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“Félix Rodríguez: proceso de formación, reproducción y permanencia de
las ideas de cambio y revolución en el Paraguay de la segunda mitad del siglo
XX”
“Felix Rodriguez: process of formation, reproduction and permanence of the
ideas of change and revolution in the Paraguay of second half of century XX”
Verónica Inés Magriñá*
Resumen
Esta investigación se centra en la historia de FélixRodríguez, de nacionalidad paraguaya, maestro de grado,miembro del Partido Comunista Paraguayo, que se integró algrupo armado FULNA (Frente Unido de Liberación Nacional)durante la dictadura del Gral. Alfredo Stroessner (1954-1989).La construcción de su identidad en base a las ideas de cambioy revolución se vislumbra en su relato y sus acciones,legitimados por el discurso de justicia social concebida comola necesidad de mejorar las condiciones laborales, educativasy de participación política “al servicio del pueblo”. Sumilitancia lo llevó a exiliarse en Posadas, desde 1960 hasta2010, donde siguió trabajando en pos de la liberación delParaguay.
Palabras Clave: Exilio – Militancia – Dictadura – Cultura Política –Paraguay
Abstract
This investigation is centered in the history of FelixRodriguez, of Paraguayan nationality, masterful of degree,member of the Paraguayan Communist Party, that was integratedto group armed FULNA (In front United of National Liberation)during the dictatorship of the Gral. Alfredo Stroessner (1954-1989). The construction of its identity on the basis of the
1
ideas of change and revolution glimpses in its story and itsactions, legitimized by the speech of conceived social justicelike the necessity to improve the labor, educative conditionsand of political participation “to the service of the town”.Its militancy took it to exiliar himself in Inns, from 1960 to2010, where it continued working after the liberation ofParaguay.
Keywords:Exile – Militancy – dictatorship – politic culture – Paraguay
*Profesora y Licenciada en Historia, investigadora inicial dela Secretaria de Investigación y Postgrado de la FHyCS- UNaM.Email: [email protected]
Introducción
Félix Ramón Rodríguez nació en General Artigas (Paraguay) en
1917. Fue un maestro rural, exiliado político y miembro del
partido comunista, que se integró a las filas del movimiento
guerrillero FULNA (Frente Unido de Liberación Nacional) entre
1958 y 1962, durante el gobierno dictatorial del Gral. Alfredo
Stroessner (1954-1989). Nos preguntamos específicamente acerca
de las condiciones sociales, históricas y políticas que hacen
posible el surgimiento de una cultura política contra –
hegemónica, orientada a la construcción de un modelo de
sociedad basado en las ideas de justicia, equidad, soberanía y
democracia.
2
En las páginas que siguen intentamos mostrar cómo se construye
la identidad de un sujeto común en relación a las ideas
revolucionarias de un contexto socio-político particular, que
transcurre en una región de frontera atravesada por los
avatares históricos de dos países: Argentina y Paraguay. El
énfasis está puesto en los discursos sociales y políticos que
legitiman la existencia y la participación en la guerrilla y
su coexistencia con otras formas de historización. Con este
enfoque puntualizamos el tema de la búsqueda realizada por un
ciudadano de nacionalidad paraguaya, en relación al ideal de
justicia social para mejorar las condiciones laborales,
educativas y de participación política de la sociedad “al
servicio del pueblo”. Esta conciencia social de plantear la
necesidad de cambio se sustenta en su formación política
dentro del Partido Comunista, en el que militó durante la
secundaria en Villarrica en los años ’40. Asimismo,
consideraremos a los actores que participaron en los
movimientos de resistencia armada que, en el caso de Paraguay,
adquiere características propias.
Hemos optado por acercarnos al objeto de estudio a través de
una historia de vida por varios motivos. La cercanía de los
acontecimientos, la dificultad para acceder a las fuentes
escritas que dan cuenta de los mismos y la posibilidad de
apelar al testimonio oral de las personas que vivieron durante
el periodo estudiado, hacen pensar que es posible escribir la
historia reciente del país a través del relato de las víctimas
3
de la dictadura, que cuenten que es lo que han vivido y que es
lo que recuerdan.
Asimismo, en la historia de vida de sujetos en contextos
sociales considerados adversos o en situaciones extremas, como
puede ser un régimen político represivo, se observan las
acciones de los individuos desde la óptica del contra poder.
En efecto, el poder, por más coercitivo que sea, deja
intersticios donde los sujetos pueden llevar a cabo prácticas
de resistencia y oponerse a éste, acciones que pueden producir
cambios importantes para la sociedad en la que se desarrollan
las mismas (Carbonari, M. 2003).
Caracterización del régimen político stronista
Para entender el accionar contra-hegemónico de Félix durante
el proceso dictatorial en Paraguay, resulta necesario
caracterizar brevemente el régimen instaurado por Alfredo
Stroessner entro los años 1954 y 1989.
Desde sus inicios el gobierno stronista estuvo apoyado desde
el inicio por un partido tradicional del Paraguay que perduró
en los mandatos siguientes a este período. Según la Comisión
de Verdad y Justiciai (CVJ), éste fue un régimen totalitario
que se constituyó mediante una “unidad granítica” en el
gobierno integrado por las Fuerzas Armadas y el Partido
Colorado, y Stroessner como líder único. Además, otro rasgo
totalitario fue que durante este tiempo se acrecentó y
4
perfeccionó la política de persecución a los opositores y se
imposibilitó cualquier intento de participación política de la
oposición.
La larga duración de este régimen se debió tanto a factores
internos como externos. Entre los primeros se distinguen el
terrorismo de Estado, el apoyo del partido tradicional de
masas y la preponderancia militar en la dirección del Estado
después de la Guerra del Chaco (1936). Entre los segundos, la
adhesión y el sometimiento del gobierno stronista a la
estrategia de la Guerra Fría (1945-1989), la Doctrina de
Seguridad Nacional promovida por Estados Unidos de
Norteamérica, el apoyo político y económico de este país hasta
la llegada de James Carter y los intereses regionales de
Brasil. La relación entre los países del cono sur responde a
una práctica política para sostener el equilibrio, en este
plano se inscribe la decisión brasileña en el apoyo a la
dictadura para hacer un contrapeso a la influencia argentina
como dueña de la llave de salida al mar (Informe Final CVJ,
Tomo I, 2008: 34-36).
Otro factor importante fue el consenso de aceptación de
autoridad del líder. Entre 1959 y 1967 se inició el culto a la
personalidad del Gral. Stroessner, a través de programas en
los medios masivos de comunicación. Se reproducían canciones
al “valiente guerrero de temple de acero”, se fijaban grandes
carteles de propaganda y el presidente inauguraba
construcciones de puentes, caminos y edificios públicos.5
También, mediante la presión gubernamental, se trataba de que
el presidente inaugurara edificios y construcciones de
empresas privadas que se habían instalado en el país. En el
mismo orden de sucesos, el presidente se encargaba de entregar
los diplomas a los egresados de las escuelas de enseñanza
media y universitaria. Así ejercía presión sobre los futuros
profesionales del país para conseguir la adhesión al régimen
sin resistencias. Esto significaba una fuerte presencia de
Stroessner en todos los ámbitos de la sociedad civil, públicos
y privados, para ser reconocido por la población como líder
indiscutido del nuevo orden instaurado.
De manera significativa, el presidente buscó cooptar a la
población en el rechazo a los opositores, apelando a la
tradición nacionalista colorada bajo la idea de que los
opositores eran portadores de ideas foráneas y que el ejército
encarnaba el “ser nacional”. La lucha se orientaba
específicamente hacia la ideología comunista a través de la
implementación a nivel nacional del plan continental ideado
por Estados Unidos, denominado “Doctrina de Seguridad
Nacional”. Se configuró entonces un aparato represivo frente
al avance del “comunismo ateo”.
