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Ministerio de Educación Superior Universidad de Pinar del Río “Hermanos Saíz Montes de Oca” Facultad de Ciencias Técnicas “Centro de Estudios de Energía y Tecnologías Sostenibles-CEETES” Título: Propuesta de diseño de un horno para el secado del arroz, en La UEBI Victoria de Girón, empleando como combustible la cascarilla del grano. Tesis en opción del grado de Máster en Eficiencia Energética Autor: Ing. Pedro Luis Díaz Navarro Pinar del Río, 2016

Título: Propuesta de diseño de un horno para el secado del ...rc.upr.edu.cu/bitstream/DICT/3189/1/Pedro Luis Díaz Navarro.pdfíndice de consumo del mismo es la torre de secado del

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  • Ministerio de Educación Superior

    Universidad de Pinar del Río “Hermanos Saíz Montes de Oca” Facultad de Ciencias Técnicas

    “Centro de Estudios de Energía y

    Tecnologías Sostenibles-CEETES”

    Título: Propuesta de diseño de un horno para el

    secado del arroz, en La UEBI Victoria de Girón,

    empleando como combustible la cascarilla del grano.

    Tesis en opción del grado de Máster en Eficiencia Energética

    Autor: Ing. Pedro Luis Díaz Navarro

    Pinar del Río, 2016

  • Ministerio de Educación Superior

    Universidad de Pinar del Río “Hermanos Saíz Montes de Oca” Facultad de Ciencias Técnicas

    “Centro de Estudios de Energía y

    Tecnologías Sostenibles-CEETES”

    Título: Propuesta de diseño de un horno para el

    secado del arroz, en La UEBI Victoria de Girón,

    empleando como combustible la cascarilla del grano.

    Tesis en opción del grado de Máster en Eficiencia Energética

    Autor: Ing. Pedro Luis Díaz Navarro

    Tutores: MSc. Asist. Julio Rivero González

    MSc. Aux. Luis Manuel García Rojas

    Pinar del Río, 2016

  • PENSAMIENTO

    Todo debe hacerse tan simple como sea posible, pero no más simple.

    Albert Einstein

    (1879-1955) Físico alemán

  • AGRADECIMIENTOS

    Le agradezco grandemente a mi mamá Marlén. Porque tú, Mami, siempre has sido el

    apoyo vital para que alcance metas como estas y como las que vendrán en un futuro.

    Sin ti nada de esto hubiese sido posible.

    A mi princesa Paola, gracias por ser la energía que mueve el mundo de Papá.

    Arlenys, gracias por ser mi compañera, por tu apoyo incondicional y por soportarme.

    Abuelo, gracias por estar siempre conmigo y por ser mi ejemplo como hombre ante la

    vida.

    Mis amigos Julio y Daniel, gracias por ser eso, mis amigos.

    Mi familia, gracias por estar ahí.

    En fin, esta es una redacción en la que siempre se incurre en el error de omitir u olvidar

    a alguien importante. Por eso termino la misma dando las gracias a esa persona que

    olvidé.

    GRACIAS

  • DEDICATORIA

    Esta es la primera de muchas dedicatorias, pero todas serán para ti

    ...Paola

  • RESUMEN

    La presente investigación toma como base la aplicación de la tecnología de gestión

    total de eficiencia energética en la Unidad Económica Básica Industrial Victoria de

    Girón perteneciente a la provincia de Pinar del Río. Uno de los resultados de la

    aplicación de dicha tecnología en la misma arrojó que el portador energético diésel es

    el más consumido en la entidad y el puesto clave donde se experimenta un mayor

    índice de consumo del mismo es la torre de secado del grano. En dicha torre existe un

    quemador de diésel que calienta el aire para el proceso de secado y la investigación

    propone la sustitución de este equipo por un horno que queme cascarilla de arroz con

    la misma finalidad. Para este fin se diseña y se aplica una metodología sustentada

    fundamentalmente en el cálculo de los indicadores energéticos de explotación del

    horno y su correlación con los principales parámetros del diseño físico del mismo. Se

    obtiene como resultado final la propuesta de diseño de un horno incinerador con

    tecnología de parrilla en su cámara de combustión y volumen de la misma de 9,024

    m3 que garantiza obtener el calor requerido en la torre de secado mediante el empleo

    de un intercambiador de calor de tubos y coraza con un arreglo en tresbolillo

    compuesto por tubos de 88,9 mm de diámetro exterior. Se estimó además el ahorro

    energético por concepto de la sustitución del combustible diésel por la cascarilla del

    arroz en un valor de 239,68 litros por día.

    PALABRAS CLAVES:

    Eficiencia, energía, hornos.

  • ABSTRACT

    This research builds on the application of technology management total energy

    efficiency in the Victoria de Giron Basic Industrial Economic Unit belonging to the

    province of Pinar del Río. One of the results of the application of such technology in

    the same energy carrier found that diesel is the most consumed in the entity and the

    key position where a higher rate of consumption of the same is experienced is the grain

    drying tower. In the tower there is a diesel burner which heats the air for the drying

    process and research proposes to replace this equipment through a furnace that burns

    rice husks for the same purpose. For this purpose it is designed and methodology

    mainly based on calculating the energy indicators operating the furnace and their

    correlation with the main design parameters of the physical same applies. the proposed

    design of an incinerator is obtained as the final result with grate technology in its

    combustion chamber and the same volume of 9,024 m3 that guarantees to obtain the

    heat required in the drying tower by using a heat exchanger a shell and tube

    arrangement comprises tubes staggered 88.9 mm outer diameter. Energy saving is

    further considered in respect of the replacement of diesel by rice husks to a value of

    239.68 liters per day.

    KEY WORDS:

    Efficiency, energy, furnaces.

  • TABLA DE CONTENIDO Pág.

    INTRODUCCIÓN ......................................................................................................... 1

    CAPÍTULO I. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA .................................................................. 9

    1.1. El Arroz (Oryza sativa L.) ................................................................................. 9

    1.2. Proceso de secado del arroz ......................................................................... 13

    1.3. La cascarilla de arroz. .................................................................................... 17

    1.3.1. Propiedades físicas de la cascarilla de arroz. ...................................... 17

    1.3.2. Propiedades químicas de la cascarilla de arroz. .................................. 19

    1.4. Los hornos incineradores............................................................................... 22

    1.4.1. Tipos de hornos incineradores. ............................................................ 23

    1.5. Conclusiones del Capítulo. ............................................................................ 31

    CAPÍTULO II. MATERIALES Y MÉTODOS ............................................................... 34

    2.1. Generalidades de la Unidad Económica Básica Industrial Victoria de Girón. 34

    2.1.1. Estado del residuo cascarilla de arroz en la UEBI. .............................. 35

    2.1.2. Metodología para caracterizar químicamente la cascarilla de arroz de la

    variedad INCA LP-5. ...................................................................................... 36

    2.2. Metodología para el cálculo termodinámico de los parámetros del horno

    incinerador de cascarilla de arroz. ........................................................................ 37

    2.2.1. Selección del tipo de horno más adecuado para incinerar la cascarilla de

    arroz. .............................................................................................................. 38

    2.2.2. Cálculo del volumen de producto a secar. ........................................... 38

    2.2.3. Cálculo de la masa de agua a remover del volumen de granos en una

    pasada. .......................................................................................................... 39

  • 2.2.4. Cálculo del calor requerido en la torre de secado. ............................... 39

    2.2.5. Proceso de calentamiento del aire para el secado del arroz cáscara. . 48

    2.2.6. Pérdidas de calor en el horno. ............................................................. 52

    2.3. Cálculo de los parámetros de la combustión de la cascarilla del arroz. ......... 53

    2.3.1. Cálculo del flujo de combustible. .......................................................... 53

    2.3.2. Cálculo de la cantidad de aire necesaria para el proceso de combustión.

    ....................................................................................................................... 54

    2.3.3. Cálculo del índice de exceso de aire (relación aire-combustible). ....... 54

    2.4. Cálculo de las dimensiones físicas del horno. ............................................... 55

    2.4.1. Dimensiones del intercambiador de calor. ........................................... 55

    2.4.2. Volumen de la cámara de combustión. ................................................ 55

    CAPÍTULO 3: ANÁLISIS Y DISCUSIÓN DE LOS RESULTADOS............................. 58

    3.1. Cálculo de los parámetros termodinámicos para la propuesta del horno

    incinerador de cascarilla de arroz. ........................................................................ 58

    3.1.1. Cálculo del volumen de producto a secar. ........................................... 59

    3.1.2. Cálculo de la masa de agua a remover del arroz en una pasada. ....... 60

    3.1.3. Cálculo del calor requerido en la torre de secado. ............................... 60

    3.1.4. Cálculo del calor a entregar a un tubo del intercambiador. .................. 64

    3.1.5. Cálculo de las pérdidas de calor en el horno. ...................................... 65

    3.1.6. Cálculo de los parámetros de la combustión de la cascarilla de arroz. 67

    3.1.7. Selección del ventilador para garantizar el caudal de aire de

    alimentación. .................................................................................................. 68

    3.2. Cálculo de las dimensiones físicas del horno. ............................................... 69

  • 3.2.1. Diseño del intercambiador de calor. ..................................................... 69

    3.2.2. Comprobación del volumen de la cámara de combustión. ................... 70

    3.3. Simulación termodinámica del horno. ............................................................ 70

    3.4. Valoración del impacto energético de la propuesta. ...................................... 71

    3.5. Valoración económica.................................................................................... 72

    3.5.1. Costos directos de producción. ............................................................ 72

    3.5.2. Gastos actuales en la UEBI por el consumo de combustible fósil........ 73

    3.6. Valoración medioambiental. ........................................................................... 74

    CONCLUSIONES ...................................................................................................... 76

    RECOMENDACIONES .............................................................................................. 77

    REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS ........................................................................... 78

    BIBLIOGRAFÍA .......................................................................................................... 82

  • 1

    INTRODUCCIÓN

    El hombre desde sus inicios ha empleado las fuentes de energía con la finalidad de

    mejorar sus condiciones de vida. En un principio las energías renovables como la

    proveniente de la luz solar (energía solar), la fuerza de las corrientes de agua (energía

    hidráulica), la energía proveniente del viento (eólica) y la proveniente del calor interno

    del planeta (geotérmica) entre otras fueron empleadas para calentar y cocer alimentos,

    proveer calor a los refugios, trasladar cargas pesadas, accionar mecanismos, entre

    otros fines. Los primeros equipos industriales empleados fueron los molinos de agua,

    accionados por energía hidráulica y los de viento después, que trabajaban empleando

    la energía eólica; su finalidad era la de moler los granos cultivados en los campos.

