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I pia|i6Q, la etapa inicial de toda investigacion cientiTica en Analiticos segundos: a proposito de algunos argumentos en la interpretacion de David Charles Eduardo Mombello Universidad Nacional del Comahue Argentina Resumen: En este trabajo intento evaluar algunos argumentos centrales sobre los cuales se apoyan las interpretaciones recientes de David Charles acerca de la as[ llamada definici6n nominal de Arist6teles y sus compromisos y alcances, en relaci6n a la investigaci6n cientfficamente satisfactoria de Analiticos segundos. Por un lado, discuto dos puntos en sus argumentaciones. Uno atafie a las consecuencias inferJdas de su tesis relativa a la visi6n en tres niveles (anallticamente separables) de investigaci6n cientifica de Aristbteles. Tales consecuencias expresan su posici6n sobre la profundidad semintica de los nombres. Otro afecta al argumento que, segijn Charles, explica la posici6n de Arist6teles sobre lo que cuenta como definicidn {horismos). Por otro lado, setlalo cierta inadecuacidn en la interpretaci6n de una evidencia (93a 30-6), presentada a favor de la interpretaci6n de otro pasaje (93b 30-33), segtin la cual, en B 10, Arist6teles presenta su perspectiva de tres niveles de investigacibn cientfftca que tiene como primer momento una definicidn nominal. Paiabras clave: Adst6teles | Analiticos \ definici6n | semSntica | ciencia , the first stage of every scientific enquiry in Posterior Analytics: on the subject of some arguments in David Charles' interpretation Abstract: In the present paper it is my intention to assess some central arguments on which are recently founded David Charles' interpretations about the so called Aristotle's nominal definition, its commitments and scopes, in connection with tbe scientifically successful enquiry of Posterior 8 (2003): 217-240 > 217

cientiTica en Analiticos segundos: a proposito de … · argumentaclones sobre la base de las cuales se apoyan algunas de sus interpretaciones acerca de la relacion entre Ia defmicion

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I

pia|i6Q, la etapa inicial de toda investigacioncientiTica en Analiticos segundos: a proposito de algunos

argumentos en la interpretacion de David Charles

Eduardo MombelloUniversidad Nacional del Comahue

Argentina

Resumen: En este trabajo intento evaluar algunos argumentos centrales sobrelos cuales se apoyan las interpretaciones recientes de David Charles acerca dela as[ llamada definici6n nominal de Arist6teles y sus compromisos yalcances, en relaci6n a la investigaci6n cientfficamente satisfactoria deAnaliticos segundos. Por un lado, discuto dos puntos en sus argumentaciones.Uno atafie a las consecuencias inferJdas de su tesis relativa a la visi6n en tresniveles (anallticamente separables) de investigaci6n cientifica de Aristbteles.Tales consecuencias expresan su posici6n sobre la profundidad semintica delos nombres. Otro afecta al argumento que, segijn Charles, explica la posici6nde Arist6teles sobre lo que cuenta como definicidn {horismos). Por otro lado,setlalo cierta inadecuacidn en la interpretaci6n de una evidencia (93a 30-6),presentada a favor de la interpretaci6n de otro pasaje (93b 30-33), segtin lacual, en B 10, Arist6teles presenta su perspectiva de tres niveles deinvestigacibn cientfftca que tiene como primer momento una definicidnnominal.

Paiabras clave: Adst6teles | Analiticos \ definici6n | semSntica | ciencia

, the first stage of every scientific enquiry in PosteriorAnalytics: on the subject of some arguments in David Charles'interpretation

Abstract: In the present paper it is my intention to assess some centralarguments on which are recently founded David Charles' interpretationsabout the so called Aristotle's nominal definition, its commitments andscopes, in connection with tbe scientifically successful enquiry of Posterior

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Anaiytics. On one hand, I discuss two issues on his arguments. One concernsthe deduced consequences from his thesis related to Aristotle's {analyticallyseparable) three-stage view of scientific enquiry. This consequences states hisposition about semantic depth of names. The other concerns an argumentwhich -according to Charles- accounts for Aristotle's position about what isworth definition (horismos). On the other hand, 1 point out a certainunsuitability of the interpretation of an evidence {93a 30-6), presented infavour of the interpretation of another passage {93b 30-3), according to whichin B 10 Aristotle set out one's three-stage view of scientific enquiry whichhas, in the first stage, a nominal definition.

Keywords: Aristotle | Analytics \ definition | semantics | science

Aristotle on Meaning and Essence, la reciente obra de David Charles,' es un textosigtiiftcativo que no ha de pasar, ciertamente, desapercibldo para un vasto espectrode especialistas. En esta nota critica pretendo (I) detenemie en la descripcion y elcomentario de unos pocos aspectos particulares de la obra -aunque no por ellomenos relevantes- que intentan mostrar parte del alcance de su valioso aporte deinterpretacion. Ciertamente, el cuidado trabajo de C. presenta una lectura coherentede muchos pasajes de diversas obras aristotelicas con las que mide la eficacia deuna idea desafiante y original. Estos caracteres de su idea lo han invitado, tambien,a la tarea de enfrentar y dar respuesta a objeciones no menores. Si bien esta tareatiende a fortalecer su interpretacion, en no menor medida muestra la altadisposicion filosofica de C. para valorar los obst^culos como ocasiones para elpensamiento creativo y la argumentaci6n. Convencido de que no otro que esepuede ser el fin de reparar en la aparici6n de ciertas dificultades a partir de lasafirmaciones de un autor, a partir de I, intentare (II) mostrar que, desde cierto puntode vista, pueden presentarse (a y b infra) algunas dificultades en lasargumentaclones sobre la base de las cuales se apoyan algunas de susinterpretaciones acerca de la relacion entre Ia defmicion y toda investigacioncientifica sat is factor ia. Por ultimo, considerare la replica de C. a una de lasprincipales objeciones que ha previsto para su tesis sobre la etapa inicial de todainvestigacion cientifica en Analiticos segundos^ conforme a Ia evidencia queencuentra en B 10.93b 30-2. Su replica hace pie sobre !a interpretacion de un pasajediverso del que ve como evidencia de su tesis. Intentare (III) mostrar cierta falla enesa interpretacion, que tiende a corroborar su tesis, por el anilisis de losargumentos de los que atli hace uso Aristoteles.

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Como es natural, el resultado de la necesidad de hacer visibles puntos dediscordancia en argumentos de los que depende cierta interpretacion, o un ciertodesajuste entre una interpretacion y los textos interpretados, deja abierto elproblema de la presentacion de interpretaciones altemativas, lo cual excede elobjetivo central de la presente nota -simplemente^ de analisis. A pesar de queaquella necesidad aparece, sin dudas, a la luz de cierta perspectiva, no es menoscierto que sus resultados podrian Ilegar a ser atendibles en la ocasion de reabrir ladiscusion filosofica acerca de un problema sobre cual no parece haber, ni unarespuesta simple, ni acuerdo unanime: "^como debe ser entendida, en vistas deubicar su papel preciso en el programa cientifico de Analiticos, la Ilamada'defmicion nominal'** de An. Po. B 10.93b 29 cuya caracterizacion, paraAristoteles, resulta ({javEpbv?". De nada de lo cual, evidentemente, se sigue enningun aspecto el demerito de una obra, ciertamente formidable, como la quepresenta algunas de las interpretaciones a proposito de las cuaies me ocupo.

I. En su estimulante libro, C. logra ofrecer una vision de conjunto acerca del lugarque ocupan las conexiones semanticas, el caracter de necesidad, la esencia y laexistencia del objeto de estudio en las doctrinas aristotelicas relativas a laexplicacion y a Ia definicion en ciencia. Tambien, para la perspectiva de la fllosofiadel lenguaje, del lugar que ocupa la explicacion del significado de 'terminos declases naturales'.^ Que ([t|]) la captacion de lo que 6stos quieren decir (susignificaci6n; meaning^) no involucra ni el conocimiento de la esencia, ni e! de laexistencia de la clase significada (signified) es, hasta donde puedo ver, la tesiscentral en relacion a la filosofia del lenguaje de Aristoteles, la cual se apoya sobreel mayor aporte de C. Ciertamente, a partir de su interpretacion de Analiticossegundos B 10, C. plantea una discusion sobre ciertos enunciados que el denomina"explicaciones de lo que ios terminos signiflcan"' (p. 1, 24, et pass.) que dara porresultado una vision del ([t2]̂ ) compromiso de Aristoteles con el establecimiento detres etapas de investigacion cientifica analiticamente separables:

En la etapa primera, uno puede poseer una explicaci6n de lo que un tdrminosignifica, pero aOn no conoce la existencia de ta clase significada [93b 30-32]. En las etapas segunda y tercera, uno descubrirS (si todo va bien) taexistencia [b32] y subsecuentemente la esencia de la clase relevante [b32-33r(p.l).