“Para la población paraguaya el hecho de ser
comunista se convierte en algo que justifica la
represión (…) En medio del terror, unos pocos
protestaban contra las represiones a comunistas (…)
Tal acusación se extendía a liberales, febreristas
6
e independientes, toda vez que ejercieran algún
tipo de disidencia. Perseguir comunistas
significaba mantener la PAZ y ello justificaba
cualquier represión”. (Blanch, J., 1991:104).
Otra característica del período fue la construcción del
aparato de Estado como propiedad de quienes detentan el poder
y como fuente de orden social. La dictadura de Stroessner tuvo
claros signos -no de simple autoritarismo- sino de
totalitarismo que ejerció el control total del Estado y de la
sociedad, en el ámbito público y privado, anulando toda
iniciativa de organización colectiva e individual. El régimen
se encargó de perseguir, eliminar, excluir a quienes se
manifiesten opositores, extirpando e incluso aniquilando
cualquier foco, intento o proyecto de oposición y lucha, sean
éstos por la vía pacífica o armada. Para ello se utilizó el
aparato de estado, las Fuerzas Armadas, la Policía, el Poder
Judicial y el Poder Legislativo como instrumentos subordinados
al Poder Ejecutivo.
La corrupción en el Estado se constituyó en un elemento
frecuente del régimen y los funcionarios utilizaban el
enriquecimiento ilícito como móvil para la búsqueda y la
permanencia en cargos públicos. Durante la década del ‘60, la
propaganda del régimen se sintetizó en “Paz, Trabajo y
Bienestar con Stroessner”, ya que se llevaron a cabo numerosas
obras de infraestructura, se crearon nuevos organismos
gubernamentalesii y quince firmas de bancos extranjeros se7
instalaron en el país. Esto dio lugar la modernización e
incitó a la corrupción. Los grandes funcionarios podían hacer
grandes negociados con las obras públicas, los pequeños
funcionarios completaban sus magros salarios con “coimas”. La
corrupción se oficializó y los militares protegieron negocios
como el contrabando, cobrando comisiones por protección. A la
par de esto se desarrollaba el clientelismo del partido con
los bienes del Estadoiii.
La aplicación -en algunos casos- de leyes liberticidas como
la 294 (ley de defensa de la democracia) y la 209 (ley de
defensa de la paz pública y libertad de las personas)
consagraron el delito ideológico. Estas dos leyes limitaron
importantes derechos y se utilizaron como un instrumento para
el ejercicio arbitrario del poder. El aparato represivo violó
y manipuló a su favor la Constitución Nacional y las leyes.
Los jueces fueron dóciles al gobierno, lo cual permitió
limitar o restringir el ejercicio de los derechos, hasta
inclusive desconocerlos y darles a los represores un respaldo
formal para violar la propia ley, garantizando así la
impunidad. El régimen instaló tribunales especiales,
proscribió la actividad de algunos partidos y asociaciones
políticas e hizo ilegales a organizaciones sociales, gremiales
y medios de prensa.
El régimen se desarrolló durante los cinco mandatos de
Stroessner bajo el estado de sitio como estado permanente. La
medida sólo era levantada cuando se llamaba a elecciones para8
que los ciudadanos participen de los comicios. En este
contexto se prohibía toda forma de reunión, asociación,
libertad de opinión; asimismo no se dictó amnistía para los
exiliados y hubo centenares de presos políticos sin proceso
judicial; la proscripción y la pluralidad restringida de los
partidos opositores al régimen fueron dos factores constantes
en este período.
La separación de los espacios públicos y privados fomentada
por el régimen establecía que las personas permanezcan en el
ámbito privado y que si participaban en el espacio público,
éste sólo podía ser regulado y controlado por el régimen. El
dicho “la calle es de la policía” señalaba precisamente que
el único espacio público aceptable era el oficial (actos
partidarios, gremiales y culturales, oficialistas y
celebraciones nacionales). Por lo tanto, la represión fue uno
de los componentes esenciales del sistema político y no un
elemento marginal utilizado en situaciones extremasiv.
Las acciones represivas obedecieron a una cadena de mando
centralizada, vertical, dócil e institucional asociada al
aparato burocrático del Estado, desde la cúspide del comando
estratégico hasta la base de la pirámide represiva, el agente
policial, el soldado, el miliciano y el informante encubierto
o “pyragüé”. La mayoría de ellas fueron diseñadas con mucha
antelación a través de un vasto y múltiple sistema de
inteligencia, contrainteligencia y una extensa red de agentes
especiales o informantes encubiertos. 9
Una de las notas distintivas del modelo represivo paraguayo -a
diferencia de otros en la región- fue que no se crearon
estructuras militares o policiales clandestinas diferentes o
paralelas a las oficiales y públicas del Estado paraguayo. Las
distintas estructuras del aparato político, militar y policial
perpetraron graves violaciones de derechos humanos de manera
visible y publicitada. Tampoco existieron centros de detención
y tortura clandestina, usándose para ese efecto dependencias
policiales, militares, gubernamentales y civiles conocidas.
A pesar del panorama político caracterizado por el ejercicio
de un gobierno autoritario, la economía del país tuvo un gran
auge dando pié a la construcción de la represa binacional
Itaipú y sosteniendo una vinculación al mercado mundial
mediante la exportación a gran escala de soja y algodón y el
flujo de capitales extranjeros hacia el agro. Dicha
prosperidad emprendió un acentuado declive porque el régimen
comenzó a debilitarse, signado por la negativa del apoyo
internacional, principalmente de Estados Unidos e internamente
por el distanciamiento de los partidos de oposición que se
retiraron del Parlamento y se apartaron de Stroessner.
Los autores de “El Precio de la Paz” (Blanch, J. 1991) analizan
el régimen stronista en dirección a dos ejes: la
identificación de los sectores que se mantuvieron en el poder
junto a Stroessner y los enemigos del régimen y, por lo tanto,
de la patria; y la instauración de un aparato represivo hacia10
estos últimos, como elemento que permitió la estabilidad y la
permanencia del gobierno durante un largo tiempo. El precio
de establecer la “paz” en el país ha sido la persecución, la
tortura, la cárcel, la desaparición y el exilio de gran parte
de la población paraguaya, considerada como un peligro para la
nación.
Los movimientos armados durante la era stronistaLa situación política conflictiva del país, en un contexto
latinoamericano revolucionado, había generado en algunos
sectores de la sociedad paraguaya la idea de la resistencia
armada como única alternativa para provocar los cambios
necesarios. Esta convicción, junto con tal propósito,
generaron la aparición de grupos armados con tácticas de
guerrilla, formados en su mayoría desde el exilio, con un
programa político que sustentaba la toma del poder por la
fuerza, la instauración de un gobierno democrático y el fin de
las crecientes desigualdades económico-políticas. En el caso
de Paraguay, la organización de guerrillas se configuró como
la única forma posible de lucha contra la dictadura stronista,
ya que la acción represiva del gobierno prohibía la
participación política a través agrupaciones o partidos
(Giddens, A., 1989)
Mediante un análisis comparativo de los orígenes de los
movimientos armados que se produjeron en Latinoamérica,
Matilde Ollier (2005) establece la relación entre las
guerrillas y el contexto político y económico en que se
11
desarrollaron en Argentina (1960 y 1970), especialmente acerca
del movimiento de los Montoneros, a partir de un cruce
comparativo entre los discursos producidos en el seno de la
guerrilla y los demás discursos sociales y políticos que
circulaban en la sociedad de aquella época. La autora se
cuestiona si era real o ficticia la necesidad de encarar una
lucha armada como camino de liberación nacional, atiende los
discursos de las notas y artículos periodísticos, los
comunicados de prensa y testimonios orales de guerrilleros.
