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INNOVADORES DE EL MUNDO > SALAMANCA Una aplicación para conocer los entresijos del deporte PÁGINA 3 CASTILLA Y LEÓN NÚMERO 255 / MARTES 6 DE OCTUBRE DE 2015 [email protected] twitter @InnovadoresCyL Innovadores CyL El Mundo > Síguenos en Pellets de paja que alimentan la caldera de biomasa en la fábrica de Quesos Cerrato de Baltanás (Palencia). / MANUEL BRÁGIMO El combustible más verde > LEÓN Manejar los aparatos electrónicos del hogar desde una caja PÁGINA 7 > Jane Delgado La vida tal como la conocemos PÁGINA 5 > Ainhoa Goñi Patas sobre mi piel PÁGINA 4 > Materia gris Fuente de broncas PÁGINA 8 > VALLADOLID Pedaladas para cargar las ‘pilas’ de las sillas de ruedas PÁGINA 2 La cooperativa palentina Agropal desarrolla un proyecto para producir combustible a partir de paja y resolver el problema con los restos de las cosechas La utilización de este material eficiente en la quesería de Baltanás supone un ahorro de costes del 55% respecto del uso de otras fuentes de energía Las emisiones de dióxido de carbono se reducen al sustituir el uso de combustibles fósiles muy contaminantes. Por Almudena Álvarez CREAMOS NUEVOS IMPULSOS

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Una aplicación para conocer los entresijos del deporte

PÁGINA 3

CASTILLA Y LEÓN NÚMERO 255 / MARTES 6 DE OCTUBRE DE 2015 [email protected]

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Pellets de paja que alimentan la caldera de biomasa en la fábrica de Quesos Cerrato de Baltanás (Palencia). / MANUEL BRÁGIMO

El combustible más verde

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Manejar los aparatos

electrónicos del hogar

desde una caja PÁGINA 7

> Jane Delgado

La vida tal como la conocemos

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> Ainhoa Goñi

Patas sobre mi piel

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> Materia gris

Fuente de broncas

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> VALLADOLID

Pedaladas para cargar las ‘pilas’ de las sillas de ruedas

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La cooperativa palentina Agropal desarrolla un proyecto para producir combustible a partir de paja y resolver el problema con los restos de las cosechas

La utilización de este material eficiente en la quesería de Baltanás supone un ahorro de costes del 55% respecto del uso de otras fuentes de energía

Las emisiones de dióxido de carbono se reducen al sustituir el uso de combustibles fósiles muy contaminantes. Por Almudena Álvarez

CREAMOS NUEVOS IMPULSOS

EL MUNDO DE CASTILLA Y LEÓN / AÑO III / MARTES 6 DE OCTUBRE DE 20154 INNOVADORES

A pesar de los intentos realizados para aprovechar la paja de cereal, lo cierto es que este residuo sigue siendo un problema para los agri-cultores. La cooperativa Agropal, que cuenta con más de 8.000 so-cios, agricultores y ganaderos de Castilla y León, se ha propuesto dar una respuesta a este problema, aprovechando la paja que les sobra a sus agricultores como combusti-ble y convirtiendo este residuo que solo generaba gastos, en una opor-tunidad de negocio. «Como la que-ma de rastrojos está prohibida, y la paja en la tierra tarda mucho en descomponerse y convertirse en humus, el agricultor se ve obligado a recogerla, empacarla y almace-narla, lo que conlleva unos costes no siempre rentables», resume Ja-cinto Hermoso, ingeniero técnico agrícola de Agropal.

De ahí el empeño de esta coope-rativa por desarrollar un proyecto de I+D para obtener un biocom-bustible a partir de la paja de ce-real, para utilizarlo en sus instala-ciones agroindustriales. Y, después de casi dos años de investigaciones, desarrollos y pruebas, y una inver-sión de 1,5 millones de euros, «he-mos desarrollado la tecnología que nos permite valorizar energética-mente este residuo», señala Hermo-so. El resultado ha sido la puesta en marcha de una caldera de vapor en la fábrica de Quesos Cerrato en Baltanás (Palencia), que usa la pa-ja del cereal como combustible.