    Hacia finales del siglo XVIII se produce un hecho trascendental: la invención de la

    máquina de vapor, un dispositivo que permitía convertir el calor en fuerza mecánica

    (se quema el carbón produciéndose calor, este es utilizado para evaporar agua; el

    vapor a su vez se utiliza para accionar dispositivos mecánicos). Con la máquina de

    vapor llegó la primera revolución industrial, marcando el inicio de una era de consumo

    indiscriminado de los combustibles fósiles.

    Los combustibles fósiles son fuentes de energía no renovables y son el producto de

    millones de años de transformaciones físico-químicas a nivel de las diferentes capas

    que conforman la superficie del planeta. El riesgo de que estos se agoten es una

    posibilidad tangible en un futuro no muy lejano. Se puede decir, sin temor a equívocos,

    que los últimos 200 años constituyen un período caracterizado por un consumo creciente e

    intensivo de energía que prácticamente ha acabado con dichos recursos. La

    dependencia energética de la civilización actual con estas fuentes de energía es casi

  • 2

    completa, por lo que se hace imprescindible la búsqueda de soluciones y alternativas

    que hagan frente a esta situación. El empleo eficiente y a gran escala de las energías

    renovables, la búsqueda de nuevos combustibles y una gestión energética cada vez

    más eficiente en los diferentes procesos industriales constituyen algunas de las

    medidas a tomar en este sentido.

    Cuba, al igual que la mayoría de los países insulares, posee recursos energéticos

    limitados y satisface la mayor parte de sus necesidades mediante la importación de

    combustibles fósiles (Santos Guerra, Arrastía Acosta, Castillo Toro, & Hernández

    López, 2013). Esta dependencia unida a la inestabilidad de los precios del petróleo en

    el mercado internacional, la reducción drástica de los recursos combustibles y la

    incesante preocupación por los aspectos medioambientales, hace que también el país

    se una a la búsqueda de procesos productivos cada vez más eficientes desde el punto

    de vista de aprovechamiento energético, como se planteaba con anterioridad.

    Constituye una necesidad de primer orden para el país persuadir acerca de la

    importancia de abrir espacios a una mentalidad que encamine los procesos

    productivos que se desarrollan hacia el perfeccionamiento energético. Cada producto

    que se elabore debe costar lo que necesariamente se tenga que invertir en él, esto

    significa ahorro, reduciendo así los costos de producción al mínimo.

    A pesar de los esfuerzos realizados en este sentido varios sectores industriales del

    país continúan presentando problemas con el cálculo de los índices de consumos que

    intervienen y permiten caracterizar los diferentes procesos productivos, tal es el caso

    de la Industria Arrocera, en la que estos indicadores se determinan a partir de criterios

    prácticos. También se plantea que en este sector existe desconocimiento en cuanto a

  • 3

    las vías para economizar energía y cómo se puede influir sobre ellas, se manifiestan

    problemas con los equipos e instrumentos de medición y otras muchas limitaciones

    relativas (Santos Guerra, Arrastía Acosta, Castillo Toro, & Hernández López, 2013).

    El proceso productivo del arroz se puede desglosar en varias etapas, siendo el secado

    de la masa de granos, la de mayor influencia en la calidad final del producto, así como

    en los costos debido al consumo de combustibles y electricidad (Arrastía Acosta,

    Santos Guerra, Castillo Toro, & Hernández López, 2013). En este sector industrial los

    principales portadores energéticos empleados son el diésel y la energía eléctrica,

    constituyendo en algunos secaderos del país el 69,98 % y 29,60 % del total de

    consumo energético respectivamente; dejando tan solo un 0,42 % para portadores

    como el aceite lubricante y las grasas (Díaz Navarro, 2014). Por tales motivos se hace

    necesaria la implementación de alternativas viables para sustituir estos portadores por

    otras fuentes de energía que puedan garantizar las condiciones indispensables para

    llevar a cabo el secado del grano con iguales o mejores índices de calidad, elevando

    de esta manera la eficiencia energética de dicha actividad.

    Ideas encaminadas a aprovechar los residuos arroceros toman cada vez más fuerza

    en el mundo y en Cuba en específico. Un residuo que representa un recurso

    reutilizable, del cual se obtienen grandes volúmenes, es la cascarilla o cáscara del

    arroz; se estima que en el mundo se generan anualmente ciento trece millones de

    toneladas métricas del mismo, con un potencial energético de entre 13,2 MJ/kg y 14,2

    MJ/kg; lo que hace muy objetivo considerarlo como una fuente renovable de energía

    (Contreras Velásquez, Pereda Reyes, & Romero Romero, 2012)

  • 4

    La Unidad Económica Básica Industrial (UEBI) Victoria de Girón está enclavada en el

    municipio Consolación del Sur perteneciente a la provincia de Pinar del Río. La misma

    ha presentado indicadores desfavorables en lo que a aprovechamiento eficiente de los

    portadores energéticos respecta en el proceso de secado del arroz (Díaz Navarro,

    2014). El deterioro progresivo de sus cuatro unidades de secado, modelo STEIN,

    durante sus más de 40 años de explotación y la falta de una política de gestión eficiente

    de la energía son causas que apoyan el criterio anterior. Por tales motivos se ha

    convertido en una máxima para los directivos y trabajadores de la misma buscar

    alternativas que eleven estos indicadores. De conjunto con la Universidad de Pinar del

    Río Hermanos Saíz Montes de Oca; en específico con la Disciplina de Tecnologías

    energética, Mantenimiento y Automotriz de la Carrera de Ingeniería Mecánica; se ha

    llevado a cabo un proceso de búsqueda de soluciones que ha constado de varias

    etapas. En un primer momento se realizó un Diagnóstico Integral de la actividad del

    Mantenimiento Industrial en la misma, ya que la eficiencia en el proceso de

    mantenimiento y la eficiencia energética de una industria van de la mano (Altmann,

    2015), arrojando debilidades que se pretenden corregir con cursos de capacitación a

    los especialistas encargados de la actividad, entre otras acciones.

    Un segundo momento lo constituyo la realización de un Diagnóstico Energético que

    permitió determinar los principales portadores del centro, así como los puestos claves

    dentro del proceso industrial que allí se acomete; siendo las cuatro unidades de secado

    STEIN las principales consumidoras, con un consumo percápita de aproximadamente

    el 15,36 % del total y el portador energético de mayor demanda el diésel (Díaz Navarro,

    2014).

  • 5

    Es por tal motivo que la presente investigación, constituyendo parte ya de una tercera

    etapa, pretende determinar las posibles soluciones que se pueden acometer para

    disminuir el consumo del portador energético diésel en el proceso de secado del arroz;

    evaluando alternativas para el aprovechamiento, como combustible, de los residuos

    del proceso productivo y soluciones constructivas que eviten las pérdidas energéticas

    fundamentalmente por transferencia de calor del aire empleado para el secado del

    grano. Con tales fines se propone el siguiente diseño investigativo:

    Problema científico: ¿Cómo se puede emplear el residuo cascarilla de arroz para

    mejorar la eficiencia energética del proceso de secado del grano en la Unidad

    Económica Básica Industrial (UEBI) Victoria de Girón, Municipio Consolación del Sur,

    Pinar del Río?

    Objeto de la Investigación: Hornos incineradores de materia orgánica.

    Campo de acción: Tecnología de secado del arroz de la UEBI Victoria de Girón.

    Objetivo: Realizar la propuesta de diseño de un horno que caliente el aire, del proceso

    de secado del grano, empleando como combustible la cascarilla de arroz en la Unidad

    Económica Básica Industrial (UEBI) Victoria de Girón.

    Objetivos específicos:

    Cuantificar los volúmenes del residuo cascarilla de arroz en la Unidad

    Económica Básica Industrial (UEBI) Victoria de Girón.

    Determinar la cantidad de energía necesaria para llevar a cabo el proceso de

    secado del arroz en la Unidad Económica Básica Industrial (UEBI) Victoria de

    Girón.

  • 6

    Valorar técnica y económicamente la propuesta de diseño de un horno que

    caliente el aire necesario para el proceso de secado empleando como

    combustible la cascarilla de arroz en la Unidad Económica Básica Industrial

    (UEBI) Victoria de Girón.

    Hipótesis: El empleo de un horno que caliente el aire, utilizado en el proceso de

    secado del grano, usando como combustible la cascarilla del arroz, constituye una

    alternativa que mejorará la eficiencia energética del proceso en la Unidad Económica

    Básica Industrial (UEBI) Victoria de Girón.

    Tareas de la Investigación:

    Búsqueda bibliográfica y estudio del objeto de la investigación.

    Confección del diseño de la Investigación.

    Proceso de selección de las metodologías a emplear para realizar los cálculos

    pertinentes que validen la eficacia en el aspecto energético de las propuestas

    realizadas.

    Toma de datos de los principales indicadores energéticos del proceso de

    secado del arroz en la Unidad Económica Básica Industrial (UEBI) Victoria de

    Girón del municipio Consolación del Sur en la provincia de Pinar del Río.

    Medición de las dimensiones de los conductos de aire caliente de las torres de

    secado de la Unidad Económica Básica Industrial (UEBI) Victoria de Girón del

    municipio Consolación del Sur en la provincia de Pinar del Río.

    Selección del área donde se ubicaría el horno propuesto para la torre de secado

    de la Unidad Económica Básica Industrial (UEBI) Victoria de Girón del municipio

    Consolación del Sur en la provincia de Pinar del Río.

  • 7

    Escritura del Informe de la Tesis en opción del grado de Master en Eficiencia

    Energética.

    Resultados esperados: Se espera obtener una propuesta de horno, factible desde el

    punto de vista energético, para calentar el aire empleado en el proceso de secado del

    arroz, utilizando como combustible la cascarilla del mismo.

