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Publicación trimestral del Centre Espírita Amalia Domingo Soler, Barcelona, España.
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NACIMIENTO
VISIÓN ESPÍRITAVISIÓN ESPÍRITAAÑO 5 n Nº 20 n PRIMAVERA
¡NUEVA OPORTUNIDAD!
“Cada encarnación es comosi fuese un atajo en los
escalones de la ascensión."Emmanuel
2 Visión Espírita
editorial
COLABORADORES DE LA EDICIÓN 20 Alexandra Mielenhausen, Ana Laura Ibañez, Anna Vázquez, AndreaCampos, Gilda López, Ian Bermúdez, Janaina de Oliveira, Jesús delValle, Kédima Furquim, Marcello Pagnotta, Rafael Navarrete, SilverChiquero, Teresa Vázquez y Wellington Bossi.Fotos:Marcelo NogareMaquetación: Chris Magalhães
VISIÓN ESPÍRITAPublicación trimestral del Centre Espírita Amalia Domingo SolerCalle Ventura Plaja, 15 bajos - Barcelona - España - DL: B. 17623-2013www.ceads.kardec.es n amaliadsoler.blogspot.comBuzón de sugerencias y comentarios: [email protected]
DISTRIBUCIÓN GRATUITA
Kardec resumía en esta frase la epopeya de laevolución del Espíritu: “Nacer, vivir, morir,volver a nacer y progresar siempre, tal es laley”. Durante este año, en el apartado “Filosófico”de Visión Espírita, trataremos cada una deestas fases. En esta primera edición, hablare-mos de manera sencilla y directa sobre el na-cimiento, sobre lo que él representa para elser humano desde el punto de vista espiri-tista. En la próxima edición, que publicaremosa principios de Julio, hablaremos de la vida te-rrenal. Luego, en la tercera edición de esteaño, el tema será la muerte física. Para acabarel año, hablaremos sobre la vida en el planoespiritual, antes de una nueva encarnación.Intentaremos, de esta manera, explicar el sen-tido amplio que tiene la vida desde el puntode vista del Espiritismo, y de cómo, poco apoco, vamos progresando.En esta primera edición de 2014, tambiénempezamos con una nueva columna endonde hablaremos, en cada número, de los as-pectos básicos del Espiritismo, de una ma-nera objetiva. La idea aquí es hacer llegar elmensaje espírita a personas que todavía noconocen la Doctrina, o bien están en sus pri-meros acercamientos a ella.Como siempre, tenemos un contenido amplioy diverso, intentando, humildemente, hacer lalectura de la revista amena e instructiva.El mes de abril siempre es especial paraCEADS ya que celebramos la Jornada Espiri-tista de Barcelona. El tema de este año es“Conciencia Espírita”. El programa está prepa-rado con mucho cariño e ilusión y esperamosque sea un gran día de confraternizaciónentre amigos y familiares, espíritas o no. Es-peramos que sea un éxito, no para el CEADS,sino para todos aquellos que puedan asistir.Además, en junio de este año, CEADS cumple20 años de existencia. El centro ha crecido, hacambiado de local, muchos trabajadores hancontribuido para su desarrollo… Esperemosque siga fuerte, cada vez más consolidando sutarea de transmitir las enseñanzas del Espiri-tismo, de promover consuelo a los necesita-mos y de practicar la caridad que, sabemos,es la mayor vía de evolución, enseñada porJesús.¡Disfruten de la vida!
Conociendo el Espiritismo 3De la A a la Z
Pentateuco 4Ideas Innatas
Sistemas
Las 3 revelaciones - MOISES
Capítulo III - El Cielo
Ciencia y la creación
Psicología de la evolución 9Actos de conciencia, para la gloria de Dios
De la muerte al nacimiento
Filosofía do ser 11Nacimiento
Ciencia & Salud 12Más Allá del Cuerpo Físico
XII Jornada Espiritista de Barcelona14Conciencia Espirita
Ocio del bien 16Agenda
Memorias del Padre Germán
de Amalia Domingo Soler
Personalidad 19León Denis
Miguel Vera
sumario
Una gran dificultad para muchos espiritistas es saber
cómo explicar a los que llegan por primera vez al centro
espírita, a los amigos o parientes cosas respecto de lo que
creemos y estudiamos. Principalmente durante el
momento de ayudarlos, tranquilizarlos ante las
vicisitudes y las duras pruebas de la vida; cuando hay una
“perdida” de un ser querido, cuando un padre está
enfermo o un hijo no está en el camino correcto.
A menudo es un reto adecuar el lenguaje espírita al
cual estamos acostumbrados pero es parte de nuestro
trabajo. Esta es una parte muy importante de nuestro
trabajo. Como ejemplo mayor, tenemos al Maestro Jesús,
que hablaba de las cosas del cielo con simplicidad y
delicadeza para que todos pudiesen entender.
Una de las razones que hay para esta diferencia de
vocabulario es el hecho de que las enseñanzas espíritas
son novedosas para muchos. Es importante que
utilizemos un lenguaje sin dogmas o creencias para que
no se vincule a ninguna otra filosofía o religión. Es
verdad que todo lo que decimos no es misterio alguno
para los que creen en la existencia de la vida eterna, de
una Inteligencia Superior y que todo tiene una razón
según las leyes naturales, por ejemplo, la de causa y
efecto.
De esta manera iniciaremos un recorrido para
conocer de manera resumida la historia del Espiritismo
y su lenguaje filosófico-científico.
SU HISTORIA
Está basada en algunos principios fundamentales: la
existencia de Dios como Inteligencia Suprema, la
inmortalidad del alma, la reencarnación para el progreso
del espíritu, la pluralidad de los mundos habitados, la
comunicación con los espíritus y la propia moral espírita.
Fue revelada por varios espíritus al mismo tiempo y
por todo el planeta. Allan Kardec, un pedagogo francés,
se encargó de unir toda esta información, codificando los
mensajes recibidos por los Espíritus Superiores,
siguiendo una metodología de estudio muy rigorosa,
analizando cada uno de los mensajes y sus enseñanzas
morales con el objetivo de transmitir las Leyes Divinas
de manera clara, sin dogmas o preconceptos.
PERO… ¿QUÉ ES EL ESPÍRITU, EL ALMA Y LA
REENCARNACIÓN?
El Espíritu es el principio inteligente del Universo
creado por Dios, (Inteligencia Suprema). No son creados
en el momento de la concepción humana. Son creados en
el plano espiritual (también entendido como
erraticidad), que es la morada de todos los espíritus.
Poseen un tipo de materia menos densa que la carne
humana. Dio nos crea simples e ignorantes para que
tengamos las mismas oportunidades de aprendizaje y
evolución a través de nuestros propios méritos. No existe
ningún elegido. Somos y vivimos la realidad según
nuestras elecciones ante las Leyes Divinas.
El alma, en el contexto espírita, es este mismo
Espíritu encarnado. Es decir: que tiene un cuerpo de
carne, como nosotros ahora mismo. Venimos del plano
espiritual al plano material en un nuevo cuerpo para
aprender y evolucionar. Esta acción de volver a la carne
repetidas veces para pasar por nuevas experiencias se
llama reencarnación. Los mundos materiales son
escuelas, por las cuales pasamos para aprender,
desarrollar nuestras potencialidades y evolucionar como
seres eternos. Es por eso que “vivimos” en este plano
material el tiempo necesario para “aprobar” esta etapa,
y volveremos tantas veces sean necesarias para superar
más y más etapas de esta gran universidad de amor
llamada vida.
La Doctrina Espírita es también una ciencia de
observación y experimentación. Por lo que todo debe ser
estudiado y reflexionado ya que no es la verdad unánime.
A diferencia de algunas creencias espiritualistas, el
Espiritismo trata la comunicación con los espíritus de
manera metódica y responsable, según las orientaciones
de los Espíritus Superiores. Para tanto, Kardec fue el
hombre responsable de codificar. Es decir: de recoger la
información recibida y catalogarla de manera metódica
y sistematizada , de todos los mensajes mediúmnicos que
llegaban de todas las partes del planeta, y poniendo a
prueba cualquier manifestación sin seriedad.
