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A LA ESCUELA DE COMERCIO “MAESTROS PAGADOY” (Hoy , Escuela de Educación Media Nº 1) ( Reseña histórica) Por Aidor Miranda SUS ANTECEDENTES . Encuadre temporal y circunstancial. Corría el mes de noviembre de l961.- En Veinticinco de Mayo, era Intendente Municipal el señor Pedro TIRONI, quien había accedido al cargo en las elecciones generales del año1958. Gobernador de la Provincia de Buenos Aires era el Dr. Oscar Alende, mientras que la Presidencia de la República era ejercida por el Dr. Arturo Frondizi, todos ellos ungidos como candidatos de la Unión Cívica Radical Intransigente (U.C.R.I).- A su vez, en la Provincia, al frente del Ministerio de Educación, estaba el Dr. Ataulfo Pérez Aznar, quien poco después renuncia al cargo en virtud de haber sido proclamado candidato a Senador Nacional para las elecciones que tendrían lugar el 24 de febrero de 1962. Asume en su reemplazo el Profesor Juan Martín Ametrano, quien hasta entonces se desempeñaba como Subsecretario de Educación Desde el año anterior, l960, yo había sido convocado por el Intendente Tironi, para cubrir la vacante de Secretario General, producida a raíz del alejamiento del señor Jorge Gilbert. En el mismo año, se aprueba mi proyecto de reestructuración, que disponía la división de funciones en las tres actuales secretarías: de Hacienda. Obras Públicas y Gobierno, ésta última a mi cargo.- Además, la Subsecretaría de Gobierno que sería desempeñada por el señor Roberto Antonio Ramón Oribe. De la promoción 1944 de nuestra Escuela Normal, con 36 egresados, solamente un compañero había ido a estudiar a la

La Escuela de Comercio

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Page 1: La Escuela de Comercio

A LA ESCUELA DE COMERCIO “MAESTROS PAGADOY”

(Hoy , Escuela de Educación Media Nº 1) ( Reseña histórica)

Por Aidor Miranda

SUS ANTECEDENTES. Encuadre temporal y circunstancial.

Corría el mes de noviembre de l961.- En Veinticinco de Mayo, era Intendente Muni-

cipal el señor Pedro TIRONI, quien había accedido al cargo en las elecciones generales

del año1958. Gobernador de la Provincia de Buenos Aires era el Dr. Oscar Alende, mien-

tras que la Presidencia de la República era ejercida por el Dr. Arturo Frondizi, todos ellos

ungidos como candidatos de la Unión Cívica Radical Intransigente (U.C.R.I).- A su vez,

en la Provincia, al frente del Ministerio de Educación, estaba el Dr. Ataulfo Pérez Aznar,

quien poco después renuncia al cargo en virtud de haber sido proclamado candidato a

Senador Nacional para las elecciones que tendrían lugar el 24 de febrero de 1962. Asu-

me en su reemplazo el Profesor Juan Martín Ametrano, quien hasta entonces se desem-

peñaba como Subsecretario de Educación

Desde el año anterior, l960, yo había sido convocado por el Intendente Tironi, para

cubrir la vacante de Secretario General, producida a raíz del alejamiento del señor Jorge

Gilbert. En el mismo año, se aprueba mi proyecto de reestructuración, que disponía la di-

visión de funciones en las tres actuales secretarías: de Hacienda. Obras Públicas y Go-

bierno, ésta última a mi cargo.- Además, la Subsecretaría de Gobierno que sería desem-

peñada por el señor Roberto Antonio Ramón Oribe.

De la promoción 1944 de nuestra Escuela Normal, con 36 egresados, solamente un

compañero había ido a estudiar a la Universidad Nacional de La Plata. Era Macario Gar-

cía, quien había llegado a 25 de Mayo, procedente de la ciudad de Junín, y con quien

mantendría una hermosa y larga amistad, hasta hace algo mas de un año.en que falleció

en la ciudad de La Plata-

El ingresó en 1945, a la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, don-

de obtuvo el título de Profesor de Historia, primero, y luego el de Escribano, en la Facul-

tad de Ciencias Jurídicas y Sociales, de la misma Universidad.

Tres años después, en 1948, me puedo incorporar al “quinteto” de universitarios

veinticinqueños” en La Plata, que en setiembre del año 1949 fundamos el C.E.V: (CEN-

TRO DE ESTUDIAMTES VEINTICINQUEÑOS). Macario García, Enrique Raúl Soto, Héc-

tor Luchelli, Manuel Fernandez, José García Fernández y Aidor Miranda, Macario García

siguió vinculado a la actividad educativa, habiendo desempeñado la secretaría de la Fa-

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cultad de Humanidades, funciones en el Archivo Histórico de la Provincia y en el Teatro

Argentino de La Plata.

Así es que en noviembre de 1961, me llama a la Municipalidad, y me hace saber

que había una gran posibilidad de conseguir para 25 de Mayo, una de las dos interesan-

tes alternativas¨ la creación de una Escuela Secundaria, o una de Estética. La definición

debía ser urgente, para poder prever los recursos en el área de Educación, en la que se

estaba desempeñando.

