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Juegos y juguetes tradicionales

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juegos para niños y niñas

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Juegos y juguetes tradicionales de niños y niñas

INDICE

INTRODUCCIÓN página 3 JUEGOS DE NIÑAS página 5

JUEGOS DE NIÑOS página 8

JUEGOS DE NIÑAS Y DE NIÑOS página 12

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Juegos y juguetes tradicionales de niños y niñas

INTRODUCCIÓN

Juego popular: aquel juego que está muy arraigado en una determinada zona y los habitantes del lugar lo practican habitualmente y lo han incorporado a su cotidianeidad con todas sus características, creencias y estilos de vida locales (Lavega, 2000) Juego tradicional: aquel que se transmite de generación en generación y suele estar adscrito a una zona determinada

Se aparecen ya remotos aquellos tiempos en los que los niños y niñas del pueblo tomaban calles y demás espacios públicos y, bajo un alegre rumor de fiesta, se divertían. A los niños de hoy día esos juegos populares y callejeros les resultan arcaicos e incomprensibles ya que aquel concepto de diversión basado en el uso de objetos tan simples como una tiza, un cinturón, unas canicas o unas piedrecillas o simplemente con la única ayuda del propio cuerpo, parece haberse esfumado en la memoria sustituido bajo el halo e influencia de los bites y microprocesadores modernos. Con esos escasos medios disponibles y una inagotable imaginación los niños y las niñas de antes conseguían pasárselo en grande más allá de los innumerables (y cada día más complejos) aparatos electrónicos de toda índole que hoy saturan nuestras vidas y que parecen ser la única fuente de diversión actual. La vida, esa vida compartida, de amistad, solidaridad y compañerismo, crecía entre los partidillos de fútbol o de lima (de los niños), y las partidas del elástico o cerque, (por citar algunos ejemplos) con las que las niñas demostraban una flexibilidad que era envidiada por sus congéneres masculinos. Aquellos juegos populares no solo fueron la simiente que dio lugar a amistades más o menos duraderas… sino que eran el principal medio de diversión y entretenimiento con el que contaban los niños y niñas de las décadas pasadas. Las plazoletas, las calles, los campos, los terrenos que había por doquier y que aún no habían sucumbido ante el poder del ladrillo… todos esos lugares estaban tomados por pandillas de amigos reunidas por barrios o por afinidad académica (vamos que iban al mismo colegio y/o clase...) que se divertían con un simple balón o con las acrobacias de las que podían enorgullecerse sus espíritus inocentes.

Los juegos son siempre un reflejo de la sociedad en la que se desarrollan. Por tanto, en aquellos tiempos en los que la vida se dividía entre colegios de niños y colegios de niñas y los roles sociales masculinos y femeninos claramente diferenciados los juegos no podían obviar esa distinción y, por consiguiente, existían juegos propios de niños y juegos propios de niñas que se diferenciaban como agua y aceite, distintos y sin posibilidad de mezclarse. También los había compartidos, claro está, pero todos los chavales tenían claro cuales eran de chicos y cuáles de chicas. Los roles que la sociedad de cada momento otorga a los niños tienen su reflejo en esos juegos, dónde los propios de niños solían ser más físicos imperando la resistencia y fortaleza mientras que los de niñas más suaves y livianos, habitualmente aparecían acompañados de cancioncillas o soniquetes de sencillo ritmo y significados perdidos en el origen de los tiempos. Así nos encontramos con los juegos basados en el uso de objetos fácilmente

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conseguibles, como la lima (sólo en época lluviosa, ya que necesitaba de un terreno lo suficientemente blando como para poder clavarla sin que resbalase), unas piedras (para el tres en raya), un cinturón o las añoradas canicas (bolinches en el rico vocabulario local) etc. junto a otros en los que el protagonista era el propio cuerpo como serían los casos de los borriquitos cailones (¡cuidado con el que le tocara el gordo!), la bombilla, la piola o incluso el escondé donde los más astutos e imaginativos llevaban ventaja…

En todos los casos eran juegos sencillos, de escasas reglas y abiertos a cualquier tipo de participante sin mayor pretensión que la pura diversión.

