16
Análisis y Modficacidn de Conducta, 1987, Vol. 13. N.O 35. EFECTO DEL REFUERZO SOCIAL EN UNA MUESTRA DE INFANTES TR 1 SOMICOS-21 SOMETI DOS A ESTIMULAC ION PRECOZ María Teresa Sanz Aparicio Departamento de Peko logía Genera2 Facultad de Peicologh v. N. E. D. Este artículo refZe;Fírr los resultados de un estudio l levado a cabo sobre -las adquisiciones dif erenciates de dos grupos de lactantes trisómicos-21 en función del refuerzo empleado, en un programa de estimulación precoz. Por presentar esta población un cociente social por encima de su cociente intelectual, rasgo central de su personalidad, y por la marcada hipotonía que padecen, sobre todo en los primeros años de vida, se utilizó como premio, un refuerzo social con dos variantes: ad- ministrado en interacción física con el sujeto (grupo RII y sin interacción (grupo RNII. Según 20s datos obtenidos se comprobó un mayor ni- vel de adquisiciones en aquel grupo que había recibi- do el refuerzo en interacción. SUMMARY This report shows the results of a study carried out about about differential acquisitions of two groups of trisomy-21 babies, depending on the re&if:or - cement used i n an early stimlation program. As this population presents a social quotient hi-

SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

  • Upload
    others

  • View
    3

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

Análisis y Modficacidn de Conducta, 1987, Vol. 13. N.O 35.

EFECTO DEL REFUERZO SOCIAL EN UNA MUESTRA DE INFANTES TR 1 SOMICOS-21 SOMETI DOS A ESTIMULAC I O N PRECOZ

María Teresa Sanz Aparicio Departamento de Peko logía Genera2 Facultad de Peicologh v. N. E. D.

Este ar t ículo refZe;Fírr los resultados de un estudio l levado a cabo sobre -las adquisiciones d i f erenciates de dos grupos de lactantes trisómicos-21 en función del refuerzo empleado, en un programa de estimulación precoz.

Por presentar es ta población un cociente social por encima de su cociente in te lectual , rasgo central de su personalidad, y por la marcada hipotonía que padecen, sobre todo en los primeros años de vida, se u t i l i z ó como premio, un refuerzo social con dos variantes: ad- ministrado en interacción f í s ica con e l sujeto (grupo RII y s i n interacción (grupo RNII.

Según 20s datos obtenidos se comprobó un mayor ni- ve l de adquisiciones en aquel grupo que había recibi- do e l refuerzo en interacción.

SUMMARY

This report shows the resu l t s of a study carried out about about d i f f e ren t ia l acquisitions of two groups of trisomy-21 babies, depending on the re&if:or - cement used i n an early s t i m l a t i o n program.

As t h i s population presents a social quotient hi-

Page 2: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

gher than its intelligence quotien, main characteris- tic of its personality and because of the pronounced hipotony suffered by them, principally in the first years of life, we used as reward a social reinforce- ment with two variants: ahinistered in physicat in- teraction with the subject (RI groupl and without in- teract ion (RNI groupl .

According to the obtained data, we proved un upper tevel of acquisitions in the group which had received the reinforcement in the interaction.

Page 3: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

INTRODUCCION

Por estimulación precoz entendemos la presentación de estímu- los sensoriales de forma pautada y programada, al bebé que mani- fiesta alteraciones -perinatales, cromosómicas, ambientales...- con el fín de proveerle mayor número de interacciones con el me- dio para una mejor adaptación con su entorno, y favorecer así el desarrollo de los repertorios cognitivos.

Se han llevado a cabo gran cantidad de experimentos que vienen a demostrar la correlación altamente positiva entre ambientes en- riquecidos y el posterior desarrollo en animales inferiores de la escala filogenética (Kuenzle y Knüsel, 1974; Bennet y colab., 1979; Nissen, 1978; Schwartz, 1978; Levine, 1973; Riesen, 1973; Rosenzweig y colab. 1977). Esto nos permite comprobar un hecho de gran interés en relación con la estimulación del lactante: cuando nace un bebé es un ser totalmentae indefenso, tardará un año en andar y muchos más en valerse por sí mismo; mientras que esto lo conseguirán en muy poco tiempo los animales, ya que nacen prácticamente maduros. Este hecho en el hombre, le permite esca- par de la rigidez de una estructura determinada genéticamente y seguir un proceso de desarrollo en interacción con,los estímulos ambientales; estimulación que en el caso del lactante que presen- ta alteraciones prenatales, perinatales o postnatales, se debe de programar, contando que se producirá un feed-back con unas es- tructuras menos acabadas y por ello más plásticas.