  • 8

    CAPÍTULO I

    REVISIÓN

    BIBLIOGRÁFICA

  • 9

    CAPÍTULO I. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA

    En el presente Capítulo se pretende argumentar de manera ampliada todo lo

    relacionado con el objeto de la investigación. Realizando un recorrido por el proceso

    de secado del arroz y todo lo referente a técnicas y medidas para garantizar una

    eficiencia energética óptima en dicha actividad. Así mismo se mostrará información

    detallada de los hornos industriales, su campo de empleo, características del diseño

    estructural y energético de los mismos y sus diferentes clasificaciones.

    Se pretende lograr una revisión bibliográfica amplia, utilizando materiales actualizados

    que permitan introducir al lector en todo lo relacionado con el estado más actual del

    objeto de estudio, sus antecedentes y perspectivas futuras, de manera que la

    investigación realizada tenga en este Capítulo una base de apoyo para su justificación.

    1.1. El Arroz (Oryza sativa L.)

    El arroz (Oryza sativa L.) es una especie perteneciente a la familia de las gramíneas

    cuyo fruto es comestible. Es originario del continente asiático y se cultiva

    aproximadamente desde hace más de 5 000 años (a.c.), se puede decir que es parte

    inseparable de muchas de estas culturas. El arroz es el segundo cereal más cultivado

    en el mundo con 736 200 000 t producidas en el año 2012 tras el maíz (913 000 000

    toneladas). Eso sí, es el más importante para la alimentación del hombre y fuente de

  • 10

    una quinta parte de las calorías consumidas en el mundo como parte de su dieta básica

    (Ecured.cu, 2015).

    La Figura 1.1 muestra los niveles de producción de arroz de los principales países

    productores de este cereal. Cuba produce comparado con el resto del mundo el

    0,01 % demostrando con este resultado la magnitud que alcanza la producción

    mundial.

    En América Latina y el Caribe el arroz es, como en el resto del mundo, una de las

    fuentes más importantes de calorías y proteínas, se producen treinta millones de

    toneladas de arroz en siete millones de hectáreas anualmente, con un rendimiento

    promedio de tres toneladas por hectárea cultivada (Pedrera, Díaz Solís, Morejón

    Rivera, & Ipsán Pedrera, 2013).

    En Cuba el cultivo de este cereal se ha extendido a casi todas las regiones del país y

    constituye la principal fuente de carbohidratos en la alimentación de la población, con

    un consumo aproximado de 670 000 t al año y un percápita nacional anual que supera

    los 70 kg, mientras que el promedio mundial se encuentra por los 57 kg (Díaz, 2011).

    Figura 1.1: Producción de arroz en toneladas métricas por países. Fuente: (Producción Mundial Arroz, 2015) disponible en https://www.produccionmundialarroz.com/

  • 11

    Las variedades de arroz cultivadas han ido evolucionando en los últimos años,

    mediante una gradual renovación de las más antiguas, en función de las mejores

    características; provocando la desaparición de determinadas variedades, pues las

    nuevas ofrecen ventajas en lo referente a una mayor resistencia a enfermedades,

    mejor calidad de grano y una mayor productividad. Los programas de mejora genética

    se basan en la producción de plantas de arroz dihaploides, mediante el cultivo de

    plantas obtenidas a partir de cruzamientos previos. En el mundo hay cuatro clases de

    arroz (Espinal & Covaleda, 2005):

    El índica, que es de grano largo y delgado, constituye aproximadamente el

    87 % de la producción mundial y se cultiva principalmente en los países

    tropicales, en regiones subtropicales del sur de los Estados unidos, en el centro

    y sur de China, y el sur y sudeste asiático.

    El japónica, cuyo grano es de forma redonda, constituye aproximadamente el

    11 % de la oferta global y crece en los climas templados de Japón, Corea,

    Taiwán, el norte y el centro norte de China, Australia, el Mediterráneo, el norte

    del Brasil, Uruguay y California; el aromático, que incluye los basmati de la India

    y Pakistán.

    Los Jazmines, de Tailandia y otras variedades menos conocidas.

    Los glutinous, que se usan en postres, comidas ceremoniales y platos dulces

    y que son exportados por Tailandia. Estas dos últimas clases solo constituyen

    cerca de un 2 % de la producción mundial.

    En la Unidad Económica Básica Industrial (UEBI) Victoria de Girón del municipio

    Consolación del Sur en la provincia de Pinar del Río se cultiva la variedad de arroz

  • 12

    INCA LP-5 de ciclo corto. La misma ofrece ventajas relacionadas con una alta

    capacidad de ahijamiento, garantiza la maduración uniforme del grano, es resistente

    al acamado, a las plagas y presenta un alto potencial de rendimiento agrícola e

    industrial.

    El proceso de cultivo pasa por varias etapas. Se comienza por preparar el terreno,

    etapa esta en la que el mayor consumo de energía ocurre en los diferentes equipos y

    maquinarias empleadas para esta tarea, dígase preparado de suelos y riego para

    preablandar. Posteriormente se siembran las posturas que deben ser cuidadas con

    esmero para evitar las plagas y los periodos de sequía prolongados, ya que este cultivo

    requiere de mucha agua para su desarrollo por lo que se debe garantizar el correcto

    regadío del mismo mediante el empleo de motobombas en la mayoría de los casos.

    Una tercera etapa consiste en la recolección del grano, proceso este que a gran escala

    se realiza con cosechadoras industriales o combinadas como también se conocen

    estos gigantes, en su interior el grano pasa por todo un sistema que se encarga de

    cortarlo y limpiarlo de forma adecuada. De esta forma se logra que el arroz llegue al

    secadero lo más exento de impurezas posible coadyuvando así a mejorar la calidad

    del secado y aumentar la capacidad del secadero y su eficiencia industrial. Las etapas

    finales son: el secado del grano, donde se le extrae la humedad que trae este de las

    etapas anteriores y se deja listo para el último paso antes de estar apto para ser

    consumido o empleado como semilla; el molinado, proceso en el que se separa el

    grano de arroz de su cáscara. Según bibliografías especializadas en el tema los

    principales portadores energéticos en estas etapas son el Diésel y la Energía Eléctrica,

    por lo que una mayor eficiencia en estas garantiza la realización de un proceso más

  • 13

    efectivo desde el punto de vista económico y medioambiental. Algunas bibliografías

    refieren que el consumo de energía para producir un kilogramo de arroz es de 314 kcal

    en el caso de un sistema de cultivo orgánico orientado a mercados selectivos y 696

    kcal en el sistema prevaleciente de altos insumos químicos (Castellanos Lozano,

    2013).

    1.2. Proceso de secado del arroz

    El secado del arroz comienza en el campo después que el grano ha alcanzado su

    maduración. Durante el período de maduración el grano recibe agua y nutrientes de la

    planta bajo las condiciones normales de desarrollo de luz solar, fertilidad y humedad.

    En la maduración y el comienzo del secado, el grano decrece gradualmente en su

    dependencia de la planta para el agua y sus nutrientes y comienza a incrementar su

    interacción con el medio ambiente. Durante este período el grano transpira más

    humedad al aire que la que recibe de la planta, con la consecuencia de que esta

    decrece gradualmente. Siempre que la humedad del grano cae por debajo de las

    condiciones de equilibrio de temperatura y humedad relativa en el medio ambiente el

    grano de arroz cáscara que es higroscópico reabsorbe humedad. Así el contenido de

    humedad que contiene el grano comienza a estar sujeto al medio ambiente en el cual

    existe. Sobre el período de aproximadamente una semana o más de su maduración

    completa, el grano de arroz cambia de la dependencia de la planta a la independencia

    de ella. La temperatura y humedad del aire ambiente tanto como la maduración del

    grano están determinados mayormente por la velocidad a la cual este puede secarse.

    Después de iniciado el secado, continúa siendo higroscópico y responde a las

    condiciones de cada medio ambiente al cual sea expuesto.

  • 14

    Luego de recolectado, el arroz cáscara (en el medio se le llama así al grano de arroz

    que no ha sido pasado por el molino y conserva aún su cáscara) pasa por un proceso

    de secado donde se le extrae el exceso de humedad hasta dejarlo en las condiciones

    ideales para su futuro aprovechamiento, ya sea como semilla o para ser molido y

    consumido como alimento. Para este fin se emplean varios métodos, depende mucho

    de las características económicas del país donde se realiza la cosecha, se puede llevar

    a cabo un proceso de secado empleando la energía proveniente del sol o en el caso

    de los países con un mayor desarrollo en este sector se realiza el secado del grano

    empleando equipos de alto rendimiento (quemadores) que utilizan combustibles fósiles

    para calentar aire (medio caliente) que circula dentro de las torres de secado donde

    interactúa con el arroz cáscara.

    Los valores de humedad del grano para considerar al mismo seco varían en

    dependencia de la variedad de arroz cosechada, aunque según las consultas

    bibliográficas realizadas este rango se puede acotar entre un 11 % y un 13 % de

    humedad relativa final. En Cuba el valor empleado en este sentido según (Unión de

    Empresas Arroceras (UCAIC), 1988) se enmarca en el rango de 12.5 % y 13.5 % de

    humedad del grano.

    Algunos de los sistemas de secado de arroz más empleados en el mundo son

    (Estudios y Diseños Agroindustriales (EDIAGRO), 2015):

    Sistema de secado en torres, “por pasos”, con reposos intermedios en silos

    exteriores. Este sistema fue desarrollado inicialmente en los Estados Unidos de

    América hacia 1950.

  • 15

    Sistema de secado en torre, “intermitente”, consiste en pasos cortos de

    secado y reposo en la misma torre (secciones con aire y secciones ciegas).

    Sistema de secado en columnas, “por cochadas”, recirculando. Este método

    provoca un bajo rendimiento de grano entero durante el proceso de molinado.

    Sistema de secado en albercas.

    Sistema de secado con unidades de lecho fluidizado.

