Embed Size (px)
Citation preview
Bol. San. Veg. Plagas, 20: 251-260, 1994
Seguimiento de las poblaciones de Helicoverpa armigera (Hübner) (Lepidoptera: Noctuidae) en cultivo de tomate
J. ARNÓ, J. ARIÑO, M. MARTÍ Y M. TIÓ
En el cultivo de tomate al aire libre en la zona del Maresme (Barcelona) se aplica un programa de control integrado basado en la conservación de dos depredadores polífagos Dicyphus tamaninii Wagner y Macrolophus caliginosus Wagner. Este programa permite establecer un equilibrio entre las poblaciones de mosca blanca y míridos que se vería perturabado con la aplicación de insecticidas de amplio espectro.
Otra plaga importante del tomate durante el verano es Helicoverpa armígera. A fin de conocer cuando es necesario realizar tratamientos para el control de este lepidópte-ro, en el mismo muestreo utilizado para establecer el balance de mosca blanca y depredadores, se registra el número de huevos y orugas presentes en las siete hojas superiores de la planta. También se mantiene, desde el año 1990, una red de trampas de fero-monas que permiten establecer la curva de vuelo de H. armígera.
En este trabajo se discute el establecimiento de una única curva de vuelo para toda la comarca, así como su posible relación con la abundancia de H. armígera en el cultivo.
J. ARNÓ (i), Y M. MARTÍ.: ADV Baix Maresme. Mercat de Flor i Planta Ornamental de Catalunya. 08340 Vilassar de Mar. Barcelona. (1) Dirección actual: IRTA-Centre de Cabrils. 08348 Cabrils, Barcelona. J. ARIÑO: ADV Alt Maresme. Camí de la Riera, s/n 08398 Sta. Susanna. Barcelona. M. Tió: ADV Frespol. Ctra. de ST. Cebriá. 08395 St. Pol de Mar. Barcelona.
Palabras clave: Helicoverpa armigera, tomate, feromonas
INTRODUCCIÓN
El tomate es uno de los cultivos de mayor importancia económica en la comarca del Maresme (Barcelona). Se cultiva en invernadero desde febrero a principios de julio y al aire libre desde abril hasta octubre, con dos fechas de trasplante, una precoz en abril y una más tardía a finales de junio. La recolección es escalonada, cada 2-3 días, y toda la producción se destina al consumo en fresco.
Desde el año 1989 se aplica en la comarca un programa de control integrado basado en la conservación de depredadores polífagos de la familia de los míridos: Macrolophus caliginosus Wagner y Dicyphus tamaninii Wagner. Con este programa se consigue una
importante reducción en el número de tratamientos realizados con insecticidas de amplio espectro, así como de los daños causados por mosca blanca (ALOMAR et al., 1991). Una de las plagas que dificulta la aplicación de este programa es Helicoverpa armígera (Hübner) u oruga del tomate. Esta especie polífaga tiene como principales plantas huésped el maíz, algodón, tomate, tabaco y otros cultivos hortícolas y ornamentales y se halla distribuida por Europa meridional, Asia, Australia, Nueva Zelanda, Africa y varias islas del Pacífico (FITT 1989). En la comarca causa daños importantes en tomate y clavel.
En tomate, las larvas de los primeros estadios se alimentan sobre las hojas penetrando
posteriormente en el fruto donde prosiguensu ciclo. Pueden necesitar más de un frutopara completar su desarrollo. El objetivo delpresente trabajo es estudiar la dinámica deesta plaga a partir de trampas de feromonasy muéstreos del cultivo, para mejorar sucontrol dentro de los programas de lucha in-tegrada.
MATERIAL Y MÉTODOS
El estudio se llevó a cabo durante los años1990, 1991 y 1992 en la comarca del Mares-me, situada al norte de Barcelona. La pro-ducción agrícola de la zona está constituidapor cultivos hortícolas, flor cortada y orna-mentales. Todas las explotaciones en que seubicaron las trampas y los campos que fue-ron controlados pertenecían a agricultoresde las Agrupaciones de Defensa Vegetal(ADV) del Alt Maresme, Frespol y BaixMaresme.
