Curso de Milagros 2 - 78

8/18/2019 Curso de Milagros 2 - 78

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LA UNIÓN ÍNTIMA

Entrelazamiento De La Obra De Georges Rouault Y El Mensaje De

“Un Curso De Milagros”

Con la teoría y práctica de Un Curso de Milagros , se nos posibilita haclectura nueva a eventos del pasado y corregirlos en el presente, bajo de nuestro propio Maestro Interno. El siguiente texto es una reinterprede la obra de Georges Rouault analizada a la luz de Un Curso de milo que nos ha permitido develar el lenguaje silencioso de lo qpermanecido implícito en su obra para otorgarle una significación correlaciona perfectamente con los postulados del curso. Al tradu

imágenes en palabras, éstas se fusionan perfectamente, descubpuntos comunes que enriquecen tanto al uno como al otro posibilitamáxima comprensión de ambos y ayudándonos a transmitir el mensuna forma coherente, fiel e inequívoca.

La obra de arte, sin importar cual sea su género, admite varias lecturaen su reinterpretación que se le puede otorgar un sentido diametradiferente al que comúnmente se le ha dado. No puede haber nadapropiado, perfecto y puntual, que el mensaje de Jesús en Un CuMilagros para reinterpretar la magna obra de este honesto pintor,siempre sostuvo firmemente que su arte provenía de una visión interio

El Espíritu Santo es el mediador entre las interpretaciones del egconocimiento del espíritu. Su capacidad para utilizar símbolos le pactuar con las creencias del ego en el propio lenguaje de éste. Su cappara mirar más allá de los símbolos hacia la eternidad le permite en

las leyes de Dios, en nombre de las cuales habla. Puede, por consigllevar a cabo la función de reinterpretar lo que el ego forja, no mediadestrucción, sino mediante el entendimiento. El entendimiento es luz, conduce al conocimiento. El Espíritu Santo se encuentra en la luz porestá en ti que eres luz, pero tú desconoces esto. La tarea del Espírituconsiste, pues, en reinterpretarte a ti en nombre de Dios. (T.5.III.7Curso de Milagros, 1976)

Referencias Bibliográficas

Foundation For Inner Peace (1976). Un curso de Milagros. NewFundación para la paz interior.



“UN ARTE QUE SURGE PROFUNDAMENTE DESDE

LA VISIÓN INTERIOR”

Introducción

En 1995 comencé a dar clases sobre Un Curso de Milagros en una librerciudad de Medellín. En ese entonces me negaba rotundamente a reconautoría del curso por muchas razones; como psicólogo, pretendíaexclusivamente un enfoque psicológico al material, por temor a ser juzgadmaestro de catequesis. No es que hubiese nada malo en ello, simplememe sentía cómodo.

En una de las charlas alguien me incitó para que hablara de Jesús en Unde Milagros , y ¡no pude hacerlo! El terror me invadió. Entre en una confrointerior de la cual sólo logré expresar: “Necesito ayuda, porque ¡yo no lo cr

Como el mismo texto del curso lo indica: “En alguna parte todos los regDios tienen que ser recibidos. En el tiempo ningún esfuerzo puede hacevano” . (P.2.V.7.1) (Un Curso de Milagros, 1976)

La petición de ayuda recibió respuesta. Sin embargo, tarde mucho en recoy aceptarla. Y tardé mucho más en poder decir con certeza: Un CuMilagros es el mapa que elijo de por vida. No me queda la menor duda. Csu Mente Resurrecta, creo en su palabra y dirección certera, enseñadasCurso de Milagros .

Ese mismo día, después de haber pedido ayuda, buscaba en elDiccPequeño Larousse en color , la palabra expiación. Y allí, hace 17 añosprimera vez en mi vida que vi una obra de un pintor llamado Georges Routítulo de la obra es La Santa Faz .

Nunca en mi vida una pintura me había impactado y llamado la atención dtan sorprendente como lo hizo esta. Tenía una vaga pero persistente sen

de que tenía todo que ver con mi trabajo en el Curso de Milagros . Relatentemente que en los inicios de esta búsqueda que llegó de forma cauhabía ninguna dirección o derrotero a seguir. En un principio fue corompecabezas, con sus fichas amontonadas y en total desorden. No veíclaro ni vislumbraba a donde se dirigía todo esto. Me encontraba sedientinstante de armar este rompecabezas, que acopla perfectamente la filosUn Curso de Milagros con la obra de Georges Rouault. Con el tiempo,llenando de documentos, libros e imágenes, de la vida y obrade Rouaultras hora, día tras día, año tras año, este rompecabezas fue tomandolentamente. La dirección a seguir, ya era clara y directa. Ambas, se fundiendo como una amalgama. Ver pictóricamente la filosofía de Un CMilagros es para mí una experiencia que me permite asimilar el dictado dede una forma más clara, puntual y directa.



El pintor de la experiencia humana

Georges Rouault, nació en París el 27 de mayo de 1871 y murió en la mcapital francesa el 13 de Febrero de 1958.

Me sorprende que este gran artista, con su recorrido, su legado, su filosofvida, entrega total y un compromiso pleno en la búsqueda introspectivadesconocido y poco mencionado. En 1995, conocí de forma causal la obreste pintor, y hasta el día de hoy no me ha dejado de maravillar la puhonestidad y transparencia de este hombre. Georges Rouault, desde el inicsu carrera y durante todas sus etapas creativas sostuvo firmemente y sin duque su arte proviene de un llamado interior,una visión interior , en sus prpalabras.

El niño Jesús entre los doctores , es una obra maestra creada con tan so

años de edad y marca la entrada de este visionario, de este peregrino delcomo se definía a sí mismo en el camino del arte. Contemplarla es un dePara comprenderla mejor en su esencia, la lectura de la lección número 18Un Curso de Milagros (1976): “Permaneceré muy quedo por un instante e iréa mi hogar". Es una bella experiencia. Hazlo....

Somos libres de hacer interpretaciones y lecturas de lo que tenemos frennosotros. Más aún cuando con júbilo comenzamos a sentir una punzadasospecha indescifrable, un instinto secreto que nos hace sentir que alaquello que observamos, existe la fuente de un eco infinito. Cuandocomprometemos con honestidad y somos perseverantes para seguir las pisseñales de nuestra propia voz interior, observamos maravillados el devenacontecimientos entrelazados que nos conducen inevitablemente a udeseado. Más aún, en esos momentos en los que sentimos que en aquelloleemos, no estamos solos, a la deriva y sin dirección.

Y así, en cada paso firme que damos en esa dirección inequívoca, la certezacercarnos más a la esencia y el mensaje silencioso de lo que hay en ellonosotros, sentimos que reina un orden verdadero, y viene indudablemacompañado de un sentimiento de júbilo y una seguridad que afianza nuesperanza, fortalece nuestra confianza y nos inunda de una fe inquebrantabl

A lo largo de 17 años, he podido recopilar un buen material acerca de la vobra de Georges Rouault. Me he encontrado una gran variedad de críticapreciaciones de otros sobre su vida y obra. Algunas las considero incompdebido a que sus apreciaciones sólo se centraron en alguna etapa de su otras las he encontrado acertadas, puntuales y profesionales y otras carentes de dirección, con expresiones y juicios sin fundamento.

El Niño Jesús entre los doctores, 1894. Obtiene el premio Chenavard, (24 años)

"Permaneceré muy quedo por un instante e iré a mi hogar"

(Lección 182 - UCDM)



tas últimas, son comprensibles desde el punto de vista de aquellos que solodieron juzgar desde su propia visión y su propia experiencia porque la obra deorges Rouault es inequívoca y tiene un derrotero muy bien marcado descendencia, que es obvio y latente, para quien contemple la totalidad de su obra,principio a fin.

l análisis del conjunto de la obra de Georges Rouault, como ya lo heencionado, han surgido varias interpretaciones. Algunas de ellas lo leenralmente sin profundizar en la filosofía y carácter del autor señalando que su lor oscuro y pesados perfiles, negros, son la expresión de un concepto de la vidasimista y oprimida por una sensación de culpa, que induce a desesperar de lalvación en este mundo “Rouault siempre mantuvo un contacto estrecho, y concuencia amargo, con la vida. Sus personajes… hablan el mismo lenguaje delor y sufrimiento” (Ediciones Polígrafa, 1997)

mbién es bien comprensible la reacción inicial de todos aquellos amigos, críticosperiodistas al ver el cambio radical en la obra de aquel joven pintor, quienometía ser uno de los mejores y quien pudo haberse forjado una gran fortunaro que deja todo a un lado, para seguir obediente a su visión interna.

esde los años iniciales de nuestro siglo hasta el final de la primera guerra mundialouault no consigue vender casi nada. Su mujer tiene que mantener a la familiando clases de piano. Los críticos le injurian o se burlan de él calificando susrsonajes como «tristes caricaturas, hechuras de odio y repulsión» o comoreaciones de un orate» (Koja, p19)

orges Rouault, jamás desfalleció en seguir fielmente su llamado interno. Siempremantuvo firme a su visión interior , por encima de las duras e insultantes críticasemoledoras expresiones sarcásticas que muchos lanzaron contra él, incluso, sus

ejores “amigos”. Su inquebrantable certeza, y fidelidad a la visión interior, leotivó a sobrepasar estas críticas.

llamaron “Pintor de las tinieblas y de la muerte… Pintor maldito… Melancólico,

órbido, apóstol de la fealdad, misógino intocable” (Rouault, 2007, p32). Afirmarone “Existía un Rouault que era un pintor serio, pero hay otro que es unasón” (Robador, p134). Lo acusaron de hereje: “Si fuerais un hombre de plegaria,eucarístico, un obediente, no podríais pintar esas horribles telas; un Rouault

paz de la profundidad sentiría un poco de terror” (Romero Brest, 1979).

Su “amigo” León Bloy, crítico y novelista de la época mostró su desconciertormando: “Trato en vano de entender cómo puede ser que un artista que es

stamente lo contrario a un ignorante o vil , el único que todavía le hace recordar ao un poco a Rembrandt, pueda dedicarse a esa abominable caricatura en la quemás viril pintura de nuestro tiempo se ve mortalmente degradada”. (Sin

erencia)

Otros más lo atacaron por la estética de sus obras: “A usted sólo le atraeparecería tener una suerte de vértigo de fealdad...” (Umbrales Nº 142, 2como diría Dorival (p83): “Este artista (…) no parece concebir más que caricaturas. La infamia burguesa opera en él una repercusión tan violenta deque su arte parece herido de muerte”

Rouault, con su inquebrantable voluntad y el fulgor de una mente desresponde con una visión clara: “¡No! ¡No! Nunca me harán decir pictóricamque yo no he querido decir” (Rouault, 2007, p38). “Yo no soy aquel que creeesos augures, ni el anarquista militante hacia un arte de condenación total soy un obediente, sea cual sea mi debilidad. Mi nombre es Fiel.” (Rouaultp185).

Para aquel entonces, era muy comprensible el desconcierto de todos. Sin emhoy en día podemos contemplar el conjunto de su esfuerzo y reorientarlo

dirección inequívoca como pintor de la luz. Georges Rouault, siempre cexcelentemente su firme postulado, tal y como lo expresó:

Soy obediente, pero todo está a punto de revelarse, [puesto que] es máobedecer en silencio a ciertas llamadas interiores y pasar la vida buscanmedios de expresión sinceros y apropiados a nuestros temperamentos o a ndones, si es que los tenemos […] He podido ser «presidiario» una parte de y asumir los retos de la necesidad sin desviarme de una cierta línea intvender mi libertad inalienable, único bien en el que creo; Bien sólido e invisiblos ojos de tanta gente resignada ante lo que considera quimérico (Rouaulp111 y 180).

Georges Rouault encuentra en la obra del viejo Rembrandt, un estrecho tanto espiritual como artístico, que por obvias razones respondían perfectamlas suyas. La influencia de Rembrandt en Rouault, podría resumirse acertaden unas frases suyas en las que habla de “otra cosa otra parte”, y “secretode unión” y dónde afirma con toda su emoción:

Estando todavía en la Escuela, de vez en cuando solía ir a la biblioteca a acon lágrimas en los ojos, una indicación de Rembrandt […] Prefiero estar vida embrujado por Rembrandt que maquillarme a una moda del momento me conviene en absoluto (Robador, 2004, p89).

Sin embargo, esa influencia, ese ciclo aparentemente interminable que a untiempo se renueva, donde el mundo exterior va palideciendo, mientras un interior se ilumina más y más y se dilata, motivan a Rouault a encontrar sus medios de expresión para reinterpretarse. Para decir lo que tenía que decir su postulado muy claro, para volver a bajar a Jesús de la cruz y resucitarlemedios de expresión muchos más drásticos y directos, sin escatimar esfusin vacilar.



orges Rouault, sediento de verdades profundas, con una necesidad interiorremiante, y una visión más ardiente y penetrante que le impulsan a encontrar surdadera función como maestro, vislumbra que al hallarla, experimentarla, vivirla,totalidad de su obra es una experiencia universal que se eleva por encima de superiencia personal. Y con imágenes, plasma el derrotero para trascender landición humana a una experiencia de júbilo y esperanza. Su obra nos señala landa a recorrer, permitiendo que esquivemos los abrojos del camino. Tal como dijorival (1963, p60) “La humanidad de Rouault ha cambiado —reflejo del cambio devida Interior—.”

uault, en su etapa de madurez, después de haber superado todos los altibajos yntratiempos que pudo haber acarreado en su búsqueda, encuentra su propiaa. Camina ya libre por su senda, sin esa pesada carga. Podríamos preguntarnos,

Qué fue lo que permitió este cambio tan radical en su obra? La explicación másropiada para este suceso, la podemos encontrar en Claudio Roulet:

acia el atardecer, se había vuelto menos severo, me parece a mí, hacia laciedad y hacia los hombres que había conocido: es la única diferencia, no es que

hubiera dulcificado mucho con la edad y los honores, no, sino queobablemente, supongo, esta es mi explicación, había perdonado (Roulet, 1956,).

aquí el milagro. Rouault, halla jubilosamente su propio derrotero. Señalándonoscamino y la dirección para transitar con confianza, de la duda a la certeza, de lacuridad hacia la luz, del miedo al amor. El perdón, el absoluto perdón, es la líneaítrofe. Este es el punto donde todos y cada uno de nosotros debemos cruzar, si

almente queremos transitar libres de equipaje y trascender de la ilusoria creenciala miseria a una jubilosa, serena y permanente paz.

uault ha señalado el camino, como muchos otros. Es latente en su obra elregrinaje que recorremos en el ilusorio mundo. Es un guía, que nos ha dejado

asmado en su obra y vida, desde su propia visión interior. He aquí la paz que nospera a todos, cuando hayamos perdonado completamente.

uellos que quieren liberar a sus hermanos del cuerpo no tienen miedo. Pues hannunciado a los medios del pecado al elegir que se eliminen todas susitaciones. Puesto que desean ver a sus hermanos bajo el manto de la santidad,poder de su creencia y de su fe ve más allá del cuerpo, facilitando la visión, nostruyéndola. Pero antes de eso decidieron reconocer lo mucho que su fe habíaitado su entendimiento del mundo, y desearon depositarla en otro lugar en casoque se les ofreciese otro punto de vista. Los milagros que siguen a esta decisióncen también de la fe. Pues a todos aquellos que elige apartar su mirada delcado se les concede la visión y se les conduce a la santidad (T.21.III.8.4) (Unrso de Milagros, 1976)

¿Dónde ha depositado Georges Rouault su fe?

En el caso de Rouault, hay que decir ante todo que él jamás habló sobcreencias religiosas, tal y como señala su hija Geneviève: “Nunca fue conversar sobre aquello que concernía al ámbito espiritual, al suyo. Ámbpermanecerá toda su vida estrictamente secreto(Robador, 2004, p126).

De hecho, según cuentan sus biógrafos, Rouault consulta a un sacerdote, qda una respuesta no demasiado meditada: le aconseja que pinte cuadrpuedan venderse. El artista se siente profundamente herido. “Amo mapasionadamente y hay un creciente conflicto entre este arte y la religióprecisamente en el momento en que yo más necesitaba la religión, las opinlos consejos de católicos muy creyentes y respetables me han desconceUsted sabrá en qué situación se encuentra un artista que se siente tan abs

por su arte que este hecho le hace contemplar con melancolía la posibilidad el conflicto termine en un deplorable abandono de la religión” (Koja, 1995, p1

No es prioritario tratar de profundizar en su ámbito espiritual. Lo que reaimporta y es esencial, es la nueva lectura de la obra de Rouault, que se ha hacer aquí y ahora, con la filosofía de Un Curso de Milagros, en la cual, amcomplementan perfectamente, para reforzarse y acompañarse mutuamenteuna mejor comprensión de ambas bajo una misma mirada.

Su vida y obra, son una transposición de su vida interior, de ahí que a vehaya sido plenamente comprendido. Ha sido etiquetado como un hombre profesado la teología tradicional. Sin embargo ¿no nos dice la totalidad de s(Reinterpretada), las mismas palabras de Un Curso de Milagros? :

“Uno de los principales dogmas de la descabellada religión del ego es pecado no es un error sino la verdad, y que la inocencia es la que prengañarnos. La pureza se considera arrogancia, y la aceptación de nues

como algo pecaminoso se percibe como santidad. Y es esta doctrina substituye a la realidad del Hijo de Dios tal como su Padre lo creó, y tadispuso que fuese para siempre. ¿Es esto humildad? ¿O es más bien un intdesgajar a la creación de la verdad, y de mantenerla aparte?” (T.19.II.4.1Curso de Milagros, 1976)

Georges Rouault expresó: “Poco a la medida de mis contemporáneos, mepintor de la noche y de la muerte, pero yo no soy un desesperado, incondenado, como algunos han creído necesario subrayar sin haber vconjunto de mi esfuerzo” (Roulet, 1956, p3). “Todos mis esfuerzos tienden hVerdad y hacia la Belleza” (Robador, 2004, p227).



exploramos “el conjunto de su esfuerzo”, es indudable que podremos vislumbraregado del cual era portador.

do ese esfuerzo continuo y permanente para llevar a cabo su función comoaestro, se compagina de forma perfecta con la filosofía de Un Curso de Milagros .nto la una como la otra, están hechas para sí mismas. La obra de Georgesuault, es un canto de fe y de alegría. Es la ilustración colorida de la enseñanzaJesús en su Curso de Milagros.

rge Raúl

ferencias Bibliográficas

rival, B. (1963). Rouault. Barcelona: Editorial Fontanella S.A.

iciones Polígrafa S.A. y Globus Comunicaciones S.A (1997). Georges Rouault, laelidad a la visión interior .

orge Rouault, un pintor. (Octubre 2003). Revista Umbrales. Nº142.Publicado en:p://www.chasque.net/umbrales/rev142/30_31.htm

ja, S. (Octubre – noviembre 1995). Georges Rouault: Grandeza y miseriamanas. Guadalimar: Revista de artes. Nº 129 . España.

bador, O. (2004). Georges Rouault, al margen de las doctrinas. España:

iciones Universidad de Navarra S.A.

mero Brest, J. (1979) La pintura en el siglo XX (1900-1974. Fondo de culturaonómica.

uault, G. (2007). Sur l’art et sur la vie . Paris: Editions Denoël.

ulet, C. (1956) Rouault: Souvenirs. Editions H. Messeiller, Neuchatel.

http://www.chasque.net/umbrales/rev142/30_31.htm

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Aprender este curso requiere que estés dispuesto a cuestionar cada unovalores que abrigas. Ni uno solo debe quedar oculto y encubierto, pues ello en peligro tu aprendizaje. Ninguna creencia es neutra. Cada una de ellas poder de dictar cada decisión que tomas. Pues una decisión es una conbasada en todo lo que crees. Es el resultado de lo que se cree y emana decomo el sufrimiento es la consecuencia inevitable de la culpabilidad, y la lide la falta de pecado. La paz no tiene substitutos. No hay alternativa paraDios crea. La verdad surge de lo que Él sabe. Y así como toda la creación su

Su Mente por razón de lo que Él sabe, del mismo modo tus decisiones procetus creencias. (T.24.IN.2.1-10)

No dejes que la luz del mundo, la cual te ha sido concedida, permanezca ocmundo. El mundo necesita la luz, pues es ciertamente un lugar sombríohombres se desesperan por haber negado la visión del salvador y lo que vemuerte. Su salvador se encuentra ahí, desconocidamente y desconocidocontempla con los ojos cerrados. Y ellos no podrán ver hasta que él los concon ojos videntes y les ofrezca el perdón que se ofrece a sí mismo. ¿Podríquien Dios exhorta: "¡Libera a mi Hijo!" caer en la tentación de no escuchvez que te has dado cuenta de que es tu propia liberación la que Él pide? otra cosa sino ésta pretende enseñar este curso? ¿Y qué otra cosa sino éstaque aprender? (T.31.VII.15.1-7)

Al Espíritu Santo se le describe a lo largo del curso como Aquel que nos ofrespuesta a la separación y nos trae el plan de la Expiación, al asignarnos eespecial que nos corresponde desempeñar en dicho plan y mos

exactamente en qué consiste. Él ha designado a Jesús como el líder para cabo Su plan, ya que Jesús fue el primero en desempeñar perfectamente suSe le ha dado pleno poder en el Cielo y en la tierra, y lo compartirá contigo ctú hayas desempeñado el tuyo. El principio de la Expiación le fue dado al Santo mucho antes de que Jesús lo pusiese en marcha. (C.6.2.1-4)



MISERERE Y GUERRA

Un Rechazo Profundo Y Radical De La Mentira Y La Hipocresía.

