335

Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo
Page 2: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

El vidente Alaundo profetizó que siete plagas azotarían Cormyr y loreduciríanaescombros.Durantesiglos, la familia realsehapreparadopara es día y ha dedicado su existencia a protegera al reino. Perocuando sus antiguos guardianes duermen y sus siervos más lealesdesaparecen, un terroríficomal se disponea asolar su hogar... ¿quiénprotegeráalafamiliareal?

Page 3: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

TroyDenning

LassieteplagasLasagadeCormyrII

ePUBv1.0Garland07.11.11

Page 4: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

ParaMarkAcres,miviejoyfielamigo

Agradecimientos

DeseoagradeceraPhilAthans,mieditor,suapoyoeintuición;aMaryKirchoffquelohayahechoposible;aEdGreenwood,JeffGrubbyKateNovakquemehayanpermitidojugarconsusjuguetes;aStevenSchendyJuliaMartin,suvaliosacontribución;yalrestodecomponentesdelequipodetrabajodeReinosOlvidados,susconsejosycomentarios;y,

muyespecialmente,aAndriaHayday...simplementeporquesi.

Page 5: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo
Page 6: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

UPrólogo

n solohombrenopodríahabermatadoa tantagente. Imposible.El rastrodel asesino conducía al pie de un abeto de tronco nudoso, donde los

soldados de una compañía entera de Dragones Púrpura yacían tendidos en elsuelo, inmóviles como piedras. Había más de una veintena de soldadosdesparramados junto a los cadáveres de sus monturas, con sus cuerposcontorsionados. Las piernas y los brazos adoptaban posturas imposibles, lostorsosestabandobladosporlacolumna,lascabezassobreloshombrosclavabanla mirada en un ángulo improcedente.Muchos habían muerto antes de poderdescolgar el escudo de la silla de montar. Algunos ni siquiera habían podidodesenvainarelacero.

Emperel Ruousk desenvainó la espada y condujo su caballo colina abajo,atentoacualquierruidomientrasseguíalapistadelreguerodecadáveres.Sólodescubrióunashuellasquesealejabandelacarnicería:aparecíanenel terrenocadadosmetros.Alparecer,elasesinoseguíahuyendodespuésderecorreruncentenardekilómetros,locualconstituíaunaproezaparacualquiera,sobretodoteniendo en cuenta que estaba borracho como una cuba cuando emprendió lahuida.

El reguero de cadáveres de Dragones Púrpura discurría paralelo al delasesino,aunalanzadedistancia.Observóquelashuellasdecascossedisponíanencolumnadeados,ynohabíaseñalesqueleindujeranapensarquehubierandesplegado exploradores en avanzada. El comandante no había adoptadoninguna precaución para evitar una posible emboscada; sin duda habíaconsiderado una labor rutinaria capturar a un asesino borracho. Emperel no

Page 7: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

estabadispuestoacometerelmismoerror.Al acercarse al lugar de la carnicería, los cuervos arracimados sobre los

cadáveres remontaron el vuelo y lo miraron con rencor. Observó cómo sealejaban,ydespuéshizounaltoparaasegurarsedequeelasesinonosehabíaocultadoentreloscadáveresparatenderleunaemboscada.Ellugarhedíaacarneputrefacta. Las moscas cubrían los cadáveres, y al volar emitían un zumbidoinquietanteyensordecedor.Lascorazasdelossoldadosestabanresquebrajadasysalpicadasdesangreyentrañassecas.Algunoshabíanmiradoa lamuertea lacarayteníanlosbacinetesbajados.Echódemenosalgunosyelmos...juntoalascabezascorrespondientes.Buenapartedelosescudosestabancubiertosporlasentrañasde loscaballos,hasta talpuntoque laenseña realdeldragónpúrpurahabía desaparecido;muchos de los hombresmurieron con sus propios globosocularesenlaboca.Aunolohabíanestranguladoconsuspropiasentrañas.

Emperel empezó a sentir náuseas.Había visto docenas dematanzas en lasTierras de Piedra, pero ninguna tan feroz y sanguinaria. Se acercó al cadáverdecapitadoydesmontó.Despuéssearrodillójuntoalcuellodelcadáver.Elcorteeradesigual,todocartílagoynervio,igualqueelcuellodecapitadodeltaberneroenHalfhap.Segúnlostestigos,elasesinohabíamordidoalpobrediablodebajodelamandíbulaylehabíaarrancadolacabeza.

Emperelseincorporóycaminóentreloscadáveres,procurandomantenerelcaballoaciertadistanciadeélydelabetonudosoqueseerguíaenmediodelacarnicería. Pertenecía a un espécimen de gran tamaño, y tenía un troncoretorcidoy lobastantegrandecomoparaocultaraunadocenadeasesinos.Lacortezaeraoscurayescamosa,salpicadadesurcosdesaviaroja.Laacículaeradecoloramarillooscuroy teníaun tonoenfermizo.Las ramasentrelazadas sealzaban en lo alto a lo largo de unos sesenta metros, para acabar en coronaretorcida,dondesemarchitabanformandounasmatasqueerancomogarras.

Al otro lado del árbol, Emperel descubrió la entrada a una madrigueraenorme que se adentraba en el tronco. La tierra amontonada alrededor de laentradaeradesigual,oscura,yporellaasomabanlasraíces.Encimadelaentradadel túnel observó una ristra, sinuosa como una serpiente, de signos antiguosgrabadosenespiraleneltronco.Noreconocióaquélenguapertenecían,perosuformaseleantojóelegantealaparquevagamenteamenazadora.

Emperelestudiólamadrigueradurantealgunosminutos.Despuésseacercó

Page 8: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

alcaballoyatólasriendasaltronco.Elagujeroteníaformaoval,yapenaseralosuficientementegrandecomoparaqueunhombredealturanormalpudierapasarencogido. Había varias huellas de pisadas en la tierra, aunque le pareció quepodían haberlas borrado de las paredes y del suelo del túnel, al arrastrar uncadáver.Emperelseagachóantelaentrada,yechóunvistazoalabocadeltúnel,cuyointeriorestabaoscurocomobocadelobo.Escuchóunruidoahogadoquepodíacorresponderalronquidodeunhombre,yelairehúmedoqueflotabaenelambienteletrajoelrecuerdodelolorrancioasudor.

EmperelseacercódenuevohacialosDragonesPúrpura.Alnovernadamásquemoscasycadáveres,echómanoalasalforjasysacóunacapaconlaquesecubriólacoraza;despuéscerróelbrochedelagargantaparaactivarloshechizosdeproteccióndelaprenda.EncalidaddeagentedeconfianzadelreyAzounIV,teníaaccesoa toda lamagiaestándarde laarmería real,yenesemomentosealegródeello.Seciñóunosbrazaletesdeaceroenlasmuñecas,deslizóunanillode amatista en el dedo, añadió una dagamágica a la espada de acero y, actoseguido, se acercó de nuevo al agujero húmedo, ante el cual se acuclilló. Elronquidoadquirióunacadenciaerrática,yeltufoasudoraumentóligeramente.

Emperelaspiróunaúltimabocanadadeairefresco,ydespuésseadentródecuclillas en la oscuridad, moviéndose silenciosa y lentamente. El agujero erapequeñoyapestabaahumedad;estabasurcadodelasraícesquebradasdelárbol,gruesas como su muñeca. Aunque había poco espacio para luchar (o pararetirarse),Emperelprefirióignorarlaposibilidaddeesperarfueraaquesalieralapresa.Antesdedecapitaraltabernero,elasesinohabíaalardeadosobreelmodoenqueselasapañaríaparaacabarconelreyAzoun:talestraidoresnorecibíancuartelporpartedeEmperelRuousk,tansólojusticia,unajusticiatanrápidaycerteracomo laquecualquieragenteal serviciodel reino,poseedorde toda lamagiaypoderinherentealtítulo,podíagarantizar.

Después de recorrer unos metros, la oscuridad se volvió tan espesa queEmperel nopodíadistinguir la dagaque empuñaba ante sunariz.Sedetuvoysusurró:«Lamiradelrey».

La amatista del anillo parpadeó levemente, yEmperel empezó a distinguirlas paredes del pasadizo, teñidas de una luz azulada y carmesí.El calor de sucuerpohizoquesupieladquirieseunfulgorrojizo,mientrasqueladagaemitíaunamágicaluzargéntea.Aunostresmetros,eltúneldabaaccesoaunaestancia

Page 9: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

oblonga, decorada con líneas ambarinas que colgaban por doquier. Eran laspuntasdelasraícesprofundas.Leparecióextrañonoencontrarindicioalgunodela raíz principal, ausencia que justificaba ampliamente la forma nudosa delabeto.

CuandoEmperelseacercóalaentradadelapequeñaestancia,vioalasesinotumbado de espaldas; emitía un fulgor carmesí, recortado contra la palidezvioletadelsuelodepiedra.Denoserporlacapadesangresecaquelocubríadepies a cabeza, Emperel hubiera jurado que aquél no era su hombre. Tenía losojos cerrados y parecía dormir plácidamente; sus labios dibujaban una sonrisabeatífica, y tenía los brazos doblados sobre el pecho. Se le antojó muydemacrado como para haber asesinado a toda una compañía de DragonesPúrpura. Sus brazos eran delgados como lanzas, sus hombros chupados yfibrosos,yteníalasmejillashundidas,aligualquelosojos.

De pronto, Emperel lo comprendió todo: de dónde había sacado energíasparacorrertanto,cómoselashabíaapañadoparaacabarcontodaunacompañíadesoldadosdeelite,larazóndequesehubieraensañadoconloscadáveres.ElsudorperlabalafrentedeEmperelcuandoconsiderólaposibilidadderegresaraHalfhapenbuscadeayuda.¿Dequéserviría?Elvampiroyahabíademostradoque podía enfrentarse a más de un oponente; y al menos en ese momento,Emperelteníaciertaventaja.

Siguió caminando hasta llegar al final del túnel, y el olor de su propiatranspiración se impuso a la insufrible fetidez que inundaba toda la guarida.Aunque tenía encogido el estómago delmiedo, hizo un esfuerzo por recordarquetansóloungestoloseparabadelaseguridad.Loúnicoqueteníaquehacerera hundir lamano en el bolsillo de la capa, y se encontraría de pie junto alcaballo,bajolabrillanteluzdelsoldondeningúnvampiropodríaseguirlo.Gateóensilencioparaadentrarseenlaestancia,sinpoderevitararrastrarlospies.

Cuando Emperel se incorporó, algo blando y pegajoso se enganchó a susorejas.Elcorazónlediounvuelco,ytuvoquemordersela lenguasinsabersihabíagritado.Miróalasesino,quepermanecía taninmóvilcomoantesconlasmanossobreelpechoyunasonrisaangelicaldibujadaensuslabios.Intentónopensarenlaclasedesueñosquepodíanhacerfelizaunvampiro,ysellevólamanoalacaraparalibrarsedelatelarañaquelacubría.Erapegajosaysólida,comolatelarañadeunaviudanegra.

Page 10: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Emperel tuvo lasensacióndequeuncentenardepatitasdescendíanporsutúnica.Conlaesperanzadequefuerafrutodesu imaginación,seentretuvoenlibrarsedelatelaraña,yacontinuaciónsacóunguanteletedeacerodelcinturón,que se enfundó en la mano derecha. Cuando extendía la mano, el guante seconvertía en el símbolo sagrado de su dios,TormEl Fiel, y ello bastaría paramantenerarayaacualquiervampiro.Despuésdesenfundóelhachademanodelacorreaquecolgabadelcinturón,yconlaayudadelahojaafiladadeladagaempezóatallarelmangodemaderadelhachaparadarformaaunaestaca.

Aunque tenía la impresión de que su propia respiración resultabaensordecedora, el vampiro siguió durmiendo. La daga, que emitía un fulgorplateado, talló el mango del hacha librándolo de unas virutas gruesas comomonedas.Envainóladaga,searrodillójuntoalvampiroylevantólaestaca.Letemblabanlosbrazos.

—Torm,guíamimano—susurró.Unagotadesudorseprecipitódesdeunadesuscejashastaelhombrodel

vampiro. El monstruo parpadeó y sus ojos brillaron blancos ante la miradaperplejadeEmperel.

El agente empujó la estaca con todas sus fuerzas, y la hundió en la cajatorácicadelvampiro.Unasangregélidaynegracomolatintamanódelaherida.Unchillidoagudoreverberóentre lasparedesde laestancia,e inmediatamentealgo cogió aEmperel de la coraza y lo empujódando tumbospor el suelo depiedra.

Atravesó lacortinade filásticay fueachocarcontra lapared; lacabeza ledabavueltasyundolorintensoatenazabasupecho.Almirarhaciaabajoabriólosojoscomoplatos:enmediodelacorazateníalamarcadeunpuñocerrado,ynisiquierahabíavistoalasesinomoverlamano.

Emperel se puso de rodillas; estaba demasiado atontado como paraincorporarse,ehizounesfuerzoparallenardeairelospulmones.Aunospasos,el vampiro yacía tumbado de costado, retorciéndose de dolormientras sacabalentamente laestacadelpecho.Emperel loobservócon labocaabierta.Habíamatadoamásdeunadocenadevampiros,yningunodeelloshabíapodidohacernadaparecido.¿Habríaerradoalintentarhundirlaenelcorazón?

Elvampirodirigiósumiradavacíahacialapared.—¡Rayos del rey! —gritó Emperel, levantando un dedo y señalando las

Page 11: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

manosespectralesdelmonstruo.Los brazaletes de Emperel adquirieron una elevada temperatura y

descargaroncuatrorayosdoradosqueiluminaronlacripta.Lamagiaalcanzólasmanosdelvampiroconunadescargabrillanteydorada,despuéspenetraronensu carne y recorrieron sus brazos, que despidieron a su vez un pálido fulgorazafranado.

El vampiro arrancó la estaca de su corazón, y después se puso en pietrabajosamente para volverse haciaEmperel.Unos goterones de sangre oscurasurgíandelboqueteabiertoenelpecho,cosaquealparecerno le importó.SelimitóasopesarelhachayacercarsealagentedelreydeCormyr.

Emperelsepusoenpiedeunsaltoycargósobreelmonstruo,desenvainandoladagamágicamientraslevantabaenaltolapalmadelamanoenfundadaenelguantelete,directahaciasurostro.

—¡Atrás!—ordenó—.¡AtrásenelnombredeTorm!ElvampirodescargóunmanotazocontralamanodeEmperel,ylohizocon

talfuerzaqueelguanteletedeacerosalióvolandoyseperdióenlaoscuridad.—¿Creesquetengoaspectodeestarmuerto?Emperelabriólosojosdesmesuradamente,levantóladagamágicayhundió

lahojaplateada en el estómagode la criaturaparadespués levantarla hacia elcorazón.Elvampiro(fueraloquefuese)cerrólosojosyapuntoestuvodeceder,peroentoncescerrósusdedosentornoalamanodeEmperel.

—Cuán...traicionero—susurró.Emperel intentóretorcerlahojaenlasentrañasdelacriatura,perolotenía

cogidocontalfuerzaquenopudohacerlo.Hizounesfuerzoporsobreponerseaun acceso de pánico, retrocedió un paso y arremetió con el hombro contra lacabezadesuenemigo.

Peroelgolpenisiquieralogróalterarlo.—¡Furia leal! —maldijo Emperel entre dientes—. ¿Qué suerte de diablo

eres?—Elpeordetodos...undiablo...enfadado.ElasesinoempujóaEmperelcontralapared,desprendiendoconelgolpeun

puñadodetierrahúmeda,quecayósobreél,yacontinuaciónselibrótambiéndeladaga.Elfulgorplateadohabíadesaparecidoprácticamentedelahojamágica,yantelosojosdeEmperel,elarmasetornófríayadquirióunatonalidadnegra.

Page 12: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

El asesino la arrojó a un lado y se acercó pesadamente hacia él, mientras lasangreoscuraseguíamanandodeambasheridas.

—¡Luzdelrey!—gritóEmperel,levantandoeldedodelanillo,sinpoderdarcréditoasusojos.

Laamatistaseencendióyprodujounaluzqueinundótodalaestanciaconsufulgorazulado.Cogidoporsorpresa,elasesinocerrólosojosyapartólamirada,cegado momentáneamente. Emperel, que sabía lo que iba a suceder, saltó altiempoquedesenvainabaelaceroyestampabalaplantadelpieenlarodilladesu enemigo. El asesino cayó al suelo, rodó sobre sí y puso la zancadilla aEmperel,queperdiópie.

Emperelcayómalysegolpeólacabezacontraelsuelodepiedra.Suvisiónsehizoborrosaylosoídosempezaronasilbarleconfuerza,cuandoelmonstruosearrojócontraél,directoa sugarganta,hincando losdientesenelcuellodelyelmo.Levantóelbrazoparaguardarsedelosgolpes,yelasesinolocogiódelamuñeca. El anillo despidió un crujido estremecedor, y un dolor insoportablerecorriótodosubrazodesdelapuntadelosdedos.Emperelprofirióungritoylevantólamanodelarmaparagolpearlacabezadelatacanteconelpomodelaespada.

Elasesinocayóhaciaatrás,arrancandolacapadeloshombrosdeEmperel,yllevándoseconsigoelanillomágicodesudedo...No,nosóloelanillo.

El asesino tenía en la mano una cosa delgada y ensangrentada, y la fibrablancuzcadelnudilloasomababajoelmuñónempapadoensangre.Aúnlucíaelanillo de Emperel, que iluminó la cabeza del asesino con una brillante luzazulada. Su rostro era como el de una mantis, tenía una barbilla afilada, erachupadoysusojos,de formaoval,eran rojoscomoascuas. Incluso iluminadopor aquella luz, la complexiónde la criaturapermanecía envuelta en sombras,oscura,peronotantocomoparaqueEmperelnoreparaseenelairefamiliardesunarizafiladayellabiovueltohaciaarriba.Sacólaespadaparainterponerlahojaentreélyaquellacosaconformahumana.

—¿Te...teconozco?—No por mucho tiempo —respondió el asesino en un hilo de voz,

entornandolosojosrojos.Emperel se incorporópesadamentehastaponerseenpie,yavanzóunpaso

haciaelasesino,adoptandoconlaespadaunaguardiaalta.Elvampirohizouna

Page 13: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

muecay retrocedió paramantener la distancia, cerrando el puño alrededor delanillo.Unsuspirodesatisfacciónsurgiódesuslabioscuandolaluzquedespedíala amatista fluyó en su mano, inundando la estancia con una luz desigual yfantasmagórica.

Emperel sintió que un escalofrío recorría su espina dorsal: el asesinoabsorbíalamagiadelanillo,aligualquehabíaabsorbidolosrayosmágicosquedespidieron sus brazaletes y la magia de la daga. La estancia empezó adifuminarse ante su mirada. Consciente de que no tardaría en encontrarseatrapado en la oscuridad, sin la capa ni otra vía de escape, Emperel echó unvistazoalasalida.Elasesinoseleadelantóparacortarleelpaso.

Perfecto. Emperel se arrojó al ataque, permitiéndose esbozar una sonrisaconfiadacuandoelúltimoresquiciode luzdesapareciódesuanillo.Suespadacarecíademagia,ycuandolahojaencontrósuobjetivo,elasesinogruñóycayóenlaoscuridad.Emperelgirósobresustalonesylanzóvariostajosaunoyotrolado.Saltaronchispascuandolahojadelaespadadiocontraelsuelodepiedra.Sedio lavueltay retrocedió,esgrimiendoaoscurasy trazandoenelaire todotipodeguardiasdefensivas.Oyóun levegolpe, tan levequeapenasalcanzóaoírlodadoelsilbidodelarma.Seacercóhaciaelruidosindejardetrazararcosconlaespada,quefinalmentegolpeócontraunaesquinadeaccesoaltúnel,conelconsiguientedesprendimientodetierrayguijarros.

Un levegemidoreverberóen lasparedesdel túnel, seguidoporel rocedelcueroenla tierra.Emperelseadentróenelpasadizoconlapuntadelaespadapor delante, que zarandeaba de un lado a otro. No alcanzó nada aparte de latierraylasraíces.

Alcabodeunmomento,sucaballorelinchóydescubrióqueelasesinohabíadesaparecido.

Page 14: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

L1

os cuatro permanecían sentados, balanceándose al unísono y cruzando susmiradas,mientraselcarruajede laprincesaTanalastadababotesporHigh

Heath, en dirección al paso de Worg. Las sombras se alargaban, recortadascontra el polvo del camino, y en el interior del carruaje se estaba a gusto yreinabaunaluztenue.

ElguardiándelasmarcasorientalesestabasentadoendiagonalconrespectodeTanalasta, tiesocomounpalo,enfundadoen laarmaduradecombateyconunamiradadecuriosidadclavadaenelclérigonervudoquesesentabajuntoalaprincesa. El clérigo, el maestre de cosechas Owden Foley, del monasterio deHuthduth,permanecíaocultoenlassombras,conlacabezavueltahaciaelmagocuya túnica repleta de lunas bordadas lo delataba como a uno de los magosguerrerosmáspoderosos.Elmago,MerulaelPortentoso,permanecíasentadoenun extremo del asiento, con las manos enjoyadas cerradas sobre el pomoplateadodesubastón.ObservabaaTanalastaconunamiradasubrayadaporlascejas espesas, que tan sólo cabía describir como muy intensa. Tanalastaestudiabaalguardiándelasmarcasorientales,unhombreconrostrodecaballoque en cierto modo era atractivo, enfundado en la capa escarlata y el fajínpúrpurapropiosdesucargo.MientrasleobservabapensóqueunaprincesapodíacontraermatrimonioconalguienmenosadecuadoqueDaunethMarliir.

TanalastanoamabaaDauneth,porsupuesto,pero legustaba,ynoesmuyfrecuentequeunaprincesa se casepor amor.Pese a ser cincoañosmás jovenque ella, Dauneth era leal, valiente y bastante atractivo para ser un noble delreino, lo cual debía bastarle a cualquiera.Hacía un año hubiera bastado, pero

Page 15: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

ahoraqueríaalgomás.Estabaapuntodecumplirlostreintayseisaños,ytodaCormyr esperaba ansiosamente que diera a luz un heredero, demodo que nopodíaandarporahíperdiendoeltiempo,teníaqueenamorarsedelanochealamañana.

Razónsuficienteparaquedesearaabdicar.Conscientealparecerdelaintensidaddesumirada,Daunethapartólasuya

deOwden.—Misdisculpas,princesa.Esdifícilmantenerenbuenestadoestascarreteras

montañosas.—Unos cuantos zarandeos no me perjudicarán, Dauneth. —Tanalasta

entornólevementelamiradacomohabíapracticadoanteelespejodelasaguasdeunarroyo—.Yanosoylamuñecadeporcelanaqueconocióhaceunaño.

—Porsupuestoqueno—replicóDauneth,sonrojado—.Noquisedecir...—DebióustedvermeenHuthduth—continuólaprincesa,enuntonoalegre

—.Limpiandoloscampos,conduciendountirodebueyes,recogiendonaranjasyframbuesasobuscandosetassilvestres...

Tanalasta hizo una pausa mientras pensaba que era mejor no añadir:«Nadandodesnudaenloslagosdelasmontañas».

Merula el Portentoso enarcó una ceja, y la princesa sintió que le hervía lasangreenlasvenas.¿Acasoelmagopodíaleersuspensamientos?

—¿Deveras buscasteis setas silvestres,mi señora?—preguntóDauneth—.¿Enelbosque?

—Porsupuesto.—Tanalastamiróa losojosaDauneth,pensandoencómosolucionarlaintromisióndelmago—.¿Enquéotrolugarpodríahaberhechotalcosa?

—Puesnodeberíais—opinóDauneth—.LasmontañasquehayalrededordeHuthduthsonterritorioorco.Siunabandadeexploradoresllegaaencontraros...

—Nosabíaquemi seguridad fuese cosa suya,Dauneth.Mepregunto si elreyhacompartidoalgunacosaconvosdelaquedebaenterarme.

La mirada de Dauneth delató sorpresa ante la mujer que regresaba deHuthduth.

—No, claro que no.El rey nome confiaría nada antes de hablarlo con supropiahija,perotengouna...razónparapreocuparmeporvuestraseguridad.

Tanalastaguardósilencio,locualpermitióaDaunethañadiralgunaspalabras

Page 16: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

menos presuntuosas sobre el deber de cualquier noble por salvaguardar laseguridaddeunmiembrode la realeza.Cuandoelguardiáncalló,advirtióquelascosasestabanpeordeloquehabíaesperado.DentrodedosdíaselreyAzouncumpliría sesenta y tres años, y Tanalasta estaba a punto de cumplir treinta ycinco y seguía sin contraer matrimonio, por lo que el pueblo empezaba apreguntarsesipodríadarlesunheredero.Algunospersonajessehabíantomadolamolestiadeacelerarelproceso,sobretodoelmagodelacorteygranoeneltrasero particular de Tanalasta, de nombreVangerdahast. Sin duda, el ancianomagolohabíadispuestotodoparacelebrarelcumpleañosdelmonarcaencasadelosMarliir,conlaintencióndeapoyarelcortejodeDauneth.

Al principio Tanalasta no tuvo ningún problema en dar las cosas porsentadas,porquesabíamejorquenadiequeseagotabaeltiempoenquepodríadaraluzunheredero.Alolargodelúltimoaño,laprincesahabíatomadomayorconcienciadesudeberparaconCormyr,mientrasqueDaunethhabíaprobadosulealtad como noble y su valía personal para aspirar a sumano, cuando lo delasunto del abraxus hacía quincemeses. Nada la hubiera hechomás feliz quellevaralbuenguardiánalaltar,ydespuésempezareldesagradablenegociodeconcebirunheredero,porloquelaprincesasehizoalaideadeloqueteníaquehacercuandolellegaronnoticiasdelosfestejosqueibanacelebrarseenArabel.

Entoncestuvounavisión.Rápidamente, Tanalasta borró de su mente hasta el último vestigio de la

visiónpara, en su lugar, imaginar aMerula elPortentosodesnudoy trinchadocomo un pavo, asándose a fuego lento. Si elmago espiaba sus pensamientos,queríaquesupieraloqueleesperabaencasodequerevelaradeterminadascosasalmagosupremo.Vangerdahastnotardaríaenenterarsedesuvisión,yTanalastadeseabaexplicarlelospormenorespersonalmente.

Merulaselimitóamirarlafijamente.—¿Algúnproblema,miseñora?—Esperoqueno.TanalastacorriólacortinadelaventanillaycontemplóHighHeathatravés

delcristal.Eraunapequeñallanuradedoradoscamposajedrezados,divididosencuadradospormurosdepiedraymoteadoaquíyalláporchozascon techodepaja. Las gentes sencillas del lugar habían salido para observar el paso de lacomitivareal,peronofuehastaquehubosaludadoadosdocenasdejóvenesde

Page 17: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

mirada ausente sin que respondieran al saludo, cuando la princesa cayó en lacuentadequealgoibamal.

Sevolvióalmaestredecosechasqueestabasentadoasulado.—Owden, mire ahí fuera y dígame su opinión. No parece que las cosas

vayanmuybienenesoscamposdecebada.Eldelgadoclérigoseinclinóanteellayechóunvistazoporlaventanilla.—Así es, princesa. Es demasiado temprano para semejante colorido.

Supongoquehabránsufridounaplaga.—¿Entodoelbrezal?—preguntóTanalasta,frunciendoelentrecejo.—Esoparece.Tanalastaasomólacabezaporlaventanilla.—¡Detenganelcarruaje!Merulafruncióelentrecejoyechómanodelacortinaqueteníaalladopara

darlacontraorden,peroTanalastalosujetódelbrazo.—¿PretendedesafiarlasórdenesdeunaObarskyr,mago?Indignado,elmagosepellizcólasfrondosascejas.—Lasórdenesdelmagorealfueronmuyclaras.Nodebemosdetenernospor

ningúnmotivo,hastadejaratráslasmontañas.—Entonces siga usted, si tanto interés tiene —replicó Tanalasta—.

Vangerdahastnoesmidueñoyseñor.Quizá,suponiendoquelepresteatención,puedausteddecírselodemiparte.

Elcarruajesedetuvo,yunlacayoabriólapuerta.TanalastaextendiólamanoendirecciónaDauneth.

—¿Quiereacompañarme,guardián?Daunethnohizoademándecogersumano.—Merulatienerazón,miseñora.Estasmontañasnosonlugarpara...—¿No?—Tanalastaseencogiódehombrosytendiólamanoallacayo—.Si

tieneustedtantomiedo...—No,enabsoluto.—Alcabodeuninstante,Daunethsalíapor lapuertay

apartabaallacayoparaocuparsulugar,ofreciendosumanoaTanalasta—.Tansólomepreocupavuestraseguridad.

—Sí,yamedijoustedantesqueteníamotivosparapreocuparsepormí.Tanalastadedicóalguardiánunaagriasonrisa,ydespuéslepermitióquela

ayudaraadescenderdelcarruaje, locualdiopieaunpuñadodecampesinosa

Page 18: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

boquear,ahogargritosdeemocióneinclinarsetantoqueestuvieronapuntodedarcon lanarizcontrael suelo.Fueradelcarruajehacíauna tardeespléndida,conuncielocolorzafiroyunaire tansecocomolaarena,y laprincesasintióciertadecepciónaladvertirquehabíancruzadoprácticamentetodoelbrezal.ElpasodeWorgtansólodistabauncentenardepasos;allí loscamposdecebadacedíanabruptamenteterrenoaunbosquedepinos.

Tanalasta hizo ademán a los campesinos para que dejaran de inclinarse, ydespuéssevolvióalmaestredeagricultura,Owden,quesalíadelcarruaje trasella.

—¿Creequesusayudantespodránhaceralgunacosaporsalvarloscampos,maestredeagricultura?

Owdenobservóunenormecarrotiradoporbueyesqueseguíaalcarruajedela princesa. Una docena de monjes enfundados en túnicas de lana verdepermanecían sentados y muy juntos en el carro, entre palas, azadas y demásutillajepropiodequienes rindencultoaChauntea.Losmonjesobservaban loscampos arruinados ymurmuraban entre sí, sin duda tan preocupados como laprincesaanteloqueveían.

Owdenhizoungestoparallamarsuatención,yparaquebajarandelcarro.—Nosllevaráunashoras,princesa.—¡Unashoras!—Merulaasomósuvoluminosocuerpoporlaportezueladel

carruaje con sorprendente facilidad—. ¡No podemos permitírnoslo! El magosupremo...

—...Notieneporquéenterarse—interrumpióTanalasta—.Amenosquenosesté espiando en este preciso momento; y si ése es el caso, puede ustedinformarledequelaprincesadelacoronaprefierepasarlatardedandounpaseo.

Tanalasta miró a los Dragones Púrpura que protegían su carruaje, unacompañía montada en corceles que abría la comitiva y otra que cerraba lamarchaenretaguardia,conlaslanzasenristreylosyelmosdeacerobrillantesbajoelsol.Alacolumnaoficialleseguíaunaprocesióninterminabledecarrosdemercaderes,queaprovechabanlaescoltadeTanalastaparaasegurarseunpasoseguroporlasmontañas.Alcomprobarloinútilqueseríaintentardisfrutardeunpocodeintimidadconsupretendiente,TanalastasevolvióaDauneth.

—¿Meacompañaráusted,guardián?—Adondedeseevuestraalteza—respondióDauneth,algoincómodo.

Page 19: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Tanalasta hizo lo posible porque no le rechinaran los dientes de purafrustración,cogiódelbrazoaDaunethyloarrastróhastasobrepasarlacolumnadejinetesqueibaalavanguardia.Aunquellevabaloshombroscubiertosporunacapadesedacolorpúrpura,comocorrespondíaalarealeza,pordebajolucíauntrajecómodoparaviajar,yunpardebotasgastadas,demodoquenotardaronmuchoenllegaralpasodeWorg.Enviópordelantealcapitándelacompañía,acompañado de dos exploradores, y ordenó al resto que los siguieran a veintepasos,aunquenopudoevitarqueMerulaelPortentosolasiguierajadeante.

—Confíoenque...vuestraaltezanotendránadaqueobjetarami...compañía—jadeóMerula.

—Pues claro que no. ¿Por qué lo pregunta?—inquirióOwden Foley, queapareciópordetrásdelacolumnadecaballería.Elclérigodepielcurtidaguiñóunojoalaprincesa,ydespuéscogiódelbrazoaMerula—.Queridoamigo,quéidea tan excelente ha tenido usted al querer unirse a la pareja. A quién no leapeteceunpaseoparaestirar laspiernas.Nadacomounabuenacaminataparamoveresecorazónyecharunameadita,¿verdad?

Merulafruncióelceñoyapartóelbrazo.—Teníaentendidoquelaprincesalehabíapedidoquesalvaraestoscampos.—Asíes—replicóOwden,quehundióelcodoenungestodesenfadadoen

lascostillasacolchadasdelmago—.Peroparaesotengoamismonjes,¿ono?—Puesnosabríadecirle—farfullóMerula.Owden se limitó a sonreír de oreja a oreja y seguir charlando sobre los

efectossaludablesdelsoldelamontañayelairefrescodelospinos.Tanalastasonrióyagradecióensilencioalclérigoquehubieraidoensuayuda.Mientraselmaestredeagriculturasiguieraensalzandolosbeneficiosderivadosdelavidaenlamontaña,Merulano tendríaocasiónde inmiscuirseniensuconversaciónniensuspensamientos.

Tanalasta caminaba en cabeza por la carretera, a buen paso. El caminoascendía empinado junto a una montaña desprovista prácticamente devegetación, por lo que no tardó en dejar atrás los jadeos de Merula, aunquefueranreemplazadosporlosjadeosdelguardiándelasmarcasorientales.

—Si me lo permitís, princesa, habéis cambiado tanto desde... —Daunethhizo una pausa, sin duda destinada tanto a reconducir el comentario, como arecuperarelaliento,ydespuéscontinuó—:Desdelaúltimavezqueosvi.

Page 20: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Tanalastalomiróabiertamente.—Deacuerdo,Dauneth.Puededecirlo.—¿Disculpad?—Puededecir:«DesdequeAunadarBlethostomóelpelo»—dijoTanalasta

condesenfado, sindejarde caminar—.Todoel reino sabeque intentó casarseconmigo para arrebatarnos la corona.De veras, es insultante que se comportecomosifueralaúnicapersonaquenosupieraloqueocurrió.

—Estabaissometidaaunagranpresión—respondióDauneth,rojocomolagrana—.Habíanenvenenadoavuestropadre,y...

—Eraunacondenadaniñita.Estuveapuntodeperderelreino,ysóloyotuvelaculpa.—Pesea lopronunciadode la subida,Tanalastanomostró signosdefatiga.UnañoenHuthduthhabíabastadoparaprepararladecaraa tareasmásdurasqueuna simple caminatapor lamontaña—.Almenos eso es loquemedijo Vangerdahast. Le juro que no sé por qué razón no pidió ami padre quenombraraprincesadelacoronaaAlusair.

Daunethenarcóunaceja.—Quizáporque comprendió lomuchoqueos serviría la experiencia de lo

sucedido.—Elguardiánpareciópensativo,yañadió—:O,yaquehablamosconsinceridad,quizáseaporqueconoceavuestrahermana.¿OsimagináisaAlusaircomo reina? Ningún hijo de la nobleza estaría a salvo, porque los llevaría amorirenlaguerraolosmantendríaencerradosensualcoba.

Tanalastalomiróboquiabierta.—¡Vigilesulengua,señor!—SonrióydiounasuavepalmadaaDaunethen

laespalda—.Estáusteddifamandoamihermanapequeña.—¿Demodoquelaprincesadelacoronaestádispuestaaadmitirsuspropias

debilidades, pero cierra los ojos ante las de los demás?—Dauneth sacudió lacabeza—. No os servirá de nada. De hecho, atenta contra el espíritu de latradicióndelsoberano.Despuésdetodo,quizádebatenerunaconversaciónconelancianoVangerdahast.

—Nocreoqueesoseanecesario.—Tanalastabajóeltonodevozyseacercóun poco más—: Bastará con que lo mencione en presencia de nuestrosacompañantes. Sin duda, basta con que Merula oiga cualquier cosa para queVangeylosepaalmomento.

—¿Deveras?—Daunethvolviólamiradaparaobservaralgruesomago,que

Page 21: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

parecía tan fatigado por la subida como por la interminable cháchara sobre lanaturalezadeOwden—.Nosabíaqueelmagosupremofueraunmirón.

—Ésaesunadelascosasalasquetendráustedqueacostumbrarse,si...Tanalasta no terminó la frase, como si temiera tanto dejar claro que iba a

concedersumanoaDaunethcomoaceptarquenolequedabamásremedioquehacerlo.

El guardián era un hombre de armas y sabía aprovechar una oportunidadcuandoselepresentaba.

—¿Siqué,miseñora?TanalastaseparóensecoysevolvióparamiraraDaunethalosojos,locual

obligóa la comitivade soldadosymercaderesadetenerse.Tan sóloMerulayOwdenmantuvieronelpaso,dehechoelmagoparecíamásdispuestoquenuncaaescucharsuconversación,mientrasqueelclérigoparecíaempeñadoencaptarsuatenciónconcualquiercomentariosobrelanaturalezaquepudieraocurrírsele.

Intentandoignorarelhechodequeunmillardeojoslaobservaban,TanalastacogiólamanodeDaunethyrespondióasupregunta:

—Sivamosahacer loquemipadreyVangerdahastdeseanquehagamos...claro que antes debemos confiar lo bastante el uno en el otro como para sercapacesdehablarhonestamente,sintapujos.

—Estoy convencido de que la princesa me considera una persona muyhonesta—replicóDauneth,conseriedad.

—Porsupuesto.Nadiepondríaendudasuhonestidad,despuésdelasuntodelabraxus.Peronomereferíaprecisamenteaesetipodehonestidad.

Consciente de la cercanía de Merula, Tanalasta reemprendió la marcha.Estaban a punto de alcanzar la cumbre. De un momento a otro esperabaencontrarlacrestadelpasodeWorg,ydivisarenladistancialastorresenormesdeCuernoAlto.

Daunethapretóelpasoparamantenerseasualtura.—¿Aquéosreferís,alteza?—Llámame Tanalasta, por favor. Si ni siquiera puedes llamarme por mi

nombre...—Noqueríafaltarosalrespeto—dijoDauneth,aladefensiva—.Dehecho,

nomehabíaisdadopermisoparahacerlo.—Puesahoratienesmiautorización.

Page 22: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Excelente.Entonces,¿aquéosreferíais,Tanalasta?Laprincesalevantólamiradaalcielo,preguntándosecómoibaadecirloque

pretendíadecir sinquesuspalabrasparecieranunaorden,ysindaraentenderqueeralamismatontitaquehabíaestadoapuntodepermitirqueAunadarBlethseapoderaradelreinoantesuspropiasnarices.Tanalastaalbergabapocasdudasde queDauneth, educado conforme a los cánones tradicionales de la nobleza,consideraríaque su intencióndecasarsepor amorera tan improbable como laconsideraba Vangerdahast. Por otro lado, era ella quien había planteado lanecesidaddehablarconfranqueza,demodoqueaduraspenaspodíapedirleaDauneth que hiciera tal cosa, cuando ella no estaba dispuesta a hacerlo.Tanalastarespiróprofundamenteyempezó.

—Primero,Dauneth,debenexistirconfianzayrespeto.Dauneth apretó los labios, yTanalastapensóquehabía empezado conmal

pie.—¡Oh, no, Dauneth! Yo siento toda la confianza y respeto por ti, como

cualquierotrapersonaensusanojuicio.—Tanalastahizounapausaparaelegircuidadosamentelassiguientespalabras—.Aloquemerefiero,es...que,bueno,debeserunsentimientomutuo.

Daunethfruncióelceño.—Yoconfíoenvos,alte...esto,Tanalasta.Puesclaroqueosrespeto.—Siesofueracierto,ahoranomementirías.—¡Señora!Jamásosmentiría.—¿Deverdad?—preguntóTanalasta,quemodulóeltonodevozparadara

entenderqueteníasusdudas—.¿Deverasrespetasmibuenjuicio,despuésdelosucedido con el abraxus? ¿Confiarías el reino en manos de alguien a quienresultatansencillomanipular?

Dauneth quiso responder sin pensar, pero entonces sus ojos brillaron alcomprenderaquésereferíalaprincesa.

—Entiendoloquequeréisdecir.Tanalastasintióundoloragudoen labocadelestómago,quede inmediato

achacócomolapunzadadelorgulloherido,asícomolapruebadequeDaunethprestaba atención a sus palabras. Hizo un esfuerzo por sonreír, pero no pudocogersedelbrazodeDauneth.

—Ahoraveoqueeresunapersonahonesta.Gracias.

Page 23: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Desearíadecirquenosemerecen,peroentalcasofaltaríaamideber.¿Deverasqueréisquemecomporteasí?

—Esunprincipio.—Un principio—repitió Dauneth, aturdido. Tiró de la tela de la capa de

viajedelaprincesa,yañadió—:Siqueréisqueseahonesto,¿osimportaríaqueosdijeraqueelgrisnoossientabien?

Tanalastaapartósumanodeunmanotazo.—Dije que fueras sincero, no que te comportaras con rudeza —rió—.

Después de todo, no dejo de ser una princesa y espero que me trates con lacortesíadebida.

Page 24: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

T2

analastarecorrióelsalónfamiliardelamansiónMarliirconunamanoenelrepulgodelafaldaylaotraenlacinturadelvestido.Elcorredorseleantojó

larguísimo, había una interminable fila de columnas blancas que sostenían lascorrespondientes arcadas rematadas en voladizos y el centenar de puertas deroblequesealineabanaambosladosdelcorredor.DecaminoporHighHeath,había ordenado detener el carruaje tantas veces para salvar las plantacionesarruinadas, que habían llegado con un día de retraso. AquellamismamañanadescubrióqueeltrajedebailequehabíaordenadoqueseleenviaradesdeSuzailera una talla más que la suya. No había podido encargarse del regalo decumpleañosde supadre, pero confiaba enque lohubierahecho elmaestre deagriculturaFoley.

Finalmente, Tanalasta llegó ante la puerta custodiada por dos DragonesPúrpura, que se pusieron firmes, dieron el taconazo de rigor y se llevaron laalabardaalhombro.Tanalastasedetuvoy levantó losbrazosporencimade lacabeza.

—¿Algúnproblema,caballeros?—preguntómientrasdabaunavueltasobresí, lentamente—. ¿Alguna hebra fuera de lugar, alguna cosa que no deberíaenseñar?

Losguardiasintercambiaronunamiradaazorada,peroguardaronsilencio.—¿Qué ocurre?—insistió Tanalasta bajando la mirada. El vestido era de

sedade amatista, conun corpiño ahusadoy un escote generoso, demodoqueimaginóqueenseñabamásde loquedeberíamostrarunaprincesamodesta—.Respondan.

Page 25: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Elguardiamásjovenextendióelbrazo,ydevolviólaalabardaalaposicióndeguardia.

—Nadaenabsoluto,alteza.—Unalevesonrisacruzófugazporsuslabios—.Tenéisunaspecto...Enfin, increíble.Yoenvuestro lugarmeguardaríamuchodequemevieralareina.

Tanalastalomiróboquiabierta.—¿Cómo?—Os ruego que le disculpéis, alteza—dijo elmás veterano, adoptando la

posicióndeguardia—.Lundannopretendíaofenderos.EsquehacetiempoquenoosvemosporSuzail,yporlovistohabéis...esto...habéiscambiadomucho.

—¿Deveras?—Tanalasta losobsequióconunaampliasonrisa, sepusodepuntillasybesóaambosenlamejilla—.¡QueChaunteaosbendiga!

Desatóel lazoque recogía sumelenacastañay los largos rizosde supelocayeroncomoelaguadeunacascadasobresuespalda.Actoseguidoinclinólacabeza.

Losguardias,aturdidos,abrieronlapuertaqueconducíaalsalón,yTanalastaentróenlaestancia,dondeencontróaDaunethMarliirdepieantelachimeneade mármol, en compañía de su padre y de Vangerdahast. Los tres hombresestaban enfrascados en una animada conversación, con un vaso de licor en lamanoy riendoalgunagraciaqueTanalastaconfióenquenoguardara relaciónconsutardanza.Sorprendentemente,Vangerdahastnosehabíaesforzadolomásmínimoenvestirseparalaocasión.Habíapeinadoloslargospelosdelabarbaenunamasacompactacomounanubeblanca,ysucorpulenciaquedabaocultaporuna túnica color añil con unos cometas amarillos que, de hecho, parecíandeslizarseagranvelocidadpor laseda.Dauneth llevabaun jubónribeteadoenoro, que era el complemento perfecto al vestido amatista de Tanalasta,coincidencia que (estaba segura de ello) no era fruto del azar. El rey Azounvestía una túnica de lino y una capa de terciopelo del color de la realeza, elpúrpura,yceñíaalcostadoSymylazarr,laregiaespadadelhonor,enunavainaenjoyada.Conunaexpresiónfríayunamiradapenetrantedesusojoscastaños,supadreestaba tanatractivocomodecostumbre,aunquesurealbarbaparecíamássurcadadevetasgrisesquehacíaunaño.

—¡Por el señor de la mañana! —La exclamación no provenía de lachimenea, sino de la pared que quedaba a la izquierda de la puerta—. ¿Es

Page 26: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

posiblequeéstaseamiTanalasta?Laprincesasevolvióparavera sumadre,quese incorporabadeunasilla

elegante con remates de pan de oro. Pese a la advertencia de los guardias,Tanalasta comprendió enseguida que nunca llegaría a eclipsar a sumadre. Lareinalucíaunvestidosencillocolorvioleta,quetansóloservíaparaenfatizarlabellezadesucuerpo,porloqueFilfaerilestabatanatractivacomosiempre.Consumiradagélidayazul,lapieldealabastroyelpelocolormieleralamujermásbelladelaestancia,aunquenolopretendieraperoenaquellaocasiónponíatodosuempeñoenconseguirlo.

LareinacogióaTanalastadeloshombrosylamiródearribaabajo.—Lasmontañastesientandemaravilla,querida.¡AunqueDaunethdijoque

habíascambiado,nuncapudeimaginarqueelcambiofueratanradical!Laprincesafingiósentirsedecepcionada.—¿No? Yo que tenía la intención de despistarlo con mi atuendo de viaje

polvoriento.—Tanalasta abrazócon fuerzaa sumadre,y susurró—:Yyaquehablamosdelbuenguardiánde lasmarcasorientales,¿quéhaceaquí?Pensabaqueenestasalasólosereuniríalafamilia.

—Me temo que ha sido idea de Vangerdahast—susurró la reina en tonoconfidencial, pero acto seguido retrocedió un paso y preguntó—: ¿Algúnproblema?

—No,enrealidadno—respondióTanalastadespuésdelanzarunsuspiro—,peroqueríahablarasolasconvosyconelrey.Hayalgoquedebocontaros...

—¡Princesa,estáisbellísima!Tanalasta volvió la mirada y vio que Dauneth apartaba a su padre y a

Vangerdahastdelachimenea.Abandonadatodaesperanzadepoderdisfrutardeunmomentodeintimidad,sonrióytendiósumanoparaquelabesara.

—Gracias,Dauneth,pero¿quédijimosacercademinombre?Elguardiánsesonrojócomountomatemientrasbesabasumano.—Disculpadme,Tanalasta.LasmiradasdeaprobaciónquecruzaronVangerdahastyAzounnopasaron

desapercibidasalaprincesaque,trasinclinarseantesupadre,dijo:—Mis disculpas por el retraso, pero hicimos algunos descubrimientos

alarmantesduranteeltrayecto.—Sí,sí,Daunethmelohaexplicadotodoacercadelascosechasarruinadas.

Page 27: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Azountomólamanodesuhijaylaobsequióconunasonrisaenlaquehabíacierto reproche no exento de cariño—. Ninguna princesa debería preocuparseportalesasuntos.Paraesotenemosalosmagos,comosabrás.

—¿Cómo? —Tanalasta observó a Vangerdahast, que la inspeccionaba dearriba abajo, como si estuviera examinando a un caballo—. Quizás el magosupremohayaaveriguadolanaturalezadelproblema.

—Elmagosupremotieneasuntosmás importantesde losquepreocuparse,además de la cosecha de la cebada—repusoVangerdahast—, peroMerula elPortentosome ha asegurado que esta plaga no reviste tanta importancia comoparahaceresperaraunrey.

—¿Merula? ¿Qué sabrá ese agitador de varitas sobre cosechas?—Pese altono de su voz, Tanalasta se sintió aliviada. Si el mago supremo hubieradescubierto la naturaleza del problema, el valor de su regalo hubiera sidoinferior. Sonrió a su padre y añadió—:Si queréis saber qué es lo que sucede,debéispreguntárseloalmaestredeagriculturaFoley...

—Esoesprecisamente loquepiensohacer—interrumpióAzoun—,sierestanamabledepresentármelo...despuésdelafiesta.

—Porsupuesto—dijoTanalasta,quesesentíahalagadaaunquenolomostróabiertamente.Nisiquieraellapodíapresentaraalguienalreysinlaaprobaciónprevia del mago supremo, y la aceptación del monarca de conocer a OwdenFoley sin habérselo consultado a Vangerdahast era un buen augurio para suobsequio.

»DudoquelasplagasaneguenCormyrdurantelacelebración—concedió—.Misdisculpasporhaberoshechoesperar.

—¿Esperar?—sonrióelrey—.Nomehabíadadocuenta,ysihubieratenidoque esperar, habría merecido la pena.—Se volvió a Vangerdahast—. ¿O no,ancianomago?

ElmagodelacorteobservóaTanalastaconexpresiónagria,yrespondió:—Haperdidopeso,ypersonalmentenocreoqueseabuenoenunamujerser

tanhuesuda,especialmentealaedaddeTanalasta.Filfaerildiounapalmadaenelhombroalmago.—¡Vangerdahast!Tanalastanoestabagruesacuandosefue.—No es necesario que me defendáis, madre —dijo Tanalasta. Hizo un

esfuerzo por sonreír y dio una palmadita afectuosa al mago en la barriga—.

Page 28: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Vangeyyyonosentendemosperfectamente,¿verdad,vuestracorpulencia?Vangerdahastlamiróconlosojosabiertoscomoplatos.—Veo que habéis ganado en desparpajo lo que habéis perdido en otros

lugares.Simedisculpáis,tengoqueatenderunasuntoimportante.Elmagosedirigióaunsofácolorburdeos,dondesesentó,echólacabeza

haciaatrásycerrólosojos.Filfaerilsonrióconaprobación,peroajuzgarporlaexpresióndelrostrodeAzoun,elreyparecíaalgodolido.

—Nodeberías enfrentarte a él de esamanera,Tanalasta.Después de todo,serátu...

—Mimago,losé.—Tanalastarespiróprofundamente,ydiolarespuestaquehabíapreparado—:Aunqueatodosnosotrosnosvendríabienrecordarqueeselmagoelquesirvea lacorona,ynoalcontrario,nohayningunanecesidadderecordarme las virtudes de Vangerdahast. El respeto que siento por él es tanprofundocomoelquesientoporvos,aunquenomelimitearesponderlequesíatodo.

Elreyenarcóunaceja,peroTanalastahizodetripascorazónalobservarlasorpresa dibujada en la reina, y decidió no dar su brazo a torcer.Después delasunto abraxus, Vangerdahast y ella habían pasado algunos meses viajandojuntos, y la experiencia bastó para convencer a la princesa de que no debíapermitir que elmago supremo la intimidara.Aunque la había enseñado cómofuncionabanlascosasenelmundo,ylahabíaayudadoaolvidarlahumillaciónsufridaamanosdeAunadarBleth,tambiénhabíahecholoposibleporaplacarelinterés creciente de la princesa por Chauntea, para encauzarla hacia interesesmáspropiosdesucondición.ElviajeterminómalcuandolaprincesaserebelóydeclarósudecisióndeentrarenlaCasadeHuthduth.SeguroqueVangerdahasthabía contadoa suspadres todo lo relativoa sudecisión,pero tambiénestabaconvencidadequesehabíamostradomásdiscretosobreelpapelqueélhabíadesempeñadoendichadecisión.

Finalmente,elreyapoyósumanoenelhombrodelaprincesa:—Veoquehasencontradohierroenesasmontañas—dijo—.Esoesbueno,

perosiquieresforjarunpuñoconesehierro,nodebesolvidarelterciopeloconelquedebescubrirlo.

Tanalasta inclinó la cabeza, decidida a no protestar y poner al rey demalhumordespuésdeaquellarecomendacióntansuave.

Page 29: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Tendréencuentavuestroconsejo,padre.—Bien. —El rey sonrió, y después la condujo del brazo al sofá, donde

Vangerdahast permanecía sentado con la cabeza apoyada en el respaldo y losojoscerrados—.Veamosahorasipodemosencontraratuhermanayempezarlascelebraciones.

Elmagolevantólacabeza.—MetemoquetendremosqueempezarsinAlusair.—¿Empezarsinella?—preguntóFilfaeril.Lareinaabriósuspálidosojos—.

¿Dóndeestá?—Esto... yo, no lo sé exactamente —respondió, rojo como la grana.

Vangerdahast se levantó—.Puedeque sigaen lasTierrasdePiedra.Acabodeponerme en contacto con ella, pero lo único queme ha dicho es: «Ahora no,viejofisgón».

—¡Puesveabuscarla!HemosdecididocelebrarlafiestadecumpleañosdelreyenArabel,demodoque...—FilfaerilsemordiólalenguaymiróaDauneth,paradespuésproseguir—:CuandodecidimosaceptarelamableofrecimientodeRaynaarMarliircomoanfitrión,fueparafacilitarlaasistenciadenuestrashijas.

—Así es, majestad—dijo Vangerdahast, inclinando la cabeza—, pero metemoqueAlusairhavueltoaquitarseelanillo.

Tanalasta vio que Dauneth clavaba la mirada en los anillos de sello quelucíanlosmiembrosdelarealeza.

—Quésedtengo,Dauneth.—Cogióelbrazodelguardiányloempujóhacialapuerta—.¿Seríastanamabledetraermeunpocodejerez?

—Noesnecesarioquelohagassalir,Tanalasta—reprendióelreymientrasjugueteabaconelanillodesello—.CreoquepodemosconfiarenqueDaunethguardenuestropequeñosecreto.Además,elguardiánconocemuchomejorquetúlasituación.

Comoparacorroborarlaspalabrasdelrey,DaunethsevolvióaTanalastaydijo:

—Emperelhadesaparecido.—¿Desaparecido?—preguntóTanalasta,quesesintiómenospreciadaporno

haberle escrito su padre aHuthduth comunicándole la noticia. Emperel era elguardián confidencial de la «Espada Durmiente», una camarilla secreta devalientes jóvenes nobles, a los que se había sumido en estado de hibernación,

Page 30: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

como medida de precaución contra una antigua profecía que anunciaba ladestruccióndeCormyr.Queel reyhubieraconfiadoaDauneth ladesaparicióneraunapruebapalpabledesuconfianzaenél,ytambiéndelconvencimientodequenotardaríaenconvertirseensusuegro—.¿Cómoocurrió?

—Eso es lo que Alusair fue a investigar—respondió Azoun. Se volvió aVangerdahastypreguntó—:¿Tenemosmotivosparapreocuparnosporella?

—¡Por supuesto! —exclamó el mago—. Esa muchacha nunca aprenderá.Sabéis muy bien que le he dicho mil veces que no se quite el anillo. ¿Y sihubiéramosnecesitadocomunicarlealgoimportante?

—Es importante —recalcó Filfaeril—. Se trata del sexagésimo tercercumpleañosdeAzoun.LaausenciadeAlusaires inexcusable,y seránmuchoslosquereparenenella.

—Procuremos no sacar las cosas de quicio —pidió el rey—. Estoyconvencidodequetieneunabuenarazónparanoestaraquí.

Tanalastasemordiólalengua,conscientedequecualquiercosaquedijeraleharía parecer más celosa de lo que en realidad estaba. Daba lo mismo queAlusairdesaparecieraenlasTierrasdePiedrayolvidarasufiestadecumpleañossinunasolapalabradedisculpa,peroelhechodequelaprincesadelacoronahablaraaVangerdahastdesegúnquéformaeramotivodereprimenda.Nodebíaresultar tan extraño que Tanalasta se sintieramás a gusto en la austeridad deHuthduthqueenelpalaciodesupropiafamilia.

ElreyofreciósubrazoaFilfaeril,ydespuéssevolvióhacialapuertadoblequeconducíaalasaladebaile.

—Vangerdahast, tendráustedqueentrar solo—dijoel rey—,ynodejedeintentarponerseencontactoconAlusair.Estoyconvencidodequesepondráencontacto con usted si necesita ayuda, pero después de la desaparición deEmperel...

—No os preocupéis, que así se lo diré cuando consiga hablar con ella—respondióelmago.

Vangerdahast hizo un gesto con la mano señalando la puerta, einmediatamentesonaronunosgolpesenlamisma.Enseguidaoyeronlasórdenesqueelguardiaapostadoalotroladodabaavozencuello,yelrumorahogadodelas trompetas que precedió a la apertura de las puertas. El rey y la reinatraspasaronelumbralenolordemultitudes.

Page 31: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

DaunethsesituójuntoaTanalastayleofrecióelbrazo.—Simelopermitís.—Porsupuesto.Tanalasta deslizó lamano bajo el brazo del noble, y juntos entraron en la

famosasalaRhodesdelamansiónMarliir.Lagigantescasaladebaileestabatanatestadadenoblesquenopudoverningunodesusafamadostesoros,salvoloscapitelesdepandeorodelascolumnasylabóvedaluminiscentedesucúpuladealabastro.Suspadreslesprecedíanadiezpasosdedistancia,caminandoporlaalfombrapúrpuraquedelimitabaelpasillodecortesía,unpasilloque tan sólopodíaserutilizadoporlosmiembrosdelarealeza,quienesselimitaronainclinarlevemente la cabeza a diestro y siniestro, a medida que pasaban junto a losnobles de rango inferior situados al fondo de la gran sala, pero su avance setornólentocuandoempezaronaintercambiarlossaludosderigorconlosnoblesmásimportantesqueestabansituadosaambosladosdelatribunareal.

Tanalastaseesforzóporsonreírysiguióasuspadres,conscientedelascejasenarcadas y las miradas que la estudiaban a medida que avanzaba por laalfombra. Estaba segura de que hasta el barón de menor rango de entre lospresentessabíalobienqueAunadarBlethlahabíaengañadohastaenamorarla,con la única intención de hacerse con el trono. Su aplauso fue correcto peroforzado, muestra palpable del temor que sentían ante lo que podía esperar aCormyr cuando ella ocupara el lugar de su padre. La princesa continuósonriendoeinclinandolevementelacabeza,recordandolasmontañascubiertasporpradosverdes, todocon taldemantener la compostura, la tranquilidad.Elprimerpasopararecuperarsureputaciónconsistíaenaparentarseguridadensímisma,yparaellodebíaconseguirlaserenidadinterior.

Amedidaqueavanzabanporelpasillodecortesía,lostabardosdelanaylasblusasdelinodelosnoblesmásmodestosdieronpasoalascapasbordadasylosvestidos de tul. Empezó a distinguir broches de peltre y cierres de bronce enpuntos estratégicos, a menudo decorados con brillantes de ojo de gato ofantasmagóricoscristalesdeluna.Daunethsaludóaestoshombresymujeresporsus nombres, y Tanalasta se limitaba a decir lo mucho que le agradabaconocerlos. Nunca faltaba la sonrisa acompañando una expresión algosorprendidacomorespuestaasuspalabras,locualhizopensaralaprincesaquequizásestabacausandomejorimpresióndeloquehabíaprevisto.

Page 32: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Tanalasta y Dauneth llegaron al extremo de la sala donde se hallaban losnobles importantes, donde todo olía a aceite de lavanda y agua de lilas. Laestanciaparecíailuminadaporlaluzquedespedíanlosrubíesyzafiros,yelecodelavanidadreverberabaenlabocadesuestómago.Loshombresibantocadoscongorrasemplumadasyjubonesdesedabrillante,mientrasquelasmujeressehabíanataviadodemetrosymetrosdeencajeygasa.Alcontrarioquelosnoblesderangoinferior,queestabansituadosenunextremodelasala,losloresylasseñorasquesereuníanallíconocíanbiena lafamiliareal,ynotitubearona lahoradealabarelaspectodelareinaodefelicitaraAzounporcumplirunañomás.Tanalastavisualizólosarroyosquediscurríanentrelasmontañas,yampliósusonrisaamedidaqueseacercaba.

Primero se volvió a las familias de cinco jóvenes nobles que la habíanintentado asesinar durante el asunto abraxus, tanto para demostrar que no lesguardaba rencor como para demostrarles que no los temía. Los duques se lasapañaronparatartamudearsussaludos,perolasduquesasestabantanaturdidasque apenas pudieron responder. Tanalasta se despidió de ellos con elegancia,despuéslanzóunsuspirodealivioycondujoaDaunethporelpasillohastaunlugarmás cómodo.Ahí estaban sus amigos, losWyvernspur:Cat resplandecíaconsuvestidoblancoperla,yGiogilavioacercarsetaneleganteyafablecomodecostumbre,tocadoconuntrajepúrpuraconribetesdeoro.

—¡Por la Señora, alteza!—Giogi abrazó afectuosamente a la princesa, ydespuésretrocedióunpasoparaadmirarlaconunamirada lasciva—.¿Quémeheperdido?¡Oshabéisconvertidoenunaauténticabelleza!

—¡Giogi!—Cat dio una palmada en el hombro a su marido, después seacercó al borde de la alfombra púrpura para abrazar también a Tanalasta—.Disculpadamiesposo,alteza,yasabéislozoquetequepuedellegaraser.

—Prefiero loscumplidosdeGiogia laadulacióndeBleth—rióTanalasta,quetiródeDauneth—.Seguroquerecuerdanustedesalbuenguardián.

LosojosdeCattitilaronalreparareneljubónconguarnicionesdeoroquelucíaDauneth,conscientedelobienqueencajabaconelvestidodeamatistadeTanalasta,ylocercaqueestabalatelacolorañildelpúrpuradelarealeza.

—Tanatractivocomodecostumbre.—CatestrechólamanodeTanalasta,yacontinuaciónseinclinóhaciaellaparasusurrar—:Soisunamujerafortunada,querida.

Page 33: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Tanalasta enarcó una ceja ante el comentario de su amiga, pero guardósilencio.

—Mástardetendremosocasióndeconversar,Cat.—Esperoansiosamenteque llegueesemomento.—Catsoltósumanoyse

inclinóanteelladoblandolasrodillas—.MeencantaríaquemecontaraistodasvuestrasaventurasenHuthduth.

—¿Aventuras?—preguntóGiogi,confuso—.Pero¿noesunmonasterio?—Asíes.—Catdescargóuncodazoensuscostillas—.Despídete,Giogi.—Hastaluego,alteza.—Giogiseinclinó.Tanalastarespondióalsaludoinclinandoleveyamistosamente lacabeza,y

despuésreemprendióelcaminoporelpasillodecortesía.Seencontrabanacincopasosdelatribunadelarealeza,dondeaTanalastalealegrómuchodistinguirlafigura de pelo blanco deAlaphondarEmmarask, de pie y algo separado de lamultitud.Encalidaddesabiodelacorte,AlaphondareraeltutordeTanalastaenmateriadeleyes,filosofía,historiaycasitodolodemás.Despuésdetresdécadasdesesudosestudios,ambosseprofesabanunaprofundaamistad,peronode laformaquealgunosmurmurabanenlossalonesdelarealeza.Conlaesperanzadehacerlepartícipe,niquefuerasomeramente,delaplagaquehabíaretrasadosullegadadeHuthduth,tirósuavementedeDauneth,aunquecuandosedisponíaasaludaralsabiounamujerdebajaestaturairrumpióenelpasillodecortesíaylebloqueóelpaso.

—Princesa Tanalasta, vuestra belleza excede incluso las alabanzas másalocadasdemihijo.

Tanalasta estaba tan sorprendida que necesitó algunos segundos paracomprender lo que había sucedido. Aquella mujer iba vestida con organdí yperlas,lucíazafirosquecolgabandeloslóbulosdelaorejaylosrubíestitilabanen todosycadaunodesusdedos, inclusoen lospulgares.Supeloempolvadoformabaunatorrequesealzabaenespiral,yquesemanteníaensulugargraciasa laayudadediezalfileresdediamantedispuestosenformadelunacreciente.Por supuesto, aquella mujer pertenecía a la nobleza del reino, se habíacomportado como si bloquear el paso a una princesa fuera lomás normal delmundo.

Una pareja de guardaespaldas se adelantaron a la princesa y tomaronposiciones a ambos ladosde lamujer, a la esperade recibir alguna señal para

Page 34: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

resolver la situación. Tanalasta miró a Dauneth, cuyo rostro sonrojado leconfirmó la identidad de la duquesa, y decidió no pedir a los guardias que sellevarana lamujer.ElguardiánseseparódeTanalastaparaponerse juntoasumadre.

—Alteza,permitidqueospresenteamimadre,ladyMereldaMarliir.Tanalasta fue consciente del silencio que se adueñó de la sala cuando la

mitaddelosnoblespresentessevolvieronparacentrarsuatencióneneltrío,locuallesserviríaparacalibrarelprogresodeDaunethenelcortejodelaprincesa.Tanalasta no permitió a la duquesa incorporarse, pues se había inclinado anteella, pero tampoco pidió a los guardias que se la llevaran a un lugar másapropiado.

—Lady Marliir, qué amable por su parte presentarse usted misma. —Amedidaquehablaba,reparóenquesuspadreslaobservabansorprendidos,alpiede la tribuna—. Estaba buscándola, y me gustaría expresarle mi gratitud porservirdeanfitrionaenlafiestadecumpleañosdemipadre.

—Nosemerece.—Mereldasesonrojódepurogozo—.Elplaceresmío—añadió incorporándose sin que la princesa le diera permiso, y si escuchó lasexclamacionesqueahogaronlosnoblesque larodeaban,susonrisacarnosanodiomuestrasdeello—.¡Mecomplacetantoconoceros,querida!¡Daunethmehahabladotantodevos!

—¿Deveras?—Oh, sí. —Sin reparar en la frialdad de Tanalasta, Merelda miró a su

alrededorparaasegurarsedecontarconlaatencióndelosnobles,cogiólamanodesuhijoydiounpasoal frente—.Habladevoscontinuamente,ydelmodomásfavorable,osloaseguro.

ElrostrodeDaunethsevolviótanrojocomolosrubíesquelucíasumadreenlosdedos.

—Madre, por favor. —Apretó su mano con fuerza e intentó inútilmentellevarlaalbordede laalfombra,dondeRaynaarMarliirobservaba lo sucedidoconunaexpresióndeimpotenciadibujadaenelrostro—.¿Porquétantoempeñoendejarmemalenpresenciadesualteza?

Supreguntaprovocóunasonoracarcajadaen todos lospresentes, salvoenTanalasta. Por su parte, la princesa estaba perdiendo la paciencia con ladyMarliir.Evidentemente,aquellamujercreíaquepodíadoblegaraTanalastacon

Page 35: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

lamisma facilidad que lo hiciera el traidor deAunadar Bleth. La princesa sevolvióhacia suspadres, aquienespidió ayudacon lamiradapara evitar tenerquehacerunfeoalaanfitriona.Elreyhizoademándedirigirsealatribuna,locual daría rienda suelta a los clarines, después se volviómirandomás allá deTanalasta,haciadondeseencontrabaVangerdahast,yalhacerlosedetuvo.

—Estoytandeseosade...—No lo diga, se lo ruego—advirtióTanalasta. El tono seco de su voz se

debiótantoasuiraanteelhechodequeVangerdahasthubieraimpedidoquesupadre la ayudara, cómo a su impaciencia con lady Marliir—. Sería muyembarazoso...

—¿Embarazoso? Querida, que yo sepa Dauneth baila de maravilla. —Mereldalevantólabarbilla,seunióalrestodenoblesquehabíanprorrumpidodenuevoencarcajadas,yacontinuacióncogiólamanodelaprincesa—.Perosinoos gusta cómo baila, estoy convencida de que tendréis tiempo de sobra paraenseñarle,¿verdad?

El silencio se adueñó de pronto de la estancia, un silencio tan denso quepodíacortarseconelfilodeunaespada,yaTanalastalefueimposiblecontrolarlarabiaacumulada.SielreyinsistíaenpermitiraVangerdahastcontravenirlosdeseosdesupropiahija,quecargaraélconlasconsecuencias.Laprincesalibrósumanodelasgarrasdeladuquesayadoptólamásinocentedesussonrisas.

—Lo siento, duquesa Marliir. No alcanzo a comprender a qué se refiere.¿AcasotienelaimpresióndequeDaunethyservidoraestamosprometidos?

Un leve murmullo se extendió por toda la estancia, y la sonrisa de ladyMarliirseaguó.Sumandíbulaempezóamoversesintonnison,intentandodarunordencoherenteaunaristradesílabasqueacudíanasuslabiosparadarunaexplicación, peroTanalasta se negó a ofrecer una oportunidad a lamujer paraquepudieradisculparseoprofundizar enel tema.Miróa losguardias, aunqueDaunethyatirabadesumadreparadejarlaenmanosdelpasmadodesumarido.ElduqueMarliircogióasuesposadelhombroysevolvióhacialasalidamáscercana.

EncuantoelreyAzouncomprendióloquesucedía,dirigióunamiradafugazasuhija, tanrápidaquesólolosobservadoresmásastutospudieronadvertirelreprocheque la acompañaba.Tanalasta respondió a lamirada conun inocenteencogimientodehombros.Noteníaningunaintencióndeincomodarasupadre,

Page 36: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

ymenos aún porque podía afectar elmodo en que éste recibiera el regalo decumpleaños que le había traído deHuthduth, pero debíamantenerse firme. Sicon ello causaba algún problema, mejor achacar la responsabilidad aVangerdahast,ynoaella.

Los labios de Azoun dibujaron una sonrisa tensa, y después se separó deFilfaeril.

—LadyMarliir,unmomentoporfavor.LosMarliir se detuvieron y se volvieron lentamente. Raynaar estaba rojo

comolagranaysuesposa,pálidadevergüenza.Mereldaseinclinólevementeyestaveznoseincorporó.

—¿Ma...majestad?Elreyseacercóhaciaellosycogióaladuquesadelamano.—Acabodedarmecuentadequehecometidounapequeñainjusticiaconlos

dos —dijo mientras ponía a Merelda de pie—. El chambelán encargado delprotocolorealdebióinvitarlatantoaustedcomoalordMarliiraquecaminaranporlaalfombraennuestracompañía.

Lamujerleobservóconlosojosabiertoscomoplatosporlasorpresa,yotromurmullo,menosahogadoqueelanterior,llenólasaladebaile.

—¿Deveras?—Pues sí—respondió Azoun—. Una anfitriona debe ser honrada por sus

invitados, sobre todo cuando ha organizado un baile tan espléndido y regio.Esperoquedisculpeustedmidescuido.Meconstaqueelchambelánencargadodel protocolo es una personamuy rigurosa, y sería una pena que tuviera quepasarelrestodelavelada,ylaspróximassemanas,encerradoenuncalabozo.

Aquella broma obtuvo la respuesta apropiada por parte de quienes seencontrabanlobastantecercacomoparaoírla.LadyMarliirsesonrojóymiróasualrededorparaasegurarsedequetodossehabíandadocuentadequeacababade recuperar la reputación.Azounbesó sumanoy volvió junto aFilfaeril.Laprincesa de la corona esbozó una diplomática sonrisa e intentó no traslucir larabiaquebullíaensuinterior.SehabíaevitadounescándaloinesperadoacostadelprestigiodeTanalasta.Suúnicaesperanzaestribabaahoraenquesupadrereparase el daño que le había hecho, cuando le entregara el regalo decumpleaños.

Dauneth regresó juntoaTanalasta,aquienofreciósubrazoalgoenvarado.

Page 37: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Sesentíatanincómodacomoélcuandodeslizólamanobajosubrazo,ysiguióasuspadreshastalatribunareal.Sonaronlastrompetas,llamandoalordenalosasistentes,ytodosguardaronsilencioamedidaquelaprincesayDaunethsubíanlasescaleras.

La rabia de Tanalasta dio paso a la reflexión, y empezó a preguntarse sialguien había sugerido a la pobre mujer que sacara el tema a colación. Porsupuesto,sussospechasnotardaronenrecaerenlapersonadeVangerdahast.Elancianomagonoeradelosquedejanlascosasenmanosdeldestino,sobretodocuandoeraeldestinodeCormyrloquedependíadeello.

Subieron a la tribuna y encontraron cuatro tronos con cojines púrpura,flanqueadosporunpardesillasparaDaunethyVangerdahast.AzounyFilfaerilsesentaronenlostronoscentrales,mientrasqueTanalastalohacíaaladerechadesupadre.Elmagosupremoretiróelotrotronoconunapalabramasculladayungestode lamano,ydespués empujó su sillahasta situarla junto a la reina,para a continuación dejarse caer en ella. Ni siquiera miró en dirección aTanalasta.

Encuantotodossehubieronsentado,Daunethdiolabienvenidaoficialalosinvitadosalamansiónfamiliar,imponiéndosealosucedidohacíaunosinstantesconunchistebienrecibidoacercadelasorderadelasabuelas.Lanoticiadelaausencia de la princesa Alusair fue recibida con un murmullo de profundadecepción,peroelguardiánnotardóendespertarelentusiasmodelosasistentesalpedirlesqueseunieranaélalahoradelanzarsesentaytreshurras(unoporcadaunodelosañosquecumplíaelreyAzoun).Selevantótalestruendo,queVangerdahastnopudoevitarlanzarunamiradainquietaalacúpuladealabastrodelasaladebaile.

Unavezterminadoslosvítores,Daunethpidióa losnoblesdealtaalcurniaque despejaran el espacio situado ante la tribuna, donde a continuación unacompañíadeacróbatascantarinesejecutarondiversaspiruetas.Alcabodeunosminutos, toda la concurrencia, desde el señor demenor rango hasta el propiomonarca, lloraban de la risa. Aunque Tanalasta no pudo olvidar elcomportamiento improcedente de lady Marliir, descubrió que era capaz deperdonarlo, sobre todo desde que había intercedido unmiembro de la realeza.Para cuando terminó el espectáculo, los espectadores estaban tan agotados detantoreírquemuchosseretorcíanporlossuelosconlasmanosenelestómago.

Page 38: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Cuandolosmiembrosdelacompañíarecogieronlosbártulosyabandonaronlasala,Daunethinvitóalosnoblesmásimportantesaquesubieranalatribunaparaentregarsusregalosalrey.Despuésdeladiversiónproporcionadapor losacróbatas,lanoblezatuvoocasióndesolazarseyrelajarse,yunzumbidosuavese extendió por la sala mientras Azoun abría los regalos envueltos con tantocuidado. En su mayor parte, los obsequios reflejaban la idiosincrasia de lasfamilias que los habían realizado.De losDauntinghorn,marinos, un serení entodosudetallehechodeoropuro,convelamendesedaqueserecogíayextendíamedianteuna ruedecita conuna cadenadiminuta.LosHawklin leobsequiaronuna espada antigua forjada en la olvidadaNetheril, demasiado antigua y débilcomoparaesgrimirlaencombate,peroqueconstituíaunavaliosapiezaparalacolecciónqueelreyteníaenSuzail.CatyGiogiWyvernspurleobsequiaronunalceblancoquehabíancapturadoensubosquedeHullack:estabadomesticadohastaelpuntodequepodíacomerdelamanodeunhombre,peroseguíasiendotanorgullosoquetansólopermitíaacercarsealrey.

Azoun agradeció profusamente cada uno de los regalos, sin escatimarelogios, y dando amplias muestras de su interés por todos los obsequios, demaneraquenadiepudieradudardelomuchoquelehabíaencantadorecibirlos.Tanalastapasabatanprontodelasorpresaalaexclamación,ydespuésalaplausoquerequeríaunapequeñafraccióndetodasuatención:rutinaquecompartíacontantosotrosnoblesdecondiciónelevadaquecirculabanporlasala,enfrascadosenconversacionesvarias,esocuandonosefelicitabanmutuamenteporlasabiaeleccióndesusrespectivosregalos.Alpiedelatribuna,Mereldaeraelcentrodeatención, incluso entre los reservadosHuntsilver, y los Illance, que tenían porcostumbremostrarseenvidiosos.

Encuantosehuboencarriladolaentregaderegalos,DaunethvolvióaocuparsuasientoyseinclinólevementeparacruzarunaspalabrasconTanalasta.

—Disculpadelcomportamientodemimadre.Comopodéisver,estabamuyilusionadaconnuestromatrimonio.

—Doyporsentadoquenolehabrásdichonadaquepuedahaberlaanimadoaactuar de esa forma—dijoTanalasta con voz serena y esbozando una sonrisaforzada,pesealafuriaquesentía.

Daunethcedióposiciones,conscientedeltonoirónicodeTanalasta.—¡Jamássemehubieraocurridotalcosa!

Page 39: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Deveras?—LaprincesaTanalastafingióhacerpucheros—.¿Yquémedices de todos esos «alocados comentarios» tuyos acerca de mi belleza? ¿Deverasquiereshacermecreerquetampocoeresresponsabledeellos?

Daunethparecíaconfundido.—Puesclaroquesí,osencuentroincreíblementebella,peroenverdad...—No digas nada más, Dauneth. Hay ciertas cosas que una princesa no

deberíaoír.—Tanalastarióunpocoydespuésapoyólamanoensubrazo.Viopor el rabillo del ojo que lady Marliir llamaba la atención de AlaslynRowanmantleparaqueobservarasugesto,peronoporelloretirólamano.Sideveras pretendía tranquilizar a Dauneth, primero debía tranquilizarse ella—.Además,nocreoquetumadresealaúnicaempeñadaenempujarnosalaltar.

—Estoysegurodequetodosdeseanverosfelizmentecasada—dijoDauneth,dirigiendounamiradaincómodaasuspadresyaVangerdahast.

—¿Deveras?TeníalaimpresióndequeVangerdahasttansóloqueríavermecasada,felizmenteono.—Tanalastavolvióareír—.Créemesitedigoqueestasconspiracionesmeparecendemasiadoobvias.

Daunethevitócruzarlamiradaconelmagosupremo.—Loúnicoquelepreocupaeselbienestardelreino.—¡Demodoquehasidoél!—¿Qué?—preguntóDauneth.—Elqueconvencióa tumadreparaquesecomportaraasí.—Sinsoltarel

brazo de Dauneth, Tanalasta sonrió en dirección a Merelda—. Conozco lareputacióndeladyMarliir,Dauneth.Nocreoqueseaellaquiendebacargarconlaculpa.

Daunethparecía tanaliviadocomosorprendido,yTanalastasupoquedadosu empeño por defender a su madre mordería el anzuelo. Guardó silenciomientrasseguíamirandoendirecciónaMerelda,einclinólacabezacomplacidacuandoladyMarliiresbozóunasonrisaintrigada.

—Ahoraquelomencionáis—dijoDaunethfinalmente—,laviconversandoconelmagodelacorteestamañana.Debiódedecirlequesecomportaracomosiestuviéramosprometidos.

—Yati¿quétedijo?—preguntóTanalasta,conindiferencia.—¿Disculpad?—preguntóDauneth,rebulléndoseensuasiento.—Tenía entendido que seríamos sinceros el uno con el otro, mi buen

Page 40: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

guardián. —Tanalasta retiró la mano de su brazo, y añadió—: Conozcodemasiado bien aVangerdahast como para creer que se limitaría a ejecutar lamitaddelplan.¿Cuándosesuponequedeberíaspedírmelo?

Daunethcerrólosojosduranteunmomento,yacontinuaciónsuspiró.—Duranteelbaile.Debíasusurraroslapeticiónaloído.Peronosabíanada

delodemimadre.Esomehasorprendidotantocomoavos.—Locualnosirvedeexcusaparatucomportamiento.—Tanalastalanzóuna

miradafuriosaaVangerdahast,quepermaneció impasibleanteaquellamuestrademalhumor, y que observaba divertido cómo elmonarca jugueteaba con ungatodecuerdaqueparecíadispuestoaperseguirconenconoaunratóndorado—.¿Porqué,Dauneth?

—¿Porqué,qué?—¿Por qué te avienes a esto? —Tanalasta se esforzaba por no derramar

lágrimasde la rabiaque sentía—.Séqueno lohacespor el trono, sobre todoteniendo en cuenta la lealtad que demostraste durante el asunto abraxus. ¿Porquémetraicionasdeestamanera?

—Yo...—Daunethapartólamirada.Tanalastaobservóquevariosnobles losobservabandesde lapistadebaile,

perohizocasoomisodesusmiradas.—Dímelo.CuandoDaunethvolvióamirarla,surostronodelatabaningunaemoción.—Nooshetraicionado.Siaquíhayalgúntraidor,ésasoisvos.—¿Yo?—preguntóTanalasta,frunciendoelentrecejo.—Faltáisavuestrodeber—acusóDauneth—.Sinoconcebísunheredero,el

asuntoabraxusnoseránadacomparadoconloquepuedasucedertraslamuertedevuestropadre.

—Mireinoseráloquesucedaalamuertedemipadre—dijoTanalasta.—Y sin un heredero, vuestro reino estará sembrado de intrigas y

conspiraciones,pueshastalaúltimacasanobleconspiraráparareclamareltronoa vuestra muerte. Tarde o temprano, cualquiera de ellos considerará loconvenientequeseríaasesinaros,yCormyrtendráporreyaunusurpador,oseveráinmersoenunaguerracivil.

—¿Ytúhasdecididoquelamejorformadeimpedirloconsisteentenerunhijo conmigo? No, de ninguna manera. Tendré un marido en quien pueda

Page 41: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

confiar,onomecasarénunca.EldolorafloróenlosojosdeDauneth.—No pretendía ofenderos, mi señora, ni hablar en propio provecho, sino

convencerosdequedebéiscasaros,ypronto.Siestáismolestaconmigo, tenéismuchosentre losqueescoger.—Señalóa lamultituddecarasquehabíaen lasala—. Ahí tenéis, sin ir más lejos, a Amanthus Rowanmantle, eso si osacomodaunhombreatractivo;ocualquieradelosmuchachosSilversword,siloquebuscáisesingenio;quizásinclusoDierEmmarask,sipreferísaalguienquecompartavuestrapasiónporelsaber.

—Te agradezco tus sugerencias —dijo Tanalasta, sorprendida ante loabsurdoqueresultabaelhechodequeelpropioDaunethlerecomendaraasusrivales—.Situvieraqueescogerunmaridoalquenoamara,lomásprobableesquefuerastú.Aunquenopuedaconfiarenti,ereslealaCormyr,yesoesloquecuenta.

—Gracias,señora.—UnatisbodeesperanzailuminólamiradadeDauneth—.¿Deverastenéistiempodeconsiderarelamor?DebemospensarenCormyr.

—Estoy pensando enCormyr—repusoTanalasta; dispuesta a reprender alguardiánpor intentardiscutirconellaquedebíacasarse,perosediocuentadequenoteníaningúnsentidohacerlo.NoamabaaDauneth,ynoibaacasarseconél—.SiemprepiensoenCormyr.

—Siesofueracierto,vos...—Dauneth,por favor,no intentesdecirmequénecesitaodejadenecesitar

Cormyr.El guardián se sonrojó y apartó lamirada, consciente de que había estado

haciendo eso todo el rato. Tanalasta quería explicárselo, hablar con él de lavisión que había tenido en Huthduth, pero ¿cómo podía esperar quecomprendieraalgosiellaeraincapazdeexpresarloconpalabras?Larevelaciónhabía constituido una de tantas cosas incomprensibles que una mente agudapuede retorcer a su antojo, con tal de atribuirle un millar de significadosdistintos, pero en los que un corazón leal tan sólo percibía uno. ¿Cómopodíaconfiar en que Dauneth comprendiera sus sentimientos, cuando acababa dedemostrarlequenopodíaconfiarenél?

—Lo siento, Dauneth, pero debe ser por amor. Te aseguro que no puedoconformarmeconmenos.

Page 42: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

El guardián miró exasperado a la princesa, pero enseguida asintió con lacabezaydijo:

—Muybien,miseñora.Mañanaporlamañanameenamorarédevos.Tanalastalomiróboquiabierta,antesdereparareneltonoburlóndesuvoz.—Yamegustaríaamíquetodofueratansencillo,buenguardián—repusola

princesasonriendo—.Deverasquesí.—Enseguidaborrósusonrisaylecogiódelamano—.Perometemoquenopodríacorresponderatussentimientos.Enelfondo,nomerespetas,ydespuésdellíoenquetehametidoVangerdahast,nopodríaconfiaren ti comounaesposadebeconfiarensumarido.Disculpaqueseatanfranca,perotemerecestodalasinceridaddelmundo.TelahasganadoportulealtadaCormyr.

Dauneth torció el gesto y, conmocionado ante las palabras de Tanalasta,retiró lamano.Losnoblesnoparecieron reparar en ello, puesobservabanconatenciónaAzoun,queenesemomentolesmostrabaundragóndeunmetrodealtura, esculpido en un único trozo de cristal de amatista. A continuaciónaplaudieron a Ayesunder Truesilver cuando descendió de la tribuna con unasonrisadeorejaaoreja,despuésdequeelreyloobsequiaraconunaspalabrasquedabanfedesurealgratitudporelobsequio.

Al ver que no había más nobles al pie de la tribuna, Dauneth Marliirrecompuso el gesto y se levantó para expresar su admiración ante losmuchostesorosquesehabían idoacumulandoen la tribuna.Despuésdecomentarqueseríanecesariatodaunacohortedemagosguerrerosparatransportarsemejantecantidad de regalos a Suzail, animó aAlaphondarEmmarask para que hicieraentrega de su regalo. El sabio supremo subió a la tribuna y obsequió al reyAzoun con un volumen enorme que estaba encuadernado en piel, tituladoElvuelodeldragón,unrelatocompletoy fielde lavidadeAzounIVdeCormyr,volumensesentaydos.

AlcomentarFilfaerilsuesperanzadequeelrelatonofueratancompleto,losnobles rieron a gusto; después, Vangerdahast se incorporó para presentar suregalo,limitándoseasacarunsimplebastóndesaucedeentrelatúnica.Elreyaceptóelregaloconunamiradadeperplejidad.

—Os agradecemos el obsequio, mago—dijo Azoun—. ¿De qué clase devaritasetrata?

—No es una varita, majestad. Es simplemente un bastón —respondió

Page 43: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

VangerdahastmirandoaTanalasta,antesdeañadir—:Creoquenotardaréisennecesitarlo.

ParasorpresadeTanalasta,lasecarespuestadelmagoarrancólascarcajadasdelaconcurrencia.Pocopodíahacerella,exceptofingirquedisfrutabadelchisteyrenegarparasusadentros.ComoVangerdahastnopodíadoblegarlamediantetrucosyjugarretas,recurríaalaburladirectaparaminarsuprestigio.

Laprincesapensóqueaquellaespeciedecampañapodíacontinuarhastaquemuriera su padre, y fuera como fuese no conseguiría más que debilitar suderechoalacoronacuandoascendieraaltrono.ElviejozarandeadordevaritascreíaserelúnicocapazdecomprenderloqueCormyrnecesitaba.Yasíparecíaser,almenosporelmomento,perodeserciertolaprincesaTanalastatendríaquecasarseconDaunethenunabrirycerrardeojos.Peroenestaocasiónelmagosupremodelacorteestabaequivocado;nodebíadecidirseelfuturodeCormyrcon la cabeza, sino con el corazón, y no estaba segura de que Vangerdahasttuvierauno.

En cuanto cesaron las risas,Dauneth se volvió a la princesa y enarcó unaceja.Aunque se las ingenió paramantener su habitual expresión agradable, elrestodesurostroparecíalucharconsuanchasonrisa.Conlaesperanzadequenadiepudieraentrevercon lamisma facilidadqueella lodecepcionadoquesesentía,Tanalastaledevolviólasonrisaeinclinólevementelacabeza.

Daunethextendióelbrazo.—Damas y caballeros, permítanme presentarles a la princesa Tanalasta

Obarskyr.Tanalasta respiró profundamente y se levantó en olor de multitudes, para

despuésacercarsehastaelcentrodelatribuna.—Gracias. —La princesa Tanalasta solamente necesitó una palabra para

silenciar los aplausos—.Comobien saben todos, el pasadoañodisfrutédeunretiro enHuthduth. Pese a que elmago supremo pueda temer que losmonjeshumildesdeChaunteamehayancorrompido...—Tanalastafueinterrumpidaporalgunas risillas nerviosas cuando señaló el bastón que su padre seguíasosteniendoentrelaspiernas—,deseoasegurarlesquenadaestámáslejosdelaverdad.En lasmontañaspudedisfrutar deunapazyuna armonía sin igual, yparamiobsequioalreyAzounIVmehelimitadoatraerconmigopartedeesetesoroincomparable,tesoroqueesperoseextiendaatodaCormyr—concluyó.

Page 44: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Tanalasta señaló con el brazo la entrada a la sala de baile, donde OwdenFoleypermanecía depie bajo la arcada, junto a una caja envuelta en sedadeltamañodeunachozadecampesino.Cuandolosnoblessevolvieronparamiraren aquella dirección, el maestre de agricultura agarró una cuerda dorada yarrastró el regalo por el piso. Al principio avanzó lenta y trabajosamente,obligándose adescansar tras arrastrar la cajaunospocos centímetros.Algunosnoblesdelosmásmodestosseofrecieronaayudarle,yelhombreaceptódebuengrado.

Los nobles tiraron con fuerza de la cuerda, y la caja se les vino encimacayendo caóticamente al suelo. El silencio se adueñó de la sala, hasta queOwdenFoleyvolvióacogerlacuerda.Afirmandoqueloscondesylosbaroneserandemasiadotorpesparatanarriesgadaempresa,Owdenlosapartóanimadoporlascarcajadas,antesdevolveratirardelacuerdayavanzarlentamenteporelpisode la salaendireccióna la tribuna.Sinembargo, ahora lacajaparecíatener voluntad propia, y se le echó encima a tal velocidad que a duras penaspudoevitarserarrollado;acontinuacióntiróytiróconfuerzaperolacajanosemovió un ápice pormucho que tiró de ella, pateándola ymaldiciéndola. Paracuando llegóalpiede la tribunay subió laescalerapara tender lacuerdaa laprincesaTanalasta,losreunidosenlasalanopodíanreprimirlascarcajadas.

LoslabiosdeTanalastadibujaronunaampliasonrisa,puestoqueelnumeritoestabaacordadodeantemanoconOwden(habíanpasadolosúltimosdiezdíasdeestancia en Huthduth practicando hasta el último movimiento). Agradeció elesfuerzo al maestre de agricultura, y después tendió a su vez la cuerda a supadre,quesehabíasumadoalaalegríageneralizada.

—Tendréisquetirarvosmismodelacuerda,sire.—¡Esoserásipuedo!—respondióAzounriendo.Seincorporóyasentólos

pies como si fuera a realizar un esfuerzo considerable, y después tiró de lacuerda.

Lasparedesdelacajasedesplomaron,yensuinterioraparecióunadocenademonjesconmiradaculpable,subidosaunaespeciedecarritollenodeollasdebarrodegran tamaño.Cuando la concurrencia estallódenuevo en carcajadas,dosmonjessaltarondelcarritoycolocaronunpardeollasalpiedelatribuna,antes de dirigir una rápida plegaria aChauntea.Cuando terminaron, otros dosmonjescolocabanotropardeollasenelprimerpeldaño.

Page 45: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Cuandoestaparejarezólaplegaria,unpardearbolitosbrotarondelasdosprimerasollasyempezaronacrecerante lamiradaatónitade laconcurrencia.Otroequipodemonjes subiópor laescalinataycolocóotropardeollaseneltercer peldaño, y así continuaron hasta que cada peldaño tuvo suscorrespondientes ollas. Los árboles se cubrieron de flores al crecer, dejando atodoslospresentesboquiabiertos,exceptoalmagoVangerdahast,queobservabaelnúmeroconciertoairedecansinaimpaciencia.

Acababandebrotarlasúltimasflores,cuandolasramasdelprimerárbolsecargaron de frutos. Sonriendo complacido, el rey descendió tres peldaños yarrancóunaperadeunadelasramas.Despuéslamordiócomplacido.

—¡Eslafrutamássabrosaqueheprobadojamás!—exclamóAzoun.Elreyrecurrió a la bocamanga para limpiar el jugo de la barba, y después volvió asubira la tribunaparadirigirseaTanalasta—.Esunregaloexcelente,princesaTanalasta.¡Osagradecemossobremaneratanportentosofrutal!

Tanalastasonrióyseinclinólevementeantesupadre.—No semerecen,majestad, perome temo que los árboles no tardarán en

marchitarse tan pronto como crecieron. Mi obsequio no es el frutal, sino losmonjes.

LasonrisadeAzounseoscureció.—¿Los monjes? —Paseó la mirada de su hija al maestre de agricultura

Owden Foley y de éste a la docena demonjes que esperaban elmomento derecoger los árboles marchitos. Finalmente se inclinó al oído de su hija paramurmurar—:Nocomprendo,querida.¿Nopretenderásobsequiarmeunadocenadeesclavos?

—Deningunaforma.—AnimadaporlaexitosaentradadeOwden,Tanalastalerespondiódeformaquetodospudieranoírla—:Heconvencidoalmaestredeagricultura Owden Foley y a sus monjes para que regresen a su hogar connosotrosyestablezcaneltemplorealdeChauntea.

La expresión de Azoun pasó de la confusión a la conmoción, mientrasVangerdahastseacercabaparasituarsejuntoalrey.

—¿EltemplorealdeChauntea?—preguntóelancianomago—.¡Nolodiréisenserio!

—Hablo muy en serio. —Tanalasta ignoró la airada exclamación deVangerdahast, y se dirigió directamente a los nobles—. El templo real se

Page 46: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

estableceráparaasegurarlasaluddetodaslastierrasdeCormyr.Empezaremosporloscamposafectadosporlaplaga,situadosenellímitenortedelanación.

