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NO TODO LO QUE BRILLA ES ORO.... Por eso Antes de Juzgar Conozcamos su DURA REALIDAD Una nueva mirada

Una nueva mirada

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Es una revista diseñada para que miremos a los niños/as de la calle, como lo que son, seres humano, ángeles de Dios.

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NO TODO LO QUE BRILLA ES ORO....

Por eso Antes de Juzgar Conozcamos su

DURA REALIDAD

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INTRODUCCIÓN

En estos últimos años, hemos notado que nuestro país el Ecuador se ha sumergido en una de sus más profundas crisis, tanto económica, política y social con características propias del mismo.

El mal manejo de la economía y política, ha incitado una notoria opo-sición entre los mismos, lo cual provoca daño al país, dando como resultado el creciente empobrecimiento, si estos sectores permitieran dar otro enfoque a las políticas económicas se abrieran más campos para que otros sectores, que hasta el momento están relegados, se conviertan en los generadores de la energía necesaria para mover el motor de la economía de nuestro país.

Nos damos cuenta también que otra causa que aqueja más a esta crisis es el antagonismo que históricamente se ha venido dando entre la costa y la sierra, lo cual afecta al sector social de nuestro país, sin dejar de lado la problemática de la descentralización y las autono-mías que con sus posturas ponen en peligro la unión nacional, para poder adentrarnos más en la situación real de nuestro país vamos a realizar nuestro estudio a cada una de las crisis que afectan al Ecua-dor.

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ANÁLISIS Y VALORACIÓN DE LOS RESULTADOSSe presentaron problemas al realizar la entrevista Io, que fue dirigida hacia los niños de la calle al establecer la conversación . Se comportaban de una manera fría y desconfiada . Para poder realizarlas tuvimos que frecuentarlos para que accedieran .

En la entrevista II fue dirigida a los maestros , fue sencillo que respondieran a las preguntas , pero lo mas sobresaliente de las respuestas fue que si algun día se les presentaran una situa-ción de esa magnitud , al niño se le trataría igual que a a los demás , pero brindándole un apoyo para que a poco se fuera acoplado a las normas y obligaciones que se tiene dentro de las instituciones .

Salimos a las calles para conocer las opiniones que tienen las personas acerca de los niños que se encuentran en la calle . La mayoría de la gente destacaba su molestia hacia ellos, diciendo que se ve mal la ciudad con los niños trabajando en semáforos o pidiendo dinero, decían que las autoridades deberian quitarlos y mandarlos a orfanatorios o alguna institucion que se haga cargo de ellos.

OBJETIVOS DE LAS ENTREVITAS

Se prentende saber las diferentes perspectivas que tienen los niños de la calle y saber qué pien-sa la sociedad en general. Para esta investiga-ción es muy importante saber en qué condicio-nes viven los niños y cuáles son sus ideas que tiene de la sociedad , para posteriormente pro-poner alternativas de solución.

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Junio / Julio 2012 ProblemasSociales

ALCOHOLISMO Es una enfermedad que se caracteriza por el abuso de bebidas alcohólicas, aún cuando tiene diversos orígenes en muchas ocasio-nes comienza en la adolescencia debido a la manipulación de otras personas, por imi-tación, etc. A veces por provenir de padres alcohólicos, además por un sinnúmero de causas que provocan a la larga una depen-dencia total.

El abuso en el consumo de las bebidas al-cohólicas provoca la desintegración familiar y social, pérdida del trabajo y obligaciones, además de daños psicológicos y físicos que afectan a órganos como:- El hígado, aparato digestivo, corazón, cere-bro y los riñones.Muchas veces si no se controla puede provo-car la muerte.

DROGADICCIÓNLa poca atención de los padres hacia los problemas de los hijos, las limitaciones eco-nómicas, el desequilibrio en el delicado siste-ma emocional, provocan el uso de placebos que nos hacen escaparnos de la realidad, es-tas dependencias pueden ser de tipo sexual,

entretenimientos como los videos juegos, las telenovelas, etc.Aún cuando cada tipo de dependencia es peligrosa por el aprisionamiento del espíritu que evita el sano desarrollo como el más da-ñino de ellos, es el uso de sustancias tóxicas que alteran el estado físico y mental de los individuos, provocando daños cerebrales y físicos en la persona.

