Upload
enmanuel-lopez
View
238
Download
3
Tags:
Embed Size (px)
DESCRIPTION
gran novela!!!
Citation preview
*raspad
Créditos
Mikage EijiA u t o r
4 1 5Ilustraciones
EusthEnoptEronT r a d u c c i ó n J a p o n é s - I n g l é s
E s t e b a nTraducción Inglés-Castellano
EstebanC l e a n e r
TonijuaC l e a n e r
DarkMoscoB e t a R e a d e r
DarkhellsingB e t a R e a d e r
wwwEdición
.twindragons-subse n c a s t e l l a n o
.com p o r
Prólogo
No es que lo haya olvidado. Probablemente aún
recuerde este lugar, y hasta sueño con este escenario, como lo
estoy haciendo ahora. Pero no puedo recordar este lugar fuera
de mis sueños.
No es que lo haya olvidado. No, simplemente no puedo
encontrar alguna pista para mantener estos recuerdos. No hay
nada en la realidad que posiblemente pudiese relacionarse a
esta escena lo suficiente como para hacerme recordar. Si lo
intentase, ciertamente podría recordar, pero no suelo mirar
hacia atrás.
Eso es porque nada en mi diario vivir podría tener la
posibilidad de recordarme a la persona que está frente a mí.
- ¿Tienes un deseo?
El hombre (¿o mujer?) que me hizo esa pregunta con
una voz calmada tenía un rostro que iba cambiando con fluidez.
Aunque este sueño fue creado por mi propia psiquis profunda,
no pude captar su rostro. Lo vi, vi su rostro, o eso creo, pero a
la vez que se parece a todos, también luce completamente
diferente a cualquier otra persona.
Supongo que le di una respuesta pasiva e inofensiva en
ese entonces, pero no recuerdo cómo respondí. Como sea,
cuando oyó mi respuesta, me presentó una especie de
contenedor.
- Esta es una “caja” que concede cualquier deseo.
Ahora que lo mencionaba, sí parecía una caja.
Entrecerré mis ojos para ver la caja. No tenía mala vista,
sin embargo, no podía ver claramente la caja.
No había nada en ella; este hecho hizo que me pareciese
extraña. Era como sostener una caja de galletas cerrada que
sonaba cuando la sacudías, pero que estaba vacía al abrirla.
Luego, creo que le pregunté algo insignificante, como, -
¿Por qué me estás dando esto?
- ¡Porque eres muy interesante! No puedo distinguir a
los humanos por sus leves diferencias. No puedo diferenciar a
uno de otro, a pesar de estar tan interesado en los de tu clase.
Irónico, ¿no crees?
No entendí bien lo que intentaba decir, pero asentí sin
entusiasmo.
- Pero puedo distinguirte a ti. Te preguntarás cómo es
que esto puede ser algo especial, ¡pero es más que suficiente
para atraer mi interés!
Miré el fondo de la caja. A pesar de que no había nada
en ella, sentí como si fuese atacado por una sensación
desagradable que arrastraba todo mi cuerpo hacia el fondo.
Rápidamente aparte la vista.
- Esta “caja” te concederá cualquier deseo. No me
preocupa qué deseo sea. No te detendré aunque tu deseo
destruya a la humanidad. Simplemente estoy interesado en lo
que tú y los de tu clase desean.
Le dije algo, y él sonrió.
- Hehe… No, no. No es alguna clase de poder. Lo
humanos tienen la habilidad de conceder deseos sólo con tener
una clara imagen de ellos, para empezar. Yo sólo soy capaz de
dar un pequeño empujón a ese poder.
Acepté la caja. Por supuesto, no podía recordar este
sueño cuando desperté. Pero sería capaz de recordar claramente
lo que pensaba de ese sujeto. Y esa impresión tampoco cambió
a través de los sueños.
De alguna forma, ¿no es esa persona algo—
—desagradable?
1ª vez
- Soy Otonashi Aya. Es un placer conocerlos -, dice la
estudiante transferida con una débil sonrisa.
23ª vez
- Soy Otonashi Aya… Saludos -, dice la estudiante
transferida, sin interés ni emoción alguna.
1050ª vez
- Otonashi Aya -, dice la estudiante transferida,
luciendo completamente aburrida, sin siquiera mirarnos.
13.118ª vez
Miro a la estudiante transferida, Otonashi Aya, cuyo
nombre aún no conozco, de pie en la plataforma.
- Otonashi Aya -, la estudiante transferida murmura
únicamente esto a sus compañeros, con voz baja, como si no le
importase si le podíamos oír. No obstante, su voz es clara.
—Sí, ya sabía su nombre, aunque acabo de oírlo por
primera vez.
Todos se quedan sin respiración. No a causa de su
directa y sencilla presentación que ni siquiera podría contar
como saludo, sino, probablemente, porque es una belleza
despampanante, que destaca entre todos los que están en el
salón.
Todos esperan sus siguientes palabras.
Ella abre su boca.
- Hoshino Kazuki.
- … ¿Eh?
Por alguna razón, me llama. Toda la clase me mira con
intriga. No me miren así, tampoco tengo idea de esto.
- Estoy aquí para doblegarte -, declara repentinamente. -
Esta es mi 13.118ª “Transferencia de escuela”. Ni siquiera yo
puedo evitar el fastidiarme con tantas, así que para cambiar un
poco, declararé la guerra -. Ni siquiera se molesta en mirar a
nuestros estupefactos compañeros, y sólo me mira a mí. -
Hoshino Kazuki, haré que te rindas. Será mejor que me des
pronto lo más preciado para ti. La resistencia es inútil. ¿Por
qué? Es sencillo, porque yo—
Otonashi Aya forma una sonrisa y continúa con su
declaración.
- —siempre estaré a tu lado, sin importar cuánto tiempo
pase.
10.876ª vez
Es 「2 de Marzo」 . Se supone que hoy es 「2 de
Marzo」.
¿Por qué me aseguro de que esa sea la fecha? …
Probablemente porque el cielo sigue nublado, a pesar de que ya
es Marzo. Probablemente sea por eso. Es culpa del clima que
esté un poco melancólico, considerando que, recientemente, el
cielo azul se esconde todo el tiempo detrás de las nubes.
Cielos, me pregunto cuándo se despejará el cielo.
Estoy en el salón de clases antes de que comiencen las
clases, mirando por la ventana hacia afuera, simplemente
pensando.
Supongo que tengo estos pensamientos porque no me
siento bien. No, no me siento mal. Me siento como siempre me
he sentido, sólo estoy… incómodo. No puedo explicarlo, pero
se siente como si de repente fuese el único sin una sombra. Es
más como esa sensación de incomodidad de “algo está mal”.
… Extraño. No puedo descifrar la razón. Ayer no
sucedió nada inusual, esta mañana tomé desayuno, y escuché el
nuevo disco de mi artista favorito en el tren, y saqué “suerte
promedio” de acuerdo al programa de lectura de fortuna que vi
por casualidad.
Decidiendo no quebrarme la cabeza pensando en eso,
tomo un Umaibō1 de mi mochila. Hoy tocó uno con sabor a
carne de cerdo. Le doy una mordida. No importa cuántos me
coma, no me puedo hartar de este sabor.
- ¿Otra vez con un Umaibō—? Nunca te hartas de esos,
¿o sí? Si sigues comiendo Umaibōs todo el tiempo, tu sangre se
volverá de ese color, ¿sabías?
- … Eh… ¿Qué color sería ese?
- ¡Quién sabe!
1 Snack japonés. (http://es.wikipedia.org/wiki/Umaib%C5%8D)
La chica que bromea conmigo es mi compañera de
clases, Kirino Kokone. Su cabello castaño, entre largo y muy
largo, está atado en una cola de caballo alta, en la parte de atrás
de su cabeza. Kokone cambia su peinado todo el tiempo, pero
parece que le gusta el actual, o al menos tengo la sensación de
que ese es el único peinado que le he visto últimamente.
A continuación, Kokone agarra arbitrariamente un
asiento a mi lado y comienza a maquillarse con su espejo de
mano azul, usando una herramienta que, como hombre, no
conozco bien. Desearía que pusiera tanto esfuerzo en todo, y no
sólo en maquillarse.
- Ahora que lo pienso, tienes muchas cosas azules, ¿o
no?
- Ah, sí, me gusta el azul… ¡Ah, cierto, Kazu-kun! ¿No
hay algo distinto en mí hoy? ¿Lo hay? -, dice Kokone
repentinamente, mirándome con sus ojos brillando.
- ¿Mh…?
- ¿Cómo podría saberlo? No hay forma de que lo sepa si
me preguntas tan de repente.
- ¡Te daré una pista! ¡Mi punto de encanto ha
cambiado!
- ¿Eh?
Miro sus senos por reflejo.
- ¡Oye! ¡¿Por qué mis senos?!
- Bueno, porque siempre te estás jactando de que
pasaste a copa D, así que estaba seguro que…
- ¡Es obvio que mis ojos son mi encanto! Y, como sea,
¡los senos no crecen así de repente! ¡¿O es eso lo que te
gustaría?! ¡Pervertido! ¡Maníaco de senos!
- … Lo siento.
No hay forma de que conociese dicho punto de encanto
auto-proclamado, pero por ahora, me disculparé.
- … ¿Entonces? -, Kokone mira mi cara expectante.
Tengo que admitir que sus ojos son grandes. Me pongo un
poco tímido al darme cuenta de eso.
- … Creo que tu cara es la misma de siempre… -, digo,
sin mirar directamente su rostro.
- ¿Eh? ¿Qué? ¿Dices que mi rostro está igual de lindo
que siempre?
- No, no dije eso.
- ¡Dilo!
Me están forzando.
- A decir verdad, hoy estoy usando rímel. ¿Qué tal?
¿Qué tal?
No veo diferencia alguna. No veo cómo es que luce
diferente a ayer.
- … No, no hay forma de que pudiese darme cuenta de
algo como eso -, le digo con honestidad, y fracaso.
- ¡¿“Algo como eso”… dices?! -, me golpea.
- Au.
- Tsk. ¡Qué granuja más aburrido eres! -, dice con una
voz forzada, pero… Ha~ah, puede que en verdad se haya
enojado un poco. Kokone hace un gesto de escupirme, y se va
hacia otros compañeros para mostrar su rostro con rímel.
- Haa…
Ahora estoy cansado. Kokone puede ser graciosa, pero
no puedo lidiar con su carácter.
- ¿Acabaron con su pelea de enamorados?
Lo primero que veo cuando me doy vuelta son tres aros
en una oreja derecha. Sólo hay una persona que los usa así en
esta escuela.
- … Daiya, esa no fue una pelea de enamorados. ¿De
dónde sacaste esa conclusión?
Mi amigo Oomine Daiya sólo me mira desdeñosamente
ante mi objeción. Sí, es arrogante, como siempre. Bueno,
supongo que sería raro que alguien como él, que usa accesorios
y que no sólo ignora las reglas de la escuela, sino que, más bien,
las provoca, se rebajase de eso.
- Pero, ¿en serio no notaste el rímel? Hasta yo me di
cuenta de la diferencia. Y estoy absoluta y totalmente
desinteresado en ella.
- … ¿En serio?
Ellos son vecinos, y al parecer han sido amigos desde el
jardín de niños. Eso de que no está interesado en ella es, sin
duda, una mentira. Aún así, no notar algo que hasta Daiya notó
puede ser un pequeño problema. Después de todo, él es alguien
que no se interesa en los demás y ni siquiera parece mirar a la
gente.
- .. Pero… ya sabes…
Tengo la sensación de que también usó el rímel ayer.
- Ya veo. Entiendo, Kazu. Así que le dijiste a la perra
“No estoy interesado en ti”. Estoy de acuerdo contigo, tomaré
la misma actitud. Pero seré más directo.
- ¡Oye presidente malicioso! ¡Puedo oírte claramente!
Daiya ignora a la chica de aguda audición y continúa
hablando. - Kazu, dejemos de hablar de esa chica irrelevante—
¿Sabías que hoy llegará una estudiante transferida?
- ¿Una estudiante transferida?
Me aseguro de esto otra vez—hoy es 「2 de Marzo」.
¿Por qué alguien se transferiría tan avanzado el año?
- ¡¿Una estudiante transferida?! ¡¿De verdad?! -,
Kokone, como se esperaba, oyó nuestra conversación y elevó
su voz para preguntar.
- Kiri, no estoy hablando contigo. No te entrometas
desde allí. ¡Oh, pero tampoco te acerques! Esa cara
desesperadamente maquillada tuya no es buena para mi salud
mental.
- ¡¿Qué?! ¡Mira quién habla, Daiya! Deberías comenzar
a arreglar pronto esa deshonesta personalidad que tienes. Tal
vez deberíamos colgarte de cabeza durante 24 horas, ¡y así algo
de sangre podría llegar a tu cerebro y podrías volverte capaz de
decir algo honesto!
Para interrumpir sus insultos, elevé mi voz un poco y
volví al tema.
- Una estudiante transferida, ¿no? Creo que oí algo
sobre eso.
Daiya cierra su boca como lo planeé y me mira.
- … ¿Quién te contó? -, me pregunta con una cara seria.
- ¿Eh? ¿Por qué quieres saber?
- No contestes una pregunta con otra pregunta.
- Eh… ¿Quién fue? ¿No fuiste tú?
- Imposible. Acabo de oírlo cuando fui a la sala de
profesores para hacer un papeleo. No debería haber tenido
oportunidad de contártelo.
- ¿En serio?
- Esta clase de rumores se esparcen de inmediato, pero
al parecer esta parlanchina de Kiri aún no lo sabía.
Esto probablemente sea verdad, considerando la
reacción que tuvo. Y no sólo ella; nadie en la clase 6 de primer
año parecía saberlo.
- Es por eso que concluí que la información era secreta
hasta el día de la transferencia, que es hoy. Pero entonces,
¿cómo sabías?
- … Eh…
Me pregunto cómo es que lo sabía…
- Bueno, como sea. Pero, ¿no es extraño, Kazu? ¿Por
qué alguien se transferiría a esta altura? Probablemente haya
circunstancias. Por ejemplo, ¿qué hay de una hija de algún
presidente de alguna empresa que fue expulsada de un montón
de escuelas? En ese caso, tendría sentido que la información
fuese ocultada.
- Daiya, no es bueno intentar adivinar sobre la
estudiante transferida, eso es prejuicio. Quiero decir, incluso
sin eso ya está en una posición sospechosa. Además, todos
están escuchando en secreto.
El resto de estudiantes, que habían estado escuchando
nuestras palabras en secreto, sonrieron incómodos.
- ¿Ah? ¿Por qué debería importarme?
- Uwaa…
En el momento en que dejo salir un suspiro ante la
actitud arrogante de Daiya, suena la campana. La clase sale
disparada hacia sus asientos.
Kokone, cuyo asiento está del lado de las ventanas, abre
una y se asoma por ella. Al parecer quiere ver a la estudiante
transferida lo antes posible.
- ¡Ohh!
Aparentemente habiendo encontrado a una persona que
lucía como una estudiante transferida, Kokone eleva su voz.
Después de dejar salir este “¡Ohh!”, se sienta en su silla con
una expresión congelada, a pesar de haber estado tan animada
cuando miró por la ventana.
Me pregunto qué está mal.
Kokone sonríe y murmura, - ¡Esto es increíble!
Probablemente no sólo yo, sino que todos quieren
preguntar qué ocurre, pero nuestro profesor jefe entró al salón
justo ahora. Se puede ver la silueta de una chica detrás de la
puerta de vidrio esfumado. Tiene que ser la estudiante
transferida. Mirando hacia la clase, el profesor adivina que
todos se están preguntando sobre la persona detrás de la puerta,
y rápidamente la llama.
La silueta detrás del vidrio esfumado se mueve.
Y entonces—la veo.
En un instante—como si fuese empujado por un
barranco, el escenario cambia de repente.
Primero oigo un sonido, el sonido del escenario siendo
arrancado. Forzada y violentamente, una imagen tras otra llega
a mi mente. Escenarios similares aparecen una y otra vez.
Siento como si mi conciencia estuviese a punto de escaparse,
pero entonces es tirada de vuelta y queda firmemente fija como
si la metiesen dentro de una cajita metálica. Déjà vu. Déjà vu.
- Soy Otonashi Aya -, te oí.
- Soy Otonashi Aya -, te oí.
- Soy Otonashi Aya -, es suficiente, ¡ya te oí!
Rechazo la masiva cantidad de información que está
tratando de cargarse por sí sola en mi mente. Quiero decir, no
hay forma de que quepa toda. Mi cerebro se sobrecargará, no
puedo procesarla toda.
- Ah…
¿Qué?
¿Qué cosas incomprensibles—estoy…?
Me doy cuenta de que estoy teniendo pensamientos
incomprensibles, y de este modo cierro mis pensamientos—y
luego regreso.
¿Eh? ¿Qué acabo de pensar?
Habiendo olvidado eso, miro hacia el frente y a ella
nuevamente. Miro a la estudiante transferida, Otonashi Aya,
cuyo nombre aún no conozco.
- Otonashi Aya -, la estudiante transferida murmura
únicamente esto, con voz baja, como si no le importase si le
podíamos oír.
Otonashi Aya se baja de la plataforma.
A causa de su sencilla presentación, la clase se vuelve
ruidosa.
No se preocupa en lo más mínimo por sus perplejos
compañeros de clase, y viene caminando. Hacia mí. Mirando
directamente a mi rostro.
Se sienta de forma natural en el asiento vacío al lado del
mío, como si ese asiento hubiese sido preparado para ella
desde el inicio.
Otonashi-san me mira con el ceño fruncido
suspicazmente cuando la miro en silencio, incapaz de hacer
algo.
… Supongo que debería decir algo.
- … Eh… Mucho gusto.
Su ceño, sin embargo, no cambia ni un poco.
- ¿Eso es todo?
- ¿Eh…?
- Pregunté si eso era todo.
¿Había algo más? Aunque me digas eso, no puedo
pensar en nada. Después de todo, este es nuestro primer
encuentro.
Pero la atmósfera me fuerza a decir a algo.
- … Eh, tu uniforme… ¿Ese uniforme es de tu antigua
escuela?
Otonashi-san no reacciona a mis desesperadas palabras
de ninguna forma, y sólo continúa mirándome.
- … Eh… ¿Entonces?
Al ver mi confusión, Otonashi-san deja salir un suspiro
por alguna razón y sonríe. Una sonrisa como si estuviese
sorprendida ante un niño con problemas de entendimiento.
- Te contaré algo bueno, Hoshino.
… ¿Eh? Aún no le he dicho mi nombre. Pero este
pensamiento es una mera nimiedad. Otonashi-san dice algo que
hace que me quede sentado completamente congelado por
cinco segundos exactos.
- Mogi Kasumi hoy está usando calzones celestes.
*
La ropa usual que Mogi Kasumi viste durante
educación física no es un uniforme de gimnasia, sino su usual
uniforme de escuela.
Hoy, nuevamente está observando a los chicos mientras
juegan fútbol, mientras viste su uniforme, inexpresiva, como
un adorno.
Las blancas piernas que salían de la falda de Mogi-san
son tan delgadas, pareciera que se fuesen a quebrar en
cualquier momento. Y yo, por alguna razón, estoy durmiendo
sobre su regazo.
Ah, sí, tampoco tengo idea de lo que está sucediendo
aquí. Aunque ciertamente hay una sensación de absoluta
felicidad, no la puedo disfrutar, ya que estoy deteniendo mi
sangrado nasal desesperadamente con un pañuelo de papel. No
acabaría bien si no lo hiciese.
Sin embargo, puedo recordar cómo acabé así. Ya que
perdí mi habilidad de concentración a causa de Otonashi-san, el
balón de fútbol me golpeó justo en el rostro y mi nariz
comenzó a sangrar. Entonces Mogi-san se preocupó por mí, y
por alguna razón, me dejó dormir en su regazo.
Las piernas de Mogi-san no son para nada suaves, y,
para ser honesto, hasta me duele un poco el poner la cabeza
sobre ellas.
Me pregunto por qué se preocupa tanto por mí. Miro a
Mogi-san, pero no puedo descifrar nada de su rostro
inexpresivo.
Pero estoy feliz. Muy, muy feliz.
Por supuesto que estaba sorprendido con la aseveración
de Otonashi-san respecto a los calzones. No sólo por la falta de
contexto y lo impredecible que fue. Lo que quiero decir es que
Otonashi-san dijo “Te contaré algo bueno”. Básicamente,
declaró que la información sobre 「Mogi Kasumi」era 「algo
bueno」para mí.
Ni siquiera le he contado a Kokone o Daiya sobre mi
enamoramiento con Mogi Kasumi. No hay forma de que
Otonashi-san, a quien hoy acabo de conocer, pudiese saber.
Aún así, dijo eso.
- … Mogi-san.
- ¿Qué pasa? -, contesta ella con voz suave. Es un voz
como de una pequeña ave, que combina con su apariencia
delicada y estatura promedio.
- Hoy… este… ¿Otonashi-san te habló?
- … ¿La estudiante transferida? … No.
- No se conocen de antes, ¿cierto?
Mogi-san confirma con un movimiento de su cabeza.
- ¿Te dijo algo sospechoso? -, pregunta inclinando la
cabeza.
- Ah, no… no es nada, está bien.
Cuando vuelvo mi mirada hacia el campo deportivo,
Otonashi-san está de pie, sola, en el centro del patio, con una
pose desalentadora, que no mostraba ni interés en el balón ni en
las chicas que corrían tras él. Cuando el balón llegó hasta ella
rodando por casualidad, lo pateó débilmente… Err, ¿no lo
acaba de pasar a una chica del equipo contrario?
- Mmhh.
Tal vez he estado cavilando demasiado en eso,
pensando que ella se había dado cuenta de mis sentimientos.
Otonashi-san tuvo un impacto bastante fuerte en mí a
causa de su apariencia y actitud. Sí, simplemente lo cavilo
demasiado porque una persona como ella repentinamente me
dijo algo como eso. Es una lógica que cualquiera podría
entender. Y aún así—¿por qué no lo puedo creer?
Otonashi-san me mira. Y fija su mirada en mí, sin
apartarla, mirando directamente hacia mis ojos. Atrevidamente
eleva las comisuras de sus labios. Aunque la clase aún no acaba,
viene caminando hacia mí.
Antes de que me dé cuenta, estoy de pie, abandonando
el privilegio de dormir en el regazo de Mogi-san, lo que
supuestamente es la dicha más grande para mí. Mi cuerpo
entero se estremece; no metafóricamente, en verdad me estoy
estremeciendo.
Mogi-san, quien también parece haber notado a
Otonashi-san, se pone tensa y luego se levanta al igual que yo.
Aún con la sonrisa atrevida, Otonashi-san me apunta a
mí… no, a Mogi-san.
Justo entonces, sopla una súbita ráfaga. Una ráfaga
completamente repentina. Una ráfaga que nadie pudo predecir.
Este viento repentino levanta la falda de Mogi-san.
- ¡¡~~~!!
Mogi-san baja su falda de inmediato, pero sólo la parte
del frente. Yo estoy detrás de ella. Justo después de que la
ráfaga acaba, Mogi-san se da vuelta y me mira. En efecto,
sigue inexpresiva, como siempre, pero sus mejillas lucen
ligeramente rojas a mi parecer.
Silenciosamente forma las palabras “¿Los viste?” con
su boca. No, tal vez en verdad haya hablado, pero no pude oír
su baja voz. Sacudo mi cabeza frenéticamente. Supongo que,
ante mi frenética reacción, es obvio que los vi. Pero Mogi-san
no contesta nada, y sólo baja su mirada.
Ahora, Otonashi-san está de pie a mi lado. Logro captar
su expresión de reojo.
- Ha~ah—
Luego logro captar la razón de por qué estoy temblando
de ese modo. Leo el significado detrás de su expresión, un
sentimiento que nunca había sido dirigido hacia mí en toda mi
vida, hasta ahora.
—Hostilidad.
¿Por qué? ¿Por qué es dirigida hacia alguien como yo?
Otonashi-san levanta la comisura de su boca y frunce el
ceño hacia mí. Mientras que yo sólo tiemblo sin poder
moverme, ella pone una mano en mi hombro y pone sus labios
cerca de mi oreja.
- Eran celestes, ¿o no?
Otonashi-san lo sabía todo: mi afecto hacia Mogi-san,
que esa repentina ráfaga expondría los calzones de Mogi-san
ante mí, lo sabía todo. La declaración no había sido una broma.
Era una amenaza para insinuar que me conocía a la perfección,
que conocía mi manera de pensar, que está por sobre mí.
- Hoshino, a esta altura ya deberías haber recordado,
¿no?
Otonashi-san me observa mientras estoy petrificado.
Nos quedamos así durante unos momentos, pero cuando me
quedo en silencio, ella deja salir un suspiro y baja su mirada
hacia el suelo.
- Así que es inútil, a pesar de que me di la molestia de
hacer esto… Ya veo, hoy estás a un nivel aún más torpe -, se
queja murmurando.
- Si lo has olvidado, recuérdalo ahora: mi nombre es
「Maria」.
… ¿「Maria」? No, este… tú eres 「Otonashi Aya」,
¿no?
- … ¿E-Ese es tu seudónimo o algo así?
- Cállate -, me regaña, sin siquiera intentar ocultar su
irritación. - Bueno, de este modo no eres un desafío, pero
actuaré de acuerdo a mi propia conveniencia -, dice Otonashi-
san y se da vuelta.
- Ah, espera… -, la detengo reflexivamente. Se vuelve
hacia mí, aparentemente estresada. Sin intención me
estremezco ante su ceño fruncido.
No estoy seguro, pero a juzgar por su actitud, tal vez—
- ¿Nos conocemos de antes?
Al oír estas palabras, Otonashi-san levanta las
comisuras de sus labios.
- Sí, fuimos amantes en nuestras vidas pasadas. ¡Oh, mi
amado Hathaway, qué mísero es tu estado actual! ¡No eras tan
tonto en ese entonces cuando viniste alabándome, a mí, a la
princesa del país enemigo!
- Eh… ¿Qué? -, estoy sin palabras. Otonashi-san parece
satisfecha al verme así, y, por primera vez en el día, muestra
una sonrisa que de verdad parece una.
- Estoy bromeando.
*
Al día siguiente, vi el cadáver de Otonashi Aya.
8.946ª vez
Al oír mis palabras, Mogi-san cavila durante un rato,
con ojos afligidos. Luego murmura, aparentemente incómoda,
las siguientes palabras:
- Por favor, espera hasta mañana.
2.601ª vez
- Soy Otonashi Aya -, la estudiante transferida murmura
solamente estas palabras.
*
- ¡Oh, dios mío! ¡Eso es intenso! -, dice en voz alta mi
amigo Usui Haruaki, qué está sentado a mi lado, a pesar de
que la clase aún no acaba, y me da una enérgica palmada en la
espalda.
¿Haruaki? Eso duele, ¿sabes? Y las miradas de
nuestros compañeros son bastante embarazosas.
La mirada de Haruaki ya está volteada hacia atrás, hacia
la estudiante transferida, Otonashi Aya.
- ¡Nuestros ojos se encontraron! ¡Eso es intenso!
- Bueno, si te das vuelta para mirarla, es normal que sus
ojos se encuentren.
- ¡Hoshii, es el DESTINO!
Espera, ¿qué? ¿El destino?
- Como sea, ¡es demasiado linda! Definitivamente
pasaría como una obra de arte en el mercado mundial… y
luego sería reconocida como un monumento nacional. Oh, ya
es demasiado tarde para mí, mi corazón ya ha sido tomado…
Me declararé ante ella.
¡¡Rápido!!
La campana suena. Después de levantarnos y hacer una
reverencia ante el profesor, Haruaki va directamente hacia
Otonashi-san sin molestarse en tomar asiento luego de la
reverencia.
- ¡Otonashi Aya-san! Me enamoré a primera vista de ti.
¡Te amo!
Uwaa, en verdad lo está haciendo…
No puedo oír la respuesta de Otonashi-san, pero el
rostro de Haruaki la revela de inmediato. Ah, no… ni siquiera
es necesario mirar su rostro.
Haruaki regresa al frente de mi escritorio.
- Es absurdo… ¿Me rechazaron?
¿Pensó que tendría éxito…? Da miedo, porque en
realidad luce serio.
- ¿No es lo más normal? ¡Declararte así de repente sólo
la fastidiará!
- Mmm, entiendo tu punto. Bueno, entonces debería
declararme de nuevo. ¡Pero esta vez no de forma repentina!
¡Estos sentimientos que tengo algún día tendrán que alcanzarla!
Por un lado encuentro que su positivismo es envidiable,
pero por el otro creo que preferiría no tenerlo.
- ¿Se divierten, chicos? Para mí es bastante entretenido,
pero las chicas los están mirando con desprecio -, se une Daiya
con estas palabras.
- ¡¿Eh?! ¡¿No es sólo Haruaki al que miran con
desprecio?!
- No, a ti también. Para las chicas ustedes dos van en el
mismo saco.
- Oho, ¿en el mismo saco que yo? ¡Vaya honor! ¿No lo
crees, Hoshii?
L-Lo que sea menos…
- Dejando eso de lado, Daiyan, hasta a ti te gustaría
tratar de conquistarla, ¿no? -, Haruaki le da un toque a Daiya
con su codo. La razón de por qué no le teme a Daiya
probablemente sea porque son amigos de la infancia. O tal vez,
simplemente no le preocupan las consecuencias.
Daiya deja salir un suspiro de inmediato. - Para nada.
- ¡Eso es imposible! ¡¿Quién podría acelerar tu corazón
entonces, Daiyan?
- No importa si mi corazón late más fuerte por la
apariencia de Otonashi-san. Tal vez tenga que admitir su
belleza, pero aún así no quiero tratar de conquistarla.
- ¿Qué…?
- Haruaki, no has entendido nada, ¿verdad? Bueno, por
supuesto que este sentimiento no puede ser comprendido por
un mono como tú que vive siguiendo sus instintos y por ellos
tomaría a cualquier chica mientras tenga una cara bonita.
- ¡¿Qué?! ¡Para empezar, ¿qué tienen que ver los
instintos con preocuparse por la apariencia?!
- Dado que la apariencia de un niño está directamente
relacionada con el éxito de este, es instintivo el sentirse atraído
a alguien con buen aspecto.
- Ohh.
- Ohh -, Haruaki y yo suspiramos con admiración al
mismo tiempo. Daiya pone cara de asombrado, como si le
conmocionase que no supiésemos algo como eso.
- ¡Ah, ya lo capto, Daiyan!¡Entonces estás diciendo que
su belleza está tan fuera de alcance que ni siquiera tú puedes
intentar conquistarla! ¡Una derrota inevitable! Eso es, ¿cierto?
Como cuando los zorros se obligan a pensar “esta uva está
verde” cuando una uva está fuera de su alcance. Se llama
racionalización. ¡Qué aburrido! ¡Eso es muy aburrido, Daiyan!
- ¿Cuánto escuchaste de todo lo que dije? ¿Qué
rayos…? Bueno, la primera mitad de tu aseveración no está
necesariamente equivocada, pero te mataré por la otra mitad.
- Oho, así que en verdad no puedes intentar conquistarla.
Finalmente, Daiya golpea a Haruaki, quien pone una
cara de triunfo. Vaya, lo que había aguantado hasta ahora fue
directo a sus puños, luce como…
- No es que “yo no pueda tratar de conquistarla”. Es que
“ella no trata de conquistarme”.
- Qué rudo… Oye, Hoshii, ¿no crees que este sujeto se
deja llevar demasiado sólo por su apariencia? -, señala Haruaki
sin mostrar una señal de mejora.
- ¡No es que no trate de conquistarme porque estoy
fuera de alcance! Bueno, eso también podría ser posible, pero
en este caso no aplica.
- Uwaa, de nuevo se atreve a decir cosas raras.
- Ella no me considera fuera de su alcance, no, ni
siquiera hace una clasificación como esa. En primer lugar, no
está interesada en nosotros. Ni siquiera nos menosprecia. Tal
como reconocemos a los insectos como insectos, ella ve a la
gente como gente. Eso es todo. No le preocupan las pequeñas
diferencias entre mi lindo rostro y el feo rostro de Haruaki, tal
como nosotros no reconocemos el género de las cucarachas.
¿Cómo podrías querer tratar de conquistar a una chica así?
Hasta Haruaki luce sobrecogido por esta declaración sin
piedad sobre Otonashi-san, y queda en silencio.
- … Daiya -, por lo tanto, abro mi boca, - parece que
estás muy interesado en Otonashi-san.
Daiya se queda sin palabras. Ah, esa es una reacción
extremadamente rara. Pero, ¿no estoy en lo cierto? Dejando de
lado si su opinión es o no correcta, debe haber observado hasta
cierto grado para ser capaz de realizar un análisis como ese.
- … Tsk, ¡no estoy interesado!
- ¡Oh, te sonrojaste!
- … Oye, Kazu, vas a pisar una mina antipersonal si
continúas. ¿Debería invitarte un cebollín tan enorme que
exceda tu imaginación hasta que sufras de trastorno de estrés
postraumático2 a tal extremo que te dará urticaria con sólo ver
uno nuevamente?
Veo que Daiya está enojado, así que trato de alejarme
riendo incómodamente. De cualquier forma, Daiya parece
saber que no puede llevarse bien con Otonashi-san.
- Hasta ustedes pronto se darán cuenta de lo anormal
que es ella, a pesar de la tonta intuición de insecto que tienen -.
Sonaba como una pobre excusa.
Pero no lo era. Verás, era tal cual él decía.
2 Se puede sufrir de esta enfermedad luego de vivir eventos traumáticos como la
guerra, huracanes, violaciones, abusos físicos o un accidente grave.
*
Justo después de que la orientación de grupo acabase,
Otonashi-san levanta su mano repentinamente. El profesor jefe
de la clase, Hokubo-sensei la ve, pero ella no solamente no se
preocupa por obtener su permiso, ni siquiera espera a que
conteste, se pone de pie y comienza a hablar.
- Quiero que todos los de la clase 6 de primer año hagan
algo ahora -. A Otonashi-san no le importa que estemos
estupefactos, por lo tanto, continúa. - Tomará cinco minutos.
Pueden concederme ese tiempo, ¿no?
Nadie contesta, sin embargo ella se dirige hacia la
plataforma. Saca a Hokubo-sensei del salón como si fuese algo
completamente normal, y toma su lugar en la plataforma.
Aunque esta sería una escena anormal, se siente bastante
común para mí. A juzgar por la reacción de los demás, parecen
pensar lo mismo.
Un silencio sepulcral en el salón.
De pie en la plataforma, Otonashi-san abre su boca,
mirando hacia el frente.
- Ahora escribirán 「cierta cosa」para mí -, Otonashi-
san se baja de la plataforma y les pasa algo a los estudiantes de
la primera fila. Los estudiantes que aceptaron la cosa que les
dio, toman una hoja y lo pasan hacia los asientos de atrás; tal
cual suelen hacer con los folletos que tienen que distribuirse en
toda la clase.
Llega hasta mi asiento. Es una hoja común y corriente
de papel reciclado de unos 10 cm por cada lado.
- Cuando hayan acabado de escribir, devuélvanmelos
por favor.
- ¿Y qué es esa 「cierta cosa」?
Cuando Kokone pregunta en representación de toda la
clase, Otonashi-san simplemente explica:
- Mi nombre.
Con esto, la silenciosa clase finalmente comienza a
ponerse ruidosa. Bastante justo, tampoco lo entiendo. ¿Su
nombre? Todos lo conocen, se presentó como “Otonashi Aya”
esta misma mañana.
- ¡Qué estupidez! -, exclama alguien. Sólo una persona
podría decirle una cosa así a Otonashi-san: Oomine Daiya.
Mis compañeros quedan sin respiración todos a la vez.
Esto porque todos en la clase saben que no se debe convertir a
Daiya en un enemigo.
- Tu nombre es Otonashi Aya. ¿Por qué quieres que
escribamos eso?¿Tanto quieres que recordemos tu nombre?
Otonashi-san se mantiene firme aún frente a esa clase
de charla.
- Escribiría 「Otonashi Aya」, pero te lo acabo de decir
ahora, así que ya no hay necesidad de escribirlo, ¿no?
- Sí, no me importa.
Al parecer no esperaba una respuesta así de sencilla, y
se queda sin habla. Chasquea su lengua, destroza el papel lo
más ruidosamente que puede y abandona el salón de clases.
- ¿Qué ocurre? ¿No lo van a escribir?
Nadie pudo comenzar a escribir. Tal vez aún no lo
muestren en sus rostros, pero están sorprendidos y abrumados
por ella. Acababa de hablar con Daiya. Siendo compañeros de
Daiya, sabemos muy bien lo impresionante que es eso.
Nadie es capaz de hacer algo durante un rato, pero al oír
el sonido del lápiz de alguien escribiendo sobre el papel, el
mismo sonido comenzó a resonar desde varios lugares, como si
lo imitasen.
Probablemente nadie conocía la intención de Otonashi-
san. Pero eso no importaba, al final sólo hay una cosa que
podemos escribir. Sólo está el nombre 「Otonashi Aya」.
El primero en llevar su hoja a Otonashi-san es Haruaki.
Al ver que se pone de pie, varios compañeros lo imitan. La
expresión de Otonashi-san en realidad no cambia cuando
acepta el papel de Haruaki.
Probablemente es… la respuesta incorrecta.
- Haruaki -, pude llamar a Haruaki cuando venía hacia
mí después de intercambiar una o dos palabras con Mogi-san.
- ¿Qué sucede, Hoshii?
- ¿Qué escribiste?
- ¿Mm? Bueno, sólo podemos escribir 「 Otonashi
Aya」, ¿cierto? Aunque casi olvido poner la última letra -, dice
Haruaki mientras luce un poco desconsolado por alguna razón.
- … Sí, bueno, supongo que sólo hay eso…
- ¡No vaciles tanto y escríbelo ya!
- Pero, ¿en verdad crees que hizo esto para hacer que
escribiésemos su nombre?
En ese caso, no puedo encontrar mucho significado al
hacer eso.
Haruaki de inmediato responde con: - Por supuesto que
no -, confirmando mi sospecha.
- ¿Eh? Pero… tú escribiste 「Otonashi Aya」, ¿no?
- Sí… Escucha, Daiyan es tan inteligente que deja de
ser gracioso, ¿cierto? Bueno, pero contrastando, su carácter es
tan malo que tampoco llega a ser gracioso.
Cómo de repente cambió el tema, inclino mi cabeza.
- Y él dijo que simplemente escribiría 「 Otonashi
Aya」. Así que no pudo pensar en nada más. Claro, mi caso es
el mismo. Lo que quiero decir es que, bueno, no podemos
pensar en otra cosa, así que no podemos escribir otra cosa.
- Si no puedes pensar en otra cosa… no puedes
escribirla.
- Exacto. En otras palabras, esto no estaba dirigido a
nosotros.
Tengo la sensación de que las palabras de Haruaki
dieron en el blanco. Debería tener razón en esto.
En otras palabras, a Otonashi-san no le importa la
mayoría de sus compañeros, y hace esto sólo para la persona
que sí puede pensar en algo más.
Comprendo la razón de por qué Haruaki lucía tan
desconsolado. Quiero decir, se enamoró a primera vista. Puede
que haya actuado en broma, pero no conozco a nadie a quien se
haya confesado antes, así que iba más o menos en serio. Pero
ella no quiso ser su compañera. Su existencia estaba siendo
ignorada… tal como dijo Daiya.
- … Haruaki, eres sorprendentemente brillante.
- ¡Ese “sorprendentemente” está de más! -, reacciona
Haruaki sonriendo son amargura, mientras yo oculto la
vergüenza de haber dicho algo grosero.
- Nos vemos. Si no me voy ahora, seré asesinado por
mis senpais. ¡No, no estoy exagerando!
- Ah, está bien. Ve.
El más o menos fuerte equipo de béisbol parece ser
bastante exigente.
Miro mi hoja de papel en blanco. Estoy a punto de
escribir 「Otonashi Aya」, pero al final no puedo hacerlo.
Miro a Otonashi-san. No hay el menor cambio en su expresión
a medida que mira los papeles que le van pasando. Supongo
que en cada uno de ellos está escrito 「Otonashi Aya」.
—Alguien que no puede pensar en otra cosa no puede
escribir otra cosa.
- ……
Entonces, ¿qué se supone que escriba? Después de todo
logro pensar en algo más. Por alguna razón, el absurdo nombre
「Maria」viene a mi mente. No, estoy consciente de ello. Algo
malo ocurre conmigo. 「Maria」de entre todas las cosas… No
tengo idea de dónde salió este nombre. Si le pasase el papel
con este nombre, simplemente me rugiría algo como “¡Tienes
que estar bromeando!”.
Pero, ¿y si por alguna casualidad, es la respuesta que
está esperando…?
Después de cavilarlo mucho, comienzo a escribir
「Maria」 en el papel reciclado de 10x10 cm.
Me pongo de pie y me dirijo hacia Otonashi-san. Ya no
hay fila, parece que soy el último. Le paso mi hoja, nervioso.
Otonashi-san la acepta sin decir palabra alguna. Luego mira las
letras escritas allí, y su expresión cambia… y mucho.
- … ¿Eh?
¿Otonashi-san, quien no mostró ningún movimiento
cuando encaró al profesor o a Daiya, tiene sus ojos abiertos de
par en par?
- Fufufu… -, de repente se ríe. - Hoshino.
- Oh, recordaste mi nombre.
Me lamento el haber dicho eso de inmediato. Porque
cuando deja de reírse, frunce el ceño ante mí como lo haría ante
el enemigo de sus ancestros.
- … ¡Tú! ¡¿Te estás burlando de mí?!
Parece estar suprimiendo su ira, ya que habla con una
voz baja y profunda. Esperaba que me dijese eso, pero el tono
de su voz me toma por sorpresa.
Me agarra del cuello de mi camisa con toda su fuerza.
- ¡Wa! ¡L-Lo siento! ¡N-No es como si tratase de
burlarme de ti…!
- Entonces, ¿dices que puedes escribir una respuesta
como esa sin estar bromeando?
- … Este, bueno… Tal vez… tengas razón. Debo estar
bromeando.
Este puede haber sido el golpe de gracia. Sin soltarme,
me arrastra hasta la parte trasera del edificio de la escuela.
*
- Hoshino, ¿te estás burlando de mí? -, Otonashi-san me
presiona contra la pared del edificio de la escuela y me mira. -
No soy tan buena preparando planes, estoy consciente de ello.
Es una locura de plan, que es casi lo mismo que decir
“¡Culpable, entrégate!”. No, ni siquiera podrías llamarlo “plan”.
Y aún así… ¡¿por qué rayos tomas el cebo?! ¡Y esta ya es la
segunda vez que hago esto! ¡La primera vez lo ignoraste
completamente!
Quita su mano del cuello de mi camisa, pero sus ojos
son más que suficientes para mantenerme en el lugar. Me está
mirando mientras se muerde los labios y deja salir un suspiro.
- … No, perdí mi cordura porque finalmente encontré
un punto de apoyo usando un método tan ridículo. Pero sin
duda, la situación está mejorando, así debería estar feliz.
- … Claro, supongo. ¡Deberías estar feliz! Hahaha.
Otonashi-san nuevamente frunce el ceño ante mi
forzada sonrisa. Probablemente sea mejor quedarme callado.
- … No lo entiendo. De hecho, estaba pensando que tal
vez perdiste contra mi persistencia… pero, ¡¿por qué tienes un
rostro tan ignorante y tranquilo?!
Más que estar pensando en nada, no tengo idea de qué
estás hablando.
- Me ignoraste 2.600 veces. No importa cuántas veces
continúe esta interminable repetición, no me rendiré. Sin
embargo, sí me canso. Debería ser igual para ti, pero ¡¿cómo
puedes mantener tu compostura?!
¿Por qué debería…? No tengo idea de qué estás
hablando.
Al parecer, finalmente se da cuenta de mi perplejidad
ante sus palabras y me mira suspicazmente.
- … ¿Es que no eres consciente de esto?
- ¿Consciente? ¿De qué?
- … Muy bien. No importa si estás actuando o no, una
explicación no debería hacer mucho daño. Hm, cierto. Para
ponerlo en simple—Ya me he “transferido” 2.601 veces.
Caigo en un blanco asombro tanto como soy capaz.
- Si estás actuando, entonces eres muy bueno. Pero
ciertamente, si en verdad “no supieses”, pondrías una cara así
de tonta. Como sea, te explicaré lo que entiendo. Mh, cierto—
hoy es 2 de Marzo, ¿no?
Asiento.
- Sería cómodo decir que he repetido este 2 de Marzo
2.601 veces, pero eso no es verdad. Por esta razón utilizo la
expresión “Transferencia de escuela”, aunque no podría decir
que es apropiada.
- Haa…
- He sido enviada al 2 de Marzo a las 06:27 AM 2.601
veces.
- ……
- “Ser enviada” es la expresión correcta, desde mi
propia perspectiva, pero generalmente hablando no lo es. Así
que uso la expresión “Transferencia de escuela”, ya que es lo
más cercano a lo que en verdad sucede—
Otonashi-san ve que mi boca queda abierta y se rasca la
cabeza.
- ¡Ahh, cielos! ¡¿Cuán tonto puedes llegar a ser?! ¡Si
hay algún inconveniente después de las 06:27, simplemente lo
declaras 「vacío」, ¿o no?! -, me grita, hirviendo en su interior.
No, no… no hay nadie que pueda entender de inmediato
algo tan repentino, ¿o sí?
- … No lo entiendo muy bien, pero, ¿estás repitiendo lo
mismo una y otra vez?
Es justo en el instante en que lo digo.
- Ah—
¿Qué-? ¿Qué es esto? Presiono mi pecho, donde esta
fuerte y extraña sensación me ataca. Una inquietud… no,
“inquietud” no es suficiente. Es una sensación espeluznante,
como si tu ciudad fuese reemplazada con otra sin que nadie se
diese cuenta, sólo tú. No es como si mis recuerdos hubiesen
vuelto, no he recordado nada. Pero por alguna razón, puedo
sentir que esto “ya ocurrió”. Otonashi-san está diciendo la
verdad. Nada más que la pura verdad.