Page 47: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

V3

angerdahast seguía dando vueltas a la melodía de la Alemanda final,mientraspermanecíahundidoenunadelassillasdelosMarliir.Fruncíael

ceñoporeldolorque leproducíansusmiembrosenvejecidos.El rumorde loscarruajes había cesado casi por completo cuando los últimos invitadosabandonaronelpatio,yAzounnoparabade irdeun ladoaotro,entreélyelcalordelfuegoqueardíaenlachimenea.

—Veamos, majestad, creo que vais a tener que sentaros de una vez. —Vangerdahastseñalóconundedonudosolospiesdelrey—.Unancianonecesitadetodosufuego.

Azounsedetuvoantelachimeneaysevolvióparamirarlo.—¿Enquéestaríapensando?—No sabría deciros—respondió Vangerdahast—. Quizá vuestra majestad

hayaolvidadoquemeprohibióleerlospensamientosdesuhija.—Esonosignificaquenodebahacerlodevezencuando—replicóFilfaeril,

levantándosedelacamadelmagosupremo,dondesehabíasentadoadescansar.Vangerdahastignoróelcomentariodelareinaymascullóalgunassílabasde

naturalezaarcana,altiempoquegesticulabarápidamenteconlosdedos.Azounno pareció advertir que se deslizaba flotando de la chimenea, porque acontinuaciónseacercóalasillaaunquenosesentó.

—EmpiezaapreocuparmelacapacidaddeTanalastaparalaregencia—dijoAzoun—.Primero,eseBlethcasilaengañaparaquelecedaeltrono...

—TanalastanofuelaúnicapersonaalaqueengañóAunadar—dijoFilfaeril.Seguíavestidaconeltrajecolorvioletaquehabíallevadoenelbaile,ysesentó

Page 48: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

en una silla junto a Vangerdahast—. Recuerdo muy bien que nos teníaencandilados.Sinolellegoallevaralabibliotecaenelmomentooportuno,osino lehubierais invitadoa irdecazaaqueldía,Tanalastanisiquierasehubierafijadoenél.

—Sólo por el hecho de que un hombre quiera conocer al prometido de suhija,noquieredecirquelaobligueacasarseconél—repusoelrey,quearrugóelentrecejo,dolidoporelcomentariodesuesposa.

—NomásdeloquehemosestadopresionandoparaqueelpobreDaunethsecaseconella.—FilfaerilsevolvióaVangerdahast,quenosedioporaludidoysiguióconcentrandosuatenciónenelfuegoquecrepitabaenlachimenea—.Nomeextrañaquesumadredieraporsentadomásdeloquehabía.

—Sí—admitióAzoun—, supongoqueyo soy el culpable... perounpadrepuedeanimarasuhija,¿ono?Sóloquieroqueseafeliz.

—Qué esté felizmente casada —corrigió Filfaeril— y embarazada de unheredero.

—Sí, pero antes que nada, feliz—replicó el rey, mirando extrañado a suesposa.

—¿SeacualfuereelprecioqueCormyrdebapagar?—preguntólareina.Azounconsiderósupreguntadurantealgunossegundos,antesderesponder:—El precio del bienestar del reino no tiene por qué ser la felicidad de

Tanalasta.Quizáshaya llegadoelmomentodeque tomeconcienciadeque talveznoestécapacitadaparaceñirlacorona.

Vangerdahastsesorprendiótantoaloírhablarasíalrey,queestuvoapuntode ahogarse con su propia saliva. Por supuesto, todos habían pensado en esaposibilidadcuandoTanalastasevioinvolucradaenelasuntoabraxus,aunqueeralaprimeravezqueAzounexpresabasusdudasenvozalta.

Filfaerilnopareciótansorprendida,yselimitóaenarcarunaceja.—Esunadecisiónimportante—dijolareinaenuntonoinexpresivo.—Perono tieneporquéserunadecisión tandura.Tanalasta tiene treintay

seisaños.Cuandovosteníaissuedad,ellayahabíacumplidolosquinceaños,yForil tendría unos... —Azoun no concluyó la frase, porque al igual que suesposa, no gustaba de recordar lamuerte de su joven hijo—.Quizá TanalastaseríamuchomásfelizsinotuvieraquecargarconelpesodedarunherederoaCormyr.

Page 49: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Quizás—admitióFilfaeril—.Seacercaaunaedadenquelaelecciónyanodependerádeella,yesnecesarioquepensemosenelbiendeCormyr.

Vangerdahast nopodíadar crédito a susoídos.Hasta elmomento, la reinahabía sido la principal valedora de Tanalasta, había sostenido que la princesaasumiría sus responsabilidades sin problema cuando llegara el momento. SiFilfaerilhabíaperdidolafeensuhijamayor,¿conquéapoyocontaríaTanalastaentodoelreino?

Azounseacercóalfuegoymirófijamentelasllamas,bloqueandodenuevoelcalorquellegabaalmago.

—Tanalasta no es la misma. Quizá fuera un poco inocente cuando tuvoproblemas con Bleth, pero no era ninguna estúpida. Ahora... —El rey dejóinacabadalafrase,sacudiendolacabezaapenado—.IncomodaraladyMarliirdeesaformanohasidomuybuenaidea.

—Majestad,debemosrecordarqueTanalastahatenidocierta...colaboraciónen ello —replicó Vangerdahast—. Creo recordar haber sacudido la cabezacuandovosempezasteisasubiralatribuna.

AzounsevolvióaVangerdahastconeldesconciertoenlamirada.—Creíquenoestabaustedconvencidodelacapacidaddelaprincesadela

corona.—Ensumomento,tampocovosmeconvencíais.—¿Por qué aprovecháis la primera oportunidad que se presenta para

emprenderla entre vosotros? —preguntó Filfaeril—. ¿Y por qué la defiendeustedahora?

—Porquemeparece lomás justo—respondióelmago—.Lamuchachaselimitaadarlacaraenunmomentoinadecuado.

—¿Momento inadecuado? —Filfaeril entornó los ojos hasta no dejarentrevermásqueunpardediminutas franjasazules—.¿Sepuede saberaquéjuegaustedahora,viejomalabarista?Fueustedquiensugiriólanecesidaddequediéramos un empujoncito al destino, y que pidiéramos a los Marliir queaceptaranserlosanfitrionesdelosfestejosporelcumpleañosdelrey.

Vangerdahastsintióqueseestabasonrojando,perofueincapazdecontrolarsureacciónespontánea.

—Esposiblequeestavezhayapresionadodemasiado,mi señora—dijoelmagosupremoenuntonodevozcarentedeinflexiones.

Page 50: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Demasiado?—preguntóFilfaeril—.Siloshechizaustedconsuma...—¡Osaseguroquenohehechotalcosa!—exclamóVangerdahast,enojado

—.¿Querecurraamimagiaparamanipularlasemocionesdelaprincesa?—Sólocomoúltimorecurso—gruñóAzoun—.Díganosquéhizo.—Fueunacositadenada.—Vangerdahastlevantósumano,presionandoel

pulgaryel índiceparaacompañarsuspalabras—.Sólo fueronunaspalabritas,deverdad.

—¿Susurradaaoídosde?—preguntóFilfaeril—.¿DeladyMarliir?—Por poner un ejemplo —admitió Vangerdahast—. Pero eso no es lo

importante.—¡AhoraentiendoporquélemaltrataTanalasta!—Elreysacudiólacabeza,

incapazdedarcréditoasusoídos—.Esonoexcusaesatonteríadeltemplorealqueselehametidoenlacabeza.LamitaddelanoblezadelreinoseconvertiráaChauntea aunque sólo sea por ganarse el favor de la reina, y la otramitad selevantaráenarmasparadefendersuspropiascreencias.¿Cómopuedepretendermihijaqueloaceptesinmás?

—Porquesinolohacéis,sureputaciónquedarápor lossuelos—respondióFilfaeril. Se acercó a la chimenea para observar las llamas, lo cual privócompletamenteaVangerdahastdelcalordelfuego—.Disculpadmepordecirosesto, Azoun, pero creo que aquí somos nosotros los cortos de entendederas.Nuestrahijasabeperfectamenteloquehace.

Azounfruncióelentrecejo.—Asumamosqueesoescier...Pero¿conquéobjeto?—Paraforzarnosaactuar,porsupuesto—dijoFilfaeril—.Estáclaroqueno

quiereserreina.Antesdequeelmonarcapudiera replicar,Vangerdahast sehabía levantado

delasillaysehabíasituadoentreelreyylareina.—¡Mejorseráquenosaquemosconclusionesprecipitadas,señora!Nadieha

oídoaTanalastadecirtalcosa.Lareinagirósobresustalonesconunavehemenciaque,hastaelmomento,

parecíacotoprivadodeenvenenadoresyconspiradores.—¿Y a usted qué más le da, viejo intrigante? Nunca quiso que Tanalasta

fuerareina,nodesdequeempezóasentarseenelregazodeAlaphondarenlugardeenelsuyo.

Page 51: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Vangerdahasthizounesfuerzoparasobreponersealafuriadelareina,yenese preciso momento observó el primer atisbo de debilidad en su carácter,cuarentaañosdespuésdehaberseconocido.Noera laprincesaquien teníasusreservaspara ceñir la corona, sinoFilfaeril.La reinanopodía soportarque suhijasesacrificaraysufrieraalconvertirseenunapersonadiferente,muchomásfuerte,deloqueleexigíasupropianaturaleza.

Si el anciano mago hubiera conocido aquellos sentimientos hacía un año,antesdepartirdeviajeconTanalasta,quizáshubiesepodidocumplirsusdeseos.Filfaerileraparaéllomásparecidoaunahermana,unaesposaounaamante,yno lahabríaheridonipor todos los tesorosdelMillardeMundos.Peroyaerademasiadotarde.Dibujóensurostrounaenigmáticasonrisa,yseenfrentóalamiradafuriosaconunafieradeterminaciónqueenrealidadnosentía.

—Loquevosdecísnoseajustaalaverdad,asídesimple,miseñora.Simehemostrado duro con la princesa, ha sido únicamente porque vos y el rey oshabéismostradodemasiadoblandosconella.

—¿Qué insinúausted,mago?—preguntó la reina, echandochispaspor losojos.

—Quéhabéisechadoaperderavuestrahija,majestad.Unpecadoelvuestrocomprensible,excepto,claroestá,porelhechodequesetratadelaprincesadelacorona,herederadeCormyr.

—¡Cómoseatreve!Filfaeril estiró la mano con tanta rapidez que hubiera hecho trastabillar a

VangerdahastsiAzounnolahubieracogidodelamuñeca.—Aúnno, querida, aúnno.—LamiradadeAzoun tambiénhablabade su

enojo,tantocomoladesuesposa—.Antesquieroqueseexplique.Vangerdahastsoltóunsuspirodealivioparasusadentrosysevolvióhaciael

rey,antequieninclinólevementelacabeza.AlmenosAzounnologolpearía,amenosquefueraparamatarlo.

—En realidad esmuy sencillo,majestades—dijo—.Entre la infancia y laentradaenlavidadeunadultoexisteunperíodoenqueunodeberebelarse.Vosylareinahabéissidounospadresperfectos,peroalgoblandos,yvuestrashijasno han tenido contra quien rebelarse. Yo he cargado con el privilegio derepresentaresepapelparaTanalasta.

—¿De modo que todo este tiempo la ha provocado deliberadamente? —

Page 52: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

inquirióFilfaeril.—Más o menos —respondió Vangerdahast, que parecía orgulloso de sí

mismo—.Yodiríaquenolohehechotanmal,¿quéosparece?La rapidez de reflejos de Azoun volvió a impedir que la reina pudiera

golpearalancianomago.Vangerdahastsesintiórotopordentroalcomprenderquelafuriaqueleíaenlosojosde lareina tardaríamuchoendesaparecer.Sinembargo,hayocasionesenqueesnecesariopagarunaltopreciopordecir lascosastalycomoson.

—Quieroquedejedehacerlo—dijoAzoun—.Porlovisto,nosirvedenada.—Temo que ya no es posible.—Vangerdahast no disfrutó diciéndoselo al

monarca—.AhoraqueyasehadadoriendasueltaalafuriadeTanalasta,éstanodesaparecerá sin más, sobre todo teniendo en cuenta que ella misma la haalimentadodurante losúltimosveinteaños.Tendráqueseguir su rumbo,y sinduda es preferible que esté enojada conmigo que con vuestrasmajestades.Deesemodo,evitamoslaposibilidaddeunatraición.

—¿Haperdido la cabeza?—preguntóFilfaeril—. ¿Traición? ¿Por parte deTanalasta?

—Talcosanosucederá—aseguróVangerdahast—.Talycomoyahedicho,lasituaciónestábajocontrol.Tanalastaseconvertiráenunareinaespléndida.

—¡Yuncuerno!—repusoAzounindignado—.Supongoquelosiguientequemevaustedapedir,esquelepermitaconstruiresetemplorealdeChauntea.

—Por supuesto queno.Lodel templonome lo esperaba.—Vangerdahasthacía un esfuerzo por no perder la paciencia—. Pero tendré que encargarmepersonalmentede ello.Si empezáis adesautorizarla ante laque será supropiacorte...

—¡Yosoyelrey!—rugióAzoun—.¡HaréloqueseamejorparaCormyr,ysi es necesario negar a la princesa de la corona la construcción del dichosotemploconelquejugar,loharé!

—¿Conelquejugar?—Vangerdahastlevantólamiradaaltecho—.Deeso,precisamente,osestoyhablando:noesunaniña,majestad.Esunaprincesadetreinta y seis años que necesita un marido que sea adecuado, y cuanto antesmejor.

—Nomegustanadatodoesto,Azoun.—Filfaerilempezóacaminarporlaestancia,endirecciónalapuertaqueconducíaalashabitacionesqueleshabían

Page 53: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

asignado—.¿Quésabráelmagosobrelaeducacióndemishijos?Yoconozcoamihija.Ellanoquiereserreina,yyoopinoquenodebemosforzarla.Además,Alusairesunañomenorqueella.

—¿Alusair?—exclamóVangerdahast,perdiendoelcontrol—.¿Yquiénharádeellaunareina?Ellasíquenoquieresabernadadelacorona,ypersonalmentenosabríapordóndeempezarparasolucionarsusproblemas.

—Mucho me temo que Vangerdahast tiene razón en cuanto a eso —dijoAzoun dirigiéndose a su esposa, que ya se marchaba—. Si no queremos queTanalastaseareina,aduraspenaspodremosconseguirqueAlusairlasustituya.

—Entonces quizá sea preferible que adoptes a otro heredero, esposomío,alguienaquienVangerdahastpuedaamoldarparaqueseaenelfuturounbuenmonarca—dijoFilfaeril,conunafrialdadequiparablealhielodesumirada—.Peromuchometemoquenecesitarásdeunareinamás jovenqueyo.Unaqueseaunadécadamásjovenquecualquieradetushijas,dehecho,paraquepuedasasegurareltiro.

Filfaerilcerrólapuertaalsalir.Azounsuspiróysehundióen lasilladondeellasehabíasentado;después

arrojólacoronaalsueloyempezóafrotarselassienes.—Vangerdahast,porfavor,dígamesitienelamenorideadeloqueestáusted

haciendo.—Porsupuesto,sire.Recordaréiscómoosayudéaconducirosatravésde...Elmagofueinterrumpidoporalguienquellamabaalapuertaconapremio,y

sin esperar respuesta, Alaphondar asomó la cabeza por la puerta. Su largamelena blanca parecía más enmarañada de lo habitual, y a juzgar por laexpresióndesurostro,cualquierahubieradichoqueestabarendido.

—Ruego excuséis esta interrupción, sire, pero unamultitud de clérigos dealtorangosehapresentadoenelpatiodelosMarliir.

—Sindudahanvenidoparaofrecerseaestablecertemplosrealesporcuentapropia—aventuróAzoun.

Elsabiosupremodelacortesemirólapuntadelospies.—Yomásbiendiríaquehanvenidoparaalgomásqueofrecerseaello.—Heaquíelcomienzo.—Elreyexhalóprofundamente,antesdeagacharse

arecogerlacoronadelsuelo—.¿Algunaotracosa?—Así es, sire.Merula el Portentoso solicita vuestro permiso para celebrar

Page 54: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

una entrevista con Vangerdahast, sobre los problemas que se derivarán de lasubversióndelosmagosguerrerosenfavorde...

—DígaleaMerulaquemástardehablaréconél—interrumpióVangerdahast—,yasegúrelequelaposicióndelosmagosguerrerosnocorreningúnpeligro.

AzounmiróaVangerdahastporelrabillodelojo.—¿Estamosmuysegurosdenosotrosmismos,noesasí?—Bastante seguros —replicó el mago, dando a entender una mayor

conviccióndelaquesentíarealmente.Elsabiosupremonosehabíaretirado.—¿Algomás?—preguntóAzoun.—Me temo que sí, majestad. El duque Marliir exige que lo recibáis en

audiencia—dijoAlaphondar—.EstámolestoporquelepidieraisserelanfitrióndeunafiestaenlaqueTanalastaanunciaríaquenopensabacasarseconsuhijo.

—Por supuesto. Acompáñelo usted aquí. —Azoun dio un hondo suspiro,jugueteandoconlacoronaentrelasmanos—.Señormago—dijoobservandoaVangerdahast—, para cuando termine el día, estoy convencido de que tendráustedunplanpararesolverelbrillantelíoquehaorquestado.

—Porsupuesto,sire.—Vangerdahastcogiólacorona,ylapusotaninclinadasobre la cabeza deAzoun que cualquiera hubiera dicho que elmonarca habíacelebradosucumpleañosportodoloalto—.Serácomohabéisordenado.

Los establos olían a paja, cuero y a escarcha del amanecer, y también alresultado del trabajo duro y honesto que algunos se habían guardado demantenerocultoalosojosdeTanalastadurantebuenapartedesuvida.CuandoregresaraaSuzail,echaríaenfaltaelolorquederivadelesfuerzo,aunquesabríadónde podría encontrarlo cuando el aroma del ramillete de perfumes yprevaricacionesdepalaciosevolvierademasiadoembriagador.Tanalastadeslizólas riendas por el cuello de lamula, ajustó las cinchas y tendió las riendas almaestrede agriculturaFoley, que seguía sentadoen el pescantedel carro.Losdemásmonjespermanecíanarrodilladosenelvehículo,consusherramientasyequipo,ansiososporenfrentarseaunajornadadetrabajo.

Elrumordeunospasosprocedentesdelexteriorreverberóenelinteriordelestablo.Tanalasta se volvió y vio acercarse a sus padres bajo la luz tenue del

Page 55: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

amanecer.LosseguíanVangerdahastylahabitualcohortedeguardias.Aunqueelsolapenastardaríaunahoraenbrillarenloalto,parecíansoñolientosajuzgarporlasbolsasquelucíanbajolosojos,ytambiénporquenosehabíanpeinadoconelcelohabitual.

—Elreyylareina—dijoOwden—,ynoparecenmuycontentos.—Yonoaventuraría tantosóloporsuaspecto—repusoTanalasta—.Noes

costumbre en palacio levantarse antes del amanecer. —No hacía mucho queTanalasta hubiera considerado el hecho de levantarse tan temprano como unainterrupción innecesariadel sueño—.SeguroqueVangerdahasthapasado todalanocheintentandoconvenceramispadresdequedebenoponersealacreacióndeltemploreal.

ElrostrodeOwdenadoptóunaexpresiónafligida,peroTanalasta lesonriópara que se relajara, antes de acercarse a la salida del establo y saludar a suspadres.

—Majestades,noesperabaveroslevantadostantemprano.—¿No?¿Entoncespensabasescabullirteamparadaenlaoscuridad?Elreylopreguntóconironía,peroanadieseleescapóelreprocheeneltono

de su voz.Tanalasta pudo advertir que existía cierto distanciamiento entre suspadresyelmagodelacorte.Aunqueporreglagenerallostreseraninseparables,Azoun y Vangey apenas se miraban, mientras que su madre permanecíaligeramenteapartadadeambos.Tanalastaseinclinóantesupadre,respondiendoalairritacióndeltonodesuvoz.

—EscostumbredelasgentesdeChauntealevantarsetemprano—amedidaqueasíhablaba, losguardiasrealesformaronunpequeñocírculoalrededordelgrupo, para evitar que ninguno de los muchachos que servían en el establopudieranoírlaconversación—.HemosrecibidoinquietantesnoticiasdeTyrluk.Laplagaafectaadiezgranjassituadasalrededordelpueblo,ylacosechaestabaapuntodeperdersecuandopartióelmensajero.

Owden Foley pasó de largo junto a un guardia para ponerse junto aTanalasta.

—A este paso, majestad, todos los campos entre Carretera Alta y CuernoAltoquedaráncompletamentearruinadosendiezdías.

—Poresemotivoesporloquemantenemosexistenciasdeemergenciaenlosgranerosdelrey.—Azounignoróalmaestredeagriculturaysiguióobservandoa

Page 56: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Tanalasta—. No hemos visto a la princesa en todo un año. Preferiría que nohuyeradeesta...

—¿Endiezdías,decís?—interrumpióVangerdahast,dirigiéndoseaOwden—.Muyrápido,¿noleparece?

—Estaplagaeslamásrápidaquehevisto—asintióOwden,hosco—.Sinoactuamosrápidamente,todaCormyrperderálacosechadelaño.

—¿Deveras?—Vangerdahastseacariciósulargabarba,ysevolvióalarealpareja—.Majestades,quizátengamosantenosotrosunproblemaqueexigetodanuestraatención.

Azounfruncióelceño,confundido.—Ayermismo,ustedmedijoqueMerulaelPortentoso...—TemoqueTanalastaestéenlociertorespectoaél—replicóVangerdahast,

volviendoainterrumpirlo—.Amenosquequeráisdestriparundragón,oaunacompañía de orcos durmiendo a la bartola, Merula el Portentoso es unzarandeadordevaritas.

Elreyylareinaintercambiaronunamiradadeincredulidad.—¿Disculpe?—dijolareina.—Merula no distinguiría una plaga de una erupción cutánea—respondió

Vangerdahast—. Me aseguró que la plaga no se extendería más allá de lasmontañas,yaldíasiguienteyalatenemosenTyrluk.Tratándosedeplantas,lomejorquepodemoshaceresconfiarplenamenteenelmaestredeagricultura.

TanalastasepreguntóquéestaríatramandoVangerdahast,yfruncióelceñocuandoelancianocharlatánsedirigiódenuevoaOwden.

—MaestredeagriculturaFoley,¿cuálpuedeserelorigendeestaplaga?—Primeroaparecióenlasmontañas,ytienesusraícesbajolasuperficie.—

Owdenseacariciólabarbillaconexpresiónpensativa,antesdeañadir—:Podríatratarse de un hongo de las cuevas propagado por los orcos. Esas asquerosascriaturaspasanbuenapartedesutiempogateandoporlascavernas,yunabandaerrante podría suponer la explicación de por qué la enfermedad parecereproducirseenlugaresdistantesentresí.

—Excelente observación, Owden... si me permite ser tan informal—dijoVangerdahast.

—Porsupuesto,señormagosupremo—respondióOwden.—Llámeme Vangerdahast, por favor, o Vangey si así lo prefiere. No es

Page 57: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

necesarioguardar las formalidades cuandohablamos enprivado.—El ancianomagomiródereojoaTanalasta,yaprovechólaoportunidadqueselebrindabaparaañadir—:Comoyasabrá,amenudosemeconocepor«elmuycondenadoyviejoAgitavaritas».

—¿En serio? Primera noticia —dijo Owden, mintiendo de maravilla.Tanalasta había pasado los primeros diez días de estancia en Huthduthquejándosedelmagoypocomás,yloconsiderabauntributoalapacienciadelmaestredeagriculturaelhechodequenolepidieranquesefuera—.Laprincesasiemprehabladeustedcontalrespetoquecualquierapensaríaqueessupadre.

—Quéamableporsuparteexponerlodeesaforma.Tanalasta sospechaba del tono educado de Vangerdahast, y estudió a sus

padresparaversidescubríaporquéelmagosehabíaempeñadoengranjearselaamistaddeOwden.Inclusobajolaaurorarosáceaqueaesasalturasiluminabalaentrada a los establos, sus expresiones traslucían lamisma confusión que ellasentía.

—Majestad—dijoVangerdahast,volviéndosehaciaelrey—,quizádebamosenviarunmensajeroaCuernoAltoparaquetripliquenlaspatrullasdebúsquedadeorcos,yseocupendealejaraesasbestiasdeCormyr.Simepermitístomarprestadosalgunosexploradoresde losDragonesPúrpura, también instaréa losmagosguerrerosparaquedespachenalgunosequiposysellencualquiercavernaenlaquepuedanhaberserefugiadolosorcos.

—Locuallepermitiráafirmarquehansidolosmagosguerrerosquieneshanimpedidoqueseextendieralaplaga—repusoTanalasta—.Yaveopordóndeva,viejoladrón.

Vangerdahast sevolvióhaciaella conunaexpresiónde inocenciadibujadaenelrostro.

—Intentoimpedirqueseextiendalaplaga—dijo—.Creíqueeraesoloquevosqueríais.

—Por supuesto —aseguró Tanalasta—, pero si de veras cree que podráutilizarelconocimientodeOwdenpararestarméritosaltemploreal...

—Vangerdahastnoestárobandoméritosanadie—dijoAzoun—.Nohabráningúntemploreal.

—¿Qué?—Tanalastagirósobresustalonesparaenfrentarseasupadre,ylohizotanrápidoquealgunosguardiassepusieronnerviosos—.¿Habéispermitido

Page 58: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

queVangerdahastosconvencieradeello,sinescucharmeantes?Esonoesjusto.—De hecho, Vangerdahast no ha dicho una sola palabra en contra de tu

templo real—dijo el rey—.Tumadre y yo apenas nos habíamos retirado delbailecuandoalgunosclérigosdealtorangoempezaronareunirseenelpatiodearmas de los Marliir, insistiendo en que el palacio debía establecer templosrealesparacadaunodesusdiosesydiosas.

—Y¿porquéno?—preguntóTanalastasinelevareltonodesuvoz.Owdenpermanecía a su lado, inalterable. Habían decidido de antemano que lamejorestrategiaeraqueOwdenmantuvieraunairedepacienteconfianzaensímismo—.Siempreycuandocadaiglesiapagueelcostedesuconstrucción,noveoquémalpuedecausarsealosdemásdioses.

FilfaerilobservóaTanalastacomosisuhijaestuvieraloca.—¿FavoreceralPríncipedelasMentiras?¿OalaDoncelladelDolor?—La

reina sacudió la cabeza como si fuera incapaz de dar crédito a sus oídos—.QuizátúmismadeberíaserigirteenprimeraacólitarealdeLoviatar,porquenosabeseldisgustoqueestásdandoatuspadres.

Tanalastaguardósilencio,noporquenohubierapreparadounarespuestaantesemejanteargumento,sinoporquelehabíasorprendidooírloenbocadelareina,en lugar de la deVangerdahast.Antes, sumadre siempre la apoyaba contra elmago, y el hecho de ver cómo intercambiaban los papeles la había cogidodesprevenida.Sonrióaunodelosmuchachosquetrabajabanenlosestablos,queen ese momento pasaba cerca con dos cubos llenos de leche de cabra, einmediatamenteclavósusojosensumadre.

—Eltérmino«real»implicaelapoyodeunmiembrodelacasaObarskyr,¿ono?—Tanalastareprimióeltonodesuvozporquenopodíahablaralareinadeesemodo—.TengolasuficientefeenlafamiliacomoparacreerquenisiquieraelnuevoSerafíndelasMentirasdeCyricpodríahaberdispuestoalgoparecido.

—Y yo comparto esa fe —dijo Azoun. Al contrario que Filfaeril, el reyhablaba con voz firme y paciente—.Pero hay otras consideraciones a las quedebemos dar preferencia. Primero, ya sabes cómo se apuntan los nobles acualquiercosaquehacemos.

—Pueshaycaprichosmuchopeores,digoyo.—Quizá, pero debemos también pensar en los magos guerreros.

Consideraránungraveinsultoasuhabilidadylealtadelquelacoronaautorice,

Page 59: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

depronto,elestablecimientodeunanuevaordendemagos.—Nodeberíasernecesariorecordaralaprincesadelacoronaelimportante

papelquelosmagosguerrerosdesempeñanenelbienestardelreino—añadiólareina. El amanecer se había tornado amarillo, y bajo la luz dorada FilfaerilparecíamásunserafíncelestialenfadadoquelamadredeTanalasta—.Nidelospeligrosquederivaríandeminarsuposición,creandounambientedediscordia.Estamismamañana,heoídoavariosmagostacharatusmonjesde«pedigüeñosmágicos»e«hijosdemamá».

—Nolohacenconmalaintención,porsupuesto—sedisculpóVangerdahast—. En cuanto se presente la oportunidad, hablaré con ellos sobre el uso desemejantesepítetos.

—Noesnecesario—dijoelmaestredeagricultura,quenopudodisimularlaindignación del tono de su voz—: Comprendo sus celos... bueno, suresentimiento.

Vangerdahastse limitóasonreírante loque todossabíanqueeraundeslizintencionado,yTanalastaempezóatemerquesumadrepudieratenerrazón.SiOwden no podía manejar a Vangerdahast cuando se mostraba tan simpático,temblaba sólo de pensar en la terrible enemistad que se desataría entre amboscuandoelancianomagodierariendasueltaasuindignación.

—Silacoronadebetemerlasconsecuenciasquederivaríandelmalestardelosmagosguerreros—dijoTanalastaalareina—,entoncesesprobablequenoseanunfactortanimportanteparaelbienestardelreino.—SonrióendirecciónaVangerdahast—. Estoy convencida de que podemos confiar plenamente en ladestreza delmago supremo paramantenerlos controlados.De veras, sería unalástima que la política nos impidiera hacer lo que es mejor para el reino. ElpropioVangerdahasthaseñaladoquetansólolosclérigosdeChaunteapuedentratarunacrisiscomoésta.

Incluso estando como estaba, de buen humor, aquello fue demasiado paraVangerdahast.

—Eso no es exactamente lo que he dicho, jovencita. Una plaga sinimportanciacomoéstanosuponeunacrisisparaunreinocomoCormyr.

—Y tampoco nos interesa que lo parezca —precisó Azoun—. Crear unanuevaorganizaciónpara responderaellanoharásino fomentaresa impresión.Provocará un pánico generalizado que desembocará en robos, saqueos y otras

Page 60: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

tropelías.Losiento,Tanalasta.TendrásqueanunciarqueChaunteahapedidoaOwdenyasusclérigosqueregresenaHuthduth.

—Peroelcasoesquenohasidoasí—replicóTanalasta—.Ladiosanuncaharíatalpetición.

—NotienenadaqueverconOwdenoChauntea,nisiquieracontudecisiónde venerar a laMadre—dijo Filfaeril—. El caso es que éste no es el mejormomentoparaestablecerun templo real.Nodebisteanunciarlo sinconsultarlocon nosotros, y estoy segura de que ya lo sabías. El hecho de que intentarasobligarnosaelloes...tanimperdonablecomoqueVangeyteincomodaradeesaformaensuempeñoporquecontraigasmatrimonioantesdequeseademasiadotarde.

—¿Demasiadotarde?—Aquellapreguntalehabíasalidodelalma,porquesumadre había tocado una fibra sensible. Se volvió aVangerdahast, y le dijo—:Eso es lo que se ha propuesto, volver a mis propios padres contra mí paraconseguirsuobjetivo.

Vangerdahast enarcó sus pobladas cejas, y el dolor se dibujó en el brillooscurodesumirada.

—Losiento,miseñora,peronotengolamenorideadeaquéosreferís.—Unmatrimonioacambiodeuntemploreal.¿Eséseeltrato?—Tanalasta

miró a sus padres—. Si lo único que se me permite dar al reino es un hijo,entonces almenos hagamos las cosas bien.Confiad enmí, porque os aseguroque sería preferibledejarmi campoenbarbecho, a que siembreunhombre alquenoame.

Azounpalidecióymiróasualrededorenelpatiodelestablo,paradespuéshaceralgunosgestoscon lacabezayordenara losguardiasque lodespejaran.LareaccióndeFilfaerilfuemuydiferente.Aunqueteníalosojosempañadosenlágrimas, dedicó a Tanalasta la misma mirada dura, capaz de silenciar a lasduquesasdelenguaviperinayalosmariscalesbregadosencienmilbatallas.

—LadecisióndetupadrenosedebeaningunasugerenciadeVangerdahast.—Letemblólavoz,perodiounpasoalfrenteparaacercarseasuhijayañadirenuntonoaúnmásduro—:AlreylepreocupaCormyr.Hallegadoelmomentodequedejesdesertanegoístayhagaslopropio.

—Majestad —suplicó Vangerdahast con los ojos muy abiertos—, nodeberíais.

Page 61: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Enlamanodelmagoaparecióunabolitadealgodón,peroFilfaerillocogióporlamuñecaantesdequepudierarecitarelencantamiento.

—¡Vangerdahast!—exclamó Filfaeril en tono amenazador—. Si lanza esehechizodesilencio,nisiquieraAzountendrásuficientepoderparaquemantengaustedlacabezasobreloshombros.

Labolitadealgodóndesaparecióenlamangadelmago.—Quizá, pero ya ha tenido veinte años para encontrar un marido que le

gustara. Ahora tendrá que apañarse con Dauneth Marliir —dijo mirando aTanalasta.

OwdenFoleysepusojuntoalaprincesa.—Majestad,simepermitísintervenir,creoquehayalgoquedeberíaissaber.—¡No,Owden!—Tanalastacogióporelhombroalmaestredeagriculturay

loempujóhaciaunguardia—.Llévesedeaquíaestehombre.—Nadadeeso—dijoelrey,quehizoungestoaOwdenparaqueseacercara

—.¿HayalgoquedeberíamossaberacercadelestadodeTanalasta?—¿«Estado», padre?—preguntó ésta—. Si hubiera algo que vos deberíais

saber,creoque...—EstoyhablandoconOwden—replicóAzoun.Tanalastaobservófuriosaalclérigo.—Yahaoídoustedcuálessonlosdeseosdelrey.OwdentragósalivaydespuésvolvióamiraraAzoun.—Sire,creoquedeberíaissaberquevuestrahijanopiensaenotracosaque

noseaCormyr.Dehecho,cuandolainvitacióndeladyMarliirllegóaHuthduth,medijoquevolvíaaCormyrparadesposarseconunhombrealquenoamaba.

—Entonces,¿porquénolohahecho?—inquirióFilfaeril.—Temoqueseaculpamía.—Owdensemirabalaspuntasdelospies—.Le

aconsejé que sería mejor reina para Cormyr si esperaba hasta encontrar unhombrealqueamara.

Tanalastatuvoquehacerungranesfuerzoparaocultarsusorpresa,porque,hastaentoncesnosehabíadadocuentade la fértil imaginacióndelmaestredeagricultura.LaverdaderaqueOwdenlehabíadeseadolomejorylehabíadichoque, a juzgar por lo que se sabía del mozo, Dauneth Marliir era un hombreestupendo.Fueentoncescuandoellasalióadarsuúltimopaseoytuvolavisión,porloqueOwdenFoleynotuvoqueconvencerladenada.

Page 62: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Filfaeril abrió unos ojos como platos al oír las palabras del maestre deagricultura.

—En estas presentes circunstancias, su consejo podría ser considerado undelitodealtatraición.

—Osimplementeunbuenconsejo.—AzounmiróceñudoendireccióntantodeFilfaerilcomodeVangerdahast—.EsodebedecidirloTanalasta,ysóloella.Loqueellanopuededecidireseldestinodeltemploreal.AnunciaráquedesdeHuthduthsehallamadoalosclérigosdeChaunteaparaqueregresen.

Vangerdahastsacudiólacabezaconfuerza.—Pero,majestad...—Y confiaremos en nuestros magos guerreros para que resuelvan el

problemadelaplaga—interrumpióAzounlevantandounamano—.Aunquesetomensutiempoparasolucionarelproblema,lasgentesdeCormyrsesentiránreconfortadasconsupresencia.

Tanalastaempezóaperderelrumbo.LasduraspalabrasdeFilfaerillahabíanheridotanprofundamentequeestabadesorientadaynopodíaconcentrarse,porlo que no pudo evitar pensar que había hecho algo terrible para que la reinaestuviera tan molesta con ella. Lo cierto es que el apoyo inesperado deVangerdahast nopudo compensar el enfadode sumadre.Además, habíavistoaquella sonrisa de cobra hechizar a sus oponentes en demasiadas ocasiones,comoparaahoracaerensusredes.

AzounasintióendirecciónaOwden.—Leagradecemoselquehayarecorridoustedtanlargocamino,maestrede

agricultura, pero deberá usted acompañar a sus clérigos de vuelta aHuthduth.Tanalastaseencargarádedarlasexplicacionespertinentes.

La expresión de Owden reflejaba su profunda decepción, pero hizo unaprofundainclinaciónparamostrarsuobediencia,despuéssevolvióycogió lasmanos de Tanalasta para despedirse. Mientras el maestre de agricultura sedespedíadeella,apenaspudooírsuspalabrasporquedeprontosintióelpesodelamiradadesumadre,yalvolversehaciaellaviosuspálidosojosobservándolafijamente.Lagélidaexpresióndelareinahizoqueretrocedieraunpasodeformainvoluntaria,momentoenque la furiadeTanalastasicabe redoblada,volvióahacerseconlasriendas.Noimportabaloquesumadrepudieracreer:laprincesaestabahaciendolomejorparaCormyr,ypermitirquenadieledijeralocontrario

Page 63: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

supondríaundesastreparaelreino.CuandoOwdensedirigióalestablo,Tanalastalocogiódelbrazo.—MaestredeagriculturaFoley,elreycometeunerror.Novoyadarninguna

explicaciónparajustificarsumarcha.Aloíraquello,elrostrodeAzounadoptóunaexpresiónamenazadora.—¿Medesafías?Tanalasta miró a su madre y observó que el labio inferior de la reina

empezabaatemblar.—Debomostrarmefielamisconvicciones,sire—repuso.Owdenpalideciómientraselreysesonrojabacomolagrana.—PrincesaTanalasta,nohayningunanecesidaddediscutirpor...—El caso es que sí que hay una razón, maestre de agricultura —replicó

Tanalasta—.Cormyrlenecesitaaustedyasusclérigos...Tantoahoracomoenelfuturo.

—Yosoyelrey—dijoAzouneneltononeutroqueempleabacuandoestabaapuntodeperderelcontrol—.MisconviccionesdeterminanlasnecesidadesdeCormyr.

—Y¿quésucederácuandoosvayáis,padre?¿DebopediraVangerdahastqueos levante de la tumba para saber cuáles son las necesidades del reino? —Tanalasta sacudió la cabeza—.Debo hacer lo que creomás correcto... y debohacerlo ahora, porque estoy convencida de que en el futuro no tendré otraoportunidad.

Vangerdahast dio un hondo suspiro y masculló algunas palabrasininteligibles, mientras Filfaeril se llevaba la mano a la boca. La furiadesapareció de su mirada, pero volvió un instante después cuando miró aVangerdahast.AzounselimitóamirarfijamenteaTanalastaconunaexpresióncadavezmásdura,mientrashacíaloimposiblepornoperderelcontrol.

—Quizápuedalibrarosdesemejantepeso,princesa—dijofinalmenteelrey—.Osrecuerdoquetengodoshijas.

Tanalastahizounesfuerzopornotrastabillar.—Losé.—Bien —celebró el rey—. Vangerdahast ha sido incapaz de ponerse en

contactoconAlusair.AcompañarásatusclérigoshacialasTierrasdePiedraparabuscarla y le dirás que debo hablar con ella urgentemente. Debe regresar a

Page 64: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Arabel lo antes posible y llevar una vida acorde con la que corresponde a laherederadelacorona.

Tras pronunciar estas palabras, Azoun giró sobre sus talones y se dirigióhacialamansión,dejandoaVangerdahastyFilfaerilinmóvilesyboquiabiertos.Laslágrimasempañaronlamiradadelareina,quehizoademándeextendersusbrazos haciaTanalasta, cuando de pronto se echó lasmanos a la espalda y sevolvióhaciaelmagosupremodelacorte.

—Maldito sea—dijo en un tono de voz tan sereno, que aún pareciómásterrible—.¡Malditosea,mentirosohijodeCyric!

Vangerdahastseencogiódehombros,ydeprontopareciótanviejocomolapropiatierradeCormyr.

—Os dije que ya era demasiado tarde—susurró. Las arrugas de sus ojoscansados enrojecieron y se humedecieron, mientras observaba sus nudososbrazoscomosiseconcentraracontodassusfuerzasparaevitarcogeralareinadelasmanos—.Yolaacompañaré.Nomeapartarédeellaniunsolomomento.

—¿Deverascreeustedqueesometranquilizará?—LareinamiródenuevoaTanalasta,sevolvióysiguióaAzoun.

Tanalastapermaneció inmóvil, intentandocomprender loquehabíapasado,cuandosintióqueOwden lacogíadelbrazo.Hizoungestopara librarsede lamano,puesparasusorpresanonecesitabadesuapoyo.

Nuncaensuvidasehabíasentidotanfuerte.

Page 65: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

E4

steaño,LaÚltimaMoradanocosecharíanabos.Unacapademohocenicientocubríaloscampos,yelairearrastrabaun

olorarancioypodridotanintenso,queTanalastatuvoquecubrirselabocaparaevitar lasarcadas.Pequeños túmulosgrises señalabanel lugardonde los talloshabíanhoradadolatierra,peronohabíanirastrodelasplantas.Alotroladodelcampo,ungranjerolibreysufamiliaseencargabandecargarelcontenidodesuchozaenuncarrotiradoporbueyes.

—¡Porlomássagrado!—maldijoOwden—.¡Quéhorror!—Triste espectáculo —convino Tanalasta. Animó al comandante de su

escolta deDragones Púrpura a disponer un perímetro alrededor de la zona, ydespuésazuzóconlasriendasasucaballoparaquesiguieraandando—.Resultaextrañonohaberencontradootrasseñalesdelaplagaenlazona.

—Síque lo es—dijoOwden, siguiéndola por el bordedel campo—. ¿Porqué semolestarían los orcos en asaltar esta alquería, cuando estámuchomáscercadeunapoblaciónquelasquehemosvisitadohastaahora?

—Quizálesgustenlosnabos—señalóVangerdahast,quecabalgabajuntoaTanalasta—. Dudo que los orcos tengan un motivo para escoger una granjaconcreta.

—Nome interesa tanto el porqué, sino el cuándo—dijo Tanalasta. Hacíakilómetro ymedio que había descubierto el rastro de los orcos, al pie de unacrestamontañosapor laquehabíancruzado.Pesea lasobjecionescarentesdeconviccióndeVangerdahast,laprincesacondujoalacompañíacorrientearriba,siguiendounrastrodesigualdepiedrasremovidasyhuellasarenosasdepezuñas,

Page 66: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

hasta que los llevó a escasos pasos del campo arrasado por la plaga. Sinembargo, al comprobar que no habían asaltado la choza del campesino, sepreguntó si cabía la posibilidad de que los orcos no fueran responsables de laplaga—.Noespropiode losorcos renunciaraunobjetivo tanapetitosocomoesachoza.

—¿Ahoraospreocupaquenoasolaranel lugar?—Vangerdahast levantó lamirada al cielo, haciendo acopio de paciencia—. ¿No estáis perdiendo yabastante tiempopara,además,darlevueltasa lacabezaasemejantescosas?ElreynosenvióalnorteenbuscadeAlusair...

—¿Ycómosabeustedqueesosgranjerosnopodránayudarnos?—Tanalastaobservó al ancianomago—. Conozco la razón por la que el rey nos envió alnorte,ytienemenosqueverconencontraraAlusairqueconalejarmedeArabel.Dudo que, de estar aquí, se opusiera a que nos tomemos algún tiempo paradeterminarsisonlosorcoslosqueextiendenlaplaga.

—De acuerdo—suspiróVangerdahast, negándose a prolongar la discusión—,peronovamosaseguirlos.

Tanalasta estudió al mago con expresión pensativa. Había pasado los dosúltimosdíasintentandoaveriguaraquéjugaba,ylaverdadesquesesentíaalgoincómoda.No sabía si su padre había dicho en serio lo de nombrar un nuevoheredero,aunquelaverdaderaqueleimportabamuypoco.MientrassealejabanacaballodeArabel,lainvadióunainesperadasensacióndealivio,queinterpretócomounindiciodelopocoqueleinteresabaceñirlacoronadeCormyr.

Más tarde, cuando se hubo acostumbrado a la nueva situación, tuvo ciertasensacióndepérdida,yllegóacomprenderqueloquesentíanoeraalivio,sinoorgullo.Porprimeravezensuvidahabíaapostadotodosufuturoporsuspropiasconvicciones.Laposibilidaddequecomoconsecuenciapudieraperderelreinonolaatemorizaba,sinoquelahacíasentirsemásfuerte.

En cuanto Tanalasta tomó conciencia de ello, fue mucho más sencilloconcentrarse en el peculiar comportamiento de Vangerdahast. Dada la actitudque había adoptado con ella, hubiera esperado que aceptara encantado susustituciónenlasucesiónaltronoporsuhermana.Sinembargo,noparecíamuysatisfecho con la perspectiva y la decisión del rey, y desde entonces se habíamostradomuycorrectoconella.Nolequedabaotraopciónquemantenerseojoavizor.EstabaconvencidadequeVangerdahastplaneabaalgunacosa,ycuando

Page 67: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

semostrabacordial,aúneramáspeligroso.—¿Ybien?¿Hacemosuntrato,otendréquemeterosenunsacoelrestodel

viaje? —preguntó Vangerdahast al cabo de un rato, enarcando una de suspobladascejas.

—Esonoseránecesario—replicóTanalasta—.Yonovoyporahícazandoorcos.Sóloquierodescubrirquéhanhechoenestaalquería.

CuandoTanalastaysuséquitobordearonelcampo,elgranjerohizoentrarasu familia en la choza, y se acercó a los visitantes para saludarlos. Pese a latúnicaajadaylamelenadepeloenmarañado,laprincesatuvolacertezadequehabíasidosoldado;esmás,probablementehabíaservidocomoDragónPúrpurahasta que aceptó un pedazo de tierra en la frontera, a cambio de la paga delicencia.

Cuando se acercó al hombre, Tanalasta deslizó el anillo en su bolsillo, ydevolvió el saludo con cierta torpeza. Como princesa ignoraba el protocolomilitar, pero lo cierto es que su compañía viajaba de incógnito disfrazada deDragonesPúrpura.AligualqueVangerdahastyOwden,Tanalastalucíalacapanegra de un mago guerrero, mientras que la docena de clérigos que losacompañaban estaban vestidos con las capas y cotas de malla de cualquierDragón.

El granjero paseó la mirada de tal forma que pareció asimilar toda estainformaciónenuninstanteydespuésvolvióamiraraTanalasta.

—HagGordonavuestrospies,señoramago.NosabíaquehubieranasignadounanuevapatrullaaldesfiladerodelGnoll.

—Asíes—replicóTanalasta.PoreltonodevozdeHag,laprincesadedujoque el hombre pensaba que no se trataba de una patrulla ordinaria—. ¿Sirvióustedcon...?

—LosViolentosdeHullack.—HagposólamiradaenlascapascarentesdedivisaalgunaquelucíanlosclérigosdeOwden,antesdeañadir—:Miseñora.

Tanalastaadvirtióqueestabafaltandoaalgunanormadelestamentomilitar,peronopodíarevelarlaverdaderanaturalezadesucompañía.Aunqueestuvieracompletamente segurade la lealtaddeHag,nohabíanecesidadalgunadequesupieraquelaprincesadelacorona(o,entodocaso,laanteriorprincesadelacorona) cabalgaba por el reino protegida tan sólo por unamodesta escolta deDragonesPúrpura.Unonorevelaesetipodeinformaciónalprimeroquepasa.

Page 68: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Tanalastaseñalóconlamanoloscamposdelveteranosoldado.—Pasábamos por aquí cuando observamos huellas de orcos junto al

riachuelo.—¿Orcos?—Hagabriólosojoscomoplatos—.Nohayorcosenestaparte

deldesfiladero.—Reconozco las huellas de orcos cuando las veo —insistió Tanalasta—.

Inclusobajoelagua.Tienenlacostumbredecaminarporelagua,paraquelosperrosnopuedanseguirsurastro.

Hagenarcóunacejaylaexaminódearribaabajo,momentoenqueTanalastaadvirtiósuerror.LaprincesasevolvióhaciaOwdenyVangerdahast.

—Estonoescosadelosorcos—dijoseñalandoloscamposazotadosporlaplaga—.Almenosnodelosorcosalosqueestamosbuscando.

Owdenfruncióelceño,dirigiendosumiradaaloscamposdesolados.—Asíes.Lacoincidenciaes...—Simplementeeso:unacoincidencia...oquizásexistaalgunarelaciónque

noalcanzamosacomprender—dijo—.Pesealacorriente,lashuellasquevimosenelarroyoapenasteníanunashoras.

—Ymisnabosempezaronaecharseaperderharáunosdiezdías—señalóHag,aquiennocostórelacionarlaspreguntasdeTanalastaconelestadodesustierras—.¿Quéestábuscando?

—Como sargento veterano de los Violentos de Hullack, sabe ustedperfectamente que no debería hacer tales preguntas —dijo Vangerdahast.Aunque sus palabras no consiguieron intimidar a Hag, sí impresionaron aTanalasta. Le parecía imposible que Vangerdahast, por mucha memoria quetuviera, recordara el rango de todos y cada uno de los hombres que habíanservido,oservían,en losDragonesPúrpura.Elmagoañadióunacoletillaparaimpresionar al granjero—:De creer que podía ser asunto suyo, le hubiéramosexplicadoporquénuestracompañíacarecedeinsignia.

—¿YtambiénelporquédequesusDragonesciñanmazaenlugardeespada?Seacualfuereelmalqueaquejaamistierras,lociertoesquetambiénaquejaaotras,yelviejoRayosycentellasdebeestardelosnervios.

ElrostrodeVangerdahastenrojeciócomolagrana.—¿«Rayosycentellas»,sargentoGordon?—ElmagosupremodeCormyr—aclaróelgranjero.

Page 69: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Tanalastatuvoquemorderselalenguaparanosoltarunacarcajada,perolociertoesqueelrostrodelmagoadquiriótodasuertedetonalidades,acualmásoscura.Sielsargentoeraconscientedelopeligrosoqueeradespertarlairadelmagoqueteníaantesínodiolamenormuestradeello.

—Todos conocen cómo agarra las riendas del poder el viejoDedosenjoyados.—Tras pronunciar estas palabras, Hag echó un vistazo a lasmanos enjoyadasdeVangerdahast, y se acercóunpaso—.Nunca reuniría unacompañíadeclérigossielasuntofueraunanadería.Siélestáasustado,tambiényoloestoy.Demodoque,dígame,señor,¿quéleocurreamistierras?

VangeymiróaTanalastaconlosojosinyectadosensangre,peronodijoniuna palabra. No tenía por qué. Uno de los muchos recelos de su padre aestableceruntemplorealhabíaprovocadoenellauntemorinnecesario,yahoracomprendíaporqué.

—YoensulugarnosacaríaconclusionesprecipitadassobrelacompañíadelasMazassinInsignia—dijoTanalasta.Denuevoelgranjeroenarcóunacejaaloírelsupuestonombredelacompañía,ylaprincesanopudoevitarpensarqueestabacometiendounerrordeprotocolo, errorquealimentaba ladesconfianzadelgranjero—.PerocomoantiguomiembrodelosDragonesPúrpura,estáustedobligado a servir a la corona cuando se requieran sus servicios. ¿Deborecordárseloparaconseguirsucooperación?

Hag parecía más intimidado por la amenaza de Tanalasta, que por elazoramientodeVangerdahast.

—Esedeberesnecesarioinvocarlomedianteunescritoreal.Sipuedeustedmostrármelo,aceptarégustososusórdenes.Deotromodo,notengoporquédarmásrespuestasquelasquecreaoportuno.

—¡Unmandatoreal!—exclamóVangerdahastaltiempoquehundíalamanoenlatúnica—.¡Menudomandatovoyadarleaustedaho...!

—Faerunyatienesuficientessapos,señormago.—Tanalastahizoungestopara impedir que Vangerdahast pudiera atacar al campesino—. Aunque estoyseguradequeesteveteranomiembrodelosDragonesPúrpuraguardarásilencio,mepreguntosipuedoesperarquesushijoshaganlomismo.

Tanalastaobservólachoza,dondelafamiliadelgranjeroasomabalacabezapor la puerta entreabierta.Los ojos deHagbrillaron febriles al comprender, yasintió con gravedad, como la princesa había previsto. No había vivido en el

Page 70: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

palacio de los Dragones Púrpura durante casi cuatro décadas, sin desarrollarciertahabilidadparahacerquelagentesesintieraespecial.

Haghizoungestohaciaelextremodelaplantación.—Acompáñenme—dijo—,hayunacosaquedeseoenseñarles.—Cómono.—Tanalastasonrióydesmontódelcaballo,agradecidadequeal

menos parte de su experiencia en palacio fuera útil pese a lo lejos que seencontraban de Suzail. Animó a Owden y, a regañadientes, también animó aVangerdahast paraque la siguiera—.Hag,puestoqueyahadeducidousted laverdadera naturaleza de nuestros «Dragones Púrpura», ¿le importaría que seencargarandehacer loquepuedanparasalvar sus tierras?Dudoquepodamoshacernadaporlacosechadeesteaño,peroquizápuedanimpedirquelaplagaarruineelsuelo.

LaconsternacióndeHagafloróalaexpresióndesurostro,yTanalastasupoentoncesquenisiquieraselehabíapasadoporlacabezaquesustierraspudieranecharseaperderparasiempre.

—Agradecerémucho todo loquepuedanhacer—respondió el granjero—.Yaseráduro tenerque trabajaren laciudad todoesteaño, sin saber sipara laprimaverapodrécultivardenuevoestastierras.

Owden hizo un gesto con la cabeza a sus clérigos. Desmontaron y sedispusieronapreparar laspocasherramientasapiladasenelcarrodelgranjero,porquehabíandejadosuspalasyazadasenArabel.Peseahaberleofrecidosuayuda,Hagseguíareacioafacilitarlesinformación.LlevóaTanalastayasusdosacompañantes hasta la esquina del campo, donde se detuvo y los miróexpectante.

Tanalastahundiólasmanosenlosbolsillosdesucapa.—DebeustedjurarporsuhonordeDragónPúrpuraquenoexplicaráanadie

loquevoyadecirle.—Condiestroademán,sepusodosdelosanillosmágicosque Vangerdahast la había obligado a llevar, antes de partir de Arabel—. Nopuedeustedexplicarloniasuesposa.

—Lojuro—dijoHag—.Nisiquieraamiesposa.—Muybien.Estábienclaroqueustedsehadadocuentadequenosoyun

magoguerrero,yque lamayorpartede losmiembrosdemicompañíanosonDragonesPúrpuranormalesycorrientes.

Vangerdahastseaclarólagargantaaposta.

Page 71: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Miseñora,nocreoqueseamuyaconsejable...—Es mi decisión, señor mago. —Tanalasta sacó la mano del bolsillo, y

mostróaHaglafranjadoradaenformadeanilloquelucíauncomandantedelosDragones Púrpura—. No me cabe la menor duda de que también reconoceráesto,yasimismoloquesignificaparaalguiencapazdedistinguirentreunatropadesoldadosyuncampodetulipanes.

—Sé lo que es, como usted dice—dijoHag—, pero no seme ocurre unarazónparaqueustedlotenga.

—Por supuesto que sí.—Tanalasta señaló a la docena de clérigos que sedisponíanatrabajarenelcampo—.Yasehadadocuenta,ylaverdadesquenohatenidoningunaayudapornuestraparte.TenemosintencióndeatajarlaplagaantesdequeseconviertaenunproblemaserioparaCormyr.Paraconseguirlo,necesitamosencontraralosorcosquelaextienden.

Hagentornóunojoyreflexionóuninstante,antesdehablar:—Supongoqueenrealidadcarecedeimportanciaquiénpuedaserusted.—Nosivalorasulengua—amenazóVangerdahast.Elgranjeroasintióaregañadientesycogióunavarademadera.—Seguro que les interesará lo que les voy a enseñar —dijo mientras

trabajaba.Hagempezóaescarbarelmantilloquecubríaelcampo,hastallegaralsuelodetierrablandaquehabíadebajo—.Imaginoquedebiódeestarcercadenosotros. Los perros no empezaron a ladrar hasta que estuvo en el campo, ycuandoyoloviyaestabaamediocamino.

—¿Quién?—preguntóOwden.—Quienquiera que hiciera esto. —Hag señaló un rastro que había

descubierto.Parecíalahuelladeunpiehumanodesnudo,pero,eramuchomáslargo y tenía una marca imperceptible ante cada uno de los dedos,correspondienteaunagarra.

—Esahuellanoesdeorco—dijoTanalasta.—Amíme pareciómás unmendigo—dijo Hag—.Unmendigo bastante

alto, la verdad, con una capa raída y larga y una especie de capucha. Iba ainvitarloadormirenlacabañadelascabras,hastaquesevolvióparamirarmeytuveoportunidaddeverlelosojos.

—¿Susojos?—preguntóTanalasta.—Estaban inyectadosde sangre.—Hag titubeóantesdeañadir—:Además

Page 72: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

deque...bueno,eradenoche,ybrillabandeunmodoextraño.—¿Cómo?—preguntóVangerdahast—.Seaunpocomásexplícito,sargento.Hagadquirióunportemásorgullosoalerguirlaespalda.—Eradenoche,señormago.Esetiposóloeraunasombra,peropudeverle

los ojos. Brillaban y la verdad es que fue lo único que pude distinguir en laoscuridad.

—¿Leamenazó?—preguntóTanalasta.—En realidad, no —respondió Hag sonrojándose—. Pero consiguió

atemorizarme. Azucé a los perros para que lo echaran de las tierras. Lopersiguieronhastael lugarpordondeentraronustedes,yésa fue laúltimavezquelosviconvida.

—¿Cómomurieron?—preguntóVangerdahast.—No sabría decirle. Por lamañana,mi hijo los encontró durmiendo en la

orilladelarroyo.Nodespertaronjamás.—¿Envióustedasuhijoabuscarlos?—preguntóOwden.—Sí, a llamarlos más bien —respondió Hag, molesto ante el tono de

reprochedelmaestredeagricultura—.Miesposayyoteníamosquetrabajarelcampo.

—¿Laplaga?—preguntóTanalasta.—Descubrimos una franja diagonal justo por donde pasó el visitante

nocturno.Arrancamoslasraícescontiguashastadospasosaamboslados,peroalamañanasiguiente todalacosechasehabíaechadoaperder.—Hagseñalóelcampo—.Yaconocenelresto.

OwdenyVangerdahastintercambiaronunamiradadepreocupación.—Meequivoquéalpensarquesedebíaalosorcos.Losiento—sedisculpó

Owden.Vangerdahastapoyóunamanoenelhombrodelmaestredeagricultura.—Noseaustedtanduroconsigomismo.Eraunateoría,yunabuenateoríasi

mepermitedecirlo.¿Quémáspuedeusteddecirnosdelvagabundo?—preguntóaHag.

—Nadamás—respondióencogiéndosedehombros—.Vinodenochey sefuedenoche,ydeprontotodaslasplantasmurieron.

—¿De dónde vino? —preguntó Vangerdahast, observando la tierramontañosaquerodeabalagranja—.¿Adóndefue?

Page 73: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Ahoranoservirádenadabuscarsurastro.Hacedosdíassoplóunfuerteviento—dijoHag—.Además,yomismoechéunvistazocuandoJarlencontrólosperros.Elvagabundo,ocomoquieranllamarlo,nodejóotrashuellas.

Tanalastaestudiólazona.Lagranjaestabasituadaauncentenardepasosalnorte del riachuelo de La Última Morada, cerca de donde la Vereda de laMontañaseadentrabaenlasestribacionesdelasmontañasdelDientedeDragónhastallegaraldesfiladerodeGnoll.Lavegetaciónalternabaelsaucepeladocontocones de haya, además de piedras y otros impedimentos que hablabanclaramente de las dificultades que tendría un granjero para despejar el terrenopara los pastos. Nadie que se acercara a los campos de Hag, rodeados dearbustos,lohubierahechosindejarunrastroasupaso.

—Nosoyexplorador,perosécómobuscarhuellas—dijoHag,interpretandocorrectamente la mirada escrutadora de Tanalasta—. No hay ramas rotas, nipiedrasvueltas,nitierraremovida,almenosnadaquepuedainterpretarsecomounahuelladesupaso.

Vangerdahasttrazóunalínearectaconsumanodesdelaesquinadelcampohastaellugardondeseencontraban,ydespuéssevolvióparacontinuarlalínea.DiscurríaentredospicosenormesquequedabanalaizquierdadeldesfiladerodeGnoll.

—LasTierrasdePiedra—observóTanalasta.—Bien—asintió Vangerdahast—, supongo que no debería sorprendernos.

UnonopuedeesperarnadabuenodelasTierrasdePiedra.—Quizá podamos averiguar algo acerca del vagabundo si examinamos los

cadáveres de los perros—dijoOwden aHag—. ¿Le importa que les eche unvistazo?

—Siestádispuesto adesenterrarlos.—Hag señalóhaciaunmontículoquequedabajuntoalcobertizodelascabras.

VangerdahastarrugóelentrecejoymiróaTanalasta.—Estoy seguro de que no tengo necesidad de recordarle la naturaleza de

nuestra misión. No podemos perder toda la mañana, para que el maestre deagriculturadesentierreaesaspobrescriaturas.

—Por supuesto que no —dijo Tanalasta, dirigiéndose hacia su caballohaciendo un gesto para que la siguieran—. Usted y yo nos dirigiremos a lasmontañas delDiente deDragón sin perder ni un solo segundo. Elmaestre de

Page 74: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

agriculturaysusclérigospermaneceránaquíparaaveriguarloquepuedandeloscamposdeHag,ydespuésseguiránlapistadelpresuntovagabundo.

AhorasífruncióelentrecejoVangerdahast.—Nocreoqueseanecesarioqueseretrasen.Cualquieradenosotrospodría

informarde...—Ésassonmisórdenes—dijoTanalasta—.Ysipretendeusteddiscutirlas,

sepaquepuedolibrara lasMazassinInsigniadelserviciodelrey.Entalcasotendréqueconfiscarsuscapas,ynotendránmásremedioquecabalgarportodoelreinohaciendopreguntasypersiguiendoavagabundossinningúndisfraz.

—¡Noharéistalcosa!—¿Estáseguro?—Tanalastaseacercóasucaballo,cogiólasriendasquele

tendíaunjovenclérigo,yseencaramóalasilla—.Póngameaprueba.Vangerdahasthizoloposibleporcubrirsuarrugadorostroconunaexpresión

defuria.—Elreytendránoticiasdeesto.—No me cabe la menor duda. Sospecho que lo más probable es que no

constituya ninguna sorpresa para él.—Hizo lo posible por evitar sonreír y sevolvióaHag—:Elreinoledalasgracias,yesperoquelosclérigosseancapacesdesalvarsustierras.

Hagseinclinócuantopudo.—Y usted cuenta con todo mi agradecimiento por intentarlo. Tenga la

seguridaddequeguardarésussecretos...todossussecretos.—Más le vale —gruñó Vangerdahast al subirse a la silla—. Tenga la

seguridaddequeestaréescuchando.Hag volvió a inclinarse, y ante aquella nueva amenaza, el temor lo hizo

palidecer. Tanalasta se despidió de Owden, prometiendo reunirse con él enArabelalcabodeveintedías,antesdehacerungestoalosverdaderosDragonesPúrpuraparaquecerraranelperímetroyvolvieranaformarenordendemarcha.

Al cabalgar por el riachuelo en dirección al vado donde Tanalasta habíadescubiertolaspisadasdeorco,Vangerdahastseacercóalaprincesayledijo:

—Debéis saber que estoy dispuesto a ponerme en contacto con vuestropadre. No podéis pretender ignorar sus deseos y esperar que os perdone pordesobedecerle.

—Mepreocupamáselhechodequepuedahaberorcosporahísueltosqueel

Page 75: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

perdóndemipadre.—Tanalasta señaló el lechodel riachuelo—.¿HaenviadoustedalgúnmensajealCastillodelPeñascoparainformardesupresencia?

—Yo...bueno,sí,porsupuesto.—¿Deveras,Vangerdahast?Lasmejillas del mago supremo de Cormyr se arrebolaron por encima del

pelodesubarba.—EstoyconvencidodequeelcomandantelordTallswordyahaenviadouna

patrullaensubusca.—Seguroquesí.—Tanalastasonrióparasusadentrosantesdepreguntar—:

Dígame,¿cuándooyóustedhablardeesecampo?—¿Alteza?—preguntóasuvezVangerdahast,confuso.—El rangoqueostentabaHagGordon—aclaróTanalasta—.¿Cómopodía

saberlosiBrenTallswordnolehabíainformadosobreelcampoazotadoporlaplaga?Esperoqueelbuensargentono formepartedelengaño.Odiaríapensarque el maestre de agricultura Foley pueda andar por ahí golpeando al primervagabundoqueencuentresintenerunmotivodepeso.

Vangerdahastsuspiróruidosamente.—Por desgracia, mucho me temo que el maestre de agricultura tiene

sobradosmotivosparaello.BrenTallswordmehablódelcampodeGordonhaceunostresdías,perohoyeslaprimeravezqueoigohablardelvagabundo,ysí,yamehepuestoencontactoconelcomandanteparadecirlequepermanezcaatentoporsiaparece.—Elancianomagosonrió—.Tambiénlehepedidoquehagaloposible por mantener a vuestros amigos los clérigos lejos de quienes puedaninformaralrey.

—Nosonlosinformadoresdelreylosquemepreocupan—dijoTanalasta—.Aligualqueusted,tieneojosyoídosentodaspartes.

Vangerdahastlamirópococonvencido.—Unaprincesanodeberíapermitirseexageraciones.—¿Yquélehacepensarquehagotalcosa?—Tanalastarió.Permanecióen

silencioduranteuntiempo,saboreandoaquelmomentotanagradable,quehacíacasiveinteañosquenoexperimentabaconVangerdahast—.¿Sabe?Noresultará.

—¿Alteza?—Vangerdahastenarcóunacejaespesaconcómicainocencia—.Osaseguroquenoséaquéosreferís.

—Yyoestoy segurade todo lo contrario, peronomeengañaréisparaque

Page 76: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

cambiedeopinión.Soylobastantemayorcomoparasaberloquedebocreeryloqueno.

—¿Deveras?—La expresiónque adoptó el rostro deVangerdahast era degenuinaenvidia—.Esodebedeserestupendo.

AzounobservólabandejadegalletasuntadasdepatéqueleofrecíaFilfaeril,y su boca se llenó de pronto con un gusto que sólo podía compararse con eljulepedeboñigadebuey.LareinayélhabíanacudidoasuquintarecepciónenloscincodíasquellevabanenArabel;secelebrabaenlamansióndelapoderosafamiliademercaderesMisrim,yelreyestabatancansadodelasdeliciasqueseservían en el lugar, que no podíamirar nada que le recordara a la comida sinsentirnáuseas.

Fingió escuchar la animosa sugerencia del conde Bhela de que la coronaestableciese un entramado de carreteras empedradas para la circulación demercancíasentodoelreino,miróasuesposaeinclinólacabezatanlevementequenadie sedio cuentadequenoquería probar una sola cosamás con aquelaspectotanenfermizo.

Filfaeril esbozó una sonrisa forzada y se deslizó a su lado sin tropezar, nitrastabillar,nirecurriraningunaexcusaquepermitieraaunosolodeloscanapéscaerdelabandeja.SelasapañóparainterrumpirladiatribadeljovenBhelaconuna sonrisa de dientes blancos como la nieve, consiguiendo así lo que el reyllevabamediahora intentando,ydespuésempujóhaciaadelante labandeja.EloloragrasamentoladallegóalasfosasnasalesdeAzoun,quedeprontosepusotanmaloque tuvoque recurrir a toda su fuerzadevoluntadparanoarrojar elcontenidodelvasodevinoquesosteníaenlamano.

—¿Paté,querido?—preguntóFilfaeril—.Esdecodorniz.—¡Seráunplacer!—Azouncogiólabandejaymordióunodeloscanapés,

masticórápidamentetresvecesyloengullótratandodeimpedir,sinconseguirlo,que su lengua pudiera saborearlo—. Excelente. ¿No le apetecería uno, condeBhela?

—¿De vuestra bandeja, majestad? —preguntó Bhela, abriendo unos ojoscomoplatos.Azounasintióconentusiasmo.

—Conozcolobastanteasufamiliacomoparaconfiarenquenomehayan

Page 77: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

envenenado.Bhelaobservóloscanapésconunagulaquenologródisimular,ycuandoiba

acogerunosecontuvoynegóconlacabeza.—Noestaríabien,sire.Sólosoyunconde.—Porfavor,insisto.Bhela adoptó una expresión nerviosa, y miró a los nobles reunidos a su

alrededor,quenolehabíanquitadoojoduranteelúltimocuartodehora.—Os lo ruego, majestad. Como comprenderéis, los nobles del reino me

condenarían pormi arrogancia—dijo—.De hecho, deberíais permitir quemeretirara.Creeránqueheestadomonopolizandovuestrotiempo.

—Sí,sí,porsupuesto.Quédistraídosoy.—Azounlediopermisoparaqueseretiraraconunapalmaditaen laespalda,antesdesuspirarcansino—.Envíemeuninformeconesaideasuya,conde.¡Imagínese,empedrartodaunacarretera!

—Lotendréisantesdediezdías,majestad.Conunasonrisadeorejaaoreja,henchidodeorgullo,Bhelaseinclinóante

ambossoberanos,sevolvióysereunióconelrestodenobles,conlosquepodríacomentar la larga audiencia que le había concedido el rey. Filfaeril cogió otrocanapédelabandejayseloofrecióaAzoun.Loaceptóconunasonrisa,perolosostuvoentredosdedosmientrasseechabaalcoletoungenerosotragodevino,conlaesperanzadeanegarenlabocaelsaborperdurabledelotro.

—Cómelo, cariño—urgió Filfaeril—. No querrás que nuestros anfitrionespiensenquetemesalveneno.

Azoundejó lacopaen lamesa,ydespués seconcentróparamantenerunasonrisacomplacidamientrasrespondíaasuesposa:

—Damecuartel.Nologrósoportartodoestosintuayuda.—Y te estoy ayudando. Si queremos reparar el daño hecho por Tanalasta,

debemosmostrarnosafablesconnuestrosnobles.—Filfaerilpaseólamiradaporla sala, hasta reparar en un hombre grosero con calzones amarillos y ligascruzadas—. ¿Ése no es el condeHiloar? Por lo visto tiene un gran plan paralimpiarelBosquedelDragón.Voyahablarconél.

—Todavía no—dijoAzoun, introduciendo el canapé de paté en la boca ycogiendo aFilfaeril por el hombro.Había logradopronunciar dospalabras sinescupirpatéenelvestidodedamasco.Masticómediadocenadevecesyengullóelcanapé—.Tanalastanomehadadootraopción.

Page 78: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Túsiempretienesotrasopciones:paraesoereselrey.—Sabesmejorqueyoloqueesserrey—replicóAzoun,frunciendoelceño

poruninstante—.¿Ysepuedesaberporquérazónestásmolestaconmigo?Porelmodoenquelaprovocaste,creíquequeríasunnuevoheredero.

—QuieroloqueseamejorparaTanalasta—repusoFilfaeril—.Enlugardeello,telasapañasteparapermitirqueVangeylamanipularahastadesafiarte.

—Contuayuda.—Inconsciente.—Sin apartar lamirada deAzoun, la reina estiró lamano

queteníalibre.Unlacayollegóasuladoypusounacopadevinoensumano,copadelaquesorbióhastaqueellacayosehuboretirado—.Vangeymeutilizó.Dehabersabidolomuchoquehabíacambiadonuestrahija,jamáshubiera...Elcasoesquenosabíacuántohabíacambiado.

—Después del asunto abraxus,mepareció que lo considerarías como algopositivo —dijo Azoun—. Ella sí lo hace, de eso puedes estar segura. Y yotambién,aligualqueVangerdahast.

—Seráunareinamásfuerte,sí—dijoFilfaeril—,pero¿seráfeliz?Azounsintióunapunzadadedolorenelpecho,ytuvoqueapartarlamirada.

AmabaaTanalastacomounpadreamaasuhija,peroélnopodíapreocuparseexclusivamenteporsufelicidad.Elbienestardelreinoexigíaquehicieradeellaunaregentecapacitada,locualconstituíaunpreciomuyaltoparaunpadre.

—Tanalasta erami favorita, ya lo sabes—dijo al cabode unmomento—.Siempresehamostradodispuestaaaprender.Sólohacíafaltadecirle lascosasuna vez, y al cabo de un año las repetía palabra por palabra. Y es tan dulce.Cómoiluminaconsusonrisasinceracualquierlugar...

—Lorecuerdo.—Eltonodevozdelareinasiguiósiendofríocomoelhielo—.TemoqueloquemásamamosdeellapuedahaberlodestruidoVangey.

—Elmagodelacoronahizolomejorparaelreino—replicóelrey,estoico.Hizounesfuerzoparamiraralosojosasuesposa,yañadió—:Nosmostramosfuertesparaprotegeralaprincesadelacoronadelapartemásduradelavidaenlacorte.AunqueAunadarBlethnohubierapuestounpieenpalacio,lainocenciadeTanalastalehubierahechounflacofavorsentadaeneltrono.

—YahoraqueVangerdahast leha robadosu inocencia—susurróenfadadaFilfaeril—,¿aquiénprefieres?¿AlaTanalastadeahoraoalaquefue,teniendoencuentaqueleniegaseltrono?

Page 79: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Aúnnohaperdidoel trono—dijoel rey—.Tanalastapuede llegaraserunareinaestupendaenelfuturo,siempreycuandoencuentreaunhombrequeacepte como marido, y deje de mostrarse tan cabezota con ese asunto deChauntea.

LamiradapálidadeFilfaeriladquirióladurezadelacero.—TúyVangeysoislosresponsablesdesucarácter.Sinoosgustaenloque

sehaconvertido,laculpaesvuestraynosuya.—Lareinaterminóelvinodeuntrago,yextendiólamanoparaquelesirvieranmás—.¿Cómoestástansegurodequeestáequivocada?Laplagaseextiende,yalosabes.

—Sí, lo sé —dijo Azoun—, y Tanalasta también me desafía en eso. Herecibido informes tanto de los Immerflow comode los Starwater de que unosDragonesPúrpurahanrecurridoalamagiadeChaunteaparasalvarloscamposazotadosporlaplaga.

—Bien. —Filfaeril tendió el vaso al lacayo e hizo un gesto para que seretirara, después acercó otro canapé de paté hasta la nariz deAzoun—.No teprives.

Azounnotuvomásremedioqueaceptarlo.Cuandoselollevóalaboca,lareina sonrió aRaynaarMarliir y le hizoungestoparaque se acercara.El reygruñóparasusadentros,aunquesabíaquenohabíaformadesalvarlasituación.Había oído que Marliir había organizado una coalición de nobles, magosguerreros y altos clérigos deseosos de discutir «el destino del reino». Sinembargo, sospechaba que estaban mucho menos interesados en discutir eldestinodelreinoqueendictarlo(sobretodoenloquerespectaalaprincesadelacorona);noteníamásremedioqueescucharsuscomentariosconpaciencia.Lalealtad de la familia Marliir era su principal baluarte contra la desagradabletendenciadeArabelporrebelarseenlosmomentosmásinoportunos.

Azounsepasó la lenguaporentre losdientes,para limpiarlosdecualquierresto de paté que pudiera quedar; después, sonrió con tanta franqueza comopudo.

—DuqueMarliir,cuántomealegrodeverle.Confíoenque ladyMarliirseencuentremejor.

—Lamentablemente, no —se limitó a responder Raynaar—. Sigueguardando cama aquejada de fiebres intermitentes; si no fuera por ello, osaseguroquenohubieradejadopasarlaocasióndesaludaros.

Page 80: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Habían cruzado saludos de índole similar a lo largo de los cuatro últimosdías.DespuésdequeTanalasta rechazaseaDauneth,MereldaMarliir sehabíapuestoenfermaypidiópermisoalarealparejaparapartirhaciasucasaenarasdesusalud.SabedordequenotardaríamuchoenverseobligadoaenfrentarseaunanuevarevueltasisemarchabatanprontodespuésdeldesairedeTanalasta,Azounhabía aprovechado la excusa del brote de plaga en las tierras del norteparaquedarsediezdíasmás, imponiendoasugobernador,MyrmeenLhal,queejercieradeanfitrióndelaparejarealenelpalaciodelaciudad.EntoncesinvitóalosnoblesmásnotablesdellugaraunaextravagantecomidadeEstado,yellosrespondieronconunacadenaderecepciones,enlasquesedegustabatodasuertedepatésexóticosque,comonopodríaserdeotra forma, ibanaacabarconsuestómago. Por supuesto, lady Marliir había estado tan enferma que no pudoasistiraningunade las recepciones,yAzounestabasegurodequecontinuaríaenfermahastaunoodosdíasdespuésdemarcharse.

Azoundemoró la respuesta aMarliir lo suficiente para que todos supieranqueconocíalaverdad,yluegodijo:

—Dígalequeesperosinceramentequeserecuperepronto.Marliirenarcóunacejaalpercibirquefaltabael«por favor»,ydespuésse

volvióhaciaquienesloseguían.—Estoysegurodequevuestramajestadconoceaestasbuenasgentes:lady

Kraliqh,Merula el Portentoso yDaramos elAlto, de laCasa de la Señora enArabel.

—Porsupuesto.Azounsonrióatodosycadaunodeellos:aladyKraliqhdemiradagrave,al

rotundoMerulayaDaramos,encuyosojosbrillabaelfanatismo.Detodosellosconocíasobre todoaDaramosLauthyr.Eraunfanático,unhombre tandevotodelagloriadeladiosaTymoracomodeestablecerunaiglesiacentralenArabel,dondeteníaintencióndeerigirseenelpatriarcaabsoluto,establecidoporordendivina.

—¿Les apetece un poco de paté? —dijo Azoun cogiendo la bandeja demanos de su esposa, y ofreciéndosela al grupo deMarliir—.Es de hígado decodorniz.

La oferta pareció desarmar a los cuatro. Intercambiaron una mirada, y elduqueMarliiraceptóunodeloscanapésdelabandeja,seguidoporlosotrostres.

Page 81: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Peroaúnquedabaotro,yAzounseloofrecióaFilfaeril.—¿Uncanapé,querida?Ella leobsequió conunamiradaadorable, aceptó labandejay le tendió el

canapé.—No,tómalotú,querido:iréabuscarmás.Azounaceptó el canapé e intentóno torcer el gestomientras le hincaba el

diente.—Sonbuenísimos,¿verdad?—Puessí—dijoelduqueMarliir—.Majestad,hayalgomuyimportanteque

deberíamosdiscutir.—¿De veras? —Azoun engulló el canapé—. ¿Y de qué se trata? Si les

preocupalaplaga,lesaseguroquelosmagosguerrerosestántrabajandoenello.—Laplaga formapartedenuestraspreocupaciones—afirmó ladyKraliqh.

SegúnlosespíasdeAzoun,sustratosconelduqueMarliirselimitabanaasuntosdenegocios—.Peronospreocupamuchomáselfuturodelacorona.

—¿Elfuturodelacorona?—Azounfingiósorprenderse,perotomónotadela seriedad con que la noble había abordado el asunto.No se contentaría conrespuestas o promesas vagas, de modo que optó por seguir otro camino—.EntoncesserefierenaTanalasta.

—Nospreocupaqueseopongaacontraermatrimonio—dijoMarliir—.SurelaciónconDaunethMarliirparecíairvientoenpopa.Tienequehaberalgunarazón para que decidiera rechazarlo de aquella manera. Lo cierto es que lasituaciónfuebastanteembarazosaparatodos.

—Soyyoelresponsabledelmalentendido,lordMarliir—aseguróAzoun—.Aprecio tantoaDaunethquehahabidoquieneshanmalinterpretadomiafectocuandolepedíqueacompañaraaTanalastaalafiesta.Medisculpoporeldañoquehayapodidocausar,yquieroquetodoelmundoenArabelsepadelcariñoquesientoporél.Dehecho,estabapensandoenlaposibilidaddenombrarlolordguardián del norte. —Azoun se volvió hacia el duque Marliir—. ¿Cree quetendrátiempoparatodoeltrabajoqueseleavecina?

—Por...porsupuesto—respondióMarliir,boquiabierto.—Excelente.—Por la expresión asombrada del duque,Azoun comprendió

queacababade recuperar la lealtadde toda la familiaMarliir—.PídalequeseacerquemañanaalpalaciodeArabel,paraquepodamosdiscutirlospormenores.

Page 82: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—EsoseráunamagníficanoticiaparaDauneth—intervinoladyKraliqh—,perosiguependientenuestrapreocupaciónporel futurode lacorona.Despuésdetodo,séquecuandounamujercumpleciertaedad,tieneciertasdificultadesparaengendrarunhijo.

—¿Sí?Entalcasotieneustedunaspectodelomásjuvenilparasuedad,yTanalastapareceaúnmásjovenqueusted.Dudoquehayanecesidadalgunadepreocuparseporsucapacidadparaengendrarunheredero,cuandonisiquieraloha intentado aún... ¡A no ser que lo haya hecho ya, y no haya consideradooportunocontárseloasupadre!

Azoun guiñó un ojo al pronunciar esta última frase, arrancando unas risasestridentesentrelaconcurrencia,exceptoenlapropialadyKraliqh.Conscientede ello, apartó la mirada con la esperanza de ver si sus palabras habíanproducido el efecto esperado, y de paso evitar que aquellamujer lo sacara dequicio.

—Siesoesloúnicoquelespreocupa—continuóelrey—,creoque...—Hayotroasunto,majestad—interrumpióMerula.Elmagonoesperóaque

ledierapermisoparacontinuar—:Eseasuntotandesafortunadodeltemploreal.Quizá la princesa no haya tenido tiempo de reflexionar sobre la opinión quemereceríaalosclérigosdelarealeza.Unsirvientecondosamosnopuedeevitarversulealtaddividida.

—Pese a lo cual, el reino podría resultar muy beneficiado al buscar lasbendicionesdelosdioses—señalóDaramos—.TymorasiemprehacuidadodelasgentesdeCormyr.Denohaberserefugiadoaquíenlostiemposdifíciles,lomásprobableesqueelreinohubierasufridomásdeloquesufrió.

—Nadie discute que su presencia resultó muy favorecedora —admitióAzoun—,peromecuestacreerqueesoseaóbiceparaerigiruntemploreal.

Las venas de los ojos de Daramos se hincharon como la cuerda de uninstrumento, y antes de queAzoun pudiera terminar lo que pretendía decir, elclérigosupremohizogaladeloqueconsideróunaindignaciónjustificada.

—Después de la gentileza que Tymora ha mostrado a vuestro reino, ¿lainsultaríais estableciendo un templo real a la diosa Chauntea? —Daramos elfanáticoretrocedióconel rostro temblorosoyenrojecidopor la indignación—.¡Nodesafiéisa laSeñora, reyezuelo!La fortuna tienedoscaras,ysólounaossonreirá.

Page 83: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Aquellaamenazasumióenunprofundosilencioatodalaconcurrencia,yeltríodeguardaespaldasdiounpasoalfrenterodeandoalclérigosupremo.

—De eso precisamente quería yo hablaros, majestad —dijo Merula,devolviendounadiminutavaritadecristalaunodelosbolsillosdesucapa.Alparecer temió por unmomento queDaramos pudiera atacar al rey—.Uno nopuedeconfiarenlosclérigos.Tienenquerogarporsushechizosalosdioses,porloquesiempreestánsupeditadosasucapricho.

—Agradecemossuopinión,Merula.—Ensilencio,AzounmaldijolarabietadeDaramos,y sepreguntóhastaquépuntoestaríaobsesionadoaquelhombre.PorlaestanciadeladiosaTymoraenlostiemposdifíciles,lafeenladiosateníacasitantopoderenArabelcomoloteníaelpropiogobernador,porloquenoeraaconsejable desairar a Daramos Lauthyr. A menos que Azoun quisiera verseobligadoaaplastarotra revueltaen la zona.Hizoungestoa losguardiasparaque se apartaran, y dijo—: Tendremos en cuenta la opinión del sacerdotesupremo.Aunque la princesa y yo hemos tenido poco tiempo para discutir elasunto, nohabráun templo real enCormyr, ni deChaunteani deningúnotrodios.

El rostro de Daramos empezó a recuperar la tonalidad normal, pero noparecíahabersecalmadolomásmínimo.

—Porsupuesto,tenéisrazónenloquerespectaalosdemásdioses,majestad,peroTymorahabendecidoalosObarskyrdurantemásdeunmillardeaños.

—Por eso precisamente no la deshonraría estableciendo un templo real—dijoAzoun.

—¿Queladeshonraría?—preguntóDaramos,confundido.—Tymoraserefugióaquí,enArabel,cuandolosproblemasasolaronlazona,

perolacapitaldeCormyresSuzail—dijoAzoun—.Nopuedoevitarpensarquela ofendería al establecer un templo más grande en el sur. Siempre tuve laimpresióndequeelladeseabaquesucultosecentraraenvuestropropiotemplo.

—Oscomprendomuybien,majestad—respondióDaramos,conunbrillodealarmaenlamirada.

Azounseencogiódehombros,ydespuéssevolvióaMerula.—Metemoque tieneustedrazón,Merula.Cormyr tendráqueconformarse

sinningúntemploreal.—Entoncessupongoquesólotendréisavuestrosmagosguerrerosenquienes

Page 84: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

confiar para todos aquellos asuntos que requieran de lamagia—respondió elmago,esbozandounasonrisairónica.

—Eso parece —replicó Azoun—. El reino puede descansar tranquilo,teniendoencuentalasvecesquehanprobadosuvalíaalolargodetodosestosaños.NomegustaríapensarquépodríaocurrirleaCormyrsiellosfaltaran.

—Seríaunpeligro,sinduda—admitióladyKraliqh—.Loquenosconducede nuevo al tema de Tanalasta.No habrá templo realmientras vos gobernéis,majestad,pero¿quésucederácuandomuráis,cosaquequieranlosdiosesquenosucedahastadentrodeuncentenardeaños?

—LadyKraliqh—dijoAzoun,esbozandounaforzadasonrisa—,tieneustedtanpocamanopara calcular la edadde lagenteque empiezoa creerque estáperdiendovista—bromeó, intentandoaveriguarquénecesitaríaparaaplacarelánimode la dama—. Incluso con las innumerables bendicionesde la diosadeDaramos,dudoquellegueacumplirveinteañosmás.

—Razón demás para dar respuesta ami pregunta—replicó ladyKraliqh,haciéndoseaunladoparadejarsitioaFilfaeril,queregresabaconunabandejallenadecanapésdepaté—.Deuntiempoaestaparte,Tanalastahademostradoser una princesa inteligente y dotada de una gran fuerza de voluntad. Dudomuchoquenisiquieraseáiscapazdedoblegarsuvoluntaddesdelatumba.¿Quépretendéishaceralrespecto?

—Sí,Azoun—dijoFilfaeril, ofreciendo la bandeja de canapés aMarliir ysusacompañantes—.¿Quéharéisentonces?

Azounobservóunotrasotroaloscontertuliosycomprendióque,pesealasconcesionesqueyahabíahecho,ningunoestabadispuestoaecharleunamano.TanalastahabíaregresadodeHuthduthfortalecidayrebosantedeideas,locualles atemorizabamuchomás que la posibilidad de que alguien comoAunadarBlethpudierahaberregidoelreinodesdelassombrasdesufalda.Aéltambiénledabamiedo.

—Mientrasyosearey,gobernarédelmodoquejuzguemásconveniente,locual incluye la elección del heredero más adecuado —dijo, rechazando loscanapés—.Encuantomehayadecidido,seráCormyrquientendráqueestaralaalturadesureina.

Filfaerilesbozóunasonrisa,ydespuésentrególabandejaaladyKraliqh,queparecíaperplejaporlarespuestadelsoberano.

Page 85: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Se encargará usted de darle esto a alguien para que se lo lleve? —preguntó—.Elreyodialoscanapésdepaté.

Page 86: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

U5

n viento lacerante, lleno de tierra y ceniza, silbó al sur de las Tierras dePiedra, ascendiendo por la cara norte de los Picos de las Tormentas y

arrastrandounosnubarronescapacesdedejarroncoacualquiera,densoscomolaniebla.Atravésdelanieblapodíaescucharseellejanoentrechocardelacero,yun rumor de voces quemaldecían en el gutural idioma orco, y también en lalenguacomúndelasgentescivilizadas.Enocasiones,Tanalastaalcanzabaaverfiguras grises y pequeñas que tiraban de espada para matarse. Reconoció laposturainmóvildelosorcosqueredoblabanelataque,ytambiénlasformasmáserguidas de los hombres que defendían unmontículo en forma de huevo quepodíafácilmentecorresponderaunoscarrosconlona.

Losorcoshabíanalcanzadoalacaravanaenelbordedelallanura,dondeelsenderodelRayodePiedra abandonaba lasmontañaspara seguir por la tierraestéril que conducía alValle de las Sombras.Aquel lugar era el favorito paratalesasaltos,puestoqueallíibaapararelvientocálidoquesoplabadesdeelsur,procedente del lejano desierto de Anauroch, para topar con los Picos de lasTormentas (también llamadasmontañas del Diente de Dragón) y descargar laarena que arrastraba consigo. El resultado eran casi dos kilómetros de tierraarenosaydesigual,queimpedíaavanzaraloscarrosconlarapidezquehubierasidoaconsejable.

—¡Menudapandillademarranos!—observóVangerdahast.—Sí—admitió Ryban Winter. Ryban tenía la piel cuarteada, y era de la

mismaedadqueTanalasta.EraelcapitándeldestacamentodeDragonesPúrpuraque laacompañaban.Escupió laarenaquesehabía introducidoensugarganta

Page 87: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

porlasfosasnasales,yañadió—:Aunqueconestatormenta,esdifícildecirlo.—Almenoshabráunosdoscientos—informóVangerdahast.Señalóellugar

donde los carromatos formaban en círculo, cuya presencia fue la única señalvisiblede la existenciadel senderodelRayodePiedra—.Noesprecisamenteuna caravana modesta. Los orcos no se habrían molestado, a menos quesuperaranennúmeroalosguardias.

—En talcaso, lacaravananecesitanuestraayuda.—Tanalasta sevolvióalmago y añadió—: ¿Vamos a hacer algo? ¿O se trata de otra de sus tretas,Vangerdahast?

—¿Quépodríaganaryoconalgoasí?—Vangerdahastladirigióunamiradaamenazadora y ordenó aRyban—:Acompañe usted a la princesa para dar unrodeo.Yomeencargarédedistraerlosyme reuniré conustedesdentrodeunahora.

—¿Distraerlos?—preguntóTanalasta—.¿Yqueataquendespuéslapróximacaravana?No,creoqueno.Destruiremosaesabandadeorcosahora,antesdequeseconviertaenunejército.

—PorlovistoalaprincesaTanalastaleparecefácilloqueaunservidorleparece imposible—replicóVangerdahast, ceñudo—.Ni siquierayopuedo contantosorcos,sinllevarmepordelantealgunossereshumanos.

—Notieneporquéhacerlo—dijoTanalasta—.DisponemosdeveinticincoDragones Púrpura. El capitán Ryban permanecerá aquí en lamontaña junto aveintedesushombres,mientrasnosotrosrodeamosalosorcosylosexpulsamosdelacolina,lejosdelacaravana.

—¿Veintecontradoscientos?—preguntóRyban,mirándolaconincredulidad—.¿Enestaoscuridad?

—Laoscuridadnos favorecerá.Losorcosno sabrán cuántos somos—dijoTanalasta—.Ustedes tansólodebenfrenarlos losuficienteparaqueVangeyseacerqueporlaretaguardia.Entoncestendránquecabalgaralgalopeparaalejarsetodoloposible.Enrealidad,nocreoqueseanecesarioquedisparenustedesmásqueunaodosandanadasdeflechas.

—No—dijoelmagodespuésdequeRybansevolvieseparamirarlo—.Haydemasiadascosasquepuedenirmal.Nopodemosarriesgarnos,noestandoconnosotroslaprincesa.

Oyeron un grito procedente del campo de batalla, Tanalasta alcanzó a

Page 88: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

distinguirunadocenadesiluetasdeorcosempujandodeladounacaravana.Trespersonasserefugiarontraselcarroysiguieroncombatiendoalenemigoasangrey fuego, con el acero y con lamagia, antes de que la escena se desvanecieraocultadaporlatormentadearena.

—¿AcasoAlusairsecontentaríaconatemorizarlos?—preguntóTanalasta.—VosnosoisAlusair.—Yalparecertampocosoylaprincesadelacorona—repusoTanalasta,ante

locualRybanlamirósorprendido—.Podríamosseguiraquíhablandotodoeldíade lo que soy o lo que dejo de ser, pero eso no detendrá a esos orcos.—SevolvióhaciaelcapitándelosDragonesyextendióelbrazo—.Démesuespada.

—El rey—dijo Vangerdahast, cogiéndola de la muñeca— no dijo que sudecisiónfueradefinitiva.Estoyconvencidodequeestáansiosoporreconsiderarsupostura,siempreycuandoosavengáisaaceptaralgunadesusexigencias.

