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Índice
PortadaDedicatoriaCapítulo1Capítulo2Capítulo3Capítulo4Capítulo5Capítulo6Capítulo7Capítulo8Capítulo9Capítulo10Capítulo11Capítulo12Capítulo13Capítulo14Capítulo15Capítulo16Capítulo17Capítulo18Capítulo19Capítulo20Capítulo21Capítulo22Capítulo23Capítulo24Capítulo25Capítulo26Capítulo27Capítulo28Capítulo29Capítulo30Capítulo31Capítulo32
Capítulo33Capítulo34Capítulo35Capítulo36Capítulo37Capítulo38Capítulo39Capítulo40Capítulo41Capítulo42Capítulo43Capítulo44Capítulo45Capítulo46Capítulo47Capítulo48Capítulo49Capítulo50Capítulo51Capítulo52Capítulo53Capítulo54Capítulo55Capítulo56Capítulo57Capítulo58Capítulo59Capítulo60Capítulo61Capítulo62Capítulo63Capítulo64Capítulo65EpílogoNotasCréditos
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ParaJud,Eric,MelyBjörn,porqueellosmehanhechoentenderquelascosasquemerecenlapenaenlavidanuncasonsencillas.
YparalasGuerrerasMaxwell,porrecibirmesiempreconlosbrazosabiertos.Milbesotes,
MEGAN
1
Calor...,¡madremía,quécalormeestáentrando!EricZimmerman,miamor,mimarido,mideseo,mitodo,memirajuguetón.Lagentenosrodeamientrastomamosunacopaenlabarradelatestadolocal.Estamosfelices.Laúltimarevisióndelosojosdemiamor,trasregresardepasarlasNavidades
en Jerez con mi familia, ha ido viento en popa. Su problema en la vista es una enfermedaddegenerativaqueseagravaráconelpasodelosaños,perodemomentotodoestácontroladoybien.
—Portiyportuspreciososojos,corazón—digolevantandomicopa.Mialemánsonríe,chocasucopaconlamíaymurmuraconvozronca,elmuyladrón:—Portiyportusmaravillososjadeos.Sonrío...,sonríe.¡Adoroamimarido!Llevamoscincoañosjuntosylapasiónquesentimoselunoporelotroesintensa,apesardeque
enlosúltimosmesesmigruñónfavoritoestédemasiadopendientedeMüller,suempresa.Eneste instante,Ericestáansiosodemí.Losé.Loconozco.Y,mientraspasea lavistapormis
piernas,veoelmorboensumirada.Esemorboquemeponeamilymehacedisfrutar.Séloquequiere,loqueanhela,loquedesea,yyo,sindudarlo,sentadaeneltaburete,selodoy.
Noquieroesperarmás.Conungestoerótico,mesubolafaldademisensualvestidonegroyabrolaspiernasparaél.Paramiamor.
Ericsonríe.¡Meencantasusonrisapícara!Y,antesdequepregunte,susurro:—Nollevo.Su sonrisa se amplía al saberqueno llevobragas. ¡Québribón!Entonces, tras acercarse amí,
paseasubocaporlamíaymurmuraponiéndomeacien:—Meencantaquenolaslleves.Segundosdespués,susmanosrecorrenmismuslosposesivamenteyconseguridad.Tiemblo.Mirespiraciónseacelera,micuerposeenciendey,cuandosientocómoesasmanosqueadorose
desplazanhacialacarainternademispiernas,cierrolosojosyjadeo.Eric sonríe..., yo sonrío y doy un pequeño saltito sobre el taburete cuando su dedo separa los
labiosdemivaginayseintroduceenmiinterior.¡Oh,Dios,cómomegustaquelohaga!Cierrolosojosextasiadaporelmomentoyeljuego.Esemorboso,calienteyapasionadojuego
que, ahora que somos padres, nos permitimos menos de lo que nos gustaría pero, cuando lohacemos,lodisfrutamosconfrenesí.
—Pequeña...Pequeña...¡Mmm!Mefascinaquemellameasí.
—Pequeña,abrelosojosymírame—insisteconsuvozroncacuandosacaeldedodemiinterior.Suvoz...Adorosuroncayfascinantevozconeseacentazoalemánquetiene,y,sinvacilar,hago
loquemepideylomiro.EstamosenelSensations,unlocalswingerdeintercambiodeparejasquefrecuentamossiempre
quepodemosydondedejamosvolarnuestrafantasíayalimentamosnuestrosmáslujuriososdeseos.Hemos quedado con Björn y Mel, nuestros grandes amigos. Unos amigos con los que
compartimos,ademásdeldíaadía,unapartedenuestramorbosaycalientesexualidad,aunqueentreMelyyonuncahahabidonada,nilohabrá.
Ericsemiraelrelojyyolomirotambién.Lasdiezyveinte.Veinteminutosderetrasoy,sindudarlo,miamorsacasumóvilconsuúnicamanolibre,puesla
otralatieneentremispiernas,haceunacortayrápidallamaday,cuandocuelga,dicemetiéndoseelteléfonoenelbolsillodelpantalónoscuro:
—Novienen.Nopreguntoelporqué,mástardemeenteraré.Sólo deseo disfrutar del placer que me ocasiona lo que la mano de mi amor hace entre mis
piernas,ymáscuandoloveomirarhaciaungrupodehombresyséloquepiensa.Sonrío.EnelSensationshaymuchosconocidosconlosquehemosdisfrutadodelsexo,perotambiénhay
desconocidos,loquelohacemásinteresante.Mefijoenunhombrealtodepelooscuroquetieneunabonitasonrisa,ysindudarlodigo:
—ElmorenodelacamisablancaqueestáconOlaf.Ericloobservaduranteunossegundos,séqueloanalizay,finalmente,congestopícaro,pregunta
antesdecogersucopa:—¿Élyyo?Asientomientras continúo sentada en el taburete.Me acaloro y, segundos después, elmoreno,
que,todoseadicho,físicamenteestámuybien,seplantaanuestroladotrasunaseñadeEric.Todoslosqueestamosallíentendemosellenguajedelasseñas,ydurantevariosminutoslostres
hablamos. Se llamaDennis y es amigo deOlaf. Y, aunque nosotros no lo hemos visto antes, noscomentaquehaestadoenellocalenalgunaocasión.
UnavezqueEricyyodecidimosquenosagradalacompañíadeaquélparaqueentreennuestrojuego,miamorponelamanoenunodemismuslosyDennis,sindudarlo,posalasuyaenmirodilla.Lamasajea.Soyconscientedecómomimaridoobservaloquehace,cuandolooigodecirentonoíntimo:
—Subocaessólomía.Dennisasiente,yséquehallegadoelmomentoquelostresestábamosbuscando.Sindudarlo,mebajodeltabureteyEricmeagarraconfuerzadelamanoymebesa.Echamos a andar hacia los reservados, y los gemidos gozosos y excitantes procedentes del
interiorcomienzanallenarmisoídos.Gemidosdeplacer,goce,gustazo,regocijo,éxtasis,felicidad,lujuria,diversión.Todos los que estamos en el Sensations sabemos lo que queremos. Todos buscamos fantasía,
morbo,desenfreno.Todos.Durante el camino, noto cómo la mano de Dennis se posa enmi trasero. Lo toca y yo se lo
permitoy, al llegar frente aunapuertadondehayuncartel enque se leeSALAPLATA, los tres nosmiramosyasentimos.Sobranlaspalabras.
Eslasaladelosespejos.Unasalamásgrandequeotrasdellocal,convariascamasredondasysábanas plateadas donde,mires a dondemires, te ves a timismo enmil posiciones gracias a losespejos.
Nosoynuevaenestopero,enelmomentodeentrarenunasala,micuerposeeriza,mivaginaselubrica,yséquevoyadisfrutarunabarbaridad.
Unavezdentrodelahabitación,comprueboquelaluzesmástenuequeenelrestodellocal,yvemosaotraspersonaspracticandosexo.Sexomorboso,calienteypecaminoso.Unaclasedesexoquemuchagentenoentiende,peroqueyoveocomoalgonormal,porquelodisfrutoyesperoseguirdisfrutándolodurantemuchotiempoconmiamor.
Nadamáscerrarlapuerta,miramosalosdoshombresyalamujerquesediviertenalfondodelahabitación.Oírsusjadeosysuscuerposchocaryliberarsees,comopoco,excitante.Ericmeagarraposesivamenteporlacinturaymurmuraenmioído:
—Enloquezcoalpensarenposeerteasí.Ufff...,¡loquemeentra!Llevamosjuntosvariosaños,peroelefectoZimmermansigueenmí.¡Mevuelveloca!Acaloradaporelmomento,sonrío.Sinsoltarmedelamano,Ericcaminahaciaunadelascamas
redondas,dondehayvariospreservativosy,alllegarjuntoaella,sesientaymemira.YomequedodepieanteélcuandoDennis,queestádetrásdemí,seacercaymeagarrapor la
cinturaparapegarmeasucuerpo.Suerección,atravésdelaropa,mehacesaberlomuchoquemedesea.Susmanossepierdenenel interiordemivestido.Metoca.Tocamispechos,mivagina,mitrasero,yEricnoscontempla.Lamiradaveladademorbodemiamorporloquevemevuelveloca.
Entonces,oigoqueDennisdiceenmioídoconsuparticularacento:—Megustaquenollevesbragas.Apenas puedo dejar demirar a Eric, que nos observa. Disfruta con lo que ve, tanto como yo
disfrutoconloquelasituaciónmehacesentir.Nuestracompenetraciónsexualnoshaceestarbien.Quemetoqueesehombreoqueotramujerlo
toqueaélenesosencuentrossexualesnonosencelaporquesiemprelohacemosjuntos.Esosí,fueradenuestrosjuegos,yeneldíaadía,loscelosantecualquieraquesimplementenosmireonossonríanoshacendiscutiracaloradamente.Somosraros,losé.PeroEricyyosomosasí.
Unavezharecorridoconlasciviamicuerpo,Dennissacalasmanosdedebajodemiropay,trasdesabrocharunfinocorcheteenellateraldemicintura,meabreelvestidoy,segundosdespués,éstecaeymequedocompletamentedesnuda.
Nibragas,nisujetador.Tengoclaroaloquevoyyloquequiero,¡olépormí!Losojosdemiamorseachinandedeseo,yyosonrío.Lomiroysientocómosurespiraciónse
aceleraanteloquemuestrosinningúntipodepudor.Sinperderunsegundo,selevantadelacamaycomienzaadesnudarse.¡Bien!
Primerosequitalacamisa.Madremía...,madremía...,cómomegustamimarido.
Conunasonrisitaquemecalientahastaelalma,sedescalza,despuéssedesabrochalospantalonesy,trasquitárselos,loscalzoncilloscaentambién.
AntemíquedamiDios,miamor,migilipollasparticular,ymeestremezcoalversuerección.SiestuvieraenFacebook,pondríaun«Megusta»muy...muygrande.NotoqueDennishacelomismoqueErichahechosegundosantes.Losientomoversedetrásde
míyséqueseestádesnudando.¡Bien,estoydeseandoquemehagansuya!Una vez los tres estamos desnudos, Dennis y Eric se colocan frente a mí, orgullosos de sus
cuerpos.Susgestoslodicentodoy,dandounpasoalfrente,mearrodilloanteellos,cojosusdurosytersospenesconlasmanosylospaseocondulzurapormimejilla.
Veocómoseestremecenanteloquehago,mientrasyopiensoqueenbrevesinstantesseránparamí,sóloparamí.
Segundosmás tarde, siento lamanodeEric enmi cabezay,después, ladeDennis.Ambosmemasajeanelcuerocabelludoanimándomeaquemimeloquetengoentrelasmanos.Poreso,primerounoydespuésotro,introduzcosuspenesenmihúmedaycalientebocaydisfrutodelmorboqueesaacciónmeprovoca.
Losnototemblar,tiritar,vibrarconloquemibocaymilengualeshacen,ymegusta.Mesientopoderosa.
Séqueeneseinstantesoyyolaquetieneelpoder,yasíestamosvariosminutos,hastaquesueltosusmásquedurospenes.Ericmehacelevantardelsueloparaquelomireysusurraexcitado:
—Dametuboca...,dámela.Lapeticióndemiamoresloquemásdeseo.Mibocaessuboca.Suya.Subocaesmiboca.Mía.Enelsexonosunimoshastasersólounapersona.Totalmenteentregadoamisdeseos,Ericchupa
mi labiosuperior,despuésel inferiory, trasdarmeunmordisquitoquemehacesonreír,murmuramientraslasmanosdeDennissepaseanportodomicuerpoyseintroducenentodoslosrecovecos:
—¿Tegusta,Jud?Asiento.¿Cómonovoyaasentir?De pronto, las manos de mi guapomarido y las de aquel extraño se unen y juntos me tocan
lentamentehastavolvermeloca.YentoncesoigoaEricdecir:—Dennis,siéntateenlacamayofrécemeamimujer.Elaludidohaceloquemiamorlepide.MehacesentarsobreéldecaraaEric.Meflexionalaspiernasy,traspasarlasmanosbajomis
muslos,meabreparaEric,yentonceséstedicesindejardeobservarme:—Despuésseréyoelqueteofrezcaaél.¿Deacuerdo,Jud?Asiento...,asientoyasiento.Enloquezcoconelmorboqueesomeocasiona.ConEricamilado,meencantaráserofrecidaa
quienélquiera.Unestremecimientomerecorreelcuerpoalsentircómomiamorseacerca,flexionalaspiernas
paraponerseamialturay,deunfuerteempellón,mepenetra.
Yogritodeplacer.Elsexonosgustafuertecitoy,parafacilitarnoselmomento,DennismesujetaconfirmezamientrasEricseaprietacontramíenbuscadeeseplacerextremoquenosenloqueceynoshaceserélyyo.
Mis pezones están duros, mis pechos se mueven a cada embestida de mi amor, y Dennis,encantadoconloqueve,dicecosasenmioídoquemeponenamilyquedeseoquehaga.
Sindescanso,Ericprosigueconsusembestidas.Siete...,ocho...,doce...Nuestrasmiradassefusionanyloanimoaquesiga,aquemeempale,aquemefollecomoséque
nosgusta,ylohace.Lodisfruta,lovive,losaborea,tantocomolohagoyo.Peroelplacermevaahacerexplotar,mientrasobservoelautocontroldemiamor.Apesardeestarposeídoporlaexcitacióndelmomento,Ericsiempremantieneelautocontrol.No
comoyo,quemedescontroloencuantolalujuriameposee.Porsuerteparamí,amboslosabemos,ytambiénséqueaéllegustaqueenesosinstantesyosealoca,desinhibida,excesivaeinsensata.
Sinembargo,eneltiempoquellevamosjuntos—apesardetodoydemicarácterespañol,quemehacesercompletamenteopuestaamialemán—,enciertomodoheaprendidoacontrolar,dentrodemidescontrol.Séqueesraroentenderloquedigo,peroesverdad.Amimodo,yacontrolo.
Eltiempopasa,misjadeossubenvariosdecibelios,yEric,enloquecido,meagarraporlacinturayme arranca demanos deDennis, por lo que quedo suspendida en el aire. No aparta su azuladamiradademí,ymemanejaasuantojosindejardeclavarseunayotravezenmiinterior.
¡Quéplacer!¡NadiesabeposeermecomoEric!Comopuedo,meagarroasucuello,aeseduroyfuertecuelloalemánquemevuelveloca.Uno...,dos...,siete...Todayovibro.Ocho...,doce...,quince...Todayojadeo.Veinte...,veintiséis...,treinta...Todayogritodeplacer.Elcalorquelasembestidasdemiamormeproducenmequemalasentrañas.Aloírmeyvermiexpresión,mimaridoenloquecededeleite.Losé.Lodisfruta.Lopongoacien.Sólotengoqueversumiradaparasaberquelegustaloqueve,loquesiente,loquedayloque
recibe. Y cuando, segundos después, mi chorreosa vagina tiembla por su posesión, tengoconvulsionesy,trasungritodegoceincreíble,miamorsabequehellegadoalclímax.
Gustoso,separaaobservarme.Legustavermiplacery,cuandoconsigoregresaramicuerpo,despuésdesubiralséptimocielo,lomiroconunasonrisaquemellenaelalma.
—¿Todobien,pequeña?—pregunta.Asiento...,nopuedohablar,yEric,queesconscientedeello,dice:—Adoro ver cómo te corres, pero ahora nos vamos a correr los tres, ¿de acuerdo, Jud?—
Asientodenuevo,sonrío,yEricmurmuramientrasmebesa—:Ereslomásbonitodemivida.Suspalabras...Sugalantería...Sumaneradeamarme,demirarmeodeseducirmemecalientadenuevohastaelalma.Él lo sabe y sonríe, me muerde el labio inferior y, al tiempo que mueve la cadera, vuelve a
profundizar enmí y yo vuelvo a gritar. La Judmalota ha aflorado y, clavándole los dedos en laespalda,susurrojadeantemientraslomiro:
—Pídemeloquequieras.
Esafrase...Esaspalabraslovuelventanlococomoamíy,deseosadequeenloquezcamás,insisto:—Folladmelosdos.Miamorasiente,ynotocómoletiemblaellabiodelujuriamientrasmisterminacionesnerviosas
sereactivanendécimasdesegundoytodasupotenciavirilmehaceentenderqueélysóloéleseldueñodemicuerpoydemivoluntad.
Condeleiteysinsalirsedemí,miamormiraaDennis,yoigoquedice:—Sobrelacamahaylubricante.Vamos,úneteanosotros.Aloíreso,mivaginasecontraeyrodeaelpenedeEric.Ahoraesélquienjadea.Dennisseponeunodelospreservativosquehayencimadelcolchón.Cuandoacaba,cogeelbote
delubricante.Yosigoempaladapormiamorysujetaasucuello.Ningunodelosdosnosmovemos,onopodríamosparar.Esperamosanuestrotercero.
Dispuestoadisfrutartambién,DennismedaunpardecacheteseneltraseroquepicanperoqueaEriclehacensonreír.Abreelbotedelubricantey,mientraslountaenmitraseroeintroduceundedoenmiano,diceparaquelooigamoslosdos:
—Mueroporentrarenestepreciosoculito.Eric y yo nosmiramos e, instantes después, mi amorme separa las nalgas yme ofrece a él.
DenniscolocalapuntadesupeneenmianoyEricmurmura:—Cuidado...,concuidado.El gruesomiembrodeDennis se introduce enmípoco apoco,mientras yo abro la bocapara
respirar comounpececilloyEric,mi controlador amor,meobservapara asegurarsedeque todoestábien.Nohaydolor.Mianoyaestádilatadoy, segundosdespués, losdosme tienen totalmenteempalada.Unopordelanteyotropordetrás.Esaposesión,depie,esalgonuevoparamí,algoquesólohehechounpardevecesy,cuandomiamorcomienzaamoverse,yogritodeplacerymedejoposeer.
Quieroquememanejen...Quieroquemehagangritardegustazo...Quierocorrermedeplacer...EricyDennissabenmuybienloquesehacen.Sabendóndeestáellímitedetodojuegoy,sobre
todo,sabenquesoyimportanteyqueanteelmásmínimodolorhandeparar.Peroeldolornoexiste.Sóloexisteelgoce,elmorboylasganasdejugar.—Notecorrastodavía,Jud—pideEricalvercómotiemblo.—Espéranos—insisteDennisamediavoz.Jadeo...¡Andaqueesfácilloquepiden!Micuerposerebela.¡Quiereexplotar!Elorgasmoenelinteriordemíquierereventardeplacer,perointentobuscarmiautocontrol,ese
que creo tener, y esperarlos. He de hacerlo. Sé que, llegado el momento, el éxtasis será másenloquecedor.Másdevastador.Másembriagador.
Durantevariosminutosnuestroinquietantejuegocontinúa.Tiemblo...Tiemblan.Jadeo...Jadean.
Micuerposeabrepararecibiraesosdosadonisconlujuria,ymedejollevarymanejar.¡Oh,Dios,cómolodisfruto!Cómomegustaloquemehacenycómomegustasentirmellenadeellos.Sí.Esoesloquequiero.Esoesloquemegusta.Esoesloquedeseo.Sindescansosemueven,buscansusatisfacción,medanplacer,jadeanyresoplanhastaqueambos
ycasialunísonodanunalaridoagónicoalclavarseenmí.Entoncesséqueelmomentohallegadoyporfinmepermitoexplotar.
Mi cuerpo se relaja, mi grito me libera y siento que los tres subimos al cielo de la lujuriamientras vibramos dentro de nuestro propio éxtasis. Sin lugar a dudas hemos conseguido lo quebuscábamos:morbo,lascivia,fantasíaysexo.Mucho...muchosexo.
Durantehoras,disfrutamossinlimitacionesdetodoaquelloquenosgusta,nospone,nosexcita,hastaque,trasunanocheplagadadevoluptuosidadysensualidadenelSensations,nosdespedimosdeDennis,yconfirmoqueesbrasileño.
Cuando salimos del local y caminamos hacia el coche, pregunto por nuestros amigosBjörn yMel.ErictuerceelgestoymeexplicaqueaBjörnlehanvueltoapiratearlawebdesubufete.Esomesorprende.Yaeslaterceravezenmenosdeunmes.Nuncaentenderéaloshackers.
¿Quégananhaciendoeso?AlastresdelamadrugadallegamosanuestracasaenMúnich.Estamosagotadosperofelices.Unavezmetemoselcocheenelgaraje,SustoyCalamar,nuestrosperros,vienena saludarnos
comosillevaranmesessinvernos.¡Quéexageradosson!—Estosanimalesnuncavanacambiar—protestaEric.Mialemánadoraanuestroscariñososbichitos,peroenocasionestantaefusividadloagobia.Haycosasquenocambian,yaunqueséqueEricyanopodríavivir sinellos, siempreprotesta
cuandolobabosean,poresoélsequedaenelinteriordelvehículomientrasyosalgoymedeshagoencariñosconnuestrasmascotas.
Deprontocomienzaasonarmúsicaenelinteriordelvehículoyyo,sinmirar,sonrío.Michico,milocoamor,sabequeadoroAquenomedejas,[1]lacanciónqueinterpretanmiAlejandroSanzyAlejandroFernández.¡Vayadostitanes!
Cuandooigoqueseabrelapuertadelcoche,loobservoycuchicheodivertidaalverlosalirdeél:—¿Quieresbailar,Iceman?Mirubiosonríe.Dios,¡québonitasonrisatiene!Estos tontosmomentos, estos bailecitos románticos que tantome gustan, no se repiten con la
frecuenciaquequerría,peromirandoamiamormedesahogocomouna tontaysonrío.Sinduda,cuandoquiere,Ericlohacemuy...muybien.
Me encanta cómo se acerca amí con su gesto serio,me pone a cien, y, obviando aSusto y aCalamar, recorre lenta y pausadamente mi cintura con sus grandes manos, me acerca a él ycomenzamosabailaresaincreíblecanción.
Rodeados por lamúsica, nosmovemos en el garajemientras nos comemos con a los ojos ytarareamosconunasonrisaaquellode«Aquenomedejas».[2]Sinduda,niyolodejo,niélmedejaamí.Discutimos,nospeleamosdíasí,día también,peronopodemosvivirelunosinelotro.Nosamamosdeunamaneralocaydesesperadacomocreoquenuncavolveremosaamaranadie.
Cuando la canción acaba,Ericme besa.Tiemblo excitada. Su lengua recorre el interior demibocadeformaposesivay,cuandodamosporfinalizadonuestroapasionadobeso,looigomurmurarcontramislabios:
—Tequiero,pequeña.Asiento...,sonríoy,extasiadaporlasincreíblescosasquemehacesentirsiemprequeseponetan
romanticón,murmuro:—Mástequieroyoati,corazón.Unaveznosrecomponemos,nosdespedimosdeSustoyCalamary,cuandoEricmedalamano
paraentrarencasa,digoquitándomelosaltoszapatosdetacón:—Dameunsegundo.Lostaconesmematan.Aloírme,mialemánsonríey,comosoyunaplumaparaél,mecogeentresusbrazosycomienza
a subir la escalera conmigo. Ambos reímos. Al llegar a la primera planta, Eric se para ante lahabitacióndeFlyn,abrelapuerta,lovemosdormirysonreímosorgullososdenuestroadolescentedecatorceaños.
¡Quérápidocrecenlosniños!HacenadaeraunserbajitodecaritaredondaypósteresenlasparedesdeljuegomangaYu-Gi-
Oh!,yahoraesunjovenlarguirucho,delgado,conpósteresdeEmmaStoneensuarmarioyesquivoconnosotros.Cosasdelaedad.
Después,vamosalahabitaciónquecompartenEricyHannahy,alabrirlapuerta,Pipa,lainternaquenosechaunamanoconellos,selevantadelacamaydice:
—Lostresniñosduermencomoangelitos.Ericyyosonreímos.Angelitos...,loquesediceangelitosnoson.Peronoloscambiaríamosporlosmejoresangelitos
delmundo.Conamor,miramosalpequeñoEric,queyatienecasitresañosyesuntrastoquetodolotocay
todo lo rompe,ya lapequeñaHannah,que tienedosyesunagran llorona,peronossentimos lospadresmásafortunadosdelmundo.
Unpar deminutos después,Eric y yo entramos ennuestra habitación, nuestrooasis particular.Allí nos desnudamos y vamos derechos a la ducha, donde nos mimamos y nos besamos conadoración.Luegonosacostamosynosdormimosabrazados,agotadosyfelices.
2
Alamañanasiguiente,cuandoEricmedespiertaymeanimaalevantarme,estoyhechaunoszorros.Vamosaver,¿porquéantespodíapasarmelanocheenvela,dejuerga,yahora,cuandosalgo,al
díasiguientemecuestatantoreponerme?Sinlugaradudas,ycomodiríamisuperhermanaRaquel,¡cuchufleta,laedadnoperdona!Yescierto.Hastahaceuntiempomicuerposerecuperabarápidamente,peroahora,cadavezquetrasnocho,
aldíasiguienteestoyfatal.¡Mehagomayor!Losniños,queyasehanlevantado,nosesperanconPipaySimonaenlacocina.Mientrasseviste,Ericmemiraydice:—Vamos,dormilona.Levanta.Yomiroelrelojyresoplo.—Perosisólosonlasnueveymedia,cariño.Atravésdemispestañas,veocómoélsonríeyseacercaamí.—De acuerdo—responde—. Sigue durmiendo, pero luego no te quejes cuando te cuente las
graciosaspedorretasquehaceHannaholasrisasdelpequeñoEricporlamañana.Pensarenellosmereactivaelalma.Sólopodemosdesayunarloscincojuntoslosfinesdesemana
y,comoadoroamisniños,melevantoymurmuro:—Vale.Espérame.Ericmeobservaysonríecuandocaminohaciaelbaño.Memiro al espejo.Mi aspecto dejamucho que desear: pelo revuelto, ojos hinchados y gesto
agotado. Aun así, en lugar de regresar de nuevo a la cama, me lavo la cara, los dientes y, trasrecogermelamelenaenunacoletaalta,vuelvoalahabitación.
—Quieromibesodebuenosdías—exigeEricmirándome.Encantada por su petición, lo beso, lo beso y lo beso y, cuandomi respiración se acelera, él
murmuramimoso:—Mesabemaldecirtequeno,perolosniñosnosesperan.¡Aisss, los niños...! Desde que tenemos niños y Eric está tan centrado en la empresa, nuestros
momentos locoscomoelde lanocheanteriorbailandoenelgarajecasi sehanesfumado,aunquecuandolostenemosson¡lomejor!
Meentralarisa.¿Porquémimaridomeponeacienacualquierhoradeldía?Conmiradadevíboradivertida,meseparodeélymepongorápidamenteunabata.Noeslomás
sexidelmundo,peroeslomássocorridoaestashoras.Unavezlistos,michicomecedeelpasoparaquevayadelantedeély,encuantosalimosdela
habitación,medaunazoteeneltraseroymurmuracuandoyolomiro:—Anochelopasamosbien,¿verdad?Asiento.—Túyyosiemprelopasamosbien—respondoenamoradadeélcomounacolegiala.Sonríe...,sonríoy,cogidosdelamano,nosencaminamoshacialacocina.Al entrar, Flyn, mi mayorzote, que ahora no da besos porque le parecen absurdos, protesta
cuandointentobesuquearlo.—Mamáaaaaaaaa,porfavorrrrrrrr—dicehuyendodemisbrazos.—Dameunbeso,quelonecesito—insistoparahacerlorabiar.Perominiño,queyaestáenplenaedaddelpavo,memiraydicecontonodereproche:—Jolines,¡paradeunavez!Sugestomehacereír.¿Dequiénhabrásacadoesecaráctergruñónyserio?FinalmentemeacercoamipequeñoEric,aesepequeñorubialesquealgúndíaseráuntipoduro
comosupadre,ymelocomoabesos.Él,aligualquesuhermanoFlyn,retiraelrostro.Nolegustaqueloachuchen,peroamímedaigual,¡loachuchodoblemente!
ConelrabillodelojoveoqueSimonayPipasonríen.Siguensinentendermicarácterespañoldebesuquearatodoelquepuedo.Unavezacaboconelniño,mevoyderechaaHannah,quealvermesonríe.
¡Melacomo!A pesar de que es una gran llorona, cuando Hannah no llora tiene la sonrisa más bonita del
planeta.Esmorenitacomoyo,perolatunantatienelamismaexpresiónintrigantedeEric,yesomeencanta.Meemociona.Mefascina.
Unavezheachuchadoamistrespequeñosamores,mesientoalamesadelacocinayFlyndice:—¡Menudajuerguecitatehaspegado,mamá!Tucaralodicetodo.Oíresomehacesonreír.¡Siélsupiera!Sinlugaradudas,miadolescentesefijaentodo,ymientrasEriccogeaHannahparabesarlacon
amor,respondo:—Cariño,sólotediré¡quemelopaségenial!—Ytú,papá,¿tambiénlopasastegenial?—veoquepreguntaFlyncurioso.Ericlomira.Sequedaestáticoy,alversugestodesconcertado,decidoresponderporél:—Tanbiencomoyo,Flyn.Telopuedoasegurar.Aloírme,mimaridomemira,sonríeyyoleguiñounojoconcomplicidadmientraslequitoal
pequeñoEricelchupetedesuhermana.Duranteunbuenrato,apesardequePipaySimonaestánconnosotros,Ericyyonosencargamos
dedardedesayunaranuestrospollitos.Sonadorables.PeromiinstintodemadrehacequeescaneeaFlyn,ymedoycuentadequemeobservatrassuspestañasoscurasylonotoinquieto.
Bueno...,bueno...¿Quéhabráhechoestavez?Desdehaceunosmeses,laactituddeFlynconrespectoalmundoengeneralhacambiado.Sepasa
mediavidapegadoalteléfonomóvilyalordenadormientrasinteractúaconlasredessociales.Eso
sacadesuscasillasaEricyenocasionesdiscuteconél,peroFlynsiempresesaleconlasuyaysigueconsuscosas.
Sinembargo,mientrasdoydedesayunaralpequeñoEric,soyconscientedequealgopasa,ysumiradamehacesaberqueocultaalgo.
Concautela,observoamimarido.Porsuerte,estátanensimismadoconlaspedorretasdeHannahmientrasledalapapillaquenosehapercatadodelamiradadeFlyn.
Lacucharaque tengoen lamanosemecae.ElpequeñoEric,Superman,como lo llamasu tíoBjörn,mehadadounmanotazoy,traspellizcarleelmoflete,melevantoacogerunacucharalimpiaantesdequeSimonaoPipameladen.EsomeofrecelaoportunidaddeacercarmeaFlyn.
—¿Quétepasa?—cuchicheo.Élnomemira,peroresponde:—Nada.—¿HasdiscutidoconDakota?El gesto de Flyn se ensombrece. Dakota es su novieta, una niña encantadora, compañera de
colegio.—Dakotayaespasado—replicaélentonces,sorprendiéndome.Yolomiroboquiabierta.—Pero...pero,cariño,¿quéhapasado?Flynmemira como si fuera un bicho raro. Seguro que piensa que soy la última persona del
universoalaquelecontaríaloquehapasadoconsunovieta.—Nada—responde.—Pero,Flyn...—Mamá...,noquierohablardeello.Dakotaesunasosa,unaestrechay...—FlynZimmerman—locorto—.¿Cómopuedesdeciresodeesachicatanencantadora?Lamadrequeloparió.Estrecha,diceelmocoso.¡Hombres!Y,cuandovoyaañadiralgomás,aclaracongestoserio:—Paratuinformación,ahorasalgoconElke.—¿Elke?—preguntodenuevoperpleja—.¿QuiénesElke?—Joder...—Eh...,¿hasdicho«joder»?—protestodispuestaaregañarlo.—¿Quécuchicheáisvosotrosdos?—oigoentoncesquepreguntaEric.Flynyyolomiramosalunísonoy,conelmayorgestoinocente,decimosalavez:—Nada.Sin apartar los ojos de nosotros, Eric sonríe y, antes de meterle a Hannah otra cucharada de
papillaenlaboca,murmura:—Vosotrosyvuestrossecretitos.Me hace gracia su comentario. Tiene razón. Aunque Flyn ya nome cuenta tantas cosas como
antes,síqueesciertoqueveenmíunprimerapoyoyeso,aunqueaEriclegusta,séqueenelfondoleescueceunpoquito.
Unavezhemosterminadodedarleseldesayunoalosenanos,Flynmemiraypregunta:—¿Nosvamos?
Supreguntamehacesonreír.Los sábados por la mañana es nuestro momento de salir con las motos y divertirnos por el
campo,porloquemiroaEricydigo:—¿Tevienes?Miamormeclavasumirada.DespuésmiraaHannahyaEricyfinalmentedicealvercómoFlyn
desaparecedelacocina:—Hoyno.Tengoqueatenderunpardellamadasde...—¡Essábado,Eric!—protesto—.Hoynotrabajas.Mimaridosonríeyaclaraponiendolosojosenblanco.—Seráalgorápido,cielo.Además,prefieroquedarmeconlospequeños.Asiento.Noentiendoquedebaseguirtrabajando,perosíquedeseeestarconlosniños.Yoestoy
todalasemanaconellosysalirelsábadoporlamañanaconlamotomedesahoga.Leguiñounojoamichicarrónydigo:
—Deacuerdo.Flynyyonosvamos.Pipamesustituye rápidamenteconelpequeñoEric,mientrasqueelEricmayormecogede la
mano,meparay,mirándomeconseriedad,dice:—Tenedcuidado.Asiento.Leguiñounojoycorroamihabitaciónparacambiarme.Alllegarallí,sacomiequipodemontarenmoto.Comosiempre,melopongoconunasonrisaen
labocay,cuandomeajustolasbotasycierrolosbroches,miimpacienciaestremenda.Cuando acabo, bajo los escalones de dos en dos y corro al garaje. Allí ya me espera Flyn,
equipadoconsumonoazul.SaludoaSustoyaCalamar,yluegodigomirándoloaél:—TienesquecontarmequiéneslatalElke.—Paso.Su pasotismo últimamente me tiene un poco mosqueada, pero como quiero reírme con él,
cuchicheo:—¿AcasoElkenoesestrecha?SumiradaaloZimmermanmetraspasa.—Vale...,vale...—suspiro—.Esoescosa tuya,peroalmenosmecontarásquéhaocurridocon
Dakota,¿no?Sincontestar,Flynseponeelcascoy,mirándome,pregunta:—Hoyquenovienepapá,¿vamosalapista?Esohatenidogracia.CuandoEricnosacompaña,solemospasearconlasmotosporelcampoy
hacerpocaslocuras.Seponeenfermosinosvecorrerriesgos.Perocuandoélnoviene,Flynyyonosacercamoshastaunapistacercanademotocrossparadesfogarnos.Miniñonoestanosadocomoyo a la hora de saltar, pero algún saltito que otro da, y yo lo aplaudo cuando veo su cara desatisfacción.
Una vez nos subimos a lasmotos, salimos del garaje, saco elmando que abre la cancela delbolsillodemicazadoradecuerorojayblancay,trasaccionarlo,observocómolaverjaseabre.
Con voz de ordeno ymando, regaño a Susto. El muy tunante ya quiere salir corriendo, perocuandooyequelegrito,sesientajuntoaCalamarynosemueve.¡Quélindoes!
Flynyyodamosgasysalimosdelaparcela.Nosdetenemoshastaverquelaverjasehacerradoylos perros se quedan dentro y, después, aceleramos a todamecha para dirigirnos a una explanadacercana.Duranteunbuenrato,disfrutamosconlasmotosporelcampo,hastaquenosacercamosalapistademotocross.Allí,comosiempre,disfrutoymedesfogo.Lonecesito.Estartodalasemanaconlosniñosencasamegeneraunestrésquenoledeseoanadie.
Adoroamishijos.Noloscambiaríapornadadelmundo,peromegustaríaqueEricentendieradeunavezpor todasquenecesito trabajar.Elproblemaesque siempreque lomenciono terminamosdiscutiendo.Raro,¿verdad?
SegúnEric,nomehacefalta.Élmelodatodo,peroyonoquieroeso.Yoquierohaceralgomásquecriarniños.Trasnuestraúltimadiscusiónal respecto, la fecha topeque lediparacomenzaratrabajarseestáacercando,ymeimaginoquevolveremosatenerunabuenapelea.Lointuyo.
Agotadatrasdarvariasvueltasporlapistaysaltarobstáculos,finalmenteparolamoto,mequitoelcascoyesperoaFlyn.
Unavezestáamilado,hacelomismoqueyo,yentoncesabrounapequeñamochilaquellevoalaespaldaysacounasbotellitasdeagua.Estamossedientos.Unavezsaciadalased,meapoyoenlamotoypregunto:
—Muybien.Cuéntame,¿quéhapasadoconDakota?Mihijoresopla—esoselohepegadoyo—,yalverquenolequitolavistadeencima,responde:—Dakotaesunacría...,esoes todo.—Surespuestamesorprendey,cuandovequevoyadecir
algo,añade—:Y,sinoteimporta,nomeapetecehablardeello.—Puesmeimporta—replicoconsequedad.Lomiroalaesperadequemelocuentecuandoelmuysinvergüenzasuelta:—¡Joder,mamá!Esmividaprivada.Molestaporsutono,másqueporlapalabrota,contesto:—Es la segunda vez esta mañana que dices una palabra que nome gusta, peromenosme ha
gustadoel tonitoquehasempleado.Si tepreguntoporDakotaesporque laconozco,esunabuenaniñay...
—Yamíyanomegustaporquemeaburre.¿Quéquieresquetediga?Vale..., está claro que Dakota es pasado. Me apena. Es una chica encantadora y me gustaba
bromearconella.Peroquieroentenderloqueocurre,asíqueinsisto:—Muybien.NohablemosdeDakota.¿QuiénesElke?Porque,queyorecuerde,nuncateheoído
mencionaresenombre.ElgestodeFlynsesuavizay,conunamediasonrisa,murmura:—Elkeesincreíble.Esguapa,divertidayestábuenísima.Eltérminomedejaalucinada,peroprocuroserprecavidacuandopregunto:—¿Hallegadonuevaesteañoalinstituto?—No.—¿Entonces?—Estárepitiendocursoy,antesdequepreguntes—diceelmuysinvergüenza—,loestáhaciendo
porquesuspadressesepararonelañopasadoyellanolollevóbien.Vercómoladefiendemehacesonreír,yfinalmente,trasdaruntragodeagua,murmuro:
—Flyn,mepreocupoportiporquetequiero.Elcríoasiente.Nosonríecomootrasvecesy,sinimportarlemimomentosensiblero,seponeel
cascoydicesinmirarme:—Meparecemuybien.Oye,¿quétalsitevasadarunossaltosyregresodentrodeunahora?—¡¿Qué?!MievidentesorpresaporquequieraquitársemedeencimahacequeFlynañada:—Mamá,megustaríairconlamotoaveraElke,peronoquieroquevengasconmigo.Yanosoy
uncrío,ynonecesitounaniñera.Anda,mimadre,¡miraelmayor!Oíresomehacegracia,peronoestoydispuestaadespegarmedeélcuandovaconlamotooEric
podríadespellejarmeviva,asíquerespondo:—Pues lo siento, guaperas, pero cuandovas enmotoyo soy tu sombra.Si quieresver aElke,
vamosacasa,tecambiasderopa,dejaslamotoy...—¡Joder,quécortarrolloseres!Sufaltadetactomeincomoday,sujetándoleelbrazo,loobligoaquemepresteatención.—¡Teestáspasando!—siseo.—Vamos...,noseaspesadita.Su contestación vuelve a molestarme. Desde que comenzó en el nuevo instituto, Flyn está
cambiando.—Oye,mocoso...—gruñoenfadada—.¡Hazelfavordetenerunpoquitodeeducaciónconmigo,
quesoytumadre,nouncolega!Pero¿quénaricestepasaúltimamente?Notolatensióndesucuerpo.Conozcoesamiradaretadora.Malo...,malo...Y,singanasdeliarla
más,mepongoelcascoydigo:—Vamos,regresemosacasa.Seacabóelmotocrossporhoy.
3
Ellunes,cuandoEricsevaatrabajaryFlynalinstituto,misemanacomienzadenuevo.Niños...,niños...,niños...¡Mesalenlosniñosporlasorejas!Cualquieraquemeescuchecreeráquesoyunamalamadre,peroseequivoca.Cuido,mimo,besoyadoroamispequeños,perosientoquenecesitohaceralgomásqueesoo
mevolveréloca.Esanoche,comotengoganasdeestarconmirubioalemán,preparounacenitaespecial.Loaviso
paraquenolleguetardeymerespondequeregresarápronto.Sinembargo,alasdiezdelanoche,cansadadeesperarlo,conlacomidatiesaytrashabermebebidoyosolitaunabotelladechampándepegatinasrosa,memetoenlacamaymeduermo.Esmejorasíporque,comoveaaesegilipollas,lomataréporelplantón.
Aldíasiguiente,cuandome levanto,Ericyasehamarchadoymehadejadounanotasobre lamesaquedice:
Perdóname,pequeña...,pero fue imposibleescaparme.Yestabas tanpreciosadurmiendoque fuiincapazdedespertarte.Tequiero,miamor.
Tugilipollas
Cuandolaleo,sonrío.Cómomeconoceysabequelohabréllamadoeso.Porsuerte,tengounaincreíbleamigaquesepreocupapormítantocomoyoporella.EsMel,la
mujerdenuestroamigoBjörn.Lallamocuandomelevanto,quedamosynosvamosdecompras.Ellasehaquedadoenparo tras trabajarunosmesesenunestudiodediseñográfico,yestá tan
aburrida como yo de estar en casa. Estoy pensando enEric y en cómome dejó colgada la nocheanteriorconlacenaencimadelamesacuandoMelmemuestraalgoypregunta:
—¿Quétepareceéste?Suvozmehaceregresaralarealidady,alverloquemeenseña,pregunto:—¿Enfermera?Mel,divertidayconpicardía,bajalavozymurmura:—Séqueesmuytípico,peroparaloquenosvanadurarpuestos,¿quémásda?Sonrío.EldisfrazesparaunafiestaquecelebranenelSensationsdentrodeunosdías.Cojootros
quellamanmiatención.—Oye...,¿ysivamosdeángelydemonio?—propongo.Melsueltaunarisotaday,dejandoeldeenfermera,afirma:—Mepidoeldedemonio.Megustasermalignaeirreverente.Entre risas nos los probamos. El vestido rojo y negro, los guantes negros hasta el codo, los
cuernosyel tridentesonparaMel,yelvestidoy losguantesblancos, laaureolaen lacabezay lavaritablancasonparamí.
¡Peroquémonasestamos!Divertidas,nosmiramosalespejoyMeldice:—Siaestolesumamosunasbotasaltas,lastuyasblancasylasmíasrojas,yasomoslaperversión
total.—Parecemosdoszorrones—murmuroalmirarnos.—Peroconclase—diceMelriendoyrevolviéndosesucortopelo.—Muuuchaclase—afirmoyodivertida.—Uf...,cuandomeveaBjörn...Conloquelegustaquemedisfrace...Ambas reímosmientras imagino la cara de Eric cuandome vea vestida de angelito. ¡Le va a
encantar!Estámaldecirlo,peroestoytremendamentemorbosaysexiconestetrajecitocorto.Einclusolos
kilitosquemeagobianenocasionesyquesehanquedadoenmicinturaparecequevanmuybienconestedisfraz.
Trasescogernuestrostrajes,rápidamenteelegimoslosdenuestrosmaridos.Elloslohanqueridoasí,ydecidimosdisfrazarlosdebomberoydepolicía.
¡Québuenorrosvanaestar!Cuandoacabamosdecomprarysalimosdelincreíblesex-shop,cogemosmicoche.—¿DeverdadqueEricvolvióadejartecolgadaconlacena?—preguntaMel.—Como lo oyes. Cada vez pasa más a menudo. Y, ya para colmo, encima, cuando me he
levantado tenía una notita suya pidiéndome disculpas y ya se había ido. Pero ¿es que ese hombrenuncadescansa?
Melresoplayseretiraelflequillodelacara.—Mira,Jud—dice—,tantoEriccomoBjörnsondoshombresambiciososensusempleosy,por
muchoquenosjorobe,sondelosquesellevaneltrabajoacasa.—Odiocuandohaceeso—afirmomolesta.—Yyo.Pero,comoloquiero,¡losoporto!Oír esomehace sonreír, apesardequeenelúltimoaño la empresa lohaabsorbidomásque
nuncay,aunqueyoledigoqueeldineronossobra,Ericnomeescuchaysiguetrabajandocadadíamás.
—¿Sabes?—oigodecir aMel—.Yo tengounacenitano séquédíacon losmuermosesosdeldespachodeabogadosalqueBjörnquierepertenecer.
—¡Uf,quépesadez!—murmurocompadeciéndola.—Creoquenohaynadamássoporíferoqueeso.—Sí, mujer, sí —me mofo—. Las cenitas que tengo yo de vez en cuando con los aburridos
hombresdenegociosdeMüller.Ambassonreímos.Sinduda,cenarcondesconocidosoconpersonasconlasquenotienesmucho
feelingymantenerlasformasespesadísimoycomplicado.Depronto,el teléfonomóvildeMelsuena.Laoigohablarduranteunossegundosy,cuandolo
apaga,dice:
—EricyBjörnestánjuntos.—¿Yeso?—preguntosorprendida.—Alparecer,Ericyél teníanquehablarde temaslegalesdeMüllerynosesperanparacomer.
¿Quéteparece?—¡Perfecto!—Sonríofelizporsaberquevoyaveramiguapomarido.—Muy bien, pues he quedado con ellos a la una y media en La Trattoria de Joe. Pero antes
tenemosqueirarecogerelvestidoquemehecompradoparaelbautizodelosbebésdeDexter.Portanto,pisaelacelerador,queno llegamos,yyasabesqueaestosalemanesno lesgustacomer tantarde.
Mientrasconduzcopor lascallejuelasdeMúnich, le comentoaMel loquemeestáocurriendoconFlyn.
—Nome tomes amal loque tevoy adecir—contesta—,pero siemprehe creídoque tanto túcomoErictenéisdemasiadosobreprotegidoymimadoaFlyn.Esunniñoque,antesdedecirloquequiere,yaseloestáisdando.Sehaacostumbradoasalirsesiempreconlasuya,yahora...
—Ahoraseestápasandoconnosotros.Enespecial,conmigo—finalizoyolafraseconscientedequemiamigatienerazón.
—Serébrutaychapadaalaantigua,oquizáesqueenelejércitoheaprendidodisciplina,perounbofetónatiempoevitamuchastonterías,¿nocrees?
—No...¿Cómolevoyapegar?Melsuspira.Yoresoplo,yfinalmenteelladice:—Mira,Jud,entiendoquedarleunguantazoaunmuchachoqueyaesmásaltoquetúnodebede
sermuyagradable,peronopuedespermitirquesesigapasandocontigo.—Nisemeocurriríapegarle.—¿Ericsabelomalquetehabla?—Niegoconlacabezayellapregunta—:¿Yporqué?—PorqueErictienemuchotrabajoynoquieroagobiarlomásdeloqueestá.Peroúltimamente
estoyvolviendoaverenFlynalniñotiranoqueconocíhaceañosyquemelohizopasartanmal,yesomeasusta.
Melmetocalacabeza.Sabequesoyunamujerfuerte,peroparalosniñossoyunasensiblona.—Eres lamejormadre que Flyn podrá tener en la vida—murmura—, y esemocoso coreano
alemánalgúndíasedarácuenta.Esonuncalodudes,¿vale?Asientoysonrío.CuandollegamosalatiendadondeMeltienequerecogerelvestido,selopruebaenseguida.—Tequedadeinfarto.Melesunpibóndetía.Esmásaltaqueyo,ysucuerpoestáperfectamenteproporcionado.—¡Quéenvidia!—mascullomientrasobservosucintura.Ellamemira,levantalascejasypregunta:—¿Envidiadequé?Mepongoenpiejuntoaella,mecolocodeperfily,levantándomelacamisa,murmuro:—TraslacesáreadeHannah,nomequitoestamorcillita.Loskilossenieganamarcharsehagalo
quehagay,claro,luegoveoesasfotosdefamosasque,reciénparidas,parecequeestándepasarelaymepreguntocómolohacen.
—Miraqueeresexagerada—replicaella,ponelamanoenmihombroyañade—:Puesquesepasqueyoteveoestupenday,encuantoaesasfamosas,imaginoquehabrádetodo,lasqueseoperanylas que por gracia divina se recuperan en un abrir y cerrar de ojos. Pero, asúmelo, las humanassomosaquéllasalasquetrasunembarazonosquedanestrías,tripita,etcétera,etcétera.
Suspiroysonrío.—Tienes razón. Perome da tanta envidia contemplar esos posados recién paridas y verlas tan
estupendas...—Fotoshop,querida...¡Fotoshop!Ambasnospartimosderisaporesaincreíbleverdady,trasmirarmealespejo,admito:—LociertoesqueaEriclegustamimorcillita.Leencantatocarlaymofarsedequeélysóloél
hacreadoesanuevacurvaenmicuerpo.—Puessiestáencantadoconello,¡notemartirices!Eso me hace sonreír. En ocasiones, las mujeres nos preocupamos por verdaderas chorradas
cuandohaycosasmásimportantesyterriblesenlavidaquepordesgracianotienensolución.—Tienesrazón—digoencogiéndomedehombros—.¡Vivamimorcillita!CuandoMelpagaelvestido,salimosdelatiendayrápidamentecogemosmicoche.Consoltura,
conduzcohastallegaralrestaurantedondeestánnuestrosmaridos.Alentrarenla trattoria, losveosentadosalfondo.Sinduda,sonunadeliciapara lavista.Uno
rubio y otromoreno, a cuálmás guapo y atractivo.Al vernos, ellos se levantan y sonríen.Comosiempre, tanto Mel como yo somos conscientes de que las miradas de las mujeres se clavan ennosotrasy,comosiempretambién,disfrutamosdelasatencionesdenuestrasparejas.
Ericmeretiralasillaparaquemesiente,mebesaenelcuelloypregunta:—¿Siguesenfadadaconmigo?Yolofulminoconmicarade«tevoyamatar»y,cuandosesienta,murmuroconunasonrisa:—Gilipollas.Aloírme,miamorsonríe.Cadadosportresmedicequesoyunamalhablada,peroenmomentos
comoéseselotomatanarisacomoyo.Pobrehombre...,nolequedaotra.Cuandoelcamarerovieneatomarlacomanda,decidocomenzarconunaensalada.Sorprendido,
puesloverdenoeslomío,Ericmemira.—Tienescrostinidemozzarellaytomatessecos—dice—;¿noquieres?—Yoniegoconlacabeza
yEricinsiste—:Jud,cariño,¿porqué?Sinnecesidaddehablar,meseñalo lamorcillitaque indiscretamentesemarcaenmi tripa,yél
sonríeymiraalcamarero.—Porfavor—dice—,cambielaensaladademimujerporunoscrostinidemozzarellaytomates
secos.Lomiroboquiabierta.Voyaprotestarcuandoélmebesaymurmura:—Erespreciosa,pequeña.Esonuncalodudes.Sonrío.Esquemelocomeríaabesosdeloguapoqueesy,sinimportarmequiénnosmire,me
acercoaélylobeso.Amo,adoro,mueropormiamor...Ericseseparaentoncesdemíyañade:—Porcierto,aunariesgodequememates,antesdequesemeolvide,estatardetengounparde
reunionesynoséaquéhoravoyaterminar.Portanto,nomeesperesparacenar.—¡¿Otravez?!—Jud,¡estrabajo,nodiversión!—respondemolesto.¡Mierda!Cómomejorobaquemedigaeso.Vale...,serel jefazoydueñodeunaempresaexitosacomoMüllerrequieremuchashoras,pero
¿porquénodelegaunpoquitoenotraspersonascomohacíaantes?YoquieroqueEricmeprestelamismaatenciónquealprincipiodenuestrarelación,soyasíde
románticaytonta,peronada,¡imposible!Yahora,conlosniños,nuestrotiemposolosselimitacadadía más y más. Sin embargo, como no tengo ganas de protestar como en otras ocasiones,simplementedigo:
—Deacuerdo.Ericmevuelveabesaryyo,quenoquierodesaprovecharesemomento,lodisfrutoysonrío.Durante la comida los cuatro bromeamos y hablamos de nuestros hijos. Sin duda, es el tema
estrellaentrenosotros.BjörnyMelhablandeSami,ynosotros,deFlyn,EricyHannah.Sialguiennosgrabaramientraslohacemos,luegonospartiríamosalverlascarasdetontosylasrisasquenosechamosacostadeellos.
Acabadoslosprimerosplatos,elcamareroseloslleva,ydeprontooigoamiespalda:—Eric...EricZimmerman,¿erestú?Oírlavozdeunamujermencionandoelnombredemimarido,mehacemirarcuandoveoami
alemánvolversey,trasunsegundodesorpresa,murmurarmientrasselevanta:—Ginebra.Seabrazanyyolosobservo.¿Quiénesesamujermorena?El abrazo es demasiado largo parami gusto. Si hago yo eso con un tío que Eric no conoce,
explota. Aun así, sin ganas de polemizar, sonrío mientras su gesto me sorprende. Su sonrisa, aexcepcióndeconmigo,pocasvecesestanamplia,ysumanerademiraraesamujermeincomoda.
Pero¿quiénesella?La escaneo en profundidad:morena, de edad parecida a la de Eric, pelo largo como yo, alta,
delgada, estilosa a la par que sexi, con unos ojos verdes impresionantes y, por supuesto, sinmorcillita a la vista. Sin lugar a dudas, es unamujer muy guapa, vamos, de esas que ves en losanunciosdetelevisión,ymejodedecirquesinFotoshop.
Estoyobcecadamirándolacuandooigoquemiamorpregunta:—Pero¿quéhacesenMúnich?—Trabajo.—TehacíaenChicago.¿CómoquelahacíaenChicago?Pero,vamosaver,¿quéesesodequelahacíaenChicago?Lamujerlevantaunamanoy,tocándolelamejillaamialemán,murmura:—Ay,Eric...,québienteveo.—Yyoati,Gini.¡¿Gini?!¡¿Gini?!Uf...,comienzaapicarmeelcuello.Losdossemiran...,semiran...,semirany,cuandoestoyapuntodearmarlamarimorena,oigoa
latalGinebrasusurrar:—Bollito...Bueno...,bueno...,bueno...¡¿«Bollito»?!¿Lohallamado«bollito»?¿Cómoque«bollito»?Y,actoseguido,condemasiadafamiliaridad,añadeconvozseca:—Cuántomeheacordadodeti,miamor.¡Meda!Ay,quemedaunjamacuco.¿Quéesesodequesehaacordadodeélydellamarlo«miamor»?ObservoaEric.Sumiradaintensameenferma.Élysusmiradas.Vale...Vale...Vale...Respira,Judith...,respira,queteconozcoy¡aquíardeTroya!Miniveldetoleranciaseresquebrajaporsegundosydeprontosientoqueesosdosmetocanlos
ovarios,pornodecirotracosamásvulgar.Meacaloro.Mepicaelcuello.ElcorazónmevaamilcuandonotolamanodeMelpordebajodelamesa.Ellasabeloquesientoeneseinstante,yconlosojosmepidetranquilidad.Poreso,conunamás
quefalsasonrisa,lamiroparahacerlesaberqueestoybien,jodidaperobien.Tras unos segundos en los que aquellos dos se contemplan, se sonríen y se comunican con la
mirada,yquesemehacenterriblementeinterminables,Ericsevuelvehaciamíydice:—Ginebra,quieropresentarteamimujerJudith.¡¿Cómo?!¿Porquénodiceahoraaquellode«preciosayencantadoramujer»comohacesiempreantetodo
elmundo,enespecialconloshombres?Uf...,uf...Misojosnegrosylosojosverdesdelamujerconectan,cuandodeprontoellacambiatotalmente
su gesto y su actitud y, llevándose lamano a la boca, dice, al tiempo que se aparta de Eric paraacercarseamí:
—Ay,Diosmío,perdón...Perdón...,nosabíaqueEricestuvieracasado—y,cogiéndomelamano,insiste—:PorDios,Judith,nohequeridoincomodarteconmisdesafortunadoscomentarios.
Mi corazón bombea con fuerza y, sin querer recrear la matanza de Texas en ese restaurante,intentoesbozarunasonrisa.
—No,nopasanada—murmuro.—Claroquepasa—insisteella—.Mesientoavergonzada.Laclaridaddesuspalabrasmehacesonreíry,bajandominiveldecabreo,afirmo:—Deverdad,Ginebra,nopasanada.Actoseguido,Ericmeagarraporlacinturaymeacercaaél.—Ginebra—dice—,Judithestodoloqueunhombrequerríaparasíy,porsuerte,yolaencontré,
laenamoréylaconvencíparaquesecasaraconmigo.Esadeclaracióndeamormehacesonreírdenuevo.Dios...,¡quétontasoy!—EllossonBjörnyMel,unosbuenosamigos—presentaEric.
—Encantada —dice sonriendo la tal Ginebra y, a continuación, pregunta—: ¿También soispareja?
TrasagarrarlamanodeMel,Björnasienteyafirmabesándolelosnudillos:—Sinlugaradudas.Melsonríe.YotambiénlohagocuandoGinebra,volviéndosehaciaunamujerrubiaqueespera
pacientementetrasella,dice:—EllaesFabiola,meayudaenlaproductora.—¡¿Productora?!—exclamaEric.—Sí...,sí...,¡lologré!—aplaudeellamirandoamiamor—.Tengomipropiaproductora.—Siemprefuistedecididayemprendedora—murmuramigilipollasparticular.Ellaasiente,saca
desubolsounatarjeta,queleentrega,yEricafirma—:Teníasclaroloquequeríasyfuisteaporello.Esosiempremegustódeti,Gini.
¿Queesosiemprelegustódeella?Oy...,oy...,oy...¿Aquecojolacopadevinoquetengodelanteyselaestampo?Pero,comonoquierovolveracabrearme,sonríocuandoEricpregunta:—¿HavenidoFélixcontigo?—Porsupuesto,perohaidoavisitarauncolegadeunadesusclínicasveterinariasmientrasyo
hacíaunascompras—diceGinebrariendoeindicandounasbolsasquellevaenlasmanos.Todossonreímosyentoncesellavequeunhombrelehaceseñasydice:—Tengo que dejaros. He de cumplir un encargo de mi marido. —Y, mirándome a mí
directamente,pregunta—:¿Comemosotrodía?Yoasiento,yEricledaunatarjetadelaempresa.—Llámameycomeremos—ledice.Ginebracogelatarjetaylamira.—¿PresidenteydirectordeMüller?—pregunta.Ericasiente,yellamurmuraacontinuacióncon
unaencantadorasonrisa—:Creoquetenemosquecontarnosmuchascosas.—Sinduda—afirmaEric.Denuevosonrisitastontascuandolamujermemiraydice:—Hasidounplacer,Judith.—Lomismodigo.Instantesdespués, semarchacon la rubiadetrásdeellay, cuandoveoqueEric la siguecon la
mirada,preguntomientrasmesiento:—¡¿«Bollito»?!Björnsonríe,Meltambién,peroEric,quemeconoce,nolohace.—¿QuiénesGinebrayporquénuncamehashabladodeella?—insisto.—Uy...,uy...,uy...,querecojanloscuchillos,quemeconozcoaestaespañola—semofaBjörn.—¡Cállate,tonto!—protestaMel,queimaginoquepiensalomismoqueyo.Ericsonríe—¡¿aqueledoyunsopapo?!—,yBjörnpreguntaentonces:—¿EslaGinebraquecreo?Mimaridoasientey,alverquelomiroalaesperadequemeaclarequiénes,responde:—Ginebrafueminoviadurantemisañosdeestudianteenlauniversidad.
—Anda...,quéinteresante—memofo.Aloírmitono,Ericdejadesonreírysisea:—CreoqueFernandofuetunovioduranteunosaños.Esomehacesonreírconmaliciaamí,yrespondo:—Nofueminovio,ysiempresupistedeél.Nuncateoculténada.—Niyoati.—¡Ja!Permítemequemería,¡bollito!,peronuncahabíaoídohablardeGini—replicoconsorna.VeoqueBjörnyMelsemiran.Estánempezandoasentirseincómodos,yelladice:—Hayapaz.Todostenemosexennuestrasvidas,¿no?—Sí,perolosmíos,cuandomeven—añadohiriente—,nomellaman¡«bollito»!,nimedicenlo
muchoquesehanacordadodemí,ymuchomenosyolosmiroconcaradeatontada.Eric,alqueleestoytocandolasglándulas,yselassétocarmuybien,memiracongestoserio.—Ginebrafue lanoviaconlaquehicemiprimer tríoyconocíelmundoswinger—explica—.
Despuésdeaquello,conocióaFélix,semarchóaviviraEstadosUnidosconélyfindelahistoriahastahacediezminutos,quenoshemosvistoporprimeravezenmuchosaños.¿Algomás?
Ese«¿Algomás?»mehacesaberque,sisigo,voyaarruinarlacomida.Asípues,miroelplatoquetengodelante,sonríoymurmuro:
—Mmm...,québuenapintatieneesto.—Sí.Tieneunapintaestupenda—afirmaMelparaecharmeuncable.Y,sinmás,empiezoacomercomosinohubieramañana.Lacomidacontinúay,pordesgracia,latensiónsequedaenelambiente.SialgohacemosEricy
yo,apartedelamor,esdiscutir;¡québiensenosda!Condisimulo,loobservoyveoqueélnomiraniunasolavezhaciaellugardondeestálamujer.Cuando acabamos de comer, nos levantamos, nos despedimos y nosmarchamos. Él regresa a
Müllerparaseguirconsutrabajo,BjörnyMelsevanaporSamialcolegio,yyovuelvosolaacasa.Menudorollo.
Nadamásabrirlapuerta,oigogritos.SonSimonayFlyn.Rápidamentedejolasbolsasquellevoycorroalacocina.
—Hedichoquenoquieroleche—estádiciendoFlyncuandoentro—.¿Enquéidiomatelodigoparaqueloentiendas?
—Pero,hijo,siyosólotelodecíapor...—Meimportaunamierdaloquemedigas.—¡Flyn!—gritoalvercómolehablaaSimona.Lamujer,alverme,suspira.—Tranquila,Judith.Nopasanada.Pero,oh,sí...,¡síquepasa!¿Aqueledoyunguantazo,comodecíaMel?Esemocososeestápasandocadadíamás.Lomiroygruño:—PídeledisculpasaSimonaahoramismosinoquieresquetecaigaungrancastigoporsertan
desagradableconella.Elcríomeobservaconsumiradade«¡tevoyacomer!»,peroamínomeimpresiona.Durante
variossegundosmevuelvearetarhastaquefinalmente,cambiandoelgesto,dice:
—Losiento,Simona.Lamujersonríe.¡Québuenaes!Paraella,Flynymisniñossonsusnietos,ylosquieretantoo
másquemipadre.Molestaporlaactituddelchaval,siseo:—Ahoraveteatuhabitación,¡ya!Sinmirarme,Flynsaledelacocina,ySimonapregunta:—Pero¿quéleocurre?—La adolescencia y las hormonas revolucionadas son muy malas, Simona —murmuro
sentándomealamesa—,ysinlugaradudasFlynloestállevandofatal.Ambasnosmiramosyasentimos.Menudanoshacaídoconeljovencito.Unahoradespués,recibounmensajedeEricpararecordarmequellegarátarde.Esomeenfada
aúnmásdeloqueyaestoy,peroloasumo.Sétodoeltrabajoquetieneynoquieropensarenlamujerquelohallamado¡«bollito»!
Doshorasdespués,yconlaayudadePipaparadardecenaraEricyaHannahyacostarlos,voyala habitación de Flyn.No ha aparecido en toda la tarde y es la hora de cenar. Al acercarme a sucuarto, oigo la música de los Imagine Dragons, el grupo preferido de mi hijo, y, tras dar dosgolpecitosenlapuerta,abroyloveotiradoenlacamamirandoeltecho.
Entroenlahabitacióny,alverquenomemira,comienzoatararearlacanciónquesuena,quenoes otra queRadioactive.[3]Aún recuerdo el día que fuimos a comprar elCDFlyn y yo, cómo lacantamosenelcocheaplenopulmóncuandoregresábamos.
Enelloestoycuandoélselevantadesucama,paralamúsicaymemira.—¿Quéquieres?—pregunta.Vale...,sigueenfadado.Notengoganasdediscutir,asíquedigo:—Lacenaestáenlamesa.¿Vienes?—Notengohambre.SutonocortanteesigualitoqueeldeEric.Cadadíaseparecemásaély,deseosadeunpocode
calorhumano,digoacercándomeaél:—Venga,Flyn.Bajaconmigoacenar.Ericllegarátardeynoquierocenarsola.—Alverqueme
mira,pongocaradeperropachónymurmuroconvozdeniña—:Porfi...,porfi...,porfi...Noquierocenarsolita.
Finalmente,elcríosonríe.Quéguapoestácuandolohace.—Deacuerdo—suspira.Encantada,ledoyunbesoenlamejillay,cuandovaaprotestarpormidemostracióndeafecto,lo
miroycuchicheo:—Soytumadreyquierobesarte.Denuevosonríe.Aisss,quemelocomoooooooo.La cena, a pesar delmal inicio conFlyn, es amena.Porunosminutos,mihijo vuelve a ser el
charlatánquedisfrutaconmigohablandodemúsica.SehaenteradodequelosImagineDragonsvanaactuarenAlemaniaeintentapersuadirmeparaquelollevealconcierto.Durantevariosminutosdigo
queno,perofinalmenteelchavalconsigueelsí.Sinlugaradudas,Meltienerazón:soydemasiadoblanditaconél,ypuedeconmigo.
Una vez terminada la cena, nos sentamos los dos en el sillón con mi portátil y, sin dudarlo,comprodosentradasonlineparaélyparamí.AEric,nipreguntarle;aélnolegustanlosImagineDragons.EncuantoFlynporfinconsiguesupropósito,meabraza,mebesayyosonríocomounatonta.
¡Andaquenosabehacermebienlaroscacuandoquiere!Cuandosevaalacamaporquealdíasiguientetieneinstituto,mequedoviendolatelevisión,pero
comomeaburre,entroenFacebookymepongoacharlarconmisamigaslasGuerrerasMaxwell.Ungrupodivertidoyocurrentedondesiempreencuentroalegríaypositividad.
Alasoncedecidomarcharmeamihabitación,pasoparaveralosniñosylostresduermen.Felizporveramispolluelostanbonitos,mevoyalacama.SobremimesillatengounlibroquehabladeunbomberoyunafotógrafaquemeharecomendadounamadredelcolegiodeSamiydecidoleermientrasllegaEric.
A las once y veinte, la puerta de la habitación se abre. Entrami guapomarido y lomiro condeleite.Élseacercaamíymedaunbeso,peronodicenada.
Nomejorobesqueencimavieneenfadado...Atravésdelespejoobservocómosedesanudalacorbata,sedesabotonalacamisay,cuandosela
quitaylatirasobrelasilla,dicemirándome:—Jud...,hoynomegustótucomportamientoenelrestaurantetrasaparecerGinebra.Bueno...,bueno...,bueno...,miamortienelanochecitarumbosa,ylomaloesqueyosoyproclive
atenerlatambién.Asípues,cierroellibroylomiro.—Amítampocomegustóverloquevi—replico.Ea...,yalehedadolarespuestaquequería.Mehabuscadoymehaencontrado.¡Adiscutir!Ericfrunceelceño—malo...,malo...—y,desabrochándoseelcinturón,sisea:—¿Yquéviste?Conscientedeloquehedicho,dejoellibrosobrelamesillayrespondo:—PuesviaEricZimmermanreencontrarseconunviejoamorquelollamaba«bollito»yquelo
dejóatontadoybabeandocomouncrío.Esoesloquevi.Y,sí,estoycelosa,¡loadmito!Sugestonocambia.Esomehacepresuponerquenoandomuydesacertada,ymeenvenenoaún
máscuandodice:—TeexpliquéquiéneraGinebra.¿Aquévieneesatontería?Conmásganasdediscutirqueél,sonríoconmalicia.SéqueesasonrisitamíaaEricloenferma,
perodispuestaaenfermarlocomoélmeenfermaamí,pregunto:—¿Félixessumarido?—Sí—dice,ycongestocontrariadopregunta—:¿Aquévienehablardesumarido?—¿Tedejóporél?Segúndigoeso,medoycuentadequemeestoypasandonotrespueblos,sinoveintitrés.¡Madrecita,québocazassoy!ElpechodeEricsehincha;sindudamevaasoltarelmayorbufidodelahistoria,perodepronto,
talcomosehinchasedeshinchay,mirándome,murmura:—Sí.Asiento...Mepicaelcuelloperonomelorascoy,aunquemipartedecotillaquieresaber,hay
otrapartedemíquemegritaquenopregunte,¡quecierreelpico!Ericcontinúadesnudándoseensilencio.Laincomodidadsepalpaenelambienteyesomeenerva.
¿Porquéhablardeesamujernosestáoriginandosemejantemalrollo?Dossegundosdespués,semeteenlacamaymeabraza.—Dejadepensarcosasraras,queteconozco,Jud—susurra.Nomemuevo.Decido no hablar, pero pasados cinco segundos no puedo continuar callada, y
siseo:—Piensoloquetúmedasquepensar.Deberíashabervistotucaradetontoalmiraraesamujer,
a...a...Gini.—Jud...—Y ya cuando le dijiste eso de «Eso siempre me gustó de ti» o eso otro de «decidida y
emprendedora»yoscomíaisconlosojos,tejuro,Eric,que...que...Looigoreír.Sumalhumoryasehaesfumado—¡lamadrequeloparió!—,einsiste:—Basta,cariño...,noveasfantasmasdondenoloshay.—Pero...Miamormeponeundedoenlabocaparaacallarmey,mirándomealosojos,dice:—Tequiero,Jud.Noteenvenenescontuspensamientos.Ginebraesunamujerdemipasado,al
igualqueentuvidahayhombres.Yahora,creoqueesmejorquelodejemosaquí.Nodigomás.DejoqueEricapaguelaluzydecidonopreguntarsilavaallamarpararecordar
esepasado.Mejormecallo.
4
CuandoMel fueabuscaraSamialcolegio, lapequeñacorrióhastaellay,conungestoprecioso,murmuró:
—Mami,¿sepuedevenirPabloalparque?Trasdarleunbesoasurubita,MelviollegarcorriendoaPablo.Miróalosniñosyrespondió:—PrimerotenemosqueversilamamádePablonotienequehacerotracosa.EneseinstantellegóLouise,lamadredelniño,ytrasoíresorespondió:—Genial.¡Todosalparque!Diezminutosdespués,Melylamadredelpequeñoestabansentadasenunbancoviendojugara
sushijoscuandoaLouiselesonóelteléfonomóvil.—Discúlpameunsegundo—dijo.Actoseguido,sinimportarlequeMelpudieraoírla,comenzóadiscutiryadecircosashorribles.
Cuandoterminóycerróelmóvil,miróaMelycomentó:—Mimaridoyyovamosdemalenpeor.—Vaya...,losiento.Melnoquisodecirmás.Cuantomenos semetieraunoen losproblemasde lasparejas,mejor.
PeroLouiseañadió:—Tresañosdenovios,seisdecasadosy,ahoraquetodonosvabienytenemosunhijoprecioso,
le descubro en el ordenador unas fotos de una fiestecita con sus colegas de bufete, con unasprostitutas,quemehandejadosinhabla.
Boquiabierta,Mellecogiólasmanosypreguntó:—¿Estásbien?Louisenegóconlacabezaylosojosselellenarondelágrimas.—No—murmuró—.Noestoybien,perotengoqueestarloporPablo.Depronto,sientoquemi
vida tiene que dar un cambio brusco, pero... no sé cómohacerlo.Nunca imaginé que algo asímepudierapasar.Johanestabatanenamoradodemí...—Actoseguido,añadióconrabia—:Aúnrecuerdoloilusionadosqueestábamoseldíaquecomenzóatrabajarenesemalditobufetedeabogados.
EsollamólaatencióndeMel,quepreguntó:—¿Tumaridoesabogado?Louiseasintióyluegosiseóconciertoretintín:—Sí.TrabajaparaHeine,DujsonyAsociados.Unbufetellenodedemoniosconcaradeangelitos
quehanconseguidoquenospaseesto.Sorprendida, Mel la miró. Aquel bufete era al que Björn intentaba acceder como socio
mayoritario.—¿Porquédiceseso?—preguntó.
—Porquevandemoralistas,dedefensoresdelavidaenfamiliayelmatrimonio,peroluegonopredicanconelejemplo—contestóLouiseconlamiradaperdida—.Esosmalditosabogadostienenunadoblevidallenadeviciosycorrupción;esosí,vistodesdefuerasonperfectosmaridosypadres,ysusmujeresaccedenatodocontaldeseguirviviendocomoauténticasreinas.
Mel laescuchaba incrédula.Siaquelloeraverdad,Björndebería saberlo.AlverqueLouiseselimpiabalosojosconunpañuelo,repitió:
—Deverdadquelosiento.Louiseasintiómientrassesecabalaslágrimasy,trascogerfuerzas,afirmó:—Yotambiénlosiento,peroestoyenesemomentoenelquenoveosalida.Johanvivesuviday
pretendequeyosealaperfectamujercitaqueloespereencasarodeadadeniños,comolosonotrasdelbufete.Perosihastahetenidoquedejardeveramisamigasparasalirconesasmujeres.
—Pero¿lohashabladoconél?Louiseasintióabatida.—Sí.Aunquedenadasirve.Johandicequeéstaesahoranuestraviday,sihablodedivorcio,me
amenazaconquesequedaráconPablo.Meloquitará.Al oír eso, Mel se sintió muy apenada y, sin saber qué decir, la abrazó. Así estuvieron unos
segundos,hastaquesesepararon.MelomitióqueBjörnansiabaperteneceraaquelselectobufetedeabogadosy,encambio,dijo:
—Escucha,Louise,nosomosíntimasamigas,peroquieroquesepasquemetienesparatodoloquenecesites.
Laaludidasonrió.—Gracias.EstabanhablandodeellocuandoMeloyóelllantodeSamiy,almirar,laviocaídaenelsuelo.
Rápidamenteambasse levantaronycorrieronhaciaella,peromientras llegabanunmuchachoconmonopatínyunperropequeñoseagachójuntoalaniñaparaatenderla.
CuandoMelllegóhastaSamiyyaestabaabriendosubolsoparaponerleunatiritadeprincesas,laniñadejódelloraryempezóaacariciaralperro.
—Esmuysuavecita—dijo—.¿Cómosellama?—Leya—respondióelmuchacho—.Yestáencantadadequelatoques;¿vescómolegusta?Pero
silloras,seasustaylloraellatambién.Samisonrióy,mirandoasumadre,quelaobservabasorprendida,dijo:—Mami,quierounperritocomoLeya.Agachándose para levantar a la pequeña del suelo, tras ver que había sido una simple caída
mientrascorría,Melrespondió:—Lopensaremos,¿vale?Laniñaasintió,diomediavueltaycorrióparaalcanzaraPablo,quesesubíaauntobogán.Feliz
porque no hubiera sido nada,Mel le dio las gracias almuchacho por el detalle y se encaminó denuevoalbancodelbrazodeLouise.Losniñosteníanquejugar.
Esa noche, cuando Sami vio a su papi, le pidió encarecidamente un perrito. Su mascota, unhámsterllamadoPeggySue,habíamuertomesesantes,yBjörn,trascontarleuncuentoyarroparla,seloprometió.Loquenodijofuenicuándo,nicómo.
5
Suenaelpuñeterodespertador,¡ymequieromorir!Nomegustanadamadrugar,peromadrugo.CuandoEricselevantaysemeteenladucha,nohablamossobreloocurridolanocheanterior.
Hablarde ello significaríadiscutir denuevo,ydecidocerrar laboca.Para cincominutosquenosvemos,noquieroenfadarme.
Albajaralacocina,Flynestáterminandodedesayunar,meacercoaély,antesdequeledéunbeso,élselevanta.Cuandovaasalir,lollamo:
—Flyn.—¿Qué?Eneseinstante,Ericentraenlacocinayyodigodirigiendolavistaalchaval:—¿Nomedasunbesoantesdemarchartealinstituto?Elniño...memira...,memiraymemira,yfinalmentereplica:—Vengaya...,queyanosoyunbebé,mamá.Y,sinmás,damediavueltayseva.Yomequedoconcaradetontacontemplandolapuertacuando
Ericseacercaamíy,mientrasmecogeporlacintura,murmura:—¿Tevaleunbesomío,corazón?Asiento,¡mevale!Claroquemevale,y¡mássimellamacorazón!Encantada, lobesoy,cuandonuestros labios se separan,Ericmeguiñaunojoy sepreparaun
caféconesegestodecanallaquetantomegustaymeenamora.Diezminutosdespués,semarchaalaoficina.Desdeelventanaldelacocina,veocómosealejaen
elcocheymepreparoparaestartodoeldíasinél.Comocadamañana,trasdardedesayunaralosniños,entramosenmiantiguocuarto,queeshoy
sucuartodejuegos,yjugamos.Pero,pasadasdoshoras,yaestoyparaelarrastre.Hannahlloramásquesonríe,yenocasionespuedeconmiaguante.
¿Porquétengounaniñatanllorona,conlopocollorónquefueelpequeñoEric?Por suerte, Pipa, la mujer que está interna en casa para que me ayude con los niños, tiene
muchísimapaciencia,yesellalaqueseencargadelallorona.Cuandolospequeñossequedandormidosamediamañana,decidoponermeelbañadorydarme
unbañitoenlapiscinacubierta.ÉseesunodelosgrandesplaceresdeserlaseñoraZimmerman.Mezambullo,nado,descanso,vuelvoanadary,cuandomeharto, flotoenmediode lapiscina
mientrasescuchodefondolavozdeMichaelBublécantarCryMeaRiver,[4]ysonrío.SiemprequeBjörnlaescuchayestáconEricyconmigo,nosmiraycuchicheaaquellode«nuestracanción».
Mientrasflotomirandoeltechodelapiscinacubierta,recuerdoaquelmomentoconBjörnyEricañosatrásenlacasadelabogado.Cierrolosojosysientocómomivaginaselubricaalrememorar
cómoesosdostitanes,unorubioyunomoreno,mehicieronsuyaaqueldíayyoselopermití.Estoy pensando en ello cuando oigo la voz de Simona, que me llama. Levanto la cabeza
rápidamenteyveoquememuestraelteléfonodecasa,quellevaenlamano.—Judith,preguntaportilaseñoraDukwen—dice.Sinsaberdequiénmehabla,salgodelapiscina,mesecounpocolasmanosylacaraycojoel
teléfonomientrasveoaSimonasalir.—¿Sí?Dígame—respondo.—¿Judith?—Sí.Soyyo.—Hola,soyGinebra,laamigadeEric.Nosconocimosayerenaquelrestaurante,¿merecuerdas?¡Joderrrrrrrrr!Mequedoboquiabiertaalsaberquiénesy,sentándomeenunabanquetaparaponermelosanillos
quemehequitadoparametermeenlapiscina,murmuro:—Sí.Claroqueterecuerdo...—Ah...,quéalegríasaberlo,cielo.Elmotivodemillamadaesparainvitarosestanocheatiya
Ericacenar.LecomentéamimaridoquehabíavistoaEricytehabíaconocidoati,yestácomolocopor veros a los dos. Y, por supuesto, tras el malentendido de ayer, he decidido llamarte yconsultárteloatiparaevitarproblemas.
—¿Amí?—preguntosorprendida.—Sí,cielo,ati—oigoqueresponde.Unsilencioextrañomeparaliza.—Mira,tesoro,yoodiocuandomimaridoquedaparacenarconalguienqueapenasconozcoy,
comonoquiero incomodarte,meheatrevidoa llamara tucasa,pues imaginéqueestaríasahí.Deverdad, Judith,deverdadque sientomuchísimo loqueocurrióayer.Mecreasono,nohepodidodejardepensarenelloydesentirmeterriblementemal.Porqueteaseguroque,siunamujerledijeraamimaridodelantedemí«bollito»o«miamor»,yoestaríamuyenfadada.Yséqueati,comosumujer,notegustóy...
—Vale,loadmito,¡nomegustó!—digofinalmente—.Yaceptotusdisculpas.—Gracias...,gracias...,gracias...Niteimaginaselpesoquemequitasdeencima.Sinsaberporquésonríocuandoellainsiste:—¿Teapetecequecenemosestanoche?Simedicesquesí,llamaréaEric,lediréquehehablado
contigoyquedaréconél.¿Quéteparece?Unapartedemínoquiere,peromiladocotillaporsabermáscosasdeellamehaceresponder:—Deacuerdo.LlamaaEricyquedaconél.Trasdespedirnos,cuelgoyresoplo.¿Porquéheaceptado?Cinco minutos después, el teléfono vuelve a sonar. Al mirar la pantalla veo que pone «Eric
Oficina»y,trascogerlo,digo:—Sí,cariño,hehabladoconGinebrayheaccedidoacenarconellosestanoche.—Atinohayquienteentienda—looigodecir—.Ayermemontasunnumeritoporsaludarlaen
elrestaurantey¿ahoraquedasconellaparacenar?Sucomentariomehacesonreír.Sinduda,soyunespécimendignodeestudio.
—¿Dóndehasquedado?—pregunto.—EnNicolaoalassiete.¿Leparecebienalaseñora?—¡Perfecto!OigoqueEricseríeyesovuelveahacermesonreírmientraspregunto:—¿Vendrásacasaacambiartederopa?—Porsupuesto.—EntoncesoigootroteléfonoquesuenaenlaoficinayEricdice—:Tengoque
dejarte.Hastaluego,miamor.—Hastaluego,cariño.Y, dicho esto, cuelgo comprendiendo eso queEricme ha dicho de que amí no hay quienme
entienda.¡Perosinomeentiendoniyo!
Alassieteenpunto,yoengalanadaconunpreciosovestidoazulónquemeencanta,ymichicovestidoconuntrajeoscuroperoinformal,entramosenelrestaurante.Ericdasuapellidoyelmaître,al ver que tenemos reserva, nos lleva hasta la mesa del fondo. Me sorprendo al comprobar queGinebraysumaridoyaestánallí.
Desdeladistancia,observoalhombre.Esmuchísimomayorqueella,perocuandodigo«mayor»merefieroaunosveinticincootreintaañosmás.EncuantoGinebranosve,avisaaFélix,yveoqueéstesonríeyselevanta.
Ericyélsedanlamanoconafecto.¡Québuenrollito!Segundosdespués,mepresentaamí.Congalantería,elhombremecogelamanoy,besándomela,dice:
—Esunplacerconocerte,Judith.—Lomismodigo,Félix.Reconozco que al principio de la comida estoy algo alterada: saber que Eric y esamujer han
tenido una historia en el pasado no me hace mucha gracia. No obstante, de forma gradual, minerviosismo se esfuma al ver queGinebra no hace absolutamente nada que puedamolestarme; alrevés,estátodoelratopendientedequelaveladaseaagradable.
Cuandodecidoiralbaño,ellameacompaña.Unavezasolasallí,dice:—Pensarás que Félix es muy mayor para mí. —Yo la miro sorprendida. Ginebra sonríe y,
apoyándose en la pared,murmura—: Imagino que ya sabrás queEric y yo éramos pareja cuandoconocíaFélix,¿verdad?
—Sí.EsomecomentóEric.Ginebraasienteyprosigue:—CuandoconocíaFélix,yoteníaveinteaños.Eraunaniñacuriosaporelsexoyporloqueera
ensílapalabra«morbo».Unanoche,envezdesalirconEric,mefuiconunasamigasyenunafiestaprivadaconocíaFélix.
Asiento...Meestoyenterandodealgoquenohepreguntadocuandoellaañade:—¿Sabesaloquemerefierocon«fiestaprivada»?—Asientodenuevo.Tontanosoy.Ellasonríe
ycontinúa—:Félixeraunatractivohombredecincuentaaños,unhombredemasiadomayorparamíenaquellaépoca,perotrasjugarconélaquellanochecomonohabíajugadoenmivida,yanopudedesengancharme de él. Félixme hizo conocer lo que yo siempre había ansiado y nunca nadieme
habíadado.Asombrada,pregunto:—¿Porquémecuentastodoesto?Ginebrasonríe,bajalavozymurmura:—Porque quiero que sepas que soy feliz conmimarido, y que, a pesar de su edad,me sigue
proporcionando,entreotrasmuchascosas,laclasedesexoquemevuelveloca.Conéldisfrutodelmorbodemilmaneras,cosaqueconEricnuncahabríasucedido.
Suspalabrasllamancadavezmásmiatención.—¿Porquédiceseso?—pregunto.—Porquesoymujeryséqueestásintranquilaconmipresencia.Veoentumiradaqueestásalerta
conrespectoaEricyamí,peronodebesestarlo.Susinceridadaplastantemegustaymeincomodaapartesiguales.Noséquépensarcuandoella
prosigue.—Félixeselhombredemivida.Élmedaloquebuscoyyoledoyloquequiere.Juntoshacemos
unbuentándem.Unbuenequipo.Cuandoestoysola,hagoloquequieroy,cuandoestamosjuntos,mepongo en susmanos y accedo gustosa a todos sus oscuros caprichos. Se puede decir que soy suesclavasexual.
Asientounavezmás,yellavuelveadejarmesinpalabrasenelmomentoenquepregunta:—Siyotebajaralasbragasenesteinstanteytemasturbaraenelcubículodeesebaño,¿creesque
aEriclemolestaría?Guauuuuuuuu,¡menudorebotepillaríamialemán!Yquéguantazoleibaadaryoaellaporlista.
Pero,acaloradaporloquedice,contesto:—Sí.Ginebrasonríeeinsiste.—¿Yporquésemolestaría?Apoyolacaderaenlabonitaencimerademármolrosadelbañoyrespondo:—Porqueélyyotenemosnormas.Ylaprimeradeellaseshacerlotodosiemprejuntos.Ginebraasientey,trasrepasarseloslabiosconcarmín,cuchichea:—Félixestaríaencantadodequetemasturbaraotúmelohicierasamíconlacondicióndeque
luegoselocontaraparaqueéldisfrutase—y,bajandolavoz,murmura—:SialgonuncamegustódeEricessuposesividadysuexclusividad.
—Puesesoesjustoloqueamímegustadeél—añadosegura.Ginebramemira,vuelveasonreírydice:—AFélixyamínosvaalgomuynuestro.Meencanta ser suesclava, suputita, sumonedade
cambio.Meexcitaquemeofrezca,quemefuerce,meobligue,meateparaotros,ytodoesoesalgoqueséqueaEricnuncalegustó.
Uy...,uy...,¡nihablar!Esonoleatrae.Noséquédecir,cuandoellapregunta:—¿EstoyequivocadayahoraaEriclevaeso?—No—respondoconrotundidad.Ginebraasientey,retirándoseelpelodelacara,susurra:—Nomeveascomounaamenaza,Judith.Amodemasiadoamimarido,yséqueencontraraotro
comoélesimposible.Acadainstantemássorprendida,vuelvoaasentir.¡Joder,parezcotonta!—Necesitaba decirte esto—afirma guardándose en el bolsito su barra de labios—.No quiero
malentendidosentretúyyo.Cincominutosdespués,regresamosalamesa,dondenosesperannuestrosmaridos,yunahora
mástarde,trasunanocheencantadora,nosdespedimosyregresamosacasa.Enelcoche,Erictocamirodillamientrasconduceypregunta:—¿Lohaspasadobien?Porraroqueparezca,asiento.MegustaríahacerlemilpreguntassobreGinebra,peroséqueal
finaldiríaalgoquememolestaríayterminaríamosdiscutiendoporello.Asípues,sonrío,lomiroyafirmo:
—Sí,miamor.Cuando llegamos a casa, tras saludar a nuestras mascotas, que nos dedican un recibimiento
descomunal,subimosanuestrahabitación.Allí,cojoaEricdelamanoy,sinhablarnos,hacemoselamorconposesividadyexclusividad.
Lodeseoparamí.Sóloparamí.
6
Llegaelviernes.Ericseajustalacorbataanteelespejodenuestrahabitaciónyyoprotestodesdelacama:—Venga,va,Eric,elañopasadonofuialaFeriadeJerez.Élmeobservaatravésdelespejoconsugestoserioyresponde:—Porquetúnoquisiste,pequeña...,porquetúnoquisiste.Valeeeee...Tienerazón.ÉlteníaunviajealaRepúblicaChecaypreferíacompañarlo.Sigueanudándoseelnudodelacorbatacuandoañade:—Cariño,vetúalaferiaydaleelgustoatupadre.Yoestoymuyocupado.Sabesquevoyatope
detrabajoy...—¿Porquénodelegaspartedetustareasaalgunodelosdirectivos?—Jud...,nocomiences—murmura.—Perovamosaver...—protestolevantándome—.Antesdelegabasunagranpartedeltrabajoen
ellosypodíamosestarmástiempojuntos.¿Dequésirveeldinerosinolopodemosdisfrutar?Elgestodemialemánsedescompone,¡faltaríamás!Yaestoydiciendoalgoqueloincomoday,
sinresponderaloquelehepreguntado,replica:—Mira,Jud,esmiempresa,tengoqueatenderla,ynopuedoperdereltiempoenirdefiestecitaa
Jerez,¡entiéndelo!Esomesubleva.PorsupuestoqueEricmeanimaaquevayaalaFeriadeJerez,peroyoquiero
quemeacompañe.Podercaminardelbrazodemiespectacularmarido,pasartiempoconélyhacerlesaberatodoelmundoloasquerosamentefelizquesoy.Sivoysola,comenzaránlashabladurías,ynomeapetecequeleponganlacabezacomounbomboamipadre.
PeroyamehaquedadoclaroqueEricnoestápor la labory, comonoquierodiscutir conél,cuandocomienzaasonarennuestroequipodemúsicalacanciónMemuero[5]deLaQuintaEstación,miroamichicarrón,melevanto,meplantoanteélydigo:
—Vamos.Bailaconmigo.Ericmemira,sigueconelceñoarrugadoyprotesta.—Jud,tengoprisa.Nodesistoy,mientrasmentalmentetarareoesode«memueroporbesarte,dormirmeentuboca»,
[6]insisto:—Vamos,Iceman,bailaconmigo.Peronada,¡niIcemannileches!Alparecer,hoynoeseldía,yEricvuelveafulminarmemientras
protesta:—Jud.Tehedichoquetengoprisaynoestoyparatonterías.Oír esomemolesta. ¿Por qué es incapaz de vermi detalle? ¿Por qué no semuere por bailar
conmigo?—Puesvale—murmurosentándomedenuevoenlacama—.Tútelopierdes.Durante unos segundos permanecemos los dos calladosmientras contemplo cómomi amor se
ponelachaqueta.Dios,quéincreíbleestávestidocontraje.Alverquemeobservaatravésdelcristalparacomprobarsiestoyenfadadaporeldesplanteque
acabadehacermeconelbailecito,digodispuestaaseguirconeltemadeJerez:—Oye,Eric,yoteacompañotodoslosañossíosíalaOktoberfesty...—Jud,¡noeslomismo!Oírlodeciresomehacereír,perodemaldad,yachinandolosojossiseo:—¿Cómoquenoeslomismo?—Cariño,laOktoberfestsecelebraenMúnichynotengoquedejarnadadelado,peroparaira
Jerez, he de aparcar las obligaciones y viajar a otro país; ¿acaso eres incapaz de entender lo quedigo?
No.No soy incapazde entender lo quedice, lo quemeda rabia es que Iceman sea incapazdeponerseenmilugar.
—Sólo quiero que entiendas que paramí también es importante asistir a la feria demi tierracogidadetubrazoparaqueamipadrenoleponganlacabezacomounbomboconloscotilleos—replico—.Sóloeso.
Ericnocontesta.Sugestoceñudolodicetodoy,alfinal,decidocallaro,sinduda,vamosatenerunabuena.Mesientorumbosa,ymástraseldesplantequemehahechoconelpuñeterobaile.
Diezminutosdespués,yaenlacocina,comonohedichonada,mialemánseacercaamí,sabequelohahechomal,ymeabraza.
—Intentaré buscar días libres para ir a Jerez —murmura—, pero no te prometo nada, ¿deacuerdo,pequeña?
Quehagaeso,quealmenoslopiense,yaesuntriunfo,yafirmo:—Deacuerdo.Ericmebesay,cuandoseparasuslabiosdemíconunamaliciosasonrisa,murmurasinquenadie
nosoiga:—¿Deverdadquemidisfrazparaestanocheesdepolicía?Asiento.Olvidonuestroenfadoymurmurosonriendo:—Esperoquemedetengas.Ericsonríeasuvez,muevelacabezaypreguntacurioso:—Yeltuyo¿dequées?Yolomirodeesamaneraqueséque legustay loenloquece,clavomispupilasen lassuyasy
cuchicheo:—Esoessorpresa.Cuandomialemánsevaatrabajar,loobservoalejarseenelcochedesdelaventana.Séqueme
quiere,séquedaría lavidapormí,peroahora,entre losniñosy laempresa,mefalta tiempoparaestarconél,ymesientoalgoabandonada.¡Vayamierda!
Comopuedo,pasoeldía.Meaburrocomounaostra.Amoamishijos,peronecesitohaceralgomásquecuidarlos,ycadadíalotengomásymásclaro.
Porlatarde,MelvieneacasaparadejaraSamiy,trasdespedirnosdelosniños,quesequedanencasa con Simona, Norbert y Pipa, nos vamos a casa deMel, donde Björn y Eric nos esperan yavestidos,elprimerodebomberoyelsegundodepolicía.Alverlos,nopodemosparardereír.
Nos ponemos nuestros disfraces de ángel y demonio, que son de zorrones total, y, cuandosalimosconellos,loschicossilban.Estánencantadosconloqueven.
Ericmemiraysusurra:—Ereselangelitomástentadorypreciosoquehevistoenmivida.Sonrío.Nolopuedoremediar.Unaveznosponemoslosabrigosporencima,paranoescandalizaranadiepornuestraspintas,
loscuatronosmontamosenelvehículodeBjörnynosdirigimosalSensations.Comoeradeesperar,lafiestaesdivertida.Verlosdisfracesquelagentellevamehacesonreír.—Hola—oigoquedicealguiendepronto.Al volvermeveo aFélix vestido demosquetero.Divertidos, nos saludamos,Eric le presenta a
BjörnyaMely,cuandoterminan,pregunto:—¿YGinebra?Félixsonríey,traspediralcamarerounabotelladechampán,dice:—Lahedejadoenel reservadonúmerocincoentretenidamientrasyoveníaaporchampán.—
Luegoseacercaymurmura—:Lehepedidoamimujerquedejebiensatisfechosatresamigos.Asiento.Ericasientetambiény,cuandoaquélseva,miamormusita:—Veoquesiguenensulínea.Sucomentariomesorprende.Sihayalguienpermisivoenel sexo,éseesmichico.Lomiroy
pregunto:—¿Porquédiceseso?Élmemira,pasaeldedopormibarbillay,acercándoseamí,susurra:—Porque tevaloroyporquenunca teutilizaríacomomonedadecambioni tedejaríasolacon
otros hombres y sus exigencias. En nuestra relaciónmandamos los dos, y juntos iremos a todoslados.
Mebesa.Lobeso.Adorosusbesoscargadosdeamor.Cincominutos después, cuandoEric habla conBjörn,Mel se acerca y, señalando con el dedo,
preguntadeformadisimulada:—Yese cachitas guaperas quemueve las caderas comoRickyMartin y va vestido de vaquero
¿quiénes?Condisimulo,dirijolavistaadondeMelindicaenelmomentoenqueelcachitasguaperasme
mira.Sonrío.Élsonríeyseacercaanosotras.—Hola,Dennis—losaludo.Luegomiroamiamigayañado—:Mel,tepresentoaDennis.Endécimasdesegundo,EricyBjörnestánanuestrolado.¡Vayados!Concaballerosidad,Dennis
lossaluda,despuéscogelamanodeMel,labesaymurmuraconsuparticularacento:—Obrigado.—Nomedigasqueeresbrasileño...—oigoquediceMelenalemán.Élasientey,sinsaberporqué,yosalto:—Bossanova,samba,capoeira...
Yentonces,meparo.¿Quéhagoyohaciendoloquelagentesiemprehaceconmigoconesode«Olé,torero,paella...»?¿Acasosoyimbécil?Ericmemiradivertido.Meleeenlacaraloquepiensoymurmurajuguetónenmioído:—Cariño,tehafaltadodecircaipiriña.Durantevariosminutos,loscincohablamosynosreímos.Dennis,ademásdeestarcomountren,
enelqueveoquemuchasquierenmontar,pareceunabuenapersonay,cuandopocodespuéssealejadelamanodeunasrubias,miamormebesaenlasienypregunta:
—¿Quieresbeberalgo?—Unacoca-cola.—¿Solaoconvodka?Lopienso.Lanocheesjoven,yrespondo:—Mejorsola.CuandomichicoyBjörnsemarchanaporlasbebidas,Mel,quemiraaladerecha,cuchichea:—Joder...,puessíqueesmaduritoelmaridodeGinebra.—Treintaañosmásqueella—leexplico—.Tendráunossetenta.Acontinuación,melevantodeltaburete.—Ven,acompáñame—digoy,alverquenuestrosmaridosnosmiran,hagounaseñaylesaclaro
—:Vamosalbaño.Eric y Björn asienten y, cuando desaparecemos tras la cortina y no me dirijo al lavabo,Mel
pregunta:—¿Adóndevamos?—Quieroveralgo—afirmosinsoltarlamientrasseguimosaFélix.Encuantollegoalreservadonúmerocincoyvoyaabrirlacortina,Melmedetiene.—¿Quéhaces?—pregunta.—Sóloquieroverynopone«Stop».Portanto,sepuedemirar.Melsonríe,asiente,yconcuriosidadabrimoslacortinatranquilamenteparaobservar.Enlahabitación,Ginebraestáatadaaunasilladeunamaneraquemedejasinpalabras.Suespaldadescansaenelasiento,sucabezacuelgahaciaelsueloysuspiernasestánsujetasalo
altodelrespaldo.Unhombrequeseagarraalasillaconfuerzaseintroduceenellaunayotravezmientrasellajadeaygritadeplacer.
Melyyoobservamoscuandodeprontoeltipodaunúltimoalaridoyseretiradeella.Instantesdespués, otro hombre se arrodilla ante Ginebra y, con una facilidad queme deja sin palabras, leintroducelamanoenlavaginaantelosgritosdelocuradeella.
—¿Disfrutas,miamor?—oigoquepreguntaFélix.—¡Sí...,sí...!—gritaGinebra.Sindescanso,elhombresacaymetelamanoenelinteriordelavaginadeella.—Joder...,nomevanadaelfisting—murmuraMel.—Amítampoco—susurrosinrespiración.Eneseinstante,Félixseagacha,ledadebeberdesucopadechampánaGinebraydice:—Asímegusta,zorrita.Estosamigosquierencobrarloquelesprometí.
Ellasonríe.FélixacercasubocaaladeellamientrasotrohombrelecolocaunaspinzasenlospezonesyentoncesGinebragrita,peroséquegritadeplacer.
Los hombres ríen al oírla. Félix se levanta de donde está, se acerca al pene de otro y, trasrecorrerloconlalengua,leechasobreésteelrestodelchampándesucopa.
—Méteselaenlabocahastaelfondo—dice.Actoseguido,elhombrecogelacabezadeGinebray,conexigencia, lohace.Esomevuelvea
incomodar,aunqueséqueaella legusta.Esetipodesexonomeva.Vercómoaquel tipoobligaaGinebra mientras el otro juguetea con la mano en el interior de su vagina me deja sin palabras.Entonces,Meltirademíydice:
—Regresemosconloschicos.Asiento.Conloquehevisto,essuficiente,yahoraentiendoporquéGinebramedijoqueaEric
noleibaeso.Sinlugaradudas,noleva,niamítampoco.Sinmás,regresamosjuntoanuestrosmaridos,quenosentreganlasbebidas,yyomesientoenun
taburete.EneseinstanteseacercananosotrosDianayOlaf.Duranteunratocharlamoshastaquemefijo
enquealfondodelasalaestáDennisconlasrubias.Elbrasileñonosmira,nosobserva,yEric,quesedacuentacomoyo,pegalabocaamioídoy,moviendoeltaburete,dice:
—Angelito...,separalosmuslosparaelvaquero.Extasiadaporelmorboquemeprovocasiempreesaacción,hago loquemepidey loqueme
excita,mientrasobservocómoDennisnossiguemirando.Esetipodecosassonlasquemevanylevanamichico.
Sinduda,mispiernasabiertasleofrecenaDennisunavisiónbastanteinteresantedemí.Eric,quelo sabe,quemeconoceyquedisfruta comoyodelmomento, introduceundedoen suwhisky, lomojay, después, con complicidad, excitacióny alevosía, lopasapormiboca, pormis labios.Sinapartarsusojosdelosmíos,sientocómosudedobajapormibarbilla,pormicuello,mispechos,miombligo.Mebesamientras sudedobaja..., baja... ybaja,hastaque lo siento llegaral centrodemihúmedoylatentedeseo.
Uf...,¡quécalor!Mis labios vaginales se abren solos, mientras Eric tiene los ojos clavados en mis pupilas y,
cuandosudedo tocamiyahinchadoclítoris,yo jadeo,cierro losojosporpuroplaceryoigoquedice:
—Mírame,cariño...,mírame.Obedezco. Sé lo mucho que le excita a Eric que lo mire en esos instantes y, con unamirada
totalmenteperversa,vuelvoajadear.Élsonríe,mebesaelcuelloymurmura:—Tumiradamehacesaberqueyaestáspreparadaparajugar.Asiento.Ésteeselsexoquemegustay,sincerrarlaspiernas,besoamiamor.Lodeseo.Deseo
jugarconlocura.AsíestamosunosinstanteshastaquenuestrasbocasseseparanyDennis,queyasehadeshechodelasrubias,comobuenjugador,enpocossegundosestáanuestrolado.Ericlomira,nohacenfaltapalabras,ysegundosdespuéslamanodeDennisseposicionaenlacarainternademismuslosmientrassusurra:
—Meapasionaquenollevesbragas.
Ericsonríe,yyotambién.EntoncesDiana,quehavistolajugadayvavestidadetroglodita,dice:—Judith,reservaelprimerbaileparamí.Esomehacesonreír.MeestápidiendoserlaprimeraentomarmicuerpocuandoBjörn,queestá
juntoaMelyOlaf,preguntaentonomorboso:—¿Quiénsevienealasaladelfondo?Todosloacompañamos.Todostenemosganasdepasarlobien.La sala es grande, y hay más gente además de nosotros. Distintas camas están ocupadas por
hombres y mujeres practicando sexo y, nada más entrar, Björn se lleva a Mel a una libre y allícomienzan su juegoconOlaf.Todos losobservamoshastaqueDiana,queesuna lobadeseosadesexo,secolocajuntoaEricydice:
—¿Quétalsicomienzoyoconelangelito?Élmemira,sonríey,cuandovemigestodeaprobación,asiente:—Todatuya.Dianamedalamanoymellevaaotracamalibre.Sinquemediganada,séloquequiereella,lo
queexcitaamiamory loqueyodeseo.Poreso,me tumbosobreelcolchón.Micortovestidodeangelitosesubesolo,dejandoaldescubiertomiausenciadebragasymibiendepiladopubis.
Eric, Diana y Dennis me observan. Veo sus miradas. Todos están deseosos de comerme, dedisfrutarme,desaborearme,yentoncesEricseacercaamíy,cogiéndomelasmanos,melas llevahastalosbarrotesdelacabecera.
—Agárrateaellosynotesueltespornadadelmundo—medice.Lohago.Ericmebesa,pasealasmanosconpropiedadpormicuerpoypregunta:—¿Estáscaliente,miamor?Aloírlo,meestremezcoyasiento.—Sabesquesí—murmuro.Mimaridometocalaspiernas.Tiemblo.Conseguridad,meseparalosmuslosdejandomivagina
húmedaaldescubiertoy,pasandoundedoporella,musitamientraslaabre:—Adorotuhumedad.Instantesdespués,labocadeDianachupacondeleiteloqueEricleofrece.Suansiedadnoleha
permitidoesperarunsegundomás.Notocómodatoquesconlalenguasobremiclítoris,yobservoqueEricyDennissesientancadaunoaunladodelacama.
—Esoes,miamor,abrelaspiernasparaDiana.Sindudarlo,lohago.Dios,¡quéplacermásinconfesable!Gustosa por lo que ellame hace, jadeo yme retuerzo agarrada a los barrotes de la cabecera
mientrasEricyDennisnosobservanconardor.Cuandoelplacerylalujuriatomanmicuerpo,soyunjugueteenmanosdecualquiera,yDiana
sabemuybiencómomanejarmeasuantojodesdelaprimeravezquemeposeyó.Sin descanso, chupa, lame, introduce los dedos en mí y me masturba mientras juega con mi
clítoris,altiempoqueEricyDennismebajanelvestidoparasacarmispechos.Cadaunoseadueñadeunoylossaboreanasumaneramientrasyopierdolanocióndeltiempoymeentregodócilmenteaellostres.
No sé cuánto rato estamos así; sólo sé que, cuando vuelvo a ser consciente, estoy de rodillassobrelacamadeltododesnuda,mientrasDianamesujetalascaderasconunamanoyconlaotramemasturbadeformarítmicaaltiempoqueseoyeelchapoteodesusdedosenelinteriordemivagina.
Eric y Dennis nos observan con sus duros penes erectos preparados para mí, cuando ellamurmuracercademiboca:
—Esoes,angelito...,muévete...Esoes...,esoes.Loca...,locadedeseo,hagoloqueDianamepide.Memuevomientras siento cómo todomi cuerpoarde apuntode explotaryoigo losgemidos
placenterosdetodoslospresentes.Diana,comomujerexperimentadaendarplacer,mehacegritar,moverme,cabalgarsobresumanohúmedademisfluidos,mientrasyoobservoaEric.
Sugesto.Sumiradamevuelvemás loca todavía,hastaquemearqueo,elplacer toma todomicuerpoy,conunúltimogemido,leshagosaberquehellegadoalclímax.
PeroEricyDennisestándeseososdesexoy,cuandoDianaseretirademí,Dennislaagarra,laponeacuatropatasylapenetra.DianagritadeplacerenelmomentoenqueEric,levantándome,medalavuelta,meponeenlamismaposiciónqueella,meagarradelpeloysusurraenmioído:
—Mevuelvesloco,morenita...,loco.Y,deseosodemí,meempalahastaelfondoy,comounsalvaje,mehacesuyamientrasyojadeoy
le pido más y más y me dejo llevar por la pasión del momento. Como un animal, mi amor, mimarido,mi todo,me hace suya, y yome acoplo a él y lo hagomío. Es nuestro baile. Es nuestramaneradeverelsexo.Esnuestrodelirio.
Sindescanso,loscuatrojadeamosmientraselruidosecodenuestroscuerposalchocarsuenaconfuerzaenlasala.Una...,dos...,tres...,veintevecesentraysaledemímialemány,cuandosabequeyano aguanto un segundo más, se deja ir al mismo tiempo que yo y juntos disfrutamos de aquelmorbosoymágicomomento.
Acabadoeseasalto,Diana,queesinfatigable,vuelveaabrirmedepiernasmientrasEricsesientaenlacamaysusurracuandoDennisladeja:
—Dametujugo...,dametujugo.EricyDennisnosobservan.Diana,lainsaciable,nosecansadesaborearme,yyopermitoquelo
hagaencuantoEricseacercaamí,mebesaenloslabiosypregunta:—¿Todobien,pequeña?Asiento...,asientoyjadeoentregadaalplacercomoséqueaéllegusta.NingunamujermesaboreacomoDiana.Otrasmehantomado.Otrashandisfrutadodemí,pero
Dianaeslamujerqueverdaderamentehahechoquemecorradepuroplacer.Entregadaasuexigenteboca,cierrolosojosydisfrutodelmomento.Cuandovuelvoaabrirlos,
veo aGinebra desnuda ante nosotros junto a otramujer.Ambas nos observan y, tan pronto comoGinebravequelamiro,sonríe.
ExtasiadaporlascosasquemehaceDiana,letiendolamanosinsaberporqué.Ginebrameladayyoselaaprietomientrasmeretuerzogustosa.Ericnosmira.Veolasciviaensumiraday,conmiotramanolibre,cojounodelospreservativosquehaysobrelacamayseloentrego.
Mi amor no aparta los ojos demí. Intenta leer lo que le digo y, cuandome entiende, abre elpreservativo,seloponey,trasecharaGinebraaunlado,agarraalaotramujer,lasientasobresus
piernasylaempalaconferocidad.De pronto soy consciente de lo que he provocado, pero Eric no ha aceptado, y la dicha por
saberlosuperaloqueDianamehacemientrasmeretuerzodeplacer.Cuando Diana se da por satisfecha y me suelta, tras unos segundos en los que recupero el
resuello,mearrodilloenlacama,meabrazoalaespaldademiamorycomienzoabesarleelcuellomientrassuscaderasseclavanenlaotramujer.
Ericseestremecealsentirme.Micontactolegustatantocomoloqueheprovocado.Oigosusjadeos,losdeGinebra,queestáalladoconotrohombre,yalenredarlasmanosenel
pelodemimaridoobservocómoEricembistealadesconocidaconfuerza.Encantadaconloqueveo,besoelanchocuellodemiamor.EntoncessientoqueDennis,queestá
detrásdemí,entraeneljuegoy,alnotarquenolorechazo,murmuraponiéndomeelvellodepunta:—Tucuerpoessamba.Meexcitasuvozmelosaycalentita.Uf...,quémorbotieneDennis.Actoseguido,conaguayuna toalla limpia,me lavaparaél.El frescormeencanta,cuandome
besalascostillas,eltrasero,paseasussuavesygrandesmanospormicuerpodesnudo,mientrasyoatravésdemisoscuraspestañasobservoloquehaceEric,loquehacemiamor.
Asíestamosvariosminutoshastaquemirubioechahaciaatráslacabezaenbuscademibocaylobeso.LodevoromientrassoyconscientedequeGinebranosobserva.
—Tequiero—murmuroentrebesoybeso.Erictiembla.Yotiembloconél.Nopuedoquererlomás.Dennis,alsentirmevibrarynotarlaexcesivahumedadquetengoentrelaspiernas,meagarrapor
la cinturay, trasponerseunpreservativo, sin alejarmeunápicedemi amor, se introduce enmíymurmuraenportuguésalpercibirlaoscilacióndemiscaderas:
—Eugostodoseocorpo.Oírlohablarensulenguameexcitamás,yalentenderquelegustamicuerpo,muevolascaderas
ypercibocómoDennistiembladelujuria.Placerporplacer.Aquelloquesiento,quetodoslospresentessentimos,mehacecerrarlosojosyjadearcomouna
posesa.Dennismemueveasuantojoyyopermitoque lohaga,mientrasmispechosserestrieganporlaespaldadeErichaciéndolesaberqueyotambiéndisfrutoconloqueocurre.
Abrolosojosy,desdemiposición,observoqueGinebra,mientrasestáconelotrohombre,tocaconunamanoelhombrodeEricytienelabocacerca,demasiadocercadelasuya.Esomehaceestaralerta.
Durantevariosminutos,elplacerseapoderadetodoslosqueestamosenlamorbosahabitación.Oigolosgemidosintensosdetodoelmundoy,porsupuesto,losdeDennisylosmíos,quesubenysubenysuben,peromiconcentraciónseencuentraenotracosa.EnEric.
Todosestamosallíporquequeremos.Todosestamosallíporquelodeseamos,hastaquedenuevoveoqueGinebrasehallademasiado
cercade labocademiamor.Soyconscientedecómoella le tocaelmentón,yentoncesalargo lamanoy,separándoladeél,murmuro:
—Subocaessólomía.
—Essólotuya,pequeña...,sólotuya—jadeaEricparaqueyolooiga.Oír su voz en unmomento asíme vuelve loca.Dennis se hunde totalmente enmí y, segundos
después, llegamos juntos al clímax mientras Eric y Ginebra, con sus respectivas parejas, tienenconvulsionesysecontraendeplacer.
Esanoche, cuando llegamos a casaynosduchamos, almeternos en la cama,miro aEricy lepregunto:
—¿HabríasbesadoaGinebrasiyonollegoaprohibirlo?Élmemira.Sabedeloquehabloy,negandoconlacabeza,musitaunescueto:—No.Pero,nocontentaconlarespuesta,insisto:—¿Tehabríagustadohacerloconella?—Jud...—Responde—ataco.Ericclavaentoncessusojazosenmí.—Melopermitisteyyolorechacé—contesta—;¿aquévieneesapreguntaahora?Asiento.Nopuedoreprocharalgoqueyoheprovocado,aunqueélnoloaceptó.—Eric—murmuro—,sóloqueríademostrartequeconfíoenti,ysimemientesyo...Rápidamente,miamorsemueve,sesientaenlacamay,cogiendomicaraentrelasmanos,dice:—No sé de lo que hablas, ni por qué habría dementirte yo, cariño.He rechazado algo que tú
mismameofrecías.¿Quéteocurreahora?Sinsaberaúnporquéhiceloquehice,pregunto:—¿Porquélarechazaste?Ericmaldiceyrespondemirándome:—Telohedicho:noquieronadaconella,Jud.¡Nada!—Entonces¿porquénolaseparastedetuboca?—Nolosé,Jud.Quizáfueraporqueestabaallímite.Túmismavisteque,nadamásdecirloque
dijiste,lleguéalclímaxconlaotramujer.Pero,cariño,mibocaessólotuya,comolatuyaessólomía.Nodudesdemí,porfavor.
Sin ganas de seguir hablando, asiento, le doy un beso en los labios y me recuesto sobre él.Segundosdespués,Ericapaga la luz.Adiferenciadeotrasveces,estaveznobromeamossobre loocurrido,yeso,aunqueEricnoloquieraver,medaquepensar.
7
Alamañanasiguiente,cuandomedespierto,estoysolaenlacama.Miroelreloj: lasdiezyveinte.Rápidamentemelevanto.
¿PorquéEricnomehadespertadoantes?Comounaloca,mevisto.Mepongounosvaqueros,unacamisetayunaszapatillasdedeportey
vueloescalerasabajo.Cuando llego a la cocina, Simona, Pipa y Eric están con los niños, mientras que Flyn está
tecleandoensumóvil.Comounaexhalación,entroylepreguntoamiamor:—¿Porquénomehasdespertado?Élseacercaamíconunapreciosasonrisay,trasbesarmeenloslabios,responde:—Porquenecesitabasdormir.Buenosdías,pequeña.Queestédehumormehacesonreíry, sinquererpensaren loquehablamos lanocheanterior,
miroamialrededorypregunto:—¿DóndeestáSami?Eric,queestáhaciéndoleunapedorretaaHannah,noresponde.Flynmemiraentoncesconcara
deapuroydice:—Björnhavenidoestamañanayselahallevado.Depronto,elteléfonomóvildeEricsuena.Echaunvistazoalapantallay,mientrasleentregala
niñaaPipa,dice:—EsWeber,paraunostemasdelaoficina.Iréaldespachoahablarconél.—¿Otraveztrabajo?Ericresoplaysaledelacocinasincontestar.Cuandoyasehaido,meacercoaFlyn.—¿Quéteocurre,cariño?—lepregunto.AhoraqueEricnoestá,élmemiradirectamentealosojos.¡Uy...,uy...,esamiraditadecorderodegollado...!¿Quéhabráhecho,Diosmío?¿Quéhabráhecho?Acostumbradaasuespecialmiradacoreanaalemana,levantolascejasyfinalmenteéldice:—¿Podemosiramihabitación?¡Losabía!¡Sabíaqueocurríaalgo!Convencidadequetienealgoquecontarme,asientoylosdossalimosdelacocina.Alsalir,veo
queFlynmiraendirecciónaldespachodeEricy,cuandoseaseguradequeestálapuertacerradaynonosve,mecogedelamanoy,tirandodemíatodaprisa,dice:
—Vamos.
Subimos la escalera de dos en dos y en silencio. Al llegar a su cuarto, entramos, él cierra lapuertaymemira.