- ¿Finalmente lo entiendes?
- … E-Espera un poco -. Ella ha experimentado el 2 de
Marzo 2.601 veces. Sólo eso sería suficiente como para
confundirme, pero básicamente, Otonashi-san está declarando
esto: - … ¿Yo estoy provocando esto?
- Sí -, responde de inmediato Otonashi-san.
- ¿P-Por qué habría de hacer eso?
- Es imposible que conozca tu motivo.
- ¡No estoy haciendo esto!
- ¿Cómo puedes afirmarlo si ni siquiera estás consciente
de esto?
“¿Por qué yo?”, cuando estaba a punto de decir esto, me
doy cuenta: sólo hay un factor que hizo que se fijara en mí, y
ese es, que escribí 「Maria」 en el papel.
- De manera similar a ti, que no estás consciente de esto,
otras personas que, simplemente fueron arrastradas hasta aquí,
no tienen medios para recordar el pasado que fue declarado
「vacío」. En otras palabras, además de mí, sólo el culpable
sería capaz de escribir el 「Maria」 que mencioné en una
iteración pasada.
Pero recuerdo ese nombre. Tengo que admitir que es
impensable que un nombre como 「Maria」 apareciese de
repente sin razón alguna.
- No sé si sea efectivo, pero siempre trato de actuar de
forma que permanezca en los recuerdos de los demás. He
esperado a que el culpable, que también tiene recuerdos de
iteraciones pasadas que fueron declaradas 「 vacío 」 ,
cometiese un error. Pero, bueno, no tenía expectativa alguna.
- … ¿Desde cuándo sospechas de mí? Quiero decir,
específicamente me dijiste el nombre 「Maria」 en algún otro
mundo, ¿o no?
- No sospecho específicamente de una persona que luce
inofensiva como tú.
- ¿Entonces…?
- Hmph, pues claro que probé a todos, uno por uno, y
les dije este nombre, ya que mi tiempo es prácticamente
ilimitado.
Su tiempo es ilimitado. El tiempo que ha vivido
Otonashi-san es una cifra tan grande que ni siquiera podría
decir que es una metáfora.
Entiendo, su tiempo es prácticamente ilimitado, así que
ha llegado a este imprudente plan de hacer que la clase
escribiese su nombre. Con la leve esperanza de que alguien
escribiese 「Maria」. Aunque no tuviese esperanza alguna,
todas sus soluciones para abrirse paso, fueron desgastadas
durante esas 2.601 “Transferencias de escuela”, así que
probablemente fuese una simple forma de matar el tiempo
hasta que apareciese un nuevo plan. Incluso probar un plan
como ese es mejor para la tranquilidad mental que quedarse
haciendo nada. Después de todo, su tiempo podría continuar
para siempre.
Es por eso que Otonashi-san se enojó cuando caí con
esta trampa. Probablemente sea como cuando no puedes vencer
a un enemigo en un RPG, y por lo cual subes
desesperadamente de nivel, pero en realidad podías ganarle
fácilmente usando cierto ítem. Tal vez hayas conseguido el
objetivo, pero quieres que te devuelvan tu esfuerzo.
- Bueno, cortemos con esta charla inútil. Después de
todo, aún no se acaba.
- ¿Ah no?
- Claro que no. ¿O te parece que está arreglado? ¿Te
parece que la pesadilla consecutiva, la “Salón Rechazador”, ha
acabado?
¿El “Salón Rechazador”? Supongo que así llama a esta
situación repetitiva. Como sea, sólo hay una cosa que me
molesta.
- Bueno, puedo entender que me trates como el culpable
porque escribí 「Maria」. Pero, escucha, para empezar, ¿por
qué no te afecta el “Salón Rechazador”?
- No es como si no me afectase; en realidad también
puede afectarme. Si me rindiese y dejara de recordar, sería
capturada por el “Salón Rechazador” de inmediato, y
continuaría viviendo sin sentido en esta recurrencia
interminable. Es tan fácil como escupir en un vaso de agua que
está sobre tu cabeza. Seguiríamos experimentando eternamente
este día que rechazas.
- ¿Eso ocurriría sólo al olvidarse?
- Piensa en ello. ¿Hay alguna otra persona que podría
notar esta recurrencia, si hasta tú, el que la causó, no estaba
consciente de ella?
… Tal vez tenga razón. Y, cielos, lo ha repetido 2.601
veces.
- Ciertamente sería más fácil dejar de recordar. Pero eso
definitivamente nunca ocurrirá.
- … ¿Nunca?
- Así es, nunca. No es posible que me rinda. No importa
si tengo que repetirlo 2.000 veces, 20.000 veces, o un millón de
veces, superaré esta recurrencia y cumpliré mi objetivo.
2.000 veces. Pensando una vez más en ese número,
frecuentemente nos cruzamos con este “2.000” como unidad en
nuestras vidas diarias. Pero en si realidad tenemos que
juntarlos… Por ejemplo, un año tiene 365 días, cinco años son
1.825 días… y aún no serían suficientes.
Otonashi-san había excedido esa cantidad de tiempo.
- Hoshino, ¿tampoco estás consciente de la razón de por
qué produjiste este “Salón Rechazador”?
- ¿Eh? ... Ah, sí.
Fufu~ ya veo. Asumiendo que te estás haciendo el tonto
sólo para evadir esta pregunta, ciertamente hay un significado
detrás de esto. En ese caso, tu actuación es bastante buena.
- ¡N-No estoy actuando!
- Bueno, entonces te preguntaré—
Otonashi-san sonrió levemente.
- Hoshino, tú lo has—conocido, ¿verdad?
—¿A quién? … No es la pregunta que me hago ahora
mismo. Por cualquier razón. ¿A quién he conocido? No lo sé.
No puedo recordar. Pero aún así, lo entiendo.
He conocido a “*”.
¿Cuándo? ¿Dónde? Por supuesto que sabría tales cosas.
No es parte de mis recuerdos. Aún así, puedo sentir que nos
hemos conocido.
Intento recordar, pero la información está bloqueada de
mi vista como viendo a través de un obturador bajando a una
gran velocidad. ¡Atención! No se permite la entrada. Sólo
personal autorizado.
- Fufu~ Así que lo conociste -, se ríe. Ahora Otonashi-
san está convencida. Y yo también lo estoy.
Yo, Hoshino Kazuki, soy el originador que causó esta
situación.
- Él debería habértela pasado, la “caja” que te concede
un “deseo” -, repentinamente utiliza la palabra “caja”. Basado
en este contexto, esa “caja” parece ser la herramienta que
produce este “Salón Rechazador”.
- Ah, aún no te digo mi objetivo -, me dice Otonashi-
san sin parar de reírse. - Mi objetivo es—obtener la “caja”.
Luego su risa desaparece. Otonashi-san, quien está
convencida de que tengo la “caja”, me mira con el ceño
fruncido con ojos fríos y me ordena, - Ahora, entrégame la
“caja”.
De seguro tengo que tener la “caja”. No puede ser de
otra forma, ¿cierto? Pero, ¿en verdad está bien entregarle esta
“caja” que cumple cualquier “deseo”? quiero decir, Otonashi-
san ha soportado 2.601 repeticiones sólo para poder obtener
esta “caja”. Así que tiene un “deseo” que vale la pena tanto
esfuerzo. Quiere cumplir su propio “deseo”, aunque signifique
menospreciar mi propio “deseo” y robarla. Es como si... esta
fuese una—tenacidad increíblemente anormal.
Así es, esto es anormal. Otonashi Aya es anormal.
- … No sé cómo hacerlo.
Esto no es mentira, pero también es mi forma de
mostrar resistencia.
- Ya veo. Entonces, ¿me la entregarás una vez que
recuerdes?
- Bueno…
- Olvidar el cómo sacarla es un caso común. Pero sólo
lo has olvidado; en alguna parte, sigues sabiendo cómo hacerlo.
Es como montar en bicicleta: no puedes enseñarle a otros, pero
sabes cómo se siente. Sólo estás desconcertado porque no
puedes ponerlo en palabras.
- … ¿No hay alguna forma de acabar con el “Salón
Rechazador” sin sacar la “caja”?
Otonashi-san me lanza una mirada fría. - Así que no
planeas entregármela. ¿Eso es lo que quieres decir?
- N-No es eso…
Al ver mi obvio pánico, Otonashi-san suspira. - Veamos.
Supongo que el “Salón Rechazador” también acabaría si
aplastase la “caja” junto con su “dueño”.
- ¿Aplastarla junto con su “dueño”?
Con “dueño” probablemente se refiere al culpable que
posee la “caja”—en otras palabras, yo. ¿Aplastarla junto
conmigo? En otras palabras—
Otonashi-san reprime sus sentimientos y dice fríamente,
- El “Salón Rechazador” acabará si tú mueres.
*
¿Esta es razón suficiente para preparar un
「*******」?
¿Quieres decir que planeas hacer esto también, en caso
de ser necesario? En ese caso, por favor hazlo rápido, que sea
fácil de aguantar.
3 de Marzo. Mañana. Lluvia. Un cruce con una mala
vista.
He arrojado mi paraguas y mirado el 「*******」. Las
demás cosas no entran en mi vista. Ni el camión que se ha
estrellado en el muro, ni Otonashi-san, que sólo está allí, de pie,
son reconocidos por mis ojos. Un líquido rojo que fluye sin
cesar, tanto que la lluvia no puede limpiarlo.
Un cad****, al que le faltaba la mitad de su cabeza, que
tiene su cer**** esparcido. Un Cadáver. Un Cadáver. UN
CADáver. Un Cadáver CadáverCADÁVER. Un cadÁVER. Un
Cadáver CadáverCADÁVER. Un Cadáver. Un Cadáver. ¡Un
Cadáver!
El 「cadáver」 de Haruaki.
- —ah… -, eso que está frente a mis ojos me hace
vomitar apenas lo reconozco. Miro a Otonashi Aya. Está
inexpresiva, mirándome.
- … Haruaki.
¡Pero no te preocupes Haruaki! ¿Sabes? Todo esto será
deshecho, de todas formas. Esto será declarado 「vacío」 .
Convenientemente.
… ¿Oh? Tal vez…
¿Tal vez esta sea la razón de por qué estoy deseando al
“Salón Rechazador”…? ¿Porque estoy rechazando situaciones
de esta clase?
2.602ª vez
- Soy Otonashi Aya.
- —Ah.
En ese instante, una imagen roja aparece en mi mente.
Una imagen que ha sido enterrada en las profundidades de mis
recuerdos, aunque la acabo de ver. Y, como si mi cerebro fuese
tirado por un hilo conectado a él, los recuerdos del 2.601°
“Salón Rechazador” son sacados a la superficie.
Estoy tan anonadado de mí mismo que no puedo
suprimir el grito.
- ¿Mh? ¿Qué ocurre Hoshii? Parece que te duele algo,
¿estás bien?
Haruaki, que está sentado a mi lado, se preocupa por
mí.
Haruaki, que supuestamente había sido atropellado por
un camión, me sonríe.
Un malestar inevitable. Nauseas. La información se
expande, cubriéndome completamente, como si yo fuese su
presa y estuviese siendo devorado por ella. Mi mente no puede
aguantar la velocidad de la información y sucumbe ante la
presión.
Los recuerdos de la última vez se conectan con los de
esta vez.
Tan vívidamente, tan claramente—
- En verdad Aya-chan es demasiado linda. Me le
declararé.
—a causa del cadáver de Haruaki.
Y ahora él se enamora de ella a primera vista otra vez,
aunque lo haya hecho sufrir así.
Miro a Otonashi-san. En ese momento nuestras miradas
se cruzan. Me está mirando. Me está mirando con una atrevida
sonrisa.
… ¿Se supone que ese cadáver tenía que coaccionarme
a entregarle la “caja”?
En ese caso es demasiado efectivo al amenazarme
mostrándome un cadáver, implicando un “Te mataré”… y el
usar el cadáver de un amigo mío también me acorrala con
sentimientos de culpa. Otonashi-san está haciendo todo esto de
forma arbitraria. En teoría, hasta yo entiendo que no es mi
culpa, pero cuando veo un cadáver, esta teoría se ve minada y
mi corazón se destroza fácilmente.
Si supiese cómo, de seguro le regalaría la “caja” de
inmediato. Pero afortunadamente no sé cómo hacerlo.
…. ¿Afortunadamente? ¿En serio? Quiero decir, si este
es un ataque efectivo, Otonashi-san seguramente continuará,
hasta que mi corazón se destruya.
Otonashi-san baja de la plataforma y se acerca a mí,
hasta quedar a mi lado.
Manteniendo su mirada hacia adelante en lugar de
mirarme, murmura, - Parece que recuerdas.
*
Si continúa así me doblegaré.
Estoy consciente de que no resolverá nada, pero me
hice el tonto y huí de Otonashi-san. De alguna manera tengo
que pensar en una contramedida mientras la evito.
Es por eso que—
- ¿Esos son todos los detalles, Kazu?
—le pregunté a la persona más inteligente que conozco,
Oomine Daiya.
Daiya está apoyado en la pared del pasillo y claramente
está de mal humor. Probablemente porque mi explicación
utilizó todo el recreo entre la primera y la segunda lección.
- ¿Y? ¿Qué quieres de mí al contarme esta idea para
una novela?
Le conté todo de forma honesta, incluyendo las cosas
que me había contado Otonashi-san, sin omitir ni una sola parte.
Aún así, el problema era el mismo. Ya que no esperaba que un
realista como Daiya creyese en mi situación, la convertí en una
historia para una novela.
- Me preguntaba qué se supone que tiene que hacer el
「Protagonista」 de esta historia.
- Si lo pensamos de forma general, probablemente
tendría que oponerse a la 「Estudiante Transferida」.
Obviamente yo era el 「Protagonista」 y Otonashi-san
era la 「Estudiante Transferida」.
Ya que lo había puesto de esta forma, Daiya se da
cuenta de que la 「Estudiante Transferida」es 「Otonashi
Aya」 . Pero sólo muestra una sonrisa irónica junto a las
palabras, - Así que ella fue la modelo -, aparentemente
convencido de que esto sólo es ficción.
- Pero… no creo que el 「Protagonista」 pueda hacerle
frente a la 「Estudiante Transferida」.
- Supongo que eso es verdad en el presente.
La oponente es Otonashi Aya. Una persona que va tan
lejos como para “transferirse” 2.602 veces y hasta produce
cadáveres con el fin de obtener la “caja”. No creo que tenga
alguna opción de ganarle.
- Pero es posible que, más adelante, el 「Protagonista」
obtenga un poder que se compare con el de la 「Estudiante
Transferida」-, dice Daiya despreocupadamente.
- ¿Eh—?
Por supuesto que consulté a Daiya para hallar una
solución, pero lo hice con las mismas expectativas de encontrar
una aguja en un pajar. Honestamente, no esperaba que él
pudiese pensar en una solución que me arreglase las cosas.
- ¿Por qué reaccionas así? Bueno, entonces, ¿por qué el
「Protagonista」 no se puede comparar con la 「Estudiante
Transferida」?
- ¿Eh? Bueno—
- Ha~ah, no, mejor no contestes. Probablemente me
darías una respuesta aburrida y me irritaría.
… Tengo permiso para enojarme en esta parte, ¿no?
- La diferencia entre el 「 Protagonista 」 y la
「Estudiante Transferida」 es la diferencia en la información.
La 「Estudiante Transferida」 puede usar esta información
para mover al 「Protagonista」 como si fuese una marioneta.
Es sencillo, simplemente tiene que darle información favorable
al 「Protagonista」.
Eso es… cierto. Otonashi-san puede hacer cualquier
cosa conmigo tan pronto vuelva a olvidar la situación.
- Por otro lado, si él cierra el espacio entre sus niveles
de información, que es la razón principal de que no pueda
hacerle frente, podría arreglárselas y que funcione. Así que
sólo necesita deshacerse de esa desventaja.
- … ¡Pero eso es imposible!
Daiya forma una sonrisita ante mi murmullo. - Oye,
¿me dijiste que el 「 Protagonista 」 puede mantener los
recuerdos de la última vez?
- Sí.
- Si los recuperó de sí mismo, quien recuperó los
recuerdos de la última vez, es capaz de mantener los recuerdos
de la vez anterior a esa, ¿cierto?
- … Bueno, supongo que sí.
- Entonces, si recupera los recuerdos de la penúltima
vez, también puede mantener los de la antepenúltima vez. Si
recupera los recuerdos de la antepenúltima vez, también puede
mantener los de la vez anterior a la antepenúltima.
- … ¿Y…? Quiero decir, la 「Estudiante Transferida」
es capaz de reunir información durante esta vez. La diferencia
no puede ser 「 Estudiante Transferida 」 ya posee los
recuerdos de más de 2.601 repeticiones. ¿Qué va a cambiar
para el「Protagonista」 si obtiene los recuerdos de dos o tres
veces—
- Que repita 100.000 veces.
- … ¿Eh?
- No hay forma de cubrir la diferencia producida por
2.601 veces. Así que sólo hay que hacer que esa cantidad de
veces sea irrelevante. La diferencia de información entre
102.601 veces y 100.00 veces sólo es de un 2%, usando
matemática simple. Ya no sería posible llamarla “diferencia”.
Si el 「Protagonista」 repite esta cantidad de veces, obtendrá
los medios para oponerse a la 「Estudiante Transferida」 .
Luego tiene que utilizar la información obtenida y lo esfuerzos
del oponente para desgastar a la 「Estudiante Transferida」,
para debilitarla, para frustrarla y hacer que olvide los recuerdos
de esas iteraciones.
- Yo—
¿Cómo se supone que haga eso?
- … Pero, para empezar, él no sabe cómo mantener esos
recuerdos.
Es cierto, fui capaz de mantener los recuerdos esta vez,
pero sólo fue casualidad.
- Dijiste que la conmoción al ver un cadáver hizo que el
「Protagonista」 recuperase sus recuerdos, ¿verdad?
- Eso supongo… al menos.
No puedo pensar en alguna otra razón, y mi intuición
me dice que así fue. Fui capaz de mantener los recuerdos por
casualidad, porque vi el cadáver de Haruaki.
- Entonces es sencillo -, declara Daiya
despreocupadamente. - El 「Protagonista」 sólo tiene que
producir cadáveres por su cuenta.
- ¡¿Qué ray— -, quedo sin palabras por reflejo. -Hacer
algo como eso—
- Bueno, escucha. Supongo que ciertamente no es
razonable matar a alguien. Con tanta falta de ética, el
「Protagonista」 podría causar aversión por parte del lector.
Mi punto es que el 「Protagonista」 tiene que preparar algo
con el mismo impacto que el ver un cadáver.
- … Eso ciertamente… podría funcionar.
- En otras palabras, el 「Protagonista」 sólo tiene que
tener una tenacidad mayor por la “caja” que la que tiene la
「Estudiante Transferida」.
La campana suena. Daiya considera nuestra
conversación como acabada y se da vuelta.
- Volveré al salón. ¡Deberías ir de prisa también, Kazu!
- Sí…
Pero no tengo ganas de regresar al salón de inmediato, y
me quedo aquí. Daiya se aleja sin prestarme atención.
Suspiro.
- … De seguro tiene que haber una manera de mantener
mis recuerdos, pero—
—¿aguantar 100.000 veces? En teoría puede ser posible,
pero en la realidad no lo es. No hay forma de una persona
sensible pudiese soportarlo. Es como que a uno le digan “He
desarrollado un auto que alcanza los 10.000 Km/h, así que, por
favor, condúcelo por mí”. Aunque el auto pudiese conducir a
esa velocidad, mi cuerpo no podría resistir el peso y finalmente
se quebraría. Mi mente—no, la mente humana no está hecha
para soportar 100.000 repeticiones del mismo día.
Otonashi-san es un caso especial, si en verdad es capaz
de soportarlo. Por favor no me metan en la misma categoría
que este monstruo.
Pero, ¿esa es la única forma de oponerse a Otonashi-
san? ¿No sería mejor si simplemente ambos sacamos la
bandera blanca?
Dejo salir un suspiro una vez más, ya que no puedo
decidirme con algo así. Cuando miro hacia arriba, queriendo
volver al salón por ahora…
- —Ah -, reflexivamente levanto mi voz. - Haruaki…
¿Nos escuchó? No, su rostro en las sombras lucía muy
serio como para ser eso. Después de todo, sólo estábamos
hablando de una “historia de ficción”. En teoría.
- Francamente, al ser tu amigo, me dan celos cuando te
diviertes sin mí. Así que creo que está completamente bien que
me esconda y los espíe. Así que perdóname, - comienza,
declarándose a sí mismo inocente. A pesar de su tono de broma,
su expresión se mantiene seria, como estaba antes.
- Bueno, entonces, Hoshii -, se rasca la cabeza y me
pregunta:
- ¿Quieres probar matándome?
Mi respiración se detiene.
No tengo idea de lo que le hace decir esas palabras
inusuales.
Haruaki observa mi desconcierto por un rato. Ni
siquiera soy capaz de pestañear. De repente, con su boca forma
una sonrisa satisfecha y, al parecer, siendo incapaz de aguantar
más, estalla en risas.
- ¡Ah, no me digas que! — ¡Eso es cruel, Haruaki! ¡No
te burles de mí!
- ¡Ahaha! No, no. ¡¡Es que jamás hubiese supuesto que
tu reacción sería tan seria…!! ¡Increíble! ¡Hoshii, eres
demasiado gracioso! ¡Por supuesto que sólo bromeo, sólo
bromeaba!
Bueno, eso es lógico. No hay alguien que creyese que
una repetición como esa sucediese en la realidad.
- Cierto… una broma… por supuesto que es una broma.
- Por supuesto. Obviamente es una broma… Dejar que
me maten…
Sentí algo extraño con la última oración.
- … ¿Haruaki?
- ... Y, ¿cómo puedo ayudarte?
¿Ayudarme? ¿De qué está hablando Haruaki?
- Bueno, ya que de todas formas mis recuerdos se
perderán en el siguiente mundo, supongo que se limita a lo que
pueda hacer ahora.
Ah, ya veo—
Haruaki cree en el “Salón Rechazador”. Cree en la
historia que todos los demás pensarían que fue inventada.
- … Haruaki.
- ¿Qué ocurre, Hoshii?
- Este… este sólo es un escenario de ficción que inventé,
¿sabes?
Haruaki ríe y dándolo por hecho, dice, - Esa es una
mentira, ¿no?
- ¿Qué—
Ni siquiera puedo pronunciar las palabras para
preguntarle cómo se dio cuenta de eso. Quiero decir, ni siquiera
yo podría creer una historia tan absurda aunque me lo rogasen.
- ¡Wahaha! ¿Te impresiona esta profunda amistad mía
que logra que me trague una historia como esa sin dudar?
- Sí.
Cuando asiento, Haruaki parece ser tomado por
sorpresa por alguna razón.
- N-No… ¡No contestes tan francamente! ¡Harás que
me sonroje! -, se rasca la nariz tímidamente. - En todo caso,
Daiya también piensa que esta no es una historia de ficción,
sino que en verdad te está ocurriendo, ¿sabes?
- ¿Eh?… No, no lo creo. Quiero decir, estamos
hablando Daiya, el realista, ¿recuerdas?
Sin embargo, ahora que lo menciona, tal vez él haya
actuado un tanto inusual. Después de todo, cambió de lugar
para esta charla especialmente, y sacrificó su recreo. Si en
realidad pensase que sólo es una novela, me hubiese apartado
con algo como “Aburrido. No lo escribas.”.
- Está bien, probablemente no creyó tu historia tal cual.
Pero en verdad cree que te encuentras en esta situación en este
momento. ¡Lo sentí!
Ahora que lo pienso, el consejo de Daiya estuvo un
poco fuera de contexto, considerando que se trataba de una
novela. Claramente eligió las respuestas que yo quería.
- Para empezar hay una contradicción, Hoshii. Verás,
Aya-chan, quien es el motivo de la 「Estudiante Transferida」
llegó hoy. Llamaste a Daiya en el recreo después de la primera
lección. ¿Cuándo habrías tenido el tiempo para pensar en todo
esto?
- Ah—
Eso es completamente cierto.
- Creo que estás diciendo la verdad, y no sólo una
invención.
- … ¿Por qué?
- Está demasiado bien hecho como para ser una
invención tuya, ¿no? No hay forma de que tengas una
imaginación tan viva.
- Qué grosero…
- Bueno, pero aunque fueses un poco más brillante y
pudieses inventar esto en tan corto tiempo, seguiría creyéndote.
- … ¿Por qué?
- Porque somos amigos, ¿no?
Uwa, qué cosas está diciendo. Quiero decir, ¿cómo
debería… evitar el ruborizarme y reaccionar ante él si me habla
de este modo?
*
Haruaki frunce el ceño y pone una papa frita en su boca.
- Ya veo. Así que Aya-chan… no, Otonashi Aya puede
haberme matado…
Como sugirió Haruaki, fuimos a un McDonald’s. Dos
estudiantes en uniforme que se retiraron antes por enfermedad,
en un McDonald’s, a plena luz del día. Era inevitable el sentir
las miradas de la gente de alrededor y querer huir.
- Me pregunto si a Otonashi-san le importaría estar en
un McDonald’s a esta hora y en uniforme.
- Bueno, supongo que en el caso de Otonashi Aya, no lo
haría.
Haruaki escucha la historia de que podría haber sido
asesinado por la Otonashi-san de la cual se enamoró a primera
vista, y escupe su nombre con hostilidad.
- En otras palabras, se ha adaptado a esto a través de
más de 2.000 ciclos.
Otonashi-san se ha acostumbrado a que todo sea
declarado 「vacío」. De seguro ya no se altera por ninguna
cosa que ocurra en el 「Salón Rechazador」. Se ha adaptado a
esta situación anormal. ¿En verdad se podría decir que su
personalidad aún es normal? ¿La de esta Otonashi-san que está
tratando de matarme?
- ¿Se supone que este era un escape?
Mi corazón se detiene.
La repentina voz de la persona en la cual pensaba en
este mismo momento. No me puedo voltear hacia la voz detrás
de mí, soy incapaz de moverme, como si estuviese hecho de
cemento.
¿Cómo nos encontró? Ni siquiera le dije a Daiya.
Otonashi-san camina alrededor de mí y se detiene frente
mí. Sigo sin ser capaz de levantar el rostro.
- Te contaré algo bueno, Hoshino -, dice con una
sonrisa en su rostro. - Estoy viviendo este 2 de Marzo por
2.602ª vez. He pasado este tiempo junto a los compañeros de
clase que no han cambiado en lo más mínimo, ya que no
mantienen recuerdo alguno, y no están conscientes de esta
recurrencia -. Silenciosamente pone su mano sobre la mesa.
Eso es suficiente para hacer que mi cuerpo quedase tieso. - La
gente cambia. Sus valores también. Así que no es para nada
fácil predecir sus acciones. Sin embargo, es mucho más fácil
adivinar las acciones de ustedes, ya que están atrapados en un
callejón sin salida, y nunca cambian. Aún más, ya que es el
mismo 2 de Marzo, conozco tu patrón de conversación.
Hoshino, puedo predecir fácilmente el rango de acciones que
tomaría un estudiante de preparatoria pasivo como tú.
Sólo estoy experimentando la 「 diferencia de
información 」 que Daiya mencionó anteriormente. Pensé
vagamente que sólo era sobre información acerca del 「Salón
Rechazador 」 o de la “caja”. Pero no es sólo eso. La
información más crucial es la información sobre 「Hoshino
Kazuki」— o sea, yo. Y la información que necesito obtener
es sobre 「Otonashi Aya」. A eso se refería Daiya desde un
principio. Es por eso que dijo que la diferencia entre nuestra
información desaparecería a través de más repeticiones.
- ¿Entiendes? No puedes escapar de mí, Hoshino. Te
tengo a mi alcance. Podría aplastarte fácilmente. Pero si lo
hago, también aplastaría ese importante objeto que posees, esa
es la única razón por la que estás vivo. ¿Lo entiendes? Será
mejor que no me hagas enfadar.
Otonashi-san toma mi mano. - Quédate en silencio y
sígueme. Y luego obedéceme en silencio.
No está tomando mi mano fuertemente. Si lo intento,
debería ser capaz de sacudírmela de encima. Pero… ¿puedo
hacer eso?… imposible. Ya he sido capturado por Otonashi
Aya. ¿No doy pena? Estoy consciente de eso, pero es sólo que
no puedo… desafiarla. No sé cómo. Y a pesar de eso—a pesar
de desconocer algún motivo para desafiarla—mi mano se libera
del agarre de Otonashi-san.
- ¿Qué estás haciendo? -, dice Otonashi-san. No fui
capaz de sacarla de encima, así que sus palabras hostiles no
eran dirigidas hacia mí.
- ¿Que qué estoy haciendo?… ¡Ha!
Eran dirigidas hacia Haruaki, quien había separado
nuestras manos.
- ¡No te entregaré a Hoshino! ¿No puedes comprender
algo tan simple? ¿Eres idiota?
Las provocaciones de Haruaki son infantiles, pero su
rostro está rígido. Está mintiendo completamente. Él no
menosprecia de esa manera a la gente, para empezar.
Sin embargo, naturalmente, Otonashi-san no reacciona
ante su provocación.
- No estoy preguntando eso. Usui, parece que tú eres el
que no puede usar su cabeza. Tus acciones son inútiles,
insignificantes. Parece que has decidido salvar a Hoshino, pero
ese sólo es un sueño pasajero y frágil, a punto de desaparecer.
De todas formas, la próxima vez, habrás olvidado esa
determinación y vendrás corriendo a declararte ante mí en lugar
de considerarme tu enemiga.
Haruaki titubea ante estas palabras. Sabe que será de
esa forma. Si todo se reinicia otra vez, Haruaki olvidará
nuestras conversaciones de esta vez. Sin embargo, aunque sea
hostil hacia ella ahora, va a enamorarse a primera vista
nuevamente, y se volverá a declarar. Haruaki está dentro de un
callejón sin salida. Y aunque está enfrentado a tal verdad,
Haruaki aprieta su puño.
- ¡No, tú sigues siendo quien no puede usar su cabeza,
Otonashi! ¡Tal vez en verdad regrese a ser el “yo inconsciente”
cada vez! Supongo que no seré capaz de mantener mis
recuerdos, y no soy tan brillante como Daiya. Pero, ¿sabes
qué? Tengo bastante fe en mí mismo.
- No lo entiendo. ¿Qué tratas de decir?
- Dime, Otonashi. Es cierto que estoy en un punto
muerto y eso no cambiará, ¿cierto?
- Sí, es por eso que no puedes hacer algo.
- ¡Ha! ¡Es justo al revés, Otonashi! Si no voy a cambiar,
puedo poner las manos en el fuego por el yo del siguiente
mundo. Después de todo, seré exactamente la misma persona
que soy ahora. ¡Puedo imaginar eso sin problemas! Esos “yo”
van a creer en Hoshii cada vez que explique esta situación, y lo
ayudarán cada vez. No importa qué mundo sea, no abandonaré
a mi amigo Hoshii. Escucha y recuerda bien esto, Otonashi— -,
señala a Otonashi-san. - —Si haces de Hoshino Kazuki tu
enemigo, también harás que un inmortal esté en tu contra. ¡Yo!
Para ser honesto, su postura es cualquier cosa, excepto
firme; está fanfarroneando, y sus manos hasta están temblando.
Obviamente está inquieto, en especial porque normalmente
anda haciendo de gracioso ante todos. Las palabras heroicas le
venían tan poco, que ni siquiera parecía gracioso. Pero sus
palabras calentaron mi corazón más que suficiente. Quiero
decir, Haruaki lo está diciendo sin 1% de duda. Tampoco hay
alguna de sus exageraciones comunes. Haruaki lo dice dándolo
por hecho.
- ……
Por supuesto que Otonashi no está nerviosa, ni en lo
más mínimo, por su postura insegura. Pero tampoco objeta de
inmediato. Cierra su boca durante unos segundos, molesta.
- … Me cercas como si fuese la mala. ¿No estás
consciente de que es Hoshino Kazuki quien te arrastró hasta
este “Salón Rechazador”?
Las palabras de Otonashi-san son precisas y afiladas.
Haruaki recibe daño por cada una, pero aún así—
- ¡No confundiré a mi aliado sólo por eso!
Haruaki no cambia de opinión. Decididamente no
desvía su mirada de Otonashi-san, a pesar de tener miedo.
Esto no es bueno. Quiero decir, ¡el oponente es
Otonashi Aya! Ella no es quien está molesta cuando Haruaki la
declara como una enemiga eterna. Es Haruaki. La chica a la
cual se siente atraído cada vez va a ser hostil con él; sin razón
aparente. A partir de ahora, Haruaki sufrirá cada vez. Mientras
que ella, de seguro, no siente presión alguna al ser
menospreciada por él.
Sin embargo…
- He perdido mi interés -, Otonashi-san es quien desvía
la mirada primero y se da la vuelta. - De todas formas, todas
tus acciones se volverán insignificantes cuando llegue la
próxima vez -, escupe esas palabras, y se va.
Si no fuese porque ella fue quien lo dijo, habría sonado
como una pobre excusa. Pero no se oye para nada como eso.
En primer lugar, ¿cómo podría Otonashi-san perder contra él si
ni siquiera se preocupa por él? Por lo tanto, simplemente dijo
lo que pensaba. Sencillamente llegó a la conclusión de que
sería más conveniente hacer algo respecto a mí en una
situación más ventajosa. Otonashi-san no siente nada por
nosotros. Obviamente no siente miedo, pero no está enojada
con nosotros y tampoco nos desprecia.
Así que me pregunto—¿por qué?
No, lo sé. Sólo debe ser mi imaginación. Una
suposición errada. Un malentendido extremo. Pero, aún así, en
verdad, honestamente, sólo por un instante—
¿No parecía un poco—deprimida?
- Oye… Hoshii -, dice Haruaki con su mirada aún en
dirección a la puerta automática por la que salió Otonashi-san.
- ¿Crees que voy a ser asesinado?
“Imposible…”, es lo que casi contesto por reflejo. Pero
luego me doy cuenta de que podría ser como la última vez y
me quedo callado.
*
Como esperaba, estaba lloviendo el 3 de Marzo de la
2.602ª vez. Fui a la escuela un poco más temprano que la
última vez y evité el lugar del accidente, aunque era un desvío,
para poder prevenir el ataque de Otonashi-san… o, mejor dicho,
simplemente para no ver esa escena una segunda vez.
Cuando llego al salón, Daiya ya está allí. Se me acerca
cuando me ve.
- ¿Qué ocurre, Daiya?
Por alguna razón, Daiya no contesta de inmediato, mira
profundamente en mis ojos. Es bueno escondiendo sus
sentimientos, como siempre, pero esta vez, hay algo
obviamente diferente.
- … Sobre lo que hablamos ayer… -, Daiya habla
conscientemente de manera indiferente. Es sobre la 「novela」.
En otras palabras, es sobre mi 「situación actual」.
- Hay algo que me ha estado molestando. ¿Por qué la
「Estudiante Transferida」 no pierde sus recuerdos, a pesar de
que el 「Protagonista」sí los pierde?
No puedo responderle, porque no entiendo la razón de
por qué comenzó a hablar sobre eso.
- Hasta el 「Protagonista」—el creador del 「Salón
Rechazador」— pierde sus recuerdos. Aunque asumamos que
la 「Estudiante Transferida」 posee alguna clase de poder
especial, ¿no sería demasiado conveniente que
automáticamente conserve los recuerdos de las repeticiones?
Así que creo que sería mejor hacer que el 「Protagonista」 y
la 「Estudiante Transferida」 sean capaces de conservar sus
recuerdos empleando el mismo método.
- … Tal vez tengas razón.
Estoy de acuerdo sin pensar demasiado sobre el
significado de eso. Tal vez soy incapaz de captar las palabras
por completo porque sólo está hablando de una 「novela」.
- El 「 Protagonista 」 fue capaz de mantener sus
recuerdos porque vio un cadáver, ¿cierto?
- … Eso creo.
- El cadáver fue el resultado de un accidente con un
camión, ¿cierto? No hay forma de que la 「 Estudiante
Transferida」, quien ha vivido el mismo día por 2.602 veces,
no sepa sobre ese camión. Si la 「Estudiante Transferida」
puso sus manos en el accidente, entonces sin duda alguna fue
intencional. Es por eso que dijiste que el 「 Amigo del
Protagonista」 “fue asesinado”.
Asentí.
- Pero algo me ha estado molestando.
- ¿Por qué? ¿Mis pensamientos son extraños?
- No, para nada. Ciertamente es un ataque efectivo
contra el 「Protagonista」. Es decir, si puede darse por hecho
que mantendrá sus recuerdos. No hay razón para un ataque
exitoso si el 「Protagonista」lo olvida de inmediato.
- No entiendo lo que tratas de decir…
- El objetivo de la 「Estudiante Transferida」 es robar
la “caja” del 「Protagonista」, ¿cierto?
- Sí.
- Intenta pensar desde la perspectiva de la 「Estudiante
Transferida」. Finalmente encontró a la persona que estaba
buscando—al 「Protagonista」. Aunque ella podría haberse
quedado callada, abiertamente le explicó la situación al
「Protagonista」. Entre un oponente sin idea de lo que pasa, y
un oponente que fue atacado, por lo que está con la guardia
alta—¿a cuál es más fácil robarle la “caja”? Obviamente que al
oponente que no tiene idea alguna. Así que, ¿por qué crees que
la 「Estudiante Transferida」 le explicó la situación?
- Este… ¿porque la 「Estudiante Transferida」 pensó
que el 「Protagonista」lo olvidaría?
- Así es. Ella concluyó que no importaría. Eso que le
contó probablemente fue debido a algo como disipación;
también podrías llamarlo negligencia.
- Pero el accidente sólo pudo ocurrir intencionalmente,
¿no? Así que sólo podría ser un ataque contra mí…
- Supongo que fue intencional. Pero trata de pensar de
este modo: fue un imprevisto para la 「Estudiante Transferida」
que el 「Protagonista」 viese el cadáver.
En otras palabras, ¿el accidente tenía un fin diferente al
de atacarme?
Pienso una vez más en sus palabras.
- Ah—
Rápidamente miro el salón de clases. La 「Estudiante
Transferida」—Otonashi Aya—no está allí. Seguramente está
en ese lugar.
- Imposible… ¡eso ya no es normal!
- Por supuesto. No hay forma de que una persona que se
ha adaptado a 2.602 repeticiones seguiría mentalmente sana.
Otonashi Aya mató a alguien. No lo hizo para atacarme,
sino para mantener sus propios recuerdos.
Recuerdo. No quiero hacerlo, pero recuerdo. Que ese
accidente no sólo ha sucedido en la 2.601ª vez. Que ya puede
haberlo hecho en cada una de las otras 2.600 veces.
Entonces, ¿continuará matando para poder
“transferirse”? ¿Seré forzado a observar esto en silencio?
¿Haruaki será asesinado nuevamente esta vez?
- —¡Haruaki!
- ¿Mh? ¿Qué ocurre, Hoshii?
Haruaki acaba de entrar al salón de clases y está de pie
al lado de la puerta.
¿Qué significa esto? ¿Haruaki no es la víctima?…
Cierto, no es necesario que él sea el cadáver, ¿o sí?
- Bueno, suficiente con tu novela, Kazu… vayamos al
grano -, Daiya continúa sin preocuparse por Haruaki. - Parece
que hubo un accidente hace poco -, Daiya respira hondo y dice,
- Otonashi Aya fue atropellada por un camión.
- Eh— ¿Qué—?
Ah, ya veo.
Ni siquiera le importa si ella misma es la víctima.
4.609ª vez
- Haruaki fue atropellado por un camión.
5.232ª vez
- Mogi Kasumi fue atropellada por un camión.
27.753ª vez
Práctica de fútbol durante educación física.
Debido a que tengo sangrado nasal, estoy durmiendo en
el regazo de Mogi-san.
De repente comienzo a preguntarme sobre sus
sentimientos, por dejarme dormir en su regazo. ¿Tal vez está
tratando, aunque sólo sea un poco, de atraerme? No tengo la
más mínima idea; está inexpresiva, como siempre que le hablo
de forma casual.
- … Mogi-san.
- Dime.
- ¿En qué estás pensando ahora mismo?
- ¿Eh? -, Mogi-san ladea su cabeza, pero su respuesta
no parece venir. La única reacción que muestra ante mi
pregunta es un rostro perplejo.
Esto me hace cavilar un poco. Si es tan difícil reconocer
los sentimientos de la pareja, ¿puede realmente progresar el
amor? ¿Por qué me enamoré de una chica tan complicada? En
primer lugar—¿cuándo rayos me enamoré? Intento recordarlo.
- ……… ¿Eh?
- … ¿Qué ocurre? -, pregunta Mogi-san cuando dejo
salir un sonido repentino.
- ¡N-No… no es nada!
Probablemente mi cara no dice “nada”. Mogi-san está al
tanto de eso, pero no es capaz de preguntarme sobre el tema,
así que se queda en silencio sin decir nada.
Me pongo de pie sin previo aviso a Mogi-san.
- Ah, este… Parece que mi sangrado nasal se detuvo.
- … Mh.
Nuestra conversación acaba con estas sencillas palabras.
¿Por qué abandoné voluntariamente una situación tan
favorable? Tal vez esta bendición no vuelva a llegar una
segunda vez.
Pero—es imposible.
Verás, no importa cuánto lo intente—no puedo
recordar.
No puedo recordar. No puedo recordar. ¡No puedo
recordar!... ¡No puedo recordar cuándo me enamoré de ella!
¿Por qué me enamoré? ¿Cuál fue la causa? ¿O simplemente me
sentí atraído hacia ella antes de darme cuenta, sin siquiera una
ocasión especial? Al menos debería saber eso; es imposible que
lo olvidase, pero… no puedo recordar, no importa cuánto lo
intente.
No fue amor a primera vista, y, a excepción de que
somos compañeros de clase, no tenemos casi nada en común. Y
aún así, ¿por qué así, tan repentinamente? ¿O acaso fue un
completamente repentino despertar del amor?
- —Imposible…
Aunque es difícil de creer, es lo único en lo que puedo
pensar. Un completamente repentino despertar del amor.
- ¿Qué ocurre? ¿Estás bien?… ¿Deberíamos ir a la
enfermería?
Me pregunto repetidamente si esto no fue alguna clase
de error. Pero mientras más lo reconsidero, más real me parece.
No me sentía atraído hacia Mogi-san. ¿Hasta cuándo? Cierto—
—No me sentía atraído hacia ella hasta ayer.
- —Ah, ya veo.
Miro a la estudiante transferida que sólo está de pie en
medio del patio—Otonashi Aya.
¿Cuál la ocasión que me hizo sentirme atraído hacia
Mogi-san?—Ah, eso es fácil. No fue ayer. Pero hoy ya estoy
enamorado. Entonces, ¿cuándo fue?
Eso sólo fue posible—entre ayer y hoy.
Sólo durante las más de 20.000 repeticiones que han
sucedido debido al “Salón Rechazador”.
Ah, ya recordé. Aunque sólo un fragmento, pero
probablemente recordé más de lo normal. Aún así, sólo es un
fragmento, así que la mayoría de los recuerdos siguen perdidos.
He perdido el recuerdo más importante para mí—el
cómo me enamoré de Mogi-san. Y seguramente no lo
recuperaré. No puedo compartir nada con ella. Un amor no
correspondido por el cual no puedo hacer nada; no importa
cuánto tiempo pase, mis sentimientos sólo se volverán más
fuertes.
No, tal vez sea más que eso. Este amor podría
desaparecer tan pronto se acabe el “Salón Rechazador”. Quiero
decir, este amor ni siquiera debería existir sin el “Salón
Rechazador”.
Esto es extraño. Algo así es muy extraño. Este amor no
es de mentira. Pero, ¿este amor es una farsa que no podía
existir originalmente?
Una repentina ráfaga pasa justo antes de que acabe la
clase. Levanta la falda de Mogi-san. Me pregunto por qué, pero
tengo la leve impresión de que ya conocía esos calzones
celestes.
No, ya lo sabía. El hecho de que Mogi-san hoy está
usando calzones celestes. Y también el hecho de que Otonashi
Aya ha sacrificado a Mogi Kasumi más que a nadie para poder
mantener sus recuerdos.
Por lo tanto decido defender este “Salón Rechazador”.
*
Esta vez Otonashi Aya no se acerca a mí.
No, creo que la vez anterior fue igual. Sólo puedo
recordar levemente, pero ha sido de este modo durante un
tiempo.
Durante la hora de almuerzo, Otonashi Aya está sola,
masticando su pan cansinamente. Esta vez yo soy quien se
acerca a ella. Con sólo hacer eso, mi cuerpo se pone tenso y mi
ritmo cardíaco se acelera. El rechazo de Otonashi-san hacia los
demás ha creado una barrera gigante, lo suficiente como para
presionar por sí misma.
- … Otonashi-san -, me preparo y la llamo. Sin embargo,
Otonashi-san ni siquiera se voltea. Aunque es imposible que no
haya escuchado a esta distancia, así que continúo sin que me
importe mucho. - Tengo algo que hablar contigo.
- Yo no -, me rechaza sin pestañear.
- Otonashi-san.
Ninguna reacción. Simplemente continúa masticando su
pan sin entusiasmo.
Parece querer ignorarme sin importar lo que diga. En
ese caso sólo tengo que hacer que ignorarme sea imposible
para ella.
Cuando lo pienso, de inmediato viene a mi mente. - …
Maria -. El movimiento del masticar de su boca se detiene. -
Tengo algo que hablar contigo.
A pesar de esto, ni siquiera me mira, tampoco dice nada.
El salón de clases está completamente en silencio,
nuestros compañeros sólo nos miran aguantando la respiración.
Y finalmente, Otonashi-san parece haber perdido su
paciencia y suspira, - Jamás pensé que dirías ese nombre.
Parece que has recordado bastante esta vez.
- Sí, así que—
- Aún así, no hay nada que discutir contigo -, una vez
más comienza a masticar su pan sin ganas.
