La viuda negra.

Hace mucho tiempo, había un señor que siempre en las noches caminaba por las plazas. Él tenía un amigo que se llamaba Carlos. Un día, cuando estaba caminando por la plaza desierta, una mujer de negro caminaba delante de él. Entonces, Pedro, le tocó el hombro y la mujer volteó hacia él. Se asustó, ella tenía los ojos de algodón, cuerpo de esqueleto y no tenía boca. Pedro se asustó, quedo tirado en la plaza botando espuma por la boca. Justo ese día su amigo pasaba por allí, lo vio tirado. Llamó a la ambulancia y cuando vino se lo llevó. Después de mucho tiempo, Pedro fue perdiendo el miedo y junto con su amigo Carlos fueron y se lo contaron a todo el barrio. Desde ese día, todo el barrio sabe que a la noche pasar por la plaza cuando está desierta puede ser momento oportuno para ver una mujer de negro llamada “La viuda negra”

Piero Molina Bonillo.-6ºD

La casa embrujada.

Había una vez en un lugar muy lejano, llamado Catamarca, una casa muy extraña. Cierta vez, un chico llamado Kevin y su amigo Pepe entraron en esa

casa, desaparecieron en ella y nunca más los volvieron a ver. Algunos decían que se habían ido de pesca y se los tragó el mar. Ese era el comentario que circulaba entre la gente. Apareció, entonces, el dueño de la casa. Abrió la puerta y ¡zas!, La casa se lo tragó entero. Policías, bomberos y rescatistas entraron en la casa, sorprendidos vieron que la casa tenía dientes y salieron todos corriendo. A partir de ese nadie pisaba la mansión. Todos tenían miedo. Pánico. Un año más tarde, una familia que visitaba el lugar desapareció. La policía tomó una decisión, mandó a demoler la casa, porque se dieron cuenta que la casa tenía vida y cada vez desaparecían más personas. En los escombros encontraron los cuerpos de los desaparecidos. El pueblo fue feliz, se supo que había pasado y nadie más desapareció después del derrumbe.

“Versión libre de Vazner Ribeiro” 6ºD.

La hermana y el hombre lobo.

Había una vez un hombre lobo, que como todos sabemos, en luna llena se convertía en una bestia.

Tenía una hermanita que vivía con él, ya que la mamá había muerto cuando la dio a luz. Sus nombres: Héctor y Eugenia, así los habían bautizado. Un día salieron de paseo juntos, la luna estaba asomando, era luna llena. Héctor quiso correr hacia su casa, pero justo en la puerta se transformó en lo más temido… ¡hombre lobo! Eugenia, ignorante de la situación, se asustó mucho, salió corriendo y se encontró con Vanesa e Isaac, el hermano mayor. Les pidió ayuda. Ellos empezaron a reír y Eugenia les dijo: ¡No es un chiste! Créanme. Entonces, en ese momento se dieron cuenta de toda la verdad. Isaac dijo que había que matarlo pero Eugenia se había dado cuenta de la identidad del “hombre lobo”, era nada menos que su hermano. Exclamó: No, a mi hermano, no!!!!! Isaac fue en busca de un arma. Ella trató de impedirlo, pero la empujó y salió a buscarlo. Y cuando lo encontró, le disparó y lo hirió. Eugenia prometió cuidarlo y estar con Héctor todas las lunas llenas de su vida, y así, el hombre lobo no asustaría a nadie más.

Autoras: Daiana Pérez y Nicole Tapia 6ºD

El hombre de agua

El problema se hallaba en el hombre de agua, él quería destruir a Lorenzo y también a Alondra.

Una noche, Alondra y Lorenzo, amigos de toda una vida, salieron a dar una vuelta por la ciudad y encontraron una mancha de agua. No le dieron importancia, siguieron su camino. La mancha los perseguía para todos lados, los siguió hasta la casa de ella. Cuando Alondra se acostó en su cama, la mancha se puso debajo de ella. Al otro día la mancha se había convertido en un Hombre de Agua. Esa mancha tenía pensado darles una sorpresa. Mientras tanto los amigos continuaban con sus caminatas nocturnas sin dar importancia a esa mancha que encontraban habitualmente. Alondra y Lorenzo, de repente, se transformaron en magníficos “superhéroes”. La respuesta del Hombre de agua no se hizo esperar, una carcajada fuerte y larga se escuchó en la noche. Los dos se miraron sorprendidos. Entonces, Alondra dijo: ¡Baastaaaa, de carcajadas! Empezó la pelea. Ella gritó y Lorenzo se enfrentó con su oponente. El nuevo superhéroe salió vencedor el Hombre de Agua murió. Alondra y Lorenzo pegaron media vuelta y dieron por terminado el

problema. De paso controlaron la ciudad, buscando manchas por el piso. No había nada. Al fin continuaron con su paseo interrumpido. Milagros Betancur 6C