—Mamá—dice—,tengoquecontartealgo.Asiento.Sinduda,lacosavaatraermiga.Mesientoensucamatrasquitarunpardecamisetas
quecomosiemprehadejadotiradasypreguntoconunsuspiro:—Losé.Conozcotumirada,asíque¡dispara!Mihijoserascaelcuello.Bueno...,bueno...,queaéstelevanasalirronchonestambién.Despuésserascalacoronillayfinalmentevahastasumesilla,rebuscaenelcajóny,tendiéndome
unsobre,dice:—Noteenfades,perosonlasnotas.Ay,miniño...Pobrecito,elapuroquetiene.Siélsupieralomalísimaestudiantequefuiyoasuedadylosdisgustosquelesdabaamispadres,
seguramentememiraríaconotrosojos.Perono,nopuedodecírselo,ysonrío.Flynesunbuenestudiante,siemprehasidounniñodenotablesysobresalientesytremendamente
exigenteconsigomismo.Cojoelsobrequemetiendeeintentoquitarlehierroalasunto.—Vamos, cariño,nopongas esa cara.Papáyyoya tehemosdichomuchasvecesquenohace
faltaquetodoseansobresalientes,miamor.Además,esteañohascambiadodecicloydecentroyestodomuchomásdifícil,porloqueesnormalquetusnotashayanbajado.
Elpobrememiraconojitosderatoncilloasustadoyyosonrío.¡Cómomecamelamicoreanoalemán!Yentonces,sinabrirelsobreconlasnotasquemehadado,pregunto:—¿Estásapuradoporquetehaquedadoalguna,cuchufleto?Élasiente.Perosihastapálidoloveo...Yo sonrío y cuchicheo, aunque, a diferencia de otras veces, cuando le digo aquel ridículo
«¡cuchufleto!»quetantorepitemihermanaRaquel,nosonríe,porloquecomienzoapreocuparme.—¿Quéhassuspendido?—pregunto.Remolonea.Duda.Miraeltecho.Oh...,oh...,¡estonomegusta!Después, sus ojos se dirigen al armario donde están sus pósteres de los ImagineDragons, su
grupopreferido.¡Uf...,comienzoaasustarme!Luegomiraasuspiesyfinalmente,cuandovequememuevoymevaadarunataque,susurrasin
mirarme:—Mehanquedadoseis.¡¿Seis?!¡Ay,quemedaunjamacuco!¿Heoídobien?¡¿Hadichoseis?!¡Lamadrequeloparió!—¡¿Seis?!—susurroantesdegritar—.¡¿Tehanquedadoseis?!Flyn,alvermigestoyoírmivoz,ponecarade«pobredemí»yresponde:
—Sí...,pero...esque...—¡Joder,Flyn,seis!—repitosincreerlomientraselcuellomecomienzaaarder.Pero¿cómohapodidopasaresosisiemprehasidounestudianteestupendo?Madremía.Madremía,cuandoseentereunoqueyomesé,laquesevaaarmar.Elniñonosabeadóndemirar,¡yyotampoco!Y,comounaloca,abroelsobredelasnotasy,conunhilodevoz,murmuro:—Has suspendido... historia, matemáticas, filosofía, geografía, inglés y dibujo... Pero... pero
¿cómo puedes suspender hasta dibujo? Madre mía, Flyn, cuando Eric vea esto, no querríaencontrarmeentupellejo.
Mihijomemira,sabequetengorazón.—¿Cómosellamabatututor,quenolorecuerdo?—preguntoenfadada.—Alves.SeñorAlves.Asientoyrepitoacalorada:—EllunesyapuedesdecirlealseñorAlvesquequierounatutoríaconélparaquemeexplique
quénariceshapasado,¿entendido?Flynasiente,nolequedaotra.Todavíasorprendidaporaquello,murmuro:—¿Ycómolecontamosestoatupadre?En ese instante se abre la puerta de la habitación.Al ver que esEric, escondo rápidamente las
notasamiespalda.¡Quétío,siemprenospilla!Nosvealosdosdesconcertados,asíqueentra,cierralapuertaypregunta:—¿Quéplaneáisamisespaldas?Comosinoshubieracomidolalenguaunhipopótamo,asíestamosFlynyyo.Elniñonosabequé
decir,yyonoséniquéresponder.Madremía...,madremía...,cuandovealaspuñeterasnotas...NuestromutismoylarigidezdenuestroscuerposponenenalertaaEric.Nosconoce.Seacercaa
míydice:—¿Qué ocurre, pequeña? —Al ver mi brazo hacia atrás, mira por encima de mi cabeza y
pregunta—:¿Quéesesepapelqueescondes?Ahoralaquelomiraconojosderatoncilloasustadosoyyo,yentoncesoigoaFlyndecir:—Papá,sonlasnotas.Ericmemira...Yolomiro...Ericsonríe...Yomerascoelcuello...Lasronchasenmicuellomedelatanyesolehacepresuponerquealgonovabien.Asípues,me
apartalamanoparaquenomerasque,acontinuaciónmelasuelta,extiendesumanoydice:—¿Meenseñaslasnotas,Jud?Vale.Elmomentohallegado.Peroantesdedárselas,digointentandoallanarleelcaminoaFlyn:—Cariño,piensaqueesteañohacambiadodecicloy...—Venga,Jud,esoyalosé.Enséñamelas.
Flynyyonosmiramos.—Meestáisasustandoconvuestrasmiraditas—diceEric,aúnconhumor.Oy...,oy...,oy...,laquesevaaarmar...Y,sinpoderretrasarmáselterriblemomento,selasentrego.¡Acubrirsetoca!Sin quitarle de encima la vista ami amor, veo cómo su boca pasa de la divertida sonrisa a la
sorpresay,deahí,alenfadoendécimasdesegundo.AntenosotrosacabadeaparecerelfríoIcemanqueasustaaFlyn,yentonceslooigodecircon
vozroncaycontrolada:—Flyn,veamidespachoyespérameallí.Enunabrirycerrardeojos,elchicodesaparecedelahabitación,yEricmemiraysisea:—¿Cuántotiempopensabasocultármelo?Suacusaciónmetocalasnarices,elpiederechoydistintaspartesdemicuerpo.Melevantodela
camaypreguntoconcautela:—¿Cómodices?Conelgestocongestionadoylasmalditasnotasenlamano,Ericmusita:—Aquíponequeselasentregaroneldía18,yhoyes23.¿Hastacuándopensabasocultármelas?Yaestamos.¡Ericysusconclusionesprecipitadas!Clavomisojazosnegrosenélyprotesto:—Oye...,oye...,oye.Queyolasacabodeverporprimeravezhacecincominutos.—¡¿Seguro?!—¡Segurísimo!—Nomelocreo.—Puescréetelo—insisto.—Jud,memolestacuandomientesparaocultaralgodeFlyn.¡Yaestamos!¿PorquéEricsiemprecreequeestoycompinchadaconelniñoparatodo?Trasacercarmeaélsinningúnmiedo,leclavoeldedoíndiceenelpechoysiseo:—Mira,bollito...—¡Jud!—¡¿Qué?!—¡Novuelvasallamarmeasí!—replicafurioso.Sumiradamehacesaberqueesonolehaceningunagracia,ynodispuestaajorobarlascosas
másdeloqueestán,digo:—Vale.Perdona.Encuantoalniño,entiendo tusorpresay tuenfado,porqueesomismomeha
pasadoamícuandomelashaenseñado.Peroloquenoentiendoesquerápidamentedesconfíesdemíporqueyo...
—¿Cómonovoyadesconfiardeti,sisiempreloestástapando?—¡Pero¿quénaricesestásdiciendo,gi...?!Suduramiradahacequemecalle.Esmejorqueenunmomentoasíno lo insulteo todo iráa
peor.Pero,vamosaver,¿quéesesodedesconfiardemí,cuandoyoconfíoplenamenteenél?
Ericsemuevenervioso.Paramidesgracia,cuandolascosasseleescapandelasmanos,puedellegaraserelhombremásdesagradabledelmundo.
—¿Acasocreesquesoytontoynomedoycuentadela infinidaddevecesquemeocultasalgoparaquenoloregañe?—insiste.
¡Joder,tienerazón!Bueno...,bueno...,bueno...Siseenteradequehecompradodosentradasparallevarloalconcierto
delosImagineDragons,¡laquememontaesfina!ReconozcoquesoydemasiadoprotectoraconFlynenciertosmomentos,perotambiénlosoycon
mis otros hijos, con mi familia, con mis amigos e incluso con él. Sin embargo, cuando voy acontestar,Ericseadelanta:
—Daigualloquedigas,Jud.Comosiempre,atitodoteentraporunoídoytesaleporelotro,¿verdad? —A continuación, se dirige hacia la puerta y añade—: Voy a hablar con Flyn a solas.Necesitounaexplicaciónaestedesastredenotas.
Y,sinmirarme,saledelcuartodandounportazo.¡Yalahemosliado!Estávistoque,cuandolamalarachitacomienza...,¡asaberDioscuándoacaba!Unavezsolaenlahabitación,durantevariossegundosmiroalsuelo.SéqueErictienerazonesmásquesuficientesparaestarmosqueadopero,comosiempre,yame
haechado laculpaamí.Laprimerasorprendidacon loocurridoalver lasnotashesidoyo,peroestoyseguradequeesecambiodeactitudenFlyntieneunaexplicación.Sinduda,laadolescencia,losamigosylosamoresloestánatontando.
Sinembargo,comomadrequemeconsiderodeFlyn,decidoiraldespacho.Quieroestardelantecuandoexpliqueeldesastre.Asípues, salgode lahabitación,bajo la escaleraymedirijohacia eldespachodemiincombustibleamorenfadado.
Alllegar,estálapuertacerradayoigolavozautoritariadeEric.¡Buenoooo...,laqueleestácayendoaFlyn!YaconozcoaEricporque,sino,estaríaasustaditaperdidapensandoqueestáladrandocomoun
perrofuriosoyrabioso.Sinesperarunsegundomás,abrolapuertayentro.EricyFlynmemiran,yveoenlosojosdeminiñoalgoquenuncahevistoenélyquemipadre
siemprehallamadopasotismo.Esonomegusta,asíquemedirijoaEric,quetienelasnotasenlamano,ydigo:
—Soysumadreyquieroestarpresenteentodoloquetengasquedecirle.Observocómosupechoseagitaysusojosseentornan...,¡joder,parecechino!En su mirada leo que le gustaría echarme del despacho, pero sabe que lo que he dicho es
importante para el niño y para todos como familia y, volviendo amirar al crío, continúa con superorata.
Como siempre, Eric hace preguntas y, cuando Flyn va a contestar, lo interrumpe y el niño seencoge.Esomesacademiscasillas.Ericnolodejacontestar.Mecalloydecidodecirleamimaridoloquepiensocuandoelcríonoestépresente.
—Estáscastigadosinsalircontusamigos.—Papáaaa...
—¡Hedichocastigado!—insistemialemán.—¡Nosoyunniño!—gritaFlyn.Aloíreso,Ericresopla,apoyalasmanosenlamesadesudespachoycontrolandolavozsisea:—Eresmihijoyconesomevaleparacastigarte.Flynsedesespera,loveoensusojosy,mirándome,dice:—Elviernestengounafiestaimportante.—¿Quéfiesta?—preguntaEric.Sinamilanarse,elcríosedirigeamiamoryresponde:—Lafiestadelcumpleañosdeminovia.—PuesdileaDakotaquenovas—sueltaEric.—Dakotanoesminovia,papá;ahoraloesElke.Ericmemiray,tansorprendidocomoyocuandomeenteré,pregunta:—¿YquiénnaricesesElke?Bueno...,bueno...,bueno...,lacosasevacaldeandoporsegundoscuandoFlyn,enbuscadelapoyo
quesiempreledoy,memiraconesegestoquemedescongelahastaelalma.—Mamá,ayúdame—suplica—,tengoqueiralafiestadeElke.—Tumadrenotevaaayudarporquenoirás,¡estáscastigado!—insisteEric.—Papáaaa...Suspiro yme acaloro. No voy a llevarle la contraria a Eric, esta vez no, porque sé que tiene
razón.Asípues,cojofuerzasydigo:—Losiento,Flyn,perocomopapáhadicho,¡estáscastigado!Miniñomemiracongestodeincredulidad.Noentiendecómoestaveznoloayudo.¡Ay,quédolorsientoenelalma!Estodesermadredeunadolescente,enplenaedaddelpavo,esmásdurodeloquecreía.NotolamiradadeconformidaddeEricanteloquehedichoy,cuandoFlynvuelveaquejarseotra
vez,lesuelta:—Y,porsupuesto,yapuedesolvidartedelordenador,latablet,lasredessocialesyelmóvil.—¡Nopuedeshacereso!—gritaFlyn.Ericseponeenfermoaloírsutonoy,acercándoseaél,replica:—Puedoyloharé.—¡Pero,papá...!Bueno...,bueno...,bueno...,silequitatodoesoalniño,selocarga.¡Pobrecito!—Ycomovuelvasaprotestaro a levantarme lavoz—siseaEric congesto furioso—, te juro,
Flyn,quelasconsecuenciasvanasermuchomásgraves.Elniñomemira.¡Angelito!Yyo,conlamirada,sinpestañear,lepidoquenoabralabocaynose
leocurramencionarlodelasentradasdelconcierto.Porsuerte,meentiende,hacecasoymiraalsuelo.Uf...,¡menosmal!CuandoEricseenfada,eseltíomásintransigentedelmundopero,enesteinstante,pesealapena
quemedaFlyn,miamortienetodalarazón.Duranteunpardeminutos,lostrespermanecemoscallados,hastaquefinalmenteEricdice:—Saldeldespachoytráemetuportátil,latabletyelmóvil.Telodevolverétodoypodrásvolver
asalircontusamigoscuandorecupereslasseisquetehanquedado,¿entendido?Abatido,micoreanoalemánagachalacabeza.Sabequeenesteinstanteesmejorobedecery,por
ello,sinmirarme,pasapormiladoysaledeldespacho.Unavezmequedoasolasconmiamor,Ericmemira.Ea...,¡ahorametocaamí!—Sientohabermepuestoasícontigo—dice—.Flynmehacontadoqueacababasdeverlasnotas.
Losiento,cariño.Perdóname.Norespondo,simplementelomirocongestodeenfadoyloinformo:—LehedichoaFlynquelecomenteasuprofesorquequierounatutoríaconél.—Iremoslosdos—afirmaEric.Dos segundos después, la puerta se abre y Flyn entra con todo lo que Eric le ha pedido. Sin
mirarnosaningunodelosdos,dejaelordenador,latabletyelmóvilsobrelamesadeldespachoysemarcha.
Ericsepasaentonceslamanoporlacabezaypregunta:—¿Quéestamoshaciendomal,Jud?Oírsutonodevozabatidomehacesaberqueaéllehadolidomáshacerloquehahechoquea
nuestrohijo.—Nohemoshechonadamal,Eric—murmuroacercándomeaél—.Seguimossiendolosmismos
queayer,peroélcambiayyanoeselniñoquesecontentabaaprendiendoamontarenmonopatínojugandoconnosotrosalaPlayStation.
—Y,sinohemoshechonadamal,¿porquédeprontosuspendeseis?Ésaesunapreguntadifícilderesponder.—Yo no puedometerme en la cabeza de Flyn—digo—, pero he tenido su edad, como la has
tenidotútambién,y...—Yo siempre he sido muy responsable, incluso con esa edad, Jud—me corta—. Siempre he
sabido que los estudios eran algo que debía aprobar por mí y por mis padres, aunque estuvieradesfasadoenciertosmomentos.
Sonrío.Sinduda,michicarrónsiemprehasidoungran responsable.Meencojodehombrosyrespondo:
—Puessientodecirtequeamí,asuedad,loúltimoquemeimportabaeranlosestudiosyloquemispadrespensaran,porqueloúnicoquequeríaerasaltarconlabicicletacomounaloca,divertirmey,cuandoibaaladiscotecaconmisamigas,serunachicaguapaalaqueadmiraranloschicos.
Mi confesión hace que Eric memire, y entonces observo que las comisuras de sus labios serelajan.
¡Bien...,vamosbien!Actoseguido,pasalasmanosalrededordemicinturaymurmura:—Tusamigosdebíandeestarciegosparanoadmirarte.Vuelvoasonreír.¡Quémonoescuandoquiereeljodío!—Era desgarbada, además de peleona con los chicos—confieso—.Me gustaba demasiado el
deporteymesentíafeaanteotraschicasque,conmimismaedad,estabanmásdesarrolladasyeranmásfemeninas.
MiIcemansonríe,esometranquilizay,acercandosufrentealamía,murmura:—¿CreesquehehechobienconFlyn?Lomiroymepierdoensusojos.—Hashecholoquecualquierpadrepreocupadoharíaporsuhijo—afirmo—.Lehashechover
que toda causa tiene un efecto.Ahora es él quien debe darse cuenta de lo que realmente tiene quehacerparavolveradisfrutardetodoslosprivilegiosquetenía.Y,sitequedasmástranquilo,quieroquesepasque,enestaocasión,yohabríaactuadoexactamenteigualquetú.
—Puesmesientofatal—insiste.Nopuedoevitarloysonrío.Enminiñez,recuerdohaberescuchadoamispadresteneresamismaconversacióncuandonos
castigabanaRaquelyamíporhabernosportadomal,loqueeradecontinuo.—Entiendo tu malestar porque yo también me siento así — digo—, y más cuando no lo he
ayudadoparalodelafiestadeElke.—Ericresoplaaloíreso,peroprosigo—:Hastaestemomento,Flyn siempre había ido bien en los estudios y no habíamos tenido que enfadarnos con él por ellopero, ahora, creo que nos va a tocar pasar una temporadita complicada hasta que consigamosencauzarlodenuevo.
—¿QuiénesElke,ycuándodejódeestarconDakota?—Niidea,corazón—digoy,alverlaconfusiónensusojos,afirmo—:SeguroqueElkeseráuna
buena niña como Dakota. —Eric se toca el pelo y prosigo—: Cariño, todo esto se deberá a unconjunto de cosas. Su edad, la novia, los amigos, el interés por todomenos por los estudios y larebeldía.Piensaquehemospasadodeserlospadresperfectosalenemigoaabatir.Estoesasí,Eric.Esleydevida,amor.
Ericresopla.Sinduda,sabequetengorazón.—RecuerdoquemipadremeprohibíasaliromequitabalabicicletaenJerez—continúo—.Eso
meenfadaba,peroera loúnicoquehacíaqueyo reaccionara.—Eric sonríe—.Pero,por favor, lapróximavezquehablesconél,permítelequeresponda.Nolocortestodoelratocadavezquevaacontestarodejarádehablarcontigo,ytúnoquiereseso,¿verdad?—Élniegaconlacabezaeinsisto—: Pues entonces hazme caso. No hay nadamás incómodo que querer responder y que no te lopermitan.
Ericasiente.Sinduda,séquelapróximavezquehableconéllohará.Medaunbesoymurmura:—¿Perdonasatugilipollasporsacarconclusioneserróneasdeti?Esomehacesoltarunacarcajaday,encantada,posolasmanosensushombrosydigotocándole
concariñoelcuello:—Adoro que en ocasiones seas un gilipollas; ¿sabes por qué?—Él niega con la cabeza, y yo
aclarodivertida—.Porquemeencantareconciliarmecontigo.Susonrisaseensancha.¡Oh,Dios,quémaravillosasonrisatienemialemánpreferido!Cuandovaabesarmeyséquemevaadejarsinrespiración,nosinterrumpenunosgolpesenla
puertadeldespacho.—Adelante—diceEric.Lapuertaseabre.EsSimonaque,congestopreocupado,explica:
—Sientointerrumpir,peroFlynsehapilladoundedoconlapuertayestádoloridoenlacocina.Ericyyosalimosalacarrera.¡Ay,miniño!Cuando llegamos a la cocina, nuestro adolescente nos mira. Eric se apresura a arrodillarse
delantedeél,cogesumano,retiralabolsadehieloquePipalehapuestoyexaminaeldedoaplastadoyrojo.
—Jud, llama a Marta para ver si está en el hospital —me pide a continuación con gestodescompuesto.
Sintiempoqueperder,lostresnosdirigimosalgaraje.Allí,nosencontramosconNorbert,que,alvernosllegar,aunquenosabeloquehapasado,dicerápidamente:
—Encincominutosllegamosaurgencias.AFlynporeldolorseleescapanunaslágrimas,yEricnopuedeyanirespirar.Madremía,¡peroquénerviososeponeconestostemas!HabloconMarta.Estáenelhospital.Comopuedo,mientrasllegamostranquilizoalgrandullóny
aminiñoalavez.Noséquiénesmáscomplicado.Cuandollegamosaurgencias,Marta,lahermanadeEric,quetrabajaallí,yanosestáesperando.
Micuñada,queesunamor,sepreocupaporFlynencuantolove.—Túquédateaquí—diceentoncesmirandoaEric.—No.YovoyconFlyn—insisteél.Martayyonosmiramosy,finalmente,pararelajarlodigo:—Ericyyonosquedaremosaquí.Flyn,veconlatíaMarta.Unavezellosdosdesaparecenporlapuerta,Ericmemiracongestotensoy,antesdequeabrala
boca,digo:—Sabes que esmejor que no estemos nosotros para que Flyn esté atento a lo queMarta y el
doctorledigan,asíqueniseteocurraprotestar,quelamadresoyyo,estoypreocupadaynoestoymontandounnumerito,¿deacuerdo?
Ericasienteynodicenada.Norbert,queyahaaparcadoelcoche,entraenurgencias.Alvernos,sesientaanuestrolado,ylostresesperamosconimpacienciayensilencio.
Cuarentaminutos después, la puerta se abre y salenMarta yFlyn.Miro aEric y veo cómo sugestosesuavizaalcontemplarlo.Loquiereconlocura.Losé,ysólodeseoqueFlyntambiénlosepa.
Cuandoseacercaaél,observasumanovendadayluegolomiraalosojos.—¿Estásbien,colega?—lepregunta.Elcrío,queyanollora,esbozaunasonrisayasiente.—Meduele,papá,peroestoybien.Ericloabrazayyomeemociono.¡Soyasídetonta!Martanosdicequelehanhechounaradiografíayeldedonoestároto,perotieneunapequeña
fisura.Lehanpuestouna férulapara inmovilizárseloy tieneque tomarantiinflamatorios.Unavezacabadeexplicárnoslotodo,veoquetienemalacara.
—¿Teencuentrasbien,Marta?—pregunto.Micuñadamemira,serecogeelpeloenunacoletaaltayresponde:—Sí.Essóloqueestanochenohedormidomucho.
Tanprontocomosabemosquetodoestábien,apesardelsusto,Martamiraasusobrino,queestátanaltocomonosotras,yledice:
—Todavíanomehascontadocómotehaspilladoeldedo.ÉlnosmiraaEricyamí,quesomoselenemigo,yresponde:—Estabaenfadado,cerrélapuertaconfuerzaymepilléeldedo.Concariño,letocoelpeloylobesoenelhombro.—¿Yporquéestabasenfadado?—insisteMarta.Flynmiraalsuelo.Ericmemiraamí.MartamiraaEricyyofinalmentedigo:—Vamos,cielo,respondealoquetehanpreguntado.Miniñoresopla,levantalacara,miraasutíaycontesta:—Medieronlasnotasysuspendíseis.—¡¿Seis?!—gritaMarta.Ericasiente.Yoasiento.FlynvuelveamiraralsueloyMartalesuelta,sorprendiéndonosatodos:—Flyn Zimmerman, espero que tus padres te hayan castigado como mereces, jovencito. Tu
obligaciónesestudiaryaprobar,comolaobligacióndetuspadresescuidarte,protegerteyprocurarquenotefaltedenada.
Atónito,miamorobservaasuhermana.Estoyseguradequeesperabacualquierotracosamenoseso,ysonríocuandolooigodecir:
—Gracias.Martaleguiñaelojoconcomplicidad.
Cuando llegamos a casa, Simona y Pipa están preocupadas pero, en cuanto ven a Flyn, lapreocupaciónselespasa,ylomismoocurreconSonia,misuegrayabueladelniño.Martalallamaparadecírseloy,cuandoellatelefoneaparapreguntaryhablaconFlyn,tambiénsetranquiliza.
Traslacomida,ErichablaconBjörnydespuésnossentamosconlosniñosenelsalón.HannahyelpequeñoEricsequedandormidos,ycomienzalapelículaLosVengadoresenlatelevisión.¡Bien!Nosgustaalostres.
DuranteveinteminutosEric,Flynyyolavemos,hastaquelapuertadelsalónseabreySimonaanuncia:
—Flyn,unatalElkealteléfono.Elcríonosmira.Sabequeestácastigado.Yonomuevoniunapestaña,yEric,finalmente,alver
quenovoyaabrirlabocayelniñonolequitaojo,dice:—Veahablarconella,perohazlodesdetuhabitación.Flyndaunsaltoycorrehaciaelteléfono.Yosonríoycuchicheo:—Vaya...,vaya...¿Noquieressaberquéesloquehablaconsunuevanovieta?Ericniegaconlacabezayrespondecongestotaciturno:—LaintimidaddeFlynentemasdeamoresessólosuya.Sonrío.Nopuedoevitarloy,sindecirnadamás,meacomodojuntoamiamoryseguimosviendo
lapelículamientraslospequeñinescontinúandormidos.Lapeli está genial.Me encanta pero, comoya la hevisto yEric también, tras reírnospor una
escenadivertida,lepregunto:—Porcierto,¿quétehadichoBjörn?Ericmuevelacabezayexplica:—Lehanvueltoapiratearlaweb.—Pobre...,¿yaeslaterceravez?—Lacuarta.IntentanlocalizaraltalMarvel,peronodanconél.Sinduda,debedeserunhacker
profesional.Resoplo.EsevidentequeBjörntieneungranproblema.Guardamossilencioduranteunossegundos,hastaque,mirándolodenuevo,digo:—Tenemosquehablar.NotoqueEricsetensa,perofinalmenteresponde:—Cariño,siessobreGinebra...—Noessobreeso—locorto,yañado—:Confíoenti.Ericasiente.Legustaloquehedichoy,sonriendo,murmura:—Entonces,túdirás.Cojofuerzasydigosinparpadear:—Esenreferenciaatrabajar.Sucarasedescompone.—Judith,porfavor.—Ah...,ah...,nomellamesporminombrecompleto,queesosólolohacescuandotecabreas—
mequejo.Suspira.Sabequenopuedeseguiresquivandoeltema,porloquecierralosojosyreplica:—Deacuerdo,yaséquelaniñayatienedosañosy...—Eric—locortoimpasible—.Sabesqueadoroalosniñosyteadoroatiyqueporvosotrosdoy
mivida,peronecesito trabajarenalgoquenoseacuidarde losniños,dardecomera losniñosydormiralosniñosotejuroquemevoyavolverlocacomomihermanaRaquel;¿quiereseso?
—No—responderápidamente—.Pero,cariño,notehacefalta.Sabesqueyocubrotodasvuestrasnecesidadesy...
—Losé,¡claroquelosé!Séquiéneresyconquiénmehecasado—gruño—.Perotambiénséqueohagoalgooalfinalmevoyaconvertirenunserinsoportable.
Ericmemira,yolomiroyleadvierto:—Elqueavisanoestraidor—y,comonomeapetececallármelo,añado—:Además,todavíano
heolvidadoqueledijisteaGinebraquetegustabanlasmujeresqueibanaporloquequerían,yyo,amigo,siemprevoyaporloquequiero.Quetequedeclaro.
Oigosuresoplido.¡Ericysusresoplidos!Finalmente,cuandovequenovoyaceder,dice:—Sabesque,sitrabajas,tutiempoparalosniñosyparamíseverálimitado,¿verdad?—Puesclaroquelosé,¡losétodo!—respondoconscientedeello—.Perotútambiénsabesque
nosoymujerdequedarmeencasaelrestodemividaalaesperadequemimariditoregresedesutrabajo.—Sugestosecontrae.Nolegustanadaloquehedicho,einsisto—:Vamosaver,Eric.Estaconversación la hemos tenido muchas veces y no estoy dispuesta a volver a discutir por ello.Convéncete de unavez por todas de que yo soy lo queves, ¡soy Jud!Lamujer independiente que
conocisteenMüller,España, trabajandodesecretariayque,además,por las tardes,dabaclasesdefútbol a niños. Si no quieres que trabaje en tumaldita empresa porque soy tumujer, te juro quebuscarétrabajoenotrositioy...
PeroEricnomedejaacabar,poneundedosobremislabiosparaquemecalleyreplica:—Notrabajarásparaotros.Bueno...,nopensabadecirtenadademomento,perohayunavacante
paraunpardemeseseneldepartamentodemarketing.Parpadeo.¿Hadicholoquecreoquehadicho?¡¿Tengotrabajo?!Micaradebedeserunpoema.¡¿Marketing?!—Margueriteestaráfueraunpardemeses.LecomentéaMikalaposibilidaddequetútrabajaras
conellaesetiempoyleparecióbien.—¡¿Marketing?!—RíodivertidaalpensarentrabajarconMika;¡meencanta!—Sí,cielo,perohayunacondición.—¿Cuál?—preguntodeseosa.—Trabajarásamediajornadaynoviajarás.Oíresomehacesonreír.Medaiguallacondición.Voyatrabajar,¡tengountrabajo!Yentonces
digorápidamente,sinpensar:—Acepto.Aceptotucondición.Miamorsonríetambién.Dios...,cómomegustaverloasí.—Estoysegurodequeloharásgenial—dice—.Siquieres,ellunesvienesconmigoalaoficinay
hablasconMika.—Sí...—afirmoconunhilodevoz.—Deacuerdo.Leenviaréunmensajeparaqueellunesesperetuvisita.¡Tomaya!Menudogolazoquemehametidoelalemán.Alemania,1-España,0.¡Melocomo...,melocomo...,melocomo!Yo, que estaba dispuesta a discutir y a pelear como una leona, me quedo sin palabras. Como
siempre,Ericmehasorprendido.Mesientoahorcajadassobreélymurmuro:—Ahoraescuandotengoquedecirtequenoséquédecir.Élsonríe.Adorosusonrisa.Nomequitaojodeencimay,trassuspirar,musita:—Puesdimealgobonito.Ahoralaquesonríesoyyo.—Ereselmejor,tequiero...,tequieroyterequetequiero.Miamorríesatisfecho.—Pequeña,sóloquieroqueseasfeliz.Esosí, recuerdanuestracondición,yque losniñosyyo
existimos,quetenecesitamos,ytodoirásobreruedas.Suadvertenciaescariñosa,yafirmo:—Lorecordaré,tantocomolorecuerdastú.
Susonrisasecontraeunpoco,séqueesapullitaquehesoltadolehaescocido,peronodispuestaa que elmomento se jorobe pormi poco acertado comentario, lo beso en la punta de la nariz yañado:
—¿Sabesqueestoylocaporti,señorZimmerman?MiIcemanvuelveaensancharsusonrisaymeclavaconsuavidadlosdedosenlacintura.—Megustaqueestéslocapormí...,señoritaFlores—murmura.Dereojomiramosalosniños,quesiguendurmiendo,yendécimasdesegundosnuestrasbocas
seencuentran.Han pasado varios años desde que nos besamos por primera vez, pero las mariposas y los
elefantesquesientoenelestómagocuandoEricmebesasiguentanvivoscomoelprimerdía,ysóloesperoqueaéllesucedalomismo.Lodeseo.
Nuestro beso se acrecienta y, enloquecido por ello, Eric se levanta conmigo en brazos y metumbasobreelsillón;luegoseechasobremícondelicadezaparanoaplastarme.
Sabemosquenoesmomentoparaeso.Sabemosquelosniñosduermenanuestrolado.Sabemos que es una locura, pero también sabemos que la locura es lo nuestro y que, cuando
comenzamosabesarnos,¡olvidamoslapalabra«sabemos»!RápidamentesientolaexcitacióndeEricapretándosecontramí.¡Oh,Diosssss!¡Loquieroya!Los besos suben y suben de intensidad. El calor inunda nuestros cuerpos y, enloquecido, mi
alemáncomienzaadesabrocharmeelbotóndelosvaquerosyyomearqueoparafacilitárselo.Consumanolibre,mesuelta lacoletaquellevoenloaltode lacabezay,cuandomeagarradelcuelloparaahondarensubeso,deprontolapuertadelsalónseabreyoímos:
—Mamáaaa...,papáaaaa...ElsaltoquedamosEricyyoparasepararnoshacequeelsillónsetambalee,yFlyn,queesmuy
cabrito,insistemirándonoscongestocontrariado:—Pero¿quéhacéis?Vayapillada.¡Vayapillada!Ericsesientaconrigidezenelsillónysedisponeaverlatelevisión.¡Quécabritoéltambién,cómoescurreelbulto!Pero yo, al ver que el niñonomequita la vista de encima a la espera de una explicación,me
retiroeldescontroladopelodelacaraymurmuromientrasmecubroelpantalóndesabrochadoconlacamiseta:
—Pues,cariño,notevoyamentir,nosestábamosbesando.—¡Jud!—protestaEricaloírme.Me entra la risa. No lo puedo remediar y, mirando a mi amor, queme observa sorprendido,
insisto:—PorelamordeDios,Eric,Flynyaesmayorysabeperfectamenteloqueestábamoshaciendo.
¿Quéquieresquelediga?Mialemánmemirayresopla,sabequellevorazón.Luegosevuelvehaciaelniñoyafirma:—ComohadichoJud,¡nosbesábamos!
Flynasienteysonríeconpicardía.¡Menudosinvergüenza!NopreguntamásysesientaenunsofáquehayaladerechadeEric.Durantevariosminutos,los
tresvolvemosacentrarnosenlapelículadelatelevisión,hastaquedeprontomimaridopregunta:—¿CuándoeralafiestadecumpleañosdeElke?Yolomiro...Flynlomirayresponde:—Elviernesqueviene.Nosédequévatodoesto,perodeprontomialemánpreferidodelmundomundialdice:—IrásalcumpleañosdeElkepero,después,estáscastigado,¿entendido?Flynsonríey,trasponerseenpiedeunsalto,seabalanzaliteralmentesobreEricolvidándosede
sudedolesionado.—Gracias...,gracias...,gracias,papá.Ereselmejor.¿Papá?¿Yyoqué?Sinembargo,meemocionocomounamonaysonríofelizalentenderqueEricsehapuestoenla
pieldeFlynyhacomprendidolanecesidaddesuhijopornofallarleaElke.Sinduda,mialemáncambia,comocambiaFlynycomo,obviamente,tambiéncambioyo.
8
Como todos los años, la cenadegaladeldespachodeabogadosHeine,DujsonyAsociados enelrestauranteChezAntoninestabasiendotodounexitazo.
Elfamosobufeteorganizabaunavezalañouneventoparalaincorporacióndesocios.Björn,queeraconsideradounodelosmejoresabogadosdeMúnich,estabatambiénallítomando
algo en compañía deMel. Su sueño siempre había sido trabajar en el afamadodespacho, pero nocomo asociado; él quería algomás, quería que su apellido formara parte del nombre del bufete:Heine,Dujson,HoffmannyAsociados.
Enaquellaocasión,susueñoestabamuycercadeversecumplido,yaqueeldespachonecesitabaefectivo y los dos asociados mayoritarios estaban entrevistándose con distintos profesionales.Deseosodeconseguir elpuesto,Björnpresentó sucandidatura,pero sabíaque, igualque ladeél,habíaotrastresmás,ytododependíadelaopciónqueeligieranGilbertHeineyAmadeusDujson.
Ataviada con un bonito vestido negro y blanco,Mel, que se encontraba apoyada en una de lasbarras,observabahablaraBjörnconotrosabogados.Estabaguapísimoconaqueltrajeazulderayadiplomática.
Pero¿realmenteconquénoestabaguapo?No le había contado a Björn lo que Louise le había dicho en referencia a aquel bufete. Ella
prefería siempre observar antes de levantar falsos rumores. Y, por lo que veía, todos aquelloshombreseranunosfrikisdelaabogacíaypocomás.
Concuriosidad,laextenienteMelParkervioaLouise,lamamádePablo,entrarjuntoasujovenmarido. Parecía feliz del brazo de aquél, hasta que la descubrió a ella y su expresión cambió.Evidentemente,noesperabaencontraraMelallí.
Duranteunrato,Mellasiguióconlamiradaporlaestanciahastaquevioquesedirigíaalbaño.Sindudarlo,yparatranquilizarla,Melfuetrasellay,unavezdentro,Louisepreguntó:
—¿Quéhacesaquí?—Björn,minovio,esabogadoyquieretrabajarenestebufete.ElgestodeLouisesedescompuso.—Nolopermitas—murmuró—.Silohace,tuvidaseráundesastre.Aloíreso,Melsonrióyrepuso:—Tranquila,Louise,conozcoaBjörnynoesunhombrequesedejellevarpornadie,y...Eneseinstanteseabriólapuertadellavaboyentrarondosmujeres.Lasmiraron,lessonrierony,
cuandodesaparecieronenelinteriordelosaseos,Louisecuchicheó:—Nodigasquenoteloadvertí.Y,dichoesto,lajovensemarchódelbañodejandoaMelconlabocaabierta.Cuandosalió,sedirigiódenuevohastalabarradondehabíaestadomomentosantes,miróasu
alrededorysuspiró.Sinlugaradudas,lasmujeresdetodosaquelloshombres,ademásdeflorerosyunosclonesunasdeotras,erantodoloqueellanuncaquerríaser.Sóloconverlas,oírlashablaryvercómosemovíanporlasala,sabíaquedeallípocasamigaspodíallevarse.
Aburrida pero con lamejor de sus sonrisas,Mel esperó pacientemente a que Björn dejara dehablarconaquellostiposyseacercaraaella,algoqueélnotardóenhacer,pueseraconscientedecómomuchosdelospresentesobservabanasumujer.
—¿Otrocóctel?—preguntóBjörn.—Memueroporunabirrabienfresquita.—Mel...Ellasonrió.—Deacuerdo,señorHoffmann,seréfinayeleganteyquerréotrocóctel.Björn sonrió. Sabía cuánto le estaba costando aMelmezclarse con aquella gente y, cuando le
entrególabebida,elladijo:—TejuroquetodosestosfrikisdelasleyessonlomásaburridodelafazdelaTierra.Todavía
nopuedocreerquetúseasunodeellosyqueyoestécontigo.—¿Meacabasdellamar«frikiaburrido»?—dijoBjörnriendo.Melasintió.Björnseacercóentoncesaellaysusurró:—Esomelovasarepetirestanochecuandolleguemosacasa,Catwoman.Ambos estaban riendo cuandounode losorganizadoresde la cena,GilbertHeine, el asociado
mayoritario,seacercóhastaellos.—¿Lopasáisbien?—¡Estupendamente!—asintióMelconlamejordesussonrisas.—Todogenial,Gilbert—aseguróBjörn.Elhombremiróentoncesalgoagobiadoasualrededorymurmuróacercándosemásaellos:—Estoy deseando cenar.Hemos encargado un paté austríaco que es unamaravilla, un pescado
increíbleyunpostredelacasaqueestáparachuparselosdedos,¡yaveréis!BjörnyMelsonrieronaloírlo.ElhombrecanosodeaparienciaimpecablesequedóconellosmásratodeloqueaMellehabría
gustado.Por suparte,Björn loconsideróunhonory,alvercómobromeabay reíaconsumujer,supoquelosestabanestudiando,locualerabuenaseñal.
Cuando el jefazo semarchóy llamóaBjörnpara que lo acompañara,Mel lo animóa ir.Ellaesperaríaallítranquilamente,perosusplanessefueronaltrasteenelmomentoenquelamujerdeljefazo, Heidi, fue hasta ella, la agarró del brazo y se la llevó a una mesita donde otras mujeresestabanconversando.
Louiselamiró,peronocomentóqueseconocieran,porloqueMelcallóydisimuló.Duranteunbuenrato,prefabricóunasonrisamientrasescuchabacómohablabanlasmujeres.
¿Porquéerantanantinaturaleseinsufribles?Melnoteníanadaqueverconellas,ycuandoyanopudosoportarunsegundomásoíralasotras
hablandodelbótoxodenosabíaquépreciosaycarísimaprendadevestirquellevabaunadeellas,sedisculpódiciendoquedebíairalbañoysequitódeenmedio.
Unavezallí,seechóaguaenlanuca.Entonces,Louiseentrótambiénenelbaño.
—Sientosertanfríadelantedeésas—dijo—,pero...—¿NodicesquequieresdivorciartedeJohan?¿Quéestáshaciendoaquí,entonces?—preguntó
Melmirándola.Louisesuspiró.—Yatedijeloqueocurría,¿lohasolvidado?Ambasseobservaron,yfinalmenteMelafirmó:—Te aseguro que, si yo fuera tú y un tío, por muy abogado que fuera, me amenazara, lo
machacaba.Eneseinstante,unodelosaseosseabrióyunamujersaliódeél.Conunacandorosasonrisa,se
lavólasmanosmientrasLouiseentrabaenunodeloscubículosyMelsemirabaenelespejo.Conpaciencia,Melesperóaquelaextrañasefuera,peroparecíanotenerprisa.Unavezselavó
lasmanos,abriósubolsoycogióunneceserdelquesacóunpintalabiosycomenzóaretocarseelcarmín.
Louisesaliódelaseoy,alverquelaotratodavíaseguíaallí,selavólasmanosy,sindecirnada,semarchó.UnavezasolasMelylamujer,éstaguardósuneceserysaliótambiéndelbaño.Melsequedóconunaextrañasensación.Pero¿quéocurríaallí?
Sedirigiódenuevoalabarray,cuandoelcamarerolesirvióotrocóctel, locogióysonrióalimaginarasusantiguoscompañerosdeunidadallí.
—¿Quépiensamipreciosateniente?—preguntóBjörnacercándose.Alsentirlasmanosdeélsobresucinturaysubocaenlacoronilla,lajovenmurmuró:—En coger cinta aislante y taparles la boca a algunas pesadas que hay por ahí. Eso es lo que
pienso y, ya de paso, en quitar la musiquita de violines y poner algo mejor, como Bon Jovi oAerosmith.
Björnsonrióysecolocóasulado.—¡Quédecepción!—dijo—.Creíquepensaríasalgomásdivertidoalverquesonreías.SaberqueBjörnlahabíavistosonreírlehizogracia,yreplicó:—Sonreía al imaginar a Fraser o aNeill aquí,metidos entre tanto pijerío y tanta tontería—y,
bajando lavoz, cuchicheó—:Oye, ¿te imaginas a cualquierade estos casposos enun conciertodeBonJovioAerosmith?Seguroquelesdaelhumodeunporroysequedancolgadostresmeses.
—Mel...—susurróélincómodo.—Tranquilo,JamesBond,nadiemehaoído.Björnasintió.Sinduda,aquellascenasnoeranloquemáslegustabaaMel.—Cariño—replicó—,ésteesmimundo.Esconestaspersonasconquienestratoadiario,y...—Losé...,losé...,perosontanaburridosytandiferentesdetique,deverdad,noséquéestamos
haciendoaquí.—PeroentoncesMelviounphotocallquehabíaenunlateralymurmuró—:Aunque,bueno,tusueñoesquetuapellidoaparezcaalgúndíaenesecartel,¿no?
Ambosmiraronelphotocalldelfamosísimobufetedeabogadosquehabíaenelrestaurante.—Sí,cariño—admitióBjörn—.Éseesmisueño.Trasunsegundoenelqueambospermanecieronensilencio,alver la incomodidaddeMel,él
comentó:—Bueno,paratuconsuelotediréqueelcateringquehancontratadoparalacenaesexquisito.
—Menosmal,almenoscenaréalgorico.Divertido,Björnañadió:—GilbertHeinenoshaincluidoatiyamíenlamesapresidencial.—¡Nojorobes!—Mel...—¡Menudoaburrimiento!—¡Mel...!—Venga,va...,cambioelchip.¡Quéilusión!—dijoellasonriendo,loquelohizoreír.Björntomóuntragodesubebiday,segurodequenadielooía,indicó:—Cariño,soyconscientedelesfuerzoquehacesporrelacionarteconlasmujeresdemiscolegas,
quesuelenserinsufriblesyellosbastanteaburridos,perotenemosqueestaraquí.MibufeteesunodelosmásjóvenesdeMúnich,perotengomuchaspapeletasparaconseguirloquemepropongo.Y,siloconsigo,prepárate,porqueentoncespodremoscomprartodoloquequeramos.
Aloíreso,Mellomiró.—¿Acaso no compramos ya todo lo que queremos? —replicó. Björn no respondió, y ella
cuchicheó—:Vale,yoteapoyo,ysabesquesiempreteapoyaréentodoloquequieras,perorecuerda:esperodetielmismoapoyo.
Elgestodelabogadosecrispó.PensarenlasposibilidadesdetrabajoqueMelleofrecíanoeraloquemáslegustaba.—Noesmomentodehablardeello,¿nocrees?—siseó.Melasintió;aúnrecordabasuúltimadiscusiónalrespecto.Y,resoplandoalversugesto,replicó:—Mensajerecibido,noteapures.—Meapuroporqueteveomal,perositúnovienes...—Eh..., eh..., eh... ¿Acaso crees que te voy a dejar venir aquí solo con tanta loba con cara de
Caperucita?—Björn sonrió y ella añadió—: Si ya temiran con descaro estando yo, no quiero niimaginarmequéharíansinoestuviera.
—Bueno...—Ah,no...,nomevayasahoradesobradito,BjörnHoffmann,otejuroque...No pudo decir más. Sin importarle lasmiradas indiscretas que se clavaron en ellos, Björn la
acercóaélylabesóconpasión.Cuandosesepararon,murmuró:—Tengoami ladoa lomáspreciosoydeseablequeunhombrepuedeanhelar.El restonome
interesa—y,alejándoladeél,prosiguió—:Peroenestetipodecenashayquesonreíryhacerlesverqueunopuedesertanincreíblecomoellos,¿deacuerdo,miamor?
RiéndoseestabancuandoGilbertselesacercóy,mirandoaMel,dijo:—Quemeperdonemi esposa pero,Melania, eres lamujermás bonita e interesante de toda la
fiesta,yvengoencantadoacogertedelbrazoparaquemeacompañesalamesa.—¿Tengoqueponermeceloso,Gilbert?—semofóBjörn.Elabogadosesentónsoltóunarisotada.—Tranquilo, Hoffmann —dijo—. No creo que pueda competir ni con tu juventud ni con tu
lozanía,ymeconstaqueestamujercitatuya...—Novia,Gilbert...,novia—aclaróella.
Aloíreso,elhombremirósorprendidoaBjörn.—¿Cómoesposiblequetodavíanoestésconella?—preguntó.Björnsuspiró,yGilbertindicó
—:Recuerdaqueunodelosrequisitosindispensablesdeestebufeteesestarcasadoybiencasado.—Losé—dijoBjörnsonriendo—.Yestoyenello.Elhombremadurodepeloblancoasintió.—Hoffmann,ademásdepreciosa,sevequeestamuchachaesinteligenteydivertida.¡Nopierdas
laoportunidad!—Gilbert,eresunadulador—dijoMelsonriendodivertidaalverlacaradecircunstanciasdesu
novio.Desubrazo,yseguidaporBjörn,caminóconGilberthastaellugardondeestabalamujerdeél,
quenodudóenagarrarsealbrazodeaquélyjuntossesentaronalamesapresidencial.Lacomidaestabaexquisita,peroaMellamatabalacompañía.LamujerdeGilbert,juntoaotras
que estaban a su lado, tras conversar sobre los hijos, comenzó a hablar de recetas de cocina y dereligión,yMelnopodíahacerotracosamásquesonreíryasentir.
Aldarsecuentadequeestabamuycallada,Gilbertlepreguntó:—¿Tegustalacomida?—Sí...,sí...,buenísima—respondióMelconunasonrisa.—Sientoquelaconversacióndemiesposaylasotrasmujeresnoseamásamenaparati.—Nodigaseso,porDios,tumujeryelrestosonunencanto—mintióMel.Elhombrecabeceó,eraevidentequenolacreía,asíquecontinuaroncenando.Unavezterminadalacena,todosentraronenunsalónanexodonderápidamentecomenzóasonar
músicaswing,yGilbert la invitóabailar.TrasguiñarleunojoaBjörn,Melsalióa lapistaconelabogado,yriéndoseestabacuandoéstedijo:
—Todavíaestoysorprendido.—¿Porqué?—Björnmecomentóqueerastenienteypilotabasunavióndelejércitoestadounidense.Ellasonrió.LegustabaqueBjörnestuvieraorgullosodeeso.—Esuntrabajocomootrocualquiera—repuso.—No.No...Esoquetúhashechonolohacetodoelmundo.Esmás,soyincapazdeimaginara
cualquierademistreshijas,oamimujer,haciendoalgoasí.—Gilbert,mipadreesmilitar,ydigamosqueesalgoquehevividodesdepequeña.Elhombresonrió.—Yosoyabogadoyningunodemishijoshaseguidomispasos—contestó.—Mi hermana Scarlett tampoco es militar, Gilbert. No todos en una misma familia suelen
dedicarsealomismo.—¿Puedosertotalmentesincerocontigo,Melania?—preguntóentonceselhombremirándola.Ellaasintió.—Björnesunabogadoimpecable—dijoél—.EsunodelosmejoresdeMúnichyenmibufete
sóloqueremosalosmejores.—Melsonrió.Sinduda,Björnnoloibaatenerdifícil.Peroentonces,Gilbertsonrióasuvezyañadió—:Sinembargo,elhechodequenoestécasadoysunoviaseamadresoltera no le facilita la entrada al gabinete; a no ser que eso cambie, se convierta en un hombre
casadoconunaperfectamujercita,padrelegaldetupequeñay...—Contodosmisrespetos,Gilbert—locortóMelviendoporprimeravezlasorejasaaquellobo
conpieldecorderito—:creoquedeberíasfijarteeneltrabajoqueBjörnescapazderealizarynoenotrascosasqueatubufetenilevannilevienen.
Aloírla,elhombreasintió.Sinduda,eraunamujerconcarácter.—Tienesrazón...—dijo—,séquetienesrazón,peroenestetrabajotodocuentay,aunquesuene
mal,somosundespachodeabogadosmuytradicional.TúmecaesmuybienyséquepuedesllegaraserlamujerperfectaparaelabogadoBjörnHoffmannyayudarloensuascensoenlavida;¿aquesí?
Mel no respondió. Si le decía lo que pensaba y lo que sabía porLouise, sin duda su novio seavergonzaríadeella.
—¿Puedopedirtequemedevuelvasamimujer?—oyódeprontoquedecíaBjörn.Encantado,elhombresonrióy,guiñándoleelojo,murmuró:—Novia...,Hoffmann.Novia.Terecuerdoqueaúnnoestumujer.Divertidopor el comentario,Björnasióentre susbrazosaMely, cuandoGilbert semarchóy
elloscomenzaronabailar,cuchicheó:—Vaya...,vaya...,¿pervirtiendoalosabuelitos?Mel,quedecidiónocomentarleloqueaquéllehabíadicho,replicó:—Yameconoces,cariño.Soyunapervertidoraoficial.Björnlaabrazó.Nadalegustabamásquedisfrutardesucompañía.Acercólabocaaloídodeella
ysusurró:—Esperoquemeperviertascuandoregresemosacasa.Melsonrióy,olvidándosedeloqueelviejodepeloblancolehabíadicho,afirmó:—Quenotequepalamenorduda,JamesBond.
9
El domingo por lamañana, tras levantarnos y dar de desayunar a los niños, Ericme dice que haquedadoconBjörnyquenosvamosapasareldíaconellos.
Esomeponedebuenhumor.AdoroaBjörnyaMel,yestarconellossiempreesdivertido.Flynintentaescaquearse.Yano legustavenirconnosotrosa lossitios,peroEricnose lopermitey,alfinal,mipequeñogruñónnosacompañaaregañadientes.
Unavezconseguimosarreglaralosniñosycargarenelcochetodolonecesarioparapasareldíafuera con ellos, nos dirigimos felices hacia el centro deMúnich. A la una de la tarde, Eric y yollegamosconnuestratropa,incluidaPipa,alacasadenuestrosamigos.
ContresniñosquellevamosnosotrosySami,laniñadeellos,¡larevoluciónestáasegurada!Encuantonosvellegar,Samisonríeycorrehacianosotros.Nosadoratantocomonosotrosla
adoramosaellay,tirándosealosbrazosdemiamor,pregunta:—¿Mehastraídounregalo,tíoEric?Meentralarisa.Samiestanmelosona...Eric,queesunblandoconellaynuestrosniños,metelamanoenmibolsoy,comoporartede
magia,sacaunhuevoKinder.¡Nuncafaltan!Alverlo,laniñalocogefelizy,después,corretraselpequeñoEric,queyaestátrasteandocon
susjuguetes,mientrasqueFlynsesientaenunsillónconcaradecircunstanciaspornotenersumóvilparawasapear.
Björn,miguapoamigo,seacercaanosotrosy,quitándomealaceporradeHannahdelosbrazos,pregunta:
—¿Cómoestámimonstruito?¡«Monstruito»!Björnlallamaasíporlolloronaquees.Laniñalomira.Seplanteasilloraronoporelapelativo,perofinalmentesonríe.¡Olé,miniña!
Si es que cuando sonríe es para comerse esos mofletes regordetes que tiene, pero oh..., oh..., deprontoarrugaelentrecejo,contraelacaraycomienzaallorar.
¡Ea...,yaestamos!Merío.¡Nolopuedoremediar!YBjörnrápidamenteleentregalaniñaaEric,que,alcogerla,le
sonríeamoroso.¡QuépacienciatienemiamorconHannah!Sinduda,latieneporqueessupequeñamorenita,porque,sinofuerasuhija,estoyseguradeque
huiríadeellacomodelapeste.Unavezveoquelaniñadejadellorar,miroamibuenamigoBjörnylepregunto:—¿Haspodidosolucionarlodetupáginaweb?
Asiente,tuerceelcuelloyafirma:—Mañanavolveráaestaroperativa.PerocuandocojaaesetalMarvel,teaseguroquemelasvaa
pagar.Levoyareventarlacabeza.Mel,queseacercaanosotros,miraaFlynypregunta:—Cariño,¿tudedoestábien?Mamámeenvióunwasapparadecirmeloquetehabíaocurrido.
¡Quédolor!Flynmemiraparasabersisólolehecontadoesooalgomás.Yonomuevoniunmúsculopara
admitirodesmentir,yfinalmenteelniñodiceenseñándolelamano:—Sí,estoybien.Björn,queobservaaFlyn,murmuraentonces:—Túyyotenemosquehablar,jovencito.Meheenteradodealgoquenomehagustadonadade
nadaenreferenciaatusnotas.Flynresopla,memiraconojosacusadores,yyorespondo:—Yonohesido.Habrásidotupadre.Depronto,SamiseacercaaBjörnymurmuracongestodetristeza:—Papi,meduelelatripita.Björn centra entonces toda su atención en la pequeña y, en cuanto le dice dosmonerías, Sami
sonríeysemarchacorriendo.Esomehacereír.Todavíarecuerdolomuchoquelecostópronunciarla erre.Melpone losojos enblancoante laguasade suhija, lequita aEric anuestraniñade losbrazosparabesarla.
—Prínsipe...,prínsipe...,¡creoqueteengañancomoauntonto!—murmuroyodivertidamirandoamiamigo.
Björnsonríe,cogealpequeñoEric,quecorreteaconunadelasmuñecasdeSamimientrasletiradelacabezaparaarrancársela,ypregunta:
—¿CómoestámiSuperman?Mibonitoniñorubiodeojosazulessonríe,cuandoSamiofendidagrita:—¡Superman,erestonto,damemiprinsesa!MiamorseacercarápidamentehastanuestroSupermandestrozatodoy,trasquitarlelamuñecade
Samiantesdequelearranquelacabeza,seladevuelvealaniñayellaloabrazaconunaencantadorasonrisa.
—Gracias,tíoEric.Tequieromucho.—¿Másqueapapi?—preguntaBjörnmirándola.Bueno...,bueno,loquemefaltabaporoír.Serácelosón,elpapi.La niña, que es una preciosidad, y no sólo por lo bonita que es, sonríe con picardía. ¡Menuda
elementaeslajodía!Acontinuación,miraalosdostitanesquetienedelanteyresponde:—Papi,atitequieromucho,mucho,mucho,yaltíoloquierosólounmucho.—Ah,bueno...—VeoquesonríeeltontusodeBjörn.Melyyonosmiramosytambiénsonreímos.Vayatelaconlaprinsesa.Cuandocrezca,¡mieditonosda!EricyBjörnsonríenconcaradetontos,pero¿quéefectoscausanlosniñosenellos?Unavezyanoshemosbesadoysaludadotodos,loshombresylosniños,acompañadosporPipa,
pasanalasaladejuegosguiadosporBjörn.Sindudaalguna,allísedivertirán,¡haydetodo!Cuandoveoquesealejan,agarroaMeldelbrazoylepregunto:—¿Quétallacenitadeanocheconlosabogados?—Unsantocoñazo.Ambas reímos. Sin duda, venimos demundosmuy diferentes de aquel en el que estánmetidas
nuestrasparejas,yenocasionescodearteconperfectasmujercitasalasqueloúnicoquelesinteresaesserlamásguapaolaquemejorliftingsehayahechonoeslonuestro.
Meltiraentoncesdemíy,alllegarjuntoaunamesita,levantauncojínymeentregaunospapeles.SugestomehacesaberqueloquemeenseñanoesalgoqueamibuenamigoBjörnlohagasaltardealegría.
Sonrío.¡¿Quéserá?!Conlospapelesenlamano,losmiroy,cuandoestoyleyéndolos,Melapunta:—Recuerdasquetelocomenté,¿verdad?¿Quéteparece?Leoymurmuro:—¡Joder!—Sabíaquediríaseso—aplaudeMel.Madremía...,madremía...—¿Björnhavistoesto?—pregunto.Ellaasienteconlacabezayyoañado—:¿Yquéhadicho?Miamigaseacomodaenelbonitosillóndecolorcaramelo.MiraaBjörn,queeneseinstantesale
conEricdelasaladejuegosconunodesuscómicsenlamano,ysonríe.Uy..., uy, esa expresión irónica no me deja entrever nada bueno. Mientras los chicos están
preparándosealgodebeberenelminibardelsalón,Meldice:—Lógicamente,aBjörnnolehacenipizcadegracia.—¡Losabía!—Esunretrógrado—gruñeella.—Tambiénlosé.EsdelpelajedeEric—afirmodivertida.Melvuelveasonreíry,trasmiraraBjörn,quehablaconmimarido,cuchichea:—Nodigasnadadelantede él, yahe tenidobastante estamañana.Semeocurrió enseñarle los
papelesynoveaslaquemontóJamesBond.Asípues,porfavor,tepidoquenolocomentesdelantedeél.
—Vale.Melsuspirayprosigue:—No le hace ni pizca de gracia la posibilidad de que pueda trabajar como escolta para el
consuladodeEstadosUnidosenMúnich.Ambasreímos.LuegoMelseinterrumpeydice:—Ay,Jud,¿quéhago?Dametuopinión.Estáclaroquecomodiseñadoragráficanomefuemal,
pero...peroyonecesitoalgomás.—¿Yyoquéquieresquetediga?Esoesalgoquedebesdecidirtú.—Losé.PeroelpesaditodeBjörnnoquierehablardeello.De nuevo, me río. Sin duda, Eric y Björn se han enamorado del estilo de mujer que nunca
pensaron.
—¿Escolta?—cuchicheodivertida.Melgesticula.—Meencanta.Esomepermitiráserunachulitacontrajedehombreygafasdesol.Vuelvoareírme.Nolopuederemediar.MellohadejadotodoporBjörncomoyoensumomentolodejéporEricy,aunqueséqueensu
vidaesfelizcomolosoyyo,pregunto:—¿Teestásplanteandoregresardenuevoalejército?Mipreguntalahacesonreír.¡Lamadrequelaparió!Mel,laduratenienteParkerdelejércitodeEstadosUnidos,mequitalospapelesdelasmanos,los
doblay,guardándolosalverqueloschicosseacercan,mesusurra:—Novoyaregresaralejército.Esono.Peropodríaserescoltade...—Mel...,espeligroso.—Escucha, Jud,máspeligrosoquemi antiguo trabajo, ¡imposible!Viajarédevezencuandoy
pocomás.—¿Pocomás?LuegoMelañadebajandolavoz:—Mipadrehamovidoalgunoshilosparaello,ycreoquedeberíaaprovecharlo.—Pero¿puedesserescolta?—preguntosorprendida.Ella,consuchuleríacaracterística,seretiraelflequillodelosojosyafirmacongestoencantado:—SoylahijadelmayorCedricParkeryextenientedelejércitoestadounidense;¡puesclaroque
puedo!AmbasnosreímoscuandooímosanuestraespaldalavozdeBjörn,quedice:—Nomelodigáis,¿aquesédeloquehabláis?Suexpresiónmehacesaberquenoleagradalaidea,yMelreplicamirándolo:—Nohablábamosdeello,007.—Mentirosa...,eresunamentirosilla—semofaBjörn.Eric se sienta ami lado y, como siempre, en su afán protector pasa lamano alrededor demi
cinturaymeacercaaél.Lomiro...,memiraysonreímoscuandoBjörnsueltaobservandoasuchica:—¿Quéletradelapalabra«¡No!»eresincapazdeentender?Mel arquea las cejas. ¡Uissss,mal rollito!Y con un gesto queme hace saber que eso no va a
acabarbien,responde:—Mira, muñeco, a chula tú no me ganas ni dando un cursillo acelerado; por tanto, tranqui,
tronco,nolavayasacagartodavíamás.Björnparpadea.Sin lugar adudas,hapasadoel tiempo,pero es evidenteque todavía le cuesta
adaptarsealamaneradehablardeMely,cuandoveoquevaaresponder,ellaañade:—¿Aúnnotehasdadocuentadequetúnodecidespormí?ElgestodeBjörnsedescomponepormomentos.Bueno...,bueno...,quesevaaarmarlamarimorenaymimaridoyyoestamosenfilapreferente.Acto seguido,Björn responde,después lohaceMel,y comienzana lanzarsepullitas.Entonces,
Ericacercasubocaamioídoypregunta:—¿QuélesocurreaJamesBondyalanoviadeThor?
Oíresosapodosmehacesonreír;aúnrecuerdocuandoellosmismosselosllamabany,mirandoalosojosdemiamor,esosojosazulesquetantomeenamoran,respondo:
—El padre de Mel ha movido algunos hilos para que ella pueda trabajar en el consuladoestadounidensecomoescolta.
VeosorpresaenlaexpresióndeEric,ynomeextrañocuandolooigodecir:—Pequeña,sifuerastú,larespuestaseríalamismaqueladeBjörn:«¡No!».Aver...,aver...Sialguiendeberíasaberelmalresultadoquetieneprohibiralgo,éseesEricZimmerman,yantes
dequemedétiempoaresponder,élañade:—Yseríaun«¡No!»inamovible.Uisss,¡quérisa!Nopuedoevitarlo.Sinlugaradudas,mirisitalehacesaberamialemánpreferidoloquepiensoy,trasretirarmeun
mechóndepelodelacara,insiste:—Nolopermitiríaylosabes,¿verdad?Lomiro...Memira...Sonrío...Levantalascejas...Yfinalmente,conesearteespañolquecorrepormisvenas,respondo:—Mira,Iceman,siyofueraella,alfinalharíaloqueyoquisiera.Ylosabes.Portanto,alégrate
dequenosoyella,otendríasunmolestoproblemadeesosquetesacandetuscasillas.Ericsonríe.Obviamente sabe que lo que digo es cierto, así que acerca su boca a la mía y murmura
tentándome:—Alégratetúdenoserella...Sonríoconmaliciay,sinapartarsumiradadelamía,Ericmerozaconsutentadoraboca.Madremía...,¡quéjuegomássucio!Mechupa el labio superior, después el inferior, y termina conunmordisquito. ¡Sigue jugando
sucio!Y,antesdebesarmecomosóloélsabe,murmura:—Tútambién,tegusteono,tendríasunmolestoproblemadeesosquetesacandetuscasillas.Me apresuro a besarlo. No puedo pensar en lo que ha dicho. Bueno, sí puedo, pero ahora no
quierohacerlo.Sóloquieroquemebeseyquemehagasentirtanespecialcomosiemprelohace.Nuestras bocas se encuentran, igual que docenas de veces al día, cuandooímos queBjörn nos
llama.Allevantarlavista,nosencontramosaélyaMeldepie.—Sinosdisculpáisunosminutitos—diceélcongestoserio—,Melyyotenemosquepasarami
despachoadialogar.—No.Ahorano—replicaella.Aloírla,élsonríey,mirándola,dice:—Nosoymilitar,perotengomiartilleríaparaconvencerte.—¡¿Ahora?!—protestaMel.
Convencidodeello,Björnmiraasunoviaeinsiste:—Sí,Mel,¡ahora!Meentralarisamientrasveoquemiamigadisimulalasuya.Ambassabemosmuybienloqueva
aocurrirenesedespacho.—Björn —continúa Mel—. Están los niños, Pipa, Eric y Jud; ¿no crees que ahora no es
momento?PeroBjörnlacogeentresusbrazos,nosmiraydice:—Enseguidavolvemos.Ericasiente...Yosonrío...Melponelosojosenblanco...YBjörnnosguiñaunojomientrassevan.Dossegundosdespués,cuandonuestrosamigosdesaparecen,Ericmemiraydicedivertido:—¿QuéteparecesivamosavercómoestánPipaylosniños?Asientomimosa,lobesoymurmuro:—Preferiríahacerotracosa.—Insaciable—cuchicheaélsonriendo.—Sólodeti—matizoalentendersuspalabras.Encantado, mi loco amor me da un pequeño azote en el trasero y, levantándose conmigo en
brazos,dicemientrascaminaendirecciónalasaladejuegos:—Demomento,comportémonoscomounospadres responsablesqueestándevisitaencasade
susamigosy,cuandoestemossolos,teharésaberloinsaciablequesoyyodeti.Sonríodivertida.Sinlugaradudas,ambossomosinsaciables.
10
A pocosmetros de ellos, y en elmismo rellano del edificio donde estaba su casa,Björn abría lapuertadesubufetedeabogados.
Alserdomingonohabíanadie, laoficinaestabadesiertay, sinsoltarelbrazodeMel,caminóentrelasmesasdesustrabajadoreshastallegarantelapuertadesudespacho.
Mellomiróymurmurófrunciendoelceño:—Desdeluego,Björn,lotuyonotienenombre.Elabogadosuspiró.SialgolegustabadeMeleraeseairesuyotancombativoy,cogiendoelpomodelapuerta,dijo
mirándolaalosojos:—Tedijequecadavezqueteoyerahablardeltemitapasaríaesto,porlo...—Perotenemosinvitadosencasa—lointerrumpióella.Björnsonrió.Másqueinvitados,EricyJuderanfamilia,yprecisamenteellosnoseasustabanporloqueibana
hacer.—Nosevanaescandalizar—contestó—.Ytúyyotenemosquehablar.—Pero,Björn...—Entraeneldespacho.Melresopló.¿Hablar?¿Björnqueríahablaroqueríaotracosa?PensóenEricyJud.Sabíaperfectamentequeellosnoseescandalizabanporsuausencia.Noeralaprimeravezque,estandotodosjuntosconlosniños,algunaparejaseausentabaunos
minutosyregresabapocotiempodespuéscomosinohubierapasadonada.Lobuenodeaqueltipodeamistaderaquenohabíaqueocultarnada.Todosesabía.Nohabíaquedisimular.
Alveraquelgestosuyo,quetantolefascinaba,Björntuvoganasdesonreír.SabíaqueMelfinalmenteharíaloqueellaquisiera,peroteníaquedemostrarlequeélnoestabade
acuerdo.Nodeseabasepararsedeellaniunsolodía,ymuchomenospensarquevolveríaatenerunavidaplagadadeturnosyausencias.Curiosamente,aquelloloencelaba.Lerecordabaunaépocadelaquenoqueríasabernadaporqueeraconscientedeque,encuantolatenienteParkerapareciera,loshombreslamiraríandeunaformaqueélnoestabadispuestoasoportar.
Congestodeenfado,Melentróeneldespacho.SequedóparadasinllegaralamesayBjörnlaempujóparaquecontinuaraandando.Ellaapenassisemovió.Éldecidiócambiarentoncessuplany,desconcertándola,caminóhastasumesa,retirólasillaytomóasientocontranquilidad.
—Siéntate—dijo—.Tenemosquehablar.
La expresión de sorpresa deMel al ver que era cierto que tenían que hablar se hizomás queevidente.Horasantes,trassuúltimadiscusiónalrespecto,Björnlehabíadichoquelasiguientevezquelaoyeramencionareltematendríanunaseriaconversación,yasíibaaser.Porello,elabogadonocambiósugestoeinsistió:
—Mel.Hedichoquetesientes,porfavor.Asombradaporque fuera cierto lo de hablar, ella caminóhasta lamesa.Se sentó frente a él y,
apoyandolaespaldaenlasillaconchulería,levantóelmentónydijo:—Muybien.Hablemos.Björnhizolomismoqueella.Serecostóenelrespaldodesusillaylamiró.—Mel—empezóadecir—,noquieroquelohagas,ysabesmuybienporqué.Ellacerrólosojos,negóconlacabezaygruñófrunciendoelceño.—Por el amor deDios, Björn, ¿otra vezme vienes con los celos?—Él no respondió, yMel
prosiguió—:Heestadorodeadaporcientosdehombresdurantemuchotiempoyhesabidocuidarme.—Nolodudo.Peroahoraestásconmigoynoquieroqueseastúquientengaqueprotegeranadie,
cuandosoyyoelquequiereprotegerteati.—Pero,Björn,creoque...—Hedichoqueno—insistió él—.Además, con loqueyopuedo llegar a ganar si entro en el
gabinetenovasanecesitar...—Vamos, hombre..., no me vengas otra vez con lo mismo — gruñó Mel, recordando su
conversaciónconGilbertHeine—.Vale...,séquevasaganarmuchodinerosientrasenesemalditobufete,peronolonecesitamos.Yavivimosmuybien,¿no?
—¿Aquévieneesode«malditobufete»?Mel suspiró. Debía ser sincera con él pero, omitiendo lo que Gilbert le había dicho para no
dañarlo,lehablódetodoloqueLouiselehabíacontadoenreferenciaaaquelsitioysucorrupción.Björnlaescuchóy,unavezterminó,dijo:
—Habladurías, cariño. Es normal que ella esté enfadada con Johan si sabe que está con otrasmujeres,perodeahíaqueculpabilicealbufete,creoque...
—Pero,Björn...Elabogadolevantólamanoyrespondióenactitudimperativa:—Seacabó.NomeapetecehablardeJohanydeLouiseporquenomeinteresansusproblemas
personales,perosíquierohablardenosotros,ypornadadelmundodeseoquetrabajesenloquetepropones,¿entendido?
—Björn...Él,desesperadoporlaimpetuosidaddesunovia,preguntó:—Entreesosantiguoscompañerosconlosquepodríasvolveratrabajar,¿hayalgunoconquien
pudierashabermantenidorelaciones?Lapreguntalapillódesorpresa.Porsupuestoquecabíalaposibilidaddereencontrarseconalgún
viejocompañeroconelquehabíaestado.Ellamismaselohabíacontado,comoélselocontabatodoaellay,comonoqueríamentirle,afirmó:
—Sabesquesí;¿aquévieneeso?Conscientedelomuchoquesejugabaconaquellaconversación,ymásconunamujercomoMel,
Björnreplicócontranquilidad:—Mira, cariño, me han invitado a varios pases de modelos, fiestas y eventos a los que he
rechazadoirparanoincomodarteati,¿verdad?—Nomejodas,007;¿aquévieneesoahora?Dispuestoasoltarloquellevabadentroyhastaelmomentonohabíapodidosoltar,élrespondió:—Vieneaque,siatitemolestaqueyomereencuentreconantiguasconocidas,¿acasonodebo
preocuparmeyosivasdenuevodeSuperwomanentretantomachote?Melnocontestó.Elalemánteníatodalarazóndelmundo.Eneltiempoquellevabanjuntos,Björnlehabíahechoverloespecialqueeraparaél,eincluso
delantedeellahabíadejadomuyclaroatodamujerqueseleacercabaqueestabacomprometidoyfueradelmercado.Si ibanauna fiesta, acudían juntos.Si ibanaundesfile,Björnevitaba siempreestar a solas con las modelos y, cuando practicaban sexo con otros, jamás la hacía sentirse mal,porqueinclusoenesosmomentosledemostrabaqueellaeraúnicaeirrepetible.
—Escucha,Björn.Enreferenciaaesetrabajo...—Mepreocupatuseguridadfundamentalmente—lacortó—.Yencuantoaloshombresconlos
quetrabajarás,seránbuenaspersonasy todoloquetúdigas,pero¿creesquevanarespetarteynovanahacercomentariosmaliciosos?
Mel sonrió.Conocíaaalgunodeaquellosescoltasy, sinduda,encuanto lavieran lediríandetodo,inclusonodudabadequealgunointentaraalgoconellaporlosviejostiempos.
—Túmismasonríes;¿porqué?—Vamosaver,cariño,sontíosy...—Precisamenteporquesontíoscomoyo,sédeloquehablo,yporesomirespuestasiguesiendo
quenoquieroquevayas,porquenoquieroqueestésasolasconellos.—Pero...—¡Nohayperos!—Björn...Élsonrió.Habíallegadoalmomentolímitealquequeríallegary,mirándola,añadió:—Hagamosuntrueque.Yotedoy.Túmedas.Mellopensó.Haceraquellopodíaserbuenaidea,yasintió.—Vale.¿Quéquieres?—¿Cualquiercosa?—preguntóelabogadoconpicardía.Melsetocósucortoyalocadopeloyafirmó:—Siesohacequetequedesmástranquilo,cariño,¡porsupuesto!LasonrisadeBjörnseensanchóy,depronto,ellasupopordóndeibaelmorenazo.Seechóhacia
delanteparaapoyarseenlamesaysusurró:—Eresuntramposo.—¿Porqué?—dijoélriendodivertido.—Porquesémuybienloquemevasapedirymeparecefatal.—¿Yquétevoyapedir?—preguntóél,riendootravez,conscientedequesunoviateníarazón.Melserevolvióensusilla,resoplóydijomientrasloseñalabaconundedo:
—Mevas apedirquemecase contigoy tengamosunpequeñoSpidermanalque llamarPeter,¿verdad?
Elalemánsonrió.Nadalegustaríamás,ysemofó:—SiesquehastateapellidasParker,cariño.—Björn... —protestó ella, consciente de cuánto admiraba a Peter Parker, el álter ego de
Spiderman—.Y loqueme jorobamás—continuó—esque, sinoscasamos,el imbécildeGilbertHeinesevaacreerquelohacemosparacumplirunodesusabsurdosrequisitosenrelaciónconelbufete.
Aloírla,Björnfruncióelceño.—Sabesqueesonoesverdad—replicó—.Yonuncatehepedidoquetecasesconmigoporese
motivo.Sitelohepedidoesporquetequieroydeseoqueseasmimujer...¿Aquévieneeso?Conscientedequenolehabíacontadolaconversaciónquehabíamantenidoconelhombre,Mel
resoplóy,cuandofueahablar,Björnprosiguió:—Sabesqueme encantaría casarmecontigo, pero sientodecirte queno es eso loque te voy a
pedir,cariño.—¿No?—preguntóelladesconcertada.—No.Noeseso.—Y,sinoeseso,entonces¿quées?ABjörnleencantóversuexpresióndedesconcierto.Nohabíanadaquedesearamásquecasarse
conellay,claudicando,afirmó:—Vale.Tehementido.Quieroquetecasesconmigo.—Losabía...,miraquelosabía—gruñóMel,alaquelosbodorriosnoleiban.Elabogado,divertido,laoyóprotestary,trascogerelmandodelequipodemúsica,loencendió.
Ledioalapista3ycomenzóasonarQuando,Quando,Quando,[7]deMichaelBublé.—Musiquitaahora...—rezongóMel.Lapreciosayrománticacancióninundóeldespacho,yBjörn,sindarseporvencido,leguiñóun
ojo,hizoqueellaselevantarayempezóacanturrear:—«Quando...,Quando...,Quando...».[8]Laextenientesuspiróy,cuandofueaprotesar,éllaabrazó,laacercóasucuerpoparabailarcon
ellaymurmuró:—Puedosermuyconvincentesimelopropongo;losabes,¿verdad?Melasintió.Sialguienpodíaconseguiralgodeella,éseeraBjörn.Esemalditoabogado,consu
romanticismoy sumanerademirarla, enocasiones conseguíaquehiciera cosas inauditas, aunquetodavíanolahabíaconvencidodepasarporelaltar.
Dejándosellevarporlamúsica,Melsedisponíaadeciralgocuandoéllesusurróaloído:—Llevamoscasidosañosviviendojuntos.Mepedistetiempoyyoteloheconcedido.Sabesque
teadoro,quemueropormiprinsesay...—Esoeschantaje.Björnsonrió.Conellanohabíaotromodo.—Lo sé, cariño—respondió—, pero si tú quieres que yo claudique en unas cosas, tú has de
claudicarconmigoenotras.Sabesquememueroporcasarmecontigo,y lomejorde todoesque
séqueenelfondo,muyenelfondo,tútambiéntemueresporcasarteconmigo,¿verdadquesí?AMelseleescapóunasonrisita.—Eresuncreído,007—cuchicheó—.Y,sinolosabesya,terecuerdoquelosbodorriosconfrac
ychaquénomevan.Sinoscasamosalgúndía,loharéenvaquerosycelebrándoloconunasbirritas.Björn,queeraconscientedeello,sonrió.—Tú,Samiyyo—convino—.Lostressomosunafamilia,unapreciosafamilia,ysimplemente
quieroformalizarlascosascomoabogadoquesoy.Vamos...,diquesíeintentaremoshacerlodeunaformaquenosgustealosdos.
—Chantajistaemocional...,esoesloqueeres.—Ytúerespreciosa.MelmiróelpisapapelesqueBjörnteníaenlamesa.«¿Seloestampoenlacabeza?»,pensó.Björnobservósumirada.«Meloplantaenlacabeza»,sedijo.En silencio, bailaron aquella bonita canción, hasta queMel sonrió. Luchar contra Björn y su
corazóneraimposible,porloquelomiróyafirmó:—Deacuerdo.Mecasarécontigo.Élsedetuvoentoncesenseco.—Repiteesoquehasdicho—pidiómirándola.Melpusolosojosenblancoyrepitió:—De acuerdo.Me casaré contigo este año, aunque demomento la fecha queda en el aire—y
añadió—:Peroloharéenvaqueros.Henchidodeorgulloporhaberconseguidosupropósito,elabogadosonrió,ysedisponíaadecir
algocuandoellalointerrumpióparamatizar:—Y, por supuesto, de momento, el enano calvo y sin dientes que quieres que tengamos para
llamarloPeterParkerhabrádeesperarporquequierotrabajardeescolta,¿deacuerdo?Björn sonrió encantado. Sin duda, había conseguido parte de lo que pretendía y, dispuesto a
lograrqueMeldejaradeladolasegundapartedeltrato,murmuró:—Noolvidaréesteinstantemientrasviva.Ellapusolosojosenblancopero,incapazdenosonreír,declaró:—Yotampoco.SuscuerposserozabanyMel,soltándosedeél,sesentósobrelamesadeldespachodesufuturo
marido.—¿Quétalsisellamosnuestropactoantesderegresarconnuestrosinvitados?—propuso.—Parker,eresmuytraviesa—murmuróBjörndivertido.—Losé,comotambiénséquetegustaquelosea—afirmóellasonriendo.Björnsonrióencantado.—¡Queesperen!—exclamóabriéndoselacamisa.Instantes después, la prenda de él voló, la camiseta de ella acabó sobre una de las sillas y los
pantalonesdeambosenelsuelomientraslavozdeMichaelBublécantaba.Desnuda,Melsetumbósobrelamesay,sindecoro,abriólaspiernasparaél.Alverloqueellaleofrecía,Björnjadeó,seleacercóysusurrópaseandoeldedodelicadamenteporlospliegueshúmedosdesusexo:
—Tecomeríaentera,perometemoqueestohadeseralgorápido.
Y,sinmás,semetióentresuspiernasylapenetróconurgencia.AlsentiraBjörnensu interior,Melsearqueósobre lamesaychillódeplacer,mientrasél se
apretabacontraellaycomenzabaabombearconfuerza.Elsonidodesuscuerposalchocarresonabaenelsilenciosodespacho.Björnposóentonceslas
manossobresuspechos,selostocóy,trasinclinarseparaaccederaellos,selosmetióenlabocay,sinparardebombear,selosmordisqueóhastaquelosjadeosdeMellovolvieronloco.
Elabogadovibrabamientrasellatemblabay,enloquecido,seincorporó,lecogiólaspiernas,selassubióaloshombrosy,mirándola,dijoenuntonocargadodesensualidad:
—Adorofollarte,tenienteParker.Laextenienteasintió.Oírlodeciraquelloenaquelmomentoeramorboso.Muymorboso.Eléxtasisque leprovocaba loqueél lehacíay ledecía ladejaba sin fuerzasy,abandonadaal
momento,seagarróalamesayvolvióachillardeplacer.Björneratremendamentesexual.Sindescanso,elalemáncontinuóhastaqueellagritóalllegaralclímax.—Björn...Oírsunombreenbocadeellamientrasconvulsionabadeplacereraunadelascosasquemásle
gustaban.Mirarlayadmirarlamientrasveíaelgoceensurostroloapasionabayloexcitabaaúnmás,hastaquesegundosdespués,trasunfuerteempellónquehizoqueMelvolvieraagritar,elabogadosecorrió.
Conlasrespiracionesagitadas,BjörnbajólaspiernasdeMelconcuidadoy, tumbándosesobreellaenlamesa,murmuróagotado:
—SeñoraHoffmann,tevoyahacermuyfeliz.Diezminutosdespués,unavezvestidosdenuevo, regresarona lacasacogidosde lamano.Al
verlos,EricyJudsonrieronysealegraronporlaincreíblenoticia.¡Habíaboda!
11
Salirconlosniños,ymásconcuatro,essiempreunaaventura,piensoagotada.Unavezacomodoaloscríosenelcoche,miroaPipaylepregunto:—¿Vasbien?Lapobre,queesmásbuenaqueelpanytienepintademonja,memirayresponde:—Sí.Gracias,Judith.Unavezquevequetodosestamosbien,Eric,michicarrón,arrancaelmotordelcoche.—MelyBjörnyasalendelgaraje—digoentonces—.Síguelos.—¿Vamos al restaurante de Klaus? —Asiento, y mi amor responde tocándome la rodilla—:
Entonces,tranquila,pequeña,séllegar.Sonrío.Soyfelizy,cuandooigoelprimerlamentodemipreciosaperolloronaniña,mevuelvoy
comienzoacantarleesode«Soyunataza,unatetera,unacuchara,uncucharón»,[9]ylaniñasecalla.Leencantaqueletarareeesacancioncita,comoalpequeñoEriclegustaquelecanteladeltallarín.
HepasadodeescucharalosAerosmithacantarcancionesacuálmástonta,peroqueamishijoslesgustan.¡Paraloquehequedado!
Flyn,quepodría ayudarme,pasa.Se limita amirarpor laventanaya ignorarnosamíya losniños.
Veinteminutosdespués,agotadadetantacucharaycucharón,cuandollegamosalrestauranteEricaparcay,entonces,lapuñeteraniñasehadormido.
¿Quiénseríalamadrequelaparió?Animados, salimos del vehículo. Ir a comer al restaurante de Klaus nos encanta a todos. Con
cuidado,cojoalapequeñaHannahylametoensucochecitomientrasprotesto.—Telaconlaniña,¡noshasalidoflamenca!VeoqueEricsonríe.Memira...,miraasuniñay,cuandoFlynsaledelvehículoconsuhermanoyPipacorretrasellos,
elmuytunantemedice:—¿Cómoeralacanción?...Soyuncucharón...Ambosnospartimos.Sinlugaradudas,¡lacancioncitaselastrae!AlllegarjuntoaMel,BjörnySami,éstossefijanenlaniña.—Sí—digo—,elmonstruitosehaquedadodormido.Ericsonríe,Björntambién,yMelmurmura:—Puescuandosedespierte,¡noscomeporlospies!Volvemosareír.TodoloqueHannahtienedeguapaydormilonalotienedetragonaylloronay,
sinduda,cuandosedespierte,comodiceMel,¡noscome!Alentrarenelrestaurante,Klausnosveysonríe,ySami,queadoraasuabuelo,alquellamalelo,
correhaciaél.—Lelo...,lelo...,yaestoyaquí.Elhombreseagachafelizymiraalaniña.—¿Cómoestámiprincesa?—dice.Lapequeña,queadoraquelallamen«princesa»,setocalacoronadoradayresponde:—Bien,peroquieroaguaporquetengomuchasedypapihadichoquetepidieraagüitaati.¿Me
dasagüita?AKlausselecaelababa,yrápidamentesemueveparadarlealaniñaloquequiere.Unavezla
pequeñatienesuvasodeagua,veoqueKlausmiraamipequeñoypreguntadenuevo:—¿YcómoestáSuperman?AdiferenciadeSami,Ericesmásparcoenpalabras.Sinduda,esunZimmerman,ysimplemente
asienteconlacabeza.AlverelgestodeKlaus,yomeagachodivertidayaclaro:—Esosignificaqueestámuybien.El hombre sonríe e, instantes después, nos saluda a todos. Está feliz por tenernos allí, y noto
comosiempreelamorquesientehaciasuhijoBjörnyhaciaMel,queessuojitoderecho.Instantesdespués,nosdirigimoshacialamesaquenostienereservada.Björnacercadostronas
paraSamiyparaEricymepregunta:—¿QuieresotraparaHannah?Condulzura,observoamiBellaDurmienteyrespondo:—Demomento,no.Dejemosqueelmonstruitosigadurmiendo.Entre risas, nos sentamos mientras Björn yMel se llevan aparte a Klaus para darle la buena
noticiasobresuboda.Concuriosidad,losobservoymeemocionocuandoveoalhombreabrazarasuhijoydespuésaMel.Sinduda,lanoticialehagustado.
Mediahoradespués,Hannahsedespiertay,trasvariassonrisasacuálmásbonita,comienzaconsuconciertodelloros.RápidamenteKlaussellevaalacocinasupotitoparacalentarloy,encuantolotrae,casisinrespirar,Hannahselocome,antelaexpresióndebobodesupadre.
Peroenelmomentoenquelacomidaseacaba,laniñadecidemontarunodesusnumeritosy,alfinal,labuenadePipa,quehacomidomientrasyoledabadecomeralmonstruito,paraqueelrestopodamostenerunratodepaz,metealapequeñaenelcochecitoysaledelrestauranteadarunpaseo.Flynsevaconella.Nuestracompañíaloaburre.
Cuandosaledelrestaurante,veoqueMelmiraaBjörnylepregunta:—¿Deverdadquelamonstruitonotequitalasganasdetenerniños?—Eh...,cuidaditoconloquedicesdeminiña—semofaEric.Suchicorespondeentoncesconunaencantadorasonrisa:—Cielo...—y, señalando a mi pequeñín, afirma—: Ellos tienen un Superman y yo quiero un
Spiderman.UnpequeñoPeterHoffmannParker.Melponelosojosenblancoyyomerío.Nolopuedoremediar.Depronto,suenansendosmensajesenlosmóvilesdeEricydeBjörn.Mimaridoechaunvistazo
yluegocomenta:—AlfredyMaggienos informandequeestánorganizandouna fiestaprivadaenelpalacetede
campoquetienencercadeOberammergau.
—Sí—afirmaBjörndejandoelmóvil—.Yotambiénloacaboderecibir.—¿Oberammergauesesepuebloqueparecedecuento?—pregunto,yEricasiente.Aloírme,Melseinteresa,yyoleexplicoqueEricyyoestuvimospasandounfindesemanaen
eseincreíblesitio.MiamigasesorprendecuandoledigoqueallívilacasadeCaperucitaRojaydeHanselyGretel.
Björnsonríeentoncesymurmuramirandoasuchica:—Mmm...,deCaperucitaRojaestaríastentadora,teniente.LoscuatroreímoscuandoMel,quenuncahaasistidoaunadeesaslujuriosasyprivadasfiestas,
pregunta:—¿QuiénessonMaggieyAlfred?Yosonrío.Todavíarecuerdolaprimeravezqueoíhablardeellos.EstábamosenZaharadelos
Atunes,enlapreciosacasadeFridayAndrés.MiroamiamigayrespondomientrastocoelanilloqueEricmeregaló:
—Sonunaparejamuysimpáticaquecadaequistiempoorganizanfiestastemáticasmuyprivadas.—¿Temáticas?—preguntacuriosaMel.EricyBjörnsonríen.—LlevabancasidosañossinorganizarnadaporunaenfermedaddeAlfred—explicamiamor—,
peroalpareceryaestárepuestoytienenganasdefiesta.—CuántomealegrodequeAlfredestémejor—asiento.Melnosmiraalaesperadequealgunocuentealgomás,yfinalmentedigo:—Yo sólo he asistido a dos fiestas organizadas por ellos. En la última, la temática era la
prehistoria,perolaprimeravezquefuiaunadesusfiestashabíaqueirvestidosdeloslocosañosveinte.FuimosconFridayAndrés.Ellosparecíangánsteres,¡ynosotrasflappers!
Melsonríe,sabeloqueesunaflapper,yBjörndice:—Enesafiestafuecuandoteconocí.Ericasiente...Björnsonríe...RecordaraquellaprimeravezyloqueocurrióconEricyBjörnenaquellugaraúnmeacaloray,
sonriendo,digoalverquenadiepuedeoírnos:—Sinlugaradudas,esafiestamarcóunantesyundespuésenelsexoparamí;larecuerdocomo
algomuyespecial.Sólopensarlomeexcita.Ericsonríe.Björntambién.¡Québribones!YMel,alentendersussonrisitas,sinpizcadecelos,mepregunta:—¿Antesdeesafiestanohabíashechonadade...nada?Ahoralaquesonríesoyyo.—Días antes tuve mi primera experiencia con Frida y Andrés en su casa —respondo—, y
anteriormenteaeso,Eric,estelistillorubioqueahoraríeymiraaltecho,meengañóenunhoteldeMadrid. Me tapó los ojos, puso una cámara a grabar y me hizo creer que era él quien jugabaconmigo,cuandoquienlohacíaenrealidaderaFrida.
—¡Nomedigas!—exclamaMel.Recordaraquellosmomentosjuntosmehacereír,yañado:
—Nitecuentolofuriosaquemepusecuandovilograbado.¡Queríamatarlo!Denuevo,Ericsonríey,acercándoseamí,dice:—Perocuéntalobien,cariño.Antesdeeso,yotepreguntésiestabaspreparadaparajugaraloque
yoqueríaydijistequesí.—Resoplodivertida,¡claroquelorecuerdo!—.Segundosdespués,insistíenmipreguntayvolvisteaaccederconelúnicomatizdequenoqueríassado.
—¡Menudotramposo!—ríeMel.—Nofuetramposo,élpreguntó—afirmaBjörn.Aloíreso,resoplodenuevo.Peroparahacerlesentenderdeunavezportodaselenfadoquesentí
enaquelinstante,losmiroyseñalo:—Vale,tenéisrazón,éllopreguntó.PeroimaginadqueeldíademañanaHannahoSami,vuestras
preciosasniñas,conocenaunostiposysevenenmimismasituación.¿Quépensaríasvosotros?—Lomato—sentenciamialemán.—Learrancolacabeza—afirmaBjörn.Melyyonosmiramosynoscarcajeamosporsuscontestacionesprimitivas,mientrasellosnos
observanmuyserios.Miejemplonoleshagustadonada,peroinsisto:—¿Yporqué losmataríaiso les arrancaríais la cabeza?Si ellos también leshanpreguntadoa
ellaslomismoqueEricmepreguntóamí...Ellospodríandecirlomismoquehasalegadotúy...—Bueno..., bueno...—me corta mi amor cogiendo al pequeño Eric en brazos con seriedad—.
Cambiemosdetema.—Sí,mejor—afirmaBjörncolocándolelacoronitadenuevoasuniña.—Qué diferente se ve todo cuando uno es el papaíto, ¿verdad, machotes? —se mofa Mel,
haciéndome reír. Luego añade—: Pues, os guste o no, el día de mañana vuestras niñas, que sonnuestrastambién,disfrutaránlibrementedelsexocomohacemosnosotros,yesperoquelodisfrutenmucho...,mucho...,mucho.
Ellossemiran.Nohablan.Sinduda,noquierenniplantearseloqueMelestádiciendo.Sorprendidaporsusreacciones,losmiroysonríosabiendoqueeseejemplo,alfin,leshahecho
entenderloqueenotrosmomentosnuncaentendieron.Sinlugaradudas,Ericmepreguntó,peronofueconcretoensupreguntay,aunquelaexperiencialarepetiríamilveces,verloquehabíagrabadoaqueldíamedejósinsaberniquépensar.
Sinembargo,comonoquieromachacarmássusmentesdemachotesposesivos,cambiodetema:—¿HabéishabladoconDexter?Björnasientey,trasbeberdesucerveza,dice:—Ayer justamentehabléconélymeconfirmóqueelbautizoesdentrodedos semanas.Verás
cuandoseenteredenuestraboda.Todossonreímos,yentoncesMelmurmuraparahacerrabiaraBjörn:—¡México!Quéganasdeir.—¿México? ¿Y nuestra boda qué?—protesta él, que, al verla sonreír, cuchichea—: Eresmuy
traviesa,ylovasapagar.Cada vez que recuerdo mi luna de miel allí, no puedo dejar de sonreír. Riviera Maya. Hotel
Mezzanine.Ericyyo.Uf...,quémomentosyquébienlopasé.Loquedaríaporvolveraestarallí.Pero en esta ocasión el viaje será por otro acontecimiento, y solos, lo que se dice solos, no
estaremos.DexteryGracielahansidopadres.Antelaimposibilidaddeélparatenerhijos,buscaronunbanco
de semen y, meses después, el resultado ha sido la llegada de Gabriel y Nadia, unos preciososmellizos.
—NoquieroniimaginarmecómoestaránDexteryGracielaconlosbebés.—Telodigoyo—responderiendoBjörn—.¡Agotados!Ericsonríe,yoleguiñounojoconcomplicidady,sindudarlo,meacercaaélylobeso.Nunca
desaprovechounmomentofeliz.
12
Ellunes,cuandomedespierto,estoyhistérica.¡VoyaMüller!Alfinalgodiferentededarpapillas,limpiarmoquetesycantarlodeltenedoryeltallarín.¡Vivalavidalaboral!Unavezmeducho,miromiarmarioyalfinaloptoporponermeunbonitotrajedechaquetagris
conunacamisanegra.Elresultadomegustacuandomemiroalespejo,mepongounoszapatosdetacóngrisesy¡estoypreparada!
Tanprontocomobajoalacocina,EricyFlynestándesayunando.Alentrar,Ericmemiraynodicenada,peroFlyn,alvermedeesaguisa,ynoconlosvaquerosolabatadeandarporcasa,meobservasorprendidoypregunta:
—¿Adóndevas,mamá?SaludoaSimona,quesaledelacocinacondosvasosdelecheparallevárselosaPipay,mientras
mellenounatazadecafé,respondo:—Alaoficinaconpapá.Tengounaentrevista.Ericnodicenada,sinoquesiguemirandoelperiódico.EntoncesFlyn,quenomequitalavistade
encima,preguntasorprendido:—¿VasatrabajarenMüller?Mesientoasulado.—Sí,cariño—contestoemocionada.—¿Yporqué?Doyuntragoamicafé,observoqueEricmemiraporencimadelperiódicoydigo:—Porquesoyunamujeralaquelegustahaceralgomásqueestarencasatodoeldíay,sitengo
lasuertedeconseguirunempleo,¿porquénoaceptarlo?LabocadeFlynseabrecomosihubieradichoalgoterriblementedesagradable.—¿YquiénvaacuidardeEricydeHannah?—pregunta.Resoplo.Otroconelquelidiar...Comopuedo,ysinalterarme,digo:—LoharánPipaySimona.—¿Yquiénmevaaayudarahacerlostrabajos?—Pues los tendrásquehacer tú,pero tranquilo, tendré tiempoparaayudarteporquesólovoya
trabajaramediajornada.—Peroestaráscansadaylossábadosporlamañananoteapetecerásalirconmigoasaltarconla
moto.Norespondo:saltarconlamotosiempremeapetece.—Noveobienquetrabajes—insisteél.Joder..., joder,quédifícilmeloestáponiendoelcabritodelniño.Novoyacontestar.Novoya
entrar en su juego o terminaremos discutiendo como hacemos últimamente. Pero Flyn es unZimmermany,cuandoestoydandountragoamicafé,sentencia:
—Noquieroque trabajes.Papá lohacepor todosy sepasamediavidaen laoficina. ¿Porquétienesquehacerlotú?
MiroaEricenbuscadeayudayveoquelacomisuradesuslabiossecurva.¡Serácapullo!Andaquemeechaunamanoenlaconversación...
—Flyn—empiezoadecir—,teaseguroque...—Quieroqueestésencasacomounamadre—insistedandounmanotazoenlamesa.Bueno...,bueno...,bueno...,¿enquésigloseestácriandomihijo?Lomiro.Élmemiraconmalicia.Estásiendocruelconmigo.Alfinal,lollamo«chino»,ydiscutimosmostrandoamboslamisma
crueldad,porloquemurmuroparareivindicarmisderechos:—Flyn, lasmujeres decidimos lo quequeremoshacer en esta vida, y te aseguroquemevas a
tenerparatodoloquenecesites.Sinembargo,nomeparecebienquepiensescomounviejodelsiglopasadoalrespectodequelasmadrestienenqueestarencasa.
—Esloquepienso.—Puesestámuymalpensado—sentencio—.Yonoteestoyeducandoparaquepiensesasí.Las
mujeres y los hombres somos seres independientes y con las mismas oportunidades, y aunquevivamosenparejadeb...
—Noquieroquetrabajes.Túno.—¡Flyn,basta!—exclamaEricy,dejandoelperiódicoque tieneen lasmanos,añade—:Judes
mayorcitaparasaberloquequierehacerono.Seacabóelpensarsóloenloquetúquieres.Aplícateenaprobar,¡esoesloquetienesquehacer!Yolvídatedelamotoydelrestodelascosas.
Elniñoresopla,nosmiraysecalla.Alfinal,terminamoslostresdesayunandoensilencio.¡Québuencomienzodedía!Veinteminutosdespués, le indicamosaNorbertquenohace faltaque lleveaFlyn:nosotros lo
dejaremosdecaminoalaoficina.Elsilenciovuelveaestarpresenteenelcoche,ydecidoponermúsica.Busco losCDque lleva
EricenelvehículoymedecidoporelúltimoqueleregalédeAlejandroSanz.Cuandoveloquecojo,mimaridomemiraydice:—Megustamuchoesacanciónquediceaquellode«Aquenomedejas».[10]Merío.Séaquécanciónserefiere,perocuandovoyameterelCD,recuerdoqueFlynvienecon
nosotrose,intentandohacerleunagracia,buscoeldiscoqueEricllevadelosImagineDragons,sugrupopreferido,ylopongo.
CuandocomienzaasonarDemons,[11]buscosumiradacómplice,peroélmeignora.¡Vayatelitaconeljodidocoreanoalemán!
Alllegaralinstituto,Flynsiguesinhablar.Estáenfadado.Intentocomprendersufrustración,peroporunavezquieroynecesitoqueélmeentiendaamí.
Cuandomevoyadarlavueltaparasonreírleydesearlebuendía,élabrelapuertadelcoche,sebaja
y,sinmirarme,lacierra.Esome rompe el corazón. Quiero a Flyn, costómucho queme aceptara y no quiero queme
rechace.Meentristezco.Miroaminiño,queyaesunespigadoadolescentemásaltoqueyo,atravésdel
cristaldelvehículoynohagointentodesalir.¿Paraqué?Silohago,séqueloavergonzaréantesusamigos.Conscientedeloquesiento,Ericmusita:
—Jud,esunadolescente.Daletiempo.—Ledarétodoeltiempoqueélquiera—digointentandosonreír.Conunacariñosamirada,EricsonríeyarrancaelcochemientrasyoobservoqueFlynsedirige
haciaungrupodechicosychicasquenoconozco.¿YanovaconsuamigoJosh?Sugestocambia,susandarestambiény,cuandovamosadoblarlaesquina,sinsaberporquégrito:
—¡Para!Ericdaunfrenazo.—Aparca...—leexijo—,corre,aparca.Élllevaelvehículohastalaaceray,rápidamente,abrolapuertaysalgo.Ericlohacetambiény,
encuantollegaamilado,preguntapreocupado:—¿Quéocurre?¿Quépasa?Alversugestomedoycuentadelsustoquelehedado.—Ay,cariño,perdona—murmuromirándolo—.EsquequeríasabersiElke, lanuevanoviade
Flyn,estabaenesegrupito.Ericmaldice.Sinduda,lehedadounbuensusto,cuandodeprontoloveofruncirelentrecejoy
preguntarmientrasseñala:—¿Esésa?Miroymequedosinpalabras.Flyn,miniño,migruñoncete,seacercaaunamuchacharubiaconmáspechoqueyo,vestidacon
uncortísimovestidovaquero.Laagarra,tiradeellahaciaélylabesaenlaboca.Pero...¡perobuenooooooooo!¿Quéguarreríashaceminiño,ycuántosañostieneesamuchacha?Elbesoseprolonga,seprolongayseprolongacuandolamanodeFlynseposaeneltraserode
ellayseloaprieta.EntoncesoigoqueEricmurmuradivertido:—Éseesmimachote.Escandalizada por lo que acabo de ver,miro amimarido—¡seme va a salir el corazón del
pecho!—ypreguntoasombrada:—Pero¿cuántosañostieneElke?—Ericseencogedehombrosy,cuandovaaresponder,digo—:
PorlomenostienedosmásqueFlyn.—Legustaránmayorcitas—semofaelcabrito.Susonrisameenerva.Pormuchocuerpoquetenga,Flynesuncríoy,cuandoobservoquevuelve
abesaraaquellarubiadelargaspiernasygrandestetorras,gruño:—PorDios,¿túsabesladeenfermedadesquepuedecogerbesandoasí?Ericsueltaunacarcajada.Mecogede lamano,me llevahastaelcocheymesostiene lapuerta
abierta.
—Venga,¡vámonos!—dice.—MegustabamásDakota—gruñosinmoverme.Miamorsonríeeinsiste:—Mamápollo,hazelfavordeentrarenelcochedeunavez.Porúltimavez,miroaFlynycomprueboquesiguebesandoalarubia;¡lamadrequelotrajo!Subo al coche, cierro la puerta y, cuandoEric entra y se sienta ami lado, pregunta con gesto
guasón:—Pero,cariño,¿porquéponesesacara?—Joder,Eric,¡¿túhasvistolomismoqueyo?!—Flynesunadolescenteycomienzaadescubrirelplacerdebesarytocaraunachica.—Seríey
añade—:Y,porloqueveo,¡notienemalgustoenasuntodemujeres!¿Ledigo«¡Gilipollas!»onoselodigo?No...,definitivamentenovoyadecirnada.Eslomejor.Pero,todavíaconfusaporloquehevisto,reprocho:—¡Yaestáshablandoconélurgentementedelanecesidaddelasrelacionescongomitaparaevitar
futurosproblemasyenfermedades,¿entendido?!Ericsueltaunacarcajada.Seríeenmicaray,cuandoacercasubocaalamía,murmura:—Eresmaravillosa,cariño...,tremendamentemaravillosa.Trasunrápidobeso,miamorarrancaelvehículo,cambiaelCDdemúsicaysuenamiAlejandro
mientrasyonosalgodemiasombroporloqueacabodever.
Media hora después, llegamos a la oficina y dejamos el coche en el parking de la empresa.Apartir de ese instante, Eric instala en su rostro lamirada de jefe y hombre frío que conocí en sumomentoy,cuandomecogelamanoparairhaciaelascensor,yolaapartoycuchicheo:
—Seamosprofesionales,cariño.Esolosorprendey,parándose,replicamientrasfruncemáselceño:—¿Meestásdiciendoquenovoyapodercogerlamanodemimujer?Lomiroboquiabierta.—Eric,estamosenlaoficina;¿pretendescogermedelamanocadavezquemeveas?—No—respondeélconsinceridad.—Pues,entonces,entiendeloquedigo.Y,dichoesto, sigoandandohaciaelascensor.Elsonidodemis tacones retumbaenel solitario
parkingcuandolooigodecir:—Meencantacómotequedaestetraje.Estásmuysexi.Sonríoaloíresoy,mirándolo,suspiroconscientedequeheengordadocincokilosenelúltimo
año.—Loqueestoyesreventona,poresoeltrajemequedaasí.Ericsonríe,medaunrápidocacheteeneltraseroymurmura:—Amímegustas.Aisss,¡quemelocomo...,quemelocomo!
Conlotraumatizadaqueestoyyoporestospuñeteroskilos,quemedigaeso¡meencanta!Cuandoelascensorseabre,montamosenélyEricpulsaelbotóndelasextaplanta.Lomiroy
pregunto:—¿Novasatudespacho?—TeacompañaréprimeroaldespachodeMika.Aloíreso,resoplo.Lomiroysiseo:—Eric,niseteocurraacompañarmehastaeldespachodeMikacomosifuerasmipadreporque
aquísóloquieroserJudithFlores.Bastantetengoyaconquetodoelmundosepaquesoytumujercomoparaquemevayasencimaenplanguardaespaldas.Seamosprofesionales,¡porfavor!—Y,trascoger aire, insisto—: Sé perfectamente dónde está el despacho y no quiero que me acompañes,¿entendido?
Ericresoplaasuvez.Loqueleacabodedecirletocalamoraly,congestotosco,veoqueaprietaelbotóndelaplantadécima,ladesudespacho.Enseguidamesientofatalpormireprimenda,asíquemeacercoaél.
—Cariño—murmuro—,entiendeque...—Señorita Flores, por favor —replica alejándose de mí—, recuerde que aquí soy el señor
Zimmerman.—Y,mirándome,añade,elmuygilipollas—:Seamosprofesionales.Oy...,oy...,oy...,lasganasquetengodedarleunpellizcodoloroso.Peroenlugardeesoasientoy,
ensilencio,llegamosamiplanta.¡Parachula,yo!Instantesdespués,laspuertasseabren,ymedispongoasalirdelascensorcuandolamanodeEric
medetiene.—EncuantoacabetureuniónconMika,subeadespedirtedemí;notemarchessinhacerlo—me
dicesinacercarse.Dichoesto,mesuelta,ylaspuertasdelascensorsecierranprivándomedemiraramiamor.Cuandomequedosola,medoylavuelta,estirolachaquetademitrajeycaminoconseguridad
haciaeldespachodeMika.Alllegar,susecretaria,quemeconoce,selevantarápidamenteymedice:—SeñoraZimmerman,Mikahadadoordendequeentreencuantollegue.Sonrío.Asientoy,cuandovoyaentrareneldespacho,mevuelvoylepreguntoalachica:—¿Cómotellamas?—Tania,señoraZimmerman—murmuraellaconcaradesusto.Asiento.Hedeserrápidaoalachicaledaráuninfarto,porloquesonríoydigo:—Tania,minombreesJudith.Teagradeceríaquemellamarasporesenombre,puestoquevamos
atrabajarjuntasyseráincómodoquemeestésllamandotodoelratoporelapellidodemimarido,¿deacuerdo?
Lajovenasiente.Yocreoqueyanorecuerdanicómomellamodelonerviosaqueestá.Doymediavuelta,golpeoconlosnudilloslapuertadeMikay,cuandooigosuvoz,entro.NiquedecirtienequeMikamecaegenial.Hemoscoincididoenvariasfiestasdelaempresa,es
unatíadivertidaydagustoestarconella.Esunosdiezañosmayorqueyo,peroselaveunamujeractual,nosóloporsuformadevestir,sinotambiénporsumaneradepensar.
DuranteunratohablamosyMikameexplicaque,enMüller,marketingestádivididoporáreas:investigacióncomercial,imagen,compras,ventas,diseñoeinnovacióny,porúltimo,comunicación,
queeseláreaenlaqueyovoyatrabajar.Luegomeentregaunospapelesenlosqueseindicaqueambasnosencargamosdeesaárea,yme
emociono al ver que dentro de nuestro cometido está desarrollar campañas de comunicación,eventos,ferias,redessociales,etcétera.
Sonríofeliz.Mesientocapacitadapara todoello,yesomeproporcionaunsubidóndelquince.¡Ericmeconocemuybien!
Unavezséelpuestoquevoyaocupar,pasamosaldespachoqueestájuntoaldeMika.Éseseráelmío,ylomiroconunosojoscomoplatos.¡Tengodespachopropio,yconventana!
¡Oléyolé!—Comoves—diceMika—,Margeriteestádebajaporunaccidentedomésticoyno regresará
hastadentrodeunpardemeses.—Vaya—murmuro.—Judith, sobre lamesahayunacartadecolores.Antesdemarchartehoy,por favor,dimequé
colorprefieresparaquetelopinten,¿deacuerdo?¿Vanapintareldespacho?Micaradebedeserunpoema,porqueMikaañademirándome:—Erichapedidoqueeltiempoqueocupesestedespachoestétodoatugusto.—Vale—consigodeciremocionada.Cuandoregresamosaldespachodeella,lesuenaelteléfono,locogey,unavezcuelga,memira.—Tengounareunión.Estoyorganizandodistintasferiasy...—¿Puedoasistiraesareunión?—preguntodirectamente.Mikaasienteencantada.—Porsupuestoquesí—dicesonriendo—.Dameunossegundos,querecojoloquenecesito.Mientrasesperoaqueellarecojaunospapelesdelamesa,mimóvilvibra.UnmensajedeEric.
¿SiguesconMika?
Sonríoymeapresuroaresponder:
Sí.Yahoravoyaentrarenunareuniónconella.¡Estoyilusionada!
Unavezledoya«Enviar»,esperorápidamentesucontestación,peroporextrañoqueparezcano
larecibo.Guardoelmóvilymaldigoalpensarque,conseguridad,Ericapareceráenesareunión.Cuando Mika lo tiene todo, camino a su lado en dirección a la sala de reuniones, mientras
observoquequienmereconocememiraconcuriosidad.Comopuedo,sonrío.Noquieroquepiensenquesoyunatíabordeyestirada.
Al entrar en la sala de reuniones,Mikame presenta a los hombres que están allí como JudithFlores,nocomolaseñoraZimmerman.Estoypordarlemilbesosporesedetallazo.Creoqueellalosabe y, sin más preámbulos, les explica que a partir de ese instante ella y yo dirigiremos eldepartamentodecomunicación.
Unavezhechaslaspresentaciones,meenterodequeesosejecutivospertenecenalasdelegaciones
deMüllerenSuiza,LondresyFranciay,sinmásdilación,comienza lareunión,a laqueyoasistocalladitayatenta.Eslomejorquepuedohacerhastaquelecojaeltinoalasunto.
Eltiempopasaymimóvilvibradespuésdeunahora.
¿Dóndeestás?
Condisimulo,loleoycomienzoateclear:
Sigoenlareunión.Cuandoacabe,tellamo.
Comonodeseoquecontinúeinterrumpiendomiatención,apagoelmóvilymecentroenloque
vaaserminuevotrabajo.Otrahoradespués,cuandolareunióntermina,decidimossubirtodosalacafetería,queestáenla
planta novena. Al entrar, veo que algunos trabajadores me miran; sin duda saben quién soy, lasnoticiasdebendehabervoladoporMüller,ymeponemalavercómocuchichean.
Mika,quetambiénsehadadocuenta,seacercaamíymurmura:—Tranquila.Muéstratetalycomoeresyprontoteperderánelmiedo.Asiento.Sinduda,mevaatocarpasarporlomismoquemetocóaguantarenMadrid,cuandoen
laoficinatodoelmundoseenteródequeyoeralanoviadeljefazo.Ladiferenciaesqueaquíyanosoysunovia,sino¡sumujer!
Cuandollegamosalabarra,pedimosunoscafés.Paseolamiradaporlacafeteríayentoncesveoentraraunachicarubitaconunacarapreciosayunmoñitoencantador.Laobservo,sesientalejosdenosotrosyveoquehablaporteléfono,mientrassetocacondeleiteunmechóndepeloquelecaeenlacara.
¡Quémona!Laconversaciónquesetraenlosqueestánamialrededorhacequedejedemirarlaymeincluya
enella,hastaqueHarry,elinglésquehaestadosentadoamiladotodoeltiempo,mepregunta:—¿Quétehaparecidolareunión?Sonrío,metocolafrenteyrespondo:—Aunque estoy un poco descolocada, ha sido interesante. Sólo espero ponerme al día
rápidamenteenmuchascosasparaestaravuestraaltura.Harrysonríe.—Tranquila—dice—.Notengolamenordudadequeloharásmuybien.—Gracias—murmuroagradecidaporsupositividad.DenuevonosunimosalaconversacióndelgrupocuandoTeo,elfrancés,preguntamirándome:—¿Ycuándotereincorporastotalmente,Judith?YomiroaMika.—Judithtrabajaráamediajornadadurantedosmeses,mientrasMargeriteestédebaja—explica
ella.Todosmemiranporesodelamediajornada,veoensusexpresionesquenoentiendennada,pero
novoyaseryoquienseloexplique.Meniego.
La conversación se reanuda yme siento feliz.Nadie habla de niños, nadie habla de papillas y,sobretodo,¡nadiecantaeltallarín,nillora!
Ahoraquepiensoenllorar,¿cómoestaránmimonstruitaymiSuperman?Rápidamente, me quito sus imágenes de la cabeza, o me pondré ñoña, y me centro en la
conversación adulta que se desarrolla ante mí.Minutos después, cuando alguien pregunta por miextraño acento y se enteran de que soy española, espero lo de siempre pero, por increíble queparezca,ningunodiceesode«Olé...,toro...,paella».
Aisss,madre,¡nomelopuedocreer!Porfindigoquesoyespañolaynadietocalascastañuelasconlasmanos.Sonrío,yestalmisonrisaqueHarry,elinglés,seacercaamíypregunta:—¿Porquésonríes?Sinpoderevitarmisonrisa,lomiroyrespondo:—Porquehoyestásiendoundíaperfecto.Ahoraelquesonríeesél.Memiraysugiere:—¿Otrocafé?Asiento.Lopidey, cuando el camarero lo pone ante nosotros y estoy echando el sobrecito de
azúcar,oigoqueHarrydicealtiempoqueseñalamianillo:—Porloqueveo,estáscasada.Concariño,miroeldedoenelqueorgullosamentellevoelanilloqueEricmeregalóyquetanto
significaparanosotrosydigo:—Sí.Segundos después, los dos volvemos amirar a los demás, que hablan de trabajo.Así estamos
comoveinteminutoscuandoproponenquevayamosacomertodosjuntos.Séquedeberíaregresaracasa,peromeapeteceasistiralacomida,porloquedecidollamaraSimonaparavercómoestánlosniños.
Me separo un metro del grupo para hablar y sonrío cuando ella me pone a mi Superman alteléfono.Lehabloymesueltaunpardefrasesdivertidas.TantoélcomoHannahestánbien,yvuelvoa sonreír en el momento en que oigo los lloriqueos de la niña de fondo. Mi monstruita estáperfectamente.
Encuantocuelgo,medispongoallamartambiénaEricparainformarlodequemevoyacomerfuera,perodeprontoloveoentrarporlapuertadelacafetería.¡Losabía!Yasehaenteradodequeestoyallíyhabajadoacotillear.
Malempezamossiyacomienzaconesecontrol.Concautela,noseacercaanosotros,peroséquemeobservatrassusrubiaspestañas.Noestonto,ysabeque,comoseleocurraacercarse,mevoyaenfadar,porloquesemantiene
alejadodelgrupo.Sinembargo,cuandoMikalove,rápidamentelosaludayEric,aprovechandolaoportunidad,seuneanosotros.
Con su típica cara de «aquímando yo», les estrecha lamano a los demás, que lo saludan conformalidad—¡es el jefazo!—y, sin perder un segundo, se coloca ami lado,me agarra de formaposesivaporlacinturaydice:
—Veoqueyaconocéisamipreciosayencantadoramujer.
Losotrostreshombresmemiranboquiabiertos.Yosonrío...,sonrío...,sonrío¡oabofeteoaEricporeso!Pero¿quéesesode«preciosayencantadoramujer»eneltrabajo?Sólo le ha faltado levantar la pata y mearme como un perro para marcar su territorio. ¡Será
gilipollas!Harrymemira,yolomiroyvuelvoasonreír.Porsuerte,élhacelomismoqueyo.Durantevariosminutos todoshablan,mientrasyoescuchoconunaprefabricada sonrisaen los
labios,hastaqueEric,mirándoseelreloj,memira,despuéssedirigeaMikaypregunta:—¿Habéisterminadoconlareunión?Ambasasentimos.—Sí,Eric—diceMika—.Ahoraestábamospensandoeniracomertodosjuntos.Sinmirarme,veoquemialemánseapresuraaresponder:—Quégranidea.Avisaréamisecretariaparaquereserveenelrestaurantedeenfrente.LoshombresyMika aceptan encantados.Comer conel jefazo esun lujo, peroyo creoque lo
mato...,creoquelovoyamatar.¿Porquéseautoinvitaaesacomida?Sinsoltarme,meobservaysonríe,yyolemuestroconmimiradaloquepienso.Ericmeconoce,
sabequeloqueestáhaciendonomeestágustandounpelo.Pero,sincortarse,cogemimanoydice:—Mika,adelantaosvosotrosalrestaurante.Judyyoiremosenseguida.Ea...,¡yamehaseparadodelgrupo!Repito:¡lomato!Caminoasuladohastallegaralascensory,cuandovoyadeciralgo,unempleadoseparajuntoa
nosotros.Mecallo.Ensilencio,cogemoselascensorjuntoamástrabajadores,quememiranconcuriosidad.Yoles
sonrío, no quiero que piensen que soy una estirada por ser la señora Zimmerman. En cuantollegamosalaplantadécima,Eric,quetodavíanohaabiertolaboca,tirademimanocondelicadezaycaminamosjuntoshaciasudespacho.
