1981: 257)

VERBOS PRONOMINALES CON VALOR REFLEXIVOVerbos pronominales que ya tienen valor reflexivo (la accin que expresan revierte sobre el sujeto):

autolesionarse, autoabastecerse, autoconvencerse, autoengaarse.

El prefijo auto- suele aportar un significado reflexivo a la base que modifica. As, una autocrtica es una crtica hecha a uno mismo, y la autodestruccin es la destruccin propia. Unido a verbos pronominales que ya tienen valor reflexivo (en el sentido de que la accin que expresan revierte sobre el sujeto), este prefijo aade informacin enftica, y subraya que el referente del sujeto ejerce la accin por s solo y sin ayuda, o que lo hace intencionadamente. As, si se dice de alguien que se autolesiona, se entiende que lo hace con el nimo consciente de hacerse dao, mientras que se lesiona puede interpretarse como accin involuntaria. Se extienden estas diferencias a autoabastecerse, autoconvencerse, autoengaarse y a otros verbos que se ejemplifican a continuacin:

Cualquier mozo con cara simptica, cualquier nia guapita que pasa por ah, se autocalifica como actor o actriz; Pero no le convena seguir por ese camino, autoacusndose de distracciones; Las palabras con que Agueda se autorretrata recuperan la nocin clsica de la angustia existencial. (RAE: NGLE-Manual, 2010, 10.6.1)VERBOS TRANSITIVOS DE ACCIN RECPROCAUna oracin de accin recproca es la que est formada por un verbo transitivo en forma recproca, es decir, cuando los sujetos se corresponden mutuamente. Para no confundirlas con las formadas por un verbo transitivo en forma reflexiva, se aaden los vocablos mutuamente, entre s, uno a otro, los unos a los otros, las unas a las otras. La reciprocidad solo se puede producir con verbos transitivos.

Los pronombres recprocos pueden considerarse un subgrupo de los reflexivos (y, por tanto, de los personales), pero su significado es ms complejo. En efecto, la oracin reflexiva Ella se cuida designa una situacin en que la persona que cuida es a la vez la persona cuidada. (RAE: NGLE-Manual, 2010, 16.2.3a)

Reciprocidad: El prefijo inter- (o su variante patrimonial entre-, menos productiva) puede imponer un valor recproco a los argumentos del verbo con el que se combina. As, en [] extraos personajes que interactan con cuantos viandantes salen a su paso, se dice que ciertos personajes y ciertos viandantes participan en alguna accin recproca. Se forman con el prefijo inter- verbos transitivos (intercomunicar, interconectar) e intransitivos (interactuar, interdepender), pertenecientes todos a la clase de los verbos simtricos o de argumentos colectivos. El prefijo aporta informacin enftica en muchos de los contextos en los que su presencia no es imprescindible, como en Se interrelacionan (frente a Se relacionan) o en Se entrecruzan algunos mensajes (frente a Se cruzan algunos mensajes). Al contrario que el prefijo auto- (autocontrol), el prefijo inter- no se suele combinar, en su interpretacin recproca, con nombres eventivos no deverbales (*intercontrol). Es, en cambio, muy productiva la pauta inter- + adjetivo relacional, como en interdepartamental, interindividual, interinsular, internacional, interocenico o interuniversitario, entre otros muchos. (RAE: NGLE-Manual, 10.6.2)VERBOS PRONOMINALESSe llaman verbos pronominales los que contienen en su conjugacin formas pronominales tonas con rasgos de persona. Exigen la concordancia de nmero y persona entre el sujeto y el pronombre tono: Yo me canso; T te mareas; Ellos se cansan.Construccin pronominal mediaVeamos estas oraciones:

1.El nadador se ha ahogado.2.El puente se ha hundido.3.Pedro se lava despus del trabajo.Las tres son pronominales, puesto que en las tres el pronombre tono se designa al mismo ser mencionado en el sujeto. En la nmero 3 el pronombre se indica que el ser lavado es el mismo (Pedro) que haca la accin, o sea, que Pedro lava al mismo Pedro; llamamos a esto sentido reflexivo. Podramos decir los mismo de las oraciones 1 y 2? Evidentemente, no: en ellas no decimos ni que el nadador ha ahogado al mismo nadador, ni que el puente ha sido el que ha hundido el puente. Aqu la forma pronominal tiene un sentido diferente del reflexivo; dice que al nadador y al puente, sin que ellos hicieran nada para ello, sin que tampoco se piense en un causante de la accin, les ocurri algo. Este uso de la construccin pronominal se llama construccin pronominal media. Observemos que puede presentarse en todas las personas: No me ahogar si nado por esta parte; Os habis hundido en la pobreza.Decir que en estos casos no se piensa en un agente no significa que no se pueda pensar en una causa. La construccin seguir siendo media si, en lugar de decir El puente se ha hundido, decimos El puente se ha hundido con (o por) la carga excesiva; esto es, a consecuencia de la carga excesiva. Aqu se ha expresado causa y no agente.

La diferencia entre la nocin de causa y agente, aunque se trate de nociones vecinas, puede apreciarse cotejando estos dos ejemplos de estructura similar:

1.La corrida fue suspendida por la lluvia.2.El valle fue anegado por las aguas.Ambas son construcciones pasivas. Pero en la oracin 1 se quiere decir que la corrida fue suspendida como consecuencia de la lluvia (y no que la lluvia suspendi la corrida); y en la oracin 2 lo que se quiere decir es que las aguas anegaron el valle (y no que el valle fue anegado como consecuencia de las aguas). En el primer caso tenemos un complemento de causa, por la lluvia, y en el segundo, un complemento agente, por las aguas. As como la oracin 1 podra transformarse en una oracin pronominal media (La corrida se suspendi por la lluvia), la oracin 2 no admitira tal transformacin, al menos sin alterar el sentido. (Seco 1989, p. 118)

Si me afeito puede entenderse como me afeito a m mismo o como el barbero me afeita, en me examin de Latn no es posible entender me examin a m mismo; aqu solo se entiende una interpretacin pasiva: sufr un examen; solo que el acto real al que se refiere este verbo suele incluir una participacin activa del sujeto. El sentido no-activo es evidente cuando el sujeto de examinarse aparece como objeto directo de examinar: me examinaron de Latn.voz media. Se dice tradicionalmente que estn en voz media las oraciones cuyo sujeto designa la entidad a la que afecta el proceso denotado por el verbo, sin que exista o se presuponga un agente externo que origine dicho proceso, como El barco se hundi o Mara se ahog. En ellas se indica, simplemente, que al sujeto le ocurre algo y normalmente se construyen con un verbo en forma pronominal. (RAE: DPD, 2005, p. 772)

La alternancia activa media puede ejemplificarse con el par El sol seca los campos (activa) ~ Los campos se secan (media). En ambos casos, el grupo nominal los campos designa al paciente, pero es complemento directo en la primera oracin y sujeto en la segunda.

Los verbos pronominales son aquellos que se conjugan siempre con el pronombre tono correspondiente: me, te, se, nos, os, se. Este pronombre no desempea ninguna funcin sintctica, es un mero componente del verbo, o sea, de todo el ncleo del predicado.

El grupo ms numeroso de oraciones con se en espaol es el constituido por aquellas en las que se no puede considerarse propiamente reflexivo. No lo es, lgicamente, con los verbos intransitivos, donde no puede ser ni objeto directo ni, en muchos casos, indirecto. Aparece con casi todos los de movimiento: irse, venirse, caerse, etc., y con otros como morirse. Para algunos, como Stockwell et alia, se es ah un objeto vaco; para otros, como Bobes, ha contribuido a borrar la frontera entre verbos transitivos e intransitivos. Pero, como seala Alarcos, es intil preguntar la funcin sintctica de este se. Simplemente, es una incrementacin lxica, con repercusin en el significado del verbo, surgida histricamente de un acusativo o un dativo. Con estos verbos intransitivos, el uso de se parece arrancar de un dativo tico, muy frecuente en el latn vulgar; mientras que en verbos transitivos, como alegrarse, hundirse, parece surgir de un acusativo, quizs objeto directo en un principio.

Otros, como Babcock y Bobes, tratan de incluir estas frases en algn tipo de voz media existente en espaol, donde tambin entraran los verbos transitivos incrementados por un se no propiamente reflexivo. (Cano Aguilar 1981: p. 273)

El morfema pronominal tono que caracteriza a los verbos pronominales no es argumental, por lo que no le corresponde propiamente una funcin sintctica. As, el morfema se no constituye el complemento directo de despertar en El nio se despert, sino un segmento que forma parte de la constitucin lxica del verbo despertarse. Los mismos pronombres pueden ser tambin reflexivos, y en tal caso se interpretan como argumentos. De esta forma, la oracin Se sec puede ser reflexiva (Se sec con una toalla) o media (Se sec al sol). (RAE: NGLE-Manual, 2010, 41.7.1c)

El espaol deja a menudo abierta la eleccin entre la interpretacin media y la reflexiva de muchas oraciones construidas con verbos pronominales. La eleccin entre una y otra es relevante, pero ha de hacerse a partir del contexto o la situacin. Es clsica en la gramtica tradicional espaola la polmica acerca de si Me lavo (frente a Me lavo a m mismo) debe analizarse como oracin intransitiva, de forma que me sera la marca del verbo pronominal lavarse, o bien como transitiva y, en tal caso, me constituira el complemento directo reflexivo del verbo lavar. [...] En el espaol actual Me lavo es una oracin transitiva en la que el pronombre me designa el complemento directo. De este modo, se distinguen claramente en castellano el uso pronominal del verbo llamar (As es como me llamo) y el transitivo (Se llama a s mismo Campen). Como en otros muchos casos, el primer uso alterna en la lengua clsica con la pasiva de participio (As es como soy llamado). (RAE: NGLE 2009, 41.13.g)

Un mismo verbo puede ser:

a. transitivo no reflexivo: Pedro golpea a Juan.b. transitivo de accin refleja: Pedro se golpea (a s mismo).c. transitivo de accin recproca: Pedro y Juan se golpean el uno al otro.d. pronominal intransitivo no reflexivo: Pedro se golpe en un brazo al caer.e. pronominal transitivo: Pedro se golpe la cabeza contra la pared.Los verbos pronominales alternantes, que constituyen el grupo mayoritario, poseen variantes no pronominales intransitivas, como en La violencia recrudece (en las reas chilena, andina y rioplatense) o, ms frecuentemente, transitivas: Los campos se secan [secarse, verbo pronominal] ~ El sol seca los campos [secar, verbo transitivo].