Como puede verse, lo que [t,] es a la filosofia del lenguaje de Aristoteles, [ti] lo esa su proyecto epistemologico." Dos inferencias de [t2], que a juicio de C. resultan

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inmediatas, y que -sin dudas- soti decisivas para [t|], terminati de completar elcuadro origitial de C. sobre la posicton de Aristoteles:

(i) It cannot be (in his view) an essential part of knowing an account of whata name or another name-like expression (e.g. for a kind) signifies that oneknows that the kind is instantiated.(ii) It cannot be (in his view) an essential part of knowing an account of whata name or another name-like expression (e.g. for a kind) signiftes that oneknows that all members of the kind actually have an essence, still less whatthe essence is. For, one could only know this when one knows that the kind inquestion exists. But this knowledge can only be achieved at Stage 3 after onehas passed Stage 2 (p. 25).

Todas las explicaciones de lo que los tiombres significati'^ cuentan comodefinicionales, esto es, soti definiciones (p. 33), en el enfoque de C : ''For, they allplay one of the roles required of definition: they link the term to be defined with anaccount which is the object ofenquiry"^^ (p. 77).

Como puede verse, C. inclina dr^sticamente su interpretaci6n hacia laprovocativa posicion de que Aristoteles ha supuesto que, en el nivel mas elementalde investigacion cientifica, el investigador aristot^lico solo cuenta con unadefmicion de tipo nominal (/.e., con una que s61o responde a que significa eltermino [quid nominis], sin compromiso dc existencia con lo definido oinvestigado, y que, por tanto, no responde, en sentido estricto, a que es aquello delo cual cl nombre !o es [quid rei]).

Asi, en la etapa uno, la captacion del investigador aristotelico que presenta C.no supone un compromiso ontologico, ni metafisico, con aqucllo que un termino Apodria denotar, sino solo con la significacion liguistica B del mismo: "For, at StageI of the three stages of scientific enquiry, one grasp the significance of (e.g.)'eclipse' without knowledge of ihe existence or essence of the phenomenon" (p.147). La etapa uno corresponde al enunciado de un saber expresableesquematicamente como 'A=B'. Tal esquema representa "ow account of what nameor another name-like expression signifies" (p. 24). EI saber que representa elenunciado que no supone compromisos ontologico-mctafisicos oficia como"•springboard" para las siguientes etapas de la ''successful investigation". Enpalabras de C , en la etapa uno el investigador puede expresar que "'Triangle'signifies plane figure with three angles", mientras que, en la etapa dos, "There areplane figures with three angles. So triangles exist" (p. 36).

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Debe tenerse presente que son esos enunciados y los compromisos ontologico-metafisicos que comportan (o no) los que caracterizan esencialmente a cada etapade investigacion cientffica y no centralmente -hasta donde alcanzo a ver- lospresupuestos que operan en la comprensi6n del investigador cuando capta lasignificacion o el significado de un termino en cada una de ellas. Ello no obsta,claro esta, para que en cada una de ellas se pueda atribuir -como hace C - un statusepistemico (i.e. un cierto tipo de conocimiento 'cientffico') al investigador respectodel enunciado que, precisamente, opera como evidencia de ese status. Asi, el queen relacion a la etapa uno se pueda decir que no es necesario que se haya captadola existencia o la esencia del objeto de estudio para contar con el enunciado que lacaracteriza, no quiere decir que Ia etapa este determinada centralmente por, o seidentifique con, un suceso que acontece a! aparato de compresion del investigador.Lo que Ia caracteriza es un enunciado defmicional que no compromete a lainvestigacion con la existencia o esencia del objeto que define; uno que no conllevacompromisos ontologico-metafisicos. Lo cual parece entrafiar que no es necesarioque el investigador capte existencia o esencia alguna. Pero, la etapa uno no es nadade la compresion del investigador, es, precisamente, una explicacion de lo que unnombre o termino significa dada como la identidad entre un termino y susignincaci6n exclusivamente lingufstica, sobre la base de la cual prosigue lainvestigacion: "Ow the basis of a Stage I account, one knows that the kind, if itexists, possesses some specified property" (p. 35).

En este punto, creo que conviene detenerse a observar cierto costado 'actual*del alcance logico-epistemologico que la interpretacion de C. parece descubrir.Curiosamente, el tipo de respuesta satisfactoria que puede dar un investigadorcientffico aristotelico en el inicio de toda investigaci6n {i.e. en la etapa uno), segunla propuesta de C , presenta puntos de coincidencia no menores con algunaspropuestas epistemologicas actuales.

En efecto, cuando con la formula 'F=m.a'''' la ffsica modema expresa el aspectomatematizable de esa creacion genial que llamamos segunda ley de Newton, lamecanica clasica nos da una respuesta cientfficamente aceptable a "^que significael termino 'fuerza'?", aun cuando nadie haya podido captar u 'observar' laexistencia de ninguna fuerza individual que tenga como su constitucion ultima algorepresentable por 'm.a'. Es claro que la satisfacci6n cientffica de aquella pregunta,la aceptabilidad de esta respuesta, que resulta una explicaci6n del nombre (quidnominis), se ha alejado definitivamente de la aceptabilidad y satisfacci6n que se

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podria pretender desde otra perspectiva que buscara una defmicion real, la posici6ncientffica actual -sueie aceptarse''- tiende a excluir los compromisos ontologicos ometaffsicos que podrfan involucrarse en la satisfaccion mas ingenua de ta respuestaa la pregunta '^que es F?' {quid ret). De este modo, podemos sintetizar estos utilessupuestos epistemologicos en la siguiente proposici6n [/]:

para que el investigador llegue a contar con la expUcacidn cientificasatisfactoria de lo que significa un t6nnino 'F' (que representa o es el lugarI6gico de un objeto de estudio dado) no hace falta saber que existen, en eluniverso empfrico o en el metafisico,16 ni algo que sea un individuo -unafiierza- particular con su esencia, ni una clase con una esencia que sea lodenotado por el tdmiino 'F'. Una explicaci6n trans re resulta cientfftcamentesatisfactoria."

Aquella formulacion ('F=m.a') puede ser asimilada a lo que solemos llamar en laactualidad, tradicionalmente, defmicion nominal (como opuesta a la 'real' ). Eneste caso, teorica. Hipotesis y teorias cientfficas son o utilizan, muchas veces, estetipo de defmicion, como se sabe, para el establecimiento de la significaci6n de susIlamados terminos teoricos.'^ Este artilugio lingUistico -presuntamentedesontologizado- es aquel de John Stwart Mill,^° en virtud del cual, para nuestraconcepcion actuaf^ y general de *definici6n', identificamos una expresion nominal'A' {defmiendum), con otra 'B ' {definiens) que significa lo mismo que 'A' y que -en el mejor de los casos- da las condiciones necesarias y suficientes del algocandidato a ser determinado como un A.

La aceptabilidad epistemologica de la respuesta que Charles propone para laetapa uno de la investigacion cientffica (sobre, por ejemplo, que es un eclipse), conla que -a su juicio- Aristoteles se ha comprometido, no es diferente de la esperadaen la posicion mas actual que acabo de presentar. En efecto, ella descansa en elconveniente reemplazo de la pregunta a la que debe responder la primer etapa de lainvestigacion cientifica. Descansa en ta sustitucion de la pregunta ('^qu6 es F?')que exige una definicion real, por aquella mds conveniente ('6qu6 significa *F'?')que s6lo pide una defmicion nominal. En palabras de C , "What is triangle? is to beunderstood as: What is 'triangle'? and taken as equivalent to: What does 'triangle'signify?''{^.21)?'

Desde la perspectiva para la cual las explicaciones de lo que los nombressignifican cuentan como definiciones o explicaciones defmicionales (p. 33, i,e.tienen la forma esquematica 'A=B', donde A corresponde al termino que se define

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por la significaci6n lingUistica B), C. ve que el requisito de identidad semanticaentre los nombres (como A) y las significaciones (como B) lo ha sido tambien deArist6teles ("'thunder* signifies the same as *o certain type of noise in the clouds^"p. 197 et pass.). Aunque se lamenta de que el filosofo de Estagira, en el pasajeinvolucrado, no haya explicado ''how the signification of such names is determinedor about the role (if any) in this of accounts of what names signify. Nor has heexplained how it is that names and such accounts can signify the same'''' (p. 56).Laguna que sera llenada por C. Cabe notar que, si A y B no significaran lo mismo,dificitmente le atribuiriamos actualmente {i.e. desde la perspectiva het^era de lade Mill ) a B estatuto definicional (como propone C , cfr. p. 33) alguno respectode A. Tampoco, desde luego, a las explicaciones del tipo 'A=B'.

