República ¿sí o no?

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  • 8/7/2019 Repblica s o no?

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    e s p a a s

    46/ElViejo Topo

    quieres callarte (Creative Commons)

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    e s p a a s

    ElViejo Topo/ 47

    Qu modelo de sociedad, qu forma de gobiern o.Cu a t ro pre-cisiones pre v i a s .

    Pri m e ra, con respecto al tipo de sociedad, a la forma deg o b i e rno y a otros asuntos de carcter colectivo, al igual que elpoeta, siempre respetar las decisiones del pueblo, definidoste como los no pro p i e t a rios y los sin poder.Segunda, al ser la sociedad capitalista la que deseo tra n s-

    f o rm a r, la nocin de clase es muy importante para entender lan a t u ra l eza del capitalismo y los antagonismos que genera, ascomo el papel que ha de jugar en su tra n s f o rm a c i n .Te rc e ra, continuar manteniendo el compromiso anticapi-

    talista en la medida de mi saber, de mis fuerzas y dentro de los

    cauces que estime ticos. Cu a rta, explicar desde el comienzo qu entiendo por

    repblica y por sociedad. Pa ra mi, la repblica es una forma deg o b i e r n o que los ciudadanos adoptan para relacionarse polti-camente entre ellos en aquellos asuntos y reas colectivas de lasociedad, mientras que la sociedad es el modelo general de con -v i ve n c i a que adoptan los ciudadanos para relacionarse entree l l o s, a travs de la forma de gobierno y otras instancias, enaquellos aspectos relacionados con los mbitos pri vado y p-b l i c o, y, en ambos, con el bienestar general de todos y cada unode ellos

    Pe ro una cosa es la utopa y otra las realidades histri c a s. Lah i s t o ria de la humanidad nos informa de los mltiples y va ri a-dos tipos de sociedad, as como de las formas de gobierno quese han ensayado en las mismas. Hoy es del dominio pblicoque una repblica capitalista no difiere sustancialmente deuna m o n a rqua o de otra clase de dictadura capitalista: el siste-ma capitalista ha aprendido a explotar a las personas y a es-quilmar los recursos naturales con todas las formas de gobier-no imaginables.

    Mi planteamiento consiste en que un debate sobre la re p -blica es indispensable, pero que ha de tener en cuenta no slola forma de gobierno, sino tanto o ms el modelo de sociedade n

    el que se quiere vivir. Esto re q u i e re que hagamos un esfuerzopor precisar el tipo de sociedad que mejor responde a las exi-gencias de mantener el bienestar general, porque la forma dego b i e rn o, posiblemente la republicana, se ajustar debida-mente a ella. Pe r s o n a l m e n t e, considero que slo en una s o c i e -d a dsin propiedad pri vada, sin clases, de ciudadanos iguales,con gestin hori zontal, donde ha de ser la voluntad del puebloquin decide autogestionar los recursos comunes disponiblesde acuerdo con las necesidades comunes expresadas por elmismo pueblo, donde el gobierno no re p resentar la vo l u n t a ddel pueblo, sino que estar compuesto y formado por la misma

    Repblica, s o no?Sobre las sociedades y las formasde gobierno

    por Jos Iglesias Fernndez

    epblica, s. Pero no cualquier repblica. No se trata slo de sustituir la cabeza de alguien favorecido porla gracia de Dios por la de quien ha sido favorecido con la gracia del pueblo. La repblica es muchoms que eso. As se postula en este artculo, versin extractada del ms amplio que puede consultarse

    en www.elviejotopo.com, seccin Otros Textos.R

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    voluntad del pueblo, entonces, y slo entonces, puede existir

    una forma de gobierno genuinamente re p u b l i c a n a.

    El modelo de sociedad

    Cualquier unidad de convivencia humana, sea esta la fami-lia, la comuna, la colonia, la comunidad, las aldeas, los pueblosy las ciudades, o la sociedad como una agregacin de todas s-t a s, se congrega y organiza para un fin supremo colectivo: las o b re v i vencia de todos y cada uno de sus miembro s, la org a n i-zacin social donde el hombre puede desarrollar el bien su-p re m o, su vida moral e intelectual. Veamos que nos indicandos de los filsofos ms importantes que ha habido en el mun-d o, Platn y Ma rx, cmo argumentaban esta afirmacin, cada

    uno a partir del desarrollo de su propia interpretacin o para-d i g m a :

    Pl a t nEn su famoso ensayo La re p b l i c a,1 Platn avanza las lneas

    que definen s u modelo de sociedad, pero que sugieren ele-mentos a re f l e x i o n a r, especialmente en su definicin, a lah o ra de pensar en altern a t i vas a la sociedad capitalista. Pa raPlatn, la justicia no es slo una parte de la virtud de losh u m a n o s. Tambin formaba parte de esa aptitud por la cuallos hombres son capaces de mantener relaciones polticase n t re ellos y formar s o c i e d a d e s.2 Y aade lo que puede ser lo

    ms important e a destacar, y es que para que las s o c i e d a d e ssean posibles, cada ciudadano ha de ser capaz de mostra rrespeto por los otros ciudadanos, y por no apropiarse de todoaquello que el otro necesita para su desarrollo personal, dea c u e rdo con su habilidad y capacidad fsica para hacerlo.3 E sd e c i r, para que una sociedad se forme y sea justa, cada ciuda-dano ha de frenar su mpetu por apropiarse de todos aquellosbienes materiales que necesita para hacer todo aquello quepuede con su deseo y habilidad, si estas acciones impiden olimitan las posibilidades de otro ciudadano que desea, por elmismo dere c h o, desarrollar su ha-bilidad y su deseo. Es decir, lo justo

    consiste en que cada ciudadano hade dejar los suficientes medios ma-t e riales y el suficiente espacio pol-tico para que todos los miembro sde la sociedad puedan re l a c i o n a r s ee n t re ellos como iguales. As mis-m o, cada ciudadano ha de disponer de los medios suficientesp a ra vivir sin necesidad de apropiarse de lo ajeno; ha de dis-poner de la libertad de poder aplicar su conocimiento, ascomo los instrumentos y los materiales de tra b a j o. Este re s-peto por lo de cada uno, y por lo de los dems, es lo que hace

    que el gnero humano sea bueno y sea social.