Pero antes, había que conseguir el combustible idóneo y más efi-

ciente a partir de la paja. Por eso la primera parte del proyecto ha con-sistido en la fabricación de pellets de paja de cereal a nivel industrial y con un proceso de densificación, que ha permitido obtener pellets de paja «con una calidad equiparable a los mejores pellets de madera», explica el ingeniero y coordinador del proyecto. Porque, como aclara, lo novedoso no es hacer pellets de paja, que ya se usan en la alimenta-ción del ganado, sino darles un uso como combustible. Para ello ha ha-

bido que transformar la paja en gránulos, tal y como se hace con la madera, pero siguiendo un proceso determinado de mezcla con mine-rales, «para quemarlo como si fue-ra serrín de madera», explica.

Una vez conseguido el biocom-bustible a partir de una materia pri-ma agrícola se inició el proceso de fabricación de pellets en la planta de granulación que la cooperativa tiene en Villoldo (Palencia).

El siguiente paso fue adaptar las instalaciones de la fábrica de que-sos y demostrar la efectividad del nuevo combustible. Algo que se ha probado con éxito en la quesería, cuyas instalaciones de Baltanás

> PALENCIA

Calor eficiente con pellets de paja La cooperativa Agropal desarrolla un proyecto para producir combustible a partir de la paja y resolver el problema que tienen los agricultores con los restos de sus cosechas. Por A. Álvarez

«están quemando actualmente pa-ja y funcionando perfectamente», apunta Hermoso. Pero que obligó a salvar antes varios escollos. El pri-mero, fue solucionar el elevado porcentaje de cenizas que se pro-ducen al quemar la paja, en torno al 6%. «Las cenizas tienen mucho sílice y un alto contenido en mine-rales alcalinos, que desgastan la maquinaria», señala el ingeniero. A eso hay que añadir el coste que su-pone su eliminación, ya que hay que limpiar más a menudo los equipos e instalaciones. Además de

los problemas derivados de la for-mación de escorias que pueden en-torpecer el funcionamiento de los equipos.

El otro inconveniente era el ele-vado porcentaje de cloro que tiene la paja, lo que hace que este resi-duo sea muy corrosivo y que la temperatura de fusión de las ceni-zas sea más baja. La solución ha si-do el uso de calderas más robustas, con un sistema de extracción de ceniza fiable, solido y eficiente, y evitar llegar a temperaturas muy altas, para que no se formen esco-

rias que podrían atascar o romper la maquinaria. «Se ha buscado un equilibrio entre la temperatura de fusión de las cenizas y el rendi-miento de la caldera, para que se-an lo suficientemente altas como para ser eficientes», explica el co-ordinador del proyecto.

Es así como desde hace unos meses, la fábrica de quesos cuenta con una caldera de vapor de bio-masa en la que la paja ha sustitui-do como combustible al gas licua-do en el proceso de pasteurización de la leche, el cuajado, la concen-

Caldera alimentada con pellets en la fábrica de quesos de Cerrato en Baltanás (Palencia). / MANUEL BRÁGIMO

Tengo una amiga convertida en una bata de cola blanca y roja. Los lunares rojos enor-mes le rodean el cuerpo, tanto, que podría transformarse en la musa de cualquier dise-ñador de ropa flamenca.

Pero sus circulitos se irán, poco a poco, y bajará la inflamación. El proceso de «inspi-ración» no ha terminado, lo que ha termina-do es la irritación causada por uno de esos famosos zancudos tan típicos esta tempora-da en el Mediterráneo, aunque en otros paí-ses es un habitante de los peligrosos y des-de hace muchos años. Spray, pulseras, ma-

teriales reflectantes, trucos de la abuela; parece que nada funciona contra estos ejér-citos alados: los temidos mosquitos veranie-gos y los aún más recelados mosquitos ti-gre. Esta especie, ella solita, es capaz de transmitir enfermedades como la malaria o el chikunguña.