En humanos se han realizado trabajos para demostrar el efecto del ambiente en los primeros momentos del desarrollo, desde los estudios de Hess y Shipman (1965) y los de Bee y colab. (1969), se sabe que las instrucciones verbales y el tipo de lenguaje que emplea la madre en su hijo determinará la ejecución de éste: las madres que utilizaron más abstracciones y verbalizaciones desarro llaron en el niño una mayor destreza verbal, las que leían diaria mente durante diez minutos a bebés de trece meses durante nueve meses, lograron que el lenguaje de sus hijos se colocaran por en- cima de la media. Rheinghold (1969) observó que al incrementar la atención individual a los niños internados en instituciones, au-

Page 4: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

mentaban su talla y peso. Korner y Thoman (1972) registraron a doce bebés comprobando que sus ojos penmxcih abiertos el 90% del tiempo que estaban en brazos y solo un 25% cuando yacfan en la cuna, lo que sugiere que el desarrollo temprano del esquema visomotor se ve facilitado por la estimulación vestibular y el manejo que recibe el bebé. La variedad y clase de objetos dispo- nibles para el niño tienen relación con el índice de desarrollo mental (Yarrow y otros, 1972), y con su conducta exploratoria (Rubinstein, 1967). Los lactantes de madres que estimularon poco, y no respondieron a sus señales limitando su exploración, produ- jeron C.I. inferiores en sus hijos (Beckwith, 1971b, Clarke-Ste- wart, 1973; Ainsworth y Bell, 1975).

En general, se puede afirmar que si no hay un intercambio en- tre el niño y el ambiente durante el período de desarrollo senso- motríz (dieciocho primeros meses), se producirá un deterioro en la inteligencia y adaptación futura al medio. Lo que viene a con- firmar que la experiencia temprana juega un papel fundamental en el desarrollo del bebé.

En el caso del lactante síndrome de Down, esta necesidad se presenta más acusada ya que uno de sus rasgos más sobresalientes en esta época, causado por la propia alteración cromosómica, es la hipotonía, que mediatiza y limita su relación con el entorno; esa hipotonía generalizada produce menor receptividad a la esti- mulación exterior, por lo que deberá presentársele de forma más insistente y fundamentalmente programada. Por otro lado, dado que esta alteración se detecta inmediatamente después del nacimiento que es causante del 0.1% de todos los nacimientos con 3.000 casos por año (hntley y Hartlage, 1976) y que constituye una población bastante homogénea en cuanto a desarrollo de la inteligencia y rasgos de personalidad se refiere, la hacen objeto de gran número de estudios.

Uno de sus rasgos de personalidad más destacable es su efecti- vidad que lo sitúa de dos a tres años por encima de su edad men- tal (Domino, Goldchmid y Kaplan, 1964; Silverstein, 1970; Cont- well y Birch, 1969; Grotz, 1972; Anderson, 1937; Cytryno, 1975), de todo ello se deduce la utilidad del refuerzo social en el tra- bajo de estimulación con estos niños.

Como hemos dicho por las características diagnósticas de esta población, la estimulación precoz se puede iniciar después de na- cer, e inmediatamente surge un problema inherente a la misma pa- tología: el refuerzo a emplear. Este factor reviste especial im- portancia teniendo en cuenta que por la hipotonfa, ya mencionada, son difíciles de motivar. Refuerzos primarios, como leche, agua o chupeteo, no lo constituyen para el lactante Down por su esca- sez o carencia de reflejo de succión; distinto es el caso de los reforzadores tactiles que aplicados de forma suave, resultan re-

Page 5: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

forzadores pos i t i vos para e l l a c t a n t e , ya que dependen de e l l o s más directamente (brazos de l a madre, c a r i c i a s , sabanas. . . ) . Si e s l a madre l a p r inc ipa l administradora de l o s reforzadores tac- t i l e s , su s o l a presencia s e vivenciará como reforzante ; con e l l o l a s oportunidades para programas conductuales por medio de refue: zos t a c t i l e s son inmensas.