Curvas de vuelo
El seguimiento de adultos de H. armíge-ra se realizó mediante trampas de feromo-nas tipo embudo (International Pheromo-nes Dry Funnel Trap) con DDVP (Diclor-vos) como agente insecticida. Se utilizaroncápsulas de feromonas fabricadas por Bio-logical Control Systems, Ltd., Grupo Agri-sense, que se renovaban mensualmente.Esta combinación de trampa y feromonafue ensayada por IZQUIERDO et al. (1992)con buenos resultados. El control de lastrampas se realizaba semanalmente, reti-rándose los individuos capturados. En 1990se instalaron 23 trampas, 21 en 1991 y 6 en1992, repartidas a lo largo de la comarca,que permanecieron en el campo desde prin-cipios de abril hasta mediados de noviem-bre. Las trampas más alejadas distaban,entre ellas, unos 50 km. En 1990, 17 tram-pas se situaron en los márgenes de parcelasde tomate temprano y seis se situaron enparcelas de otros cultivos hortícolas, col-
gadas de un trípode de cañas. En 1991 y1992, se mantuvieron en el mismo empla-zamiento que el año anterior sujetas a unsoporte metálico. Todas las trampas estabansituadas a una altura aproximada de 1,6 mdel suelo.
Muéstreos del cultivo
El seguimiento de H. armígera en laplanta se realizó a la vez que los muéstreosque se hacían para aplicar el programa decontrol integrado. Se estudiaron campos detodos los ciclos de cultivo de tomate al airelibre. El muestreo de mosca blanca-míridosera secuencial observándose las siete hojassuperiores de cada planta, de un número va-riable de plantas por campo en función delequilibrio plaga-depredadores. Esta parte dela planta muestreada incluye la preferidapor Helicoverpa sp. para realizar la puesta(ALVARADO et al, 1982 y SAOUR y CAUSE
1993). De cada planta muestreada se anota-ba el número de huevos y larvas del noctui-do hallados. El número de campos fue de22 en 1990, 56 en 1991 y 42 en 1992. Elnúmero de plantas por campo fue variable(entre 6 y 40). La periodicidad del muestreofue mayoritariamente semanal, aunque oca-sionalmente se dispone únicamente de datosquincenales.
Cálculo de los grados día
Para el cálculo de los grados día (°D), sehan utilizado los registros de la EstaciónMeteorológica del IRTA-Centre de Cabrils(244-E de la red del Instituto Nacional deMeteorología). Los grados día (°D) han sidocalculados de acuerdo con la fórmula de lasinusoidal (ALLEN 1976) considerandocomo umbral inferior de desarrollo 11° C ycomo umbral superior de desarrollo 38° C(TWINE 1978).
Los datos referentes a precipitaciones queaparecen en este trabajo proceden de lamisma estación.
Análisis estadístico
Para comparar las capturas de cada tram-pa con la curva de vuelo teórica, obtenida apartir de la media de las capturas de todaslas trampas, se ha utilizado la prueba Ji-cua-drado (x2). Las capturas correspondientes acada semana se han expresado como el por-centaje sobre el total de individuos captura-dos por cada trampa a lo largo de la campa-ña. Las trampas se controlaron durante 36semanas, y por lo tanto la prueba de %2 seaplica con 35 g.l.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Durante los años 1990 y 1991, los valoresabsolutos de las capturas correspondientes alas diferentes trampas fueron muy disparesentre sí, sin embargo, las curvas de vuelo
obtenidas a partir de los valores porcentua-les mostraron una gran similitud.
En 1990, las %2 obtenidas al comparar lascapturas de cada trampa a la curva teórica sepresentan en el Cuadro 1. Al aplicar la prue-ba de x2 con 35 g.l. y a = 0,05 se obtiene unvalor de 49,8. Como puede observarse, 10trampas se comportaron de forma distinta ala teórica (valores de %2 superiores a 49,8).
