View
226
Download
0
Category
Preview:
DESCRIPTION
Cuento infantil Jade y el Bosque Azul, relata la historia de una pequeña niña que entra en un bosque lleno de magia y sorpresas.
Citation preview
1
Jade y el BosqueAzul
A. Morales
2
Erase una vez una pequeña niña llamada Jade, era muy
inteligente y con una nobleza que le salía del corazón.
Jade vivía en una casa al lado del bosque azul, con su
madre, Diana, y sus abuelitos, José y Lourdes, Además de
su tío Gerardo, a quien todos le decían “Güero”.
3
Jade tenía una amiga inseparable, una pequeña perrita
schnawzer plateada llamada “Coco”.
Los abuelitos de Jade le obsequiaron a coco cuando
ambas eran muy pequeñas y aunque Coco era un poquito
enojona, las dos se querían mucho y salían todas las tardes
a jugar.
Como había dicho antes Jade vivía al lado del bosque
azul, el cual debía su nombre a las innumerables mariposas
azules que habitaban en él.
4
La gente creía que esas mariposas eran hadas que
desaparecían a las personas cuando se adentraban en el
bosque al anochecer, esta creencia surgió desde hace
muchos, muchos años, cuando una niña entró en él y nunca
más se supo de ella, a pesar de las múltiples búsquedas
para rescatarla.
De esta manera surgió la leyenda del bosque azul y por
ello sus abuelitos no dejaban que se acercase al bosque
cuando comenzaba a caer la noche.
5
Una tarde, Jade caminaba con Coco cerca del bosque
azul y de pronto la perrita empezó a seguir una mariposa,
por lo que ambas entraron al bosque sin darse cuenta.
-¡No!, Coco regresa es peligroso. -Grito Jade-
Pero Coco siguió corriendo detrás de la mariposa,
hasta perderse detrás de los árboles.
-¡Coco regresa... es peligroso!
6
Después de caminar un poco, Jade al fin alcanzó a
Coco, quien seguía tratando de alcanzar la mariposa que
subió volando a la copa de un árbol enorme. Coco se puso
muy contenta al ver a Jade y juntas se dispusieron
regresar a casa.
-Ni modo Coco, ya será para otra ocasión, es hora de
regresar a casa, andando antes de que se haga más tarde.
De pronto se escuchó una tenue voz que provenía de
un árbol enorme en donde se encontraba una de las
mariposas y que ahora se veía más grande y hermosa que
antes.
-Bienvenidas a mi reino azul.
-¿Quién ha dicho eso?
-¡¡Allí arriba!!! -Exclamo Jade-
-¡Pe.. pero qué es eso!
7
Miraron hacia la copa del árbol y vieron a la mariposa
que ahora adquiría una forma más humana, pero conservaba
unas alas casi transparentes y hermosamente brillantes.
Al mismo tiempo comenzaron a llegar más mariposas
con formas humanas, pero más pequeñas que la que les
hablaba.
-¿Quién eres?.
8
-Soy Azul, reina de este lugar, y hada de este bosque. Las
mariposas que veis son mis súbditos. ¿Qué hacéis aquí?
-Nada, solo jugábamos un poco, pero ya nos vamos
-Me temo que eso es imposible, pues quien entra en este
bosque después del atardecer se convierten en una más de
mis mariposas, sin embargo les propongo un trato.
9
-Si me traen el objeto más liviano que puedan encontrar en
mi bosque las dejaré ir, pero si no lo consiguen, ambas se
convertirán en hermosas mariposas y se unirán a mi corte,
les concedo una hora.
Aunque ya era muy tarde el bosque estaba iluminado
por el destello que emanaba de las mariposas del bosque
azul; Jade y coco recorrieron el bosque sin hallar el objeto
más liviano, hasta que encontraron una pluma muy pequeña,
de pronto las hadas vertieron polvos mágicos y las llevaron
volando con la reina de la hadas.
10
-Y bien, que tenéis.
Jade apretó fuertemente la pequeña pluma en sus
manitas y después de pensarlo un poco, finalmente la soltó
detrás de su vestido, sin embargo tenía su pequeño puño
cerrado, el cual mostró a la reina.
-Aquí lo tenéis- mostrando el puño cerrado al hada.
-Pero… esto es una broma? Aquí no hay nada!
-Pues entonces no has mirado bien. Hay aire, y más ligero
que él no hay otro objeto!
-Vaya, me ha sorprendido tu ingenio, jajajaja -Rió muy
alegremente el hada ante la inteligencia de la pequeña
Jade.
11
-¡Increíble!, en mil años esta es la primera vez que me
ocurre algo parecido. Después de la alegría que me habéis
dado, merecéis iros a casa. Podéis marchad.
-Gracias, señora.
-Podéis volver cuando queráis.
Jade y coco marcharon a casa muy alegres y volvieron
en muchas ocasiones a jugar con las hadas del bosque azul.
12
¡Y colorín colorado, este cuento, se ha terminado!
FIN
Recommended