DELINCUENCIAEste fenómeno social tiene profundas y ex-tensas raíces, por una parte los problemas económico, por otra las fallas educaciona-les, pero principalmente la escasa formación ética de la sociedad lleva a cometer delitos que muchas de las veces se trata de justificar con la necesidad.

La delincuencia no es privativa de algún sec-tor social como se extiende a todos los niveles tanto de las clases pobres, como de las cla-ses ricas, en uno tratando de solventar algún vicio, necesidad, etc… los otros tratando de adquirir una mayor cantidad de supuesta ri-queza o talvez una mayor cantidad de po-der ante la sociedad.

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LOS NIÑOS DE HOY

El problema de los niños de la calle no es un problema actual sino que viene desde tiem-po atrás. No se sabe con exactitud cómo comenzó, pero probablemente este suceso inicia por el abandono de los niños, posterior-mente niños que se salen de sus hogares por su propia cuenta como resultado de proble-mas que tienen a su alredor.

Buena parte de los niños de la calle mantie-nen algún vínculo familiar y sobreviven ro-bando, pidiendo limosna, o lustrando zapa-tos para ayudar, de esta manera, a completar los ingresos de sus familias. Son lo que conocemos como niños “ EN LA CALLE “.

Sin embargo, otros muchos han roto con todo vínculo familiar y hacen de la calle su modo de vida: los conocemos como niños de la calle. En este caso se trata de menores que viven en grupo con otros chicos, entorno a la figura de un líder, y se apoyan en la pros-titución y los pequeños hurtos para sobrevivirLa mayoría son adictos a las drogas, desde la heroína al pegamento común.

Según los datos de UNICEF, hay unos 40 millo-nes de niños de la calle en América Latina, y más de la mitad de ellos inhalan pegamen-to de base solvente. En total, 20 millones de clientes que consumen alrededor de 20 millo-nes de galones de pegamento al mes.

las oportunidades que se les presentan a es-tas pequeñas criaturas de trabajo son muy feas se basan en la Prisión, prostitución, es-clavitud, violencia y muerte son los destinos más habituales que aguardan a los niños de la calle.

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CAUSAS DEL TRABAJO INFANTILA pesar de que la comunidad internacional lo ah condenado en terminos claros e iniquivo-cados y de que muchos paises lo han declarado ilegal , el trabajo infantil sigue existiendo a gran escala .

CUANTOS NIÑOS TRABAJAN

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En los últimos años el crecimiento de niños sin hogar o abando-nados (de la calle) que han brotado de zonas marginadas, han ocasionado que nuestro país tenga más problemas de violencia, broncas,

atracos, violaciones, etc. De las cuales escasamente nos percatamos, ya que esto sucede en los cinturones de miseria que rodean a cada ciudad de nuestro paísSe ha preferido el tes-

timonio directo a la reflexión exhaustiva, debido al descono-cimiento real que se tiene sobre el tema.No siempre las en-trevistas se comple-mentan en una sola sesión. Se requiere de dos o tres, depen-

diendo del interés y la duración de lo narra-do, la entrevista fue mínima para facilitar su desenvolvimiento, ya que algunos niños se inhiben mientras que otros se mues-tran abiertos.

EL “CERILLO”Viviendo en cada una de las calles de la ciudad de Ibarra, el “cerillo” de aproxima-damente 12 años de edad recuerda andar vagando por las calles ignorando quienes son sus padres, teniendo como única fami-lia a dos amigos apodados el “pulguita” y el “molo”, representando unos 12 ó 13 años de edad quienes lo acompañan a sus cami-natas por la ciudad y a la vez le encauzan a acciones de drogas. Los últimos meses de su vida han estado marcados por el peligro de morir intoxicado por alguna droga, ser asesi-nado en alguna pelea o ser detenido por la policía.Sus compañeros son un claro ejemplo de cómo una sociedad enferma y caótica pro-mueve conductas antisociales en los niños y jóvenes marginados.