Para Rafael Lapesa (Estudios de morfosintaxis histrica del espaol. Madrid, 2000, pp. 817 ss.), la construccin reflexiva propiamente dicha es aquella en que el significado del verbo es el mismo que cuando el verbo es transitivo y de accin, y en la que el objeto directo se refiere al mismo ser o cosa que el sujeto. As, no vara el sentido del lexema verbal entre desatarse y desatar a otro, matarse y matar a otro, lavarse y lavar algo, mirarse y mirar a otro, etc. Este reflexivo puede reforzarse con a m mismo, a ti mismo, etc., refuerzo que nos ayudar a distinguirlo. Los as llamados verbos reflexivos propiamente dichos son simplemente verbos transitivos en los que el significado del verbo reflexivo es el mismo que cuando es transitivo o de accin, solo que su complemento directo tiene el mismo referente que el sujeto de la accin. Las otras construcciones en las que no hay un objeto directo correferente con el sujeto, Lapesa las denomina reflexivas interiores porque presentan en forma reflexiva (pronominal) un sentido distinto al que cuando son transitivos, cosa que no ocurre con los reflejos propiamente dichos.

Esto puede darse con verbo de accin fsica: me levanto indica adoptar una postura diferente a la de sentado, frente a levanto un peso (= elevo, alzo algo). Me lanzo no refiere la misma accin que lanzar una piedra, por ejemplo.

Lo mismo ocurre con verbos de tipo psquico: alegrarse, enfadarse, avergonzarse, jactarse, burlarse, en los que se diferencia claramente el valor de la construccin reflexiva (donde el sujeto experimenta la accin, no la provoca en s mismo) del valor causativo de la construccin transitiva (alegrar a alguien); el sujeto no es activo, como el de yo me lavo, ni siquiera como el de yo me siento, sino afectado por un proceso psquico, asiento de ste. Hay tambin en estos casos alternancia con intransitivos. Naturalmente, tampoco en estos verbos es posible el refuerzo con a m mismo, etc.

Hay otros verbos originariamente intransitivos, pero que se pueden construir con pronombre, para dar el valor de reflejo interior. En unos casos hay alternancia: sonrerse / sonrer. Pero en otros no: dignarse, jactarse, atreverse. Estos verbos son diferentes a los dos grupos anteriores, en primer lugar porque no pueden oponerse a una construccin transitiva, y en segundo lugar porque tampoco es posible la alternancia con intransitivos. Tampoco en ellos es posible el refuerzo con a m mismo, etc.

La construccin reflexiva puede llevar un pronombre que represente al sujeto, pero no como objeto directo sino como indirecto. El primero tipo es el reflexivo de inters: comerse beberse algo, permitirse una licencia, etc. Con alguno de estos verbos puede haber refuerzo con a m mismo: se permiti a s mismo ciertas libertades, pero ello no es posible con otros (en general, con la mayora), por ejemplo con comerse o beberse no existe la combinacin con a s mismo. Este reflexivo de inters se emplea con mayor frecuencia cuanto ms afectivo sea el lenguaje utilizado. As, se encuentra ms en el lenguaje medieval y en el habla coloquial.

El reflexivo de inters nos lleva a otro uso del reflexivo llamado dativo tico, con el que se muestra la intervencin personal del sujeto, su voluntad consciente de participar en la accin: me temo que..., me pienso que..., me figuro que..., me digo que..., etc. En algunos casos hay posibilidad de refuerzo con a m mismo y en otros no: me digo a m mismo / *me temo a m mismo, *me figuro a m mismo.

El reflexivo puede tener tambin sentido posesivo en aquellos casos en que el objeto indirecto de la construccin reflexiva (que consiste, pues, en verbo transitivo) indica algo perteneciente al sujeto, o que forma parte de l. Es lo que ocurre en mancharse el traje, herirse el pie o cortarse la mano, expresiones en las que parece posible el refuerzo con a s mismo, etc. En estas construcciones es posible un valor causativo para el reflexivo: voy a cortarme el pelo, hoy me examinar de Qumica.

Por otra parte, la construccin reflexiva puede indicar acontecimientos fortuitos o no proyectados. Es lo que se halla en se me rompi la silla, frente a romp la silla, se me sube la sangre a la cabeza, se me asomaban las lgrimas, se le cort la voz, la garganta se le qued seca, el mundo se le vena encima.

Tiene valor de reflejo dinmico el empleo del reflexivo con verbos intransitivos de movimiento o de estado. En castellano se encuentra desde los primeros textos: salios de la red e desatos el len (Cid, v. 2282), y formas como irse, estarse, quedarse, marcharse, etc., han sido generales en la historia del idioma.

En ocasiones, el verbo incrementado con pronombre reflexivo tiene un matiz significativo especial: indica una mayor intervencin personal. Pero en otros casos sus matices de sentido son claramente aspectuales. Lo mismo se da en marcharse frente a marchar; o en dormir (durativo), opuesto a dormirse (incoativo), donde se diferencia claramente el distinto modo de accin.

En construcciones como sbete aqu, ntrate all, se ha hablado de la existencia de matiz resultativo; mejor que eso, quiz se trate de diferencias de expresividad frente al verbo simple.

En las construcciones reflexivas con valor recproco es frecuente que haya una indicacin del otro agente que interviene en la accin recproca, aunque formalmente no aparezca como sujeto, sino en forma de complemento introducido por con.

Finalmente, sealaremos algunas construcciones especiales con se, en las que el verbo vara su significacin respecto de la forma simple de maneras muy particulares. Es lo que se encuentra en frases como el barril se sale o la casa se llueve: los sujetos de salirse y lloverse no podran serlo desde una perspectiva estrictamente semntica, pero s constituyen el tema acerca del cual se comenta algo; en ltimo trmino, barril o casa son en estas expresiones un tipo de sujeto afectado, por lo que el empleo de se es razonable.VERBOS QUE SE CONJUGAN SIEMPRE PRONOMINALMENTEHay verbos que se conjugan siempre pronominalmente. Una gran parte de ellos rige complemento de rgimen preposicional:

aborrascarsearrogarseenamoriscarseobstinarse

aborregarseatenerse aendeudarsepavonearse

aburguesarseatreverse aenfrascarsepitorrearse

acartonarsebifurcarseenfurruarseportarse

acurrucarsecondolerseenlozanarsequerellarse

adentrarsecontonearseensaarserebelarse

adormilarsedemudarseensimismarseregodearse

aduearsedesdibujarseesforzarserepanchigarse

afanarse pordesentendersefugarserepanchingarse

agolparsedesgaitarsegrillarserepantigarse

agusanarsedespelotarseguasearseresentirse

antojarsedesquitarseherniarsesincerarse

arracimarsedesternillarseindisciplinarsesuicidarse

arremolinarsedesvivirseinmiscuirse entransparentarse

arrepanchingarsedignarsejactarse deufanarse de

arrepentirse deempecinarsemofarse devanagloriarse de

Los verbos intrnsecamente reflexivos se denominan tambin pronominales inherentes por carecer de correlato no pronominal: *arrepentir no se usa (*yo arrepiento), sino solo acompaado del pronombre tono arrepentirse (yo me arrepiento).

Muchos de los verbos inherentemente pronominales se construyen con complemento de rgimen: abalanzarse sobre, abstenerse de, adentrarse en, atenerse a, dignarse a, enterarse de, incautarse de, jactarse de, obstinarse en, quejarse de, querellarse contra, vanagloriarse de, etc.

De hecho, en otras pocas de la lengua, algunos de estos verbos han tenido tambin una forma transitiva sin se.

No hay ninguna razn por la que estos verbos, que indicar tambin un proceso psquico, no posean una correspondiente forma simple, como los otros verbos pronominales. Si existe la pareja: Juan se decidi a venir / Juan me decidi a venir, es solo una laguna accidental del lxico espaol que no existe: Juan se atrevi a venir / *Juan me atrevi a venir. (Cano Aguilar 1981: 279)

VERBOS SIN ALTERNANCIA PRONOMINALVerbos como

alargar, aumentar, disminuir, engordar, estrechar, hervir, mejorar, empeorarTodos estos verbos, excepto hervir, denotan procesos no acabados, es decir, movimiento dentro de una escala de grados que nunca llega a su extremo final.

Ciertos verbos de complecin gradual, que expresan que la accin se completa gradualmente, expresan telicidad, es decir, un proceso que solo puede darse por realizado con su culminacin, cuando llevan el cltico se. El cltico sera una marca de telicidad asociada a las estructuras que denotan un evento tlico: la variante pronominal de desteir es desteirse. La variante se puede construir con cltico o sin l, pero la variante con cltico es la que denota un punto final.

