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PROGRAMA DE INTERVENCIÓN PARA NIÑOS CON ANSIEDAD SOCIAL
TRABAJO DE GRADO
UNIVERSIDAD CATÓLICA DE COLOMBIA
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
CURSO DE ESPECIAL INTERÉS ANSIEDAD Y DEPRESIÓN
BOGOTÁ D.C., NOVIEMBRE DE 2016
PROGRAMA DE INTERVENCIÓN PARA NIÑOS CON ANSIEDAD SOCIAL
TRABAJO DE GRADO
Ps. MSc. IVONNE ALEJO CASTAÑEDA
ASESORA
Jesús García Velandia, 424996
Norida Angarita Robayo, 424720
Alexander Cusba Bayona, 425235
UNIVERSIDAD CATÓLICA DE COLOMBIA
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
CURSO DE ESPECIAL INTERÉS ANSIEDAD Y DEPRESIÓN
BOGOTÁ D.C., NOVIEMBRE DE 2016
“Las opiniones expresadas en este trabajo son responsabilidad de los autores; la Facultad de
Psicología de la Universidad Católica de Colombia ha verificado el cumplimiento de las
condiciones mínimas de rigor científico y de manejo ético.”
(Artículo 65 Reglamento Interno)
Agradecimientos
Debemos agradecer de manera especial y sincera a quien nos asesoró en el
desarrollo del trabajo de grado: la Profesora Ivonne Alejo Castañeda, que nos ha
acompañado en el seguimiento, enseñanza y elaboración de éste trabajo bajo la modalidad
de curso de especial interés en ansiedad y depresión. Su apoyo y confianza en nuestro
trabajo y su capacidad para guiar las ideas han sido un aporte invaluable, no solamente en
el desarrollo de éste trabajo, sino también en nuestra formación como investigadores. Las
ideas propias, siempre enmarcadas en su orientación y rigurosidad, han sido la clave del
buen trabajo que hemos realizado juntos, el cual no se puede concebir sin su siempre
oportuna participación. Le agradecemos también el habernos facilitado los medios
suficientes para llevar a cabo todas las actividades, que implicaban propuestas,
correcciones, modificaciones con el fin de obtener un buen resultado para el desarrollo de
éste trabajo de grado bajo la modalidad de curso de especial interés.
Queremos expresar también nuestro más sincero agradecimiento a la Universidad
Católica de Colombia, al Doctor Carlos Vargas, quien es el encargado de la decanatura de
la facultad de psicología, ya que gracias a su liderazgo y compromiso, hemos podido
adentrarnos a ésta ciencia maravillosa y a todo el personal docente por su importante
aporte y participación activa en el desarrollo y formación teórica en torno al
comportamiento humano a partir de los procesos psicológicos básicos y superiores, es decir
, la psicología. No cabe duda que la participación de ésta representada por todo el personal
docente ha enriquecido el trabajo realizado y ha significado el surgimiento de un sólido
vínculo afectivo. Muchas gracias.
Dedicatoria
Este trabajo representa no sólo el esfuerzo para terminar la carrera, sino que es una
muestra de todo un camino lleno de sacrificios, es un gran paso para cumplir nuestros
sueños, ser profesionales en el área de la psicología. Esto lo debemos a Dios, quien inspiró
nuestro trabajo de grado bajo la modalidad de curso de especial interés en ansiedad y
depresión para la conclusión del mismo. A nuestros maestros quienes arduamente se
esforzaron por transmitirnos el conocimiento teórico - práctico para ser profesionales
competentes. A nuestros padres que hicieron todo en la vida para que pudiéramos lograr
nuestros sueños, por motivarnos y darnos la mano cuando sentíamos que el camino era
complejo. A nuestros compañeros de estudio, sin su ayuda nunca hubiéramos podido
realizar éste trabajo. Finalmente, a todas aquellas familias que se esfuerzan por la
educación de sus hijos y buscan alternativas para la resolución de sus conflictos.
“Quiero dedicar este trabajo a todas las personas que han hecho parte de mi formación
profesional y personal, a mi madre y a aquella persona que desde el cielo me acompaña, ya
que son estas personas quienes me han guiado, me han dado la fuerza, la tenacidad y el
carácter para llegar hasta este punto.”
Jesús García
“Quiero dedicarle este trabajo a mí padre, gracias a su apoyo y esfuerzo constante, pese a la
distancia que nos separa, me brindó las fuerzas necesarias para asumir con madurez y
carácter la vida en la universidad y la responsabilidad de formarme como profesional. La
confianza que depositó, me permitió afrontar con valentía y dificultad que trajo consigo
ésta etapa de mi vida”.
Alexander Cusba
“Quiero agradecer a Dios, por permitirme llegar a este punto y haberme dado la salud, el
tiempo y la fortaleza para lograr mis objetivos, a mis padres y a mi esposo por eso apoyo
constante, a mis compañeros y docentes que de una u otra forma hicieron parte de este
sueño”.
Norida Angarita
Tabla de contenido
Resumen, 1
Justificación, 2
Objetivos, 41
Objetivo General, 41
Objetivos Específicos, 41
Método, 42
Estudio del Mercado, 42
a. Objetivo General del Estudio de Mercado, 42
b. Objetivos Específicos del Estudio de Mercado, 42
c. Descripción del producto, 42
d. Nombre, logo símbolo y slogan del producto, 43
e. Producto básico, 44
f. Producto real, 45
1. Fase 1: Intervención, 45
2. Fase 2: Seguimiento, 46
g. Producto ampliado, 46
h. Clientes, 47
i. Mercado Potencial, 47
j. Mercado Objetivo, 48
k. Mercado Meta, 48
l. Competencia, 49
m. Competencia directa, y sucedánea, 49
1. Productos de la competencia, 50
n. Análisis DOFA, 50
1. Estrategias, 51
o. Canal de distribución, 51
p. Resultados del estudio de Mercado, 52
q. Discusión del estudio de Mercado, 62
r. Presupuesto , 64
Lista de Tablas
Tabla 1. Análisis DOFA, 50
Tabla 2. Datos demográficos de las personas que respondieron la encuesta de mercadeo, 52
Tabla 3. Presupuesto del producto, 64
Lista de Figuras
Figura 1. Logo-símbolo y slogan del producto SUPERÁNDOTE, 43
Figura 2. Descripción del mercado potencial, porcentaje de colegios en Colombia, 47
Figura 3. Descripción del mercado objetivo, porcentaje de colegios en Cundinamarca, 48
Figura 4. Descripción del mercado meta, porcentaje de colegios en Bogotá, 49
Figura 5. Descripción de la competencia directa y sucedánea, 50
Figura 6. Descripción de las respuestas dadas al primer ítem, 53
Figura 7. Descripción de las respuestas dadas al segundo ítem, 54
Figura 8. Descripción de las respuestas dadas al tercer ítem, 54
Figura 9. Descripción de las respuestas dadas al cuarto ítem, 55
Figura 10. Descripción de las respuestas dadas al quinto ítem, 55
Figura 11. Descripción de las respuestas dadas al sexto ítem, 56
Figura 12. Descripción de las respuestas dadas al séptimo ítem, 56
Figura 13. Descripción de las respuestas dadas al octavo ítem, 57
Figura 14. Descripción de las respuestas dadas al noveno ítem, 58
Figura 15. Descripción de las respuestas dadas al décimo ítem, 58
Figura 16. Descripción de las respuestas dadas al onceavo ítem, 59
Figura 17. Descripción de las respuestas dadas al doceavo ítem, 59
Figura 18. Descripción de las respuestas dadas al treceavo ítem, 60
Figura 19. Descripción de las respuestas dadas al catorceavo ítem, 60
Figura 20. Descripción de las respuestas dadas al quinceavo ítem, 61
Figura 21. Descripción de las respuestas dadas al dieciseisavo ítem, 62
Figura 22. Entrenamiento en Solución de Problemas página 1, 66
Figura 23. Entrenamiento en Solución de Problemas página 2, 66
Figura 24. Entrenamiento en Solución de Problemas página 3, 67
Figura 25. Entrenamiento en Solución de Problemas página 4, 67
Figura 26. Entrenamiento en Solución de Problemas página 5, 68
Figura 27. Entrenamiento en Solución de Problemas página 6, 68
Figura 28. Entrenamiento en Solución de Problemas página 7, 69
Figura 29. Entrenamiento en Solución de Problemas página 8, 69
Figura 30. Entrenamiento en Solución de Problemas página 9, 70
Figura 31. Entrenamiento en Solución de Problemas página 10, 70
Figura 32. Entrenamiento en Solución de Problemas página 11, 71
Figura 33. Entrenamiento en Solución de Problemas página 12, 71
Figura 34. Entrenamiento en Solución de Problemas página 13, 72
Figura 35. Entrenamiento en Solución de Problemas página 14, 72
Figura 36. Entrenamiento en Solución de Problemas página 15, 73
Figura 37. Entrenamiento en Solución de Problemas página 16, 73
Figura 38. Entrenamiento en Solución de Problemas página 17, 74
Figura 39. Entrenamiento en Solución de Problemas página 18, 74
Figura 40. Entrenamiento en Solución de Problemas página 19, 75
Figura 41. Entrenamiento en Solución de Problemas página 20, 75
Figura 42. Entrenamiento en Solución de Problemas página 21, 76
Figura 43. Entrenamiento en Solución de Problemas página 22, 76
Figura 44. Entrenamiento en Solución de Problemas página 23, 77
Figura 45. Entrenamiento en Solución de Problemas página 24, 77
Figura 46. Entrenamiento en Solución de Problemas página 25, 78
Figura 47. Entrenamiento en Solución de Problemas página 26, 78
Figura 48. Entrenamiento en Solución de Problemas página 27, 79
Figura 49. Entrenamiento en Solución de Problemas página 28, 79
Figura 50. Entrenamiento en Regulación Emocional página 1, 80
Figura 51. Entrenamiento en Regulación Emocional página 2, 80
Figura 52. Entrenamiento en Regulación Emocional página 3, 81
Figura 53. Entrenamiento en Regulación Emocional página 4, 81
Figura 54. Entrenamiento en Regulación Emocional página 5, 82
Figura 55. Entrenamiento en Regulación Emocional página 6, 82
Figura 56. Entrenamiento en Regulación Emocional página 7, 83
Figura 57. Entrenamiento en Regulación Emocional página 8, 83
Figura 58. Entrenamiento en Regulación Emocional página 9, 84
Figura 59. Entrenamiento en Regulación Emocional página 10, 84
Figura 60. Entrenamiento en Regulación Emocional página 11, 85
Figura 61. Entrenamiento en Regulación Emocional página 12, 85
Figura 62. Entrenamiento en Regulación Emocional página 13, 86
Figura 63. Entrenamiento en Regulación Emocional página 14, 86
Figura 64. Entrenamiento en Regulación Emocional página 15, 87
Figura 65. Entrenamiento en Regulación Emocional página 16, 87
Figura 66. Entrenamiento en Regulación Emocional página 17, 88
Figura 67. Entrenamiento en Regulación Emocional página 18, 88
Figura 68. Entrenamiento en Regulación Emocional página 19, 89
Figura 69. Entrenamiento en Regulación Emocional página 20, 89
Figura 70. Entrenamiento en Regulación Emocional página 21, 90
Figura 71. Entrenamiento en Regulación Emocional página 22, 90
Figura 72. Entrenamiento en Regulación Emocional página 23, 91
Figura 73. Entrenamiento en Regulación Emocional página 24, 91
Figura 74. Entrenamiento en Regulación Emocional página 25, 92
Figura 75. Entrenamiento en Regulación Emocional página 26, 92
Figura 76. Entrenamiento en Regulación Emocional página 27, 93
Figura 77. Entrenamiento en Regulación Emocional página 28, 93
Figura 78. Entrenamiento en Regulación Emocional página 29, 94
Figura 79. Entrenamiento en Regulación Emocional página 30, 94
Figura 80. Entrenamiento en Regulación Emocional página 31, 95
Figura 81. Entrenamiento en Regulación Emocional página 32, 95
Figura 82. Entrenamiento en Regulación Emocional página 33, 96
Figura 83. Entrenamiento en Regulación Emocional página 34, 96
Figura 84. Entrenamiento en Regulación Emocional página 35, 97
Figura 85. Entrenamiento en Regulación Emocional página 36, 97
Figura 86. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 1, 98
Figura 87. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 2, 98
Figura 88. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 3, 99
Figura 89. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 4, 99
Figura 90. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 5, 100
Figura 91. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 6, 100
Figura 92. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 7, 101
Figura 93. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 8, 101
Figura 94. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 9, 102
Figura 95. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 10, 102
Figura 96. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 11, 103
Figura 97. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 12, 103
Figura 98. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 13, 104
Figura 99. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 14, 104
Figura 100. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 15, 105
Figura 101. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 16, 105
Figura 102. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 17, 106
Figura 103. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 18, 106
Figura 104. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 19, 107
Figura 105. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 20, 107
Figura 106. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 21, 108
Figura 107. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 22, 108
Figura 108. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 23, 109
Figura 109. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 24, 109
Figura 110. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 25, 110
Figura 111. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 26, 110
Figura 112. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 27, 111
Figura 113. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 28, 111
Figura 114. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 29, 112
Figura 115. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 30, 112
Figura 116. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 31, 113
Figura 117. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 32, 113
Figura 118. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 33, 114
Figura 119. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 34, 114
Figura 120. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 35, 115
Figura 121. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 36, 115
Figura 122. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 37, 116
Lista de Apéndices
Apéndice A. Encuesta de mercadeo, 129
Apéndice B. Listado de la competencia directa, 132
Apéndice C. Listado de la competencia sucedánea, 133
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 1
Programa de Intervención para Niños con Ansiedad Social
Resumen
El presente trabajo tiene como objetivo, diseñar una herramienta de
apoyo a profesionales de psicología y la educación que facilite el
proceso de intervención bajo un programa didáctico llamado
superándote (Programa de Intervención para Niños con Ansiedad
Social) mediante la utilización de tres técnicas cognitivo
conductuales: regulación emocional, entrenamiento en habilidades
sociales y entrenamiento en solución de problemas, para niños
menores de 10 años expresado en tres cuentos animados llamados “
el pequeño valiente” quienes presentan trastorno de ansiedad social.
Bajo el constructo de ansiedad social entendido como el miedo o
ansiedad que le produce al sujeto el estar inmerso en situaciones
sociales o expuesto a la evaluación de otras personas. Esta
propuesta se plantea debido a que no se encuentra en el mercado
una herramienta que permita ayudar al psicólogo a intervenir la
complejidad de la ansiedad social en los niños Los resultados
arrojaron que el uso de técnicas cognitivo conductuales: regulación
emocional entrenamiento en habilidades sociales y entrenamiento
en solución de problemas sirven como programa de apoyo al
profesional en psicologia disminuyendo significativamente los
síntomas característicos de este trastorno.
Palabras Clave: ansiedad (SC ), fobia social, regulación
emocional, entrenamiento en habilidades sociales, entrenamiento en
solución de problemas.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 2
Justificación
En primer lugar es importante establecer en qué consiste el concepto de “ansiedad”
y tener en cuenta que este ha atravesado por varios cambios, por ende primero se revisará el
desarrollo histórico que ha sufrido el trastorno de ansiedad con el transcurso del tiempo,
donde sus primeros estudios se dieron a mediados del siglo XIX, con los trabajos de
Augustin Landré-Beuvais quien describió a la ansiedad como una relación de enfermedad
emocional que se expresa fisiológicamente; dando lugar a diversos aportes y
modificaciones de otros autores como Sigmund Freud en los años de 1907, quien la
describió como un trasfondo propio de la psique humana, relacionada con la angustia o la
neurosis que sentía una persona ante los daños que se generaban en el aparato psíquico.
Posterior a esto con el auge del conductismo y la llegada del primer manual de criterios
diagnósticos de la APA para los trastornos mentales, la ansiedad empezó a ser considerado
una categoría más amplia de signos y síntomas que requería distintos métodos de
evaluación e intervención, donde nuevos autores intentaban describir la manera como se
desarrollaba este trastorno; así mismo, en el año 1980 con la introducción del DSM III se
dejó atrás el concepto de neurosis para hablar de ansiedad y se dio inicio al abordaje
terapéutico en niños, puesto que no se tenían en cuenta ya que su comportamiento y
cambios eran considerados como algo normal durante su ciclo vital de vida; generando con
esto la ruptura de un hito en la psiquiatría y la psicología ya que no existía un solo tipos de
ansiedad y además eran problemas que involucran a los niños. (Barboza, Alfano &
Landeira, 2009).
Por lo anterior y de acuerdo a los aportes de diferentes autores, la ansiedad puede
ser considerada como una condición clínica y psicopatológica o una respuesta emocional
esperada que se activa ante situaciones de peligro o estrés que permiten a las personas un
mejor desempeño ante estas situaciones. Según Barlow y Durand (2003) y la APA, definen
la ansiedad como "un estado de ánimo negativo caracterizado por síntomas corporales de
tensión física y aprensión acerca del futuro" expresada en los tres canales de respuesta
fisiológica, cognitivo y conductual, producido por distintos factores biológicos como la
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 3
genética, por lo que son heredados y se puede presentar en varios miembros de una familia,
por fallas en los neurotransmisores cerebrales, malas sinapsis entre neuronas, hormonas y
transmisores o la relación de sistema límbico con otras estructuras. Por ejemplo cuando un
niño llega nuevo a un salón de clases, será normal que el primer día ante el intento de
establecer interacción social, fisiológicamente presente sudoración, temblor y hasta
taquicardia, en su respuesta cognitiva pensar que no es capaz de hablar con alguien y
conductualmente querer irse del salón con el fin de evitar el malestar, así mismo, estos
autores respaldan dichos conceptos basados en las diferentes teorías desde las freudianas
hasta las llamadas teorías reformuladas, donde el conductismo explica la adquisición de la
ansiedad mediante condicionamiento clásico, operante y aprendizaje vicario, como también
la teoría de la vulnerabilidad triple, considerada como las más pertinente para entender la
etiología de los trastornos de ansiedad, puesto que integra varios factores como la
vulnerabilidad biológica generalizada, vulnerabilidad psicológica generalizada y
vulnerabilidad psicológica específica (Barlow & Durand, 2003).
Ahora bien para caracterizar la ansiedad social que es el trastorno de interés de este
trabajo se debe tener en cuenta las variables cuantitativas y las cualitativas que han
utilizado los investigadores a través de la historia para distinguir los subtipos de ansiedad
social, por ejemplo Ihab, Sierra y Fernández han clarificado que los criterios cuantitativos
que se han tenido en cuenta para determinar los subtipos de fobia social tienen que ver con
el número de situaciones temidas por las personas y desde la perspectiva cualitativa se
clasifican en la forma en cómo se da la interacción social y las situaciones que elicitan
ansiedad (2007).
A nivel cuantitativo los investigadores han retomado varias subclasificaciones de
ansiedad social, pero las que prevalecen según Ihab, Sierra y Fernández (2007) son la fobia
social generalizada y fobia social específica; en la fobia generalizada las personas suelen
tener miedo a estar en varios espacios de interacción social o que le representen algún
grado de exposición al medio, en cambio en la fobia no generalizada o específica la persona
teme una situación circunscrita o concreta donde requiera la actuación del sujeto ante otros
individuos.