Del discurso de la guerrilla, Ollier destaca la utilización de
la violencia como un medio legitimado y efectivo para producir
cambios de importancia en la sociedad; además existe la
necesidad y urgencia de encarar la lucha armada, ya que los
partidos políticos y las organizaciones de la sociedad civiliNotas? “La Comisión de Verdad y Justicia se constituye como consecuencia de la voluntaddel pueblo paraguayo manifestada con la petición de la sociedad civil al ParlamentoNacional, agrupados en la Mesa de la Memoria y archivos de la represión, cuandocayó la dictadura de Stroessner y se concretó con el acuerdo del ParlamentoNacional y del Poder Ejecutivo, que derivó en la sanción de la Ley 2225/03… (DichaComisión) buscó establecer en forma oficial la verdad y la justicia histórica sobrelos hechos de violación de los derechos humanos ocurridos Paraguay, básicamentedurante la dictadura stronista (1954-1989)”. (http://www.derechoshumanos.net/lesahumanidad/informes/paraguay/Informe_Comision_Verdad_y_Justicia_Paraguay_Conclusiones_y_Recomendaciones.htm). Lareferencia a este texto debe figurar en la bibliografíaii Se crearon el Colegio Superior de Guerra, el Instituto de Bienestar Rural (IBR) yla Secretaría Técnica de Planificación.iii Algunos autores afirman que estas características dar lugar a calificar alsistema stronista, siguiendo a Max Weber, como “patrimonialista”. Cf. RIQUELME,Marcial. Hacia la transición a la democracia en el Paraguay. Fundación Naumann. EditorialHistórica. Asunción. 1989. Págs. 11 y 12 La referencia a este texto debe figurar en labibliografía
iv Cf. BLANCH, José. (coord.). El precio de la paz. CEPAG. Asunción Paraguay. 1991, pág.39; AAVV. Anive haguä oiko. Informe Final. Comisión de Verdad y Justicia. Capítulo I:“Conclusiones y Recomendaciones”. Asunción. 2008 La referencia a este texto debe figurar en labibliografía
12
son recursos ineficaces.v Al decir de la autora, estamos frente
al ejercicio de una violencia legitimada que, según sus
estudios, se corresponde con los sucesos que anteceden al
“Cordobazo” en la Argentina.
En el caso del Paraguay, el discurso de la guerrilla reconoce
la necesidad de producir cambios profundos en el país e
inscribe un espacio de debate hacia el interior de los
partidos opositores (febrerista -el bloque de izquierda- y
comunista). Es significativo que los exiliados que residían en
la Argentina, afiliados a estos partidos, también se
organizaron en distintos movimientos con la idea de encarar
la lucha armada. La formación de estas agrupaciones estaba
impulsada por los acontecimientos que se desarrollaban en
Cuba, con la esperanza de una liberación continental.
Desde el contexto internacional, este hecho recibió la
influencia de la Revolución Cubana que incentivó en el país la
propagación de los ideales libertarios y su concreción por
medio de las armas. Para los rebeldes que habían tomado las
armas en resistencia a la dictadura de Stroessner, ésta era la
única salida posible para lograr la liberación del pueblo y la
instauración de régimen democrático, con plenas libertades
políticas. Además, las experiencias de protestas y
manifestaciones de diversos sectores sociales (obreros,
v “… ¿por qué insistir en la inclusión de la violencia armada dentro de la cultura política, su campo y su trama? Porque, entre otras cosas, se trata del contexto de interacción en el cual la juventud aprendió el significado de hacer política”. (Ollier. 2005: 22).
13
campesinos, estudiantes universitarios, docentes, etc.), que
representan formas de “luchas sociales”, han contribuido como
un factor más en el surgimiento de las guerrillas paraguayas
formadas en el exilio, específicamente, para fundamentar y
conectar el discurso de la guerrilla con el de la justicia
social.
Asimismo, la práctica de acción guerrillera aparece como
legítima en el testimonio de los sujetos participantes,
quienes fundamentan su accionar como la “lucha del pueblo”, la
“liberación nacional” y la “defensa de los derechos
constitucionales”. En las memorias individuales este accionar
aflora reiteradamente como la representación del pasado lleno
de significados reivindicativos de sus prácticas.vi A fin de
recuperar esas memorias hemos realizado entrevistas a miembros
del partido comunista paraguayo: Ananías Maidana, Luis
Casabianca, Ahissa Céspedes, Ramón Paiva, Félix Sandoval y
Félix Rodríguez, entre otrosvii. También accedimos a las
entrevistas realizadas por la Comisión de Verdad y Justicia de
Paraguay a comunistas, febreristas y liberales, que dan cuenta
de las mismas ideas sobre la lucha armada en la época
estudiada.
vi Cf. CASABIANCA, C. Enfoques Polémicos. Capítulo: “Miguel Ángel Soler, héroecomunista caído en combate”. Ed. Arandurá. Asunción. 2005; VENTRE BUZARQUIS. J.Prisión, torturas y fuga. Asunción. 2007. Págs. 21-24 La referencia a este texto debe figuraren la bibliografía
vii Las entrevistas se realizaron entre los años 2006 y 2010.14
Sabemos que se formaron dos grupos de exiliados paraguayos
residentes en Buenos Aires: el Movimiento 14 de Mayo para la
liberación nacional y el Frente Unido de Liberación Nacional
(FULNA), los cuales fueron foco de resistencia armada
antistronista. Según Arellano (2005), el primero estaba
integrado por paraguayos exiliados miembros del partido
febrerista, principalmente argentinos y algunos colaboradores
del coloradismo disidente. El segundo, según varios autoresviii,
era la rama militar del partido comunista. Sin embargo, los
fulnistas se niegan a afirmar que ésta era una agrupación
formada desde el Partido Comunista, sino que estaba abierto a
todos los partidos y que en él se encontraban febreristas,
liberales, colorados disidentes e inclusive los que no
pertenecían a ningún partido. Este último punto amerita
aclaración. Frente a los acontecimientos que sucedían en el
país, los dirigentes del Partido Comunista realizaban un
llamado a la población paraguaya a manifestarse por medio de
las armas en contra de la dictadura stronista, ya que se
consideraba que la única forma posible de participación
política era a través de la lucha armada.
Entretanto, a mediados de 1958, ya comenzaron a circular
comunicados del PC llamando a los camaradas a colaborar con
estos grupos que se estaban preparando para ingresar al país y
enfrentar con las armas al gobierno stronista. Y, desde elviii Cf. MIRANDA, Aníbal. La lucha armada en Paraguay. 1ª parte. Miranda & Asociados.Asunción. 1989; ARELLANO, Diana. Movimiento 14 de Mayo para la liberación. UniversidadNacional de Misiones. 2008. Lachi, Marcelo (compilador). Insurgentes. La resistencia armadaa la dictadura de Stroessner. Arandurá. 2004 La referencia a este texto debe figurar en la bibliografía
15
exilio en Buenos Aires, algunos paraguayos comunistas
organizaron en 1959, un movimiento armado denominado Frente
Unido de Liberación Nacional (FULNA) con el fin de derrocar al
gobierno de Stroessner, basados en la ideología foquistaix,
heredada de la revolución cubana. Según uno de los
entrevistados, Luis Casabianca, fundador del FULNA y del
Partido Comunista, fue enviado a Asunción junto a su esposa
para organizar el modo en que se iba a desarrollar la
guerrilla en el Paraguay. Entonces, elaboraron un plan,
plantearon un programa de acción, definieron el grupo que va a
dirigir la acción armada, reunieron recursos económicos para
comprar armas y articularon la colaboración de los partidos
políticos paraguayos y de organizaciones internacionales.