Cuando una madre a c a r i c i a a su h i j o , también l e habla, sonr íe ; si ese niño r e a l i z a algo deseable para l a madre, e s t a s e l o apro- bara verbalmente a l a vez q2e l e son re i r á y cogerá en brazos. Es- t a cadena de respuestas s e produce contínuamente en l a in te rac- ción madre-hijo, consiguiendo con e l l o que dos estímulos previa- mente neutros, son r i s a y aprobación verba l , adquieran por sí valor re forzante .

En l a dinámica de l a estimulación precoz sucede l o mismo, c u a l do e l l a c t a n t e comienza e l t ratamiento l o primero s e r á i n t e r acc io nar con é l , que s e acostumbre a l t e rapeuta para que con e l l o sus c a r i c i a s l a s acepte como estímulos placenteros y no l e asusten; e s to e s , que e l bebé s e f ami l i a r i ce con e l entorno y e l terapeu- t a , convir t iéndole en administrador de reforzamiento, e s t a b l e c i é l dose un vínculo e n t r e ambos y siendo ese vínculo l a base de l re- forzamiento.

Part iendo de e s t o s presupuestos en nuestro es tudio , pretendi- mos comprobar si e x i s t í a n d i fe renc ias en l a s adquisiciones de in- fan tes mongólicos en e l contexto de l a estimulación precoz, cuan- do s e administraba e l re fuerzo s o c i a l contactando f ís icamente con e l niño -para ap l aud i r l e por l a ejecución deseada s e cogían sus manos y s e r ea l i zaba e l reforzador conjuntamente- o , si por e l cont ra r io , l a simple ap l icac ión de l reforzador s o c i a l -el terape; t a aplaudía a l niño-, e r a recompensante en igua l medida.

Hasta e l momento no s e han rea l izado invest igaciones en e s t e sent ido, pero nos inclinamos a pensar que aquel grupo que r e c i b i e s e e l refuerzo s o c i a l en in te racc ión obtendría mejores ejecucio- nes, por l o que nos planteamos l a s igu i en t e h ipótes i s : habiéndo- s e comprobado l a u t i l i d a d de l refuerzo s o c i a l en e l contexto de

fi l a estimulación precoz, cab r í a pensarse que mayor s e r á su e f ica- c i a a l adminis t ra r lo en in te racc ión con e l su je to .

Suje tos

La muestra es taba cons t i t u ida por 18 bebés a f ec tos de t r isomía primaria en e l pa r 21: 10 varones y 8 hembras s i tuándose e n t r e l o s once y t r e c e meses con un coc ien te de desa r ro l lo en t r e 65-75 según l a e sca l a para medir e l de sa r ro l lo psicomotor en l a primera infanc ia (~ rune t -Lez ine ) . Todos l o s su j e to s cumplían l a condición

Page 6: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

de l l e v a r a l menos un mínimo de cua t ro meses de t ratamiento de estimulación precoz para poder p a r t i c i p a r en e l experimento; en e s t e período de tiempo, habían su f r ido más de una rev is ión diag- nós t ica y s e había ido completando una f i cha individual de evolu- ción de peso, t a l l a y dent ic ión u t i l i z a d a de cont ro l has ta l o s ve in t i cua t ro meses.

Material

Durante l a f a s e experimental cada niño continuó con su progra- mación individual izada (con e l material p rec iso para e l l o ) , pero en todas s e introdujeron ocho obje t ivos comunes, dos por á rea tr: bajada: en e l á rea de motricidad gruesa s e emplearon como estímu- l o s de apoyo una pe lo ta y un sonajero, para l o s obje t ivos de mo- t r i c i d a d f i n a fue u t i l i z a d o e l t ab l e ro de f i gu ra s geométricas de l a s esca las Bayley, una c a j a de p l á s t i c o de lOxlOxlO centímetros y l o s cubos de 2x2 centímetros de l a esca la de Brunet-Lezine, tal! t o en e l á r ea de lenguaje como en %a de s o c i a l no s e prec isó ma- t e r i a l de apoyo. Las t r e s s a l a s donde s e r ea l i za ron l a s sesiones reunían condiciones s imi la res en cuanto a espacio, luminosidad y aparatos aux i l i a r e s .

Diseño

Se u t i l i z ó un diseño de dos grupos a l ea to r io s , controlando l a var iab le sexo, de t a l forma que cada grupo s e componía de cinco varones y cua t ro hembras. La var iab le independiente e s e l t i p o de re fuerzo administrado ( R I - R N I ) y l a va r i ab l e dependiente l a s e je - cuciones de l o s su j e to s en l o s dos obje t ivos de cada una de l a s á reas t rabajadas:

- Motor grueso: En sedestación s e coloca en posición de gateo. En bipedestación con apoyo, levanta y ba j a un p ié .

