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AMOR, TRANSFERENCIA y LOCURA. 1 Serapio J. Marcano D. Amor. Estructuración mental. Fantasía inconsciente El amor es un afecto o una emoción básica de los seres humanos que, por fines prácticos y expositivos, se le estudia separado de los otros afectos básicos, pero que en la realidad psíquica está indisolublemente ligado a los mismos en una constante interacción, y particularmente al otro afecto antitético que es el odio. Estos afectos cabalgan sobre las vicisitudes de gratificación o frustración de las necesidades de los seres humanos desde el momento en que se inicia la vida de relación con otros seres humanos, siendo el primer objeto de relación la madre y más específicamente algunos aspectos de la madre, que los psicoanalistas 1 Conferencia dictada en el Ciclo de Conferencias “Clínica Psicoanalítica Sobre el Amor”, en la Sociedad Psicoanalítica de Caracas, 1.998 Sociedad Psicoanalítica de Caracas, 1.998

Amortranferenciaylocura Serapio Marcano

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AMOR, TRANSFERENCIAyLOCURA.1Serapio J. Marcano D.Amor. Estructuracin menta!. Fantas"a inconscienteEl amor es un afecto o una emocin bsica de los seres humanos que,por finesprcticosyexpositivos, seleestudiaseparadodelosotrosafectos bsicos, pero que en la realidad psquica est indisolublementeligadoalosmismosenunaconstanteinteraccin, yparticularmentealotro afecto antittico que es el odio.Estos afectos cabalgan sobre las vicisitudes de gratificacin o frustracinde las necesidades de los seres humanos desde el momento en que seinicia la vida de relacin con otros seres humanos, siendo el primer obetoderelacinlamadreymsespecficamentealgunosaspectosdelamadre, que los psicoanalistas conceptuamos como cualidades de lafuncin materna con las cuales se establece fundamentalmente el vnculo.Estas cualidades son la capacidad de alimentar y cuidar, de hacerpresencia, de dar calor, de proteger y que, adems de servir deinstrumentos para satisfacer las necesidades pulsionales, van aproporcionar un plus de placer sensualo de displacer, sensaciones queadquirirn una connotacin afectiva amorosa o de odio de acuerdo a lagratificacin o frustracin de dichas necesidades y de la manera en que1 Conferenciadictada en el Ciclo de Conferencias Clnica Psicoanaltica Sobre el Amor,en la Sociedad Psicoanaltica de Caracas, 1.998 Sociedad Psicoanaltica de Caracas, 1.998 las mismas sean satisfechas o no por los obetos de la realidad exteriorquesustentanlavidadeestossereshumanosenformacin. Esmuydifcil definir con exactitud los modos en que el infante ha experimentadosus vnculos con los obetos de la realidad exterior y la manera en la cualdichos vnculos han sido internali!ados y pasarn a formar parte de sushuellas mnmicas. "esdeel psicoanlisis slolos podemos inferir atravs de sus reviviscencias durante la experiencia analtica y haciendoinferencias con la ayuda de una disciplina auxiliar como lo es laobservacin de bebs orientada psicoanalticamente. #obre las primariasvivenciassesolaparnlasnuevasexperiencias, lascuales, asuve!,abrirnunaventanaalaposibilidaddemodificacindelasprimitivasexperiencias,o seranuna reproduccinde las anteriores. $uandolasexperienciasvividassonintegradasenuncontextosignificativo, dichasexperiencias se van estructurando en un proceso de significaciones cadave! ms compleas y armnicas que configuran organi!aciones ydiferenciacionesmentalesdentrodel mundointernoqueincluyealosobetos internos y su interaccin con los obetos externos.%ero tambintienen lugar otras experiencias que no son integradas plenamente en uncontexto significativo enel momento de ser vividas, y cuyo prototipo loconstituyen las experiencias traumticas, las cuales van a ser obeto deuna elaboracin retroactiva, seg&n el decir de 'reud ()achtr*glich+eit enalemn, ,pr-s.coup en francs/, y esa reorgani!acin o reinscripcin, quees experimentada, de ve! en cuando, en funcin de nuevas condiciones,le confiere un sentido, e incluso un eficacia o un poder patgeno.('reud,#. 