Para entender el proceso que fue utilizado para la
codificación o revelación espírita, transmitida por los
Espíritus Superiores (seres desencarnados que viven en
la erraticidad), es necesario entender qué son los
mensajes mediúmnicos.
La palabra médium significa intermediario. En este
caso, es una persona que posee más desarrollada la
facultad de comunicación con los espíritus
desencarnados. No es un don, pues NADIE tiene
privilegios o son elegidos por el Creador, todos somos
iguales pero en fases de evolución diferentes según
nuestros propios esfuerzos.
Los mensajes mediúmnicos son la consecuencia de
esta comunicación pudiendo ser a través del habla,
escritura o intuición, entre otros. El contacto con los dos
planos de la vida, encarnados y desencarnados, nos sirve
de lección para que podamos entender la vida eterna,
practicar la caridad con nosotros mismos y con otros
seres, encarnados y desencarnados. Por no ser un don o
una predilección, por ser una facultad biológica como
otra cualquiera (como el habla o la visión), no se trata de
una ventaja para el que la posee. Para poder alimentar el
cuerpo material, normalmente aprendemos un oficio
material, que garantiza nuestra supervivencia. Las
facultades espirituales sirven para alimentar el Espíritu
para la práctica del bien; y no deben ser usadas para
sustentar el cuerpo material y los goces de la vida
mundana. De manera clara: no se debe cobrar por usarse
la mediumnidad.
CONCLUYENDO
De acuerdo con Kardec, “El Espiritismo es la ciencia
que trata de la naturaleza, origen y destino de los
Espíritus, y sus comunicaciones con los hombres. Al
mismo tiempo es una ciencia de observación y una
doctrina filosófica.”
Fue codificada por Kardec en el apogeo de la Era de
la Ciencia, donde Paris era el centro de los
descubrimientos y muy abierta de pensamiento,
momento propicio para empezar a estudiar algo nuevo
sin perjuicio o prohibición.
En algunas pocas palabras hemos resumido su
historia y surgimiento como filosofía de vida, ciencia de
experimentación y transformación del hombre en un ser
de bien con bases solidas de una fe racional, sin misterios,
dogmas o rituales.
Los principales objetivos del Espiritismo son
promover la reforma íntima de la humanidad, reafirmar
las enseñanzas morales de Jesús interpretándolas de
manera racional, desarrollar la fe razonada y guiarnos
hacia la vida futura a través de las leyes perfectas de la
Inteligencia Suprema.
En el Espiritismo no se cree que el hombre sea
malo por naturaleza. Pero sí se cree, que este tiempo
como espíritus encarnados sirve para su evolución
como seres eternos.
La vida como la conocemos está basada en tres
principios: Dios, Espíritu y materia. Siendo esta última,
más o menos densa según las condiciones de evolución
de los espíritus y los planetas que habitamos.
Una vez tengamos claro las palabras del
vocabulario espiritista como alma, caridad, encarnar,
erraticidad, Espíritu, evolución, Dios como la
Inteligencia Suprema, materia, mediumnidad,
reencarnación y vida eterna, podremos seguir adelante
con el estudio con más facilidad. (A.C.)
Visión Espírita 3
Conociendo el Espiritismo
DE LAAA LAz
4 Visión Espírita
Pentateuco
TERESA VÁzQUEz
El Libro de los Espíritus- Allan Kardec
Capítulo IV. Pluralidad de existencias. Punto IX.
Emmanuel dice “El libro es el comando mágico de
las multitudes; y sólo el libro noble, que esclarece la in-
teligencia e ilumina la razón, será capaz de vencer a las
tinieblas del mundo”. Encontramos esta cita en la edi-
ción del Libro de los Espíritus de 1981, Editora Argen-
tina 18 de abril. Treinta tres años después de esta cita,
ampliaríamos el significado de la palabra “libro” y uti-
lizaríamos otros recursos actuales mágicos para la in-
teligencia y la razón, como son las redes sociales,
youtube, twitter,…
De igual manera ocurre con el lenguaje utilizado
en el Libro de los Espíritus que data de 1857 y que nos
llega ciento cincuenta y siete años después mante-
niendo el manuscrito original sin ninguna adaptación.
El contenido no caduca porque pertenece al lenguaje
universal del alma, más sí la forma, como la vida
misma en la que los cuerpos perecen a la decadencia
natural de la materia, mientras que la esencia pervive
en otras planos vibratorios.
En el punto VIII del capítulo IV del Libro de los Es-
píritus, titulado Semejanzas físicas y morales”, encon-
tramos (como ocurre a lo largo de la lectura del libro),
un lenguaje de la época que utiliza los vocablos bien y
mal para distinguir entre lo susceptible de corrección
y lo correcto. Con la conciencia actual, sabemos que el
mal y el bien son aspectos de la unidad; podríamos
decir que el mal no ha sido creado por Dios siendo
Éste el Creador de cuanto existe, pero sí nos dotó de
libre albedrío para utilizar nuestro poder co-creador,
sabiendo que cuánto hiciéramos con él, permanece
sujeto a las leyes divinas y por tanto a la integración y
unidad con Dios, Fuente de Vida Eterna y Amor Incon-
dicional.
En la respuesta 214 del L.E, los espíritus dicen
“por lo general, no tomáis suficientemente en cuenta
las figuras poéticas”. Es por eso que para comentar el
punto IX referente a “Ideas innatas”, voy a utilizar un
lenguaje poético por ser el lenguaje que surge del co-
razón para el corazón, recordando que éste es el ór-
gano por excelencia de Vida y sus pulsaciones vibran
con la frecuencia armónica de la naturaleza, la Tierra,
los astros, el cosmos y toda manifestación de Vida.
El Espíritu encarnado proviene de lo que llama-
mos “mundo espiritual” en el que habita con la “indu-
mentaria” adecuada a la vibración existente, de ahí
que en vibraciones más sutiles y puras, los espíritus
se manifiesten como haces de luz resplandeciente y
rasgos indefinidos asexuados. Conforme la frecuencia
se altera para modificar la estructura corporal del es-
píritu en su proceso de materialización hasta llegar a
la reencarnación en la tierra, ciertos recuerdos que-
dan retenidos en su memoria celular y su ADN de
forma que le acompañan en todo el bagaje encarna-
torio, guiándolo en su misión existencial pero en un
plano inconsciente para que no domine las decisiones
que el individuo pueda tomar según su libre albedrío.
Como ejemplo podemos utilizar el de la persona que
vive en la zona del ecuador planetario y se desplaza a
Finlandia o cualquier país cerca de los polos: la clima-
tología y las condiciones ambientales son totalmente
diferentes a lo que está acostumbrada, por lo que de-
berá adaptarse a su hábitat con nueva vestimenta,
costumbres, hábitos,... Con el tiempo, el recuerdo del
clima tropical pasará a ser vago e incluso confuso, lle-
gando incluso a olvidarlo por completo. Cuando en-
carnamos ocurre algo parecido, la materialización nos
obliga a pagar el cánon del olvido y nosotros como es-
píritu, asumimos el reto y encarnamos dispuestos a
cumplir nuestra misión existencial.
Todo lo vivido en vidas anteriores forma parte de
nuestra experiencia como espíritus inmortales y “en
cada nueva existencia, el Espíritu toma como punto de
partida el alcanzado en su vida precedente” aunque las
circunstancias externas sean totalmente diferentes,
de ahí que en una encarnación anterior puede vivir
como un esclavo africano y en la siguiente un terrate-
niente norteamericano, o cualquier otro ejemplo que
tenga este mismo significado. La memoria que queda
archivada en el alma es de las vivencias del personaje
encarnado, no del “atrezzo”. “El cuerpo cambia pero no
el Espíritu, aunque mude de vestimenta”.
Los talentos y dones son adquisiciones del alma y
por tanto pertenecen a ella aunque no se manifiesten
en todas las reencarnaciones ya que, “una determi-
nada facultad puede permanecer aletargada durante
la existencia, porque el Espíritu quiere ejercer otra que
no tiene relación con aquella. Entonces queda en estado
latente para reaparecer más tarde”, en otra existencia
o en momentos clave de la existencia actual.