- Motor f ino : Casa e l c í r c u l o de l t ab l e ro de f i gu ra s geométri- cas . Mete un cubo en una ca ja .

- Lenguaje: Repite: BA - BA. Repite: NA - NA

- Social : Dice adiós con su mano. Juega a l cucú con sus manos.

(Los obje t ivos fueron programados según: programa de interven- ción temprana para niños mongólicos ( M . Hanson, items comparados de A . Gessel l para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir e l de sa r ro l lo psicomotor en l a primera infanc ia de Brunet- Lezine 1.

Se rea l izaban cinco ensayos de cada uno de l o s ocho obje t ivos en cada ses ión que puntuaban O Ó 1 según fue ra co r r ec t a o no l a ejecución.

Page 7: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

Procedimiento

Como ya hemos indicado, l o s su j e to s reunían l a condición de a s i s t i r a t ratamiento de estimulación precoz un mínimo de cua t ro meses an tes del i n i c i o de l experimento. Durante e s t e período de tiempo l o s programas de entrenamiento habían s ido divididos en l a s s igu i en t e s á reas : motricidad gruesa (cont ro l ce fá l i co , sen- t a r s e , g i r a r s e sobre sí mismo, ga t ea r , en p i e ) , motricidad f i n a (v i sua l , a lcanzar , agar rar y manipular ob j e to s ) , comunicación ( lenguaje expresivo y lenguaje recept ivo) y social-autoayuda ( a l i mento e i n t e r acc ión ) . A l a s madres s e l e s había entregado una co- p ia del programa e ins t rucc iones semanales por e s c r i t o de l o s ob- je t ivos que debían de t r a b a j a r en e l hogar, adiestrándolas en l a sesión para e l l o .

E l r e fuerzo administrado an te l a ejecución deseada fue siempre verbal: "bien, muy bien.. .". E l c r i t e r i o u t i l i z a d o para conside- r a r s e superada una programación de obje t ivos e r a l a rea l izac ión del 75% de l o s elementos propuestos, debiéndose r e a l i z a r es tos cinco veces s i n e r r o r durante dos sesiones para considerarse su- perados.

En l a f a s e propiamente experimental, l a s madres dejaron de a s i s t i r a l a ses ión para e v i t a r con e l l o l a ap l icac ión de l r e f u e r zo de forma incontrolada, aunque s e l e s s igu ió dando pautas sema- nalmente, entrando un observador con cada uno de l o s terapeutas con e l f í n de anotar cada uno de l o s n ive les de ejecución de l su- j e to y l a s conductas presentadas, pero no in te rv in iendo en ningún caso. Se r e a l i z ó una nueva programación para cada uno de l o s ni- ños introduciéndose ocho obje t ivos comunes, dos por á rea t raba ja- da. Los i n t en tos d i a r i o s s e r eg i s t r a ron de forma s i s temát ica en unas t ab l a s elaboradas a l efecto.

La muestra s e d iv id ió de forma a l e a t o r i a pero teniendo en c u e l t a e l sexo, en dos grupos:

le Grupo: Se s igue empleando como refuerzo verbal "bien, muy bien. . ." y simultáneamente e l t e rapeuta coge l a s ma- nos de l niño y aplaude con é l ; a e s t e grupo s e l e denominó R I ( re fuerzo en in t e r acc ión ) .

20 Grupo: Se mantiene e l mismo refuerzo verba l , a l a vez que e l t e rapeuta aplaude an t e l a s ejecuciones co r r ec t a s ; grupo R N I ( re fuerzo no in te racc ión) .

RESULTADOS

Dado que e l tamaño de l a muestra e r a pequefio y por e l t i p o de medidas tomadas (número de a c i e r t o s de l 1 a l 5 en cada uno de l o s ocho obje t ivos por cada s e s i ó n ) , e s de suponer que l a s puntua

Page 8: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

ciones en cada condición experimental no s e d is t r ibuyeran normal- mente, de hecho l a computación de medias y desviaciones t í p i c a s en l a s d i s t i n t a s áreas muestra que l o s grupos R I y RNI d i f i e r en considerablemente en algunas de e l l a s (cuadro no 1).