Miserere y Guerra fue una serie realizada entre 1914 y 1927 que tardó publicada hasta 1948. El grabado ocupó un lugar importante en la obra de GRouault destacando entre sus series la del Miserere , donde represennítidamente la condición humana (ego), y su veneración de la musufrimiento, el dolor, la enfermedad, y la miseria, consecuencias inevitablecreencia inculcada en el pecado.

Es esencial que no se confunda el error con el pecado, ya que esta distincióque hace que la salvación sea posible. Pues el error puede ser corregidtorcido, enderezado. Pero el pecado, de ser posible, sería irreversible. La c

en el pecado está necesariamente basada en la firme convicción de que mentes, y no los cuerpos, las que atacan. Y así, la mente es culpable y siempre, a menos que una mente que no sea parte de ella pueda dabsolución. El pecado exige castigo del mismo modo en que el errocorrección, y la creencia de que el castigo es corrección es claramente una(T.19.II.1.1-4) (Un Curso de Milagros, 1976)

Si bien es claro que la serie Miserere es una reflexión sobre la muertealegato contra todas las guerras y, en última instancia, contra toda fobarbarie. También es bastante claro y revelador que Georges Rouault, dopor una urgencia catártica de expiación, un hombre libre de hipconvenciones y demasiado independiente para sujetar sus creacionesexigencias de un dogma, se insurreccionó con un urgente impulso interiorpenetrante visión, para sondear las profundidades del espíritu.

En Miserere , George Rouault plasma algo revelador. Desveló con su oficio c“pecado original” , esa limitante creencia que había sido inculcada desde siemmás escondida, más profunda y universal, había causado la mayor deva

jamás infligida en la mente humana.

Como bien lo afirma el Anexo a Un Curso de Milagros (2004): “Este es el cdel ‘pecado original’: la creencia de que la culpa es real y está completa justificada”. (P.2.IV.10.6)

La fuerza que se contiene en su arte es de raíz psicológica, no religiosa. GRouault, debería volver a encontrar, de manera más directa y profunrespuesta de otra locura, la locura de la cruz. Es obvio, que en sus pinturas scrucifixión Jesús descansa sus pies sobre tierra firme y sus brazos, en vez dclavados a la cruz parecen abrirse para proteger a sus semejantes.



viaje a la cruz debería ser el último "viaje inútil". No sigas pensando en él, sinolo por terminado. Si puedes aceptarlo como tu último viaje inútil, serás libre

mbién de unirte a mi resurrección. Hasta que no lo hagas, estarás desperdiciandovida, ya que ésta simplemente seguirá siendo una repetición de la separación, depérdida de poder, de los esfuerzos fútiles que el ego lleva a cabo en busca dempensación y, finalmente, de la crucifixión del cuerpo o muerte. Estaspeticiones continuarán indefinidamente hasta que voluntariamente se abandonen.o cometas el patético error de "aferrarte a la vieja y rugosa cruz". El únicoensaje de la crucifixión es que puedes superar la cruz. Hasta que no la supereses libre de seguir crucificándote tan a menudo como quieras. Éste no es elangelio que quise ofrecerte. Tenemos otro viaje que emprender, y si leesidadosamente las lecciones que aquí se ofrecen, éstas te ayudarán a preparartera emprenderlo. (T.4.IN.3.1-11) (Un Curso de Milagros, 1976)

orges Rouault, es un analista agudo de la psicología y naturaleza humanas, condiscernimiento muy sutil hacia todo lo hipócrita, fariseo y falso, que despierta en

una repugnancia profunda y violenta hacia todo lo que inculcó el establecimiento,e dio albergue al ego.

Miserere cada plancha va acompañada de un título. Se dice, que los títulos deda grabado hacen eco a la imagen para lograr un golpe certero, violento en lansciencia de quien los contempla; sin embargo, si se lee con una ópticaerente, basada en la Mente Resurrecta de Jesús, este eco retumbará en lansciencia, refrescándola renovándola y transformándola con un Mensaje deperanza y certeza, que cambiará completamente la forma de pensar, donde éstará corregida y reinterpretada.

n Curso de Milagros no es un movimiento, ni una religión; no es otra iglesia. Esás bien un sistema de entrenamiento mental, para que cada uno encuentre suopio camino hacia Dios, bajo la dirección de su propio Maestro Interno. Y como

afirma en Un curso de Milagros: “Una teología universales imposible. Mientrase una experiencia universal no sólo es posible sino necesaria” (C. in 2.5) (Unrso de Milagros, 1976)

curso es un dictado de la Mente Resurrecta de Jesús, para corregir y transformardos aquellos pensamientos que se quedaron incrustados de forma limitante en landición humana (ego). Jesús al hacer una reinterpretación de las escrituras en su

urso de Milagros , nos ofrece caminar por una senda más despejada, bajo sumorosa, firme y certera dirección.

Este curso procede de él porque sus palabras llegan a ti en un lenguapuedes amar y comprender. ¿Puede haber otros maestros que señalen el caaquellos que hablan lenguas distintas y recurren a símbolos diferentesupuesto que sí. ¿Dejaría Dios a uno sólo de Sus Hijos sin una ayuda muytiempos de tribulación, sin un salvador que lo representase? Aun así, necesun programa de estudios polifacético, no porque el contenido sea diferenporque los símbolos tienen que modificarse y cambiar para poder ajustarsdiferentes necesidades. Jesús ha venido a responder a las tuyas. En él halRespuesta de Dios. Enseña, entonces, con él, pues él está contigo; él siempaquí. (M.23.7.1-8) (Un Curso de Milagros, 1976)

El Miserere y Un Curso de Milagros, se funden como una amalgama paraapreciar palpable e inequívocamente el verdadero mensaje de Jesús, reinterpretación de las escrituras.

Referencias Bibliográficas

Foundation For Inner Peace (1976). Un curso de Milagros. New York: Funpara la paz interior. Fundación para la paz interior (2004). Anexo a un curso de Milagros. NewFundación para la paz interior.



“Ten piedad de mí, oh Dios,

conforme tu gran misericordia”.

Cuando hayas aceptado la Expiación, te darás cuenta de que no hay culpaalguna en el Hijo de Dios. Y sólo cuando veas su inocencia podrás entenunicidad. Pues la idea de la culpabilidad da lugar a la creencia de que apersonas pueden condenar a otras, como resultado de lo cual, se pseparación en vez de unidad. Sólo te puedes condenar a ti mismo, y hacerimpide reconocer que eres el Hijo de Dios. Has negado la condición existencia, que es su perfecta irreprochabilidad. El Hijo de Dios fue creaamor, y mora en el amor. La bondad y la misericordia le han acompañado spues él jamás ha dejado de extender el Amor de su Padre. (T.13.I.6.1-7)

La santidad espera serenamente en el templo el regreso de aquellos que laLa Presencia sabe que ellos retornarán a la pureza y a la gracia. La misericoDios los admitirá con gran ternura, desvaneciendo toda sensación de pérdida con la garantía inmortal del Amor de su Padre. Allí el miedo a la será reemplazado por la alegría de vivir, pues Dios es Vida, y ellos moraVida. La Vida es tan santa como la Santidad mediante la que fue creaPresencia de la santidad vive en todo lo que vive, pues la santidad creó la vipuede abandonar lo que creó tan santo como ella misma. (T.14.IX.4.1-7)

No hay ninguna parte del Cielo de la que puedas apropiarte y tejer ilusiones Ni hay una sola ilusión con la que puedas entrar en el Cielo. Un salvador noser un juez ni la misericordia puede ser condenación. Y la visión no condenar, sino únicamente bendecir. Aquel Cuya función es salvar, salvarálo ha de lograr está más allá de tu entendimiento, pero cuándo lo va a hacen tus manos. Pues el tiempo es una invención tuya y, por lo tanto, lo gobernar. No eres esclavo de él ni del mundo que fabricaste. (T.22.II.8.1-8)

Los esclavos del deseo de ser especial se liberarán. Tal es la Voluntad de Dde Su Hijo. ¿Se condenaría Dios a Sí Mismo al infierno y a la perdición? ¿Yacaso lo que dispones para tu salvador? Dios te llama a través de él a unirtVoluntad para que ambos os salvéis del infierno. Observa las marcas de losen las manos que te extiende pidiendo que le concedas tu perdón. Dios te ptengas misericordia con Su Hijo y con Él. No se la niegues a ninguno de los único que te piden es que se haga tu voluntad. Buscan tu amor a fin de qupuedas amar a ti mismo. No ames tu deseo de ser especial en vez de amEllos. La marca de los clavos está también en tus manos. Perdona a tu Pque no fuese Su Voluntad que tú fueses crucificado. (T.24.III.8.1-13)



Jesús infamado…

Una semana es poco tiempo, sin embargo, la Semana Ssimboliza la jornada que el Hijo de Dios emprendió. Él comenzóel signo de la victoria, la promesa de la resurrección, la cual ya había concedido. No dejes que caiga en la tentación de la crucni que se demore allí. Ayúdale a seguir adelante en paz más aella, con la luz de su propia inocencia alumbrando el camino hacredención y liberación. No le obstruyas el paso con clavos y es

cuando su redención está tan cerca. Deja, en cambio, qublancura de tu radiante ofrenda de azucenas lo acelere en su cahacia la resurrección. (T.20.I.3.1-6)

Hazle a tu hermano la ofrenda de las azucenas, no la de una code espinas; el regalo del amor, no el "regalo" del miedoencuentras a su lado, con espinas en una mano y azucenas otra, indeciso con respecto a cuál le vas a dar. Únete a mí adeshazte de las espinas y, en su lugar, ofrécele las azucenas. 20.I.2.5-7)

Gozas ya de la visión que te permite ver más allá de las ilusiSe te ha concedido para que no veas espinas, ni extraños, ni nobstáculo a la paz. El temor a Dios ya no significa nada pa¿Quién temería enfrentarse a las ilusiones, sabiendo qu

salvador está a su lado? Con él a tu lado tu visión se ha conveen el poder más grande que Dios Mismo puede conceder desvanecer las ilusiones, pues lo que Dios le dio al Espíritu Sanlo has recibido. El Hijo de Dios cuenta contigo para su liberaPues tú has pedido -y se te ha concedido- la fortaleza para penfrentarte a este último obstáculo, y no ver clavos ni espinascrucifiquen al Hijo de Dios y lo coronen como rey de la muert20.II.7.1-8)



Siempre flagelado…

Elegí, por tu bien y por el mío, demostrar que el ataque más a juicio del ego, es irrelevante. Tal como el mundo juzga estas más no como Dios sabe que son, fui traicionado, abandogolpeado, atormentado y, finalmente, asesinado. Está claro que edebió únicamente a las proyecciones de otros sobre mí, ya que le había hecho daño a nadie y había curado a muchos. (T.6.I.9.1

En última instancia, sólo el cuerpo puede ser agredido. No cabede que un cuerpo puede agredir a otro, y puede incluso destruirembargo, si la destrucción en sí es imposible, cualquier cospueda ser destruida no es real. Su destrucción, por lo tanto, no jutu ira. En la medida en que creas que la justifica, estarás aceppremisas falsas y enseñándoselas a otros. El mensaje de la crucfue precisamente enseñar que no es necesario percibir ninguna de ataque en la persecución, pues no puedes ser perseguireaccionas con ira, tienes que estar equiparándote con lo destruy, por lo tanto, viéndote a ti mismo de forma demente. (T.6.I.4.1-7

Sin embargo, no se le puede realmente crucificar. En este radica tanto su dolor como su curación, pues la visión del ESanto es misericordiosa y Su remedio no se hace esperar. No o

el sufrimiento de Su vista, sino llévalo gustosamente ante Él. Deante Su eterna cordura todo tu dolor, y deja que Él te curpermitas que ningún vestigio de dolor permanezca oculto de Su escudriña tu mente con gran minuciosidad en busca de cuapensamiento que tengas miedo de revelar. Pues Él sanarápensamiento insignificante que hayas conservado con el propósherirte a ti mismo, lo expurgará de su pequeñez y lo restituirágrandeza de Dios. (T.13.III.7.1-6)



Se refugia en tu corazón,

mendigo en desgracia.

He aquí el único hogar que cree conocer. He aquí la única segque cree poder encontrar. Sin ese mundo que él mismo construsiente como un paria, sin hogar y preso del miedo. No se da cueque en ese mundo es donde en verdad es presa del miedo y dontiene un hogar; donde es un paria que en su vagar se ha alejadode su hogar, y por tanto tiempo, que no se da cuenta de que olvidado de dónde vino, adónde va, e incluso de quién es en rea(L.PI.166.4.1-4)

Tu pequeño papel consiste únicamente en entregarle al ESanto la idea del sacrificio en su totalidad y aceptar la paz queofrece a cambio sin imponer ningún límite que impida su extenscual limitaría tu conciencia de ella. Pues lo que Él otorga tienextenderse si quieres disponer de su poder ilimitado y utilizarloliberar al Hijo de Dios. No es de este poder de lo que qdeshacerte, y, puesto que ya dispones de él, no puedes limitarlopaz no tiene hogar, tampoco lo tenemos ni tú ni yo. Y Aquel qnuestro hogar se queda sin hogar junto con nosotros. ¿Es eso quieres? ¿Deseas ser un eterno vagabundo en busca de ¿Pondrías tus esperanzas de paz y felicidad en lo que no puedfracasar. (T.19.IV.B.i.9.1-9)

Tú, cuya mente está ensombrecida por las dudas y la culpab

recuerda esto: Dios te dio el Espíritu Santo a Quien le encomemisión de eliminar toda duda y todo vestigio de culpabilidad qamado Hijo jamás se hubiese echado encima. Su misión no fracasar, pues nada puede impedir el logro de lo que Didispuesto que se logre. La Voluntad de Dios se hace sean cfueren tus reacciones a la Voz del Espíritu Santo, sea cual fuere que elijas escuchar y sea cuales fueren los extraños pensamque te asalten. Encontrarás la paz en la que Dios te ha estabporque Él no cambia de parecer. Él es tan estable como la pazque moras, la cual el Espíritu Santo te recuerda. (T.13.XI.5.1-6)



Solo, en esta vida de acechanzas

y malicias.

No obstante, los dones de Dios lo acompañan en su solitinsensato vagar, aunque él no se dé cuenta. No puede perderlosno ve lo que se le ha dado. Continúa errante, consciente de la fuque le rodea por todas partes, viendo como lo poco que tiene nosino menguar, conforme él sigue adelante sin ir a ninguna parteaun así, continúa deambulando en la miseria y en la pobrezaaunque Dios está con él, y en posesión de un tesoro tan grandeante su magnitud, todo lo que el mundo ofrece no tiene ningún (L.PI.166.5.1-5)

Éste es el mundo que el Amor de Dios revela. Es tan diferenmundo que ves a través de los enturbiados ojos de la maliciamiedo, que uno desmiente al otro. Sólo uno de ellos puede percen absoluto. El otro no tiene ningún significado. A aquellos qusurgir del ataque un mundo de odio listo para vengarse, asesdestruir, les resulta inconcebible la idea de un mundo en el qperdón resplandece sobre todas las cosas y la paz ofrece su dua todo el mundo. Es tan diferente del mundo que ves a través enturbiados ojos de la malicia y del miedo, que uno desmiente a(L.PI.189.3.1-6)

Los dones de Dios te pertenecen, y se te han confiado para qlos des a todos aquellos que eligen recorrer el solitario camino dtú te has escapado. Ellos no entienden que lo único que haciendo es ir en pos de sus deseos. Ahora eres tú quien les tienenseñar. Pues has aprendido de Cristo que hay otro caminopueden recorrer. Les puedes enseñar esto demostrándoles la feque colma a aquellos que sienten el toque de Cristo y que recolos dones de Dios. No permitas que tus pesares te tienten a no sa tu cometido. (L.PI.166.13.1-6)



¿No somos nosotros presidiarios?

¿Quién puede nacer de nuevo en Cristo sino aquel que ha perda todos los que ve, o en los que piensa o se imagina? ¿Quiémantenga a otro prisionero puede ser liberado? Un carcelero no ser libre, pues se encuentra atado al que tiene preso. Tieneasegurarse de que no escape, y así, pasa su tiempo vigilándolo.barrotes que mantienen cautivo al preso se convierten en el munel que su carcelero vive allí con él. Sin embargo, de la liberació

preso depende que el camino de la libertad quede despejado pados.(L.PI.192.8.1-6)

Me verás a medida que aprendas que el Hijo de Dios es inocesiempre anduvo en busca de su inocencia, y la ha encontrado.cada cual está tratando de escapar de la prisión que ha construno se le niega la manera de encontrar la liberación. Puesto que en él, la ha encontrado. Cuándo ha de encontrarla es sólo cuesttiempo, y el tiempo no es sino una ilusión. Pues el Hijo de Dinocente ahora, y el fulgor de su pureza resplandece incólumesiempre en la Mente de Dios. El Hijo de Dios será siempre tal fue creado. Niega tu mundo y no juzgues al Hijo de Dios, pueterna inocencia se encuentra en la Mente de su Padre y lo ppara siempre. (T.13.I.5.1-8)

No soy víctima del mundo que veo. ¿Cómo puedo ser la vde un mundo que podría quedar completamente des-hecho si eligiese? Mis cadenas están sueltas. Puedo desprenderme desólo con desearlo. La puerta de la prisión está abierta. marcharme en cualquier momento sólo con echar a andar. Nadretiene en este mundo. Sólo mi deseo de permanecer aqumantiene prisionero. Quiero renunciar a mis desquiciados descaminar por fin hacia la luz del sol.(L.PI.57.1.1-9)



Creyéndonos reyes.