    Todos estos sistemas tienen en común la presencia de un medio caliente que circula

    e interactúa con el arroz cáscara extrayendo la humedad del mismo mediante un

    incremento de su temperatura, en la mayoría de los casos este medio es el aire

    previamente calentado, como se expresaba con anterioridad. Ahora bien, el rango de

    temperatura a la que el aire interactúa con el grano y el tiempo de exposición deben

    estar muy bien controlados para evitar que el arroz arda y por consiguiente el porciento

    de granos enteros en el proceso de molido sea demasiado bajo, no cumpliendo de

    esta forma con los estándares de calidad establecidos.

    Por tal motivo los sistemas de secado de arroz en su mayoría someten al grano a

    varios pases, dejando periodos de reposo entre estos. El grano sale de cada pase con

    un valor de humedad menor al que tenía con anterioridad y esto garantiza que la

    temperatura del pase siguiente sea menor que la del anterior.

    En Cuba este proceso está muy bien documentado, estableciéndose un rango de

    temperatura del aire que interactúa con la masa de arroz entre los 50 ºC y 55 ºC,

    dependiendo directamente de la temperatura del arroz a la salida del pase que se le

    esté dando, temperatura que debe oscilar entre los 37 ºC y 38 ºC con un tiempo de

    exposición a los gases que no exceda los 30 min. El factor fundamental en la operación

  • 16

    de secado es la temperatura del grano a la salida de la torre, dependiendo de esta se

    realizan los ajustes de temperatura de los gases calientes de entrada a la torre así

    como el tiempo de exposición. Desde el momento en que el arroz alcance el 17 % o

    17,5 % de humedad, se debe ser más cuidadoso con las temperaturas a las que se

    seca. La Tabla 1.1 muestra la temperatura de salida del grano a diferentes pases.

    Tabla 1.1. Temperatura (ºC) del grano a diferentes pases.

    Pases % de humedad de entrada

    30 % 24 % 20 %

    1 40—41 39—40 38—39

    2 39—40 38—39 37—38

    3 38—39 37—38 37

    4 37—38 37 --

    5 37 -- -- Fuente: (Unión de Empresas Arroceras (UCAIC), 1988)

    Todo el arroz que contenga un porciento de humedad de recibo que sea superior al 24

    % debe dársele como promedio cinco pases, aquel que su porcentaje sea menor que

    24 % se le debe dar cuatro pases y aquel que sea inferior a 20 % dos o un solo pase.

    El período prudencial de tiempo entre cada pase puede ser entre 12 h y 14 h de esta

    forma se evita que el arroz se arda (Unión de Empresas Arroceras (UCAIC), 1988).

    El proceso de secado del grano de arroz cáscara constituye en su totalidad la

    operación de mayor importancia para obtener un producto final de buena calidad, en

    el mismo también se registran los mayores índices de consumo de portadores

    energéticos. Por tales motivos los productores que cuentan con escasos recursos

    económicos deciden en la mayoría de los casos vender sus cosechas sin secar el

    grano, lo que por supuesto hace que los precios de ventas sean muy inferiores a los

    del arroz procesado. Países como Cuba invierten cuantiosas sumas en estos fines, es

  • 17

    por eso que se hace necesario todo un movimiento innovador que indague y

    experimente con nuevas fuentes de energía menos costosas. Un ejemplo de esto lo

    constituye la cascarilla del arroz, residuo del propio proceso que puede ser quemado

    y utilizado como combustible.

    1.3. La cascarilla de arroz.

    La cascarilla de arroz es uno de los desechos más importantes de la producción de

    este cereal. La cantidad de cascarilla que se genera, año tras año en Cuba puede

    superar las 736 200 000 t/año, con el agravante de que por su baja degradabilidad

    natural, se acumula en el ambiente, generando situaciones extremas de

    contaminación. La cascarilla de arroz es de consistencia quebradiza, abrasiva y su

    color varía del pardo rojizo al púrpura oscuro en dependencia de la variedad de arroz

    cultivada.

    1.3.1. Propiedades físicas de la cascarilla de arroz.

    Para el empleo de la cascarilla de arroz como combustible, incluso para otros fines, se

    deben conocer muy bien las propiedades físicas de la misma. Estas son las siguientes

    (Villada & Gutierrez, 2010):

    Densidad.

    La densidad de la cascarilla es baja, por lo que al apilarse la misma ocupa grandes

    espacios. Se determinan tres variantes de esta propiedad:

    1. Densidad a granel: En muchas aplicaciones la rentabilidad de la utilización de la

    cascarilla depende en gran medida de los costos de transportación, los cuales a su

    vez están determinados por la densidad a granel de la misma. La densidad a granel

  • 18

    es la masa (m) de cascarilla que equivale a un metro cúbico. Se determinaron los

    siguientes valores:

    Cascarilla suelta, empacada a granel: 100 kg/m3

    Luego de someter el recipiente a vibración: 143 kg/m3

    Compactación manual al estrujarla con los pies: 180 kg/m3

    2. Densidad aparente: Una cascarilla contiene muchísimos poros microscópicos.

    Estos poros llegan a la superficie y se abren hacia afuera. Otros se encuentran en

    el interior y se cierran sobre sí mismos. Al determinar la masa (m) y el volumen (V)

    de una cascarilla se obtiene como cociente (m/V) la densidad aparente de esta con

    un valor de 124 kg/m3. En la práctica esto significa que una cascarilla, al entrar en

    contacto con el agua, la absorbe lentamente y luego se hunde.

    3. Densidad específica: Este valor es el resultado de la resta de la densidad aparente

    menos el volumen de todos los poros contenidos en una cascarilla, obteniendo un

    valor de 1420 kg/m3. La cascarilla es por consiguiente 1,4 veces más pesada que

    el agua.

    Conductividad térmica de la cascarilla (K).

    La conductividad térmica de la cascarilla es comparable a la del corcho granulado o

    lana mineral (Tabla 1.2), haciendo de la misma un material aislante por excelencia,

    utilizado en la industria de la construcción con este fin.

    Tabla 1.2. Comparación de los valores de conductividad térmica.

    Material Valores de K (W/mK)

    Cascarilla 0.03605

    Lana mineral 0.03033

    Corcho granulado 0.02888 Fuente: (Villada & Gutierrez, 2010)

  • 19

    Dureza de la cascarilla.

    La dureza de la cascarilla tiene el valor seis en la escala de Mohs y la ceniza cerca de

    un seis punto cinco. Estos valores unidos a la estructura dentada de su superficie le

    proporcionan a esta y a sus cenizas características similares a la del papel de lija.

    Forma, Tamaño y Peso específico de la cascarilla.

    La cascarilla tiene forma de canoa, superficie rugosa y su color varía en dependencia

    de la variedad de arroz. También dependiendo de la variedad su longitud esta entre

    los ocho y diez milímetros de largo por uno o dos de ancho (el ancho corresponde con

    aproximadamente el 30 % o el 40 % de su longitud). En dependencia del tamaño una

    cascarilla pesa entre dos punto cinco y cuatro punto ocho miligramos, con un peso

    específico de 125 kg/m3, es decir, una tonelada a granel ocupa un volumen de ocho

    metros cúbicos.

    Porosidad de la cascarilla de arroz.

    El volumen de porosidad de la cascarilla es del 54 %.

    1.3.2. Propiedades químicas de la cascarilla de arroz.

    Un análisis gravimétrico de más de 20 variedades de cascarilla de arroz, realizado en

    Colombia, arrojó los resultados que se muestran en la Tabla 1.3.

    Tabla 1.3. Composición gravimétrica de la cascarilla de arroz.

    Elemento % del Peso

    Carbono (C) 39-42

    Oxígeno (O) 32-34

    Minerales (Ceniza) 14-24

    Hidrógeno (H) 4-5

    Nitrógeno (N) 0.3-2 Fuente: (Ministerio de Minas y Energía de Colombia, 1990)

  • 20

    De igual forma un análisis de sus principales compuestos nutritivos arrojó los

    resultados que se muestran en la Tabla 1.4.

    Tabla 1.4. Compuestos nutritivos en la cascarilla de arroz.

    Compuesto % en peso

    Proteína 1.9-6.2

    Grasas 0.4-1.5

    Fibras 34.3-41.6

    Celulosa 37.2-43.4

    Hemicelulosa (Pentosanas) 17.2-22.2

    Minerales (Ceniza) 14.2-24.6

    Azúcar 0.2-0.4 Fuente: (Ministerio de Minas y Energía de Colombia, 1990)

    La gran variación del contenido de proteínas radica en una separación no del todo

    limpia entre cascarilla y película de aleurona. Como promedio realista debería

    asumirse un 3 % de contenido de proteína (Ministerio de Minas y Energía de Colombia,

    1990).

    Este análisis demuestra que a pesar de la gran cantidad de variedades analizadas los

    contenidos de oxígeno, carbono, nitrógeno e hidrógeno se mantienen en rangos

    estrechos. Siendo el porciento de cenizas el que más varia (10 puntos porcentuales),

    estando esto relacionado fundamentalmente con las características propias del tipo de

    suelo donde se realiza el cultivo.

    Otro estudio realizado al arroz de la variedad paddy arrojo los resultados que se

    muestran en la Tabla 1.5.

    Tabla 1.5. Composición gravimétrica de la cascarilla del arroz paddy.

    Cascarilla de arroz Cenizas de cascarilla de

    arroz

    Componente % Componente %

    Carbono 39,1 Ceniza de Sílice 94,5

    Hidrógeno 5,2 Oxido de Calcio 0,25

  • 21

    Nitrógeno 0,6 Oxido de Magnesio 0,23

    Oxigeno 37,2 Oxido de Potasio 1,10

    Azufre 0,1 Oxido de Sodio 0,78

    Cenizas 17,8 Sulfato 0,56 Fuente: (Varón Camargo, 2005)

    Comparando con los resultados del estudio anterior se puede ver el grado de

    compatibilidad o coincidencia entre ambas investigaciones, por lo que se puede

    establecer que los rangos establecidos en el análisis realizado por el Ministerio de

    Minas y Energía de Colombia son bastante certeros.