- ¡¿Por qué?!
Las miradas de nuestros compañeros se concentran en
mí cuando comienzo a gritar reflexivamente.
- ¡¿Por qué?! ¡¿No soy la persona de la que te tienes que
encargar?! ¡Entonces, ¿por qué no tratas de escucharme?!
- ¿“¿Por qué?”, dices? -, dice Otonashi-san
despectivamente. - ¿De verdad no lo sabes? ¡Ha! Cierto,
siempre eres un tonto y actúas de esta forma. No piensas por ti
mismo. ¿Por qué debería dejar que alguien como tú me haga
compañía?
- … Bueno, no sé qué haya hecho otras veces.
- ¿“Otras veces”? Qué estupidez. ¿Cuál es la diferencia
del “Tú” de ahora? ¿Eh? Eres el mismo, ¿no?
- ¿Cómo puedes afirmar eso? Tal vez voy a ofrecerte mi
ayuda. En ese caso—
- Virtualmente, no importa -, Otonashi-san escupe esas
palabras sin siquiera dejarme terminar. Estoy a punto de objetar
por reflejo, pero esta objeción es borrada por las siguientes
palabras de Otonashi-san. - Porque no me has hecho esta
propuesta sólo dos o tres veces.
- ¿Eh—? -, estoy tan atónito que mi rostro debe verse
extraño. Frunciendo sus labios levemente, Otonashi-san deja su
pan a medio comer y dice:
- Muy bien. De todas formas esta vez está llena de cosas
inútiles. Esta no es solamente la segunda o tercera vez que te
explico esto, pero deja que lo diga de todas formas -, Otonashi-
san se pone de pie y comienza a alejarse. No tengo más opción
que seguirla en silencio.
*
Como de costumbre, me lleva hasta la parte de atrás del
edificio de la escuela. Y como de costumbre, se apoya en la
pared.
- Diré esto ahora mismo, al principio. No tendré una
conversación contigo. Vas a escuchar mis palabras como un
idiota.
- … Puedo decidir eso por mi cuenta.
Digo eso para ser un poco rebelde, pero Otonashi-san
sólo me lanza una mirada fría.
- Hoshino, ¿sabes qué vez es esta? No, no lo sabes. Esta
repetición es la 27.753ª.
Es un número demasiado exorbitante.
- … ¿Contaste cada vez en especial?
- Sí, ya que no hay forma de afirmar esto una vez que
deje contar una sola vez. Si lo olvidase, perdería mi punto de
vista. Por eso sigo contando.
Ciertamente, es un poco tranquilizador si uno sabe
cuántos pasos lleva uno hacia un destino desconocido.
- He repetido esto todas esas veces. Ya he probado casi
todas las formas posibles de acercarme a ti. Estoy en una
situación en la que ni siquiera puedo pensar en algo que no
haya intentado.
- ¿Es por eso que crees que no tiene sentido hablar
conmigo?
- Sí.
- ¿Ni siquiera intentas convencerme de que te entregue
la “caja”?
- Hace mucho tiempo que me rendí respecto a eso.
- ¿Por qué? En alguna de estas repeticiones debe haber
habido un “yo” cooperativo.
- Sí, claro. Hubo veces en que me tratabas con
hostilidad, y también hubo veces en que cooperabas. Pero,
¿sabes qué? No importa. No entregabas la “caja” en ninguno de
los dos casos.
¿No entregaba la “caja” ni siquiera cuando estaba
cooperando?... Pero bueno, suena lógico. Si Otonashi-san
hubiese obtenido la “caja”, entonces este 「ahora」 dentro del
“Salón Rechazador” no existiría.
- Sólo para confirmar: es completamente seguro que yo
tengo la “caja”, ¿cierto?
- He estado dudando eso por mi cuenta constantemente.
Pero la conclusión siempre es la misma. Hoshino Kazuki es,
sin duda alguna, el “dueño”.
- ¿Por qué crees eso?
- No hay tantos sospechosos como tal vez creas. La
explicación tomaría demasiado tiempo, así que la resumiré. Es
imposible que los pocos sospechosos me engañen 27.753 veces.
Por lo tanto, el único “dueño” posible, eres tú. Es más, aparte
del “Salón Rechazador”, hay evidencia circunstancial
indiscutible, ¿o no?
Tal como dijo. He conocido al distribuidor de la
“caja”—“*”.
- Aún así, no sacas la caja, para nada. Mejor dicho, no
puedes sacarla. Te he reconocido como el “dueño” hace más de
20.000 veces.
- Entonces, ¿te has rendido?
¿Esta Otonashi-san que no escatima esfuerzos para
obtener la “caja”?
- No me he rendido. Simplemente no logro obtener la
caja. Imagina que estás buscando una moneda de ¥100 que
debería estar en tu billetera, pero no puedes encontrarla, sin
importar lo mucho que busques. Buscar en cada rincón de la
billetera es fácil. Aún así, no la encuentras. En ese caso,
imagina que esos ¥100 ya no están allí. De ese mismo modo,
en estas 27.753 repeticiones he llegado a la conclusión de que
「no puedo obtener la “caja” de Hoshino Kazuki」-, Otonashi-
san me frunce el ceño por un momento y se da vuelta.
- Bueno, la atracción secundaria acabó. ¿Todavía
quieres decir algo?
- … ¡Sí! Es por eso que quería hablar contigo, en primer
lugar -. Tengo que decirlo. Lo he decidido. He decidido
defender el “Salón Rechazador”. Haré de Otonashi-san, quien
ha venido a matar a Mogi-san—.
- Otonashi-sa—no, Otonashi Aya, te hago mi—
- —¿Enemiga?
- —¡¿Eh?!
Aquello que estaba a punto de decir con la
determinación de saltar al vacío, Otonashi-san lo adivinó por
adelantado. Y sigue sin estar interesada y sin mirarme.
Cuando ve que estoy sin palabras y conmocionado
desde el fondo de mi ser, Otonashi-san deja salir un suspiro. Se
vuelve hacia mí de mala gana.
- Hoshino, ¿aún no lo entiendes? ¿Cuánto tiempo crees
que he pasado junto al idiota que eres? Este sólo es otro patrón
que ya he repetido tantas veces que estoy aburrida. No hay
manera en que no vea a través de él, ¿o sí?
- ¿Q-Qué—
¿Ya he tenido una determinación así de fuerte
incontables veces? ¿Por qué acababa siendo insignificante
todas esas veces?
- Por cierto, también diré esto: aunque tus valores
básicos le daban forma a tu determinación de hacerme una
enemiga y luego trataban de mantener tus recuerdos cada vez;
al final revocarás esta hostilidad hacia mí. Estoy segura.
- N-No hay ninguna—
Después de todo, eso significaría que acordaría con ella
el matar a Mogi-san, significaría que elegiría borrar mis
sentimientos por Mogi-san.
- ¿No puedes creerme? ¿Quieres que te diga la razón
que he oído incontables veces de ti?
Me muerdo los labios.
Otonashi-san considera que la conversación se acabó y
aparta la vista.
- Estos valores básicos tuyos pudieron durar más de
20.000 repeticiones sin problema. Sólo te reconoceré eso.
Levanto mi rostro espontáneamente.
Acaba de decir que me 「 reconoce 」 , ¿cierto?
¿Otonashi-san dijo eso?
- Espera un momento -. Hay una cosa más que tengo
que preguntar sin importar qué.
Otonashi-san vuelve solamente su cabeza hacia mí.
- Has dejado de intentar quitarme la “caja”, ¿cierto?
- Sí. ¿No lo dije ya?
- Entonces… ¿qué planeas hacer desde ahora?
No hay cambio en la expresión de Otonashi-san. Me
sigue mirando sin apartar sus ojos. Soy yo quien aparta la
mirada, sin intención, ante su mirada extremadamente directa.
- Ah—
En ese instante… Otonashi-san se aleja sin decir nada,
sin haber respondido mi pregunta.
*
Otonashi-san no regresó al salón de clases después de
esto—tal vez se fue a casa.
Quinta lección, matemáticas. No puedo entender la
fórmula inmediatamente, aunque probablemente ya he oído de
ella un trillón de veces, y en lugar de eso, observo todo el
tiempo a Mogi-san. ¿En verdad la abandonaré? ¿De verdad me
desprenderé estos sentimientos por ella voluntariamente?
No, eso no es posible. No importa lo que haya pensado
el “yo” del pasado. El “yo” actual no renunciará a Mogi-san,
eso es todo lo que importa.
La quinta lección acaba. Luego de eso me dirijo de
inmediato hacia Mogi-san. Ella se da cuenta y me mira con sus
grandes ojos. Mi cuerpo se pone tenso como una piedra sólo
por esto. Mi corazón pierde su ritmo habitual, sólo con mirarla.
Eso muestra lo especial que es para mí lo que le voy a decir.
Una acción que seguramente no realizaría en mi vida cotidiana.
Pero no puedo evitarlo. No puedo pensar en otra forma de
mantener mis recuerdos. No puedo pensar en otra forme
además de declararme a Mogi-san.
- … Mogi-san -. Supongo que estoy poniendo un rostro
bastante extraño en este momento. Mogi-san me mira con
curiosidad e inclina su cabeza. - Este… hay algo que
quisiera—
「Por favor, espera hasta mañana」.
- —Ah.
Una imagen atraviesa mi mente. Una voz comienza a
reproducirse arbitrariamente. Es una sensación tan clara y
brillante, lastima como si un cristal se enterrase en mis ojos,
mis oídos y mi cerebro. Mi pecho late agresivamente, como si
fuese golpeado por un martillo.
N-No—
No quiero recordar. Aunque no quiera recordar, aunque
quería considerar que no había sucedido incontables veces, no
desaparece. Aunque puedo olvidar cualquier otro recuerdo
importante, este, en particular, no lo puedo olvidar.
Sí, así es—
Hace mucho tiempo—ya me había declarado a Mogi-
san.
- … ¿Qué ocurre?
- … Lo siento, no es nada.
Puse un poco de distancia entre Mogi-san y yo. Ella
levanta una ceja suspicazmente, pero no me pregunta nada más.
Regreso a mi asiento y dejo que mi parte superior caiga
y quede postrada en el escritorio.
- … Ya veo.
Ahora que lo pienso es obvio. Después de todo, he
repetido este día más de 20.000 días.
Me confieso a Mogi-san. Pero lo olvido. Así que me
confieso de nuevo. Pero lo vuelvo a olvidar. Con el fin de
resistirme al “Salón Rechazador”, he hecho esta declaración,
que ni siquiera quería hacer, una y otras vez, y lo olvidaba así
sin más.
Y cada vez recibía la respuesta que menos quería oír.
Siempre es la misma. Decididamente es siempre la
misma respuesta. Bueno, no hay forma de que fuese a cambiar,
Mogi-san no puede mantener sus recuerdos, y por lo tanto su
respuesta tampoco puede cambiar.
Esa respuesta—
- Por favor, espera hasta mañana.
Realmente cruel. Eso sí—ese mañana nunca llegará.
Obtener una determinación incomparable, armándome
de valor que originalmente no sería capaz de tener, llevando
mis nervios al límite—y aún así, estas honestas palabras mías
desaparecieron completamente como si nunca hubiesen
sucedido. Y luego, tal como ahora, tenía que verla a ella, quien
había perdido esos recuerdos de mi declaración incontables
veces, otra vez.
… Ya veo. No se convierten en vacío. Para comenzar,
no ha habido nada. Desde el inicio que no hay nada en este
mundo. No hay valor en un mundo donde todo lo que ocurre se
convierte en vacío. Igualmente no hay valor en las cosas bellas,
en las cosas feas, en cosas preciadas, cosas gastadas, cosas
amadas, o en cosas odiadas.
Por esa razón no hay nada, sólo vacuidad. La esquiva
vacuidad llamada “Salón Rechazador”.
Tengo nauseas. Estoy siendo forzado a respirar en un
ambiente así. Aunque siento el impulso de vaciar de aire mis
pulmones, no puedo, ya que no sería capaz de continuar
viviendo aquí. No puedo vivir sin respirar. Pero si continúo
respirando vacuidad, entonces mi cuerpo también quedará
vacío. Me volveré tan hueco como una esponja.
O—¿hace tiempo que ya es demasiado tarde para mí y
ya estoy vacío?
- ¿Qué ocurre, Kazu-kun? ¿Te sientes mal?
Cuando escucho una voz familiar, levanto mi rostro
lentamente mientras sigo tirado sobre el escritorio. Kokone está
de pie frente a mí, frunciendo el ceño.
- Eso me recuerda, tuviste sangrado nasal durante
educación física, ¿cierto? Esto podría ser causado por eso
también, ¿sabes? Si no te sientes bien, ¿quieres que vayamos a
la enfermería?
- No hay necesidad de preocuparse por él, Kiri. Apuesto
a que el origen es el regazo en el que durmió más que su
sangrado nasal. -, dice Daiya, quien está de pie a mi lado sin
que me diese cuenta.
- ¿Regazo…?... ¡Ah! ¡Ya veo! ¡Así que eso es! Vaaaya,
sólo es mal de amor…
Luego sonríe y me da una palmada en los hombros,
alentándome.
- ¡Pillín! ¡Pilluelo! ¿No es un poco atrevido,
considerando que se trata de ti? Por favor, no hagas cosas
maduras como el amoooor.
- Dominado por una seducción tan simple—qué ridículo.
- ¡N-No! Siempre me ha gust—
Me detengo a media oración. Ese fue un error verbal en
varios sentidos. Por ejemplo, admitiría mis sentimientos por
Mogi-san al decirlo, pero antes que todo—
- ¿Ha? No tenías sentimientos especiales por Mogi
hasta ayer, ¿o sí?
—no sería verdad.
De hecho, hoy me enamoré de ella. Al menos desde el
punto de vista de Daiya y los demás, era un despertar repentino
por mi parte. Y es por eso que nadie sabe de mi afecto por ella,
a pesar de que es claramente visible por mi actitud.
- Oye, oye, Daiya, parece que este sujeto acaba de
admitir su amor no correspondido por Kasumi. Uhihi -,
Kokone sonríe y le da un toque con el codo a Daiya.
- Sí. En el mejor de los casos tal vez me entretenga un
poco más.
- Uhehe… ¡después de todo, el amor de los demás es
entretenido! Mh, mh. No te preocupes. ¡Onee-chan te apoya!
¡Te daré mi consejo y te ayudaré! ¡Si te rechazan, hasta te
consolaré! Pero si tienes éxito, te mataré, porque eso me
irritaría.
- No te preocupes. Cuando los dos comiencen a salir, se
la robaré.
- ¡Uwaa, eso suena gracioso! ¡La desgracia de los
demás y enredos de un triángulo amoroso! ¡Magnífico!
Esos dos son realmente crueles al ignorar mi condición
inferior.
Bueno, pero afortunadamente XX no está aquí. Si él
estuviese aquí, entonces se colgaría de la oportunidad y llevaría
la conversación en una dirección que acabaría en—
- —¿Eh?
- ¿Mhh? ¿Qué ocurre, Kazu-kun?
- No, es que… me estaba preguntando dónde está. ¿Se
tomó el día libre?
- ¿De quién estás hablando? -, pregunta Daiya con un
rostro suspicaz. Eso es extraño. Creí que Daiya sabría de quién
estoy hablando cuando hablo de ese modo.
- ¿No lo sabes? Obviamente es—
—este… ¿quién?
¿Eh? ¡Espera un segundo! Yo… estaba a punto de decir
el nombre de cierta persona. Así que, ¿por qué no puedo
recordar sólo el nombre, sino tampoco su rostro?
- … ¿Kazu-kun? ¿Qué ocurre? ¿De quién estabas
hablando?
Me siento enfermo, como si hubiese tragado algún
semi-líquido como limo, que me hace querer arañar mi
garganta. Pero tengo suerte al aún ser capaz de sentir esa
repugnancia. Si me la tragase completamente y la desechase,
entonces XX desaparecería.
- ¡O-Oye… Kazu-kun!
No hay problema. Puedo recordar. Puedo recordarlo
gracias a esa repugnancia.
- —Haruaki.
El nombre de mi querido amigo. El colega que prometió
ser siempre mi aliado… Es sólo un poco, pero tengo la
esperanza. La esperanza de que sólo olvidase a Haruaki por
alguna razón. Pero en verdad soy un idiota, esa esperanza—
- Oye, Kazu. ¿Quién es ese Haruaki?
—jamás se cumpliría.
Aprieto mis dientes ante la sensación de irritación.
Daiya y Kokone fruncen el ceño ante mi extraño
comportamiento. Esos dos lo han olvidado, aunque lo conocen
desde hace mucho más, ya que son amigos de la infancia. El
hecho de que 「Haruaki」 ya no existe aquí se me entierra sin
piedad, y—
- Me voy a casa.
—es una herida fatal para mí.
Me pongo de pie, tomo mi mochila, les doy la espalda y
me alejo para abandonar el salón de clases. No puedo soportar
estar más aquí. ¿Por qué Haruaki no está aquí? Sé por qué. Lo
sé, Haruaki ha sido “rechazado”. ¿Por quién? Eso es seguro.
Definitivamente fue “rechazado” por el 「Protagonista」 que
causó este “Salón Rechazador”.
Malentendí todo. Creí que el “Salón Rechazador”
continuaría con el día a día por siempre. Qué ingenuo. Es
imposible que fuese así. El día a día se llama así porque fluye
constantemente. Si detienes el curso de un río, entonces el lodo
se acumularía y se tiñería oscuro. Es igual que eso. El
sedimento también se ha acumulado aquí.
Ha~ah, ya veo. Supongo que me di cuenta de este hecho
hace mucho ya. No importa cuánto lo repitiese, siempre re-
descubría este hecho, y así dejaría de ser hostil hacia Otonashi
Aya.
Otonashi Aya destruirá el “Salón Rechazador”. Y
sabiendo lo que sé ahora, ¿por qué la detendría?
La campana suena. Probablemente la mayoría de mis
compañeros de clase ya han vuelto a sus asientos. Así que,
antes de irme del salón, me doy la vuelta.
Un asiento vacío. Otro asiento vacío. Otro asiento vacío.
Y hay otro por allá. Ha~ah… Ya lo había adivinado, pero nadie
sospecha de la inusual cantidad de asientos vacíos.
*
Probablemente lo pude adivinar, pero no lo pensé
porque no quería admitirlo. Otonashi Aya ha llegado a la
conclusión de que es imposible recuperar la “caja” de mí.
En primer lugar, es fácil terminar con el “Salón
Rechazador” tan pronto conoces al culpable. Es con el fin de
retirar la “caja” que ella ha estado repitiendo estas 20.000 veces.
Así que… ¿qué debería hacer ella?
¿No es obvio?
Mis miembros vuelan mientras soy arrollado por el
camión. El ver mi familiar pierna derecha volando lejos de mí
luce extremadamente cómico para mí. De alguna forma, me
estoy riendo.
- Así que aquí se acaba.
Soy 「asesinado」. Me dejo ser asesinado.
- 27.753 repeticiones inútiles. ¿Así que esto acaba en
un completo desperdicio de esfuerzo? Tengo que… Tengo que
admitir que ahora hasta yo estoy cansada -. Para ser preciso,
aún no estoy muerto, sino que estoy tirado sobre un charco de
mi propia sangre, lo sé, moriré. No tengo salvación. Y,
efectivamente, he sido asesinado por ella. - ¡Ugh…! He pasado
una exorbitante cantidad de tiempo y lo que obtengo es esto.
¡Nunca he odiado más mi propia incapacidad más que ahora…!
-, murmura lamentándose amargamente. - Continuemos. Ya
que no pude hallar aquí la “caja”, sólo tengo que buscar la
siguiente.
Los ojos de Otonashi Aya ya no me están percibiendo.
No, de seguro nunca lo hicieron, en primer lugar. Desde el
inicio hasta el final, Otonashi Aya sólo ha estado mirando la
“caja” en mi interior.
¿Esto también será declarado vacío? No, no será así. Si
la “caja” llamada “Salón Rechazador” está dentro de mi cuerpo,
entonces sería destruida junto con mi muerte, y como mi
cuerpo fue aplastado por el camión, esta “caja” ya ha sido
destruida también.
No se repetirá más.
Ha~ah, qué ironía. Si esta es la única forma de acabar
con el “Salón Rechazador”, entonces la muerte es la única cosa
que ha sido decidida desde el principio. Bueno, naturalmente
está vacía. Este mundo de seguro era—el mundo después de mi
muerte. Pero con esto, nuestra lucha llega a su fin. Era una
lucha unilateral, sin sorpresas, pero aquí llega a su fin.
Sí… eso es de lo que estás convencida. ¿Cierto,
Otonashi-san?
Das pena. ¡Siento lástima por ti desde el fondo de mi
corazón, Otonashi-san!
Supongo que es porque me despreciabas todo el tiempo.
Si no, no habrías cometido tal malentendido. Es por eso que
este sin sentido ha continuado.
Escucha, Otonashi-san, habría sido lo suficientemente
sencillo si lo hubieses pensado un poco. Es imposible que una
persona normal como yo fuese el 「Protagonista」.
Quiero decírselo, pero eso ya no es posible. Ni siquiera
puedo mover mi boca. Mi consciencia se desvanece. Muero.
Y entonces—nada acaba.
Estoy en una escena que no puedo recordar afuera
de mis sueños.
He aceptado la “caja” de él.
- ¡Por favor, ten calma! Normalmente hay riesgos
con tales cosas, pero no hay ninguno con este. No perderás
algo preciado, ni su alma será arrebatada. ¿Sabes? No es la
característica especial de la herramienta lo que añade
componentes negativos, sino la naturaleza del humano que
la usa. Si la usas correctamente, tu deseo se volverá
realidad tal cual.
Si la usas correctamente—
Pero, ¿en verdad esa condición es tan fácil de
cumplir? No lo sé. No lo sé, pero aunque haya un riesgo,
sigue siendo una condición extraordinaria. Tal como tener
certeza de ganar la lotería. Por supuesto que hay una
posibilidad de destruir la vida propia con todo el dinero.
Pero normalmente no se considera ese riesgo, ¿no?
Así que por favor dime cómo es que una persona
puede no aceptar esta “caja”.
- —¿Qué significa esto?
Porque aquí hay alguien que la devuelve.
- ¿Te estás conteniendo? ¿No puedes creer en mis
palabras? O—¿me tienes miedo?
Todas y cada una, por supuesto. Pero esa no es mi
razón. Simplemente no necesito tal cosa.
Verás, mi deseo es que el día a día continúe. Ya
tengo eso sin usar la “caja”. Tal como un hombre con un
trillón de yens no desea un millón de yens. Por supuesto que
estoy consciente de su valor. Pero aún así, no tengo que
aceptar una cosa así de un hombre tan misterioso.
Así es. En efecto, rechacé la “caja”.
Por lo tanto—
Aunque sí desease por estas repeticiones para que mi
día a día continuase, es imposible que yo fuese el culpable.
27.753ª vez
*raspado* *raspado* *raspado* *raspado*—
Me pregunto qué será ese sonido. Es un sonido
extremadamente bajo y casi no logro oírlo sin agudizar mis
oídos. Pero es un sonido que no debería oír, que viene de mi
interior.
*raspado* *raspado* *raspado* *raspado*—
Hay un pequeño raspón siendo aplicado en mí.
¿Dónde?—bueno, el sonido de adentro, así que está raspando
mi interior, por supuesto.
*raspado* *raspado* *raspado* *raspado* *raspado*
*raspado* *raspado* *raspado* *raspado* *raspado*
*raspado* *raspado* *raspado*—
Aunque el sonido es muy bajo, a mí me parece
extremadamente alto, así que reflexivamente cubro mis oídos.
Pero el hacerlo sólo me permite oír mejor. Ha~ah, obviamente.
Por supuesto que puedo oír mejor dentro de mí cuando
bloqueo los sonidos exteriores. Así que ni siquiera soy capaz
de cubrir mis oídos. Nunca seré capaz de escapar del sonido
de mí siendo corroída.
Y duele. Como esperaba, ser corroído duele. Apuesto a
que así se siente cuando el corazón de uno se convierte en un
pez globo. Un continuo dolor de pinchazos. ¿Estos son
sentimientos de culpa? Y estaba segura de que era el primer
sentimiento que había perdido. Debo haber estado siendo más
testaruda de lo que pensé.
*raspado* *raspado* *raspado* *raspado* *raspado*
*raspado* *raspado* *raspado* *raspado* *raspado*
*raspado* *raspado* *raspado*—
Estoy siendo corroída.
Mi corazón.
Mi ser.
Ha~ah, si esto sigue así mi interior perderá su forma y
se desmoronará en pequeños pedazos, como virutas de madera.
Mhhm, no. Ya es—demasiado tarde, ya sólo soy pequeños
pedazos.
En estas 20.000 repeticiones, dejé de ser yo misma.
Estoy consciente de este hecho. No pude soportar el
aburrimiento, y perdí mi corazón. Ya ni siquiera me puedo
comunicar con otros apropiadamente.
Este mundo me está rechazando.
Bueno, era obvio. Este no es el lugar al que pertenezco
desde el inicio. Yo misma me clavé en él forzosamente. El
salón de clases de todos los demás siempre me está rechazando.
Sé cómo puedo conseguir la calma. Pero no haré tal
cosa. Eso porque—mi deseo aún no ha sido concedido.
… ¿Eh? Pero ya me he desmoronado en pequeños
pedazos. Entonces, ¿por qué no puedo conservar solamente
este deseo como tal? ¿Es posible, siquiera? Mi deseo fue
corroído junto a mi corazón. Como prueba—
—no puedo recordar este deseo.
- —Ahaha.
Me río intencionalmente. Cierto, no puedo recordar.
Ahaha, no puedo recordar. ¿Cuál era mi deseo? ¡Vamos,
déjame recordar! ¡Ahaha, deja de bromear conmigo! ¿Por qué
soporté todas estas repeticiones que no son más que una
tortura? Sólo me puedo reír. Aunque sólo puedo hacer eso…
Ha~ah, hace mucho tiempo que he olvidado cómo reír de
verdad, así que elevo mi carcajada sin expresión alguna.
Así que—podría terminarlo perfectamente.
Una conclusión extremadamente sencilla. Me pregunto
por qué no pude pensar en una cosa así.
Sólo tengo que matarlo. Así es, sólo tengo que matarlo.
Sólo tengo que matar a Kazuki Hoshino. Después de todo, él
es el origen de esta agonía. Si puedo conseguir la paz al
hacerlo, entonces sólo tengo que matarlo rápido. Pero en un
lugar que conozca.
Esta 「tenacidad」 mía que alguna vez se llamó mi
「deseo」 no me concederá un final.
27.754ª vez
Mi cuerpo rápidamente se volvió frío y luego vacío,
pero aunque eso significa que yo debería haberme vuelto vacío,
abro mis ojos, como siempre. Incapaz de soportar el frío que ya
debería haber pasado, me abrazo a mí mismo en la cama y
tiemblo.
Fui asesinado.
El 2 de Marzo de algún bucle.
Así es, aún si soy asesinado, el “Salón Rechazador”
continúa sin cambio. Ganando consciencia de esto, siento como
si de verdad me volviese vacío. No parece que el frío vaya a
desaparecer pronto.
No puedo aguantar quedarme aquí demasiado tiempo, y
por eso voy a la escuela temprano, sin tomar un desayuno
apropiado.
Afuera está el familiar cielo nublado. Mañana va a
llover. Me pregunto cuándo fue la última vez que vi al sol.
No hay nadie en el salón de clases. Bueno, es
completamente normal, ya que llegué una hora antes.
Una pregunta me llega repentinamente. ¿Por qué fui al
salón de clases tan tenazmente? Ya me he dado cuenta varias
veces de la repetición del “Salón Rechazador”. Incluso ahora.
Así que, ¿no puedo simplemente no ir a la escuela para resistir
a esta repetición?
No… ¡sí voy! Sí, voy. Si estoy sano, voy a la escuela.
Para mí, este es mi día a día. Es definitivamente algo que ni
soñaría con cambiarlo. Una acción que no cambiaría a ningún
costo; mantener mi vida cotidiana. Es mi única creencia.
Ah, ya veo. Tal vez esa sea la razón de por qué sigo
aquí. No entiendo la lógica detrás de todo, pero eso es lo que
siento, aunque acabe quedando solo en este salón de clases.
- —
Me muevo hacia el centro del salón y me subo al
escritorio de alguien con los zapatos puestos. En mi mente trato
de disculparme, pero cuando intento recordar de quién es el
escritorio sobre el que estoy de pie, no puedo recordar ni su
nombre ni su rostro. Aún así me siento culpable.
Miro a mi alrededor. No es como si esperase a que algo
fuese a cambiar sólo con pararme sobre un escritorio, pero no
hay nadie en el salón poco iluminado.
No hay nadie en el salón de clases.
No hay nadie en el salón de clases.
- … Mh, tengo un poco de frío -. Me abrazo a mí
mismo.
La puerta se abre con un sonido. La persona de afuera
de inmediato me ve de pie sobre el escritorio y frunce el ceño.
- … ¿Qué haces allí, Kazu? -, Daiya me lanza una
mirada incómoda.
Sólo con darme cuenta, mi rostro se relaja.
- … Ah, cielos, qué alivio. -, murmuro y me bajo del
escritorio. Daiya me observa mientras hago eso, sin dejar de
fruncir el ceño.
- Verás, el verte me alivia mucho, Daiya.
- … Pues, que suerte.
- Después de todo, eres el Daiya real.
- … Oye Kazu. Ahora mismo, por primera vez en mi
vida, estoy sintiendo terror de un humano.
- Pero, ¿sabes? Aunque seas el Daiya real, este mundo
sigue siendo una farsa del día a día. No puedo compartir nada
contigo. Al siguiente Daiya no conocerá al “yo” de ahora. Es
como si yo fuese el único afuera de la televisión. Sólo logro
conocerte de forma unilateral. Así que, ¿de verdad puedo decir
que estás aquí?
Es por eso que no hay nadie aquí.
—¿nadie?
- Ah—
No, eso no es correcto. Sólo hay una persona más. Sólo
hay una persona más que comparte recuerdos conmigo. Hay
una persona de la cual no puedo escapar mientras no deje de
mantener mis recuerdos.
Ha~ah, ya veo. Todo el tiempo sólo estuvimos nosotros
dos en este “Salón Rechazador”. Hemos estado todo el tiempo
al lado del otro sin ser capaces de huir, ni siquiera de intentar
hacerlo, en este pequeñísimo espacio del tamaño de un salón de
clases. Pero no tuve el privilegio de notarlo porque ella me
había estado viendo como a un enemigo.
Me siento en mi propio asiento. Ella se sienta a mi lado.
... No puedo creerlo. Sólo con imaginármela sentada allí,
me calmo un poco. A pesar de que ella fue quien me mató.
*
¿Es a causa de esto?
¿“A causa”? ¿Qué es “a causa”? No comprendo el
significado de esto. No puedo captar mis propios sentimientos.
Pero mi temperatura corporal decae aún más, rápidamente. No,
es peor. Mi cuerpo ya se ha enfriado completamente, y ahora
alcanza el cero absoluto, se congela, y por eso duele, y luego
queda completamente tieso.
- Soy Otonashi Aya. Mucho gusto.
La 「Estudiante Transferida」 actúa casi como una
verdadera estudiante transferida y sonríe suavemente,
pareciendo un poco avergonzada.
- ¿Qué rayos…? -. No puedo comprender el significado
de esto. No, para ser honesto, sí lo entiendo.
「— No es como si no me afectase; en realidad también
puede afectarme. Si me rindiese y dejara de recordar, sería
capturada por el “Salón Rechazador” de inmediato, y
continuaría viviendo sin sentido en esta recurrencia
interminable. Es tan fácil como escupir en un vaso de agua que
está sobre tu cabeza—」
—Una voz que ya había oído resuena en mi cabeza.
La miro en la plataforma, compruebo sus características,
llego a la conclusión de que tiene que ser ella, pero no puedo
creerlo.
¿Ella es—Otonashi Aya?
Sí, aunque ella reconociese que la persona que ha
estado persiguiendo por más de 20.000 “Transferencias de
Escuela” no era el culpable y todo lo que ha hecho hasta ahora
ha sido inútil, es imposible que se diese por vencida.
¡Imposible! ¡Es imposible que se diese por vencida!
Eso simplemente—no va con ella.
El número de nuestros compañeros se ha reducido a la
mitad porque fueron “rechazados”. A pesar de todo, todo el
mundo le está lanzando preguntas. Ella responde concisa y
sencillamente, pero de forma apropiada. No los rechaza
fríamente como lo hacía antes.
Casi como una verdadera estudiante transferida.
Esta escena no debería ser posible. Por lo tanto, es un
hecho falso. Una mentira. Todos son sólo una mentira. Todo es
mentira. Entonces… ¿Otonashi Aya también es una mentira?
—No.
—No.
- ¡No permitiré esto!
Todos los demás lo permiten, yo no. No permitiré que
Otonashi Aya se vuelva una farsante.
- … ¿Qué ocurre, Hoshino? -, me pregunta Kokubo-
sensei por alguna razón. Sólo entonces me doy cuenta de que
me había puesto de pie repentinamente.
Miro de reojo a Mogi-san. Las miradas de mis
compañeros están concentradas en mí, al igual que la de ella.
Pero como esperaba, soy capaz de adivinar lo que está
pensando detrás de ese rostro inexpresivo.
Seguramente no me dará una respuesta si le pregunto en
qué está pensando en este momento. Hemos pasado un largo
tiempo juntos en este salón. A pesar de eso, nuestra relación se
ha estancado. Tiene que llegar el día siguiente para que nuestra
relación se mueva más allá de sólo ser compañeros de clase.
Así es, Mogi-san no está allí. No hay nadie aquí. Es por
eso que… ya es suficiente.
Abandono a todos mis compañeros, quienes de todos
modos olvidarán mi extraño comportamiento. Sólo miro a
Otonashi-san. Camino hacia la plataforma sobre la cual está de
pie. La acción que realizaré es tan inusual en mí como la el
intento de declararme a Mogi-san.
Estoy de pie frente a Otonashi-san. Ella no muestra
ninguna señal de descontento, y me echa un largo y evaluador
vistazo. Me pongo extremadamente irritado por su expresión
que luce como si me viese por primera vez.
- Oye, ¿qué te ocurre, Hoshino? -, la voz de Kokubo-
sensei es serena, pero puedo reconocer la intranquilidad en ella.
Mis compañeros también preguntan cosas similares.
Los ignoro a todos y me arrodillo frente a Otonashi-san.
Bajo mi cabeza y le presento mi mano.
- ¿Qué estás haciendo? -, pregunta Otonashi-san en un
tono formal que jamás usaría para mí.
- He venido a encontraros -. ¡En ese caso también usaré
un tono formal!
- … ¿Qué estás diciendo?
- He venido a encontraros, milady Maria. Soy
Hathaway, aquél que juró protegeros, incluso si aquello
significase traicionar a todos los demás y convertirlos en mis
enemigos.
El ruido de la gente que nos rodeaba desaparece de
forma divertida. Sí, así es. Con el fin de recuperar a Otonashi-
san, el primer paso que tomo es hacerle entrar en cuenta de que
toda esa gente no existe. El estado actual debería ser fácil de
comprender.
Sin levantar mi cara, espero a que Otonashi Aya tome
mi mano. Espero sin moverme a que ella ponga su mano sobre
la mía para comenzar el baile.
Pero no resultó. Otonashi-san no tomó mi mano. En
lugar de eso, colapso hacia el costado, haciendo un ruido sordo.
- … Me das asco.
Ya que tenía mi cabeza agachada, no sé qué clase de
ataque fue ese. Pero tirado en el piso miro hacia arriba, hacia
ella, y finalmente entiendo lo que me ha hecho. Me dio un
rodillazo desde la derecha.
Ah, sí. Comprensible. ¿Por qué tuve la ingenua ilusión
de que tomaría mi mano?
- —Heh.
Sin duda, si en verdad es 「Otonashi Aya」, entonces
es imposible que fuese tan amable como para dejar que
tomase su mano.
- Ha, hahaha…
Aparentemente incapaz de aguantarlo más, Otonashi-
san se ríe, divertida desde el fondo de su ser. Probablemente
hasta un límite que no había visto hasta ahora en esas 20.000
repeticiones.
Aún estoy tirado en el piso, y mi cabeza me duele, pero
mis mejillas se relajan con alivio.
- Me has hecho esperar bastante, ¿no, mi amado
Hathaway? Me sorprende que te atrevieras a dejar que una
frágil dama como yo, que apenas puede levantar una cuchara,
esperase. ¡Nunca pensé que me dejarías sola 27.753 veces en el
campo de batalla!
Otonashi-san se inclina sobre mí y extiende su mano.
Toma la mía y tira con fuerza.
Sí, eso es. Así es como se supone que es Otonashi Aya.
- … Pero gracias a eso te has vuelto bastante fuerte.
Tomada por sorpresa, Otonashi-san abre sus ojos
ampliamente. Luego sonríe levemente de nuevo. - Tú, por otro
lado, te has vuelto bastante hábil con las palabras, Hathaway.
Con esas palabras, Otonashi-san me saca del salón
tirando de mí, sin dejar ir mi muñeca.
Ignorando la tutoría de grupo. Ignorando al profesor.
Ignorando a los estudiantes. Ignorando todo. Abandonamos el
salón de clases, ignorando todo lo que he abandonado.
*
Después de sacarme del salón, Otonashi-san me dijo
que me sentara en el asiento trasero de una gran motocicleta e
hizo que me pusiera un casco. Estaba bastante asustado por la
velocidad que nunca antes había experimentado y le pregunté
con voz agitada si tenía una licencia mientras sentía su
sorprendentemente delgada cintura (bueno, uno podría darse
cuenta de lo delgada que era con sólo mirarla, pero, de alguna
forma, inconscientemente demandaba fiabilidad de ella).
Respondió mi pregunta sin rodeos con: - Es imposible que
tenga una. Tenía mucho tiempo libre entre cada “Transferencia
de Escuela”, así que adquirí esta habilidad. Uso mi tiempo de
forma productiva, ¿no crees?
Tengo que admitir que su habilidad de conducción no
es para nada mala.
Cuando le pregunto si ha adquirido otras habilidades,
me contesta, - Por supuesto -. Conducir autos está dentro de lo
que esperaba, pero además de eso también aprendió artes
marciales, deportes, idiomas, varios instrumentos musicales, y
muchas más cosas. Hablando en general, probó todo lo que
pudo bajo las circunstancias del “Salón Rechazador”. Pero
Otonashi-san, quien aparentemente sería capaz de obtener el
puntaje máximo en el Examen Nacional Central para Admisión
Universitaria, declara: - Bueno, ya sabía casi todas esas cosas
antes de las “Transferencias de Escuela”.
Sus características básicas eran altas desde el inicio,
pero eso también mostraba cuánto tiempo había pasado en esas
27.754 veces. No puedo hacer el cálculo exacto, pero
convertidos a días acabarían siendo cerca de 76 años.
Alrededor de la esperanza de vida de un ser humano. Cuando
lo pienso de nuevo, sólo se me ocurre la increíble cantidad de
tiempo que es.
- Dime, Otonashi-san, tienes la misma edad que yo,
¿cierto?
Probablemente a causa de esos pensamientos, me entró
curiosidad sobre su edad real.
- … No, no tengo tu edad.
- ¿Eh? Entonces, ¿cuántos años tienes?
- Eso no importa, ¿o sí? -, contesta Otonashi-san,
levemente malhumorada. ¿Tal vez es algo que no le gusta que
le pregunten? Bueno, oí que no es educado preguntar a las
mujeres por su edad… En otras palabras, ¿está en una edad en
que eso aplica?
Pensando en eso, no hay forma de que una estudiante
tan madura estuviese en el mismo grado que yo. Solamente
eligió ser una compañera de clases debido a que esa posición
era útil para entrar al “Salón Rechazador”. ¿Tal vez ya esté en
una edad en que usar uniforme cuenta como cosplay?
- Hoshino, si estás teniendo pensamientos groseros, te
arrojaré de la motocicleta.
Ni siquiera me mira porque está conduciendo. ¡Qué
aguda es!
- A propósito, aprendiste a conducir una motocicleta
durante las “Transferencias de Escuela”, ¿cierto? En ese caso,
esta moto no es tuya, ¿verdad? ¿De quién es? ¿De tu padre?
No soy muy conocedor de motocicletas, pero esta no
parece hecha para mujeres.
- No sé.
- … ¿Eh?
- ¿No crees que es descuidado dejar una moto sola en
frente de la casa con las llaves puestas?
Bueno, también pienso eso, pero, espera, ¿qué? Eso
dignifica que…
- Además el cerrojo de la cadena estaba muy mal
construido y podía cortarse fácilmente con algunas
herramientas. Siempre es igual todas las veces que me
“transfiero”. Bueno, obviamente.
No preguntaré detalles. No sé nada. Sí, no tengo idea.
- Pero, dime, si pierdes tus recuerdos, entonces esta
habilidad de conducción, las otras habilidades y el
conocimientos que adquiriste también se perderán, ¿cierto?
Esa sería una verdadera pena.
- …… -, Otonashi-san no me responde.
- ¿Otonashi-san?
Sigue sin responder. Tal vez—
- ¿También crees que sería una pena?
¿Sería posible que no absorbiese todo ese conocimiento
y habilidades solamente para matar el tiempo? Hasta alguien
como Otonashi-san lamentaría perder todas esas habilidades
adquiridas. Por lo cual no quería perder sus recuerdos. Eso es
lo que pienso. Con el fin de producir este sentimiento de
“lamentación”, se dedicó a adquirir habilidades.
Lo que me recuerda—
Aunque algo tarde, comienzo a preguntarme…
—¿Por qué Otonashi-san actuó como si hubiese perdido
sus recuerdos?
Al final me lleva hasta el hotel con la apariencia más
lujosa de toda la zona, el cual, aunque no era de primera clase,
obviamente no era asequible para una estudiante de
preparatoria. Otonashi-san se registra como acostumbraba,
rechaza al botones que se ofrece guiarnos, y comienza a
avanzar con determinación.
Cuando llegamos a la habitación, Otonashi-san de
inmediato se sienta en el sofá.
Me siento en la cama mientras suprimo el nerviosismo
de estar en un hotel de clase alta… De hecho, sería una
situación sensacional estar a solas con una chica en un hotel,
pero siendo Otonashi-san la otra persona, sorpresivamente no
siento esa extraña tensión, ya que estar con ella parece
simplemente demasiado irreal.
- Vaya, debes ser rica, Otonashi-san. Bueno, la verdad
es que sí lo parecías.
- Si soy rica o no, no tiene nada que ver con esto. De
todos modos el dinero regresará cuando me “transfiera” otra
vez.
- … Ahora que lo mencionas, es cierto. Eso significa
que sería capaz de comprar todos los Umaibōs en la tienda de
abarrotes. ¡Genial!
- Eso no importa ahora. No vinimos a discutir cosas tan
insignificantes, ¿o sí?
- C-Cierto, ¿qué quieres discutir, específicamente?
- Las acciones que tomaremos a partir de ahora.
Después de todo, perdí mi orientación cuando resultaste no ser
el culpable.
- Lo siento.
- Corta el sarcasmo.
No lo dije con sarcasmo.
- Pero, bueno, entonces, ¿no sería mejor simplemente
encontrar al verdadero culpable? No me malentiendas; sé que
no es sencillo, pero, ¿no resultaría mejor ahora que has perdido
esa obsesión contra mí?
- Hoshino, he vivido 27.754 “Transferencias de
Escuela”, ¿estás consciente de eso?
- … ¿Qué quieres decir?
- Te he contado un poco sobre esta última vez, ¿no? Sin
importar cuánto te confundí con el culpable, no es como si no
hubiese dudado de otras personas. También traté de ponerme
en contacto con los otros sospechosos con la mentalidad de no
saber quién era el culpable aún… claro que probablemente fui
negligente hasta cierto punto, ya que te confundí con el
culpable.
- Pero, ¿no hallaste a otro posible culpable además de
mí?
- Sí. Ten en cuenta que esta es la 27.754ª vez. Esto
significa que el “dueño” de la “caja” es una persona que no se
ha revelado durante todo ese período de tiempo.
- Este… ¿sería posible que se dio cuenta de ti porque
actuaste demasiado descaradamente?
- Aunque se haya precavido de mí, sería imposible.
Estamos hablando de una cantidad de tiempo de 27.754 veces,
¿sabes?¿O dices que el “dueño” tiene la fortaleza e ingenio
para continuar escondiendo su identidad por tanto tiempo?
Bueno, pero también es verdad que no lo pude descubrir.
Cielos… el “dueño” sólo puede ser alguien que entre al salón
de clases, y aún así, ¿por qué no puedo encontrarlo?
- … Espera un poco. ¿A qué te refieres con eso de que
el “dueño” sólo podría ser alguien que entrara al salón?
entonces, ¿el “dueño” tiene que ser uno de nuestros
compañeros?
Eso me recordó que Otonashi-san mencionó que no
había tantos sospechosos la última vez.
- No. Los profesores y estudiantes de otras clases que
vienen a la clase 6 de primer año cada vez también son
sospechosos. El rango de este “Salón Rechazador” es, como su
nombre lo implica, sólo el salón de la clase 6 de primer año.
Sólo la gente que ha entrado a ese salón durante el 2 y 3 de
Marzo están involucradas en este fenómeno.
¿…….? Pero abandoné el salón y vi a varias otras
personas, de hecho.
- Tu cara me dice que no lo entiendes, Hoshino. En
primer lugar, ¿crees que en verdad sea posible hacer que el
tiempo regrese atrás?
- ¿Eh…?
¿Qué quiere decir? Si digo “no”, entonces el concepto
básico de todo esto no será válido, ¿o sí?
- … Pero, ¿no es eso lo que la “caja” hace posible?
- Supongo que sí. De seguro sería posible con la “caja”.
Pero estoy preguntando tu opinión. ¿Puedes creer ciegamente
en que esa cosa tenga el poder de regresar atrás el tiempo?
¿Crees que un fenómeno como ese es siquiera posible?