Alpasarveoavariasmujeresquemeobservanconatención,ylessonrío.¡Sonríoatodobichoviviente!Llegamosantelapuertadesudespacho,ymesorprendoalveralachicarubiadecaritapreciosa
ymoñito gracioso en la cabeza sentada en la silla donde suele estar Dafne, la secretaria de Eric.Nuestrasmiradasseencuentrancuandomimaridodiceconvozdeordenoymando:
—Gerda,llamaalrestaurantedeFloyydilesquereservenunamesaparaseis¡ya!Lajovenasiente,dejademirarme,cogerápidamenteel teléfonoycomienzaamarcarmientras
Ericyyoentramoseneldespacho.Unaveznosquedamossolosyélcierralapuerta,memiraysiseasinlevantarlavoz:—Aceptastetrabajarmediajornadayluegoregresarconlosniñosacasa,¿lohasolvidadoya?—
Medispongoacontestarlecuandovuelvealacarga—:Tedijequemellamarasencuantoacabaralareunión.
Molestaporsusmodales,meretirodeélyrespondoconsorna:—¿Paraqué?Yameestabasvigilandocontusinformadores.
Ericresopla.Setocaelpeloy,cuandovaahablar,loseñaloconeldedoymurmuro:—Muymal,Eric,comenzamosmuymal.Sivoyatrabajarenestaempresa,necesitolibertadde
movimientos; no quiero sentir tus ojos ni los de nadie pegados a mi nuca. Pero ¿qué te ocurre?¿Acasonitrabajandoentujodidaempresatevasafiardemí?
Élnocontesta.Sumiradamehacesaberlofuriosoqueestá,yyo,quenoestoymuchomejorqueél,caminohacialosgrandesventanales.Meestáentrandouncalorinfernal,ynoprecisamenteporloquemesueleentrarsiempre.
Unavezllegoalosventanalesmirohacialacalley,segundosdespués,sientoqueEriccaminaenmidirección.Calentitacomoestoy,mevuelvoylesuelto:
—NomeextrañaqueFlyntengaesosretorcidospensamientosreferentesaqueyotrabaje,sitú,quemeconoces,notefíasdemí.—Ericnocontesta,yprosigo—:Yosóloquierotrabajar,sentirmebienconmigomismapero,desdeluego,siesovaasuponerestartodoeldíaconmiedoaquetútesientasmolestoporconquiénhablooconquiéntomouncafé,¡apagayvámonos!
Eneseinstanteseoyenunosgolpecitosenlapuerta,éstaseabreyaparecelarubiadelmoñito.—Señor Zimmerman —dice tocándose el pelo con coquetería—, ya he reservado en el
restaurante.—Muybien,Gerta.Gracias—afirmaEricconrotundidad.Mi mirada y la de ella chocan y, rápidamente, deduzco que con quien hablaba la tipa en la
cafeteríamientrassetocabaelpeloeraconEric.Esomeenferma.Estarconunhombrecomoélimplicaestaralertasiempreenmateriademujeres,peroesafaseya
lapasé,omehabríavueltoloca.Aunasí,lamiraditadeladelmoñonomegustaunpelo,ycuando,trasesbozarunasonrisitatontorrona,damediavueltaycierralapuerta,preguntometiendotripa:
—¿DóndeestáDafne?Ericvuelvelamiradahaciamíy,entendiendoloquepienso,respondeconborderío:—Dafneestádebajapormaternidad,¿algomás?Uiss...,uisss,esverdad,Dafnetuvounniño.PeroesachuleríatanIcemanmemata.Mecabrea.¡Me
poneacien!Tengomuchomásenlapuntadelalenguaporsoltar,¡estoyquemuerdo!,peronolevoyadar
eseplacer.Asípues,negandoconlacabeza,vuelvoamirarporlacristaleraysiseo:—Noestoycelosa,estoyenfadada.Quieroquelosepas.LlevabatiemposinqueEricmesacaratantodemiscasillas.Losúltimosmesesencasaconlos
niños han sido en ocasiones desquiciantes, pero en lo que respecta a la pareja, maravillosos ytranquilizadores.Sinembargo,ahoraquequierocomenzaratrabajar,lacosacambia.Ericnomelovaaponerfácil,yFlyntampoco...¡Laquemeespera!
Ericmemira.Elreflejodelcristalmeayudaavertodoloqueélhacetrasdemí,yresoplo.Veoque se abre la americana, se lleva lasmanosa la cinturaybaja la cabeza.Sinduda, se estádandocuentadesuerror.Losé.Loconozco.
—Escucha,Jud...—empiezaadecir.—No,escuchatú—siseodándomelavueltacomounpuritotoromiura—.Duranteeltiempoque
heestadoencasacuidandodelosniñosmehefiadodetialcienporcien,apesardesaberquetienesunenormeimánparaatraeralasmujeresytrabajasrodeadodeellas.—Hablarsobreesomehace
temblar,peroprosigo—:Niunasolavezhedichounamalapalabraportusviajesoportuscenasdeempresa,nitehehechosentirincómodoinsinuándotecosasdesagradables.Mefíodetialcienporcien,ylohagoporqueséquemequieres,séloimportantequesoyparati,ytambiénséquenadietevaadartodoloqueyotedoycomomujerymadredetushijos.¿Acasohedepensarquehagomalfiándomedeti?
—No,Jud...,no—seapresuraaresponder.—Puesentonces,dejadepensarquevoyarompercorazonesallápordondepisey...—Amímelorompiste—dicemirándome,elmuygranuja.Inconscientemente,surespuestamehacesonreír,perocontengomitontarisitayreplico:—Que sea la última vez que mandas a nadie a vigilarme durante mis horas de trabajo en la
empresa,porquesimevuelvoadarcuentadeello, te juroque lovasa lamentar.—Ericmemira.Sabequehabloenserio,einsisto—:¿QuévaapensarahoraGerdademí?¿Acasonotedascuentadeque,conloquehashecho,puedesacarconclusionesequivocadasconrespectoanuestrarelación?
Ericasiente.Sabequelohahechomal.Cierralosojosy,cuandolosabre,responde:—Tepidodisculpas,Jud.Tienesrazónentodoloquedices.Resoplo...Memira...Lomiroy,cuandoveoesamiradaarrepentidaquetantoadoroyqueconozcotanbien,sueltoun
quejido.—Eric...Nohacefaltaquedigamás.Miamor,michico,mitodo,daunpasohaciamíymeabraza.Ningunohabladuranteunossegundos,hastaqueélfinalmentedice:—Prometoquenovolveráasuceder.—Esoespero—asiento,deseosadequeseaasí.Comosiempre,esmirarnosy,¡zas!,nosbesamos.Apesardeserdospolosopuestos,nuestroimánnosatraeydisfrutamosdenuestromaravilloso
beso.Pero,comosiemprequelohacemos,elcalornosinvadey,separándomedeél,murmuro:—Cariño...,estamosentudespacho.Miamorasiente,memiraalosojosyreplica:—Creoqueahoraquevoyatenertedenuevocercaeneldespachotendréquehacerobras.—¡¿Obras?!Ericsonríey,sinsoltarme,añade:—Unarchivodentrodemidespacho...,¿nocreesquenosvendríabien?Meríoaloíreso.Ningunodelosdoshaolvidadonuestrosencuentroslocoseimprudentesenel
archivoquehabíaeneldespachodeMadrid.—Québuenaidea,señorZimmerman—digo.Entre risas, nos besuqueamos. Recordar nuestros comienzos siempre es divertido, morboso y
caliente.Trassuúltimobeso,Ericpregunta:—Ahoraenserio,cielo,¿quieresquevayaaesacomidaoestarásincómoda?Lomiro...¡Melocomo!Yfinalmente,agarrándolodelamano,contesto:—Claroquequieroquevengas,cariño.Ereseljefazo;además,¡asípagastú!
Mi Iceman sonríe, se abrocha la chaqueta, recupera la compostura y, de lamano, salimos deldespacho. Una vez fuera, Gerta nos mira, Eric suelta mi mano, me agarra posesivamente por lacinturaydice:
—Gerta,paracualquiercosaurgente,estarécomiendoconmipreciosamujer.Ladelmoñitoasiente,yosonríoy,felizconmimarido,nosvamosacomer.Cuandollegamosalrestaurante,losdemásyaestánallí,yMikasonríealvernos.Floy,eldueño
del local, viene rápidamente hacia nosotros y nos saluda.Complacida, le doy dos besos; no es laprimeravezquecomoallíconEric.Acontinuación,nosreunimosconelrestodelgrupo,yFloynosllevaconamabilidadalamesaquetenemosreservada.
Unavezallí,dejoqueEricelijasitio,yomecolocoasuderecha,yMikaseapresuraaponerseami izquierda.Harry,el inglés, seacercaaellay le retira lasilla. ¡Quégalante!Eric,porsupuesto,hace lomismoconmigo—¡faltaríamás!—y,unaveznossentamos todos,elcamarero reparte lascartasyescogemosloquequeremoscomer.
Cincominutosdespués,trashacerlacomandaconelcamarero,éstesevayapareceotroquedeformaordenadanossirvevinoenlascopas.Unavezacabaysemarcha,Teo,elfrancés,cogelasuya,lalevantaydice:
—BrindemosporlaseñoraZimmermanyporsuincorporaciónalaempresa.Vale...,hepasadodeserJudithaserlaseñoraZimmerman.¡Vayamierda!Eso en cierto modo me cabrea, porque sé que ya nunca me tratarán como a una igual. Sin
embargo,todoslevantanamigablementesuscopasybrindan.NomiroaEric.Séloquepiensa,comoséqueélsabeloqueestoypensandoyoeneseinstante.
Doyunsorbitoalvinoy,sinpoderreprimirme,aclaro:—Teo, por favor, paramí seríamuchomás fácil si en el trabajome llamaras pormi nombre
comoyo te lo llamoa ti.Sinduda, soy lamujerdeEric, esoya lo sabemos,pero anivel laboralsimplementequieroserJudithFlores.
VeoquetodossemirancondisimulocuandoHarry,elinglés,levantasucopaydice:—¡PorJudith!De nuevo todos, vuelven a brindar. Con el rabillo del ojo, observo que Eric se tensa, pero
entoncesdice,sorprendiéndome:—Osagradeceréatodosquetratéisamimujercomoaunamáseneltrabajoylallaméisporsu
nombre.Sin duda, Judith es unapersona con carácter y, si no lo hacéis, ¡amí nomevengáis conquejas!
El comentario los hace reír, y el ambiente se relaja. Sin duda, Eric, como siempre, los tieneacojonados.
Cuandoacabamosdecomer,Ericyyonosdespedimosdetodoelmundo.Luego,yomedirijoaMikaysusurro:
—Mañanaelegiréelcolordeldespacho.Ellameguiñaunojoynosvamos.CaminamoshaciaeledificioMüller,entramosenélybajamos
algarajeapornuestrocoche.Cuandonosmontamos,miroaEricypregunto:—¿Porquénotrabajasestatarde?Élarrancaelcochey,guiñándomeelojo,murmura:
—Porquequieroestarcontigoy,comosoyeljefe,melopuedopermitir.Sonrío.Meencantaesarespuesta.
13
Elmartes,cuandoMelyBjörndejaronaSamienelcolegio,elgestodelabogadoeraserio.Mel,quesabíaporqué,exclamóantesdemontarsedenuevoenelcoche:
—Bastaya,porDios,Björn,quesólovoyaunaentrevistaen...—Mehiervelasangrequelohagas.—Björn,accedíacasarmecontigo...—dijoMelsonriendo.—Sí—siseóelabogado—,peronomedistefecha.Ellasonriódenuevoe,intentandoqueéllohicieratambién,cuchicheó:—Ésaseráotranegociación.Aversitecreesquesólotúpiensasloquenegocias.Éllamiróconelceñofruncido.Eralista,muylista.—Nomehacenipizcadegraciaquevayasaesaentrevista—gruñó.—Björn...—Vale,Parker.Séquellegamosaunacuerdo.Tútecasasconmigoyyonopongoobjeciónaese
trabajo,pero¡joder,Mel,¿porqué?!Ellalomiró,resoplóy,cuandosedisponíaaresponder,élprosiguiógesticulandomuchoconlas
manos:—Nonecesitamoseldinero.ConloqueyoganotenemosparavivirholgadamenteSami,túyyo.—Miraqueteponesfeocuandodiscutes.—Estoyhablandoenserio,Mel—repusoélmirándola.—Yyotambién—afirmóellasonriendo.Björnmaldijo.Enocasiones,discutirconsunoviaeradesesperantey,sindarsubrazoatorcer,
insistió:—Yatehedichoque,siquieresuntrabajo,Ericestaráencantadode...—¡Eric!—locortóellaperdiendosuhumor—.Pero¿tú tecreesqueEricesunaONG?Joder,
Björn,queErictienequemirarporsuempresa.BastantehahechoyaaccediendoalapeticióndeJudcomoparaqueencima...
—Mel —protestó Björn—. Sin que yo le dijera nada, Eric me comentó que si quieresincorporartealmundolaboralpuedereubicarteensuempresa.Pero,cariño,sihastapodríastrabajarenmidespacho.
—¿Desecretaria?—Sí.—PorDios,¡quéaburrimiento!Élresopló.—Estoyconvencidodequeseríasunaexcelentesecretaria—aseguró.—Mira, Björn, no me jorobes—replicóMel meneando la cabeza y, sin pensar lo que decía,
agregó—:Siquisierauntrabajodeoficina,sólotendríaquedecírseloamipadreyloconseguiríaenelconsuladodeEstadosUnidos.
Nadamásdecireso,cerrólosojos.Acababademeterlapatahastaelfondo.—¿Quéhasdicho?—preguntóél.Melserascólaoreja.¿Cómopodíasertanbocazas?—¡Ah,genial,Superwoman!¡Genial!—Habló007.Peroelabogado,másfuriosoacadainstantequepasaba,sealejódeellaypreguntóabriéndosela
chaquetadeltraje:—¿Meestásdiciendoquenolehaspedidountrabajodeoficinaatupadreporqueteaburre?Melnoqueríamentirle,asíquedijo:—Escucha,Björn.EstarcontigoyconSamitodoslosdíasmellena,ysoytremendamentefelizde
tenerosydisfrutaros,pero...peronecesitoalgomás.Estoyacostumbradaaunempleoconactividad,accióny...
Sinquererescucharla,élaccionóelmandoadistanciadesucocheylaspuertasseabrieron.—¡Perfecto!—exclamó—.AhoraresultaqueSamiyyosomospocoparati.Melabriólabocay,cuandoélfueamoverse,loempujócontraelvehículo,acercósucaraalade
élysiseó:—Yonohedichoeso.Vosotrossoislomásimportantedemivida.Simplementeestoydiciendo
quenecesitountrabajoquemeproporcionealgodeactividad.Yonovalgoparaestarsentadadetrásdeunamesacomoloestástú.¿Tandifícilesdeentender?
Molestoporsuspalabrasyporelempujónquelehabíadado,Björnlamiró.—No—gruñó—.AlaqueleresultadifícildeentenderquetantoSamicomoyotequeremosyte
necesitamosanuestroladotodosycadaunodelosdíasesati.¿Deverdadnoloentiendes?—Joder,Björn,quenoestoyhablandoderegresaraAfganistánnianingúnpuntocaliente.Sólo
setratadeserescoltay...—Escolta—repitióBjörn cortándolamientras tecleaba en sumóvil—. Según laWikipedia, un
escolta es un profesional de la seguridad, pública o privada, especializado en la protección depersonas(conpoderpolítico,económicoomediático).Unescoltaesunexpertoencombatecuerpoacuerpo, especialista en armas de fuego y armas blancas, capacitado para minimizar cualquiersituación de riesgo.Y, una vez dicho esto, ¿me estás diciendo que no tengo de qué preocuparme?Joder...,Mel...,joder...¿Porquéestodotandifícilcontigo?
—Vistoasí,parece...—Vistoasínoparece,Mel,¡esloquees!Esuntrabajoarriesgado,yyonoquieroeseriesgopara
mimujer.NoloquieroparatiySamitampoco,¿esquenoloentiendes?Loentendía.¡Claroqueloentendía!Pero,comonoqueríadarsubrazoatorcer,diounpasoatrásyreplicó:—Björn,lodehoyessólounaentrevistaenelconsulado.Unatomadecontacto.Incapazdemantenerseunsegundomás juntoaella,quenoqueríacomprender loquedecía,el
abogadosemetióensuvehículoy,antelacaradesorpresadeMel,arrancóysemarchó.Notenía
ganasdeseguirdiscutiendo.Conlabocaabiertaporquelahubieradejadoplantada,ellaloobservóalejarseatodogas.Cuando
loperdiódevista,sedisponíaapararun taxiyentoncesvioaLouise.Conunasonrisa, levantó lamano para saludarla, pero ella no le devolvió el saludo, sino que se metió directamente en suvehículoysemarchó.
Sorprendida,alfinalMelparóuntaxi.—Al Consulado General de Estados Unidos en Múnich, en Königinstraße, 5 —le indicó al
conductor.Mediahoradespués,cuandollegóypagólacarrera,sequedómirandoeledificio.Sinduda,no
era unamaravilla, pero era el consulado. En la entrada, entregó su pasaporte estadounidense y leindicaronadóndeteníaqueir.Conpaciencia,esperódurantediezminutoscuandodeprontounavozdijoasuderecha:
—MelaniaParker.Aloíraquellavoz,Melmiróyselevantósonriendo.—ComandanteLodwud—murmurósorprendida.Duranteunossegundos,ambossemiraronalosojos,hastaqueelhombre,reaccionando,cogió
unacarpetaqueletendíaunamuchachaquehabíatrasunmostrador.—Dígale a CheeseAdams que yo entrevistaré a la señorita Parker—indicó. Acto seguido, se
volvióhaciaMel—:Acompáñeme,porfavor.Sindudarlo,ellalosiguióhastasudespachoy,cuandolapuertasecerró,semiraronfijamentea
losojosysefundieronenunabrazo.Enotraépocasehabíannecesitadomutuamentey,aunqueaquelcariñohabríasidopococomprensibleparalosdemás,ellosloentendíanyserespetaban.
Cuandosesepararon,elcomandanteLodwudlamiróydijo:—Estáspreciosa.Sicabe,másbonitaquenunca,enespecialporquenotienesojeras.Ambosrieron,yacontinuaciónMelpreguntó:—¿Quéhacesaquí,James?Élleseñalóunasillay,unavezsehubosentadoéltambién,explicó:—Pedíeltrasladoalconsuladohacecercadeochomeses,¡despuésdecasarme!Acadainstantemássorprendida,Melsonrió,yél,cogiendounmarcodefotosquehabíasobrela
mesa,dijoconorgullo:—Miesposa,Franzesca.Asombrada,Melobservóelrostrosonrientedelamujery,unavezhuboencajadolaestupenda
noticia,miróasuantiguoamigoydeclaró:—Enhorabuena,James.Mealegrasaberquelosuperaste.Élasintió.—Cuando temarchasteyvique túhabíassidocapazdesuperar lodeMike, supequeyodebía
hacerlomismoenreferenciaaDaianay,alnotenerteatiparajugaraloquejugábamos,reconozcoquetodofuemuchomásfácil.
Melasintió.Inevitablemente,recordóentoncesaquellosinstantesenlosque,trasunamisión,ellaacudíaaldespachodelcomandantey,despuésdecerrarlapuertaconpestillo,sedesnudabaparaély,mientraslollamabaMikeyélaellaDaiana,disfrutabandeunjuegooscuroqueenciertomodono
losdejabairhaciadelante.Muchashabíansidolasmadrugadasenqueaquellosdoshabíanescogidoauntercero,hombreo
mujer, les daba igual, para continuar con sus calientes juegos. Infinidad de veces,Mel se sentabasobresuspiernas,setapabalosojosconunpañueloyleexigíaquelafollaradeformadespiadadamientraspensabaqueeraMikequienlohacía.Ésefuesujuego.Unjuegoquepocosconocieronperoqueellosdisfrutaronsinnecesidaddeimplicarsentimientos,tansólomorboyegoísmo.Conesolessobraba.
—Deverdad,James.¡Enhorabuena!—consiguiórepetir.Élsonrióy,trasdejarlafotodenuevosobrelamesa,mirósumanoypreguntó:—¿CómoestáSami?Melsacóunafotodesucartera.—Preciosaymayor—dijo—.¡Yporfinyapronuncialaerre!Elcomandantemirólafotoquelemostrabaysonrió.Lapequeñaestabaincreíblementemayory
bonita.—¿Ylosmuchachos?¿Vesaalgunodetusexcompañeros?—Sí.SiemprequepuedoyestánenMúnich,quedoconFraseryNeill,¿losrecuerdas?Elmilitarasintióymurmurósonriendo:—Neillsiemprememirabaconmalacara.Nuncalegusté.Noséporquémedaqueintuíaloque
túyyohacíamosenaqueldespachocuandoveníasaentregarmelosinformes.Melsonrió.Neillnuncalehabíadichonada.—Lodudo—contestó—.Melohabríadicho.Ambosasintieron,yacontinuaciónéllesoltó:—Nomedigasqueyanoestásconeseabogadoguaperasquetegustabatanto...—Sí.Síestoyconél—replicóella.—¿Yporquénotehascasado?—dijoélenseñándolesuanillodematrimonio.Aloíreso,Melseencogiódehombros.—Porqueesalgoqueaúnmequedaporhacer—respondió.Elcomandantesonrió.Laconocíamuybienysabíaqueaquellacontestaciónsignificabaqueno
queríahablardeltema.Asípues,abriólacarpetaquehabíacogidodelasecretaria,leechóunojoy,alverlacartaescritaporelpadredelajoven,preguntó:
—¿Quierestrabajarcomoescolta?AúnconfundidaporhabérseloencontradoallíyporladiscusiónquehabíatenidoconBjörn,Mel
respondió:—Meloestoyplanteando,James.Demomentoquieroinformarmedeltrabajoparavalorarsime
sientocapacitadaparaello.Jamesasintióycomenzóahablarledelosrequisitosnecesariosparaserescoltaenelconsulado.
Afortunadamente,Mellosreuníatodos.Entonces,élleentregóunpapelyprosiguió:—El salario base es éste. A esto has de añadir un plus de peligrosidad, transporte, vestuario,
viajes, etcétera.—Y,parándose paramirarla, preguntó—:Ese abogado con el que vives... ¿está deacuerdoconquetrabajesenesto?
Melsonrió.Sinlugaradudas,Jamescomenzabaahacersepreguntasenrelaciónconella.
—EseabogadosellamaBjörn,yno,noestádeacuerdoconquetrabajeenesto.El comandante asintió y, dejando los papeles sobre la mesa, se echó hacia atrás en su silla y
señaló:—Sifuerasmimujer,yotampocoestaríadeacuerdo.Ellalomiródivertida.—¿Enseriomeestásdiciendoloqueheoído?—musitó.—Totalmenteenserio—afirmóél.—¿Ydesdecuándoerestantradicionalymachista?Lodwudsoltóunarisotadaycontestó:—DesdequeFranzescameenamoró.Sitesoysincero,comohombreenamoradoquesoy,nome
gustaríaqueFranzescaestuvieradeviajecontinuamente,sirviendodecortafuegosdeotrapersona.YsieseabogadotequierelamitaddeloqueyoquieroaFranzesca,teaseguroquenolegustará.
—¡Hombres!—suspiróella.ElcomandantesonrióyMel,cogiendolospapelesqueélhabíaextendidoporlamesa,preguntó:—¿Paracuándonecesitáiscubrirlaplazadeescolta?—Parajulio.—Ellaasintióyentoncesélañadió—:Simedicesquesí,elpuestoestuyo.Eloficial
CheeseAdams y yo estamos entrevistando a los aspirantes, pero te aseguro que, si tú lo quieres,cerraremoslasentrevistas.
ElcorazóndeMelaleteóconfuerza.Aquellanuevaaventuralegustaba,laatraía.Sinembargo,decididaanodejarsellevarporlaefusividad,seguardólospapelesenelbolsoysepusoenpie.
—PrefieropensarlounpocomásyhablarconBjörn—dijo.Elmilitarselevantóyasintió.Luegolaabrazóymurmuró:—Decidasloquedecidas,llámame.MeencantarápresentarteaFranzesca.—Loharé—contestóellasonriendo.—DaunbesograndeaSami,saludosaBjörny,porsupuesto,aFraseryaNeill,¿deacuerdo?Encantadadehabervueltoaverasuviejoamigo,Melasintióy,trasdarleunúltimobesoenla
mejilla,abriólapuertaysemarchó.Teníaquepensar.
14
Duranteel restode lasemanavoy todas lasmañanasaMüller,y losniños,alverquememarcho,lloran.¡Quédifícilesdejarlosasí!
Ericobservaynodicenada.PeroloconozcoyséqueensuinteriorsemuereporreprocharmeelllantodelosniñosylosgritosdelpequeñoEriccuandodiceaquellode«¡Mamá,notevayas!».
Siemprequelooigo,semeparteelcorazón.Mipequeñínmequiereasuladoyyoquieroestarconél,perotambiénnecesitomipropioespacioomevolveréloca.
Flynsigueenfadadoconmigopero,adiferenciadelpequeñoEric,envezdepegarseamícuandoregresoacasa,sealejamásymás.Comoesmayor,ledoyespacio,yaselepasará.
Elmartes elegí el color de las paredes demi despacho. Gris claro. Con losmuebles oscurosquedabienyprofesional.
Enlaoficina,porlasmañanas,meempapodurantehorasdetodoloqueMikameentrega,yelviernes, cuando estoy enmi despacho sentada por primera vez, llega una preciosa planta con unanotitaquedice:
Yosélomuchoquevales.AhorademuéstralesaelloslomuchoquevaleJudithFlores.T.Q.y,comodicenuestracanción,«Tellevoenmimentedesesperadamente».[12]
Eric
Sonrío al leer lo que mi amor ha escrito y me pongo tontorrona. Cinco años de amor connuestrosaltibajos,perocincoañosquevolveríaarepetirconlosojoscerrados.
AlrecordarnuestracanciónmicorazónsaltadealegríamientrassoyconscientedequeEricestácumpliendoloquemeprometió.Nohavueltoamolestarmeniaespiarmeenlaoficina.
Unavezelijositioparalabonitaplanta,estoycontentay,trascogermimóvil,escribo:
Graciasporlapreciosaplanta;¿comesconmigo?Invitoyo.
Dossegundosdespués,suenamiteléfono.
Teesperoenelparkingdentrodedoshoras.
Sonrío.Meagradasaberquenolohadudado.Dejoelmóvilsobrelamesaycomienzoamirar
unosdocumentosmientrastarareoencantadanuestrabonitacanción.Una vez termino el último papel, mis ojos se posan de nuevo en el teléfono de la mesa.
Descuelgo,marcoy,cuandooigounavoz,digo:—Hola,papá.—Morenita...,quéalegríahablarcontigo,cariño.Mipadre,comosiempretancariñoso.Quégustohablarconél.Duranteunbuenratocharlamos
detodounpoco,hastaquedice:—Porcierto,elotrodíavialescandalosodetuamigoSebasymecontóquesemarchabaahacer
unviajeporAlemania.Mepidióquetedijeraque,sipasabaporMúnich,tellamaríaparaverte.Pensarenellomehacefeliz.Sebasesundivertidoamigoconelquenopuedoparardereír,a
pesar deque aEric lo saquede sus casillas por lomuchoquevacila y lo piropea.Comodicemipadre,esescandalosoamásnopoder.
—OjalápaseporMúnich—digo—.Serágenialverlo.—Aver,morenita,¿alfinalvenísesteañoalaferia?Oír eso me subleva, ya que sigo sin convencer a Eric para que me acompañe. Finalmente
respondo:—Nolosé,papá.—Y,paraculpabilizarmeamíynoaltontodemimarido,añado—:Recuerda
quehecomenzadoatrabajar,yahorapedirunosdíasescomplicado.—Pero,morenita,tumaridoeseldueñodelaempresa.¿Porquévaasercomplicado?Lasagacidaddemipadremehacesonreír.—Papá...—respondo—,noquieroquelagenteveaquetengotratodefavorycomiencenadecir
tonterías. Por favor..., por favor, entiéndelo. Te prometo que si puedo iremos todos y, si no, lodejamosparaelañoqueviene.
Durantevariosminutos,mipadreprotestaconelegancia.SiemprelehagustadoquemihermanayyoestemosenlaFeriadeJerezconél.Yoloescuchosindecirnada.
—¿SabesquetuhermanasevaaMéxico?—diceentonces.—Sí—contesto—.Yotambién.EselbautizodeloshijosdeDexteryGraciela.RecuerdaqueJuan
AlbertoeselprimodeDexter.—Sí, hija, eso lo sé. Pero, al parecer, Juan Alberto tiene negocios que atender y quiere
aprovechareseviajeparaello.Se iránunasemanaantesconLucíayJuanito.—Luego,bajando lavoz,murmura—:Esosí,Luznova.Esmás,latengoaquí.Alparecer,tuhermanayellahandiscutido.
Nomesorprendeparanadaoíreso.CadavezqueLuzymihermanadiscuten,laniñasevaconmipadre.Pobrecito,laquelehacaídoconlasmujeresdelafamilia.
—Mira,morenita—añadeentonces—,sialgoheaprendidocontodasvosotrasesanopreguntar.Tu hermana simplemente dijo que la niña se quedaba conmigo, yLuz y ella casi no se hablan.Y,como hombre juicioso que soy, esperaré pacientemente a que alguname cuente lo ocurrido. Porcierto,Luzestáaquí;¿quiereshablarconella?
Loquehadichomehace sonreír.Andaquenoes listomipadrey, acomodándomeen la silla,respondo:
—Sí,papá.Dilequeseponga.Durante unos segundos oigo la voz demi padre, que llama ami sobrina. Su voz, esa ronca y
dulcevozsuya,quemeencanta.—Hola,tita—oigoentoncesquediceLuz.
—Hola,cariño.¿Quétal?—¡Super...superguay!Porcierto,dilealpuñeteroJackieChanZimmermanque...—¡Luz!—¿Quépaaasa?—Pero¿porquélollamasasí?Lajodíasueltaunarisotada.Siesqueesparamatarla...—Tita...—cuchichea—,essunuevonick,¿nolosabías?No,nolosabía.Siemprehaodiadoquelorelacionenconunchino.Lereprocho:—Mira,Luz,yasabesqueaéllejorobaque...—Pero,oye,tita...Aversiahoravasasercomomimadre,quesequedóenelsiglopasado.—Pero¿dequéhablas?Oigoresoplaramisobrina.Melaimaginomirandoaltechocomohagoyocuandopregunta:—¿AcasonohasvistocómosellamaensunuevoperfildeFacebook?Lopienso..., claroque lo sé.En superfil se llamaFlynZimmerman,por loquemesorprendo
cuandoLuzdice:—EnsunuevoperfilsellamaJackieChanZimmerman,peronodigasnadasiélnotelohadicho
omebloqueará.—¡¿Qué?!Luzseparte.Laoigoreírcomounaposesamientrasmecuentalodivertidoyocurrentequeesel
nuevoFlynporFacebook.Esomesorprende,yaqueencasatienesiempreunacaradeamargadoqueparecequehayamordidounlimón.
Charloconmisobrinaduranteunbuenrato,mehabladesusamigasChariylaTorrija,hastaque,intentandocambiardetema,lepregunto:
—¿Quéhaocurridoparaquenotehablescontumadre?—Nada.—Elquenadanoseahoga,Luz—replico,einsisto—:Desembucha¡ya!Oigosuresoplido.Éstaesderesoplidoscomoyo.—Tita...—dicefinalmente—,mimadre,queesunaagonías.—¡Luz!—Telodigoenserio.—Yyotedigoenserioquenomegustaquehablesasídetumadre.Esmihermanaylaquiero,
¿entendido?—Ay,tita,yotambiénlaquiero,peroesqueavecesparecequehayanacidoenelsiglopasado.
¡Cómopuedesertanagonías!Asiento.Laniñanomeve,yentiendoloquedice,puesamítambiénmelopareceenocasiones,
peronolevoyadarlarazón,¡sólolefaltabaeso!Meimaginoamipadreconlaorejapuesta,asíqueinsisto:
—Noteandesconrodeosycuéntame.Yaséquetumadreenciertascosasesunpoco...—¡¿Un poco?!—gruñe ella—. Por favor, tita, que tengo catorce años y todavía se empeña en
ponermehorquillitasdeDoralaExploradoraenelpelo,calcetinesconpuntillitasyenirabuscarmealinstituto.
Merío.Nolopuedoremediar.RaquelesmuchaRaquel,ymásconsusniñas.—¿Y?—pregunto.—Puesquemevinoabuscarelotrodía,llegóantesdelahoray,bueno...,yo...yoestabacon...con
minovioy...Bueno...,bueno...,bueno...¡¿Otraconnovio?!Medoyaireconlamano.SimihermanavioloqueyovihaceunosdíasconFlyn,entiendoquese
escandalizara.Perocomonoquieroparecerdelsiglopasadocomoella,pregunto:—¿Tienesnovio,Luz?—Sí.SellamaHéctor,y¡estáparacomérteloynodejarniloshuesecitos!—¡Luz!—Tita,nomeseastútambiénantigua.Sóloteestoydiciendolaverdad.Héctortieneuncuerpode
escándaloyunculoooduroooincreíbleee.—¡Pero,Luz!—Yantesdeque sigasprotestando—añade lamuydescarada—,nopiensodejarlopormucho
queosempeñéistodos.Uisss,¡quemeda...!¿Desde cuándomi sobrina ha dejado de ver a niños para ver tíos buenísimos con cuerpos de
escándaloyculosdurosincreíbles?Meacaloro.Melevantodelasilla.Sinduda,lashormonasdeLuzyFlynestánenplenaebullición.Alfinal,consigoretenertodolo
quesemepasaporlacabezaydigo:—Escucha,Luz,debesentenderquetumadre...—LoqueentiendoesqueHéctormetienelocaymegustamucho.¿Quelatieneloca?¿Hadichoquelatieneloca?Vayatela...,vayatela...—¡Luz!—Sólodigoloquesiento,noteenfadesporello,mujer.Suvozyanoesladeunadulceypícaraniña.Suvozsehavueltoautoritariayesomemolesta,
porloquerespondo:—Mira,Luz,amínomehablesasío...—Adiós,tita.Y,sinmás,medejacolgadaalotroladodelteléfonoconcaradetonta.—Morenita,¿siguesahí?—oigoentoncesquedicemipadre.—Sí,papá—gruño—.Yalepuedesdeciraesasinvergüenzaque,cuandolavea,sevaaenterarde
loquevaleunpeine.¡Puesnovalaniñataymedejacolgadaalteléfono!Depronto,mipadreseríe.—Tranquila,hija.Sonetapas.¿Yanoteacuerdasdecuandotúteníassuedad?Resoplo.Claroquemeacuerdo,yporesonoquieroqueellacometaloserroresqueyocometí.—Peroella...—Judith,cariño,Luzestácreciendo,yestoessóloelcomienzodesucambioalamadurez.Vale. Entiendo eso, como estoy segura de que lo entiende mi hermana, pero ella y Flyn son
nuestrosniños.—Pero,papá—insisto—,¡quetienenovio!—¿Cuántosnovietestuvisteistúytuhermana?—Papá...—Sonrío.—¿Cuántasvecesmeheenfadadoyoporeso?—Uf...,demasiadas.—Yverdaderamente,hijamía,¿sirvierondealgomisenfados?Entiendoloquequieredecir.—Ensumomento—prosigue—,vosotrashicisteis loquequisisteis,nosgustaraonoavuestra
madreyamí,yahorahayqueestarmuypendientedequeLuznohagaexcesivamenteeltonto.Pero,hija, tienequeequivocarse,decepcionarseysufrirparaaprenderavivir.Asíes lavida,morenita...,asíeslavida.
Sinlugaradudas,misabiopadretienetodalarazóndelmundo.Cuando yo tenía la edad de Luz, me creía la más lista del mundomundial, y cuanto más me
prohibíanalgo,máslohacía.Alfinal,conscientedequepocopuedehacerseanteeso,afirmo:—Tienesrazón,papá.Comosiempre,tienesrazón.—Tranquila,hija.Laadolescenciaesunmomentodifícilenlavidadetodapersona,perosiyohe
superadolatuyayladetuhermana,sindudaRaquelsuperaráladeLuz.—¿YsitedigoqueFlynestáigual?Larisotadademipadrevuelveasonar.—TúyErictambiénlosuperaréis—dice—.Oslopuedoasegurar.Ahoralaquemeríosoyyo.Sinduda,mipadretuvoquelucharmuchoconnosotras.Acontinuación,miroelrelojydigo:—Papá,tengoqueirme,perotellamarémañanaparavercómovatodo.—Deacuerdo,cariño.Besosparati,paralosniñosyparaEricy,porfavor,hacedunesfuercitoy
¡venidalaferia!Unavezcuelgo,resoplo.JoderconlodeJerez,yvayatela...,vayatela...laquenoshacaídoami
hermanayamíconlosjodidosadolescentesysushormonasrevolucionadas.Sinperderunsegundomás,cojomibolso,salgodeldespacho,medespidodeMikaydeTania,la
secretaria,ycojoelascensorparairalparking.MientrasbajopiensoenmisobrinaLuzyenFlyn.Vayados.Pensarenlamalaépocaqueestánpasandometensayhacequemepiqueelcuello.Me
rascoinconscientementemientraspiensoenelmundocomplicadoenelqueestánsumergidosacausadesuedad,yvuelvoaresoplar.
Cuando llego a la plantamenos uno y las puertas del ascensor se abren, veo el coche deEricaparcadoalfondoyobservoqueestádentro.Conpasoseguro,llegohastaelvehículo,abrolapuertay,cuandomesiento,pregunta:
—¿Quéteocurre?Joder,¡québienmeconoce!—Jud—insiste—,tucuellomedicequeocurrealgo.¿Quées?Rápidamente bajo el parasol paramirarme en el espejito y, cuandomeveo los ronchones,me
cagoentó;¡joderconlosronchones!—Luztienenovio—lesuelto—.Dicequeestábuenísimo,quetieneuncuerpodeescándaloyun
increíbleculoduro,¿telopuedescreer?Ericmemira,veoqueselecurvanlascomisurasdeloslabiosy,antesdequepuedaresponder,
digo:—Niseteocurrareírteolavamosatener.—Cariño...Levantodenuevoelparasoly,sinquerercontarlelodeJackieChanZimmerman,insisto:—Noquierohablardeello.Vamos,¿dóndequieresqueteinviteacomer?Miamorpasealasmanospormicabello,sueltamimoñoy,mirándome,pregunta:—¿Enseriomeinvitasacomer?—Sí.—¿Aloquequiera?—Puessí.—Sonrío.Mialemánasientey,acercándoseunpocomásamí,murmura:—¿Aunqueseaunsitioterriblementecaroyconracionesdeesastanpequeñasquetedejancon
hambre?Esomehacesonreír.SialgolegustaaEricsonlosbuenosrestaurantes,yasiento.—Porsupuesto,¡donselecto!Élsonríeentoncestambiénymedaunrápidobesoenloslabios.—Vámonos de aquí antes de que te desnude en el parking de la empresa y pierda toda mi
reputación—diceapresurándoseasoltarme.SonríodivertidacuandooigolavozdelasolistadeSilbermond,quecantaJa.[13]Media hora después, Eric y yo caminamos por un parque en busca de un banco en el que
sentarnos para comer. Mi marido pone los ojos en blanco al saber la posibilidad de que SebasaparezcaenMúnich,yyometroncho.
Paradarmeunasorpresade lasquemegustan,ErichaparadoenunMcAutoy,entre risas,hapedidounashamburguesas,coca-colaypatatas.
Comodicemihermana,¡melocomocontomate!Cuando nos sentamos a una mesita del parque, abrimos las bolsas donde llevamos las
hamburguesasy,metiéndomeunapatataenlaboca,dice:—Meencantanestasincreíblescomidasasolascontigo,corazón.Adoroquemellamecorazón,yéllosabe.Lodicedeunamanera,consuacento,que,uf...,¡me
vuelveloca!Sonrío.Mialemánmeacabademeterotrogolazoconesebonitodetalley,tragándomelapatata,
sonríoymurmuro:—Asínuncavoyaadelgazar,perotequiero.Eric sonríe encantado, de nuevome hace ver cuántome quiere conmis kilos demás y, entre
mimos y carantoñas,me zampo una hamburguesa con queso y patatas fritas queme deja plena ytotalmentesatisfecha.
DespuésdeunaestupendacomidadondemiamoryyohablamosdeFlyn—omitodenuevolode
Jackie Chan Zimmerman— y de Luz e intentamos recordar nuestra adolescencia y entenderlos,quedamosenqueeldiálogoesesencialenesosmomentos,yEricestáconmigoenquenopodemosperderesacomunicaciónconnuestrohijo.
Cuandoestamosdeacuerdoentodoloreferenteanuestroadolescentecabroncete,regresamosacasa.
TrassaludaraSustoyaCalamarque,comosiempre,sedeshacenencariñoshacianosotros,nadamásentrarencasaoímoslloraraHannah.YomiroaEric,élmemiraamíysonreímos.Sinduda,cuandocrezcanolatendremosencasallorandosiemprequeregresemosdetrabajar,oesoespero,y,comodosamantespadres,vamosaconsolarla.
15
—Hedichoquenoquierohablardeello.MelsedesesperóaloírlacontestacióndeBjörn.Desdequehabíaregresadodelconsulado,habíaintentadodialogarconélmilvecesacercadelo
que había hablado con el comandante Lodwud, pero él no la había dejado y se había cerrado enbanda.Sinembargo,dispuestaaqueloescuchara,insistió:
—Luego dices que la cabezota soy yo, pero ¡joder! Quiero decirte que vi a Lodwud en elconsuladoy...
—Nomehablesdeesetipo,porfavor—siseóBjörnfurioso.Recordar las cosas queMel le había comentado que practicaba con él no le hacía ni pizca de
gracia.—Pero,vamosaver—dijoellaentonces—,¿desdecuándonopodemoshablartúyyo?—Desdequehablasdealgoquenomeinteresay,siencimaapareceelnombredeesetipo,ya...—Björn...,pero¿quéestásdiciendo?Lodwudespasado,comootrasmujeressonpasadoparati.—Mira,Mel...,déjalo.Enfadadaporsucabezonería,ellalomiróeinsistió:—Deverdad,¿tandifícilesescucharloquetengoquecontarte?Björn,quesearreglabalacorbatamirándosealespejo,asintió.—Noesunacuestióndequeseafácilodifícil,simplementeesquenoquieroescucharte.Noestoy
deacuerdoconesemaldito trabajoyno lovoyaestar.Ahorabien, siquieresponer fechapara laboda,estaréencantadodemarcaresedíaenmiagenda.
MelresoplóyBjörn,alverelgestotoscodeella,sentenció:—Vale. No hablaremos de fechas ni de bodas, y ahora, como sueles hacer siempremuy bien
solita,decideloquequiereshacer,peroluegonotequejes.—¿Quenomequejedequé?Elabogadocerrólosojos.Enocasiones,Melerapeorqueunmalsueño.—Dequelascosaspuedandejardeirbienentretúyyo—siseómirándolafijamente.—Pero¿dequéhablas?—Mira,Mel,¡yabasta!Esarespuestaeraloúltimoqueellaqueríaescuchar.Nunca,entodoeltiempoquellevabanjuntos,lehabíahabladodeesemodoy,cuandosedisponía
areplicar,SamientrócorriendoyseechóenbrazosdeBjörn.—Papi,¿mellevasalcole?Björn,alqueseleencogíadeamorelcorazóncadavezquelaniñalollamaba«papi»,sonrióy,
dulcificandosuvoz,dijotrasdarleunbeso:
—Hoynopuedo,princesa.Mamátellevará.—Puestetocabaatihoy—gruñóMel.Éllamiróyreplicó:—Puesnopuedo.La cría losmiró a uno y a otro. Pocas veces los veía en aquella actitud.Luego, observando a
Björn,preguntó:—Papi,¿estásenfadado?Elabogadosonrióybesóelcuellodelapequeña.—¿Yporquéibaaestarenfadado?—dijo.Samimiróentoncesasumadre,quelesonreía,yrespondió:—Porqueestásdiscutiendoconmamá;¿yanolaquieres?—Sami...—murmuróMel.Al ver el rostro de lamujer a la que amaba, Björn se acercó a ella con la niña en brazos y,
abrazándolaconsumanolibre,dijo:—Amamálaquieroconlocuratantocomotequieroatiy,aunquediscutamos,miamor,nodejo
dequererla;¿entendido,renacuajo?Lapequeñaasintióy,trasverjuntosasuspadrescomoellaquería,sebajódelosbrazosdeély
corrióhaciasuhabitaciónaltiempoquegritaba:—¡Entoncesdaosunbesomientrasyovoyaporladiadema!Una vez desapareció la niña, Björn yMel, que estaban el uno al lado de la otra, se miraron.
Teníanmilcosasquedecirseyreprocharse,peroél,cansadodelmalestarocasionado,laabrazó,laacercóasucuerpoysusurró:
—Sientohabertehabladoasí.—Yotambiénlosiento—afirmóMel.Conscientedequeningunodelosdosqueríaestarmal,Björnclaudicóy,sinsoltaralamorena
quelovolvíaloco,murmuróconmimo:—Samiquierequetedéunbesoyyotambiénquierodártelo;¿túquieresrecibirlo?Melsonrióy,trasponersedepuntillas,acercóloslabiosalosdeaquelhombre,alquequeríacon
todosuser,ylobesó.Elbesosefueintensificandosegundoasegundo,losúltimosdíashabíanestadomuyfríoselunoconelotroy,cuandopararonparatomaraire,Björnmurmuró:
—Anda,veteallevaralaniñaalcolegioo,alfinal,voyairaladespensa,voyacogerelbotedeNutellaytevoyaembadurnarentera,paraluegochuparte,comerteyfollartecomomegusta.
—Quétentador.¿Puedohaceryolomismo?—dijoellariendo.Björnlamiródeaquellamaneraqueaellalavolvíalocay,bajandolavoz,musitó:—Siteportasbien,estanochelopondremosenpráctica.Conunasonrisamásluminosaqueladelosúltimosdías,Melafirmó:—Prometoserunabuenachica.Unavezlaniñaysumadresalierondelacasa,Björnfuedemejorhumorasudespacho.Allílo
esperabalaprimeravisitadelamañana,quenoeranotrosquelosabogadosHeineyDujson,juntoconotroscolegasdesubufete.
Mel condujo hasta el colegio de Sami mientras reía con la pequeña. Reír con ella y con sus
ocurrenciaseraalgomaravillosoydivertido.Unavezaparcó,caminódelamanodesuniñahastalaentrada.Allí,comocadamañana,estuvocharlandoconalgunasdelasmadresdeotrosniñosduranteunosminutosy,cuandocaminabaderegresohaciasucoche,oyóquesonabasuteléfono.UnmensajedeBjörn.
Recuerda.Pórtatebien.
Estabamirandoelmensajecuandooyóunavozque la llamaba.Alvolverseseencontrócon la
mujerdeGilbertHeine,Louiseyotrasdosmujeresalgomásjóvenes.¿Quéhacíanaquéllasallí?Comonopodíasalircorriendooquedaríamuymal,seacercóaellasylamásmayordijo:—Hola,querida,soyHeidi,lamujerdeGilbertHeine;¿merecuerdas?Melasintió,prefabricóunasonrisayrespondiótrasintercambiarunarápidamiradaconLouise:—Porsupuesto,claroquesí.Heidi se acercó entonces a ella y, tras darle dosbesosde lomás falsos, la agarródel brazoy
murmuró:—Mimarido,Gilbert,estáconBjörn.ÉlnosdijoqueveníasadejaraSamanthayhemosdecidido
esperarte.Venga...,vayamosadesayunar.Mellasmiró.¿QueBjörnleshabíadichoquepodíanencontrarlaallí?Loibaamatarcuandoloviera.¿Poresoelmensajeconaquellodequeseportarabien?Confusa,ibaamoversecuandounadelasmujeresmásjóvenesafirmó:—Nuestros espososy tu futuromaridoestán eneste instante enuna reuniónyhemosvenidoa
raptarteparallevarteconnosotrasypasarunamañanaincreíblemientrasnosconocemosunpoquitomás.
AMelselepusieronlospeloscomoescarpias.¡Nilocaseiríaconellas!—Losiento—comenzóadecir—,peroyo...—Ah, no, querida—insistióHeidi—.No sé qué tendrás que hacer pero, sea lo que sea, queda
anuladoporquetevienesconnosotras.Louisesonreíaensilencioal ladodeaquélla.Mellamiró.Teníadosopciones:acompañarlaso
huir.MaldijoaBjörnporaquellaencerronapero, comonodeseabaocasionarleproblemas,cedió.Teníaqueir.
Alprimersitioadondefueronfueaunacafeteríadelcentro.Allílasesperabanotrasdosmujeresy,duranteunahora,todasdesayunaronentrecuchicheosyhabladurías.
MellasescuchabamientrasobservabaaLouiseparticipardelaquelarrecomosifueraunamás.Aquellamodosita era tan bruja como las demás, y entonces pensó alucinada: «¿Dónde está la
Louisecandorosaqueconocíadelcolegio?».Unavezacabaroneldesayuno,se fueronalspamás famosoycarodeMúnich.Alentrarenel
glamurosoestablecimiento,unajovencitalespidióloscarnetsdesociasy,encuantollegóaMel,trasungestodeHeidi,quedóclaroqueellaentrabatambiénallísíosí.
Durante más de tres horas estuvieron en el increíble spa, donde Mel hizo un circuito termal
acompañadadeaquellasarpías,ysoportósusmiradasfurtivasdesorpresacuandovieroneltatuajequellevaba.
Cuandopartedelasmujeressemovieronaotrasala,HeidiagarróaMeldelbrazo.—Querida—ledijo—,queríahablartedeLouiseydesumaridoJohan.Elcasoesquehallegado
amisoídosalgoqueambascomentasteishacepocoy...—Heidi—lacortóMel—.LoqueyocomentoconLouiseesalgodeellaymío.Denadiemás.Lamujerapretólaboca.Sinduda,elcortequelehabíadadonolegustó,ycontraatacó:—Vale. No hablaremos de ellos, pero permíteme recomendarte una estupenda clínica donde
podríanquitarteconláseresoquetienesenelcuerpo.Mellamiróboquiabierta.—¿Terefieresamitatuaje?—preguntó.Lamujerasintió,yella,conteniendolasganasquetenía
demandarlaapaseo,replicó—:Gracias,perono.Mitatuajeespartedemípormuchosmotivosquenovienenacuento.
Unavezdijoesto,alcanzaronalasdemásmujeres.Apesardequeeranunapandilladecargantesyfastidiosasarpíasquenohacíanmásquesacarladesuscasillas,Melestabadecididaadisfrutardelmaravillosospa.
Después del circuito termal, se empeñaron en pasar por la peluquería para que se hiciera unpeinado diferente del que llevaba: su pelo despeinado era demasiado transgresor ymoderno paraaquellas finolis.Finalmente,Melclaudicó,porBjörnypornoquerersoltarlesunnuevoborderío,mientrasseacordabadetodoslosantepasadosdesuguaponovio.
Cuando terminaron en la peluquería, Mel se miró al espejo. Parecía que una vaca le hubieralamidolacabeza.Sinduda,aquéllanoeraella,yteníaqueescapardeallícomofuera.Mirósureloj,le sonaban las tripasdehambre.Era lahoradecomer,yHeidi, aldarsecuenta, seacercóaellaymurmuró:
—Nohayprisa,querida,Björnsabequeestásconnosotrasyestáfelizdequeasísea.Esmás,hehabladoconélhaceunratoymehadichoquenotepreocupesporSamantha,tuhija.Élseencargadequevuestraniñeralarecojayestéconellahastaqueregresesacasa.
Mel laescuchó incrédula. ¿AhoraBeaera suniñera?¿YSamieraSamanthaparaBjörn?Pero,comonoqueríadecirnadaqueestuvierafueradelugar,asintióydijoconlamejordesussonrisas:
—Deacuerdo.Heidiyelrestodelassoporíferasmujeressonrieron.—¿QuéosparecesivamosacomeraO’Brian?—propusounadeellas.Las demás asintieron.Mel no sabía dónde estaba aquel lugar y, una vez se lo explicaron, dijo
mirándolas:—Disculpadme,perotengoqueiralbaño.Unavezpudoquitarse a aquéllasde encima, entró enel lavabo, sacóde sualbornozblancoel
teléfonomóvily,trasmarcarelteléfonodeBjörn,siseóenvozbaja:—Éstamelapagas.Björn,queestabaconlosmaridosdelasarpíasenunclubexclusivamenteparahombres,seretiró
unpocodelgrupoparaquenolooyeranyrespondió:—Escucha,cariño,sitelohubieradicho,nohabríasqueridoir.
—Pero¿eresimbéciloqué?—siseóella—.¿Cómoseteocurrehacermeunaencerronaasí?—Mel...—¡NiMelnileches!—gruñómirándosealespejo—.Tejuroqueestoyapuntodeestrangularlas
atodascomounasolamásmedigaquemipeinadoesdemasiadomasculinoymimaneradevestirtambién.Pero,¡joder!,sihemostenidoquepasarporunapuñeterapeluqueríaynoparezconiyo.
Björn sonrió al oírla y,mirando a los hombres quehablaban conuna copade bourbon en lasmanos,respondió:
—Cariño,estaráspreciosayseguroquenoseráparatanto,peroahoratengoquedejarte.¡Pórtatebien!
Enfadada,Mel cortó la comunicación. Respiró hasta que consiguió serenarse y luego llamó aJudith.Lanecesitaba.
Suamiga,queacababadellegaracasatraspasarlamañanaenMüller,alverelnombredeMelenlapantalladesuiPhone6,saludó:
—Buenasssssssssssssssss.—Judith,escúchame,necesitotuayuda.Asombrada,Judpreguntó:—¿Quépasa?RápidamenteMellecontóloocurridoy,trassaberadóndeibanairacomer,suamigadijo:—Notepreocupes.¿Aquéhoraquieresqueestéallí?—Cuantoantes,mejor,ojuroquelasmataré.—Tranquila,quevoyarescatarte—dijoJudithriendo.—Notardes,porfavor,ycuandomeveas,teloruego,¡sétú!Judithsonrió.LosentíaporBjörn,peroaquellascacatúasibanasaberquiéneraella.Una vezMel salió del baño con la mejor de sus sonrisas, llegó a donde estaban las mujeres
vistiéndosecondecoroy,trasponersesutangarojo,quetodasmiraronhorrorizadas,susvaquerosysucamiseta,cuandofueaponerselacazadoradecuero,lainsoportableHeidicuchicheó:
—Siquieres, el díaque tevengabien,Melania, podemosquedardenuevocontigoy enseñartetiendasexclusivasderopadondepuedesencontrarmodelosincreíblementemaravillosos.
El estómago de Mel se revolvió. Lo último que quería era parecerse a aquellas lánguidasvistiendoy,conmenospacienciadelaquehabíatenidohorasantes,replicó:
—Teloagradezco,Heidi,peromegustalaropaquellevo.—Querida, no debes olvidar que, si Björn finalmente pasa a ser uno de los asociados
mayoritarios como lo es mi marido, habrán de cambiar ciertas cosas en ti, y no hablo sólo delhorribletatuajedetuespalda.
Mel apretó los dientes, pero le resultó imposible contenerse durante un segundomás, así quesoltódelantedetodasellas:
—Heidi,creoquehasolvidadoquequienquizátrabajeenelbufeteseráBjörn,ynoyo.Portanto,permítemedecirtequeaquiennolegustemitatuajequenolomire,porqueahísevaaquedar.
Sucomentarionolecayóbienala«estupenda»Heidi,perodisimuló.Siestabaallíeraporquesumaridoasíselohabíapedidoy,cogiendosucarobolso,dijo:
—Venga,vayamostodasacomeraO’Brien.
Una vez allí, el maître, al ver a Heidi, les indicó que esperaran unos minutos. Les estabanpreparandounadesusmaravillosasmesas.Nerviosa trasmirarsureloj,Mel resopló.Sisemetíandentro del local, Judith lo tendríamás complicadopara encontrarla, por lo que, apoyándose en lapared,sehizolaremolonacuandodeprontoelsonidoestridentedeunamotollamólaatencióndetodas.
Al mirar, Mel sonrió al reconocer la moto de Eric, una impresionante BMW negra y grismetalizadoqueenocasionesutilizabaJudith.
Lasmujeresmiraronhacialacalleyobservaroncómoelmotoristaparabalamotofrenteaellasy se bajaba. Sin embargo, se quedaron boquiabiertas cuando, al quitarse el casco, vieron que setratabadeunamujer,quecaminabaensudirecciónydecía:
—Hombre,Mel...Conel cieloabiertopor suaparición, laaludida sonrióy,mirándola,dijomientras sehacía la
encontradiza:—Hola,Jud,¿quéhacesporaquí?—Pasaba,tehevistoyhedecididoparar.—Yentonces,conguasa,añadió—:¿Quétehapasado
enelpelo?Melresoplóy,antelacaradeburladesuamiga,contestó:—Peluquería...,¿quétalestoy?Conteniendolasganasdereír,Judafirmó:—Noestuestilo,reina.AhoralaquesonriófueMely,volviéndosehacialasmujeres,quelasobservaban,dijo:—Chicas, os presento ami amiga Judith. Jud, ellas son lasmujeres delmaravilloso bufete de
abogadosalqueBjörnquiereacceder.Acostumbradaacodearseporeltrabajodesumaridoconmujerescomoaquéllas,Judlasmiró
unaaunayrespondió:—Encantadadeconocerlas,señoras.Las demás asintieron pero no abrieron la boca. Sorprendida por lo maleducadas que estaban
siendo,yparadarlesunbuengolpedeefecto,MeldijoalverlacaradeguasadeLouise:—JuditheslamujerdeEricZimmerman,elpropietariodelaempresaMüller.¿Sabéisdeloque
hablo?Depronto,Heidireaccionóy,acercándoseaella,dijo:—Oh,querida,quéplacerconocerte.Claroqueséquiénes tumarido.—Y,mirándolacomosi
fueraunbichoraro,preguntó—:¿Teapetececomerconnosotras?MelyJudithsemiraron.Estabaclaroque,siJudnohubierasidolamujerdeZimmerman,nola
habríainvitadoy,conelcascodelamotoaúnenlamano,negóconlacabezayrepuso:—Muchasgracias por la invitación, pero justohabíaquedado conunos amigospara tomarnos
unasbirrasyquemarrueda.—Luego,clavandolavistaenMel,preguntódivertida—:¿Tevienes?Sindudarloniunsegundo,Melasintióy,mirandoalasmujeres,quelaobservabanconunosojos
comoplatos,dijoconunacálidasonrisa:—Esperoquemedisculpéis.Muchasgraciasporlamañanaquehemospasadojuntas,peroahora
memueroporunasbirrasbienfresquitas.
Lacaradeaquéllasporeldesplanteeramásqueevidente.CuandoJudithabrióelbaúltraserodelamotoyleentregóaMelotrocasco,oyeronunavozquedecía:
—Estropearástupeinado,Melania.Laaludidasonrióy,mirandoaLouise,quedisimulabaunasonrisa,respondió:—Noimporta.Luego,antelacaradesorpresadelasdemás,MelyJudithmontaronenlamotoysemarcharon
quemandorueda.Unratodespués,cuandopararonfrentealrestaurantedeKlaus,Melsequitóelcasco,miróasu
amigaylaabrazó.—Graciasporvenirysalvarme—dijo.Judithsonrióy,tocándoleelpelo,respondió:—Sinduda,esaspedorrasnosonunabuenainfluenciaparati.Diezminutosmástarde,despuésdequeMelsequedaraagustodespotricandodeaquellasbrujas,
entraronenelrestauranteyKlaus,alverla,preguntó:—Pero,muchacha,¿quétehaocurridoenlacabeza?JudithsoltóunacarcajadayMelrespondiódirigiéndosealbaño:—Nadaquenosolucioneencincominutos.Dicho esto, entró en el baño,metió la cabezabajo el grifoy, cuando saliódenuevo, Judith la
observódivertida.—Éstasí—dijoalversudespeinadoydivertidopelo—.Éstaerestú.
Esa tarde, cuandoMel llegó a su casa,Sami corrió a abrazarla.Pasó la tarde con ella y, en elmomentoenquelaacostóyllegóBjörn,lomiróy,señalándoloconeldedo,siseó:
—Nuncamásvuelvasahacermeunaencerronacomoladehoy,¿entendido?Elabogadosonrióy,cuandofueaabrazarla,ellalehizounquiebro.—Ah,no, JamesBond...—gruñó—.Estanoche,ni se teocurra rozarmeo te juroque tevoya
meterelbotedeNutellaporunsitioquenotevaagustar.Meldesapareció,yBjörnmaldijo.Estabaclaroquehabíametidolapatahastaelfondo.
16
Elviernes,Norbertaparecepuntualenlacasaalascincodelatarde.VaallevaraFlynalcumpleañosdeElke.
Eneseinstante,suenamiteléfonoyveoelnombrede¡Sebas!Meapresuroacogerloyoigo:—¡Marichochooooooooooooo!MicarcajadallamalaatencióndeEric,quememiray,cuandoledigoporseñasquiénes,¡huye
despavorido!—Sebas,quéalegríahablarcontigo.Justoelotrodíamedijomipadrequequizánospodríamos
verporqueestásdeviajeporAlemania.¿Quéhacesaquí?Oigojaleodefondoyvocesquecantan,ySebasresponde:—Estoyenuntourdivertidísimocontreintayseislocasenbuscadegeypermanes.Merío.SebassiemprellamaGeypermanaEric.—MañanaporlatardepasamosporMúnich—añademiamigo—.¿Podríamosvernosunparde
horitas?Diquesí...,diquesí,chiquilla,quetengoganasdeverteycontartemilcosas.Pienso.Sé que al día siguiente vamos a casa deMel y deBjörnpero, dispuesta a ver aSebas,
afirmo:—Porsupuestoquesí,envíameunmensajeynosvemos.Dosminutosdespués,cuelgofeliz.VeraSebassiempreesmotivodefelicidad.Conmiteléfonoenlamano,caminohastaelsalón,dondeEricestáleyendo.Mesientoasulado,
lecuentolodeSebas,yentoncesélmemiraypregunta:—¿Treintayseis?—Conél,treintaysiete—contestoriéndome.Ericasienteypreguntadivertido:—¿YquieresqueBjörnyyoestemosallí?Ahoralaquecalibraesosoyyo.ConozcoaSebasperonoconozcoalosotrostreintayseisy,
comoseantanescandalososcomomiamigo,sindudaEricyBjörnnosalendeallívivos.Asípues,digo:
—Casimejorqueosquedéisencasaesperándonoshastaquevolvamos.Estamosriéndonoscuandounguapoadolescentevestidoconunosvaqueroscaídos,unacamiseta
grisdesugrupofavorito,losImagineDragons,yunasConversenegrasapareceantenosotrosynosmira.Enlosañosquehacequeloconozco,Flynhacambiadoentodoslossentidos.Loconocísiendounniñobajitoyregordete,yahoraesunadolescentedelgado,guapetón,estilosoyespigado.
—¿Conesaspintasvasairalcumpleaños?—protestaEric.—Papá,¿pretendesquemepongatrajeycorbata?Meentralarisa.Sinlugaradudas,lostiemposhancambiado.
—Cariño,Flynvaalamoda—murmuromirandoamiamor.Ericasiente.Sabequellevorazóny,sacándoseunteléfonodelbolsillo,selotiendeyledice:—Tomatumóvil.Quierotenertelocalizado.Elcríosonríe:harecuperadosubienmáspreciado.Leguiñounojoyomitopedirleunbeso.Flyn
sigueraritoconmigo,peroeneseinstantesonríeyyomesientobien.Muy...muybien.Cincominutos después, una vez se ha puesto su chupa azul, se va conNorbert, y yo lomiro
alejarsecomounamadreorgullosa.—Quéguapoymayorestáminiño—siseo—.Todavíarecuerdocuandoloconocí.Eratanretaco,
yahora,míralo,esmásaltoqueyo.AEriclahacegraciamicomentarioysusurraabrazándome:—Vamos,mamápollo.Tenemoscosasquehacer.Dedicamoselrestodelatardealospequeñinesy,cuandoalasochoymedialosdossequedan
dormidos,Ericyyorespiramosaliviados.Nosduchamosyestrenounvestiditodealgodóndecolorverdebotellayunasbotascalentitasdeandarporcasa.Alverme,miamorsonríe,medaunazoteeneltraseroymurmura:
—Estáspreciosa.Yosonrío.Siemprelehagustadomimododesenfadadodevestiry,entrerisas,vamosalacocina
ycenamosalgo.Alasnueveymedia,Ericrecibeensumóvilunmensaje.EsFlyn,parapedirquelodejemoshasta
lasdoce.Mimaridoseniega.—Cariño,noseasaguafiestas.—No,Jud.Terecuerdoqueestácastigado.—Losé.Peroestáenunafiesta—insisto.Peromicabezónalemángruñe:—Demasiadoesquelohedejadoiralafiestadesunovia.Vale...,tienerazón.Aunasí,intentandoponermeenelpellejodeFlyn,vuelvoalataque.—Aver, cariño, piensa.Nuestro niño lo está pasando bien en el cumpleaños y sólo quiere un
poquitomásdetiempo.—¿TerecuerdocómoessuamiguitaElke?Laimagendelarubiaguapadepechosgrandesmevienealamente.Evitopensarloqueminiño
puedeestarhaciendoconellaeneseinstanteporquenodeseoalarmarme,einsisto:—Cariño,nomecalientesomiperversamentecomenzaráapensarcosasquenoquierodeesa
Elkeyminiño.—Y,tomandoaire,prosigocalmándomeamímisma—:Debemosfiarnosdenuestrohijo.Aunquequierahacerseelmayor,Flynesuncríotodavía,yamboslosabemos.Venga...,dilequesíyrecuerdaloquehablamos.Hemosdedarleunvotodeconfianza.
Ericresopla.Lopiensa...,lopiensaylopiensa,yalfinalleescribediciéndolequeNorbertiráabuscarloalasdoce.
Feliz,loabrazoyseguimostiradosenelsofá.Meencantaesasensacióndeestarjuntoaélviendolatele.
Lashoraspasanmientrasestamosenfrascadosviendounapelículadedesastresnucleares,cuandodeprontoelteléfonodeEricsuena.
—Dime,Norbert.Misojosmiranelreloj:lasdoceyveinte.Rápidamente, Ericme suelta. Se levanta del sofá y,mientras yome levanto también, oigo que
dice:—Ahoramismovoy.Cuelgalallamaday,mirándome,dicecongestooscuro:—TengoqueiraporFlyn.—¿Quépasa?—preguntosorprendida.ElgestodeEricmedicequenadabueno.—TuniñonisaledelafiestanilecogeelteléfonoaNorbert—sisea.Uiss...,uiss...Esode«Tuniño»hasonadofatal,perosindarleopciónmepegoaél.—Voycontigo.—Estásenpijamaynotengotiempodequetecambies—protesta.Memiro.Loquellevoesropadeandarporcasa;nomeimporta,asíqueinsisto:—Hedichoquevoy.Mepondréunabrigolargoy...—¿Vasasalirenpijama?Suinsistenciameenfaday,singanasdesonreír,afirmo:—Pormihijo,voyhastadesnuda.Ericnohabla,noresponde,simplementeasiente.TrasavisaraSimonaantesdesalir,mepongounabrigolargosobremivestiditodealgodónyno
mecambiodezapatos.LuegomontamosenelcocheyvamosensilenciohastalacasadeElke,dondecelebrasucumpleaños.
Alllegar,vemosaNorbert.Elhombrenosmiraydice:—Sientohabertenidoquellamaros,peronoséquéhacer.ElgestodeEricempeoraacadasegundoquepasa.Madremía...,madremía...,laquesevaaliar.—Llamémoslounavezmásalteléfono—insisto—.Quizásehadespistadoynosehadadocuenta
de...PeroEricyanorazonaymurmuraseparándosedenosotros:—Venga,Judith...,¡dejadecubrirlo!Con unamala leche que ni te cuento, llega hasta la verja de la casa, llama, espera, pero nadie
contesta.Esolocrispaaúnmás,yvocea:—¡¿Acasolospadresdelamuchachanoestánencasa?!Otropadrequeestáallíesperandojuntoanosotrosdeprontogritaconelteléfonoenlaoreja:—Bradley,salahoramismodelafiesta,¡ya!Ofuscado,elotropadreyEricsemiran,yeldesconocidodice:—Lehedichomilvecesamihijoquenoquieroverloconestagentuza,peronopuedosepararlo
deellos.Ericnodicenada,yyo,incapazdecallarme,pregunto:—¿Porquédicelodegentuza?Elhombreseretiraelpelodelacaraysisea:
—Pensaránquesoyunclasista,peroamihijonoleconvienerodearsedeesapandilla.Desdequeandaconellos,yahasidodetenidodosvecesy,pormuchoquehabloconél,nomeescucha.
Ay,madre...¡Ay,madre!Pero¿dóndesehametidoFlyn?Measustoy,mirandoaEric,lepido:—Cariño,vuelveallamaraFlyn.SiBradleyhacogidoelteléfono,¿porquénolovaahacerél?Untono,dos,cuatro,siete...¡Nada!Nocogeelteléfonopero,paranuestrasuerte,pocosminutos
despuéslapuertadelaverjaseabre,saleunmuchachoalquerápidamenteidentificocomoBradleyy,trasllevarseunacollejadesupadre,semeteenelcocheatodaprisa.
CuandomiroaEric,ésteyahaentradoenlaparcelay,sindudarlo,corrotrasél.HedeaplacarlooelhuracánZimmermanpuedeliarlabiengorda.
Seoyemúsica.EstásonandoPitbull,concretamente,HotelRoomService,[14]unacanciónqueaFlynleencantayqueamí,cuandolaponeencasaatodaleche,meponelacabezacomounbombo.
Veo a varios jóvenes algomásmayores quemi niño por los alrededores del jardín fumando,besándose y metiéndose mano. Bueno..., bueno..., menuda bacanal tienen montada aquí. Eric y yomiramosanuestroalrededor,peroningunodeellosesFlyn.
¡Menudofiestorrohaorganizadolaniña!¿Dóndeestánsuspadres?Alentrarenlacasa,apartedelamúsicaatodotrapo,notoquehueleamarihuanay,mirandoami
alrededor,veoavariosdeaquellosdescerebradosfumando.Nomesuenansuscaras.NuncahevistoaaquellosamigosdeFlyn.
ElgestodeEricsecontrae.—Lovoyamatar.—Tranquilízate,cariño...,tranquilízate.LaversiónmalotadeIcemanclavasusojosazulesenmíysisea:—¿Cómoquieresquemetranquiliceconloqueestoyviendo?Cojo a Eric de lamano para hacerle saber que debe calmarse, pero élme suelta y, a grandes
pasos,sedirigehaciaunaesquina.Depronto,loveo.Flynestáriendoconsunoviasentadasobresuspiernasyunalitronaenlasmanos.
Perobueno,¿desdecuándobebecervezaelmocoso?CorrotrasEricy,cuandollegamosdelantedelcrío,élnosmiray,enlugardequedarsecortadoo
sorprendido, suelta una carcajada que nos deja sin palabras. Rápidamente me doy cuenta de que,ademásdefumado,estábebido.¡Lomato!
Ericresopla,yolequitolacervezadelasmanos.Ojú,quécabreoquetienemiamor,cuandolooigodeciragritos:
—¡Flyn,levántate!Elkenosmira,Flynnisemueve,yentoncesellapreguntasonriendoconunporrodemaríaentre
losdedos:—Amarillo,¿estosdinosauriosquiénesson?Bueno...,bueno...,bueno...Aéstalevoyadartalguantazoquelavoyamandardirectamenteala
semanaqueviene.¡¿Porquélollama«Amarillo»?!
¡Serániñatalamocosa!Sinremilgos,nicontestar,EricapartaaElkedelaspiernasdenuestrohijoy,deuntirón,levanta
aFlyn.Lachicanosmira,yyo,sindudarlo,lequitoelporrodelasmanosylometoenunjarrónconfloresqueveoallíallado.
—Muymal,guapita,muymal—siseo—.Ycomomamádinosauriotedigo:¡aléjatedemihijo!Lajovensonríe.Otraquevafina...filipina.Flynintentasoltarse,peroloúnicoqueconsigueesqueEricloagarreconmásfuerzaylosaque
delacasaaempujones.Unavezhemossalidodelbulliciodelafiestaylapesteamarihuana,yaeneljardín,Ericlosuelta
ygrita:—¡¿Mepuedesexplicarquéestáshaciendo?!Flyn,queporsusmovimientosnosdemuestraquellevaunpedoconsiderable,sueltaunarisotada
ymurmuraconchulería:—Peroquécortarrolloseres...,joder.—¿Quéhasdicho?—bramaEric,fueradesí.YomiroaFlyny,depronto,loveocomoaundesconocido.Su respuesta, en ese momento, me parece un gran despropósito y una gran provocación y,
cogiéndolodelamano,tirodeélypreguntomientraslomiroalosojos:—Pero¿quétepasa?¿Quéhacescomportándoteasí?—¡Ehhh...,Amarillo,¿adóndevas?!—gritandoschavalesquepasanpornuestrolado.Flynsonríeconmalicia.Ericmaldice,yyoestoypor soltarleunguantazoalmocoso,peroen
lugardeellocontengomisimpulsoseinsisto:—¿Quéhastomadoapartedefumarmaríaybeberalcohol?Élsacudelacabezay,conungestoquenoessuyo,murmura:—Niqueteimportara.—¡Flyn!—siseaEric.Lomiro.Meaprietolamanocontraelmusloo,comosalgadisparada,elbofetónquelevoyadar
vaasersonado.Eric,porsuparte,semuevedispuestoatodo,yyo,intentandoquenoocurranadadeloqueluegonospodamosarrepentir,memetodenuevoentreellosyempujoalcrío.
—Cierraelpicoynolacaguesmás—ledigo—.Vayámonosacasa.—JackieChan,¿tepirasya?—preguntaunchicoquepasapornuestrolado.FlynsonríeyEricsusurra,acadainstantemásmolesto:—JackieChan...,Amarillo...¿Quésonesasabsurdeces?Yonodigonada.Sidigoquelosabía,mecomeamí.—Vámonosdeaquí—gruñeEricfinalmente.Cuandosalimos,esevidentequeNorbertsesorprendealverelaspectodeFlyn.—Norbert—digo—,notepreocupesyveteparacasa.Yavamosnosotros.Unavezlos tresnosmetemosenelcoche,Ericcierradeuntremendoportazo.Menudocabreo
quellevaelcolega.Entonces,memiraygrita:—¡¿Creesquetodavíadeboseguirfiándomedetuniño?!—Nuestroniño—corrijo.
—Tuniño—insisteEric.Vale.Yaestamoscomosiempre.Cuandohace algomalo esminiño, y cuandohace algobueno esnuestroniño.Peronovoy a
contestarniaentrarenprovocaciones.Ericestámuynervioso,yestávistoque,digaloquediga,mevoyallevarpalosportodaspartes,asíquedecidocerrarlaboca.
Segundosdespués,Ericarrancaelcocheconrabiayconducehastacasa.Nadiehabla,yamínosemeocurreponermúsica.Yaséquemimadresiempredecíaquelamúsicaamansaalasfieras,perocreoque,enunmomentoasí,esmejorquenilasfierasescuchenmúsica.
Cuandollegamosacasa,SustoyCalamarsalenarecibirnosy,comopuedo,lossujetoparaquenoseacerquenniaEricniaFlyn.Noestáelhornoparabollosy,alfinal,saldríanellosperjudicados.
Unavezellosentranencasa,sueltoa losanimalesyentroyotambién.Simona,quenosesperajuntoaNorbert,alverelaspectodelniñocuandoentramosenlacocina,sellevalamanoalabocaymurmura:
—Ay,Flyn,¿quétehapasado?Nunca ha visto al chico de esemodo, y yo, para intentar calmarla, digomientrasme quito el
abrigolargo:—Tranquila,estábien.Idaacostaros,porfavor.Trasintercambiarunamiradaconmigo,NorbertagarraaSimonadelbrazoyambosdesaparecen.
Pobremujer,¡eldisgustoquelleva!Sinlugaradudas,lainfanciadeFlynsehadesvanecidodeunplumazo,dejandoantenosotrosa
unadolescenteconflictivo.Elsilencioenlacocinaesincómodo.Comodiríamipadre,secortaelaireconuncuchillo.Lo
quehahechoFlynestámal,muymal.Eric abre el armario donde están susmedicinas y rápidamente destapa un bote y se toma una
pastillaconunpocodeagua.Esomealerta.Noesbuenoparaelproblemadesusojos.Sinduda,latensióndelmomentolehaprovocadodolordecabezapero,cuandovoyadeciralgo,élmiraalcríoypregunta:
—¿Paraestoqueríasiralcumpleañosdeesachica,JackieChan?Flynnoresponde,yEric,furioso,gritaygritaygrita.Sueltaporlabocatodoloquelevieneen
ganaymás.NisemeocurredecirlequebajeeltonoparaquenodespierteaPipaoalosniños,nitampoco
quecambiesuactitud.Sinduda,loocurridoesparaestarasíy,cuandoyahadichotodoloqueteníaquedecir,sentencia:
—Estoydecepcionadocontigo.Mucho.Dichoesto,semarchaymedejaconelcríoasolasenlacocina.LachuleríainicialdeFlynsehadisipado.Sinduda,elpedalquellevabaselehabajadoalospiesconlabroncadeEric.Lomiro seriamenteyélnomemirapero, cuandoveoquepalidecede repente,meapresuroa
cogerunfruteroazulquehayvacíosobrelaencimerayselodoy.Actoseguido,mihijovomita.¡Joder,quéasco!Sinembargo,comomadresuyaquesoy,melevantoylesujetolafrente.Nopuedosepararmede
élapesardelcabreoquellevo.¡Esminiño!Cuandotermina,lequitoelfrutero,conasquitolollevoalbañomáscercano,lovacíoy,cuando
regreso,tiroelfruteroconrabiaalabasura.Luegopongoaguaahervirybuscoenelarmariounabolsitademanzanilla.
ConelrabillodelojoobservoqueFlynmemira.Estáarrepentido.Loconozco,yesamiradaysusojoscaídosmelohacensaber,peronolehablo.Noselomerece.
Unavezelaguahierve,laechoenunvasito,introduzcoelsobrecitodemanzanillay,dejándolosobrelamesa,mesientofrenteaélymurmuro:
—¿Hacefaltaquetedigaqueloquehashechoestámal?Elcríoniegaconlacabezamientrasmiraelsuelo.Detontonotieneunpelo.—¿QuéesesodeJackieChan?—preguntoacontinuación.Nocontesta.YonodigoqueloséporqueLuzmelodijo,ypasademí,peroinsisto:—Olvídatede iralconciertode los ImagineDragons.Loquehashechono tienenombre,y lo
sabes.Losabesperfectamente.Mipartedemamápolloquiereabrazarloyacunarlo,peromiotrapartedemadredolidamedice
queno,quenodebohacerlo.LoquehahechoestámalyFlyndebeentenderlo,comoyoloentendícuandoalosquinceañostomédemasiadotequilaenelcumpledemiamigaRocío.
¡Madremía,quépedalpilléporquererllamarlaatencióndeunchico!Recuerdolareaccióndemispadres.Mimadregritaba,mecastigaba,meregañaba,peroloque
realmenteme impresionó fue lamirada y el silencio de decepción demi padre. Esome dejó tanmarcadaquenuncamásvolvíabebersinconcienciacomoaqueldía.
Y ahora, aquí estoyyo, haciendo lomismoconFlynpara intentar que comprendaque estonopuedehacerleningúnbien.
Duranteunbuenrato,ambospermanecemosensilencioycasiaoscurasenlacocinamientrasélse toma la manzanilla. Pero, cuando veo que el color vuelve a sus mejillas, me levanto y digoextendiendolamano:
—Dametumóvil.—No.—Dametumóvil—insisto.Finalmente,meloentrega.Acontinuación,sinquitarleelojodeencima,digo:—NoséquiénesElkeniporquéahoratedejasllamarAmarillooJackieChancuandotú...—Esonoesproblematuyo—mecortaelmocoso—.Misamistadessonmías,ytúnotienesque
decidirquiénpuedesermiamigoomichica,¡joder!—Flyn,tencuidadoconloquedicesyolvídatedeesosamigosydeesachica.Noteconvienen.—Porquetúlodigas.Su tono de voz, el modo en que me contempla y la agresividad que veo en su mirada me
paralizan.Entonces,trascogermibolso,queestásobreunasilla,abromicartera,sacolasentradasparaelconciertodelosImagineDragonsysiseorompiéndolasanteél:
—¡Seacabó!—Flynsequedaboquiabierto.Luegotirolospapelesalabasurayañado—:Ahoravealavartelosdientesyalacama.
Sinmás,salimosporlapuertadelacocina.
Entonces,veoluzbajolapuertadeldespachodeEricydigo:—Vamos,subeahacerloquetehedicho.Mañanahablaremos.UnavezveoqueFlynsubeydesaparece,mevuelvoyentrocondecisióneneldespachodemi
amor. Lo ocurrido esta noche no lo beneficia ni a él ni a sus ojos. Cuando se pone nervioso, lerepercuteenlavista,eirremediablementemepreocupo.
Alentrarloveosentadoantesumesa.Sugestonoesmuyconciliador.Condecisión,caminohacialamesaypregunto:—¿Teencuentrasbien?—Sí.Tieneen lamanounvasodewhiskyyal recordarqueunratoantesseha tomadounapastilla,
empiezoadecir:—Eric,creoque...—Jud—mecorta—.Noeselmejormomentoparanada.—Perocreoque...—Hedicho«paranada»—repiteimplacable.Vale.Esmejorquemecalle.Sinlugaradudas,yotengopartedeculpaenloocurrido.LoaniméaquedejaraaFlynunrato
más, peroEric también es culpable, ya que fue él quien dijo que podía ir a aquella fiesta.Ambossomosresponsablesdeloquehasucedido,peroélhaderumiarloydarsecuentadeello.Asípues,asiento,doymediavueltaymeacercoalminibar.Sacounvaso,unhieloymesirvoundeditodewhisky.
Con el rabillo del ojo observo que Eric me mira.Me observa.Me conoce tanto como yo loconozcoaélysabequetengomilcosasquedecir,peroaunasímeaguantoymecallo.Mecuestaunhorror,perolohago.Actoseguido,caminohastaelsofáquehayfrentealachimeneaencendidaymesientodeespaldasaél.
Siélnoquierehablarniverme,nohablaremosnilomiraré.Asíestamosunbuenrato.Cadaunosumidoensuspropiospensamientosy,almirarhaciaabajo,
mehorrorizoalverlamorcillitaquesememarcaconelvestido.Rápidamenteencojolatripayelmichelíndesaparece.
Tengoqueperderesoscincokilos¡ya!DeprontooigoqueEricselevantay,aunquenoloveo,séqueseacercaamí.Miroelrelojque
haysobrelachimenea.Sonlasdosmenosveintedelamadrugadaytodosenlacasaduermen.LospasosdeEricsedetienendetrásdemí.Imaginoquemeestáobservandoe,inconscientemente,
vuelvoametertripa.Loconozco,séquenecesitaunratoparapensarlascosasyyaestácalibrandosuerror.Alfinalseacercaalsofáysesientaalotrolado.
Contodolocabezónygruñónquees,enelfondoEricesunhombremuybásico.Sémanejarlomuybien,aunqueenocasiones,yaunsabiendoquevamosadiscutir,nomedalaganademanejarlo.
Su mirada y la mía chocan. Sus ojos intentan provocarme para que diga algo, pero no... No,Iceman,heaprendidoquecallándomeganomásquegritando.Lesostengolamiradayfinalmenteéldice:
—Perdóname.Hepagadocontigoloquenomereces.
—Comosiempre,soytusacodeboxeo—siseomolesta.Ericasiente,sabequellevorazón.—¿Meperdonas?—insiste.Nohablo.¡Meniego!Éldejasuvasosobrelamesitaymequitaelmíodelasmanos.Memira...,memira...,memira...,
seacercaparabesarmey,¡zas!,misfuerzasflaquean,ymáscuandosusurra:—Claroquemeperdonas,¿verdad?Interiormentesonrío.Sinqueél sehayadadocuenta,esabatalla laheganadoyoconsiguiendo
queyaestébesándomeypendientedemí.Miamorhacequetodayovibrey,conganasdequemesiga,melevantoydoyunpasoatrás.Eso
loanima,asíqueselevantayvuelveaacercarseamí.Dejoquelohaga.Permitoqueseinclinehaciadelanteyjuntesufrenteconlamía.Accedoaque
rodeemi cintura con el brazo yme acerque a él.Consiento que sus labios rocenmi rostro ymedeshagocuandolooigosusurrar:
—Pequeña...¡Oh,Dios!¡Oh,Dios!Puedo defenderme de Eric Zimmerman mientras exista un palmo de distancia entre ambos.
Gobiernomicuerposinomeroza,peromedeshagocomounheladocuandometocaymellamaesode«pequeña».
Sinhablar,miamorgrandotemeizaentresusbrazos,yyorodeosucinturaconlaspiernasysucuelloconlasmanosylobeso.Lobeso...,lobesoylobesoy,cuandoporfinparo,lomiroalosojosypregunto:
—¿Tesiguedoliendolacabeza?—No,cielo...,yano.Unadesusmanossemetepordebajodemilivianovestiditodealgodónyyomeestremezco.Sin
lugaradudas,tratándosedesexo,Ericesmuchomásfuertequeyo,ycuandoagarramisbragasydeuntirónlasrasga,milocaexcitaciónseredobladispuestaatodo.
—Asímegustamás—afirmamiIcemanantesdemordermeellabioinferior.Mirespiraciónseaceleracuandomedepositasobrelamesadesudespacho.Comosiempre,está
recogida, no hay nada fuera de lugar. Nuestro beso prosigue mientras disfrutamos de esa locaseducciónysóloseoyeelcrepitardelfuegoenlachimenea.
Nuestroscuerpossecalientan,sederritenantenuestrocontacto,yrápidamentelequitoaEriclacamisetagrisquelleva.Besosucuello,sushombros,susbíceps,mientrasélmetocaymebesaamí.Con deleite, nosmiramos.Nos comemos con los ojos, nuestrasmiradas nos excitan, y yo sonríocuandoéldaunpasoatrás,desabrochaelcordóndelospantalonesnegrosquellevayéstoscaenalsuelo,seguidossegundosdespuésporloscalzoncillos.
Mibocaseseca.Diosmío,¡québuenoestámimarido!Verladuraexcitacióndemiamormetrastoca,mequitaelsentido,yEricmurmuratocándose:—Todotuyo,cariño.Sonrío y trago el nudo de emociones que está a punto de ahogarme. Somos dos especímenes
dignos de estudio. Siempre resolvemos nuestros problemas igual: ¡con el sexo! Quizá no sea lamejorforma,peroesnuestraforma.Ladelosdos.
Ericesmío.Todoélesmíoydenadiemás,ylosé.Porsupuestoquelosé.Deseosademostrarleloqueessuyo,mequitoelvestiditocortoporlacabezay,unavezéstecae
alsueloymetotripa,soyyolaquesusurra:—Todatuya,corazón.La respiración de mi alemán se acelera. La locura que sentimos el uno por el otro no ha
disminuido ni un ápice desde que nos conocemos. Al revés, ha aumentado por la confianza quetenemoselunoenelotroparaprovocarnos.
Eric sonríe,miramisdurospezonesy,agachándose,daun lametazoprimeroaunoy luegoalotroy,deuntirón,terminaderomperlasbragasparaquequededeltododesnudacomoél.
Séloquequiereyélsabeloquequiero...Séloquemepideensilencioyélsabeloquelepido...Ylomejordetodoesqueséquenoslovamosaconcedergustososunaymilveces...Hechizadaporelmomento,apoyoloscodosenlamesay,condescaroycomplicidad,abrolas
piernaslentamenteparaél,dejandoelcentrodemihúmedodeseoalavista.Ericlomiray,convozronca,tentadoraysagaz,murmuramientraspasaeldedoporencimademitatuaje:
—Pídemeloquequieras...—ymirándomefinaliza—,yyotelodaré.—¿Loquequiera?Uf...,uf...,loquesemeocurre.Lascomisurasdemislabiossecurvan,lassuyastambién.Elprincipiodeesafraseymitatuaje
definennuestramaravillosahistoriadeamor.—Lomismodigo,Iceman—murmuro—.Lomismodigo.Miamorsonríe.Retiralentamentelosdedosdemihumedadypide:—Ofréceteamí.Excitadaconloqueoigo,metumbodenuevosobrelamesa,meacomodo,deslizomispropias
manospormismuslosy,trastocarlosyverquemialemánnomequitaojo,llevomisdedoshacialosplieguesdemivagina,metocoysientolohúmedaqueestoy.Miamor,consumirada,consuvozyconsupetición,meponeamil.Abrolosplieguesdemisexoynotoqueestoyresbaladiza.Comopuedo,dejoaldescubiertomibotóndelplaceryalfinalsusurrodeseosa:
—Tuyo.Mi loco amor asiente y, agachándose, saca la lengua y rodea mi clítoris con ella.Mi cuerpo
reaccionarápidamenteymeencojo.Ericsonríey,privándomedecerrarlaspiernas,ponelasmanosenlacarainternademismuslos,sacalalenguaymevuelvelocamientraslaposadenuevoenmiclítoris.Acontinuación,sientocómosubocasecierraalrededordeélymesucciona.
Micuerpotiembla.Meencantaquemiamorjueguedeesamaneraconmigo,ymeabandonoalplacermientrasmirohacialapuerta,quenohemoscerradoconllave,ypidoatodoslossantosquenadieoseabrirla.
Durantevariossegundos,laincreíblebocadeEricpermanecesobremisexoy,cuandoporúltimolasepara,suplico:
—Sigue,porfavor...,sigue.
Conunacautivadorasonrisa,veoquevuelveahundirlacabezaentremistemblorosaspiernasycomienza de nuevo a lamer. Cierro los ojos extasiada, llevo los brazos hacia atrás,me agarro albordedelamesayseparomáslosmuslosparaél.
El ritmo de Ericmientrasme chupame vuelve loca, y comienzo a temblar con violencia.Megusta...,megusta...,ymicuerposecontraedeplacer.
—Oh,sí...,sí...,nopares—consigobalbucear.El placer aumenta, la locura se acrecienta, el espasmo se amplía mientras siento gustosas
descargaseléctricasquemehacenjadearygemirsincontenciónyunincreíbleorgasmocomienzaarecorrermicuerpodesdelanucahastalapuntademispies.
Oh,Dios...¡Quégustazo!¡Quésubidón!Peromiamorquieremás,deseamás,yyotambién.Y,cogiéndomeenvolandas,melevantadela
mesa,mellevahastalalibreríay,altiempoquemeapoyaenella,mebesaconpasión.Actoseguido,conunmovimientodecadera,introducesuerectoyansiosomiembroenmiinterior.
De nuevo,me arqueo de placer. Eric es grande, todo en él es grande y, cuandomi vagina loacoge,mevuelvolocaaloírlogemiryvercómoélmismosemuerdeellabio.
Lomiroextasiada.Estansexi...Loquierotanto...Segundosdespués,comienzaamoverse,primerolentamentey,cuandoestáporcompletohundido
enmí,suritmoseacelera.Comopuedo,murmuro:—Mírame...,mírame...Mi amormemira, hace lo que le pido, y siento quenuestros ojos ardendepasiónpor lo que
hacemos y disfrutamos. No puedo moverme, Eric me tiene arrinconada contra la librería y sólopuedorecibirlo,jadearydisfrutar.Misgemidosylossuyosllenanelsilenciodeldespachomientrasunayotrayotravezsehundeconfuerzaenmíyyoloanimoaquecontinúehaciéndolo.
Soytansuyacomoélesmío.Nuestrosmomentosdesexo,solosoencompañía,sonincreíbles.Losdisfrutamos.Losvivimos.
Losdeseamos.Nosimplicamosalcienporciensinvergüenzas.Nadaexisteenesemágicoinstanteexcepto nosotros dos.Cuando al fin la lujuria nos hace temblar al unísono,Eric se introduce unaúltimavezenmíjadeandoconvozroncayluegocaemoselunoenbrazosdelotroagotados.
Larespiraciónagitadadelosdosresuenaeneldespachoy,pasadomediominuto,susurro:—Cariño...,meestoyclavandoelcantodeunlibroenlaespalda.RápidamenteEricreacciona,meapartadelalibrería,memiraypregunta:—¿Todobien?Asientoysonrío.Mimaridoyyoloarreglamostodoconsexo.Comonosgusta.Adoroquemepregunteesosiemprequemantenemosrelacionessexuales.Esosignificaquesigue
preocupándosepormícomoelprimerdía,ynoquieroquedejedehacerlo.Cuando, instantes despuésme deja en el suelo, camino desnuda hacia elminibar.Allí tenemos
agua,abrounabotellita,doyuntragoydespuésselaentregoaélparaquebeba.Pobrecitomío,cómosuda;cualquierdíasemedeshidrataconelesfuerzo.Entrerisas,nosvestimosyleenseñomisbragas.Noganopararopainteriorconél.Espartede
nuestrojuego,yquieroquesigasiéndolo.Cómomeponesugestocuandomelasarranca.Diez minutos después, entramos en nuestra habitación y, abrazados y sin hablar en ningún
momentodeFlyn,nosdormimos.Necesitamosdescansar.
Cuandomedespierto, como casi siempre, estoy sola en la cama.Miro el reloj digital que haysobremimesilla.Las9.43.
Me desperezo y hago la croqueta sobre el colchón. Cómo me gusta revolcarme en nuestraenormecama.SonriendoestoycuandodeprontorecuerdoloocurridolanocheanteriorconFlynydoyunsalto.NoquieroniimaginarmeloquepuedeestarocurriendoentreélyEric.
Ay,miniño...,ay,miniño,quemelocome.Melavolosdientes,lacaray,sinducharme,porlasprisas,mepongoelvestiditodealgodónque
llevaba ayer, me calzo mis botas de andar por casa, cojo mi móvil y salgo a toda leche de lahabitación.
Antesdebajar,pasoporlahabitacióndeFlynparaversiestáy,alabrir,mequedoboquiabiertaalverloaélyaEricsentadosenlacamahablando.
—¿Quéocurre?—preguntamiamor,levantándosealarmadoalvermisprisas.Con el corazón a punto de salírseme por la boca, entro en el cuarto y murmuro cerrando la
puerta:—Nada.Ericvuelveasentarseenlacamay,trasobservarmecondetenimiento,dice:—¿Acasocreesquelovoyamatar?Joder...,joder...¿Cómopuedeconocermetanbien?Sin embargo, sonrío disimulando y, mientras miro a Flyn, que tiene una pinta desastrosa,
pregunto:—¿Cómoteencuentras?ElcríomemirayveoensusojosqueEricyalehacantadolascuarenta.—Bien—dice.Mialemáncogemimano,mesientasobresuspiernasy,cuandovoyadeciralgo,Flynsisea:—Jud,papáyamehadichotodoloqueteníaquedecirme.¡Ay,madre!Semeencogeelalma.FlynllevasinllamarmeJuddesdequenacióelpequeñoEricy,cuandovoyadeciralgo,miamor
selevantay,cogiéndomeconfuerzadelamano,dice:—Flyn,vísteteyluegobaja.HoyvasabañaraSustoyaCalamar.—Aloíreso,elniñosedispone
areplicar,peroEriclocorta—:Y,comoyatehedicho,noquieroniunasolaprotesta,¿entendido?Todavía sorprendida por lo que Flyn ha dicho, salgo al pasillo con Eric y él; al ver mi
desconcierto,dicesinsoltarme:—Cariño,respiratranquila.¿Quéteocurre?Hagoloquemepidey,cuandoexpulsoelaire,murmuro:—MehallamadoJud,Eric...Nomehallamado«mamá».Veoqueasienteysacudelacabeza.—Tranquila.Mañanatevolveráallamar«mamá».
Como puedo, digo que sí, pero igual que me ocurrió años antes, el corazón se me acaba dedescuajeringaralsentirquemicoreanoalemánestádejandodequererme.
Decidoiradarsaltosconlamoto,peroFlynnoquierevenirseconmigo.Cuandoregreso,estoyhambrienta,abrolanevera,veounodelospaquetesdejamóndelricoquemipadremeenvíaymepongomorada.¡Dios,québuenoestá!
17
CuandoJudithyEricllegaronalacasadesusamigos,Samiseechóalosbrazosdesustíos.Durantevariosminutos,éstosleprestarontodasuatenciónalapequeña,que,comosiempre,erauntorbellinodevidayluminosidad.
EnelmomentoenqueporfinBjörn,EricySamisealejaron,JudithyMelentraronenlacocinayJudpreguntó:
—¿TodobienconBjörn?Alcomprenderloquesuamigalepreguntaba,Melseapoyóenlaneveraysonrió.—Todoperfecto.Creoqueya lehaquedadoclaritoalguaperasque,sivuelvea jugármelacon
esapandilladeurracas,novoyasertanamablecomolofuiconellaslaúltimavez.Nomegustan,comotampocoyolesgustoaellas,yesatalHeidiesunagranzorra.
—Heidiesunazorra—repitiócanturreandoSamialpasarporsulado.Aloíralaniña,semiraronyrápidamenteMelpreguntó:—Sami,¿porquédiceseso?—Mami,lohasdichotú.—Sí,cariño,esaHeidiesmuyzorraymuyperra—afirmóJudagachándoseparaquedarfrentea
lapequeña—.Pero,Sami,esaspalabrassonmuyfeasynosedicen,¿deacuerdo?Agachándoseasuvez,Mellecolocóasuhijalacoronitaquetantolegustaballevarenlacabeza.—Valeeeeeeeeee—dijofinalmenteSami—;¿medaisunagalletadechocolate?Singanasdedarlemásvueltasaltema,Judithcogióunagalletadeuntarroy,encuantoseladioa
lapequeña,éstasaliócorriendodelacocina.EneseinstanteaparecieronBjörnyEric,yelabogado,mientrassacabaunascervezasfresquitas
delanevera,semofó:—Vaya...,perosiestánaquílasdosmacarrasmotorizadasdelasbirrasbienfresquitas...¿Iréishoy
tambiénaquemarrueda?Ericsonrió.Judithlehabíacontadoelepisodio,ysoltóunacarcajadacuandoMelrespondió:—Simelovuelvesarecordar,quemaremosruedayMúnichentero,guapito.Despuésdeunratoenelqueloscuatrocharlaronyrieronporloocurrido,sonóelteléfonode
Judith.Eraunmensaje:
EstoyenunamásquedivinacerveceríaenlaplazaMarienplatz.¿Tienesunratoparatuloca?
Judithsonrió.¡Sebas!Y,levántandose,yguiñándoleelojoaEricdijo:—Mel,havenidounamigomíodeEspaña;¿tevienesconmigoaverlounpardehoras?—¿Quéamigo?—preguntóBjörn.
Repanchingándoseenunasilla,Ericmiróasucasihermanoy,congestocómplice,murmuró:—Tranquilo,Björn.Sebasylastreintayseislascuidaránmejorquetúyyo.Divertida,Judithleguiñódenuevoelojoasumaridoy,cuandosalióconMelporlapuerta,oyó
queBjörnpreguntaba:—¿Lastreintayseis?Unavezenlacalle,Melmiróasuamigaylesoltó:—Muybien.Desembucha.¿Quiéneseseamigo?Judithsonriópero,comoqueríaquesellevaraunasorpresaalconocerlo,simplementeabrióla
puertadesucocheycontestó:—Montaycalla.Mientrasconducía, Jud ibahablandodemilcosas.Al llegaralparkingpúblicodeMarienplatz,
dejaronelcocheycaminaronencantadashastalapreciosacerveceríaHofbräuhaus.SinlugaradudasSebasestabaallíy,nadamásabrirlapuertayentrar,deprontoseoyó:
—¡Marichochooooooooooo!Judithsonrió.Sebas,sulocoSebas,tanguapocomosiempre,corríahaciaellaparaabrazarlay
besuquearla.Cuandoelabrazoyelbesuqueoacabaron,JudithlepresentóaunaalucinadaMel,yél,comosilaconocieradetodalavida,labesóconcariño.
Acontinuación,trasmirarasusescandalososcompañerosdeviaje,dijo:—Creoqueesmejorquenossentemosaaquellamesa.Sinosponemosconellos,nopodremos
cotillearanuestrasanchas.Durantemásdeunahora,Melobservóojipláticacómoaquélysuamigahablabanalavelocidad
delaluzponiéndosealdíadetodo,hastaqueélmurmuróparaterminarloqueestabacontando:—Yahíterminóminovelescahistoriadeamor,lujuriaysexoconelpotrosuecoquemenublóla
razón.Portanto,hedecididoqueapartirdeahorazorrearéconmuchos,perosólomeenamorarédeloscaballosdePeraltademitierra.
Judithseapenó.LaúltimavezquehabíavistoaSebas,ésteestabalocamenteenamoradodeaquelsurferosueco.
—Losiento,Sebas—murmuró—.SélomuchoquequeríasaMatías.—Tranquila,chochete—afirmóél—.Ahorametomolavidasindramatismos,yhellegadoala
conclusióndeque,cuandotodosube,loúnicoquebajaeslaropainterior.—Y,mirandoaunalemánque pasaba junto a ellos, dijo—: Geyperman demiarma, con lo difícil que es encontrarme y túperdiéndome...
Melsoltóunacarcajada.Aqueltipoeraincreíble.—¡Sebas!—gruñóJudithdivertida.Élleguiñóunojoconcaradepilloycuchicheó:—Sinosehaenteradodeloquehedicho,mujerrrrrrrrrrrrr,¡déjamezorrear!Los tres rieron y luego siguieron charlando.Mel se inmiscuyó esta vez en la conversación, y
Sebasyellaterminaronentendiéndosealaperfección.Alcabodeunrato,élvioqueJudithmirabaelrelojypreguntó:
—Y tuGeyperman rubio y buenorro ¿por qué no ha venido?Mira...,mira quememoría porpresentarloalastreintayseislocasquemeacompañan.
MelyJudithsemiraron,yestaúltimarespondió:—Temandamuchosbesos,pero...—¿Conlengua?—¡Sebas!—dijoJudithriendojustoenelmomentoenquelostreintayseisselevantabandela
mesay,escandalosamenteyconganasdecachondeo,sesentabanconellos.Loqueenunprincipioibanasersólounpardehorasseconvirtieronencuatroy,cuandoporfin
sedespidierondeSebasylostreintayseisysubieronalcoche,Melmiróasuamiga.—PrométemequelapróximavezEricyBjörnvendránconnosotras—ledijomuertadelarisa.Estabancomentando lobienque lohabíanpasadocuandoaMel le sonóelmóvil.Unmensaje.
Björn.
Amor,compracervezas.Convuestralargaausencia,Ericyyonoshemosdadoalabebida.
DespuésdeleerleelmensajeaJud,pararonenunsupermercado.Pero, como siempre ocurre cuando unamujer entra a comprar, salieron con el carro cargado
hasta arriba y, en elmomento en que estabanmetiendo las bolsas en elmaletero del vehículo, unadolescentedepelooscuroylargoseplantóanteellas.
—¿Quierenquemeencargueyodelcarrito,señoras?—dijo.Judithasintióconunasonrisa,yMel,mirandoalchico,preguntómientraséllasayudabaconlas
bolsas:—Eh...,¿dóndetehevistoyoantes?Aloíreso,elcríolamiróyseapresuróarespondersonriendo:—Seguroqueaquímismo.Melparpadeó.¿Dóndelohabíavistoantes?Y,soltandoelcarrito,añadió:—Todotuyo,chavalote.El muchacho sonrió y, sin decir nada más, se alejó con el carro. El euro que iba dentro le
proporcionaríaesanocheunbocadilloparalacena.
18
Trasunasemanitaquenoseladeseoniamipeorenemigo,estoyagotada.Flynnos loponemuydifícil.Han llamadodelcolegioparadecirquenoha idoaclase,y soy
conscientedequeminiñoestáperdiendolospapeles.Lehepedidoenvariasocasionesquesoliciteunaentrevistaconsututor,perohastaahoraleharesultado«imposible».Insistirédenuevooalfinalacabarépidiéndolayomisma.
CuandoEricllegadetrabajar,nomequedaotraquecontarleloocurridoy,tanprontocomoéstesemarchaasudespachoenfurecido,Flynseencaraconmigoymedicecosascomoqueyanosoyalguiendefiarporhabérselocontadoasupadre.Intentohacerlorazonary,enespecial,hacerleverquesucomportamientoestádejandomuchoquedesear,peroledaigual,siguerebatiendotodoloqueledigohastaqueEricregresayelcríosecallaynohablamás.
¿QuéestáocurriendoconFlyn?Esa noche, en la intimidad de nuestra habitación, Eric intenta quitarle hierro al asunto. Está
molestoporelcomportamientodelmuchacho,perosuvisióndeltemanoescomolamía.Flynnosecomportade lamismaformadelantedeEricquedelantedemí,ynosotros tampocoreaccionamosigual.Conmigoseencara,seponechulo,dicecosas terriblesqueenocasionesnolecuentoaEricparanoliarlamás,peroconélsecalla.Flynhapasadodeserunniñocaprichosoaunadolescenteprovocadoreindisciplinado.
El martes, Eric se va de viaje. Flyn se trae a uno de sus amigotes a casa y, cuando los pillofumándoseunporroensuhabitación,echoalamigoytengounabuenaconmihijo.Él,ofendidoporlo que he hecho,me acusa de estar amargándole la vida y yo tengo que respirar. O respiro o leestampounasillaenlacabeza.
Elmiércoles,cuandoEricregresa,decidocallarynocontarlenadadeloocurrido.Séquehagomal,peroEricllegacansado,yloúltimoquequieroesagobiarloconmásproblemas.
El jueves,nadamás levantarse,veoquemimarido tienemalacara.Esomeangustiapero, trastomarse sumedicación, sonríe yme tranquiliza. Sé que nuestra vida siempre será así. TendrémilsustosconlosdoloresdecabezadeEricacausadesuvista,peroverlosonreírpocodespuésmehacesaberqueeldolorharemitido;sinofueraasí,losabríaporelhumornegroquelosuelepreceder.
Esa mañana, sobre las doce, cuando estoy trabajando en Müller, recibo una llamada de mihermana Raquel. Mi padre ha hablado con ella en referencia a Flyn, y la pobre, que ya está enMéxico,mellamaparaapoyarmemoralmente.
—¿QueahoratellamaJud,elpuñeteroniño?—Sí—asientoapenadaomitiendootrascosas.—Lamadrequeparióalchino.—¡Raquel!
Ambasreímosyfinalmenteelladice:—Vale..., vale..., ya sé que es coreano alemán, pero si él te joroba, yo lo jorobo y lo llamo
¡«chino»!—Miraqueeres—digoriéndome.Entonces,oigoaRaquelresoplaratravésdelteléfonoydecir:—Eseniño tequierey tequieremucho,peroelpavazo lehavenidodegolpe.Deprontoseha
visto mayor, guapete y resultón y se cree el rey del mambo. Pero, tranquila, como dice papá,regresaráalredil.Esosí,mientrasnoregresa,átatelosmachos,¡quevienencurvas!
Vuelvoasonreírcuandomihermanaañade:—Mira,cuchufleta,estásenlamismasituaciónqueyocontuqueridasobrina.Niteimaginaslo
rebeldeycontestonaqueestáLuz.Esosí,enlosestudios,latíaesunalumbreras,ysobreesonomepuedo quejar, pero en cuanto a los chicos, ¡ofú!, qué tontería tiene encima.Ha pasado de jugar alfútbolaquerercomprarsesujetadoresconrellenodegel.
—¿Conrellenodegel?—preguntosorprendida.—Sí,hija,sí.Elotrodía,lamocosavaymedicequequiereunsujetadorWonderbrapush-uppara
quesupechoaumenteytenerunescoteperfecto.¿Quéteparece?—¿Tedijoeso?—Sí,hija,sí.¡Quelasniñasdeahorasonmuyespabiladas!Merío,nopuedoremediarlo.NomeimaginoaLuz,michicarrona,diciendoesoy,derepente,
recordandoalgo,digotrascontarlequehevistoaSebasenMúnich:—HablandodeLuz,hazel favordenoponerlehorquillasdeDora laExploradoraycalcetines
conpuntillitas,queyaesmayor.—Perosiestámonísimaconello.—Ambasreímos,ymedoycuentadelocabroncetaqueesmi
hermanacuandoañade—:Lohagoparaqueproteste,tonta.Yaséquenotieneedadparaponérselo.—Noséquiénespeor,siellaotú.Raquelríe.Meencantasurisa.Oírlareírescomooíramimadre.—Segúntusobrinita—prosigue—,ahoraestálocamenteenamoradadeesetalHéctor,perohasta
elmespasadoloestabadeuntalQuiquey,claro,yohedemirarporsureputación,yasabeslolargaqueeslagenteylomuchoquelegustadarlealalengua.
Asiento.Séperfectamentecómoeslagentedecotillaymetomentodo.Bajolavozymurmuro:—Acuérdatedecuandotúyyoteníamossuedad,¿oacasohasolvidadoelveranitoquetediopor
Roberto,eldelosjuegosrecreativos,oporManuel,eldelatiend...?—Ais,Roberto,quéguapoera.¡Ay,madre,cuchu!—gritadepronto—.¿TeacuerdasdeDamián,
eldelaMontesaazulquetantotegustabayporelquesaltabaslaverjadecasatodaslasnochesparaverteconél?
—Sí.Claroquelorecuerdo.Pensarenaquellomehacereíracarcajadas.Sinduda,ennuestraadolescenciatodoshacemosmás
tonteríasdelasqueluegoqueremosreconocer,aunquerecordarlasnoshagasonreír.—Porcierto,papáestátristónporquedicequenovendréisalaFeriadeJerez.—Nolosé.Aúnquedamucho.—Pero,cuchu...,yatelaperdisteelañopasado,¿telavasaperdertambiénesteaño?
Mejorobapensarenello.Desdequenací,sólomeheperdidoesaferiaunavezenmivida,porloque,dispuestaadejarmelasuñasparallevaraEricesteaño,afirmo:
—No.Claroqueno.Harétodoloposibleparair.Alfinal,cuandocuelgo,mihumorhamejoradoconsiderablemente.Laslocurasdemihermanay
demisobrinamehacenreír.Entonces,oigounosgolpecitosenlapuertademidespachoy,almirar,veoaGinebra.¿Quéestáhaciendoellaaquí?
—Hola, guapísima—me saluda dicharachera—. Tengo una comida con Eric y, como sé quetrabajasaquí,hepensadoenpasarasaludartemientrasélterminaunosasuntillos.
Mequedoboquiabierta.¿Erictieneunacomidaconellaynomelohadicho?GinebraentraenmidespachocomoPedroporsucasa,sesientafrenteamíymurmura:—Québienlopasamoselotrodía...—¿Cuándo?Ellamemiraysonríe.—EnelSensations—explicabajandolavoz—,aunquetumarido,elmuymalote,merechazó.—
Nodigo nada.No puedo, y ella prosigue—:Por cierto, te vimirando tras las cortinas cuando yoestabaenelreservadoconlosamigosdeFélix.¿Teexcitóloqueviste?
Lorecuerdoalinstantey,conlamismasinceridadconlaqueellamepregunta,yolerespondoalavezquememaldigoporsertancuriosa:
—Sitesoysincera,nimeexcitómimegustó.Ginebrasonríe.—¿Porqué?—¿Porqué,qué?Ellameobserva.Noapartalamiradademíyresponde:—¿Queporquénoteexcitó?Alfinyalcabo,essexo.—Porqueesaclasedesexonomeatrae—replico.Ginebrasueltaunarisotaday,bajandodenuevolavoz,cuchichea:—Judith,precisamenteloqueamímeexcitaesquemetratenasíyquemimaridolopermitay
meuseasuantojo.Pero,claro,túprefieres...—Prefieroloquetúmismavistedespués—lacortosegurademímisma—.Nuncadisfrutaríacon
loqueatitegusta,esonovaconmigo.Susonrisaseensanchayasiente.—¿Ericytúnoosofrecéisaotros?—Sí.—PuesesoesloquehaceFélixconmigo,cielo.Vale.Séquepuedeparecerlomismo,peronoloes,yañado:—No.Noeslomismo.Yqueconstequenocriticoloquevi;siatiyatumaridoosgustaesa
clasedesexo,¡adelante!Sólodigoqueyonomeprestaríaaeso.Perorepito:siatitegusta,teexcitayestáisdeacuerdo,¡adelanteydisfrutadlo!
Ginebraentiendemuybienloqueledigo,yacontinuaciónmurmura:—Amíme encanta que Félixme obligue yme entregue a sus amigos para queme usen a su
antojo.Creoqueeslapartemásexcitantedenuestrocalientejuego.
—Sobregustosnohaynadaescrito—afirmosonriendo.—¡Túlohasdicho!—convieneellaconungraciosogesto.ConGinebrame pasa algomuy raro. Tan prontome cae bien comome caemal. No llego a
cogerlebienelpunto,peroreconozcoqueellasiempretratadeseramableyencantadoraconmigo.Mirándolaestoycuandoselevanta,seacercaalaparedycomenta:—Nomedigasqueéstossonvuestrosniños...—Sí—digoalverqueseñalalasfotosdemishijos.—Oh,Diosmío,sonpreciosos,Judith.Quémonadaaaaa.Quéricurasssssssssss.—Loson—afirmoorgullosadeellos.—¿Habéisadoptadounniñochinito?MedispongoarespondercuandodeprontoEricentraylohacepormí:—Flynnoeschino,escoreanoalemán.EraelhijodemihermanaHannah,yahoraesnuestro.—¿Era?—preguntaGinebra.Ericasientepenosamenteyeneseinstanteconfirmoquellevansinhablarsevariosaños.—Hannahmurió—explicaélentonces.—Oh,Diosmío,Eric...,losiento.Nosabíanada.Miamorasiente.Hablardeelloleduele,yséqueledolerátodasuvidacuandoresponde:—Flynsequedóconmigoy,desdequeJudllegóanuestrasvidas,somosunafamilia.Ginebrasellevalasmanosalaboca.VeoquesienteloocurridoaHannahy,emocionada,lecoge
lasmanos.—Sécuántolaqueríasylounidoqueestabasaella.Ericasientedenuevo.YopasolamanoporsuespaldayGinebralosueltaydicereponiéndose:—Sinduda,Judithytúhabéiscreadounapreciosafamilia.—Sí—afirmaélconseguridadmientrasmeguiñaunojo.Ginebravuelveamirarlapareddondeestánlasfotosdelosniñosypregunta:—¿Cómosellamanlosotrosdos?—EricyHannah—respondo.Entonces,Ginebraenterneceelgestoymurmura:—Sonpreciosos...,preciosos.—Y,mirandoaEric,añade—:Aúnrecuerdoquetúnoqueríastener
hijosyyosí.—Ericsonríeyellafinaliza—:Quécuriosaqueeslavida...,alfinal,túloshastenidoyyono.¿Pensáistenermás?
—No—afirmaEricantesdequeyoresponda.Vaya.Esomesorprende.Siemprehesidoyolaquedecíarotundamentequeno,yoíraEricdecir
esoenciertomodomesubleva.Perotienerazón:¡contresvamossobrados!Alvermigesto,Eric se acerca amí,mecogepor la cinturay,mirándomedirectamente a los
ojos,pregunta:—Vamosacomer,¿tevienes?—¿Teencuentrasmejorqueestamañana?—preguntointeresadaporél.—Sóloeraunpequeñodolordecabeza,cariño—replicasonriendo—.Venga,venteacomer.Lomiro..., no sé qué hacer.Yomisma estoy llena de contradicciones: ¿debería ir o no? Pero,
siendoconsecuenteconlaconfianzaquetengoenél,respondo:
—Mejoridvosotros.—¿Seguro?—preguntamiamorintentandoleermirostro.Conunasonrisaquelotranquiliza,asiento.—Sí,cariño.Seguro.Idvosotros,tenéismuchascosasdelasquehablar.Dossegundosdespués,GinebrayEricsalendemidespachoyyomesientodenuevoenmisilla.
ConfíoenEricy,abriendounacarpeta,murmuro:—JudithFlores,dejadepensartonterías.
19
Aquellamañana,MelestabaenelcentrocomercialconsusexcompañerosdebatallónNeillyFraser.El día anterior,Björn, que se había enterado de que habían llegado deAfganistán, los llamó paraorganizarlaquedada.Erasumododepedirleperdónporlaencerronadedíasantesconlasmujeresdelosabogados.
Eneltiempoquellevabaretiradadelejército,lavidadeMelhabíadadoungirodecientoochentagrados.Ahoradisfrutabadeunaexistenciademasiadotranquilaconsuhijayconunhombrequelaadoraba.