    Otra propiedad química de importancia en la cascarilla del arroz lo constituye su poder

    calorífico el cual en relación con el peso en seco de la misma varía entre los 13,9

    MJ/kg y 16,2 MJ/kg (3 320,98 kcal/kg y 3 870,5 kcal/kg respectivamente). Las

    variaciones en estos valores obedecen a diferentes contenidos de ceniza e impurezas

    producidas por la película aceitosa de la aleurona (Kerneur, 1992). En el caso de la

    variedad de arroz paddy se plantea que el poder calórico de la cascarilla de la misma

    es de 3 287,9 kcal/kg y se especifica que esto se debe a su alto contenido de sílice

    (20 %), factor este que dificulta la combustión (Varón Camargo, 2005).

    En la Tabla 1.6 se compara el poder calorífico de la cascarilla de arroz con el de otros

    combustibles derivados de la agroindustria y con algunos energéticos tradicionales.

    En la misma se puede notar que la cascarilla tiene un poder calorífico superior que el

    del bagazo de caña húmedo, entre otros combustibles.

    Tabla 1.6. Poder calorífico de algunos combustibles.

    Producto Poder Calorífico (kcal/kg)

    Cascarilla de arroz 3 650

    Cascarilla de café 4 251

    Bagazo caña húmedo 2 335

    Bagacillo 3 142

  • 22

    Tusa de maíz 5 225

    Carbón 7 000

    Petróleo 7 800

    Leña verde (30 % humedad) 2 500 Fuente: (Kerneur, 1992)

    El esqueleto de dióxido de silicio (SiO2) de la cascarilla hace engorroso el proceso de

    quemado de la misma, generando cenizas de color blanco o rosado cuando la quema

    se realiza al aire libre. Esto ocurre porque el oxígeno del aire llega fácilmente al

    carbono adherido en los poros más profundos. En quemadores comerciales de

    cascarilla se produce por lo general una ceniza entre negra y gris. El modo de quemar

    este residuo depende en gran parte de que producto o subproducto se desee obtener.

    1.4. Los hornos incineradores.

    La mayoría de las instalaciones industriales modernas necesitan energía para su

    funcionamiento, esta muchas veces es suministrada en forma de calor, de ahí que

    siempre se requiera de equipos (dígase calderas, hornos, etc.) encargados de la

    producción de la misma.

    En el mundo moderno, la energía para usos industriales tiene varias fuentes: la energía

    química de las sustancias combustibles, la energía potencial del agua acumulada en

    embalses, la energía atómica, la energía solar, la energía de las mareas y otras. Pero,

    a pesar de existir diversas fuentes, la mayor parte se obtiene a partir de la energía

    química liberada, en forma de calor, por los combustibles al quemarse estos en los

    hogares de los hornos; de aquí, que el correcto diseño de estos equipos, su óptima

    construcción y su eficiente operación, sean de gran importancia y singular interés,

    máxima si se tiene en cuenta que los recursos combustibles del mundo son limitados

  • 23

    y su mala utilización, además de contribuir a su agotamiento, significa pérdidas

    económicas para cualquier nación.

    De ahí que se puede decir que un horno incinerador es un dispositivo que genera

    energía en forma de calor mediante el proceso de incineración de un combustible dado

    manteniendo el mismo dentro de un compartimento cerrado. Estos tienen varios usos

    que van desde el empleo de los mismo para cocer alimentos como la generación de

    calor para llevar a cabo complejos procesos industriales.

    1.4.1. Tipos de hornos incineradores.

    Los hornos incineradores industriales están diferenciados en la práctica atendiendo al

    tipo de tareas que realizan, aunque el principio de funcionamiento de uno con respecto

    al otro no difiere en gran medida. A continuación se relacionan los diferentes tipos de

    hornos incineradores empleados en procesos industriales:

    1. Hornos de Cámara.

    Como su nombre lo indica, estos hornos están constituidos por una cámara donde se

    quema el combustible, en este caso, mediante quemadores a la llama. Estos pueden

    operar con combustibles líquidos, gaseosos o sólidos. La forma general de este horno

    es un prisma de base cuadrada o rectangular, cuya altura es mucho mayor que el

    ancho y la profundidad. Los quemadores se colocan en la pared frontal, en las paredes

    laterales y muy excepcionalmente en el techo.

    Los hornos de cámara son (en la actualidad) los más empleados en las centrales

    termoeléctricas, por ser los que permiten las mayores capacidades de generación de

    vapor y por lo tanto de energía eléctrica.

  • 24

    Estos hornos se dividen en dos grupos atendiendo a la tipología de la cámara de

    combustión (Garay, 2001):

    hornos de cámara abierta.

    hornos de cámara semiabierta.

    Los hornos de cámara abierta presentan una sola cámara como tal, mientras que los

    de cámara semiabierta presentan dos, una inferior llamada propiamente cámara de

    combustión, que es donde están ubicados los quemadores y en la cual transcurre en

    lo fundamental el proceso de combustión, y una superior, llamada de enfriamiento,

    donde concluye el proceso de combustión y se transfiere una parte importante del calor

    a las paredes de agua y sobrecalentadores radiantes.

    Los hornos de cámara utilizados para sólidos, pueden a su vez clasificarse en hornos

    con extracción de ceniza seca o con extracción de ceniza líquida.

    Los hornos con extracción de ceniza seca son los más utilizados en el mundo, estos

    son del tipo de cámara abierta y tienen una tolva inferior para recoger la ceniza que se

    desprende de las llamas mientras que los de extracción de ceniza líquida pueden ser

    de cámara abierta o semiabierta, en ambos casos, en la zona de ubicación de los

    quemadores las pantallas de agua se recubren con material refractario, para crear una

    zona de altas temperaturas (1500 ºC a 1600 ºC) con lo que se consigue fundir una

    parte de la ceniza, la cual escurre hacia el fondo del horno y sale por el orificio previsto

    para ello.

    2. Hornos de suspensión.

    La tecnología de suspensión permite quemar una gran variedad de combustibles

    (carbón, residuos biomásicos, residuos inertes), de manera limpia y eficaz. La

  • 25

    fluidización, desarrolla la combustión, en el seno de una masa en suspensión de

    partículas de combustibles, es decir, crea una columna de partículas sólidas

    (homogeneizadas), a través de las cuales pasa un fluido (líquido o gas) de forma

    ascendente. Existen varios tipos de hornos de suspensión (Garay, 2001):

    a) Hornos de lecho fluidizado.

    Los lechos fluidizados tuvieron su origen en los trabajos desarrollados por Fritz Winkler

    para gasificar el carbón, a mediados de la década de 1920. Con posterioridad se

    realizaron las primeras aplicaciones para la combustión con fines energéticos, pero no

    fue hasta 1960 que, con la necesidad de reducir las emisiones gaseosas

    contaminantes (SO2 y NOx) y viéndose en el lecho fluidizado una vía para su alcance,

    se desarrollaron importantes esfuerzos investigativos e implementaciones industriales,

    que condujeron a los primeros generadores de vapor comerciales. Estos operaban con

    carbón como combustible y posteriormente surgieron aplicaciones en otros

    combustibles, como por ejemplo la cáscara de arroz y otras biomasas. La combustión

    en lecho fluidizado se caracteriza por la intensa transferencia de calor en la cámara

    del horno y por las bajas temperaturas a que ocurre (800 ºC – 900 ºC).

    El horno con tecnología de lecho fluidizado presenta una capa de combustible sobre

    una parrilla distribuidora de aire; si la velocidad del aire es baja, este atraviesa la capa

    y provoca las reacciones de combustión, pero el combustible permanece formando un

    lecho fijo. Si ahora se incrementa la velocidad del aire cierto valor, las partículas de

    combustible serán suspendidas por la corriente de aire y gases de la combustión,

    formándose un lecho o capa fluidizada que adquirirá ciertas propiedades de fluido, de

    donde toma su nombre. Si la velocidad del aire se incrementa aún más, podrá pasarse

  • 26

    al llamado lecho fluidizado burbujeante, en el cual las burbujas de aire se unen

    formando grandes huecos en el lecho de partículas sólidas.

    b) Hornos ciclónicos.

    Los hornos ciclónicos fueron desarrollados en la década de los cuarenta, siendo

    instalados los primeros en una caldera comercial en 1944. El objetivo central que se

    buscó fue disponer de un sistema que permitiera el uso del carbón con un menor grado

    de preparación, que el necesario para la combustión a la llama, con el fin de reducir

    los costos de la preparación, a la vez que se alcanzaba una alta eficiencia en la

    combustión, una reducción de la emisión de sólidos volátiles y se facilitaba la

    extracción de la ceniza.

    El horno ciclónico está constituido por un cilindro enfriado por agua, que recibe el

    combustible junto con el aire primario por el extremo delantero de manera tangencial.

    c) Hornos de torbellino.

    Este tipo de horno tiene como principio de trabajo la creación de un torbellino o ciclón

    en su interior; esto con el objetivo de incrementar la turbulencia y el mezclado del aire

    y el combustible, para favorecer el proceso de combustión y poder reducir el exceso

    de aire; todo lo cual se traduce en un incremento de la eficiencia del generador de

    vapor. Los hornos de torbellino se clasifican en dos tipos: torbellino vertical y torbellino

    horizontal. A continuación se verán sus características generales:

    Horno de torbellino vertical.

    El principio de funcionamiento de este equipo consiste en una cámara prismática, de

    sección transversal cuadrada, en la que se colocan toberas de aire en sus cuatro

  • 27

    esquinas, de manera tal que al descargar sus chorros, crean un torbellino de eje

    vertical.

    Horno de torbellino horizontal.

    El horno de torbellino horizontal consiste en una cámara prismática, de sección

    transversal rectangular, en la que se colocan toberas de aire en sus paredes frontal y

    trasera, de manera tal que se crea un torbellino de eje horizontal. El horno puede

    además poseer una pequeña parrilla formando el piso, por la que entra una pequeña

    cantidad de aire.

    3. Hornos de semisuspensión.

    Los hornos de semisuspensión se caracterizan porque en ellos el combustible se

    quema simultáneamente mediante dos modos de combustión. Una parte se quema en

    suspensión en la cámara del horno (las partículas finas) y la otra se quema en capa

    sobre una parrilla (las partículas gruesas). Este efecto se logra suministrando el

    combustible mediante un distribuidor o lanzador que, como su nombre indica, lanza el

    combustible a la cámara del horno. Las partículas finas son arrastradas por la corriente

    de gases y quemadas en suspensión en la cámara del horno, mientras que las gruesas

    caen sobre la parrilla del horno quemándose en capa. La magnitud de lo que se quema

    por uno y otro modo de combustión depende del grado de preparación del combustible

    (granulometría) y de la densidad de sus partículas. En los casos en que la parrilla sea

    fija se da origen al horno de parrilla horizontal basculante y en los casos que ésta tenga

    movimiento se da origen a una variante de horno de parrilla viajera.

