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Alejandra A r d i l a Parsons

!Esta soy yo!Soy una combinación entreSantander y Antioquía.

Tengo 20 años

Soy estudiante de Comunicación Social - periodismo.

Más que unacarrera es mi PASIÓN

CARISMÁTICA

ALEGRE

RESPONSABLE

AMOROSA

VANIDOSA

DENTRO DE LO QUE ME GUSTA HACER ESTA EL PODER ESCRIBIR CUALQUIER PENSAMIENTO ...

“IMPORTANCIA DEL VIVIR”

Por: Alejandra C. Ardila Parsons

“Lo menos frecuente en este mundo es vivir. La mayoría de la gente existe, eso es todo” me parece oportuno iniciar este texto con esta maravillosa frase de Oscar Wilde ya que en este mundo el verdadero significado de vivir para algunos ha perdi-do su esencia. Nos hemos sometido a una burbuja de vida donde solo nos importa lo propio, estamos llenos de indiferencia, de insensibilidad donde los demás quedan en un segundo plano y hasta tercer plano.

Pero como en toda regla hay excepción alguien muy especial, amante a la naturale-za, a la pesca, luchador por la comunidad, un ser que tal vez para la mayoría de colombianos sea un desconocido más, encontró el significado de lo que es vivir. Luis Arango Crespo, “Lucho Arango” como era conocido en su tierra del corregimiento del llanito ubicado en el Magdalena Medio tuvo la valentía, el valor, el entusiasmo, el amor, la sabiduría de descubrir en cada una de sus acciones lo importante y razonable de lo que es la vida.

Lucho Arango fue un líder, un verdadero ejemplo a seguir quien fue capaz de pensar en el otro, en su comunidad, en construir grandes cosas sin importar las diferencias, en acercar de nuevo a las personas el sentido de la palabra, del dialogo, de la unión, tuvo el don de convencer a su comunidad con una palabra concreta y sincera. Lucho contra viento y marea por el bienestar de su gente hasta que lamentable-mente entró en su vida los intereses económicos, la injusticia y la insensibilidad de un país llamado Colombia.

En toda la historia de este ser tan excepcional es irónico que muy pocos conozca-mos su historia, una historia llena de miles de cosas maravillosas para la vida, que sí aportan a ser grandes personas. Digo irónico porque a los quien tratan “ídolos”, “modelos”, “héroes” como Pablo Escobar o Diomedes Díaz los medios de comuni-cación si se le sacan novela, serie, libro e infinidad de publicidad y son personas llenas oscuridad y en lo absoluto no aportan nada para la vida. Pero como Luis Arango es humilde, luchador, soñador y tras de él no hay intereses políticos, socia-les o económicos no se tiene en cuenta, lo cual es lo que quiero dejar como enseñanza, vale la pena coger la semilla que Lucho Arango dejo y traspasar fron-teras con su sabiduría para hacer de Colombia un país mejor lleno de responsabili-dad social y encontrar el verdadero significado de la vida y de los es vivir.

Columna de Opinión

La vida es solo una

por eso hayque Vivirla

Don fe de que ...

Y entonces ¿dónde queda la voluntad de paz?

Hecho por: Alejandra Carolina Ardila Parsons

Durante los últimos dos años es común encontrar en los titulares de los medios masivos de comuni-cación colombiana frases como: “acuerdos de paz”, “diálogos de paz”, “diálogos en la Habana”, “sí se puede hacer la paz”, “un país unido por la paz”, entre miles de más frases que finalmente llevan la parte clave de este texto: la paz. Desde el año 2012 la paz es un tema que ha estado al oído y al ojo de los colombianos donde a primera vista puede ser fácil de interpretar pero realmente lleva una serie de acciones para que posiblemente se pueda lograr.

Se supone que la paz es la ausencia del conflicto, y entonces ¿qué es conflicto?, según Kenneth Boulding economista ingles afirma que “el conflicto es una forma de competencia donde las partes que pugnan reconocen tener metas mutuamente incompatibles. Durante éste se dan diferentes tipos de procesos de facilitación, de negociación, de mediación o de realización de acuerdos y activ-idades tendientes a solucionarlo, que llevan a diversas maneras de transformar, gestionar y termi-nar el enfrentamiento, con el fin de entrar en una etapa a la cual se supondría aspiran las partes involucradas”. Este sería el camino para tener un proceso de paz, es decir, a una etapa de poscon-flicto en donde prevalecen: preservar la paz, construir o reconstruir todo lo perdido durante años y velar por el cumplimiento de los acuerdos a los cuales llegaron las partes. Ante esta situación cabe entonces la pregunta ¿Estamos preparados para saber que después del acuerdo todos somos angelitos? Este cuestionamiento lo responde uno de los ponentes del evento Felacfas donde resal-ta que para esto ocurra se deben crear condiciones para que la gente no tenga venganza, reconoc-er las diferencias del contrincante, hacer alianza para los que hacen la paz lo cual es muy cierto pero a la hora de ejecutar todas estas acciones en un país como Colombia es un poco complicado, es difícil hacer borrón y cuenta nueva ante esta situación de posconflicto donde hay miles de heri-das abiertas y lo único que se lograría es alargar cada vez más el proceso de paz que durante los últimos años se está realizando.

“El país no ha conocido la voluntad de paz de ninguno de los dos grupos, los colombianos seguimos despertándonos todos los días con minas antipersonales en las escuelas de Colombia (…) “con esta frase de Paloma Valencia está la clave de este dilema, no se ha conocido la voluntad de las partes que están a cargo del proceso de paz, todo el mundo habla, unos dicen sí es posible, hay firmas, hay desacuerdos, existe la presencia de otros países, pero entonces ¿ dónde está el propósito de todo esto? sí cada día por la televisión vemos que hay más muertes, más atentados, más violencia. ¿Dónde queda la voluntad de paz?

Columna de Opinión

I LOVECOOKING

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LUCESCÁMARA Y ACCIÓN

TELEVISIÓN

Se vale la pena soñar ...

“La posibilidad de realizar un sueño es lo que hace que la vida sea más interesante ”

Algún díallegaré ...

NOTA IMPORTANTE ....

Nunca hay que olvidar estos dos amores

Amor por la familia

AMORPROPIO

SONRÍE ES GRATIS

HECHO CON AMOR ALEJA