—Estoypensandoenaceptarelpuestodeescoltaenelconsulado.¿Quéosparece?NeillyFrasersemiraron,yesteúltimosonrióycontestó:—Amínomeparecemal;esmás,soyconscientedequeloharásmaravillosamentebien,pero
¿quédicetuabogado?—Pordecir,dicemuchascosasyningunapositiva—afirmóMelresoplando.Neillasintió.EstabaconBjörny,paraecharleunamano,sequejó:—¡¿Escolta?!¿Tehasvueltoloca?—¿Porqué?EntoncesNeillmiróaMelalosojosydijo:—Vamosaver:dejastetutrabajoenelejércitoparapasarmástiempoconSamiyBjörn,¿yahora
estáspensandoenserescolta?¿Tantonecesitáiseldinero?—No—respondióella.Björnprecisamentenoandabacortodedinero,yelmilitar,queestabaalcorrientedesuboyante
situaciónfinanciera,lamiróeinsistió:—Sabes que suelo estar de acuerdo contigo enmuchas cosas pero, en esto, siento decirte que
estoyconBjörn.Amítampocomeharíamuchagraciaquemimujerfueraescoltadenadie.—Pero,Neill...—No,Mel—lacortóél—.Unacosaeracuandotrabajabasparasacartúsolaadelanteatuhija,y
otramuy diferente es que tengas una buena vida y quieras complicarla con ese trabajo. Piénsalo.Quizánotemerezcalapena.
Durante un buen rato, los tres hablaron de los pros y los contras de aquel empleo, hasta queFraser,tocándoseelestómago,dijo:
—Comienzoatenerhambre.¿Quéosapetececomer?—TenemosqueesperaraBjörn,quehaidoaporlaniñaalcolegioparaqueosvea—advirtió
Mel—.Portanto,dileatuestómagoqueespere.Frasersonrió,peroentoncesNeillseñalóalotroladodelacalle.—Tuestómagoestádesuerte,colega—exclamó—.Miraquiéneslleganporahí.
Mel y Fraser miraron y sonrieron al ver a la pequeña Sami en brazos de Björn, riendo defelicidadconsuscoletasmediodeshechasmientrasesperabanaqueelsemáforosepusieraenverdeparapodercruzarlacalle.
AMelselaveíaenamorada.—Sinduda, ese abogado esungranhombre—semofóFraser—.Sólohayquever tu carade
tontaalmirarloylafelicidaddeSamiporestarconél.—¡Serásidiota!—dijoellariendo.—Björnesungrantipoynosemereceeldisgustoquequieresdarleconlodeltrabajodeescolta
—cuchicheóNeill.Melsuspiró.Björn loera todoparaella.Verlo llegarconsupequeñaenbrazos,sin importarle
quelemancharasucarísimotraje,yconlamochilarosadelasprincesascolgadadelbrazolahizodarsecuentadecuántoloquería.Acontinuación,miróasusamigosy,bajandolavoz,preguntó:
—Sivosotrosencontraraisaalguienqueoshacetremendamentefelices,queosdatodosuamoryquehacequetodoslosdíaslavidaseamaravillosa,¿ledaríaisfechadeboda?
—Sindudarlo—afirmóNeill.Melsonrióaloíreso,yNeillañadió:—CuandoconocíaRomina,meenamorédeellaendécimasdesegundo.Sumaneradehablarme,
detratarme,dehacermelavidafácilmevolviólocodeamor,ysupequedebíadarelgranpasoantesdequeotromáslistoqueyopudieraenamorarlayseolvidarademí.Yteaseguroqueeslomejorquehehechoenmivida.—Depronto,suteléfonosonó—.Hablandodemiamor...,aquílotengo.
FraserrioyNeill,trascruzarunaspalabrasconsuadoradamujer,cerróelteléfonoyexplicó:—Rominahadichoquenosesperaatodosencasaparaprepararnosunaestupendacomida,yno
aceptaunnoporrespuesta.Melasintió:iríanacomer.Sinembargo,nopodíaapartarlamiradadeBjörnydesuhija.Ellos
nolaveían,peroellaaellossí,yvercómoBjörngesticulabaylaniñareíaacarcajadasleencantó.Muchas eran las veces en que ellos jugaban en casa y Mel los contemplaba con disimulo y seemocionabaantesubonitacomunicación.BjörnySamieranpadreehija.Amboslohabíanqueridoasídesdeunprincipio,yellaloaceptócomplacida.
Sinapartarlosojosdeellos,queahorayacruzabanlacalle,deprontoMeltuvoclaroquedebíahacerloquesucorazónledictabay,mirandoasuscompañeros,quelaobservabanfijamente,dijo:
—VoyadarleaBjörnunafechaparalaboda.NeillyFrasercomenzaronaaplaudir,peroellaloshizocallarenseguida:—Nodigáisnada,bocazas,quieroqueseaunasorpresaparaél.—Samiytúhabéisencontradoaalguienquemerecemucholapena—apuntóNeillchocandolos
puñosconlosdeellatalycomohabíanhechocientosdeveces—.Nolojorobes.SinapartarlamiradadeBjörn,Melasintió.—Sinduda,éllomerece.—Joder,teniente—semofóFraser—.¿Quéhapasadoparaqueseobreelmilagro?Conojosdeenamorada,MelmiróaBjörn,queenesemomentosesubíaaSamialoshombros,y
respondió:—Simplemente,quemeacabodedarcuentadequeyanopuedovivirsinél.
—¿Yesafechaparacuándo?—preguntóNeillcurioso.Divertidayasombradaporsupropiadecisión,Melseencogiódehombros.—Nolosé—dijo—.Yahora,cerradesasbocazas,quenoquieroqueBjörnseenteredenada.Cuando él y Sami llegaron hasta ellos, Neill y Fraser se deshicieron en halagos con la niña
mientrasBjörnbesabaasuchicaypreguntaba:—¿Cómoestámiheroínapreferida?—Bien—respondióellaencantada—.Ygracias.—¿Porqué?—PorllamaraNeillyaFraser.Sorprendidoporqueellalosupiera,BjörnmiróaFraseryésteconfesó:—Losiento,macho,peroalfinalnoshasacadoqueayerhablamos.Lateniente,cuandosospecha
algo,noparaconsutercergradohastaquedaconlaverdad.Todossonrieronporelcomentario,yMel,sinsoltarsedeBjörn,dijo:—Teestábamosesperando.Rominanosinvitaacomerensucasa.—¿Yeso,preciosa?—PorqueRominanoaceptaunnoporrespuesta—contestóNeill—.Además,creoquetendremos
algoquecelebrar.Aloíreso,Mellomiró.¡Loibaamatar!—¿Quétenemosquecelebrar?—quisosaberBjörn.FraseryNeillsemiraronconcomplicidad,yesteúltimo,mofándosedeMel,quelosacuchillaba
conlamirada,soltó:—Teniente,¿tenemosalgoquecelebrar?Ellasonrióy,comosilosviejostiemposhubieranvuelto,respondió:—Celebraremos que dos capullos, muy capullos, han regresado de su última misión en
Afganistán.Neill y Fraser soltaron una risotada, y Björn, que no entendía nada, cuando vio que aquéllos
volvíanacentrartodasuatenciónenlapequeñaSami,murmuróaloídodelamujeralaqueadoraba:—Teniente...,cómomeponequetellamenasí.Melsonriódivertida.Suchicosehabíaintegradototalmenteensugrupo.Habíadejadodeseruntipoquesemanteníaal
margen de aquellos estadounidenses para convertirse en uno que disfrutaba cada vez que todos sereuníanyeranconscientesdesurespetoysucariño.
Trastomarseunacervezayhablarsobrebanalidades,alfinaltodosseencaminaronhacialacasadeNeillyRomina,dondenofaltaronelbullicioylaalgarabía,mientrasMel,enamorada,observabaembobadaasunovioyseconvencíadequeteníaquecasarseconél.Björnerasuamor.
20
—Judith,mevoyacomer—oigoquediceMika justamentecuandoestoycerrando lacarpetaparahacerlomismo.
Encuantosalgodeldespacho,lostrabajadoresconlosquemecruzoenmicaminomemiranymesaludanconunasonrisa.Esomealegra.Megustaqueveanenmíaunapersona,ademásdealaseñoraZimmerman.
Unavezenlacalle,medispongoacogeruntaxipararegresaracasacuandooigoquealguiengritaminombre.Almirar,sonríoalverquesetratadeMarta,lahermanadeEric,queconlamanomedicequelaespereydeunacarrerallegahastamí.
—¿Quéhacesporaquí?—preguntotrasbesarnos.Martamemiraysonríe.—VeníaahablarconEric—dice.—Noestá.Hasalidoacomerconunaantiguaamiga.Misúltimaspalabrasdebendesalirmeconciertotonillo,porqueellapreguntaalinstante:—¿Quéamiga?Sinquererponercaritas,traseltonitoquelehadadoaloquehedicho,respondo:—UnatalGinebra...,¿laconoces?—¿Ginebra está aquí? —pregunta sorprendida. Yo asiento, y añade—: Ostras, me encantaría
verla.Larecuerdoconcariño,aunqueyofueraunaniña.Eramajísima...,¡majísima!SaberqueMarta también la recuerdaconcariñono sé simegustaomedesagrada.Micuñada
debedevérmelodenuevoenlacara,porquedice:—Perotúparamíereslaúnica...,¡lamejorparaelbordedemihermano!Suapreciaciónyelcariñoquemetienefinalmentemehacensonreír.—¿Comemosjuntas?—preguntaentonces.Asiento.LlamoaSimona,medicequelospequesestánbienyleindicoquellegarémástarde.Delbrazo,caminamosporlascallesdeMúnichyentoncesdeprontolalocademicuñadasepara,
levantaunamanoygritandodice:—¡Mecaso!Rápidamenteveoelanilloensudedo.¿Cómoquesecasa,siellanoesdecasarse?¿Conquiénse
casa?Laveosaltar,sonreíryemocionarseenelmomentoenquedice:—Estoyloca...,¡losé!Pero...perohedichoquesí,¡ymecaso!Lamiro.Memira.Lasdosnosreímos.¿Dequémerío?MartarompióconsualocadonovioPeterhaceochomesesy,queyosupiera,noestabasaliendo
connadie.Poreso,cuandonopuedomás,concaradecircunstanciaspregunto:—¿Yconquiéntevasacasar?
La chiflada demi cuñada suelta una carcajada, aplaude como una niña chica, se retira el pelorubiodelacaray,trasaspirar,murmura:
—ConDrewScheidemann.Vale...,niideadequiénes.—Esunanestesistaquetrabajaenelhospital—explicaellaemocionada.—¡¿Unanestesista?!Martaasientey,felizdelavida,añade:—Nosconocemosdesdehaceunosaños,yreconozcoquelaprimeravezquelovinomecayó
bien.Inclusosiemprequeíbamosdecenadeempresasiempreerademasiadosensatoyjuiciosoparamigusto.Perohaceseismeses,unanoche,cuandosalíadelhospital,nosencontramosenelparking...¡Oh,Diossssssssssssss,lorecuerdoysemeponenlospelosdepunta!
—¿Porqué?—preguntocuriosa.—Porqueestan...tan...serio,estableyserenoquenosécómohapodidofijarseenmí.Condecirte
queenocasionesmerecuerdaaltontodemihermano...EsomehacereíralimaginaraltalDrewdelpelajedeEric.—Pero...fuealucinante—prosigue—.Fuimosatomarunacopa.Élmedijoquenoteníapareja,
yoleconfeséquetampocoy,bueno...,unacosallevóalaotra,comenzamosavernoscadadíamásseguidoysólopuedodecirtequeestoyfelizy...y...¡embarazada!
—¡¿Qué?!¡Tomayabombazo!Bodayembarazo.—¡Estoydecuatromeses!—insisteMarta,tocándosesucasiinexistentetripa.Acadasegundomásalucinadaportodoloquemeestácontandoenmediodelacalle,noséniqué
decir.HastahaceapenasquinceminutosnosabíaqueMartateníanovio,yahora,depronto,sevaacasaryestáembarazada.Martahabla...,hablayhabla.Estánerviosa.
—¿LosabeSonia?Ellaniegaconlacabeza.—Pensaba decírselo luego amamá. Primero quería contárselo al troglodita demi hermano y,
como sabía que tú estabas enMüller, pensé que seríasmi gran apoyo cuando élme llamara loca,desequilibradaydescerebrada.
—No,mujer...¿Cómotevaadecireso?Ambasnosreímosyellaprosigue:—Porcierto,¿recuerdaseldíaquevinisteisconFlynalhospital?—Yoasiento—.Puesmimala
cara era porque, segundos antes de llevar a Flyn hasta vosotros, acababa de vomitar..., ¿no esemocionante?
Lamiroboquiabiertayasientoalpensarenelascoquemedabacuandoyoestabaembarazada.—Emocionantísimo.Mi cuñada, que está sobreexcitada, no para de hablar. Yo la escucho y así llegamos hasta un
restauranteespañolquenosencanta.Allínosponemosmoradasajamoncitodelrico,tortilladepatataconcebollitaycarneensalsay,cuandovoyaexplotar,digo:
—Marta,ariesgodeparecerunaidiota,quieroquesepasqueelmatrimonionoesunjuegodehoytequieroymañanano.
—Losé—respondeellasonriendofeliz—.Peroestoytanenamoradaqueséquetodovaasalirbien.
Asiento.Merindo.Nopiensovolveraserlanotadiscordante,yentonceselladice:—Drewyyoqueremoscasarnosantesdequenazcaelbebé.Lollevamospensandounosmesesy,
bueno...,hemosdecididohacerlodentrodeunpardesemanas.¿Quéteparece?—¿Dentrodeunpardesemanas?Martaasiente.—¡Y, por supuesto—añade—,quieromi despedida de soltera en elGuantanamera!Tengoque
avisaraMelyatodoslosamigos,¡verásquéfiestón!Enese instante,meentra larisa.Larisafloja. ¡CuandoseentereEric,vaaflipar!Martaseríe,
creoquesabeloquepienso.Lasdosnosdescojonamosy,enelmomentoenqueconsigoparardereír,murmuro:
—Veráscuandoseenteretuhermanodelaboda...—PeorvaasercuandosepaquetevoyallevardenuevoalGuantanamera.Esonoshacevolverareírotravez.Nolopodemosremediar.Tras una comida en la que no paro de desternillarme con la loquita de mi cuñada, ella me
convenceparaquelaacompañeadarlelanoticiaasumadre.Aceptoencantada:adoroamisuegraypornadadelmundomeperderíasucaracuandoseentere.
CuandollegamosalbarriodeBogenhausen,dondeviveSonia,nosparamosantelaverjaoscuradelpreciosochalet.
—¿Tepuedescreerqueestoynerviosa?—Tranquila.Yasabescómoestumadre.Seguroquesealegra.Unavezllamamosaltimbre,laverjaseabreyentramos.Sealaépocaquesea,eljardíndeSonia
essiempreunamaravilla.AdmirándoloestoycuandoAmina,lamujerquetrabajaparaella,nosabrelapuertadeentradaysaluda:
—Buenastardes,laseñoraestáenelsalón.Martayyosonreímospero,encuantoentroenelsalón,lasonrisasemecortadesopetón.¿Qué
hacenEricyGinebraallí?Boquiabierta,miroamimarido,que,alverme,selevantarápidamenteydice:—Hola,cariño.Loobservoy,cuandoveoqueMartaabrazaaGinebracondemasiadaefusividad,murmuro:—¿Quéhacesaquíconella?Peronopuederesponderme.Sonia,queyaestáamilado,meabraza,mebesuqueacomosiempre
y,cogiéndomedelamano,mesientaasuladoydice:—Quéalegríatenerteaquí,Judith.—Y,mirandoalamujerqueconsiderounaextrañayquenosé
porquéestáallí,añade—:YamehadichomihijoqueconocesaGinebra,¿verdad?—Sí—afirmo.Ginebrayyonosmiramosyentonceselladice:—Noshemosvistounpardeveces.Cuandolaconoció,FélixdijoqueJuditheraunamujercon
claseysaberestar,alaparquedivertidayguapa.QuésuertehatenidoEric.Soniasonríey,sinsoltarmimano,declara:
—Estoy totalmente de acuerdo con Félix; todo lo que yo pueda decir de Judith es poco. Es lamejornueraqueunasuegraquerríaparasuhijo.
EstoyencantadaconsuhalagocuandoSoniasueltamimano,cogeladeGinebraeindica:—Perotúmehasdadohoylasorpresadeldía,Ginebra.Tengotanbuenosybonitosrecuerdosde
tique,cuandohasaparecidoconmihijo,hetenidolaimpresiónderegresaralpasado.—Mamá,porfavor,noexageres—murmuraEricsentándoseamilado.Bueno...,bueno...,bueno...Noséquépensar.Aquíestoy,conmisuegra,micuñada,mimaridoyla
exdeél;¡todoestoesmuysurrealista!Aunasí,intentoprefabricarunasonrisaconvincente,asientoyrespondo:—Tumaridotambiénmeparecióunbuenhombre,Ginebra.Díselodemiparte.Ella sonríey, con sudesparpajohabitual, comienza a recordar cosasqueveoquehacen reír a
Marta,aSoniayaEric.Yotambiénsonrío,hastaquenopuedomásy,levantándome,digo:—Simedisculpáis,voyunmomentoalbaño.Sinmiraratrás,salgodelsalón.Meencaminohaciaelcuartodebañoy,unavezdentro,echoel
pestillo.Mepongolamanoenelcorazón.Mevaamily,mirándomeenelespejo,observoquemicuellocomienzaaenrojecerse.Rápidamentemeechoagua.Noquieroqueningunosepercatedequeestoynerviosay,cuandonotoquelarojezdesaparece,sientoalivio.
Tanprontocomosalgodelbaño,regresoalsalóny,alentrar,meencuentroaloscuatroriendo.Siguenconsusrecuerdosy,oye...,¡loentiendo!Perometocalosovarios.YamegustaríaamíveraEricconmipadre,mihermanayunexmíorecordandotiempospasados.
Mimaridomemira.Buscamicomplicidady,dispuestaadársela,leguiñounojo,meacercoaélylobeso.
Misuegra,que llevayaañoshaciendoparacaidismo,habladesusúltimossaltos,yEric,comosiempre,noquiereniescuchar.RiéndomeestoyporellocuandooigoqueMartadice:
—Bueno,mamá.Yoveníaacontarteunpardecosillasimportantesy,yaqueestáEricaquí,puesoslodigoalosdosalavezy,así,comovulgarmentesedice,matodospájarosdeuntiro.
Aloíreso,Ginebrahaceademándelevantarseparairse,peroMartalasujetaydice:—Tranquila,nohacefaltaquetevayas.Esometocalamoral.Peroloentiendo:micuñadaesmuycorrecta.SoniayEricclavanlasmiradasenMartacuandoésta,trasmirarmeenbuscadeapoyo,levantala
manoysuelta:—¡Mecaso!Cricri...,cricri...,seoyenlosgrillosdeljardín,hastaqueSoniamurmuraincrédula:—BenditoseaDios.El silencio se apodera de nuevo del salón. Se puede decir que podría oírse hasta una hormiga
caminarporeljardíndepuntillas,hastaqueEricpregunta:—¿Quetecasas?—Sí.Conunaexpresiónindescifrable,miamormiraasuhermanaeinsiste:—¿Yconquiéntecasas?Marta,alaqueleimportantresnariceselgestoseriodemiIceman,sonríeyresponde:
—ConDrewScheidemann.Sonia,quesigueboquiabierta,preguntaentonces:—¿YquiénesDrewScheidemann?Nopuedo...,nopuedo...,nopuedo.Merío,¡merío!Yalfinalsemeescapalarisotada.¡Estodotansurrealista...!Martamesecunda,yentoncesEric,mirándonosalasdos,gruñecongestoserio:—Nosédóndeleveislagracia.Vale.Dejamosdereírantesdequenoscoma.—A ver, hija—dice Sonia echándose hacia delante—. Sabes que soy una madre abierta a tus
locuras,perounaboda...—Losé,mamá—lacortaMarta—.SéquemevasadecirlomismoqueJudmehadichodequeel
matrimonionoesunjuegodehoytequieroymañanano.Perodebessaberqueestoyseguradeloquehagoyconquiénlovoyahacerporquenoesalguienqueconocíayer,sinoalguienqueconozcodesdehaceañosy...
—¿SelahasestadopegandoaPeter?—rugemialemán.—¡Eric!—protestoyo.Aloíreso,Martalomirayresponde:—No,hermanito.Cuandoestoyenparejasoyterriblementefiel.PeroaDrewloconozcodesde
hacetiempoporquetrabajaenelhospital.Portanto,quetequedeclaroque,cuandoestuveconPeter,sóloestuveconél;¡nosaquesconjeturasquenosonciertas!
Ginebra nos mira. Se levanta de donde está y sale del salón. Yo la miro. ¿Adónde va? Dossegundosdespués,vuelveaentrary,sentándosejuntoaSonia,dice:
—LehedichoaAminaqueteprepareunatila.Anda,mimadre,¿ahoravadesalvadorayseñoradelacasa,lacolega?Ericsigueaúnboquiabiertopor lanoticiacuandoMartaabresubolsoy,sacandolapruebadel
delito,quenoesotraqueladelembarazo,laenseñayañade:—También... tambiénquierodecirosqueestoyembarazadadecuatromesesyestoymuy...muy
feliz.¿Cómoqueréisquenomería?Ay,Dios,quemepartootravez.Las caras deEric y sumadre son lomás gracioso que he visto últimamente. Pero entonces la
pobreSoniamusitaconunhilodevoz:—Embarazada...Tú,embarazada.—Sí,mamá.Yo,embarazada.¡Voyatenerunbebecito!—Veoquesonríe—.¿Aquemola?—Joder,quélocura—suspiraEric.Misuegrasedaaireconlamano.Ofú,quéfatiguitaquelehaentrado;peroentoncesconsigue
decir:—Pero,hija,siatisetemuerenhastalasplantasdeplástico.—¡Mamá!—protestaMarta.—Quelatilaseadoble—diceSoniatocándoseelrostro.Ericmiraasumadre,parpadeayselehinchalavenadelcuello.Oh...,oh...,¡peligro!Y,antesde
que suelte alguna de las suyas, me levanto y, abrazando aMarta para que sienta mi total apoyo,
exclamo:—¡¿Noosparecebonitootrobebémásenlafamilia?!ConelrabillodelojoobservoquelavenadeEricsedeshincha.¡Menosmal!Entonces,Ginebraselevanta,secolocaamiladoydice:—Enhorabuena,Marta.Porlabodayporelbebé.Micuñadaaceptagustosasuabrazo,yacontinuaciónSoniaseponetambiénenpieymurmura
emocionada:—Ay,hija...Ay,hija...,nuncapenséquellegaríaestemomento.Sonriendo,Martalaabraza.¡Aestamujernohayquienlaentienda!Eric,queaúnnosehamovido,nosmiraentoncesysuelta:—Pero¿oshabéisvueltotodaslocas?—Eric...—murmuro.—No,Jud...,¡cállate!—protestamigruñón—.Estadescerebradasevaacasarconalguienqueno
conocemos,¿yencimavaatenerunbebé?Martasesientacontranquilidadenelsillóny,mirándome,cuchichea:—Telodije.Tedijequeelcontroladorysabelotododemihermanitomellamaríadescerebrada.—Marta,nopiquesatuhermano—replicaSonia.—No, mamá, déjala que me pique—gruñe mi amor—. Ya vendrá luego llorando cuando su
mundo,comodiceella,selevuelvadelrevés.Marta,alaquenoselemueveniunpelo,memiraysemofa:—Deverdad,chica,quenosécómosoportasaestetroglodita.Sucomentariomehacesonreír,peroentoncesEricprosigue:—¿Quétalsievitascomentariosabsurdos,ytú—siseamirándome—dejasdesonreír?—Eric,hijo...—loregañaSonia.Peromialemán,quecuandoseenfadaesunaapisonadora,responde:—Noteentiendo,mamá.Estaimprudenteteestádiciendoqueestáembarazada,quesecasaconun
desconocido,¡ytúnodicesnada!Bueno...,bueno...,aquísevaaarmarlamarimorena,yefectivamente¡searma!Alfinal,Martaselevanta,comienzaadiscutirconEricymialemánnosecalla.Aminaentray
dejaunabandejaconvariastazasyunateteracontilayhuyedespavorida.Durantevariosminutos,EricyMartaseechanencaratodoloquequierenymás,altiempoque
GinebralosobservaySonialosreprendeporsuscomentariosmientrasbebetila.Cuandocreoquehededeciralgoparaintentarmediar,GinebraseacercaaEricyseñala:
—Escucha,cielo,Martayaesmayorcitaparasaberloquequierehacerconsuvidaigualquetúlofuistecuandotecasaste,comomehascontado,sinconocerapenasaJudith.
¡Tócatelosbolondrios!Pero¿dequéhablaésay,sobretodo,quélehacontadoeltroglodita,pornodecirgilipollas,de
mimarido?Sucomentarionomegusta,ymimiradalediceabsolutamentetodoloquepiensoamigilipollas
particularcuandoGinebraprosigue:—Eric,túhasencontradoalamordetuvidaenJudith.¿PorquéMartanohapodidoencontraral
suyo?Vale...,esoyamegustamás.¿Ericlehadichoquesoyelamordesuvida?Mimiradasesuaviza.Ladeéltambiény,finalmente,Martarompeallorarsentándoseenelsofá.Sonia,GinebrayyomiramosaEric.Esperamosquehagaalgo,queloarregle,yél,trasponerse
lasmanosenlascaderas,sacudirlacabezayresoplar,sesientajuntoasuhermanaydice:—Losiento.—¿Porquélosientes?—gimoteaMarta.—Porquesoyunbocazasademásdeuntrogloditayungilipollascomopiensamimujer.Esomehacesonreír.SécuántoquiereaMarta,yentonceslooigodecir:—Yame conoces, todome lo tomo a la tremenda, pero es porqueme preocupo por ti.No sé
quiéneseseDrewyesomedesconcierta.Perositúeresfeliz,sabesqueyolovoyasertambién,ymásahoraquetendremosaotropequeñíncorreteandopornuestrascasas.
Martadejadelloriquear,levantalamiraday,sonriéndoleamiamor,explica:—Drew es médico anestesista en el hospital, y la persona más cariñosa y caballerosa que he
conocidoenmivida,ademásdeti.Y,aunquenolocreas,suseriedadtanparecidaalatuyafueloquellamómi atención.Élme calma,mehace ver la vida de otramanera, y te aseguro que cuando loconozcastegustará.
Ericsonríeyabrazaasuhermana.¡Ay,quémonoqueesmichicarrón!Unavezveoquetodosecalma,Soniasuspiray,sentándosejuntoasuhijaenelsofá,pregunta:—Bueno,yahoraquetodosestamosmástranquilos,¿labodaparacuándoes?Martamemira.Yomiroaltechoyfinalmenteellasuelta:—Paradentrodedossemanas.—Traedme unMartini doble—murmura Sonia mientras Eric resopla y yo me río sin poder
remediarlo.
21
Tras pasar la tarde en casa deNeill y Romina, cuandoBjörn yMel regresaron a la suya estabanagotadosperofelices.Estarconaquellosamigoserasiempredivertido.
Ese día le tocaba a Björn bañar a Sami mientras Mel preparaba la cena. Cuando terminó, laextenientesonrióaloírloscantarenelbaño:«Yyatúvasaestarlimpia,bellaytodolodemás,conmistoquesvasaentusiasmar,nombreyhonranosdarás».[15]
A su hija siempre le había gustado aquella canción de la películaMulán, y Björn, que eraconscientedeello,selahabíaaprendidodespuésdeverlatantísimasvecesconlaniña.Siemprequelabañabaellalepedíaqueselacantara,aloqueélaccedíagozoso.
Una vez terminaron del baño, cenaron los tres y, luego, de nuevo aBjörn le tocó contarle uncuentoalapequeña,momentoqueMelaprovechóparaprepararsusorpresita.
Comosiempreque le tocabaaélcontar loscuentos, laniñaseaprovechabay lehacía leerdoscapítulosenvezdeuno,yélaccedía.Eraincapazdedecirlequenoasupequeña.
Cuandoacabó,MeloyódesdeelpasilloqueBjörnaúnleía.Sonrió.Saminopodríatenermejorpadre.
Entonces,laniñapreguntó:—Papi,¿porquélabrujaledaunamanzanarojaaBlancanieves?—Porqueeratanguapa...tanguapa...quelabruja,celosadesubelleza,queríaenvenenarla.—¿Yporquélamanzanaerarojaynoverdeoamarilla?Björnsonrió.Samiysuspreguntas...—Porquelasmanzanasrojassonmágicasymuy...muydulcesyenocasionesconcedendeseos,y
alabrujaleconcedióeldeseodeenvenenaraBlancanieves.Su respuesta pareció convencer a la niña, y Björn continuó hasta que Sami lo interrumpió de
nuevo:—Papi¿yporquéMuditonohabla?¿Nosabehablar?Al oír eso, Mel se asomó para ver la cara de Björn. Él, suspirando, pensó un momento la
respuestayfinalmentedijo:—Tú sabes que hay niños que estánmalitos de los ojos y no pueden ver, ¿verdad?—La cría
asintióyélañadió—:PuesMuditonaciómalitodelavozynopodíahablar,peroporlodemásél...—Pero¿noleenseñaronahablar?Björnsonrió.ExplicarleciertascosasaunaniñadelaedaddeSaminoerafácil.—Lointentarontodoslosenanitos,incluidaBlancanieves,perolavoznuncaquisosalir.—Pobrecito,¿verdad?—Björnasintió,ySamiañadióacontinuación—:Ysimivozmañanano
quieresalirynopuedohablarmás,¿cómotevoyapedirquemecuentesuncuentoporlasnoches?Aloíreso,Melseemocionó,yBjörn,enternecidoporlossentimientosqueaquellapequeñarubia
ledespertaba,contestócerrandoelcuento:—Teaseguro,princesa,quesimañananotesalieralavoz,yoconmirartealosojossabríaloque
mepides.—¿Deverdad?Björnlabesóenlafrenteyasintió.—Cariño,lospapásylasmamásmuchasvecessabemosloquequierennuestrosniñossólocon
mirarlos a losojos. ¿Oacasono tehasdadocuentade cómoenocasiones, sinque túdigasnada,mamáoyosabemosquequieresunheladoounachocolatina?
Laniñaasintióy,abriendomucholosojos,cuchicheó:—Soismágicos,comolasmanzanasrojas.Elabogadosonrió.—Exacto—convino—.Somosmágicos,yahora,¿continuamosconelcuento?SamiasintióyBjörnsiguióleyendohastaque,pasadosdiezminutos,cerróellibroydijo:—Ahora,adormir,señorita.—Jo,papi...—Adormir—insistióélconcariño.Samino tardó en claudicaryBjörn la arropó.Adoraba a supequeña tanto comoadoraba a su
madrey,dándoleunbesoenlapuntadelanariz,leacomodósumuñecapreferidaysusurró:—Buenasnoches,princesa.—Buenasnoches,papi.Feliz,Björnencendióelintercomunicadorporsilaniñalosnecesitabadurantelanocheysalióde
lahabitación.AlencontrarseconMelenelpasillovestidaconsubatadesaténnegraexcesivamenteabrochada,sonrió.Ellaleechólosbrazosalcuelloylobesóenlaboca.
—Hola,miamor—susurró.Embrujadoporaquellademostracióndeamor,Björncuchicheó:—¿Quieresquetecuenteuncuentoatitambién?Melsonrió,clavó losojosenaquéllos tanazulesy,hundiendolosdedosen laespesacabellera
oscuradesuchico,musitó:—Llévamealahabitación.—¿Así?¿Deltirón?—dijoélriendo.—Llévamealahabitación—insistióella.Concaradepilluelo,Björnhizoloqueellalepedía.Pensóque,sinduda,aMellehabíaidobien
quedar con Neill y Fraser para olvidarse un poco de lo ocurrido últimamente. Al entrar en lahabitación,seencontróconquelaestanciaestabaporcompletoalumbradaconvelas.
—Cierralapuerta—pidióella.Denuevo,Björnhizoloqueellaledecía.Luegolamiróymurmuró:—Estoseponemuy...peroquemuyinteresante.Encantadaporcómoéllamiraba,Melcogióunsobreyselotendió.—Léelo.Björn,queacadainstantesentíamáscuriosidad,abrióelsobreyleyó:
Samiduermeynoquierodespertarla.Cogeelintercomunicadorparapoderoírlasisedespiertay,después,damelamanoyvamosatudespacho.
Losojosdeélbuscaronlosdeella,yéstadijoconunasonrisa:—Losiento,amor.Debesabrirlapuertay...—No...—murmuróBjörndecepcionadocomouncrío,mirandolacama.Melasintió,seencogiódehombroseinsistió:—Vamos.Tusorpresateesperaeneldespacho.Saberqueallítambiéntendríasorpresalohizosonreíry,trascogerelintercomunicador,Björn
abriólapuertaycaminaronhaciasudespacho,unlugarbastantealejadodelahabitacióndeSamiydelrestodelacasa,yaqueseencontrabaenelpisodeallado.
Unavezallí,alencenderlaluz,éstasetornórojay,divertidoalverloscientosdebombillasdecoloresdeladecoracióndeNavidad,élcuchicheómirándola:
—Recuerda que luego debemos recogerlo, o mañana toda la oficina se preguntará qué haocurridoaquí.
Mel sonrió.A continuación, lo guio hasta su granmesa, lo hizo sentarse en su silla de cueronegroy,trasdarleunbesoenloslabioscalienteypasional,seseparódeélypreguntó:
—JamesBond,¿estáspreparado?Björnasintiócomoun tontocuandoella, cogiendoelmandoadistanciadelequipodemúsica,
accionóunbotóny,depronto,comenzaronasonar losprimerosacordesde lacanciónBadto theBone,[16]yaplaudióencantado.
Melseabrió labatanegray,parasusorpresa,Björnvioque ibavestidaconsuspantalonesdecamuflajeysucamisetacaqui.Luego,poniéndoselagorramilitar,sonrióycomenzóacontonearsealcompásdelamúsica.
ABjörn lochiflabaaquellacanción,yverlabailardeaquelmodo...,uf...Loexcitaba.Loponíacardíaco.Noeralaprimeravezqueellalohacía,yélesperabaquenofueralaúltima.
Cuando la bata cayó al suelo,Björn aplaudió,mientrasMel, encantada, se dejaba llevar por elmomentoybailabaúnicayexclusivamenteparaél.
Con sensualidad, se subió a lamesa y se quitó las botasmilitares.A continuación, comenzó adesabrocharseelpantalónmientrascontoneabalascaderasyobservabacómoélseguíahipnotizadotodosycadaunodesusmovimientos.
Cuando los pantalones terminaron en una esquina del despacho, lo siguiente en volar fue sucamisetacaqui,porloquequedóvestidaúnicamenteconunconjuntoverdedecamuflajedebragaysujetador.
Björnlaobservabaencantado.Aquellamujercitadescaradalohabíaenamoradoy,cuandoellasevolvió para enseñarle el tatuaje del atrapasueños de su costado, él sintió que enloquecía.Adorabacadacentímetrodelcuerpodeaquellamujer.Entoncesellaempezóamoverloshombrosysemetiósuschapasidentificativasenlaboca,yaBjörnseleresecóhastalarazón.
Melerasexi...Meleratentadora...Meleraprovocativa...
Convencidadeloquesubaileestabaocasionandoenél,bajódelamesa,sesentóencimadesuspiernasy,hechizadaporsumirada,sequitóelsujetadormientrasmovíalascaderassobrelassuyasysepasabaunamanoporlosdurospezonesparahacerleverloexcitadaqueestabaporsumirada.
—Guau,nena—consiguióbalbucearél.Luego, tras levantarse,Mel se subiódenuevoa loaltode lamesay,consensualidad,placery
erotismo,comenzóaquitarselasbragaslenta,muylentamente,frenteaél.Frenteasuamor.Björnapenassipodía reaccionar.Lesudabanhasta lasmanosalverel festínqueellacolocaba
antesusojos.Cuandoestuvo totalmentedesnuday lacanciónacabó,Melsesentósobre lamesay,casisinresuello,murmuró:
—Estoy segura de que lo que acabo de hacer escandalizaría a las mujeres de esos frikis deabogadosquetienescomoamiguitos.Peroenesteinstanteyosoyturegalo,007.Hazconmigoloquequieras.
Nohizofaltadecirnadamás.Excitadocomoestaba,Björnlahizotumbaralolargodelamesay,abriéndolelaspiernas, lachupó,ladegustóylehizoelamorconlalenguacontotalfrenesí,hastaquesus instintosmássalvajes lohicieronbajarse lacremalleradelpantalóny, trassacarsuduroyaterciopeladomiembro,lapenetróyambossearquearondeplacer.
Alverqueaella le temblabanlaspiernasacausade laexcitación,Björnsesentóensusillay,arrastrándola hacia sí, la sentó a horcajadas y la besó. No hablaron. No hacía falta hablar. Sussentimientos,unidosalmorbodelmomentoylanecesidadimperiosaqueteníanelunodelaotra,lohicieron todo. Con urgencia se amaron. Con premura se tocaron. Con exigencia se poseyeron y,cuandoelclímaxlesllegóyquedarontendidosunaenbrazosdelotro,Melmurmuró:
—Comopreliminar,nohaestadomal.—Nadamal,Parker—afirmóélsinresuello.Instantes después, Björn volvió a endurecerse e hicieron el amor sobre lamesa con auténtica
locura.—Dicenquenohaydossintres—cuchicheóMeltrasesesegundoasalto.Agotadoysudoroso,Björnlamiróysonrió.—¿Estásdispuestaamatarme,cariño?Melasintióylobesó.—Sindudaalguna—afirmó—.Hoyestoydispuestaatodoporti.Encantadoporlaentregaqueestabademostrandoaquellanoche,elabogadolabesósinresuello
hastaqueellapropuso:—¿Quétalsivamosalacocinaaporalgodebeberantesdequenosdeshidratemos?Divertidoyamediovestir,Björnaceptó.Melrecogiórápidamentesuropay,trasdesenchufarlas
lucesrojasdeNavidad,sepusosubatanegra.—Vamos,cariño...,sígueme—dijo.Björn fue tras ella sin dudarlo.Abrieron la puerta que comunicaba el despacho con la casa y,
despuésdecruzarelpasillo, llegaronalacocina,dondesoltaronlaropaylasluces.Sedienta,Melabriólaneveraysacódoscervezas.LasabrióyleofrecióunaaBjörn,queseapresuróacogerlay,traschocarlaconladeella,dijo:
—Portiyporquemesigassorprendiendo.
Melsonrió.Esoesperaba.Apoyados contra la encimera de la cocina, ella reía ante los comentarios provocadores que él
hacíaenreferenciaacómoloponíaqueMelbailaraparaél.Cuandoseterminaronlascervezas,ellasesacóotrosobredelbolsillodelabatadesedanegrayseloentregódiciendo:
—Ábreloyleeloquepone.Complacido,Björnhizoloquelepedíayleyó:
Paraestanochetanespecialhabríaqueridotenerfresas,peronotuvetiempodeiracomprarlas.Aunasí,tengochocolateyunafrutamágica;¿adivinascuáles?
Éllamirósorprendidoysusurró:—Fresasychocolate,¡québuenosrecuerdos!Estocadavezprometemás.Melsonriósatisfechaporsucomentarioy,trasabrirlanevera,sacóunarelucientemanzanaroja
yunbotedeNutella.—No hay fresas, mi amor—dijo—, pero he oído en algún lado que las manzanas rojas son
mágicasyenocasionesconcedendeseos.—¿Ah,sí?—Sí.—Y,entregándolelamanzana,añadió—:Parati.Björnlacogióy,sinmirarlafruta,murmuró:—EresmiEvaypretendesquemuerdalamanzanacomoAdán.—Sí.Seríaunplacervercómolamuerdes.Másymássorprendidocadavez,Björnmirólamanzanay,alverquedeellasobresalíaunfino
papelenrollado,levantólavistahaciaMel.—¿Eljuegocontinúa?—preguntó.—Sí,cariño.Eljuegocontinúa.Leeloquepone.Disfrutandodelmomento,Björndesenrollóelpapelitoyleyó:
Porquenoquierovivirsinti,porqueSamiteadorayporquenosquieresalasdoscomonuncahevisto querer a nadie, ¿quieres casarte conmigo en Las Vegas el 18 de abril y más adelante locelebramosparalafamiliaenMúnich?
LacaradeBjörnalleeraquelloeraalgoqueMelsabíaquenopodríaolvidarenlavida.Lamiró
con sus impactantes ojos azules y, tras parpadear y asumir que lo leído era verdad, asintióemocionado.
—Porsupuestoquequierocasarmecontigoesedía,miamor.Melselanzóasusbrazosyéllaaceptó.Amabaconlocuraaaquellamujery,porfin,ellasehabía
decidido a dar el paso. Se abrazaron y se besaron hasta que, de pronto, Björn la apartó de él ymurmuró:
—Entonces¿estohacequeolvideslaideadeserescolta?AMelnolegustóoíresopero,comonodeseabaromperaquelmágicomomento,respondió:—Cariño,esoyalohablaremos.
Convencidodequeeramejorcallarydisfrutardesutriunfo,Björnasintióyvolvióabesarla.—Sientonotenerunpreciosodiamanteparadarte—dijo—,peroteprometoquemañanamismo
tecomproelquetúquieras.Laextenientesonriódivertida;elanilloeraloquemenosleimportaba.Luego,trasabrirelbote
deNutella,metió lamanoy, cogiendoeldedodeBjörn, lountódechocolatea la alturadonde seponenlosanillosyseñalódivertida:
—Yatienestuanillo.¿Meponesunoamí?Asombradopor laoriginalidadqueMel ledemostrabasiempreen todo,élmetióeldedoenel
tarroy,cogiéndoleeldedoaella,ledibujóotroanilloconchocolate.Segundosdespués,enamoradosyfelices,seretiraronjuntosalahabitaciónconelbotedeNutella.
Sinduda,recordaríanaquelmomentoelrestodesusvidas,aunquenohubieranifresasnidiamantes.
22
CuandosalimosdecasadeSonia,MartayGinebrallamanauntaxiparairasusdestinosynosotrosnosdirigimosalgarajeparasacarnuestrocoche.Ensilencio,Ericmaniobramientrasyomepongoelcinturóndeseguridad.
Unavez hemos salidode la parcela y le he dicho adiós aSonia con lamano,me apoyo en elreposacabezasycierrolosojos.
—¿Cansada?—preguntaEricconvozneutra.Porsu tono,veoqueesperaquediscutamos.Sabequehaberloencontradoencasadesumadre
conGinebranomehahechogracia,perorespondo:—Sí.—Pequeña,creoque...—Nomellamespequeña,¡ahorano!—siseoapuntodesaltarlealayugular.Ericmemira.—Jud...Yya,incapazdemantenerarayamiincontinenciaverbal,respondo:—Pero¿túerestontoodirectamentemetomasamíporidiota?Mirespuestalosorprende.Veoqueacercaelcochealaaceraypara.Echaelfrenodemanoy,
mirándome,pregunta:—¿Mepuedesdecirquétepasa?Micuerposerebela.Meentraelcalorespañoly,mirándolo,siseo:—¿QuéhacíasconGinebraencasadetumadre?—Tenía que hablar con mi madre. Cuando terminamos de comer, lo comenté y Ginebra me
preguntósimeimportabaquepasaraasaludarla.Nopudedecirlequeno.—Nomehabíasdichoqueteníasqueverla,¡mientes!Ericcierralosojos,suspirayfinalmentemurmura:—Jud.Ellaymamásellevabanmuybien,ynohepodidodecirlequeno.Asiento.Oasientoolopateo.Y,conmáscalorquesegundosantes,mequitoelcinturóndeseguridad,abrolapuertaysalgoal
exterior.Necesitoaireantesdequemedéalgo.Ericsaledelcochecomoyo.Lorodeay,poniéndoseamilado,pregunta:—Cariño,¿enserioestásasíporqueGinebrahayavisitadoamimadre?Resoplo.Mepicaelcuello.Melorascoy,cuandoélmevaaquitarlamano,lomiroygruño:—Nometoques.—¡Judith!Su voz de ordeno y mandome saca de mis casillas y, sin importarme la gente que pasa por
nuestroladoynosmira,grito:—¡¿TandifícileradecirmequeibasallevaraGinebraacasadetumadre?!—Ericnoresponde,y
yoañado—:Intentoconfiarenti.Lohago.Intentonopensartonterías,pero...—¿Quieresbajarlavoz?—protestaalvercómonosmiran.Oíresomesubleva.Meimportaunamierdaquiénnosmire,porloquerespondo:—No. No puedo bajar la voz, como tú no has podido decirle que no a Ginebra. ¿Te valemi
contestación?Ericlevantalasmanos.Setocalanuca,blasfemay,mirándome,dice:—Aveceseresinsufrible.—Anda,mimadre,¡másvalequemecalleloqueaveceserestú!Micontestación,llenadechulería,loincomodaysiseacongestotosco:—Subealcoche.—No.Mialemánbajalabarbilla,achinalosojosyrepite:—Subealmalditococheyvayamosacasa.Éstenoessitioparadiscutir.Eneseinstanteoigolasrisitasdeunasmujeresquenosobservany,singanasdeliárselaaellas
también,memontoenelcocheydoyuntremendoportazo.Ericmontaasuvezydaotroportazo.Pobrecoche,elmaltratoqueleestamosdando...
Enunsilencioextrañollegamosacasa,peromedaigual.Siselehaceincómodo,quesejorobe.Nomeimporta.Estoymolesta.Muyenfadada.
UnavezhesaludadoaSustoyaCalamar,pueslospobresnotienenlaculpadenada,entroporlapuerta que comunica el garaje con la casa y rápidamente el pequeño Eric viene corriendo a miencuentro.MealegraverquePipaloshamantenidodespiertoshastanuestrallegada.Locojo,lobesoyloachuchocuandoelniñomemiraydice:
—Mami,hecomidogalletas.Satisfecha porque ha dicho una frase entera, miro a Eric, éste sonríe y, quitándomelo de los
brazos,ledauncariñosobesoenelmoflete.—Muybien,Superman—dice—.¡Muybien!Esapequeñacosameacabadealegrarelmomento,ysonrío.Nolopuedoevitar.Unavezentramosen lacocina,veoqueHannahestámuertadesueño.Esdemasiado tardepara
ellos,pero la sacodesu trona, labesuqueocomoanteshehechoconmipequeñoy laniñasonríefelizporestarconsumamá.
Duranteunratoreinalafelicidadenlacocina, losniñossemerecenquenosotrosdisimulemosnuestromalestar,hastaqueFlynabrelapuerta,separay,alvernosreíratodos,nosmiraypregunta:
—¿Molesto?Ericyyo lomiramos.Sinduda, el críoyavienecon la escopeta cargada.Maldía.Maldía.Y,
antesdequemialemándigaalgo,respondo:—No,cariño,claroqueno.Flynentray,sinmirarnos,cogeunalatadecoca-coladelfrigorífico,laabre,selabebededos
tragosy la deja sobre la encimera.Acto seguido, se da la vuelta y se dispone a salir de la cocinacuandoSimonalollama:
—Flyn.Élcontinúaandando.—Flyn—insistelabuenamujer.Élnohacecaso,esohacequeEricyyomiremosy,cuandoporterceravezSimonalollamayél
niseinmuta,nopuedocallarmeantesufaltaderespetoygrito:—¡Flyn!Ahora,sí.Ahorasísepara.SedalavueltayEric,tanmolestocomoyo,lerecrimina:—¿NooyesaSimona?Congestocontrariado,élresoplaymiraaSimona.—¿Quéquieres?—pregunta.Lamujer,yanerviosapornuestraatención,murmura:—Cielo,lalatanosedejaahí.TodosmiramosaFlyn,yentonceselmuysinvergüenzaresponde:—Puestíralaalabasura.¡¿Cómo?!Bueno...,bueno...,bueno...,esosíqueno.¡Chulerías,lasmínimas!VuelvoadejaraHannahensutronay,acercándomeamiadolescentecreciditodehumos,pongo
mirostrofrentealsuyoysiseo:—FlynZimmermanFlores,hazel favordecogeresamaldita latadecoca-colaahoramismoy
tirarlaalabasura,antesdequepierdalapocapacienciaquemequedaytedétaltortazoquenolovasaolvidarenlavida.
Elcríomemira...,memira...,memira.Mereta.Lesostengolamiraday,finalmente,conunasonrisitaqueesparadarledoscollejas,cogelalata
ylatiraalabasura.Unavezlohahecho,vuelveamirarmey,conunaprovocaciónquemeponelospelosdepunta,
pregunta:—¿Contenta?EneseinstantemeacuerdodeloquehabléconMely,comosimimanotuvieravidapropia,le
doyunabofetadaquesuenahastaconecoy,sinpoderevitarlo,pregunto:—¿Contento?Sorprendido,Flynsellevalamanoalacara.Joder...,joder...,joder...,pero¿quéacabodehacer?Nuncalehepegado.Nuncamehecomportadoasíconél.Sindecirnada,Flynsedalavueltay
saledelacocina.Loacabodeofender.Hannah se pone a llorar y, al mirar en su dirección, veo el rostro de Eric. Está blanco,
sorprendido y, sin decirme nada y de malos modos, sale de la cocina. Observo a Simona y,agarrándomealaencimeradelacocinaporlatemblequeraquemehaentrado,murmuro:
—No...noséquémehapasado.Lamujer,tannerviosacomoyo,mehacesentarenunasilla.Alverelpercal,Pipaseapresuraa
llevarsealospequeñosalacama.Simonasesientaentoncesamilado.—Tranquila,Judith—dice—.Tranquila.
Peroyonopuedoestartranquila.LehedadounbofetónaFlynporelenfadoquetraíaconEric.Lamiroymusito:
—Hehechomal...,¿cómohepodidohacereso?Un rato después, me veo cenando sola en la mesa del salón. Ni Flyn ni Eric tienen hambre.
Mientrasmemeto un trozo de tomate en la boca,maldigo. ¿Por qué no pierdo el apetito con losdisgustoscomoelrestodelahumanidad?
Esquehayquejorobarse,amílosdisgustos¡medanhambre!Unavezheacabadodecenar,no séquéhacer.Estoyextraña.Mesientomalpor loocurridoy
decido irahablarconEric.Medirijoasudespachoyveoquenoestá.Voya lapiscinacubiertaytampoco está. Entro en nuestra habitación y tampoco se encuentra allí. Decaída, paso a ver amispequeños.Losdosduermencomoangelitosy,despuésdebesarlosconcariñoenlacabeza,alsaliroigolavozdeEric.ProvienedelahabitacióndeFlyn.
¿Entroono?Trascontarhastaveinteparacogerfuerzas,decidoabrirlapuerta.Losdosmemiranconojosacusadores.¡Seráncabritos!Sus miradas me hacen sentir como la madrastra del cuento de Blancanieves. Durante unos
segundosambospermanecencallados,hastaqueEricprosigue:—Como decía, he hablado con la abuela Sonia y ella se quedará contigo durante los días que
estemosenMéxico.Lehedadoinstruccionesenreferenciaatuslimitacionesportucastigo.—PeroyoqueríairaveraDexter—sequejaelcrío—.Leprometíqueiríalasiguientevezque
fueraisy...—Enlavida,todacausatieneunefecto—locortaEric—.Ytúsolito,contucomportamiento,te
lohasbuscado.Flynrefunfuña.Nimemira.Yoloobservoypregunto:—¿Lehaspedidoyalatutoríaatuprofesor?Elchavalrespondesinmirarme.—Sí.Asiento.Quierodisculparmeconélpormibofetón,ydigo:—Flyn,conrespectoaloquehaocurridohoy,yo...—Mehaspegado—mecortaélsinmirarme—.Nohaynadaqueaclarar.—Claroquehayqueaclarar—afirmodispuestaahablar.Elcrío,quenoestáporlalabor,miraaEricenbuscadeapoyo,yéldice:—Jud,mejordéjaloestar.Nolojorobesmás.Alucinadaporsurespuesta,oigoentoncesqueFlyndice:—Ahora,sinoosimporta,quierodormir.Meimporta.¡Claroquemeimporta!Quieroaclararloocurrido.Quieroquesepaqueestoyarrepentidaporello,perosufrialdadylas
palabrasdeEricmetocanelcorazón,ynoséniquédecir.Mimaridomemira,mehaceunaseñaconlacabezaparaquemeretireyyosalgoabatida.Élsale
trasdemíy,mirándome,dice:—Jud,acompáñamealdespacho.
Sincogermedelamanocomohabríahechoenotrasocasiones,comienzaabajarlaescalera.SéquenovamosanuestrahabitaciónparaqueFlynnonosoigadiscutir,ymepreparoparalaartilleríapesadaquemevaasoltarIceman.
Unavezensudespacho,Ericcierralapuertay,mirándome,sisea:—¿Cómohaspodidopegarle?—Nosé...,yo...—¿Cómoquenolosabes?—subelavozmialemán.Tengo dos opciones: hacerle frente o callarme. Con lo nerviosa que estoy, casi sería mejor
callarme,peroEricesespecialistaensacarmedemiscasillas,yrespondo:—Es lasegundavezque le faltaal respetoaSimonadelantedemí,ynose lovoyaconsentir.
Sientoenelalmahaberledadoesebofetón,noséquémehapasado,pero...pero...—Nodeberíashaberlohecho.—Losé.Séquenodeberíahaberlohecho,peroFlynnopuedecomportarseasí.Deacuerdoquetú
y yo lo tenemos bastantemimado y le damos todo lo que en ocasiones no semerece, pero si nocortamosesamaneradehablarleaSimona,conelpasodeltiempoiráapeory...
—Novuelvasaponerlelamanoencima.Sumiradameenfadamásquesuspalabras,ysiseo:—Ytúnovuelvasahablarmedelantedelniñocomolohashecho.¿Teparecebonitodecirmeque
mecalleynolalíemás?—¿Tehaparecidomalmicomportamiento?—Asiento,claroquemehaparecidomal.Yentonces
élañade—:Puesesoesloquetúhacescontinuamenteconél;¿aquemolesta?Vale..., acaba de meterme un golazo por toda la escuadra. Tiene razón. Pero, como no estoy
dispuestaacallar,siseodenuevo:—Meparecequeese«déjaloestarynolojorobesmás»hasobrado,¿nocrees?—Nolocreo—respondeélfuribundo.Suvoz,tensaytajante,hacequemicorazónsedesboque.¿Acasonomeestáescuchando?Insisto:—Teaseguroqueamímeduelemásqueatielhechodehaberledadoesebofetón,peronopodía
consentirsufaltaderespeto.Esunniñoy...—Novuelvasapegarlenuncamás—repite.Vale..., hasta aquí ha llegado mi paciencia. Cambio el peso de mi cuerpo de un pie a otro y
pregunto:—¿Oqué?¿Quépasarásivuelvoaponerlelamanoencima?Ericmemira...,memira...,memirayfinalmente,cuandosabequeestoyapuntodetirarmeasu
yugularporsuchulería,responde:—Novoyaresponderaturidículapregunta,yahora,vamosadormir,estarde.Y,sinmás,abrelapuertadeldespachoysevadejándomeconcaradetonta.Pero¿noíbamosa
discutir?Sola en el despacho,miro ami alrededor.Con lamala leche que llevo encima, lo destrozaría
pero,comolapersonacivilizadaquesoy,tomoaireysalgodeallí.Alllegaralaescalera,veoquenoestáesperándomey,comonotengoganasdesentirloamilado,mevoyhacialapiscinacubierta.Unavezallí,medesnudoy,sinpensarlo,metiroalagua.
Nado..., nado..., nado yme desahogo y, cuando estoy agotada y sin aire, salgo del agua ymeenvuelvoenunatoalla.
Molestaporloocurrido,meencaminohacialahabitación.Alacercarmeveoluzpordebajodelapuerta y cuando entro Eric no está, pero entonces oigo correr el agua de la ducha. Tengo queducharme,peroesperaréaqueélsalga.Nomeapetecehacerloconél.
PrimerohemosdiscutidoporGinebra,yahoraporlodeFlyn.Desdeluego,eldíanohapodidosermásredondo.
Lapuertadelbañoseabreyaparecemibuenorroalemán,mojadoyconunatoallaalrededordelacintura.Siemprequeloveoasí,semeresecahastaelalma.¡Dios,québuenoestá!
Pero,comonoquierohacerlever loqueenotrasocasiones ledigocon lamirada,entroenelbañoycierrolapuerta.Allí,mequitolatoallaymemetobajoladucha.Cuandoacabomesecoelpeloconelsecadory,alsalir,observoqueEricestátumbadoenlacamaymemira.
En circunstancias normales me habría abalanzado sobre él entre risas, pero no, esta noche lacircunstancianoesnormaly,dirigiéndomehaciamiarmario,cojounasbragasyunacamisetaymelaspongoparadormir.
Ericme siguepor la habitación con su azuladamirada y, cuando intuye quenovoy a abrir laboca,dice:
—DejadepensarcosasrarasconrespectoaGinebra,queteconozco.No respondo.Me niego.Memeto en la cama, pero las palabrasme queman en la garganta y
finalmentesiseo:—Sólotediréque,sifueraalrevés,sitútehubierasencontradoconmipadre,mihermanayun
exconmigoenlacasadeélsinqueyotehubieraavisado,notehabríagustado.¡Queyotambiénteconozco!
Mialemánfrunceelceño,¡yotambién!,ycontinúo:—Estoyconfiandoenti.Malditasea—digolevantandolavoz—.Estoyconfiandoenti.—Jud...—TealentéajugarconellalaotranocheenelSensations,teaniméaquehoyosfueraislosdos
solosacomer,pero...perotúhacesquecomienceadudar.—Escucha,cariño.Ginebraessólounaamiga.Nadadeloquetetengasquepreocuparte.Maldigo.Mecagoentodoloquesemenea.—YencuantoaFlyn—prosigo—,nometoqueslasnarices,EricZimmerman:élestanhijomío
comotuyo,porloquenovuelvasnuncamásareprendermedelamaneraenquelohashechohoyotejuroquelovasallevarmuymal,¿entendido?
Sugestosecontrae.Séqueledueleloquedigo.¡Quesejorobe!Quesejorobetantocomoyo.—Jud,escucha...—No,noquieroescucharte—finalizotumbándomeydándolelaespalda—.Comotúmismohas
dichoantes,¡adormir,queestarde!—Cariño...—No—siseoquitándomesumanodelhombro—.Hoynoquierosertucariño.Déjameenpaz.Novuelveatocarme.Sientoquesemueveenlacama.Estáincómodo,mispalabraslehanhecho
tantapupacomoamílassuyasy,finalmente,acercándosepordetrás,murmura:
—Ginebrasemuere.Elcorazónsemepara.Lentamentemedoylavueltay,cuandosusojosylosmíosseencuentran,
explica:—Tieneuntumorcerebralinoperable.Lehandadodecuatroaseismesesdevidayharegresado
aAlemaniaadespedirsedelagentequehasidoimportanteensuvida.Nodigonada,ahorasíquenopuedo.—Conocí aGinebra cuando tenía la edad deFlyn—continúa él—.Sus padres eran unos ricos
empresariosalemanesdueñosdevariasfábricasdecalzado,peroporloúltimoquesepreocupabaneraporlaúnicahijaquetenían.Alveraquello,loquehizomimadrefuequererla,ymishermanasadorarlacomoaunahermanamás.Duranteaños,ellafuesóloalguiendelafamilia,hastaque,enlauniversidad,suspadresmurieronenunaccidenteaéreoyocurrióalgoentrenosotrosquelocambiótodo.
Ericselevantadelacama,yomesientoparaobservarlo,yprosigue:—Me enamoré de ella como un tonto. Ginebra era decidida, impetuosa y divertida, y juntos
descubrimosmuchascosas,entreellas, lasexualidad.Unasexualidadquenosdistanciócuandoellacomenzóaexigirciertascosasquenomeagradaban.CuandoconocióaFélixymedejóporél,meenfadémuchísimo.Leprohibíacercarseamimadreyamishermanas,queeranlaúnicafamiliaquetenía.Mesentíatraicionado,yentoncesellasemarchóaChicago.Nohabíavueltoaverlahastaeldíaquenoslaencontramosenelrestaurante,yhoy,mientrascomíamos,cuandomehadichoelmotivodesuviajeymehapedidoveramimadre,nohepodidodecirlequeno,Jud.
Asiento. Sin duda, yo tampoco podría haberle dicho que no.Me levanto dispuesta a abrazarlo,peroentoncesélmedetieneconlosojosllenosdelágrimas.
—Túeresmivida,eresmiamor—dice—,ereslamadredemishijosylaúnicamujeralaqueyoquiero ami lado.Pero cuandomehe enteradodequeGinebra semoríaymehapedidover amimadre...,yo...yo...
—Losiento,cariño...,losiento.Permanecemosunratoabrazadosdepieenmediodenuestrahabitación.Ericmepegaasucuerpo
yyomepegoalsuyoy,cuandonoscalmamos,nosmetemosenlacama.SientolástimaporGinebra,ysemeresquebrajaelcorazón.
23
Aquellamañana,Melselevantó,ytrasenviarvarioswasapsaJudith,quenorespondió,vistióaSamiylallevóalcolegiocomotodoslosdías.
Estabahablandocon lasdemásmamáscuandovioqueJohan llegabaconPablo.Elabogadoseacercóhasta lapuertadondeestabaelgrupodemadresconunacandorosasonrisay, trasdarleunbesoalcrío,éstecorrióconsuscompañeros.
Melloobservóconcuriosidad.EralaprimeravezqueveíaaJohanllevaralniñoalcolegiopero,como no quería meterse donde no la llamaban, continuó hablando con las demás. Entonces, depronto,notóquealguienlaasíaporelcodo,yalvolverseseencontróconlaencantadorasonrisadeJohan.
—Melania,¿tienesunsegundo?—preguntóél.Sorprendida porque aquél se hubiera acercado a ella, se despidió del resto de las mamás y,
cuandocaminabanhaciaelaparcamiento,éldijo:—Louisemehacontadoquesabesdenuestroproblemayalgomásy,aunqueimaginoqueellaya
telohadicho,tepidodiscreción.Mellomiró.Noentendíaaquéveníaaquello,cuandoellanohabíavueltoahablarconLouise.—Vuestravidaenparejaesalgoquedebéissolucionarvosotros—replicóella—,perocreoque...—Tú no tienes que creer nada—la cortó Johan—. Tú sólo tienes que permanecer alejada de
Louiseymantenertupreciosaboquitabiencerrada.—¡¿Qué?!Sinlaencantadorasonrisadesegundosantes,élsiseó:—Nomegustas,comomeconstaquenolesgustasamuchosdelbufeteportuchulería.Sinduda,
eresunanefastainfluenciaparamimujer,ymeatrevoadecirqueparatunoviotambién.Aloíreso,Melseechóhaciaatrás.—Yamímeconstaquetúeresidiotaprofundo,pornodeciralgopeor—replicó—.Pero¿dequé
vas?¿Quiéntecreesqueeresparahablarmeasí?Con una maquiavélica sonrisa, Johan la cogió entonces del brazo con fuerza. Mel sacó su
temperamentodetenienteParkerysiseó:—Suéltamesinoquieresquetedéunapatadaenloshuevos.Élnolasoltó,perodeprontoambosoyeronquealguiendecía:—Eh...,oiga...¿Quéleestáhaciendoalaseñora?Almirar,seencontraronaunmuchachosubidoaunmonopatínqueseacercabaaelloscongesto
deenfado.Johanlasoltó,peroantesdedarselavueltaparasubirseasucoche,murmuró:—DetidependequeBjörnconsigaonoloquequiere.Agitadaporloocurrido,Melnosemoviósiquieradelsitio.Entonces,elmuchachoseacercóa
ellaconelmonopatínenlamano.—¿Seencuentrabien,señora?—lepreguntó.Todavía sorprendida, ella asintió mientras el coche de Johan se alejaba y, mirando al chico,
intentósonreír.—Sí,gracias.Aloíreso,elmuchachomontódenuevoensumonopatínysedespidióalejándosedeellaatoda
prisa.—Adiós,señora.Tengoquemarcharme.Comounatonta,Meldijoadiósyluegoresopló.Pero¿dequéibaelidiotadeJohan?Durantevariosminutosdudóquéhacer,hastaquefinalmentesemetióensuvehículoysedirigió
acasadeLouise.Aellanadieledecíaquépodíaonohacer.Alllamaraltimbre,unachicarubiaqueMelnoconocíaabrióconunteléfonomóvilenlamanoy
saludó:—Hola.Melmiróelnúmerodelacasaydijo:—Hola.SoyunaamigadeLouise,¿estáella?Lajovensonrióy,echándoseaunladoparadejarlaentrar,gritómientrasproseguíahablandopor
teléfono:—¡Louise,havenidounaamigatuya!Mel entró en la bonita casa, y estaba sentada mirando las fotos sonrientes expuestas en la
chimeneacuandooyólavozdeLouise:—Hola,Verónica,¿quéhacesaquí?Mel se volvió y la miró. ¿Verónica? Pero al ver que aquélla llevaba un brazo en cabestrillo,
exclamó:—¡PorDios,Louise,¿quétehaocurrido?!Lachicarubia,queenesemomentocolgóelteléfono,sonrióyexplicó:—Perdióelequilibrioysecayóporlaescalera.Siesquemihermanavacomounaloca.Lastresmujeressonrieron.Sinembargo,algoledecíaaMelqueaquellonoeracierto.Entonces,
lachicarubiaañadió:—AprovechoqueVerónicaestáaquíparairalsúperacomprarunascosas,¿deacuerdo?—Deacuerdo,Ulche—dijoLouisesonriendo.Unavezquedaronlasdosasolas,ellasesentójuntoaMelyéstalamiró.—¿Verónica?¿AhoramellamoVerónica?—Mel...—Pero¿dequévaesto?Louiserespondióconunasonrisatriste:—EsmejorqueJohannosepaquehasestadoaquí.Mellamiróincrédula.Pero¿quéestabaocurriendoallí?Y,sinandarseconrodeos,insistió:—Deacuerdo,seréVerónica.Perodime,¿quéhapasado?—Teloacabadedecirmihermana:mecaíporlaescalera.—Y una chorra —replicó Mel al tiempo que se levantaba sin apartar la mirada de ella—.
¿Pretendesquemecreaeso?Ahoramismovamosairalacomisaríaylovasadenunciar.Túnotehascaído.
—No.—Pero,Louise...—Mira,Mel,notelotomesamal,peroesmejorquemedejesllevarmivida.Elsilencioseapoderódelsalón.AMelnolegustabanadaloquesecocíaenaquellaimpolutay
bonitacasa.—¿Porquélosoportas?—preguntó.Louisenorespondió,yMel,sentándosedenuevoalladodeella,insistió:—Notienesporquéaguantarlo.PormuyabogadoqueseaJohan,nopuedehacerteesto,nipuede
retenerte.Mira,yonoentiendodeleyes,peroséqueloqueélpretendeesalgoquenopuedeser.Túeresunapersonay,comotal,debestenertupropiavozytomartuspropiasdecisiones.
—¿Yquéquieresquehaga?—replicóLouiseconlosojosllenosdelágrimas—.ÉltieneelpoderdetodoymepuedequitaraPablo.
—Esoestáporver.¿Acasohasconsultadotusituaciónconunabogado?—No.—Puesven ami casay consúltale aBjörn.Estoy convencidadeque él sabrá asesorarte y, así,
podrástomartupropiadecisiónsinmiedo.—Nopuedo.—¿Porquénopuedes?ALouiselecorríanlaslágrimasporlasmejillascuandorespondió:—PorqueBjörnesunodeellos.Noqueada,Mellacorrigió:—No,Louise, no.En eso te equivocas.Björn quiere trabajar en ese bufete, pero no es uno de
ellos.Y,cuandoseenteredeesto,teaseguroque...—Nosepuedeenterar.—Louise,Björnesunabogadoíntegroque...—¡Mel,convéncete!—gritóella—.Todoelqueentraenesebufetesecorrompe.Johantambién
eraunabogadoíntegrohastaquedejódeserlo,niteimaginaslosdocumentosfraudulentosquehevistoensuordenador.Siyopudiera,siyosupiera,tejuroque...—Hizounapausayterminó—:Peronopuedo.Nopuedo...
—Louise,notedejes...,nopermitasque...Entoncesella,levantándosesinmirarla,agregó:—Sé que no hago bien, pero por mi hijo haré lo que sea. Y, si para Pablo es bueno que yo
continúeconsupadreyacepteestetipodevida,loharé.Noquierosepararmedemihijoy,silohagodel padre, sé que éste, respaldado por el bufete,me lo va a quitar. Y ahora, por favor, vete y novuelvas.SiJohanseenteradequehasestadoaquí,tendréproblemas.
—Pero,Louise...—No,Mel,¡vete!Cuando salióde la casa, la exteniente estabacompletamentedesmoralizada. ¿Cómoeraposible
queLouisesedejaravencerasíporaquelimbécil?
Mirósumóvil.Judithseguíasinresponderlealoswasapsquelehabíaenviado.Ofuscada,semontóensucocheymurmuró:—Pero¿dóndeteestásmetiendo,Björn?...Luego,trasarrancarelmotor,sedirigióaMüller.TeníaquehablarconJudith.
24
CuandoJudsedespertótraspasarunanochehorrible,Ericyasehabíamarchadoalaoficina.¿Porquénolahabíaesperado?Conpaciencia,seduchóy,sinánimosdehacernada,saliódecasa trasvera losniños.Flynni
siquieralamiró,yelladecidiódejarloestar.Noteníaelcuerpoparanuevasdiscusiones.En cuanto llegó al parking de la oficina, se encontró a Mel junto a la verja de entrada.
Sorprendidaporverlaallí,abriólapuertadelcocheysuamigasubió.—Pero¿túnomiraslosmensajes?—lesoltó.Conlacabezacomounbombo,Judithsedisponíaacontestar,cuandoellaañadió:—¿Quéteocurre?Losojosselellenarondelágrimasy,alverla,Melmurmuró:—Vayamañanitaquellevohoy.—Y,sindejardemirarla,añadió—:Niseteocurraentrarenel
parking.Tútevienesconmigoatomarteuncafé.Judnegóconlacabeza.—Nopuedo.Tengomuchotrabajo.—Queledenmorcillaaltrabajo.Ereslamujerdeljefey,sillegastarde,¡quetenganhuevosde
despedirte!Por primera vez en lo que iba demañana, Judith sonrió y, tras darmarcha atrás, se encaminó
haciaunacafeteríaqueestuvieraalgoalejadadeMüller.Noqueríaquenadielaviera.Diezminutosdespués,cuandoestacionóysaliódelcoche,Melyellacaminaronhastaunaterraza
cerradadeunacafeteríay,traspedirlealcamarerounpardecafésyunajarradeagua,Melmiróasuamigaypreguntó:
—Vamosaver:¿quéteocurre?Aloíreso,Judithsederrumbó.LecontóaMelloqueocurríaconFlyn,loqueocurríaconEricy
loqueocurríaconGinebra,ylehizosaberlomuchoquenecesitabaverasupadre.Mellaescuchóconpaciencia,laconsoló,laanimóy,cuandovioquesuamigadejabadellorar,señaló:
—EnloreferenteaFlyn,sientoqueledierasesatortaqueundíayotepropusepero,sinduda,loquieraverEricono,selamerecía.Silepermitísesecomportamiento,seconvertiráenunmonstruoy,porsupuesto,notengoquedecirteque,sitehablamalatiyEricnoponefreno,elguantazoselomerecenlosdos.
—Ericnosabemuchascosas.Melascallopara...—Muymal,Jud,muymal.Debescontarletodoloqueocurre.Judithsuspiró,sabíaquesuamigateníarazón.—Tejuro,Mel,queaveceslosZimmermanpuedenconmigo,yayerfueunadeesasveces.Los
quiero. Los adoro, pero en ocasiones los mandaría a paseo con sumo gusto por imbéciles, por
engreídosyporpretenciosos.SéquenoobrébiendándoleunbofetónaFlyn,peroellos tampocoobraronbien,ylosaben.Sinembargo,sontanorgullososquesonincapacesdereconocerloypedirdisculpas.
Mel asintió. Sin lugar a dudas, ella también los conocía y sabía muy bien sus defectos y susvirtudes.
—EncuantoaGinebra—prosiguió—,sientoenelalma loquemedices.Debedeserhorribletenerlasensacióndequeeltiemposeagota;yonoquerríanuncavermeensulugar.
—Sitesoysincera,Mel,ypormuyfeoquequededecirlo,ellaesloquemenosmeimportaahoramismo.EstoytanenfadadaconEricyconFlyn,quenoséniparaadóndetirar.
—YenreferenciaatupadreylaFeriadeJerez,siyofueratú,meiba.¿QueEricnoquiereir?,¡quenovaya!Peronodejesdehacerloquetúquieresparahacerloqueélquiere.Alfinyalcabo,él...
—Perosiélmedicequemevaya.Enestecasosoyyolaquequierequeélvengaporelsimplehechodequedeseoquemipadredisfrutede la feria connosotros, comomi suegradisfrutade laOktoberfest.Ambossemerecenquelosacompañemos,ymeenfadamuchoqueEricnosedécuentadeello.
—Pero,Jud,escucha...,sitienemuchotrabajoesnormalque...—¡Me importa unamierda su trabajo!—saltó Jud comoun resorte—.Entiendoquedeba estar
pendientedelapuñeteraempresa,peroyosólolepidounasemanaalañoparairamitierra,sólolepidoeso,ysinomedaelgustoesporquenoledalagana.Joder...,¡eseljefe!Y,comojefe,puedehacer cosasque el restode los currantesno sepuedenpermitir.Y si te digo esto esporque lo sé.Porquelohizocuandomeconquistó,yporquenoséporquénaricesestavezestátancerradoairaJerez.Pero,claro...,siyanocenaconmigomuchasnochesporquesequedaeneltrabajo,¿cómosevaavenirconmigodeviajeunosdías?—Y,dandoungolpeen lamesa,prosiguió—:Hay tiempopara lo que él quiere.Mira cómopara ir aMéxico al bautizo de los hijos deDexter ha hecho unhueco.Pero¿esquesecreequesoygilipollasynomedoycuenta?Estámásqueclaroqueélnosediviertemucho en la feria.No le gusta vestirse de andaluz, odia ponerse el sombrero, y enfermacomoalguiendigaqueseanimeabailarsevillanas.Pero,joder,enocasionesyotambiénvoyacenasdeempresaquenomegustanyenlasquemeaburrocomounaostraymecalloporqueséquesonimportantesparaél.
—Jud...,Erictequiere.—Esolosé.Séquemequiere,comoélsabequeyoloadoro,peronosésiesporqueyasabeque
metieneseguraoporquemevemuyenamoradadeél,queseestáconfiandoyestádejandodehacerlascosasqueanteshacía.Y,vale,entiendoquedirigirunaempresaescomplicado,peroyoquieroviviryserfeliz,yquieroqueéltambiénlosea.Sialgoodiabadesupadreeraquelodejótodoporlaempresa,ynoquieroquelepaseaéllomismo.
Eneseinstante,aJudithlesonóelteléfono.AlverquesetratabadeEric,seloenseñóasuamigayéstadijo:
—Cógelo,estarápreocupado.Judsuspiró.Conocíaasumaridoy,singanas,contestó:—Dime,Eric.
—¿Dónde estás? Te he llamado y me han dicho que no habías llegado. He llamado a casa ySimonamehadichoquehabíassalidoya;¿sepuedesaberdóndetehasmetido?
Su voz, la exigencia en su tono cuando necesitaba sentir su cariño, hizo que Judith cogiera elmóvilylosumergieradentrodelajarraconaguaparanoestamparlocontraelsuelo.
Alveraquello,suamigapestañeóy,sorprendidaaltiempoquedivertida,preguntó:—Pero,marichocho,¿quéhashecho?Judithsonrióy,trasrecogerselamelenaenunacoletaalta,replicó:—AhogarelteléfonoparanoahogaraEric.—Joder,Jud,queesuniPhone6.Segúndijoeso,lasdoscomenzaronareíracarcajadas.Quienlasvierapensaríaqueestabanlocas
deremate:tanprontollorabancomoreían.Cuandosetranquilizaron,Meldijo:—Ahoralotendrásdesesperado.Notienecómolocalizarte.—¡Quesejoda!Notengoganasdehablarconél.E,intentandodejardepensarenEricyenellayentodoslosproblemasquelarodeaban,Judith
miróasuamigaypreguntó:—¿YtúquéhacíasesperándomeenMüller?¿Haocurridoalgo?Comounresorte,yomitiendoelverdaderomotivo,Mellecontólosucedidoaquellamañanaen
lapuertadelcolegiodeSamiysuposteriorvisitaacasadeLouise.Judithparpadeaba,alucinadaporloqueestabaoyendo.Unavezsuamigaterminó,Judlamiróymurmuró:
—YaeseJohan¿nolehasdadounapatadadondemásduele?—No—dijoMelsonriendo.—Pero¿dóndeseestámetiendoBjörn?—insistióJudith.Melresopló.Suamigaacababadehacerlelamismapreguntaqueellasehacíaasímisma.—Supuestamente, en el bufete de abogadosmás famoso y reputado deMúnich—dijo—.Pero,
cadavezquehabloconLouise,tengolasensacióndequeenrealidadseestámetiendoenunasecta.—DebeshablarconBjörn.—Loharé.Claroque loharé.—Y,queriendoverunrayodesolenunamañanatanplagadade
problemas, Mel añadió—: Ahora escúchame. Obviando tus problemas y los míos, el verdaderomotivodemismensajesyelhechodequehayaidoabuscartealtrabajoeraparapreguntartesiEricytúnosacompañaríaiseldieciochodeabrilaBjörnyamíaLasVegasparahacerlalocuradelsiglo...
Porfin,Melhabíaaccedidoalaspeticionesdesubuenamigo,yJudith,olvidándosedetodoslosproblemas,laabrazóemocionadaymurmuró:
—Porsupuesto.Esonilodudes;¡enhorabuena!Laslágrimasacudierondenuevoasusojosylasdossonrieronemocionadas.Mel,queestabaen
unanube,lecontólosucedidolanocheanterior.Sinlugaradudas,habíasidounapreciosapeticióndematrimonio.
Unahoradespués,desdeelteléfonodeMel,JudithllamóalaoficinaparahablarconMikay,alverquesuausencianodescabalabanada,decidióolvidarsedeMüllerysemarchóconMelapasareldía,sin imaginarquesumaridoestabaremoviendocieloy tierraparaencontrarla.Sinembargo,amediamañanasonóelteléfonodeMel.
—Oh...,oh...—dijoéstaalverqueeraEricquienllamaba—.Houston,tenemosunproblema.
Alverenlapantallaelnombredesumarido,Judithlocogió.—¿Quéquieres?—dijo.Eric,queestabaenlaoficina,sellevólasmanosalosojosaloírsuvoze,intentandocontenerla
furiaquesentía,preguntó:—Judith,¿dóndeestás?Envalentonadaporladistancia,ellarespondió:—Comoves,estoyconMel.En la línea se hizo entonces un silencio incómodo y, cuando Jud no pudo soportarlo más,
preguntó:—¿Quieresalgoopretendesquesóloescucheturespiración?Furiosocomodesdehacíatiempoquenoloestaba,Ericdiounpuñetazosobrelamesaygritó:—¡Llevotodalamañanabuscándotecomounlocoy...!—Mira,Eric.Yotambiénségritary,sisigueshablándomeasí,tejuroqueloharé,¿entendido?Eric,quehabíaperdidocompletamentelospapeles,continuóchillando.EntoncesJud,retirándose
elteléfonodelaoreja,mirólajarradeaguadondetodavíaestabasumergidosumóvilydijo:—Mel, o me quitas tu teléfono ahora mismo de las manos o creo que va a seguir el mismo
caminoqueelmío.—Niseteocurra—respondióellaarrebatándoselo.Judithsonrióporsurespuesta,yMelsepusoelteléfonoalaorejaymurmuró:—Eric...,Eric..., soyMel. Judith está conmigo...No..., no..., escucha..., no quiere hablar contigo.
Creo...creoque...Eh...eh...eh...,¡joder,Eric,¿tequierestranquilizar?!Jud,queestabaacostumbradaadiscutirconsumarido,miróasuamigay,finalmente,sonriendo,
lequitóelteléfonodelasmanos.—Vamos a ver, Eric—dijo—, tienesmucho trabajo. ¿Qué tal si sigues trabajando yme dejas
pasarlamañanaenpaz?—Judith,teestáspasando...—siseóél.Ellasoltóentoncesunarisotadaquelocaldeóaúnmás.—Soyconscientedeello—replicóJud—,peropermítemedecirtequetúlollevashaciendodesde
hace tiempo. Y ahora, por favor, no vuelvas a llamar, porque no quiero hablar contigo. Ya nosveremosestanocheencasacuandoregrese.Adiósssss,guapito.
Y,dichoesto,colgó.—Madremía, la que te espera esta noche cuando vuelvas— susurróMelmirando a su amiga
fijamente.Conscientedeello,Judithasintióyseencogiódehombros.—Tranquila—dijo—.Sobreviviré.Diezminutosdespués,Björnllamóasufuturamujereintentósonsacarledóndeestaban,peroal
finalterminódiciendo:—Vale...,vale...,Parker,yorecojoaSamidelcole.¿Vasallegarmuytarde?Melmiróentoncesasuamigayrespondió:—Cariño..., me voy a ir con Judith a celebrar nuestro compromiso. Entiéndelo, es la única
amiga...amigaquetengoaquí.
Björnsuspiró.Sefiabatotalmentedesuchica,perosaberqueJudithnoestababienyqueibanacelebrarelcompromisolohizoinsistir:
—Cariño...,entiéndeme,mehallamadoEric,estápreocupadoporJud.—Loentiendo,Björn,peroesqueJudnoquierehablarconélahora,entiéndemetúamí.Y, lo
siento,tequierocontodamialma,peronovoyadecirtenidóndeestamosniadóndenosvamosairacelebrarlo.
—Mel,noseascabezona.—Björn,noseaspesadito.Alverqueeltonodelaconversacióncomenzabaavariar,Judithlequitóelteléfonoasuamiga.—Björn—ledijo—,comoseteocurradiscutirconMelporelgilipollasdetuamigo,tejuroque
notelovoyaperdonar.Y,antesdequedigasnadamás,déjamedecirte:¡enhorabuena!Melyamehacontadolodelabodayestoymuyfelizporvosotros.
Elalemánsonrió.Todavíanosecreíaquesunoviahubierahecholoquehizolanocheanteriory,mirándoseeldedo,queyanoteníachocolate,respondió:
—Gracias,Jud,teaseguroquelocelebraremosotrodíatodosjuntos.Peroahora,porfavor,¿porquénomedicesdóndeestás,paraque,así,Ericytúpodáisencontrarosparahablar...?
—Esquenoquierohablarconél.—Judith...,noseascabezota.—Björn...,tevoyamandaralamierda.Depronto,Mellequitóelteléfonodelasmanosy,metiéndoloenlajarradeaguadondeestaba
aúnsumergidoeldeJudith,sentenció:—Seacabó.—¡Mel!¡Tumóvil!Ytuscontactos...Aldarsecuentadeello,Melresopló,perocomonoqueríadarlemásimportancia,replicó:—Mira...,asíaprovechoylesacouniPhone6aJamesBond.—Ambassoltaronunarisotada,y
luegoMelañadió—:Hoyesnuestrodíadechicas.Hoynosomosmadres,niesposas,ninoviasdenadie,ynovamosapermitirquenadienosloamargue.
Denuevo, lasrisas tomaronel lugar,y loscamareros,que lasobservaban,semiraronentresí.Sinlugaradudas,lasmujeresestabancadadíamáslocas.
Cuandodejaronlacafetería,decidieronirsedecompras.Comprarsiempreeraunabuenaterapia.Unavezsalierondelcentrocomercial,fueronacomeryluegoseacercaronaunspaqueninguna
delasdosconocía.Sorprendidas,vieronqueeramásgrandedeloquepensaban,ysesumergieronentodos los tipos de piscinas que allí había mientras reían y hacían carreras en los chorros acontracorriente.
Finalmente, agotadas, sedecidieronporun increíblemasajepolinesio.Se lomerecían.Cuandosalierondelspa, trasdejar lasbolsas con las cosasquehabíancompradoenel coche, se fueronacenaraun restaurantealquenohabían idonunca.Si ibanaalgunoconocido, seguramenteEricoBjörnlaslocalizarían.
Nadamásentraren lapequeñapizzería italiana,unoshombrescomenzarona tirarles los tejos.Ellassonrieronperonoleshicieronnicaso:loquelasesperabaencasaerainfinitamentemejorqueaquello.
Unavezsalierondel restauranteeran lasdiezde lanoche,ypaseabandelbrazoporelMúnichantiguocuandoJudithdijo:
—YoiríaalGuantanamera,perotemoqueEricmebusqueallí.Depronto,alcruzarunacalle,unamúsicaconritmollamósuatención.Entraronenellocaldedondeproveníalapegadizacanciónyenseguidasedieroncuentadeque
eraunbarbrasileño,dondesindudarlopidieronunascaipiriñas.—¡Madremía,Mel!Hayquecontrolarseconestabebida,quecondosllegamosarastrasacasa
cantandoAsturias,patriaquerida.[17]Aloírasuamiga,Melsoltóunarisotaday,mirándola,exclamó:—¡VivaAsturias!Segundos después, dos hombres, tan anchos como dos armarios empotrados, se pusieron a su
ladoylas invitaronabailar.Sinembargo,ellassenegaronyse losquitarondeencima.Loúltimoquequeríaneratenerproblemasconaquellosgrandullones.
Mientras bebían sus ricas caipiriñas, observaron cómo bailaba la gente. Tenían un ritmoalucinante.Entrerisas,ellasintentaronmovereltraserocomolohacíanlasbrasileñasquehabíaenellocal,perolesresultabamaterialmenteimposible.Aquéllasteníanunarte¡quenosepodíaaguantar!
Depronto, lamúsicase interrumpió, lagenteseretiróde lapistayunaparejaformadaporunhombreyunamujerquedaronsolosenelcentro.Todoslospresentesempezaronaaplaudir,yMelyJudtambién.Instantesdespués,laparejacomenzóabailardeunamaneraincreíble.Lamujerteníaunritmazoalucinante,peroelhombre...,¡oh,Dios,cómosemovía!
Lagentedabapalmascadavezquehacíanalgúnmovimientoasombroso,cuandodeprontolaluzledioalhombreenlacarayJud,estirándose,murmuró:
—Mel.Notelovasacreer.—¿Elqué?Parpadeandoparaverconmásclaridad,Judithasintió.—ElmorenazoquebailaenlapistaesDennis.—¿Dennis?¿QuéDennis?—Dennis,elamigodeOlaf,delSensations.Esemorenazobrasileñoque...—¡Nojorobes!¿Esél?Judasintió.—Amenosquelacaipiriñamehagaverloquenoes,esetíoquebailaquequitaelsentidoesél.Laschicasloobservaronboquiabiertasmientrasélbailabaconunasensualidadimpresionantey,
cuandolacanciónacabó,todoelmundoaplaudióarabiar.Unavezfinalizadalademostración,seenterarondequelaparejaeranprofesoresdebaile,yde
que darían una clase allímismo.Ni cortas ni perezosas,Mel y Judith fueron para allá a aprenderjuntoconotrosquehabíaenlasala.
Durante media hora, la clase continuó y, cuando de pronto Dennis se paró frente a la jovenmorena,preguntó:
—Judith,¿erestú?Acaloradaporseguirelritmoqueaquéllosmarcaban,laaludidalomiróy,alversereconocida,
murmuróconcaradetonta:
—Síiii.—¡YyosoyMel!Entonceséllascogiódelamanoy,alejándolasdelgrupo,preguntó:—¿Habéisvenidosolas?—Sí—dijeronlasdosriendo.Dennislasmiróconincredulidad.AquelbarrionoeraunodelosmejoresdeMúnich;alrevés,
era bastante conflictivo. No conocía bien a aquellas mujeres, a pesar de haber disfrutado demomentosmorbososconunadeellas,pero síhabíaoídohablar a suamigoOlaf acercadecómoEricyBjörnlasprotegían,yélmismolohabíapresenciadoenelSensations.
—¿Quéestáishaciendoaquí?—preguntó.—Estamos celebrando la despedida de soltera de Mel —respondió Jud acalorada y, todavía
sorprendida,preguntóasuvez—:¿Ytúquéhacesaquí?Alverqueestabanalgocontentas,aunquesinllegaraestarborrachas,Dennisexplicó:—Soyprofesordeforróy...—¿Forró?¿Quéeseso?Entendiendoque las chicas no conocieran aquello, se sentó con ellas a tomar algomientras la
músicabrasileñacomenzabadenuevoasonar.—UnestilodebailedeBrasilcomoelqueacabáisdever—explicó.—Ahhh,esverdad,quetúerasbrasileño—semofóMel.—Oh,sí...,yasabes,bossanova,samba,capoeira,caipiriña—semofóélmirandoaJudith.—¿Trabajasenesto?—preguntóellasonriendo.Elmorenazosonrióasuvez.—Losjuevesporlanochesueloveniraestasalaadarclasesdeforró,perotambiéntengootro
trabajoporlasmañanasquenotienenadaqueverconesto.—Nohabíaoídoesodelforróhastahoy;¿ytú,Mel?—SuamiganegóconlacabezayJudañadió
—:¿Nosenseñasaperfeccionarlo?Dennissonrió.Estabaclaroqueaquéllasqueríandivertirsey,mirándolas,asintió.—Porsupuesto.Sólohayquetenersentidodelritmo.Apartirdeesemomento,Dennislespresentóavariosamigosycompañeros,ylanochedelas
chicassevolviólocaydivertida.Nadiesepropasóconellasy,treshorasdespués,JudithbailabaconDenniscongraciaysoltura.
—Tienesmuchoritmo,Judith—ledijoélentonces.Ella,acaloradaysedienta,sonrió,miróaMel,quesearrancabaconotrobailecitoconotrotipo,y
dijo:—Memuerodesed,¿vamosalabarra?Unavezallí,Dennispidiódoscoca-colasconhielo.—¿AEricnoleimportaqueestésaquísinél?—dijoentregándolelasuyaaJudith.Ellasonrióy,mirándolo,preguntó:—¿Quéhoraes?—Launaydiezdelamadrugada.Judithhablódenuevo.
—Aestashoras,Ericdebedeestarqueechahumopornosaberdóndeestoy—contestó.—Yameparecíaamí...—dijoriendoDennis.—Yateparecía,¿qué?—preguntóJud.Dennisdiountragoasubebidayseñaló:—Noconozcoatumaridoyapenasteconozcoati,peroEricmeparecióunhombreposesivo,
comolosoyyo,entodoloreferenteasumujer,apesardevuestrosjuegosenelSensations.Cuandomencionóellocal,ellasuspiró.Loquedaríaellaporestarenaquelinstantejugandocon
sumaridoenelSensations.Pero,sinquererdarlemásimportanciaaltema,replicó:—Tienesrazón.Erices tremendamenteposesivo,perohoyestoycabreadaconélysóloquiero
pasarlobienconmiamiga.Aloírsurespuesta,Dennisdecidiódarporfinalizadalaconversacióny,cogiéndoladelamano,
dijo:—Puesentonces,preciosa,¡vamosapasarlobien!Esanoche,traspasarhorasyhorasbailandodiferentestiposdemúsicabrasileña,lasdosjóvenes
decidieron dar la fiesta por concluida a las cuatro de la madrugada. Dennis se empeñó enacompañarlashastaelcoche,peroellasnoselopermitieron.Nonecesitabanunguardaespaldas.
Cincominutosdespués,caminabanporunaoscuracalledeMúnichcuandounvehículosedetuvoasuladoyoyeronunavozquedecía:
—Perdonen,señoritas.Lasdos separarony,al agacharseparaverquiénhablaba, seencontraronconundesconocido
quelespreguntó:—¿Cuánto?LaschicassemiraronyMelpreguntóasuvezdivertida:—¿Cuánto,elqué?Elhombre,conunaencantadorasonrisa,sesacólacarteray,enseñándosela,insistió:—Cienparacadaunasimeacompañáisduranteunahora.Lasdosamigasintercambiaronunamirada.—Losiento,guapo—replicóJuddivertida—,perotengoquecomprarmeuniPhone6yconcien
notengoniparaempezar.—Cientocincuenta—insistióél.—¡Vengaya!Queno...,quenosotrasvalemosmuchomás.Pero¿túhasvistoquépibones?¡Sube
laoferta,hombre!—dijoMelriendo.—Trescientoscincuentaporlasdos—insistióaquél.Esecomentariolashizoreír,yJudithcuchicheó:—Quéofertatantentadora;¿aceptamos?De pronto aparecieron dos vehículos de policía con las luces azules encendidas y el tipo del
coche,bajándosedelmismo,lesenseñóunaplaca.—Muybien,guapitas—dijo—.Quedáisdetenidasporprostitución.Ellassemiraronboquiabiertaspero,antesdequepudieranmoverse,unospolislasesposarony
lasmetieronenloscochessinatenderasusprotestas.Al llegara lacomisaría,seguíandiscutiendoconlospolicíascuandooyeronunavozconocida
quepreguntaba:—Pero¿quéestáishaciendovosotrasaquí?Almiraralagentequelosobservabadesdeelotroladodelmostradordelacomisaría,vieronque
setratabadeOlaf,elamigodelSensations.Las dos chicas se apresuraron entonces a contarle lo ocurrido y éste, enfadado, comenzó a
discutirconsuscompañerosporelerror.Peroelpolicíaquelashabíadetenidonoquisoentrarenrazón,ylasllevóhastaunodeloscalabozos.MellepidióaOlafquellamaraaBjörn.Judithnoabriólaboca.Sinduda,cuandoEricseenteraradedóndeestaba,liaríaunamuygorda.
Cuandoestabanenelcalabozorodeadasporotrasmujeres,untiposeacercóhastalosbarrotes.—Pero¿quévenmisojos?—exclamó—.LanoviadeBjörnHoffmann...—Y,riendo,cuchicheó
—:¿Sabetunovioaquétededicasporlasnoches?AlveraJohan,elmaridodeLouiseysociodeGilbertHeine,Melsiseó,incapazdecallarse:—Vetealamierda.Élleguiñóentoncesunojoconsuperioridady,sinmoverse,afirmó:—Tencuidadoconloquediceso,ademásdeestardetenidaporprostitución,podríaañadiralguna
cositamás.—Y,bajandolavoz,cuchicheó—:TedijequetealejarasdeLouise,¿lorecuerdas?JudagarróaMeldelamanoparaquecallaray,cuandoaquélsemarchó,preguntó:—Pero¿quiénesése?—ElmaridodeLouise—respondióMelenfadada.Unahoradespués,trashaberconfraternizadoconotrasdetenidas,unpolicíallegóydijoabriendo
lacelda:—MelaniaParkeryJudithFlores,vamos,hanpagadovuestrasfianzas.Laschicassemiraron:habíallegadolacaballería.—NiunapalabradelmaridodeLouise—dijoMel.—Pero,Mel,Björndeberíasaberque...—Niunapalabra,Jud.—Vale...,vale—replicósuamiga,quenoteníaganasdediscutir.Bastanteleesperaba.Cuando salieron y vieron a Eric y a Björn mirándolas con gesto oscuro junto a Olaf, Jud
murmuró:—Joderrr...—Esodigoyo:¡joder!—afirmóMel.UnavezOlaflesentregósuspertenencias,MelmiróaBjörny,congestoserioyprofesional,éste
dijofirmandoenunpapel:—Ladenunciaestáanulada,¿verdad,Olaf?—Sí.Notepreocupesporeso,Björn—replicódeprontoJohan,apareciendoenescena.MelyJudlomiraron,yBjörndijomientrasletendíalamanoconunasonrisa:—Graciasportuayuda,Johan.Ericlediolamanoforzandounasonrisa.—Porcasualidadestabaencomisaríaporotra causa—explicóel abogado—.No sé cómohan
podidoconfundiravuestrasmujeresconalgoquenoson.Mellomiróalucinada.Sinduda,todoaquellolohabíamontadoaqueldesgraciadoparadarleun
toquedeatención.Sumidoensumundo,Ericapretabalamandíbulay,cuandonopudomás,exigió:—¡Vámonos!Unavezloscuatrollegaronhastadondeestabanloscoches,BjörnmiróaMelygruñó:—¿Sepuedesaberquéhacíasporesebarrioaesashoras?—Salíamosdetomaralgo—respondióellaconaparentetranquilidad.JudithmiróaEric.Esperabaqueexplotaradeunmomentoaotro,peronolohacía.Nisiquierala
miraba.—Pero,vamosaver...—insistióBjörn—.¿Vosotrasnosabéisqueenesebarrioesdondetrabajan
lamayoríadelasprostitutasdeMúnich?Las jóvenes se miraron y, esforzándose por no sonreír, negaron con la cabeza. Björn y Eric
resoplaron,yesteúltimo,queteníaunterribledolordecabeza,dijo:—Vamos.Estardeyestamostodoscansados.MelyJudsebesaronysepidieronprecauciónconlamirada,yentoncesJudobservócómoBjörn
mirabaconcomplicidadasuchicaysonreía.Sinduda,élibaatomarsetodoaquelloconhumor.Eric, por su parte, no habló. Semetió en su coche y, cuando Jud cerró la puerta y se puso el
cinturón,lomiróydijo:—Vale.Estoypreparada.Puedesecharmelabronca.Sininmutarseporsucomentario,elalemánarrancóelmotorycondujoensilencio.Noobstante,cansadadesumutismo,Judinsistió:—Vamos,Eric,dialgoovasaexplotar.Peroelalemánnilamirónihabló,yJudsuspiróycalló.Unavezencasa,cuandolacancelaseabrió,oyó lospasosrápidosdeSustoyCalamar,quese
acercaban.Ericdetuvoelvehículo,bajóy,demalosmodos,semetiódirectamenteencasamientrasJudsequedabaenelinteriordelcoche.
Yahabituadaasusenfados, saliódelcocheysaludóa losanimales.Calamar se fueenseguida,peroSustonoseseparódeella.
—Madremía,Susto,elcabreoquellevaelcabezón—murmuróJudithbesandosulargohocico.Elanimalparecióentenderlay,restregandoelhocicocontraelpómulodeella,lahizosonreír.A
continuación, Judith le dio un beso para despedirse de él y entró en la casa. Dejó su bolso en laentradaysedirigióalacocina.Estabasedienta.
Estaba bebiendo agua en la oscuridad cuando, de pronto, Eric entró en la cocina, abrió elarmaritodondeestabanlasmedicinas,sacóunapastillayselatomóconunpocodeagua.Unavezaquélhubodejadoelvasoenelfregadero,lamiróydijo:
—Novoyadiscutircontigoporqueestoytanfuriosoqueseguramenteluegomearrepentiríadeloquepudieradecir.Lomejoresquenosvayamosadescansar.
Y,sindecirmás,diomediavueltaysemarchódejandoaJudithpreocupadaporhabervistoquesetomabaaquellapastilla.
25
LallegadaaMéxicoD.F.tresdíasdespuésesunsoplodeairefrescoparalosdos.Eric y yo no hemos hablado sobre ninguno de nuestros problemas, pero ambos sabemos que
estánahíyquetardeotempranovolveránasalir.Loúnicoquemedijonadamásmontarnosenelaviónfue:«Tequieroyvamosapasarlobienen
México».Yológicamenteasentí.Nadameimportamásqueestarbienconélydisfrutar.Al llegar al aeropuerto, una limusinanegra nos espera.Sin duda,Dexter quiere lomejor para
nosotros.Cuarentaminutosdespués,estamosensucasay todos reímoscuandoelorgullosopadreaparecesentadoensusilladeruedasconsusdospequeñosenbrazosyGracielaasulado.
SamiyelpequeñoEriccorreteanporlaestanciaconlapobrePipadetrás,mientrasHannahnosobservaenbrazosdesupadre.¡Milagro,miniñanollora!¿Estarámadurando?
Tras muchos besos, abrazos y felicitaciones, todos comenzamos a hablarles en balleno a losbebés.Mel tienea laniñayyoalniñoy,complacida,meacercosucabecitaa lanariz.Meencantacómohuelenlosbebés,ysonríocuandoDexterdice:
—Animaosytenedmásbebecitos,aunquenocreoqueossalgantanrelindoscomolosmíos.Todosreímosy,cuandoMeldevuelvealabebitaalosbrazosdesumadre,Björnlaagarraporla
cinturaylepregunta:—¿Teanimas?Veoquemiamigaparpadea,lomiray,después,buscandoasuhijaconlamirada,dicealverla:—Sami,ven,quepapitieneganasdequeledesbesitos.Dos segundos después, la pequeña está en brazos de su papá haciéndole monerías, y Björn
babeando.¡Hombres!Dextermemiray,alvermigestodivertido,sonríeypregunta:—Diosa,¿túnoteanimas?¡Ja!Ni loca tengo yo otro bebé.No..., no..., no.Y, cuando voy a responder, Eric dice con una
sonrisa:—Cerramos la fábrica. Con un adolescente problemático y dos pequeñines, ¡nos damos por
satisfechos!Eric sonríe, realmente parece que lo haya abducido el buen humor, y yo, encantada con su
contestación,loagarroporlacinturayafirmo:—Simimaridodicequelafábricasecerró,¡nosehablemás!Entrerisas,GracielaleindicaaPipaadóndepuedellevarseaHannah,aSamiyalpequeñoEric.
Sinduda,elcuartodejuegosadondevanlesdivertirámuchomás.Loshombrespasanaunsalón,yMelyyoacompañamosaGracielahastaunaestanciapintadaenamarillo.Alentrar,dosmujeresselevantanynosquitanalosbebésdelosbrazos.
Gracielanoslaspresenta:sonCeciliayJaviera,lascuidadorasdelosbebésylasqueecharánunamanoaPipaconlosnuestros.Unavezdejamosalosniñosacargodeellas,acompañamosaGracielaalacocinaaporalgodebeber.
—Bueno.¿Quétallaexperienciadesermamá?—preguntaMel.—Increíbleperoagotadora.Nuncapenséquepudieraexistirunamortanpurocomoelquesiento
pormishijos.Puedoasegurartequeestostresmeseshansidolosmásbonitosdemivida.—¿Yelpapáquétal?—preguntocuriosa.Gracielasueltaunarisotada.—Loco de amor por ellos, y por mí. Nos mima, nos cuida,... todo lo que te pueda decir en
referencia a él ¡es poco!—Luego baja la voz y murmura—: Y, desde que puedo volver a tenerrelacionessexuales,meponeeltraserorojotodaslasnoches.
Lastressoltamosunarisotada.ConocemosaDexterysabemoslomuchoquelegustavernosconeltraserorojocuandojugamos.EstamoshablandodeltemacuandoGracieladice:
—Quesepáisquenoshacompradotresbatasdesedarojayunoscollaresmuyparticularesynoparadehablardelasganasquetienedevernosconellopuesto.
Merío.Dexteresunlocoquedisfrutadelasexualidadapesardesuslimitacionesfísicas,ymegustaqueseaasí.Aúnrecuerdocuando loconocíenMúnich,cómome impresionó jugarconélyconEricenaquellahabitacióndehotel.
Cuandollegamosalsalón,nomesorprendoalveramihermanayasumaridoallí,yRaquel,alverme,selevantaycorrehaciamígritando:
—¡Cuchufletademisamores!Meapresuroaabrazarla.Peroquélindaesmilocahermana.—¿Ylosniños?—mepregunta.—EnelcuartodejuegosconPipayunascuidadoras.YaséqueLuzsehaquedadoenJerezcon
papá,pero¿dóndeestánLucíayJuanito?—ConlospadresdeDexter.Seadoranmutuamente.Trassaludaratodoelmundo,Raquelcorrealcuartodejuegosaveramishijos.Diezminutosdespués,regresaencantadaconunasonrisa,yyo,quelaestoymirando,digo:—Estásmásdelgada.—Ytúmásgordita.Lamadrequelaparióooooooooo...,¿ledoyuncapónonoselodoy?Desde luego,mi hermana es la leche. Todavía no se ha dado cuenta de que decirle eso a otra
mujeressinónimodeenfado.¡Nopiensaloquedice!Entonces,alvermicaradepóquer,añade:—Aunqueesoskilitosdemástesientanmuybien.Telucemáslacara.¿Melucelacara?¡Eso...,túarréglalo,soperraka!Intentosonreír,mejoresoquedecirloquerealmentepienso.Aunque,desdeluego,nohaynada
másincómodoyquetedejepeorcuerpoqueelhechodequetediganque¡estásmásgordita!UnavezJuanAlbertomehabesadoyhasaludadoatodoelmundo,Dexternospresentaaunos
amigossuyos,CésaryMartín,ynossentamosatomaralgo.Mihermana,quesehainstaladoamilado,seacercaamíycuchichea:
—Estacasaespreciosayenorme,¿verdad?—Asiento,yellacontinúa—:Dexterseempeñóenquenosquedáramosaquíconellosestosdíasy,así,mientrasélymicucuruchillotrabajaban,yoheestadoconGracielaylosniños.Porcierto,lahabitaciónquenoshandejadoestodounlujo.Vamos,nienlarevista¡Hola!hevistounaasí.Elbañotieneunjacuzziimpresionante.
—Lohabrásestrenadocontucucuruchillo,¿no?—preguntoconpicardía.Raquelseponecomoun tomate.Eshablardesexoy lapobreseponenerviositaperdida.Pero
entonces,acercándoseamí,cuchichea:—Porsupuestoquesí.Ofú,cuchu...,¡quéfrenesínosentró!Yocreoqueseenterótodoeledificio.Merío,nolopuedoremediar,yRaquelmedaunmanotazoparaquemecalle.Esomehacereír
aúnmás. Durante variosminutosmemofo demi hermana, y ésta finalmente termina a carcajadalimpia.Entonces,seponeseriadepronto.
—¿TehacontadopapáalgodelaPachuca?—pregunta.Niegoconlacabeza.LaPachucaesunabuenaamigade toda lavidadeJereza laque le tengo
muchocariñoy,siemprequevamosallí,pasamosporsurestauranteparacomersalmorejo.—Puesquesepasquecreoqueentreellaypapáhayalgo...—añademihermana.Lamiroboquiabiertaymurmuro:—¿LaPachucaypapá?—Sí,cuchu,sí.ElotrodíaoíalBicharróndiciéndoleapapá:«Tuhijatehajodidoelplanconla
Pachucaaldejartealaniña».—¿Enserio?—preguntosorprendida.—PalabritadelNiñoJesús—afirmaRaquelmuyconvencida.Sucomentariomedejaloca.¿MipadreylaPachuca?Pero,rápidamente,alverquemihermana
memiraalaesperademireacción,lepregunto:—¿Qué?Raquelsuspira,miraalrededoralrestodelgrupoycuchichea:—¿Esquenovasadecirnada?Ay,Dios,cuchu,quepapáylaPachucayatienenunaedady...—Ysisehacencompañíayestánbienjuntos...—lacorto—,¿dóndeveselproblema?Raquelvuelveasuspirar.Seletuerceelmorrillocomosiemprey,trasunossegundosensilencio,
murmura:—Yonoveoningúnproblema,peromemolestaquepapánonoslohayacontado.¿Porquénos
looculta?—Puesporquealomejorledaapurocontárnosloporquepiensaquelovamosavermal.Nosésimicontestaciónlaconvenceono,peroRaquelasienteynodicemás.Duranteunbuenratotodoshablamos,hastaquesuenaelteléfonodeDexteryéste,trashablary
colgar,dice:—Eramimadre.Nosesperaatodosparacenarensucasa.Encantados,noslevantamos.LospadresdeDextervivenenelmismoedificio,cuatroplantasmás
abajo.Segúnmecontósumadre,secompraronlacasaallíparaestarcercadeDextercuandoéltuvoelaccidentey,porloqueveo,ahoraconloschiquillosyanosevanamudar.
Antesdebajar,Melyyopasamosaveranuestrosniños.Lesestándandodecenar,yPipayunadelascuidadorasnosindicanquenonospreocupemos.Ellasseencargarándeponerleslospijamasy
acostarlos.Melyyoasentimosencantadas.Nosvendrábienunpocodelibertadenesteviaje.CuandoentramosenelpisodelospadresdeDexter,éstosnosacogencomosiempre,concariño.
Unavezveoamissobrinos,queestáncenandoenlacocina,regresamosalcomedor,dondeelgrupoenterocenamosentrerisasyalgarabía.
Unpardehorasdespués,volvemosalapartamentodeDexter.Pasamosaveralospequeños,queduermencomoangelitos,yvamosaacostarnos.Estamosagotados.
Aldíasiguiente,resultadivertidoreunirsecontodosenlacocina.Haytantosniñoscomoadultos,yaquelloeslalocura.
Porlatarde,trasunbonitopaseoporunpreciosoparqueconloscríos,trasatenderlosydejarlosconelpijamapuestoconlascuidadoras,losadultosnosponemosguaposynosvamosacenaraunsitio espectacular. La madre de Dexter se queda con mis sobrinos encantada, y Raquel más aún.Acabadalacena,Dexternosinvitaalteatro;¡quéplanazo!
Luego,todos,incluidosCésaryMartín,losamigosdeDexter,quehanestadoconnosotrostodalanoche,sevienenalacasadelanfitriónatomarunascopas.Unavezhemoscomprobadoquelosniñosduermen,regresamosalsalón,dondecontinuamosbebiendoybromeando.
Eric,quenohaparadodepiropearmeentodalanoche,mecogedelasmanoscuandopasoporsuladoymesientasobresuspiernas.Adoronuestracercanía.Laechabademenos.Asíestoyduranteunbuenrato,hastaqueDexteracercándoseanosotroscuchichea:
—Tengounpardecositasparati,paraMelyparaGracielaenlahabitacióndelplacerqueestoydeseandoqueospongáis.Porcierto,tenemosquecelebrarelpróximoenlacedeBjörnydeMel.
Segúnoigoeso,conlamiradaleordenoquesecalle.Mihermanaysumaridoestánallí,yDextermurmuraentoncesdivertido:
—EsperoqueRaquelsevayaprontoadormir.—Yotambiénloespero—afirmaErictocándomelarodilla.Oíresomehacesonreíry,comosiempre,mivaginatiembladeexcitación.Duranteunahoramás, todoscontinuamoscharlandoamigablementeenelsalón,hastaqueJuan
Albertoselevantaydicemirandoamihermana:—Cariño,estoyagotado.Vámonosadormir.Atodaprisa,mihermanaselevantayDexterdice:—Eh,güey,¡disfrutaddeljacuzzidenuevo!Elgestodemihermanamehacereír,ymáscuandoveoqueseponerojacomountomate.Juan
Alberto,quelaconocemuybien,nosguiñaunojo.—Ahoritamismoyavuestrasalud—dice.Todosreímosporelcomentario,yRaquel,escandalizada,ledaunmanotazoenelhombroasu
marido.Instantesdespués,ambossalendelsalón.Entonces,veoqueloschicossemiranyrápidamenteséloquepiensan.Susmiradasysussonrisas
losdelatan.Luego,Dexterpregunta:—¿Quélesparecealasmujeressientramosajugarunratoenlahabitacióndelplacer?YosonríoyveoqueMelyGracielatambiénlohaceny,sinnecesidaddedecirnadamás,lastres
noslevantamos.Ericseposicionaamiladoy,besándomeenelcuello,murmura:—Ansiosa.—Detiyparati,¡siempre!—respondocaminandoasulado.Lastresparejas,acompañadosporlosdosamigosdeDexter,quesondenuestrorollitoyporlo
queGracielamehacontadojueganconellosmuyamenudo,nosdirigimoshaciaeldespachodeél.Alentrar,Mel,quenuncahaestadoallí,memiraymurmura:
—Creíqueíbamosaunsitiomásíntimo.Sincontestarle,leguiñoelojoy,cuandovequeGracielapulsaunbotónquehayenlalibreríay
éstasedesplazahacialaderecha,añade:—Vaya...,vaya...,estoseponeinteresante.PeroeneseinstanteaBjörnlesuenaelteléfonoyélseapresuraacogerlo.—Entradvosotros—dice—.Esmipadreytengoquehablarconél.—Mequedocontigo—afirmaMel.Björnasiente.EntreellosexistenlasmismasreglasqueentreEricyyo,ylanúmerounoessexo
siemprejuntosenlamismahabitaciónyenelmismogrupo.UnavezDexter,Graciela,Eric,César,Martínyyopasamosalaoscurahabitación,lalibreríase
cierrayunaluztenueyamarillentatomaellugar.Actoseguido,Ericmeagarra,mechupaellabiosuperior,despuéselinferiory,trasundulcemordisquito,introducelalenguaenmibocaymebesaposesivamente.
Cuandoel tórridobesoacaba,ydejaclaroaloshombresqueallíélysóloélesmidueño,mepreguntaconmimo:
—¿Aquédeseajugarhoymipequeña?Me gusta que se comporte así en estos momentos. Me excita. Nunca hacemos nada sin
consultarnosy,trasvercómoMartínyCésarnosobservan,murmurodeseosadesexo:—Juegaconmigoaloquequieras.—¿Aloquequiera?CuandoobservolacruzdesadoqueDextertieneenlahabitación,sonríoyañadomirandoaEric:—Niseteocurra.Mi amor sonríe, y entonces Dexter se acerca a nosotros y, entregándome un collar de cuero
negro,dice:—Ponteesto,diosa.Lomiro.Essuaveyenelcentrohayunaargolla.—Yasabesquenomevaelsado—replicomirándolo.Elguapomexicanosonríe,meguiñaelojoysusurra:—Losé,peroniteimaginaslailusiónquemehaceataroscomoaunasperrillas.Eric sonríe. Pone sumirada demalote queme enloquece y, tras colocarme el collar,me lleva
hastalamesaquehayenunlateraldelahabitación,medesabrochaelvestido,mequitaelsujetadorylasbragasymurmura:
—Échatebocaabajosobrelamesayestiralosbrazos.Hagoloquemepidesinrechistar.Todosmemiran.Loshombresmecomenconlamirada.Me
tiemblanlaspiernasdelaexcitación,yEricsealejadejándomeallícompletamenteexpuesta.
Esincreíblelomorbosoquepuedellegaraserenlaintimidadylocelosoqueesenlavidarealcuandounhombremedesea.Séqueescomplicadoquelagenteentiendaeso,peronomeimporta;nosotroslo tenemosclaroyes loquemevale.Loquenosvaenelsexoeselmorbo,elplacer,eljuegoyeldisfruteparalosdos.
Denuevo, durante unos segundos todos permanecemos en silencio hasta queDexter le pide lomismoaGraciela.Éstasequitaelvestidoymesorprendoalverquenollevanisujetadornibragas.Vaya...,vayaconGraciela,quiéndiríaqueeslatímidajovenqueconocí.
El silencio inundadenuevo lahabitacióndelplacer,mientrasnosotras, excitadasyexpuestasaellos,esperamosdesnudas.EntoncesveoqueEricseacercaalequipodemúsicayojeavariosCD,memirayfinalmenteponeuno.
ComienzaasonarAC/DC,ysonríoalreconocerHighwaytoHell.[18]Lacañeracanciónsuenaatodamechaenlahabitacióndelplacer,unlugartotalmenteinsonorizadodondenadienosvaaoírnigritar,nigemir,nigozar.
Con curiosidad,miro ami alrededor cuandoveoqueDexter, que lleva unmando en lamano,aprietaunbotónylaluzcambiadeamarillentaaroja.Eneseinstante,CésaryMartíncomienzanadesnudarse.MiroaEric,éltambiénsedesnuda,peroadiferenciadelosotrosdos,unavezdesnudosesientaenlacamaaobservar.¡Quémorbosoes,elpuñetero!
MartínyCésarsecolocanunospreservativos,ydeprontonotoquealgomegolpeaeltrasero.Mevuelvoparamiraryveoqueesunafustadecuerorojo.SonríocuandooigogritaraDexter:
—Esoes,niñas,antesdeserfolladas,quieroveresasnalguitasrojas...,muyrojas.Graciela y yo nosmiramos y sonreímosmientras Eric, que continúa sentado en la cama, nos
observa con seriedad. En momentos así, me encantaría saber qué es lo que piensa. Se lo hepreguntadootrasvecesysiempremerespondelomismo:dicequenopiensa,quesólodisfrutadeloqueveyseexcita.
Una vez siento que el trasero me arde por los suaves latigazos, Eric baja la música y,sorprendentemente, se oyen las respiraciones aceleradas deGraciela y lamía.Ambas disfrutamosconaquello;entoncesmimaridoseacercaanosotrasydice:
—Subidlasrodillasalamesa,separadlasyseguidtumbadas.Instintivamente,nosotraslohacemos,yentoncesveoqueDextersecolocaalladodesumujer,le
acariciaelsexoymurmura:—Esoes,mivida...,quierotupanochitabienabiertita.Acto seguido,Gracieladaungrito cuandoDexter le separa lasnalgasy le introduceunanillo
anal.Eneseinstantesientolasmanosdemiamorenmiano,lotoca,lotientayentoncessoyyolaquegritadeplaceralnotarcómomeintroduceotroanilloamí.
LasrespiracionesdeGracielaylamíavuelvenaacelerarsecuandoDexterseacercayenganchaunascorreasalasargollasquellevamosalcuello.DespuéssecolocajuntoaEric,queestáfrenteanosotras,yleentregamicorrea.