En suma, tanto la etapa uno de [t2] que C. propone, como su tesis [ti], presentanel resultado o momento epistemico alcanzado al inicio del proceder de uninvestigador aristotelico. Ese momento de la investigacion cientifica, laformulaci6n de una "hipotesis" (p. 161), ve restringido su alcance ontologico-metafisico, como puede verse en [t2] y en las consecuencias (i) y (ii), del modosefialado en [t\. supuesto en e! cual se apoya, tambien, (aunque, como es claro, envista de un programa cientifico diverso) una parte no menor de los desarrollosepistemo!6gicos mas actuales, aun respecto de los postulados que conforman lasteorias. Asi, en la interpretaci6n de Charles, el compromiso ontologico-metafisicoque supone la posicion de Arist6teles para la etapa uno {i.e. la explicacion que lacaracteriza) de toda investigacion cientifica no se mostraria muy diferente del que[/] expresa y que opera como supuesto aceptado en posiciones mis modemas,como la de Hempel, por ejemplo."

II. a) Charles dedica los capitulos 2 y 3, como 61 mismo Ios resume, a argumentar afavor de la etapa uno de [t2]:

uno comienza la Investigaci6n clentffica con la captaci6n de lo que el t6rminosignifica, io cual no requiere tener conocimiento de la existencia de la clase.En esta etapa, uno no necesita nada de la esencia o la existencia de la clase (p.

Sobre la base de la posicion [t2]̂ ^ que manifiesta las tres etapas de investigaci6ncientifica con las que -a juicio de C - se compromete Aristoteles, C. infiere lasconsecuencias cniciales (i) y (ii). El no detalla c6mo es que infiere (i) y (ii) a partir

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de su propuesta [t2]. S61o parece sefialar que su inferencia es inmediata: ''"IfAristotle does accept the three-stage view, two consequences immediately follow"(p. 25). Pero, sin dudas, el argumento que C. no explicita debe garantizar lasconexiones pertinentes entre la existencia de la clase^* y la instanciacion de lamisma -cfr. (i)-, por un lado, y entre e! hecho de que "all members of the kindactually have an essence" -cfr. (ii)- y el hecho de que la clase tenga una esencia^',por el otro. Pues tales consecuencias -explicita C. inmediatamente- "en efecto,dejan abierto el asunto de si que se conozca la explicacion de lo que significa unnombre como 'hombre' supone que se conozca que la clase hombre, si existe,tenga una esencic^^" {ibid). Me detendre, pues, en parte del analisis de esteargumento no explicito.

Puede verse que la consecuencia (i) expresa la

(A) desconexi6n entre el conocimiento de una expiicacidn de lo que unnombre significa (= etapa uno de [t2]) y el 'que se conozca que la clase estiinstanciada'' [=0)J.

Como es ciaro, lo que (A) no expresa es la desconexion entre el conocimiento deuna explicacion de lo que un nombre significa y el conocimiento de que la claseexiste. [t2], sobre la base de An. Po. 93b 32, habla del conocimiento de la existenciade la clase y no del conocimiento de que la clase tiene instancias.

Pero entonces, para que (A) se siga inmediatamente de

la investigaci6n cientffica comienza con la captaci6n de lo que el terminosignifica, lo cual no requiere tener conocimiento de la existencia de la clase '̂(= etapa uno de [t2]; p. 19),

seria necesario agregar una premisa extra al argumento de C. del tipo de lasiguiente:

[3] el que ' la clase est̂ instanciada' -segilin se expresa en (A)- supone (o seidentifica con) la existencia de la clase.

No estoy seguro de que esa haya sido la idea de C , pero, debe concederse a favorde su afirmacion de que (i) se sigue inmediatamente de [t2] que, cuanto menos, si lainstanciacion de la clase no se sigue de que ella exista, cabe inferir que (i) no sesigue de [t2]. Pues, el no tener conocimiento de la existencia de las instancias debeseguirse, necesariamente, del no tener conocimiento de que la clase existe, para

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aceptar que (i) se sigue de [12]. Asi, el argumento no expHcito de Charles, lainferencia inmediata, parece suponer que, si se conoce que la clase existe(conocimiento que corresponde a la etapa dos), entonces se conoce que la clasetiene instancias.'^

Por su parte, su consecuencia (ii) expresa la

(B) desconexi6n entre el conocimiento de una explicacidn de lo que unnombre significa (= etapa uno de [t2]) y el 'conocer que todos los miembrosde la clase tienen actualmente una esencia' [=(ii)\.

Nuevamente, es claro que lo que (B) no expresa es la desconexi6n entre elconocimiento de una explicaci6n de lo que un nombre significa y el conocimientode la esencia que la clase tiene. [ii\, sobre la base de An. Po. 93b 32-3, habta delconocimiento de la esencia de la clase y no del conocimiento de que todos losmiembros de una clase tienen una esencia.

Ahora bien, para que (B) se siga inmediatamente de

la investigacidn cientifica comienza con la caplaci6n de lo que el t̂ rminosignifica, [para la cual] no se necesita nada de la esencia o la existencia de laclase " (= etapa uno de [t2]; p. 19),

se requiere de otra premise extra:

[4] el conocer que todos los miembros de la clase tienen actualmente unaesencia -segun se expresa en (B)- supone (0 se identifica con) conocer, enalgtin grado, la esencia de la clase.

Como se dice en (ii), el conocimiento de que las instancias tienen una esencia nopuede ser alcanzado en la etapa uno "pues, esto solo se puede conocer cuando seconoce que la clase en cuestidn existe. Pero este conocimiento solo puede seralcanzado en la etapa tres^* luego de haber pasado por la dos" -^(ii)-. Esto es, elconocimiento de que las instancias de una clase tienen una esencia -deberiaestableccr el argumento no explicito de Charles- es el conocimiento (0 parte de el)que se alcanza en la etapa tres: ''when one knows the essence of the object/kindsignified by a name or name-like expression" (p. 24). Asi, el argumento de Charlesobliga a suponer que, si se conoce la esencia de la clase, entonces se conoce que lasinstancias de la clase tienen una esencia.

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En resumen, el saber positive que puede estar implicado en [3] y [4] {i.e., saberque la clase tiene instancias o que ellas y la clase tienen una esencia) correspondeal de las etapas dos y tres de [t2], respectivamente (cJr. p. 35-36).

Sin embargo, si se examinan con algun detenimiento las suposiciones oidentificaciones [3] y [4], se ve que los argumentos subyacentes a (i) y (ii) , los quepermiten su 'inferencia inmediata' a partir de [t2], presentan -si he entendido bien-algunos problemas.

El primer problema con [3] parece ser este: de la existencia de una clase no sesigue que ella tenga instancias. Pues, por la teoria de clases, aceptamos que lasclases puedan ser vacias. Por ejemplo: la clase de todos los presidentes argentinosque recibieron un premio Nobel. Asi, aun cuando se conociera en la etapa dos de[t2] que la clase existe., ello no nos comprometeria con la existencia de instanciassusceptibles de tener una esencia. Pero entonces, segun hemos visto, cabe inferirque (i) no se sigue inmediatamente de [t2].^'

A favor del argumento de Charles, se podria pensar en una cierta identificacionen virtud de la cual el hecho de saber que la clase tiene instancias (para ladesconexion que se expresa en (A)) no puede suceder sin saber que la clase existe.Esto presentari'a un segundo problema para [3].

En efecto, aun cuando se conociera que la clase tiene instancias (segun reza (X),lo cual no se pudo haber inferido de [t2]) no podri'amos suponer o colegir de allique ella existe al mismo nivel ontologico en el que sus instancias existen.Ciertamente, del hecho de que una clase tengef'^ instancias no se sigue la existenciaextrapsicologica y extralingui'stica (esto es, 'mas all^' del piano psicologico olinguistico)^' de la clase. Esto es, la existencia de la clase perro'* como parte delmobiliario al que pertenecen los perros individuales no se sigue de la existencia delos perros individuales. Pues, desde el punto de vista \6gico,perro no es el nombrede (no nombra) nada, sino un termino general (un predicado de individuos) quetiene a la clase (un cierto objeto abstracto, si se admite) como su extensidn. Y auncuando se conceda la existencia de esos objetos (cuestion nada necesaria ydiscutible, por cierto), sin dudas, la extension de los terminos generales(reemplazados por las letras esquematicas 'F' , 'P ' , etc. en los esquemas del tipo*Px') no ha de pertenecer al mismo universo ontologico que recorren las variablesde individuo x. y, etc., que son los lugares 16gicos que ocupan los perrosindividuales. Esto es, la aceptaci6n de la existencia de las clases no es una cuestionque deba ser aceptada necesariamente por derivacion a partir de la existencia de

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instancias. En casos en que se admite su 'existencia', por ejemplo, cuando Quine lapropone para dar una teoria satisfactoria sobre los numeros, se las admite -como esnatural- en un 'reino' diferente de aqu^l al que pertenecen sus instancias. Unaanalogia con aires antiguos quizA aclare el punto: de ta existencia de los perrosindividuales y de la humana disponibilidad llngtiistica de un predicado para ellos(esto es, la que nos permite hablar de individuos de esa clase, como cuandodecimos, v.g., 'x es un perro'), no se sigue, necesariamente, la existencia del penoen si.