CUADRO No 1: Medias y desviaciones t í p i c a s de l a s ejecuciones en l a s 22 sesiones, por á r ea s y obje t ivos para cada uno de l o s dos grupos de su j e to s .

Por todo e l l o , s e consideró oportuno l a u t i l i z a c i ó n dé l a prue ba no paramétrica U de Mann-Withney; dicha prueba s e ap l i có a l a s puntuaciones t o t a l e s en l o s ocho obje t ivos de l grupo RY y RNI, obteniéndose una suma de rangos de 103.5 y 67.5 respectivamente a l o s que corresponden un va lor Z de 1.65 ( f i g u r a no 1 ) , que a l compararla con e l valor Z de l a s t ab l a s para n y n2 = 9 ind i ca que ambas muestras son signif icat ivamente d i f e r en t e s ( ~ 4 0 . 0 5 , cont ras te u n i l a t e r a l ) (Cuadro nQ 2 ) .

Seguidamente s e pasó a r e a l i z a r un segundo a n á l i s i s , para com- probar si l o s s u j e t o s entrenados con e l re fuerzo soc i a l adminis- t rado en in te racc ión , s e comportaban diferencialmente en l a s dis- t i n t a s á r ea s , en re lac ión a l o s s u j e t o s entrenados so lo con e l refuerzo soc i a l . Para e l l o s e volvió a emplear l a prueba U de Mann Whitney obteniéndose l o s resu l tados presentados en e l cua- dro nQ 3.

Page 9: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

FIGURA NQ 1: Representación de la suma de rangos de las puntuaciones de los RI y RNI (valor Z = 1.65 pb 0.05).

RI R N I

CUADRO No 2: Resultados de la compa- ración de rangos de puz tuaciones totales entre los RI y RNI con la prueba U de Mann-With- ney.

CUADRO NQ 3: Comparación de rangos de las puntuaciones en cada área en ambos grupos.

Page 10: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

FIGURA NQ 2: Representación de l a suma de rangos de l a s cuatro áreas en l o s dos grupos.

m. grueso

R I R t I I R I R t l I R I R N I R i R W I

No exis ten d i ferencias s i g n i f i c a t i v a s , no obstante s e observa una tendencia a que l o s su j e tos de ambos grupos s e comporten di- ferencialmente y que e s t a s d i ferencias g i ran en un sent ido o en o t ro en función de l á rea comparada. En l a s á reas de soc i a l , len- guaje y motor grueso, parece e x i s t i r una tendencia a un mayor ni- ve l de ejecución de l o s su j e tos R I f r e n t e a l o s RNI; s i n embargo e s tos resu l tados s e invier ten en e l á rea de motor f i no ( f igura n 2 ' 2 ) .

Analizando e l proceso de adquisición de cada uno de l o s grupos en l o s ocho. objet ivos s e observaron d i ferencias en cuanto a l nú- mero de sesiones necesarias para alcanzar e l c r i t e r i o f i j a d o pa- r a considerar una conducta aprendida.

Como ya indicamos anteriormente, para que en estimulación pre- coz s e considere superado un obje t ivo y poder programar un nivel super ior , e l s u j e t o debe de e jecutar cinco in tentos s i n e r ro r en dos sesiones consecutivas; a s í pues, considerando dentro de cada grupo a l o s 9 su j e tos y sus ocho objet ivos a r e a l i z a r obtendremos un t o t a l de 72 s i tuac iones que analizándolas secuencialmente, s e comprueba que l o s infantes R I empiezan a aprender an tes l a ta rea e igualmente completan l a programación en menor tiempo (cuadro no 4 ) ; por ejemeplo en l a sesión no 19 habían adquirido un 50% de l o s obje t ivos l o s R I f r en t e a l 19.4% de l o s R N I .

Llevando a cabo un estudio por obje t ivos , s e pudo comprobar que e s t a re lac ión s e mantenía; e s to e s , que l o s su j e tos R I apren- den antes l a t a r e a que l o s R N I ( sa lvo en l o s dos obje t ivos cor res pondientes a l á rea de motor f i n o donde e l proceso s e inv ie r t e ) . Se expresa gráficamente en l a s f iguras nQ 3 a 10.

Page 11: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

FIGURA NQ 3: Curvas acumulativas de sujetos que consiguen cada uno de los ocho objetivos por sesiones.

FIGURA N03

Page 12: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

CUADRO NQ 4: Objetivos conseguidos en función del número de sesi: nes en ambos grupos.