No tengo idea de lo que trata de decir.
- Creo que—
Así que sólo contesto a su pregunta honestamente sin
pensar en sus intenciones.
- —una vez que algo ha sucedido, no puede ser
deshecho.
Hasta yo he pensado 「Si pudiese regresar el tiempo…」
incontables veces ya. Pero asumiendo que hubiese una
máquina del tiempo, seguramente seguiría sin ser capaz de
creer en los viajes a través del tiempo. Probablemente ni
siquiera creería aunque viajase hacia el pasado y obtuviese una
prueba de que ese era el pasado. Probablemente ni de ese modo
lo creería.
No sé si esa era la respuesta correcta, pero Otonashi-san
asiente con un “Mhm”.
- Tu sentimiento es normal. Y, al parecer, el creador de
este “Salón Rechazador” también piensa como tú.
- … ¿A qué te refieres?
- La “caja” hace que los sentimientos internos se
vuelvan realidad completamente. De la cabeza a los pies. De
manera impecable. En otras palabras—incluyendo las dudas
sobre si viajar atrás en el tiempo se volvería realidad.
Comprendes lo que esto significa, ¿no?
- Este…
Querer volver en el tiempo, pero sin creer en ello. La
falta de fe probablemente distorsionaría la forma del deseo. Lo
entiendo.
- Pero, ¿no fuiste enviada al pasado, efectivamente?
- Hoshino. ¿Me referí a este fenómeno como 「ser
enviada de vuelta al pasado」 siquiera una vez?
No hay forma de que lo sepa, ya que he perdido la
mayoría de mis recuerdos sobre ella.
- Poniéndolo de forma sencilla: Si el “Salón Rechazador”
nació del deseo de regresar el tiempo hacia atrás, entonces es
imposible que mis recuerdos fuesen amablemente excluidos de
este fenómeno. Y, en primer lugar, si estas repeticiones fuesen
tan perfectas, ¿cómo es que me colé como una 「Estudiante
Transferida」? -, me mira de reojo. - Pues, como eres tú,
apuesto a que pensaste algo como “Para Otonashi-san, todo es
posible”, y dejaste de pensar luego de eso.
No puedo objetar, porque tiene razón.
- En pocas palabras, todo lo que hice fue entrar en la
“caja”. Por ejemplo, no fue por mi propia voluntad que acabé
siendo una 「 Estudiante Transferida 」 . Es una posición
asignada por la división de roles del culpable. El escenario del
“Salón Rechazador” es la clase 6 de primer año, así que
supongo que era la forma más natural de explicar que entrase
repentinamente; ya que soy de la misma generación que
ustedes. El sentimiento de equilibrio del culpable mantuvo la
consistencia.
- ¿……?
No tengo idea de qué está hablando Otonashi-san. ¿Por
qué es necesario mantener la consistencia?
- ¿Por qué tienes esa falta de comprensión…? Como sea,
lo explicaré se forma sencilla—Asumamos que el “Salón
Rechazador” es una película que el culpable está dirigiendo. La
grabación ha terminado, así que sólo falta la edición. Pero
debido a circunstancias de la compañía, hay un nuevo actor que
tiene que aparecer en la película, y ya no quedan más
personajes. Pero no es razonable no darle un papel, y en lugar
de eso mostrar a este actor estando de pie en la pantalla. Eso ya
no sería una película. Así que en lugar de eso, decide modificar
el guión lo mínimamente posible para poder darle un papel. A
eso me refiero con “mantener la consistencia”.
- En otras palabras no pudo hacer nada en contra de ti al
colarte y de algún modo tuvo que integrarte. ¿Así que fue
forzado a convertirte en una repentina 「Estudiante Transferida」
y mantuvo la vida escolar del 2 de Marzo de ese modo?
- Sí. Y sólo eso debería bastar para hacer que sientas
que hay algo mal con este “Salón Rechazador”. Es demasiado
molesto explicar cada cosa por separado, así que iré
directamente a la conclusión. Esta no es la 「realidad」, ni es
una repetición. Simplemente es un pequeño 「espacio」 aparte.
Sólo es un torpe “deseo” que se mantiene válido mientras el
culpable continúe confundiendo esto con un bucle temporal.
- Este… entonces, ¿es por eso que las repeticiones son
imperfectas?
- Exacto. El culpable, quien no cree que sea posible
volver atrás el tiempo, simplemente no le permite proceder. Lo
está rechazando. El “dueño” simplemente necesita seguir
“engañándose” a sí mismo.
- ¿Esta imperfección es la razón de que podamos
mantener nuestros recuerdos?
- Supongo. Las razones de por qué podemos mantener
nuestros recuerdos pueden diferir, pero indudablemente es una
brecha en el “Salón Rechazador”.
Pero aún hay algo que no puedo entender.
- Pero al final, ¿quién eres tú, Otonashi-san?
Otonashi-san frunce el ceño abiertamente. Tal vez era
una pregunta que quería evitar.
- Ah, no… no tienes que decirme si no quieres.
Sin embargo, abre su boca, aún con el ceño fruncido.
- No hay un nombre genial para mi posición. Sólo soy
una estudiante… o eso me gustaría decir, pero esto se aplicaba
hasta hace sólo un año… Mi posición, ¿eh? Nunca le he puesto
un nombre, pero, es verdad, tal vez haya una forma de
expresarlo. Yo soy—
Otonashi-san, luciendo bastante molesta, escupe las
siguientes palabras:
—una “caja” personificada.
- ¿Una “caja” personificada? ¿Qué quieres decir? -.
Cuando le pregunto repitiendo como un loro porque no
entiendo, Otonashi-san frunce el ceño aún más.
- Habrán obstáculos si te explico los detalles. Así que
no puedo decirte.
Estoy un poco descontento. Y al parecer esto se refleja
en mi rostro, por lo que Otonashi-san continúa después de
mirarme.
- Pero te diré solamente esto: Una vez obtuve y usé una
“caja”.
- ¡¡Eh—!!
- Y mi deseo aún se está cumpliendo.
¿Otonashi-san posee una “caja”?
- Tienes curiosidad por mi motivo para buscar la “caja”
de todas formas, ¿verdad? Muy bien, te dejaré saber. Mi “deseo”
sí fue concedido. Pero al mismo tiempo, perdí todo.
- … ¿Todo?
- Mi familia, mis amigos, mis compañeros de clase,
profesores, vecinos—perdí todo lo cercano a mí a causa de mi
“deseo”. Todo lo relacionado conmigo ya… no está aquí.
Estoy sin habla.
- ¿Esa no es… alguna clase de metáfora, sino literal?
- Sí. No puedo soportar dar todo por perdido así tal cual.
Es por eso que estoy tomando acción.
Ella lo ha perdido todo, ya no tiene qué perder. Ese
puede ser el por qué Otonashi-san puede ser tan testaruda y
temible en cierto sentido.
Como sea, desear una situación como esa, cielos, ¿qué
clase de deseo introdujo en la “caja?
- ¿No es posible destruir la “caja”? ¿El deseo no
quedaría sin efecto de ese modo?
- Hoshino -, dice Otonashi-san con un fuerte tono de
reprimenda ante mi duda reflexiva. - La “caja” está cumpliendo
mi deseo, ¿entiendes? No me hagas decir más al respecto.
Es cierto. Es imposible que Otonashi-san no pensase en
esta duda común y corriente por sí misma. En otras palabras, es
algo así: la “caja” ciertamente le había quitado todo, pero aún
así—Otonashi-san no quiere dejar sin efecto su deseo.
Cuando me quedo en silencio, Otonashi-san vuelve a
tomar el liderazgo.
- Mi “deseo” y el “deseo” de del “dueño” del “Salón
Rechazador” no pueden coexistir. La “caja” está hecha de ese
modo. Por lo tanto, se repelieron entre sí cuando me colé, y la
interferencia en mi contra fue reducida. Pero sólo 「reducida」.
Dicho de otro modo, yo tampoco puedo evitar el efecto del
“Salón Rechazador”. Ni siquiera sé cuánto me afecta. Si me
rindiese, también quedaría atrapada en el “Salón
Rechazador”… como ya te había dicho antes, ¿no?
Si ese es el caso, ¿qué piensa el “dueño” de Otonashi-
san? Al menos, no debe percibirla como algo agradable.
- Ya deberías haber comprendido la situación hasta
cierto grado, así que volveré al tema principal. Supongo que ya
no es posible retirar el “Salón Rechazador” y usarlo. Esta “caja”
ya ha sido utilizada por el “dueño”, así que está bien acabar
con el “Salón Rechazador”.
- Entonces, ¿cómo podemos hacer eso?
- Destruyendo la “caja” del “dueño”. O,
alternativamente, destruyéndola junto con el “dueño”. Algo así.
Otra posibilidad podría ser… encontrarlo a él, al distribuidor de
la “caja”, ya que tal vez él sea capaz de hacer algo. Pero no
debería estar dentro de la “caja”, así que esa no parece ser una
opción.
¿El distribuidor de la “caja”?
Estoy a punto de preguntarle sobre él—pero me detengo.
No recuerdo sobre este “*” a quien ya debería haber
conocido, y tampoco quiero hacerlo.
- … Así que nada ocurrirá mientras no encontremos al
culpable, ¿verdad?
- ¿Oh? ¿Nada ocurrirá, dices? Así que implícitamente te
quejas de que nuestra conversación hasta ahora ha sido
completamente inútil, poco constructiva y una pérdida de
tiempo, ¿no? Tienes agallas.
- ¡N-No! Sólo estaba confirmando…
- Hmph, entonces, ¿hay posibilidades de que con tu
conocimiento e ingenio puedas resolver este problema que ni
siquiera yo pude resolver? Estoy segura de que no dijiste eso
sin tener algo en mente, ¿verdad?
- Ugh… -, me estremecí. No había forma de que tuviese
una idea.
- Si supiese cómo, entonces no habría forma de que no
lo encontrara. Pero, es verdad… a diferencia de los demás, la
muerte del “dueño” no será perdonada dentro del “Salón
Rechazador”. Por ejemplo, he muerto incontables veces dentro
de él pero ahora estoy aquí y no he perdido mi “caja”.
- Pero, ¿es diferente para el “dueño”?
- Sí, exacto. El “dueño” y la “caja” están conectados.
En el instante en que el “dueño” muera, el “Salón Rechazador”
será destruido. Eso debería ser certero ya que pude confirmarlo
en un caso similar. La “caja” se romperá en el momento en que
el “dueño” muera; al mismo tiempo, las características del
“Salón Rechazador” serán aniquiladas, y el concepto de la
muerte será restaurado.
- Entonces, ¿se quedará muerto…?
- Exactamente.
- Entonces puedo afirmar que no soy el culpable. Y
también que, naturalmente, tú tampoco lo eres.
- Bueno, sí.
Entonces Mogi-san tampoco puede ser la culpable.
Quiero decir, Mogi-san ya se ha encontrado con ese accidente.
- Oye, algunos de nuestros compañeros han
desaparecido, ¿cierto? ¿Eso no tiene nada que ver con la
muerte?
- … No puedo decirlo con seguridad, pero no debería
haber relación alguna. Aún no conozco el propósito detrás de
esto, pero probablemente sea otra característica del “Salón
Rechazador”.
—¡Espera!
De repente me doy cuenta de una sencilla forma para
determinar al culpable.
Al mismo tiempo, la sangre se va de mi cabeza. ¿Qué
estoy pensando? Eso de demasiado despreciable. Pero…
pero—
Otonashi Aya. Ella podría hacerlo.
No debo decírselo. Pero, ¿por qué Otonashi-san no se
ha dado cuenta de este método? Es imposible que no se haya
dado cuenta. Pero no lo ejecutó. ¿Qué significa? ¿Qué significa
eso—
- Hoshino -. Me sobresalto cuando me habla. - ¿Qué
estás pensando? De seguro no pensaste en alguna forma para
encontrar a “dueño”—
Me sobresalto otra vez.
- —¿Así que sí pensaste en una, Hoshino?
- Ah, no—
- Es inútil ocultarlo. ¿Cuánto tiempo crees que he
pasado contigo? Te he estado persiguiendo más que a nadie en
este mundo. Aunque no por voluntad propia…
Estoy consciente de eso. Cualquiera se daría cuenta de
que estoy tratando de ocultar algo.
- —
Pero es imposible que se lo pueda decir así de fácil.
- Hoshino, hasta tú deberías saber que no soy una
persona muy paciente.
No es alguien que vaya a caer en una mentira aleatoria.
Aunque trate de evadir su pregunta, de seguro se me acabará
escapando el método, al final. Pero aún así—
- ¡¡Hoshino!!
Otonashi-san me agarra del cuello de mi camisa. Ah,
qué doloroso. Va en serio. Bueno, claro que va en serio,
después de todo, ha soportado más de 20.000 repeticiones sólo
para obtener la “caja”.
- ¡¡Dímelo!! ¡¡Dime ese método!!
Seguramente me lamentaré si se lo digo. Pero,
¿realmente puedo mantenerme en silencio en una situación así?
- … Sólo tienes que matar a todos nuestros
compañeros.
Por lo tanto, se lo digo.
Es sencillo. Si puedes excluir de ser sospechosas a todas
las personas que han muerto al menos una vez, entonces sólo
tienes que hacer eso. Sólo tienes que matarlos. Es bastante
simple y malévolo.
Pero la gente que muere aquí revivirá. No hay nada de
qué preocuparse. Jamás podría hacer una división así, pero
estoy seguro de que Otonashi-san está pensando de ese modo.
Después de todo, produjo cadáveres para poder
mantener sus recuerdos.
Pero, ¿en verdad no se le ocurrió esto? ¿Por qué no
pensó en esto como algo no sólo para mantener sus recuerdos,
sino también para rastrear al culpable? Y, asumiendo que lo
hizo, ¿por qué no llevó a cabo ese efectivo método si sólo
necesitaba repetirlo alrededor de 40 veces?
No responde.
No muestra reacción alguna.
Lentamente la miro a la cara. Otonashi-san aún me está
sosteniendo del cuello, y me mira sin pestañear.
- Eso—
Retira su mano de mi cuello en silencio.
- Eso—no es un método.
- … ¿Eh?
- Eso sería algo como una prueba científica en personas
vivas. Claro que la mejor forma es usar humanos si es que
quieres saber cómo se ven influenciados. Pero ese acto ni
siquiera debería considerarse como método, para empezar -.
Otonashi-san espeta esas palabras con voz baja y apartando la
mirada. - ¿Quieres saber por qué? No es necesario decirlo.
Porque ese acto es inhumano. En el momento en que alguien
haga una cosa así, ya no será humano… sí, ciertamente soy una
“caja” personificada. ¿Es a causa de eso? ¡¿Es por eso que tú—
Una inconfundible ira reside en los ojos de Otonashi-
san.
- —no me estás considerando como una humana?!
Ha~ah, ciertamente, si percibió mis palabras de esa
forma, entonces esa ira es comprensible. Me doy cuenta de que
fui desconsiderado.
Pero no puedo comprenderlo.
- Pero mataste personas para mantener tus recuerdos, ¿o
no?
- … ¿Qué dices?
Otonashi-san es aparentemente incapaz de soportar mis
palabras y me lanza una mirada penetrante.
- … C-Como dije, produjiste eventos que te causaran
una impresión para poder mantener tus recuerdos, ¿no?
- ¡¡Ya deja de insultarme—!! ¡¿No te lo acabo de
explicar?! ¡Sólo puedo resistir porque soy una “caja”!
Ha~ah, cierto. Que ella mantuviese sus recuerdos
produciendo cadáveres sólo era una teoría infundada de Daiya.
Aún así, no puedo entenderlo.
- ¿Por qué tienes esa cara? ¡¡Si tienes algo que decir,
entonces escúpelo ya!! -, Otonashi-san nuevamente me agarra
del cuello.
Ante su ceño fruncido, yo también frunzo el ceño.
Sí… No me había preparado a mí mismo. En realidad
no consideré lo que significaba fruncirle el ceño, lo que no era
un acto común para mí.
Estoy completamente bajo su control. Y sólo porque
estoy consciente de eso me estoy resistiendo de esta forma.
Pero digo algo que quiebra las cosas entre nosotros.
- ¡¡Entonces, ¿por qué me mataste?!!
Y entonces, las palabras entre nosotros se pierden.
*
Esas palabras quebraron irrevocablemente nuestra
relación.
Otonashi-san borró toda palabra o expresión hacia mí.
Por completo. Con una Otonashi-san así de pie frente a mí,
naturalmente no podía hacer nada, y, al final, no tuve más
opción que abandonar el hotel.
Holgazaneo cerca del hotel, pero lo hago sólo por
renuencia. Simplemente malgasto mi tiempo sin razón. Le echo
un vistazo a la moto “prestada” en la que vinimos, y me alejo.
Voy a una tienda de abarrotes y compro un té en botella PET.
Lo bebo poco a poco. Me doy cuenta de que casi no puedo
recordar lo que he bebido. Este debe ser el fin.
A diferencia de Otonashi-san, no tengo certeza de si
puedo mantener estos recuerdos. Si ella no me considera
necesario, tal vez olvide todo, y antes de que me dé cuenta,
seré lanzado afuera del “Salón Rechazador”. Y entonces
desapareceré de aquí como cierta persona.
No hay sonido en el camino. Y tampoco hay luces en la
calle, tampoco hay colores. Es casi como si la persona que hizo
todo esto no hubiese tenido tiempo para hacer todos los detalles.
Pongo la botella vacía en mi boca. Siento como si fuese
a ser tragado si no actúo como que estoy bebiendo. ¿Tragado
por qué? No lo sé.
De repente, la música de artista favorito resuena en el
silencioso camino. ¿Qué?... Ha~ah, ya veo, es mi teléfono…
¿mi teléfono? ¿Alguien me está llamando? Cierto. ¡Cierto! No
puedo recordar haberle dicho mi número. ¡No puedo recordar
haberle dado mi número a Otonashi-san, pero en algún mundo
debo haberlo hecho!
Saco el teléfono móvil del bolsillo de mi uniforme. El
nombre 「Kirino Kokone」 está en la pantalla de LCD.
Miro hacia el cielo. ¡Como si las cosas pudiesen ir así
de convenientemente! Lo sé. Pero no puedo evitar tener alguna
expectativa, ¿verdad?
Regulo mi respiración y contesto la llamada.
- Ah, hola… Kazu-kun.
No siento la aspiración normal en su voz. Aunque tal
vez sólo sea yo, ¿o Kokone siempre ha sido así hablando por
teléfono? Tal vez seamos íntimos, pero jamás había hablado
con ella por teléfono.
- Ah, este—
Tengo la corazonada de que ya conozco esta
conversación. Ah, no, de seguro la conozco. Simplemente no
puedo recordarla ahora mismo.
- ¿Puedes venir un momento? Te diré donde
encontrarnos.
¿Cómo iba esto? ¿Cómo es que continuaba?
- Hay algo que te tengo que decir, Kazu-kun.
3.087ª vez
Sí que amo los Umaibōs, pero la verdad es que no me
gustan tanto los con sabor a “Hamburguesa Teriyaki”.
Estoy en el desierto parque en frente de su casa.
Estamos mirándonos el uno al otro enfrente de la fuente de
agua mientras mastico el Umaibō que ella me dio.
- … ¿Cómo está?
- … Ehm, este… no es un sabor que no me guste, pero
bueno…
- … En realidad no estoy preguntando… por el Umaibō.
Ya sé eso, pero, quiero decir, ¿cómo debería
reaccionar?
- … Entonces, ¿saldrás conmigo?
No tengo suficiente experiencia con esas cosas como
para mantener la calma. Pero la compañera de clase frente a
mis ojos debería estar igual de nerviosa que yo. Al menos
nunca antes la había visto así. Tal vez sea por el nuevo rímel
del cual me había hablado esta mañana, pero sus ojos se ven
aún más grandes de lo usual. Y esos ojos me están mirando
fijamente… es imposible que evite una mirada así. No sé qué
decir, pero no puedo quedarme en silencio, así que abro mi
boca.
- … Entonces… ¿me amas?
El rostro ante mis ojos se sonroja.
- Tal… vez…
- ¿“Tal vez”? -, sin querer le pregunto de vuelta.
- … E-Es bastante malo de tu parte preguntar algo así,
¿sabes? Conoces mi respuesta, ¿cierto?... O… ¿O quieres que
lo diga?
- ¡Ah…! -, finalmente me doy cuenta de lo insensible
que fui y agacho mi cabeza avergonzado. - Lo… siento -, me
disculpo por reflejo.
Ella me mira con ojos respingones y murmura, - … Te
amo -. Luego junta valor y me dice directamente a la cara, - …
Te amo.
No puedo evitar desviar la mirada, porque su rostro me
deja atónito con su linda apariencia. Mi corazón
definitivamente está balanceándose—solamente por su muestra
de afecto.
Creo que se ve linda. Su personalidad también es
hermosa, y siempre está rodeada de personas. También sé que
muchos sujetos se le han declarado sólo para acabar siendo
rechazados.
Sería entretenido salir con ella, de seguro. Pero—
- Lo siento.
Pero contesto de esa forma. Así que claramente yo
mismo estoy sorprendido. Sé que lo que estoy haciendo es un
desperdicio, pero no puedo imaginarme a nosotros saliendo
juntos. No se siente realista.
Sus expectativas de desvanecen de sus ojos y son
reemplazadas con lágrimas. Aunque sé que esta es mi
responsabilidad, no puedo mirarla directamente. No puedo
decir nada, porque estoy seguro de sólo diría “Lo siento” si
comenzase a hablar.
- …… Titubeaste un poco, ¿verdad?
Asiento ante su murmullo.
- … Oye… te gustan los Umaibōs, ¿cierto?
Palabras sin contexto. También asiento ante ellas.
- ¿Pero no te gustan tanto los con sabor a
“Hamburguesa Teriyaki”?
- Sí…
- ¿Cuál sabor te gusta más?
- Este… “Crema de Maíz”, supongo -, no tengo idea de
por qué está preguntando esto, pero contesto algo incómodo.
- Ya veo. Uhuh, uhuh… -, asiente repetidamente. -
Ahaha… entonces fracasé.
Estos comentarios triviales suyos… no sé por qué, pero
por alguna razón esas palabras me llegan. Es como si estuviese
viendo un video pobremente editado.
- Digamos que la aproximación de mi declaración
hubiese sido diferente. Entonces, ¿habría sido posible que
aceptaras? -, dice mientras me miraba con el rostro hacia arriba.
No lo sé, después de todo estoy titubeando mucho. No,
eso no es verdad—sí sé. Ciertamente la rechazaría. Es evidente
que le daría la misma respuesta una y otra vez, a menos que las
condiciones, o yo mismo, cambien.
Mientras sea hoy, no puedo imaginarme saliendo con
ella. Por lo tanto, mientras sea hoy, es imposible que fuese a
aceptar su declaración.
- Tu cara me dice que no sabes.
No puedo responder nada. Pero ella toma esto como un
“Sí” y finalmente sonríe dulcemente.
- Ha~ah, está bien. Entonces, sólo tengo que continuar
declarándome hasta tener éxito, ¿cierto?
Esa podría ser una buena idea. De esa forma al menos
puedo tomar un poco de responsabilidad por rechazar sus
sentimientos. Pero aún así—tiene que ser después de hoy,
¿sabes?
27.754ª vez
Ciertamente estoy exhausto después del completo
quiebre en mi relación con Otonashi-san y la repentina llamada
de Kokone… aunque eso sólo es una excusa.
Se me había olvidado por completo que un accidente
sucedería con seguridad. Yo estoy a salvo. Reflexivamente
recuerdo eso debido a la inmensa conmoción que sufrí al morir
una vez, cuando voy cerca del cruce. Así que la auto-
protección no es un problema. Pero no es para nada
satisfactorio. Después de todo, eso significa que alguien más
será atropellado por este inevitable accidente.
Lo había olvidado, y a causa de eso, ya era demasiado
tarde para salvar a esa persona. Aunque sabía que alguien sería
arrollado, no lo detuve. “Porque lo había olvidado” ni siquiera
cuenta como excusa.
Soy horrible. Es igual como si hubiese matado a esa
persona.
Mogi Kasumi está allí.
La chica que amo está allí.
El camión está avanzando hacia ella a gran velocidad,
como siempre.
Soy incapaz de salvarla en mi posición actual. No
importa cuán testarudamente salga corriendo ahora, no seré
capaz de salvarla a esta distancia.
Va a mancharse de sangre. La chica que amo va a
mancharse de sangre. La chica que amo va a mancharse de
sangre por mi culpa. La chica que amo va a mancharse de
sangre, una y otra vez, con mi responsabilidad, una y otra vez,
porque sigo haciendo la vista gorda, una y otra vez.
- ¡¡U-UAAAAAAAAAAAAAAAAHA~AH!!
Corro hacia el camión. ¿Para salvar a Mogi-san? No.
Ciertamente no. Simplemente no puedo soportar mis
sentimientos de culpa y por eso quiero actuar como si hiciese
algo. Es meramente auto-satisfacción.
Horrible. ¿Cuán horrible puedo llegar a ser?
Entonces, lo veo.
- ¿Eh…?
La chica que ya no tenía esperanza alguna es lanzada
lejos.
No fui yo. Estoy muy lejos como para alcanzarla a
tiempo. Consecuentemente, sólo hay una persona que pudo
haberlo hecho.
Sólo la chica que continuaba luchando incluso cuando
yo abandonaba mis recuerdos y actuaba como si no la
conociese.
Aunque no llegaría a tiempo… a tiempo para salvarse a
ella misma.
Aún así, ella—
—Otonashi Aya, se precipitó.
Ah, cierto. Ya recuerdo. Ya había presenciado la misma
escena incontables veces.
Para ella, todo se repetirá, de todos modos. Hasta el
hecho de que salvó a alguien desaparecerá. Lo que quedará será
el recuerdo del dolor que sufrió hasta la muerte, el miedo de
encontrarse a la muerte. La desesperación que emerge al saber
que tendrá que pasar por lo mismo otra vez.
Y aún así, Otonashi Aya saltó frente al camión, para
poder salvar a alguien más de ser arrollado.
Una y otra vez. Muchas miles de veces.
Cierto. ¿Por qué sólo olvidé eso?
El fuerte ruido de un choque resuena, pero el camión no
detiene su curso, y destroza la muralla con un fuerte estruendo.
Me acerco a Otonashi-san aún sobrecogido por el estruendo. A
su lado, Mogi-san yace tiesa en la misma posición en la que
estaba cuando fue arrojada a un lado. Al parecer ha sufrido una
conmoción.
Miro a Otonashi-san. Su pierna está doblada en una
dirección anormal. Está cubierta de sudor frío, pero habla con
una resolución casi como si no estuviese herida.
- La última vez, te maté -. Aunque hablar debe ser
doloroso para ella, lo dice claramente. - Creí que todo acabaría
si mataba al “dueño”. No quería hacerlo, pero en ese momento
creí que esta era la única forma de salir del “Salón Rechazador”.
Acepté convertirme en algo menos que un humano, no quiero
admitirlo, pero no me importó en ese momento. Creí que la “yo”
que se convirtió en algo menos que un humano también se
reiniciaría y desaparecería después de salir del “Salón
Rechazador”.
Finalmente entendí por qué Otonashi-san actuaba como
si hubiese olvidado todo al inicio de esta vez. No podía
perdonarse a ella misma por aprobar mi muerte cuando me
encontré con este accidente. Tanto así que estaba por
abandonar el salir del “Salón Rechazador” y el obtener la “caja”
respecto a la cual es tan tenaz.
「 ¡¡Entonces, ¿por qué me mataste?!!」
Tanto que no fue capaz de objetar contra estas palabras.
¿Qué tan cruel he sido? Y no eran para nada verdad, siquiera.
La última vez, me precipité para salvar a Mogi-san y
morí debido al accidente. Creí que era culpa de Otonashi-san,
como siempre creí que la muerte de Mogi-san era culpa de
Otonashi-san.
A causa de este prejuicio solté algo como 「 Me
mataste」 . Debería haber notado este malentendido en el
momento en que negó el asesinato. En realidad, simplemente
fue incapaz de salvarme.
Por alguna razón, este accidente siempre sucedía.
Alguien era atropellado con certeza. Simplemente por
coincidencia fui yo esa vez.
- Mph, sólo puedo reírme ante mi propia estupidez. La
culpa no desaparece sólo con olvidarla. Y realmente el “Salón
Rechazador” no acabó y ahora tengo que lidiar con haberme
convertido en algo más bajo que un humano. No puedo pensar
en alguna situación donde la palabra “retribución” se aplicase
mejor -, mientras dice esto, Otonashi-san tose sangre.
- Otonashi-san, no tienes que hablar si te duele…
- ¿Habrá otra oportunidad para hablar? Ya me he
acostumbrado a este dolor. No es nada. Sólo es un dolor
momentáneo, así que es mucho mejor que sentir dolor
repetitivamente debido a alguna enfermedad.
¡A eso no se le llama “acostumbrarse”!
- No perdí mis recuerdos, ni salí del “Salón
Rechazador”. Fufu… probablemente ya lo sabía. Que no sería
liberada de él.
- … ¿Por qué?
- Es simple. Sé que mi tenacidad no me liberaría así de
fácil.
Otonashi-san se pone de pie vacilantemente, aunque
podría quedarse acostada allí, pero supongo que no puede
soportar que la mire desde arriba.
Su pierna izquierda no funciona para nada. Otonashi-
san tose sangre violentamente, pero luego se pone para derecha
usando el bloque de pared como soporte y me mira.
Probablemente a causa de que Otonashi-san se movió,
Mogi-san, quien había estado petrificada e inexpresiva,
comienza a moverse también. Luego me mira tímidamente.
- ¿Estás bien, Mogi-san?
- … ¡¡HII!! -, grita repentinamente. - ¿D-De qué han
estado hablando… justo ahora…? No, no sólo ahora, desde
ayer… ¿qué son ustedes dos?
… ¿Qué? ¿A quién estás mirando con esos ojos? ¿A
quién estás mirando con esos ojos asustados?
… Ya sé. Yo soy al que está dirigida su mirada.
De alguna, forma soy incapaz de dejarla sola, e
inconscientemente alcanzo sus mejillas.
- ¡N-No me toques!
Ha~ah… tienes razón. ¿Qué estoy haciendo? ¿Por qué
me acerco a ella por error, a pesar de que yo soy el que la
asusta? ¿O acaso pensé que eso la calmaría? ¿Siquiera pensé
que sería capaz de calmarla?... No hay forma de que fuese
capaz de eso.
- … ¿Qué… son…?
Aprieto mi puño. No puedo explicarle nada, así que no
tengo más opción que soportar su estado. Me encantaría
explicarle toda la situación ahora mismo. Tal vez me
entendería. Pero—no debo hacerlo.
Después de todo tengo que luchar. Tengo que luchar
contra el “Salón Rechazador”. Y por ese motivo tengo que
rechazar la vida cotidiana producida por el “Salón Rechazador”.
Llegué a esa determinación cuando tomé la mano de Otonashi-
san, aquella vez. Lo rechazo. Que Mogi-san un día sonrió ante
mis palabras, que se sonrojó frente a mí, que me dejo dormir en
su regazo—rechazo todo eso.
Mogi-san se rinde en tratar de entenderme cuando me
quedo en silencio, y se pone de pie, aún asustada. Da un paso
hacia atrás con las piernas temblando mientras nos mira como
si orase para que no fuéramos a perseguirla. Luego, se escapa.
La miro desde atrás. Y me aseguro de no desviar mi
mirada, porque se supone que este es el resultado que deseo.
- —Capto lo determinado que eres -, dice Otonashi-san,
aún apoyada contra la pared, luego de mirarnos. - Por lo tanto,
también he llegado a una determinación. Abandonaré mi
objetivo de obtener la “caja”.
- … ¿Eh?
Esto me preocupa. Definitivamente me preocupa.
Necesito el poder de Otonashi-san.
Sin pensarlo mucho más, abro mi boca para detenerla, y
justo cuando lo hago…
- —Por lo tanto, te daré una mano.
- … ¿Eh?
No esperaba eso.
¿Darme una mano? ¿Otonashi Aya me dará una mano?
- ¿Por qué estás embobado como un completo idiota?
Acabo de decir que te daré una mano. ¿No pudiste oírme?
Pero eso es tan imposible como que el sol salga por el
oeste y se esconda en el este.
- Perdí mi rumbo. Tal como criticaste, me convertí en
un ser más bajo que un humano al matarte. No, aún peor. Soy
una cobarde que abandonó su propio objetivo e intentó huir
porque no quería admitirlo. Para decirlo de forma sencilla, me
rendí una vez ante el “Salón Rechazador”. Y continúe huyendo
mientras me decía a mí misma que no había nada más que
hacer para alguien como yo que solamente es una “caja”
derrotada.
Aunque se está degradando a sí misma, el brillo en sus
ojos sigue siendo afilado. Estoy un poco aliviado.
- Pero no hay razón para titubear. Ciertamente hice algo
como para estar avergonzada, pero no hay razón para
deprimirme por algo como eso. Nada saldrá de las
lamentaciones. Por lo tanto, ya no huiré más. Así que—
Cierra su boca una vez, titubeando al finalizar su
oración.
- Así que, por favor—perdóname.
Ha~ah, ya veo. A eso se refería. Supuestamente este
extraño discurso era una disculpa ante mí. Esta petición es
completamente insignificante.
- No puedo perdonarte.
Otonashi-san parece sorprendida por un instante ante
mis claras palabras, pero de inmediato regresa a su cara seria.
- Ya veo… ciertamente ser asesinado no es algo que se
pueda perdonar. Lo entiendo.
- No es eso.
Otonashi-san frunce el ceño al no poder comprender
mis palabras.
- Lo que quiero decir es que… no sé qué es lo que
tengo que perdonar.
Así es. No es como si no le fuese a perdonar.
Simplemente no la puedo perdonar, porque no hay algo que
necesite ser perdonado, para empezar.
- … Hoshino, ¿qué estás diciendo? Yo…
- ¿Me mataste?
- … Así es.
- ¿Qué tonterías son esas? -, sonrío espontáneamente. -
¡Estoy aquí! -. Cierto, este es un hecho certero. - Estoy aquí,
Otonashi-san.
Sin importar cuánta responsabilidad sienta ella, no es
algo que no pueda ser deshecho.
De todas formas, no entiendo por qué siente una
responsabilidad tan fuerte. No es la creadora del “Salón
Rechazador”, después de todo. Otonashi-san simplemente se
vio envuelta en él—
—no, eso no es correcto.
Otonashi-san no es sólo una víctima. Es una soberana
que captó nuestras personalidades y leyó a través de nuestros
patrones de conducta. Sabe cómo se expandirán las ondas en el
agua al arrojar una piedra a cierto lugar. Es una soberana, al
menos en el mismo grado que el creador mismo del “Salón
Rechazador”. Pero a causa de este poder, se siente responsable
por las cosas que ocurren, porque cree que las cosas pueden
prevenirse si actúa correctamente.
Por lo tanto, ya que no pudo, y tampoco previno la
muerte de alguien, se siente como si ella misma fuese la
asesina. Pero Otonashi-san lo dijo: la muerte en el “Salón
Rechazador” sólo es aparente.
- En realidad no me importa. Pero si insistes en ello,
¿qué tal si usas cierta palabra más adecuada?
Otonashi-san no se mueve por un rato, y sigue
frunciendo el ceño. Cuando creo que va a moverse otra vez,
mira hacia abajo.
- Fufu…
Sus hombros tiemblan. ¿Eh? ¿Qué? ¿Qué significa
eso? Me pongo nervioso y la miro disimuladamente.
- Hehe… haha... ¡¡HAHAHAHAHAHA!!
—¡Se está riendo! ¡¡Y encima es una risa estrepitosa!!
- ¡O-Oye! ¿Por qué te ríes? ¡¡Disculpa, pero no lo
entiendo!!
Otonashi-san sigue riéndose fuertemente por un rato,
mis protestas no la alcanzan. Cielos… ¿de qué se trata esto? De
hecho, estoy seguro de que tengo que decir algo “genial”, pero
parece que mis palabras sólo son causa de risas al final…
Finalmente Otonashi-san deja de reírse, regresa a su
habitual y galante expresión y habla con los labios fruncidos.
- He experimentado 27.754 “Transferencias de Escuela”.
- … Sé bien eso.
- Estaba convencida de que había captado tu patrón de
conducta por completo. Pero no pude predecir lo que acabas de
declarar. ¿Puedes imaginar lo divertido que es esto para alguien
que se había acostumbrado al aburrimiento? -, dice, luciendo
complacida.
Aún no puedo captar su verdadera intención, e inclino
mi cabeza.
- Hoshino, eres muy divertido. Nunca antes había visto
un humano como tú. A primera vista, luces como una persona
común sin valor, pero, de hecho, no hay nadie más apegado a
su vida diaria que tú. Justamente por este motivo eres capaz de
distinguir esta vida cotidiana falsa de la verdadera, incluso
mejor que yo.
¿Mejor que Otonashi-san?
- Eso no es verdad. No puedo distinguirla en lo absoluto.
Después de todo, me duele el corazón cuando ocurre el
accidente, aún sabiendo que va a ser deshecho…
- Por supuesto. Eso no tiene nada que ver con
distinguirlo. Por ejemplo, cuando ves una película o lees un
libro, también te sientes mal cuando los personajes la pasan
mal, ¿verdad? Es lo mismo aquí.
Me pregunto si en verdad será así.
- —Hoshino.
- ¿Qué?
- Lo siento.
Es tan repentino que no entiendo por qué se está
disculpando. Antes de que me dé cuenta, la alegría ha
desaparecido de su rostro.
- En serio, me avergüenzo de mi propia incapacidad. Lo
siento.
- E-Está bien…
Sólo me siento incómodo cuando una persona que
obviamente está por sobre mí se disculpa francamente ante mí
de esta forma. Balbuceo como si estuviese siendo criticado por
ella. Tengo que admitir que soy patético.
- Esa sólo fue una simple disculpa, pero estás bien con
eso, ¿cierto? Sólo tengo que seguir entendiéndote, captándote y
dirigiéndote. Eso es lo que deseas de mí, ¿verdad?
- S-Sí…
- Una disculpa, ¿eh? Una necesidad, con seguridad;
pero me parece que no lo había hecho hace años.
… Estoy seguro de que en verdad no lo ha hecho.
- Bueno, entonces, ya es hora.
- ¿”Hora”?
- Para el final de la 27.754ª “Transferencia de Escuela”,
y el inicio de la 27.755ª.
- Ah, ya veo -, acepto este extraño hecho con calma,
sorprendentemente.
Cuando miro alrededor, la gente, naturalmente, se había
reunido a causa del gran accidente. Entre esa gente, muchos
vestían uniformes muy familiares. Kokone también está allí y
nos observa. Hemos estado hablando el uno al otro mientras los
ignorábamos. Bueno, supongo que puedo entender por qué
Mogi-san estaba asustada. Una Otonashi-san ensangrentada y
yo conversando ciertamente es muy extraño.
Le ofrezco mi mano a Otonashi-san. Ella toma esta
mano, que ha sido rechazada por alguien más, sin titubear.
Mi corazón se aplasta por un sobrecogedor poder como
si fuese molido por un tornillo de banco. El cielo comienza a
cerrarse como un monedero. A pesar de estar siendo cerrado, el
mundo se vuelve blanco. Blanco. Blanco. El suelo se vuelve
inestable y por alguna razón siento un sabor azucarado—no en
la lengua, sino en mi piel. Esa sensación no es mala, pero se
siente desagradable. Finalmente entiendo que esto es lo que
marca el final de la vez 27.754.
Estamos dentro de una suave, dulce y pura
desesperación blanca.
0ª vez
No me di cuenta de que “El amor cambia al mundo” no
es sólo una metáfora hasta que tuve dieciséis.
¿No has pensado varias veces también que la vida es
demasiado larga con todas esas repeticiones de hábitos? Estoy
segura de que el número de veces que he pensado seriamente
sobre morir no podrían ser expresadas usando los dedos de
ambas manos.
Estaba terriblemente aburrida.
Pero no puse esto en palabras y me comporté
alegremente como siempre. Después de todo, no hará nada
bueno mostrarles a todos una actitud como esa. Por lo tanto
me esforcé para llevarme bien con todos, lo que no es tan
difícil. Si no piensas demasiado sobre los puntos buenos y
malos, los gustos y disgustos, puedes llevarte bien con todos.
Un gran número de personas se reunió a mi alrededor y
todos me dijeron lo mismo.
- Siempre eres tan alegre. Seguramente no tienes
preocupaciones, ¿verdad?
Ah, sí. Muchas gracias a todos por ser engañados tan
honestamente. Muchas gracias por no reconocer mi lado
oscuro hasta ahora. Gracias a que he llegado a querer
desechar todo.
Probablemente conozca el punto en el tiempo en que
este aburrimiento comenzó.
Todos y cada uno son tan egocéntricos.
Cuando intercambiaba direcciones de correo con algún
chico y contestaba sus mensajes regularmente, se emocionaba
por su cuenta y se me declaraba. Cuando trataba de no excluir
a un chico que no era bien recibido por las chicas, lo
confundía con afecto y se me declaraba. Cuando era invitada
por alguien al cine y aceptaba, ya que era difícil negarse, se
me declaraba. Cuando iba a casa junto a alguien varias veces
porque vivíamos en la misma dirección, se me declaraba.
Y luego ponían muecas como si los traicionase, se
herían egoístamente y se resentían conmigo. También las
chicas a las que les gustaban esos chicos estaban resentidas
conmigo. Egoístamente. Egocéntricos. Me hería cada vez,
quedé llena de cicatrices, y cuando no ya no reconocía las
nuevas cicatrices al ser herida nuevamente, me di cuenta, al
final.
Sólo necesitaría asociarme con todos y cada uno con
poco entusiasmo en mi tiempo libre. Sólo necesitaría sentir el
ambiente y continuar teniendo conversaciones superficiales.
No les mostraría lo que hay dentro de mí, sólo necesitaría
cerrarme como una concha para poder proteger mi suave
interior.
Y entonces me aburrí.
Nadie se daba cuenta cuando sólo mostraba mi
superficie.
Todos me decían lo mismo.
- Siempre eres tan alegre. Seguramente no tienes
preocupaciones, ¿verdad?
Qué gran éxito.
Todos deberían desaparecer.
Era un día común después de clases. Estaba sonriendo
como siempre mientras conversaba cómicamente con los
extraños a mi alrededor que fingían ser mis amigos. Entonces,
repentinamente, sin ningún ímpetu en especial. Sin embargo,
me golpeó. Este concepto repentinamente obtuvo una forma y
me hizo pensar en cierta palabra.
「Sola」
Estaba completamente—sola.
Sola. Ya veo, estaba sola. A pesar de estar rodeada por
todos, estaba sola. Me sentí extrañamente complacida. Esta
palabra me quedaba demasiado bien.
Pero esta palabra rápidamente afiló sus colmillos y me
atacó. Era la primera vez que aprendía que el dolor viene
junto a tal soledad absoluta. Mi pecho dolía, no podía respirar.
Y a pesar de que finalmente podía tomar aire, sentí como si
hubiese agujas dentro del él. El dolor repasó mis pulmones. Mi
vista se volvió negra por un momento, y pensé que mi vida
perfectamente podía terminar ahora. Pero mi vista volvió de
inmediato y la vida no terminó así de fácil. Por lo tanto, no
sabía qué hacer. No lo sé. Ayúdenme. Todos, ayúdenme.
- ¿Qué ocurre?
Alguien se dio cuenta de mi cambio y me habló.
- Te vez muy feliz sonriendo así.
¿Eh?
¿Estoy sonriendo—?
Toqué mis mejillas porque no comprendía sus palabras.
Ciertamente, mis mejillas estaban levantadas.
- En serio, siempre eres tan alegre. Seguramente no
tienes preocupaciones, ¿verdad?
Me reí. - ¡Sí, soy feliz! -, me reí. Me reí sin saber por
qué.
En ese momento, el color de la gente que me rodeaba
gradualmente se volvió transparente. Uno por uno, se
volvieron transparentes. Se volvieron transparentes y
desaparecieron, así que ya nos lo pude ver más. Algunas voces
me hablaban, pero no las podía oír. Pero, por alguna razón,
seguía respondiendo apropiadamente. No lo entiendo.
Antes de que me diese cuenta, el salón de clases estaba
vacío. Sólo quedaba yo. Pero estoy segura de que yo la hice así.
Yo los rechacé.
- Tengo un compromiso, así que me iré ahora -, dije
con una sonrisa, aunque no podía ver a nadie, y tomé mi
mochila. Mi relación con los demás probablemente podía
establecerse aunque no le hablase a nadie en específico.
Debería haber hablado con la pared desde el principio si así
es como es.
Y aún así, ¿por qué?
- … Disculpa, ¿estás bien?
Aunque no debería haber habido nadie allí, pude oír
esas palabras claramente por alguna razón. Acababa de pasar
por el portón de la escuela cuando fui llevada de vuelta en un
instante y los invisibles también cambiaron de vuelta.
Un chico de mi clase estaba de pie allí sin aliento
cuando me di vuelta. Al parecer, había corrido tras de mí.
Su nombre seguramente era Hoshino Kazuki. No
éramos íntimos, ni tenía alguna característica especial—no
sabía nada más aparte de su nombre.
- ¿A qué te refieres? -, mientras preguntaba eso, noté
que me cubría una extraña expectativa. Después de todo, no
preguntaría si 「 Estoy bien 」 si no hubiese notado mi
anormalidad. Lo que significa que debe haber sido capaz de
sentir mi cambio, lo que no había sido posible para la gente
que estaba cerca de mí.
- Este… ¿cómo lo digo…? Parecías muy “distante”… o
no… no estoy seguro, pero parecía como si no estuvieras
dentro de la vida cotidiana -, dijo con dificultad. No fue para
nada específico. - Este… no importa si sólo fui yo. Disculpa
por decir cosas raras.
Parecía bastante incómodo y estaba por irse.
- … Espera un poco -, lo retuve. Inclinó su cabeza
levemente y me miró.