Según la planificación, el movimiento comenzaría con la
incursión clandestina de una columna de guerrilleros desde
Argentina que se uniría a las columnas formadas en varias
ciudades y en sitios de zonas selváticas con el objetivo de
enfrentarse directamente con las fuerzas policiales y el
ejércitox y destituir al régimen. En este grupo armado
participó Félix Rodríguez desde Villarrica, cumpliendo roles
de contactador, lo cual constituyó un engranaje más en suix El foquismo es una teoría de la lucha armada que propone la instalación de"focos" de rebelión (pequeños grupos de combate), para dividir las fuerzasadversarias, que deberían ser hostilizadas de manera sistemática, sin caer en unenfrentamiento directo con fuerzas regulares. Se aplicó exitosamente en lasexperiencias cubana y vietnamita, y frustradamente en Bolivia y algunos paísesafricanos. Su desarrollo doctrinario más acabado lo realizó Ernesto "Che" Guevara,por lo que la teoría se conoce también como "guevarismo". Su aplicación esesencialmente rural; implica encontrar terrenos geográficos bien protegidos, quepermitan golpear al adversario y replegarse con seguridad. (CÉSPEDES, R. PAREDES,R. 2006: 23) ¿Es cita o sólo una alusión al texto? En el primer caso, debe ir entre comillas
16
militancia dentro del Partido Comunista. En la organización de
estos movimientos armados también participaron exiliados de
otros partidos de oposición y colorados disidentes.
En un comienzo el FULNA promovió la preparación de las masas
para la lucha armada, específicamente del sector del
campesinado, y por ello, algunos de sus integrantes fueron a
Cuba, Rusia y China para recibir entrenamiento militar e
instrucción ideológica acerca de la guerra de guerrillasxi.
Esperaban una victoria a corto plazo y con apoyo externo. Sin
embargo, después de la caída en combate del líder guerrillero
“Agapito Valiente” en la columna Ytororó (julio de 1960), el
partido comunista se avocó a la captación y formación de
nuevos adeptos al partido a través de la propaganda política y
la instalación de comités de lucha campesinos a fin de generar
cambios en la sociedad a largo. (Céspedes, R. y Paredes, R.
2004)
Del foquismo se pasó a la estrategia de la guerra popular
prolongada (propia del comunismo chino). Según los autores
x MIRANDA, Aníbal. La lucha armada en Paraguay. 1ª parte. Miranda & Asociados. Asunción.1989; ARELLANO, Diana. Movimiento 14 de Mayo para la liberación. Universidad Nacional deMisiones. 2008. Lachi, Marcelo (compilador). Insurgentes. La resistencia armada a la dictadurade Stroessner. Asunción, Arandurá, 2004. La referencia a este texto debe figurar en la bibliografía
xi “Estamos convencidos de que en la hora actual, debemos dejar de lado las cuestiones que nos separan yformar una gran fuerza cívica capaz de abatir la dictadura. Para ello es preciso que los hombres y mujeres denuestro pueblo, sin perjuicio de su fidelidad y militancia partidaria, impulsen una potente movilización civilconjunta, con participación directa de liberales, febreristas, comunistas, colorados democráticos, católicos ojocistas (J.O.C.)”. (Proclama del FULNA al Pueblo Paraguayo, febrero de 1959.Cita de Moraesy Colmán.http://www.corredordelasideas.org/docs/ix_encuentro/ceres_moraes_evaristo_colman.pdf.). La referencia a este texto debe figurar en la bibliografía
17
consultados, estas dos estrategias se combinaron erróneamente,
lo cual entorpeció la acción guerrillera centrada en la zona
de las cordilleras del Ybuturuzú. Los mismos guerrilleros
tuvieron dificultades de comunicación y disidencias entre el
brazo político y el brazo militar respecto a restricciones
logísticas, el desencadenamiento de luchas internas y el
accionar de infiltrados de las fuerzas de seguridad
paraguayas, hechos y acciones que condujeron a un
debilitamiento de la guerrilla hasta prácticamente su
desaparición en 1965. (Duré Venegas, V; Silva, A. 2007).
La participación de Félix en el FULNA Mediante el enfoque de “historia de vida focal o temática”
(Aceves Lozano, 1999) hemos retomado la trayectoria política
que tuvo Félix y su participación en este proceso, y podemos
expresar lo que nos relató en varias entrevistas. Manifestó la
forma en que comenzó a organizarse el grupo del FULNA en la
ciudad de Villarrica, cuáles fueron sus objetivos, quiénes
integraban y cuáles fueron las acciones concretas que
realizaron en este contexto de particulares características.
Estamos así ante la presencia de una red socialxii tendida e
integrada por Félix, diferente a la del PCP ya que tenía otros
intereses y otros fines; la de encabezar un golpe armado para
terminar con la dictadura stronista.
xii A través de las interconexiones ramificadas (ya sean dentro de organizaciones burocráticas tales como laempresa, el sindicato u otras), los individuos se integran a la sociedad. Primero, por medio de los vínculos entreel individuo y su red personal, y, después, a través de las subculturas particulares en las que se ve integrado, y asíen la sociedad en su conjunto.” (Requena Santos, F., 1994: 33).
18
“Bueno, FULNA se crea entonces por una necesidad política, por una
necesidad económica, por una necesidad cultural, y aparecen los
chicos exigiendo mejores profesores, los chicos estudiantes…”
(Félix Rodríguez. Posadas. Audio 1, 2008).
Félix tenía conocimiento de los acontecimientos que sucedían
en el exterior, sobre todo estaba al tanto de la revolución
social que se estaba produciendo en Cuba y expresaba que la
revuelta de tal magnitud había incentivado la formación de
grupos armados en toda Latinoamérica. En el Paraguay, se había
instalado en la sociedad la idea de que el cambio era posible.
“Lo que me entusiasmó realmente la juventud paraguaya de la época
de la tiranía, fue la liberación de Cuba. Aparece la revolución cubana
y un gran aliciente una gran esperanza, indudablemente que hubo
muchos simpatizantes, un movimiento que se liberó de muchos
dictadores arbitrales así como Batista, Stroessner, Morínigo. Y
aparecieron los movimientos de liberación como en Argentina, Chile,
Paraguay, Uruguay, y parte del Brasil, y así. No el sistema pero sí el
carácter de gobierno a veces muy arbitrario, muy dictatorial,
reprimiendo libertades elementales, ese es.” (Félix Rodríguez.
Audio 5, 2008).
A través del Partido Comunista se informaba que los exiliados,
desde Argentina, estaban entrenándose en tácticas de guerrilla
para derrocar al gobierno de Stroessner y que había
organizaciones que resistían y eran duramente reprimidas
dentro del país. Sin embargo, la persecución no fue un
limitante para la participación de Félix en el FULNA. Las
19
razones que él expone al respecto es que al momento de
prepararse para la lucha armada ya tenía una formación
ideológica y una conciencia política, derivada de su
experiencia de vida y de las lecturas obtenidas en su
formación educativa fuera y dentro del PCP, lo cual le ayudó
a comprender la necesidad de rebelarse contra el orden
instituido.