    Pa ra completar su visin de sociedad, Platn da mayor im-p o rtancia a los intereses comunitarios que a los individuales.As como sostiene que el Estado utpico ha de ser comunista e ntodos los sentidos, especialmente aplicar un frreo c o m u-nismo de bienes a los filsofos y los guardianes por ser los queg o b i e rnan [] En t re ellos no habr propiedad pri vada. Na d aser suyo, para que no deseen amasar las ri q u ezas que son lasque corro m p e n.4

    Ma r xCo n t ra rio a las deducciones de Platn, Ma rx establece que

    hemos de mirar al n i vel de desarrollo de los poderes materi a-

    les de produccin y de sus relaciones correspondientes porq u eson los que determinan el carcter de los distintos tipos des o c i e d a d. En el Pre f a c i o de 1859 designa los modos de pro d u c-cin asitico, esclavista, feudal, y de la burguesa moderna co-mo pocas pro g re s i vas en la formacin econmica de la socie-dad. La transicin de un tipo de sociedad a otro tiene lugarcuando las fuerzas materiales de produccin entran en con-flicto con las relaciones reales de produccin, y esta re l a c i nantagnica adopta la forma de conflicto de clases.5 De estep roceso destaca tres caractersticas del concepto de sociedad:

    La pri m e ra nota caracterstica empieza por la idea de que

    los seres humanos viven en sociedad y ello no implica unaanttesis entre individuo y sociedad, pues puede supera r s esuponiendo cierta especie de contrato social, o, altern a t i va-m e n t e, considerando a sta como un fenmeno supra i n d i v i-dual. As dice an cuando re a l i zo un trabajo c i e n t f i c o, efectoun acto s o c i a l, porque es h u m a n o. No slo se me da como pro-ducto social el material de mi actividad, como el idiomamismo que utiliza el pensador. Mi propia existencia es una ac-tividad social. Contina diciendo que debemos evitar la pos-tulacin de la sociedad como una abstraccin frente a lo indi-

    vidual, p o rque el individuo es unser social.

    La segunda caracterstica de laconcepcin de la sociedad huma-na por parte de Ma rx es que noexiste separacin entre la sociedady la natura l eza; por el contra ri o, a

    los seres humanos se les trata como parte del mundo natura lque es la base real de todas sus actividades. La produccin y lare p roduccin de la vida material mediante el trabajo y la pro -

    c reacin es una relacin natural y social. En este sentido, laconcepcin de Ma rx difiere profundamente de la que ha pre-

    e s p a a s

    Po s i c i o n a rnos como a n t i c a p i t a l i s t a ssupone que asumimos la premisa de quehay altern a t i va s al capitalismo, de que la

    t ra n s f o rmacin social es posible.

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    valecido en gran part e

    de la sociologa, en laque la sociedad ha sidomuchas veces conside-rada como un fenme-no autnomo e ignora-da su relacin con elmundo material, con laconsecuencia de que elestudio de los pro c e s o sy relaciones econmi-c as6 ha quedado am-pliamente excluido y

    consignado a la esferade una ciencia socials e p a rada y especiali-z a d a.

    La concepcin ge-n e ral de Ma rx tie neuna terc e ra cara c t e r s-tica distintiva que lav i n c u la a su nocin detipos de sociedad, estoe s, en ellos se estudia la

    relacin entre sociedad y natura l eza como un intercambio quese desarrolla histricamente a travs del trabajo humano quec rea y tra s f o rma al mismo tiempo las relaciones sociales entrelos seres humanos. Este proceso histrico (materialismo hist-rico) tiene dos aspectos: uno es el desarrollo de las fuerzas pro-d u c t i vas (o pro g reso tecnolgico), y el otro es la cambiante di-visin social del trabajo que constituye las relaciones socialesde produccin (fuerzas y relaciones de produccin) y, sobret o d o, las relaciones de clase.

    C a ractersticas mnimas de una sociedad utpicaPo s i c i o n a rnos como anticapitalistas supone que asumimos

    la premisa de que hay altern a t i vas al capitalismo, de que lat ra n s f o rmacin social es posible. Ad e m s, a la hora de disearuna altern a t i va, este posicionamiento parte de comenzar a mi-rar en dos direcciones de forma sencilla. Un ade ellas se basaen el anlisis de la propia lgica del capitalismo y evita incluirlas mismas caractersticas que lo determinan en el diseo de laa l t e rn a t i va, en los pro c e s o s, los sujetos y los instrumentos paraconseguirla. La o t raconsiste en buscar entre las diversas uto-pas que han diseado otros pensadore s, objetivo s, polticas,m e d i d a s, y reflexiones entre sus modelos de sociedad. De s d ePlatn a We l l s, pasando por Mo ro, Campanella, Bacon, Ha-

    r ringhton, Fnelon, Mo re l l y, Babeuf, Fo u ri e r, Owen, Sa i n t - Si-mon, Cabet, Ha w t h o rn e, Bu t l e r, Bellamy y Mo r ri s, en todosellos podemos encontrar mltiples enseanzas para nuestrod i s e o.