—¿Incluiríantalesexigenciasquerenunciaraaltemploreal?—Porsupuesto—asintióVangerdahast—,aunqueelreyhadejadobienclaro

quedebéiselegiraunmaridoqueseadevuestroagrado.—Quéamableporpartedesumajestad,perocreoquedebemosconsiderar

sudecisióncomoalgodefinitivo.Amenosqueel rey estédispuesto a aceptarmispuntosdevista,novoyaceñirlacorona.—TanalastasevolvióhaciaRyban,preguntándose si no estaría precipitándose en sus conclusiones. La visión quehabíatenidosólolehabíaadvertidodelasconsecuenciasquesederivaríandeunmatrimonio desafortunado, pero ahora le pareció que afectaba también a suhabilidadpararespaldartodassusdecisiones—.Puededarmeesaespada,capitánRyban.ApartirdeahoraesaAlusairaquienhayqueproteger.

RybanmiróaVangerdahast.—¿Por qué se dirige a él, Ryban? —preguntó Tanalasta—. Soy yo el

miembrodelarealeza.Ustedrespondeantemí,aligualqueVangerdahast,talycomoélnopierdelaocasiónderecordarcuandoleinteresa,claro.

—Avuestrasórdenes.—Rybanapretólamandíbulaantesemejantebronca,mientrasdesenvainabaelacero.

TendiólaespadaaTanalastaporlaempuñadura.Laprincesaseinclinóparacubrirelespacioquemediabaentresusmonturas,cogióelarmaqueleofrecíaytrazó una floritura en el aire con la hoja. La espada no estaba tan equilibradacomolosespadinesqueesgrimíaenlasaladearmasdepalacio,perosinduda

Page 89: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

eraunarmasólidaqueprestaríabuenservicio.—No ponga esa cara de pasmarote, capitán —dijo la princesa, riendo

desenfadada—.QuizáyonoseaAlusair,perosoyunaObarskyr.Hemanejadolaespadadesdequeaprendíacaminar.

—Estoseráalgodistinto,miseñora—advirtióRyban,cuyamiradapasódelasombroalapreocupación—.¿Habéistenidoocasióndeenfrentarosalgunavezaunorco?

—No,amenosqueAunadarBlethseaconsideradocomotal.—Tanalastarióal ver la expresión incómodadel oficial—.Quizá desee usted hacerme algunasugerencia.

—No haría más que perder el tiempo, créame —gruñó Vangerdahast.CondujosucaballojuntoaTanalasta,despuéslequitólaespadadelamanoyseladevolvióaRyban—.Meparecequelaprincesanolanecesitará.

Tanalastaclavóenéllamiradamásaltivaquepudo.—¿Quizáselreyhacambiadodeopiniónrespectoaltemploreal?—Lodudomucho,perosiinsistísenseguiradelante,nopuedopermitirque

arriesguéis las vidas de buenos soldados con esa bobada de acompañarlos alcombate.—Elmago señaló conundedonudoso colina abajo, dondehabíaunpromontoriodegranitosituadoaloestedelcampodebatalla—.Esperaréisallí,acompañadaporcincode losmejoreshombresdeRyban.Si seacercaunsoloorcoamenosdecienpasosdevos,lossoldadosseosllevaránatodogalope(porlafuerza,siesnecesario)haciaeloeste.¿Comprendido?

ATanalastaleofendióeltonodeVangerdahast,perotambiénpercibióciertoalivio en lamirada deRyban, lo cual le confirmó que el capitán compartía lapreocupación del mago. Agradeció en silencio a la diosa que acabara deahorrarle más aventuras de las que quería correr. Aunque Tanalasta estabadecididaarepresentarelpapeldeprincesaaventurerayponeraVangerdahastaprueba, tambiénera lobastante inteligentecomoparadarsecuentadequeunaproporcióndediezcontraunopodíaserempresaexcesivamenteambiciosaparasuprimerabatalla,aunqueelhechodecontarconelmagosupremodeCormyrfueraunfactoratenermuyencuenta.

—¿Compartís la opinión de Vangerdahast, capitán? —preguntó con tonodesafiante.

—Asíes—respondióelsoldado—.Nopretendonegarvuestradestrezacon

Page 90: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

el acero,mi señora,peroesoscerdosno respetan las reglas.Vuestrapresenciaseríaunacargaparanosotros.

—Excelente.—Tanalasta se hundió de hombros. Su decepción no era deltodofingida,yaquehabíaenvidiadodesdesiemprelasmaravillosashistoriasdecombatesquesuhermanapequeñacontabaencasa,alvolverde lasTierrasdePiedra—.Destaqueadoshombresparamiprotección.Sinovoyatomarparteenelcombate,ustednecesitarádisponerdetodosloshombresposibles.

Vangerdahastfruncióelceñoantelaperspectivadereducirlosguardiasqueprotegeríanalaprincesa,perosemordiólalenguaaregañadienteseinclinólacabezaendirecciónalasalforjasdelaprincesa.

—¿Tenéis el bastón y los brazaletes que os di? —preguntó—. Ah, ¿y elanillo?

Tanalastahurgóenelbolsillodelacapayencontrólosanillosguardadosenbolsillosespeciales.Acontinuaciónselospuso.

—No os preocupéis.Adoptaré todas las precauciones posibles.—Agitó lamanoparamostrarleslosanillos—.Noquieroquenadiesepreocupepormí.Dehecho, creo que incluso podría recordar aquel hechizo que me enseñó paramanteneralejadosalososos.

—¿Estáispreparadapararealizarlo?—preguntóVangerdahastsorprendido.—Nomequedamásremedio.—Tanalasta llevóacabounaseriedegestos

conlasmanos—.¿Love?Eltiempoquepasamosjuntosnofueunapérdidadetiempo.

—Lavidapuedesertansorprendente...inclusoparaalguiendemiedad.—Vangerdahastsacudiólacabeza—.Quizásaúnpodamosconvertirosenunbuenmagoguerrero,siempreycuandosigáisdecididaanoserreina.

Acontinuación,elmagodelacortetiródelasriendasysedirigióalgalopehacialaretaguardiadelabatalla.RybanordenóatresDragonesPúrpuraqueloescoltaranporsinecesitabaayuda,yasignóunpardejinetesaTanalasta.

Laprincesaysuscompañerosdesmontaronyllevarona loscaballosdelasriendaspor lapendiente.Lascolinaseran tanarenosascomoel terrenoque seencontraba al pie de las mismas, aunque era tan desigual y rocoso como lasTierrasdePiedra,porloquecualquierorcoqueecharaunvistazosidespejabalatormentaveríaalostresjinetesquecruzabanlaladeradelacolina.Alavanzarapie no podían tener la seguridad de que no los descubrieran, pero sería más

Page 91: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

difícilverlosporqueprocurabanpasarinadvertidos.Sinembargo,laprincesanohizonadaporreducirel ruidoquehacían loscascosde loscaballosalavanzarpor terreno rocoso, porque con el estruendo del combate ni siquiera ellaconseguíaoírlo.

CuandoTanalastaseacercóallugarqueelmagolehabíaasignado,elterrenosevolviómásarenoso,ysediocuentadequeVangerdahastnolohabíaelegidosóloparamantenerlaalejadadelcombate.Latierraestérilseprecipitabaporlapronunciada pendiente, y aquel lugar disfrutaba de una posición privilegiadaparaobservareldesarrollodelabatalla.Calculóquehabíacercadedoscientascincuenta figuras jorobadas que intentaban superar la barrera de caravanas,muchasde lascualesardíanenvueltasen llamas.Enel interiordeestabarrerahabíaunoscincuentaguardiasqueprotegían lacaravana,quesedefendíanconespadas,hachas,y,devezencuando,unrayomágicoounallamaradadefuego,yqueseesforzabanpordefenderalgruposituadoenmitaddelreducto,dondeseapiñabanlasmujeres,losniñosyalgunosmercaderesquemaldecíanadestajo.

Variasmujeresylamayoríadelosmercaderesempuñabanlanzasdemadera,dispuestos a cargar contra los marranos que pudieran romper el perímetrodefensivoestablecidoporlosguardias.Ajuzgarporelnúmerodecuerpos,tantolos humanos como los orcos, que yacían diseminados a lo largo del diminutocírculo, ya habían tenido que emplearse a fondo en más de una ocasión. Laprincesa no vio ni rastro de los animales que tiraban de los carros.Probablementeloshombresloshabíanliberadodelasriendas,olosorcosseloshabíanllevadoarastras.

Lostresaseguraronlasriendasdesusmonturasalotroladodelacimadelacolina,demaneraquenadiepudieraverlas.Tanalastaabriólasalforjas,seciñólosbrazaletesycogióunbastoncillodecolornegroantesdevolveragatasalacima. Aunque no había tenido ocasión de usar ni los brazaletes ni el bastón,había practicado algunas veces con ellos y sabía cómo recurrir a su magia.Consideraba un ejemplo del peligro que acechaba en las Tierras de Piedra, elhecho de que, antes de partir deArabel, Vangerdahast se hubiera ocupado derequisar tantamagia de la armería de losDragonesPúrpurapara confiársela aella. En cambio, cuando la dejó en Huthduth no le dejó más que una dagamágica,sindudaporqueesperabaquevolvieraasuladoenunosdiezdíasparaexigirleque la teletransportarade inmediatodevuelta a casa.Sólo suempeño

Page 92: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

pordemostrarleloequivocadoqueestabalediofuerzasparaaguantarelprimermes de tedio, antes de descubrir las satisfacciones que proporcionan el durotrabajoenelcampo.

La princesa llegó a la cima de la colina y vio que una columna de orcosarremetíaporelhuecoquehabíaentredoscarros,cargandoenestampidacontralos cuerpos caídos de cuatro fornidos guardias de la caravana.Un temblorosogritodebatallasurgiódelasgargantasdelasmujeresylosmercaderesapiñadosen el centro del perímetro defensivo, cuando se arrojaron dispuestos aenfrentarsealenemigo.

Tanalastaextendióeldedodondellevabapuestoelanillodesello,eimaginóelrostrodelmagosupremo.

«¿Vangerdahast?»Ésteaparecióenformadesiluetaborrosaadoscientosmetrospordetrásde

lacaravana,cuandosurgíadeunacrestaarenosaagitandounavaraporencimadelacabezadelaquesematerializóunaboladefuego.Laesferaígneasuperólos carromatos y alcanzó la columna de orcos, que quedaron reducidos a unmontón de cenizas, cuandono se consumieron retorcidos en el suelo y con lapiel chamuscada. Los marranos se desintegraron en una columna de humonegruzco que dio paso a una polvareda de ceniza, y el viento arrastró losgemidosangustiososdelosmoribundos.

Tres de aquellos cerdos, ennegrecidos, salieron indemnes del ataque, y altrastabillarcegadosfueronobjetodelasatencionesdelasmujeresymercaderes,que no perdieron ocasión de atacarlos con las lanzas hasta que quedaroninmóvilesenelsuelo.

«Sí.» La voz de Vangerdahast surgió en la mente de Tanalasta. «Estoyocupadoenestemomento,sinosetratadealgoimportante.»

El mago bajó la vara y media docena de rayos en forma de tridentealcanzaronaunacuadrilladeorcosqueintentabanvolcaruncarromatopesado.Alotroladodelperímetro,Tanalastaobservóqueotrostantosestabanapuntodeacabarcontresguardiasqueluchabanfatigados.

«Problemasa laderecha...no,asu izquierda—dijoTanalastamentalmente—.Noestánmuylejos.Puedoverlotododesdemiposición.»

«Por supuesto. ¿De veras creíais que os iba a privar así como así de ladiversión?»

Page 93: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Vangerdahastguardó lavaraentre lascinchasde lasalforjas,ydespuésdesacarunacosadelbolsilloqueteníaenlamangadelatúnicaseñalóhaciadondelehabíaindicadoTanalasta.Unanieblaamarillentasecerniósobreel tropeldeorcosamedidaquedescendíaarasdesuelo.Cualquierguerreroalqueacariciaralanieblaperderíaelarmayseveríareducidoauncuerpotembloroso.Porelbiende los guardias de la caravana, Tanalasta deseó que el efecto de la niebla seredujeraasumirenunsueñoprofundoyquenocontuvieraunhechizomortífero.

Los jinetes que debían acudir a la carga aparecieron a retaguardia deVangerdahast,conlosbrazosalrededordelcuellodelcaballomientraslasbestiasse esforzaban en vano por mantenerse a la altura de la montura del mago.Empuñaban aceros y en el otro brazo llevaban asegurados escudos redondos,peroaTanalasta leparecióverqueparacuandoalcanzaranalmagolospobrescaballosestaríanmuycansadosparaentrarencombate.

Cuando Vangerdahast se acercó a doscientos pasos de la batalla, volvió aempuñarlavara.Hundióelextremoinferiorbajolaaxilayempezóazarandearla punta de un lado a otro, invocando crepitantes rayos luminosos que sedirigieronhaciaunladodelcírculoformadoporloscarromatos,mientrassurgíande la vara unosmeteoritos fulminantes que se dirigieron al otro extremo. Losorcoscayeronadocenas,ylosqueseencontrabanenesazonadelperímetronotardaron en emprender una retirada confusa. Los cansados guardias de lacaravanahicieronunapausaquelespermitiómirarensudirecciónylevantarlahojadelaespada,enseñaldeagradecimiento.Despuésseapresuraronaayudara los compañeros que sufrían la peor parte del combate, y que eran los queestabansituadosmáscercadeTanalasta.

Los orcos no tardaron en descubrir la causa de sus problemas. CuandoVangerdahast seacercóaunossetentapasosde loscarromatos,unmarranodelos grandes, situado a la derecha, empezó a gritar órdenes y a señalar endirecciónalmago.Ignorandoelconstanteflujomortíferoquesurgíadesuvaramágica, más de cincuenta orcos se arrojaron contra él para formar una líneadefensiva y mantener alejado al mago del perímetro donde se defendían loscaravaneros.

Vangerdahastemprendióelgalopeparaatacardesdeotroángulo.«¡Por ahí no!—advirtióTanalasta—.El líder está en el flancoopuesto.Si

puede...»

Page 94: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

«¡Sémuybienloquedebo...hacer!—protestóVangerdahasttrabajosamente—. ¡Yo ganaba batallas... para Cormyr... antes de que vuestro padre fueracoronadorey!»

Elmagosupremotiródelasriendasparacambiardedirecciónydirigirseallado opuesto de la caravana. Los orcos que habían formado para detenerlolanzarongritos triunfales,peroVangerdahastno tardóendemostrarles suerrorcuando lesarrojóunabolade fuegoque fueacaerenmediode la formación.Losjinetesqueacudíanaapoyaralmagoformaronensuretaguardiayaambosflancos.

EllíderorcomiróendirecciónaVangerdahast,ydespuésanimóasusorcosaqueselanzarancontraélformandoendiagonal.Cuandoelmagonocorrigiólaposición,Tanalastasediocuentadequeobienelmagonoteníalíneadevisión,o se estaba tomando la molestia de separar al líder de los orcos que loacompañaban.

«Unpedazodepastelaladerecha»,advirtióTanalasta.«¿Unpedazodepastel?»Peseasutonojocoso,elmagotiróconfuerzade

lasriendasaladerecha.«¡Dijeunpedazo,nounacuartaparte!—corrigióTanalasta.Elvolumende

labarrigadeVangerdahastdebióhaberleproporcionadounconceptomásclarodeloqueelmagoconsiderabaunpedazo—.Elorcoquebuscaesmayorquelosdemás,tieneunacabezaprominenteyelmorropintado.»

«¡Loveo!»Un relámpago cegador surgió del extremo de la vara de Vangerdahast, y

partió por lamitad a un simple guerrero al que el líder había empujado en elúltimomomento.Elcomandantesearrojóalsueloydesaparecióbajounanubedepolvo.Elmagoinvocóunnuevohechizodelavara,graciasalcualconsiguiósumirtodaeláreabajounaenormeboladefuego.

Vangerdahastysuscompañerosalcanzaronelmurodeespadasycolmillosqueellíderhabíaanimadoalcombatecontaldedetenerlos.Elmagonoprestólamenoratenciónalosmarranos,yselimitóapicarespuelasensumonturaparasuperar labarreradeaceroorco,quearremetiósin resultadocontra los flancosdel caballo. Sus compañeros, que no disfrutaban del escudomágico, tuvieronquedependerdedefensasmás convencionales, y cargaron contra la líneaorcaaceroenmano,ayudadosporloscascosdeloscaballos.

Page 95: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

En cuanto hubieron pasado, Vangerdahast tiró de las riendas lo suficientecomo para dedicar a los orcos que habían quedado atrás una llamaradaimpresionante,paraacercarseacontinuaciónaloscarromatosalgalopemientraschamuscabaalosorcosqueibaencontrandoadiestroysiniestro.Amenudotansólo necesitaba hacer un simple gesto con la vara. Los escoltas del mago notuvieron mucho trabajo, la verdad. El enemigo no se atrevía a acercarse losuficientecomoparaenfrentarseaellos.

LosguardiasdelacaravanaprocedieronatirardeunodeloscarromatosparapermitiraccederaVangerdahastalperímetro,cuandoTanalastavioqueellíderorco,quesehabíaagazapadobajounapequeñaduna,mojabalapuntadevariaslanzas en un cubo. Un puñado de guerreros orcos asomaba por encima de laduna, para observar nerviosos aVangerdahast,mientras empuñaban las lanzasqueellíderlesibapasando.

«Vangey, el líder sigue vivo—advirtió Tanalasta—. A su espalda, a unosveintepasosyunpocoalaizquierda.»

Elmagofrenóelcaballoehizoungestoalosmercaderesparaquecerraranelperímetro.

«¿Aunpedacitodepastel,oaunpedazogrande?»«Aunaoctavapartedelpastel—respondióTanalasta—.Trasesadunadonde

seagazapan.Tengacuidado.Tienenlanzas,yestánuntandolaspuntasenalgo.»Vangerdahastselimitóareíramododerespuesta.Volvióadeshacersedela

vara, y después tomó prestado un escudo de uno de los jinetes, sobre cuyasuperficie pasó la mano. Tanalasta no pudo ver qué se proponía, pero sí quemovíaloslabiosmientrasmurmurabaunhechizo.

Losorcoshabíanempezadoarecobrarse,yformaronunampliosemicírculoalrededordeVangerdahasty los tres jinetesque teníamáscerca.Vangerdahastnolesprestóatención,ysiguiópasandolamanoporencimadelescudomientrasmurmuraba palabras arcanas. Esto pareció inquietar al enemigo más que elhechodeverloconlavaraenalto,yTanalastapensóenlaposibilidaddequeelmago lo estuviera haciendo aposta. Indudablemente, conocía toda suerte dehechizos que no se invocaban en cuestión de segundos, pero era lo bastanteinteligentecomoparanorecurriraellosenplenocombate.Empezóaoírseunchillidonervioso,procedentedelasfilasdeorcos.Endosocasionesunpuñadodeguerrerosvalientesintentaroniniciarunacarga,perosefrenaronencuantoel

Page 96: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

magosupremomiróensudirección.Finalmente,Vangerdahastapretólamanocontralapartefrontaldelescudoy

guardósilencio.«DoyporsentadoqueRybanylossuyosestánpreparados.»Tanalasta miró hacia la colina, donde apenas alcanzaba a distinguir las

siluetas borrosas deRybany susDragonesPúrpura.Estabandiseminados a lolargodelacrestadelacolina,conlosarcospreparadosyelcarcajcolgandodelaperilla de la silla de montar. Hasta el último de ellos parecía auscultar lapolvaredaendireccióna la llanura,dispuestosadistinguircuantopudierandelcursodelabatalla.

«Dispuestos —dijo Tanalasta—. Es más, yo diría que están ansiosos porentrarencombate.»

Vangerdahastasintióyempezóazarandearelescudodeunladoaotro,comosibuscaraunpozodeaguadondecavarunpozo.Cadavezqueelescudopasabaante ellos, los orcos que formaban en semicírculo se arredraban alarmados,dispuestos a echarse al suelo. A continuación, en cuanto el mago apartaba elescudo,losorcosseponíanenpiedeunsaltoygritabanyagitabanlasespadasenelairesinperderdevistaalmago.

Por desgracia, al resto de la tribu le asaltaban las mismas dudas. LosguerrerosarmadosconhachasvolvíanlentamentealasseccionesdelperímetroqueVangerdahastacababadedespejar,mientraslosorcossituadosenelextremodelacaravanamáscercanoaTanalastaparecíanarrojarsesobreloscarromatosconmásvigorquenunca.Tanalastavioquelosguardiasdelacaravanaestabanexhaustos,queseagarrabanalasruedasopermanecíansubidosenelpescante,yque esgrimían el acero a dos manos, cuando incluso alguien como Tanalastapodríahacerloconuna.

LaprincesaestabaapuntodeanimaraVangerdahastparaqueemprendierael ataque, cuandovioungranpájaroque apareció en el cielopor el oeste.Lacriaturaeraunpuntoborrosoenlapolvareda,por loquelaprincesanosupoaqué podía obedecer, excepto que parecíamuchomayor que cualquier águila yque volaba más raudo que un halcón en plena caza. El ave emprendió undescensoenpicado,ydespuésdesobrevolarencírculossobreelescenariodelabatalla,sealejóparadesaparecertrasunaloma.

—¿Quéeraeso?—preguntóTanalasta.

Page 97: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Elqué?—preguntóasuvezunodesusguardias.—¿No lo han visto?—Señaló en dirección al lugar donde el pájaro había

desaparecido—.Eraunaveenorme,dosvecesmayorqueunáguila...yrápida,muyrápida.

—Talvez fueraunbuitre, alteza—dijoel segundoguardia—.Lesatraeelolordelasangre.

—Eramuchomayorqueunbuitre—insistióTanalasta—.Y losbuitresnosontanrápidos.

—La polvareda de estas tierras tiene la particularidad de dar pie aespejismos, alteza —dijo el primero de los guardias, tras intercambiar unamiradaconsucompañero—.Vosnoospreocupéisporello.

Por mucho que le costara obedecer (sobre todo teniendo en cuenta queninguno de los guardias había visto aquella ave), la princesa no insistiómás.Fueraloquefueseaquellaextrañacriatura,noseinterponíaeneldesarrollodelosacontecimientos.TanalastaseguardóelenfadoyvolvióaprestaratenciónaVangerdahast, que finalmente parecía haberse cansado de las triquiñuelas.Cuandoelmagozarandeóelescudohechizadohaciaellugardondeseocultabael comandante orco, pareció titubear y después lo volvió a zarandear hacia elmontículo,antesdepararseenseco.

Los orcos que se reunían alrededor de su líder empezaron a gorgotearnerviosos.Ellíderseincorporóparaasomarlacabezaporencimadelmontículo.Vangerdahasthincó los talonesen los flancosdelcaballoy sumontura salióagalopecontantadecisiónqueelmagoyahabíarecorridolamitaddeltrechoqueloseparabadelmontículocuandosuescoltasaliótrasél.

El comandante orco se levantó y empezó a gesticular en dirección aVangerdahast. Unos lanceros abandonaron la protección del montículo y sedispusieronen filaanteel líder,clavandoelextremode la lanzaenel suelo,einclinandolapuntademaneraamenazadoracontraelcaballodelmago.

«¡En nombre del rey!—Vangerdahast tiró con fuerza de las riendas, peroinmediatamentecambiódeopinión,sedeshizodelescudoyseinclinósobreelcuellodelcaballo—.¡Dijisteislanzas,nopicas!»

Antes de que Tanalasta pudiera replicar, uno de los guardias que laescoltabanexclamó:

—¡Porelguanteletedehierro!

Page 98: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Acasopretendequeloatraviesendeparteaparte?—preguntóelotro.LaprincesaTanalastaseencogiódelmiedoyquisoapartarlamiradacuando

recordócómohabíanrebotadolasespadasorcascontraellomodelcaballo.—No le pasará nada—dijo, esperando que elmago atravesara la línea de

defensaorca,formadaporlaristradelanzas.En lugar de ello, aquel magnífico caballo saltó y se mantuvo en el aire,

galopandocomosiapoyara loscascosenel suelo.Cuandoelcaballopasóporencima de los atónitos orcos, Vangerdahast sacó algo del bolsillo y lo arrojócontraelenemigo.Losmarranos,aterrorizados,soltaronlaspicasysepusieronenpiedándosepalmadasenlaespaldamientraschillabanaterrorizados.

NomurieronhastaquelosjinetesqueseguíanaVangerdahastlosremataronenuntorbellinodeaceroycascos.Tanfuriosofuesuataque,queTanalastanosediocuentadequesóloerandoslosjinetesatacantes.Elterceroyacíaenelsuelo,cerca del círculo de caravanas, con el pecho abierto por una herida visibleincluso desde la posición elevada que ocupaba Tanalasta. Su caballo seencontrabaaunosmetrosdedistanciadelcuerpo:andabaperdido, temeroso,ysacudíalacabeza.

Laprincesanotuvotiempodepreguntarasuscompañerossihabíanvistoloque había sucedido. Lamontura deVangerdahast cayó a retaguardia del líderorco, obligando almuy cerdo a volverse y emprender la huida por el terrenocubiertodearena, tandeprisaque inclusoel caballodeVangerdahast tardóunpardesegundosenalcanzarlo.Paraentonces,Vangerdahasthabíarecuperadolavaraylaempuñócomosifueraunalanza.

Tanalasta esperabaqueunhechizo redujera el cráneodelorcoaunapulpasanguinolenta,peroVangerdahastse limitóaapuntarsulanzaimprovisadaa lanuca del enemigo,mientras el ímpetu del caballo hacía el resto. El líder orcosalióvolandounadocenadepasos,antesdecaer finalmentealsuelo.Elmagosupremo tiróde las riendasparadetener el galopedel caballoyvolviógrupashacialacaravana.

Los orcos empezaron a dispersarse, gritando y chillando como si sudemoníaco señor acabara de aparecer subido delmás negro pozo delAbismo.Un par de bolas de fuego estratégicamente lanzadas avivaron el pánico, y losmarranos que estaban más cerca de Vangerdahast emprendieron la huida enmasa.Elmagoencendióunpardecortinasígneasparaobligarlosacorrerhacia

Page 99: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

donde se ocultaba Ryban, y después se dirigió a la caravana para arremetercontralosguerrerosorcosqueluchabanalotrolado.

Un relámpago negro surgió detrás de uno de los carromatos que habíanardido,yacontinuaciónexplotóproduciendounaoscuridadcreciente.AntesdequeTanalasta comprendieraque se tratabade lamismaave enormequehabíavistoapenashacíaunmomento,lasombraseelevóenelaireygolpeódellenoenelflancoaunodelosjinetesqueescoltabanaVangerdahast.Eljineteperdiólimpiamenteeltorso,yelcaballosiguiógalopandoconmediocuerpodeljineteagarradoalasilla,comosinohubierapasadonada.

Elfantasmacayósobreelsegundojinetecuandoéstesevolvióparaverquéle había pasado a su compañero. El Dragón Púrpura desapareció bajo lasenormesalasnegrasdelacriatura,mientrashacíaademándetirardelaespada.Sucaballoaparecióalcabodeuninstante:habíaperdidolasillayteníatrestajosenelflanco,porlosquesangrabaprofusamente.

—¡QueHelmnosproteja!—gritóunodelosguardiasdeTanalasta—.¿Quéesesacosa?

—Segúnusted,unbuitre—repusoTanalastaconamargura.Al ver que Vangerdahast seguía al galope, sin saber lo que ocurría a su

espalda,laprincesaimaginóelrostrodelmagoensumente.«¡Vangerdahast,asuespalda!Esunaespeciededemonio,o...»Tanalastanopudoterminarlafrase,puestoquealcomenzarlaelfantasmase

volvióhaciadondeellaestaba.Laextrañacosaparecíauna fusióngrotescademujer y avispa, tenía un torso enorme, una cintura muy delgada, y unasextremidades como bastones articuladas de forma inhumana. Su pelo era tanoscurocomorelampagueantesyclaroseransusojos,ylaprincesacreyóentreverunasonrisajalonadadecolmillosamarillentos.

«Quieta,Tanalasta.»La princesa se volvió haciaVangerdahast y vio que elmago tiraba de las

riendas para dirigir su montura en dirección opuesta. Apuntó con la vara alfantasmaylanzóunrayobrillantedeluzesmeralda,perolacriaturayasehabíaelevadoenelaire.Elrayocayóenellugarquehabíaocupadolacosahacíauninstante, y los restos del cadáver del segundo jinete que acompañaba aVangerdahastsalierondesperdigadosentodasdirecciones.

El fantasmabatió sus alas enplenovuelo,y se lanzó sobre la caravanaen

Page 100: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

direcciónallugardondeseocultabaTanalasta.Laprincesaalcanzóaverunpardepechosdesnudosydiezgarrasdeébanoquesurgíandelosdedosdelgadosdeaquella cosa. Una esferita flamígera partió de Vangerdahast: su intención eraalcanzardellenoelflancodelacriatura.Eldemonioperdióímpetu,cayóhaciaunlado,perodespuésbajólasalasoscurasysealejóvolando,haciendoquelaesfera delmago explotara en una bola de fuego.Cuando la cosa se acercó, laprincesadistinguióelpuenteestrechodelanarizyunabarbilla larga,comodebruja,empapadaenrestossanguinolentos.

UnafuriaincontenibleardióenelinteriordeTanalasta,ydeprontonopudopensarenotracosaquenofueramataralenemigo.Sepusoenpieyhundiólamanoenelbolsillodelacapa,mientrasbuscabanerviosalavaritapacificadoraque le había dadoVangerdahast. Comprobó sorprendida que no sentía ningúntemor,sólounansiadesangreinsaciablequeleinfundíaunaeuforiapeculiaryquenublabasuspensamientos.¿SetrataríadeléxtasisdelabatalladelquetantolehabíahabladoAlusair?

UnodelosguardiasdeTanalastalacogiódelhombroylaempujóhaciaelcaballo.

—¡Corred!El hecho de que elDragón Púrpura la empujara la hizo volver en sí, y el

terror se apoderó de ella en el momento en que recordó con qué facilidad elfantasmahabíamatadoa los jinetesqueescoltabanaVangerdahast.Trastabillódospasos,despuéssedetuvocuandolosguardiasdesenvainaronsusacerosysesituaronanteellaalbordedelrisco,paraprotegerla.

—¡No sean temerarios! ¡Guardias, retírense!—gritó la princesa Tanalasta.SoltólavaritametálicaysacólamanodelbolsilloparajuguetearconunodelosanillosqueVangerdahastlehabíadadoenArabel—.¡Ahora!

Los guardias no obedecieron. En lugar de ello, empuñaron con fuerza elacero por encima de sus cabezas y lanzaron el grito de batalla, pero erademasiadotarde.

Elfantasmasobrevolóelterrenoarenoso,alcanzóelriscoyatravesódeparteaparteconlagarraaunodelosguardias,mientrasconelalaprecipitabaalotroalvacío,sindetenerelvuelotrepidantequeloacercabaaTanalasta.

—¡MurodeDragón!—gritóella,apuntandoelanilloalsuelo.Tanalasta sintió un intenso dolor en el dedo, y acto seguido un muro de

Page 101: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

fuerzaselevantóentreellayelfantasma.Unsonidoahogadoreverberóatravésdel terreno, y la criatura quedó colgando en el aire ante ella, con las alasextendidascontraelhorizonte,aambosladosdelabarreramágica.

Elfantasmaprofirióunchillidocapazdehelarlasangreenlasvenas,ysusojos blancos se volvieron humanos, propios de una mujer. De repente, laoscuridaddesapareciódesurostro,pararevelarlafazdeunanobleatractivadela misma edad, más o menos, que su madre, la reina Filfaeril. Tanalastatrastabillódenuevoante tal aparición, tanconmocionadayaterrorizadaestabaqueleparecíaquehubieraolvidadocorrer.

«¿Tanalasta?»,preguntólavozdeVangerdahastensucabeza.Elfantasmaliberósurostrodelmuromágicoysevolvióhaciaelmago.A

Tanalasta se le encogió el corazón al comprender lo que eso significaba. Lacriaturaeracapazdeoírloquedecíanmentalmente.

«¡Responded!»El fantasma liberóunalade labarrera,yTanalasta recuperóel sentidodel

peligro.«¡Silencio,viejoestúpido!»Laprincesasevolvióhacialoscaballos.DeprontoVangerdahastaparecióallímismo,anteella,sentadoenlasillade

montardesucaballo,entrelaprincesaysumontura,oscilandoconintermitenciaarrastradoporloscaprichosdelateletransportación.Tanalastavolviólamiradayvioqueelfantasmapretendíasuperarelmuromágicoporencimayquesurostrovolvía a ser una máscara de oscuridad. La princesa lo señaló con el brazo yrecordóelbrazaletequelucíaenlaotramano.

—¡Rayosdelrey!Un dolor lacerante sacudió la mano de la princesa Tanalasta y cuatro

relámpagosdemagiadoradasalierondirectoshaciaelpechodelfantasma.El ala de la criatura comenzó a fundirse en un borrón oscuro, y los

relámpagosalcanzaronelalaprovocandounasucesióndedescargasluminosas.El apéndice se volvió levemente translúcido, y en él Tanalasta pudo ver lacompleja estructura ósea de la criatura, parecida a la de un murciélago peromuchomásresistente.Luegorecuperósuoscuridad.

—Yahabéisdemostradoqueteníaisrazón,princesa—dijoelmagodespuésdeacercarseydarleungolpecitoen laespaldaconelextremodelavara—.Yahora, ¿por qué no dejáis que este viejo estúpido vuestro se las vea con esa

Page 102: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

desagradablefulana?Demasiado cansada como para discutir, Tanalasta se limitó a inclinar la

cabezayacorrerhaciasucaballo,subiéndosealasillacuandoelprimerhechizodelmago relampagueaba en el cielo a su espalda. Se inclinó hacia abajo paraliberar lasriendasde lamonturadelguardia,ydespuésvioqueel fantasmasearrojabacontraVangerdahastfundidoenunaboladepálidafuria.Elmagopusohorizontalmentelavaraqueesgrimía,yacontinuaciónlalevantóporencimadesucabeza.Unsetocompuestoporarbustosdeespinasargénteasseelevóenloalto,surgidodelanada,paradeteneralatacante.

Tanalasta dirigió sumonturahacia donde se encontraba su compañía, perovioqueunahordadeorcosascendíaporlamontaña,ycomprendióqueleseríaimposible reunirse con los Dragones Púrpura. Rogando a la diosa que Rybanpudieraverloquesucedíaallíarriba,diomediavueltayclavólostalonesenlosflancosdelcaballo.

Labestia,aterrorizada,subióporlaladeraescarpadacomosifueraunacabramontesa,yloúltimoqueTanalastaoyóasuespaldafuelamaldiciónqueprofirióVangerdahast,atónito:

—¿Quéengendrodesúcubotehaincubado?

Page 103: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

E6

lmagosupremoestabaasustado—sólounlocohubierapermanecidoserenoen semejante situación—, pero también se sentía cegado por la furia. Su

corazón latía con fuerza en supecho, latía comono lohabíahechoen setentaaños.Cadalatidodesucorazónleimpelíaachamuscaralfantasmaconelrayoylatormenta,aatacarlounayotravezhastareducirloaunmontóndecenizas,aunamanchaenlacimadelrisco.

Vangerdahast nunca había experimentado la furia de la batalla, y noalcanzaba a comprender a qué se debía. El mago supremo había advertido aAzounenmásdeunaocasiónquelasbatallasnolasganabaunoporlorabiosoqueestuviera,sinoporlofríoquesemantuviera,porelcálculodesapasionado,yahora allí estaba él, luchando tan encarnizadamente por controlar sus propiasemociones como por derrotar al enemigo. Era desesperante. Los restos de suúltimo rayo mágico seguían trazando parches transparentes a lo largo de laestructuradecuerodelaladelfantasma,yelmagosedispusoabajarlavaraypronunciarlaspalabrasarcanasquevolveríanainvocarelmismohechizoinútil.Lasituaciónleparecíadescorazonadora.

Vangerdahastbajólavaraydeslizóunamanoenelinteriordelamangadesu túnica.Mientras buscaba enunbolsillo diminuto, lomás rápidoposible, latelarañaquesiemprellevabaencima,elfantasmaloobservóporencimadelalaysearrojócontraél.LamonturadeVangerdahastdiounrespingoyestuvoapuntode tirarlode lasilla.El fantasmacayósobreunala,empujandoalaterrorizadocaballohaciaelbordedelrisco.Elmagosacólamanodelamanga,yarrojóunaboladetelarañacontraaquellacosaoscuramientrasrecitabaunencantamiento.

Page 104: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Antes de que acabara de pronunciar la primera palabra del hechizo, elfantasmareplególasalasycayóalsuelo.Alcaer,unamarañaenormedefibrapegajosa surgió a su alrededor, atrapandoa la criatura enunamasa amorfadefilamentoblanco.

ElcaballodeVangerdahastestuvoapuntodecaerporelprecipicio,peroalfrenarensecoelmagosalióvolandodelasilla.Maldijoasumonturaporsertancobarde, y extendió la mano para agarrarse a las crines del animal mientrasvolabahaciaunadunasituadaacientosdemetrosdedistancia.

Vangerdahast experimentó una irritante molestia cuando la magia de latúnicaseactivóporsímisma,ylassolapasdelacapaseextendieronhaciafueraparaimprovisarunaespeciedevela.Planeóhaciaelsueloypasóvolandojuntoalguardiaalqueelmonstruohabíagolpeadoconelala.Elpobrediablohabíacaídodecabezasobrelaarena,dondeyacíaenterradohastaloshombrosdespuésdepartirseel cuello.Undesgarro sanguinolentoen lacoraza señalabael lugardondelohabíagolpeadoelaladelfantasma.

Vangerdahastsevolviómientrassacabaunaplumadelinteriordelatúnica.Seguíainvadidoporaquellaextrañafuriaasesina,yrecitóunhechizorápidoaltiempo que estiraba los brazos; en ese preciso momento se elevó en el aire,diciéndosequeteníaunabuenarazónparavolveralcombateantesdecomprobarsiTanalastaseencontrababien.Teníaqueaveriguardedóndehabíasalidoaquelfantasma.Necesitabasaberporquéhabíaayudadoalatribudeorcos.Teníaquematarloantesdequeburlaralaseguridaddesumagiaypudieraescapar.Detodoelloloúltimoerasindudalomásimportante.

El mago se elevó con gracia, ascendiendo por el acantilado sin que suenemigopudieraverlo.Alsubir,oyóelentrechocardelaceroylosrelinchosdeloscaballosenlalejanía.Poralgunarazónquenoalcanzóacomprender,Rybansehabíaenfrentadoalosorcosenlugardehuirdeelloscomohabíanplaneado.Maldijo al soldado por ser tan valiente y se tocó el broche de garganta de latúnica. Cuando el bronce empezó a producirle un cosquilleo en los dedos,imaginóelrostrodeRyban.

«¡Amenosqueestéusteddefendiendoalaprincesa,abandoneelcombateyvayaabuscarla!»

«Nolaencuentro,yaunquepudieraretirarmenoloharía—respondióRyban—.¡NosveremosenEverwatch!»

Page 105: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

El cierre de la garganta se tornó frío al tacto de Vangerdahast, quien deprontocobróconcienciadelsentimientodepenayperplejidadquesentía.Noerapropiodelcapitánde losDragonesPúrpuranegarseacumplirconsudeber,nipensar que alcanzaría Everwatch después de desobedecer una orden directa.EverwatcheraelpalaciocelestialdeHelm,eldiosdelosguardianes,ysólolosguardianesmásfielesaspirabanaservirallíportodalaeternidad.

Vangerdahastvolóencírculosparaganarlacimaporlaparteopuestaalriscopordondehabíacaído,yalllegarpusoelpieentierra.Descubrióquelatelarañamágica empezaba a disolverse, transformándose en una sustancia viscosa ytranslúcidadecolorgrisseda,bajolacualviolaformadeunafemeninacolumnavertebral,muymarcada,delaquesurgíanlasbasesdedosalasdecueroblanco.Pocomáspodíaversedelafigura.Parecíahechaunovillo,teníaelcuelloyloshombros inclinadoshaciaadelante, laspiernasencogidasante labarbilla,y lasalasplegadasalrededordelcuerpo.

Vangerdahastseacercócaminandoagatas,luchandoporrecuperarelcontrolde sus emociones antes de atacar. Vio el extremo de su vara de guerra queasomaba por entre la masa viscosa. El fantasma no parecía forcejear, pero latelaraña sedisolvía apasos agigantados, encogiéndose alrededorde la criaturacomosi fueraunaespeciedecapullo.Elmagohizomemoriadelhechizomásrápido y mortífero que conocía, lo preparó y se acercó a cinco pasos de lacriatura,quehizoademánderetorcerlasalasblancas.

—Bienhecho,mago—dijoconvozrasposa—.Nohaymuchosquepuedanalardeardehabercapturadoaunaghaznethyvivanparacontarlo.¿Quéesloquedeseas?

—¿Ghazneth?—¿Esoesloquedeseas?—preguntóelfantasma—.¿Saberquésoy?Latelarañaseguíaencogiéndosealrededordelaghazneth,ocomoquieraque

sellamaraelmonstruo.Vangerdahastapuntóeldedoalaespaldadelfantasma.—Entreotrascosas.—¿Quéotrascosas?—Lavozdelaghaznethempezabaaparecervagamente

humana... femenina, con un acento arcaico de Cormyr—. Sabes que sólo esposibleundeseo.

—Nosoyyoquien correpeligrode serobjetodeunhechizomortífero—

Page 106: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

repusoVangerdahast—.Ni soydel tipodepersonasqueaceptaríaundeseodealguiencomotú.Yopreguntaréytúresponderás.Siereshonestaconmigo,quizáteenvíedevueltaalinfiernodelquesaliste,enlugardepermitirquetucadáversepudraycorrompaenestastierras.

Laghaznethflexionóunpocolasalas(losuficientecomoparadaraentenderalmagoquenoestabatanatrapadacomoparecía).

—Deseopordeseo—dijo—.Extrañodeseoesése,peroteloconcedo.—Nohepedidonada—replicóVangerdahast,conscientedequeelfantasma

intentaba dar la vuelta al sentido de todo lo que decía. Tanto le molestó queestuvoapuntodepronunciarlasílabaquedesataríasuhechizomortífero—.Notedebonada.

—Noescierto.Latelarañasereducíaaunasimplecapadetelaqueenvolvíaelcuerpodela

ghazneth. Vangerdahast avanzó un paso para recuperar la vara, y retrocedióenseguidaalobservarqueelcolornegrovolvíaaenvolver losextremosde lasalasdelacriatura.

—Me debes mucho más de lo que crees, Vangerdahast —prosiguió laghazneth—,yvasapagar...túyCormyr.

—¿Vangerdahast? Qué honrado estoy de que sepas mi nombre, ghazneth.Sólosoyunmodestomagoguerrero.

—Cuidadoconlasmentirasquedigas—advirtiólaghazneth—.Oacabaráscomoyo.

—Pormuy innecesarioquepuedaparecermesemejanteconsejo, teaseguroquelotendréencuenta—dijoVangerdahast,másdispuestoquenuncaanegarsunombre.Aquellacosateníacadavezmáspintadeserundemonio,ynuncaeraaconsejableadmitirelnombredeunoanteundemonio—.¿DedóndedicesqueconocesaeseVangerdahast?Megustaríainformarledesudeuda.

—No hablaré del asunto si no es con Vangerdahast. —El cuerpo de laghaznethadquirióunbrillohúmedo,surcadoporfilamentosgrisáceos,restosdelhechizo utilizado por Vangerdahast para retener a la criatura—. Sin embargo,podéisdecirlelosiguiente:sinopaga,Cormyrlohará.

—¿Cómo?—Alverquelacriaturanorespondíadeinmediato,Vangerdahastespetó—: ¡Responde! Se me agota la paciencia, tanto como se disuelve estatelaraña.

Page 107: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¡Quélástima...nadameretiene!—ElfantasmarodóhaciaVangerdahast,levantandounalaparaescudarseyotraparatirarloalsuelo.

Elmago saltó hacia atrás, colocándose fuera del alcance de las alas.Tuvotiempodeatisbarel rostrograveydeperfil aguileñodeunaanciana, antesdequelosojosdelaghaznethabandonaranelazulparatornarseblancosysurostroquedara oculto por un velo de oscuridad. Señaló con el dedo al pecho de lacriatura y escupió la sílaba que desataría el hechizo mortífero que habíamemorizado.Laghaznethplegóelala superiorcon la intencióndeprotegerse,peroVangerdahastapenashabíacerradoloslabioscuandouncírculoblancosedibujóeneltorsodelacriatura.

El fantasmaprofirióunchillidoagudoyseencogióporelpecho,mientraslasgarras largasque teníaarañabansurcosenelpechodesnudo.Lacarnequehabíabajolamanosetornópálidayblanda,yempezóarezumarentresusdedoscomoceracaliente.

Elmagoseencogiódehombros.—Teníasrazón:soyVangerdahast.Debiósaberconquiénselasjugaba.Lamanodelaghaznethresbalóporsupecho,pararevelarunvacíodesigual

allá donde el mago había atacado a la criatura. A través del agujero vio unamarañadevenasyunamasainformedemohoviscoso,cuyaformarecordabaala de un corazón. Vangerdahast trastabilló sorprendido ante la sensación depánico que lo embargaba. Era incapaz de recordar la última vez que habíaexperimentadoaquellasensación,peromuyprobablementeseremontaraaantesdequeelreyAzounciñeralacorona.

La ghazneth se apoyó despacio en sus patas de avispa, mientrasVangerdahastseesforzabaenpensar.

«De modo que el corazón de esa cosa está cubierto de moho. Eso nosignificaqueseaindestructible.Podíaserdenaturalezanomuertaodemoníaca»,pensó.

Teníamediosparacombatirambasposibilidades.Loúnicoquedebíahacererasuponerexactamentedequésetrataba,ylanzarunhechizoodosqueburlaraelescudodesusalas, sinpermitirqueesacosa learrancaraantes las tripasdecuajo.

Laghaznethdiodospasosaun lado,parasituarseentreVangerdahasty la

Page 108: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

batallainterminableentrelosorcosylosDragonesPúrpuradeRyban.Elmagose preguntó si habría llegado el momento de recurrir a lo que los magosguerreros consideraban el artilugiomás útil de la túnica: el bolsillo de huida.Rebuscóenlatúnicaelbolsillosecreto,peroentoncescayóenlacuentadequehuirnoeralasolución.Tanalastanoestabamuylejos,yeramuyprobablequelacriaturalaencontrarasivolvíaaelevarseenelaire.

Laghaznethextendiósusalas,cortándolelavíadeescape,salvoquequisieravolar o saltar por el acantilado. El pánico de Vangerdahast se convirtió endecisión,yencontróelbastónpacificadorenfundadoenelinteriordelatúnica.Eraunaherramientamuycomún,queestabaalalcancedecualquiercapitándelos Dragones Púrpura; un bastoncillo casi tan poderoso como las varitas queseguían enfundadas en los correspondientes bolsillos de su túnica, aunque elbastónteníalaventajadesermuymanejableyrápido.

La ghazneth avanzó sin quitar ojo a la mano del mago. Vangerdahastpermitióquelollevarahaciaelbordedelacantilado,rogandoqueelmonstruonosupieraquepodíavolar.Nohabíaningunarazónparacreertalcosa.Lacriaturaera presa del hechizo de telaraña cuando él cayó por el precipicio y, porsupuesto,estabadeespaldascuandovolvióasubir.

Vangerdahast alcanzó el borde del precipicio y se detuvo. La ghazneth sedispusoasaltarsobreél,yelmagosacóelnegrobastónpacificadordelinteriordesutúnica.

—Últimaoportunidadpararendirte.Deotromodo,noquedaránirastrodeti,nisiquieraparahacermeunpardebotas.

Apuntó el extremo del bastón a la ghazneth y, como era de esperar, elfantasmaplegóelalaoscurasobresíparaabsorberlaboladefuegoqueesperabarecibir.

Vangerdahastsearrojóhaciaatrásyemprendióelvuelo.Girósobresímismoenelaireyascendióvolandoenlínearectaalolargodelapareddelacantilado,conintenciónderegresarallugardondehabíasaltado.Laghaznethaparecióenaquelprecisoinstante,saltandoalvacíoconlasalasextendidas.

Vangerdahastgolpeósupechoconelbastónpacificador,ygritó:—¡Aleste!La ghazneth se vio impulsada repentinamente hacia el cielo, como si la

hubieranarrojadodesdeunacatapulta,ydespuéssealejóendirecciónesteentre

Page 109: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

chillidosderabiayconfusión.Vangerdahast rióquedodurante algunos segundos, y regresó a la cima.La

criatura tardaría unamedia hora en recuperarse de lamagia de repulsión quehabía invocado con el bastón. Tiempo más que suficiente para reunirse conTanalastaymarcharsedeallí.Guardóelbastónensutúnicaycogióelanillodesello.

Agazapada tras la última duna que daba paso a las Tierras de Piedra,Tanalastaobservócómoelfantasmasealejabavolandohaciaeleste,yguardóelanillodeselloenunbolsillodelacapa.Loúltimoquequeríaenaquelmomentoera hablar con Vangerdahast. La criatura podía oír su conversación gracias alanillo,yfueraloquefueseloqueelmagohubierahechoalacriatura,noqueríaqueéstalaspagaraconella.

El fantasma fue alejándose hasta convertirse en una mota, y finalmentedesapareció. Sólo entonces volvió Tanalasta hacia su caballo, y empezó adesandar el camino que había recorrido al alejarse de la cima, procurando noperdersupropiorastro.Lasprimerasdosvecesquetuvoquecoronarunaduna,vioqueVangerdahastlabuscabadesdelacimadelacolina,asomándoseporlaladera de la montaña u observando la caravana, que parecía recuperarse delataque.Laterceravezencontróalcaballodelmagoescondidoenunadepresióndelterreno,agachadocontraelladodesombradeunaroca,temblandodeterror.Condujosucaballohacialamonturadelmago,yhablóalaasustadabestiaenuntono de voz tranquilizador. El caballo la miró con ojos cansados, abiertos ydesconfiados.

Tanalastasedetuvoaunadocenadepasosdelcaballo.—Vamos,Cadimus.—Mantuvolasmanosenlaperilladelasilla,consciente

de que lo asustaría si intentaba acercarse o precipitar las cosas—. ¿No mereconoces?SoyamigadeVangerdahast.

El caballo inclinó las orejas hacia adelante al oír el nombre de su amo.Tanalastalevantólentamentelamanoyseñalóhaciaelrisco.

—Vangerdahast —dijo—. ¿Le conoces, verdad? Vangerdahast está bien.¿Porquénomeacompañasaverle?Vangerdahastestáahímismo.

El caballo se volvió hacia donde señalaba Tanalasta. Al no ver el risco,

Page 110: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

ocultotrasunadunadearena,empezóaandarlentamente,Tanalastaseinclinóparacogerlasriendas,peroelcaballoresoplóamododeadvertenciaeinclinólacabezaparaapartarladelaprincesa.

—De acuerdo, Cadimus. —Tanalasta volvió a enderezarse en la silla—.Síguemetúsolito.VamosareunirnosconVangerdahast.

Volviósupropiamonturaysedirigiósinprisashaciaelrisco,procurandonoponernerviosoalcaballo.Nosabíaquéhabíaocurridoallíarriba,perodebíadehabersido terrible.Cadimuserauncaballovaliente,criadoenelespíritude lalucha. Su hermano,DamaskDragon, era el caballo de batalla favorito de supadre.

Finalmenteseacercarontantoalacimaqueellugarempezóaasomarsobrelacrestade laduna.Cadimus sepusomásnerviosoquenunca,sedetuvopararesoplar y escarbar el terreno con los cascos. Al principio, Tanalasta intentótranquilizarlo con susurros, pero cuanto más hablaba mayor empeño ponía elcaballoenvolversobresuspasos.

Laprincesadecidió intentar una estrategiadiferente: volvió lamiraday sealejóalgalopesindecirunasolapalabra.Eraunaestrategiamuyarriesgada,nosólo porque temiera que el pobre animal se quedara vagabundeando por lasTierras de Piedra, sino también porque Vangerdahast era un hombre bastantecorpulento.Aunquepodíanviajarlosdosensupropiocaballo,aTanalastanoleapetecíalomásmínimocompartirlasillademontarconelmagoenlasjornadasdeviajequeseavecinaban.

LaprincesacabalgócasicincuentapasosantesdequeCadimusemprendierael trote detrás de ella; resoplaba enfadado e intentaba ponerse a la altura delcaballodeTanalastaparadesequilibrarlo,comosiquisieraconvencerlodequedieralavuelta.TanalastasedejóalcanzaryconsiguióhacerseconlasriendasdelamonturadeVangerdahastytirardeellas.

—¡Menudocaballodebatallaestástúhecho!Cadimus resoplódisgustado,peroagachó lasorejasydejódeempujara la

yegua. Tanalasta suspiró aliviada y lo condujo otra docena de pasos colinaarriba,momentoenquenolesquedómásremedioquedisponerseasuperar laduna.

Alasombradelrisco,teníanqueascendertrabajosamenteporlaladeradelamontañasiqueríanllegaralacima.Cadimusmoviólacabezapara tirarde las

Page 111: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

riendas amodo de protesta, pero Tanalasta emprendió el ascenso apartándoseligeramentedelalíneadevisióndelrisco,paraqueelcaballonocreyeraquesedirigíanalmismolugardelqueanteshabíahuidoalgalope.

Aldescenderporladunaseprodujoasuespaldaunruidosimilaraldeunacorriente de aire.Cadimus profirió un relincho aterrorizado y salió al galope,estandoapuntodetiraraTanalastadelasilla.Consiguiócogersealaperilla,ydespuésdesmontóysevolvióhacialacimadeladuna,señalandoconunamanohaciaelsonido,mientrasconlaotraacariciabaelbrazaletemágico.

—¡Ni se os ocurra! —ordenó Vangerdahast, que aterrizó sobre la dunaacompañado por una pequeña tormenta de arena—. Ya he sufrido bastantesgolpesporhoy.

Tanalastabajóelbrazo,nomuysorprendidadevervolaralmago.—¿La próxima vez podría usted avisarme?—Bajó la mirada y reparó en

Cadimus,quesealejabaalgalope—.Mireloquehahecho.—¡No tengo tiempo que malgastar en advertencias!—El mago señaló al

dedo de la princesa, donde esperaba encontrar el anillo de sello—. Además,¿cómo podía avisaros? ¡Hace quinceminutos que estoy intentando hablar convosatravésdeldichosoanillo!

—Esomeparecióqueharía.—Tanalastavolvióaencaramarseenlasillademontar—.Poresomeloquité.

—¿Qué? —preguntó Vangerdahast, cuyas mejillas se arrebolaron hastasemejarrubíes.

—Temía atraer la atención del fantasma. —A regañadientes, Tanalasta leofreciólamanoparaquemontaraenlasilla—.Puedeoírtodoloquedecimosatravésdelosanillos.

—Noseáisridícula—replicóVangerdahast,frunciendoelentrecejo.Enarcóuna ceja y con lamirada ausente hizo un gesto con lamano para rechazar laoferta—.Porotrolado...

Sinmolestarseenterminarlafrase,sellevódosdedosalabocaysilbóparallamarlaatencióndesucaballo.

—Porotraparte,¿qué?—preguntóTanalasta.—Acompañadme. —Vangey extendió los brazos, saltó en pleno aire y

sobrevolólaposicióndeTanalasta—.Notenemosmuchotiempo.Tanalasta no tuvo que preguntar la causa de las prisas delmago. Si había

Page 112: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

intentado hablar con ella mediante el anillo, el fantasma sabía que se habíanseparado y podía volver con la esperanza de encontrarla.Galopó siguiendo almagoyCadimusnotardóenunirseaellos:elcaballoparecíahaberrecuperadolaconfianzaensímismo,simplementeporhabervistoasuamo.

Tanalastaalcanzóalmagovoladorysepusoasualturaparapoderhablar.—Vangey,¿porquéhuyeusteddeesacosa?—Tuvoque inclinarel cuello

paraquepudieraoírla—.¿Porquénolamatócuandotuvoocasióndehacerlo?Cuando Vangerdahast la miró desde arriba, pudo leer en sus ojos cierta

preocupación.—Me cogió un poco por sorpresa—admitió—. Y para seros sincero, en

realidadnotengolamenorideadeaquépuedeobedecerunaghazneth.—¿Ghazneth?Alcanzaronlabasedelacolina,yVangerdahastsealejóvolando,porloque

nopudieronseguirhablando.Ascendieronendiagonalporlaladeraendirecciónoeste,hastaquesevolviólobastanterocosacomoparapoderocultarlashuellasde cascos en caso de que los siguieran. Después se dirigieron hacia el este,alejándose de los orcos que aún se movían por todas partes en el campo debatalladelsenderodelRayodePiedra.TanalastaobservóellugarypudoverqueRybansehabíaquedadoparaenfrentarsea losmarranos.VioaunadocenadeDragones Púrpura tendidos entre los muertos, mientras cuadrillas de orcosdisputabanentresíporlassillasde,almenos,eldobledecaballos.Selehizounnudoenlagarganta,yrogóqueningunodeesosDragoneshubierapermanecidoen labatallaporcreerqueellaestabaenpeligro, aunque leparecióqueeraelúnicomotivoplausible.

Encuantohubieronascendidoasuficientealturaparaquelallanuraquedaraocultaporlatormentadepolvo,Vangerdahastsedirigióalalomadelamontaña.Abrióelcaminohastallegaraunrefugioquesereducíaaunentranteenlaroca,ydespuésdejóaTanalastaquedieradecomeraloscaballosehicieraguardia,mientras él daba una vuelta en busca de posibles vías de escape. Al volver,señaló una montaña que se encontraba a un kilómetro de distancia, en cuyacrestahabíaunarocaenormeenformadeespiral.

—Si la ghazneth nos encuentra, usad el bolsillo de huida de la capa paradirigirosallí,despuésdescendedporlaladeraopuestaycabalgadcomoalmaquelleva el diablo. —La miró entornando un ojo—. No lo habéis utilizado aún,

Page 113: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

¿verdad?Tanalastahizoungestodenegación.—¿Yosacordáisdecómosehace?—No soy sorda.—Tanalasta hizo ademándemeter lamano en el bolsillo

secreto de su capa—. Estas capas no son tan difíciles de usar. Pero ¿por quépreocuparsetanto?Matemosaesacosayacabemosdeunavezportodas.

—Nocreoqueseatanfácil.—Vangerdahastvolvióasonrojarse.—Creíquepodíaustedconcualquiercosa—dijoTanalasta.—Nomegustaadelantaracontecimientos—dijoVangerdahast,evitandoasí

nuevaspreguntas.Sacóunpuñadodecomponentesparahechizosdelbolsillo,yempezó a disponerlos todos sobre la superficie de una roca, recurriendo altrabajocomoexcusaparaevitarlamiradadeTanalasta—.Conocíaminombre.

—Puesclaroquesabíasunombre.—Noporhablar,Tanalastadejódehacerguardia—.Yaledijequepodíaescucharloquedecíamosatravésdelosanillos.

Vangerdahast replicó,peroTanalastano looyóbien.Deprontose lehabíaocurrido algo terrible, e intentó desesperadamente encontrar una razón queinvalidara sus peores temores. Al no conseguirlo, la princesa cogió aVangerdahastporelhombro.

—Vangey,¿ysiésaeslarazóndequeAlusairsequitaraelanillo?Vangerdahast la miró confundido, pero no dijo nada, y la princesa se dio

cuentadequenolehabíaprestadomásatencióndelaqueellalehabíaprestadoaél.Sacóelanillodesellodelbolsilloyloobservósobrelapalmadesumano.

—Vangerdahast,meloquitéparanollamarlaatencióndelaghazneth—dijo—.¿YsiAlusairsevioobligadaahacerlomismo?

—¿Por qué iba a hacer algo así?—preguntó Vangerdahast molesto—. Laghazneth está aquí.—Lamiradadelmago se iluminó al comprender a qué serefería—.¡No!

—No sabemos lo que ha sucedido—intentó tranquilizarlo Tanalasta—.Elsilencio deAlusair podría deberse a que se limita a ser cautelosa.Después detodo,nosabedóndeestáesacosa.

Máspreocupadoquenunca,VangerdahastsevolvióhaciaTanalasta.—Muchísimasgracias:antesnoestabapreocupadoporAlusair.—Elmago

palidecíaantelamiradadelaprincesa—.Yaoslodije.Laghaznethdijoqueledebíaalgo.Sinopago,Cormyrlohará.

Page 114: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Habló usted con esa cosa?—Tanalasta clavó lamirada en el arrugadorostrodelmago,enlugardemantenerseojoavizor.

—Lodecís comosihubiéramos tomado juntosel té—gruñóVangerdahast—.Teníaatrapadaaesacosaenunatelarañamágica.

—¿Ylasoltó?—Nohicenadadenada.Nosécómo,perologródisolvermitelaraña...quizá

laabsorbió,oalgoasí.Elcasoesquenotengolamenorideadecómolohizo.—ElmagoseacercóaCadimusparasacarellibrodesortilegiosdelasalforjasdel caballo—. Cuando volvamos a Arabel, quizás el sabio supremo puedadecirme qué es exactamente una ghazneth. No puedo teletransportarnos devueltahastamañanaporlamañana,perosipodemoshacernocheaquí...

—¿Volver?—preguntóTanalasta—.¿AArabel?Vangerdahast abrió el libro de sortilegios y empezó a pasar páginas, sin

prestaratenciónalaprincesa.—Porsupuesto.¿Nopensaréisquepermitiréquesigáisaquí?—¡Yustednocreeráquevoyavolver sinhaberencontradoamihermana

Alusair!—¡Basta, alteza! —Vangerdahast cerró el libro con fuerza—. Vuestra

temeridadyanoshacostadolavidademuchoshombresvalientes.—¿Mitemeridad,Vangerdahast?—Vuestratemeridad—insistióelmago—.¿Nofuisteisvosquieninsistióen

quedebíamosdestruiralatribudeorcos,«comolohubierahechoAlusair»?—Sí,peroesonoquieredecir...—YcomoconsecuenciadeellohemosperdidoatodalacompañíadeRyban.—¿Cómopuedeusteddecirquehasidopormiculpa?—Tanalastasesentía

dolida—.¡Sesuponíaquedebíandispararunascuantasflechasyemprender lahuida!

—Esonocambialasituación—insistióVangerdahast—.Habéisjugadoconlavidadeloshombres,ynovoyapermitirquetoméismásdecisionesquenooscompetan.

—Vangerdahast, lamento la pérdida de Ryban y sus hombres —dijoTanalasta,abriendolosojoscomoplatos—,peronosoytemeraria.Siustedyelreyestánjugandoconmigo,megustaríaquemelodijeraahora.

—El reyhablóen serio, esoos loaseguro.Nopermitiráqueunaordende

Page 115: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

monjesocupeunpuestodesemejanteinfluencia.—¿Él no lo permitirá,Vangerdahast?—preguntóTanalasta—. ¿O es usted

quiénnolopermitirá?—En este asunto ambos compartimos la misma opinión —insistió

Vangerdahast—.PeroesonotienenadaqueverconvuestroinminenteregresoaArabel.Constituyeunactodetraiciónelhechodequeosempeñéisenarriesgarlacorona,alarriesgardeestemodotantovuestravidacomoladelosdemás.

—Seríaunchantaje siel rey jugarade farol—replicóTanalasta—.Ysiesasí, la traición pesará sobre vuestra conciencia, no sobre lamía.No he hechootracosaquetomarlaspalabrasdemipadrealpiedelaletra.

—Elreynojugaríadefarolconsupropiahija.—Entoncessólohayunaformadeinterpretarcuálesnuestrodeber—afirmó

ella—.Elreynoshaenviadoabuscaralaprincesadelacorona,yestacriaturaghaznethnoshaapremiadoaencontrarla.

Vangerdahastsoltóunhondosuspiro,claramentefrustradoporeldilemaenque se encontraba sumido. Tanalasta volvió a vigilar los alrededores, a ver sientrelapolvaredaatisbabaelborróndeunasalasoscurasenelhorizonte.

—Princesa, sed razonable—dijoVangerdahast—.Aunque todo lo quemedecísescierto,nisiquieravospodéisadmitirquevuestropadrepudierapensarquesucederíaalgoasícuandoosenvióalas...

—Noséquétendríaelreyenlamente—interrumpióTanalasta—.Loquesíséesqueestoyaquí,yqueelreymeordenóquebuscaraaAlusair.

En silencio, la princesa añadió que precisamente debía cumplir la misiónporque el rey nunca había supuesto que pudiera entrañar ningún peligro. Elhecho de permitir que el fantasma les obligara a volver a Arabel, tan sóloconfirmaría la convicción de su padre de que debía protegerla. Pero siencontrabaaAlusairydescubríaloqueocurríaenlasTierrasdePiedra,quizásempezaraaconfiarenlasdecisionesquealgúndíatomaríacomosoberana.

Uninstantedespués,Vangerdahastsuspiró.—De acuerdo. Si os empeñáis en fingir que no comprendéis cuál es el

motivorealdeesteviaje,osloexplicaré.—Noesnecesario,Vangerdahast—dijoTanalasta,levantandolapalmadela

mano—.Loqueustednoparececomprenderesqueenrealidadyaséelporquédetodoesto.Losmagosguerrerostemenquelosclérigosrealesocupensulugar;

Page 116: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

ustedtemetenerenbreveunmaestredeagriculturarealquecompitaporeloídodelmonarca,yelreytemeincomodartantoaunoscomoaotros.

—Nuestras reservas no son de una naturaleza tan mezquina —replicóVangerdahast—.Amíme preocupan los celos que puedan generarse entre lasdiversas religiones, mientras que la cuestión que hace referencia a la lealtaddivididaescompletamenteinadmisible...

—Sí, sí.Conozco de sobra los argumentos en contra, y sé que usted es laúnicacabezapensantedetodoelreino.Quenopiensaenotracosa,vamos.—Tanalastahizounapausaydespuésañadióconironía—:Jamáscuestionaríasulealtad, sólo su conviccióndequeningunaotrapersonapueda saber loque esbuenoparaCormyr.

—¡Señora!—vacilóVangerdahast—.Esonoesjusto.—No, pero es cierto. Quizás usted sea la única persona que conozca las

necesidadesdeCormyr.Inclusoyodeboadmitirque,porlogeneral,tienerazónentodo.—Tanalastacogióaireyreunióvalorparacontinuar—:Esamíaquientodosvosotrosnocomprendéis.Sinopuedoserreinaamimanera,entoncesnoreinaré.

Vangerdahastlaobservócomosiacabaradeconocerla.—¡PorlaUrdimbre!¿Renunciaríaisaltronoporunpuñadodeclérigos?—Renunciaría por variosmotivos—respondió Tanalasta—. Por esa razón

me corresponde amí decidir que es necesario encontrar aAlusair.Al parecer,soylaúnicapersonaquesehatomadoenserioestamisión.

Vangerdahastapartólamiradayobservólapolvareda.Tanalasta lo dejó a solas con sus pensamientos, satisfecha, pues creía que

había ganado por lamano la discusión. Siguieron de esemodo, planeando lasiguientemaniobraensuparticularguerradevoluntades,hastaqueunamanchaborrosa en forma de «V» se recortó contra el cielo, hacia el este. Era tanpequeña, que si la princesa no llega a estar mirando en esa dirección, no lahabríavisto.

Laformadistantesevolviómásymásgrandeaunavelocidadalarmante,yTanalastanotardóendistinguir lasalasdecueroquesemovíanarribayabajoentrelapolvareda.Seguíaunrumboparaleloallugardondeseocultabanenlasmontañas,ypasódelargosinvolversehaciaellos.LaprincesadeseócontodassusfuerzasquelossupervivientesdelacaravanaylosdelacompañíadeRyban

Page 117: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

sehubieranalejadotodoloposible.En cuanto desapareció tras la montaña, Vangerdahast se volvió hacia la

direcciónaproximadaendondeseencontrabalapolvorientallanura,yapilótrespiedrasalbordedeunazanja.

—Vendráporaquí.—¿Vendrá?—preguntóTanalasta.—Siempreycuandoestéisenlociertodequepudooírlaconversaciónque

mantuvimosatravésdelosanillos—explicóelmagomientrashundíalamanoenelbolsillointeriordelacapa—.Claroqueloquevoyahaceresconvertirmeenelemisor,aunquedudoqueesosupongaalgunadiferencia.Siesacosapuedeinterceptarunaformadetelepatía,sospechoquepodráinterceptarlaotra.

—¿Dequéestáhablando?—preguntóTanalasta,contrariada.—DeencontraraAlusair,porsupuesto—respondióelmago—.Dijisteisque

esoeraloqueosproponíaishacer.—Mereferíaabuscarlafísicamente,noaconvidara laghaznethaquenos

siguieralapista.—¿Ypordóndeoshabéispropuestobuscarla?—preguntóVangerdahast.—¿No lo sabéis?—preguntó a su vezTanalasta, incrédula—. ¿Ni siquiera

habéisintentadoencontrarla?—¿Ydequéhubieraservido?Cuandonoquierequenadie laencuentre,se

quitaelanillodeselloyseocultadetodaslasmiradas.—ElmagosereferíaalanillomágicodeintimidadqueAlusairhabíaobtenidodespuésdemuchoinsistiraAzoun.Alponérselo,podíaimpedirquenisiquieralamagiadeVangerdahastla localizara—. Aunque no se haya puesto el anillo de ocultación, Alusair semueverápidamente.Notienesentidointentar localizarla,hastaqueestemosenposicióndeemprenderlacaza.

—Yhastaqueustedhayatenidotiemposuficienteparaquitarmedelacabezatodaslasideasinconvenientesquepuedatener—añadióTanalastasecamente.

—Quizá.—Vangerdahast se encogió de hombros—. Lo cual nos lleva almismodilema:¿dóndebuscar?

—PuestoqueAlusairibatraslapistadeEmperel,nocreoquetardemuchoenpasarporlaCavernadelaEspadaDurmiente—señalóTanalasta.LacavernaeraunrefugiosecretodelosSeñoresQueDuermen,unacompañíadeguerreroshibernadosaquienesEmperelteníaelencargodecuidar—.Creoquepodríamos

Page 118: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

empezarporahí.—¿Yllevarallíalaghazneth?—replicóVangerdahast—.Nomepareceque

seamuybuenaidea.Intentamosmantenerelemplazamientodelacompañíaensecreto,comobiensabéis.

—¿Y por dónde empezaría usted? —preguntó Tanalasta condescendiente,abriendolosojos.

—¿PorquénoselopreguntamosaAlusair?—replicóVangey.—PorqueAlusair no lleva puesto el anillo de sello—respondióTanalasta,

exasperada—.Yporque tenemos razonespara creerque tieneunbuenmotivoparanoponérselo.

—Cierto, pero ese motivo está por aquí, buscándonos a nosotros. —Vangerdahast señaló hacia el risco donde se había enfrentado a la criatura—.Probablemente sea la única oportunidad que tendremos de establecer contactocon Alusair, sin poner su vida en peligro. Además, podemos poner a pruebavuestrateoríadequelaghaznethpuedeoírtodoloquedigamosatravésdelosanillos.

El mago no dio a entender que si Tanalasta tenía razón, no tendrían másremedioquehuiratodaprisaparanoenfrentarsealaghazneth.Noobstante,ajuzgarporlospreparativos,Vangerdahastestabadispuestoaaceptarelcombate.

—Antesdedarmiconformidad,dígamecuálessonsusplanes.—Tanalastaseñaló el montoncillo de chucherías dispuestas sobre la piedra. Reconoció undiente de ajo, una rama de romero, un vial de agua bendita, además de otrosobjetosextraños—.¿Paraquéquieretodoeso?

—Setratadeunexperimentosinimportancia—respondióVangerdahast,conuna de sus sonrisas inocentes que ponían nerviosa aTanalasta desde que tuvoedad para articular palabra. Cogió una pluma de paloma y añadió—: No séexactamentequéesunaghazneth,demodoquemeesmuydifícilaveriguarquépuede rechazarla,peroapostaría algoaqueesto servirá. Jamásmehecruzadoconundemonioalquelegustelaplumadeunapaloma.

—¿Planeaexpulsarla?—Siestáisenlociertodequepuedeleernuestrasmentes,sí.—Vangerdahast

cogióunaroca,ydespuésempezóadibujarunpentagramasobresusuperficie—.Piensoenviarladerechitaalinfiernodelquesalió,seacualfuere.

—¿Ysinoloconsigue?

Page 119: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Vangerdahastseñalóconundedonudosolaestribaciónmontañosa,encuyacimaseerigíalapiedraenformadeespiralquehabíaseñaladocuandollegaron.

—Paraesoestánlasvíasdeescape.¿Pensáisayudarmeono?—Espero que todo esto no sea fruto de su orgullo —asintió Tanalasta.

Después de haber recordado al mago cuál era su deber, no podía negarle suayuda—.¿Quéquierequehaga?

Vangerdahastleexplicósupartedelplan,ydespuéssevolvióparacontinuarconlospreparativos,mientraselladesatabaloscaballos.Cuandovolvióconlasbestias, el mago había terminado de trazar el signo de protección y estabadispuestoaempezar.Sesubióalapiedrayseadentróenelinteriordelaestrellade cinco puntas, cogiendo con fuerza aquel conjunto extraño de componentesparahechizos.

—Podéisobservarlo tododesde lacresta—dijo—.Siesto funciona,veréisunportalabiertoqueabsorberáalaghaznethdevueltaasuhogarinfernal.

—¿Ysilaghaznethnodesaparece?—preguntóTanalasta.—Entoncesmereuniréconvosenlacresta...Yserámejorquenoescatiméis

esfuerzosa lahoradehuir.—Inclinó lacabezaanteella,ysevolvióhacia lastrespiedrasquehabíaapiladoenelbordedelazanja—.Preparado.

TanalastasevolvióhacialacrestaeimaginóelpelorubiocenizaylamiradadeojosnegrosdesuhermanaAlusair,despuésrozóconlamanoelbrochedelacapa.Elmetalvibróaltactoyviolacabezadesuhermanainclinadaaunlado.

«EstoyconVangeyenelsenderodelRayodePiedra,albordedelosPicosdelasTormentas.Elfantasmanospersigue.Deboencontrarte.»

«¿Tanalasta?—ElrostromadurodeAlusairtraicionósuenfado—.Estanquedel Orco, Vangey sabe dónde está. ¡A partir de ahora nada de magia, o noconseguiréisdarnidospasos!»

A continuación, el rostro de Alusair se desvaneció. Tanalasta sacudió lacabezaparadespejarseymiróaVangerdahast.

—¿ConoceustedunlugarllamadoEstanquedelOrco?—He estado allí en más de una ocasión.—El mago siguió estudiando el

cielosituadosobrelaspiedrasapiladassobrelazanja—.Ahoradebéisiros.—Alusair me dijo que, a partir de ahora, nada de magia. —La princesa

Tanalastanoparecíadispuestaaobedeceralmagoymeterlamanoenelbolsillomágico.

Page 120: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Qué? —Vangerdahast la miró, asombrado—. ¿Cómo pretende queencontremosEstanquedelOrco?

—A mí me preocupa más nuestro plan —replicó Tanalasta, con unasensación de desmayo—. Alusair me dijo que nada de magia, o que no loconseguiríamos.

Eradifícildeterminar si la expresióndeVangerdahast correspondíaa ladeunapersonaintrigada,oaladelairritaciónenpersona,perounacosasíeraclarayesquenoparecíatenermiedo.

—Demasiado tarde para cambiar de planes. —Volvió la mirada hacia elrisco,ydespuéshizoungestoaTanalastaparaqueseapartara—.Idos,queahíviene.

Tanalastalevantólamiradadeformainvoluntaria,yviolafiguraoscuraqueasomabaporencimadelamontaña.Volviógrupasmirandohacialaagujadelasiguientecrestaymetiólamanoenelbolsillodehuidadelacapa.Sintióqueseledormíaelbrazo,seprodujounrestallidoagudoyunrectángulodeoscuridadenformadepuertasematerializóanteella.

Cadimuslanzóunquejidoeintentóecharseatrás,amenazandoconsoltarlasriendasquesosteníalaprincesa.

—¡Ahorano,cobardica!—LaprincesaTanalasta tirócontodassusfuerzasdelasriendasdelcaballoyanimóasupropiamonturaafranquearelportal.

El mundo se hizo todo oscuridad, y la princesa experimentó la sensaciónatemporalyextrañadeprecipitarseenelvacíoduranteunaeternidad.Semareóantesdequeunfríointensoseextendieseporsusdedosysunariz.Susoídossellenaron con un rugido susurrante y sobrecogedor, como el del agua que seprecipitaconfuerzaporunacascada,ysuestómagoreverberócomosiacogierala vibración de un millar de tambores. Entonces, en menos tiempo del quetardaríaenpestañear,volvióalaluz:ledabavueltaslacabezayelvientosilbabaensuoído.

Cadimus resopló trasella;parecía tanconfusocomoalarmado,yTanalastarecordódeprontodóndeestabayquéestabahaciendo.Descargóunapatadaenlosflancosdesumontura,yelpobrecaballoemprendiólamarchaaciegas,tanaturdidocomoel jineteque lomontaba.Laprincesadejóquecontinuarahastaquesintióquehabíansubidounacuesta,momentoenquedescabalgóyatóalosdosanimalesaunosarbustosescuálidosqueteníaamano.

Page 121: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

CuandoTanalastavolvióalrisco,lacabezayanoledabavueltas.Setumbóbajo la espiral degranitoy asomó la cabezapara echar unvistazo a la cresta.MásallávioalaghaznethquesearrojabasobreVangerdahast.

Cuandoelfantasmaestabaapuntodeecharseencimadelmago,secontuvoyvolvióaganaraltura.Duranteun instante terrible, laprincesapensóque iríaaporella,peroentoncesvioqueelmonstruocaíasobreunalanegrayenorme,altiempoqueextendíasusgarrasparaatacaralmagoporlaespalda.Vangerdahastse volvió rápido como el rayo, pero la ghazneth ya estaba encima de él.Tanalasta supoqueelhechizodelmagonoactuaríaantesdeque lacriatura leabrieralastripasconsusgarras.Sepusoenpieantesdepensarenloqueestabaapuntodehacer,yhundióunamanoenelbolsillodehuidadelacapa,mientrasconlaotracogíaelbastónpacificador.

Porsuertetantoparalaprincesacomoparaelmago,Tanalastasiguiódondeestaba.Comoelbrochecapazdeenviaryrecibirmensajes,elbolsillodehuidadelacapasólopodíautilizarseunavezaldía.Sehundióenelsueloyobservóasombrada cómo la ghazneth rebotó contra la estrella protectora, hasta chocarcontralaladeradelamontaña.

Vangerdahastsehundiódehombrosaliviado,antesdequesuvozempezaseareverberarenlasrocasamedidaquegritabaelencantamientoyarrojabaalaireloscachivachesquehabíareunido.Laghaznethtrazócírculosalrededordelpicodondeseencontrabaelmago,arrojándosehaciaéldevezencuando,peseaquesiempresalíarebotadaysegolpeabacontra la laderade lamontañaunayotravez.Unaespiraldeluzbrillanteaparecióenelaireantelacriatura,yempezóaseguir susmovimientoscomounasegundasombradecuyaexistenciano teníanoticia.

Cuandofinalmentelaghaznethsecansódegolpearsecontralaladeradelamontaña,seposóenlazanjacercanaaVangerdahast.Leparecióquedecíaalgo,despuéssetumbóyenvolvióelpedazodetierraconlasalas.Lapiedraempezóatemblar, y Tanalasta comprendió, debido a la postura tensa del mago, que aVangerdahast jamás se le había pasado por la cabeza la posibilidad de que elmonstruo pudiera arrancar la posición elevada donde había organizado sudefensa.

La voz de Vangerdahast reverberó con mayor apremio, y se inclinó paraarrojar los objetos contra loshombrosde su atacante.El tornadoque seguía a

Page 122: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

espaldasdelaghaznethcrecióenintensidad,mientrasparecíaabsorberlasalasdecuerohaciaelfondodelaespiral.Lacriaturamiróinquietaporencimadesuhombro,ydespuésunpequeñoojoaparecióenmediodeltornado.Apartirdeladescripción de Vangerdahast, Tanalasta esperaba ver una especie de infiernoígneoodesiertocubiertodesangre,peroaquelpequeñocírculoseparecíaalasTierrasdePiedracomodosgotasdeagua.

Laghaznethprofirióunrugidoygirósobresímisma.Seoyóunrestallidoquereverberóen lasmontañasyelpedazode tierradondeVangerdahasthabíatrazadolaestrellaseabrió.

LaprincesaTanalastavolvióaponerseenpie,gritandoalmagoqueutilizarael bolsillo mágico, aunque era consciente de que no podría oírla dado elestruendodelapiedradesgajada.CuandoVangerdahastseacercóalborde,sacóunaplumadepalomaygolpeóalaextrañacriaturaenlacabeza.

Se oyó un chillido agudo en la montaña. La ghazneth desapareció en eltorbellino,arrastrandoconsigoelpedazode tierra.Elmago,porsuparte,cayóbocaabajoenlazanja,dondeyaciótembloroso.Finalmente,elhechizosefundióenunpuntodefuerzaydesaparecióparadejarpasoalsilenciomásabsoluto.

Tanalastalanzóungritodejúbilo,despuésviounasiluetafamiliarenelcieloysetumbódenuevo.Vangerdahastlevantólacabezayellasepusoderodillasparaseñalaralcielo,trasél.Elmagoselevantóysevolvióhacialaladeradelamontaña,dondelasiluetadelaghaznethserecortabaentrelapolvareda.

Vangerdahast permaneció inmóvil durante un tiempo que le pareció unaeternidad,aunquemuybienpudosermenosdeunsegundo.Tanalastaempezóalevantarseparagritar,peroaúnnosehabíapuestoderodillascuandoelmagosevolvióhaciaellayaparecióasulado,teletransportadomágicamente.Allíestaba,un poco aturdido y mareado a causa del hechizo, extendiendo la mano paracogerladelamanga.

—¡Salgamosdeaquí!

Page 123: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

E7

stabanperdidosenelarenosomar.Elsolseocultabatrasunbancodenubescolor perla oscuro, y un viento racheado del norte había cubierto el

horizonteconunacortinadepolvopardusco.Lallanuraestabapavimentadaconbloques desiguales de basaltomarrón rojizo, dispuestos sin orden ni conciertosobreunlechodearenaamarillenta,mientrasquelasescasasmatasdearbustoscapaces de resistir la aridez parecían la versión enfermiza de un avellano.InclusoloscalzonesdemontardeTanalastaylagloriosabarbadeVangerdahasthabían adoptado un tono marrón caqui bajo la gruesa capa de polvo de lasTierrasdePiedra.

Pormuyincómodoquepudieraresultarviajarbajolapolvareda,laprincesaagradecíaelhechodequenadiepudieraverlosconfacilidad.DespuésdelfútilintentodeVangerdahastporlibrarsedelaghazneth,cualquiercosaquepudieraayudarlesaocultarseeraungranalivioparaella.HabíanvistoalacosaendosocasionesdesdequeseadentraronenlasTierrasdePiedra.Laprimeravez,hacíadosnoches,cuandosuformaoscuraserecortócontraelhorizonte,entreellosylasmontañas.Lasegundavezhacíatansólounashoras,cuandoapareciólejos,alnorte,volandoencírculoscomounhalcónenbuscadesupresa.

El fracaso deVangerdahast en su intento por exorcizarla habíaminado suconfianza. Pasaba horas enteras sumido en un profundo silencio, y de prontoofrecíaaTanalasta interminablesanálisissobreloquepodíahaberfalladoparaquelaghaznethnoseencontraradesterradaensuplanooriginario.Despuésdehaberleído(ydehabermemorizado,segúndecíanalgunos)todosycadaunodelos libros de palacio, la princesa pudo discutir algunas de sus teorías sin

Page 124: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

necesidaddehablardemasiado.Hastaelmomento,segúnella,elhechoeraqueelexorcismonohabíasidounfracaso,yquelaghaznethhabíavueltoasuplanooriginario.Pordesgracia,suplanoeraToril.

Vangerdahastrechazóaquellaposibilidadporconsiderarlaunacontradicciónensímisma,yselimitóaseñalarqueundemonionopodíaperteneceraToril,yquenadaenTorilpodíaserundemonio.Tanalastaconsideróladiscusióncomouna cuestión de pura semántica. A su entender, cualquier cosa que tuvieraaspecto, que actuara y matara como un demonio, era un demonio. Es más,cuandoseñalóqueaaquellacosalehabíanafectadonouno,sinodoshechizosque, supuestamente, sólo podían afectar a un demonio (tanto la estrella deprotección, comoel exorcismoen sí),Vangerdahast fue incapazde refutar susargumentos.Quizálacriaturanoseajustaraaladefinicióndedemonioaceptadaporunmagoguerrero,peroparalaprincesasinoloera,lefaltabamuypoco.

TanalastadeseóqueVangerdahastnolahubieraengañadoparasepararsedeOwdenFoley.HabíaleídoenEllibroImmaskaridelaguerra(entraduccióndeAlaphondar, por supuesto) que los clérigos están mejor preparados que losmagosparaenfrentarsealosdemonios.Almenoslosclérigosnosedejanmatarporunacuestióndeorgulloconlamismafacilidadquelosmagos.

Porsegundavezenelúltimocuartodehora,Tanalastadescubrióque teníaunapelículadepolvoenelrostro:primeropasólamanoparalimpiarselosojos,ydespuésrecurrióalacantimploraparaenjugarselosdientes.Obiensehabíandesviadodelrumboqueseguíanhaciaeloeste,obienelvientohabíarolado,ysirecordaba algo del modesto Estudio sobre la flora de las tierras áridas, deGaspaerilGofar,eraqueelvientonoacostumbraarolarenlasTierrasdePiedra.

Tanalastaobservólapiedraimánquecolgabadelamuñecacorrespondientea lamano con que Vangerdahast sujetaba las riendas. Seguían viajando en ladirección adecuada según la aguja, lo cual significaba que se dirigían hacia eloeste.Entonces,¿porquéazotabaelvientodelnortesusrostros?Ysinoeraelviento del norte, ¿por qué arrastraba la arena deAnauroch?Cuando el vientorolaba,desaparecíalapolvareda.AlmenosestoesloqueafirmabaelestudiodeGaspaeril.

—Algovamal—dijoTanalasta,tirandodelasriendasparafrenarelpaso.Vangerdahastsiguióadelante,concentradoensuspensamientos,sinreparar

enlaausenciadeTanalasta.EllaesperóaqueCadimusdieraalgunospasosmás,

Page 125: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

y entonces sacudió la cabeza ante la poca atención que le prestaba su«protector».

—¡Vangerdahast!El mago se irguió en la silla y miró a ambos lados. Cuando no vio a la

princesaenellugardondesolíaestar,profirióunjuramentoylevantólamiradaalcielomientrascogíaunadesusvaritas.

—¡Nadademagia,Vangerdahast!—gritóTanalasta.Desdequehabíandejadoatrása laghazneth,habíanseguidoelconsejode

Alusairyevitaban lamagiacomosi fueraunaenfermedadcontagiosa.Habíanguardado los anillos, los brazaletes y las capas en las alforjas, y enterrado lasvaritas pacificadoras, las dagas mágicas y todo cuanto irradiara un aura demagia. Hasta el momento tenían sobrados motivos para felicitarse por elresultado.

Elmagoseguíasinverla,yTanalastaagitólamanoenelaire.—Estoyaquí.Vangerdahast tiró de las riendas y volvió grupas, mientras en sus ojos

cansadossereflejabaunprofundoalivio.—¿Quésucede?—preguntóoteandoelhorizonte—.¿Habéisvistoalgo?—Esloquenohevistoloquemepreocupa.¿Aestasalturasnotendríamos

quehaberllegadoaEnsenadaCarmesí?—Según parece, no, puesto que aún no hemos llegado. —Vangerdahast

apartó la mano de la capa que llevaba colgada a lomos del caballo—. Tenedpaciencia.LasTierrasdePiedrasonmuyextensas.

—Siustedconsideragrandeunaextensióndeseismilkilómetroscuadrados,entoncessíloson—replicóTanalasta—,peronosetratadeeso.UsteddijoquealcanzaríamosEnsenadaCarmesíenundía,yyallevamosdos.

—¿Y cómo voy a saber cuánto podemos tardar? —repuso Vangerdahastencogiéndosedehombros—.Jamásenlavidahecabalgadohastaallí,comobiensabéis.

—Imaginoqueno—suspiróTanalasta.Conloocupadoquesolíaestar,eradifícil para el mago disponer del tiempo necesario para cubrir distancias acaballo, sobre todo teniendo en cuenta que se podía teletransportar—. ¿A quédistanciaestádelsenderodelRayodePiedra?

—Pocoimporta,¿noosparece?—Elmagosacudiólacabeza.Señalóconla

Page 126: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

manolallanurarocosaquelosrodeaba,yañadió—:Nocreoquenosperdamos.—Esposiblequesí,sinuncalacruzamos.—Tanalastaseñalólapiedraimán

que colgaba de lamuñeca de Vangerdahast—. ¿Está usted seguro de que esacosaseñalaelnorte?

Vangerdahast extendió el brazo para ponerlo en la misma dirección queseñalabalaaguja.Lapiedraimáncolgóporunmomentohaciaellado,yluegogirópararecuperarsuposiciónoriginal,perpendicularalviento.

—¿Loveis?Siempreseñalaelnorte.—Entonces, ¿por qué nos da de cara el viento del norte? —preguntó

Tanalasta.—Noeselvientodelnorte,sinoeldeloeste.—Vangerdahastrespondiócon

tantarapidezquediolaimpresióndeestarmuysegurodesí.—¿ConarenadeAnauroch?—preguntóTanalasta.Elmagofruncióelceñoyguardósilenciounossegundos,antesdeseñalarel

suelo.—LaarenavienedelasTierrasdePiedra.—No si hacemos caso a Gaspaeril Gofar. —Tanalasta alargó la mano—.

Déjeme ver el mapa. A menos que Ensenada Carmesí esté a más de sesentakilómetrosdelsendero,yodiríaquenoshemosadentradodemasiado.

—Yodiría que la ensenada está a unos sesenta kilómetros del sendero delRayodePiedra—replicóVangerdahast,sintenderleelmapa.

—¿Tiene usted el mapa, verdad?—insistió la princesa, que seguía con lamanoextendida.

—Porsupuesto—aseguróelmago,dandounapalmaditaalasalforjas—.Unmapamágico.

—Estupendo—dijoTanalasta—.Supongo que deberíamos dar las gracias.Vamosaaprenderunalecciónvaliosísima.

—¿Vamos?—preguntóVangerdahast,ceñudo—.¿Aquéosreferísalutilizarelplural?

—Sinmagianisiquierapodemosconsultarunmapa.¿Nocreequetodoestoesunpocoridículo?—preguntóTanalasta—.¿Ysinecesitáramosesemapaparaganarunabatalla?

—Si esto fuera una batalla, nosotros no estaríamos aquí —replicóVangerdahast, envarado—. Y si intentáis sugerir que vuestros clérigos

Page 127: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

pedigüeñosloharíanmejor,recordadquetambiénellosrecitansushechizosalamaneratradicional:unasílabadetrásdeotra.

—Vangey, no me refería a eso.—Tanalasta se inclinó sobre la silla paratocarleelbrazo—.Sólointentodecirquelamagiatambiéntienesupuntoflaco,comocualquierotracosa.

—Mimagiaeslobastantepoderosacomoparallevarnosaambosdevuelta,sanosysalvos,aArabel.—Vangerdahastapartóelbrazo—.Precisamenteesoesloquedeberíamoshacer,sobretodoahoraquesabemosqueAlusairestáasalvo.

—Hemos descubierto que sigue con vida, pero no que esté a salvo—dijoTanalasta en un tono irritado—. Ignoramos si ha averiguado algo sobre ladesaparicióndeEmperelodelaghazneth,hechosambosquesospechoqueestánrelacionados.Y lo que aún esmás importante: no hemos informado aAlusairqueellaeslanuevaprincesadelacorona.Yapuedeusteddejardeladoeltemadelhechizodeteletransportación,yseguircabalgando.

Tanalastahincólostalonesenlosijaresdelcaballohastapasardelargojuntoa Vangerdahast, tiró de las riendas para situarse perpendicular al viento yemprendióeltrotehacialoqueesperabaquefueraeloeste.Elmagonotardóenseguirla.

—Si insistís en continuar con esta locura, ¿os importaría mucho dejar decabalgarendireccióncontraria?

—Novoyendireccióncontraria.—Tanalastarecordóeltextodeunpanfletosobrenavegación,escritohacíauncentenardeañosporunDauntinghorn—.Sipuedo probárselo, ¿me promete dejar de repetir cada dos por tres eso de quetenemosqueteletransportarnosaArabel?

Vangerdahast frunció el entrecejo. La observó pensativo, sin responder, yTanalastaempezóatemerqueselehubieraocurridolomismoqueaella.

Cuando finalmente habló el mago, tuvo la completa seguridad de que nisiquieraselehabíaocurridopensarenlaposibilidaddequetuvierarazón.

—¿Ycuandonopodáisprobarlo,dejaréisqueosdevuelvaaArabelsanaysalva,ymepermitiréisquemeencargueyosolitodeesteasunto?

—Deacuerdo.—Muy bien. Entonces, adelante —animó el mago, dibujando una

involuntariasonrisa.Tanalastatambiénsonrióalpellizcarlamejilladelmago.

Page 128: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Tengolasensacióndequevamosallevarnosmuybiendespuésdeesto.Desmontó y trasladó sus pertenencias a una de las alforjas. En cuanto las

hubo vaciado, se dedicó a llenarlas con piedras como puños de grandes, y sedispusoacaminarantesucaballo.

—Usted delante, Vangerdahast. Caminaremos durante algunos minutos,guiadosporsupiedraimán.

Vangerdahast observó la alforja llena de piedras como si la princesapretendieralapidarlodespués,peroasintióytiródelasriendasparaquelaagujade lapiedra imán señalara endirecciónnorte.Sedirigieronpocoapocoen ladirección adecuada según la aguja, procurando no desviarse del rumbo.Tanalastalesiguióapie,conduciendosucaballoyhaciendounapausacadadiezpasosparacolocarunadelaspiedrasquellevabaenlaalforjasobrecualquieradelaspiedrasmayoresqueVangerdahastencontrabaasupaso.

