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EESOPI Nº 8111 “Nuestra Señora de la Misericordia”
Lengua y Literatura
Cuadernillo I – 1º Año
2017
Profesora Noelia Carraro
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La Lengua
La lengua es una parte esencial del lenguaje, su parte social. Es decir, un sistema de signos o
señales, un código de comunicación, un idioma, un conjunto de convenciones necesarias
adoptadas por un determinado cuerpo social para permitir el ejercicio de la facultad del lenguaje
en los individuos.
La gramática es una ciencia que estudia los elementos de una lengua (sonidos, formas,
funciones, significados) y las reglas que se deben emplear para combinar esos elementos y
producir mensajes.
La Literatura
El diccionario de la lengua española, de la Real Academia Española (RAE), define a la
literatura como “el arte que emplea como medio de expresión una lengua”.
A diferencia de otras disciplinas que también utilizan la lengua para expresarse, la literatura se
compone de un conjunto de textos ficticios o imaginarios que se contraponen con aquellos que
no inventan sino que intentan registrar sucesos reales, por ejemplo, los textos de historia. Así fue
en los orígenes para los antiguos griegos. La palabra poesía -que para ellos señalaba a la literatu-
ra en general- significaba “producción”, “creación”, es decir, denominaba un objeto artificial o
artístico, inventado con palabras para imitar o representar las cosas tal como podrían suceder en
la vida.
Aunque parta de hechos reales, el escritor imagina, supone, omite algunas cosas y privilegia
otras, esto es, inventa. Pero no lo hace para negar el mundo o la historia: la ficción tiene
estrechas relaciones con la realidad. El escritor valora los hechos que narra, incluye sus ideas y
dialoga en su texto con otros discursos sociales, con otras voces y puntos de vista, como las ideas
políticas, culturales, éticas y artísticas de su época, porque la literatura es también ideología, es
decir, un conjunto jerarquizado de ideas que permiten ver el mundo, analizarlo e interpretarlo.
Además, de las seis funciones del lenguaje que el lingüista Roman Jakobson estableció, la que
caracteriza a la literatura es la función poética que se interesa no sólo por el contenido del
mensaje sino también por cómo lo emite. De esta manera, el lenguaje de la literatura se aleja de
lo cotidiano para crear un hecho artístico que se define por su valor estético. Es decir, que la
literatura busca, por medio de la palabra, representar una mirada original del mundo, apelando al
uso connotativo del lenguaje, lo que permite interpretar el mensaje en múltiples sentidos.
La Comunicación
Comunicar, según la RAE (Real Academia Española), significa transmitir señales mediante
un código común al emisor y al receptor.
Los componentes que intervienen en una situación comunicativa son: emisor, receptor,
mensaje, referente, canal, código.
La comunicación oral y la comunicación escrita
Usamos el canal oral o el escrito con funciones diferentes en situaciones comunicativas y con
intencionalidades distintas. Por eso, existen numerosas diferencias entre los mensajes que se
valen de uno u otro sistema de representación.
Comunicación Oral Comunicación Escrita
Variedad lingüística
Presencia de rasgos de
variedad social y regional del
hablante.
Preferencia por la variedad
estándar.
Registro Predominio del registro Preferencia por los usos
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coloquial e informal. formales y preocupación por
la normativa.
Selección de la información Distribución espontánea de la
información.
Rigurosidad en la progresión
de la información.
Planificación
Escasa planificación, excepto
en textos que exigen
preparación previa. Por
ejemplo: la conferencia.
Cuidadosa planificación y
sucesivos borradores antes de
la edición.
Aunque hay diferencias entre la comunicación y la escrita, existen algunos préstamos. Por
ejemplo, la poesía oral es un discurso altamente planificado las notas recordatorias o las
agendas, presentan una gran espontaneidad.
Variedades lingüísticas
El español no es el mismo en todos los lugares donde se lo habla, ni en todos los momentos
históricos; es diferente en un mismo hablante, y también lo es según la situación comunicativa en
la que lo usa. Esto significa que en español (como en cualquier otra lengua: inglés, guaraní,
japonés) podemos reconocer variedades.
En síntesis, una variedad lingüística es un conjunto de formas de habla compartidas por un
grupo de individuos.
Todas estas variedades pueden ser agrupadas en lectos y registros.
Los lectos: Cuando el uso de una variedad determinada del español depende de algunas
características relevantes del emisor, se habla de lectos. Las características relevantes del emisor,
es decir, los lectos pueden ser:
Dialectos. Son las variedades que dependen del lugar donde vive el emisor: no se
habla el mismo español en la ciudad argentina de Formosa que en la ciudad argentina
de San Juan, en la ciudad venezolana de Caracas, en la ciudad española de Madrid.
Cronolectos. Son las variedades del español que dependen de la edad del emisor. En
una misma región, la gente mayor de setenta años no habla la misma variedad del
español que la gente menor de veinte años.
Sociolectos. Son las variedades del español que dependen del grado de formación
cultural o educación que ha recibido una persona: una persona que ha recibido un
grado alto de educación y que tiene hábitos de lectura no habla de la misma manera
que una persona que ha recibido poca educación y que no lee.
Los registros: Cuando el uso de una variedad determinada del español depende de la
situación comunicativa en la que participa el emisor, entonces se habla de registros. Los rasgos
relevantes de la situación comunicativa, es decir, los registros son:
Registro especializado o general. En este caso, el aspecto de la situación
comunicativa relevante es el tema del intercambio, que puede ser general o
especializado. El tema general es aquel que no requiere que los participantes del acto
comunicativo tengan una formación especializada en algún campo de conocimientos.
El tema es especializado cuando es propio de un campo de conocimientos específico,
por ejemplo el campo de la medicina. Cuando el tema de un intercambio comunicativo
es especializado, la variedad del español utilizada es el registro profesional o técnico;
en caso contrario hablamos de registro general.
Registro formal o informal. En este caso, el rasgo relevante de la situación
comunicativa es la relación que tienen entre sí los participantes del acto comunicativo.