Asimismo, me dió los lineamientos para formalizar un expediente y poder encauzar-

los de inmediato. Ellas eran: solicitud firmada por autoridades educativas, representantes

de entidades sociales, culturales, de la actividad privadas, y refrendada por la autoridad

municipal.

Cumpliendo con sus indicaciones, se convoca a una reunión en la municipalidad al

personal directivo de los establecimientos educativos de todos los niveles de planta urba-

na, para informar sobre el particular y unificar criterios para cumplimentar las tareas.

Del intercambio de ideas, se coincidió en que de la opción sugerida, se decidiera por

una escuela secundaria, y siendo que ya existía una Escuela Normal y el ciclo básico de

la Escuela Industrial, la especialidad faltante era la de Comercio, y así se acordó.

A fin de realizar las gestiones del caso y recabar firmas de adhesión a la solicitud

que debía elevarse al ministerio, se formó una comisión provisoria, “pro creación de la Es-

cuela de Comercio” integrada por la directora de la Escuela Normal, profesora Noemí

Cha de Lago, la señorita Antonieta Pirota, por el Colegio San José, el señor Raúl Rojas,

por el Consejo Escolar, el señor Nicolás Di Caro, presidente de la Cámara de Comercio y.

Aidor Miranda, Secretario de Gobierno Municipal.

Con la firma de todas las autoridades escolares, instituciones culturales, sociales,

cooperativas y gremiales, la solicitud fué entregada por los delegados de la comisión Ni-

colás Di Caro y Aidor Miranda, al Ministro de Educación Profesor Ametrano, quien se

comprometió a dar trámite preferencial a la petición, habida cuenta la altura del año -era el

mes de diciembre- para posibilitar el inicio de las actividades en el período lectivo de

1962.-

Iniciado el expediente, el Profesor García y el Dr. Miranda entrevistaron a la Directo-

ra de Enseñanza Superior, Media y Vocacional, profesora Carreras de Urréjola y a la Ase-

sora, Profesora Agueda Zenettini, para interesarlas en la rápida tramitación del expedien-

te, ya que era y es por todos conocido, que en el. receso de verano poco es lo que puede

esperarse de cualquier tramitación en la Administración Pública. Justo es destacarlo, co-

mo se vería al poco tiempo, ambas funcionarias cumplieron cabalmente con el compromi-

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so asumido, y fueron eslabones fundamentales de la concreción de la Escuela de Comer-

cio.

1962.: AÑO ELECTORAL CON SORPRESAS.-

Como surge del relato precedente, todo estaba encaminado perfectamente, y en

vías de concreción, pues del seguimiento que hicimos con el profesor García, teníamos

conocimiento que los trámites burocráticos necesarios se cumplían regularmente

Pero, nos habíamos olvidado de un dato que en Argentina siempre es un interrogan-

te, difícil de desentrañar, de lo que el “mañana” nos puede deparar, cuando están en jue-

go los factores políticos que mueven toda contienda electoral.

El 24 de febrero, había elecciones generales en todo el país para la renovación de

autoridades nacionales, provinciales y municipales ..

Realizadas las mismas, se anulan las de la Provincia de Buenos Aires y ésta es interve-

nida por el gobierno nacional. Consecuentemente, se produce la renuncia del goberna-

dor y de todos sus ministros, y obviamente, también la del profesor Ametrano.

Mientras tanto, mi amigo Macario que no le había perdido pisadas a la tramitación,

me hacía saber que la misma se había completado, y había quedado pendiente la firma

de la Resolución Ministerial, pero,… ya no había Ministro que pudiera refrendarla

Viajé enseguida a La Plata, y con Macario, expediente en mano, entrevistamos a

Ametrano, que habiendo renunciado, estaba en aguardo de su reemplazante. Transcu-

rrían ya los últimos días de marzo, por lo que le planteamos el problema que se nos crea-

ba con la inscripción de alumnos, puesto que ya habíamos registrado- más de 30 ingre-

santes-, los que ante la demora generada , tuvieron que inscribirse en otras escuelas,. “

Miranda, yo lo siento como ustedes, pero, ya no puedo firmar nada, pues he dejado de

ser ministro y tengo presentada la renuncia”, dijo apesadumbrado.

Fué entonces, que inspirados mas por la impotencia que por agudeza mental, nos

atrevimos a insinuarle : ”¿ Y si antidatamos la Resolución a la fecha en que era todavía

ministro?. Por cierto, no dejó de sorprenderse ante una propuesta que entendíamos era

audaz en demasía, y que si no fuera por que sabíamos del gran interés que tenía en solu-

cionarnos el problema, podría aparecer como irrespetuosa de su investidura ministerial.