EL “PULGUITA”De aproximadamente 13 años nos cuenta: Nací en un barrio de Otavalo, mi casa era muy pobre, teníamos dos cuartos para 5 en mi familia. Me obligaron a trabajar y no hubo mas lugar que la calle, limpiando vidrios de carros y algunas veces me robaba alguna que otra cosa. Quise armar mi propio grupo para cuidarnos ente todos, pero no tuve ami-gos. Ahora que ya somos tres (cerillo, molo, pulguita) nos podemos defender de algunas broncas y corridas que nos saben hacer. La experiencia más fea que tuve fue cuando por defenderle a un amigo me apuñalaron en el estómago, solo recuerdo levantarme en un hospital con agujas en mis manos (sue-ro), pero de ahí todo es tranquilo en Ibarra, la gente muchas veces ya nos conoce y nos da una moneda.

LA VIDA DE LOS NIÑOS DE LA CALLE

LA VIDA DE UN NIÑO DE LA CALLE

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Algunas de las violaciones a los derechos de los niños de la calle son:

- No tener la oportunidad a una identidad.- Se les niega su derecho a la educación.- No se les brinda la debida atención médica.- Los niños son maltratados moral y físicamente.- El niño es abandonado, tal vez desde su nacimiento.- Algunos niños son discriminados por su color o raza.- Los niños son explotados cuan do prestan un servicio.- No se les brinda un hogar, cariño, amor y comprensión.

CONCLUSIONES:- Debemos estar unidos todos para combatir este gran problema que está afectando a todo el mundo.- Si queremos tener un mejor mundo, tenemos que poner atención a estos niños que nos necesitan tanto.- Para acabar con este problema, los padres deben comprender y apoyar a sus hijos desde pequeños.- Para evitar el problema de la drogadicción debemos enseñarles a estas personas a practic-ar algún deporte.

SOLUCIONES:Que cada familia ibarreña en este caso, que posea recursos morales y económicos solventes, se haga responsable reco giendo a un niño de la calle de la siguien te manera:

- Localizar al niño en su hábitat.- Presentarme y brindarle mi amistad.- Preguntarle su nombre y decirle que si en ese lugar lo puedo localizar para visitarlo y platicar como amigos.- Invitarlo a salir a lugares de recreación e invitarlo a comer a casa.- Cuando él ya sienta confianza de que yo sea su amigo, brindarle todo mi cariño y apoyo para darle a conocer un mundo diferente.

Vendiendo caramelos, rosas, o limpiando parabri-sas de los carros, así encontramos niños en las calles de Ibarra.A pesar de campañas mediáticas del INFA en Im-babura, en programas que intentan erradicar la mendicidad y el trabajo de los niños en la calle, los infantes siguen subiendo a los buses e ingresan-do a los locales comerciales.César Pérez, Director del INFA, señaló que la pro-puesta de erradicar el trabajo infantil tiene que ser compartida con todos los actores sociales.

VIOLACIONES A LOS DERECHOS DE LOS NIÑOS DE LA CALLE

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¿QUIÉNES SON?María Belén, 15 años:“vendo caramelos en los buses para ayudar en casa, no robo solo trabajo”

Elena, 7 años;“Yo vendo chicles en los buses con mi hermano, con ese dinero comemos”

Mario, 12 años:“Hago malabares con fuego, con eso espero sobrevivir y darles de comer a mis hermanos menores”

Eduardo, 16 años:“Vendo tarjetas en los buses, así logro educarme y a veces comer un poco saludable”

Rita, 5 años;“Paso en el parque con mi hermana vendiendo caramelos, ella dice que es para comer”

Raquel, 13 años:“Me encontraron durmiendo en las calles, yo huí de mi casa porque mi padrastro abusaba de mi”

Yo soy una niña, yo soy un niño, yo quiero ser feliz, yo tengo sueños, yo tengo miedo, yo lloro, yo espero, yo creo, yo valoro, yo vendo.Ellos son solo niños que han sufrido la calle, que han sido las victimas de una sociedad que los tacha de malos.