1012/.3anto las experiencias plenamente integradas en un contexto significativo,como aquellas que no lo son, constituirn las #antas"as inconscientes,las cuales van a determinar, en buena medida, las modalidades vincularesen las relaciones con los obetos de la realidad externa, bien sea en lasformas ms maduras de relacin, como en las que configuran lasllamadas estructuras clnicas, si aceptamos un criterio nosolgicopsicoanalticoparaorgani!ar dichasestructuras. %erotambindichasfantasas van a organi!arse de diferente manera en los diversosmomentos integradores de la mente humana que, desde ya debo aclarar,nosiguenunadireccin unvocalineal, paralela al patrndedesarrollobiolgico o neurofisiolgico, aunque se solapan sobre l, sino quealternan momentos deprogresinoregresin, odemayor omenorintegracin y que, para fines tericos, las diversas corrientespsicoanalticassistemati!andesdediferentesvrtices, dependiendodesus intereses particulares.,s las fantasas correspondientes a cada unode los diferentes bloques constitutivos de la estructuracin psquicacontendrn una particular organi!acin de las pulsiones, deseos,pensamientos, afectos, concepcin del tiempo y del espacio ymecanismos mentales de las formaciones del inconsciente.#e puede hipoteti!ar que en los niveles ms primarios de funcionamientode la mente no habra diferenciacin entre el sueto y el obeto, as comolas experiencias afectivas y de placer o de displacer estaranindiferenciadas., partir de all se integraranhacia un estado de placer ydedisplacermsespecficos, conuntamenteconladiferenciacinmselaborada de las imgenes 4buenas5y5malas5 del s mismo y del obetohasta llegar a una integracin de las cualidades y de los afectos 4buenos5y 4malos5, placenteros y displacenteros, dentro de un mismo sueto y unmismoobeto. Enlamedidaenqueseavan!aenlaintegracinhaytambin una evolucin en la dimensionalidad de la visin del mundo quepasa de un nivelde relacin linealen elcualno se distinguira entre ladistancia y eltiempo que, como dice 6elt!er, (1.171/8 4no es un mundoconducente a la emocionalidad fuera de la forma ms simple y polari!ada5y en lacual 4la gratificacin nopodradiferenciarsede la fusin conelobeto5, hasta un niveldonde eltiempo adquiere la dimensionalidad delproceso secundario tal como lo plante 'reud en 49os dos %rincipios del'uncionamiento6ental5 (1.111/ yencuyonivel, el tiempo, comounpoderoso factor que nos viene desde el mundo exterior, ha adquirido unatendencia direccional propia, acompa:ado de una discriminacinimportante del sueto y del obeto, que corre paralela a la transformacindel predominio de los mecanismos de identificacin proyectiva eidentificacin adhesiva, constituyentes principales de las identificacionesnarcissticas que encontramos en la base de m&ltiples trastornospsicopatolgicos regresivos. 3oma preeminencia entonces laidentificacin introyectiva como mecanismo mental, que va a dar lugar noslo a esa mayor discriminacin de s mismo y del obeto sino tambin delos afectos y en donde tienen lugar la capacidad de espera vinculada a laoportunidad para la gratificacin, predominando los sentimientosamorosos sobre los hostiles, que ahora son contenidos dentro del sueto.3odas estas experiencias dadas en los diferentes niveles de integracindel funcionamiento mental, van deando una sucesin de inscripciones designos en el inconsciente que constituyen las representacionesinconscientesdelapulsinlascualesestndispuestasenformadefantasas, que a su ve! son los escenarios imaginarios a los cuales se fiala pulsin y que pueden concebirse como verdaderas escenificaciones deldeseo (9aplanche.%ontalis, 117;/.9a pulsin se diferencia del instinto entanto que su obeto no est predeterminado biolgicamente y que buscauna satisfaccin placentera ms all de la necesidad biolgica y que elplacer que procura se observa como componente parcial e incorporado alplacer del amor sexual genital adulto y por eso en el %sicoanlisishablamos de psicosexualidad en lugar de simplemente sexualidad.