No todas estas 10 trampas estuvieron ale-jadas de campos de tomate durante toda lacampaña. Aunque GREGG y WlLSON (1991)indican que las capturas de una trampa pue-den estar sesgadas por la proximidad de uncultivo atractivo, este condicionante no pa-reció aplicable a la situación de nuestra co-marca. Las explotaciones del Maresme ocu-pan, por término medio, una superficie deunas 4 ha y la producción se halla muy frac-cionada. Durante la campaña en cada explo-tación pueden coexistir varias parcelas pe-
Cuadro 1 .-Valores de %2 obtenidos al comparar las capturas de cada trampa con las de la teóricade cada campaña. Las trampas que difieren de la teórica (35 g.l., a = 0,05) se señalan con *
quenas de tomate (2.000 m2 aproximada-mente) con fenologías diferentes, y por lotanto sería poco operativo situar una trampajunto a cada parcela. HARTSTACK y WlTZ(1981) determinaron el radio efectivo deuna trampa de feromona para Heliothis vi-rescens, obteniendo valores de entre 60 y160 m dependiendo de la época del año. Sien nuestra zona se colocara una trampa encada parcela de tomate, muchas áreas deinfluencia de las diferentes trampas se so-laparían.
Dado que en nuestras condiciones la feno-logía no podía ser un factor determinante enla colocación de las trampas y que la infor-mación que nos proporcionaban no parecíaestar tan ligada al cultivo inmediato, se optópor repetir el emplazamiento de las mismasen 1991. Durante este segundo año, sólo dostrampas no se ajustaron a la curva de vueloteórica (Cuadro 1). También en esta campa-ña algunas trampas estaban cerca de camposde tomate y otras no, confirmando la hipóte-sis de la campaña anterior de que las tram-pas proporcionaban información generalsobre la abundancia de H. armígera. Comoconsecuencia, en 1992 se decidió reducir elnúmero de trampas a seis, escogidas entrelas que se ajustaron a la teórica en 1991, deacuerdo a la prueba de %2. Como puede ob-servarse en el Cuadro 1, en 1992, estas seistrampas siguieron el modelo de la teóricapara la comarca.
Los recuentos de larvas sobre plantas pro-porcionaron datos muy erráticos debido pro-bablemente a la distorsión producida por lostratamientos con Bacillus thuringiensis, pi-retrinas o bien a la acción de los depredado-res. Por esta razón estos datos no se presen-tan en este trabajo.
En la Figura 1 se representan las capturasmedias obtenidas los años 1990, 1991 y1992. Se observa que las capturas se inicia-ron en abril y mayo. En los meses de mayo-junio se registró el primer máximo de adul-tos de H. armígera, que corresponde, segúnlos datos obtenidos por GABARRA (1990a)en esta misma zona, a los adultos emergidosde las crisálidas diapausantes. En Granada,
CABELLO y SALMERÓN (1989), registraronun primer vuelo en enero y febrero única-mente con trampas de luz, y un segundovuelo a finales de abril - principios de mayodetectado con trampas de feromonas. El se-gundo vuelo, en nuestra zona, se observó lasegunda quincena de julio, de forma muyclara los dos primeros años y menos defini-damente durante 1992. GABARRA (1990b)también registró un vuelo a mediados dejulio, mientras que CABELLO y SALMERÓN
(1989) lo hacen en junio-julio en Granada.El tercer vuelo, que detectaron las trampasde feromonas colocadas en el Maresme, fueobservado entre septiembre y octubre. Estasfechas coinciden con las del último vuelo de-tectado por GABARRA (1990b) en la mismazona y CABELLO y SALMERÓN en Granada.En octubre-noviembre el 100 % de las pupasentran en diapausa (GABARRA 1990a).
En la Figura 2 se representan las curvasde abundancia de huevos a lo largo de lastres campañas obtenidas al considerar todoslos campos muestreados en conjunto. Se ob-servó un máximo de puesta a finales dejunio y primera quincena de julio. Estaépoca coincide con el final del cultivo de to-mate en invernadero, en que algunos añoshemos observado ataques de H. armígera.Durante este período el tomate al aire libretemprano está en el máximo de floración (3o
a 5o ramillete en flor) y por lo tanto en unestado fenológico atractivo para la plaga.NYAMBO (1988) y FIREMPONG y ZALUCKI
(1990) observaron una clara preferencia deH. armígera por las plantas en flor para rea-lizar la puesta. ZALOM et al. (1983) obtuvie-ron resultados similares con H. zea sobre to-mate. El segundo máximo de huevos, quesuele ser el más importante, se observó laprimera quincena de agosto. TambiénRODRÍGUEZ et al. (1990) encontraron, en to-mate, el máximo de ovoposición de toda lacampaña a finales de julio y finales de agos-to. A partir de esta fecha la puesta sobre to-mate va decreciendo y la del tercer vuelo deH. armígera se realiza mayoritariamentesobre otros cultivos, como por ejemplo cla-vel, que entra entonces en la fase de flora-
Fig. 1.-Capturas de adultos de H. armígera, mediante trampas de feromonas, durante 1990, 1991 y 1992en la comarca del Maresme.