De modo que tampoco una identificacion (o equivalencia logica) del tipo, *xconoce que la clase esta instanciada si, y s6lo si, x conoce que la clase existe'podria ser parte del argumento vdlido, no explicitado por Charles, que sustentara suinferencia inmediata (i).

Como Charles sefiala (cfr. n. 4 p. 25) su inferencia (i) es contraria a la posicidnde Bolton (1976: 523): "[...]/or Aristotle any kind whose natttre we are in aposition to uncover must have members (93a 4, 19-20)". Bolton usa esta analogialogica (que no lo compromete con los mismos problemas que a C/°) para explicarsu interpretaci6n sobre el punto: las defmiciones nunca lo son de clases vacias, estoes, relativas a individuos inexistentes."" Quiz^ un intento radical por diferenciar suposici6n de la de ese autor le haya hecho abandonar a Charles su formulaci6n mdstemprana de la inferencia inmediata (i):

(a) it will not be an essential part of knowing an account of what a name orname-like expression signifies that one hiows that the kind exists (Charles1994: 39).

la cual SI immediately follow de su [t2] sin los problemas aqui sefialados, y esaquello que parece tener en mente C. con su nueva formulacion (i). Como sea, laformulaci6n mas temprana de (ii) tampoco ofreceria problemas para aceptar suinferencia como inmediata. En efecto, el escribia:

(b) // will not be an essential part of knowing an account of what a namesignifies that one knows the essence (for example: efficient cause) which isgrasped at stage three {ibid).

Pero esto no es -como puede verse- lo que (ii), quizi siguiendo el intento dediferenciacion con la tesis de Bolton, dice o expresa segun (B). Para inferir de 'seconoce la esencia de la clase' -como en la etapa tres de [t2]- la proposicion 'seconoce que los miembros de la clase tienen una esencia' -como en (ii)-, habria que

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aceptar que, del hecho de que la clase tenga algo x (una esencia), se sigue que susmiembros tambien lo tienen. Lo cual, claro estd, no es admisible. Como no lo es,tampoco, la conversa que pudiera fundar una cierta identidad (o equivalencia) deltipo 'x conoce la esencia de la clase, si, y s61o si, conoce que todas sus instanciastienen una esencia'. En efecto, del hecho de que todos los individuos de una clasetengan algo (una esencia, p. 25) no se sigue que la clase lo tenga (p. 19). De modoque, todo parece indicar que tampoco (ii) se sigue de [t2].

Estos puntos, en suma, podrian volver confusa la distincion que el mayor aportede C. establece en [t2]. En especial porque de (i) y de (ii) parece depender demanera crucial su tesis [t|].

Estos son problemas, en buena parte, derivados de la identificaci6n entre formasespeciflcas (o genericas) y clases logicas, con la que -por varias razones, entre lasque estas cuentan- no es necesario acordar, aun cuando esa difundida opcion puedatener, como metafora o analogia, cierto valor ilustrativo o nivel de aplicacion.

II. b) Otro problema, si no me equivoco, aparece en su esquematizacidn de aquelloen lo que Aristoteles estaria pensando en An. Po. B 10.93b 29-32. En efecto, C.interpreta que la argumentacion de Aristoteles que subyace a su pronunciaci6nsobre la obviedad (((xxvEpdv; 93b 29) de que haya un enunciado de lo que elnombre significa e! cual sea defmici6n, parte de la supuesta premisa de Aristdtelesdeque

(premisa I): *para todo x, x es una definicidn, si, y s6Io si, x es unaexplicacidn de io que algo es* (cfr. n. 7 en p. 26).

Si ese fuera el caso, el g^nero, que -sin lugar a dudas- es una respuesta correcta(quiza la primera, en el constructo teoretico de Aristoteles) a la pregunta socratica'ique esxT {Top. A 5.102a 31-35), deberia haber sido considerada por el estagiritacomo una defmicion. Lo cual, ya desde Topicos, y por razones diversas, parece nohaber sido suposicion (A 5.102a 13-14; 102b 29-33; Z 12.149b 21-23; 4.142a 8-9;5.142b 35; H 5.155" 8-10; et passim).

El argumento de Charles debe defender, para mantener Ia adaptacion cientificade su [t2], que "(2) Todas las explicaciones (genuinas) de los que los nombressignifican son definiciones" (p. 49). Pero una explicacion genuina que bienresponda a la pregunta socratica no necesariamente es una definicion -si puede seruna generica-; en cambio, toda defmicion responde, desde luego, genuinamente a

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ella. Claro que, si se insistiera en que el g^nero puede ser considerado comodefmici6n en el presente contexto de Analiticos, entonces la reconstruccion delargumento subyacente a 93b 29-32 que Charles descubre se enfrentaria a unobstaculo insalvable.

En efecto, C. sostiene que el argumento subyacente a su interpretaci6n de ladefinicion ^avEpbc, sigue asi: . i

(premisa 2): 'para todo x, x es una explicaci6n de lo que un nombre significasi, y s6lo si, X es una explicaci6n de lo que algo es\por tanto *para todo x, x es una explicacidn de lo que un nombre significa, si,y s6Io si, X es una definici6n -de [premisas] (1) y (2)-' {ibid).

Asi las cosas, el g^nero, la respuesta mds elemental -pero no por ello menosacertada- a la pregunta socrAtica gue es, deberia ser una definicion, ya que es unaexplicacidn de Io que el nombre significa tal como lo requiere la ontologica ymetafisicamente inocua etapa uno de [t2]; Io cual, desde el punto de vista deAristoteles, parece inadmisible: "Asi pues, sabiendo que es algo por definici6n, nose sabe si existe. Pero [eso] es imposible" {An. Po. B 7.92b 17-18).

ni . Charles ve la evidencia de la etapa uno de su [t2] en An. Po. B 10.93b 30-2 (p.24). Sobre ella se funda la captacion de la que habla [ti] y que sirve como*trampolin' (=representa un conocimiento suficiente) para Ia investigacion de laexistencia y de el que es de la cosa -^. 49; cfr. su premisa (i)- en las dos etapassiguientes.

El es consciente de una posible objecion (p. 49-50) a su interpretacion que sefunda en aquello a lo que Aristoteles parece apuntar en el contexto inmediato de93a 20-8: "al conocimiento de la existencia y de lo que la cosa es (etapas 2 y 3) yno a ninguna etapa precedente" (p. 49). Es curioso, sin embargo, que no ofrezcapara ella mas respuesta que su interpretacion de otro pasaje: 93a 30-6. A la luz dela misma intuicion que le ha permitido 'separar' su etapa uno de la dos, Charles leealii que

(R) uno tiene una captaci6n sobre eclipses la cual lo habilita a investigar suexistencia. Asi, se puede tener una captacidn sobre eclipses la cual no suponeexistencia (ibid).

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Creo que aqui su interpretaci6n no encaja del todo con lo que Aristdteles parecetener en la mira para ese contexto explicativo. En primer lugar, porque -desde unaperspectiva general- R no expresa la idea de la investigacion en curso en el pasaje93a 30-6.

En efecto, no es alii el caso de que la investigacidn de la existencia de eclipsesdependa de algun tipo de captacion sobre eclipses (la cual convendria que fuera -para C.~ una del tipo de una significaci6n linguistica). En el pasaje al que C.prefiere acudir como replica, es posible observar que no importa a Aristoteles siuno logra la captacion de un eclipse o 'sobre eclipses', sino si se logra la quecorresponde a si existe el eclipse" de luna;** Io cual no es Io mismo. (Ar.reemplaza los objetos a los que alude con las cxpresiones 'el eclipse' y Ma luna'por las letras esquematicas '>1* y T^ [=a30] respectivamente). En segundo lugar,porque tal investigacion depende de la existencia de la interposicion de la tierra{'ff, en el esquema de Ar. a31-32), y no de la especificaci6n de la palabra 'eclipse*(p. 50) o de su significacion.

Ciertamente, en 93a 30-6 Aristoteles muestra, en rigor, c6mo se comportan lasreiaciones y los compromisos de existencia, que subyacen a la investigacidn encurso, esto es, a la investigacion sobre si existe el eclipse de luna:

[I] captar si r(\a luna) se eclipsa o no, se identifica con Ia investigacidn de laexistencia de B (a31-2); i.e. con !a investigacion de la existencia de lainterposicion de la tierra. Lo cual -es evidente- no diflere de investigar cllogos relevante de Ay de! eclipse (a32-33); pues ese logos scr4 'interposicionde la tierra^,[2] y si existe eso [B\, tambien decimos que existe aquello [A] (a33).