Los Espíritus nos dicen que “el Espíritu encarnado
tiene la conciencia instintiva del Mundo Invisible, pero
muchas veces ésta es falseada” por prejuicios, intere-
ses, poderes y mentes subyugadas por la ilusión de las
formas, que quieren mantener la esclavitud y la de-
pendencia emocional y afectiva de las personas para
permanecer en un estatus ficticio de Poder efímero
que genera dolor, guerras, luchas, hambre y miseria a
todos los niveles. Estamos hablando de todos aquellos
seres humanos que se han olvidado de su naturaleza
divina hasta el punto de renegar de ella y actuar en
contra de ella. Cuando la mente se encuentra libre de
ataduras, la conexión con el mundo espiritual se vi-
vencia como un reencuentro, el retorno a la forma na-
tural de vivir y Ser en el mundo. Por eso tantas
personas se acercan cada vez más a la vivencia de la
espiritualidad, para reconfortar su alma y sanar sus
aflicciones, sus carencias, sus crisis personales y co-
lectivas alimentadas por una vida volcada a la muerte
y la destrucción, a la individualidad, exclusión, miseria
de todo tipo.
Los Espíritus nos dices que el Ser Humano existe
como manifestación de la Belleza Divina, por tanto
nuestra condición es ser felices, libres, solidarios,
amorosos, afables, acogedores, creadores de acciones
para la vida, por la vida y con la vida.
IDEAS INNATASel libro de los espíritus
Visión Espírita 5
Pentateuco
SISTEMASWELLINGTON BOSSI
Como sabemos en el siglo XIX los fenómenos
mediúmnicos empezaron a sucederse en diferen-
tes partes del mundo y fueron motivo de análisis
por varios estudiosos, muchos de ellos contra-
rios al Espiritismo. El pedagogo francés Allan
Kardec, en su trabajo de codificación del Libro de
los Médiums, nos presenta un estudio de estos
análisis categorizándolos por sistemas. Este es-
tudio nos enseña la rigurosa seriedad con que
Kardec desarrolló su obra de
codificación. No quedó tema
alguno sin ser cuestionado, sin
ser analizado, sin ser tenido
en cuenta.
En el complejo capítulo IV
del Libro de los Médiums, el
autor divide los fenómenos
espíritas en dos clases: los fe-
nómenos físicos y los fenóme-
nos intelectuales. Quienes
niegan la existencia de los es-
píritus no aceptan que exista
algo más allá de la materia,
por consiguiente, niegan la
realidad de estas manifesta-
ciones. En este texto tratare-
mos algunos de estos
sistemas, empezando por los
sistemas basados en la negación.
Sistema del charlatanismo: considera los fe-
nómenos espíritas como obra del engaño, inspi-
rado por un prejuicio originado por personas
que usan la fenomenología para llamar la aten-
ción, basado en un protagonismo egocéntrico y
aprovechando la buena fe de los participantes en
estas sesiones. La razón nos dice que no se debe
juzgar una parte, mientras se desconozca con
profundidad la totalidad.
Sistema de la locura: descarta el fraude malin-
tencionado pero entiende que quienes intentan
engañar a los demás, en realidad se están enga-
ñando a si mismos. Kardec no descarta que hu-
biese entre los espíritas algunos excéntricos, sin
embargo, sabiamente avisa que “[…] habría que
ser muy mal crítico para confundir la exagera-
ción que se hace de una cosa con la cosa misma”.
Sistema de la alucinación: variante del sistema
de la locura, está basada en que los objetos no se
mueven en realidad, sino que se trata de una alu-
cinación. Por tanto, si una persona ve cómo una
mesa se levanta y gira, de entre un grupo de per-
sonas que no lo ve, podría sospecharse que se tra-
tara de una alucinación. Sin embargo si todo el
grupo observa lo mismo y no se detecta ninguna
causalidad humana, por así decirlo, la argumen-
tación de la alucinación quedaría invalidada.
Sistema de las causas físicas: concepto que se
aleja de la negación absoluta, al aceptarse la reali-
dad de los acontecimientos y al creer en una causa
puramente física. En este caso la acción causante
de los fenómenos puede ser originada gracias al
magnetismo, residente en la electricidad o en cual-
quier otro fluido. Este sistema puede explicar al-
gunos fenómenos, pero no todos, ya que en
muchos se identifica una inteligencia causante.
Sistema del reflejo: da un paso más al partir
del principio en que se reconoce una acción in-
teligente, quedando por descubrir o estudiar su
origen. Se pensaba que residiría en la inteligen-
cia del médium o en la de los asistentes, aunque
con el tiempo, se ha observado que muchos fe-
nómenos son ajenos a la inteligencia de estas
personas.
Sistema de sonambulismo: apoyado por mu-
chos correligionarios, entonces y aún hoy en día.
Admite que todas las comunicaciones tienen ori-
gen en el espíritu del médium y cuando las co-
municaciones van más allá de las capacidades
intelectuales del médium, se explican debido a
un estado sonámbulo que exalta y desarrolla los
sentidos de la inteligencia del médium. Sin em-
bargo gracias a diferentes estudios y observacio-
nes, se aclara que este sistema no consigue
justificar todos los acontecimientos.
Estos son apenas algunos de los sistemas que
se han definido para explicar los fenómenos
mediúmnicos de la época. En sus análisis, Allan
Kardec los ha tenido todos en cuenta inclu-
yendo también las ideas divergentes del Espiri-
tismo, demostrando cómo la lógica Espírita se
fundamenta en la verdad analítica.
el libro de los médiums
6 Visión Espírita
Pentateuco
JANAINA DE OLIVEIRA
Nos cuenta el evangelista Mateo ( 5:17 y 18)
que Jesús no vino a corregir lo que habían dicho
los profetas que le precedieron. El Maestro afir-
maba que lo que él enseñaba no contradecía la ley,
sino que la confirmaba. También su encarnación
y su martirio habían estado anunciados antes de
su venida a la Tierra: el Maestro no vino a revocar
la ley, sino para cumplirla. A primera vista puede
parecer extraño que así pensara Jesús. Su moral
fundamentalmente basada en la mansedumbre,
convoca en cada palabra al amor a Dios sobre
todas las cosas y al prójimo como a uno mismo;
al perdón incondicional, a la caridad y a la humil-
dad como modos de vida. No deja de sorprender
que el Maestro dijera que había venido a confir-
mar la ley, cuando la leyes como la de Talión, del
“ojo por ojo, diente por diente”, establecida por
Moisés, aparentemente chocan tanto con su pro-
puesta evangélica.
Nos aclaran los espíritus, sin embargo, que
hay que hacer una distinción entre la parte divina
de la ley promulgada por Moisés y la parte civil
disciplinaria de su legado. Como legislador de un
pueblo todavía influenciado por el culto a las imá-
genes, la evocación frívola de los espíritus, con un
sentido moral y de justicia todavía poco desarro-
llados, Moisés estableció leyes que eran adecua-
das al contexto cultural y histórico que le
correspondió vivir. Por otra parte, como profeta,
intérprete de mensajes procedentes de los planos
espirituales y espíritu de gran elevación, el legis-
lador hebreo ofreció a su pueblo reglas de convi-
vencia pacífica, entre ellas los diez
mandamientos, de carácter divino, que por su na-
turaleza y origen sagrados trascienden el tiempo
y el espacio.
La ley del “ojo por ojo, diente por diente” apa-
rece en la enseñanza del pueblo de Israel, es decir,
en lo que los Judíos llaman la Torah y los cristia-
nos llaman Pentateuco o ley escrita de Moisés,
que se refiere al texto de los cinco primeros libros
de la Biblia: Génesis, Éxodo, Levítico, Números y
Deuteronomio. Solemos pensar en la Ley de Ta-
lión como una ley que justifica la venganza, pero
en realidad es una ley que, como todas las demás,
se creó para mantener la paz y el orden social. El
ego se encarga de que veamos en el enunciado
“ojo por ojo, diente por diente” la posibilidad de
infligir a los demás el mismo daño que nos hagan
a nosotros, pero otra lectura es posible. En lugar
de pensar en esta ley como una aval a la venganza,
podemos comprender que pretendía poner freno
a la práctica del crimen. En otras palabras, antes
que permitir nuevas actitudes violentas, la Ley de
Talión pretendía que las personas no hicieran
daño a los demás por miedo a la represión que
podrían sufrir en el caso de que lo hicieran. Ob-
viamente, cada periodo histórico y cultural tiene
las leyes que caracterizan su nivel evolutivo y la
Ley de Talión plasma el momento vivido por la
humanidad de hace dos mil años. Tampoco es que
nos podamos vanagloriar de estar mucho más
adelantados actualmente, si pensamos que mu-
chas personas solo hacen lo que es correcto si
existen leyes que les obliguen a hacerlo.