La participación en el FULNA por parte de Félix es la síntesis
y la culminación de un proceso de formación ideológica e
identitaria, que se gestó desde su adolescencia y juventud. La
agrupación guerrillera se convirtió en el canal para expresar
la inconformidad y los reclamos -primero individuales, luego
sociales- que él tenía hacia el régimen autoritario. Según la
teoría marxista, la participación en el FULNA constituyó la
praxis que llevó a Félix a buscar superar las condiciones
materiales de su existencia.
“Te doy un ejemplo de cómo, por primera vez de la oligarquía, entre
colorados y liberales, igual aquí entre radicales y otros, demócratas,
liberales de la antigua organizaciones burguesas, latifundistas, los
ricos por un lado, los dueño de estancia por otro, los dueños de tierra
por otro lado, y los campesinos abandonados en su miseria,
nadando. Y los empleados, los explotados, también, era una cuestión
de organizarse. Era prohibido organizarse. Y así, una serie de cosas
se fueron acumulando, y aparece el FULNA. Frente Unido de
Liberación Nacional, apoyándose en el mensaje del sacerdote éste,
revolucionario, progresista, muy humanista, y asimilamos, y
llegamos a unirnos, y leer el mensaje del sacerdote éste. Y estaba en20
la conciencia de cada joven de que era necesario agruparnos”.
(Félix Rodríguez. Posadas. Audio 5. 2008).
En 1958 el hermano de su esposa, heredero de una joyería-
platería familiar en la ciudad de Villarrica, le ofreció a
Félix trabajar en el negocio en la atención al público. Él se
encontraba en Encarnación con su familia y volvió a Villarrica
para trabajar en la Joyería “Bogado”.
“… Después de nuevo, estando yo aquí de nuevo al Paraguay. Voy
como legalizándome, muy legalmente ¿no? Voy y mi cuñado me dice
‘Te propongo la joyería de Villarrica para encargado de todos mis
bienes, yo voy a Asunción’. Bueno y tenía así como tres o cuatro
bienes, propiedades, todos quedaban a mi nombre. La joyería a mi
nombre. Y la joyería se convirtió en un comité del FULNA.” (Félix
Rodríguez. Posadas. Audio 1. 2009).
En 1959, comenzó a organizar reuniones clandestinas en dicho
local con estudiantes secundarios (compañeros de sus dos hijos
mayores, Jorge y Félix, apodado Ngy, que significa petiso o
corto), para leer literatura marxista, diarios y revistas de
actualidad, política nacional e internacional e intercambiar
información con los correligionarios del partido sobre los
movimientos de resistencia armada que se encontraban en
formación desde Buenos Aires.
Como puede leerse hasta aquí, para Félix era muy importante
la lectura de libros que ayuden a la formación y toma de
21
conciencia política de los miembros del FULNA. Entre ellos
había adolescentes que no tenían experiencia militante en
partidos y otros eran profesionales, militares y obreros que
habían participado de movimientos y organizaciones juveniles.
Al respecto, Pablo Pozzi (2007) analiza la conciencia política
en los testimonios de los obreros argentinos que participaron
de huelgas durante la última dictadura, distinguiendo
diferencias según las clases sociales, reconociendo la
importancia de la educación (formal y popular) en la
politización de las acciones. Sostiene que la formación
mediante la lectura permitía a los militantes de extracción
social baja reconocer la violencia de la que eran víctimas y
organizarse en sindicatos para responder a la misma
desnaturalizándola y marcando una continuidad entre sus
creencias anteriores y las nuevas; mientras que para los
sectores medios representaba una ruptura con la forma de ver
la realidad circundante. En el caso paraguayo, los miembros de
partidos políticos opositores al régimen stronista propiciaron
la lectura de textos teóricos y periodísticos que, enlazada
con sus experiencias de vida (desempleo, exilio, persecución,
pobreza), reforzaba las razones de la necesidad de reunirse y
luchar por sus ideales revolucionarios. Es decir, que las
reuniones de los grupos de resistencia armada fueron resultado
cultura política, iniciada en el seno del partido, capaz de
generar acciones concretas para terminar con el régimen
instaurado por Stroessner.
22
Así, Félix relataba que en la joyería Bogado los “camaradas”
leían periódicos que conseguían de contrabando, noticias
internacionales de los que sucedía en Cuba, en China, en
Europa y en los países limítrofes. También leían y reproducían
los comunicados y el periódico “Adelante” del Partido
Comunista. Asimismo, tenían un mimeógrafo para imprimir
folletos y repartir a la población. En las reuniones
escuchaban los mensajes de Fidel Castro en la radio “La Voz de
La Habana” e intercambiaban ideas sobre la guerrilla y sobre
los últimos sucesos del país.
Podemos observar que las actividades del frente desde la
Argentina se intensificaban de acuerdo a los acontecimientos
internacionales y nacionales. Aníbal Miranda (Miranda, A.1989)
advierte que para 1959 y 1960 son numerosos los comunicados
del FULNA al Partido Comunista y viceversa, para ejecutar las
instrucciones para entrar clandestinamente a través de la
ciudad de Clorinda (Formosa) al Paraguay. Además, los diarios
de la época anunciaban que los intentos de entrada al país de
guerrilleros en la frontera eran desbaratados por los
militares antes de que llegaran a Asunción.
Las reuniones en la joyería Bogado comenzaron a principios de
1960, cuando ya habían tomado el poder los guerrilleros
revolucionaros en Cuba. Este contexto internacional favorable
a la revolución incentivó a que el grupo del FULNA en
Villarrica ideara y planificara el golpe de Estado mediante el
uso de las armas. Para ello tuvieron que prepararse con23
tácticas militares de manera clandestina, a fin de propiciar
un golpe certero al régimen de Stroessner. El grupo creía
contar la ayuda y el apoyo en armamentos y hombres del frente
en otras ciudades del país, de los exiliados en Argentina,
incluso del gobierno de la URSS, que prometía enviar refuerzos
una vez que se tomara el poder. (Miranda, 1989).
Igualmente cabe destacar que en el grupo fulnista de
Villarrica participaban varios estudiantes secundarios, lo
cual nos invita reconocer que el tipo de actividades que se
decidían eran típicamente estudiantiles, tales como repartir
folletos, pintar paredes o pasacalles, repartir periódicos del
PCP, leer y debatir bibliografía de izquierda, antes de
encarar la lucha armada. Empero, lo novedoso es que estas
actividades no sólo las idean y realizan jóvenes sino también
adultos, en su mayoría varones, y con profesiones definidas, a
diferencia de otros grupos guerrilleros de países del Cono
Sur, como Argentina, en los cuales las actividades encaminadas
terminaron siendo una experiencia netamente juvenil. (Ollier,
M. 2005).
Una vez planificada y organizada la acción guerrillera, dentro
del FULNA se les había encomendado una tarea específica a los
dos hijos de Félix. Debían conseguir armamentos, abrigos y
alimentos para los guerrilleros que se prepararían
militarmente en un campo del cerro Ybyturuzú. Félix refería
que en una ocasión, uno de sus hijos -Ngy- entró a la casa de
un sacerdote para arrebatarle una chaqueta de un ex24
combatiente de la guerra del Chaco, la cual serviría para los
guerrilleros del FULNA. El episodio se produjo cuando Ngy
llegó a la casa, se escondió para no ser descubierto, pero por
los ruidos el sacerdote salió a ver quién estaba afuera. Ante
el susto, el joven tiró la bicicleta de éste en el pozo de
agua del patio de la casa, recogió el abrigo y salió
corriendo. Cuando Félix recordaba esta anécdota del FULNA, lo
hacía con simpatía y con cierto orgullo por el accionar de su
hijo, quien siendo adolescente, arriesgaba su vida por
conseguir los materiales para la guerrilla, como un verdadero
“revolucionario”. “Y Ngy, chiquitito, doce años tenía, pero era miembro ya del FULNA, y
necesitaba colchones, abrigos. El sacerdote éste ocupó la capa de los
ex combatientes… ése agarró y corrió, para los soldados del FULNA,
los guerrilleros del FULNA. La bicicleta tiró, tiró en el pozo. Entre
buscar y buscar se fue, no tenía que ser conocido porque tenía que
ser clandestino (…) ¡El chiquilín tenía doce años! Se reúnen los chicos
del Colegio Nacional, de la escuela Normal, y se lee el mensaje del
sacerdote éste, y les gustó, empezaron a organizarse. Recoger toda la
ropa para los soldados, para los guerrilleros, que tenían que llevar
en el cerro… Yvytyrysu. (Félix Rodríguez. Posadas. Audio
2. 2008).