El Espíritu Santo, que ve donde te encuentras, pero sabrealmente te encuentras en otra parte, comienza Su lecciósimplicidad con la enseñanza fundamental de que la verdad es vÉsta es la lección más difícil que jamás tendrás que aprender y, aal cabo, la única. La simplicidad es algo muy difícil para las mretorcidas. Observa todas las distorsiones que has hecho de lo qes nada; todas las extrañas manifestaciones, sentimientos, accioreacciones que has urdido de ello. Nada te es tan ajeno cosimple verdad, ni hay nada que estés menos inclinado a escuchcontraste entre lo que es verdad y lo que no lo es, es perfectaevidente; sin embargo, tú no lo ves. Lo que es simple y obvio

evidente para los que desean fabricar palacios y ropajes regiosnada, creyendo que éstos les convierten en reyes de áurea. (T2.1-7)

No aceptes ese nimio y aislado aspecto como tu identidad. El socéano no son nada en comparación con lo que tú eres. Erefulge sólo a la luz del sol, y la ola ondula mientras descansa soocéano. Pero ni en el sol ni en el océano se encuentra el podemora en ti. ¿Preferirías permanecer dentro de tu mísero reino, y siendo un triste rey, un amargado gobernante de todo locontempla, que aunque no ve nada está dispuesto a dar la vidello? Este pequeño yo no es tu reino. Elevado como un arco mencima de él y rodeándolo con amor se encuentra la gloriosa totala cual ofrece toda su felicidad y profunda satisfacción a todapartes. El pequeño aspecto que piensas haber aislado no e

excepción (T.18.VIII.7.1-8)

Tengo un reino que gobernar. Sin embargo, a veces no parecyo sea su rey en absoluto, sino que parece imponerse sobredecirme cómo debo pensar y actuar y lo que debo sentir. No obsse me ha dado para que sirva cualquier propósito que yo percibaLa única función de mi mente es servir. Hoy la pongo al servicEspíritu Santo para que Él la use como mejor le parezca. Demanera, soy yo quien dirige mi mente, que sólo yo puedo goberasí la dejo en libertad para que haga la Voluntad de Dios 236.1.1-8)



¿Quién no se maquilla?

Como anfitrión del ego, crees que puedes descargar toculpabilidad siempre que así lo desees, y de esta manera copaz. Y no pareces ser tú el que paga. Y aunque si bien es obvio ego exige un pago, nunca parece que es a ti a quien se lo exigestás dispuesto a reconocer que el ego, a quien tú invitaste, traúnicamente a los que creen ser su anfitrión. El ego nunca te pepercibir esto, ya que este reconocimiento lo dejaría sin hogar.cuando este reconocimiento alboree claramente, ninguna aparque el ego adopte para ocultarse de tu vista te podrá engañar.apariencia será reconocida tan sólo como una máscara de laidea que se oculta tras todas ellas: que el amor exige sacrificiopor lo tanto, inseparable del ataque y del miedo. Y que la culpabes el costo del amor, el cual tiene que pagarse con miedo. (T6.1-8)

Eso no son leyes, sino locura. El cuerpo se ve amenazado mente que se hace daño a sí misma. El cuerpo sufre sólo para mente no pueda darse cuenta de que es la víctima de sí mismsufrimiento corporal es una máscara de la que la mente se valeocultar lo que realmente sufre. No quiere entender que es su enemiga; que se ataca a sí misma y que quiere morir. De esto esque tus "leyes" quieren salvar al cuerpo. Para esto es para lcrees ser un cuerpo. (L.PI.76.5.1-7)

Dicho llanamente, el ataque es la respuesta a una función queha llevado a cabo tal como tú la percibes. Puede que ello tengver contigo o con otro; sin embargo, allí donde se perciba, aatacará. La depresión o el ataque no pueden sino ser los temtodos los sueños, pues el miedo es el elemento de que se compEl fino disfraz de placer y alegría en el que tal vez vayan envapenas cubre el grueso bloque de miedo que constituye su médesto es lo que el milagro percibe, y no las envolturas que lo c(T.29.IV.3.1-5)

¿Por qué habría de disfrazarse de muerte la liberación? (T.26.VII



Y a veces ocurre que el camino es hermoso…

El camino no es arduo, pero es muy diferente. El tuyo es el cdel dolor, de lo cual Dios no sabe nada. Ése es el camino qverdad es arduo y muy solitario. El miedo y la aflicción soinvitados y moran en ti, acompañándote dondequiera que vas. P jornada tenebrosa no es el camino que el Hijo de Dios desea reCamina en la luz y no veas a los siniestros compañeros, pues ncompañeros dignos del Hijo de Dios, que fue creado de la luz yluz. La Gran Luz siempre te rodea e irradia desde ti. ¿Cómo pver a los) compañeros siniestros en una luz como ésa? Si los vúnicamente porque estás negando la luz. Niégalos a ellos en vela luz, pues la luz está aquí y el camino ha sido despejado. (T4.1-10)

A la larga, todo el mundo empieza a reconocer, por muy vagaque sea, que tiene que haber un camino mejor. A medida qureconocimiento se arraiga más, acaba por convertirse en un decisivo en la vida de cada persona. Esto finalmente vuedespertar la visión espiritual y, al mismo tiempo, mitiga el apegvisión física. Este alternar entre los dos niveles de percepciexperimenta normalmente como un conflicto que puede llegar muy agudo. Aun así, el desenlace final es tan inevitable como(T.2.III.3.6-10)

El camino del ego no es mi camino, pero tampoco es el tuEspíritu Santo les ofrece una sola dirección a todas las mentesque me enseñó a mí es la que te enseña a ti. No perdamos de vdirección que Él nos señala por razón de las ilusiones, pues silusión de que existe otra dirección puede nublar aquella en favocual la Voz de Dios habla en todos nosotros. Nunca le concedas el poder de interferir en la jornada. El ego no tiene ningún porque la jornada es el camino que conduce a lo que es verdadatrás todas las ilusiones, y ve más allá de todos los intentos del edemorarte. Yo voy delante de ti porque he transcendido el ego. por lo tanto, la mano, puesto que tu deseo es transcenderlo tamMi fortaleza estará siempre disponible, y si eliges compdispondrás de ella. Te la doy gustosamente y de todo corazón pte necesito tanto como tú me necesitas a mí. (T.8.V.6.1)



En el viejo suburbio de las grandes penas.

La aceptación de la culpabilidad en la mente del Hijo de Dios fcomienzo de la separación, de la misma manera en quaceptación de la Expiación es su final. El mundo que ves sistema ilusorio de aquellos a quienes la culpabilidadenloquecido. Contempla detenidamente este mundo y te cuenta de que así es. Pues este mundo es el símbolo del casttodas las leyes que parecen regirlo son las leyes de la muerteniños vienen al mundo con dolor y a través del dolor. Su crecimva acompañado de sufrimiento y muy pronto aprenden lo que so

penas, la separación y la muerte. Sus mentes parecen atrapadas en sus cerebros, y sus fuerzas parecen decaer cusus cuerpos se lastiman. Parecen amar, sin embargo, abandonson abandonados. Parecen perder aquello que aman, la cuquizá la más descabellada de todas las creencias. Y sus cuerpmarchitan, exhalan el último suspiro, se les da sepultura y dejaexistir. Ni uno solo de ellos ha podido dejar de creer que Diocruel. (T.13.IN.2.1-11)

Hoy hablamos en nombre de todo aquel que vaga pormundo, pues en él no está en su hogar. Camina a la denfrascado en una búsqueda interminable, buscando eobscuridad lo que no puede hallar, y sin reconocer qué es loanda buscando. Construye miles de casas, pero ninguna de satisface a su desasosegada mente. No se da cuenta de qu

construye en vano. El hogar que anda buscando, él no lo pconstruir. El Cielo no tiene substituto. Lo único que él jconstruyó fue un infierno. (L.PI.182.3.1-7)

Si deseas contemplar el amor, que es la realidad del mundo, mejor cosa podrías hacer que reconocer en toda defensa contrasúplica de amor subyacente? (T.12.I.10.1)



Mañana será hermoso, decía el náufrago.

Al contemplar con claridad el mundo que te rodea, no pusino darte cuenta de que estás sumergido en la demencia. Vque no está ahí, y oyes lo que no emite sonido. Las emocionesexpresas reflejan lo opuesto de lo que sientes. No te comunicanadie, y te encuentras tan aislado de la realidad como si tú fuesúnico que existe en todo el universo. En tu demencia pasas pola realidad completamente, y dondequiera que tu mirada se pos

ves más que tu mente dividida. Dios te llama, mas tú no le pues estás embebido en tu propia voz. Y no puedes ver la visióCristo, pues sólo te ves a ti mismo. (T.13.V.6.1-7)

Sin embargo, puedes estar seguro de que algún día, tal vez hovez mañana, entenderás, comprenderás y verás. (L.PI.124.11.3)

Escucha, pues, la única respuesta del Espíritu Santo a todapreguntas que el ego plantea: eres una criatura de Dios, una de su Reino de inestimable valor que Él creó como parte dMismo. Eso es lo único que existe y lo único que es real. Has elun sueño en el que has tenido pesadillas, pero el sueño no es Dios te exhorta a despertar. Cuando le oigas no quedará ni rasttu sueño porque despertarás. Tus sueños contienen muchos dsímbolos del ego y éstos te han confundido. Eso se debe

obstante, a que estabas dormido y no te dabas cuenta deCuando despiertes, verás la verdad a tu alrededor y dentro de tino creerás en los sueños porque éstos dejarán de ser reales paEl Reino, en cambio, y todo lo que allí has creado, será sumamreal para ti porque eshermoso y verdadero. (T.6.IV.6.1-8)

Se le dirá cuál ha de ser su papel, hoy, mañana y siempre16.1.5)



El arduo oficio de vivir…

El dolor es señal de que las ilusiones reinan en lugar de la veDemuestra que Dios ha sido negado, confundido con el mpercibido como demente y considerado como un traidor a Sí MismDios es real, el dolor no existe. Más si el dolor es real, entoncDios Quien no existe. Pues la venganza no forma parte del amomiedo, negando el amor y valiéndose del dolor para probar queestá muerto, ha demostrado que la muerte ha triunfado sobre la

El cuerpo es el Hijo de Dios, corruptible en la muerte y tan como el Padre al que ha asesinado. (L.PI.190.3.1-7)

Ésta es la promesa del Dios viviente: que Su Hijo viva, quecriatura viviente forme parte de él y que nada más viva. Aquellque tú has dado "vida" no está vivo, y sólo simboliza tu deseo dseparado de la vida, de estar vivo en la muerte, y de percibir acomo si fuese la vida, y al vivir, como la muerte. Aquí las confuse suceden una tras otra, pues este mundo se basa en la confuen nada más. Su base es inmutable, si bien parece estar cambcontinuamente. Mas ¿qué podría ser eso, sino lo que realsignifica el estado de confusión? Para los que están confundidestabilidad no tiene sentido, y la variación y el cambio se convierla ley por la que rigen sus vidas. (T.29.II.6.1-6)

La curación, el perdón y el feliz intercambio del mundo del doluno en el que la tristeza no tiene cabida, son los medios por los Espíritu Santo te exhorta a que lo sigas. Sus dulces leccionenseñan cuán fácilmente puedes alcanzar la salvación y cuánpráctica necesitas para dejar que Sus leyes reemplacen a las qpromulgaste para mantenerte prisionero de la muerte. Su vivuelve la tuya propia, al tú extender la poca ayuda que Él te pideliberarte de todo lo que jamás te causó dolor. (L.PI.137.9.1-3)



Sería tan dulce amar.

A tus creaciones les corresponde estar en ti del mismo modque a ti te corresponde estar en Dios. Tú eres parte de Diocomo tus hijos son parte de Sus Hijos. Crear es amar. El amextiende hacia afuera simplemente porque no puede ser conteNunca deja de fluir porque es ilimitado. El amor crea para siemaunque no en el tiempo. Las creaciones de Dios han exsiempre porque Él ha existido siempre. Tus creaciones han exsiempre, porque tú sólo puedes crear como Dios crea. La eteres tuya porque Él te creó eterno. (T.7.I.1-9)

No necesitas la bendición de Dios porque de ella ya disponessiempre, pero sí necesitas la tuya propia. La imagen que el egode ti es la de un ser desposeído, vulnerable e incapaz de amapuedes amar semejante imagen. Sin embargo, puedes escamuy fácilmente de ella abandonándola. Tú no formas parte deimagen, ni ella es lo que tú eres. No veas esa imagen en nadiehabrás aceptado como lo que eres tú. Todas las ilusiones acercla Filiación se desvanecen al unísono tal como fueron forjadunísono. No le enseñes a nadie que él es lo que tú no querríaTu hermano es el espejo en el que ves reflejada la imagentienes de ti mismo mientras perdure la percepción. Y la perceperdurará hasta que la Filiación reconozca que es íntegrainventaste la percepción, y ésta perdurará mientras la deseando. (T.7.VII.3.1-11)

Mira a tu hermano dulcemente, y contempla el mundo donpercepción de tu odio ha sido transformada en un mundo de a(T.26.V.14.5)

El milagro es un servicio. Es el máximo servicio que le puprestar a otro. Es una manera de amar al prójimo como a ti men la que reconoces simultáneamente tu propia valía y la de él1.I.18.3-4)



Dice ser la hija de la alegría.

Hacer comparaciones es necesariamente un mecanismo depues el amor nunca las hace. Creerse especial siempre conllevacomparaciones. Pues se establece al ver una falta en otro,perpetúa al buscar y mantener claramente a la vista cuanta fapueda encontrar. Esto es lo que persigue el especialismo, y estoque contempla. Y aquel a quien tu deseo de ser especial así rhabría sido tu salvador si tú no hubieses elegido usarlo como unejemplo de cuán especial eres tú. Frente a la pequeñez que ves tú te yergues alto y señero, irreprochable y honesto, pinmaculado. No entiendes que al hacer eso es a ti mismo a rebajas. (T.24.II.1.1-7)

La única creencia que se mantiene celosamente oculta y qdefiende aunque no se reconoce, es la fe en ser especial. Émanifiesta de muchas formas, pero siempre choca con la realidla creación de Dios y con la grandeza con la que Él dotó a Su¿Qué otra cosa podría justificar el ataque? ¿Quién podría oalguien cuyo Ser es el suyo propio y a Quien conoce? Sólo los qcreen especiales pueden tener enemigos, pues creen ser difereno iguales. Y cualquier clase de diferencia impone diferentes órde realidad y una ineludible necesidad de juzgar. (T.24.I.3.1-6)

Nada de lo que el mundo cree es verdad. Pues el mundo lugar cuyo propósito es servir de hogar para que aquellos que dicconocerse a sí mismos puedan venir a cuestionar lo que sseguirán viniendo hasta que se acepte la Expiación y aprendan qimposible dudar de uno mismo, así como no ser consciente de se es. (L.PI.139.7.1-3)



En los labios que fueron lozanos,

sabor a hiel.

El caos es la ausencia total de orden, y no tiene leyes. Para qpueda creer en él, sus aparentes leyes tienen que percibirse reales. Su objetivo de demencia tiene que verse como corduramiedo, con labios mortecinos y ojos que no ven, obcecadoaspecto horrible, es elevado al trono del amor, su moriconquistador, su substituto, el que te salva de la salvación. ¡Cuánhacen aparecer a la muerte las leyes del miedo! ¡Dale gracias al que se sentó en el trono del amor y que salvó al Hijo de Dioscondenarlo al miedo y a la muerte! (T.23.II.15.3-8)

Sostienes -y piensas que es verdad- que no crees en estasinsensatas ni que tus acciones están basadas en ellas. Pues cexaminas de cerca lo que postulan, ves que no se puede creellas. Hermano, crees en ellas. Pues de no ser así, ¿cómo ppercibir la forma que adoptan, con semejante contenido? ¿acaso ser sostenible cualquiera de las formas que adoptanembargo, crees en ellas debido a la forma que adoptan, y no advel contenido. Éste nunca cambia. ¿Puedes acaso darle vidaesqueleto pintando sus labios de color rosado, vistiéndolo de publanco, acariciándolo y mimándolo? ¿Y puede acaso satisfaceilusión de que estás vivo? (T.23.II.18.1-9)

No conoces tus creaciones simplemente porque mientras tu siga estando dividida decidirás contra ellas, y es imposible ataque has creado. Pero recuerda que a Dios le resulta igualimposible. La ley de la creación consiste en que ames a tus creacomo a ti mismo, por ser éstas parte de ti. Todo lo que fue creaencuentra, por lo tanto, perfectamente a salvo porque las leyDios lo protegen con Su Amor. Cualquier parte de tu mente qsepa esto se ha desterrado a sí misma del conocimiento, al no satisfecho sus condiciones. ¿Quién sino tú pudo haber hechoReconócelo gustosamente, pues en ese reconocimiento radentendimiento de que tu destierro es algo ajeno a Dios, y, por lono existe. (T.10.I.1.1-7)



La gran dama cree tener un lugar reservado en el cielo.

No hay nadie que de una manera u otra no se sienta aprisionaése es el resultado de su libre albedrío, tiene, por endeconsiderar que su voluntad no es libre, o, de lo contrarrazonamiento circular de esta premisa sería evidente. El libre alno puede sino conducir a la libertad. Los juicios siempre aprisionque fragmentan la realidad con las inestables balanzas del desedeseos no son hechos. Desear implica que ejercer la voluntad suficiente. Sin embargo, nadie que esté en su mente recta podríaque lo que desea es tan real como lo que su voluntad dispone. Ede "Busca primero el Reino de los Cielos" di: "Que tu volunta

antes que nada alcanzar el Reino de los Cielos" y habrás dicho: que soy y acepto mi herencia". (T.3.VI.11.1-8)Lo único que necesitas hacer para morar aquí apaciblemente

a Cristo, es compartir Su visión. Su visión se le coinmediatamente y de todo corazón a todo aquel que esté dispuver a su hermano libre de pecado. Y tienes que estar dispuestoexcluir a nadie, si quieres liberarte completamente de todos los edel pecado. ¿Te concederías a ti mismo un perdón parcial? ¿Palcanzar el Cielo mientras un solo pecado aún te tiente a sufriendo? El Cielo es el hogar de la pureza perfecta, y Dios lpara ti. Contempla a tu santo hermano, tan libre de pecado compermítele que te conduzca hasta allí. (T.22.II.13.1-7)

Aún no se recuerda el Cielo totalmente, pues el propósito del ptodavía necesita alcanzarse. Sin embargo, todo el mundo está sde que irá más allá del perdón y de que sólo seguirá aquí hast

éste se perfeccione en él. Ése es su único deseo. Todo temdesaparecido porque él está unido a sí mismo en su propósitesperanza de felicidad es tan segura y constante que apenas seguir esperando aquí por más tiempo con sus pies aún tocatierra. Aun así, se siente feliz de poder esperar hasta que todmanos se hayan unido y todos los corazones estén listoselevarse e ir con él. Pues así es como se prepara para dar el pasel que se transciende el perdón. (T.30.V.3.1-7)

¿Estás seguro de que el Cielo se puede alcanzar? Si la respueno, es que caminas solo. Pídele entonces a tu Amigo que se unate dé certeza con respecto al camino a seguir. (T.23.II.22.11-13)



Mujer emancipada, al atardecercanta como sifuera mediodía.