Y así, no sé si fruto de una demanda in-ternacional, o porque el problema ya está en nuestros jardines, equipos de investigación de todo el mundo trabajan en la actualidad para acabar con ellos de cualquier forma. La Universidad de Zaragoza ha dado un pa-

so muy interesante en este sentido; quiere incorporar insecticidas en los plásticos a través de microcápsulas que pudiesen deshacer-se poco a poco, para que la liberación del producto se realiza-se durante, por ejemplo, varios años. Además de que así es más prác-tico, lo que se busca es que siempre haya la misma cantidad de producto, porque estos malvados con alas tienen gran facili-dad para inmunizarse.

El planteamiento es bueno ¿para qué echarte el líquido encima si tus prendas pueden estar compuestas por él? Así buscan incorporar esta tecnología bautizada como

Inesfly en el calza-do, en mosquiteras y en prendas de ro-pa. Este invento es-tá ya presente en pinturas que pue-den utilizarse para cubrir las casas y protegerá así a sus habitantes de la te-mida picadura de estos mosquitos. Espero, evidente-mente, que esos productos puedan estar al alcance de los ciudadanos de los países más des-

favorecidos, esos primeros sufridores de unas plagas que se llevan las vidas de sus seres más queridos. Esos familiares a los que no pueden proteger ni tras el umbral de su hogar, porque la pobreza no entiende de muros ni de barreras.

AINHOA GOÑI

BLOG ‘Made in Spain’

Su utilización supone un ahorro de costes del 55% respecto del uso de otras fuentes de energía

Patas sobre mi piel

EL MUNDO DE CASTILLA Y LEÓN / AÑO III / MARTES 6 DE OCTUBRE DE 2015 INNOVADORES 5

«Hemos cerrado el círculo», se-ñala Jacinto Hermoso, coordi-nador del proyecto de I+D de-sarrollado por Agropal para aprovechar el excedente de pa-ja de cereal de sus socios y usar-lo como biocombustible que sustituya el consumo de com-bustibles fósiles en sus instala-ciones agroindustriales. «Por un lado tenemos la materia pri-ma, por otro, la necesidad de dar solución a un problema que tienen los agricultores, y, por último, las instalaciones donde usarlo», explica Hermo-so

Y se han conseguido los principales objetivos, «ahorrar costes de combustible y usar una materia prima que nos so-

bra para ser más competitivos y hacer los cultivos de los so-cios más rentables, ya que lo que hasta ahora supone un gasto puede ser una oportuni-dad más de negocio». De he-cho, el excedente de paja en la cooperativa que podría desti-narse a este proyecto ronda las 200.000 toneladas anuales. «El efecto colateral de estos dos objetivos es la mejora me-dioambiental por la vía de la re-ducción de las emisiones de CO2 a la atmósfera», agrega. Y además, las cenizas generadas en el proceso de combustión de los pellets de paja se usarán co-mo fertilizante en los suelos agrícolas, y así «cerramos el círculo», insiste el ingeniero.

JACINTO HERMOSO / COORDINADOR

«Usamos materia prima que nos sobra, para ser más respetuosos con el medio ambiente»

tración de suero y en los procesos de limpieza de equipos e instalacio-nes, donde se necesita vapor de agua a ocho o nueve bares de pre-sión. Una caldera que ha sido dise-ñada a medida de las necesidades de la quesería por un fabricante nacional, seleccionado por la coo-perativa entre varios fabricantes europeos. Se trata de «una caldera capaz de funcionar con un com-bustible tan novedoso y barato co-mo la paja». El desarrollo y la adaptación han sido complejos, pero la sustitución de un combus-

tible por otro ya está suponiendo un ahorro de entorno al 55% en los costes de consumo energético. Aunque todavía «la rentabilidad depende de una demanda conti-nua y estable en los procesos», puntualiza José Ramón Cebrián, del área de Ingeniería Industrial. «Por eso ahora se trabaja para me-jorar el rendimiento de la caldera, para que funcione bien en consu-mos altos y bajos, ajustando la pro-ducción a las necesidades para conseguir unos rendimientos me-jores», agrega.