Esta puede ser de confianza, o bien puede ser formal. Si es de confianza, el registro
que se usa es el informal; si no, el registro es formal.
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Registro oral o escrito. En este caso, la característica relevante de la situación
comunicativa es el canal de comunicación. Este puede ser oral o escrito. Cuando una
persona habla con otra, el registro que utiliza es el oral. Cuando una persona se
comunica con otras a través de la escritura, el registro que utiliza es el escrito.
Circunstancias de la comunicación Variedades de lengua
Medio usado --------------------------Modo------ lengua oral (canal sonoro, auditivo)
lengua escrita (visual, gráfico)
Relación entre emisor y receptor --Estilo------- lengua formal (uso cuidado)
lengua informal (uso espontáneo)
Función que cumple
el emisor en una situación ----------Registro---
comunicativa
científico
coloquial
informativo
literario
profesional especializado en…
Procedencia geográfica --------------Dialecto---
del emisor lengua general
lengua regional------urbana
rural
Culturales -----------------------------Sociolecto- lengua escolarizada (usos correctos)
lengua no escolarizada (presenta
problemas de pronunciación,
vocabulario, ortografía, etc.)
Edad del emisor ---------------------Cronolecto-
Época de emisión
lengua de adultos
lengua de adolescentes
lengua infantil
lengua arcaica
lengua contemporánea
La lengua estándar
La lengua estándar es una variedad de lengua que toma las características de pronunciación,
vocabulario, construcción sintáctica, morfología, ortografía y puntuación correspondientes a los
usos establecidos como adecuados dentro de una comunidad lingüística, en nuestro caso el
español. El conocimiento de la lengua estándar permite la comprensión y la emisión de mensajes
a los integrantes de una sociedad. Se utiliza, por ejemplo, en los medios de comunicación, en un
texto informativo, en una conferencia.
La lengua estándar, según los criterios del cuadro anterior, se puede describir como na
variedad de estilo formal, con usos de lengua escolarizada, de adultos, contemporánea. En
nuestro caso, corresponde al español que es usado y comprendido por los hispanohablantes en
general.
Oralidad, escritura y tecnología
El desarrollo tecnológico borró ciertas fronteras entre los mensajes orales y escritos. Por
ejemplo, las comunicaciones orales pueden perdurar en el tiempo si se graban. Además, se
difunden a gran distancia gracias al teléfono, la radio, la televisión, internet.
Las comunicaciones escritas, que tienen un carácter diferido, pueden transmitirse en el
momento en que se han escrito y, por lo tanto, pueden ser respondidas de inmediato, como
ocurre con los telegramas, los mensajes enviados por fax y los diálogos que pueden establecerse
a través del chateo.
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Existen textos híbridos, de origen oral y recepción escrita, y viceversa. Una conferencia o una
ponencia en congreso se escriben, pero luego las escuchamos. Una entrevista surge oralmente,
pero luego puede ser transcripta para su difusión.
El Chat
Video: http://youtu.be/8XhLJrVH8RY: Experiencia de reflexión sobre el lenguaje,
desarrollada por dos profesoras de Lengua y Literatura en una escuela secundaria de Santa Fe.
Entre otros aspectos, el proyecto es rico para debatir la pertinencia de examinar las situaciones
comunicativas en entornos digitales con criterios provenientes del mundo “de papel”.
Reconoceremos, sin duda, que son mensajes de texto y que, como tales, ambos despliegan una
conversación (vale notar incluso los íconos en los que se apoyan). Sin embargo, las formas de
hablar no son exactamente iguales, y para distinguir sus rasgos específicos debemos examinar el
registro.
Como vimos previamente, el registro está directamente vinculado a la situación comunicativa
y, en este sentido, se ve determinado por tres variables: (a) el tipo de actividad social en la que
los hablantes participan; (b) las relaciones entre los participantes; y (c) el modo, esto es, el canal
–escrito u oral– y el estilo retórico particular adoptado por el hablante, que en definitiva
determinan la “textura” del mensaje.
Si analizamos cada una de estas variables veremos que estos hablantes intercambian mensajes
de texto –un tipo de conversación específica, mediada por celulares y más o menos diferida en el
tiempo– y comparten ciertas formas de expresión propias de ese canal. Además de la brevedad
de los mensajes, podemos notar también los intercambios imbricados, propios de la conversación
espontánea; esto es, las preguntas yuxtapuestas que envía un interlocutor son respondidas en una
secuencia inversa: de la última a la primera, ya que este orden agiliza el diálogo.
Mientras que en el segundo de los intercambios la “escritura ideofonemática” está casi
ausente, en el primero predominan las expresiones abreviadas, quizá motivadas en la urgencia de
respuestas rápidas, es decir, en el ritmo que marca la inmediatez de una charla diferida en el
espacio pero no el tiempo. Esta economía de caracteres, que comenzó siendo impuesta por los
mismos sistemas de SMS o por el tamaño de las pantallas de los celulares, hoy en día ya nos
resulta parte de la gramática y del vocabulario de estos géneros.
Las formas lingüísticas que los hablantes emplean en estos géneros discursivos digitales (sms,
chat):
• Acortamientos, omisión de algunas letras o formación de siglas, como en grax (“gracias”).
Las siglas, como LOL (“laughing out loud”) o ASAP (“as soon as possible”), son frecuentes en
inglés, pero también las encontramos cada vez más en español: TQM (“te quiero mucho”).
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• Escritura ideográfica o de “rebus”: “representar algo que tiene un significado, no para aludir
a su significado sino a su nombre”; en estos ejemplos, x o salu2 (“saludos”).
• Escritura silábica: el nombre de la letra se lee como sílaba y, por lo tanto, la representa; por
ejemplo, en uno de estos SMS, las letras t (en “t”), b (en “bso”).
• Escritura fonética: sin atender a la ortografía, se trata de emplear una letra que represente el
sonido que se quiere comunicar; así, es frecuente notar la sobreabundancia de K, en ke (“que”),
la ausencia de H, o el uso de c (“se”).