- E-Este… -, tal vez lo había retenido, pero, ¿qué
debería decir ahora?
Pero, oye,—fue capaz de describirme como “distante”
a pesar de que estaba sonriendo mientras estaba en ese
solitario salón de clases.
- … ¿Siempre me veo alegre?
Si contestaba a esto como los demás, entonces sólo
sería igual.
Ah, tenía grandes expectativas. Tenía grandes
expectativas de que lo negaría y me entendería.
- Sí, bueno… así luces -, dijo, titubeante.
Al oír estas palabras, me desencanté con él, perdí mi
interés y lo odié. Estaba sorprendida por ese péndulo—como
un súbito cambio en mis sentimientos, pero mis expectativas
probablemente habían estado bastante altas.
Pero entonces, él, a quien odiaba, añadió estas
palabras.
- En verdad te esfuerzas, ¿verdad?
Mis sentimientos se sacudieron como un péndulo una
vez más y mi odio se invirtió completamente. Mi rostro no pudo
seguir ese cambio—sólo mi corazón se sintió extrañamente
cálido.
Esforzarme. Esforzarme para parecer alegre.
Eso es cierto. Mucho mejor que haberlo negado.
Y así—me enamoré.
Estoy perfectamente consciente de ello. Sólo es una
suposición conveniente. Sólo el que haya dicho 「En verdad te
esfuerzas, ¿verdad?」 no significa que entiende todo sobre mí.
Estoy consciente de ello. Pero, aún así—esta suposición mía ya
no abandona mi mente.
Al principio, pensé que este sentimiento sería temporal,
pero pronto creció a un punto en el que no podía ser deshecho.
Mis sentimientos por él se estaban amontonando, como nieve
que no se derrite hasta me cubre por completo mi corazón. A
pesar de estar consciente de que él se volvería mi todo si
seguía así, por alguna razón no me sentí mal.
Después de todo, Hoshino Kazuki me rescató de ese
solitario salón de clases y disipó mi aburrimiento.
Si desaparecía de mi corazón, con seguridad volvería
allí. Volvería a ese solitario salón de clases donde estaba
completamente sola.
Mi mundo cambió así de fácil. Parecía mentira que
había estado aburrida. Es como si mis sentimientos hubiesen
estado conectados a un potente amplificador. Me alegro con
sólo saludarlo. Al mismo tiempo, me entristece el sólo ser
capaz de saludarlo. Me alegro al hablar con él. Me entristece
sólo poder hablar un poco con él. Mi corazón, que claramente
está fuera de orden, se siente complicado y bien.
¡Sí! ¡Me llevaré bien contigo, no fracasaré!
Para comenzar, me gustaría que comenzásemos a
llamarnos por nuestros nombres de pila.
————————……
- ¿Tienes un deseo?
Él parece existir en todos lados, pero no existe en
ninguno. Luce parecido a todos, pero no se parece a ninguno.
Alguien que no puedo reconocer si es hombre o mujer me
habla.
¿Un deseo? Claro que tengo uno.
- Esta es una “caja” que concede cualquier deseo.
La acepto con mis manos ensangrentadas.
De inmediato comprendo que es real. Por lo tanto,
estoy determinada a no dejar ir esta “caja”. Todos harían lo
mismo, ¿o no? No creo que haya alguien que fuese a
devolverla.
Entonces, deseo.
Aún sabiendo que es imposible, deseo.
- —No quiero… lamentarme.
27.755ª vez
- Vamos, ¿no hay algo distinto en mí hoy? ¿Lo hay? -,
viene a preguntar Kokone con su rostro habitual. Ya me ha
preguntado lo mismo en algún momento del pasado. ¿Cuál era
la respuesta correcta?
- … Te has puesto rímel.
- ¡Ooh! ¡Tienes mi visto bueno, Kazu-kun!
Parece que estaba bien.
- … ¿Y? ¿Qué tal?
- Sí, te ves linda. -, digo sin titubear. Una vez más era la
respuesta correcta. No estaba siendo demasiado serio al
respecto, pero Kokone luce satisfecha sólo con oír la palabra
“linda”, y asiente sonriendo.
- Mhm, mhm. Ya veo, tienes muy buena vista. ¡Oye, tú,
el chico de allí con esa personalidad retorcida! Deberías seguir
su ejemplo. Cruza sus brazos contenta, y vuelve su cabeza
hacia Daiya.
- Preferiría morder esa lengua a decir eso.
- Ah, ese sería un alivio para el mundo entero. Adelante,
por favor.
- No, hablo de tu lengua.
- ¡Haha! ¿Así que deseas un apasionado beso conmigo?
Por favor, no te dejes llevar tanto por tu fascinación por mí.
Sin percibir la situación en la que estoy, ambos
comienzan a insultarse el uno al otro a gran velocidad—como
siempre. Poco después, Daiya saca a conversación el tema de la
estudiante transferida.
Por favor, ven pronto, Otonashi-san.
*
- Soy Otonashi Aya. No me interesa nadie, a excepción
de Hoshino Kazuki y el “dueño”.
El salón completo se vuelve bullicioso al momento.
Este… ¿Otonashi-san? Eres una estudiante transferida,
así que, claro, puedes poner algo de distancia entre tú y tus
compañeros de clase en el primer día. Pero he estado en esta
clase por casi un año, así que no funciona así en mi caso,
¿sabes?
- ¿A qué se refiere con eso de “dueño”? ¿Quién es la
posesión? ¿Se refiere a “la persona poseída por Hoshino”?
- Entonces, ¿no sería simplemente una 「novia」?
- ¿Lo que significa que Kazuki-kun tiene una 「novia」
y la estudiante transferida, Otonashi-san, la está buscando?
¿Por qué?
- Supongo que hubo algo entre él y Otonashi-san. Tal
vez estén saliendo… ¡entonces, está jugando a dos bandas?!
- ¡Exacto! ¡Sin duda es eso! ¡De esa forma parece más
divertido, así que así sea!
- Entonces, al tener complejos sentimientos de amor y
odio por Hoshino, lo ha perseguido y se ha transferido a
nuestra escuela. Estoy segura.
- Eso significa que Hoshino… ¡¿sedujo a esa belleza?!
¡Maldición!
Nuestros compañeros hablaron del tema como les dio la
gana, ignorándonos a nosotros, los sujetos del tema. ¿De dónde
rayos salen esas ideas?
- Entonces, Hoshino en realidad… sólo jugó conmigo…
- ¡¿Qué?! ¡¿Tú eras la otra?!
- No… probablemente sólo era una extra… la tercera—
no, debe haber más.
- ¡¿Qué…?!¡Ese bastardo!
Kokone finge estar llorando mientras Daiya aprovecha
la oportunidad y levanta la voz de una forma que normalmente
no haría. Cielos, esos dos cooperan sólo en momentos como
este.
- … Qué fastidio -, murmura Otonashi-san. - Por tu
culpa se interesaron más en mí en lugar de marginarme.
Este… ¿eso es culpa mía?
*
Justo después de la primera lección, Otonashi-san y yo
salimos rápidamente del salón. aunque algunos de mis
compañeros me animan, también siento la sed de sangre en las
miradas de algunos chicos, pero no hay tiempo para
preocuparse por tales cosas.
Llegamos a nuestro lugar habitual—la parte de atrás del
edificio de la escuela. Ya no participamos en las lecciones.
- Ya veo. Trabajar contigo significa ser arrastrada
automáticamente a tu red de relaciones. Cielos… eso es poco
práctico.
No, estoy bastante seguro de que el problema fue cómo
les hablaste.
- Pero es la primera vez en estas 27.755 veces que he
experimentado demérito al rechazarlos. Esto es muy
entretenido.
- Ehm… no sé cómo podrías encontrar entretenido
esto…
- No seas así. Hasta para mí las nuevas experiencias son
más o menos emocionantes. Además, las cosas cambiaron así
de tanto porque comenzamos a operar juntos. Es un cambio
bien venido.
- ¿Qué quieres decir?
- Puede que haya alguna pista nueva que no había visto
cuando estaba sola.
Mirándolo de ese modo, con seguridad valía la pena
cooperar, pero bueno…
No, puede estar increíblemente en lo cierto. Después de
todo, ella no sabe cómo era la clase 6 de primer año antes de
hoy. No puede comparar hoy con los días anteriores. Por
ejemplo, no sabe que mi amor por Mogi-san evolucionó entre
ayer y hoy—en otras palabras, durante el “Salón Rechazador”.
- Pero, ¿qué deberíamos hacer, concretamente?
- … Respecto a eso, Kazuki. Le he dado muchas vueltas
al asunto, y he llegado a la conclusión de que puede que sigas
siendo la clave para el “Salón Rechazador”.
- ¿Eh? ¿Así que aún sospechas de mí?
- No es eso. Déjame preguntarte: ¿por qué puedes
mantener tus recuerdos?
- Eh… quién sabe…
- Es un misterio, ¿verdad? claro, puedo sentir ciertas
diferencias entre tú y los demás humanos, pero, ¿no sigue
siendo extraño que seas el único que puede mantener sus
recuerdos?
- Bueno… claro que sí.
- Por lo tanto, asumo que este hecho puede estar
incluido en el objetivo del “dueño”.
- ¿Eh…?
- Eres lento como siempre. En otras palabras, puede
que también sea parte de los intereses del “dueño” el que
mantengas tus recuerdos.
¿Uno de los objetivos del “Salón Rechazador” es que
mantenga mis recuerdos?
- Eso no es posible. No es como si retuviese mis
recuerdos con seguridad, ¿sabes? Si no fuera por ti,
probablemente habría seguido perdiendo mis recuerdos como
los demás.
- Ciertamente, puedes decir que esa es la falla en mi
hipótesis. Sin embargo, también es posible que tu capacidad de
retención tenga fallas al igual que la recreación del pasado por
el “Salón Rechazador”. Esa contradicción apoyaría mi
hipótesis, ya que el pasado ya no puede rehacerse si conservas
sus recuerdos.
En efecto, eso podría ser posible. Pero por alguna razón,
no le encuentro el sentido.
- En primer lugar, ¿qué significado hay en dejarme
mantener mis recuerdos?
- ¿Cómo debería saberlo? -, contesta sin rodeos. - Pero
sé que sentimiento mueve más a la gente.
- ¿Cuál?
Otonashi-san mira profundamente en mis ojos, y dice: -
El amor.
- … ¿El “amor”…?
Debido a la horripilante cara que pone, no logro captar
el significado de inmediato. Ah, ¿el amor?
- Otonashi-san, eso fue bastante lindo de tu parte.
Otonashi-san me mira fríamente. - ¿Qué cosa? Un amor
tan profundamente arraigado no se diferencia del odio de
ninguna forma.
- ¿Es igual que el odio? -, estoy sorprendido. - … ¡Son
completamente distintos!
- Son iguales… No, ciertamente son diferentes. El amor
es un sentimiento peor que el odio porque la gente no está
consciente de su suciedad. Es simplemente repugnante.
Repugnante, ¿eh…?
- Eso no importa ahora. Kazuki, ¿no se te ocurre nada?
- Te refieres a alguien que esté enamorada de mí,
¿cierto? Imposible, no hay—
Estoy a punto de negarlo cuando de repente recuerdo.
Hay alguien.
Si no estaba bromeando cuando me llamó por
teléfono—hay alguien.
- Parece que se te ocurre alguien.
- ……
- ¿Qué ocurre?
- Este… bueno. La chica que está enamorada de mí no
tiene que ser la culpable necesariamente, ¿cierto?
- Por supuesto que no. Sólo eso está muy lejos de ser
suficiente para concluir si esa persona es la culpable o no. Sin
embargo, esa no es razón para no investigar este asunto.
- No… bueno… es imposible que ella sea la culpable.
- ¿Qué te hace estar tan seguro de que ella no es la
“dueña”?
Simplemente no quiero que ella lo sea. Estoy consciente
de eso.
- Tenemos oportunidades ilimitadas mientras estemos
en el “Salón Rechazador”. Tomaremos todas las posibilidades
para acercarnos al “dueño”.
- … Pero, hasta ahora, no has tenido éxito con ese
método, ¿o sí?
- Estás bastante ofensivo hoy, ¿eh? Pero es como dices.
No obstante, tenemos la nueva pista de que tu retención de
recuerdos es otro objetivo. Nunca había investigado con eso en
mente. Tal vez seamos capaces de obtener nueva información
que no fui capaz de obtener antes.
- Pero—
- ¿No quieres aclarar nuestras dudas aún más porque es
alguien en quien confías?
Es verdad. Es tal como dice. En algún lugar de mi
corazón estoy dudando de esa persona, por lo cual, no quiero
investigar.
- … Entiendo. Te ayudaré.
- Aunque no sólo deberías ayudarme, sino tomar el
liderazgo.
Tiene razón. Yo soy quien quiere salir del “Salón
Rechazador”… Aún así… hay algo que me ha estado
molestando en extremo desde hace un rato. Hay algo extraño.
- Bueno, entonces, vamos.
- ¡E-Espera un segundo!
- ¡¿Por qué estás titubeando?! ¡Estoy casi al límite de
mi paciencia, ¿sabes?!
¿Qué es lo que me moles—Ah, ya veo.
Cuando reconozco el origen de este extraño sentimiento,
mis orejas se calientan.
- ¿Mh? ¿Qué ocurre, Kazuki? Tu cara está toda roja.
- Ah, no, es que, tú estás—
¿Por qué cambió su forma de llamarme de 「Hoshino」
a「 Kazuki」?
- ¿Qué? ¿De qué estás hablando?... oye, ¿por qué tu
cara se está poniendo aún más roja?
- … D-Disculpa. No importa.
¿Cuándo comenzó a llamarme por mi nombre de pila?
Ni siquiera mis padres me llaman así. Supongo que mi cara se
está poniendo más roja ahora.
- ¿…? Eres raro. Como sea, vamos.
「 Otonashi-san 」 vuelve su espalda hacia mí y
comienza a caminar.
- S-Sí…
¿Debería usar otro nombre aparte de Otonashi-san,
también? Si siguiese su ejemplo, ¿la llamaría… 「Aya」?...
¡¡No, no, no!! ¡No puedo, no puedo! ¡¡Eso está fuera de
discusión!! Que sea 「Aya-san」, al menos… no, eso sigue
siendo demasiado formal. Pero 「 Otonashi-san 」 es
demasiado reservado. Debería ser un nombre que sea fácil de
decir y un poco más casual.
- Ah…
Se me ocurre uno. También es bastante embarazoso
decirlo, pero ya que he usado ese nombre tantas veces, debería
servir.
- …… Maria.
Cuando murmuro este nombre con voz baja,
「Otonashi-san」 se detiene y se da vuelta. Sus ojos están
abiertos ampliamente.
- ¡Uwa! ¡L-Lo siento! -, me disculpo por reflejo al verla
su inesperadamente aguda reacción.
- … ¿Por qué te disculpas? Solamente me sorprendiste
un poco.
- … Entonces, ¿no estás enojada?
- ¿Por qué debería enojarme? Llámame como quieras.
- Y-Ya veo…
La boca de Otonashi-sa—no, de Maria se relaja.
- Pero, de todas las opciones elegiste Maria… heh.
- Ah, bueno… si no te gusta…
- No me importa. Sólo confirmaba algo de nuevo.
- Este… ¿qué confirmaste?
Por alguna razón, Maria sonríe amablemente. - Que tú,
Kazuki, eres un sujeto entretenido.
*
Estoy hurgando.
He vuelto al salón de clases y ahora estoy hurgando
entre las cosas de la chica que parece tenerme afecto.
Claro que no hago esto porque quiero, y además me
siento terriblemente inmoral al hacerlo.
Están en clases de educación física por el momento. Por
esa razón, Maria creyó que, mejor, deberíamos usar esta
oportunidad para buscar una pista en sus pertenencias en lugar
de preguntarle directamente.
Ya que he estado pensando lo mismo en silencio, le
obedecí mientras tenía estos sentimientos de inmoralidad.
A propósito, sólo tiene sentido si yo soy quien lo hace.
Maria ya ha buscado entre las pertenencias de todos varias
veces. A juzgar por el estado actual de las cosas, no ha
encontrado nada. Lo que es bastante normal. Maria no puede
notar nada que haya cambiado de antes, ya que sólo nos ha
conocido por hoy.
- Huu…
Ha hecho marcas claras con varios colores en sus libros
de texto. Sus notas están escritas pulcramente con letras
pequeñas y bien formadas. Y además, aquí, ha usado un
montón de colores. En el borde izquierdo hay un dibujo de un
gato. Y también hay uno en la siguiente página, en el mismo
lugar. Igual en la página siguiente… luego me doy cuenta. Se
supone que esto sea un folioscopio. Cuando hago pasar las
páginas el gato se aleja volando en un cohete que ha construido
con una lata. Sonrío espontáneamente antes de ser detenido por
Maria frunciendo el ceño.
En general, hay muchas cosas de chicas. Los colores
generalmente son rosa o blanco. Su iPod está lleno de J-POP.
Su billetera no está aquí, así que probablemente la lleva con
ella.
- ¡Oh!
Encuentro un teléfono móvil cuidadosamente decorado.
Un cofre del tesoro con información personal.
Tenía expectativas de encontrar una pista, pero el
teléfono está bloqueado, así que no puedo examinarlo… Pero,
de algún modo, me alivia el no tener que hacerlo.
Pruebo mirando en su bolsa de maquillaje al lado del
espejo de mano rosa. Esta debe ser la base de maquillaje, este
el lápiz labial, este el delineador para cejas, estas las tijeras
para cortar las cejas, y finalmente, algo que parece ser el
nuevo… rímel, supongo.
- —
¿Oh? Hay algo extraño.
- ¿Encontraste algo Kazuki?
- …… Aún no lo sé…
Revuelvo los contenidos de la bolsa de maquillaje. No
nada especial allí, creo.
- Maria, ¿algo en esta bolsa de maquillaje te llama la
atención?
- No. Ya he buscado en él anteriormente, pero no
encontré nada especial— -, comienza a decir, pero entonces su
rostro se congela. - —Espera, no puede ser. No debería tener
eso. Es imposible que no lo notase durante estas 27.755 veces.
Pero… de hecho—
- ¿Eh? ¿Encontraste algo?
- … Kazuki. Deberías haber sentido algo al ver esto.
- … ¿Eh?... mhh, bueno, pensé que usar maquillaje
sorprendentemente no parece propio de ella.
- ¡Santo cielo! -, Maria contrae tremendamente su
rostro.
Sigo buscando en la mochila por más pistas. Dentro de
ella, descubro una sensación familiar. Lo saco.
- Ah—
Es retirado.
Cuando veo un familiar envoltorio, mis recuerdos salen
a la superficie.
「Digamos que la aproximación de mi declaración
hubiese sido diferente. Entonces, ¿habría sido posible que
aceptaras?」
「Ha~ah, está bien. Entonces, sólo tengo que continuar
declarándome hasta tener éxito, ¿cierto?」
No puede ser.
No puede ser.
No puede ser.
No creeré tal tontería.
Sólo es una coincidencia. Tiene que ser sólo una
coincidencia, pero los recuerdos que salen a la superficie en mi
mente son muy poco convencionales como para haberlos
inventado yo—
- —Maria, ¿cuál es tu comida favorita?
- … ¿Por qué preguntas eso tan de repente? -, Maria me
mira y frunce el ceño. - … Oye, ¿qué ocurre Kazuki? ¡No te
ves bien!
- … Pues, verás, el mío son los Umaibō.
Revelo el objeto que acabo de sacar de la mochila. Un
paquete de Umaibō.
- En especial me gustan los con sabor a “Crema de
Maíz”, pero no se lo he dicho a nadie porque a nadie le importa.
A menudo los como en el salón, pero respecto al tipo, soy
bastante infiel, a decir verdad, y como diferentes sabores todo
el tiempo. ¡Nadie debería saber que el sabor que más me gusta
es el de “Crema de Maíz”!
「 ¿Pero no te gustan tanto los con sabor a
“Hamburguesa Teriyaki”?」
「¿Cuál sabor te gusta más?」
Rezo para que sólo sea un error mío y miro nuevamente
al refrigerio. No importa cuánto lo mire, sigue siendo el mismo.
No es con sabor a “Hamburguesa Teriyaki”, es un Umaibō con
sabor a “Crema de Maíz”.
Los recuerdos resurgidos me lo dicen.
Aunque el que tenga un Umaibō con sabor a “Crema de
Maíz” en su mochila sólo sea una coincidencia, las imágenes
de mis recuerdos recuperados me lo dicen sin dudar.
Que ella es—la “dueña”.
- Kazuki.
Maria agarra mis hombros fuertemente. Sus uñas se
entierran en ellos y me traen a la realidad.
- Con seguridad ella es la “dueña”. Finalmente hemos
llegado a nuestro objetivo… bueno, no exactamente.
Cuando Maria espeta estas palabras, le pregunto, - ¿Qué
quieres decir?
- Alguien que comete un error tan estúpido jamás
podría engañarme por 27.755 “Transferencias de Escuela”.
- Pero, Maria, admitiste que no sabías quién era el
“dueño”, ¿verdad?
- Eso no es verdad. Probablemente ya había llegado a
ella varias veces. Pero no pude mantener el recuerdo de que
ella era la “dueña”.
- ¿Eh? ¿Por qué no?
- No estoy segura, pero supongo que es otra regla del
“Salón Rechazador”, tendría sentido. El “Salón Rechazador”
funciona mientras que la “dueña” crea que está dentro de un
bucle que no cambia. Pero si alguien supiese que ella es la
“dueña”, este prerrequisito se derrumbaría. Por lo tanto, tan
pronto alguien descubre que ella es la “dueña”, ese recuerdo se
borra.
- … Pero esta vez sabemos quién es la “dueña”.
- Como era de esperar. Pero eso de ningún modo es algo
para regocijarse -, dice Maria, irritada. - Si esta vez no hacemos
algo respecto a esto, vamos a perder esta pista, otra vez.
Ya veo. Si perdemos ahora, olvidaremos todo lo que
descubrimos esta vez y comenzaremos una vez más nuestra
búsqueda del culpable.
Maria se muerde los labios, molesta. El tener sólo una
oportunidad puede ser bastante irritante para alguien como ella,
que se ha acostumbrado a ser capaz de rehacer las cosas.
- … Pero, Maria, la vida es un concurso que se acaba en
una sola partida, ¿o no? No importa lo pequeño que sea el
asunto, no hay un botón para reiniciar y volver al último punto
de guardado.
Le tengo bastante aprecio a esa frase, pero Maria me
mira fríamente.
- ¿Qué se supone que logrará esa frase de aliento mal
empleada?
Hasta suspira.
- D-Disculpa… es que parecías un poco irritada.
Al oír mi disculpa, Maria se relaja un poco.
- Sí, claro que lo estoy. Pero no porque nuestra
situación no es favorable.
- ¿Por qué, entonces?
- ¿No lo entiendes? Aunque descubrí varias veces que
ella era la “dueña”, el “Salón Rechazador” aún no ha acabado.
¿Entiendes lo que eso significa?
Lado mi cabeza. No sé si es en mi contra, en contra del
culpable, o de ella misma, pero Maria escupe estas palabras,
irritada:
- Ya he perdido varias veces contra la “dueña”.
*
- Kokone.
- ¡Oh, el hombre del amor, Hoshino Kazuki en persona,
ha llegado!-, Kokone bromea conmigo como siempre.
Es la hora de almuerzo en este momento. Al final, no
participamos en las clases de la mañana y sufrimos las burlas
de los demás a causa de eso. Pero gracias al completo silencio
de Maria, se rindieron rápidamente. Aunque las curiosas
miradas de nuestros compañeros seguían concentradas en
nosotros. Bueno, no es algo para sorprenderse.
- Escucha, Kokone. A decir verdad—
Me detuve. Porque Kokone había cambiado su suave
rostro a uno serio y me agarró de las mangas. Luego de echarle
un vistazo a Maria, Kokone me lleva afuera del salón.
- Kazu-kun, por favor no evadas mi pregunta y dame
una respuesta sincera -, Kokone suelta mi manga justo al lado
de la puerta y continúa. - ¿Cuál es tu relación con Otonashi-
san?
- … ¿Por qué preguntas eso? -, pregunto a pesar de ya
conocer la respuesta. Kokone baja su mirada, pero no puede
responder. - No puedo describir mi relación con Maria tan
fácilmente -. Kokone sigue en silencio, mirando el suelo. - Pero
amo a otra persona, no a Otonashi-san.
Kokone abre sus ojos ampliamente cuando oye mis
palabras y me mira directamente. - Entonces— -, pero no dice
nada más y mueve su mirada. No dejé pasar eso. Echa un
vistazo en el salón de clases y busca a alguien. Sus ojos dejan
de moverse. Y están dirigidos hacia—Mogi Kasumi.
Como es 1 de Marzo, aún no me he enamorado de
Mogi-san, y durante esta vez, la 27.755ª, no he tenido contacto
con ella en ninguna forma.
- Kokone, a decir verdad, hay algo que me gustaría que
hicieras. Eso es—
- Sí. No tienes que decirlo, creo que he entendido
nuestra conversación hasta ahora -, dice Kokone con una
sonrisa. - En el salón de cocina después de clases. ¿De
acuerdo? ¡Te diré todo allí!
¿Por qué en el salón de cocina?, me pregunto por un
momento, pero, claro, Kokone está en el club de Economía del
Hogar.
- Probablemente hoy no habrá nadie más allí.
Cuando asiento, me mira otra vez. No puedo adivinar
qué pensamientos hay detrás de su rostro.
- Kazuki -, Maria, quien había estado observándonos
desde más allá de la puerta, me llama. Probablemente es la
señal para retirarme.
Le digo a Kokone, - Nos vemos después -, y estoy a
punto de darme vuelta.
- ¡Ah, espera un segundo! -, me detiene Kokone.
Detengo mi vuelta y la miro otra vez.
- Este… ¿puedo preguntar? Ah, pero no es necesario
que contestes, claro…
- ¿Qué cosa?
- ¿Quién es la persona que amas, Kazu-kun?
Contesto de inmediato, - ¡Mogi-san!
En el instante en que oye eso, Kokone mira hacia abajo
y oculta su rostro. Pero no dejo pasar su expresión antes de que
lo haga.
Kokone estaba sonriendo.
*
Luego, después de clases.
Escuchamos un grito viniendo del salón de cocina
cuando entramos, de inmediato nos damos cuenta de que todo
se había arruinado.
Perdimos esta oportunidad excepcional.
Allí estaba, como se había planeado, Kirino Kokone y
Mogi Kasumi, en el salón de cocina. No, estrictamente
hablando—lo que una vez fue Kirino Kokone, y Mogi Kasumi
está allí.
El salón de cocina está manchado con sangre.
La culpable está sosteniendo un cuchillo cocinero
ensangrentado.
- Kazu-kun.
Aunque se ha percatado de mi presencia, su expresión
sigue siendo la misma.
- … ¿P-Por qué—
No lo entiendo. ¿Por qué hizo algo como eso?
Mogi-san me mira, ensangrentada. Inexpresiva, como
siempre. Pero noto que una luz que titila en sus ojos me
condena.
Ha~ah, sí. Cierto. Ciertamente, también debo ser
culpado por esta situación.
- Muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere,
muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere,
muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere,
muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere,
muere, muere, muere.
Mogi-san murmura incansablemente algo que parece
una maldición.
No quiero oír eso. Quiero bloquear mis oídos, pero ni
siquiera puedo hacer eso. Perdí el control de mi cuerpo en el
mismo momento en que vi el cuerpo de Mogi-san manchado
con sangre. Sus palabras invaden mis oídos. Intento
desesperadamente no captar el significado de esas palabras,
pero es inútil—las palabras me aplastan como una avalancha,
descienden sobre mí y cubren mi cuerpo paralizado.
Mogi-san está hablando. Está diciendo esas palabras
que me condenan.
- ¡Muere!
27.755ª vez
- Tal vez sea un poco tarde, pero me di cuenta de que
no te necesito.
Ella ladea su cabeza. Tal vez es demasiado repentino
para ella.
- De hecho, me di cuenta hace tiempo de que eres una
molestia, ¿sabes? Pero no quería ser cruel. Después de todo,
originalmente éramos 「amigas」.
Pero ya no lo somos.
Supongo que aún me considera como a una 「amiga」.
Hasta ayer, éramos tan íntimas que escuchábamos los
problemas amorosos de la otra, pero ahora que he cambiado,
ya no puedo hacerlo más. Por lo tanto, ya no somos
「amigas」.
Este no es sólo un problema por mi parte. De ninguna
forma puede dudar de mí, aunque he cambiado. Incluso
cuando le hablo de forma completamente distinta a como lo
hacía en el pasado, no se puede dar cuenta.
—「Nadie puede interrumpir mi cambio」.
Esa es la regla de este mundo.
Asumamos que, en el mundo normal, yo cambio
mientras que los demás siguen igual. En su caso, me
consideraría como a una amiga. Así que si cambio, lo
percibiría como algo inusual en mí. Eso ya perturbaría mi
cambio. Probablemente se asemejaría a la reacción hacia
alguien que repentinamente tiñese rubio su cabello durante las
vacaciones de verano. Mis posibilidades serían limitadas al ser
puesta en un ambiente en el que no puedo cambiar libremente.
En ese caso, no sería capaz de conseguir mi único
deseo, 「pasar el día sin lamentaciones」.
Es por eso que existe esta conveniente regla.
Así es. Este mundo está hecho completamente de forma
conveniente para mí.
Y aún así—
Y aún así… ¿qué? No puedo pensar en lo que yace más
allá de eso.
Tengo la sensación de que no tengo que pensar en eso.
Por lo tanto, omito ese pensamiento y saco otro tema.
- ¿No crees que el “amor” se asemeja a derramar salsa
de soya en un vestido blanco?
Ella no parece comprender mi metáfora y ladea su
cabeza.
- Digamos que derramaste salsa de soya en tu vestido
blanco, ¿está bien? Aunque lo limpies, queda una mancha. Se
queda para siempre. Por lo tanto, seguirás recordando “Ah,
derramé salsa de soya allí…” cuando lo veas. Es imposible
que puedas olvidarlo, ya que la mancha se queda allí para
siempre.
Abro un cajón del mesón.
- Verás, eso me enferma.
Tomo firmemente el cuchillo cocinero del cajón.
- Me refiero al hecho de que una mancha como esa fue
lo que me quebró.
Saco el cuchillo cocinero.
Ya he usado este cuchillo de cocina con el mismo
propósito varias veces. Este cuchillo es el más filoso.
Se pone pálida cuando me ve agarrando un cuchillo.
Me pregunta, - ¿Qué vas a hacer con eso? -, aunque apuesto a
que puede adivinarlo, hasta cierto punto. Pero no puede creer
que haría algo como eso, eso es lo que está 「prediciendo」
- ¿Quieres saber que voy a hacer con esto? Ufufu…
Pero, ¿sabes? Lo siento. Probablemente—
- ¡Te rechazaré!
—es justo lo que estabas esperando.
***é a ****** con un ********.
Intento no comprender este oscuro y doloroso
sentimiento que está por elevarse. Aunque es inútil resistirse,
aunque tengo que comprenderlo para mi propósito, intento
resistirme. Porque no quiero sentir este sentimiento. Porque
todo el tiempo he actuado como si no pudiese comprenderlo,
hasta ahora.
Ha colapsado y está escupiendo sangre. Debe estar
sufriendo. Que penoso.
Probablemente, fracasé. Debería haberla ****do lo
menos dolorosamente posible.
- ¿Sabes? Fracasar en esto puede ser algo horrible. Los
chicos desarrollan un poder absurdo cuando se desesperan.
Incluso un chico delgado es mucho más fuerte de lo que yo soy.
Ser golpeada con tal fuerza es muy doloroso, pero sus ojos son
mucho más horripilantes cuando me golpean. Me miran como
si fuese basura. ¿Por qué fracasé otra vez…?... Ah, claro,
porque usé un cuchillo barato sólo porque se veía genial. Es
bastante difícil matar a alguien con algo así, ¿sabías? Y eso es
desagradable. Lo es apuñalar o cortar a las personas. ¡Es
asqueroso! Podría vomitar a causa de eso. También he llorado,
preguntándome a mí misma por qué tengo que hacer cosas tan
desagradables. Pero, ¿sabes? Al final, pasará lo mismo una y
otra vez mientras la persona en cuestión tome las mismas
acciones. Y a causa de eso, mi futuro deseado nunca llegará.
Así que, ¿qué otra cosa debería hacer además de borrar a esa
persona? No puede evitarse, ¿o sí? ¿No es algo cruel? ¿Por
qué tengo que hacer tales cosas?
Me está mirando con ojos impotentes.
- Pero, ¿sabes qué? Tal vez ni siquiera necesito
apuñalarte así. Al final, “Rechazar” es sólo algo mental. Y,
¿sabes qué más? No encontré otra manera. No pude “rechazar”
a nadie con otro método además de matarlo con mis propias
manos. No es tan fácil “rechazar” a alguien desde el fondo de
tu corazón. Eso coloca una carga en tu corazón. Y al crear
estos sentimientos de culpa, me fuerzo a mí misma a huir de
esa persona. Gracias a eso puedo pensar realmente que no
quiero ver más a esa persona—los “rechazo”. Ya nadie puede
recordar a esa persona, sin importar qué ocurra.
Deja caer su cabeza, aparentemente incapaz de
soportarlo más.
- ¡Lo sé! Es mi culpa, ¿verdad? Todo es mi culpa,
¿verdad? pero entonces, dime, ¿qué debería hacer?… Lo
siento. No tienes idea, ¿o sí? Ha~ah, ¿por qué estoy hablando
tanto? Sé por qué. Estoy ansiosa, muy ansiosa, tan ansiosa que
no puedo quedarme callada. Secretamente espero que puedas
perdonarme cuando te diga mis razones. Pero ya lo sé; no hay
manera de que me perdones, ¿o sí? Lo siento. De verdad lo
siento. Lo siento, lo siento. Lamento ser tan egoísta. Pero,
¿sabes qué? Yo soy la que más sufre, me estoy culpando
debidamente a mí misma. Sé que estoy haciendo algo malo. Así
que, para ser honesta, no podría importarme menos lo que
pienses de mí.
Me pregunto a quién le estoy hablando… Pero tengo la
sensación de que eso no importa. De todas formas, nunca le he
hablado a alguien en específico. Ni siquiera consideraba una
「amiga」 a esa persona que yacía en el suelo.
De todas formas estoy sola.
- N-No—
Y aún así, no quiero admitirlo, a pesar de que estar en
un lugar así me hace más consciente de que cuán sola estoy.
No puedo evitar gritar.
¡Por favor ven! ¡Ven rápido!
- ¡Kazu-kun!
Me pregunto cuándo… ¿cuándo me volví capaz de
llamarlo tan casualmente? Aunque frecuentemente he obtenido
permiso para llamarlo de esa forma en estas repeticiones, él
nunca lo recuerda.
En ese instante, la puerta se abre.
Él está aquí. Aquel que he estado esperando, Hoshino
Kazuki, está aquí.
Kazu-kun se queda sin habla al ver este terrible
espectáculo. A su lado está esa molesta chica, Otonashi Aya,
quien está viviendo en mi caja como un parásito.
- … Así que finalmente has venido, Kazu-kun.
Me sorprenden mis propias palabras. ¿Qué tan
estúpida soy? ¿Cuántas veces Kazu-kun desmintió mis
expectativas? ¿No me había rendido con él varias veces entre
esta incontable cantidad de traiciones? Ni siquiera es una
coincidencia que apareciese aquí. Yo decidí invitarlo aquí
para poder mostrarle esto. Y aún así, no puedo evitar esperar
un milagro de su parte porque apareció en tan buen momento,
al igual que el de hace tiempo. Estoy comenzando a esperar
que me lleve de vuelta al mundo real.
Aunque—es imposible que eso ocurra.
Kazu-kun tiene sus ojos abiertos ampliamente.
- Kazuki, puedo adivinar lo que estás sintiendo. Pero
deberías haber sabido que… -. La chica superflua dice algo.
- … la “dueña” es—Mogi Kasumi.
Kazu-kun lleva su vista hacia la desplomada ******.
¿Cuál era su nombre? Ah, bueno. Lo olvidé. Hasta
olvidé cuándo lo olvidé.
- … ¿P-Por qué—
¿Quieres saber por qué hice eso? No puedo ocultar mi
irritación ante la lentitud de Kazuki.
Poniendo reproche en mis ojos, grito mis pensamientos
hacia él. - ¡Muere!
No es suficiente.
- Muere, muere.
Sigue sin ser suficiente.
- Muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere,
muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere,
muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere,
muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere,
muere, muere, muere.
Simplemente no quiero—
- —¡¡morir!!
27.755ª vez
Ahora que lo menciona, Mogi-san no se ha puesto
maquillaje ahora mismo. Aunque ya que obviamente no tengo
el hábito de maquillarme, a diferencia de Maria, era bastante
difícil que me diese cuenta.
Pero ella tiene una bolsa de maquillaje.
¿Por qué?
Maria supone lo que sigue:
—Porque se aburrió de usarlo.
Ya no puedo recordarlo, pero supongo que Mogi-san
originalmente se preocupaba mucho de su aspecto. Sin
embargo, dejó de preocuparse porque no pudo encontrar una
razón para seguir haciéndolo en el “Salón Rechazador”. Dejó la
bolsa intacta en su mochila desde el 1 de Marzo antes del
“Salón Rechazador”.
Mogi-san se aburrió de aplicarse maquillaje tanto como
el sacarlo de la mochila. Sólo alguien que tiene los recuerdos
de más de 20.000 bucles podría volverse así. Y la única
persona que podría tener esos recuerdos es—el “dueño”. Por lo
tanto, la chica que amo, que también me ama, Mogi Kasumi,
debe ser—la “dueña”.
「Hay algo que te tengo que decir, Kazu-kun.」
Así es cómo Kokone me llamó durante la vez anterior,
la 27.754ª vez. Luego me dijo lo que sigue:
「¡Kasumi te ama!」
Kokone sabía del amor de Mogi-san hacia mí. Estoy
seguro de que Mogi-san le consultó este tema, ya que eran
buenas amigas hasta ayer.
Queríamos atraer a Mogi-san con un cebo. Pero si lo
hacíamos, naturalmente sería precavida. De ser posible,
queríamos dejar a Mogi-san sin posibilidades de prepararse a sí
misma porque Maria ya había perdido numerosas veces contra
ella.
Por lo tanto, decidimos usar a Kokone como
intermediaria. Concluimos que podría atraer a Mogi-san para
nosotros si podíamos hacerle pensar que yo tenía la intención
de declararme.
Como consecuencia de eso—matamos a Kokone.
Recuerdo las palabras de Mogi-san.
「… Entonces, ¿saldrás conmigo?」
¿Cuán seguido se declaró ante mí? ¿Cuánto tiempo
había estado enamorada de mí? Si el amor era mutuo, entonces
por qué—
「Por favor, espera hasta mañana.」
¿Por qué dijo eso?
Mogi-san parece no ser consciente de la sangre que la
cubre, y no muestra expresión alguna.
—como siempre.
¿Siempre ha sido así de inexpresiva? No, no es así. En
algunos fragmentos de mi memoria hay una imagen de Mogi-
san sonriendo brillantemente. Pero esa Mogi-san sonriente no
me parece para nada real. Para mí, Mogi-san es una chica
inexpresiva y reticente.
Pero, ¿y si esa brillante Mogi-san, que no parece real, es
la original? ¿A dónde fue la chica llamada Mogi Kasumi?
- Fue arrastrada -. Maria refunfuña esas palabras, como
respondiendo mi pregunta. - Fue completamente arrastrada en
esta repetición sin fin -, declara con sus ojos desdeñosos
concentrados en Mogi-san.
Hay un pensamiento que ya se me había ocurrido
anteriormente: No es posible para la psiquis humana el soportar
un número tan grande de repeticiones.
Pero Mogi-san había experimentado el mismo día
27.755 veces. Y después de repetirlo tantas veces, Mogi-san
está cubierta de sangre en este momento.
- … Es tu culpa, Kazu-kun -, dice, mirándome. - ¡Todo
es porque me arrinconaste!
- … Mogi-san, ¿qué he hecho?
- Mogi-san -, repite después de mí y tuerce su boca. -
Te lo dije. Definitivamente te lo dije. Te lo dije cientos de
veces, ¿o no?
- ¿D-De qué estás hablando…?
- Te dije que me llamaras 「Kasumi」, ¿o no…?
… No lo sé. No sé nada de esto.
- Lo dije cientos de veces y aceptaste cientos de veces,
¿o no? Y aún así, ¿por qué? ¿Por qué siempre lo olvidas de
inmediato?
- No puede… evitarse…
- ¡¿No puede evitarse?! ¡Dime, ¿por qué no puede
evitarse?! -, grita Mogi-san histéricamente, pero su rostro
sigue siendo casi inexpresivo.
Probablemente se ha olvidado cómo cambiar su
expresión durante tantas repeticiones porque ha perdido las
razones para hacerlo. Ya no puede ni reírse, ni llorar, ni
enojarse con alguien apropiadamente.
- Kazuki, no la escuches.
Mogi-san me libera de su mirada y mira a Maria con el
ceño fruncido. - ¡No llames a Kazu-kun tan familiarmente!
- Lo llamo como yo quiera.
- ¡No puedes!... ¿Por qué Kazu-kun te recuerda a ti,
pero no a mí?
- Kasumi, tu diseñaste esto de esta forma porque es más
fácil hacer las cosas de nuevo.
- ¡Cállate! ¡No pretendía hacer eso!
Ahora que lo pienso, en la 27.754ª vez, Mogi-san lucía
atemorizada cuando vio cómo sí recordaba a Maria.
En ese momento, estaba seguro que estaba atemorizada
por mi extraño comportamiento, pero ahora que sé que ella es
la “dueña”, mi punto de vista ha cambiado: en realidad,
permitió que su descontento acumulado se escapase porque
recordé a Maria y no a ella.
- Kazu-kun…
Tampoco estoy acostumbrado a ser llamado así por ella.
Tal vez me ha preguntado una vez si me podía llamar 「Kazu-
kun」, tal como me ha pedido que la llame 「Kasumi」.
Puede que lo haya olvidado, pero Mogi-san recuerda
todo.
- Kazu-kun, dijiste que me amabas.
- … Sí, probablemente lo hice.
- ¡Y yo concordé contigo! ¡También dije que te amaba!
- ……
Sólo recordaba que ella había dicho 「Por favor, espera
hasta mañana」. Nada más. No recuerdo nada más.
- No lo recuerdas, ¿eh?
No puedo darle una respuesta.
- ¿Puedes imaginarte lo feliz que estaba? Di mi mejor
esfuerzo todo el tiempo durante esas repeticiones para poder
hacer que me mirases. Me cambie el peinado, probé usando
rímel, intenté atraerte, averigüé sobre tus pasatiempos, aprendí
sobre tus hábitos de conversación… y, ¿sabes lo que pasó
después? ¡Ocurrió un milagro! Tu actitud cambió claramente.
Me di cuenta de que tenías interés en mí. Aceptaste mi
declaración, la cual habías estado rechazando anteriormente.
Hasta te declaraste ante mí. Cada vez que lo hacías, elevabas
mis esperanzas. Cada vez, creí que una feliz 「continuación」
me esperaba. Creí que esta repetición finalmente se acabaría.
Pero, ¿sabes qué?... Kazu-kun— -, Mogi-san me mira
inexpresivamente. - —cada vez lo olvidabas.
No puedo soportar su mirada, y bajo la mía.
- Incluso cuando te olvidabas, tenía muchas esperanzas
de que lo recordarías la próxima vez. Cada vez que aceptabas
mi declaración, cada vez que tú te declarabas ante mí, elevabas
mis expectativas una y otra vez. Pero al final no lo recordabas.
Pronto abandone mi esperanza. Pero, ¿sabes? ¡Si alguien se te
confiesa, no puedes evitar tener esperanzas! Podría ocurrir un
milagro, después de todo. Y es por eso que fui herida cada vez.
No puedo imaginarme saliendo con ella. Pero Mogi-san
hizo real lo que yo no fui capaz de imaginarme. Hizo que me
enamorase de ella. Tal vez esta es la razón de por qué mis
recuerdos están conservados vagamente.
Pero, al final, ganar mi afecto de esa forma no tuvo
sentido. No hay nada más allá de eso. Cuando se gana mi
afecto, se acaba ahí mismo. Lo que le esperaba era un amor no
correspondido. Un amor completamente unilateral que sigue
sin ser correspondido aún cuando se gana mi afecto.
- Por lo tanto, ya no quería que te declararas ante mí.
Pero de todas formas venías. Seguías diciendo que me amabas.
Y, aunque estaba feliz, el dolor era mayor… así que no tuve
más opción que decirte esto cada vez:
Mogi-san dice esas palabras que, ciertamente, he oído
varias veces ya.
- “Por favor, espera hasta mañana”.
Mi corazón se retuerce.
Todo este tiempo, ella era más herida por esas
palabras—mucho más que yo.
Pero entonces, ¿por qué simplemente no acaba con el
“Salón Rechazador”? Su amor unilateral no será correspondido.
Aunque no sea su único objetivo, definitivamente sufre de este
modo.
- Kazu-kun… ¿lo entiendes? Es tu culpa que esté
sufriendo. Todo, todo, tooodo es tu culpa.
- ¿Qué tonterías estás diciendo? -, Maria la interrumpe
con un rostro malhumorado. - Qué falta de responsabilidad.
Simplemente estás forzando la responsabilidad de tu dolor en
Kazuki porque ya no puedes soportar la agonía de tu propio
“Salón Rechazador”.
- … ¡No! ¡Es culpa de Kazu-kun que esté sufriendo!
- Cree lo que quieras. Pero Kazuki no lo cree. Ni
siquiera puede recordarte. Kazuki sólo ha conservado sus
recuerdos por el bien de su propio objetivo, no por tu corazón
podrido.
- ¡¿Por qué…?! ¡¿Por qué sabrías algo como eso?!