Es difícil imaginarse que se pueda innovar en una empresa sin herramientas tecnoló-gicas. Nos comunicamos entre nosotros y trabajamos en colaboración con los demás de formas que hubieran sido imposibles ha-ce diez años. Nuestra capacidad de recabar grandes cantidades de datos y la rapidez con que los peinamos han cambiado de ra-íz todo lo que sabemos.

Los datos nuevos han llevado a desarro-llar soluciones para misterios que en otro momento consideramos fuera de nuestro

alcance. A principios de los años 2000 nos maravillamos de ser capaces de obtener el mapa del genoma humano. Hoy sopesamos las consecuencias de editar esos mismos genes que aún entendemos de forma muy primaria. El uso de la tecnología ha sido fundamental y estimulante.

Conforme avanzamos, debemos contes-tar a preguntas que no son de respuesta fá-cil. CRISPR (Repeticiones Palindrómicas Cortas Agrupadas y Regularmente Espacia-das) es la última técnica para modificar el

ADN. Es un proce-so que usa una en-zima para cortar un gen en un lugar concreto. Puede cambiar muchas cosas de la vida que conocemos pa-ra mejor o peor. La pregunta es quién decide cuál es la mejor forma, o la más correcta, de proceder.

El desarrollo de nuevos medica-mentos y la pro-ducción mejorada de una variedad de culti-vos son adelantos innovadores de los que la gran mayoría de la gente se alegra. Lo com-plicado es decidir qué hacer en los territo-rios comunes a la ética y el mundo empre-sarial.

La ciencia progresa mucho más rápido

que la normativa o que la capacidad de respuesta del gobier-no, y el mundo acadé-mico no es lo bastante ágil como para avan-zar al ritmo que se de-sarrollan sus propios procesos. El reto con-siste en que los líderes empresariales se plan-teen razonadamente las consecuencias de sus acciones no sólo pensando en los benefi-cios, sino en toda la hu-manidad. Estamos en

un punto de inflexión para el futuro del mun-do vivo. Las decisiones que tomemos hoy afectarán a la vida que conocemos.

Jane Delgado es presidente y CEO de la Alian-za Nacional para la Salud Hispana y experta de la Fundación de la Innovación Bankinter.

JANE DELGADO

LA VENTANA DEFundación Innovación Bankinter

/ ANSH

Además del ahorro de costes, se consigue un efecto muy beneficio-so para el medio ambiente, al redu-cir las emisiones de dióxido de car-bono (CO2) a la atmósfera, ya que la paja sustituye el uso de combus-tibles fósiles muy contaminantes como el petróleo, el gas o el car-bón. «De esta forma en Agropal y en Quesos Cerrato estamos contri-buyendo a mantener los campos limpios, a reducir el riesgo de in-cendios, y a disminuir la depen-dencia energética de nuestro país», señala Jacinto Hermoso. Porque el esfuerzo realizado en I+D no solo redunda en la cooperativa, sino que también «contribuye a mejorar el medio ambiente reduciendo las emisiones de CO2 y mejorando la huella de carbono en la fabricación de nuestros productos», insiste.

Pero la gran ventaja para los so-cios de la cooperativa, es que se da salida a un residuo, creando nue-

vas oportunidades de negocio. De hecho, solo la instalación de la cal-dera en Baltanás y el uso del nue-vo biocombustible, ya da salida a 2.000 toneladas de paja anuales. Aunque la idea de la cooperativa es poner en marcha otras instala-ciones que funcionen con el nuevo combustible para poder usar toda la paja que entreguen sus socios, contribuir a la rentabilidad de sus explotaciones, y reducir además el consumo de combustibles fósiles.

Pero además, en ese esfuerzo de I+D+i, Agropal trabaja ya el apro-vechamiento de las cenizas que se originan en el proceso de combus-tión de la paja. Para ello ha desa-rrollado una línea de investigación dirigida a usar esas cenizas como fertilizante, enriqueciéndolas para «hacer un abono inorgánico con el que fertilizar las tierras de los so-cios», concluye Hermoso.

Pellets de paja. / MANUEL BRÁGIMO

Las emisiones de CO2 se reducen al sustituir el uso de combustibles fósiles muy contaminantes

La vida tal como la conocemos