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Seguir a Jesús supone una óptica distinta de la vida, en la que la riqueza y el éxito no consisten en atesorar y triunfar, sino en compartir y servir. Mateo 6, 24-34. 8 Tiempo Ordinario –A- Autora: M.Asun Gutiérrez. Música: Mozart. Divertimento en D.

Evangelio del Domingo VIII d. a

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Page 1: Evangelio del Domingo VIII d. a

Seguir a Jesús supone una óptica distinta de la vida,en la que la riqueza y el éxito

no consisten en atesorar y triunfar,sino en compartir y servir.

Mateo 6, 24-34. 8 Tiempo Ordinario –A-Autora: M.Asun Gutiérrez.Música: Mozart. Divertimento en D.

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 Jesús habla de la verdadera felicidad en las bienaventuranzas (Mt 5,1-12), del compromiso fraterno (Mt 5,21-26);

del amor a los enemigos (Mt 5,43-48); de reconocer y dirigirse a Dios como Padre (Mt 6,5-13).

Y ahora, siguiendo el sermón de la Montaña, va al fondo: Amor y confianza absoluta en Dios...

ésta debe ser la primera preocupación de sus seguidores.

Vista desde la cima del monte de las bienaventuranzas

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Nadie puede servir a dos señores, porque aborrecerá a uno y amará al otro, o bien, se interesará por el primero y menospreciará al segundo. No se puede servir a Dios y al dinero.

Jesús sabe que la seducción del dinero hace ver la vida desde el punto de vista de ganar y acumular, sin pensar en los demás. Lo que está en juego es la fidelidad a Dios o la idolatría del dinero. Es necesario optar. Seguir a Jesús es incompatible con servir a dos amos tan opuestos como son Dios y el ídolo del dinero.

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Por eso les digo: No se inquieten por su vida, pensando qué van a comer, ni por su cuerpo, pensando con qué se van a vestir. ¿No vale acaso más la vida que la comida y el cuerpo más que el vestido?

Es una invitación a buscar lo fundamental en esta vida. A vivir de una manera más serena dando a cada cosa la importancia que tiene. Hay cosas que valen mucho más que la comida y el vestido, como la convivencia, la amistad, los "ratos perdidos" con los amigos, la capacidad de gozar de las cosas más sencillas y profundas que nos ofrecen la vida y la naturaleza.

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Miren los pájaros del cielo: ellos no siembran ni cosechan, ni acumulan en graneros, y sin embargo, el Padre que está en el cielo los alimenta. ¿No valen ustedes acaso más que ellos? ¿Quién de ustedes, por mucho que se inquiete, puede añadir un solo instante al tiempo de su vida?

Jesús me repite: no andes preocupado, no te inquietes.¿Soy libre frente al dinero y los bienes materiales?¿Qué me preocupa? ¿Qué me agobia?Se trata de no centrarme solo en mis cosas para ser libre y poder

estar pendiente de las necesidades de los demás.

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¿Y por qué se inquietan por el vestido? Miren los lirios del campo, cómo van creciendo sin fatigarse ni tejer. Yo les aseguro que ni Salomón, en el

esplendor de su gloria, se vistió como uno de ellos. Si Dios viste así la hierba de los campos, que hoy existe y mañana será echada al fuego, ¡cuánto más

hará por ustedes, hombres de poca fe!

Jesús está convencido de que la felicidad no depende de los bienes materiales. El deseo de acumular posesiones y privilegios esclaviza, aleja del amor generoso y gratuito del Padre y rompe la solidaridad entre los hermanos. Jesús nos asegura que la codicia, la ansiedad, la ambición, el agobio, la prepotencia, el afán de poder no es el camino a la felicidad. Lo que hace feliz al ser humano es el respeto a sí mismo y a los demás, practicar la generosidad, la bondad, el amor..., poniendo la fe y la confianza en sus manos. Solo el amor es digno de fe.

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Jesús no nos anima a la pasividad, a la irresponsabilidad, a cruzarnos de brazos esperando la actuación de la providencia divina. Es una invitación a confiar plena y activamente en Dios, colaborando en su proyecto de construir un mundo más justo, más solidario, más amable, más humano para todos.Teniendo siempre la profunda seguridad de que, en todas las circunstancias, contamos con el amor de Dios.

No se inquieten entonces, diciendo: ¿Qué comeremos, qué beberemos, o con qué nos vestiremos? Son los paganos los que van detrás de estas cosas. El Padre que está en el cielo sabe bien que ustedes las necesitan.

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Busquen primero el Reino y su justicia, y todo lo demás se les dará por añadidura.

La clave fundamental de este texto es la llamada a buscar el Reino de Dios y su justicia, a transformar el mundo desde la óptica de Dios, a cambiar de raíz toda situación de injusticia e insolidaridad y el sistema que las engendra. El espíritu del Reino es abandonar el futuro en manos de Dios y compartir lo que se tiene, especialmente con quienes más necesitan.“Vaciarse de toda voluntad de poder o instinto de posesión es hacer posible el Reino de Dios” (Leonardo Boff)

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No se inquieten por el día de mañana;el mañana se inquietará por sí mismo.

A cada día le basta su aflicción.

Cada día es un regalo en el que puedo vivir la cercanía y la ternura de Dios. Compartir el amor, el humor, mis mejores sentimientos. Disfrutar del juego, la risa, la música, el tiempo con las personas que quiero y que encuentro en el camino. Cada día es una llamada a seguir a Jesús, a sembrar y construir los valores del Reino, dejando que Dios programe libremente mi futuro.

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Señor:Cada día llamas a nuestra puertapara despertarnos a la realidad del Dios vivo.Pero al vernos preocupados, y hasta obsesionados,por eso que llamamos necesidades básicas- la comida, el vestido, la salud, el trabajo...-,te sorprende nuestro agobio, y nos hablas del Padrecon un lenguaje y un tono que rompe nuestro esquema de vida.

“Él se ocupa de los pájaros y los alimenta.Y viste a las flores del campo de belleza...Él sabe tus necesidades siempre.Para Él valés mucho más que pájaros y flores... Ulibarri Fl.