Elmago supremo no dejó demirar atrás todo el rato, primero la observóburlón, luego intrigado, asombrado, y... finalmente, desazonado. Cuando laalforja quedó vacía, estaba sonrojado hasta las cachas. Sacudió la cabezadisgustado,ysedeshizodelapiedraimánquellevabaenlamuñeca.

—¡Hemos estado cabalgando en círculo!—Elmago levantó el brazo paraarrojarlapiedraalolejos.

—¡Espere! ¡No es culpa de la piedra!—Tanalasta se volvió paramirar eltrechoquehabíanrecorridoyvioquelaspiedrasdibujabanunacurvasuaveperovisible—.CecilDauntinghorndescubrióunfenómenosimilarharáuncentenardeaños,cuandoestuvonavegandoalrededordeunadiminutaislaenelMardelasEstrellasFugaces.Resultóquelapiedraimánseñalabaunextrañoacantiladodepiedranegra,yqueencuantosehuboalejadoempezóaseñalardenuevoelnorte.

Vangerdahast observó las piedras que la princesa había distribuido en lallanura.

—Seréidiota.Confíoenqueestéisorgullosadespuésdeburlarosdemí.—Enrealidad,no.—Tanalastavolvióaredistribuirelpesoensusalforjas—.

Es decir, quizás un poco, pero no era mi intención hacerle quedar como unidiota.Sóloqueríaqueconfiaraenmibuenjuicio.

—Confiaríamuchomásenélsimepermitierais tele...—empezóadecirelmago,enarcandounaceja.

Page 129: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Vangey...—No,aArabelno—dijoelmagoaltiempoquelevantabaunamano—,sino

al Estanque del Orco. No me cabe la menor duda de que Alusair estarámaldiciendonuestratardanza,yahoratardaremoseldobleenencontrarlo...siesqueloconseguimos.

—Alusair tendrá que esperar unas horasmás. Sospecho que semolestaríamucho más con nosotros si atrajéramos a la ghazneth a su campamento. —Tanalastaasegurólasalforjas,ydespuésvolvióalimpiarseelpolvodelosojos—.Además,dudoquehayamosperdidomuchotiempo.Sihubiéramosavanzadodecaraalvientoantes,estoyseguradequemehabríadadocuenta.

Laprincesamontóy tomóunadirecciónperpendicularalviento,seguradedirigirse hacia el oeste. Cabalgaron durante tres horas, y en dos ocasiones sepercataron de la presencia de pequeñas bandas de siluetas jorobadas, queasomaban por entre la polvareda. En ambas ocasiones se alejaron de ellas,cabalgandoendireccióncontraria,antesderetomarelrumbooeste.Alfinal,elcieloamarillentoempezóatornarsemarrónyturbio,yTanalastaestabaapuntodesugerirqueacamparanparapasarlanoche,cuandoelvientoarrastróelaromadelamuerte.

Laprincesatiródelasriendasyelhedordesaparecióconlamismarapidezconquehabíallegado.

—¿Ha olido usted eso, Vangerdahast? —preguntó segura de haberpalidecido.

—¿Un olor a sangre rancia? —Señaló el viento—. ¿Procedente de esadirección?

Tanalastaasintió.—No,noloheolido.El mago volvió grupas hacia el viento y azuzó a Cadimus dejando a

Tanalastapreguntándoseelporquédeaquelcomportamientotanrudo.Losiguióaunospasosdedistancia,deseandodisponerdealgúnotromediodedefenderseapartedelamagia.Elhedorseintensificóyempezóaaparecerydesapareceraintervalos cada vez más frecuentes. Vangerdahast siguió alterando el rumbohastaquesehizomásymásconstante.Laprincesaobservóelmusgoquecrecíaentrelasrocas.Finalmente,unacortinadevaporblancoaparecióantesumirada,destacando una columna de árboles descarnados, dispuestos a lo largo de una

Page 130: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

cadenademontesrocosos.Vangerdahastdetuvoelcaballobajounaramadelgadayobservólabasede

losmontes.Tanalastallegóasualtura,apuntoderomperatoseranteeloloraazufreyhierroqueimpregnabalazona,einmediatamentesedispusoaobservarelterrenoempinadodetierrarojiza.Abajo,enelbarranco,viounarroyodeaguateñida de rojo, que discurría hacia el norte por encima de un lecho de cantoscorroídosydesiguales.

—¿EnsenadaCarmesí?—preguntó.—Precisamente donde vos dijisteis que lo encontraríamos —asintió

Vangerdahast,quesedirigióaguasarribayemprendióelgalopea lo largodelbordedelbarranco—.Vamos,adelante.AcamparemosenelEstanquedelOrco.

—¿Sabedóndeestá?—Nuncaheestadoaquí—respondióelmago.—Creoqueseríamejorqueacampáramosaquí.—Tanalastaobservóelcielo

tenue,antesdeañadir—:Notardaráenhacersedenoche,demasiadaoscuridadparaseguircabalgando.

—Tenemos tiempo. —Vangerdahast siguió cabalgando. Cuando vio queTanalasta no le seguía, tiró de las riendas y se volvió hacia ella—. ¿Quizáqueráishacerunaapuesta?¿Quétaldobleonada?

—¿Dobleonada?—Tanalastaobservóel arroyoy sacudió lacabeza.Paraqueelaguaestuviera tancaliente lafuentenodebíadeandarmuylejos—.Nohaytrato,viejofisgón.Yaveoloquepretende.

—¿Deveras?—Vangerdahastsonrió,despuésvolvióaazuzaralcaballo—.Supongoquesoisdemasiadolistaparamí,Tanalasta,quenoesdecirpoco.

La fuente estabamás cerca de lo que había supuesto la princesa. Siguió aVangerdahastalolargodelbarrancounoscuatrocientosmetros,momentoenquelacortinadevaporempezóaaclarar,yelriachuelosevolviótanincolorocomoel cielo. Pasaron varios minutos contemplando el barranco intrigados, yfinalmentedesmontaronysedispusieronallevarloscaballoshaciaelterraplén.Amedidaquedescendían,unacintaescarlatatiñóelvaporantesumirada,rizadaentre las protuberancias nebulosas de dos montecillos rocosos situados en lacostalejana.

—DoyporsentadoqueelEstanquedelOrcotendráunaspectosangriento—dijoTanalasta,altiempoqueseñalabahacialacintaescarlata.

Page 131: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Asídeberíaser.¿EstáisseguradequevuestrosclérigosdetresalcuartodeHuthduthnoosconvirtieronenpitonisa?

Tanalastafruncióelceñomientrasintentabadecidirsielmagoseburlabadeellaointentabaecharleunpiropo.

—Sentidocomún.—Según tengo entendido, de eso andan sobradas las pitonisas—replicó el

mago—.Veamos,lamagiadeverdad...—No nos prestaría ningún servicio en las actuales circunstancias —

interrumpióTanalasta—.Ydesearíaquedejarausteddereferirseamisamigosdeesemodotandespectivo.

—Como deseéis, alteza —repuso Vangerdahast, llevándose la mano a lacabeza.

Alcanzaron el fondo del barranco y cruzaron un trecho cubierto de hierbahastalaorilla,dondecomprobaronlatemperaturadelaguaconeldedoantesdemontarydisponerseacruzarel riachuelo.Alotro lado, siguieronelarroyodeaguasrojizashastallegaraunvallequedibujabaunasuavependiente.Aunquenohabíavegetaciónadospasosdelrío, lahierbavirgencubríalasparedesdelvalle, y el hedor pasó de un olor a azufre y hierro a sólo hierro. En cuantoTanalastaseacostumbróalolorydejódeasociarloalasangre,yanolepareciótanapestoso.

Finalmentealcanzaronelextremodelvalle,dondeelarroyosedesbordabapor un precipicio rocoso desde una cuenca cubierta de vapor. Cuando noapareció ningún centinela para saludar o desafiarlos, ataron los caballos a unamoreraycubrieronel restodel trayectoapie,conscientesde laposibilidaddequeuna tribudeorcos,oalgopeor,hubieraobligadoaAlusairaabandonarelpuntodereunión.Noencontraronnadaexceptounpequeñoestanquedeaguasteñidas de rojo, rodeado por un montículo cubierto de hierba, en cuyo pieencontraronformacionesdebasaltorojo.

—¿EstoeselEstanquedelOrco?—preguntóTanalasta.—Por supuesto. ¿Cuántos estanques rojosdiríaisquehayen lasTierrasde

Piedra?—Ahora que lomenciona—respondió Tanalasta,molesta—, el ensayo de

GaspaerilGofarmencionabacercadesesentaconjuntosdeaguateñidadehierro.—Aquílotenéis—dijoVangerdahast—.Loreconozco.

Page 132: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Elmagosubiógateandopor lacaídaycaminóhaciaelconjuntodecantosque había en la orilla sur del estanque.Mientras cruzaban la vega, Tanalastadescubrió un metro cuadrado de suelo recién levantado. Dejó a Vangerdahastsolo y se detuvo para examinar el terreno. Las piedras habían sidocuidadosamenteextraídasdelsueloyapiladasenlosbordes,yhabíaunpequeñohoyoenelcentro,dondehabíanmojadoelsueloconunatazadeagua.

—Estánaquí—dijoVangerdahastdesdearriba—.Bueno,comomínimoaquíhayalguien.

Tanalastasereunióconelmagoanteelcírculodepiedras.Alacercarse,olióelaromafamiliardelhenoyvioelextremodeunacoladecaballoqueasomabapordetrásdeunaroca.

—¿Alusair?—llamó.—Nolocreo—respondióVangerdahast.Tanalastaseacercóalarocaydescubrióuncampamentooculto,lobastante

grande como para acomodar a una compañía de veinte personas. En aquelmomentosólohabíauncaballoatadoyVangerdahast,sentadoenlasilladesupropia montura. A sus pies había un par de botas polvorientas, y el magoregistraba los bolsillos y calzones de una túnica que alguien había dobladocuidadosamenteparadejarlosjuntoaunacapa.

—Vangerdahast,pero¿quédiantreestáhaciendo?—preguntóTanalasta.—Intentoaveriguaraquiénperteneceesto—replicóelmago—,ysiesono

unodeloshombresdeAlusair.—Asíes.AlguienhabíarespondidoaespaldasdeTanalasta,tancercaquelaprincesa

sellevóunsusto,gritóydiounrespingo.Sevolvióhacialapersonaquehabíahablado, apretando en la mano una piedra que llevaba en lugar de la dagamágica. El hombre estaba desnudo y mojado, tenía el pelo a la altura de loshombros y la piel brillante del calor del estanque; no tenía mal aspecto. Dehecho, teníamuy buen aspecto, el pelo tan oscuro como lamirada, un rostroatractivoyunabarbillaenlaquedestacabaunhoyuelo.Eradehombrosanchoscomounapuerta,losbrazosdeltamañodelosmuslosdeTanalasta,elabdomenplano como una tabla y... Tanalasta se sonrojó, pues una princesa no teníaocasióntodoslosdíasdeversegúnquécosas.

—¡Alteza, perdonadme! —exclamó el hombre, mortificado. Empuñaba la

Page 133: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

espadaylavaina,ybajólasmanosparacubrirsudesnudez—.Noesperabaquellegaraishoyconlapolvaredaquehahabido,yestabaenelaguacuandooíqueseacercabaalguien.

AlverqueTanalastanorespondía,elhombreinsistió.—Ruegomeperdonéis,alteza,perohemosperdidoalgunoshombreseneste

viaje,yteníaquemovermeconcautela.FinalmenteTanalastasepercatódequelomirababoquiabierta.—¡Pormihonor!—LaprincesaTanalastasoltólapiedraysediolavuelta,

con el rostro rojo como el tomate, como si acabara de sacar la cabeza de lashumeantesaguasdelestanque—.Por...porfavor,noledeismásvueltas.

TanalastaviolasonrisadeVangerdahastporelrabillodelojo.—Vaya,quizásesteviajehayamerecidolapena,despuésdetodo—dijoel

mago,tendiendolaropaalhombre—.¿Sepuedesaberquiénesusted,hijo?—MellamoRowen—respondió.Tanalastaoyóqueelreciénllegadosacudía

lospantalonesparaponérselos—.RowenCormaeril.Aloírsunombre,aTanalastaseleencogióelcorazón.Sevolviólentamente

ycomprobóqueyasehabíapuestoloscalzonesylatúnica.—¿FamiliardeGasparCormaeril?—preguntó.—Gaspareramiprimo,y tan traidoralhonordenuestra familiacomodel

reino—asintióRowen.A Tanalasta se le cayó el alma a los pies. Junto a Aunadar Bleth, Gaspar

Cormaerilhabíasidounodeloscabecillasdelasuntoabraxus.Comocastigoporlosucedido,supadreincautótodaslastierrasdelafamiliaCormaeril.

Tanalastanopudoencontrarpalabrasparaexpresarsusorpresa.—Ruegoquedisculpéiscómomehecomportadoenvuestrapresencia,alteza

—dijo Rowen, inclinándose profundamente—. De haber sido posible, estoyconvencidodequelaprincesaAlusairhabríaenviadoaotrapersonaaesperaros.

—Lo dudo—gruñóVangerdahast. Elmagomiró a Tanalasta y sacudió lacabeza—.Nocreoquelehicieramuchagraciasaberqueestabaiscerca,yoslohademostradodeestemodo.

—¿Porquésiemprepiensalopeordelagente,señormago?—TanalastaseacercóaRowen—.EstoyconvencidadequeenvióasirRowenporquesabíaqueeraelhombremáscapacitadoparalamisiónqueleencargó.

LaprincesatendiósumanoaRowen,quiensesorprendiótantoquelevantó

Page 134: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

lamiradasincogerla.Ellasonrióeinclinólacabeza,sinretirarlamano.Nosinciertos reparos, Rowen cogió sumano por los dedos y rozó con los labios eldorso.

—SimplementeRowen,alteza—dijo—.Meprivarondeltítulojuntoconlastierrasdemifamilia.

—En tal caso, simplementeRowen.—TanalastaobservóqueVangerdahastlevantaba la mirada antes demirarlo ceñudo. Hizo un gesto para que RowenCormaerilse incorporara—.Dígame,Rowen,omuchomeequivocooesoquehevistoenelbordedelestanqueobedecíaaunaobradefe.

—Así es, alteza—respondióRowen, con los ojos abiertos comoplatos—,peromesorprendequesepáistalcosa.Nocreíquenadiepudierareconocerlo,aexcepcióndelosHijosdeChauntea.

—Ynoseequivoca—sonrióTanalasta—,y,porfavor,nometratedealteza.BastaconquemellameTanalasta.

—¡Por el dragón azul! —exclamó Vangerdahast, poniéndose en pie—.¡Alusairnoshaenviadoaungranjero!

Page 135: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

L8

acolhabíaempezadoamarchitarse,ylosbordesdesushojasseteñíandecolor marrón mientras las cabezas verdes se abrían. Un pordiosero alto,

envuelto enuna capahecha jirones, cruzaba el campo endiagonal, sin prestaratenciónalgranjero,empeñadoendedicarle insultosyenanimara lospatanesquelorodeabanaperseguiralintruso.Bajolaluzdelatardecer,elintrusonoerasinounasiluetaalargada,deandarespeculiaresyunamiradavidriosacapazdeasomarpordebajodelacapuchaqueensombrecíaelrestodesusfacciones.

—Ésaeslaseñal—susurróAzoun—.Yalostiene.—Bien hecho, sire —dijo Dauneth Marliir—. Mejor será librarse de esa

gentuza.—Yo no los tacharía de gentuza, señor guardián.—Azoun ató el caballo

alrededordeunfresno—.Sólopretendenayudar.—Sí, pero ¿a quién? —Dauneth lo siguió hacia la sombra—. Estoy

convencidodeque sumajestadyahaconsiderado laposibilidaddequehayandivulgadolanoticiaaposta,contaldeganaradeptosparael temploreal.Deboadmitir que por el momento se han salido con la suya. Tal y como están lascosas,laplagaecharáaperderlamitaddeloscamposcultivablesdelreino,yloscampesinostendránporhéroesaestosplantadoresdesemillas.

Una docena de jinetes abandonaron a galope tendido los bosques que seextendíanalotro ladodelcampo,gritandopromesasderestituciónalpasar.Elpordiosero, a unos pasos del lugar de la emboscada, no prestó atención a losjinetesysiguióavanzandoimpertérrito.

—Silaplagasecobralamitaddeloscamposdelreino,quizáseanhéroes—

Page 136: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

reflexionó Azoun—. Sólo significará decir una cosa, guardián: que habremosdescuidado nuestras obligaciones. Además, Owden y sus clérigos no son losúnicosquehanvistoalquediseminalaplaga.

—Porsupuesto...Loscampesinosvenaesetipopordoquier—dijoDauneth—. En Bospir han quemado a otro estamañana, uno que ni siquiera era altocomo lo describen. Simplemente llevaba puesta una capa negra cuando ungranjeroloviohaciendosusnecesidadesenelmargendelacarretera.

Azountorcióelgesto.Eraelséptimolinchamientodelque teníanoticiaenlos últimos tres días, y al parecer la cosa iba en aumento.Quizá debió haberhechocasoaDaunethhacíadosdías,cuandolepidióqueenviaraunacuadrillademagosguerrerosparaquebuscaranalas«MazassinInsignia»;sinembargo,no quería incomodar a Tanalasta llevando a sus amigos aArabel cargados decadenas.Además,habíaconsideradolosmotivosdeDaunethalgosospechosos,porque temía que el joven noble hubiera planteado aquella sugerencia pordespechoaTanalasta.

Azoun debió haberlo considerado con más cuidado. El alto guardián erademasiadolealcomoparapermitirquesussentimientospersonalesinterfirieranen su deber. Los clérigos habían dado pie al pánico que Dauneth tanto habíatemido, y como resultado eran asesinadas personas inocentes. El rey casi sesintióaliviadoaldescubrirqueelaltoguardiánhabíaanalizadoelasuntomejorqueél,yesosignificabaqueDaunethnoestabadolido,yeltrononecesitabadeunguardiánlealenArabel.EncuantotuvieranaOwdenFoleyysus«MazassinInsignia»bajocontrol,quizásAzounpudierareparareldañoquehabíacausadoTanalasta.

ElpordioserodeojosrojospasójuntoalescondrijodeAzounydesapareciótrasadentrarseenlosárbolesquehabíadetrásdelclaro,seguidodecercaporlosMazas sin Insignia.Una líneadeDragonesPúrpura surgióde laespesuraparaenfrentarse a la compañía de clérigos. Los Dragones no lucían los visoresbajadosyempuñabanlaslanzassujetasalestribo,perolafieraexpresióndesusrostros no dejaba lugar a dudas de que estaban dispuestos a emprender elcombate. LosMazas sin Insignia tiraron de las riendas y lograron detener lasmonturasantelosDragones.

Confusoscomoestaban,losclérigosseguíandecididosacapturaralapresa.UnpuñadodeellosintentópasarjuntoalosDragonesPúrpura,queempuñaron

Page 137: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

las lanzasenristreparadetenerlos.Otrosvolvierongrupaspararodear la líneade jinetes, pero fueron detenidos por otra columna de Dragones Púrpura quesurgieron de entre los árboles para impedirles el paso. Incluso entonces, losclérigosnoparecieroncaerenlacuentadequesuencuentroconlosjinetesdelreynoeracasual.

—¿Qué estáis haciendo? —Owden hizo un gesto para señalar hacia elbosque,dondehabíadesaparecidoelpedigüeñoalto—.¡Sigamosaesehombre!¡Esunpeligroparaestastierras!

—No lo creo—dijoMerula elPortentoso, al salir delbosquecon losojosaúnrojosylacapuchadelacapanegraechadahaciaatrás—.Nosoyyoquiensededicaacabalgarporelnorte,atemorizandoacampesinosidiotascontodosesoscuentosdefantasmasoscurosylasplagasqueseavecinan.

Owdensehundiódehombros,bajólamazayclavólamiradaenelelegantemago.

—¿Merula el Gordo? ¡Explíquese! Está interfiriendo en una misión real,cuyoobjetivoesresolverunasuntodelamayorimportancia.

—¿Deveras?—Azounazuzóelcaballoparaqueasomaradelescondrijoaespaldas de los clérigos, acompañado por Dauneth Marliir y otra tropa deDragonesPúrpura—.Quéextraño,norecuerdohaberincluidoalacompañíade«MazassinInsignia»entrelasfilasdelosDragonesPúrpura.

Todalabandadeclérigosvolviógrupas,pálidosalver lacoronaqueceñíaAzounenlacabeza.

—¡Majestad!Owden saltó de la silla, se arrodilló en el suelo e inclinó la cabeza. Sus

clérigos, que lo seguían a un paso, lo imitaron, moviéndose tan rápido quealgunos de los Dragones más celosos de su deber estuvieron a punto deatravesarlosconlaslanzas.

Azounhizoungestoparaqueretiraranlaslanzas,ysiguiómirandoaOwdenyasusclérigos.

—Dehecho,norecuerdohaberauspiciadolacreacióndeningunacompañíadeclérigos,nidehaberlesencargado...—MiróaDauneth—.¿Cuáleslafrase,señorguardián?

—Creo que «una misión real, cuyo objetivo es resolver un asunto de lamayorimportancia»,sire.

Page 138: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Ah,sí.—Azounrepitiólafrasecomosiintentararefrescarsumemoria,ydespuéssacudiólacabeza—.No,estoyconvencidodenohaberdichotalcosa.

Owdenseatrevióalevantarlacabeza.—Perdonad mi presunción, majestad, pero nosotros, esto... asumimos tal

título.—¿«Asumimos», maestre de agricultura Owden? —inquirió Merula. Se

acercóhastasituarsejuntoaOwden,ydespuésmiróaDauneth—.Sabráqueesoleconvierteenunimpostor.Lesconvierteatodosenimpostores.

El rey se mordió la lengua, intentando desesperadamente reprimir la ira.MerulahacíaloposibleporacorralaraOwdendemaneraquenolequedaramásremedio que confesar que se había hecho pasar por un agente de la corona, oadmitirqueTanalastahabíadesafiado lasórdenesdel rey.Alparecer, elmagoseguía preocupado por el futuro de los magos guerreros después de queTanalasta asumiera el trono... a pesar de contar con la garantía personal deAzoun de que su posición estaba garantizada, independientemente de quiénpudierasucederlo.

—¿Quizá fue la princesa Tanalasta quien le dio tales órdenes, maestre deagriculturaOwden?—MerulasiguiómirandoaDauneth.

Azounhizounesfuerzopormantenerseimpávidoyguardarsilencio.Aquelasunto estaba sometido a la jurisdicción del alto guardián, y la menorinterferencia del rey sería interpretada como unamuestra de favoritismo a losclérigos,ocomounafaltadeconfianzaenlaobedienciaaldeberdelaprincesadelacorona.

—LamentodecirquelaprincesaTanalastanonosordenónada.—Owdensedirigió directamente a Azoun—. Veréis, sire, se trataba de una emergencia.Tropezamos con un granjero que había visto al responsable de extender laplaga...

—Ese pordiosero alto por el que han estado preguntando —dijo Azoun,satisfecho de tener un pretexto para asumir el control de la conversación—.Sabrán,porsupuesto,quesuspreguntashanextendidoelpánico.

—Misdisculpas,majestad—dijoOwden,señalandolacapapúrpura—,peroésa es la razón de nuestros disfraces. Esperábamos que las preguntas de unacompañíadeDragonesPúrpuraparecieranmenossospechosas.

—Yquizáhubiesesidoasí,sienverdadhubieranactuadoustedescomouna

Page 139: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

compañía de soldados—dijo Azoun—. Pero al detenerse a reparar todos loscamposazotadospor laplagaquehanencontradoa supaso,hanpersuadidoatodo el mundo de que yo estaba tan preocupado por la situación que henombradoacompañíasenterasdeclérigosparaquelaresolvieran.

—Quizá no falte mucho para que tengáis que hacerlo, majestad —dijoOwden.

—Estoysegurodequeesoesprecisamenteloquemáslesgustaríaaustedesque sucediera—replicó Dauneth—, pero no pienso permitir que extiendan elpánico simplemente para convertirse en héroes a ojos del pueblo. Loscampesinos ya empiezan a quemar los campos del vecino cuando aparece elprimer indicio de la plaga, y siete hombres han sido asesinados por el simplecrimendeobedeceraladescripcióndelpordioseroalquebuscan.

Owden,cariacontecidoante semejantesnuevas,mantuvo lamiradaclavadaenAzoun.

—Lamento haber causado tantos problemas, majestad, pero aun así lasituación en nada cambia. Es necesario encontrar al causante de extender laplaga e impedir que siga vagabundeandopor nuestros campos.Mientras no loconsigamos,nopodemosdejardeatenderloscamposqueinfectaeimpedirquelaplagaseextienda.

—No tardará en caer—dijo Azoun—. Todas las compañías de DragonesPúrpura al norte deCarreteraAlta han sido puestas sobre aviso.No creo quehayamuchasposibilidadesdeque laplagaseextiendaporsímisma,almenosteniendoencuentaqueloscampesinosquemanlastierrasanteelmenorindiciodesuaparición.

—No dudo que eso será de gran ayuda, pero nosotros tenemos muchapráctica en estos asuntos —dijo Owden—. Permitidnos proseguir nuestrabúsqueda,sinocomoDragonesPúrpura,comohumildesclérigos.

—Temoqueesonoseaposible—dijoDauneth.FinalmenteOwdenprestóatenciónalaltoguardiándelasmarcas.—¿Vaaarrestarnos?—El señor guardián de las marcas no tiene elección —dijo Merula con

mediasonrisadibujadaenloslabios—.Hacersepasarporunagentedelacoronaesungravedelito,castigadoconlapenademuerte.

—¿De muerte? —preguntó uno de los clérigos de Owden, una joven

Page 140: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

pelirrojadeapenasveinteaños—.¡Sólopretendíamosayudar!—Lo siento, pero a menos que la princesa Tanalasta les encargara esta

misión...—sugirióMerula,dedicandoalajovenunasonrisadecocodrilo.—Nolohizo—replicóOwden,volviéndosealajovenpelirrojaconelceño

fruncido a modo de advertencia, para después incorporarse y acercarse aDauneth—. Haga con nosotros lo que deba hacer, señor guardián, pero se loruego, no permita que ese oscuro pordiosero campe a sus anchas por estastierras. Quizá la plaga le parezca a usted una cosa sin importancia, pero sinosotrosnolahubiéramoscontenido...

Seacercólentamentealasalforjasdelcaballoparanoponernerviososalosguardias, sacó la maza de las cinchas y se la tendió a Dauneth por laempuñadura.

Azoun dirigió aMerula unamirada que no le dejó duda alguna acerca decómo había encajado su desconfianza. Merula desvió la mirada y fingió norepararenella,plenamenteconvencidodequeVangerdahastloprotegeríadelaira real. Su suficiencia era mejor argumento que cualquier cosa que pudierahaberhecholaprincesaTanalastaparadesprestigiaralosmagosguerreros.

Dauneth mantuvo las manos en la perilla de la silla de montar, sin hacerademándecogerlamazadelclérigo.

—Dehecho,esposiblequeMerulahaya llevadodemasiadolejos todoesteasunto.—Elguardiándirigióunamiradainquisitivaalrey,quesonrióparasusadentros con expresión inflexible al tiempo que asentía cortésmente—. Creorecordar que estos ropajes os fueron dados por el mago de la corte con elpropósitodeescoltaralaprincesaTanalastaalasTierrasdePiedra.

—Yaunquequizásesopuedadarlesaustedesunaexcusaenausenciadeunaorden real, eso no disculpa el hecho de que aún las lleven puestas—apuntóAzoun. Aunque aprobaba la capacidad de recursos de Dauneth, no estabadispuestoapermitirquelasMazassinInsigniacamparanasusanchas.Despuésde todo, había trabajado duro para controlar los alborotos de aquellos últimosdías—.Debenresponderpordesobedecermisdeseosyreemprenderlatareadeperseguiralpordiosero,enlugardeacompañarlaalasTierrasdePiedra.

Owdenvolvióaintroducirlamazaenlatiradecueroquecolgabadelasillademontar,conunaexpresióndealiviodibujadaensurostro.

—Por supuesto,majestad.Hay una explicaciónmuy sencilla para eso.De

Page 141: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

hecho,hellegadoapensarqueeraloqueVangerdahastpretendíadesdeelprimermomento.

—¿Deveras?Esojustificaríamuchascosas.—Azounlevantólamanoparaordenaralmaestredeagriculturaqueguardara silenciohastaque terminaradehablar—.Estoysegurodequelareinaquerrásaberexactamentequésedijoosehizo.LeinvitoaustedyalosclérigosqueleacompañanaregresarconmigoaArabel, donde seránmis invitados hasta que hayan redactado un informe quesatisfagaalareina.

LosojosdeOwdenseapagaronalcomprenderloqueelreyqueríadecir.—Como ordenéis, majestad—dijo el maestre de agricultura, inclinándose

envarado.—Bien. Durante el camino de vuelta quizá sea usted tan amable de

explicarnosaMerulayamítodoloquehayandescubiertosobreesepordioseroy la plaga.—Azoun dirigió una sombríamirada aMerula, y añadió—:Estoyconvencidodequelosmagosguerrerostomaráncartasenelasunto...almenosencuantotenganunavagaideadeloqueestáocurriendo.

LacoletillasatisfizotantoaOwdencomoirritóaMerula.—Seráunplacer,sire.AMerulayamínosgustamuchoconversarmientras

viajamos.—Oh,muchísimo—gruñóelmago.—Excelente—dijo Azoun sonriendo al ver lamirada deMerula. Tuvo la

sensacióndequefinalmentehabíalogradohacerseconlasriendasdelasituación—.Dauneth,¿dóndeleparecequedeberíamoshacernoche?Esdemasiadotardepara emprender el camino de vuelta, y no queremos echar a este pobrecampesinodesucasa.

—Buenaidea,sire—respondióelguardián,ydespuéshizoalgunosgestosasushombresparaempezarlospreparativos.

Azoun levantó la mirada al cielo vespertino y vio la luz que despedía laprimeraestrellaqueaparecióporeleste.

—Ha pasado tanto tiempo desde la última vez que lo hice. —Empezó aponerse el anillo de sello en el dedo, y después dibujómentalmente el rostrobarbudodeVangerdahast—.Tantotiempo.

Page 142: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

CuandooyóensumentelavozdeAzoun,Vangerdahastestabadepiesobrela hierba que cubría la orilla de la desembocadura del Estanque del Orcomientrasloscaballospacíanunosminutos.

«Estanochedormirébajounmantodeestrellas,amigomío.»Vangerdahastbajólamiradaylanzóunhondosuspirodecansancio.Aunque

el anillode sellodelmagoestaba en el interiorde las alforjasque colgabanalomosdeCadimus(comoelrestodeobjetosmágicos),Azounnotuvomayoresproblemas para ponerse en contacto con él. Consciente de que debía estardisponibleparalafamiliareal inclusocuandoselibraradelanilloparatrabajaren el laboratorio o tomar un baño, el mago supremo había adoptado laprecaución de hacer aquellos anillos familiares de manera que ellos siemprepudieranponerseencontactoconél,aunquenollevarapuestoelsuyo.Aquéllano era la primera vez que se arrepentía de haber tomado tantas precauciones(recordó de inmediato una noche en particular, acompañado por una ninfamarina muy juguetona), pero sí era la primera vez que podía causarle seriosproblemas,tanseriosqueinclusoseasustó.

«Puesyonocreoqueduermaunápice,graciasavos—replicóVangerdahast,hablandoenvozalta—.¿Quéseosofrece?»

«Aquí lascosasestánbajocontrol.Yapuede traeraTanalastadevueltaencuantoleparezca.»

«Metemoqueesonovaaserposible.—VangerdahastempezóarebuscarenlasalforjasdeTanalasta losbrazaletes,anillosy lacapa—.Tanalastaganóunaapuesta.NosencontramosenelEstanquedelOrco.»

«¿Unaapuesta?»«Nopreguntéismás—dijoelmago—.Lacosahaempeorado.»«¿Noestádispuestaaabandonarlaideadeltemplo?»«Peoraún.»«¿Quépodríaserpeorqueeso?»«Un Cormaeril —explicó Vangerdahast—. Un explorador Cormaeril que

adoraaChauntea, llamadoRowen.Yodiríaque laha impresionadomásde lodeseable.»

«¡Creíque teníaustedunplan!—protestóAzoun—.¿Quéclasedeplanesése?»

«No os pongáis nervioso. Quizás el explorador tenga un carácter

Page 143: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

desagradable, que odie a la realeza o algo parecido.—Vangerdahast cerró lasalforjasdeTanalastaysedirigióalolargodelestanquehastaelcampamento—.Pero en este momento tenemos problemas aún más acuciantes. Pedid aAlaphondar que busque toda la información posible acerca de una criaturallamada ghazneth. Es un fantasma, un demonio o algo peor, cuyas alas loprotegendelosefectosdelamagia.Nosoycapazdeacabarconél.»

«¿Queustedqué?»«Noshaestadohostigando,yalparecertambiénhaimportunadoaAlusair.

—CuandoVangerdahastseacercóalcampamento,oyóunchapoteoenelagua—.QuizátengaalgoqueverconladesaparicióndeEmperel,peronolosé.AúnnohemospodidoencontraraAlusair.»

«Estonodeberíallevartantotiempo.¿Quédiantresucede?»«Parece que la ghazneth siente cierta atracción por la magia —dijo

Vangerdahast—, razón por la que Alusair tuvo que quitarse el anillo cuandointentéponermeencontactoconelladesdelamansióndelosMarliir.Metemoquenopodremoshablarasímuchomásrato,viejoamigo.»

«Espere —dijo Azoun, preocupado—. Enviaré a Merula, acompañado dealgunosDragonesPúrpura...tambiéntengoaOwdenaquí,conmigo.»

«Esonoharíasinoempeorar lascosasenloreferenteaTanalasta—repusoVangerdahast—.Silascosasvuelvenaponersefeas...»

«¿Vuelven?»«No temáis, sire, la chica semanejómuy bien.—Vangerdahast se detuvo

cercadelaspiedrasybajóeltonodesuvoz—.Comoestabadiciendo,siemprepodremosteletransportarnosaArabel.»

«Vangerdahast,esperoquesepaloquehace.»«¡Pues claro que sí! —Vangerdahast parecía muy dolido—. Ahora no

podemosabandonar...amenosqueestéisdispuestoapermitirquevuestrodesfilerealseconviertaenuncuadrodehortalizas.»

Azounselimitóaproferirungruñidocomorespuesta.Elmagosonrióparasí,yseadentróenelcampamento,dondevioaRowensentadojuntoalaorilla,contemplando por entre el vapor un borrón blancuzco que tan sólo podíacorrespondera lapersonade laprincesaTanalasta,queflotabaen lasuperficiedel oscuro estanque.Vangerdahast se acercó a ellos, boquiabierto y a grandeszancadas,atravesandoelcampamentoparadarunasuavepatadaconlasuelaen

Page 144: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

laespaldadelexplorador,ytirarlodecabezaalaguacaliente.Rowen desapareció bajo la superficie durante unos segundos, y después

asomólacabezaatrespasosalaizquierdaconlaespadadesenvainada.CuandovioaVangerdahastdepiebajolaluzdelaluna,apartóelarma.—¿Hasidousted?—Asíes—gruñóVangerdahast—.Yyapuedeustedconsiderarseafortunado

porhaberrecibidosólounchapuzón.Espiaralaprincesadelacoronacuandosebañapodríaconsiderarseuncrimencontralacorona.

—¡Yo no espiaba a nadie! —exclamó Rowen, abriendo unos ojos comoplatos.

—¿Ah,no?Mirón.—¡Vangerdahast!—Tanalastanadóhasta laorillaysaliódelagua,cruzada

debrazosparaocultarcomopudosudesnudez—.EsnecesarioquesedisculpeanteRowen.Yolepedíquehicieraguardiamientrasmebañaba.

—Dudoquelepidieraqueosvigilara—gruñóelmago,peseasospecharquequizá se le pudiera haber ocurrido tal cosa a la princesa. Vangerdahast mirófijamenteaRowen—.Dehabercuidadodelaseguridaddelaprincesa,enlugardemirarlaconesosojosdebobo,quizámehabríaoídoacercarme.

—Vigilaba el horizonte —protestó Rowen. Aunque Tanalasta seguíacubriéndose con losbrazos, el explorador se cuidómuchodemirarlamientrashablaba—.Miseñora,debéiscreerme.Elmotivodequenoleoyera...

—No le haga usted caso, Rowen —interrumpió Tanalasta—. Este viejofisgóntienefamadecaminardepuntillasportodoslossalonesdepalacio.Nadiepuedemantenerunaconversaciónprivada,sinhaberseaseguradoantesqueestáa solas, mirando tras las cortinas, vestidores y alcobas en veinte pasos a laredonda.

Aunqueveintepasoseraunacifrapocoaproximada,Vangerdahastoptóporfingirsedolido.

—Aunque eso fuera cierto, princesa, ahora no estaba fisgoneando. —SeacercóalaorillaytendiólacapaaTanalasta—.Heestadohablandoconvuestropadre.

Rowen sepuso tanpálidocomo la luzde la luna,ydespuésmiróhacia elcírculodepiedras.

—¿Estáaquíelrey?

Page 145: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—No.—Vangerdahasthizoungestoparaqueelexploradorsalieradelagua,ydespuésapartólamiradaparaqueTanalastapudieraponersetranquilamentelacapa—.Daosprisa,quenotenemosmuchotiempo.

—¿Tiempo?—Rowensaliódelaguasinmiraralaprincesa—.¿Porqué?—ElreyestáenArabel—dijoTanalastamientrasseponíalacapa.Hablaban

adistancia.—¿Magia?—preguntóRowen,volviéndosehaciaVangerdahast—.¡Alusair

yaleadvirtióque...!—Peronoadvirtióalrey,joven—repusoVangerdahast—.Ahora,seabuen

chicoyprepareloscaballos.—Porsupuesto.—LaexpresióndeRowenpasódelarabiaaladesazón—.

Tieneustedrazón,nodisponemosdemuchotiempo.Elexploradorenvainólaespada,cogiósusillademontarysedirigiódonde

estaban los caballos. Tanalasta hizo ademán de seguirlo, peroVangerdahast lacogiódelbrazo.

—¿No olvidáis algo, princesa? —Señaló el lugar donde había dejadoperfectamentedobladaslafaldademontarylatúnica—.Nodeberíaistentaralpobre Rowen. No es justo que lo alentéis a obtener un premio que no tieneoportunidaddeganar.

—¿Yquiéndicequeno tieneoportunidaddehacerlo?—Laprincesacogiósuropaysedirigióhaciaunasrocasparacambiarse.

Vangerdahastgruñóparasí.Sacóunamonedadeorodelbolsillo,laarrojóalaireyrecitóunencantamientocuandoempezóacaer.Lamonedasedetuvoalaalturadesusojos.

—Vangerdahast,¿haperdidoeljuicio?—Tanalastaseasomabadetrásdelaroca—.¡Conseguiráatraerla!

—Esomehandicho.Vangerdahastcogiólamonedasuspendidadelaireyempezóafrotarlaentre

laspalmasdesusmanos.Unauraverdosa rodeóa lamoneda,menosbrillantequelaluzdelalunaqueiluminabalamanodelmago.

—Ahora, observad y aprended, querida, observad y aprended. —Vangerdahast esperó a que Rowen volviera de preparar los caballos, y lepreguntó—:¿Adóndedebemosdirigirnos,joven?

CuandoRowenseñalóhacia lascolinas,Vangerdahastsevolvióyarrojó la

Page 146: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

monedaenladireccióncontraria.Lamonedasealejóconunsilbidoendirecciónal barranco, sobrevolando las tierras llanasydesapareciendode suvista comounaestrellafugaz.

—¿Unapistafalsa?—preguntóRowen.—Bastará para que tomemos una o dos horas de ventaja —asintió

Vangerdahast.—Quizásinfravaloreustedlavelocidaddelaghazneth.Rowenseagazapótrasunaroca,dondelaluzdelalunailuminabalalejana

siluetadelaghaznethcuandoéstaapareciósobrevolandolallanura.—¿Cuántotiempopermanecerálamonedasuspendidaenelaire?—preguntó

Tanalasta.—El tiempo que tarde la ghazneth en cogerla. —Vangerdahast siguió

mirandolasolitariallanura,asombradodelavelocidadalaquehabíaperdidodevistaalaoscuracriatura—.¿Quiénsabe?

—Antesdeloquenosgustaría—concluyóTanalasta.La princesa salió completamente vestida de detrás de las rocas; lucía dos

brazaletesenunbrazo,ysehabíaechadolacapaporencimadeloshombros,sincerrar el broche. Los brazaletes no irradiarían magia a menos que se pusieracualquieradeellosenelotrobrazo,perosicerrabaelbrochedelacapaactivaríaautomáticamente diversas medidas mágicas que a buen seguro llamarían laatención de la ghazneth. Vangerdahast se puso su capa por encima de loshombros sin abrocharla, y después de montar se alejaron en silencio delEstanquedelOrco.

Page 147: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

L9

a pendiente se extendía ante ellos, cubierta por una oscuridad tanimpenetrablecomolatinta.Vangerdahastcabalgabaensilencio,vigilandoel

cielooscuroqueseabríaa susespaldas,y lamentándoseparasusadentrosdelconstante rumor de los cascos de los caballos. Esperaba ver en cualquiermomento a la ghazneth surgir de la niebla que cubría el Estanque del Orco,aunquesumayortemor,enrealidad,eranopoderverla,queaparecieraagitandosus alas de algún oscuro rincón del cielo y que los desarmara antes de poderlanzar un hechizo. Sus dedos seguían trazando signos de protección. Sólo elsaberquelamagiaatraíaalfantasmacomosiencendieranunfuegoenmitaddela noche le impedía vocalizar las palabras arcanas que darían pie a que seactivaransusencantamientos.

Finalmente, coronaron la cresta de una colina y empezaron a atravesar unclarodesnudoiluminadoporlaluna,sinunasolapiedradetrásdelaquepoderocultarse.Ni siquierapodíanescudarseen lapolvareda,puestoque lascolinashacíandelvientoalgodemasiadoerráticoydispersocomoparacargarcontodaaquellaarena.Lostresespolearonsusmonturasycruzaronelclaroaltrote.

Finalmente,Vangerdahastempezóatranquilizarsecuandoalcanzaronelotrolado del altozano y descendieron al abrigo de las sombras del barrancoadyacente, aunque Rowen no parecía muy tranquilo. El explorador siguióespoleandosumontura,conduciéndoloshacialacimadeunacolinaarenosacasial galope durante varios minutos, para desmontar después y recorrer a pie elcuello de un lecho de roca.Volvieron amontar cuando alcanzaron la cumbre,cabalgaronal trotehaciaotracima,y repitieron lamismaoperación tresveces

Page 148: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

másantesdequeRowen,finalmente,descendierahastaelfondodeunbarrancodondesoplabaelviento,conintencióndehacerunaltoenelcamino.

El explorador observó el cielo una vez más, y después hizo señas aVangerdahastyTanalastaparaqueseunieranaél.

—SeguiremosbarrancoarribahastaquenosconduzcaalasllanurasdeGnoll—dijo Rowen—, después nos dirigiremos al sur hacia los Picos de lasTormentas.Allínosesperaunagranpolvareda,peroamainaráunpococuandoamanezca.BuscamosunpardemontañasqueAlusairdenominalosOjosdelaMula.

—Seguro que las reconoceremos cuando las veamos—dijo Vangerdahast.NopreguntóporquéRowenlesinformabadelarutaqueibanaseguir.Conlaghazneth siguiéndoles la pista, si se separaban lo mejor sería que cada unosupieraadóndedirigirse—.¿AllínosreuniremosconAlusair?

Rowenrebullóenlasillasinapartarlamiradadelsenderoqueseguían.—De hecho, no. Allí estaba hace tres días, cuando recibió el mensaje de

Tanalasta.—¿Ydóndeestáahora?—preguntóVangerdahast,convencidodequenoiba

agustarlelarespuesta.—Habrá que verlo—se encogió de hombros Rowen, antes de volverse a

Tanalasta—.Podéisseguirelsendero,¿verdad?—Sí.Rowen asintió como si no hubiera esperado menos, lo cual arrancó una

sonrisa de sorpresa de labios de Tanalasta. Al no observar el efecto que suspalabras causaban en ella, siguió dirigiéndose a la princesa e ignorando porcompletoalmagosupremo.

—Alusair parecía algo... reacia a abandonar su búsqueda —explicó elCormaeril—. Nos dirigiremos al último campamento y le seguiremos la pistadesdeallí.

—Eso significa que aún no ha encontrado a Emperel. —Vangerdahast seinclinó cogido a la perilla de la silla, con la esperanza de sumarse a laconversación—.¿Yquéhaestadohaciendoallíarriba?

—Siguiéndolo, por supuesto —dijo Tanalasta—. ¿Va a dejarle hablar,Vangey?

Vangerdahastmiróceñudoalaprincesa,quenopareciódarsecuentadeello.

Page 149: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Quizásestabademasiadopendientedelexplorador.—Sigausted,Rowen.—Comoordenéis,alteza.—Le recuerdo que le ha pedido que la llame Tanalasta —gruñó

Vangerdahast.Aquelmuchachoseestabagranjeandolaatencióndelaprincesademasiadodeprisaconaquelladeferenciaconque la trataba—.¿Yporquénoibaahacerlo?Despuésdetodo,yahavistolasjoyasdelacorona.

—¡Vangerdahast!—Tanalastaledirigióunamiradafulminante,ydespuéssevolvióaRowen—.¿Debo recurriraRowenparaque le recuerdequiénmandaaquí?

Rowensevolvióconlamiradafebrilylosojosmuyabiertos,iluminadosporlaluzdelaluna.MiróelespacioquemediabaentreTanalastayVangerdahast,ycomoquiennoquierelacosaapoyólapalmadelamanoenelpomodesuacero.Elmagoestabaapuntodeadvertirledesuerror,perosecontuvoylopensódosveces. Cuanto más se mofara del muchacho, más se pondría Tanalasta de suparte.

Vangerdahast apartó la mirada, dispuesto a disculparse, lo cual no eraprecisamenteplatodesugusto.

—Espero que la princesame perdone. Sólo intentaba que elmuchacho sesintieramásagusto.

—SellamaRowen—recordóTanalasta.—Porfavor,sielmagosupremodeseallamarmemuchacho,nomeofenderé

—dijo Rowen—. A decir verdad, han pasado tantos años ya desde que mellamabanasíqueloencuentrodivertido.

—Entonces nome importa que le haga reír,Rowen—dijoTanalasta—.Apartir de ahora, el mago supremo puede llamarnos muchacho y muchacha, ynosotroslollamaremosaél«abuelo».

—Estoy convencido de que la corte real considerará vuestra decisiónmuydivertida—replicóVangerdahast, antesdemorderse la lengua.PormuchoqueconfiaranenRowen,VangerdahastnoibaapermitirqueTanalastaseenamoraradeunCormaeril.Despuésdelasuntoabraxus,equivaldríaacomprometerseconunsembiano—.Siyahemosterminadodehacerreíral jovenCormaeril,quizápuedacontarnostodoloquesepadeEmperel.

RowenmiróaTanalasta,esperandosuasentimientoantesderesponder.

Page 150: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—En realidad no hay mucho que contar. Encontramos su rastro a unoskilómetrosalestedeHalfgapyloseguimosporelSenderodelRayodePiedraen dirección a Emboscada de Shouk, después fue como si de pronto hubieraencontradoelrastrodeotrapersonaylohubieraseguidoalsur,hastaunatumbaalpiedeunascolinas.

—¿Unatumba?—preguntóVangerdahast.—¿Muyantigua?—preguntóTanalastaalmismotiempo—.¿Dequétipo?—Eramuy antigua, alteza—respondióRowen—.Respecto al tipo, veréis,

nosoyprecisamenteunexpertoenlamateria.Estabasituadabajolasraícesdeun roble nudoso y viejo, de negra corteza y tan lleno de raíces que es unamaravilla que se sostenga. Había unos signos antiguos grabados en el tronco,peronuncaloshabíavistoenningunaparte.

—¿Signos? —preguntó Tanalasta, cada vez más emocionada—. ¿Eranélficos?

—No sabría decirlo —respondió el explorador, encogido de hombros—.Eransinuososyelegantes.

—Pareceélfico.—Aligualquelatumba—admitióVangerdahast.—PiensaustedenelÁrboldelCuerpo...—¿Peroretorcidoynegro?Rowen movía la cabeza entre uno y el otro, pero, aun así, no parecía

comprenderdequéhablaban.—Nudosoynegro—dijoTanalasta—.Sí,esmuyinteresante.—Ningúnelfohubieraplantadonadaparecido,ysiseestápudriendo...—Recuerdealoselfosmalvados.—Cierto, pero los elfos oscuros cultivan setas, no árboles —dijo

Vangerdahast—.Yvivenbajotierra.—Hablodeelfosdelbosque,nodeloselfososcuros.¿Haolvidadoustedel

AñodelTruenoLejano?—Simeper...—intervinoRowen,dirigiéndosehaciaTanalasta.—La familia Bleth, cómo no —dijo Vangerdahast, interrumpiendo al

explorador—,peroentoncesMondarestabaequivocado.—Quizá se lodijeron antesdematar a toda su familia—dijoTanalasta—.

Fueunamatanza...unamatanzaélfica.

Page 151: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¡Discúlpenme!—exclamóRowen,que levantó lavoz losuficientecomoparahacerseoír—.Lamentodecepcionarles,pero loselfosno tienennadaqueverconesatumba.

TantoVangerdahastcomoTanalastafruncieronelceño.—¿Seguro?—preguntaronalunísono.—Descubrimosunosanillosantiguosmuyllamativos,yunpeinedeplata—

explicóRowen—,yunestilete,ocultoenelmangodeunabanicodebronce.—Esonoesprecisamenteélfico—dijolaprincesa.—Nilosavambrazosdelasiguientetumba—afirmóRowen.—¿Habíaotratumba?—exclamóVangerdahast—.¿Dostumbas?—De hecho —respondió Rowen, sacudiendo la cabeza— había tres... al

menos tres vimos nosotros. Todas abiertas. Emperel siguió a quienquiera quefueraacadaunadeellas.Creemosqueallíesdondesetopóconlaghazneth.

VangerdahastyTanalastaguardaronsilencio,intentandoencontrarunsentidoa lo que el explorador les explicaba. Las tumbas que describía Rowen nopertenecíanalaEspadaDurmiente.Vangerdahastvisitabaesacavernaconciertaregularidad, para inspeccionar su estado y renovar el hechizo de estasis quemantenía a los jóvenes señores en animación suspendida, por lo que estabaconvencidodequenohabíaniunsoloárbolatreskilómetrosalaredonda.

—Lastumbas—dijoTanalasta—.¿Eransimilares?—Unasparecíanmásantiguasqueotras—respondióRowen—.Oalmenos

los árboles estaban más crecidos, y tenían los mismos signos grabados en eltronco. Pero las cosas que había en cada una de ellas eran diferentes. En laúltimahabíaunbrochedeunmagoguerrero.

El explorador señaló con el dedo los broches de las capas que llevabanpuestassusacompañantes.

—¿Nollevaráporcasualidadencimaesebroche?—preguntóVangerdahast.—Losiento.LaprincesaAlusairdijoque...—Yaimaginoloquedijo—replicóVangerdahast.—¡Silencio!—ordenóTanalastaenunsusurro.La princesa se adelantó a sus compañeros, y los obligó a detenerse.

Vangerdahastdirigiósumiradaalcielo,ysumanosecerróentornoalbrochedelacapa.Silaghaznethloshabíaencontradosinhaberrecurridoalamagia...

Tanalastaextendiólamanoparacogerlodelbrazo.

Page 152: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Orcos—susurró.Vangerdahastestuvoapuntodelanzarunsuspirodealivio,peroentoncesse

diocuentadequeeraimposibledespistaralosorcossinrecurriralamagiay,ala vez, revelar a la ghazneth su posición. Observó el contorno de las colinas,mientras planeaba una secuencia devastadora de hechizos en los que el fuegodesempeñabaunpapel preponderante.SiTanalasta podía ver a esosmarranos,tambiénellospodíanverla.Losojosdelosorcoserantansensiblesquepercibíanelcalorquedesprendíaelcuerpodeunacriaturaenlaoscuridad.

—¿Dónde? —preguntó Vangerdahast, al no advertir signo alguno de supresencia.

—Nolosé—respondióTanalasta—,loshuelo.—¿Qué?—susurróVangerdahast—.Siestuvieran tancercacomoparaque

pudiéramosolerlos,aestasalturasyaestaríamosmuertos.—Sísidependiéramosdenuestroolfato—susurróRowen—,peroTanalasta

sehabañado,ypuedeoleralgomásapartedesupropioolor.Elexploradordesmontóycogióunpuñadode tierra,que resbalóentre sus

dedos. En cuanto hubo determinado que la brisa soplaba por el barranco,condujo a Vangerdahast y a Tanalasta hacia la parte de la garganta de dondesoplabaelvientoylespidióconungestoquedesmontaran.Lostrespasaronlasiguiente media hora tropezando a oscuras, sin ver ni rastro de los orcos.Vangerdahast estaba a punto de insistir en que volvieran amontar, cuando unruido lejano hizo eco en el barranco que había tras ellos. Se detuvieron paraescucharhastaque losorcospasaronde largo,ydespuésvolvieronamontaryreemprendieronsucaminobarrancoarriba.

Permanecieronensilencioduranteotramediahora,hastaquealcanzaronlapunta del barranco y ascendieron a la extensión de las Llanuras de Gnolliluminadaporlaluna.PesealasadvertenciasdeRowen,lapolvaredanoeratanintensacomohabíasupuesto(almenoscomparadacon las llanurascercanasalSendero delRayo dePiedra), peroVangerdahast apenas podía distinguir en ladistancia el muro oscuro de los Picos de las Tormentas. Por mucho que lointentó,novioningúnpicoquelerecordaraalasorejasdeunamula.

Semantuvieroncercadelbordedelallanura,dispuestosaagazaparsetraselbarrancoencasodequeaparecieranlosorcosolaghazneth.Pasadoelbarranco,donde podían refugiarse, las vacías llanuras hicieron que Vangerdahast se

Page 153: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

sintieradesvalidoeinseguro,ysólopensarencruzaraqueltrechoaplenaluzdeldíaleimpidiósugerirqueacamparanalamparodecualquierbarranco.

Si la falta de abrigo inquietaba a Tanalasta y Rowen, no lo demostraron.Amboscabalgaronunojuntoalotroelrestodelanoche,atanpocadistanciaquesus piernas se rozaban de vez en cuando. Pese al cansancio y su petulanciahabitual, Vangerdahast no estaba de humor para entrometerse en aquellosmomentos, aunque fuera por el bien del reino. El explorador respetaba a laprincesaporsusconocimientosytalento,yellaparecíaresponderaeserespetoconunaamabilidadquenoeraprecisamenteforzada.ExceptoAlaphondarylosmiembrosdesupropiafamilia,nadiehabíatratadoasíaTanalastaenpalacio.Sihabía encontrado respeto en las Tierras de Piedra conRowenCormaeril, bienpodíaelmagosupremodejaraunladolosinteresesdeCormyrduranteunpardehoras.Pesea losproblemasque le causaba,Vangerdahast amabaa laprincesacomoaunahija,yqueríaquefuerafelizcomounareina.

Sinembargo,Vangerdahastjamáspermitiríaquesecasaran.Permitirqueunmiembro de los Cormaeril subiera al trono constituiría un insulto para lasfamilias que habían sido leales durante el asunto abraxus, y daría pie amalentendidos entre quienes habían intrigado contra la corona, pero elmatrimonionoeraelúnicocaminoqueconducíaalasatisfaccióncarnal.Sisuamistad seguía por ese camino, quizá pudiera hablar con Tanalasta acerca dedisponer de cierto asunto. En más de una ocasión había hecho lo propio porAzoun,yquizáfueraelmediodeconseguirqueolvidaratodoesesinsentidodeltemploreal.

Al este, el horizonte empezaba a clarear ante la proximidad del amanecer.Vangerdahastoyóalaparejamurmurarenvozmuybaja.Seencogiódehombrosybajólacabezahastadarconlabarbillaenelpecho;despuésespoleóunpocosumontura para que se acercara lentamente a fin de oír su conversación. Sushechizos de fisgón eran mucho más efectivos y convenientes, pero con laghazneth tan cerca, no tenía más remedio que recurrir a los métodos másconvencionales.

—¿...LellevóaadoraralaMadre?—preguntabaTanalasta—.Chaunteanoesunadivinidadmuypopularentrelosmiembrosdelanobleza.

—HastaqueGasparnosdeshonró,nosotros, losCormaeril, no éramosunafamilia muy aficionada al politiqueo, sino a la tierra —respondió Rowen—.

Page 154: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Chauntea consideró conveniente bendecir nuestras granjas, y nosotros laveneramosparacorresponderla.

—Comprendo —dijo Tanalasta—. ¿Y usted aún la adora, pese a haberperdidosustierras?

—Asíes.—Rowenapartólamirada,peroenseguidaañadió—:Despuésdeque redima mi nombre sirviendo al mando de la princesa Alusair, tengo laesperanzadequeelrey,algúndía,meconcedaunapequeñapropiedad.

Tanalastaextendiólamanoparacogeralexploradordelamano.—Nopierdalafe,Rowen.Chaunteasiemprerecompensaaquieneslasirven

bien.—Sí,quienessirvenalaMadresiempreobtienensurecompensa.AquelbreveintercambiobastóparaqueVangerdahastsintieraunescalofrío

en el cuerpo.Golpeó los flancos del caballo con el tacón y se interpuso entreambos,obligandoalaprincesaaretirarsumano.

—¿Ocurrealgo?—preguntóelmago,fingiendounbostezo.ComprendióqueRowenseríamáspeligrosocomoamantequecomoesposo—.¿Algovamal?

—Nadaqueunpocodeconsideraciónnopuedacurar—respondióTanalasta,contrariada.

—¿Interrumpo?—preguntóentonceselmago,mientraspestañeabacomosiestuviera adormilado. Sin embargo, por su tono de voz había dado a entenderquepreferíaquenofueraasí,yentoncespaseólamiradadelaprincesaaRowen—.¿Otravezendanzaconlasjoyasdelacorona?

—¡Vangerdahast!—Tanalastalevantólamanocomosituvieraintencióndeabofetearalmago,despuéssacudiólacabeza,frustrada—.Aquíelúnicoquesehacomportadodeunaformalamentableesusted...¡Yestoyseguradequenoesnecesarioqueselodiga!

—¿Ybien?—insistióVangerdahast,mirando con unos ojos comoplatos aRowen.

—Sería un crimen si le respondiera como se merece, señor mago —respondió el explorador, cuyo rostro se ensombreció—, pero debe usted saberque está mancillando mi honor. Tan sólo albergo sentimientos puros hacia laprincesa.

—Excelente.—VangerdahastmiróaTanalastalosuficientecomoparatorcerel gesto ante la furia que traslucía sumirada, y después se volvió de nuevo a

Page 155: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Rowen—. Ya puede suponer lo inadecuado que sería que ella se... esto... seencariñaradeusted.

—¿Queseencariñara?—preguntóRowen,confuso—.¿Demí?—Nolehagacaso—dijoTanalasta—.Vangerdahastesfamosoporsumente

retorcida.—Comprendo—dijoRowen,quedeprontosehabíaenvaradoenlasillade

montar—. En fin, no hay peligro de que suceda tal cosa. Los gansos nopersiguenaloscisnes.

—No,asíes—apostillóVangerdahast—.Mantienenladistancia,porquedelocontrariolagenteempezaríaatrataralcisnecomosifueraunagallina.

—Yonosoyningunaavedecorral.—Tanalastalevantólabarbillaygolpeóelcuellodesumonturaconlasriendas,saliendoalgalope—.Lesagradeceríaaambosque...

Sufrasequedóinterrumpidacuandosucaballoprofirióunagudoquejido.Temiendo que el caballo de Tanalasta pudiera haberse partido una pata,

VangerdahasthundiólostalonesenlosijaresdeCadimusysaliódisparadotraslaprincesa.Alacercarse,laprincesavolviógrupasypasóalgalopeendireccióncontraria, inclinándoseen lasillaparacogeralgoquehabíacaídoal suelo.Deprontosurgieronunaseriedegritosyburlasenlallanura,yelmagocomprendióqueelquejidodelcaballosehabíadebidoaalgomásserioqueunapatarota.

VangerdahastempujóaCadimushaciaelruidoyviounmuroformadoporsiluetasdeorcosqueascendíahastaelbordedelallanura.Losmarranosnoseencontrabanamásdeuncentenardepasosdedistancia,ysusgruesoshocicosyorejas puntiagudas se recortaban contra el horizonte púrpura. Más cerca, unadocena de formas jorobadas se incorporaban después de haber permanecidoocultosenunazanjapróximaallugardondeseencontrabaRowen.Elexploradorseesforzabapor librarsedelcaballoparanoquedaraplastadobajo supeso: lapobre bestia tenía cuatro lanzas alojadas en la caja torácica, y cada vez queintentabaponersederodillas,partedesualientosurgíaenformadevahoporlosorificiosdesusheridas.

Tanalasta detuvo su montura junto al caballo postrado y se inclinó paratenderlamanoaRowen.Cuandoésteaceptólamanodelaprincesa,otralanzaatravesó al caballo, que profirió un nuevo gemido. Otra lanza, o quizás unaflecha, pasó tras la espalda de la princesa, y dosmás fueron a clavarse en la

Page 156: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

gravaquepisabanloscascosdesucaballo.Elexploradorvolviólamiradahacialas zanjasdonde sehabíanemboscado losorcos,y soltó lamanodeTanalastaporquelaprimeradocenadeorcosapenasdistabanunosdiezpasos.

—Nohaytiempo,princesa.¡Marchaos!—¿Ydejarleaustedaquí?¿Quéclasededamaseríasihicieratalcosa?—

TanalastadesmontódelasillaymiróaVangerdahast—.¡Hagaalgo!Peronoeranecesariodarórdenesalmago,queyaestabaempuñandounade

susvaritaspreferidas.EncuantoTanalastasaltódelasillaparalibraraRowendel peso del caballo, elmago pronunció la palabramágica y blandió la varitahaciaelorcomáscercano.Elsalvajegritóconmocionadoyrodóporelsuelosinpoder evitar partirse la crisma en el terreno empedrado. El mago repitió tresveces más el mismo gesto, antes de que la princesa empujara el caballo losuficienteparaqueRowenpudierasoltarelpiedelestribo.Elexploradorselibródel caballo muerto y se incorporó, bloqueando a Vangerdahast el ángulo devisión.

—¡PorelDragónPúrpura!—Vangerdahastsemovióparaconseguirunbuenángulodevisión,ydespuéshizovolaraotroorco.Losdemásseacercabanporunflanco,ynotardaríanenalcanzarladistanciaadecuadaparaarrojarsuslanzas—.¡Tanalasta,quitaddeenmedioaeseidiota!

—Medidvuestrolenguaje,Vangerdahast.—Tanalastavolvióamontarensucaballo,ycerróelbrochedesucapa—.Olvidesucaballo,Rowen,hallegadoelmomentodelaretirada.

VangerdahastsedetuvoalotroladodelcaballodeRowenydespejólazonacon trespasesdevarita,guardándolaacontinuaciónen lamangade la túnica,mientras con la otra mano buscaba algo en la capa. El tiempo que tardó enencontrarloleparecióunaeternidad,quizáporquenocesabadeotearelcielodelamanecerenbuscadelasalasoscurasdelaghazneth.

Rowen hundió la espada en la cabeza del caballo y cogió lamano que letendía laprincesa,montandoen lagrupadelcaballo, trasella.Lanzóun tajoaalgoquehabíaalotrolado,yunorcoprofirióungritoagudo.Tanalastaacaricióelbrazaleteydespachóaotroscuatroorcosconcuatrorayosdoradosmágicos.Despuésvolviógrupasyhundiólamanoenelbolsillodehuida.Seprodujounadetonacióncasi inaudible,yVangerdahastobservóenel reflejode losojosdelcaballomuertoatresorcosaturdidosanteloquehabíanvisto.

Page 157: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Elmagosoltólasriendasehizoungestoconlamanolibreparaquedosdeellos explotaran tras ser alcanzados por rayos mágicos, y en ese precisomomentoencontróconlamanoquerebuscabaenlacapaunapequeñabarradehierro.Señalóconellaaltercerorcotemblorosoymurmuróunrápidohechizo.

—Nadasemueve.Elorcodejócaerlosbrazosaloscostados,yVangerdahastrebullóenlasilla

paraenfrentarsealcontingentemásimportantedelahordaqueestabaatansólounostreintapasosdedistancia.Cogióunpequeñovialdelbolsillodesucapa,lodestaponó rápidamenteydespués señalócon lamanounpunto situadoaunosquincepasos.Elmagoempezóarecitarunlargoencantamientomientrasvertíadelvialunpolvilloblanco.Elpolvillo,amedidaquecaía,seconvertíaenhumo,yunallamadiminutacobróvidaenellugardondehabíaseñalado.

Cuando terminó, los orcos habían empezado a arrojar lanzas contra él. Ladistanciaseguíasiendoconsiderableparaquelasarmasresultaranefectivas,peroVangerdahastnopodíaarriesgarse.RodeóelcaballomuertodeRowenyesperóaquelosprimerosmarranosalcanzaranla líneadellamasdiminutasquehabíaformadoenelsueloparapronunciarlapalabramágica.

Entonces cobró vida unmuro de luz cegadora, de llamas que se elevaronunossietemetrosenelaireyseextendierona lo largode trescientospasosenambasdirecciones.Elsilenciorelativoquehabíandisfrutadohastaelmomentosetruncóantelosgemidosygritosdelosorcosmoribundos,yelhedoracarnequemadasehizoinsoportable.Unosbultosparecidosaespantapájarosenvueltosen llamas se separaron del muro y trastabillaron confusos de un lado a otrodurante algunosminutos, antes de caer inmóviles al suelo, donde continuabanardiendohastaquedarreducidosacenizas.

Vangerdahastnobajólaguardiahastaquesehuboaseguradodequeningunodelosenemigosquehabíafranqueadoelmurodefuegocontinuabaconvida,yluego se volvió hacia el orco al que había ordenado permanecer inmóvil. Elmarranoseguíadepieenelmismolugar,mirándoselapuntadelospiesconlosojosmuy abiertos e inyectados en sangre.Elmago cabalgóhasta su altura, lodesarmódeunapatadayvolvióalevantarlamiradahaciaelcielo.Elsolyasehabíadestacadoenelhorizonte,yuna luz intensa se extendíahacia eloeste atravésdelcielo.Elviento(comoleshabíadichoRowen)habíaamainado,ynohabíapolvaredaalgunaqueimpidieralavisibilidad.

Page 158: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Vangerdahast estudió el cielo hasta estar seguro de que la ghazneth no seencontrabaenellugar,despuésdesmontóyfrotóunpequeñoretaldesedasobrela armadura pegajosa del prisionero. El orco le espetó algo en su lenguajegutural, probablemente suplicándolequedejarade jugar con él y terminaradeunavezportodasconsusuplicio.Elmagoselimitóasonreírysusurróconvozsuaveunhechizo.Hundióelpedazodesedaenlabocadelacriaturayvolvióamontarensucaballoparaalejarseciertadistanciaantesdegritar:

—¡Huye!El orco trastabilló un solo paso y recuperó la libertad de movimiento.

DespuésdemirarbrevementeaVangerdahast,sediolavueltayechóacorrersindetenersearecuperarlalanza.Elmagovolviógrupasalsur,endirecciónalosPicosde lasTormentas,yvioquesuscompañerosagitabanelbrazoenelaireparallamarsuatencióndesdelacrestadeunapequeñaestribaciónaalgomásdeunkilómetrodedistancia.Trasellos,elterrenopeladoydurodelasLlanurasdeGnoll daba paso a un laberinto tortuoso de agujas de color pardo y cañonesretorcidos,quelentamenteseelevabanhacialasdesiertaslomasdedospicostandelgadoscomoaltos,quesólopodíancorresponderalasOrejasdeMula.

Vangerdahastcerróelbrochedelacapayhundiósumanoenelbolsillodehuida.Unapuertanegrasurgióantesumiradaacompañadadeunsusurro,ysinperder un segundo espoleó al caballo para atravesarla. No podría recurrir albolsilloduranteel restodeldía,perodisponíadeotrosmediosparaabandonarrápidamenteunlugar.Además,Tanalastayahabíautilizadoelsuyo,ynoteníaningunaintencióndeiraningunapartesinoeraconella...sobretodoteniendoencuentaqueahoraRowenmontabaelmismocaballo.

Un instante después,Vangerdahast estaba sentado junto a sus compañeros,esforzándose por aclimatarse a su nueva ubicación. La teletransportación,aunquefueraatancortadistancia,siempreledejabaaunoaturdidoduranteunosminutos.Tanalastalocogióporelhombroysoltóelbrochedelacapa.

—¿Se encuentra bien, Vangey?—preguntó sin soltarlo del hombro—. Esustedunauténticogranoenel culo,pormuysupremoque sea,pero loúltimoquequerríaesperderloamanosdeunorco.

—Estoy muy bien. —Vangerdahast pestañeó para sobreponerse a laconfusión. Se encontraban mucho más cerca del laberinto de lo que habíasupuesto,ylabocadeuncañónenormecubiertodefangoseencontrabaapenas

Page 159: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

a unos cien pasos de distancia—.Apresurémonos.He perdonado la vida a unorcoparaimbuirleunpocodemagia,peroconestaluzlaghaznethnotardaráendescubrirelengaño.

CuandoVangerdahast hizo ademán de adelantarse,Rowen se inclinó en lasillaparacogeralcaballodelbocado.

—Ésteesel caminoqueconducea lasOrejasdeMula.—Señalóhaciauncañónmáspequeñoqueseencontrabaasetecientosmetrosaleste—.Encambio,en ese otro cañón sólo encontrará usted problemas y caminos que no llevan aningúnsitio.

—Entoncesnoperdamoseltiempohablandodeello—gruñóelmago—.¿Yporquénocabalgaustedconmigo?Cadimusesun...

Vangerdahastnosemolestóenconcluir lafrase,porqueTanalastayahabíaemprendidoaltroteelcaminoqueconducíaalcañónlejano.Espoleósumonturapara seguirla, preguntándose con aire distraído si habría algún modo deconvencerlos de queChauntea no vería conbuenos ojos que una pobre yeguatuvieraquecargarconsemejantesmocetones.

Page 160: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

C10

uandoentraronagachadosenelpequeñocañón,elsolyasehabíaalzadoenelhorizonte.Elterrenodelagargantaerainclusomásdesoladoqueelque

habían encontrado a su paso por la llanura, ya que sólo había algunosmuroserosionados cubiertos de tierra y algún que otromatojo raquítico de arbustos.Hicieronunaltoaunos treintapasosdel lugarporelquehabíanentrado,paraquesuscansadasmonturaspudieranbeberdelasaguasdeunarroyuelofangoso,paréntesisqueVangerdahastaprovechópararegresaralaembocaduradelcañónybuscaralaghaznethconlamirada.Nopasómuchotiempoantesdequevieraun par de alas provenientes del oeste, que trazaron círculos alrededor de lacortina de humo que despedía el muro de fuego que había invocado, paradespuésalejarseenlamismadirecciónquehabíaseguidoelorcoensuhuida.

Vangerdahastesperóhastaestarsegurodequelacriaturahabíadesaparecidopararecorrerelcañónlomásdeprisaquepudo.

—Tenemos que irnos. En unos cincominutos nuestra oscura amiga habrádescubiertoelengaño.

RowentendiólasriendasdeCadimusalmagoysevolvióhacialamonturadeTanalasta.

—Ejem...Estoysegurodequedisfrutaustedcompartiendolamonturadelaprincesa, joven, pero Cadimus es el doble de fuerte que su caballo. —Vangerdahastmontó y ofreció lamano al explorador—. Iremosmás rápido simontaustedconmigo.

—Buenaobservación.Rowenseacercóalmagoparacogersumano,peroTanalastaseadelantóal

Page 161: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

saltardesusilla.—Dehecho, iremosmás deprisa si cambiamos demontura.—La princesa

extendió sumanoparadarunapalmadaalmagoen labarriga—.Rowenyyojuntosnopesamosmásqueustedsolo.Ustedmontarámiyegua,ypermitiráqueelpobreCadimuscargueconnosotros.

—Unabuenaidea—replicóelmago—,peroyasabéislotemperamental...—Cadimusesmásbienunpococobardica—repusoTanalasta—.Notuveel

menorproblemaparacontrolarloenelSenderodelRayodePiedra...¿oacasohaolvidadoustedquiénselodevolvió?

—Deacuerdo—gruñóVangerdahast—.Nopuedopermitirqueperdamoseltiempodiscutiendohastaquenosencuentrelaghazneth.

Intercambiaronlasmonturasyreemprendieronelcaminoquediscurríaporelcañón.Alprincipio,Vangerdahastintentóvigilaratentamenteelcielodelnorte,peronotardóendarsecuentadeloinútilqueera,puesteníanquedarvueltasymásvueltasporaquellaberinto.NopudoimaginarcómoselasapañabaRowenparasaberadóndeiban.Elexploradorseadentrabasintitubearporrecovecosycañones laterales,quedoblabanparavolverpordondehabíanvenido,antesdedoblarse de nuevo y tomar una nueva dirección que era imposible reconocer.Duranteuntiempo,Vangerdahastcreyóqueelexploradorseguíaalgúnrastrooque reconocía los montoncitos de piedras, pero cuando se atrevió a dejar demiraralcielonovionadaparecido.

Después de cabalgar durante casi dos horas, el cañón desembocó en unacuencaampliayllanasurcadapormásdeunadocenadegargantasdiminutas.Alllegaraella,lostressedetuvieronsindesmontarydierondebeberasuscaballosgraciasaunafuentedeaguafangosa.Vangerdahastobservóelsolenelcieloyfinalmentepudodeterminarhaciadóndesedirigían,aunquetalinformaciónnolesirvieradenada.

—Rowen,¿cómosabeustedadóndesedirige?—preguntó—.Yonisiquierasoycapazdedistinguirenquédirecciónvamos.

—¿De veras está admitiendo que hay un truco que el mago supremo noconoce?—bromeóTanalasta—.Nocreoquedebaustedresponder,Rowen.

—Hayunmontóndetrucosquenoconozco—respondióVangerdahast—,ygraciasavosnuncadejarédeaprendercosas.

—Éste en particular no tiene ningún secreto. —Rowen ofreció a

Page 162: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Vangerdahastunpalitoplanoconunasmuescasgrabadasendiversosángulosalolargodelosbordes,yledijo—:Esunmapagrabadoenunavara.Graciasaélpuedesllevarelcálculodelosgirosylasdireccionesquehas...

—Por las muescas que hay a los lados —interrumpió Vangerdahast, queexaminabalavara—.Yelánguloconfirmaquehallevadoustedbienlacuenta.

—Muy bien —rió Tanalasta—. Aún le convertiremos a usted en unexploradordeprimera.

VangerdahastlamiróimpávidoydevolviólavaraaRowen.—Cuandounodisponedelamagia,nonecesitalasvaras.—Exceptocuandonosepuederecurriralamagia—replicóTanalasta.La princesa señaló hacia la pared occidental de la cuenca, donde se

proyectaba una diminuta sombra, que se alargaba o encogía en función de lascaracterísticas del terreno.Vangerdahast volvió lamirada hacia el camino quehabíanrecorrido,yobservólashuellasquehabíandejadosusmonturasalpasarporencimadelbarroseco:

—Tanalasta —dijo el mago supremo—. Sé que prometí no volver amencionareltema...

—Puesnolohaga—interrumpiólaprincesacondureza—.NopiensovolveraArabelhastaquenohayahabladoconAlusair.

—Escuchadme. Esta criatura es muy peligrosa. Reunamos algunos magosmásyvolvamosacompañadosporunaescoltadeDragonesPúrpura.

—Y cuando el rey sepa lo que ocurre aquí y le ordene que me deje enArabel,¿ledesafiaráustedypermitiráqueleacompañe?

—Supongoqueno,perolotendréencuenta.—Elmagoreanudólamarchaparaadentrarseenelterrenodifícilqueseabríaasupaso—.Cuandolaghaznethdescubranuestrorastro,nocreoquetardemuchoenencontrarnos.

—Más de lo que usted se imagina —dijo Rowen—. Estas tierras seextiendenalolargodecentenaresdekilómetrosporlabasedelasmontañas,yloscañonessonprofundos.Noesfácildistinguirloquesemueveensuinterior,nisiquieraasomándosealborde,yaúnmenosdesdeelcielo.

—Espero que esté usted en lo cierto, Rowen—dijo Tanalasta—, aunqueEdwinNarlokexponeunateoríaensuensayoCazadehalcón,segúnlacuallavisióndelasavesdepresaesmuchomásagudaquelanuestra.

—Noheleídoeselibro—seexcusóRowen,incómodo—,perodiríaqueeso

Page 163: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

tienesentido.Delocontrario,lescostaríamuchocazardesdesemejantealtura.—Perolaghaznethnoesunavedepresa...—Sinembargo,debemosserprecavidos.—Vangerdahastsacóunguantede

lino del bolsillo y lo plegó en su palma, donde podría cogerlo en cualquierinstante—.Lapróximavezrecordadmequenodeboapostarconvos,alteza.

—Si lo que estáis pensando es... —dijo Tanalasta abriendo los ojosdesmesuradamente.

—Las apuestas son cosa sagrada—la tranquilizóVangerdahast—. Esto espara la ghazneth. Cuando nos encuentre, atacadla con todo lo que tengáis amano.Tendréisqueganartiempoparaqueyopuedaactuar.

—Comoquiera—dijoTanalastasinapartarlavistadelguante.ConsultóelmapadeRowengrabadoenlavara,ydespuéssiguióelcamino

delacuencahastallegarauncañónllenodesombrascuyabocadesprendíaolorahumedad.Labocaeratanprofundacomounpozo,ytanangostaqueamenudoVangerdahast rozaba las paredes con ambas rodillas. Incluso en el puntomásancho no cabían ambos caballos juntos, y el camino se retorcía como unaserpiente.Elmagonopudoimaginarpeorlugarparasufrirunaemboscada,ynoperdiódevistaelestrechopedazodecieloquesedibujabasobresuscabezas.

Vio a laghazneth endosocasionesdurante las cuatrohoras siguientes.LaprimeravezfuealdistinguirunaVdiminuta,recortadacontraelcieloazul.Noeramayorquesuuña,yvisibleportanbreveespaciodetiempoquepodríahaberobedecidoalasiluetadeunbuitreenorme.Lasegundavez,almagonolecupolamenorduda.Apareciósobreelcañón,trasellos,lobastantegrandecomoparaque sus alas y el cuerpo dibujaran una cruz inconfundible, que trazaba lentoscírculosymirabahaciaabajo,buscandoalgoenaquellaberinto.

Convencido de que el fantasma había descubierto su rastro, VangerdahastvolvióasugerirquelomejorerateletransportarseaArabel.LaúnicarespuestadeTanalastaconsistióenpedirlequelesdejaralayegua,ysiguieronavanzandoensilencioduranteelrestodelatarde.Conelsolocultodurantelamayorpartedel trayecto tras un borde u otro del cañón, tuvieron cierta dificultad paracalcularelpasodel tiempo,peroVangerdahastestabaconvencidodeque teníaque ser primera hora de la tarde cuando de pronto el suelo de la garganta sevolvió más sólido. Las paredes ya no parecieron alzarse tan altas sobre suscabezasyelaireranciosevolviómáscálidoymásárido.

Page 164: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—No tardaremos en dejar atrás las tierras difíciles —dijo Rowen—. YaquedapocoparallegarallugardondeestuveconAlusairporúltimavez.

—¿Enunade las tumbas abiertas?—preguntóTanalasta, que no esperó larespuestadelexplorador—.Serámuyinteresante.

Vangerdahast estaba a punto de citar aquel aforismo sobre el gato y sucuriosidad,cuandooyóungolpesecoasulado.Miróhaciaabajoyviouncráterde diez centímetros en el fango seco, y un fulgor de oro apenas visible en elfondo.Elmagofruncióelceño, intentandoimaginarcómounamonedadeorohabíaacabadoallí,despuéslevantólamirada.

—Cuida...—gritóalarmado.Unaformacuadradaseadentróenelcañónatrompiconesylogolpeóenel

pecho.Deprontosuspulmonessequedaronsinaire,ysuspiesabandonaronlosestribos. Se encontró tendido de espaldas, respirando a grandes bocanadas ygimiendodedolor.Todoenelcañónfuerongritos,magialuminosaycascosdecaballosquevolabandeunladoaotro,yfinalmentesediocuentadequeseguíatendidoenelsuelomientraslabatallaseguíasucurso.

Vangerdahastsesentócomopudoyencontróuntorsosinpiernasnicabezadesparramado sobre suspiernas.Empujóhorrorizado aquel cuerpo, y entoncesreconociólaarmadurahediondadelorcoquehabíautilizadocomoseñuelo.Tanaturdidoestabaquenopudoapreciarlaironíadequelaghaznethselohubieradevuelto.

Los cascos de un caballo golpearon el tobillo de Vangerdahast. Un dolorlacerantesubióportodasupiernaantesdequecogieralaherradurayapartaraala bestia de un empujón. Oyó la voz de Tanalasta, que recitaba el únicoencantamientoquesabía,yunrelámpagodeluzdoradailuminólasparedesdelcañón.Vangerdahastsacudiólacabezaparadespejarse,yviolasbotasdeRowenpasar alotro ladodel caballo,momentoenque se leocurriópensarquedebíahaceralgoantesdeque laghazneth losmataraa todos,uno trasotro.Abrió lamanoydescubrióqueelguantehabíadesaparecido.

—¡Vangerdahast!—gritóTanalasta—.¡Nopodréaguantarmuchomás!Vangerdahast asomó la cabeza y vio queCadimus se volvía de lado en el

cañón,conlaprincesacabalgandoasulomo,señalandoalapartealtadelcañón,mientrassegolpeabalasmuñecassinqueesosirvieradenada.Habíautilizadolosbrazaletespararealizarunadescargaderayosmágicosyelúnicohechizode

Page 165: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

combatequeconocíaparadispararotra,porloquepasaríaalgúntiempoantesdequepudieraatacardenuevo.Losbrazaletessólonecesitabanunosminutospararecuperarsucargamágica,peroenelfragordelcombateunosminutoseranunaeternidad.ElmagosiguióconlamiradaladirecciónenqueseñalabaTanalasta,ypudodistinguiralaghazneth.

Erademasiadograndecomoparavolarenaquellagarganta tanangosta,demodoquelacriaturadescendíaporlapareddelcañón,conlacabezapordelantey las alas enormes encogidas a ambos lados del cuerpo.Ya había recorrido lamitad del camino, y sus ojos blancos observaban el suelo del cañón, dondeRowenpermanecíadepieparaenfrentarsea ella tan sólocon la espadayunadagaherrumbrosa.

SeríamásfácildeloqueVangerdahasthabíapensado.Extrajounabolitadetelaraña pegajosa que guardaba en un bolsillo de la capa y la arrojó contra lacriaturamientrasmurmurabaelhechizo.Anteelsonidodesuvoz, laghaznethvolviólacabezahaciadondeseencontrabaelmago,yalverloseimpulsóasímisma desde la pared y cayó con las garras extendidas para abrir en canal aRowen.La telarañaseabriósobreelmuro,pero logróatrapara lacriaturaporunarodillae,inesperadamente,consiguiódetenerla.

Vangerdahastsuspiróaliviado,despuéssepusoenpieyencontróelguantebajo su montura. Logró recuperarlo pese a tener que esquivar las coces, ysacudió el polvo que lo cubría. Entonces sopló en la abertura del guante ysusurróunencantamiento.Losdedosseinflaronunavez,abandonósusmanosyempezóaflotarenelaire,antesumirada.Elmagosacódelbolsillounvialllenodemoscasdisecadas,ycolocóunodeaquellos insectosdiminutosen lapalmadelguanteflotante.

MientrasVangerdahast hacía todo esto, la ghazneth profirió una letanía demaldiciones incomprensibles y batió sus alas contra la ladera de la garganta,intentandolibrarsedelatelarañaquelahabíaatrapado.Alverquenoconseguíanada, forcejeó girando sobre símisma con intención de emprenderla a golpescon la telaraña. El filamento se partió con un ruido seco e imperceptible,momentoenqueelfantasmacayóaplomodeespaldascontralapared.Rowenseabalanzósobrelacriaturaencuantocayó,apartósusalascondosgolpesdeespada,ydespuéssearrojóafondodagaenmano,conintencióndehundirlaensucuello.

Page 166: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Ungritosobrenatural reverberóen lasparedesdelcañón.Laghaznethgirósobresímisma,golpeóconelalaalexplorador,alquearrojóporlosairescontraelcañónparairadarcontraCadimus.TanalastayRowencayeronalsueloconelcaballo en una confusa maraña, momento que aprovechó el fantasma paraponerseenpie.Aunqueelagujerodelpecho,cortesíadeVangerdahast,sehabíacerradoporcompleto,ladagaherrumbrosaseguíaclavadahastalaempuñadura,manandounasangreoscuraalrededordelahoja.

—¡Rayosdelrey!—gritóTanalasta.Cuatro rayos dorados pasaron junto a Vangerdahast, pero la ghazneth se

había protegido con una de sus alas antes de que los rayos la alcanzaran. Elapéndice adquirió una tonalidad blancuzca, mostrando el entramado decartílagosenformadeabanico.

Vangerdahastcerrólamanoyseñalóalacriatura,momentoenqueelguantevoladorsecerróalrededordelamoscaqueteníaenlapalmaysedirigióhaciaellugar indicado por elmago.Cubriéndose con el ala, la ghazneth se dispuso aincorporarse.Elmagoguióelguanteparaqueevitaraelala,ydespuésbajó lamanoehizoademándepropinarunabofetada.Elguanteextendiósusdedosyenganchódeunapalmadalamoscaenlacabezadelfantasma.

—¡Luz!—ordenóVangerdahast.Unglobodeluzmágicaengullólacabezadelaghazneth.Lacriaturaprofirió

un grito y retrocedió de un salto, moviendo la cabeza como loca, pero noconsiguiódesprendersedelaluz.

Vangerdahastbajósumanoycerrólosdedoscomosiesgrimieraconfuerzalaempuñaduradeuncuchillo.Elguantedesapareciótraselaladelfantasma,yungruñidofrutodelasorpresarecorriótodoelcañón.Elmagomoviósumanoarriba y abajo. El guante subió y bajó al ritmo de su voluntad, cogiendo elcuchillo herrumbroso de Rowen y salpicando las paredes de la garganta conchorrosdesangreoscura.

La ghazneth profirió un grito y bajó su ala, revelando sin tapujos el aurabrillantequehabíaengullidosucabeza.Aleteócomounaloca,perosuempeñoporatraparelguanteflotantefueinútil.Nopodíavernadaenelinteriordeaquelglobodorado,salvolaintensaluzamarillenta.Vangerdahastmoviólamanosinperderunsegundo:ladagaherrumbrosatrazóunarcoenelaireysehundióenlacaja torácica de la criatura. La ghazneth se dobló sobre la herida, de la que

Page 167: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

manaba abundante sangre, y emprendió la huida por el cañón, rozando lasparedesconlasalasmientrasproferíaalaridosderabia.

Vangerdahast salió corriendo tras ella, pero la criatura era rápida como unleón. Antes de dar el tercer paso, el mago fue consciente de que jamás laalcanzaría y se dio la vuelta para ver a Tanalasta montada en su yegua, ytendiendolamanoaRowenparaquesubieraalagrupa.Aunqueelexploradorno había sufrido herida alguna, parecía aturdido por el golpe.Cadimusestabadetrásdelayegua,conlosojosabiertoscomoplatosyatontado,peropocomás.Vangerdahasttomólasriendasdelcaballoyseencaramóalasilla.

—¡Adelante!—Aunque uno de los hechizos de luz deVangerdahast solíadurartodoundía,sospechabaquelaghaznethnonecesitaríatantotiempoparaabsorberlamagiadelhechizoyvolvermásrabiosaquenunca—.¡Comopodéissuponer,esonolamatará!

—Sí,peroalmenosestáherida.—Tanalastahincólostalonesenlosflancosdelayegua,queemprendióelgalopeporelcañón—.Algohemosconseguido.

Vangerdahastlasiguió,desplazandoelguantepararecuperarlo.Temerosodeperder la daga de Rowen, cogió el arma ensangrentada de la mano mágica.Descubriósorprendidoquesetratabadeunarmasencillaforjadaalhierro.Losdemoniosodianelhierro,pero laghaznethnoeraundemonio,nopodíaserlo.Limpióelarmaenlamantaquecolgabadelasalforjasylasujetóasucinturón.Después, cogió con fuerza el guante suspendido del aire y lo guardó en elbolsillocorrespondiente.

Habían doblado al galope dos esquinas muy cerradas, cuando Tanalastaprofirióungritoytiródelasriendas.Aunqueesperabaencontrarunabandadeorcos bloqueando el paso, porque era imposible que la ghazneth hubierasuperadolosefectosdesuhechizodeluztandeprisa,Vangerdahastintrodujolamano en la capa y cogió un pedazo de azufremientras se colocaba junto a laprincesa.Aveintepasosdedistancia,elcañónestababloqueadoporunaenormepuertadeacero.

—¡Porlasnuevepuertasdelinfierno!¿Quéhaceahíesapuerta?Rowen se incorporó para mirar por encima del hombro de Tanalasta, y

despuéscerrólosojosysacudiólacabezaparaaclararlasideas.—¿Estásegurodequeesporaquí?—preguntóTanalasta.—Es por aquí—replicó Rowen—. Será una ilusión. En una ocasión nos

Page 168: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

encontramosconunajustoantesdeabrirlasegundatumba.—¿Una ilusión?—Vangerdahast agitó la mano en dirección a la puerta y

mascullóunaletaníadesílabasmísticas—.¡Desaparece!La puerta desapareció instantáneamente y en su lugar apareció una figura

oscura y rechoncha de grandes ojos rojos y una nariz enorme, roja de tantobeber. Ceñía una corona deslustrada, sobre un pelo largo y enmarañado, y elagujeroqueteníaporbocatansólopodíaadivinarseentrelabarbacerradaquecubríabuenapartedesucaragraciasacuatrocolmillosamarillentosylalenguaqueseagitabainquieta.

—¿Qué?¿Nollaman?—graznóelhombrecillo.Levantólosbrazosalcieloen un gesto extraño que Vangerdahast no comprendió muy bien—. ¿Hacendesaparecermipuerta?

Elextrañopersonajeestabadesnudocomodioslotrajoalmundo,teníaunapiel brillante del color de la obsidiana y una barriga del tamaño de una ollasopera.Ensusdedoslucíaunasuñasrotasyamarillentas,unasalasplegadastraslos hombros, y una interminable procesión de parásitos sobre el vello de sucuerpo.

—Otra...—Vangerdahastestabatansorprendido,queapenaspudovocalizarlapregunta—.¿Otraghazneth?

—¡Porsupuesto!—Tanalastaparecíamásemocionadaqueasustada—.Hanabiertotrestumbas.

—Tres...quesepamos—precisóVangerdahast.Laghaznethbatiósusalas.Cuandolosapéndicesdieroncontra lasparedes

delcañón,lanzóunarabiosamaldiciónyempezóacaminarhaciaellos.—¡Yaestábien!—Vangerdahast soltó las riendasy extendióelbrazopara

cogerasuscompañerosporlamuñeca—.Agarraos.—¡Yono!—exclamóRowen,abriendodesmesuradamentelosojos.Elexploradorse libródelmago,cogióladagadelcintodeVangerdahasty

saltódelayegua.Laghaznethacortóladistanciahastaacercarseadiezpasos.—Rowen...—Tanalastarebullóenlasillademontar.—Éste esmi lugar, y debo cumplir conmi deber—replicó el explorador,

apartándosedelcaballo.Tanalastaobservóalaghazneth,cuyalenguasinuosaasomabaporentrelos

colmillos,mientrassedisponíaasaltarsobreellos.Vangerdahastseestirósobre

Page 169: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Cadimusparacogeralexplorador.—Démelamano—ordenóelmago—.¡Ahora!Rowenseapartó.Laghaznethcacareócomounalocayseelevóenelaire.

Vangerdahastvolvióa sentarseen la sillae imaginó losestablosdepalacioenArabel.Tanalastaprofirióungrito,seagachóysoltósumanomientraselmagorecitabaelencantamiento.UnagranoscuridadlosenvolvióyalgopesadoydurogolpeóaVangerdahastdesdearriba.Entoncessintióquecaíaenunagujeromuyprofundo.

Tuvolaimpresióndequetardabamuchoenalcanzarelsuelo.Yanosentíaningúnpesoalaespalda.Cadavezestabamásdesorientado,másmareado,yyanopodíaprecisarelpasodeltiempo.Teníalasensacióndequeseguíacayendo,ypensóquequizásesoeraloqueunosentíaalmorir,nidolor,nimiedo,tansólounaoscuridadinmensayrepentina,conlasalvedaddequeaúnteníalasensaciónde que algo caliente y asqueroso lo tenía cogido por el cuello, de que algohúmedosefrotabacontrasumejilla.

Volvió la luzencuantohubodesaparecido.Vangerdahastvioporel rabillodelojoelflancoparduscodeCadimusquepasabajuntoasunariz,ydespuésfueaparardecabezacontraelsueloblandoyfangoso.Todoselevinoencima,yseencontróenterradobajounamontañadecueronegro,hediondoycrujiente.