La cultura popular de cualquier país no estaría completa sin esos juegos que practican los niños de cualquier población o ciudad, lógicamente influidos por la zona geográfica, tanto en su vertiente física como cultural, y sujetos a reglas o convencionalismos propios que pueden variar según el lugar donde se practiquen. Estos juegos pasaban de padres a hijos, sin conocer en que momento surgieron, con lo que se aseguraba su supervivencia generación tras generación. Gracias a ellos, se aprendían valores, a ganar, a ser justos con los que tenían la desdicha de perder, a trabajar en equipo y de forma individual, se concebían estrategias, organizaciones (elementales, claro está), se establecían las primeras relaciones sociales y de convivencia, y, en definitiva, se establecían los cimientos para el desarrollo personal de aquellos niños y niñas en su caminar hacía la edad adulta.

Lamentablemente esa transmisión de padres a hijos se está deteriorando poco a poco. Como consecuencia, la cultura popular de nuestros juegos tradicionales está perdiéndose irremisiblemente. Con este trabajo se pretende rescatar del olvido a aquellos juegos, tan queridos por las generaciones precedentes, y que hoy, lamentablemente sólo son meros objetos de trabajos académicos. Las actuales generaciones tienen su propia manera de divertirse, los juegos tradicionales han dado paso a otros más modernos y adecuados a los tiempos en que vivimos. Sin embargo, debe entenderse que la práctica lúdica vinculada a la cultura circundante aporta multitud de tradiciones y manifestaciones propias de indudable riqueza. Conviene por tanto tener en cuenta la importancia de que los alumnos y alumnas conozcan y practiquen juegos populares, como vínculo y parte del patrimonio cultural de nuestra Comunidad. Creemos que es labor de este instituto el aportar nuestro granito de arena para que esta parte tan importante de nuestra cultura y tradición no perezca en el olvido.

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Juegos de niñas.

RAYUELA

En el suelo se dibuja una plataforma con diversas categorías. La partida comienza cuando el primer jugador tira un tejo en la primera división trazada en el suelo. Luego, debe saltar en un pie hacia dicha categoría, recoger el tejo siempre en un pie y volver hacia la partida. Si lo consigue, intentará con la segunda categoría; si no, cederá su turno. Este juego consta de uno a diez jugadores.

AL PASAR LA BARCA

El juego consiste en hacer oscilar la comba de un lado a otro con un suave balanceo. El primer jugador entra en la comba y salta mientras cantan la canción. Cuando la acaba, se sale de la comba y entra el siguiente jugador, todo esto sin dejar de dar a la comba y sin dejar de saltar. Comienza a cantar y cuando acaba la canción sale de la comba y entra el siguiente jugador. Así hasta que se acaba la fila de jugadores o algún jugador de los que saltan detiene la comba. Si hace esto, el jugador sustituye a alguno de los jugadores que daban a la comba.

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La canción es: Al pasar la barca, me dijo el barquero: las niñas bonitas no pagan dinero. Yo no soy bonita, ni lo quiero ser, que si eres bonita te echas a perder.

RECORTABLES

Eran recortables de muñecas y sus vestidos que se ponían boca abajo en el suelo, y las niñas tenían que intentar darle la vuelta (dando una palmada). Quien le diese la vuelta a una de las muñecas apostadas, se la ganaba.

LAS FIGURITAS

Las figuritas eran o son un juego al que jugaban normalmente las niñas. El juego consistía en colocar las figuritas, que eran como tazos pero redondos y en una de sus caras tenían una figurita o dibujo, las colocaban boca abajo y había que intentar darle la vuelta al mayor número posible de figuritas con la palma de la mano abierta. La niña que consiguiera volver alguna figura, se la quedaba, y la que no volviera ninguna, debía poner otra en el montón.