Hay que resaltar que esta subclasificacion se ha determinado en población de
adultos ya que en niños y adolescentes no se cuenta con un gran bagaje en investigaciones
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 4
sobre ansiedad social, aun así se ha logrado establecer que existe una mayor tasa de niños
que temen a una gran cantidad de estímulos y situaciones sociales que los que solo temen a
una en específica, lo que es un gran problema debido a que la fobia social generalizada
requiere de mayor intervención que cuando se trata de una fobia social específica, además
resulta más incapacitante para los niños tener fobia social generalizada ya que en un 70%
de las ocasiones los estímulos fóbicos están relacionados en el contexto escolar, dentro de
las situaciones que más representan miedo para los niños se han establecido que hablar
formalmente en público, participación de actividades escolares, comer en presencia de otros
y participar en fiestas se llevan las mayores puntuaciones; además que las niñas tienen
niveles más elevados en frecuencia y magnitud de los síntomas asociados a ansiedad que
los niños, (Ihab, Sierra & Fernández, 2007).
Es por esto que la población infantil-juvenil es de gran relevancia para de estudio en
fobia social, ya que primero se cuentan con muy pocos datos que permiten establecer con
severidad una distinción de subcategorías y por otra parte dejar avanzar esta problemática
en esta población puede acarrear mayores problemas para su vida adulta.
De igual forma la aparición de la ansiedad como un trastorno en adultos y niños está
sustentada mediante teorías que explican la adquisición y mantenimiento de esta
problemática, han sido muchos los autores que han intentado dar explicaciones a los
trastornos de ansiedad y han elaborados diversas teorías, así que se retoman las netamente
del enfoque cognitivo conductual, ya que son estas las que tienen mayor aceptación por la
comunidad científica: las primeras están relacionadas con las Teorías del Aprendizaje
siendo la primera la del Condicionamiento clásico. Esta sostiene que la ansiedad es
entendida como una respuesta emocional condicionada, donde sus principales
características son: Las repeticiones de la asociación entre los ECs y los EI incrementará la
fuerza de la RC de miedo, las reacciones de miedo fóbico se favorecen cuando la
intensidad de miedo inducido por los EIs es elevada y cuando otros estímulos neutros
similares a los ECs pueden elicitar reacciones de miedo, siendo éstos mayores a mayor
semejanza con los ECs (Belloch, 2009).
Otra teoría que tomó aún más fuerza desde los años 70’s es la del Condicionamiento
clásico y operante. En esta teoría se combinan dos factores que implica tanto al
condicionamiento clásico como el operante, dos formas de aprendizaje estrechamente
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 5
relacionadas pero esencialmente diferentes, apoyado en el paradigma de evitación activa,
que se desarrolla en dos fases básicas: inicialmente se da mediante condicionamiento
clásico donde la respuesta condicionada de miedo genera respuestas de escape ante el
estímulo y en la segunda fase, implica un proceso de evitación activa, donde el sujeto no
aprende a evitar un castigo (EI), sino a escapar de la exposición al estímulo (EC) que le
avisa de la proximidad de un evento aversivo. (Belloch, 2009).
Pero esta teoría más tarde recibiría varias críticas así que los teóricos crearon
Alternativas teóricas al modelo bifactorial la primera es la Operante no mediacionales:
Establece que la conducta de evitación se produce bajo condiciones de reforzamiento
positivo, más que reforzamiento negativo, es decir que el sujeto se aproxima a los estímulos
que señalan seguridad o no shock; la evitación actuaría como reforzador positivo. Según
este enfoque el desarrollo de la conducta de evitación se basa en la conducta de
aproximación- relajación donde la conducta de evitación no solo es motivada por un escape
de miedo, sino también por una aproximación a la situación que aporta seguridad, y la
segunda son las Operantes mediacionales: Este modelo se basa en los principios de
conservación de la ansiedad e irreversibilidad parcial, donde en el primero las latencias
cortas de respuestas de evitación previenen que se produzca reacciones autónomas de
ansiedad al EC, con lo cual se conservan y no se extinguen y el segundo se basa en el
hecho de que en los casos de reacciones muy intensas de miedo, las respuestas
condicionadas clásicamente son difíciles de extinguir completamente (Salomón & Wynne,
1954 citado por Belloch, 2009).
Aunque los teóricos más adelante propondrán una teoría más aceptada, Teoría de la
Preparación. Que según Seligman, (1970), el concepto de preparación, parte de que el
organismo está preparado filogenéticamente a lo largo de la evolución de la especia para
asociar ciertos estímulos discriminativos fáciles y difíciles, esta teoría surge como
reacción a la premisa de equipotencialidad, que según este supuesto los estímulos son
arbitrarios, ya que cualquier estímulo condicionado o incondicionado puede asociarse. Lo
importante en esta teoría es que el significado de preparación es un modelo de
condicionamiento de la ansiedad orientado biológicamente. Por consiguiente la fobia se
puede explicar a partir de cuatro propiedades la selectividad, fácil adquisición, resistencia a
la extinción y la irracionalidad, en niños suele aparecer a la edad de los siete años
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 6
predominando la fobia a los animales, puesto que durante la infancia el individuo puede
resultar vulnerable a los depredadores, por lo que la evolución ha establecido que durante
estas edades, a partir de una especial sensibilidad al sistema defensivo antidepredador, el
organismo adquiera con facilidad miedos interespecíficos (Barboza, Alfano & Landeira,
2009).
Luego de esta Eysen (1979) desarrolló la Teoría de la Incubación de la Ansiedad.
La cual aportó una versión más moderno sobre el condicionamiento de la ansiedad, al cual
llamó teoría de la incubación el postulado fundamental sobre este modelo consiste en que
esta se adquiere y mantiene de acuerdo a los principios del condicionamiento tipo B, donde
la motivación es generada por el propio paradigma de condicionamiento y posee menos
dependencia del estado motivacional del individuo. Una cualidad de éste tipo de
condicionamiento es que tanto el EI como el EC poseen propiedades de drive (Belloch,
2009).
A pesar que los teóricos conductuales realizaron varias teorías como se ha visto
hasta el momento las críticas aumentaban, por ende se empezaron a incluir aspectos
cognoscitivos que explicarían procesos que hasta este momento no se habían podido
explicar, la primera teoría que surgió fue la del Condicionamiento y Procesos Cognitivos.
Belloch (2009), sugiere la importancia de los procesos cognitivos aludiendo a la existencia
de formas indirectas de aprendizaje de los miedos y las fobias, es decir, aprendizaje que no
implica la aparición física del EI. Por ejemplo, basta en que el niño observe las reacciones
de miedo que experimenta otro niño ante un EC. El condicionamiento semántico se basa en
relaciones de información E-E. Éste tipo de aprendizaje puede desempeñar un papel
importante en el desarrollo de miedos y fobias en los niños pues en este caso las fobias no
se adquieren únicamente por condicionamiento directo y vicario. Por ejemplo, la palabra
araña puede ser asociada a palabras de significado negativo, como veneno y picadura a
través de un condicionamiento semántico.
Los Modelos cognitivos ampliaron la explicación teórica a la adquisición y
mantenimiento de la ansiedad Seligman & Johnston, (1973), elaboraron un modelo sobre la
conducta de evitación basado en el concepto de expectativa de resultado, cuyo fundamento
está en que el organismo controla la elección de respuestas sobre la base de los resultados
esperados, es decir, el organismo posee una preferencia innata. Bandura (1977), propone la
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 7
teoría de la autoeficacia, cuyo planteamiento consiste en la percepción de la propia
capacidad para llevar a cabo acciones específicas de forma exitosa y sugiere que la
ansiedad se asocia más a las expectativas de autoeficacia que a los resultados, planteando
cuatro vías mediante las cuales se puede construir las expectativas de autoeficacia en el
individuo: experiencia vicaria, experiencia directa sobre el éxito, información verbal y
conciencia de la propia activación emocional. Davy (1989), presentó un modelo pavloviano
para dar cuenta al mantenimiento e incubación de la ansiedad empleando como concepto
básico la reevaluación del EI, donde el EC y la RC se interponen una serie de factores
mediadores y moduladores relacionados con la valoración de expectativa y los procesos de
revaloración del EI. A fin de que la capacidad del EC para activar una representación
cognitiva del EI depende de diversos factores que determinan hasta qué punto el individuo
espera que el EI siga al EC (expectativa de resultado) (Belloch, 2009).
Por último los teóricos cognitivos conductuales relacionaron la Ansiedad y
procesamiento de la información. Según Lang (1977), esta teoría se basa en una
concepción descripcionista de la imagen emocional, es decir, la representación que
corresponde a una imagen mental se asemeja más a una descripción que a un cuadro, donde
toda la información es codificada de forma abstracta y uniforme. De este modo las
imágenes emocionales son conceptuadas como: estructuras preposicionales y no como
representaciones sensoriales, es decir, incluyen el concepto de imagen emocional
proposiciones codificadas semánticamente acerca de los estímulos. La información sobre la
ansiedad es almacenada en la memoria a largo plazo en redes asociativas (redes
emocionales), la cuales son activadas a través de imputs y cuando se accede de este modo a
un número suficiente de nodos (esquema), la red entera se activa dando origen un número
de conductas y experiencias denominadas emoción. Así mismo, la memoria emocional está
constituida por información sobre estímulos externos, información sobre las respuestas
(expresión facial o conducta verbal) e información o conceptos semánticos de los objetos y
situación (Barboza, Alfano y Landeira, 2009). Por otro lado diversos autores han apuntado
que los factores biológicos y familiares juegan también un papel importante en la
adquisición de un trastorno de ansiedad, se estima que más del 50% de la población con
algún tipo de ansiedad presenta covariación entre su familia con rasgos ansiosos, por ende
tanto en la evaluación como en la intervención es necesario plantear este factor como una
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 8
posible explicación para la adquisición del trastorno (Bögels, Brechman & Toussaint, 2006
citado por Gonçalves et al., 2009).
Con todo lo dicho anteriormente la ansiedad ha sido de especial preocupación para
psiquiatras y psicólogos desde que iniciaron los estudios de psicopatología, desde la
primera versión de DSM en 1952 se iniciaron a reportar los especificadores de los
trastornos de ansiedad, actualmente se maneja la versión DSM V pero al ser tan actual las
investigaciones sobre este trastornos están propuestas en el modelo que especifica DSM IV
TR. Existen diferencias significativas entre ambos manuales para describir los criterios
diagnósticos de la ansiedad y todos sus trastornos, por ejemplo DSM IV TR especifica 12
trastornos de ansiedad (el trastorno de angustia sin agorafobia, el trastorno de angustia con
agorafobia, la agorafobia sin historia de trastorno de angustia, la fobia específica, la fobia
social, el trastorno obsesivo compulsivo, el trastorno de estrés postraumático, el trastorno
de estrés agudo, el trastorno de ansiedad generalizada, el trastorno de ansiedad debido a
enfermedad clínica, el trastorno de ansiedad inducido por sustancias y el trastorno de
ansiedad no especifica), En cambio la APA para DSM V después de realizar
investigaciones ha decidido darle una nueva clasificación para los trastorno de ansiedad (el
trastorno de ansiedad por separación, el mutismo selectivo, la fobia específica, el trastorno
de ansiedad social, el trastorno de pánico, la agorafobia, el trastorno de ansiedad
generalizada, el trastorno de ansiedad debido a otra afección clínica, otro trastorno de
ansiedad especificado y el trastorno de ansiedad no especificado) (Asociación Americana
de Psiquiatría, 2002 & 2014).
El hecho que la Asociación Americana de Psiquiatría haya decidido hacer cambios
al capítulo de los trastornos de ansiedad permitió la inclusión de trastornos específicos para
nuestra población de interés (los niños) ya que especifica dos nuevos trastornos que si bien
se pueden presentar en adultos, su prevalencia y tratamiento psicológico se presenta más en
niños, los cuales son el trastorno de ansiedad por separación y el mutismo selectivo, además
que en DSM IV TR parecía que los trastornos de ansiedad se presentaban con adultos
parecido a los trastornos de personalidad, pero investigaciones demuestran que muchos
trastornos de la ansiedad se evidencian desde la infancia (Rodríguez, Senin & Perona,
2014). Otro cambio que se realizó fue el cambio del término fobia social por trastorno de
ansiedad social, debido al componente fisiológico, motor y cognitivo que diferencia una
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 9
fobia y la ansiedad, aunque actualmente se manejan ambos términos y para la misma
sintomatología y se aceptan de igual manera, también se realiza una clara diferenciación
entre angustia y pánico y a partir de DSM V se tendrá en cuenta al pánico como el
especificador clínico en vez de la angustia, además el trastorno de pánico y agorafobia se
separan y a partir de esta versión puede existir la existencia de los dos trastornos debido a
que estos son comórbidos en vez de hablar de la presencia de uno solo cómo se trabajaba en
DSM IV TR, la separación se debió a que muchos creían que el inicio de la agorafobia era
el pánico pero no en todos los casos suele ser así y se añadió un especificador para el ataque
de pánico cuando la ocurrencia es de un único episodio lo cual lo diferencia de un trastorno
de pánico (Rodríguez, Senin & Perona, 2014).
Algo que si se le ha criticado a DSM V es la exclusión del trastorno obsesivo
compulsivo y el trastorno de estrés postraumático de los trastornos de ansiedad, los
profesionales que aceptan la exclusión de estos trastornos afirman que es adecuada debido a
que por ejemplo lo característico para los trastornos obsesivos compulsivos son el grado de
compulsiones y la impulsividad más que los síntomas ansiosos, también el nivel de insight
y las ideas delirantes que son muy diferentes al de la ansiedad y en el caso del estrés
postraumático se ha evidenciado diferencias significativas en los mecanismos patológicos
como los son la adquisición, vulnerabilidad y el mantenimiento del trastorno, en cambio los
profesionales que no simpatizan con esta idea de la exclusión argumentan que para ambos
trastornos la sintomatología ansiosa está presente y es quien mantiene la problemática
(Rodríguez, Senin & Perona, 2014).
Sin importar qué grupo de teóricos tengan la razón DSM V ya ha diferenciado estos
trastornos, colocando como trastornos del espectro obsesivo compulsivo a: Trastorno
Obsesivo Compulsivo, Trastorno dismórfico corporal, Trastorno por acumulación,
Tricotilomania, Trastorno por Excoriación, entre otros y para los trastornos relacionados
con traumas y estresores se especificó a: Trastorno de apego reactivo, trastorno de relación
social desinhibida, trastorno de estrés postraumático, trastorno de estrés agudo, trastorno de
adaptación, entre otros (Asociación Americana de Psiquiatría, 2014).
A partir de esta claridad se debe comentar que DSM V hace especial diferenciación
entre algunos criterios diagnósticos cuando se trata de niños los cuales empezaron a revisar
para así entender de manera más clara la diferencia que existe en los signos y síntomas que
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 10
presentan los niños y adolescentes relacionados con ansiedad en los ámbitos educativos y
sociales, dentro de los trastornos que hacen diferenciación en criterios para niños están el
trastorno de ansiedad por separación, el mutismo selectivo, La fobia específica, el trastorno
de pánico y el trastorno de ansiedad generalizada la mayoría de diferencia está en la
frecuencia, intensidad y duración de los síntomas otros (Asociación Americana de
Psiquiatría, 2014).
Pero revisaremos especialmente el trastorno de ansiedad social debido a que es este
el de relevancia para la implementación de la herramienta “el pequeño valiente”, es este
trastorno el que más nos interesa ver las diferencias planteadas entre ambos manuales,
según DSM V esta patología con consiste en el miedo o ansiedad que le produce al sujeto el
estar inmerso en situaciones sociales o expuesto a la evaluación de otras personas
(Asociación Americana de Psiquiatría, 2014). Como describimos anteriormente la quinta
edición del DSM afirma que los síntomas de este trastorno son más claros en los términos
del triple canal de respuesta y no solo se refiere al temor a las situación sociales como se
describía en DSM IV TR, DSM V aclara que este trastorno en niños se puede manifestar en
situaciones donde están niños de su misma edad y no sólo con adultos.
Además debe cumplir con otros criterios como; el miedo a que otros noten su
ansiedad y por ende realicen una valoración negativa que provoque humillación o
vergüenza, las situaciones sociales en general provocan algún grado de ansiedad o miedo,
resiste de manera significativa estar en contextos sociales, el miedo o ansiedad son
desproporcionados al peligro real que involucra la situación social, el miedo o ansiedad
intensa a ambientes sociales persiste por más de seis o más meses, el miedo provoca un
malestar clínicamente significativo que deteriora al sujeto en sus áreas de ajuste, la
ansiedad no se puede atribuir a consumo de alguna sustancia ni una afección médica, la
ansiedad no se explica mejor por otro trastorno mental y si existiera una afección médica el
miedo sería claramente más intenso a la valoración social (Asociación Americana de
Psiquiatría, 2014). A pesar que la diferenciación entre ambos trastornos no fue significativa
si esa importante resaltar que al referirse a fobia social y ansiedad social se estaría
refiriendo a la misma problemática y desde DSM IV TR el trastorno de ansiedad social en
niños tiene diferencia a la de los adultos en su intensidad y frecuencia.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 11
Ahora bien, para realizar la Caracterización de la Población Infantil Se asume la
existencia de cierta predisposición filogenética para adquirir los miedos comunes, existen
también diferencias individuales que parecen influir en la adquisición y mantenimiento de
los mismos, pudiendo interaccionar con otras variables de tipo ambiental, por ejemplo:
entorno familiar, pautas de crianza sucesos vitales, estilos parentales) y modular la
evolución normal o patológica de los temores infantojuveniles. Aspectos constitucionales
diversos como los determinados por la herencia , la transmisión de patrones familiares , las
variables de personalidad por ejemplo: neocriticismo o rasgo de ansiedad, la sensibilidad a
la ansiedad, la reactividad psicofisiológica, la diferenciación sexual del cerebro, o los
ritmos psicobiológicos, entre otros, o, podrían explicar por qué algunos niños son más
miedosos que otros en la mismas etapa evolutiva o por qué en ello no desaparece la
respuesta normal de miedo ante un estímulo concreto cuando por la edad , cabría esperar
que se redujera (Valiente, Sandín & Chorot, 2012), además existen teorías que confluyen en
que este tipo de problemas se desarrollan a partir del déficit de aprendizaje de repertorios
adecuados, siendo este aporte un análisis importante para la psicología ya que determina
que existe una relación entre el desarrollo de la ansiedad social con la forma en que se
mantienen y se sostienen las habilidades sociales de una familia (Braz, Comodo, Del Prette,
Del Prette, Fontaine, (2013).