El condicional [2] es claro: de no existir el eclipse (no el eclipse de luna), i.e. de noexistir A, no habr^ causante {B) ni logos -por [ I ] - del eclipse {A) que lo expresecomo tai. En este caso, cualquier investigacidn sobre el logos del eclipse (el queresponde a que es el) sera obviamente vana/' Por ello, [1] supone [2]: la existenciadel causante {aition) -i.e. la interposicidn de la tierra {By- implica la existencia deleclipse ([2]), y la captacidn de la existencia del aition es -da cuenta de- lacaptacidn de la existencia del eclipse que eclipsa a la luna (=[1]). Asi las cosas, Ar.no puede mas que adherir a la idea de que no existiendo aquello que se quiere saberqu6 es {v.g. el eclipse,^^ A), es imposible saber que es, pues de ello se sigue que sucausante (en este caso, B) no existe (por [2]). La conditio sine qua non para saberque es algo A y cual es la causa de su existencia (lo cual es Io mismo) es la de que

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haya un caitsante de la existencia de aquello A (93a 5-6). Inversamente a !o que C.propone, toda explicacion sobre eclipses (de luna o de sol), y su captacion, suponenla existencia del eclipse en sentido estricto, i.e. del causante.

V^aselo tambien de este modo. Charles s61o puede rechazar, por medio de suinterpretacion R, la objecidn segun la cua! el objetivo general que Aristotelespersigue en 93a 20-8 es el que indica -en sus terminos- que Aristoteles "wfocusing on knowledge of existence and of what the thing is (Stages 2 and 3), andnot on any preceding stage. For, he begins by noting that one cannot arrive atStage 3 save via Stage 2 (a20y\ C. parece admitir (p. 37) que en el contexto 93a30-6 se explica el proceder metodologico para el caso de haber captado algo de elque es (a29) del objeto de estudio."*^ La explicacion de este proceder metodologico,cabe notar, corresponde unicamente debido a que se ha captado que el objeto deestudio feoxiv (a28).^^ Pero entonces, Aristoteles esta explicando el procedermetodol6gico o cientifico que supone -contrapuestamente a lo que C. sugiere porR - Ia existencia del objeto de estudio. Existencia de la cosa de la que se habladesde el inicio (al9), y parece supuesta en lo que sigue de la exposicion. En talcaso, lo que se dice en 93a 30-6 no tiene por qu^ ser lei'do como expresion de unacaptacion semanticamente superficial que oficie como 'trampolin' en la busquedade la existencia del eclipse {cfr, n.23 p. 38). Contrariamente, el ejempio de"interposicion de la tierra" (a3O-31) es uno de algo de el que es del eclipse {i.e. undato que no hay por que excluir de el que es del eclipse, puesto que no es uno deconocimiento accidental de la existencia del eclipse; =a24-26); lo cual es captado acondici6n de que se capte que el eclipse existe (a28-29). Y ello habilita adeterminar facilmente (a28), por la afirmativa en este caso, si la luna se eclipsa ono (a31): este es - repi t^oslo- el caso de investigacion (a31-32) cientificapresente que Ar. muestra como ejempio en el pasaje. La investigaci6n en curso enel ejempio nada tiene que ver con si existe o no el eclipse, ello ya se sabe.

Asi, investigar que ia luna se eclipsa (o no) no comporta algo diferente de saberque existe (o no) la interposicion de la tierra ((Sp* feaxiv f| o-C =a32), segun vimosrecien. Pero no hay diferencia entre esa investigacidn (sobre el eclipsarse de laluna) y la del enunciado del eclipse: cuando hay enunciado explicativo relevante (elque responde a que es el eclipse), hay un causante y, con ello, tambien hayinvestigacion ulterior (a32-33) sobre cualquier tipo de eclipse (de luna u otro).

Todo lo cual muestra lo que Ar. se propone en el contexto inmediato a 93a 30-6:

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[a] que sabiendo qui es el eclipse (==Ia interposici6n de la tierra) -cosa que nopuede hacerse si no se sabe que (e! eclipse) existe (por a28) noaccidentalmente, puesto que el saber (sobre el eclipse) es relativo al qu^ es(a25-26>-, es mfc f̂ cil (a28) la investigaci6n ulterior (v.g. acerca de si la lunase eclipsa o no) y[b] que nada se investiga, si no se sabe que existe el eclipse (26-27);'De modo que, en la medida en que captamos que existe, asimismo captamostambien en relaci6n al que es" (a28-29), pero no al rev^s.

Para concluir, cabe sefialar que al tnargen de las fiiertes dudas sobre las sugerentes

interpretaciones de los pasajes sobre los que se apoyan sus tesis [tj] y [t2], no es

menos cierto que el esfuerzo de C. por coordinar e! cuadro de su reconstruccion y

la carga de la prueba que entrega a quienes no compartan su visi6n en manera

alguna son ligeros. En cualquier caso, la discusi6n sobre el peso epistemologico de

la llamada 'defmicion nominal' no puede eludir la consideracion sobre su potente

posicion.

Notas

' En adelante utilizo ' C para aludir al nombre del autor y la referencia a los numeros de pdgina,sin m^ precisiones, para la obra.^ C. hace frente a 'desafios esc^pticos' a lo largo de toda la obra, aunque pueden encontrarse lasobjeciones principales a las posiciones relacionadas con su tesis central {cfr. infra) en elapartado 2.8. "Interim conclusions and sceptical challenges": 48-52.^ En adelante An. Po. Para las traducciones y citas de Analiticos que presento sigo la edici6n deRoss (1991).'' Sobre el uso de esa expresi6n y los problemas que suscita ese tipo de definici6n cfr. Bolton(1976: 515SS.), Irwin (1982: 259ss.), o Sorabji (1980: 196ss.), v.g.

Natural-kind terms. Varios de los ejemplos que aporta C. (p. 1) para este tipo de terminos loson de terminos generales 'contables' (o, ai modo de Locke, sortal terms); e.g. 'hombre','eclipse', etc. Sin embargo, para la introducci6n de! su creatura teor^tica {cfr. infra 'miesencialista modemo' [p. 5ss.]). recurre a los casos -paradigm^ticos, por cierto- de 'agua' y'oro'; i.e. a t^nninos generales no contables (o 'de masa'). Asi, C. parece suponer que suinterpretacion sobre la teoria aristotdlica del significado, a la cual subyacen los siemprecspinosos problemas de identidad, es una igualmente vdlida para ambos casos, los cuales sonabarcados por la expresibn unica 'natural-kind term'.* Evito la traducci6n por 'significado', la cual resulta potenciaimente confusa para la expresi6nque C. prefiere usar aqui (p. 1), en obvia alusi6n al quid nominis. Signify, en ciertos contextos, ymean, en otros, son las nociones elegidas por C. para cubrir el espectro sem^tico de

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' En otros lugares, considerados desde el punto de vista de su papel epistemol6gico, C. se refierea ellos como ^''merely a hypothesis'"* (p. 158; et passim.).' Mds adelante (p. 24) C. presenta esta visi6n esquem^ticamente de la siguiente manera: "StageI: This stage is achieved when one knows an account of what a name or another name-likeexpression signifies (section [A]: 93b 30-2) Stage 2: This stage is achieved when one knows thatwhat is signified by a name or name-like expression exists (section [B]: 93b 32) Stage 3: Thisstage is achieved when one knows the essence of the object/kind signifted by a name or name-like expression (section [BJ: 93b 32-3)".' Entre corchetes he repuesto los pasajes de An. Po. en los que C. encuentra la evidencia de laseparaci6n en tres etapas {cJr. p. 24).'** • OpiCT|idi; 5' feneiSf) XfeYetai elvai XbTOi; toij xl feaxi, itxx-VEpdv 6x1 b \itv xii; tavxi. Xiryty; to\) -d cnuialvei x6 6v<Hia t| X6-Yoq fexepo^ bvc^axtoSTiq, diov -A ornialvei [xi feaxi] tpl-ycovov. 6nep kxovxei:; 6xi tea., C,r\xoviiev Bid. xl feaxiv (An. Po. B 10.93b 29-32)." Utilizo la palabra 'epistemologfa' y sus cognadas en el sentido que las !iga a una doctrina delos ftindamentos y m^todos del conocimiento cientffico.

Esto es, cualquiera de las candidatas a su etapa uno de investigaci6n cientffica." La investigaci6n a la que se alude es, desde luego, la de la existencia y la de la esencia (etapas2 y 3 de [tj respectivamente).