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EL ELÁSTICO

El juego del elástico es un juego tradicional que consiste en realizar una serie de saltos rítmicos alrededor de los elásticos. Se juega con diferentes niveles de dificultad pasando de jugar de nivel del tobillo al nivel de la rodilla, y en algunos casos se podía subir el elástico hasta la cintura. Se amarran los extremos de los elásticos a las patas de la silla si juegas solo, si juegan varias personas, dos sujetan el elástico y cuando uno falle, pierde pasando a sujetar el elástico. Normalmente se juega acompañándose de canciones populares, como por ejemplo la del marinerito:

Popeye el marinerito piii no sabe tocar el pito piii y yo q lo se tocar piiiii

no me lo quiere dejar piiii. un día me lo dejo pii

y al agua se me cayo piiii y el pobre marinerito piiii.

Sin pito se quedo piiii

LA COMBA.

Se juega con una cuerda. Dos jugadores la agarran, uno por cada extremo, para dar vueltas a la cuerda. Los demás se colocan en fila para ir pasando a saltar sin perder turno, una vez que empieza a saltar el primero. Si uno no salta cuando le toca, o tropieza con la cuerda, se para el juego y éste pasa a "ligársela", o lo que es lo mismo, a "dar a la comba".

Mientras que uno salta, los demás cantan una canción y según como sea ésta, se da a la comba a un ritmo diferente.

EL CORRO.

Los participantes se cogen de la mano formando un círculo. Bailan al compás de las canciones y acompañan la letra al compás de los movimientos. Son juegos colectivos, en los que no hay un número fijo de participantes y que, en algunos casos, sus canciones también se utilizan como juegos de comba o de filas.

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Juegos de niños

BURRITOS CAILONES

Juegan dos equipos al cual uno de ellos se coloca agachado y en fila. Después, el otro equipo salta encima, deben caber todos los miembros del equipo. Una vez encima, en caso de que ninguno se cayera, el capitán decide ''churro, media manga o manga entera'' refiriéndose a la muñeca, al codo y al hombro, respectivamente, y señalaba una de estas partes y el capitán del otro equipo debía adivinarlo. Si lo adivinaba, los equipos se cambiaban (los de arriba se agachaban y los de abajo saltaban). Y si no lo adivinaban, la siguiente ronda seguiría igual.

JUEGO DE LAS CHAPAS O TAPONES DE BOTELLAS

Desde a aproximadamente unos 50 años el juego de las chapas era uno de los juegos más populares en entre los niños especialmente, pocas eran las mujeres que jugaban ya que en la sociedad de aquella época no era algo bien visto y la mentalidad de los niños estaba acostumbrada al rechazo. Era un juego popular y asequible para ellos ya que se jugaba con la chapas recogidas en las tabernas , normalmente cuando los padres iban a tomarse algo recogían algunas chapas para dárselas a sus hijos o ellos mismos los acompañaban y se encargaban de buscarlas por los suelos.

Las chapas con más valor eran las más difíciles de encontrar y en aquella época tener una chapa de una bebida poco común como un zumo especial hacia que el niño tuviera un mayor éxito , aquellas personas que vivieron esto le dan un especial valor a la chapas diferentes. Cuando tú tenías una chapa valiosa la podías cambiar por unas cuantas más comunes. Aun que existían más variantes en Valverde del Camino la más común consistía en: MATERIAL: Canicas y chapas PROCEDIMIENTO: Hacían un circulo en el suelo y cada participante ponía una chapa en su interior, no había límite de jugadores y para comenzar se hacía una tirada con la canica y el que

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estuviera más cerca de las chapas era el que comenzaba, el juego consistía en utilizar la canica para golpear la chapa de otra persona y cuando consiguieras sacarla del círculo, era para él. No había ganador.

LA LIMA

La lima es un juego popular antiguo, que hace aproximadamente unos 50 años tenía mucho éxito, tanto como para mujeres como para hombres sin que hubiera una diferenciación de sexo y era muy parecido al juego de la rayuela que era principalmente femenino. Era un juego que se caracterizaba por estar al alcance de cualquier niño de aquella época, ya que para jugar solo se necesitaba un hierro de unos 25 cm. afilado en uno de sus extremos como por ejemplo una lima, de ahí viene su nombre.