Observa todas las baratijas que se confeccionan para colgarcuerpo, o para cubrirlo o para que él las use. Contempla todcosas inútiles que se han inventado para que sus ojos las Piensa en las muchas ofrendas que se le hacen para su delrecuerda que todas ellas se concibieron para que aquelloaborreces pareciera hermoso. ¿Utilizarías eso que aborrecescautivar a tu hermano y atraer su atención? Date cuenta de qúnico que le ofreces es una corona de espinas, al no reconocuerpo como lo que es y al tratar de justificar la interpretacióhaces de su valor basándote en la aceptación que tu hermano haél. Aun así, el regalo proclama el poco valor que le concedeshermano, del mismo modo en que el agrado con que él lo arefleja el poco valor que él se concede a sí mismo. (T.20.II.1.1-6)

Considera, entonces, los plateados milagros y los dorados sde felicidad como los únicos tesoros que quieres conservar denalmacén del mundo. La puerta está abierta, no para que ladrones, sino tus hermanos hambrientos, quienes confundiebrillo de una piedrecilla con oro y almacenaron un puñado dereluciente creyendo que era plata. Sin embargo, a este lado puerta abierta no tienen nada. ¿Qué es el mundo, sino una dimbrecha que parece desgarrar la eternidad y fragmentarla enmeses y años? ¿Y qué sois vosotros que vivís en el mundo, sinimagen fragmentada del Hijo de Dios, donde cada uno dfragmentos está oculto dentro de un trocito de barro separinseguro? (T.28.III.7.2)

Debe subrayarse nuevamente que al cuerpo le resulta tan impaprender cómo crear. En cuanto que recurso de aprendizaje sellevar simplemente por el estudiante, más si se le dota falsameniniciativa propia, se convierte en una seria obstrucción para el maprendizaje que debería facilitar. Sólo la mente es capailuminación. El espíritu ya está iluminado, y el cuerpo, de por demasiado denso. La mente, sin embargo, puede hacer llegiluminación hasta el cuerpo al reconocer que éste no es el estudique, por lo tanto, no tiene la capacidad de aprender. Es muy fáobstante, poner al cuerpo en armonía con la mente una vez quha aprendido a mirar más allá de él hacia la luz.(T.2.V.6.1-6)



El condenado se ha ido…

Los que se sienten culpables siempre condenan, y una vez qucondenado lo siguen haciendo, vinculando el futuro al pasado talestipula la ley del ego. (T.13.IX.1.2)

La dicha procede de un propósito unificado, y un propósito unies algo que es únicamente propio de Dios. Cuando tu propósitounificado es el Suyo. Si crees que puedes interferir en Su pronecesitas salvación. Te has condenado a ti mismo, pecondenación no es algo que proceda de Dios. Por lo tanto, no eNi tampoco lo son sus aparentes resultados. Cuando ves a tu hecomo un cuerpo, lo estás condenando porque te has condenadmismo. No obstante, si toda condenación es irreal, y tiene quepuesto que es una forma de ataque, entonces no puede consecuencias. (T.8.VII.15.1-8)

Aceptar la Expiación te enseña lo que es la inmortalidad, paceptar que estás libre de culpa te das cuenta de que el pasado existió, y, por lo tanto, de que el futuro es innecesario y de que tendrá lugar. En el tiempo, el futuro siempre se asocia con exsólo la culpabilidad podría producir la sensación de que expnecesario. Aceptar como tuya la inocencia del Hijo de Dios es, tanto, la forma en que Dios te recuerda a Su Hijo, y lo que éste verdad. Pues Dios nunca ha condenado a Su Hijo, que al ser inoes también eterno. (T.13.I.9.1-4)

No eres libre de renunciar a la libertad, sino sólo de negarla. (T5.1)

En esto eres tan libre como Dios, y así será eternamente. (T.4.III.



Su abogado, con frases vacías, argumenta su inconsciencia…

Sin imparcialidad no hay justicia. ¿Cómo iba a poder ser juespecialismo? No juzgues, más no porque tú seas tambiémiserable pecador, sino porque no puedes. ¿Cómo iban a entender los que se creen especiales que la justicia es igual parel mundo? Quitar a uno para dar a otro es una injusticia contra apues los dos son iguales ante los ojos del Espíritu Santo. Su Paddio a ambos la misma herencia. El que desea tener más o menos, no es consciente de que lo tiene todo. El que él seprivado de algo no le da el derecho de ser juez de lo q

corresponde a otro. Pues en tal caso, no puede sino sentir envtratar de apoderarse de lo que le pertenece a aquel a quien juzges imparcial ni puede ver de manera justa los derechos de otro pno es consciente de los suyos propios. (T.25.VIII.13.1-10)

La decisión de juzgar en vez de conocer es lo que nos hace pla paz. Juzgar es el proceso en el que se basa la percepción, pel conocimiento. He hecho referencia a esto anteriormente al habla naturaleza selectiva de la percepción, y he señalado qevaluación es obviamente su requisito previo. Los juicios sientrañan rechazo. Nunca ponen de relieve solamente los aspositivos de lo que juzgan, ya sea en ti o en otros. Lo que percibido y se ha rechazado, o lo que se ha juzgado y sdeterminado que es imperfecto permanece en tu mente porque hpercibido. Una de las ilusiones de las que adoleces es la creen

que los juicios que emites no tienen ningún efecto. Esto no pueverdad a menos que también creas que aquello contra lo qu juzgado no existe. Obviamente no crees esto, pues, de lo contralo habrías juzgado. En última instancia, no importa si tus juicioacertados o no, pues, en cualquier caso, estás depositando tu feirreal. Esto es inevitable, independientemente del tipo de juicio dse trate, ya que juzgar implica que abrigas la creencia de qrealidad está a tu disposición para que puedas seleccionar de que mejor te parezca. (T.3.VI.2.1-12)

Por juzgar se tiene que pagar un precio porque juzgar es fiprecio. (T.9.II.9.5)



Bajo un Cristo olvidado en su cruz. Hay otro punto que debe quedar perfectamente claro antes d

pueda desaparecer cualquier residuo de temor que aún esté asocon los milagros. La crucifixión no estableció la Expiación; resurrección la que lo hizo. Son muchos los cristianos sinceros qhan entendido esto correctamente. Nadie que esté libre de la creen la escasez podría cometer tal equivocación. Si se examcrucifixión desde un punto de vista invertido, parece como shubiese permitido, e incluso fomentado, el que uno de Sus sufriese por ser bueno. Esta desafortunada interpretación, que como resultado de la proyección, ha llevado a muchas personas sumamente atemorizadas de Dios. Tales conceptos anti-religiosinfiltran en muchas religiones. El auténtico cristiano, sin emdebería hacer una pausa y preguntarse: "¿Cómo iba a ser p

esto? ¿Cómo iba a ser posible que Dios Mismo fuese capalbergar el tipo de pensamiento que Sus Propias palabraseñalado claramente que esindigno de Su Hijo?" (T.3.I.1.1-9)

Si interpretas la crucifixión de cualquier otra forma, la eusando como un arma de ataque en vez de como la llamada a para la que se concibió. Con frecuencia, los Apóstoles la interprerróneamente, por la misma razón que otros lo hacen. Su propioimperfecto les hizo ser vulnerables a la proyección, y, como resde su propio miedo, hablaron de la "ira de Dios" como el armrepresalia de Éste. No pudieron hablar de la crucifixión enterasin ira porque sus propios sentimientos de culpabilidad habían que se sintiesen indignados. (T.6.I.14.1-4)

Éstos son algunos de los ejemplos de pensamiento tergiversaNuevo Testamento, si bien su evangelio, es en realidad, únicame

mensaje del amor. Si los Apóstoles no se hubieran sentido culpnunca me habrían podido atribuir expresiones tales como "Nvenido a sembrar paz, sino espadas". Esto está en clara opositodas mis enseñanzas. De haberme entendido realmente, no phaber descrito tampoco mi reacciona Judas como lo hicieron. pude haber dicho: "¿Traicionas al Hijo del Hombre con un beso?ser que hubiese creído en la traición. El mensaje de la crucifixióprecisamente que yo no creía en la traición. El "castigo" que sinfligí a Judas fue un error similar. Judas era mi hermano y un HDios, tan miembro de la Filiación como yo. ¿Cómo iba a condcuando estaba listo para probar que condenar es imposible? 15.1-9)



“Angustiado él, y afligido,

no abrió su boca”

He dicho que la crucifixión es el símbolo del ego. Cuando el eenfrentó con la verdadera inocencia del Hijo de Dios intentómuerte, y la razón que adujo fue que la inocencia es una blascontra Dios. Para el ego, el ego es Dios, y la inocencia tiene quinterpretada como la máxima expresión de culpabilidad que juplenamente el asesinato. Todavía no entiendes que cualquier que puedas experimentar en conexión con este curso procedúltima instancia, de esa interpretación, pero si examinasereacciones que éste suscita en ti, te convencerías cada vez mque eso es cierto. (T.13.II.6.1-4)

Es probable que hayas estado reaccionando durante muchoscomo si te estuviesen crucificando. Ésta es una marcada tendenlos que creen estar separados, que siempre se niegan a examque se han hecho a sí mismos. La proyección implica ira; la ira ala agresión y la agresión fomenta el miedo. El verdadero significala crucifixión radica en la aparente intensidad de la agresión compor algunos de los Hijos de Dios contra otro. Esto, por supuesimposible, y se tiene que entender cabalmente que es imposible.contrario, yo no puedo servir de modelo para el aprendizaje.

(T.6.I.3.1-6)

Te has crucificado a ti mismo y te has puesto una corona de essobre la cabeza. Aun así, no puedes crucificar al Hijo de Dios, pVoluntad de Dios no puede morir. Su Hijo ha sido redimido propia crucifixión, y tú no puedes condenar a muerte a quien Ddado vida eterna. El sueño de la crucifixión aún despesadamente sobre tus ojos, pero lo que ves en sueños no realidad. Mientras sigas percibiendo al Hijo de Dios como crucifies que estás dormido. Y mientras creas que puedes crucifiestarás simplemente teniendo pesadillas. Tú que estás comenzadespertar, todavía eres consciente de tus sueños y aún no loolvidado. Te olvidarás de ellos y cobrarás conciencia de Cristo cotros despierten para compartir contigo tu redención. (T.11.VI



De muchas maneras, el hermoso oficio de

sembrar en una tierra hostil.

El Pensamiento de Dios rodea tu mísero reino y espera abarrera que construiste, deseoso de entrar y de derramar su luzel terreno yermo. ¡Mira cómo brota la vida por todas partes! El dese convierte en un jardín lleno de verdor, fértil y plácido, ofrecdescanso a todos los que se han extraviado y vagan en el

Ofréceles este lugar de refugio, que el amor preparó para ellodonde antes había un desierto. Y todo aquel a quien le dbienvenida te brindará el amor del Cielo. Entran de uno en uno esanto lugar, pero no se marchan solos, que fue como vinieron. Eque trajeron consigo les acompañará siempre, al igual que a ti. su beneficencia tu pequeño jardín crecerá y acogerá a todos lotienen sed de agua viva, pero están demasiado exhaustos para seguir adelante solos. (T.18.VIII.9.1-8)

De la misma manera en que la falta de fe mantendría vumíseros reinos yermos y separados, así la fe ayudará al Espíritu a preparar el terreno para el santísimo jardín en que Él convertirlo. Pues la fe brinda paz, y así, le pide a la verdad que eembellezca lo que ya fue preparado para la hermosura. La vsigue muy de cerca a la fe y a la paz, y completa el proce

embellecimiento que ellas comienzan. Pues la fe sigue siendo ulas metas del aprendizaje, que deja de ser necesaria una vez lección se ha aprendido. La verdad, en cambio, jamás se ause(T.19.I.15.1-5)

Para el Espíritu Santo, "Lo que el hombre sembrare, eso cosequiere decir que lo que consideres digno de ser cultivado lo culten ti mismo. (T.5.VI.6.1)



Calle de los Solitarios

Tú no deseas realmente el mundo que ves, pues no ha hechque decepcionarte desde los orígenes del tiempo. Las casaerigiste jamás te dieron cobijo. Los caminos que construiste llevaron a ninguna parte, y ninguna de las ciudades que fundaresistido el asalto demoledor del tiempo. Todo lo que has hechoimpreso sobre sí el estigma de la muerte. No lo tengas enestima, pues es un mundo viejo y decrépito, e incluso seg

construías estaba ya listo para retornar al polvo. Este mundo dno tiene el poder de influenciar al mundo viviente en absoluto. puedes conferirle ese poder, y si bien lo abandonas con tristeza,no puedes encontrar el camino que conduce más allá de él haotro mundo. (T.13.VII.3.1-7)

Siéntate sosegadamente, y según contemplas el mundo qurepite para tus adentros: "El mundo real no es así. En él nedificios ni calles por donde todo el mundo camina solo y separadél no hay tiendas donde la gente compra una infinidad de innecesarias. No está iluminado por luces artificiales, ni la desciende sobre él. No tiene días radiantes que luego se nublan.mundo real nadie sufre pérdidas de ninguna clase. En élresplandece, y resplandece eternamente”. (T.13.VII.1.1-7)

Acudamos diariamente a este santo lugar y pasemos un rato jAhí compartimos nuestro sueño final. Es éste un sueño en el qhay pesares, pues contiene un atisbo de toda la gloria que Dios ndado. En él se ve brotar la hierba, los árboles florecer y los phacer sus nidos en su ramaje. La tierra nace de nuevo desdnueva perspectiva. La noche ya pasó, y ahora nos hemos unidoluz. (L.PII.Preg2.4.1-6)



“Invierno lepra de la tierra”.

Tú eres el soñador del mundo de los sueños. Éste no tiene niotra causa, ni la tendrá jamás. Todo lo que aterrorizó al Hijo de le hizo pensar que había perdido su inocencia, repudiado a su Pentrado en guerra consigo mismo no es más que un sueño fútiese sueño es tan temible y tan real en apariencia, que él no despertar a la realidad sin verse inundado por el frío sudor del tesin dar gritos de pánico, a menos que un sueño más dulce precesu despertar y permitiese que su mente se calmara para poder a-no temer- la Voz que con amor lo llama a despertar; un sueño

dulce, en el que su sufrimiento cesa y en el que su hermano amigo. Dios dispuso que su despertar fuese dulce y jubilosoproporcionó los medios para que pudiese despertar sin mied27.VII.13.1-5)

¿Cuán poderosa puede ser una diminuta pluma ante las inmalas de la verdad? ¿Podría acaso oponerse al vuelo de un ágimpedir el avance del verano? ¿Podría interferir en los efectos sol veraniego produciría sobre un jardín cubierto de nieve? Vcuánta facilidad se puede levantar y transportar este pequeño vpara no volver jamás. Despídete de él con alegría, no con pesarde por sí no es nada ni significaba nada cuando la fe que teníasprotección era mayor. ¿No preferirías darle la bienvenida al cáliveraniego en lugar de poner tu atención en un copo de nieve quderritiéndose, y tiritar pensando en el frío invernal? (T.19.IV.A.9.1

Los ángeles revolotean amorosamente a tu alrededor, a mantener alejado de ti todo sombrío pensamiento de pecaasegurarse de que la luz permanezca allí donde ha entradohuellas de tus pasos iluminan al mundo, pues por donde tú caminperdón te acompaña jubilosamente. No hay nadie en la tierra qude dar gracias a aquel que ha restaurado su hogar, protegiéndodel crudo invierno y del gélido frío. ¿Y cómo podrían el Señor dCielos y Su Hijo dar menos como muestra de agradecimiento chan recibido mucho más? (T.26.IX.7.1-4)



Jean-François jamás canta Aleluya…

La Biblia afirma repetidamente que debes alabar a Dios. Esquiere decir que debas decirle cuán maravilloso es. Dios no tienego con el que aceptar tal alabanza, ni percepción con qué juzPero a menos que desempeñes el papel que te corresponde creación, Su gozo no será total porque el tuyo no lo es. ciertamente sabe esto. Lo sabe en Su Propio Ser y en la experique Su Ser tiene de la experiencia del Hijo. El constante fluir d

Amor se obstruye cuando Sus canales están cerrados, y se ssolo cuando las mentes que Él creó no se comunican plenamcon Él. (T.4.VII.6.1-7)

¿Cómo no iba a complacer al Señor de los Cielos que aprecieobra maestra? ¿Qué otra cosa podría hacer sino darte las gracti que amas a Su Hijo como Él lo ama? ¿No te daría a conoceAmor, sólo con que te unieses a Él para alabar lo que Él ama? ama la creación como el perfecto Padre que es. Y de esta maSu alegría es total cuando cualquier parte de Él se une aalabanzas y comparte Su alegría. Este hermano es el perfecto rque Él te hace. Y Dios se siente feliz y agradecido cuando le dagracias a Su perfecto Hijo por razón de lo que es. Y todagradecimiento y felicidad refulgen sobre ti que haces que Su asea total, junto con Él. Y así, tu alegría se vuelve total. Aquellos

voluntad es que la felicidad del Padre sea total, y la suya junto cde Él, no pueden ver ni un solo rayo de obscuridad. Dios Mofrece Su gratitud libremente a todo aquel que compartepropósito. Su Voluntad no es estar solo. Ni la tuya tampoco. (T9.1-13)

Hacer la Voluntad de Dios no produce ninguna tensión unaque reconoces que Su Voluntad es también la tuya. (T.2.VI.6.4)



En el país de la sed y el miedo.

Quizá valga la pena dedicar un rato a reflexionar una vez más el valor de este mundo. Tal vez estés dispuesto a conceder quese pierde con renunciar a cualquier pensamiento que le adjualgún valor. El mundo que ves es ciertamente despiadado, inestcruel, indiferente en lo que a ti respecta, presto a la venganza yde odio inclemente. Da únicamente para más tarde quitar, y te dde todo aquello que por un tiempo creíste amar. En él no se encontrar amor duradero, porque en él no hay amor. Dicho munel mundo del tiempo, donde a todo le llega su fin. (L.PI.129.2.1-6

Los milagros son como gotas de lluvia regeneradora que caeCielo sobre un mundo árido y polvoriento, al cual criahambrientas y sedientas vienen a morir. Ahora tienen agua. Ahmundo está lleno de verdor. Y brotan por doquier señales de viddemostrar que lo que nace jamás puede morir, pues lo que tienes inmortal. (L.PII.Preg13.5.1-4)

La sangre del odio desaparece permitiendo así que la hierba vucrecer con fresco verdor, y que la blancura de todas las resplandezca bajo el cálido sol de verano. Lo que antes era unde muerte ha pasado a ser ahora un templo viviente en un munluz. Y todo por Ellos. Es Su Presencia la que ha elevado nuevaa la santidad para que ocupe su lugar ancestral en un trono ancY debido a Ellos los milagros han brotado en forma de hierba y

sobre el terreno yermo que el odio había calcinado y dejado estéque el odio engendró Ellos lo han des-hecho. Y ahora te encuen tierra tan santa que el Cielo se inclina para unirse a ella y hsemejante a él. La sombra de un viejo odio ya no existe, ydesolación y aridez ha desaparecido para siempre de la tierra a Ellos han venido. (T.26.IX.3.1-8)

El suelo que pisas es tierra santa por razón de Aquellos que, aahí contigo, la han bendecido con Su inocencia y con Su paz. (T.2.4)



Hay lágrimas para nuestras desdichas….