• Uso de emoticones, que combinan signos de puntuación para transmitir el estado de ánimo o
las intenciones comunicativas de los participantes (ironías, chistes, etc.).
• Integración de recursos de la historieta: mayúsculas para expresar un grito, uso de
interjecciones, onomatopeyas, etc.
• Reiteración de signos para expresar intensidad: aaaaahhhhh!!!, grrrrrr, entre otros.
• Omisión de tildes, signos de puntuación o mayúsculas al comienzo de la oración o en
nombres propios.
En síntesis, en los géneros discursivos digitales (chat, mensajes de texto, tuits, intercambios
en redes sociales, blogs y foros) resulta generalmente válida la regla de “escribimos-como
hablamos”, porque estos textos tienen mucho de conversación y, por lo tanto, toman formas del
habla espontánea. Así, podríamos referirnos a ellos como “oralidad digital”.
Finalmente, en cuanto a la espontaneidad e inmediatez de estos intercambios, es interesante
observar que, aunque los consideremos formas de comunicación sincrónicas (los interlocutores
coinciden en el mismo tiempo), solo el chat exige la copresencia de los interlocutores. El resto de
los géneros (sms, correo electrónico, tuits, redes sociales, foros, comentarios en blogs) es de
naturaleza asincrónica o diferida. Es cierto que se suele esperar una respuesta breve, rápida –
como en los mensajes de texto analizados– y hasta ingeniosa, pero la participación simultánea de
los participantes no es necesaria. Fuente: Fernanda Cano y Cecilia Magadán (2014). Clase 1. La oralidad: tecnologías para tomar la palabra.
Propuesta Educativa II - Lengua y Literatura – Nivel secundario. Especialización docente de nivel superior en
educación y TIC. Buenos Aires: Ministerio de Educación de la Nación.
Las Funciones del lenguaje
Un emisor al emitir un mensaje busca comunicarse con ciertos fines: informar, expresar sus
sentimientos, pedir, etc. Según sea su intención, en un mensaje predomina uno de los
componentes del circuito comunicativo (Ver “circuito de la comunicación” en página 8 del
Cuadernillo para Ingresantes 2016) y es posible distinguir las siguientes funciones del lenguaje.
Emotiva o expresiva: predomina el emisor, ya que su intención es comunicar sus
sentimientos o su parecer sobre algo. Por ejemplo, en la escritura de un diario íntimo,
en donde el emisor suele contar cómo se siente: Te quiero.
Apelativa: aquí el acento está puesto en el receptor, ya que el emisor busca llamarle la
atención, captarlo. Por ejemplo, la publicidad busca que el receptor se sienta
identificado con lo que se quiere vender, que lo desee, le guste y lo consuma: ¡Llame
ya!
Informativa o referencial: predomina el referente, es decir, el tema del que se habla.
El emisor tiene la intención de transmitir información. Esta función predomina en los
manuales: El chita es un felino.
Poética: se centra en el mensaje. Lo más importante para el emisor es llamar la
atención sobre la forma en que ese mensaje fue construido. Por ejemplo, en los textos
literarios se pone especial cuidado en la forma en que se arma determinado texto, qué
palabras se usan, cómo se las usa, etc.: El verde es gala y ornato del bosque en
primavera.
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Metalingüística: la intención del emisor es usar la propia lengua para hablar sobre
algún aspecto referido a ella. Por ejemplo, en el diccionario, para saber qué significa
una palabra se utilizan otras de la misma lengua: Escuchar significa “prestar atención
a lo que se oye”.
Fática: predomina el canal de comunicación. La intención del emisor es comprobar si
ese canal funciona bien, o abrirlo/cerrarlo. Por ejemplo, cuando alguien nos saluda
abre el canal de comunicación: Hola, ¿me oís bien?
Actividades
1. Lean los siguientes textos. En cada uno predomina uno de los elementos del circuito
de la comunicación. Indiquen en los espacios en blanco cuál es ese elemento, la
función del lenguaje y la intención del emisor asociados.
Texto A.
amor (Del lat. Amor, -oris). 1. m. Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su
propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser.
Elemento que predomina: ______________. Función: ______________. Intención:
____________.
Texto B.
♥ Amor de verano♥
La película que estabas esperando
¡No te la podés perder! Próximamente en cines.
Elemento que predomina: ______________. Función: ______________. Intención:
____________.
Texto C.
Marcos: -¿Hola, Mica?
Mica: -Sí, ¿quién habla? No se escucha bien.
Marcos: -Hola. ¿Ahora?
Mica (muy nerviosa): No… cortá y volvé a llamar.
Elemento que predomina: ______________. Función: ______________. Intención:
____________.
Texto D.
Romance del enamorado y la muerte
Un sueño soñaba anoche, soñito del alma mía,
Soñaba con mis amores, que en mis brazos los tenía.
Vi entrar señora tan blanca, muy más que la nieve fría…
Elemento que predomina: ______________. Función: ______________. Intención:
____________.
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Texto E.
¡Qué inmenso es el mar! ¿No es maravilloso? Me siento conmovido ante él.
Elemento que predomina: ______________. Función: ______________. Intención:
____________.
Texto D.
Los mares son grandes masas de agua salada que cubren la mayor parte de la superficie
terrestre.
Elemento que predomina: ______________. Función: ______________. Intención:
____________.
La comunicación literaria
La literatura es un caso especial de comunicación. Por una parte, en ella se cumple el mismo
circuito que en cualquier otra comunicación: el autor es el emisor de un mensaje (la obra
literaria), construido por medio de un código (la lengua), que está dirigido a múltiples receptores
(los lectores). En la literatura, el mensaje no tiene un único significado; los lectores comprenden
e interpretan los textos de maneras diversas, según sus gustos, sus experiencias de vida y de
lectura, sus circunstancias (edad, estado de ánimo) y el contexto social y cultural en que se
desenvuelven.