VERBOS TRANSITIVOS CON ALTERNANCIA PRONOMINALHay verbos transitivos no pronominales que cuando se conjugan pronominalmente dan lugar a oraciones intransitivas con verbo pronominal; se habla, entonces, de un se intransitivizador: levantar > levantarse; poner > ponerse; hacer > hacerse; dormir > dormirse; llamar > llamarse; separar > separarse; llevar > llevarse, etc.

Levanto el paquete / Me levanto a las ocho.Llamo a Miguel / Me llamo Miguel.Los verbos pronominales son, en principio, incompatibles con un complemento directo (CD). Existen, no obstante, ciertas estructuras fijas, como aparselas, arreglrselas, no jalarse una rosca, perdrselo (Si no quieres venir a la fiesta, t te lo pierdes), ganarse el pan, ganarse la vida, jugarse el tipo, jugarse el pellejo, tirarse a alguien, saltarse algo a la torera, etc., o algunos verbos que, con la forma pronominal, han adquirido sentidos especiales, como llevarse algo (adquirir, robar), abrirse (irse), comerse un stop, saltarse las normas, saltarse un semforo (infringir), que parecen tolerar la presencia de un CD con se pronominal. El empleo de se en estos casos es obligatorio; su omisin determina o anomala gramatical o cambio de significado: Llevo un reloj Me llevo un reloj.

Por lo general, los verbos pronominales se construyen solo con complemento de rgimen (arrepentirse de, inmiscuirse en, referirse a), pero unos pocos tambin admiten alternativamente complemento directo o complemento de rgimen: encontrarse a alguien ~ encontrarse con alguien; tropezarse a alguien ~ tropezarse con alguien; quedarse algo ~ quedarse con algo. La alternancia es ms frecuente, sin embargo, entre la variante pronominal y la no pronominal del mismo verbo: en un gran nmero de casos se obtienen diferencias semnticas muy marcadas (empear algo ~ empearse en algo; fijar algo ~ fijarse en algo; negar algo ~ negarse a algo; despedir a alguien ~ despedirse de alguien); en otras alternancias, en cambio, la diferencia de significados es ms sutil (olvidar un nombre ~ olvidarse de un nombre; admirar su inteligencia ~ admirarse de su inteligencia; lamentar el error ~ lamentarse del error).

VERBOS TRANSITIVOS CON ALTERNANCIA PRONOMINAL TRANSITIVALa mayor parte de los verbos pronominales son intransitivos, pero son transitivos los que aparecen en grupos verbales como beberse el vino, creerse los infundios, estudiarse la leccin, desayunarse los cereales (tambin noticias, anuncios, etc.), encontrarse a un amigo, llevarse la plata, esperarse una sorpresa. Estos verbos alternan con variantes transitivas no pronominales (beber el vino, creer los infundios, etc.). Ello a llevado a algunos gramticos a entender que tales variantes pronominales son, en realidad, combinaciones de verbos transitivos con dativos aspectuales. Estos dativos se llaman tambin concordados porque, a diferencia de los dems, presentan necesariamente los mismos rasgos de nmero y persona que el sujeto: Yo me le ayer todo el diario. No es claro, sin embargo, que este fenmeno sea sintctico en lugar de lxico. (RAE: NGLE 2009, 41.13)

Para que se pueda utilizar la forma pronominal es necesario que la oracin tenga objeto directo determinado.

Se trata de verbos transitivos que, sin dejar de serlo es decir, conservando el objeto directo, pueden usarse en forma pronominal. Sin el cltico se, estos verbos expresan simplemente una accin transitiva, mientras que con el se esa accin se refuerza y resulta aplicada con intensidad al sujeto.

Verbos que significan ingerir alimentos slidos o lquidos:

almorzar, cenar, comer, desayunar, engullir, fumar, merendar, tomar (beber), tragar, etc..

Verbos que significan procesos mentales:

aprender, conocer, creer, imaginar, saber, suponer, temer, etc.

Verbos ganar, gastar y vender.

Verbos apostar, jugar.

Verbos encontrar, esconder.

En general, el que no se formen verbos pronominales a partir de verbos transitivos que expresan CREACIN (componer, construir, elaborar, escribir, fabricar, inaugurar) y tampoco con algunos de los que denotan la accin contraria (clausurar, derribar, derruir) es seal de que la lengua interpreta esos eventos como acciones que exigen intervencin externa, y no en funcin de procesos que desembocan en estados. [...]

El modo de accin de los verbos tambin condiciona su capacidad para pertenecer a paradigmas pronominales. As, aborrecer, amar, detestar y odiar (verbos transitivos que denotan emociones o afecciones) carecen de variantes pronominales. Existen, pues, las formas verbales aborrecerse u odiarse, con pronombre reflexivo, pero no los verbos pronominales correspondientes. [RAE: NGLE 2009, 41.13u-v]

Estos verbos, que pueden construirse con o sin se, llevan en todos los casos un objeto directo y en forma transitiva directa son tambin verbos estativos: saberse la leccin, me temo lo peor, se conoce todo Londres. El se de estos verbos podra relacionarse con los llamados dativos ticos.

Son verbos con alternancia pronominal y aspecto lxico tlico: aprenderse la leccin, beberse toda la leche, comerse toda la tarta, fumarse un puro, gastarse todo el dinero, leerse el QuijoteVERBOS TRANSITIVOS CON ALTERNANCIA PRONOMINAL CON COMPLEMENTO DE RGIMEN

Un grupo nutrido de verbos transitivos da lugar a la pauta V1 ~ V2 + se. En este esquema, un verbo transitivo alterna con su variante intransitiva pronominal, que aparece seguida de un complemento de rgimen (y a veces de un adjunto), como en olvidar una fecha ~ olvidarse de una fecha, o en equivocar el camino ~ equivocarse de camino (sin artculo en la segunda opcin). No se obtiene sinonimia absoluta en estos casos, pero s una notable proximidad entre los significados que expresan las dos variantes. Cabe decir lo mismo de pares como encontrar a alguien ~ encontrarse con alguien y de otros similares. La segunda variante del par desayunar caf ~ desayunarse con caf (con complemento adjunto) es ms comn en el espaol americano que en el europeo. Sucede, en cambio, lo contrario en enfrentar un problema ~ enfrentarse con (o a) un problema:

Se hizo necesario en el mundo supervisar desde varios ngulos la situacin familiar y, en especial, la que enfrentan las mujeres.Y a Csar le espantaba su docilidad, la pasividad con la que se enfrentaba a la desgracia.El complemento de rgimen caracterstico de la variante pronominal (abrazarlo ~ abrazarse a l) puede alternar con el indirecto (abrazrsele) con unos pocos verbos con complementos locativos.

La variante con complementos locativos es ms propia de los nombres de lugar que de los de persona. De hecho, los pronombres dativos tonos son caractersticos de los complementos de persona, como en Se le abraz, mientras que los grupos preposicionales de interpretacin locativa pueden designar cosas con igual propiedad: Se abraz al rbol > Se abraz a l. De forma anloga, cabra decir Se les opusieron o Se opusieron a ellos si se habla de policas, pero se suele preferir la segunda opcin si se habla de criterios o de razonamientos. (RAE: NGLE 2009: 34.7b y 35.6j)Algunos verbos introducen complementos de rgimen que alternan con el objeto directo de sus variantes transitivas: decidir algo ~ decidirse a algo; despedir a alguien ~ despedirse de alguien; lamentar algo ~ lamentarse de algo; olvidar algo ~ olvidarse de algo. La mayora de los verbos pronominales exige complemento de rgimen preposicional (CRP) que no llevaba la forma no pronominal. La presencia de la preposicin puede ir o no acompaada de una diferencia de significado:

La madre cuela la leche [CD] > Me cuelo en el ftbol [CRP]

colar > colarse en; acordar > acordarse de; negar > negarse a; decidir > decidirse a; prestar > prestarse a; lazar > lanzarse a,

Otras formas no exigen ningn cambio del significado:

admirar > admirarse; asustar > asustarse; examinar > examinarse; compadecer > compadecerse; lamentar > lamentarse; defender > defenderse; cubrir > cubrirse; golpear > golpearse.

El sujeto de la oracin activa suele pasar a complemento con preposicin en la formacin media. Cuando el sujeto de la oracin media es de cosa, la preposicin que aparece normalmente es con; cuando el sujeto es de persona, con alterna con de y por:

Tanto leer me aburre. / Me aburro de tanto leer.Tu victoria me alegr. / Me alegr con (de, por) tu victoria.Me molestaron sus palabras. / Me molest con (por) sus palabras.La forma pronominal y la preposicin pueden ser a veces concomitantes, sin que se produzca alteracin en la estructura de la oracin:

Aprovech la confusin. / Se aprovech de la confusin.Confes sus pecados. / Se confes de sus pecados.VERBOS TRANSITIVOS DE MOVIMIENTO CON ALTERNANCIA PRONOMINALacercar, alejar, apartar, etc.

Sent al nio en el carrito.

Me sent en el banco.Tom asiento en el banco.Sub al rbol. [intransitiva]

Sub al chico al rbol. [transitiva]

Me sub al rbol. [reflexiva / pronominal]

Acercar significa poner cerca o a menor distancia de lugar o tiempo.

En la secuencie te me es posible Te me acercaste (Te acercaste a m) porque te es aqu reflexivo. No es posible *Te me acerqu (Me acerqu a ti) porque el pronombre te no es reflexivo en esta oracin.

Se distinguen Te le acercas (Te acercas a l), formado con la forma pronominal acercarse, y Te lo acercas (Lo acercas a ti), formado con el verbo transitivo acercar.

Los complementos indirectos que indican direccin, destino o trmino suelen alternar con los complementos de rgimen: Se acerc a ella ~ Se le acerc (direccin, destino o trmino); Se nos acerc ~ Se acerc a nosotros.