El mundo acabará con alegría porque es un lugar triste. Cuaalegría haya llegado, el propósito del mundo habrá terminamundo acabará en paz porque es un campo de batalla. Cuando haya llegado, ¿qué propósito podrá tener el mundo? El macabará entre risas porque es un valle de lágrimas. ¿Quién seguir llorando allí donde hay risa? Y sólo el completo perdón daa todo esto para bendecir el mundo. El mundo partirá en bendic

pues no acabará como comenzó. Convertir el infierno en Cielofunción de los maestros de Dios porque lo que enseñan son leccque reflejan el Cielo. Siéntate ahora por un momento con verdhumildad y date cuenta de que puedes hacer todo lo que Dios que hagas. No seas arrogante ni digas que no puedes aprendprograma de estudios. Su Palabra afirma lo contrario. Su Volunhará. No puede ser de otra manera. Y da gracias de que así se14.5.1-15)

El Espíritu Santo, sonriendo dulcemente, percibe la causapresta atención a los efectos. ¿De qué otra manera podría correerror, cuando has pasado por alto la causa enteramente? Él te ea que lleves todo efecto temible ante Él para que juntos mirdescabellada causa y os riáis juntos por un rato. Tú juzgas los efpero Él ha juzgado su causa. Y mediante Su juicio se elimina

efectos. Tal vez vengas con los ojos arrasados en lágrimas, masdecir: "Hermano mío, santo Hijo de Dios, contempla tu sueño fútique sólo algo así podría ocurrir". Y saldrás del instante santo rcon tu risa y la de tu hermanounida a la de Él. (T.27.VIII.9.6.1-8)

El perdón no apoya las ilusiones, sino que, riendo dulcemencongrega a todas sin muchos aspavientos y las deposita tiernaante los pies de la verdad. (L.PI.134.6.2)



“El que cree en mí,

aunque esté muerto vivirá”.

¿Te postrarías ante ídolos como éste? Aquí la fortaleza y el pde Dios Mismo se perciben dentro de un ídolo hecho de barro. Aproclama que lo opuesto a Dios es señor de toda la creaciónfuerte que la Voluntad de Dios por la vida, o que la infinitud del ala perfecta e inmutable constancia del Cielo. Aquí por fin se derrVoluntad del Padre y del Hijo, y se entierra bajo la lápida que la mha colocado sobre el cuerpo del santo Hijo de Dios.(L.PI.163.4.1-

Bajo el polvoriento contorno de su mundo distorsionado, equiere dar sepultura al Hijo de Dios, a quien ordenó asesinarcuya putrefacción reside la prueba de que Dios Mismo es impante el poderío del ego e incapaz de proteger la vida que Écontra el cruel deseo de matar del ego. Hermano mío, criatura deesto no es más que un sueño de muerte. No hay funeral, ni atenebrosos, ni mandamientos siniestros, ni distorsionados ritcondena a los que el cuerpo te pueda conducir. No pidas quelibere de eso. Más bien, libera al cuerpo de las despiadadinexorables órdenes a las que lo sometiste y perdónalo por lo quordenaste hacer. Al exaltarlo lo condenaste a morir, pues smuerte podía derrotar a la vida. ¿Y qué otra cosa, sino la dempodría percibir la derrota de Dios y creer que es real? (T.198.1-7)

¿Cómo iba a permitir Dios que Su Hijo se extraviase por un cque es sólo la memoria de un instante que hace mucho que Este curso te enseña sólo lo que es ahora. Un terrible instante pasado lejano que ha sido completamente corregido no es motpreocupación ni tiene valor alguno. Deja que lo muerto y lo pdescansen en el olvido. La resurrección ha venido a ocupar su luahora tú eres parte de la resurrección, no de la muerte. Niilusión del pasado tiene el poder de retenerte en un lugar de muebóveda en la que el Hijo de Dios entró por un instante, parinstantáneamente restaurado al perfecto Amor de su Padre. ¿Y iba a podérsele mantener encadenado cuando hace tanto tiempse le liberó de las cadenas, que éstas desaparecieron de su para siempre? (T.26.V.10.1-8)



Cantad maitines, el día renace.

Cuando hayas contemplado lo que parecía infundir terrohayas visto transformarse en paisajes de paz y hermosura; chayas presenciado escenas de violencia y de muerte y las hayasconvertirse en serenos panoramas de jardines bajo cielos despecon aguas diáfanas, portadoras de vida, que corren felizmenellos en arroyuelos danzantes que nunca se secan, ¿qué necehabrá de persuadirte para que aceptes el don de la visión? Y unque la visión se haya alcanzado, ¿quién podría rehusar lonecesariamente ha de venir después? Piensa sólo en esto p

instante: puedes contemplar la santidad que Dios le dio a Su Hnunca jamás tendrás que pensar que hay algo más que pueda(T.20.VIII.11.1-4)

Permite hoy que esta corrección sea colocada en tu mente enhora de vigilia. Da la bienvenida entonces a toda la felicidad quecorrección brinda a medida que la verdad reemplaza al miedodicha se convierte en lo que esperas ha de ocupar el lugar del Dado que Dios es Amor, se te concederá. Refuerza esa esperamenudo a lo largo del día, y acalla todos tus temores con la sigexpresión de certeza, la cual es benévola y completamente Dios, al ser Amor, es también felicidad. Y la felicidad es lo que hoy. No puedo fracasar, pues lo que busco es la verdad. 103.3.1-7)

Salgamos al encuentro de ese mundo recién nacido, sabiendCristo ha renacido en él y que la bendición de su renacimperdurará para siempre. Habíamos perdido el rumbo, pero Él encontrado por nosotros. Démosle la bienvenida a Aquel que rea nosotros para celebrar la salvación y el fin de todo lo que crehaber hecho. El lucero del alba de este nuevo día contempmundo diferente en el que se le da la bienvenida a Dios, y a S junto con Él. Nosotros que le completamos, le damos las gracicomo Él nos las da a nosotros. El Hijo reposa, y en la quietud quele dio, entra en su hogar y por fin está en paz. (C.EP.5.1-6)



“Nosotros… somos bautizados

en su muerte”

Cuando tu cuerpo, tu ego y tus sueños hayan desaparecido, sque eres eterno. Tal vez pienses que esto se logra con la muertecon la muerte no se logra nada porque la muerte no es nada. Tologra con la vida, y la vida forma parte del ámbito de la menteencuentra en la mente. El cuerpo ni vive ni muere porque no contenerte a ti que eres vida. Si compartimos la misma menpuedes superar la muerte puesto que yo la superé. La muerte intento de resolver conflictos no tomando ninguna decisión. Aque todas las demás soluciones imposibles que el ego propugnatampoco resultará.(T.6.V.A.1.1-7)

El Espíritu Santo te guía hacia la vida eterna, pero tieneabandonar tu interés por la muerte, o, de lo contrario, no podrásvida aunque te rodea por todas partes. (T.12.IV.7.6)

Ésta es la invitación al Espíritu Santo. He dicho ya que ascender hasta lo alto y hacer que el Espíritu Santo descienda hamas sólo puedo hacer eso a instancia tuya. El Espíritu Sanencuentra en tu mente recta, tal como se encontraba en la mBiblia dice: "Que more en ti la mente que estaba en Cristo Jesúsutiliza como una bendición. Se trata de la bendición de la mentmilagrosa. Te pide que pienses tal como yo pensé, uniéndote dmanera a mí en el modo de pensar de Cristo. (T.5.I.3.1-6)

El Segundo Advenimiento de Cristo, que es tan seguro comoes simplemente la corrección de todos los errores y el restablecimde la cordura. Es parte de la condición que reinstaura lo que nunperdió y re-establece lo que es eternamente verdad. Es la invque se le hace a la Palabra de Dios para que ocupe el lugar dilusiones: la señal de que estás dispuesto a dejar que el pdescanse sobre todas las cosas sin excepción y sin res(L.PII.Preg9.1.1-3)



“Amaos los unos a los otros”.

Para los efectos del aprendizaje, examinemos de nuevo la crucNo hice hincapié en ella anteriormente debido a las temconnotaciones que quizás tengas asociadas con ella. Lo único qha subrayado hasta ahora es que no fue una forma de castigobstante, no se puede explicar nada utilizando exclusivatérminos negativos. Existe una interpretación constructiva crucifixión que está totalmente desprovista de miedo y que, tanto, si se entiende debidamente, es totalmente benévola en culo que enseña. (T.6.I.1.1-5)

La crucifixión no es más que un ejemplo extremo. Su valor, aque el valor de cualquier otro recurso de enseñanza, únicamente en la clase de aprendizaje que facilita. Se puede en-y se ha entendido- incorrectamente. Ello se debe únicamehecho de que los temerosos tienden a percibir con miedo. Ya que siempre puedes recurrir a mí para compartir mi decisión, y dmodo hacerla más firme. Te dije también que la crucifixión fue la jornada inútil que la Filiación tuvo que emprender, y que paraaquel que la entienda representa la manera de liberarse del mAunque antes sólo hice hincapié en la resurrección, no entonces el propósito de la crucifixión y la manera en que éshecho, condujo a la resurrección. Ese propósito, no obstante tienaportación muy concreta que hacer a tu propia vida, y si lo exasin miedo, te ayudará a comprender tu propio papel como maest6.I.2.1-8)

La crucifixión no puede ser compartida porque es el símboloproyección, pero la resurrección es el símbolo del compartir, ypara que la Filiación pueda conocer su plenitud, es necesaricada uno de los Hijos de Dios experimente un redespertar. (T.6.I.



Señor, eres tú, te reconozco.

Los que llevan años aprisionados con pesadas cadhambrientos y demacrados, débiles y exhaustos, con losaclimatados a la obscuridad desde hace tanto tiempo que ni sirecuerdan la luz, no se ponen a saltar de alegría en el instante ese les pone en libertad. Tardan algún tiempo en comprender lo qla libertad. Andabas a tientas en el polvo y encontraste la manohermano, indeciso de si soltarla o bien asirte a la vida por tanto t

olvidada. Agárrate aún con más fuerza y levanta la vista parpuedas contemplar a tu fuerte compañero, en quien ressignificado de tu libertad. Él parecía estar crucificado a tu ladembargo, su santidad ha permanecido intacta y perfecta, y, con lado, este día entrarás en el Paraíso y conocerás la paz de Dio20.III.9.1-6)

Tú que tomas de la mano a tu hermano tomas también la míacuando os unisteis no estabais solos. ¿Crees acaso que yo tedejar en las tinieblas que acordaste abandonar conmigo? relación radica la luz de este mundo. Y el miedo no puededesaparecer de tu vista ahora. No caigas en la tentación de arrel regalo de la fe que le ofreciste a tu hermano. Lo únicoconseguirías con ello sería asustarte a ti mismo. El regalo se disiempre, pues Dios Mismo lo aceptó. No puedes quitárselo ahora

aceptado a Dios. La santidad de tu relación quedó establecidaCielo. No entiendes lo que aceptaste, pero recuerda qentendimiento no es necesario. Lo único que se necesitsimplemente tu deseo de entender. Ese deseo fue el de ser sanVoluntad de Dios se te concede, pues lo único que deseas es siempre tuviste o lo que siempre fuiste. (T.18.III.4.1-15)

Puedes estar tan seguro de que yo te llevo de la mano como dtú estuviste de acuerdo en llevar de la mano a tu hermano. (T5.5)



Y Verónica, con el suave lino, aún pasa por el camino…

Pues este velo obscuro, que hace que la faz de Cristo se asemla de un leproso y que los radiantes rayos del Amor de Su Padriluminan Su rostro con gloria parezcan chorros de sangrdesvanecerá ante la deslumbrante luz que se encuentra más allá

una vez que el miedo a la muerte haya desaparecido. (T.19.IV.D.El perdón permite que se descorra el velo que oculta la faz de

de aquellos que contemplan el mundo sin piedad. Te preconocer al Hijo de Dios, y borra de tu memoria todo pensammuerto, de manera que el recuerdo de tu Padre pueda alzarseumbral de tu mente. ¿Qué podrías desear que el perdón no pudarte? ¿Qué otros regalos aparte de éstos merecen procurarse? imaginado valor, efecto trivial o promesa pasajera que nunca se cumplir puede ofrecerte más esperanza que la que te brinda el p(L.PI.122.3.1-5)

Acepta la única ilusión que proclama que en el Hijo de Dios ncondenación, y el Cielo será recordado instantáneamente, el mquedará olvidado y todas sus absurdas creencias quedarán olvi

junto con él, conforme la faz de Cristo aparezca por fin sin velo aen este sueño de perdón. Éste es el regalo que el Espíritu Saofrece de parte de Dios tu Padre. Deja que el día de hocelebrado tanto en la tierra como en tu santo hogar. Sé benévoambos, al perdonar las ofensas de las que pensaste queculpables, y ve tu inocencia irradiando sobre ti desde la faz de C(L.PI.198.10.1-4)



“Hasta las ruinas fueron destruidas”

No es la Voluntad de Dios que Su Hijo viva en estado de guerrlo tanto, el imaginado "enemigo" que Su Hijo cree tener es totalirreal. No estás sino tratando de escapar de una guerra encarnde la que ya te has escapado. La guerra ya terminó, pues has ohimno de la libertad elevarse hasta el Cielo. Grande es la dichregocijo de Dios por tu liberación porque tú no creaste la libertadde la misma manera en que no creaste la libertad, tampoco cuna guerra que pudiese poner en peligro dicha libertad. destructivo ha existido nunca ni existirá jamás. La guer

culpabilidad y el pasado desaparecieron al unísono en la irrealiddonde vinieron. (T.13.XI.2.1-8)

La guerra contra ti mismo no es más que una batalla entrilusiones que luchan para diferenciarse la una de la otra, creyendla que triunfe será la verdadera. No existe conflicto alguno entre ela verdad. Ni tampoco son ellas diferentes entre sí. Ninguna de laes verdad. Por lo tanto, no importa qué forma adopten. Lo quengendró es una locura y no pueden sino seguir formando paello. La locura no representa ninguna amenaza contra la realidejerce influencia alguna sobre ella. Las ilusiones no pueden vela verdad ni suponer una amenaza para ella en absoluto. Y la reque niegan no forma parte de ellas. (T.23.I.6.1-9)

Las mejores alternativas que el ego ofrece para contrarrestar

se percibe como la ruda intromisión de la culpabilidad en la paz solvido, el sueño y la muerte. Aun así, nadie piensa que esconflicto y abatido por una guerra cruel, a menos que crea que acontendientes son reales. Al creerlo, se ve obligado a escaparuna guerra sí pondría fin a su paz mental, y, por lo tanto, lo desMas sólo con que se diese cuenta de que la guerra es entre un real y uno irreal, podría mirar en su interior y ver su libertad. pensaría estar abatido y atormentado por interminables batallasmismo percibiese que no tienen absolutamente ningún significad13.XI.1.1-5)



“Jesús estará en agonía

hasta el final del mundo…”.

He venido como una luz a un mundo que en verdad se niega sí mismo. Hace eso simplemente al disociarse de todo. Dicho mes, por lo tanto, una ilusión de aislamiento, que se mantiene vpor miedo a la misma soledad que es su ilusión. Os dije que econ vosotros siempre, incluso hasta el fin del mundo. Por eso es que soy la luz del mundo. Si estoy contigo en la soledad del munsoledad desaparece. No puedes mantener la ilusión de soledadestás solo. Mi propósito, pues, sigue siendo vencer el mundo. Yoataco, pero mi luz no puede sino desvanecerlo por razón de lo qLa luz no ataca a la obscuridad, pero la desvanece con su fulgorluz va contigo a todas partes, tú desvaneces la obscuridad conLa luz se vuelve nuestra, y ya no puedes morar en la obscuridcomo la obscuridad no puede morar allí donde tú vas. Acordarte es acordarte de ti mismo, así como de Aquel que me envió a ti.(T2.1-13)

Dile que sabes que no puedes fracasar en tu empeño pconfías en Él. Y dite a ti mismo que esperas lleno de certeza contemplar el mundo que Él te ha prometido. De ahora en adverás de otra manera. La luz ha llegado hoy. Y verás el mundo qte ha prometido desde los orígenes del tiempo, en el cual el fitiempo está garantizado. (L.PI.75.8.1-5)

"Descanso en Dios." Este pensamiento te brindará el descanssosiego, la paz y la quietud, así como la seguridad y felicidabuscas. "Descanso en Dios." Este pensamiento tiene el poddespertar la verdad durmiente en ti que posees la visión que veallá de las apariencias hasta esa misma verdad en todo el mundtodo lo que existe. He aquí el fin del sufrimiento para el mundo y para todo aquel que jamás haya venido o haya de venir paraaquí por algún tiempo. He aquí el pensamiento mediante el cual de Dios nace de nuevo para reconocerse a sí mismo. (L.PI.109.2



¡Es la última vez, Padre!

La más tenebrosa de las piedras angulares que ocultas, matu creencia en la culpabilidad fuera de tu conciencia, pues en esetenebroso y secreto yace el reconocimiento de que has traicionHijo de Dios al haberlo condenado a muerte. Tú ni siquiera sospque esta idea asesina, aunque demente, yace ahí oculta, puansias destructivas del ego son tan intensas que sólo la crucifixiHijo de Dios puede, en última instancia, satisfacerle. No sabe quel Hijo de Dios porque es ciego. Más permítele percibir inocencualquier parte, y tratará de destruirla debido a su miedo.

(T.13.II.3.1-5)

Este velo, que la creencia en la muerte mantiene intacto y qatracción protege, es el más tenebroso de todos. La dedicaciómuerte y a su soberanía no es más que el voto solemne, la proque en secreto le hiciste al ego de jamás descorrer ese velo, acercarte a él y de ni siquiera sospechar que está ahí. Ésteacuerdo secreto al que llegaste con el ego para mantener eternaen el olvido lo que se encuentra más allá del velo. He aquí tu prode jamás permitir que la unión te haga abandonar la separacprofunda amnesia en la que el recuerdo de Dios parece totalmente olvidado; la brecha entre tu Ser y tú: el temor a Dúltimo paso de tu disociación. (T.19.IV.D.3.1-4)

Tú que has querido condenar a tu propio Creador no p

comprender que no fue Él Quien condenó a Su Hijo. Quieres nSus Efectos, sin embargo, Éstos jamás han sido negadoimposible que Su Hijo pudiese jamás haber sido condenado por carece de causa y es contrario a Su Voluntad. De lo único qmemoria quiere dar testimonio es del temor a Dios. Él no ha hechque temes. Ni tú tampoco. Por lo tanto, jamás perdiste tu inocNo tienes necesidad de curación para estar sano. Desde la quietu interior, ve en el milagro una lección en cómo permitir que la Ctenga Sus Propios efectos y en no hacer nada que pueda interfe28.I.10.1-9)



El hombre es el lobo del hombre

Es una locura usar el cuerpo como chivo expiatorio sobre descargar tu culpabilidad, dirigiendo sus ataques y culpándolo por lo que tú mismo quisiste que hiciese. Es imposible exterfantasías, pues éstas siguen siendo lo que tú deseas y no tienenque ver con lo que el cuerpo hace. El cuerpo no sueña con ellaúnico que éstas hacen es convertirlo en un lastre en vez de enútil. Pues las fantasías han hecho de tu cuerpo tu "enemigo"débil, vulnerable y traicionero, merecedor del odio que le tienesqué te ha servido todo esto? Te has identificado con eso que odinstrumento de venganza y la aparente fuente de tu culpabilidahas hecho esto a algo que no tiene significado, proclamándmorada del Hijo de Dios y haciendo luego que se vuelva contra 18.VI.6.1-8)

El ego se vale del cuerpo para conspirar contra tu mente, y pque el ego se da cuenta de que su "enemigo" puede acabar cocon el cuerpo reconociendo simplemente que no forman parte dey el cuerpo se unen para llevar a cabo un ataque conjunto. Tal veésta la más extraña de todas las percepciones, si te detieconsiderar lo que ello realmente implica. El ego, que no es reade persuadir a la mente, que sí es real, de que ella es su recuaprendizaje; y, lo que es más, de que el cuerpo es más real quNadie que esté en su mente recta podría creer semejante cnadie que está en su mente recta lo cree. (T.6.IV.5.1-4)

Es esencial, no obstante, que el obrador de milagros esté mente recta, aunque sea brevemente, o, de lo contrario, será inde re-establecer la mentalidad recta en otros. (T.2.V.3.5)



Se dice que los chinos inventaron la pólvora

y nos dieron una dádiva con ello.