- ¿Preguntas “por qué”? -, Maria endereza su espalda y
la mira despectivamente. - La respuesta es simple -, responde
con toda tranquilidad, - Porque he observado a Hoshino Kazuki
más que nadie en este mundo.
- ¡¿Qué— -, al oír estas mordaces palabras, Mogi-san
pierde su línea de pensamiento. Intenta murmurar una objeción,
pero su boca solamente se abre y cierra sin formar palabra
alguna.
Cierro mi boca por una razón distinta. Quiero decir, ¡es
vergonzoso cuando alguien dice algo así! En serio.
- ¡N-No, lo he observado por la misma cantidad—
- Tu tiempo no vale nada -, Maria lo niega con un
argumento irracional. - ¿No comprendes que tu tiempo no tiene
valor alguno sólo con mirar lo que has logrado? Mírate en un
espejo. Mira tus manos. Mira tus pies.
En el rostro de Mogi-san había sangre seca que estaba
por volverse negra.
En la mano de Mogi-san había un cuchillo de cocina.
A los pies de Mogi-san estaba el cadáver de Kokone.
- Por favor, siéntete libre de objetar. Insiste en que
observaste a Kazuki tanto como yo lo hice. Si es que en verdad
crees que tus palabras tienen peso alguno.
Mogi-san parece afligida y baja su mirada.
No soy capaz de decirle algo.
- …… Heh, fufufu. ¿Has observado a Kazu-kun más
que nadie en este mundo? Supongo que sí. Tal vez es como
dices. Ufufufu, ¡pero eso no importa! ¿Por qué debería
importar? -, se ríe, con su cabeza aún agachada.
- Hmph, me das pena. Así que al fin te quebraste.
- ¿“Al fin”…? Ufufu… ¿Qué estás diciendo? -. Apunta
su cuchillo cocinero hacia Maria, con su cabeza aún agachada.
- ¿Pensaste que seguía cuerda, en primer lugar? -, levanta su
cabeza. - ¡Deja que te enseñe un agradable hecho, Otonashi-
san! ¡Todos los que son asesinados por mí desaparecen de este
mundo! -, su rostro es inexpresivo, como siempre. - ¡Así que
no importa! ¡No importa cuánto tiempo hayas observado a
Kazu-kun si vas a desaparecer de todos modos!
Mogi-san sujeta el cuchillo de cocina y carga contra
Maria. Grito el nombre de Maria por reflejo, pero ella
aburridamente mira a Mogi-san, sin parecer preocupada en lo
más mínimo. Sencillamente toma el brazo con el que Mogi-san
sujeta el cuchillo y la contiene de ese modo.
- Ugh…
La diferencia de poder es clara. Tanto que me da
vergüenza haber gritado su nombre.
- Lo siento, pero ¿sabes? He aprendido todas las
principales artes marciales. Ver a través de tus movimientos
directos es tan fácil como torcer el brazo de un bebé.
El cuchillo de cocina suena al caer de la mano de Mogi-
san.
Desarmada, Mogi-san mira estupefacta al cuchillo de
cocina que está en el suelo.
- … ¿Tan fácil como torcer el brazo de un bebé…? -,
susurra Mogi-san con mucho dolor con su mirada aún dirigida
hacia el cuchillo.
- …… Ufufufu -, y, a pesar de que está sintiendo dolor,
Mogi-san sonríe.
- ¿Qué es tan gracioso?
- ¡“¿Qué es tan gracioso?”, pregunta! Ufu… haha,
¡HAHAHAHAHAHA! -, se ríe con la boca abierta
ampliamente. Su rostro manchado con sangre, sin embargo,
está bastante lejos de estar sonriendo. A pesar de su risa, la
comisura de sus labios no está levantada. Más que entrecerrar
sus ojos suavemente, los ha abierto ampliamente.
Maria arruga su frente al ver esta fuerte risa.
- ¡¡Claro que es gracioso!! ¡Después de todo,
comparaste el agarrar mi brazo con torcer el de un bebé! ¡Tú,
de entre todas las personas! ¡Tú, Otonashi Aya! ¡Una obra
maestra! ¡Si no es una obra maestra, ¿qué más puede ser?!
- No logro ver lo que encuentras tan entretenido.
- ¿En serio? Entonces, dime, ¿de verdad podrías torcer
el brazo de un bebé?
Aún no puedo entender por qué se ríe. Pero Maria
parece estar sin habla.
- Oh, bien, me atrapaste. Felicitaciones. ¿Y ahora qué?
¿Cuál era tu objetivo?
- …..
- Ya sé, lo he oído muchas veces, después de todo. Es
finalizar este mundo que se repite, ¿verdad? Es obtener una
“caja”, ¿verdad? Así que, ¿qué harás por ella? Sólo tienes que
matarme para acabar con esto, ¿cierto?
- … cierto.
- ¡Sé que has perfeccionado todas esas artes marciales,
Otonashi Aya! ¡Tú misma me lo dijiste! ¿Por qué tú…? ¿Por
qué actúas como si fueses más lista que yo? ¿No es ridículo?
¿Crees que no sabía eso, o qué? ¡Qué vergonzoso! Es
vergonzoso, ¿verdad? Escucha… he vuelto al pasado tantas
veces como tú, ¿sabes? ¡Te conozco bastante bien! Me
desarmaste. Estás sosteniendo mi brazo. ¿Y ahora— -, Mogi-
san regresa a una mirada seria y dice las siguientes palabras
con voz baja, - ¿Qué vas a hacerme a continuación?
- …… -, Maria no contesta.
- Oh, qué amable. Qué amable eres, Otonashi-san. Tú,
que no puedes matarme. Tú, que no puedes torturarme. Tú, que
no puedes siquiera romper un solo hueso. ¿Eres capaz de torcer
el brazo de un “oh, pobre y débil” bebé al ser tan elegante al
odiar la violencia? No, no puedes. Por supuesto que no puedes.
Ya veo. Así que esa la causa principal de las derrotas de
Maria.
Tan pronto la violencia llega a ser la única solución,
Maria no puede hacer nada. Y Mogi-san está consciente de ello.
- Piensa en eso un momento. ¿No crees que tuve la
oportunidad de matarte y “rechazarte” durante todo este
tiempo? ¿Sabes por qué no lo hice, a pesar de que claramente
eras una molestia? Para empezar, ¡es conveniente que me
rescates del accidente! Pero eso no es todo. Me di cuenta de
eso por primera vez cuando descubriste que tengo una “caja” y
fracasaste en arrinconarme.
Maria aprieta sus dientes.
- Ni siquiera mereces—ser mi oponente.
Hace algún tiempo, Daiya me había dicho que el
「Protagonista」 es inferior a la 「Estudiante Transferida」 a
causa de su diferencia en la información. Pero su tesis está
errada.
La 「ProtagonistaM o g i K a s u m i
」tiene más información que la 「
Estudiante TransferidaO t o n a s h i A y a
」.
- Ya he tenido suficiente de este patrón -, dice Mogi-san
con un deliberado tono de aburrimiento.
- … Pero, a diferencia de las otras veces, ahora Kazuki
está aquí.
- Sí, bueno. Entonces, ¿deberíamos intentar algo nuevo?
Mogi-san patea la empuñadura del cuchillo de cocina.
El cuchillo gira en la sangre y se desliza hacia mis pies.
- Recógelo, Kazu-kun.
¿Recoger qué? ¿El cuchillo de cocina? Miro hacia
abajo, al cuchillo de cocina, nuevamente. La sangre en él ha
aumentado. Brilla con un rojo intenso.
- Dime~ Kazu-kun. ¿Me amas? Si así es—
Levanto mi rostro y miro cómo se mueven sus labios.
- —te mataré. Así que dame ese cuchillo.
—¿Qué?
No entiendo. Sé lo que significan sus palabras, pero no
puedo entender lo que acaba de decirme.
- ¿No me oíste? Dije que me pases ese cuchillo para que
pueda matarte -, repite. Parece que no le oí mal.
- Mogi, ¡¿te has vuelto loca?! ¡¿No amas a Kazuki?!
¡¿Por qué le pides algo así?!
- Tienes razón. ¡Lo amo! Pero justamente por eso
quiero que muera. ¿No dije que es culpa de Kazuki que esté
sufriendo? Por lo tanto, lo quiero fuera de mi vista. ¿No es esa
la conclusión lógica? -, dice Mogi-san, como si fuera algo
completamente normal. - Para empezar, ¿por qué crees que
tomé su cebo, a pesar de que sabía que Kazu-kun vendría?
Bueno, ¡tengo un objetivo adecuado! He tomado una
decisión—la decisión de matar a Kazu-kun -, Mogi-san espeta
sus palabras mirándome de reojo. - Puedo “rechazar” a Kazu-
kun al matarlo. Estará fuera de mi vista. Si eso ocurre, estoy
segura de que no sufriré más. Seré capaz de quedarme aquí
para siempre.
- Mogi, ¿qué tonterías dices—¡Ugh! Ah— -, gime de
repente Maria y se arrodilla. Está sosteniendo algo en su lado
izquierdo.
- ¿…? ¿Maria?
Hay algo clavado en su lado izquierdo.
… ¿Eh? ¿Clavado?
- ¡Ah— ¡M-Maria!
Maria mira lo que está clavado en su lado izquierdo.
Apretando sus dientes, saca este cuerpo extraño sin titubear.
Gime de dolor nuevamente. Frunciendo el ceño hacia Mogi-san,
tira lejos el objeto que ha sacado. Miro el objeto que está
rodando en el piso. Es una navaja.
- Tenías la guardia baja. Tal vez hayas perfeccionado
toda clase de artes marciales, pero eso no te hace inmune a los
ataques sorpresa. Este cuchillo barato no es para nada efectivo
contra los hombres, pero debería ser más que suficiente para tu
delgado cuerpo, ¿verdad? Lo siento, ¡pero tu constitución
permanece igual en este mundo sin importar cuánto te
entrenes!
Maria intenta ponerse de pie, pero aparentemente el
lugar de su herida está mal, así que no lo logra. La sangre fluye
rápidamente de su lado izquierdo.
- También he pasado por mucho, ¿sabes? Así que pensé
que sería mejor tener esto conmigo. Siempre llevo este cuchillo
escondido en mi cuerpo.
Mogi-san camina hasta quedar en frente de mí. Se
agacha y recoge el cuchillo de cocina que estaba en el suelo.
- Ah—
Aunque está con la guardia baja por completo, no soy
capaz de dejar salir nada más aparte de ese sonido. No me
puedo mover, como si estuviese petrificado. No puedo hacer
nada más que estar quieto pegado a la pared como un clavo. Mi
cuerpo es abandonado. Mi mente está congelada porque no
puedo aceptar la realidad que está tomando lugar frente a mis
ojos.
- ¿No lo dije, Otonashi Aya? Las personas que van a
desaparecer de todos modos no importan.
Mogi-san se sienta a horcajadas sobre Maria y levanta
el cuchillo de cocina. Lo baja sin titubear. Una y otra, y otra, y
otra vez. Hasta que la respiración de Maria se detiene con
seguridad.
Maria no deja salir ni un solo vergonzoso gemido
durante todo el proceso.
- Si te hubieses quedado como una simple molestia
como un montón de moscas que pululan alrededor de heces, te
habría perdonado. Pero no, ¡tenías que ligar con mi Kazu-kun!
-, se queja Mogi-san, y se pone de pie.
Maria ya no se mueve. Mogi-san mira el cuchillo de
cocina con el que ha apuñalado varias veces a Maria. Luego, lo
arroja a mis pies.
Reflexivamente miro el cuchillo. Aquel cuchillo que
está bañado en sangre de Kokone y Maria.
- Muy bien, tú sigues, Kazu-kun.
Me agacho y tomo el cuchillo de cocina a regañadientes.
Inmediatamente quito mi mano cuando siento el viscoso toque
de la sangre. Trago saliva y lo tomo una vez más. Mi mano
tiembla, no puedo tomarlo apropiadamente. Cierro mis ojos y
me obligo a tomarlo. Los abro de nuevo. El hecho de que estoy
sosteniendo el arma que mató a Kokone y a Maria hace que mi
mano tiemble aún más. Casi lo dejo caer. Lo tomo con ambas
manos para suprimir el temblor.
Ha~ah, no puedo. Definitivamente no puedo hacer nada
con este cuchillo.
- ¿Qué estás haciendo, Kazu-kun? Vamos… ¡dame el
cuchillo!
No, no soy sólo yo. Nadie podría hacer algo con este
cuchillo. Eso significa que—
- … ¿Quién te hizo hacer todo esto, Mogi-san?
Mogi-san tampoco debería haber sido capaz de hacer
algo con él. De ninguna forma habría sido capaz de hacer esto.
A menos que haya sido manipulada.
Me mira perpleja.
- … ¿De qué estás hablando? ¿Quieres sugerir que
alguien me dirigía? ¿Estás bien de la cabeza, Kazu-kun? Eso
no podría ser posible, ¿o sí?
- Pero me enamoré de ti.
- …… ¿A dónde quieres llegar?
- Incluso después de experimentar más de 20.000
repeticiones, incluso después de haber sido arrinconada, jamás
harías una cosa así, Mogi-san. ¡La chica de la cual me enamoré
jamás haría una cosa así!
Por un momento, Mogi-san es golpeada por mis
palabras, pero luego me frunce el ceño y contesta. - … Ya veo.
Así que, apelando a mis emociones, quieres que te perdone la
vida, ¿eh? Estoy decepcionada. Jamás pensé que fueras tan
cobarde. Así que en verdad no quieres morir por mi bien, ¿eh?
No hay forma de que quisiera eso. Para empezar, no
quiero morir, y no creo que ella e pudiese salvar si yo hiciese
eso.
- …… Kazu-kun, ¿crees que matar es un tabú absoluto?
- … Sí.
- Ufufu, qué correcto eres. Sí, tienes razón. ¡Tienes toda
la razón! -, dice y husmea en mis ojos. - —Entonces, durante
toda una vida… no, por favor, disfruta tu estadía aquí por
toda la eternidad -, me dice con una voz fría. Probablemente
porque sabe que eso es lo menos deseo. - Porque—si entrego
mi “caja”, moriré.
En otras palabras, ¿morirá si el “Salón Rechazador” se
acaba? Maria no había mencionado una sola palabra sobre eso.
- ¿Lo entiendes? Al sacar esta “caja” me matarás.
¿Crees que estoy mintiendo? ¿Crees que sólo estoy diciendo
excusas aleatorias para proteger la “caja”? ¡Pues no es así! ¡Lo
entenderás si piensas un poco al respecto! Quiero decir, ¿por
qué crees que tuve el deseo de volver al pasado?
¿Cuándo alguien quiere volver al pasado? ¿Tal vez en
momentos cuando sucede alguna tragedia…?
- ¿Nunca te preguntaste por qué siempre soy arrollada
por ese camión? Tengo que reconocer que hubo veces en las
que Otonashi Aya se sacrificaba por mí… ah, por cierto,
también hubo veces cuando tú te sacrificabas. Pero la mayoría
de las veces sólo era yo, ¿verdad?
- Ah—
No me digas que—
Finalmente me di cuenta de una posible explicación.
¿Por qué Mogi-san no quiere acabar el “Salón
Rechazador”? Ese accidente de tráfico es un fenómeno
inevitable en el “Salón Rechazador”. Alguien, específicamente
Mogi-san, se ve envuelto en ese accidente. No sé por qué, pero
con seguridad eso pasa.
「Creo que—una vez que algo ha sucedido, no puede
ser deshecho.」
Una vez dije esas palabras. Maria respondió como
sigue: “Tu sentimiento es normal. Y, al parecer, el creador de
este “Salón Rechazador” también piensa como tú”.
Así que, asumiendo que tengo la oportunidad de
destruir la “caja”. Hacer eso también significaría—
- ¿Estás preparado para hacerme la víctima de un
accidente?
—¿matar a la chica que amo?
Un sonido apagado resuena. Primero me pregunto qué
fue ese sonido, pero luego me doy cuenta de que el cuchillo ha
caído al suelo.
- ¿Ni siquiera eres capaz de pasarme el cuchillo? Qué
lamentable…
Mogi-san camina hacia mi lado. Recoge el cuchillo de
cocina. Probablemente ahora me matará.
Como ha cometido tantos pecados, sólo puede
justificarse al seguir cometiéndolos. Si no lo hace, será
aplastada por su consciencia. Ya no puede regresar. Ha perdido
los medios para controlarse, así que se desenfrenará y me
matará.
Probablemente— 「 Kasumi Mogi 」 dejó de ser
「Kasumi Mogi」 cuando mató a su primera víctima.
En su rostro inexpresivo está la sangre de dos chicas. Se
agacha a la misma altura que estoy yo, porque no me puedo
poner de pie. Pone sus brazos a mis alrededor, con el cuchillo
en su mano. Deja que sus brazos se intercepten detrás de mi
cuello, y pone la hoja en mi arteria carótida.
El rostro de Mogi-san se acerca, y luego abre su boca.
- Por favor, mantén los ojos cerrados.
Cierro mis ojos como me dice.
Algo suave toca mis labios.
Instantáneamente me doy cuenta de qué es.
Al final, cierta emoción brota en mí. La emoción que no
brotó ni siquiera cuando vi el cadáver de Kokone, o en el
momento en que Maria fue apuñalada.
Es ira.
Yo—no puedo perdonar esto.
- No es la primera vez que te beso, ¿sabes? Pero me
temo que siempre es forzadamente.
No puedo perdonar esto. Quiero decir, ni siquiera puedo
recordar eso. Y estoy seguro que tampoco recordaré esta vez.
- Adiós Kazu-kun. ¡Te amé!
¿De verdad está satisfecha con recuerdos que no puede
compartir con alguien? Bueno, tal vez Mogi-san esté satisfecha
con eso, considerando lo mucho que ya se ha acostumbrado a
estar sola.
Un agudo dolor corre a través de la parte posterior de
mi cuello.
Traiciono la petición de Mogi-san y abro mis ojos. Ella
se enoja, pero no puede desviar su mirada a tiempo. Ha~ah,
finalmente nuestros ojos de encuentran apropiadamente.
Tomo su mano.
Por el rabillo de mi ojo puedo ver cómo el líquido rojo
fluye desde mi cuello hacia sus manos y gotea desde allí.
- … ¿Qué estás haciendo?
- No… puedo perdonar…
- ¿No puedes perdonarme? Fufu… En realidad no me
importa. Estoy consciente de eso. ¡Pero no importa! De todas
formas este es el adiós.
- No es eso.
- ¿Qué es, entonces?
- No eres tú a quien no puedo perdonar. ¡Es al “Salón
Rechazador”, que está lejos de ser como el día a día!
Sujeto más fuerte su muñeca. Su delicada mano es
inmovilizada por la mía. Mi vista se vuelve negra por un
momento. El sangrado en mi cuello debe ser fatal.
- ¡S-Suéltame—!
- ¡No!
Aún no sé qué hacer. Estoy seguro de que no puedo
matarla, pero me cuenta claramente de una cosa: este “Salón
Rechazador” es imperdonable. Por lo tanto, definitivamente no
debo desaparecer a esta altura.
- ¡Deja que te mate! ¡Por favor, deja que te mate! -,
grita. Aunque se supone que estas son palabras de rechazo, me
suena a que está llorando por el dolor. Casi como un lamento.
… Ah, ya veo. Finalmente me doy cuenta.
Está llorando.
En la superficie, está inexpresiva, como siempre. No ha
derramado lágrima alguna. La miro directamente, y ella desvía
su mirada inmediatamente. Sus frágiles y delgadas piernas han
estado temblando todo el rato. No puede darse cuenta de sus
propios sentimientos al haber perdido su expresión facial. Ni
siquiera puede darse cuenta de que está llorando. Sus lágrimas
ya no fluyen, probablemente porque se secaron hace mucho
tiempo.
Disculpa por no haberlo notado antes.
- No dejaré que me mates. No permitiré que me
rechaces.
- ¡No me fastidies! ¡No me atormentes más!
Lo siento, pero no puedo escuchar esa súplica.
Por lo tanto—
- ¡Definitivamente me rehúso a dejarte sola aquí! -,
grito.
Tal vez sólo es mi imaginación, pero he tenido la
sensación de que Mogi-san se relajó por un segundo.
¡Pero aún así…!
- Ah—
Mi vista se vuelve completamente negra. Un golpe en
mis mejillas regresa temporalmente mi visión. El escenario ha
cambiado. Las zapatillas de Mogi-san manchadas con sangre
están justo frente a mis ojos. Mis manos ya no están
sosteniendo su muñeca, sino que están tiradas en el suelo,
impotentes.
No es como si ella me hubiese hecho algo. Colapsé por
mi propia cuenta.
A pesar de que estaba seguro de que finalmente había
encontrado una forma de persuadirla, ya no me puedo mover.
Hasta tengo problemas para mover mi boca.
- Soy… una idiota.
Escucho su voz.
- Sólo por eso, sólo por una frase como esa, yo—
Al ser incapaz de levantar mi cara, no sé cómo lucía su
rostro cuando dijo eso.
- ……… Debo… matar. Debo matar. Debo matar.
Debo matar. Debo matar. Debo matar. Debo matar. Debo matar.
Debo matar. Debo matar. Debo matar. Debo matar -, como si
se diese instrucciones a sí misma, repite las mismas palabras.
Sus zapatillas de mueven. La sangre de alguien se
derrama en mi cara. Veo levemente el brillo del cuchillo de
cocina. —Ah, está planeando usarlo.
- Ahora sí será el adiós, Kazu-kun.
Se agacha y acaricia suavemente mi espalda.
- —Debo matar…
Y luego entierra la hoja—
- —Debo matarme a mí misma.
—en su propio cuerpo.
27.755ª vez
- —Debo matarme a mí misma.
Desesperadamente me instruyo a mí misma. Esta es la
única forma, la única forma de prevenir el ser poseída por mi
falsa 「yo」.
Abandonaré todo. Esta es la única forma que se me
ocurre para pagar mis pecados.
Entierro el cuchillo en a mitad de mi cuerpo. Él
finalmente se da cuenta de lo que he hecho y me está mirando
con sus ojos abiertos ampliamente.
Por favor, no pongas esa cara. Intento calmarlo con
una sonrisa—pero entonces me doy cuenta de que ya no puedo
sonreír. No he sonreído, ni llorado desde hace mucho, después
de todo.
La temperatura de mi cuerpo decae más y más. Espero
que la suciedad dentro de mí se vaya junto con la
temperatura…
「¡Definitivamente me rehúso a dejarte sola aquí!」
Gracias, pero eso no es posible. Ha sido imposible
desde el inicio. ¿Cómo alguien podría no estar de acuerdo?
Quiero decir—
—hace ya mucho tiempo que morí.
0ª vez
Ah, voy a morir.
Este pensamiento continuaba, mientras seguía viva
durante un lapso de tiempo increíblemente largo luego de ser
arrollada por el camión. De ninguna forma puedo sobrevivir a
tal impacto. Voy a morir, mi vida acaba aquí.
N-No, no quiero—
Estas son las tontas palabas de alguien que nunca ha
pensado seriamente en el concepto de la muerte, a pesar de
haber pensado varias veces en morir.
Morir. Acabar. No hay nada después. Me doy cuenta de
lo horrible que es ahora que estoy a punto de morir.
Si esto de todas formas va a ocurrir, ¡entonces al
menos podría haber sucedido después de que el amor
cambiase mi mundo!
¡Ahora, conozco el amor!
¡Tengo un objetivo!
¡Aún no he hecho nada por él!
—Esto es demasiado cruel.
- Mhm, una situación que atrae mi interés.
Un hombre (¿o mujer?) aparece de la nada. No tengo
idea cómo apareció. Para comenzar, ¿por qué siquiera puede
hablarme normalmente? Ni siquiera puedo percibir claramente
sobre qué está de pie. Estoy toda torcida, así que ni siquiera sé
en qué dirección estoy mirando. Y aún así, esa persona no
desvía su mirada de mí. Esta es una situación imposible de ser.
Ah, no, eso no es verdad. Estoy en otro lugar, desconocido, y
estoy de pie frente a esa persona. No sé dónde estoy. No recibo
ninguna impresión de este lugar, pero es un lugar especial.
- No me malinterpretes, no estoy hablando de tu
accidente. Tales accidentes son comunes y ocurren en todo el
mundo. Lo que atrae mi interés es que este accidente ocurrió
cerca del chico en el cual estoy interesado.
¿De qué está hablando?
He oído que ves toda tu vida frente a ti cuando mueres,
pero no había oído nada sobre ser traído a este extraño lugar y
hablar con esa persona.
¿Es un Shinigami o algo así?
Una persona que luce parecido a todos, pero no se
parece a ninguno.
Pero una cosa sí es segura, es encantador. Su
apariencia, su voz, su fragancia, me fascinan.
- Quiero ver cómo reacciona el chico a las “cajas”
usadas a su alrededor. Ah, pero también estoy interesado en
cómo usarás tu “caja”, por supuesto. Después de todo estoy
interesado en toda la humanidad. Bueno, pero, naturalmente,
sólo eres una 「extra」 -, diciendo estas incomprensibles
palabras, esa persona sonrió. - ¿Tienes un deseo?
¿Un deseo? Claro que tengo uno.
- Esta es una “caja” que concede cualquier deseo.
La acepto.
De inmediato me doy cuenta de que todo esto es real.
Por lo tanto, decididamente no suelto esta “caja”.
Por favor, si no puedo cambiar este final, entonces, por
favor, al menos déjame rehacerlo un poco. Me basta con que
sólo sea el día de ayer. Hay algo que aún me falta hacer.
Aunque sólo sea por ayer, puedo transmitir mis sentimientos.
Si soy capaz de hacer esto, estoy segura de que no tendré
ningún remordimiento. No importa cuál sea su respuesta, no
tendré remordimiento alguno. Por favor, regresa el tiempo por
un pequeño momento. Estoy consciente de que esto no es
posible, pero aún así, es lo que deseo.
Cuando lo deseé, la “caja” se abrió como la boca de
un carnívoro, y desapareció, mezclándose con el espacio.
Muy bien. Debería estar bien así.
- Fufu— -, la encantadora y sonriente persona comenta
una sola oración sobre mi deseo, - —ve lo que obtienes al
contenerte.
Y luego desaparece, y yo soy lanzada fuera de este
lugar especial que no dejó impresión alguna en mí.
Llego a una cámara envuelta en oscuridad, en la cual
un intenso hedor golpea mi nariz como si incontables
cadáveres hubiesen quedado abandonados aquí. Es una
habitación desagradable, comparada con ella, una prisión
habría parecido un paraíso. Ha~ah, si me quedo sólo una hora
aquí, me desmayaré. Pero la habitación comienza a pintarse
de blanco. La blancura hace que pierda de vista los límites de
la habitación. Y entonces, como si alguien encendiese un
incienso hecho de dulces, una dulce fragancia borra el olor
podrido. Cada vez que pestañeo, aparecen cosas necesarias,
como un pizarrón, escritorios y sillas. La habitación termina
de llenarse y lo único que falta es llamar a los actores
necesarios. Insertar a la gente que entró a nuestro salón ayer.
Si eso es hecho, puedo rehacer las cosas. Puedo rehacer el día
de ayer.
Pero no importa cuán limpiamente pueda estar pintado
este lugar, sigue siendo una cámara peor que una prisión.
El mundo después de mi muerte, empaquetado con una
blanca, blanca, muy blanca esperanza.
Así que, sí. Si parece que no puedo lograr mi objetivo—
—tendré que destruir yo misma esta caja., antes de que
la linda decoración se despegue exponiendo esa vergonzosa
vista ante mí.
5.000ª vez
- ¿Por qué simplemente no lo matas? -, Haruaki-kun
sugiere, bromeando, esa bizarra tontería cuando consulto con
él.
6.000ª vez
- ¿Por qué simplemente no lo matas? -, Haruaki-kun me
dice, bromeando, la misma solución por enésima vez cuando
consulto con él.
7.000ª vez
- ¿Por qué simplemente no lo matas? -, Haruaki-kun me
dice, bromeando, esta solución lógica.
8.000ª vez
- ¿Por qué simplemente no lo matas? -, Haruaki-kun me
sugiere su teoría, bromeando.
9.000ª vez
- ¿Por qué simplemente no lo matas? -, Haruaki-kun me
dice, bromeando, este hecho cuando consulto con él en mi
grave situación.
9.999ª vez
Haruaki ya me ha dicho la manera de borrarlo a él
mismo.
- ¿Cómo puedes asegurarte de que, definitivamente, no
quieres ver más a una persona?
Haruaki me sugirió varios métodos, tantos que estoy
harta de oírlos. Eventualmente, llegamos a la conclusión de
que los sentimientos de culpa son la mejor forma de hacer que
uno evite a cierta persona. Nuevamente, es como siempre.
Y, como siempre, me dice cómo crear esos sentimientos
hacia alguien.
- ¿Por qué simplemente no lo matas? -, Haruaki-kun me
dice, bromeando, el último método que me queda. - Esa es la
solución definitiva. Aunque, bueno, si en verdad lo matas, ¡ya
no será problema de volver o no volver a verlo, heh!
¿Por qué es necesario “rechazar” a Haruaki-kun?
Bueno, es porque creo que su desaparición tendrá un gran
impacto en Kazu-kun y en mí.
Vivir en este mundo se parece a jugar un juego de
Tetris que no puedes acabar. Al principio dar tu mejor intento
para alcanzar una nueva puntuación máxima. Eso también es
divertido. Pero después dejas de preocuparte por tu
puntuación, después de todo, no importa si alcanzas una nueva
puntuación alta o no; sólo es un juego que se reiniciará. Y
luego comienzas otra vez. Nada cambia cuando alcanzas el
“Game Over”. Sigues dando tu mejor intento para divertirte
un poco, pero juegas con un esfuerzo poco entusiasta, y la
pantalla se llena en poco tiempo. Se vuelve aburrido. Deja de
ser interesante. Se vuelve difícil para ti. Se vuelve doloroso.
Pierdes el espíritu de siquiera girar el bloque. Simplemente no
te importa. Pero aunque no te importe, los boques siguen
viniendo. No importa cuán seguido alcancen la parte de arriba,
no puedes detener el juego. Si me detengo, moriré, y no quiero
eso. Después de todo, tengo un objetivo que alcanzar. Tengo
que pasar este día sin arrepentimientos. Es por eso que debo
cambiar este sistema por completo de alguna forma.
Y Haruaki es una parte importante de este sistema. Por
lo tanto, tengo que “rechazarlo”.
- …… ¿Puedes decirme una vez más cómo puedo crear
sentimientos de culpa?
- … ¿Qué te ocurre Kasumi? Aunque, bueno, no me
importa… -, dice Haruaki, como siempre. - ¿Por qué
simplemente no lo matas?
Esta es exactamente la 1.000ª respuesta.
¡Es verdad! Esa es la única forma. Sí, no puede evitarse.
Entiendes, ¿verdad? Me lo dijiste 1.000 veces, así que
entiendes, ¿verdad? Mejor dicho, tú quieres que lo haga,
¿verdad?
—Tú quieres que te mate, ¿verdad?
10.000ª vez
- ¡Detente, por favor! ¡Por favor, no me mates!
No le prestaré oído.
Mataré a Usui Haruaki.
Después de todo, él mismo me lo sugirió, ¿verdad?
Ma** a Usui Haruaki.
Y después desapareció. La persona que alguna vez fue
Mogi Kasumi desapareció. Supongo que no veré nuevamente a
la “yo” que fue aplastada en agonía, hecha polvo y llevada
por el viento hacia algún lugar. Sin embargo, mi cuerpo sigue
resucitando. Mi cuerpo sigue resucitando por siempre, a pesar
de estar vacío por dentro.
Siento que algo entra en mi cuerpo vacío. Algo sucio
que nació en esta “caja”. Algo increíblemente grotesco que
huele tan asqueroso como un montón de insectos muertos
mezclados con heces. Lo rechazo. Lo rechazo continuamente.
Pero lo sé muy bien: puedo rechazarlo tanto como quiera, pero
esto gradualmente entrará a mi cuerpo a través de sus huecos.
Huele mis puntos débiles como una hiena y comienza a teñirme
de negro comiéndome por mis partes débiles. Me vuelvo
completamente de negro y hasta pierdo consciencia de mi
identidad. Me vuelvo alguien falso que sigue teniendo mi
rostro.
Pero aún así, no puedo dejar que acabe.
¡Definitivamente pasaré el día sin arrepentimientos!
—¿Pasar el día sin arrepentimientos?
- Hahaha.
¿Soy estúpida? ¿Cómo sería capaz de hacer eso aquí?
Este es el mundo después de mi muerte. Así que, ¿cómo irían a
desaparecer mis arrepentimientos en el mundo real al hacer
algo en este mundo alternativo? Aunque Kazuki se me
declarase en este mundo, no tendría sentido. Quiero decir,
¿cómo podría sentirme satisfecha en un “hoy” completamente
aparte?... No se me ocurre nada.
El resultado que he esperado tanto tiempo.
Con el fin de perseguir esto, he dado mi mejor intento
en este punto muerto durante todas estas repeticiones.
Pero ni siquiera sabía qué era ese resultado que estaba
esperando.
Lo he buscado a tientas todo este tiempo sin saber
dónde estaba.
Y entonces, llegué a la conclusión de que, al final, no
existe tal resultado.
- ¡No quiero morir!
Ha~ah—Heh. Finalmente me di cuenta.
Así que ese era mi “deseo”.
Así que ese era mi “deseo” que no puede cumplirse por
toda una eternidad.
Y distorsioné tanto la “caja” porque no pude darme
cuenta de eso antes. Este “deseo” distorsionado mío pasó a
ser una 「atadura」 y ya no desapareció. Está en la “caja”,
por lo que no desaparecerá.
Esta 「 atadura 」 permanece en mí y continúa
moviendo a mi “yo” falso. Así que estoy segura de que aunque
yo desaparezca, esta “caja” no lo hará. Jamás.
27.755ª vez
「¡Definitivamente me rehúso a dejarte sola aquí!」
Solamente gracias a esas palabras, por sólo un
momento pude volver a ser la Mogi Kasumi que era antes.
- Soy una idiota.
¿No me había decidido ya? ¿No había decidido desde
el principio que destruiría la “caja” antes de que perdiese de
vista mi objetivo y me deshonrase a mí misma?
Pero esas incontables repeticiones debilitaron mi
determinación más y más, hasta que acabó desapareciendo.
Esa vez, cuando maté a cierta persona cuyo nombre ya
ni siquiera recuerdo, debería haber perdido toda forma de
regresar.
Pero—
- Sólo por eso, sólo por una frase como esa, yo—
—aún era posible.
Mi amor me ha salvado justo en el último momento.
Pero sé que volveré a ser atrapada de inmediato. Voy a ser
atrapada por la “caja”. Por lo tanto, mientras aún soy 「Mogi
Kasumi」—debo matarme.
- Adiós, Kazu-kun.
Y ahora, la “caja”, que no pudo traerme felicidad a
pesar de ser tan conveniente, va a terminarse.
Puedo fallecer así de cerca de mi ser amado. Tal vez
este sea un feliz giro de los acontecimientos. Así que, de este
modo está bien. Estoy bien.
Cierro mis ojos.
Seguramente no volveré a abrir—
- ¿Quién te dio permiso para morir?
Quedo perpleja, y abro mis ojos.
La persona inidentificable que una vez me dio la “caja”
está allí. Kazu-kun no parece darse cuenta de su presencia, así
que soy la única que puede verlo.
Cuando nuestras miradas se encuentran, esa persona
sonríe tranquilamente.
- Aún quiero observar a ese chico. Me complica si
finalizas esta increíble oportunidad de observación ilimitada
por cuenta propia.
¿Qué?... ¿Qué está diciendo?
- Pero bueno, supongo que no es tan emocionante que
sean situaciones similares todo el tiempo. Veamos… está en
contra de mis principios, pero, ¿puedo encargarme de la
“caja”? La alteraré sólo un poco. Estás planeando destruirla
de todos modos, así que no te importa, ¿verdad?
Sin esperar por mi respuesta, coloca su mano en mi
pecho. En el momento que hace eso…
- ¡Ugh, aaHa~ah! ¡¡AHA~AHHH!!
Un intenso dolor que excede la imaginación. Un dolor
que me hace gritar, a pesar de que me he acostumbrado a la
colisión con un camión y de que ni siquiera levanté mi voz
cuando me apuñalé a mí misma. Esta clase de dolor de
diferente. Es una sensación como si mi alma fuese cortada en
mil pedazos. Un dolor que ataca directamente los nervios y no
puede ser apaciguado.
Él saca la “caja” del tamaño de una mano y sonríe.
- Ha~ah, creo que ya te habías dado cuenta, pero esta
“caja” ya no puede funcionar sin ti. Así que tendrás que entrar
a la “caja”- . Mientras dice eso comienza a doblarme. Me
dobla y me dobla, y luego me mete dentro de la “caja”.
Kazu-kun. Por favor, Kazu-kun, sé que estoy siendo
egoísta, y también sé que es insolente después de hacerte esas
cosas, pero, pero—no puedo—ya no puedo—
Kazu-kun, ayúdame—
27.756ª vez
Tengo que acabar con el “Salón Rechazador” y
recuperar mi vida cotidiana.
¿Qué es lo peor que podría suceder para dificultarme el
lograr ese objetivo? ¿Encontrarme con un gran obstáculo? Por
ejemplo, ¿uno donde tenga que atravesar un delgado hilo de un
edificio a otro? ¿O uno donde tenga que repetir el mismo día
un millón de veces?
No creo que sea así. Quiero decir, en ese caso sé cómo
superar el obstáculo. No importa lo difícil que parezca, podría
adquirir las habilidades necesarias para superarlo durante este
tiempo casi ilimitado.
No, creo que el no saber cuál es el obstáculo es lo peor
de todo. Si no sé qué hacer, simplemente estoy perdido. Pero el
tiempo no transcurre aquí, así que el tiempo no puede resolver
el problema por mí.
Y acabo de—encontrarme con el peor escenario posible.
- ¿Qué ocurre, Hoshii? Hoy estás actuando algo extraño.
Es el recreo después de la primera lección. Haruaki me
habla con una suave risa.
La lección acaba de terminar, así que nadie ha
abandonado el salón aún. Mogi-san también está sentada en su
puesto. Así es—todos, mis 38 compañeros, están dentro del
salón de clases.
Intento pensar en por qué la gente “rechazada” está aquí,
pero por alguna razón he olvidado casi todo lo de la última vez.
Tengo la corazonada de que descubrimos algo, pero no puedo
recordar nada.
Pero está bien. Aún así está bien.
Si logramos descubrir algo importante, lo volveremos a
descubrir en poco tiempo. Para mí es todo un misterio el por
qué mis compañeros han vuelto, pero no afecta a lo que tengo
que hacer.
Ese no es el problema.
- Cielos, hoy sí que está aburrido~. ¡No sucedió nada
especial en lo absoluto!
No sucedió nada especial.
Un dolor atraviesa mi pecho debido a la observación de
Kokone.
No quiero creer esto. No quiero admitir la situación
actual.
- Daiya -, llamo a Daiya, que está detrás de mí, con voz
suplicante. Él sólo voltea su cabeza hacia mí, esperando para
oír mi inquietud. - ¿Oíste algo respecto a una estudiante
transferida hoy? -, digo con la vaga esperanza de que asentiría.
Pero mi pregunta es—
- ¿Haa? ¿De qué estás hablando?
—negada con el ceño fruncido, como esperaba.
Así es—Otonashi Aya ya no se volvió a “transferir”.
Por lo tanto, no sé qué hacer ahora.
Encontrar al “dueño”. Y luego, ¿qué? ¿Sacar la “caja”?
¿Destruir la “caja”? ¿Cómo hago eso?
Pretendía encontrar una solución junto a Maria. Pero
sólo me estaba apoyando en eso. Era completamente
dependiente de ella, así que no sé qué hacer ahora que no está
aquí.
*
- Pero escucha, ¿no es lo mismo sea esta nuestra vida
cotidiana o ese “Salón Rechazador”? -, así contesta Haruaki
ante mi pregunta.
Consulté con él durante los recreos porque no tenía idea
de qué hacer. Y esa es la respuesta que obtuve de él en la parte
trasera del edificio de la escuela cuando acabé de contarle todo
durante la hora de almuerzo.
Conozco la personalidad de Haruaki. No diría eso
porque no crea mi historia.
- ¿Lo mismo…?
- Ah, no. No es que no te crea, en serio. Es sólo que,
bueno, digamos que de verdad estamos dentro de ese “Salón
Rechazador”. Entonces, ¿qué es diferente a la vida cotidiana
que extrañas?
- ¿Qué es diferente? Son completamente—
- Iguales, ¿verdad? La gente que desapareció,
incluyéndome, ha vuelto. Otonashi Aya no era miembro de esta
clase, de todos modos. Simplemente volvió a lo que solía ser al
principio. ¿O me equivoco?
¿Simplemente volvió a lo que solía ser?
Tal vez.
Después de todo, puede que nunca la hubiese conocido
sin el “Salón Rechazador”.
Nadie sabe respecto a Maria. Es completamente normal.
La existencia de Otonashi Aya no pertenece a la clase de 6 de
primer año, para empezar.
Tal vez todo fue un sueño. Tal vez Otonashi Aya sólo
fue una ilusión mía.
… No lo sé. Pero hoy sigue siendo 「2 de Marzo」.
- Pero, ¿sabes? Si este es el “Salón Rechazador”,
entonces el 「2 de Marzo」 de hoy nunca acabará. Así que,
¿puedes decir que es igual a la vida cotidiana?
Estaba seguro de que Haruaki estaría de acuerdo
conmigo. Pero…
- De hecho, ya había considerado eso.
En lugar de eso, ladea su cabeza.
Estoy sin habla a causa de que responde tan
francamente. Haruaki se rasca la cabeza, incómodo, cuando
me ve así, y continúa.
- Sé lo que quieres decir. Pero, mira, ¿no tienes esa
sensación de incomodidad sólo porque sabes que es un bucle?
¿Y si, por ejemplo, tu vida cotidiana hasta ahora también
hubiese consistido en tales días que se repiten? No te habrías
dado cuenta, ¿verdad? Y, efectivamente, yo tampoco siento
nada en este momento. Estoy convencido de que en este
momento me encuentro en mi vida cotidiana. Aunque, sólo
como hipótesis, este sea ese “Salón Rechazador”.
Él—tiene razón.
Tengo esta sensación de incomodidad y disgusto
porque estoy consciente de estas repeticiones. Si no lo supiese,
no me importaría en lo absoluto.
Ni siquiera tendría este conflicto que tengo ahora si no
supiese respecto al “Salón Rechazador”. Incluso si el día se
estuviese repitiendo, podría disfrutar de esta vida cotidiana con
la que fui provisto. Podría pasar todo mi tiempo sin saber que
trágico destino de cierta persona. Sería algo lleno de felicidad,
y conveniente.
Para destruir esto no hay más que mera auto-
satisfacción.
- Estoy seguro de que ya entiendes lo que tienes que
hacer, Hoshii.
- Sí. Ya sé qué tengo que hacer.
- ¿Verdad? Bueno, entonces—
Haruaki se calla de repente. Me doy vuelta
preguntándome el por qué, y veo a Mogi-san de pie allí.
- ¿Qué ocurre? -, pregunto.
- Me gustaría tomar prestado a Kazuki. ¿Está bien?
Haruaki y yo intercambiamos miradas al oírla.
- Este… Hoshii. ¿Estás bien con esto por ahora? Si aún
hay algo que quieras decirme, te escucharé.
- Sí, gracias Haruaki.
Haruaki se va diciendo, - De nada.
Me pregunto qué quiere de mí. ¿Me buscaba a mí en
específico?
Me concentro en su rostro. Qué rostro más lindo.
Cuando pienso eso, no puedo soportar el seguir viéndola y
desvío mi mirada.
- —— -, a pesar de que ella es quien vino a mí, Mogi-
san frunce el ceño. - … Deja que te pregunte algo. Tal vez
suene extraño, pero por favor, responde sin meditarlo.
- Ah, está bien…
Asiento, pero Mogi-san sigue con el ceño fruncido,
teniendo problemas para comenzar. Después de un rato,
aparentemente llega a una decisión y me mira directamente a
los ojos.
- ¿Soy Mogi Kasumi?
—¿Hah?
Como no esperaba una pregunta como esa, ni siquiera
puedo sorprenderme y sólo me quedo de pie con una cara seria.
Mogi-san desvía su mirada, incómoda.
- … Este… ¿Mogi-san? ¿Perdiste la memoria o algo
así?
- … Puedo entenderte. Pero por favor, contesta mi
pregunta.
- Por supuesto que eres Mogi Kasumi, Mogi-san…
Oh, cielos, jamás diría eso en mi vida cotidiana.
- Ya veo… -. Por alguna razón, Mogi-san murmura eso,
luciendo un poco desolada. - Muy bien. Puede que suene
increíble, pero prepárate y escucha. Yo soy—
Entonces, Mogi Kasumi, la chica que amo, dice algo
completamente contradictorio.
- —Otonashi Aya.
- ——¿Eh? ¿Otonashi Aya…? ¿Mogi-san es Maria?
¿Qué significa esto?
Mientras me abruma la sorpresa, Mogi-sa continúa.
- Sí, soy Otonashi Aya. Estaba a punto de perder la
confianza en mí mismo porque todos, absurdamente, me
llamaban 「 Mogi Kasumi 」 a pesar de mi apariencia
comportamiento distintos, pero definitivamente soy 「Otonashi
Aya」.
Bueno, la persona en frente de mí es 「 Mogi
Kasumi」. A decir verdad, también tengo la sensación de que
su apariencia y forma de hablar encajan perfectamente con la
「Otonashi Aya」 en mis recuerdos, pero…
- Este… cierto, es ese trastorno de personalidad
múltiple que siempre sucede en los mangas, ¿verdad? ¿No será
que estás con otra personalidad en este momento…?
Eso también es bastante absurdo, pero sigue siendo
conocimiento general.
- También tuve esa clase de ocurrencia. Pero si fuese así,
deberías sospechar respecto a mi comportamiento diferente y
no deberías conocer el nombre 「Otonashi Aya」, ¿verdad?