Fig. 2.-Abundancia de huevos de H. armígera sobre tomate durante 1990, 1991 y 1992 en la comarca del Maresme.Las flechas con línea continua indican la primera semana en que se disponen de datos; las flechas con línea discontinua
indican la última semana en que se realizaron seguimientos de campo.
Fig. 3.-Representación de los máximos de adultos capturados con trampas de feromonas y puesta sobre tomatedurante 1990, 1991 y 1992. Se representan también, los °D calculados entre estos máximos.
ción. GABARRA (1990a) encontró capturasmuy superiores sobre clavel que sobre toma-te durante el mes de octubre en el Maresme.
En la Figura 3 se representa, mediante ungráfico de puntos, los máximos de capturas ypuesta durante los tres años en que se ha rea-lizado el estudio. En 1990 se observa que elprimer máximo de huevos registrado coinci-de en el tiempo con el segundo vuelo detec-tado por las trampas de feromonas. El segun-do máximo de puesta no tiene reflejo en lascapturas. En 1991, se observa concordancia(una semana de desplazamiento) entre el pri-mer máximo de huevos y el primer vuelo deH. armígera. En 1992, la situación durantelos meses de junio y julio es bastante distintaa los otros dos años, las capturas son nota-blemente menores y parecen bastante erráti-cas, lo mismo que la puesta. En la semana32 en 1990 y 1991 se encontró una puestamuy elevada pero no se observaron máximosde capturas, ni esta semana ni la anterior nila posterior. GABARRA (1990a, 1990b) tam-poco indica máximos poblacionales de adul-
tos en este período los años 1985, 1987 y1988. El último vuelo detectado con las fero-monas en septiembre-octubre no tiene refle-jo en la puesta localizada sobre tomate, debi-do probablemente al poco atractivo del culti-vo que entra en senescencia.
En la Figura 3 aparecen los °D entre losmáximos de las curvas de vuelo y oviposi-ción. Según (TWINE 1978) H. armígera pre-cisa 475° D para completar su ciclo vitaldesde la eclosión del huevo a la emergenciadel adulto tomando como umbral inferiorde desarrollo 11° C. KAY (1981) estableceuna duración del huevo de 43,3° D, consi-derando un umbral inferior de desarrollo de11,7° C. Por lo tanto es necesario acumularalrededor de 520° D para completar elciclo completo. En la Figura 3 se observaque en el año 1991 entre las semanas 30 y40 debería localizarse otro vuelo de H. ar-mígera ya que los °D acumulados son muysuperiores a los 520° D teóricos. Aunquese carece de los datos de temperaturas delaño 1990, la similitud de la curva de vuelo
de este año con la de 1991 parece indicarque también ese año faltaría detectar unvuelo a mediados de agosto. A tenor deestos resultados las trampas de feromonas,en este período, no son buenas indicadorasde las poblaciones de H. armígera existen-tes. GABARRA (1990a, 1990b) obtuvo re-sultados parecidos utilizando feromonassuministradas por INRA-Brouessy y dife-rentes tipos de trampa por lo que ni la for-mulación de la feromona sintética ni eltipo de trampa parecen ser el motivo deeste comportamiento. Tampoco los cam-bios de las cápsulas de feromonas coinci-den con los registros más bajos de captu-ras. La causa podría ser las temperaturas obien la competencia que producen lashembras presentes tal como sugierenHARTSTACK y WlTZ (1981) que encontra-ron una disminución de los radios efecti-vos de actividad de la trampa durante losmeses más calurosos. Según los mismosautores, la competencia de las hembrasproduce una reducción en la efectividad dela trampa. Por lo que respecta al año 1992,y atendiendo a los °D, parece que se detec-tan los tres vuelos existentes. Hay que se-ñalar que en este año y en la semana 32coinciden el máximo de capturas y el má-ximo de puesta (Figura 3). En 1992 losmeses de junio y julio fueron muy húme-dos si se comparan con la media del perío-do 1981-1991. La cantidad de lluvia fuesiete veces superior a la media en junio ytres veces superior en julio. La climatolo-gía tal vez podría explicar la diferentecurva de vuelo que se produce este añorespecto a los dos anteriores.