Pero, por otra parte, dentro del mensaje que es la misma obra literaria, se produce una nueva
comunicación. Hay otro emisor: la voz que habla en una narración, por ejemplo, es la del
narrador que organiza los hechos y los presenta al lector, no la del autor real. También ocurre
que los personajes dialogan entre sí, adoptando posiciones de emisores y receptores de mensajes,
alternativamente. A su vez, el referente de un texto literario, es decir, aquello de lo que habla,
forma parte del mundo que construye la misma obra, y no del mundo real en que vivimos. Por
estas características, los textos literarios son siempre ficcionales, aunque creen y nos presenten
mundos similares al mundo real.
Los Géneros Literarios
El concepto de género literario implica una forma de clasificar los textos en distintos grupos,
cada uno de los cuales se diferencia por características propias. Entre la variedad de textos que
existen, los géneros permiten que el lector reconozca algunos como poesías, por ejemplo, y los
distinga de otros que serían novelas o cuentos.
Aristóteles, un filósofo del siglo IV a.c. y el primero en escribir un estudio sobre la literatura
(“la Poética”), teniendo en cuenta el tema, el modo y los medios de imitar, dividió a la literatura
en tres grandes géneros, que con el correr del tiempo pasaron a denominarse:
Género narrativo: se caracteriza por la presencia de un narrador que relata una historia
conformada por hechos ficticios que le suceden a un personaje en un tiempo y lugar. Este
género incluye al cuento, la novela, el mito, la leyenda. Estos textos, generalmente, están
escritos en prosa.
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Cuando nos tocó resolver el caso de los tres estudiantes, Holmes y yo estábamos en Londres. Una
tarde, recibimos la visita de Hilton Soames, profesor del Colegio Universitario de San Lucas. Se lo veía
muy alterado… María Tadich: “El caso de los tres estudiantes” en Cuentos policiales para chicos curiosos.
Género lírico o poético: se caracteriza porque quien emite el mensaje es un yo lírico,
emplea un lenguaje retórico compuesto por recursos literarios, rima y métrica. Estos
textos están escritos, generalmente, en verso. Los poemas, los romances, las canciones
forman parte de este género.
Hay ojos que miran, hay ojos que sueñan,
hay/ o/jos/ que/ lla /man,/ hay/ ojos /que/ es/pe/ran,
hay ojos que ríen, risa placentera,
hay ojos que lloran, con llanto de pena,
unos hacia adentro, otros hacia afuera. Miguel de Unamuno, “Hay ojos que miran, hay ojos que sueñan” en Poesía completa.
Género dramático o teatral: estos textos son pensados para ser representados en un
escenario. Quien emite el mensaje es el actor-personaje y lo hace a través de diálogos. La
tragedia, la comedia, forman parte de este género.
CARMELO. –Este mes no llegamos.
CHICHO. -¿Adónde?
CARMELO. -¡Con la guita! No llegamos. Roberto Cossa, La Nona.
Sin embargo, esta división no es tan rígida. Muchas veces los límites se borran, las fronteras
se desdibujan y en un mismo texto se cruzan dos o más géneros literarios.
Por otra parte, nuevos géneros y subgéneros han ido surgiendo a partir de ciertos cambios
en las necesidades sociales y comunicativas.
El Género Narrativo Literario
Incluye textos en los que un narrador cuenta hechos ficticios que les sucedieron a personajes
en un tiempo y lugar. (Ver “estructura básica de la narración” y “tipos de narradores en
páginas 5, 6 y 7 del Cuadernillo para Ingresantes 2017)
Tipo de textos narrativos literarios: El cuento y la novela
El cuento es un texto ficticio breve, de carácter sencillo. Edgar Allan Poe sostenía, además,
que el cuento debe producir una impresión, un efecto en el lector que se prepara desde la primera
frase hasta el final del relato. Los personajes que aparecen son pocos, sólo aquellos esenciales
para provocar el efecto deseado.
En general, el desarrollo narrativo del cuento se concentra en un solo nudo, núcleo o
conflicto.
Durante el siglo XIX el cuento sufrió importantes modificaciones y adquirió las siguientes
características:
Presencia
del
narrador.
Lugar. Tiempo. Referencia que indica
tipo de texto. Personajes.
Verso.
Métrica. Referencia que
indica tipo de texto.
Un “yo
lírico” emite
el mensaje. Rima.
Actores-
personajes. Diálogo.
Escritura
en prosa.
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es producto de un autor individual y no de una comunidad1;
se busca la originalidad y no la reformulación de otros cuentos ya existentes;
la estructura, los temas y el estilo manifiestan un medio más complejo de elaboración;
se transmite en forma escrita. Por ejemplo, “El viejo guardarropa de roble” de Charles
Dickens.
A diferencia del cuento, la novela es más extensa.
La acción es necesaria en este tipo de texto, pero lo fundamental son los personajes y el
mundo ficticio en que ellos viven.
La novela presenta una historia principal e historias secundarias, las descripciones abundan en
sus páginas y los diálogos nos dan a conocer a los personajes. Por ejemplo, ¿Quién conoce a
Greta Garbo? de Norma Huidobro y Aunque diga fresas de Andrea Ferrari.
La novela corta o “nouvelle” se define como la representación de un acontecimiento sin la
amplitud de la novela normal ni la brevedad del cuento en el tratamiento de los personajes y del
argumento. La acción, el tiempo y el espacio se presentan con un ritmo acelerado en el desarrollo
del relato, pero no tanto como se da en el cuento. Un ejemplo de este tipo de novela corta es el
libro Canción o Cuento de Navidad de Charles Dickens.
Los Subgéneros Narrativos Literarios
Dentro del género narrativo cuento y/o novela se incluyen subgéneros literarios como
“maravilloso”, “realista”, “fantástico”, “policial”, “ciencia-ficción”.
Relato Realista: se consolida en Europa a mediados del siglo XIX. Sus máximos exponentes
son: Honoré de Balzac, Stendhal, Flaubert, Tolstói. Presenta una representación verosímil (que
parece real, que tiene apariencia verdadera) de la realidad. Intenta provocar en el lector la
sensación de que está viendo lo que se le cuenta. Su intención es tratar de reflejar la vida
cotidiana, recrear la sociedad de una determinada época. Esa representación pretende ser
objetiva, pero, en realidad, siempre será una manera de ver el mundo.