Todos estábamos convencidos. que no obstante la irregularidad de la tramitación, tenien-

do en cuenta la trascendencia del objetivo, aquí si podíamos decir, que “el fin justifica los

medios”

Reflexionó un instante, y luego nos dijo. “ Sí, podría ser, pero mi firma está precedi-

da por la de la Directora de Enseñanza Media. Hablen primero con ella., y de acuerdo

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con su respuesta, veremos que podemos hacer”. Allá corrimos por los pasillos del minis-

terio de calle 13, a encontrarnos con la profesora Carreras de Urréjola, a quien le impusi-

mos en detalles, lo que habíamos conversado con el ya ex –ministro.

Nos escuchó atentamente, y sin titubeos nos dijo:” De mi parte no hay ningún pro-

blema, porque tengo la certeza que todos los requisitos están perfectamente cumplimen-

tados y cuentan con mi visto bueno” … ¡Y firmó.!

De nuevo al despacho de Ametrano. Era el último paso. Ya casi estábamos viendo

abrirse las puertas de la Escuela de Comercio….¡Y también firmó.!, como “Ministro”,

quien ya no lo era en esos últimos días de marzo , pero “retrocediendo en el tiempo”,

¡dos meses!!. hasta. el 29 de enero de 1962, fecha que tiene la Resolución Nº 00379

, cuyo texto, dice_

“LA PLATA, 29 de enero de l962

“VISTO el pedido formulado por representantes del comercio, la industria, entida-

des culturales y sociales del distrito de Veinticinco de Mayo, y

CONSIDERANDO:

Que la Dirección de Enseñanza Superior, Media y Vocacional, ha realizado un

estudio de las necesidades de creación de un establecimiento comercial en el men-

cionado distrito;

Que la carencia de una Escuela Secundaria, acarrea varios problemas Econó-

micos y sociales a la población, por cuanto los numerosos egresados

de las escuelas primarias deben recorrer largas distancias para atender a su

educación media.

Por ello, el Ministerio de Educación resuelve:

1ª) Crear una Escuela de Comercio ene. Distrito de Veinticinco de Mayo.

2º) Comunicar la presente resolución, notificar a las Direcciones de Enseñan-

za.

Superior, Media y Vocacional y por su intermedio a quien corresponda, de

Personal y “Estadística, de Administración, de Educación, a la División Contratos,

Digesto Escolar y Propiedades, y al Consejo Escolar respectivo”

LA DIRECCION

Teníamos ya la partida de nacimiento de la Escuela de Comercio Nº 1, pero nada

mas que eso. Había que darle vida al proyecto aprobado. Había que designar sus autori-

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dades, formar el cuerpo docente, y “reclutar” los alumnos posibles para iniciar los cursos.

Fue una carrera contra el tiempo, porque transcurrían ya los primeros días de abril. En la

primera semana, se concierta una reunión en la Municipalidad con la Asesora de la Direc-

ción de Enseñanza Superior, Media y Vocacional Profesora Agueda Zanettini, para acor-

dar la forma de solucionar urgentemente dichos problemas.

Esa reunión tuvo como protagonistas, además de la citada funcionaria, al Dr.Pedro

Damiani, don Roberto Antonio Ramón Oribe, que era el subsecretario de gobierno muni-

cipal y jubilado como Inspector de Escuelas de la Nación , el Ingeniero Alfredo Rubén Di

Caro, la señorita Olga Martha Iriberri que sería propuesta como Preceptora , y Aidor Mi-

randa.

El motivo de esta primera reunión, era la designación provisoria del Director, “Tiene

que ser uno de ustedes” nos dijo la Asesora. porque tengo que llevarme el nombre para

oficializar su nombramiento. Ninguno quería ser. Finalmente convencimos, a Pedro Da-

miani, para que fuera él, quien finalmente aceptó con la “condición” de que solo sería por

dos años como máximo, pues no le gustaba la función directiva. Pese a su promesa, que

no dejaría de respetar, debió continuar hasta fines de 1968, año en que presenta su re-

nuncia al cargo, en el que es reemplazado provisoriamente por el Vice-director Ingeniero

Di Caro, hasta el 20 de agosto de 1970, en que soy designado Director.

A esta altura no puede dejar de aclararse, que todo esto era un procedimiento de

excepción y fuera por completo de la normativa reglamentaria, pero que afortunadamente

fue posible porque estaba la voluntad política de la autoridad ministerial, de no privar a la

comunidad de 25 de Mayo, de un nuevo establecimiento secundario, que había sido re-

querido por sus instituciones mas representativas.

EL CUERPO DOCENTE

Cumplido este primer paso, y siempre siguiendo la vía de excepción, quedamos au-

torizados con el Dr. Damiani, para confeccionar el listado de los profesores que dictarían

las materias de Primer año, todos los cuales ingresarían en la calidad de contratados. .

Con la idea de no dejar de obrar con total imparcialidad, hicimos una convocatoria

pública para que se anotaran quienes estuvieran interesados en dictar las distintas cáte-

dras, pero todo ello sin dejar de invitar a que lo hicieran aquellas personas de ya tenían

reconocidos méritos, como en el caso particular del Dr. Armando Unánue, quien declinó

hacerlo porque aun pesaba sobre él la proscripción política de la época de la “Revolución

Libertadora”.