—Adoroamimorbosomarido—murmuraGracielaenelmomentoenqueDextertiradelasuya.En ese instante siento que alguien se mueve detrás demí. De reojo observo que esMartín y,
cuandoEricasiente,tocaelanilloanalylomeneamientrasmedapalmaditassuavesenlavagina.¡Oh,Dios,quéplacer!
Esostoquecitossecoshacenquememueva,quenopare,yesoaloshombreslesgusta,lesgustamucho.
Pasadosunosminutosenlosquesientomisnalgasrojasymivaginacaliente,Martínintroducedosdedosenmisexoy,trasahondarenmí,comienzaamasturbarme.
Boca abajo sobre la mesa como me tiene, estoy por completo a su merced, mientras aqueldesconocidomemasturbaymanejamicuerpoasuantojo.
Excitada,memuerdoel labio inferiorymearqueo,cuandosientoqueélmesacael anillodeltrasero,meagarraporlacintura,tirademíhaciaatrásy,poniéndomelospiesenelsuelo,medalavueltaymurmuracercademirostro:
—Sifuerascomida,seríasunchileporlopicantedetumirada.—Y,actoseguidoyconceleridad,mesientaenlamesa,meabredepiernasy,alvermitatuaje,murmuraexcitado—:Güey...,curiosotatuaje...«Pídemeloquequieras»...
Yo sonrío. No veo a Eric, pero seguro que sonríe también. Nos gusta ver la sorpresa en losrostrosdelagentecuandolo leenocuandopreguntanquéponeyEricoyose lo traducimos.Losexcitaesemensaje.Sesientenpoderososalpedir,yyoencantadadeofrecerplacer.
Traspasarlamanopormitatuaje,Martíncolocalacabezadesupeneenmihúmedaentradayseintroduce enmí al tiempo que veo queCésar penetra aGraciela, que aún sigue tumbada sobre lamesa.
LamúsicavuelveasonaraltayfuertemientrasMartínentraenmílentamente.Clavalasmanosenmicinturaparaquenopuedamoverme,perosusempellones,cadavezmásvigorosos,mesacuden.EntoncessientounasmanosfuertesquemesujetaneltraseropordetrásyséqueesEric.Losé.
Echolacabezahaciaatrásyveoquesehasubidoalamesa.Megustasumiradafelinayexcitada.Luego,dauntirónalacorreay,apretándomeeltrasero,murmuraenmioído:
—Esoes,miamor,dejaqueentreenti.Dejaquetefolle...Actoseguido,mecogelasmanos,lasuneamiespalday,después,enredalacorreaalrededorde
ellas.Esoesnuevo,nuncamehaatadoasí.—¿Tegusta?—oigoquepreguntaentoncesexcitado.—Sí—afirmomientrasunnuevojadeosaledemiboca.—¿Tegustacómotefolla?—Sí...—vuelvoaasentir.Paramínohaynadamásmorbosoqueescucharloquedicemiamorenunmomentocaliente.El
morbonoessóloloquehacemos,sinotambiénsuroncavoz,suspalabras,sumiradayelmodoenquemesujeta.Acalorada,miroaMartín,quecontinúaasolandomicuerpoy,cuandoveoquevaaabalanzarsesobremiboca,digobienaltoparaquemeoiga:
—Mibocasólotieneundueño.Martínasiente.Nosomoslaúnicaparejaquesereservalosbesossóloparaellos.EntoncesEric
tiradelacorrea,hacequelomireymebesa.IntroducelalenguaenmibocacontalposesividadquecreoquemevoyaahogardeplacermientrasMartínsiguehundiéndoseenmíunayotravez.
Eneseinstante,oigoqueGracielajadeatantoomásqueyo.Sinduda,loqueocurrelavuelvelocacomoamí.Elcalorrecorremicuerpocomounaculebrilla,cuandoEricseapartay,trasponersedepie en lamesa, coloca su pene antemí y lo introduce enmi boca.No puedo tocarlo,mismanos
siguenamordazadas,yesoenciertomodomeexcita.Suave.Elpenedemiamoressuave,duro,dulceyexcitante.Meencanta.No sé cuánto dura aquello, sólo sé queme abandono al placer que doy yme dan.Mi cuerpo
tiembla,misexosucciona,mibocachupa,yyodisfrutodeaquellasensaciónmientrasllegoalclímaxvarias veces sin pensar en nada más, hasta que Martín acelera sus acometidas y, tras un fuerteempellón,séqueelplacertambiénlehallegadoaél.
EncuantoMartínseretira,veoquecogeunabotellitadeaguaymelaechasobrelavaginaparalavarme.
¡Oh,quéfrescor!Eric se baja de la mesa. Sin desatarme las manos de la espalda, me tumba con exigencia y
premura,colocamispiernassobresushombrosymepenetrahastael fondoparaqueyovuelvaagritar.
—Sí...,así...,gritaparamí—oigocómoexige.Nadamegustamásqueserposeídapormiamor.Nopodermoverlasmanosmeestámatando,
aunque,almismotiempo,meestágustando.Niyomismameentiendo.Nuestraposesiónnoes sólo física, sino tambiénmental,porqueséque,cuandootrohombreo
mujerestáenmiinterior,sóloconverlamiradadeEricescomosifueraél.Élysolamenteélmefollademilmodos,demilmaneras,comoséquesoyyolaquelofollaaél.
Sindescanso,miamorsemueveenmiinterior,unayotrayotravez.Somosinsaciablesenloquealsexoserefiere.Entonces,mirandoaMartín,quenosobserva,murmuro:
—Sujétameparaél.Aloíreso,Ericsonríe.Nuestroinstintoanimal,esequenosposeeenmomentoscomoéste,yaha
aflorado y, abriéndome todo lo que puedo para mi amor, me dejo penetrar mientras Martín mesostieneporloshombrosparaquenomemuevaniunmilímetrosobrelamesa.
Fuerte...,fuerte...,fuerteyduro.Asímehacesuyamiamor,yséqueyolohagomíomientrasensusojosobservolarabiaportodoloocurridoentrenosotrosúltimamente.
Veoquesemuerdeellabioinferior,loquesignificaquesullegadaalséptimocieloestácercana.Lamúsica se para y pueden oírsemis gritos en la habitación. Peromis gritos no son los únicos.Cercadenosotros,Graciela está sentada sobreDexter, que llevapuestoun arnés conunpene a lacinturaygritacomoyo.
—Dimequetegustaasí...,dímelo—exigeEricconvozronca.Asiento...,nopuedohablar.TodayotiemblomientrasoigolosazotesqueDexterledaasumujer
eneltrasero,yEricmásdentrodemínopuedeentrar.Mis gritos de placer y los de Graciela resuenan en la insonorizada habitación, y eso a los
hombreslosponeamil.Entonces,lapuertaseabreyveoentraraBjörnyaMel.Nosmiran,ensusojosveo lasganasque tienendeunirseal juego,departicipar,peroyoenese instantesóloquierojugarconmiamor,conmiEric,conmiZimmerman.
Por suerte para mí, Eric tiene un aguante increíble. Sabe dosificarse para que el placenteroinstantedurecuantodeseemosy,trascorrermeunavezycuandosientequevoyacorrermedenuevo,seagachasobremíymurmura:
—Juntos,pequeña...,juntos.
Mordiéndomeellabioinferior,meproporcionaunúltimoysecoempellónquehacequeelplacernoslleguesimultáneamenteytengamosconvulsionescomolocossobrelamesa.
Conloshombrosdoloridosporestartantoratoconlosbrazoshaciaatrás,nuestrasrespiracionesseacompasan,yentoncesveoqueCésarseacercaaMelyBjörncomienzaadesnudarlamientrasellasecolocaelcollardecuero.
Sinmovermeni separarmedemiamor,observocómocomienzael juegoentreellos.Ericmebesaentoncesenelcuello,mesientaenlamesay,trassoltarmelasmanos,murmuraenmioído:
—¿Todobien,miamor?Dirijomisojososcuroshaciaél.Meduelenunpocolosbrazospero,conunaponzoñosasonrisa,
asientoymiamorsonríe.Varios minutos después me entran unas irremediables ganas de ir al baño para hacer pis y,
mirandoaEric,digoponiéndomeunadelasbatasrojasquehaysobrelacama:—Tengoqueirallavabo.—¿Teacompaño?—No,cariño,nohacefalta.Enseguidavuelvo.Cuandovoyamoverme,Ericmesujetay,mirándomealosojos,murmura:—Teechabademenos,corazón.Yosonrío.Séaloqueserefiere.—Yotambiénati,miamor—digosonriendodefelicidad.Lobesoy,trasabrirlapuertadelalibrería,salgoycorroalbaño.Dosminutosdespués,yconlavejigavacía,memiroalespejoysonríoalverelcollardecuero
deDexterenmicuello.Dexterysusrarezas.Trasatusarmeunpocoelpelo,mecierrolabatarojasobre la cintura y salgodel baño.Caminode regresohacia el despachoy, cuandomedispongo aentrar,medoydebrucesconalguienquesaleatodaprisa.
¡Mihermana!Alverme,Raquelmeagarradelamanoy,conelgestodesencajado,murmura:—Ay...,cuchu...,ay,cuchu...,¡vámonosdeaquí!—¿Quépasa?—preguntopreocupada.—Tenemosquecogeralosniñosymarcharnosdeaquí.—¿Porqué?¿Quéocurre?Voyamovermecuandomihermanasellevalamanoalabocaymurmura:—No...,noentreseneldespacho.¡Ay,virgencita,quédepravación!Segúndiceeso,séloquepasa,ysemeponelacarnedegallina.Joder...,joder...,joder...Pongounpieeneldespachoy,condisimulo,miroyveoquemehedejadolapuertadelalibrería
abiertaalsalir.¡Malditasea!Raqueltirademí.¡Estáhistérica!Comopuedo,lallevohastalacocinaparadarleunvasodeagua.Pobrecita,mihermana,conloimpresionablequeesparaestascosas.Tiembla.Yome agobio y, cuando se ha terminado de beber el vaso de agua, lo deja sobre la
encimeraycuchichea:
—Ay,Diosmío...,ay,Diosmío...,¡quéfatiguita!—Tranquila,Raquel.Tranquila.Mihermanasedaaireconlamano,estáblancacomolaceray,comotemoquesedesmaye,la
sientoenunasilla.—Teníased—empiezaaexplicarentoncesconvoztemblona—.Vinealacocinaaporaguay,al
salir,oíruido.Fuihastaeldespachoy,alentrar,yo...yoviesapuertaabierta,measoméy...y...Ay,cuchu,¡vámonosdeaquí!
—Raquel,respira.PeroRaquelestá,comodecíalacancióndeShakira,bruta,ciegaysordomuda,ytiembla...tiembla
comounahojadelsustoquetiene.Ay,pobrecita,michicarrona,¡quémalratitoestápasando!Voyaporotrovasodeagua,estavezparamí.Lonecesito.Saberquemihermanahavistoloque
havisto,meresecahastaelalma.Bebo...,beboybebomientrasintentopensarrápidamenteenunaexplicaciónquedarlecuandoella
seacercaamíymurmura:—Eric...Ericestabaconesosdepravados.—Escúchame,Raquel...—No, escúchame tú a mí —insiste con la respiración entrecortada—. He... he visto algo
horroroso, impúdicoyguarro.Eric estabadesnudoymirando,mientrasMel yGraciela estaban acuatropatascomounasperrillas...Ay,Dios...Ay,quéfatiguita,¡nopuedonidecirlo!
—Respira,Raquel...,respira.Peromisorprendidahermananoatiendearazonesy,levantándose,prosigue:—Ellas llevaban unos collares de cuero negros como si fueran perros, Dexter tiraba de una
correa,mientrasBjörny creoque... que...César las... las... ¡Ay,Dios, qué asco!—Y, tomandoaire,suelta—:Estabanfollando, ¡follandocomoconejos! ¡Todosrevueltos!¿Cómo...cómopuedes teneramigosasí?
Joder...,joder...,joder,quémalratomeestáhaciendopasaramítambién.Noséquéresponderle.Nuncame imaginéviviendouna escena así conRaquel.Entonces,mi hermana se agacha en el
sueloyseponeallorar.Pero¿porquétienequesertandramática?Me agacho con ella con la intención de levantarla y la pobre, hecha un mar de lágrimas,
murmura:—Cuánto siento lo deEric, cuchu..., con lo que tú lo quieres, y... y él...—Y, cogiendo fuerzas,
sisea—:Ese desgraciado es un depravado, un cochino, un cerdupedo..., un... un...—Entonces gritalevantándosedelsuelo—:¡Ay,virgencitadelaMerced!
—¿Yahoraquépasa,Raquel?Mihermanalevantaunbrazoy,señalándomeconundedoacusador,diceconvoztemblorosa:—Tú...túllevasotrocollardeperrillacomolosquellevanellas...Ostras,¡elcollar!Inconscientemente,melotocoymurmuromientrascomienzoasentirunpicorenelcuello:—Raquel,escúchame.
Elgestodemihermanahapasadodelhorroralaincredulidady,yasinllorar,dice:—¿Qué...quéhashecho,Judith?—Raquel...—¡Ay, virgencita! ¿Qué te ha obligado a hacer Eric?, porque juro que cojo un cuchillo y le
rebanoelpescuezodeladoalado.Hedeexplicarme.Necesitodeciralgoantesdequesaqueconclusioneserróneas.—Raquel—respondo—,Ericnomehaobligadoanada.—¡Mientes!Tratandodenoperderlosnervios,insisto:—No,Raquel, nomiento. Eric y yo disfrutamos así del sexo.Y, aunque sé que es complicado
entenderlo,niélmeobliga,ninadiedelosqueestánahídentroestáobligado.Veoquepestañea.Loqueacabodedecirladejaloca.—¿Tevaesaperversión?—murmura.Asientoacojonadayentoncesellagrita—:¡Pero¿esque
estásmaldelacabeza?!—Raquel,nochilles.Seseparademí.Yointentocogerla,peromedaunmanotazo.Sesientaenunasilla.Séqueno
entiendenaday,acomodándomejuntoaella,prosigo:—Eric,yoytodoslosqueestánenesahabitaciónnoestamosmaldelacabeza,Raquel,essólo
que,alahoradedisfrutardelsexo,nosgustahacerloconmásgentey...—¡Guarra! Eso es lo que eres, ¡una guarrindonga y una cochina! ¡Qué vergüenza! Tus niños
durmiendoapocosmetrosdeaquíytúzorreandocomounaperdida.—Raquel...—murmurointentandoentenderla.—¿Cómopuedegustarteeso?Entiendosuindignación.Entiendoloquepiensa.Entiendoquepiensemilcosasdemí.YotambiénpensétodoesolaprimeravezqueEricmemostróesemundo.Asípues,tratandode
ponermeensulugarytambiéndehacerlecomprender,prosigo:—Yo no lo veo como una cochinada, sino simplemente como otro modo de ver, entender y
disfrutar del sexo.—Y, antes de que pueda hablar, añado—: Eric y yo somos una pareja normal,comotú,comoBjörnyMeloDexteryGracielapero,alahoradelsexo,nosgustaalgomás.
—¿Parejanormal?—Sí.—Mira,guarrindonga...,esodenormalnotienenada.Esolohacenlosdepravadosylosqueno
estánbiendelacabeza.Ytú...ytú...¡Ofú,quécalor!—Aver,Raquel—insistorascándomeelcuello—.TúmismamehasconfesadoqueJuanAlberto
ytúdisfrutáisenvuestracamajugandoconvibradoresyconsoladoresy...—Esonoeslomismo,Judith...—Loes.Escúchameydéjameexplicarme.—Nodigastonterías.—Raquel, tú y tumarido jugáis como jugamosEric y yo.Laúnicadiferencia es quenosotros
jugamoscongentedeverdadyvosotrosconaparatosdesiliconayconvuestraimaginación.—Pero¡¿quétonteríaestásdiciendo?!—chilla.—No digo ninguna tontería, Raquel.—A continuación, clavo la mirada en ella y pregunto—:
¿PorquéjuegasconvibradoresconJuanAlberto?Mihermanaseponeroja,peroalverqueesperocontestaciónresponde:—Porquemedalaganaymesaledelpotorro;¿yatiquéteimporta?Sucontestaciónmehacesonreír,einsisto:—Lo haces porque te causa morbo. Que yo recuerde, me dijiste hace tiempo que tenías un
consoladorllamadoAlPacinoyotroKevinCostner.¿Porquélespusisteesosnombres?Raquelsedaaireconlamanomientrasyomerascoelcuello.—Hedichoquenoeslomismo—sisea—.Nointentesconvencerme,¡cochina!Vale...,novoyaenfadarmeporquemellamecochina.RaquelesRaquel.—LespusisteesosnombresalosjuguetitosporqueenelfondotegustaríaquefueranAlPacinoy
KevinCostnerquienesestuvieranallí—insisto—,y...—Por favor, ¡cuánta tontería tengo que oír! —grita mi hermana—. ¿Quieres dejar de decir
porquerías desagradables? Que tú seas una guarrindongui no significa que yo tenga que serlotambién.Ay,Judith,quédecepción,¡quédecepción!
—¿Me consideras una guarrindongui? —Raquel ni siquiera pestañea, y añado—: Pues sientomuchoquepiensesesodemí.
—Cuandopapáseentere...—¡¿Qué?!Ah,no...,esosíqueno.Enesteinstante,sacotodamiartilleríapesaday,mirandoamihermana,replico:—Raquel, si se te ocurre decirle algo a papá demi vida sexual, ten por seguro dos cosas: la
primera,quenovolveréahablarteenlavida,ylasegunda,queéltambiénsevaaenterardelobienquetelomontasconAlPacinoyKevinCostner.
Nosmiramos.Ellaestáenfadada.Yotambién.Eneseinstante,JuanAlbertoentraenlacocinaencalzoncillosy,mirandoamihermana,dice:—Michiquita,estabapreocupadoportutardanza.¿Quéocurre?Mihermanaselevantayhuyedemiladopararefugiarseenbrazosdesumarido,cuandoenese
momentoapareceEricconunatoallaalrededordelacinturaymemira.—Cariño,¿quépasa?—dice.AlveraEricdeesaguisa,Raquellomiray,comounaverdulera,grita:—¡Guarro,degenerado,indecente,vicioso,corrupto,inmoral...!¡Esoesloquepasa!Sumaridoyelmíosemiransorprendidosmientrasyoresoplo.Merascoelcuelloy lepidoa
Ericconlamiradaquenodiganada.Sinduda,Raquelnolovaaponerfácily,caminandohaciaella,siseo:
—Sivuelvesainsultaramimarido,teaseguroque...—Pero¿quéospasa?—insisteJuanAlberto.Raquel se calla, no dice nada. A sabiendas de que luego se lo va a contar,me planto antemi
cuñadoyexplico:
—RaquelacabadedescubrirqueaEric,amíyaalgunosmásdeestacasanosgustauntipodesexodiferentedelquevosotrospracticáis.Esoesloqueocurre.
Ericmemirasorprendidoporloquehedicho,yyoañado:—Y yo le he dicho que, mientras vosotros jugáis con consoladores y vaginas de silicona,
nosotrosjugamosconpenesyvaginasdecarneyhueso.¿Dóndeestáelproblema?JuanAlbertoabre laboca.Elpobreestá tan sorprendidocomoEricy,mirandoamihermana,
dice:—Escucha,relinda...—Vámonosdeaquí.Noquieroestarenestacasacorruptallenade...de¡inmorales!—Raquel...—susurroparapedirlecalma.—¡Vámonos!—vuelveagritarella.—¿Ahora?—preguntamipobrecuñado.—No,elmesqueviene,¡notejode!—insisteRaquelmalhumorada.TrasintercambiarunamiradacómpliceconEric,quedeprontomehacepresuponermásdeuna
cosa,elmexicanomurmura:—Cariño,losniñosestándormiditosencasademistíos.¿Cómolosvamosadespertar?—Medaigual—insistelacabezotademihermana—.Noquieropermanecerniunsegundomás
bajoelmismotechoqueestosperdidosysucioscochinos.—Raquel,comovuelvasainsultarnos,tejuroquemevoyaenfadar—siseo.Ericmecogedelamanoymesujeta.Meconoceyestáviendoquealfinallevoyacruzarlacara
amihermanacomosigaporesecamino.—Escucha,mi reina—dice JuanAlberto—, quizá no sea elmejormomento para decirte esto,
peroantesdeestarcontigoyotambiénpractiquéloqueelloshacen.—¡¿Qué?!—gritamipobreRaquel.¡Tomayaaaaaaa,loqueacabadeconfesarmipobrecuñado!—Participé en orgías—prosigue él—, y en su defensa tengo que decir que nome considero
ningúncorruptoniningúndegenerado.Essólounaclasemásdesexo,tanrespetablecomolaquetúyyopracticamos.
Labocademihermanaseabre...,seabreyseabrey,cuandonosepuedeabrirmás,yestáclaroquevanasalirdeellasaposyculebras,Ericdice:
—JuanAlberto,llévateatumujeralahabitaciónytranquilízala.Inmóvil,veocómomicuñadoagarralamanodemihermanay,sindecirniunapalabramás,tira
deellacongestotoscoyambossemarchan.El corazón semeva a salir del pechomientrasme rasco el cuello.Ericme sujeta entonces la
mano,lomiray,quitándomeelcollardecueronegro,musita:—Cariño,teestásdestrozandoelcuello.Agobiadaporloocurrido,merefugioensusbrazos.—Llévamealacama—lepido—.Necesitocerrarlosojosydesconectar.
26
A lamañanasiguiente, todossaben loocurrido.Todosmenos lospadresdeDexter;ya seencargaJuanAlbertodequeRaquelnoabralaboca.
Mihermanaestáenfadaday,porloqueveo,consumaridotambién.Pobre,¡laquelehacaído!MelyGracielaintentanhablarconella,perolacabezotadeRaquelsehacerradoenbanda,sólo
veennosotrosaunosdegeneradosy,cuandopasapornuestro lado,enespecialporelmío,me lodiceapesardelosgruñidosdeJuanAlberto.
—Jodercontuhermana—protestaMel.Luegomellevahasta la terraza,dondenossentamosatomar el sol, y añade para quitarle hierro—: Bueno, la verdad es que si mi hermana Scarlett seenteraradecómoesmividasexual,seguroquereaccionaríacomoella.
Gracielasenosacercaconunascopasysesientaconnosotras.—Debéiscomprenderlas—dice—.Notodoelmundoentiendeestetipodeprácticassexuales.—Losé—afirmoviendoaEricsonreíralapequeñaHannah—,eintentoponermeensulugar,
porqueellaesmuytradicional.—Bueno...,bueno...—diceMel riendo—.No te fíesde las tradicionales,queésas luegoson las
peoresylasmásviciosillas.Lastresreímos,yluegoyoañado:—No, en serio, Raquel siempre ha sido muy tradicional en temas de sexo. Con su anterior
marido, sé que hizo el misionero y pocomás, pero con Juan Alberto estoy segura de que se haespabilado,ymásqueseespabilarátrasenterarsequeéltambiénparticipóenorgíasenotraépoca.
Denuevoreímos.Québrujassomoslasmujerescuandonosjuntamos.—Jud—diceGracielaentonces—.Yaséquenotevaelsado,pero¿notegustócómoanochete
atóEriclasmanosalaespalday...?—Nomedisgustó,peroprefierotenerlasmanossueltas—respondo.—Pero¿noteexcitó?—insiste.Silopienso,claroquemeexcitó.—Enocasiones—digobajando lavozalveraSamicorrerpornuestro lado—,Ericyyonos
atamosanuestracamay...—Peronoeslomismo,Jud—vuelvealacargaGraciela—.Ayerteatóenunjuegodevariosy
pudeverensucaraquedisfrutabaconello.Esomesorprende.Sinlugaradudas,leviolacaracuandoestabadetrásdemí.—Queno—repito—.Queelsadonomeva.Quenomegustasufrir.—Yonosufro...,alrevés,disfruto—diceGracielariendo.Meldauntragoasubebiday,despuésdequePipanosindicaquesellevaalosniñosalasalade
juegos,murmura:—Amítampocomeva.—Pero¿lohasprobado?—preguntaGraciela.Melasientey,bajandolavoz,cuchichea:—Loprobéhaceañosconuntipo.Peroundía,traspasarmeunbuenratoatadaysuspendidaenel
aire,decidíquenoeralomío.Aunque,bueno,reconozcoquecuandoheestadoenlacruzsujetasímehaexcitadoylohepasadobien.
—¿Teexcitalacruz?—pregunto.—Sí, y a Björn también—dice sonriendo con picardía—. Creo que deberías probarlo. Estoy
seguradequetegustaría.—¡Niloca!—resoplo—.Siaccedoaeso,sindudaaccederéamáscosas,yrepito:¡pasodelsado!MelyGracielasonríen.Ambaslohanprobado.Estaúltimacuchichea:—PruébaloconEric.Hace tiempo,Dextermecontóque los tresestuvieronenalgunafiestecita
BDSM.Y,porloquesé,selopasaronmuybien.Melyyonosmiramos.Primeranoticia.—¿Ycuándodicesquehanestadoenesasfiestecitas?—preguntaMelcambiandoeltonodevoz.Alversureacción,Gracielaseapresuraaresponder:—No...,no...,noesactual.Élmecontóquefuehaceaños.EnesemomentoapareceDextery,posicionándosejuntoasumujer,pregunta:—¿Dequéhablantrespreciosasmujeresbajoelsol?—Desado—respondeGraciela.Dextersonríe.—Mividalinda,viciosayhermosa—murmura—.Sonlasdocedelamañana,lacasaestállenade
genteymisviejosestánenel salónconnuestrosbebitos.Pero, sinoestuvieran, ahoritamismo tedesnudaría,teataríasobrelabanquetayjugaríaunbuenratitocontigocomonosgusta.
Gracielasonríe,seacercaalasilladeruedasdesumaridoylobesa.—Nilostacosestántansabrososcomomidueña—murmuraDexter.Melyyonosmiramosysonreímos.Losreciénestrenadospapisestáncomoatontados.Cuandoel
besoacaba,Dextermemirayseñala:—Tuhermana está totalmente norteada. Si seguimos su plan, vamos a entrar en broncas.Ni te
cuento,lohasoltadotodoporsuboquitacuandomehavistoestamañanita.Asiento.Meimaginoamihermana,mientraspiensoquépuedodecirleohacerparaquerespetelo
queyohago.Al finyalcabo, se tratade respetar.Yorespeto loqueaella legusta,yelladeberíarespetarloqueamímegustapero,claro,¡hazleentenderesoamidramáticahermana!
EneseinstantesalenalaterrazaBjörnyEricmuyserios.—¿Quéocurre?—pregunto.—Creoquehayuncoreanoalemánqueselaestájugando—diceBjörn.Aloíreso,rápidamentemiroaEric.—¿Quéhahecho?Ericsesientaamiladoysuspira:—Mimadrenomelohadicho.Pero,cuandoregresemos,metemoquetendremosquehablarcon
ciertoadolescenteconflictivo.Resoplo.Noquieronipensarquéhabráhechoahorae, intentando relajaramiamor,apoyo la
cabezasobresuhombroymurmuroparahacerloreír:—Túyyosolosenunaisladesiertaseríamostremendamentefelices,¿verdad?Miamorsonríey,acercandolabocaalamía,murmura:—Contigo,encualquierlugar.Esa noche, en la intimidad de nuestra habitación, Eric me sorprende cuando me pide que me
pongaelcollardecuero.Lohagogustosay,trasdecirmequeconfíeenél,meataalacabeceradelacamaycomienzaadarmeórdenesqueyoaceptoencantadamientrasmehaceelamorconexigencia.
Unavezacabamosnosreímosy,cuandomedesata,preguntomientrasestamostumbadossobrelacama:
—¿Atitegustaríajugarconmigoatadaaunacruz?Miamormemiraysonríe.—Nuncaharénadaqueatitedesagrade.Vale.Surespuestamegusta,peroinsisto.—Pero¿tegustaría?Denuevosumiradametraspasa.¡Dios,cómomeponeesamirada!Séquedudasurespuesta.Sabeloquepiensodeesascosas,perofinalmentesusurra:—Claroquemegustaría.Deprontoselevantay,tendiéndomelamano,dice:—Ven.Me levanto.Mepasaunabataquemeanudoa la cinturay, trasponerseélotra,mecogede la
manoysalimosdelahabitación.Veoquemellevaalahabitacióndelplacer.Ericponelaluzrojaycierralapuerta.
Concuriosidad,observolosartilugiosqueDextertieneallí.Sinduda,aélyaGracielalesgustancosasqueniamíniaEricnosvan.
—¿Tefíasdemí?—preguntamiamormirándomealosojos.Meentralarisa.Claroquemefíodeél.Entonces,mebesa,desataellazodemibata,éstacaeal
sueloyyoquedototalmentedesnuda.Excitada,meagarroaEricydisfrutodeun increíblebeso,hastaqueélmesepara,mecoge la
manoymellevaantelacruzacolchada.Yolamiro.Éricmemiraamíydice:—Enlacruzsepuedenjugaramuchascosas.Nosóloaloquetúcrees.Actoseguido,medalavuelta,meponedeespaldasaél,subemismanoshaciaarribay,conunas
cintasquecuelgandelacruz,comienzaaatármelas.—Eric...Miamormeapaciguapaseandolabocapormicuello,lochupaymurmura:—Tranquila,pequeña...,tranquila.Cuando termina de atarme lasmanos, se agacha ymehace separar las piernas.Con una cinta,
sujetaunodemistobillosyluegoelotro.
Una vezme tiene totalmente inmovilizada en la cruz,miro hacia atrás. Con Eric nunca tengomiedo de nada. Entonces observo cómo se desabrocha la bata y ésta cae al suelo y él queda tandesnudocomoyo.
Laluzroja,yoatadayverlodetrásdemíconlograndequeesmeintimida.Meponelacarnedegallina,peronodigonada.Ericnuncameharíadaño.
Actoseguido,looigomoversey,depronto,unamúsicaestridentequenoidentificocomienzaasonar. Entonces, veo que Eric coge un azotador con flecos rojos y, pasándolo por mi cuerpo,murmura:
—Cierralosojos,pequeña.—Eric...Intentomoverme.Lasensacióndeestarinmovilizadameagobia,peroélinsiste.—Ciérralosyconfíaenmí.Hagoloquemepide.Confíoenél.De pronto siento cómo comienza a pasear el azotador por todo mi cuerpo. Es suave,
increíblemente suavey, cuandome estoy acostumbrando a su suavidad, unpicor en las nalgasmehaceabrirlosojosyoigoqueEricpregunta:
—¿Duele?—No.Miamorsonríeyahorasientoelpicorenlaotranalga.Duranteunrato,Ericmeazotaconcuidadolasnalgas,losmuslos,laspantorrillasylascostillas.
Elpicoresgustosoy,cuandonotoqueelcuerpoenteromearde,élsueltaellátigo,posasuduropeneenlaentradademivaginaymepenetra.
Grito.Nopuedomoverme.Atadacomoestoydepiesymanos,metienetotalmentedominada.Eric,mi
grandullón,aprietaelpeneenmiinteriorymurmura:—Lacruzteinmoviliza,ytetengototalmenteamimerced.¿Lonotas?Asiento...,nopuedohablar.Apoyalasmanosenmicinturaylamasajeamientrasmeempalaconlentitud.Después,susmanos
vanhastamivientre,bajan...,bajanybajany,cuandosudedosecolocasobremiclítorisyloacaricia,Ericsusurraenmioído:
—Nomevaelsadoylosabes,peroahoramismomeencantaríaquedelantedetihubieraalguienchupandoloquetocomientrastefollo.Imagínalo.Imagínalo,pequeña,ydisfruta.
Extasiadaporloquelaunióndetodoesomeestáhaciendosentir,jadeoenelmomentoenqueélcomienzaabombearenmiinteriorcomounanimal.Gimo.Meentregoaél.Micuerporebotacontrala cruz acolchada y noto que la sensación me gusta.Me gusta estar sometida mientras el duro yexigentepenedeEricentraysaledemí.Nuestrosgritosdeplacernacenymuerenenlahabitación,hastaqueelgocenospuedey,trasunaúltimaestocada,losdosllegamosauncalienteclímax.
Acabadoel locomomento,ambospermanecemosapoyadosen lacruzunos instantes;yosobreella, y Eric sobremí. Necesitamos que nuestro resuello se tranquilice, mientras lamúsica cañerasuenaanuestroalrededor.
Minutosdespués,Ericsaledemí,sientocómoseagachay,trasdarmeunmordisquitoenlanalga
derecha,medesatalostobillosparalevantarsefinalmenteydesligarmelasmanos.Unavezliberada,medoylavuelta,justoenelmomentoenqueEricapagalamúsica.Elsilencio
nosllena,nosmiramos,sonríoyélsonríey,trasdarnosunfugazbeso,miamormeagarraporlacinturaydicemimoso:
—Estoes lomáximoqueyoquierohacer contigoen la cruz.Nuncaharíanadaque tepudieraincomodarnidesagradar,¿entendido?
Asientoysonrío.Sinduda,miamorsabeloqueaambosnosagrada,yesomehagustado.
Pasan dos días en los que por las noches, cuando los niños duermen, Eric y yo, solos o encompañía,jugamosatodoloquesenosantoja.Atodo...
Raquelsiguesinhablarme,noseacercaamí,perocomienzaacomunicarseunpocomásconlosdemás.Sinduda,continúaenfadadaconmigo,yosoysuguarrindonguihermanay,conociéndola,mevaamartirizarelrestodemivida.
Llegalafechadelbautizoyamaneceunpreciosodía.Todosnosponemosnuestrasmejoresgalasysalimosendistintoscocheshacialaiglesia.
Durantelahomilía,ErictienequesaliralacalleconHannah.Comosiempre,elmonstruitolaestámontando.YomequedoconelpequeñoEric,quejuegaconSamisobreelbancodelaiglesiaconuncochecito.
Condisimulo,observoaRaquelyveoquemiraalfrentemuydignamientrasescuchaloquediceel sacerdote.El cura habla de saber perdonar y entender, e inconscientemente sonrío. ¡Vamos, queparecequesabeloquehapasado!
Unavezbautizadoslosmellizos,todoslosinvitados,quesomosmásdecien,nostrasladamosalClubdeGolfMéxico,un lugarpreciosoycolorido.Nadamás llegar,unosatentos camarerosnoshacenpasar aunode susbonitos salonespara elbanquete,y, todo seadicho,mepongomoradaacanapés.
¡Quéricoestátodo!Yquépocomeimportanahoraloscincokilosengordados...Pipa y las cuidadoras se llevan a los niños para darles de comer. Los pasan a un salón más
chiquitito con otros niños y allí comen, juegan y duermen la siesta mientras los mayores nossentamostranquilamente.
Cuando acaba la comida, y los niños siguen durmiendo, nos quedamos sentados a la mesacharlando,yentoncesobservoquemihermanadiscuteal fondodelsalónconJuanAlberto.Desdequehavistoloquehavistoyélhaconfesadoalgodesupasado,sindudalacosasehacomplicado.Nolesquitoelojodeencima,hastaqueveoquemicuñadosedaporvencido,sedalavueltaysealejadeella.Eric,quetambiénsehadadocuenta,murmura:
—Esteviajecitonolovaaolvidarenlavida,elpobre.Asiento.Desdequemihermananomehabla,lopagatodoconél.PorsuerteparaRaquel,elmexicanoestranquilo,muytranquilo,perotambiénestoyconvencida
deque,comosecabreeylolleveallímite,mihermanalovaapasarmal.VeoentoncesqueJuanAlbertosedirigealbary,trasguiñarleelojoaEric,voyasuencuentro.
Cuandollego,mesientoeneltaburetedealladoy,mirandoalcamarero,pido:
—Póngamelomismoqueél.Micuñadomemiraysonríe.—Adoroatuhermana—dice—,laquieromásqueamivida,perocuandoseponetancabezota
medanganasde...de...Asiento.Entiendoloquequieredecir,ymurmuro:—Lamentomucholoquehapasado,ymesientoresponsabledevuestrasdiscusiones.Elcamarerodejaantenosotrosdosbotellitasdeagua.—Guauuuu...—exclamodivertida—,¡veoquevasfuerte,cucuruchillo!JuanAlbertosonríey,mientrasmesirveelaguaenunbonitovaso,señala:—Elaguasiempreaclaralasideas.Esomehacesonreír.Sinduda,mihermanahaencontradoaunbuenhombre.Cuandoterminade
llenarsuvaso,dice:—Yointuíaqueaquellanocheterminaríaisenlahabitacióndelplacer.El agua se me va por otro sitio. Me ahogo. Juan Alberto se ve obligado a darme un par de
palmaditasenlaespalday,encuantomerecupero,murmuro:—¿Porquélointuías?Micuñadosonríeysuspira:—Cuando me divorcié, tuve una temporada loca. Dexter me invitó a su habitación del placer
variasvecesconunasmocitasmuyguapasy,porsupuesto,acepté.ConozcoaCésaryaMartínyséquéclasedesexolesgusta.Además,nosoytonto:vilasmiradasqueintercambiabanconEricyconBjörnlaotranocheeimaginéloqueibaaocurrir.PoresoaniméaRaquelparaquenosfuéramosalacama.
—Ay,Dios...—No te apures, preciosa —dice sonriendo con complicidad—. Disfrutáis del sexo a vuestra
manera,yestanrespetablecomoeldisfrutequeyotengocontucabezonahermana.¿TeimaginassilepropongoalgoasíaRaquel?
—Teabrelacabeza—memofo.Ambosreímosporaquelloyluegoélañade:—Pero tenías razónen loquedijiste laotranoche.Nosotros jugamosen la intimidadcomo lo
hacéisvosotros,conladiferenciadequeEricytúhacéisloqueosgustaporqueestáisdeacuerdoy,enmicaso,yonolopropongoporqueséqueRaquelmemataría.Poresomeconformoconjugarcon aparatitos de silicona, imaginar y fantasear. Y, una vez dicho esto, siempre negaré que lo hedicho,¿entendido,cuñada?
Sonrío.Unavezmás,JuanAlbertomehacesonreír.—¡Quégrandeeres,tío,quégrande!—exclamo.Unahoradespués,EricnospideunosManhattanaMel,aGracielayamí.Sabequenosgustan
muchoy,mientrasbebomicóctelyescuchocómoBjörnlehacepedorretasamipequeñaHannah,observoaDexterjuntoamihermana.Estánlosdossolostraslascristalerasdelazonadebanquetehablandoyveoqueambosgesticulanconlasmanos.Sinlugaradudas,estándiscutiendo.
—CreoquedeberíasavisaraJuanAlberto—ledigoentoncesaEric.—¿Porqué?
—PorqueDexterymihermanasonunabombaderelojeríajuntosylapuedenliarmuymuymuygorda.
Ericasiente,perosinlevantarsemurmuramientrasjuegaconelpequeñoEric:—Tranquila,JuanAlbertoyaestápendientedeellos.Mirohaciaellugardondemeindicamiamoryveoamicuñadojuntoalosniñoshablandocon
lospadresdeDexter,mientrascondisimuloobservaaRaquel.Eltiempopasa,yDexteryRaquelsiguenjuntos.¿Dequéhablarán?Meagobio.Elmexicanotieneunalenguadedoblefiloquepuedehacerledañoamihermanasi
quiere.Perodeprontoveoqueseabrazan.¡Tomaya!DexterymihermanaseabrazanyEricmurmurasonriendo:—Comonegociador,notieneprecio.Björnsonríeyafirmaviendolomismoquetodos:—Yasabemosqueeselmejor.Boquiabierta,veocómoDextersealejadeRaquelensusilladeruedas,seacercahastanosotros,
memiraydice:—Midiosa,cuandopuedas,tuhermanaquierehablarcontigo.—¿Conmigo?Dextersonríe,sientaaGracielasobresuspiernasymusita:—Vetranquila,milinda,lafierayaestáaplacada.Lomiroboquiabierta.¿Quélehabrádicho?Denuevo,buscocon lamiradaamihermanaycomprueboquenoestádondeestabasegundos
antes.Rápidamentemisojoslabuscanporelsalónylaencuentrojuntoasumarido.Delamanoselollevaaunlado,hablanyfinalmenteveoqueambossonríenyRaquellobesa.
DenuevomiroaDexterypregunto:—Pero¿quélehasdicho?ElmexicanodauntragodelManhattandesumujeryresponde:—Laverdadysólolaverdad.Durantevariosminutosobservocómomihermanaysumaridosehacenmimitoshastaqueella
denuevosevasolaysesientatraslascristaleras.Sevuelvehaciamíymesonríe.EntoncesEricmeacercaaél,medaunbesoymurmura:—Veconella.YoestarépendientedeHannahhastaquePiparegreseconEric.Melevantocondecisión,MelmeguiñaunojoycaminohaciadondeestáRaquel.Unavezllegoa
sulado,ellamemiraporprimeravezenvariosdíasy,conlosojosllorosos,murmura:—Cuchu...,¿tepuedessentaramilado?Sindudarlolohago.Yo,porella,hagoloquesea.Actoseguido,minerviosahermanacogemimanoydice:—Séqueenocasionessoyegoístaymáscerráqueelculodeungorrión,perotambiénséquete
quieroyquenoquieroseguirenfadadacontigo.—Yotampococontigo—respondo.Raquelasientey,trassecarselosojos,prosigue:—Reconozcoque,cuandovi loquevi,measusté.Sabesqueesascosasnovanconmigonicon
misideas,pero...peronodeberíahaberdicholasburradasquedijelaotranochedeEricydeti.Y,antesdequedigasnada,porsupuestoquenoteconsiderounaguarrindonguiniunadescerebrada,yaEric tampoco.Creoqueeresunahermanafantástica,unahijamaravillosayunatíadetussobrinosincreíble.Y,siatiyatumaridoosgustaesetipodesexo,¡adelante!Nohacéismalanadie,nomatáisanadie,noherísanadie,sólodisfrutáisdevuestrasexualidadavuestromodo,aunqueamímesigapareciendounalocura.
Bueno...,bueno...,bueno...,¡simepinchan,nosangro!¿Quiénesésaydóndeestámicuchu-hermana?Durantevariosminutos,Raquelhablayhabla, hastaque,dejándomeboquiabierta,meabrazay
añade:—Ericytúosqueréis.Soisunaparejamaravillosaalaquemuchosenvidian.Yotengolamejor
hermana del universo y por nada delmundo voy a permitir que nuestra bonita relación se acabeporqueyonohagalascosascomotú.
Laabrazo.Aisss,loquequieroyoamiRaquelita.—Tequiero,tonta...—ledigo—.Tequieromuchoy...—Cuchu—meinterrumpebalbuceando—.Dextertienerazón.Enocasionesdamosimportanciaa
enfadostontossinpercatarnosdequeesastonteríasnosrestanfelicidadhastaquepasaalgorealmenteimportante y entonces ya no hay forma de recuperar el tiempo perdido. Yo no quiero perder eltiempocontigoporquetequiero—lacaraseledescuajeringacomoaunchimpancé—,ereslamejorhermanadelmundo.
Sonrío.Meemocionoy,abrazandoalatontademihermana,afirmo:—Yotambiéntequiero,telohedichoytelodirétodaslasvecesquequieras.—¿Aunquetehayallamadoguarrilladegenerada?Sueltounarisotada.—Porsupuesto.Mihermanaselimpiaconcuidadolosojosparaquenoselecorraelmaquillajeycuchichea:—Que conste que sigo escandalizándome cuando pienso en lo que haces con tumarido, pero
estoyavergonzada;¡tellaméguarrilla!¿Cómopudehacerlo?—Teloperdono—digoysonríomirándola—,yteloperdonoporqueséqueenlaintimidad,con
tucucuruchillo,erestanguarrillaydegeneradacomoyo.Raqueltambiénsonríeyseponeroja.—Ay,tonti,¡nodigaseso!Porcierto,tengoquedecirteunacosaoreviento.—Túdirás—respondodispuestaaescucharloquequiera.Mihermanamemiray,trasunodesussuspiritos,dice:—Comodiríapapá,quienjuegaconfuegosequema.Tencuidadoynotequemes.Vuelvoareír,esimposiblenohacerlo,cuandoañade:—¿Sabes?Teníasrazónenalgo.—¿Enqué?Raquelseacercamásy,bajandolavoz,cuchichearojacomountomate:—EnquecuandojugamosconAlPacinooKevinCostner,cierrolosojosypiensoenellos.¡Soy
unzorrón!
27
El día de nuestro regreso aAlemania, en cuanto llegamos al aeropuerto y pienso en Flyn, semeabrenlascarnes.¿Quénosencontraremoscuandolleguemos?
Tras despedirnos de Mel, Sami y Björn, Norbert, que ha ido a recogernos, nos saluda y elpequeñoEricsetiraasusbrazos.Loquieremuchísimo.
Una vez nosmontamos en el coche,Norbert nos pone al día de cómo ha ido todo en nuestraausencia, pero no habla de Flyn. Lo omite totalmente. Al llegar a casa, Simona sale a nuestroencuentroybesuqueaconamoralospequeñosmientrassaludaaPipa,quesonríe.
Entonces,el teléfonodeEricsuenaysealejadenosotrasparacontestar.VeoquesemeteensudespachoyyoabrazoencantadaaSimona.Hablamosduranteunbuen ratoy, cuandoEric saledeldespacho,memiraypreguntacongestoserio:
—¿VamosaporFlyn?Yoasientoy,alversuexpresión,inquiero:—¿Ocurrealgo?Nuestrosojosseencuentranymiamor,relajandoelgesto,sonríeymeagarraporlacintura.—Nadaimportante—dice.LosniñossequedanennuestracasayEricyyovamosa ladeSoniaaporFlyn.Al llegarnos
encontramosamicuñadaMartaconmisuegraquenoshacenuncalurosorecibimiento.—¿Cómoestás?—preguntomirandoaMarta.Micuñadasonríey,tocándosesubarriguita,responde:—Felizcomounaperdiz,nerviosaporladespedidadesolteradelmartesylabodadelsábado,y
asquerosamentevomitiva.TodossonreímosyentoncesEric,alquehevistomiraranuestroalrededor,pregunta:—¿DóndeestáFlyn?Aloíreso,Soniaponelosojosenblanco.—Arriba.Ensuhabitación—responde—.Antesdequeloveas,tengoquedecirtequeestoymuy...
muyenfadadaconél.—Yodirectamentelohabríamatadoporloquehahecho—afirmaMarta—.Pero,tranquilos,las
aguashanvueltoasucauceytodoestásolucionado.—Pero¿quéhahecho?—preguntoansiosa.—Ay,hija...,estosmuchachosdehoyendíanotienencabeza—murmuraSoniasentándose.Al oír a su madre, Eric se sienta a su lado. Oh..., oh..., su gesto se endurece. Y, una vez nos
sentamosloscuatrocongestocontrariado,finalmenteexplotaysisea:—¿Mepodéisdecirdeunasantavezquénariceshahecho?—Hijo...—murmuraSonia.
Amímeestáentrandoelnervioy,cuandovoyallevarmelamanoalcuello,medoycuentadequeEric me observa y evito hacerlo. Ver cómo Sonia y Marta intercambian una mirada me hacepresuponerqueloquehahechohatenidomiga.Entonces,Martaexplica:
—Miqueridosobrinoyvuestroqueridohijo,parahacerseelchulitodelantedesunuevanovieta,que, por cierto, nome gustó un pelo cuando la vi, creó un perfil en Facebook con el nombre deMalotePaloteytuvolagenialideadeinsultaraunamigodelinstitutoysubirunvídeo.
—¡¿Qué?!—bramaEric.Yo escucho alucinada. Pero ¿cuántas cuentas de Facebook tiene el puñetero niñato? Entonces,
pongo la mano sobre el brazo de mi amor y, tras pedirle tranquilidad con la mirada, preguntohorrorizada:
—¿Aquéamigolehahechoeso?—JoshBluke,elhijode...—¿Josh,nuestrovecino?—meapresuroapreguntar.MartaySoniaasienten,mientrasqueEricyyoparpadeamosalucinados.Sinpoderevitarlo,mellevolamanoalaboca.JoshfueelprimeramigodeFlynenelcolegio
cuando éste comenzó a relacionarse con los niños.Horrorizada, pienso en él.A pesar de tener lamismaedadquenuestrohijo, Joshsiguesiendouncrío tímidoyapocado.¿CómohapodidoFlynhacerleeso?
—Fíjatesiestonto—prosigueMarta,encendida—quesubióaeseperfilunvídeodondeestánenelbañodelinstitutoconelpobreJosh,escupiéndole.
—¡¿Cómo?!—gritaEric.—¡¿Qué?!—preguntoyo.—Sí,hijos,sí—prosigueSoniaapenada—.Elcríoencuestión,alsaber loquehabíahechomi
tontonieto,selodijoasuspadresyelloslodenunciaronalapolicía.Rastrearonlacuentayelrestoyaoslopodéisimaginar.
Micaraesunpoema.LadeEricdamásquemiedito.Mi niño,mi tonto niño, por chulear delante de su nueva novia, ha querido hacerle daño a un
amigo,sindarsecuentadequeeldañoseloestabahaciendoasímismo.Ericsellevalasmanosalpelo,selotocayséqueestánervioso.Muynervioso.Sumadre,alverlo,posaunamanosobresurodillaymurmura:—Ya está todo solucionado, hijo, no te preocupes.Marta y yo le hicimos cerrar esa cuenta de
Facebooky,después,lollevamosacasadeeseniñoaquelepidieraperdóndelantedesuspadres.Yosigobloqueada.¿CómohapodidohacerFlynalgoasí?Ericselevantay,mirándome,dice:—Ven.Tenemosquehablarconél.Asiento. Me levanto a mi vez y, tras ver que Marta y Sonia nos dejan nuestro espacio, nos
dirigimoshacialahabitaciónqueelniñotieneencasadesuabuela.Mientrassubimosporlaescalera,cojolamanodeEricy,parándolo,digo:—Porfavor,respiraypiensaantesdedecirtodoloquequieresdecirle.Miamormemira.Asientey,conungestoextraño,musita:—Jud...,estoytanconfundidoporloquehahechoquenoséniquédecirle.
Durante unos segundos, los dos permanecemos callados y cogidos de la mano, hasta quefinalmentedigo:
—Hagamosunacosa.Comoamímevecomoalapolimala,sigamoshaciendoquelocreaasí.—¡Pero¿quédices?!—protesta.—Creoque,sitevemásreceptivoqueamí,hablarácontigodecosasqueseguramenteconmigo
novaahablar.Piénsalo,cariño.—Miamorlopiensa..., lopiensaylopiensay,cuandoveoquenorespondeylaansiedadsevaaapoderardemí,pregunto—:¿Quéteparece?
—Nocreoquefuncione,Jud.—¿Porqué?—Porque,encuanto levea lacara,nosésivoyapodercontenermededecirle todoloqueme
rondaporlacabeza.Sonrío.Noesmomentodesonreír,perolohago.—Eso será un gran error, y lo sabes—replico—.Tumadre yMarta ya le habrán echado una
buenabronca.Túdebesdecirlealgotambién,peroenestaocasiónesmejorqueseayolaqueleecheelbroncazodelsiglo.Hazmecaso,deverdad.Amíyametieneentrecejayceja,y...
—Esquenoquieroquetetengaatiasí.¿Porquétevaatenerentrecejayceja?Miroamiamor.Sinduda,estátansumergidoensutrabajoquetodavíanosehadadocuentadela
crudarealidadenreferenciaaFlynyamí,yasiento.—Escúchame,amor.Creoqueenesteinstanteesmejorqueteveaaticomoaunamigoenvezde
comoaunenemigo.Ericmemira...,memira...,memiray,finalmente,acercándomeaél,medaunbesoenlapuntade
lanarizysusurra:—Deacuerdo.Sonrío.Meencantaqueentreeneljuego.Leguiñounojoymurmuro:—Vamos.Tenemosquehablarconnuestrohijo.Alentrarenlahabitación,Flynestátumbadosobrelacama.Alvernos,enseguidaseponeenpie
y,mirándonos,diceantesdequenosotrosdigamosnada:—Séqueloquehehechohaestadomal.Lohepensadoymearrepientodeello.Pero...—Mehasdecepcionado,Flyn—locortaEric—.Jamásmehabríaesperadoestodeti,yteaseguro
queJoshtampoco.¿Enquéestabaspensando?AprietolamanodeEric,sientoque,sinolohago,novaaparar.Entoncessecalla,memirayyo,
dandounpasoalfrente,digoconesachuleríaespañolaquenosepuedeaguantar:—Increíble,Flyn...Increíble.¿CómohaspodidohacerleesoaJosh?—Élmemira,nodicenada,
yyoprosigo—:Simelleganadecirqueharíasalgoasínuncalohubieracreído.Pero¿dequévas?¿Dechulito?¿Decastigador?¿DeMalotePalote?¿Osimplementeesquehasperdidolacabeza?
—Losiento—murmuraFlyn.Ay,pobre...Ay,quemedesarma.Noobstante, sinquerer caer enmi sensibleríade siempre, sacudo la cabezay,poniéndome las
manosenlacintura,sentencio:—Mira, guapito, Josh fue el primer amigo que tuviste cuando nadie quería ser tu amigo en el
colegio, ¿lo has olvidado? A él no le importó que te llamaran ¡«chino»! —grito. Eric me mira
sorprendido y yo prosigo—:Ni tampoco le importó que no tuvieras amigos. ¿Y ahora qué pasa?Ahora,cuandohabéiscambiadodelcolegioalinstituto,yéltenecesitaasulado,teolvidasdeél,teechasnuevosamiguitosynoseteocurreotracosamejorquemeterteconél;pero¿quécoñoestáshaciendo,Flyn?
—Jud...La voz de mi amor me hace entender que debo bajar el tono y, volviendo a mirar al crío,
cuchicheo:—Nosólovasaestarcastigadoeltiempoquedigatupadre,sinoqueahoratambiénvasaestar
castigadoeternamentepormí.—Y,moviéndomeconchulería,añado—:Y,comoaElkeoaalgunodetusnuevosamiguitosselesocurrahacerleodecirlealgoaJosh,tejuropormimadrequeselasvanatenerqueverconmigo.¿Ysabesporqué?—Elcríoniegaconlacabezayyosiseo—:Porqueyo,cuandoquiero,quierodeverdad,yaJoshloquieroynovoyapermitirquecuatroadolescentesmaleducadosalosquelesfaltaunabuenatortaporpartedesuspadreslehagandaño.Asípues,yapuedesdecirlesatusnuevosamiguitosque,comoyomeenteredequeletosenolomiranmal,selasvanaverconmigo,¿entendido?Y,porsupuesto,olvídatedequedarconellosoverlos.Sitengoquesertusombra,loseré,peroesasamistadessevanaacabar.
Flynnodicenada.Sabequeesmejormantenersecallado.Entonces,Ericmemira,meaprietalamanoydice:
—Deacuerdo,Jud.Bastaya.—¡Basta ya! ¡Basta ya!—grito como un poli malo—. Este mierdecilla, con la nariz llena de
granos,sepermitehacerloquelehahechoaJoshytúsólodices¡bastaya!Conscientedeloquehago,Ericrepitesinquitarmelosojosdeencima:—¡Bastaya!Mesueltodesumano.Estoyencendida.TengoganasdedecirleaFlynmilcosasmás,perodecido
hacercasoaEricyserenarme.Eslomejor,ynodebopasarme.Flyn nos observa sin moverse, y entonces veo que Eric se sienta en una silla y, con una
tranquilidadinusualenél,comienzaahablarconnuestrohijo.Ensilencio,yotambiénmesientoyescuchotodo loquedice.Reconozcoquemeencantaese ladoserenodeEric.Miamoresungranpolibuenocuandoselopropone.
Flyn loescuchaconatención.Por finveoqueconectaconél,ymisojosse llenande lágrimascuandooigoqueEricdice:
—Lo último que voy a decirte sobre este tema es que has hecho daño a un buen amigo tuyollamadoJosh.Túnoeresunamalapersona,hijo,perosinocambias,sinoponesdetuparte,loserás.
Quéverdadmásverdaderaacabadedecirmimarido.Estoyporgritar¡olé...,oléyolé!Perono.Nodebohacerlootodonuestromontajedepolisbuenosymalossevendráabajo.
UnavezacabaEric,Flynasienteymemira.Sabequeahoraesmiturnopero,comonotengonadamejorquedecirconrespectoatodoloqueyahadichomiamor,lomiroypreguntomuyseria:
—¿Recuerdatuprofesorlatutoría?Elcríomemira.Ensusojosveofrialdadhacialoquedigo,yentoncesresponde:—Sí.Me la recordó el viernes, peromedijoque ladejáramospara el lunesde la semanaque
viene.
—El lunes de la semana que viene no podré ir —blasfema Eric—. Tengo una reuniónprogramadadesdehacemesesy...
—Noimporta,cariño.Iréyo—locorto.Miamorasiente,yyo,sincambiarmigesto,vuelvoamiraraFlyneindico—:Ahorarecogetuscosas,nosvamosacasa.
Actoseguido,Ericyyonoslevantamosy,sindecirnadamás,salimosdelahabitación.Cuandollegamosalaescalera,meparoy,mirandoamiamor,susurro:—Estoymuyorgullosadeti.EslaprimeravezqueteveohablarasídetranquiloconFlyn,yque
sepasqueloúltimoquehasdichomehallegadoalcorazón.Ericcabecea,sonríey,pasandolamanopormicintura,meacercaaélycuchicheahaciéndome
reír:—Gracias, poli malo, y que sepas que voy a tener que aplicarme para domar esa chulería
españolaquetesaledelcuerpocuandoteenfadas.Merío.¿Domarmeamíunalemán?Antes,lascabrasvuelan.Veinteminutosdespués,trasdespedirnosdeMartaydeSonia,lostresnosmontamosenelcoche
sindecirnada.El silencioesatronadorydecidoponermúsica. Instantesdespués,canturreoesode«Todoelmundovabuscandoeselugar.LookingforParadise.Oh...Oh...Oh...Oh...».[19]
28
Elmartesporlatarde,cuandomeestoyarreglandoparaacudiraladespedidadesolteradeMarta,dudosobrequéponerme.¿Muyarreglada?¿Muyinformal?LoúltimoqueséesqueGinebrahaliadoamisuegray,juntas,hanorganizadolacenaenunrestaurantequenoconozco,porloqueleescribounmensajeamiamigaMel:
¿Hayquearreglarsemuchoparaelrestaurante?
Dossegundosdespués,mimóvilpitayleo:
Pasadelrestaurante,piensaenelGuantanamera...¡Azúcar!
Leeresomehacesonreír,porloquealfinalmiromiarmarioysacounconjuntodecamisetade
tirantesconchaquetaajuegocondiminutaslentejuelasyunosvaquerososcuros.Merecojoelpeloenunmoñoaltoydesenfadado,mepongounasbotasnegrasy,unavezacabo,murmuromirándomealespejo:
—Perfecta.¡Arregláperoinformal!Nadamásdecireso,merío.¡CadadíameparezcomásamihermanaRaquel!Sonriendocomounatonta,salgodelahabitación.Sinlugaradudas,Eric,queacabadellegarde
trabajar,memiraráconsugestoserioynodiránada.Noquiereacudira lacena.Seniegaa iralGuantanamera. Estoy bajando la escalera cuando de pronto oigo una voz que proviene del salón.Alucinada,aguzoeloídopara identificarlamejory,encuanto lohago,meparo,cierro losojosymurmurosorprendidaalcomprenderquesetratadeGinebra:
—Pero¿quéhaceéstaaquí?Nomecaemal,mepareceunabuenamujer,pero¿porqué tienequecreersequeesmi amiga
cuandoyonolosientoasí?Singanasdepermanecerparada en la escalera, retomomi caminoy, al entrar en el salón,me
encuentroaGinebraconsumaridoyelmío.Alverme,ellaaplaudeydice:—Aquíestás.¡Oh,peroquéguapatehaspuesto!—Bellísima—afirmaFélix.—Gracias—respondoconunasonrisa.Me gustan los halagos, pero quien quiero que me los haga no ha abierto la boca. Entonces,
Ginebradice:—Eric, ¡tienesquevenir!Van a ir losmaridosynoviosde lasmujeres invitadas a la fiestade
despedidadesolteradetuhermana,yconesetrajeestásbien.¿AcasoquieresqueJudithestésola?¿O
pretendesqueandequitándosealosmosconesdeencimacuandoveanquevasincompañía?Sorprendidaporesaspalabras,miroamiamor.Élmemira...,memiraymemira,yfinalmente
dice:—Iré.Boquiabierta,voyadeciralgocuandoGinebrasemeadelanta:—Buena elección. Sin duda, tumujer se ha puesto tan guapa porque quiere guerra esta noche,
¿verdad?Ericmemira.Yolomiroy,convencidadeloquepasaporsucuadriculadacabeza,replico:—Yosóloquieroguerraconmimarido,Ginebra.Observo quemi aclaración hace sonreír a Eric, y la aludida, consciente del tonito demi voz,
añade:—Normal,cielo.Tontaseríassinolaquisierasconunhombrecomoél.SéqueloquehadichoesunpiropohaciaEric,peromemolesta.Nomegustanadaquesetome
esas licencias con nosotros cuando yo, particularmente yo, nunca se las he dado. Eric, que meconoce,memiray,dándomeunbesoenloslabios,dice:
—¿Quieresquevayacontigo?Comonotengoganasdemontarleunnumeritodelantedeesosdos,afirmo:—Claroquequiero.¿Porquélodudas?Dossegundosdespués,miamorsaledelsalón,vaacambiarsederopayyomeexcusoparaira
verlosniños.Cuandoregreso,Ericyaestádevueltavestidoconunacamisanegra,unospantalonesvaquerososcurosyunaamericana.
¡Dios...,quéguapoestá!—Loshombrescenaremosconelnovioenelrestaurantedeunamigo—oigodeciraFélix.Esonolehacenipizcadegraciaamiamor,peronodicenada.Yahadichoquevieneynovaa
cambiardeopinión.Diezminutosdespués,nosdespedimosdePipaydeSimonayloscuatrosalimosde casa, nosmontamos en nuestro coche y vamos hasta la casa deBjörn y deMel.Aparcamos elvehículo, bajamos y le envío unmensaje a mi amiga para decirle que estamos allí. Dosminutosdespués aparecen, yBjörn, al vernos, se frota lasmanos y con gesto guasónmurmuramirando aEric:
—Cenitadehombres,¡quéilusión!Aloírlo,Mel sonríecomosonríoyo.Sinduda, esacenita le apetece tanpocoaBjörncomoa
Eric.—ReservaréunbailecitoparatienelGuantanamera—murmuraMel.ElgestodeBjörncambia.Yanosonríey,atrayéndolahaciasí,perciboqueledicealgoaloído
quesóloellossabenyloshacereír.Entonces,sientolaspoderosasmanosdemiamorrodeándomelacinturayoigoquediceenmi
oídoantelaatentamiradadeGinebra:—Pásalobienenlacena.Mástardenosvemos.Asiento.Lobesoyrespondo:—Yatúsabes,miamol,dóndeestaré.Ericsonríe.Mevuelvelocaverloasíy,besándolodenuevo,afirmo:
—Hereservadolosmejoresbailesparati.Denuevovuelveasonreír.Detodosessabidoque,comomucho,Ericmueveelcuellooelpiey,
mientras ledoyunúltimobeso,veoqueun taxi sedetieneparanosotras.Trasguiñarleelojoconcomplicidad,memontoatrás juntoaMelmientrasGinebra,quesubedelante, leda ladirecciónaltaxista.
Alllegaralrestaurante,mesorprendoalverlacantidaddemujeresquesomos.Yocreíaqueibaaserunacenitamásomenosíntima,perono,alfinalsomostreintaydos.Marta,micuñada,felizconlafiesta,nosabraza.Estáguapísimaconsuvestiditohippy.Meencantaelestilazoquetienelajodía.Sepongaloqueseponga,¡todolequedabien!Inclusoembarazadapareceunatopmodel.¡Quésuertelasuya!
Sonia,misuegra,estádespendolada.Ríe,bromea,aplaude,brindayselopasabomba.Sinduda,sialguiensabesacarlejugoalavida,¡ésaesmisuegra!
MelyyoconocemosaalgunasamigasdeMartayaunpardelasdeSonia,peromedoycuentadequeGinebraconoceamuchamásgentequeyo.¿Cómopuedesereso?
RápidamentemedoyrespuestaamipreguntacuandomeenterodequeamuchasdelasamigasdemisuegralasconocedelaépocaenqueestuvoconEric,yalasamigasycompañerasdeMartalashaconocidoporwasapporquehaorganizadolacenajuntoaSonia.
Melmemira.Séquepiensalomismoqueyo.Ginebraestátomandounprotagonismoincómodojuntoamicuñadaymisuegra,peronoseréyoquiendiganada.Noquieroquevayanapensarcosasraras.
Intento que nome afecte nada, ni siquiera cuandomuchas de las mayores le dicen a Ginebraaquellode«québonitaparejahacíaisEricytú».
Mecallo.Eslomejorquepuedohacer,peroGinebra,comosiempre,saleenmidefensaydicedelantedetodas:«JudyErichacenmejorpareja».
Sinembargo,Mel,miMel,quemeconoce,murmura:—Simepidesqueletireunacopaencima,¡selatiro!Aloíreso,sueltounagrancarcajaday,chocandomicopaconlademiamiga,respondo:—Tranquila.Estátodocontrolado.—¿Qué tal si nos vamos al Guantanamera?—dicemi cuñada cuando ya hemos terminado de
cenar—.¡Allínosesperanloschicos!Todas aplauden.Todas tienen ganas de pasarlo bien y, dispuesta a pasarlo tan bien como ellas,
grito:—¡Azúcarrrrrrrrrrrrrrr!EnlacallenosesperaelminibúsqueMartahaalquiladoy,unavezhemosmontadotodasenél,
éstenosllevaanuestropróximodestino.AlentrarenelGuantanamera,mihumorcambia.AunqueEricno loentienda,ese lugaresuna
pequeña parte demi casa.Los amigos, el ambiente, lamúsica, todo eso unidome recuerda amisbuenosmomentosdejuergaconmisamigosenEspaña,yllegarallímehacefeliz.
Alentrarbuscoconlamiradaamirubio,peronoloencuentro,yprontovemosqueloschicosnohanllegadoaún.Lastreintaydosmujeresnosdispersamosporladiscotecay,entrerisas,veoamisuegrabailarjuntoaGinebrayasusamigas,mientrasunosmaduritoslasjaleanyellasseentreganal
bailoteocubano.EstoyenlabarraconMel,Martayalgunamáscuandooigoamisespaldas:—Nolopuedocreerrr.Cuántamujerdivinajuntaaa.Sinvolverme,yaséquiénes.SetratadeMáximo,elargentinoalquehacetiempoapodamosDon
Torso Perfecto. Sin tardanza, nos besa encantado y nos invita a una primera ronda de chupitos,exceptoaMarta,queporsuembarazosetomaunzumo.
Entre risas estamos charlando cuando aparece Anita con su nuevo novio, un checoslovacoguapo...guapoarabiary,divertida,Melcuchichea:
—Con lopoquita cosaque es estamuchachay los novios tan estupendosque se echa siempre.Porque, que yo sepa, ha estado conDonTorsoPerfecto—las dosmiramos al argentino, que estáhablandoconMarta—yluegoconelportuguésaquelquecantabafadosyquenoeraguapo,sino¡losiguiente!
Asiento,Meltienerazón:Anitasabeelegirmaravillosamente.Entonces,oigounavozquediceamilado:
—Peroquébelloesverteporaquí...,mireinaespañola.Al mirar, me encuentro con Reinaldo, y me tiro a sus brazos complacida. Llevo sin ir al
Guantanamera almenos tresmeses.Con tal de no oír gruñir aEric, no voy. PeroReinaldo es unamor.Desde quemi cuñadame lo presentó, siempre ha sido un caballero conmigo, tan caballerocomoMáximo.Ningunodeellossehapropasadolomásmínimo,aunqueaEriclemolestenuestramaneradebailar.
—Hey,negro,¿tengoqueponermecelosa?—protestamicuñada.Reinaldo sonríe y, cuando me suelta a mí, abraza a mi cuñadaMarta, a Anita y aMel y nos
presentaaunosamigoscubanosquevanconél.Durante un rato charlamos todos animadamente y siento como si aquello fuera la ONU. Allí
estamosalemanes,unaamericana,unaespañola,cubanos,unchecoslovacoyunargentino;¿sepuedepedirmás?
CuandocomienzalacanciónLavidaesuncarnaval,[20]quecantaCeliaCruz,todossalimosalapista, ymi suegra, en cuanto ve aMáximo, lo saluda con efusividad.Al ver eso,Marta y yo nosmiramosy reímos.Todavía recordamos cuando aquélla nos pidió que le buscáramosunguaperascontabletitadechocolateparadarlecelosaunex.MáximolaagarrafelizycomienzaabailarconellamientrastodosgritamosloqueCeliaCruznoshacegritarylevantamoslasmanos.
Cuando las bajamos de nuevo, Reinaldome coge y nosmarcamos uno de nuestros bailecitos.Encantada,medoycuentadequenoheolvidadonadadeloqueconeltiempoheaprendidoconellos,especialmenteconélyconMáximo.EstoydándomeunavueltecitacuandoveoaGinebrabailandocomounadescosida.
Olvidándome de ella, me centro en pasarlo bien, ¡quiero pasarlo de vicio! Por lo que bailodescontroladamente hasta que, en una de mis vueltas, mis ojos chocan con unos ojazos azules yenfadadosymedoycuentadequeEricyahallegado.
Almirar haciaMel, la veo conBjörn bailando en la pista. ¿Cuánto llevarán allí?Y, como notengoganasdemalascaras,dejodebailary,trassaludaraDrew,mifuturocuñado,meacercoaEricy,empinándomeparaquemeoiga,lepreguntoaloído:
—¿Bailas,miamol?Incómodocomosiemprequeestáallí,élmemirayresponde:—Yasabesqueno.Ginebrallegaeneseinstantehastanosotros.Noparadebailar.Sindudaalguna,seloestápasando
bomba.—¿Nobailáis?—dice.Ericnorespondey,cuandoyovoyadeciralgo,Félixlacogedeunamanoyselallevaalapista.
Mimaridolosobservacongestoserioyyosonrío.No sé si es que soymasoquista o me falta un tornillo, perome río en su cara y entonces él
pregunta:—¿Quétehacetantagracia?Pidounchupitoalcamarero,ésteloponeantemíy,trasbebérmelodeuntrago,digo:—Si se te hubiera ocurrido salir a bailar con ella, te aseguro que habría sido lo último que
habríashechoenlavida.Mispalabraslohacensonreírtambiénaély,alsentirqueserelajatrasesecomentario,loabrazo
ymurmuromimosa:—Cariño.¿Cuándotevasadarcuentadequeaquísólovengoabailarconmisamigos?—¿Ynocreesquetusamigosseacercanmuchoatiparabailar?—PorDios,Eric, está tumadre, tuhermana,y ¡estás tú! ¿Cómopuedes tenerpensamientos tan
retorcidos?—Pero, al ver que no dice nada, insisto—:Mira, guapo, si yo quisiera hacer algo tanretorcido como lo que tu horrorosamente piensa, soy lo suficientemente lista para hacerlo y quenadielovea.
—Judith...Vale...,mehepasado.Comosiempre,hasalidomiladochulo.Pero,cansadadetenerquedefender
algoabsurdo,respondo:—Mira,cariño,eldíaque tedescuentadequeellos terespetancomoamimaridoqueeres, te
aseguroqueserásmuchomásfeliz.PorDios,¡quécabezón!—Y,dichoesto,meseparodeélysiseo—:¿Sabes,simpático?Sitequisieraengañarconotrohombre,teaseguroquenuncaloharíaaquí,¿ysabesporqué?—Ericsonríeincómodoyyoañado—:Porqueesosamigosmíosdelosquetantotequejasnomeloibanapermitir.Tetienenmásapreciodelquetúlestienesaellos,ylaverdad,¡notelomereces!
Ericnoresponde.Susilenciomeestásacandodemiscasillasy,alverquelomiro,sólodice:—Sitúdiceseso...,locreeré.Su tono escéptico me hace saber que no cree lo que digo. Y me canso. Me canso de su
desconfianzasiemprequevoyalGuantanameracuando,locreaélono,eselsitiodonde,sinél,estoylamardeprotegida.
Estamossinhablarvariosminutos.Comosiempre,yasehaenfadado.¡Faltaríamás!Y,dispuestaaquenomejorobelanoche,lomiroysiseo:
—Mira,Eric,nodeberíashabervenido.Notegustaestesitioynolopasasbien,comoyonolopasobienviendotucaradeamargado,portanto,¿quétalsitemarchasydejamoslosdosdepasarlomal?
—¿Quieresquemevaya?—No.Yoquieroquetequedesytelopasesbienconmigo.Peroloquenoquieroesquetequedes,
teamarguesymeamarguesamítambién.Sugestodeaceromehacesaberque loqueacabodedecirya leha tocadodefinitivamente las
narices.Puesquesejoda,¡consuscaritasysussilencioséltambiénmelasestátocandoamí!Está claro que hay un punto en nuestras vidas donde nunca estaremos de acuerdo, y es el
Guantanamera.Ericdaunpasoalfrente,medaunbesoenloslabiosydice:—Teverécuandoregresesacasa.Y,sinmás,mirubio,duroyfríoalemánsedalavueltayseencaminahacialapuerta.Björn,que
noestálejosdenosotros,alveraquellomemirayyolehagoungestoconlasmanosparaquesepaqueEricseva.Björnvatrasélyyodecidonopensarenello.
Melseacercaentoncesamí.—¿Quéhaocurrido?Molesta,suspiro.—Lodesiempre,Mel.AEricnolegustaestelugarnilascompañías.—Tumaridoestonto.—Yodiríamásbien¡gilipollas!—digosonriendoymirandoamiamiga.Unpardeminutosdespués,mientrasestoydespotricandocontramirubioalemán,Björnseacerca
anosotrasydice:—MevoyconEric.—LuegobesaaMelymurmura—:Yvosotrasportaosbienynohagáisque
tengaqueirdenuevoasacarosdelcalabozo.Sonreímosinevitablementealoíreso,yMelañade:—Meportarétanbiencomoteportaríastú.EntoncesBjörnlevantalascejasyellaprotesta:—Oh,porDios,cielo...Anda,veteynopiensestonterías.Unavezélsehaido,nosinantesmirarunpardeveceshaciaatrás,Melpideunpardechupitosal
camarero,noslostomamosdeltiróny,encuantodejamoslosvasitosenelmostrador,gritamos:—¡Azúcarrrrrrrrr!Durantehorasbailamos,bebemosynosmetemostotalmenteenla juerga.Ginebramepregunta
porEricyyoledigoquesehaidoacasa,ellaasienteycontinúabailandoconsumarido.Sinduda,Félixtieneunaedad,peronomecabelamenordudadequelegustalafiesta.
Sin embargo, a diferencia de otras veces, ésta termina antes de lo que imagino.Marta, por suembarazo,estácansada,ysufuturomarido,quehaaguantadocomounjabato,alfinallaconvenceparairseadescansar.
Pocodespués,misuegraysusamigastambiénsemarchan,trasellaslasamigasylascompañerasdeMartay,luego,tambiénGinebrayFélix.
Melyyocontinuamoslajuergaconnuestrosamigoshastaque,agotadas,alasseisdelamañanadamosporfinalizadoelbailoteoy,acompañadasporReinaldoyMáximo,llegamosanuestrascasas.Comosiempre,lacaballerosidadporpartedeellosesexquisita.
Cuandoentro,séquehebebidounpoquitodemás,perosólounpoquito,ydecidonopasaraveralosniños.Estoytorponaynoquierodespertarlos.
SuboamihabitaciónymesorprendoalverqueEricnoestáenlacama.¿Dóndesehabrámetido?Esomeintranquilizay,rápidamente,bajoasudespacho.Alentrar,lodescubrosentadoasumesa.
Nuestrasmiradasseencuentran.Yosonrío.Élno,ymurmuro:—Yaestoyaquí.Eric descansa la nuca en el respaldo de su silla paramirarme.Me dedica la mirada del tigre
asesino.Esamiradadecabreototalque,envezdedarmemiedo,curiosamentemeponeamil.Dios,¡quémorbosasoy!
Comopuedo,llegohastasulado.Nolotoco,sólomirolamesa,ydeprontooigo:—Niseteocurrahacerloqueestáspensando.Sonrío.MealegrasaberqueEricimaginaquevoyahacerloquehacenenlaspelículas:tirartodo
loquehaysobrelamesaalsuelo.Pero,claro,tienemilpapelesyestáelportátil,ypuedoliarlamásdeloqueimaginoquelaheliadoya.
Vuelvoasonreír.Élsiguesinhacerlo,ydecidosentarmeahorcajadassobreél.Nosemueve,peromelopermiteyyomesientoencelo.Estoy caliente, tremendamente caliente, y mi marido es el único que deseo queme dé lo que
busco. No obstante, cuando voy a acercarme a su boca, Eric pone una mano en mi pecho parafrenarmeypregunta:
—¿Quéhaces?—Quierobesarte—susurro.—No.—Sí...,sí...,anda,déjamedarteunbesito,aunqueseachiquitito.Miamormemira.Yolepongocaritadepena.Lopiensa.Esodelbesitochiquititoymigestolo
hacendudar,perofinalmenterepite:—No.¡Jodidocabezón!Abrolabocaparaprotestarcuandoél,comosiyofueraunaplumilla,selevantadelasilla,me
dejaaunladoy,congestohosco,sisea:—Aversitecreesqueyoestoyaquísóloparasatisfacertusdeseossexuales.Anda,mimadre...¿Yahoramevieneconeso?—¿Ah,no?—preguntoconsorna.MicontestaciónhacequemeecheotradesusmiraditasdeIceman.—No—replica.Peroyo,quecuandoquieroalgomepongomuyyyyyypesadita,insisto:—Venga,miarma...,siloestásdeseando.Mirespuestanoselaesperaba.Esperabamienfadoantesurechazoy,agarrándoloporlacintura,
murmuro:—Eresmío,EricZimmerman,ylomíolotengocuandoyoquiero.Me pongo de puntillas para besarlo, pero él se estira y no llego. ¡La madre que lo parió!
Finalmenteseretiraydoyuntraspié.Perono,nomevoyaenfadarniporésas.Y,caminandohaciaél,insisto:
—Notienesescapatoria,rubiales.
Denuevosemueve.Pero,ahora,envezdealejarseseacercay,cogiéndomeentresusbrazos,meinmoviliza,memiraalosojosysisea:
—Tedeseomásque amivida, perono te voy adar loquequieresporque estanochemehasechadode tu ladoyno te lomereces.Así queno insistas, Judith, porqueno lovas a conseguir teenfadesono.
Sumirada,laclaridadensuspalabrasyelquemellame¡Judith!mehacensaberqueloquebusco¡es un caso perdido! Por ello, cuandome suelta, estoy tan enfadada por su rechazo que, sin decirnada,doymediavueltaysalgodeldespacho.Lanochesehaacabado,ypuntoyfinal.
¡Élselopierde!Aunque,ahoraquelopienso,¡tambiénmelopierdoyo!
29
Eljueves,Ericyyonosdirigimosensilencioaltrabajoensucoche.Sigue enfadado por lo ocurrido en el Guantanamera. Si hay algo que a Eric lo saque de sus
casillasesqueloechedemilado,ylaotranoche,loeché.¡Meaculpa!UnavezllegamosaMüller,ambosbajamosdelcochey,sinapenasrozarnos,caminamoshastael
ascensor,dondecadaunopulsaelbotóndesuplanta.Lomiroconlaesperanzadequehagalomismoqueyo,peronada,¡imposible!¡Comosinoexistiera!
Cuandoelascensorsepara,tengoganasdebesarlo,derecordarlequeloquiero,quememueroporélyquecomoélnohaynadie,perosucaradepocosamigosmehacesaberquenoleapeteceoírme.
—¿Irásalareuniónquehayalasdiezenlasaladejuntas?—lepreguntoentonces.Ericasienteyrespondeconvozneutra:—Porsupuesto.Desesperada,insisto:—Porfavor,mírameydimequeyasetehapasadoelenfado.Michicomemira,¡porfin!Pero,sincambiarsugestodeperdonavidas,responde:—Tengotrabajo,Judith.Uis,¡Judith!...¡Malasunto!Desisto.Doyunpasoalfrente,salgodelascensory,cuandosientoquelaspuertassecierrantras
demí,resoploymurmuroenespañolparaquenadiemeentienda:—Jodidocabezón.Dichoesto,caminocondecisiónhaciamidespachoyTania,lasecretaria,alvermeselevantay
dice:—Judith,estamañanahanllegadounasfloresparati.Asientoy,alentrar,veosobremimesaunpreciosoramoderosasrojasyfrunzoelceño.¿Quiénmelashabráenviado?Dejoelbolsosobrelamesa,caminohaciaelramoqueTaniayahacolocadoenunbonitojarrón
decristaly,cogiendolanota,leoenespañol:
Nuncadudesquetequiero,apesardequeenocasionesmellevasallímite.Tugilipollas
Sonrío.Nopuedoevitarlo.Esosdetallessonlosquehacenquecadadíaestémásenamoradadeél.¡Melocomooooooooooo!¡Melocomocontomate!,comodicemihermana.Ericesúnico.Irrepetible.Inigualablesorprendiéndome.
Meguardolanotaenelbolso,cojoelmóvilyescribounmensaje:
Tequiero...,tequiero...,tequiero.
Ledoya«Enviar»y,conunasonrisa,espero larespuesta.Pero, transcurridosdosminutos,me
sorprendoamímismapreguntándome:«¿Deverdadnomevaacontestar?».Despuésdediezminutostengoganasdeestrangularloy,cuandohanpasadoyacuarentaycinco,
loúnicoquemeapeteceescogerlasfloresyestampárselasenlacabeza.Pero¿cómopuedesertancabrito?EstoysumidaenmispensamientoscuandoMikaentraenmidespacho,velasfloresydice:—Quépreciosas,¿sondeEric?—Asientoy,sonriendo,cuchichea—:Todavíanopuedocreerque
eljefazoseatanrománticocontigo.Asientodenuevo.Románticoes,ycabezón,¡nitecuento!Peroesonolodigo.Noquedaríabien.Mika se sientay, juntas, ultimamosdetallesde la reunión.Queremospresentarles aEricy a la
juntadirectivaelplanningde lassiguientesferiasen lasqueMüllerparticipará,yambasdeseamosquetodocuadrealaperfección.
Unavezhemosacabado,Mikayyonosdirigimoshacialasaladejuntasconnuestrastabletsenlamanoynuestrosteléfonosmóviles.Alllegar,varioshombresdelajuntadirectiva,quemeconocen,mesaludanconcordialidad.Leshacegraciaque trabajeen laempresay,cuandoEricentra,comosiempreocurre,eluniversoseeclipsaparatodoelmundoylemuestranpleitesíacomosideundiossetratara.Vamos,quesólolesfaltagritar«¡Vivaeljefe!».
Lomiro con la esperanza de recibir unamirada cómplice por parte de él. Sabe que espero sumensaje.Sabequeherecibidosusfloresysabequemeestácabreandocadasegundoquetranscurreypasademí.
Peronada.Élsiguesinhacermecasoy,comosumujerquesoy,asientoypiensoparamí:«Muybien,gilipollas,túlohasquerido».
Acto seguido, con lamejordemis sonrisas,meacercoaunosdirectivos,que rápidamentemesonríencomounostontos.Durantevariosminutosutilizomisarmasdemujer,esasqueséquetengo,paraqueloshombresmemirenmaravillados,yrápidamenteobservolosresultados.¡Hombres!
Enocasionessontanbásicosquetengoquereírme,yéstaesunadeellas.Conelrabillodelojo,observocómomilocoyavecesinsoportableamorporfinmemirapor
encimade lascabezasdeaquélloscon losquehabla.Esasensaciónmegusta.Eseestremecimientoquesientoalnotarsuinteréshaciamíeselmismoquemeprovocabacuandoyoerasusecretariay,enunahabitaciónplagadadegente,nomepodíatocar,nirozar,nihablar.
España,1-Alemania,0.Consciente de que ahora tengo su total atención, me hago la interesante y con coquetería me
colocoelpelotraslaorejaalhablar.Séquelegustamuchomipelo.DeprontooigoqueMikamellama.Conunaencantadora sonrisa,medeshagode losdirectivosquememiranembobadosymeencamino hacia ella, que está con un hombremoreno demi edad queme observa con una pícarasonrisa.
—Judith, tepresentoaNick.—Trascogersumano, ledoydosbesos, ¡ésosparaEric!—.Éles
nuestromejorcomercial.Encantada, asiento y sonrío y, sin mirar a mi maridito, ya sé que debe de estar dándose de
cabezazoscontralapared.¡Parachula,yo!SoyconscientedecómoNickmemiraymesonríe.Sin lugaradudas,debedeestarpensando:
«¡Carnefresca!».YMikanodebedehaberlecontadoquesoylamujerdeljefeonomemiraríaasí.Charlamosdurantevariosminutosy,cuandolareuniónvaacomenzar,congalantería,Nickapartaunasillaparamíy,enelmomentoenquemesiento,seacercaamioídoymurmura:
—Despuésteinvitoauncafé.Asiento. Pobrecito, cuando se entere de quién soy, se le van a caer hasta los empastes de los
dientes.Y,sinquererevitarlo,miroaEric,queyaestásentadoymeobservamuyserio.Lareunióndacomienzo.Hablanunos,hablanotros,yNickseacercaamíparacuchichear.Yo
sonrío divertida por las cosas que me dice, mientras soy consciente de cómo Eric sigue mismovimientoscondisimulo.
España,2-Alemania,0.Se apagan las luces y comienzan a presentar en la pantalla ciertos temas. Continúan hablando
cuandomimóvilvibra.Disimuladamente,lomiroyleo:
¿Aquésedebeesasonrisa?
SinmiraraEric,escribo:
¿Mevessinluz?
Dossegundosdespués,mimóvilvuelveavibrar:
Nonecesitoluzparasaberqueestássonriendo.
Suspiro.Élysustonterías...Yrespondo:
¿Acasonopuedosonreír?
Elmóvilvuelveavibrar.
Sí.Peromegustamáscuandosonríesparamí.
Ahorasíquesonrío,nolopuedoremediary,levantandolacabeza,observoenlaoscuridadque
Ericmemira.Escribo:
HahechofaltaqueNickentraraenlareuniónparaquemehablaras;¿vescompetencia?
Dudosidarleonoalbotónde«Enviar».Séqueesolevaamolestar,perocomosoyunagran
puñetera,¡zas!,loenvíoyobservosureacciónatravésdemispestañas.Comoesdeesperar,élfrunceelceño,levantaelmentónynocontesta.Aisss,micelosón.
Pero¿todavíanosehadadocuentadequehenombradoaNickparapicarlo?Pasadosunpardeminutos,escribo:
Contéstamealoquetehedicho:¿Nickescompetencia?
Élleeelmensajeperonocontesta,einsisto:
Eric,estoyesperando.
Nicaso.Nomehacenicaso.Las luces se encienden, la reunión prosigue y yo,molesta por su gesto serio de superioridad,
escribo:
Unavezinterrumpisteunareuniónpormí.¿Acasocreesqueyonoloharéporti?
Cuandoledoya«Enviar»,soyconscientedeloquehepuesto,yErictambién.Peroel tíonise
menea.¡Joder,esdehierro!Insisto:
Tedoydiezminutos.Omecontestas,oparolareunión.
Ni se inmuta. Está totalmente seguro de que no lo voy a hacer. Pero ¿es que todavía no me
conoce?Dispuestaasorprenderlo,envíounmensajeaMel,enelquedigo:
Llámamedentrodecincominutosysíguemeelrollo.
Acto seguido, dejo el móvil sobre la mesa para que Eric lo vea y crea que desisto. Me
repanchingoenlasillaymecentroenlareunión,mientraselseñorDuhmenhablasincesarytodosloescuchamos.
Pasadosunosminutos,mimóvilvibraruidosamentesobrelamesay,mirandoamialrededorconmimejorcaradeapuro,digo:
—Losiento.Esdecasa.—Trasescucharunossegundos,exclamolevantandolavozunpoco—:¿Cómo?¿Enserio?¿Deverdad?No...,no...Nopuedeser...
Mel,divertida,nopuededejardereír,mientrasdice:—Marichocho,¿quéestáshaciendo?Procuronoreírme—¡lamadrequelaparió!—,yconseriedadrespondo:—Deacuerdo...,deacuerdo,hablaréconEricytevolveréallamar.Unavezcuelgo,melevantoenmediodelareunióny,antelacaradeasombrototaldemimarido,
quenohabíacreídomiamenaza,miroalagentequehayanuestroalrededorydigo:
—Siento interrumpir la reunión, pero necesito unos minutos a solas con mi esposo. —Y,sonriendo,añado—:Tenemosqueapagarunpequeñofuegoencasayestremendamente¡urgente!
Comotodossonmuysolícitos,ymástratándosedemí,quesoylamujerdeEric,rápidamenteselevantanyabandonanlasala,mientrasMikaleexplicaaNickquiénsoyyélmemirasorprendido.¿Lamujerdeljefe?
Unavezsalelaúltimapersonaycierranlapuerta,Eric,sinlevantarlavozenexceso,gruñesinmoversedesusillóndedirector:
—¿Cómohaspodidohacerlo?Conunasonrisitade«¡Telodije!»,caminohaciaélydigo:—Tehedadodiezminutos.Cincomásdelosquemedistetúamíensumomento.Y,porcierto—
cuchicheo—,hededecirtequeencasatodoestábienyquelareunión,Iceman,lahasinterrumpidotú.Ericmemiracongestoincrédulo.Sinduda, lohesorprendido,yesomegusta.Meacercoaél
condecisióny,cuandoestoydelante,pregunto:—¿Haycámarasenestasala?Miamor,esequemevuelveloco,asiente.¡Vayamierda!Perofinalmenteniegaconlacabezayañade:—Tampocoestáinsonorizada.Excitadaalsabereso,subomifaldadetuboanteél.Conunatranquilidadquenoeslaquesiento
en mi interior, me quito las bragas negras que llevo, hago una pelota con ellas en la mano y,metiéndoselasenelbolsillodelaamericana,murmurocualvampiresadelcineporno:
—SeñorZimmerman,sientodecirlequeestarésinbragasenlaoficina...—Jud—mecorta—.¿Quéestáshaciendo?Biennnn,¡mehallamadoJud,noJudith!Vamosbien,yrespondo:—HacertesaberquesólotedeseoatiaunqueteenfermequevayaalGuantanameraohableconel
guaperasdeNick.—Sugestosecontraeyprosigobajandolavoz—:Yquieroquesepasque,apesardel enfadoque tengopor tudesplante, estoycaliente,deseosade ti ymemueroporver tumiradacuandomecompartesconotrohombre.¿Tequedaclaro?
Eric,memira...,memiraymemira.¡Oh...,oh...!Pero,antesdequepuedacalibrarloquesiente,selevanta,meacercaaél,deuntirónmebajala
falda,mesientasobrelamesay,conlascivia,pasala lenguapormilabiosuperior,despuésporelinferior,ymelomuerde.Yojadeo,¡mevuelvoloca!
Cuandomiboca,miser,mialmaytodayoestamosrendidosaél,miIcemanparticularmedatalbesazoquemedejasinaliento,mientrasmedejollevarporelmaremotodeemocionesquemehacesentir.
¿Deverdadmevaahacerelamorsobrelamesa?Meagarradelpeloy,tirandodeélhaciaatrás,separasubocadelamíaymurmura:—Jugaríacontigoahoramismo.Teabriríalaspiernasy...—¡Hazlo!—lotiento.Exigente como es, me devora de nuevo la boca, me hace el amor con la lengua y, por su
intensidad, sé el esfuerzo que está haciendo por no tumbarme sobre lamesa y follarme como unsalvaje.Elbesodurayduraydura,yyolodisfrutotodoloquepuedohastaquefinalizay,sinapenas
separarsubocadelamía,susurra:—Nopuedeshaceresto,pequeña.Aquí,no.Séquetienerazón.Séqueestamosenlaoficinaynodebería,perorespondo:—Losé.Perotúmehasobligado.Nomehashabladoentodosestosdíasy...—Nopuedesandarporlaoficinasinropainterior.—Ytúnopuedesenfadarteconmigoporestastonterías—loreto.Eric me mira. Clava sus impactantes ojos azules en mí, mientras yo con descaro toco su
entrepiernaysientosuduraypotenteexcitación.¡Ay,madre!Cuántolodeseo.¡Porfavor!Quemeconozcoyestoyapuntodehacerunademislocuras.Sugestodesconcertadomehacesonreírylarazónvuelveamí.NopodemoshaceresoenMüller.
Nodebemosypunto.Y,decidiendoacabaresemomentoprovocadopormíparavolverloloco,meseparodeélydigomientrascaminohacialapuertapordondetodoshansalidominutosantes:
—Deacuerdo.Vistoqueno le apetezcoabsolutamentenada,prosigamoscon la reunión, señorZimmerman,y,porfavor,novuelvaainterrumpirla.
Boquiabiertoporcomoloestoydejando,sedisponeaprotestarcuandoyoabrolapuertaydigocomounaperfectamujercita:
—Pasenydisculpenlainterrupción.Creoqueelfuegoencasayaestáapagado.Ericrápidamentesesientaycolocaunospapelessobresuentrepiernaparaquenadieobservelo
abultadaqueestámientrastodosentranyocupansusbutacas.Conunasonrisa,mesientojuntoaMikayNickysereanudalareunión.Pero,sisoysincera,nomeenterodenada.Aúntengoelsabordesubesoyelolordesuexcitaciónenminariz.
Lomiroyobservoquecompruebacongesto implacable lapantallade suportátil. ¿Quéestarápensando? Histérica, me muevo en la silla consciente de que no llevo ropa interior. Media horadespuéshacemosun alto para tomarun café.Veo aEric hablar por teléfonoynome acerco a él.Cuandodenuevoentramosenlasaladejuntasynossentamos,deprontomiamorapoyalasmanossobrelamesaydice:
—Losiento,señores,peromiesposayyodebemosabandonar lareuniónpararesolverciertosasuntosfamiliares.—Despuésclavalamiradaenmíyañade—:Judith,¡vamos!
Ostrasssssssss,quéfuerte,¡cancelalareuniónpormí!España,2-Alemania,1.Sin querer llevarle la contraria, rápidamente recojomi tablet ymimóvil y, cuando llego a su
lado,meagarraconfuerzadelamanoydicemirandoalosquenosobservan:—Lareuniónseposponehastamañanaalasnueveenpunto.Buenosdías,señores.Sinmás,ambossalimosdelasaladejuntasyveoquevamosderechosalascensor.Unaveznos
metemosenél,Ericmeaprisionacontralaparedy,mirándomealosojos,murmura:—Pequeña,acabasdeencenderungranfuegoquetienesqueapagar.Mebesa,yyo¡medejo!España,2-Alemania,2.¡Empate!Cuandollegamosalgaraje,sinsoltarmedelamano,sinrecogerabrigos,sinnada,mellevahasta
elcoche.Unavezentramos,voyadeciralgocuandoéltecleaensuteléfonoydice:
—Gerta,queunmensajeropaseporeldespachodemimujer,cojasubolsoysuabrigoyluegovayaporelmíopararecogermiscosasyllevarlasamicasa.
Dichoesto,cuelga.Yosonrío,élarrancaelcochesinhablar.Noséadóndevamos.Noséadóndenosdirigimosperomedejollevarcuando,pasadasvariascalles,veoqueaparcay
bajadelcoche.Tanprontocomoabrelapuertademilado,pregunto:—¿Adóndevamos?Pero no hace falta que me responda. Ante nosotros hay un hotel y, cogiéndome de la mano,
murmura:—Venconmigo.Losigo,¡claroquelosigo!Yoaéllosigo¡hastaelfindelmundosihacefalta!Entramos en el hotel y pide una habitación. El empleado de recepción nos mira. Vamos sin
abrigos,sinbolso,¡sinnada!¿Quépensarán?Por suerte, Eric lleva su cartera en el bolsillo de la americana y, tras entregar su Visa, el
recepcionistanosdaunatarjetaydice:—Suite776.Séptimaplanta.Ericasiente.Yosonrío,ynosencaminamoshaciaelascensor.Al llegarallí,unhombre loesperay,unavezentramoslos tres,Ericpulsaelbotónyvuelvea
besarme.Conelrabillodelojoobservoqueelhombrenosmira,ymurmuro:—Eric...Pero él no me escucha. Sigue a lo suyo. Me coge entre sus brazos y, separándome unos
milímetros,susurramientrasmesubelafalda:—Nosésimatarteojugarcontigoporloquehashechoymehashechohacer.Azoradaporlamiradaincréduladelhombreperoalmismotiempoexcitada,respondo:—Votoporquejueguesconmigo,suenamejor.Veo que mi respuesta hace sonreír a Eric y, dándome un azote en el trasero desnudo, sisea
mirandoalhombrequenosobserva:—Justin,yalohasoído.Vamosajugar.—Sorprendida,veoqueelhombreasientey,cuandomiro
a mi marido, él añade—: Señorita Flores, prepárese para satisfacer mis más pecaminosasnecesidades.
Actoseguido,mecargaalhombrocomosifuerauntrogloditay,cuandoelascensorsepara,lostressalimosdeélynosencaminamoshacialahabitación.
Alllegarfrenteaunapuerta,Ericlaabre,entramos,cierra,medejaenelsueloy,apoyándomecontralapuerta,exige:
—Ábretelablusaysácatelospechossinquitarteelsujetador.Suexigenciameexaltaymecalientamásymás,mientrasJustinnosobservaensilencio.Esapeticióntansalvajemehapuestoamily,acalorada,hagoloquemepide,mientrasmesiento
tremendamentesensualalsacarmelospechosparaellos.Ambosmemiran.Ambosmedevoran,yEric,alvermissenosaldescubiertoconmispezones
erectos,loscontemplanconlujuriaylediceaJustin:—Disfrutemosdemimujer.Eldesconocido,alquenohevistoenmivida,seacercaamíy,traspellizcarmemisendurecidos
pezones,meloschupa.Meagarradeformaposesivaporlacinturay,mientrasobservoaEric,quenosmira,medejotocarymanosearporaquelquedevoramispechossinpudor.
Cuandocreoquevoyaexplotarporel calorquesiento, sincontemplaciones,Ericmearrastrahastaunasilla,medalavuelta,mesubelafalday,acercandolabocaamioído,murmura:
—Inclínatesobreelrespaldodelasillayabrelaspiernasparanosotros.Extasiada,hagoloquemepide.Migritosepierdeentrelamanodemiamor,quemetapalaboca,
cuandosuduroytersopeneentrahastaelfondodemí.Actoseguido,Ericliberamiboca,tirademipelo,melevantalacabezaylooigopreguntar:
—¿Quieresjugarfuerte,pequeña?—Sí—respondo.—¿Asídefuerte?—insistehundiéndosedenuevoenmí.—Sí...,sí...Ericretrocedeyvuelveaclavarseenmísacándomemilyungemidos,cuandoveoqueJustinse
bajalacremalleradelpantalón,sacasuduropeneyloponefrenteamicara.Sinquenadiemediganada,abrolabocapararecibirlo,parachuparlo,paradisfrutarlo,mientrasmeagarroasusnalgasyaccedoaquemefollelaboca.
Éseesnuestrojuego.Esloquehepedido,yEricmeloda.Adiferenciadeotrasveces,miamornosemueve,noretrocede.Sequedaclavadoenmiinterior
ysientocómomivaginapalpitaantesudurayprofundaintromisión.Ericaprieta...,aprieta...,aprietasuscaderascontramíyyojadeoenloquecidamientraselmiembrodeJustinentraysaledemiboca.
Cuando mi respiración cambia, noto que Eric retrocede para volver a ahondar en mí conferocidad. Justinseaparta, seponeunpreservativoysesientaen lacamaparamirarnos.Ericestádurocomounapiedray,acercandolabocaamioído,murmura:
—NuncavuelvasaecharmedetuladocomohicisteelotrodíaenelGuantanamera.Asiento...,nopuedonihablarcuandoinsiste:—Y,porsupuesto,nuncavuelvasaandarsinropainteriorporMüller,¿entendido?Norespondo,noquierodarleesegusto.Yél,dándomeunazoteeneltrasero,repite:—¿Entendido?Elplacerquesientoesinigualable,yelaluddeemocionesquemeinvadenomedejaresponder.
Ericasolamicuerpodejandoclaroqueessuamoconfuerza,condeterminación,conposesividad,yyosólopuedoabrirmeaélydisfrutarloquemedauna,dosyveinteveces.
Lasillasemuevedesitioynopuedosujetarla.Ericysusembestidasatroceslomueventodoy,cuando ya no puede más, después de un gruñido de satisfacción que me hace saber lo que estádisfrutandodeesanuevalocura,sehundeunaúltimavezenmíyambosnosdejamosllevarporelmomento.
Dejocaerlacabezahaciadelanteparatomaraliento.Estoyexhausta.Pero,sindarmeunrespiro,miseñor,miamo,mipatrónsaledemíymellevahastaJustin.Antelaatentamiradademialemányensilencio,eldesconocidomelavarápidamenteelsexoconunatoallahúmeda,mesientasobreél,
mecolocaasuantojoymeempalaconsuduropene.Yovuelvoajadear.Elcaminoyaestáabiertoyhumedecido.Ericlohahecho.PeroJustin,enbuscadesuplacer,me
agarraporeltraseroymemuevesobreélconfirmezayprecisión.Ungemidoescapademibocayecholacabezahaciaatrás.Esincreíble.Fantástico.Enloquecedor.
Micuerposeamoldaa loqueesehombremehaceymedejomanejar.Moviéndome,buscomipropioplacer,cuandosientoquemiamor,desdeatrás,posasusgrandesycuidadasmanossobremicintura,terminadedesnudarme,meaprietacontraJustinymurmuraenmioído:
—Recuerda.Intentacerrarlaspiernasyelplacerseintensificará.Hagoloquemepideysoyconscientedeque,alhacerlo,elplacerseincrementa,seextiende,y
jadeoal tiempoquenotocómoJustin tiembla.Repitounayotravez loqueEricmeharecordado,mientraselduropenedeJustinjugueteaenmiinterior,seabrepasotodoloquepuede,yyogritodeplacerporello.
Cuandosientoquemiamormeseparalasnalgas,meacomodosobreJustindispuestaarecibirloaél.Alnotarmipredisposición,Ericjugueteaconmianounosminutosparadilatarlo.
Justinloveyentoncesmemiray,mientrassehundeenmí,pregunta:—¿Nosquieresalosdosdentrodeti?Elardorenel rostrodelhombreseextiendea todosucuerpo,yEric,alqueno leveo lacara
perosísientodetrásdemí,dice:—Justin,ademásdesermidueñaymiesclava,mimujerestambiénatrevida,morbosayfogosa.
¿Quémáspuedopedir?Elaludido,queestáenmi interior,asientey,cuando jadeoalnotareldedodeEricenmiano,
susurra:—Tieneslacompañeraquemuchosqueremosperoquepocosconsiguen,amigo.Gustosodeoíreso,Ericmebesaelcuello.—Losé—dice.Unpardesegundosdespués,melevanta,medalavueltay,mirándomealosojos,dicemientras
mellevahastaunsillóndecueroblanco:—SepáratelasnalgasparaJustin.Lohago...,hagoloquemepide...,mientrasmirespiraciónseaceleraysientocómolalenguadel
desconocido me recorre el trasero con lascivia.Mi cuerpo se estremece involuntariamente, y miamor,rozandoapenassubocaconlamía,dice:—Siéntatesobreélyentrégate.
Oírloquemepidemevuelveloca.Uff...,¡madrecita,quécalor!MirohaciaatrásyveoaJustinyasentadoenelsillón,alaesperadequecumplamiordenconel
preservativopuesto.Comolaesclavasexualquesoyenesteinstantedemiamor,meacomodosobreJustinsindejardemiraramidueñoyseñor.
Justinmeabrelaspiernasy,sinperderunsegundo,guíasuduropenehaciamiano,quedilatadocomoestáhacequesehundarápidamente.
Jadeo. Cierro los ojos, y Justin, agarrándome con fuerza las nalgas, me cierra las piernas y,moviendo con premura sus caderas, me da unas buenas embestidas que resuenan por toda lahabitaciónparasaciarelapetitosexualquetieneeneseinstantedemí.
¡Dios,quéplacer!Supeneentraysaledemiano,unayotrayotravez,yyolodisfruto.Logozo...,losaboreo.Misojosy losdeEricestánconectadosmientras Justin sehundeenmí,yyo,gustosa, jadeoy
permitoquelohaga.Complacidoconloqueve,nonosquitaojohastaquefinalmenteJustinllegaalclímaxy,trasunúltimoempellón,ambosnosdejamosllevar.
Sin salirse demí, Justin pasa lasmanos por debajo demis rodillas y, abriéndome losmuslos,murmuraconunhilodevoz:
—Eric...,tumujer.Miamormemiraacaloradomientrassetocaelpenegustoso.Y,parahacermerabiar,seagacha,
mebesaelsexoyjugueteaconél.Grito.Meretuerzo.¡Uf,quécalor!Durantevariosminutos, sigoempaladaporelanoporJustin,yalmismo tiempoEric juguetea
conmiclítorisyyodisfrutocomounaloca.Comounaverdaderaposesa.Calor, delirio, frenesí..., todo eso me hace sentir mi amor, mientras juguetea conmigo y otro
hombremeabreparaél.Segundoasegundo,mirespiraciónseaceleray,cuandoyanopuedomás,cojoconlasmanoselpelodeEric,hagoquememireymurmuro:
—Hazloya...Tedeseo.Trasunúltimoydulcemordisquitoamivagina,mialemánponeunarodillasobreelsillón,se
acomodabieny,guiandosuduropenehaciamihúmedayardienteentrada,seintroduceenella,sedejacaersobremíymebesamientrassehundeunayotravez;Justinnosemueve.
Megustaestarentreaquellosdoshombres.Lodisfruto,yséqueelloslodisfrutantambién.Esoestimulamispensamientos.
LasmanosdeJustinmeagarranporlosriñonesysientocómosupeneseendureceycomienzadenuevoaentraryasalirdemiano,mientrasEricsólotienelosojosclavadosenmíymeentregaloquequiero,loquelepidoyloquenecesito.
—Másfuerte—exijo.Al oírme, sonríe con fogosidad, se agarra al borde del sillón y me da lo que quiero. Sus
acometidas sonapasionadase impetuosas.Sientoquemevaapartir endosdeplacermientrasmeentregoaélyaquienélquiera.Soysuya.
Una y otra... y otra vez, aquellos dos hombres entran enmí con fogosidad y yo abandonomicuerpoentresusmanos.Memueven,mecolocanasuantojo,sehundenenmiinterioryyoaccedo...,accedoatodoloqueellosquieran,mientrassientosusdurospenesdentrodemíymehacenjadeardeplacer.Depuroplacer.
Nosécuántotiempodura.Nosécuántotiempoestamosasí.Sóloséque,cuandoelorgasmonosllega,elespasmoestalqueeléxtasisporloqueestábamos
haciendo nos hace tener convulsiones uno en brazos del otro durante varios segundos, mientrasJustin,debajodenosotros,soportaelpesodenuestroscuerposyvivesuparticularaventura.
Duranteel restode lamañana,disfrutodelmorbo, laposesividady la lujuria juntoamiamor.Permitoquemanipulenmicuerpocomosiyofueraunamuñecadetrapo,ymegusta.Meexcitasersu esclava sexual en ese instante, me encanta permitírselo, y sé que a Eric le gusta también
autorizarlo.Tan pronto estoy a cuatro patas como boca arriba o boca abajomientras ellosme follan,me
separan las nalgas, me ofrecen, me acarician, me chupan, introducen los dedos en mí, y yo loconsiento.Aprueboloqueallíocurreporquelaprimeraenexigirlosoyyo.
Alasdosdelatarde,trasvariashorasdesexocaliente,exacerbadoyfebril,Justinsevay,cuandoEricyyonosquedamossolosenlahabitación,digo:
—NuncahabíavistoaJustin.¿Dequéloconoces?Ericmemira.Estádepieamilado,yresponde:—Loconozcodesdehaceaños,peroportrabajosetrasladóaviviraBerlín.Lasemanapasada
mellamóymedijoquevivíaaquídenuevo.Levantándome,cojoelsujetadorparaponérmeloyafirmo:—Entonces,lovolveremosaverenelSensations,¿verdad?—No.Nuncaloverásporallí.—¿Porqué?—preguntosorprendida.Miamormeayudaaabrocharmeelsujetadory,unavezlohahecho,mebesaenelcuelloydice:—Porque la discreción es fundamental para él. Primero, porque sumujer no participa de sus
juegos.Y,segundo,porqueesjuezdelTribunalSuperior.Portanto,loverássóloenocasionescomoladehoy.
Saberqueesjuezmesorprende,peropregunto:—¿Quesumujernoparticipa?—No—dice y, abrochándose el botón del pantalón, añade—: Por eso ha dicho que tú eres la
compañeraquemuchoshombresquerríantenerperopocosconsiguen,¿lorecuerdas?—Asiento,yEricmebesayañade—:Y,porsuerteparamí,eresmimujer.Mía.
Esasensacióndepropiedadtandemialemánmehacereír.—Ytú,Iceman,eresmío.Ambos reímos. A cualquiera que se le diga que disfrutamos compartiéndonos en ciertos
momentosnonosentendería,peroyoyapasodeeso.Pasodeloquepiensen,deloqueopinen.YosoyfelizasíconEric,ypuntoyfinal.
Estoyatontadamirándolocuandomiamor,milocoamor,dicemientrasmeabraza:—Por eso, pequeña,me pongo tan celoso cuando vas alGuantanamera.Tengo tantomiedo de
perderteque,siesoocurriera,yocreoque...—Pero¿quétonteríasestásdiciendo?Ericresopla.—Jud,soyconscientedemislimitaciones,ylosabes.Oíreso,queheoídotantasvecesenlosañosquellevamosjuntos,mehacereír,yafirmo:—Mira,miamor.Yononecesitoque túbailes siyobailo.Yosólonecesitoqueseas feliz,que
sonríasy te fíesdemícuandosalgosin tiovoyadivertirmealGuantanamera.El resto... sobra,ysobraporquetequieroyparamínoexistenadiemásquetú.
Susonrisaseexpande.Seagranda.Feliz,loabrazo,lobesocontodoelamorquesoycapazdedarley,mirándolo,murmuro:
—Soytuya,comotúeresmío.Entératedeunasantavez,cabezón.
Despuésdevariosbesosypalabrasdeamorquesólomilocoytestarudoalemánsabedecirme,terminamosdevestirnos,abandonamoselhotelyregresamosacasa.
¡Quémañanitadejuevesmásbuenaquehepasado!
30
LabodadeMarta...llega.Esedía,nosponemostodosguapísimos.Peroquienesmenosimportamossomosnosotros.Allíla
queimportaesMarta,quevapreciosaconsubonitovestidodenoviaysuincipientebarriguita.Sonia,misuegra,sepasatodalaceremoniaagarradadelamanodeEric.Lonecesita,yentiendo
quelohaga.Essuhijoy,pormuchoquehayamadurado,serásuniñotodalavida,comomihermanayyosomoslasniñasdemipadre.
Unavezfinalizadalaceremonia,repartosaquitosdearrozentrelosinvitadosparaqueloecheny,cuandomisojosseencuentranconlosdeGinebra,éstamemiraydice:
—Pero qué guapa estás, Judith. —Yo asiento, río y entonces ella, dejándome sin palabras,prosigue—:Graciasporpermitirmeveniralaboda.
—¡¿Qué?!—murmuroboquiabierta.Ella,quetienemástablasqueunajedrez,sonríeysusurra:—Judith,apesardemisesfuerzosporcaertebien,séquetesigoincomodando.Ydeverdadque
losiento.Nocontesto.Oírladeciresomellegaalcorazón,yfinalmente,guiñándoleelojo,respondo:—Estoyfelizporqueestésaquí.Venga,disfrutemosdelapreciosaboda.Ginebraasiente.Nodicemás,yyo,dándome lavuelta,prosigomicaminomientrasmesiento
comounabrujapiruja.Alsalirdelaiglesia,Melyyotiramosunbuenarsenaldearroz,mientrasreímosporlacaraque
ponenlosnovios.EricyBjörn,quelosaben,sealejandenosotras.Noquierenensuciarsesustrajesconelpolvillo.¡Vayadospijoteros!
Elconviteseorganizaenunhotelcercanoalaiglesiaytodosaledemaravilla.SóloconverlacaradeMarta,todossabemoslofelizqueesy,cuandolosnoviosbailanelvals
quehanelegido,todosaplaudimos,mientrasyomesientotanfelizcomolanoviaalladodemiamor.En la vida me habría imaginado aMarta bailando un vals el día de su boda, pero sé que ha
queridodarleelgustoasumadreyalospadresdelqueyaessumarido.Yseloaplaudo.Soniaselomerece,ylospadresdeélseguroquetambién.
Esosí,unahoradespués,llegaungrupodejóvenesquesubenalescenario,ysonríoalverunostimbales, unas guitarras, bongós ymaracas. Feliz por ver el rumbo que va a tomar la fiesta, meacercoamicuñada,queestáhablandoconReinaldo,MáximoyalgunosamigosdelGuantanamera,ydigo:
—Québuenaideahastenido,Marta.Ellamemirayyoseñaloalosjóvenesydigo:—¡Muybuenaidea!Ahorasíquevamosabailar.
Veoquemicuñadaclavalamiradaenaquéllos,ysonriendo,cuchichea:—Pues,locreasono,noséquéhacenaquí.—Luego,echandounvistazoalrestodelosamigos,
pregunta—:¿Loshabéiscontratadovosotros?Todosnieganconlacabezaapesardelomuchoquelesagradalaidea,hastaqueoímosdecira
nuestrasespaldas:—Loshecontratadoyo.Alvolvermeyencontrarmeconmiincreíbleyguapomarido,sonrío...,sonríoysonrío,mientras
veocómoMartasetiraasusbrazosylobesuqueaconamor.Reinaldo,Máximoyelresto,trasalabarel detalle, corren hasta los recién llegados y, segundos después, los timbales suenan y la gentecomienzaabailar.
Sinmovermedemisitio,sigomirandoamisorprendentemarido,ynosésicomérmeloabesosodesnudarlodirectamenteyhacertodoloquesemeantojeconél.Eric,queesmuchoEric,sabeloquepiensoalvermigestoy,acercándoseamí,elmuycanallamurmura:
—Recuerda,pequeña:pídemeloquequierasyyotelodaré.Merío,nolopuedoremediar.Y,abrazándomealhombrequemevuelvelocadedeseoydeamor
entreotrascosas,respondo:—Túsíquesabes,miamol.Encantado,mi chicome rodea con los brazos,me acerca a él yme besa.Me devora y yo lo
disfrutohastaqueoigolavozdeGinebra,quedice:—Vamos,parejita,¡abailar!Oíresomehacesonreír.¿Bailar,Eric?Yéste,quesigueabrazándomecomounoso,diceentoncesconsupreciosasonrisa:—Quieroquebailes,ríasygritesesode«¡Azúcar!»,yquelopasesfenomenalcontusamigos.Y,
tranquila,prometonoencelarmenipensartonterías.Contentaporloqueacabodeoír,sueltounarisotadajustocuandolaorquestacomienzaatocar
537C.U.B.A.[21]—¡Diosss!—grito—,¡mevuelvelocaestacanción!Ericsonríe,medalavueltay,dándomeunazotitocómpliceeneltrasero,diceempujándome:—Anda,¡veydisfrutadelamúsica!Trasguiñarleelojo,llegobailoteandohastamisamigosyyanoparodurantehoras.Elgrupoque
miamorhatraídoesbuenísimo,ynosdivertimosmientrasgritamosaquellode«¡Azúcarrrrr!».Unpardeveceshagounapausaparabeberalgo.Sinobebo,medeshidrataré.Cadavezquemeve,miamor,queestácharlandoconunosamigos,meofreceunacoca-colafresquita.¡Cómomeconoceelcanalla!
Misuegraysusamigassehacencargodelosniños,disfrutanconellos.InclusoFlynsonríe.Esomegusta.
Pero una de las veces, cuando dejo de bailar y camino hacia Eric, veo que está hablando porteléfonoapartadodelgrupocongestoserio,ymedamalaespina.
Alvermellegar,Björnmepasalacoca-colafresquita,ylepregunto:—¿Conquiénhabla?—Nosé—respondeél.
DeprontoEriccuelgael teléfono, se tocaelpeloy,porcómomueve lacabeza, séqueocurrealgo.Esomealerta.Peromásmealertacuandosedalavueltayclavalosojosenmí.
Trasunossegundosenlosqueintuyoqueordenasusideas,caminahaciamíy,antesdequeabralaboca,yopregunto:
—¿Quéocurre?BjörnyMelyaestánamilado,yEric,cogiéndomelamano,dice:—EraNorbert.EstáconSustoenurgencias.Depronto,paramílafiestaacaba.Susto...¡MiSusto!¿Quéleocurre?Y,comopuedo,conunhilo
devozpregunto:—¿Quéhaocurrido?Ericmeaprietalamano.—Alparecer,cuandoNorbertsacólabasura,sedejólapuertadelacancelaabierta,Sustocorrió
trasélyunvehículolo...loatropelló.Segúnoigolaúltimapalabra,mesueltodeEricyllevomimanodirectaalcorazónmientrasmis
ojosseinundandelágrimas.Sinesperarunsegundo,Melmecogeymurmura:—Tranquila...,Jud...,tranquila.Peromi tranquilidadyanoexiste.Susto,miSusto,ha tenidounaccidente,yyo rompoa llorar
mientras siento cómo Ericme acerca a su cuerpo,me abraza yme dice una ymil veces quemetranquilice,quetodovaasalirbien.