Los complementos de rgimen con los que alternan estos complementos indirectos se identifican como tales porque pueden aparecer sin doblado pronominal en contextos como Se acerc a nosotros; Se uni a ellos, que no exigen que el complemento con el pronombre personal tnico se duplique.

VERBOS INTRANSITIVOS CON ALTERNANCIA PRONOMINALEst durmiendo > Duerme [significado durativo]

Se est durmiendo > Est empezando a dormir [significado incoativo]

morirse, troncharse de risa, quedarse en blanco, quedarse para vestir santos, cagarse en la mal salada, irse al gareteHay una serie bastante larga de verbos intransitivos que aparecen en forma pronominal. La alternancia supone alguna diferencia, mayor o menor, en el plano del significado y en la idea de nfasis.

VERBOS INTRANSITIVOS DE MOVIMIENTO CON ALTERNANCIA PRONOMINAL

Son verbos de movimiento con alternancia pronominal que se interpretan como predicados de consecucin: Se sali el agua de la baera (frente a la variante no pronominal Sali agua de la baera).

Verbos de movimiento con alternancia pronominal que no altera la estructura sintctica: salirse, marcharse, venirse, caerse, morirse.

El uso de la forma pronominal no es, en la mayor parte de los casos, algo que dependa caprichosamente de la voluntad del hablante. El espaol es rico en usos pronominales que no presentan, sin embargo, un estado tan catico como podra deducirse de la observacin de casos aislados:

Con los verbos intransitivos de movimiento, el uso de la forma pronominal est relacionado con hechos de la estructura sintctica (expreso o no). Concretamente, el pronombre establece un lazo especial entre el sujeto y el lugar de donde, el complemento de origen del movimiento. De este lazo especial derivan efectos secundarios de sentido, que dependen mucho del contexto (lingstico o no) y que deben ser recogidos en el lxico o diccionario. Tambin algunos verbos transitivos de movimiento aparecen en forma simple o pronominal; y tampoco en ellos el uso es caprichoso. (Molina Redondo 1990: 56)

Algunos verbos que expresan movimiento (alzarse, erguirse, levantarse) se emplean en sentido figurado en oraciones que no designan procesos, sino estados o propiedades.

VERBOS INTRANSITIVOS DE CAMBIO DE ESTADO Verbos mediosLas cosas rotas, las cosas que nadie rompe, pero se rompieron. (Pablo Neruda)

Los verbos intransitivos de cambio de estado o VERBOS MEDIOS pueden ser pronominales (cansarse, secarse) o no pronominales (aumentar, morir).

Los verbos de alternancia pronominal indican un proceso que se produce en el interior del sujeto, sin que este sea el agente ni exista ningn agente externo a l. Pueden aparecer en cualquier persona (me, te, se, nos, os, se).

El trmino VOZ MEDIA se aplica tradicionalmente a los verbos intransitivos que designan cambios de estado, as como procesos experimentados por algn sujeto que no suele ejercer control directo sobre ellos. [...]

Ha sido muy debatida la cuestin de si el trmino VOZ MEDIA es apropiado para designar la estructura gramatical de estas unidades. Muchos gramticos responden afirmativamente, pero otros no se suman a esta opinin y entienden que los pronombres tonos no deben asimilarse a los morfemas flexivos. Como es sumamente polmico que en el espaol exista una voz media (sin desvirtuar el sentido del trmino voz [que es un exponente morfolgico de la ditesis]), se evitar aqu este trmino. Es til, en cambio, la expresin CONSTRUCCIN MEDIA aplicado a las oraciones intransitivas que expresan cambio de estado, sea con verbos pronominales (Se secan los campos) o no pronominales (Crece la hierba). Tambin lo es el distinguir entre la interpretacin media de una oracin refleja (Me moj Result mojado) y la interpretacin reflexiva (Me moj Vert algn lquido sobre m mismo). Existen relaciones sistemticas de forma y sentido entre las oraciones que muestran los procesos en desarrollo y las que presentan la accin de llevarlos a cabo, as como las que describen los estados en los que desembocan. (RAE: NGLE, 2009, 41.13c; 41.13e)

El espaol deja a menudo abierta la eleccin entre la interpretacin media y la reflexiva de muchas oraciones construidas con verbos pronominales.

No existe una clasificacin semntica suficientemente precisa de los verbos pronominales, pero un gran nmero de ellos denotan o bien cambios de estado (sacarse, despertarse, secarse), o bien procesos o reacciones de carcter mental, afectivo o emocional. Son pocos numerosos los verbos pronominales que no corresponden a ninguno de estos dos grandes grupos, en buena medida porque sus sujetos designan participantes activos: confesarse, contenerse, decidirse, justificarse, etc.

Si se interpreta en sentido amplio el concepto de cambio de estado, el grupo ms numeroso de verbos pronominales del espaol es el que corresponde a este paradigma.

La mayor parte de los verbos pronominales denotan cambios de estado de diferente naturaleza:

de lugar o de posicin (acostarse, agacharse, alejarse, levantarse, sentarse, volverse);

de forma, presencia, apariencia o aspecto externo (acortarse, estrecharse, ocultarse, vaciarse);

de consistencia, entereza o propiedad (agriarse, apagarse, arrugarse, mancharse, oxidarse, romperse);

de estado anmico, emocional o de conciencia (alegrarse, entristecerse, molestarse, preocuparse), y de otras muchas cualidades y estados relativos a la naturaleza, fsica o no, de personas o cosas (ablandarse, calentarse, congelarse, rizarse, secarse).

Se ajustan, pues, a pautas semnticas relativamente firmes. El que estos verbos no expresen acciones que exijan intervencin externa explica que abrirse o cerrarse se usen como verbos pronominales, pero no inaugurarse o clausurarse. El verbo cortarse es pronominal cuando se aplica a una salsa (Se cort la mahonesa: oracin media), pero no lo es cuando requiere un agente externo, como sucede en las pasivas reflejas (Se cort el pan). (RAE: NGLE-Manual, 41.7.2c)

El cambio de estado que estos verbos denotan se concibe como adquisicin de una propiedad (industrializarse adquirir naturaleza industrial) o su prdida (despoblarse perder poblacin).

En las frases con sujeto sintctico [-Animado] hablaremos de un contenido medio, e incluso de una voz media con se cuando se den estas dos caractersticas: a) aunque haya un agente en la realidad, en la expresin lingstica no se hace referencia en absoluto a ello; b) se apunta a un proceso, indicado por el verbo, en cuanto que se desarrolla en algo (el sujeto sintctico), o le afecta de algn modo. En este sentido, suelen corresponderse con frases intransitivas (no con pasivas, que presuponen normalmente un agente). Por ello, los verbos tpicos dentro de este apartado son los que indican cambio de estado. (Cano Aguilar 1981: 4.4.1)

Los verbos de estado no son pronominales (con algunas excepciones, como estarse quieto o saberse la leccin).

En el mismo sentido, aburrirse admite la parfrasis pasar a estar aburrido de forma similar a como lo hacen la mayor parte de verbos pronominales que denotan procesos que desembocan en estados. Estas parfrasis son inadecuadas para amar, odiar, etc. (RAE: NGLE-Manual, 41.13v)

VERBOS DOBLEMENTE PRONOMINALESLos verbos doblemente pronominales se construyen con dos pronombres tonos. Uno de ellos admite las tres personas y aparece en dativo, mientras que el otro es un pronombre de tercera persona que concuerda con el sujeto. El verbo ocurrir(se) es doblemente pronominal en oraciones como Se me ha ocurrido una idea genial. El dativo es el pronombre me, que alterna con otras personas: Se {te ~ le ~ nos...} ha ocurrido una idea genial. El pronombre se permanece fijo en tercera persona y concuerda con el sujeto una idea genial.

Se trata de construcciones formadas con unos pocos verbos pronominales de pensamiento y afeccin, como olvidar, antojar, ocurrir (en el sentido de venir a la mente), que, adems del pronombre concordante con el sujeto, exigen otro en dativo. Resulta, pues, agramatical la oracin *Se ocurri una idea extravagante, que requiere la presencia de dicho dativo: Se {me ~ te ~ le ~ les} ocurri una idea extravagante.La sintaxis de ocurrir en estas oraciones es anloga a la que posee en la actualidad este verbo cuando significa suceder (Me ocurri una desgracia). El verbo pronominal olvidarse se construye hoy sin dativo con sujeto de persona (Me olvid), pero no de cosa. No hay, pues, verbo pronominal, sino pasiva refleja, en Se olvid tu fecha de cumpleaos. El verbo es, por el contrario doblemente pronominal en Se me olvid tu fecha de cumpleaos, donde se concuerda en tercera persona con el sujeto (tu fecha de cumpleaos) y me es un pronombre dativo que designa el que experimenta el olvido. La presencia necesaria hoy del pronombre dativo en Se me olvid el nombre es similar a la que muestras otras oraciones con dativos que se interpretan como experimentadores (Le duele la cabeza a Eva, frente a *Duele la cabeza a Eva). El dativo es tambin necesario (en la lengua actual) en Le vino a la cabeza algo que haba ledo a los veinte aos y otras oraciones similares. (RAE: NGLE 2009: 35.2)

El dativo se hace necesario cuando los verbos olvidar, antojar u ocurrir se usan como pronominales: Se le olvid la cita; Se le antojan helados; Se le ocurri una buena idea. Aun as, se admiten en algunos pases alternancias como Te me olvidaste ~ Te olvidaste de m. A ello cabe agregar que la expresin Se me hace que... contiene un pronombre tono de dativo, como los anteriores, con un sentido modal cercano al que tienen Me parece que... o Me da la impresin de que... en el espaol general. Es ms frecuente en el espaol americano que en el europeo la alternancia darle a alguien por algo ~ drsele a alguien por algo: Le dio por encerrarse en el bao a fumar a escondidas; Desde que apareci el cuento de Walsh, en 1965, a la prensa se le dio por acumular conjeturas sobre el cadver.. (RAE: NGLE 2009: 35.8t)

Muchos verbos doblemente pronominales alternan esta construccin en la sintaxis con otras en las que no son doblemente pronominales.