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Era necesario que el suelo estuviera húmedo para poder clavar la lima, consistía en hacer un cuadro en la tierra con 8 divisiones e ir clavando la lima en cada una de las divisiones numeradas del uno al ocho según la distancia de menos a mayor, comenzaba el juego mediante un sorteo, uno de los participantes, lanzaba la lima con el objetivo de pincharla en la arena nº 1, si lo consigue sigue lanzando y así sucesivamente hasta llegar al cuadro número 8, si falla, lanza el jugador siguiente, quien primero consiguiera completar el recorrido ganaba la partida.

PEONZA

Tradicionalmente era o es un juego destinado principalmente al género masculino. Trataba de enrollar la cuerda en la peonza y soltarla para hacerla girar durante el mayor tiempo posible. La peonza solía tener punta de hierro y estar fabricada de madera. Actualmente el juego no es muy popular pero en su tiempo jugaban todo tipo de personas desde niños hasta ancianos, que enseñaban a sus nietos a jugar.

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DIÁBOLO

El diábolo, comúnmente llamado diablo y también conocido como «el diablo de dos peras» o "tia p", es un juguete de malabaristas que consiste en un carrete, o sea dos, semiesferas huecas, normalmente de caucho, unidas por su parte convexa por medio de un eje metálico, que es manipulado con una cuerda atada a dos palillos, uno en cada mano. Normalmente a este juego suelen jugar los niños enseñados por sus padres aunque también pueden jugar las niñas pero mayoritariamente juegan y han jugados siempre los niños. Actualmente no es juego muy popular no se suelen usar mucho los diábolos.

LA BOMBILLA

Este juego es una derivación del “salto a piola” en el que una persona se pone encorvado y detrás suya, un círculo. Cuando se pinte el círculo, las demás personas tienen que saltar encima de la persona encorvada y caer dentro del círculo. Si hay una

persona que cae fuera del círculo, esa es la que se pone encorvada. Si caen todos dentro, el primero que haya saltado dice “¡Bombilla!” y el que estaba encorvado tiene que coger a alguien de dentro del círculo para que se ponga en su posición.

CANICAS

MATERIAL:

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Varias canicas PARTICIPANTES Ilimitado REGLAS: Se hacia un hoyo en el suelo y se lanzaban las canicas con el dedo corazón desde un lugar acordado intentando meterlas en el agujero. El que lo conseguía se quedaba con las canicas de los demás. Se jugaba durante todo el año.

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PELOTA VERDE

La pelota utilizada es una de color verde, cuyo tamaño es similar al de una pelota de tenis, la cual traían unos zapatos de colegial llamados “Gorila”. El juego consiste en lanzar una pelota a unos agujeros cavados en el suelo, y el que la cuele debe correr hacia el agujero y cogerla para dar con ella a otro participante. Si llega a ser golpeado se eliminará. En este juego era más habitual la participación de los niños, puesto que siempre ha gustado más a los del género masculino eso de lanzarse cosas.

ROMPEHUESOS

Este juego empieza con dos personas cuyos traseros están unidos y una tercera persona coloca su cabeza debajo y se agarra a la cintura de los compañeros y otra persona salta por encima haciendo una voltereta apoyándose en la espalda del que esta agachado.

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EL CASTRO O TRES EN RAYA

PARTICIPANTES Dos participantes MATERIAL: Seis piedras diferentes tres a tres y el dibujo REGLAS: Por sorteo se elige a uno de los participantes que comienza el juego colocando una de sus piedras en el centro. Alternativamente las van colocando hasta que uno consigue completar una línea entera. El ganador comienza el siguiente juego.

Este juego que en la antigüedad se jugaba en el suelo ha añadido varios cambios en la actualidad pasando a ser ahora juego de mesa. Este juego no distingue entre sexos.

EL BURRO

Un jugador se coloca con el tronco flexionado y los codos apoyados en las rodillas, siendo el apoyo de los otros jugadores. El resto de jugadores saltarán este obstáculo. Tienen que hacer una pequeña carrera (2 o 3 metros) para coger impulso. Para saltar al burro (jugador con el tronco flexionada), se apoyarán en su espalda. Tras saltar se colocará como otro burro más, de modo que a medida que van saltado se formará un fila de burros mayor que el que vaya a saltar tiene que ir superando. Este juego puede ser tanto de niños como de niñas, pero le gusta más a los niños.