Alvermeeneseestado,misuegravienerápidamentehaciamí,yyomedoylavueltaparaquenadie más me vea llorar, mientras les pido que no les digan nada a Flyn ni a Marta. No quierojorobarlelabodaamicuñadaniasustaralniño.
EricpasalamanocondulzurapormirostromientrasBjörnyMelmedicenunayotravezquenomeangustie,peroyoyanoveo...Yaestoyhistéricay,mirandoaEric,pregunto:
—¿QuémástehadichoNorbert?ElgestodeEricesserio.—Cariño,elveterinarioestáhaciendoloquepuede.Sientoquemefaltaelaire.¡Measfixio!EneseinstanteapareceFlyny,alvermeasí,pregunta:—Papá,¿quéocurre?Ericmemira,entiendequehadesersinceroconFlyn,yresponde.—UncochehaatropelladoaSustoy...—¿Sustoestámuerto?—preguntaelcríoconunhilodevoz,loqueamímehacelloraraúnmás.—No...,no—aclararápidamenteEric—.Elveterinarioestáconél.La angustia me carcome mientras mi marido da explicaciones al niño y éste, a pesar de lo
nerviosoqueestá,demuestraqueesunjodidoZimmermanynisedespeina.Quieroirme.Quieroirala clínica, pero no puedo hablar.Y entonces Eric, queme conocemuy bien, clava los ojos en sumadre,queestáamilado,ypregunta:
—Mamá,¿tepuedesllevaraPipayalosniñosatucasa?—Porsupuesto,hijo...,porsupuesto.Ericasientey,agarrándomeconfuerzadelamano,dice:
—Vamos,Jud.Iremosalaclínica.—Voyconvosotros—diceFlyn.Ericasiente.—Nosotrostambiénvamos—afirmaMel.Miamorlamira.—No,Mel,esmejorqueosquedéisconlosniñosmientrasdurelafiestayluegolosllevéiscon
mimadreasucasa.Miamiga,mibuenaamiga,memirayyoasiento.Erictienerazón.—Notepreocupes,Eric—diceBjörn—.Nosotrosnosencargamos.—Deacuerdo—convieneMel—.Peroquieroquemetengáisinformada.Asiento y Eric también y, cogidos de lamano, vamos hacia la salida. Pero de pronto Eric se
detiene,miraaladerechay,dirigiéndonoshaciaFélixyGinebra,pide:—Félix,necesitotuayuda.—¿Quéteocurre,Judith?—preguntaGinebraalverelestadoenelquemeencuentro.RápidamenteEricexplicaloocurrido,yFélix,aloírlo,dice:—Iremosconvosotros.EneseinstanterecuerdoqueEricmedijoqueFélixteníavariasclínicasveterinariasenEstados
Unidosy,apenassinhablar,loscinconosdirigimoshacialacalle.LoúnicoquequieroesveraSustocuantoantes.
¡NecesitoveraSusto!Veinteminutosdespués,cuandoEricaparcaelcoche, literalmenteme tirodelvehículoycorro
hacialaclínica.Lapuertaestácerrada,sonlasdoceymediadelanoche,peroNorbert,alverme,se levantade
dondeestásentadoymeabre.—¿Cómoestá?—preguntopreocupadaviendolasmanchasdesangreensuropa.Elhombrememiraymurmuracongestoapenado:—Judith,losiento.Nomedicuentadequelaverjasequedabaabiertay...—Norbert,¿cómoestá?—insistonerviosa.EneseinstanteentrantodosyNorbert,tanpreocupadocomoyo,respondemirandoaEric:—Nolosé.Elveterinariomedijoqueesperaseaquí.Entonces se abre la puerta de la consulta y el veterinario de urgencias, al ver a tanta gente
elegantementevestida,pregunta:—¿VienentodosporSusto?—Sí—afirmaEricconrotundidad.—Soysudueña.Quieroverlo—digoangustiada—.¿Cómoestá?—Esmejorquenoloveaahora—respondeelveterinario—,porque...—Hedichoquequieroverlo—insisto.Eric,quemeconoce,cogemirostroentrelasmanosy,mirándome,dice:—Escucha,cariño.LoimportanteahoraesatenderaSusto,yaloverásmástarde.Séquetienerazón,queyonopuedohacernada.Peroconunhilodevozmurmuro:—Estaráasustado,ysimeveseguroque...
—Estásedadoparaquenosientadolor—mecortaelveterinario.Saberdesupadecimientomemachacaelalma,yentonceselveterinarioprosigue:—Elgolpequeharecibidohasidofuerte,peroestáfueradepeligro.Tienediversascontusionesy
se ha fracturado la pata delantera izquierda y, la verdad, aunque quiero ser positivo, no veomuybuenasoluciónaeso.
Derepente,measusto.Eric,queaúnnomehasoltadolamano,mientrasmesientaenunasilla,murmura:
—Tranquila,pequeña...,tranquila.Asiento.Tienerazón.Deboestartranquila.DebocomportarmecomounaadultaestandoFlyncon
nosotros.—Doctor—preguntaEricentonces—,¿puedeoperaraSustoahora?—Sí —afirma él—. Estábamos esperando a que llegaran ustedes para que dieran su
consentimientoyfirmaranestospapeles.Aquíseexplicanlosriesgosdelaanestesiaylacuantíadelaoperación.Perohededecirlesquequizá,aunconlaintervención,lapatadelanimalnoquedebien.
EriccogelospapelesmientrasFélixcomienzaahablarconeldoctor.Comoveterinarios,ambosseentiendenalaperfección.
Mi amor se saca un bolígrafo del bolsillo y, agachándose, se apoya en una silla y firma lospapelessinleerlos.AlgoquesiempremedicequeyonohagaloestáhaciendoélporSusto.
UnavezEricseincorpora,meguiñaunojoconcariñoyoigoqueFélixdice:—Lomásacertadoesoperarlo.LehepedidoaldoctorFaüterquemepermitaestarpresenteenel
quirófanoparaayudar:soyespecialistaenestetipodefracturas.¿Avosotrososparecebien?Ericmemira.Yoasiento,yentoncesélmurmuratendiéndolelamano:—Gracias,Félix.Cuando los dos hombres desaparecen tras la puerta, Ginebra, que hasta el momento se ha
mantenidocallada,sesientaamiladoy,cogiéndomelamano,dice:—Todovaasalirbien.Tranquila,Judith.FélixnovaapermitirqueaSustolepasenada.Comoha
dicho,esespecialistaenesetipodefracturasyhaoperadoainfinidaddeanimalitosensusclínicas.Medicejustoloquenecesitooír:positividad,eintentosonreír.Eneseinstante,Flynsesientaen
laotrasillay,cogiendomiotramanolibre,murmura:—Mamá,tranquila.Sustoesfuerteyserecuperará.Su contacto, sus palabras y, en especial, que me llame ¡«mamá»! y se preocupe por mí me
provocan de nuevo el llanto, y lo abrazo.Llevo tanto tiempo sin abrazarlo, sin sentirlo cerca quellorodefelicidad,dentrodemitristeza,portenerlojuntoamí.NecesitoaFlyn.AdoroaFlyn,ysóloquieroquemequiera.
Pasadosdiezminutos,enlosquenohepodidoparardellorarcomosimefueralavidaenello,yesquemeva,Flynselevantademilado,yEricseacercaaNorbertydice:
—Creoqueesmejorqueregresesacasa.—No,señor.Prefieroquedarmeaquí.—Y,mirándomecongestopesaroso,susurra—:Losiento,
Judith.Losientomucho.Suexpresiónmehacesaberquelodicesinceramente.Pobre,eldisgustoquetieneencima.Sihay
alguienquesiempremehaqueridoymehademostradosucariñodesdequepuselospiesenMúnich,
éseeselbuenazodeNorbert.Melevantoyledoyunabrazo.—Túno tienes la culpa de nada,Norbert—aseguro—.Por favor, novuelvas a disculparte.Ya
sabemostodosloinquietoqueesylolocoqueestáSustoy,tranquilo,seguroqueserecuperará.Sonreímos,yluegoEricinsiste:—Vamos, Norbert, vete a casa. Simona debe de estar nerviosa. Prometo decirte algo cuando
regresemos.—Y,volviéndose,pregunta—:Flyn,¿quieresirteconél?—No—respondemihijo—.Prefieroquedarmeconvosotros.Norbertseresiste,peroalfinalloconvencemosentretodosyseva.Unavezsaleporlapuertade
laclínica,Ericlacierradesdedentroysesientaamilado.Sólopodemosesperar.Unahoradespués,Félixyeldoctoraparecenantenosotros,yesteúltimodice:—Hasalidotodocomoesperábamos.Hemostenidoquedarlepuntosenelhocicoytienevarios
dientes rotos.Encuantoa lapata, lehemospuestounaplacacon tornillosquedeberemoscambiardentrodeunosmesesenunasegundaoperación.
—Deacuerdo—consigomurmurar.—Bien—oigoquediceFlynamilado.—Demomento—prosigueelveterinario—,Susto tendráquequedarse aquí algunosdías.Pero
tranquila,todoestábien.Estoycomoenunanube.Susto,mipreciosoSusto,pareceque seencuentra fueradepeligroy,
mientrasEriccontinúahablandoconelveterinario,Félixseacercaamíydice:—Tubichilloesmásfuertedeloquecrees.Serepondrá,aunquequizátengaunacojeradepor
vida,peroesotedaigual,¿verdad?Sucomentariomehacesonreír,¡claroquemedaigual!Loabrazoysusurro:—Gracias...,gracias...,gracias.FélixsonríeyoigoqueGinebraríecuandoéldice:—Denada,mujer.Mi felicidad es completa, y abrazo también a Ginebra. La verdad es que la mujer no se ha
separado demi lado y no ha parado de darme ánimos durante las horas en las que yo veía másoscuridadqueluz.
¡Joder,quénegativamevuelvoenalgunosmomentos!Unavezmesueltodeella,abrazofelizamiamoryentoncesoigoqueelveterinariodice:—Judith,¿quiereverloahora?Asiento.Asientocomounaniñachicay,mientrasFélix sequedaconGinebra,yoentroenuna
habitacióndelamanodemiamorydeFlyn.Veojaulasconotrosanimalitosquememirancuriosos,hastaqueelveterinariosedetieneante
unadelasjaulas,quetieneunaluzrojaeneltecho,ydiceabriendolapuerta:—Estásedadoypermaneceráasíunbuenrato,peroestábien.Mequedobloqueadamirando amiSusto.Verlo asíme impresiona.Tiene la cabeza vendaday
también parte del cuerpo. De pronto parece estar más delgado de lo que por norma está y,acercándomeaél, lobeso sobre lavendadelhocicoy las lágrimas semeescapan.Qué indefensoparece.
—Tranquilo,cielo...,mamiestáaquíynotevaadejar—murmuroconelcorazónencogido.
Durantevariosminutos,meolvidodelrestodelmundoysólomecentroenSusto,sóloenél.Lobeso. Lo toco con cariño y le dedico las mayores palabras de amor y ternura que soy capaz dearticulareneseinstante.
EricyFlynsiguenamilado,noseseparandemíy,congestoserio,meobservanhastaquemihijodaunpasoalfrenteytocaconafectoaSusto.Nosmiramosysonreímos.Estamosfelicesporteneranuestroperroconnosotros.Ericnosobservaensilencioy,conociéndolocomoloconozco,séqueveraSustoasídebedeestardestrozándolo.Sihayalguienquenosoportavereldolorolasenfermedadesenlosdemás,esél.
—Sepondrábien,Eric,tranquilo—digo.Aloírme,miamorsonríey,trasacercarsealajaula,ledaalanimalunbesoensuvendadacabeza
yresponde:—Sustotodavíatienemuchaguerraquedar.Alsalirdelaclínicasoncercadelastresdelamadrugada,yEricyyonosempeñamosenllevara
Ginebrayasumaridoalhotel.Eslomínimoquepodemoshacerporellos.Una vez los hemos dejado, me apoyo en el reposacabezas y cierro los ojos. Estoy contenta
¡dentrodemisustoporSusto!Perotodoparecequeestásaliendobien.Al llegar a casa,NorbertySimonanosesperan juntoalpobreCalamar, que está triste y solo.
Rápidamentelesindicamosquetodoestácontroladoy,cuandosemarchanadormiryFlynsesubeaCalamarasucuartoparaqueestéacompañado,Ericmeabrazaymurmuramirándomealosojos:
—Todovaasalirbien,pequeña...,teloprometo.Asiento.Quieroqueasíseay,simiEricZimmermanmelodice,¡locreeré!
31
Ellunes,cuandoalassietedelamañanasonóeldespertador,Melqueríamorirsepero,alargandolamano,loparóysiguiódurmiendo.
Björn, que lo había oído, abrió los ojos y observó divertido cómo ella se arropaba con lasmantas.
—Cariño...—murmuró—,hayquelevantarse.Mel,sinquererabrirlosojos,musitóconelpeloenmarañado:—Cincominutos...,sólocincominutosmás.Björn asintió y, tras darle un beso en la punta de la nariz, dijo cogiendo el despertador para
volveraponerlaalarma:—Te daré una hora. Yo me encargaré de levantar a Sami, ¿vale? Pero luego te levantas y la
llevamosjuntosalcolegio.Conunaponzoñosasonrisa,Melasintióy,suspirandocongustito,repuso:—Ereselmejor,cariño...,elmejor.Björnselevantósonriendodelacamay,desperezándose,fuehastalahabitacióndelapequeña,
dondereinabalapaz.Concariño,seacercóhastalacamay,sonriendoalverquedormíaconelpeloenmarañadocomosumadre,setumbóasuladoysaludó:
—Buenosdías,mipreciosaprincesa.Hayquelevantarse.Aloírlo,laniñaabrióunojitoyprotestó:—Papi,noquiero,tengosueñito.Björn sonrió. Mel y Sami eran el centro de su vida. Las adoraba. Las amaba con locura. Y,
besandolacabezarubiadelapequeña,cuchicheó:—¿Sabes,prinsesa?Mamiestádormida;sitelevantasahorapodráselegirlaropaquetúquieras.Losojosdelacríaseabrierondeinmediatoy,sentándoseenlacama,seretiróelpelodelacaray
preguntó:—¿Loqueyoquiera?Alversuexpresióndepilluela,Björnrioyafirmó:—Loquequieras,exceptolosdisfracesdeprincesasylascoronas.Yasabesquealcolesólose
puedenllevarcuandohayfiestadedisfraces.—Jooooooooooooooooooo.A cada segundo más encantado por las reacciones de la pequeña, Björn le guiñó un ojo y
cuchicheóconcomplicidad:—Pero puedes llevar el vestido rosa con la cara de las princesas que te compré y los zapatos
nuevos.¿Quéteparece?—Síiii.
Como si fuera un cohete a propulsión, Sami se tiró de la cama, abrió el armario y, tras sacaraquelloquesupapihabíadicho,lomiróyafirmócongestopícaro:
—Mamisevaaenfadar.—Demamimeencargoyo—dijoBjörnriendoycogiendoalapequeñaenbrazos—.Ven,vamos
albaño.Hayquelavarselacaritaylosdientes.Unahoradespués,cuandoBjörnySamiestabandesayunandoyavestidos,élconsuimpolutotraje
yellaconsuvestidonuevo,Melselevantóy,alveralapequeña,murmurómientrassellevabaunamanoalacabeza:
—Cariño,porfavor,queSamivaalcolegio,noalaentregadelosOscar.LapequeñamiróentoncesaBjörn,querespondió:—Losé,peroesqueSamiestanelegantecomosupapi.Melasintióy,sonriendo,sedioporvencida.—Vale,voyavestirme.Esosí,siasusmajestadesnolesimporta,yoiréenvaquerosycamiseta.Cuandodesapareció,BjörnySamichocaronlasmanosconcomplicidad.—Papi,ereselmejor—cuchicheólapequeña.Felizporelcomentariodelapequeña,élsoltóunacarcajadamientrasexclamaba:—Pormiprincesa,¡loquesea!Mediahoradespués,MelyBjörnsalierondelacasa,bajaronalgarajeysemontaronensucoche.AlllegaralcolegiocoincidieronconLouise,Heidiyotrasmujeres,yMel,alverlas,setensóy
murmuró:—Esperoqueestonoseaunanuevaencerronaolovasalamentar.Alveralasmujeres,Björnseencogiódehombros.—Yonosénada.Teloprometo.ConSamienel centroy cogidapor ambosde lamano,Heidiy lasdemás se acercarony esta
últimalossaludó:—Buenosdías,parejita.Quéalegríaencontrarosaquí.—Elplaceresmío,Heidi—saludóencantadoBjörnaltiempoquelabesaba.—Heidiesunazorra—soltódeprontoSami.—¡Sami!—laregañóBjörn.—Yunaperra...,esodijeronmamáylatíaJud.Mel,quesehabíaquedadosinhablaynosabíadóndemeterse,observóasuhijamientrassentíala
miradaacusadoradeBjörnydelasmujeresy,comopudo,susurró:—Sami,esonosedice.—Luego,mirandoaHeidi,quesehabíaquedadoacuadros,añadió—:No
lodiceporti,Heidi;sientoeldesacertadocomentario.Y,sinmás,cogióasuhijaenbrazosysealejóparadejarlaenelcolegioantesdequelescerraran
lapuerta,mientrasBjörnsequedabaconaquéllas.Sinpermitirleabrirlabocaasuhija,labesóyselaentregóalaseñoritamientraspensabaquéexplicacióndarleaBjörnpero,cuandosevolvióyvioalasmujeres sonriendo como tontas alrededor de él con una actitud que no le gustó nada de nada,apretóelpaso.
—Sinduda,esetrajetanbiencortadotequedamaravillosamentebien—decíaHeidi.Björn, que era un conquistador nato, sonrió con un gesto que hizo que todas las mujeres se
ruborizaran,hastaqueMelllegóe,incapazdenodecirnada,replicósincortarse:—Puesosaseguroquesintrajeestámuchomejor.SucomentariohizoquetodaslaobservaranconlabocaabiertayBjörnlamiraraincómodo.¿Por
quéhabríadichoaquello?Entonces,deprontoHeidipreguntó:—Melania,¿tevienesconnosotrasadesayunar?Björnnohabló.En sumirada,Mel podía leer lo que él quería quehiciera, ymás tras susdos
desafortunadoscomentarios,peroellareplicósindejarseembaucar:—Losiento.Dentrodemediahoratengounacitaalaquenopuedofaltarpornadadelmundo.Heidiasintióy,disimulandosuincomodidadconlamejordesussonrisas,respondió:—Nohayningúnproblema,Melania.Yanosveremosotramañana.Adiós,Björn.Y, dicho aquello, la pandilla de urracas, entre las que estaba Louise, se dieron la vuelta y se
marcharon.Tan pronto como aquéllas se alejaron, Björn miró a Mel incrédulo y, cuando se disponía a
protestar,ellaseleadelantódiciendo:—OdiocuandomellamanMelaniadeesamanera.¡Medahastarepelús!—¿QuéesesodequeHeidiesunazorrayunaperra?Tratandodenosonreír,Melcuchicheó:—Ay,cariño,losiento.ElotrodíaleestabacontandoaJudith,eldíaque...—PorelamordeDios,Mel.¿SamiacabadellamarzorrayperraalamujerdeGilbertHeineytú
teríes?Y,porsiencimaerapoco,noseteocurreotracosaquedecirquesinropaestoymejor.—Laverdad,cariño.Lapuritaverdad.—Mel...—gruñóél.AlverelpocosentidodelhumordeBjörn,ellacambióelgestoymurmuró:—Vale.Losiento,cariño.Tienesrazón.Haestadofueradelugary...—¿QuétalsicomienzasaseralgomásagradableconHeidiyesasmujeres?—Imposible.—Imposible,¿porqué?—protestóél.—Puesporquenomegustanynoquierotenernadaqueverconellas.Comprendoquetuilusión
seaentrarenesedichosobufete,peroentiendequeyonoquierosabernadadeellos.Portanto,sitúhasderepresentarunbonitopapelparaqueellasyellostequieran,¡adelante!,peroyonolovoyahacer,porquenolesgustoyteaseguroquenolesvoyagustarnunca,¿entendido?
Elabogadoclavólosojosenlamorenadescaradaqueloretabaconlamiradapero,cuandosedisponíaaresponder,sonósumóvil.Contestóy,trashablarunossegundos,locerróydijomirandoaMel:
—Eralapolicía.—¿Lapoli?¿Quéhapasado?—preguntóellasorprendida.—Hanpillado alhacker que atentaba contramiweb, y el inspectorKleiber quiere que vaya a
comisaría.Sorprendidayencantadaaloíreso,Mellocogiódelamanoy,sindudarlo,dijo:—Vamos.Iremosjuntosaveraesedesgraciado.
TrascallejearporMúnich,unavezaparcaronelvehículo,entraronenlacomisaríasinsoltarsedelamano.PreguntaronporelinspectorKleiberylesindicaronquesudespachoestabaenlasegundapuertaaladerecha.
—Tejuroque,cuandoveaaesedesgraciadodeMarvel—sentencióBjörncaminando—,melasvaapagarestéonolapolicíadelante.
—Cariño—murmuróMel—, tranquilízate.Ya lohancogido,ydudoquevuelvaapiratearte laweb.
Björnasintióeintentórelajarse,peroenelfondodeseabaecharsealacaraaaqueldestructordelo ajeno. Al llegar frente a una puerta, de pronto ésta se abrió y apareció ante ellos el inspectorKleiber.Alverlos,seapresuróacerrardenuevoydijo:
—Creoqueesmejorqueantespasenamidespacho.Mel asintió, pero Björn, desobedeciendo las indicaciones del policía, abrió la puerta que éste
acababadecerrar,dispuestoacomersealmalditohacker,yseencontróaunamujermayoryaunadolescentedelaedaddeFlyn.Congestocontrariado,sumiradapasódelamujeralniñoy,cuandotuvoclaroqueelhackereraaquelcríodepelolargoydescontroladoquenolomiraba,diounpasoatrássindecirnadaycerrólapuerta.
—Comolehedicho,esmejorquepasenantesamidespacho—insistióelinspector.PeroBjörnnecesitabaqueleconfirmaraloquecreía,ypreguntósinmoverse:—¡¿Elhackeresuncrío?!—Sí—afirmóelinspector.—¿EsemuchachoesMarvel?—preguntósorprendidaMelaldarsecuentadequeloconocía.—Sí—volvióaasentirelpolicía.—¡Joder!¿Yquéhaceunniñatopirateandomiweb?Elinspectorabrióunapuertay,señalando,insistió:—Porfavor,pasen.Tenemosquehablar.Alucinados, entrarony tomaron asiento.El inspector se sentó a su vez, colocó ante ellos unos
papelesydeclaró:—Ese muchacho es un cerebrito en informática, y si le digo esto es porque algunos de sus
compañerosasílohandescritoalverlascosasquehace.Sinohubierasidoporquenosllamarondelinstitutoalquevaparaavisarnosdesufaltadeasistenciadesdelamuertedesuabuelo,difícilmentelaunidaddedelitosinformáticospodríahaberlocazadoporloquelehacíaaustedensupáginaweb.Elchicoesmuybuenoenloquehace...,créame.
MelyBjörnsemiraronsorprendidos.Sinlugaradudas,loshackerserancadavezmásjóvenes.Acontinuación,elinspectorabrióunacarpetaypreguntó:—¿LesuenaelnombredeBastianFogelman?—No—respondióBjörn.—¿Estáustedseguro,señorHoffmann?—insistióelinspector.Björnsedisponíaaprotestarcuandoaquélañadió:—¿RecuerdaelnombredeKatharina?Unamuchachasuiza.Aloíreso,Björnseincorporódelasilla.Claroquelarecordaba.—¿QuéocurreconKatharina?
—¿QuiénesKatharina?—preguntóMel.Sinentenderaquéveníatodoaquello,BjörnmiróaMelyseapresuróaresponder:—Era una amiga.Una vecina.—Y, viendo la expresión de ella almirarlo aclaró—:Llevo sin
verlamuchosaños,nomemiresasí.Alvercómosemiraban,elinspectordijo:—KatharinaeralahijadeBastianFogelman,suvecino.Björnlevantólascejasy,clavandosusojosenél,preguntó:—¿Y?—El crío que ha visto y que ha estado pirateando su web es el hijo de Katharina, nieto de
Fogelman...—y,entregándoleunpapel,añadió—:yporloqueéldice,essuhijotambién.—¡¿Qué?!—exclamaronincrédulosMelyBjörnalavez.ElinspectorsedisponíaadeciralgocuandoBjörnsepusoenpiedeunbrinco.—¡¿Qué tonteríasestádiciendo?—soltó—.Laúnicahijaque tengose llamaSami,nomideun
palmoyacabodedejarlaenelcolegio.Mel,todavíasinreaccionar,miróaBjörncuandoéstecogiómalhumoradoelpapelqueelpolicía
le tendía y comenzó a leer. Efectivamente, aquello era una partida de nacimiento en donde en lacasilladepadreponíaclaramente«BjörnHoffmann».Sinentenderabsolutamentenada,sesentódenuevoenlasillay,dejandoelpapelsobrelamesa,murmurómirandoaMel:
—Noséquéesesto.Nitampocoséquiénesesecrío,perodesdeluegonoeshijomío.—SeñorHoffmann...—¡Nodigatonterías,inspector!—locortóBjörn—.Siyotuvieraunhijo,tengaporseguroque
losabría,ymuybien.Alversudesconcierto,Mellocogiódelasmanosy,atrapandosumirada,susurró:—Tranquilo,cariño.—SeñorHoffmann,escúcheme—insistióelinspectorKleiber—.Nosllamarondelcolegiopara
denunciarque,traselfallecimientodesuabuelo,unmenornoibaaclaseyseguramentevivíasolo.Elmuchachonosvioen lapuertadesucasa,seasustó,yhaestado toda lanochevagandopor lascalles.Cuandounosdemisagenteslolocalizarondurmiendoenunparque,locogierony,antesdetraerloalacomisaría,elmuchachosuplicóqueteníaqueirasucasaaporsuperro.Mishombresloacompañarony,allí,trasobservarciertascosasensuhabitación,seencontraronconlasorpresadequeeraélquienlepirateabasupáginaweb.
Björncadavezentendíamenos.Eracomosilehablaranenchino.—Al principio, el muchacho no soltaba prenda —prosiguió el inspector—. No contestaba a
nuestraspreguntas,apesardeque laspruebas lodelataban,peroal final seha rotocuandohemosqueridosepararlodesumascota.¿UstedvivióenelbarriodeHaidhausen?
Elabogado,confundido,asintióalrecordarlo.—Sí.Vivíallí.Elinspectormirólospapelesqueteníadelanteeindicó:—Porproblemasconsumadrastra,usted,supadreysuhermanosemarcharondelbarriodela
nochealamañana,¿verdad?Conlosojosveladosporlosrecuerdos,Björnasintió.
—Sí.MimadrastaseenamoródeunnorteamericanollamadoRichardShepard...,ytuvimosquemarcharnos.
—Björn—murmuróMel,conscientedeloquelecostabahablardeaquello.Al sentir a su mujer a su lado, el abogado la miró para hacerle saber que estaba bien, y a
continuaciónseñaló:—Inspector,noséaquévienerecordarmipasado,perosí,todocuantodiceescierto.Mipadrelo
habíapuestotodoanombredeaquellamalamujer,yellanosloquitó.Nosdejóenlacalleytuvimosquemarcharnosdelquehabíasidonuestrobarriodeundíaparaotro.
Unincómodosilenciolosrodeó,hastaqueelinspectorafirmó:—Pues he de decirle que, cuando usted se marchó, Katharina regresó a Suiza embarazada de
usted.—¡¿Qué?!—exclamó Björn, bloqueado. Durante un par de segundos, su mente se inundó de
recuerdospasados,ydeprontosiseó—:Siesofueracierto,¿porquénomebuscóparacontármelo?—Eso,señorHoffmann,nolosé.Yosóloséloqueelniñonoshadicho.Mareadocomonuncaensuvida,Björnseapoyóenel respaldode lasilla.Melsabía loque le
dolíarecordaraquelloy,alverloenaquelestado,cogióunpapelycomenzóadarleairemientraslesusurraba:
—Tranquilo,cariño...,tranquilo.Pero lapalabra«tranquilidad» era loquemenos le rondabapor la cabeza aBjörn.Sólopodía
pensarenloqueaquelpolicíaledecía.Teníaunhijo,¿yseenterabacasiquinceañosdespués?El inspector Kleiber puso una botellita de agua delante de Björn. Mel la cogió, la abrió y,
entregándosela,exigió:—Bebeagua.Bebe.Björnbebióybebióybebióy,cuandolabotellaseacabó,ladejósobrelamesay,levantándose,
negó:—Nopuedeser.Esimposiblequeseamihijo.Katharinamelohabríadicho.Quierohablarcon
ella,¡quieroverla!Yestoysegurodequetodosesolucionará.—SientodecirlequeKatharinamuriódecáncerhaceochoañosenSuiza—informóelinspector
—.Entonces,elabuelodelcríosehizocargodeélaquí,enMúnich,hastaquemuriótambiénhacepocomásdeunmes.
Acadainstantemásbloqueado,Björnexigió:—Quieroveraesemuchacho.Exijohablarconélyaclarartodoesto.Elinspectorlevantóentonceselauriculardeunteléfonoydijo:—LepediréalaasistentesocialquenosavisecuandoterminedehablarconPeter.Björnsemesóelpelo.Aquelloeraunalocura.¿Cómoibaatenerunhijoynosaberlo?—Cariño..., cariño..., cariño... Es mejor que te tranquilices — insistió Mel levantándose para
ponerseasualtura—.Antesdehablarconelniño,creoque...—¿Peter?¡¿HadichoquesellamaPeter?!—preguntódeprontoBjörn.ElinspectorasintióyMel,aloíraquelnombre,murmurósentándose:—Diossanto.Si algo le gustaba aBjörn eran sus discos de vinilo y sus cómics de Spiderman. Los cuidaba
comooroenpaño,ymuchashabíansidolasvecesquehabíacomentadoconellaque,siteníaunhijo,sellamaríacomosusuperhéroefavorito:Peter.
Acadainstantemásconfundido,Björnnosabíaquépensar.Entonces, lapuertadeldespachoseabrióylamujerqueestabasegundosantesconelcríodijo:
—Puedenpasarahoraparahablarconél.Melnosemovió,sinoquemiróaBjörnalaesperadesudecisión.—Vayamos,pues—dijoélfinalmente.Alsalirdeldespacho,Melseapresuróacogerlelamano.Queríaquesintieraqueestabaconél,y
Björn,aldarsecuentadeello,lamiróeintentósonreír.Perolapreciosa,inquietanteymaravillosasonrisadelabogadonosalióy,delamano,pasaronalasalaconelinspector.
Alentrar,elmuchacho,quevestíaunpantalónvaqueroraído,unasudaderaconcapuchaazulonayunaszapatillasque,sinlugaradudas,habíanvistotiemposmejores,nolevantólacabeza.Continuócon la vista fija en el suelo, y entoncesMel reparó en elmonopatín rojo y en el perro blanco ymarrónqueestabaasuspiesysupoacienciaciertaqueyaloshabíavistoantes.
Porsuparte,Björnsesentóalotroladodelamesa,frentealmuchacho,conlaesperanzadequeéste lo mirara. Él era un gran abogado, un hombre acostumbrado a lidiar con todo tipo desituaciones,eibaacontrolartambiénaquello.
Entonces,elcríosemovió.Levantóelrostroparaobservar,perosupelolargonolosdejabaversucaraconclaridad,yMel,conscientedequeyaseconocían,losaludó:
—Hola,Peter,soyMel.—Losé.—Túyyoyanoshemosvistoantes,¿verdad?—insistióellaantelasorpresadeBjörn.Élasintió.—Sí.Melteníamuyclaroquiéneraelchaval,ydijo:—TehevistovariasvecesenelparqueadondellevamosaSami,¿verdad?—Sí.—Yenelsupermercado...;túereselchicoquealgunosdíasrecogeloscarritos.—Sí—volvióaafirmarelmuchachoy,mirándola,añadióalverqueellanolocomentaba—:Y
tambiénnosvimoshacepocoenlapuertadelcolegio.Al oír eso,Mel simplemente asintió con la cabeza, yPeter entendió que no debía comentar lo
ocurridoaqueldíaconaquelhombre.PeroBjörn,queestabahistéricoescuchándolos,preguntó:—¿Yquéhacíasenesoslugares?Porque,sipirateabasmiweb,¿acasotambiénpretendíashacerle
algoamifamilia?—Björn—protestóMel.—No...No...,yonuncalesharíadaño.Nunca—murmuróelchaval.Pordebajodelamesa,MelpusounamanosobrelanerviosapiernadeBjörn,quenoparabade
moverse,ylepidiótranquilidad.Elchavalestabaasustado.Sólohabíaqueverloencogidoqueestabaparadarsecuenta,yBjörn,trasentenderloquesunoviaqueríadecirle,cambióeltonoypreguntó:
—Peter,¿porquédicesqueeresmihijo?
—Porquemamásiemprelodecía.Escribiósunombreenunafotoenlaqueestánlosdosydesdepequeñomedijoqueustederamipadre.Miabuelotambiénloafirmaba.
Bloqueadoyconfundido,Björnmiróaladolescente.¿Cómopodíatenerélunhijosinsaberlo?—Ysi tumadrey tu abuelo lodecían, ¿porquéno te acercaste amí?—volvió apreguntar—.
¿Porquépiratearmiweb?Elcríonorespondió,sinoquesimplementebajólacabeza.Entonces,elinspectordiounpasoal
frenteyloamenazó:—Sinorespondes,tendremosquellevarnosatuperro.—¡No!—gritóelmuchachoagarrándosealchuchoblancoymarrón—.NomeseparendeLeya.
Porfavor,esloúnicoquetengo.Aquellasúplicapillóatodosporsorpresa,yaMellerompióelcorazón.Oíralchicodeciraquellolehizorecordaralgoquehacíamucho...muchotiempounbuenamigo
lehabíacontadoy,emocionada,pensóenél.Siélestuvieraallí,nopermitiríaqueocurriera.¿Debíapermitirloella?Björn miró a Peter y, cuando se disponía a decir algo, el crío se retiró el pelo de la cara y
explicó:—Undíafuihastalapuertadesutrabajo,peroelporterodeledificiomeechóyentoncespensé
que,siaquelhombremehabíaechado,quénoharíausted,ymefui.Noquiseinsistir.Durante un buen rato, el inspector y Björn hicieron preguntas al muchacho y éste fue
contestándolas educadamente como pudo. En ningún momento lloró. En ningún momento sedesmoronó.Enningúnmomentosemostróchuloodesagradable.PeroMel,queloobservaba,sabíaquetrastodaaquellaintegridadhabíaunmuchachitoque,encuantonadieloviera,sevendríaabajo.
Bloqueadocomonuncaantesensuvida,Björnselevantódelamesay,sindecirnada,saliódelasala.Mellosiguióy,yaenelpasillo,oyóqueéldecía:
—Nopuedeser.¿Cómovaasermihijo?—Björn...—No...,nopuedeser,Mel.Yonotengoningúnhijo.—Escucha,cariño...Mírame,Björn—susurrótanimpactadacomoél.Elinspectorsalióentoncestambiénasuencuentro.—Creo que todos hemos tenido bastante por hoy—dijo—.La asistente social se va a llevar a
Peterauncentrodemenoresy...—¡No!—exclamódeprontoMel.Björnyelinspectorlamiraronyellacontinuó:—Nopuedenllevárselo.Él...élnostieneanosotros.ElabogadomiróaMelsorprendido.—Pero¿quéestásdiciendo?—Björn—insistióella—.Esemuchachopodríasertuhijo.—Mel, no saques conclusiones que puedan ser erróneas —siseó enfadado—. Nunca he oído
hablardeél,y...—Misextosentidomedicequeesverdad—insistióella.Björnlamirómolesto.
—Ojaláutilizarastusextosentidoparaotrascosasqueyonecesito—replicó.Enfadadaporsucontestación,Mellomiróygruñó:—Mira,si lodicesporesapandillade imbécilesquehemosvistohaceunratoen lapuertadel
colegio,sólotediréque...—Déjalo,Mel.—No.Novoyadejarlo—respondióella.Luegosehizoelsilencio.Sinduda,aquellocomenzabaahacermellaentreamboscuandoBjörn,
desesperadoporloqueacababadedescubrir,siseó:—PorelamordeDios,Mel...¿Acasopretendesquellevemosaunextrañoacasa?—Sí.Aloíreso,elinspectorKleiberdijo:—Creoquetendríanquehablardeesotranquilamenteensucasa.Éstenoeslugar.Mientrastanto,
laasistentesocialpuedellevarseaPeteralcentroy...—No,imposible.Losepararándesuperro—volvióarepetirMel.Acadainstantemásdescolocado,Björnclavósusbonitosojosensuchicaymurmuró:—Mel, esta situación se me va de las manos, pero entiendo menos aún tu reacción, y más
sabiendoqueesecríoeselputohackerquemehaestadovolviendoloco.¿DeverdadpretendesmeteraesemuchachoyasuperroencasaconSami?
Laexmilitarasintiósinsaberporqué.—Sí.—Pero¿porqué?—Porquesí.Porque...porqueesunniñoquenecesitacariño.—Esonomevale,¡joder!—protestóBjörn.—Puestetienequevaler.—Mel...Sincederunápice,ellainsistió:—Sevienenconnosotros.PeteryLeyasevienenconnosotros.—Miraqueerescabezota—gruñóél.—Ytútambién,perosevienenacasa.Sinentendernada,Björnclavólamiradaenellay,suavizandoeltonopidió:—Vamosaver,cariño,¿mepuedesexplicarporquéinsistestantoenello?Conlosojosvidriosos,Melsuspiró.—MibuenamigoRobertSmith, el tenienteque fue abatidoenvueloy alque sabesquequería
comoaunhermano,almorirsuspadrescuandoélteníadoceaños,estuvodurantedosenunacasadeacogida.Mehablódelatristezadesentirsesolo,delocomplicadoquefueasumircomoniñoquenoleimportabaanadie,yquenoentendióquetambiénlosepararandesuperro,queeraloúnicorealdesupasadoquelequedaba.—Y,tomandoaireparanoemocionarse,añadió—:TambiénrecuerdosusonrisacuandocontabaqueeldíaqueNancyyPatwin lo llevaronasucasa fueelmás felizdesuvida,hastaqueconocióasumujer.
—NosabemosquiénesPeterylosproblemasquenospuedeoriginarennuestrasvidas.—NancyyPatwintampocosabíanquiéneraRobert.Vieronenélaunniñonecesitadodecariño,
queeslomismoquehevistoyoenPeter.Pero¿esquenotedascuenta?Björnsemesóelpeloofuscado.Queríasalirdelacomisaríacuantoantes,ysentenció:—Losiento,perono.Esemuchachonosevieneacasa.—Björn...Elabogado,quenoqueríadiscutirmáseltema,diomediavueltayseencaminóparahablarconel
inspector,quesehabíaapartadodelaconversaciónanteriormente.Con el corazón encogido, Mel observó a través del cristal de la puerta de una sala cómo la
asistente social intentaba hablar con el chavalmientras éste le suplicaba una y otra vez que no losepararan de su perra. Sin saber qué hacer, Mel miró en dirección a Björn y al inspector y,finalmente,entróenlasala,dondeelchicoahorallorabadesconsoladoabrazandoasumascota.
—Peter...,Peter...,mírame—murmuróagachándoseparaponerseasualtura.Cuandoél lamirócon los ojos llenos de lágrimas, ella le dijo al ver que la asistente social hablaba por teléfono—:¿Puedohacerteunaspreguntas?—Elcríoasintió—.¿Porquétehevistoenvarioslugaresantesdehoy,comoporejemploelparquealquesolemosirconSami?
Petertragóelnudodeemocionesqueteníaenlagargantayrespondió:—Porquequeríaconoceramihermanaymegustabasentarmeaobservarlos.Nuncalosmolesté.
Sólodeseabavercómoél jugabaconSami,para imaginarcómohabríasidoconmigosimamá lehubieradichoqueyoerasuhijo.
Larespuestacalóhondoenella.ElchicocreíaqueSamierahijadeBjörny,sinquerersacarlodesuerror,Melvolvióapreguntar:
—¿Quéhacíaselotrodíaenlapuertadelcolegio?Petermirómásalláy,cuandovioqueBjörnnopodíaoírlos,contestó:—Fui a verlas comomuchasmañanas.Me encanta ver a Sami contenta. Pero, tranquila, no le
contaré aBjörn lo que ocurrió con ese tipo. Sin embargo, debería contárselo usted.Nome gustócómolaagarró.
Dolidaporloqueestabaoyendo,Melsuspiró.Aquelmuchacho,sinconocerla,estabadispuestoaguardarleelsecretoy,sinsaberporqué,preguntó:
—¿EstássegurodequeereshijodeBjörn?Secándoselaslágrimasconlamano,elchavalrespondió:—Mimadresiemprelodecía.—Entonces,desesperado,viocómolaasistentesocialselevantaba
ymurmuró—:Porfavor,señora,nodejequesellevenamiperra.Lameteránenunaperreray,siyonolareclamoenunosdías,seguramentelasacrificarány...yellaesloúnicoquetengo.
Conlapenaenelcuerpo,Melnosabíaquéhacery,alvercómoelchicolamiraba,dijocogiendolacadenadelanimal:
—Yolacuidaréhastaquetodoestosesolucione,¿quieres?Elmuchachodejódellorary,mirándola,susurró:—¿Haríaesoporella?—Melasintióy,conmovida,estuvoapuntodeecharseallorarcuandoel
críolaabrazócondesesperaciónymusitó—:Gracias,señora,gracias.Siemprehetenidolaintuicióndequeustederaespecial.Leprometoregresaraporellay...
—TehedichoquemellamoMel.LlámameMel,porfavor.Elcríosonriócontristeza.
—Gracias,Mel.—Escucha,Peter,todoestoseresolverá.Yaloverás.Elmuchachomiróhaciaelpasillo,dondeBjörnhablabaconelinspector,ydijo:—Él no cree que yo sea su hijo, ni quiere que lo sea, y yo... no quiero ser una carga para él.
Cuandoconsigasalirdellugaradondemevanallevar,recogeréaLeyayregresaréamicasa.—Sieressuhijo,tequerrá.Deesomeencargoyo—afirmóMel—.Y,sinoloeres,teaseguro
queyomismateayudaréaencontrarunsitiodondevivir.Peterseabrazóasuperraymusitó:—Pórtatebienconlaseñoray...—Mel,recuerda,Mel.Elcríosonrióyrepitió:—Leya,pórtatebienconMelhastaqueyoregrese,¿deacuerdo?Laperra lomiróy, cuandoéste se levantó, ella lohizo también.En ese instante la asistente se
dirigióalchicoydijo:—Vamos.Angustiada,MelmiróaPeter,despuésalamujer,ypreguntó:—¿Adóndelollevan?Ellaconsultólospapelesquellevabaenlamanoyseñaló:—AunacasadeacogidaquetenemosenNeuhauserStrasse.Silesinteresa,elinspectorlesdará
másinformación.Peter tocó la cabeza de su perra y, tras darle un abrazo a la mujer que se quedaba con ella,
murmuróapenado:—Cuídala,Mel.Regresaréaporella.Enternecida,ellaasintióy,encuantoelmuchachosemarchó,alverquelaperradeestaturamedia
tirabayladrabaparairtrasél,seagachóy,abrazándolacomohabíahechoinstantesantessudueño,musitó:
—Tranquila,Leya...,tranquila.YotecuidaréhastaquePeterregrese.El animal pareció relajarse y, cuandoMel supo que así era, se levantó del suelo, justo en el
momentoenqueBjörnentrabaenlasalay,mirándola,preguntaba:—¿Quéhacesconesechucho?—Noslollevamosacasa.—¡¿Qué?!—preguntósorprendido.Dispuestaacumplirsupromesa,Melsiseó:—Mira,Björn.Leheprometidoaesemuchachoquelacuidaríayloharé.Ofuscado,élgruñó:—¿Acasopretendesllevarmehoylacontrariaentodo?—¡¿SabesporquéPeterestabaenelparque?!—gritómirándolofuriosa—.Esepobrechicocree
queSamiessuhermanaysóloqueríavercómotú jugabasconellapara imaginarqueasíhabríasjugadoconélsisumadretehubieradichoqueeratuhijo.Y,encuantoalaperra,leheprometidoquelavoyacuidarporque,siselallevanynadielareclamaenunosdías,lasacrificarányyome...meniegoaello;¿tehasenteradootelorepito?
Boquiabierto,elabogadolamiróyasintiósindecirnada.Estabaclaroque,fueraPeteronosuhijo,laperrasemarchabaacasaconellos.
32
UnavezEricsevaatrabajaralgomásprontodelohabitualyyohabloconelveterinario,quemedicequeSusto está bienyquepuedo llevármelo a casa al día siguiente, cuelgo el teléfono feliz yregresoalacocina.
Allí,Pipaseafanapordardedesayunaramimonstruito,queseempeñaenquelacomidavayaapararacualquierladodelacocinaexceptoasutripita.
CuandoveoentraraFlyn,nosmiramos.Esperounasonrisa.Alfinyalcabo,elotrodíameabrazóymellamó«mamá»,pero,alparecer,
elborderíoharegresadoy,comocadamañana,meretaconlamirada,yyo,enelmomentoenquemecanso,laesquivo.
Sabequehoyloacompañaréaclasey¡porfin!tendremoslareuniónconsututor.Esoloincomoda.Loquenosabe,niseimagina,escuántomeincomodaamí.Una vez Flyn ha terminado de desayunar, nos dirigimos en silencio hacia el coche y, cuando
arranco,clavomisojosenélypregunto:—Si hay algo que tu profesor pueda contarme que aún no sepa, es tu oportunidad para
decírmelo...ContodalachuleríadelosZimmerman,mihijomemirayresponde:—Yaquevas,quetelocuenteél.Siento ganas de darle un pescozón. Dos días antes, me abrazaba y me mimaba llamándome
«mamá»,perodenuevolafrialdadhavuelto.—¿Puedesdejardesertandesagradable?—preguntocansada.Flynmevuelveamirarpero,cuandocreoquevaadeciralgo,secalla.Esaactitudchulescame
enfermaenocasionesmásquesimecontestara.Sinembargomecallo.Nodigonada.Novoyaentrarensusprovocaciones.
Conduzco en silencio hasta el instituto. Una vez aparco, Flyn sale del coche y rápidamente seacerca a un grupito de chicos que lo saludan chocándole lasmanos. Esos amigotes suyos nomegustan,yobservocómoellosmemiranamí.
¿Porquéminiñohatenidoqueconocerlos?Desdeelinteriordelvehículo,veoapareceralafrescaporlaqueséqueFlynestácolgado,bajo
y,antesdequeseacerqueamihijo,lollamo:—Flyn,venaquí.Michicoseresiste.Estáentrehacermecasoodemostrarlesasusnuevosamigotesqueélesquien
me domina. Pero al final gano yo.Me conocemuy bien y, cuando ve que cierro el coche de unportazo, pierde el culo en regresar ami lado antes de que saquemi raza española y le cante lascuarentadelantedeellos.
Sinrozarnos,nidecirnosnada,vamoshastasecretaría.Allí,trasavisardequetengotutoríaconelseñor Alves, mandan a Flyn a clase y me dicen que pase a una salita contigua. Si hace falta, yaavisaránalniño.Entroenlasalita,enlaquehayunamesayunassillas,ymesiento.
Mientras espero la llegada del tutor, recuerdo cuando Flyn era pequeño y yo lo defendía dealgunasmadresysuschismorreos.Esomehacesonreír,peroalmismotiempomeapeno.Conloqueloquiero,almuysinvergüenza,ylomalqueseestáportandoconmigo.
Miromimóvil.Notengoningunallamada,ydecidoescribirleunmensajeaEric:
Hola,guapo.Estoyenlatutoría.Tequiero.
Imagino ami rubio alemán en su reunión leyendo elmensajemuy serio y sonrío cuandomi
móvilpita.Leo:
Hola,preciosa.Yamecontarásencasa.Yotambiéntequiero.
Estoysonriendocuandolapuertaseabreamisespaldasyoigo:—Buenosdías,señoraZimmerman.Rápidamente guardo el teléfono y, en cuanto voy a responder, me quedo con la boca abierta.
Aqueltipocongafasdepastamerecuerdaaalguieny,tanprontocomosoyconscientedequenoesquemerecuerde,¡sinoqueesél!,murmuroenmiperfectoespañol:
—Joder...Antemí estáDennis, el brasileñobuenorrodelSensationsy el quenos enseñóaMely amí a
bailar forró lanochede ladetención.Sugestode sorpresaes tangrandecomoelmío,ypreguntaboquiabierto:
—¿EreslamadredeFlynZimmerman?Asientoaturdidayfinalmenteconsigopreguntar:—¿YtúereselseñorAlves?Ahoraesélquienasientey, sentándose frenteamí, sequita lasgafasdepastaydespuésdeun
instantedesilenciodice:—Tranquila,Jud.Ambossomospersonasmaduras,juiciosasysensatascomoparasaberafrontar
esta situación, ¿de acuerdo? —Asiento, y entonces él añade tendiéndome la mano—: SeñoraZimmerman,encantadodeconocerla.
Comosiestuvieraenunaburbujita,letiendolamanoamivezyselaestrecho.Esecontactotanpudoroso y decente me hace sonreír cuando pienso que lo he tenido como un salvaje entre mispiernasysobremicuerpo.
Trasesesaludodelomásfríoeimpersonal,Denniso,mejordicho,elseñorAlves,sevuelveaponerlasgafas,abreunacarpetaysecentraenhablarmedeFlyn.Lascosasquemedicenosondelomejor.Sinlugaradudas,mihijo,micoreanoalemán,hapasadodeserunniñoaserungamberrodetomoylomoquenoschoteaasupadreyamícomoledalagana.
Observovariospartesdefaltasdeasistenciay,fijándomeenlosqueestánconmifirma,medoycuentadequeenlavidahevistoyoesosdocumentos.Sinduda,Flynlosfalsificó.
Parpadeoalucinada.Pero,vamosaver,¿quiéneseseFlynydóndeestámicoreanoalemán?MecentroenlospapelesdemihijoqueestánantemícuandooigolapuertayentraFlyn.Lomiro
congestodeenfadoy,encuantoélsesienta,sututordice:—Flyn,leenseñabaatumadrelosexámenesque...—Ellanoesmimadre,esmimadrastra—replica.Oírlodeciresodelantedesuprofesormeduelemuchísimo.¡¿Madrastra?!¿Porquédiceeso?Pero,sincambiarmigesto,simplementesusurro:—Flyn,porfavor.Demala gana, el crío se repanchinga en la silla, y entonces oigo a su profesor decir en tono
tajante:—FlynZimmerman,siéntaterecto.—Mihijonosemueve.Retaasututor,peroalfinal,anteel
gesto duro deDennis, hace casomientras éste dice—:Ten un respeto por tumadre porque, si havenido a esta reunión y ahora está aquí soportando estoicamente todo lo que le estoy diciendo esporquetequiere,sepreocupaportiyterespeta,algoquepareceserquetúhasolvidado.Portanto,y,vistotucomportamientovergonzoso,saldelatutoríaahoramismoyregresaaclase.Notengonadamásquehablarcontigodelantedeella.
Megustalaseriedadylarotundidadconlaquelehablay,cuandoFlynsaleofendidodelasala,miroaDennisymurmuro:
—Gracias.Élsonríey,quitándosedenuevolasgafas,lasdejasobrelamesaydice:—Me gusta tan poco como a él utilizar este tono tajante, pero con estosmuchachos y a estas
edades,unohadeserasíparaqueloescuchenylorespeten.Asiento.Tiene razón.SiEricyyohiciéramos lomismo, seguroque todocambiaría.Entonces,
oigoquepregunta:—¿Encasalasituaciónesigual?Yosuspirodesesperada.—Sí.Supadreyyointentamoshacernosconél,peroalfinalnosécómoselasingeniaysiempre
terminamosdiscutiendoentrenosotros.Élasiente.—Esoeslopeorquepodéishacer.Ericytúdebéisestarunidosanteélycaminaralaparconél.
Hablacontumarido,osiquieresconvocaremosotrareuniónconelpsicólogo.Sientoloquetevoyadecir,peroelotrodíalopilléjuntoaotrostreschicosfumandoporrosenelpatio.
—¡¿Qué?!Uf...,uf...,uf...Yaséqueporfumarteunporronoeresundrogadictoniundelincuentepero,joder,
¡quetienecatorceaños!Medoyaireconlamanoyprontosientoquemepicaelcuello.Loqueestoyoyendonomegustanada,peroentoncesDennisañade:
—Tuhijonoesmalchaval,perolachicaconlaqueestá,unatalElke,yelgrupitoconelquesejuntan son conflictivos y debéis hacer todo lo posible para separarlo de ellos o al final tendréisgraves problemas. Varios de esos muchachos que hoy son sus amigos ya ni siquiera están en elinstituto.Todosellos sondebuenas familias, como lavuestra,quepuedenpermitirseestecolegio.
Pordesgracia,muchosdeesospadresloshandejadoporimposibles,aunquemirecomendaciónesquevosotrosnolopermitáis.
Asiento...,asientoyasiento.Mepitan losoídoscuandoDennisclava losojosenmíy, levantándose,saleaporunvasitode
agua. Al entrar de nuevo en la sala, se apoya en la mesa, me lo entrega y yo me lo bebo. Acontinuación,dice:
—Flyn ha acumulado demasiados partes negativos y, con su siguiente parte, siento decirte queserá expulsado del instituto una semana. Si, tras esa expulsión, vuelve a tener otro parte, seráexpulsadounmesenteroy,sireincide,duranteelrestodelcurso.
Madremía...,¡madremía!Loquemedicemedejasinhablay,cuandotengaqueexplicárseloamiqueridomarido,noséni
cómolovoyahacer.Charlamosduranteveinteminutosmás.Luego,Dennisguardalospapelesquemehaenseñadoy,
unavezcierralacarpeta,memiraydice:—¿Algunapreguntamásquequierashacerme?Niegoconlacabezayentoncesélsesacaunatarjetadelbolsilloymelaentrega.—Aquíestánmisteléfonos—dice—.Ericytúpodéisllamarmeparaloquenecesitéis.Asientocomounaimbécil.Sinlugaradudas,ese«loquenecesitéis»esmuyamplio.Salimosal
pasilloycaminamoshacialapuertadesalidacuandooigoquedice:—Mehaencantadoencontrarteaquí.Nuncalohabríaesperado.—Yyonuncahabríaesperadoquefueraseltutordemihijo—replico.Ambosreímosyluegopregunto,algomástranquila:—¿CuántollevasviviendoenAlemania?—Dosaños.CuandoterminémisestudiosenBrasil,decidívermundo;vivítresañosenMéxico,
otros tres en Suiza, y en Alemania llevo dos. Cuando cumpla tres, mi intención es trasladarme aLondres.
Denuevo,losdosvolvemosareír.Entonces,élbajalavozypregunta:—¿Lasllevaspuestasahora?Sinduda,serefiereasillevoonobragas,yrespondoevitandosonreír:—Porsupuesto.Sólomelasquitocuandoestámimarido.Dennisasientey,sinpararse,añade:—Mealegrasaberlo.Ericesunbuentíoyhacéisunaestupendapareja.SuúltimocomentariomehacesaberqueélnuncaintentaríanadasinestarEricpormedio.Esome
gusta y, poniéndome las gafas de sol antes de salir por la puerta del instituto, extiendo lamanoydigo:
—Hasidounplacer,señorAlves.Denniscogemimanoyresponde:—Elplacersiempreesmío,señoraZimmerman.Sonreímosynosdespedimos.Cadaunovuelveasusquehaceres,perocuandollegoamicoche
mefijoenunaparejitaqueestásentadaenunbancodelparquecomiéndoseabesos.Abroelcochey,depronto,almirardenuevoalaparejitamedoycuentadequeaquéllaesElke.
Mequedoboquiabiertadurantevariossegundoshastaque,alvercómolachicasepropasaaplenaluzdeldía,meacercoaellosypregunto:
—Disculpa,¿eresElke?—Sí,¿ytúeres...?—preguntaellacondescaro.La rabia puede conmigo.Mi hijo está echando su vida a perder por esa perraka, y ella anda
zorreandoconsusamigosapocospasosdelinstituto.—SoylamadredeFlyn,¿sabesdequiéntehablo?Adiferenciadeloquemehabríapasadoamíanteunapilladaasí,Elkesonríey,levantándosede
laspiernasdelchico,murmura:—¿Elchino?Puesentoncesdirássu«madrastra».Oíresomeenfurece.Siesachicatuvierasentimientosverdaderosporminiño,sabríalomuchoquelemolestaquelo
llamen así; además, llamami atención que ella diga lo demadrastra. Pero, antes de que yo puedadecirnada,ellaañadecontodoeldescaro:
—Mira,madrastritadelchinito,loqueyohagaconmividaesalgoquenoteimporta,y...—Porsupuestoquenomeimporta—lacortofuriosa—.Amísólomeimportamihijo.Nome
agrada que estés con él pero, si lo estás, no veo bien que ahora estés aquí con este otro chicohaciendoloquehacéis.
Elke y elmuchacho semiran y sueltan una risotada. ¡Serán descarados!Y, de pronto, ellameempujaconviolenciaygrita:
—¡Pero¿túquiéntehascreídoqueeresparahablarmeasí?!Contengolasganasquesientodedarleunempujón.Soyadulta,yrespondo:—¿Ytú,maleducada,quiéntehascreídoqueeresparaempujarmeygritarmedeesemodo?Sinpoderevitarlo,meenzarzoenunaridículadiscusiónconaquellaniñata,queloúnicoquehace
escalentarmemásymás.Estávistoqueaéstanolehanenseñadoeducaciónensucasa,ysiseotrasuntercerempujónalquefinalmenterespondo:
—Teprohíboquevuelvasaacercarteamihijoyestaveztelodigodeverdad,¿entendido?Ellasueltaunarisotada.—Nomeprohíbenimimadreymevasaprohibirtú.—Pues quizá ése es tu problema, que no te han prohibido nada y necesitas aprender lo que
significalapalabra«educación».—¡Puta!—¡Putaloserástú!—gritofuerademí.Segúndigoeso,séquemeestoyequivocando.Meestoymetiendoenunjardíndelquenovoya
salir bien parada y, dando un paso atrás, siseo mientras decido dar por concluida esa absurdadiscusión.
Comonomeapeteceoírlosinsultosquemegritaesaniñatamaleducada,memontoenelcoche,arrancoymevoy.Esmejorquemealejedeallíolaniñatavaamorderelpolvo.
Mevoydirectaalveterinario.NecesitoveraSusto.Por suertepara todos, su recuperaciónestásiendobuenay,cuandoloveo,medeshagoencariñosconél.Mipichurrínselomerece.
Unavezsalgodelaclínicaveterinaria, llamoaMely,sindejarquemesalude,cuandocogeel
teléfonodigo:—Hola,Mel.Vasafliparcuandotecuenteloqueacabodedescubrir.Oigoquemiamigaresoplay,bajandolavoz,medice:—Túsíquevasaflipar,ymucho,cuandotecuenteloquehedescubiertoyo.Anda,venteparami
casa.Teespero.Comonohaqueridosoltarprendalajodía, lacuriosidadmepuedey,comoenlaoficinasaben
quenovoyairyconEricnopuedohablarporqueestáenunareunión,meencaminohaciasucasa.Quierosaberquéesesoconloquevoyaflipartanto.
33
—¿QueBjörntieneunhijo?Melasintió.—Sí.Jud...,sí—afirmóconvencida—.Yhastatieneelmismocolordeojosycortedecara.Judithnorecordabaalchicodelsupermercadoquerecogíaloscarritosapesardequesuamiga
selodescribióy,agachándoseparatocaralaperrita,quenoseseparabadeMel,murmuró:—Hola,Leya.Porloqueveo,eresunamilrazascomoCalamary,oye...,ahoraquetemiro,creo
quetútambiéntieneselmismocortedecaraqueBjörn.Alverelgestoguasóndesuamiga,laextenienteprotestóbajandolavoz:—De acuerdo. No se parecen. Pero, joder, Sami tampoco se parece amí y esmi hija, y Eric
tampocosepareceati,sinoatumarido,yestuhijo.Judmiróhaciasuamigo,quehablabaporteléfonomientrasobservabaporlaventana,ydijo:—Pero,Mel,¿porquéestástanseguradequeessuhijo?Laextenientesonrió.Sinduda,JuditheratanescépticacomoBjörn.—Porquemelodiceelcorazón—contestóconunsuspiro.Judresopló.Ellatambiénhabíasidomuydecorazonadas,porloqueafirmó:—Mira,yotambiénpensabaquelosmorenazoscomoTaylorLautner,KeanuReevesoAntonio
Banderaseranmiprototitodehombre,yluego,¡sorpresa!,resultaqueelhombredemissueñosesrubio,ojosclaros,cabezota,alemán,ysellamaEricZimmerman.
Ambasrieron.Luego,Meldiountragoasucervezaydijo:—Björnmehaprometidoquesevaahacer laspruebasdepaternidad.Pero tedigoyoqueese
muchacho¡essuhijo!Sorprendida por la tranquilidad conque su amiga se estaba tomando todo aquel asunto, Judith
preguntó:—Mel,¿estásbien?—¿Porquédiceseso?—Mira, quizáme estoymetiendo donde no debo, pero tan pronto le pidesmatrimonio, como
quieresserescolta,yahora...¿esemuchachoenvuestrasvidas?Laextenientesuspiró,sabíaqueJudteníarazóny,cuandofuearesponder,éstaañadió:—Mel.Noconocéisdenadaaesechico.Podríaserunpsicópata,unladronzueloovetetúasaber.
¿Cómoloquieresmeteraquíconvosotros?Melasintió.Entendíaloqueaquélladecía,perorespondió:—Losé..., losé...DiceslasmismascosasqueBjörn.Quizámeestoyvolviendototalmenteloca,
pero en referencia a esemuchacho, la corazonada de que nome equivoco y el hecho de que noquieroqueloseparendesuperroes...¿RecuerdasaRobert?
—¿Atuamigo,elquemurióenelaccidentedeavióny...?—Sí, ése —afirmó Mel sin dejarla terminar—. Él me contó lo mal que se sintió cuando
fallecieronsuspadresy,aunquesuperroeraloúnicoquelouníaasupasado,losepararondeél.Meexplicólocruelquefueversesolosiendouncríoydarsecuentadequenoleimportabaanadiey...y,siyopuedoevitarqueunniñocomoPetersientaeso,creoquetodohabrámerecidolapena.
—Disculpa—señaló Judith—.Paramíunniño es lapequeñaSami,perogansos comoPeterocomo Flyn ya no son niños. Son miniadultos llenos de granos y conflictos personales que, pornorma,deciden joderte lavidaporquesushormonasestánrevolucionadas,pero¿túsabesdónde teestásmetiendo?
—No.—Exacto, ¡no lo sabes!—cuchicheó Judith—.Ese crío comenzará a haceros la vida imposible
una vez os relajéis. Tiene catorce años, y a esa edad lo único que hacen es contestarte demalosmodosydarproblemas.Ytelodigoyo,quetengoencasaunodelamismaedadyyasabescómovaeltema.
—Losé—suspiróMel—.Quizáquieroabarcarmásdeloquepuedo.Talvezsoyunailusa,perocreoquePeteresdiferente.Losientoasí,ysiencimapuedeserel...
—Puede,túlohasdicho,puede;pero¿ysinoessuhijo?Melseencogiódehombrosycuchicheó:—Pues habrá que ayudarlo e intentar que el día demañana ese hombrecito sea un hombre de
provecho.Élnoeselresponsabledeestarenelmundo.Judith sedioporvencida.Sin lugar adudas,Melqueríadarleunaoportunidadalmuchachoy,
claudicando,dijo:—De acuerdo, no insistiré más. Aquí me tienes para todo lo que necesites, como madre y
sufridoradeunadolescente.Pero,recuerda,sialfinalterminaenestacasa,nolepermitasquesepaseniunpeloporque,comolohagas,¡estásperdida!
—Lo recordaré —asintió Mel—. Por cierto, que sepas que hoy Sami, cuando nos hemosencontradoconHeidiysuscompinchesenelcolegio,hasoltadoqueHeidieraunazorra.
—¿¡Qué!?—dijoJudithriendoaloíreso.Melasintiósinpoderevitarsonreíryprosiguió:—YdespuéshaañadidoquemamáylatíaJuddecíaneso.—¡Lamadrequelaparió!Duranteunrato,entrerisas,estuvieronhablandodeaquello,hastaqueMelpreguntó:—Oye,¿quéteníasquecontarmetú?Aloíreso,JudithseolvidódelodeSamiy,mirandoasuamiga,murmuró:—¿AquenosabesquiéneseltutordeFlyn?—Puesno.—Dennis.Melparpadeó.—¿Dennis...Dennis...—susurró—,elbuenorrodelSensationsyelpotentorroquebailaesoquese
llamaforró?—Elmismo—asintióJud.
—¡Joder!—Esodigoyo:¡joder!Nitecuentolacaradetontaquesemehaquedadocuandomelohevuelto
aencontrar,estavezcomotutordemihijo.Ambasrieron,perolarisaselescortócuandoJudleexplicótodoloqueaquéllehabíadichodel
muchacho.—Vayatela...,vayatelaconFlyn.¿Quévasahacer?—De momento, hablar con Eric y ver qué solución podemos adoptar con respecto a lo que
Dennismehacontado.Esobvioque,ohacemosalgo,oestoiráapeor.Yluego,pararemate,salgodelinstitutoymeencuentroconsusupuestanoviadándoseelloteconotro.
En ese instante, Björn dejó de hablar por teléfono. Llevaba horas hablando con los serviciossocialesyelregistrodeMúnichparaconseguirciertadocumentación.Loocurridoaquellamañanalohabíadejadofueradejuego.Unhijo...¿Podíatenerunhijodecasiquinceaños?
Lasolaidealomareaba.Nienelpeoroelmejordesussueñospodríahaberimaginadoalgoasí.Alcolgar,vioaMelyaJudith.Lasobservócuchichearyreír,yluegosusojosfuerondirectosa
laperraquedormíaplácidamenteasuspies.Todavíanoentendíaquéhacíaaquelanimalensucasa,perocomonoteníaganasdediscutirconaquellasdos,selesacercóysimplementedijo:
—Estaréenmidespacho.—Cariño—lollamóMel—.¿Quierescomeralgo?—No—bufóélsinmirarlas.Entonces el abogado se detuvo dispuesto a decirles algo. Sin duda, lo que había dicho Sami
aquella mañana no había estado bien, pero finalmente decidió seguir su camino. No le apetecíaenfrentarseaaquellasdos.Seguroquelosacabanmásdesuscasillas.
Cuandodesapareció,Judith,queloconocíamuybien,susurró:—Vayamalalechequesegastaelcolega,¿no?Melasintió.—Siyotecontara...Diezminutosdespués,Judithmiróasuamigayafirmó:—LlamaréaEricparaquevenga.CreoqueBjörnnecesitadesahogarseconsuamiguito.Melasintió,yJudithseapresuróallamarlo.Mediahoradespués, sonó lapuertade la casa.EraEric,que, congesto serioy trasbesar a su
mujerysaludaraMel,cogióunpardecervezasfresquitasqueéstaledioyfuedirectoaveraBjörn.Suamigolonecesitaba.
—Hola,papaíto—saludóentrandoensudespacho.Aloírlo,éstelomiró,pusolosojosenblancoyprotestó:—Nomejodastútambiénconeso.Apesardelodelicadodeltema,Ericseacercóasuamigoy,traspasarleunadelascervezasy
chocarlamano,sesentófrenteaélypreguntó:—¿Aquéesperabasparallamarme?Björnsepasóunamanoporelpeloymurmuró:—Eric...—Entiendoqueestésconfundido,quenoentiendasnadayunsinfíndecosasmás,perosabesque
estoy aquí para lo que necesites.Y esto es algo excepcional, ¿no crees?—Luego, bajando la voz,cuchicheó—:Quemimujer tengaque llamarmeparadecirme loque leocurreamimejoramigo,pornodecirmihermano,nomehagustado,tío.
—Joder,perdona.Tienesrazón.Ericsonrióy,trasdarambosuntragoalascervezas,añadió:—ConquePeter...—Sí—afirmóBjörn.Conlamirada,ambosseentendieroncuandoelrubioalemánindicó:—Mucha casualidad. —Björn no respondió, y Eric agregó—: Quien le puso ese nombre al
muchachosabíalomuchoquetegustabaati,¿nocrees?Suamigoasintió.Volvióadarotrotragoasucervezaylecontóabsolutamentetodolosucedido
aquellamañanayloquehabíadescubiertotrashacervariasllamadas.Ericloescuchóconpacienciay,cuandoésteterminó,preguntó:
—¿Quévasahacer?—Nolosé.Yoesperabaencontrarenesacomisaríaaunhackeraquiendarleportodosloslados
y,encambio,meencuentroconunmuchachoqueencimadicesermihijo.Ericsuspiró;sindudaaquelloeraparaestardesconcertadoy,sinandarseconrodeos,preguntó:—¿Ypodríasertuhijo?Aloíreso,Björnselevantó.Semovióporeldespachointranquiloy,finalmente,sentándosede
nuevoantesuamigo,respondió:—No...Sí...¡Nolosé!—Joder,Björn.Desesperado,elabogadodejósucervezasobrelamesaydeclaró:—Cuando estuve con Katharina era un chaval, un inconsciente, y no tomaba las debidas
precauciones;¿otúlastomabassiendouncrío?—No—murmuróEric—.Yotambiéneraalgoinconscienteeneso.LosamigossemiraronunmomentoyluegoBjörnsiseó:—¿Sabes por quéme joroba tanto todo esto? Porque, si esmi hijo, si esemuchacho tienemi
sangre,meheperdidopartedesuvida,yesomejode...,mejodemucho.ElsilencioseapoderódeelloshastaqueEricañadió:—Tienesrazón,yentiendoloquedices.Peroquizánoseatuhijoy...—Melaseguraquesusextosentidoledicequeloes.Eric no supoquédecir.Con el pasode los años, Judith le había enseñadoque enocasiones el
sextosentidodelasmujereseraalgotremendamentepoderosoquetenerencuenta.—Escucha,Björn—respondió—,enelcasodequeseahijotuyo,laadolescencianoesunabuena
época.Ya sabes la cantidadde problemasqueFlynnos está ocasionando, y esoque todavía nohehabladoconJud,quehoyhatenidolatutoríaconsuprofesor.
—Losé...,losé,peroMelsehaempeñadoentraerseacasaalaperradelchavalparacuidarla.—¿Yporqué?¿Porquélohahecho?Descolocado,Björnmiróasuamigo.—DijoqueunamigosuyopasóporlasmismascircunstanciasquePeterasuedad,yque,siella
podíaevitarqueunniñosufriera,sesintierasoloylosepararandesuperro,loevitaría.Duranteun ratoestuvieronhablando sobreaquello,hastaqueEric,parahacer sonreír aBjörn,
preguntó:—¿Unmilrazasentucasa?Alentenderloquesuamigoqueríadecir,Björnsonrió.—Entucasahaydos,aunqueJudithseempeñeendecirqueSustonoloes.Porcierto,heoídoque
mañanaledanelalta.—Esodicemipequeña—dijoEricsonriendo.Elabogadoasintióyluego,congestodesesperado,cuchicheóincrédulo:—Papaíto...Pero¿cómovoyaserpadredeunadolescentetanaltocomoyo?Ericsonrióaloíreso.Sinlugaradudas,lacosasecomplicabapero,comonoqueríacontinuar
conlonegativo,murmuródebuenhumor:—Lavidatequieresorprender.Tunoviahapuestofechaparavuestrabodaydeprontoteaparece
unhijo;¿tepuedepasaralgomássorprendente?Aloíreso,Björnresopló.Últimamentesuvidaeraunalocura,porloquenegóconlacabeza.—¿CómoesPeter?—quisosaberEric.Björnseechóhaciaatrásenelrespaldodesusillayrespondió:—TienelacomplexióndelgadaydesgarbadadeFlyn,elpelolesobrepasaloshombros,suropa
esalmenosvariastallasmásgrandedelaquenecesita,esunexcelentepiratainformáticoysépocomás.
Unnuevosilencioseadueñódeldespacho,yfinalmenteBjörndijo:—Mañanamevoyahacerlaspruebasdepaternidad.Ericasintió.—Perfecto.Siestuhijo,doyporsentadoqueteocuparásdeél,pero¿ysinoloes?Esapreguntadabavueltasyvueltasenlacabezadelabogadoy,alfinal,sinsaberenrealidadqué
responder,dijo:—Nolosé.Peroloquesíséesquenolovoyadejarenlacalle.
Esanoche,cuandoJudithllegóasucasa,Flynlededicóunacuriosamiradaalcruzarseconél.EsolehizosaberquesuamiguitaElkelehabíahabladodesuencuentro.PensóencontárseloaEric,peroalfinalcalló.Noqueríamáslíos.
Aldíasiguiente,Björnsehizolaspruebasdepaternidad.Cincodíasdespuésfuearecogerlas,yelcorazónseleparó:Petererasuhijo.
34
UnadelasmañanasenlasqueEricyyovamosenelcochehaciaMüller,lesuelto:—Digasloquedigas,creoquedeberíamosconcertaresaentrevistaconelpsicólogo.—No.—Su tutor lo recomendó, cariño.Flynnecesita un tipode ayudaquequizá nosotros no somos
capacesdedarle.—Hedichoqueno.Flynya fueademasiadospsicólogoscuandoerapequeñoynoquieroque
tengaquevolverair.—Pero,Eric,¿novesqueelproblemaquetenemosconélsenosescapadelasmanos?Miamornocontesta.Séque sabeque tengo razón,pero su cabezoneríano lodeja reaccionar.
Finalmentesisea:—Hedichoqueno.Yomeocuparédeél.Mecallo.Mejormecallo loquepiensoen relaciónconeso.Nosécómosevaaocupardeél
trabajandotodoloquetrabajapero,comonotengoganasdezanjareltemacomoélpretende,insisto:—Eric,noeresconscientedemuchascosas.Ayer,cuandolleguéacasa...—¿Quépasaahora?Comosiempre,soyportadorademalasnoticias.Elqueélnoestéúltimamentemuchoencasale
haceperderseelmodoenqueFlynseestácomportandocontodos.—Ayerporlatarde—digo—,cuandolleguéacasa,FlynestabadiscutiendoconNorbertynome
gustóeltonoqueutilizó.—Esuncrío,Jud...,notetomestodolosuyoamal.Sucontestaciónmesorprende.—¡Claroqueesuncrío!Pero¿acasotúyyonoleestamosenseñandoeducación?Mirespuestalohaceresoplary,trasuntensosilencio,pregunta:—Vamosaver,Jud,sitanmallehablóaNorbert,¿porquénomelodijistecuandollegué?Lomiro.Calibromirespuestay,consinceridad,contesto:—Porquequeríatenerlanocheenpaz.Séquemirespuestalehacepensary,trasvolverasuspirar,miamorasiente.—¿Quétalsihablamosconélestatardecuandoregrese?—¿Vendráspronto?Ericsonríe.Ponelamanosobremirodillayafirma:—Teloprometo.Saberquevaallegarprontoacasamehacesonreír.—Perfecto.Duranteunrato,losdosnoscallamos,hastaquedigo:
—¿No te apetecería algúndía hacer una locura comohacíamos antes y, por ejemplo, coger elaviónymarcharnosaVenecia,aBerlín,aPolonia,aDublínoacualquierladotúyyosolos?
Ericsonríe,luegoveocómoniegaconlacabezayresponde:—Noestoyparalocuras.Tengomuchotrabajo.Sucontestaciónnoeslaqueesperaba,yvolvemosaquedarnosensilencio.Algopasaentrenosotrosquenoshacetenerestossilencios.Pero,deseosadequeesodesaparezca
cuantoantes,pregunto:—¿NotesorprendióloquetecontédeltutordeFlyn?Ericnoparpadea.Memira...Despuésmiralacarretera...,vuelveamirarmeyfinalmentedice:—No.¿Por?Ahoralaqueparpadeaylomirasoyyo.—PuesporqueeltutordeFlyn...—respondo—,túyyo...,pueseso.Ericsonríe.Dios...,cómomegustaverlosonreír.—Pequeña,imaginoquesudiscreciónserátangrandecomolanuestra.—Y,guiñándomeunojo,
añade—:TodoslosquevamosalSensationsnoshemosencontradoenunmomentodadoconalguiendeallíy,comotedigo,ladiscreciónesloqueprima.Poralgosomosadultos.
Asiento.Laverdadesquetienerazón.¿Porquécomermeelcoco?UnavezllegamosaMüller,encuantosubimosenelascensorquierobesaralhombrequeadoro,
peroélyaestácentradomirandounospapelesconelceñofruncido.Cuandoelascensorsedetieneenmiplanta,loobservoconlaesperanzadequeéldeseebesarme,perosólomemira,meguiñaunojoydice:
—Quetengasunbuendía,cariño.Sonrío,salgoylaspuertasdelascensorsecierran.Nibeso,niabrazo,¡niná!Pero¿quénosestápasando?Mientrascaminohaciaeldespacho,soyconscientedequeañoroalEricqueestabapendientede
míalcienporcien.Añorosusbesosysuscontinuasganasdeestarconmigo.Séquemequiere,esonolopuedodudar,perocreoquelapasiónquesentíapormíseestáenfriando.¿Porqué?
¿Porquéyosigoqueriendotenernuestrostontosmomentosyélparecepodervivirsinellos?Cuandollegoaldespacho,Mikamedaunascarpetasparaquelasrevise.Lanotoagobiada,pero
no tengoganas de preguntar y, cogiendo lo queme entrega,memeto enmi despachodispuesta atrabajar.
Liadaestoyconellocuandosuenaelteléfono.—¡Hola,cuchuuuuuu!Oírlavozdemihermanaescomounsoplodeairefrescoy,sonriendo,saludo:—Hola,petardilla.Durantevariosminutoshablamosdecosassinimportancia,hastaquedice:—Micucuruchillomehacompradounamaripazynosécómofunciona,ycomoséquetútienes
una,pues...—¿Quetehacompradoqué?—preguntosorprendida.—Unamaripazoquizpaz,ocomosedigaeso.Meentralarisa.Mepartoy,cuandoentiendodeloquehabla,murmuro:
—UniPad,Raquel,uniPad.Mihermanasuspira,sonríeymurmuracongracia:—Ofú,cuchu...,yasabesquelosidiomasnuncafueronlomío.Sindejardereír,leexplicocomopuedoalgunascosas.Laverdadesque,mientraslohago,me
imaginoamihermanaconsumaripazdelantedeella,tocándolotodoybloqueándola.Raquelesuncasoy,cuandofinalmentebloqueaeliPadyyoyaestoyquemevoyatirarporlaventanadeMüller,deprontomepregunta:
—¿Quétepasa?—Nada.—Cuchu..., soy tu hermana mayor. Te conozco, y ese tonito de voz lo noto excesivamente
apagado.Vamos,desembucha.¿Quéteocurre?Sonrío.Sinlugaradudas,comobrujamihermananohabríatenidoprecio.—Siobviamosquemeestássacandodemiscasillaspor lapuñeteramaripaz—respondo—, lo
quemeocurreesqueenocasionesquerríaquelascosasfuerandiferentes.—Matizayresume:¿cosas?¿Quécosas?Resoplo.¿Enquéjardínmehemetido?Pero,bajandolavoz,cuchicheo:—SetratadeEric.Deprontoescomosinonecesitaraestarconmigo,yechodemenosalEric
queconocíhaceaños,queeracapazdehacerlocurasporamor.Essóloeso.Mihermanaríe.Esomehacesuspirar,yentonceslaoigodecir:—Vamos a ver, cariño, en eso creo que te puedo responder, pues he estado casada con dos
hombres.Yqueconstequenovoydeexperta,pero la locurapasionaldeun«aquí tepillo,aquí temato»quesesientealprincipiodeunarelacióncomienzaaevaporarseapartirdelcuartoaño,oalmenosesodicen.
—Vaya—murmuropensandoquehacemásdecuatroañosqueconozcoaEric.—Mira,cuchu,justamenteelotrodíaleíunarevistaenlaquesedecíaqueeldeclivedelapasión
comienzadependiendodelasparejasalcuartooquintoañoderelación.Segúnesarevista,lalocuradeesaprimeraépocasetransformaconelpasodeltiempoenunapasiónmástranquilaconunfuertecomponentedecariñoycomplicidad.
—¡Nojodas!—¡Nodigaspalabrotas,malhablada!—meregañamihermana.Esomehacereír,yentoncesprosigue:—ConelempanaodeJesússecumplióesaestadística.Aloscuatroañoscomenzónuestrodeclive
comoparejay,alosocho,literalmentenonossoportábamos,especialmenteporqueyoibaarañandolostechosdemedioMadridconlacornamentaquellevaba.
—Raquel...—murmurosinpoderevitarsonreír.—Aisss, tontusa,no te apures, esoya lo tengoyomásque superado.Peroprecisamentede los
erroresseaprendey,ahora,conmicucuruchillo,estoytratandodequetodoseadiferente,eintentoquelosratosqueestemosjuntosseanlomejordelomejor.
AlpensarenmicuñadoJuanAlberto,sonrío.Sinlugaradudas,elrollitoferozdemihermanaestámuchomásenamoradodeloqueloestuvonuncamiexcuñadoJesús.
—Tranquila—respondo—.CreoqueJuanAlbertotevaahacerfeliztodatuvida.
—YatiEric.Pero¿novescómoteprotege?Oíresomehacereír.Claroquesientocómomeprotege,peroyonecesitoalgomás,ycontesto:—Sí...,siséqueenesotienesrazón.Séquemequiere,nolodudo,perotambiénsoyconscientede
quelaempresaloabducedemasiado,yesoesporquenodelegaennadie.Sidelegaraenalguienpartedesutrabajo...
—Cariño...,puesentoncesnoesquenoquieraestarcontigo.Simplementeesquetieneunexcesodetrabajo.
—¿Yporquénodelegacomohacíaantes?—Esonolosé,cuchu...,quizátengasquepreguntárseloaél.Mihermana tiene razón,perohablarconEricde su trabajo siempreescomplicado.Desdeque
hemos tenidoa losniños,sientoqueseesfuerzaeldoblesindarsecuentade lomuchoqueseestáperdiendodeellosydemí.
—Yotracosa—mesacamihermanademispensamientos—.Séquequizánovengaacuentoloquevoyadecirporqueya sabesque soyunpocoantiguaenalgunas cosas,peroesos jueguecitossexualesqueostraéis,¿nocreesquetambiénpuedenempeorarlarelación?
—Andaya,nodigastonterías—respondomolesta—.Esonotienenadaquever.—Vale...,vale...,peroporsiacasofíjatesilegustaestarcontigooconotrasenesosmomentos.
Porque,si legustaestarmástiempoconotras,directamente,hermanita,creoquetendrásquedarleunapatadaensublancoculoy...
—¡Raquel!—gruño.—Vale...,vale...,cierroelpico.Joderconmihermana.¡Estáempeorandolasituación!—Bueno...,¿cuáleraelmotivodetullamada?—pregunto.—Espapá.Estámuypesaditoconlodelaferia.¿Vaisaveniralfinalono?NohevueltoahablardeesoconEric,bastantetenemosyacondiscutirconFlyn,perocomono
estoydispuestaadarleeldisgustoamipadre,afirmo:—Sí.Iremos.Nadamásdecireso,cierrolosojos.Joder...,joder...,¿porquémientosiEricnoquiereir?—Ay,cuchuuuu,¡québien!Puesentoncesvoyallevaraltintetusvestidos,¿vale?Alpensarenmisbonitosvestidosdeflamenca,asientoyafirmosonriendo:—Deacuerdo,Raquel.Llévalos.—Porcierto,encuantoalaPachuca...—Ah,no...,noquierosabernadaal respecto—lacorto—.Sipapá tienequecontarnosalgoen
relaciónconella,yanoslocontará.Meniegoacotillear.Portanto,noquierooírniunasolapalabradeellos,¿entendido?
Oigoamihermanaresoplar,yfinalmentedice:—Vale.Uy...,uy...,ese«vale»tanescuetomemosqueay,cayendocomounatontaensujuego,pregunto:—¿«Vale»?¿Porquédices«vale»deesamanera?—¿Sabes,bonita?...,ahorasoyyolaquenotienenadaquecontar.Ytedejo,queestápitandola
lavadorayquierotenderlaantesdeirarecogeraJuanitoyaLucíaalcole.Adiós,Judith.Tequiero.
Y,sinmás,lamuysinvergüenzamecuelgaelteléfono.YaséaquiénseparecemisobrinaLuz.Sin querer pensar en nadamás, decido ponerme a trabajar. Es lomejor. Esome hará olvidar
problemasfamiliaresysentimentales.A la hora de salir, paso por la cafetería para coger una coca-cola yme encuentro allí a Eric
tomandoalgoenlabarraconsusecretariayunpardehombresmás.Élnomeve,yyoloobservocondisimulodesdeladistancia.
¡Dios,quémaridotengo!Comosiempre,estáimpresionanteconsutrajegrisysucamisablancapero,porcómomuevelas
manos,parecemolestoporalgoy,aunqueparezca increíble, sugestodeenfadomeencanta. ¿QuéseríadeEricZimmermansinsugestohoscoydeperdonavidas?
Ofú,meencanta...,meencanta...Nolopuedoremediar.Pero,traslacharlaconmihermana,mefijoensusecretaria.LatalGertallevaunvestidoazulón,
lamardesimple,peroesjovenysucuerpolozanoysinunápicedegrasamehaceresoplar.¿Porquénotendréyoesecuerpo?
Sin apartar los ojos de ella, observo cómomira a Eric. Sin duda, lo observa con un tipo deadmiración que no me hace ninguna gracia. Soy mujer y, como tal, sé de lo que hablo, perofinalmenteysindecirnada,cojomicoca-colaymevoy.Eslomejor.Ericestáeneltrabajoyyohededejardepensarentonterías.
Porlatarde,cuandoestoyencasa,Flynllegadelcolegioymemira.SabequetengoquedecirlealgoporlosgritosqueledioeldíaanterioraNorbert.Estoyconvencidadequeesperamiataque,perocomonoquierohablarconélhastaqueEricllegue,melimitoasonreírleyaguiñarleelojo.Esolodesconcierta,loveoensucara,yélvaysubedirectoasuhabitación.
35
En los servicios sociales, Björn rellenaba varios papeles mientras Mel, a su lado, le pasaba concariñolamanoporlaespaldaymurmuraba:
—Tranquilo,cariño.Estáshaciendolocorrecto.Björnasintió.Sabíaqueloestabahaciendopero,mirandoaMel,musitó:—Comoelchuchoesesemeeenelcocheporhaberlodejadosolo,tejuroMelque...—Queno,cariño,queLeyaesmuybuena.Nopienseseso.Elinspectorquehabíallevadotodoelcaso,unavezBjörnlehubodadolospapelesfirmadospara
entregárselosalamujerdelosserviciossociales,losmiróydijo:—El chico estará aquí dentro de cinco minutos. Una patrulla puede acompañarlos a casa del
muchacho para recoger lo que el crío necesite. La casa es de alquiler, y el propietario ya hareclamado las llaves, que le serán entregadas dentro de dos días. Todo lo que dejen allí irá a labasura,díganseloalniño.
—Deacuerdo—afirmóMel tomandonotaalverapareceraPeteral fondo,sonrióy,sinsaberporqué,fuehaciaél.
El inspector y Björn se quedaron mirando el abrazo que aquellos dos se daban, y el policíacuchicheó:
—Siesemuchacholesrobaolesdaelmásmínimoproblema,nodudeenponerseencontactoconmigo.Noseríanielprimeronielúltimoquecausaestragosunavezentraensunuevacasa.
Björnasintióy,conscientedequeaquelmuchachoeraahorasuresponsabilidad,indicó:—Esperonotenerquellamarlo.Björn los observó mientras se acercaban. Él era una persona afectuosa con los demás y,
finalmente,tendiéndolelamano,elmuchachoselaestrechóy,trasestrechárselatambiénalinspector,esteúltimodijo:
—Pórtatebien,Peter,ynotemetasenlíos,¿entendido?Elcríoasintióconlavistafijaenelsuelo.LamiradadeBjörnloacobardaba.Una vez el inspector se marchó, el abogado miró bloqueado a Mel, que lo observaba, y
finalmentefueellalaquedijo:—Venga.Vayámonosdeaquí.Unpardeminutosdespués,cuandosalíandelacomisaríayMel leexplicabaalcríoquetenían
queirasucasaasacarloqueélquisiera,éstereplicó:—Peroyotengounacasa,nonecesitoiralavuestra.Björnsedisponíaacontestar,peroMelseleadelantó:—Escucha,Peter,eresmenordeedadylosmenoresnopuedenvivirsolos.—Peroyosécuidarme.Miabuelomeenseñó.Nonecesitoanadie.
Conmovida,MelmiróaBjörnalaesperadequedijeraalgopero,alverquenolohacía,añadió:—Estoyconvencidadequetuabueloteenseñómuybien,Peter,perosólotienesdosopciones:o
irauncentrodemenoresovenirconnosotros,y teaseguro—dijoguiñándoleunojo—queconnosotrosestarásmuybien.TenemosunahabitaciónpreciosaparatiyparaLeya,ylapodrásdecorarcomotúquieras.
ElcríomiróaBjörnenbuscadeunaseñaldequeestabadeacuerdo,yentoncesél,paraecharleunamanoaMel,dijo:
—Peter, el propietario de la casa donde vivías con tu abuelo ya la ha reclamado y hay quedevolvérsela.Si,cuandoestésconnosotros,noteencuentrascómodoporlascircunstanciasquesean,podráshablarconserviciossocialeseirte.Teloaseguro.
—¿Melopromete?—Teloprometo—leaseguróél.Alllegarfrentealcoche,BjörnledioalmandoyMelexclamóabriendolapuerta:—¡Sorpresa!Leya salióenloquecidadel interiordelvehículoyse tirósobreelmuchacho.Alverla,Peter la
abrazómientrasMelyBjörnerantestigosdecómoaquellosdosseadoraban.Cincominutosdespués,cuandolaperrasetranquilizó,subieronalcoche.Björnmiróelasiento
trasero,dondeelanimalhabíaesperado,y,trascomprobarquetodoestabaenorden,dijo:—Muybien,Leya.Tehasportadomuybien.Aloíreso,elmuchachoreplicó:—Señor,yomismoheeducadoaLeya,yleaseguroquesabecomportarse.Elabogadoasintióy,observandoalanimal,depelosdescolocadosyestaturamedia,preguntó:—¿Dequérazaes?—Nolosé.Elabuelolaencontróunanochecuandoeraunacachorritaylatrajoacasa.—¿YcuántosañostieneLeya?—preguntóMelinteresada.—Tres.Pocodespués,mientrascirculabanporMúnich,Meldijopararomperelsilencio:—¿Sabes,Peter?Samiteníaunamascota.EraunhámsterllamadoPeggySue,perosemurióhace
unosmeses,yniteimaginaselcariñoquesetienenyaLeyayella.Peterasintiómirandoporlaventanilla.Noteníalamenordudadeello.Cuandollegaronalbarriodelchaval,Björnmiróasualrededor,levantólacabezayobservóla
ventanadelsegundopisoquehabíaasuderecha.Allíhabíavividosuinfanciaysuadolescencia.Nohabía regresado a aquella zona trasmarcharse con su padre y su hermano. Consciente de lo quepensaba,Mellepreguntó:
—¿Estásbien,cariño?Elabogadoasintióy,siguiendoa lospolicíasqueya losesperabanallíyalmuchacho,caminó
hastaentrarenelportal.Unavezelniñohubosacadounas llavesdesubolsillo,abrió lapuertay,mirándolos,dijo:
—Puedenpasar.Los agentes entraron y después lo hicieronMel y Björn. La casa era pequeña, apenas tendría
cuarentametroscuadrados,peroselaveíalimpia.Laperracorrióabeberaguaauncazoquehabía
enlacocinayMel,mirandoalniño,leindicó:—Meteenunamochilaoenunamaletatodoloquenecesites.Elcríonosemovió.—¿Yquépasaráconloquedejeaquí?—preguntó.Aloírlo,Björnrespondió:—Comotehedicho,elpropietariodelacasalahareclamado,ytodoloquetedejesaquí,unavez
leentreguemoslasllavesaldueño,serásuyo.Elniñonegóconlacabeza,miróasualrededorymurmuró:—Elabueloyyonoteníamosmuchascosas,perohayalgunasquemegustaríaconservar.AMelletocóelcorazónoíreso.Aquelmuchachonecesitabasusrecuerdos;entoncesBjörndijo:—Guardaahoraenunamochila loquenecesites.Mañanacontrataremosaalguienquevengaa
recogertodoloquequierasyveremosdóndepodemoscolocarlo,¿deacuerdo?Rápidamenteelcríosemovióy,tendiéndolelamano,comoaquélhabíahechoenlacomisaría,
murmuró:—Gracias,señor...,gracias.MelmiróaBjörnemocionada,yéste,trassuspirar,cogiólamanodelchicoy,después,tocándole
conlaotralacabeza,musitó:—Denada,Peter.Recuperadosdeaquelcontacto,elmuchachoseseparódeélyentróenuncuartoquehabíaala
derechamientrasMelobservabaasualrededor.Siguiendoalcrío,Björnseapoyóenelquiciodelapuertaymiróconpesaraquellatristehabitaciónysuminúsculoventanuco.
Ellugarerapequeñoy,sobreunaviejamesaqueocupabamásdelamitaddelaestancia,habíaunmonitoryvariastorresdeordenadortuneadas.Desdelapuerta,ymientrasPetermetíaalgoderopaenunamochila,preguntó:
—¿Desdeaquípirateabasmipáginaweb?Elchicoparódehacerloquehacíay,mirándolo,afirmó:—Sí.Björnasintió.Deprontoviounafotosobrelamesilla.EnellareconocióaKatharinasonriendo
conunPetermáspequeñoy,sinquitarleojo,preguntó:—¿Yporquélohacías?Elniñotorcióelgesto,seencogiódehombrosyrespondió:—Porqueestabaenfadadoconusted.Séquemimadrenuncalehablódemíyustednosabíademi
existencia,peroyoestabaenfadado.—¿Yyanoloestás?—No.Yano.—¿Porquéyano?ElcríovolvióamiraraBjörnduranteunossegundosyfinalmenterespondió:—Porque,apesardequenolegusto,nilegustamiperra,meestáayudandoynomeestádejando
tiradoenlacallecomopenséqueibaahacercuandosupierausteddemí.Surespuestatocódirectamenteelcorazóndelabogado,ysesintiótanmalquenosuporesponder.
Si alguien había luchado porque aquello no ocurriese había sido Mel. Si ella no se hubiera
empecinadoenllevarsea laperraacasayobligarloahacerselaspruebasdepaternidad,Björnnosabíaquépodríahaberocurrido.
Estabaabstraídoensuspensamientoscuandoelcríopreguntó:—Señor,megustaríallevarmemisordenadores.Elabogadomiróloqueleseñalabay,todavíabloqueado,asintió.—Por favor, Peter, llámame Björn—dijo, e intentando ser amable, añadió—: Si no lo haces,
tendréquellamarteyoatitambiénseñoryserámuyincómodo,¿nocrees?Elmuchachosonrió.ABjörnlegustóverloshoyuelosqueseleformabanenlasmejillascuando
sonreía,tanparecidosalossuyosyalosdesuhermano.—Mañanaregresaremosynoslosllevaremos,¿vale?—contestó.Veinte minutos después, abandonaron la casa, se despidieron de los policías que los habían
acompañadoysedirigieronhaciasuhogar.Unavezaparcaronelvehículoenelinteriordelgaraje,albajarse,Petersujetóconlacorreaasumascotayordenó:
—Leya,siéntate.LaperraobedecióinmediatamenteyMel,cogiendolamochilaconropadelchaval,dijo:—Vamos,Peter,subamosacasa.Alentrarenlaespaciosacasa,elniño,quenosoltabaalanimal,sesintióintimidado.Allí todo era nuevoymoderno, nadaque ver con su hogar, donde todo era viejo y de épocas
pasadas.Paraquesefamiliarizaraconellugar,MelleenseñólacasamientrasBjörnsedirigíaalacocina.Estabasediento.
CuandoMelllegójuntoaPeteryLeyaalcuartodeinvitados,dijoalentrar:—Yéstaserátuhabitación.¿Quéteparece?Peter lamiró sorprendido.Era enorme.Tenía un ventanal por el que entraba el sol, una cama
grandeyunarmarioinmenso.Alverqueelmuchachonosemovíanidecíanada,Melleaclaró:—Porsupuesto,podrásdecorarlaatugusto.Compraremosunamesadeordenador,cambiaremos
lascortinasy...—¿PorquéerestanamableconmigoyconLeya?Esapreguntalapillóporsorpresa,peroMelrespondió:—Porquemegustas,comomegustaLeya.—Björnnoestácontento,¿verdad?Ellamiróalmuchacho.Seapenóporesecomentariopero,seguradeloquedecía,afirmó:—Teequivocas,Peter.Björnestámuycontentoperonosabecómodemostrarlo.Yoloconozco
muybien,yteaseguroqueestádeseosodeconocerte.Sólolehacefaltatiempo.Dáseloyveráscomotodosalebien.
—Gracias—dijoélmirándola.Melsonrió.—Nomedes lasgraciasyhazque todoestomerezca lapena.No te conozco,peroalgoen tu
miradamedicequeeresbuenchaval,apesardetuspelosenlacara,turopatrestallasmásgrandey,porsupuesto,losquebraderosdecabezaquelehasocasionadoaBjörnconlodesupáginaweb.
PetersonrióyMelañadió:—Colocaturopaenelarmario.Cuandotermines,estaréenlacocinaconBjörn.
Unavezellasehubomarchado,Petersesentóenlacama.Aquellugareraelparaíso.Elhogarconelquesiemprehabíasoñadoyquenadateníaqueverconloquehabíavivido.Suabuelo,apesardehaberledadountecho,nuncahabíapodidoofrecerleesascomodidades.
Tocólacolchaconmimo.Erasuave,extremadamentesuavey,mirandoaLeya,preguntó:—¿Quéteparece?LaperrasetumbóenelsuelodemaderaoscurayPetersonrió.—Amítambiénmepareceunlugarincreíble—dijo.CuandoMelllegóalacocina,Björn,queestabaapoyadoenlaencimera,lamiróypreguntó:—¿Quévamosahacerconél?Ellaseleacercó,lequitólacervezaqueteníaenlasmanosydiountrago.—De momento, darle de comer —respondió—. Estoy convencida de que el muchacho tiene
hambre.—Mel...—protestóBjörnbajandolavoz—.Noestoydecachondeo.Teestoyhablandoenserio.
Esechicoesmihijo,ynoséquévoyahacerconél.Devolviéndolelacerveza,ellalediounbesoenloslabiosyañadió:—Yotambiénestoyhablandoenserio,ycreoqueloprimeroquetenemosquehaceresconseguir
queconfíeennosotros...—Mel,¡¿quierescentrarteyverlarealidad?!Joder...,nosabemosquiénesesemuchacho,niqué
legusta,nisitienealgúntipodeadicción...—Tranquilízate...,hazmecaso.—Joder,siteníapococonlodenoestarcasadocontigo,encimaahoraesto.Aloírlodecireso,Mellomiróypreguntóarrugandoelentrecejo:—¿Estáshablandodelpuñeterobufete?—Björnno respondió,peroella, conscientedequeera
así,añadió—:Pero,vamosaver,¿desdecuándootrosdirigentuvida?Björn,alentenderloqueellaqueríadecir,replicó:—Odio que lo llames «puñetero bufete», y mi vida la dirijo yo, pero me jode que surjan
problemas.—¿Peter,Samiyyosomosunproblema?Aloíreso,elabogadolamiróy,suavizandoelgesto,matizó:—No,cielo.Peroentiendeque...—Entiendomásde loquequiereshablarconmigoymepermitesdeciramí.Perosabes loque
piensodeesebufeteydesusabsurdosrequerimientosparaperteneceraél,ysielhechodequePeterestéennuestrasvidaslesmolesta,¡queselamachaquencondospiedras!
—Parker...Podríassermenosdesagradable.Laextenientepusolosojosenblanco.Enocasionesolvidabaquesunovioeraunfinoyafamado
abogadodeMúnich.—Vale,007,micomentariohaestadofueradelugarparatusdelicadosoídos—replicó—,pero
queconsteenactaquelossédeciraúnpeores.—¡Mel!Ellasonrióalversugesto.Alfinal,Björnsevioobligadoasonreírtambiénypreguntó:—¿NopiensasquequizálallegadadeesechicoseaunamalainfluenciaparaSami?
Melsuspiró.Sabíaqueteníapartederazón,perorecordandoelmodoenquePeterhabíatratadosiempreaSami,respondió:
—¿Por qué eres tan negativo y no intentas ver lo bueno? ¿Por qué no te relajas y tratas deaveriguaraquécolegiova,quiénessonsusamigos,quécosaslegustany...?
—Porquemiprofesiónmehacesercautoentemasasí.Laextenientesonrió.—Mira,Björn—dijo—,pormitrabajo,cuandoibaaAfganistán,siempreteníaqueestaralertaen
relaciónconquiénpudieraacercarseamíconunagranadademano,peroloquenuncaperdífuelahumanidad.EsoesloúnicoquetienesqueutilizarahoraconPeter,tuhumanidad,paraqueélveaqueleestásdandounaoportunidad.Elmayor,eladultoerestú,yesonunca...nuncadebesolvidarlo.
Sorprendidoporsupositividad,elabogadoasintió.—Metienesentremaravilladoyasustado.—¿Por?Y,cogiéndolaporlacinturaparaacercarlaaél,murmuró:—Porquemeestásdemostrandounafaceta tuyaquenoconocía frentealadolescentemelenudo
conpintaderaperodelBronx.Vale,estáclaroqueesemuchachoesmihijo,peronopuedesobviarquenoloconocemosyquenospuederobar,atacarporlanocheoincluso...
—Pero¿quéestásdiciendo?—dijoMelriendo.—Yonomerío,cariño.Teloestoydiciendomuyenserio.TienelamismaedaddeFlyn,ymira
losquebraderosdecabezaqueéstelesestádandoaEricyaJudith.Melasintió.SabíaqueenelfondoBjörnllevabarazón,perosenegabaacreerlo.Deprontooyeronunruido,miraronasuderechayvieronaPetercruzarsigilosamenteelpasillo
conlaperra.BjörnseapresuróasoltaraMely,mirándola,murmuró:—Comoseleocurrarobarnosalgo,saledecasainmediatamente,pormuyhijomíoquesea.—Björn...—protestóella.—Pero¿adóndeva?—cuchicheóaquél.—Nolosé,perodejadesermalpensado—replicóMel.En silencio, lo siguieron y, al llegar al salón, vieron que Peter estaba parado mirando unos
cómicsdelalibrería.Alpercatarsedesupresencia,elcríosevolvióydijo:—Björn, me gusta tu colección de Spiderman, ¡qué pasada! Mamá siempre me decía que te
gustabanmuchoesoscómics.Yotengovariosenmicasa.Yatelosenseñaré.Elabogadoseacercóhastaelchicoy,sinsaberporqué,sacóunejemplaryexplicóorgulloso:—Comencé mi colección en los años ochenta. Mi padre me los compraba, y este ejemplar
precisamenteeselnúmerounodelAsombrosoHombreAraña.—Guauuu,¡quéflipe!—exclamóelmuchacho.MelyBjörnsemirarony,sonriendo,esteúltimodijoponiendoelcómicenlasmanosdelcrío:—Puedesleerlossiquieres.PeterretirórápidamentelasmanosyBjörninsistió:—Cógelo.—No.LarotundidaddesutonohizoqueBjörnclavaralamiradaenélypreguntara:
—¿Porquénoquierescogerlo?Elmuchacholopensó.—Porquenoquieroqueserompaycargarluegoconlasculpas.Sialgoasíocurriera,notengo
dineroparapagártelo.Aloíreso,aBjörnseledescongelóunpoquitoelcorazón.—Escucha, Peter —dijo—, coge los cómics siempre que quieras. La única condición que te
pongoesqueloscuidesydespuéslosguardesensusitioyporsuorden.Elmuchachomiróaquellomaravilladocomosideuntesorosetrataray,cogiendoelcómicque
elabogadoletendía,cuchicheó:—Gracias.Alversugestodesatisfacción,Björnsonrió,yMelpensóensuamigoRobert.Sindudaestaría
sonriendodesdeelcieloydiciéndole:«Mel,notearrepentirás».
36
AburridaestoyviendolatelevisiónjuntoaSustoyCalamarcuandoMelmellamaparadecirmequePeteryaestáencasayqueélyBjörnllevanhorassentadosenelsalónhablandodecómics.
Estoyencantada.Saberqueaquellocomienzaconbuenpieesgenial.Antesdecolgar,miamigamepideque lesguardeel secretoynovayaadecirlenadaaKlaus.
Quierenesperarunosdíasantesdedarlelanoticia.Yoseloprometoy,finalmente,Melmepidequelosacompañecuandovayanahacerlo.Aceptogustosamente.
Nomeloperderíapornadadelmundo.Una vez cuelgo, decido llamar ami padre. Tengo ganas de hablar con él, y nome sorprende
cuandooigolavozdemisobrinaLuz,quemesaluda:—Hola,titaaaaaaaaaaaaa.Sonrío.Ellamehacesonreír.—Hola,miniña.¿Cómovatodo?—Puesmira...,jodidaperocontenta.¡Herotoconelatontadodeminovio!Noesperabaesacontestacióny,sinsaberrealmentequédecir,respondo:—Vaya,losiento,Luz...—Nolosientas,tita.Colorín,colorado,deotroyameheenamorado.Durante un buen rato, mi sobrina me cuenta sus cosas con total tranquilidad mientras yo,
ojiplática, asiento, asiento y asiento. Está claro que, si le digo algo que no quiere oír, dejará decomentarmetodasesascosas,porloquemelimitoaescucharyaasentir.
—Y¿sabes?—¿Qué?—Lasemanaqueviene, JuanAlbertonosvaa llevaraMadridamíyamisamigasChariy la
Torrijaaveralos¡OneDirection!¿Cómotequedas?Sécuántolegustaamisobrinaesegrupoquecausafurorentretodaslasadolescentes,ynotan
adolescentes,ysonriendoafirmo:—¡Genial!Meparecegenial.—Oye,tita.¿Puedopreguntarteunacosa?—Claro,cielo,dime.—¿EsciertoqueBjörnyMelhanmetidoaunindigenteensucasa?—¡¿Qué?!—preguntosorprendida.Vamosaver.MisobrinaestáenEspañaynosotrosestamosenMúnich.¿Cómohapodidovolar
tanrápidalanoticiahastaallí?Y,sobretodo,¿cómohapodidollegaresamentira?Pero,intentandoserlomásdiscretaposible,pregunto:
—¿Quiéntehadichoeso?
—JackieChanZimmerman.—¡¿Flyn?!—Sí,tita.HaceunratomelohacotilleadoporunprivadoenFacebook.Sin respiración, escucho lo que mi sobrina me cuenta. Nunca he dicho nada de ese perfil de
FacebookqueFlynseabrió.HemantenidoelsecretoparanodesvelarqueLuz,enciertomodo,meinformademuchascosas.
—¿Éltehadichoeso?—preguntoentonces.—Sí.Y,oye,¿cómoeseseindigente?Molestayenfadadaporqueelatontadodemihijodigacosasasí,replico:—Loprimerodetodo,Luz,esquePeternoesunindigente.Esunniñodecasiquinceañosque
vivíaconsuabueloyque,almoriréste,sequedósolo.Portanto,esode...—Sí,yasabíayoqueFlynsepasaba—oigoquesuspiraella—.Desdequeseechóesanoviay
esosamigos,noeselmismo.Aloírquemisobrinadiceeso,mepongoenalertay,olvidándomedePeter,pregunto:—¿Quésabesdeesanoviaydesusamigos?—Laverdadesquepoco,tita,empezandoporquenoentiendobienelalemányellosescribenen
eseidiomaenFacebook...PeroconverlasfotosquepublicanyciertoscomentariosquetraduzcoconeltraductordeGoogle,séquenosonnadabuenos.
Durante un rato hablo con mi sobrina, hasta que mi padre le reclama el teléfono. Vaya dos.Finalmente,ganamipadrelapartidaymurmura:
—Hayqueverlaguasayelartequetienelajodíadelaniña.Sonrío.Mipadreymisobrinajuntossonlabomba.—Venga,papá—replico—,sitemueresporquelostenga.Élsueltaunacarcajada.—Meencantaquetodasmisniñastengáisarteyguasa.Lapositividadyelbuenhumordemipadrerápidamentemerecarganlaspilas.Habloconélde
Flyny,comosiempre,medabuenosconsejos.SobreEricylomuchoquediscutimosúltimamentenodigonada.Séqueesolovaapreocupar,ynoquiero.Asípues,mehabladeFlynyyoescuchotodoloqueéltienequedecirme.
Cuando,media hora después, cuelgo el teléfono, siento la necesidad imperativa de hablar conFlyn.Trasasegurarmedequeestáensuhabitación,subo,llamoalapuertayentropasandofrenteasucaradeperdonavidas.
—¿Quéquieres?—mepregunta.Mal...,mal...,comenzamosmuymal.Pero,sindejarmellevarporsudesidia,mesientoenlacama
ydigomirándolo:—Creo que tenemos que hablar, ¿no te parece?—El crío me mira, no sabe de qué hablo, y
entoncesañado—:¿QuéesesodequeBjörnhametidoaunindigenteensucasa?Flynarrugaelentrecejoyfarfulla:—Malditachivatatusobrinita.
¡¿«Tusobrinita»?!Hastahacecuatrodías,Luzeraunadesusmejoresamigas.Sindecirqueyotambiénojeodevez
encuandoeseperfil,medispongoaprotestarcuandoélañade:—Meparecefatalquelaniñatatengaque...—Noesunaniñata,estuprima.Alguienaquientúqueríasmucho.Elcríomemira.Enunprimermomentonodicenada,peroluegoprosigue:—Decíaquemeparecefatalquetevayaconelcuentodeloqueledigo,ademásdeque...—Peternoesunindigente—aclaro—.Esunniñoalqueselemuriólamadre,sefueavivircon
elabueloy,almorirtambiénéste,sequedósolo,peronoesunindigente.Flynsonríe.Suexpresiónnomegustacuandodice:—Segúnmehadichomipadre,esechavalvivíaenunmalbarrioque...—Noséquétehadichotupadre—locortofuriosa—.Peroesemuchachovivíaenunbarriode
Múnich,comoyovivíenunbarriodeJerez.—Y,enfadada,añado—:Notodoshemostenidolasuertedenacerenunafamiliacondinerocomotú.
Eldescaradodelniñosiguemirándomeconungestoquenomehacenipizcadegraciay,antesdesalirdelahabitación,lomiroydigo:
—¿Sabes?Porloquemehancontado,Petertienecosasquetúnotienes,apesardehabertecriadoentrealgodonesydehaberestudiadoen losmejorescolegios.Yesascosasse llamaneducaciónysensatez.Esemuchacho,alqueseguramentelehafaltadotodoloqueatitehasobradoenestavida,es...
—Cortaelrolloynomemarees.Oírlodeciresomesublevay,furiosa,siseo:—Medaigualloquedigatupadre.Piensollevartealpsicólogooadondehagafaltaparaque...—No.Noiréalpsicólogo—mereta.Memuerdolalengua,mejormelamuerdo.Luego,añado:—Cuandovengatupadrehablaremosdeltema.Y,así, sindarle laoportunidaddedecirnadamás,salgode lahabitacióno,comoestéallímás
rato,levoyasoltarunsopapoalcolegaquelovaaflipar.Pero¿dequéva?Unahoradespués,Ericllamaparadecirquellegarátarde.Meenfurezcopero,comonotengoganasdediscutirtambiénconél,asiento,mecalloy,unavez
termino de cenar sola en el comedor, puesto que Flyn se ha negado a cenar conmigo, subo amihabitaciónyrecibounwasapdeLuz:
QuesepasqueFlynmeacabadebloquearenFacebook.¡Unmojónparaél!
Boquiabierta,miroelmensaje.Estoyporirasuhabitación,perodesisto.Si lohagotendremos
movida,ynoquierotenerlaaestashoras.FinalmentemetumboenlacamaymeduermoantesdequeEricllegue.Casiqueeslomejor.
Aldíasiguiente,cuandosalgodeltrabajo,voyacasadeMelyBjörn.QuieroconoceraPeter.Alllegar,meimpacta,peromásmeimpactacomprobarlaeducaciónyelsaberestarquetieneelchaval.Melnohaexagerado.Teníarazón.
Efectivamente,llevaelpelodemasiadolargoparamigusto,laropaqueusaesenorme,perosusmodalessonimpecables.Vamos,queunavezmáslavidamedemuestraqueeldineronolodatodo,ymenoslaeducación.
Despuésdetrabajar,Ericvienetambién,yterminamoscenandoloscuatroconelmuchachoyconSami,quenosdemuestraatodosqueella,sinlugaradudas,eslareinadelacasayestáencantadaconPeteryconLeya.
CuandoEricyyoregresamosacasaenelcoche,sacoeltemadeFlynyloqueéstelecomentóamisobrina,yélseapresuraaquitarleimportancia.SegúnEric,soncosasdechavales.Segúnyo,esalgo con muy mala leche. Hablo del psicólogo y es mencionarlo y comenzar a discutir. Comosiempre,siyodigoblanco,éldicenegro,yalfinaltengoquetomarladeterminacióndecallarme.EricseniegatantocomoFlynaqueéstevayaaunpsicólogo.
¡MalditosZimmerman!
Unasemanadespués, trasunamañanaenlaqueapenashevistoaEricycuandomehecruzadoconélenlaoficinaapenasmehamirado,lemandounmensajeparasabersiloesperoparairacasadeMelyBjörn.EsatardelevanadarlanoticiaaKlaus.
Miteléfonosuena.Esunmensajesuyo:
Vetú.Tengotrabajo.Yoirédespués.
Trabajo...,trabajo,¡siempreeltrabajo!Sin ganas de polemizar, voy a casa de mis amigos y me dedico a tranquilizar a Björn. Está
nerviosopor la noticia que tienequedarle a su padre, aunque lo veo feliz conPeter. Sin duda, elmuchachosabecómometérseloenelbolsillo,yviceversa.
Concuriosidad,observocómosehablanyrápidamentemedoycuentadelacomplicidadquesehacreadoentreellos.MesientoencantadacuandoMelseacercaamíycuchicheo:
—Porloqueveo,todogenialentreellos,¿verdad?Melmiraaaquellosdos,quehablancontranquilidadsentadosalamesa,yresponde:—Nienelmejordemis sueñosme imaginéqueBjörn lopondría tododesuparte,niqueese
chavalfueratansensato.LasdossonreímosyomitocontarleloqueeltontodemihijopiensadePeter.—Tomaunacoca-cola—diceMel—.BeberemosalgomientrasvieneEric.Consatisfacción,lacojoy,mientraslabebo,mefijoencómoBjörnyelchiquillosecomunican.
Estámásqueclaroquetantoelunocomoelotroestánponiendotodoloquepuedendesuparte,yesomegustatantocomoséquelesgustaaellos.
ApesardeldisgustoinicialdeBjörnalenterarsedesuexistencia,notolaadmiraciónquesientehaciaelchico.Melodicesumirada,ycómolohablaylocuida.EsunapenaqueBjörnnohubieraconocidoaPeterdepequeño,peromealegrasaberquevaaserungranpadreelrestodesuvida.
Mientrasloscuatrohablamosenelsalón,llegaBea,lachicaquecuidadeSamiy,trasescucharlasindicacionesqueMeltienequedarle,sevaalcolegioaporella.
Miromireloj.Ericseestáretrasandopero,depronto,suenaelmóvildeBjörnyésteseseparaunosmetrosdenosotrospararesponder.Cuandoregresa,dice:
—EraEric.Selehapresentadounproblemaenlaoficinaydicequeiráderechoalrestaurantedemipadre.
Asiento.Nodigonada.Ericysusproblemasenlaoficina.Y,olvidándomedeello,cojoaPeterdelbrazocomoantañohacíaconFlynyloscuatrosalimosdelacasa.TenemosqueveraKlaus.
Alllegaralbarrestaurante,apesardequeintentahacernosverqueestátranquilo,veoqueBjörnestárealmentenervioso.Porello,mientrasMelyPeterhablanjuntoalcoche,meacercoyledigo:
—¿Quétalsientrastúsoloylohablascontupadre?—Miamigolopiensayyoinsisto—:Björn,la noticia puede afectarle. Creo que deberías hablar primero tú con él para darle tiempo a quereaccioneasumaneray,unavezsepadelaexistenciadePeter,sivesqueselotomadebuengrado,hacerentraralchaval.