    Cuando nos manifestamos anticapitalistas, qu tipo de so-ciedad tenemos en la mente como re f e rencia? Ut o p a, o en nin-gn lugar, ser el de nuestra pre f e rencia. Un trmino que T h o-mas Mo re (1516), canciller del rey ingls En rique VIII, acup a ra definir su propuesta. Modificando ligeramente la descri p-cin que hace de la utopa este pensador, comenzara por defi-nir como a l t e rn a t i v a aquella propuesta social que supone o t romodelo de organizacin social: es decir, aquella que exprese l a

    idea de construir una sociedad perfecta en un lugar que, en al -gn momento del transcurrir de la historia, sea posible. Am-pliando la definicin, una altern a t i va es un modelo utpico desociedad que va contra, y es capaz de, desintegrar el sistemacapitalista; nueva m e n t e, una utopa es un modelo cuya natu-ra l eza deja sin lugar a dudas que no desarrolla las perve r s i d a-des de los sistemas de produccin, de consumo, de distri b u-cin, de poder, de propiedad, y de va l o res del capitalismo. Un autopa, en el corto plazo, tambin es un plan de accin necesa-rio para luchar contra el capitalismo. Ahora bien, las altern a t i-vas han de demostrar que su esencia est en contra y no com-

    e s p a a s

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    Jaume DUrgell (Creative Commons)

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    puesta (o ser confundida) con medidas paliativa sp a ra aliviarlas desigualdades y las injusticias que engendra la exigencia dea p ropiacin del propio capitalismo. Deben tener como finali-dad la igualdad y la justicia y no la c a r i d a d.

    Pe ro cules seran las caractersticas mnimas para estable-cer la sociedad utpica?

    Pri m e ro, destaquemos qu elementos pensamos que se han

    de re c h a z a r. La sociedad utpica hacia la que encauzar los di-versos posibles p rocesos de tra n s f o r m a c i n ha de declara r s eanticapitalista, anticlasista, antisexista y antimilitarista. Losposibles sujetos sociales activo shan de establecer desde un co-m i e n zo del proceso mbitos de autonoma colectiva como em-b riones en los cuales se ha de vivir el aspecto que sealabaMa rx: la relacin entre sociedad y natura l eza como interc a m-bio que se desarrolla histricamente a travs del trabajo huma-no que crea y tra s f o rma al mismo tiempo las relaciones socia-les entre los seres humanos. Estos sujetos y mbitos genera r nlos conflictos de clase dentro del capitalismo.

    Se g u n d o, una manera de establecer las caractersticas mni-mas nos las da el examen de la natura l eza del propio capitalis-m o. Es decir, pensamos que toda sociedad utpica que se pien-se o se haya soado como una altern a t i va, ha de contener unasc a ractersticas que se opongan pragmtica y radicalmente a lasdel capitalismo. Por ejemplo, la pro p i e d a dde la ri q u eza (y delos medios de produccin) no ha de ser pri vada sino colectiva ;la pro d u c c i n no ha de ser para el intercambio en el merc a d o,sino muchos ciudadanos quedaran excluidos de los pro d u c t o sque satisfacen las necesidades materiales; la toma de decisio -n e ss o b re la utilizacin de los recursos (materiales y humanos)ha de ser establecida colectivamente por los ciudadanos, o sino la dictarn los grupos de poder en su beneficio part i c u l a r;e l

    conjunto de va l o re s , afectos e institucionesque regulen la basem a t e rial de la sociedad ha de estar pensado de forma que pri-me la importancia del bien comn, o si no dar la pre f e re n c i aal bien pri va d o, al egosmo individual: Bakunin deca que la li-b e rtad de los individuos no es un hecho individual, es un he-cho colectivo, un producto colectivo; y Ma rx deca lo mismo,el hombre es, en el sentido ms literal, un zoon politikon, nosolamente un animal social, sino un animal que slo puedeindividualizarse en sociedad.

    Repetimos este aspecto tan import a n t e. Pa ra ve rificar hastadnde cualquier altern a t i va ,7 o modelo de organizacin socialque se proponga va c o n t ra el capitalismo, podemos va l e rnos de

    un cri t e rio esencial que sirva de unidad de medida:

    Que su sistema de p ro p i e d a d sea colectivo, no pri va d o.Eliminada la propiedad pri vada de los recursos pro d u c t i vos yn a t u ra l e s, el p o d e r que ejercan los pro p i e t a rios y el poder delEstado de clase que protega los intereses de los capitalistas sed e s va n e c e. Esta exigencia sobre la propiedad, y sus consecuen-cias sobre el poder, permiten re c o n s t ruir el resto de los demss e c t o res de la vida comunal:

    Que su sistema de p ro d u c c i n est en rgimen comunita-rio; que no explote al hombre ni despilfarre re c u r s o s.

    Que su sistema ded i s t r i b u c i n sea equitativo; libre accesoa los bienes que satisfacen las necesidades bsicas.

    Que la gestin del p o d e r sea hori zontal; no jerrquica nidesptica. A debatir la forma de gobiern o, de re p b l i c a .

    Que su sistema de va l o res y afectosp roponga y potencie elbien comn: justicia, igualdad, fra t e rn i d a d .

    Y qu haya un respeto por la intimidad de la res priva d adel ciudadano.

    Toda esta tra n s f o rmacin podramos redefinirla como eld e s a r rollo de las fuerzas pro d u c t i va s, las fuerzas sociales y pol-

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    quieres callarte (Creative Commons)

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    ticas que se concentran en el zoon politikon mencionado porMa rx .

    Resumen sobre la sociedad utpicaEl hombre es un ser p o l t i c o por natura l eza, y un ser s o c i a l

    por existencia.L o j u s t o consiste en que cada ciudadano consienta en com-

    p a rtir los medios materiales y el espacio poltico de forma co-l e c t i va, para que todos los miembros de la sociedad puedanrelacionarse entre ellos como iguales.

    La sociedad ha de dar mayor importancia a los i n t e reses co -m u n i t a r i o s que a los individuales. La sociedad no es virt u o s asino cuando todos los ciudadanos toman parte como iguales

    en la vida de la sociedad. Por tanto, aadimos que el Es t a d ou t p i c o, de ser necesario, ha de ser comunista en todos los sen-t i d o s, aplicando un frreo comunismo de bienes a todos losciudadanos y ciudadanas. En t re ellos no habr propiedad pri-vada del conocimiento, de los recursos ni de los medios pro-d u c t i vo s. Nada de lo que sea considerado ri q u eza pro d u c t i vaser de nadie, para que a ninguno se le ocurra amasar las ri q u e-zas que son las que corrompen a los individuos. La sola men-cin del Es t a d o nos lleva a establecer que papel le asignamosen el proceso de cambio (Estado s, no, o muy poco); tambinal concepto de p o d e r, en el sentido de que, si el poder corro m-p e, no nos corromper a los que lo alcanzamos? Ha de quedar

    c l a ro cmo nos situamos en relacin con el poder del Estado, ycon los poderes que controlan al Estado.8

    El p roceso de tra n s f o r m a c i n a una sociedad sin clases, ha dea p oyarse esencialmente en los antagonismos innatos del capi-t a l i s m o, aparte de los que genera cada lgica de acumulacindel propio sistema.