El ejército de los impotentes es en verdad débil. No tiene armenemigo. Puede ciertamente invadir el mundo y buscar un enePero jamás podrá encontrar lo que no existe. Puede ciertamenteque encontró un enemigo, pero éste cambia incluso mientras latacando, de modo que corre de inmediato a buscarse otro, y consigue cantar victoria. Y a medida que corre se vuelve conmismo, pensando que tuvo un pequeño atisbo del gran enemig

siempre elude su ataque asesino convirtiéndose en alguna otra¡Cuán traicionero parece ser ese enemigo, que cambia tanto qsiquiera es posible reconocerlo! (T.21.VII.4.1-7)

En segundo lugar, los atributos del amor se le confieren"enemigo". Pues el miedo se convierte en tu refugio y en el prode tu paz, y recurres a él en busca de solaz y de escape de cuaduda con respecto a tu fortaleza, así como con la esperanza de descansar en una quietud sin sueños. Y al así despojar al amorque le pertenece a él y sólo a él, se le dota con los atributos del mPues el amor te pediría que depusieses todas tus defensas péstas meras necedades. Y ciertamente tus armas se desmoronaquedarían reducidas a polvo, pues eso es lo que son. (L.PI.170.5.5-1-6)

¡Qué descabellada es la idea de que atacando es la manedefenderse del miedo! Pues he aquí donde se engendra el miedle nutre de sangre para que crezca, se expanda y sea cada verabioso. Ésta es la manera de proteger el miedo, no de escapaél. Hoy aprendemos una lección que te evitará más demosufrimientos de los que te puedes imaginar. Y es ésta: Tú faaquello de lo que te defiendes. Y al defenderte contra ello hacesea real e ineludible. Depón tus armas, y sólo entonces percibifalsedad. (L.PI.170.2.1.7)



Estamos locos.

¿No es acaso extraño que consideres arrogante pensar quetú quien fabricó el mundo que ves? Dios no lo creó. De eso pestar seguro. ¿Qué puede saber Él de lo efímero, del pecado oculpabilidad? ¿Qué puede saber de los temerosos, de los que sude los solitarios; o de la mente que vive dentro de un ccondenado a morir? Pensar que Él ha creado un mundo en etales cosas parecen ser reales es acusarlo de demente. Él noloco. Sin embargo, sólo la locura da lugar a semejante mundo.

152.6.1-7)

Sería ciertamente una locura poner la salvación en manos dementes. Pero puesto que Dios no está loco, ha designado a Ucuerdo como Él para que le presente un mundo de mayor cordtodo aquel que eligió la demencia como su salvación. A Él le eselegir la forma más apropiada para ayudar al demente: una qataque el mundo que éste ve, sino que se adentre en él calladay le muestre que está loco. El Espíritu Santo no hace sino señotra alternativa, otro modo de contemplar lo que antes veía, qreconoce como el mundo en el que vive, el cual creía entender25.VII.8.1-4)

Tu liberación no es aún total: todavía es parcial e incomaunque ya ha despuntado en ti. Al no estar completamente loc

estado dispuesto a contemplar una gran parte de tu demencreconocer su locura. Tu fe está comenzando a interiorizarse máde la demencia hacia la razón. Y lo que tu razón te dice ahora, eno lo quiere oír. El propósito del Espíritu Santo fue aceptadaquella parte de tu mente que el ego no conoce y que tú tamconocías. Sin embargo, esa parte, con la que ahora te identificateme mirarse a sí misma. No conoce el pecado. ¿De qué otra sino, habría estado dispuesta a considerar el propósito del ESanto como suyo propio? (T.21.IV.4.1-9)



Cara a cara.

No olvides que tú y tu hermano habéis llegado hasta aquí junciertamente no fue el ego el que os guió. Ningún obstáculo a la ppuede superar con su ayuda. El ego no revela sus secretos, ni tque los examines y los transciendas. No quiere que veas su debni que te des cuenta de que no tiene poder alguno para mantalejado de la verdad. El Guía que os condujo hasta aquí aún estvosotros, y cuando alcéis la mirada estaréis listos para mirar ccara al terror sin temor alguno. Pero primero, alza la mirada y mir

hermano con inocencia nacida del completo perdón de sus ilusioa través de los ojos de lafe que no las ve. (T.19.IV.D.i.8.1-7)

¿Sería mucho pedir que tuvieses un poco de confianza enque te trae a Cristo para que todos tus pecados te sean perdonsin excluir ni uno solo que todavía quisieras valorar? No olvideuna sola sombra que se interponga entre tu hermano y tú nublade Cristo y el recuerdo de Dios. ¿E intercambiarías Éstos por uinmemorial? El suelo que pisas es tierra santa por razón de Aqque, al estar ahí contigo, la han bendecido con Su inocencia y cpaz. (T.26.IX.2.1-4)

Cuando te encuentras con alguien, recuerda que se trata encuentro santo. Tal como lo consideres a él, así te considerarámismo. Tal como lo trates, así te tratarás a ti mismo. Tal como p

de él, así pensarás de ti mismo. Nunca te olvides de esto, pues semejantes o bien te encuentras a ti mismo o bien te pierdemismo. Cada vez que dos Hijos de Dios se encuentran, sproporciona una nueva oportunidad para salvarse. No dejes de dsalvación a nadie, para que así la puedas recibir tú. Yo estoy siecontigo, en memoria tuya. (T.8.III.4.1-8)

El Espíritu Santo te enseña que siempre te encuentras cmismo, y el encuentro es santo porque tú lo eres. (T.13.IV.6.9)



Augurios

El velo que cubre la faz de Cristo, el temor a Dios y a la salvasí como el amor a la culpabilidad y a la muerte, no son sino difenombres de un mismo error: que hay un espacio entre tu hermanque os mantiene aparte debido a una ilusión de ti mismo qmantiene a él separado de ti y a ti alejado de él. La espada del

es el arma que le entregas a esta ilusión de ti mismo, para que luchar e impedir que el amor llene el espacio que mantienehermano separado de ti. Mientras empuñes esa espada, no obsno podrás sino percibirte a ti mismo como un cuerpo, pues te hcondenado a estar separado de aquel que sostiene el espejrefleja otra imagen de lo que él es, y, por ende, de lo que tú no psino ser también. (T.31.VII.9.1-3)

No tienes idea del tremendo alivio y de la profunda paz que rede estar con tus hermanos o contigo mismo sin emitir juicininguna clase. Cuando reconozcas lo que eres y lo que tus hermson, te darás cuenta de que juzgarlos de cualquier forma que stiene sentido. De hecho, pierdes el significado de lo que elloprecisamente porque los juzgas. Toda incertidumbre procede creencia de que es imprescindible juzgar. No tienes que juzga

organizar tu vida, y definitivamente no tienes que hacerloorganizarte a ti mismo. En presencia del conocimiento todo queda automáticamente suspendido, y éste es el proceso qpermite al conocimiento reemplazar a la percepción. (T.3.VI.3.1-

Juzgar es el proceso en el que se basa la percepción, peroconocimiento. (T.3.VI.2.2)



Las guerras son el espanto de las madres.

Tú no puedes comprenderte a ti mismo separado de los demáse debe a que tú, separado del legítimo lugar que ocupas Filiación, no significas nada, y el legítimo lugar de la Filiación esÉsa es tu vida, tu eternidad y tu Ser. Esto es lo que el Espíritu Sarecuerda. Esto es lo que Él ve. Esta visión atemoriza al ego por sserena. La paz es el mayor enemigo del ego porque, de acuerd

su interpretación de la realidad, la guerra es la garantía de su supervivencia. El ego se hace más fuerte en la lucha. Si crees qulucha, reaccionarás con saña porque la idea de peligro se adentrado en tu mente. Dicha idea es un llamamiento al egEspíritu Santo está tan pendiente como el ego de cualquier sepeligro, oponiéndose a éste con todas Sus fuerzas de la misma en que el ego le da la bienvenida. El Espíritu Santo contrarrestacogida dándole la bienvenida a la paz. La eternidad y la paz estestrechamente relacionadas como lo están el tiempo y la guer5.III.8.1-13)

Esto es lo que era el ego: el odio cruel, la necesidad de venganzagritos de dolor, el miedo a la muerte y el deseo de matar, la ilusno tener hermanos, y el yo que parecía estar solo en el univermilagro corrige este terrible error con respecto a ti mismo con la m

dulzura con la que una madre amorosa adormece con su cantocriatura. ¿No preferirías escuchar un canto así? ¿No contestarcanto todo lo que pensabas preguntar, haciendo incluso qpregunta dejase de tener sentido? (C.2.8.1-4)

Este es el alegre canto que la salvación entona a todo el que oVoz. (P.2.VI.7.2)



“Debemos morir,

nosotros y todo aquello que es nuestro”

Creer en el infierno es ineludible para aquellos que se idencon el ego. Sus pesadillas y sus miedos están asociados conego te enseña que el infierno está en el futuro, pues ahí es donde todas sus enseñanzas apuntan. Su objetivo es el infiernoaunque tiene por finalidad la muerte y la disolución, él mismo noen ello. El objetivo de muerte que ansía para ti, le deja insatisNadie que siga sus enseñanzas puede estar libre del miedomuerte. Sin embargo, si se pensase en la muerte simplemente el fin del dolor, ¿se le tendría miedo? Hemos visto antes esta eparadoja en el sistema de pensamiento del ego, pero nuncclaramente como aquí. Pues el ego tiene que dar la impresión dmantiene al miedo alejado de ti para conservar tu fidelidad. Peroque generar miedo para protegerse a sí mismo. Una vez más, intenta y lo logra con demasiada frecuencia, hacer ambas valiéndose de la disociación para mantener sus metas contradicunidas, de manera que parezcan estar en armonía. El ego enseñlo tanto, que la muerte es el final en lo que respecta a cuaesperanza de alcanzar el Cielo. Sin embargo, puesto que tú y no podéis estar separados, y puesto que él no puede concepropia muerte, te seguirá persiguiendo porque la culpabilidaeterna. Tal es la versión que el ego tiene de la inmortalidad. Y elo que su versión del tiempo apoya. (T.15.I.4.1-5)

Aceptar la Expiación te enseña lo que es la inmortalidad, paceptar que estás libre de culpa te das cuenta de que el pasado existió, y, por lo tanto, de que el futuro es innecesario y de que tendrá lugar. En el tiempo, el futuro siempre se asocia con exsólo la culpabilidad podría producir la sensación de que expnecesario. Aceptar como tuya la inocencia del Hijo de Dios es, tanto, la forma en que Dios te recuerda a Su Hijo, y lo que éste verdad. Pues Dios nunca ha condenado a Su Hijo, que al ser inoes también eterno(T.13.I.9.1-4)



Mi dulce país, ¿dónde estás?

Si el universo que percibimos fuese tal como Dios lo creóimposible pensar que Dios es amoroso. Pues aquel que ha decque todas las cosas mueran y acaben en polvo, desilusdesesperanza, no puede sino inspirar temor. Tu insignificante viden sus manos, suspendida de un hilo que él está listo para corningún remordimiento y sin que le importe, tal vez hoy mismo. Y esperase, el final es seguro de todas formas. El que ama a un d

no conoce el amor, ya que ha negado que la vida sea real. La mse ha convertido en el símbolo de la vida. Su mundo es ahocampo de batalla, en donde reina la contradicción y los opuluchan en una guerra interminable. Allí donde hay muerte es impla paz (M.27.2.1-8)

Todo esfuerzo de encontrar esperanzas de paz en un cambatalla ha sido en vano.

(T.29.II.3.1)

Tu propósito ahora es pasar por alto el campo de batalla. (T4.7)

La puerta está abierta; te has retirado del campo de batalla. (T6.3)

El instante santo es la morada de los milagros. Desde allí, cadde ellos viene a este mundo como testigo de un estado mental qtranscendido el conflicto y ha alcanzado la paz. El instante santoel consuelo de la paz al campo de batalla, demostrando así qguerra no tiene efectos. Pues todo el dolor que la guerra ha trataocasionar, los cuerpos despedazados y los miembros mutiladomoribundos gimientes y los muertos silenciosos, son dulceelevados y consolados. (T.27.V.3.1-4)



La muerte lo tomó, cómo si él

se levantara de un lecho de ortigas.

Si el pecado es real, la salvación tiene que ser el dolor. El doel costo del pecado, y si el pecado es real el sufrimiento es inevLa salvación no puede sino ser temible, pues mata, aulentamente, y antes de otorgar el deseado favor de la muertevíctimas que están casi en los huesos antes de haberapaciguada, los despoja de todo. Su ira es insaciable e inclem

aunque totalmente justa. (L.PI.101.3.1-4)El pecado, la culpabilidad y la muerte se originaron en el eg

clara oposición a la vida, a la inocencia y a la Voluntad de Dios m¿Dónde puede hallarse semejante oposición, sino en las menfermizas de los desquiciados, que se han consagrado a la lose oponen firmemente a la paz del Cielo? Pero una cosa es sDios, que no creó ni el pecado ni la muerte, no dispone que tú aprisionado por ellos. Pues Él no conoce ni el pecado nresultados. Las figuras amortajadas que marchan en la profúnebre no lo hacen en honor de su Creador, Cuya Voluntad evivan. No están acatando Su Voluntad, sino oponiéndose a ell19.IV.C.I.3.1-5)

El Pensamiento de Dios te creó. Y no te ha abandonado, ni t

estado nunca separado de él ni siquiera por un instante. Te perteGracias a él vives. Es tu Fuente de vida, pues te mantiene unido todo es uno contigo porque él jamás te abandonó. El PensamieDios te protege, cuida de ti, hace que tu lecho sea mullido y allacamino, al iluminar tu mente con gozo y amor. Tanto la eternidadla vida eterna refulgen en tu mente porque el Pensamiento de Dte ha abandonado y todavía se encuentra en ti. (L.PI.165.2.1-7)



El justo, como la madera de sándalo,perfuma el hacha qhiere.

A menos que pienses que todos tus hermanos tienen el mderecho a los milagros que tú, no reivindicarás tu derecho a elhaber sido injusto con otros que gozan de los mismos derechotú. Si tratas de negarle algo a otro, sentirás que se te ha negadSi tratas de privar a alguien de algo, te habrás privado a ti mismimposible recibir un milagro que otro no pueda recibir. Sólo el pofrece milagros. Y el perdón tiene que ser justo con todo el mund25.IX.8.1-6)

Esta idea contiene los primeros destellos de tu verdadera funcel mundo, o en otras palabras, la razón por la que estás aqpropósito es ver el mundo a través de tu propia santidad. Demodo, tú y el mundo sois bendecidos juntos. Nadie pierde; a nale despoja de nada; todo el mundo se beneficia a través de tuvisión. Tu santa visión significa el fin del sacrificio porque les oftodos su justo merecido. Y él tiene derecho a todo, ya que ése sagrado derecho como Hijo de Dios. (L.PI.37.1-6)

Hermano mío, tú eres parte de Dios y parte de mí. Cuando phayas visto los cimientos del ego sin acobardarte, habrástambién los nuestros. Vengo a ti de parte de nuestro Padre a ofrtodo nuevamente. No lo rechaces a fin de mantener ocutenebrosa piedra angular, pues la protección que te ofrece no te salvar. Yo te daré la lámpara y te acompañaré. No harás estesolo. Te conduciré hasta tu verdadero Padre, Quien, como yonecesidad de ti. ¿Cómo no ibas a responder jubilosamentellamada del amor? (T.11.IN.4.1)



Desde lo profundo.

No existen diferentes clases de vida, pues la vida es coverdad. No admite grados. Es la única condición que todo lo quecreó comparte. Y al igual que todos Sus Pensamientos, noopuesto. La muerte no existe porque lo que Dios creó compaVida. La muerte no existe porque Dios no tiene opuesto. La mueexiste porque el Padre y el Hijo son uno. (L.PI.167.1-6)

La extraña creencia de que una parte de las cosas que mpuede seguir existiendo separada de lo que muere, tampoco proa un Dios amoroso ni vuelve a sentar las bases para que se confianza. Si la muerte es real para una sola cosa, la vida no eLa muerte niega la vida. Pero si la vida es real, lo que se niegamuerte. En esto no puede haber transigencia alguna. O bien exidios de miedo o bien Uno de Amor. El mundo intenta hacer mitransigencias al respecto, y tratará de hacer mil más. Ni unapuede ser aceptable para los maestros de Dios, ya que ninguellas sería aceptable para Dios. Él no creó la muerte, puesto qcreó el miedo. Para Él ambas cosas están igualmente desprovissentido. (M.27.4.1-10)

Pero la muerte no existe. Lo que existe es la creencia en la muer3.VII.5.11)

Hermano la muerte no existe. (T.27.II.6.8)

Todos los corazones palpitantes se encuentran tranquilos y de gran expectación porque la hora de lo eterno está por llegmuerte no existe. El Hijo de Dios es libre. Y en su libertad radicadel miedo. Ya no quedan en la tierra lugares ocultos que puedarefugio a ilusiones enfermizas, a sueños de temor o a percepcfalsas del universo. Todas las cosas se ven en la luz, y en la transforma y se comprende su propósito. Y nosotros, los Hijos denos levantamos del polvo y contemplamos nuestra peimpecabilidad. El canto del Cielo se escucha por todo el munmedida que éste es elevado y conducido a la verdad. (M.28.4.1-



En el lagar, la uva fue pisoteada.