$uando la necesidad es satisfecha, y queda la huella mnmica del obetoque produo placer, surge el deseo, buscando satisfaccin en la identidadde percepcin, reproduciendo alucinatoriamente las percepciones que sehan convertido en signos de esta satisfaccin.#e dirige una demanda aunobetobuscandoqueel mismoproveadichasatisfaccin, perolamisma es imposible de satisfacer, ya que es una demanda de amor quebusca ser llenada de una ve! por todas y crece en una relacin espiraladasin fin. #e asemea aluego infantil del$uento del 0/.%ara 'reud la transferencia en el anlisis se produce cuando el deseo seaferra a un elemento muy particular que es la persona del analista, la cuales vaciada de significado, igual que los restos diurnos del sue:o, y se leconfiereunasignificacindistintaalaoriginal, conlocual el deseosedisfra!a para permanecer inconsciente.9a transferencia es la misma en el anlisis que fuera de l. %or un lado eselmsgrande aliado delanlisisy porotro es elmayorobstculo. Elanlisis se hace gracias a la transferencia y a pesar de ella, como dice ?.,. 6iller(1171/parafraseandoa'reud. Estocorrespondealosdosaspectos de la transferencia, uno es el de la repeticin inconsciente, quees descrita por 'reud como un estereotipo o clich que se repite en formaconstanteenel decursodelavidadeunapersona, dirigindosealarealidad buscando satisfacerse en una persona de dicha realidad externa,y en el anlisis se dan todas las circunstancias para que el analista ocupeel lugar hacia donde se dirigirn esas demandas libidinales, que no sonms que demandas de amor. En los niveles concientes la b&squeda deeseobetodelarealidadesaplicadaenformaracional, peroanivelinconsciente, es una relacin ilusoria, irracional, o imaginaria como dira9acan.El otro aspecto de la 3ransferencia es el de la resistencia, que es unodelostrestiposderesistenciasdel @o. 9a3ransferenciapuedeserpositiva y negativa, desde elpunto de vista de los afectos, y la positivapuede ser de afectos cari:osos, desexuali!ados o amorosossexuali!ados. Estos&ltimos, untoconlosnegativossonlosqueseconstituyen en resistencia al buscar satisfaccin en lugar de recordar.,spor eemplo, cuando una persona siente recha!o y hostilidad a todo lo queprovengadel analistapuedeser porqueenel inconscienteel analistarepresenta un figura parental intrusiva, que no permite la necesaria)arcisisacin del infante, lo cual no excluye que el analista realmente secontraidentifiqueconestosobetosintrusivos. El anali!anterepiteyelanalistatambin, enlugarderecordarestosafectos, comounmodelovincular del pasado. 9a transferencia amable, o positiva amorosasublimadaeslaquepermiteoperar sobreel pacientepor sugestin.#eg&n 'reud (111A/, por sugestin debemos entender la forma deinfluenciar una persona mediante los fenmenos de transferencia posiblesen su caso.9a sugestin es en este caso, y no siempre, para 'reud, igualque para 'erenc!i(11B1/8 4la creacin artificialde condiciones donde latendencia universal a la obediencia ciega y a la confian!a incondicional,residuos del amor y del odio infantil.ertico hacia los padres, se transfierealapersonadel hipnoti!ador5 (enestecasoseraalapersonadelanalista/.Estn dadas as las condiciones, como diimos antes, para queelanalista, alser obeto de transferencia, para elanali!ante, adquiera yconcentre en s, una nueva significacin, elvalor de sntoma, y sura laneurosis de transferencia.#eg&n la teora lacaniana, el analista pasa entonces a ocupar el lugar delgranCtro, queescuchalademandadel pacientedebuscar laverdadsobres mismo, sobresuidentidad, sobresudeseo. El analistaserubicado como el #ueto #upuesto #aber.6antener esta relacin ilusoriae imaginaria es lo que permite que el inconsciente empue paramanifestarse. El analistalolograal noidentificarseconeste#ueto#upuesto #aber, pues de lo contrario, si lo encarna, la experienciaanaltica desencadena una psicosis alucinatoria crnica y que en laprctica lo observamos cuando el paciente nos dice que lo sabemos todode l y por lo tanto no tiene que decirnos nada ms.,dems, si desde ellugar del analista recurrimos a cualquier saber para tapar esa abertura, loquelograremosescerrar el caminoatravsdel cual el inconscientebuscaba expresarse. %ero esto tambin puede verse desde otraperspectiva, y es la siguiente8 el sueto, en el anlisis, dirigir al analistasus demandas mediante las cuales repetir toda una serie de sucesos desu vida psquica anterior y las vivir no como experiencias delpasadosinocomorelacinactual conlapersonadel analista. 