El hijo de Félix -a quien entrevistamos- era el encargado de
llevar panfletos y folletines del FULNA a una zapatería en
Villarrica y a las casas de algunos miembros del Partido
Comunista de la ciudad. Ngy cumplía la función de “mensajero”,
ya que sus movimientos no despertaban las sospechas
policiales, debido a su corta edad. 25
“…Mi padre me daba carteras de cuero llenos periódicos del partido
comunista paraguayo (…) folletines o folletos del Frente Unido de
Liberación Nacional, FULNA. Eso tenía que ir y llevar a otra casa…
(Félix Rodríguez (h). Posadas. Audio 1. 2010)
Según las palabras de Félix, el incentivo para reunirse y
comenzar un grupo de resistencia fueron los escritos de un
sacerdote de apellido Talavera, a quien alude Aníbal Miranda
en su libro (Miranda, A., 1989). Desde el exilio en Argentina,
llamaba al pueblo paraguayo a unirse y luchar en contra de la
tiranía de Stroessner. Las primeras reuniones fueron a
comienzos de 1959 en el primer piso de la joyería, donde
asistía un grupo de estudiantes secundarios, compañeros de la
escuela Normal de los dos hijos mayores de Félix (Jorge y
Félix) entre los que menciona a Claudio Alfonso Ramírez
Acosta, Antonio Alonso Ramírez, José Chilavert y Efraín
Ibáñez, y otros varones profesionales (maestros, abogados y
comerciantes) militantes del febrerismo y del Partido Liberal.
“... llevábamos la idea anti dictatorial, contra la tiranía, contra las
represiones, por la liberación, por las garantías constitucionales…al
ciudadano, al niño, a las mujeres trabajadoras, a los estudiantes,
falta absoluta de garantías. Entonces había necesidad de formar a
toda aquella gente. Toda aquella gente estaba deseosa de
organizarse para rescatar la libertad, las garantías constitucionales.
Y había milicos, había sacerdotes inclusive, había maestros, que
estaban de acuerdo. Moralmente apoyaban, no en presencia física de
ellos, sino mandaban a la juventud que tenían cierta libertad de ir y
26
venir… queríamos contribuciones para la alimentación de los
soldados, pedíamos a los comerciantes antifascistas,
antidictatoriales y a los que querían colaborar con especias o con
dinero, o nos prestaban el local por una hora… una hora para decir
lo que tenés que decir muy prudentemente. Hacer la revolución
armada es lo más difícil, nosotros hicimos”. (Félix Rodríguez.
Posadas, Audio 2. 2008).
Los objetivos de dichas reuniones era prepararse ideológica y
militarmente para enfrentar a la policía de Stroessner, junto
con los demás grupos clandestinos que se formaron en el país,
a fin de provocar la caída del gobierno.
Traduciendo los “no-dichos”
En ninguna de las entrevistas que realizamos Félix (padre)
dijo los nombres de sus compañeros del FULNA. Pensamos que
este silenciamiento y negación respecto de los integrantes
podría deberse al temor como consecuencia de la gran represión
que sufrió durante varios años. Sin embargo, pudimos rescatar
algunas identidades de las entrevistas que realizamos a los
hijos y nietos de Félix, las entrevistas realizadas por el
CEDAPPAxiii y la Comisión de Verdad y Justicia del Paraguay. A
través de estas últimas, pudimos cotejar con otros datos que
Félix no llegó a contarnos y que sirvieron para conocer
detalles sobre su militancia en Paraguay y en Argentina. Es
oportuno decir que en otras ocasiones, frente a los
entrevistadores de la Comisión de Verdad y Justicia, llegó a
negar vinculación con uno de los compañeros del FULNA, Antonio
27
Alonso Ramírez, diciendo que éste en realidad era compañero de
trabajo de su esposa, Casilda. No obstante, uno de sus hijos,
Félix, afirmó en una entrevista que esa misma persona visitaba
frecuentemente su casa en Villarrica, a principios de 1960.
“… Alonso Ramírez, no recuerdo si era compañero de Casilda, pero sí
que era maestro, camarada comunista. Estuvo en China y en Rusia y
nos comentaba eso, hablaba con una parsimonia de expositor, como
doctorado en alguna materia. Así, sabiendo bien lo que decía,
preparado, muy equilibrado, muy armonizado, tranquilo, calmo,
pensando todas las palabras. Sí, yo tengo los mejores recuerdos.
Lógicamente apareció un día en casa y después se fue sin decir
“hasta luego”. Porque la cosa era así, a veces nadie tenía que
enterarse de que se iba, ni de que estaba, entonces se obviaba todas
esas cuestiones formales… esto sería allá a principios de los 60”.
(Félix Rodríguez (h). Posadas. Audio 1. 2010).
Michael Pollak advierte que hay en los recuerdos zonas de
sombras, silencios, “no–dichos”. Las fronteras entre esos
silencios y “no-dichos” y el olvido definitivo y lo reprimido
inconsciente no son compartimentos estancos, están en perpetuo
dislocamiento. Esa tipología de discursos, silencios, y
también alusiones y metáforas, es moldeada por la angustia de
no encontrar una escucha, de ser castigado por aquello que se
dice o, al menos, exponerse a malentendidos. La memoria no es
total sino selectiva, ya que la persona recuerda y expone
aquellos acontecimientos que evalúa como importantes o
xiii La sigla hace alusión al Centro de Estudios, Documentación y Archivo del PuebloParaguayo en Argentina, dirigido por la Mgter. Diana Arellano, perteneciente alProyecto de Investigación HANUIN dirigido por el Dr. Abínzano (2006-2013).
28
válidos, de acuerdo al contexto en que se encuadra su relato y
al entrevistador (Pollak, M. 2006). Al respecto, Markowski
sostiene que los estados de memoria llevan la huella del
olvido y están densamente poblados de silencios estratégicos,
de usos del olvido y luchas de reconocimiento y legitimación
(Markowski. 2002). Por su parte, respecto de los silencios,
Jelin afirma que en el testimonio traumático se produce una
narrativa subjetivada en la que los silencios son expresiones
de experiencias dolorosas y una forma de “contar la verdad”
(Jelin, E., 2002).
En todo momento la consigna fue mantenerse en la
clandestinidad, no darse a conocer públicamente, entonces los
que participaban de las reuniones se cuidaban entre sí para no
ser denunciados por los vecinos. Además, tenían el peligro de
la existencia de los pyragüé, que eran ciudadanos colorados
infiltrados en las reuniones y actividades prohibidas y luego
los denunciaban en las comisarias. La actuación de estos
sujetos hacía efectiva y eficiente la persecución a quienes
conspiraban contra el gobierno o eran sospechosos de hacerlo.