Elmagopermanecióenelsueloduranteunbreveinstante,queleparecióunaeternidad, mientras la cabeza le daba vueltas. Intentaba discernir dónde seencontrabayaquéobedecíaelhedorquepercibíansusfosasnasales.Oyóvocesque gritaban sorprendidas, hombres, también algunas mujeres, y cobróconcienciadeundolorlacerantequeloatenazabaenmitaddelaespalda.

Vangerdahast hundió los dedos en el suelo blando, y pudo arrastrarselentamente. Creyó oír un ruido metálico, similar al que hace una personaenfundadaenunaarmadura.Algunasvocesempezaronaparecerlefamiliares.Elmago siguió arrastrándose y de pronto se sintió liberado del peso. Se puso derodillasyvioelrepulgodelvestidodeunamujer,ynomenosdecincuentapatasdecaballoqueloseparabandelasparedesblancasyenyesadasdeunestablo:deprontolorecordótodo.

Vangerdahast levantólacabezayvioaunacompañíaarmadaentodaregladeDragonesPúrpura.Losacompañabanvariaspersonasqueleeranfamiliares:unhombrealtodebarbagris,enfundadoenuntrajedemontarpolvoriento,que

Page 170: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

ceñía una corona dorada en la cabeza; unmago de cejas pobladas con rostropétreo;unabellezarubiadeojosazulescomoelhielo;unclérigoenvarado,derostrochupadoypielcurtida.Azoun,Merula,Filfaeril,Owden...Todosellosloobservabanconunamiradaenlaquesefundíanelhorrorylaconfusión.

AlgoaleteójuntoaVangerdahast,yalmirarenaquelladirecciónviolapuntadeunalanegradecueroqueseagitabaenelaire.

—¡No!—Sepusoenpieagitando lamanoparaapartarasusamigos,ysediolavueltaparaenfrentarsealaghazneth—.¡Guardaosde...!

Una mano negra descargó un golpe en su cara, y se vio volando por elestablo.CayóaunadocenadepasosdelantedeCadimus,sobreelestómago,conunpitidointensoenlosoídosyunhilodesangrebrotándoledeunaheridaenlacara.Sucampodevisiónseestrechó.Sacudiólacabezaparaaclararselasideasyhundiólamanoensucapa.

Una docena de Dragones Púrpura lograron espolear sus monturas parainterceptar a la ghazneth. La criatura oscura pasó entre los soldados como unáguilaatravésdeuncamporepletodeardillas,apartódeunmanotazolaespadaconqueloamenazabaelreyAzounyseacomodóantelasillademontardondeseencontrabaelrey.

—¡Usurpador!La ghazneth arrancó la corona de la cabeza de Azoun, y hundió sus

asquerosas garras en su armadura, levantándolo de la silla como si fuera unmuñecodetrapo.Vangerdahastsintiónáuseas,ylaoscuridadempezóacerrarseasualrededor.Apretóconfuerzalosdientesycogiósuvarafavorita,confiandoenmanteneralmargenalaoscuridad.

Unos cuantos Dragones Púrpura se interpusieron ante la ghazneth,atacándolaconlosaceros.Conalgunosgolpesdelasalasoscurasse lasapañóparamantenerlos a raya, pero losmagos guerreros ya habían emprendido unabatería de hechizos de rayo y fuego. La ghazneth plegó sus alas y lanzó unrugido que no era sino una risa estruendosa, porque los hechizos se habíanestrelladocontrasusdefensas.SaltóporencimadelosguardiasyaterrizójuntoaFilfaeril.Lamagiadelosmagosguerrerosse interrumpió.Lareinaprofirióungritodeterrorylacriaturalaocultóbajosusalas.

El campo de visión de Vangerdahast seguía estrechándose cada vez más.Sacólavaritadelacapa.

Page 171: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—No tienes por qué tener miedo, querida —dijo la ghazneth. Despuéscacareóbajolasalas—.Jamásharíadañoaunareina...¿Osí?

La criatura levantó el vuelo con Filfaeril en sus garras. La visión deVangerdahastseestrechóhastaconvertirseenunadelgadalínea.Agitólavaritaen el aire en dirección a la reina, y gritó la palabra mágica que liberaba elhechizocuandoladelgadalíneaseconvirtióenoscuridad.

Page 172: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

L11

ossignos surcabanel sicomoro formandounaeleganteespiral, tan sinuosacomo una serpiente, definidos con tal claridad como el día en que los

grabaron.AunqueTanalastanopudo identificar laeraenquefuerongrabados,habíaestudiadolasuficienteliteraturaélficacomoparareconocerelestilocomoarcaico. Los caracteres fluían con elegancia uno tras otro, con extremosalargados y serifas que se ondulaban con tal gracia que parecían guardar unaperfectaunidad.Mientrasqueaquellenguajeleparecíadeformainequívocaaltowealdaneano,lainscripciónensíleparecióarcaicayartificiosa,inclusoparaelestándardelaAntiguaEradeOrthorion.

Estehijodelhombre,quesucadáveralimenteesteárbol.Elárboldeestecadáver,quecrezcamientrasnutra.Elespíritudeesteárbol,paraqueelloslepermitanregresarmientrascrezca.

Tanalasta retrocedió un paso y dejó de leer cuando terminó la primeraestrofa. Aparte de la pronunciación peculiar y la referencia al hombre, lainscripcióneraelepitafionormalparaelÁrboldelCuerpo,especiedememorialcreadoporlosantiguoselfosdelReinodelosBosques.Alamuertedeunelfoapreciadoporlacomunidad,suscompañerosescribíanelepitafioeneltroncodeun arbolito y enterraban el cadáver bajo las raíces del árbol. La princesa noconocía todos los detalles del ritual, pero había leído un ensayo en el que sesugeríaquesóloeranenterradosasíaquelloselfosquehabíanprestadoungran

Page 173: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

servicioalacomunidad.Encualquiercaso,habíavisitadovariastumbasdurantesus viajes con Vangerdahast, y siempre le había impresionado el portemajestuosodelosárbolesquelucíanensutroncoestasinscripciones.

El sicomoro que tenía delante ofrecía un claro contraste con estosmonumentosantiguos.Elárboleranudosoyraquítico,teníaeltroncoabiertoyunacorona formadapor ramas torcidas,quedespués sealzabanhaciael cielo,formandoángulosimpensablesenlanaturaleza.Sushojasamarillentasparecíanpequeñasmanosmarchitasdispuestasacogeralprimerdesdichadoquepasarapor debajo, y la corteza pasaba del blanco liso de las ramas a un abigarradoconjuntodegrises.Lamayordiferenciaresidíaenlabasedeltronco,dondeunagujeroexcavadorecientementepenetrabaenlasprofundidadesmohosasqueseextendíanbajoeltronco.

Tanalasta volvió a concentrarse en la inscripción y leyó la siguienteestrofa:

Asíduermenquienestraenladestrucción:unsueñosindescanso.Asísiembranquienestraenlapena:semillasdesuruina.Asímueranquienessiembranlamuerte,yloshijosdesushijos.

A Tanalasta empezó a encogérsele el estómago. Las maldicionesprácticamentebrillabanporsuausenciaen la literaturaélfica, inclusoen laerarelativamenteagitadadel temprano reinadodel reyOrthorion.Por supuesto, laBibliotecaRealnoconteníaobrasanterioresaOrthorion(alparecer,losprimeroscormytas no tenían tiemponi interés para aprender altowealdaneano), pero laprincesa no podía creer que tales maldiciones fueran habituales en la poesíaanterior aOrthorion.Aparte de aquella única y famosamasacre, y de algunosincidentes aislados, los elfos de la Era de Iliphar se habían mostrado muyreservados(endiosados,quizáfueralapalabra)conloshumanos,peropacíficos.

Tanalasta siguió la inscripción alrededordel árbol y leyó la última estrofa,queconstabadeunúnicoversoamododerequerimiento:

Venidaquí,LocoreyBoldovar,yyacedentreestasraíces.

Tanalasta pensó de inmediato en la ghazneth coronada que habíadesaparecido conVangerdahast, y se apartó del árbol llevándose lamano a la

Page 174: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

boca,mientras su corazón latía con fuerza en supecho.BoldovarElLoco erauno de sus antepasados, un rey de Cormyr cuyo reinado se remontaba oncesiglos atrás en el tiempo. Se rumoreaba que había matado a un montón decortesanos de palacio, antes de que una de sus víctimas cayera con él por lasalmenasdelafortalezadeFaerlthann.Ladesdichadamujerhabíamuertoenelactonotantoporeldañoproducidoporlacaídacomoporlas terriblesheridasquelehabíainfligidoeldesequilibradoBoldovar.

Aún menos conocido era el hecho de que el rey había seguido con vidadurante algunos días hasta que fueron a buscar a Baerauble Etharr, el primermagosupremodeCormyr,queseencontrabaausentedelacorte.Sinembargo,porsuerteparaloshabitantesdelreino,Boldovarsealejósinrumbo,solo,antesde que el mago pudiera regresar. Cuando al cabo de diez días se encontróflotandoenelImmerflowuncadáverhinchado,vestidoconelcolorpúrpurareal,Baerauble aprovechó la ocasión para anunciar lamuerte de su señor y ordenóquese incinerara inmediatamenteelcadáver.Hastaahora,nuncahabían tenidounarazónparapensarquelasprisasdelmagopudieranobedeceraotromotivoqueno fuera la sensibilidaddesuolfato,peroTanalastanopudoevitarpensarqueBaeraublehabíaaprovechado laocasiónpara resolverel terribledilemaalqueseenfrentaba.Puestoqueelmagosupremohabíajuradoprotegerlacoronade Cormyr a cualquier precio, a duras penas pudo haber condonado elderrocamientodeunrey,pormuylocoqueestuviera,perotampocopodíapensarqueelreinadodeBoldovarbeneficiaraalreino.QuizásustituyóotrocadáverporeldeBoldovar,yenvióalreylocoaalgúnlugardondepudieradisfrutarloquelequedaradevida,unlugardondenopudieracausarmásdaño.

Rowenapareciójuntoaellaaldarlavueltaalárbol.—¿Algúnproblema,miseñora?Parecéis...intranquila.—Másbienestoyasustada...Asustadaeintrigada.—Tanalastanoapartóla

miradadelárbol—.¿Lossignosgrabadosenlosdemásárboleserancomoéstos?—Separecíanmucho—respondióRowensinapenasdirigirlamiradaalos

caracteres.—Sí, pero ¿eran exactamente los mismos? —Tanalasta señaló los tres

caracteres correspondientes al nombrede«Loco reyBoldovar»—.Sobre todo,éstos.

—Yodiríaquesí,alteza—respondióRowen,queajuzgarporsutonodevoz

Page 175: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

parecía algo incómodo—. Para ser honesto con vos, debo confesaros que nisiquieradistingoladiferenciaentrelossignosqueseñaláisylosqueestánasulado.Losiento.

—Nosedisculpe.—Tanalastasevolvióhaciaél—.DeberíacomprenderlodifícilqueesentenderelaltowealdaneanosinteneramanolaBibliotecaReal.

—NisiquieraconlaBibliotecaReal—comentóRowen—.Nuncasemehandadobienlaslenguasantiguas.

—Enrealidadelaltowealdaneanonoesunalengua.—Tanalastasonrióanteelcandordelexplorador—.Separecemuchoalamúsica.Escuche.

Laprincesadiolavueltaalrededordelárbolyacaricióconlayemadeldedoel primer signo. Un raspar melódico reverberó en el lugar, cuando una vozfemenina,tanangustiosacomoamenazadora,entonóelprimerversodelepitafio.Por supuesto, al igual queRowen,Tanalasta no comprendía aquellas palabras,porqueeloídohumanonopodíacaptartodalatesituracaracterísticadelalenguaélfica.

—¡Jamáshabíaoídonadaparecido!—exclamóRowen.—Niyo.—Tanalasta tembló,desazonadaporaquellamúsica—.Era lavoz

deunespírituélfico.Llevóalexploradoralrededordelárbol,ytradujocadaunodelossignosen

vozalta,tantoparaqueRowenconocierasusignificadocomoparaasegurarsedeque loshabía interpretadocorrectamente.Cuando terminó, el rostrodeRowenestabatanblancocomoelalabastro.

—¿Loshizounelfo?—preguntóelexplorador, refiriéndosea lasghazneth—.¿Porqué?

—Nolosabremoshastaquedescubramosquéelfofue—respondióTanalasta—. Primero debemos asegurarnos de que las ghazneth están relacionadas conestos árboles. Por eso quiero comprobar si son estos mismos signos los queaparecenenlosdemásárboles.

—No tengo ni idea.—Rowen se encogió de hombros—.De haber sabidoquedebíafijarmeenello...

—¿Ycómopodíahaberlosabido?—preguntóTanalasta—.EstoyseguradequepodréaveriguarlosiconsultolasnotasdeAlusair.

—¿Quénotas?—Supongoquemihermananoesdeesaclasedepersonasquevantomando

Page 176: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

notasporahí—suspiróTanalasta.—SumisióneraencontraraEmperel.—Tendríamuchaprisaporhacerlo.—Tanalastaempezóarodearelárbol,en

direcciónalagujero—.Alusairsiempretieneprisa.¿Semolestóeninvestigarelinteriordelastumbas?

—Ahí es donde encontramos esto. —Rowen sacó del cinturón la dagaherrumbrosa,quetendióaTanalasta—.Estabaenlasegundatumba.

Tanalastaprefirióexaminarladagaantesdeentrarenlamadriguera.Elfiloestabaafiladoconpiedradeesmerilyteníaunasmarcasenlasuperficie.

—Hierro forjado en frío—dijo—.Me sorprende que haya sobrevivido alpasodeltiempo.SeforjóenSuzailharáunosmiltrescientosaños.

—¿Y cómo lo podéis determinar con tanta precisión?—preguntó Rowen,mirandoelarmacondesconfianza—.Yonohedescubiertoningunamarca.

—Precisamenteporesolosé.Suzailconstruyósuprimeraforjadeaceroenel año setenta y cinco, el Año de la Muerte Fiel. Con anterioridad, la gentefundíasupropiohierroenhornosenelsueloydabanformaasusarmasenunaforjacomunitaria.—Tanalastadevolvióladagaalexplorador—.Peseaquesinduda se tratadeunaobrade calidad, ningúnmercader quevisitaraCormyr sehubieramolestado en cargar con el hierro cuando sabía de sobra que todo elmundopedíaacero.

—Comprendo.—Rowensacudiólacabeza,sorprendido,antesdepreguntar—:¿Hayalgoquenosepáis?

—Por supuesto —respondió Tanalasta sin pensar—. Escuchar aVangerdahast, que podría escribir una tonelada de libros con todo lo que yoignoro.

Rowen rió despreocupadamente, y se volvió hacia el lugar donde elmagohabía desaparecido. Tanalasta siguió sumirada. De vez en cuando veían a laghazneth, que sobrevolaba en círculos el laberíntico cañón, con la cabezaenvueltaenelglobodeluz.AunqueapenashabíatranscurridomediahoradesdequeVangerdahastlanzaraelhechizo,elfulgordesumagiaempezabaadecrecer.Decididaaterminarsuinvestigacióncuantoantes,laprincesacogióelanillodecomandantede losDragonesPúrpuraque llevabaenelbolsilloy lodeslizóenunodesusdedos.

—Nobajelaguardia—ordenó,entrandoenelagujero.

Page 177: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Adóndevais?—preguntóRowen,cogiéndoladelbrazo.Aunque aquel gesto hubiera parecido una muestra de condescendencia en

cualquier otra persona, enRowen tan sólodelatabapreocupación.Tanalasta lediounapalmadaenlamano.

—Debo echar un vistazo al interior —respondió—. Ambos sabemos quepodríadescubriralgoquelosdemáspudieronhaberpasadoporalto.

—Puesmejorseráqueosdeisprisa,alteza.—Rowenapretólosdientes.—No se preocupe, que no me entretendré —aseguró ella, mirando en

direcciónalaghazneth.Laprincesaactivólaluzmágicadelanilloyentróenelagujero; entonces se volvió y sonrió—. ¿No os pedí que me llamaraissimplementeTanalasta?

—Comodeseéis,alteza—respondióRowencontozudez,agachándoseparaofrecerleunacálidasonrisa.

Tanalastadiounapatadaenelsueloparaecharleunpocodetierraencima,sevolvióysiguiócaminando.Elolorarancioaumentabaamedidaqueavanzaba,ysupielempezóaerizarseantelapresenciamalignaquepercibíaenelambiente.Cuando después de dar diez pasos llegó al final del pasadizo tenía la piel degallina y le dolía la mandíbula de tanto apretar los dientes para reprimir lasnáuseas. Delante de ella vio un foso de tamaño humano, rodeado por todaspartesde raíces entrelazadas, rotasynegras.Nohabía raícesquepartierandelárbol,almenosqueellapudieraapreciar.Aquelladiminutaestanciaestabavacía,salvo el suelo sencillo de losa, donde vio restos de tela podrida y algunosbotones,brochesyhebillasesparcidos.

Tanalastaseadentróenlasala,dondeolíaarayos,yestuvoapuntodegritarcuando algo blando y diáfano se pegó a sumejilla. Se lo quitó como pudo ydescubrióqueteníalasmanosllenasdeunapegajosatelaraña.Tardóuninstanteen reconocer que era seda pura, y entonces advirtió que todo el lugar estabaimpregnado de seda, entrelazada alrededor de las raíces, colgando por todaspartesparadarformaalasparedesdelatumbaycubriendotambiénlosrestosdiseminadosquehabíaenelsuelo.

El primer impulso de la princesa consistió en marcharse, porque aquelfilamento le recordaba la telaraña de la viuda negra, pero apretó lamandíbulacon fuerza e hizo un esfuerzo por apartar de las paredes la telaraña que lascubría.Descubrióconsorpresaquealquitarlasedaseabríaanteellaotrotúnel,

Page 178: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

queempezóaexcavardeesemodohastaque recorrióotrosdiezpasos,másomenosladistanciaalaqueseencontrabalahumedadcondensadadelsicomoro.

Tanalasta reprimió un temblor, al descubrir que el árbol, o el cadáver quehabíabajoél,habíapodridoelsuelodetalformaqueelprocesoderegeneraciónnatural se había interrumpido por completo. Regresó al centro del árbol yexaminóunpuñadodebotones.Elenchapadodoradoestabatandeslustradoqueapenasdiscernía la formadeundragón rampante, con las alas extendidasy lacola rizada tras la espalda.De pronto desapareció cualquier duda que pudierahaber albergado sobre la identidad de la ghazneth. Era el emblema del reyBoldovar. Temerosa de infectarse del mal que emanaba de aquel lugar, laprincesaarrojólosbotonesaunladoygateóendirecciónalasalidadelatumba.

Rowen la esperaba ante el agujero, sosteniendo las riendas de la yegua yvigilandoelcañón.

—¿Cuánto falta para que regrese Vangerdahast?—preguntó el exploradorantesdequesalieradelamadriguera.

—Creo que hasta mañana tendremos que apañárnoslas como podamos—respondió la princesa, que al levantar la mirada descubrió cierta inquietud enRowen—. Dudo que Vangerdahast disponga de más hechizos deteletransportación, y aunque ése fuera el caso, necesita algún tiempo paraprepararlos.

—En tal caso, será mejor que nos apresuremos —dijo Rowen, cuyainquietudsehabíaconvertidoenpreocupación.

TendiósumanoparaayudaraTanalastaaincorporarseylaprincesalacogió.Pero en lugar de ayudarla a salir del agujero, le quitó del dedo el anillo decomandantedelosDragonesPúrpura.

—Vamosadesatarlasalforjas.—Sevolvióhacialayegua—.Nosservirádeseñuelo.

—¿Nocreequeestetrucoestámuymanido?—preguntóTanalastamientrassalíadelagujero—.Laúltimaveznonossirviódemucho.

—Sí,peroestaghaznethnoesladeantes.Rowen tenía ocupadas las dos manos en atar el anillo a la melena de la

yegua,porloquetuvoqueseñalarhaciaelnorteconungestodelacabeza.Laprimeraghaznethseguíasobrevolandoencírculosel laberintodecañones,yelhalodoradoyluminosoprácticamentehabíadesaparecido,hastaelpuntodeque

Page 179: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

laprincesapudodistinguirlaformadesucabeza;sinembargo,aquellonoeraloquemáspreocupabaalexplorador.Unasegundasiluetaoscuraseacercabadesdeelnorte,ysehacíacadavezmásdiáfanaamedidaquelaobservaba.Laprincesasedirigióalagrupadelayeguayempezóadesatarlasalforjas.

—No apriete mucho el nudo—dijo—. Soy consciente de que utilizar unseñueloeslaúnicaoportunidadquetenemosdeganartiempo,peroestecaballomehaservidofielmente.Megustaríadarleunaoportunidad.

—Yaestá.—Rowenretrocedióunpaso,despuésdeatarelanillodoradoalamelenadelayeguaconunnudosencilloeintrincado—.Puestoquenotienequecargarconnada,lomásprobableesquetengamásposibilidadesquenosotrosdevolveracasa.

—Meparecejusto—dijoTanalasta.Laprincesaretirólasalforjas,levantólamanoydescargóunafuertepalmada

enlagrupadelcaballo.Elanimalsedirigióaltrotehaciaelsur,endirecciónalprofundo cañón situado entre los picos de las Orejas deMula. Rápidamente,Tanalasta se quitó los brazaletes y los guardó en las alforjas, después sedesabrochó el cierre de la capa y se aseguró de que no llevaba ningún objetomágicoquepudieradelatarsuposición.

—¿Hacia dónde nos dirigimos? —preguntó en cuanto hubo resuelto elproblemadelamagia.

—Idvosdelante.—Rowenseñalóhaciaelsudoeste,másalládelasOrejasdeMula—. Encontraréis el rastro de los cascos de los caballos a unos veintepasosdeaquí;yomeencargarédeborrarnuestrashuellas.

Peseanogustarlelaideadesepararsedelexplorador,teniendoencuentalacercaníadelaghazneth,laprincesacomprendiólanecesidaddesuplanyechóacorrerabuenpaso.ComoRowenhabíaprevisto,notardóenencontrarunsurcoproducidoporlashuellasdecascosquehabíadejadolacompañíadeAlusair.Sequitólacapadeencimadeloshombrosylaarrastróporelsuelopolvorientoquepisaba,maldiciendolatemeridaddeAlusairmientrashacíaloposibleporayudaralexploradoraborrarsushuellas.

Lasmarcasde loscascosde loscaballosdesaparecieroncasiporcompletoveintepasosmásadelante,yTanalastacomprendióquesuhermanahabíadejadoaquelrastrointencionadamente,paraqueRowentuvieraunapistadeladirecciónque había tomado. Sin embargo, al llegar a ese punto empezó a adoptar

Page 180: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

precauciones.Laprincesacontinuóborrandotodaslashuellasqueencontróasupaso, aunque fueron pocas y estaban muy separadas unas de otras. Además,empezó a adoptar sus propias tácticas, intentandomoverse de roca en roca osobre suelo duro siempre que fuera posible y evitando cualquier arbusto quepudieradoblarymostrarindiciosdesupaso.

Lasiluetalejanasehizocadavezmayor,primeroadoptandolaformadeunaVydespuésladeunacruzdiminuta.Tanalastaencontrócuatrohuellasdecascosquegirabanhacia el sur.Lasborróy ajustó supropio rumbohastaque seviotrepandoporunapequeñasierra.Laprincesamiróhaciaatrás:Rowenlaseguíaaunos cincuenta pasos, y decidió arriesgarse a cruzar la sierra y emprender laascensiónatodavelocidad.

Cuando Tanalasta se acercó a la cima, la ghazneth que se acercaba seperfilaba tan grande como su pulgar. Se echó al suelo y siguió la ascensióngateando,procurandopisaroapoyarsesóloenpiedras,ymantenersealejadadelos arbustos que le entorpecían la vista de la ghazneth. Cruzó hasta la cimaarrastrándoseporel suelo,ydespués seocultó trasunosarbustosyobservóalfantasma.

A Rowen aún lo separaban diez pasos de la cima cuando la silueta de lacriatura fue lobastantegrandecomoparaque laprincesapudieradistinguir elcontornodesusalas.Susurróunaadvertenciaalexplorador,yleordenóconungestoquepermaneciera inmóvil.Éste se arrojó cuerpoa tierray rodó sobre símismo para ocultarse tras unos arbustos, cubriéndose de paso con su capa decamuflajeytornándoseprácticamenteinvisible,inclusoaojosdeTanalasta.

Esperaron,exhaustosymalhumorados,mientraslaghaznethpasabavolandoamenosdesetecientosmetrosdelacresta.Pareciódirigirsehaciaelsicomoro,perofinalmentevirósobreunalaparaacercarsehaciasucompañera.

Tanalastaseincorporóyanimóalexploradoraapresurarse.—¡Ahora,Rowen,deprisa!Rowenabandonólosarbustosyarrastrólacapaporelsueloparaborrarsus

huellas,antesdeecharacorrerporlapendienteparallegarjuntoaTanalasta.—Hayqueverquémaneradecorrer—dijosinaliento—.No...estabaseguro

depoderalcanzaros.—Elmiedoescapazdeesoydemás.—Tanalastasevolvióparadescender

la pendiente en diagonal, siguiendo el rastro de Alusair—. No tendría usted

Page 181: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

problemasenmantenerseamialturasituvieratantomiedocomoyo.—Sinotengomiedo—dijoelexploradoralllegarseasualtura—,esporque

notengonadaqueperder.Sinembargo...vosseréisreinaalgúndía.¿PorquéosseparasteisdeVangerdahast?

—ElreymeordenóencontraraAlusair—respondió—.Mediounmensajeparaella.

—No—replicóRowen—.Esoesunaexcusa,nounarazón.AunquevosyVangerdahastintentaraisdisimularlo,vuestrarelaciónestirante.

Alcanzaronlafaldadelasierraysedejaroncaerenunaampliadepresióndelterreno.LacaraescarpadadelosPicosdelasTormentassealzabahaciaelsur,ylasierradiscurríaconmayorsuavidadhaciaelnorte.Rowenrecurrióalacapaparaborrarcuatrohuellasdecascosquellevabandirectamentehaciaelplieguedel terreno.Tanalastamirópor encimade suhombroyvioque en el cielonohabíaningunaghazneth...almenos,porelmomento.

—Intentáisconvencerle...dealgo—mascullóRowen—.¿Dequé?—Aunque tuviera usted razón —dijo Tanalasta, mirándolo con expresión

severaantesdetropezarconunarocayestarapuntodecaer—,noesquiénparainterrogaraunaprincesadelacorona.

—Es precisamente ahora, alteza—dijoRowen, pronunciando el título concierto énfasis—, después de ver que no queríais acompañar a Vangerdahast,cuandoesmideberpreguntarosporqué.

—De acuerdo. —La princesa cada vez encontraba más dificultades paramantenerelpaso,mientrasqueRowenparecíaganarenfuerzas—.Supongoquesabrá en qué situación me dejó Aunadar Bleth. Si pretendo... gobernaradecuadamente, antes debo recuperar el respeto de mis súbditos. No loconseguirésimeteletransportocadadosportresanteelmenorpeligro.

—No.—Rowensedetuvo.—¿Quéhace,Rowen?—Tanalastasehabíaparadodospasosdespués.—Unonosegranjeaelrespetodelpueblomintiéndole—dijoelexplorador

—.Dehecho,ésaeslamejorformadeperderlo.Tanalastalevantólamiradaalcielotraslaespaldadelexploradoryviodos

puntosnegrosquevolabandeunladoaotro.—Nohaytiempoparadiscutirestetema.—No necesitáis ganaros mi respeto, princesa —dijo Rowen—. Ya os lo

Page 182: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

habéis ganado con vuestra valentía e inteligencia. Ahora, por favor,demostradmequevosmerespetáis.

—¿Y podremos continuar? —preguntó Tanalasta, cuya mirada trazó unacircunferenciacompleta.

Rowenrespondióconungestodeasentimiento.—Deacuerdo.—Bajólamiradaydescubrióquenopodíavolveralevantarla

—.Sideverasquieresaberporqué...Mequedéporusted.—¿Pormí?—Doyporsupuestoqueesconscientedelapreocupacióndelmagosupremo

sobrequemehagomayorparadarunherederoalreino—comentóTanalasta.—Preocupación compartida por muchos —dijo Rowen—. Pero no

comprendopor...—¿Quiereustedoírlo, síono?—lo interrumpióTanalasta, señalandoa las

dosghazneth—.Porquenotenemosprecisamentetodoeltiempodelmundo.—Porfavor.—Rowentragósaliva.—Las celebraciones por el cumpleaños de mi padre eran la excusa para

empujarmeacontraermatrimonioconDaunethMarliir.Todoelmundolosabe.—Tanalastahizounapausapara rechinar losdientes,antesdecontinuar—.Loqueno sabenesquecuando llegó la invitaciónaHuthduth,dije almaestredeagriculturasupremoquevolvíaaCormyrparacasarmeconDauneth.

—¿Y qué os dijo el alto maestre de agricultura para haceros cambiar deopinión?

—QuemedeseabatodalafelicidaddelmundoyquesabíaqueDaunetherauna buena persona —repuso Tanalasta—. Mis dudas surgieron más tarde,cuandomequedésolayestabaapuntodeabandonarmiretiroenlasmontañas.

Rowen asintió y guardó silencio, como si no le pareciera peligroso que laprincesaanduvierasolaporaquellasmontañasqueestabaninfestadasdeorcos.

—CuandolleguéalacabeceradelríoOrcen,ellugarsellenóconeltrinodelos pájaros y la luz adquirió tonalidades doradas. Un magnífico caballo grissurgiódelbosquellevandoaunaancianaconojoscolorperlayunaarmaduradeencajeplateado,ycuandollamésuatención,lamujercondujosumonturaaguasabajo hasta llegar a mi altura. No habló, pero mientras el caballo bebía, unaoscuridadimpenetrablepasabadesuhocicoalagua.Lahierbasemarchitóantemimirada.Enlaladeradelacolina,lospinossesecaronyperdieronlahoja.

Page 183: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Noeraunsueño?—preguntóRowen.—Estaba tan despierta como ahora—respondió Tanalasta—. Una lágrima

solitaria resbaló por la mejilla de la anciana, que sacudió la cabeza en midirección.

—Yvoscreéis...—Yonocreonada—interrumpióTanalasta—.Estabatanasustadaqueeché

acorrer sin importarmehaciadóndemedirigía.Antesdepararmeapensarenello,mehabíaperdidoyestabaapuntodeanochecer.Alcabodeunrato,lleguéante un bosquecillo de sauces tan espeso que apenas podía pasar. Debíretroceder, pero oí la risilla de unamujer y pensé que quizá podría indicarmecómovolveralmonasterio.

—¿Y?—preguntóRowen,conexpresiónrecelosa.—Me abrí paso como pude por entre el follaje, hasta la orilla de un

arroyuelo,dondelajovenalaquehabíaoídoreírpermitíaquesucaballobebieradelaguadelestanque.Labestiaeratanblancayluminosacomounapiedradediamante,peronosupedequésetratabahastaquealcélavozparapreguntarporelmonasterio,ylacriaturalevantólacabeza.

»Eraununicornio—dijolaprincesa.»Un cuerno dorado, la pezuña hendida, todo—prosiguió Tanalasta—. En

lugarderesponderme,lamujersaltósindejardereíralomosdesucaballoyseadentró en el bosque.Las flores y los arbustos florecían instantáneamente pordondepasabaelunicornio.

—¿Y cuando desapareció, descubristeis que no os habíais movido delmonasterio? —preguntó Rowen, después de haber guardado silencio durantelargossegundos.

—Casi—respondió Tanalasta, sorprendida—. Estaba en mi lago favorito.¿Cómolosabía?

—Dehaberosperdido,nosehabríatratadodeunavisión.—LaexpresióndeRowenpasóderecelosaaaturdida—.¿Yvospensáisqueyosoyeseunicornio?

—Hastaelmomento,ereselmejorcandidato...—Eralaprimeravezquelotuteaba.Después, se encogió de hombros—.Dudoque fuera una coincidenciaqueencontraratuobradefeenelEstanquedelOrco.

—Peromifamilia...—repusoRowen,haciendoungestodenegación.—¿Yahoraquiénestásiendodeshonesto?—preguntóTanalasta.Enelcielo,

Page 184: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

trasRowen,unadelasghaznethseapartóparavolarhaciaelsurendirecciónalayegua—.Sabestanbiencomoyoquelavisiónnoversabasobrepolítica,sinosobreamor.

Rowen palideció visiblemente, demasiado aturdido para decir una solapalabra. Tanalasta lo cogió de la mano y antes de echar a correr parareemprenderlahuida,preguntó:

—Yahora¿podemosseguir?

Filfaeril estaba sola, sentada en el ábside de una silenciosa sala del trono,contemplandounaextensagaleríaconabundantesarcosdoblesyaltascolumnasdemármolacanalado.Aunquelaestanciaolíaamohoypodredumbre,lahabíanadornado de forma impecable con anchas bandas verticales marrón y oro,coloresquelanoblezacormytahabíalucidohacíamásdemilaños,cuandolasfronterasdelreinoapenasseextendíanmásalládelríoAguasde laEstrella,yArabelerapocomásqueunconjuntodefondasdecarretera.AlareinanoseleocurríaquéfamiliadelanoblezadeArabelpodíahaberconstruidounrecibidortanarcaico,ymuchomenosque,despuésdehaberlohecho,descuidaranellugaryloabandonarandeesemodo.Noteníaningúnsentido.

AunquenadateníasentidodesdeelregresodeVangerdahast.Nocomprendíaporquéhabía llevadoconsigoal fantasma,oporqué aquella criatura lahabíasecuestrado sólo para abandonarla allí y largarse con viento fresco. ¿Tantoconfiabalacriaturaenaquellaprisión,osehabíaolvidadodeella?Esmás,¿quédiantreera?

Pormuy importantes que pudieran ser las respuestas a estas preguntas, noeran lasmásrecurrentesen lamentedeFilfaeril.Antesquenada,queríasaberqué leshabíaocurrido aAzounyTanalasta...Y tambiénaVangerdahast.Y lociertoesque larespuestaaestaspreguntasno ibaaencontrarlasen lasaladeltrono.

La reina hizo un esfuerzo por permanecer sentada un pocomas, mientrasaprovechaba el tiempo para estudiar el entorno y buscar alguna pista de lapresenciadesucaptor.Encasodesecuestro,lasinstruccionesdeVangerdahasteranmuyclaras.Primero,hacerloposibleporevitarllamarlaatenciónyesperaraquesepresentenlosmagosguerreros.Segundo,evitarqueelcaptordisponga

Page 185: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

delamenorexcusaparacausardañoasuvíctima.Tercero,lucharohuirtansólosilamuerteesinminente.Vangerdahastlehabíadichoinnumerablesvecesqueencuantosealertabaalosmagosguerrerosdequeunmiembrodelafamiliarealcorría peligro, una compañía acudiría al rescate en unos pocosminutos. PeroFilfaeril llevabahorassentadaenel trono,ysiapenas lehabíavistoelpeloalcaptor,de la compañíanohabíani rastro.Seguroquehabía falladoalgoenelplanderescatediseñadoporelmagosupremo.

Filfaerilseincorporóydescendióporlaescalinata.Hizounapausaparaversielfantasmaestabacerca.Cuandocomprobóquenoestaba,recorriólagaleríahastalaspuertasdebarrotesdebroncequehabíaalfinal.Sucaptornisiquierasehabíamolestadoencerrarlas,demodoquelasfranqueóy...volvióaencontrarseen el extremo opuesto de la galería, junto a la tribuna, como si se hubieralimitadoaregresaralpuntodepartida.

Filfaerilgirósobresustalonesyviolaspuertasabiertasentrelosmismosdospilares, observó las mismas columnas y las puertas de roble de la galeríaanterior.Empujólapuertaylaatravesó.Volvióaencontrarseenunextremodelagalería,antelosdostronosdemaderadelestrado.Contrariada,lareinacerrólapuerta,volvióaabrirlaylafranqueó...conidénticoresultado.

La reina cerró de un portazo la puerta de bronce y recorrió la galería.Sospechaba desde el principio que el fantasma no se había limitado a irsevolando después de abandonarla ahí a su suerte, y el hecho de que hubieradejado la puerta abierta era una prueba palpable de la crueldad de la criatura.Comosabecualquiertorturadorqueseprecie,elsecretodequebrarlavoluntadde lavíctimaresideencontrolarsumente.Dejar lapuertaentreabierta tenía laintencióndeliberadadequeFilfaerilperdieralaesperanza.Lociertoesquehabíafuncionadomuchomejordeloqueestabadispuestaaadmitir.

Mientrassedirigíaalestrado,setomósutiempoparaexaminarcadaunodelos arcos dispuestos a lo largo de la galería, pero el resultado era siempre elmismo.Seencontrabadepieenelladoopuestodelasala,frentealmismoarcoqueacababadeatravesar.

Finalmente, la reina se resignó al comprender que aquella prisión era tanseguracomolaceldadeunamazmorra,yregresóaltrono.Sesentómanteniendotantacalmacomolefueposible.Despuésdededicarunosminutosarecuperarse,Filfaeril imaginó el rostro de barba poblada del mago supremo y acarició el

Page 186: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

anillodesello.Sumentepermaneciótansilenciosacomolasaladeltrono,yalmomentose

leocurrieronunsinfínderazonesporlascualesVangerdahastguardabasilencio,peroenseguidasearrepintiódeello.Dehaberpodidoresponder,Vangerdahastlohubiera hecho, y el que no fuera así se debía a dos posibles causas: o estabaincapacitadooaquellaextrañaprisiónleimpedíaoírla.

La fanfarria de unas trompetas reverberó por toda la sala del trono, y elfantasma entró por la puerta. Su aspecto era tan terrible como de costumbre,llevaba las alas plegadas, la corona deslustrada, y aquella mirada de ojosinyectados en sangre clavados en Filfaeril. En sus manos llevaba un bultocubiertodeharaposgrisesquepodíaseruncadáverounmontónderopa,ydesustalonesgoteabasangre.

—Mi señora —dijo al tiempo que se inclinaba, para después recorrer lagaleríaendirecciónaFilfaeril—.Debéisperdonarmequeoshayaabandonadodeestamanera.Lostraidoresmehantenidoocupado.

Cuandoelfantasmaseacercóalestrado,Filfaerilvioqueelmontoncitoderopaque llevabaestabacompuestodecapasnegrasconbrochesdebronce.Alparecer,losmagosguerreroslahabíanencontrado.Empezóasentirundolorenlaspuntasdelosdedos,delafuerzaconqueapretabalosbrazosdeltrono.

—No hay ninguna necesidad de que llaméis a nadie más. —El fantasmaarrojólasropasaunapiladedesperdiciosysubióhastaelestrado.Amedidaqueseacercaba,elhedorasangreyrestoshumanossehacíamásinsoportable—.Yonuncamealejodemasiadodevos,nunca.

Se detuvo al llegar junto al trono donde permanecía sentada la reina, ydespués se agachópara coger sumano.Ella nopudo evitar dar un respingoyretirarlamano.

—Vamos.—Laghaznethdiounapalmaditaeneldedodondelareinateníaelanillo de sello, hasta que se lo quitó con suavidad, dejando toda su manomanchadadeunasangrequeaúnseguíacaliente—.¿Deverascreéisquevoyahacerosdaño?

Filfaerilselimitóamirarlo,altiempoquesepreguntabasihabíaperdidoeljuicio.

El fantasma apretó el anillo en la palma de su mano, después sus ojosquedaronenblancoyextendióunpoco lasalas.Soltóunmurmulloquedo.Al

Page 187: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

ver que tenía enfrente la entrepierna desnuda de la criatura, Filfaeril volvió lacabeza, molesta... pero enseguida se lo pensó mejor y acercó su mano a loscabellos. Con un movimiento rápido y seguro deslizó los dedos entre losmechones plateados y alcanzó la empuñadura diminuta de una navaja afilada,quedesenvainóconsumocuidado.La reina rebullóenel trono,y tiróa fondohacia el abdomen del secuestrador, mientras activaba la palabra mágica quedesatabalamortíferamagiadelarma.

Elfantasmaseencogiódedolor,abriósumanoysoltóelanillo,quecayóalsueloproduciendounsonidometálico.Perolacriaturapermanecióenpie.

Filfaerilvolvióagritarlapalabramágica,hundiendolanavajacontodassusfuerzas.Depronto, el trono en el que se sentaba crujióy separtió endos.Almirarasualrededorcomprobóqueseencontrabaencimadelosrestosmohososdelamaderapodridaquehabíaconstituidoeltrono.Enunapiedra,anteella,violos restosdeslustradosdesuanillodesello,queenaquelmomentoapenaserauna fruslería de hojalata que lucía la estampa del dragón real de Cormyr. Lareina estaba demasiado confundida como para saber qué le había sucedido altrono,perosupoacienciaciertaquesuanilloestabaprivadodetodasumagia.

El fantasma arrancó el alfiler de Filfaeril de su abdomen y se quedómirándoloconfuso.Asuespalda,lamajestuosasaladeltronosehabíavueltounlugar oscuro y húmedo, como una bodega, y la reina alcanzó a distinguir lasilueta de diversas barricas, recortadas contra un lejano rectángulo de luzdiáfana.

—¡Mirad lo que habéis hecho a nuestros tronos!—El fantasma señaló losrestos astillados del banco, antes de clavar su mirada rojiza en Filfaeril—.¿Cuándoengordasteistanto?¡Oshabéispuestocomounacerda!

De pronto Filfaeril se sintió enorme como un caballo de guerra. Surespiración se volvió entrecortada, lenta, y sintió que su cuerpo había crecidohasta tal punto que le costaba moverse. Su estómago empezó a gruñir. Unaterrible sensación de desesperación y letargo se apoderó de todo su ser, y almirar hacia abajo descubrió que su esbelto cuerpo se había convertido en unamontaña de carne fofa. Gritó horrorizada, y al intentar alejarse del fantasmadescubrióquenopodíamoverse.

—¿Quién eres?—La reina se sorprendió al oír que la pregunta que habíasurgidodesuspropioslabiosparecíaformuladaporotrapersona—.¿Quéestás

Page 188: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

haciéndome?LacriaturasearrodillóasuladoyacariciólaslargastrenzasdeFilfaerilcon

susdedoscubiertosdesangre.Lareinahubieradeseadoapartarsumano,perolepesaba tanto el brazo que apenas podía levantarlo. Detrás del fantasma laestanciavolvióaadquirirelaspectodeunasaladeltronoentodosuesplendor.

—¿Porquémeobligáisahacerlo?—preguntóasuvezelfantasma.Lacogióconfuerzadelcabelloytiróhaciaatrásparaquelomiraraalacara—.¿Creéisqueéstaesformadetrataramireina?

—¿Tureina?—Filfaerilrespiróprofundamenteehizounesfuerzopormirara los ojos enloquecidos del fantasma—. No soy nada tuyo, excepto tuprisionera... una prisionera que te convendría tratar bien. Cuando el rey nosencuentre...

AlgoduroyenormeseestrellócontralamejilladeFilfaerilcontantafuerzaque la reina cayó hacia atrás y rodó por el estrado.Nodejó de rodar sobre símismahastaquediocontraelplintodeunacolumnademármol.

—¡Yosoyelrey!—Elfantasmasesituóasulado,lacogiódelabarbillaytiróhaciaatrásdesurostro—.Yvosmireina.

—SoylaesposadelreyAzoun—respondióFilfaeril,haciendoungestodenegación.

Mientrasasíhablaba,lasaladeltronovolvióatornarsehúmeda.Lassiluetasespectralesdelasbarricasseperfilaroncontralagalería,yempezóacomprenderque su única esperanza de salvación consistía en aferrarse a su verdaderaidentidad.

—SoyFilfaeril,esposadelreyAzounIV.Lasbarricascobraronsolidez.—¡Nosoislareinadenadie,sinolamía!—Elfantasmavolvióaabofetearla,

y su visión se tornó momentáneamente borrosa—. Sois la esposa del reyBoldovar.Miesposa.

Filfaeril empezó a temblar, momento en que la humedad desapareció porcompletodelasaladeltrono.Siendoadolescentes,tantoellacomosushermanasse entretenían de noche contándose historias de terror, en las que a menudoaparecíaelreyBoldovaryelmodoenquehabíamatadoatodassusamantes.

—¿Bo...BoldovarElLoco?—¡Boldovar el rey,maridode la reinaFilfaeril!—El fantasmapresionó la

Page 189: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

puntadelanavajaenelpechocarnosodelareina—.Decidlo—ordenó.—Rey...reyBoldovar,ma...rido...—Filfaerilcalló,alserconscientedeque

obedeceralasexigenciasdelfantasmasupondríaabandonarsealalocura,quizáporsiempre.Sacudiólacabezaylevantólabarbilla—.Anteslamuerte.

Casi al instante, su cuerpo volvió a adquirir la esbeltez y belleza que locaracterizaban,yseencontrótendidaenelsuelodeunabodegahúmedadondese almacenaba el vino. Boldovar frunció el ceño y, confundido, miró a sualrededor,despuésseencogiódehombrosyvolvióaconcentrarsuatenciónenFilfaeril.

—Comoqueráis,miseñora.El fantasma atacó a la reina con la navaja y le provocó cuatro cortes

profundosenlacurvasuperiordelpecho.Filfaerilcerrólosojos,sorprendidadequenosehubieralevantadolabrumaoscuradelamuerteparallevarlaconsigo.EncuantoseactivabaelhechizoqueVangerdahasthabíaaplicadoalahojadelanavaja, el menor roce de ésta era capaz de provocar una muerte instantánea.Encomendó su alma a Lady Sune, y abrió los ojos para descubrir la miradafantasmagóricadeBoldovarclavadaenlasuya.

—¿Quéhapasado?¿Habréabsorbidotodasumagia?—Boldovarsedeshizodelanavaja,arrojándolaaunlado,ydespuéslededicóunasonrisadejandoaldescubiertosuscolmillosafilados—.¿Quizáqueráisretractaros?

Page 190: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

E12

lmagosupremodelacortedespertóatadoydesnudo,cubiertotansóloconuna sábana ensangrentada, rodeado por los enemigos del reino. A su

izquierda se encontrabaOwden Foley, con un trapo húmedo en lamano y uncuencodebronceen laotra.AlaphondarEmmaraskyMerulaelPortentoso loobservabanalpiedelacamaconojospequeñosybrillantes,siempreatentosalamenorseñaldequeelmagosupremopudieraleersuspensamientos.Asíera,porsupuesto,peronopodíapermitirseel lujodequelosupieran.Deotromodolomataríansinpiedad.

A la izquierda del mago permanecía de pie Azoun IV, con el brazo encabestrilloyelhombrocubiertoconunvendajeempapadoensangre.Bien.AlmenosVangerdahasthabíahecholoposibleantesdecaer,aunquenorecordaracuándonicómo...Niporqué.

Le dolía horrores la cabeza desde el puente de la nariz hasta la nuca.Recuperabaelhilodesuspensamientoslentamenteydurantebrevesperíodosdetiempo. Tenía la cabeza llena de costras, inflamada, y la piel peculiarmentetensa,y eldolor lo sacudíadederechaa izquierda.Teníauna fiebremuyalta.Estaba hambriento, tanto que se hubiera comido un oso, aunque por supuestosabíaqueeramejornopedirnadadecomer.Haríaloquefueraparanorogarasuscaptoresniunmendrugodepan.

Por supuesto, Owden ejercía de torturador. El clérigo había dejado susherramientas sobre una mesita que habían acercado a la cama, y las habíadispuestoenordenadasfilas:cuchillos,agujasylazosdehilo.Conscientedequehabía dejado su instrumental a la vista con la sola intención de intimidarlo,

Page 191: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Vangerdahastapartólamirada.Denotenerlasmanosatadasaldoseldelacama,habríacogidocualquieradeloscuchillosparademostraralostraidoressuerror.Aunquedehaber tenido lasmanosdesatadasnohabríanecesitadouncuchillo.Despuésdetodo,eraunmago.

Esosipudierarecordaralgunodesushechizos.Mientras que buena parte de los hechizos que conocía requerían gestos

complejos e ingredientes especiales, por no mencionar el hecho de recitarpalabras místicas, había alguno que otro que sólo necesitaba un conjuro. Sinembargo, los supuso preparados para ello. Los enemigos del reino eran taninteligentescomoperseverantes.SiVangerdahastqueríahuirysalvarlacorona,tenía que mostrarse tan inteligente como ellos. Levantó la cabeza y miró aMerula.

—Ayúdeme y le perdonaré esta traición —dijo—. ¡Use su magia y leperdonarécuandolacoronaestéenmismanos!

MerulapalidecióymiróaOwden.—Disculpad,majestad—dijo elmaestre de agricultura al cruzar lamirada

con Azoun—. Vos mismo mencionasteis el modo en que las señorasRowanmantleyHawklindesconfiarondesusrespectivoshijos,cuando...

—¡Sí, sí!—Azoun levantó lamanopara silenciar al clérigo—.Estoymuyfamiliarizado con los pensamientos enajenados que provocan las heridas de lacriatura.

—¿Pensamientos enajenados? La locura reside en estas ataduras. —Vangerdahasttiróconfuerzadelascorreasqueinmovilizabansubrazoizquierdo—. Desatadme y os garantizo que os conduciré a salvo al exilio en tierrasextranjeras.

—Esperoqueno tardeensanardeesta locura.—AzounmiródisgustadoaOwden.Volvió lamirada aVangerdahast, lo cogió del brazo y dijo—:Amigomío, sé que sus pensamientos están confundidos, pero intente responderme:¿Quélehasucedidoamihija?¿Estáasalvolaprincesa?

—¿Tanalasta?—Enlomáshondodesulocura,elmagosintióunapunzadadeculpabilidad.

—Sí,laprincesaTanalasta—asintióAzoun—.Novolvióconusted.Deprontorecordólabatallaenelcañón,yalhacerlosintióunaintensarabia.—¡Ellamedesafió!—LassienesdeVangerdahasttemblabandelafuriaque

Page 192: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

locorroía—.¡Rameradescarada!—¿Ramera?—repitió Azoun—. ¿Significa eso que la acompaña el joven

Cormaeril?—¡Consentida!—escupióVangerdahast—.Esunaconsentida.—Pero¿estáasalvo?Vangerdahast intentó sentarse y había levantado la cabeza de la almohada

cuando lascorreas tirarondeél.Empezóamover lacabezadeun ladoaotro,intentando en vano recordar cualquier hechizo que pudiera liberarlo. Azounapoyó la palma de sumano en la frente delmago y empujó hacia abajo paramantenerinmóvilalmago.

—¡Nomeasfixiéis!—gritóVangerdahast—.¿Cómovoyacontestarossimeasfixiáis?

—Nopretendoasfixiaranadie.—Azounaflojólamano.—¿Yporquéibaacreeros?—Vangerdahastpermanecióinmóvilymirócon

desconfianzaalrey.—Vangerdahast,yojamásleharíadaño.—Decidmequenomequeréisquitardeenmedio.—Noquieroquitarosdeenmedio—sacudiólacabezaelrey—.Ustedesel

consejero en quienmás confío ymimejor amigo. Por favor, intente recordar.HáblemedeTanalasta.

—Desatadme. —Vangerdahast se inclinó para señalar las correas quesujetabansumuñecaizquierda—.Sóloésta...yoslodiré.

AzounlanzóunamiradainquisitivaaOwden.—De todos modos, no os lo dirá—dijo el clérigo, haciendo un gesto de

negación—,yesdemasiadopeligroso.Podríadespedazarnosatodosconunodesushechizos.

—¡Noprestéisatenciónaeselabrador!—Vangerdahastsacudiólacabezaenun intento por recordar cualquier hechizo que pudiera ayudarle a escapar—.Tememipoder.

—Yconrazón—replicóOwden.Vangerdahastsevolvióparamirarlo.Owdensacódelbolsillounospolvosde

colortrigo,peroVangerdahastactuóconrapidezycerrólosojosantesdequeelclérigoactuara.

—¿Sabeusteddóndeestá,Vangerdahast?—preguntóOwden—.¿Recuerda

Page 193: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

loquelesucedióasucabeza?—Meduele.Usteddebiódehacermealgunacosa—respondióelmagosin

abrirlosojos.—No,yono—negóOwen—.Fuelacosaqueloacompañabacuandovolvió.—¡Usted!—insistióVangerdahast.—Legolpeóenlacabeza,ydespuéssearrojósobreAzoun...—¡No!Finalmente, afloró a su mente el conjuro correspondiente al hechizo de

ceguera.Noserviríaparaliberarlo,ysóloafectaríaaunapersona...perosielegíaa lapersonaadecuada,quizápudieracrear laconfusiónnecesariaparahacerseconunodelosinstrumentosdetorturadeOwdendispuestosenlamesita,aunladodelacama.

Vangerdahast volvió la cabeza haciaAzouny empezó a repetir el conjuro,después olió un aroma fuerte y vio que Owden arrojaba unas gotas sobre surostro.Cacareóunasílabamás,todoasualrededorsesumióenlaoscuridadydeprontotuvolasensacióndequecaíaporunprecipiciosinfondo.

Alcabodeunrato,Vangerdahastdespertóatadoydesnudo,cubiertotansóloconunasábanalimpia,rodeadoporlosenemigosdelreino,todosellosojerosos.AsuizquierdaseencontrabaOwdenFoley,conuntrapohúmedoenlamanoyuncuencodebronceenlaotra.AlaphondarEmmaraskyMerulaelPortentosoloobservabanalpiedelacamaconojospequeñosybrillantes,siempreatentosalamenorseñaldequeelmagosupremopudieraleersuspensamientos.Asíera,porsupuesto,peronopodíapermitirseellujodequelosupieran.Deotromodo,lomataríansinpiedad.

A la izquierda del mago permanecía de pie Azoun IV, con el brazo encabestrilloyelhombrocubiertoconunvendajeempapadoensangre.

Vangerdahastnopudorecordarcómohabíallegadoacaerprisionerodelosenemigosdel reino.Norecordabanada,salvounolorconfusoquedesaparecíade su memoria cuando intentaba recordarlo. La única cosa que le parecióvagamente familiar fueron las vigas y planchas demadera que había sobre sucabeza:eltechodesuceldaoelsuelodelpisosuperior.Enrealidaddependíadelaperspectivadecadauno,yleparecióquepodríaservirlecomovíadeescape,esosiconsiguierarecordarelhechizoadecuado.

—¿Vangerdahast?—preguntóelclérigo,cuyorostroseparecíaaldeunarata

Page 194: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—.¿Sabeusteddóndeseencuentra?Vangerdahastsabíaperfectamentedóndeestaba(enunatorredeprisioneros),

peronoestabadispuestoaconcederasussecuestradoreselplacerdeadmitirlo.Sintióquealguien le tocabaelhombroyvolvió lamiradaparaveral reyasulado.

—Viejoamigo,¿merecuerda?—Porsupuesto.—Vangerdahastoptóporganartiempo,conlaesperanzade

recordarelhechizoquenecesitaba—.¿Cómopodríaolvidarelrostrodelusur...delrey?

—¡GraciasseandadasalaMadre!—exclamóAzoun,visiblementerelajado—.¿Recuerdaamihija?¿MepuedeusteddecirquérecuerdadeTanalasta?

Los recuerdosde labatalla libradaen el cañónaflorarona sumente comounaexhalación:laprimeraghaznethlotiródelcaballoconelcuerpodestrozadodeunorco,yalabrirselaspuertasdeaceroaparecióantesumiradalasegundaghazneth,desnudayconlosojosinyectadosensangre,quesalíaenpersecucióndeTanalastayelexplorador,quelogróapartarseatiempo,seguidodecercaporesarameradeprincesaque...

—Es todo tan... confuso. —Vangerdahast sacudió la cabeza e intentósentarse. Cuando las correas se lo impidieron, levantó la mano izquierda ypreguntóalrey—:¿Creéisquepodríais...?

—Porsupuesto.Azoun hizo ademán de desenvainar la daga para cortar las correas, pero

Owdenseinclinósobrelacamaparaimpedírselo.—Aúnno,majestad.—¿Aún no? —gritó Vangerdahast. Se volvió hacia el clérigo y chilló—:

¡Suélteme! ¡Suéltemeahoramismo,o juroque lamentaránestedíacuandomehagaconlacorona!

El rey profirió un gruñido de cansancio, y Vangerdahast comprendió deprontoqueacababadeperdercualquieresperanzaquepudierahaberconcebidodeengañarasuscaptoresparaquelosoltaran.Entoncessevolvióhaciaelrey.

—Creoqueempiezoarecordar.—Cerrólosojos,concentrándose,aunqueenlo único que se estaba concentrando era en recordar un hechizo que pudieralanzar sin contar con lasmanos—.Quizá sime soltarais almenos unamano,podría mesarme la barba. Sí, eso es. Mesarme la barba siempre me sirve de

Page 195: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

muchaayuda.Azounselimitóasacudirlacabeza.—¿Cuántotiempomásharáfalta?—preguntóaOwden.—Estoysegurodequevuestramajestadtampocolorecordará—respondióel

clérigo, encogido de hombros—, pero vuestra convalecencia resultó tan duracomo ésta, y vuestras heridas no eran tan profundas como las sufridas por elmagosupremo.

—Espere,ahorameencuentromuchomejor.—Vangerdahastpestañeóvariasveces.

—Mealegro—dijoOwden—.¿Recuerdaloquelesucedióalaprincesa?Vangerdahast asintió, y de pronto recordó comouna exhalación el conjuro

delhechizodepuertadimensional.Estabacompuestoporapenasunadocenadesílabas,demodoqueerarápidoysencillo.Segurodequeno tardaríaenmirarlas rejas desde el otro lado, fijó la mirada en el techo y empezó a recitar elconjuro, después olió un fuerte aroma vagamente familiar cuando lamano deOwden Foley apareció ante su campo de visión y un polvillo cayó sobre susojos.

Vangerdahasttuvolasensacióndequecaíaporunprecipicioylaestanciasevioenvueltaenunacompletaoscuridad.Despertómás tarde,estabadesnudoyatado,cubiertosóloconunasábana, rodeadopor losenemigosdel reino.Asuderecha se encontraba Owden Foley, con un trapo húmedo en la mano y uncuencodebronceen laotra.AlaphondarEmmaraskyMerulaelPortentoso loobservabanalpiedelacama,elprimeroconlosojoshundidosyenrojecidosdetantoleer,elotrovestidoconunatúnicapolvorienta,conunaspectocadavéricoylasmejillasdemasiadohundidasparaalguiendesucomplexión.AlaizquierdadelmagoseencontrabaAzounIVconunamaltrechaarmaduradecombate,yaqueelherrerohabía tapadounagujerosituadoa laalturadesupechoconunaplanchadeacero.

—¿Azoun?—boqueóVangerdahast—.¿Habéisestadoluchando?—¡Graciasseandadasalosdioses!—Elreydiounapalmadaenelhombro

delmago—.Porfinlohemosrecuperado.—Esoesterriblementepresuntuosoporvuestraparte,¿nocreéis?—preguntó

Vangerdahast,quemiraba lamanoqueel reyapoyabaensuhombro.Elmagolevantólamanoparaapartaralrey,perodescubrióqueteníalamuñecaatadaal

Page 196: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

dosel de la cama con una correa.Observó la correa como si no comprendieranada y preguntó con voz autoritaria—: ¿Qué significa esto? ¡Desátenmeenseguida!

—Quizálohagamosmástarde.—OwdenFoleyseinclinósobreelmagoylocogiódelotrobrazo—.¿Sabeusteddóndeestá?

—¡Pues claro que sí! —exclamó, contrariado—. En mi habitación de...Estamos en el palacio de... —Contempló las tablas que tenía encima de lacabeza,perofueincapazderecordarenquéciudadestaban.Consideróduranteun instante su situación, y llegó a la única conclusión posible—: ¡Ustedesmehansecuestrado!

Azoun masculló una maldición a la diosa Chauntea, y se dirigió hacia lapuerta.Owdenlevantóundedo.

—Unminuto,sire.—Unminuto—repitió el rey,mirando al clérigo—.Aúndebo salvar ami

reina,aunquenosepanadademihija.—¿Lareina?—preguntóVangerdahast,levantandolacabeza.—Sí,seguroquerecordaráustedalareina—asintióOwden,másanimado.—¿Filfaeril?—LareinaFilfaeril—confirmóOwden—.¿Recuerdaustedloquelesucedió

alareina?—¡Pues claro!—Vangerdahast lo recordaba todo: la batalla en el cañón, a

Tanalasta siguiendo a Rowen, el ataque en el establo cuando intentó librar aFilfaerildelasgarrasdelaghazneth—.¿Seencuentrabienlareina?

—No podemos saberlo —respondió Azoun—. La última vez que la vi,estabaviva.

—¿Laúltimavezquelavio?—preguntóVangerdahast,conelcorazónenunpuño.

—Metemoquelasecuestrólaghazneth—dijoOwden—.Elreyconsiguióvolveraverla,cuandoseacercóalaguaridadeesacriatura,quesevioobligadaatrasladarlaaotrolugar.

—¡Por las escamas de Thauglor! —Vangerdahast hizo ademán deincorporarse, pero seguía atado a la cama. Contempló de nuevo las correas,confusoyaturdido,ydijo—:¡Desatadmedeunavez!Tenemoscosasquehacer.

—Sus cosas pueden esperar un pocomás—dijo Owden—.No estará del

Page 197: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

todocuradohastaqueseenfrentealdemonioquellevadentro.—¿Aquédemonioserefiere?—preguntóelmago.—Cadaunodenosotroscargaconsupropiodemonio—explicóOwden—.

La mayoría lo mantenemos confinado en la parte más oscura y recóndita denuestra alma, donde no pueda hacer daño. Pero cuando sufrimos un traumaterrible,comoelqueustedyel reyhansufrido,eldemoniopuedeaflorara lasuperficie.

—Pero¿québobadaesésta?—preguntóVangerdahastaAzoun.—Vangerdahast,deberíaescucharle.—¿Escucharaestecampesino?—semofóelmago—.¿Yaoshaconvencido

Tanalasta?Eldolorafloróalrostrodelrey,queapartólamiradasinresponderle.—Temo que tal cosa sea imposible—dijo Alaphondar, que intervino por

primeravez—.Nohemospodidoconvencerleausteddequenosdigaquélehasucedidoalaprincesa.

—¿Qué quiere decir con eso de que no han podido convencerme? —preguntó, contrariado, Vangerdahast—. Está con Rowen Cormaeril. Huyeroncuandoyometeletransportéaquí.—PaseólamiradadelreyaMerula—.¿Acasonadievaaexplicarmequéocurre?

—Por supuesto—dijoOwden—.Sudemonio interiorhaescapado,ydebecapturarlodenuevo.

—¿Capturarlo?—Antesdequeleconsuma—prosiguióelclérigo—.Debemirarenlomás

profundo de símismo y enfrentarse a él, aquí, en presencia de testigos.Debeusted decirnos qué quiere el demonio, y entonces cobrará fuerzas paraenfrentarseaélycontrolarlo.

Vangerdahastdesconfiabade laspalabrasdel clérigo. Intentabanarrancarleunaconfesión,pero¿porqué?Despuésdetodoloquehabíahechoporelreino,¿tenía Azoun miedo de él? ¿Estaba, quizá, celoso de su poder? El mago sevolvió para echar en cara al rey su debilidad, y se dio cuenta de que eso eraprecisamenteloquequeríaOwden.Emprenderlaconelreytansóloavivaríalasuspicacia de Azoun y daría pie al resentimiento, mientras que admitirabiertamentequenocreíaensuderechoalacoronaporelsimplehechodenacerhijo de rey, por muy rebuscado que pudiera parecer, impediría que Azoun

Page 198: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

volviera a confiar a ciegas en él. En cualquier caso, Owden seguiría ahíesperando,dispuestoareemplazaraVangerdahastensupapeldeconsejeroreal,ademásdereemplazaralosmagosguerrerosporsutemplorealdeChauntea.

—¡Malditogusano! ¡Lenguade serpiente, depiel de escamas,mentirosoyruin!¿Deverascreesquepuedesentrometerteen losasuntosde lacorona?Yameencargaréyodequepaseselrestodetuvidarecogiendochampiñonesenlomás profundo de un calabozo. ¡Vas listo si crees que voy a hablarte de misdemonios!—exclamóVangerdahast,volviéndosehaciaelclérigo.

Vangerdahast recordó un hechizo que podría conjurar sólo con la voz yempezóamascullarlaspalabrasadecuadas.Owdenrebuscóalgoensubolsillo,peroelreylevantólamanoyseloimpidió.

—YodiríaqueVangerdahastvuelveasereldesiempre.Elmago terminó el hechizo, y un segundo después seguía tumbado en la

camadespuésdeadoptarlaformadeunpequeñovisón.Rodósobresímismoyse escurrió a cuatro patas por las sábanas, pasando por entre Alaphondar yMerulahastallegaraunadelasesquinasdelaestancia.Unavezenlaesquina,se detuvo y volvió a adoptar su forma humana, después se volvió paraenfrentarseasuscompañeros,quenopodíandisimularsunerviosismo.

—¿Vanaseguirahíplantados,mirándomeboquiabiertos,omeacercaránlatúnica?—preguntó—.Tenemostrabajoquehacer.

—No puede usted hacerlo—dijoOwdenmientras se acercaba hacia él—.Aúnnoestápreparado.

—MaestredeagriculturaFoley,sivuelveamencionaramisdemoniosunasola vez, le juro que pasará toda la vida esquivando tordos en los jardines depalacio.

OwdensedetuvoalllegaralpiedelacamaymiróaAzoun,queselimitóasonreíryencogersedehombros.

—¿Qué puedo decir? Vangerdahast siempre tuvo algo demoníaco. —Observó aMerula, y añadió—:Ya ha oído usted almago supremo.Déle unatúnica.

CuandoMerulaseapresuróaobedeceralrey,Vangerdahastseinclinóanteelsoberanoydijo:

—Gracias,sire.Mealegracomprobarquehayalguienquenohaperdidolacabeza.

Page 199: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Elmagosealisólabarba,ydespuéssepasólamanoporloquelequedabadepelo,yalhacerlosepercatódelasheridasqueteníaenlacabeza.Lasacaricióconlasyemasdelosdedos,ycomprobóquehabíancicatrizadoporcompleto.

—¡PorThauglor!—maldijo—.¿Cuántotiempomehantenidodurmiendo?—Ha estado... durmiendo cinco días—respondió Azoun, a quien se veía

incómodo.—¿Ynopudierondespertarme?—Vangerdahastgirósobresustalonespara

enfrentarseaOwden—.¿Acasoustedes,losclérigos,nosirvenparanada?Por el rostrodeOwdencruzóuna expresióncolérica, pero antesdeque el

clérigo pudiera replicarle,Azoun cogió aVangerdahast del hombro y lo llevóhacialamesaylassillasdispuestasasualrededor.

—Mejorseráquetomemosasientoycharlemosunrato,viejoamigo—dijo—.Debemos hacermuchos planes e ignoramos unmontón de cosas sobre losucedido.

Page 200: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

E13

lenjambrependíadelcielodelnortecomounrebañooscilantedeoscurasmotas, prácticamente invisible al recortarse contra el imponente muro

formadopor lasdunasdeAnauroch,queseerigíanenespiralhaciaelvestigiocaóticodeunasolitariatorredevigilancia.

ElrastrodeAlusairllevabadirectamentealasruinas.Tanalasta no tuvo valor para expresar sus dudas; pero no era necesario.

Despuésdecuatrodíasdeesquivargnollsyghaznethenlaspolvorientasllanurasque separaban las Tierras de Piedra de las Marcas del Trasgo, Rowen y ellahabían desarrollado un instinto natural para saber qué pensaba el otro. Elexploradorcogiólasalforjasquecargabaalhombro,abriólascorreasytendióalaprincesalacapaylosbrazaletes.

—Yonomepreocuparía—dijoRowen—.EncuantoAlusairconsiderequecorreunpeligrosuperiorasusfuerzas,sepondráencontactoconVangerdahastmedianteelanillodesello.

—¿Y cuántas veces le has visto hacerlo? —Era una pregunta retórica,Tanalastanoesperabarespuesta—.Además,¿dequéibaaservirVangerdahast?Contantasghazneth,sumagiaseríainútil.

—Sigo pensando que hay motivos para albergar esperanzas. —Rowenobservólaslejanasmotasduranteunossegundos—.Sitodosehubieraresuelto,¿quéhacenesasmanchasenelcielo?

Abrochó lascorreasdenuevoyempuñó la improvisadapicaqueTanalastahabía preparado, atando la daga de hierro al extremo de una rama de olmobastante sólida. Aunque el arma era más incómoda de llevar que una simple

Page 201: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

daga,permitiríaaRowenatacarconmayorconvicción,puespodríamantenerlasdistancias con el enemigo. La princesa se puso la capa sobre los hombros, ysiguióalexploradorcaminandoencuclillasalamparodelamalezapolvorienta,quelellegabaalaalturadelacintura.Tendríanquecubrirunbuentrechodeesemodo,pueslallanuraeratanllanacomounlago,yhabíapocoslugaresdondepoderesconderse.

Semovieronatrompicones,corriendodemataenmata,agachadosoacuatropatas cuandodebían atravesar terreno al descubierto.Tuvieronmucho cuidadodemantenerseojoavizorallejanoenjambredeghazneth,sindescuidarporellolamaleza, porque en la llanura habitaba una increíble selección de serpientes,arácnidosyescorpiones,quegustabandeesconderseenlarelativaseguridadqueproporcionaban los arbustos espinosos. En varias ocasiones, Tanalasta se vioobligadaaretrocederdelasgenerosasmandíbulasdeunciempiésodelaguijónenhiestodeunescorpiónalquehabíanimportunado;enunaocasión,elextremodelapicadeRowenrecibiólascariciasdeloscolmillosdeunaserpiente.

Amedidaqueseacercabana la torre,empezaronaobservaralgunasmotasindividualesquesobrevolabanlasruinas,oquealzabanelvuelodesdedetrásdelmuroparaunirsealenjambreprincipal.ATanalastase lerevolvióelestómagodemiedo, ymaldijo por tener que acercarse tan lentamente.QuizásAlusair yellanoestuvieranmuyunidas,peroeranhermanas,ynopodíadejardepensarenunenjambredeghaznethpeleándoseporelcuerposinvidadeAlusair.

Rowen pareció advertir la inquietud creciente de Tanalasta. Corrió másdeprisayatrechosmáslargos,descuidandolanecesidaddeocultarseamedidaque se acercaban. La princesa agradeció la preocupación del explorador, perotambiénsabíaquenoserviríadenadasitodaslasghaznethlosveíanacercarse.Ya alcanzaba a distinguir la silueta inconfundible de sus alas extendidas, y notardarían mucho en aproximarse lo suficiente como para que las criaturaspudieran verlos entre la maleza. Tanalasta estaba a punto de advertirle delpeligro,cuandoelexploradorsedetuvodepronto.

—Rowen,¿quéestáshaciendo?—Pensandoquequizálohabíamordidounaserpienteo, inclusopeor,unciempiés tigre, seacercóa su ladoy locogiódelbrazo—.¿Quésucede?

—Nosonghazneth—respondiósinmoverse.Tanalastaobservóel enjambre en ladistancia, pero estabademasiado lejos

Page 202: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

paraquepudieraidentificardequéclasedecriaturasetrataba.Intentódenuevoqueseagachara.

—Nopuedesverlobien.—¿No?—Señaló hacia uno de los extremos de la espiral—. Fijaos en el

extremodesusalascuandoviren.Tanalasta obedeció, y al fijarse observó un penacho blanco y apenas

perceptible,comounosdedosdiminutos,silueteadoscontralasdunasdearena.—¿Plumas?—Esoparece—replicóRowen.—Sonbuitres—dijolaprincesaconelcorazónenunpuño.—Nosabemosquésignificaeso—dijoapretandosubrazo—.Quizámuriera

unodeloscaballosdeAlusair.—Demasiadosbuitresparaunsolocaballo—respondióTanalasta.La princesa se acercó prácticamente corriendo,mientras hacía un esfuerzo

porcontenersuimaginación.TanalastanodejabaderecordarseasímismaqueAlusair había superado a una docena de criaturas tan terribles como cualquierghazneth, que era una líder experimentada al mando de una compañía deguerreros,unpardeclérigosyunpuñadodemagiaasudisposición.Peroestasconsideraciones caían en saco roto al ver la impresionante bandada de buitresque sobrevolaban la torre. Había carroña para un regimiento, y la fuentemásobviadecarroñasólopodíaobedeceraunacompañíadecaballeroscormytas.

Al acercarse, Tanalasta vio que la construcción era una de esas torresextrañasydesproporcionadasdescritasenel librodeArturShurtmin,LaEdadDorada de los Trasgos. Levantada en bloques de piedra arenisca y oscuraargamasa, el capitel tenía una protuberancia impresionante cerca de la partesuperior,queseinclinabanotablementeenesadirección,comosiungranpesotirasedeella.Estrafalariashilerasdeventanucosrodeabanlaestructuraprincipaldelatorre;supresenciasugeríalaexistenciade,almenos,ochopisosinteriores,paraunaalturadetansólotrecemetros.

Los muros exteriores estaban surcados de manchas rojas y anaranjadas.Rezabalaleyendaqueaquellossurcosobedecíanalasangredeloscautivosquelosconstructoreshabíanmezcladoconlaargamasa,peroArtur(cuyapasiónporeltemaeraquizádemasiadograndeparadarunaopiniónimparcialalrespecto)sosteníaquelossurcoseranpruebadequelostrasgosamenudoempleabantiras

Page 203: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

verticalesparafacilitarlaimpresióndequeunaconstrucciónbajaeramásaltadeloqueparecía.AunqueTanalastateníasusdudassobreambasteorías,laverdaddelcaso jamásseconocería.ElReinoTrasgodesapareciómuchoantesdequeempezaralahistoria,ydeélnosesabíamásdeloquelasruinasesparcidasporlastierrassalvajes,entreAnaurochylosPicosdelasTormentas,podíanrevelar.

Tanalasta intentó armarse de coraje ante la presencia de la torre de lostrasgos.Porreglageneral,estasruinassolíanservirsimplementedeentradaauncomplejode túneles,queen laactualidadestabanocupadospor toda suertedesiniestrascriaturas.Quizálosbuitrescelebrabanunfestíngraciasaunatribudekobolds o trasgos bárbaros que habían sido lo bastante estúpidos como paraatacaralacompañíadeAlusaircuandopasócerca.

TanalastayRowenseencontrabanauncentenardepasosdelatorre,cuandoempezaronaoler lamuerte en el aire: el fétidohedor a carnepodrida, el acreolorcillodecarnequemada,elolorranciodelatierrarevuelta.AlrecordarloqueArtur aseguraba en su obra sobre que los trasgos de la edad dorada siempreorientaban sus puertas hacia el sol poniente, Tanalasta se dirigió seguida porRowen hacia la puerta oeste de la torre. Observaron las copas de algunoscastaños que asomaban por encima del muro, dispuestos a mostrar sus hojasamarillentasenformadeestrella.Elhedorsehizomásintenso,ytambiénmásconstante. Al acercarse más, la princesa oyó el aleteo y el gorgoteo de losbuitres, así como un sonido que no pudo identificar, un sonido desapacible yerrático, interrumpido de vez en cuando por un martilleo ahogado y algunoschasquidos.

Tanalasta sedetuvo juntoa lapuertayasomó lacabezapor laesquina.Sehabía equivocado en cuanto al número de castaños. Había uno solo, tenía untronconudosoyplateado,tangruesocomolacinturadeungiganteyunacoronade ramaje amarillento que envolvía toda la torre. Bajo la sombra queproporcionaban las ramas del árbol, había dos docenas de caballos mediomuertosdehambre, atadosaunacuerda, tan famélicosyagotadosqueapenaspodíanmoverse para espantar a los buitres. Algunas bestias yacían inmóvilesbajo una nube demoscardones y plumas negras,mientras que unamaraña dearmadurayhuesoquemadoyacíaapiladaalpiede la torre, juntoalventanucodel tercer piso. Cerca, una docena de pajarracos hacían de las suyas con loshuesos de un caballero cormyta. Al lado del cadáver vieron una espada

Page 204: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

primitiva,cuyahojaforjadaenhierroestabacubiertaporunacapadeherrumbre.Diseminadas por todo el patio al pie de la torre vieron docenas de enormesmontonesdetierra,cadaunodeloscualescorrespondíaaunagujeroexcavadorecientementeenlatierra.

Oyeron un ruido ahogado, procedente del extremo opuesto del patio, y laatención de Tanalasta se centró en el movimiento de unas piedrecitas querodaban por una de las pilas de tierra. Distinguió algo negro, cuya forma lerecordó vagamente a la de una flecha. Bajo la luz, atenuada por el castaño,confundiólasiluetaconladeunbuitre,hastaquevolóunmontóndetierraporencimadelamontañita.

TanalastasintióqueRowenlacogíadelbrazo,momentoenquefinalmentereconoció la forma oscura de un ala plegada. Retrocedió un paso y se volvióhaciaelexplorador.

—Tendremosquetenderleunatrampa—susurró.—Yo la sorprenderé por la espalda —dijo Rowen, haciendo un gesto de

asentimiento—.Conunpocodesuertenomeoiráacercarme.—Yasíevitasquecorrapeligro—dijoTanalasta,exponiendoelmotivode

queelexploradorhubieratrazadoeseplan.Hizoungestodenegaciónyañadió—:Sisirvieradealgo,notendríaningúninconvenienteenaprobartuplan,peroesascriaturassondemasiadorápidasyresistentes.Aunquepudierassorprenderla(y eso es mucho decir), jamás la matarías de un solo golpe. Tendremos quehacerlojuntos.

Rowenvolvióaasomarseporlaesquina,yapretólamandíbulaconfuerza.—Disculpadmepor lo que voy a decir, alteza, pero debemos considerar la

posibilidaddequeseáis laúnicaherederaquesigaconvida.Arriesgarvuestravidaseríaundelitodealtatraición.

—Estánvivos—dijoTanalasta—.YAlusairtambién.—Nopodéissaberlo—repusoelexplorador—.Hanestadoincinerandoalos

suyos,locualsignificaquesihancontraídoalgunaenfermedad,y...—Tienendosclérigos,unmagoguerreroyunmontóndealforjasllenasde

pocionesmágicas.—Noteníamospociones—dijoRowen—.Elmagoguerreromuriódurante

nuestroprimerencuentroconlaghazneth,einclusosilosclérigossiguieranconvida, a estas alturas ya se habrán quedado sin agua. Ya habéis visto en qué

Page 205: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

condicionesestánloscaballos;unhombrenoaguantanilamitaddetiempo.—Hayaguaenel fondode lamadriguera,poresoprecisamenteconstruían

lostrasgosestastorres,paraprotegersuspozos.—TanalastaconfióenqueArturShurtminhubierafundamentadoestaobservaciónenunhechomássólidoquelodelacostumbreporlastirasrojizasqueadornabanlastorres—.AunqueAlusairhayamuerto,porlasexcavacionesdelaghaznethpodemosdeducirquepartedelacompañíaha sobrevivido. ¿Deverascreesque losabandonaríaamerceddeesacriatura,esténvivosomuertos?

—Supongoqueno.—Rowenleofreciólapica—.Tomadesto:voyaversipuedohacermeconesaespadaherrumbrosa.

—No soy lobastante fuerteparamanejar unapica.—Tanalasta rechazó elarma—. Además, no quiero arriesgarme a que la ghazneth advierta ladesaparicióndelaespada.Esoecharíaaperdermiplan.

—¿Plan?—preguntóRowen,enarcandounaceja.—Latretadelareina.—Tanalastasonrió,henchidadeconfianza—.Boreas

Kaspes la utilizó para ganar el desafío del rey en 978 del Calendario de losValles.

Rowen observó dubitativo a la princesa hasta que ella le explicó su plan.Asintióaregañadientesyadmitióquepodíafuncionar.Aportóalgunosconsejosylemostrócómorodarsobresímismosinhacerseningúndañoalarrojarsealsuelo. Entonces la princesa montó guardia mientras él recurría al talón paracavarunatrincheraaunodelosladosdelapuerta.Encuantohuboterminado,letocóelhombroylaempujódenuevodetrásdelmuro.

—Recordad que no se trata de una partida de ajedrez—susurró—. Si laghazneth hace cualquier movimiento inesperado, no tendréis oportunidad depensarenvuestrosiguientemovimiento.

—Melimitaréaactuar—asintióTanalasta.La princesa caminó hacia la puerta, pero se lo pensómejor y se acercó al

exploradorparabesarloenloslabiosapasionadamente.Nolosoltóhastamuchodespuésdequeserecuperaradelasorpresainicial,einclusoentoncescontinuóhastaquesumenteempezóapensarenotrascosasquenoteníannadaqueverconlaghazneth.

—Suerte—dijoTanalasta,medioahogada,mirandoaRowenalosojos.—Sí,soymuyafortunado.

Page 206: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Elexploradorlacogióentresusbrazosylaempujócontraelmurodelpatio.Tanalastasintiólossalientesdepiedraareniscacontrasucolumna,laexcusaquenecesitaba para apretar su cuerpo contra el del explorador, y al cabo de unossegundos laprincesa sintióunanecesidadurgentede satisfacer susdeseosquehubierasidounpecadonegar.RecorrióconsusdedoseltorsodeRowenysintióque él hacía lo propio con el suyo; deseaba tanto que acariciara todos losrincones secretos de su cuerpo... Fue entonces cuando se dio cuenta de quehabíanelegidoelpeormomentoparasuprimerbeso.

Haciendoalardedeunagranfuerzadevoluntad,deslizósusmanosentresuscuerposyapartóelpechodelexplorador.Éstenopareciódarsecuentadeloqueestabahaciendo,quizáporquenoponíamuchoempeñoenello.Rowendeslizóunadesusmanosalrededordesucinturaparaacariciarlelaespalda,enrealidad,unpocomásabajo,yconlaotraacariciósupechoblandoyacogedor,momentoen que a la princesa le temblaron las piernas. Se dejó llevar durante un breveinstanteydespuéshizoacopiodecorajeyseapartódeél.

—Espera...Cuando vio que lo empujaba del pecho, una mirada horrorizada cruzó el

semblantedeRowen,quetrastabillósonrojadohastalasorejas.—¡Perdonadme, mi señora! Creí que... —El explorador tenía clavada la

miradaenlapuntadesuspies,alparecerincapazdeterminarlafrasesimirabaaTanalasta—.Creíquevosqueríais...

—Yquería...Quiero.—Tanalasta sonrió y cogió sumano, pero se guardómucho de acercarse al explorador—. Pero serámejor que tengamos la cabezadespejada,¿nocrees?

Rowen asintió, y por su rostro cruzaron expresiones sucesivas dehumillación,alivioynerviosismo.

—Será mejor que... Es que no había sentido nada... Es decir, nunca mehabíanbesadoasí.

—¿Esperabas menos de una princesa? —Tanalasta sonrió abiertamente,despuésobservólapasajeraexpresióndeculpabilidadenlamiradadeRowen—.¿Oacasoyalohabíashechoantes?

Rowen desvió la mirada y quiso responder, pero Tanalasta levantórápidamentelamanoparaqueguardarasilencio.

—Olvídalo.

Page 207: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Pero...—No quiero oírlo. —Tanalasta sacudió la cabeza—. Podría cambiar de

opiniónsobrerescataraesacerda.—Pero...—¡Esunaorden,Rowen!Tanalastasedeslizóporlaesquinayfranqueólapuerta,conlosbrazaletesen

lamano.Enunextremodelpatio,elaladelaghaznethasomabapordetrásdelmontóndetierraquehabíaexcavado.Unescalofríorecorriólaespinadorsaldelaprincesa,yduranteuninstantedeseóqueRowensehubieramostradoremisoallevar a cabo su plan. Sin embargo, era él quien correría más riesgos, peroTanalastanoestabaacostumbradaaservirdeceboynopodíaevitarpensarenquequizácometeríaunerrorqueterminaraconlamuertedeambos.Seaseguróde llevar la capa sobre los hombros, y después se dirigió en zigzag hacia laespada herrumbrosa, contando los pasos desde elmomento en que atravesó lapuerta.

Cuando contó hasta diez, Tanalasta se ciñó los brazaletes, dibujómentalmente el rostro de su hermana y cerró el broche de la capa. Sintió unhormigueo en los dedos que asían el metal. La imagen de Alusair se tornóojerosaymacilenta.Teníabolsasoscurasbajolosojos,lasmejillashundidas,yparecíaestartumbadadeespaldasenunlugarmuyoscuro.CuandoTanalastanohallóindicioalgunodepercibir lapresenciamentaldesuhermana, laasaltóelpánicoyestuvoapuntodegritarderabia.

Mientraslaprincesaseesforzabapordominarsumiedo,lacabezaenvueltaensombrasdelaghaznethasomósobreelmontóndetierra.Sevolvióhacialapuerta y la miró con unos ojos borrosos inyectados en sangre. Tanalasta diorienda suelta al horror que la embargaba y profirió un grito, que permitió aRowencomprenderquelahabíadescubierto.

Los buitres respondieron levantando el vuelo a través de las ramas delcastaño,mientras laghazneth subíapor lamontañade tierraparaextender susalassindejardemiraraTanalasta.Laprincesagirósobresustalonesyechóacorrerhacialapuerta.

Ensumente,lamiradadeAlusairsetornómenoscristalina.«Frentea la torre,conRowen», transmitióTanalasta.Peseahaberpensado

enelmensajeunadocenadevecesdespuésdedescribirsuplanaRowen,a la

Page 208: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

princesa le resultó muy difícil mantener la concentración, acosada por laghazneth que iba tras ella. «Espada de hierro a veinte pasos del rastrillo, a laizquierda.¡Juntasenesto!»

LaimagendeAlusairpestañeódosveces.«¿Tanalasta?»Perolaprincesanopudoresponder.Lamagiadelacapalepermitíaenviar

un solomensaje, y breve, al destinatario, y éste debía responder con idénticabrevedad.Cuandollegóalapuerta,susoídosestabaninundadosporelaleteodelasalasdelaghazneth.ObservólamodestatrincheraqueRowenhabíaexcavadocomohabíapodidoysearrojóal suelocomo lehabíaenseñadoelexplorador,rodandosobreelhombroparanohacersedaño.Uncrujidoestallóasuespalda.Tanalastasepusoenpieyprofirióungritodetriunfo.

Perofueungritomásbienbreve.Vio a Rowen junto a la puerta, con el extremo de la pica hundido en la

trinchera,elhombropegadoalpaloyelotrobrazocogidoalrededordelarmayhundidoenlacaderaparamantenerelarmaenposición.Habíanatravesadoalaghaznethdeparteapartecomohabíanplaneado,peronoestaba tanmalheridacomoTanalastahabíaesperado.Elfantasmasedeslizabaporelpalodelapicaparaarrancárseloalexploradordelasmanos.

Aunqueestaghaznethestaba tandesnudacomolasdosanteriores, teníaunaspectomás aguerrido, un pecho amplio, anchos hombros y un rostro de lunamasculino.Teníatrescuernoscomodecabraenlacabeza,eracejijuntaylucíaunanarizporcinaychatade laquesalíaunalientooscuroyenvenenadocadavezqueexhalaba.Tenía losbrazos tan largosque,pesea encontrarseamediocamino de la pica, Rowen tuvo que inclinarse a un lado cuando le lanzó unzarpazoparaesquivarlo.

—¡Rowen,agáchate!—exclamóTanalasta,señalandoconlamanoelpechodelacriatura.

—¿Qué?—Rowenseagachóyvolvióaesquivarunagarraenorme,despuésintentó remover lapicaparaensanchar laheridaqueatravesabaelpechode lacriatura—.Soyloúnicoqueseinterponeentrevosy...

—¡Obedece!—ordenóTanalasta.Sinesperaracomprobarqueelexploradorhubieraobedecido,diounapalmadaenlosbrazaletes—.¡Rayosdelrey!

Unadescargarecorrió losbrazosdelaprincesa,yRowenseechócuerpoa

Page 209: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

tierra en cuanto cuatro haces dorados surgieron de las puntas de los dedos deTanalasta.

Laghaznethfuetanrápidacomosuscompañerasalahoradeplegarlasalaspara protegerse de lamagia, pero la pica que atravesaba su pecho le impidióusarlas comohubiera sido su deseo y no pudo protegerse del todo.Los hacesmágicos de Tanalasta encontraron un hueco, sorprendieron a la criatura en elesternón,ylaarrojaronhaciaatrásatravésdelapuerta.

Laghazneth cayóde espaldas y rodó sobre símisma, partiendo la pica endos.Trasella,Tanalastadistinguióunadocenadefigurasquesurgíandelatorredelostrasgos.Entonceslacriaturavolvióaponerseenpiecomopudo.

—¿Yahoraqué?—preguntóRowen,intentandoincorporarseconlamismarapidezquesuenemiga.

Enestaocasiónnofuenecesarioinsistirle.Seagarróaloquepudomientraslaprincesametíalaotramanoenelbolsillodehuidadelacapa.Despuésdeuninstantedeoscuradesorientación temporal,seencontróenel interiordelpatio,junto al esqueleto que Tanalasta había visto desde la puerta, rodeada por lossupervivientesojerosos,hambrientosysuciosdelacompañíadeAlusair.Roweny ella observaban el extremo partido de la pica que asomaba por entre lasmaltrechasalasdelabestia.

—¡Laespada!—exclamóTanalasta,señalandoelsuelo.Rowen profirió un juramento, y entonces la princesa se percató de que el

armahabíadesaparecido.La ghazneth se volvió hacia ellos, extendiendo sus alas para detenerlos.

Alusair salió de la sombra que le proporcionaba el castaño, con intención dehundirlaespadadehierroenelcráneodelacriatura.Perosuspiesrozaronunade sus alas, y alertó a la bestia. Ladeó la cabeza y la hoja herrumbrosa de laespadacayójuntoalcráneo,cortándolelimpiamenteunaorejayhundiéndoseenlaclavícula.

La ghazneth profirió un aullido de dolor, recurrió al brazo para quitarse aAlusairdeencimaydespuéssevolviópararematarlafaena.Tanalastarecordóelhechizodel rayo,peroRowenyahabíacogido lapuntade lapica rotay seabalanzabasobrelaespaldadelacriaturaconladagaenalto.

Elexplorador realizó lacargahundiendo ladagaa travésdelcaparazóndecuerode las alas hasta dar con la espalda de la criatura.El fantasma rugió de

Page 210: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

nuevoysevolvióparaenfrentarseaél,peroentoncesAlusairvolvióaatacarlopor laespaldacon laespada, lanzandounaestocada trasotracontrasusalasypatas.Laghaznethsevolviódenuevo,peroselimitóaapartaralaprincesadeunmanotazoysaliócorriendoporlapuertacomoalmaquellevaeldiablo.

Tanalastaseacercócorriendoasuhermana.Alusairyacíatendidabocaabajosobreelbarro,conlosojoscerradosylarespiraciónentrecortada.

—¡Alusair! ¿Me oyes? ¿Estás bien? —preguntó Tanalasta después dearrodillarsejuntoaella,yapoyarsucabezaenelregazo.

—¿Cómo voy a estarlo? ¿Nunca te ha golpeado una de esas criaturas?—AlusairabrióunodesusojoscastañosymirófijamenteaTanalasta—.Por losNueveInfiernos,¿quédiantrehacestúaquí?¡Éstenoeslugarparaunaprincesadelacorona!

—No, Alusair, no lo es —respondió Tanalasta, esbozando una sonrisa alcomprobarquesuhermanaseencontrababien.

Page 211: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

L14

a real compañía expedicionaria emergió de una densa oscuridad con unsonoroestampido,traslocualtodossusmiembrospermanecieronmareados

enlassillasdemontar,conelestómagorevuelto(aligualquelacabeza)acausadelateletransportación.Lentamente,laoscuridaddiopasoaunaluzmarrón,ypudieron ver un sicomoro en la pelada ladera de la colina. Un viento cálidoempujó la tierra sucia de los páramos, y cuando empezaron a distinguir unassiluetasjorobadasantesumirada,elsilencioabriópasoalgolpeteometálicoyaunsinfínderesoplidos.

Algo afilado golpeó las costillas de Vangerdahast y rebotó en su escudomágicosincausarleningúndaño.Fueentoncescuandoloscaballosempezaronarelinchar.

—¡Marranos! —gritó Vangerdahast tras conseguir recuperarse—.¡Emboscada!

Unaoscuridadondulantesurgióasuderecha,locogiódelbrazoytiródeélemprendiendo el vuelo y levantándolo de la silla de montar. Tenía a losmiembrosdelacompañíaexpedicionariaasuspies:cincuentapoderososmagosguerreros,respaldadospordoscientosDragonesPúrpura,confundidosentreunahorda de marranos chillones y sorprendidos. Vangerdahast profirió unamaldición.Pormuchoquehubieranprevistolaposibilidaddeencontrarseconuncomité de bienvenida como aquél, nadie pensó que se teletransportarían enmediodeunatribudeorcos.

Vangerdahastsacóunabolitadeplomodelbolsilloqueteníaenlamangaylacogióentrelosdedospulgareíndicerecitandounconjurorápido.Sucuerpo

Page 212: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

adquirió un tono argénteo y se tornó pesado. La ghazneth gritó sorprendida ycayóalsueloaleteandoenunesfuerzoinútilpormantenerlaventajadelaaltura.Vangerdahast se volvió para liberar su brazo, pero no porque temiera caer yestamparseenelsuelo.Comoatodoslosmiembrosdelacompañía,tambiénélsehabíaprotegidomágicamentecontracualquierclasedegolpeocorteantesdeabandonarArabel.Seagarrabaalfantasmaimpulsadoporlaseddesangrequese había despertado en él en cuanto percibió su presencia, la misma sed desangrequehabíaexperimentadolaprimeravezquelovio.Queríaarrastrarloalsuelo y desenvainar la daga de hierro para descuartizar a la infame criatura,destruyéndoladefinitivamente.