Es cierto, jamás dije el nombre 「Otonashi Aya」 en
voz alta en frente de ella.
- En primer lugar, ¿por qué de repente te convertiste en
Mogi-san?
- … No lo digas tan ambiguamente. Simplemente
cambié a la posición de 「Mogi Kasumi」. No es como si me
hubiese transformado en ella. Bueno… como sea, ¿cómo puedo
explicar esta situación…? Cierto, ¿entiendes que no puede
haber una 「Mogi Kasumi」 en esta 27.756ª vez si yo soy
「Otonashi Aya」, ¿verdad?
Asiento.
- 「Mogi Kasumi」 desapareció. Su posición quedó
vacía. ¿Aún recuerdas que no me convertí en una estudiante
transferida por cuenta propia? Tal vez, esta vez fui colocada en
esa posición vacía en lugar de convertirme en una estudiante
transferida.
Eso se siente tan… forzado.
- ¡Es imposible que yo—no, que la clase completa te
confunda con Mogi-san!
- En efecto, esa era una gran duda para mí. Pero a
cambio, otra más fue resuelta. La “dueña” del “Salón
Rechazador” experimentó 27.755 bucles. Por lo tanto, su
personalidad también debería haber cambiado. Y aún así, nadie
se dio cuenta.
Puede que eso sea cierto.
- Es seguro asumir que hay una regla en el “Salón
Rechazador” que dificulta que los demás se den cuenta de los
cambios por los que pasa la “dueña”. Es más, el cambio de la
“dueña” no se ve afectada por sus relaciones. Mogi Kasumi era
la “dueña”, pero desapareció por alguna razón, y yo la
reemplacé. Como la regla se aplica, nadie se da cuenta de nada,
aunque la apariencia y personalidad de mi persona, 「Otonashi
Aya」, son completamente diferentes.
La explicación de Mogi-san suena plausible, por ahora.
Si realmente es Maria, esa sería una razón para estar
feliz. Debería serlo. Quiero decir, por cuenta propia no tengo ni
idea de qué hacer. Pero si es Maria, con seguridad será capaz
de guiarme.
Sin embargo—
- No creo esto.
—no puedo aceptarlo.
Mogi-san parece sorprendida ante mi marcada
resistencia y abre ampliamente sus ojos.
- … Sé que suena difícil de creer, pero esa no es razón
para oponerte a mí de esa forma.
Me muerdo los labios.
- Ah, ya veo. Simplemente no quieres aceptar ese hecho.
Aceptarlo también significaría admitir que Mogi es la “dueña”.
Y no quieres admitir eso, de ser posible. Lo que está bien,
después de todo amas a M—
- ¡¡Detente!! -, grito por reflejo.
¡Tienes toda la razón! Definitivamente no quiero
aceptar eso. Pero no me refiero a la afirmación de que ella es la
“dueña”. Lo que no puedo aceptar es que—
- …… Amo a Mogi-san -, saco la voz. - Lo sé.
Mogi-san levanta una ceja, en señal de que no tengo
que decirle esto ahora.
- Por lo tanto—¡¡no es posible que seas Maria…!!
Aprieto mis puños. Al ver mis puños temblando,
debería haberse dado cuenta de lo que intento decir. Abre
ampliamente sus ojos y cierra su boca.
Amo a Mogi-san. Ese sentimiento no ha cambiado, ni
siquiera ahora.
Ese sentimiento no ha cambiado—ni siquiera ahora
que Mogi-san actúa como 「Otonashi Aya」.
Si todo lo que Mogi-san dice es verdad, entonces soy un
tonto sin remedio, al no darme cuenta de que mi persona amada
cambió. Al no darme cuenta de que mi persona amada fue
reemplazada por Maria. No hay problema con ella, es sólo que
no puedo tratar con mis propios sentimientos.
Dicen que el amor es ciego. Pero este es un nivel
completamente nuevo.
Falso.
El amor que he sentido por un período de tiempo
increíblemente largo resultaría ser falso.
Por lo tanto, no puedo aceptarlo. No puedo aceptar que
ella sea 「Otonashi Aya」. En el momento en que lo acepte,
este amor va a terminar.
- ¡Amo a Mogi-san! -. Por lo tanto, digo esto, lo que
debe sonar a una declaración de guerra a ella.
Sin decir nada, baja su mirada.
Esta fue la peor declaración de todas. Ni siquiera pensé
en la otra persona mientras me declaraba, sólo lo hice para
negar la situación.
Aprieto mis puños más fuertemente. Pero de todos
modos tengo que decirlo.
- ¡Si insistes en ser Maria, entonces pruébamelo!
Ella sigue mirando hacia abajo por un rato. Pero luego
abre sus ojos con determinación y habla.
- Kazuki, aunque te rindas frente al “Salón Rechazador”,
mi misión no cambiará. Así que, al principio, pensé en dejarte
estar. No obstante, no quiero hacer eso, después de todo. No
quiero que caigas de rodillas por algo como esto.
Toma mi mano derecha. Mi vista deambula hasta ella.
Me está mirando directamente a los ojos.
- Así que ahora te darás cuenta de que no soy otra más
que Otonashi Aya.
Acerca mi mano a su pecho.
- ¿Q-Qué estás hacien—
- Soy una “caja” -, dice desdeñosamente. - Por lo tanto,
no soy lo mismo que la humana 「Mogi Kasumi」.
- Tu “deseo” aún está siendo concedido y eso, ¿verdad?
En ese caso, ¡es igual para Mogi-san! ¡Aunque me muestres tu
“caja”, eso no demuestra que seas 「Otonashi Aya」!
Sacude su cabeza.
- En los cuentos de hadas existen hadas que te conceden
sólo un deseo, ¿verdad? cuando oyes una historia como esa,
¿alguna vez has pensado “por qué simplemente no desear por
deseos ilimitados”?
Asiento. Al hacerlo, uno tendría un sinfín de deseos.
También había pensado en eso.
- Es un poco vergonzoso, pero mi deseo es similar a ese
-, dice burlándose de sí misma. - Mi deseo fue—「Quiero
conceder los deseos de los demás」. Me convertí en un ser que
concede deseos.
- Eso es—
Igual que la “caja”.
Pero creo que ese es un “deseo” bastante honrado.
Entonces, ¿por qué pone una sonrisa tan burlona de sí misma?
- Pero no pude creer completamente en su viabilidad.
La “caja” no pudo conceder mi “deseo” completamente. Todas
y cada una de las personas que han usado mi persona, una
“caja”, desaparecieron. Porque la “caja” había conjeturó mi
duda de este modo: 「no es posible que los “deseos” sean
concedidos tan convenientemente en el mundo real」.
Quedo sin palabras. ¿Cuánto tiene que jugar la “caja”
con nuestras vidas para quedar satisfecha?
- Kazuki, permitiré que toques mi “caja”. Después de
eso ya no serás capaz de hacer preguntas tan estúpidas como
quién soy yo.
Abre mi mano y la presiona contra su pecho.
Siento el latir de su corazón
Y en ese momento—
- Ah—
Me hundo hasta el fondo del mar. Aunque se supone
que es el fondo del mar, está iluminado como si el sol se
hubiese hundido también. Es hermoso. Estoy fascinado con el
agua. Pero hace frío. No puedo respirar.
Todos lucen felices. Todos lucen felices. Todos lucen
felices. En el fondo del mar. Juguetean con peces del fondo
marino. Se sofocan, se hinchan, se congelan, son aplastados
por la presión del agua, y sonríen. Nada tiene sentido aquí.
Nada es importante aquí. Por todos lados aparecen marionetas.
Y gente llenando el teatro. Y se muestra la historia de
imágenes. Y comedias. Una tragedia donde todos son felices.
Entre ellos, alguien está llorando.
Solamente uno está llorando, rodeado por los demás
que ríen alegremente, - AHAHAHAHAHAHAHAHA.
Sacudo mi cabeza. Esto es mi imaginación, sólo es mi
imaginación. ¡No puedo ver nada aquí!
Pero ya fue suficiente para que me diese cuenta de algo.
Para que me diese cuenta de la emoción de alguien, de lo que
seguramente ya no me libraré ni alejaré.
Una soledad increíble.
Me escurro del fondo del mar y regreso a donde estaba
antes.
Ha soltado mi mano.
Lentamente quito mi mano de su pecho, y, exhausto,
caigo sobre mis rodillas. Al mismo tiempo noto que mis
mejillas están humedecidas por lágrimas.
Ya no puedo negarlo. Después de presenciar eso, ya no
puedo negarlo.
- Esta es mi “caja”—“Felicidad Imperfecta”.
Ella es—「Otonashi Aya」.
¿“Mogi-san también posee una caja”? Eso no importa.
No es un argumento que pueda ser usado para negar a Maria.
No hay necesidad de razonar lógicamente. Me di cuenta al
tocarla. Me di cuenta de que es Maria.
Estoy seguro de que no quería mostrar esto a las demás
personas. No obstante, me lo mostró. Para que yo no perdiese
contra el “Salón Rechazador”.
- Maria, lo siento…
Maria sacude su cabeza con una sonrisa.
- —
Odio mis sentimientos.
Me di cuenta. Me di cuenta de que ella es 「Otonashi
Aya」, y aún así mis sentimientos hacia ella no han cambiado.
Su sonrisa me parece terriblemente linda. Los restos de mi
amor aún me confunden sin alejarse.
Me siento tan mortificado al estar tan unido a ese amor,
que mis lágrimas no se detienen.
- Kazuki -, Maria dice mi nombre.
- ¿Eh?
Y luego realiza una acción impensable.
Me abraza.
A pesar de saber lo que está haciendo, no entiendo por
qué lo hace. No me abraza de la forma que esperaría de
Maria—es tímida.
- Fuiste el único que recordó mi nombre- . Maria habla
con acertijos. - Si no fuera por ti, habría estado sola. No quiero
admitirlo, pero me apoyaste. Incluso durante el tiempo en el
que creía que eras el “dueño”. Así que—
Finalmente reconozco lo que está haciendo.
- —al menos por ahora, yo te apoyaré.
Me abraza fuertemente. En contraste con el tono que
usa, que es bastante débil, más bien me está envolviendo que
apoyando.
- Déjame ser amable contigo al menos por ahora,
mientras sientes amor hacia mí.
No lo sé.
No sé si esta emoción se dirige a 「Mogi Kasumi」,
「Otonashi Aya」, o ambas. Lo único que sé, es que estoy
increíblemente feliz por eso.
- Ah.
Tal vez—
Tal vez Maria no dejó que tocase su “caja” por mi
propio bien. Maria no quería que la llamase 「Mogi Kasumi」.
Quiere decir que quería que admitiese su existencia.
Después de considerar esa teoría por sólo un momento,
tengo que admitir que eso es pensar demasiado, y me río sin
querer.
*
- Hoshii, ¿de qué hablaste con Kasumi después de que
me fui?
Es después de clases. Haruaki toca mi pecho con una
gran sonrisa.
- ¡¿Se te declaró, o algo así?!
- Ah… no.
Me confesó que es Otonashi Aya, así que en cierto
sentido, tiene razón.
- ¿Oh? ¡Sólo te andas con rodeos! ¡Qué sospechoso!
¡¿Acerté?! ¡Maldición, qué celoso estoy! ¡Kasumi se ha vuelto
más hermosa últimamente!
Ah, ya veo.
Al ver a Haruaki hablar tan alegremente, finalmente me
doy cuenta de lo que tengo que hacer.
Aunque es reconfortante el que me haya reunido con
Maria, he estado sin saber qué hacer a causa de que 「Mogi
Kasumi」, la “dueña”, desapareció.
「Si haces de Hoshino Kazuki tu enemigo, también
harás que un inmortal esté en tu contra. ¡Yo!」
Recuerdo las palabras que Haruaki le dijo una vez a
Maria. Aunque esto ocurrió hace bastante tiempo, así que ya no
estoy muy seguro acerca de las palabras exactas.
Así es. Debo obtener su apoyo, sin importar qué.
- Haruaki, ¿podemos retomar la charla de antes?
Se sorprende por un instante cuando le pregunto de
repente, pero luego asiente con una sonrisa.
- Te dije antes que me había dado cuenta de lo que tenía
que hacer, ¿cierto? Déjame decirte la conclusión a la que he
llegado.
Miro a los ojos de Haruaki y declaro la guerra que voy a
luchar.
- Yo—lucharé en contra del “Salón Rechazador”.
Él abre sus ojos ampliamente cuando escucha mi
declaración.
- Este… escucha… ¿No te lo expliqué claramente?
Aunque estemos en ese “Salón Rechazador”, no hay
restricciones mientras no sepas respecto a él.
- ¡Sí, pero simplemente no puedo! ¡No me es posible
permitirme estar en una vida cotidiana en la cual no puedo
continuar con mi vida porque todo se repite!
- ¿Por qué?
- Porque—sí sé respecto a ello, aquí y ahora mismo.
Tal vez todo continuaría sin problemas para mí si tan
sólo me olvidase sobre estar en el “Salón Rechazador”. Sin
embargo, sí sé respecto al salón. sé que no es más que una vida
cotidiana falsa.
Por lo tanto, no puedo ignorarlo.
Tal vez sólo sea auto-satisfacción. No obstante, estoy
convencido de que tengo razón y no puedo actuar de otra forma.
- … Bueno, es cosa tuya. Pero en ese caso, ¿hay alguna
razón de que seas tan obstinado? -, Haruaki pregunta sólo por
curiosidad.
¿Una razón…? ¿La razón por la cual insisto tanto en
una vida cotidiana real? He pensado sobre eso. Y la verdad es
que tal vez mi apego a mi vida cotidiana no sea normal.
- Me parece que esa razón también tiene que ver con la
vida y la muerte… -, susurra Haruaki.
Ah, cierto. Eso es. La razón es tan sencilla.
- Es—la razón de la vida.
Haruaki abre sus ojos ampliamente, ya que al parecer
no esperaba esta respuesta.
- ¿La razón de la vida? ¿Qué es eso? ¿A qué te refieres?
- No puedo sé cómo decirlo, pero… por ejemplo,
obtener 100 puntos en un examen con el que no has aprendido
nada no te hace feliz, ¿verdad? Eres feliz cuando obtienes 100
puntos como resultado de aprender con el máximo esfuerzo
mientras tienes como objetivo obtener una buena calificación.
¿O me equivoco?
- Efectivamente, algo que has obtenido después de
mucha dificultad tiene más valor que algo por lo cual no
realizaste algún esfuerzo.
- En mi opinión, perseguir este “algo” es lo que
significa vivir. No creo que sea exagerado. Quiero decir, todos
moriremos algún día. ¡La consecuencia de la vida es la muerte!
El perseguir únicamente al resultado me asusta.
- Todos moriremos algún día… Es verdad.
- Si este es el “Salón Rechazador”, donde todo se
declara vacío, entonces de ninguna forma puedo aceptarlo.
Tengo que estar en mi vida cotidiana para poder proteger mi
razón de vida. Por lo tanto, niego a la “caja” que niega la vida
cotidiana.
Haruaki escucha mi honesta opinión con mucho interés.
… Tal vez ni siquiera necesitaba decirle todo eso.
Probablemente Haruaki me ayudaría sin condiciones.
- Haruaki, ¿me ayudarás?
Haruaki me da un visto bueno sin dudar.
*
Por sugerencia de Haruaki, decidimos informar también
a Kokone y Daiya respecto al tema. Los cinco nos hemos
reunido alrededor de la cama en ese hotel de clase alta que
había visitado antes con Maria.
Le expliqué el estado de la situación a Kokone y Daiya.
De hecho, esperaba que Maria se quejase sobre esta
pérdida de tiempo, pero la verdad es que no me interrumpió y
sólo complementaba lo que yo decía de vez en cuando. Tal vez
quería oír nuevas opiniones sobre el tema.
- Este… Entonces dices que Kasumi en realidad es
Otonashi Aya y no Kasumi, y que la Kasumi real es la “dueña”,
quien creó el “Salón Rechazador” y no conocemos su
paradero… Y ahora quieres una solución, ¿eh…?... ¡No tengo
idea de qué estás hablandooo! ¡No entiendo nada de nadaaa! -,
Kokone se deja caer sobre la cama. - Ha~ah, esta cama es
increíble.
- No pedí tu opinión sobre la cama.
- ¡Ya lo sé! -, contesta enojadamente ante mi broma.
Aunque probablemente Kokone en verdad estaba cavilando
sobre el tema, a pesar de comportarse así.
- Déjame preguntar algo… -, intercede Daiya. - Si
estamos en el “Salón Rechazador”, ese supuesto accidente
ocurrirá de nuevo, ¿verdad?
- Sí, debería -, contesta Maria.
¿Eh…? ¿Daiya se lo está tomando en serio?
- ¿Por qué pones esa cara de estúpido, Kazu? Pareces
una carpa en frente de su cebo, abriendo y cerrando su boca.
- Eh, no—sólo estaba sorprendido de que nos creyeses
tan rápido respecto al “Salón Rechazador”.
- ¡Como si fuese a creer una cosa así! -, dice Daiya con
desdén.
- —Eh… ¿Eh…?
- No me importaría si sólo tu te hubieses vuelto loco,
pero ahora hasta Mogi-san está diciendo cosas raras. Puede que
haya otra circunstancia detrás de esto, pero es demasiado
fastidioso hablar de eso. Así que decidí aceptar ese “Salón
Rechazador” por ahora, y dejé de dudar en ese punto.
En resumen: ¿quiere ayudarnos?
- ¿Y entonces, Daiyan? Puede que el accidente vuelva a
ocurrir. ¿Y entonces…? -, Haruaki lo insta a continuar.
- Ah. Si el accidente ocurrirá como suele hacerlo,
¿quién va a ser la víctima? Mogi ya no está aquí, ¿verdad?
- Probablemente… seré yo. Es seguro asumir que tomé
ese rol también, ya que fui forzada a estar en su posición.
- ¿Siempre fue Kasumi quien fue arrollada? -, pregunta
Haruaki.
- No, también hubo casos en que otros eran arrollados
después de tratar de rescatarla. Yo, Kazuki, Mogi, y hasta tú,
porque intentaste salvarme mientras yo intentaba salvar a Mogi.
Y no sólo una vez. Lo hiciste varios cientos de veces.
- ¡Guau! ¿En serio? Espera, ¿varios cientos de veces no
es como imposible…?… Ah, no, no necesariamente, ¿eh?
También es plausible que la misma persona tomase la misma
acción en la misma situación.
- Aún peor, en la mayoría de los casos te me declaraste
de antemano -, Maria suspira.
- Un hombre que se sacrifica para salvar a la mujer que
ama… ¡Oh, vaya! ¡¿No soy genial?!
- Para ser sincera, deberías haberte ocupado de tus
propios asuntos.
- Q-Qué cruel -, Haruaki hace una mueca.
Pero supongo que no será capaz de reconsiderarlo, ya
que sus acciones no estuvieron mal.
- Ya que estamos en el tema, ¿cuántas veces me declaré
ante ti, Aya-chan?
- Exactamente 3.000 veces.
- V-Vaya, qué apasionado soy…
- ¡Entonces fuiste rechazado 3.000 veces! ¡Ese tiene
que ser un récord de ser rechazado sin precedentes! ¡Tu
desesperanza es bastante asombrosa, Haru!
- ¡Cállate, Kiri!
Esos dos sí que son graciosos.
- Mogi… ah, no, por ahora te llamaré Otonashi.
Otonashi, ¿por qué Mogi se dirigía a la escena del accidente
cada vez a pesar de saber que el accidente ocurriría?
Maria levante una ceja ante la pregunta de Daiya, y
contesta, - Porque está definido en las reglas del “Salón
Rechazador”. Oomine, creo que ya leíste mi mente, pero he
intentado prevenir el accidente varias veces.
- Bueno, obviamente no te sacrificarías de inmediato.
Es más normal pensar que llegaste a esa línea de acción
después de algún tiempo. Aunque, por mi parte, jamás elegiría
ser arrollado.
- Oye, ¿por qué están hablando sobre el accidente?
Nada se arreglará mientras no encontremos a Kasumi, ¿verdad?
-, Kokone ladea su cabeza mientras los interrumpe.
Daiya desvía la mirada, molesto. - Este ruidoso
personaje humanoide me está sacando de quicio.
- Ahaha. Si tan sólo tú fueras arrollado 20.000 veces por
un camión, ¿no? ☆.
- Deja que te pregunte, Kiri, ¿cómo vas a encontrar a
Mogi por nosotros?
- Bueno… no sé. Y, como sea, ¡¿tú sabes cómo?!
- Ni idea.
- Oho… me sorprende que seas capaz de hacerte el
inocente mientras me llamas “ruidoso personaje”. ¿Por qué no
desechas tu apellido “Oomine” y te pones “Sr. Inocente” en su
lugar? Inocente Daiya. ¡Vaya, encaja a la perfección!
- Yo no soy el único que no sabe. Los otros tampoco
saben, ¿verdad?
Haruaki y yo intercambiamos miradas. Bueno, tiene
razón. Si supiésemos, lo propondríamos de inmediato.
- Por lo tanto, tenemos que buscar otra solución. Por eso
mencioné el accidente del camión, que obviamente es un
evento especial en esta repetición. Un pensamiento
completamente normal. Srta. Jugadora Humanoide que dice
sandeces, ¿mi explicación fue capaz de alcanzarla?
- Ugh… -, Kokone aprieta sus dientes, irritada, vencida
por su explicación.
- De todas formas, deberíamos hacer algún progreso al
evitar el accidente. Por lo tanto, vale la pena intentarlo. Ese es
tu punto, ¿cierto, Daiyan?
Daiya asiente ante el resumen de Haruaki.
- Exactamente. Pero no hay caso si no podemos evitarlo.
- No— -, Maria niega su declaración. - Puede que valga
la pena intentarlo. Cuando estaba sola tenía mis límites, pero
con esta cantidad de gente puede que resulte, de alguna manera.
- ¿Acaso importa el número de personas? Cero es cero,
no importa por cuánto lo multipliques. ¿No es lo mismo para
esta clase de imposibilidad que enfrentamos? -, objeta Daiya.
- Entiendo tu punto, pero creo que hay una posibilidad.
Después de todo, las condiciones han cambiado. Yo no soy
Mogi, sino 「Otonashi Aya」. Puede que la probabilidad ya no
sea cero. Así que no puede estar mal mejorar las oportunidades
al incrementar el número de personas, ¿no crees?
Daiya cruza los brazos y cavila un rato. Al final asiente,
- Tienes razón.
- ¡Muy bien! ¡Está decidido, lo intentaremos!
¡Evitaremos el accidente de alguna forma! ¿Alguna objeción?
Nadie objeta ante el resumen de Haruaki.
Sí. Esto debería, probablemente, funcionar.
*
Temprano por la mañana. Una hora antes del accidente
que ha solido ocurrir hasta ahora.
Estamos de con paraguas en la escena del accidente, el
cruce de calles.
Haruaki y yo tenemos el papel de salvar a Maria de ser
necesario. Es peligroso si el accidente realmente ocurre, pero
ambos nos ofrecimos voluntarios para esta posición.
Se supone que Maria tiene que encontrar y entrar al
camión en cuestión. Había emitido la opinión de que la
probabilidad de ser arrollada por el camión sería mínima si
simplemente se sentaba en el asiento del conductor.
Estoy nervioso. No debemos fallar. Anoche no pude
cerrar pestaña. Debido a la ansiedad, y debido al deseo de
confirmar algo, conversé por teléfono con Maria durante varias
horas.
Miro el rostro de Haruaki, a mi lado. A diferencia de mí,
no parece nervioso. Su expresión es la misma de siempre. El
rostros que siempre he visto en el “Salón Rechazador”.
Puede que esta vez seamos capaces de destruirla.
—No importa si el accidente ocurre o no.
- Haruaki, me gustaría conversar un poco mientras
esperamos. ¿Está bien?
- ¿Por qué eres tan formal? ¡Por supuesto que está bien!
Sin querer miro hacia el cielo cuando escucho el sonido
de las gotas de lluvia sobre mi paraguas.
- Es sobre Mogi-san.
- ¿Kasumi? Este…, ¿no Otonashi-san, sino la
verdadera?
Asiento.
- No te conté que ella nos… mató, ¿verdad?
- … ¿Qué es esa historia tan violenta? -, Haruaki
levanta una ceja.
No es como si se lo hubiese guardado en secreto.
Simplemente no pude recordar hasta que me di cuenta de que
Mogi-san es la “dueña”. Y, como si mis grilletes fuesen rotos
en el momento en que recordé quién era el “dueño”, recuperé
todos los recuerdos de la última vez.
- Yo, Maria, Kokone y probablemente hasta tú, fuimos
asesinados por ella.
- … ¿Fuimos asesinados? ¿Por Kasumi? ¿Por qué?
¿Con qué propósito?
- ¡Lo hizo para poder “rechazar” a los demás!
Originalmente, todo es declarado vacío en el “Salón
Rechazador”. Así que, aunque mates a alguien, va a ser
deshecho. Pero parece que Mogi-san es capaz de “rechazar” a
los demás al matarlos con sus propias manos. Creo que lo hace
porque entonces puede desear el jamás volver a ver a esa
persona desde el fondo de su corazón.
Haruaki asiente con una expresión seria. Ya le había
explicado lo de “rechazar”, y que, al hacer eso, uno ya no
puede recordar a la otra persona.
- Nuestra Kasumi hizo eso, ¿eh?... Bastante increíble.
Pero… bueno, supongo que no me sorprende que Kasumi se
vuelva así después de experimentar casi 30.000 repeticiones.
Me parece normal.
- ¿De verdad piensas eso? -, le pregunto.
- ¿Mh? Quiero decir que puede ser difícil de imaginar,
pero cualquiera podría volverse extraño al estar en un punto
muerto como ese, ¿cierto?
- En efecto. Pero, ¿sabes qué? Aunque te volvieses loco,
aún así no matarías. ¡Simplemente ese pensamiento no parece
normal!
- ¿Eso crees? ¿No estás demasiado apegado a tu propio
punto de vista?
Tal vez. Pero no puedo creerlo. Quiero decir, el
asesinato sólo se volvería una manera efectiva de “rechazar”
porque sentiría culpa al hacerlo. No puedo creer que una
persona así pueda pensar en un crimen como ese por su cuenta.
- … Te declaraste a Maria 3.000 veces y fuiste arrollado
otras cientos de veces en lugar de ella, ¿verdad?
- Así parece. Aunque ahora no puedo recordarlo.
- Claro. Pero, respecto al resultado, tus acciones sí la
perturbaron, ¿cierto?
- Ah—… aunque eso no fue a propósito -, dice Haruaki
con una amarga sonrisa.
- Fue tan perturbada por eso porque ningún mensaje, sin
importar lo absurdo que sea, gana tanto peso al ser repetido
tantas veces. Por ejemplo: no importa cuánto creas que eres
hermoso, si alguien te dice mil veces que eres feo, perderás esa
confianza, aunque la otra persona esté bromeando.
- Bueno… supongo que sí.
- Por lo tanto, Maria no pudo evitar el ser consciente de
ti cuando te le declaraste 3.000 veces. Y estamos hablando de
Maria. Créeme, sí le afectó cuando te le opusiste.
「Si haces de Hoshino Kazuki tu enemigo, también
harás que un inmortal esté en tu contra. ¡Yo!」
Vuelvo a recordar esas palabras.
- … ¿Oh? ¿Activé la flag de la ruta de Aya-chan?
Sonrío levemente e ignoro su broma.
- Entonces, ¿y si hubiese habido alguien que le sugirió
el asesinato a Mogi-san unas mil veces? ¿Eso no le haría creer
a Mogi-san que no existe otra forma? Después de todo, ni
siquiera podía confiar en alguien y estaba al borde de la locura.
Haruaki asiente.
- … Admito que eso sería duro. Y, de hecho, es posible.
Después de todo, el que le hablara estaría en un punto muerto.
Sus acciones y valores no cambiarían. Sería completamente
normal el decir las mismas cosas una y otra y otra vez. Si dijera
una cosa una vez, probablemente diría lo mismo mil veces.
- Es tal como dices. Pero en ese caso sería problemático.
Sería como un accidente, ¿verdad? pero, mira— -, finalmente
desvío mi mirada del amenazante cielo, - —¿y si alguien
eligiese sus palabras y acciones a propósito para poder
arrinconarla? -, y entonces, concentro la vista en Haruaki.
Él no muestra signo alguno de molestia, ni siquiera
cuando le miro.
- ¿Mh? Pero es imposible, ¿o no?
La expresión de Haruaki es la misma de siempre.
- ¡Claro que no! Por ejemplo, habría sido posible para
Maria y yo si hubiésemos querido. Quiero decir, en otras
palabras, ¡que habría sido posible si hubiese habido una
persona que pretendía haber olvidado sus recuerdos en frente
de Mogi-san!
Haruaki escucha mis palabras silenciosamente sin
objeción.
- El ser capaz de mantener los recuerdos propios debe
ser un poder superior—eso fue lo que pensé originalmente.
Después de todo, normalmente uno pensaría que mientras más
información, mejor, ¿cierto? Pero eso no es verdad. el
continuar manteniendo los recuerdos propios también significa
el ser continuamente atacado por aquellos sin memoria y por
aquellos que pretenden no tenerla. Los sin memoria están en
una zona segura. Pueden atacarnos desde allí, mientras
nosotros estamos en la línea del frente.
Yo también experimenté un ataque así, cuando la chica
que amo respondió 「Por favor, espera hasta mañana」ante mi
declaración. Aunque ella no estaba en la zona segura.
- ¿Y si hubiese alguien que atacó a Mogi-san
deliberadamente desde esa zona segura? ¿Alguien que estaba
consciente de su sufrimiento, que se preocupó de que ella no
encontrase una forma de escapar y hubiese preparado la
respuesta “asesinato” para ella? Si fuese así—
- Si fuese así, podrías decir que ese sujeto controló a
Kasumi y la asistió con los asesinatos deliberadamente -, dice
Haruaki casualmente. No niega mi declaración.
- No podemos estar seguros de que Mogi-san fue el
único objetivo.
- ¿Pero…?
- Quiero decir que ella no era la única estando en línea
del frente. Maria y yo también estábamos allí. Depende de las
metas de esa persona, pero tal vez también intentó controlar a
Maria y a mí. No… tal vez ya hemos sido más o menos
controlados.
「—¿Quieres probar matándome?」
Recuerdo esas palabras que alguien alguna vez me dijo.
Y, en realidad, no he oído esas palabras una única vez. Me las
dijo incontables veces. Esas palabras se pegan a mi cabeza
como una maldición.
Y eso no es todo. Me mostraron cadáveres. A Maria se
le declararon, tuvo que ver a alguien sacrificándose por ella y
se encontró con el rechazo.
Todo era información que logré sacar de mi memoria
fragmentada. Probablemente también habían trampas más
pequeñas que no noté.
Atacando continuamente desde un lugar seguro, sin
riesgo alguno. Aunque no fuese como lo esperado, uno podría
rehacer este ataque ilimitadas veces.
- Si asumimos que nuestras acciones fueron controladas
hasta cierto grado por esa persona— -, trago saliva, - —
también ha planeado la situación en la que nos encontramos.
Haruaki se mantiene en silencio. Su rostro está oculto
por su paraguas, así que no puedo ver su expresión.
El silencio continúa. El sonido de la lluvia me parece
extrañamente fuerte. Oigo una pequeña voz. Al principio me
pregunto qué es, pero cuando agudizo mis oídos me doy cuenta
de que es una risa contenida.
Haruaki mueve su paraguas y me muestra su rostro. Me
mira y se ríe, entretenido.
- Este… Hoshii. ¿Qué se supone que sea esta broma, o
mejor dicho “gran hipótesis”? Para empezar, es definitivamente
imposible. No es tan fácil el controlar a los demás, ¿o sí? Claro,
es una historia divertida, pero siendo honesto, no sé si esté bien
reírse o no, porque pones una cara tan seria… espera, de todas
formas ya me reí porque es demasiado gracioso.
- Sí, supongo que fui muy indirecto para ti.
- … ¿Indirecto? De todas formas, ni siquiera entiendo lo
que querría lograr ese sujeto. Pero sea lo que sea, debería haber
una forma más sencilla -, Haruaki sigue hablando con voz
fuerte.
- Sí. Tampoco conozco su motivo. Así que pensé en
preguntarte.
- … ¿Preguntarme?
Al decir esto, ya no seré capaz de retirarme.
- Haruaki—
Pero perdí la intención de retirarme hace mucho tiempo.
- —¿por qué no arrinconaste para hacer esto?
No responde.
Su rostro nuevamente está oculto por su paraguas.
No dice nada. Probablemente no pretende decirme nada.
- Ya no recuerdo cuál fue el momento, pero nos hicimos
amigos poco después de entrar a la escuela. Y gracias a ti,
también pude hacerme amigo de Kokone y Daiya.
Probablemente mi vida escolar hubiese sido un poco más
aburrida si no hubiese sido por ti. Todo es gracias a ti.
Así que yo tengo hablar en su lugar.
- No ha pasado ni un año desde que nos hicimos amigos,
pero—
- ¿Así que dices que no puedes juzgar si haría algo
como esto?
Sacudo mi cabeza. Aunque Haruaki probablemente no
puede verme.
- Hay muchas cosas que no sé sobre ti. Pero hay algo
que sé con seguridad. Al menos puedo decir esto sin
equivocarme -, declaro. - Usui Haruaki jamás haría algo
como arrinconarnos.
Finalmente puedo ver su expresión. Haruaki me mira
con los ojos abiertos ampliamente.
- Así que—
Finalmente lo digo.
- Así que—¿quién eres tú?
「¿Oh? ¡Sólo te andas con rodeos! ¡Qué sospechoso!
¡¿Acerté?! ¡Maldición, qué celoso estoy! ¡Kasumi se ha vuelto
más hermosa últimamente!」
Haruaki dijo esas insignificantes palabras.
Pero noté algo allí.
Hay una regla en el “Salón Rechazador”. La gente de
alrededor no se da cuenta de los cambios de Mogi-san. No se
dan cuenta de nada, ni siquiera cuando es reemplazada por
「Otonashi Aya」. Así que, ¿cómo? ¿Cómo?
—¿Cómo podría decir que Kasumi se ha vuelto más
hermosa?
Ese no es el único punto sospechoso.
Haruaki ha sido “rechazado”.
Hasta yo me había olvidado de él. Pero logré
recordarlo otra vez.
“Lo recordé porque es un preciado amigo”. Así es como
lo interpreté. Pero, ¿cómo podría recordarlo, cuando no pude
recordar ni siquiera a una sola persona que hubiese sido
“rechazada”?
Sólo es una hipótesis, pero creo que no puedo olvidarlo
por completo porque alguien más se había mezclado con
Haruaki.
Ambos no cuentan como prueba. No, están llenos de
espacios en blanco.
Pero eso ya no importa.
Porque he recordado.
He recordado algo que no debería ser capaz de recordar.
- ¿Tienes un deseo?
- Esta es una “caja” que concede cualquier deseo.
Las palabras de alguien que podría ser cualquiera, pero
que a la vez no podría ser cualquiera.
- ¡Dime qué planeas!
Y entonces digo su nombre.
Digo el nombre del distribuidor de la “caja”, a quien
había olvidado todo este tiempo.
Su nombre es—
- “0”.
Y en el momento en que digo su nombre—
- Fufu.
—Haruaki desaparece del rostro de Haruaki.
No es como si la forma de su cabeza cambiara.
Simplemente Haruaki ya no está en la sonrisa de su rostro. El
farsante que sólo se ha disfrazado con la piel de Haruaki.
La imagen que nos ha perseguido todo el tiempo
finalmente está por aclararse.
—“0”.
- Cielos. Nadie debería conocer ese nombre, a
excepción de la actual “dueña” de esta “caja”, ¿sabes? Qué raro.
- Fuiste descuidado con tus palabras.
- ¿Descuidado? -, “0” se rió, pareciendo estar realmente
entretenido.
- No fui para nada descuidado. Para empezar, ni
siquiera tengo que ser cuidadoso con las cosas. ¡Tú eres
anormal porque fuiste capaz de cobrar consciencia de mí con
esas pistas!
- ¿Eso crees?
- Entonces, dime, cuando ves a alguien actuando un
poco extraño, ¿de inmediato piensas “Esta es otra persona.
Alguien lo está suplantando.”?
Tengo que admitir que tiene razón. No importa lo
sospechoso que actúe una persona, no es razonable considerar
que sea alguien más.
- Y aún así, me encontraste. Lo significa que sabías de
mí, una posible causa para tal hecho. Aunque nadie debería ser
capaz de recordar mi existencia.
- Si no debería ser capaz de hacerlo, ¿por qué lo hice?
- Quién sabe. Es todo un misterio. Tal vez la existencia
de Otonashi Aya te influenció. Bueno, aunque sólo porque
alguien más te enseñó sobre ella, no deberías ser capaz de
percatarte de mi existencia.
“0” está hablando de forma agradable. Pero en la
situación actual no puedo preocuparme por tales cosas.
- … Ah, ¿quieres saber mis intenciones? ¡Muy bien! No
hay nada que ocultar. Yo—sólo quería observarte de cerca.
Cuando oigo esto, comienzo a sentirla.
Ha~ah—otra vez.
La misma sensación extraña e incómoda que sentí
cuando lo vi la primera vez. La siento una vez más.
¿Qué es esto? ¿Qué es esta sensación?
- … ¡No lo entiendo! ¿Cómo es que eso te hizo
arrinconar a Mogi-san?
- ¿La razón de por qué arrinconé a la “dueña”? Como
dije, es porque quería observarte. Pero, bueno, lo explicaré de
una forma más sencilla -. “0” comienza a hablar de una forma
entretenida. - Quería ver cómo reaccionarías ante la “caja” de
alguien más. Cuando el “deseo” estropeado de Mogi Kasumi
de rehacer su pasado fue concedido, fui tan irreflexivo como
para regocijarme por un momento. Estaba feliz porque fui
capaz de observarte, envuelto en una “caja”, durante un largo
período de tiempo… Pero no tomó demasiado para que me
diese cuenta que este fue un error. Porque, naturalmente, quería
observarte lo más que pudiese en todas las situaciones posibles.
Pero no puedo hacer eso en esta “caja” que ustedes llaman
“Salón Rechazador”. Todos hacen lo mismo todo el tiempo,
incluyéndote, por supuesto. No importa cuánto Mogi Kasumi y
Otonashi Aya estabilizaran sus propias memorias, no es para
nada interesante si la persona importante, tú, no mantiene sus
recuerdos.
Me abrazo a mí mismo a causa de esta sensación
incómoda.
- Por lo tanto, decidí interferir contigo. Me convertí en
Usui Haruaki a causa de su posición central, desde la cual
podía influenciarlos a los tres fácilmente. Bueno, me permití a
mí mismo construir un ambiente deseable para mí al tomar
ventaja de Usui Haruaki, Otonashi Aya y Mogi Kasumi, e
implementé la retención de tu memoria en el sistema. ¡Gracias
a eso fui capaz de observarte bastante bien!
- Entonces, ¿acaso manipulaste a Mogi-san para que me
matara porque querías…?
- Sí, quería ver cómo reaccionarías ante un ataque
mortal de la chica que amas.
… Y por eso Mogi-san tuvo que sufrir sin parar.
- Ah, y por esa misma razón fue que te induje ese amor,
por supuesto.
- ¡¿Qué—
¿Mis sentimientos fueron inducidos—
- ¿Oh? Estaba seguro de que te habías dado cuenta. Ah,
ya veo. Así que no querías darte cuenta. Fufu… esos
momentos son los que hacen valer el estar cerca de ti. A decir
verdad, no necesito estar en esta “caja” para observarte. Pero
entonces probablemente pasaría por alto momentos como este.
El observar desde fuera de la “caja” es realmente un fastidio, sí,
casi como husmear a través del lente de un telescopio de súper
alta eficiencia desde muy lejos en el espacio. Es posible ver,
pero concentrarse en algo es el fastidio. Así es como se siente.
Así que, aunque fue una consecuencia, ¡fue realmente
afortunado el poder observarte desde tan de cerca como Usui
Haruaki!
Finalmente me doy cuenta de qué es esta sensación
incómoda.
Así es. Es—temor.
No es como si no hubiese sentido temor hasta ahora.
Pero este temor de ahora difiere demasiado del común y
corriente, por lo cual no pude reconocerlo.
- Bueno, entonces, Hoshino Kazuki-kun. ¿Qué vas a
hacer?
No puedo formar palabra alguna.
No puedo abrir mi boca, porque me volví consciente de
este temor.
- ¿Creíste que todo se arreglaría al poner al descubierto
que 「Yo」 estoy dentro de Usui Haruaki? Claro, tengo un
aspecto humano en este momento. Y ya que también soy un
asesino, simplemente podrías entregarme a la policía y decir
que está todo arreglado. Pero no es así, ¿verdad? Tu meta es
recuperar tu vida cotidiana, ¿no es así? ¡Nada se arregla sólo
conversando conmigo!
Él es peligroso, más peligroso que cualquier otra
persona con la que me haya topado.
- Esta también es la razón de por qué no oculté más de
lo necesario el hecho de que me convertí en Usui Haruaki. En
efecto, la “caja” ahora está mi poder porque la robé de su
“dueña”. Podría mostrártela ahora mismo. Pero no es necesario.
Ni tampoco es necesario entregártela simplemente porque me
recordaste. Y tampoco tienes el poder de forzarme a ello.
Está interesado en mí, pero sólo como sujeto de pruebas.
Ni más, ni menos. Y, naturalmente, no tengo idea cómo tratar
con alguien que me trata así.
Por lo tanto—
- —Pues claro que no.
—Por supuesto que yo jamás podría hablar tan
irrespetuosamente.
- Kazuki no tiene ese poder por sí mismo.
Sin embargo, “0” me mira, buscando el origen de esa
voz. Pero no se equivoca, la voz viene de mi mochila.
El claxon de un camión resonó. Con su motor rugiendo,
un gran camión avanza hacia nosotros. “0” mira en su
dirección y frunce levemente el ceño. El camión que se
apresura hacia nosotros me es horriblemente familiar. Y
sentada en el asiento del conductor, está Maria.
- ¡Te eché de menos, “0”!
Esta voz resuena desde el teléfono móvil que dejé
encendido en mi mochila durante toda nuestra conversación.
El camión va avanzando hacia nosotros. Nosotros
estamos de pie en el suelo. El sonido de una parada repentina.
Los frenos no funcionan de acuerdo a lo planeado a causa de la
lluvia. El camión se acerca más y más. Pero “0” no retrocede, y
yo tampoco lo hago cuando veo que él no se mueve. Cierro mis
ojos por instinto.
El sonido de la frenada desaparece.
Abro mis ojos. El camión, literalmente, se detuvo justo
en frente de mis ojos.
- ¿Qué se supone que lograrás con esta farsa? -, “0”
sonríe levemente y le plantea esta pregunta a la figura en el
asiento del conductor.
- Sólo es una pequeña bienvenida. Qué afortunado que
no fuiste arrollado como sustituto de Kasumi, ¿eh?
Puedo oír esta voz desde el frente y desde mi mochila.
Después de bajarse del camión, Maria finalmente se quita el
audífono de Bluetooth y finaliza la llamada telefónica.
“0” está mirando a Maria, quien está de pie frente a
nosotros sin un paraguas.
- Así que escuchaste toda nuestra conversación. En
otras palabras, ustedes dos ni siquiera se preocuparon por esta
estrategia, para comenzar. Qué mal—me habría encantado ver
a Kazuki desesperanzado por el resultado de esta estrategia.
- Yo estaba considerando seriamente esta estrategia
cuando la propusiste. Pero al parecer, Kazuki sabía de tu
verdadera forma y me dejó a oscuras.
Aunque eso no era lo que pretendía. Simplemente no
sabía cuando contarle que lo había descubierto.
Sin embargo, elegí el momento para, efectivamente,
hablar con Haruaki después de hacerlo cooperar.
- Pero esa fue la elección correcta al final. Porque si
hubiese estado a su lado, podrías haber continuado haciéndote
el tonto.
- ¿Fuiste a robar el camión para parecer estar lejos?
Bueno, te agradezco tu esfuerzo. Pero, ¿por qué debería
hacerme el tonto si estuvieras aquí? Tal vez seas una “caja”,
pero eso no significa que seas capaz de hacer algo.
- ¿Qué? ¿Entonces no sabías? Parece que mis esfuerzos
fueron en vano. Bueno, entonces, deja que te pregunte: conoces
mi “Felicidad Imperfecta”, ¿verdad?
- Sí, la conozco. Y también sé que no puedes hacerme
daño con ella.
Maria se ríe de “0”, - Fufu, en verdad nunca nos
comprenderás a los humanos. Tal vez lo entiendas si lo digo de
este modo: “He hecho los preparativos para borrarte”.
“0” reacciona ante sus palabras con una sonrisa torcida.
- Sólo puedes meter a otros en tu “caja”, ¿verdad? Así
que, ¿cómo serías capaz de hacer eso?
- Parece que aún no sabes por qué me había fijado en
Kazuki.
De repente menciona mi nombre. “0” me mira. Aunque
esos ojos son amables, me parecen horripilantes. Parecen ser
los ojos de alguien que mira un cerdo y piensa sobre cómo
cocinarlo.
- … Ya veo -, “0” sonríe.
- Así que al fin lo entiendes. Kazuki tiene un don para
usar “cajas”. Puede que él haya perfeccionado hasta mi
“Felicidad Imperfecta”. Y con seguridad desearía que
continuase su vida cotidiana. Desearía por su vida cotidiana
sin seres que la amenacen—como las “cajas”. Como tú -,
Maria frunce el ceño ante “0” mientras habla.
“0” no se abruma por esas palabras, ni tampoco está
sorprendido, ni asombrado. Simplemente baja la mirada con
tristeza.
- Ya veo. Así que no has cambiado en nada -, “0”
contesta de esa forma.
Le dice eso a ella, quien ha sobrepasado a cualquier otra
persona después de vivir a través de 27.755 bucles.