Björnsetocalacabeza,piensaenloquelehedichoyasiente.—Tienesrazón.Esmejorhacerloasí.MelyPeterseacercananosotrosy,alverqueBjörnestácomobloqueado,explico:—Björnvaaentrarprimeroparahablarconsupadreydespuésnosenviaráunmensajeparaque
entremosnosotros,¿osparecebien?Melnosmira.Esosuponeuncambiodeplanes,peroentonceselmuchachodice,demostrándonos
unavezmássumadurez:—Esunabuena idea.Creoque esmejor que se lo cuentes a solas y, simequiere conocer, yo
estaréencantadodeentrar.Björnponeentonceslamanoenelhombrodelchicoydice:—Tardarépocosminutos.Teloprometo.Peterestáconforme,yMel,cogiendolamanodeBjörn,murmura:—Teacompañaré.Yoasiento,cojoaPetery,mirandounbarquehayenfrente,indico:—Vamos.Teinvitoaunacoca-cola.CuandoBjörnyMelsemarchan,elchavallosmiray,sindecirnada,nosdirigimoshaciaaquel
bar.Allí, con tranquilidad, hablamos demúsica yme sorprendo al ver que su gustomusical es elmismoqueeldeFlyn.Estamosensimismadosen laconversacióncuando,a lospocosminutos,mimóvilsuenay,mirándolo,digo:
—Muybien,chavalote,¡tenemosqueentrar!Peterselevantay,sindudarlo,cogemimano.Esomegusta.Sientoquesoyimportanteparaély,
tras guiñarle el ojo, salimos del local y entramos en el del padre deBjörn.Mel nos espera en lapuertay,conunasonrisa,dice:
—Estáneneldespacho.El gesto deMel me hace saber que todo ha salido como esperaban. Klaus es un hombre que
siempresetomalavidacomolevieney,alabrirlapuertadeldespacho,sientocómoésteclavalosojosenPetery,abriendolosbrazos,dice:
—Muchacho,vencontuabuelo.Meemociono.Soyasí deblanditayde tontay, entre risasy lloros,Melyyonos secamos las
lágrimas.¡Quémomentotanbonitoacabamosdevivir,yelmemodeEricselohaperdido!Mirodenuevoelreloj.Deprontosuenamiteléfonoy,alverqueesél,comoestoyfelizporlos
acontecimientos,murmuroencantada:—Vaya...,vaya,mirubiopreferido.¿Mehasleídoelpensamiento?—¿Porqué?SonríocomounatontamientrasobservoaKlaushablarconsunietoyaMelyaBjörnbesándose
yrespondo:—EstoyconKlaus,yahaconocidoaPeteryhasidoprecioso,porque...—Cariño —me interrumpe—. No puedo entretenerme. Estoy en el aeropuerto y salgo para
Edimburgoahoramismo.—¡¿Qué?!¿CómoquesevaaEdimburgo?Pero,antesdequeyopuedadecirnadamás,Ericprosigue:—Hayunproblema en la delegacióndeEdimburgoy he de viajar allí. Imaginoque regresaré
dentrodeunpardedías.—Alverquenodigonada,Eric,quemeconocemuybien,insiste—:Cariño,meapeteceesteviajetanpococomoati,perohedeir.
Lasonrisahaabandonadomicara.Notengoganasdereír.—¿Haspasadoporcasa?—digo.—No.No he tenido tiempo.Gertame ha hecho una pequeñamaleta con ropa que tengo en la
oficina.Untrajeyunpardecamisas.Nonecesitomás.Vale. Que Gerta le haga la maleta a mi marido me toca la moral, por lo que le pregunto a
bocajarro:—¿Ellateacompaña?Elresoplidodefrustraciónqueoigoatravésdelteléfonomehacesaberlomuchoquelojoroba
quelepregunteeso.—Jud...,porelamordeDios—dice—,estrabajo.Hasurgidounimprevistoytengoqueir.Cierro los ojos y asiento. Tiene razón.No debo ser tan pesadita con el temita de los celos, e
intentandorazonar,murmuro:—Losé,Eric.MándameunmensajecuandoaterricesenEdimburgo,¿deacuerdo?—Jud...,tequiero—diceenuntonobajoparaquenadielooiga.—Yotambiéntequiero.Y,sinmás,cortolacomunicación.Alvermigesto,BjörnyMelrápidamentevienenhaciamí.—EricsevaenesteinstanteaEdimburgo—explico.Misamigossabenloquepiensoy,abrazándome,dicen:—Puesentonces,llamaaSimonaydilequevasacenarconnosotros.Asientoysonrío.Eslomejorquepuedohacer.
Esanoche,cuandollegoacasa,trassaludaraSustoyaCalamar,suboaveralosniños.Todos
duermen,incluidoFlyn.Entroenmihabitaciónyderepentemepareceenorme.CuandoEricnoestá,todoesenormeen
esta casa. Pero, como no quiero pensar en nada,me desnudo yme pongo una camiseta.Odio lospijamas.
Sinsueño,cojoel libroque tengoen lamesillaycomienzoa leercuandosuenamimóvil.Unmensaje.Eric.
¿Estásdespierta?
Rápidamenterespondo:
Sí.
Unpardesegundosdespués,mimóvilsuena.Locojoyescucho:—Hola,miamor.Conunasonrisitatonta,dejoellibro.—Hola.—¿Siguesenfadadaconmigo?Oírsuvozeselbálsamoquenecesito,yrespondo:—Noestoyenfadada.Essóloquememolestaquetevayasdeviajeasí,depronto.Oigosurisa.Serámaligno...—Eraestoosalirdemadrugada,ymuchasvecestúmismamedicesqueprefieresquemevayay
duermaenelhotelaquemalduermaencasaydemadrugadamevayadeviaje.Tienerazón.Lehedichoesoenotrasocasiones.Meacomodoenlosalmohadonessonriendoy
digo:—Teechodemenos.Lacamaesenormesinti.—¿Sabes?Yotambiénteechodemenos.Peroteníaquehaceresteviaje,cariño.Venga,cuéntame
cómoselotomóKlausaldescubrirquetieneunnieto.Durante un buen rato, le explico con todo lujo de detalles lo ocurrido esa tarde, yme encanta
oírlosonreír.AsíestamoshastaquebostezoyEricdice:—Debesdormiromañanaestarásmuertadesueño.—Joooo..., es que no quiero dejar de hablar contigo. Cuando no estás, me cuesta dormir una
barbaridad.Necesitoabrazarmeamijefepreferidoparaconciliarelsueño.—Mipropiatonteríamehacesonreíraloírloreíry,conscientedequeestoyhaciendoelcanelo,afirmo—:Perotienesrazón.Tengoquedormir.
—Intentaréacelerartodoloquetengoquehaceraquíparaestarmañanaporlanochecontigoenlacama;¿deacuerdo,cariño?
—Vale—asientoconcaradetonta.—Unbeso,pequeña,yduerme.Tequiero.—Tequiero—respondoencantadaantesdecolgar.Unavezdejoelteléfonosobrelamesilla,meechosobreelladoenelqueduermeEricyaspiro
su olor.No sé cómo explicar la tranquilidad queme proporciona hacer esto,mientras siento quepocoapocomeduermo.
Aldíasiguiente, trasuna loca jornadade trabajoen laque recibovariosmensajesdemiamorparahacermesaberqueestábienyseacuerdademí,porlanoche,cuandoestoydandodecenaralosniños,tengoesperanzasdequeEricregreseacasa.
MiinquietudestalquevuelvoasentirmecomolaJuddeantesdeteneralosniñosysóloesperoqueelEricquevaaregresarseaelEriclocoquemeempotrabacontralasparedesmientrasmehacíaelamorposesivamente.
En cuanto acabo de darles de cenar a los pequeñuelos, tan pronto como Flyn semarcha a sucuartosinhablarme,corroaducharmeparaquitarmelapapillaqueHannahmehatiradoenelpelo.Quieroestarpreciosaparacuandomiamorllegue.Alasdiez,mientrasestoyviendolatelesolaenelsalónylospequesestándormidos,recibounmensajequedice:
Losiento,miamor.Problemasconelavión.
Nooooooooooooooooooo.Leeresoescomorecibirun jarrodeagua fría.Loesperabaestanoche.ElEricdelqueyome
enamoréhabríavoladoparaestarjuntoamísíosí.Durantevariosminutosmiroelpuñeteromensaje,mientrasmeconvenzodeque,sinoviene,es
porquenopuede,noporquenoquiera,yfinalmenterespondo:
Ok.Nopasanada.
Peropasa,¡claroquepasa!Durante todo el díamehe sentido comouna chiquilla de quince años esperandopara ver a su
amoryladecepciónestangrandeque,delosnervios,unratodespués¡mebajahastalaregla!Hayquejoderseconeldisgustoquetengo,yahora,encima,muertitadedolores.A las once, tras esperar una llamada de teléfono de Eric y no recibirla, paso del cabreo a la
melancolía.¿YsiverdaderamenteelamorqueEricsentíapormísehaapagado?Eldolordeovariospuedeconmigo,porloquevoyalacocinaymetomounpardecalmantes.
Sinduda,esloquenecesito,ademásdedejardepensartonterías.Perolatristezamepuedey,entreloapenadaquemesientoylaspuñeterashormonas,semesaltan
laslágrimas.¿AcasoEricyanomequiere?Singanasdellorar,caminoporlacasaaoscurascomounfantasmahastallegaramihabitacióny
metumboenlaenormecama.Porsuerte,conlaayudadeloscalmantes,eldolorsevaunahoradespués,peronotengosueño.
Miroelreloj:lasdoceyveinte.Duranteunpardehorasdoyvueltasenlacama.Deunlado,deotro.Bocaarriba,bocaabajo,yal
final,cansada,alasdosycincodelamadrugadamelevantoybajoaoscurashastaeldespachodeEric.Eselugaressusitio,surefugio,yallíesdondemesientomejor.
Deprontosientounasirrefrenablesganasdelloraramocotendido.
ComodiríamihermanaRaquel,llorar,ademásdedespejarellagrimalydarteundolordecabezaconsiderable,enocasionesesbueno.Pero,sinduda,éstanoesunabuenaocasiónparallorar,asíque,porecharlelaculpaaalguiendemidesazón,selaechoalaregla.¡Odiotenerlaregla!
Pornorma,cuandolatengo,unamalalechesobrenaturaltomamicuerpo,peroenestaocasiónloquehatomadomicuerpoesunamoñezabsoluta.¡Estoymoñas!
Comolamujerdramáticaymoñasoficialquemeheproclamado,buscoelCDquemásmelleguealcorazónyencuentroelquelegrabéhaceañosaEricconcancionesquenosgustabanalosdos.
Lopongoy,cuandosuenanuestracanción,Blancoynegro,[22]¡mequieromorir!PorDios,perosimisojosparecenunafuente.MesientoenelsillóndeEricymedesahogomientrasMalúinterpretaesapreciosacanción.Qué
tiemposaquellosenlosqueélmebuscabaparaestarsiempreamilado.Quétiempos,enlosquemeperseguía,meacosabaysóloestabapendientedemí.
Quétiempos...Quétiempos...Unavezacabalacanción,mientrasmesecolaslágrimasynotolanarizrojacomountomate,me
acercoa la chimeneay la enciendo.Meencanta la estanciadeEric, tanpersonaly tan suya,y contristezasonrío.
Encuantoelfuegoseaviva,mirolasfotosquetienedetodosnosotrosysonríoalverunanuestraenZaharadelosAtunes.¡Quétiemposmásbonitos!
Desesperadapor loquemicorazónsiente,ycomonecesito fustigarmemás, cojounálbumdefotosdelalibreríaycomienzoaojearlo.Comounchimpancé,lloromientrasveofotosnuestras.Yoembarazada,EricyyoabrazadosconelpequeñoFlyn.Fotosdenuestraboda.Fotospescandoenunlago.OtrasderisasenunaFeriadeJerez.
Fotos...,fotos...yfotos...Recuerdos...Recuerdos...Recuerdos...Hastaquenopuedomás,yconhipoporloemocionadaqueestoy,cierroelálbum.¿Deverdadelamorcaducacomolosyogures?Agotadayconlacabezacomounbomboporlairritaciónquemeestoydandoyosolita,miroel
relojquehayencimadelachimenea.Lastresmenosdiezdelamadrugada.Mesientoenel suelosobre labonitaalfombraquehay frentea lachimenea.Por suerte,aldía
siguienteessábadoynotengoquemadrugar.Menosmal,porquesino,iríafina.Mirandoestoyelfuegocuandocomienzaunacanciónquemeencanta...,bueno,quenosencanta.
SellamaYouandI[23]yesdeMichaelBublé.MiguelitoBurbuja,comoenocasionesdigoyoparahacerreíraEric.
Sécuántolegustaamiamoresecantanteyesacanción,ycierrolosojosmientraslaescucho.Suletraespreciosa,románticaytierna;sientoquelaslágrimasdesbordandenuevomisojosylasdejocorrerdescontroladamentepormirostromientrasmiroelfuego.
La canción dice cosas maravillosas, fantásticas, novelescas, y yo, arrebatada por todo lo quesiento al escucharla, cierro los ojos mientras comienzo a darme aire con la mano. ¡Uff..., quéfatiguita!
Entreeldisgustoquellevo,laregla,lacancioncitaylaausenciadeEric,mevaadarunpatatús.Labonitacanciónacaba.Meencojo,apoyolacabezasobremisrodillasy,entonces, lacanción
comienzadenuevoyoigo:—¿Bailasconmigo,pequeña?Aloíresavoz,lavozquetantodeseabaoír,mevuelvoymisorpresaesmayúsculacuandoveoa
Eric,amiguapoEric,mirándomeconesospreciososojazosazules.¿Estoydespiertaoesunsueño?Micara,migesto,misojosdebendeser tandesastrososcomo laspintasque llevo,porquemi
amorfrunceelceñoypreguntaacercándoserápidamenteamí:—Pero¿quéteocurre,cariño?Ayudadaporél,melevantoy,abrazándolo,murmuroaltiempoquehundolacaraensupecho:—Hasvenido...,hasvenido...Duranteunos segundospermanecemoscalladosmientrasMichaelcantaesode«Túyyo..., túy
yo»,ycuandodesentierromicaradesupecho,mepongodepuntillasysusurro:—Estásaquí.Ericmeobservacomoelquemiraalgoquenoentiende.—Cariño,hubounproblemaconeljety,cuandorecibítuescueto«¡Ok!»,decidícogerunvuelo
comercialparallegaracasaaunquefuerademadrugada.Pero¿quétepasa?Sonriendo como una tonta al saber que ha cogido un vuelo comercial para estar conmigo, lo
abrazoypregunto:—Eric,¿túmequierestodavía?Su gesto ahora sí que es de no entender nada. Frunce el ceño y, agachándose para estar ami
altura,dice:—Pero¿quétonteríadepreguntaesésa?Unsollozosaledemiboca.Lamoñasoficialhavuelto,yEric,mirándomeboquiabierto,susurra:—¿Cómonovoyaquerertesiereslomáspreciosoquetengoenmivida?Ea...,allorartodavíaconmáspena.Intentopararantelaangustiademipobrechico,peroes imposible.Micuerpo,mislagrimales,
todayoestoydescontrolada.YEricmurmuraentoncescongestoconfuso:—Meestásasustando,cariño.¿Quéteocurre?Norespondo.¡Nopuedo!Diezminutosdespués,cuandoconsigodejardellorarcomounchimpancé,lobeso,lodevoroy,
encuantomifuerteEricmecogeentresusbrazosymeempotracontralapareddispuestoadarmeloquelepidosinhablar,musitoapenadamientraslaslágrimasamenazandenuevo:
—Nopodemos,¡mehavenidolaregla!Ericsonríe.Nomesueltay,besándomelapuntadelanariz,susurracontodosucariño:—Pequeña,contenerteconmigomevale.Alverquemisojossedesbordandenuevo,sinsoltarme,mecogeconmásseguridadentresus
brazosymesubeanuestrahabitación,donde,sindesnudarse,se tumbaen lacamaconmigoynosquedamosdormidoselunoenbrazosdelotro.
37
ElsábadoalassietedelamañanasonóeltimbredecasadeBjörn.Ding-dong...Ding-dong.Melyél,alarmadosaloírlo,selevantaroncorriendoyfueronaabrir.Enlapuertaseencontraron
aEricconlosdospequeños,que,mirándolos,dijo:—Necesitoqueosquedéisconestasdosfierashastamañana,queyoregrese.Hoyeseldíalibre
dePipayquierollevarmeaJudith.¿Puedeser?Aúndormidos,ambosloobservaronyMelpreguntó:—¿Ocurrealgo?Ericsonrió,negóconlacabezay,trasverqueBjörnasentíaanteloquehabíapedido,respondió:—Nadagravequenosesolucioneconunpardedíassóloparanosotros.—Excelenteidea—afirmóMel.—¿YFlyn?—preguntóBjörn.—SequedaconSimonayconNorbert.Élyaesmayor,peroestaspequeñasfieras,sinPipa,les
daríanmuchotrabajo.BjörncogióenbrazosaHannah,queestabadormida,yentoncesEriccuchicheó:—Sientonohaberestadoelotrodíacuando...—Noimporta—dijoBjörnsonriendo—.Todosalióbien.Los dos amigos semiraron con cariño. Entre ellos sobraban las palabras. Finalmente Eric se
dirigióasuhijo,queestabacogidodesumano,seagachóyledijo:—Pórtatebienconlostíos,¿vale?Elcríoasintió,yEric,guiñándoleselojoasusamigos,murmuró:—Gracias,¡osdebouna!Unavezaquélsehubomarchadoatodaprisa,MelcogióalpequeñoEricylepreguntó:—¿Quieresdesayunar,Superman?—Sí.Galletasdechoco.Björnsonrióy,acontinuación,susurró:—Voyallevaralmonstruitoanuestracama.Conunpocodesuerte,dormiráunratomás.Sobre lasdocede lamañana, la casadeBjörnydeMeleraunaauténtica locura.Sami,Ericy
Hannah,juntoalaperraLeya,noparabandecorreteardeunladoparaotro.Laalgarabíaeratalquealfinaldecidieronsacarlosatodosalparque.Porsuerte,Peterseofrecióaayudarlosconlosniños.
Una vez en el parque,Mel vio a Louise con Pablo, pero ésta, al verlos, cogió a su hijo y semarchó.Alseguirlamiradadesunovia,Björnpreguntó:
—ÉsaesLouise,¿verdad?Melasintió,peronoteníaganasdehablardeellaoterminaríandiscutiendo,asíquemiróaSami
ygritó:—¡Sami,nocojasaHannahenbrazososetecaerá!Segundosdespués,yconloscríoscontrolados,MelyBjörnsesentaronenunbancoadescansar
mientrasPeteranimabaaentraralospequeñosenunpequeñocastillodecoloresyparecíanpasarlobien.Loscríosestabanrendidosalospiesdelmuchachoyhacíantodoloqueaquélproponía.HastaHannahhabíadejadodellorarparairtrasélconlaesperanzadequelacogieraenbrazos.
EneseinstantepasarondosjovencitasdelaedaddePetercercadedondeélestabaconlosniñosylomiraronmientrasseacercabanaélhaciéndose las interesantes.MelyBjörn loobservaban,y laexteniente,alveralabogadosonreírconpicardía,murmuródivertida:
—Niseteocurradecirunapalabradeloquepiensas.Björnsonrióy,cuandoaquéllas llegaronhastaPetery losniñosycomenzaronasonreírcomo
tontuelasmientrassetocabanelpelo,replicó:—Eltíoesunguaperas.Sinduda,esunHoffmann.Sinpoderevitarlo,MelsoltóunarisotadayBjörnañadió:—Esunchicoincreíble,¿verdad?Ellaasintió.—Tanincreíblecomoelguaperasdesupadre.Björnsonrióasuvez.Apenaspodíacreerqueaquelmuchachotanbieneducado,apesardesus
circunstancias,fuerasuhijo.Lasdudasdelprimermomentoquedarondisipadas.Díaadía,Peterledemostrabaquiéneray,cuantomásloconocía,máslegustaba.
Peter era un buen chico que no daba problemas ni pedía nada. Disfrutaba pasando las tardessentadoenelsalónleyendocómicsdeSpidermanojugandoantesuordenador.
No era un muchacho de salir con amigos, y de momento tampoco con chicas. Era más biensolitarioperocariñosoconlosqueteníaasualrededor.EnsimismadoestabaelabogadopensandoenesocuandoMeldijo:
—Björn,tenemosquehablar.Aloíreso,élclavólosojosenellaymurmuró:—SiessobreGilbertHeineysubufete,noeselmomento.Melnegó.—Tranquilo.Noquierohablardeeso.—Puessiessobrelodeltrabajodeescolta,tampocoesmomento.—No.Tampocoeseso.Sorprendido,Björnlamiróycuchicheódivertido:—Cariño,sinoquiereshablardenadadeeso,meacabasdeacojonar.¿Quépasa?Melsonrióy,posandolasmanossobreladeél,dijo:—Quizánotegusteloquetevoyadecir,perohepensadoquetalvezahora,conla llegadade
Peteracasa,noseaelmejormomentoparaviajaraLasVegasycasarnos.—¡¿Qué?!Perosiyahemosarregladotodoslospapeles.Alversugesto,ellalevantólasmanosyaclaró:—Nos vamos a casar, por supuesto que sí, cariño, eso te lo prometo. Pero faltan apenas dos
semanasynocreoquedebamos irnosahoradeviaje.Hepensadoquequizápodríamosretrasar la
bodaparadespuésdelverano,paraseptiembre.—No.—Escúchame, amor—insistió ella—. Sólo serán unosmeses, el tiempo suficiente como para
ponertodoenordenconPeter.Björn resopló.Loúltimoque quería era retrasar su boda con ella, pero sabía que tenía razón.
Necesitabantiempoconelchico.—Nos casaremos y lo sabes—añadióMel—. Pero creo que debemos ser juiciosos e integrar
primeroaPeterenlafamilia.Elabogadoasintió.Legustaraono,ellateníarazón,yfinalmenteafirmó:—Deacuerdo.—¿Deacuerdo?¡¿Así,sinmás?!¡¿Sindiscutir?!Aloírlayversugestoincrédulo,Björnsonrió.—Sí,deacuerdo.Satisfechaporlobienqueselohabíatomado,ellapreguntóentoncesconsorna:—¿SeenfadarámuchotuamiguitoGilbertHeine?Aloíresoyversugestopícaro,Björnmurmuró:—Miraqueeresretorcida,Parker.—Y,sonriendo,afirmó—:Cariño,noscasaremoscuandotúy
yoqueramos,nocuandoquieraGilbertHeine.Retrasaremoslabodaparaseptiembre,peroentoncesyanohabrámásexcusasparaposponerlaniunmesmás,¿deacuerdo?
Mellobesóenamorada.—Teloprometo,miamor...,nohabrámásretrasos.Durantevariosminutos,apesardeestarenunparque,seprodigaronmuestrasdecariño,hasta
que decidieron darlas por finalizadas y Björn, para enfriarse, dijo al ver que las muchachas queestabanminutosantesconPetersealejaban:
—EstoypensandocambiaraPeterdecolegio.—¿Porqué?—preguntóMel.—Megustaríapoderdarletodoloquenohepodidoentodosestosañosy,conociéndolo,veoque
esunmuchachoquevaloralosestudios.Melasintió.Sinduda,Peterleshabíarotolosesquemas.—Me ocuparé de los niños mientras tú hablas con él y se lo preguntas, ¿te parece? —dijo
levantándosedelbanco.Björnasintióy,trascogersumano,empezóadecir:—Oye...—¿Qué?—Septiembre,¿entendido?Melsonrió.—Entendido,JamesBond...,entendido.Concomplicidadsemiraronhastaqueél,sinsoltarla,dijo:—¿Sabes,morena?—¿Qué?Enamoradocomountontodeaquelladescaradadepelocorto,elabogadoclavósusojosazules
enlosdeellaymurmuró:—Atuladosoycapazdecualquiercosa.—¿Ah,sí?¿Yesoaquéviene?Élmiróentoncesaladolescentequereíaconlospequeñosy,sindudarlo,respondió:—Porque,desdequeestoycontigo,heaprendidoque lascosasquemerecen lapenanuncason
sencillas,ygraciasatiestoysiendocapazdedarleestaoportunidadaPeter.Melsonrióy,rozandosunarizconladeél,afirmó:—Yesonoshacefelicesatodos.Quédateconeso.—Lohago,amor.Lohago.Laextenientelobesóenloslabiosy,cuandoseseparódeél,replicó:—¡Lodeseptiembrequedapendiente!—Ambossonrieronyellaañadió—:AhorahablaconPeter
ypregúntalelodelcolegio.Noesunbebé,ycreoquenodebemoshacernadaqueaélnoleparezcabien.
Björnasintióyviocómolamujeralaqueadorabasealejabaendirecciónalosniños.Cuandollegóhastaellos, tocóconcariñoelpelodePeter, cruzóunaspalabrasconél,yéste, trasmiraraBjörn,sonrióyseacercóaél.
El abogado lo recibió también con una sonrisa y, cuando el muchacho se sentó a su lado,preguntó:
—¿Quiéneseranesaschicasquetehansaludado?Peterrespondióencogiéndosedehombros:—Unasamigasdelinstituto.BjörnlomiróconpicardíayPetertambiénalversuexpresión.Denuevoseentendíansinhablar.
Acontinuación,elabogadopreguntó:—Peter,¿tegustaríacambiardecolegio?—Nolosé.¿Porquéhabríadehacerlo?—respondióelmuchachosorprendidoporlapregunta.Al oír eso, Björn asintió. Poco a poco iba conociendo al muchacho y sus inquietudes y,
mirándolo,contestó:—Puedodarteunamejoreducaciónquelaquehasrecibidohastaelmomento,ycreoqueeltema
delosestudiosysusoportunidadesesalgoquetúvaloras,¿verdad?—Sí.Deseoso de conocerlo todo de él, Björn le hizo mil preguntas que el muchacho respondió y
viceversa,yunavezsucuriosidadcasisesació,clavósusojosenélydijo:—Tienesqueprometermeunacosa.—¿Elqué?Björnseacercóentoncesaélycuchicheó:—Novolverásapiratearabsolutamentenada.Entiendoqueeresuncerebritoparalainformática,
peronoquierolíos,¿entendido?Petersonrióy,chocandolamanoconladeélcomoMelhacía,asintió:—Deacuerdo.Encantado por aquella estupenda relación que se estaba fraguando entre los dos, el abogado
preguntó:
—¿Has pensado qué te gustaría estudiar?O,mejor dicho, ¿sabes ya qué te gustaría ser en unfuturo?
Peterasintió.Siemprehabíatenidoclaroloquequeríasery,mirándolo,respondió:—Quieroestudiarbioquímicaclínica.Björn parpadeó. Esperaba que le dijera algo que tuviera que ver con la informática y,
sorprendido,sedisponíaahablarcuandosuhijoexplicó:—Labioquímicaclínicaes la ramade laquímicaque sededicaa la investigaciónde los seres
vivos.Séqueaquí,enAlemania,paraaccederaesaespecialidad tengoque tener la licenciaturadeMedicina,ysiempreheestadodispuestoaconseguirla.
Boquiabiertoporlaseguridadconlaquehablabaelmuchacho,Björnafirmó:—Cuentaconmigoparaello,chaval.Peterasintiófeliz.—Gracias—dijoysonrió.Emocionadoporlossentimientosyelorgulloqueaquelmuchachoprovocabaenél,elabogado
leechóelbrazoporencimadelhombroy,acercándoloaél,declaró:—Quiero que sepas que estoy muy feliz de haberte encontrado, y sólo espero que podamos
recuperartodoeltiempoperdido.Peterasintió, tenía lasmismasganasqueéldehacerloposible.Y,echandoelbrazoporencima
delhombrodesupadre,sonrióydijo,haciéndoloreír:—Serágenialpoderhacerlo,JamesBond.
38
Ellunes,trasunfindesemanadeensueñoenelqueErichaceunadenuestraslocurasdeamorymeprogramaunviajesorpresaaVeneciaparademostrarmelomuchoquemequiereylotontaquesoyalhacermeesaspajasmentales,cuandollegamosaMüllerynosmetemosenelascensor,lepongoojitosydigo:
—Nosvemosestanocheencasa.Élasiente, sonríecomounmalotey,acercándomeaél,mebesa.Devoramibocaconabsoluta
devociónolvidándosededóndeestamosycuandonosseparamos,dice:—Nolodudes,pequeña.Enamoradacomomesiento,murmurorecordandonuestrofindesemanaenVenecia:—Arrivederci,amore.—Addio,miavita.Esamiradademalote,esasrománticaspalabrasyesebesodeseadosonloqueañoraba,yestoy
sonriendocuandoseabrenlaspuertasdelascensor,leguiñoelojoysalgodeél.Sinmiraratrás,séquemiamormeobservahastaquesecierranlaspuertasyyocaminofelizy
seguradetodohastamidespacho.Estoydebuenhumor,elmundoesmaravilloso,peroentoncesMikaentraaceleradaydice:—Tengounproblemón.Oh...,oh...,miburbujitarosadefelicidadsedesvaneceyleprestomitotalatención.Es el primer problemón con el que voy a lidiar desde que comencé a trabajar en Müller e,
intentandotranquilizarla,hagoquesesienteypregunto:—¿Quéocurre?Lapobrerápidamentemehablasobrelaferiadefarmaciasqueestamosgestionandoymurmura:—MispadreshandecididocelebrarsusbodasdeoroelpróximosábadoytengoqueiralaFeria
deBilbaoenEspaña.Yahoradeboelegirentreeltrabajoylafamilia.Oíresomesorprende,yenseguidarespondo:—Porsupuesto,elegiráslafamilia.Tuspadressecasan,¿cómonovasaasistir?Mikasuspira,ponelosojosenblancoyexplica:—Elañopasadohubounproblemaen laFeriadeBilbaoconunodenuestroscomerciales.Al
muyidiotanoseleocurrióotracosaquetirarsealahijadelorganizadorenlosbañosdelaferia.Elcasoesquealguienavisóalpadreylospillaron,ylasquejasllegaronaEric.
Asiento.RecuerdoqueEricmelocomentóensudía.Mikaprosigue:—Alfinal,trasmuchobatallarconlaorganizaciónparaquenoecharanaMüllerdelaferia,Eric
yyoquedamosconesehombreenqueesteañoestaríayoenelstandcontrolandoaloscomerciales.Pero, claro, ahoramis padres han decidido anunciar su boda sorpresa y, cuando les diga que no
puedoir,selovanatomarmuymal.Suagobiosehaceextensibleamí.QuieroayudarMika,ynosóloporqueseapartedemitrabajo,
sinotambiénporquelamujerquetengodesesperadaantemínosehaquejadodequeyosólotrabajeporlasmañanasyencimanoviaje.Esoconllevamásfaenayviajesparaella,yenningúnmomentolohamencionado.
Poreso,yaunquesoyconscientedequeEricsevaaenfadar,propongo:—¿Quéteparecesihablamosconesehombre?¿Cómosellama?—Imanol.ImanolOdriozola.Asiento.Piensoconrapidezydigo:—Lollamaremosyleexpondremosquetúnopuedesiryqueentulugariréyo.Alfinyalcabo,
soylamujerdeljefazoyesolepuedeagradar.Segúndigoeso,Mikamemira.—Túnopuedesviajar.Ésafue laprimeracondiciónqueEricmeimpusocuandocomenzastea
trabajar.¡Nadadeviajes!—¡¿Queteloimpuso?!De pronto veo que se da cuenta de la bomba que ha soltado y, al vermi cara, rápidamente se
disponeaaclarar:—Bueno,no.Realmentenofueasí.Élme...—Mika—lacorto—.Nomientas,queconozcoaEric.Saberesomesubleva.¿CómoqueEricseloimpuso?Ea,¡seacabóelbuenrollitoconmimarido!¡AdiósviajeaVenecia!Unacosaesloqueélyyohablemosypactemosencasayotramuydiferentequeelmuyatontado
imponga condiciones a las personas que trabajan conmigo. Observo aMika y compruebo que lapobreestáasustada.Sabequeselehaescapadoe,intentandotranquilizarla,digo:
—Sé que me aprecias tanto como yo a ti, pero también sé que mi trabajo de mañanas no essuficiente para ayudarte.No soy tonta,Mika, y sé que, si yoviajara como tú, el trabajo seríamásllevaderoparatiy...
—Judith,porfavor,notepreocupes.Estoyacostumbradaaviajary...—Yaséqueestásacostumbrada,porqueformapartedetuempleo,peroloquemejorobaesque
mimaridoteimpusieraciertascosasparaqueyotrabajaraaquí.No,nomehacenipizcadegraciaquelohiciera.
LacaradeMikaesunpoema,cuandosentencio:—VasairalabodadetuspadresporqueyovoyairaBilbaocomomellamoJudithFlores.Ellamemiracondesconciertoyyosonrío,aunqueloquerealmentetengoganasesdeasesinara
untiporubiollamadoEricZimmerman.Cuandoterminamijornadalaboral,llamoporteléfonoaEricasudespacho,perosusecretaria
medicequeestá enunacomida.Unavezcuelgo, recojo lospapelesquehay sobremimesaymedespidodeMika,quemevuelveasuplicarquecambiedeopinión.Yolatranquilizo,hadehacerlo.Salgoalacalley,traspararuntaxi,regresoacasa.
Cuandollegoyabrolaverjaparaentrar,milocoparticular,Susto,intentasalircorriendo.
Pero¿éstenoaprende?Unavez cierro la verja,Susto yCalamarme dan su gran recibimiento. ¡Festival de aullidos y
lametazoscomosilleváramosmesessinvernos!Mientraslosbesuqueoymebesuquean,agradecidaporelcariñoquemedemuestran,piensoen
esos desalmados que son capaces de abandonar omaltratar a los animales. Sin duda, no sólo notienencabeza,sinoquetampocotienencorazónnisentimientos.
Acompañadaporellosdos,llegohastalapuertadecasaySimona,cuandoabre,medicequelospequeñosestánaúnencasademisuegra.FelizporsaberqueSonialosestarámalcriando,mesientoenlacocinaacomerunpoquitodejamónconpanytomateyentoncesoigoqueSimonadice:
—¿Aquenosabesquésoñéanoche?Lamiroalaesperadequecontinúeyellasuelta:—¡Conlatelenovela«Locuraesmeralda»!¿Larecuerdas?Ambas soltamos entonces una carcajada. Recordar la época en que estábamos enganchadas al
culebróndeEsmeralda yLuisAlfredonos hace reír, y terminamos rememorando las escenas quemásnosimpactaron,comoaquelfinal,enelquelosprotasysuhijomontadosacaballosedifuminanenelhorizonte.Riéndonosestamosporellocuandosuenaelteléfono.Simonalocogeydice:
—EsdelinstitutodeFlyn.Larisasemecortadecuajo.¡¿Otroproblema?!Levantándome, cojo el auricular, escucho sinparpadear loqueunamujermecuentay, cuando
cuelgo,miroaSimonaydigoponiéndomelachaqueta:—VoyalinstitutoarecogeraFlyn.—¿Quéhapasado?—Sehapeleadoconunmuchacho.Simonasacudelacabeza,yomecagoentodoslosantepasadosdeFlyny,trasdirigirmehaciael
garaje,memetoenmicocheyvoyaporél.Veinteminutosdespués,entroenel institutoyvoyderechaaDirección.Nadamásentrar,veoa
Flynyaotrochico.Flyntienelacejayellabiohinchados.Elotromuchacho,ellabioyelpómulo.Miniñomemira,rápidamentevoyhaciaél,meagachoy,preocupada,susurrotocándolelacara:
—Cariño...,¿estásbien?Midemostracióndeafectonolegustaymeapartalasmanosconrudeza.—Flyn...—murmuro.—Joder...—siseaél.Entristecidaporsuspalabras,digoacontinuación:—Flyn,estotienequeacabar.Peroelmocoso,aquienestáclaroquenoleimportanmissentimientos,insiste:—Déjameenpaz.Su desplante me duele, y el hecho de que nome llame «mamá»me parte el alma. Sin poder
evitarlo,losojossemellenandelágrimas.¿Porquétodasucrueldadlalanzacontramí?Depronto,unavozdehombrequemeesconocidadiceamiespalda:—FlynZimmerman,aunamadreniselehablaniselatratadeesamanera.Elcríonodicenada.MiroaDennis,quemeobservay,alvermiexpresiónymisojosllorosos,
dice:—¿Tieneunsegundo,señoraZimmerman?Asiento y, dejándome guiar, entro donde él me indica. Una vez cierra la puerta del pequeño
despacho,abrelosbrazosyyoaceptosuabrazomientrasmurmura:—Tranquila...Tranquila...—Noséporquémehablaasí—balbuceo—.Noséquélehehecho.—Tranquila—insiste él—. Los adolescentes en ocasiones son así con las personas a las que
quieren.Siloconsultarasconelpsicólogodelcolegio,tediríaesomismo.—Peroyonolehehechonada,Dennis.Noséporquétodaesaagresividadcontramí.—Judith,debéisllevaraFlynalpsicólogo.Élpodríaayudarlo.Metragolaslágrimasyasiento.Loúltimoquequieroesmontarunnumeritodemadrelloronae
histérica. Justoentoncesseabre lapuerta,nosseparamos rápidamenteyDenniscogeunospapelesqueunamujerleentregamientrasmedice:
—Siéntate.Comounaautómata, lohagoyenesemomento lapuertavuelveaabrirseyentraotrohombre
coneldirectordelcolegio.Elhombreeselpadredelotromuchacho,yDennisnosexplicaquesehanpeleadoporunachica.Sindecirelnombre,séquesetratadeElke.
Elotropadreyyonosmiramos.Nosabemosquédecir.¡Malditosniños!Almenos,nomehatocadounpadredeesosquesecreenquesuhijolohacetodobien.Segundos
después,hacenentrara losmuchachos,y tantosu tutorcomoeldirectordelcolegio lesechanunabuenabronca.Finalmente,elpadreyelchicosemarchanjuntoconeldirectory,cuandoyohagolomismo,Dennisnosacompañahastalapuerta.
Los tres caminamos en silencio, pero siento el apoyo moral de Dennis, y se lo agradezco.Necesitosaberquealguienestáamiladoyentenderquenoestoyhaciendonadamal.
Cuando llegamos a la puerta del instituto, sin pararse, Flyn sigue hastami coche, yDennis, alverlo,murmura:
—Sientolodelaexpulsión.Yatedijeenlatutoríaque,sivolvíaatenerotroparte,elinstitutoloexpulsaría.Detodasformas,pensadenlodelpsicólogo.Creoquepodríahacerlemásbienquemal.
Suspiro. Sé que tiene razón, sólo hay que convencer al cabezota de mi marido. Por ello,intentandosonreír,respondo:
—Gracias,Dennis.Unavezdigoeso,medespidoconunaúltimamiradayvoyhaciaelcoche,dondeunlarguirucho
adolescente de apellido Zimmerman me espera apoyado con cara de perdonavidas. ¿A quién separecerá?
Doyalmandodelcocheylosfarosseiluminan.Flynabrelapuertadelanteraysesienta.Dos segundos después, me siento yo y, cuando lo veo saludando con guasa a unos chavales
mayoresqueél,queestánsentadosenunbancodelparque,lomiroymurmuro:—Penséqueerasmáslisto.¿QuéhacespeleándoteporElke?Flyn clava sus ojos en mí, se retira el flequillo de la cara y comienza a toquetear la radio.
Enfadadaconsuactitudchulesca,siseo:—Ahorasíquenovasasalirnialapuertadelacalle.Flyn,¡tehanexpulsado!
—Vengaya...,¡cortaelrollo!Lomato,esquelomato.Y,conteniendolasganasquetengodecruzarlelacara,voyaañadiralgo
máscuandoéldice:—Llévameamicasa.Misensatezmehacecallar,apesardelasganasquemeentrandepreguntarlequesisucasanoes
lamía.EnsilencioconduzcoporMúnichy,cuandollegamosacasayaparcoenelgaraje,veocómoFlyn
deunmanotazosequitaaCalamardeencima.—¡Novuelvasatratarloasí!—lechillo.Élnomehacenicaso.Siguesucaminoydesaparece,mientrasyosaludoaSusto,quecadadía
estámásrepuestodelaccidente,yCalamarvieneamíenbuscadecariño.Unavezdejoamispreciososperros,entroenlacasayveoqueSimonavienecaminandohacia
mípreocupada.—Ay,Diosmío,Judith—dice—.¿Hasvistolomagulladoqueviene?Cuandoloveaelseñor,se
vaaalarmar.Asiento.ImaginoaEriccuandoloveapero,quitándoleimportanciaaltema,replico:—Tranquila.Estábien.Yasabesqueloschiquillossondehierro.Actoseguido,oigounospasitoscorriendoy,aldarmelavuelta,veoamipequeñoEricqueviene
haciamí.Feliz,locojoentremisbrazosy,besándolo,murmuro:—¿CómoestámiSuperman?ElrestodelatardenoveoaFlyn.Seencierraensuhabitaciónynosale.Consigomanteneraraya
misganasdellamaraEricycontarleloocurrido.Silohago,lodisgustaré,yesmejorquehableconélunavezestéencasa.
Sinduda,lanochepromete;entreelviajequepiensohaceraBilbaoparaqueMikapuedaestarenlabodadesuspadresyloocurridoconFlyn,cuandollegueEric,¡menudofestival!
HabloconMel,lecuentoloocurridoconelcríoyéstaintentaconsolarmey,cuandolecomentolodeBilbao,seapresuraadecir:
—¿AEricleparecebienqueviajes?Singanasdepolemizar,miento:—Sí.Nohayproblema.—Ostras,Jud,puesmevoycontigoyasíaprovechoyvoyaveramiabuela,queestáapenasa
doscientoscincuentakilómetros.—¿Enserio?—Yatedigo.—¿YBjörn?Aloíreso,Melsonríeyañade:—Psicologíafemenina,Jud:leentroamimorenazodiciéndolequelevoyadarlanoticiadela
bodaamiabuela,¡yéltanfeliz!—¿YSamiyPeter?—insisto.—Sequedanconsupadre,cielo.Peteresmayor,ySamiseencargarádevolverlos locosa los
dos.
Encantada,ambasreímosporaquello.Conlopequeñaquees,sindudaSamiseharálareinadelacasaytendráaBjörnyaPeterasuspies,deesonomecabeduda.Y,felizporsucompañía,sonríoyafirmo:
—Yotendríaqueestarenlaferiael juevesporlatarde,todoelviernesyelsábadosóloporlamañana;despuéslotengolibrehastaeldomingo,queregresaremos.
—Puesnosehablemás:sitevasparaBilbao,¡mevoycontigo,queyotambiénnecesitounpocoderelaxdechicas!YeldomingoalquilamosuncocheynosvamosaAsturiasaveramiabuela,¿teparece?
—Genial.Traspasar el restode la tardeconelpequeñoEricyHannahen lapiscina, cuandoPipa se los
acabadellevarparabañarlos,Ericentraencasa.Medaunbesorápido—¡joder,yavolvemosalodesiempre!—ycorreescalerasarribaparavera lospequeños.Semuereporverlosy,cuandoveinteminutosdespuésbaja,memiraypreguntacongestohosco:
—¿PorquénomehasavisadoporlodeFlyn?Vaya...,yaveoquehapasadoporsuhabitaciónaverlo.Comopuedo,lecuentoloocurridoenel
instituto.ElgestodeEricseendureceporsegundos.¿DóndeestáelEricdenuestromaravillosofinde semana? Y, cuando acabo de relatarle todo lo del instituto, murmura descolocándome porcompleto:
—¿MepuedesexplicarporquéeltutordeFlyntehaabrazado?Esomepillapor sorpresa.NomehabíapercatadodequeFlynnoshabíavisto,ni élmehabía
dichonada.Sinduda,elniñoquiereguerraconmigo.—Eric...—empiezoadecir—,Flynmehablómalcuandolleguéalinstituto,yDennis...—¡¿Dennis?!—gruñe furioso—. ¿Tanta confianza tienes con él? ¡Creo que deberías llamarlo
señorAlves,¿no?!Resoploycontranquilidadmurmuro:—Cariño,él...—Meimportaunamierda—mecorta—.¿Porquétienequeabrazarteesetío?Molestaporsutontoreproche,grito:—¡Porquenecesitabaunabrazoome ibaaderrumbarporel tratodeFlyn! ¡Y, aunque te joda,
volveríaaabrazarloenunmomentoasí,porqueese tío,comotú lo llamas,nosehapropasado lomásmínimo,sinoquesólointentabaqueyomecalmase!
ApartirdeeseinstanteseabrelacajadePandoray,comosiempre,nosóloreñimosporloquenoshallevadoaello,sinoquetambiénsalenarelucirotrostemas.
Durantemásdeunahora,Ericyyodiscutimos.Élmereprocha,yolereprochoy,cuandoyanopuedomás,chillo:
—¡Flyn irá al psicólogo loquierasono!—Y, sindejarle responder, prosigo—:Yodioque leimpusierasaMikaqueyonoviajaría.Pero¿quiéntecreesqueeres?
Ericmemira...,memira...,memira. Sumirada de Iceman enfurecidome traspasa, y entoncessisea:
—Tumaridoyeldueñodelaempresa,¿teparecepoco?Esacontestaciónmesubleva. ¡Seráchuloel jodío alemán!Y,dispuestaaser tanchulacomoél,
replico:—Pues,aligualqueatitesurgenimprevistos,enestaocasiónmehansurgidoamí,yeljueves
meiréalaFeriadeBilbao.—¡¿Qué?!—bramacomiéndomeconlamirada.—Loquehasoído.Mikanopuedeyyoiréensulugar.—Eltratoeraquenoviajarías.Sonríoconmaldad,conesamaldadqueséquelosacadesuscasillas,yluegoafirmo:—Losé,peroaligualqueenocasionestúmeprometesregresarprontoacasaydespuéstienes
queirtedeviajeaEdimburgo,yotambiénpuedotenerimprevistos,¿ono?Ericcomienzaa soltarpor suboca saposyculebras. ¡Quémalhabladoescuandoseenfada,y
luegodicequesoyyo!Seniegaaaceptarqueyoviaje,peroyo,sinbajarmedelaburra,reiterounayotravez:
—Voyair,ynadadeloquedigasmeharácambiardeparecer.Mialemán,furioso,usaentoncessutácticamássuciaydecidesacarmetotalmentedemiscasillas.
Alfinal,elpuñeteroloconsiguey,cuandomerecuerdaladetencióndelapolicíaeldíaquesalíconMel,incapazdeentenderqueseatanbicho,lomiroygrito:
—Pero¡¿aquévieneahoraquemesaquesarelucireso?!—Porque todavía no hemos hablado de ese día. De cómo desapareciste sin permitirme saber
dóndeestabasydecómoterminasteisdetenidasporlapolicía.—Mira,Eric—locorto,cansadadeoírlo—.¡Vetealamierda!Mi rabia,migestoymivoz lehacensaberqueyahaconseguido loquebuscaba.No lehablo.
Sóloloobservomientrasélselimitaamirarmeconsucaradeperdonavidas.Y,cuandoherespiradoycontadohastadoscientosporquehastacienerapoco,siseo:
—¿Sabes,Eric?LopeordetodoesquetúyyodeberíamosestarhablandosobreFlyn—y,antesdequeéldiganada,añado—:Pero,claro,comosiempre,elmocosoyasehaencargadodecambiarladireccióndeladiscusión,¿verdad?
Ericnoresponde.Sabequeenciertomodotengorazóny,trassalirdeldespacho,oigoquellamaaSimonaylepidequeaviseaFlynparaquebaje.
CuandoEricentraenlaestanciaysesientaensusilla,nonoshablamos.Siemprepasaigual.Elniñolapifia,elniñoledalavueltaalatortillay,alfinal,Ericseenfadaconmigo.
¿Cuándovaacambiareso?Cincominutosdespués,Flynentraeneldespacho,Ericselevantadesusillóndesupermegajefazo
y,acercándoseaél,lepreguntaexaminándoleelojoylaboca:—¿Teduele?Elcríoniegaconlacabezaymimaridosedirigeamíydice:—¿Porquénolohasllevadoalhospital?Incrédulaporsupregunta,replico:—Porquenoesgrave.Sólosonmagulladuras.—¿Ahoratambiéneresdoctora?Suprovocacióndelantedelcríomesubleva,meirritaotropocomás,yrespondo:—¿Sabes, Eric?Creo que deberías enfadarte con tu hijo, no conmigo.No soy yo quien se ha
pegadoconalguienenelinstituto,nitampocoalaquehanexpulsado.Mispalabrasparecendespertarloy,volviendolavistahaciaelelmuchacho,quenosobservaen
silencio,por fin comienzaa echarleunbuen rapapolvo.Se lomerece,yyo, impasible,me siento,observoyescuchosinmoverme.Notengonadaquedecir.
EnunmomentoenqueErichaceunsilencio,Flynmemiraymesuelta:—¿Disfrutasconesto?Bueno...,bueno...,bueno...Pero¿dequévaelmocoso?Clavomis ojos en Eric en busca de alguna palabra de apoyo y, al ver que ni semolesta,me
levanto,meacercoalniñatoy,contodamichulería,respondo:—Nitelopuedesimaginar.—Judith,Flyn,¡bastaya!—gruñeEric.El críome lanza la fría sonrisade losZimmerman,yyo,queyamáscalentitanopuedoestar,
murmuro:—¿Sabes,Flyn?Elqueríeelúltimoríedosveces.—¡Judith!—protestaEric.Miniveldeaguanteytoleranciavuelveaestarbajoceroy,comonoquieroarrancarleslacabeza
a ninguno de aquellos dos,me doy la vuelta, salgo del despacho yme encamino ami habitación.NecesitounaduchaquemedespejeymeenfríeoalfinalallívaaarderTroya,aunqueestemosenAlemania.
Cuandosalgodeladucha,meencuentroaEricsentadoenlacama.Comosiempre,sugestoyanoeseldeminutosantes,perocomonomeapetecehacermigasconelenemigo,nolomiroyéldice:
—Jud...,venaquí.Mehagolasorda,¡lasueca!,¡lachina!Yél,alverquenopiensohacerlecaso,selevanta,camina
haciamíy,cuandovaatocarme,siseoconfrialdad:—Niseteocurratocarmeporqueesloúltimoquemeapetece.Noséquénaricestepasaonos
pasa últimamente a los dos, pero está visto que algo no va bien, y ya estoy harta de que tú digas«¡ven!»yyo,comounaidiota,teobedezca.
—Jud...—Estoy enfadada, ¡muy enfadada contigo!—siseo rabiosa—. Creía que, tras el bonito fin de
semana que habíamos pasado enVenecia, nuestro a veces complicadomundo podría ser un pocomejor, pero no, ¡todo sigue igual! Continúas comportándote como un energúmeno conmigo antecualquiercosaquetengaqueverconFlyn,¡joder,quelohanexpulsado!Y,porsupuesto,norespetasqueyo,comomujertrabajadora,tomeunadecisióncomolaquehetomadodeiralaFeriadeBilbao.Asíque¡nometoques!Ydéjameenpaz,porqueloúltimoquenecesitoahoramismoesati.
Aloírmedeciresocontantadureza,Ericdaunpasoatrás.Leagradezcoeldetalley,unavezmepongomivestiditoazulónyunoscalcetinesdeandardescalza, ante suatenta,desconcertaday fríamirada,salgodelahabitaciónconpasoraudoysinmiraratrás.
Cierrolapuertayrespiroy,agrandeszancadas,bajohastalacocina.Estáoscura.Nohaynadie.SimonayNorbertyaestánensucasita,ymesientoenunasillaparacompadecermedemímismasinencenderlaluz.
¿Cómoveinticuatrohorasantespodíamosestarbesándonosapasionadamenteyahorapodemos
estarasí?¿Porquéelfindesemanaparecíaentendertodoloqueledijeencuantoalniñoyamitrabajoy,
ahora,todovuelveaserigualqueantesdenuestracharla?Duranteunbuenratomiro,observomijardíndesdelaventanayrecuerdolobonitoquesepone
enprimavera.Piensoenmipadre.Intento imaginarquémediríaquehicieraenunasituaciónasíyresoplo.Resoplodefrustración.
Elrestodelasemana,ambosestamosfríoscomoelhielo.LapobreSimonanosobserva,nodicenada,perosedacuentadetodoy,consusojillosplagadosdeexperiencia,mepidecalma...,muchacalma.
Asíestamoshastaeljuevesporlamañana,quesalgodelbañoyEricmeestáesperando.Cruzamosunarápidamirada,hastaqueélsevuelvey,alvermimaletasobrelacama,dice:—HellamadoaMelylehedichoquesepaseporcasa.Lomirosorprendida.—¿Porqué?Congestoserio,Ericmemiray,trascalibrarsuspalabras,indica:—Hecanceladovuestrosvueloscomerciales.IréisdirectamenteaBilbaoennuestrojetprivado.
Norbertosllevaráalaeropuerto.Voyareplicarcuandoañade:—EsunatonteríaquevayáisdeaquíaBarcelonaparaqueluegoallítengáisquetomarotrovuelo
paraBilbao.Pero,porsupuestopuedesprotestar—diceclavandolamiradaenlamía—.Vamos,eslomínimoqueesperodeti.
Durantevariossegundos,ambosnosobservamos.Nosretamos.Llevamosunosdiítasmalos,muymalos,ydecidomordermela lenguaaunariesgodequeme
envenene.EnciertomodomegustaireneljetdirectamenteaBilbao,algoqueyonolehepedidoperoque
élhapensadopormí.Segundosdespués,cuandovequenovoyadecirnada,añade:—LlámameoenvíameunmensajecuandohayáisaterrizadoenBilbao.—Vale—afirmo.Y,sinmás,sedalavueltaysaledelahabitaciónconpasorápidoydecididodejándomeconla
bocaabiertacomounatonta.Durantevariossegundos,nomemuevo.¿Sehamarchadosindarmeunsimplebeso?LaindiferenciadeEriccadadíamematamás,perocomonoestoydispuestaahundirme,termino
devestirme.CuandooigoaMel,bajoconmimaletay,trasdarunbesoamispequeños,nosvamos.Memarchosinmiraratrás.
39
TrasaterrizarenelaeropuertodeBilbao,MelyJudithnosesorprendieroncuando,alsalirpor lapuerta,unhombredemedianaedadygestoamablelasmiróy,dirigiéndoseaJud,preguntó
—¿SeñoraZimmerman?Ellaasintió,yelhombreleindicóconunaencantadorasonrisaaltiempoqueletendíalamano:—Soy Antxo Sostoa. Su marido, el señor Zimmerman, llamó a las oficinas para indicar que
veníanustedesalaferiaynecesitabanuncochequelasrecogieraylasllevaraalhotelCarlton.Las chicas intercambiaron una mirada. Como siempre, Eric estaba en todo y, sin dudarlo, se
montaronenelvehículoparairhastaelgranymajestuosohotel.En el camino, Mel llamó por teléfono a Björn y, mientras hablaba y reía con él, Judith
simplementeescribióensuteléfono:«YaestoyenBilbao».Pocodespués,recibióunfrío«Ok».Jud suspiró ymiró por la ventanilla.Odiaba estar amalas con Eric, pero estaba visto que no
podía hacer nada. Sólo necesitaba despejarse un poco y disfrutar conMel de un fin de semana dechicas.Nopedíamás.
Unavez llegaronalpreciosohotelydespuésdequeAntxo les indicaraque lasesperaríaen lapuertaparallevarlasalaferia,subieronrápidamentealahabitación,dejaronlasmaletasybajaronalcoche.Noqueríanperdersenada.
Enlaferia,JudithpudoverqueMüllerteníaunestupendostandconsusproductos.AllísaludóavariaspersonasqueconocíadecuandotrabajabaenMadrid,yéstossesorprendieronalverlaallíenrepresentacióndesumarido.
Pocodespués,ytrassaludaratodoslosempleadosdeMüller,MelsefueadarunavueltaporlaferiayJudithsepreocupódebuscaraldirector,yaquequeríasaludarlo.
Mientrasdabaunpaseoporlaferia,Meldeprontoviounacaraconociday,acercándose,dijo:—¡¿Amaia?!Laaludidasevolvióaloírsunombrey,parpadeando,exclamó:—Ahíva,lahostia,Melania.Pero,tía,¿quéhacesaquí?Rápidamentelasdosmujeresseabrazaroncongustoycomenzaronaahablar.Mientrastanto,Judithhabíaencontradoaldirectordelaferia,elseñorImanolOdriozola,alque
sepresentócomolamujerdelseñorZimmerman,eldueñodeMüller.Trashablarconélomitiendoel incidentedelañoanterior,Judithseencargódedejarlemuyclaro lo importantequeeraparasuempresa estar en aquel evento.Aquello le gustó al hombre, y ella enseguida supoque se lo habíametidoenelbolsillo.
Amediodía, Jud comió un simple sándwich como el resto de los empleados; había ido allí atrabajar. Por la noche, cuando cerraron la feria, el director pasó por el stand de Müller yamablemente invitó a Judith y a Mel a cenar a un precioso restaurante del Casco Viejo, donde
degustaronunosincreíblesplatos.Unavezacabadalacena,elhombre,queestabaencantadoconelhechodequelapropiaesposa
delsuperjefazohubieraidoalaferiaenrepresentacióndesuempresa,lasacompañóalhotel.Cuandoélsemarchó,Judithledijoasuamiga:
—CreoquelosproblemasdeMüllerconeldirectordelaferiasehansolucionadodeporvida.Melsonrióy,agarradadesubrazo,afirmó:—Eres una excelente relaciones públicas ¿lo sabías?—Jud rio, y ella añadió—: Eric te va a
comerabesoscuandoregreses.Judith dibujó una forzada sonrisa en su rostro. No le había contado nada de lo ocurrido a su
amigay,guiñándoleelojo,replicó:—Seguroquesí.Notequepalamenorduda.Duranteunrato,ambashablaronsobrelaferia,hastaqueMeldijo:—¿Sabes?Meheencontradoconunaantiguaamiga.—¿Aquí,enBilbao?Melasintióencantada.—FuenovietadeunprimomíodeAsturias,hastaque lodejóporatontado.Alparecer, trabaja
paranoséquélaboratorioyestáenlaferiatambién.Mañanatelapresento,¿vale?—Vale—dijosuamigasonriendo.
Aldía siguiente, Judithmadrugópara ir a la feria,mientrasMel sequedabaun ratomás en lacama.Ellairíamástarde.
Durantetodoeldía,comomujerdeljefazo,JudatendióatodoaquelqueseacercabaalstanddeMüllery,cuandoMelllegó,seencargóderepartirpublicidadalosasistentes.Alasocho,cuandolaferiayacerraba,unajovenrubiaseacercóaellas.
—Judith—dijoMel—,tepresentoaAmaia.—Eeepa,¿quétal?—soltólarubia,ytrasdarleunpardebesosaJud,añadió—:Vaya...,vaya...,
conquetumaridoeseltodopoderosodueñodeMüller...EllaasintióyAmaia,cogiéndolasalasdosdelbrazo,dijo:—Vamos...,osllevodepinchosporBilbao.Durante horas rieron, comieron y bebieron. Si algo se hacía bien en Bilbao era comer. Todo
estaba exquisito. La cocina vasca era unamaravilla, y tanto Judith comoMel lo disfrutaron de lolindo.
Esanoche,cuandollegaronasuhotel,Amaiacomentóantesdemarcharsealsuyo:—Oye, ¿por qué no os venís conmigo mañana a mi pueblo?—Las chicas la miraron y ella
insistió—: He quedado con mi cuadrilla y unos amigos para ir al pueblo de al lado, Elciego, adisfrutardeunmaridajeestelar.
—¿Maridajeestelar?—dijoMelriendo—.Pero¿esoquées?Amaiasoltóunarisotaday,congestodeintriga,cuchicheó:—Ah,no...,esonooslodigo,asíospicarálacuriosidadyvendréis.MelyJudithintercambiaronunamirada,yAmaiainsistió:
—Venga,veníos.OspodéisquedarenmicasadeElvillaradormir.Allíhaysitiodesobra.Judithsonrió.Parecíabuenaidea,yMel,alverelgestodesuamiga,afirmó:—Deacuerdo,¡nosapuntamos!LastresrieronporaquelloyJudith,animada,dijo:—Vale.Entonces lomejor será quemañana alquiles un cochey, desde allí, el domingopor la
mañananospodemosiraAsturiasparaveratuabuela,¿teparece?—¡Perfecto!—asintióMelfeliz.Esanoche,cuandoMelseestabaduchandoenelhotel,Judithllamóasucasa.Simonarápidamentecogióelteléfonoy,trassaludarlaconcariño,leindicóquelosniñosestaban
bienydurmiendo.Cuando lepreguntó siqueríahablar conEric,queestabaeneldespacho, enunprincipioJuddudó.¿Deberíahablarconél?Sinembargo,lanecesidadquesentíadeoírsuvozeratangrandequealfinalasintió.
Pasadosunossegundos,oyólaroncavozdeEric:—Dime,Judith.Volvíaallamarlaporsunombrecompleto.Sutonoerafríoeimpersonale,intentandodarleesa
calidezqueellanecesitabayéllenegaba,Judlosaludó:—Hola,cariño.¿Quétaltodoporahí?—Bien,¿ytú?Ellasuspiró.Ericnoseloibaaponerfácil,yrespondió:—Laferiavaestupendamente,elseñorOdriozolatemandasaludos.Ericasintió.ÉlmismohabíahabladoaquellatardeconImanolOdriozolayéstenohabíaparado
dedecirleunayotravezloencantadoraqueerasumujeryelbuentrabajoqueestabahaciendoenlaferia. Pero Eric no se lo comentó a Judith. No quería que se sintiera vigilada y se lo pudierareprochar.
Elsilencioseapoderóentoncesdelalíneatelefónica.Estabaclaroquelabrechaentreelloseracadavezmayor,porloqueJudithdijo:
—Mañana,cuandoacabeenlaferia,Melyyoiremosconunaamigasuyaaunpuebloque...—¿Aquépueblo?Ellalopensó.Norecordabaelnombre,yrespondió:—Laverdadesqueahoramismonomeacuerdodelnombre...—¿Cómopuedesiraunsitiodelquenorecuerdaselnombre?—gruñóEric.Judith cerró los ojos.Hablar con él no había sido buena idea y, perdiendo parte de su fuerza,
murmuró:—Bueno,lociertoesque...—Mira,mejornocontinúes—lacortóélsindejarlaterminar.Cansadadesufrialdad,Judithsesentóenlacama.—Eric,nomegustaestarcontigoasí.—Túlohasprovocado.Ellasuspiró.Elalemánnoseloponíafácil.—Eric, cuando tú viajas y llamas a casa, por muy molesta que yo esté, procuro ser amable
contigoy...
—Sihasllamadoparadiscutir,nomeapetece.¿Quieresalgomás?SuinsensibilidadlerompióelcorazónaJud.¿Deverdadnoibaaserniunapizquitaamable?¿Enserioquenolaañorabatantocomoellaloañorabaaél?Y,singanasdeprolongaraquello,sacudiólacabezaymurmuró:—Sólollamabaparasabercómoestabais.Sóloparaeso.Adiós.Y,sindecirnadamás,cortó lacomunicacióny tiróel teléfonosobre lacama.Loquenosabía
Juditheraque,amuchoskilómetrosdedistancia,unhombrellamadoEricZimmermanmaldecíaysearrepentíaporsufaltade tacto,perosumalditoorgullo le impedíavolvera llamara lamujerqueamaba.
Alsalirdeladuchayverasuamigacongestopreocupado,Melfuehastaellaylepreguntó:—¿Quéteocurre?Judith,necesitadadehablar,leexplicólaverdad.—Pero¿porquénomehascontadoantesloquepasaba?—preguntóMelmirándolafijamente.Judithseretiróelpelodelacaraysuspiró.—Nolosé.Quizápenséque,sievitabahablardeello,loolvidaríaylascosassesuavizaríanhasta
regresaracasa.Pero,despuésdehablarconEric,sientoquetodovademalenpeor.YanoessóloporFlyn,nolepuedoecharlasculpassóloaél,sino...
—Jud,mírame—lacortóMelcogiéndole lasmanos—.Sihayuna relaciónentredospersonasqueyosiempreheconsideradobuenayverdadera,es la tuyayladeEric.Sinduda,estáispasandoporunamalaracha.Todaslasparejasenunmomentodadopasanporello,peroestoyconvencidadequelosuperaréis.Yaveráscomosí.
Judithsonrióy,meneandolacabeza,respondió:—QuieroaEricyséqueélmequiereamí,peroúltimamentesomosincapacesdecomunicarnos.—Y si encimahay un cabroncete de niño a vuestro lado dando infinidad de problemas que os
sobrepasan,sindudalacosanopuedeiramejor.Judsuspiró,yMel,tratandodeanimarasuamiga,añadió:—Vamos...,veadarteunaducha.Yaveráscomoluegotesientesmejor.Con una triste sonrisa, Judith se levantó, cogió una toalla limpia y, guiñándole un ojo,
desapareciótraslapuertadelbaño.Melesperóunossegundosy,cuandooyócorrerelagua,cogiósuteléfonoy,trasmarcar,dijo,
conscientedequelatenienteParkernuncalaabandonaría:—Hola,Eric,soyMel.¿Cómoerestanrematadamentegilipollas?
40
Aldía siguiente, traspasar Judith lamañana trabajandoen la feria,AmaiayMel laesperabana lasalidaconlasmaletasenuncochedealquiler.
Entrerisasybromas,lastressedirigieronhaciaelpueblodeAmaia,ElvillardeÁlava,mientraslajovenreíacontándolesqueallíhabíaundichoquedecía«ConelvinodeElvillar,beberycallar».Riéndoseestabanporaquellocuandoésta,antesdellegar,tomóundesvíoydijo:
—Osvoyaenseñarunacosaquemefascinademipueblo.Mel y Judith sonrieron. Estaban charlando cuando de prontoAmaia paró el coche. Bajaron, y
JudithyMel,conunosojoscomoplatos,señalaronalfrente.—Ostras,quépasada—murmuróJudith.—Pero¿estoquées?—preguntóMel.Amaiasonrió.Eraunadelascuriosidadesdelpuebloy,observándolas,dijoconorgullo:—Esundolmeno,comodiríanlosexpertosenlamateria,unmonumentomegalíticofunerario,
aunqueaquísehallamadodetodalavidala«Chaboladelahechicera».Boquiabiertasalveraquellotanantiguoyfueradelocomún,laschicasseacercaronaél,yJudith
preguntó:—¿Yporquéselellamaasí?Amaiaseencogiódehombrosy,tocandounadelaslegendariaspiedras,respondió:—Segúnmecontabamiabuela,sunombreevocaunaleyendaquelorelacionabaconelhogarde
unahechiceraalaqueenlamañanadeSanJuanselaoíacantarypregonar.—Uf...,semehanpuestolospeloscomoescarpias—semofóMel,enseñándoleselbrazo.Judithsuspiróe,inconscientemente,pensóenEric.Aéllehabríaencantadoverytocaraquello.
Legustabamucholeer librossobreesaclasedemonumentosmegalíticos,yseentristecióalsentirquenopodíacompartirlodescubiertoconél.
—LaChaboladelaHechicera—prosiguióAmaia—fuedescubierta,sinomeequivoco,en1935apesardeseralgoprehistórico,yposteriormentefuerestaurada.—Luego,bajandolavoz,cuchicheó—:También tengoquedecirosquemuchosde losquevivimospor losalrededoreshemosvenidoaquíaecharalgúnpolvetequeotrosobrelaspiedrasdeldolmen.
LaschicasrieronyentoncesAmaiaañadió:—Aunque,poniéndonosserias,osdiréqueesunodelosdólmenesmásimportantesdeEuskadiy
el mejor conservado de la zona. Pero si hasta se estudia sobre él en algunas universidadesnorteamericanas.
—Quépasada—murmuróJudithtocandolaspiedras.—Venga,tenéisquevenirparalasfiestasenagosto—afirmóAmaia—.Secelebraunaquelarre,
con una representación con un macho cabrío, cabalgata de brujas, títeres, hacemos una gran
queimada,ytodoesoseacompañaconlamúsicadelatxalapartayotrosinstrumentos.—Quéchulada.CreoqueaBjörnlegustaría—afirmóMel,tocandolaspintorescaspiedras.Aloírla,Amaiasemofó:—Vayanombrecitomásraroquetienetuchurri...Melsonriódivertidayrespondió:—PuesllámaloBlasito,queescomolollamamiabuela.LacarcajadadeAmaiayJudithnosehizoesperar,ylavascareplicó:—Siesquetuabuela¡eslahostia!¡Cuidadoconelmokordo!MelyJudsemiraron.¿Mokordo?¿Quéeraeso?Alvercómolamiraban,Amaiaseñalóunagrancacadevaca.—Enmitierraaesolollamamos¡mojón!—contestóJudith.—Vayaconversacioncitamáschula,¡¿eh?!—dijoMelriendodivertida.Durantevariosminutos,lastreschicashablaronjuntoaldolmendeunsinfíndediferenciasentre
lasdistintascomunidadesautónomas,hastaquelavasca,mirándoseelreloj,dijo:—Creoqueesmejorquenosvayamosoalfinalllegaremostarde.Apenada, Judithmiróporúltimavez aquellaspiedrasy, tras sacar sumóvil, les hizouna foto.
AlgúndíalegustaríatenerlaoportunidaddeenseñárselaaEric.Sinduda,legustaríaveraquellugar.Veinte minutos después, descargaron las maletas en casa de Amaia. Mientras sacaba su ropa,
JudithvioqueMelhablabaconBjörnporteléfono.Leencantóoírlareírybromearconél.Almenos,aalguienleibabienenelamor.
Mirándosealespejo,sequitóelvaqueroquellevabaylacamisaysepusounafaldahippynegrahastalospiesyunacamisetarosafuerte.Comonoteníaganasdepeinarse,serecogióelpeloenunacoleta altay,probándose la cazadoravaqueraparaver cómoquedaba, semiróal espejo, sonrióymurmuróalveralaJudithdeantaño:
—¡Sí,señor,éstasoyyo!Una vez las tres muchachas terminaron de vestirse, montaron en el coche de alquiler y se
dirigieron a Elciego, un precioso pueblecito que estaba a escasos kilómetros de Elvillar. Allí seencontraron con la cuadrilla de Amaia y unos amigos de éstos y, tras ser presentadas, todos seencaminaronhacialasBodegasValdelana.
Alentrarenaquel increíblesitio, Judith lomiróconcuriosidad.Comodiría supadre,el lugarteníasoleraehistoria.¡Quémaravilla!
Minutosdespués,unhombrequereunióalgrupoleshablósobrelahistoriadelasbodegasyleshizounavisitaguiada.
Cuandoacabólavisita,todosmontaronensusvehículosparticularesyfueronaladirecciónqueelguíaleshabíadado.Allílosaguardabanparacontinuarconlaparticularexperiencia.
Al llegar al punto indicado los esperaba un amable enólogo, y con él fueron hasta unimpresionantelugarllamadoel«BalcóndelasVariedades»,dondecontinuaronconlavisita.
Duranteunrato,todosdisfrutaronpaseandoporlosviñedos,hastallegaraunsitiodondehabíapreparadasvariasmesasconmantelesinmaculadamenteblancosysillas.
—Quélugarmásbonito—murmuróMelalverlo,yJudithasintió.Losasistentessesentaronentoncesparaverelatardecer.
Lapuestade sol allí erapreciosay, cuandooscurecióy aparecieronpocoapoco las estrellas,comenzóaquellodeloqueAmaialeshabíahablado.Elenólogolesexplicóentoncesqueelmaridajeestelarconsistíaenconjugarcincocopasluminosas,cincovinosycincoleyendasdeconstelaciones.
EscucharonaaquélhablarlesdecómolascincoestrellasllamadasArturo,Vega,Altair,Polarisylas que configuran laCoronaBoreal, además de tener sus increíbles leyendas, habíanmarcado elmundode lavid.Acontinuación,cuandopusieronanteellosunascopasde luz, todossonrieronaloírlodecir:
—Señoras,señores,apartirdeesteinstante,relájenseydéjensemimarporelvino,lanocheylasestrellas.
Aloíreso,JudithmiróconpicardíaasuamigaMelycuchicheó:—Sivesquemepasoconelvino,párame,quenoeslomío;¿deacuerdo?Melasintióy,enconfianza,murmuróguiñándoleelojo:—Lomismodigo.Conlaayudadeunprogramainformático,elenólogocapturólaimagendeaquellasestrellasy
las proyectó en una gran pantalla estratégicamente colocada. Con cada estrella, aquél narraba suleyenda,yJudith,alterminardeescucharlahistoriadeVegayAltair,miróemocionadaasuamigaysusurró:
—Quéhistoriatanbonitaytristealavez.—Melasintió—.PobreVegaypobreAltair.¡Ofú,quépenita!
Al ver aquello, Mel le quitó de la mano la copa de vino a su amiga y, mirándola divertida,preguntó:
—Judith,¿estásbien?Ellaasintióy,recuperandosucopadevino,murmuróparaquenadielaoyera:—Tranquila.Essóloqueañoroamicabezón.Melsonrió.Sinduda,aellatambiénlehabíallegadoalcorazónlatristehistoriadeAltairyVega
y,chocandosucopadeluzconladesuamiga,dijo:—Despeja la mente y, como ha dicho el enólogo, déjate mimar por el vino, la noche y las
estrellasyolvídatedelresto,incluidoelcabezón.La joven señoraZimmernan asintió.Su amiga tenía razón.Debíadisfrutar de aquella increíble
experienciayolvidarsedel restodelmundo.Por loque,prestandoatencióna lanueva leyenda, secentróenloquesecontabaenreferenciaalaestrellaArturo.Sinduda,ningunadeaquellasestrellashabíatenidounabuenavida.¡Pobrecillas!
41
Conunacopadevinoenlasmanos,miroelcielo.Hafinalizadolaincreíbleexperienciadelmaridajeestelaryestoyrelajada.Hace fresquito, pero la temperatura es tan agradable que da gusto estar sentada al aire libre
disfrutandodelatranquilidadenunanochedelunallenaenestesitiotanespecial.Nuncamehagustadoelvino,quienmeconocesabequeprefierounacoca-colaconhielo,peroel
caldodeesasbodegasmehaenamoradoyhastalehepilladosupuntitorico.CreoquemellevarévariasbotellasparaEric.Seguroqueélloapreciamuchomásqueyoy,si
mepermite,lecontarélaexperienciatanincreíblequehevividoenelmaridaje.Piensoenmishijosysonrío.Pensarenelloshacequemesientafeliz,aunque,cuandomeacuerdo
de Flyn, mi sonrisa se desdibuja. Echo de menos pasar horas con él hablando sobre música ocualquierotracosa.Pero,bueno,lasituacióneslaqueesy,anteeso,pocopuedohaceryohastaqueelniñodecidaincluirmedenuevoensuvida,siesquelohace.
También pienso en Eric. En mi rubio y grandote alemán. ¿Qué estará haciendo ahora? ¿Seacordarádemí?
UnascarcajadasmedevuelvenalarealidadytengoquereírcuandoveoamiamigaMelmuertaderisaadosmetrosdemíescuchandoloqueunachicadelacuadrilladeAmaiacuenta.
—Verdaderamente,ellugaryelvinosonmaravillosos,peroséquetemueresporunacoca-colaconmuchohielo.
Encuantooigoeso,mirespiraciónsecorta.No,nopuedeser...Y,dándomelavuelta,recibounadelasmayoressorpresasdemividacuandoveoaescasoscentímetrosdemí,depie,vestidoconunjerseyazulónyunosvaqueros,alhombrequemedaomequitalavida.
Ericestáamiladoy,bloquedaporlasorpresa,consigomurmurar:—Pero...pero¿quéhacesaquí?Mialemán,ampliandosusonrisaalvermibuenapredisposición,sesientajuntoamíenlasilla
librequehayamiderechay,sinresponderamipregunta,acercasuscálidoslabiosalosmíosymechupa primero el superior, después el inferior, yme da unmordisquito. A continuación, lo oigosusurrar:
—Hevenidoaveramipequeñayapedirledisculpasporsertangilipollas.Ay,quemelocomo,¡ay,quemelocomoooooooooooooooooo!Desde luego, cuando quiere sorprenderme, mi gilipollas particular sabe hacerlo muy bien y,
cuandomeveocapazdeabrirlabocaparaarticulardospalabrasseguidas,dice:—Cariño,haycosasquemesiguenenfadandodetodoloquehaocurridoyquetendremosque
hablarunavezregresesacasa,peroteníasrazónencuantoalhechodeque,siemprequeyoestoydeviaje y te llamo por teléfono, tú eres mil veces más agradable que yo, por lo que he venido a
solucionarlo.Encantadaconloqueheoído,sonrío.Esostontosdetallessonlosquesiempremehanenamorado
deEric.—¿Ylosniños?—preguntoentonces.—Encasa.—Y,trasecharunvistazoalreloj,afirma—:Eimaginoquedurmiendoaestashoras.Olvidándomede las personas que están a nuestro alrededor, con deseo agarro el cuello demi
rubialesylobeso.Lodegusto,lodisfrutoy,cuandoporfinsientoquetengoquesepararmedeélolodesnudaréallímismo,pregunto:
—¿Cómosabíasdóndelocalizarme?Conunaponzoñosasonrisa,miamormiraendirecciónaMel,yella,alverquelamiramos,nos
guiñaunojo.—Tenemosunatenienteconmuymalalechequeanochemehizoverloburroeidiotaqueestaba
siendoconmipreciosamujer—explicaEric—,yunavezcolgué,decidí resolverlo.Por eso, estamañanahehabladoconelpilotodenuestrojety,trasquedarconél,mehallevadohastaBilbao.Allí,tirandodecontactos,unamigoque tieneunaempresadehelicópterosmehaconseguidounpilotoprivadoquemehatraídohastaaquíyquemellevarádevueltaaBilbaodentrodetreshorasparaqueregreseacasaantesdequelosniñossedespiertenysepanquesupadrehahechoestalocuraporsumadre.—Sonrío..., no lopuedo remediar,y entoncesmurmura—:Porcierto, ¿sabíasquecercadeaquíhayunhelipuerto?
Estoymásfelizqueunaperdizy,encantadaconloquecuenta,susurro:—No.Peroconquelosupierastú,mevale.Noscomunicamoscon lamiradacomosiemprehemoshechoy,enamorada,paso lamanocon
delicadezaporeserostroquetantoamo.—Teechabademenos—digo.Mialemán,porqueesmialemán,aunqueavecesquieraarrancarlelacabeza,sonríe,seacercade
nuevoamislabiosyreplicamimoso:—Seguroquetantocomoyoati,micorazón.Comodosimanes,nuestroslabiossesellandenuevo.Oh Dios..., qué placerrrrrrrrrrrrrrr... Entonces, una tosecita a nuestro lado hace que nos
separemos,yMel,congestodivertido,dice:—Estoyfelizporvosotros,perolaenvidiamecorroe.Ambosreímosaloírla,yEricmurmuramirándola:—Graciasporlallamadayportuspalabras.Melasmerecía.EncuantoaBjörn,habríavenido,ya
losabes,peroestatardeteníaplanesconPeteryKlaus.—Losé,guaperas...,yporesoseloperdono—ríeMel.Felizporsuspalabras,dirijomimiradaamibuenaamigay,guiñándoleunojo,digo:—Gracias.Melríemeneandolacabezayreplica:—Quesepasquemehacostadosudorylágrimasocultartequesabíaqueveníaparaacá.De nuevo, ambas sonreímos, y entonces ella, tras sacarse las llaves del coche del bolsillo
delanterodelpantalón,dice:
—Aver,tortolitos.Sonlasdoceydiezdelanoche.Amaiayyonosquedaremostomandoalgoenestepuebloconsucuadrilla.¿Hastaquéhoraestarás,Eric?
Mialemán,quenosueltamimano,dice:—Hequedadosobrelastresymediadelamadrugadaconelpiloto.¿Nosvemosenelhelipuerto?—¡Perfecto! —afirma Mel. Eric coge las llaves que ella tiene en la mano, y mi amiga, sin
soltarlas,nosmirayañade—:Disfrutaddeltiempoqueestéisjuntosynodiscutáis.Miamoryyosonreímos.Loúltimoquequeremosesdiscutir.—Asusórdenes,teniente—diceEriclevantándose—,noperdamosmástiempo.—¡Agur!—gritaAmaiaconunasonrisa.Delamanoyconprisa,michicoyyonosdisponemosasalirdelasincreíblesbodegasy,cuando
llegamosalapuerta,Ericsepara,meobservaypregunta:—¿Adóndevamos?Meentra la risa.Ningunode losdossabeadónde irenese lugar,perodeprontosemeocurre
algoy,quitándolelasllavesdelasmanos,leguiñounojoydigo:—Montaenelcoche.Tevoyallevaraunsitioquetevaaencantar.Mediahoradespués,trasperdermeporlacarreteraquevaaElvillar,cuandoparoantelaChabola
de la Hechicera, el monumento megalítico, Eric lo contempla sorprendido y susurra al verloiluminadoporlaluzdelalunaylosfaros:
—Quémaravilla.Fascinada,echoelfrenodemano,apagolaslucesdelcocheysalimosdeél.Alhacerlo,observo
quealfondohayotrovehículoaparcadoconlaslucesapagadas.Sonrío.Sinduda,loquehaceneslomismoqueestoydeseandoyo:¡sexo!
Denuevovuelvoamiraramialemán,queestáflipadoanteaquellaspiedras.—Sabíaqueteibaagustar—comentosatisfecha.Con felicidad en la mirada, mi chico agarra mi mano, nos acercamos hasta el dolmen y lo
tocamos.Ensilencio,nuestrasmanossepaseanporaquellasmágicaspiedrasmientrasleexplicolascuriosidadesqueAmaianoshacontadohorasantesyEricmeescucha,hastaquesudeseonopuedemás,meacercaélymebesa.
Unaveznuestroslabiosseseparan,Ericmemiraydice:—Noséquénosestásucediendoúltimamente,peronoquieroquesigapasando.Tequiero.Me
quieres.¿Quénosocurre?—Norespondo.Meniegoahacerlo,yentoncesoigoquedice—:Apartirdeesteinstante,seréyoquienseocupedeFlyn;iráalpsicólogoy...
Resoplo.LoquemenosmeapeteceenestemomentoeshablardeFlyn.—Creoqueesmejorquedejemosesetemaparacuandoestemosencasa—replico—,noseaque
digamosalgoquenonosgusteyjorobemoselmomento.Túyyosomosespecialistasenello.Miamorasiente.Hundelosdedosenmimelenaoscura,quetantolegusta,yañade:—Tienesrazón,peroteprometoque...Nolodejocontinuar.Letapolabocaconlamanoydigo:—No,Eric.Noprometascosasque luegoeneldíaadíanopuedascumplir.Si lohaces, sime
prometesahoraalgoyluegoloincumples,teloecharéencara,yenestemomentonoquieropensarenello.Ahoranoquieropensarenotracosaquenoseamostúyyo.Noquierohablar.Sóloquiero
quememimes,quemebesesyquehagamoselamorcomonecesitamosycomonosgusta.Michicoasiente,pasealoslabiospormifrente,pormicuello,pormismejillasy,cuandoyame
tienecardíacaperdida,murmurasoltándomelacoleta:—Deseoconcedido,pequeña.Apartirdeeseinstante,séquetantoélcomoyoperderemoslarazón.Nonosimportaquiénnospuedaverenlaoscuridaddelanoche.Deseosademimarido,apoyola
espaldaeneldolmenynosbesamoshastaquesientocómosusgrandesmanossemetenpordebajodemicamisetay,unavezmesacalospechosdelsujetador,loscomienzaatocar.
Mi ansiedad crece tan rápidamente como la de él, mientras disfruto de cómome pellizca lospezonesaltiempoquesulenguaexploramibocaenbuscademipropiodeseo.Acabadoelbeso,conungestoquemevuelveloca,seponederodillasantemí,mesubelacamisetay,sindudarlo,yollevomispezoneshastasubocaabierta,quelosespera.
Jadeo..., el placer es inmensomientras siento cómome los aprieta con los labiosparadespuéssuccionarlos y lamerlos. Extasiada, enredo los dedos entre su rubio cabello y gimo.Gimo de talmaneraquemispropiosgemidosmeexcitanmásymásacadasegundo.
Así estamosunbuen ratohastaque el aire frescode lanochehaceque tiemble, ymi amor, aldarsecuenta,selevantadelsueloymurmuramirándome:
—Tedesnudaríaparacomerteentera,perohacefríoynoquieroqueenfermes.—Sonríoantesupreocupación, no lo puedo remediar. Entonces, metiéndome la mano por debajo de la falda,comienzaatocarmelosmuslosydice—:Perotevoyahacerelamory...
—Hazlo...—exijodescontroladadesabrochándolelacremalleradelvaquero.Divertido pormi urgencia,memira y sonríemientras siento que susmanos llegan hastamis
bragas, las toca, me enloquece, y yo, deseosa de enloquecerlo también a él, meto la mano en elinteriordesucalzoncillo.
—Oh,Dios...—susurroalsentirsupeneduroyerectopreparadoparamí.—¿Loquieres,pequeña?—Sí...,claroquesí...Ericsemueveymimanosemueveconélcuando,deuntirón,mearrancalasbragas.¡Sí!Alver
quesonríodichosa,murmura:—Morenita...,agárrateamicuelloyábretepararecibirme.Como si fuera una pluma,Ericme carga entre sus brazos.La verdad, enmomentos así, es un
gustazotenerunmaridotanaltoyfornido.¡Meencanta!Milocoamorpuedehaceresoymelohaceamí,sóloamí.
Estoymordiéndomeellabioinferiorcuandoguíosupenehastamihúmedavaginay,mirándonosconintensidad,Ericseintroducelentaypausadamenteenmímientrasdiceconvozronca:
—Cuántotenecesito.Ambos jadeamos al sentir que nuestros cuerpos están del todo anclados el uno en el otro y,
cuandoveoqueéltiemblayechalacabezahaciaatrás,exijo:—Mírame,Eric...,mírame.Obedientementehaceloquelepidoy,alverlalocurainstaladaensuspupilas,susurroalsentirsu
duropeneenmiinterior:
—Tequiero.Conlasmanosalrededordemicuerpo,Ericmemaneja,sehundetodoloquepuedeenmípara
quelosdostemblemos.Suscaderassemuevendeadelantehaciaatrásenbuscadelplacermutuo,yyojadeosabiendoquemisgemidosloexcitanmásymás.
De pronto, un ruido hace quemi amor se pare.No se sale demí, pero observo cómomira anuestroalrededorenbuscadelmotivoy,pasadosunossegundos,dicesonriendo:
—Hayunaparejaescondidaobservándonos trasel tercerárbolde laderecha.Debendeser losdueñosdelcochequehayaparcadomásallá.
Condisimulo,mirohaciadondeéldice,veoaaquellosobservándonosconmorboy,sonriendo,murmuromientrasechomiscaderashaciadelante:
—Puesdémoslesloquedeseanver.Eric ríe. A diferencia de otras parejas, a nosotros lasmiradas indiscretas no nos importan, al
revés,nosexcitan,yproseguimosconello.Conunamanobajomitrasero,Ericmesujeta,mientrasconlaotrameprotegelaespaldaparaquenomelaarañeconlapiedradeldolmen.
Beso suboca, susdientes se clavan suavemente enmi labio inferior, y entonces él comienza abombearconmásfuerzaenmiinterior,altiempoqueyojadeocadavezmásaltoypidomásymás.
Nuestros ojos, nuestras bocas y todo nuestro ser conectan como siempre. Aquello no es sólosexo, aquello que nosotros disfrutamos es placer, cariño, respeto, amor, complicidad. Nuestroscuerposchocanunayotravez,mientrasEricmesujetaconfuerzaentresusbrazosyeldolmeny,cuando el clímax nos llega de una manera brutal, ambos gritamos y liberamos toda la tensiónacumuladaennuestrointerior.
Apoyados en la piedra, respiramos aceleradamente. Lo que acabamos de hacer es vida paranosotrosy,mirándonos,comenzamosareír.Necesitábamosreír.
Pasadosunossegundos,Ericmedejaenelsueloydicedivertido:—Sientohaberterotolasbragas.Nopuedoremediarsoltarunacarcajada,yacontinuacióncuchicheo:—Nolosientas.Noesperabamenosdeti.Estamossinpoderdejardesonreírcomodostontos,yentoncesabromibolsoysacounpaquete
deKleenex.Noslimpiamosy,después,guardolospañueloshechosungurruñoenelbolsillodelacazadora.Mástardelostiraréalabasura:hayqueserlimpiayrespetuosaconelmedioambiente.
Estoyacalorada,ymeestoydandoaireconlamanocuandomedoycuentadequelaparejaquehaestado observando se mete rápidamente en el coche, arranca y se va. Eso me provoca risa, ycuchicheoalverqueEricobservacómoelcochesealeja:
—Menosmalquenovivimosaquí,sino,mañanaseríamoslacomidilladelpueblo.Ambosreímosy,encuantocomienzoarecogermidespeinadopeloenunacoletaalta,Ericme
paraymirándomedice:—Meencantatumelena.—Losé.—Te quiero, ¿eso lo sabes también? —murmura volviéndome loca—. Por mucho que
discutamos,nuncaloolvides.Conunaponzoñosasonrisa,asientoyrespondoguiñándoleunojo:
—Yoteadoro,miamor.Alastresydieznosencaminamoshaciaelhelipuerto.EricdeberegresaraBilbao,dondesujetlo
llevaráderegresoaMúnich.Unavezllegamosallí,veoqueAmaiayMelnosesperanhablandoconelpilotodelhelicóptero.Ericdetieneelvehículo,sevuelvehaciamíydice:
—Tenedcuidadomañanaconelcoche.CuandolleguesaAsturias,envíameunmensajeparasaberquehabéisllegadobien,¿deacuerdo?
Al oír eso, sonrío. El instinto protector de Eric aflora de nuevo y, deseosa de que semarchetranquilo,afirmo:
—Teloprometo,cariño...,tendremoscuidadoyteenviaréesemensaje.Ericmebesa.Medevoralabocay,enelmomentoenqueseseparademí,cuchicheadivertido:—Notecreasquemehacegraciadejarteaquí,ymenosaúnsinbragas.Sucomentariomearrancaunasonrisamientrasbajamosdelcocheynosencaminamoscogidos
delamanohaciaaquellostres,quenosmiran.Cinco minutos después, tras varios besos y abrazos cargados de amor, observo cómo el
helicópterosealejaconelamordemividaensuinterior,yentoncesAmaiamurmura:—Niña,québuengustotienes.¡Menudotiarrón!—Yosonrío,yAmaia,queesunacachonda,me
mira divertida y pregunta—: ¿Estás segura de que ese pedazo de tío no es vasco?Porque, que yosepa,sóloenestastierrashayhombrestanimpresionantes.
LastresnosechamosareíryluegonosvamosacasadeAmaia.Tenemosquedescansar.
42
Alasdiezdelamañana,MelyJudithsedespidierondeAmaiaprometiendoqueregresaríanconsusfamiliasoqueellairíaavisitarlasaAlemania.
Acontinuación,lasdosjóvenessepusieronenmarcha.CogieronlacarreteraquelasllevóhastaBilbaoy,deallí,hastaSantander.EnTorrelavegapararonparaestirarlaspiernasyfinalmenteMelcondujohastallegaraLaIsla,elpueblodesuabuelaenAsturias.
UnavezllegaronantelacasonadeCovadonga,laabueladeMel,éstaparóelmotordelvehículoy,mirandoasuamiga,dijo:
—Comotedije,hemosllegadoentreshorasymedia.Judithmiróencantadaasualrededor,aquellugareraprecioso.Entonces,lapuertadelacasonase
abriódeprontoyunaancianaconlosbrazosenjarrasporquenoesperabavisitagritó:—¡¿Quéye...?!¡Oh!Alverasuabuela,Melsebajódelcocheyexclamó:—Abuela,¡sorpresa!Elgestodelamujersesuavizóalreconocerasunietay,abriendolosbrazos,gritó:—Ay,neñademivida...¡Neña!Felizporverlaemocióndeaquélla,Melcorrióaabrazarlay,cuandolamujerdejódehablarala
velocidaddelrayo,ellamiróaJudithylaspresentó:—Abuela, ella esmi amiga Judith. Vive enMúnich como yo y es española. Judith, ella esmi
abuelaCovadonga.Lamujerguiñóunojoy,mirandoaJud,quelaobservabadivertida,saludó:—Dameunabrazo,hermosa.Quéalegríatenerteenmicasajuntoamineña.Judithnodudóendarleaquelloquelamujerlepedíay,abrazándola,respondió:—Encantadadeconocerla,Covadonga.Mehanhabladosiempremuybiendeusted.—¿Yquiéntehahabladodemí?—Björn—contestóJudith—.Élletienemuchocariño.Lamujersonrióaloíresenombreymusitó:—Aisss,miBlasito,quéricurademuchacho.Aloíreso,laschicasrieron.—Vamos,entradencasaacomeralgo,quesoisdossacosdehuesines—lesindicólamujer.Judithmiróasuamigadivertidayéstadijo:—Prepárate,quemiabuelaesmuuuyexageradaconlacomida.Traspasaralacasa,lamujerseparóy,mirandoasunieta,preguntó:—¿DóndetedejasteaSamiyaBlasito?—EnMúnich,abuela.
—Pero,leches,¿yporquénoloshastraídocontigo?Sinmuchasganasdeexplicarse,Melrespondió:—HevenidoconJudithportrabajoyellossehanquedadoencasa.Temandanmuchosbesos.Lamujercabeceó.Lehabríaencantadoverlos.—Erestanpuñeteracomotupadre,elCeci—cuchicheó.—Abuela...,esCedric...,yalosabes—dijoMelsonriendo—.¿Ysepuedesaberporquésoytan
puñeteracomoél?Poniéndosedenuevolasmanosenlascaderas,Covadongamiróasunietayalamorenaquela
acompañabaydijo:—¿Porquénomehasllamadoparadecirmequevenías?—Porquequeríadarteunasorpresa.—¿Loves?,¡comoelCeci!Siemprequieresorprenderme.Judithrioyentonceslaancianaañadió:—Puesporquerersorprenderme,casino tengocomidaparavosotras.Simehubieras llamado,
podríahaberpreparadounasbuenasfabesounricopoteounosgrelosconpatataso...—Abuela...,notepreocupes.Judithyyonosapañamosconcualquiercosa.Covadongaabrióladespensaeindicó:—Tengohechopitudecaleyayunaspocasjudíasverdes.Tambiénhaybollospreñaos,pastelde
cabracho,algodecabralesyfruta;¿tendréisbastante?LaschicasintercambiaronunamiradayJudithdijo:—Másquesuficiente.Rápidamente,lamujersepusomanosalaobrayellasfueronalavarselasmanos,momentoque
Judithaprovechóparaenviarunmensajequedecía:
YaestoyenAsturias.Tequiero.
Segundos después, el teléfono le pitó y ella sonrió al ver una foto en la que estaba Eric con
HannahySupermanriendofelicesenlapiscinadelacasa.Elmensajedecía:
Tequeremosyteañoramos.
JudithsonrióalverasuspequeñinesyaEric.Elloseransuvida,peroseapenóalcomprobarque
Flynnoestabaenlafoto.Mel,quesaliódelbañoenesemomento,alverloquesuamigaleenseñaba,sacósumóvilysemofó:
—MiralaquemehaenviadoBlasito.AlverlafotodeBjörnyPeterjuntoaSamiportandocoronitasdeprincesas,Judithrio.—Tenemossuerte,¿verdad?—dijo.Comprendiendoloquequeríadecirlesuamiga,Melasintió.—Sí,Jud.Muchasuerte.Cuandofuerondenuevoalacocina,lasdoschicassequedaronasombradasalverlamesaque
Covadongaleshabíapreparado.
—¿Aquiénmáshasinvitadoacomer,abuela?—comentóMeldivertida.Lamujerdijoapremiándolas:—Sentaosycomed,¡queseenfría!Durante la comida, Mel le contó a su abuela la noticia de su boda y la mujer aplaudió
entusiasmada.Quesecasarasunietaeraungraneventoy,aunquerefunfuñócuandoaquéllaledijoquetendríaquecogerunaviónparairaMúnichalenlace,alfinallamujersonrióemocionada.
¡Secasabasuneña!La tardepasóa todamechay, cuandoquisierondarsecuenta,ya teníanquemarcharsehaciael
aeropuerto.Agradecidaporlainesperadavisita,Covadongadijoentregándolesunasbolsas:—Aquílleváisbollospreñaosparalafamilia.—Gracias,hasidounplacerconocerla—dijoJudithabrazándola.—Lomismodigo,hermosa...,lomismodigo.Melmetiólasbolsasenelcochey,abrazandoasuvezalamujer,ledijo:—Nollores,abuela.Covadongasesecólaslagrimillasconelpañueloquesesacódelamangaderechay,mirandoa
sunieta,replicó:—Venavermemásamenudoyllorarémenos.Emocionada,Melvolvióaabrazarasuabuelay, trascolmarladebesos,hastaqueéstarioyla
llamópesada,leguiñóunojoysemetióenelcoche.Unavezarrancó,miróporelespejoretrovisorconlosojosencharcadosenlágrimas,yJudith,
cogiéndoladelmofletemurmuró:—Nollores,neña.Aquellolahizoreír,ycontestó:—Vale,marichocho.EntrerisasllegaronhastaelaeropuertodeAsturias.Allíentregaronelcochealacasadealquiler
y,después,seencaminaronhaciaelhangardondeelimpresionantejetprivadodeEricZimmermanlasesperabaparallevarlasdevueltaaAlemania.
43
Trasun recibimientoencasaquemehace tremendamente feliz,el lunes,Ericyyovamos juntosaMüller.Denuevoparecequevolvemosaestarenlamismasintonía.
Nadamásentrarenlaoficina,Mikameesperay,conunagratasonrisa,memiraydice:—Quesepasqueeldirectordelaferiamellamóelviernesymedijoqueerasmaravillosa.Sonriendo,afirmóencantada:—Éltambiénlofue.
Durante varios días, todo funciona genial en casa, yme alegro al enterarme de que Flyn estáviendoalpsicólogodelcolegio.Porsupuesto,aélnolehacegracia,ymelohacesaber.
Ericmeenvíatodoslosdíasvariosmensajescariñososamiteléfonooemailscuandoestamosenlaoficina,yesomehaceverqueintentadarmeloquenecesito.
Eljueves,cuandosalgodetrabajar,mevoydirectaacasa,quieroestarconmisniñosydisfrutarde su compañía antes de que se vayan al cumpleaños de una amiguita. En cuanto Flyn llega delinstituto,voyasaludarloyveoqueEricvieneconél.Esomesorprendey,acercándome,pregunto:
—¿Quéhaocurrido?Ericmemiray,unavezelniñosesubeasuhabitaciónsinhablar,dice:—Mehanllamadodelcolegio.Alparecer,hoynuestrohijonoteníaganasdevisitaralpsicólogo.
Porsuerte, trashablarconeldirectory tambiénconsu tutor,heconseguidoqueno lehicieranunnuevoparte.
«Nuestro»...,¿hadicho«nuestrohijo»?Porprimeravezenmuchotiempo,cuandoeljodidoniñohacealgomal,nodiceaquellode¡«tu
hijo»!Esomegusta.Sinduda,Ericcomienzaadespertarse.No sé qué decir. Por norma,me llaman amí del instituto y, curiosa por saber por qué lo han
llamadoaél,voyapreguntarcuandoEric,quedebedeintuirlo,dice:—Tedijequemeocuparíadeély,paraquitarteestosmarronesdeencima,habléconellosyles
dijequeapartirdeahoramellamaranamí.Sorprendidaporesadecisiónqueyonohepedido,pregunto:—¿Porqué?Ericladealacabezayrespondeconfrialdad:—Telodije.Quieroevitarteproblemasati.Deprontosetocalosojos,luegolafrente,yséloquelepasa.Leduelelacabeza.Escaneosusojosyveoelderechomásenrojecidodelonormaly,cuandovoyadeciralgo,élme
suelta:
—Nomeagobies,Judith.Bueno...,bueno...,bueno...Esosignificaqueeldolordecabezaesconsiderable,odelocontrario
lequitaríaimportancia.Intentotranquilizarme,peroenelfondomeasusto.SéquelaenfermedaddeEricesdegenerativa
y que eso en ciertomodo es normal por la tensión a la que está sometido, pero no puedo evitarasustarme.Cadavezmeparezcomásaélconeltemadelasenfermedades.
Ensilencio,loacompañoalacocina,yobservoqueestavez,Ericcogedospastillasdedistintosbotes.Unavezselastoma,memiray,antesdequeéldiganada,soyyolaquedice:
—Échateunrato,cierralosojosyrelájate.Ericasiente.El quenopresente batallamehace saber lomal que está y, en elmomento enque se va de la
cocinayseencierraensudespacho,séquevaadescansar.Losé.Al poco rato Pipa se lleva al pequeño Eric y a Hannah al cumpleaños. Cuando Norbert los
acompañaenelcocheySimonasalealjardínconSustoyCalamar,laqueestáapuntodelinfartosoyyo.EstoypreocupadaporEricyenfadadaconFlyn.
Pero¿esqueesteniñonosedacuentadenada?Furiosaconél,decido subir a suhabitación.Despuésde llamar, entro, lo retocon lamiraday
siseoenvozbaja:—Enfádateconmigo todo loquequierasynomehables sino te apetece,perohazel favorde
recordarquea tupadreelestrés leocasiona terriblesdoloresdecabezaporsuenfermedaden losojos. Joder, Flyn, ha tenido que tomarse dos pastillas, ¡dos! Pero ¿no eres consciente de suenfermedad?
Elcríomemira,memiraymemira,yentoncesañadodesesperada:—Flyn,estoquetedigoesserio,muyserio,ytienesquehacerporentenderlo.Finalmenteasiente.Vaya,porfincomprendealgodeloquedigo.—¿Quéhapasadoenelinstituto?—preguntoacontinuación.Nadamásoírme,sugestocambiaydice:—Túyanoteocupasdemíporquelohacemipadre.Saldemihabitación.Vale,¡volviólachulería!Tratandodehacerlesaberqueloquieroyquenosoyelenemigo,intentohablarconél,peromis
palabrascaenensacorotoy,depronto,comienzaachillarmedeunamaneratanatrozquealfinalterminochillándoleyotambiénaél.
Pero¿adóndequierellegarestemocoso?Discutimosagritopeladoduranteunbuenratohastaquedeprontolapuertadelahabitaciónse
abre,Ericentraconcaradepocosamigosy,mirándome,suelta:—¿Sepuedesaberquéhacesaquí?Esapreguntamepillatandesorpresaquenoséquéresponderley,preocupadaporél,digo:—¿Teencuentrasbien?¿Teduelemenoslacabeza?Miamorasiente.Veoquesuojoestáahoramenosenrojecido.—Judith—diceentonces—,sihedeencargarmeyodeFlyn...,¿quétalsimedejas?Lomiroboquiabierta.
—Oye..., oye..., oye..., me parece genial que te ocupes de él, pero creo que yo también puedohablar,¿oacasocuandoerayolaquemeocupabateprohibíaquehablarasconél?
Elcríonosmira.Comosiempre,parecedisfrutarconloqueve.—Paraelmodoenquetehasocupadodeél—siseaEricentonces—,mejorquenolohubieras
hecho.Bueno...,¡hastaaquíhemosllegado!¡Serágilipollasydesagradecido!Y,mirándolo,voyasoltarunademisperlascuandomirubio,quecadasegundosealteramásy
más,añade:—Mira, Jud, no quiero discutir contigo.Meduele la cabeza y te voy a pedir, por favor, que a
partirdeahora,comosoyyoquiensevaaocupardeél,telimitesaver,oírycallar.Buenooooooooooo...,buenoooooooooooo...Pero¿estegilipollasdequéva?¿Acasopretendequeseaunmonosabio?Y,olvidándomedesusojos,desucabezaydesumalestar,gritoenfadada:—¡¿Cómodices?!Segúndigoeso,medoycuentadequeEricacabadepercatarsedesuerror,peroyo,queyaestoy
enplenaebullición,lomiroysiseo:—¿Sabesquétedigo,Eric?¡Queosdenatiyaél!Y,sinmás,salgodelahabitacióndandounportazo.Conelcorazónamil,agarro las llavesdelcoche,salgodecasaymevoyalcumpleañosde la
amiguitademishijos.Necesitopositividad,yencasanolavoyaencontrar.Cuandoregresamos,Pipayyobañamosalospequesylesdamosdecenary,tanprontocomose
losllevaadormir,meencierroenelbañodemihabitaciónparadepilarme.Noquieroveranadie.Unratodespués,encuantoEricvieneaavisarmedequelacenaestápreparada,poralucinanteque
parezcanotengohambrey,trasgritarlequenovoyacenar,semarcha.Unavezterminodedepilarme,memiroalespejoymurmuro:—¿Quierequeseaunmonosabio?...¡Seráimbécil!Maldigo,mecagoentodasuestirpey,volviendoamirarmealespejo,medigo:—Jud,relájate...,relájate.LosZimmermannovanapodercontigo.Cierrolosojosylohago.Cuentohastadoscientosporquehastaciennotengosuficientey,cuando
bajoalacocina,Simonamedice:—Hedejadotucenaenelhorno.Asiento. En lo último que pienso ahora es en cenar pero, al ver que me mira preocupada,
respondoconvozcariñosa:—Yaestarde,Simona.Vamos,vete.Norbertteespera.Lamujer,queesladiscreciónpersonalizada,medaunabrazoymurmura:—Cenaalgo.Noesbuenoacostarseconelestómagovacío,ynotepreocupesporelseñor,está
bien.Nohavueltoatomarseningunapastilla.Saberesomegustay,unavezsemarcha,salgoalsalónyoigoquelatelevisiónestápuesta.Alentrar,veoaFlynyaEriccalladosviendounaseriedepolicíasquelesencantaydecidono
sentarmeconellos.CojolascorreasdeSustoyCalamar,mepongounabrigolargoygruesosobre
milargacamisetadealgodón,unasbotas,ymevoyadarunpaseoconellos.Cuando salgo de la parcela camino conmis perros por la urbanización iluminada por bonitas
farolas,hastaquerecibounmensajeenelmóvil.EsEric.
¿Dóndeestás?
Rápidamenterespondo:
PaseandoconSustoyCalamar.
Mimóvilnovuelveasonar.Bien.Sehadadoporenterado.Continúomipaseoy,cuandoyaestoycansada,regresoacasa.Laslucesestánapagadas,peroal
entrarmeencuentroconEricsentadoalpiedelaescalera.—¿Porquénomehasavisadodequesalías?—pregunta.Loquiero,juroqueloquiero.Peroestoytanenfadadaconélporcómomehahabladodelantede
Flynque,mirándolo,respondomientrasmequitoelabrigoylasbotas:—Mira,cariño,mealegrasaberqueyanoteduelelacabezayestásmejor,peroestoycalentitay
algo retorcidita por lo que ha pasado y, la verdad, no quiero discutir porque hoy prefiero ser unmonosabio. Ya sabes, alguien que sólo ve, oye y calla. Por tanto, ¿qué te parece si te vas a lahabitaciónadescansarymedejasenpaz?
Segúnlodigo,medoycuentadelachuleríajerezanaquehepuesto.Ericmemira...,memiraymemiray,finalmente,asienteydicemientrassubeabatidolaescalera:
—Deacuerdo,Jud.Soyconscientedequehemetidolapataconmisdesafortunadoscomentariosyahoratúmandas.
¿Queyomando?¡¿Queyomando?!Pero¿nomehadichoquequierequeseaunmonosabio?Joder...,joder...,joder...,quémalalechemeentraeneseinstante.Sin duda, él está ya en plan conciliador, pero yo no.Me van a volver loca entre el puñetero
alemányelpuñeterocoreanoalemány,singanasdepensarenello,voyalacocina.Mepreparounsándwich,cojounacoca-colaymeencaminohaciaelsalón,donderápidamentemeenganchoaverunapelícula.
Sobre lasdocede lanochemeentrased.Me levanto,voya lacocinay,alabrir lanevera,misojosvenunabotellitaconpegatinasrosaalfondodelenormefrigoríficoamericano.Duranteunosminutos,lamiro—¿laabro?,¿nolaabro?—y,alfinal,cogiéndola,murmuro:
—¡Quénarices!Conlabotellaenlamano,mesientoenunasilladelacocina,laabroy,sindudarloyamorro,
doyunprimertrago.—Mmm...,quéfresquitoestá—digo.Sinpoderevitarlo,recuerdolaprimeravezqueprobéesabebida,ysemedibujaunasonrisa.Eric
mehabíallevadoalMoroccio.Doyunsegundotrago,unterceroy,cuandovoyporelsextotrago,ríoymurmuro:
—¡Brindoporlotontoqueeres,EricZimmerman!Sinsoltar labotella,salgodelacocinayregresodenuevoalsalón.Unavezcierrolaspuertas
paranomolestaranadie,aoscurasmetiroenelsillónybuscoentrelostropecientosmilcanalesquetenemosparaquedarmeviendoundocumentalsobreaves.
SimihijaHannahloviera,diría«¡Pipis!¡Pipis!».Sigoviendoelprogramamientras labotelladepegatinasrosa llenapocoapocomiestómago.
Cuandoeldocumentaldeavestermina,comienzaotrodehipopótamosy,después,unprogramadeunveterinarioyloscasosqueselepresentan.
Deprontosaleunaimagendeunamamápatoseguidaporsuspatitos.¡Quémonos!Esomehacesonreír,hastaqueveoqueestáncruzandounacarreterapordondepasaunrallyde
coches.Conelcorazónencogido,observocómounvehículoseacercayarrollaalúltimopatitodelafila.Unavezhapasadoelcoche,alguiencorreaauxiliaralpatito.Apartirdeesemomentoentraenacción el veterinariopero, pordesgracia, el animalmuereyyo, sinpoder remediarlo,meecho allorarcomounamagdalena.
¿Porquéhatenidoqueocurriralgoasí?Elpobrepatitosóloibatrassumadreysushermanos.¿Porquéhatenidoquemorir?Estoysollozandoalvercómolamamápatodavueltasymásvueltas.Noentiendenada,comoyo
noentiendoporquéahorasoylamadrastradeFlyn,yentoncesoigoamiespalda:—¿Quéteocurre,Jud?Aunquenomire,séqueesEricy,sinsoltar labotellaque tengoen lamanoderecha,balbuceo
hechaunmardelágrimas:—Elpato...—¡¿Qué?!—Ay,Eric—insistoseñalandoeltelevisorconelpelosobrelacaraylosojoscongestionados—,
elpatitocruzabaporunacarreteratrassumadreysushermanosy...ylohanatropellado.Ericseponeencuclillasamilado,veoquemiraeltelevisor,despuésmequitalabotelladelas
manosy,alcomprobarquesóloquedaunculín,dice:—Nomeextrañaquelloresporunpato.—Pobrecillo...,pobreanimalito.—Estáshelada,cariño.—¿Porqué?¿Porquéhatenidoqueocurrirleesoalpato?—insisto—.Elpobresólocruzabacon
sumadre y sus hermanos por la carretera, ¡qué injusticia!—Y, quitándole la botella aEric de lasmanos,doyunúltimotragoymurmuro—:Ofú,miarma...,creoqueestoyalgoborracha.
SientoqueEricsonríeyentonceslooigodecir:—Anda...,¡algoborracha!Levanta,quetellevoalacama.¿Cama?¿Mellevaalacama?Ah,no...,esosíqueno.Estoyenfadadaconély,mirándolo,siseo:—Niseteocurratocarmeoseducirme,¡listillo!—y,antesdequeresponda,lerecuerdo—:Quete
quedeclaroquenoestoy losuficientementeborrachacomoparanorecordar logilipollasquehassidoestatardeconmigoantetuniñoFlynyquemehasdichoquequieresqueseaunmonosabio.Quesólovea,oigaycalle.
Ericnocontesta.Ahorahesidoyolaquehadichoaquellode«tuniño».Memiraysusojosmetransmitenquesabequetengorazóny,sindejarlocontestar,metiroasus
brazos. Le doy un coscorrón pormi efusividad y, juntos, caemos sobre la alfombra. Ambos nostocamoslafrente.Menudomelonazonoshemosdado.
Ericprotestaconlamanoenlacabeza:—A ti no hay quien te entienda. Tan prontome dices que no te toque, ni te seduzca, como te
abalanzassobremí.Vale.Tienemásrazónqueunsanto.Amínohayquienmeentienda.Peroesqueahoralodeseoy,sindejarlocontinuarconsusquejas,acercomibocaalasuya,lo
beso,lodevoro,melocomo.Labotellitadepegatinasrosa,ademásdehacermellorarporelpato,mehacequererotrascosas,ylasquiero¡ya!
Eric responde rápidamente. Se apunta al momento besazo de la noche y, cuando me quito lacamisetaymequedosóloconlasbragas,murmura:
—Cariño,estamosenelsalón...—Meimportaunpepinodóndeestemos.Veoquemicontestaciónlohacesonreír.—Pequeña...,podríaentrarcualquiera.Peroamíesomedaigual.¡Queentrequienquiera!—¿Teduelelacabeza?—preguntoacontinuación.—No,yano.¡Bien!Mealegrasaberlo,porque lonecesito, lodeseoy lovoyahacermíoallímismo.Y,sin
dejarlodecirnadamás,vuelvoabesarloparademostrarlemiardor,miapetitoymiimpaciencia.Uf,¡quécalentitaestoy!Rápidamente,pillamimensaje.¡Quélistoescuandoquieremialemán!Susmanosrecorrenconlujuriamiespalda.Surespiraciónseaceleracomolamía.Susdedosse
clavanalllegaramicinturay,cuandosientoquebajalamanohastamitrasero,séloquevaahacer.Lomiro.Seloexijoconlamiradaporquelodeseocontodasmisfuerzas.
Sinhacersederogar,Eric,esehombreimpetuosoalqueadoroaunqueenocasioneslomataría,agarramisbragasy,deuntirónsecoycontundente,melasrompe.
—¡Sí!—jadeoapasionada.—¿Estoeraloquequerías?Asiento...,asiento...yañado:—Sí.Quieroesoymás.Nuestras bocas vuelven a encontrarsemientras yomuy... muy caliente por el morbo que todo
aquellomecausa,memuevosobremimarido.Segundoasegundo,soyconscientedequelotengoamimerced,dequeeneseinstanteharácualquiercosaqueyolepiday,separandosubocadelamía,sonríoconmalicia,introduzcolamanoentrenuestroscuerposy,sacandosuduropenedelinteriordelpantalónnegrodepijama,exijo:
—Mírame...Eric lo hace. Eric obedece. Eric se somete. Y, mientras clava sus increíbles ojos claros en la
oscuridaddelosmíos,comienzoaintroducirsumiembroenmivaginamientrasdigo:
—Odiocuandotecomportascomountiranoconmigo,pero...—Cariño...Nolodejohablar.Conmimanolibre,letapolabocayprosigo:—Peroenesteinstante,enestesegundo,enestemomento,mandoyo.Eresmío...,soytudueñay
voy a disfrutar de ti, aunque mañana, cuando vuelvas a comportarte como un gilipollas, mearrepienta.
Sumirada llenade lujuriaydeseoavivamicreciente locuray,alvercómo le tiemblael labioinferiorporloqueestáoyendo,porloquelepropongo,sientoquetengorazón.Ericesmío.Esmigilipollasparticular,yesonadielovaacambiar.
Con su pene totalmente enmi interior y sentada a horcajadas sobre él, lomiro.Mi amor estátumbado en el suelo a la espera demis caprichos y,moviendo las caderas de adelante hacia atráscomoséquelegusta,notoquesearquea.
—¿Tevasacorrerparamí,corazón?—preguntoparando—.¿Sóloparamí?—Sí—gruñeembravecidopormilujuria.ContinúomoviendolascaderasyEricenloquece.Nomedetengo.Sigode adelante hacia atrás con suavesymedidosmovimientos—¡joder, qué
gustazo!—y,cuandolosientotemblarypalpitar,murmuro:—Hazmesabercuántodisfrutas.Sedúcemecontusjadeosytalveztedejellegaralclímax.Acadapalabraquedigo,miamorvibrayseexcitamásymás,yyomesientopoderosa,además
de un poco pedo, ¡todo hay que decirlo!... Sin embargo, me gusta la sensación que aquello meprovoca,ypregunto:
—¿Teexcitaloquedigoyhago?Élabrelabocapararesponder,peroeltemblordesucuerponolodeja,einsisto:—¿Verdad?—Sí...Sí,pequeña.Sonríoconlujuriaymimentepiensa:«España,1-Alemania,0».Y,dispuestaameterleunabuenagoleadaquenoolvideenmuchotiempo,musito:—Notecorreráshastaqueyotelopermita.El jadeo de frustración de Eric al oírme me enloquece, me perturba, me chifla, mientras su
cuerpotiemblabajoelmíoysumirada,sometidaamiscaprichos,noabandonalamía.—Hoytuplacerquedasupeditadoalmío.Soylamonaegoístayyomando.—Jud...—Sólopodrásllegaralorgasmocuandoyotelopermita.¿Entendido?Su rostro, su precioso rostro, refleja su placer y su frustración mientras se muerde el labio
inferior. Eric,mi loco amor, necesita llegar al clímax, ansía derramar su simiente enmi interior,peroloestáretrasandopormí.Loestáretrasandopormí.
Dios...,¡cómomegustasaberlo!En un tono plagado de erotismo, hablo de nuestras experiencias. Le recuerdo momentos
morbososconotroshombresylesusurroamediavozeldíaqueenMéxicomeatóalacruz.Durantevariosminutos lomartirizo, lovuelvo locomientrasdisfrutodelplacerquesupenemeocasiona,peroelritmodenuestroscuerposinevitablementeseacelera,ymiplacerconél.