A partir del estudio de los °D acumuladosentre los diferentes máximos de ovoposi-ción (Figura 3), se observa que dentro decada campaña entre los dos máximos depuesta registrados se mantiene la duraciónde un ciclo completo: 510° D (1991) y441° D (1992). Si calculamos el número de°D acumulados entre el primer vuelo y elprimer máximo de puesta se obtiene 75° Den 1991 y 121° D en 1992, claramente infe-riores a los aproximadamente 520° D re-
queridos. Al descontar entre 450 y 500° D apartir del primer máximo de puesta halladoen cada campaña, encontramos que el ante-rior debía haberse producido en octubre, yque correspondería a la generación que en-traría en diapausa.
CONCLUSIONES
Todas las trampas colocadas en la comar-ca respondieron de una forma muy parecidae indicaron la existencia de una única curvade vuelo para la zona.
H. armígera presenta habitualmente en lazona cuatro vuelos. El primero se produceentre mayo y junio y parece corresponder alos adultos salidos de las crisálidas inver-nantes. El segundo se produce durante elmes de julio. El tercero, que en ocasiones nose registra en las trampas de feromonas,debe producirse durante el mes de agosto.Este vuelo puede determinarse a partir de laduración del ciclo de H. armígera en °D obien por el aumento de la puesta sobre to-mate. El cuarto se produce durante septiem-bre y octubre y es el que da lugar a la gene-ración que entra en diapausa entre los mesesde octubre y noviembre.
Entre máximos de puesta dentro de cadacampaña se mantiene el número de °D paracompletar el ciclo. Esto no sucede entre elprimer vuelo y el primer máximo de ovopo-sición. Probablemente esta falta de sincro-nismo se debe a un escalonamiento en laemergencia de los adultos procedentes delas crisálidas diapausantes.
En nuestra situación las trampas puedenser utilizadas como indicadores de la abun-dancia de H. armígera en la zona y por lotanto para determinar los períodos de máxi-mo peligro, excepto en el mes de agosto.En esta época se observan niveles elevadosde puesta mientras que las capturas entrampas de feromonas no indican la exis-tencia de un vuelo. Sería necesario estudiosmás precisos para determinar las razonesde este comportamiento errático de las fe-romonas.
AGRADECIMIENTOS
Queremos agradecer a la Dra. Gabarra(IRTA-Centre de Cabrils) su colaboraciónen la discusión de los resultados y su revi-sión del texto. Nuestro agradecimiento al Sr.J. Izquierdo (Escola Superior d'Agricultura
de Barcelona) por las ideas aportadas pararealizar este estudio, y al Departamento deTecnología Hortícola del IRTA por suminis-trarnos los datos meteorológicos. Gracias,también, a los agricultores de las ADV AltMaresme, Frespol y Baix Maresme por sucolaboración.
ABSTRACT
ARNÓ, J., ARIÑO, J., MARTÍ, M. y Tío, M., 1994: Seguimiento de las poblaciones deHelicoverpa armígera (Hübner) (Lepidoptera: Noctuidae) en cultivo de tomate. Bol.San. Veg. Plagas, 20(1): 251-260.
In the area of Maresme an Integrated Pest Management program is being used foroutdoor tomato crops. This program is based on the conservation of two native polypha-gous predators Dicyphus tamaninii Wagner and Macrolophus caliginosus Wagner. Tokeep the balance between whitefly and mirid bug populations no broad spectrum insecti-cides are allowed.
Helicoverpa armígera is an important pest for the tomato crop during the summer.To know when it is necessary to spray to control it, the number of eggs and larvae pre-sents in the seven top leaves are recorded when sampling for the whitefly and miridbug populations. Since 1990, a pheromone trap network was set for monitoring seaso-nal fly patterns.
In this study, the establishment of a seasonal fly pattern for the area and its relationwith the abundance of H. armígera populations are discussed.