En la Doctrina Espírita se conoce a la parte di-
vina de la ley mosaica como la Primera Revela-
ción; la propuesta evangélica de Jesús como la
Segunda Revelación, y a las enseñanzas de los es-
píritus como la Tercera. Cada nueva revelación
confirma y actualiza, en función de la evolución
intelectual y moral de los pueblos a los que van
dirigidos, el mensaje de la inmortalidad del alma
y de la necesidad de hacer al prójimo lo que se
desearía que se nos hiciera a nosotros mismos
como camino de aprendizaje del amor cósmico.
Las 3 revelaciones - MOISÉSel evangelio según el espiritismo
Visión Espírita 7
SILVER CHIQUERO
En todas las épocas el hombre ha creído en
forma intuitiva, que su vida futura sería feliz o
desdichada según el bien o el mal que haya
obrado, siendo las penas y recompensas el re-
flejo de sus instintos predominantes. El hombre
primitivo sólo podía concebir aquello que veía,
así reunió todos los suplicios, torturas y afliccio-
nes ideando su propio infierno, relacionándolo
con penas materiales. Por esa razón los infier-
nos de todas las religiones se parecen entre sí.
Se hallan numerosas analogías entre el Tár-
taro (infierno de los paganos) y el Infierno (de
los cristianos), aunque el primero trataba de tor-
mentos individuales sin recrear su vista con los
suplicios mientras que el segundo trataba de los
tormentos colectivos con sus calderas hirvientes
para los condenados. Ambos tienen su rey, Plu-
tón gobierna sin ser malvado, reteniendo al mal-
hechor; mientras que Satán goza de los
tormentos que infligen sus legiones demoníacas.
Por la visión limitada de aquellas épocas se
supuso la mansión de la felicidad en las regio-
nes superiores (Campos Elíseos vs Olimpo) y
el lugar de los suplicios en las inferiores (Tár-
taro vs Infierno). Al circunscribirse Cielo e In-
fierno a sólo dos situaciones, no se puede
pensar en diferentes grados sin aceptar la idea
de superarlos y por tanto, de progresar.
El Tártaro es conocido por la poesía de Ho-
mero y Virgilio y la prosa más precisa de Fene-
lón, donde los jueces proporcionan las penas
en relación a las faltas. El Infierno es conocido
por citaciones fidedignas de los libros de auto-
res sagrados y vidas de santos, donde la mate-
ria es base de todas las torturas, sin equidad.
En el Tártaro vemos a los culpables tortu-
rados por los remordimientos, siempre enfren-
tados a sus crímenes y a sus víctimas, todos
llevan en sí el estigma de su pasado, son casti-
gados por las faltas cometidas; pero a imagen
de sus existencias terrestres, son sólo sombras,
almas con sus cuerpos fluídicos.
En el Infierno hay demonios, condenados y
santos que son sólo espíritus que resucitarán
el último día, los elegidos en un cuerpo purifi-
cado y los condenados en un cuerpo manchado
y deformado por el pecado.
Los teólogos suponen que Dios obra dos mi-
lagros, el primero sacando del sepulcro a nues-
tros cuerpos tal cual habían entrado en él,
cubiertos con las cicatrices que la vida y la
muerte les imprimieron; el segundo al recibir la
inmortalidad, que perdieron ante la cólera de
Dios, al ser expulsados Adán y Eva del paraíso.
Dios cambia las leyes y las propiedades de
la materia por él mismo creadas, perpetúa esa
podredumbre viva, la arroja al fuego, no para
purificarla sino para conservarla sufriente y
ardiente. Debido a estos milagros, Dios se con-
vierte en uno de los verdugos del inferno, pues
si sólo a sí mismo pueden los pecadores impu-
tarse sus males espirituales, no ocurre lo
mismo con los males de las carnes, atribuidos
sólo al Creador.
CAPÍTULO III
EL INFIERNO
Pentateucoel cielo y el infierno
8 Visión Espírita
RAFAEL NAVARRETE
Desde tiempos remotos la historia correcta
del origen de todas las cosas se confunde con la
historia religiosa sobre el origen y la formación
del Universo, bien porque las primeras teorías
acerca de los planetas estaban plagadas de
errores, bien porque todavía necesitaba
desarrollarse la inteligencia colectiva, para
entender las leyes de la física (ley de gravedad,
calor, luz), la astronomía (movimientos, volumen
y papel de los cuerpos celestes), la química
(transformación de la materia), la geología
(formación de los estratos terrestres), botánica,
zoología, paleontología; se puede decir pues, que
“la ciencia es la encargada de explicar La Génesis
según las leyes de la Naturaleza”.
Hoy por hoy, la ciencia no ha logrado resolver
todas las incógnitas que suscita la génesis, pero es
innegable que desmontó definitivamente los
errores capitales, asentando con datos ciertos una
base sólida, mientras que los puntos aún no
aclarados son de menor importancia y no
perjudican el conjunto.
Desde tiempos remotos las religiones nos han
intentado explicar el origen del mundo, desde
Moisés hasta nuestros días, pero la ciencia
comprueba que algunas de las escrituras
sagradas no concuerdan con la realidad, por
tanto hay que sacrificar las contradicciones,
saber resignarse y amoldarse al nuevo estado de
las cosas, porque los dogmas no son absolutos.
No por esto, los creyentes dejarán de tener fe ni
de creer en esta o aquella religión.
“Ninguna religión jamás progresó
positivamente sosteniendo errores manifiestos.
La misión de la ciencia es descubrir las leyes de
la Naturaleza; como estas leyes son obras de
Dios no pueden ser contrarias a las religiones
que se basan en la verdad”.
La génesis comprende dos partes: la historia
de la formación de los mundos y la Tierra, y la
historia de la humanidad en su doble principio
(espiritual y corporal); desde el punto de vista
científico, se determinó con gran precisión los
mecanismos del Universo y también del
organismo humano. Pero considerando el ser
Espiritual, la ciencia no llegó a comprenderlo del
todo y no ha sido el objetivo de sus
investigaciones, delegándolo en la Filosofía; a su
vez, ésta formuló teorías contradictorias,
partiendo de la espiritualidad pura hasta llegar a
la negación del principio espiritual e incluso de
Dios, dejando la respuesta sin resolver.
Para el hombre, éste es el problema más
importante, ya que se relaciona con su pasado y
con su futuro y sobre estos interrogantes, la
ciencia guarda silencio.
Las religiones reconocen la existencia del alma
aunque no lo demuestren, pero no se ponen de
acuerdo en su origen, su pasado, ni su porvenir,
siendo esto lo esencial al ser humano.
“Si el problema del hombre como ente
espiritual es todavía hoy una mera teoría, se debe
sin duda a la falta de medios directos de
observación [...]; para fijar las ideas faltó el
elemento espiritual”.
En el Espiritismo, ese estudio es experimental;
con la ayuda de la mediumnidad, el hombre se
encuentra en posesión de un nuevo medio directo
de observación, una vez en contacto con los seres
del mundo espiritual, nos ha sido dada la
posibilidad de conocer las leyes divinas en
relación al elemento espiritual. La mediumnidad
en relación con el mundo espiritual es para los
humanos, lo que el telescopio para las estrellas o
el microscopio para los microorganismos.
“El mundo material y el espiritual están en
contacto constante, son mundos solidarios entre
sí y ambos tienen su parte activa en la génesis. Sin
el conocimiento de las leyes que rigen el Mundo
Espiritual sería imposible tener una concepción
integral de la génesis”.