Para lograr veracidad, el escritor realista recurre a diferentes técnicas:
Descripciones precisas, detallistas de los espacios, de las costumbres de una sociedad,
del estilo de vida, etc., para recrear el ambiente de una época y de un país.
Personajes comunes en la vida de pueblos o ciudades. Por ejemplo, la maestra, el
médico, un pescador, una sirvienta, etc.
El lenguaje, los diálogos de los personajes intentan captar el habla de una clase social,
el nivel de educación y/o la profesión de una persona.
El narrador, generalmente, se encuentra en tercera persona omnisciente (lo sabe todo y
conoce hasta los pensamientos más íntimos de los personajes).
Historia y relato
En una narración encontramos dos aspectos: la historia y el relato.
La historia es el conjunto de los sucesos, mientras que el relato es la manera en que el
narrador cuenta la historia.
El autor de un relato puede jugar con los tiempos alargando o acortando la duración de los
hechos. De esta forma puede provocar en el lector distintas sensaciones: dinamismo, pesadez,
tedio, precipitación.
También puede alterar el orden de los acontecimientos a través de diversos recursos:
1 El cuento siempre tuvo un creador “concreto” o “personal” (un mendigo, un trovador, un juglar). Este “autor”
ofrecía su relato a un auditorio que luego lo transmitía produciendo modificaciones. Y, de esta manera, el cuento
perdía su condición individual y pasaba a ser patrimonio del pueblo.
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Alteración del orden sucesivo: el autor puede optar por presentar los hechos que se
dan cronológicamente en la historia de forma alterada, saltando en el tiempo. Piensen,
por ejemplo, en la película Titanic cuya historia central ocurre en el pasado pero está
enmarcada por dos segmentos del presente.
Presentación de la anciana sobreviviente Presente
Narración de los sucesos ocurridos en el barco Pasado
Cierre con la anciana sobreviviente Presente
Retrospecciones y anticipaciones: pueden presentarse flashbacks (retrocesos
repentinos en el tiempo) que a modo de flashes del pasado (por ejemplo, recuerdos)
permiten recuperar datos que explican los sucesos actuales del relato. También el
narrador puede contar anticipadamente un suceso que ocurre en el final de la historia.
Al llegar aquí un extraño cuadro se proyectó en mi mente: (…) un chico de once o doce años con un
collar de plata y una horquilla de hierro en la mano, golpeando con todas sus fuerzas a un tejón que
eludía el golpe y se escapaba por entre sus piernas.
Ese chico era Jun-du. Cuando lo conocí tenía un poco más de diez años. Y eso fue hace treinta. Mi
padre vivía entonces y la familia estaba en buena situación, de modo que yo era en realidad un niño
consentido (…)
Ahora que mi madre lo mencionó, este recuerdo de mi infancia se encendió ante mí como un súbito
rayo en una noche oscura, y me pareció que por un instante volvía a ver el bello antiguo hogar de mi
niñez…
En ese juego todo tenía que andar rápido. Cuando el Número Uno decidió que había que liquidar a
Romero y que el Número Tres se encargaría del trabajo, Beltrán recibió la información pocos minutos
más tarde. Tranquilo pero sin perder un instante, salió del café de Corrientes y Libertad y se metió en un
taxi…
Las Clases de Palabras
Los Pronombres del Primer Grupo
La clasificación semántica de los pronombres
Los pronombres tienen la particularidad de que no tienen un significado fijo. Si buscamos el
pronombre yo en el diccionario no tendremos una referencia de quién es ese yo, porque depende
de una situación comunicativa. Así,
el pronombre yo y todos los de primera persona señalan al emisor, a cualquier persona
que toma la palabra para dirigirse a otra;
los pronombres de segunda persona señalan al receptor, a quien recibe el mensaje.
Los pronombres de tercera persona señalan a aquello de lo que hablan el emisor y el
receptor.
Existen dos grupos de pronombres: los del primer grupo y los del segundo. Aquí veremos los
del primer grupo, aquellos que se relacionan con las personas que intervienen o se mencionan en
la comunicación.
Pertenecen a este primer grupo, los siguientes pronombres.
Futuro
anticipa
ción
Presente
Pasado
flashbac
ks Presente
Altera
ción
del
orden
sucesi
vo.
Presente
Altera
ción
del
orden
sucesi
vo.
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Pronombres
Personales
Señalan a las personas
que intervienen en un acto
de comunicación.
1ª persona singular yo, me, mí, conmigo
2ª pers. sing. tú, vos, te, ti, contigo, usted
3ª pers. sing. él, ella, se, sí, le, lo, la, consigo
1ª persona plural nosotros/as, nos
2ª pers. pl. vosotros/as, os, usted/es
3ª pers. pl. ellos, ellas, les, los, las
Pronombres
Posesivos
Señalan pertenencia o
posesión en relación con las
personas que intervienen en
un acto de comunicación.
1ª pers. sing. mi/s, mío/s, mía/s
2ª pers. sing. tu/s, tuyo/s, tuya/s
3ª pers. sing. su/s, suyo/s, suya/s
1ª pers. pl. nuestro/s, nuestra/s
2ª pers. pl. vuestro/s, vuestra/s
3ªpers. pl. su/s, suyo/s, suya/s
Pronombres
Demostrativos
Señalan la distancia en
la que se encuentran los
objetos de las personas que
intervienen en un acto de
comunicación.
Cerca del emisor
(la primera persona).
este, esta/s, esto/s
Cerca del receptor
(la segunda persona).
ese, esa/s, eso/s
Lejos del emisor y
del receptor.
aquel, aquella/s, aquello/s
La morfología del pronombre
Algunos pronombres varían en género y/o número, pero otros no. Por ejemplo, el pronombre
de primera persona yo no tiene género, pero sí número.
Actividades
2. Lean el siguiente diálogo.
(Dos amigas en la puerta del cine)
Ana: Yo(1) quiero ver esa(2). ¿Y vos?