ELLOS SONLOS VERDADEROSHABITANTES DELA CALLE

Sobreviven:

Cuidando coches

Acarreando fardos en el mercado

Pidiendo limosna

Alimentándose con el pegament que esnifan

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¿QUIENES AYUDAN?La Licenciada Miriam Quiroz, Directora del

centro de ayuda familiar e infantil MIES-IN-

FA comentó que en las calles de la cuidad

de Ibarra existen alrededor de 10 a 12 niños

que viven en la calle. Estos pequeños rostros

pasan días, tardes y noches sin un subsidio,

un techo que los abrigue y mendigan para

conseguir un bocadillo de comida. Existen

varios centros que reciben niños y niñas de

diferentes edades y los organizan de acuer-

do a ciertos parametros, la mayoría requie-

ren una referencia familiar que testifique sus

raíces y su condición.

Las Aldeas SOS son las más reconocidas por

la ciudadanía y constan de 106 niños y niñas.

Sin embargo, existen otros centros que brin-

dan servicios a estos niños abandonados, sin

padres y sin un hogar. El centro Manuela Pé-

rez recibe solo niñas y consta de 30 de ellas,

la casa Mercedes José Molina consta de 20

niñas y adolescentes, mientras que el INFA

tiene un casa mixta con 13 niños.

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TRAS LA MIRADA DE MARIA BELEN

Conocí a María Belén Morán Vera meses atrás, o talvez no. Todos los días en el bus de las 12h00 una sencilla jovencita ofrece sus caramelos, y como ella dice,

“Reciban esto por cordialidad no por com-promiso”. Su sonrisa sencilla y contagiosa me llamó la atención, pero fue mucho después que la invité a sentarse a mi lado y descubrí que talvez no la había visto jamás. Me llevé la grata sorpresa de que ella era la menor de las trillizas. Me dijo; “Seguramente nos has visto, yo no recuerdo haberte visto, pero hay cosas que se me olvidan”. Esto me abrió la puerta para conocerla, y lo primero que noté fueron sus ojos soñadores y su sonrisa serena.

María Belén proviene de una familia de 9. Su madre, María, y sus ocho hijos. Primero están las trillizas: María Angelina, María Estefanía y nuestra amiga María Belén, de 15 años.

M.Belén Morán Vera Vendedora de caramelos

Después la pequeña Camila de 8 años, a quien se refiere con mucha dulzura. Luego Carlos de 5 años, Paula de 4 años, César de 3 y Verónica de 18 meses; los dos últimos son de otro padre, pero al igual que a M. Belén su padre los dejó. Al preguntar sobre su padre, no nos deja terminar la pregunta y nos dice “Seguro piensas que no lo quiero, pero si lo hago aunque mis hermanas no, pero gracias a él, yo estoy viva”.

Ella vive en Cusubamba, y estudia en el Co-legio Cardenal de la Torre. Está en primer cur-so y aunque no le gustan las matemáticas y tener que ir al colegio, lo hace por su madre. Nos dice “Hay días en que la gente piensa que por salir a vender caramelos no tenemos sueños y en el colegio mucho más” cuando indago al respecto, me pide que solo la deje hablar.Nos encontramos nuevamente este miér-coles “Adivina ya cumplí 15 años, fue el lunes, pero no teníamos dinero, así que mejor salí a trabajar”; dice. Sus horarios son duros, y su vida muy sacrificada, viste un calentador rojo, camiseta verde y chaleco azul, pero al despedirse me hace sentir como si ella fuera la niña más feliz del mundo, porque simple-mente está viva.