Ciencia y la Pentateuco
la génesis
CREACIÓN
Visión Espírita 9
En la vida cotidiana hay incontables cosas que
hacemos de forma mecánica, sin ni siquiera darnos
cuenta de cómo o porqué las hacemos de una ma-
nera en particular. Las repetimos cada día sin parar
a reflexionar sobre ellas. Otras, sin embargo, las ha-
cemos porque nos sentimos, por alguna razón o
necesidad, obligados a hacerlas. Tal vez si las deja-
mos de hacer nos sentiremos culpables o no reci-
biremos la compensación emocional o económica
que esperamos por actuar de una determinada
manera; tal vez no creemos tener la fuerza de vo-
luntad necesaria para actuar de forma diferente.
También hay cosas que hacemos o dejamos de
hacer por temor a las consecuencias, nos reprimi-
mos o nos forzamos a actuar de una forma en par-
ticular porque deseamos evitar que algo suceda.
Finalmente hay cosas que decidimos hacer porque
nos llenan, porque son importantes para nosotros,
porque nos realizamos cuando las hacemos y nos
sentimos mejores al hacerlas. Son actos de con-
ciencia presente, lúcida, emocional e intelectual-
mente bien fundamentados.
¿Qué “cosas” son estas? Pueden ser la oración
que hacemos cada día, los comentarios que hace-
mos sobre nuestros compañeros de trabajo, el tono
de voz que ponemos a un familiar, la decisión de
dejar de fumar o de tomar otro cigarrillo, las tareas
profesionales, las actividades que realizamos
cuando deseamos descansar, las fotos que compar-
timos en las redes sociales, las horas que dedica-
mos al voluntariado o las actividades en las que
colaboramos en el centro espírita. Imaginemos por
un instante que pudiéramos hacer un listado de
todo cuanto hacemos en un único día. Luego que
pudiéramos clasificar cada actitud como motivada
por la rutina, por la obligación, por una voluntad
débil, por el temor o finalmente por un acto libre
de la conciencia. ¿Cuánto de lo que hacemos cada
día llevaría la etiqueta: “acto de conciencia”?
Para el apóstol de los gentiles este era un punto
clave en las enseñanzas que compartía a través de
sus cartas. Pablo instruía a las recién formadas co-
munidades cristianas a pensar de forma sensata y
a actuar de forma coherente a sus principios. Sus
cartas aconsejaban a analizar la ley y el evangelio a
partir de la conciencia.
¿Acaso mi libertad va ser juzgada por la con-
ciencia de otro? (1ª Carta a los Corintios, 10:29)
Para este incansable trabajador del evangelio,
no había mérito alguno en la observancia de la ley
por temor, obligación o tradición. Sólo los actos de
conciencia son, para el apóstol, para la gloria de
Dios. Así nos lo enseña en la primera epístola a los
Corintios.
En resumen, sea que ustedes coman, sea que
beban, o cualquier cosa que hagan, háganlo todo
para la gloria de Dios. (1ª Carta a los Corintios,
10:31
Nos dicen los espíritus en la pregunta 621 de El
Libro de los Espíritus que la ley de Dios está inscrita
en la conciencia del hombre. Siguiendo los consejos
de Pablo, es importante que nos esforcemos por ar-
monizar los gestos y pensamientos de la vida coti-
diana con la ley cósmica universal. Poner el piloto
automático, dejarse arrastrar por una voluntad
débil o vivir reprimiéndonos por temor o senti-
mientos de culpabilidad no nos hace avanzar, aun
cuando pensamos que no estamos actuando mal.
Pongamos como objetivo actuar des de una con-
ciencia presente, lúcida y cósmica de forma cada
vez más frecuente en las pequeñas cosas de la vida
cotidiana todos los días de nuestras vidas. (J.O.)
Psicología de la evolución
Actos de conciencia,para la gloria de Dios
KÉDIMA FURQUIM
Cuando una vez decidido, por la volun-
tad del Padre Creador, que nuestra estancia
en la tierra se ha acabado, es cuando real-
mente empezamos a vivir. En este mundo
de pruebas y expiaciones en el que vivimos
aprendemos y adquirimos experiencias
cada día. Aún no sabemos y no aceptamos
la muerte como deberíamos, porque nos
falta mucho por aprender. Pero una vez que
empezamos a estudiar la doctrina de luz,
es cuando comprendemos que seguimos
aprendiendo, también en el otro lado, es
decir, en el plano espiritual. Una vez desen-
carnados, pasado un tiempo en la erratici-
dad, nos preparamos, de nuevo para volver
a reencarnar. Se nos da esa nueva oportu-
nidad y nos disponemos para un nuevo na-
cimiento. Desde el mundo espiritual,
siempre según nuestro merecimiento, te-
nemos la oportunidad de elección, tene-
mos la oportunidad de elegir a la familia
con la que queremos vivir. Los lazos de san-
gre ya se planifican desde el otro lado.
Los padres tienen una responsabilidad
muy grande en relación a los hijos.
Según Emmanuel: “Asumir el compromiso
de la paternidad constituye un engrande-
cimiento para el espíritu, a partir del mo-
mento en que el hombre y la mujer
comprendan el carácter divino”. La mayoría
de los padres se equivocan muchas veces,
sea el en exceso de ternura o en demasia-
das exigencias, pero la luz del evangelio
hace con que la familia camine junta bus-
cando el equilibrio.
Aprendemos durante toda nuestra exis-
tencia, siempre estamos a tiempo de ins-
truirse, sea el educando o el educador.
Aprendemos con las experiencias, vamos
evolucionando y creciendo.
Nos cabe a nosotros educadores y,
sobre todo, a los padres, la tarea de dar-
les a los niños la ayuda y el equilibrio del
hogar para que puedan hacer que su en-
carnación sea lo más armoniosa posible,
y posibilitarles las herramientas correc-
tas para su evolución.
La educación espírita nos enseña la im-
portancia de orar y vigilar, pues el pensa-
miento tiene una fuerza que muchas veces
no podemos imaginar. Los pensamientos
siendo buenos se transforman en instru-
mentos de elevación moral y espiritual. Los
pensamientos inferiores generan ondas
nefastas, atrayendo en muchos casos a es-
píritus inferiores, envolviéndonos en su
zona vibratoria, y agravando nuestros pro-
blemas, sean ellos de orden moral o físico.
10 Visión Espírita
Psicologia de la evolución
Aprendiendosiempre
Visión Espírita 11
Filosofía del ser
ANNA VÁzQUEz
Cuando esperamos un bebe y sabemos que
seremos padres; cuando nos anuncian que na-
cerá un hermano, o sobrino, o incluso cuando
unos amigos nos informan de que están emba-
razados… nos invade una sensación de alegría
inmensa… ¡un nuevo ser nacerá! ¡El ciclo de la
vida empieza otra vez!
Nuestra alegría ante la buena noticia, quizá
nos haga reflexionar sobre la importancia de la
venida de un ser entre nosotros. Una nueva vida
que quizá tendrá los ojos de su padre, los labios
de su madre, las manos de su tío… pero que a
pesar de cualquier similitud o parecido gené-
tico con sus progenitores, es un espíritu inde-
pendiente, individual y único.
Es un ser que se ha preparado para comen-
zar de nuevo en la vida material, un espíritu que
ya ha aceptado la necesidad de tener una nueva
existencia física para vivenciar situaciones ne-
cesarias, para poner en práctica todo aquello
que sabe que le ayudará a mejorar, a caminar
con paso firme por el sendero del progreso.
El nacimiento es la última fase de un proceso
en la que el espíritu se une al cuerpo físico, a
una envoltura carnal que durante todo el pro-
ceso de gestación se va formando, uniendo mo-
léculas del periespíritu a moléculas del cuerpo
físico en formación, enraizándose en el nuevo
vestido que le servirá para transitar por esta
nueva oportunidad, para aprender, para expe-
rimentar quizá, sensaciones y sentimientos con
los que tendrá que lidiar para encontrar la paz.
Esta nueva experiencia, que es la vida car-
nal, ofrece la oportunidad de recomenzar, de
volver a encontrar a otros seres con los que
estamos vinculados, a sentir sensaciones
quizá olvidadas, sentimientos más maduros,
a aprender nuevas ciencias que enriquezcan
nuestra inteligencia, a terminar proyectos in-
acabados…
El nacer nos ofrece un sinfín de situaciones
provechosas para el progreso hacia el amor.