¿Y qué es ese cuerpo vestido de negro que quieren enterrar? cuerpo que ellos consagraron a la muerte, un símbolo de corruun sacrificio al pecado, ofrecido a éste para que se cebe en éeste modo, siga viviendo; algo condenado, maldecido por su haclamentado por todos los miembros de la procesión fúnebre qidentifican con él. Tú que crees haber sentenciado al Hijo de Desto eres arrogante. Pero tú que quieres liberarlo no haces sino la Voluntad de su Creador. La arrogancia del pecado, el orgulloculpabilidad, el sepulcro de la separación, son todos parte consagración a la muerte, lo cual aún no has reconocido. El brculpabilidad con el que revestiste al cuerpo no haría sino desPues lo que el ego ama, lo mata por haberle obedecido. Pepuede matar a lo que no le obedece. (T.19.IV.C.i.4.1-8)

El cuerpo es el ídolo del ego, la creencia en el pecado hecha y luego proyectada afuera. Esto produce lo que parece ser una mde carne alrededor de la mente, que la mantiene prisionera diminuto confín de espacio y tiempo hasta que llegue la muedisponiendo de un solo instante, en el que suspirar, sufrir y mohonor de su amo. Y este instante no santo es lo que parece vida: un instante de desesperación, un pequeño islote de arenadesprovisto de agua y sepultado en el olvido. Aquí se dbrevemente el Hijo de Dios para hacer su ofrenda a los ídolosmuerte y luego fallecer. Sin embargo, aquí está más muerto queNo obstante, es aquí también donde vuelve a elegir entre la idolel amor. Aquí se le da a escoger entre pasar dicho instante rindiéculto al cuerpo, o permitir que se le libere de él. Aquí puede aceinstante santo que se le ofrece como substituto del instante noque antes había elegido. Y aquí puede finalmente darse cuenta dlas relaciones son su salvación y no su ruina. (T.20.VI.11.1-9)



“Entre más noble es el corazón,

menos rígido es el cuello”

Es fácil distinguir la grandeza de la grandiosidad, pues elpuede ser correspondido, pero el orgullo no. El orgullo no promilagros, y te privará, por lo tanto, de los verdaderos testigosrealidad. La verdad no está velada ni oculta, pero el que sea evpara ti depende del gozo que lleves a sus testigos, que son quiela mostrarán. Ellos dan testimonio de tu grandeza, pero no puedetestimonio del orgullo porque el orgullo no se puede compartirquiere que contemples lo que Él creó porque lo que Él creó gozo.(T.9.VIII.8.1-5)

La cara de inocencia que el concepto de uno mismorgullosamente lleva puesta, condona el ataque que se lleva a cadefensa propia, pues, ¿no es acaso un hecho harto conocido mundo trata ásperamente a la inocencia indefensa? Nadie queuna imagen de sí mismo omite esta cara, pues tiene necesidad dMás no quiere ver el otro lado. Sin embargo, es ahí donaprendizaje del mundo tiene puestas sus miras, pues ahí es donestablece la "realidad" del mundo, para perpetuar la continuidaídolo. (T.31.V.4.1-4)

Rinde tus armas, y ven sin defensas al sereno lugar donde porpaz del Cielo envuelve todas las cosas en la quietud. Abandonapensamiento de miedo y de peligro. No permitas que el ataquecontigo. Depón la cruel espada del juicio que apuntas contra tu cuello, y deja a un lado las devastadoras acometidas con laprocuras ocultar tu santidad. (L.PI.190.9.1--4)

"El Cielo y la tierra pasarán" significa que no continuarán exiscomo estados separados. Mi palabra, que es la resurrección y lano pasará porque la vida es eterna. Tú eres la obra de Dios, y Sues totalmente digna de amor y totalmente amorosa. Así es cohombre debiera pensar de sí mismo en su corazón, pues eso es realmente es. (T.1.III.2.1-4)



“Con uñas y pico”

El mundo que ves no es más que la ilusión de un mundo. Dioscreó, pues lo que Él crea tiene que ser tan eterno como Él. mundo que ves, no obstante, no hay nada que haya de perdurasiempre. Algunas cosas durarán en el tiempo algo más que otrasllegará el momento en el que a todo lo visible le llegue su fin4.1.1-5)

Los ciegos se acostumbran a su mundo adaptándose a él. saber cómo desenvolverse en él. Han aprendido a hacerlo, pero

través de lecciones gozosas, sino a través de la dura necimpuesta por las limitaciones que no creían poder superar. Y todavía lo siguen creyendo, tienen en gran estima a esas lecciose aferran a ellas porque no pueden ver. No entienden que slecciones en sí las que los mantienen ciegos. Eso no lo creen. conservan el mundo que aprendieron a "ver" en su imagincreyendo que sólo pueden elegir entre eso o nada. Odian el mque aprendieron a conocer mediante el dolor. Y todo lo que creehabita en él sólo sirve para recordarles que están incompletos se les ha privado injustamente de algo. (T.21.I.4.1-9)

Mientras el perdón no sea completo, el mundo seguirá tenienpropósito. Es el hogar donde nace el perdón, donde crece y donvuelve más fuerte y abarcador. Aquí se le alimenta, pues esdonde se le necesita. Un benévolo Salvador, nacido donde el p

fue concebido y donde la culpabilidad parecía real. Éste es Su porque aquí ciertamente se le necesita. Él trae Consigo el fimundo. Es a Su llamada a la que los maestros de Dios respodirigiéndose a Él en silencio para recibir Su Palabra. El macabará cuando todas las cosas que hay en él hayancorrectamente juzgadas mediante Su juicio. El mundo acabará bendición de la santidad sobre él. El mundo desaparecerá cuanno quede ni un solo pensamiento de pecado. No será destruatacado y ni siquiera sufrirá el más mínimo rasguño. Simpledejará de parecer que existe.(M.14.2.1-12)



Lejos de la sonrisa de Reims

Uno de los principales dogmas de la descabellada religión del eque el pecado no es un error sino la verdad, y que la inocenciaque pretende engañarnos. La pureza se considera arroganciaaceptación de nuestro ser como algo pecaminoso se percibe santidad. Y es esta doctrina la que substituye a la realidad del HDios tal como su Padre lo creó, y tal como dispuso que fuesesiempre. ¿Es esto humildad? ¿O es más bien un intento de desgla creación de la verdad, y de mantenerla aparte?” (T.19.II.4.1-5)

Lamento cuando mis hermanos no comparten mi decisión solamente una Voz, pues eso los debilita como maestros y alumnos. Con todo, sé que no pueden realmente traicionarsemismos ni traicionarme a mí, y que sobre ellos es donde todavíaque edificar mi iglesia. No hay ninguna otra alternativa al resporque únicamente tú puedes ser la roca de la iglesia de Diodonde hay un altar hay una iglesia, y la presencia del altar es hace que la iglesia sea santa. La iglesia que no inspira amor, tiealtar oculto que no está sirviendo al propósito para el que Ddestinó. Tengo que edificar Su iglesia sobre ti porque quieneaceptan como modelo son literalmente mis discípulos. Los discson seguidores, y si el modelo que siguen ha elegido evitarles dorelación con todo, serían ciertamente insensatos si no lo sigu(T.6.I.8.1-7)

El intento de formalizar la religión es un intento tan evidente dde reconciliar lo irreconciliable que prácticamente no neexplicarse aquí. La religión es experiencia; la psicoterapexperiencia. En sus más altos niveles se vuelven una. Ninguverdad en sí misma, pero ambas pueden conducir a la verdad.puede ser necesario para encontrar la verdad, la cual permperfectamente obvia, sino la eliminación de los aparentes obstácla verdadera conciencia? (P.2.II.2.3-7)



La ley es dura, pero es la ley.

Para que las leyes puedan ser útiles tienen que comunicarsefecto, tienen que ser traducidas para aquellos que hablan diidiomas. Un buen traductor, no obstante, si bien tiene que alteforma de lo que traduce, jamás altera el significado. De hechúnico propósito es cambiar la forma de modo que la traduconserve el significado original. El Espíritu Santo es el traductor leyes de Dios para aquellos que no las entienden. Tú no podrías eso por tu cuenta porque una mente en conflicto no puede serle

un solo significado, y, por lo tanto, altera el significado para conla forma. (T.7.II.4.1-6)

Las leyes de Dios mantendrán a tu mente en paz porque la pSu Voluntad, y Sus leyes se promulgaron para apoyarla. Sus leyelas leyes de la libertad, mas las tuyas son las leyes del cautPuesto que la libertad y el cautiverio son irreconciliablesrespectivas leyes no se pueden entender simultáneamente. Lasde Dios operan exclusivamente para tu bien, y no hay más leyelas Suyas. Lo demás no está regido por ninguna ley, y es, por locaótico. Dios Mismo, no obstante, ha protegido todo lo que Émediante Sus leyes. No existe nada que no esté regido por ellasleyes del caos" es una expresión que no tiene sentido. La creacata sus leyes perfectamente; y lo caótico carece de signporque Dios no forma parte de ello. Le has "dado" tu paz a los d

que inventaste, pero ellos no pueden aceptarla, pues no están ahno puedes dársela. (T.10.IV.4.1-10)

Las leyes de Dios existen para tu protección, y no existen en (T.11.IV.2.3)

Voy a aceptar ahora solamente aquello a lo que las leyes deme dan derecho, de manera que pueda usarlo en beneficio función que Él me ha dado. (L.PI.89.1.5)



Virgen de las Siete Espadas.

Se crucifican a sí mismos en su nombre, creyendo que el podHijo de Dios emana del sacrificio y del dolor. (T.11.VI.5.5)

Si Dios sabe que Sus Hijos son completamente impecables, eblasfemia percibirlos como culpables. Si Dios sabe que Sus Hipueden sufrir dolor alguno, es una blasfemia percibir sufrimien

cualquier parte. Si Dios sabe que Sus Hijos son completadichosos, es una blasfemia sentirse deprimido. Todas estas ilusiolas múltiples formas que la blasfemia puede adoptar, son negataceptar la creación tal como es. Si Dios creó a Su Hijo perfecto, como debes aprender a considerarlo para que puedas conocrealidad. Y como parte de la Filiación, así es como tieneconsiderarte a ti mismo para que puedas conocer la tuya. (T12.1-6)

Cuando te sientas abrumado, recuerda que te has hecho damismo. Tu Consolador te proveerá descanso, pues tú no pproveértelo a ti mismo. No sabes cómo hacerlo porque si sununca habrías podido sentirte abrumado. Si no te hicieras dañmismo no podrías sufrir en absoluto, pues ésa no es la VoluntDios para Su Hijo. El dolor es algo ajeno a Él, ya que Él no sa

ataques y Su paz te rodea silenciosamente. Dios permaneperfecta quietud, ya que en Él no hay conflicto alguno. El conflila raíz de todos los males, pues al ser ciego no ve a quien Siempre ataca, no obstante, al Hijo de Dios, y el Hijo de Dios e(T.11.III.1.1-8)



“¡Muertos de pie!”.

Mientras sigas creyendo que el Hijo de Dios es culpable secaminando a lo largo de esa alfombra, creyendo que conducmuerte. (T.13.I.3.6)

Sueñas que tu hermano está separado de ti, que es un

enemigo, un asesino que te acecha en la noche y planea tu mdeseando además que sea lenta y atroz. Mas bajo este sueñootro, en el que tú te vuelves el asesino, el enemigo secresepultador y destructor de tu hermano así como del mundo. He acausa del sufrimiento, la brecha entre tus míseros sueñosrealidad. La pequeña grieta que ni siquiera ves, la cuna dilusiones y del miedo, el momento de terror y de un odio ancesinstante del desastre, están todos aquí. He aquí la causa irrealidad. Mas es aquí donde se des-hará. (T.27.VII.12.1-6)

Tú que crees que entre tu hermano y tú hay una diminuta bno te das cuenta de que ahí es donde os encontráis prisioneros mundo que se percibe como que existe aquí. El mundo que tú vexiste porque el lugar desde donde lo percibes no es real. La bse halla celosamente oculta entre las tinieblas, e imágenes nebu

surgen para cubrirla con formas vagas e indefinidas y con sicambiantes, por siempre insubstanciales e inciertas. Sin embargla brecha no hay nada. No hay secretos impresionantes ni tutenebrosas desde los que el terror surge de los huesos de la mObserva la diminuta brecha y contemplarás la inocencia y la aude pecado que verás dentro de ti cuando ya no tengas miereconocer el amor. (T.28.V.7.1-6)



A veces, el ciego ha consolado al vidente.

No procures que el Hijo de Dios se adapte a su demencia.reside un extraño que, mientras vagaba sin rumbo, entró en la mde la verdad, mas tal como vino así se irá. Vino sin ningún propero no podrá permanecer ante la radiante luz que el Espíritu Saofreció y que tú aceptaste. Pues bajo esa luz el extraño se quehogar y a ti se te da la bienvenida. No le preguntes a ese trans"¿Qué Soy?" Él es la única cosa en todo el universo que no lo Sin embargo, es a él a quien se lo preguntas, y es a su respuestque deseas amoldarte. Este pensamiento torvo y ferozarrogante, y, sin embargo, tan ínfimo y carente de significado qpasar a través del universo de la verdad ni siquiera se nota, se vtu guía. A él te diriges para preguntarle el significado del universlo único que es ciego en todo el universo vidente de la verdpreguntas: "¿Cómo debo contemplar al Hijo de Dios?" (T.20.III.7

La corrección es para todos aquellos que no pueden ver. La mdel Espíritu Santo es abrirle los ojos a los ciegos, pues Él sabe qhan perdido su visión, sino que simplemente duermen. Édespertará del sueño del olvido y los llevará al recuerdo de Dioojos de Cristo están abiertos, y Él contemplará con amor todo veas si aceptas Su visión como tuya. El Espíritu Santo mantisalvo la visión de Cristo para cada Hijo de Dios que duerme. visión el Hijo de Dios es perfecto y Él anhela compartir Su contigo. El Espíritu Santo te mostrará el mundo real porque Diosel Cielo. A través del Espíritu Santo, tu Padre exhorta a Su recordar. El despertar de Su Hijo da comienzo cuando él empinvertir en el mundo real, lo cual le permite aprender a re-invertimismo. Pues la realidad es una con el Padre y con el Hijo, y el ESanto bendice el mundo real en Nombre de los Dos. (T.12.VI.4

Pues verlo te demuestra que has cambiado tu ceguera por lovidentes de Cristo, y que tu mente ha decidido abandonar la negy aceptar el Pensamiento de Dios como tu herencia. (L.PI.165.5.6



En estos tiempos oscuros de jactancia y descreimiento, Nuestra Señora del Fin de las Tierras vigila.

Permaneceré muy quedo por un instante e iré a mi hogar.

[…] Este Niño que mora en ti es el que tu Padre conoce comHijo. Este Niño que mora en ti es el que conoce a Su Padre. Él atan profunda e incesantemente volver a Su hogar, que Su Vsuplica que lo dejes descansar por un momento. Tan sólo pidesegundos de respiro: un intervalo en el que pueda volver a respaire santo que llena la casa de Su Padre. Tú eres también Su hogretornará. Pero dale un poco de tiempo para que pueda ser lo qdentro de la paz que es Su hogar, y descansar en silencio, en paamor.

Este Niño necesita tu protección. Se encuentra muy lejos hogar. Es tan pequeño que parece muy fácil no hacerle caso y Su vocecilla, quedando así Su llamada de auxilio ahogada eestridentes sonidos y destemplados y discordantes ruidos del mNo obstante, Él sabe que en ti aún radica Su protección. Tú fallarás. Él volverá a Su hogar, y tú lo acompañaras.

Este Niño es tu indefensión, tu fortaleza. Él confía en ti. Vino psabía que tú no le fallarías. Te habla incesantemente de Su hogsuaves murmullos. Pues desea llevarte consigo de vuelta a él a poder Él Mismo permanecer allí y no tener que regresar de nudonde no le corresponde estar y donde vive proscrito en un munpensamientos que le son ajenos. Su paciencia es infinita. Eshasta que oigas Su dulce Voz dentro de ti instándote a que lo den paz, junto contigo, a donde Él se encuentra en Su casa, aque tú… (L.PI.182)



Haciéndose obediente hasta la muerte,

y muerte de cruz”

Cada día, cada hora y cada minuto, e incluso cada segundo,decidiendo entre la crucifixión y la resurrección; entre el egoEspíritu Santo. El ego es la elección en favor de la culpabilidEspíritu Santo, la elección en favor de la inocencia. De lo únicdispones es del poder de decisión. Aquello entre lo que puedesya se ha fijado porque aparte de la verdad y de la ilusión nninguna otra alternativa. Ni la verdad ni la ilusión traspasan los de la otra, ya que son alternativas irreconciliables entre sí y ambpueden ser verdad. Eres culpable o inocente, prisionero o libre, o feliz. (T.14.III.4.1-6)

Deja que yo sea para ti el símbolo del fin de la culpabilidcontempla a tu hermano como me contemplarías a mí. Perdónamtodos los pecados que crees que el Hijo de Dios cometió. Y a la tu perdón él recordará quién es y se olvidará de lo que nunca fpido perdón, pues si tú eres culpable, también lo tengo que sMas si yo superé la culpabilidad y vencí al mundo, tú estabas con¿Qué quieres ver en mí, el símbolo de la culpabilidad o el del ésta? Pues recuerda que lo que yo signifique para ti es lo que dentro de ti mismo. (T.19.IV.B.6.1-6)

Ahora el templo del Dios viviente ha sido reconstruido de para ser el anfitrión de Aquel que lo creó. Donde Él mora, Su Hijocon Él y nunca están separados. Y dan gracias de que finalmeles haya dado la bienvenida. Donde antes se alzaba una cruz, sahora el Cristo resucitado, y en Su visión las viejas cicdesaparecen. Un milagro inmemorial ha venido a bendecireemplazar una vieja enemistad, cuyo fin era la destrucción. Congratitud Dios el Padre y el Hijo regresan a lo que es Suyo, y a siempre lo será. Ahora se ha consumado el propósito del ESanto. Pues Ellos han llegado. ¡Por fin han llegado! (T.26.IX.8.1-



“Y por su llaga fuimos nosotros curados”.

Ven al instante santo y sé curado, pues nada de lo que recibél se olvida cuando regresas al mundo. Y al haber sido bendtraerás bendiciones contigo. Se te da vida para que se la impamundo moribundo. Y los ojos dolientes ya no acusarán, sinbrillarán con agradecimiento hacia ti que los bendijiste. El fulginstante santo iluminará tus ojos y les dará visión para que puedla faz de Cristo más allá del sufrimiento. La curación reemplsufrimiento. El que ve uno de ellos no puede percibir el otro,ambos no pueden estar presentes a la vez. Y el mundo será el tde lo que veas, y dará testimonio de ello. (T.27.V.6.1-8)

Y ahora las dudas son cosa del pasado, el final de la jornaindudable y se te ha concedido la salvación. Ahora el poder de mora en tu mente, para que puedas curar tal como fuiste curadoahora te cuentas entre los salvadores del mundo. Ése es tu destino. ¿Consentiría Dios acaso que Su Hijo permaneeternamente hambriento por haberse negado a sí mismo el suque le es menester para poder vivir? La abundancia mora en éprivación no puede separarlo del Amor vivificante de Dios, ni hogar. (L.PI.165.6.1-6)

Hermanos míos en la salvación, no dejéis de oír mi voz escuchar mis palabras. No os pido nada, excepto vuestra liberación. El infierno no tiene cabida en un mundo cuya hermpuede todavía llegar a ser tan deslumbrante y abarcadora que spaso la separa del Cielo. Traigo a vuestros cansados ojos una de un mundo diferente, tan nuevo, depurado y fresco que os olvide todo el dolor y miseria que una vez visteis. Más tenéiscompartir esta visión con todo aquel que veáis, pues, de lo conno la contemplaréis. Dar este regalo es la manera de hacerlo vuY Dios ordenó, con amorosa bondad, que lo fuese. (T.31.VIII.8.1



El Perdón

El vacío que el miedo engendra tiene que ser substituido perdón. Eso es lo que la Biblia quiere decir con "Ya no habrá my por lo que yo pude demostrar que la muerte no existe. Vine cumplimiento a la ley al re-interpretarla. La ley en sí, si se encorrectamente, sólo ofrece protección. Son los que aún nocambiado su manera de pensar quienes han introducido en la idea de "las llamas del infierno". Te aseguro que daré testimotravés de todo aquel que me lo permita, y en la medida en quepermita. Aquello de lo que das fe demuestra tus creencias, y dmanera las refuerza. Aquellos que dan testimonio de mí expresando, por medio de los milagros que obran, que han deja

creer en la carencia en favor de la abundancia que han aprendpertenece. (T.1.IV.4.1)

El perdón que procede de una orientación milagrosa tan sólo corrección. No posee elementos de juicio en absoluto. La frase "perdónalos porque no saben lo que hacen" no evalúa en modo alo que las personas en cuestión estén haciendo. Es una peticDios para que sane sus mentes. En ella no se hace referenresultado del error, pues eso es irrelevante. (T.2.V.A.16.1-6)

El perdón que se aprende de mí no se vale del miedo para desel miedo. Ni tampoco otorga realidad a lo que es irreal para másdestruirlo. Perdonar a través del Espíritu Santo consiste simpleen mirar más allá del error desde un principio, haciendo que, demanera, nunca sea real para ti. No dejes que ninguna creenci

afirme que el error es real se infiltre en tu mente, o creerás taque para poder ser perdonado tienes que deshacer lo que tú has hecho. Lo que no tiene efectos no existe, y para el Espíritu los efectos del error son inexistentes. Mediante la canceprogresiva y sistemática de los efectos de todos los errores, en partes y con respecto a todo, el Espíritu Santo enseña que el eexiste y lo demuestra.(T.9.IV.5.1-6)