Pocos verbos, como antojarse, son doblemente pronominales, al requerir la presencia de otro pronombre tono en funcin de complemento indirecto (CI); sin embargo, no exigen complemento de rgimen preposicional (CRP):

Ahora se te antoja un bocadillo de jamn.[te es complemento indirecto; un bocadillo de jamn es el sujeto]

Lo mismo se podra decir del verbo ocurrrsele, con la salvedad de que el verbo puede aparecer sin incremento pronominal:

Cada vez ocurren ms catstrofes naturales.

Siempre le ocurre algo jugando al ftbol, siempre est lesionado.No se me ocurre ninguna otra idea.VERBOS PRONOMINALES CON COMPLEMENTOS INDIRECTOS ARGUMENTALESSe puede establecer la divisin entre complementos indirectos seleccionados por la naturaleza semntica del verbo (argumentales) y los complementos indirectos no seleccionados (no argumentales).

Complementos indirectos seleccionados, argumentales o actanciales: exigidos por la naturaleza semntica del verbo:

Destinatarios y experimentadores: conceder un premio a alguien (designa al destinatario de la accin); lo que ms me gusta a m es el marisco (experimentante).

Un buen nmero de complementos indirectos argumentales alternan con complementos de rgimen y con otros argumentos locativos que se les asimilan. Las tres clases que agrupan tradicionalmente estos complementos indirectos son las siguientes:

Complementos de trmino, origen y ubicacin:

Complemento de direccin, destino o trmino: Se acerc a ella ~ Se le acerc. No te me acerques. Se nos alejan las oportunidades.Complemento de origen, procedencia o fuente: Se apart de ellos ~ Se les apart.

Complemento de ubicacin: Ech sal a la ensalada ~ Le ech sal a la ensalada.Los verbos que seleccionan estos argumentos, y dan lugar a las alternancias mencionadas, pueden pertenecer a varios grupos semnticos:

APROXIMACIN: acercar(se), aproximar(se), arrimar(se), como en Se acerc a nosotros ~ Se nos acerc.IGUALDAD o SIMILITUD: asimilar(se), comparar(se), equiparar(se), igualar(se), parecer(se), como en Se equiparan a ellos ~ Se les equiparan.

ADICIN o CONTACTO: unir(se), juntar(se), agregar(se), como en Se uni a ellas ~ Se les uni.SUJECIN o DEPENDENCIA: acomodar(se), adaptar(se), acoplar(se), ajustar(se), someter(se), rendir(se), como en Se haba rendido a nosotros ~ Se nos haba rendido.ADVENIMIENTO, PRESENCIA o MANIFESTACIN: sobrevenir, venir, llegar, aparecer, como en Se apareci a ellos un ngel ~ Se les apareci un ngel. (RAE: NGLE 2009, 35.6c)

La nocin opuesta a la de acercamiento es la de SEPARACIN. Los verbos que expresan esta idea (alejarse, apartarse, escaparse, soltarse, etc.) se construyen con el llamado tradicionalmente DATIVO DE ORIGEN, SEPARACIN o PROCEDENCIA, que alterna tambin con complemento de rgimen: apartarse de l ~ apartrsele. Admiten asimismo esta pauta algunos verbos que expresan OPOSICIN, como en Se opuso a ti ~ Se te opuso; Se enfrent a nosotros ~ Se nos enfrent, pero tambin ciertos tipos de JUICIO, como en No acepto nada de usted ~ No le acepto nada, o en creer {de ~ a} alguien algo, o como en Me dijo: Te quiero. Y se lo cre, donde se subraya el complemento indirecto.

La estrecha relacin que existe entre las nociones de ORIGEN y CAUSA ayuda a entender que las alternancias mencionadas se extiendan a verbos como rerse y burlarse, cuyos complementos denotan lo que suscita risa o la burla, respectivamente: Se le rea ~ Se rean de ella; Se les burlaban ~ Se burlaban de ellos, como en Todos se le burlaban por el acento, pero l no deca nada. (RAE: NGLE 2009, 35.6d)

A esta pauta de alternancia entre dativos argumentales y complementos de origen y procedencia se pueden asimilar los verbos que expresan demanda (demandar, encargar, encomendar, exigir, implorar, preguntar, recabar, reclamar, requerir, rogar, solicitar, suplicar, urgir.

Si se comparan las construcciones formadas con dativos de procedencia o trmino con las que admiten variantes transitivas de esos verbos, pueden obtenerse diferencias notables de significacin. As, en Se lo acerc, con dativo reflexivo, se habla de una accin en la que la persona o la cosa designada por lo es atrada hacia el sujeto, como se refleja en la variante Lo acerc hacia s. En cambio, en Se le acerc se hace referencia al movimiento del sujeto hacia alguna otra persona o cosa, es decir, al proceso contrario al anterior. Esta diferencia de significados se obtiene de la estructura sintctica. En efecto, la primera oracin se forma con el verbo transitivo acercar (aproximar algo a alguien) construido con un complemento indirecto de direccin o trmino: el pronombre reflexivo se. En el segundo caso, el verbo pronominal acercarse selecciona un complemento indirecto de direccin (le, variante tona de a l ~ a ella), de lo que se deduce que el significado de las dos oraciones ser el opuesto. Se obtiene la misma diferencia al comparar separrsela con separrsele, arrimrsela con arrimrsele, etc. (RAE: NGLE 2009: 35.6f)

La nocin opuesta a la de presencia o manifestacin es la de ocultamiento. Los complementos de origen y procedencia aparecen tambin con estos predicados: Se le esconde ~ Se esconde de l; Se nos oculta ~ Se oculta de nosotros.

Se ha observado que la estrecha relacin entre los complementos indirectos de origen o procedencia y los dativos simpatticos es ms general, hasta el punto de que parece ser una consecuencia natural del hecho de que se separa o se aparta de algo o de alguien aquello que le pertenece. Los verbos intransitivos que denotan PRDIDA o ALEJAMIENTO se asimilan al mismo paradigma, como en Al vehculo se le desprendieron las ruedas traseras, es decir, Se desprendieron de l, o en Yo tena una tristeza que se me sala por los poros, es decir, Se sala de m. (RAE: NGLE 2009: 35.6i)

Los complementos indirectos que expresan ubicacin presentan mayores dificultades que los de los otros grupos para aparecer en construcciones no dobladas. Contrastan Se (le) acerc a Ana (con doblado optativo) y Puse el mantel a la mesa, irregular por ausencia de doblado. Se ha observado, sin embargo, que son inestables los lmites entre esta clase de complementos y los dativos simpatticos: Le puse el babero al nio.VERBOS PRONOMINALES CON COMPLEMENTOS INDIRECTOS NO ARGUMENTALESComplementos indirectos no seleccionados, no argumentales o no actanciales:

El dativo de inters (commodi o incommodi) designa el individuo que se ve beneficiado o perjudicado por la accin o el proceso: Me buscaron un albergue.

El dativo posesivo o simpattico hace referencia a la persona o la cosa a la que se atribuye algo, muy a menudo una relacin de posesin o de inclusin: A la casa se le moj el tejado.

El dativo tico permite integrar en el verbo un elemento igualmente ajeno a l, pero afectado en alguna medida por la nocin que expresa el predicado: No se me ponga nervioso.El espaol expresa a menudo el poseedor mediante pronombres tonos de dativo en concurrencia con frases nominales que contienen artculos u otros determinantes, como en Se le hincharon los pies, Se te nubl la vista, Me torc el tobillo (tambin Se me torci el tobillo), en lugar de Se hincharon sus pies, Su nubl su vista, Se torci su tobillo.

En Se le hincharon los pies, el dativo simpattico le forma grupo con el pronombre se (se le), que corresponde al verbo pronominal hincharse. El sujeto de este verbo es el grupo nominal los pies, cuya referencia se atribuye al individuo designado por el dativo posesivo. A esta misma pauta corresponden los ejemplos nublarse o torcerse (Se me nubl la vista, Se me torci el tobillo), pero tambin otros como Sent que el corazn se me sala por la boca, as como los siguientes: Se le encoga el nimo; Se te arruga la camisa; Se nos van los hijos; Se me rompieron los anteojos; Se te va a enfriar la sopa.

En general, es muy frecuente que los verbos de dos argumentos (como lavar o romper) se construyan con tres participantes (sujeto, complemento directo y complemento indirecto) cuando el segundo de ellos designa una parte del elemento expresado por el tercero: Le lav la cara al nio; Le rompi la ventana al auto, etc. El dativo simpattico denota otras veces relaciones ms laxas que el espaol suele expresar mediante posesivos, tales como el parentesco (Se le casaron todos los hijos), la autora (Te ha quedado muy bien el artculo) y diversas nociones que pertenecen de forma ms o menos estrecha a la esfera personal del individuo (Le iba la vida en ello; Se nos acaba el tiempo; Se me va el autobs). (RAE: NGLE 2009: 35.7g)

Los solapamientos entre los dativos de inters y los simpatticos afectan a las construcciones. El dativo subrayado en Se le caa el pelo es un dativo simpattico; el marcado en Se le caa la arena, un dativo de inters, y el que se resalta en Se le cay el paraguas, podras ser cualquiera de los dos. El dativo expresa en estas tres oraciones un tipo de asociacin abstracta que admite mltiples relaciones particulares: pertenencia, parentesco, vinculacin afectiva, participacin, responsabilidad, contacto o incluso proximidad, como la que existe entre los referente te y el fuego en Se te va a apagar el fuego.