¡Bienvenidos a la materia!
NACIMIENTO
“El nacimiento es la última fase de un procesoen la que el espíritu se une al cuerpo físico,a una envoltura carnal que durante todo el
proceso de gestación se va formando...”
ALEXANDRA MIELENHAUSEN
Es importante tener conciencia de que no
somos solamente el cuerpo físico y, en este
sentido, me gustaría resaltar la importancia
de los centros de fuerza para entender y tra-
bajar el equilibrio energético y espiritual.
Primeramente es necesario tener claro al-
gunos conceptos, los cuales son definidos de
la siguiente manera en el Espiritismo:
Fluido cósmico universal: es la materia ele-
mental primitiva que puede adoptar dos es-
tados diferentes, el de eterización, que es el
estado puro, y el de materialización el cual es
menos puro. Entre estos dos estados existen
numerosas transformaciones, adoptando di-
ferentes grados de densidad y pureza.
Cuerpo humano: nuestro cuerpo físico,
material, constituido por el fluido cósmico
universal en un alto grado de densidad, al
cual el alma está temporalmente asociada
durante su paso sobre la Tierra
Espíritu: principio inteligente. Es nuestra
verdadera esencia espiritual.
Principio (o fluido) vital: es la energía que
da vida a todos los seres que lo absorben o
asimilan. Tiene su origen en el fluido cós-
mico universal (resulta de una de sus modi-
ficaciones) y en él están en estado latente,
hasta que los seres lo asimilen.
Doble etérico: es una especie de fluido
que conecta el periespíritu al cuerpo físico.
Recibe los impulsos del periespíritu y los
transfiere al cuerpo y también lo hace en el
sentido inverso.
Periespíritu: cuerpo fluídico de los espíri-
tus. Es uno de los productos más importan-
tes del fluido cósmico universal, el cual se
condensa en torno al espíritu. También es
considerado materia pero en un estado
menos denso y varía dependiendo del ade-
lantamiento moral del espíritu. En el peries-
píritu se encuentran los centros de fuerza.
Centros de fuerza: también denominados
“chakras (=rueda)” en sanscrito, son puntos
de energía que están en constante movi-
miento. Algunas filosofías afirman que en re-
12 Visión Espírita
Más Allá del Cuerpo Físico
Visión Espírita 13
Ciencia & salud
alidad tenemos muchos centros de fuerza,
de los cuales siete son los principales. Los
mismos están relacionados con diversas
zonas del sistema endocrino y nervioso.
Además, están relacionados entre si y con
nuestro cuerpo físico, mental y espiritual.
Los centros de fuerza se relacionan por
canales fluídicos similares a las venas del
cuerpo físico que transportan la sangre. La
interrelación entre los centros de fuerza, el
periespíritu, el doble etérico y el cuerpo fí-
sico ocurre a través de lazos fluídicos.
Las energías entran por los centros de
fuerza del periespíritu y pasan por el doble
etérico que promueve condensaciones del
fluido sutil a un fluido más denso. Esas
energías siguen entonces hacia los plexos
nerviosos del cuerpo físico. El sistema ner-
vioso, con el comando endócrino, distribuye
toda la energía que desciende del periespí-
ritu hacia el cuerpo físico. Las glándulas en-
docrinas por su parte son responsables por
distribuir esta energía espiritual por todo
el cuerpo a través de la corriente sanguínea.
En el libro “Entre la Tierra y el Cielo”, el
autor André Luis menciona los siete princi-
pales centros de fuerza resaltando su im-
portancia. Nos comenta que son como
usinas de recepción y almacenamiento de
energía espiritual, ligados al cuerpo físico
por terminaciones nerviosas denominadas
plexos. Los siete centros de fuerza defini-
dos en el Espiritismo son los siguientes:
Centro Genésico: físicamente corres-
ponde a las partes de los genitales, le con-
cierne todo lo relacionado a los instintos
primitivos, la seguridad personal, la conse-
cución y conservación de bienes materiales
y el aspecto sexual.
Centro Gástrico: corresponde al plexo
solar, constituido por un gran número de
ganglios nervosos altamente interconecta-
dos, ubicado en el punto medio entre la
punta inferior del esternón y el ombligo. Re-
lacionado a las emociones intensas, tanto
positivas como negativas y también a la au-
toestima, al poder personal, a nuestra capa-
cidad de crear equilibrio interno y de
mantener una buena salud.
Centro Esplénico: que en el cuerpo físico
está situado en el bazo, controlando el pán-
creas y regulando la distribución adecuada
a los recursos vitales por todos los rincones
del vehículo que nos servimos.
Centro Cardíaco: situado en el centro
del corazón, corresponde a la glándula del
timo. Regula la circulación de la sangre y
equilibra las energías de los centros de
fuerza. Es el punto de conexión, donde resi-
den las sensaciones, la emoción, el al-
truismo, la nobleza, el amor y el equilibrio
general.
Centro Laríngeo: proyecta la expresión,
la comunicación y la interrelación. Está re-
lacionado físicamente a la base de la gar-
ganta y a las glándulas tiroides, paratiroides
e hipotálamo. Une el pensamiento con la
emoción y riega el cerebro con sus rayos. Es
la llave de entrada para los centros frontal
y coronario.
Centro Frontal: está en el entrecejo o un
poco más arriba, relacionado con la glán-
dula pituitaria, ordena las percepciones que
en el cuerpo físico constituyen la visión, la
audición, el tacto y la vasta red de procesos
de la inteligencia con relación a la palabra,
a la cultura, al arte, al saber. Es la puerta de
la intuición, de la claridad y visión de pla-
nos de seres más elevados.
Centro Coronario: situado en la coronilla,
es la puerta de la consciencia. Es donde se al-
macenan las experiencias, quedando en el
subconsciente. Controla el sistema nervioso y
coincide con la glándula pineal, conocida por
ser nuestra puerta al espíritu. Está relacio-
nado con la humildad, la entrega y la capaci-
dad de reverencia ante el infinito. Estabiliza y
organiza el metabolismo y de él parte la co-
rriente de energía hacia otros centros.
Cada centro contiene dentro de sí un ba-
gaje de recuerdos, de experiencias pasadas,
de impresiones acumuladas que en gran
medida han modelado la personalidad ac-
tual. Al activarlos afloran todos esos recuer-
dos y experiencias, sean buenas o malas,
placenteras o dolorosas. Esto puede suce-
der de forma inconsciente por los aconteci-
mientos que están ocurriendo a nuestro al-
rededor o dentro de nosotros. Cuando esto
acontece, se produce una respuesta en
todos los niveles de este sistema, en nuestra
memoria, en nuestras percepciones, en
nuestro cuerpo, en patrones de pensa-
miento, emociones y tendencias a compor-
tarnos de determinada manera.
A través de pensamientos positivos y ora-
ciones podemos armonizar los centros de
fuerza, lo que nos aporta un mayor equilibrio
energético y sensación de bien estar. La res-
piración permite la asimilación y la libre cir-
culación del fluido vital, el cual también se
encuentra en el aire, mejorando el flujo de
energía a través de los centros de fuerza. Así
que es muy importante ser consciente y dar
importancia a la respiración para permitir
este libre flujo de energía a través de ellos.
Ser conscientes de nuestros aspectos su-
tiles nos puede ayudar a lograr el auto-co-
nocimiento, el cual es una pieza clave para
el principal objetivo, que es la transforma-
ción moral, despertando así todo el poten-
cial divino que ya habita en nosotros.
Como bien dice Joanna de Angelis:
“En el interior del diamante bruto, ful-
gura una estrella que espera a ser arran-
cada por golpes de cincel y láminas que
lapidan. No hay nadie que no posee bondad
interior. Existe, en el recóndito del alma, la
presencia de Dios como luz coagulada, es-
perando los estímulos de fuera para poder
brillar con alta potencia.”
Nuestro cuerpo mental, físico y sutil es
un regalo divino, es perfecto y lleno de luz
esperando ser estimulado. Así que debería-
mos sentirnos muy agradecidos y contem-
plar el trabajo divino en nosotros.