Ahora sé lo que hay detrás de esa sonrisa, hay sueños, una lucha diaria por vivir, por ayudar a su familia, hay una niña que sigue crecien-do, que con la más desapercibida inquietud por la vida nos demuestra que no pasa nada, que es un día nuevo y que siempre debemos seguir adelante. La veo alejarse mien tras ella con cara a la lluvia, sigue manteniendo su hermosa sonrisa.

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Conocí a María Belén Morán Vera meses atrás, o talvez no. Todos los días en el bus de las 12h00 una sencillajovencita ofrece sus cara melos, y como ella dice,

“Reciban esto por cordialidad no por compromiso”

Su sonrisa sencilla y contagiosa me llamó la atención, pero fue mucho después que la invité a sentarse a mi lado y descubrí que talvez no la había visto jamás. Me llevé la grata sorpresa de que ella era la menor de las trilli-zas. Me dijo; “Segura-mente nos has visto, yo no recuerdo ha-berte visto, pero hay cosas que se me ol-vidan”. Esto me abrió la puerta para co-nocerla, y lo primero que noté fueron sus ojos soñadores y su sonrisa serena.María Belén proviene de una familia de 9. Su madre, María, y sus ocho hijos. Prime-ro están las trillizas:

María Angelina, Ma-ría Estefanía y nuestra amiga María Belén, de 15 años. Después la pequeña Camila de 8 años, a quien se refiere con mucha dulzura. Luego Car-los de 5 años, Paula de 4 años, César de 3 y Verónica de 18 meses; los dos últimos son de otro padre, pero al igual que a M. Belén su padre los dejó. Al preguntar sobre su padre, no nos deja terminar la pregunta y nos dice “Seguro piensas que no lo quiero, pero si lo hago aunque mis hermanas no, pero gracias a él, yo estoy viva” Ella vive en Cusu-bamba, y estudia en el Colegio Cardenal

de la Torre. Está en primer curso y aun-que no le gustan las matemáticas y te-ner que ir al colegio, lo hace por su ma-dre. Nos dice “Hay días en que la gente piensa que por salir a vender caramelos no tenemos sueños y en el colegio mucho más” cuando inda-go al respecto, me pide que solo la deje hablar.Nos encontramos nuevamente este miércoles “Adivina ya cumplí 15 años, fue el lunes, pero no teníamos dinero, así que mejor salí a tra-bajar”; dice. Sus ho-rarios son duros, y su vida muy sacrificada, viste un calentador rojo, camiseta ver-

de y chaleco azul, pero al despedirse me hace sentir como si ella fuera la niña más feliz del mundo, porque simplemente está viva.Ahora sé lo que hay detrás de esa sonri-sa, hay sueños, una lucha diaria por vivir, por ayudar a su fa-milia, hay una niña que sigue creciendo, que con la más des-apercibida inquietud por la vida nos de-muestra que no pasa nada, que es un día nuevo y que siempre debemos seguir ade-lante. La veo alejar-se mien tras ella con cara a la lluvia, sigue manteniendo su her-mosa sonrisa.

“HAY DÍAS EN QUE LA GENTE PIENSA QUE POR SALIR A VENDER CARAMELOS NO TENEMOS SUEÑOS Y EN EL COLEGIO MUCHO MÁS”.

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EL HOY Y EL AYER DE LOS NINOS DE LA CALLE

Nosotros crecimos en una realidad distinta a la que vemos hoy, en las calles de nues-tra ciudad. Antes entre el polvo de las carreteras encontrá-bamos niños jugan-do a la rayuela, a las cogidas, a las escon-didas, a las quema-das, etc. Subidos en sus bicicletas con la única meta de jugar hasta que llegue la noche con sus ami-gos, donde el peor de los castigos era era no permitirles salir al patio y escuchar un “no puedosalir a

jugar”. Talvez por eso es que nos cuesta tanto en-tender la situación a la que de los niños de la calle, están ex-puestos. Es por ese simple mo-tivo, porque no sufri-mos la necesidad de llevar pan a la mesa, o de crecer abrupta-mente tras la falta de nuestros padres. Aquellos niños que hoy vemos la reali-dad de un mundo lleno de caos.Donde se ven obli-gados a mendigar, a vender caramelos, a