  • 28

    Horno de parilla horizontal basculante (HPHB).

    El HPHB se caracteriza porque la parrilla es fija (no viaja) y a través de ella se

    suministra el aire primario que debe ser cerca del 80 % del total. El aire primario que

    entra por la parrilla se calienta aproximadamente hasta los 250 ºC y este tiene como

    función adicional enfriar la parrilla, por lo que no puede calentarse mucho más. La

    parrilla del piso está dividida en varias secciones longitudinales, correspondiendo una

    a cada distribuidor. La parrilla como tal está formada por piezas conocidas en los

    centrales como “caballitos”, las que se apoyan en una viga cuadrada que es accionada

    por un cilindro neumático, hidráulico o de vapor, que hace que ésta pivotee en su

    posición de manera tal, que la pieza (caballito) puede adoptar una posición inclinada,

    creándose una abertura entre una y otra por la que caen los residuos al cenicero, de

    donde son retirados posteriormente.

    Este tipo de horno es el más generalizado en las calderas modernas de la industria

    azucarera cubana.

    Horno de semisuspensión con parrilla viajera.

    Este horno es similar a los hornos de parrilla viajera, pero a diferencia de aquellos, en

    que el combustible es suministrado a la cabeza de la parrilla viajera, en este caso el

    combustible es suministrado por un distribuidor que lo lanza a la cámara de

    combustión.

    4. Hornos de Capa.

    Los hornos de capa pueden clasificarse de acuerdo con el grado de mecanización de

    los procesos de suministro del combustible y extracción de los residuos, en (Garay,

    2001):

  • 29

    Hornos manuales: En ellos tanto el suministro de combustible como la extracción de

    los residuos se efectúan manualmente. En la actualidad casi no existen estos tipos de

    hornos.

    Hornos semimecanizados: En este tipo de horno el combustible se suministra

    mecánicamente, pero los residuos tienen que ser extraídos de forma manual. Ejemplo

    de éstos son los hornos tradicionales de bagazo, llamados hornos de pila.

    Hornos mecanizados: En ellos se efectúan mecánicamente tanto el suministro del

    combustible como la extracción de los residuos.

    A su vez estos pueden dividirse en tres grupos:

    Hornos de parilla viajera.

    En este tipo de horno el combustible es suministrado a través de una tolva

    directamente a la cabeza de la parrilla viajera, la que se desplaza lentamente haciendo

    ir el combustible desde la entrada hasta la parte posterior del horno en que está la

    salida; durante este recorrido, el combustible primero se calienta y después alcanza la

    temperatura de ignición y comienza a arder; al llegar a la salida prácticamente se ha

    quemado todo y sólo quedan los residuos. El aire en este tipo de horno es suministrado

    por la parte inferior de la parrilla atravesando toda la capa de combustible, lográndose

    de esa forma un adecuado mezclado del comburente y el combustible.

    Hornos de parrilla fija inclinada.

    Este horno tiene su mayor aplicación en la combustión del bagazo de la caña de

    azúcar; fue muy usado en épocas pasadas y en la actualidad se utiliza en otros países

    pero no en Cuba. El horno de parrilla fija inclinada, está compuesto por una parrilla fija,

    inclinada aproximadamente 52º con la horizontal, un cenicero inclinado de 0º – 20º con

  • 30

    la horizontal y por una cavidad inferior recolectora de los residuos. La parrilla inclinada

    consta de dos partes: la primera, llamada parte superior o placa anterior, que es

    hermética no permitiendo el paso del aire a través de ella; la segunda, que es la parrilla

    propiamente, está compuesta por elementos individuales unidos entre sí y que

    pivotean en un punto, lo que permite ajustar el espacio que queda entre unos y otros

    para de esa forma controlar el gasto de aire. El combustible que cae en la placa

    anterior, suministrado por los alimentadores, sufre en esta primera etapa un proceso

    de secado; después, por gravedad, va cayendo a la parrilla donde al calentarse y

    ponerse en contacto con el aire comienza su combustión. El combustible quemado o

    prácticamente quemado cae por gravedad al cenicero, que es una parrilla casi

    horizontal donde se completa el proceso de combustión. Por último los residuos son

    recolectados en la cavidad inferior que hay debajo del cenicero. El aire para la

    combustión en este tipo de horno se suministra tanto frío como caliente, aunque con

    cierta temperatura siempre beneficia el proceso. El aire primario es suministrado por

    debajo de la parrilla y el secundario por juegos de toberas colocadas al frente de la

    misma.

    Hornos de Pila.

    Estos hornos buscan quemar el combustible en una cámara (hogar principal) con la

    mayor temperatura posible. Al salir del hogar principal los gases pasan a una cámara

    de combustión secundaria donde completan su combustión. Los quemadores de este

    horno tiene la forma de herradura; en el saltillo, y en ocasiones en la pared frontal, se

    hace un saliente que encierra a la llama en el hogar obstruyendo la “visión” de las

  • 31

    superficies de caldera, lo que permite disminuir la transferencia de calor por radiación

    de las llamas a las fluserías.

    1.5. Conclusiones del Capítulo.

    Según lo planteado en el cuerpo de este capítulo se puede estimar que el cultivo del

    arroz está ampliamente extendido a casi todas las latitudes del planeta,

    incrementándose cada vez más los volúmenes de producción del mismo y por

    consiguiente sus índices de consumo. Toda esta situación genera una necesidad

    creciente de incrementar las medidas encaminadas a obtener un grano final con una

    calidad óptima y esto solo se logra implementando un proceso de cultivo del grano

    cada vez más eficiente. Cuba no está exenta de esta problemática, ya que el arroz es

    la base de la canasta alimenticia de la gran mayoría de los cubanos. Por lo que el país

    debe fomentar una política que apoye las innovaciones tecnológicas en este sector de

    la industria agrícola nacional. No solo se puede encaminar este trabajo a mejorar las

    condiciones de cultivo en el campo, sino que se hace imperante perfeccionar el

    proceso de secado y molinado del grano, vital este para garantizar altos índices de

    calidad en la obtención de un producto final óptimo para el consumo adecuado del

    mismo.

    Varias son las tecnologías empleadas en el mundo para llevar a cabo el proceso de

    secado del arroz, todas con sus ventajas e inconvenientes. En Cuba la tecnología más

    extendida es la de torres de secado, por pasos, con reposo en silos exteriores. No es

    un secreto para nadie que las instalaciones existentes cuentan con varios años de

    explotación, factor este que tiene una incidencia negativa en los diferentes indicadores

    que evalúan la calidad final del proceso. Esta realidad se traduce en la ejecución de

  • 32

    un proceso cada vez más costoso, con un déficit en la calidad final del grano, índices

    de consumo de energía por unidad de producto procesado astronómicos y por

    consiguiente impactos medioambientales negativos en todas las aristas de este

    indicador. Los principales portadores energéticos de esta actividad económica son la

    energía eléctrica y el diésel, teniendo un alto peso este último, ya que es consumido

    por los equipos encargados del transporte y cosecha del grano y en una gran medida

    por los quemadores de las torres de secado, encargados de calentar el aire para dicho

    proceso.

    Estas son razones suficientes para volcarse completamente a la búsqueda de nuevas

    fuentes de energía, menos costosas, que sustituyan las convencionales. Ahí es donde

    entra a jugar su papel la cascarilla del arroz; residuo sólido del proceso de molinado,

    que se obtiene en grandes cantidades y cuyo aprovechamiento esta poco generalizado

    en Cuba, por lo que sus elevados volúmenes de acumulación se vuelven desde cierto

    punto un problema medioambiental. Este residuo cuenta con característica físico-

    químicas que lo convierten en una fuente importante de obtención de energía

    calorífica, lo que hace que la idea de emplear el mismo como combustible para calentar

    el aire del proceso de secado del grano de arroz sea factible y se convierta en una

    alternativa de sustitución del diésel, combustible fósil de un alto costo de obtención.

    En el mundo existen hornos incineradores de residuos sólidos con un ya probado

    desempeño en procesos industriales, por tanto, la alternativa de diseño de un equipo

    de esta magnitud es una iniciativa que puede arrojar resultados tanto económicos

    como de calidad del proceso, alentadores para la economía del país.

  • 33

    CAPÍTULO II

    MATERIALES Y

    MÉTODOS

  • 34

    CAPÍTULO II. MATERIALES Y MÉTODOS

    Para llevar a un feliz término esta investigación se hace imprescindible definir una

    metodología a seguir. En la misma se deben especificar y determinar los principales

    parámetros útiles en la propuesta de diseño del horno encargado de incinerar la

    cascarilla de arroz y su acoplamiento eficiente a la línea de secado de la torre de los

    secaderos presentes en la Unidad Económica Básica Industrial Victoria de Girón,

    entidad donde se desarrolla el trabajo.

    2.1. Generalidades de la Unidad Económica Básica Industrial Victoria de Girón.

    La investigación realizada se enmarca en el Departamento Industrial UEBI Victoria de

    Girón perteneciente a la Empresa Agroindustrial de Granos de Los Palacios. Dicha

    UEBI se encarga del secado y molinado de gran parte del arroz cosechado en la

    provincia de Pinar del Río. Para realizar esta labor la misma cuenta con:

    Cuatro secaderos marca STEIN con más de 40 años de explotación, con una

    capacidad de recibo de 128 t/día, de ellos tres se encuentran en explotación y

    uno en un proceso inversionista de montaje de silos y reparación de

    equipamiento tecnológico. Estos secaderos anualmente son sometidos a un

    proceso de mantenimiento general donde recuperan en su totalidad las

    capacidades productivas.

  • 35

    Un molino japonés, de marca SATAKE con una capacidad inicial de 12.0 t/h, el

    cual se encuentra sometido a un proceso de sustitución paulatina de su

    tecnología.