Según Orgiles, Johnson, Huedo y Espada (2012), los niños ansiosos tienden a
presentar mayores niveles de miedo, son muy pocos los estudios en cuanto a esta población,
pues en la mayoría de los casos se confunde la ansiedad con el miedo en los estudios
infantojuveniles. Los escasos trabajos que han estudiado este problema tienden a sugerir
que el auto informé de miedo correlaciona moderadamente con el rasgo de ansiedad y de
forma más débil con la depresión. Según Valiente, Sandín y Chorot, (2012), la correlación
entre ansiedad y miedo r = 0,64 fue superior a la correlacion entre depresión y miedo r =
0,31. De forma similar, informaron que el nivel de miedo estaba mínimamente relacionado
con la depresión r = 0,20 y moderadamente relacionado con la ansiedad r = 0,38.
Por otra parte, las correlaciones entre depresión y ansiedad suelen ser moderadas; en
estos estudios las correlaciones entre ansiedad y depresión han sido similares o superiores a
las correlaciones entre ansiedad y miedo (p.ej., r = 0,64, en el estudio de Dong; r = 0,60, en
el estudio de Muris. Es decir, aunque tanto el miedo como la depresión se relacionan de
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 12
modo importante con la ansiedad, la relación entre el miedo y la depresión parece más débil
(Valiente, Sandín & Chorot, 2012).
Según Valiente, Sandín y Chorot (2012), esta relación que se da entre las tres
variables consideradas podría indicar que la ansiedad posee aspectos comunes al miedo y la
depresión, características que, sin embargo, no son compartidas por estas dos últimas
variables. Así, la ansiedad podría compartir con la depresión características de la
afectividad negativa no compartidas con el miedo, mientras que, por otra parte, la ansiedad
podría compartir con el miedo características de hiperactivación no compartidas con la
depresión. Esta explicación, si bien es a grosso modo consistente con el modelo tripartito de
la ansiedad y la depresión supone una variación en el mismo, ya que implica una separación
entre la ansiedad y el miedo.
Según Valiente, Sandín y Chorot (2012), existen sin embargo, otras posibles
variables que podrían relacionarse con los miedos de forma más específica que la ansiedad,
la depresión o la afectividad negativa. Una variable que ha sido designada como posible
candidata en este sentido es la denominada sensibilidad a la ansiedad. Ésta ha sido definida
como una variable de diferencias individuales consistente en una tendencia a experimentar
miedo ante los síntomas de ansiedad (sobre todo, los síntomas fisiológicos), y constituye el
rasgo, tendencia o predisposición a interpretar catastróficamente -es decir, como algo
peligroso- esas sensaciones de ansiedad, especialmente las sensaciones de activación
fisiológica.
Según Valiente, Sandín y Chorot (2012), sensibilidad a la ansiedad es, así mismo,
diferente del rasgo de ansiedad, ya que este último denota una tendencia a reaccionar con
miedo ante cualquier estresor o estímulo ansiógeno., a pesar de que algunos autores han
cuestionado la relevancia de la sensibilidad a la ansiedad en la población infanto-juvenil
existe evidencia de que ésta posee una especial utilidad para pronosticar el riesgo de sufrir
miedos, pánico y otros problemas de estado del ánimo. También se encontró en un estudio
reciente con una muestra de niños de 9-11 años de edad hecho por Orgiles et al (2012), que
la sensibilidad a la ansiedad se relacionaba con el nivel de miedos de forma más intensa que
el rasgo de ansiedad, sugiriendo que la sensibilidad a la ansiedad en niños podría ser
considerada como un constructo único de vulnerabilidad hacia el miedo.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 13
Los autores sugieren que, si bien el rasgo de ansiedad puede seguir siendo
considerado como un factor de vulnerabilidad hacia los miedos, la sensibilidad a la
ansiedad resulta ser una variable más estrechamente relacionada con el miedo y, en
consecuencia, podría constituir un mejor indicador de vulnerabilidad hacia el mismo
(Valiente, Sandín & Chorot, 2012).
Los modelos de vulnerabilidad cognitiva al estrés según Cámara y Calvete (2010),
también denominados modelos de diátesis-estrés, postulan que ciertos estilos de
pensamiento y procesamiento de la información representan una predisposición que
aumenta la vulnerabilidad al desarrollo de síntomas de estrés en presencia de
acontecimientos estresantes. La mayoría de estudios que han evaluado este paradigma se
han centrado en las actitudes disfuncionales (modelo cognitivo de la depresión; Beck,
1976) y/o el estilo atribucional negativo (modelo de la desesperanza; Abramson et al.,
1989) como factores de vulnerabilidad cognitiva. Sin embargo, son escasos los estudios que
se han basado en otros modelos cognitivos más recientes, como el modelo de los esquemas
(Young y Klosko, 1994). Según este modelo, como resultado de la interacción entre el
temperamento infantil y los estilos de crianza, las personas desarrollan una serie de
estructuras estables, conocidas como esquemas disfuncionales tempranos (EDT), que van a
sentar las bases del autoconcepto y de la concepción del mundo. Según Camara y Calvete
(2010), elaboraron un sistema de clasificación de los esquemas más comunes en las
personas que, presumiblemente, subyacen a la psicopatología. A partir de su experiencia
clínica, este autor describió estos esquemas organizados en cinco dominios según la
interferencia sufrida en las necesidades básicas de la infancia. En primer lugar, el dominio
de Desconexión y rechazo se asocia a un entorno familiar donde las necesidades de afecto,
aceptación y estabilidad no se ven cubiertas. En segundo lugar, el dominio de Autonomía
deteriorada surge en un ambiente infantil caótico, sobreprotector y complicado que fracasa
en reforzar la independencia de la familia. En tercer lugar, el dominio de Límites
deteriorados se ve influido por una educación permisiva, indulgente, sin dirección o con un
sentido de superioridad. En cuarto lugar, el dominio de Orientación a los demás se asocia a
familias de origen caracterizadas por una aceptación condicionada, donde los niños deben
suprimir aspectos importantes de ellos mismos para obtener amor, atención y aprobación.
Por último, el dominio de vigilancia excesiva e inhibición se vincula a un ambiente
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 14
exigente donde las normas, el deber, el perfeccionismo y el evitar errores están antes que el
placer, la alegría y la relajación, este fenómeno se evidencia en la mayoría de veces en
familias cuyas historias de aprendizaje se han visto reducidas al entrenamiento en
habilidades sociales, es decir, que se ha evidenciado como abuelo y padres de niños con
ansiedad social presentan inadecuadas habilidades sociales (Braz et al., 2013).
Numerosos estudios han mostrado la relación entre los dominios de los EDT y el
desarrollo de diversas formas de desajuste psicológico según patrones específicos de
contenido. Por ejemplo, la depresión se ha asociado con los dominios de Desconexión y
rechazo según Calvete, Estévez y Corral, 2007; Hoffart et al., 20059 citados por Camara y
Calvete, (2010) y Límites deteriorados, mientras que la ansiedad se ha relacionado con
los dominios de Autonomía deteriorada, Límites deteriorados y Vigilancia excesiva según
McGinn, Cukor y Sanderson, (2005) citados por Camara y Calvete, (2010). Sin embargo,
una importante limitación de los estudios realizados es que, hasta donde sabemos, están
todos basados en diseños transversales, por lo que generan dificultades a la hora de
interpretar el sentido de las asociaciones entre esquemas y síntomas.
Es difícil abarcar todo la concepción de “niñez” y referirlos a un concepto como tal
debido a los cambios fisiológicos, cognitivos, emocionales, sociales y dinámicos por los
que atraviesa un sujeto en los primeros años de su vida, pero podemos establecer que la
infancia se inicia desde el momento mismo después del parto y se lleva hasta el inicio de la
maduración del individuo que le permite entrar a la etapa de la adolescencia y más tarde a
la adultez (Perinat, 2007), el principal objetivo histórico con esta población es la crianza y
la educación lo que le permitirá al sujeto desenvolverse en etapas posteriores, de acuerdo a
esto podemos hablar que las representaciones sociales históricamente han cambiado sobre
los niños; antes era evidente que se pensara en los niños como sujetos pasivos de su
crecimiento físico y mental, los cuales simplemente reciben una cantidad de información la
cual ellos reciben e iban almacenando y retomando de acuerdo a sus experiencias, pero los
modelos pedagógicos modernos y el cambio en el pensamiento contemporáneo fue
colocando a los niños como sujetos diferentes en el mundo; los niños cada vez son más
responsables de sus propios aprendizajes y el desarrollo de sus habilidades emocionales,
ahora ellos son sujetos activos del su crecimiento mental y los padres guían este proceso
(Perinat, 2007).
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 15
Las investigaciones y observaciones sistemáticas sobre los niños iniciaron en el
siglo XIX cuando el desarrollo de la pediatría permitió establecer una ciencia que se
preocupaba por los cambios de los niños desde su nacimiento hasta su adultez además los
padres empezaron a sentir interés por llevar registros de las actividades de sus hijos, más
tarde este ejercicio sería el precursor de la psicología infantil, por ejemplo este ejercicio fue
el que permitió en 1882 la publicación del libro Die Seele des Kindes elaborado por
William Preyer el cual es considerado el primer clásico de la psicología infantil donde
informaba formas científicas de entendimiento del crecimiento psicomotor de los niños,
después de este trabajo vinieron obras importantes las cuales iban detallando cada vez más
año por año las características de los niños e iban diferenciando por etapas como la primera
infancia, la infancia temprana, la media y la pre-adolescencia (Perinat, 2007).
Pero fue a partir de 1926 con el inicio de los trabajos de Jean Piaget que se empezó
a documentar la forma en cómo se daba el desarrollo psicológico en la niñez, dividiendo
por etapas claras la forma en cómo los niños inician a operacionalizar y racionar sobre sí
mismo y el mundo. A partir de allí los niños empezaron a ser entendidos como seres
políticos, sociales y económicos que afectan a la población en general, es por esto que en
términos de salud son los niños quienes tienen una prioridad ya que la pérdida de uno
implica graves consecuencias para la sociedad (Perinat, 2007).
Para estudiar psicológicamente la población infantil es necesario establecer criterios
de desarrollo físico, las emociones, la inteligencia y la comunicación ya que son estos
tópicos los que más cambian y sobre los cuales se permite desarrollar gran cantidades de
teorías, estas teorías del desarrollo infantil podemos también llamarlas como paradigmas ya
que son distintos puntos que permiten explicar cómo se realiza esos cambios, entre la
literatura los paradigmas más aceptados para entender el desarrollo infantil son: el
paradigma evolucionista de Darwin, los paradigmas biológicos, socio-genéticos, sistémicos
y ecológicos (Perinat, 2007).
Volviendo con los trabajos realizados por Jean Piaget y el paradigma socio-genético
podemos iniciar a identificar como es el transcurso psicológico de los niños, Según Piaget
todos atravesamos por una primera etapa llamada la etapa sensorio-motriz que abarca desde
el nacimiento hasta los 2 años, esta se caracteriza por interacción con el mundo a través de
los sentidos, los niños expresan todo lo que está en su aparato mental a través de las
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 16
manifestaciones que hace con sus sentidos, en esta etapa se trabaja en el desarrollo de
reflejos (algunos ya innatos) el desarrollo de la motricidad y los primeros indicios de
pensamiento que le permitirá estructurar imágenes y formas. Para Piaget en esta etapa los
niños van construyendo la comprensión de su mundo externo a través de su experiencia
sensorial y en cuanto a capacidades cognitivas se dan indicios de memoria y pensamiento
(Perinat, 2007).
Después de esto los niños empiezan la etapa pre-operacional que se ubica entre los 2
a 7 años de edad, en esta etapa existe el reconocimiento de un Yo por el egocentrismo que
es característico de los niños en estas edades, el aparato mental reconoce la existencia de su
propio ser y lo que desea, fue en esta etapa donde Piaget pudo establecer ejercicios de
conservación y darse cuenta del pensamiento inmaduro de los niños, aun así es en esta
etapa donde se implantan los cimientos de la conservación de forma, volumen, peso y
reversibilidad. En cuanto a capacidades cognitivas se ejercitan más todos los procesos
cognitivos pero en especial el pensamiento y el lenguaje siendo en este último característico
el desarrollo de símbolos como parte de su lenguaje hablado (Perinat, 2007).
De 7 a 12 años los niños entran en una nueva etapa conocida como la etapa de
operaciones concretas, es a partir de aquí que se espera en niño realice conservación de
todos los elementos y desarrolle habilidades para la resolución de problemas, también se
desarrolla la habilidad del control numérico lo que le permite el pensamiento lógico y
sistemático de las cosas, además el pensamiento ya no gira en torno de sí mismo, sino que
entiende que es un ser social y existen personas fuera de él, en cuanto a capacidades
cognitivas son el pensamiento y el lenguaje quienes jalonan el desarrollo de los demás
procesos cognitivos y a sí mismos, a partir de esta época ambos procesos se vuelven más
elaborados y abstractos (Perinat, 2007).
La última etapa propuesta por Piaget es la de operaciones formales, que se
desarrolla a partir de los 12 años y continúa por la adultez, los cambios físicos y mentales
que abren al niño a la madurez es un tópico que impulsa todo el desarrollo mental infantil,
es aquí cuando el niño puede empezar a moverse en conceptos abstractos, es decir ir más
allá de lo mediato, esto le será suficiente para resolver problemas durante su vida adulta un
tipo de pensamiento conocido como el hipotético deductivo, aunque en algunos sujetos no
se desarrolle de la misma manera y por ende les cuesta más trabajo ir y venir en el
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 17
pensamiento para entender las consecuencias de sus acciones y las de los demás (Perinat,
2007).
Es a partir de esta revisión que hallamos interés en la población infantil
especialmente entre 5 a 11 años, ya que en términos de desarrollo los niños en esta edad ya
se ubican entre la etapa preoperacional y de operaciones concretas lo que nos permite dar
pautas para juegos y actividades las cuales permitirán reducir síntomas de ansiedad,
también en términos de relevancia de intervención como describimos anteriormente los
niños son entes políticos, sociales y económicos que tienen prioridad sobre otros tipos de
población ya que la pérdida de uno implica disminución de la calidad de vida familiar, el
aumento del costo económico y la pérdida de un ser productivo para la sociedad (Perinat,
2007), y por último en términos de salud pública debido a que la infancia es una etapa
crucial para el desarrollo humano donde se implanta la calidad del bienestar mental de un
individuo, la atención de un trastorno mental en la infancia es de suma importancia debido
a que esta tendrá repercusiones en la vida adulta (como en el establecimiento de relaciones
íntimas, elección de pareja y productividad laboral) y el no darle un tratamiento pronto hará
más difícil la tarea a largo plazo (Rodríguez, Khon & Aguilar, 2009).
Además la importancia de trabajar con este marco de edad es relevante debido a que
como muestra Borges, Manso, Toe y Gaspar de Matos (2008) son las edades entre 8 a 12
años donde más prevalecen los síntomas de ansiedad y donde las personas tienen menos
estrategias de afrontamiento, este grupo de investigadores se centró en analizar las
correlaciones que existen entre las edades de las personas con ansiedad y sus estrategias de
afrontamiento, analizando una muestra de 916 niños del Brasil y cruzando la información
entre las edades, géneros, estrategias de afrontamiento y niveles de ansiedad; el estudio
indico como a edades menores las personas desarrollan más síntomas de ansiedad debido a
sus pocas estrategias de afrontamiento.
Además el estudio indico como los hombres poseen menos estrategias de
afrontamiento que las mujeres a edades tempranas, debido a que las mujeres entre 8 a 15
años usan más estrategias de afrontamiento cognitivas y emocionales a comparación con
los hombres que solo utilizando cognitivas (Borges et al., 2008).
Los investigadores reconocieron que las pocas estrategias de afrontamiento a edades
más tempranas se debe al tipo de pensamiento que tienen los niños más pequeños, el cual
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 18
no le permite realizar abstracción lo suficientemente elaboradas y lógicas para hacer
análisis lógico, reevaluación positiva, búsqueda de apoyo y orientación, resolución de
problemas, o evitamiento cognitivo pero sí realizan mucho las recompensas alternativas,
aceptación o resignación y la descarga emocional (Borges et al., 2008). Estos datos son
importantes a la hora de evaluar a un niño con ansiedad ya que se necesita entender si posee
estrategias de afrontamiento y si estas son adecuadas a su edad lógica-mental para poder
elaborar un plan de trabajo.
Dentro de otra serie de investigaciones, el concepto de estilos parentales ha sido
ampliamente utilizado en la investigación sobre el desarrollo infanto-juvenil a lo largo de
las últimas décadas. Se han elaborado diferentes definiciones sobre estos modelos. Según
Iglesias y Romero (2009), los estilos o modelos parentales se consideran una constelación
de actitudes hacia el niño que son comunicadas y que, tomadas conjuntamente crean un
clima emocional en el cual las conductas de los padres son expresadas. Estas conductas
incluyen las dirigidas a una meta u objetivo específico a través de las cuales los padres
ejecutan sus obligaciones parentales como las conductas parentales no dirigidas a objetivos
concretos, tales como gestos, expresiones faciales, cambios en el tono de voz, o expresiones
espontáneas de una emoción.
Según Iglesias y Romero (2009) delineo los estilos parentales conocidos
ampliamente en la literatura científica. De acuerdo con Baumrind, los padres democráticos
explican a sus hijos las razones del establecimiento de las normas, reconocen y respetan su
individualidad, les animan a negociar decisiones conjuntamente y promueven una
comunicación abierta con ellos. Estos padres controlan y restringen el comportamiento de
sus hijos con normas y límites claros que mantiene de modo coherente y exigen su
cumplimiento. Los padres autoritarios, por su parte se caracterizan por mantener el control
restrictivo y severo sobre las conductas de sus hijos , con frecuente empleo de castigos
físicos , amenazas verbales y físicas y continuadas prohibiciones, moldean , controlan y
evalúan la conducta y actitudes de sus hijos siguiendo criterios rígidos y absolutos. No
fomentan la independencia, mucho menos la individualidad. En el estilo permisivo, se evita
hacer uso del control, se usan pocos castigos, se realizan pocas demandas al niño y se le
permite regular sus propias actividades. Los padres permisivos se muestran tolerantes y
aceptan los impulsos de sus hijos.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 19
Desde los estudios de Baumrind, muchos otros investigadores han intentado definir
el papel desempeñado por ellos parentales en el desarrollo de la competencia social y la
psicopatología en niños y jóvenes. Según Iglesias y Romero (2009), han analizado la
relación entre los estilos parentales e índices específicos de psicopatología y personalidad,
como la ansiedad, la depresión o el consumo de drogas y la conducta antisocial.
Según Iglesias y Romero (2009), la conexión entre estilos parentales y los trastornos
de ansiedad arrojaron resultados en los que se encontraron: el bajo cuidado paternal y
maternal obtuvo asociación más significativa con la presencia de trastornos de ansiedad,
pero también hay que resaltar que no solo los estilos parentales influyen en la aparición del
trastorno, ya que los contextos de pobreza generan en los niños déficits en habilidades
sociales, las cuales son un factor de vulnerabilidad a la aparición de este trastornos y otros
como los relacionados con el estado del ánimo según menciona Lacunza y González
(2009).