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El primero y ya histórico cuerpo docente y auxiliar quedó así integrado: DIRECTOR,

Pedro Vicente Damián; SECRETARIO: Roberto Antonio Ramón Oribe; PROFESORES:

MATEMATICAS, Ingeniero Alfredo Rubén Di Caro; CASTELLANO: Zunilda Casaza de Ur-

danavía; BOTANICA: Ingeniero Osvaldo H. Iacopini; GEOGAFIA: Dr. León Goldstein:

EDUCACIÓN DEMOCRATICA: Aidor Francisco Miranda; HISTORIA: Dr. Pedro Vicente

Damián; FRANCES: Adela Schall de Ferrari; INGLES: Eloísa Bouquet de Chiessa; CUL-

TURA MUSICAL: Irma Urteaga de Casas; DIBUJO Y CALIGRAFÍA: Noelia Cirigliano de

Grau; CONTABILIDAD: Domingo Viceconte; EDUCACION FÍSICA: Rodolfo Pirota. PRE-

CEPTORA: Olga Martha Iriberri.- PORTERÍA : Elsa Minichiello de Sarratea.

EL ACTO INAUGURAL

Completada la planta funcional de la Escuela y cumplidos los trámites del reconoci-

miento ministerial de todo lo actuado, recién el 23 de abril pudimos dar iniciación a las

actividades de la nueva Escuela.

No fueron pocas las dificultades que debimos superar para ello en pocos días, prác-

ticamente en horas, habida cuenta que ya había transcurrido algo mas de un mes de la

iniciación del período lectivo en todos los niveles.

En primer término, tratar de reunir el disperso alumnado que habíamos inscripto pro-

visoriamente, pero que al llegar a la fecha de iniciación de las clases y no haberse concre-

tado la creación de la escuela, debieron optar por el ingreso a los otros establecimientos.

De los mas de 40 inscriptos que teníamos registrados, y con gran esfuerzo pudimos

reunir 26 para primer año, la mayoría de ellos porque no habían podido ingresar en las

otras escuelas.

En forma paralela con esas gestiones, tratábamos de resolver otro problema no me-

nos grave, el lugar para funcionar. Ninguna escuela tenía disponibilidad. Finalmente, con-

seguimos un “albergue transitorio” en el viejo edificio de la calle 27-10 y 11, donde funcio-

naba la Escuela Profesional, cuya directora Onelia H. Saldarini, nos facilitó un aula.

Asi, desprovistos de los mínimos recursos materiales para el desarrollo de la activi-

dad educativa, y a pesar de tanta precariedad, decidimos realizar en la mañana del 23 de

abril de 1062 el acto inaugural”.

Reunidos profesores y alumnos a las 8 de la mañana en el patio central junto al

mástil, advertimos que nos faltaba el pabellón de la patria para izarlo, ya que no teníamos

acceso a la Dirección de la Escuela Profesional. Corrimos hasta la Comisaría a pedir

prestada una bandera, y poco después pudimos verla ondear al tope, mas linda que nun-

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ca, mientras que “a capella”, pues no teníamos música- entonamos, con la emoción pro-

pia de las circunstancias, las estrofas de nuestro Himno Nacional

Ahora sí: Como reza una placa de la Escuela, “Modesta en sus medios, pero altiva

en sus fines” había nacido la Escuela de Comercio Nº 1 de 25 de Mayo. Dios nos brindó

el halago de haber asistido a su gestación y alumbramiento…

LOS PRIMEROS ALUMNOS

La nómina de los 26 alumnos “fundadores”, de los cuales solo TRES arribarían al 5º año

de estudios y obtendrían el título de Perito Mercantil ( María Delia Barrales, Luis Farina y

Elida Clara Ledesma), era la siguiente:

ALE, Marta Amelia

ANTINORI, Celia Edith

BARRALES, María Delia

BERGAMINI, Mirna Mabel

CANULLAN Mario Alberto

CARRARA Oscar Aníbal

CINGOLANI Beatriz Alicia

DEL RIO Hilario Alberto

FARACE Enrique Pedro

FARINA Luis

HERBON Rodolfo

LEDESMA Elida Clara

LEGUIZAMON, Blanca Esther

LEGUIZAMON Héctor Marcial

MINIERI María Alcira

MINIERI, José Francisco

MONTERO; Raúl

MORA Amelia Aída

MORA Noelia Beatriz

PASQUALINO Zulema Edith

PETRELLI Juan

PORTILLA Juan Manuel

QUINTANA Rodolfo José

RASCHIA Juan Vicente

SCATOLON Susana Mabel

ZANOVELLO Ferruccio

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De los nombrados, Héctor Marcial Leguizamón y Raúl Montero, reingresarían mas

tarde -en 1964- cuando se crea el Turno Nocturno, en el que obtendrían también su títu-

lo.