Hoy en día somos bendecidos con una gran
cantidad de conocimientos y herramientas
para ayudar en nuestro camino espiritual, en
el acercamiento a nuestra alma y en la trans-
formación de nuestro ser. Aprovechemos pues
esta gran oportunidad y seamos este cambio
que tanto añoramos en nuestro interior.
Bibliografía:
Oliveira, Therezinha – “Fluidos y Pases”
Kardec, Allan – “La Génesis”
14 Visión Espírita
Visión Espírita 15
16 Visión Espírita
Ocio del bien
Fecha Tipo Tema Expositor Horario Centro
MADRID
agenda
BARCELONA
Coste
2 abril La Doctrina EspíritaConferencia Aurora Vaz Caballero Entradalibre
20hs Centro de Estudios yDivulgación Espírita
9 abril El buen samaritanoConferencia El buen samaritano Entradalibre
20hs Centro de Estudios yDivulgación Espírita
16 abril El libro de los EspíritusConferencia José Ramón Arrollo Entradalibre
20hs Centro de Estudios yDivulgación Espírita
23 abril SentimientosConferencia Juan Jesús Sánchez Entradalibre
20hs Centro de Estudios yDivulgación Espírita
30 abril La búsqueda ilimitadaConferencia Víctor Gallego Entradalibre
20hs Centro de Estudios yDivulgación Espírita
26 abril Los fraudesdel Espiritismo
Conferencia Entradalibre
18hs Centre Barcelonèsde Cultura Espírita
26 abril XII Jornada Espiritistade Barcelona
Jornada Varios Entradalibre
09:45hs Centre Espírita AmaliaDomingo Soler
17 mayo Evolución ydesarrollo espiritual
Conferencia Andrea Firenze Entradalibre
17:30hs Centre Espírita AmaliaDomingo Soler
21 junio Parábola delos dos hijos
Conferencia Janaina Minelli Entradalibre
17:30hs Centre Espírita AmaliaDomingo Soler
IGUALADA
10 mayo Fluidoterapia espíritaConferencia Andrea Campos Entradalibre
11:30hs Asociación de EstudiosEspíritas de Igualada
7 y 8 junio Trobada Espírita 2014Jornada Varios Entradalibre
16:30hs Asociación de EstudiosEspíritas de Igualada
En Cataluña, a la celebración de San Jorge (Sant Jordi, en catalán) se le añadió
el Día del Libro, mezclándose regalos de libros y rosas. La idea original fue del es-
critor valenciano Vicent Clavel. Poco después, en 1930, se cambió la fecha al 23 de
abril, para conmemorar la fecha de desencarne de los escritores Miguel de Cervan-
tes y William Shakespeare. En 1995, la fiesta del 23 de abril dedicada a la literatura
fue declarada por la UNESCO Día Mundial del Libro y los Derechos de Autor.
Este año el Centre Espírita Amalia Domingo Soler se unirá a estas fiestas, un día
de amor y fraternidad, regalando rosas y libros espíritas de distribución gratuita,
ofreciendo música, con la colaboración de Pedro Cabrera. También estarán a la venta
libros espíritas nuevos y usados. Además, se ofrecerá atención fraterna a todas las
personas que se acerquen a conocer la doctrina de amor de los Espíritus.
Nuestra parada estará en el número 98 de la Rambla de Cataluña. ¡Visítenos!
23 DE ABRIL: DÍA DE AMOR Y FRATERNIDAD
Visión Espírita 17
Ocio del bien
MARCELLO PAGNOTTA
Llevaba mucho tiempo queriendo leer “Memorias del Padre Ger-
mán” de nuestra querida Amalia y ahora que lo he leído, me siento
obligado a compartir con vosotros, lectores de Visión Espírita, mis
sensaciones, más bien mi admiración. Admiración por esta historia,
por estos seres, que sirvieron y aún hoy nos sirven de inspiración.
A través de la mediumnidad de Amalia, el Padre Germán nos re-
gala pequeñas historias en su etapa de encarnado. En cada una se
puede apreciar su gran elevación moral, su devoción al prójimo, in-
cluidos sus adversarios. Su gigantesca fe lo mantiene en el curso del
bien, pese a todas las dificultades que afronta.
Durante su encarnación defendió a varias mujeres que, en contra de
su voluntad, estaban predestinadas a vivir como monjas. Eran mujeres
que se encontraban en situaciones muy desesperadas cuando el Padre
Germán, con la habilidad que sólo un ser superior puede poseer, las sal-
vaba ofreciéndoles una nueva vida llena de felicidad. En el libro nos dice
“conságrese a la penitencia el alma lacerada que verdaderamente nece-
site del aislamiento para pensar en Dios; pero la mujer joven, la que ama
y es amada, forme el sagrado altar de la familia y enseñe a sus tiernos
hijos a bendecir a Dios”.
Su convicción en que la caridad es el camino de la evolución de todos y su fe en Dios le permite vencer los
intereses de una sociedad materialista. Tiene clara cuál es la misión de la Iglesia, pero como dice en este libro,
es la Iglesia de Dios, no la de los hombres. En esta Iglesia es “donde el desnudo encuentra abrigo, donde el atri-
bulado halla consuelo, donde el espíritu errante recibe útil consejo; ésta es la verdadera Casa del Señor”. Sufrió
penitencias muy duras por defender las cuestiones morales y no ceder a sus superiores, sedientos de poder.
Entendía plenamente las enseñanzas de Jesús pues amaba a quienes le odiaban. En el libro nos cuenta
cómo durante su vida y en varias ocasiones se encontró con sus enemigos. Sin embargo la superioridad
moral y las emanaciones de amor del Padre Germán eran tales que sus adversarios se sentían tan intimi-
dados que no conseguían provocarle daño alguno, por mucho que lo desearan. Tanto más, el Padre Germán
fue responsable de la transformación del alma de muchos seres volcados en la práctica del mal. Desde mi
punto de vista, este es un momento sublime en la evolución de todo ser: el momento en que uno se trans-
forma entregándose al bien, despojándose del odio, del orgullo y del deseo de venganza.
En este libro abundan momentos muy emocionantes y sólo por ellos ya merece la pena su lectura. Apre-
ciado lector, si consigues entrar en sintonía con sus historias, con sus mensajes, con sus desafíos, con sus
logros… con el amor del Padre Germán, seguramente sentirás en tu pecho una ínfima parte de su luz; po-
siblemente sentirás vibrar tu corazón en un estado superior. (M. P.)
Memorias del
PADRE GERMÁNDE AMALIA DOMINGO SOLER
18 Visión Espírita
Ocio del bien
En junio CEADS cumple 20años de estudios,
aprendizaje, compromiso yprogreso. ¡Gracias a sus
fundadoras por la fuerza ypersistencia! ¡Gracias a toda
familia CEADS!¡Gracias a la espiritualidad
superior por confiaren este trabajo!
Las enseñanzas purasde Jesús de hace 2000años son la base de la
moral espírita, talcomo en el
cristianismo primitivo.¡Celebremos con
amor el 150º aniversario del
Evangelio Según El Espiritismo!
Seguramente no seremos justos en las si-
guiente líneas. No seremos justos porque no
seremos capaces de resumir en una hoja, toda
la vida y obra de León Denis, mucho menos,
seremos lo suficientemente hábiles para
transmitir la importancia que tuvo en la con-
tinuidad y afirmación del Espiritismo después
de la muerte de Allan Kardec. Por eso os reco-
mendamos que investiguéis en sus obras, lle-
nas de reflexiones y respuestas a las
preguntas que tenemos sobre la vida.
León Denis nació en una humilde familia, el
1 de enero de 1846, en la localidad de Foug, en
la región de Lorena, nordeste de Francia. Du-
rante la infancia, fue educado básicamente por
su madre, no pudiendo ir a la escuela, porque
vivieron en diferentes sitios, debido a los dife-
rentes trabajos que conseguía el padre. Ya ado-
lescente, se afincaron en Tours. León Denis
siempre ayudaba a la economía de la familia con
su trabajo, y no le quedaba mucho tiempo libre
para estudiar, pero era muy autodidacta.