    La forma de gobiern o

    Una vez establecidos los fundamentos mnimosdel modelode sociedad, el resto del diseo permanece abierto a debate. Loque s ya podemos avanzar es hacia eldiseo y debate de la forma de gobier-

    n o.

    Thomas Mo re . Una visin del comu -nismo re p u b l i c a n o

    So b re la repblica como forma deg obierno, Thomas More sostena que,en aquell a sociedad donde las posesiones son pri va d a s,donde todos miden todas las cosas c on el dinero, ah apenassi podr lograrse que con una repblica marchen las cosasjusta o prspera m e n t e. Es decir, en u na sociedad que no eli-mine la propiedad privada difcilmente la gestin republicana

    tendr xito en el logro del bien comn por encima de l o si n t e reses individuales.9

    Por esto recalca que, para que la repblica utopiensef u n c i o-ne (a la que Mo re c o n s i d e ra no slo la mejor sino la nica [for-ma de gobierno] que por propio derecho pueda recabar para sel nombre de repblica), ha de anular la propiedad pri va d ad e n t ro de su proye c t o. Po rque en otros sitios, los que hablanpor doquier del beneficio pblico se cuidan del pri vado; aqu,donde nada hay pri va d o, llevan en serio la gestin pblica. Co nrazn, por ciert o, en uno y otro caso. En efecto, en otros sitiosquin desconoce que, si no provee pri vadamente de algo paras, perecer de hambre, por muy floreciente que est la re p -blica?; y por eso es la necesidad lo que induce a creer que ha de

    ocuparse de s antes que del pueblo, esto es, de los otro s. Aq u ,por lo contra ri o, donde todo es de todos, ninguno duda que anadie le haya de faltar nada pri vado (con tal que se atienda aque los gra n e ros pblicos estn llenos). Pues ni es cicatera lad i s t ribucin de los bienes ni nadie es all indigente o mendigo;no teniendo ninguno nada, son todos, sin embarg o, ri c o s.

    Por eso, cuando contemplo y medito sobre todas esas re p -blicas que hoy florecen por ah, no se me ofrece otra cosa, sa-me Dios pro p i c i o, que una cierta conspiracin de los ricos quet ratan de sus intereses bajo el nombre y ttulo de repblica. Yd i s c u r ren e inventan todos los modos y artes para, en pri m e rl u g a r, retener sin miedo de perderlo lo que acumularon con

    malas artes; despus de esto, para adquirirlo con el trabajo yfatigas de todos los pobres por el mnimo precio; y para abusarde ellos. Estas maquinaciones que los ricos han decretado quese observen en nombre del pueblo, esto es, tambin de losp o b re s, se hacen ya leye s.

    Pl a t n . Los modelos de gobierno y su pre f e re n c i aEstas formas de gobierno republicano que menciona Mo re

    que explotan a la ciudadana nos llevan a reflexionar sobrecmo Platn define y evala las cinco formas de gobierno ms

    conocidas:El gobierno aristocrtico se cara c-

    t e riza por el respeto a los magistra-d o s, la aversin de los guerre ros a laa g ri c u l t u ra, a las artes mecnicas y alas profesiones lucra t i va s, la costum-b re de las comidas pblicas y el cui-dado de practicar los ejercicios gim-

    nstico s y militare s.El gobierno timocrtico se cara c t e riza por la ambicin de sus

    ciudadanos: ansiosos de ri q u eza, prontos a las arm a s, gasta-rn en mujeres y en todo lo que halague sus pasiones.

    El gobierno oligrq u i c o se cara c t e riza porque los ricos ejer-

    e s p a a s

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    En una sociedad que no eliminela propiedad p ri va d adifcilmente la

    g e s t i n republicana tendr xitoen el logro del bien comn.

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    cen el mando sin que los pobres participen de l. En la medidaque se acumulan las ri q u ezas baja la virtud. Se incrementa laa va ricia y la codicia. Los empleos son para los ricos y los pobre sson despre c i a d o s. Los cargos pblicos se conceden en funcinde la renta. Este estado encierra dos estados: uno compuestode ricos y otro de pobres [clases] quehabitan el mismo suelo y que se es-f u e rzan sin cesar en destruirse losunos a los otros [lucha de clases]. Losp o b res viven en la indigencia y losricos son unos malhechores [] Enlos gobiernos oligrquicos casi todoslos ciudadanos son pobres a exc e p-

    cin de los jefes. Se pasa de la oligarqua a la democracia a cau-sa del deseo insaciable de estas mismas ri q u ez a s, que se mira ncomo el pri m e ro de todos los bienes en el gobierno oligrq u i-c o. Los jefes, que deben los cargos que ocupan a las inmensasri q u ezas que poseen, se guardan bien de re p ri m i r, mediante las e ve ridad de las leye s, el libertinaje de los jvenes corro m p i-d o s, ni de impedir que se arruinen con sus despilfarro s, porq u esu plan es comprarles los bienes, hacerles prstamos con cre-cidos intereses y aumentar por este medio sus ri q u ezas y suc r d i t o.