GRUPO - RI

Para conseguir un es tudio más completo de l o s datos obtenidos, s e pensó en r e a l i z a r con e l l o s un t i p o de a n á l i s i s que si bien no inc id í a en. l a h ipótes is de t raba jo , ayudaba a conocer mejor l a naturaleza de nues t ra población. Para e l l o , s e es tudió cada mues- t r a por separado, observando l o s e fec tos de l a estimulación pre- coz en l a s cuatro áreas ; e s dec i r dentro de cada t i p o de refuerzo s e sometió a comprobación l a s posibles d i ferencias s ign i f i ca t ivas en l a s ejecuciones de l o s nueve su j e tos en función de' l a s áreas comparadas. Para conseguir dicho propósi to s e empleó e l t e s t de F r i e dman .

En e l grupo R 1 s e obtuvo un valor x2 = 47.456 (pG0 .05) ; l a s d i ferencias más sobresa l ien tes s e hal laron en e l á r ea de l lengua- j e , en donde a l comparar l a s sumas de rangos de sus objet ivos ( 5 y 6 ) con l a s de l o s r e s t an te s aparecen d i ferencias s ign i f i ca t ivas (siendo e l punto tabular 32) (cuadro nQ 5 ) .

En 1 r u o RNI s e obtuvieron también d i ferencias s ign i f i ca t i - 5 g p vas: X = 53.876 ( ~ ~ 0 . 0 5 ) siendo, igualmente, más pronunciadas

en e l á rea de lenguaje ( l o s resu l tados s e expresan en e l cuadro no 6 ) . Las d i ferencias en t r e l o s obje t ivos s e producen en e l m i s - mo sentido de l grupo R I comentado anteriormente.

Page 13: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

CUADRO NQ 5: Comparación de l a suma de rangos de l a s puntuaciones de l o s dos obje t ivos de l á rea de lenguaje con l o s dos obje t ivos de motor f i n o y s o c i a l en ambos gru- pos.

f i

DISCUSION

En términos generales l a h ipó te s i s planteada sobre si l a s e je - cuciones en l o s d i s t i n t o s obje t ivos f i j a d o s para cada una de l a s á reas , dependían de l re fuerzo s o c i a l empleado, nuestro t raba jo . Los resu l tados s e muestran en e l

viene d i s c u t i r . 1 predicciones formuladas, y sugieren una s e r i e de aspectos que con

l

GRUPO RI

En primer lugar , y como resu l tado de l a ap l icac ión de l a prue- ba U de Mann-Withney e n t r e l a s puntuaciones t o t a l e s en l o s ocho

leng.

objet ivos de l o s grupos R I y R N I , s e comprueba una tendencia a que s e comporten diferencialmente en l a s ejecuciones a un n ive l de s ign i f i cac ión de l 0.05.

motor f . soc i a l

- S

6

- GRUPO R N I

Un segundo aspecto destacable por l a relevancia de l o s datos obtenidos, e s l a información que proporciona l a suma de campos de

I l a ap l icac ión de l a U de Mann-Withney por á r ea s , concretamente en motor f i no y soc i a l . En cuanto a l a primera: l o s su j e to s R I pun- tuan por debajo de l o s R N I , i nd i ca que e l hecho de que e l terape! t a co j a l a s manos de l niño y aplauda con é l , posiblemente tenga e fec tos i n h i b i t o r i o s . Por s e r e l área eminentemente manipulativa,

soc i a l

3

3b

3 3

37

motor f .

lenp.

'í a l proporcionar como reforzador una ac t iv idad también manipulati- va que involucra de forma ac t iva a l niño, puede no log ra r l o s

3 8 . 5

3 b

b 7

3 8 . 5 b 2 . 5

3 6

8

4 7

3 9 . 5

3

5 1 . 5

4 4

5

6

efec tos pretendidos, "no s e r reforzante" para é l . Ca .o t r a á rea a des tacar e r a l a s o c i a l , en donde s e produce l a mayor d i fe renc ia

8

4 7

4 2 . 3

4 7

4 3

3 5 . 5

en t r e l a s ejecuciones de ambos grupos, s iendo e s t e e f ec to supe- r i o r a l r e s t o de las á r eas ; resu l tados que coinciden con l o s au- t o r e s que defienden l a superioridad de l de sa r ro l lo soc i a l sobre e l i n t e l e c t u a l (Potozki y Gribb, 1942; Domino, Golchmid, y Kaplan 1964; S i l v e r s t e i n , 1970; Cornwell y Birch, 1969; Grotz, 1972; Cy- t ryno, 1975; Anderson, 1937).