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RATÓN QUE TE PILLA EL GATO

Todos lo jugadores se ponen en círculo cogidos de las manos. El ratón y el gato están dentro del círculo al principio. Todos empiezan a cantar la siguiente canción: Estando la pastora, lará, lará. larito, estando la pastora, haciendo su quesito el gato la miraba, lará, lará, larito, el gato la miraba, con ojos golositos . Si me metes la uña te corto el hociquito, la uña le metió el hociquito le cortó. Ratón que te pilla el gato, ratón que te va a pillar, si no te pilla de noche, te pilla de «madruga». Cuando se

cante «el hociquito le cortó» empieza el ratón a correr y el gato tras él. Los dos entrarán y saldrán del círculo entre los compañeros que tienen los brazos en alto. Cuando se termina la canción los del círculo se agachan y el ratón y el gato se paran, si el ratón queda fuera del círculo y el gato dentro no lo ha pillado, pero si los dos quedan dentro o fuera del círculo, el gato pilla al ratón. En este juego pueden jugar tanto niños como niñas, ya que es un juego divertido donde se pasa un buen rato en el cual se divierten los dos por igual, porque no requiere habilidad ninguna extra.

LOS ZANCOS

Se hacen unos zanco de un material reciclado, normalmente se ponían dos latas de tomate, atravesadas por un hilo que llega hasta las manos del jugador. Al andar deben tirar de los hilos que controlan los zancos para poder levantarlos. No importa el número de personas que jueguen. Se marca una línea de inicio y una meta. Todos se colocan en línea y tras una señal salen lo más rápidos posible para poder llegar el primero a la meta. Los zancos también es un juego en el cual juegan niños y niñas, pero se lo solían poner más las niñas por el hecho de parecerse a los tacones, pero en cambio los niños se los ponían más para echar carreras, por lo tanto, jugaban los dos sexos por igual.

GALLINITA CIEGA

Se juega mediante un grupo de niños y niñas, como ejemplo, pondremos a cinco niños y cinco niñas, uno o una de ellos debe poner una venda tapándose los ojos, los

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compañeros en una zona determinada se mezclan entre ellos y dos deben coger a la “gallinita ciega” y darle unas vueltecitas mientras los demás corren. Cuando esa “gallinita ciega” pille a algún o alguna de sus compañeros, debe tocarle el cuerpo, es decir, qué ropa lleva, cómo tiene el pelo, lleva gafas o no..y así hasta reconocerlo y decir el nombre de esa persona pillada.

LOS CINCO CHINOS:

Se coge cinco chinos, se lanza hacia arriba y se tienen coger por la parte exterior de la mano, lo máximo posible. Si se caen algunos chinos, se tienen que coger con la mano se tienen los chinos que se recogen al principio. Si se caen todos, pierde el juego.

EL PIQUE

El juego consiste en una serie de participantes que lanzan monedas contra una pared. Si el segundo que lanza la moneda, cae a una distancia de una cuarta o menos, éste tiene derecho a quedarse con la moneda. Así el último, es el que tiene más posibilidad de ganar monedas. Este juego se solía practicar en la plaza del pueblo, normalmente en la pared de la Heladería Guillem según cuentan algunos. Lo practicaban tanto niños como niñas.

LOS CHINOS

El juego consiste en esconder detrás de la espalda en la mano derecha el numero de chinos que se deseen (1,2 o 3) y el jugador que posea el turno, debe acertar el total de chinos que hay en las manos derechas de todos los participantes. El que acierte tres veces se salva, por lo que el último será el perdedor. Este juego era practicado tanto por niñas como por niños. A veces también, se apostaba dinero

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EL PAÑOLITO

Hay dos equipo uno en frente de otro y una persona en medio con un pañuelo y cada componente de cada equipo le corresponde un numero y la persona que sostiene el pañuelo dice un numero. Aquellas personas que tengan ese numero de los dos equipo salen corriendo a por el pañuelo y quien coja el pañuelo y se lo lleva a su zona, gana un punto.

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