    El gobierno democrtico se hace cuando los pobre s, consi-guiendo la victoria sobre los ri c o s, degellan a los unos, destie-

    r ran a los otros y re p a rten con los que quedan los cargos y laa d m i n i s t racin de los negocios, re p a rto que en estos gobiern o sse arregla de ord i n a rio por la suerte [] Por dondequiera queexista este poder, es claro que cada ciudadano dispone de smismo y escoge a su placer el gnero de vida que ms le agra-da [] En este estado puede cada uno buscar el gnero deg o b i e rno que le acomode. Cul es el paso de la democra c i aa la tirana? La causa de la ruina de la democracia es el deseoinsaciable de lo que mira como su bien: la libertad [] Cu a n d oun estado democrtico, devo rado por una sed ardiente del i b e rtad, est gobernado por malos escanciadore s, que la de-r raman pura y la hacen beber hasta la embri a g u ez, entonces, si

    los gobernantes no son complacientes, dndole toda la liber-tad que quiere, son acusados y castigados, so pretexto de queson tra i d o res que aspiran a la oligarqua [] Con el mismod e s p recio trata el pueblo a los magistra d o s, echndoles en caraque para nada sirven y que son esclavos vo l u n t a ri o s. Pblica yp ri vadamente alaba y honra la igualdad que confunde a losm a g i s t rados con los ciudadanos [] Pe ro el abuso ms intole-rable que la libertad introduce en este gobierno es que los es-c l a vo s, va rones y hembra s, son tan libres como los que los hanc o m p ra d o. Y ya casi se me olvidaba decir qu grado de libert a dy de igualdad alcanzan las relaciones entre los hombres y las

    m u j e res [] De esta forma de gobierno tan bella y encantado-ra es de donde nace la tira n a.

    Un estado, sometido al gobierno de un tira n o, es todo lo es-c l a vo que puede ser. El estado en el que reina un tirano esp o b re. [] Sucede con un tirano lo que con esos part i c u l a re s

    ri c o s, que tienen muchos esclavo s ;p o rque tienen de comn con l quemandan a muchos [] En razn delrango que ocupa, el tirano se hacen e c e s a riamente ms envidioso, msp rf i d o, ms injusto, ms impo, msdispuesto a recibir y alimentar en suc o razn todos los vicios, siguindose

    de aqu que es el ms desgraciado de los hombre s, y que comu-nica su desgracia a los hombres que le ro d e a n.Revstete ahora con el carcter del juez y decide quines de

    e n t re los cinco cara c t e re s, el real, el timocrtico, el oligrq u i c o,el democrtico y el tirnico, son ms dichosos y quines lo sonmenos [] El ms dichoso de los hombres es el ms justo yms virt u o s o, es decir, el que reina sobre s mismo y que se go-b i e rna segn los principios del estado monrq u i c o; y el msd e s g raciado es el injusto y ms depra va d o, es decir, aquel que,teniendo el carcter ms tirnico, ejerce sobre s mismo y sobrelos dems la tirana ms absoluta.

    Por tanto, nicamente sern felices los pueblos del futuro

    cuando los filsofos se conviertan en re yes y los re yes en fil-s o f o s. Cun lejana est an semejante felicidad, si los filsofosno se dignan asistir a los re yes con sus consejos!.

    El capitalismo tiene capacidad para subsumir todas las for -mas de gobiern o

    Como ve m o s, Platn es un ciudadano ms que disea elcomunismo utpico que le satisface para su modelo de so-c i e d a d, as como elige, entre las diversas formas de gobiern o,a q u e l l a que ms est en consonancia con su modelo. No voy ae n t rar a va l o rar las pre f e rencias de Platn por el modelo desociedad ni por las formas de gobiern o ; esta es una labor que

    le corresponde y deber hacer el propio lector. Destacar ni-camente que todos ellos son clasistas y jerrq u i c o s. Sin embar-g o, lo que quiero resaltar es que el capitalismo ha subsumido,ha integrado y dominado a las poblaciones a lo largo de unbuen perodo de tiempo, y ha expandido su lgica de apro p i a-cin y acumulacin por casi toda la geografa conocida. Se g nla coy u n t u ra, el capitalismo ha controlado a las sociedadesempleando todas y cada una de las cinco formas de gobiern oque seala Platn: ari s t o c racia, timocracia, oligarqua, demo-c racia, y tira n a .

    Por tanto es importante tener claro cul es el modelo de so-

    e s p a a s

    52/ElViejo Topo

    Si o p t a m o s por unare p b l i c acomo forma de gobierno de una

    sociedad sin clases, s e g u ra m e n t e l o smodelos a n t e ri o re s nos servirn de

    muyescasa re f e re n c i a.

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    c iedad que cada uno de no-s o t ros pre f i e re para a d a p t a rseguidamente la forma degobierno de manera quesea consecuente con talm o d e l o.

    Sociedad sin clases, q u

    tipo de re p b l i c a ?

    Las reflexiones desarro-lladas hasta aqu nos de-v u e l ven a la pregunta: qusociedad, qu gobierno? Es

    d e c i r, a los que deseamosuna sociedad sin clases,nos sitan ante el desafode cmo diseamos estemodelo de sociedad, y conf o rmas de gobierno que notengan ms poder que elque resulta de la gestintotalmente hori zontal, au-t o g e s t i o n a d o, autnomo,en asamblea, o el adjetivoque le queramos aadir,

    p e ro que responda a unas o c i e dad sin explotacin y sin dominio de clase.Y si sostenemos que la sociedad ha de ser sin clases, segura-

    mente ya no podemos seguir pensando que la clase tra b a j a d o-ra, aunque sea por un corto tiempo, ha de ser la va n g u a rdia, ysus partidos la cabeza pensante y gestora de este diseo. Estonos lleva a la consideracin de que, si optamos por una re p -blica como forma de gobierno de una sociedad sin clases,s e g u ramente los modelos anteri o res nos servirn de muy esca-sa re f e rencia. De todas manera s, es importante revisar pre v i a-mente el contenido de las Constituciones de las dos Re p b l i c a sE s p a o l a s.

    P r i m e ra Repblica Espaola (1873-1874)El Proyecto de Constitucin Fe d e ral (no promulgado) de la

    Repblica Espaola establece que la sociedad ser clasista, ysu forma de gobierno de jera rqua re p re s e n t a t i va. Los art c u-los 5 y 6 del ttulo preliminar y el 42 del ttulo III santificanesta re l a c i n :

    5. La libertad del tra b a j o, de la industria, del comerc i oi n t e ri o r, del crdito.

    6. El derecho de propiedad, sin facultad de vinculacin nia m o rt i z a c i n .

    4 2. La soberana reside en todos los ciudadanos, y se ejer-ce en re p resentacin suya por los organismos polticos de laRepblica constituida por medio del sufragio unive r s al .