9asdiversasestructuras se reeditan en esta relacin. 9as modalidades estructuralesnarcissticas, donde predomina una relacin dual, especular, imaginaria,buscan su propia imagen en la imagen del analista, que es la suya, y es lade otro, como en los comien!os de su desarrollo humano, identificndosecon ella y poniendo en evidencia los elementos constitutivos del yoprimitivo, con sus identificaciones imaginarias. 9a estructura edpica, enla cual predomina la relacin triangular por la presencia de un tercero, conel predominio del lenguae es simblica y la identificacin que seestablece es simblica, contiene en s la ley del padre, los ideales y lasaspiraciones dentro del Ddeal del @o y del #&per.@o, heredero del$ompleo de Edipo.E! Amor (e Trans#erenciaEn las pginas anteriores hemos ido mostrando como, desde elvrticepsicoanaltico, el amor puede ser conceptuali!ado como un componentede los afectos que se hacen presentes en los vnculos humanos, en susrelaciones no slo con los obetos de la realidad externa sino tambin conlos de la realidad psquica y que aparece en las diversas expresiones delasfantasasinconscienteslascualesrevelanlosdiversosnivelesdecompleidad de integracin de la mente humana. El amor,inextricablementeligadoal odio, apareceenlasestructurasprimitivasnarcissticas predominando las relaciones duales, especulares, derelaciones parciales sueto.obeto, donde se ama predominantemente alotro que representa la imagen del sueto dndole una esperan!a ilusoriade completud, apareciendo elodio como efecto de la diferencia de eseotro con lo que de l se espera que sea. Ese otro representa al obetoparcial delapulsinconfundidoconel suetomismoyquevendraarellenar la falla de la separacin.Ese obeto parcial es sucesivamente elpe!n, las heces y luego el falo donde los significantes previos setrasmutanenlosnuevos, locual correspondeaunprocesodeduelosucesivo, seg&n una de las lecturas posibles de la teora de las etapasfreudianas. 3odas estas demandas de amor a los obetos parciales y eldeseo que busca satisfaccin en la identidad de percepcin, van a serpenetradas por la aparicin de un tercero que desde un comien!o estpresentea travs de lasnormasde la cultura,pasando elobeto de lapulsinaconstituirseenobetototal al aparecer lasituacinedpica."icho tercero se materiali!a en la imagen paterna que marca la 9ey queprohbe acceder al obeto del deseo. Dntroduce as al sueto en el ordensimblico, en el lenguae y en el simbolismo sociocultural, en oposicin alo imaginario no simboli!ado. Elamor aparece entonces dirigido a unaotra persona queno eselobetooriginaldelapulsin sinootro obetoque, por despla!amiento simboli!ar al obeto original.El amor queacompa:aaestasrelacionesdeobeto, enlosdiversoscomponentes estructurales, puede cobrar una inusitada fuer!a en larelacin el analista, inundando todo el campo del anlisis y en el cual elanalista dea de ser tomado, por el anali!ante, como lo que realmente es8un analista que supuestamente sabe sobre el deseo del sueto y pasa aser el obeto del deseo.#e puede decir que lairrupcin violenta oprecipitada, intensa,tena! eirreduciblequealcan!aestetipodedemandaamorosayquenocedeanteaclaratoriaracional alguna, sedebeaquedichosimpulsosestndirigidos desde el inconsciente a obetos arcaicos y evidencia en ello lascondicionesimaginarias, propiasdel predominiodelasorgani!acionesnarcissticas presentes en los diferentes niveles de integracin mentalyde las fantasas inconscientes concomitantes. 