A todos ellos, egresados o no, les alcanza nuestro agradecido recuerdo, porque en

circunstancias excepcionales, su presencia hizo posible que nuestra Escuela pudiera ini-

ciar esa primera etapa de las 45 que en forma progresiva y ascendente cumpliría des-

pués, para beneplácito de la comunidad y orgullo de los muchos que pudieron “arrimar un

ladrillo” para lograr la infraestructura material y espiritual que hoy la tiene encumbrada en

el ámbito socio cultural de 25 de Mayo.

“ MAESTROS PAGADOY ”

Identificada oficialmente como “Escuela de Comercio Nº1, en una de las primeras

reuniones del grupo de profesores que trabajaba junto al Director, se acordó en buscar un

nombre como complemento,.

Giraron las sugerencias en torno a los nombres de distintos próceres, como Sar-

miento, Alberdi y Carlos Pellegrini, que en definitiva se fueron descartando, ante un pro-

puesta mas original, que pretendía buscar en la historia local, el o los nombres de quienes

por su aporte a la comunidad, merecían ser honrados con su recordación.

Así fue que hurgando en el pasado, encontramos como antecedentes válidos e in-

cuestionables, los que habían reunido en su trayectoria como educadores privados, los

hermanos Juan Bautista y Pedro Pagadoy, vinculados a familias tradicionales de nuestro

medio.

Estos maestros, oriundos de Francia y radicados en 25 de Mayo, crearon su escue-

la e “hicieron escuela” por muchos años, con sucesivas generaciones de veinticinqueños

Sobrados merecimientos para darle el nombre de “MAESTROS PAGADOY” a una

escuela nacida con humildad y modestia, pero con miras tan elevadas que serían moti-

vo de legítimo orgullo para todos los que habrían de transitar en tiempos distintos sus pa-

sillos, educadores y educandos.

LOS PRIMEROS AÑOS

Transcurrido el primer año de la actividad escolar, con las peripecias propias de su

tardío nacimiento y la precariedad de su estructura material y funcional, ya al año siguien-

te -1963- comenzó a consolidarse la vida institucional dentro del panorama educativo lo-

cal en el nivel secundario, no sin tener que afrontar la resistencia o desconfianza que ge-

nera todo lo nuevo y desconocido.-

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En sus primeros años, la conducción de la escuela, mas allá de las normas regla-

mentarias, estuvo a cargo de un equipo integrado por gran parte del primer cuerpo do-

cente, realizando reuniones semanales o quincenales, para tratar tanto aspectos didácti-

cos como los mas diversos problemas que se suscitaban en el quehacer cotidiano.

Junto a Damiani y Oribe, colaboraron entusiastamente, entre otros, el Dr. León Gol-

dstein, el Ingeniero Di Caro, el Dr. García Fernández, la señora Cirigliano de Grau y las

Preceptora Olga Iriberri y María Delia Colamarino de Caivano,-ésta en el segundo año-

como así su bibliotecaria inicial Lela Arrospide., dicho Esto a riesgo de incurrir en inevita-

bles omisiones, pues nadie rehuyó su aporte .en la medida de sus posibilidades.

Constituida la Sociedad Cooperadora bajo la presidencia del señor Víctor Tironi, de

larga trayectoria como directivo del Centro Empleados de Comercio, se inició una intensa

campaña de difusión sobre las características de esta nueva escuela secundaria, de los

contenidos de sus estudios, de la calidad y validez del título que otorgaba, su analogía

con los que se obtenían en las otras escuelas del mismo nivel, etc

De esa manera, y con la permanente difusión de dichos temas a través de los me-

dios de difusión a nuestro alcance, fuimos disipando dudas de los padres, que muchas ve-

ces desistieron de inscribir a sus hijos en nuestra nueva escuela.

¿Cuáles eran esas dudas? Nuestra escuela dependía del Ministerio de Educación

de la Provincia de Buenos Aires, mientras que las ya existentes (Normal e Industrial) lo

eran del Ministerio de Educación de la Nación. ¿Qué validez tenía entonces el titulo otor-

gado por una escuela provincial para poder ingresar a una universidad Nacional”? ¿Ha-

bía que dar equivalencias? ¿Servía el título de Perito Mercantil que otorgaba nuestra Es-

cuela para continuar estudios superiores?

Eran comprensibles los temores, porque a nuestra Escuela le tocó históricamente la

difícil pero honrosa misión de despejar esas dudas que acuciaban a los padres, que no

dejaban de mirar con muy buenos ojos, la nueva expectativa laboral que implicaba la es-

pecialidad comercial. Pero, en los primeros años y pese a todo, siguió primando la máxi-

ma con que se define la prudencia ” Ante la duda, abstente”….

A fuerza de ser reiterativos, la convicción de que nuestro título tenía la misma vali -

dez que los otorgados por los establecimientos nacionales, por existir normativa legal que

así lo tenía dispuesto, con el tiempo, llegó a todos, padres y alumnos, y año a año, por

mas de veinte seguidos, nuestra escuela no dejó de crecer en su matrícula.