En efecto, por medio de sus espías podían enterarse quienes
tramaban acciones ilegales, cuándo, dónde y cómo lo harían, y
apresarlos antes que produjeran un golpe. Así otorgaba al
régimen una apariencia de omnipresencia, que todo lo sabía y
estaba en todo lugar.
“… el local quedaba a dos cuadras de la comisaría. Los policías
pasaban y ya echaban el ojo… ya se daban cuenta. A mí me avisó un
29
vecino: ‘tené en cuenta que te están vigilando’. Y por eso establecimos
horario y día de reunión en la platería. Pero el régimen dictatorial
tenía alcahuetes, los pyragüe…”. (Félix Rodríguez. Posadas.
Audio 1. 2008).
Pese a los años que transcurrieron desde su actuación en la
guerrilla del FULNA, Félix siguió guardando silencio u
ocultando datos a los entrevistadores, incluso a los de la
Comisión de Verdad y Justicia, generando confusión de hechos o
personas, lo cual dificulta la reconstrucción de un relato
coherente de su participación.Entrevistador: “¿Usted desempeñaba algún cargo dentro de la
célula del FULNA en Villarrica?
Félix: No recuerdo ahora.-¿Y vos formabas parte?-Sí, con los
jóvenes y otros para la formación esa. Después otros dirigieron eso,
no recuerdo bien a qué se debe eso, si ya el partido o quien… porque
vino el desbarajuste antes de nada… Enseguida cayeron los del
FULNA, una emboscada, cincuenta y dos miembros fue la columna
del FULNA, fueron asesinados casi todos, cayeron en una emboscada
y todos murieron… Dos solamente se salvaron, Aguilera y el otro no
me acuerdo cómo se llamaba, que después volvieron, se escaparon y
vinieron a la Argentina. El partido los preparó, después fueron
tomados presos y los asesinaron. De manera que no hay
sobrevivientes de la columna Ytororó del FULNA. Todos fueron
asesinados”. (Félix Rodríguez. CVJ. Posadas. Audio 1.
2006).
En el corazón de este fragmento de entrevista podemos observar
que Félix elude toda posibilidad de identificación certera de
30
las actividades armadas del FULNA, aunque él mismo afirma ser
parte de esta organización en todas las entrevistas que le
hemos realizado y la brindada a la CVJ. Entretanto, percibimos
que cuanto más específicas eran las preguntas del
entrevistador, más esquivas y ambivalentes eran sus
respuestas. Cabe utilizar la categoría de análisis denominada
ñembotagu`y, expresión popular en la cultura paraguaya que
significa “hacerse el tonto” o no entender con claridad la
pregunta realizada, o también, simular no saber la información
requerida Este tipo de actitud es tan frecuente que puede ser
identificada rápidamente por los paraguayos y argentinos que
viven en las zonas fronterizas, se activa cuando el
interrogado ve comprometida su reputación, su posición social,
económica o política, o se ve amenazado de algún modo frente
al que pregunta.
En este sentido, interpretamos que el silencio en ciertas
respuestas del entrevistado resulta de su percepción de que la
información solicitada es importante para el investigador, sin
embrago nunca trasmitió todo lo que sabía, parte de los datos
quedó salvaguardada, respondiendo a los códigos propios del
partido. (Se sugiere aclarar al respecto)
Según Pollak, las memorias en confrontación no necesariamente
coinciden entre sí, por ello los grupos o asociaciones han
hecho una selección u ocultamiento de aquella información que
no reproduce la imagen que se quiere transmitir a través de
sus memorias oficiales. La frontera entre la verdad y la
31
mentira se vuelve brumosa. Y más permeable de lo que
pensábamos. (Pollak. 2006).
Resulta interesante repensar cuáles son las razones por las
cuales se produce este silenciamiento. Conjeturamos desde una
visión psicológica, que frente a situaciones de extrema
violencia y peligro de muerte, quedan en el individuo secuelas
de esos hechos, generando traumas que determinan su conducta
(pesadillas, desconfianza a desconocidos, agresividad, etc.) y
que puede suavizarse si el individuo recibe un tratamiento
psicológico que repare ese trauma. (Pollak, 2004; Beristain,
2009; Jelin, 2002). Si lo observamos desde el enfoque de la
Historia, el proceso de represión y persecución vivido en el
Paraguay -desde Morínigo hasta Stroessner- generó miedo en el
conjunto de la sociedad provocando actitudes solapadas y
comportamientos clandestinos aún en situaciones irrelevantes.
Existían además algunos sectores de la sociedad vinculados a
la dictadura que, para congraciarse con el poder, ejercían una
sanción informal hacia aquellos identificados como
“comunistas” o “guerrilleros”, ambos términos utilizados con
una connotación negativa que pesaba no sólo sobre las personas
que efectivamente participaban de acciones de resistencia a la
dictadura sino también sobre su entorno más cercano,
familiares y amigos, quienes eran afectados gravemente por las
denuncias -en su mayoría anónimas-.
32
El grupo del FULNA en Villarrica, departamento de Guairá,
según lo explica Aníbal Miranda (1989) y otros autores,
pertenecía a la columna del Guairá, comandada por Antonio
Alonso Ramírez; la otra columna, llamada “Ytororó” era del
grupo “Mariscal López”, en el pueblo Eusebio Ayala,
departamento de Cordillera, comandada por “Agapito Valiente”.
El objetivo de la acción armada era que las dos columnas de
guerrilleros lleguen a juntarse y marchar en dirección a
Asunción para sitiar la ciudad. Una y otra estarían
integradas, además, por los miembros del FULNA exiliados en
Argentina, que entraría clandestinamente por la ciudad
fronteriza de Clorinda (Argentina).
Según Félix, en esas reuniones se organizó la lucha armada
contra el gobierno de Stroessner con la metodología de
guerrilla foquista rural utilizada por los grupos
revolucionarios de América Latina. La acción consistió en ir
al cerro del Ybyturuzú, en las afueras de Villarrica, y desde
allí atacar a la policía y desestabilizar al régimen junto con
otros grupos que se levantarían en otras ciudades.
“…Entonces se levantó todo el comité de Villarrica,… ir al cerro…
Ybyturuzú. Teníamos que ir ahí y fuimos. Era mejor defensa en grupo
que estar en casa, por la retaguardia, no tenés ninguna defensa. Sin
embargo en el grupo ya tenés una defensa. Fuimos. Estaba ahí un
liberal, un febrerista. Entonces Ramírez Acosta quedó en Villarrica.
Chilavert y otro se llevó la guerrilla de Lenin, “La guerra de guerrilla”
para leer allá. Unas condiciones muy serias. Nos reunirnos en un
33
mismo lugar, era una de las condiciones. No hacer fuego, como dos o
tres vigilancias así…”. (Félix Rodríguez. CVJ. Posadas.
Audio 1. 2006).
Félix estaba al tanto de los peligros que implicaba la lucha
armada, tomó la decisión de ir al cerro a practicar el golpe
que darían al régimen dictatorial. Ésta es una de las
características particulares de la lucha armada en Paraguay
que se diferencia del caso argentino. Fue una experiencia de
adultos, no de jóvenes solamente e involucró a familias
enteras que debieron exiliarse aunque no tuvieran
participación directa en los movimientos armados de la época.
El testimonio de Félix (p) se repite en incontables
testimonios de varones y mujeres que, ya habiendo formado su
familia y realizando actividades económicas para sostenerlas,
sintieron la urgencia de tomar las armas para luchar contra
el régimen.