Aludo a la expresi6n sintdtica de la fonnulacidn evitando la constante de proporcionalidad queno resulta relevante para este analisis. Ndtese que lo mismo podria hacerse expresado como"'fuerza' significa al producto de la masa por la aceleraciAn"." Cfr. Schuster (1992: 7-13) pam una explicacidn de las diversas 'bases empfricas' a las que laconfrontacibn de las afirmaciones deseable en ciencia podrfa enfrentarse y cudi es la que -desdesu punto de vista- se acepta en ciencia.'* Ni en ningun universo, que pueda ocurrfrsele al fildsofo m4s creativo, fuem del universopsico-lingUfstico en el que podrfa aceptarse existen cosas tales como clases, tdrminos, palabras,definiciones nominates, etc." Aun cuando son diversas las perspectivas y propuestas sobre el papel de los tdrminosactualmente llamados te6ricos (cfr. n. 19 infra), esta ultima afirmaci6n debe ser puesta en uncontexto del tipo del siguiente: "los terminos tedricos hacen referencia a estados de cosas que,aunque inobservables, desempeflan manifiestamente un papel explicativo, haciendo claras lasrazones de por qu^ los fendmenos se comportan como se comportan" (Danto 1976: 105).

Algunos autores actualmente consideran que la defmicidn real sdlo se diferencia de taestipulativa en que la primera puede ser verdadera o falsa (en virtud de que se asigna unsignificado a un termino que ya tenfa alguno), mientras que la segunda no (puesto que eldefiniendum no tenfa ningun significado antes de ser definido). Asi tendriamos definicionesreales de 'unicomio', por ejemplo. En este trabajo opto por diferenciar la nominal de la real s6Iopor el tipo de pregunta a la que responden -*6qu6 es la cosa.*?' (para la real) o 'iQu^ es lo que elnombre 'X^ significa?' (para la nominal)-, cuestiones que parecen estar involucradas en lospasajes de Arist6teles.

Para una descripci6n de los alcances de este recurso en las diversas corrientes de laconcepci6n epistemol6gica 'heredada' a partir de la Alemania decimondnica cfr. Suppe, F.(1979). La estructura de las teorias cientificas. Madrid: 21-31.

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"̂ La aparici6n mds temprana de este recurso se atribuye a Gerolamo Saccheri; cfr. referenciasm4s completas sobre el punto en el agudo trabajo de Bolton (1976: 519 n.8).'̂ Si es que hay algo asi como 'nuestra concepcidn actual'. En cualquier caso, supondr^ que la

q̂ ue deseribo a continuacidn Io es. Cfr. n. siguiente.^ Actualmente, en ocasiones, la aceptabilidad epistemoldgica se reduce a la aceptabitidad]6gica: aquella que eonsiste en aceptar como satisfactorio el responder con una expresi6n quedice 'para representar qu6 cosa se usa la palahra'' (i.e., construimos una defmici6n !6gicamentesatisfactoria cuyas expresiones son 'realmente intercambiables porque tienen el mismosignlfieado"), como si se nos preguntara qu^ significa una palabra, cuando se nos pregunta qu^es una cosa. Cfr. Hospers (1982: 27 y 39ss.).' Sobre la satisfacci6n ]6gica de lo que cuenta actualmente como deflnici6n, la cual descansa en

la equivaleneia o identidad semdntica de las expresiones involucradas, puede verse Hospers(1982: 39ss.).^ "Uno de los pilares del empirismo 16gico es la tesis de que hay una distinci6n fundamental

entre teorias cientificas no interpretadas y el cuerpo de experiencia perceptual que confieresignificado a nuestras teorias y determina curies de ellas han de ser aceptadas. El sistema depostulados que constituye una teorfa " 'flota' o 'se cieme' libremente sobre el piano de Ioshechos empfricos"" (Brown 1984: 105).^' Ciertamente, la falta de compromiso con la existencia -y eonsecuentemente, con la esencia-del objeto de estudio en uno de los momentos iniciaies de toda investigaci6n cientffica es unsupuesto que esti a la base de Hneas epistemol6gicas no menores, como la defendida porHempel (1980). Tal momento es caracterizado por un enunciado de identidad sem^tica en elque se da una significacidn (B) para el termino (A) que eorresponde al objeto de estudio quesuseita un problema a resolver (i,qu6 es A?) y mueve a la investigaci6n. C6mo se llega a talenunciado ('A=B'), y cuAI es el tratamiento que la proseeuci6n de la investigaci6n le dard en susmomentos restantes a ese enunciado, son asuntos diversos, resueltos, tambien, de diferentesmaneras, conforme a cada propuesta epistemol6gica. Sin embargo, el momento de lainvestigaci6n cientffica que puede caracterizarse por ese enunciado y el supuesto no menor [/]asoeiado al valor de ese enunciado como caracterizaci6n de ese momento de la investigaci6n,son puntos en los cuales la etapa uno de C. y la correspondiente a la disposicion de unahip6tesis para el investigador de Hempel, coinciden plenamente.La formulacion de ideas conforme al tipo (E) "'trueno' es 'ruido en las nubes'" o, en la versi6nque C. reformula siguiendo a los eomentadores antiguos, "'trueno' significa un eierto ruido en lanube" (p. 44) o "'fiebre puerperal' es 'envenenamiento de la sangre con materia cadavdrica'"(ejemplo de Semmelweis que Hempel prefiere) son Io que C. llama explicaciones de lo que losnombres significan y Hempel, por ejemplo, "Idea o, como tambidn diremos, [...] hip6tesis" (qfr:Hempel 1980: 19); v^ase m^ abajo que C, tambien, aunque no la utilice con frecuencia, aceptaesta terminologia para sus explicaciones de Io que los nombres significan). Las formulacionesdel tipo E, siguiendo la idea aceptada de Mill, son oraciones que expresan la connotacidn de unt^rmino y "A statement of the connotation of a term for Mill involves no assertion, cover orover, of the existence of anything or of any other ''matters offact^" (Bolton 1976: 519). Asi,estas oraciones son vistas por Mill como definiciones nominales. E! las eonsideraba como merasproposiciones de identidad, segun hemos notado ya, que identifican un tdrmino con unaexpresi6n dada que estableee su eonnotaci6n. Tal expresi6n no pretende ser, como es natural, la

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expresi6n de la esencia de ninguna cosa. Podemos llamar, para brevedad del anSlisis, como suelehacerse, definiens a esta expresi6n y deftniendum al t^rmino con que se conecta en una oraci6n(idea, hip6tesis, explicaci6n de lo que un tdrmino significa, etc.) deflnicional.La zona de coincidencia entre el obrar metodo16gico del investigador hempeliano y elaristot^lico de C. es el momento de la investigacidn caracterizado por [a disposicidn de unenunciado u oraci6n definiciona! que no supone compromisos ontoI6gico-metaflsicos. De unenunciado desconectado del piano de los hechos que pretende explicar. En efecto, sobre la basedel supuesto [/], no puede m^ que aceptarse la desconexidn completa entre la captacidn que uninvestigador puede lograr de una explicacidn relevante de lo que un t^rmino (o expresidnnominal) significa y los hechos que, por lo general en el mundo empfrico o social, subyacen aIos fen6menos u objetos de estudio que se quiere explicar. Tales explicaciones tratan de conectaral t^rmino con las condiciones -en el mejor de los casos- necesarias y suficientes para aquelloque, de existir, cae en su denotacidn. E! investigador hempeliano y el aristot61ico de C, sindudas, discutirfan sobre cdmo han llegado a disponer de un enunciado tal. Es posible que, envirtud de los origenes que acepta cada uno para su enunciado, no se pongan tampoco de acuerdosobre cu^l es el nombre adecuado para 61: si 'expiicacidn de lo que un t^rmino significa', cuandoes producto de opiniones reputadas, v.g., o si 'hipdtesis', cuando Io es de ia propia creatividaddel investigador. Aunque quizA no haya disputa sustancial en este punto, ya que el mismoCharles estaria de acuerdo en Hamar *hipdtesis' al tipo de enunciado (=una explicacidn de Io queun t^rmino significa) que caracteriza su etapa 1 de investigacidn cientifica. En efecto, respectodel proceder de quien investiga la hidropesia explica: ''At Stage I of her enquiries into dropsy,the doctor need not know which illness she is investigating, since she will lack the abilityknowledgeably to distinguish this condition form all other conditions (whether real orimaginary). She forms a hypothesis about (what is in fact) an existing kind (with which sheinteracts), without knowing of its existence" (p. 161-2). "She could say: 'Dropsy' signiftes aunified medical condition with the following symptoms [...]" (p. 158). ''This is merely ahypothesis on her part (perhaps one of many)" (ibid). Asi, "[...] the doctor will be able toformulate an account of what 'dropsy' signifies (which she use in her hypothesis) withoutknowing of the existence of dropsy" (ibid).