Respecto a los panoramas sobre la ansiedad en Latinoamérica son alarmantes, un
estudio publicado a través de la Organización Panamericana de la Salud y difundida por la
Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2009, muestra cómo los trastornos de
ansiedad ocupan una tasa significativa de afección a la salud mental de los latinos, donde
más de la mitad de personas en Latinoamérica que sufren de este trastorno no reciben un
tratamiento correcto, siendo la ansiedad, la depresión y los problemas relacionados con el
consumo de sustancias psicoactivas las patologías más reportadas en los centros de salud
mental, donde la ansiedad es la problemática que afecta más del 18% de la población en
los países con mayor índice de desarrollo como México, Brasil y Argentina (Rodríguez,
Khon & Aguilar, 2009), esto debido además a los altos índices de pobreza en estos países
que sin duda correlacionan en este tipo de problemas según Lacunza y González (2009).
Así mismo, los trastornos de ansiedad con mayor prevalencia en Latinoamérica y el
caribe para el 2005 eran en trastorno de ansiedad generalizada (prevalente durante toda la
vida 10%, prevalente durante el último año 9%, actualmente 6%), trastorno de pánico
(prevalente durante toda la vida 9%, prevalente durante el último año 8%, actualmente 6%),
trastorno obsesivo compulsivo (prevalente durante toda la vida 8%, prevalente durante el
último año 8%, actualmente 4%), Agorafobia (prevalente durante toda la vida 6%,
prevalente durante el último año 5%, actualmente 4%) y Trastorno de Estrés Postraumático
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 20
(prevalente durante toda la vida 5%, prevalente durante el último año 4%, actualmente 4%)
(Rodríguez, Khon & Aguilar, 2009, p. 22). En cuanto al trastorno obsesivo compulsivo lo
que más se observa en los niños son la preocupación por contaminarse, por lastimarse a sí
mismos o a los demás, angustia por la simetría y el que algo malo pueda ocurrir, en el caso
de que no se cumpla un ritual compulsivo. Las compulsiones, a su vez, son definidas como
conductas repetitivas o actos mentales que reducen la ansiedad inducida por una obsesión,
las más comunes en los niños son el lavado, chequeo y rituales de ordenar (Vásquez &
Salcedo, 2012).
Laredo (2007), en un estudio realizado mediante una entrevista estructurada con
criterios DSM-III y con una muestra de preescolares, con edades comprendidas entre los
3 y 6 años de edad, ha encontrado una prevalencia del 24%. Presentándose con un 63% en
niñas y en un 37% en niños (López, Alcántara, Fernández, Castro & López, 2010). Así
mismo, entre hombres y mujeres, diversos estudios han demostrado mayor prevalencia de
los trastornos de ansiedad en mujeres en comparación a los hombres (Aguilar, Khon, &
Rodríguez, 2009).
Ahora bien el trastorno de ansiedad se asocia en algunos casos con problemas como
la malnutrición, falta de estimulación psicosocial adecuada y las lesiones ocurridas en el
nacimiento. Su impacto se puede esperar en las dificultades que pueden presentar esta
población infantil en su familia, crianza, escuela, con pares y en la relación consigo mismo;
también los contextos de pobreza favoreces al déficits de habilidades sociales adecuadas
que contrarrestan la aparición del trastorno (Lacunza & González, 2009), del mismo modo
las consecuencias psicológicas que se presentan a temprana edad ante la exposición de un
evento traumático, como el maltrato físico, el abuso sexual, el haber sido testigo de serias
lesiones o el fallecimiento inesperado de los padres, cuidadores u otro ser querido, incluye
cambios en el afecto, en el comportamiento, en las relaciones e incluso en el aprendizaje
(Ministerio de salud & protección social, 2015).
Por otro lado estudios sostienen que existe una relación entre la presencia de
trastornos por ansiedad y la constante migración de la población latinoamericana de
espacios rurales a espacios urbanos durante las últimas décadas, afirmando que estas
personas suelen migrar a condiciones de vida más precarias donde existe inestabilidad
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 21
laboral, falta de espacios de ocio y al aumento de las desigualdades sociales que conllevan a
violencia y discriminación (Rodríguez, Khon & Aguilar, 2009).
Ahora bien las estadísticas para Colombia sobre ansiedad también son alarmantes,
según uno de los últimos estudios nacionales de salud mental muestra como un porcentaje
del 9,6% de la población es afectada por esta problemática , únicamente superado por la
depresión mayor con un porcentaje de 25,1%, los trastornos de ansiedad más comunes entre
la población Colombiana son: el trastorno de Agorafobia, Ansiedad generalizada, Angustia,
Estrés Postraumático, Fobia Social y Fobia específica siendo las mujeres las más afectadas
por estos trastornos en comparación con los hombres; pero a pesar de ocupar el segundo
puesto en la tasa de problemas mentales son los trastornos de ansiedad los que se llevan el
primer puesto en cuanto a prevalencia durante toda la vida de los Colombianos con un
porcentaje del 13.5%. De a acuerdo a la severidad se encuentra con un mayor porcentaje
el trastorno de ansiedad generalizada y el trastorno de estrés postraumático, con factores de
vulnerabilidad problemas relacionados con la violencia, el narcotráfico, paramilitarismo y
problemas relacionados con la adaptación a nuevos ambientes y consumo de sustancias
(Posada, Aguilar & Deeb-Sossa, 2003 citado por Rodríguez, Khon & Aguilar, 2009).
De acuerdo a la encuesta nacional de salud mental por el Ministerio de salud y
protección social en el años 2015, el estado de afectación de la salud mental en niños se
relaciona con los factores de maltrato, funcionalidad familiar, violencia, desplazamiento y
el desarrollo del país; como también la pobreza, la guerra, la desigualdad, y aspectos
asociados con la familia, en éste caso, el abuso sexual, el maltrato, el poco apoyo social, la
violencia, experiencias traumáticas y consumo abusivo de alcohol por parte de los padres,
que limitan el normal desarrollo cognitivo, social y emocional de los niños. Adicional a
esto en Colombia se realizó un estudio sobre la prevalencia del trastorno en tres municipios
de Cundinamarca, dos de ellos expuestos a situaciones de conflicto armado y uno sin
experiencias armadas relacionadas con el conflicto. Se encontró una prevalencia de TEPT
en niños del 23,2% en un municipio que había sufrido un hostigamiento armado reciente y
del 16,8% en un municipio que había experimentado la exposición crónica a la guerra, en
comparación con una prevalencia de 1,2% en el municipio que no había tenido esas
experiencias.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 22
De acuerdo a estudio descriptivo observacional y retrospectivo; realizado en el
servicio de la psiquiatría infantil de consulta externa de la Fundación Hospital la
Misericordia, a menores de 18 años que presentaron diagnóstico de trastorno obsesivo
compulsivo entre enero del 2006 a diciembre del 2010, con revisión de 88 historias clínicas,
se encontraron hallazgos que se agruparon en categorías: factores sociodemográficos,
comorbilidades, interferencias curso, tratamiento y seguimiento. En cuanto al género, de los
88 sujetos evaluados 47, 73% (42 pacientes) de género femenino y 52.27% (46 pacientes)
masculinos. En cuanto al comienzo de la sintomatología del TOC fue promedio a los 11
años. Las comorbilidades que se presentaron fueron de los 88 pacientes, 10 presentaron
tics, comorbilidad con otras enfermedades se encontró en un 52.27% que corresponde a 46
pacientes con enfermedades como: gastritis, migraña, fibromialgia, dermatitis. La
comorbilidad con enfermedades psiquiátricas a nivel internalizante se presentó en un
73.86% y externalizantes en un 11.36%. Las principales patologías psiquiátricas
presentadas en forma discriminativa fueron fobia social, depresión, TDAH, trastorno de la
conducta alimentaria (Vásquez & Salcedo, 2012).
De acuerdo a los hallazgos encontrados en la revisión de las historias clínicas de los
88 sujetos diagnosticados con TOC se pudo observar, comparándolos con los datos
publicados en la literatura científica, similitud con la frecuencia en población masculina,
promedio de edad, y en relación con la presentación de tics en la población masculina
(Vásquez & Salcedo, 2012).
En cuanto a nuestra población de interés, Rodríguez, Khon y Aguilar (2009)
retoman el estudio de Benjet (2006) para hablar sobre la salud mental de la niñez y la
adolescencia en américa latina y el caribe, ella retoma la estadística general de la población
infantil afirmando que existen diferencias entre cada país en cuanto a su población, pero en
general las personas menores de 15 años representa un 30% de Latinoamérica y el Caribe,
los datos exactos son difíciles de recolectar ya que los investigadores han usado
instrumentos para adultos pero se estima que de la población infantil entre el 30 al 40%
sufren algún trastorno mental. Nuevamente son los trastornos de ansiedad quienes alcanzan
los índices más altos (19.6%), seguidos de los trastornos del estado de ánimo (15.7%) y los
trastornos de la conducta (13.8%), algunos de estos problemas los explican investigadores
como Greco e Ison (2009), que afirman que los programa en Colombia en entrenamientos
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 23
básicos para la vida como el de solución de problemas no se dan ampliamente en la
infancia, y esto concurre a un déficit de habilidades en las personas, en general estos
problemas son identificados a edades tempranas y durante la época de escolarización donde
los niños exacerban los síntomas de una condición clínica, en países como México, Puerto
Rico y Brasil las unidades de salud mental tienen gran demanda de la población infantil
cerca del 30% de los internos son menores de 14 años los cual es una cifra preocupante
para los gobiernos y la salud pública, una posible explicación a este problema la brinda
Tarraga, en su trabajo investigativo que correlaciona el rendimiento en solución de
problemas con los problemas afectivos motivacionales en la población mencionada, según
este autor en estos países se ha hallado que la existen deficiencias en la enseñanza de
repertorios comportamentales adecuados a la solución de problemas, ante esta dificultad las
personas latinas suelen responder mediados por emociones ante dificultades en sus
contextos sociales, generando así los déficits emocionales (2008).
Además actualmente es el suicidio la problemática más relacionada con los niños y
los problemas mentales lo que ha llevado a muchos países a implementar programas de
atención temprana para la población infantil y la priorización de la atención clínica. Entre
los factores que más se relacionan con los trastornos mentales como la ansiedad y la
depresión en los niños de Latinoamérica y el caribe son los altos índices de pobreza de la
región, el trabajar y vivir en la calle, el embarazado y toma de responsabilidades a
tempranas edades y la violencia intrafamiliar (Benjet, 2006 citado por Rodríguez, Khon &
Aguilar, 2009).
Por último tratar la población infantil con algún tipo de problema de ansiedad es de
suma importancia, debido a que según los estudios este trastorno acarrea problemas en el
desempeño escolar y la interacción social, y a la larga se ve repercutida en la salud
socioemocional del adulto ya que este trastorno suele repercutir en la vida adulta en
trastornos del estado de ánimo, problemas de conducta entre otros (Cartwright-Hatton,
2006; Silva; Figueiredo, 2005 citado por Gonçalves, Furtado, Quintes & Pires, 2009).
Ahora bien, ya que se ha explicado que es la ansiedad y como se evidencia esta
problemática a nivel mundial, de Latinoamérica y de Colombia es importante empezar a
hablar que como se debe hacer una adecuada evaluación e intervención, empezando con la
forma de evaluar ya que hay que tener en cuenta que no son los mismos criterios para todas
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 24
las poblaciones, por ejemplo la evaluación de la ansiedad en niños es peculiar y diferente a
como se hace con los adultos ya que como describe DSM V algunos niños manifiestan la
ansiedad con rabietas, pataletas, llanto irritable y alejamiento social (Asociación Americana
de Psiquiatría, 2014) está forma diferente en cómo se presentan los síntomas fue de especial
interés para la investigación de Orgilés, Méndez, Espada, Carballo y Piqueras (2012)
quienes intentaron “examinar la frecuencia y característica de los síntomas de los
principales trastornos de ansiedad en niños y adolescentes” (p. 115) para esto estudiaron a
niños de edades entre 8 a 17 años la mayoría nacidos en España (85.3%) y el resto eran
nacido en otros países pero con residencia en España, de este grupo el 49% era masculino y
el otro 51% femenino. Para la recolección de datos los investigadores utilizaron encuestas
demográficas y la escala de ansiedad infantil Spence una escala con 44 ítems que miden
signos y síntomas de ansiedad con una puntuación máxima de 114 puntos en una escala
tipo Likert de 4 puntos, la prueba está ajusta a los criterios diagnósticos del DSM IV TR y
se tuvo en cuenta los trastornos más comunes de la población infantil (Trastorno de
ansiedad generalizada, Trastorno obsesivo compulsivo, Pánico y Agorafobia, Fobia Social,
Trastorno de ansiedad por separación y fobia específica) (Zubeidat, Fernández, Sierra &
Salinas, 2008).
La forma en cómo el grupo investigativo realizó la distribución estadística fue un
grupo de preadolescentes (8 a 11 años), adolescencia media (12 a 13 años) y otro de
adolescencia (14 a 17 años). Los resultados mostraron como los síntomas del trastorno de
ansiedad por separación son más prevalentes sobretodo en la población preadolescente,
seguido de las fobias específicas y en menor medida el Pánico y Agorafobia (Hervas,
2011). En este estudio además se pudo identificar como las mujeres muestran más
prevalencia de los síntomas de ansiedad en todos los trastorno menos en el obsesivo
compulsivo, sobre todo en ansiedad generalizada (6.76%) y la fobia social (5.47%) este
resultado es concordante con evidencia previa recolectada por los investigadores. Además
los investigadores dieron cuenta que sus puntuaciones fueron más elevadas que los estudios
previos, tal vez porque en otros estaban más interesados en tratamientos y el diagnóstico
mientras que ellos estaban interesado por evidencias los síntomas de los trastornos de
ansiedad (Orgilés, et al., 2012) y Hervás (2011).
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 25
De esta investigación podemos evidenciar como el trastorno de ansiedad por
separación es más prevalente para la población de interés (niños entre 5 a 11 años) además
de los datos también obtenidos con el trastorno de ansiedad generalizada que son altos para
esta población (5.32%) y a pesar que el estudio fue realizado en una población española es
necesario revisar estudios similares en muestras colombianas o latinas para identificar si
existen similitudes con esa investigación, una explicación a este fenómeno se puede otorgar
a partir de la investigación de Greco y Ison (2009), quienes afirmar que los problemas de
ansiedad por separación y ansiedad generalizada en niños se da por un déficit de
habilidades en solución de problemas, y afirman que si en general la población
latinoamericana entrenase más en la infancia esta estrategia las cifras de problemas
mentales disminuiría notablemente.
Otra manera de realizar evaluación de trastornos de ansiedad en niños es a través de
escalas de ansiedad estandarizadas para este tipo de población, en el mercado se encuentra
gran variedad de instrumentos de medición pero pocos cuentan con las aplicaciones a
muestras considerables como para tener validez (Zubeidat et al, 2008), los investigadores
entonces ponen a prueba la efectividad de muchos instrumentos con diversos tipos de
muestras para encontrar errores de confiabilidad o ajustar las pruebas; según lo anterior
dicho muchos investigadores aplican instrumentos para calificar los niveles de ansiedad en
distinta muestras, por ejemplo Brarboza (2009) quien aplicó el instrumento de la escala
multidimensional de ansiedad para niños (MASC-VB) en una población de Río de Janeiro.
Los datos obtenidos a partir de esta aplicación permite por un lado darle más
consistencia a la prueba a la población Brasileña y por otro lado permite dar cuenta de las
cifras actuales de ansiedad en los niños de otros países, cuya cifra fue alarmante ya que de
una muestra seleccionada de niños el 67% de la población obtuvo puntuación sobre los
límites normales en la escala de ansiedad (más de 70 puntos), las edades promedio de
mayores puntuación en niveles de entre fueron de los 11 a los 13 años, asegura el autor que
esto se puede relacionar por el cambio de la niñez a la adolescencia donde el individuo se
enfrenta a muchas crisis emocionales (Brarboza, 2009).
Estos datos son semejantes a anteriores estudios (Tarraga, 2008), realizados con esta
prueba en otras poblaciones Brasileñas por ende el instrumento de medición de la ansiedad
en niños (MASC-VB) posee validez en poblaciones de este país latino, aunque las
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 26
aplicaciones correspondientes no se han realizado en Colombia los instrumentos de
validación de para un trastorno de ansiedad que se vayan aplicar en el país deben pasar por
un proceso similar o al menos haber pasado por un proceso parecido en algún país que
latinoamericano.
Otro aporte importante respecto a la evaluación de los trastornos de ansiedad en
niños son los que menciona Tortul, Marturano y Palucci quienes afirman que para lograr
evaluar niños un investigador y terapeuta debe tener en cuenta tres aspecto el primero sus
relaciones familiares, el segundo su desempeño mental y el tercero su contexto social. Estos
investigadores sugieren que evaluar las relaciones familiares permiten realizar un
acercamiento a los posibles predisponentes a la ansiedad, estilos parentales inadecuados o
ambientes de familia hostiles y lejanos suelen llevar a un niño a desarrollar síntomas de la
ansiedad, además las relaciones familiares brindan factores protectores para niño con
problemas del estado de ánimo y la ansiedad ya que los niños con mejores vínculos
familiares logran adaptarse mejor a su contexto (2007).
El segundo ámbito en el cual se debe indagar cuando se hace evaluación en niños es
el relacionado con su propio desempeño mental, algunos niños con deficiencias cognitivas
pueden tener problemas en el reconocimiento de emociones, tarea que hace más difícil la
detección de síntomas de ansiedad, también los niños en edades más pequeñas (entre 0 a 7
años) pueden expresar su ansiedad mediante la irritabilidad y el desasosiego e incluso
refiriendo debilidades en su autoestima y en la baja tolerancia a la frustración (Tortul,
Marturano & Palucci. 2007), lo anterior mencionado es de vital importancia para el
desarrollo de posteriores estudios en el campo de la psicopatología infantil, ya que como lo
menciona Hervás, los déficits emocionales tienen un correlación de más de 85% con los
trastornos clínicos de ansiedad, depresión y esquizofrenia en niños y adolescentes (2011).
El tercer ámbito de evaluación es el contexto social, la mayoría de desencadenantes
de ansiedad en niños se presentan debido a las presiones del contexto sobre el niño, es por
esto que hay que evaluar qué tan hostil y demandante es el contexto escolar y social ya que
un niño puede utilizar malas estrategias de afrontamiento para enfrentar su ambiente y esto
puede generar problemas de ansiedad (Tortul, Marturano & Palucci. 2007).