    Nada especial si tenemos en cuenta los tiempos conserva-d o re s - l i b e rales y, por tanto, la composicin de los que re-dactaran el texto de esta repblica. De hecho, B. Prez Ga l-ds ya dio una explicacin acerca de las dificultades quetena ella misma para sobre v i v i r. Dijo que la Pri m e ra Re p -blica tuvo una vida tan agitada como efmera (once meses),en la que convivi con todo tipo de crisis y problemas []

    Su existencia estuvo sacudida por dos guerras civiles here-dadas del perodo monrquico anterior (la cubana y la car-lista), y erosionada en su propia base por el enfre n t a m i e n t ode los republicanos en relacin con la organizacin polticadel Estado. Aunque la repblica no logr vencer ni a los in-dependentistas en Cuba ni a los carlistas en el norte de laPennsula, logr mantener estos frentes bajo control. Lo queno pudo re s i s t i r, en medio de tales conflictos y de una pro-funda agitacin social, fue la lucha de los mismos re p u b l i-canos sobre la instauracin del federalismo en Espaa y lad i s t ribucin terri t o rial del poder.1 0

    e s p a a s

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    Javier Prat Martnez (Creative Commons)

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    Segunda Repblica Espaola (1931-1936)Apologticos de la segunda repblica destacan que se tra t a

    de una Constitucin que reconoce de una manera amplialos derechos y libertades individuales caractersticos de unaConstitucin Liberal (incluido el derecho a la propiedad pri-vada), [pero] que, como novedad, incluye compromisos so-ciales por los cuales el Estado debe pro p o rcionar los mediosque garanticen un acceso general a la educacin, la sanidado la vivienda, que pre f i g u ran lo que desp us de la Se g u n d aGu e r ra Mundial se denominar en Eu ropa el Estado del Bi e-n e s t a r.1 1

    Ap robada por las Co rtes Co n s t i t u yentes el 9 de diciembrede 1931, a la vez que la Constitucin reconoce que E s p a aes una repblica de tra b a j a d o re s, tampoco se pronuncia en

    c o n t ra de la propiedad pri vada. Y aunque no expresa un re-conocimiento directo de la misma, sin embarg o, debemosentender que el Estado la respeta y la confirma por omisin,cuando atestigua que se re s e rva la facultad de ejerc e r:

    A rtculo 15, 1 1. El d e recho de expropiacin, sal vo siem-p re la facultad del Estado para ejecutar por s sus obras pecu-l i a re s.

    A rtculo 15, 1 2. La socializacin de ri q u ezas naturales ye m p resas econmicas, delimitndose por la legislacin la pro-

    piedad y las facultadesdel Estado y de las re-g i o n e s.

    A rtculo 45. Y quetoda la ri q u eza delp a s, sea quien fuerasu dueo, est subor-dinada a los intere s e sde la economa nacio-nal y afecta al sosteni-miento de las carg a sp b l i c a s, con arreglo a

    la constitucin y a lasl e ye s. La propiedad detoda clase de bienespodr ser objeto de ex-p ropiacin forzosa porcausa de utilidad so-cial mediante adecua-da indemnizacin, amenos que dispongao t ra cosa la ley apro-

    bada por los votos de la mayora absoluta de las Co rt e s. Co nlos mismo re q u i s i t o s, la propi edad podr ser socializada []

    En ningn caso se impondr la pena de confiscacin deb i e n e s.

    Tampoco se le poda pedir mucho a la Segunda Re p b l i c a ,si tenemos en cuenta en qu momentos nace y con qu fuer-zas polticas cuenta. A su vez, no olvidemos que, en las elec-ciones de febre ro de 1936, cuando venci el Frente Po p u l a r,coloc inicialmente slo a ministros republicanos (ningunosocialista) y con Azaa como presidente del gobiern o. El pro-yecto se limitaba a restablecer plenamente la Co n s t i t u c i nde 1931 y derogar las leyes contra r re f o rmistas que habanlegislado los gobiernos radical-cedistas que le pre c e d i e ro n .

    Despus vendra el conocido alzamiento de 1936 del genera lgolpista y su dictadura, el cual no me rece ni una sola lnea dec o m e n t a ri o.

    Voces y textos a favor de la Te rc e ra Repblica Espaola

    a) rgano oficial de la Te rc e ra Repblica Es p a o l a. E s t aAsociacin ofrece su texto sobre la Constitucin de la Te rc e raRepblica Espaola en el que no se ataca la sociedad de clasesy la re p resentatividad poltica en la forma de los viejos y losn u e vos poderes del Estado. Muy similar al texto de la Se g u n d a ,comienza cambiando los tra b a j a d o res como sujeto de la sobe-

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    quieres callarte (Creative Commons)

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    rana nacional por el del pueblo espaol. Sin embargo va mslejos en la consolidacin de una sociedad de clases en cuantoreconoce explcitamente la propiedad pri vada; el re c o n o c i-miento de un estatuto de los tra b a j a d o res; garantiza a tra b a j a-d o res y empre s a rios el derecho a la negociacin y al conflictoc o l e c t i vo); santifica la libertad de empresa en el marco de laeconoma de merc a d o. En cuanto a la gestin de la res pblica,poco vara sobre la Constitucin de 1978: re p resentatividad po-ltica por los partidos; hasta el mismo Defensor del Pueblo serdesignado por las Co rt e s, en vez de los ciudadanos a los quere p resenta. La nica novedad del texto aparece en el art i c u l o56, dnde dice que la mayor magistra t u ra ser re p re s e n t a d apor el Presidente de la Repblica y no por ningn monarc a .