A los 18 años encontró en una librería el
Libro de los Espíritus. Su convicción fue inme-
diata y comprendió que había encontrado la so-
lución clara y lógica para explicar el sentido del
universo. Justamente en Tours era donde esta-
ban ocurriendo los primeros fenómenos de las
mesas parlantes. En 1867 Allan Kardec visitó la
ciudad y León Denis se quedó sensiblemente
impresionado por la personalidad y la elocuen-
cia de Allan Kardec. Después de esa visita me-
morable para León, se creó un grupo
mediúmnico y él fue el secretario, aunque los
resultados no fueron exitosos.
Después de participar en la guerra, por la
invasión de Alemania, volvió a los grupos me-
diúmnicos, desarrollando la mediumnidad es-
cribiente y vidente. Del lado del plano
espiritual, era apoyado y orientado por espí-
ritus amigos, siendo su guía Jerónimo de
Praga, apóstol checo quemado por el Concilio
de Constanza en 1416.
Empezó con la divulgación espírita en 1882
y participó activamente en las diligencias para
registrar la Sociedad de Estudios Espíritas, con
la aprobación de Amelie Boudet viuda de Allan
Kardec, ya muy anciana. Durante 10 años se
preparó como orador y escritor; y como acos-
tumbraba a escribir todos sus discursos, algu-
nos de ellos aparecieron en la Revista Espírita.
En el Primer Congreso Espiritualista Inter-
nacional León Denis pronunció un discurso
exponiendo y defendiendo los principios de la
tesis kardeciana, que fue recibido con gran
atención y despertando el aplauso entusiasta
de los presentes. Desde entonces se multipli-
caron las giras ofreciendo conferencias espí-
ritas, con algunos temas que llegaron a ser
famosos, durante 20 años de labor muy in-
tensa. Presidió el Segundo Congreso Espiri-
tista Internacional realizado en París en 1889
y durante el Décimo Congreso Espiritista In-
ternacional celebrado en Lieja en 1923, ya era
llamado Apóstol del Espiritismo.
Sus libros contienen una extraordinaria pro-
fundidad filosófica y una admirable prosa poé-
tica. “Después de la muerte “, es una obra de
extrema importancia en la divulgación de la fi-
losofía espírita. En 1898 se publicó “Cristia-
nismo y Espiritismo “, donde reconstruyó los he-
chos de la historia cristiana, la doctrina desde
su origen y los cambios a través de los siglos.
Cinco años más tarde sale a la luz el tercer libro
“En lo invisible”. “El problema del ser y del des-
tino” publicado en 1905, es considerado por
muchos su obra principal y más importante.
También se dedicó al estudio profundo de Juana
de Arco y después de haber publicado extenso
material sobre ella, concibió su obra “La verdad
sobre Juana de Arco”, traducida al inglés por el
famoso escritor inglés Sir Arthur Conan Doyle,
grande admirador de León Denis.
Pese a su débil salud, tenía la vista amplia-
mente debilitada, no dejó de divulgar el Espiri-
tismo. Participando en los congresos, incluso
presidiendo el Undécimo Congreso Espiritista
Internacional realizado en París, en 1925.
Desencarnó el 12 de abril de 1927, vol-
viendo al plano espiritual después de haber
cumplido su noble misión para el desarrollo es-
piritual del planeta. (M.P.)
Bibliografía
Biografía en la página de Federación Espírita Es-
pañola: www.espiritismo.es
Biografía en la página de la revista espírita “O
C o n s o l a d o r ” :
http://www.oconsolador.com.br/linkfixo/bio-
grafias/Leóndenis.html
Denis
Personalidadbiografía
LEÓN
Visión Espírita 19
ANDREA CAMPOS
– Como filósofo de formación y trabajador en
Servicios Sociales, ¿cómo crees que el Espiri-
tismo puede ayudar a la humanidad todavía
desprovista de fe o falta de esperanza?
– Antes quisiera aclarar que no soy trabajador so-
cial, sino que desempeño una función en un depar-
tamento de Servicios Sociales, en el Equipo de
Emergencia de atención social. Pues bien, desde la
óptica profesional y mi perspectiva cultural consi-
dero que el Espiritismo aporta claras e importan-
tes propuestas sociales y pedagógicas a nuestras
sociedades, cumpliendo, así, una función profun-
damente transformadora y sustentadora en todos
los ámbitos de la vida. Podemos sintetizarlo con
una expresión cotidiana en el medio espírita: ilu-
minando conciencias y consolando corazones, en
base a la razón y la lógica más rigurosa, es decir, fa-
cilitando la comprensión de la realidad. Ofreciendo
respuestas a las dudas o interrogantes con la cer-
teza que proporcionan los contenidos científicos,
así como reforzando en la
certeza de la creencia reli-
giosa; aquella que –des-
provista de los enigmas de
fe dogmática- ofrece segu-
ridad emocional para
comprender la Causalidad
absoluta de donde surge
toda realidad.
– ¿En tu opinión, la filo-
sofía es la base del co-
nocimiento espírita?
– Si entendemos “la base” como la estructura, los
cimientos en los que se levanta el edificio del saber
que es el Espiritismo, sí. Ella viene a fundamentar
doctrinariamente, a establecer un marco de cono-
cimiento en torno a unos principios y leyes univer-
sales. Y ello lo confirma la propia declaración que
Kardec hace en el frontispicio de El Libro de los Es-
píritus, “Contiene los principios de la Doctrina Es-
pírita”. En este sentido el libro se convierte en el
tratado filosófico por excelencia, que para nosotros
conforma la propia Codificación. Aunque el obje-
tivo, como sabemos, no era establecer una escuela
filosófica, si es todo un complejo y amplio sistema
de filosofía en el que se recoge y elabora la ense-
ñanza de los Espíritus
superiores.
– Tenemos conoci-
miento que el pla-
neta pasa por un
proceso de transfor-
mación, algunas cul-
turas llaman la Era
de Acuario, los espi-
ritistas la Era de Re-
generación, ¿qué es
lo que cambia real-
mente en esta nueva etapa evolutiva?
– Esta etapa evolutiva en la que nos adentramos
es un acontecimiento de orden planetario o cós-
mico; una fase evolutiva que abre un nuevo hori-
zonte, es un bello amanecer rico en
consagraciones y en plenitud para el ser humano.
Adentrarse en el mundo de regeneración significa
establecer un nuevo orden de amor, justicia y ca-
ridad; un mundo de equilibrio en que se dará la
oportunidad de reorganizar nuestras fuerzas en
el viaje evolutivo de luchas sinfín que hasta ahora
hemos estado llevando para el desenvolvimiento
de nuestras potencialidades divinas. Pero esta-
mos en el comienzo de esa nueva era, por lo que
seguiremos en situación de pruebas y con nece-
sidades de expiar los equívocos del pasado, o sea,
de reparar el mal que hemos producido; en este
sentido nos encontramos en la mejor oportuni-
dad reencarnatoria posible, que hay que asumir
con responsabilidad.
– Déjenos un mensaje, a todos espíritas y no
espíritas.
– Que seamos más conscientes de nuestra realidad
espiritual, trabajando sobre nosotros mismos para
ser hoy mejores que ayer y mañana mejores que
hoy, actualizando así, nuestras potencialidades di-
vinas de forma operativa. El Espiritismo nos escla-
rece en ello, iluminando y liberando nuestra
conciencia de la noche de nuestras opacas inteli-
gencias para un amanecer de luz; nos desvela de
manera cierta lo que somos, qué hacemos aquí o
cuál es el sentido de nuestra existencia terrena; qué
nos espera más allá de esta existencia, dilucidán-
donos que nuestro comportamiento actual contri-
buye, como consecuencia lógica, en nuestro
destino futuro, en la busca del Infinito.
Personalidad
Que seamos más conscientesde nuestra realidad espiritual,
trabajando sobre nosotrosmismos para ser hoy mejoresque ayer y mañana mejoresque hoy, actualizando así,nuestras potencialidades
divinas de forma operativa
entrevista
MIGUEL VERAMiguel Vera es formado en Filosofía, espiritista de cuna, conferenciante, articulista, fundador del
Centro Espírita Recinto de Paz en Murcia. Él coordina actividades en el Centro de Estudios EspíritasSin Fronteras y es miembro de la Comisión de Formación de la Federación Espírita Española.