    Una base de transporte para el aseguramiento técnico- material y de dirección.

    Un departamento de maquinado.

    Almacén de piezas de repuesto, insumos, materiales y víveres.

    Infraestructura de dirección y control.

    La ubicación de todas estas áreas dentro de la unidad permite un flujo productivo lineal

    que facilita en una mayor medida el desarrollo del proceso llevado a cabo en la entidad

    (Figura 2.1).

    Figura 2.1: Vista aérea de la UEBI Victoria de Girón.

    Fuente: (Software Google Earth, 2010)

    2.1.1. Estado del residuo cascarilla de arroz en la UEBI.

    En el proceso de secado del arroz en la UEBI Victoria de Girón, el principal portador

    energético es el diésel. La cascarilla de arroz después del proceso de molinado se

    considera como un desecho residual que es aprovechado principalmente en las

    empresas polleras de la zona como parte de los forrajes elaborados en estas. El resto

  • 36

    de este residuo es depositado en una zona destinada para este fin, a la intemperie y

    como es un desecho de difícil biodegradación, cuando no existe suficiente espacio, la

    única opción es el quemado de este al aire libre causando efectos nocivos al

    medioambiente.

    Del total de arroz cascara procesado en la UEBI Victoria de Girón el 66,9 % constituye

    arroz limpio (grano entero, medio grano y cuarto grano), este valor es la expresión del

    rendimiento industrial de la entidad. Los subproductos, el polvo y la cabecilla,

    representan el 9.31% y 1.91% respectivamente. Por último la cascarilla, que hasta el

    momento constituye un residuo, es el 21.8% de la producción (García Rivero, 2010).

    2.1.2. Metodología para caracterizar químicamente la cascarilla de arroz de la

    variedad INCA LP-5.

    Para llevar a cabo esta caracterización se desarrollarán varios experimentos en los

    laboratorios de Química de la universidad de Pinar del Río con el objetivo de obtener

    los parámetros fundamentales:

    Porciento de humedad (ASTM D4442-07). [1]

    % de humedad =m1−m2

    m1∙ 100 [1]

    Donde:

    m1 - Muestra inicial de cascarilla de arroz.

    m2 - Masa de la muestra seca.

    Porciento de volátiles (ASTM 3175-07). [2]

    % de volátiles =m2−m3

    m1∙ 100 [2]

    Donde:

  • 37

    m3 - Masa de la muestra sin sustancias volátiles.

    Porciento de cenizas (ASTM D1102-84). [3]

    % de cenizas =m4

    m1∙ 100 [3]

    Donde:

    m4 - Masa de las cenizas obtenidas.

    Porciento de carbono fijo. [4]

    % de carbono fijo = 100% − % de humedad − % de volátiles − % de cenizas [4]

    Por otra parte el poder calorífico se determina empleando la ecuación [5] (Márquez,

    Cordero, Rodriguez Mirasol, & Rodriguez, 2001).

    HVV = 354,3 ∙ FC + 170,8 ∙ VM [5]

    Donde:

    FC - porciento de carbono fijo.

    VM - porciento de volátiles.

    2.2. Metodología para el cálculo termodinámico de los parámetros del horno

    incinerador de cascarilla de arroz.

    El cálculo de los indicadores termodinámicos del horno es la base fundamental para

    determinar los parámetros del diseño físico del mismo, entiéndase por estos: volumen

    de la cámara de combustión, tipo de intercambiador de calor y la estructura del mismo.

    También constituye un aspecto de vital importancia definir el tipo de horno según su

    tecnología (tipo de hogar) más adecuado para este caso.

  • 38

    2.2.1. Selección del tipo de horno más adecuado para incinerar la cascarilla de

    arroz.

    Teniendo en cuenta que la temperatura de trabajo de este equipo estará en el rango

    comprendido entre los 450 ºC y los 490 ºC, rango de temperatura establecido por

    algunas bibliografías para la combustión de la cascarilla húmeda, caso este que se

    corresponde con el trabajo realizado (Fuentes & Recio, 2005), y la potencia de

    generación esperada será menor a los 290 kW/m3 se empleará un horno con

    tecnología de parrilla en su cámara de combustión (Garay, 2001).

    Esta decisión se basa también en el hecho de que la combustión de la cascarilla

    produce índices elevados de ceniza y la tecnología de parrilla garantiza un proceso

    más eficiente ya que permite un mayor control de las zonas de alimentación,

    combustión y desalojo de cenizas.

    2.2.2. Cálculo del volumen de producto a secar.

    Este parámetro no es más que la capacidad de secado de uno de los secaderos

    instalados en la UEBI Victoria de Girón en una jornada de trabajo. En los planes de

    producción y otros documentos técnicos este valor (capacidad de secado de cada

    torre) aparece expresado en toneladas por lo que se hace necesario, para facilitar

    cálculos posteriores, convertirlo a unidades volumétricas (metros cúbicos). Para este

    fin se emplea la ecuación [6].

    V =m

    δ [6]

    En dicha ecuación:

    V – Volumen del arroz cáscara (m3).

    m – Masa del arroz cáscara (kg).

  • 39

    δ – Densidad aparente del arroz cáscara (kg/m3).

    2.2.3. Cálculo de la masa de agua a remover del volumen de granos en una

    pasada.

    Para determinar este valor se deben conocer parámetros tales como: la masa de arroz

    que se seca en una pasada (mm), el porciento de humedad inicial del arroz cuando es

    recibido del campo (∅𝑖) y por último el porciento de humedad que se le extrae al mismo

    en una pasada. Todos estos parámetros se relacionan en la ecuación [7].

    mw = mm ∙∅i

    100−

    ∅f100

    1−∅f

    100

    [7]

    En la misma:

    mw - Masa de agua a remover en una pasada (kg).

    mm - Masa de granos a secar en una pasada (kg) (Este valor se determina consultando

    los documentos técnicos de la entidad).

    ∅f – Porciento de humedad final del arroz cáscara (Este valor es de un 24 % ya que el

    arroz cáscara pierde en una pasada un 6 % de humedad) (Unión de Empresas

    Arroceras (UCAIC), 1988).

    ∅i – Porciento de humedad inicial del arroz cáscara (Este valor es de un 30 %) (Unión

    de Empresas Arroceras (UCAIC), 1988).

    2.2.4. Cálculo del calor requerido en la torre de secado.

    El calor requerido (Qr) en la torre de secado es la cantidad de calor necesario para

    disminuir la humedad del arroz cáscara teniendo en cuenta las posibles pérdidas que

    se puede tener en esta sección. La ecuación [8] es la empleada para calcular este

    parámetro (Incropera & Witt, 1999).

  • 40

    Qr = Qútil+Qptc + Qps [8]

    En la misma:

    Qptc - Calor perdido por las paredes de la torre de secado y el conducto que transporta

    el aire caliente desde el horno hasta la torre (Qpt + Qpc).

    Qps - Cantidad de calor que es desaprovechado por el aire que sale al ambiente

    después del secado.

    Calor útil en la torre de secado (Qútil):

    Este calor es el que se necesita suministrar al arroz cáscara para elevar su

    temperatura hasta la temperatura de secado recomendada (calor sensible) y a su vez

    disminuir la humedad del grano hasta el valor normalizado (calor latente). Este valor

    es entonces el resultado de la suma de estos dos calores [9].

    Qútil = QS+QL [9]

    Cálculo del calor sensible en la torre de secado.

    Como ya se había dicho con anterioridad este calor es el que se le debe suministrar al

    arroz cáscara para elevar su temperatura desde su valor inicial (Ta) hasta el valor

    normado para el proceso de secado (Ts). Se determina mediante la expresión [10].

    QS = ṁac ∙ Cp ∙ ∆T [10]

    En la misma:

    ṁac - Flujo másico del arroz cáscara (kg/s).

    Cp - Calor específico del arroz cáscara (kJ/kgºC) (Boizán Jústiz & Zhidko, 1986).

    ∆T - Variación de temperatura (TS − Ta) (Unión de Empresas Arroceras (UCAIC),

    1988).

  • 41

    Cálculo del calor latente del arroz cáscara.

    Para determinar este valor se debe conocer la masa de agua a extraer en una pasada

    al volumen de arroz cáscara, valor este determinado con la expresión [7]. La ecuación

    [11] relaciona los parámetros.

    QL = mw ∙ hfg [11]

    En esta:

    QL - Calor latente del arroz cáscara (kJ).

    mw - Masa de agua a removerse (kg).

    hfg - Calor de vaporización del agua (kJ/kg).

    Pérdidas de calor en la torre de secado (𝑄𝑝𝑡).

    Las pérdidas de calor en la torre de secado se dan por las paredes de la misma.

    Teniendo en cuenta el tipo de material de la torre, su conductividad térmica, la

    velocidad del viento en la zona geográfica entre otros parámetros se puede definir el

    valor de estas.

    Coeficiente de convección al interior de la torre de secado (hi).

    Este valor se determina mediante la ecuación [12].

    hi = Nu ∙k

    D [12]

    Los parámetros que relaciona esta expresión son:

    k - Coeficiente de conductividad de la superficie en contacto (W/mK).

    D - Diámetro del conducto (m).

    Nu - Criterio de Nusselt.

  • 42

    En este caso, como la geometría del conducto no es circular el valor del diámetro es

    sustituido por el factor Radio Hidráulico el cual se determina por la ecuación [13].

    RH = 4A Pm⁄ [13]

    Que relaciona los parámetros:

    A - Área de la sección (m2).

    Pm - Perímetro de la sección rectangular (m).

    Para determinar el valor del criterio de Nusselt se debe calcular el número de Reynolds

    [14], considerando la torre de secado como un banco de tubos con arreglo alineado

    (Figura 2.2), esto se hace con la metodología siguiente.

    Figura 2.2: Características geométricas de la torre de secado.

    Para un flujo de aire a través de haces de tubos compuestos por 10 o más líneas

    (NL ≥ 10) Grimison obtuvo una correlación de la forma [15]:

    Nu = C1 ∙ Rem [15]

    Cumpliendo con las condiciones siguientes:

    Pr ≈ 0,7 y 2 000 ≤ Remax ≤ 40 000

    Donde: C1 y 𝑚 son coeficientes (Incropera & Witt, 1999)

  • 43

    El valor del número de Reynolds (Re) como ya se había dicho sale por la ecuación [14].