Key words: Helicoverpa armígera, tomato, pheromone traps
REFERENCIAS
ALLEN, J. C , 1976: A modified sine wave method forcalculating degree days. Environ. Entomoi, 5: 388-396.
ALOMAR, O., CASTAÑÉ, C , GABARRA, R., ARNÓ, J.,
ARIÑO, J. y ALBAJES, R., 1991: Conservation of nati-ve mirid bugs for biological control in protected andoutdoor tomato crops. Bull. WPRS/SROP, XIV/5:33-42.
ALVARADO-RODRÍGUEZ, B., LEIGH, T. F. y LANGE, W.
H., 1982: Oviposition site preference by the tomatofruitworm (Lepidoptera: Noctuidae) on tomato, withnotes on plant phenology. J. Econ. Entomoi, 75:895-898.
CABELLO, T. y SALMERÓN, T., 1989: Estudios mediantetrampas de feromonas sexuales y de luz de las feno-logías de tres especies de noctuidos plagas (Lep.:Noctuidae) en el Sureste de España. Bol. San. Veg.Plagas, 15: 225-232
FIREMPONG, S. y ZALUCKI, M. P., 1990: Host plant se-lection by Helicoverpa armigera (Hübner) (Lepidop-tera: Noctuidae); role of certain plant attributes.Aust. J. Zooi, 37: 675-683.
FITT, G. P., 1989: The ecology of Heliothis species inrelation to agroecosystems. Ann. Rev. Entomoi, 34:17-52.
GABARRA, R., 1990a: Evaluation of the methods for theprognosis of Heliothis armigera populations. Bull.WPRS/SROP, XIII/3: 93-99.
GABARRA, R., 1990b: Report on the catches of Heliot-his armigera, Agrotis Ípsilon, and Agrotis segetumin pheromone traps in Catalonia (Spain) within theframework of the OILB network. Bull. WPRS/SROP,XIII/3: 22-26.
GREGG, P. C. y WILSON, A. G. L., 1991: Trapping met-
hods for adults, pp. 30-48. In: Myron P. Zalucki(eds), Heliothis: Research Methods and Prospects.Springer-Verlag, New York.
HARTSTACK, A. W. y WITZ, J. A., 1981: Estimating
field populations of tobacco budworm moths frompheromone trap catches. Environ. Entomoi., 10: 908-914.
IZQUIERDO, J., SAMPOL, K. y SORRIBAS, X., 1992: Com-
paración de cápsulas de feromona atrayente sexualde Heliothis (Helicoverpa) armigera (Hübner) (Le-pidoptera: Noctuidae). Bol. San. Veg. Plagas, 18:427-434.
KAY, I. R., 1981: The effect of constant temperatureson the development time of eggs of Heliotis armige-ra (Hübner) (Lepidoptera: Noctuidae). J. Aust, entSoc, 20: 155-156.
NYAMBO, B. T., 1988: Significance of host-plant phe-nology in the dynamics and pest incidence of thecotton bollworm, Heliothis armígera Hübner (Lepi-doptera: Noctuidae), in Western Tanzania. CropProtection, 7: 161-167.
RODRÍGUEZ BERNABÉ, J. A., ARIAS GIRALDA, A.,GARCÍA CANCELLÓN, F., CHACÓN ORTEGA, A. yAL VEZ GÓMEZ, C , 1990: Observation sur Heliothisarmígera Hb. en cultures de tomates dans les«Vegas del Guadiana», Badajoz (Espagne). Bull.WPRS/SROP, XIII/3: 109-113.
SAOUR, G. Y CAUSSE, R., 1993 : Comportement deponte d'Heliothis armígera Hübner (Lep., Noctui-dae) sur tomate. J. Appl. Ent., 115: 203-209.
TWINE, P. H., 1978: Effect of temperature on the deve-lopment of larvae and pupae of the corn earworm,Heliothis armígera (Hübner) (Lepidoptera: Noctui-dae). Queensland Journal of Agricultural and Ani-mal Sciences, 35 (1): 23-28.
ZALOM, F. G., WILSON, L. T. y SMITH, R., 1983: Ovipo-sition patterns by several Lepidopterous pests onprocessing tomatoes in California. Environ. Ento-mol., 12: 1.133-1.137.