Se suele denominar DATIVO TICO el pronombre tono no reflexivo que manifiesta ese caso y que modifica al verbo sealando al individuo que se ve afectado indirectamente por la accin que aquel denota. Son dativos ticos los siguientes:

Las jvenes madres que dicen Mi hijo me come o Mi beb no me duerme.No s cuidad plantes, siempre se me mueren.

No se me acalore.Un negocio, si no lo sabes manejar, se te va a la quiebra.Esta misma semana te me vas a un internado, no voy a seguir soportndote.Los dativos ticos no son argumentales, pero pueden dar lugar a situaciones de ambigedad con ellos si se dan las condiciones sintcticas adecuadas. Mientras que el pronombre me en Te me olvidaste del nio no admite otra interpretacin que la de dativo tico, en las oraciones que siguen podra interpretarse tambin como dativo de origen o procedencia, ya que los verbos escapar y llevar son compatibles con tal tipo de complementos indirectos:

No te me vas a escapar.Me ocurri a m haciendo feliz pareja con mi esposo querido, hasta que se me lo llevaron, dejndome en el mayor desconcierto. (RAE: NGLE 2009: 35.7r-s)

El dativo tico es el nico de los dativos que puede anteponerse a otro pronombre tono con su mismo caso. Este segundo dativo puede ser argumental: Me le quits esos zapatos de tacones altos, o tambin no serlo: No me le estropeen la cabeza, carajo, que es un profesor. Este dativo admite construcciones dobladas o duplicadas, en especial la de tpico inicial que suelen llamarse DISLOCADA, como A m no se me va a poner nerviosa la nia. Es raro, en cambio, en las contrastivas: *No te me caigas a m.

Posee asimismo valor expresivo el llamado DATIVO ASPECTUAL. Este dativo se denomina tambin CONCORDADO porque concuerda siempre en nmero y persona con el sujeto de la oracin. As, concuerdan en primera persona me y le en Ya me le el diario. Esta concordancia es propia de los reflexivos (Se afeit) y de los morfemas caractersticos de los verbos pronominales (Me levant de la mesa). He aqu algunos ejemplos de dativo aspectual concordado:

Los camelleros se coman el sol y se beban la arena por hallarla.Contemplas cmo se traga un platazo de slido arroz a la aragonesa.Qu bien os aprendisteis las consignas que os han lanzado vuestros jefes.Nos lemos toda la prensa de la Comunitat de los ltimos tres aos.El dativo aspectual o concordado tiene valor enftico. El ltimo texto que se cita aade a la variante sin dativo (Lemos toda la prensa) la mayor implicacin del sujeto en la accin que se menciona. Con el pronombre nos, la oracin sugiere, en efecto, que la lectura de la que se habla se concluy, pero tambin que implicaba algn esfuerzo, que comportaba cierto mrito por parte de los que la realizaron o que haba algo de particular en el hecho de hacerla.

Otras veces se sugiere que la accin descrita excede o sobrepasa en algo a lo que se considera normal (Se fumaba dos cajetillas diarias; Se gast el salario semanal en una juerga).

Existen otras connotaciones similares, resultando igualmente expresivos del valor REFLEXIVO que caracteriza el dativo concordado. Aunque el dativo tico y el aspectual se aproximan en muchos contextos, el primero no es reflexivo. Pueden, adems, concurrir en la misma oracin, como en Mi hija se [dativo aspectual] me [dativo tico] comi toda la tarta.El dativo concordado se ha llamado aspectual en los estudios sintcticos porque su presencia depende del ASPECTO LXICO o MODO DE ACCIN del predicado verbal, ya que los eventos sobre los que incide han de ser delimitados y acotados. Se rechazan, consiguientemente, los complementos directos sin determinante en singular: *El nio se bebi leche (frente a... la leche, ...un litro de leche o ...toda la leche); *No me s geografa (frente a ... la geografa o ... la leccin); *Los invitados se bebieron vino (frente a ... el vino o ... todo el vino). Favorecen asimismo este uso algunos modificadores adverbiales que denotan COMPLETITUD: de punta a punta, de cabo a rabo, de un tirn, de un jaln, como la palma de la mano, etc.: Se conoce el territorio como la palma de la mano. El cuantificador todo y el adjetivo ntegro aportan la misma informacin en los grupos nominales: Se recorri ntegra la ciudad de Lima. Te sabas las banderas de todos los pases. Me he visto todas las sagas captulo por captulo.Los contextos sintcticos en los que se usa el dativo concordado confluyen con los de otros dativos. En efecto, en el ejemplo Nos lemos toda la prensa admite la interpretacin recproca (es decir, el uno al otro o unos a otros), puesto que los pronombres tonos de interpretacin recproca concuerdan asimismo con el sujeto. Tambin lo hacen los morfemas me, te, se, etc., de los verbos pronominales. De hecho, entienden algunos autores que los dativos aspectuales pueden reinterpretarse como morfemas de persona de estos verbos en ciertos casos. Ello permite establecer distinciones como las siguientes:

saber algo (conocerlo) ~ saberse algo (haberlo memorizado);

creer algo (tenerlo por cierto) ~ creerse algo (aceptarlo de buena fe);

llevar la plata (transportarla) ~ llevarse la plata (robarla);

saltar una barrera (salvarla) ~ saltarse una barrera (omitirla);

encontrar a alguien (hallarlo) ~ encontrarse con alguien (dar con l sin buscarlo);

esperar algo (tener esperanza en ello) ~ esperarse algo (temer que vaya a suceder).

Se suele incluir en este mismo grupo el dativo que aparece en la frmula rase una vez..., propia de los cuentos, que alterna con Era una vez...

Existen razones para no reinterpretar todos los dativos aspectuales como morfemas de verbos pronominales. Una de ellas es el hecho de que la mayor parte de los verbos pronominales son intransitivos; la otra estriba en que dar una solucin lxica a estas alternancias conlleva perder generalizaciones en no pocos casos en los que parece necesario establecerlas. Se trata de pares como los siguientes, en los que los significados de los verbos no parecen por completo independientes:

{pensar ~ pensarse} bien una respuesta; {conocer ~ conocerse} bien la ciudad; {merecer ~ merecerse} un premio; {inventar ~ inventarse} una historia; {recorrer ~ recorrerse} la comarca; {imaginar ~ imaginarse} mundos inexistentes; {perder ~ perderse} una oportunidad. (RAE: NGLE 2009: 35.7v-z)

Son muchos los verbos transitivos que admiten variantes intransitivas con complemento indirecto. Predominan entre ellos los verbos pronominales acompaados de dativos de inters y simpatticos en construcciones en las que la presencia del dativo es marca de INVOLUNTARIEDAD. Se obtienen as alternancias como Cerr la puerta ~ Se le cerr la puerta; Ped la billetera ~ Se me perdi la billetera; Romp el vaso ~ Se me rompi el vaso. [...]

El complemento indirecto designa en estos casos la persona afectada por un proceso que se origina en las cosas mismas, lo que produce el efecto de ausencia de control o de falta de responsabilidad: Se me rompi el pantaln. El verbo olvidar(se) da lugar a la misma alternancia, que es triple en este caso: Olvid decrselo ~ Me olvid de decrselo ~ Se me olvid decrselo. El dativo que aparece en la tercera variante es propiamente argumental, ya que designa al que experimenta el olvido. (RAE: NGLE 2009: 35.8b-c)

Ejemplos:

Se le adormeci la pierna.Se le agolp la sangre en las mejillas.Se me apresura el pulso al verlo.Se nos ha averiado el coche.Aqu se te calentarn los pies.Se me cierran los ojos de sueo.Al verlos cre que se me paraba el corazn.Se le produjo una hemorragia al da siguiente de la operacin.Se le arrasaron los ojos de lgrimas.Se me derriti la tableta de chocolate.Se me ha pasado el tiempo sin sentir.Se nos present una complicacin.Se te ha rizado el pelo.Ya se me ha secado la camisa.Se le caen las cosas de las manos.Se nos escapan las mejores oportunidades.Se me van todas las ideas como por encanto.Se le ocurren unas ideas muy raras.Dejas ir las mejores oportunidades. No las dejo ir, se me escapan.Dejaste escaparse el loro. No lo dej escapar, se me escap.VARIACIONES GEOGRFICAS Y DIFERENCIAS DE REGISTROExiste variacin geogrfica en los verbos pronominales que se usan en el mundo hispnico. En algunas variedades (casi siempre americanas, pero no siempre las mismas) se usa regresarse a un lugar, despegarse un avin, soarse con algo o alguien, demorarse, desayunarse, enfermarse, a menudo en alternancia con usos no pronominales (Se demor mucho ~ Demor mucho). Por otra parte, presentan formas no pronominales con significado medio los verbos intransitivos calentar (usado por calentarse o desentumecerse), casar, entrenar, estrenar, entre otros. Se desaconseja el uso no pronominal de recuperarse (Estoy recuperando de una lesin muscular) o fugarse: Los ladrones, que sin duda estaban vigilando las vacas, se dieron cuenta de la llegada de los perseguidores y fugaron (Alegra, Mundo). En el occidente de Espaa se usan como verbos medios no pronominales romper (El jarrn rompi), marchar, pudrir, etc.

En el espaol hablado en la zona noroccidental de Espaa tienen variantes no pronominales algunos verbos que no las poseen en otras reas:

romper (El jarrn rompi)

marchar (Tengo mucha prisa, marcho enseguida)

pudrir (Las manzanas pudrirn)

lavar (Voy a lavar las manos)

poner (Puso la chaqueta y march)

El verbo casar, no pronominal en espaol antiguo, mantiene ese rgimen en esa misma rea, as como en algunos pases americanos.