j e

Es te rasgo de personalidad t a n espec í f ico de l o s su j e to s afec-

Page 14: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

t o s de trisomía-21 fue e l que nos i nc l i nó a l i n i c i o de l a inves- t i gac ión y p l an t ea r l a h ipó t e s i s de t r a b a j o en e l s en t i do de un mayor e f ec to de l re fuerzo verbal con in te racc ión f í s i c a (RI ) ; de e s t e modo, si en e l r e s t o de l a s á r ea s hemos comprobado una ten- dencia de l o s resu l tados , según nues t ras predicciones s e hacen más no to r i a s en e l área de s o c i a l .

Otro punto a des tacar , e s e l r e l a t i v o a l proceso de adquisi- c ión de cada uno de l o s ob je t ivos por ambos grupos, comprobándose que l o s R I ejecutaban correctamente l o s ob je t ivos (excepto l o s dos de motor f i n o ) en un promedio de dos o t r e s sesiones an tes que l o s R N I , l o que implica que con l a u t i l i z a c i ó n de e s t e refue: zo, s e adquiere con menor entrenamiento l a t a r ea . De e s t e modo, como s e puede observar en l a s f i gu ra s nQ 3 a 10, l o s nueve suje- t o s R I aprenden un mayor número de ob je t ivos y é s t o s l o s ejecutan an t e s que e l grupo que r ec ibe e l re fuerzo s i n in te racc ión .

Uno de l o s e f ec to s más importantes de l a estimulación precoz, e igualmente comprobado en nues t ro t r aba jo , e s e l conseguir e l de sa r ro l l o homogéneo, e s t o e s , que no ex i s t an lagunas o disarmo- n í a s en l a evolución, l o que a s í mismo s e logra en nues t ro estu- d io con ambos t i p o s de re fuerzo , exceptuando en lenguaje ya que aunque s e pretende cub r i r e l d é f i c i t , ex i s t en ba r r e r a s biológicas en e s t a población; l o que cons t i tuye e l más importante handicap para cua lquier t i p o de t ratamiento, inc lu ído l a intervención tem- prana.

BIBLIOGRAFIA

AINSYORTH, M.D.S. y BELL, S.M.: Mother I n t e r a c t i o n and Development of Conpetence. En K.J. C o n n o l l y y J. B rune r (Eds.): The Grou th o f Co ipetence. Academic Press 1975.

ANDERSON, J.E.: The Development o f S o c i a l Behav io r . A i e r i c a n J o u r n a l o f Soc io logy 1937. 44: 839-857.

ANTLEY, R.M. y HARTLAGE, S.: Doun1s s y n d r o i e P s y c h o l o g i c a l Aspects o f Gene t i c C o u n s e l l i n g . Academic Press. 1976.

BECKYITH, L.: R e l a t i o n s h i p s 8etween A t t r i b u t e s o f Mo the rs and T h e i r I n f a n t s l I C Scores. C h i l d Deve l . 1971, 42: 1083-1097.

BEE, H.L., VAN EGEREN. M. STREISSGUTH, J.K. NYMAN. H. y LECKIE, S.: S o c i a l C lass D i f f e r e n c e s i n M a t e r n a l Teach ing S t r a t e g i e s and Speech P a t t e r n s . Deve lop ien -

Page 15: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

t a l Psycho logy. 1969, 1: 726-374.

BENNETT, €.L. ROSENZWEIG, M.R. MORIMOTO, H. y HEBERT, M.: Maze T r a i n i n g A l t e r s B r a i n Weights and C o r t i c a l RNAIONA R a t i o s . B e h a v i o r a l And N e u r a l B i o l o g y . 1979. 26: 1-22.

BRUNET, O. y LEZINE, 1.: E s c a l a p a r a med i r e l d e s a r r o l l o p s i c o m o t o r de l a p r i m e r a i m f a n c i a . MEPSA. 1971.

CLARKE-STEWART, K.A.: I n t e r a c t i o n s Between Mo the rs and T h e i r Young C h i l d r e n : Cha- r a c t e r i s t i c s and Consequences. Monogr. Soc. Res. C h i l d Deve l . 1973, 38. no 153:109.