Estos tres ámbitos de evaluación pueden guiar la labor de un terapeuta no sólo para
evaluar si no también para realizar una intervención más oportuna con los niños que
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 27
presenten síntomas de ansiedad. Otra variable importante para la evaluación de un trastorno
de ansiedad social en el contexto escolar es el bullying, ya que como menciona Caballo,
Arias, Calderero, Salazar y Irurtia (2011) existe una gran correlación entre el acoso escolar
y el déficit en habilidades sociales, esta correlación es el principal factor que influye en la
aparición de la fobia social, donde además hay que recordar la importancia que tiene el
desarrollo de las habilidades sociales para fortalecer competencias en la infancia,
importantes para enfrentar las situaciones de peligro y riesgo como el bullying según
menciona Company, Oberst y Sánchez (2012), por esto estos investigadores desarrollaron
dos instrumentos para la evaluación de ansiedad social en niños que podrían ser víctimas de
bullying, el Cuestionario Multimodal de acoso Escolar (CMAE-1) y el Cuestionario de
Interacción Social para Niños (CISO-NIII), ambos instrumentos según la investigación de
los autores presenta validez, consistencia interna y fiabilidad lo que hace de estos
cuestionarios dos herramientas efectivas para la evaluación de un trastorno de ansiedad
(Greco & Ison, 2009).
Según la investigación de validación de los instrumentos CMAE-1 y CISO-NIII
Caballo, et al., (2011) demostraron cómo existe una mayor correlación entre el bullying y
ansiedad social en niños varones que en la correlación entre bullying y ansiedad social en
niñas, concluyendo así que son los hombres más susceptibles al acoso escolar que las
mujeres, esto porque los niveles de agresividad de acosadores varones es más alta que en el
acoso entre mujeres, los acosadores lograr predecir estos patrones de inhabilidad social lo
que les permite mayor acceso a violentar a los niños, generando así menos habilidades
sociales y más dificultades en la autoestima en los niños con fobia social, estos
investigadores junto a estudios posteriores como el de Hervás (2011), empezarán a trabajar
en un protocolo de intervención a los niños con fobia social provocada por acoso escolar,
en ese protocolo la atención estuvo más dirigida a los varones que a las mujeres.
De estas investigaciones podemos concluir que el proceso de evaluación de la
ansiedad es complejo y multidimensional, más cuando se trata de niños ya que actualmente
no se cuenta con muchas estrategias de evaluación para la fobia social, es importante como
se menciona en Brarboza (2009) que las escalas de evaluación tengan confiabilidad con
referencias latinoamericanas ya que la mayoría de herramientas como las mencionadas por
Caballo et al., (2011) y Orgiles et al., (2012) tienen validaciones con muestras Europeas y
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 28
por lo general esas tienen aplicaciones en muestras Colombianas. También es importante
tener en cuenta las variables de evaluación como sus relaciones familiares, el desempeño
mental y su contexto social (Tortul, Marturano y Palucci, 2007) sobretodo lo que tiene que
ver con el contexto social escolar ya que como mencionaba Caballo, et al., (2011) es en el
colegio donde los niños más manifiestan problemas de ansiedad por el bullying,
exposiciones al medios sociales hostiles y la competencia en rendimiento académico que
llevan a los niños desarrollar síntomas de ansiedad.
Una vez se ha logrado establecer una buena evaluación de la ansiedad social en el
niño es importante avanzar al tratamiento del mismo, actualmente se han hecho varias
propuestas de intervención que hacen que difícilmente se pueda elegir por una en particular,
algunos de los tratamientos prefieren apuntar a actividades específicas en ciertas
habilidades y otros prefieren diseñador trabajos lúdicos y dinámicos, pero entre los
tratamientos cognitivos conductuales que han resaltado en la última década podemos
señalar el trabajo de Kendall (2010) quien propone un tratamiento para la ansiedad en niños
con juegos dinámicos donde se les enseñe primero a reconocer de forma efectiva las
emociones de las más básicas a las más complejas, por ejemplo que distinga entre alegría y
felicidad, entre tristeza y depresión, acompañado a esto se les debe explicar distintas
situaciones y personas que se relacionan con estos sentimientos, por ejemplo se enseña que
la emoción correcta que debe sentir ante situaciones de peligro es el miedo y la ira, o que la
emoción más adecuada para hacer interacción social es la alegría.
Después de realizar este trabajo se debe normalizar los sentimientos asociados a la
ansiedad, por ejemplo aclararle al niño que es normal que se sienta ansioso en un nuevo
colegio. A continuación se le debe enseñar pensamiento positivos que contrarrestan el
malestar que generan los síntomas de la ansiedad, se le da la instrucción que “debata” con
los pensamientos negativos, es decir que piense de qué le sirve pensar así y dejarse llevar
por el miedo. Una vez el niño ha adquirido la capacidad de pensar de manera más positiva
se le enseña a premiar su esfuerzo y sus logros a través del auto-reforzamiento y por último
se le enseña a una técnica en resolución de problemas para que él enfrente las situaciones
sociales con más facilidad, con esta técnica se refuerza su autoestima y autosuficiencia.
Lo propuesto por Kendall (2010) podría ser una buena guía de manejo para la ansiedad
en niños ya que muestra un paso a paso para el tratamiento de la ansiedad, además que los
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 29
resultados finales demostraron ser satisfactorios con la población que él eligió, pero se
podría generar más aportes a este tratamiento basados en otros estudios, por ejemplo en
entrenamientos específicos como los usados por Olivares, Olivares y Macia (2014) quienes
entrenaron a adolescentes con fobia social generalizada en habilidades sociales básicas y
avanzadas, con el fin de evidenciar si tendría algún efecto con el pronóstico del trastorno,
pero otros autores son más amplios y prefieren tratamientos como es el caso de la terapia
de atención escalonada propuesta por Van der Leeden, Van Widenfelt, Van der Leeden,
Liber, Utens y Treffers, esta terapia consiste en un tratamiento por fases para “desescalar”
los síntomas de la ansiedad, la forma de realizarla consiste en hacer durante la primera fase
psicoeducación sobre el trastorno de ansiedad tanto en padres como en niños, donde se
establecen pautas para evitar experimentar los síntomas, reestructuración cognitiva donde
se evalúa la funcionalidad de los pensamientos que desencadenan la ansiedad, resolución de
problemas donde se da tanto a los padres como a los niños elementos cognitivos y
conductuales para resolver problemas y se brindan técnicas de afrontamiento, la exposición
que es una técnica muy utilizada en trastornos como la fobia social que ayuda a reducir los
pensamientos catastróficos de la situación y por último la prevención de recaídas donde se
ayuda a los consultantes a tener elementos protectores para evitar sentirse ansiosos en
situaciones disfuncionales (2011).
Después de realizar la primera fase se procede con la segunda fase de tratamiento que
tuvo sesiones de evaluación para ver que no había servido durante la primera fase y
continuaron ejercicios de exposición y trabajo junto a padres, después se trabajó una terapia
cognitiva con padres donde se evaluaba los pensamientos sobre protectores con sus hijos
que imposibilitaba la disposición total al tratamiento, después se realizaban ejercicios
parecidos a los de la primera fase pero estos ya eran acompañados por los padres y estos
debían motivar el avance de sus hijos, después fueron sometidos a la última fase, la cual
incluía nuevos ejercicios de trabajo con padres, después los terapeutas realizaban trabajos
con los niños como si estos fueron sus padres mediante juego de roles, los terapeutas
motivaban los avances como lo hacían los padres y ayudaban a desarrollar nueva
herramientas para afrontar los problemas y por último se realizó prevención en recaídas
(Van der Leeden et al., 2011). Aunque este tratamiento es uno de los más nuevos para la
ansiedad social se pueden considerar problemas como que tan solo el 74% de la población
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 30
le fue útil el tratamiento además de ser un tratamiento largo que podría generar deserción
de sus participantes.
En comparación el estudio de Kendal (2010) y el de Van der Leeden et al., (2011) se
puede generar un tratamiento más efectivo para la ansiedad si se combinara la
psicoeducación, la reestructuración cognitiva, la resolución de problemas, la exposición y la
prevención de recaídas con el reconocimiento de emociones, la meta-cognición y la auto-
recompensa. Los temas en que ambos autores convergen como efectivos para el tratamiento
de ansiedad son los relacionados con la reestructuración cognitiva y las técnicas en solución
de problemas, pero también hay que tener en cuenta que muchos de los trastornos de
ansiedad en niños son comórbidos con trastornos del estado de ánimo (cerca de una tercera
parte de los pacientes con ansiedad presentan comorbilidad con algún problema del estado
del ánimo) (Cummings & Fristad, 2012). Esta variable también es importante para el
tratamiento ya que podría reducir la efectividad de la terapia o ampliar la necesidad de
nuevas técnicas para realizar tratamiento en ambos; teniendo en cuenta esto Cummings y
Fristad (2012) evaluaron como la relación entre ambos trastornos contribuyen a la
efectividad de un tratamiento, tomaron una muestra de niños con comorbilidad entre ambos
trastornos y evaluaron la efectividad terapéutica, los resultados mostraron como para el
39% de la población era efectivo el tratamiento en un trastorno y ayudaba a reducir también
la sintomatología del otro.
Esta estadística tan baja ayudó a establecer un tratamiento que contribuya a ambos,
para estos autores era importante también empezar con psicoeducación de una manera
diferente a la que hicieron (Kendal, 2010 y Van der Leeden et al., 2011) para ellos la psico-
educación debía vincular aspectos de ambos trastornos y se les debe enseñar tanto a padres
y a niños cómo manejar la sintomatología asociada a la ansiedad, ellos además vincularon a
su tratamiento el fortalecimiento de la red familiar debido a que encontraron como este es
un factor protector contra la ansiedad y que permitía la adherencia al tratamiento; después
de realizar toda esta fase de educación y motivación por el tratamiento los terapeutas
combinaron técnicas cognitivas como la reestructuración cognitiva y la desensibilización
sistemática e incluyeron un entrenamiento en técnicas de solución de problemas, al
combinar estos tratamientos desde enfoques cognitivos y conductuales se esperaba que
aumentara la efectividad de la intervención para los trastornos comórbidos; al final se hizo
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 31
una última fase en prevención de recaídas, los investigadores concluyeron que su
tratamiento fue eficaz en un 87% aumentando la efectividad de un tratamiento, pero aun así
es una estadística baja en comparación a otros tratamientos (Cummings & Fristad, 2012).
Según este estudio podríamos retomar la importancia de una fase de psicoeducación,
el aporte de las técnicas cognitivas como la reestructuración cognitiva y la desensibilización
sistemática y la prevención en recaídas; se añade el hecho de incluir técnicas en solución de
problemas y el trabajo con padres ya que esto permite la adherencia al tratamiento y no se
deja de lado el aporte de Kendal, 2010 y Van der Leeden et al., 2011 quienes también
proponen la exposición, la meta-cognición, la auto-recompensa y la regulación emocional,
siendo esta última una técnica casi obligada de utilizar por todos los autores, ya que como
describen Company, Oberst y Sanchez (2012), lograr que un niño domine las emociones de
ira, tristeza y miedo y las canalice adecuadamente en pro de manejar la angustia y el
sufrimiento interpersonal, ayudara a que el pronóstico de mejora sea mayor a los
tratamientos que excluyen esta técnica.
Como hemos mencionado derivado del estudio de Cummings y Fristad (2012) el
apoyo en padres y entrenamiento en estilos parentales parece muy importante para el
tratamiento contra la ansiedad, por ende Huang, Cheng, Calzada y Brotman (2012)
ampliaron este variable del tratamiento para ver cómo los padres y sus estilos de crianza
son factores protectores o de riesgo en los niños con ansiedad, en el estudio se evidenció
cómo los padres con estilos parentales negligentes y de autoritarismo pueden llevar a un
niño a desarrollar problemas de ansiedad y trastornos del estado de ánimo, en cambio los
estilos parentales democráticos ayudan a los niños a desarrollar mayores competencias en
solución de problemas, este es un factor protector ante el desarrollo de un trastorno de
ansiedad, por otra parte los padres con un estilo parental permisivo a pesar que crean una
independencia en los niños esta puede generarse de forma conflictiva ya que puede permitir
el desarrollo de un problema del estado de ánimo.
Otra variable estudiada fue la forma en cómo los niños aprenden a socializar a
través de sus padres, los padres que demuestran relaciones emociones negativas y
conflictivas pueden generar en los niños estilos de socialización desfavorables que
desembocan en problemas de ansiedad social, ansiedad por separación y ansiedad
generalizada (Huang et al., 2012). También apuntó a otras variables del contexto escolar y
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 32
de calidad de vida, mostrando cómo este contexto favorece para la aparición de un
problema de ansiedad, el tratamiento efectuado por estas investigadoras fortalecía en
primera medida la alianza padre-hijo y con esto el trabajo en desarrollo en habilidades
emocionales, sociales y en solución de problemas dando mayor relevancia a las
herramientas emocionales, ya que claramente al desarrollar estas habilidades los niños
interactúan de una manera más sana con su entorno, y no solo facilitan su propia
interacción, sino además la interacción entre sus pares (Lacunza, 2009), las habilidades
emocionales ayudaron a expresar de forma más asertiva los sentimientos y emociones,
además de recalcar la importancia del núcleo familiar para solucionar problemas en
contextos difíciles, el resto de terapia se concentró a reducir la sintomatología y los
pensamientos de ansiedad, como la identificación y control de estímulos interoceptivos y el
cambio de pensamientos de descontrol ante las situaciones, las emociones son claves
importantes en este entrenamiento ya que la integración de habilidades emociones permite
al niño tener habilidades sociales básicas para enfrentar situaciones estresantes en la vida
escolar, López (2008).
Con este estudio los investigadores concluyeron que cerca de un 76% de la
población fortalecieron sus factores protectores y redujeron ansiedad, y resaltaron la
importancia que el hecho de vincular a la familia al tratamiento de la ansiedad muestra
mayor efectividad que en casos en que los niños tienen un tratamiento individual. Este
estudio aporta a los hechos por Cummings y Fristad (2012), Olivares, Olivares y Macia
(2014), Kendal, (2010) y Van der Leeden et al., (2011) y el sustento del trabajo con padres,
además del trabajo importante en brindar herramientas emocionales que ayuden a los niños
diagnosticados con algún tipo de ansiedad a expresar de forma más asertiva los
sentimientos y emociones.
Otras propuestas a tratamientos para la ansiedad más amplios como la de Deborah
Plummer propone ejercicios didácticos para trabajar tanto los pensamientos como los
comportamientos, ella dispone una guía de trabajo para la ansiedad; en la primera parte
trabaja una terapia de tercera generación aplicada a niños llamada mindfulness donde inicia
con apoyo al bienestar emocional, siendo esta técnica muy utilizada en el campo de la
psicología infantil para trabajar regulación emocional como lo mencionan Ramos,
Hernández y Blanca (2009), quienes afirman que al manejar este programa con inteligencia
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 33
emocional de Gardner los niños pueden manejar las situaciones de alta frustración de una
forma sana y asertiva. Continuando con la propuesta de Plummer, los niños evalúan sus
sentimientos; es necesario que ellos reconozcan que los hacen sentir ciertas situaciones y
que aprendan a separar sus sentimientos de la situación para así actuar de forma correcta,
después enseña a padres como hacer elogios y críticas de forma más asertiva con el fin de
que los niños no creen malos pensamientos sobre lo que hacen y lo que sienten. luego
propone ejercicios para “entender por qué hacemos las cosas que hacemos” aquí
nuevamente retoma el reconocimiento de emociones pero aplicado a la autorregulación,
tanto de sentimientos positivos como negativos, todas las emociones deben expresarse de
una manera controlada y equilibrada, a continuación se le muestra al niño que es el estrés y
que situaciones normalmente pueden generarle esa sensación, enseguida de ello las
actividades del niño deben ir encaminadas a primero pensar, después sentir y luego actuar
en ese orden los niños deben ver la realidad y actuar en consecuencia a ello y por último da
indicaciones a soluciones imaginativas alentadoras para problemas aquí los niños conocen
maneras imaginativas de solucionar problemas pequeños, como problemas matemáticos o
de cuentos, esto con el fin de que usen su imaginación siempre que necesiten solucionar un
problema (Plummer, 2010).
La segunda parte de la guía enseña habilidades para la vida, el niño continúa en esta
fase en un tratamiento netamente cognitivo donde desarrolla el concepto de autoconciencia,
este con el fin que realice meta-cogniciones sobre los pensamientos disruptivos, los
ejercicios ayudan a identificar pensamientos y sentimientos y permite que el niño genere
acciones según estos, la tercera parte de la guía ayuda al niño a afrontar el cambio; los
cambios son los eventos que mayor ansiedad generan en los niños, por ejemplo el cambio
de la casa al colegios, los cambios en la socialización, los cambios físicos, los cambios
ambientales entre otros; el hecho que un niño denote cambios a su alrededor puede llevarlo
a sentir ansiedad y posterior a esto desarrollar un trastorno es por esto que la guía propone
ejercicios para pensar en el cambio, prepararse al cambio y hacer el cambio, es decir coloca
a un niño en una situación anticipatoria ¿Qué pasaría si …? Eso es pensar qué ocurriría si
cambiara algo en mi vida; por ejemplo ¿Qué pasaría si entrara nuevo a un colegio? De aquí
el niño saca muchas alternativas de pensamientos, sentimientos y acciones sobre ese hecho,
después de esto se prepara para el cambio es decir, por ejemplo; si cree que entrar nuevo al
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 34
colegio le generará miedo por no tener amigos ¿Qué es lo mejor que puede hacer? ¿Cómo
lo va hacer? ¿Qué pasa si esto no funciona? Todas estas preguntas anticipan al niño a un
situación sobre la cual no tengan control, por último el niño se expone a cambiar y pone en
acción todos los planes que había pensado para ver si le son útiles o necesita pensar en
nuevas alternativas (Plummer, 2010).
La cuarta y la quinta parte de la guía nos acerca a la problemática, es decir el estrés
y la ansiedad; aquí la introducción se hace con una fase psicoeducativa sobre qué es el
estrés y cómo podemos cambiar esos sentimientos negativos que nos genera el estrés, aquí
el terapeuta muestra las opciones de afrontamiento al estrés de una forma directiva ya que
muchos niños no logran realizar este tipo de abstracciones, para el manejo de la ansiedad se
retoma el “primero pensar, luego sentir y después hacer” aquí se motiva al niño a realizar
este ejercicio de forma continua en su vida, tanto en situaciones agradables como la
felicitación de parte de un adulto como de situaciones desagradables como el que otro niño
lo agreda; Además se le enseña al niño qué hacer cuando se preocupe y que
comportamientos son adaptativos ante la ansiedad y cuáles no (Plummer, 2010).
La última parte de la guía enseña a los niños con trastornos de ansiedad a trazar sus
propios objetivos de vida y a motivarse cada vez que logré alguno y no se frustre si no lo
logra, en esta etapa se necesita de niños mayores de 12 años que puedan generar objetivos
claros y precisos (Plummer, 2010). Como podemos ver en esta guía elaborar un tratamiento
para los trastornos de ansiedad en niños es complejo, no solo por el nivel de abstracción de
los niños para realizar terapia cognitiva sino por el apoyo que se genere en su hogar a la
adherencia del tratamiento; pero esta guía también nos enseña que debemos dar claridad a
los niños sobre su problemática, después normalizar sus pensamientos y sentimientos y por
último enseñarle “que hacer” y “cómo hacer” la soluciones de sus problemas.