Julieta: Yo(3) quería ver aquella(4). ¿No te(5) entusiasma?
A.: Sí, también podría ser. Averigüemos si hay entradas.
J.: Me parece que es ahí donde las(6) venden.
A.: ¿Ahí dónde?… Ah, no veía porque me tapaba eso(7).
J.: Dale, vamos y le(8) preguntamos al señor de la ventanilla.
A.: Quizás él(9) nos puede recomendar cuál es mejor.
J.: Dale, y basándonos en eso(10) decidimos.
a) Completen si las palabras destacadas y numeradas refieren a una persona
(especificar quién), a una situación o a un objeto.
3. Reemplacen en sus carpetas las palabras o construcciones repetidas por pronombres
personales, posesivos o demostrativos. Luego, indiquen a qué palabra o construcción
reemplaza cada pronombre.
a) El club al que fuimos tenía muchos árboles. Los árboles se veían rojizos, por ser
tiempo de otoño.
b) Cerca del club vivía mi amiga de la infancia. A mi amiga también le gustaba ir al
club.
c) En el club, los chicos nos sentíamos felices. Todos los chicos practicábamos
algún deporte.
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Los pronombres enclíticos
Son los pronombres personales que se unen al final del verbo y conforman con éste una sola
palabra. Por ejemplo: decime, queríanse, mirémoslo, pensarlo, esperándolo.
Estas construcciones pueden desarmarse si se antepone el pronombre al verbo. Por ejemplo:
Decime Me decís. En el caso del infinitivo no se puede, ya que habría que conjugarlo. Por
ejemplo, pensarlo no podría convertirse en *lo pensar sino en lo piensa/lo pienso.
4. Lean el siguiente fragmento de “El almohadón de plumas” de Horacio Quiroga y
resuelvan.
Al otro día Alicia seguía peor. Hubo consulta. Constatóse una anemia de marcha
agudísima, completamente inexplicable. Alicia no tuvo más desmayos, pero se iba
visiblemente a la muerte. Todo el día el dormitorio estaba con las luces prendidas y en pleno
silencio. Pasábanse horas sin oír el menor ruido. Alicia dormitaba. Jordán vivía casi en la
sala, también con toda la luz encendida. Paseábase sin cesar de un extremo a otro, con
incansable obstinación. La alfombra ahogaba sus pasos. A ratos entraba en el dormitorio de
Alicia y proseguía su mudo vaivén a lo largo de la cama, mirándola cada vez que caminaba
en su dirección. (Fragmento adaptado)
a) Marquen todos los pronombres enclíticos que encuentren.
b) Reescriban en sus carpetas esas oraciones desarmando los pronombres enclíticos.
Tildación de verbos con pronombres enclíticos
La palabra resultante del verbo y el pronombre enclítico sigue las reglas generales de
tildación. Por ejemplo: si a la forma sume se le agrega el pronombre la, la palabra súmela lleva
tilde porque es esdrújula. Si a la forma correspondiente al pronombre vos (sumá) se le agrega la,
la tilde se pierde porque se transforma en palabra grave terminada en vocal: sumala.
El Verbo
La semántica del verbo
El verbo es una clase de palabra que indica acciones (Juan corre rápidamente.), estados (Juan
es deportista.) o procesos (Juan crece día a día en el deporte.).
La morfología del verbo
El verbo es mucho más complejo que el sustantivo y el adjetivo, porque presenta varias
categorías:
Número: indica si el verbo está en singular o plural.
Persona: indica a qué participante de la comunicación se refiere: 1ª persona: yo,
nosotros; 2ª persona: vos, usted, ustedes; 3ª persona: él, ellos.
Tiempo: indica, a grandes rasgos, en qué momento se ubica la acción: presente (acción
simultánea), pasado (acción anterior) o futuro (acción posterior).
Modo: indica la actitud del hablante frente a la acción, estado o proceso que enuncia.
Existen tres modos: Indicativo, Subjuntivo e Imperativo.
Indicativo: indica hechos de la realidad, ya sea en el presente, el pasado o el
futuro. Por ejemplo: Hoy voy a tu casa.
Subjuntivo: expresa hechos vinculados a la subjetividad del emisor: opiniones,
deseos, dudas o sentimientos y, en términos generales, aparece subordinado a un
verbo principal. Por ejemplo: Espero que ganemos.
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Imperativo: expresa órdenes, pedidos o sugerencias. Se utiliza solamente en
segunda persona. Por ejemplo: ¡Suban!
Los tiempos verbales simples de los modos Indicativo, Subjuntivo e Imperativo
En el Modo Indicativo existen los siguientes tiempos verbales simples:
Presente: hace referencia al momento en que se emite el discurso. Por ejemplo:
Llamo pero no me contestan. En la narración, este tiempo suele predominar en los
diálogos.
Pretérito Perfecto Simple: hace referencia a un evento puntual ocurrido y terminado
en el pasado. Por ejemplo: Compré regalos para todos. En la narración, se utiliza -no
en todos los casos- para las acciones principales ejecutadas por los personajes.
Pretérito Imperfecto: hace referencia a acciones, procesos o estados pasados con
cierta duración o repetición en el tiempo. Por ejemplo: Caminaba todas las mañanas.
En una narración, este tiempo verbal se utiliza -no en todos los casos- para las
acciones secundarias, ya sea descripciones o ambientaciones.
Futuro Simple: hace referencia a un evento futuro durativo, impreciso, todavía sin
realizar con respecto al presente del hablante. Por ejemplo: Iré a tu casa.
Condicional Simple: hace referencia a un evento como probabilidad, hipótesis o
condición. Por ejemplo: Iría si no lloviera. En la narración se utiliza para expresar
eventos futuros, cuando el relato se narra en pasado.
En el Modo Subjuntivo, los tiempos simples de los verbos generalmente están introducidos
por una construcción con un verbo como núcleo, es decir, están subordinados a ese verbo.
Presente: puede referirse a un evento presente o futuro, nunca pasado. Por ejemplo:
Espero que ganemos.