CORNWELL, A. y BIRCH, H.: P s y c h o l o g i c a l and S o c i a l Development i n Home-Reared C h i l d r e n w i t h Oownls Syndrome. A i e r i c a n J o u r n a l M e n t a l D e f i c i e n c y . 1969. 14: 341-350.

CYTRYNO, L.: S t u d i e s and B e h a v i o r i n C h i l d r e n w i t h Down's Syndrome. E x p l o r a t i o n i n C h i l d P s y c h i a t r y , 1975, 271-285.

GESELL, A. y AMATRUDA, C.: D i a g n ó s t i c o d e l d e s a r o l l o . Pa idós, 1976.

GROTZ, S.: A Comparison o f t h e F u n c t i o n a l and I n t e l l e c t u a l Per formance o f Phe- n y l k e t o n u r i c , A n o r e x i c and Oown's Syndrome i n d i v i d u a l s . A i e r i c a n J o u r n a l Men- t a l O e f i c i e n c y . 1972, 76: 710-717.

HANSON, M. y SCHWARZ, R.: R e s u l t s o f a l o n g i t u d i n a l I n t e r v e n t i o n Program f o r Oownls Syndrome I n f a n t s and T h e i r F a m i l i e s . E d u c a t i o n and T r a i n i n g o f t h e Me! t a l l y Retarded. 1978, 13: 403-406.

HESS, R.D. y SHIPMAN, V.C.: E a r l y E x p e r i e n c e and t h e S o c i a l i z a t i o n o f C o g n i t i v e Modes i n C h i l d r e n . C h i l d D e v e l o p i e n t . 1965, 36: 869-886.

KORNER, A. y THOMAN, E.8.: The R e l a t i v e E f f i c a c y of C o n t a c t and V e s t i b u l a r - P r o - p r i o c e p t i v e S t i m u l a t i o n i n S o o t h i n g Neonate ts . C h i l d ~ e v e l o ~ i e n t , 1972, 43: 443-453.

LEVINE, R.S.: Oown's Syndrome. The J o u r n a l o f A i e r i c a n M e d i c a l A s s o c i a t i o n . 1973, 224-1762.

NISSEN. G.: R e t a r d a t i o n of M e n t a l Development i n C h i l d h o o d and S t r u c t u r e o f So- c i e t y German. Psycho the rap ie . 1978, 25:213.

RHEINGOLD, H.L.: The M o d i f i c a t i o n o f S o c i a l Respons iveness i n I n s t i t u t i o n a l 8a- b i e s . Monogr. Soc. Res. C h i l d Devel., 1969. 21:48.

RIESEN, A.H.: A r r e s t e d Vison. En W.T. Greenough (Ed.): The N a t u r e and N u r t u r e o f Behav io r , D e v e l o p i e n t a l Psycho logy. W.H. Freeman, 1973.

ROSENZWEIG, M.R. y BENNETT, E.L.: E f f e c t s o f E n v i r o n m e n t a l En r i chmen t o r impove-

Page 16: SOMICOS-21 - Dialnetde A. Gessell para niños normales y síndrome de Down, Escala para medir el desarrollo psicomotor en la primera infancia de Brunet- Lezine 1. Se realizaban cinco

r i s h m e n t on L e a r n i n g and on B r a i n Va lues i n Rodents. En A. O l i v e i r o (Ed.): Gene t i cs . E n v i r o n i e n t and I n t e l l i g e n c e . E l s e v i e r , 1977.

RUBINSTEIN, J.: M a t e r n a l A t t e n t i v e n e s s and Subsequent E x p l o r a t o r y Behav io r i n t h e I n f a n t . C h i l d D e v e l o p i e n t . 1967, 38: 1089-1100.

SCHWARTZ, D.M. y SCHWARTZ, R.M.: A c o u s t i c Impedance and O toscop i c F i n d i n g s i n Young C h i l d r e n w i t h Downls Syndrome. Arch. O t o r a l . 1978, 104: 652.

SILVERSTEIN, A.: The Measurement of I n t e l l i g e n c e . En N. E l l i s (ed.) : I n t e r n a t i o - n a l R e v i e u o f Research o f H e n t a l R e t a r d a t i o n . (Vo l . 4). Acadeaic Press, 1970.

YARROW, L., RUBENSTEIN, H. y PEDERSON, S.D.: O inens ions o f E a r l y S t i m u l a t i o n : Oi - f f e r e n t i a l E f f e c t s on I n f a n t Development. H e r r i l l - P a l i e r Q u a r t e r l y . 1972, 18: 205-218.