De esta guía de trabajo podríamos concluir la importancia de trabajar herramientas
lúdicas para niños y reconocer la importancia de los tratamientos cognitivos para el manejo
de la ansiedad como se había mencionado con Cummings y Fristad (2012) pero esta terapia
rechaza de cierta manera las terapias de exposición propuestas por Kendal (2010) y Van der
Leeden et al., (2011) es por esto que se rechazara el trabajo con técnicas de exposición en
esta nueva herramienta de intervención para la ansiedad social, también se mencionan el
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 35
manejo de la regulación emocional a partir de mindfulness tal cual como lo propone
Ramos, Hernández y Blanca (2009).
Respecto a lo anterior mencionado sobre el trabajo con herramientas didácticas para
niños se ha evidenciado que esta estrategia es más efectiva que el simple trabajo en sesión
(Caballo, Calderero, Carrillo, Salazar y Irurtia (2011), es por esto que estos 5
investigadores realizaron una propuesta de intervención para la fobia social en niños en un
formato lúdico, ellos afirman que en esta propuesta muestra eficacia en la mayoría de los
casos ya que en 5 de las 6 dimensiones que evaluaron de ansiedad social muestra
efectividad el tratamiento, el programa muestra a través de juegos a los niños como pueden
entrenarse a ambientes sociales mediante un entrenamiento en habilidades sociales, en estos
juegos los niños interactúan en de forma grupal y se retroalimentan herramientas cognitivas
que permiten enfrentar la frustración y se dan nuevas experiencias de vida.
Durante el tratamiento se enseñaron cómo se comporta una persona con habilidad
social, hacer y recibir cumplidos, expresión de sentimientos, inicio y mantenimiento de una
conversación, hacer y rechazo de peticiones, afrontar críticas y solucionar problemas
interpersonales; recordando que este último tiene mucha importancia dentro del tratamiento
de la ansiedad social como lo propone Pérez y Cabezas (2007), ya que en la medida en
que una persona logra establecer diferentes clase de soluciones para una dificultad y es
capaz de decidir por un plan de acción logra contrarrestar los sentimientos de minusvalía y
preocupación propios de la ansiedad; además todos los juegos y actividades recreaban
situaciones de interacción social que ayuda al niño a enfrentar situaciones en distintos
contextos como el colegio, la familia y la calle (Caballo et al., 2011).
El tratamiento fue efectivo con cerca del 95% de los estudiantes contactados para la
intervención, el desarrollo de habilidades fue suficiente como para que los niños empezaran
a enfrentar situaciones sociales con gran dominio y sin miedo, por ende este tratamiento se
ha hecho muy genérico en su país de origen España, pero aun así los investigadores
sugieren que este tratamiento requiere de más tiempo para la aplicación del programa ya
que con 10 sesiones podrían quedar temas sin trabajar, además sugieren la modificación de
algunos módulos de intervención (Caballo et al., 2011).
Este tratamiento aporta a los anteriores mencionados primero un peso a las
herramientas lúdicas como ya lo había mencionado Plummer (2010) el desarrollo de
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 36
habilidades sociales y expresión de sentimientos como lo había mencionado (Huang et al.,
2012 y Kendal, 2010). Otros programas contra la ansiedad buscan reconocer sentimientos
relacionados con ansiedad y a través de juegos que incentivan controlar los pensamientos
para disminuir los síntomas, por ejemplo el programa “Journey of the Brave” busca en
primera medida que los niños reconozcan los sentimientos y emociones relacionadas con la
ansiedad, después los niños aprenden habilidades cognitivas y comportamentales para
reducir los signos de ansiedad (Urao, Yoshinaga, Asano, Ishikawa, Tano, Sato, & Shimizu,
2016).
Estas habilidades son básicamente las de reestructuración cognitiva y la técnica de
exposición donde el niño “enfrenta” sus pensamientos y después se arriesga a hacer la tarea
que lo pone ansioso. Además este programa muestra una adaptación para la población
infantil con ansiedad social de una manera lúdica como lo hace (Caballo et al., 2011), ya
que muestra a través de cuentos como dos niños atraviesan diferentes situaciones; uno de
los niños no es ansioso y el otro lo es, a través de esta dinámica se busca incentivar al niño
a reconocer como los problemas de ansiedad y los pensamientos negativos ante la
socialización bloquean su adecuada adaptación al medio (Urao et al., 2016).
Con este tratamiento podemos evidenciar como en el tratamiento de la ansiedad es
importante el reconocimiento de emociones y sentimientos como ya lo había mencionado
Huang et al., (2012), además el reconocimiento de emociones permite trabajar en
regulación emocional, ya que la evidencia a mostrado como los niños con ansiedad social
expresan los síntomas con desregulación emocional López (2008), los esto le permitirá al
niño enfrentarse a las situaciones fóbicas de manera más asertiva, además la
reestructuración cognitiva sigue siendo una técnica adecuada para el tratamiento de la
ansiedad como lo mencionaba Kendal (2010) y Van der Leeden et al., (2011), por último
resalta como el uso de los juegos incentivan a los niños a reducir el malestar provocado por
la patología.
Los aportes hechos por los anteriores autores son importantes para establecer un
tratamiento a los trastornos de ansiedad, pero sus aportes están dirigidos a distintos tipos de
ansiedad, que a pesar de poder influir en la ansiedad social no son realizados únicamente
con una población que padezca este trastorno, es por esto que se dedica la última parte de
esta revisión a los tratamientos únicamente propuestos para la ansiedad social empezando
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 37
con el hecho por Wagner, Pereira y Oliveira (2014) el cual consta de una atención en
consultorio de forma rápida ya que en tan solo 10 sesiones, resalta el trabajo de forma
grupal más que en el individual, entrenando a la persona en el autoconocimiento y en
habilidades sociales (como habilidades en conversaciones), enseña además habilidades en
reconocimiento de emociones, de una manera similar a como la trabaja Company, Oberst y
Sánchez (2009), a partir de las relaciones interpersonales asertivas que se construyen con el
diálogo oportuno, abierto y equitativo, y tiene un módulo en solución de problemas basado
en el entrenamiento de Pérez y Cabezas (2007), el cual era dirigido a personas con
discapacidad intelectual y que buscaba que estos encontraran alternativas razonables a los
problemas básicos de la vida cotidiana, el programa en general ayuda al niño a convivir con
el estrés y exponían a través de debates a escenarios los sentimiento y pensamientos
asociados a la interacción social.
Este tratamiento mostró gran efectividad en la dimensión de ansiedad social debido
a que los participantes estuvieron en constante interacción interpersonal y porque
adquirieron habilidades sociales, además este trabajo también propone que la atención
grupal es más eficaz que la individual en el tratamiento de la fobia social, debido a que los
sujetos se ven expuestos constantemente a interactuar con otros con tal de realizar el
ejercicio terapéutico, esto podría ayudarnos a la conclusión que generar un programa de
intervención grupal a pesar que puede ser incómodo para algunos participantes puede
generar grandes avances en el tratamiento de la fobia social (León, León, Herrera, De la
Corte, 2013).
Ahora bien como hemos visto en el anterior tratamiento es importante en la fobia
social un entrenamiento en habilidades social, debido a que en este trastorno se han perdido
o no se han desarrollado con suficiente efectividad las habilidades, tal como lo explican
Olivares, Olivares y Macia (2014), pero este entrenamiento en niños se debe hacer de una
manera diferente a la del adulto, debido a que con los niños se requieren mayores
estrategias pedagógicas para que ellos aprendan un hábito, según lo anterior dicho un
entrenamiento en habilidades sociales en niños que resultó muy efectivo fue el propuesto
por González, Ampudia y Guevara (2012) donde se entrenó a 36 niños institucionalizados
mediante un manual que presentaba historias y ejercicios que estimulaban el
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 38
reconocimiento de sentimientos y emociones que facilitan la interacción social, además de
involucrar la solución de problemas y la reestructuración cognitiva dentro del tratamiento.
La intervención de las terapeutas tuvo una duración de 14 sesiones donde se trabajó
en grupo habilidades sociales básicas y avanzadas (como sonreír, contacto visual, lenguaje
gestual e inicio, mantenimiento y término de conversaciones), reconocimiento emocional
(reconocer de emociones positivas y de emociones negativas), reestructuración cognitiva (a
través de situación, pensamiento emoción, sistema ABC, estilos afróntativos y cambios del
pensamiento), solución de problemas (a través del manejo de estrés, modelamiento,
moldeamiento, ensayo conductual y reforzamientos) (González, Ampudia & Guevara,
2012)
Los resultados evidenciaron que todos los participantes desarrollaron habilidades
sociales básicas y avanzadas que les permitirían afrontar situación de ansiedad social, en
cuanto al resto de habilidades como la de solución de problemas y la forma de afrontar los
problemas solo el 90% de los participantes tuvieron una adecuada adherencia al tratamiento
(González, Ampudia & Guevara. 2012) es por esto que un programa de intervención para la
fobia social en niños debe incluir el desarrollo de habilidades sociales ya que esto les
permitirá una mayor cohesión a su entorno.
Finalmente se podría decir que según la revisión que se ha hecho a los tratamientos
cognitivos conductuales de los últimos 10 años una adecuada herramienta de intervención
para la fobia social debería primero presentarse de una manera lúdica y didáctica (Caballo
et al., 2011 y Plummer, 2010), segundo tener una fase psicoeducativa que muestre al niño
porque pudo adquirir esa problemática y cómo enfrentar ese miedo de manera más asertiva
(Cummings & Fristad, 2012 y Van der Leeden et al., 2011), de las herramientas que debería
brindar el tratamiento sería importante trabajar con una estrategia cognitiva como
reestructuración cognoscitiva y otras en solución de problemas (Kendal 2010 y Van der
Leeden et al., 2011) además dar prioridad a la importancia que juega los sentimientos y
emociones relacionados con la ansiedad y enseñar el debido manejo de estos (Huang et al.,
2012 y Urao et al., 2016) y la última herramienta debería estar relacionada con habilidades
sociales ya que los niños con fobia social presentan grandes déficit en este tipo de destrezas
(González, Ampudia & Guevara, 2012, León et al., 2013 y Wagner, Pereira & Oliveira,
2014) también podría darse prioridad al trabajo grupal con otros niños con problemáticas
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 39
relacionadas que con el propio trabajo con padres (Plummer, 2010 y Wagner, Pereira &
Oliveira, 2014).
Es por esto que el programa Superándote será una herramienta de apoyo a
profesionales de psicologia y la educación que facilitará el proceso de intervención bajo un
programa didáctico llamado superándote (Programa de Intervención para Niños con
Ansiedad Social) mediante la utilización de tres técnicas cognitivo conductuales: regulación
emocional, entrenamiento en habilidades sociales y entrenamiento en solución de
problemas, para niños menores de 10 años expresado en tres cuentos animados llamados “
el pequeño valiente” quienes presentan trastorno de ansiedad social. Éste tipo de formatos
presenta una mayor adherencia al tratamiento y efectividad. En cuanto al tema de psico-
educación y la estrategia cognitiva es importante que el terapeuta la tenga en cuenta antes
de empezar el manejo de ésta herramienta con el fin de combinar todos los tratamientos con
principios cognitivos - conductuales mencionados anteriormente.
Importancia social
La importancia de este programa es dar una posible alternativa de intervención a
niños con ansiedad social de Bogotá, además, será una guía de apoyo a los profesionales en
psicología a partir del enfoque cognitivo conductual mediante el uso de técnicas como:
regulación emocional, entrenamiento en habilidades sociales y entrenamiento en solución
de problemas. De este modo se aspira a sentar precedente para la posterior creación de
diferentes programas que permitan intervenir en la salud mental de los niños no solo en la
ciudad de Bogotá, sino lograr extenderlo a nivel nacional. Por otro lado, el programa no ha
sido instaurado en la ciudad, razón por la cual, será un programa de fácil acceso, que
permitirá tanto en el terapeuta como en el niño, una comunicación bidireccional, es decir, el
trabajo será de ambas partes. Por otro lado, la pronta intervención de este trastorno en la
infancia permitirá la unión entre la familia mediante un proceso psicoeducativo considerada
ésta como el núcleo de la sociedad y posible factor de riesgo o protección ante las
diferentes problemáticas presentes en la infancia que se mantienen hasta la adultez.
Importancia disciplinar
Haciendo énfasis a la importancia disciplinar que tiene nuestro trabajo de grado bajo
la modalidad de curso de especial interés, es significativo mencionar que no existe en el
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 40
mercado un programa de intervención para niños con ansiedad social a partir de técnicas
cognitivos conductuales como solución de problemas, habilidades sociales y regulación
emocional.
En esta misma línea, el constructo de ansiedad social en niños no se ha estudiado a
profundidad, las investigaciones en torno a este tema son muy pocas y el programa que se
ha propuesto tampoco se ha encontrado, pues muchas de estas van dirigidas a la población
juvenil o adulta. Es por esto que la población a la cual va dirigida nuestro programa es de
gran relevancia para la psicología, ya que primero se cuentan con muy pocos datos que
permiten establecer con severidad el tipo de herramienta que permita desarrollar una
adecuada intervención; no existe una como ésta que le permitirá al psicólogo o terapeuta,
trabajar sobre los mantenedores de este trastorno puesto que acarrea problemas en el
funcionamiento de todas las áreas de ajuste. Además, la pronta intervención mediante la
herramienta que se propone es bajo una adecuada psicoeducación a los cuidadores del niño
permitiendo en él un adecuado nivel de funcionamiento logrando así un buen desempeño en
su paso por las diferentes etapas de la vida. De igual manera se construye la base para
posteriores investigaciones en esta área.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 41
Objetivos
Objetivo General
Diseñar una herramienta de apoyo a profesionales de psicologia y la educación que
facilite el proceso de intervención bajo un programa didáctico llamado superándote
(Programa de Intervención para Niños con Ansiedad Social) mediante la utilización de tres
técnicas cognitivo conductuales: regulación emocional, entrenamiento en habilidades
sociales y entrenamiento en solución de problemas, para niños menores de 10 años
expresado en tres cuentos animados llamados “ el pequeño valiente” quienes presentan
trastorno de ansiedad social.
Objetivos Específicos
1. Facilitar una herramienta de apoyo para que el profesional en psicología y la
educación logre mediante el programa didáctico “el pequeño valiente” hacer uso de
técnicas cognitivo conductuales que logren intervenir sobre la ansiedad social en
niños menores a 10 años.
2. Explicar el concepto claro de ansiedad y ansiedad social.
3. Comprender la técnica cognitivo conductual regulación emocional bajo la
ilustración de un cuento didáctico.
4. Conceptuar la técnica cognitivo conductual entrenamiento en habilidades sociales
bajo la ilustración de un cuento didáctico.
5. aclarar la técnica cognitivo conductual entrenamiento en solución de problemas bajo
la ilustración de un cuento didáctico.
6. Aplicar las técnicas cognitivo conductuales regulación emocional, entrenamiento en
habilidades sociales y entrenamiento en solución de problemas para el
mejoramiento en el trastorno de ansiedad social en niños menores a 10 años.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 42
Método
Estudio de Mercado
Objetivo General
Identificar los consumidores potenciales del producto superándote, con el fin de
posicionarlo en el mercado de manera competitiva.
Objetivos específicos
1. Identificar si las características y especificaciones de SUPERANDOTE
corresponden a las necesidades del profesional encargado de aplicar el proceso de
intervención.
2. Identificar el tipo de clientes, que tendrán acceso al producto y aplicación en
la población especifica.
3. Establecer el precio apropiado del producto y competir en el mercado.
4. Establecer e identificar los lugares en los que puede ser distribuido
SUPERANDOTE y la funcionalidad del mismo.
Descripción del Producto
El producto que se creará será una herramienta de apoyo a profesionales de
psicologia y la educación que facilite el proceso de intervención bajo un programa
didáctico llamado superándote (Programa de Intervención para Niños con Ansiedad Social)
mediante la utilización de tres técnicas cognitivo conductuales: regulación emocional,
entrenamiento en habilidades sociales y entrenamiento en solución de problemas, para
niños menores de 10 años expresado en cuentos animados llamados “ el pequeño valiente”
quienes presentan trastorno de ansiedad social.
Este programa terapéutico se proporcionará a través de una serie de tres cuentos
animados llamados “el pequeño valiente “; el objetivo es que cada cuento se trabaje en dos
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 43
sesiones con el niño, y esté a su vez aprenda los tres tipos de entrenamiento para que
resuelva su estado ansioso junto con un taller al finalizar.
Logo-símbolo y slogan del producto
Figura 1. Logo-símbolo y slogan del producto SUPERANDOTE.
Nuestro logo es un superhéroe que se caracteriza por contar con las capacidades
necesarias para superar la ansiedad, así: 1. Supervisión: Le permite identificar las diferentes
situaciones conflictivas y adoptar actitudes propicias a la resolución del problema. 2.
Máquina de risas: Genera en nuestro súper héroe una serie de reacciones fisiológicas,
cognitivas y emocionales que le facilitan el aprendizaje, la sociabilidad, la liberación de
estrés y la expresión de sus emociones. 3. La Súper fuerza, le permite afrontar las diferentes
situaciones problemáticas. 4. El limitador del NO, blinda a nuestro súper héroe de aquellos
pensamientos negativos ante los diferentes eventos que le generan miedo o pánico.
Su traje se identifica por ser de color verde que significa positivismo, relacionado
con la tranquilidad, la naturaleza y la esperanza. Así mismo, el color rojo está relacionado
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 44
con la energía y vitalidad que caracteriza un superhéroe. La frase “Súper-ando la
ansiedad” hace referencia a la misión que nuestro superhéroe tiene frente a todos los niños
que sufren de ansiedad social, ayudándoles a disminuir y manejar aquellas respuestas
fisiológicas, cognitivas y motoras frente a diferentes situaciones que le generan miedo y
preocupación.
Producto Básico
Superándote es una herramienta de apoyo a profesionales de psicologia y la educación
que facilite el proceso de intervención bajo un programa didáctico llamado superándote
(Programa de Intervención para Niños con Ansiedad Social) mediante la utilización de tres
técnicas cognitivo conductuales: regulación emocional, entrenamiento en habilidades
sociales y entrenamiento en solución de problemas, para niños menores de 10 años
expresado en tres cuentos animados llamados “ el pequeño valiente” quienes presentan
trastorno de ansiedad social logrando:
1. Confiabilidad de parte de quienes ofrecen el producto, ya que la herramienta de
apoyo ha sido diseñada por estudiantes de último semestre bajo supervisión de
profesionales.
2. Entrenamiento en técnicas cognitivo conductuales como regulación emocional.
3. Énfasis en técnicas cognitivo conductuales como entrenamiento en habilidades
sociales.
4. Refuerzo en técnicas cognitivo conductuales como entrenamiento en solución de
problemas.
5. Disminución de los estados ansiosos del niño después de todo el proceso de
intervención.