Naturalmente, et prototipo de investigador hempeliarip y el aristot^lico de C, tambiendiscutirfan acerca de cudles son los siguientes pasos que deben dar, en Ia prosecucidn de lainvestigacidn que los mueve, con ese enunciado a la mano. Pues, sin dudas, las diferenciasepistemoldgico-programdticas entre las posiciones de Aristdteles (segun lo presenta C.) yHempel son enormes. Pero no es menos cierto que coincidirdn en que tal oracidn definicional ohipdtesis no los compromete con nada del mundo a la manera en que [/] lo expresa. La fdrmulaque caracteriza la etapa uno de C. responde en sentido estricto, con el reemplazo convenienteque he mostrado, a !a pregunta "t,qu6 significa 'trueno'?". Con ello, ofrece, en el primer estadiode la investigacidn cientffica, una respuesta aceptable por medio de oraciones que, mis all^ deque se las Ilame o no hipdtesis -como preferirfa el investigador hempeliano-, constituyen unenunciado definitorio (una definicidn -cfr. C. p. 33- nominal) en el que se conectan terminoscon significaciones lingUfsticas. En otras palabras, hay un punto en el cual, si Charles esti en locierto, no hay diferencia entre la posicidn teor^tica de Aristdteles y la de Hempel: la captacidnde la significacidn (deftniens) para un t^rmino (defmiendum) que pueda constituir unaexplicacidn de lo que ei tirmino significa o hipdtesis, nopresupone que se conozca la existencia

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de lo que cae en la extensidn de ese termino, y, mucho menos, que tal explicacidn se logresabiendo que la clase existente denotada, o sus miembros, tienen una esencia de la cual lasignificaci6n del tdrmino (deftniens) sea su expresidn. El punto de convergencia es,precisamente, [/]: la desconexion entre los hechos y la etapa inicial de toda investigaci6ncientifica: "las hip6tesis [...] no se derivan de los hechos observados" {Hempel 1980: 33). Peroeste punto de convergencia muestra, ademis, cierto car&cterfuncional semejante en las posturasque, como ejemplo, estoy considerando.Ciertamente, aun cuando la satisfacci6n ultima de las respuestas, aquello que buscan lograr (ollegar a conocer) en ultima instancia el investigador aristotelico de C. y el investigadorhempeliano, sea -en las etapas o momentos siguientes de su investigacidn- diferente, ambosparecen partir -en cambio- de una cierta etapa inicial funcionalmente semejante. Etapa querepresenta un tipo de conocimiento (logrado de modos diversos, como se ha dicho) que oficia depauta para la investigacidn ulterior de aquello que cada una busca lograr o de guia hacia lasaiisfaccion de cada uno de los modelos de investigacidn cientffica que presentan. Asf, frente alproblema cientifico de saber qu6 es un trueno, ambas posturas seflalan un momento crucial yfuncionalmente semejante en la prosecuci6n de toda investigacidn cientffica; pues "las hip6tesis,en cuanto intentos de respuesta, son necesarias para servir de gufa a la investigacidn cientffica"(Hempel 2000: 30) o, en la versidn programitica del investigador de C. "la captacidn inicial deuna explicacidn de lo que 'F' significa provee un trampolin a partir del cual se puede llegar aconocer no accidentalmente que F existe (y por eso [i.e. porque existej) para una investigacidnsatisfactoria de lo que F es" (p. 35-36).

^̂ La intuicidn que gui'a a Charles aquf no difiere, en lo sustancial, de la defendida en susugestivo artfculo "Aristotle on names and their signification" (=Char!es 1994).^' Cfr. tambien n. 8 supra.^' Cfr. tambien la formulacidn de [tj] a partir de la cual se realizan las inferencias inmediatas (i)y 00 en n.8 supra.^ Ver nota anterior.

^° La it^Iica es mfa. Por lo dem^, ndtese que -en ocasiones- en la interpretacidn de C. lo queest^ en juego no es una ciase sino un fendmeno, con lo cual otros serdn los problemas paraderivar instancias a partir de un "fendmeno"." Las itilicas son mfas.'̂ Esta afirmacidn podria parecer plausible a la luz de Categorias 5. En efecto, a la base de estaposicidn est^ esta otra: [F] "si la clase existe, entonces tiene instancias". La proposicidn F podrfaresultar admisible si se admite que: [1] la proposicidn F puede ser reformuiada asf: "si la claseexiste, entonces existen sus instancias"; [2] una clase se identifica con una forma especffica ogenerica (i.e. pueden utilizarse las palabras 'clase' y 'forma...' intercambiablemente) y unainstancia se identifica con una ousia primera (un hombre particular); [3] Aristdteles estdpensando en el pasaje de Analiticos en su propuesta de Categorias 5 segun la cual si no existenlas entidades primeras, no existen las segundas. En suma, para admitir F habrfa que admitir laconjuncidn de [1], [2] y [3].Para aceptar [1] convendrfa tener presente que la palabra "existe" tiene dos sentidos diferentesen la reformulacidn de F (cfr. infra n.36). F podrfa quedar reformuiada asf 'si la ciase existe^ (=en el reino 2), entonces existen' sus instancias (en el reino I)*. (La metifora de los reinos, cdmoes natural, sdio alude al diverso status categorial que distingue a las ciases de sus miembros. Cfr.

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tambien nts. 36 y 38 infra). Para aceptar [2] hay que aceptar que la teorfa de ta I6gica de claseses aplicable a las formas espec(ficas/gen6ricas. Pero si aceptamos [2], entonces no podemosaceptar [3]: pues en Ia teorfa de la I6gica de clases admitimos la existencia^ de clases vacias, estoes, cuyos miembros no existen'; y si los miembros, o entidades primeras, no existen', al decir delAristdteles de CategoHas 5, seria imposible que existiera^ nada de lo dem^. Parece plausible,con todo, que la aceptaci6n de [3] sea inobjetable. Supongamos que [2] es admisible. Asf, puestoque no hay' (entidades primeras) ciervos-cabrios, entonces existe Ia c!ase ciervo-cabrio sinmiembros (por aceptar [2]) y no existe^ clase o fomia ciervo-cabrfo (por aceptar [3]). Por tanto,no podemos aceptar [2]." L̂ as it^hcas son mfas." Las itSIicas son mfas.

Como se ve, este problema no tiene nada que ver con ta interpretaci6n generalmente admitidade que en la 16gica de clases de AristcSteles no se ha pensado nunca en clases vacfas. El puntoaquf no se centra en la 16gica que suponen los argumentos de Arist6teles, sino en ta 16gica quenosotros y Charles utilizamos para fundamentar nuestras interpretaciones.

N6tese que el "tener" aqui tiene el valor correspondiente al de la noci6n de perteneneia 16glcay no nos compromete con la existeneia de la clase, aun cuando se diga que la clase tieneinstancias; como no nos compromete con la existencia del unicomio el decir que tiene un solocuemo. El valor sem^tico del verbo "tener" no es muy diferente del de "establecer" o "describircomo": i.e.y la frase "la clase tiene instancias" puede leerse asf: "Ia clase se describe (oestablece) como las instancias tales y tales"; v.g. la clase A es (se identifica o describe como) {1;el perro del emperador; Plat6n; la palabra 'casa'}. Lo cual, no nos compromete con la existenciade la clase A, aun cuando la clase A sea vista como la extensi6n det t^rmino (o Umite) 'A'.Puede discutirse la existencia lingQi'stlca o psicoI6gica de {1; el Presidente de Argentina; PIat6n;la palabra 'casa'), pero no puede derivarse su existencia de la existencia del 1, de la delPresidente de Argentina, o de la existencia de la palabra 'casa'. La afirmacidn "existe elPresidente de Argentina y Ia clase que tiene al Presidente de Argentina como miembro"constituye, como ha probado largamente Gilbert Ryle (1980: 24ss.), un tipo de error categoHalque conlleva a absurdos filos6ficos diversos. Pues, se trata de existencias diversas (de "dossentidos distintos de 'existir'", ibid), ninguna de las cuales se sigue, necesariamente, de la otra.

Esto es, ta existencia empfrica, metafisica, separada, trascendental, o lo que la filosofta mascreativa pueda postular.

Si el predicado 'perro' fiiera un nombre para un objeto del tipo de las clases, el cual fueraexistente tal como lo son sus instancias, podrfamos aplicarle la teorfa de la cuantificaci6n deindividuos sin m&s enmiendas. Pero esto serfa, sin dudas, una gran confiisidn. Como seflalaQuine "Si existieran objetos de tal naturaleza -unos objetos Ilamados, digamos, caruzos- de loscuales fueran nombres los terminos generales, entonces la lectura adecuada de '(F)' y de '(3F)*respectivamente serfa 'para todo caruzo F' y 'hay al menos un caruzo F tal que'. Pero ladificultad consiste en que los tdrminos generales no son nombres, no nombran nada" (1969:303-304). Aun cuando -contrariamente a lo que Quine aquf dice- se acepte que los tdrminosgenerales 'nombran' algo, debe concederse que aqueilo que nombran, sin dudas, no pertenece almismo 'reino' al que pertenecen las cosas que nombramos con nombres propios.' Cfr. nota anterior.