En Mxico, as como en Nicaragua y otros pases centroamericanos se usa como pronominal darse abasto: Vive en la cantina como un dcil garan que no alcanza a darse abasto, cada vez ms seco y enjuto.

El verbo desayunarse es tambin ms frecuente en el espaol americano que en el europeo, pero se documenta en ambos.

Eran muy comunes en la lengua antigua, pero estn hoy en desuso, entrarse, huirse y otros verbos pronominales de movimiento (cf. los actuales salirse y escaparse).

Las diferencias son de registro en algunos casos, como en Despert ~ Se despert; Sonri ~ Se sonri; Muero ~ Me muero, aunque a veces entran en juego otras particularidades significativas que son difciles de aislar. As, los rasgos sintcticos o semnticos que pueden oponer morirse a morir (el primero solo se usa si la muerte no es provocada) no se asimilan exactamente a los que diferencian irse de ir, caerse de caer, dormirse de dormir o salirse de salir (El agua se sale ~ El agua sale).

Se ha observado que parece existir un factor comn de naturaleza aspectual en estos pares. Los pronominales caerse, dormirse, irse, morirse, salirse son inceptivos o ingresivos, en el sentido de que denotan la entrada en un determinado estado o el paso a una nueva situacin. El verbo intransitivo no pronominal puede manifestar este mismo tipo de proceso en unos casos (morir, caer), pero no en otros (dormir, sonrer). Existen informaciones ms especficas relativas al uso de estos verbos que no siempre pueden describir los diccionarios generales. (RAE: NGLE-Manual, 41.7.3b-c)

Los dativos que expresan trmino y procedencia estn ms restringidos en el espaol europeo que en el americano en las construcciones de verbo pronominal. En el primero suelen construirse con sujetos de tercera persona (Se le enfrent ~ Se enfrent a ella; Se me escap ~ Se escap de m), pero en muchas variantes del segundo se admiten con igual normalidad las dems personas gramaticales. Ello da lugar a alternancias como Me le escap ~ Me escap de l; Me le solt ~ Me solt de ella; Te nos alejaste ~ Te alejaste de nosotros; Te les enfrentaste ~ Te enfrentaste a ellos; Me le acerqu ~ Me acerqu a ella, etc. (RAE: NGLE 2009: 35.6g)

Por sus connotaciones afectivas, el dativo tico se usa ms en la lengua oral que en la escrita, raramente se encuentra en la prosa no literaria. Se emplea mucho ms frecuentemente en el espaol americano que en el europeo, pero se atestigua en ambos.

ERRORES CON VERBOS PRONOMINALESEs frecuente el error de utilizar verbos pronominales como no pronominales:

*En esta competicin solo clasifican los tres primeros. Correcto:

En esta competicin solo se clasifican los tres primeros.*El jugador recupera bien de su lesin. Correcto:

El jugador se recupera bien de su lesin.*Bueno, marcho, hasta otro da. Correcto:

Bueno, me marcho, hasta otro da.Tambin es frecuente el error contrario:

*No me recuerdo bien de dnde fue. Correcto:

No recuerdo bien dnde fue.

COLOCACIN DE LOS PRONOMBRES TONOSLa forma se debe preceder siempre a cualquier otro pronombre tono. Por tanto son falsas construcciones como:

*Me se cay el libro. Correcto: Se me cay el libro.*Te se olvidaron las llaves. Correcto: Se te olvidaron las llaves.*Os se escap el perro. Correcto: Se os escap el perro.Cuando se trata de un verbo pronominal auxiliar de perfrasis verbal, los pronombres tonos van siempre detrs del verbo principal y no pueden intercalarse entre SE y el verbo, a no ser que se trata de pronombres en funcin de dativos ticos:

*Se nos puso a criticar. Correcto: Se puso a criticarnos.

Pero s es correcto

*Se nos ech a llorar (y no *Se ech a llorarnos).

*Se me puso a llorar (y no *Se puso a llorarme).

Cuando en una construccin formada por dos verbos, los dos son pronominales, el cltico debe aparecer en los dos verbos:

Se neg a marcharse.Se puso a quejarse.Cuando en una construccin formada por dos verbos, el verbo pronominal es solo uno, el cltico debe aparecer solo una vez, tanto en las construcciones de infinitivo como de gerundio:

*Se estuvo quejndose. Correcto: Se estuvo quejando. / Estuvo quejndose.Cuando SE es partcula en una oracin pasiva refleja o impersonal refleja, o es pronombre reflexivo o recproco, solo puede aparecer una vez en construcciones de infinitivo y gerundio:

*Se puede saberse qu est pasando? Correcto:

Se puede saber qu est pasando?Puede saberse qu est pasando?*Se estn insultndose. Correcto:

Estn insultndose.Se estn insultando.En las perfrasis verbales el pronombre tono puede preceder al verbo auxiliar o seguir al principal, excepto cuando el verbo auxiliar es un verbo pronominal. En este caso SE nunca puede ir con el verbo principal:

Se tuvo que ir. / Tuvo que irse. [verbo principal es irse]

Se est lavando. / Est lavndose. [verbo lavar + complemento directo se]

Se pudieron conocer las noticias. / Pudieron conocerse las noticias. [pasivas reflejas]

Pero:

Se puso a discutir (y no *Puso a discutirse). [verbo pronominal auxiliar ponerse a]

Cuando el pronombre tono se intercala entre SE y el verbo en forma personal, el pronombre tono siempre desempea la funcin de complemento indirecto, bien con valores simpateticos (posesivos) o bien como dativos ticos (afectivos y expletivos). Esto ocurre cuando la forma SE es componente de un verbo pronominal. Si se trata de la partcula de pasivas reflejas o de impersonales, los pronombres intercalados desempean funciones de complemento directo o complemento indirecto.

Se nos (les...) acerc un polica. [complemento indirecto o suplemento?]. Verbo: acercarse.

Se me muri el perro. [simpattico: mi perro]

Este chico se nos va a volver loco. [dativo tico. Verbo volverse]

Se nos recibi con aplausos. [complemento directo. Impersonal]

Se les entregaron los regalos. [complemento indirecto. Pasiva refleja]

(Fuente: Gmez Torrego, 1992, pp. 38-41)

CitasCon ciertos verbos pronominales cabe la sustitucin de algunas palabras o grupos de palabras por le o les, pero no la duplicacin, que parece relevante sintcticamente:

Te adelantaste a tu adversario. > Te le adelantaste.(no se dice: *te le adelantaste a tu adversario).

De todas formas, con otros verbos la duplicacin parece normal y, sin embargo, se siguen sintiendo los complementos mencionados ms como complementos de rgimen o complementos adverbiales que como complementos indirectos:

Una mujer se le acerc a Juan.Hay algunos complementos de este tipo que se dejan sustituir por le, les cuando poseen el rasgo animado o humano pero no cuando carecen de este rasgo:

El nio se abraz a su madre. > El nio se le abraz.El nio se abraz a un rbol (no se dice: *el nio se le abraz).

En el ltimo caso ya no hay ningn rasgo del complemento indirecto.

No todos los complementos indirectos son argumentos, o sea, no todos estn exigidos por el verbo:

Pint un cuadro a Mara [adjunto].

Di un cuadro a Mara [argumento]. (Gmez Torrego, 2000: 305)

Rgimen preposicional con verbos pronominalesLos verbos pronominales, es decir, los incrementados con un cltico reflexivo no conmutable por otro no reflexivo muestran una notable tendencia a exigir, en mayor o menor grado, sintagmas preposicionales que con frecuencia llegan a constituirse en rgimen. En unos casos ese complemento preposicional coincide con el que puede, o debe, aparecer con el verbo en forma no pronominal, sumado por lo general al objeto directo:

dedicar su vida a algo > dedicarse a algo,convencer a alguien de algo > convencerse de algo (el cltico sera, pues, el recuerdo de ese objeto); es habitual que en esta situacin se produzca una alternancia de tipo causativo entre las dos formas del verbo, de modo que la forma pronominal venga a ser el miembro estativo o medio correspondiente al activo no pronominal:

alejar a alguien de un lugar > alejarse de un lugar,confundir una cosa con otra > confundirse una cosa con otra,distinguir una cosa de otra > distinguirse una cosa de otra.

Pero en muchos otros el rgimen del verbo pronominal no reproduce ninguno de la forma sin reflexivo, haya proximidad de sentido entre ambas: (olvidar algo/olvidarse de algo), o no la haya: acordar algo/acordarse de algo (aqu habra que incluir los verbos slo utilizados en forma pronominal: arrepentirse, jactarse, etc. En esta ltima situacin se encuentran algunos verbos pronominales de emocin, en los que la forma pronominal con rgimen (y sentido medio) se opone a la forma transitiva directa cuyo sujeto corresponde al rgimen preposicional de la pronominal:

Me alegro de verte > El verte me alegra.

Rgimen fijo con aEs frecuente que el rgimen con a de determinados verbos pronominales se identifique con el objeto indirecto cuando hay referencia humana:

dirigirse a alguien > dirigrsele,

mientras que con otros tipos de referencia el valor del complemento con a es ms bien locativo:

dirigirse a un lugar (de duda conversin en dirigrsele),

esquemas propios tambin de otros verbos como aferrarse, oponerse o resistirse.

No todos los verbos de este tipo, sin embargo, participan de estos esquemas sintcticos: as,

No me acostumbro a Marano admite la sustitucin de a Mara por le, ni tampoco lo hace

Se dedica a los enfermos de SIDA.