Pretérito Imperfecto: por lo general, expresa un evento futuro en relación con el
verbo en pasado del que depende. Por ejemplo: Les pidió que defendieran más.
Futuro Simple: esta forma solo se utiliza en el lenguaje jurídico y administrativo.
Por ejemplo: Serán castigados quienes dañaren las boletas en el cuarto oscuro.
El Modo Imperativo solo posee formas de las segundas personas singular y plural. Hace
referencia a un evento presente como una orden, una súplica o un ruego. Por ejemplo:
Permítame sus documentos.
Uso de b en el pretérito imperfecto de los verbos de la primera conjugación
Las terminaciones del pretérito imperfecto del indicativo de los verbos de la primera
conjugación (-ar) se escriben con b (soñaba).
Uso de c en los verbos terminados en –ecer, -ocer y –ucir
Los verbos que terminan en –ecer, -ocer y –ucir se escriben con c (anochecer, conocer,
deducir).
Paradigma Verbal de los Tiempos Simples
Primera conjugación Segunda conjugación Tercera conjugación
PRESENTE
Yo
Tú/Vos/Usted
Él/Ella
Nosotros
Vosotros/Ustedes
Ellos/Ellas
amo
amas/amás/ama
ama
amamos
amáis/aman
aman
temo
temes/temés/teme
teme
tememos
teméis/temen
temen
parto
partes/partís/parte
parte
partimos
partís/parten
parten
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PRETÉRITO
IMPERFECTO
Yo
Tú/Vos/Usted
Él/Ella
Nosotros
Vosotros/Ustedes
Ellos/Ellas
amaba
amabas/amabas/amaba
amaba
amábamos
amabais/amaban
amaban
temía
temías/temías/temía
temía
temíamos
temíais/temían
temían
partía
partías/partías/partía
partía
partíamos
partíais/partían
partían
PRETÉRITO
PERFECTO
SIMPLE
Yo
Tú/Vos/Usted
Él/Ella
Nosotros
Vosotros/Ustedes
Ellos/Ellas
amé
amaste/amaste/amó
amó
amamos
amasteis/amaron
amaron
temí
temiste/temiste/temió
temió
temimos
temisteis/temieron
temieron
partí
partiste/partiste/partió
partió
partimos
partisteis/partieron
partieron
FUTURO
SIMPLE
Yo
Tú/Vos/Usted
Él/Ella
Nosotros
Vosotros/Ustedes
Ellos/Ellas
amaré
amarás/amarás/amará
amará
amaremos
amaréis/amarán
amarán
temeré
temerás/temerás/temerá
temerá
temeremos
temeréis/temerán
temerán
partiré
partirás/partirás/partirá
partirá
partiremos
partiréis/partirán
partirán
CONDICIONAL
SIMPLE
Yo
Tú/Vos/Usted
Él/Ella
Nosotros
Vosotros/Ustedes
Ellos/Ellas
amaría
amarías/amarías/amaría
amaría
amaríamos
amaríais/amarían
amarían
temería
temerías/temerías/temería
temería
temeríamos
temeríais/temerían
temerían
partiría
partirías/partirías/partiría
partiría
partiríamos
partiríais/partirían
partirían
MO
DO
SU
BJU
NT
IVO
PRESENTE
Yo
Tú/Vos/Usted
Él/Ella
Nosotros
Vosotros/Ustedes
Ellos/Ellas
ame
ames/ames/ame
ame
amemos
améis/amen
amen
tema
temas/temas/tema
tema
temamos
temáis/teman
teman
parta
partas/partas/parta
parta
partamos
partáis/partan
partan
PRETÉRITO
IMPERFECTO
Yo
Tú/Vos/Usted
Él/Ella
Nosotros
Vosotros/Ustedes
Ellos/Ellas
amara
amaras/amaras/amara
amara
amáramos
amarais/amaran
amaran
temiera
temieras/temieras/temiera
temiera
temiéramos
temierais/temieran
temieran
partiera
partieras/partieras/partiera
partiera
partiéramos
partierais/partieran
partieran
Yo
Tú/Vos/Usted
Él/Ella
Nosotros
Vosotros/Ustedes
Ellos/Ellas
amase
amases/amases/amase
amase
amásemos
amaseis/amasen
amasen
temiese
temieses/temieses/temiese
temiese
temiésemos
temieseis/temiesen
temiesen
partiese
partieses/partieses/partiese
partiese
partiésemos
partieseis/partiesen
partiesen
FUTURO
SIMPLE
Yo
Tú/Vos/Usted
Él/Ella
Nosotros
Vosotros/Ustedes
Ellos/Ellas
amare
amares/amares/amare
amare
amáremos
amareis/amaren
amaren
temiere
temieres/temieres/temiere
temiere
temiéremos
temiereis/temieren
temieren
partiere
partieres/partieres/partiere
partiere
partiéremos
partiereis/partieren
partieren
MODO
IMPERATIVO
Tú/Vos/Usted
Él/Ella
Nosotros
Vosotros/Ustedes
Ellos/Ellas
ama/amá/ame
ame
amemos
amad/amen
amen
teme/temé/tema
tema
temamos
temed/teman
teman
parte/partí/parta
parta
partamos
partid/partan
partan
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Los Verboides
Los verbos tienen tres formas que no están conjugadas, es decir, que no presentan las
categorías de tiempo, modo, persona y número. Esas formas se llaman verboides y son:
Infinitivo: formas terminadas en -ar (primera conjugación), -er (segunda
conjugación), -ir (tercera conjugación). Ejemplos: amar, temer, partir.
Participio: formas terminadas en -ado/a, -ido/a (es el único verboide que puede variar
en género y número). Ejemplos: amado, temido, partido.
Gerundio: formas terminadas en -ando, -endo. Ejemplos: amando, temiendo,
partiendo.
5. Extraigan del siguiente texto los verboides que haya.
Caminó durante un largo rato sin pensar en nada. La idea de que pudiera pasarle algo lo
asustaba mucho, pero no sabía cómo actuar. Ya había caminado lo suficiente cuando encontró
un bar. Decidió sentarse a tomar un café. Sus pies cansados le pedían un segundo para respirar.
