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LOS 3 CERDITOS Esta es la historia de tres cerditos que se conocieron de camino al bosque, donde pensaban quedarse a vivir. - Hagamos una casa entre todos con ramas caídas y algo de paja!- dijo el más perezoso. - ¡No! Hagamos una casa toda de madera. ¡Será como un juego!- dijo el más alegre El tercer cerdito dijo firmemente: - Nos conviene hacer una casa con ladrillos. - ¡Eso es agotador!- chilló el perezoso. ¡Y aburrido!- pataleaba el juguetón. Entonces los tres decidieron hacer cada uno su propia casa con el material que quisieran.

Cuento de los tres cerditos

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Page 1: Cuento de los tres cerditos

LOS 3 CERDITOS Esta es la historia de tres cerditos

que se conocieron de camino al bosque, donde pensaban quedarse

a vivir. - Hagamos una casa entre todos

con ramas caídas y algo de paja!- dijo el más perezoso.

- ¡No! Hagamos una casa toda de madera. ¡Será como un juego!-

dijo el más alegre El tercer cerdito dijo firmemente:        - Nos conviene hacer una casa

con ladrillos.       - ¡Eso es agotador!- chilló el

perezoso.       ¡Y aburrido!- pataleaba el

juguetón. Entonces los tres decidieron hacer cada uno su propia casa con

el material que quisieran.

Page 2: Cuento de los tres cerditos

LOS 3 CERDITOS

El primero en terminar su casa fue el más perezoso, no porque hubiera trabajado mucho, sino porque ató rápidamente cañas, ramas caídas y paja, hasta dar forma a una especie de choza,

donde comió y se echó a dormir como un cerdo.

Page 3: Cuento de los tres cerditos

LOS 3 CERDITOS

Al poco tiempo se escucharon los gritos de alegría del

cerdito juguetón, que, no muy lejos de allí, terminaba

de construir una cabaña, después de divertirse

cortando y clavando madera. Él también, ahora, comía y se revolcaba de felicidad.

Page 4: Cuento de los tres cerditos

LOS 3 CERDITOS

El último cerdito tuvo lista la casa de ladrillos cuando ya

era de noche cerrada. Guardó sus cosas, no se dio un baño, y comenzó a comer. Estaba

conforme con la solidez de las paredes, la ventana con

pasador, la puerta con tranca, y una chimenea que le

permitiría hacer fuego para calentarse o preparar comida.

Page 5: Cuento de los tres cerditos

LOS 3 CERDITOS

El cerdito perezoso despertó sobresaltado al escuchar la

respiración de un animal que husmeaba las delgadas paredes

de su choza.      - ¿Quién es?- lloriqueó.

-Soy el amo del bosque, el dueño de todas las sombras, el que te va a comer- dijo el lobo, y de un solo soplido desbarató la choza.

Entonces se abalanzó sobre el cerdito, que corrió hacia la

cabaña de su amigo.

Page 6: Cuento de los tres cerditos

LOS 3 CERDITOS Los gritos del amigo

alertaron al cerdito juguetón, que le abrió la puerta de su cabaña justo a tiempo. Una

vez dentro, los dos se abrazaron temblando, y espiaron por la ventana.

- Así destruyó mi pobre casita; ¡nos va a comer!

       - No te preocupes, esta cabaña no la derribará de un

soplido. -¡Soy el dueño y señor de la

oscuridad, el que hace temblar de miedo a todos en este bosque, el que les va a devorar crudos!- dijo el lobo

y sopló dos veces, y las maderas de la cabaña

volaron.

Page 7: Cuento de los tres cerditos

LOS 3 CERDITOS Los gritos del cerdito perezoso y

del cerdito juguetón despertaron a su amigo, que dormía después del duro trabajo. El dueño de la casa

hizo entrar a sus dos amigos. Los tres cerditos miraban a

través de la ventana.-       Mi choza no resistió...

-  La cabaña voló al segundo intento...      - Pero esta casa está hecha con

tiempo, con esfuerzo y con ladrillos.

-  ¡Soy el dueño del Bosque de las Sombras Inquietas, el Señor de los

Colmillos! El lobo sopló con todas su fuerza:

hasta tres veces, y cayó al suelo, débil, sin que se moviera un solo

ladrillo.Los tres cerditos se abrazaron felices.

El lobo, avergonzado, huyó al bosque y nunca más lo vieron.

Page 8: Cuento de los tres cerditos

LOS 3 CERDITOS Un trabajo bien hecho hace que

podamos descansar tranquilos y jugar sin miedo- dijo el dueño de la casa de

ladrillos-. Aprendan esa lección; ¡esta casa soporta

todos los ataques! - Sí, claro- respondieron los

otros-. En cuanto amaneció, los tres

comenzaron a ampliar la casa, porque habían decidido

vivir juntos para siempre.

Y COLORÍN, COLORADO...