“Los bichos verdes”, apelativo que caracterizó a nuestros alumnos por su uniforme

(Saco verde y pantalón o pollera gris) llenaron las calles de nuestra ciudad, compartién-

dolas sin pretender competir, con la legión de los tradicionales guardapolvos blancos

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Una demostración cabal de lo que era “La Familia del Comercial”, lo constituyó sin

dudas, las presentaciones que nuestros alumnos hicieron en los tradicionales desfiles de

carrozas con que a partir de 1964 se celebraba la “Semana del Estudiante”, en el mes de

setiembre

Directivos y demás personal de la Escuela, vimos en esos eventos estudiantiles, la

oportunidad para dar mayor difusión al conocimiento de la que era todavía una pequeña

escuela, y el perfil institucional que habría de caracterizarla con los atributos propios de

una singular “Familia”.que aceptaba como un dogma, el conocido enunciado: “Todos para

uno, y uno para todos”.

Fue así que en dichas celebraciones, a diferencia de otras escuelas que presenta-

ban motivos distintos de cada curso, en la nuestra, todo el alumnado se reunía en un úni-

co conjunto, para la representación de un solo motivo dividido en varios cuadros.

Es imposible dejar de recordar la espectacular presentación de “El Ejército Roma-

no”, conformado por alumnos de los turnos diurno y nocturno, en el año 1965; en 1966,

“Coronación de la Primavera”, en 1967, “Fantasía Oriental”; en 1968, “Historia de la dan-

za “ , en 1969, “Las cinco hazañas del hombre”; 1970, “El Ejército de los Andes.

Fue una hermosa experiencia, que sirvió de carta de presentación ante la comuni-

dad, de una institución educativa con un nuevo modelo de integración interdisciplinaria en-

tre docentes y educandos, alineados tras el objetivo común de hacerla conocer y trascen-

der, para luego, en años siguientes, poder exhibir, ya consolidada, su credencial de identi-

dad.

La profesora Noelia Cirigliano de Grau, ofició en todos los casos como asesora en

el diseño de las carrozas y vestuario, que los alumnos se encargaban de ejecutar. Obra

suya fue también, la creación del original distintivo que habrían de lucir los alumnos en

sus sacos verdes y que se reprodujo en los banderines, como sello que caracterizó des-

de entonces a la Escuela de Comercio

EL TURNO NOCTURNO

La receptividad que desde el primer momento tuvo la apertura de la Escuela de Co-

mercio, con una especialidad que ampliaba el espectro para una salida laboral, nos hizo

ver la necesidad de ampliar esta oferta educativa, para quienes por razones de trabajo y

por su edad, estaban imposibilitados de iniciar la carrera de Perito Mercantil que se cur-

saba en el turno diurno con un plan de cinco años.

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Nos abocamos por ello, a gestionar la apertura de un turno nocturno, previsto en los

planes de estudio para adultos, con los mismos contenidos pero con una duración de 6

años.

Con el importante respaldo de las dos instituciones mercantiles de la ciudad, el Cen-

tro Empleados de Comercio, presidido entonces por el señor Andrés Bergamini, y la Cá-

mara de Comercio. Presidida por don Lorenzo Iriberri, se realizaron las gestiones perti-

nentes y en 1964, obteníamos la autorización para la apertura del Turno Nocturno.

Al llamado de inscripción respondieron 41 alumnos, de las más variadas edades a

partir de los 18 años, que era el mínimo exigido y todos ellos ya con vinculación laboral.

Y, de nuevo a afrontar el problema propio de todo “carenciado” que no tiene casa

propia. ¿Adonde nos “metemos”? por que en el edificio donde funcionaba el turno diurno.,

en el horario vespertino la Escuela Profesional tenía sus propios cursos.

Después de peregrinar por posibles establecimientos con resultado adverso, recala-

mos finalmente en la Municipalidad, a cuyo frente estaba como Intendente el señor Fer-

nando Garabano, a quien le planteamos lo que hasta ese momento era un problema sin

solución a nuestro alcance.

Así fue que como alternativa de emergencia y con la mejor disposición, nos ofreció

un espacio en la planta alta del palacio municipal, que de muy buen grado aceptamos, y

una vez adaptado, allí comenzó la vida institucional del Curso Nocturno de la Escuela de

Comercio, que a partir de entonces y en forma ininterrumpida, siguió brindando hasta

nuestro días, una inestimable oportunidad de superación por el estudio, para una vasto

sector de nuestra población adulta

Al frente del turno nocturno, alternaban en la función directiva, el titular de la direc-

ción el turno mañana, Dr. Pedro Damiani y como secretario el Profesor de Educación Fí-

sica, Rodolfo Pirota. En mayo de 1968, se crea la Vicedirección, y es designado para de-

sempeñarla, el Ingeniero Alfredo Rubén Di Caro, en el turno noche.

Seis años después, en 1969, tendríamos los primeros egresados del turno Nocturno,

que fueron:

ALBORNOZ, Eduardo

APICELLA, Juan Carlos

BORDA Susana Esther

ESTENSORO Angélica R.

LGUIZAMON, Héctor Marcial

MONTERO Rodolfo

SANTURION, Jorge P.