Como Vangerdahast había previsto, al levantar la mirada se topó con elrostrodelaprimeraghaznethquehabíaencontrado.Lacriaturaledevolvíaunamirada burlona con sus ojos inyectados en sangre, y también lemostraba loscolmillosamarillentos;todaellatraslucíaodioytensión.Vangerdahastvioporelrabillo del ojo que se había entablado una sangrienta batalla amenos de seismetrosbajosuspies,descolgódelcinturónsudaganegraforjadaenhierro,yelfantasma pareció finalmente caer en la cuenta de que no tenía sentido seguirluchando.Profirióunsilbidoderabiayabriólasgarrasdejandocaeralmago.

Dominadopor lafuriadelcombate,Vangerdahastfueincapazdepensarenotra cosa que no fuera terminar de una vez por todas con el fantasma. Siguiócogidoalextremodeunala,yprofirióungritodedolorcuandosupropiopesomágicocolgódelbrazoyse lodislocó.Abrió lamano instintivamentey fueadardeespaldascontraelsuelo,rodandounlargotrecho.

Mientrasrodaba,Vangerdahastoyóelzumbidodeunadocenadecuerdasdearco, y atisbó una nube de penachos negros que pasaba sobre su cabeza. Laghaznethprofirióungrito,yelmagosupoquealmenosunadelasflechasconpuntadehierrohabía alcanzado suobjetivo.Aldar la siguientevuelta, afirmólospiesenelsueloydejóderodar;despuésintentóincorporarseydescubrióquesucuerpoerademasiadopesadoparaconseguirlo.

Vangerdahast canceló el hechizo de pesadez con un solo pensamiento,despuéstrastabillóysepusoenpiesinsoltarladagadehierro.Laghaznethseencontraba a unos treintametros de distancia, remontaba el vuelo y se dirigíahaciaelnorteconmediadocenadeflechasclavadasenelpecho.

Unpardelanzasloalcanzaronporlaespaldayloarrojaronalsuelo.Aunque

Page 213: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

laslanzasnotraspasaronlaarmaduramágica,lacaídalehizoproferirungritodedoloralcaersobreelhombroqueseacababadedislocar.Maldijoenvozalta,sedeshizo de la daga ymetió lamano sana en la capa, en busca de la varita deguerra.

Alverqueelprimerataquenohabíapenetradolacapadelanadelmago,losorcosvolvieronaatacarloconsuslanzas,provocandounanuevaoleadadedolorenelhombrodeVangerdahast.

—¡Estúpidosmarranos!—Sevolvióhaciasusatacantesydiounapatadaalarodilla del orco que teníamás cerca, que perdió pie—. ¡Incluso un kobold sedaríacuentadequevuestraslanzasnosirvendenada!

Vangerdahastlevantólavaritayunhazdeluzdoradaatravesóelpechodelorco. La criatura soltó la lanza, se llevó las manos al pecho y explotósalpicándolotodoconsusangre.Elmagoseprotegióconlasmanosparaevitarqueloalcanzaranlosrestossanguinolentosdesuvíctima,yentoncessintióqueunpardebotasdescargabansendaspatadasensusrodillas.Almirarhaciaellasvioqueotromarranosehabíaagarradoasupierna,dispuestoamorderleconlosojosinyectadosensangre.

Vangerdahastenarcóunacejahaciendogaladeuncorajesinpar,ydespuésapuntó con la varita a la frente del orco. La rabiosa criatura ni siquiera tuvoocasióndegritarcuandoelhazdoradopenetróensucabezay lapartióenmilpedazos.Elmagosedesembarazódelcadáverdecapitadoysepusoenpie.Unmarranopasócorriendoparasituarseasuflanco,dispuestoaatravesarloconsulanza. Vangerdahast levantó la varita, cuya magia destrozó por completo alguerrero.

Asuespaldaseprodujounestruendo.Sevolvióhaciaelruidoyseencontróobservandoelcentrodelabatalla,dondeunaredconfusademortíferosrayosybolasde fuegoalfombrabanel suelodecadáveresorcos.Noeramucho loquelosorcospodíanhacercontraelpoderdelamagia.Suspuntasdelanzadepiedrase quebraban contra la armadura impenetrable de losDragonesPúrpura, y susdébilesespadassedoblabancontralalanaencantadadelascapasquellevabanlosmagos guerreros, mientras que sus garras se partían al intentar arañar losflancos, también protegidos mágicamente, de los caballos. La real compañíaexpedicionaria respondía con buen acero cormyta y hechizos escogidos, y losorcos caían a docenas. Uno de los dragones decapitó de un solo golpe a tres

Page 214: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

orcos,yfuesuperadoalcabodeuninstantecuandounaboladefuegoredujoaunadocenademarranosaunmontónconfusodecarneyhuesoscalcinados.

Alverquelabatallaestabaencarrilada,Vangerdahastsevolvióhaciaellugardonde había visto por última vez a la ghazneth.Después demucho buscar, laencontrósobrevolandolazona;apenaseraunamotarecortadacontraelcielo,ymanteníaladistanciaparaevitarquepudieranalcanzarlalasflechas.Elclamorde la batalla cesó con lamisma rapidez que se había desatado, y el fantasmasiguió trazando círculos en lo alto. A regañadientes, Vangerdahast apartó lamiradadelpuntonegroysedispusoadarórdenes.

—¡Alto la magia! —Intentó encontrar con la mirada a cualquiera de losclérigos que formaban parte de la compañía, para que le curara el hombrodislocado—.¡Tropaimpar,hierro!¡Tropapar,acero!

Larealcompañíaexpedicionariasedispusoaobedecer,losmagosguerreroscancelaronsushechizosdeprotección,losdragoneslimpiaronlasespadasantesde intercambiarlas por las armas del metal al que estaban acostumbrados.Vangerdahastaguardóelcambioconunaimpacienciamaldisimulada.Elmagoloshabíaentrenadoparallevaracaboestamaniobrapeculiardurantelosúltimosdosdías(eltiemponecesarioparaquelosherrerosdeArabelforjaranunsurtidocompleto de armas de hierro para todos y cada uno de los miembros de lacompañía),peronoestabamuysatisfechoconlosresultados.Lasghaznetheranmuy violentas y rápidas, y aprovecharían el menor descuido para matar conrapidez. Además, el mago no tenía ni idea de cuántas eran o de cómoreaccionaríanantelapresenciadelarealcompañíaexpedicionaria.

Eldíaanterior,cuandoélysusmagosguerrerosexplorabanelcañóndondeVangerdahasthabíavistoporúltimavezaTanalasta,novieronni rastrode losfantasmas,peroleparecióquealmenosunaghaznethloshabíavistoseleccionarel sicomoro como punto de reunión de la real compañía expedicionaria.Vangerdahast dudaba de que la criatura hubiera considerado la posibilidad dequese teletransportaranencimade losorcos,yaqueningúncomandanteensusano juicio se hubiera arriesgado a aparecer rodeado por el enemigo, pero almenosnosehabíaarredradoalahoradeatacarlos.Encontraralasprincesasnoseríatareafácil,nisiquieraconlaayudadedoscientoscincuentamiembrosdelafuerzadeelitecormyta.

Vangerdahast se acercó al frente de la compañía, donde una cuadrilla de

Page 215: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

hombres ataviados con la armadura de camuflaje había desmontado paradispersarseentre losorcos.Algunosarrastrabanalosenemigosheridospor loscolmillos,gruñendoymascullandoenunorcopasabletodasuertedeamenazasde tortura, amenos que alguien les dijera dónde encontrar «dos humanos quecabalganunfestín».Losorcos,aterrorizados,señalabanentodasdireccioneslocual significaba que no tenían ni idea de dónde se encontraban Rowen yTanalasta.

—¡Exploradores! Estáis perdiendo el tiempo. —Vangerdahast extendió elbrazo sano alrededor del perímetro donde se había celebrado el combate—.¡Quierounrastro...yrápido!

Los exploradores del reyobedecieron rápidamente, entreteniéndose sólo lojustopararemataralosorcosantesdedispersarseentodasdirecciones.AparecióOwdenFoley,quellevabadelasriendaselcaballodeVangerdahastyobservabaconpreocupaciónlosesfuerzosdelosexploradores.

—Mal asunto —dijo al desmontar—. Esta matanza innecesaria sólo noscausaráproblemas.

—Éstasnoson las tierrasdeChauntea—gruñóelmago.HabíaaccedidoallevarconélalclérigoantelainsistenciadeAzoun,peronoestabadispuestoaque le dijera cómo debían tratar sus hombres a los orcos—. Estas tierraspertenecenaGruumschyMaglibuyet,dosorcosconocidosporsuseddesangre.Además,matarloseslomejorquepodíamoshacerporellos.Unorcoheridosólopuede esperar dos cosas: morirse lentamente de hambre o, si tiene suerte,convertirse en esclavo de su propia tribu. A estos marranos los heridos lesimportanuncomino.

—Entalcaso,tieneustedsuertedequenoseamoscomolosorcos.—Owdentendió las riendas del caballo a un ayudante y cogió suavemente el brazodislocadodeVangerdahast—.Peronoestabapensandoenlosorcos.¿Sehadadocuentadelaseddesangrequedominaalatropa?

—¿Ustedtambién?—preguntóasuvez,mirandoalclérigoalosojos.—Porsupuesto...Yaúnlasiento.—Owdenlevantóunpieyposólaplanta

en la caja torácica del mago, antes de tirar de su brazo—. Fue cosa de laghazneth,algoparecidoalalocuratransitoriaqueprovocóenustedlacriaturaalaqueseenfrentó.

Vangerdahastgritóhastaquesubrazovolvióacolocarseenlaarticulación,

Page 216: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

despuéscayóderodillaseintentóaguantareldolor.—Lafierezadeunabatallapuedeenloqueceracualquiera—dijoOwden—.

¿Quécreequepasarácuandolasghaznethsesientanpreparadasparaenfrentarseanosotros?

—Supongoqueyaconocelarespuesta—gruñóVangerdahast.Sepusoenpiecon dificultad e intentó levantar el brazo. Sólo consiguió levantarlo unoscentímetros, y el esfuerzo le hizo lanzar un silbido de dolor—. ¿Se le ocurrealgunasolución?

—Eso depende de Chauntea.—Owden apoyó la palma de sumano en elhombrodelmago—.Aquí,ladiosaleayudaráaustedasuperareldolor.

—No necesito su ayuda —rechazó Vangerdahast, apartando su brazo. Acontinuaciónsacóunapocióncurativadelinteriordesutúnicayselabebió—.Ylarealcompañíaexpedicionariatampoconecesitasuprotección.

OwdenseñalóelvialvacíoqueVangerdahastteníaenlamano.—Eseelixir fuebendecidoporundios.Noexisteningunadiferenciaentre

beberloyaceptarlaayudadelaMadre.—Ladiferenciaesqueel tesororealpagósusbuenasmonedasdeoropara

comprarlo.—Vangerdahast sentíaensu interior la fuerzamágicade lapoción,mientras actuaba en su organismo atenuando el dolor de su hombro. Acontinuación,conelbrazoheridoarrojóelvialvacíocontraunaroca—.EsoesloúnicoqueTempusesperaqueledemosacambio.

—Nosoysuadversario,Vangerdahast—dijoOwden,sacudiendolacabeza.—Entonces,¿porquéconvencióalreydequedebíaacompañarme?—Porquesemeocurrióquequizánecesitaríamiayuda.—Enlamiradade

Owdensereflejósurabiacontenida—.Nointentoarrebatarlesulugar.Tanalastaesloúnicoquemepreocupa.

—No es Tanalasta lo único que le preocupa. —Vangerdahast arrancó lasriendasdeCadimus demanosdel ayudantedeOwden,y subióa la silla—.SiestuvierapreocupadoporTanalasta, aestasalturasyahabría regresadoustedaHuthduth.

ElmagotiródelasriendasdeCadimusparaquevolvieragrupasendirecciónalsicomoro,conscientedequeelclérigonoleperderíadevista.Pesealadurezadesuspalabras,Vangerdahastsabíaqueelmaestredeagriculturaeraunhombrebuenoycapacitado,yéseeraprecisamenteelquidde lacuestión.Despuésde

Page 217: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

haber curado al rey y al mago supremo del mal de la locura, Owden habíaganadomuchos enteros entre la gente influyente, incluido el sabio de la corteAlaphondarEmmarask,muchosdelosnoblesquealprincipiosehabíanopuestoa la fundación de un templo real y, lo que aún eramás importante, el propioAzoun.NosólohabíainsistidoelreyenenviaraOwdenparaqueencontraraaTanalasta, sino que había recurrido a los clérigos de Chauntea para que loayudaranaélyaMerulaarescataralareina.

Dada la decencia característica del carácter de Azoun, el rey se sentiríaagradecidoyobligadoaexpresarsugratitudalosmonjes,estableciendoquizásel templo real de Tanalasta, cosa que Vangerdahast no estaba dispuesto apermitir.PormuycapazydefiarquefueseOwden,noexistíaningunagarantíadequesusucesorfueratanútilparaelreino,odequeChaunteanoloutilizaraparaimponersuvoluntadenelreino.HabíantranscurridomásdemiltrescientosañosdesdequelosantiguoselfosencargaronaBaeraubleEtharrquesirvieraalprimerreycormytacomoconsejeroymagosupremo.Desdeentonces,eldeberdelmago supremo había consistido en proteger tanto al rey como a su reino,conduciéndolosporelcaminomásseguro.Vangerdahastnoestabadispuestoapermitir que la tradición muriera con él, no cuando el mago supremo habíaconstituido la garantía más efectiva de la seguridad del reino durante miltrescientoscincuentaaños.

Cuando Vangerdahast llegó al nudoso sicomoro, encontró al viejoAlaphondarexactamentedondehabíasupuesto:dandovueltasconairedistraídoalrededor del tronco, entrecerrando la mirada ante los signos que copiabadespuésensudiario.Elsabiorealestabatanabsortoquenisiquierareparóenlapresenciadelmago,hastaqueCadimuslediounlametónenelcuello.Delsusto,arrojóalaireeldiarioyellápizyprofiriótalgrito,quelamitaddelosmiembrosdelacompañíasubieronporlacolinaparaasegurarsedequenocorrierapeligro.

—¿Ybien,viejoamigo?—preguntóVangerdahast,levantandolamanoparaquelosjinetescomprendieranquetodoestabaenorden—.¿Hamerecidolapenaelviaje?

—Escurioso,Vangerdahast—respondióAlaphondar,ajustándoselas lentesylevantandolacaraparamiraralmago—.Esmuyextraño,créame.

Sielsabiosehabíaenfadadoporhaberloasustado,suvoznolodelató.Selimitóa recuperarel lápizyeldiariodelsuelo,ysevolvióhaciaelárbolpara

Page 218: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

continuarconsutrabajo.—EstossignoscorrespondenalPrimerReinado—dijo—.Dehecho,lomás

probableesquepuedanperteneceralperíodoposterioraThauglor.—¿AlPrimerReinado?—preguntóVangerdahast,quenoteníalamenoridea

deloqueleestabadiciendo—.¿DetiemposdeFaerlthann?—Enesecasoseríafaerlthanniano,¿ono?—Alaphondarlemiróporencima

de las lentes, como si el mago real fuera el hijo tonto de una familia noblesegundona—.MerefieroalPrimerReinado,alquehabíaentiemposdeIliphardeloselfos.

—¿El señor de los Cetros? —preguntó Vangerdahast, sorprendido—. ¿Alprimerreydeloselfos?

—Eso sería el Primer Reinado —asintió Alaphondar, con gesto deresignación—.Deesohaceaproximadamentemilcuatrocientoscincuentaaños,cienañosantesdequeFaerlthannfueracoronado.Dehecho,másdecincuentaañosantesdequelosObarskyrseasentaranenlosbosques.

Vangerdahast observó los páramos pelados que los rodeaban, intentandoimaginarlavegetaciónsalvajequeloshabíacubiertocuandosirvierondehogaraloselfos.

—Perolossignosnosonlomásinteresante—dijoAlaphondar.—¿Deveras?—Esteárbolnoestanantiguo—dijoelsabio,haciendoungestodenegación

—.Estrescientosañosdemasiadojoven.—Yustedlosabepor...—empezóadecirelmago,peseaserconscientede

quenodebíadudardelsabio.—Poresto.Alaphondar se volvió para recorrer los signos con la yema de los dedos.

Inmediatamente,lavozrasposayangustiadadeunadoncellaelfaresonócomosiestuviera presente, y se alzó a espaldas de Vangerdahast un murmullo decaballosnerviososyjinetessorprendidos.

Alaphondartradujolacanción.

Estehijodelhombre,quesucadáveralimenteesteárbol.Elárboldeestecadáver,quecrezcamientrasnutra.Elespíritudeesteárbol,paraqueelloslepermitanregresar

Page 219: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

cuandocrezca.Asíduermenquienestraenladestrucción:unsueñosindescanso.Asísiembranquienestraenlapena:semillasdesuruina.Asímueranquienessiembranlamuerte,yloshijosdesushijos.Venidaquí,LocoreyBoldovar,yyacedentreestasraíces.

Alterminarlacanción,Vangerdahastahogóungrito.—¿Boldovar?—¿Locomprendeahora?—dijoAlaphondar,excitado,haciendoungestode

asentimiento.Elsabiorecorrióconeldedounconjuntodebuclesqueparecíanidénticos a cualesquiera otros—. Murió trescientos años antes de que estosbuclespasarandemoda.

—Tengo que confiar en su buen juicio, viejo amigo—dijo Vangerdahast.Sabía cómo hacer cantar algunos signos, pero no podía leerlos y menos aúndeterminaraquéépocacorrespondían—.¿Quésignifica?

—¿Quequésignifica?—Alaphondarparecíaconfundido—.Bueno,puesnosabríadecirle.

—Sinembargo,lomásacertadoseríapensarqueunelfograbóestossignoshará trescientos años. —Vangerdahast vio por el rabillo del ojo que losexploradores que habían salido en busca del rastro de Tanalasta estabanregresando. El capitán ascendía al galope por la colina para informarle delresultadodesusinvestigaciones.

—Oh,sí—respondióAlaphondar;haciendoungestodeasentimiento—,yloqueaúnesmásimportante:habíavividosoloyseparadodesugentealmenosdurante todo ese tiempo. ¿Tiene usted la menor idea del efecto que tamañasoledadcausaríaenunelfo?

—Sí,me temo que sí—respondióVangerdahast observando los signos, alrecordarlaspalabrasamargasyaquelangustiosotonodevoz.

—Quizás averigüe algomás en el interior de la tumba—dijoAlaphondarmientrasseagachabaparaapartarlasraíces.

—Notenemostiempoparaeso.—Vangerdahastsevolvióhaciaelcapitándelosexploradores,queenaquelprecisoinstantedeteníasumonturajuntoalmago—.Nosvamos.

—¿Quenosvamos?—Alaphondarseparóenseco—.Todavíanopodemos

Page 220: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

irnos. Al menos tardaremos un día en acotar este lugar, y un día más paraempezarlasexcavacionespreliminares.

—Nodisponemosdeundía.—Vangerdahastlevantólamiradaalcielo,peronoencontrónirastrodelaghazneth—.Quizánotengamosniunahora.

—Pero...—Ésta es una expediciónmilitar,Alaphondar—interrumpióVangerdahast,

llamandolaatencióndelcapitándeexploradores—.NuestroobjetivoconsisteenencontraralasprincesasytraerlasdevueltaaArabel...yrápido.

—Por supuesto... ¿Cómo habré podido olvidarlo? —La excitacióndesapareció de la mirada de Alaphondar. Se dirigió hacia su caballo, peroentoncesseleocurrióalgoysevolvióhaciaVangerdahastparasugerir—:Quizáquieranustedesadelantarse...

—Aestasalturasyahavistoadosghazneth—recordóVangerdahast—.¿Deverasestádispuestoaenfrentarsecaraacaraconunasoladeellas,auncontandoconunadocenadeDragonesPúrpuracomoescolta?

Alaphondartorcióelgesto,yvolvióadirigirsehaciasucaballo.—Olvídelo.—¿Han encontrado el rastro?—preguntó el mago supremo al explorador.

ÉstehizoungestodeasentimientoyseñalóhaciaunvallesituadoentrelospicosdelasOrejasdeMula.

—Hemos encontrado algunas huellas antiguas de cascos, que se dirigen alsur,alinteriordelasmontañas.

—Eso sí son buenas noticias—dijo Vangerdahast, soltando un suspiro dealivio—.QuizáTanalastahayarecuperadolarazónydecididoquehallegadoelmomentodevolveraCormyr.

Page 221: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

E15

laireestabaimpregnadodeunoloracarnefétidaytierramohosa,yenlaestrecha tumba Tanalasta se sintió febril y mareada. Tenía el estómago

revuelto, la visión borrosa, y una corriente continua de escalofríos recorría suespinadorsal.Enelsuelo,anteella,habíaalgoquenoteníaningúninterésporver. Estaba cubierto con una armadura deslustrada y sobre las piedras viotambiénunaespadaherrumbrosayunescudomaltrecho,colocadobocaarriba.Lamalezayunmohoblancuzcosehabíanextendidocomogarrasporlacoraza,y la corona del yelmo estaba quebrada a fuerza de golpes. El rostro y lasextremidades quedaban ocultos por una gruesa capa del mismo moho quecorroía las junturasde laarmadura,y tansóloelblasónarrugadodeunáguilapintado sobre el corazón identificaba el cadáver como el deEmperelRuousk,guardiándelaEspadaDurmiente.

Sostuvolaantorchaantesíyseadentróenlatumbaporelpasajedeentrada.Como la que había inspeccionado anteriormente, ésta estaba rodeada de unaredecillaentrelazadaderaícesnegras,muchasdelascualeshabíansidocortadasdurante el combate que acabó con la vida de Emperel. Confundida entre lasraícesobservólamismatelarañadefilásticaquehabíavistoenlaotratumba.Elsueloestabacubiertodejironesdecueropodrido,botones,hebillasylassuelasmineralizadasdeunpardebotasgrandes.

Tanalastarecogióunpuñadoderestosparaexaminarlomástarde,ydespuéssequitólacuerdaquellevabaatadaalacinturamientrasseacercabadenuevoalcadáverdeEmperel.Elolorquedespedíalerevolvióelestómago,yapenastuvotiempodeapartarseunpocoantesdevomitartodoloquellevabadentro.Cuando

Page 222: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

dejó de sentir arcadas, le temblaban las piernas y las sienes. La princesa sereprochó a símisma ser tan impresionable; la podredumbre formaba parte delciclo vital, tanto como el crecimiento, y tratar el fenómeno con aversiónconstituíaunaafrentaalaMadre.

Tanalasta respiró profundamente y volvió junto al cadáver. Pese a sudeterminación, se sintió débil, algo mareada y temió desmayarse si tocaba elcuerpomohoso.Duranteuninstanteconsiderólaposibilidadderetirarseydejara Emperel donde estaba, pero enterrarlo en aquel lugar que rezumabamaldadhubieraconstituidounagraveafrentaalamemoriadeuncaballerotanvalientecomo él. La princesa sujetó la antorcha entre dos losas y cogió la espada delguerrero.Deslizólahojatraslaespalday,resoplandoporelesfuerzo,lovolvióde lado.Después lomantuvo en esa posición con el brazomientras pasaba lacuerdaporsuespalda.

Cuandohubo terminado le dolían las articulaciones y apenas tenía aliento.Rodeóelcadáverydeslizólaespadaalotrolado,yentoncesadvirtióquealgolabloqueaba.Descubrióunaoscuratiracubiertaporunacapademoho.Tanalastaaprovechólaespadapararetirarelmoho,cogiólatirapegajosaytiródelabolsaqueelcadáverdeEmperelhabíamantenidooculto.

Era una bolsita como la que utilizaban los mensajeros; tenía un acabadoimpermeable y una solapa que, al cerrarse, podía hacer frente a toda clase decondiciones atmosféricas. Sin embargo, la bolsa no estaba cerrada y la solapaparecíadobladasobresí,porloqueTanalastadedujoquesólopodíahaberunarazónparaqueEmperellallevaraabiertaenelmomentodesumuerte.

—QuelaMadretebendiga,EmperelRuousk.La princesa retiró la bolsa cubierta de moho, y después se ayudó con la

espadaparaapoyarde ladoelcadáverdeEmperelyasegurarsucuerpocon lacuerda.Lacogióconambasmanos,hizounfuertenudoytirótresvecesdeellapara asegurarse de que estaba bien firme. La cuerda se tensó, zarandeó elcadáver de Emperel y lo arrastró hacia la salida. Cuando llegó al umbral quedabaalpasadizo,lacabezadeEmperelgolpeócontraeldintelyseprodujouncrujidoahogadoalaalturadesucuello,obligándolaapararseenseco.

Sinpensarlodosveces,TanalastaacercólamanoalanucadeEmperelparaapartarla del obstáculo y tocó algo pegajoso, una masa fibrosa de tejidoputrefactoypeloenganchadoyhúmedo.Consiguiódominar lasarcadasquela

Page 223: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

sacudíanyarrastróelcadáverporelpasadizo,despuésdecogerunpuñadodetierra con lamanoy limpiársela comopudo.Pormuycontrariadaquepudierasentirsesudiosa,laprincesanopodíasentirlamanoembadurnadadesangreymoho.

Encuantosehubolimpiadolamano,Tanalastaconcentrósuatenciónenlabolsaylevantólasolapa.Ensuinteriorencontróunpedazodecarbón,unlápiz,undiarioencuadernadoencuero,algunosanillossimilaresalossuyos(salvoelquelucíaelsellodeunáguilarampante,queformabapartedelequipohabitualdeunoficialdelosDragonesPúrpura)yvariosplieguesenvueltosensedaqueaún estaban en buenas condiciones. Bajo la caprichosa luz de la antorcha,Tanalasta desplegó el primer rollo de seda.Medía unos treinta centímetros deancho,yteníaunoscortespronunciadosenlasesquinas,locualdemostrabaquelohabíancortadodeunpedazomásgrande.Laprincesavolvióaenrollarlo,ydespuésdesenrollóotro.

Emperelhabíapasadoelcarbónsobreaquellatelaparatomaruncalco,yajuzgarporlaerráticadisposicióndelasmanchasdecarbónparecíalacortezadeunaliso:peroenlaimagenennegativodistinguióloscaracteresserpentiformesde la antigua escritura élfica. Era difícil de leer; sin embargo, Tanalastadistinguióloscaracteresypodíaasegurarqueeranprácticamenteidénticosalosque habían encontrado hacía unos días en los páramos. Había un epitafiopeculiar, el que se refería al cadáver enterrado en el árbol, el cadáver quealimentaría las raícesparadespuésseralimentadoporellas:«Paraqueellos lepermitanregresarcuandocrezca».Después,lamaldiciónenlaquesecondenabaaquienessembrabanladestrucción,amatara loshijosdesushijos.Laúltimalínea,elrequerimiento,eradiferente:

Venidaquí,LealSuzara,yyacedentreestasraíces.

Tanalastaprofirióungritoalleeraquellaspalabrasysoltóelpedazodeseda.AligualqueelreyBoldovar,Suzaraeraunantepasadosuyo;dehecho,eraunodelosantepasadosmásantiguos.SehabíacasadoconOndethObarskyrantesdeasentarseenlosbosquesyconstruirlacabañaenloque,alcabodeuntiempo,acabaríaporconvertirseenCormyr.Dehecho,laciudaddeSuzaildebíaaellasunombre. Claro que cabía la posibilidad de que se tratara de otra Suzara, peroTanalasta no lo creía. Suzara nunca había sido un nombre muy popular en

Page 224: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Cormyr,puesse leatribuían fragilidadyegoísmo.Se le reprochabaque,alnohaberconvencidoa suesposopara regresara laconfortable Impultur, lohabíaabandonadollevándoseconellaalmenordesushijos.

Sinmolestarse en volver a enrollar el pedazo de seda, Tanalasta sacó otrorollo de la bolsa y lo desplegó.Aquél era un duplicado de la invocación queacababadeleerhacíaunosminutos,antesdeentrarenlatumba,enlacortezadelárbolbajoelcualseencontraba.Hacíareferenciaauntraidorfamoso,MelinethTurcasson,quehabía traicionadoal reyDuar, suyerno,alvender laciudaddeSuzailaunabandadepiratasacambiodequinientassacasdeoro.

Laprincesaabriólosdemásrollosdesedatandeprisacomopudo,perosóloencontróelnombredeladyMerendil,unainfelizaquienseleocurrióutilizaraun aprendiz de mago supremo para que matara al primer príncipe Azoun.Tanalastasintióciertoalivioalleersunombre,pueslosdemástraidoreshabíansidoantepasadossuyos.

TanalastasacódelabolsaeldiariodeEmperel.Estabaescritodederechaaizquierda en alto halfling, con intención de despistar a cualquier persona quepretendiera leerlo,pero laprincesa tansólonecesitódeunminutopararepararen la triquiñuela,yotromáspara recordar lasnormasbásicasdel lenguaje.Laprimerapartedeldiario incluíaunmontónde relatos sin importancia sobreunviaje de dos días de duración al mar de la Luna, como prolegómeno a lainvestigación de una serie de informes que aseguraban que los orcos seconcentrabanenlasTierrasdePiedra.EltextoempezabaacobrarinterésapartirdelmomentoenqueEmperel relatabasu llegadaa lapoblaciónamuralladadeHalfhap,dondeunadécimapartedelaguarniciónhabíadesaparecidotrassalirenpersecucióndeunasesino.

Al parecer, el extraño había llegado una noche a Halfhap, borracho,desafiando a quien quisiera escucharle sobre cómo pretendía vengar el tratoinjusto y vejatorio que había sufrido su familia a manos del rey. Cuando eltabernerolesugirióquesefueraconsuodioaotraparte,elextranjerolearrancólacabezaconlasmanos,saliódelatabernaydesapareció.

El comandante del lugar envió una compañía de Dragones Púrpura enpersecucióndelasesino,peronuncaregresó,yfuepocodespuéscuandoEmperelpasó por la guarnición y se enteró de lo sucedido. Después de hacer algunaspreguntas,elguardiánsalióenpersecucióndelasesinoysiguiósurastrohastael

Page 225: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

interior de un árbol, donde había una tumba.Allí se enfrentó a él.Durante elcombate,reconocióalhombrecomoGasparCormaeril,unodeloscolaboradoresde Aunadar Bleth que había muerto durante el asunto abraxus, pero que, dealgúnmodo, había vuelto a la vida.Había una anotación almargen en la queseñalabaque,despuésdehaceralgunasaveriguacionescuandovolvióaHalfhapparaconseguirotrocaballo,habíallegadoalaconclusióndequelomásprobableeraqueaqueltipofueraXanthon,unprimodeGasparqueseleparecíamucho.

Tanalasta interrumpió la lectura.Conocía aXanthonpor tener famade serunodelosprimosmás«aventureros»deRowen;Xanthon,juntoconThaerilon,Boront, Cheldrin, Flaram y Horontar, viajaba por las Heartlands en busca deriqueza y emociones. Por lo que recordaba, obtuvieron más emociones queriqueza, ya que con frecuencia tuvieron que recurrir al rey Azoun para queconvenciera a algún alcalde omonarca extranjero de que nomerecía la penaejecutarlospor losproblemasquesurgiríanentreambospueblos.Azounnuncatuvomayoresproblemasparaapoyarlos,almenoshastaqueGaspartomóparteenelasuntoabraxus,puestoquelosCormaerilnuncaseolvidabandedevolver,multiplicados por cuatro, los gastos que tales molestias ocasionaban al rey.Desde que la familia había caído en desgracia, Tanalasta había sabido queBorontyCheldrinhabíanperecido,yqueHorontarseganabalavidalimpiandolasalcantarillasdeDarkhold.

Volvió a concentrarse en el diario. Para sorpresa de Emperel, seguir aXanthonhabíaresultadomásdifícildeloprevisto.Elasesinodemostróqueerarápidoyfuerte,yalparecerabsorbíalamagiadecualquierarmaencantadaqueusarancontraél.Cuando terminóelcombate,Emperelhabíaperdido lamayorpartedesusobjetosmágicos,incluidasladaga,lacapayelanillodeselloqueutilizabapara ponerse en contacto conVangerdahast.Tanalasta nopudo evitarpreguntarsequéotraspersonasllevaríanconsigounodeaquellosanillos.

Finalmente,EmperelhabíamalheridotantoaXanthon,queelasesinomatóalcaballodesuperseguidoryhuyó.Emperelvolviódenuevoalpuebloenbuscadeotrocaballoyotrorollodeseda;despuéssedirigiódenuevoalabetoehizouncalcodelacorteza,antesdereanudarlapersecución.Tanalastaexaminólosrollosdeseda,eldeSuzaracorrespondíasindudaalacortezadeunabeto.

Emperel tardóunosdíasenencontrarel rastrodeXanthon,peroal finalsehabía cruzado con una tribu de orcos que, al parecer, habían visto una figura

Page 226: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

sombría corriendo en dirección a un «árbol demoníaco» que estaba cerca deBatalladelosHuesos.Emperelnotardóenencontrarellugar,dondedescubrióunolmoconlosmismossignosgrabadosqueenlacortezadelabetogigante.

Tanalastaestudiólasanotacionesynotardóencomprobarquesetratabadela inscripción correspondiente a la tumba de ladyMerendil. Leyó los relatosreferentesalasdostumbasqueconocíayqueEmpereltambiénhabíavisitado:elsicomorodeBoldovarenlospáramos,yelcastañodeMelinethenlafortalezadelostrasgos.

La última anotación del diario era una críptica y prácticamente ilegiblereferencia a que estaba a punto de capturar a Xanthon, seguida de dosexclamacionesinexplicables:«¡QueHelmnoslibre!¡Suorgullosuponenuestraperdición!».

Cuandolaprincesacerróellibro,descubrióquesuesfuerzoenconcentrarselehabíaprovocadodolordecabeza.Letemblabanlasmanosysentíalossurcosque trazaba el sudor al resbalar por su piel. Devolvió el diario a la bolsa deEmperelyempezóaenrollar los trozosde seda.Nose leocurriópensareneltiempo que había pasado sentada en aquella tumba, hasta que oyó la voz deAlusairllamándoladesdeelpasadizodeentrada.

—¡Queme afeiten los huesos!—Eraunamaldición favorita entre algunosjugadores a quienes la suerte había dejado de sonreír—. ¿Qué diantre estáshaciendo?¡Meparecequetienesfiebre!

—Estoybien.—Tanalastalevantólamiradayobservó,porprimeravez,queprácticamentesehabíaagotadolaantorcha.Noseleocurriópensarquesudolordecabezay lasnáuseaspudierandeberseaotracosaqueno fuerahaber leídobajoaquellaluzescasaoelhedorqueimpregnabaellugar—.HeestadoleyendoeldiariodeEmperel,enelquehablabadesumuerte.

—¿Lahadescritoconpelosyseñalesparalaposteridad?—Alusairsesentóenelpasadizo.NoteníamejoraspectoqueeldeTanalasta—.NomeparecemuypropiodeEmperel.

—Yo no lo conocía, así que no sabría qué decirte. —Tanalasta señaló labolsadeEmperel,yañadió—:Pero teaseguroqueeramuyconcienzudo.Estediarionosahorrarádiezdíasdeinvestigación.

—¿Investigación? —preguntó, burlona, Alusair—. No habrá ningunainvestigación.Contodasesasghaznethvolandoasusanchas,nopiensoarriesgar

Page 227: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

tuvidaenvano.Volvemosacasa.—No es por mí por quien deberíamos preocuparnos —replicó Tanalasta,

guardandounodelosrollosdeseda.—¡Por vida de! —Alusair sacudió la cabeza con fuerza. Tanalasta había

transmitidoelmensajedesupadreasuhermana,perosólohabíaconseguidoqueserieradeella—.Yatehedichoqueamínomemetasenesto.Esoesalgoquedebéisresolverelreyytú.

—Yodiríamásbienqueesentreelreyyquienélelijacomosucesor.—¿Qué piensa hacer? ¿Ordenarme que sea reina?—Alusair avanzó como

pudohastasentarsejuntoasuhermana—.Losiguientequeharáseráordenarmequemecaseconalgúnbufónquetengauntítulolargoyuna...espadacorta.

Tras gatear por el pasadizo Alusair había quedado hecha unos zorros y,ahora,además,estabamanchadaconelmohoyellodoquecubríanelcadáverdeEmperel,peroalparecernohabíareparadoenello.Cogiólaantorchaymiróasuhermanaalosojos,antesdecolocarlapalmadelamanoensufrente.

—¡Perosiestásardiendo!—CogióaTanalastaylaanimóaquesepusieraenpie,dejandomásdeunadocenaderollosdesedaesparcidosenelsuelo—.Nodebípermitirqueentraras.

—Alguienteníaquehacerlo,princesa.—Rowenaparecióenelinteriordelatumba,queenaquelmomentoparecíaellugarmástransitadodetodoCormyr—.YTanalastasabemejorquenadieaquéobedecetodoesto.

—Pero también es la princesa de la corona.—Alusair empujó aTanalastaante Rowen, en dirección a la salida—. Ayúdeme a sacarla de aquí para queGaborlpuedaverla.

—¡Espera!—gritóTanalasta,extendiendosumanohacia losrollosdeseda—.Necesitoloscalcos.

—Notantocomonecesitassalirdeaquí.Vamos.Alusairagachólacabezadesuhermanaeintentóempujarlahacialasalida,

peroTanalastaseagarróalasparedesdelpasadizo.—Nolocomprendes,sonnuestrosantepasados.—Está delirando —dijo Rowen. Cogió uno de los rollos de seda y lo

inspeccionó—.Nohaynadaescritoenellos.—Noestoydelirando—dijoTanalasta,queseguíaempeñadaennoirsesin

ellos—.Algunosdeestoscalcosmuestranlossignosgrabadosenlacortezade

Page 228: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

losárboles;enellosfiguranlosnombresdelasghazneth:SuzaraObarskyr,elreyBoldovar,MirabelleMerendilyMelinethTurcasson.

—MirabelleMerendilnoesantepasadonuestro.—AlusaircogióelbrazodeTanalastaylodoblóasuespalda—.Notengotiempoparaesto.Lasghaznethnotardaránenvolver.

Cogióelbrazolibredesuhermanaylaempujóhacialasalida.—¡Y Xanthon Cormaeril es el que los está liberando! —gritó Tanalasta,

volviendolacabeza.—Unminuto—dijoRowen,cogiendoaAlusairporelhombro.—Nohaytiempo.—PeroAlusairsedetuvo,aunqueunossegundosdespués

la empujó hacia la salida, donde lamiró con expresión preocupada—: ¿Estássegura?

Tanalasta asintió, cayó de rodillas y rebuscó entre los rollos de seda quellevabaenlabolsayqueteníanuncalco.DespuésselomostróaRowen.

—¿Reconoceslossignos?—Pero ¿qué relación tiene Xanthon con ellos? —preguntó, haciendo un

gestodeasentimiento.—A menos que me equivoque, él está excavando las tumbas donde

descansanlasghazneth—respondióTanalasta.AcontinuaciónexplicólahistoriadelaaparicióndeXanthonenHalfhapy

losesfuerzosdeEmperelporseguirsurastro.Finalmente,completó lahistorialeyendolaúltimaycrípticaanotacióndeldiario.

—¿Suorgulloesnuestraperdición?—repitióAlusair—.¿Quésignifica?—Esmás,¿quiéngrabóesossignos?—añadióRowen—.Seguroquenofue

Xanthon.—No lo sabremos hasta que lo hayamos capturado—respondióTanalasta,

haciendoungestodeimpotencia—.Ohastaqueencontremoslosdemásárboles.—O hasta que Vangerdahast lo descubra —dijo Alusair—. Que es,

precisamente, lo que vamos a hacer. Nos dirigiremos hacia el paso deMarshview, en el enclave de la montaña del Trasgo. Después, en cuantodispongamosdeunoscuantosDragonesPúrpuraparacontenerlosataquesdelasghazneth,leenviaremosunmensajeparapedirlequesereúnaconnosotros.

TanalastayRowenintercambiaronunamiradadepreocupación,gestoquenopasódesapercibidoaAlusair.

Page 229: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Qué?FueRowenquienrespondió.—Durantevuestra...discusiónacercadequiénesrealmentelaprincesadela

corona,huboundetallequenotuvimosocasióndemencionar.—¿Ynopiensausteddecírmelo?—preguntóAlusair,molesta.—ProbablementenopodamoscontarconVangerdahast—dijoTanalasta—.

Seríapeligrosoponernosencontactoconél.—DijistequehabíaregresadoaArabel.—Y así es. —Tanalasta reunió las pocas fuerzas que le quedaban para

levantarlabarbilla—.Peronosotrosnosnegamosaacompañarle.—Nosapartamosdeélenelúltimomomento—dijoRowen—.Másbienfue

unaccidente...—¿Quehicisteisqué?—AlusairsevolvióhaciaRowencomouncapitánde

losDragonesPúrpuradispuestoahacerpasarunmalratoaunodesushombres—. ¿Decidió usted arriesgar la vida de la princesa de la corona y desafiar almagosupremo?

—Fuecosamía.—TanalastaseinterpusoentreAlusairyelexplorador—.Yofuiquien...

AlusairapartóaTanalastadeunempujónysiguióabroncandoaRowen.—¿Esustedunestúpido,oestáconchabadoconsuprimoXanthon?Ajuzgarporlaexpresióndesurostro,aRowennolehizoningunagraciaesa

acusación,peroselimitóaapretarconfuerzalamandíbula.—¡No tienes ningún derecho a tratar así a Rowen!—Tanalasta empujó a

Alusair, y dio un paso hacia ella paramirarla a los ojos—. FueVangerdahastquien se extralimitó. No tenía ningún derecho a teletransportarme a ningunapartesinmipermiso.

—No me digas que vosotros dos... —dijo Alusair después de estudiar laexpresióndesuhermana,enarcarunacejaymiraraRowen.

—¡Oh,no!—exclamóRowen—.Nadadeeso.—Esunasuntoquenoteatañe—dijoTanalasta—.Comotampocoatañea

Vangerdahastpasearmeportodoelreinocomosifueraunperrolazarillo.—¿Y cuándo abandonasteis al pobre Vangerdahast? —preguntó Alusair,

despuésdeobservaraRowenduranteotropardesegundos.—Hacesietedías—respondióTanalasta—.Enloscañonesquehaybajola

Page 230: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

tumbadeBoldovar.—Elsicomoro—puntualizóRowen.—Habéishechoelcaminoapie—fruncióelceñoAlusair—.Aestasalturas

yatendríaquehabervuelto.—Amenos...—Tanalastanopudoterminarlafrase.—¿Amenosqué?—preguntóAlusair.—A menos que haya seguido a nuestro caballo —dijo Rowen—. Nos

seguíandosghazneth,ytuvimosqueutilizarunseñuelo,yquizáVangerdahastlohayaseguidoaélenlugardeanosotros.

—¿Pordónde?—preguntóAlusairalcerrarlosojos.—Al sur de las Orejas de Mula —respondió Rowen—. Creo que eso lo

llevaríamásomenosaloestedeRedspring.—¿Qué pretendíais hacer? ¿Fugaros?—preguntó la princesa, haciendo un

gestodeincredulidad.Entoncesmiróasuhermana,yañadió—:Queconstequenoesunasugerencia.

—Nonecesitodeningunadetussugerencias—replicóTanalasta.—Yame lo temía—dijoAlusair. Lo consideró durante unmomento, y se

volvió a Rowen—. Las Orejas de Mula deben de encontrarse a dos días delcaminoqueseguimos.

—Comprendo—asintióRowen.—¿Qué? —preguntó Tanalasta, al darse cuenta de que algo se le había

escapado—.¿Quéesloquecomprendes?—Nopasanada—respondióelexplorador,cogiéndoladelosbrazos—.Me

irémañanaporlamañana,ydentrodediezdías,másomenos,nosreuniremosenlamontañadelTrasgo.—MiróaAlusair,yañadió—:Delmodoquemalgastavuestra hermana el tiempo, estoy seguro de que cuando lleguéis allí ya osestaremos esperando... Eso si Vangerdahast no me abandona colgado de lospulgaresencualquierparte.

—No. No permitiré que vayas —dijo Tanalasta haciendo un gesto denegación.

—Notecorrespondetomaresadecisión—replicóAlusair.—Síquemecorresponde.Anteshasdichoquesigosiendolaprincesadela

corona.—Peroéstaesmicompañía—replicóAlusairconunasuavidadsorprendente

Page 231: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—.Yaquísoyyoquiendalasórdenes.

Page 232: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

E16

nlasprofundidadesdeunatronerasituadaeneltercerpisobrillabanunpardepenetrantesojosinyectadosensangre,enmarcadosenunrostrocubierto

porunaoscuridadnegracomobocade loboyunhalodepeloenmarañado.Elrostro ceñía la amplia banda de una corona deslustrada, corona que parecía apunto de deslizarse sobre sus ojos. Aquello fue lo único que pudo distinguirAzoundelacriatura,desdeellugardondeseocultabaenlacarretera.Esperóaquedesaparecieranlosojosrojos,ydespuésseapartódelacortinajuntoalaquehabíaespiadolosmovimientosdelacriatura.

—Es laghazneth, sinduda.—Hizoungestode incredulidad,ydespuéssevolvióhaciaMereldaMarliir—.Cuentaustedcontodamigratitudportenertanbuenojo,ladyMarliir...Yporpermitirnosutilizarsumoradaparaespiarla.

Merelda,enjoyadayenfundadaenunvestidodenochepeseasermediodía,seinclinóprofundamenteanteelrey.

—Nosemerecen, sire.Despuésdeoír ladescripciónquehizoDaunethdeesamalvadacriatura,apenaspudecreerquepudieraverlaposarsesobrelaTorreBlanca.

—¿Yestásseguradequellevabaalareina,madre?—preguntóDauneth.Aligual que Azoun y los restantes miembros de la compañía reunidos en elespacioso vestidor de ladyMarliir, el guardián llevaba puesta la armadura decombate.

—Reconocería a la reina en cualquier parte... aunque no estuviera tanradiante como de costumbre —respondió Merelda, mirando contrariada a suhijo, antesdevolverse al reyyobservarlo conuna expresióndepreocupación

Page 233: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

dibujadaenelrostro—.DetodosloslugaresdeArabel,nosemeocurreporquérazónesaestúpidacriaturahadecididoelegiréste.Segúnheoído,eslaarmeríadelosmagosguerreros.

—Lo cierto es que parece increíble que esa ghazneth haya cometido laestupidez demostrarse abiertamente en cualquier lugar de la ciudadela—dijoAzoun, esquivando la pregunta que había insinuado Merelda. Dada suamabilidadalahoradepermitirlaentradadeunacompañíaenteradeDragonesen su propio vestidor, el rey no tenía ninguna intención de insultar a la damamintiéndola,perotampocoqueríaconfirmarlalocalizaciónsecretadelaarmería,uno de los rumores más extendidos del reino—. Pero sería una equivocaciónconsiderar estúpido a nuestro enemigo. Después de todo, ha conseguidoburlarnosdurantediezdías.

Azoun llamó laatencióndeDaunethcon lamirada,y luegosedirigióa lapuerta.

—Lamentopedirte esto,madre,peroestoy segurodeque lo entenderás—dijoelguardiánasumadre,comprendiendolasintencionesdelrey.

—¿Dequésetrata?—preguntóladyMarliir,adoptandounaexpresióncauta.—En realidad no tiene ninguna importancia. Llevamos todo el día

discutiendo la estrategia que vamos a adoptar, y nuestras gargantas estáncompletamente secas.Me preguntaba si serías tan amable de traernos algo debeber.—Sin esperar la respuesta, el guardián cogió a sumadredel brazoy laacompañóhacialapuerta—.Enviaríaalossirvientes,porsupuesto,perovamosahacerplanesynopuedopermitirquenadiequenoseadelamayorconfianzaseacerquealahabitación.

—Debíhabermedadocuenta.—LadyMarliirmiróradianteasuhijoporelhalagoqueacababadehacerle—.Vaciaréestaaladelcastillo.

—Sí, le agradeceremos mucho su prudencia —intervino Azoun. Apenaspudo contenerse hasta que la mujer hubo abandonado la estancia, antes devolverseaMerulaelPortentoso—:¿Acuántospodríallevaralaarmería?

—¿De golpe? —Merula miró a su alrededor, estudiando las armaduraspesadas con que iban ataviados sus compañeros, cerró los ojos y realizó unaserie de operaciones mentales—. No más de cuatro sin contarme a mí, peropodríallamara...

—¡No!—exclamóAzoun—.Esoexigiríarecurrira lamagiaodisponerde

Page 234: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

tiempo,ycualquieradeambascosaspodríacostarlavidadelareina.El rey sevolvióhacia loshombresque formabana suespalda.Aunqueno

habíapedidovoluntarios,descubrióenlosojosdeaquelloshombreslafervienteesperanzadequeloseligieraparairconMerulaalatorre.AzounpusosumanosobreelhombrodeDauneth,ehizounaseñaadosDragonesPúrpuradecuyadestreza con la espada tenía sobrada constancia, por no mencionar quemanejabanlaballestaalaperfección.

—¿Quéleparecenestoshombres?—preguntóAzounaMerula.—Tanbuenoscomocualquierotro—respondióelmago—.¿Quémedecís

delcuartohombre?—Estáustedhablandoconél,evidentemente.—Pero, sire—protestóMerula,abriendounosojoscomoplatos—,esmuy

arriesgado...—Esmireina—replicóAzoun—.Esmás,esmiesposa.—Sí,perovosmismohabéisseñaladolasagacidaddelaghazneth—dijo—.

Podríatratarsedeunatrampa.—Merula,noleestoypidiendosuopinión.—Yaunquenolofuera—añadióelmago,sindejarseintimidarporeltono

inflexibledelrey—,contodaseguridadsufriremoselaturdimientoposterioralateletransportación.Duranteunossegundosestaremosprácticamenteindefensos.

—¡Merula!—gritóelrey.Elmagoguardósilencio,peronoparecíaarrepentidodeloquehabíadicho.

Mungan Kane, uno de los clérigos de Chauntea que habían acompañado aOwden,diounpasoalfrenteantesdedirigirsealrey:

—Sire,simelopermitís,Merulatienerazón.Elmago lomiró con ciertadesconfianza,mientrasAzoun lohacía con los

ojosdesmesuradamenteabiertos.—¿Acasosehanpropuestodesafiarmetodos?—Jamássemeocurriríatalcosa.—Munganlevantólaspalmasdelasmanos

paratranquilizaralrey—.PerohabéisobradoelMisterioconlareinaFilfaeril,ylo correcto es que vayáis a rescatarla, pero el aturdimiento posterior a lateletransportación será sin duda un problema. Si la ghazneth no os mata debuenasaprimeras,avosocualquierotro,podríahuir.

—Tiene usted razón —admitió Azoun, después de considerarlo—. Mi

Page 235: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

agradecimiento.—Quitó la capa de hombros deMerula y se volvió hacia sushombres—. Necesito un voluntario para hacer guardia en lo alto de la TorreBlanca.Quizátengaqueenfrentarseasolasconlaghazneth.

Todos levantaron la mano. Azoun inclinó la cabeza en señal deagradecimiento,ytendiólacapaauncapitándelosDragonesalqueconocíaporserperspicazyágilconlaespada.

—¿Sabeustedcómodebeutilizarlacapa?—Asíes,sire—asintióelcapitán—.Heservidoenmásdeunaocasióncon

losmagosguerreros.—Sepusolacapasobreloshombrosehizounaprofundareverencia—.Laghaznethnopasarállevándosealareina.Silointenta,seráunhonorparamímorirparaimpedírselo.

Azounasintió congesto severo, ypuso sumanoen el hombrodel capitánantesdevolverseaMerula.

—Hayotroasuntoimportante,sire—dijoMunganKane,aldardenuevounpasoalfrente—.Yodeberíaacompañaros.

—¿Paraasegurarsedequeeltemplorealestérepresentadoenlabatalla?—preguntóMerulaconironía.

—Para asegurarme de que esa criatura maligna no le prive a usted de suinteligencia...comohizoconVangerdahast—replicóMungan.

—Yonomalgastaríamimagia...—repusoMerulaconlamiradafebril.—Esmimagia—interrumpióAzoun—.Amenosque losmagosguerreros

yanosirvanalasórdenesdelrey.—Esono seríaposible,majestad.—Merula se inclinó anteAzoun, aunque

mantuvo sumirada clavada en el clérigo—.Agradezco al rey el quemehayahechocomprenderelerrordemiafirmación.

—No se preocupe —dijo Azoun—. No podemos olvidar los valiososservicios proporcionados por el maestre de agricultura Owden y suscolaboradores, cuando fue necesario recuperar la salud mental del magosupremo...ylamía.Quizávolvamosarequerirsusserviciosparalareina.

—Por supuesto —admitió a regañadientes Merula—. Si el rey deseaprescindirdeunodelosDragonesPúrpuraporunsimpleclérigo...

—Ésenoeselcaso.—AzounsevolvióaMungan—.Elcombatedependedelosprimerosminutos,ysonmásnecesarios lasespadasquelacordura.Muchometemoque tendremosquerecurriranuestracordura losuficientecomopara

Page 236: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

que el resto del contingente de tropas llegue sin necesidad de lateletransportación.

—Sinopuedoestarconvos—dijoMungan,acongojado—,quizápermitáisque laMadreos acompañeenmi lugar.—Rebuscóen su túnicaydesenvainócincoamuletosdemaderatalladosenformadeunicornio,quetendióaAzounyacadaunodeloshombresqueloacompañaban—.Estolesprotegeráhastaquepuedareunirmeconustedes.

Merulaobservóelamuletoconelgestotorcido,ylorechazó.—Nomeservirádenada.—Procurarálaproteccióndelrey—objetóMungan,quesenegóarecuperar

elamuleto.—EsparaprocuraraChaunteaelfavordelrey.—Merulatiróelamuletoal

suelo,antesdevolversehaciaAzoun—.¿Confíoenquemilealtadnodicteaúnmife?

Alreynoseleescapóelénfasisquepusoelmagoenlapalabra«aún».Miróa los hombres que lo acompañaban. Todos le observaban expectantes con elamuleto en lamano, esperando aver quéhacía él.Azoun suspiró cansino.EngratitudaOwden,quizásempezabaamostrarsemásgenerosodeloconvenienteconlaIglesiadeChauntea.

—Quecadaunohagaloqueledictesuconciencia.—DevolvióelamuletoaMungan—.Creoquepodrémantenermeenmiscabaleshastaquellegueusted.

—Quizá sea así... pero ¿de veras queréis arriesgar la vida de la reina,dependiendodeello?—MunganatólacuerdadelamuletoenlavainadeAzoun,ydespuésretrocedió—.Lollevaréisahíporsilonecesitáis.

LosDragonesPúrpurainclinaronlacabezaantelamuestradesabiduríadelclérigo, e hicieron lo propio con sus amuletos, excepto Dauneth Marliir. Elguardiánfueelúnicoqueselopusoalrededordelcuello.

Filfaerilyacíajuntoalaghazneth,queapretabasucuerpodesnudocontralareina,envueltaporunadesusalasycubiertaconunatelaasquerosa.Laestanciaempezaba a parecerse más a un dormitorio que a una armería, y la reina eraincapazde imaginarquépodía retener tantoaAzoun.Lascapas sobre lasqueyacíanelmonstruoy la reinaparecíanun lechodeplumascubiertodeseda,y

Page 237: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

unosgrabadoslascivosaparecíanpaulatinamenteenlasparedesqueformabanlaprisión.

La reina reprimióun temblor.Había aprendidopor el caminoduroque lasilusiones de Boldovar siempre reflejaban sus deseos ocultos. Sin embargo,exhalóunsuspiro,acariciólaorejapuntiagudadelacriaturaydespuésdeslizólayema de los dedos por las arrugas infestadas de piojos de su pecho.Le habíallevadodíasydíasdesutilmanipulaciónengañarasusecuestradorparaatraerloal lugar donde losmagos guerreros podrían sorprenderlo, y estaba dispuesta ahacerloquefueranecesarioparadistraeralaghaznethhastaquellegaraAzoun.

Boldovar abrió los labios y escupió un puñado de anillos, grises y feos aaquellas alturas, despuésde absorber toda sumagia.Filfaeril hizoun esfuerzoporsoltarunarisita(nolecostómuchomostrarseunpocodemente),cogióunodelosanillosdecomandantequehabíaapiladosjuntoaellaylosostuvoantelabocadelaghazneth.

—¿Otro?LosojosrojosdeBoldovarobservaronlatroneradesdelaquesedominaba

lamansióndelosMarliir,yFilfaerilpensóqueaúnestabademasiadotensoparasalirseconlasuya.

—¿No lo quieres? —Deslizó el anillo entre sus pechos, y lo introdujoprofundamenteparaquelaturquesatitilaradesdeelescotecomounsolitarioojoazul—.Entalcaso,loguardaré.

Laghaznethclavólamiradaensuspechos:másconcretamente,enelanillomágico.Locontemplóimpávidodurantelargorato,yFilfaerilsepreguntósinohabríadelatadosusintenciones.Alolargodelosúltimosdíassehabíamostradomás y más amistosa, recurriendo a toda su fuerza de voluntad, pero hastaentoncesnohabíaintentadoengañarla.

Quizáshabíaarriesgadomucho.Laghaznethpodía sermuchascosas,peroeraastutaeinteligente.Lohabíademostradoenmuchasocasionesalolargodeaquellosúltimosdiezdías,altrasladarladeunesconditeaotro,ademásdetenderemboscadasa losmagosguerreroseldobledeveces.Alprincipio,Filfaerilnopudo imaginarporqué su secuestradorpermanecía enArabel.Si loúnicoquequeríaerasentaraunareinadeverdadenuntronoimaginario,pudoestablecerseenunlugarmásseguro,encualquieradesusguaridasocultas.Entoncesempezóadarsecuentadequeelmonstruoseguíaunplanpreconcebido.Silaghazneth

Page 238: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

noeraatacadaantesdemediajornada,susilusionesempezaríanadesvanecerse.Despuésdepensarlodetenidamente, la reinasediocuentadequesucaptor sealimentabadelamagiaconlaqueleatacaban.Empezópordecirledóndepodríaencontrar objetos mágicos, tanto para asegurar su propia supervivencia comoparaprepararloparaeldíaenquepudieraarrastrarloalaTorreBlanca.

Porfinhabíallegadoesedía.¿Dóndeestabaelgrupoderescate?Unaletaníade pensamientos absurdos desfilaron por la mente de Filfaeril a causa de suuniónconBoldovar.Quizásuesposohabíaabandonadolastareasdebúsqueda,persuadidodeque,dada su incapacidadparahuir,preferíaestar conBoldovar.Despuésdetodo,laghaznetheramuchomáspoderosaqueAzoun,y,despuésdehabersobrevividodurantemásdeunmillardeaños,podíaofrecerlecosasqueno estaban al alcance de un simple rey humano. Pero no, eso era imposible;Azounlaamaba.¿Laamaba?Eraelrey,yellaeralareina.Elsuyohabíasidotanto unmatrimonio político como romántico: Filfaeril no era sorda ni ciega.Habíaoídolosrumoresquehablabandelparecidoincreíblequeteníanalgunosjóvenesconsumarido,yhabíatenidoocasióndecomprobarpersonalmentequedichosrumoresnoeraninfundados.

Filfaerilsacudiólacabeza,intentandolibrarsedelalocuradeBoldovarqueemponzoñaba su mente. Por muchas barbaridades que hubiera podido hacer,Azounnolaabandonaríajamás,nienunmillardeaños.

—¿Te pasa algo, querida?—sonrió la ghazneth, enseñando sus colmillosamarillentos—.¿Teinquietalanochedenuestraconsumación?

Boldovar sacó una lengua roja con la que acarició los pechos de Filfaerilhastarecuperarelanilloyllevárseloasuasquerosaboca.

AzounysuscompañerossalierondelaatemporaloscuridadparaencontrarsenoenlaarmeríamágicadelaTorreBlanca,sinoenunvestidorhúmedo,cuyasparedeslucíanfrescosdeindescriptiblesviolacionescontranaturaamujeres.LoprimeroquepensóelreyfuequeMerulaelPortentosoloshabíateletransportadoaljardínsecretodealgúnnoblelujurioso(probablementedeunodelosIllanceodelosBleth).Entoncesvioalaghazneth,queyacíatumbadaenunacamaconsábanasdeseda,situadaenelextremoopuestodelaestancia;hundíaelrostroenel pecho de una figura cubierta de gasa, que cubría con una de sus alas. Al

Page 239: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

repararenello,aúnsesintiómásconfuso.NopodíaserFilfaeril.Alamujernoparecíadesagradarleelcontacto;además, la reina jamáshubierapermitidoquesucedieranadaparecido:¡Nadielaabrazaría,exceptosumarido!

—¡Moveos,señor!—gritóalguien.Azoun sintió que un par demanos lo empujaban del hombro. Recordó su

planysearrojórodandoalsuelo,segurodequetodovolveríaacobrarsentidocuando se recuperara de los efectos secundarios de la teletransportación. Seincorporóconelescudoenunamanoysunuevaespada,forjadaenhierro,enlaotra. Vangerdahast le había advertido que no debía emplear un arma mágicacontralaghazneth.Azounsevolvióhacialacamacubiertadeseda.

Elfantasmaparecíaforcejearconsucompañera.Éstasehabíasentadosobreunadesusalas,agarradaalcuellodelacriaturamientrasgritabaparaprotegerladeloshombresquepretendíanasesinarla.Lastradaporelhisterismodelamujer,la criatura no pudo levantarse y arrojarse contra el rey y sus hombres. Unosrayosdoradoscruzaronlaestanciaendirecciónalabdomendelaghazneth,quedesembarazó el ala tan deprisa como siempre, para impedir las caricias de lamagia.

—¡No...magiano!—gritólamujer,volviéndosehaciaMerulaylevantandolamanoenseñaldeadvertencia.

EntoncesfuecuandoAzounlareconoció:estabadesnuda,salvoporunateladegasalobastanteindiscretacomoparaavergonzaracualquierfurciadeArabel.Sesintió tanaturdidoqueestuvoapuntodesoltar laespada.Esamujererasuesposa.

Dauneth y los Dragones Púrpura emprendieron la carga a través de laestancia,mientraslaghaznethconseguíasoltaralareinadesucuelloyarrojarlaalsuelo.Azouncargótrasellos,confuso,rabiosoeincapazdecreerqueFilfaerillohubieratraicionadopor...¿quéera?¿Unaespeciededemonio?

Dauneth y los Dragones se arrojaron sobre la ghazneth, y sus espadas dehierrotrazaroncurvasenelaire.Laprimerahojamordióelbrazodelacriatura,venciósuguardiaypermitióqueelguardiándelasmarcaslahirieradespuésenelabdomen.Untercerataquelaalcanzódesdearriba, teníalasuficientefuerzacomoparasepararlacabezadeloshombrosdeunogro.

Filfaeril permanecía agachada a un lado de la ghazneth, contemplando elcombateconunaexpresióndeterrorenelrostro.Azounsedirigióhaciaellacon

Page 240: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

elcorazónenunpuño,consumidoporloscelosypresadeunarabiaasesina.—¡Furcia!Filfaerilabriólosojosdesmesuradamente,yalecharsehaciaatráslasgarras

negrasdelaghaznethpasaronporencimadesucabezaparaalcanzarelbrazodeunodelosDragones.Elsoldadoperdiólaespada,quepasólejosdelcuellodelfantasma, yendo a caer sobre un armario de roble. Entonces la ghazneth learrancóelbrazoalaalturadelhombroygolpeóelyelmodeotroDragónconél.Amboshombrescayeronalsuelo:unoaullabadedoloryelotropermanecíaensilencio,inmóvil.

Azoun pasó junto a Dauneth, intentando evitar la refriega para alcanzar aFilfaeril,peroencontróasupasounaenormealanegra.Seagachóparaevitarla,ydespuésoyóelrugidodelaghaznethcuandoelarmadelguardiánsehundiódenuevoensuabdomen.Cuandoelreysepusodetrásdelacriatura,lanzóuntajocon la espada con intención de partir su espalda. Aunque el golpe hubieraquebradoelespinazodecualquierhombre,lahojadehierronopenetrómásdeundedoenladurapieldelaghazneth.

Azoun oyó una voz. Al bajar lamirada vio a Filfaeril en el suelo, con elrostro anegado en lágrimas y la sucia gasa de furcia enrollada alrededor de lacintura.

—¿Azoun?—susurró.—¡Zorratraidora!ElreylibróelhierrodelaespaldadelaghaznethysedirigióhaciaFilfaeril,

momento en que una súbita oscuridad se cernió sobre él. No tuvo tiempo deagacharseolevantarlaespada,paraevitarqueelalaloalcanzaraenplenorostroyloarrojaraalotroladodelaestancia.Diocontraunarmarioabiertoydespuéscayó al suelo, mientras el contenido del armario (compuesto de capas ybrazaletesdecombate)sedesparramabaasualrededor.

Daunethseescabullóporelotroflancodelacriatura,dispuestoaacercarseaFilfaeril, pero sólo consiguió trastabillar pasando de largo cuando el fantasmagolpeóinesperadamentesuyelmoconeldorsodelpuño.Elguardiánsedetuvofrente al tapiz roído que colgaba de la pared. Pese al golpe, el hecho de quegruñeraysacudieralacabezadabafedequeseguíaconvida.

Ahoraquenohabíanadiequeentretuvieraalaghazneth,Merulasedestacópara lanzarleun rayoacompañadoporun truenoensordecedor.Elala trazóun

Page 241: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

arco en el aire en busca de protección. El hechizo la alcanzó y formó unacascada de luz cegadora que finalmente se disipó a lo largo del apéndice decuero, dando paso a un abanico de luz plateada. Sin embargo, la fuerza delimpactobastóparadesequilibraralaghazneth.

Filfaeril se puso en pie y echó a correr hacia el mago con las manosextendidas.

—¡No...Noutilicelamagia!—gritó.—¡Cuidadoconella,Merula!—gritóAzoun—.Noshatraicionado.LaadvertenciabastóparaqueFilfaerilsedetuvieraenseco.Sevolvióhacia

Azoun,cuando,depronto,desaparecióenvueltaenunatelarañablancuzca.—¡Esomantendráquietaalafurcia!—gritóelmago.La ghazneth dio un salto y se impulsó por la estancia hasta situarse entre

Filfaeril y sus atacantes.Merula dio una palmada con lasmanos y lanzó dosabanicos de fuegomágico contra el enemigo. El fantasma levantó el ala y sevolviódelado.Cuandolasllamasalcanzaronlasuperficiedelala,simplementechisporrotearon y se fundieron, y el apéndice de cuero empezó a emitir unintenso fulgor carmesí. La ghazneth se dirigió entonces hacia Merula,protegiéndoseasímismayalareina.

Azounsepusoenpiecomopudoyrodeóalacarreraelflancodelacriatura,perotropezóconDauneth,alquecogiódelbrazo.

—Noparecequeestéencondiciones,guardián.Merulayyonosocuparemosdedistraeraesedemonio.Ustedencárguesedelafurcia.—Azounseñalóconlamanolafiguraenvueltaentelarañaquecorrespondíaasumujer.

—¿Furcia?Majestad, habéis perdido la...—Dauneth observó la cintura deAzoun,dondeencontróelamuletodelunicorniocolgadodelavainadelaespada—.¡Ponéoslo!

—Noeselmomento...—repusoAzoun,haciendoungestodenegación.—¡Haced lo que os digo!—Sin esperar a que le diera permiso, Dauneth

rodeó el cuello deAzoun con la tira de cuero del amuleto, del que tiró haciaabajoparaquepasaraporelyelmo—.Yahora,¡queChaunteanosguarde!

—¿Quiénsecreeustedque...?—preguntóelrey,ceñudo.—¡Decidlo!Dauneth abrió unos ojos como platos al darse cuenta del tono con que se

habíadirigidoasurey,momentoenqueMerulallamóalsoberanodesdelaotra

Page 242: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

puntadelaestancia.—¿Majestad?¿Necesitáisayuda?Azounmiróhaciadondeestabaelmago,perosólopudoverlaparteanterior

del ala de la ghazneth. Se volvió para pedir ayuda de Dauneth, pero éste selimitóacogerlodelcuellodelacoraza.

—Porfavor,sire.—¡De acuerdo!—Azoun apartó lamano deDauneth, y después se volvió

hacialaghaznethgritando—:¡QueChaunteanosproteja!Instantáneamente,al levantar laespadaparadefenderse, laestanciacambió

suaspectoyeldormitorioseconvirtióenunaarmería.Losgrabadosquecubríanlosarmariosderobledesaparecieron,yentoncescomprendióelplandeFilfaeril:cómohabíaempleadolaúnicaarmaqueteníaasudisposiciónparaproporcionaral grupo de rescate todo el tiempo posible y poder recuperar el sentido de laorientacióndespuésdeteletransportarsealinteriordelaestancia,ycómodebiódolerlequesupropiomaridolaacusaradeserunafurciayunatraidora.

—¡Dauneth,lareina!—Azounseechóhaciaatrás,agachándoseparaevitarelaladelaghazneth,peroseencontrófrenteafrenteconsusgarras—.¡Salvealareina!

Alteneralreytancerca,laghaznethsevioobligadaaolvidarsedeMerula.Azounbloqueólosataquesdelbrazoheridodelaghazneth,ydespuésdelsano,momentoenqueselasingenióparaalcanzarconlahojadehierrolaclavículadelacriatura.

Laghaznethprofirióun rugidoysearrojósobreél,decididaaaplastarloyburlar su guardia. Superada la confusión, el rey se arrojó a su vez contra laspatasdelacriaturayrodóporelsueloproduciendounfuerteestruendometálicocon la armadura. Dio contra un armario que cubría la pared, desparramandosobreélsucontenido.Convencidodequesuoponenteloalcanzaríaantesdequepudieraincorporarse,apartólascosasdeencimadesupechoylevantólaespadaaciegasparadefenderse.

Elgolpeno seprodujo.En lugardeello,ungorgoteoextraño surgióde labocadelacriatura,yelreysepusoderodillasparaencontrarlaaunospasosdedistancia.Merula estaba encima del hombro del demonio, y se esforzaba poresgrimir la hoja de la daga de hierro para cortar la garganta de la ghazneth.Azounapartólaespada,pusounarodillaentierraysetiróafondocomopudo,

Page 243: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

peronoalcanzóelabdomendelacriaturaporescasoscentímetros.La ghazneth trastabilló hacia atrás entre rugidos, intentando sacudirse a

Meruladeencima.AzounvioporelrabillodelojoqueDaunethcorríahacialareinaconlacapadeunmagoguerrerosobreloshombros.Segúnelplan,debíaserelguardián,ocualquieradelosDragones,elencargadoderajarlagargantadelacriatura,mientrasMerulaselasingeniabaparahuirconella,peroelreysesintiómástranquiloalverqueDaunethseacercabaaella,lacogíadelatelarañayhundíalamanoenelinteriordelbolsillodehuidadelacapa.

Enaquelmomentoescuchóunclamormetálicodearmadurasprocedentedelospisos inferioresde la torre.El rumor llamó laatenciónde laghazneth,quevolviólamiradahacialapuertaderoblequeconducíaalinteriordelaarmería.Estabacerradapordentroyunlistóndemaderaasegurabalapuertadeunladoaotro, pero la criatura sabía tan bien como Azoun que la puerta tan sóloaguantaría hasta que alguno de losmagos utilizara el conjuro adecuado. Trasproferir unamaldición, el fantasma levantó lamano y golpeó aMerula en lafrente.Seprodujouncrujidoseco,losojosdelmagodieronvueltasalrededordesusórbitasycayóhaciaatrás.

LaghaznethsevolvióhaciaDauneth.Azounsedisponíaacortarleelpasocuando el guardián encontró el bolsillo de huida y desapareció llevándose aFilfaeril.

Azounsedirigióhacialapuertaatrancada,perolaghazneth,impulsadaporlasalas,llegóantesqueél.

—¡Ladróndereinas!—masculló—.¡Usurpador!Azoun sepusoenguardiay la rodeódemaneraquenopudiera encarar la

puertacuandollegaraMungan.Aunquelaghaznethteníaunadocenadeheridas,de las que manaba una sangre oscura y rancia, la criatura diabólica apenasparecíaafectada.

—¿Quiéneres?—preguntóAzoun—.¿Quéeres?—Boldovar,reydeCormyr.Su respuesta parecía tan increíble como la propia criatura, pero no había

tiempoparadiscutir.Elclamorcesóalllegaralpisoquehabíaalotroladodelapuerta.Azounsearrojóhaciaella.

—¡Ahora,Mungan!LavozdeMunganresonóenelhuecodelaescalera,yuninstantedespués

Page 244: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

un rayo mágico y terrorífico reventó la puerta. La ghazneth se volvió paraenfrentarsea laacometidadelgrupoderescate,profirióunrugidoysehizolaoscuridadenlaestancia.

Untumultodevocesangustiadasseextendióporlaarmería.Azounsepusoenpie y apoyó la espalda contra la pared,mientras trazaba con la espada unaseriedearcosdefensivos.Sabíaquenopodríabloquearningunodelosataquesde la ghazneth con una simple espada, pero quizá pudiera ganar el tiemponecesarioparaesquivarlaorodarporelsuelo.

Lacacofoníacontinuóhaciéndosemásymásaltaduranteuntiempo.Pareciódurarunaeternidad,aunquequizánofueramásqueunossegundos.Loscuerposcaíanalsueloconalarmanteregularidad,yalhacerloreverberabaungolpesecoen las paredes de la estancia. En dos ocasiones Azoun se batió en retiradacuandotocóconlaespadaalgoquenopodíaver.Dioporsentadoquellegaríaelmomentoenquelaghaznethhundiríalasgarrasensuarmadura,peroelgolpenollegó.Elrumordelabatallacesó,despuésloshombresempezaronaarrastrarseporlahabitaciónllamándoseporsusnombres,yfinalmentealguiendioconunanillo de comandante y al pronunciar la palabra adecuada la estancia volvió ailuminarse.

Estabacubiertademuertosyheridos.A juzgarpor susheridas, lamayoríahabíancaídoabatidosporunaespada.TansóloMunganydoshombresqueseencontraban tras él yacían con las gargantas abiertas en el dintel de la puerta,degollados,alparecer,porlaghazneth.Nohabíanirastrodelfantasma,peroalsentirunafríacorrientedeaire,Azouncomprendióquenonecesitabalevantarlamiradaparasaberquehabíahuidoporlatrampilladeltecho.

Page 245: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

T17

analastayacíaenbrazosdeRowen,doloridayfebril,confortadapor la luzdelsolquepenetrabaatravésdelasretorcidasramasdeuncastaño.Alusair

estabaocupadapreparandoloscaballossupervivientesparapartir,yunodelosclérigos se encargaba del entierro de Emperel. Tanalasta tenía la mente tanconfusaquenodejabadedarvueltasalmismoasunto.TeníaagarradacontrasupecholabolsaenlaqueEmperel llevabalosmensajes,yrecordabavagamenteque debía llevarlos a Alaundo. Sin embargo, le costaba mucho recordar porqué...Yestabatanagotadaqueeraincapazdeencontrarlasolución.

Un guantelete de acero apareció flotando en el aire sobre Tanalasta, a laaltura de sus ojos. Pensó que se trataba de una aparición, que era lamano deIyachtuXvimquehabíaidoparallevarlaasuBastióndelOdio,momentoenqueseagarróconfuerzaalbrazodeRowen.

—Nomedejes.—Le tendió labolsadeEmperel—.LlevaestoaAlaundo.Háblaledelossignos...ydeXanthon.

—Noestáistanenferma,alteza.—Rowensenegóaaceptarlabolsa.Elguanteleteseacercóaúnmás,calentóelrostrodeTanalastayseinterpuso

ante su mirada de tal forma que no podía ver más allá. Estaba demasiadoasustadaparadesviarlamirada.

—Nodiscutas.—Tanalastalevantólabarbilla—.Bésame.Quieromorir...—No creo que os estéis muriendo, alteza. —Rowen parecía sentirse

insultado—.Y os aseguro que no vais amorir enmis brazos.Ahora quedaosquieta,ydentrodeunminutoSeaburtseencargarádequeossintáismejor.

—¿Seaburt?

Page 246: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Tanalastaviolagruesamuñecaquesurgíadelguantelete,yquelentamenteleayudó a comprender que no se trataba de la mano de Iyachtu Xvim. Era elsímbolodeTormelFiel,eldiosalqueadorabaAlusairyelquereverenciabanlosdosclérigosdesucompañía.Seaburtdepositóelguanteleteen la frentedeTanalastaymurmuróunarápidaplegariaasudios,solicitandolaayudadeTormpara «esta entregada hija de Cormyr». Al recordar sus discusiones conVangerdahastyelrey,Tanalastapensóconpreocupaciónquequizáladeidadnola encontrara digna de su magia curativa, y siguió apretando la bolsa contraRowen.Supielempezóaerizarsealsentirlamagia,despuéssintióatravésdesufrente que el guantelete se enfriaba y se secaba. La cabeza le dolía más quenuncayprofirióungemidoinvoluntario.

—Sed fuerte, princesa—dijo Seaburt. Con una barba de meses y negrasbolsasbajolosojos,elclérigonoteníamejoraspectoqueTanalasta—.Tormoslibrarádeesafiebre,peroosdoleráhastaqueabandonevuestrocuerpo.

«¿Dolor?» Tanalasta hubiera gritado si hubiera tenido fuerzas. Se sentíacomo si alguien acabara de abrirle la cabeza con un hacha. Cerró los ojos,escuchó los latidos de su corazón que reverberaban en sus oídos, y suplicó aChaunteaqueleconcedieralafuerzanecesariapararesistirlacuracióndeTorm.Eltemblordesienesarreció,ypensóquesucerebroibaaestallarensucabeza.Hacíaloposibleporcontenerse,cuandoelguanteletevolvióacalentarseysintióun tactohúmedoensufrente.Elguantedespidióuna luz intensa,de tal formaque hasta ella misma pudo verla pese a tener los párpados cerrados. Unossegundosmás tarde, sintió unaoleadade frescuraque recorrió hasta la últimafibradesucuerpo.

Tanalastaabriólosojosyseencontrómirandoatravésdelbrilloperladodelguantelete.Seaburt apretaba con fuerza lamandíbula, y con lamiradaperdidaobservaba más allá de los muros abandonados del torreón. Vio en su rostrosurcosdesudor,unsudorquegoteabadesubarbaparacaersobreelguanteleteyfundirseconunsusurro.Tanalastasesentíamásfuerte.Laniebladesapareciódesumente,yyanosesintiótanmareada.Seesforzóporsentarse,peroSeaburtlaobligó a seguir tendida y la retuvo así hasta que el fulgor desapareció porcompletodelguantelete.

Cuandofinalmenteelclérigololevantóysacólamanodesuinterior,teníalapielrojaehinchada.

Page 247: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Aún estáis débil —dijo Seaburt—. Bebed cuanto podáis y os sentiréismejor.

—Yame sientomuchomejor, gracias.—Tanalasta se sentó, pero estuvo apuntodedesmayarsecuandointentóincorporarse—.Aunqueahoracomprendoaquéserefiereconlodesentirsedébil.

Sonóunsilbatoalotro ladodelpatio,dondesuhermana lehacíaungestoconlamano.JuntoaAlusairseencontrabanlossupervivientesdelacompañía:el segundo clérigo, una docena de ojerosos caballeros y quince caballosflacuchos. Aunque los caballos tenían los correajes correspondientes, habíanquitadolassillasalaspobresbestiasparanocargarlasdemasiado.

—Ha llegado elmomentode irse.—Rowenpasóunbrazopor la axila deTanalastay laayudóa incorporarse—.Losiento,peropareceque tendréisquecaminar.Loscaballosestándemasiadodébilesparallevaros.

Amedidaque seacercabanaAlusairy losdemás,Tanalastaobservóa lasdébilesbestiasconunasimpatíajustificadaporsupropiocansancio.

—¿Qué necesidad hay de obligar a estos pobres animales a que nosacompañen? —preguntó a su hermana—. Si les permitimos descansar aquí,tendránmásposibilidadesdesobrevivir...Ysino,almenosmoriránenpaz.

—¿Yde qué iba a servirnos eso?—preguntóAlusair—. Simueren por elcamino,nohabremosperdidonada.Siserecuperan,nosahorraráncincooseisdíasdecamino.

Alusairsevolvióparadarlaordendepartidaalacomitiva,peroTanalastasesintió asustada ante la perspectiva: un ahorro de cinco o seis días supondríallegaralamontañadelTrasgobastanteantesqueRowen,ynosehacíailusionessobreloquetalcosasupondría.AlusairseencargaríadequeunmagoguerrerolateletransportaraaArabeldeinmediato,ysuspadres,queconsideraríancualquierrelaciónconunCormaerilpocomenosqueundesastrepolíticoencomparaciónconeldesairedeDauneth,seencargaríandequeRowennoseacercarajamásamenosdediezkilómetrosdeella.

—¿Qué sucede? —preguntó Rowen, ofreciéndole la mano—. Si estáisdemasiadocansadaparacaminar,yoosllevaré.

—No.—Tanalasta lo retuvohastaque losdemás sehubieronalejadounospasos—.Rowen,nopuedesabandonarmemañana.

—Perodebohacerlo.—Nohizoelmenoresfuerzoporguardar silencio—.

Page 248: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Vangerdahastnotieneniideade...—Vangerdahastnotardaráenimaginarselosucedido—susurróTanalasta—.

Yaunquenolohiciera,eseviejofisgónescapazdecuidardesímismo.—Quizá deberíamos hablar de esto más tarde —dijo Rowen, observando

inquietolaespaldadeSeaburt—.Aúnestáismuydébil.—¡No!—Tanalasta cogió susmanos—.Rowen, debes saber lo que siento

porti...yloqueesperoquesientaspormí.—Porsupuesto—respondióconunasonrisatímida—.Enningúnmomento

semehaocurridopensarqueeraiseltipodeprincesasquebesanalprimeroquepasa,mientrasseenfrentanaunaghazneth.

—Así es —replicó la princesa, sin corresponder a su sonrisa—, pero norehuyaseltema.

—Estáismuyporencimademiposiciónsocial...pero,sí,osconsideromáscomounamujerquecomounaprincesa.

—¿Debo entenderlo como un sí? —preguntó Tanalasta, ceñuda. CuandoRowenasintió,laprincesaañadió—:EntoncesnopodemospermitirqueAlusairnossepare.Yasabesloquepretendehacer.

—Dudoquenosotrosseamoselmotivodesuspreocupaciones.—Claroqueno—dijoTanalasta—.Tambiénlepreocupaelmomentoenque

elreyseenteredenuestrossentimientos,porquelomásprobableesqueelpesodelacoronarecaigaenella,enlugardeenmí.

—¿Vuestro temoresunaposibilidadoestá fundadoensólidas razones?—preguntóRowen,conexpresiónenigmática.

—Sí, ladesgraciaenquehacaídotufamilia—dijoTanalastaaladvertireldolor que le había causado, y decidir que merecía una respuesta honesta—causaríaalgunosproblemasaltrono.Lasfamiliaslealesconsideraríancualquierfavormostradohaciaticomounaafrentaasusintereses,ylasfamiliasneutralespodríanecharencaraaltronosufaltadereciprocidad.

—Entalcaso,elreynotendríaelecciónenesteasunto—supusoRowen—.SeveríaobligadoanombrarherederaaAlusair.

—Noesposiblepredecirloqueharáodejarádehacerelrey.—Tanalastaseencogió de hombros—. Puede ser una persona muy sorprendente, y sabereconocercuándoesmejorretirarsequeperder.Nuestraspartidasdeajedrez lehanenseñadoesoymuchomás.

Page 249: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Mientras Rowen lo consideraba, Seaburt volvió la mirada desde laretaguardiadelalínea.

—Silaprincesasesientedemasiadodébilparacaminar...—Laprincesasesiente lobastante fuerteparacaminar—replicóTanalasta

—.Nosepreocupepornosotros.Sinecesitamosayuda,selapediremos.—Porsupuesto.—Seaburtfruncióelentrecejoysiguiócaminando—.Estaré

atentoavuestrallamada.Tanalasta clavó la mirada en la espalda del clérigo y experimentó una

repentina sensaciónde rechazo.Cuando se hubo alejado lo suficiente, cogió aRowendelbrazoysiguierontraslacompañía.

—Sabes loquesucederácuandolleguemosa lamontañadelTrasgo—dijoenvozbaja—.Alusairenviaráunmensajey,cincominutosdespués,unadocenademagosguerrerossepresentaránparallevarmedevueltaaArabel.

—¿Debolamentarelqueosponganasalvo?—preguntóelexplorador.—Sí,siesosignificaquenovolvamosavernos.—¿Noestáisexagerandounpoco?Soymuycapazdeencontrarelcaminode

vueltaaArabelpormispropiosmedios...YtambiénaSuzail.—¿Cuándo?¿EntreunayotramisióndeexploraciónenAnaurochoentrelas

misiones de espionaje a las que te destinarán enLlanura deDun?Mi padre yVangerdahasttemantendrántanocupadoquenoverásunaciudadcormytahastaquemecaseycargueconelhijodeotrohombre.

AunqueRowenpermanecióimpasible,almenostuvolacortesíadetorcerelgesto.

—SidesobedecieraaAlusair,pasaríalospróximosdiezañosdemividaenlasmazmorrasdelcastillodeCrag...sinlamenoresperanzadepoderredimirelnombredemifamilia.

La compañía empezó a abrirse en abanico a lo largo del páramo. Loshombres se dispusieron a llevar a uno de los caballos más o menos hacia eloeste,dejandounreguerodepistasfalsasantesdevolverhaciaelsur.Tanalastaguardósilencioduranteunrato,conscientedequeRowenteníarazón.Noteníaautoridad para anular la orden dada por su hermana, yVangerdahast tenía uncarácter lobastante implacablecomoparaencerraralexploradorconelmenorpretextodedesobediencia.

—Tienesrazón,porsupuesto.NopuedopedirtequedesobedezcasaAlusair.

Page 250: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Tanalastamantuvo la cabeza gachamientras hablaba, observando lamalezaporsidescubríaserpientesuotrosobstáculos—.Porlotanto,teacompañaré.

—¿Qué? —gritó Rowen, atrayendo la mirada curiosa y reprobatoria deSeaburt.Elexploradormoderóeltonodesuvoz,ydespuéscontinuódiciendo—:Esloquemásmegustaría,peroAlusairnuncalopermitirá.

—Alusair puede darte órdenes a ti, pero no a mí —dijo Tanalasta—. Nisiquieraesmihermanamayor.

—Porfavor,Tanalasta...Nopuedo.HacerloquemepedísmeconvertiríaenunapersonamuyparecidaaGasparyXanthon.

—Nuncaseráscomoellos.—No lo creo: basta con que antepongamis deseos a mi juramento como

DragónPúrpura.—RowenayudóaTanalastaarodearunarbustodeuñadegato,apartándolaalmismotiempodeunalacrándispuestoaatacar—.Todostenemosundeberquecumplir.Yosoyexplorador,ymideberesdesplazarmeconrapidezparaencontraraVangerdahast.Vossoislapersonamásinstruidaqueconozco,yvuestrodeberesiraArabelparainformaralreydeloquehabéisdescubierto.

—Yasíloharé—dijoella—.Perocontigo.—EstaréismásseguraconAlusair—respondióRowen,haciendoungestode

negación.—¿Deveras?—Tanalastaobservóaloshombresqueliderabasuhermana—.

Másbiencreoquealasghaznethlesresultarámásfácilencontraraunpuñadode hombres maltrechos, que a dos personas que se muevan rápida ysigilosamente.

—Quizá.—Rowencallóunossegundosparapensaryañadió—:Podríasercomo decís si estuvierais en buenas condiciones, pero con esa fiebre... Estáismuydébil.

—Lafiebreremitirá.Seaburthadicho...Tanalastanocompletó la frasealcomprender loquesignificabael silencio

deRowen.Habíaestadoasu ladomientrasSeaburt lacurabapor loquehabíaoído las palabras del clérigo.Trastabilló al dar dos pasosmás, se detuvo y sevolvióhaciaelexplorador.

—Túnoquieresqueteacompañe.AjuzgarporlaexpresiónculpabledeRowen,asíera.Tanalastacomprendió

que su suposición era acertada. Libró su brazo del explorador y siguió

Page 251: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

caminandosinayuda.Rowenseadelantóparaalcanzarla.—Porfavor,Tanalasta,noesloquepensáis.Confíoplenamenteenvuestras

habilidades...Tanalastalodetuvoensecolevantandolamano,labarbillayapartándosede

él.—Yaessuficiente,Rowen.Yporcierto,cuandosedirijaamí,puedeusted

tratarmedealtezasiesolehacesentirsemejor.

Un ruidoahogadodepasossurgióentre lospinos,y reverberóa travésdelvalle,deunaaotraladerahastaqueVangerdahastnosupodistinguirsiprocedíade un lado o de otro. Tiró de las riendas deCadimus para que se detuviera ylevantó un brazo, ante lo cual los componentes de la real compañíaexpedicionariatambiénsedetuvieron.EllugarseinundóalinstanteconelrumorylosmurmullosdelosmagosylosDragonesquesepreparabanparapresentarbatalla.Durante el últimodía ymedio, la compañía había perdido docenas dehombresycaballosen lasemboscadasque losorcosy lasghazneth leshabíantendido, por lo que, en aquelmomento, incluso el quiquiriquí de un gallo lesobligabaabuscarrefugio.

—¿Van a guardar silencio de una vez? —preguntó Vangerdahast,volviéndoseenlasilla.

Losmirófijamentehastaqueremitióelestruendo,momentoenquevolvióaobservar el terreno que estaban a punto de recorrer. El valle era uno de esoscañonesserpenteantes,cubiertosporunafranjaondulantedeterrenopantanosoyparedesaltascubiertasdepinos.Alfrentenopodíaverniacincuentapasosdedistancia, y a ambos ladosmenos aún.Al cesar el ruido, reparó en que habíaárbolesentodasdirecciones,porloquedabalaimpresióndequeeltamborileoproveníadetodaspartes.Enocasionesparecíaelruidoproducidoporloscascosalhundirseenlahierba;enotras,elrumordeunasalasalbatirelaire.

Cadimus levantóelhocicoparahusmearelairecuandounayeguadecolorbermejosurgióalgalopeanteelmago,conelpechocubiertodeespuma,losojossalidosdesusórbitasy,lasriendasyestribossueltos.Recorrióelvalleagalopetendido, al parecer sin reparar en la presencia deCadimus, Vangerdahast y lacompañíadeexpedicionariosqueesperabandetrás.Cercadelayeguavolabaa

Page 252: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

rasdesuelounaghazneth,conlasalasnegrascomobocadelobocompletamenteextendidas,ylosbrazosdispuestosacogerlosflancosdelcaballo.

Vangerdahastapuntóalfantasmaconeldedoypronuncióunasolapalabra.Unadocenaderayosdemágicaluzdoradaalcanzaronalaghazneth.Elimpactola arrojó contra los pinos, arrancando ramas y hojas. Al cabo de un instante,reverberaron en el valle los cascos y gritos de los Dragones y los magosguerrerosquepicaronespuelasensusmonturasparaemprenderlacarga.Sialgohabía aprendido la real compañía expedicionaria a lo largo de los dos últimosdías, era que uno nunca debía titubear al enfrentarse con una ghazneth.VangerdahasttiródelasriendasdeCadimusparavolvergrupastandeprisacomopudo,paraemprenderlapersecucióndelayeguaquegalopabasinjinete.

ElcaballodeTanalastaeraunayeguadecolorbermejo.

Elcaballonoresopló,nosequejó,nisiquierarelinchó.Selimitóacaerderodillas y cerrar los ojos, antes de desplomarse sobre unos arbustos.TanalastaobservócómoAlusair,aturdidaporelcansancioyunafiebrerecurrente, tirabadelasriendasdelanimaleintentabareemprenderlamarcha.Cuandoelcaballono semovió,Alusairmaldijo superezay, sinvolverse, tiróde las riendasconmásfuerza.

Tanalasta guardó silencio, satisfecha de ver que, para variar, no era ella laquecometíaunaestupidez.LaprincesanopodíacreerquehubierainterpretadotanmallossentimientosdeRowen.Subesoparecíasincero,perocreíarecordarhaber leído en alguna parte que los hombres experimentan sentimientos másintensos con su cuerpo que con su corazón. Quizás ése había sido su error.Quizás había interpretado una simple lujuria como algo más... duradero. Elafectoquehabíapercibidosólofuelaatraccióncarnalqueunhombresienteporunamujer.Laprincesacasideseónohabersemostradotanvirtuosa.SiRowenlahubierautilizado,almenosTanalastatendríaalgunajustificaciónparaenfadarse.Pero tal y como estaban las cosas, lo único que podía hacer era sentirseincómodaeintentarevitarlohastaquepartieraenbuscadeVangerdahast.

Finalmente,Alusairdejódetirardelasriendasdelcaballo,yconelentrecejofruncidodiounavueltacompletaalrededordelanimal.Eraelsegundoquehabíamuertoenlasúltimasdiezhorasdemarcha.Profirióunamaldiciónininteligible

Page 253: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

ysevolvióhaciaTanalasta.—Pudistehabermeavisado.—Creíqueselevantaría—dijoTanalasta,extendiendolasmanos.Alusairlamirófijamente,ydespuésllamólaatencióndelosdemásconun

silbidoquedo.Cuandolatropasereunióasualrededor,señalóelcaballomuerto.—Vamosaquitarnoslosyelmos.Loshombrescansadosgruñeronyprocedieron,a regañadientes, aquitarel

forrodecueroquerecubríaelinteriordesusyelmos.Despuésdequemurieraelprimer caballo, habían pasado casi una hora enterrándolo para evitar que elcadáverpudiera atraer a losbuitres, y supresenciadelatara la rutaquehabíanseguido. Nadie tenía ganas de repetir la experiencia, sobre todo teniendo encuenta que la noche se acercaba y que había trece caballosmás, dispuestos aseguirencualquiermomentoalosotrosdos.