En algn caso al rgimen con a puede aadirse un dativo tico o posesivo:

Esta falda se te ajunta muy bien a la cintura.

Por otro lado, bastantes verbos no admiten sustantivo humano o animado en dicha posicin, y tampoco el sintagma de a tiene valor locativo (por ejemplo, apresurarse o atenerse). En general, el sentido que aportan estos regmenes con a, muy diluido en muchos casos, oscila entre las ideas de objetivo y destino o finalidad. En conjunto, si bien algunos de estos verbos admiten en el rgimen un sustantivo humano: acostumbrarse, adaptarse, adherirse, ajustarse, amoldarse, dedicarse, lo ms frecuente es que sus complementos incluyan referencias de otro tipo. [...]

Alternancia de a con otras preposicionesLos verbos que significan movimiento en direccin a un destino suelen construirse no slo con a sino con cualquier otra preposicin que se congruente con el tipo de movimiento designado. As, abalanzarse puede llevar un complemento central a, contra o sobre, acercarse lleva a, hacia, hasta, etc., al igual que aproximarse. (Cano Aguilar, 1999: 29.5-29.5.1.1 y 29.5.2.1)

Conviene detenerse en el significado que damos al trmino media, no utilizado corrientemente en la gramtica del espaol. Es un trmino relacionado con la categora gramatical de voz (o ditesis), que sirve para indicar un determinado tipo de relacin entre el verbo, el sujeto y el objeto de una oracin. Suelen sealarse tres posibilidades:

a)cuando el sujeto del verbo es el agente (o es presentado como agente) de una accin ejercida sobre un objeto distinto del sujeto, la construccin es activa: El presidente aplaz la reunin.b)cuando el sujeto del verbo corresponde en realidad al objeto de un verbo activo en una construccin subyacente, la oracin es pasiva: La reunin fue aplazada por el presidente.c)cuando el sujeto sea o no agente es al mismo tiempo el objeto de la accin indicada por el verbo, la construccin es media: El nio se lava tres veces al da; La gripe se cura con estas pastillas.

Cada una de estas posibilidades (o voces) es expresada mediante una flexin verbal especfica (como ocurre, por ejemplo, en griego).

La existencia de construcciones activas y pasivas en espaol est fuera de toda duda; tambin lo est que la construccin pasiva tiene formas especficas (ser + participio; se + verbo en forma activa + nombre concertado con el verbo; obsrvese que la especificidad es lograda en los dos casos mediante procedimientos de tipo sintctico).

El problema es el siguiente: existe una voz media en espaol? Si la existencia de esta voz requiere la posesin de una forma especfica y privativa, la respuesta tiene que ser negativa. Pero esto no es obstculo para que tratemos de mostrar que hay oraciones en espaol cuya caracterstica bsica es la relacin de identidad entre sujeto y objeto que define a la voz media, es decir, para que intentemos justificar la existencia de construcciones medias.

El primero de los dos ejemplos que hemos dado lneas antes es una oracin tradicionalmente llamada reflexiva: El nio se lava tres veces al da.

Esta oracin cumple claramente la condicin exigida: el sujeto de la oracin es al mismo tiempo objeto de ella (El nio = se).

El segundo ejemplo no ofrece una interpretacin tan clara: La gripe se cura con estas pastillas.

Las caractersticas de estas oraciones son: tener un sujeto gramatical no animado; presentar la forma se; poseer un verbo transitivo. El primer hecho que salta a la vista es la igualdad total de estructura, por lo menos aparentemente, con las oraciones llamadas pasivas con se. Las diferencias pueden resumirse en dos puntos:

a)en las pasivas con se hay siempre referencia a un agente que nunca va, si embargo, explcito; en las medias, que coinciden con las anteriores en esa misma referencia, el agente puede ir o no explcito. En el ejemplo que hemos dado est explcito; no lo est en el otro: La gripe se cura muy lentamente.

b)en las pasivas el agente no expreso es siempre humano; en las medias el agente es siempre no humano (estas pastilla en nuestro primer ejemplo).

La condicin para que en una oracin media el agente sea humano es que vaya explcito.

Hemos visto que el sujeto de una oracin media puede ser o no el agente real del verbo; est claro que cuando el sujeto no es animado no puede ser el agente de la accin. El elemento se que aparece en estas oraciones solo puede ser descrito como objeto directo.

Los verbos transitivos con uso medio son muy abundantes en espaol, de modo que es intil tratar de proporcionar listas.

Cuando el agente no va expreso hay casos en los que no es fcil determinar si se trata de un agente humano o no humano: la interpretacin como pasiva o media es dudosa; as ocurre, por ejemplo, en: Las puertas se abren a las nueve en punto; Los comercios se cierran a las ocho; La discusin se acab en aquel momento.

En algunos casos la formulacin media alterna con la activa intransitiva: con esta ltima desaparece la referencia al agente y es el sujeto el que resulta directamente presentado como tal: Los comercios (se) abren a las cuatro de la tarde; La herida (se) cerrar pronto; La disputa (se) termin al poco tiempo.

Hay que sealar el uso frecuente de construcciones medias con un pronombre personal tono en funcin de objeto indirecto; este pronombre establece una especial relacin de pertenencia entre el sujeto de la oracin y la persona implicada: Se adormeci el dolor; Se le agolp la sangre en las mejillas; Se me apresura el pulso al verla; Se nos ha averiado el coche; Aqu se os calentarn los pies; Se me cierran los ojos; Al verlos cre que se me paraba el corazn; Se le produjo una hemorragia al da siguiente de la operacin; Se me ha pasado el tiempo sin sentir; Se le present una complicacin; Se te ha rizado el pelo.Algunos verbos intransitivos aparecen tambin en construcciones semejantes: Se le caen las cosas de las manos; Se me escapan las mejores oportunidades; Se os van todas las ideas como por encanto; Se le ocurren muchas cosas.

La construccin media es tambin posible con sujeto humano sin que obligatoriamente este sea el agente real de la accin. (Molina Redondo, 1990, p. 29 ss.)

Dativo "tico"En otros verbos la accin queda completa con slo el complemento directo, y sin embargo, construimos la frase adems con un dativo, que es el llamado tradicionalmente tico, el cual, siempre en relacin con personas o pronombres personales, indica la participacin moral de una persona en una accin. Es el dativo que Bello llama superfluo, y que sirve tambin para dar tono familiar y festivo a la oracin:

No te me pongas tonta.Que si Sacripante o Roldn fueran poetas, que ya me hubieran jabonado a la dondella. (Quijote, II, 1)

Este dativo, en latn, se limitaba a los pronombres de primera y segunda persona: mihi illam laudas?; ecce tibi est exortus Isocrates. Pero en castellano hemos extendido su uso a la tercera persona (que en latn tena otro matiz) y aun al sustantivo; as, podremos decir: en frica mataron un hijo a mi amigo, donde mi amigo, si no tiene intervencin directa en la oracin, recibe el efecto moral de ella.

En otros casos, solemos emplear para recalcar ms dicho efecto, un dativo pleonstico del pronombre personal, diciendo:

A m amigo le han matado un hijo.Para el empleo de este dativo es preciso que la persona que lo representa no reciba la accin como trmino de la misma, sino que toque sus consecuencias, buenas o malas. As, en la frase:

el gato se ha comido la carne,decimos solamente un hecho que puede no afectarnos; pero

el gato se me ha comido la carneindica que me ha perjudicado al hacerlo. Al decir

el chico es muy estudioso; le han dado un premio extraordinario,slo afirmamos un hecho; pero si decimos

el chico es muy estudioso; me le han dado un premio extraordinario,hacemos resaltar la satisfaccin que el hechos nos inspira. El mismo valor tiene este dativo en

t lo quisiste, t te lo ten,y en este pasaje del Quijote (II, 5):

te la chanto (a Sanchica) un don y una seora a cuestas y te la saco de los rastrojos y te la pongo en toldo y peana,

donde Sancho da a entender 'hago todo eso para tu satisfaccin'. A este dativo le llama la Academia "dativo de inters", pero como esta palabra puede prestarse a ambigedades si no se hace la distincin debida entre el inters gramatical de recibir la accin y la moral de sufrir las consecuencias, preferimos seguir la nomenclatura latina y seguir llamndolo dativo tico. (Martnez Amador 1974: 437-438)

Personalismo en espaolEl espaol es esencialmente personalista. No se pierde en vaguedades colectivas, ni confunde el mundo material e inanimado con el protagonismo personal y trascendente sobre el que se centra la accin. No es un hecho casual que falten en espaol pronombres indefinidos a semejanza del alemn y del francs. Ha faltado inters por ocultar el sujeto o por prescindir de l, y en caso de necesidad se han estimado suficientes viejos procedimientos latinos.

Causas del personalismo:

La explicacin de esta agudo personalismo ha sido buscada en las circunstancias histricas de la vida espaola, sujeta al choque continuo con pueblos y culturas muy opuestos. Influida durante siglos por rabes y judos, y ms tarde por sus vecinos europeos, hubo de formarse un modo personal e incorruptible en esta constante oposicin con sus rivales europeos y africanos. Antecedentes rabes parecen existir en la extraa personificacin de la Naturaleza que revelan frases como:

amanecer pobre y anochecer ricoamanecer Dios y medraremosinexistentes fuera de las lenguas ibricas. Extraos, asimismo, al modo de pensar europeo son los falsos reflexivos espaoles, que parecen animar los objetos ms inertes e incluso aaden un matiz recproco, como en el conocido ejemplo de Cervantes:

No pareceran sino dos pedazos de cristal, que entre las otras piedras del arroyo se haban nacido (Don Quijote, I, 28). [Criado del Val, M.: Fisonoma del espaol y lenguas modernas. Madrid: Saeta, 1972, 270-271]

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