6. Fortalecimiento en todas las áreas de ajuste del niño al final proceso de
intervención.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 45
Producto Real
Superándote, es un programa de intervención para profesionales en el campo de la
psicología y la educación que permitirá intervenir la fobia social o trastorno de ansiedad
social en niños menores de 12 años, este programa de intervención consta de tres fases cuyo
sustento teórico está basado en técnicas cognitivos conductuales: el entrenamiento en
regulación emocional, el entrenamiento en habilidades sociales y entrenamiento en solución
de problemas. Este programa terapéutico se proporcionará a través de una serie de tres
cuentos animados llamados “el pequeño valiente “; el objetivo es que cada cuento se trabaje
en dos sesiones con el niño, y este aprenda los tres tipos de entrenamiento para que resuelva
su estado ansioso.
Éste programa de intervención consta de dos fases: una de intervención dividida en
tres sub-fases y fase de seguimiento relacionadas a continuación:
Fase 1: Intervención
Fase 1.1: Entrenamiento en regulación emocional
Esta fase se realiza la lectura del cuento cuyo personaje principal es “Valentín”, que
busca generar en los niños las herramientas necesarias que le ayuden a controlar sus
emociones como: rabia, enfado, tristeza, preocupaciones entre otras como lo enseña Bunge,
Gomar y Mandil (2009) y también Lantiere y Goleman (2008). Que le permitan al niño
desenvolverse de manera positiva en los diferentes contextos sociales.
Fase 1.2: Entrenamiento en habilidades sociales
Esta fase se realiza la lectura del cuento cuyo personaje principal es “Valentín”, y éste
a lo largo de la historia desarrolla este tipo de habilidades, conductas que permiten la
interacción y relación con los demás según el entrenamiento de Bunge, Gomar y Mandil
(2009). Son aprendidas a lo largo del crecimiento y desarrollo; la cultura y las variables
sociodemográficas son imprescindibles para evaluarlas y entrenarlas. Por otro lado, se
trabajaron los dos tipos de habilidades, las básicas como lo propone Labrador (2008) y las
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 46
complejas como lo propone Caballo (2008), con el objetivo de que el niño con fobia social
las adquiera y entrene en diferentes contextos.
Fase 1.3: Entrenamiento en solución de problemas
Esta fase se realiza la lectura del cuento cuyo personaje principal es “Valentín”, y éste
a lo largo de la historia desarrolla este tipo de habilidades, pensamientos en los cuales
planee alternativas para la solución como lo propone Bunge, Gomar y Mandil (2009),
reflexión ante situaciones estresantes según Labrador (2008) y predecir consecuencias de
comportamientos como lo propone en su libro Comeche y Vallejo (2005), todo esto lleve al
niño a generar conductas más adaptativas a la hora de desenvolverse en un contexto social.
Fase 2: Seguimiento
Esta fase se realiza después del todo el proceso de intervención, cuyo objetivo será
observar si los niveles de ansiedad en el niño han disminuido considerablemente después
del entrenamiento en todas las técnicas cognitivo conductuales.
Producto Ampliado
Como parte del producto ampliado, se diseñará una página web
www.superandote.com, ya que según la encuesta de mercadeo (ver figura 9) las personas
desean que este programa de intervención tenga una vinculación con los medios
electrónicos, la página web básicamente proporcionará unos instructivos que orienten al
terapeuta a cómo usar el programa de intervención de una manera más eficaz, además en la
página web se subirán videos de capacitación sobre el programa de intervención, algo que
pocos productos similares en el mercado proporcionan.
Otro producto ampliado consiste en la originalidad en los cuentos, ya que estos
estarán diseñados en imágenes de alto relieve o como se conocen “Pop-up Book”, esta idea
proporcionará una diferencia con otros productos y podrá hacer más interactivo el trabajo
con los niños.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 47
Clientes
Los clientes a los que va dirigido el programa de intervención para profesionales en el
campo de la psicología y la educación que permitirá intervenir la fobia social o trastorno de
ansiedad social en niños menores de 12 años, a partir de un programa terapéutico llamado
Superándote son instituciones educativas en Bogotá, bajo la dirección de psicólogos
profesores y orientadores.
Mercado Potencial
El mercado potencial al cual va dirigido el programa de intervención para la fobia
social o trastorno de ansiedad social en niños menores de 12 años, está compuesto por las
diferentes instituciones educativas públicas y privadas en Colombia, correspondientes a los
colegios registrados a la fecha (12.845 públicos y 9.537 privados) según el ministerio de
educación nacional (2015), este mercado se piensa alcanzar mediante la distribución masiva
de la editorial Panamericana, que tiene sedes en 26 ciudades de todo el país.
Figura 2. Descripción del mercado potencial, porcentaje de colegios en
Colombia.
43%
57%
Colegios Privados Colegios Publicos
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 48
Mercado Objetivo
Al mismo tiempo, el mercado objetivo está compuesto por instituciones educativas
públicas y privadas en el Departamento de Cundinamarca, las cuales están registradas a la
fecha según el ministerio de educación nacional (2015).
Figura 3. Descripción del mercado objetivo, porcentaje de colegios en
Cundinamarca.
Mercado Meta
El mercado meta estará compuesto por instituciones educativas públicas y privadas
que estarán ubicadas en la ciudad de Bogotá, según la Secretaria de Educación Distrital
(2015).
38%
62%
Colegios Privados Colegios Publicos
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 49
Figura 4. Descripción del mercado meta, porcentaje colegios en
Bogotá.
Competencia
Competencia Directa y Sucedánea
La competencia directa de Superándote, son los psicólogos y autores los cuales crean
herramientas didácticas para trabajar esta problemática, según la investigación 45
psicólogos crean material didáctico a través de libros para la fobia social en el país (EAN,
2014), ver apéndice B; y la competencia sucedánea son las editoriales de libros que
publican este tipo de libros de piscología, más específicamente en el campo de la ansiedad
en niños, de las cuales se han podido delimitar unas 34 en la ciudad de Bogotá, ver
apéndice C.
77%
23%
Colegios Privados Colegios Publicos
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 50
Figura 5. Descripción de la competencia directa y sucedánea.
Productos de la competencia
Los psicólogos que crean material para el trabajo de fobia social son la competencia
directa de SUPERANDOTE, ya que ofrecen productos como:
1. Libros para niños el trabajo con niños con fobia social de 6 a 15 años
2. Manual guía para terapeutas
3. Preguntas orientadoras sobre el proceso de análisis del libro
4. Animaciones y diseño atractivo para niños
5. Respaldo de editoriales de libros los cuales son reconocidos en el campo de la
psicología.
Análisis DOFA
Tabla 1.
Análisis DOFA
Análisis DOFA
Debilidades Oportunidades
Por ser un producto nuevo en el
mercado, se cuenta con poca evidencia
en cuanto a su efectividad en el
tratamiento para la ansiedad social en
niños.
Podrían existir instituciones que tengan
la intención de adquirir el producto
debido a que se ha incrementado las
cifras de reportes de ansiedad social en
niños, y para suplir esta demanda
57%
43%
Competencia Directa Competencia Sucedánea
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 51
El programa está diseñado para
intervenir específicamente
problemáticas con la ansiedad social en
niños.
necesiten adquirir nuevos productos.
Fortalezas Amenazas
El acceso al programa se podrá realizar
de manera física y virtual, por medio de
la página web.
El programa está diseñado para toda la
población de niños, con problemas de
ansiedad social.
El programa de intervención para niños
con ansiedad social, se caracteriza por su
metodología dinámica y fácil aplicación
en el proceso de intervención.
Contar con un producto efectivo para el
manejo de la ansiedad social en niños.
Contribuir con la efectividad de los
programas de intervención para la
ansiedad social, desarrollados en las
diferentes instituciones.
La poca disponibilidad de recursos
económicos de las diferentes
instituciones que no le permitan la
adquisición del producto.
La competencia de otros productos
dirigidos a la intervención en
ansiedad social en niños.
Estrategias
Para enfrentar las amenazas evidenciadas en el análisis anterior, se piensa generar
promociones donde por cierta cantidad de libros comprados, se adicionará capacitaciones
online, además, se podría reducir costos para las instituciones cambiando ciertas ventajas
del producto ampliado, en cuanto a la segunda amenaza se cuenta con la estrategia que
SUPERÁNDOTE es una herramienta mucho más didáctica y llamativa para los niños, con
muchas fortalezas como las mostradas en el análisis DOFA.
Canales De Distribución
Superándote es un producto que los clientes encontraran en las diferentes librerías
Panamericana de Bogotá, al contactarnos con esta librería nos permitirá un amplio
despliegue comercial por toda la ciudad, además para cumplir con el mercado potencial nos
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 52
contactaremos librería nacional para que distribuya los libros por todo el país; aparte se
montara una pauta publicitaria que se distribuirá a través de distintos medios electrónicos,
como en la página web www.superandote.com, a través de Facebook y otras aplicaciones y
correos electrónicos, en donde se dará a conocer el portafolio de productos de nuestra
compañía. De igual manera se realizará visitas personalizadas a las instituciones educativas
públicas y privadas con el personal especializado en psicología clínica y de la salud, y se
asistirá a eventos relacionados en psicología clínica infantil conformados por las diferentes
entidades de salud, creando un stand donde se pueda entregar publicidad y asesoría sobre
nuestro programa de intervención.
Resultados del Estudio de Mercado
La encuesta de mercadeo fue aplicada a 18 participantes del sector clínico y
educativo, quienes han tenido proximidad a niños con fobia social, y de alguna manera han
tenido que ejecutar decisiones para atenderlos, en la tabla 3 se evidencian algunos datos
demográficos de los encuestados, siendo de relevancia que la mayoría de participantes
fueron psicólogos clínicos (el 66.66% de encuestados).
Tabla 2
Datos demográficos de las personas que respondieron la
encuesta de mercadeo.
N %
20-29 6 33.33
Edades 30-39 9 50.0
40-49 3 16.66
Sexo Hombre 8 44.44
Mujer 10 55.56
Psicólogo 12 66.66
Ocupación Orientador 3 16.66
Coordinador 2 11.11
Rector 1 5.55
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 53
Los tres primeros ítems de la encuesta están dirigidos al conocimiento que tienen los
participantes sobre algún producto para el tratamiento de fobia social, los elementos que
gustaron del producto y que aspectos desaprueban del mismo; según la encuesta el 83% de
las personas no tenían conocimiento de un productos para el tratamiento de la ansiedad
social en niños (ver figura 6), y del 17% de participantes que contestaron que si tenían
conocimiento de un producto dirigido para esta problemática, el 100% resaltaron que era
una guía muy fácil (ver figura 7) pero también el 100% está de acuerdo que no les gusto
que el material solo estuviera dirigido para niños mayores de 7 años (ver figura 8).
Figura 6. Descripción de las respuestas dadas al primer ítem.
17%
83%
Si No
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 54
Figura 7. Descripción de las respuestas dadas al segundo ítem.
Figura 8. Descripción de las respuestas dadas al tercer ítem.
Del ítem 4 a 6 se establecieron preguntas dirigidas a plantear estrategias y temas que
llevara el material de apoyo para el tratamiento de la fobia social, a más de la mitad de los
encuestados (56%) les interesa que el tema central del producto sea directamente la
intervención de esta problemática, dejando relevada las consecuencias (22%) y las causas
de este tipo de ansiedad (ver figura 9). También los encuestados afirmaron que les
gustarían que el material permitiera resolver problemas de adaptación al contexto y
100%
Es una guía facil
100%
Era únicamente para niños de 7 años
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 55
seguridad en sí mismo (33% ambos) o también que este material permitiera de alguna
manera mejorar los modelos parentales (22%) (Ver figura 10); en cuento a las estrategias de
intervención, los encuestados les interesaría que se usaran entrenamientos en habilidades
sociales (44%) o que el material vaya dirigido a entrenar en solución de problemas (28%) o
técnicas en respiración y/o regulación emocional (11%) (Ver figura 11).
Figura 9. Descripción de las respuestas dadas al cuarto ítem.
Figura 10. Descripción de las respuestas dadas al quinto ítem.
11%
22%
11%
56%
causas consecuencias evaluación intervención
6%
22%
6%
33%
33%
problemas del estado de animomejorar modelos parentalesasertividadadaptación al contextoseguridad en si mismo
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 56
Figura 11. Descripción de las respuestas dadas al sexto ítem.
Los ítems 7 y 8 permiten observar lo que las personas piensan en cuento a los
tiempos de intervención de la fobia social en niños, los encuestados están de acuerdo que
las sesiones de intervención sean entre 6 a 9 (44%) o de 10 a 13 (50%) (Ver figura 12),
además el 33% de los encuestados indicaron que las sesiones deberían durar al menos 1
hora y el 28% opinaron que el tiempo pertinente seria 45 minutos (ver figura 13).
Figura 12. Descripción de las respuestas dadas al séptimo ítem.
28%
44%
11%
11% 6%
solución de problemas habilidades sociales
técnicas de respiración regulación emocional
exposición
6%
44% 50%
3 a 5 sesiones 6 a 9 sesiones 10 a 13 sesiones
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 57
Figura 13. Descripción de las respuestas dadas al octavo ítem.
Entre otros temas relevantes aportados por los encuestados, la mayoría están
interesados en que el material de apoyo se muestre a través de libros interactivos o de
páginas web (ver figura 14), ya que cada uno de estos obtuvo un 39% de favoritismo por
parte de los participantes; además los encuestados opinan que el material lo manejen
únicamente psicólogos, ya que el 72% de las personas dieron un concepto favorable a estos
profesionales (ver figura 15), los encuestados también aportaron su concepto valorativo de
cuanto debería costar el producto, el 56% están de acuerdo que valga entre 15 a 20 millones
y el 33% opina que valga entre 21 a 30 millones (ver figura 16). Otro dato relevante
aportado por los encuestados, mostro que ningún profesional jamás ha recibido algún tipo
de capacitación o taller que lo oriente a utilizar algún material de forma eficaz en el
tratamiento de fobia social (ver figura 17) este dato será importante y se hablará más
adelante en la discusión del estudio de mercadeo.
17%
28%
33%
17%
5%
30 minutos 45 minutos 1 hora 90 minutos 2 horas
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 58
Figura 14. Descripción de las respuestas dadas al noveno ítem.
Figura 15. Descripción de las respuestas dadas al décimo ítem.
11%
39% 39%
11%
cartillas libros interactivos paginas web sofware
72%
28%
0% 0%
psicólogos orientadores profesores administrativos
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 59
Figura 16. Descripción de las respuestas dadas al onceavo ítem.
Figura 17. Descripción de las respuestas dadas al doceavo ítem.
Los ítems 13 a 15 están dirigidos a conocer aspectos que llamarían la atención de
los encuestados para comprar un producto que atienda a niños con fobia social, además de
conocer si existe alguna área de ajuste en especial que quieran que se trabaje en el producto
final. Según la encuesta el 42% están interesados en que se trabaje en el área social y el
32% en el área emocional (ver figura 18); en cuanto a los aspectos de interés se evidenció
que la mayoría de personas están interesadas en que sea un producto con validez y
56% 33%
5% 6%
entre 15 a 20 millones entre 21 a 30 millones
entre 31 a 40 millones entre 41 a 50 millones
0%
100%
Si No
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 60
confiabilidad (39%) y que además tenga simplicidad al usarlo (28%) (Ver figura 19);
además al momento de adquirir un producto para el tratamiento de esta problemática, lo
primero que tendrían en cuenta es su calidad y efectividad (72%) siendo esta opción la de
mayor prevalencia sobrepasando por mucho a las otras opciones (ver figura 20).
Figura 18. Descripción de las respuestas dadas al treceavo ítem.
Figura 19. Descripción de las respuestas dadas al catorceavo ítem.
21%
5%
42%
32%
familiar académica social emocional
28%
39%
22%
11%
simplicidad validez y confiabilidad
atractivo para los niños diseño, color y originalidad
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 61
Figura 20. Descripción de las respuestas dadas al quinceavo ítem.
El último ítem de la encuesta permitiría de manera libre obtener comentarios y
sugerencias por parte de los encuestados, y aunque se obtuvieron muchas sugerencias se
agruparon en 7 categorías; que atiendan niños desde los 4 años y que sirviera para mejorar
el rendimiento académico obtuvo 5% de preferencia de los encuestados, que se indague
exhaustivamente protocolos de intervención y que se tengan en cuenta las características
sociodemográficas de la población obtuvo el 6%, que se implemente en colegios como una
herramienta de prevención y que tenga una sección para padres tuvo un 17% de
favoritismo, pero la categoría con más puntuación fue que se muestre en forma de juego
(22%), aunque también el 22% de encuestados no contestaron este ítem (ver figura 21).
5%
72%
6%
6%
11%
precio calidad y efectividad
marca presentación del producto
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 62
Figura 21. Descripción de las respuestas dadas al dieciseisavo ítem.
Discusión del Estudio de Mercadeo
Según los datos recogidos en la encuesta de mercadeo se pudo evidenciar que pocos
profesionales tienen conocimientos sobre productos dirigidos a la intervención de niños con
fobia social; de cierta manera este hecho favorece la creación de este material, debido a que
en muchos sectores, y para muchos profesionales será algo innovador que llegara a sus
centros de atención, además indica que el producto potencialmente puede ser una
herramienta que facilite este tipo de intervención, las pocas personas que contestaron que
tenían conocimientos sobre productos de intervención para la fobia social concordaron que
les gustaba el hecho que eran guías simples y de fácil uso, lo que orienta a este trabajo a
que sea también una guía de baja dificultad de manejo para que todos los profesionales
puedan usarlo sin complicaciones, también los encuestados opinaron que lo que menos
gusto o agrado fue que iba dirigido a niños mayores de siete años dejando de lado otras
edades que posiblemente puedan ser vulnerables ante la aparición de esta problemática y
que de alguna manera el material que se cree podría vincular esta población para disminuir
esta inconformidad.
De las temáticas a las cuales les parecerían que deberían ir dentro de un producto
dirigido para atender la fobia social en niños, los encuestados opinaron que la intervención
es lo más importante, sobre la misma evaluación, consecuencias y causas de la patología,
esto debido a que los participantes no conocen herramientas de intervención que faciliten su
22%
5%
22% 17%
5%
17%
6% 6%
sin comentarioque sirva a niños desde los 4 añosque se muestre en forma de juegoque tenga una sección para padresque ayude al rendimiento académicoque se implemente en colegio
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 63
trabajo con esta problemática; por otro lado, se muestra como los encuestados están
interesados en que el programa dirigido a niños con fobia social maneje problemas de
adaptación al contexto y seguridad de sí mismo, ya que estas son dos problemáticas que
aquejan sus consultas recurrentemente; se identificó además que a los participantes les
interesaría que el producto incluyera un apartado para entrenar en habilidades sociales y
técnicas en solución de problemas, así que el producto tendrá un apartado para cada una de
estas estrategias de intervención.
La encuesta de mercadeo también indago sobre la opinión de los profesionales
respecto al tiempo que debería durar una intervención con niños con fobia social, esto con
el fin de establecer la extensión y duración del material que se creará, en términos del
tratamiento completo y tiempo en cada sesión; según los datos dados, creen pertinente que
el tratamiento dure de 10 a 13 sesiones, donde cada sesión tenga una duración entre 45
minutos a una hora; es por esto que el material contará con 12 temas, uno para cada sesión,
y se ajustara de tal manera, para que el terapeuta alcance a hacer todo su trabajo en el
tiempo antes establecido.