cantar en los buses, a realizar malaba-res que causan cu-riosidad, a estirar la mano, con la espe-ranza de no encon-trar en ella la mirada de desprecio típica de las personas que quieren juzgar en lu-gar de ayudar. Pero no nos damos cuen-ta de que no todos son iguales si bien hay niños que se de-dican a robar, o tie-nen vicios que han adquirido al ritmo de la calle, no son todos, también podemos observar aquellos ni-

ños de 8 años que llevan de la mano a sus hermanitos me-nores, sustituyendo a sus padres adqui-riendo la responsa-bilidad más grande del hombre ser quien diga “Yo respondo por ellos”. Hablo por los niños que fuimos y por los niños que miro día a día transitar en el mundo de sueños perdidos. Hablo por los que no tienen voz y la voz que tienen ha sido silenciada con la bulla de las miradas acusadoras.

PROYECTO NIÑAS DE LA CALLE

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Niño; que juNtas trapos, botellas y papel

para veNder y poder sobre vivir.CoNseguir uN poCo de diNero,para Comprar uN parvo plato de Comida

y CoNseguir uN sitio para dormir. uN Niño de la Calle

que debería estar jugaNdo por los Campos,o asistieNdo por dereCho a la esCuela;eN lugar de estar peNsaNdo eN el trabajo

aNgustiado Cual adulto para CoNseguir la plata y exis-tir. Niño; que eN lugar de estar eN Casa CoN tus padres

reCibieNdo sus CoNsejos y CariCias;te eNCueNtras solo, deambulaNdo por las Calles

CogieNdo el frio del iNvierNo; siN el Calor de uNa ma-dre.vagabuNdo NoChe y día; siN teNer a doNde ir. Niño; que podrías ser el futuro de tu pueblo

eN lugar de teNer uN preseNte taN iNCierto,deshumaNizaCióN del adulto altameNte preoCupaNte

para ver por ti y ayudartea dejar de ser uN Niño de la Calle.

Ricardo Ibarra Antonio

POEMA“Niño de la calle”

OPINIONESMargoth:Ellos son victimas de la pobreza, del desem-pleo de la manipulación de gente inescrupu-losa que las explota, para vivir a costilla de ellos, utilizándolos como fuente de egresos para satisfacer sus vicios, por los cuales de-bemos trabajar y exigir a las autoridades que trabajen.

Oscar: NO me agrada la idea de verlos en la calle, causan una mala impresión. Tengo la idea que a la primera me van a robar, y que todo eso es mentira.

Darío: Son ángeles perdidos, yo soy amigos de al-gunos de ellos, no son malos por lo contrario la mayoría son muy inteligentes, y si les brin-das el suficiente amor no te imaginas lo leales que son.

NUESTRAS OPINIONESAndrea Jativa: La imagen de los niños de la calle, es tergiver-sada diariamente, y es muy triste saber que detrás de su sonrisa hay mucha tristeza, por la cual se trabaja y este trabajo aumenta dia-riamente.

Paula Hernández:Creo que muchos nos enfocamos en nues-tra realidad pero nadie se fija en lo que estos niños tienen que hacer para sobrevivir. Por lo tanto nosotros no deberíamos tener cara para emitir un juicio destructivo ante ellos.

Fernanda Cevallos:He trabajado con varios grupos de niños de la calle, niños que con recelo se acercan y que al contar sus historias nos destrozan el co-razón, a mi en especial me dan ternura, tal-vez por el hecho de ser madre es que sea tan sensible pero para mi todos ellos merecen solo mejor como hijos de Dios. Espero con esto llegar a sus corazones para que sepan que no todo tiene un solo lado hay mucho atrás de lo que miramos día a día.

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SOCIALES

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Nuestro propósito es mostrar la otra cara de los niños calle que día a día

miramos