CuandoRowensearrodillóparaayudaralosdemás,Tanalastaintentóevitarsumirada,perodespuéssediocuentadequenopodíamostrarsetanreservada.PuestoqueAlusairteníafiebreylosmiembrosdelacompañíaestabanrendidospor el cansancio, recaía cierta responsabilidad sobre sus hombros. TanalastacogióaRowendelbrazo.

—Usted, no —señaló hacia una línea borrosa y oscura que se recortabacontraelhorizonte,haciaeloeste—.Yodiríaqueesoesunbarranco.Mireaversiencuentraunarroyoyunlugarsegurodondeacampar.

—Esperaunmomento.—Alusairestaba tandébilqueapenas tenía fuerzasparallamarlaatencióndeRowenconungesto—.Tanalasta,túnodasórdenesalosmiembrosdemicompañía.

—Lohagocuandotúnoestásencondicionesdecuidardesuseguridad.—Tanalastamiróasuhermanaalosojos,queestabamásagotadaqueenfadada,yseñalóconelbrazoaloscaballossupervivientes—.Sinoprocuramosqueestasbestias bebanun poco de agua, y pronto,mañana tendremosque enterrarlos atodos: después podremos empezar por tus hombres. —Miró a uno de losguerrerosqueaúnseesforzabaporquitarseelyelmo.

—La princesa Tanalasta tiene razón. —Alusair recibió el comentario deRowen con unamirada glacial, pero el explorador no se dejó intimidar—. Sihubieraisestadoenposesióndetodasvuestrasfacultades,haceunpardehorasquemehubieraisenviadoabuscaragua...Ynosóloparaloscaballos.

Page 254: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Puede ser, pero sigo siendo la comandante de esta compañía.—Alusairfrunció de nuevo el entrecejo, aunque su expresión parecía más dolida queenojada.

—EntoncesharásbienenrecordarloypermitirqueSeaburtpongaremedioatufiebre—dijoTanalasta.

Puesto que Seaburt y su compañero clérigo tan sólo podían recurrir a lasuficiente magia curativa como para que un tercio de los miembros de lacompañíarecuperaranlasfuerzas,todosycadaunodeellosestabangravementeenfermosunodecadatresdías.Pordesgracia,comoAlusairhabíadescubiertoalquedar atrapada en la torre de los trasgos, la enfermedad tendía a recuperarfuerzas al segundo día. Hasta entonces, había rechazado rotundamente laposibilidaddeprivaraalguiendelacuraciónparapoderrecuperarseella.

—Quizá no conozca el ejército —dijo Tanalasta a Alusair—, pero sé deliderazgo.ComoescribióelgranestrategaAosininTruesilver:«Sialguienenvíaasussoldadosalamuerte,almenosdebehacerlosobrio».

Alusairfruncióaúnmáselentrecejodispuestaadiscutir,peroRowense loimpidió.

—Princesa,permitidqueSeaburtponga remedioavuestra fiebre—insistióRowen—.Silohacéis,todostendremosmásoportunidadesdesalirdeéstaconvida.

Alusairpaseólamiradasobretodosycadaunodesushombres.Cuandovioquetodoscompartíanlaopinióndelexplorador,profirióunsuspiro.

—Muy bien, Rowen, vaya a ver si encuentra agua —dijo Alusair—. Yustedesyameexplicaránporquérazónnohanenterradotodavíaalcaballo.

Losmiembros de la compañía empezaron a cavar el terreno duro con losyelmos. Seaburt se llevó aparte a Alusair, y empezó a prepararla para elhechizo... el último que podía realizar hasta la mañana siguiente. Rowen sedirigióhaciaelhorizonteendirecciónoeste,perosedetuvoaldarunadocenadepasosylevantólamanoparaprotegerselosojosdelintensosolponiente.

Tanalasta,contrariada,seacercóaélyseñalólalíneaborrosa.—Estáahí.Podráverustedlasombraqueproyecta.—Bien.Yalaveo.Tanalasta sedio cuentadequeRowen laobservaba,y al volversehacia él

comprobóqueelexploradornoobservabaelbarranco,sinosusojos.

Page 255: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Disculpadesteengañoinfantil—dijo—.Sóloqueríadisculparme.—¿Disculparse? —repuso Tanalasta con frialdad—. No tiene por qué

disculparse.—Metemoqueoshedadomotivosdesobraparadespreciarme.—Tonterías.Has sidomuy valeroso. El rey sabrá de tu valor.—Tanalasta

hizo una pausa, después decidió que era necesario dar una muestra de sumagnanimidad,apartedelhechodetutearle—.Lociertoesquenomeextrañaríaqueteconcedieranesapropiedadquetantoansías.

—¿De veras creéis que ésa es la razón de que esté aquí? ¿Porque voy enbuscadeunpedazodetierra?

Tanalasta retrocedióante laamargurade suvoz,ydespuésbajó labarbillaparaadoptarunaalturamenosregia.

—No,por supuestoqueno.Sóloqueríaque supierasquenopienso seguircomportándomecomounaestúpidacontigo.

—¿Comounaestúpida,alteza?—Sí.—Tanalasta apartó lamirada—. Te he estado provocando como una

furciadetaberna,y tú tehascomportadoconlasuficientehonorabilidadcomoparanoaceptarmiafectobajofalsaspretensiones.—MiróaRowendereojoyañadió—:Aunquehubierasidopreferiblequehubierasdichodesdeelprincipio,queestabacomportándomecomounaestúpida.

—¿Ycómoqueríais que lohiciera?Noera eso loque sentía.—Rowen seatrevióacogerladelamano,ycuandolaprincesalaretiró,elexploradorvolvióaintentarlo—.Simissentimientossondistintosdelosvuestros,essóloporquesonmás firmes.Desde elmomento en que os conocí no he sido indiferente avuestrapresencia.

Tanalastasesentíademasiadoconfusacomopararetirarlamano.Denuevoélledecíaloqueellaqueríaoír,pero¿cómopodíacreerlecuandosusaccionesparecíandecirtodolocontrario?Hizoungestodenegación.

—Eso no puede ser cierto, o jamás me dejarías con Alusair... Sobre todoteniendo en cuenta que Vangerdahast dispone de todos los recursos del reinoparaasegurarsedequenovolvamosavernos.

Rowencerrólosojosduranteunmomento,ydespuésvolviólamiradahaciaelhorizonte.

—Quizáfueralomejor.

Page 256: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Cómo?—TanalastaagarróaRowenporelbrazo—:Nometratescomoauna idiota. Si no quieres hacerme la corte, entonces espero comomínimoquetengaselcorajedeadmitirlosin rodeos.Heoídoa losdemásdecirunacosaypensarotradurantetodamivida,ysiquieresquetedémiopinión,túnosirvesparaello.

—Meexpresolomejorqueséypuedo,princesaTanalasta—replicóRowen,cuya mirada echó chispas ante el menosprecio de la hija del rey—. Missentimientossontansinceroscomofirmes,perosoyhijodeunafamiliaquehacaídoendesgracia.Decortejaros,loúnicoquelograríaseríadebilitarlacorona.

Tanalastaexperimentóunaalegría repentinaensucorazón,yelenfadofuedejando paso a la comprensión. Permaneció de pie e inmóvil durante algunossegundos, y finalmente empezó a comprender cuánto debían haber herido suspalabrasalexplorador.

—Rowen,lamentotodoloquetehedicho—dijoTanalasta,acercándoseunpocomásaél—.Ahoraquemehasexplicadotusreservas,comprendoquehassidohonesto...muyhonesto,almenoscontigomismo.

—Disculpad,princesa.Noeraesoloquepretendía.—¿De veras? —preguntó Tanalasta, enarcando una ceja—. En tal caso,

¿estáspreparadoparahacervalertusargumentosporencimadelosdeladiosa?—Porsupuestoqueno,perosiosreferísavuestravisión,¿cómopodremos

tenerlaseguridaddequesoyyoelelegido?—Losé—replicóTanalasta—.Ytútambién.Rowenparecíacompungidoynodijonada.—Seguroquenofaltaránquienes lamentenmidecisión—dijoTanalastaal

advertirlaoportunidaddeconvencerlo—,perosucederíalomismosieligieraaotro. Si me decantara por un Silversword, los Emmarask se enfadarían. SieligieraaunEmmarask,losTruesilverlodesaprobarían.SimedecidieraporunTruesilver,losHawklinsmurmurarían,ycualquierotropretendienteconstituiríaun menosprecio para losMarliir. Más vale que respete los dictámenes de micorazónyelijaalhombrequedeseo,unapersonahonesta,lealydeconfianza...Esehombre,Rowen,erestú.

—¿Aunqueesooscuestelacorona?—preguntó—.Ydenoserasí,¿aunqueoscostaralalealtaddelaaltanoblezadelreino?

—Túeressólounadelasmuchasdecisionesquepodríancostarmelacorona.

Page 257: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Tanalasta se encogió de hombros—. Sin embargo, son decisiones que debotomar,ynomeimportasufrirlasconsecuencias.—Lomiródehitoenhito—.Simifrentedebeceñirlacorona,disfrutardelafortalezadetucarácteramiladocompensará con creces la pérdida de la lealtad caprichosa de cualesquierafamilias.

—Pero¿cuántas lealtadesde familiasnoblesvaleunhombrecomoyo?—preguntóRowen, después de considerar la cuestión durante un rato—. Seguroqueni lamitaddeellas.Esnormalque losmiembrosde la realeza tomen suspropiasdecisiones,peronodebenignorarlosproblemasquesederivarándeello.La gente no me considerará mejor que Aunadar Bleth; pensarán que meaprovecho de vuestra generosa naturaleza para recuperar la posición de mifamilia,ylaestabilidaddelacoronaseresentirá.

—¿Tan bajo concepto tienes de mí? —preguntó Tanalasta—. ¿Das porsentadoquelagentesólomecreecapazdeatraeraaprovechadosyarribistas?

—Noeraesoloqueyoquería...—sedisculpóelexplorador,lívido.—¿Yaquéotracosapodíasreferirte?Quizátengasrazónyhayasidomejor

no seguir por este camino. —Tanalasta señaló el horizonte—. Allí tienes elbarranco,Rowen.Acércateaversiencuentrasagua.

Layegua relinchó tresveces,yalarañarel suelocon laspezuñasestuvoapunto de aplastar el pie de Vangerdahast. El mago supremo profirió unamaldiciónyasióconfuerzalasriendas,obligándolaabajarlacabezaalaalturadesurostro.

—Suavemente, amigo mío. El animal ha sufrido mucho —pidió Owden,levantandolamano.

—Y lo que sufrirá, si no empieza a comportarse como es debido—gruñóVangerdahast—.Dígaselo.

—Nocreoque...—replicó,contrariado,Owden.—Dígaselo—ordenóVangerdahast—.Quizáleaclarelasideas.Owdensuspiró,perosevolvióhaciaelcaballoyempezóarelincharcomoél.

Layeguatensólasorejasyclavóunodesusojosredondosenelrostrodelmago,que a su vez entrecerró los ojos y contrajo la boca en una mueca. La yeguaapartó la mirada y emprendió una rápida sucesión de relinchos y resoplidos,

Page 258: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

interrumpidosdevezencuandoporalgúnqueotrogemido,ounrelinchoagudo,deOwden.Cuandoterminólaconversación,Owdenasintióyacaricióelcuellodelanimalparatranquilizarlo.

—¿Ybien?—preguntóVangerdahast.—Heconseguidoextraerciertainformación,peroloscaballosnorecuerdan

las cosas igual que nosotros. —Owden cogió las riendas de manos deVangerdahast—. Lo único queme ha dicho de interés es que las ghazneth lapersiguendesdeel«amanecerdelamanecer.»

—¿Y?—Y que la princesa se fue con «su semental»—dijo Owden mientras se

deslizabaentreelmagoylayegua.—¿Su semental? —exclamó Vangerdahast—. ¿Qué ha querido decir con

eso?

Elbarrancoresultóserunariberatortuosamásllenadesaucesquedeagua.Sinembargo,encontróunarroyueloanomuchadistancia,yTanalastapudooíralos caballos chapotear mientras hacían lo posible por secar por completo elarroyo.Permanecíaarrodilladaenunaelevación, reuniendounascuantashojaspodridasenunapiladebarro,comopreparativoparasuofrenda.Aunqueestabaagotada después de caminar todo el día, el trabajo alejaría a Rowen de suspensamientos,ycualquiercosaquehicieraparaconseguirloleparecíapoco.

La princesa no estaba enfadada con él, pero sí decepcionada. Sabíamejorquenadieloquepensabandeella.Muchosnobles,quizálamayoría,acusaríanaRowen de aprovecharse de su caráctermanipulable.No obstante, pensarían lomismodecualquierpersonaalaqueeligieracomoconsorte.Laúnicaformadecambiarsuopiniónconsistíaenmostrarsepacienteydemostrarles,observandounabuenaconducta (tanto lapropia,como ladelelegido), loequivocadosqueestaban.NosesentíadolidaporqueRowenhubieraseñaladoloquepensaríanlosdemásdesurelación,sinoporquenoconfiabaenellaparahacerquecambiarandeopinión.Sinoconfiabaenqueseimpondríaalosdemás,¿cómoibaaconfiarensímisma?

Tanalastacogiódelsuelounapiedradeltamañodeunpuño,ysevolvióparacolocarla a un lado del montoncito, cuando encontró un par de botas de

Page 259: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

exploradordecueroblando,depiea su lado.Reprimióungritode sorpresaycolocólapiedrajuntoalasdemás.

—¿Sólo querías disculparte?—preguntó Tanalasta sin levantar la mirada,conunpuñadodehojassecasensusmanos,quediseminóporelmontoncitoquehabíaformadoenla tierra—.¿Oquizáshasdecididoperseguiresas tierrasquetantoansías?

—Supongo que merezco todo lo que podáis decir de mí. —Rowen searrodillóasulado,yempezóadarformaaunpuñadodehojas—.Laverdadesquehevenidodenuevoadisculparme.Mehecomportadocomounpisaverdedeltresalcuarto.

—Supongoquenoesperarásqueloniegue.—No.Cuandodije todoeso,mecomportécomouncobarde.Sólopensaba

enmí,encómovuestroamorpodríaafectarmireputación.—Dijistequepensabasenelbiendelacorona—recordóTanalasta.—Quizá pensara en ambas cosas.—Rowen se encogió de hombros—. O

quizá no pensaba en nada. En cualquier caso estaba equivocado. No mecorrespondeamídecidirquéconvienealacorona.Osruegoquemeperdonéis.

Tanalastahundiólosdedosenelbarroyloesparciódelrevéssobreelhumusde lashojasquehabíadepositadoenel suelo.Pormuy sincerayhumildequefuera la disculpa deRowen, pocopodía atemperar su enfado.Nohabía hechoningunaalusiónasucapacidadparagranjearselaconfianzadesussúbditos,¿yquéfuturopodíaesperarleconunhombrequenocreíaenella?

—Graciasporaclararelasunto,Rowen—dijoTanalasta,enuntonodevozsarcástico—. Temía que al comportarme como una idiota, también te hubieracargadoconlosdeberesdemiposición.

—Ahora sois vos quien juega con mis palabras, princesa —dijo Rowen,enfadado—.He venido a deciros que estoy de acuerdo con vos. ¿Por qué noqueréisescucharme?

—Teheescuchado.—Tanalastaquisodecirquenolehabíagustadoloquehabía oído, pero lo pensó mejor y, en lugar de recriminarle con acidez sucomportamiento, se limitó a sacudir la cabeza—: No creo que tenga sentidoseguirconesto,Rowen.Quizádebierasirte.

—Si lodeseáis—dijoRowendespuésdemirarla con incredulidadduranteunbuenrato.Ellasiguiótriturandoconsusmanoselhumus.

Page 260: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Así... —Recordó que partiría a la mañana siguiente, y que, con todaprobabilidad,seríalaúltimavezquelovería.Tanalastaestuvoapuntodedecirqueno,quenoera loquequería...Pero¿dequé ibaaservir?Aúnnocreíaenella.Hizoacopiodetodasufuerzadevoluntadycompletólafrase—:Asíes.

Rowensevolvióparaalejarsedelaprincesa,perodeprontosedetuvo.—No.—¿No?—preguntóTanalasta,másconfusaquecontrariada.Elexploradorseacercóaellaehizoqueselevantara.—Laverdad,Tanalasta,esésta.Despuésderodearlaensusbrazoscontantafuerzaquelalevantódelsuelo,

labesóapasionadamente.Laprincesaestabatanasombradaquenopudonegarsea aquel beso. Había imaginado aquel momento desde que había conocido aRowen, y era él quien por fin había tomado la iniciativa. Su sentido de laoportunidaderatípicamentemasculino,peropeseaelloelcuerpodeTanalastareaccionócontantapasióncomoensuanteriorbesoen la torrede los trasgos.Una sensacióndegozosa ansia recorrió todo su cuerpo, tantoque se preguntócómounasensacióntalpodíaserfrutodeotracosaquenofueraladiosaalaqueambos veneraban. Antes de que pudiera darse cuenta tenía las manos en sucintura, lo atraía hacia sí, y una sensación de calidez sagrada fluyó por sucuerpo, alejando de sí toda ansia mientras ahondaba en su decisión. Deseabadisfrutar delmomento, acariciar con susmanos cada centímetro de su piel, yresponder a la llamadade la pasión con todas sus consecuencias, pero aúnnopodíaentregarsealcarnalabandono...nomientrassumentesiguieraenfrentadaasucorazón.

TanalastadeslizóunamanoentreellosyempujóaRowenporelpecho.Elexplorador la besó si cabe más apasionadamente, y con una de sus manosacariciósupechoy lecausóunplacersin igual.Ellacerró losojosduranteunsolitario latido de corazón,momento en quemordió al explorador en el labio,quizáconmásfuerzadelanecesariaparallamarsuatención,ylogróquitárselodeencima.

—¡Rowen!—LavozdeTanalastatransmitíamáspasiónqueenfado,másdeloquehubieradeseado.Tragósalivaydijo—:¿Quésignificaesto?

—Creo que ya lo sabes.—Rowen se llevó un dedo al labio donde ella lehabíamordido,ydespués lamiródirectamente,enfadado—.Nopensabaen la

Page 261: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

princesadelacorona,sinoenlamujerqueconozcoyalaqueamo.—¿Que amas?—La palabra no sonó tan hueca como había esperado. De

hecho, sonaba muy bien—. Eres tú el que está tan preocupado por lasconsecuencias que nuestra relación puede tener para la corona. ¿Qué piensashaceralrespecto?

—Laverdadesquenolosé—respondió,haciendoungestodenegación—,y tampoco puedo decir que me importe mucho, siempre y cuando puedasprotegermedeVangerdahast.—Ajuzgarporeltonodesuvoz,setratabadeunamentiraamedias—.Preferiríanovivir loquemequedadevidaconvertidoensapo.

Tanalasta lomiró largamente; quería ganar tiempo para llegar a la mismaconclusión que su propio corazón. La princesa conocía demasiado bien alexploradorparacreerque,depronto,sehabíaolvidadodesudeberparaconlacorona. Simplemente, había llegado a la misma conclusión que ella hacía yatiempo.

—¡EstarásmuyenamoradosicreesquepuedoprotegertedeVangerdahast!—sonriólaprincesa.CogióaRowenporelbrochedelacapayatrajosurostrohaciaella—.Aunquetediréunacosa:heleídoqueunaprincesapuedebesaracualquiersapoquelevengaengana.

Acaricióellabioheridoconsulengua,ydespuésladeslizóensubocaparadarleunbeso largoyprofundo.Rowenrespondióalbeso tirandodeellahaciaatrás,consuavidad,paraquesetumbaraenelsuelo.Tanalastaseapretócontraélardiendo de puro deseo. Lasmanos del explorador acariciaron sus hombros ypechos,encendiendochispasdepasiónallídondelatocaba,ylaúltimasombradedudadesapareciódesumente.Roweneraelhombredesuvisión.Losabíapor el modo en que su piel se encendía al tocarlo, y supo que nunca querríasepararsedeél.

Apartó los labios lo suficienteparabesar sucuelloy susurrar entrebesoybeso:

—Rowen...—Tuvo que parar para recuperar el aliento—.Necesitamos unplan.

—Tengounplan.Rowen desabrochó el cinturón de Tanalasta y hundió la mano en la piel

desnudaqueocultabalatúnica.Ellatemblódepurogozoycerrólosojoscomo

Page 262: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

sifueraaperderelconocimientodelplacerqueleproporcionaba.—No...Cuando titubeó lamano deRowen, ella la cogió por lamuñeca y guió su

palmahastaquedioconunodesuspechosdesnudos.—Esdecir,sí—dijo—.Pero¿quémedicesdelfuturo?—Nopuedodejarquemeacompañes—respondióél,conlamanocrispada.

Hizoademánderetirarla,perolopensómejorcuandoTanalastaseloimpidióalapretarelbrazoconsuhombro.Unasonrisacruzópor laexpresióndeRowenque,dealgúnmodo,logrócontenersudeseolosuficientecomoparaañadir—:NosécuántotardaréenencontraraVangerdahast,y...

—Y yo debomostrarle al rey lo que he descubierto, tan pronto como seaposible...Losé.—Tanalastaacercósuotramanoalcinturón,yempezóadesatarla hebilla. Estaba tan nerviosa (¿o excitada?) que le temblaban las manos—.¿Cómoteloquito?

—Escomoeltuyo.Rowenarqueólaespaldaparadarlemásmargendemaniobra,yfinalmente

pudo desabrochar la hebilla del cinturón. Tanalasta cogió el dobladillo de sutúnicayselaquitóporloshombros.Nopodíaestarmásnerviosa,ydecidióqueeralaprincesamásafortunadadetodaFaerun.Seinclinódenuevoparaabrirsepasoabesosporsucuello.

Rowen lanzóungemidoquedo,despuéspermaneció inmóvilyensilencio.Por un momento, Tanalasta temió estar haciendo algo mal... o, al recordar eltemblor que agitaba sus manos, pensó que, quizás, él se había excitadodemasiadorápido:había leídoal respectoenelTratadode labuenaesposa,deMiriamButtercake,queaveces loshombres sufren talesdecepciones,peronoera el caso. Tan pronto como se había quedado quieto, Rowen atrajo su bocahaciasíylabesódenuevoapasionadamente.

—Hayunacosaqueni siquierapuedendictar los reyesy las reinas,yquesólonosotrospodemoscontrolar—dijo,mirándolaalosojoscuandoterminódebesarla.

—Losé.Laprincesaempezóaquitarselatúnica,peroRowenseloimpidióalcogerla

deunbrazo.—No.Merefieroaquehayunmododequenopuedansepararnos...aunque

Page 263: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

sólosiestásrealmenteseguradequeestásdispuestaaarriesgarlacorona.—Tengotreintayseisaños—dijoTanalastasintitubear—.Siaestasalturas

nopuedotomarunadecisión,¿quéclasedereinasería?Rowen sonrió, se puso de rodillas y cogió la bolsa de semillas que había

juntoalmontoncitodetierrayhojasquelaprincesahabíapreparado.Cogióunasola semilla de columbina y la colocó en la palma de su mano. Tanalasta lacontemplódurantealgunoslatidosdecorazón.Estabamásnerviosaquenunca:en su oído oía la sangre que corría por sus venas, sentía el corazón como sihubierasubidohastasugarganta.

—¿Lasemillade laceremonia?—preguntófinalmente,cuandorecuperóeldominiodesímisma.

—Sivasatenerme—asintióRowen.—¿Estás haciendo esto por mí... o por el reino? —preguntó Tanalasta al

ponersetambiénderodillas.—Por ninguno de los dos. —Rowen siguió sosteniendo la semilla en su

mano—.Lohagopormí.Elcorazón,lasangrequegolpeabaensuoído,desaparecieron,yloslatidos

deTanalastarecuperaronunritmonormal,comosihubieravueltoasupecho,allugaralquepertenecía.

—Buenarespuesta.Extendió la palma de su mano para posarla encima de la de Rowen, y

empezaronaentonarlainvocación.—Bendícenos,oh,Chauntea, talycomonosotrosbendecimosestasemilla,

paraquetodacrianzacrezcasanayfuerte.Conlasmanos libres,TanalastayRowencavaronunagujeroenelmontón

que ella había preparado.Después, la princesa cogió la cantimplora y regó elsuelo.

—Preparamosestelechoconamoryalegría—dijoRowen.Juntos,colocaronlasemillaenelagujeroylaenterraron.—En el nombre de Chauntea, que las raíces de lo que hoy plantamos

arraiguenenlomáshondo...—empezóTanalasta.—Yqueeltallobroteconfuerza...—Yquelaflorflorezcaradiante...—Yelfrutoseaabundante.

Page 264: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Terminaron juntos,despuésvolvierona regarel sueloysebesaron.Enesaocasión,fueRowenquienquitólatúnicaaTanalasta.

Page 265: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

L18

oshuesosdelmagosupremoestabanalaalturadeloquepodíaesperarsedesu edad. Después de más de diez días persiguiendo ghazneth, le dolía la

espalda,teníalascaderasparaelarrastre,yloúltimoquequeríaeraascenderunaladera rocosa a cuatro patas para espiar la posición de una tribu demarranos.Paraesoestabanlosexploradoresdelrey...peroVangerdahastsehabíaquedadosin exploradores. Owden Foley había encontrado al último aquella mismamañana: reducido a un cuerpo ensangrentado y destripado, cubierto por unreguero de hormigas rojas. En aquella ocasión no se planteó la posibilidad deenterrarlo. Se limitaron a rociarlo con aceite inflamable y prender fuego a sucuerpo,despuésdeencomendarsualmaaHelm.Ahoraelmagosupremoteníaqueapañárselasporsuspropiosmediosparaespiarlasposicionesenemigas.

Vangerdahastcoronó lacimade lacolina,yobservóunaextensiónenormede terreno cubierta de niebla, que formaba parte del pantano delMar Lejano.Hacia el horizonte era una extensión de hierba dorada y verde con canales deaguas broncíneas, que discurrían entre bosquecillos diseminados de chopos ypíceas de pantano. El lugar estaba poblado por cormoranes y garcetas negras,todas tan chillonas como una banda de trasgos, además de nubes amorfas deinsectosnegrosquesobrevolabanlahierbaagranvelocidad.

En la costa cercana, varias tribus orcas habían formado un campamentoconjunto sobre un saliente de tierra rocosa que asomaba del pantanoaproximadamente un millar de pasos. Los machos habían formado en cuatrograndes compañías y se retiraron a un extremo de la pequeña península paraformarcuadrillasyadiestrarseenelusodelasarmas.Lashembrasylosniños

Page 266: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

estaban situados alrededor de los fuegos tribales o paseaban por la orilla enbuscadepecesycrustáceos.Unatorrededospisos,edificadaconbarroseco,seerigíaenelextremodeunpromontorio,ydesdeellasedominabaelpantanoportres lados, y en tierra estaba protegida por un puente levadizo demadera. Suvasta arquitectura y las troneras redondas recordaban a las obras que solíanhacerseantiguamenteenCormyr.Delasventanasdelsegundopisoemanabaunaextrañaauradeoscuridadquecubríaellugarcomounsudario.

El agua que fluía alrededor de la torre relucía a causa de los peces deescamas plateadas que la poblaban. Las nubes de insectos sobrevolaban loscampamentosorcosemitiendounzumbidoqueenloquecíaaVangerdahast,pesea ladistanciaque lo separabadeellas.Unaextraña red formadaporpequeñasgrietas se extendía a lo largo del centro de la península, y despedía gruesascortinasdehumoamarillentoqueseelevabaenelaire.Todalavegetaciónquehabíaencienmetrosa la redondadelpromontorio sehabíamarchitado,yunaalfombra de moho gris se extendía por la base. La ladera que había entre elescondrijodeVangerdahastylacostaestaballenaderestosdeciervo,todostanpodridos,quenisiquieralosorcosseloscomerían.

Elmago supremode la corte hizo un gesto para llamar la atención de susayudantes,querápidamentesereunieronconél.Eranelcomandanteenjefedelos Dragones Púrpura y el segundo de los magos guerreros. Alaphondar yOwden siguieron a la pareja, pese a queVangerdahast no se lo había pedido,peroelmagonopusoningúninconveniente.Elsabiosupremotomaríanotadeloque sucediera, mientras que las opiniones del maestre de agricultura Foley amenudo valían la pena, siempre y cuando Vangerdahast no se empeñara encontradecirle.

Vangerdahastseñalólatorredebarrosinabrirlaboca.—¿Tanalastaestáahídentro?—preguntóOwden.—Losabrécuandoentre.—Supongoqueeslaúnicaformadedescubrirlo—asintióOwden.AVangerdahast se le cayó el alma a los pies.Lo cierto es que ni siquiera

sabíaconseguridadsi lasghaznethestabanallí,yesperabaqueOwdentuvieraunaideamejorparadescubrirlo.Enlugardeello,parecíaquetendríanquetomarlatorrealasalto...yconmenosdelamitaddelacompañíaquehabíapartidodeArabel.

Page 267: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Ésteesmiplan—dijoVangerdahast,despuésderespirarprofundamente.Explicó rápidamente lo que pretendía, y pidió a los dos comandantes que lorepitieran palabra por palabra. Cuando lo hubieron hecho, se volvió haciaOwden para darle una última oportunidad de quedar en evidencia—.Doy porsentadoquelasghaznethestánahí,yaquelosorcosnosuelenpracticarconlasarmas.

—Ni comparten campamento, ni construyen torres que recuerdan el estiloarquitectónicodelaantiguaCormyr—añadióOwden—,ytambiénporquehacedíaymedioquenolasvemos.¿Aquéesperamos?

—A nada, según parece. —Vangerdahast inclinó la cabeza ante suscomandantes, que se retiraron veinte pasos colina abajo para preparar a sushombres.

—¿Supongoqueustedesdossedaráncuentadequeaquíhaymásceradelaqueardeasimplevista?—preguntóAlaphondarencuantosehubieronido.

—¿Serefiereustedalatorre?—preguntóOwden—.Nocreaquesemehaescapadosusignificado.

—¿Quésignificado?—preguntóVangerdahast.—Lo que supone esa torre —explicó Alaphondar—. Históricamente, las

ciudadelasconstruidasenlugarestandesangeladossirvendecubilparaespíritusquesiempreestánenguardia.

—Me parece una buena definición para referirse a una ghazneth—opinóVangerdahast.

—Yomásbiendiríaque,comodescripción,bienpodríaaplicarsealseñordetodasellas—dijoOwden—.Nosadentramosenelterrenodelfantasma,amigomío.Haráustedbienenescucharlavozdesualma.

—Mialmamedicequeunantiguoespíritunoviviríaenunatorreconstruidacon barro —replicó el mago, ofendido—. Con este clima, una construccióncomoéstanotardaráenderretirse.

—Por eso debemos considerar los motivos que haya podido tener laghaznethparaerigir la torreenunpantanocomoéste—señalóAlaphondar—.¿HanleídoelensayodeAliBinwar,tituladoDelascuatronaturalezas?

—Lamentablementehe tenidocosasmuchomás importantesquehacerquemalgastar mi tiempo leyendo esos libros inútiles —respondió Vangerdahastmirandoelcielo.

Page 268: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Porsuerte,yono—dijoOwden—.¿Serefiereustedalcapítuloquehabladelaamalgamaciónelemental?

—Exacto —respondió Alaphondar con un brillo en la mirada—. En elpantanotenemoslafusiónentrelatierrayelagua,perolaausenciadelaireyelfuego. Los elementos pasivos están combinados, pero los activos estánexcluidos.

—Condicionesperfectasparaladescomposiciónespiritual—admitióOwden—.Tendremosqueandarojoavizor.

—Porsupuesto,peronoestabapensandoenusted.—Alaphondarseñalóconlamanolaladerarocosa—.Hayunmontóndepiedrasporaquí.¿Porquésehaconstruidounatorredebarro?

—Porque el barro combina el poder de la tierra con las propiedadesdisolventesdelagua—repusoOwden,abriendounosojoscomoplatos.

—Sí... elmedio idealpara la transformación.—Alaphondar señaló la torrede barro—.Dale forma, añade un poco de fuego y aire, y unos días despuéstendrásunatorre.

—O proporciónale una chispa de vida, y tendrás una ghazneth —señalóOwden.

—¿De qué están hablando? —preguntó Vangerdahast, frunciendo elentrecejo.Alverqueningunorespondía, su imaginación ledio la respuesta—.¿QuepretendenhacerunaghaznethdeTanalasta?

—Esopodríaexplicarporquémotivolasghaznethhanestadotrabajandotanduroparamantenernosapartadosdeestelugar—sugirióAlaphondar.

—¡Nosearidículo!—exclamóVangerdahast,conunasensacióndevacíoenlabocadelestómago—.LacriptadeBoldovarnoestabaprecisamentecercadeunpantano.

—Muchospantanossehansecado—replicóelsabio.Vangerdahast quiso replicar a su vez que tampoco habían encontrado ni

rastro de una torre, aunque desde luego unmillar de años eramucho tiempo.Tantasestacionesdelluviasprimaveraleshubierandestruidocualquierrastroquepudieraindicarquelatumbahabíasidoprotegidaporunafortalezadebarro.

—¿Yquémedicendelárbol?Dudoqueencontremosmuchospoetaselfosenuncampamentoorco.

—Esareflexiónsemeantojacontradictoria—dijoOwden—,claroquehay

Page 269: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

tantascosasqueignoramos...—Incluyendoelpropósitode la torre.—Vangerdahastempezóadescender

lentamente la ladera de la colina—. No pienso escuchar más conversacionesfilosóficas sobre el tema. Podríamos estar discutiendo todo el día y noaclararíamosnada.SiTanalastaestáenesatorre,debemosrescatarla.

—Ysi no es así, tendremosqueobligar a la ghaznethquenosdigadóndeencontrarla—dijoOwden.

ElclérigosiguiólospasosdeVangerdahast,yAlaphondarsedirigióagatashacia el puestodesdedondevigilaría la posición, entre unmontóndepiedras.Nadiesugiriólaposibilidaddeemplearlamagiaparalocalizaralaprincesa.Siaúnnolahabíanhechoprisionera,lamagiaconduciríaalasghaznethhastaellacomounaflecha.

Alsepararse,Alaphondarsedetuvo.—Buenasuerte,amigosmíos,vayanconcuidado.—No se preocupe por nosotros—aseguróVangerdahast—.Es usted quien

asumeciertoriesgoalquedarseaquísolo.¿Recuerdamiseñal?—La estrella fugaz —asintió Alaphondar. Hizo un gesto para señalar el

bolsillodehuidaqueincluíasucapa—.Mereuniréconlacompañíaencuantolavea.

—Estupendo.Sitenemosalaprincesa,nopodremosdemorarnosmucho—dijo Vangerdahast—. Si no la rescatamos, significará que tampoco tenemostiempoparapreocuparnosdeusted.

—Y si las cosas se ponen feas, Alaphondar, ni se le ocurra reunirse connosotros—añadióOwden—.Nopodráustedayudarnos,yalguiendebeinformaralrey.

—Preferiblementeenpersona.—Vangerdahastacercólamanoalbrochedela capa deOwden—.Demodo que no lo utilice, amenos que sea necesario.Deberíavivirustedlosuficienteparaquepudieraescribirlacrónicadetodoloquehemosdescubiertosobreesascriaturas.

—Losé,losé—respondióAlaphondar,aregañadientes—...Miespadaeslapluma.

Volvióadesearlesbuenasuerteydespués siguiógateando.VangerdahastyOwden regresaron al lugar donde habían dejado los caballos ymontaron. Lossupervivientes de la real compañía expedicionaria estaban subidos a la silla,

Page 270: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

esperándolos;cadaunodelosjinetesllevabapuestaunacapaconelbrochedelcuello abierto. Aunque las capas eran para los magos guerreros, la compañíahabía perdido tantos hombres, que ahora todos, incluido el Dragón de rangoinferiorquelosacompañaba,disponíandeuna.

Vangerdahast inclinó lacabezay loscomponentesde lacompañíacerraronsus broches. Los magos guerreros empezaron a animar las armas de losDragonesmediante sumagia, y la atmósfera se llenó con elmurmullo de losencantamientosmágicos amedida que entonaban los cánticos necesarios paraproporcionara todosunescudomágico.Elmagosupremohizo lopropioparaOwdenyél,antesdevolversehacialacimadelacolina.Alaphondarpermanecíaarrodilladoentreunaspiedras;entrecerrabalosojosparavigilarlatorre,conelbrazoenaltodispuestoadarlaseñal.

—¡Preparados!—Vangerdahastemprendióeltrotehacialacolina,animandoasushombresaquelosiguieran—.Losrezagadoslopagarán.

Habíanalcanzadolacimadelacolina,antesqueAlaphondarhubierabajadocompletamente el brazo. Vangerdahast hincó los talones en los ijares deCadimus,urgiendoalgalopealcaballo.Labrisatrajoelruidodeloscascos.Elclamor de una campana de alarma reverberó en el pantano, seguido por untumultodegritosygruñidos.

Elmago supremo coronó la cima de la colina y vio quinientos orcos quecorrían hacia el istmode la península.Delante de losmarranos volaban cincovetas oscuras, cuyas alas negras eran meros borrones al dirigirse a todavelocidadhacia la real compañía expedicionaria.AVangerdahast se le cayóelalma a los pies. Hasta entonces jamás se habían enfrentado a más de tresghazneth.

La carga emprendió el descenso de la colina y cobró velocidad. AVangerdahast ledolíansusviejas rodillasde tantohacer fuerzaen la silla.Lasghaznethsiguieroncobrandoalturaamedidaqueseacercaban,yseencontrabana unos treinta metros en el aire cuando la compañía cruzó el istmo de lapenínsula. El mago supremo deslizó una mano en el interior de su capa yencontróelbolsillodehuida,conelcuelloinclinadoparanoperderdevistaalasghazneth.Finalmente,cuandocalculóquedebíandehaberalcanzadolossesentaosetentametrosdealtura, lasghaznethseinclinaronsobreunalaparacaerenpicadosobrelaretaguardiadelacompañía.

Page 271: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Vangerdahast miró al frente de nuevo y vio que los orcos formaban enapretadasfilasenelistmodelapenínsula,mientrassusoficialessepreocupabandeempujarygolpear a los cobardes, para evitarque abandonaran laposición.Losmarranosibanarmadoscontodotipodelanzas,espadasypicas,ocualquierotra cosa que llevaran en el momento en que sonó la alarma. Aunque nodispusierandemagia,romperlaslíneasleshubieraparecidocosahecha,peroelmago supremo no estaba dispuesto a perder el tiempo enzarzándose en uncombate cerrado con los marranos, sobre todo teniendo en cuenta que lasghaznethcaíanenpicadoporlaretaguardia.

Vangerdahast clavó la mirada en uno de los campamentos tribales quedistaba unos doscientos pasos de la torre, situado detrás de una línea larga deorcos que recorrían la península para frenar la carga. Apenas distinguía lassiluetas lejanas,correspondientesamujeresyniños,quevolvíanlamiradatrassus guerreros y hacían toda suerte de aspavientos para animarlos. Menudasorpresaseibanallevar.

Vangerdahast hundió lamano en el bolsillo de huida, y un gran cuadradonegrosedibujóantesumirada.Cadimusrelinchóeintentóevitarlo,peronotuvotiempo.Penetróenelportalalgalopetendido,yVangerdahastexperimentóesasensacióntanfamiliarenlaquelaoscuridadyelvacíoibancogidosdelamano.

Enunbreveinstantevolvióasaliralaluz;lacabezaledabavueltasyteníaun pitido intenso en los oídos, al que acompañaban los gritos y quejidos desorpresa que resonaban a su alrededor.Cadimus dio un traspié, algo chilló yVangerdahast recibió un golpe en la espinilla. Bajó la mirada, pero aún veíaborrosoynopudosaberloquehabíasucedido.Elsonidodeloscascosempezóaenvolverlo, y elmundoestalló enuna cacofonía indescriptiblede resoplidosyrelinchos.Cadimus topóconalgoblandopero resistente,ya continuaciónconotra cosa igual de blanda y resistente en el otro lado. En ese momentoVangerdahastempezóavislumbraranteél la formaredondade lagrupadeuncaballo.

Elmagosacudiólacabezaparaaclararselasideas,recordandoqueestabaenplena carga de caballería. Empezó a distinguir las formas de los caballosdesorientadosyloshombresdemiradavidriosaquelosmontaban.Avanzabanagalopetendido,ignorandolatorregruesaerigidaenunextremodelapenínsula,aunoscincuentapasosalfrente.

Page 272: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¡Alto!—VangerdahasttiródelasriendasdeCadimus,procurandoguardardistanciasconelcaballoqueloseguía—.¡Alto!¡Deténgase!

Lentamente,losmiembrosdelacompañíaempezaronaejecutarsusórdenes.Para cuandoVangerdahast alcanzó la torre, la carga había perdido bríos y loscaballos daban bandazos a ciegas, mientras los hombres que los montabansacudían la cabeza para librarse de la confusión subsiguiente a lateletransportación. El terreno en el extremo de la península estaba lleno degrietas, de las cuales surgía un humo amarillo que impregnaba el aire de unhedoracreasulfuro.Nubesdemosquitos,avispasymoscasvolabandeunladoaotro a través del humo, sin dejar de morder y picar a diestro y siniestro.Vangerdahastpodíaoírsuzumbidoenloquecedor.

Obligó a Cadimus a volver grupas y se encontró ante los restos delcampamentoorco.Viopielesycomidaamediococinardispersaspordoquier,yalashembrasaterrorizadasqueagrupabanalosjóvenesaturdidosempujándoloshacia el pantano. Cerca de dos docenas de machos y un número similar defornidashembrasseacercabanaellos,armadosconlanzasdecaza.

VangerdahastcondujoaCadimusatravésdeungrupodeDragonesaturdidosyagitólamanoendirecciónalaparteanchadelapenínsula,mientrasformulabaunaserielargaycomplejadeconjuros.Alcontrarioquelamayoríadehechizos,aquél no requería un componentematerial, pero símediominuto de complejacantinela.Antes de que terminara, los ancianos orcos empezaron a arrojar laslanzas contra él, y las ghazneth aparecieron arriba, sobre el promontorio,surcandoelcieloderegresoalatorre.Aunquenopodíaverelcuerpoprincipaldel ejército orco, estaba seguro de que estaría cargando península arriba paradefenderlatorre.

CuandoVangerdahastterminóelhechizo,unmurodeuncolormuyvivoselevantóanteél,unmuroqueseextendíaa lo largode lapenínsulapenetrandoprofundamenteenelagua.Nobastaríaparadeteneralasghaznethvoladoras,porsupuesto, pero el ejército orco se vería obligado a retroceder hasta el pantanopara vadearlo. Cualquier guerrero lo bastante estúpido como para intentarescalarloseríarechazadotanmagulladoquenadiepodríareconocerlo.

CuandoVangerdahastsevolvióhacialatorredebarro,unalluviadeflechasorcas llovía de las troneras. La real compañía expedicionaria empezaba arecuperarse del aturdimiento y respondía al fuego enemigo, pero sin mucho

Page 273: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

éxito.Elmantodeoscuridadqueparecíaprotegerel lugar, lesimpedíaapuntarconefectividad,porloquesusflechaseran,másomenos,tanefectivascomolasdelosmarranosquealcanzabanlasarmadurasprotegidasporescudosmágicos.

Vangerdahast cabalgó al frente para entrevistarse con los subcomandantes,que permanecían agrupados recibiendo órdenes de Owden. Con el entrecejofruncidoporlapresuncióndelclérigo,elmagodesmontódejandoaCadimusenmanosdeunodelosDragonesmásjóvenes,yseacercóalosoficiales.

—¡Dejendeperderel tiempoconelcampesino!—VangerdahastempujóalcomandantedelosDragonesPúrpurahaciaelmuro—.Lasghaznethllegaránenunpardeminutos.Desplieguealosarqueros.

—Asusórdenes—respondióelotro,pálido.Sedispusoaobedecersinperderunsegundo,ydioalgunasórdenesavozen

cuelloa losDragonesparaque formaranencuadro.Vangerdahast sevolvióalcomandante de sus magos guerreros y señaló las puertas de la torre. Para susorpresa, tenía una capa de hierro negro. No comprendía por qué razón se lehabíaescapadoesedetalledesdelacimadelacolina.

—¿Puededecirmeporquérazónsiguelatorreenpie?—No.—El jovenmagopalideció—.Lahemosatacadocon fuego, rayosy

deformación.Perotodohasidoinútil.—Dehecho, loshechizosnohacensinofortalecer laspuertas.Elhierrono

aparecióhastaquesusmagosempezaronahacersutrabajo—añadióOwden.—¡Pues inténtenlo con las paredes! —bramó Vangerdahast—. ¡No hay

tiempoqueperder!Amedidaquehablaba,elmagosupremosacólapiedra imándelbolsilloy

cogióunapizcadepolvode lacapadeOwden.Mezclóelpolvocon lapiedraimán,señalandolabasedelatorre,ymurmuróunhechizo.Unrayobrillanteytranslúcidosurgiódelapuntadesusdedos,yenvolvióeledificioformandouncírculodeenergíacrepitante.Elbarrosevolvióoscuro, liso,hastaelpuntodequeparecíaestarapuntodefundirsecuandolamagiadelmagosedesvaneció,yremitióhastaformarundiscolisodemármolnegro.

Vangerdahast profirió entre dientes una maldición cuando la flecha de unorcorebotótrasalcanzarleenelpecho.

—Igualquelapuerta—dijoOwden—.MetemoqueAlaphondarcomprendemejor la naturaleza de la torre de lo que cree. Es como si empleara nuestra

Page 274: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

propiamagiacontranosotros.—Obviamente—resoplóVangerdahast.Decidióprobarlatácticaopuesta,apuntóconlamanolapareddelatorrey

mascullóentredientesunconjurorápidoparadisiparmagia.Elcírculooscurosehizomayor.

Una ráfagade flechas lanzadaspor losDragones anunció la llegadade lasghazneth.Vangerdahastobservóelmuroyvioqueloscincofantasmascaíanenpicado sobre el pantano, con el pecho y las alas atravesadas por flechas conpunta de hierro. Le pareció que dos de las criaturas volabanmás lentas de lonormal,yunadeellasesparcíaasupasoelreguerodesangreoscura.

—Silamagianosirve,recurriremosaltrabajoduro—dijoOwden.ElmaestredeagriculturaempuñólalanzadepuntadehierroqueunDragón

habíaclavadoentierraycargóendirecciónalatorre,apartándosedelcírculodeoscuridadanimadoporVangerdahast.

Una auténtica lluvia de flechas cayó sobre el clérigo, procedente de lastronerasdelatorre.Lamayoríanolealcanzaron,peroinclusolasquelohicieronrebotaroncontra laarmaduramágicasincausarleelmenordaño.Vangerdahastlomiró con expresión hosca, pero finalmente comprendió lo que se proponíahacerelclérigoyordenóaunacuadrilladehombresquelosiguieran.

—¡Vayanaayudaraeseloco!¡Tanalastamearrancarálasorejassileocurrealgo!

Una docena de Dragones empuñaron las lanzas y salieron tras Owden,seguidosdeunpuñadodemagosguerrerosquerápidamentecrearonunescudomágico sobre sus cabezas para desviar el diluvio de proyectiles orcos.Vangerdahastpermanecióinmóvilunossegundosparaobservarlarespuestadelenemigo,peroelauradeoscuridadqueenvolvía la torre le impidióver loquesucedíaensuinterior.Laúnicareacciónconsistióenunleverecesodelalluviadeflechas,cuandolosmarranossecerciorarondelafutilidaddesudefensa.

Lasandanadasdeflechas lehicieron tomarconcienciade laproximidaddelasghazneth.Almirarasualrededor,VangerdahastvioalosDragonesPúrpuraformadosenlíneasdispersasalolargodelacosta,empeñadosenllenarelairedeflechasparadefendersedelasghaznethquesobrevolabanelterrenoarasdesuelo.Detrás de cada línea deDragones Púrpura había unmago guerrero quelevantaba el dedo por encima de sus cabezas mientras entonaba el conjuro

Page 275: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

correspondientealmuromágico.Cuando los magos guardaron silencio, surgieron unas cortinas onduladas

alrededor de losmárgenes de la península, encerrándola en un perímetromuysimilaralqueprotegecualquiercastilloformadopormurosmágicos.Unpardeghaznethsedierondecabezacontraestasbarricadas,yenellugarreverberaronsusgritosdedolor,aunqueparecíanmássorprendidasqueheridas.Losotrostresfantasmas se dirigieron rápidamente hacia la costa para evitar los hechizos, ycomounrelámpagonegroirrumpieronatravésdeunalíneaformadaporalgunosDragones,paraclavarsusgarrasenelmagoguerrerosituadoenretaguardia.

Unodeloshechiceroslanzórápidamenteunhechizodetelaraña,uniéndoseasu atacante en una especie de capullo formado por un filamento pegajoso yblancuzco. Los otros dos magos guerreros se vieron levantados del suelo;gritaron y agitaron brazos y piernas cuando las ghazneth remontaron el vueloarrastrándolosaellos.UnalluviadeflechaspersiguióalosfantasmassuperandoelmuroprismáticocomounrelámpagodeVangerdahast,aunqueesonobastaraparaimpedirquelascriaturassoltaranasusvíctimasenmediodelejércitoorco.Despuésdeunbrevetumultodemagiaapresurada,entrelosgritosdelosorcos,éstoslanzaronunoscuantosvítores,locualanunciabanladerrotadelosmagosguerrerosanteunenemigomuysuperiorennúmero.

EnlapartedelmuroquedabaaVangerdahast,unadocenadeDragonessearrojó sobre la ghazneth que había quedado atrapada a la telaraña. Losfilamentosempezabanamudarsucolor,yloshombresemprendieronelataqueconreticencia.Finalmente,unocogiósuespadaconambasmanosylahundióenelcapullocon todassus fuerzas.Elataquefuesucedidodeungritoestridente,perocuandoelsoldadointentórecuperarlaespadaparavolverahundirlaenelenemigo,éstapermanecióenganchadaalatelaraña.Empezóaremoverladeunladoaotroconlaesperanzadeagrandarlaheridaycausartodoeldañoposible.Al ver que eso producía un rugido ensordecedor, varios de sus compañeroshundieron sus armas en la telaraña e imitaron la táctica.La ghazneth aulló derabia y dolor, forcejeando con todas sus fuerzas, y losDragones tuvieron quehacerverdaderosesfuerzosparanosoltarlaempuñaduradelaespada.

De pronto, el fantasma dejó de forcejear.Un gran estruendo levantó a losDragones del suelo cuando éste se abrió bajo sus pies, para dar paso a unacolumna de humo amarillento que los hizo volar por los aires. Los soldados

Page 276: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

trazaron un molinete como si estuvieran bailando una danza aérea, mientrasgolpeaban y gritaban al fantasma con la espada y el puño cubierto por elguantelete,enganchadosasuenemigoporelhechizodetelaraña.Susvocessevolvieronroncasyrotasdespuésdeinhalarelhumoamarilloyacre.Unpardeguerreros se libraron de la telaraña y cayeron al suelo, mientras el humodesaparecíatanrápidamentecomohabíaaparecido.

La crisálida se hundió en el suelo arrastrando a hombres y armas, peroreapareció al cabo de unmomento cuandouna columnade fuego la arrojó denuevoporlosaires.Elhechizodetelarañasedisolvióalarder.LosDragonessedesintegraron en una maraña compuesta por la armadura quemada y cenizasaullantesqueseprecipitódenuevoenelabismo.Laghaznethsurgiócomounasilueta llameante, y permaneció flotando en pleno vuelo, extendió las alas yprofirióun largograznido.Cayó sobreun aladejandoa supasouna esteladefuego,conintencióndeatraparalmagoguerreroqueestuvieramáscercaconsusgarrasardientes,momentoenquedesapareciódelavistadeVangerdahast.

Las demás ghazneth llegaron sobrevolando por encima de los murosmágicos,procedentesdeloscuatropuntoscardinales,conlasgarrasextendidasydejando a su paso goterones de sangre oscura.El estruendo de lamagia y lasflechasquerasgabanelairelasobligóabatirseenretiradaalinstante,momentoenqueelsueloempezóatemblar.Unascortinitasdefuegosurgieronalolargode la columna de la península. El hedor a sulfuro se volvió asfixiante, y loshombres empezaron a toser, ahogarse y llevarse lasmanos a la garganta. Loscaballos de la compañía, asustados y libres de las riendas que sujetaban losjinetes,huyeronalgalopeporla líneadelacosta, topándosedevezencuandoconlasparedes invisiblesdelosmurosmágicos,ensuempeñoporbuscarunasalidaquelespermitieraalejarsedelapenínsula.

Los magos guerreros despejaron la atmósfera con una ristra de vientosmágicos,locualnoimpidióqueVangerdahastprofirieraunamaldición.

Hastaelmomento,lasghaznethnuncahabíanrecurridoapoderessemejantesparacombatira la realcompañíaexpedicionaria,ynopodíaevitarpreguntarsequé otras sorpresas les tenían reservadas. Toda su estrategia se basaba en lanecesidad de mantener controladas a las criaturas el tiempo necesario paraaccederal interiordela torre;Vangerdahastempezabaapensarquenisiquierapodríaalcanzareseobjetivotansencillo.

Page 277: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Elmago supremovio unaghazneth envuelta en llamasque sobrevolaba elmuro prismático que había creado, y a la que tuvo que obligar a retrocedermedianteuna tormentadehielo.DespuésechóacorrerparaunirseaOwdenylos demás que estaban junto a la torre. El maestre de agricultura y otros doshombresformabanhombroconhombro,atacandoelbarrocomoposesosconlapuntadehierrodelalanza,aunquesólohabíanlogradoarrancaralgunospedazosde barro. Se las habían ingeniado para practicar un túnel que penetraba unossesentacentímetroshaciaelinteriordelatorre,yelmurocedíacadavezquelogolpeabanconlaslanzas.DispuestoaimpedirqueelclérigodeChaunteaentraraprimero,VangerdahastseintrodujoeneltúnelyapartóaOwdendesucamino.

—Dejepasara losDragonesPúrpura—dijoelmagosupremo—.Tanalastanomeperdonaríaqueleocurrieraaustedalgomalo.

—Claro, sería tan lamentable como permitir que otro pudiera liberarla.—OwdenselibródelamanoconqueVangerdahastlocogía,perosehizoaunladoydejódecavar—.Continúeconsus juegossi tanto lodesea.Nocreoqueesopuedaalterarladecisiónquehatomadolaprincesa.

Vangerdahast se mordió la lengua para evitar replicar, consciente de queenfrentarse abiertamente a él sólo serviría para confirmar lomucho que temíaqueelclérigotuvierarazón.Tanalastasiemprehabíasidounamujerperceptiva;ahora, que además sehabíavuelto tozuda,necesitaría algomásqueun simplerescateparaquereconsiderarasusconvicciones.

Los soldados que cavaban la emprendieron con la pared de barro, y encuestióndesegundoslograronpracticarunpardeagujerosquedabanaloscurointerior.Unoloratierrahúmedainundóeltúnel.Unzumbidoextrañoreverberóen el interior de la torre, cuando los Dragones gritaron y retrocedieron comopudieron,conlascabezashundidasensendasnubesdeavispasnegras.

Vangerdahastlevantóunamanoysoplóenlapalma,dispersandolasavispasconunrápidohechizodeviento:magiadefensivaestándarparacualquiermagoguerrero que se preciara de serlo. Los dos Dragones cayeron de espaldas,cubriéndose los ojos y gritando de dolor. Owden y algunos Dragones se lasapañaron para apartar las manos del rostro, que lucían visibles muestras depicaduras.ElclérigorogólapiedaddeChaunteayempezóarezar.

—AhorresushechizosparaTanalasta—dijoelmagoalponerlamanoensuhombro—. Por mucho que lamente compartir su gratitud, la princesa podría

Page 278: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

necesitardesuspoderescurativosmásqueestossoldados.Owdenescuchóabatidosusargumentos.Vangerdahastnoledioelección,lo

pusoenpieysevolvióhaciaelinteriordelatorre,decuyointeriorsurgíaunanubedeavispas.MediadocenadeDragonesPúrpurasetaparonlacabezaconlacapaycargaroncontraelenjambrealacarrera.Superadaslasavispas,golpearonlaparedagujereadadeltúnelconelhombropordelante.

Los agujeros que habían practicado antes cedieron ante el empuje de losDragones,ylaparedsederrumbóparadarpasoaunportaldeapenasdosmetroscuadrados.Dosguerreroscayerondecabezaenlaoscuridad,conlaespinillaenelbordedelabrechaquehabíanpracticado.Allídondesuspiernasentrabanencontactoconlapared,unoscírculosdemármolnegroempezaronaextenderseamedida que la torre absorbía la magia de sus capas y escudos mágicos. Lasavispascayeronsobreellos,yloshombresempezaronagritarycorrersinordenniconcierto.

Unmagoguerrerodirigióunatormentamágicahaciaelagujero.Losbordesse volvieron demármol oscuro, pero bastó para que el viento empujara a lasavispas hacia lo más hondo de la torre. Varios Dragones se adentraron en laoscuridadytirarondesuscamaradasporlaspiernas.

Una tempestad de flechas orcas surgió de la oscuridad a modo derecibimiento.Lamayorpartegolpeócontrasuobjetivosincausarningúndaño,salvo dos que hicieron blanco y sus víctimas gritaron de dolor al encajar laspuntasdeflecha.Cuandosuscamaradaslossacarondeltúnel,unodeellosteníauna flecha alojada en el hombro, y en el otro atravesaba la garganta.Vangerdahast sacó un anillo de comandante de su bolsillo y se lo puso losuficientecomoparaactivarsumagia,despuésseloquitóyloarrojóalinteriordeltúnel.

Elanillobrillanteatravesóeltúnel,superólabrecha,ycuandocayóalsueloempezó a remitir su fulgor. La luz duró lo suficiente para permitir aVangerdahastverlanubedeavispasquegirabaentorbellinoenlaparedexterior,yaunadocenadeorcosquesedirigíanhaciaunapuerta.

—¡Bolasdefuego!—exclamóVangerdahast, trascomprobarqueTanalastanoestabaenlaestancia.

—¿Bolasdefuego?—seextrañóOwden—.¡Perosiesoesprecisamenteloquequieren!Esetipodemagiaconvertirátodalatorreenpiedra.

Page 279: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Y qué más da? Ya hemos abierto una brecha —respondió el mago,haciendoungestodeindiferencia.

Mientras los magos guerreros que estaban bajo su mando preparaban loshechizos,Vangerdahast comprobóqueel cursode labatalla en lapenínsula leeradesfavorable.Unadensanubedehumo,quebrillabaaquíyalládebidoalascortinasmágicas de color escarlata, cubría el campode batalla.LosDragonesPúrpurayacíanenelsueloadocenas,conlasmanosalrededordelagargantaocompletamente inmóviles. Los pocos que quedaban de pie apenas podían vernadaatravésdelasllamasyelhumo,estabansolosenlacosta,formandolíneasmaltrechas, tosiendo y asfixiándose debido al aire envenenado. No había nirastrode losmagosasignadospara apoyar a los soldados,y los caballosde lacompañíagalopabandeunladoaotrodelacosta,másenloquecidosquenunca.Por supuesto, Cadimus lideraba la carga. Cuando Vangerdahast no pudodistinguir ninguna ghazneth en el cielo, se preguntó si los fantasmas habríancaído,víctimasdelasarmasdehierrodelosDragones.

Perosuesperanzasequebróalobservarqueelfulgormágicoquedespedíaelmuroempezabaadisiparse.Aunquesuspropioshombresbloqueabansucampodevisión, tuvolacertezadequelasghaznethsehabíanacercadoalmuroparaabsorber lamagia.A su espaldahabíaunahordadeorcosdispuestos apelear,esperandoavadearlaorillayacabarconlossupervivientesdelarealcompañíaexpedicionaria.

Vangerdahast pensó que los marranos no encontrarían demasiadasdificultades.SufriríanunmomentodeconfusióncuandoCadimus y los demáscaballos atravesaran la líneadeorcos,perodespués tendrían lavictoria en susmanos.NodisponíadesuficientesDragonesvivosparaconteneralenemigo,ycaeríantodosencuantolosorcosllegaranasualtura.

Delinteriordelatorresurgióungranestruendoproducidoporunaboladefuego.Vangerdahast volvió lamiraday vio una lenguade fuegoque salía delportal.Lasparedesdebarrosufrieronunatransformacióninmediatayadoptaronlatexturadelmármolnegro,hastalaalturadelsegundopiso.Arrancóuntrozode lacapa, loenrolló formandounconoy se lo llevóa los labios.Susurróunconjurorápidoysevolvióhacialossupervivientes.

—¡Retiradaalatorre!Aunquepudooírsupropiavozsobreelestruendodelabatalla,losDragones

Page 280: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

rompieron filas y corrieron hacia la torre tan deprisa como pudieron. Mediadocenacayócasideinmediato,víctimasdelhumoamarillentoyemponzoñado,odelaslenguasdefuegoquesurgíandelasentrañasdelatierra.Vangerdahastcomprendióquelamitad,quizásunaveintenadesoldados,conseguiríanalcanzarlatorre.

Elmagosupremocogióalmagoguerreroqueteníamáscerca.—Cuandoentreenlatorre,ustedasumiráelmando.Bloqueélabrechacon

unmurodehierro,pero,cuidado,quenotoqueelmurodelatorre...déjeloaunmilímetrodedistancia.Después, reúnaa los supervivientesy teletranspórtensedevueltaaArabel.

—Asusórdenes—respondióelmago,obviamentealiviado.—¿Y qué me dice usted de Alaphondar? —preguntó Owden—. No ha

enviadoustedesaestrellafugaz.—Alaphondar está a salvo en su escondrijo —respondió el mago,

observando la carnicería que se producía a su alrededor—. NosteletransportaremosdesdeArabelylorecogeremos.

Vangerdahast volvió a concentrar su atención en la torre, de cuyo interiorsurgían las llamas de la última bola de fuego. Sacó una pluma de cuervo delinteriordesucapayseacaricióconellamientraspronunciabaunconjuro.Sintióuncosquilleoensusbrazos.Empezóasentirsemuyligero,entoncessuspiesselevantarondelsueloyseelevóenelaire.

CuandoVangerdahastcompletóelhechizo, llegaroncorriendo losprimerosDragonesprocedentesdelacosta.Hedíanasulfuroytosíanconfuerza.Hastaelúltimosoldadoteníalacarallenadepicadurasdeinsectos,rojascomotomates,ylucían la expresión de una persona aquejada de fiebre recurrente. Al ver queVangerdahast flotaba en el aire, uno de los soldados intentó agarrarlo de latúnica.

—¿Adóndecreequeva?—preguntóelsoldadoconvozagudaydesentonada—.¡Larealcompañíaexpedicionarianoabandonaalossuyos!

—¡Cobarde!—acusóotrodelossoldados—.¡Vuelvaaquíyluchecomounhombre!

Algunoshombresmássesumaronalasacusacionesysalierontraselmago,conintencióndeagarrarloporlacapacomofuera.Vangerdahastdesembarazósubrazoysealejódesualcanceconunchasquidodelosdedos.

Page 281: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Cómoseatrevenaacusarmededesertor?—preguntóelmago,cadavezmás furioso. Sacó una varita del interior de su capa y añadió—: ¡Cómo seatreven!

—¡Vangerdahast,eslalocuradelaghazneth!—exclamóOwden,despuésdedar un paso al frente y levantar los brazos para impedir el ataque. El clérigoseñalólosrostrosmagulladosdelossoldados—.Estánenfermosyheridos,igualqueustedloestuvoenArabel.

—¡Pues manténgalos bajo control! —ordenó Vangerdahast, que se sentíacomounidiotayalgoasustadoportodoloqueignorabadelasghazneth—.NosveremosenArabel.

—¿Yo?—preguntóOwden,sorprendido—.¿Aquéserefiere?Necesitaquealguienvigilesuespalda.

—¿Cómo? —Vangerdahast movió los brazos como un pájaro y flotó endirecciónalabrechahumeanteabiertaenelmuronegrodelatorre—.Amenosquepuedaustedvolar,quelodudo,noseríamásqueunlastreparamí,ademásdequeperderíaustedlamagiadesucapa.

—¡Espere!—exclamó el mago al que Vangerdahast había abandonado elmando—.Creoquepuedoayudarle.

Vangerdahast miró hacia atrás y vio que el mago guerrero se reunía conOwden y que, después, ambos echaban a correr siguiéndolo por tierra. Elhechiceroacaricióconunaplumadepalomalosbrazosdelclérigo.UnpuñadodeDragonesenloquecidostrastabillarondeunladoaotrosiguiendoalapareja,maldiciendoaVangerdahast,acusándolodecobardeyprometiendovengarseenlaotravida.Detrásdeellos,enlaorillamáscercanaalapenínsula,lasghaznethhabíanterminadodeabsorberlamagiadelmuromágico.Cadimustrotóatravésdelagujero,liderandoalosdemáscaballos,quedevezencuandomirabanconojosdesorbitadosalasghaznethqueseencontrabanenloalto,sobreellos.

Owden se elevó algo inseguro en el aire, bloqueando la líneadevisióndeVangerdahast.PoresonopudovercómoseguíalacarreradeCadimus.

—¡Preparado!—¡Yaleavisaréyocuandoestéustedpreparado!Vangerdahastsevolvióysealejóflotandohacialaoscuridadmarmóreaque

envolvíalatorre.

Page 282: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

D19

esdelacimadelacolinadondeAlaphondarobservabaelcursodelabatalla,latorreparecíaunacajitadeltamañodeunpulgar,envueltaenunaespiral

lentaformadaporlabrumadelospantanos.Losmiembrosdelarealcompañíaexpedicionaria (lo que quedaba de ello) eran diminutas figuras que de vez encuando asomaban por entre el humo y las llamas que surgían del suelo. Losorcos formabanunamasacompactaqueesperabaenel agua,mientrasque lasghazneth parecían cuatro sombras y una solitaria lengua de fuego recortadascontra la pared invisible del muro mágico. De vez en cuando, la colina deAlaphondartemblabaacausadeunaexplosión,oelairellevabaimpregnadoeloloracredelsulfuroeinclusoacarnequemada.Porotraparte,labatallasehabíatornado tan confusa que ya no podía distinguir lo que sucedía, y temía por elbienestardelossuyos.

Peroloúnicoquedistinguíaclaramente(labrumadelpantanoqueseelevabaenespiralhacia la torre) lepreocupabamásquecualquierotracosa.Apartedeque se le antojaba contranatural, sugería una ominosa concentración deesfuerzos, como si la torre absorbiera a la real compañía expedicionaria, a lasghaznethyalosorcos,einclusoalaspropiasenergíascorruptasqueemanabandel pantano. Alaphondar no estaba seguro de que Vangerdahast cayera en lacuentadelasunto,aunquetampocoestabasegurodeque,siloadvertía,ledieralaimportanciaquemerecía.Elmagosupremoeraunhombreesforzadoyteníamuchasvirtudes,peroeldiscernimientofilosóficonoeraunadeellas,sobretodoenplenabatalla.

Alaphondarechómanodelbrochedelacapa,perofinalmentedesistióyse

Page 283: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

incorporó.AunquesepusieraencontactoconVangerdahast,¿quépodíadecirle?¿«He descubierto un fenómeno extraño»? El anciano mago le abroncaría poratraer sobre él la atención de las ghazneth, y no le faltaría razón. Para poderservirdealgunaayudaalossuyos,necesitabamásinformación.

Alaphondardescendióporlacolinalomásdeprisaquesuscansadasyviejaspiernaslepermitieron;despuéssacóuncatalejodelasalforjasyvolvióasubirhastalacima.CuandoenseñóporprimeravezsuinventoaVangerdahast(deesohacía décadas), el viejo carcamal se había burlado de su «monóculo de dospalmos», y después le preguntó por qué alguien podía preferir la imagendeformada que proporcionaba, a la sencillez de un hechizo de clarividencia,capaz de ofrecer una imagen real, clara como el agua. Alaphondar habíaencajado la crítica con resignación, y mascullado algo relacionado con lasmejorasquedebíarealizarenelinvento.

CuandoAlaphondaralcanzólacimadelacolinaysellevóelcatalejoalojo,la imagenno era nada confusa: tampocodaba losmolestos saltitos del primermodelo, siemprey cuandomantuviera el extremodel catalejo apoyado enunapiedra.La torre seveía tanaltacomosubrazo,ypeseaquenopenetrabadeltodoelhumoamarillento,distinguió la figuradeOwdenFoleyatravesandoenpleno vuelo, tras la estela de Vangerdahast, una brecha de la anchura de unaventana.Qué extraño le pareció ver que la puerta de la torre tenía un aspectomuchomássólidoqueantes,comosiestuvierafundidaenmetal,mientrasqueelpisoinferiordeledificiohabíaadquiridoelaspectodelmármolnegro.

Una serie de destellos plateados destacaron la figura de Vangerdahast alrecortarsecontraelportaloscuro,cuandoagitóunadesusvaritasenelinterior.Afuera,otrosveintecentímetrosdepareddebarrosetransformaronenmármol,y el sabio tuvo la sensación de que había supuesto adecuadamente por quéhabían erigido la torre en aquel lugar. No le cabía la menor duda de que lahabíanedificadoallíparaprotegeralgoquepodíasurgirdelpantano,ylamagiadeVangerdahastcontribuíaaacelerarelproceso.

Un mago guerrero que apareció en su campo de visión, empezó a hacergestos señalandoelportal.Leparecióqueestaba formulandounhechizo.Parasorpresa de Alaphondar, una docena de Dragones Púrpura cayeron de prontosobreelmago.Aparecióunmurodehierrosobresuscabezasy,alcabodeuninstante, se les vino encima. Varios guerreros situados en los bordes lograron

Page 284: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

salvarseporlospelos,despuésseincorporaroncomopudieronylevantaronlasespadas.Unparsevolvieronhacialatorreynotardaronenverseseparadosdelportal por un rayo mágico. Los demás emprendieron la retirada en direcciónopuesta.

Alaphondarhizoungestodeimpotenciaantesemejantemuestradelocura,ydespuésdescubrióaloscaballosdelacompañíagalopandoporelpantano.Lossiguióconelcatalejoydescubrióparasusorpresaquelasbestiasaterrorizadascabalgaban en plena estampida hacia la horda de orcos que aguardaban enformación. Arremetieron contra los orcos que formaban en vanguardia yobligaronalosdemásaretirarseocaerbajolafuriadesuscascos.Lavalientemonturadelmagosupremo,Cadimus,liderabaelasalto,ysemovíadeunladoaotro para estampar sus cascos contra cualquier orco que osara acercarse. Tanfierofueelasaltodelcaballo,queAlaphondarsepreguntósiVangerdahasthabíarecurridoaunhechizoparaimbuirenelanimalunaespeciedefuriadecombate.

Su curiosidad desapareció poco después, cuando una ghazneth surgió delaguaporlagrupadeCadimus.Elfantasmaextendiólasalasylevantóunbrazoseñalando al semental, después resbaló y estuvo a punto de caer cuando otrocaballolepisólasalas.Laghaznethsevolviórápidamente,ydelayemadesusdedossurgióunalenguadefuegoconlaquetrazóunarcocontralaestampidaque se le echaba encima. Abrió una brecha negra, una brecha que se tragó amediadocenadeanimalesenunabrirycerrardeojos.Loshuesoshumeantesdelos caballos reaparecieron poco después sobre una cortina cegadora de fuegorojizo.

Otra ghazneth surgió del agua, y remontó el vuelo batiendo sus alas,envueltas en una oscuridad que a Alaphondar le pareció borrosa. Empezó atrazarcírculosdeunladoaotrodelaestampida,ytrasellaviounrastronegroquesepaseósobrelascabezasdeloscaballos.Losanimalesenloquecieron,sevolvieronparamorderseunosaotrososedetuvieronparaempujarycocearalosquelosempujaban.

Lacargaperdióbríos.Unaterceraghaznethsurgiódelaguaysearrojósobrelos orcos, que no cejaban de chillar y señalar la estampida. Como un solohombre, los marranos se volvieron contra los caballos, atacándolos con sañaarmados con espadas toscas, como si no les importara su propia vida. Loscaballosrespondierondeigualmodo,ysedetuvieronenmediodelahordapara

Page 285: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

morderycocearalosorcos;cuandonoteníananadieaquienatacar,hacíanloposible por adentrarse aúnmás en la refriega. SóloCadimus y un puñado derobustosanimales,situadosalfrentedelacarga,selibrarondelainfluenciadelaghaznethysiguieronadelante.

La dos últimas ghazneth remontaron el vuelo desde un pedazo de suelocubiertodehierbaquehabíaenelpáramo.Unasalióenposdeloscaballos,queseguíanhuyendo, sobrevolando su posicióndesde la retaguardia ymojándoloscomo si lloviera porque el fantasma estaba empapado. Los animales sedetuvieroncasienseco:teníanelhocicocubiertodeespumarajos.SóloCadimuslogróhuiralgalopehastaelpantano,encuyasaguassehundió.

Alaphondarnoesperóaversielcaballosalíaalasuperficie,sinoquedirigióelcatalejohastalaúltimadelasghaznethquehabíavisto.Lacriaturasehabíasubidoalomosdeunayeguafuertequeintentabaretrocederenplenocombate,conlasmandíbulascerradasentornoalcuellodeunenemigo,mientrasconloscascosanterioresmanteníaarayaaotrosdos.Elferozanimalpartióelcráneoaunorco,empujóalaguaaotro,ydeunmordiscoquebrólaespinadorsaldeotro.Entoncesdecidióquitarsedeencimaal inesperado jinete, sevolvió, forcejeóycoceóviolentamenteenunesfuerzoincreíbleporlibrarsedelaghaznethquelamontaba.

Elcaballosecansóalcabodeunmomento.Depronto,lagualdrapasetornófeayperdiócolor, su rostro sevolvióchupadoy fuecomosi susmúsculos sefundieranparadesaparecerdesufisonomía.Elanimalcayódeladoyrodóporelsuelo,intentandoasílibrarsedelaghazneth,queselimitóasaltarencimadeotramontura,dejandoalayeguaamerceddelagua,dondesindudaseahogaría.

Alaphondarbajóelcatalejoysecubriódetrásdelaspiedras,conlasangrecongelada en las venas por lo que acababa de ver: ira y fuego, oscuridad,enfermedadymuerte,cincofuerzasprimordialesesgrimidasporcincofantasmasoscuros perseguidos por Emperel hasta el momento de su desaparición. Lasimplicaciones eran obvias. Emperel protegía a los Señores queDuermen, unacompañíasecretadecaballeroscormytasqueseencontrabansumidosenestadodehibernaciónhastaeldíaenquesecumplieralaprofecíaanunciadaporelgransabiodeCandlekeep,AlaundoelProfeta:

Sieteazotes(cincodesaparecidostiempoha,unodenuestrostiemposy

Page 286: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

otroqueestáporvenir)abriránunapuertaqueelhombrenopodrácerrar.Deellasaldránlashuestesdelosmuertosylaslegionesdeldiablohechoasí mismo, para arrasar toda Cormyr y sumirla en ruinas, a menos quequienes murieron hace tiempo se levanten para defender la tierra delpeligroquelaacecha.

Boldovar era un azote que había desaparecido hacía tiempo, y que habíaregresadotrayendodelamanolaoscuridadylalocura.Alaphondarnoconocíalos nombres de las otras ghazneth, pero parecía razonable pensar que podíancorresponderaazotesdelpasadodeCormyr.Podíaenumerardememoriadoceposiblesnombres,sólolimitándosealosreyes.

Portanto,sóloquedabandosazotes.Unocoetáneoyotro,el«queestabaporvenir», para abrir la puerta que «ningún hombre podría cerrar». Su siguientepensamientoprovocóunescalofríoenelsabio.Tanalastapodíaserunodeesosazotes.Vangerdahast había predicho consecuencias terribles para el reino si laprincesa no renunciaba a su plan de establecer un templo real, y Alaphondarconocíalosuficientelahistoriadelreinocomoparasaberque,enestosasuntos,raravezseequivocabanlosmagossupremos.

Alaphondarhizounesfuerzoporplantarse.Cadimussedirigíapesadamentehacialaorilla,despuésdeeludiralosorcosylasghaznethquesobrevolabanencírculos el pantano. El caballo andaba con la cabeza gacha por detrás de lahierba que crecía salvaje. Los demás caballos se encontraban cerca de lapenínsula, pero todos flotaban junto a la orilla, salvo los que habían caídomuertos en la playa, obstaculizando el avance de los orcos. Las ghaznethparecían dispuestas a animar el avance de la horda, sin preocuparse de queVangerdahastpudierahaberentradoenlatorre.Claroqueteníanpocosmotivosde preocupación, puesto que mientras el mago siguiera lanzando hechizos, lapiedradelatorreseguiríaendureciéndose.

Alaphondarmiródenuevoatravésdelcatalejo.Latorresehabíaoscurecidohastatalpuntoquesóloquedabaunacuartapartedebarro,envueltaporlabrumaparduscaquesurgíaenespiraldelpantano.Alaalturadelsuelo,lanubeeratandensaquenisiquieradistinguíalapareddelatorre,tansóloelcrepitarargénteoproducido por los hechizos de combate de Vangerdahast, que surgían de labrecha que habían practicado con tanto esfuerzo. Alaphondar lamentó

Page 287: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

comprobarquesuamigohubieraavanzadotanpoco.Cuandoconsiguierallegarjunto a Tanalasta, la torre sería de mármol sólido y estaría completamenteenvueltaenlabrumapardusca.

Lossupervivientesdelarealcompañíaexpedicionariasehabíanagrupadoaunosveintepasosdelaentradadelatorre.Leparecióincreíblequetanmodestafuerzasedispusieraenaquelmomentoaemprenderunacargacontraelenemigo.LosDragones empuñaban sus espadas de hierro y se empujaban unos a otrospara formar algo parecido a una columna. Los dos magos guerrerossupervivientespermanecíanjuntosentrelosguerreros,másbienenretaguardia,hablandoentresíygesticulandoconprisas.Alaphondarnopudoimaginarquéseproponían hacer los Dragones, pero sus esfuerzos cómicos por organizarse lehicieronpensarquehabíancaídopresadelaoscuralocuradeBoldovar.

El sabio estaba a puntode abandonar el catalejoydescenderpor la colinacuando un enjambre de insectos atacó la retaguardia de la compañía. Loshombres, enloquecidos, salieron corriendo en todas direcciones, rompiendo laformaciónparasacudirselosinsectosdeencima,aunqueenocasionesayudabanalcompañerogolpeandoconlahojadelaespadaplana.Losdosmagossacaronalgunos componentes mágicos de sus bolsillos y giraron sobre sus talones,gesticulandohacialapartealtadelatorre.Ningunodelosdoslogróterminarelhechizo. De pronto, uno cayó al suelo de rodillas con las manos en la cara,mientrasqueelotrofuealcanzadoporungolpedeespadaperdidoenlanuca.

Alaphondarenfocóelcatalejoa la torre,siguiendolanubenegrahastaunadelastronerasdelsegundopiso.Aunquesuinteriorpermanecíasumidoenunaoscuridad impenetrable, tenía pocas dudas de lo queguardabadentro: la sextaghazneth,señoradelosenjambresyelazotedelpresente.

Dejóelcatalejodondeestabaymiróporencimadelasrocasparadescenderpor lacolina.EntoncesAlaphondar reflexionóconcalma.Erapreferible trazarunplanalternativoantesdeenfrentarsealpeligro.Sacóeldiariodelbolsillodelacapa,arrancóunahojaygarabateóunmensaje.

A quienquiera que lo lea, le ruego que se muestre leal al DragónPúrpuraylleveacabounserviciodevitalimportanciaparalacorona.Sies usted uno de los pocos que conocen a la Espada Durmiente, vaya adespertarla de inmediato: han llegado los azotes y la puerta se abre. Si

Page 288: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

todoestonosignificanadaparausted,leruegoquelleveestanotaalreysinpérdidadetiempo,yselaentregue.QueelsabioOghmacuidedeestemensajeyveleporquecaigaenlasmanosadecuadas.

AlaphondarEmmaraskSabiosupremodelacorterealdeCormyr

Alaphondarselasapañóparaestamparsusellojuntoalafirma,yabriódenuevoelcatalejoyloguardóensuinterior.Sitodoibabien,recuperaríalanotaél mismo. De lo contrario, la persona que enviara el rey a investigar sudesaparición descubriría el mensaje cuando encontrara el artilugio. El sabioapoyóelcatalejoentredospiedras.Antesdepenetrarenelpantano,lodejóenunlugarvisible,losuficienteparaquellamaralaatencióndecualquierpersonaquepudiera rastrear lazonaenbuscadepruebasdel finalde la realcompañíaexpedicionaria.

A juzgar por la situación delmuro deVangerdahast, tenía que alcanzar lafaldadelacolinaantesdeutilizarelbolsillodehuida,locualleproporcionaríatiempo suficiente para hacer un envío rápido. Abrochó el cierre de la capa ydibujóensumenteelrostrodeTanalasta.

CuandoTanalastadescubrióelrastro,lacompañíadeAlusairseencontrabaen uno de esos cañones pronunciados que serpenteaban interminablemente atravésdelosPicosdelasTormentas,convirtiendocualquierviajeatravésdelasmontañasenunejercicioenloquecedordondesecombinabanapartesigualeslaescalada y el sentido de la orientación. Como la mitad de la compañía, laprincesa sufría continuos escalofríos y estaba empapada en sudor fruto de lafiebre, por lo que cuandomirómás allá de los pinos y vio un surco de tierraremovida en medio de un valle pantanoso pensó que se trataba de unaalucinacióncausadapor la fiebre.Habíanpasadoseisdíasdesde laúltimavezquelehabíanpracticadounacura,ysabíaporexperienciaqueesasalucinacioneseranmásfrecuentesamedidaqueelenfermoempeoraba.Cincodíasdespuésdesu boda (le pareció que habían pasado años enteros desde que se casó conRowen,aunquecreíarecordarquenohabíanpodidotranscurrirmásdediezdías)

Page 289: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

se atrevieron a formular una ronda general de hechizos de curación, y comoconsecuenciadeelloperdierontreshombresduranteelataquedeunaghazneth.Desdeentoncessólorecurríanalamagiacuandoestabantanenfermosqueeranincapaces de continuar, por lo que las ghazneth nunca perdían ocasión decobrarseunaltoprecioporsusalud.

Finalmente, Tanalasta surgió de los árboles trastabillando, y se adentró enunafranjadelvallecubiertadehierba,dondeoyóalolejoselsonidodelagua.Aunadocenadepasoshabíaunoscuantossaucesqueocultabanun riachuelo.Atreintapasosdelriachuelosealzabalaparedsurdelcañón,pobladadepinos,tanescarpada que le pareció imposible escalarla. Atraídos por la promesa deencontraraguafrescaconlaqueatemperarsufiebre,todoslosmiembrosdelacompañía caminaron entre los sauces a buen paso y se arrojarondespreocupadamente en la orilla del riachuelo, antes de empezar a beber aguaformandouncuencoconlasmanos.

Tanalasta echaba su tercer trago cuando captó un olor familiar, dulzón,correspondientealestiércoldecaballo.Echóuntragomás,selevantóyvadeóelriachuelograciasaunaspiedrasqueasomabandesusaguas.Atravesólossaucesquehabíaenlaotraorillayencontróelmismosueloquehabíavistoantes.

El rastromedía unos tresmetros de ancho y estaba cubierto por una capagenerosadeestiércolseco.Pudodistinguirtresgruposderastrosmarcadosenelsuelo.LoscascosdeloscaballosteníanlamarcacaracterísticadelasherradurasutilizadasporelejércitodeCormyr,mientrasqueunpardehuellasdestacabanporencimadelasdemás,superpuestas,huellasdebotasdesuelalista.Rowen.

Tanalastasevolvióparallamaralosdemás,ydescubrióasuhermanaqueseacercabaaellaentrelossauces.Alusairseagachóycogióunpocodeestiércolconsusmanos.

—Nohacemucho—dijo—.Diezdías,comomáximo.—Pero eraVangerdahast.—Tanalasta señaló los tres grupos de huellas—:

Según La guía de campo de la princesa de acero para las tácticas de losDragonesPúrpura,ésaeslaformaciónderigorparaunacompañíaqueincluyaun importante contingente de magos guerreros, encargados de proteger a losmagos.

—¿Lo has leído? —replicó Alusair, enarcando una ceja—. Dudo que lamitaddeloscapitanesdeDragoneshayanacariciadolatapa.

Page 290: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Quizá seaporque tuestilo esunpocodescuidado—repusoTanalasta—.Megustaríamuchoayudarteadarleunpocodevida,sipiensasrevisarloparalasegundaedición.

—Nohabráunasegundaedición—comentóAlusairenun tonodevoz tanlacónicocomosusintaxis—.Loquesíhabráesunaorden.—Señalólashuellascorrespondientesalasbotasdeexplorador—.Supongoquetambiénhabrásleídomilibritosobreelartederastrear.

—Porsupuesto:medicuentadequenohabíasleídoeldeLanatharManyon.—Ignorólamuecadedesagradoquehizosuhermana,yseagachóasulado—.CreoqueestahuellacorrespondeaRowen.Comoestásuperpuestaalasdeloscascos de los caballos, sabemos que los estaba siguiendo.Al parecer goza debuenasalud.

Tanalastaseñalólapartemásampliadelahuella,dondeunalevedepresiónsugeríaunazancadafirme.

—Muybien.—Alusairinclinólacabeza—.Estaráscontenta.—Estarécontentacuandovuelvaaverlo.—Tanalastaseincorporóyobservó

la franja de suelo removido. No podía ver a Rowen, por supuesto, pero lereconfortósaberquepisabaelmismoterrenoqueélhabíapisado—.Ensulibro,Lanathar aseguraba que un observador avezado podía averiguar el tiempo queteníaunahuellasimplementeporlodeterioradaqueestuviera.

—Más o menos —gruñó Alusair—. Y si decía lo contrario, era un vilmentiroso.

Tanalasta guardó silencio y permitió a su hermana estudiar las huellas.Entretanto, los demás miembros de la compañía vadearon el riachuelo y sereunieronconellas.Dosdeloshombrescaminaronporentreelrastroquehabíanencontrado para hacer una valoración propia, pero cuando Alusair se levantóellosaúnseguíanconelestiércolenlasmanos.

—Yodiríaquehacedeochoaquincedíasque lacompañíapasóporaquí.LashuellasdeRowensonmásdifícilesdeprecisar,peronocreoquetenganmásdeochodías.

—Entonces es probable que a estas alturas ya los haya alcanzado—pensóTanalasta.

—¡Ni se te ocurra! —exclamó Alusair, ceñuda, después de observarlafijamente—.Nos dirigimos a lamontaña del Trasgo, y no pienso cambiar de

Page 291: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

opinión.—Se volvió hacia sus hombres—.Bebed cuanto queráis y llenad lascantimploras.Tenemosqueescalaresacolinaantesdequeoscurezca.

—¿Por qué?—preguntó Tanalasta, sorprendida—. Vangerdahast está muycerca.

—A estas alturas, Vangerdahast puede estar en cualquier parte. Igual queRowen.

—No,Rowenvolveráconellosabuscarnos.Esoesloquepretendedecirnos—dijo Tanalasta. Al ver que su hermana fruncía aúnmás el entrecejo, se diocuentadequeestabaapuntodeconvencerlayseñalólashuellas—:Rowennoestanpococuidadoso.Sihadejadounrastro,esporquequeríaqueloviéramos.

—Nopodíasaberquepasaríamosporaquí—respondióAlusair,haciendoungestodenegación.

—SabíaqueatravesaríamoselpasodeMarshview,ysóloestamosadosdíasalsurdeallí—dijoTanalasta—.Nosdirigimosalsur,mientrasqueesterastrosedirigehaciaeloeste.Enalgúnmomentoteníamosquecruzarnosconél.

Varioshombresempezaronamanifestarsuconformidad.—Muchasconclusionessacastú,apartirdeunpardehuellasdebotas.Site

equivocas...—advirtióAlusairdespuésdededicarlesunamiradacontrariadadeadvertencia.

—Nomeequivoco—insistióTanalasta—.ConozcoaRowen.Fuelopeorquepodíahaberdicho.LasfaccionesdeAlusairseendurecieron,

despuésdescorchólacantimploraysevolvióparallenarlaenelriachuelo.—Yahetomadounadecisión.Nopiensopasearamishombresportodoslos

PicosdelasTormentas,sóloporquetútengasganasdecompartirlacamaconunexplorador.

Tanalasta abrió desmesuradamente los ojos, y no sólo porque no estuvieraacostumbradaalhechodeairearpúblicamentesusasuntosamorosos.

—Porlovistohemosllegadoalquiddelacuestión.—Siguióasuhermanahastalaorilladelriachuelo—.¿Deverastepreocupatantoquepuedaencontraraunhombre,comoparaestardispuestaasometeratussoldadosaotrosdiezdíasdefiebresólopormantenermeseparadadeél?

—¡Si te refieres a Rowen Cormaeril, no tengo por qué preocuparme!—exclamóAlusair.Sushombresempezaronallenarlascantimplorasydespuéssealejaronunpoco,dispuestosaesperarmientrassemirabanlapuntadelospiesu

Page 292: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

observabanelinteriordelbosque.LaprincesalosignoróyañadiódirigiéndoseaTanalasta—:Vangerdahastnopermitiráqueesafrivolidadtuyavayamásalládeloqueyahallegado.

—¡Noesningunafrivolidad!—escupióTanalasta.Deprontosintiótalfuria,quedecidiódemostrar aAlusair quehabíadosprincesas tozudas en la familiaObarskyr—.Vangerdahastnopodráhacernada.

—¿Acaso la fiebre ha consumido tu mente? Si insistes, Vangerdahast seencargarápersonalmentedequeRowenpasemás tiempoenAnaurochqueuncuidadordecamellosdeBedine.

—Vangerdahastyanotieneautoridadparahacereso—dijoTanalasta—.AlmenosnosobreRowen.

—¿De qué estás hablando? Ya sea legal o no, Vangerdahast tiene esaautoridadsobrecualquierpersonaenCormyr...salvo,quizá,delosmiembrosdelafamiliareal.

—Túlohasdicho.—Tanalastarespiróprofundamente,yañadió—:Supongoquehallegadoelmomentodequelosepas.

—¿De que sepa qué?—Alusair abrió unos ojos como platos—. ¿Qué hashecho?

—Vamos,Alusair.¿Noerastúlaprincesamundana?—Incapazdeborrarlasonrisadesurostro,TanalastasevolvióaloshombresdeAlusair—.Quieroquesesepaquelaprincesasehacasado.RowenCormaerilespríncipeconsorte.

—Lesruegoquedisculpenamihermana—dijoAlusair,dandounpasoanteTanalasta—,estoyseguradequeimaginaráncuálesseríanlasconsecuenciasdequerepitieranloqueaquísehadicho.

Los hombres cerraron la boca, porque se habían quedado boquiabiertos, yparecieronmásincómodosquenunca.Alusairlosobservóduranteuninstante,ydespuéssevolvióhaciasuhermana.

—¡Y tú! —dijo—. ¿Prometida en secreto? ¿Nada menos que con unCormaeril?Tu presunta boda durará treinta segundos cuando nuestro padre seentere... y entonces ya será tarde para el pobre Rowen. No semerece que loexilien.

—Nuncaocurrirá tal cosa—dijoTanalasta—.No,amenosqueel reyestédispuesto a infligirme el mismo castigo. No renunciaré a Rowen. Estoyenamoradadeél.

Page 293: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Enamorada?—Alusairenrojeciódeira—.¡Ereslaprincesadelacorona,zorraegoísta!¡Piensaenelreinoporunavezentuvida!

—¿Egoísta?—De pronto, una gran serenidad se adueñó deTanalasta, querespondióasuhermanaenuntonodevoznormal,inclusosereno—:Alusair,nocreo que seas quién para tacharme de egoísta. Elmiedo que veo en tu rostrohablaporti.¿DeverasestásdispuestaasacrificarmifelicidadparapoderseguirvagabundeandoporlasTierrasdePiedra,acostándoteconelprimerjovennoblequecruceunamiradacontigo?

ElmiedodesapareciódelrostrodeAlusair.—Porsupuestoqueno—respondióAlusair,forzandounasonrisa—.Esoes

loquelosdemásesperanquehaga.Tendríaqueolvidarmedeello.—Golpeóunapiedra con la punta de la bota y la mandó directa al arroyo—. Lo que mepreocupaesquenopodréhacerlotanbiencomotú,queseríasmejorreina.

—Si eso es verdad, ¿por qué intentas mantenerme lejos de Rowen? ¿Noconfías enmí lo suficiente comopara creer que lo que hago es lomejor paramí...yparaCormyr?

—NoesporRowen—dijoAlusair,mirandoasuhermanaalosojos—.Yotambiénestuveunavezconél...

—¡Alusair!—Losé—dijoAlusair, levantando lamanoparasilenciarasuhermana—.

Loúnicoquedigo,esqueesun tipoestupendo...pero,Tanalasta,piensaenelcarizpolíticodelasunto.Suprimointentóderrocaralrey,¡portodoslosdioses!

—¿Deverascreesquenohepensadoenello?—Seguroquesí,siempreycuandohayasleídoalgoalrespectoenunodetus

libros,pero...—Alusairseencogiódehombrosynoconcluyólafrase—.Mira,loúnicoque tedigoesqueyonovoyaser reina.Si solucionaselasuntoconVangerdahastyelrey,meharásfeliz.

—Peronopiensasayudarme.Alusair extendió las manos en un gesto de indefensión, después cogió la

cantimploradeTanalastayseagachóparallenarlaenelriachuelo.—Estupendo.Tanalasta estabaapuntode señalarqueAlusair tendríaqueapechugar con

lasconsecuencias,cuandounaimagendeAlaphondarEmmarasksematerializóen su mente. El anciano sabio se miraba la punta de los pies y respiraba

Page 294: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

profundamente,yTanalasta tuvola impresióndequeestabaasustadoporalgo.Laspalabrasdesumensajeempezaronafluirporsumente.