El perdón es un gesto vacío a menos que conlleve correcció2.V.A.15.3)



La Faz de Cristo

Deja que Él sea el Juez de lo que eres, pues en Su certeza lano tiene cabida, ya que descansa en una Certeza tan grande quSu faz dudar no tiene sentido. Cristo no puede dudar de Sí MismVoz que habla por Dios puede tan sólo honrarle y deleitarse eperfecta y eterna impecabilidad. Aquel a quien Él ha juzgado no sino reírse de la culpabilidad, al no estar dispuesto ya a seguir jucon los juguetes del pecado, ni a hacerle caso a los testigocuerpo al encontrarse extático ante la santa faz de Cristo. 151.8.1-4)

Tal es tu resurrección, pues tu vida no forma parte de nadaque ves. Tu vida tiene lugar más allá del cuerpo y del mundo, m

de todos los testigos de lo profano, dentro de lo Santo, y es tan como Ello Mismo. En todo el mundo y en todas las cosas Su Vozhablará más que de tu Creador y de tu Ser, el Cual es uno con Ées como verás la santa faz de Cristo en todo, y como oirás en eco de la Voz de Dios. (L.PI.151.12.1-4)

Busco mi verdadera Identidad, y la encuentro en estas pal"Soy Amor, pues el Amor fue lo que me creó". Ahora no nebuscar más. El Amor ha prevalecido. Ha esperado tan quedameregreso a casa, que ya no me volveré a apartar de la santa fCristo. Y lo que contemple dará testimonio de la verdad de la Ideque procuré perder, pero que mi Padre conservó a salvo pa(L.PII.229.1.1-5)

¿Y por cuánto tiempo habrá de verse esta santa faz, cuando

más que el símbolo de que el período de aprendizaje ya ha cony de que el objetivo de la Expiación por fin se ha alcanTratemos, por lo tanto, de encontrar la faz de Cristo y de no bnada más. Al contemplar Su gloria, sabremos que no tennecesidad de aprender nada, ni de percepción, ni de tiempo, ninguna otra cosa excepto del santo Ser, el Cristo que Dios creóSu Hijo. (L.PII.Preg6.5.1-3)

Y cada uno encuentra a su salvador cuando está listocontemplar la faz de Cristo y ver que Éste está libre de pecad20.IV.5.6)



La resurrección

La resurrección del mundo aguarda hasta que sanes y seapara que puedas demostrar que el mundo ha sanado. El instantesubstituirá todo pecado sólo con que lleves sus efectos contnadie elegirá sufrir más. ¿Qué mejor función que ésta podrías sSana para que así puedas sanar, y evítate el sufrimiento que conlas leyes del pecado. Y la verdad te será revelada, por haber eque los símbolos del amor ocupen el lugar del pecado. (T.27.VI.8

Libera a tu hermano aquí, tal como yo te liberé a ti. Hazle el mregalo, y contémplalo sin ninguna clase de condena. Considérainocente como yo te considero a ti, y pasa por alto los pecados cree ver en sí mismo. Ofrécele en este huerto de aparente agmuerte su libertad y completa emancipación del pecado. Demanera, allanaremos juntos el camino que conduce a la resurrdel Hijo de Dios y le permitiremos elevarse de nuevo al feliz recde su Padre, Quien no conoce el pecado ni la muerte, sino sólo leterna. (T.19.IV.D.i.18.1-5)

"El Cielo y la tierra pasarán" significa que no continuarán exiscomo estados separados. Mi palabra, que es la resurrección y lano pasará porque la vida es eterna. Tú eres la obra de Dios, y Sues totalmente digna de amor y totalmente amorosa. Así es cohombre debiera pensar de sí mismo en su corazón, pues eso es realmente es. (T.1.III.2.1-4)

Yo soy tu resurrección y tu vida. Vives en mí porque vives en Dtodos tus hermanos viven en ti, tal como tú vives en cada uno de¿Cómo ibas a poder, entonces, percibir indignidad en un hermapercibirla en ti mismo? ¿Y cómo ibas a poder percibirla en ti mismpercibirla en Dios? Cree en la resurrección porque ésta ya consumado, y se ha consumado en ti. Esto es tan cierto ahora coserá siempre, pues la resurrección es la Voluntad de Dios, Quisabe de tiempo ni de excepciones. Pero no hagas excepciones,lo contrario, no percibirás lo que se ha consumado para ti. ascendemos hasta el Padre juntos, como fue en un principio, coahora y como será siempre, pues ésa es la naturaleza del Hijo detal como su Padre lo creó. (T.11.VI.4.1-9)



Los dos Cuadros

Dios estableció Su relación contigo para hacerte feliz, y nicosa que hagas que no comparta Su propósito puede ser repropósito que Dios adscribió a cada cosa es la única función queDebido a la razón que Él tuvo para crear Su relación contifunción de las relaciones se convirtió para siempre en "hacer Eso es todo. Para satisfacer esta función te relacionas cocreaciones del mismo modo en que Dios se relaciona con las SPues nada que Dios haya creado puede estar excluido de la fely nada que Él creó desea otra cosa que extender felicidad tal coCreador lo hizo. Lo que no satisface esta función no puede ser re

En este mundo es imposible crear. Pero sí es posible hacer feldicho repetidamente que el Espíritu Santo no quiere privarte drelaciones especiales, sino transformarlas. Y lo único que esto siges que Él reinstaurará en ellas la función que Dios les asignfunción que tú les has asignado es claramente que no sean fuenfelicidad. Pero la relación santa, comparte el propósito de Diolugar de tratar de inventar otro para que lo substituya. Cada reespecial que has entablado es un substituto de la Voluntad de glorifica tu voluntad en vez de la Suya debido a la ilusión de qudiferentes.

Has entablado relaciones muy reales incluso en este mundoembargo, no las reconoces porque has hecho que sus subspredominen de tal manera que, cuando la verdad te llama constantemente lo hace- contestas con un substituto. El pro

fundamental de cada relación especial que has entablado es maa tu mente tan ocupada que no puedas oír la llamada de la verda

En cierto sentido, la relación especial fue la respuesta del egocreación del Espíritu Santo, Quien a Su vez fue la Respuesta da la separación. Pues aunque el ego no entendía lo que habíacreado, era consciente de una amenaza. Todo el sistema defeque el ego desarrolló para proteger la separación de los avancEspíritu Santo, fue en respuesta al regalo con el que Dios la beQuien, mediante Su bendición, permitió que se subsanase.bendición encierra dentro de sí la verdad de todo. Y la verdad es



ue el EspírituSanto mantiene una estrecha relación contigo porque Él tu relación con Dios queda restaurada. Tu relación con Él jamásha roto porque desde que se produjo la separación el Espíritu

anto no ha estado separado de nadie. Y gracias a Él todas tusaciones santas han sido cuidadosamente preservadas para quevan el propósito que Dios te dio.

ego siempre se mantiene alerta por si surge cualquier amenaza, y larte de tu mente en la que el ego fue aceptado está ansiosa pornservar su propia razón, tal como la entiende. No se da cuenta dee es completamente demente. Mas tú tienes que darte cuentaactamente de lo que esto significa si quieres que se te restituya lardura. Los dementes protegen sus sistemas de pensamiento, pero lo

cen de manera demente. Y todas sus defensas son tan dementesmo lo que supuestamente tienen que proteger. No hay nada en laparación, ni "razón", ni atributo, ni ningún aspecto que no seamente. Y su "protección", que es parte de ella, es tan demente como

da ella. Por lo tanto, la relación especial, su principal defensa, noede sino ser demente.

o tendrás mucha dificultad ahora en darte cuenta de que el sistema pensamiento que la relación especial protege no es más que un

stema ilusorio. Reconoces, al menos en términos generales, que elo es demente. No obstante, todavía te parece que la relaciónpecial es en cierto modo "diferente". Sin embargo, la hemosaminado con mucho más detenimiento que muchos de los otrospectos del sistema de pensamiento del ego que has estado másspuesto a abandonar. Mientras este aspecto continúe vigente, no

stante, no podrás abandonar los demás. Pues este aspecto no eserente. Si lo conservas, habrás conservado todos los demás.

s esencial darse cuenta de que todas las defensas dan lugar a lo queieren defender. La base subyacente de su eficacia es que ofrecen loe defienden. Lo que defienden se ha depositado en ellas paraantenerlo a salvo, y conforme operan te lo brindan a ti. Toda defensaera dando regalos, y los regalos son siempre una miniatura -ontada en marco de oro- del sistema de pensamiento que la defensaotege. Se trata de un marco muy elaborado, repleto de gemas, yofusamente tallado y pulido. Su propósito es ser valioso en sísmo, y desviartu atención de lo que encierra. Más no puedes tener

el marco sin el cuadro. Las defensas operan para hacerte creer puedes.

La relación especial te ofrece el marco más imponente y falaz delas defensas de las que el ego se vale. Su sistema de pensamieofrece aquí, rodeado por un marco tan recargado y elaborado, cuadro casi desaparece debido a la imponente estructura del mEn el marco van entretejidas toda suerte de fantasías de quiméricas y fragmentadas, engarzadas con sueños de sacrivanagloria, y entrelazadas con hilos dorados de auto-destruccibrillo de la sangre resplandece como si de rubíes se tratase,lágrimas van talladas cual diamantes que refulgen tenuemente amortecina en que se hace el ofrecimiento.

Examina el cuadro. No dejes que el marco te distraiga. Este cuadte ofrece para que te condenes, y si lo aceptas creerás condenado. No puedes conservar el marco sin el cuadro. Lvaloras es el marco, pues en él no ves conflicto. No obstante, el no es más que la envoltura del regalo de conflicto. El marco noregalo. No te dejes engañar por los aspectos más superficiales dsistema de pensamiento, pues en ellos se encierra todo el sistemsí, sin excluir ningún aspecto. En este regalo rutilante habita la mNo permitas que tu mirada se pose en los destellos hipnóticomarco. Mira el cuadro y date cuenta de que lo que te ofrecemuerte.

Por eso es por lo que el instante santo es tan importante pdefensa de la verdad. La verdad en sí no necesita defensa, m

necesitas ser defendido contra tu aceptación del regalo de mCuando tú, que eres la verdad, aceptas una idea tan peligrosa pverdad, la amenazas con su destrucción. Y ahora se te tiendefender, para poder así conservar intacta la verdad. El podCielo, el Amor de Dios, las lágrimas de Cristo y la alegría despíritu eterno son convocados para defenderte de tu propio aPues tú los atacas al ser parte de Ellos, y Ellos tienen que sapues se aman a Sí Mismos.

El instante santo es una miniatura del Cielo, que se te envía deCielo. Es también un cuadro, montado en un marco. Mas si aceste regalo no verás el marco en absoluto, ya que el regalo sólo p



er aceptado cuando estás dispuesto a poner toda tu atención en eladro. El instante santo es una miniatura de la eternidad. Es unadro de intemporalidad, montado en un marco de tiempo. Si tencentras en el cuadro, te darás cuenta de que era únicamente elarco lo que te hacía pensar que era un cuadro. Sin el marco, eladro se ve como lo que representa. Pues de la misma manera ene todo el sistema de pensamiento del ego radica en sus regalos, delsmo modo el Cielo en su totalidad radica en este instante, que semó prestado de la eternidad y se montó en el tiempo para ti.

e te ofrecen dos regalos. Cada uno de ellos es un todo en sí mismo y puede ser aceptado parcialmente. Cada uno de ellos es un cuadro todo lo que puedes tener, aunque desde una perspectiva muy

erente. No puedes comparar su valor comparando el cuadro de unon el marco del otro. Debes comparar únicamente los cuadros, pues, otro modo, la comparación no tendría ningún sentido. Recuerdae el cuadro es lo que constituye el regalo. Y Sólo sobre esa basees realmente libre de elegir. Contempla los cuadros. Contempla loss. Uno es un cuadro diminuto, difícil de ver bajo las pesadasmbras de su enorme y desproporcionado marco. El otro tiene unarco liviano, está colgado en plena luz y es algo maravilloso dentemplar debido a lo que es.

que has tratado tan arduamente -y todavía sigues tratando- decajar el mejor cuadro en el marco equivocado, y combinar de esteodo lo que no puede ser combinado, acepta lo que sigue y regocíjater ello: cada uno de estos cuadros está perfectamente enmarcado deuerdo con lo que representa. Uno de ellos está enmarcado de forma

e el cuadro esté desenfocado y no se pueda ver. El otro, de formae su cuadro se vea con perfecta claridad. El cuadro de muerte y deieblas se hace cada vez menos convincente según logras dar con éltre todo lo que lo envuelve. A medida que se expone a la luz cadaa de las piedras inertes que en la obscuridad parecían brillar desdemarco, dichas piedras se vuelven opacas y sin vida y cesan desviar tu atención del cuadro. Y por fin miras al cuadro en sí, viendoalmente que, sin la protección del marco, no tiene sentido.

otro cuadro tiene un marco muy liviano, pues el tiempo no puedentener a la eternidad. No hay nada en él que te pueda distraer. El

cuadro del Cielo y de la eternidad se vuelve más convincemedida que lo contemplas. Y ahora, después de haberse hechverdadera comparación, puede por fin tener lugar una transformde ambos cuadros. Y a cada uno de ellos se le da el lugar qcorresponde una vez que se ve en relación con el otro. Cuando el cuadro tenebroso ante la luz, no lo percibes como algo temibleque por fin te das cuenta del hecho de que no es más que un cY en ese momento reconoces lo que ves ahí tal como es: un cde algo que pensabas que era real, y nada más. Pues más allá dcuadro no verás nada.

El cuadro de luz, en claro e inequívoco contraste, se transforlo que está más allá del cuadro. A medida que lo contemplas, t

cuenta de que no es un cuadro, sino una realidad. No se trata drepresentación pictórica de un sistema de pensamiento, sino quePensamiento mismo. Lo que representa está ahí. El mardesvanece suavemente y brota en ti el recuerdo de Dios, ofreciétoda la creación a cambio de tu insignificante cuadro, que noningún valor ni ningún significado.

A medida que Dios ascienda al lugar que le correspondeasciendas al tuyo, volverás a entender el significado de las relacy sabrás que es verdad. Ascendamos juntos hasta el Padre epermitiendo que adquiera predominancia en nuestras mentes. Tonos dará al darle a Él el poder y la gloria, y al no conservar niilusión con respecto a dónde se encuentran éstos. Se encuentrnosotros gracias a Su predominio. Lo que Él ha dado, es Resplandece en cada parte de Él, así como en la totalidad. La re

de tu relación con Él radica en la relación que tenemos unos conEl instante santo refulge por igual sobre todas las relaciones, puél todas las relaciones son una. En el instante santo sólo hay curya completa y perfecta, pues Dios está en él, y donde Él está, sque es perfecto y completo puede estar. (T.17.IV.1-15)



Un Curso de Milagros

¿Cómo iba a permitir Dios que Su Hijo se extraviase por un cque es sólo la memoria de un instante que hace mucho que Este curso te enseña sólo lo que es ahora. Un terrible instante pasado lejano que ha sido completamente corregido no es motpreocupación ni tiene valor alguno. Deja que lo muerto y lo pdescansen en el olvido. La resurrección ha venido a ocupar su luahora tú eres parte de la resurrección, no de la muerte. Niilusión del pasado tiene el poder de retenerte en un lugar de muebóveda en la que el Hijo de Dios entró por un instante, parinstantáneamente restaurado al perfecto Amor de su Padre. ¿Y iba a podérsele mantener encadenado cuando hace tanto tiempse le liberó de las cadenas, que éstas desaparecieron de su para siempre? (T.26.V.10.1-8)

Seguramente habrás comenzado a darte cuenta de que este cumuy práctico, y de que lo que dice es exactamente lo que quiereYo no te pediría que hicieses algo que tú no puedes hacerimposible que yo pudiese hacer algo que tú no puedas Teniendo esto en cuenta, y teniéndolo en cuenta muy literalmnada puede impedir que hagas exactamente lo que yo te pido, te exhorta a que lo hagas. Yo no te impongo límites porque Diosimpone ninguno. Cuando te limitas a ti mismo, no somos de un sentir, y eso es lo que es la enfermedad. La enfermedad, no obsno es algo que se origine en el cuerpo, sino en la mente. Toda de enfermedad es un signo de que la mente está dividida y de qestá aceptando un propósito unificado. (T.8.IX.8.1-7)

La resurrección, al ser la afirmación de la vida, es la negaciónmuerte. De esta manera, la forma de pensar del mundo se inviercompleto. Ahora se reconoce que la vida es la salvación, y cuaclase de dolor o aflicción se percibe como el infierno. Ya no se leal amor, sino que se le da jubilosamente la bienvenida. Los ídolodesaparecido y el recuerdo de Dios brilla en el mundo sin niobstrucción. Se ve la faz de Cristo en toda cosa viviente, y mantiene nada en la obscuridad, excluido de la luz del perdón. quedan pesares sobre la tierra. El júbilo del Cielo ha descendidoella. (M.28.2.1-8)



Pruebas Indirectas de la Verdad

En un mundo nacido de la negación y carente de direccinecesitan pruebas indirectas de la verdad. Percibirás la necesidesto si te das cuenta de que la negación es la decisión de no qsaber. La lógica del mundo, por lo tanto, no puede sino conducnada, pues su meta es la nada. Si decides ser tan sólo un sueñotener ni dar nada más que eso, te verás obligado a dirigpensamientos hacia el olvido total. Pero si lo eres todo y eso es tienes y lo que das, y aun así lo niegas, es porque tu sistempensamiento se ha desconectado totalmente de la verdad y separado de ella. Éste es un mundo demente y no debes subela magnitud de su demencia. No hay ninguna área de tu perceque no se haya visto afectada, y tu sueño es sagrado para ti. Po

es por lo que Dios puso al Espíritu Santo en ti, allí donde tú pussueño. (T.14.I.2.1-8)O Dios está loco o bien es el ego el que lo está. Si exaimparcialmente las pruebas que ambas partes presentan, te cuenta de que eso tiene que ser verdad. Ni Dios ni el ego proponsistema de pensamiento parcial. Ambos sistemas son internacoherentes, aunque diametralmente opuestos en todo, de tal que una lealtad parcial es imposible. Recuerda también quresultados son tan diferentes como sus cimientos, y quenaturalezas fundamentalmente irreconciliables no puedereconciliadas alternando entre ellos. Nada que esté vivo es huépues la vida es creación. Por lo tanto, toda decisión que tominvariablemente la respuesta a la pregunta: "¿Quién es mi padserás fiel alpadre que elijas. (T.11.IN.1.1-8)

No hay prueba que pueda convencerte de la verdad de lo q

deseas. No obstante, tu relación con Él es real. No veas estmiedo, sino con regocijo. Aquel que invocaste está contigo. Dbienvenida y honra a los testigos que te traen las buenas nuevSu llegada. Es cierto, tal como temes, que reconocerlo a Él suponegación de todo lo que crees saber. Pero lo que crees saber fue verdad. ¿De qué te sirve aferrarte a ello y negar las pruebfavor de la verdad? Pues estás demasiado cerca de la verdad para poder renunciar a ella ahora, y no podrás sino ceder anirresistible atracción. Puedes demorar esto ahora, pero sólo ptiempo. El Anfitrión de Dios te ha llamado y tú le has oído. jamás volverás a estar completamente dispuesto a no escucha16.II.6.1-12)





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