- Al hacer eso, una “caja” inferior como tú también
desaparecerá.
Maria ni siquiera se estremece.
- Estoy consciente de eso.
- Me lo imaginaba.
“0”, sin embargo, aún parece triste. No parece que
siquiera le importe la posibilidad de ser borrado.
- ¿Aún no puedes vivir por tu propio bien? ¿Sólo te
puedes mover por el bien de alguien más? ¡Desde el fondo de
mi corazón, me da pena una forma de vivir como esa!
- Tu pena ni siquiera puede ser usada como cebo para
pescar.
- Al principio estaba interesado en esa característica
tuya poco común, pero no vale la pena. Un humano que no
tiene deseo alguno es lo mismo que una máquina. De igual
forma podría usar a una aspiradora como objeto de observación.
¡Para mí, eres la existencia más aburrida que hay!
Maria, irritada, aprieta sus dientes al oír las palabras de
“0”. Me parece normal. En lugar de ser percibida como un
oponente, recibe la pena del enemigo.
- Muy bien. No quiero ser borrado, así que hagamos un
trato. Te entregaré la “caja”. A cambio quiero que me dejes en
paz. ¿Qué opinas?
- … Hmph, son condiciones bastante egoístas,
considerando que estás por ser borrado.
- Deberías estar agradecida de que siquiera responda
ante tu muy dudosa amenaza. No es seguro que Hoshino
Kazuki en realidad vaya a usar tu “caja”. Y ni siquiera quiero
imaginar lo baja que es la probabilidad de que yo desaparezca
si el usara la caja. Estoy haciendo esa conciliación innecesaria
sólo para expresar mi respeto ante Kazuki, por encontrarme,
¿sabes?
- ¿Conciliación? Lo que nos entregarás es una jaula
vieja en la cual encerraste a Kazuki. Puedes preparar nuevas
jaulas tantas veces como quieras, ¿no? Ya tuviste suficiente
con ella y la habrías cambiado pronto por una nueva de todas
formas, ¿verdad?
- Le dejaré eso a tu imaginación.
- Hmph… Kazuki, ¿estás de acuerdo con eso? -, Maria
pregunta por mi confirmación. Asiento. Estoy de acuerdo
mientras podamos hacer algo al respecto del “Salón
Rechazador”.
- Hoshino Kazuki-kun. ¿Puedo darte un consejo? -, “0”
me pregunta una cosa como esa. - Eres alguien que no desea
por un cambio. Pero la mayoría de los “dueños” desean
justamente eso cuando obtienen una “caja”. Tal vez obtengan
algo. Tal vez quieran convertirse en algo. Tal vez quieran
deshacerse de algo. Todos intentan hacer que un deseo se
vuelva realidad. A consecuencia de esto, naturalmente te estás
enemistando con ellos.
Frunzo el ceño, ya que no logro captar la intención de
sus palabras.
- Hoshino Kazuki-kun, ¿te consideras a ti mismo
anormal? -, me pregunta eso.
- … Soy normal.
Cuando oye mi respuesta, sonríe.
- Ya veo. ¡Pero me temo que eres anormal! No obstante,
no tienes que preocuparte si no te gusta eso. El tiempo en el
que podrás mantenerte anormal es bastante corto.
Eventualmente, la gente como tú es rechazada o pierden su
anormalidad, adaptándose a la sociedad. ¡No te preocupes!
Eres del segundo tipo, no hay duda de eso -, dice, sin dejar de
sonreír. - Y es por eso que—en verdad eres funesto -, dice,
luciendo realmente alegre. - Lo que quiero decir es que has
aprendido que tales vacíos existen. Cada vez que te encuentres
con un evento lamentable, pensarás: 「Si tan sólo tuviese una
“caja”…」. No importa cuánto luches para poder olvidarte de
ello, desafortunadamente las “cajas” sí existen. Las “cajas” que
conceden cualquier deseo sí existen. Jamás serás capaz de
olvidar la existencia de ese vacío. Y, eventualmente, cuando
estés viviendo con ese conocimiento, ¡el momento en que
necesites una “caja” definitivamente llegará!
Sigue sonriendo.
Ah, ya veo—
Yo devolví la “caja”. Pero hacer eso fue inútil. Para
entonces ya estaba atado a la maldición de “0”.
- Para cuando necesites una “caja”, tal vez ya hayas
perdido tu anormalidad. Si es así, ya no serás capaz de
perfeccionar la “caja”. Eso reducirá un poco mi interés. Por lo
tanto, voy a continuar interfiriendo un poco contigo y tu
alrededor a partir de ahora—para suscitar tu interés en la “caja”.
¿Qué debería haber hecho para prevenir el ser maldito?
—Probablemente no había forma de evitarlo.
Yo—no, nosotros ya habíamos perdido en el mismo
momento en que nos encontramos a “0”.
- Naturalmente, te proveeré con una “caja” aunque
pierdas tu anormalidad. No me importa—siempre y cuando me
dejes escuchar tu sonido.
- … ¿Sonido?
- Sí, me agrada cualquier timbre que produzcan los
humanos, pero hay un sonido que me gusta por sobre los demás.
De ser posible, me gustaría que me dejases escuchar ese sonido.
… ¿Mh? ¿Cuál sonido, preguntas? Mi gusto es completamente
ordinario, así que creo que ya lo sabes. Es—
Sonríe, y dice:
- —el sonido de corazones chirriando.
Con esas palabras “0”, que luce como Usui Haruaki,
desaparece.
Una pequeña caja aparece en el lugar donde “0” había
estado de pie. Cuando la alcanzo, comienza a expandirse
automáticamente.
Justo después de esto, el escenario completo comienza a
plegarse. Puedo ver las murallas de este mundo. Los blancos
papeles murales comienzan a desmoronarse hasta hacerse
polvo. El dulzor que se había pegado en mi piel desaparece,
dejando atrás una apagada incomodidad. Mis orejas
semicirculares enloquecen y comienzan a girar. El sonido de la
destrucción. El sonido de la destrucción. El sonido de la
destrucción de alguien más. Este lugar está lleno de
desesperación. Innegable desesperación.
La falsa ambientación ha sido borrada, y estamos de pie
dentro de una cámara oscura. Una cámara pequeña y oscura, en
la cual probablemente enloquecería si tuviera que quedarme
aunque fuese por medio día.
Esto es, probablemente—dentro de la “caja”.
Y en esta habitación como prisión, ella está agachada.
Con su frente presionada en sus rodillas y sus brazos sobre sus
piernas.
Esta es la chica que amo.
- … Mogi…-san.
Al oír mis palabras, lentamente levanta su rostro.
- Ah—
Una débil luz se enciende en sus ojos, que recién
parecían casi muertos.
- ¡No puedo creerlo! ¡Es imposible que todo saliera tan
bien para mí!
Lágrimas ruedan por sus mejillas.
Al principio me parece muy extraño, pero rápidamente
me doy cuenta de la razón.
- —En verdad viniste a salvarme.
Ya veo. Ya puedes derramar lágrimas otra vez.
- Mogi-san, lo siento. Pero planeo destruir el “Salón
Rechazador”.
- … Sí -, Mogi-san asiente mientras llora.
- Planeo dejarte morir en el accidente.
- …… Sí -, se seca las lágrimas. - Puedes destruir la
“caja”. También puedes acabar con mi vida. Pero, por favor,
espera un momento. Hay algo que quiero decirte.
Al decir eso, Mogi-san comienza a buscar algo en su
mochila. Saca algo y lo esconde detrás de su espalda.
Maria frunce el ceño ante el comportamiento de Mogi-
san.
- Mogi… no otra vez…
Mogi-san ignora a Maria y se me acerca, escondiendo
sus manos detrás de ella.
- … ¡Espera, Mogi! ¡Por favor, ya detén est—
- No es eso, Maria -, reprendo a Maria. No puedo ver lo
que está ocultando Mogi-san, pero ya sé qué es.
Maria reacciona ante mis palabras con una expresión
dubitativa y rodea a Mogi-san. Cuando reconoce el objeto en
las manos de Mogi-san, sólo sonríe irónicamente con asombro.
- Kazu-kun, ¿crees que hayan sentimientos que no
cambien? -, me pregunta Mogi-san.
De inmediato sé qué responder, pero para ella, no es
una respuesta agradable. Por lo tanto, me complica un poco el
decirla.
Supongo que mi respuesta sería diferente si no hubiese
experimentado el “Salón Rechazador”. Pero sí lo hice. He
experimentado este mundo que está cerca de la eternidad. Por
lo tanto no puedo evitar pensarlo. Sentimientos que no
cambian—
- —No los hay, supongo.
Mogi-san escucha mi respuesta pacientemente.
Y luego sonríe.
- Sí, también creo eso.
Miro en sus ojos sin pensarlo. Parece que ya había
predicho esta reacción, así que sigue sonriendo y continúa.
- Mis sentimientos por ti no siguieron siendo los
mismos. Dejaste de ser alguien preciado para mí. Comencé a
detestarte, te odiaba, te consideraba una molestia. Hasta estuve
a punto de matarte una vez. Pero, ¿sabes qué? Eso significa que
estaba dependiendo de ti todo el tiempo, porque siempre estaba
creyendo que me rescatarías de este lugar. Siempre, siempre…
no podía ignorarte. Sé que es el peor sentimiento, y el más
egoísta que pueda haber. Pero, ¿sabes? No podía evitarlo.
Aunque sabía que estaba siendo egoísta. Sé cómo se llama este
sentimiento. Aunque no creas en los sentimientos que no
cambian, por favor cree sólo en esto. Durante todo el tiempo
que pasé en el “Salón Rechazador”—
Mogi-san me abraza muy reservadamente. Y me da el
objeto que había estado escondiendo. Sus labios tiemblan justo
al lado de mi oído.
- —Te amé, Kazu-kun.
Sus labios se acercan a los míos. Justo cuando están por
tocarse, se detiene. Después de quedarse así por un rato, retira
sus labios pacíficamente, sin haber tocado los míos.
Inicialmente quiero preguntarle por qué se ha detenido,
pero lo reconsidero. A causa de lo que me ha entregado.
- Ah—
En mis manos está la razón de por qué no pudo hacer
algo.
Lo entiendo, y me muerdo los labios.
Es algo diferente a lo que había esperado.
Es un Umaibō.
Eso es lo que esperaba. Pero no es mi sabor favorito,
““Crema de Maíz””. Es uno con sabor a “Hamburguesa
Teriyaki”. Del tipo que no me gustan mucho. Es más—
—es del tipo que se suponía que Mogi-san me daría,
originalmente.
¿Por qué Mogi-san me abrazó tan reservadamente? ¿Por
qué no me besó?
Esta no era la declaración de la Mogi Kasumi que se me
había declarado incontables veces, que ya me había besado y
había experimentado el “Salón Rechazador”.
Era la primera declaración de la Mogi Kasumi anterior
al “Salón Rechazador”, quien sólo me podía llamar “Hoshino-
kun”.
- Quiero rehacer el 2 de Marzo.
El más profundo arrepentimiento que tuvo ese día.
Lo acababa de solucionar.
Así que—¿tengo que contestar como si ahora fuese el
verdadero 2 de Marzo?
Miro a Mogi-san.
Mogi-san está sonriendo amablemente. Está esperando
con una amable sonrisa, a pesar de ya saber mi respuesta.
- Eso es—
¡Es demasiado cruel!
No quiero decir algo así.
Quiero decir, amaba a Mogi-san. Aún si fueron
controlados por “0”, esos sentimientos en sí no eran falsos.
¿Por qué no tengo opción más que decir palabras que la
herirán?
Ha~ah, por supuesto.
Yo “rechacé” esta “caja”. Negué el deseo de Mogi-san.
Voy a dejar que muera en ese accidente. No tengo derecho a
decirle palabras amables.
Abro mi boca.
Aún así, es bastante difícil decirlo. Titubeo, abriendo y
cerrando mi boca varias veces, pero luego quedo sorprendido
por un líquido salado en mi boca.
Pero no puedo pensar en otras palabras para decirle.
- Por favor, espera hasta mañana.
Mogi-san baja la mirada tristemente.
Definitivamente está herida por esas palabras. Y aún así,
instantáneamente cambio su expresión otra vez. Me dice, -
Gracias.
—con una sonrisa.
Con una sonrisa que viene desde el fondo de su corazón.
Ah—
Debido a esta sonrisa, finalmente recuerdo.
Una conversación de hace algún tiempo atrás.
La conversación que me hizo enamorarme de ella.
La conversación que gatilló este amor efímero.
Un recuerdo preciado.
- Hoshino-kun, ¿puedes llamarme “Kasumi”, por
favor…?
- ¿Eh? ¿P-Por qué así, tan de repente?
- Tal vez te parezca repentino, pero he querido que me
llamases así todo este tiempo, ¿sabes?
- Ya… veo.
- Entonces… ¿está bien?
- E-Está bien.
- A-Además… este… bueno—¿puedo llamarte “Kazu-
kun”?
- Este…, sí, claro.
- B-Bien. Entonces, prueba llamándome.
- …… Kasumi.
- … Por favor, dilo una vez más.
- Kasumi.
- … Gracias.
- ¡¿Qué…?! ¡¿P-Por qué estás llorando…?!
- ¿Mh? ¿Estoy llorando?
- ¡S-Sí lo estás…!
- Entonces… es porque estoy muy feliz, Kazu-kun.
Y luego, Kasumi rió, aún derramando lágrimas por sus
ojos.
Nunca antes había visto una sonrisa como esa. Era una
sonrisa que estaba llena de felicidad pura.
Fue la primera vez que fui capaz de brindar tanta
felicidad a otra persona. Esta sensación era algo nuevo para mí,
así que me puse extremadamente feliz.
Brindar felicidad a otros es la felicidad.
Estaba feliz de haber descubierto ese lado de mí; y ella,
quien me había enseñado este sentimiento, se volvió una
existencia especial para mí.
Tal vez yo sea sencillo. Pero esa sonrisa logró
cambiarme, sin duda.
Pero voy a borrar este recuerdo.
Voy a borrar este sentimiento recientemente conocido.
Creo que eso es demasiado cruel. Creo que no había
necesidad de tener tal obstáculo justo en el último momento.
Creo que es demasiado cruel hacerme destruir tal cosa con mis
propias manos.
Pero aún así, ya he elegido.
Ya he elegido hace bastante tiempo.
Quiero decir, incluso este remordimiento será borrado
de inmediato por el “Salón Rechazador”, ¿verdad?
- Maria, ¿puedes concederme un favor?
Así que quiero que alguien me dé un pequeño empujón
mientras estoy titubeando.
- Dime.
- Deberías saber lo que estoy por hacer ahora.
- Sí, porque te he observado más que nadie en el mundo.
- ¿Qué voy a hacer ahora? Sólo quiero que me digas eso.
Maria asiente con una expresión seria. Sin duda conoce
la razón de por qué lo estoy preguntando.
- ¡Vas a aplastarlo!
Pero Maria no usa ninguna palabra amable.
- ¡Vas a aplastar el torpe “deseo” de alguien más por el
bien de tu propio “deseo”! Es lo único que no abandonarás bajo
ninguna circunstancia, Kazuki.
Sí, creo que tengo razón.
- Por lo tanto, tú—destruirás la “caja”.
Asiento ante las palabras de Maria.
Uso todo mi brazo izquierdo para secarme las lágrimas.
- Es tal como dices.
Me paro en frente de la pared.
La pared gris que nos rodea es tan delgada como si
estuviera hecha de papel. Esta “caja” ya no tiene poder.
Simplemente está encerrando mis recuerdos y evita que
desaparezcan durante un poco más de tiempo.
Quiero voltearme y corroborar la expresión de Kasumi.
Pero tengo la sensación de que no debo hacerlo.
Sostengo mi mano derecha en el aire, para poder
destruir la “caja”, el “deseo” de Kasumi, y mis recuerdos.
- Gracias. Así que al final, realmente fuiste tú quien me
rescató, Kazu-kun.
¡Por favor, detente!
No tienes razón alguna para agradecerme. Sólo lo
estoy aplastando. Sólo estoy aplastando tu “deseo” errado.
Lo siento.
Por favor perdóname por no ser capaz de salvarte.
Por lo tanto, ignoro su voz.
Pero, gracias. Finalmente puedo creer en mí mismo,
porque sonreíste al final.
- ¡UAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH! -, grito
vaciando completamente mis pulmones, y golpeo la pared tan
fuertemente como me es posible.
La muralla se quiebra fácilmente, como vidrio, con un
fuerte sonido.
Dentro de uno de los trozos esparcidos puedo ver a
Kasumi y a mí mismo. Estamos sonriendo felizmente el uno al
otro. Esta pieza cae, se quiebra y se convierte en polvo.
Una luz blanca comienza a brillar desde el exterior.
Mientras más se derrumba la muralla, más es la oscuridad
corroída por la luz. A excepción de nosotros, todo se vuelve a
pintar y desaparece.
Hay mucha luz; no puedo ver nada.
Pero, cruelmente, Kasumi está allí. La Kasumi
verdadera claramente está allí.
Está tirada en la calle, ensangrentada. Parece tan
doloroso que quiero desviar la mirada.
Pero Kasumi está sonriendo. Está sonriendo para mí
con todas sus fuerzas.
Su boca se abre, - Adiós.
Y luego somos desplegados en un blanco puro, y
desaparecemos.
La luz blanca entra en mi cuerpo. La luz busca
violentamente mis huecos y me invade. Pinta mis interiores, mi
sangre, mi corazón y mi cerebro de blanco. La luz blanca
invade hasta mi memoria y la pinta de blanco. Mis falsos pero
valiosos recuerdos. Esta nueva sensación que he conocido. Las
palabras que acabamos de intercambiar.
Todo se borra y se vuelve blanco.
Todo se borra y se vuelve blanco.
Todo se borra y se vuelve blanco—
1ª vez
- Soy Otonashi Aya. Es un placer conocerlos -, dice la
estudiante transferida con una débil sonrisa.
Anonadadas por su apariencia, las chicas comienzan a
meter ruido, mientras que los chicos están completamente sin
palabras.
Por supuesto que yo no soy excepción. Creo que nunca
antes había visto a alguien tan encantador. No habría podido
desviar la mirada aunque quisiese. Nuestros ojos se encuentran.
Instantáneamente quedo cautivado por sus ojos. La estudiante
transferida parece acostumbrada a mi reacción y me sonríe
suavemente.
Casi me mareo.
Probablemente sea imposible enamorarme de ella.,
somos demasiado diferentes. Es casi como si no viviésemos en
el mismo mundo. Tal vez eso suene un poco grosero, pero creo
que cualquiera estaría de acuerdo conmigo después de verla.
- Para empezar, me gustaría hacer una aclaración -, dice
Otonashi Aya sin perder su perfecta sonrisa. - Por favor, —no
se hagan amigos de mí—Otonashi Aya.
El salón de clases se hunde en silencio de inmediato.
Esta declaración es suficiente para poner en silencio a
toda la bulliciosa clase. Es casi como magia.
- Por favor, no se ofendan por esto. De ser posible, me
encantaría hacerme amiga de todos. Esto, sin embargo, no es
posible, porque—la existencia de Otonashi Aya tiene que ser
una ilusión.
Trago saliva a pesar de no tener idea de qué está
hablando.
- De todas formas no seríamos una buena combinación.
Somos como fantasmas que se ven el uno al otro. Porque soy la
“Estudiante Transferida”. No conozco a nadie—y además
nadie me conoce—y voy a regresar constantemente a este
estado. Tendrán que soportar y mantener este estado sin
relaciones durante mucho tiempo. Así que creo que es preciso
llamarme “fantasma”. Pero, aunque sea un fantasma, aún tengo
una personalidad. También me siento mal por eso, pero no
tengo más opción que aceptarlo. Porque tan pronto deje de ser
capaz de aceptar el ser una ilusión—tan pronto deje de poder
soportarlo más—voy a ser arrastrada por esta falsa repetición.
Aún no entiendo nada. Lo único que comprendo es que
está siendo totalmente seria y no dejará que nadie se burle de
ella.
- Para poder convertirme en una ilusión, abandoné mi
nombre real dentro de esta “caja”. Temo que si uso mi nombre
real, me convertiré en mi propia carga. Y si soy arrastrada por
esta falsa repetición, probablemente todos ustedes serán
borrados -, continúa con voz firme. - Por lo tanto, yo—tengo
que continuar siendo una ilusión, siendo Otonashi Aya.
Ya veo. No sé qué significa, pero aún no es 「Otonashi
Aya」. Va a convertirse en 「Otonashi Aya」. Probablemente
no quiere hacerlo, no es lo que desea. Aún así, no tiene más
opción que convertirse en 「Otonashi Aya」.
- Pero no soy fuerte -, dice con amargura. - Supongo
que habrá momentos en que quiera quejarme. Sin embargo,
dejaré de ser 「Otonashi Aya」 tan pronto como muestre
alguna señal de debilidad de aquí en adelante. Por lo tanto,
mostraré esta debilidad ahora mismo. Yo—
Es por casualidad.
Sí, supongo que es por casualidad, pero sin duda—
—me está mirando a mí cuando lo dice.
- Yo—quiero que alguien esté a mi lado.
Y luego me sonríe.
- Muy bien, por favor, permitan que me presente una
vez más -. Habla como para convencerse a sí misma. - Soy
「Otonashi Aya」. Espero que nos llevemos bien durante el
largo tiempo que nos espera adelante.
Otonashi Aya hace una marcada reverencia.
Seguimos en silencio, sin saber cómo reaccionar.
Por lo tanto, aplaudo.
El sonido de mis manos aplaudiendo es lo único que se
oye.
Finalmente, alguien se une al aplauso. Después, alguien
más también comienza a aplaudir. El sonido de los aplausos se
vuelve continuamente más fuerte.
Cuando todos nuestros compañeros están aplaudiendo,
finalmente vuelve a levantar su rostro.
Pero ya no está sonriendo.
Está apretando su puño firmemente y mirando hacia
adelante con una postura imponente.
Epílogo
El clima es magnífico, con un claro cielo azul.
Lo primero que hice después de levantarme fue
confirmar la fecha de hoy en mi teléfono móvil. 「7 de
Abril」 . Hoy es 「 7 de Abril」 . También revisé en el
periódico y en la televisión para confirmar que realmente es
「7 de Abril」 . Bueno, por supuesto que sé que no hay
significado en tal confirmación. Pero desde que estuve
envuelto en el “Salón Rechazador”, no puedo evitarlo, o de otra
forma me pongo ansioso.
Los eventos del “Salón Rechazador” permanecieron en
forma de conocimiento. Pero sólo puedo recordar aquellos
recuerdos con una sensación de estar mirando fotografías que
fueron sacadas en un lugar en el que nunca he estado. La “caja”,
Maria, “0”—sé quiénes son, pero las emociones
correspondientes ya no están allí. No hay ira, no hay tristeza—
nada. Así que, aunque haya estado enamorado de alguien,
probablemente lo hubiese olvidado para este momento. Tal vez
voy a olvidar gradualmente estos recuerdos porque son muy
débiles.
Incluyendo a Maria.
Quiero decir, de todas formas no se suponía que nos
conociésemos, así que estoy seguro de que no habrá una
segunda vez.
Como sea, hoy es 「 7 de Abril 」 , el día de la
ceremonia de apertura.
Me he convertido en un estudiante de segundo año.
Mi salón pasó de estar en el 4° piso, a estar en el 3°. No
es como si el escenario hubiese cambiado para mejor sólo
porque el salón cambió de piso y está un poco más hacia al
oeste. No obstante, el aire se siente completamente diferente
cuando entro al salón de la clase 3 de segundo año. Me
emociono tanto que agarro mi pecho.
Después de comprobar el mapa de los asientos colocado
en el escritorio del profesor, me siento de acorde a él. Mis
nuevos compañeros contestan alegremente cuando los saludo
con un ligero 「Espero que nos llevemos bien」. Sí, siento
buenas vibras.
Otra persona entra al salón.
Me descubre y levanta su mano.
- ¡Hola, Hoshii! ¡Así que estamos en la misma clase
otra vez!
A pesar de ser palabras comunes, las miradas de todos
los otros 15 compañeros de clase se concentran en nosotros. Sí,
Haruaki es ruidoso como siempre.
- … Haruaki.
- ¿Mh? ¿Qué ocurre?
Lo miro con ojos de sospecha.
- ¿Eres el original?
- … ¿Por qué? ¿Parezco uno falso? ¿Tal vez pensaste
que era un gemelo mío? ¡¿Fuiste influenciado por algún manga
muy famoso3 y ahora piensas que todos los pitchers de béisbol
de preparatoria son gemelos?!
- … No.
Por alguna razón, comienzo a dudar de la personalidad
de Haruaki…
- ¡¡Ah, cierto, Hoshii! Ahora que lo pienso—
- ¡Buenos días, Haru y Kazu-kun!
Una nueva voz interrumpe Haruaki.
Kokone está de pie en la puerta del salón de clases. Y a
su lado está Daiya.
Ah, ¿esos dos también vinieron afectuosamente juntos a
la escuela? Aunque si mencionase eso, Daiya me haría sufrir
un acoso mental durante todo el día, así que no lo digo en voz
alta.
3 Probablemente se refiere a “Touch”.
( http://es.wikipedia.org/wiki/Touch_(manga) )
- Mi corazón comenzó a latir más rápido por un
segundo al ser saludado por una chica, pero, vaaaya, ¿sólo eres
tú, Kiri? Vaya desperdicio de emoción.
- Oye, Haru… ¿Por qué reaccionas así? ¿Quién te crees
que eres?
- Este… bueno, me gustaría que dejaras de estar tan
obsesionada conmigo como para seguirme y estar en la misma
clase que yo.
- Haa… ¿Así que intentas ocultar tu vergüenza de estar
tan fascinado conmigo con esa frase? En veddad que edes un
niñito pequeño, ¿no, Haru-chan? Ah, cierto. ¿Puedes dejar de
llenar tu teléfono móvil con mi voz moe?
- ¡Como si fuese a hacer tal cosa!
- 「Mi amo~」… ¡Vamos! ¡Ahora es la oportunidad de
añadir nuevos archivos a la colección de voz Moe-Moe de
Haru! ¿Te doy otra oportunidad? ¡Si quieres, puedo añadir un
「Bienvenido a casa~」 esta vez!
¿Qué es esta conversación…? Por favor, deténganse, es
vergonzoso.
- Haa… Oye, Kazu, ¿tienes petardos, de casualidad?
Me gustaría encender uno y meterlo en la boca de Kiri ahora
mismo.
- ¿Y qué opinas tú, Daiya? ¿Te da celos que sólo le dé
mi voz Moe-Moe a Haru? ¡No te preocupes! Si te arrodillas y
besas mis pies, te diré 「Onii-chan」, siscon. ¡Oh, ¿no creen
que soy una persona amable?!
- ¿Qué tal si dices 「Discúlpenme por haber nacido」?
… Nada ha cambiado con el cambio de clase.
Pero esto es lo que deseaba.
Me siento un poco solo sin Maria ni Mogi-san, pero
luché contra el “Salón Rechazador” para ganar esto.
- … ¿Por qué sonríes por nada? ¡Eso es repulsivo,
Kazu! -, Daiya me señala.
- Ah, es verdad. Kazu-kun está sonriendo. Qué
pervertido es. Apuesto a que se está imaginando que la chica
sentada a su lado se tropieza torpemente—
- No es así -, niego de inmediato, haciendo que Kokone
frunza sus labios.
- Pero, de todos modos, ¿quién se sienta aquí? ¿Sabes?
¿Alguna chica linda? -, me pregunta Haruaki mientras se sienta
en dicho puesto sin vergüenza alguna. Ya sé eso, ya que revisé
el nombre de las personas que se sentaban en los asientos
cercanos cuando buscaba mi puesto.
- Sí. ¡Es una chica linda!
- ¡¿En serio?! ¡¿Quién es?!
Ella tiene un puesto. Me alegra saber eso. El hecho de
que tiene un puesto significa que la posibilidad de que se siente
allí también existe.
Para cuando vuelva, su puesto no estará al lado del mío,
pero no me importa.
Le digo con una sonrisa el nombre de la chica que se
sienta a mi lado.
- ¡Es Mogi-san!
*
Ese día casi pensé que la lluvia continuaría por una
eternidad.
Me dirigí al hospital justo después de que oí de Daiya
sobre el accidente de Mogi-san, y que por eso había estado
ausente en la escuela. Fui en taxi, ya que el hospital al cual
había sido llevada no estaba dentro de la ciudad. Un
comportamiento increíble, considerando que valoro una vida
pacífica por sobre todo.
Pero tenía que hacerlo. Ya que luché contra el “Salón
Rechazador”, tenía que conocer el resultado.
Fui el primero en llegar al hospital, hasta llegué antes
que su familia. Luego esperé junto a ellos, mientras pensaban
que era su novio, a que la operación terminase.
La operación fue exitosa… al parecer. Pero, al final,
Mogi-san no recuperó la consciencia ese día.
Fue dos días después que pude verla finalmente, ya que
no me permitían entrar a la UCI. Para entonces, ella había sido
transferida a un ala general.
Mogi-san estaba en su cama con un aspecto muy
lamentable. El sonido del electro-cardiograma y la respiración
artificial hacía que mis oídos vibraran. Sus pies y manos
estaban fijos, su rostro estaba cubierto con moretones, y un
brazo estaba decayendo, y se había vuelto violeta debido al
goteo intravenoso.
El ver el cuerpo herido de una conocida solo en un
hospital me hizo derramar lágrimas sin darme cuenta. Pero yo
no era el único que quería llorar. No me estaba permitido llorar
en frente de ella. Suprimí mis lágrimas y miré su rostro,
husmeando un poquito.
Mogi-san parecía un poco sorprendida cuando me vio.
Aunque no estoy muy seguro, ya que no movió sus músculos
faciales.
Su familia me había dicho que tal vez había recuperado
la consciencia, pero aún no había dicho palabra alguna a causa
del shock.
Pero Mogi-san abrió su boca, tratando de decirme algo
con todas sus fuerzas. Le dije que no se sobre-esforzara, pero
no me hizo caso e intentó hablar.
Mogi-san dirigió sus primeras palabras hacia mí,
haciendo que su máscara de oxígeno se volviera blanca con su
respiración.
- —Me alegra tanto… el haber sobrevivido -. No pude
entender bien lo que dijo, pero me sonó a algo así.
Mogi-san estalla en lágrimas al haber dicho eso.
Cuando dejo que mi mirada deambule, al no saber hacia dónde
mirar, descubrí su mochila sucia al lado de la cama. Vi un
envoltorio plateado en la mochila abierta. Sabiendo lo que era,
lo tomé con mis manos inconscientemente. Un Umaibō con
sabor a “Hamburguesa Teriyaki”. Estaba molido, ya no tenía su
forma original. Cuando lo toqué sin pensar, de repente no pude
soportarlo más y rompí a llorar.
No sé por qué pasó justo en ese momento. Recuerdo
que me lo dio en ese mundo, pero no puedo recordar la razón
de por qué lo hizo.
Pero mis lágrimas eran reales.
Después de eso fui varias a veces a su habitación del
hospital en el ala general. Mogi-san intentaba hablarme lo más
alegremente posible.
- Mientras estaba inconsciente, tuve un largo sueño.
Mogi-san me dijo esta una vez. Aparentemente, creyó
que todo había sido un sueño.
De repente, un pensamiento cruzó mi mente. Mogi-san
no pudo escapar del destino de ser arrollada por el camión en
ese mundo. Y el hecho de que hubiese sobrevivido cada vez
tampoco cambió. Esta puede ser la razón de por qué el “Salón
Rechazador” ha quedado intacto, a pesar de lo seguido que se
encontraba con el accidente.
Pero, aunque fue capaz de sobrevivir, aparentemente ya
no podría ser capaz de mover la parte inferior de su cuerpo. En
el momento del accidente, sufrió un golpe en la espalda que
dañó su columna vertebral. La probabilidad de una
recuperación no sólo era desesperanzadora, era imposible.
No pude evitar quedarme en silencio, ya que no sabía
qué palabras decirle exactamente. Para romper el hielo, Mogi-
san dijo lo siguiente:
- Siempre pensé que pensaría “Preferiría haber muerto”
si me pasaba esto. Entiendes estos pensamientos, ¿verdad,
Hoshino-kun? Después de todo, ya no seré capaz de volver a
caminar con mis piernas. Incluso cuando quiera ir a comprarme
un pequeño postre en el almacén de al lado, no seré capaz de
hacerlo tan despreocupadamente. Sólo podré ir si dependo en
alguien más para que me saque en mi silla de ruedas. ¡Toda
clase de dificultades sólo para comprar un postre! ¿No es eso
cruel? Pero es un poco extraño. No tengo ganas de morir, para
nada. Me pregunto por qué. Creo que, en realidad, desde el
fondo de mi corazón—
- —me alegra estar viva.
Mogi-san dijo eso sin una pizca de farsa o mentira.
- Así que estoy bien. Tampoco abandonaré la escuela.
No importa cuánto tiempo tome, me recuperaré. Tal vez ya no
pueda ir a la misma escuela que ustedes, pero no me rendiré.
Sonrió y me mostro débilmente sus bíceps.
Es vergonzoso admitirlo, pero en ese momento, rompí a
llorar en frente de ella. Me alegraba. Me alegraba que su deseo
más importante hubiese sido concedido.
- —¿Puedo hacer algo por ti?
Quería ayudarla todo lo posible. Pensé en eso con toda
honestidad. Por eso le pregunté.
Mogi-san comenzó con, - Me alegra mucho que
preguntes eso -, y continuó tímidamente, - Quiero me que
reserves un lugar al cual volver. Quiero que me construyas un
lugar en el cual estar una vez más.
- —¿Una vez más? ¿Alguna vez te construí un lugar?
- …… Dentro de ese largo sueño sí lo hiciste.
Después de responder de ese modo, Mogi-san desvió su
mirada por alguna razón.
*
En la ceremonia de entrada.
Recuerdo algo mientras Haruaki suspira durante el
discurso inaugural del director en el gimnasio.
- Ahora que lo pienso, Haruaki. ¿No ibas a decirme algo
esta mañana?
- ¿Mh?... ¡Ah, cierto! ¡Cierto! ¡He oído algunos
rumores de que hay una chica increíblemente linda entre los
estudiantes nuevos! -, Haruaki golpea mis hombros mientras
me guiña un ojo.
- Bueno, no me importa. Como senpai no tendré
ninguna ocasión de hablarle, de todas formas.
- ¡¿Eres un idiota?! ¡El sólo ser capaz de observar a una
chica linda ya es una alegría!
No quiero creer que esa es la percepción normal.
- Pero, ¿cuándo oíste este rumor? Después de todo hoy
es el primer día que vamos a ver a los de primer año.
- ¡¿Los milagros nunca se acabarán?! ¡Es información
de Daiyan!
- ¿De Daiya?
No puedo creer esto inmediatamente. Nunca he visto a
Daiya hablar sobre una chica.
- No me crees, ¿verdad? ¡Pero hay una razón de por qué
Daiya sabe! Sabes que Daiya se equivocó en dos problemas en
todo el examen de entrada, ¿verdad?
- Sí. Suele jactarse bastante de eso. De que estableció el
récord de nuestra escuela.
- ¡Ese récord fue roto en sólo un año! -, dice Haruaki,
feliz desde el fondo de su corazón. No tiene remedio… Pero
puedo entenderlo.
- ¿Eh? ¿Qué tiene que ver eso con que Daiya sepa sobre
esta chica linda?
- Eres realmente lento, Hoshii. Lo que digo es que esta
chica linda rompió su récord al obtener una puntuación
perfecta en todas las materias. Por lo tanto, Daiyan fue
informado por los profesores, al ser el anterior dueño del
récord anterior. El profesor además le dijo que la ella era tan
hermosa que hasta él, siendo un adulto, se puso nervioso.
Eso es exagerar demasiado. Ponerse nervioso… ¿a
pesar de haber vivido tanto?
El discurso inaugural del director ha acabado durante
nuestra conversación.
El presidente enciende su micrófono.
- Muchas gracias, director… Ahora procedamos con el
saludo de la representante de los nuevos alumnos—
- ¡Mira, va a salir! ¡La belleza de los rumores!
Ya veo. Ella es la representante que hace el saludo, ya
que también es la mejor estudiante. Hasta ha comenzado a
interesarme, así que miro alrededor para encontrarla.
- La representante de los nuevos alumnos—Otonashi
Maria.
¿Otonashi—Maria?
Un nombre que me parece extremadamente familiar…
No, no. No puede ser. Maria se llamaba Otonashi Aya, después
de todo.
- Sí.
Pero esa voz sin duda es de ella. Es la voz de Maria.
Ha~ah, ya veo. Finalmente lo entiendo.
「Si lo has olvidado, recuérdalo ahora: mi nombre es
“Maria”」
Hah. Así que estaba diciendo la verdad en ese momento.
… ¿Eh? ¿Entonces estuve llamando a Maria por su
nombre de pila todo el tiempo…? ¡UWAA! ¡UWAAAA!4
- … ¿Por qué te pusiste rojo, Hoshii?
Se sube a la plataforma con más elegancia que
cualquier otra persona. De por sí ya tiene una gran presencia, al
haber vivido más que cualquier persona aquí.
4 En Japón se suele llamar por el nombre de pila a las personas con
las que se tiene una relación íntima.
Los estudiantes se vuelven bulliciosos sólo con verla.
Un rostro que conozco muy bien. Este rostro que ha
estado a mi lado durante mucho tiempo.
Está usando un uniforme nuevo.
Sí, creo que eso es en contra de las reglas. Jamás
hubiera pensado que sería menor que yo.
Maria deja que su mirada deambule, de pie sobre la
plataforma. Su mirada se encuentra con la mía. Y esta mirada
de detiene en mí por alguna razón.
Luego sonríe.
Mi cuerpo fácilmente se paraliza por completo debido a
esto.
Maria comienza su discurso sin liberarme de su mirada.
Hasta los bulliciosos estudiantes se callan ante su imponente
voz.
- ¿No crees que está mirando hacia acá todo el rato? Oh,
rayos, ¿tal vez se enamoró de mí? -, Haruaki comenta
bromeando, pero estoy tan absorto por la mirada de Maria que
ni siquiera puedo contestar.
Sólo estoy mirando a Maria.
Y Maria sólo me está mirando a mí.
- —Y así concluyo el saludo de los nuevos alumnos.
Soy la representante de los nuevos alumnos, Otonashi Maria.
Maria desciende de la plataforma. Y justo después de
hacer eso, los estudiantes se vuelven bulliciosos una vez más.
No, no sólo los estudiantes. Hasta los profesores están
confundidos.
Pero yo, sin duda, soy el más confundido.
Porque Maria no se dirige a su posición original, sino
hacia mí.
Los estudiantes automáticamente abren paso en la
dirección de su movimiento, impresionados por su autoridad.
Maria toma ventaja de esto y se dirige directamente hacia mí.
El camino va de ella hasta mí.
Ah, cielos. ¿Aún no se ha deshecho de ese hábito de ese
mundo? Tal vez esté bien no tener reserva dentro de ese mundo,
pero no funciona de ese modo aquí, ¿o sí?
Ya me di cuenta de que mi vida cotidiana va a ser
destruida.
- Haha—
Pero, no obstante, me río.
Es un verdadero fastidio.
Es un verdadero fastidio, pero no… no se siente como
uno.
Finalmente, los estudiantes en frente de mí se hacen a
un lado. Haruaki también se aleja de mí. Estamos rodeados por
un claro, casi como en el ojo de un ciclón.
En medio del amplio espacio, Maria está de pie frente a
mí.
Creí que nunca más nos volveríamos a ver. Pero,
pensando en eso, es imposible que no viniera a mi lado.
Después de todo, su meta es obtener una “caja”. No tiene más
opción que acercarse a mí, que soy el objetivo de “0”.
Maria sonríe. Abre su boca fácilmente.
- —siempre estaré a tu lado, sin importar cuánto tiempo
pase—Así es como te declaré la guerra una vez, pero sigue
siendo así, al parecer.
Después de decir eso, se presenta una vez más.
- Soy 「Otonashi Maria」. Es un placer conocerte.
La estudiante de primer año hace una profunda
reverencia, tal como hizo hace tiempo en el pasado.
Por lo tanto, aplaudo, tal como hice hace tiempo en el
pasado.
Por un rato, mi aplauso es todo lo que resuena en el
gimnasio. Luego Haruaki comienza a aplaudir sin saber de la
situación. Empujado por él, alguien más comienza a aplaudir.
Aunque nadie sabe lo que pasa, el aplauso se vuelve mayor.
En medio de este magnífico aplauso, ella levanta su
rostro.
Pero ya no está sonriendo.
Está apretando su puño firmemente y mirándome
directamente con una postura imponente.
Palabras del autor
Hola, soy Mikage Eiji.
Han pasado exactamente tres años desde mi trabajo
anterior. Si había lectores esperando mi nuevo libro, les ruego
perdón. Y también, gracias por no olvidarme.
Hubo un período en el que llegué a un alto, pero no es
como si me hubiera retirado de escribir. La razón por la cual no
publiqué un libro en tres años es simplemente por mi propia
falta de poder.
Escribí este libro con la intención de que tuviera un
valor de entretención alto. Mi posición concerniente a mi
intención de escribir novelas también ha cambiado.
Pero no pude evitar el emocionarme con todo este
cambio. ¿No desaparecerá mi calidad? ¿No se sentirán
traicionados mis fieles lectores? ¿No será enterrado bajo
numerosas otras grandes obras?
Esta fue la ansiedad—y miedo—con la que estaba
luchando en todo momento que escribía 「Utsuro no Hako to
Zero no Maria」.
Pero esta ansiedad y miedo desaparecieron antes de que
lo supiera.
Porque me di cuenta de que este libro no es nada más
que mi propio libro.
Creo que se ha convertido en libro, soy capaz de decir
“Prueben leerlo” a los lectores a los que les gustaron mis
trabajos anteriores, a los que no les gustaron, y también a los
que no sabían de mí hasta ahora.
¿Qué tal estuvo? ¿Fue entretenido, ahora que probaron
leerlo?
Si la respuesta es “Sí”, entonces no hay alegría más
grande para mí.
Por cierto, este es mi cuarto libro, y también el primero
con ilustraciones.
Para ser honesto, al principio estaba preocupado sobre
que la interpretación del lector cambiara debido a las
ilustraciones, pero cuando recibí un correo con un boceto,
cambié de opinión.
Era la sensación de mis propios personajes
deteniéndose para ser poseídos sólo por mí.
Era la sensación de tener a los personajes fuera de mi
control.
Esta vez, no conocía la apariencia de mis personajes
hasta que casi acabe de escribir, así que la influencia fue
bastante poca, pero voy a saltarme esta “independencia de mis
personajes” en mis futuros trabajos.
Estoy ansioso por saber cuál será el resultado.
Es más, recibí apoyo de mucha gente mientras escribía
este libro. Para decirlo claramente, el peso de mi gratitud es
diferente esta vez. Porque finalmente pude sentir fuertemente
por primera vez que fui capaz de completar un libro de esta
forma.
Por lo tanto, mis agradecimientos van a ser
respectivamente largos. Les ruego perdón.
A toda la gente en el equipo de edición de ASCII Media
Arts. Al corrector. Al diseñador. Gracias a todos ustedes.
A 415-san, que dibujó las ilustraciones para mí. Estaba
ansioso por las ilustraciones al principio, pero tan pronto vi las
ilustraciones de 415-san, esta ansiedad se esfumó. Mis días han
cambiado desde entonces, y durante días completos he tenido
varios delirios mientras miraba sus ilustraciones con una
sonrisa en el rostro.
A mis amigos que me ayudaron a desarrollarme, a todos
mis colegas de mi trabajo de medio tiempo.
A mi familia que me ha cuidado cuando tuve muchos
problemas para sacar un libro.
A Fujiwara Yuu-san. Estoy realmente agradecido que
me hayas alentado cuando estuve a punto de decaer porque mis
manuscritos estaban siendo rechazados sin parar.
Y por supuesto, a Kawamoto-san, quien está a cargo de
mí. Si no fuera por usted, este libro jamás habría existido. Me
asombra que no me abandonara, viendo cómo era en el
pasado—no es broma. Me ayudó a crecer en varios aspectos,
no sólo respecto a los libros. Estoy realmente agradecido. Mis
mejores deseos para el futuro.
Y también, por supuesto, me gustaría agradecerles a
todos ustedes, los lectores, que tomaron este libro en sus manos.
Las novelas existen porque hay lectores que las leen.
Todos ustedes son parte de esta novela… de la cual, aunque sea
algo grosero decirlo, pero, de todos modos, ustedes son
componentes importantes.
Espero poder haber canalizado mi gratitud hacia todos
de una forma, al menos, un poco interesante.
Espero que nos sigamos viendo por un largo tiempo a
partir de ahora, de ser posible.
Ah, y también, ¡disculpen por escribir notas tan
aburridas!
—Mikage Eiji
Palabras del Traductor
Esta novela me llamó mucho la atención por su forma
narrativa.
Le dije a Roy que la sacáramos cuando al fin se
decidió a sacar novelas ligeras, pero no quiso, así que le dije
“¿Qué te pasó, Roy? Antes eras chévere.” Pero Roy me dijo,
“Eso no es verdad”.
Es cierto, nunca lo ha sido.
Pero bueno, acabé fundando una sección de novelas
propiamente tal, ya que aún no existía con esa denominación,
espero que podamos seguir sacando novelas que consideramos
que valen la pena ser leídas.
—Esteban108
Comentarios
Mikage Eiji
Vivo en Saitama. Calzo 24,5 cm. Los zapatos para
hombres no tienen una medida mínima. Cuando fui a jugar
bolos con algunos amigos el otro día, mis zapatos rentados
eran los únicos que tenían una Hello Kitty en ellos. Maldición.
415
Vivo pacíficamente en un rincón del área
metropolitana de Tokyo con un portaminas en mi mano. Mi
habitación siempre es un desorden con todos los mangas y
materiales que tengo allí, así que me he propuesto el “mantener
mi habitación hermosa por más de un mes” como meta para
este año.