«¡Tanalasta,noabrasningunapuerta!Lasghaznethsonazotes,hacedorasdelmal.VangerdahastyOwdenestándentro,losdemáshanmuerto.¡Esperaosaltaalpantano!Responde,porfavor,porfavor...»

—¿Tanalasta?EraAlusair,yTanalasta sintióquesuhermana lacogíadelbrazo.Hizoun

débilgestoasuhermanaparaqueesperara,ydespuésseconcentróenlavozdeAlaphondaryenviólarespuesta.

«Alaphondar, estoy a salvo con Alusair en las montañas, a dos días delpantano. Comprendido que las ghazneth sean azotes. Conozco cuatro de susnombres: Suzara, Boldovar, Merendil y Melineth. Xanthon Cormaeril lasliberó.»

—¡Tanalasta!—Alusairtirabadelbrazodesuhermana—.¿Quéocurre?—Creo que debemos arriesgarnos a practicar algunas curaciones —dijo

Tanalasta—.AcaboderecibirunmensajedeAlaphondar.—¿Qué?—AlparecerestáenelpantanodelMarLejanoconVangerdahastyOwden

Foley.—A continuación, Tanalasta repitió rápidamente el mensaje, y despuésañadió—:CreequelaprofecíadeAlaundoestáapuntodecumplirse.Yasabes,ladelossieteazotes...

—«Cincodesaparecidostiempoha,unodenuestrostiemposyotroqueestáporvenir»,sí,laconozco.LaleíencuantosupequedebíamosbuscaraEmperel.

—Deberíamos informar al rey—dijo Tanalasta, cerrando el broche de lacapa—.Serámejorquepreparesaloshombres.Mehaparecidoentenderquelasghazneth estabanmuy ocupadas con Vangerdahast, pero será mejor no correrriesgos.

Alusair hizo un gesto de asentimiento y se acercó a sus hombres dandoórdenes a voz en cuello; entonces se detuvo en seco y se volvió hacia suhermana.

—Mira a ver qué dice de mí. Mi compañía podría seguir el rastro deVangerdahastyalcanzarelpantanoenunpardedías.Quizáseamoslosprimerosenllegar.

—Selopreguntaré.

Page 295: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Tanalasta se tomó algunos segundos para redactar un mensaje sucinto ycompleto, después cerró los ojos e imaginó la cara de su padre.Depronto, laimagensequitólacoronaymiróaunlado.Entoncesenvióelmensaje.

«Padre,Alaphondarinformadelapresenciadelossieteazotes.Lacompañíade Vangerdahast ha sido aniquilada en el pantano delMar Lejano; Vangey yOwdenestánvivos.Alusairyyonosencontramosadosdíasdedistancia,ynosacercaremosparaayudarlos.»

Alprincipioel rostrodel reyrebosabaalivioalsaberquesushijasseguíanconvida,perodespuéshizounamuecaantetanimprevistasnoticias.Elreyhizoungestodenegación.

«No, no podemos arriesgar a las princesas. Los magos guerreros y losDragonesnotardaránenllegaralcampodebatalla.RegresadinmediatamenteaArabel.Tumadreestábien,quizásunpococonmocionada.»

—¿Ybien?—preguntóAlusaircuandolaimagendesapareció.Tanalastaignorósupregunta,fingiendoqueseguíaencontactoconelrey,y

aprovechólapausaparaplanearloqueibaahacer.Alusairseacercóhaciaellaysequedódepie,esperandoasulado.

—Dice quemadre está bien, algo asustada—dijo Tanalasta al levantar lamirada.

—¿Yesoquésignifica?—Alparecerdabaporsentadoquelosabíamos.—En fin, supongo que son buenas noticias —dijo Alusair después de

reflexionarunmomento—.¿Yquéórdenestehadadoparamí?—«ElreinonopuedepermitirseprescindirdeVangerdahastyAlaphondaren

este momento»—citó Tanalasta, sin darse tiempo a reconsiderar su decisión.Quizá fuera más una interpretación propia, una opinión, que una mentira—.«Debéishacercuantoestéenvuestrasmanosporsalvarlos.»

Alusaircerrólosojos,hizoungestodeasentimientoymiróasuhermana.—Yahora,¿quévoyahacercontigo?—Puesdejarqueteacompañe,porsupuesto.Nohatenidotiempodesermás

explícito —respondió Tanalasta, que extendió las manos en un gesto deindefensión.

Page 296: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

L20

aestanciaestabamásoscuraqueunatumba,ylaatmósferaeratandensayolía de tal forma a orín de orco que a Vangerdahast se le revolvía el

estómagosóloderespirar.Elsueloestabaalfombradodeserpientesquesiseabanalarrastrarse,mientrasnubesdeinsectoszumbonesflotabanallídondenodabala luz, reprimidasporunamagiaquehabíaactivadoOwden.Loscadáveresdelos marranos calcinados yacían extendidos junto a las paredes, cubiertos porescarabajos y moscardones. Ribetes de humo amarillo se elevaban en espiralaquíyalláconunoloracre,cálido,comosidelpantanosetratara.

Cuando no se presentaron más orcos dispuestos a ser ejecutados,Vangerdahastcruzólosbrazosyseabriócaminolentamente.Laoscuridadquereinabaenel lugarparecíaengullir la luzquebrillabaenlapuntadesuvarita,reduciendoloqueporreglageneralhubierasupuestounaesferadeseismetrosdeluzaunhuevodeformequeteníaunacuartapartedeintensidad.Ungruñidoconstante y ronco resonaba en las paredes de la torre, como si aquella luzsobrenaturalconstituyeraunaofensaparaeledificio.El intensocalorhizoqueVangerdahast sudara copiosamente, y un flujo de sudor constante caía de suscejasalsuelo.Lasserpientessiseabanyseesparcíansobreelsudor.

Al acercarse a la puerta, Vangerdahast vio que el dintel y las bisagras demadera estaban podridos, y las paredes cubiertas de un residuo cenicientoproducido por una especie de hongo maloliente. La puerta que daba a lahabitación contigua estaba abierta, y colgaba de la única bisagra que parecíacumplirconsufunción.VangerdahasthizounaseñaaOwdenparaqueestuvierapreparado,ydespuésentróflotandoenlahabitación.

Page 297: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Estabaenlaesquinadeuncorredorangostoqueseabríaendosdirecciones:una,quegirabaalaizquierda,conducíaaunaescalerademármolylaotra,quediscurría recta, terminaba ante una puerta cerrada. Las paredes estabanimpregnadasdelmismomohoblancuzcoquehabíavistoenloscamposazotadosporlaplagaalnortedeCormyr.Unflujoconstantedehumoamarillentosurgíadelasescalerasygirabaenespiralaldoblar laesquina,paradesaparecerenelrecibidoroscuro,ylaatmósferaeraaúnmáscálidayfétidaqueenlahabitaciónqueacababandedejaratrás.

Vangerdahastflotóporelpasadizoeintentóabrirlapuerta.Sequedóconeltiradorenlamano,dejandounboquetedelamaderapodrida.Unosescorpionespardossalierondelacavidadycayeronalsuelo.

—Quizádeberíamosprobarantespor lasescaleras—sugirióVangerdahast,deshaciéndosedeltirador.

—Sí,eslomejor.Ningunodelosdosmencionóelobviofinalqueesperabaaquiensequedase

encerradoenunahabitación llenadeescorpiones.Elmagosupremosedeslizóporelcorredoryseencontróanteelhuecodelasescaleras.Habíapocoespacio,era asfixiante y estaba cubierto de cienoymoho, como el resto de la primeraplantadelatorre,pornomencionarladensidaddelhumo,cuyohedorhizotosera Owden. El mago se tapó la boca y flotó escaleras arriba aguantando larespiración.Inclusoasíelhedorlehizosentirsefebrilyaturdido.

CuandoVangerdahastseacercabaalapartealta,unpardeflechassurgieronde la oscuridad y rebotaron contra su escudomágico para ir a clavarse en lassuciasparedes.Unavozguturalgritóunaorden,ylaslanzasdepuntadehuesopasaron silbando a su alrededor, procedentes de una docena de agujeroscubiertosdehongos,ocultosenlaparedinterior.Aunquealgunaslanzastambiénchocaroncontrasucapa,lafuerzadelataqueestuvoapuntodeempujarlocontralasparedesdelaescalera,quesindudaabsorberíansumagia.

Vangerdahasttocóconlavaritalalanzaqueteníamásamano,ydesatóunconjuntoderayosqueatravesaronlosagujerosporlosqueloshabíanatacado.Eltruenoreverberóenlasparedesdelatorre,yelhuecodelaescalerasellenódedestellos azulados y gritos ahogados al atravesar uno tras otro a los orcos.Laatmósferasehizomásdensaconelhedoracerdoquemado,ylaslanzasconquehabían sidoatacadoscayeronalpiso inferior.Si algunode losmarranoshabía

Page 298: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

conseguido sobrevivir a la réplica del mago, guardó silencio y se mantuvooculto.

—¡Arriba!—gritóOwden.Vangerdahast levantó lamiradayvio a los dosúltimosorcosque saltaban

porlasescalerastraslaluzdesuvarita.Seacercóunpocomásaltechoydejóquepasarandelargo,locuallepermitiódespacharaunodeellosconungolpesecodevarita.Elotrocayóvíctimadeunmazazo,cortesíadeOwden.

—Esto ya me parece más prometedor —dijo Vangerdahast—. Al menosintentandetenernuestroavance.

SiguióflotandodelantedeOwden,escalerasarriba,yalsubirlasseencontróenunaestanciaespaciosa,encimadeunamesacuadrada llenadecangrejosderío, anguilas y toda clase de peces pescados por los orcos en el pantano.Allítambién zumbaban innumerables insectos, que producían un estruendoensordecedor capazde levantar un terribledolor de cabeza aVangerdahast.Elradiodealcancedesuhechizodeluzeraescaso,impidiéndoleiluminartodaslasparedes,perojuntoalhuecodelaescaleraencontróabiertalapuertadehierrodeunaceldaminúscula.HizoungestoaOwdenparaquesepusieraasuespalda,yelmagosupremoentróflotandoparainspeccionarsuinterior.

Aunladohabíaunjergónyunadocenadeanillosdediversostipos,cálicesyarmas.Aunqueerandeunafacturaexquisita,sucondiciónactualeralamentabley todos ellos habían perdido su lustre y estaban oxidados. Al otro lado deljergón,deunatrampillaquedabaalpasadizodondehabíanintentadotenderlesuna emboscada, surgía un hedor a carne chamuscada. En la pared opuesta deaquellahabitaciónhabíaunatronera,desdelacualVangerdahastpudoveraloscaballoscuandoemprendieronenloquecidoslacargacontralahordadeorcosenelpantano,peronovioalasghaznethporningunaparte.

Vangerdahast se retiró de la tronera e inspeccionó la habitación. En lasparedeslateralesencontraronotrascuatroceldas,cadaunadeellasconunjergónydiversosobjetosdeplomoqueenotrostiemposfueronmágicos.Enelextremoopuesto,sólounadelaspuertasdehierroestabaabierta.Laotraestabacerrada.ElmagosupremoformulóunhechizodetelarañaehizoungestoaOwdenparaqueabrieralapuertacerrada.

Elmaestredeagriculturaagarróeltiradorytiróconfuerza,peronocedió.Sedisponíaaempujarlapuerta,cuandounruidometálicoresonóensuinterior.

Page 299: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—¿Tanalasta?—Vangerdahastapenasoyósupropiavoz,debidoalafuerzaconquelatíasucorazón—.SoyVangerdahast.

—YOwden—añadióelclérigo,conlosojosdesmesuradamenteabiertos.Norecibieronrespuesta,eintercambiaronunamiradallenadeinquietud.—Tanalasta,tenemosqueabrirestapuerta—advirtióVangerdahast—.Sino

puedes responder, da el golpe real. De lo contrario, Owden se pondrá muynervioso.

—Puedoresponder.—LavozparecíamásgraveyroncaqueladeTanalasta.—Nomeparecesuvoz—susurróVangerdahast,entrecerrandolosojos.—Ydudo queOwden sea de los que se ponen nerviosos—dijoTanalasta

antesdequeOwdenpudieraresponder.—¡Esella!—exclamóelclérigoconunasonrisa.—Mejorseráasegurarse—dijoVangerdahast,precavido,haciendoungesto

aOwdenparaquesepusierasobrelapuerta,conlamazapreparada.—¿Asíelquequedarámalseréyo?—Owdenhizoungestodenegación—.

¿Cuántotiempollevaencerradaahídentro?Claroquetienelavozronca.—Lacautelanoesningúninsulto—insistióVangerdahast.Owdenlevantólamiradayflotóhaciaeltechoaregañadientes,paraponerse

sobre lapuerta.Vangerdahastseñalóel tiradorymurmuróunapalabramágica.Lapuertaseabrió,peroTanalastanosaliódelacelda.

—¡Tanalasta!—llamóOwden, dando al traste con la sorpresa que hubieradeparadosuposición—.Vamos...notenemosmuchotiempo.

—No.—¿Qué?—Owdenbajódeltechoeintentóabrirmáslapuerta.Vangerdahastlocogiódelbrazoytiródeélparaapartarlodeltirador.—¿Princesa?¿Hayalgúnproblema?—Noquieroquemeveanasí—respondió lavoz—.Nomepodéisayudar,

asíquedejadmeasolas.Osloordeno.—Sabéisquenopodemosobedeceros.Vangerdahast empujó la puerta para abrirla, y vio una figura sombría

agazapadaenlaoscuridad,quelomirabaconojosinyectadosensangreycuyorostroestabarodeadoporuncabellonegrocomoelazabache.Tanduraseransusfacciones,lasmejillasmarcadas,lanarizafiladacomounadaga,laboca...queelmago tardó unos segundos en reconocerla como la de Tanalasta. Incluso

Page 300: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

entoncesnopudoevitarinterponerlavaritaentreambos.La princesa se apartó rápidamente, descubriendo un par de alas pequeñas

comodevampiro,quesurgíandelaespinadorsal.—¡Osloadvertí!Ahora,dejadmeenmanosdelúnicodestinoquemerezco.Owden se recuperómucho antes queVangerdahast. Empujó la varita para

apartarlayentróflotandoenelinteriordelacelda.—Noosmerecéisnadadeesto.—Elclérigoextendiólosbrazosparaabrazar

alaprincesa—.¿Quéoshacepensarasí?—¡Nometoques!TanalastaseapartódeOwdendeunsalto, rápidacomounaserpiente,yse

encaramó a la tronera.De pronto la vieron gracias a la luz que se filtraba delexterior.Estabadesnuda, temblorosa,y losobservabaconojosrojos.Sufiguraflacuchaeraunaburlacomparadacon laqueVangerdahasthabíaentrevistoenEstanquedelOrco,yantelacomparaciónnopudoevitarsentirnáuseas.Ellasecruzódebrazosparataparsudesnudezybajólamirada.

—Simetocáis,absorberétodosvuestroshechizos.—Señalóconlabarbillapuntiagudaelpiso—.Yyasabéisquésucederáacontinuación.

—Sí, lo sabemos.—Vangerdahast hizo ademán de desabrocharse la capa,pero recordó lo que ocurriría con la magia que guardaba en los bolsillos ydesistiódesupropósito—.Nopodemosdejarosaquí.Vendréisconnosotrosdeunauotraforma.

ArrancólacapadeloshombrosdeOwdenyselatendióalaprincesa,peroéstanosemolestóencogerla.

—¡TanalastaObarskyr!Noheperdidoatodaunacompañíadesoldadosdelreyparapermitirqueosconvirtáisenunaghazneth.—Vangerdahastlearrojólacapa—. Ahora poneos eso y acompañadnos. Sea lo que fuere en lo que osconvirtáis, loharéis enCormyr aunque tengaque teletransportarosdevuelta aArabelenvueltaenunatelaraña.

—Dudo que seas tan rápido, viejo —replicó Tanalasta, cuyos ojos rojosbrillarondesafiantes.Pesealoquehabíadicho,sepusolacapaparaocultarsudesnudez,cerróelbroche,queperdióellustreinmediatamente.Entoncesbajódelatronerahastaelsuelo.Losinsectosylasserpientesnoleprestaronatención,limitándose a hacerse a un lado o deslizarse por encima de sus pies—. Túdelante,fisgón.

Page 301: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Tan aliviado se sentía el mago supremo de haber recuperado a Tanalasta(aunquefueraeneseestado),quehubieraqueridocogerlayteletransportarladeregresoaArabelenaquelmismoinstante.Sinembargo,intentarsemejantecosaenel interiorde la torreno lepareciómuyadecuado.Dada lanaturalezade latorre:sufacilidadparaabsorberlamagia,podíanacabarencerradosdeporvidaentreaquellascuatroparedes.Vangerdahastregresóalaestanciaprincipalyflotóendirecciónaltechopolvoriento.

—¿Sabéissihayaquíalgunatrampilla?—preguntó—.Habráalgúnmododellegaraltecho,digoyo.

—¡No!—exclamóTanalastacomosisetrataradeunaorden—.Esdecir,nopodemosutilizarla.Essupuerta.

Señalóelextremoopuestodelahabitación,yVangerdahastcomprendiócuáleraelproblema.Lapuertaestabacentradasobrelasescaleras,porloquelaúnicaformadeusarlaeravolando.SiintentabasosteneraTanalastalosuficientecomoparapasarlaporlatrampilla,ellaabsorberíalamagiadelhechizoquelepermitíavolar,ylosdosquedaríanatrapadosenlatorre.

—Podemos recurrir a la puerta del pantano. —Tanalasta pasó debajo deVangerdahastyempezóabajarlasescaleras—.Nocreoquecuentenconeso.

Al bajar por las escaleras, la capadeTanalasta empezó a desintegrarse: sevolviópolvorientayseca,yserasgaronlosbordes.Vangerdahastsediocuentaypensóquelomásprudenteerallegaraunalapocotransitadadepalacio;despuésseolvidódelasunto.Laalegríadehaberlaencontradoempezabaadesvanecerse,y su dolor de cabeza hizo acto de presencia con energías renovadas. Letemblabanlassienesycadavezveíamásborroso.Ledolíanlasarticulacionesyteníaelestómagorevuelto.Cuandollegaronalpiedelasescaleras,sesentíatandébilcomounaanciana.

—¿Algunodevosotrossesientedébil?—preguntó.—Es la torre—respondióTanalasta—.Este lugarestá impregnadodelmal

delasghazneth...losenjambres,laoscuridad,laplaga,todo.—Si no rechaza usted una ayudita de la diosa, yo podría ayudarle —se

ofrecióOwden,poniendolamanoenelhombrodelmago.—Después.—Vangerdahastsedispusoadoblarlaesquina—.Salga...Oyeronaalguiengritarasustadoenlahabitacióncontigua.—¡Vangerdahast,ayuda!¿Estáustedahí?

Page 302: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Parece la voz de... —dijo Owden, apartando la mano del hombro delmago.

—¡Alaphondar!—exclamóVangerdahast.Olvidandoeldolordecabeza,Vangerdahastdoblólaesquinavolandoyechó

unvistazoalinteriordelahabitaciónporunabrechaquehabíaenlapareddelatorre.AllíestabalafiguradelgadadeAlaphondar,recortadacontralaintensaluzprocedente del exterior. El sabio se sacudía las avispas a manotazo limpio ycorría a ciegas en círculos, mientras intentaba recuperarse de los efectosderivados de la utilización del bolsillo de huida de su capa.A una docena depasos,losúltimossupervivientesdelarealcompañíaexpedicionariaseretorcíandedolor,víctimasdelosenjambresdeavispasquelosatacaban.Eranunapresafácilparalosorcosylasghazneth,quelosperseguíanporlapenínsula.

—¡Tráigalo aquí dentro! —exclamó Vangerdahast, empujando a Owdenhacialabrecha.

Cuando el clérigo se apresuró a obedecer, Vangerdahast guardó la varitabrillanteenunbolsilloysacóunpequeñocuadradodehierrodeotro.Frotó lahojaentresuspalmasyempezóaentonarunlargoconjuro.

Owden atravesó la brecha para acercarse a Alaphondar, y las avispas sedispersaronalinstante.Elclérigobajólamanoylapusoenelhombrodelsabio.

—Yaestoyaquí,amigomío.Alaphondarsevolvióhaciasusalvador.Elrostrovenerabledelsabioestaba

llenodepicadurasdeavispaqueempezabanahincharseyenrojecerdetalmodoque,peseanotenerlosojoscerrados,delahinchazónloparecía.

—¿Owden?—preguntóAlaphondar.Afuera,lasghaznethadvirtieronloquesucedíayremontaronelvuelo—.¡DígamequeVangerdahastestáconusted!

—Asíes,ynoeselúnico—respondióOwden.Estarespuestaempujóalsabioaadoptarunaexpresiónintrigada,expresión

quenotardóenmudarcuandoOwdenlolevantódelsueloyselollevóhacialatorre. Cuando Vangerdahast ocupó su lugar en la brecha, las ghaznethsobrevolaban por encima de los supervivientes de la real compañíaexpedicionaria, y viraban sobre un ala en dirección a la torre. Vangerdahastvolvió la punta de la hoja de hierro hacia abajo y, tras soltarla, pronunció laúltimapalabradelhechizo.

La península desapareció detrás de un muro de hierro, y acto seguido se

Page 303: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

oyeronunaseriedegolpesensordecedoresquereverberaronenelinteriordelatorre.

Vangerdahastseretiróalinteriordelaestanciaconunzumbidoenlosoídosy un ojo puesto en el muro de hierro que había creado. La barrera estabailuminadaensuinteriorporalgunosrayosdeluzquesefiltrabanatravésdesusuperficieoscuraylapareddelatorre,peroelespacioerademasiadopequeñoparaunaghazneth.Almenos,esoesperabaél.Cuandonovolvieronaoírruidosprocedentes del otro lado, volvió a empuñar la varita de luz del bolsillo y sedirigióhacialosdemás.

—Quizásehayanrotoelcuello—sugirióOwden—.Elmuroeradehierro.—¿Deverascreesquetendremostantasuerte?—preguntóTanalasta—.Ese

murotambiénestáhechodemagia.Ahoramismoestarán...absorbiéndola.—¿Tanalasta?—preguntó Alaphondar, sin tenerlas todas consigo—. ¿Qué

hacesaquí?—Vaya pregunta. Creo que vuestra intención era rescatarme —replicó

Tanalastaentonoácido—.¿Meoyes?¿Otehasquedadosordocomounatapia?Vangerdahastenarcóunaceja.Laprincesalohabíatratadoaéldeesaforma

enmásdeunaocasión,perosiemprehabíasidorespetuosaconAlaphondar.Elsabioeracomounpadreparaella.

Alaphondarsesentíatandolidoquenopudodisimularloniaunconelrostrotanhinchado.Apretólaspestañasconfuerzayquisoexplicarse...perotitubeó.

—Es culpa mía.—Miró a su alrededor sin ver nada—. Por alguna razónpensaba que estabais con Alusair. Acaba de decirme que ha descubierto losnombresdelasghazneth,graciasalossignosquehabíaenlasdemáscriptas.

—¿De veras? —preguntó Vangerdahast. Evitando mirar directamente aTanalasta,deslizólamanoensubolsilloparacogerunamadejitadeseda—.Nosabíaquelehubieraenseñadoustedaleerlossignosélficos.

—Oh, sí, por supuesto que sí —respondió Alaphondar—. Los signoscorrespondientes al período posterior a Thauglor debe conocerlos cualquierprincesaquesepreciedeposeerunabuenaeducación.

LosojosdeTanalastapestañearonrápidamentecuandoestudiólaexpresiónde todos y cada uno de sus acompañantes. Vangerdahast se cuidó mucho demantenerunaexpresiónneutra.Alusairnodistinguiríaunsignoantiguodeunaruna,demodoqueteníamuyclaroloquehabíaqueridodecirleAlaphondar.

Page 304: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

PeroOwdennofuetanperspicaz.—¿Signos correspondientes al período posterior a Thauglor? —preguntó,

incrédulo—.¿PoreldragónThauglor?—Uncampesinocomoustednoloentendería—gruñóVangerdahast.Siguió

mirandoaAlaphondar,mientrassacabalamadejadelbolsillo—.¿Ledijoalgunaotracosa?

—Mepreguntópor laprofecíadeAlaundo.—ElsabiomiróendirecciónaTanalasta.Titubeóunmomento,proporcionandoaVangerdahastmástiempodelnecesario,yañadió—:¿Laconoces,verdad,Xanthon?«Sieteplagas,cincoquefueron,unadelpresente...»

—¡Xanthon!—Vangerdahast se volvió rápido como el rayo, arrojando lamadejadehilodesedacontralaghaznethimpostora.

De no haber estado limitado por el terrible dolor de cabeza que tenía y lomucho que le dolían las articulaciones, quizás hubiera podido ser lo bastanterápido para atrapar al fantasma. Pero la realidad era que Xanthon habíadesaparecido.LatelarañamágicadeVangerdahastseextendióporelsueloyelmuro,atrapandoadocenasdeserpienteseinnumerablesinsectos.

Alaphondar profirió un grito de dolor, y al volver Vangerdahast la varitaluminosa,vioalimpostoragarrandoalsabiopordetrás,conlasgarrashundidasenloscostadosdeAlaphondar.ElpesoextrahacíadescenderaAlaphondaryaOwden hacia el suelo repleto de bichos, peroXanthon no parecía dispuesto aesperaraquesucedieraloinevitable,quesusinsectosterminaraneltrabajo,sinoqueechóhaciaatráslacabezaydespuésseimpulsóparahundirloscolmillosenelcuellodeAlaphondar.

Vangerdahast apuntó la varita a la siendeXanthonypronunció la palabramágica.Seprodujouncrujidoensordecedorseguidodeundestellocegador,yacontinuación se escuchó el ruido de un cuerpo al golpear contra la pared.Pestañeandoparalibrarsedelaschiribitas,elmagoextendiólamanoycogióaOwdendelaparteposteriordelacapa.

—¿Siguevolando?—preguntó.—Porahora—respondióelclérigo.CuandoaVangerdahastseleaclarólavista,vioquesurayohabíaempujado

a Xanthon contra el lecho pegajoso formado por la telaraña que antes habíaarrojadoalfondodelahabitación.Elimpostorcolgababocaabajodelapared,y

Page 305: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

forcejeaba para librarse de la telaraña profiriendo maldiciones contra Azoun.AúnteníaunleveparecidoconTanalasta,perolailusiónyanoeratanfuerte.Laghazneth no había sufrido daños, por supuesto, y el filamento de la telarañaempezaba a perder color, pero almenos pasarían unos segundosmás antes dequeconsiguieradesembarazarse.

VangerdahastsevolvióparacomprobarelestadodeAlaphondar.Elancianosabio colgaba inerte de los brazos de Owden, y las heridas que tenía a loscostadosempezabanacubrirsedepus.Elmagocolocósuavementelamanoenelhombrodesuamigo.

—¿EstábienTanalasta?—Porahora—respondióelsabio—.EstáconAlusair.—¿Seguro?Cuandoelsabiohizoungestodeasentimiento,Vangerdahastdesenvainóla

daga de hierro y se volvió de nuevo a Xanthon. Los ojos del fantasmaadquirieronuna tonalidad anaranjada a causa delmiedo, y empezó a forcejearcon más fuerza. Consiguió librar uno de sus brazos, y empezó a golpear latelarañaconsusgarrasafiladas.

—Esta vez no, traidor —siseó Vangerdahast—. Ahora vas a pagar tuinsensatez.

El mago supremo lanzó un rápido conjuro y arrojó la daga contra laghazneth. El arma atravesó la habitación y se clavó en mitad de su pecho,penetrando su esternón y hundiéndose hasta la empuñadura. La ghaznethforcejeó de un lado a otro como una loca, profiriendo angustiosos aullidos eintentandolibrarsedelatelaraña.Alpasaralgunossegundossinqueelmonstruoperdiera ni un ápice de sus fuerzas, Vangerdahast comprendió que tenía queponer algomás de su parte para rematar la faena. Xanthon había conseguidolibrarunadesuspiernas.

—Necesitoalgoduro.Permítamesumaza—dijoelmagoaOwden,dándoleacambiolavaritaluminosa.

EsofuesuficienteparaXanthon.Arrancóladagadehierrodesupechoyconellalanzótajosadiestroysiniestro,amenudohiriéndoseélmismoensuintentodeliberarsedelatelaraña.VangerdahastestuvoalgotorpealahoradesacarlamazadelatiraenqueOwdenlallevabacolgadadelcinto,sobretodoteniendoencuentaquenoqueríaheriraAlaphondar,queaúncolgabadelclérigo.Cuando

Page 306: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

liberólacabezadelamaza,Xanthonsehabíapuestoenpie;desupechomanabaunreguerodesangrenegra.

ElfantasmaarrojóladagadehierrocontraVangerdahast,despuéssediolavueltaysaliócorriendoporlapuerta.Sóloelescudomágicodelmagoimpidióqueelcuchilloleabrieraelcráneo.

Vangerdahast profirió unamaldición, después intercambió unamirada conOwdenyfijósusojosenAlaphondar.

—¿Podráustedsalvarlelavida?—Porsupuesto—respondióOwden,molesto,puessesintióinsultadoporla

pregunta—,peronecesitounlugarmásseguroparatrabajar...yparaquepuedadescansar.

—Entoncesleproporcionaréuno.—VangerdahastvolvióacolgarlamazadeOwdendesucinturón,yalargólamanoparaintroducirlaenelforrodelacapadeAlaphondar—.Perdóname,amigomío.

Cogióelbolsilloy loarrancó,despuéssostuvoel retalenelaire.Vigiló lapuertaporsiaXanthonseleocurríavolveryextendióelretalmientrasentonabaun elaborado conjuro. Cuando terminó, el bolsillo que había arrancado habíaadoptadolaformayeltamañodeunatrampilla.Vangerdahastsoltólatrampilla,quesiguióflotandoenelaire.

—Puedenrefugiarseenella.Tireusteddelapuertaencuantohayaentrado,nadiepodrátocarle:nisiquierasabránqueestáustedahí.—VangerdahastsoltólamazadelcintodeOwden—.Ynoseleocurrasalirhastaqueyolellameporsunombre, aunque le parezca quehanpasadodiez días.Ahí dentro el tiempofluyedeformaextraña,porloqueloqueaquíseantansólounossegundos,ahípuedaparecerledías.

—¿Y qué piensa usted hacer? —preguntó Owden, mirando la maza yenarcandounaceja.

—Voy a vengar una traición—respondióVangerdahast—.Y erradicar unaplaga.

—¡No!—LavozdeAlaphondarapenasparecíaunsusurro—.Es lapuertaqueningúnhombrepuedecerrar...¡laabrirás!

—PareceserqueXanthonyahaabiertoesadichosapuerta.—Vangerdahastapartólamirada,paraobservarelinterioroscurodelpasadizoporelquehabíadesaparecidolaghazneth—.Ymehepropuestocerrarlaensuspropiasnarices.

Page 307: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo
Page 308: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

L21

apiedraimánoscilóenlapalmadelamanodeVangerdahast,señalandoalotroladodelaesquina,hacialaoscuridadenvolventequeengullíalaparte

bajade la torre.Elmago flotóhasta laparedexteriorparaecharunvistazoalsiguiente tramo del corredor. Cuando vio que no le habían tendido ningunaemboscada—sólo había los habituales insectos y serpientes—, avanzó por elpasadizo.Contreshechizosdistintosque loprotegíandecualquierdaño,no lepreocupabademasiadolaposibilidaddequeloatacaran,perouncazadorsabioaprendearespetarasupresa.

El corredor continuaba a lo largo de media docena de puertas, todas tanpodridasycubiertasdemohocomolaprimeraquehabíavisto.Laatmósferaeramás cálida y fétida que nunca, aunque por suerte el mago ya se habíaacostumbradoynosesentíatanmal.Antesdesepararse,OwdenhabíainsistidoenformularalgunoshechizosdecosechapropiaeinvocaraChaunteaparaqueprotegieraalmagocontralaenfermedad,elvenenoyelmalqueimpregnabaenel lugar. Para sorpresa de Vangerdahast no tardó en recuperar las fuerzas, einclusoesehumoamarilloseapartabadesucaminocuandorecorríaelcorredor.Esta pequeña ayuda no le haría cambiar de opinión sobre el templo real deTanalasta,porsupuesto,perocuandovolvieranaSuzailteníaplaneadoofrecerleunaodosplegariasdeagradecimiento.

A medida que Vangerdahast se acercaba a la siguiente esquina, la piedraimánque tenía en lamano sevolvióhacia él.Esto ledejóperplejo,hastaquedobló laesquinay lapiezademaderavolvióaoscilarydespuésgiró sobre símismaparaseñalardenuevohacialaesquinaqueacababadedoblar.Elmagose

Page 309: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

volvióydescendióunpocoparainspeccionarelárea.Habíacambiadolavaritaluminosa por el anillo de comandante de Alaphondar, a fin de tener ambasmanoslibresparaluchar,perolaluzdelanilloeramásdébilqueladelavarita.Tuvoquedescendercasihastalaalturadelsueloparapercatarsedelasfranjasdehumoamarilloquetrazabanunaespiraldescendente,yquesefiltrabanatravésdeunmontóndeserpientes.

Vangerdahastgolpeóel suelocon lamaza.Advirtióun leve tembloryunaresistencia momentánea, pero la maza atravesó el suelo y se perdió de vista.Vangerdahast frunció el ceño, preguntándose si aquélla sería la «puerta delpantano» a la que se había referido Xanthon cuando asumió la fisonomía deTanalasta.Obviamente,laghaznethhabíaintentadoengañarasus«rescatadores»parallevarlosaunatrampa,yelmagosupremosospechabaqueaquelpropósitohabía estado en lamente de todas las ghazneth desde hacía algún tiempo... almenosdesdequehabíaregresadodeArabel.

Pero ¿por qué? La razón le pareció obvia: la religión de Tanalasta era laséptimaplagadelaprofecíadeAlaundo,«laqueestabaporllegar»,ytansóloVangerdahast podía impedir a la princesa que abriera «la puerta que ningúnhombre podría cerrar». Decidido a librarse de la única persona que podríadetenerlas, lasghaznethhabían tendidouna trampaalmago.Laexplicación lepareció pertinente y lógica, y estaba decidido a impedir que las ghaznethdispusierandeunasolaoportunidaddeconvertiralaprincesaenunadeellas.

Vangerdahast arrancó lamaza del suelo y la colgó del cinto; después sacóuna semilla demanzanadel bolsillo de la capay la dejó caer.Cuando aúnnohabía tocado fondo, realizó un pase mágico con ambas manos y pronuncióalgunas palabras de naturaleza arcana. De pronto se formó un remolino en elsuelo,yseabrióunagujerodeltamañodeunhombre.Vangerdahastescogióunadesusvaritas, lanzóunaboladefuegoporsiaalguien,oaalgo,se leocurríatenderleunaemboscada,ysiguióalasllamasatravésdelaoscuridad.

Laboladefuegopareciócaerycaerhastaelcentrodelatierra;sehizomásymás pequeña al alejarse deVangerdahast.Aunque elmago no llegó a tocarninguna pared, tenía la sensación de atravesar un pozo para adentrarse en unvacíoardienteylóbrego,impresiónconfirmadaporelhechodetenerlaespiralde humo amarillo a tan poca distancia. Finalmente, cuando la bola de fuegohabíaquedadoreducidaaltamañodeapenasunpulgar,tocófondoyseexpandió

Page 310: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

formandoundiscodeluzrojizaqueiluminófugazmenteunaplazarodeadaportoscosmurosdepiedra,ademásdealgunasentradascuadradasatúneles.

Como no se había deshecho de la piedra imán, Vangerdahast siguiódescendiendohastaqueelhedoracredesupropiohechizodefuegoalcanzósuolfatoyelhumoamarilloseperdióenlaoscuridad.Sedetuvoflotandoaunosmetros de un suelo llano y fangoso, acompañado por el goteo del agua y elzumbido constante de los insectos. No había nada por encima de su cabeza,excepto una oscuridad total, no había ni rastro del pozo por el que habíadescendido.Alargólamanohaciaarribaytocóalgoblando:alempujarlo,cedióbajolapresióndesumano;noeraagua,erademasiadoelásticoparaquefuesebarro,peroeramuchomássólidoqueelpozoporelquehabíadescendido.

—Hay muchas formas de entrar, pero sólo una de salir —siseó XanthonCormaeril.Ajuzgarporeltonodesuvoz,estabatanenfadadocomodolorido—.Pero¿porquépreocuparse?¡Seguroqueungranmagocomotúpuedeencontrarelcaminodevueltaacasa!

Vangerdahastsevolvióraudohacialavozyviounaredtoscaquevolabaenel diminuto radio de acción de su hechizo de luz. Reaccionó sin perder unsegundo,bajólavaritaypronunciólapalabramágica.Laboladefuegoatravesólaredyexplotóalchocarcontraelpechodelasiluetaoscura,arrojándolahaciaatrás hasta que topó con una pared de piedra. El estruendo reverberó en laestancia,yacontinuaciónlosrestosdelaparedimpulsaronconfuerzaalmagocontraeltecho,ydespués,alrebotar,loarrastraronhaciaunapared.

Vangerdahast cayó boca abajo sobre el suelo fangoso, y al estirar los piesdescubrió que topaba con otra pared, postura dolorosa para un hombre de suedad.Noperdióeltiempoencambiardepostura,peroempujólavaritaatravésdelaredyrodósobresímismomientrasseextendíaelfuego.

LasllamasnoalcanzaronaXanthon,peroiluminarontodalaplaza.Erauncírculoenfangadoquenomediríamásdediezpasos,estaba llenoarebosardeinsectosyabundabanlaschozasdestartaladasquehabíanservidodehogaralostrasgoshacíamucho tiempo.Losedificioscompactospresentabanuna fachadasólida de piedra apilada, sólo quebrada por las ventanas entrecerradas y losdintelesde laspuertasque llegabana lacinturadeunhombre.Enmitadde laplazahabíaunadepresiónconaguaestancada.

Cuando el fulgor de los proyectiles de fuego lanzados por Vangerdahast

Page 311: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

empezóadesaparecer,Xanthonseincorporódeentrelosrestosdelaschozasyasomólacabezaporencimadeunmuro.Aaquellasalturas,cualquierparecidocon Tanalasta había desaparecido. El rostro de Xanthon había adquirido unamonstruosidadesquelética,sunarizparecíalapuntadeunaflechayunabarbadedíasasomabadevezencuandoporentre lanubede insectosque lo rodeaban.ApenaseravisiblelaheridadedagaqueVangerdahastlehabíainfligido:noeramásqueunacicatrizoscura.

—¿Quésensacióndelibertadteproporcionatodaesamagia,viejoamigo?—preguntóXanthon.

Vangerdahast apuntó de nuevo con la varita y disparó otro proyectil ígneoque recorrió la plaza hasta alcanzar su objetivo. Xanthon levantó la mano yatrapó el proyectil, pero desapareció tras el muro a causa de la fuerza delimpacto.

Vangerdahastdesenvainóladagadehierro,empezóacortarlaredyentoncessediocuentadequeaquellacosaestabaconstruidaconserpientesvivas.Aunquesuscolmilloseranincapacesdeatravesarsucorazamágica,lassupervivientesloatacabancondenuedo.Alverlas,nopudoevitarproferirungrito.

Xanthonapareció entre las ruinas, al otro ladode laplaza conel proyectilmágicodeVangerdahastenlapalmadelamano.

—¿Sabíasqueestoesambrosíaparamí?Xanthon echó la cabeza hacia atrás y engulló el resto del fuego.

Vangerdahastdejódecortarlaredyseincorporó,rogandoparaqueaquellugarno absorbiera la magia como lo hacía la torre. Descubrió aliviado que podíaremontarvuelo,peroalhacerlorebotócontraeltecho.

—Lamagianotesalvará,viejoestúpido—advirtióXanthon,engullendoelfuego—.Venaquíysolventaremoslacuestióncomohombres.

—Unodenosotrosyanoesunhombre.Unodenosotrosesuntraidor...ynosólohatraicionadoaestepaís.

—Soyloqueelreyhizodemí—respondióXanthon,haciendoungestodeindiferencia.

La ghazneth se acercó almago.Vangerdahast levantó la daga de hierro y,cegadopor la rabia,empezóa recitarelconjurodeunhechizoquehundiríaelarmaenelojodeltraidor.

PeroXanthonestabapreparado.Laghaznethserefugióenunodelostúneles

Page 312: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

abiertos en las paredes de la plaza y desapareció, privando al mago de unobjetivo. Elmago supremo interrumpió el conjuro, y profirió una obscenidad.Sólopodía emplear aquelhechizo tresveces al día, y acababademalgastar lasegunda.

Vangerdahast sacó la maza del cinto y pasó el siguiente cuarto de horainspeccionandolaplaza,mientrasesperabaaqueXanthonvolviera.Finalmente,se dio cuenta de que la ghazneth le había amenazado en vano, de que habíajugadodefarolyconfióaúnmásensusposibilidadesdeéxito.Eltraidorestabaasustado,porquede lo contrariohabría regresadopara concluir el combate.Elmagopasóotrocuartodehorabuscandolapiedraimánquehabíautilizadoparaseguirelrastrodesupresa,despuésdescendióflotandoyseadentróenelmismopasadizoporelquehabíadesaparecidoelfantasma.

Elportalconducíaalosconfinesdeunacallejueladelostrasgos...untúnelminúsculoquenoeramásanchoqueloshombrosdeVangerdahast,yqueapenasllegaba a su cintura. Tuvo que avanzar flotando con la cabeza por delante,mientraselhumoamarillentolohacíaaunospasosdelantedeél.Elsuelohedíaa barro ymoho, y en las paredes resonaba el vuelo de los insectos. Elmagointentónopensarenlacosarojaquerecorríaeltecho,yqueenunaocasiónlerozólaespalda.

Vangerdahastpersiguióasupresadoblandounadocenadecorredoresyuncentenardepuertasentreabiertas,despuéssalióaotraplazaysediocuentadeque no necesitaba la piedra imán para seguir al fantasma. Incapaz de volar,Xanthon dejaba un rastro muy claro en el barro. Es más, una corrienteimperceptiblearrastrabaelhumoamarilloatravésdevariostúneles,yalparecerlaghaznethseguíaalhumo.Elmagoguardó lapiedra imán,cogió lavaritaderepulsiónenunamanoyladagadehierroenlaotra.

Xanthonintentótenderleunaemboscadatresplazasmásadelante,arrojandosobreélunaparedquecayóasusespaldascuandosalíadel túnel.Elmagoselimitó a tocar el costado de la ghazneth con la punta de la varita, y la envióvolandohastalaotrapared;después,lasiguióalinteriordeotrotúnel.Elmagoconsultó la piedra imánmágica antes de entrar en la plaza. En dos ocasioneslogrósacarventajaasuadversario,yacercarseaélporlaespaldaparaatacarle.En la segundaocasiónconsiguiópropinarleunbuengolpecon lamazaque lehabíaprestadoOwden.

Page 313: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Xanthon logró escurrirse por los pelos en el siguiente túnel. Después,Vangerdahastpudomantenersealadistanciaadecuadaparaoírlo.Losiguióporel ruido característico que hacía al arrastrarse por los pasadizos fangosos. Amedida que se alargaba la persecución, el sonido fue haciéndose más y másimperceptible ymenos constante. Finalmente, cesó por completo, y cuando elmagosedetuvoparaconsultarsupiedra imánmágica,elbrazode laghaznethsurgiódelapuertacontiguaylearrebatólavaritaderepulsión.

Vangerdahastquedótansorprendidoquesealejóunadocenadepasosdelapuerta.Cuandofinalmenteseaseguródequelaghaznethnoleatacaba,Xanthonyahabíavueltoaescurrirseporlostúneles,moviéndoseconmayorrapidezquenunca.Elmagoencontrósuvaritaaunoscentenaresdepiesdedistancia,estabadeslustrada y hundida en el barro. Había desaparecido toda su magia, y elfantasmasehabíaalejadotantoquenisiquierapodíaoírlo.

El mago decidió dejar su magia a salvo en el interior de sus bolsillos, yreemprendiólacaza.Coneltiempo,Vangerdahasttuvoquerenovarsuhechizode vuelo, después los hechizos de protección y por último continuar a pie lapersecución. Estuvo a punto de renunciar y teletransportarse al interior de latorredebarro,peronopodíapermitirqueXanthonnorecibieraeljustocastigoporsutraición.

LapersecucióncontinuóhastaqueXanthonempezóaacusarelcansancioyVangerdahastescuchósusresoplidosysuspasostorpesenelfango.Decididoanocometerelmismoerrorqueantes,elmagotomólainiciativayapretóelpasotraselfantasma.Cayósobresuespaldayextendiólosbrazosparahundirladagaensugarganta.

PeropormuycansadoqueestuvieraXanthon,seguíasiendomásrápidoqueelmagosupremo.CogióaVangerdahastdelbrazoyloarrojócontraelbarroconlacabezapordelante,hundiendoladagaensupropiaclavícula,perolibrándosedeencajareltajoenelgaznate.

Vangerdahast se vio sacudido por un peculiar hormigueo cuando lamagiaempezó a abandonar sus hechizos de protección. Cogió aXanthon del pelo eintentó tirar su cabeza hacia atrás para liberar su brazo, pero su fuerza no eranada en comparación con la de la ghazneth. La criatura cerró susmandíbulasalrededor del antebrazodelmago, peronopudopenetrar con sus colmillos sumagia de protección, aunque, por supuesto, Vangerdahast sabía que eso

Page 314: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

cambiaríacuandolaghaznethabsorbieratodasumagia.Vangerdahastrodódeladoylibróparcialmentesubrazodelapresióndela

ghazneth,ganandoalmismotiempoespacioparamaniobrar.Deslizólamanoenlacapaycogióunavaritadelbolsillo,despuéstocóalaghaznethenlacabezaypronuncióunaúnicapalabradeorigenarcano.

Un destello silencioso de luz mágica y dorada iluminó el túnel, cegandomomentáneamente aVangerdahast y arrojándolo contra la pared.Al aflojar laghazneth susmandíbulaspudo liberar subrazo, ypropinóun tajo al pechodeXanthon.Rogóparaquesuhechizodevuelo tuviera lamagiasuficientecomoparaaguantareltiemponecesario,yseimpulsóhaciaeltecho.

Xanthonaúnnosehabía sacudido la luzmágicade losojos,perocayódeespaldasmientrasmovíalosbrazosaladefensiva,apenasaunoscentímetrosdelanarizdeVangerdahast.Lasnuevasheridasdel fantasmaempezarona sanar:gracias,sinduda,aladosisdemagiaqueacababadeabsorber.Loshechizosdeprotección mágica de Vangerdahast desaparecían rápidamente, y no podríarenovarlos hasta que descansara y tuviera ocasión de estudiar su libro dehechizos. Consciente de que había desperdiciado la oportunidad de vencer alfantasmaenuncombatefísico,Vangerdahastdecidióquelomejoreraretirarseparasalvarelpellejoypoderlucharotrodía.

CerrólosojosyevocóunaimagendelpatiodelpalaciodeArabel.Mañanaregresaría en busca de Alaphondar y Owden, y volvería a la carga con otracompañíadeDragonesPúrpura.Aveceseraposibleretrasar la justiciadelrey,peronuncaeludirla...nocuandoelmagosupremodecidíaqueeraasuntosuyoaplicarla. Un gruñido le dio a entender que Xanthon se había librado de laceguera,yVangerdahastdecidióformularelconjurodeteletransportación.

Experimentó esa sensación familiar de caer a un pozo sin fondo, despuéssintió algo blando y pegajoso en las suelas de sus botas. El aire parecíaestancadoyhúmedo,ytuvolahorriblesospechadequeconocíalafuentedeesezumbidointenso.Elmagointentóaclararselasideas,yseencontródepieanteunacuestafangosa,observandounestanquedeaguasuciayunaseriedechozasdestartaladas,construidasporlostrasgos.Porunmomentocreyóhabervueltoalamismaplazapor laquehabíaentradoa laciudadabandonada,perotrasunainspecciónrápidadelazona,comprendióquenohabíanirastrodelaparedenlaquesehabíaescudadoXanthon.Elmagosupremosehabíaperdido.

Page 315: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Hay muchas formas de entrar, pero sólo una de salir. —La voz de laghazneth reverberó a través de los túneles hasta llegar a la plaza, tan ronca ysibilantecomoelsiseodeunaserpiente—.Túoyo,estúpidoviejo...yahorayosoyelcazador.

Enalgúnlugarenelinteriordelatorreseprodujoungolpesecoahogado,ydespuéslapuertadebisagrasdehierroseabrió,formandoremolinosenelaguafétida, y apartando los cadáveres chamuscados demedia docena de DragonesPúrpura. El olor a moho y piedra húmeda llegó hasta la nariz de Tanalasta,produciéndole unas irreprimibles arcadas.Había sentido esa sensaciónmás deuna vez durante los últimos dos días, en los momentosmás inesperados. Porejemplo, cuando encontraron el caballo de Alaphondar atado al pie de unacolina, pero no cuando vadearon el pantano lleno de cadáveres en avanzadoestadodedescomposición.LaprincesaempezabaapensarquementiraAlusairlehabíaafectadolosnerviosmásdeloquepensaba.Aunquehabíavueltoatenerfiebre,nadiemásenlacompañíaparecíasufriresosaccesosdenáuseas.

Alusairaparecióenlapuerta,depiesobrelosescalonesnegrosyrecortadasufiguraencolorplatacontraelinteriorenpenumbradelatorre.

—Nada...aquínoestán.—¿Estávacía?—TanalastacerróelcatalejorotodeAlaphondaryañadió—:

Estonotienesentido.Habían encontrado el catalejo en las rocas, no muy lejos de donde

Alaphondarhabíadejadoelcaballohambriento.Elcatalejoestabapartidoendosmitades,unajuntoalaotra.Alparecerelsabiohabíaestadoobservandolatorre,quenodistabanikilómetroymediodelaorilla,mediohundidaenelpantanoyrodeadadeloscadáveresflotantesdelosmiembrosdelacompañíaderescatealmandodeVangerdahast.Unainspecciónmásexhaustivadeláreacircundantenoofrecióningunapruebadequeloshubieranmatado.Casitanintrigantecomoesoera el hecho de que, después de registrarlo todo a conciencia, no habíanencontradoloscadáveresdeVangerdahast,AlaphondaruOwden.Eracomosisehubierandesintegrado.

Tanalasta subió las escaleras para entrar en la torre y descubrió el lugaroscuro y mohoso que había previsto. A la izquierda había una escalera que

Page 316: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

conducíaalpisosuperior,yuncorredorquedabaaunapuertadespuésdedoblaraladerecha.Habíainsectosportodaspartesymásserpientesdelasquedesearíaver, cosa que le pareció normal en un lugar así; además, ninguna parecíaespecialmente peligrosa. Los hombres de Alusair estaban por todas partes,golpeabanlasparedeseinspeccionabanelsueloenbuscadepasadizossecretos.

Tanalastacaminóporelrecibidorhacialaderecha.Alusairlasiguiódecercaproduciendoaquelruidometálicocaracterísticode

lasarmadurascuandorozanlasparedesdepiedra.—Hay un dormitorio corrido y siete celdas individuales arriba, y media

docenadealmacenesenestaplanta.Nohemospodidoencontrarunaentradaalasmazmorras,peroprobablementesehayainundadohacetiempo.

Tanalastadoblólaesquinayechóunvistazoalaprimerahabitación.Laluzcálida de la tarde se filtraba por una gran brecha, del tamaño de una ventana,abierta en la pared opuesta. Los bordes estaban redondeados por el paso deltiempoycubiertosdemoho.

—¿AlgunaseñaldeRowen?—preguntóTanalastaasuhermanaenuntononormalysinmirarla.

—Rowenpuede cuidar de símismo.—AunqueAlusair también respondiócomosilepreguntaranporeltiempoquehacía,cogióaTanalastadelhombroyledijo—:LomásprobableesquenosestéesperandoenlamontañadelTrasgoconVangerdahastyAlaphondar.

—Si de veras Vangerdahast está allí, dudo que Rowen esté con él —respondióTanalasta.

Cuandolaprincesaestabaapuntodedirigirseaotrahabitación,escucharonunsusurroapenasperceptible.

—¿Tanalasta?—preguntóunavozqueleerafamiliar.Tanalastasevolviórápidamente,yenapenasunsegundosuhermanaentró

enlahabitación,espadaenmano.—¡Identifíquese!—exigióAlusair,que,antelamiradaatónitadeTanalasta,

levantólapuntadelaespadaparaamenazaraunacabezasintroncoquesurgíade un diminuto círculo oscuro que había en el techo. Era una visión tanespeluznante, que Tanalasta tardó unos segundos en reconocer el rostro deOwdenFoley.

OwdennoquitabaojoalaespadadeAlusair.

Page 317: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Ma...maestredeagriculturaOwdenFo...Foley,avuestrospies.Alusairbajólaespada,perosiguióobservandoalclérigocondesconfianza,

hastaqueTanalastaseadelantósituándoseentreambos,yOwdenpudosoltarunsuspirodealivio.

—Gracias,querida.—SonrióaTanalasta,ydespués inclinó labarbillaanteAlusair—.Esunhonorparamíconoceros,princesaAlusair.Porfavor,osruegoquemeconsideréisavuestrospies.

OwdensacóunbrazodelcírculoflotanteyacercólamanoaAlusair,queselimitóaobservaraquelbrazoquehabíasurgidodelanada,sinintenciónalgunadeestrecharsumano.

—¿Podríadecirmeexactamentequéesusted?—preguntó.Owdensesonrojóybajó lamirada.Finalmentecomprendióelaspectoque

debíadetener.—¡Disculpadme!Vangerdahastnospidióqueesperáramosaquídentrohasta

quevolviera.Depronto,elcírculonegroquehabíadetrásdelacabezadeOwdensehizo

másgrande,mostrandounbolsilloenormequeflotabaenplenoaire.Elclérigovolvióadesaparecerensu interior,aunquede inmediatocayóal suelocon lospiespordelante.VolvióainclinarseantelasprincesasyseacercóaTanalasta.

—¡Por la semilla, cuántome alegro de veros!—La abrazó cálidamente, ydespuésmiróhaciaelpasadizo—.¿Dóndeestáeseviejogruñón?

—Esperábamosqueustednoslodijera.—Se fue tras Xanthon Cormaeril, para impedir que abriera la puerta de

Alaundo—dijoOwden,cuyaalegríasedifuminóinmediatamente.—¿Cuántohacedeeso?—preguntóAlusair.Owden se encogió de hombros, haciendo un gesto vago para señalar el

bolsillooscuroquecolgabaencimadesucabeza.—Unos minutos después de que Alaphondar se pusiera en contacto con

Tanalasta.—Hace dos días—dijo Tanalasta, después de intercambiar unamirada de

preocupaciónconsuhermana.—Yahora,¿qué?—preguntóAlusair.—Daremos por sentado que se ha perdido, siempre con la esperanza de

equivocarnos—dijounavozfamiliar.Unmomentodespués, laancianacabeza

Page 318: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

deAlaphondaraparecióenlabocadelagujeroflotante.Teníalosojoshundidosy cansados, y su piel estaba tan pálida como el alabastro—. ¿Quéotra opcióntenemos?Yahabéisleídominota.

—¿Quénota?—preguntóTanalasta.—Ladeltubo—respondióseñalandoelcatalejo—.Enlaquedecíaaquien

laencontraraquedespertaralaEspadaDurmiente.—Nohabíaningunanota.—Tanalastaseparó lasdospiezasdelcatalejo—.

Asíescomoloencontramos.—AlmenossabemosquéhasidodeRowen.Debiópartirladeuntajo—dijo

Alusairalcogerlospedazosdelcatalejoeinspeccionarlos.—¿YesetalRowensabedóndeencontrarlaEspadaDurmiente?—preguntó

Alaphondar.AlusairguiñóunojoaTanalasta.—Noteníaningúnmotivoparamencionarlo—dijoTanalasta.—Entonces debe de estar de camino para informar a tu padre —suspiró

Alaphondar—. Y puesto que no sabemos dónde está Vangerdahast, cualquierretrasosupondríaundesastreparaCormyr.Debemosinformaralrey.

Alaphondarasomódeprontolamanoparacerrarelbroche.—¡Espere,Alaphondar!—exclamóTanalasta,conscientedequesuengaño

resultaríaevidenteencuantoelsabioseentrevistaraconelrey—.Hacedosdíasinformédesustemoresasumajestad.

—¿YosdijosidespertaríaalaEspadaDurmiente?—preguntóelsabio.Tanalastasintióunasensacióndevacíoenlabocadelestómago,puestoque

sabíacuálibaaserlareaccióndelsabioencuantorespondiera.Además,habíademasiadoenjuegocomoparaintentarconvencerledelocontrario.

—No,noexactamente.—Entalcaso,debemosasegurarnos.Alusair gritó unas cuantas órdenes después de asomarse por la puerta, y

ordenó a la compañía que se preparara por si el envío delmensaje llamaba laatencióndeunaghazneth.

—Póngaseencontactoconlareina,enlugardeconelrey—dijoAlusairaAlaphondar—.Ellaconocerásusplanes,ynodebemosatraeralasghaznethasuposición si ya estuviera en las Tierras de Piedra. Si aún no se ha marchado,dígalequeconsucaballopodríaplantarmeenundíaencualquierparte.

Page 319: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Alusair,debodecirteunacosa—dijoTanalastaasuhermana,incapazdeseguirsoportandolosremordimientos.

—Ahorano,Tanalasta.Estoesimportante.—Tambiénloquedebodecirte.—Tanalastasepreparóparalatormentaque

ibaadesatar—.Quizátehayadadolaimpresióndeque...—¡Después!Alusair se apartó de ella, impidiendo a su hermana revelar la verdad.

Alaphondarabriólosojosunossegundosdespués.—La reina nos asegura que el rey Azoun llegará antes que nosotros a la

EspadaDurmiente.—ElsabiosevolvióaAlusairconexpresióndeextrañeza—.Estabaunpoconerviosa.ParecepensarqueaestasalturasdeberíaisestarcercadelamontañadelTrasgo.

—¿La montaña del Trasgo? ¿Y por qué iba a creer algo así? El rey enpersona nos pidió que investigáramos... —Alusair dejó colgada la frase y sevolviócomounrayohaciaTanalasta,lívidaderabia—.¡Voyacortartelalengua,zorramentirosa!

Vangerdahast despertó sin permitirse el placer de recordar lo que habíasucedido.Supolaverdadencuantooyóelzumbidodelosenjambresdeinsectosy olió el aire estancado que reinaba en el interior de los túneles. Su libro dehechizos de emergencia seguía abierto por el últimohechizo que había estadoestudiando, unhechizopoderosode viento que esperaba emplear para alejar alos insectos si no le permitían conciliar el sueño. Al parecer, no había sidonecesario.

Elmagonoteníaformadesabercuántohabíadormido,peroajuzgarporlarigidez de sus articulaciones y el dolor de huesos, había sido bastante. Suestómagorugíadehambreynotardaríamuchoentenertantasedqueseríacapazde beber el agua estancada que había enmitad de la plaza, pero almenos elsueñolehabíarejuvenecidomentalmente.Yanosesentíadispersoniconfundidocomocuandohabía intentado teletransportarse aArabel, e incluso empezaba aformular algunas teorías para encontrar la salida. O bien había seguido aXanthonaunplanodistinto,onopodíateletransportarseacausadeunaespeciedebarreramágicaqueseloimpedía.Loúnicoqueteníaquehacereraimaginar

Page 320: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

cuál,despuésempezara trabajarenelproblemadedeterminardóndeestabaocómosuperarlabarrera.

Y si eso fallaba, siemprepodía recurrir al anillode losdeseos, aunque loshechizos de deseos eran muy peligrosos, y había aprendido por la duraexperienciaqueeramejorevitarlosenloposible,exceptoencircunstanciasmuycontroladas. Si un simple hechizo de teletransportación no funcionaba allídentro, no podía ni imaginar qué sucedería si intentaba utilizar un hechizo dedeseo.

Vangerdahastcerróellibrodehechizosyvolvióaguardarloenelinteriordesu capa, después comprobó el estadode las armasdehierroy se levantóparadesperezar su cuerpo rígido. Al incorporarse, escuchó un ruido metálico,procedentedelaotrapartedelmurocontraelquesehabíaapoyado.Diounsaltodel susto y se volvió hacia la pared, donde vio un par de ojos rojos que loobservabanatravésdeunaventanaentreabierta.

—¿Hasdescansado?—susurróXanthon.Vangerdahastolvidódeprontoeldolordehuesosyempezóacorrerpor la

plaza, entrando en el primer túnel que encontró. Cayó en plancha sobre labarriga y se deslizó unos cinco pasos por el suelo embarrado, volviéndosedespués como pudo sobre sí. Elmago continuó arrastrándose por el pasadizo,con tanta rapidez como susviejaspiernas le permitían,mientras formulabaunconjuroparaguardarselasespaldas.

Eltechosevinoabajoconunestruendoensordecedor,yeltúnelsellenódeuna nube negra de polvo.Vangerdahast rompió a toser, después se recuperó yconsiguióformularelhechizodevuelo,porsiacaso.Seimpulsódelsueloysedeslizóflotandoporelestrechocorredortanrápidocomoseatrevióahacerpornocontarconloshechizosdeprotección.Hastaquenollegóalasiguienteplaza,noseleocurriópensarque,encasodehaberestadoenpeligro,aaquellasalturasyaestaríamuerto.

Unadelasúltimascosasquehabíahechocuandosediocuentadequeestabaapuntodequedarsedormido,fuelanzarunhechizosencillodeproteccióncontraelmal,prolongando suduraciónconunpardehechizosdeampliación.Habíacontadoconesehechizoparamanteneralejadoasuenemigoeltiemposuficientepara despertar y huir, pero al parecer el hechizo había impedido a Xanthonponerle la mano encima. Ni siquiera una ghazneth podía absorber una fuerza

Page 321: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

mágicaquenopudieratocar.Empezabaacomprendercómopodíaderrotaralfantasma,yVangerdahastse

detuvoparaformularotrohechizoyprotegersedeformapermanente.Nohabíarecogido todos los ingredientes de su bolsillo, cuando oyó que Xanthon seacercaba. El mago guardó los ingredientes que tenía en la mano y se dirigióhaciaotrotúnel.

—¡Espera!—gritóXanthon—.Tenemosalgodeque...Vangerdahast derrumbó el techo como había hecho antes, ahogando las

protestasde laghaznethenmitadde la frase.Después, siguiócorriendoporelpasadizo,endirecciónalasiguienteplaza.

Cincuentapasosdespués,Xanthonaparecióanteélenuncrucedecaminos.Se puso de cuclillas y levantó las garras en una grotesca imitación de unademandadetregua.

—Detenteyescúchame,quesiempretendremostiempodeluchar.—No me interesa nada de lo que puedas decir. —Pese a la réplica,

Vangerdahastnohizoademándeatacarleohuir;selimitóamoverlosdedosenungestoqueconcluyólanzandounarociada—.Dudoquequierasentregartealajusticiadelrey.

—Yhacesbien...Además,esonoseríaposible,porquetaljusticianoexiste.—Xanthon señaló con una garra los pasesmágicos delmago, y esperó a queterminarademoverlamano—.Másbienpensabaentodolocontrario.

—¿Que yo me rinda? —se burló Vangerdahast—. Creí que el loco eraBoldovar.

—Dehecho—sonrió la ghazneth ante el comentario delmago—,no seríaunarendición.Necesitamosunséptimomiembro,yLuthaxasegura...

—¿Luthax? —preguntó Vangerdahast, sin aliento. Luthax había sido unantiguo señor del castillo de la Guerra de los Magos en Cormyr, el únicomiembrodeelevadaposiciónenlahermandadquehabíatraicionadoalreino—.¿Lohasresucitado?

—¿Yo?—Xanthonseechóareír—.No,enabsoluto.Elseñor...digamosqueyosólosoyunapiezamásdelengranaje.

—¿Dequé?—Yaconoces laprofecía—dijoXanthoncomoquienhablaconunniñoal

queesnecesariorepetir lascosascientosdeveces—.«Sieteazotes...cincodel

Page 322: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

pasado,unodelpresente,unoqueestáporvenir...» ¿Deverasnecesitas tantasexplicaciones?

—¿Yquieresqueseayo?—Incapazdedarcréditoasusoídos,Vangerdahastmiró por encima del hombro. Sin duda la conversación tenía que ser unajugarretaparadistraerlo—.Esoesuninsulto.

—Yo preferiría matarte —confesó la ghazneth haciendo un gesto deresignación—, pero... si me dices que no, sin duda habrá otro candidato. EnCormyrnoescaseanlostraidores...seguroquenohacefaltaquetelorecuerde.

—¿Yo, un traidor?—Vangerdahast estuvo a punto de empuñar una varita,pero hizo un esfuerzo por contener su ira. Sólo había una explicación posibleparaelcomportamientodeXanthon:intentabaengañaraVangerdahastparaqueactuaraconviolenciadeunavez—.¿Quéhapasadoconel«túoyo,estúpidoviejo»?

—Olvidasesodeque«haymuchasformasdeentrar,perounasoladesalir»—replicóXanthon—.Teníasquecomprenderlainutilidaddetusesfuerzos.Sólohayunmododesalirdeaquí...yconsisteenhacerloconnosotros.

—¡Oporencimade tucadáver!—gritóVangerdahast, incapazdeaguantarpormástiempoqueloinsultarandeesemodo—.Yatienesmirespuesta.

Elmagoretrocediócorriendoporel túnel,y lohizoporquenoseatrevíaaatacar hasta haberse protegido con toda su magia de protección. Asaltar a laghazneth tan sólodisiparía elhechizodeproteccióncontra elmal, ypese a larabia que lo inundaba, seguía decidido a salir de aquella situación con vida.Cuandoalcanzólasiguienteintersección,eligióuntúnelalazarycorrióporélatodavelocidad.Yanoleimportabaenquédirecciónhuir.Estabaperdidogirarapordondegirara.

PeroaXanthonsíleimportaba.LaghaznethhabíaempezadoaseguirtandecercaaVangerdahastquepodíaoír suspasos,apesardeencontrarse fueradelalcancedelanilloluminosodelmago.DevezencuandoelfantasmaaparecíaenunaintersecciónparaburlarsedeVangerdahastconruegosteatralesenlosquelepedía que reconsiderara su decisión. El mago ni siquiera se molestaba encontestar.Simplementeselimitabaaretirarsehastalaúltimaintersecciónporlaque había pasado y lo intentaba por otro lado. Xanthon procuró mantenerlosiempre enmovimiento, para impedir que formulara un hechizo ymantenerloalejadodelasplazasyotroslugaresdondepudieratenerespaciosuficientepara

Page 323: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

lucharconcualquierotraarmaquenofueralamagia.Vangerdahast intentó en varias ocasiones distanciar a su perseguidor

derribando el suelo sobre su cabeza, pero Xanthon siempre advertía susemboscadasyseadelantabaparaabsorberlafuerzamágicadelhechizo.Elmagono tardó en comprender que no hacía más que saciar la sed de magia de suoponente, y guardó las varitas para concentrarse en procurarse la magia deprotección. Perdió dos hechizos debido a sendas interrupciones (uno que loprotegería contra el veneno, yotro contra las armasde contusión), pero se lasapañóparaformularunhechizoqueloprotegieradelasgarrasyloscolmillos.Dehecho,loconsiderótodaunavictoria.

Al cabo de un tiempo, expiró el hechizo de protección contra el mal.Xanthon empezó a volverse más atrevido, a veces incluso intentó tender unaemboscadaaVangerdahastcuandoéstepasabaporloscrucesdecaminos;otrasse abalanzó por la espalda del mago para repetirle su «invitación». El magoresistiólatentaciónderenovarsuhechizo.Percibíaelnerviosismocrecientedelaghazneth,ysabíaque labatallaestabaapuntodealcanzarunpuntocrítico.Cuando eso sucediera, debía disponer de un par de sorpresas guardadas en lamangaparasacarventajadelasituación.

Vangerdahast vio su oportunidad cuando los corredores angostosdesembocaronenunagenuinaavenidadelostrasgos,unpasajecubiertodelodo,lobastanteanchocomoparaquepudierancaminartreshombresjuntos,conunaaltura demás de tresmetros (tal y como pudo comprobar cuando se impulsóhacia arriba y de pronto se golpeó contra un techo negro, blando y amorfo).Xanthon se detuvo al salir por uno de los túnelesmás pequeños, y levantó lamiradaparaobservaralmagoconodiomaldisimulado.

—Escóndete ahí arriba todo el tiempo que quieras —susurró—. Cuandoempiecesamorirtedehambre,quizáteunasanosotros.

—Me temo que voy a decepcionarte. —Vangerdahast rebuscó en susbolsillos—.Estabapensandoquequizávayasiendohoradecastigartutraición.

Elmagosacóunpellizcodehierroexplosivodelbolsilloy lodispersóporencimadesucabezapronunciandoelconjuroapropiado.LosojosdeXanthonadquirieron un fulgor escarlata, y se retiró en el túnel siseando y soltando unenjambredeavispaszumbonasenelinteriordelaavenida.Elmagorióybajóalsuelo para renovar su hechizo de protección contra el mal (el encantamiento

Page 324: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

requería dibujar con polvo de plata especial un círculo en el suelo), despuésañadióunpardeampliacionesporsiacaso,ysedirigióhaciaeltúnelporelquehabía desaparecido Xanthon. Había llegado el momento de convertirse en elcazador.

Xanthon intentó en dos ocasiones saltar sobreVangerdahast para absorbertodasumagiadeprotección.Enambasocasiones,elfantasmaseviorechazadopor el hechizo de protección contra el mal, que le impedía tocar al mago.Vangerdahastpisabalostalonesdesupresa,sindejardehablardeloscastigosqueibaaimponerleporsutraición.Durantemediahora,Xanthonnopudohacerotra cosa que huir. Una hora después empezó a trastabillar. La desesperaciónhizopresaenéleintentódetenerasuperseguidorconenjambresdeinsectosyredes de serpientes, pero todo ello le restaba fuerzas, y elmago no tenía quehacermásqueapartarlasdesucaminoconunsimpleademándelavarita.

Finalmente,Xanthonvolvióalaavenidadelostrasgos,queatravesóatodaprisa en un intento desesperado por alejarse de Vangerdahast. La estrategiahubiera funcionado si la carretera principal de los trasgos no hubiesedesembocado también allí, en una enorme plaza en mitad de la ciudadsubterránea.Elcírculoera,conmucho,elmayordetodalaciudad,rodeadodeedificios destartalados con pilares de mármol y pórticos de piedra arenisca,cuyostechosalcanzabancasilosdosmetrosymediodealtura.

Enelcentrodelaplazahabíaunestanquedeunosdosmetros,cuyocontornoestabadelimitadoporunaampliafranjadearenadorada.Estaballenodeunaguanegraybrillante,tanestancadaquecuandoXanthoncorrióhaciaellanisiquierasehundió.Lasuperficiesimplementeseagitóunpococomogelatinasólida,ysuspiessepegaronalasuperficieencuantolospusoencima.Dospasosmásysedetuvoensecoenmediodelestanque.

Vangerdahastnisiquieraaminoróelpasoalverlo.SelimitóasacardelcintolamazadeOwden,ysearrojósobresuenemigoparapropinarleunmazazoenlanuca. Se escuchó un crujido, seguido de un chorro de sangre negra. Xanthoncayóderodillashaciaadelante.

Vangerdahast pasó por el borde dorado del estanque y se volvió paracontemplarasuoponentearrodilladoenelcentro.ElcráneodeXanthonestabamedio quebrado, tenía un aspecto de hueso roto y negro que asomaba por laheridaformandoángulosimposibles,unojocolgandodelacuencayunasonrisa

Page 325: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

torcidaenunrictusburlón.—Últimaoportunidad—dijoXanthon—.Simedejasir,podráscambiarde

opinión.—¿Y qué te hace pensar que te dejaré ir? —preguntó Vangerdahast,

descargandounnuevogolpeconlamaza.Xanthon sonrió y se arrojó hacia adelante, para desaparecer entre la brea

lanzándose de cabeza. Vangerdahast logró golpearle en un pie, a la altura deltobillo,antesdequelaspiernasdelaghaznethdesaparecieranporcompleto.Yahabíavistoalaghaznethdesapareceratravésdeunsuelodepiedra,porloqueno se sorprendió de que también pudiera desaparecer en un estanque lleno debrea.

Vangerdahast ni siquiera consideró la posibilidad de permitir la huida delfantasma.XanthonCormaerilerauntraidordelapeorcalañay,algoqueeratanimportante como eso, era la mejor opción que el mago tenía para regresar aCormyrantesdequelosazotesarruinaranelreino.Sacódosanillosdelacapa,uno para respirar bajo el agua (si eso era aquella cosa tan negra) y otro parapermitirselalibertaddemovimientosquenecesitaríaenesemedio.Despuéssehundiódecabezaenmediodelestanque.

Elmago estaba apenas a unos centímetros de hundirse en el agua, cuandounacapaperladademagiaapareciósobreellíquidooscuro.Apenastuvotiempodelevantarlacabezayganarlasuperficieantesdegolpearsecontraella.Sintióun golpe que recorrió todo su cuerpo, y que llenó de angustia todo su ser.Entoncesvolvióaflotarhaciaeltecho.

Vangerdahast recuperó el control poco a poco, y después aprovechó elrespiropara sacudir la cabezayver si estabaherido.Elgolpehabíadejado suviejocuerpoparaelarrastre,perolopeorhabíasidoelsusto,apartedelhombrodislocado.Volóencírculossobreelestanqueydescendiólentamente.

Cuandoseacercóatreintacentímetrosdelagua,volvióaaparecerlabarrerade color perla. Sin duda se trataba de un hechizo diseñado para impedir laentradaaseresdeintencioneshonorables,apersonasleales.

—¡Notesaldrásconlatuya,Xanthon!¿Meoyes?—Vangerdahastintentabarecordarlaspalabrasarcanasquedispersaríanlabarreramágica—.¡Voyaporti!

Page 326: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Después de tres días sin levantarse de la silla de montar, Azoun no diocréditoasusojoscuandoalcabalgarporlosestrechosconfinesdelcañóndelaCimitarra encontró un caballo flacucho que permanecía a la entrada de lacaverna secreta de la Espada Durmiente. El impresionante caballo tenía lamirada vidriosa y estaba agotado después de su incesante cabalgar por loscaminos.Tambiénestabacubiertodeespumarajos,despuésdehabercabalgadocasihasta reventar,demaneraqueaduraspenasconseguíamantenersedepie.Sinembargo,elreyhubierareconocidoalnobleanimalencualquierparte.

—¡Cadimus!Azountiródelasriendasdesuagotadocaballoparafrenarelpaso.Saltóde

lasillayantesdeacercarsealcaballodelmagosupremo,entrególasriendasaunodelosDragonesqueloacompañaban.

—¿Cómo estás, viejo amigo? —preguntó al tiempo que acariciabacariñosamentealcaballo.

Cadimus respondióconunrelinchosuave,ydespuésmovió lacabezaparaseñalarsusillademontar.El reyviosangreenella,muchasangre, lamayoríasecaydecolormarrón,peronoerasangrereciente.

—¡Kuceon!—llamóAzounaunadelasclérigosdeOwdenFoley—.¡Vengaaquí,rápido!

Lamuchachaseacercóaltrotehastalavanguardiadelacompañía,ysaltódelasillaantesdequeelcaballosedetuviera.Dejólasriendasenmanosdequienpudieracogerlas,seacercóhastadondeestabaAzouny tocócon lasyemasdelosdedoslasangreincrustada.

—Estáherido.Lomásprobableesquesehayainfectado,ysindudaesunaheridagrave.

El rey iba a preguntar si la víctima pudo haber conjurado un hechizo deteletransportación, cuando cayó en la cuenta que Vangerdahast nunca habríahechotalcosadesdeeselugarenparticular,sintenerencuentalacercaníadelasghazneth.Conelcorazónenunpuño,escogióaunadocenadeDragonesyaunpardemagosguerrerosparaqueentraranconélenlacaverna,despuéshizoungesto para pedir a uno de sus hombres que encendiera las antorchas parailuminar el camino. Estuvo tentado de ponerse un anillo de comandante deDragones Púrpura e invocar la luz mágica que proporcionaba, pero habíanpasadolosúltimostresdíascabalgandodíaynocheprecisamenteparaevitarque

Page 327: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

el uso de la magia pudiera atraer a las ghazneth al lugar donde reposaba laEspadaDurmiente.Hubiera loquehubieseensu interior,podríaesperaraqueencendieralasantorchas.

El rey cogió laprimera antorcha encendiday sedirigióhaciaunaspiedrasquealguienhabíamovidonohacíamucho,situadasenlaentradadelacaverna.Elairehedíaapodredumbreymuerte,yAzounsupoantesdedareltercerpasoquealgoterriblehabíasucedidoalosSeñoresQueDuermen.

—¿Vangerdahast?—llamóavozencuello.Nohuborespuesta,demodoquedoblaronlaesquinaquedesembocabaenla

CavernadelaCimitarra.Ellugarseparecíaacualquierotracriptaquepudieranhabervisitado.Estaba

arebosardehuesos,trozosdearmadurasherrumbrosasypedazosdetela.Eraloúnicoquequedabadelosquinientosvalientescaballerosquesehabíanprestadovoluntarios para la hibernación, en espera de que llegara el momento en quefueran necesitados. Sólo encontró una capa, intacta pero ensangrentada,correspondientealrealcuerpodeexploradores.

—¡Sire!—gritóKuceon,incapazdepronunciarunapalabramás.Consciente del efecto que su reacción tendría en quienes le acompañaban,

Azoun contuvo la desesperación y cogió la capa ensangrentada, antes devolversealajovenclérigoqueseencontrabaasulado.

—Encárguesedeproporcionaraestoshombresunentierrodecente—ordenó—. Aunque nunca llegaron a luchar, todos eran unos héroes de los pies a lacabeza.

Vangerdahastrodeólentamenteelestanque,conlavozvacilanteylosbrazostemblorosos almoverlos por encima de aquella capa demagia perlada.Hacíadécadasquenoseenfrentabaamuerteconnadie,yahoraquesentíapróximalavictoriaestabatannerviosoqueapenaspodíaentrelazarlosdedosparaformularun simple hechizo de disipar magia. Xanthon debía de estar muy malherido,porquedelocontrarionuncasehubierarefugiadoenelestanque,arriesgándoseaqueVangerdahastdescubrieraelmododesalirdelaciudaddelostrasgos.Laghaznetherademasiadointeligenteparaquedarseatrapada,porloqueteníaquehaber un portal oculto bajo la superficie. Con un poco de suerte, en el otro

Page 328: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

extremo lo esperaba Cormyr, el lugar ideal para hacer caer la justicia del reysobresupresa.

Elmago permaneció inmóvil enmedio del estanque y extendió lasmanospara repetir las sílabas arcanas de su hechizounay otra vez, recurriendoparaello a las postreras reservas de magia de que disponía. La barrera mágicaparpadeó, siseó y empezó a vacilar, permitiendo a Vangerdahast atisbar laoscuridad abismal que ocultaban las negras aguas. Recitó el conjuro una vezmás,extendiendolosbrazosalmismotiempo.Lasuperficiemágicadesapareció.ElmagojuntóambasmanosysehundióenelaguaenpersecucióndeXanthon.

Unamembranaamarilla sedeslizópor el estanqueybastóparadetener ensecoaVangerdahast.Unalargaseriedetaponazosreverberaronenelinteriordesu cerebro, después rebotó en el aire y se encontró de espaldas al techo de laestancia. Le dolían terriblemente el cuello y los hombros, y sentía las manosflojasyadormiladas.Lamazaempezóadeslizarseporentresusdedos.

—¡Porelcolmillopúrpura!—maldijoVangerdahast.Hizo un esfuerzo para apretar los dedos e impedir que el arma cayera al

agua, y lentamente extendió las extremidades para recuperar el control de sucuerpo. Entonces advirtió la sensación de vacío que tenía en el estómago, encómo reverberaba acompasado aun latido extrañoqueni siquiera alcanzaba aoír. Al principio achacó esa sensación al haberse golpeado con la membranaamarilla,peroempezóasentirlavibraciónenloshuesosylosdientes,ynotardómuchoencomprenderqueeradebidoaunrumorintenso,unrumordemasiadobajoysonoroparaqueeloídohumanopudieracaptarlo.

Vangerdahast se sintiómareado.Echó el cuello hacia atrás y pensó que lacaverna se le caía encima. El rumor siguió aumentando su intensidad, hastaconvertirseenungruñidoominosoyapenasaudiblequelerecordóvagamentealde un gato, o a un terremoto oído en la lejanía. Volvió a dirigirse al techo yencontróelpasobloqueadopor lamismasustanciaesponjosa.La tocó.Estabainmóvil.Comoelairedeunataúd.

Vangerdahast observó la superficie del estanque. La membrana amarillahabía dividido el centro y se había retirado hasta los bordes opuestos delestanque,confiriéndoleunaspectosimilaraldeunojo.Elcentroconservabasucolor negro habitual y estaba tan inmóvil como un espejo, permitiendo aVangerdahast ver el reflejo de símismo flotando en el techo. Estaba ojeroso,

Page 329: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

tenía lasmejillas hundidas y bolsas rojas de cansancio bajo los ojos.Tambiénhabía algo más, algo que había experimentado muy a menudo desde que seenfrentabaalasghazneth:miedo.

Vangerdahast siguió contemplando la imagen hasta que finalmente cesó elrumor.Entonces cayó en la cuentadequenohabíapensado en loqueharía acontinuación, en que no había recuperado fuerzas y que en ese momento nohacía nada útil. Simplemente había titubeado. Sacudió la cabeza en unasilenciosa reprimenda por haberse comportado como un novato. Era el magosupremodeCormyr,ylosmagossupremosnopodíanpermitirqueelmiedolosparalizara.

Vangerdahast torció la cabeza con la intención de estirar losmúsculos delcuellodolorido,ydespuéscerrólosdedosentornoalaempuñaduradelamaza.Noteníalasmismasfuerzasqueantes,peroprobablementeseríamuycapazdepropinardosotresgolpesantesdeperderelarma.

En el interior de su mente, Vangerdahast imaginó el rostro terrible deXanthon,ydespuéscerróelbrochedelacapa.Paraaliviodelmago,laimagenenarcóunacejasorprendida.

Vangerdahastrecurrióalhabladelpensamiento,parapreguntar:«Dime qué debo hacer.» Huelga decir que el mago no tenía la menor

intencióndeunirsealasghazneth,peronoseríalaprimeravezqueganabaunabatallarecurriendoalengaño.«NotraicionaréaCormyr,peropodríaunirmea...»

«Demasiadotarde—dijolavozdeXanthon,cadavezmásdistante—.Yalohashecho,viejoidiota...lahastraicionadoytehasunidoanosotros.»

Xanthon soltó una risotada estridente que cesó de inmediato, dejando aVangerdahastcompletamentesoloenlaoscuridaddelaciudaddelostrasgos.Elcorazón del mago empezó a latir con fuerza, pero se esforzó por reprimir elpánico que se adueñaba de él y se concentró en la siguiente opción.Clavó lamiradaenelestanque,intentandodescubrirmásalládelasuperficienegradesusaguaslasprofundidadesestigiasdondeXanthonhabíadesaparecido.Apretóconfuerzalamazaunavezmás,eintrodujolamanoenelbolsillodehuida.

Sobrevino ese instante atemporal de caída, seguidos de unos segundos deaturdimientososegadoenlosqueVangerdahastselimitóarecordaradóndeibayde dónde venía, y después vio un par de membranas amarillas cubiertas deescamasquesurgierondeambosladosopuestosdelestanquequehabíabajoél.

Page 330: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Se deslizaron por la superficie hasta encontrarse brevemente en el centro yreplegarse, cubriendo las aguas de una capa de color negro brillante.Vangerdahast volvió a observar su propio reflejo. Se vio solo y débil, y nisiquierasediocuentadequelamazaresbalabadesumanoycaíaenlasaguasdel estanque. Lasmembranas amarillas volvieron a tocarse, y lamaza golpeócontralasuperficierebotandoenelsuelo.

Cuandolasmembranasvolvieronaformareldibujodeunojo,elreflejodeVangerdahast vaciló en la superficie del estanque oscuro durante un segundo,volviendoasituarseenelcentro.Nogritó.

ElmagosupremodeCormyrerademasiadoorgullosocomoparagritar.

Page 331: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

TEpílogo

analastaenjuagóelsaboracredesuboca,ydespuésse lavólacaraconelaguafríadelarroyo.Yanoteníafiebre(Owdensehabíaencargadodeque

todoslosmiembrosdelacompañíarecuperaranlasalud),peroeralaterceravezaquellamañanaquecualquierolorunpocodesagradableleprovocabaganasdevomitar. En aquella ocasión había sido la campanilla de montaña, antes uncampoalfombradodeénulacampana.EmpezabaapreguntarsesisuviajealasTierrasdePiedranolehabíaprovocadounafuertealergiaalasflores.

—¿Osencontráismejor,querida?—preguntóAlaphondarasuespalda.—No es nada —respondió Tanalasta—, sólo estás flores de montaña. —

Volvióaenjuagarselaboca,seincorporóyseacercóalsabio—.¡Superfumeestanempalagoso!

—ExtrañaaversiónparaunahijafieldeChauntea.—Elancianosabioestabasentadoahorcajadassobreelcaballo,mientrasobservabapensativoaTanalasta—.Muyextraña,síseñor.

—Estoy segura de que se me pasará si rezo —respondió Tanalasta,inflexible,porquenoeralaprimeravezqueelsabiolaobservabadeesaformadesdequepartierondelpantano.Señalóelvendajequeteníaelsabioalrededordelascostillas—:¿Yusted?

—Lo bastante bien como para caminar, lo cual cada vez se hace másnecesario.—Señalóconlacabezaunapraderaquehabíaalfinaldelvalle,dondeAlusair y el resto de la compañía permanecían tendidos sobre el campo decampanillasdemontañaquehabíamovidoaTanalastaalvómito—.Ayudadmeabajar,sisoistanamable.

Page 332: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Laprincesaleofrecióelhombroyelsabiosedeslizódelasillaylacondujodenuevohacia lascampanillas.ATanalastavolvióarevolvérseleelestómago,perocomoyalohabíaechadotodo,nocreyónecesariovolveraretirarse.

—... Seguro que son los cascos de Cadimus —dijo Alusair, sin prestaratención a su hermana—. Pero no sé por qué razón Rowen cabalgó hacia elnorte,cuandoestabatancercadelamontañadelTrasgo.

Despuésdeescuchar ladescripciónquehizoAlaphondarsobre lahuidadeCadimus del pantano durante la batalla, habían supuesto que Rowen habíacogidoelcaballoparapartiralgalopeyllevarelmensajealrey.

—Quizáno tuvoelección—dijoOwden.Se incorporóenmitaddelgrupo,conunmanojodefloresqueteníanmanchasmarrones—.Estoessangre.

—¡No!—Tanalastaseabriópasohastallegarasualtura—.Déjemeverlo.Owdenletendiólasflores,ydespuéscogiósusmanos.—Nohaymucha,porloquenosabemosloquesignifica.—Yo sí—replicó Tanalasta. Pese a la magia que habían empleado en la

torre, no vieron ni rastro de ninguna ghazneth, y todos los integrantes de lacompañía se habían preguntado adónde podían haber ido los fantasmas—.Tenemosqueirtrasél.

—Nohablesenplural—dijoAlusair—.TúvolverásalamontañadelTrasgoconlosdemás.

—No—dijoTanalasta—.Rowenesmiesposo,y...—Miexplorador—interrumpióAlusair,mirándolafijamente—.Nodiscutas.

Si fueras cualquier otra persona, tendrías que regresar a Arabel cargada decadenas,despuésde la jugarretaquemehiciste... y tenencuentaque siempreestoyatiempodecambiardeopinión.

—Sifueracualquierotrapersona,nohubieratenidoqueengañartecomolohice —replicó Tanalasta, que también la miró a los ojos sin perder lacompostura.Aunque laprincesade lacoronaardíaendeseosdereprendercondurezaasuhermana,hizounesfuerzoparamanteneruntonodevozsosegado—.Alusair,medisculpoporhaberteengañado,perohallegadoelmomentodequetantotú,comoelrey,comoVangerdahast,meconcedáiselmismoprivilegioquesiemprehasexigidoparati.

—¿Y de qué privilegio se trata, si puede saberse?—preguntó su hermanaconelentrecejofruncido.

Page 333: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

—Delprivilegiodellevarsupropiavida,porsupuesto—señalóAlaphondar.Elancianosabiocogióaambashermanasdelamanoylasapartódelcorroqueformaban los soldados y exploradores, y, por suerte, de las flores que tantomolestaban a Tanalasta—.Queridasmías, Cormyr se enfrenta a una crisis. Siqueremosqueelreinosobreviva,necesitaráasusdosprincesas.

—Podrácontarconmigo—dijoAlusair.—Estupendo,peronopodréishacerlosola—dijoAlaphondar—.Sielreino

debesobrevivir,esnecesarioqueTanalastayvostrabajéisjuntas...algoquenopodréisconseguirsinoconfiáislaunaenlaotra.

—Nosoyyoquienhamentido—repusoAlusair,mirandoasuhermanaconfrialdad.

—Perosísoisresponsabledeesamentira—replicóAlaphondarcondureza—.Sinoconcedéisavuestrahermanaelrespetoquemereceyconfiáisenellapara hacer lo que crea necesario, ¿qué otro remedio tiene que rebelarse omanipularos?

—O dejarme en paz —añadió Tanalasta. Ya de joven, Alusair se habíacansadodelasobligacionesinherentesasucondicióndemiembrodelarealeza,de manera que prácticamente había abandonado el reino—. Y éste no esmomentoparaeso.

—Estupendo.Puedesacompañarme,peroel restodemicompañía...—dijoAlusairdespuésdemirarlasorprendidaymorderseellabio.

—Aún no he terminado—interrumpió Alaphondar. Levantó lamano parahacercallaraAlusair,ysevolvióaTanalasta—.Respectoavos...

—Losé.Mivalorparaelreinonoestribaenmihabilidadconlaespada.—Muy astuta—alabó el sabio enarcando una ceja—, pero lo que quería

deciresquecomofielaChaunteacreoquenoosconvienevagabundearporlasTierrasdePiedraconvuestrahermana.

—¿Y qué tiene que ver Chauntea con esto? —preguntó Tanalasta,confundida.

—Lasnáuseas,querida.Estamañanalasflores,ayermicaballoyanteayerelolorquedesprendíanlospinos.

—He tenido náuseas, sí —admitió Tanalasta—. Por supuesto que sí. Sillevarausteduntiempocombatiendolasfiebresintermitentesylagripe,tambiénsesentiríamaldevezencuando.

Page 334: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

Alaphondar no añadió una sola palabra, y Alusair se limitó a mirar a suhermanaconelentrecejofruncido.

—¿Quépasa?—preguntóTanalasta—.¿Porquémemiráisasí?La respuesta la encontró en cuanto acabó de formular la pregunta. Era la

únicapersonadelacompañíadeAlusairqueseguíaquejándosedesusalud,ylaverdadesqueyanoteníafiebreniningúnotromal,nisiquieraestabacansada.Sencillamente,suestómagosehabíavuelto impredecible,estabamareadacadadosportresy,devezencuando,vomitaba...sobretodoporlamañana.

—¡Porelarado!—exclamó.—Sí, supongo que ésa es una forma de describir lo que pasó —dijo

Alaphondar—.NocreoquedebáisviajarporlasTierrasdePiedraensemejanteestado.

Tanalastaapenasescuchósuspalabras,porqueteníalacabezaenotraparteycalibraba las consecuencias de su «condición». No podía haber elegido unmomentopeor.Vangerdahasthabíadesaparecido,ylosazotesestabanapuntodeemprenderla con el reino, por lo que era vital para Cormyrmostrar un frenteunido en los meses venideros. Las noticias de su embarazo no harían sinoempeorar la situación. Si confesaba el nombre del padre, los nobles leales sesentiríaninsultadosypodíanmostrarsereticentescuandollegaraelmomentodeapoyaralacorona.Sinoconfesabaelnombredelpadre,lagentedudaríadelalegitimidaddelacriatura,ycuestionaríasuposicióncomoherederodelacorona.Hiciera lo que hiciese, el rey se vería obligado a nombrar heredera aAlusair,precisamente cuando el reinomás necesitaba de su destreza en combate paraenfrentarsealasghaznethydarconfianzaalpueblo.

Tanalastasesorprendióaldescubrirquenadadetodoaquelloleimportabalomásmínimo.Sesentíabendecida,felizeinundadaporunacalidezespecial,yenel fondodesucorazónsabíaquehabíahecho lomásadecuadoparasímisma,para el reino y para su pueblo. Había adquirido la fuerza necesaria para queCormyrafrontara lacrisis,nopesealhijoquecrecíaensu interior,nisiquieraporél...sinoatravésdeél.Aquéleraelverdaderosignificadodesuvisión.

—¿Porquésonríesdeesemodo?—preguntóAlusair.Pusounamanoenelhombrode suhermana, y añadió—:Cuando el rey se enterede esto, desearásestarenlasTierrasdePiedra,perseguidaporunahordadeghazneth.

—Nolocreo—rióTanalasta,volviéndosehaciasuhermana—:Aquí, tú la

Page 335: Las siete plagassibaja.website/wp-content/uploads/Reinos-Olvidados.-La... · Para Mark Acres, mi viejo y fiel amigo Agradecimientos Deseo agradecer a Phil Athans, mi editor, su apoyo

guerrera de la familia. Por favor, ve a buscar amimarido y no te olvides dedecirlequevaaserpadre.