Iniciativa conjunta:

Producto EXPLORA CONICYT de Apropiación Social de la Ciencia y la Tecnología

Autor: Verónica Gálvez - Ilustraciones: Alex Rojas - Asesoría Científica: Katica Boric

Iniciativa conjunta:

Como todas las tardes después de clases, Felipe y Rocío pasaron con sus madres a la plaza de juegos. Al llegar, vieron que en su asiento preferido se encontraba una mujer embarazada con su hijo de unos 7 años. El niño le acariciaba el vientre a su madre y le susurraba en el ombligo.

Al cabo de un rato, Rocío y Felipe giraban como locos en una rueda, pero no le quitaban la vista al niño. Cuando por fin terminaron y se les hubo pasado el mareo, se acercaron para intentar escuchar qué era lo que decía en susurros.

- “Si la pieza que está en la mesa tiene un cinco y un tres, significa que debes buscar entre tus fichas una que tenga cualquiera de esos dos números” - le decía el pequeño a la barriga de su madre.

- ¿Qué haces? - preguntó Rocío sin poder contener la curiosidad.

- Le enseño a mi hermanito a jugar dominó - respondió el niño.

- ¿Y cómo sabes que puede escucharte? - preguntó Felipe.

- Porque cuando le hablo se mueve ahí dentro.

- ¿Y cómo sabes que te entiende? – cuestionó Rocío.

- Eso no lo sé, pero yo creo que sí lo hace.

Las tres mamás se miraban unas a otras y se reían de las ocurrencias de sus hijos.

- ¿Cómo te llamas? – le preguntó Rocío.

- Renato y mi hermanito Clemente - respondió el niño entusiasmado.

Cerebro: es la parte más grande del encéfalo y el responsable de las fun-ciones superiores que caracterizan al ser humano, tales como: la conciencia, el pensamiento, el lenguaje, el aprendizaje y la memoria. El cerebro es el encargado de interpretar los impulsos generados por el sistema nervioso.

Columna vertebral: conjunto óseo que forma el esqueleto axial de los vertebrados. En el hombre consta de 24 vértebras móviles (7 cervicales, 12 torácicas y 5 lumbares) y 9 fijas (5 fusionadas en el hueso sacro y 4 que for-man el cóccix).

Embrión: etapa inicial del desarrollo de un ser vivo, en el caso del ser hu-mano, en el útero de la madre. Este término se aplica desde la fecundación hasta el final de la octava semana.

Encéfalo: está ubicado en la cavidad craneana. Es la parte de mayor masa del sistema nervioso. En él se distinguen tres partes voluminosas: el cerebro, el cerebelo y el bulbo raquídeo.

Iniciativa conjunta:

Mientras Renato continuó hablándole a su hermanito, dándole instrucciones de cómo colocar en el dominó aquella pieza que tiene los dos números iguales, Rocío y Felipe nuevamente se alejaron para jugar. Rápidamente se lanzaron por el resbalín y volvieron donde el niño que no se despegaba de su madre.

Mostrándoles el libro que leía, la mamá de Renato les comenzó a explicar cómo funciona el cerebro de los “fe-tos”. Y les contó que así se llama a los bebés cuando han estado dentro del vientre materno alrededor de ocho semanas, y hasta el momento que nacen.

- ¿Y cómo se llaman antes de las ocho semanas? – preguntó curioso Felipe.

- Se les llama “embrión” - respondió la mujer. - En la etapa embrionaria comienza la formación de su sistema nervioso que está compuesto por el cerebro, la médu-la espinal y los nervios. El sistema nervioso es uno de los más importantes de nuestro organismo porque su función principal es captar y procesar rápidamente las señales que recibimos para lograr una oportuna interac-ción con el medio ambiente. El sistema nervioso controla y coordina eficientemente las respuestas necesarias so-bre el resto de los órganos, por ejemplo, cuando alguien

nos lanza una pelota que no podemos detener, nuestro sistema nervioso reacciona inmediatamente para evitar el golpe, ya sea dándonos instrucciones para alejarnos o protegernos. En ese caso, la información transita desde el cerebro, baja por la médula espinal y llega hasta los diferentes miembros del cuerpo para que ejecuten la acción.

- ¡Yo sé qué es la médula espinal! – exclamó Rocío, quien no pudo evitar recordar el accidente que tuvo en la playa, cuando se tiró un piquero al mar y su cabeza chocó con-tra una roca.

- Cuando me recuperaba en el hospital, el médico me ex-plicó que la médula espinal es un cordón largo que baja desde el cerebro, que está en la cabeza, por cada uno de los huesos o vértebras que tenemos en la columna. Por aquí –indicó Rocío doblando hacia atrás su mano izquier-da y tocando su espalda de arriba hacia abajo, tal como el médico se lo había explicado a ella. También me dijo que la médula espinal es de un color más o menos blanco.

Feto: vertebrado vivíparo en desarrollo. El período fetal transcurre desde el momento en que se ha completado la etapa embrionaria hasta el nacimiento, cuando se convierte en un neonato.

Iniciativa conjunta:

Renato estaba inquieto, pues hace rato quería hacer una pregunta.

- ¿Qué pasa hijo? – dijo su madre.

- Quiero saber cuántas semanas tiene mi hermanito.

- ¿Qué es eso de las semanas? – interrumpió Felipe.

- Es el período de gestación o tiempo que lleva dentro del útero. Recuerden que una semana tiene siete días, y un mes tiene alrededor de cuatro semanas. Clemente lleva treinta y seis semanas aquí dentro – respondió la mamá embarazada acariciando su vientre.

- ¿Y cuánto falta para que nazca? – preguntó Renato esta vez.