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" En efecto, la ape!aci6n al recurso de la teorfa de la Wgica de clases de Bolton no presenta, almenos, problemas de adecuaci6n entre sus tesis y la teoria de clases. Pues, Bolton no acepta quese pueda saber qu6 significa un t^rmino que denota una clase sin que el t^rmino tenga referencia,y con ello, la clase, miembros. "Ciervo-cabrlo", en la perspectiva de Bolton, es un t^rmino delque no podemos tener una explicacidn de lo que significa porque no refiere a nada, esto es,denota una clase vacia (cfr. Bolton 1976: 524 y 542). Tal cosa no colisiona con la teoria declases a la que se recurre. En cambio, en la perspectiva de Charles, "ciervo-cabrio" es untdrmino del que podemos saber qu^ significa sin saber que la clase existe, en la etapa uno. Aqufcomienza el problema: "In some cases, there may no kind or object which is signified byrelevant linguistic expression (e.g. 'goatstag')" (p. 25). En esos casos, nunca se superarS la etapauno. Pero el punto es este: puede haber clases inexistentes como denotaciones de t^rminos. Locual es, hasta donde aicanzo a ver, bastante inusual para la teoHa de clases. La clase de loscumulos de oro que pesan m^ de 100.000 toneladas puede tener como miembros a la montafiade oro de Meignon y a la de la ciudad de E! Dorado que buscaban los conqulstadores espaflolesen America; ambas cosas inexistentes, por cierto, pero ello no convierte a la ciase en inexiste, nial t^rmino (cumulo-de-oro-que-pesa-mis-de-lOO.OOO-tns.) en uno que denota tal cosa, o que nodenota nada. El t^rmino denota, como es claro, una clase vacfa (una clase de inexistentes y nouna clase inexistente) que podriamos convenir existe en el piano psico-lingOistIco, sin que nadade ello nos comprometa con la existencia de las montafias de oro particulares de m^ de 100.000tns. El caso con "ciervo-cabrio" no es diferente. Si no me equivoco, uno de los problemas quecolabora en la falta de adecuacidn entre sus tesis y la teorfa de clases, es que el argumento deCharles asocia la inexistencia de la clase a la inexistencia de sus instancias, pues, su propuestaintenta explicar "how can he [i.e. Aristdteles] accept in [An. Po.] B. 10 that there is a type ofdefinition (liorismosj associated with the name 'goatstag', since there are no goatstags?" (p.28). Esto es, parece suponer que, porque no existen ciervo-cabrfos individuales, la ciase ciervocabrio no existe, aun cuando, igualmente, el tirmino 'ciervo-cabrlo' cuente con una explicacidndefinicional de lo que l̂ significa ("there can also be a type of definition of what 'goatstag'signifies", ibid).

''Providing we are dealing with a natural-kind the behavior of whose members can only beunderstood and explained within the context of a scientific theory we simply cannot stipulatewhat it is to fall into the kind. We must learn from scientific inquiry what the real nature of suchkind is. And there is only one way that such inquiry can reliably get off the ground -bybeginning with, as a nominal definition, an account of the kind based on what is more familiarto us. Such accounts are in fact based on a reference to actual instances of a kind and only bymeans of such a reference can they hope to fix on the essence which determines the extent of thekind. [...] The content of necessarily true statements about natural kinds is fixed by thesignificance of the natural-kind terms in question. And their significance for us is fixed only viaa reference to certain actual entities" Boiton (1976: 541).

Es posible que el argumento de Charles que pasa por alto esta distincidn tenga en la mira latesis de Sorabji segun la cual la "essence can enter into definition in tow radical different waysIt may simply be alluded to. or il may be fully specified Sometimes part of the essence (thegenus) will be specified, while there is only an allusion to the differentia" (1980: 195). Sorabjiha pensado que en B 10 hay explicaciones de lo que lo que un nombre significa las cuaiescualifican como bpio^iol y como explicaciones del qui es, explicaciones s61o geniricas (i.e., sin

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la diferencia) que suponen instancias particulares, *'and an example would be the account ofthunder as a certain noise in the clouds" (1980: 198). Personalmente, creo que es controvertidosostener que "cierto ruido en las nubes" o una expresi6n nominal precedida por el Indefinido tis,pueda ser tenida por una definici6n (bpiondw;) parcial (1980: 196) que expresa o "specifies thegenus'* {ibid), como sostiene Sorabji apoydndose, en parte, en Bolton (1976: 524), En efecto, ensu explicacl6n sobre el punto, Bolton no se refiere a la defmici6n nominal (o parcial, en laterminologfa de Sorabji) como a una expresi6n gen^rica, sino ccnio a la expresidn que determinauna cierta totalidad de instancias que nos es familiar, un tipo de comprensi6n de un universalcercano a la sensopercepci6n (1976: 530) -conforme a la distinci6n de Arist6teles de "loprimero para nosotros" {cfr. Ar, Fisica 184a !6ss,). Como es natural, tal totalidad nonecesariamente ha de ser el g^nero de la cosa que se investiga, cosa cuyo nombre signifique oespecifique a tai g^nero. Pues, en la expresi6n "un cierto tipo de bfpedo" no se manifiesta elg^nero de 'hombre' ni se alude por su expresi6n a la esencia del objeto de estudio, aun cuando(a) los miembros del tipo (o universal) a los que el investigador se refiere -por haberseenfrentado sensoperceptiblemente a ellos- tengan todos la esencia de hombre.Convincentemente, Bolton no pide mis que esta ultima condici6n (a) para su "totalidadfamiliar" (1976: 534), Ia cual no hay por qud identificar con e! g^nero del objeto de estudio. Peromds alld de los alcances y desviaciones de la controversia, las precisiones ldgicas de Charlessobre lo que cuenta como defmici6n, no impiden que se piense en el g^nero como bpio|i6i; -a laSorabji-, lo cual parece estar lejos de ser evidente y dcsdibuja !a distinci6n sem^tica entre lasfdrmulas tecnicas "TX feaxi" y "1:6 tl flv etvai". Cfr. tambien la posici6n de Lucasiewicz (1977:124), segun la cua! las afirmaciones como "hombre es animal" son apodicticas (y anallticas), loque resulta de que el predicado (esencial) estA contenido en el sujeto, y que "los predicadosesenciales resultan de las definiciones"; a partir de la que se podrfa argUir con cierto dxito que ele^nero resulta de la definici6n genuina, pero no que 1̂ sea una definici6n tal.

Por lo demis, saber (0 investigar) X no es lo mismo que saber que (0 investigar si) X existe,Arist6teles distingue muy bien estos dos tipos de investigaci6n para fen6menos ya desde An. Po,B 1, y tambien ha distinguido claramente entre los saberes positivos que corresponden a laexistencia de la cosa y al qud es de ella y sus relaciones reciprocas.*^ Un cierto caso de eclipse que no es {e.g.) el de sol. {cfr. B 1.89b 26).*^ El canon que opera aqui es el mencionado unas lineas antes: investigar qu6 es lo que nocaptamos que existe es no investigar nada (93a 26-27).**' Recurro al caso del eclipse al solo efecto de mantener el ejemplo, pero t^ngase en cuenta queparece claro que Aristdteles no est^ dispuesto a decir que el eclipse no existe, aunque no piensalo mismo sobre el cievo-cabrlo {cfr. 92b 5-8)." Efectivamente, traduce el comienzo de 93a 29 asf: "In those cases in which we graspsomething of the what it is, we proceed thus: [...]" (ibid).•** Precisamente, la traducci6n ad hoc de Charles de la oraei6n de 28-29 (c&cne we, txoiiev bxi6cTiv, ohvuc, &xo|^v Kal npdc, x6 xi kaziv.) muestra su aceptaci6n al valor existencial del verbode a28: ''''Thus, how we stand with regard to finding out -what something is is determined by theway we know that it exists" (p. 37). Sobre el valor del 'es' en el uso aristotelico -^wrpredicativo- cientfficamente relevante, a la luz de la teorfa del aspecto, cfr. Back (2000: 264ss.):"In normal contexts, of being per se, 'is' signifies real existence or presence. 'S is' means 'S

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exists'. Additional predicates may specif^' the type of existence further. A statement of tertiumadiacens has the logical form, S is (existent) asaP'[,..]"."̂ Para aceptar lo que C. propone habrfa que aceptar que en la oraci6n de 28-29 (cfr. notaanterior) Aristdteles termina el desarrolio de la idea de la necesidad de la existencia del objetode estudio de toda investigaci6n para pasar a hablar en la linea 29 de otra cosa. Esto es, hay queaceptar que desde alii la idea que 61 comienza a desarTollar es la de c6mo se procede en lainvestigacidn cuando se tiene 'algo de el qu6 es', io cual hay que entender como 'algo de lo queel nombre significa', esto es, con una definici6n nominal a la mano. Todo lo cual -€n especial,porque alii la argumentaci6n de Aristdteles vuelve sobre las relaciones entre la existencia delobjeto y el causante- no parece ser el caso.

Bibliografla citada

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Recibido: 29 de agoslo dc 2003Evaluado: 23 de setiembre dc 2003

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