Los profesionales también orientaron la posible presentación del material de apoyo,
ya que la encuesta revelo que la mayoría se muestran interesado por libros interactivos o
una página web, la decisión final es que el material se entregara en físico a través de libros
interactivos, pero se creará una página web que permita orientar un uso más adecuado del
material y se brinde una capacitación online sobre el producto como producto ampliado.
Además, la encuesta revelo que son los psicólogos los profesionales que deberían
tener interacción con este material, excluyendo a otros profesionales como docentes,
orientadores y demás que interactúan con el niño, esto se debe a que las personas
encuestadas conocen que son los psicólogos los que mayor entrenamiento en esta
problemática tienen. La encuesta también preguntó sobre el presupuesto que estarían
dispuestos a invertir en este producto, más de la mitad de encuestados, opinan que el precio
se debería ajustar entre 15 a 20 millones de pesos, por ende el precio final acordado para
este material de intervención será de $ 18.934.000
Otro dato interesante de la encuesta, es que ningún profesional reconoció que se le
hubiera dado algún tipo de capacitación para el manejo de un material de intervención de
fobia social, es por esto que el producto creado tendrá como producto ampliado un módulo
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 64
de capacitación para la persona que lo adquiera, esta brindada a través de la página web que
se espera crear como se mencionó anteriormente, la encuesta además permitió conocer
elementos decisivos y de interés para la compra del producto, según los encuestados la
importancia que el producto tenga validez, confiabilidad, calidad y efectividad prima sobre
otros elementos como el precio, la innovación, la presentación, etc.; estas respuestas
influenciadas por el profesionalismo de los entrevistados.
Finalmente, la encuesta permitió a los participantes que opinaran de manera libre, y
aportarán comentarios y sugerencias para los creadores del producto, y aunque se
obtuvieron muchas sugerencias, estas se agruparon en siete categorías, las cuales son; que
atiendan niños desde los cuatro años, que sirviera para mejorar el rendimiento académico,
que se indague exhaustivamente protocolos de intervención, que se tengan en cuenta las
características sociodemográficas de la población, que se implemente en colegios como una
herramienta de prevención y que tenga una sección para padres, pero la categoría con más
puntuación fue que se muestre en forma de juego debido a la población a la cual va dirigida
el producto, esta última sugerencia será importante retomarla, ya que los libros no se
presentaran de manera de juego, sino de una manera didáctica e interactiva con la cual los
niños se sientan a gusto con el material por ello la creación de tres cuentos y su respectivo
taller al finalizar.
Análisis costos y gastos
Tabla 3.
Presupuesto del producto
Concepto Valor
Diseño del producto
Gastos del editor
Gastos de ejecución
Valor hora profesional
Transporte por recorrido ( visitar colegios privado y públicos para la
distribución y publicidad del producto)
Asistencia a eventos a nivel de psicologia de la salud ( congresos
nacionales)
Materiales y Papelería ( hojas lápices talleres para resolver en casa)
Gastos del editor ( diseño de los diferentes cuentos hoja por unidad)
Producto ampliado ( página web, portafolio de servicios, publicidad por
redes sociales )
Alquiler de equipos ( video bean y pc )
Producto terminado
$12.960.000
$450.000
$270.000
$90.000
$35.000
$1.500.000
$400.000
$9000
$180.000
$2.950.000
$90.000
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 65
Valor Total del Producto $18.934.000
Según la tabla anterior, se observa que el valor de los costos operacionales es de
$18.934000 pesos, y para el análisis ROI (retorno de inversión) se necesitan vender 211
ejemplares para cubrir los gastos operacionales. Por otro lado, mensualmente se deben
vender $1.577.833, es decir, 18 programas de intervención para profesionales en el campo
de la psicología y la educación que permitan intervenir la fobia social o trastorno de
ansiedad social en niños menores de 12 años en la ciudad de Bogotá.
Resultados
Después de un largo proceso de elaboración de nuestro producto se plasma a
continuación la herramienta de apoyo a profesionales de psicologia y la educación que
facilitara el proceso de intervención bajo un programa didáctico llamado superándote
(Programa de Intervención para Niños con Ansiedad Social) mediante la utilización de tres
técnicas cognitivo conductuales: regulación emocional, entrenamiento en habilidades
sociales y entrenamiento en solución de problemas, para niños menores de 10 años
expresado en tres cuentos animados llamados “ el pequeño valiente” . Es oportuno, recordar
que la ansiedad social se produce en el sujeto al estar inmerso a situaciones sociales o
expuesto a la evaluación de otras personas. Esta propuesta se planteó debido a que no se
encontraba en el mercado una herramienta que permitierá ayudar al psicólogo y al
educando a intervenir la complejidad de la ansiedad social en los niños. A continuación se
ilustran los tres cuentos que desarrollaran las tres técnicas cognitivos conductuales
mencionadas anteriormente.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 66
Figura 22. Entrenamiento en Solución de Problemas página 1.
Figura 23. Entrenamiento en Solución de Problemas página 2.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 67
Figura 24. Entrenamiento en Solución de Problemas página 3.
Figura 25. Entrenamiento en Solución de Problemas página 4.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 68
Figura 26. Entrenamiento en Solución de Problemas página 5.
Figura 27. Entrenamiento en Solución de Problemas página 6.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 69
Figura 28. Entrenamiento en Solución de Problemas página 7.
Figura 29. Entrenamiento en Solución de Problemas página 8.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 70
Figura 30. Entrenamiento en Solución de Problemas página 9.
Figura 31. Entrenamiento en Solución de Problemas página 10.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 71
Figura 32. Entrenamiento en Solución de Problemas página 11.
Figura 33. Entrenamiento en Solución de Problemas página 12.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 72
Figura 34. Entrenamiento en Solución de Problemas página 13.
Figura 35. Entrenamiento en Solución de Problemas página 14.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 73
Figura 36. Entrenamiento en Solución de Problemas página 15.
Figura 37. Entrenamiento en Solución de Problemas página 16.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 74
Figura 38. Entrenamiento en Solución de Problemas página 17.
Figura 39. Entrenamiento en Solución de Problemas página 18.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 75
Figura 40. Entrenamiento en Solución de Problemas página 19.
Figura 41. Entrenamiento en Solución de Problemas página 20.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 76
Figura 42. Entrenamiento en Solución de Problemas página 21.
Figura 43. Entrenamiento en Solución de Problemas página 22.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 77
Figura 44. Entrenamiento en Solución de Problemas página 23.
Figura 45. Entrenamiento en Solución de Problemas página 24.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 78
Figura 46. Entrenamiento en Solución de Problemas página 25.
Figura 47. Entrenamiento en Solución de Problemas página 26.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 79
Figura 48. Entrenamiento en Solución de Problemas página 27.
Figura 49. Entrenamiento en Solución de Problemas página 28.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 80
Figura 50. Entrenamiento en Regulación Emocional página 1.
Figura 51. Entrenamiento en Regulación Emocional página 2.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 81
Figura 52. Entrenamiento en Regulación Emocional página 3.
Figura 53. Entrenamiento en Regulación Emocional página 4.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 82
Figura 54. Entrenamiento en Regulación Emocional página 5.
Figura 55. Entrenamiento en Regulación Emocional página 6.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 83
Figura 56. Entrenamiento en Regulación Emocional página 7.
Figura 57. Entrenamiento en Regulación Emocional página 8.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 84
Figura 58. Entrenamiento en Regulación Emocional página 9.
Figura 59. Entrenamiento en Regulación Emocional página 10.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 85
Figura 60. Entrenamiento en Regulación Emocional página 11.
Figura 61. Entrenamiento en Regulación Emocional página 12.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 86
Figura 62. Entrenamiento en Regulación Emocional página 13.
Figura 63. Entrenamiento en Regulación Emocional página 14.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 87
Figura 64. Entrenamiento en Regulación Emocional página 15.
Figura 65. Entrenamiento en Regulación Emocional página 16.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 88
Figura 66. Entrenamiento en Regulación Emocional página 17.
Figura 67. Entrenamiento en Regulación Emocional página 18.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 89
Figura 68. Entrenamiento en Regulación Emocional página 19.
Figura 69. Entrenamiento en Regulación Emocional página 20.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 90
Figura 70. Entrenamiento en Regulación Emocional página 21.
Figura 71. Entrenamiento en Regulación Emocional página 22.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 91
Figura 72. Entrenamiento en Regulación Emocional página 23.
Figura 73. Entrenamiento en Regulación Emocional página 24.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 92
Figura 74. Entrenamiento en Regulación Emocional página 25.
Figura 75. Entrenamiento en Regulación Emocional página 26.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 93
Figura 76. Entrenamiento en Regulación Emocional página 27.
Figura 77. Entrenamiento en Regulación Emocional página 28.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 94
Figura 78. Entrenamiento en Regulación Emocional página 29.
Figura 79. Entrenamiento en Regulación Emocional página 30.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 95
Figura 80. Entrenamiento en Regulación Emocional página 31.
Figura 81. Entrenamiento en Regulación Emocional página 32.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 96
Figura 82. Entrenamiento en Regulación Emocional página 33.
Figura 83. Entrenamiento en Regulación Emocional página 34.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 97
Figura 84. Entrenamiento en Regulación Emocional página 35.
Figura 85. Entrenamiento en Regulación Emocional página 36.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 98
Figura 86. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 1.
Figura 87. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 2.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 99
Figura 88. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 3.
Figura 89. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 4.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 100
Figura 90. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 5.
Figura 91. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 6.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 101
Figura 92. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 7.
Figura 93. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 8.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 102
Figura 94. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 9.
Figura 95. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 10.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 103
Figura 96. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 11.
Figura 97. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 12.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 104
Figura 98. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 13.
Figura 99. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 14.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 105
Figura 100. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 15.
Figura 101. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 16.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 106
Figura 102. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 17.
Figura 103. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 18.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 107
Figura 104. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 19.
Figura 105. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 20.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 108
Figura 106. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 21.
Figura 107. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 22.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 109
Figura 108. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 23.
Figura 109. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 24.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 110
Figura 110. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 25.
Figura 111. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 26.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 111
Figura 112. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 27.
Figura 113. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 28.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 112
Figura 114. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 29.
Figura 115. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 30.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 113
Figura 116. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 31.
Figura 117. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 32.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 114
Figura 118. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 33.
Figura 119. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 34.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 115
Figura 120. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 35.
Figura 121. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 36.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 116
Figura 122. Entrenamiento en Habilidades Sociales página 37.
Conclusiones
La realización de éste trabajo de grado bajo la modalidad de curso de especial
interés junto con la creación de una herramienta de apoyo a profesionales de psicología y la
educación que facilite el proceso de intervención bajo un programa didáctico llamado
superándote (Programa de Intervención para Niños con Ansiedad Social) mediante la
utilización de tres técnicas cognitivo-conductuales: regulación emocional, entrenamiento en
habilidades sociales y entrenamiento en solución de problemas, para niños menores de 10
años expresado en tres cuentos animados llamados “ el pequeño valiente” quienes presentan
trastorno de ansiedad social, nos condujo a los siguientes afirmaciones que a su vez pueden
irse modificando a lo largo del tiempo a partir de otro tipo de estudios o la continuación del
mismo.
Según lo establecido en la justificación , se confirma que la ansiedad social en niños
y de acuerdo a los aportes de diferentes autores, la ansiedad puede ser considerada como
una condición clínica y psicopatológica o una respuesta emocional esperada que se activa
ante situaciones de peligro o estrés que permiten a las personas un mejor desempeño ante
estas situaciones, claramente se evidenció a lo largo de los cuentos que se propusieron para
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 117
la intervención en ansiedad social , recordando que el personaje principal era Valentín.
Según Barlow y Durand (2003) y la APA, definen la ansiedad como "un estado de ánimo
negativo caracterizado por síntomas corporales de tensión física y aprensión acerca del
futuro" expresada en los tres canales de respuesta fisiológica, cognitivo y conductual que se
activaban en Valentín cuando de enfrentar algún tipo de situación se trataba más aún en el
ámbito escolar presentado síntomas como: el miedo a que otros noten su ansiedad y por
ende realicen una valoración negativa que provoque humillación o vergüenza, las
situaciones sociales en general provocan algún grado de ansiedad o miedo, resiste de
manera significativa estar en contextos sociales, el miedo o ansiedad son
desproporcionados al peligro real que involucra la situación social, el miedo o ansiedad
intensa a ambientes sociales persiste por más de seis o más meses, el miedo provoca un
malestar clínicamente significativo que deteriora al sujeto en sus áreas de ajuste.
Por otro lado, se confirmar que la exposición a eventos altamente estresores
resultan incapacitante para los niños pues uno de estos estímulos fóbicos es la exposición al
contexto escolar, hablar formalmente en público, participación de actividades escolares,
comer en presencia de otros y participar en fiestas que conducen al aumento en los
diferentes canales de respuesta.
De igual forma, se valida la aparición de la ansiedad social como patología o
trastorno en adultos y niños mediante un sustento teórico a partir de teorías explicativas
centradas en la adquisición (biológicos, contextuales familiares, aprendizaje) y
mantenimiento (evitación y escape, modelos parentales, deficiencias en regulación
emocional, habilidades sociales y solución de problemas) de las mismas: Teorías del
Aprendizaje, Alternativas teóricas al modelo factorial, Teoría de la Preparación. Teoría de
la Incubación de la Ansiedad, Condicionamiento y Procesos Cognitivos, Modelos
cognitivos, la Ansiedad y procesamiento de la información, todas ellas a partir de un
enfoque cognitivo conductual, ya que estas han sido de mayor aceptación en la comunidad
científica.
Además los estudios confirman que una muestra de niños de 9-11 años de edad,
según Valiente, Sandín y Chorot (2012) encontraron que la sensibilidad a la ansiedad se
relacionaba con el nivel de miedos de forma más intensa que el rasgo de ansiedad,
sugiriendo que la sensibilidad a la ansiedad en niños podría ser considerada como un
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 118
constructo único de vulnerabilidad hacia el miedo, situaciones por las cuales paso
Valentín. Es por ello que a partir de la revisión de los pocos estudios que se han realizado y
la edad a la cual va dirigido nuestro producto niños menores de 12 años se ubican entre la
etapa pre operacional y de operaciones concretas lo que nos permitió crear la herramienta
de intervención el pequeño Valiente ilustrado a partir de tres cuentos bajo diferentes
técnicas cognitivo conductuales.
De acuerdo a la encuesta nacional de salud mental por el Ministerio de salud y
protección social en el años 2015, el estado de afectación de la salud mental en niños se
relaciona con los factores de maltrato, funcionalidad familiar, violencia, desplazamiento y
el desarrollo del país; como también la pobreza, la guerra, la desigualdad, y aspectos
asociados con la familia, en éste caso, el abuso sexual, el maltrato, el poco apoyo social, la
violencia, experiencias traumáticas y consumo abusivo de alcohol por parte de los padres,
que limitan el normal desarrollo cognitivo, social y emocional de los niños. Adicional a
esto en Colombia se realizó un estudio sobre la prevalencia del trastorno en tres municipios
de Cundinamarca, dos de ellos expuestos a situaciones de conflicto armado y uno sin
experiencias armadas relacionadas con el conflicto.
Otro aporte importante, es como a partir de la implementación de técnicas
cognitivo conductuales, se puede intervenir la patología que estos niños presentan: ansiedad
social , como lo son: la regulación emocional , el entrenamiento en habilidades sociales , y
el entrenamiento en la solución de problemas, a partir de modelamientos, moldeamientos y
aprendizajes vicarios, aprendizaje observacional, reestructuración cognitiva y
desensibilización sistemática, logran disminuir los niveles de ansiedad y adaptabilidad a los
diferentes contextos por los cuales puede estar inmerso el niño más aún cuando de enfrentar
un ambiente escolar.
La creación de productos para la intervención en problemáticas infantiles expresada
en juegos didácticos (cuentos) es de gran ayuda para la disminución de la sintomatología en
los niños, ya que estos, logran mejorar la adaptabilidad al medio, mejorar relaciones
parentales, solucionar problemas de la vida diaria, adquirir habilidades que se requieren en
cualquier contexto y el tipo de respeta controlada que se dan ante sucesos cotidianos,
logrando así un aumento en la calidad de vida de los niños y eficaz desarrollo y
afrontamiento en todas sus áreas de ajuste.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 119
Finalmente, es oportuno tener en cuenta el presupuesto, que se requiere para la
realización de un producto como estos, teniendo en cuenta el valor de los costos
operacionales y el retorno de inversión y cómo éste desea ser recuperado. El objetivo es
hacer un excelente producto que atienda las necesidades de quien lo requiere, sin embargo,
no se llegaría a ningún resultado si son ,más los gastas que el retorno de inversión y el
tiempo que se demoraría para recuperar lo invertido.
Recomendaciones y líneas futuras
Es de gran relevancia para la creación de nuevos productos establecer o seleccionar
el tipo de problemática que se desea intervenir en los niños, establecer un rango de edad
adecuado debido a que no hay mucha investigación en este campo como lo es la ansiedad
social. Por otro lado, sería pertinente, trabajar otro tipo de técnicas desde el enfoque
cognitivo conductual en la ansiedad social en niños como lo pueden ser la reestructuración
cognitiva y la desensibilización sistemática, pues no se encontraron mayores
investigaciones en la aplicación de éste tipo de técnicas junto con la creación de nuevos
productos ,ya que primero se cuentan con muy pocos datos que permiten establecer con
severidad una distinción de subcategorías y por otra parte dejar avanzar esta problemática
en esta población puede acarrear mayores problemas para su vida adulta.
Para evitar que se presenten con menor frecuencia este tipo de problemáticas en los
niños dirigidas a la ansiedad social es importante conocer el contexto o ambiente al cual se
expone el infante, pues de este depende que sea víctima y posteriormente se vea afectada su
integridad; esto cuando el sujeto no ha sido expuesto a una experiencia negativa. Por otro
lado, una vez expuesto el sujeto es importante realizar un seguimiento y una intervención
psicológica tanto para este como para su familia la cual brinde herramientas como técnicas
de relajación, desensibilización sistemática, técnicas de exposición e inundación y otras que
le permitan dar un manejo adecuado a su proceso, pues ésta realizada a tiempo es un factor
crucial que evitara que los síntomas desencadenen en el aumento de otras comorbilidades a
nivel patológico.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 120
Finalmente, seria asertivo diseñar un producto dirigido a padres cuyos hijos
presenten ansiedad social y el tipo de manejo que estos podrían realizar ante los sucesos
estresores que logran activar sus diferentes canales de respuesta.
INTERVENCIÓN ANSIEDAD SOCIAL 121
Referencias
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trastornos Mentales DSM IV-TR. Estados Unidos: Editorial Masson S.A.
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adolescência: uma revisâo. Psicología clínica do rio de janeiro, 5 (1), 46-61. Doi:
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Barlow, D. & Durand, V. M. (2003). Psicopatología. España: Editorial Thomson.
Belloch, A., Sandin, B. & Ramos, F., (2009). Manual de Psicopatología Vol. II. España:
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