9as eroti!aciones delvnculodenotarnlasrelacionesdeobetoparcial correspondientesaesos diferentes niveles y pondrn en evidencia la mayor o menorintegracindelosafectos, delascualidadesdelosobetosydelosmecanismos mentales puestos en uego. Estos diferentes nivelescorresponden a las varias formas de amor de transferencia que aparecenen las neurosis, la locura y la psicosis.Esbuenoaclarar quemi posicinesladequeentodoindividuoseorgani!an, dentro de su aparato psquico las diversas estructuras enmuyvariadas proporciones, y que en un nivel de integracin ptimoconstituiran las modalidades de vinculacin con predominio del eeedpico sobre el ee narcisstico, de lo simblico sobre lo imaginario, y enel cual, como dice 9iberman (1.172/, la accin y la expresin de las ideasy la regulacinde los afectos secombinancon el mayor gradodeadecuacin. %erotambinpiensoquecadaserhumanopresentaunaorgani!acin estructural predominante la que eventualmente puede fleary dar lugar a la aparicin de otro tipo de estructuras de mayor o menorintegracin, apoyndonos, paraplantear esto, enque4todaestructuratieneunlugar vacoqueposibilitalaspermutaciones5. (Eabinovich, ".1.177/.En los anali!antes con predominio neurtico y en los cuales elconflictoedpico genital, con sus angustias de castracin, es el que rige la escenatransferencial, aparecen enamoramientos con diversos grados deintensidad pasional, en los cuales la ideali!acin del obeto amoroso estdirigida a la persona del analista, disociada de las inclinaciones yexpectativas sexuales respecto al mismo, las cuales van a ser dirigidas aotros obetos de la realidad externa que, debido a alguna caractersticaparticular, atraen hacia ellos los deseos erticos correspondientes alprogenitor deseado, en tanto que los afectos negativos son dirigidos haciaotros obetos que tambin tienen caractersticas que los ligan, de alg&nmodosimblico, conlosobetosedpicos, ydondelarivalidadconelprogenitor delmismo sexo puede adquirir caractersticas pasionales enlascualesaparece el odio al atribuirlelaprohibicin delasexualidad,pero hacia los cuales tambin subyace una me!cla de admiracin y celospor el lugar que este obeto ocupaal lado del obeto de amor, lugar quedesea inconscientemente tomar en posesin y que a la ve! teme, pues dequedarseatrapadoall nopuedehacer laexogamia, a:adindoseleadichos temores el correspondiente al de la castracin.,mar es, parael suetoubicadopredominantementeenunaposicinnarcisstica, que el obeto se preste a proveer una ilusin de igualdad, decompletud, de constancia, de no separacin. "esde la posicin del obetomarcado por la 9ey que impone el reconocimiento de lo imposible de lacompletud, queimponeasumir larenuncia, amar esdesconfirmarlealsueto esa expectativa de unin, es no sostener esas identificaciones y asprocurar la identificacin simblica a travs de la cual el sueto incorporala 9ey que le impone aceptarse en falta. %ero cuando el amor adquiere uncarcter pasional dondelaintensidaddel afectoyel apegoal obetociegan completamente al sueto, aparecen las ms intensas sensacionesde xtasis, o los sufrimientos ms dolorosos que pueden eventualmenteconducir hasta el suicidio yFo el homicidio cuando dicho amor esprohibido. En los actos pasionales estamos frente a la locura detransferencia, llamada tambin %sicosis transferencial por algunos, o antela3ransferenciapsicticadel individuopsictico. El lenguaecoloquial,igual que el contenido manifiesto del discurso de algunos anali!antes nosmuestra como con frecuencia llamamos locura a ciertos actos opensamientosqueseimponendominandolara!n, subvirtindola, aligual que a todo su funcionamiento psquico.,ll el sueto es actuado poresta pasin que lo aliena.Estalocurapasional remontasusorgenesalastempranasrelacionesmadre.hio, que los +leinianos califican como una psicosis infantiloriginaria y que ,ndr 0/, 4Esquema del %sicoanlisis 4, Cb. $ompl., ,morrortuEd. 3 OODD. 110B, 1101.9aplanche.%ontalis. (117;/, 4"iccionariode%sicoanlisis.5 Ed. 9abor,Garcelona, Espa:a.9iberman, ". (1172/, 4'unciones del @o y estilos comunicativos5, $ap. D,en 49enguae y 3cnica %sicoanaltica5, Ed. Pargieman, Gs. ,s. 1172.6elt!er, ". (117M/, Exploraciones del autismo5, %aids, Gs. ,s. , 1171. 6iller, ?.,. (1171/, 4$inco conferencias $araque:as5, Ed. ,teneo de$aracas, 1171.Eabinovich, ". (1177/, #eminario sobre ?. 9acn, $aracas. $onferenciasprivadas. 6imeo.