    Re =Vaire∙D

    νaire [14]

    Si (NL < 10) entonces el valor de Nusselt se calcula utilizando el resultado de la

    ecuación [10], afectado por un factor de corrección C2. [16]

    Nu(NL

  • 44

    Figura 2.3: Resistencias en la pared de la torre de secado.

    Fuente: (Espinosa, sf)

    R1 =1

    hi [18] R2 =

    eac

    kac [19] R3 =

    1

    ho [20]

    En estas expresiones:

    eac - Espesor de la pared (m).

    kac - Conductividad térmica del acero (W/mK).

    Utilizando estos valores en la ecuación [21] se puede determinar el coeficiente global

    de transferencia de calor en las paredes de la torre de secado (Uo).

    Uo =1

    R1+R2+R3 [21]

    Habiendo determinado ya este último parámetro se pueden determinar las pérdidas de

    calor en la torre de secado (Qpp) mediante la ecuación [22].

    Qpt = Uo ∙ At ∙ (Th − Ta) [22]

    Los parámetros que componen esta ecuación ya se determinaron previamente, solo

    falta calcular el área de la torre. Conociendo que la torre de secado tiene forma

    rectangular el área de la misma se determina por la ecuación [23].

    At = (a ∙ l) + 2(a ∙ h) + 2(l ∙ h) [23]

    En esta:

  • 45

    a – Ancho de la torre (m).

    l – Largo de la torre (m).

    h - Altura de la torre (m).

    Pérdidas de calor en el conducto de aire de la torre de secado (𝑄𝑝𝑐).

    Para facilitar este trabajo se hace más conveniente dividir el conducto en cinco

    secciones (Figura 2.4).

    Figura 2.4: División del conducto de aire en secciones.

    Las pérdidas de calor por las paredes del conducto para cada una de las secciones en

    que se dividió el mismo se determinan por la ecuación [24]. (ATECYR, 2007)

    Qpc = U ∙ AT ∙ ∆T [24]

    En esta ecuación:

    𝐐𝐩𝐜- Pérdidas de calor por el conducto de aire caliente (W).

    𝐔- Coeficiente global de traspaso de calor (W/m2K).

    𝐀𝐓- Área total superficial del conducto (m2).

    ∆𝐓- Diferencia entre la temperatura del conducto (𝐓𝐈) y la temperatura ambiente (𝐓𝐚)

    (K).

  • 46

    Cálculo del coeficiente global de traspaso de calor (U).

    El coeficiente global de traspaso de calor se determina en función de la resistencia

    térmica de la superficie, ecuación [25].

    U =1

    Rt [25]

    Según (Boizán Jústiz & Zhidko, 1986) el coeficiente de resistencia térmica puede ser

    determinado empleando la ecuación [26].

    Rt =1

    h1+

    xp

    kp+

    1

    h2 [26]

    Donde:

    𝐑𝐭- Coeficiente de resistencia térmica de la superficie del conducto (m2K/W).

    𝐡𝟏- Coeficiente de convección interno de la placa del conducto (W/m2K).

    𝐡𝟐- Coeficiente de convección externo de la placa del conducto (W/m2K).

    𝐱𝐩- Espesor de la placa (m).

    kp- Conductividad térmica del material del conducto (W/mK).

    El coeficiente de convección externo de la placa del conducto (h2) se determina por la

    ecuación [27] (Boizán Jústiz & Zhidko, 1986). Así como el valor del coeficiente de

    convección interno de la placa del conducto (h1) se determina con la ecuación [28],

    derivada esta de un despeje en la expresión de Nusselt.

    h2 = 2,8 + 3Vaire [27]

    En esta expresión el parámetro (Vaire) es el valor de la velocidad del aire al exterior del

    conducto.

    hi =Nu∙d

    kaire [28]

  • 47

    En esta ecuación:

    𝐤𝐚𝐢𝐫𝐞- Coeficiente de conductividad térmica del aire (W/mK).

    d- Diámetro de la tubería o del conducto.

    Como la sección del conducto no es circular el valor del diámetro del mismo es

    sustituido por el radio hidráulico (RH) factor este empleado para adecuar la ecuación

    de Nusselt a conductos con perfiles no circulares (Esperanza Salinas & Salazar Alvear,

    2004). Este valor se determina mediante la expresión [13].

    El valor del parámetro Reynolds se determina de la misma manera que en el caso de

    las perdidas en la torre de secado [14]. Lo que en este caso por estar en presencia de

    un conducto y el cálculo es por el interior del mismo se sigue el siguiente criterio:

    Estamos en presencia de un régimen laminar cuando se cumple que Re < 2 300, por

    lo que un régimen turbulento seria cuando Re ≥ 2 300. Atendiendo a esto el valor de

    Nusselt se determinaría en el primer caso mediante la ecuación [29] y para el segundo

    caso empleando la ecuación [30].

    Nu = 1,4 ∙ (Re ∙d

    l)0,4 ∙ Prf

    0,33 ∙ (Prf

    Prp⁄ )0,25 [29]

    Nu = 0,021 ∙ (Re)0,8 ∙ Prf

    0,43 ∙ (Prf1

    Prp)

    0,25

    ∙ El [30]

    Cálculo del área total de la superficie del conducto.

    Este valor se determina sumando las áreas superficiales de cada una de las secciones

    en las que se ha dividido el conducto. En el caso de las secciones A y B se deben

    determinar cuatro valores de área ya que estas son prismas de cuatro caras, esto no

    sucede con las demás secciones, ya que cada una tiene tres caras pues la cuarta es

  • 48

    la apertura del conducto que acopla con la torre de secado. Los perfiles que componen

    estas superficies son rectangulares y trapezoidales por lo que las áreas de estos se

    determinan empleando las ecuaciones [31] y [32] respectivamente.

    Arectángulo = a ∙ b [31]

    Atrapecio =a+c

    2∙ h [32]

    Pérdidas de calor por el aire que sale al ambiente después del secado (𝑄𝑝𝑠).

    El aire a la salida de la torre de secado va cargado de humedad, por lo que se puede

    aplicar la ecuación [10], expresión esta vista ya en pasos anteriores para determinar

    calor sensible, con el fin de determinar el calor perdido por este concepto.

    En esta expresión se relacionan parámetro tales como: flujo másico de aire necesario

    para el secado, extraído de la documentación técnica del ventilador instalado en estos

    momentos en la torre de secado, (ṁa) (kg/s); calor específico del aire (Cp) (kJ/kgoC) y

    las diferencias de temperatura entre el aire a la salida de la torre y el medio ambiente.

    2.2.5. Proceso de calentamiento del aire para el secado del arroz cáscara.

    Para calentar el aire del proceso de secado se seleccionó un intercambiador de tubos

    y coraza, en este circularán por fuera de los tubos los gases producto del proceso de

    combustión de la cascarilla y al interior de los mismos el aire empleado en el proceso

    de secado del arroz cáscara. Figura 2.5.

  • 49

    Figura 2.5: Esquema del flujo de aire en el intercambiador de calor.

    El calor entregado a un tubo del intercambiador de calor depende de su geometría y

    de las características del material que lo conforma. El valor de la longitud del tubo se

    considerará como un valor prefijado en dependencia del espacio disponible para ubicar

    el horno, de esta magnitud dependerán en gran medida el número de tubos a emplear

    y por consiguiente la altura y el ancho del intercambiador. La metodología que rige

    este proceso de diseño es la siguiente:

    Cálculo del calor que se debe entregar a un tubo del intercambiador (𝑄𝑡𝑏).

    Cálculo del coeficiente de convección interna en un tubo del intercambiador (hia).

    Este valor se determina empleando la ecuación [28], expresión ya trabajada. En la

    misma el valor del diámetro a utilizar es el del interior del tubo del intercambiador. El

    valor de Nusselt para este caso se determina en función del número de Reynolds. La

    disposición de los tubos en el intercambiador de calor será en tresbolillo por lo que se

    puede determinar el valor de Nusselt por la ecuación [33].

    Nu = Rem ∙ C1 [33]

    Aire Frío

    Aire Caliente

  • 50

    Donde:

    m y C1 son constantes cuyos valores dependen a la disposición en tresbolillo de los

    tubos del intercambiador (Incropera & Witt, 1999).

    Cálculo del coeficiente de convección externo del intercambiador (hog)

    Este parámetro se determina mediante la ecuación [34].

    hog = 2,8 + (3 ∙ Vgc) [34]

    En esta ecuación:

    Vgc – Velocidad de los gases de la combustión (m/s).

    Como los gases de la combustión son los que van a circular por fuera de los tubos, es

    necesario conocer la velocidad de los mismos. Para determinar este parámetro es

    preciso primeramente calcular el tiro de la chimenea. Este se determina por la ecuación

    [35] (Trinks & Mawhinney, 1975).

    Tiro (mmH2O) = 4.63 ∙ B ∙ (1

    Tc−

    w1

    Tg) ∙ X [35]

    Donde:

    B - Presión atmosférica (cmHg).

    W1 - Densidad de los gases de combustión (kg/m3).

    X - Altura de la chimenea.

    Tc - Temperatura del aire ambiente (K).

    Tg – Temperatura de los gases en la chimenea (K).

    Una vez calculado el tiro de la chimenea, la velocidad de los gases de escape se

    puede determinar por la ecuación [36]:

  • 51

    Vgc = √Tiro ∙ 19,6 ∙1

    ρh [36]

    Donde:

    ρh = ρc ∙ W1 - Densidad de los gases de la combustión (kg/m3).

    ρc - Densidad del aire (kg/m3).

    W1 - Densidad específica de los gases de la combustión.

    Cálculo del coeficiente global de transferencia de calor en el tubo.

    Como ya se había hecho con anterioridad este valor se puede determinar empleando

    la analogía eléctrica (Figura 2.6).

    Figura 2.6: Esquema de las resistencias térmicas en la pared del tubo.

    Fuente: (Espinosa, sf)

    R1 =r2

    r1hia [37] R2 = r2

    ln(r2r1

    )

    kac