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EN LA “CASA PROPIA”

Año 1966.- A esta altura, transcurridos los primeros cuatro años, ya aparecía con-

formada la que por años sería distinguida como “ LA FAMILIA DEL COMERCIAL”, deno-

minación que hacía honor al grupo humano de los docentes de cualquier función, desde

el director a los preceptores, los auxiliares, padres y alumnos, que cohesionados firme-

mente, trabajaron sin desmayos por el crecimiento y la consolidación de la flamante es-

cuela, instalándola en la comunidad como un claro exponente de calidad educativa

No se puede dejar de recordar ciertos apellidos de padres de alumnos, que entre

muchos otros cuyos nombres resulta inevitable omitir, desde la Asociación Cooperadora o

desde el Club de Madres, fueron verdaderos puntales en la concreción de cada uno de los

emprendimientos proyectados. Los Abriola, Dentice, D’Angelo, Dré, González,(Oscar y

señora), Del Río, Picone, Rodríguez, Chacón, Brunero, Telechea, Cordioli, Almirón, Risé,

Pinto, Serrano, Cryan, Vior, Tombolato, Andrade, Coscarelli, Raineri, Herrero, Uribarri, Ba-

dano, Marelli, Carrozo, Carona, Labolita, Melgar, Gagliano, Elorga, Faga, entre muchos

otros, son nombres que hoy no pueden leerse en los paredes de la Escuela, pero que en-

tre cada uno de sus ladrillos, su recuerdo asoma en la mezcla espiritual imperecedera

que asegura su vitalidad y garantiza su permanencia..

Héctor Dentice presidía la Asociación Cooperadora cuando se resolvió realizar una

rifa de 1000 números, con un primer premio de un automóvil Peugeot 303, a fin de recau-

dar fondos para emprender una verdadera cruzada para procurar adquirir nuestro propio

edificio. El sorteo tendría lugar en una cena, en la que tenía derecho a participar cada ad-

quirente, la que se llevó a cabo en el Club Sportivo, y fue beneficiario del premio el señor

Antonio Farace

Realizada la misma, se pudo reunir la cantidad de un millón de pesos, cifra impor-

tante pero insuficiente para poder concretar la compra del edificio que era propiedad de la

sucesión de don Pedro Azcona. Ubicado en la calle 10 entre las de 26 y 27, con la que

habíamos iniciado las conversaciones y tenían la mejor disposición para venderla.

A partir de ese momento, se realizaron activas gestiones en el Ministerio de Educa-

ción, para obtener el aporte de los 2 millones de pesos que faltaban para completar el pre-

cio exigido por los propietarios, que era de 3 millones de pesos.

Obtenida esta partida, se realiza poco después., el acto de escrituración en la Escri-

banía General de Gobierno, en La Plata, la que se hizo a nombre del Ministerio de Edu-

cación de la Provincia, pues no era posible que la Asociación Cooperadora figurara como

adquirente. Era Gobernador entonces, el Dr. Anselmo Marini, de la UCR. quién había ac-

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cedido al cargo en las elecciones que habían consagrado como Presidente de la Nación

al Dr. Arturo llia.

Con el Dr. Damiani, recordamos como hecho anecdótico de entonces, que parte del

precio se pagó con un cheque de $ 700.000, de la cuenta de la Tesorería de la Provincia

en la casa Central de su banco, y que al pretender hacer efectivo su importe por parte

del señor Gofredo Andrade, familiar de los vendedores, le fue devuelto “por falta de fon-

dos”, debiendo ser sustituido por otro con “fecha diferida”. ¡ La Provincia estaba “en des-

cubierto” en su propio Banco¡

¡Y nos mudamos a nuestra “propia casa”!, de la que saldría a fines de ese año-

1966- la Primera Promoción de Peritos Mercantiles, con tan solo cuatro egresados: Ma-

ría Delia BARRALES, Elida Clara LEDESMA, Luis FARINA y Silvio DAGLIO .

En esa “casa”, que iríamos modificando en su estructura edilicia para adaptarla a los

nuevos requerimientos de aulas para un creciente alumnado, estuvimos durante casi

veinte años consecutivos, hasta que en l982, nos mudaríamos para inaugurar el flamante

edificio de calle 13 y 25, que sería su asiento definitivo.

El 21 de mayo de 1982, se lleva a cabo el acto inaugural de la nueva sede escolar.

Era inocultable la satisfacción que experimentábamos todos -docentes, padres y alum-

nos-, por acontecimiento tan trascendente, aunque no existía ánimo ni disposición para

festejos

¿La razón de ello? Otros acontecimientos acaparaban la preocupación de los argen-

tinos, que asistían impávidos al desfile de miles de jóvenes que, inocentes, marchaban

hacia el impensado escenario de guerra abierto en el Atlántico Sur, para jugar sus precio-

sas vidas en la contienda armada desatada con Gran Bretaña, en el intento de recupera-

ción de nuestra soberanía, sobre las Islas Malvinas.