Lo que no sabía era que entrar en ese café era el peor error que podía cometer. Se enteraría
demasiado tarde.
a) Escriban el infinitivo, el participio y el gerundio de los siguientes verbos
conjugados.
Caminó: _______________________________________________________________
Pudiera: _____________________________________________________________
Asustaba: ____________________________________________________________
Sabía: _______________________________________________________________
Había: ______________________________________________________________
Encontró: ____________________________________________________________
Decidió: ______________________________________________________________
Pedían: ______________________________________________________________
Era: ________________________________________________________________
Enteraría: ____________________________________________________________
Verboides irregulares
Algunos verbos presentan participios irregulares, que no presentan la desinencia usual. Por
ejemplo: escrito, hecho. Otros verbos tienen dos participios: uno regular (freído, bendecido,
imprimido) y otro irregular (frito, bendito, impreso). En función adjetiva se prefiere el empleo de
la forma irregular: Le encantan los huevos fritos. En verbos compuestos se elige la forma
regular: Había freído muchos huevos.
La Formación de Palabras
Las palabras están formadas por diferentes sonidos, llamados fonemas, como /b/, /p/, /r/, /s/,
etc., que no poseen significado propio. Esos sonidos se representan en forma escrita mediante los
grafemas, como las letras.
Además, las palabras están constituidas por unidades mínimas que sí tienen significado y se
denominan morfemas, entre ellos se encuentran las bases o raíces.
Por ejemplo: pan-cito está formada por el morfema base o raíz pan, que le otorga el
significado a la palabra “pancito”, y el morfema diminutivo –cito, que significa “pequeño”.
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Los prefijos y los sufijos
Delante de los morfemas base o raíz, algunas palabras suelen presentar otros morfemas
llamados prefijos; por ejemplo, bicicleta, monopatín, subsuelo, prelavado. Hay otros morfemas
que se ubican después de los morfemas base o raíz y se denominan sufijos; por ejemplo, tenista,
relojero, masticable, cariñoso.
Los prefijos y los sufijos pueden estar presentes simultáneamente en una misma palabra
acompañando a la base o raíz; por ejemplo, inmovilidad.
Palabras Simples, Derivadas y Compuestas
Las palabras simples son aquellas que están formadas solo por el morfema base o raíz; por
ejemplo, casa, árbol, sol, luna. Cuando las palabras están constituidas, además, por un prefijo
y/o sufijo, nos encontramos frente al fenómeno de derivación. Estas palabras se llaman
derivadas; por ejemplo, caserío, arboleda, soleado, lunar.
Cuando las palabras están formadas por dos raíces o morfemas base, el fenómeno producido
recibe el nombre de composición. Estas palabras se denominan compuestas; por ejemplo,
sacapuntas (sacar + puntas), limpiavidrios (limpiar + vidrios), portalápices (portar + lápices),
malcriar (mal + criar).
Uso de rr en palabras compuestas
En las palabras compuestas, debe escribirse rr para indicar sonido fuerte si la palabra a la que
se le agrega el prefijo u otra palabra comienza con r (contra + réplica = contrarréplica).
La Narración Periodística
La Noticia
La noticia es un tipo de texto narrativo periodístico que constituye un relato objetivo de un
hecho de actualidad e interés público en el que se informa de manera precisa y breve sobre un
tema determinado.
Para que una noticia sea efectiva, la información se ordena según la figura de una pirámide
invertida: los hechos no se presentan de forma cronológica (en el orden en que ocurrieron), sino
de mayor a menor importancia; en los primeros párrafos se responden seis preguntas básicas, en
los siguientes se agregan detalles, y en el final se propone un balance o cierre de la nota.
Primeros párrafos
Resto de la noticia
Dado que la noticia intenta ser objetiva, la información debe:
provenir de fuentes confiables,
presentarse de manera precisa,
no incluir juicios de valor u opiniones personales,
estar presentada en tercera persona.
¿Qué sucedió? ¿A quién?
¿Dónde? ¿Cuándo?
¿Cómo? ¿Por qué?
Detalles/
cierre
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Todo aquello que rodea a un texto se denomina paratexto y aporta claves para la lectura y
circulación de un texto. Gracias a los elementos paratextuales, es posible hacerse una idea
general del tema de un texto con una simple mirada.
El paratexto de la noticia está formado por elementos visuales (fotos, dibujos, gráficos) y
verbales. Entre estos últimos podemos distinguir:
La volanta: es una sola frase que anticipa el hecho ocurrido y se ubica sobre el título.
El título: presenta el suceso acerca del que se dará información.
El copete o bajada: sintetiza la información esencial y está ubicado bajo el título.
Los epígrafes: son textos que acompañan y explican la información visual.
Por otra parte, en el cuerpo de la noticia, que puede tener una extensión variable, se desarrolla
la información sobre el hecho.
La diéresis
La diéresis (también llamada crema) es el signo que consiste en los dos puntitos que se
colocan sobre la u (ü) de las sílabas gue, gui, para indicar que esa letra representa un sonido que
debe pronunciarse.
El punto
El punto es el signo de puntuación con el que se indica que una oración ha terminado. Si a
continuación sigue una oración en el mismo párrafo, se denomina punto y seguido. El punto y
aparte indica, además, el final de un párrafo. Si el punto cierra el texto, se denomina punto
final.
El punto también se emplea después de las abreviaturas, aunque, en este caso, la palabra que
sigue no se escribe con mayúscula inicial.
La coma en enumeraciones y aclaraciones
La coma se emplea, entre otros usos, para separar los elementos de una enumeración. En
general, antes del último elemento de la enumeración se emplea un coordinante (y, o). Por
ejemplo: Para el picnic pueden traer frutas, empanadas, sándwiches o cualquier alimento que
no necesite mucha refrigeración.
También se utiliza para delimitar aclaraciones. Por ejemplo: Ayer, como todos los viernes,
visitó a la bisabuela Irma.