23/06/2014 23:20h Operador: digitalPublicación: 23 JUNIO 2014 Sección: BUZON SPCPágina: Sociedad 3 Edición: BUN

BUN

LOS DESTACADOSu

Álvaro Lodares Unión Editorial 168 páginas 16,64 euros

La soberanía jurídica pertenece al pueblo constituido en nación. El sobe-rano no es el Estado, es la gente. Así, los verdaderos patronos en el sistema económico son los consumidores.

Pobreza y mercado

Jenny Valentine Maeva 176 páginas 8,90 euros

La pobre Moni tiene que estar siem-pre pendiente de lo que haga su her-mana Nana, aunque tampoco se que-ja mucho porque estar con la niña es muy divertido. ¡Y más en verano!

Nana y yo de vacaciones

Joaquim Valls Obelisco 250 páginas 12,00 euros

El sobrepeso y la obesidad se han convertido en la pandemia del siglo XXI: afectan a una de cada dos per-sonas. ¿Quién no ha tenido en algún momento de su vida kilos de más?

Ligera mente

Maruja Torres Planeta 256 páginas 19,00 euros

La famosa periodista Ma-ruja Torres, con 70 años a sus espaldas y mil batallas en el recuerdo, arranca esta cita literaria frente al imponente edificio del periódico en el que ha he-cho la mayor y más fructífera parte de su vida profesional. El director de El Pa-

ís la ha citado en su despacho...

Diez veces siete

Ann Cleeves Maeva 488 páginas 19,90 euros

La bióloga Rachel Lambert llega a los Peninos del Norte, un fascinante paisa-je entre Inglaterra y Escocia, para lide-rar un proyecto medioambiental. Allí se encuentra a una amiga asesinada...

Una trampa para cuervos

LA SEMANA

? LUNES 23 DE JUNIO DE 2014

?DE LOS

El director Álex de la Iglesia se pasa a la novela más ne-gra n El realizador Álex de la Iglesia, que ha firmado éxitos tan sonados como El día de la bestia, Acción mutante o La comunidad, vuelve a la carga con su corrosivo humor negro, aunque esta vez lo plasma en pa-pel, en la novela Recuérdame que te odie, de Planeta, donde cuenta la historia de Bruno, un dibujante de cómic emocionalmente desequili-brado, que ha desaparecido. Cuando su editor, un hombre irascible y con pocos escrúpulos, entra en su casa, ve cómo el piso está inundado de agua. Hay un grabado de Durero que le da una pista...

EL DETALLE

LIBROS

Este pensador alerta del peligro de etiquetas morales como ‘inmigrante’ o ‘nacionalista’.

Es inevitable la lógica de la crueldad, porque es inevitable la categorización.

Entonces, ¿qué es lo que po-demos hacer?

No podemos vivir al margen de la moral, pero sí en los márgenes de la moral. La solución está en

mantener la tensión entre la mo-ral y la ética, entre la norma y la respuesta a una situación.

¿Es realmente posible una educación ética?

Es posible, y ahí es muy impor-tante el papel del testimonio. El que enseña a través del testimo-nio te dice lo que él ha hecho, no lo que tú tienes que hacer. A tus hijos les tienes que explicar las costumbres de tu país, pero mos-trar que hay momentos en los que uno tiene que saltarse la norma.

¿Se refiere al imperativo Hay que transgredir?

No es un imperativo. Es el de-seo de que la moral y la lógica de la crueldad no tengan la última pa-labra, de un mundo donde no sea-mos tratados como categorías.

EVA JIMÉNEZ / BARCELONA

Joan-Carles Mèlich Sangrà (Bar-celona, 1961) acaba de publicar

Lógica de la crueldad (Herder), un libro donde muestra la cara más perversa de la moral, y que es la continuación de Filosofía de la fi-nitud (2002, revisado en 2012) y Ética de la compasión (2010).

Me temo que su trilogía filo-sófica no tendrá tanto éxito co-mo otras. ¿Qué les diría a todos aquellos a los que no les atrae la Filosofía?

La Filosofía ha sido desde siempre un intento de enseñarnos una forma de vida basada en el pensamiento, la crítica, la duda. Si alguien no quiere hacerse pregun-tas, que no lea Filosofía.

En su libro presenta una vi-sión fundamentalmente negativa de la moral. ¿Por qué?

Intento hacer ver que la moral tiene una cara cruel que, normal-mente, no se pone encima de la mesa.

¿Toda lógica cruel suele aca-bar con violencia?

No necesariamente. Muchas veces la crueldad implica, simple-mente, una indiferencia. La vio-lencia es la agresión contra alguien concreto, en cuanto nombre pro-pio; en cambio, la crueldad, y la violencia derivada de la crueldad, no se ejerce contra alguien por el nombre propio, sino porque ha si-do clasificado como categoría.

¿Cómo es posible que una per-sona acabe siendo cruel consigo misma?

Eres cruel contigo misma, no cuando te contemplas como un nombre propio, sino cuando pien-sas en lo que se le exige a un pe-riodista, una madre, una hija, un ciudadano…

¿Cómo describiría usted la moral de la época que nos ha to-cado vivir?

Desde Kant, la moral se entien-de como un conjunto de normas, imperativos, valores, normas de decencia; que, además, se ponen por escrito y, lo que es peor, se crean comités de ética que te di-cen lo que tienes que hacer.

¿Qué le sugiere la categoría in-migrante?

Es un ejemplo clarísimo de ló-gica de la crueldad. Matar a un in-migrante no es lo mismo que ma-tar a un ciudadano de la Unión Eu-ropea. Ha sido clasificado y es tratado en función de esa clasifi-cación.

¿Y nacionalista y normaliza-ción lingüística?

Si alguien es clasificado, no co-mo nombre propio, sino por el he-cho de hablar español o catalán, y tratado en función de la misma, entonces se incurre en una lógica de la crueldad.

Usted no apela a la dignidad ni a los derechos humanos para solucionar los conflictos. ¿Cómo justifica dejar de lado lo que pa-rece incuestionable?

Estoy a favor de los derechos humanos. Lo que ocurre es que detrás de ellos hay una lógica de la crueldad. Porque se aplican a los que, previamente, han sido clasifi-cados como humanos.

Sin embargo, ¿no resulta de al-gún modo inevitable el lenguaje y la distinción, como usted mis-mo reconoce en su libro?

«NO LEAS FILOSOFÍA SI NO

DESEAS HACERTE PREGUNTAS»

«Detrás de los derechos humanos siempre hay una lógica de la cruel-dad, que puede ser la indiferencia»

ENTREVISTA

JOAN-CARLES MÈLICH SANGRÀ • ESCRITOR Y FILÓSOFO