    Slo faltaba que as no fuese.Desde mi punto de vista, este texto legitima la sociedad capi -talista y propone la repblica federal como forma de gobierno

    b u r g u s.

    b) Julio Anguita. Hacia la Te rc e ra Re p b l i c a . La propuesta re -p u b l i c a n a . En este guin de tra b a j o, el autor seala que la IIIRepblica se define por la capacidad y la entidad de su pro-puesta. Una propuesta que se hace a la ciudadana, a los colec-t i vos en los que ella se organiza a fin de que se incorporen parac o n s t ruirla. Estamos pues ante una propuesta poltica querecaba la participacin activa de los ciudadanos y ciudadanas

    p a ra que tanto una como los otros y otras vayan re a l i z n d o s een un marco nuevo. En definitiva, la III Repblica no viene; set rae constru y n d o l a.1 2 Ad e m s, como novedad, pre t e n d ec o n s t ruir la Te rc e ra Repblica Espaola en el marco de unaEu ropa federal a partir del impulso de un autntico pro c e s oc o n s t i t u yente euro p e o.

    En efecto, es importante destacar que la Te rc e ra Re p b l i c ano va a caer del cielo; hay que luchar por ella como condicinn e c e s a ria. Pe ro formas de repblica hay muchas, por eso he-mos insistido en que la repblica quehemos de construir ha de ser en fun-cin del modelo de sociedad que de-

    s e a m o s, condicin suficiente. En mi ca-s o, he sealado que la sociedad utpicaha de ser antisexista, antimilitarista, an-ticlasista y antijerrquica. Sin embarg o,el Guin slo recoge la pre o c u p a c i npor la igualdad ciudadana de sexos y la preocupacin por lapaz y el laicismo, as como la participacin radical en las insti-tuciones burg u e s a s, todo dentro del marco de una Eu ro p af e d e ral a partir del impulso de un autntico proceso constitu-yente euro p e o. Pe ro no es anticapitalista en el sentido de mani-festarse por la abolicin de la propiedad pri vada, y con ello de

    las clases sociales, ni tampoco de las estru c t u ras jerrq u i c a sp ropias de los sistemas de dominio y explotacin, nacionales ye u ro p e a s. Propone la forma federa l de gobiern o, pero estaf o rma de gobierno lo mismo se adapta a los gobiernos de cort edemocrtico burg u s, republicano o con monarqua parla-m e n t a ria; es decir, la descentralizacin espacial que opera conel federalismo puede ir seguido de un centralismo regional oa u t o n m i c o, jerrq u i c o, y de corte re p re s e n t a t i vo.

    Por tanto, admitimos que hay que incorporarse a un debate,p e ro a un debate conjunto en el que precisemos qu modelode sociedad y qu forma de gobierno los ciudadanos quere-m o s.

    Este es un texto que apenas presenta diferencias con el ante -

    r i o r.

    c) La Semana Republicana de As t u r i a s . Qu quiere decirRe p b l i c a. Tradicionalmente se ha definido la repblica co-mo la forma de estado de los pases en los que el pueblo tienela soberana o facultad para el ejercicio del poder, aunque esteltimo sea delegado por el pueblo soberano en gobern a n t e sque elige de un modo u otro. Lo cierto es que una re p b l i c aest basada en el i m p e rio de la ley, donde tanto los gobern a n-tes como los gobernados se someten por igual a un conjuntode principios fundamentales normalmente establecidos enuna constitucin. De ah que el trmino repblica va asociado

    inevitablemente a democracia, no hay democracia sin re p b l i-ca ni repblica sin democra c i a.1 3

    Finalizamos este muestra rio de pro p u e s t a s, manifiestos,guiones y opiniones con este ejemplo en el que el autor, ald e f i n i rnos qu es la repblica, la identifica con las estr u c t u-ras de poder jera rquizado (gobernantes y gobernados) y for-mas de gobierno como la democracia, aunque hasta ahoraslo hayamos con ocido las de tipo burgus o las clebres po-p u l a res de los pases del Este. Esta insistencia en repetir y

    m antener las viejas recetas, ata nues-tro imaginario y lo impide evol u c i o-nar hacia nuevas formas de gobiern o

    sin estru c t u ras de poder, clases, etc.Nada positivo que ensalzar.

    d) Re s u m e n. Recojo de Higinio Po l ouna observacin a tener muy en

    cuenta, cuando advierte que las dos repblicas espaolasm u ri e ron bajo las botas militare s, pero pienso que tendra queaadir que esto fue posible porque los militare s, los cura s, losp a t ronos y los banqueros formaban parte activa y destacada delas dos sociedades republicanas: para estos poderes fcticos, larepblica era la forma de gobierno mediante la cual podan

    e s p a a s

    ElViejo Topo/ 55

    El gobierno o l i g rq u i c o se

    c a ra c t e riza porque los ricos e j e rcenel mando sin que los pobre s

    p a rticipen de l.

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    seguir manteniendo sus intereses de clase en aquel momentoh i s t rico sin arriesgar sus pre r ro g a t i vas estamental e s. Si laTe rc e ra Repblica nace con todos estos poderes fcticos den-t ro, me temo que corra la misma suerte que las dos anteri o re s.

    Tambin dice, los ve n d e d o res de mentiras que han pre-tendido enterrar la memori a ,ig n o raban que el esfue rzo d em uchas personas re p u b l i c a n a s

    d u rante el gobierno 1 4 de la Se-gunda Repblica para llevar lai n s t ruccin y la cultura a losciudadanos del pas contra s t a-ra con esta monarqua que re i-na sob re el embru t e c i m i e n top o p u l a r, el triunfo de una televisin de cloaca, el agi tar de lassotanas de obispos y el fanatismo deport i vo. Po rque la re p -blica espaola era la instruccin popular, el desarro l l o, laa s p i racin a una Espaa libre, prspera y feliz como decane n t o n c e s.1 5 Entiendo su entusiasmo y aoranza por laSegunda Repblica, pero ms pienso que eran personajesrepublicanos en el gobiern o, con buena parte del pueblo

    a p oy n d o l e s, y no los gobiernos republicanos durante lasfases de los gobiernos compuestos por lerro u x i s t a s, cedistasy dems dere c h a s.stos no me parece que tuvieran los obje-t i vos que menciona H. Po l o.