“No fueron todos al cerro del Yvytyrysu, algunos quedaron en la
ciudad para organizar…los movimientos estudiantiles, los sindicatos,
los partidos, y bajo peligro siempre. Yo con mi señora enferma, con
una partida de criaturas, hijos míos, y era el único que estaba
trabajando, ya dejé de trabajar, y era una aventura realmente ¿no?
Una aventura sin ninguna base, otra cosa hubiera sido si te
subvenciona el gasto familiar. Pero no, no hay de eso.” (Félix
Rodríguez. Posadas. Audio 4. 2008).
Según Félix (h) las guerrillas en Paraguay estaban escasamente
preparadas; los ciudadanos que participaban de ellas no tenían34
experiencia en el uso de armas y jamás habían peleado en una
guerra, entonces la lucha armada fue una iniciativa
“descabellada” y sin ninguna posibilidad de éxito enfrentando
al poderoso aparato represivo del régimen.
El saldo final de estas prácticas políticas de Félix en el
FULNA, fue el apresamiento en la cárcel de Tacumbú (Asunción)
en el año 1960, durante seis meses. Gracias a las gestiones de
su esposa Casilda, logró salir en poco tiempo y asilarse en
Posadas junto a su familia. Luego de este episodio, doloroso y
traumático para toda su familia y para él mismoxiv, Félix vivió
exiliado en esta ciudad argentina, hasta sus últimos días de
vida, de cara a su Paraguay anhelado.
Conclusiones
Los pilares de la investigación se cimentaron desde las
nociones de memoria, poder, ideología y violencia.
La memoria: a través de los testimonios orales hemos dado a
conocer la complejidad de los procesos de memoria/olvido, ya
que encontramos profundos significados tanto en las palabras
dichas, como en las omisiones y los silencios. Precisamente
aquí radica la importancia de comunicar las experiencias de
xiv la política represiva del gobierno stronista provocó el desmembramiento de lafamilia Rodríguez. Los dos hijos mayores, participantes del FULNA, debieronesconderse en casas de familiares y amigos en Encarnación y luego exiliarse enPosadas y luego en Buenos Aires. El resto del grupo familiar tuvo que emigrar a laArgentina, sin posibilidad de retorno, ya que sus nombre figuraban en la listanegra elaborada por la policía, que tenían la entrada prohibida al país, conpeligro de ser encarcelados.
35
quienes han vivido situaciones traumáticas en el pasado, para
que sean comprendidas por la sociedad del presente y evitar el
olvido.
El poder: por un lado, Félix entendía el poder como la
capacidad de los individuos de generar cambios en la sociedad
a partir de la toma de decisiones y el ejercicio de la
ciudadanía. Y por otro, su uso por parte de los gobiernos
dictatoriales, desde el cual el poder del Estado perseguía el
beneficio propio y dejaba de lado la soberanía del pueblo.
La ideología: entendemos que los acontecimientos traumáticos
vividos, lejos de desactivar sus ideas, reforzaron un
posicionamiento político frente a la adversidad, imbuido de
ideas foráneas recreadas en el contexto particular de la
frontera.
La violencia: nos aproximamos a violencia de Estado a partir
de la experiencia de vida de Félix y, a través de ella,
intentamos comprender la opresión sufrida por el pueblo
paraguayo. En este contexto, cobran sentido los actos de
violencia que ejercieron algunos sectores de la sociedad,
concebida como la única y necesaria forma de reacción posible.
De la interrelación entre estas nociones
poder/ideología/violencia emerge la configuración de la
identidad paraguaya, la cual se entreteje de manera singular
con la historia argentina como producto de experiencias36
generadas en un espacio de frontera, con dimensiones
significativas desde el punto de vista geopolítico y cultural.
De esta manera, postulamos que la situación fronteriza ha ido
gestando una identidad argentino-paraguaya peculiar por las
luchas en común, expresadas en las vidas que se entienden y
extienden a uno y otro lado del río Paraná. Demostramos una
vez más que, más allá de los límites políticos presentes en el
imaginario social, las fronteras resignifican una
multiplicidad de relaciones y experiencias que les son
propias, sin cuya consideración, muchos procesos políticos
pasados y presentes no pueden ser comprendidos cabalmente.
Desde la perspectiva de la historia de vida, hemos trazado un
recorrido por los últimos 50 años de historia de Paraguay y
de Argentina, a partir de la historia de vida de Félix, quien
ha conformado su identidad como extranjero, exiliado,
comunista y revolucionario. Es posible señalar que el
fundamento que permite construir tales categorías identitarias
se halla en la percepción que tuvo de la violencia ejercida
por el Estado durante toda su vida. Por ello, apelamos a sus
recuerdos de los desplazamientos por la frontera.
Interpretamos que se trata de un trayecto insoslayable para
comprender el proceso de construcción del perfil del
revolucionario, tal como él mismo se reconocía.
Félix fue un hombre de su época y respondió a las mismas
circunstancias que miles de paraguayos, a quienes les ha
tocado vivir en una sociedad llena de injusticias y37
desigualdad. Como él, otros tantos decidieron participar
activamente en la construcción de una nueva realidad, generar
el cambio profundo en la sociedad, con el entusiasmo que
generaba el espíritu revolucionario de los acontecimientos que
se sucedían en el mundo. Con tales convicciones, los
ciudadanos paraguayos se lanzaron a la lucha armada por la
instauración de un régimen democrático bajo la ideología
comunista. La militancia en el PCP y luego las acciones
revolucionarias del FULNA implicaron la puesta en peligro de
la propia vida y la de sus familiares y compañeros en pos del
ideal de liberación del pueblo paraguayo.
En las entrevistas percibíamos cómo los entrevistados
recordaban con añoranza esos años de activismo, muchos creían
vivir aún en aquella época. Desilusionados del presente, no
queda más que mirar al pasado con nostalgia y al futuro con
esperanza. Esta actitud les ha permitido sobrevivir al horror
y mantenerlos con vida. Los ideales perviven en diversas
facetas de sus vidas. La presencia de Félix en las
manifestaciones de los trabajadores y estudiantes
universitarios, en los actos conmemorativos o de
reconocimiento de personas afines a sus ideales, en reuniones
de compañeros y camaradas, en actividades partidarias,
solidarias, en protestas y reclamos dan cuenta de la
pervivencia de sus convicciones de lucha por la justicia,
libertad y democracia a pesar del tiempo y las modificaciones
del contexto.
38
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Archivo de la Escuela nº 3 “Domingo Faustino Sarmiento”,
Posadas. Año 1936.
Hemeroteca de la Biblioteca Nacional de Paraguay.
Hemeroteca y Archivos orales y escritos del CEDAPPA. UNaM.
Ley 196 de Paraguay.
Museo de las Memorias. Asunción, Paraguay, periodo 1954-1989.
Fuentes oralesEntrevistas en profundidad realizadas por la tesista a:
Ahissa Céspedes: tesorera del PC Argentino, Posadas, marzo de
2010.
Ananías Maidana: dirigente del PCP. Asunción, junio de 2010.
Carlos Luis Casabianca: miembro y fundador del FULNA.
Asunción, junio 2010.41
Félix Paiva: miembro del MOPOCO, Asunción, junio de 2010.
Félix Ramón Rodríguez: miembro del PCP y el FULNA, Posadas,
desde el año 2006 hasta el año 2010.
Félix Rodríguez (h): miembro del FULNA, Posadas, noviembre de
2011.
Félix José Sandoval: miembro del PCP, Posadas, marzo de 2010.
Florencia del Socorro Rodríguez: hija de Félix Rodríguez y
Casilda Bogado. Posadas. Desde el año 2006 hasta el año 2012.
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