El gobierno militar de turno, que una vez mas se habían encumbrado en el poder

después de derrocar a un gobierno constitucional, con escasa o nula visión geopolítica del

presidente, General Leopoldo Galtieri, había creído oportuno dejar de lado las gestiones

diplomáticas y recurrir a las vías de hecho, sin medir en modo alguno las posibilidades y

menos aun las consecuencias de una guerra desigual con una potencia del primer mun-

do como es Inglaterra.

Mientras nosotros izábamos el pabellón patrio que daba la señal de apertura de un

nuevo baluarte de la educación en nuestro medio, y entonábamos con profunda unción

nuestro Himnos Nacional, latían en nuestros corazones la inquietud y tristeza, porque en

ese mismo momento, a miles de kilómetros, en el Atlántico sur. El rugir de los cañones

apagaba el eco de nuestras voces…, y miles de jóvenes que se habían visto obligados a

Page 14: La Escuela de Comercio

trocar su uniforme escolar por otros que los convertía en improvisados soldados de una

inexplicable guerra, se debatían en una cruel alternativa de tratar de conservar su valio-

sa vida y evitar perderla sin siquiera llegar a saber por qué

Y allá, en ese cruento escenario, añorando los recreos de su escuela, en las fango-

sas trincheras, uno de nuestros “ chicos”: jugaba en serio a la guerra: ROLANDO DANIEL

TROCHE, quien a Dios gracias, no habría de contarse entre sus muchas inocentes vícti-

mas., y pudo volver a nosotros, dejando atrás su terrible pesadilla.

En honor de esa heroica legión y para perpetuar nuestros derechos a su sobera-

nía, impusimos el nombre de “Islas Malvinas” al hermoso salón de actos, tal como lo re-

cuerda la placa que desde ese día luce en uno de sus laterales.

A partir de ese auspicioso hecho, los años sucesivos pusieron de resalto que el rit-

mo ascendente no ha sufrido alteraciones, y habiendo surcado ya los carriles de los 47

“kilómetros” de vida, todos quienes tuvieron algo que ver en ese largo tramo, pueden os-

tentar en el interior de sus pechos, la reluciente e innominada medalla que iluminando sus

corazones, dice:¡¡¡ Yo también estuve…!!!

¡Y LA VIDA SIGUE¡¡¡

Se dice y no sin razón, que “lo que no avanza, retrocede; y lo que no progresa, se

arruina”. , reflexión ésta tenida en cuenta, al decidirme a relatar hechos no por todos co-

nocidos, que tienen que ver con la gestación, advenimiento y desarrollo de esta querida

criatura institucional que se llamó “Escuela de Comercio MAESTROS PAGADOY”. a la

que en el curso de sus jóvenes 47 años, varias veces le cambiaron su ropaje, sin que en

modo alguno le hicieran perder su linaje ni opacar el brillo de su trayectoria. Por algo es

para todos “Nuestra Escuela” y para cada uno de nosotros, los que la “vivimos” siem-

pre será “Mi Escuela” Los hechos y cada una de las circunstancias conexas, no son sim-

ples recuerdos que la memoria ha movilizado para instalarlos en tiempo presente, sino

que son vivencias que han dejado en el. alma su marca indeleble y acompañan mi exis-

tir.

Los relatados, no son hechos de la naturaleza, son hechos y actos gene-

rados por personas. Y precisamente por ello, porque en tiempos diversos

personas distintas fueron sus valiosos protagonistas, pensé que era justi-

cia asociar sus nombres, al modesto y sencillo pero a su vez rico historial

de “ Nuestra escuela-“

Page 15: La Escuela de Comercio

“Sin recuerdos y sin proyectos nuestro presente, carente de sentido,

sería incompatible con la vida” “La vida de uno mismo es demasiado

poco como para dedicarle por entero nuestra Vida” (Luis Chiozza)

A los que hoy no están y ya no podrán volver, quisiéramos hacerles llegar un “,mail”

a la nube en que reposan, para decirles que siguen estando entre nosotros para que

“vean” que no pasaron en vano por la vida terrenal, y que las semillas de su siembra ca-

yeron en muy fértiles surcos, los mismos que abrieron con su saber, su vocación y su

amor, y de los que año a año, cientos de jóvenes siguen cosechando los mejores frutos.

Para MI ESCUELA

Para ROBERTO RAMON ANTONIO ORIBE

Para LEON GOLDSTEIN

Para OSVALDO IACOPINI

Para RODOLFO PIROTA

Para ADELA SCHALL DE FERRARI…

y para todos los que en verdad se sientan herederos y continuadores de su legado,

dedico este modesto aporte, una reseña histórica dictada por mi corazón y procesa-

da por mi memoria.-

En VEINTICINCO DE MAYO, EL 23 DE ABRIL DE 2007, A CUARENTA Y CINCO AÑOS DEL

NACIMIENTO DE LA “ESCUELA DE COMERCIO Nº 1 “MAESTROS PAGADOY”

“Pasado y futuro son ilusiones tenaces,

pero, ilusiones al fin” .(EINSTEIN)

Aidor Francisco Miranda