- Ya puede nacer a las treinta y seis semanas porque su cuerpecito está listo y su cerebro también. A veces inclu-so nacen con menos tiempo, pero no es lo apropiado. Lo ideal es que cumplan por lo menos las cuarenta semanas para que hayan alcanzado la madurez que necesitan para vivir aquí afuera.

- ¿Su cerebro será más inteligente para entonces? – pre-guntó Felipe.

- No lo sé, veamos qué dice el libro – respondió la mamá de Renato. Y comenzó a leer en voz alta para que todos pudieran escuchar.

- A las cinco semanas de gestación, el sistema nervioso comienza a desarrollarse.

- ¡Oh! Cuando todavía es muy chiquitito – exclamó Rocío.

- Pero yo quiero saber si ya puede jugar – insistió Rena-to.

– ¡Escuchen, entre las nueve y las doce semanas, se producen unas doscientos cincuenta mil neuronas por minuto! Recuerden que las neuronas son las células que reciben los estímulos internos y externos, y conducen esa información a través del sistema nervioso. Esas neu-ronas le ayudarán mucho a Clemente para que cuando nazca pueda aprender a jugar, pero primero necesita desarrollarse bien – agregó la mamá.

- Mamita, continúa – dijo Renato impaciente.

Sistema nervioso: red de tejidos, cuya unidad básica son las neuro-nas. Su principal función es captar y procesar rápidamente las señales para lograr una oportuna interacción con el medio ambiente, a través del control y coordinación eficiente sobre el resto de los órganos.

Iniciativa conjunta:

- Entre las diecisiete a veinte semanas, las conexiones en-tre el oído y el cerebro ya están desarrolladas; entre las veinticuatro a veintiséis semanas, la retina de sus ojos se encuentra formada y comienza a transmitirle informa-ción al cerebro.

- ¿Qué es la retina? – preguntó Felipe esta vez.

- Es un tejido sensible a la luz que se encuentra en el interior del ojo.

- ¿O sea que ya puede ver y escuchar? – interrogó ansioso Renato.

- El oído es uno de los órganos que más se desarrolla dentro del útero. Desde la semana dieciséis, los fetos ya pueden percibir sonidos y voces que vienen desde el exterior. O sea que Clemente sí puede escuchar.

- ¡Viste, yo te dije que me podía oír! – dijo Renato diri-giéndose a Felipe.

- ¿Y qué ve? – preguntó Rocío.

- ¡Veamos! Desde las treinta y tres hasta las treinta y seis semanas el cerebro ya está listo para escuchar, sentir e incluso ver formas tenues. ¡Ahí está la respuesta!

Ya era la hora de la colación y la mamá de Renato sacó una bolsa con plátanos y les ofreció a todos, luego sacó otra con trocitos de zanahoria picada, pasas y nueces.

- ¿Por qué tu mamá trae esos alimentos a la plaza? – mur-muró Felipe a Renato.

- Porque dice que la alimentación es muy importante para mi hermanito y sobre todo para su cerebro, por eso come pescado, carne, huevos, leche y otras cosas sanas. Siempre me da a mí, aunque yo quisiera comer dulces, ella prefiere la fruta y los cereales porque así crecemos fuertes y sanos. También dice que debemos estimularlo, por eso le hablo y juego con él, así cuando nazca recono-cerá mi voz.

Gestación: período de desarrollo embrionario intrauterino que concluye cuando se alcanza la formación completa de todos los órganos, dura alrededor de 40 semanas.

Médula espinal: es un largo cordón blanquecino localizado en el canal vertebral, es la encargada de llevar impulsos nerviosos a los 31 pares de nervios raquídeos, comunicando el encéfalo con todo el cuerpo.

Nervios: materia blanca que en forma de cordones o prolonga-ciones nerviosas, comunican los centros nerviosos con todos los órganos del cuerpo.

con notoria alegría. - Entonces, ¿le puedo enseñar a jugar dominó? – insistió.

- Cuando yo tenga un hermanito le enseñaré a jugar pin pon – anunció Felipe.

- Y cuando yo tenga una hermanita, le enseñaré a patinar - señaló Rocío, imaginándose en una fabulosa pista de hielo rodeada de cientos de personas que aplaudían su actuación.

- Hijo, hoy Clemente tiene un cerebro que está en desa-rrollo, o sea, recién se está preparando, pero te aseguro que cuando nazca podrá aprender grandes cosas - res-pondió la mamá de Renato.

¡Sí!!!!! – Exclamó el pequeño, luego abrazó a su madre y pensó en lo entretenido que será compartir todos sus juegos con Clemente, su querido hermanito. Pero ahora estaba en el lugar más entretenido de todos, por eso, no vaciló en preguntar ¿vamos a jugar? Y bastó decirlo para que los tres corrieran a toda velocidad.

Fin

Iniciativa conjunta:

Todos escuchaban atentos la conversación, incluso las mamás de Felipe y Rocío, que poco a poco se habían acer-cado. Estaban en eso cuando la niña intervino.

- ¡Es cierto! En un programa de televisión, dijeron que las embarazadas que consumen lácteos, frutas y verduras, ayudan mucho a su bebé; pero aquellas que consumen alcohol o drogas, como el vino y el cigarrillo, le provocan mucho daño.

- ¡Sí, eso está muy mal! - exclamó su mamá.

- ¡Le hacen un daño terrible al hijo que esperan! – dijo la mamá de Renato.

- ¡Pobres bebés! – se quejó la mamá de Felipe, imaginan-do la triste situación.

-¡Niños, pongan atención! Acá en el libro dice que la exposición a tóxicos y el consumo de alcohol o tabaco, pueden ocasionar trastornos en el normal desarrollo del cerebro – leyó la futura madre.

- ¡Qué bueno que el cerebro de Clementito está bien por-que mamá nunca fuma o bebe alcohol! –exclamó Renato