    Incluso si miramos el Pro g rama del Frente Po p u l a r, publi-cado en Ma d rid el 15 de enero de1936, tampoco el gobierno po-pular se atreva a ir ms all de lai n s t ruccin y la cultura mencio-nada. Destaquemos algunas desus negativas en aquellos aspec-tos que podra iniciar un pro c e s ode socializacin:

    Los republicanos no aceptan el principio de la nacionali-zacin de la tierra y su entrega a los campesinos, solicitado porlos delegados del partido socialista. (Art. IV)

    Los republicanos no aceptan el subsidio de paro solicitadopor la re p resentacin obre ra. Entienden que las medidas depoltica agra ria, las que se han de llevar a cabo el ramo de la in-

    e s p a a s

    56/ElViejo Topo

    El Gu i n de Julio A n g u i t a no es anticapitalistaen el sentido de manifestarse por la abolicin

    de lap ropiedad pri va d a,ni tampoco de

    las estru c t u ras jerrquicas de d o m i n i oy explotacin.

    Mariano Domnguez (Creative Commons)

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    du s t ria, las obras pblicas y, en suma, todo el plan de re c o n s-t ruccin nacional, han de cumplir, no slo su finalidad pro-pia, sino tambin el cometido esencial de absorber el paro.( A rt. V)

    No aceptan los partidos re p u b l i-canos las medidas de nacionalizacinde la Banca propuestas por los part i-dos obre ro s. ( A rt. V I )

    No aceptan los partidos re p u b l i-canos el control obre ro solicitado por la re p resentacin delp a rtido socialista. (Art. V I I )1 6

    No, n o, no y no, c u a t ro negaciones bien claras que evidenciansin lugar a dudas la intencin y la capacidad tra n s f o r m a d o ra

    del Frente Po p u l a r.

    Resumen definitivo

    Vo l vamos a re c o rdar una vez ms lo que nos deca Mo re :En aquella sociedad donde las posesiones son pri va d a s,dnde todos miden todas las cosas c on el dinero, ah apenaspodr lograrse que con una repblica marchen las cosasjusta o prspera m e n t e. Es decir, en una sociedad que noelimine la propiedad p ri vada difcilmente la gestin re p u b l i-cana tendr xito en el logro del bien comn por encima de

    los intereses individuales. Sin embarg o, en ninguno de estosp roye c t o s, proclamas y manifestacion es aparece todavaesta preocupacin por una sociedad de iguales. Es duro, pe-ro hay que aceptar que la natura l eza constitucional de las

    dos Repblicas espaolas era cla-sista, y por tanto, ambas dieron des lo que pudieron. Ahora, aprove-chando la leccin, hay que ser msambiciosos polticamente e ir mslejos. La Tercera Repblica no pue-de ser un calco a medias entre la

    Constitucin de 1931 y la de 1978, como aparece en algunostextos que se proponen actualmente.

    Bre ve declaracin de pri n c i p i o s

    Nac con la Repblica, soy republicano y seguir sindolo,p e ro mi concepcin de la repblica es la de una forma de go-b i e rno que est en funcin de una sociedad sin clases. Po rtanto la lucha de clases y toda clase de luchas ha de estar diri-gida a la tra n s f o rmacin del capitalismo, a la consecucin deuna sociedad utpica de ciudadanos y ciudadanas iguales, enla cual, entonces, la repblica tendr su sentido. Volviendo aMa c h a d o, trabajar para la terc e ra repblica en la modestamedida de mis fuerzas y dentro de los cauces que yo estimeque conduce n a esa sociedad utp i ca

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    No t a s1 . A ristocles Pl a t n. La re p b l i c a. Edicomunicacin. Ba rcelona 1999.2 . Michael B. Fo s t e r. Plato to Ma c h i a ve l l i . Masters of Political Thought. Vol. I, Ha r rap & Co. Ltd. London, 1963.3 . Michael B. Fo s t e r. Las cursivas son mas.4 . A ristocles Pl a t n. Trabajo citado5 . Todas las frases entrecomilladas de este epgrafe estn extradas de T. Bo t t o m o re. Diccionario del pensamiento marxista. Pginas 689-

    691. Te c n o s. Ma d rid 1984.6 . Este es el caso de Platn y Ari s t t e l e s, en los cuales la visin de sociedad que deducen es ms idealista que materi a l i s t a .7 . Esta misma regla sirve para saber si los mbitos de autonoma que proponemos se organicen (comunidades, colonias, comunas) pue-

    den ser embriones de una futura sociedad altern a t i va .

    8 . Con respecto a est polmica es importante el libro de John Ho l l ow a y. Cmo cambiar el mundo sin tomar el poder. El Viejo To p o. Ba r-celona 2004. Existe un rico debate que se puede seguir en www. h e r ramient.com.ar y tambin en www. ez l n . o rg / revistachiapas9 . Por eso es importante no confundir el comunismo republicano con el republicanismo de la democracia burguesa, puesto tan de moda

    por algunos autore s.1 0 . h t t p : / / o l m o. c n i c e. m e c d . e s / ~ j t a c 0 0 0 1 / h i s t o ri a / m e n u d o / i n d e x . h t m1 1 . h t t p : / / w w w. e ro j. o rg / b i b l i o / i i republ/index.htm1 2 . h t t p : / / w w w. n o d o 5 0 . o rg / re p u b l i c a / # a n c re15549781 3.La Repblica Espaola hoy. In t e rvencin en la Presentacin de la Semana Republicana en As t u r i a s. Oviedo 9 de abril Pascual Se r ra n o

    ( Ka o s. III Re p b l i c a )1 4 . La frase entrecomillada insertada y modificando el texto es ma.1 5 . Higinio Po l o. A o rada Repblica espaola. http://www. n o d o 5 0 . o rg / republica/docs/polo_7-04-06.html1 6 . w w w. t e rc e ra republica.tk

    Hay que a c e p t a r que la natura l ezaconstitucional de las dos Repblicas

    espaolas erac l a s i s t a, y por tanto, a m b a sd i e ro n de s lo que pudiero n .