Susjadeossevuelvenmásruidosos,losmíosmásescandalosos.Vamosadespertaratodalacasay,cuandosientoquevoyaexplotaryentiendoquenopuedoexigirleque loretraseniunsegundomás,murmuro:
—Y ahora, a pesar de lo enfadada que estoy contigo por lo que ha ocurrido hoy, quiero eseorgasmo,yloquiero¡ya!
Endécimasdesegundo,Ericposalasmanosenmitraseroyseclavahastaelfondoenmiinteriorparapartirmeendos,mientrasnosestremecemosporeltsunamiqueasolanuestroscalientescuerpos.
—Sí...,así—jadeoalsentirlosespasmosdemivagina.Ericsecontraeymeempaladenuevototalmenteenél.Repiteesotresvecesmáshastaquenos
arqueamos y, con unos broncos gemidos que contenemos para no despertar a toda la casa, nosdejamosir,mientrasnuestrasmentesvuelanporelplacerynuestroscuerposseencuentranunavezmás.
Agotada,caigosobreelcuerpodemiamor.DemiEric.Demirubioalemán.Adiferenciademí,queestoycompletamentedesnuda,élestávestido.Sientoquesusbrazosme
aprisionancontraél.Meacuna.Mebesaen lafrenteyyocierro losojosextasiadacuandolooigomurmurar:
—¿Noquieresqueabraotrabotellitadepegatinasrosa?Sonrío,¡serápetardo!Y,sinmirarlo,susurroalrecordarloenfadadaqueestoyconél:—Teodio,EricZimmerman.Entoncessientoquemiamorsonríey,besandomifrente,afirma:—Puesyotequieroconlocura,señoritaFlores.
44
Elmiércoles,despuésdedejaralapequeñaSamienelcolegio,Melestabaabriendolapuertadesucochecuandooyóquealguiendecía:
—Buenosdías,Melania.AldarselavueltaseencontródirectamenteconGilbertHeine.Conscientedeque,sielabogado
estabaallíeraporquequeríaalgodeella,losaludó:—Hombre,Gilbert,¿cómotúporaquí?Sonriendoporsudescaro,élseacercóycuchicheó:—Querida,creoquetúyyotenemosquehablar.Alversuexpresión,Melsupoquenopodíaesperarnadabuenodeaquelloy,mirándolo,dijo:—Túdirás.Entonces,sinelmenorescrúpulo,elhombrelesoltó:—Tufuturomarido llevaaños intentandoformarpartedemibufete.Susueñosiemprehasido
leer en el cartel: «Heine,Dujson,HoffmannyAsociados».Y, si tú eres inteligente comocreoqueeres,noloestropearás.
Mel,quenopodíacreerloqueestabaoyendo,preguntó:—¿Aquévieneeso?Gilbertsonrióconmaliciayrespondió:—JohanmehacomentadoloocurridoconLouisey,apesardequemimujerte...Incrédulayenfadadaporloentrometidosqueeranaquéllosenrelaciónconaqueltema,queella
nohabíavueltoamencionar,gruñó:—Mira,¡hastaaquíhemosllegado!¿Queréisdejartodosdemeterosenmivida?Louisemecontó
lo que le ocurría y yo simplemente le di mi opinión. Pero ¿de qué vais? ¿Acaso ella no puedecontarmeloqueledélagana?
Sinperderlospapeles,elhombrereplicó:—¿Sabes?Björneselperfectocandidatoparamibufete,exceptoporsumalasuerte.—¿Malasuerte?Gilbertlamiróy,asintiendo,cuchicheó:—Entre el hijo que le ha salido de debajo de las piedras y estar con una problemáticamadre
solteraquebebecervezaylepermiteasumaleducadahijaqueinsultea...—¡Parahablardemihijatendrásquelavartelabocaantes!—locortóMelfuriosa.—¿CreesqueBjörnesunhombreconsuerte?—preguntóélsindespeinarse—.Porqueyonolo
creo.Sóloloseríasidesaparecierasdesuvida,yaqueestoyconvencidodequenuncavasadarlatallaparaserlamujerdeBjörnHoffmann.
Mel estaba furiosa al oír lo que aquel hombre decía. Deseaba decir cosas terribles, pero se
contuvopornoperjudicarmásaBjörnyfinalmenterespondió:—Escucha,podéisirosalamierdatúytubufete.Pero¿quiéntehascreídoqueeres?Unacosaes
queBjörnquieratrabajarconvosotrosyotramuydiferentequetútengasque...—Porcierto,noteconvieneserdetenidaporprostitución—lacortóél—.Esedetallitotampoco
lobeneficia.Al oírlo decir eso,Mel iba a protestar, pero él montó en su vehículo y se marchó dejándola
boquiabiertayfuriosa.Durante varios minutos, no supo qué hacer, hasta que cogió su móvil y marcó el número de
Björn.—Hola,preciosa—contestóél.Sutonodevoz...Sualegríaledolióenelalma,ydijo:—Björn,esedesgraciadodeGilberthavenidoalapuertadelcolegioy...—Porel amordeDios,Mel, ¿quiereshacer el favordedejarde insultar a laspersonaspor el
simple hecho de que no te caigan bien?—Y, sin dejarla hablar, siseó—:Mira,Mel, estoy conmipadreyconPeterynotengotiempoparadiscutircontigo.
Laextenientetomóairey,singanasdemontarunnumeritoapesardelofuriosaqueestaba,dijoantesdecolgar:
—Vetealamierda.Yahablaremos.Luego, encabritada, subió a su coche. Durante un rato pensó en lo ocurrido, en las cosas
desagradables que Gilbert Heine le había dicho y, necesitada de hablar con alguien que le dierafuerzasyquelaentendiera,llamóaJudith:
—¿Dóndeestás?—Enlaoficina—respondiósuamiga—.¿Ocurrealgo?Melmiróasualrededorypreguntó:—¿Puedoiraverte?—Porsupuesto,ysimetraesunfrapuchinodechocolateblanco,¡tecomoabesos!—Alverque
suamiganoreíaaloíreso,añadió—:Oye,¿quépasa?Comonoqueríaangustiarla,Melrespondió:—Tranquila.Sóloquierocomentartealgo.—Ok.Aquíteespero.Cuandocolgó,Melarrancóelmotorysemarchó.Mediahoradespués,trasestacionarsucocheenunparking,pasóporelStarbucksmáscercano,
compródosfrapuchinosysubióaldespachodesuamiga.Necesitabahablarconella.CuandoJudlavioaparecer,selevantódesusillay,sonriendo,dijomientrasabríalosbrazos:—Ymetraesdeverdadelfrapuchinodechocolateblanco,¡tequiero...,tequiero!Melsonrióporsuefusividad.Juditherapuravitalidady,trasdarleunbesoaaquélla,quelehabía
arrebatadoelvasodelasmanos,sesentóenunasillaydijo:—Tengounproblema.Judith, que sacaba con cuidado un poco de nata con la pajita verde, se lametió en la boca y,
omitiendolosproblemasqueellatenía,dijo:—Dios...,asínuncavoyaadelgazar,peroestátanricalanata...—Luegosesentójuntoasuamiga
ypreguntó—:Muybien.Dime,¿quépasa?Laextenientediountragoasubebiday,sinesperarunsegundomás,lecontóloocurridoaJud,
quepasódelasorpresaalaincredulidady,deahí,alaindignación.—Pero¿esetíoesidiotaoqué?¿Nolohasmandadoalamierda?—Sí,ydespuéshemandadoalamierdaaBjörn.Judithlamirósorprendidayseapresuróaañadir:—TienesquecontarletodoestoaBjörn.—Loheintentado,Jud.Perocadavezquemencionoalgodeesebufete,selíaynomedejahablar.
Yonosoportoaesagente,yBjörnnosoportasaberlo.Cogiendoelteléfono,Judithlamiróydijo:—Ahoramismolollamamosyselocuentastodopuntoporpunto.Estonopuedecontinuarasí.Melcerrólosojosuninstante,lequitóasuamigaelteléfonodelasmanosyreplicó:—Ahora no, Jud. Está con Peter y su padre, y no creo que sea el momento. Además, pronto
tendremoslafiestadecompromisoy,silecuentoesto,selaestropearé.—Pero,Mel...,esetipoes...—Esundesgraciado—lacortóella—.PeroahoranopuedohablarconBjörny,porsupuesto,ni
unapalabraaEric;¿meloprometes?Judsuspiróy,alverlacaraseriadesuamiga,finalmentedijo:—Teloprometo.PerocomoestosevayademadreynoselocuentesaBjörn,tejuroqueselo
contaréyo.Aquellamañana,cuandoMelsalióde lasoficinasdeMüller,sefuedirectamenteasucasay,al
entraryoírrisas,sedirigióhaciaelsalón,dondeseencontróconBjörnyPeter.Verlafelicidadensusrostroshizoquesesintieramal.Sihablabaahorasobreloqueocurríaconaquéllos,todoibaacambiar,porloque,suspirando,decidiódejareltemaparaotrodía.
Durante variosminutos los observó jugar desde el sofá con unosmandos delante de la tele y,cuandosupoquepodíacontrolarlavoz,dijo:
—Perobueno,¿túnotienesquetrabajarytúnotienesqueestudiar?Aloírla,Petersecalló,yBjörnparóeljuegoyselevantó.—Hola,cariño—dijo—.EstamañanaPeteryyohemosidoadesayunarconmipadreydespués
lostreshemosidoaunaentrevistaenuninstituto.—¿Y?—preguntóella.Elmuchachoibaaresponder,peroBjörnlepidióunsegundo,llevóaMelaparteypreguntó:—Antesderesponderaeso,¿porquéestabasdetanmalalecheestamañanaydóndehasvistoa
Gilbert?Porcierto,teniente,odioquemecuelguescomolohashecho,ymássiencimamemandasadondemehasmandado.
Durante unos segundos, ella calibró su respuesta.Tenía que contarle lo que ocurría.Debía sersincera con él en relación con el acoso que estaba sufriendo por algo que un díaLouise le habíacomentado.Pero,incapazdehacerlo,respondiócambiandoelgesto:
—ViaGilbertenelcolegiodeSami.Porcierto,medieronsaludosparati.—¿Ytumalaleche?—Untipomehizounapirulaconelcoche.Sóloeraeso.
Björnlamiróalosojos.Intentóleerloqueéstosqueríandecirle,peronoteníaganasdeponerendudaloqueellalecontaba,asíqueasintióy,volviendoasonreír,dijomientrasseacercabaconelladenuevohastaPeter:
—Comotedecía,hemosidoauninstitutoqueaPeterlehagustadobastante,¿verdad,campeón?ConunasonrisaquedescongelaríaelPoloNorte,elmuchachoasintióyafirmóemocionado:—¡Quépasadadeinstituto!Hastatienenunportátilparacadaalumno.Nocomoenelmío,enel
quehayunoyviejoparatodalaclase.Melsonrió.Sinduda,loquePeterdecíaeraverdady,tocándoleelpeloconternura,indicó:—Sóloqueremoslomejorparati,cariño,ysiesecolegiotegusta, intentaremospor todoslos
mediosquepuedasirallí.PeteryBjörnsemirarony,traschocarselamano,elabogadodijo:—Porcierto,luegohemosidodecomprasytehecompradoeliPhone6quequerías,¡caprichosa!Encantada,Mel aplaudió al ver la cajita de su nuevo iPhone 6 sobre lamesita. Por fin podría
aparcarelviejomóvilquehabíatenidoquerescatardesdequeelsuyoacabódentrodeunajarra.—TambiénlehecompradoaPeterunportátilenlatiendademiamigoMichael.Casualmente,allí
tenían puesto este juego en uno de sus ordenadores, los dos hemos comenzado a jugar y lo hecompradotambién.¡Noveasquépasada!
Divertida, y obviando lo ocurrido aquellamañana,Mel lomiró y, como si fuera lamadre deaquelgigantedeojosazulesypelonegro,preguntó:
—¿Ytúnoteníastrabajo?Conunapícarasonrisa,BjörnvolvióasentarseconPetery,dirigiéndoseaella,respondió:—Teníaunpardevisitasqueatender,peroAidansehaencargadodeellas.Noeranimportantes.Laextenienteasintió.Sinduda,PeterleestabacambiandolavidaaBjörny,felizdequeasífuera,
sesentóentreellosdosy,mirándolos,afirmó:—Muybien,listillos.Quierojugar.¿Aquiénmachacoprimero?
45
MelyBjörnestánfelicesporsufiestadecompromiso,yyoloestoytambiénporellos.Estamañana, tras hablar conMel por teléfono durante casi una hora, hemos decidido que los
niñossequedenenmicasa.Eslomejor.PipayBealoscuidarán.TraslanochedelabotelladelaspegatinasrosanohevueltoadiscutirconEric,peroyanome
voyaengañarmás:soylamonasabia.Soyconscientedequeennuestracasasecuecealgoy,eldíaqueexplote,noséquiénsevaasalvar.
CuandoMel aparece conBea, que se encargará de cuidar aSami esa noche enmi casa, y conPeter,Flyn,queyahasidoavisadoporEric,bajaarecibirlo.
Sindecirnada,observocómoSami,despuésdedarnosunbesoamimaridoyamí,corretraselpequeñoEric,ytambiéncómoFlynnosemueveymiraaPeterconcuriosidad.
—YésteesFlyn—oigoquelediceMelaPeter—.Ambostenéismásomenoslamismaedad,yseguroquepodéishablardemilcosas.
Losdosadolescentesasientenconlacabezaynodicennada.Yonoabrolabocaysóloesperoquemijodidohijosepacomportarseconelmuchacho.Eric,queestájuntoaMel,alverqueFlynnodicenada,miraaSimonaeindica:—Peterpuededormirestanocheenlahabitacióndeinvitados,¿estápreparada?—Sí, señor—dice lamujer sonriendoy, acercándose al chico,murmura—:Bienvenido,Peter,
soySimona.Siquierescualquiercosa,sólotienesquepedirla,¿deacuerdo?—Loharé,señora.Gracias—respondeelcrío.LaeducacióndePeteresexquisita.Veraesemuchacho,alquelehafaltadodetodo,mehacedarmecuentaunavezmásdequenoes
necesariocriarseenuna familia condineropara ser educado.Sinduda,Peter esungranejemplo.OjaláFlyntomaranota.
—¿YBjörn?—pregunto.Melseretiraelpelodelacarayrespondeconpicardía:—Sehaidoparaelrestaurante.Habíainvitadosquellegabanpronto.ConociendoaBjörn,seguroquelacenaserádelasbuenasy,cuandovoyacontestar,oigoque
Ericdice:—Flyn,aPeterlegustanmucholosordenadores,ymeconstaquejuegaalosmismosjuegosque
tú.LosdosadolescentesintercambianunamiradayFlynpregunta:—¿Juegasa«LeagueofLegends»?—Sí.—¿Ya«WorldofWarcraft»?
Petersacasuportátilnuevodelamochilayafirma:—Enéstesoymuybueno.¿Ytú?Flynsonríe.Comosiempre,versusonrisamehinchaelcorazón.Acontinuación,cuandolosdos
subencorriendoporlaescalera,Ericdice:—Noosacostéismuytarde.—Vale,papá—respondeFlyn.Mel,Eric,Simonayyonosmiramosy sonreímos. ¿Qué tendrán esos juegos, quehermanan a
desconocidos?Trasbesuquearalospequeños,queestánenlapiscinaconPipayBea,nosmarchamos.Tenemos
unagrannochepordelante.Cuandollegamosalrestaurantenosencontramosconvariosamigos,peromisubidónesmáximo
enelmomentoenqueoigodeciramiespalda:—¡Sorpresa!AlvolvermemeencuentroconFridayAndrés.Alverlos,gritoenloquecidaycorroaabrazarlos:Decirquelosquiero¡esquedarsecorto!Y,cuandoporfinconsigocalmarme,pregunto:—¿YGlen?Sonriendoysinsoltarmelamano,Fridaresponde:—Sehaquedadoencasademispadres.Losvuelvoaabrazar.Estoyemocionadaportenerlosallíconnosotros.Paramí,ellossondela
familia como Mel y Björn. Amigos que conocí de manera extraña y que al principio meescandalizaronconsucomportamiento,peroparamísonespeciales.Muyespeciales.
Agarradadesufuturomarido,MelhablaconEricyAndrés,peroentoncesobservoquesugestocambia.MeapresuroamirarhacialapuertayveoentraraGilbertHeineyasumujerjuntoaotrostipostrajeadosquepresupongoquesonabogados.
Rápidamente, caminohaciami amigaymepongoa su lado.Sé loquepiensa,peroBjörn, sinperdersusonrisa,vaasaludaralosreciénllegados.
—¿Quéhaceesapandilladeidiotasaquí?—cuchicheo.—Nolosé.Björnnomedijoquevendrían—respondeMel.Instantesdespués,Björnseacercahastanosotrasconaquéllosy,mirandoaMel,anuncia:—Cariño,Gilbert,Heidiyotrosasociadoshanllegado.Observocómomiamigacambiaelgestoporunafalsasonrisay,trasbesarlosconcordialidad,
dice:—Graciasporvenir.—Nonoslopodíamosperder—afirmaGilbertconunasonrisaderata.—Unfuturoenlaceessiempremotivodefelicidad—añadelaperradeHeidi.Gilbert,queveoquetieneelbrazosobreelhombrodeBjörn,diceentonces:—Ynosotrosestamos felicesdeestar invitadosaunacontecimiento tanespecialcomo loes la
fiestaporelenlacedelque,¿quiénsabe?,podríasernuestropróximosociomayoritario.—Eso,¿quiénsabe?...—repiteDujson,elotroabogado,entrandoporlapuerta.AMelselecortalarespiracióncuandoGilbertlamiray,guiñándoleelojo,añade:—Björn,eresunodelosmejoresy,laverdad,Gilbert,Dujson,HoffmannyAsociadosesunbuen
nombre,¿noteparece?Björnsonríe,agarraaMelporlacinturayafirmamientraséstalomira:—Sinduda,suenamuybien,¿verdad,cariño?Mel,queséquetieneganasdearmarlamarimorena,sonríetambiénycontesta:—Sí,cielo,suenamuybien.Dichoesto,veoqueBjörnlepresentaaaquéllosaEricyaAndrés,yMel,disculpándose,mecoge
de lamano y vamos las dos al baño.Una vez entramos yme cercioro de que no hay nadiemás,murmuroalverlopálidaqueestámiamiga:
—Respiraynodejesqueeseasquerosoteestropeeestemomentotanbonito.Melasiente,seechaaguaenlanucay,conseguridad,dice:—Tienesrazón.Yopuedoconello.Volvamosalacena.Diezminutosdespués,cuandoveoqueMelestádisfrutandodenuevodesufiesta,Fridaseacerca
amíycuchichea:—Aúnnome lopuedocreer: elguaperasdeBjörn, ¡padredeunadolescenteyunapequeña,y
encimaahorasevaacasar!Sucomentariomeprovocarisa,yrespondoobviandoaPeter:—El guaperas ha encontrado a la mujer que necesita a su lado. Y sólo te diré que, si por él
hubierasido,yasehabríacasadohacemásdeunaño,peroMellofrenó.Fridaabrelosojossorprendida.—Créetelo—digo—.Esasí.Fridasonríe,miraaMelyésta,alverquelamiramos,seacercaanosotrasymurmura:—Señoras,mepitanlosoídos.¿Quéhabláisdemí?Fridayyosoltamosunacarcajada,yluegoéstaresponde:—SimplementedecíaqueestoysorprendiadequeBjörnfinalmentepaseporlavicaría.Melasientey,sinperdersubuenhumor,cuchichea:—Puesdeberíassorprendertemásdequelaquevayaapasarseayo.Dehecho,cuandollaméami
madreparadecírselo, loprimeroquemepreguntófue:«¿Quéhasbebido,Melanie?».—Denuevo,todas reímos,ydespuésMelañadeencantada—:LaverdadesqueBjörn tiene todo loquesiemprebusquéenunhombre.
En ese instante, el camarero nos indica que el salón está preparado.Björn busca aMel con lamiradayella,trasguiñarnosunojo,seva.
—¡Meencanta!—murmuraFrida.Asiento,Melesunamordechica.—Pues,cuantomáslaconozcas,másteencantará—afirmo—.Yaloverás.Fridaasientey,sinmovernosdedondeestamos,pregunta:—¿Melytúalgunavez...?Alentenderaquéserefiere,rápidamenteniegoconlacabeza.—No.Nunca.—¿Porqué?Perosiestábuenísima...Oírladeciresomehacereír,ymurmuro:—Porquelastíasnomevan,enelsentidoenquetevanati...
—Peronosotrashemosjugadoytehevistojugarconotras...Asiento.Tienemásrazónqueunsantoyrespondo:—Digamosquemeencantadejarmemimar.Sóloeso.Ambasreímos,yentoncesMelregresadenuevoanuestroladoypregunta:—Vuelvenapitarmelosoídos.¿Dequéhabláis?Fridayyointercambiamosunamiradayellaexplica:—LepreguntabaaJudithsitúyella...,yasabes...Melmemira,yosonríoyellacontesta:—Larespuestaesno.Elsentimientoqueambas tenemosvamásalláde losexualynos impide
hacerciertascosas.—Totalmentedeacuerdo—afirmochocandomicopaconladeella—.Melescomomihermana,
yconellanopodríahacerciertascosas,comonopodríahacerlasconmihermanaRaquel.Fridaasiente.MedispongoadeciralgocuandoMelafirma:—Paramí,Judesintocableentodoslossentidos.—Guauuu—memofodivertida.—¿SóloJud?—preguntaFridaconpicardía.Alentenderaloqueserefiere,Melsonríeyasegura:—Enelsentidoenelquelopreguntas,sí.Encantadaconlaaclaración,Frida,queesunalobadeagárrateynotemenees,trasunbarridode
cuerpoaMelquemecalientahastaamí,levantasucopaydice:—Mealegraservuestraamigaenlugardevuestrahermana.¡Vivalaamistad!Las tres chocamos nuestras copas riendo. Desde luego, como diríami hermana, ¡nos falta un
tornillo!Lacenatranscurredeunmodoagradable.Amigosconocidosynoconocidosbrindamosporlos
felicesnovios,yellossebesanantenuestrosaplausos,mientrasobservoaGilbertyasussecuacesymecagoentodasucasta.
Eric,queestáami lado,nomesuelta.Esdelasnochesenlasquesientoquesuposesividadestotaly,cuandolacenaacabaytodospasamosalsalónatomarunacopa,memiraymurmura:
—BjörnhapropuestoiralSensationscuandosevayanalgunosinvitados;¿teapetece?Asientocomplacida.Loesperaba,ynadameapetecemás.Duranteunpardehoras,charlamosconunosyotroshastaqueBjörn,trasdespediralosúltimos
invitados,entrelosqueestánGilbertylosdemásabogadosconsusrespectivasmujeres,nosmiraydicealosnuevequequedamos:
—Sigamosconlafiesta.Losquequedamosasentimosy,encantados,nosvamosalSensations.Nadamásllegar,cuandove
aBjörn,eljefedellocalsedirigeaél:—Comopediste,tenéisreservadalasaladelfondo.Björnasiente.Luego,estoyhablandoconFridacuandoderepenteoigo:—Quéilusión,¡EricyJudith!Alvolverme,veoaGinebrayasumarido.Voyasaludarloscuando,sorprendentemente,Frida,
queestáamilado,dicealtoyclaro:
—¿Quéhaceesaasquerosaaquí?—Cariño...—murmuraAndrésaloírla.Yomequedopetrificada,peroGinebra,enlugardeamilanarse,seacerca.—Perobueno,Frida,¿nosaludas?—lesuelta.MiamigaFrida,quetieneunapersonalidadarrolladora,trasmiraraEricyasumarido,quenos
observan,clavalosojosenaquélla,queestádespampananteconunvestidoverdeclaro.—Valoromitiempoynolopierdosaludandoazorras—replicaacontinuación.Y,sinmás,seagarradeAndrés,ambossedanlavueltaysemarchandejándomesorprendidaamí
ytambiénalresto.Laincomodidadsepalpaenelambiente,peroGinebra,sincambiarelgesto,nosdice:—Vaya,veoquehaypersonajesquenocambian.¡¿Personajes?!¿Hallamado«personaje»amiFrida?Aéstaletapoyolabocaconunadelasmías,perocuandovoyahablar,Ericmeagarradelbrazo
paraquemecalleylooigodecir:—Ginebra,sinoteimporta,nosesperanenunafiestaprivada.Me encanta que Eric haya dicho esa última palabra: ¡«privada»! Lo siento por Ginebra pero,
agarrándomealbrazodemimarido,medoylavueltaycaminoconelrestodemisamigos.Cuandoentramosenlasalaprivada,uncamareronossirveunascopasquetodosaceptamoscon
ganas.FridaseacercaentoncesaEricyamíypregunta:—¿Desdecuándoestáesatiparracaaquí?Ericsonríe,daunsorboasubebidaymurmura:—Frida...,noseasasí.Laaludidamiraentoncesamiamorysisea:—Tencuidadoconesazorraynotefíesdeella.Suclaridadmehacereír.EsosiempremehagustadodeFrida.Durantevariosminutos,mientraselladespotricasobreGinebra,observoparaversiEriclehabla
delaenfermedaddeellapero,alverquenodicenada,yotampocohablo.SiEricesdiscreto,yoloserétambién.LoqueleocurreaGinebraconsusaludnoesalgoparafrivolizar.
Actoseguido,AndrésseacercaanosotrosyEricyélcomienzanahablarconotrotipo,momentoenelqueFridamemiraydice:
—Tencuidadoconesaperra.Esmalaytelapuedejugarcuandomenosteloesperes.—Tranquila, es encantadora conmigo—respondo sonriendo—. No ha hecho nada por lo que
tengaquepreocuparme.—Quéascoletengo...—prosigueFrida—.Esosí,yameencarguédedejárselotodobienclarito
antesdequesemarcharaconesetalFélix.Aunque,sitesoysincera,creoqueeslomejorquelepudopasaraEricporque,así,coneltiempoteconocióati.
Asiento.Noquieroque laspalabrasdeFridaenreferenciaaGinebramehagancogerlemanía,porloqueafirmoconpositividad:
—Puesentoncesquedémonosconesoyolvidémonosdeella.Fridayyobrindamosynovolvemosamencionarla.
Lamúsica suena y, rápidamente, algunas nos lanzamos a bailar. Digo algunas porque Eric nobaila ¡ni loco! Él, conmirarme apoyado en la barra improvisada que el dueño del Sensations hainstaladoenaquellasala,tienebastante.
Mientras bailo junto aMel la canciónTalkDirty,[24] de JasonDerulo, observo ami amor. Ellugaresprovocador,élessexiylacanciónescalentita.Y,clavandolamiradaensusojazosazules,muevolascaderasmientrascanturreoaquellode«¿Vasahablarmesucioamí?».
Sucio..., la palabra «sucio» nunca me ha gustado, pero allí donde estoy tiene un significadoespecial,megustaymeexcita.
Me provoca tanto que,mientrasmuevo las caderas ante la atentamirada demi impresionanterubio, me quito las horquillas del moño que llevo y, cuando mi oscuro y ondulado pelo cae encascadasobremirostro,loretiroconcoqueteríayobservoamiamorsonreír.
Apocosmetrosdedondebailo,observocómoAndrésdesnudaaFridaenunaenormecamayqueBjörnyMel,quehadejadodebailar,hacenlomismo.Sinlugaradudas,eljuegocalienteacabadecomenzar.
VuelvoamiraraEric,quenomequitaojo.Sabequeesaprovocativacanciónmegusta,ytambiénsabe que esa provocación va dirigida única y exclusivamente a él.Acercándome a donde está, sinparardecontonearmeparaseducirlo,mearrimoaélylesusurroaloído:
—¿Vasahablarmesucioamí?Esaincitantefraseespartedelacanción.Y,sonriendo,élresponde:—Atitehablocomotúquieras.Ambos reímos y, echándole los brazos al cuello, lo beso,mientras él enreda lasmanos enmi
pelo.Duranteunbuenrato,escuchomúsicaagarradaamiamormientrasobservocómootrosjuegan,
ymeexcitoalveraFridaenacción.¡Esunaloba!Lamúsicacambiaentonces,ylavozdeNorahJonesinundaelreservadomientrascantaLoveMe.
[25]Ericsuspiray,agarrándome,pregunta:—¿Bailamos?Misonrisalodicetodo.Abrazadaaél,comienzoabailaraquellacanciónquetantasvecesheescuchadoennuestracasay
hemosbailadoasolasensudespacho.Compenetrados,miamoryyocantamosaquellabellamelodíamirándonosalosojos.Todoenélmegusta.Séquetodoenmílegusta.Estoyexcitadaysientosucrecienteycalienteerecciónatravésdelateladenuestraropa,quenos
separa.Sinpudor,nuestroscuerpossetocandeseososdealgomásmientrasbailamos.Discutimos,nosamamos,volvemosadiscutir,peroestoytanconvencidacomoéldequeestamos
hechoselunoparaelotroydequenuestroamorperduraráeneltiempo.Oírlocantaraél,queeraelhombremásherméticodelmundo,meemociona.Enestosaños,Eric
hacambiadoysehahechoamí.Yanoesraroverlocanturrearobailarconmigoasolas;esoeraimpensable cuando lo conocí,peroélpormíhaceesas cosas, comoyo lohiceen sumomentoalabandonarEspañaparaseguirloyestarconél.
Nosmiramosalosojosymecalloenamoradacuandomiamorcanturreaaquellode«Loúnicoquepidoesque,porfavor...,porfavor,mequieras».
Pero¿cómonolovoyaquerersiestoycompletaylocamenteenamoradadeél?Abrazadaamiamor,cierrolosojosydisfrutodeesemomentomágicomientrassoyconsciente
dequeélnosefijaenotramujer.Sólotieneojosparamí.NosésiEricsabecuántolonecesito.Avecesmehacedudarlocuandoanteponeeltrabajoamí,
perocuandotienemomentoscomoéste,enelquebailaconmigo,séquelohacedecorazón.Megustasiemprequemehacesentirespecialy,enesteinstante,enestesegundoloestáhaciendoyyosoylamujermásfelizdelmundomientrasbailoconélesarománticaymaravillosacanción.
Tan pronto como termina, comienza otra, y yo continúo abrazada a mi amor bailando ydisfrutandodelmomentomientras a nuestro alrededor la gente disfruta del sexo con libertady seoyensusjadeos.
¡Excitante!De pronto, unas manos, además de las de mi marido, me agarran por la cintura y oigo que
alguiendiceenmioído:—Suenanuestracanción.Ericyyonosmiramosysonreímos.Sinlugaradudas,CryMeaRiver[26]esunacanciónmuy
especialparaBjörn,paraEricyparamí.Entonces,miamormurmura:—AúnrecuerdolobienquelopasamosaquellanocheencasadeBjörn,cuandotú,pequeña,nos
poseístealosdosmientrassonabaestacanción.Asiento.Sonríoycierrolosojosmientrasbailamos...,nosdevoramos...,nosexcitamos.Recuerdos.Preciososycalientesrecuerdos tomanmimentemientrassientoque lacomplicidad
quenos unió años atrás sigue vigente entre nosotros y que, por suerte, aMel, la futura esposa deBjörn,noleimportayrespetadichacomplicidad.
Los tres bailamos la sensual canción interpretada por la voz deMichael Bublé, mientras EricdevoramibocayBjörnpasealasmanospormicuerpo.
Inconscientemente,miroamialrededorenbuscadeMelyobservoqueellaestádesnudasobreuna cama pasándoselo bien con Frida y Andrés. Nuestras miradas se encuentran y mi amiga mesonríe. Su gestome hace saber que aprueba aquello y, sin dudarlo, cojo lasmanos de los dos y,mirándolosalosojos,losllevohastalaenormecamadondeMeldisfruta.
EricyBjörnsesientanunoacadaladosinhablar.MiamorvuelveatomarmibocamientrasmedesabrochalablusayBjörnmeabrelaspiernasymebesalacarainternadelosmuslos.
Misjadeosnotardanenllegar,yEric,queestáatentoamí,sonríeymurmura:—Disfrutaydisfrutaremosnosotros.Lo sé. Sé que es así. El placer que esos dos hombres saben proporcionarme no me lo ha
proporcionadoningúnotrodúo.EricyBjörn,BjörnyEricestáncompenetradosparamíencuantoalartededarplacer.
Comodosexpertoseneltema,medesnudan,metocan,mechupanymehacendisfrutar.Björnyaestádesnudo.Tras levantarse, hacequeme siente sobre ély, pasando losbrazosbajomismuslos,susurramientrasEricsequitalaropa:
—Esoes,déjatemanejar.
Suvozenmioídoy lamiradademiamoresmorbopuroy,cuandoEricseagachaypasealabocapormihumedad,tiemblo.Björn,queesquienmesujeta,meabrebienlosmuslosparamiamorydiceenmioído:
—Primerotefollaráélydespuéstefollaréyo;¿estáspreparada,preciosa?Asiento.Asientoyasiento.¡Preparadísima!Paraellosdosestoysiemprepreparada.Entonces,Ericselevanta,memiraymebesadejándome
elsaborenlabocademipropiosexo.Enloquecidoporelmomento,metesuduropeneenmivaginaylenta,muylentamente,seintroducedeltodoenmímientrasyogimoyBjörnmurmura:
—Jadea...,grita...,vuélvenoslocosdeplacer.Al oír mi jadeo, Eric mueve las caderas y se clava de nuevo en mi interior. Yo grito. Con
movimientossecosycontundentes,mimaridoentraysaleunayotrayotravezdemí,mientrasyoloacepto.Mis jadeos losvuelven locos.Mis resuellos los excitan, cuando siento cómo lasmanosdeaquellosdosmetienentotalmenteinmovilizadayséqueestoyasumerced.
Misperversosycalientesgritosavivansudeseo,yentoncesEric,agarrándomedelacinturaconfuerza,selevantadelacamaconmigoenbrazos.Björnseincorporatambiény,mientrasmiamormemaneja para encajarme una y otra vez en él, soy consciente de que nuestro amigo se pone unpreservativo.
Comounamuñecamemuevoentresusbrazos,hastaqueEricdaunalaridogustosoyséquehallegadoalclímax.Memiraagotadoy,sinsalirsedemí,susurra:
—¿Todobien,cariño?Asiento.Todomejorquebien.Concuidado,saledemí,sesientaenlacamay,haciéndomesentarsobreél,vuelveaabrirmelos
musloscomoinstantesanteshahechoBjörn.Despuésmebesaenelcuelloy,mientrasobservocómoBjörn ledevora los labiosaMel,queestáanuestro ladodisfrutandoconFridayAndrés,Ericmedicealoído:
—Eresmía.Extasiadaporsuspalabras,porsuvozyporelmomento,veocómoBjörnabandonalabocadesu
mujer, seacercaanosotrosy, trasecharmeaguaenel sexopara lavarme,mecogepor lacintura,acercasuduropeneamiempapadavaginaymeempalaporcompleto.
MientrasEricmeabrelosmuslosparaBjörn,noparadedecirmelopreciosaquesoy,cuántomeamaylomuchoqueloexcitavermeasí.
Uf...,quéplacer...,quécalor.Björn, que está tan excitado comoyo, nome suelta las caderas y, conmovimientos certeros y
precisos,meempalaunayotravez,mientrasyodisfrutoymedejollevarporelmomento.LasacometidasnoparanhastaqueEriclopide.Entonces,sinsalirse,Björnmelevantaysiento
cómoEricguíatambiénsupenehaciamivaginaymurmuraenmioído:—¿Puedo?...Asiento...,claroquepuedey,excitadaalnotaraquello,afirmo:—Soytuya.Hazlo.LalenguadeEricsepaseapormicuellocuandolooigodecirconvoztrémula:—Despacio,Björn...
Elabogadomesujetaconcontrolmientrasmiamorfuerzalaentradadesuvergaenmiyarepletavagina y, al final, lo consigue. Ambos penes se funden en uno solo, y el placer que siento esindescriptible,increíble,yjadeo.
Loquemisdosadonismehacenmevuelvelocay,cuandoestoyempaladavaginalmenteporsusenormesydurosmiembros,comienzanamoverseymisgemidossevuelvengritosdepuroplacermientrasveoqueMelseacercaaBjörny,trasabrazarlo,lobesa.
Loca.LocamevuelvenEricyBjörnconsucompletaposesión,yesomehaceechar lacabezaparaatrás.Notomivaginallena,repletaarebosar,peroelplacerestanintenso,taninmensoquenoquieroqueesasensaciónacabe.
SientolarespiracióndeEricenmiespaldamientrassusmanosexigentesmemuevenenbuscadenuestro placer. Eric y Björn. Björn y Eric. No paran. Son insaciables. Sus respiraciones y susmovimientos me enloquecen, y yome dejo manejar como si fuera unamuñeca.Me gusta ser sujugueteylosoymientrasjueganconmigoymemimananuestraparticularmanera.
Querríamiraramimaridoybesarlocomohacenmisamigosy,comosimeleyeralamente,miamorsusurraenmioído:
—Después,micorazón...,después.Calor...,tengomuchísimocalormientraslasangrecorredescontroladapormicuerpoytodasmis
terminacionesnerviosasmehacensaberquemevoyacorrer.Cuatro manos me sujetan, dos cuerpos me poseen, y mi vagina está totalmente dilatada y
empapadapormisfluidos.Placer...,placer...,elplacermetomay,cuandoyanopuedomás,medejoirmientrasmicuerpoes
movidoporaquéllos,queinstantesdespuéssecorrenporyparamí.Pasadosunossegundos,cuandoBjörnsesale,meguiñaunojoysemarchaconMelaunadelas
duchas.EncuantoEricsaledemítambién,medoylavueltaymiamormurmuramirándomealosojos:
—Vamos...,bésame,morenita.
46
Elmartes,elgrupodeamigosquedaronparacenarencasadeJudithyEric,peroantesde lacenadecidieronmeterseenlapiscinainteriorparajugarconlosniños.
Flyn y Peter se escaparon al cuarto del primero para ponerse los bañadores, ya que erandemasiadorecatadosparahacerloenlosvestuariosdelapiscina.
Mientras Eric, Björn y Andrés se ocupaban de los pequeños, Frida, Mel y Judith fueron acambiarse de ropa en los vestuarios. Una vez tuvieron los biquinis puestos, mientras se quitabananillos,relojesypendientesylosdejabansobreunahamaca,Fridacuchicheó:
—EnSuizahayunoslocalesquesondelomáschulos;¡tenéisquevenir!—Iremos—afirmóJudith,yMelsonrió.Minutos después, los tresmatrimonios estaban sumergidos con los pequeños en el agua de la
piscina cuando aparecieron Flyn y Peter y se tiraron en bomba. Entre risas, todos comenzaron ajugar, y Mel, al ver a Björn divirtiéndose con Sami y con Peter, se acercó a su amiga Judith ysusurró:
—¿Noteparecesexi?Judith miró en su dirección y pensó que sí, que Björn le parecía sexi, aunque, mirando a su
marido,quellevabaalpequeñoEricsobreloshombros,respondió:—Soymásderubios,perdóname.La diversión duró un buen rato, hasta que decidieron salir de la piscina y secarse. Sin duda,
Simonanotardaríaenanunciarlesquelacenayaestabapreparada.Una vez se vistieron, después de que las chicas recogieran sus alhajas de la hamaca, Judith
murmuró:—Noencuentromianillo.—Seguroquesehabrácaído—replicóMelmirandoasualrededor.Todos comenzaron a mirar por la piscina en busca del anillo perdido, y Eric, acercándose,
preguntó:—¿Québuscas?Judithleenseñóeldedovacíoyarrugóelentrecejo.—Mianillopreferido.Élasintió.Sabíaqueaquelanilloquelehabíaregaladohacíaaños,enelqueponía«Pídemeloque
quierasahoraysiempre»,eraespecialparaellay,mirandoalsuelo,murmuró:—Tranquila,cielo.Aparecerá.Duranteunbuenratotodosestuvieronbuscandoelanillo,peroéstenoaparecióporningúnlado,
yEric,mirandolapiscina,finalmentedijo:—Quizásehayacaídodentro.Mañanalocomprobaremos.
Judithasintió.Pero,alvercómolamirabaFlyn,susextosentidolapusoenalertay,acercándoseaél,lepreguntócontotaldiscreción:
—¿Hasvistoaalgunodelosniñosacercarsealahamaca?Elcríoserascóelcuelloyrespondióconunasonrisita:—No.Judith comprendió entonces por su sonrisa que mentía; lo conocía demasiado bien. A
continuación,bajandounpocolavoz,musitó:—Túnotendrásnadaquever,¿verdad?Aloírla,elcríodiounpasoatrásygritó:—¡¿Creesqueyotengotuanillo?!—Flyn...—siseóellaalverqueEriclosobservaba.—¿Yyoparaquéquierotuanillo?—Flyn...,bajalavoz.—¿Porquéhedebajarlavozsimeestásacusando?—insistióaquélconscientedequeEriclos
estabamirando.Alertado,Ericlosobservóperoentonceselmuchachogritóenfadado:—¿PorquénolepreguntasaPeter?—¿APeter,porqué?Entonces,todoslosmiraron,yFlynindicócuandoMelseacercabaaellos:—Porqueéltambiénestabaaquíconmigoy,silopiensasmejor,élpuedenecesitareseanillomás
queyo.—¡¿Qué?!—protestóMelaloíreso.—Dejadedecirtonterías,Flyn—gruñóJudith.Confundido,Björnclavólamiradaensuhijo,yelmuchacho,quellevabaaSamienlosbrazos,
replicó:—Yonohetocadoeseanillo.Siqueréispodéisregistrarmiscosas.—Claroquenolohastocado—afirmóMelcolocándosejuntoalcrío.Aloíreso,Ericseacercóhastaellosparaponerpaz.PeroJudith,molestaporelcomentariode
Flyn,losoltó:—¿Acasoesnecesarioacusaraotroscuandoyosólotehepreguntadoati?—Bastaya—seentrometióEric—.Seacabóestaconversación.PeroFlyn,deseosocomosiempredejaleíto,miróasupadreygruñó:—Papá,¿porquémetienequeacusardeteneryoelanillo?—Quizáporquehevistocómomeobservabasylasonrisitaqueponías.—¡Hedichoqueyabasta!—insistióErice,intentandosuavizareltono,sedirigióaunaenfadada
Judithyafirmó—:Seguroqueelanillosehacaídodentrodelapiscina.Vayamosacenarymañanapediréquelobusquen.Venga,¡todosacenar!
FridayAndréssemiraron.Sinlugaradudas,larelacióndeJudithconelcríonoestabapasandoporunbuenmomento.
Sinmás,todossalierondeallíysedirigieronhaciaelcomedor,dondesesentaronalrededordelamesa.Tratandodedisimular sumalestar conFlyn, Judithcambióelgestoparahacerles saber a
todosque loocurridonohabía tenido importancia,peroMel,que laconocíamuybien,unade lasvecesenqueambasselevantaronparairalacocina,ledijo:
—Jud, siento lo ocurrido, pero creo que si pusiera las manos en el fuego por Peter no mequemaría.
Judithasintióconunasonrisa.Ella,encambio,nopondríalasmanosporFlyn.—No pienses más en eso—contestó mirando a su amiga—. Seguro que el anillo está en la
piscina.
Aldíasiguiente,Judithselevantóantesquenadie,bajóalapiscinay,trasponerseunasgafasdebuceo,larecorriódosvecesdepuntaapuntayelanillonoapareció.
47
LosdíasqueFridayAndrésestuvieronenMúnichlospasaronconlafamiliaylosamigos.Estarconelloseradivertido,ylanocheenquetuvieronquemarcharse,lohicieronconpesar.
TraselepisodiodelanillodeJudith,BjörnhablóconPeteralrespecto,yésteledejómuyclaroqueélnohabíatenidonadaquever.Björnlocreyó.
Unanoche,despuésdequeMelacostaraaSamiyPeteryasehubieraidotambiénalacama,entróen su habitación y miró al hombre moreno que tantos buenos momentos le daba. Björn estabaleyendounospapelesqueteníasobrelacama.
—Niñosacostadosyperradormida.Elabogadosonrióaloíresoy,trasrecibirelbesodeMel,murmuró:—Sólofaltastúdesnudaamilado¡ylanocheserácolosal!Mel,dispuestaadarleaquelloqueélsolicitaba,dijo:—Damecincominutosparaunaduchaytendrásloquepides.—Guauuu,¡quéinteresante!—semofóelabogadoviéndolamarchar.Alentrarenladuchaysacarseelmóvildelbolsillotraserodelvaquero,vioqueteníaunmensaje.
Dimesiaceptaselpuestodeescolta.Mepresionanynecesitouncandidato.
Al leerlo, Mel supo que era del comandante Lodwud. Pensar en hablarlo con Björn era
complicadoy,dejandoelmóvil,decidiómeterseenladucha.Necesitabarefrescarlasideas.Cuandosaliódelbaño,sesorprendióalnoveraBjörnenlacama,dondelohabíadejado,porlo
que,trassecarseelpeloconunatoallayvestidatansóloconelalbornoz,lobuscóportodalacasa.Alnoencontrarlo,decidióiramiraraldespacho.
—¿Quéhacesaquí?Björnsonrióalverla.—Elexpedientedeestecasoestaba incompletoydecidíver si estabanaquí lospapelesqueme
faltaban.—¿Yestaban?—preguntóellaapoyándoseenlamesa.Alverladeaquellaguisa,Björnasintióy,retirándoleunpocoelalbornozparaverle lapierna,
afirmóconvozronca:—Tentadora.Actoseguido,cogióalajovenenbrazosy,trassentarlaahorcajadassobreél,labesó.Cuandose
separódeella,dijo:—Nosésivoyapoderesperaraseptiembre...Melrio.
—Podrás...,claroquepodrás.Depronto,Björnrecordóalgo.—Mel,tengoquedecirtealgoyesperoquenotemoleste.—Aloíreso,ellafruncióelceño,yél
prosiguió—: Esta tarde, Sami me ha dicho emocionada que en la tele tenía canales de dibujosanimadosnuevosy...
—Vale..., vale..., sé loquevas a decir—lo cortó ella—.Pero, cariño,Peter sóloha tenidoquemeterunaclavedesdesuordenadory...
—Mel,noquieroquepirateenada.¿Dequésirvequeyoseloprohíbaytúselopermitas?Melsuspiró.Sabíaqueteníarazóny,singanasdediscutir,asintió.—Deacuerdo.MañanalediréaPeterquequiteesoscanalesytambiénlosdedeportes.—¿Deportes?—preguntóél.Melsonrió.—Sí,cielo...,unmontóndecanalesdedeportes—dijo.Alversugestotravieso,Björnasintióy,trascogerelmandodelequipodemúsica,loaccionóy
comenzóasonarlacanciónAChangeIsGonnaCome.[27]—¿Seal?—Contigonuncafalla—respondióélbesándola.La exteniente se olvidó de lo que estaban hablando mientras la increíble canción sonaba y
caldeabasegundoasegundosuscuerposysusalmas.Seadoraban,senecesitaban,perosiantesconSamisutiempojuntosseveíareducido,ahoraconPetersereducíamásaún.
Mel pensó en el mensaje que acababa de recibir de Lodwud. Tenía que hablar con Björn deaquelloy,aunquesabíaqueésenoeraelmejormomento,separándosedeélcomentó:
—Cariño,tengoquehablarcontigodealgo.Björn,queyaestabatotalmentelanzadoaloquesehabíapropuesto,asintió.—Después...,preciosa...,después.—Björn...—Luego...,ahoraestoymuyocupado.Melsonriópero,parándolodenuevo,explicó:—He recibidounmensaje deLodwud en elmóvil.Hede dar una respuesta en relación con el
trabajodeescolta.Elpuestoesmíosiloquiero.Aloíreso,elabogadoapartóincómodolasmanosdeellaypreguntó:—¿Yquévasadecir?Melsuspiró.Sabíaqueelbuenrolloseacababadeterminar,porloquerespondió:—Escucha,cielo,estoyintentandohablarlocontigo.—Pues si lo estás hablando conmigo, la respuesta es no.No quiero quemimujer sea la puta
escoltadenadie.Sutono,suformadedecirloylarabiaquedetectóensuspalabrashicieronqueMellomiraray
gruñera:—Oye,¿túquétecrees?¿Queyosoyunapánfilacomoesasmujeres?¿Acasopiensasquevasa
dirigirmividaenloreferentealoquequierohacer?—¿Quieresdejardemalmetercontraelbufetedeunavez?Estoyhartodeque,alamínima,sólo
salgandetuboquitacosasdesagradablescontraellos.Mira,Mel,llevoañosintentandoconseguiresesueñoyestavezrozamisdedos,portanto,¡nolojorobes!
Ellasuspiró.Pornadadelmundoqueríajorobarsusueñoe,intentandonovolveradecirnadadeaquéllos,insistióeneltemaqueleinteresaba:
—Cariño,hicimosuntrato.Yomecasabacontigoytúaceptabasque...—¿Tehascasadoconmigo?Laextenientelomiróy,echandochispasporlosojos,respondió:—Björn...,esonoesjusto.Elalemánnosemovió.Sabíaqueloqueacababadedecirnoeracorrecto.—Escucha,cariño—insistióella—,tenemosquehablar.Haycosasquenosabesenrelacióncon...Björnlasoltóofuscadoy,apartándolaaunladoparalevantarse,siseómientraslacortaba:—Mira,enesteinstantesemehanquitadolasganasdecualquiercosacontigo.Buenasnoches.Actoseguido,seencaminóhacialapuertaysaliódeldespacho.Mel,boquiabierta,nosemovió
mientrasseguíasonandoaquellamaravillosacanción.
48
MirelaciónconFlynsigueigual.Ericseencargaahoradeél,peroelcríocontinúasindirigirmelapalabra. Eso sí, ahora soy como los tresmonos sabios: no oigo, no veo, no hablo. Sin embargo,añoronuestrasconversacionesynuestrasrisas.
¿Élnolasechademenoscomoyo?Mi anillo no aparece y estoy apenada. Ese anillo significaba mucho para mí, y Eric se ha
empeñadoenencargarmeotroigualyséquecualquierdíalotraerá.El jueves, tras llegarde trabajardeMüller,me tomouncafé en la cocinamientras charlo con
Simona.Flyn entra seguido por el pequeño Eric. Rápidamente, al ver a mi chiquitín, que viene a mis
brazos,medeshagoenhalagosconélyluegosalgodelacocinadesumanoparairaveralgoquequiereenseñarme.
Encuantoregresoalacocina,nohaynadie,niFlyn,niSimonay,trasabrirunarmario,sacounasgalletitasymelascomoconelcafé.
¡Quéricas!Un par de horas después, comienzo a sentirmemal.Mi estómago se descompone y tengo que
correralbañoenvariasocasiones.CuandoEricllegadetrabajar,noceno.Meencuentrofatal.Miamor,alvermeeneseestado,sepreocupaysedesvivepormí.Sinlugaradudas,siunaquiere
latotalatencióndeEricZimmerman,sólotienequeencontrarsemal.¡Vayatela!Demadrugadamedespiertoy,sindecirlenadaamichicarrón,voycorriendoalbaño.Asqueada,piensoenquéhepodidocomerparaquemiestómagoestétanenfadadoconmigo.Tengomuchased,porloquebajoalacocina.Sacounabotellitaconaguafríadelfrigoríficoy,
comono tengosueño,mesientoaoscurasy,alver sobre laencimera lamaripaz, como llamamihermanaaliPad,locojoymepongoacotillearporFacebook.
Cuando he cotilleado todo lo posible,memeto en el perfil de JackieChanZimmermany leo:«Carrerasencasa.Sinduda,lasgotasfuncionan.¡Quérisas!».
¡Lamadrequeloparió!Yaséporquémeencuentromal.Pero¿deverdadhasidocapazdehacermealgoasí?Enfadada,hagounacapturadepantalla,melevanto,salgodelacocina,subolaescalera,entroen
la habitación de Flyn y, cuando doy unmanotazo sobre la cama y éste se incorpora asustado, lesuelto:
—¿Quémehasechado?Flynparpadea.Estabadormidoy,furiosaporloquehahechocontramí,pegomifrentealasuya
ysiseodispuestaapartirlelacaracomomedigaalgofueradelugar:
—Estoesloúltimoqueesperabadeti.¿Cómopuedessertanretorcidoconmigo?—¿Dequéhablas?—pregunta.—Tehasreídoagustocontusamiguitosporlodelasgotitas,¿eh?Noresponde.Sabequelohepilladoy,furiosa,lesueltoantesdesalirdesuhabitación:—Escúchame,JackieChanZimmerman,medueleenelalmatenerquedecirteesto,peroahorala
quenoquieresabernadadetisoyyo.RegresoalacamaymemetoenellasindespertaraEric.
Alamañanasiguiente,cuandomelevanto,nodigonada.SipuedoevitarledisgustosaEric,selosevitaré.Mepreocupaqueleduelalacabezayesohagaquesuvistapuedaempeorarpero,conmigo,elniñatohadadoconunhuesoduroderoer.
Eldomingo, tresdíasdespués, trashabervistounpartidodebasketdeEricyBjörn,donde lospobrecitosmíospierden,cuandosalimosdelpolideportivoobservosorprendidacómoFlynyPeterhablan de sus cosas. Sin lugar a dudas, Peter tiene una gran capacidad para perdonar comentariosmalignosyolvidar, yunmagnetismoquehacequenos estéganandodía a día a todos, incluido aFlyn.
Con curiosidad, mientras estoy con Mel y los pequeños, observo cómo Eric y Björn,acompañadosdelosdosadolescentes,ríenyhablanapocosmetrosdenosotras.Alpercatarsedequelosobservo,miamigadice:
—Megustaverlacamaraderíaquehayentreellos,¿atino?Asiento—¡por supuesto queme gusta!—, y respondo omitiendo la acción vergonzosa quemi
hijohahechocontramí:—Claroquesí.Dichoesto,Hannahletiendelosbrazosasupadreyéstelacogeencantado.Luego decidimos ir a tomar algo al restaurante deKlaus. Nos encaminamos hacia los coches
cuando,depronto,alguienmeagarradelcodo.Aldarmelavuelta,pestañeo.¡Flyn!Sinhablar,esperoaverquéesloquequiere,yalfinaldiceenuntonodevozbajo:—Sientolodelotrodía.Nodeberíahaberteechadonadaenelcafé.Bueno...,bueno...,bueno...¡Flyndisculpándoseporalgo!Mequedotanbloqueadaquenoséquéhacer.Abrazarlono.Besarlotampoco.Séquerechazará
ambascosas,porloquedigosimplemente:—Aceptotusdisculpas.Flynasiente,memiraalosojosdeunmododiferenteydespuéssealejademí.Yomeemocionocomounatonta.Esanoche,cuandollegamosacasayaparcamoselcoche,SustoyCalamarvienenasaludarnos,y
Simona, que está conNorbert esperándonos,me dice que ha ido a una tienda que está abierta losdomingos a comprar y nos ha dejado hecho un pastel de carne en el horno. Yo asiento y se loagradezcomientras toco lacabezadeSusto.Luegoelmatrimonio seencaminahacia sucasade lamano.
Alentrar,EricsemetedirectamenteensudespachoconFlynymedesmarcandesuconversación.
CuandoPipavaasubirconlospequesparaducharlos,despuésdebesuquearlos,medirijohaciael despacho.Con lamano en el pomo, estoy a punto de abrir pero sé que, si lo hago, las chispasvolverán a saltar, y finalmente doy un paso atrás. Pienso en Eric y decido dejar las cosas en susmanos.Eslomejor.
Necesitada de hacer algo, voy a la cocina y, obviando el rico pastel de carne de Simona,mepongo a pelar patatas.Voy a hacer una demismaravillosas tortillas de patata. Esas que tanto nosgustan a todos, incluido a Flyn. El hecho de que me haya pedido disculpas me ha causado tantaimpresiónquequierohaceralgoquepuedagustarleaély,sinduda,esolevaagustar.
Duranteunbuenrato,meafano.Hagounaensaladadetomatesfrescoscondaditosdemozzarella,dosexquisitastortillasquehuelenagloriayabrounodelospaquetitosdejamóndeJabugoquemipadrenosenvíacadames.Sabequeadoroesejamóny,comosuniñaquesoy,aunenladistanciamesiguedandoelcapricho.
Unavezcolocoeljamónsobreunplatito,ylopongoenlamesajuntoalaensaladadetomateylas tortillas,meencaminodenuevohaciaeldespacho.Pego laorejaa lapuertaycomprueboquesiguenallí.Después, abrocon lamejordemis sonrisasyEricyFlyndejandehablarymemirancomosinotuvieraqueestarallí,porloquepregunto:
—¿Quépasa?¿Nopuedoentrar?FlyndirigelavistahaciaotroladoyEricresponde:—Claroquepuedesentrar,cariño.Su contestación me gusta, me tranquiliza y me demuestra que mi marido quiere que siga
participandodeesasreuniones.Sentándomeenunasilla,mededicoaescucharloqueErichablaconFlyny,cuandofinalmenteacaba,miamormepregunta:
—Jud,¿quieresañadiralgo?Pormicabezapasanmilcosasqueañadirpero,comonecesitoquehayapaz,enespecialporEric,
quenoganaparadisgustos,ydespuésde ladisculpaqueesedíaherecibidodeFlyn,niegocon lacabezay,levantándome,musito:
—No.Al oír eso, el chico me mira. Veo que lo sorprende que no le chivatee a su padre su última
fechoría,quemehavaciadolastripas.Y,deseosadeveraEricfeliz,digo:—Venidconmigoalacocina,hepreparadoalgomuyricodecena.Ericsonríealpercibirmialegría.—Pero¿nohadichoSimonaquehabíadejadopasteldecarne?Asientopero,sinquererrevelarlesmisorpresa,insisto:—Venga.Vayamosalacocinayluegomedicessiprefiereselpasteloloqueyohepreparado.EricyFlyncaminandelantedemíy,cuandoentramosenlacocina,miamordiceencantado:—Tortilla de patata, tomates conmozzarella y jamónde ese tan rico que envía tu padre. ¿Qué
celebramos?Depronto,suenasumóvil.Losacadelbolsillodesupantalóny,almirarlo,indicalevantandola
mano:—Dadmeunsegundo.Enseguidaregreso.Unavezélsaledelacocina,elsilencioseapoderadellugar.Flyncaminahacialanevera,laabre
ycogeunacoca-cola.Cuandoregresaalamesa,lomiroydigo:—Yotambiénquierouna.Sin gesticular en exceso pero haciéndome saber que lo jorobami comentario, deja su bebida
sobrelamesa,abrelanevera,cogeotralatay,dejándolaantemí,dice:—Aquílatienes.Unavezsesienta,abresulataydauntrago.Consumismachulería,cojolamíay,alabrirla,la
coca-colasaleapresiónymesalpicalacara,lacamiseta,elpeloytodoamialrededor.—¡Joder!—protesto.Flynsueltaunarisotada,yyo,furiosaaloírlo,metolamanoenlaensaladadetomatesy,nicorta
niperezosa,selaextiendocontodamimalalecheporlacara.Aljodidocríoselecortalarisaalinstante.—¿Porquélohashecho?—gruñe.Empapadadecoca-cola,lomiro.—Dondelasdan,lastoman.O,mejordicho,elqueríeelúltimoríedosveces,JackieChan.Enfadado, se levanta. De pronto la puerta se abre, y Eric, al ver nuestras pintas, exclama
sorprendido:—Pero¿quéoshapasado?Conunaservilleta,terminodesecarmelacarayelpeloyrespondo:—Pregúntaseloaél.—¿Amí?¿Porquéamí,siyonohehechonada?—protestaelcrío.—Sí, claro—memofo—. Y por eso la coca-cola que ¡tú! me has traído de la nevera me ha
explotadoenlacaraalabrirla,¿verdad?Ericnosmira...,nosmira,yFlyninsiste:—Papá,tejuroqueyosólohesacadolacoca-coladelaneveraylahedejadosobrelamesa.Lo
queelladaaentenderesmentira.¡Telojuro!—¿Selojurascomoamímejurasteenotromomentootrascosas?—lereprochoyo.—Noestoyhablandocontigo,estoyhablandoconmipadre—siseaélenfadado.—¿Hablascontupadre?—digolevantandolavoz—.¿Yyoquésoy?,¿unmueble?—Elniñono
contesta, y prosigo—: Porque, que yo recuerde, hasta hace poco yo era tu madre y tu segundoapellidoes¡Flores!¿Mepuedesdecirquéhehechoparaqueyanomequieras?
—Yonohedichoquenotequiera—vuelveasisearelmuchacho.Surespuestamesorprende.¡Ay,quemequiere!Pero,calentitaqueestoy,digo:—Puesentonceshablamosidiomasmuydiferentes,Flyn,porqueelqueyanomellames«mamá»
yquecontinuamentemeestéshaciendoputaditasparasacarmedequiciodamuchoquepensar,¿noteparece?
—Jud,¡bastaya!—gritaEric.Oíresomeenerva.¿Porquénuncaseponeenmilugar?¿Porqué?Y,cuandoFlynsedalavuelta
ysaledelacocinaenfadado,añade:—Muybien,Jud.Cadadíalohacesmejor.Dichoesto,éltambiénsaledelacocina.Acontinuación,mesientoenlasilla,miroelestropicio
quehayamialrededor,conlostomatesylacoca-cola,ymurmuroenfadadaconelmundo:
—Ytútambién,Eric.Tútambiénlohacesmejorcadadía.
49
El lunes,Ericsevaantesqueyoa laoficina.Harecibidouna llamadadenoséquiénysemarcharápidamente.Yonilepregunto.Traslasemanitaincómodaquehemospasado,prefieroquesevayasinmí.
Porello, cojomicocheycon tranquilidadconduzcohastaMüller.Entroenmidespachoymeencuentrounaplanta.Alverlapiensoque,siesdemimarido,subiréasudespachoyselaestamparéenlacabeza.Elmuycabritonomehadirigidocasilapalabradesdeayery,comoselehayaocurridoenviarmeeso,mevaacabreartodavíamás.
Duranteunbuen ratoomito la tarjetitaqueveoenun lateral,perocuandoyanopuedomás, lacojoyleo:
Esperoquetodosehayasolucionado.SeguroqueaEricyaFlynyaseleshapasadoelenfado.Concariño,
GinebrayFélix
¡¿GinebrayFélix?!¿CómoqueGinebrayFélix?¿PorquésabenellosqueFlynyErichandiscutidoconmigo?Acadainstantemásenfadada,cojolanotitaymedirijoalascensor.Ericmevaaoír.Conpaso
firmeyseguro,llegohastasuplantay,antesdequesusecretariamevea,abrolapuertadeldespachoymequedoparalizadaalverjuntoaEricalaspersonasquemehanenviadolamaceta.
—Aquíestá—aplaudeGinebra—.Ibaabajaryoahoramismoaverte.Queríasabercómoestabasysitehallegadonuestraplantita.
Mecagoensupadre,ensumadrey,comodiríamipadre,¡entóssusmuertos!El gesto de Eric me indica que, además de mi lengua, contenga lo que pienso y, fabricando
rápidamenteunasonrisa,respondo:—Muchísimasgraciasporlaplanta.Hasidotodoundetalle.Félixsonríeyacercándoseamí,murmuramientrasyotocomidedosinanillo:—Mealegraquetegustaraeldetalle.SeleocurrióaGinebra,despuésdequeEricnoscontaraen
eldesayunoquehabíaistenidounfindesemanamovidito.Esa información sobre nuestros díasmoviditos..., ¿por qué tienen que saber nada ellos? Pero,
intentandonodejarmalamiestúpidomarido,cuandoloquesemereceesquelopisotee,respondo:—¡Undetalleprecioso!Estoyparadaallíenmedio,sinsaberquéhacer,yentoncesmiencantadormaridopregunta:
—¿Queríasalgo,Jud?Lo miro. Claro que quería algo, pero ahora quiero arrancarle los ojos y, reaccionando
rápidamenteasupregunta,digo:—No.Erasóloparasaberquehabíasllegadobien.Sabeperfectamentequeesmentiraloquedigo.—Bueno, pues en vista de que estás estupendamente,me voy a trabajar—añado, ymirando a
aquellosdos,digo—:Hasidounplacervolveraveros,ygraciasporlaplanta.Sindecirnadamás,doymediavueltaycaminohacialapuerta.Unavezsalgodeldespacho,como
siflotaraenunaburbujita,voyhaciaelascensorperoalguienmecogedelcodoy,alvolvermeparamirar,meencuentroconEric.
—Jud...—Teodio—susurrosinquenadienosoiga.Eric sabemuybienporqué lodigoy, cogiéndomede lamano, tirademíconeleganciayme
llevahastaunasalapequeña.Unavezcierralapuerta,dice:—Escucha,cariño.Fueunsimplecomentario.Nohedichoque...—Me da igual—insisto furiosa—. Les has contado que habíamos discutido y, además, nome
dijistequeteníasquedesayunarconellos;¿porqué?Mipreguntaloincomoda,seloveoenlamirada,peroresponde:—Porquenoeraimportante,Jud.Poresonotelocomenté.Nolocreo.Porprimeravezenmuchotiempo,nocreoloquemecuenta,ysiseopensandoenlas
advertenciasdeFrida:—¿Quéhacenellosdosentudespacho?Ericnodicenada.Daunpasoalfrenteparaacercarseamí,peroyo,quenoestoydispuestaacaer
ensuinflujo,doyunoatrásalverquenovaacontestaramipregunta.—Hederegresar—digo—.Tengomuchotrabajo.Y,sinmás,caminohacialapuertaymevoy.Ericnovienedetrásdemí.Trasunamañanacaóticadonde la leydeMurphy juegaenmicontraymepreguntoaquellode
«¿Qué más puede salir mal hoy?», al abandonar Müller siento un gran alivio cuando suena miteléfono.EsMarta,micuñada.
Quiere quenos veamosy quedo con ella.Estar conMarta siempre es un soplo de aire fresco.ParecementiraqueseahermanadeEric.Ellaestodopositividad,yélestodolocontrario.
Hablamosdesuembarazo,delofelizqueessuvidaahora,hastaque,mirándomeconesacaraquetantomehacereír,dice:
—PorDios...,porDiossss,¡memeootravez!Suelto una carcajada al ver cómo se va corriendo al baño. Aún recuerdo cuando yo estaba
embarazadalomeonaquemevolví,yriendoestoyporesocuandooigo:—Nomedigasquehoytambiénmeveréobligadoadetenerte...Aldarmelavuelta,veoqueesOlaf.—Señoragente,deténgameporpedirdobleracióndefrankfurt—respondo.Élsonríe,seacomodaamiladoy,traspedirunacervezaalcamarero,dice:
—Oye,sientomucholodetuanilloylodeFlyn.Oh...,oh...,creoquemevoyaenterardealgoquenoséy,sincambiarelgestoparaqueOlafnose
percatedequenosénada,murmuro:—Yaves...,cosasdemuchachos.¡Vayaocurrencias!Olafasiente.Elcamarerolesirvelacerveza,éldauntragoy,cuandoestoylocaporquedigaalgo
másomevaadaruninfarto,añade:—CuandoEricmecontóloocurrido,rápidamenteenviélafotodetuanilloalasdistintascasasde
empeñosdeMúnichy,encuantomeenviaronlaconfirmacióndequeestabaenunadeellas,sólotuvequeverlacintagrabadadellocalparacomprobarquehabíasidoFlynquienlohabíallevado,aunquelaventalafirmóunamigotesuyomayordeedad.
Ay,madre...Ay,madre...¿Flynmerobóelanilloylollevóaunacasadeempeños?Uf...,uf...,¡quécalormeentra!¡Quéfatiguita!Asientocomosifueramediotonta,yfinalmenteconsigomurmurar:—Porsuerte,hemospodidorecuperarlo.—Sí—afirmaOlaf—.PeronoveasquédisgustosellevóEriccuandoviolagrabación.Comosiyoestuvieraaldíadetodo,asientodenuevocomounaidiota,ydeprontolesuenael
móvily tras contestar, él sevuelve,yomiroy, alver adoschicas sonriéndole,dicedejandounasmonedassobrelamesa:
—Tedejo.Midoblecitahallegado.SaludosaEric.Sonríotratandodedisimular,yluegomecagoenelpuñeteroJackieChanZimmermanyenmi
marido.¡Seránmentirosos!TraspasarunratoconMartaynocontarleloquehedescubierto,mevoydirectamenteacasa.¡Vayadíadedisgustosquellevo!Allí,intentoolvidarladesagradablenoticiaqueOlafmehadadoypasounaestupendatardecon
mispequeñinesenlapiscina,hastaqueFlynentraypreguntamirándome:—¿Puedevenirunamigoacasa?Pormí,desdeluegoqueno.Sucomportamientoesparaqueestécastigadohastaquecumplacien
años.—Llamaatupadreypregúntaseloaél—respondomuyseria.—Yalohellamadoymehadichoqueloquedigastú.Joder...,joder...,joder...CómomejorobacuandoErichaceeso.Pero¿noseestáocupandoéldesupuñeterohijo?Noobstante,comonotengoganasdegrescaso,comosalgadelapiscinalearrancolacabezapor
lofuriosaqueestoyconél,respondo:—Hazloquequieras.Alfinyalcabo,esloquesiemprehaces.Esanoche,cuandoEricllegaacasa,nodigonada.Mecalloenreferenciaaloquesédelanilloy
esperoavercómosedesarrollanlosacontecimientos.Mimaridonodicenimu.Aldíasiguiente,trasunliosodíadetrabajoydespuésdepasardenuevolatardeconlosniños,
cuandoPipaselosllevaalacama,mevoyadarunpaseoconSustoyCalamar.Amisbichilloslesencantanesospaseos.
En cuanto regreso, Calamar se tumba agotado en el garaje, pero Susto, que nunca quiere
separarsedemí,mesigueyentraconmigoenlacasa.Divertida,continúojugandoconélcuando,aliralacocina,observoqueSimonaestápelandounaspatatasparahacerunaensaladaalemana.
Veo los ingredientes que le va a echar sobre la mesa: salchichas de Frankfurt, pepinillos,cebolleta,mayonesa,perejil, salymostazaantiguadeDijony, sabiendo lobuenaque levaasalir,murmuro:
—¡Quéganitasdecomerla,Simona!Lamujersonríeymenealacabeza.SindudaleestoyenseñandomuchascosasdeEspaña,yunade
ellasesquealosespañoles¡nosencantacomer!Sonriendo,caminohaciaelfrigorífico,loabro,cojounalatadecoca-colay,cuandolavoyaabrir,lamujermedice:
—¡Cuidado!Aloírla,meparo,lamiroypregunto:—¿Cuidadoporqué?Quitándomelalatadelasmanos,Simonaleponeuntrapoporencimaparaabrirlaydice:—El otro día, cuando regresamos del supermercado, aNorbert se le cayeron algunas latas al
sueloantesdemeterlasenlanevera,ynoquieroquealabrirlateexploteenlacara.¡Joderrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr!¡Joderrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr!¡Yjoderrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr!DeprontocomprendoqueacusésinfundamentoaFlyn.Deprontomesientolapeorbrujadelmundomundial.Deprontocomprendoquelacagué,cuandoélnohabíahechonada.Acaloraday llenade remordimientosporelberenjenalque lemontéalcrío, cojo lacoca-cola
queSimonameofreceyaabierta.Sinembargo,yanoparodemirarel relojhastaque llegaFlyn.Necesitodecirlequemeequivoqué.Soyasídeidiotaconél,aunquenoselomerece.
Mirandoestoyangustiadaporlaterrazadelsalóncuandoveoqueelchicoentraporlacancela.Decidoolvidarlodelanillo.Esoloresolveremosenotroinstante,perosoyconscientedequetengoquepedirledisculpasporlaquelelie.
Sindudarlo,mepongounabrigoyvoyensubusca.CalamarySustoyaestánconelmuchacho,yéste,cuandomeve,memiraconmalacara.Antesdequeéldiganada,meadelanto:
—Perdona,Flyn.Perdonaporhaberteacusadoporlodelacoca-cola.SimonamehacomentadoqueaNorbertselecayeronalgunasantesdemeterlasenlaneveray...
—Tedijequenohabíasidoyo—respondecongestoserio,sinmirarme.Asiento.Tienerazón,einsistocontodoelcariñoquepuedo:—Losé,cielo,losé,yporesotepidoperdón.Puedoestarmolestaoenfadadacontigoporotras
cosas,peronodeboestarloporéstaynecesitabaquelosupierasyquemeperdonaras.Susojosseclavanenlosmíosysientounasganasterriblesdeabrazarlo.Meabalanzaríasobreél
y lobesuquearía,peroséquenodebo.Nopuedo:élnoquiere.Asípues, simplementeme limitoaescucharlocuandodice:
—Mealegrasaberquesabesquenofuiyo.Dichoesto,sedalavuelta.Lomirodesconsoladay,cuandocreoquenomevaavolverahablar,
sueltalamochilay,mirándome,sisea:
—¿Porqué?¿PorquétuvistequehablarconElke?Lomiroalucinada.¿Aquévieneahoraesosiyohabléconellasólounavezhacetiempo?—¿Porquétuvistequemeterteenmivida?—¿Dequéhablas?—consigomurmurar.Flynsemuevenervioso.Miraalosladosy,acercándoseamí,sisea:—Jud,notehagaslatonta.Sabesmuybiendeloquehablo.Noqueadaporloquedice,locojodelcodo.—Pero¿dequéhablas?Siterefieresaldíaquelaencontréalasalidadelinstitutobesándosecon
otrochico,sóloledijequetúerasunbuenchicoyquenosabíaaquéestabajugandoella.Flyn,soytumadrey...
Élaprietalosdientes.Sumandíbulasecontraey,acercandoelrostroalmío,meinterrumpe:—Túnoeresmimadre.Mimadremuriócuandoyoerapequeño.Túsóloeres lamujerdemi
padrey,entodocaso,mimadrastra;¡entératedeunavez!Ay,Dios...¡Elcorazónsemevaasalirdelpecho!¿Quélehehechoyoparaqueestétanagresivoconmigo?Sinquerercontinuar,ycongestofurioso,Flynmemiray,señalándomeconeldedo,musita:—Por tu culpa,Elkemedejó. ¿Enquémásmevas a jorobar?Porque, si sigues jorobándome,
prepárate,porqueyopiensohacerlomismo.Parpadeo.Medueleenelalmaquenomeconsideresumadreconloqueyoloquieropero,una
vezasumotodoeso,lomiroymurmuro:—De acuerdo, Flyn. No soy tu madre. Pero ¿me estás diciendo que estás enfadado conmigo
porque Elke no quiere estar contigo? —Él no responde. Entonces, el corazón se me encoge ypregunto—:¿PoresoestáshaciendoqueEricyyodiscutamostanto?
Sin responderme,coge lamochiladel suelo,damediavueltayseva,dejándomesinsaberquépensar.
Horasdespués,cuandoveollegarelcochedeEric, loesperoenelgarajey,encuantobajadelvehículo,voyasuencuentro.
Nadamásverme,élanunciaconunaesplendorosanoticia:—Miraloquetetraigo.Concuriosidad,observosumanoy,alvermianillo,locojoypreguntohaciéndomelatonta:—¿Dóndeestaba?Ericsonríe,meguiñaunojoydice:—Loencontréenelmaleterodelcochecuandofuiameterunospapeles.Lo miro boquiabierta. ¿En el maletero del coche? Pero ¿éste se cree que me he caído de un
guindo?Y,antesdequeyodiganada,añade:—Quizásetecayóallíynotedistecuenta.Asiento.Mejorcierroelpiquito,quenoquiero liarlamás.Aunasí,nocomprendoporquéme
estámintiendoenalgotanimportantecomoeso.Sinduda,losdossomosunosgrandespringadosconelcrío,loestamoshaciendomuymalcon
él,yélnosestátoreandocomoquiere.
Cuentohastadiez.Después,hastaveinte.Hededejaresetemaparaotromomento.Y,poniéndomeelanilloeneldedo,lecuentoaErictodoloquerealmenteocurrióconlacoca-colayporquécreoqueFlynmetienetantoodio.Omitoloquemehadichoenreferenciaaseronosersumadre.EsoledoleríaaEric.
Elgestodemimaridosecontraealoírmispalabrasy,cuandoacabo,pregunta:—¿FlynestáasícontigoporqueElkelodejó?—Esomehadadoaentender—murmurofastidiada.Mirubiomaldice,semueveporelgarajecomounleónfuriosoy,clavandosuazuladamiradaen
mí,sisea:—Jud,¿porquénuncamehablastedeeseencuentroconesamuchacha?¡Lamadrequeloparió!Élmeestámintiendoenreferenciaalanilloy tiene lapocavergüenzadedecirmequeno lehe
contadoaquello.Sinoselocomentéensumomentofuepornoecharmásleñaalfuegoy,acercándomeaélcon
todalamalalechedelmundo,siseo:—Oye,Eric,dejandodeladoquenotecontéquepilléalaamiguitadeFlyndándoseellotecon
otroyledijecuatropalabras,creoquedebemoshablarconél.Desconcertado,memira.Llegaracasayrecibirloconproblemasnodebederesultarleagradable,
perodispuestaasolucionardeunasantavezaquelloquemartirizaaFlyn,letiendolamanoydigo:—Vamos.Ericcogemimano,laaprietay,deuntirón,meacercaaélparabesarme.Unavezlohahecho,
memirayconseguridadasiente:—Vamos.Cogidosdelamano,subimoshastalahabitacióndeFlyn.Ericllamaalapuertaantesdeentrary,cuandooímoslavozdelcrío,entramos.Comosiempre,
estáanteelordenadory,alvernos,cierralaventanadelchatporlaquehablabaconalguien;nohesidocapazdeverconquién.Ericcomienzaahablar...,hablayhabla.
Comentatodoloqueyolehecontado,yFlynrespondealadefensiva.¡Faltaríamás!Unbuenratodespués,cuandoveoqueEricyaestáperdiendosupocapaciencia,sentencia:—Flyn,quizátumadrenodeberíahaberledichonadaaesachica,peroteaseguroque,siyola
hubieravisto,habríareaccionadocomoella.—Túeresmásdiscretoqueella.—Vaya,¡graciasFlyn!—exclamodolidaporsufaltadetacto,mientrascompruebounavezmás
que,delantedeEric,nodicequenosoysumadresinosumadrastra.El crío no responde.Ericmemira con cara de «¡Cállate!» y yodecidohacerle caso.Entonces
Flyndice:—Papá,yo...—No,papá,no—locortaEricfurioso—.Estoycabreado,¡muycabreadocontigo!Yahorasólo
tevoyapedirunacosa.Dameunpocodetranquilidadycomienzaacomportartecomoelmuchachoalquehecriadoyhedadounaeducaciónporque,sinolohaces,tejuro,Flyn,quelolamentaráseirásderechoauncolegiomilitar.
Elchavalnoabrelaboca.Lodelcolegiomilitarsonpalabrasmayores,yEricprosiguemientrasyomemantengocalladitatodoelrato:
—Detodasformas,túyyotenemosunaconversaciónpendienteenloreferenteaJud.Estoyhartodemuchascosas,ycreoqueyanotevoyapasarniunamás.
Flynnodicenada,deprontoveoquesefijaenquellevoelanillopuestoy,condisimulo,dejademirar.Sinañadirnadamás,Ericcogemimanoysalimosde lahabitación.Nosdirigimoshacia lanuestray,cuandocierralapuerta,mesueltaysemetedirectamenteenelbaño.
No lo sigo, sinoque le doyunosminutos.Entiendoque llegar a casa y que yo le vaya con laserenatadecontrariedadestodoslosdíasesagobiante.Flynysusproblemasnosestánmatandocomopareja.
Dispuestaahacerleolvidar,meacercoalequipodemúsicaquetengoenlahabitación,buscounCD y, cuando comienza a sonar nuestra canción, me planto frente al baño. Al cabo de pocossegundos, cuando Eric sale, con la mejor de mis sonrisas paseo las manos por sus hombros ymurmuro:
—Ahoratevasarelajar.Comosiempredecíamimadre, lamúsicaamansaa las fierasy,dispuestaa amansar a la fiera
rubiaquetengoantemí,sonrío.Peroentonces,él,sinimportarlemissentimientos,quitamismanosdesushombros,mientrassuenaaquellode«Teregalomiamor,teregalomivida»,[28]ydice:
—Séquehagomilcosasmal,Judith,quemetomucholapatacontigo,pero,porfavor,déjamerespirar,dameespacioporquemeestáisvolviendolocoentrelosdos.
¡Anda,mimadre!¿Aquelomandoalamierdaporgilipollas?Oír esome duele,me rompe el corazón y, alejándomede él, apago lamúsica ymurmuro sin
ganasdediscutir:—Deacuerdo,Eric,tedaréespacio.Sinunápicedehumanidad,elamordemividaabrelapuertaysaledelahabitación.Nolosigo.
Noselomerece.Metumboenlacama,apagolaluzymepasohorasmirandoaltechomientrastocomianillorecuperado.
Entrada lamadrugada, lapuerta seabre,Ericentra, sedesnuda, se tumbaami ladoysequedadormido.
Sinduda,herecuperadomianillo,peroestoyperdiendoamiamor.
50
Dosdíasdespués,cuandoJudithsaliódetrabajar,fueaverasuamigaMel.Necesitabahablarconellaoseibaavolverliteralmenteloca.Lasituaciónencasaerainsoportable.Ericestabataciturno.Flynseescondíaporlasesquinasynadiehablabaconella.
—Tranquila,Judith.Todopasará.—Lo sé. Sé que todo pasará. Pero la extraña sensación de soledad que siento en la boca del
estómagocuandoestamosencasanomedejavivir.—Teentiendo—murmuróMel.EllayBjörnhabíanestadosinhablarsesóloundíatrasloocurridolaúltimanoche,peroBjörn
noteníalacabezoneríadeEric,yencuantopudolosolucionó.NosoportabasentirlaindiferenciadeMel.
Sinquererhablardeello,Melmiróasuamigaysusurró:—Todosearreglará,yaconocesaEric.Porcierto,enhorabuenaporhaberrecuperadoelanillo.Judithsemiróeldedo.AMeltampocolehabíacontadoloquesabíay,encogiéndosedehombros,
murmuró:—Gracias.En ese instante se abrió la puerta yLeya, la perra, se levantó y corrió. Instantes después entró
BjörnconSamisobreloshombros,ytantoMelcomoJudithsedeshicieronenbesosconella.AlveraJud,Björn la saludóencantado,pero laconocíamuybien,y la tristezaqueveíaensu
miradalehacíapresuponerquealgopasaba.—¿Vatodobien?—preguntó.Judithsonrióaloírloy,guiñándoleunojo,musitó:—Sí,tranquilo.Simplesdiscusionesentretuamiguitoyyo.Björnsuspiró.EricyJudysusdiscusiones...Luego,mirandoasualrededor,preguntó:—¿NohallegadoPeterdelcolegio?Melmiróelreloj.—Cariño,todavíaquedaunratoparaquellegue.El abogado asintió pero, cuando iba a decir algo, su teléfono sonó y, separándose de ellas, lo
atendió.Hablóconalguieny,aldespedirse,dijo:—Deacuerdo,Gilbert,intentarépasarmeavertemañana.Lasdosamigassemirarony,encuantoBjörnsemarchóhaciasudespacho,Judithpreguntó:—¿Lehascontadoyaloqueteníasquecontarledeeseimpresentable?—No.—¿Yaquéesperas?Melsonrióyreplicó:
—¿TepreguntoyoatiporquénolecontasteaEricladiscusiónquetuvisteconElkeoporquépermitesqueelniñodigaquenoeressumadrecuandoélnoestá?
Judparpadeó.—Tocadayhundida.Melrio.—Mira,lohedecidido—añadió—.Novoyadecirnada,yquesealoqueDiosquiera.Élyasabe
loqueyopiensodeesagentuzayconesomevale.Depronto,Samipreguntó:—TíaJud,¿quieresverelponirosaquemehacompradopapi?Ellaasintióencantadayrespondió:—Claroquequieroverlo.Enséñameeseponirosa,miamor.Peterllegódelcolegiounratodespués.ComosiemprequeveíaaJudith,laabrazabaconcariño.
Eraunniñoafectuoso,yJudithseemocionaba.¿PorquéFlynnolaabrazayaasí?Trasestarunratoconellas,elchicoseretiróasuhabitaciónparahacerlosdeberes.Una hora después, cuandoMel y Jud estaban compartiendo una coca-cola en la cocina, Björn
abriólapuertayanunció:—Miradquiénhavenido.Judithysumaridosemiraronysesaludaronsinmuchaefusividadporpartedeella.—Björnqueríahablarconmigodeciertostemaslegales—explicóEric.Sinmoversedelsitioyconsubebidaenlamano,Judasintió:—¡Genial!Cuandoloschicossemarcharonaldespacho,Melcuchicheóboquiabierta:—Guauuu...,nienelPoloNortesontanfríos.Aloírla,Judseencogiódehombrosy,comonoqueríaseguirhablandodelmonotema,quenose
quitabadelacabeza,dijo:—Vamos,enséñameloscanalesquePeteroshapirateadoeneltelevisor.Quieroversilostengo
ono.Unahoradespués,EricyBjörnsalierondeldespacho,dondenosólohabíanhabladode temas
legales,ysesentaronconlaschicasparatomarsealgo.Elbuenhumorreinabaenelambiente,peroanadielepasóporaltoqueJudithestabamáscallada
delonormal.Conscientesdelatirantezquehabíaentresusamigos,BjörnyMelsemirabansinsaberquéhacer,hastaqueella,levantándose,dijo:
—Osquedáisacenar,¡decidido!Llamaréparaquenostraiganunaspizzas.Durante la cena, lapresenciadePeterydeSamihizoque todo fueramásameno,peroEric se
sentíamal.VeraJudtandesganadaporloqueestabaocurriendoencasaconFlynyconélmismolepartíaelcorazón.
El temadel chavalyapasabadecastañooscuro.Enterarsedequehabía sidocapazde robar elanilloque tantoadoraba JudithhizoqueEricabriera losojoscomoplatosy sedieracuentade loequivocadoqueestaba.Sinduda,éleraelgranculpableencuantoalmuchacho.SitodaladurezaqueenocasionesvertíacontraJudithlahubieravertidocontraaquél,ahoranoestaríanasí.
PensóencontarlelafechoríadeFlynenrelaciónconlodelroboalamujerqueadoraba,perofue
incapaz.Loavergonzabaqueella supiera laverdadde todoy,aunsiendoconscientedequeestabamalloquehacía,decidiócallar.Esosí,trashablarconelchavalcomonohabíahabladoensuvida,decidió que todo tenía que acabar y, a la siguiente fechoría que hiciera, se iba derecho al colegiomilitar.
Cuandoterminarondecenar,llególahorademarcharsey,ensilencio,EricyJudentraronensucoche.Élarrancóelvehículoy,mirándola,preguntó:
—¿Quieresescucharmúsica?—Medaigual.Deseosodequeaquelloacabara,elalemánbuscóentrelosCDquellevabaenelcocheypusouno.
CuandocomenzóasonarlavozdeRicardoMontanercantandoConvénceme,[29]preguntó:—Estacancióntegusta,¿verdad?Judithresopló.Biensabíaélcuántolegustaba.—Sí.Nolomiraba.Ericnecesitabaquelohicieraparaconectarconsusojos,porloquemurmuró:—Escucha,Jud...—Noquieroescucharte.Enfadado por haber sido él quien había creado aquelmalestar, sin poder aguantar un segundo
más,insistió:—¿Hastacuándovaaduraresto?Peroella,sinmirarlo,replicó:—Simplementeteestoydandoelespacioquemepediste.Eric asintió.Arrancó el vehículo y condujo en silencio hasta su casa.Era unbocazas, un gran
bocazasconella,ysemerecíaquelehablaraasí.Al llegar al garaje, Eric apagó el motor y, cuando Jud iba a salir del coche, la agarró de la
muñecay,atrayéndolahaciasí,laabrazóyleprometióqueapartirdeeseinstantetodoibaacambiar.Estavez,Judnosealejó.Sinduda,lonecesitabatantocomoélaella,yloescuchó.
51
Elviernes,trasdejaranuestrosniñosyaSamiyaPeterconSimona,Norbert,BeayPipa,sinmiraratrásononosiremos,nosdisponemosapasarungranfindesemanaplagadodesexoymorbo.
Alllegaralhoteldondenosvamosaalojarlospróximosdosdías,traspasarporrecepciónydarnuestrosnombres,BjörnyMel,Ericyyonosdirigimoshacianuestrasrespectivashabitaciones.
El hotel es bonito y, cuando Eric y yo cerramos la puerta de la nuestra, nos miramos, noscomunicamosconlosojoscomosiemprehemoshecho,ysabemosquetodoestábien.
Tengoganasdedivertirmeconél.Entoncesveounabotellitaconpegatinasrosametidaenhielojuntoadoscopasysonrío,seguradeloquequiero,yséqueéltambiénquiere.
—Desnúdate—mepide.Esanoche,alejadosdelosniñosydelosproblemas,mimaridoyyonoshacemosmutuamenteel
amorsinreservas.Nosnecesitamos...Nosqueremos...Nosamamos...Ycuando,demadrugada,caemosagotadosenlacama,Ericmurmura:—Creoquetúyyonecesitamosmásfinesdesemanacomoéste.Encantada,sonrío.Nomecabelamenorduday,poniéndomeahorcajadassobreél,afirmo:—Tendremostodoslosquetúquieras.
Alamañanasiguiente, tras llamaracasaysaberquetodoestábajocontrolporallí, loscuatronosdirigimoshacialacasadeAlfredyMaggie.AlverqueBjörnyEricconversan,Melseacercaamíycuchichea:
—Tengoquehablarcontigo.—¿Quépasa?Miamigamehaceseñasparaquecalleymurmura:—Luegohablamos.Asiento.Melsonríey,mirandoelenormecasoplónquesecierneantenosotros,pregunta:—¿Tantodinerotienenlosanfitriones?Ericyyointercambiamosunamiradaymiamorresponde:—Son dueños de medio Múnich, y tienen acciones en distintas productoras de cine
estadounidense.Melsesorprendealoíreso,peromássorprendidasequedacuandoselospresentamosyellosla
recibenensucasaconairecampechano.
La gran fiesta es por la noche. Maggie nos enseña por encima los preparativos y, mientrascaminamosporlasdistintassalasambientadas,Melmurmura:
—Madremía.Eldineralquedebendehabersegastadoentodoesto.Sonrío. Sin lugar a dudas, los anfitriones pueden gastarse eso y más. Sólo hay que mirar
alrededor para darse cuenta del coste de todo. No quiero ni imaginarme lo bonito que va a seraquelloiluminadoporlanoche.
Alfred ha ordenado traer columnas labradas y pedestales para ambientar las impresionanteshabitaciones, junto a bustos y estatuas de hombres ymujeres, y lamesa principal del comedor esenorme.
Tras salir del gigantesco salón, entramos en otro espacio lleno demesitas bajas rodeadas porgrandes ymullidos almohadones de colores. Con picardía,Maggie se ríe y nos dice que es paraquienesquieranseguircomiendoenpúblicotraslacena.
Deallípasamosaotroenormesalón,enelqueunostrabajadoresultimandetalles.Loshombresnos observan curiosos, pero siguen con su trabajo. Nosotras paseamos entre columpios de cuerosujetosal techoy,alvervarios jacuzziscubiertosporenredaderasparadarefecto,nosmiramosyMaggiemurmuraqueerauncaprichodesumarido.Lastresnosreímoscuandopasamosaotrasaladondevemosvariascrucesacolchadas,ceposdemaderacongrilletes,jaulasyotrosartefactos.
Melclavasusojosenmí,yyo,sabiendoloquepiensa,meríoymurmuro:—Aquínoentroyoniloca.Unavezsalimosdeesaestancia,Maggienosmuestravariashabitacionespequeñassinpuertaen
lasquehayunacamaensuinterior,yunadeellasconcortinasamododepuerta,uncolumpiodecueroenelcentroyungranespejo.Setratadelasalanegra.Noshabladequehaygentealaquenolegustaestarrodeadaalahoradehacerelintercambio,yfinalmentevamosaotrasalagrandellenadecamasconsábanasdoradasyplateadas.
Acabadalavisita,salimosalexteriordelaenormecasonayvamoshastaunjardínalairelibre,dondenosesperanloschicosjuntoaotrosinvitados.Pasamosgranpartedelamañanaallíy,trasunaimprovisadacomidaenunode los restaurantesdelpueblo,nosdespedimosy regresamosalhotel.Debemosprepararnosparalafiestadelanoche.
Entrerisas,mearregloconMely,cuandomemiroalespejo,meacuerdodeFridaydeAndrés.Conañoranza,recuerdomiprimerafiestaconellosvestidosdelosañosveinte.Pordesgracia,esosbuenosamigosnohanpodidodesplazarseparaestafiestaacausadeltrabajodeAndrésy,aunquelosañoro,sonrío.Séqueestánbienyfelices.Esoesloúnicoqueimporta.
UnavezMelhaacabadoderecogermipeloenunmoño,sedaaireconlamanoylepregunto:—¿Quétepasa?Acalorada,ellamurmurarápidamente:—Tengomuchocalor.¿Notienescalor?Asiento.Laverdadesqueenesehotelhacemuchísimocalor.Memiroalespejoymegustael
aspecto juvenil y lozano que ese peinado me otorga cuando oigo a Mel decir tras terminar deponermeenlacabezaunacoronadelaureles:
—Estásmonísima.Encantadaaloíreso,mefijoensucortoyengominadopelooscuroyafirmo:
—Túsíqueestásguapa,conesoslaurelesalrededordelacabezayloscoloretesquetienesporelcalor.
Lasdosreímos,yacontinuaciónnosponemosnuestrassandaliasromanasdetacónblanco.Cuando nosmiramos al espejo, ambas silbamos. Estamos sexis y tentadoras vestidas con esos
cortosvestidosderomanasenblancoyoro.Sinduda,fueronunabuenaelección.—Miraquenomeponesnada,peroreconozcoqueasívestidaestásimpresionante.Miamigasueltaunacarcajaday,dándomeunbesoenlamejilla,cuchichea:—Meencantanoponertenada—y,mirándome,añade—:Escucha,yoquierocont...Eneseinstantellamanalapuertadelahabitación.Lasdossabemosquiénessony,conunapícara
sonrisa,noscolocamosenplandiosasdelOlimpoydecimos:—Adelante.Lapuertaseabreyaparecennuestrosguaposgladiadores.Björnestáimpresionante,peroyono
puedoapartarlamiradademirubioalemán.Vestidodegladiadorconesetrajeconfalditadecueromarrón,lacapaylassandaliasromanas...,uf...,uf...,porelamordeDios,¡quésexiestá!
Al ver nuestros disfraces, los chicos sonríen, les gustan tanto como a nosotras los suyos.Entonces, con picardía, me levanto la corta falda de mi vestido y, enseñándole a Eric mi reciéndepiladomontedeVenusparalaocasión,murmuro:
—Sinnadadebajo,comoatitegusta.Miamorasiente,yveocómolanuezdesugargantasemuevecuandotraga.Estoyensimismada
ensusojoscuandooigoqueMeldiceantelamiradadeBjörn:—Puesyosíllevo.Noséirsinbragas.Miamigosueltaunacarcajada,Ericsonríe,yyo,dispuestaademostrarlequemesientocomouna
diosavestidaasí,memuevoconpremeditación,nocturnidadyalevosíaypregunto:—¿Tegustamivestiditoderomana,Iceman?Lanuezdelagargantademiamorvuelveamoversemientrasloveoasentir,yentoncesséloque
va apasar cuandomi rubio caminahaciamíy, desabrochándose el cinturónque reposa sobre suscaderas,veoquelaespadacaealsueloydice:
—Pequeña...,quítateelvestidosinoquieresqueteloarrugue.—¿Ahora?Miamorasiente,yyosonríosatisfechapor loqueheprovocado,peroentoncesveoqueBjörn
murmuramirandoaMel:—Estástardandoendesnudarte,preciosa.Sinunápicedevergüenza,yexcitadasporloqueaquellosdostitanesnosordenan,nosmiramos
y,conunapícarasonrisa,desabrochamoslospasadoresquellevamosalhombroynuestrosvestidoscaenalsueloendécimasdesegundo.
Ericmecomeconlamirada.¡Uf...,québrutoteseestáponiendo!Susojosmehacensaberlomuchoquemedeseay,acercándoseamí,susurraantesdebesarme
condelirio:—Seréelprimeroyelúltimoenhacertemíaestanoche.Actoseguido,metumbaenlacama,observocómosequitaelbóxer,mecubreconsucuerpoy,
separándomelaspiernasconlassuyasysinmimo,mehacesuya.Meaprietacontrasíyyomedejollevardisfrutandoalmáximodelafogosidaddemiamor.
Con Eric sobre mí y con mi voluntad anulada por nuestra locura, no sé cuánto tiempo pasacuando soy consciente de queMel está tumbada ami ladomientrasBjörn la besa y semueven alunísonoentrejadeosysusurros.
Como digo, nuestra amistad es especial, diferente. Compartimos intimidades y momentospasionalesqueotrosamigosnocomparten,peroanosotrosnosgusta,nosencantapoderhacerlo,yloscuatrodisfrutamossobrelacamahaciendoelamorcondelirio.
Unavezacabadoeselocoprimerataquequenosotrashemosprovocado,losdosgladiadoresselevantande la camaynos levantananosotras.Entre risas,pasamosalbañoparaasearnosy, enelmomentoenquememiroalespejo,gruño:
—Joder...,mipeloestáhechoundesastre.Eric,queadoramimorenamelena,seponedetrásdemí,labesayresponde:—Déjatelosuelto.Felizporaquello, lehagocasoy,cuandosalimosdelbaño,mientrasesperamosaqueBjörny
Melregresen,Ericdicemientrasseacomodaelcinturónconlaespada:—Noteseparesdemíenlafiesta,¿deacuerdo,cariño?Asiento.Nilocameseparodeél.¡Andaquenohabrálagartas!Arropadosconunascapasgruesasquenoshemoscompradoparalaocasión,nosmontamoslos
cuatro en el coche deBjörn.Hace frío, y éste se apresura a poner la calefacción.Divertidos, nosdirigimosa la fiesta, peroal coger la carreteraquenos llevaráhasta lamansión,unoshombres acaballovestidosderomanosnosparanynosindicanquedebemosdejarelcocheallí.
Cuandonosbajamos,nosfijamosenquealosladoshayvariascuadrigastiradasporcaballos,yvamosenellashastalacasa.Esonosencanta.Ambientacióndesdeelminutouno.Sinduda,AlfredyMaggiesabendarfiestas.
Unavezlascuadrigasnosdejanenlaentrada,nosapresuramosaaccederalaenormemansiónyde inmediato nos quedamos boquiabiertos. Realmente aquello parece la antigua Roma. Por todasparteshayhombresymujeresvestidosdeaquellaépoca,ylacaracterizacióndellugaresfantástica.Más tarde, me entero de que ha ayudado en la decoración uno de los equipos que trabajó en lapelículaGladiator.Sinduda,todoaquelloesincreíble.
De lamanodemiamor,caminopor lacasonaconvertidaen laantiguaRomaymefijoen loscuencosrústicosllenosdeuvas,lasjarrasfinasparaelvinoylashermosascopas.Enaquellafiestanohaycerveza,nohaycoca-cola,nohaychampán.
Lasparedesestándecoradasconfinascenefas,antorchasylámparasdeaceite.—Increíble.MaggieyAlfredcadadía se superanmás—afirmaBjörnechandounvistazoa su
alrededor.Lostresasentimosasombradosmientrasaceptamosunascopasdevino,quemástardesabemos
queesaromático,ybebemosmientrassaludamosamuchosconocidos.Todoslospresentesloqueremospasarbien.Lagranmayoríanosconocemosdeotrasfiestaso
deencontrarnosenciertoslocalesswingers.Nadieestáallíporequivocación.—Pero¡quéalegríavolveraverosaquí!—oigodepronto.
Rápidamenteme doy la vuelta yme encuentro conGinebra y sumarido. ¿Qué están haciendoellosallí?
Ericseapresuraaagarrarmedelamano,yentoncesAlfredseacercaanosotrosydice:—Eric,nosésiconocesamibuenamigoFélix.Vaya...,vaya...¿AlfredesamigodeFélix?Sinceramente, no me extraña. El tipo de sexo que he visto que les gusta a aquéllos y a los
anfitrionesesmuyparecido.Entonces,Ericsonríeyafirma:—Sí.Loconozcoaélytambiénasumujer,Ginebra.Laaludidasonríeyyoledevuelvolasonrisa.Mientras todoshablamos,mepercatodequeGinebranoseacercaaEricni lomirademanera
queyomepuedamolestar.Laverdadesquesiempreguardamuybienlasdistanciaspero,cuandosealejandenosotros,mealegro.
Deprontosuenanunastrompetasyuncañóndeluzenfocahacialoaltodelaescalera.AllíestánAlfredyMaggieconsuscarosdisfraces.Comoanfitriones,dan labienvenidaasus invitados.Noshacen saber que somos ciento treinta personas escogidas selectivamente para la fiesta, y acontinuaciónunosguapossirvientesromanosnosentreganunospapeles.Enellosvieneunplanodelacasaexplicandolassalasysustemáticas.
Unavezacaban laexplicación,conunagratasonrisa,Alfrednos invitaa todos losasistentesapasaralcomedory,encantados,todosnosdirigimoshaciaallí.Cadaunodenosotrostieneasignadounlugarenlamesa,ymealegraverqueMaggienoshapuestojuntoaBjörnyMel.
Cuandonosacomodamos,unoscriadosnossirvenmásvinoydespuéscomenzamosadegustarmanjaresquesupuestamentesecomíanenlaantiguaRoma.
Deentradanossirvenunexquisitopurédelentejasconcastañas.Alprincipiopiensoquenomelovoyacomer,pero¡estábuenísimo!AMel,encambio,lehorrorizaelolor.
Llenanmicopaconalgoquenoconozcoy,alpreguntar,elcamareromedicequeesmulsum.Yovuelvoamirarlo.Noséquéeseso,yésteconcorreccióndice:
—ElmulsumesunvinotípicodelaépocadelImperioromano.Estáhechodeunamezcladevinoomosto conmiel.Después se remueve hasta que lamiel se disuelve y se sirve templado con losentrantes.
DoyuntraguitoyMel,mirándome,afirma:—Memueroporunabirra,¿nohay?—Yyoporunacoca-cola.Loscuatrollegamosalconvencimientodequeaquellonoesloquemásnosapetece,yentonces
nostraenvinoderosasyvinodedátiles.¡Repitovariasveces!Estánincreíbles.Ericsonríe.—Nobebasmuchoque, cuando regresemos al hotel, tengo encargadapara ti unabotellita con
pegatinasrosa.Yo me río con complicidad al oírlo. Sabe que por su culpa me encanta el champánMoët &
ChandonRoséImpérial.MelohizobeberennuestraprimeracitaenelMoroccioysehaconvertidoenuncompañerohabitualennuestrosmomentos.
—Tranquilo,amor—susurro—,queparamibotellitadepegatinasrosasiempretengohueco.Los camareros traen paté de olivas, moretum, distintos quesos frescos de hierbas, sésamo y
piñonesy,comoplatofuerte,unincreíblelechónasadoyrellenoconhojaldreymiel.Melyyonoschupamoslosdedos,todoestábuenísimoy,cuandotraenlasmanzanasasadascon
frutossecos,creoquevoyareventar.¿Por quémi padreme habrá enseñado que hay que terminarse siempre todo lo que hay en el
plato?Acabada la cena, mientras todos charlamos tranquilamente y estoy tomando algo que llaman
hidromiel,veoqueAlfredselevanta,llevanhastaélcuatrocarritosdeservicioconruedasvacíosyél,trascogerunmicrófonoparaquetodoelmundopuedaoír,dice:
—Amigos,enlaantiguaRoma,despuésdecomerenbanquetesconcurridoscomoéste,siempreseorganizabaalgúntipodeespectáculo.Habíavariosytodoseransangrientos,como,porejemplo,atar a un pobre hombre a una estaca para que una fiera hambrienta lo despedazara mientras loscomensalesobservaban.
Todoslospresentesarrugamoselentrecejo;¡quéasco!¿Deverdadhacíanesolosromanosynoechabanluegolapota?Alvernuestrogesto,Alfredsonríeycontinúa:—Ennuestrocaso,hepensadocrearunespectáculollamado«elpostrecomún».Consistiráenque
tresmujeresytreshombres,losqueseofrezcan,seránatadosaestoscarritosyseránofrecidoscomopostreatodoelmundoduranteunahora.Después,seránliberados,todossaldremosdelcomedorypodremosdirigirnosalasdistintassalasparacontinuarconlafiesta.
Las risas de muchos de los asistentes se oyen junto a algunos aplausos. Mel me mira y,acercándoseamí,murmura:
—Nilocameprestoaeso.Yosonríoyafirmo:—Yasomosdos.Nuestroschicarrones,queestánanuestroladoynoshanoído,asienten.Piensancomonosotras.Encantadaalcomprobarqueestamosdeacuerdo,besoamirubioy,cuandooigolasrisasdelos
asistentes,nome sorprendoalver aGinebra levantarse.Félix, sumarido, ledaunbesoy, trasunazoteeneltraseroquehacereíraloshombresqueestánasualrededor,Ginebrasealejadeellosconunagransonrisa.
Detrásdeellasalendosmujeresytreshombrese,instantesdespués,semarchanconloscriados,que se llevan los carritos, y los demás seguimos sentados a lamesa.Unmomentomás tarde, lastrompetas suenan, las puertas se abren y entran de nuevo los criados con aquéllos desnudos ymaniatadossobreloscarritosdeservicio.
Boquiabierta,observolaescena.Miraqueyahevistocosasrarasenmivida,peroveresomeparecesurrealista.Losvoluntariosestánatados,unosbocaarribayotrosbocaabajo.MefijoenGinebra,queestábocaabajo.Supechoestápegadoalabandeja,tienelasmuñecasy
los tobillos atados al carrito de servicio y está por completo expuesta para todos. Los camarerosdejancadacarritoendistintospuntosde lamesay,apartirdeentonces, los invitadoscomienzana
moverloscarritosasuantojo.Losofrecidosríenanteloqueaquelloshombresymujereshacen,peroyosólopuedofijarmeen
Ginebra.Ledancachetitoseneltrasero,hastaqueunhombre,queestájuntoaFélix,seponeenpiey,levantándoselafalditaderomanoquelleva,seechahidromielalrededordelpeneyselointroduceaGinebraenlavagina.Félixloanimay,finalmente,levantándosetambién,metesuvergaenlabocadesumujer.Lagenteaplaudeanteloqueve,mientrasyoobservoojiplática.
Ginebragrita,jadea,mientrasFélix,conlosojoscerrados,continúasupropiobaileparticularenlabocadesumujer.
Melmemira.Yomeencojodehombrosy,acercándomeaEric,murmuro:—SiGinebraestátanenferma,¿porquéhaceesto?Eric,quehadejadodeobservarelespectáculo,clavalosojosenmíyresponde:—Porqueesloquelegusta,cariño,yFélixnoledicequenoanada.Lagentese levantaysearremolinaalrededordeGinebray lasotraspersonasqueestánen los
carritosdeservicioparajalear,tocaryhacertodoloqueselesvengaengana,peronosotros,aligualqueotraspersonas,nonoslevantamos.Nonosinteresaesetipodejuego.
Olvidándonosdeloqueocurreaescasosmetrosdenosotros,comenzamosahablarentoncesconotrosinvitados,hastaquesuenanlastrompetas.Eneseinstantetodoelmundosesientay,cuandoloscamarerosentranaporlosvoluntariosparallevárselos,yomequedosinhabla:vansucios,cubiertosdecomidaydeloquenoescomidapero,porextrañoquemeparezca,selesvefelices.Sinduda,handisfrutadoconalgoqueamíparticularmentemehorroriza.
Losinvitadoscontinuamossentadosalamesacuando,diezminutosdespués,laspuertasvuelvenaabrirsey losseisvoluntariosentrandenuevoduchadosyconsus impolutos trajesderomanos.Lagenteaplaudeylosvitorea,yellossonríen.
PocodespuésesMaggielaqueselevanta,cogeelmicrófonoydice:—Amigos, la cena ha acabado. Ahora os invito a que vayáis a los distintos salones
acondicionadosquehayenlacasaparaquegocéisdevuestromorbo,devuestrasexualidadydeestagranfiesta.Recordadlasnormasy¡adisfrutar!
Todosnoslevantamosysalimosdelcomedor.Laprimerasalaquenosencontramoseslaqueestáplagada de mesitas bajas y almohadones. Allí nos sentamos. Hablamos durante un buen rato conconocidos,hastaquemirubiomurmuraenmioído:
—¿Quéteparecesitúyyonosvamosaunodeesoscolumpiosdecuero?Creoquelasúltimasvecesqueloprobamosnosgustó.
—Ymucho—afirmo.Delamano,caminamoshacialassalasdondeséqueestánloscolumpios,mientrasMelyBjörnse
quedanhablandoconotrossobreloscojines.Alllegar,vemosquenohayningúncolumpiolibrey,alrecordarunoenlahabitaciónnegradel
espejo,comolallamóMaggie,medirijohaciaallí.Porsuerte,estávacía.Nosbesamosy,cuandoelbesoacaba,veoqueunhombrequenoconozcoestámirándonos.Ericmepreguntaconlamiradayyosonrío,yentoncesmiamordice:
—Cariño,tepresentoaJosef.Encantada,sonríoaltalJosefyéstehacelomismo.Eric,queestádetrásdemí,leordenaaJosef
quecierrelascortinasparaquenadienosmolestey,trasello,murmuraenmioído:—Tevoyaquitarelvestido,¿puedo?Lomiroconunasonrisaguasonayconunpestañeosabeque ledigoquesí.Actoseguido,mi
amorabreelpasadorquesujetamivestido,éstecaehastamispiesyyoquedodesnudaexceptoporlassandaliasromanasdetacónquellevo.Josefsonríe.Nometoca.Nosobserva,yEric,cogiéndomeentresusbrazos,mesubealcolumpio,pasalascorreaspormistobillosymismuslosy,unavezquenotaqueestoysujeta,mesueltaysusurrabalanceándome,mientrasmispechossemueven:
—¿Quéleapeteceamipreciosamorenita?Excitadaporaquello,sonrío.Quierodisfrutardemirubitodemilmaneras,demilposiciones,de
mil jadeos.ObservoqueJosefnosmira, espera instruccionesy, finalmente, sinquitarle lavistadeencimaamibuenorroesposo,respondo:
—Quierodisfrutardetodo.Miamorasiente.Sonríe,sesacaeldisfrazdegladiador,quecaealsuelojuntoalmío,seacercaa
míy,aproximándoseamiboca,murmura:—Entonces,disfrutemos.Con suboca, busca lamíay, conuna sensualidadquemedeja sinpalabras,me chupa el labio
superior, después el inferior, yo abro los ojos y él finaliza su increíble ritual dándome unmordisquitoeintroduciendosuincreíblelenguaenmiboca.
Nosbesamos...Nosdevoramos...Nosexcitamos...Y,cuandonuestroslabiosapenasseseparanunosmilímetros,Ericmusita:—Abrelosojosymírame,cariño...,mírame.Gustosa,hagoloquemepide.Nadamegustamásquemirarlomientras,colgadadelcolumpio
delplacer,apenaspuedomovermey,casisinsepararnuestrasbocas,miamorintroducelapuntadesupeneenmihúmedaaberturaysientocómopocoapocosehundeenmí.
UnjadeosaledemibocaaltiempoquesaleotrodeladeélcuandoEricseagarraalascintasdecueroquehaysobremicabezay,sinpermitirquesemuevan,susurraamioídomientrassientosupoderenmiinterior:
—Esoes,pequeña...,sujétatealascintasyábreteparamí.Actoseguido,lascaderasdemialemáncomienzanarotar.¡Oh,Dios,quéplacer!Susmovimientossonasombrosos,inesperados,chocantes,perturbadores.Ericmehaceelamory,comosiempre,mesorprende,mevuelveloca,mehacequerermásymás.Suspenetracionessoncerteras,profundas,sagaceseinteligentes.Paramínohaynadiecomoél
enelsexo.NadieescomomiEricZimmerman.Mis jadeos suben de decibeliosmientrasme dejomanejar por el hombre que amo como una
muñecaysigosuspendidaenelairesobreaquelincreíblecolumpio.Josefcontinúamirándonos,peroadiferenciadehaceunosminutos,medoycuentadequeyanollevasudisfrazderomano.Miamormeabrazamientrassigueconsusperturbadorasypasionalespenetraciones.Enloquecida,lemuerdoelhombro,yalmismotiempomecomplacecomprobarcómoJosefnosobserva.Susojosylosmíosseencuentranymehablaconlamiradamientrasseponeunpreservativo.Mehacesabercuántodesea
estarentremispiernasylomuchoqueleapetecefollarme.Yanomeasustadecir lapalabra«follar»comomeasustabaalprincipio.Cuandojugamos,nos
excitaqueEricmeladigaoyoseladigaaél,noscalienta.Ellenguajequeenocasionesutilizamosenesosardientesmomentosesfogoso,acaloradoytórrido.Muy...muytórrido.
Alsentircómoleclavolosdientesenelhombroylasuñasenlaespalda,Ericjadea,aceleralasacometidasy,trasacercarsubocaamioído,looigomurmurar:
—Todamía.Míaysolomía,inclusocuandoJoseftefolleparamí.Suvozyloquedicemeenloquece.Ericlosabe,meconoce,yprosiguearrebatadoporlapasión:—Mevoyacorrer,pequeña.Voyaecharmisimienteen tiydespuésmesaldréy teofreceréa
Josef.Teabriréparaélyteencajaréensucuerpocomoahoratetengoencajadaenelmío.—Sí...,sí...—consigobalbucear.Aquellonosexcita...Aquellonosvuelvelocosy,cuandosientoquemiamorsecontraeyyogritodeplacer, trasun
últimoempellónsehundetotalmenteenmíy,unavezacabansusconvulsiones,saledemiinterior.Conlasrespiracionessofocadas,ambosnosmiramosy,acontinuación,éldice:
—Josef...Elaludidoya tieneen lamanounabotellitadeaguayuna toalla limpia.Sinperder tiempo,me
lava,metoca,meprovoca,cuandoEric,poniéndosedetrásdemí,mueveelcolumpioparaquenosveamosreflejadosenelgranespejo,meagarraporlosmuslosy,separándomelosmásaún,dice:
—Estáhúmeda,preparadayabierta.ObservoenelespejomidescaroymidesvergüenzaysonríocuandoJosefdeja labotellay la
toallaaunladoypreguntaseñalandomitatuaje,queestáenespañol:—¿Quépone?Ericyyointercambiamosunamiradaysonreímos.—Pone:«Pídemeloquequieras»—dicemiamor.Josefasiente.Sinduda,lehacegraciamitatuajey,arrodillándoseantemí,dice:—Pidoquesepareslosmuslosparamíytemetasenmiboca.Supeticiónesexcitantey,abriéndomemásparaél,loprovocomientrasleenseñoelnéctarque
desea degustar. Eric, que tiene los ojos conectados con los míos a través del espejo, empuja elcolumpiohastaposarmivaginasobrelabocadeaquél.Ledaloquepideyloqueélyyogustososestamosdispuestosacompartir.
Durantevariosminutos,aquelextrañomechupa,melame,memordisqueaelcentrodemideseo,yyosimplementememuevosobresubocaydisfrutodeaquellosinapartarlosojosdelespejodondeestoyenganchadaalosojosdemiamor.Ericsonríe.Legustaloqueve.Leexcitamiacaloramientoy,conlasmanosenmisnalgas,memuevesobrelabocadeaquél.
Adoroquehagaeso.Mevuelvelocaquedirijanuestrojuego.Meexcitasentirqueéltienepodersobremí,comoenotrosmomentosmegustasentirqueyotengopodersobreél.
MisjadeossubendedecibeliosmientrasEricmebesaparatragarsecadagemidomío.Susojosylosmíosestántotalmenteconectadosy,cadavezquemesusurraaquellode«bienabierta,miamor,permitequedisfrutedeloquesóloesmío»,meencojodeplacer.
Pierdolanocióndeltiempo.Nosécuántoratodisfrutamosasí.Sóloséquemeentregoamiamor
y éste a su vezme entrega a otro hombre lleno de placer. Tras un último orgasmo queme haceconvulsionar, Josef se levanta, se coloca entre mis muslos abiertos, guía su duro pene hasta mitremendahumedadymepenetra.Yo jadeoycierro losojos.Eric,queestádetrásdemí,murmuraentoncesenmioído:
—Así,pequeña,noteretraigasydisfrutadenuestroplacer.Echolacabezahaciaatrásymiamormebesamientraslasensacióndeingravidezporestarsobre
elcolumpiomevuelveloca.EricmehaceelamorconlalenguamientrassientoqueJosefagarraconlasmanoslacuerdaquepasapormitraseroparaintroducirsemásymásenmí.
Estoy tremendamente excitada por el momento; entonces Eric abandona mi boca y murmurabuscandomimiradaatravésdelespejo:
—Dimeloquesientes.LosgolpessecosqueJosefmeda,unidosalmodoenqueEricmeabreparaélyasuspalabras,
mehacensentirmilcosasy,cuandopuedo,respondo:—Calor...,placer...,morbo...,entrega...Nopuedocontinuar.Josefhacogidolaposturacorrectaycomienzaabombearenmiinteriorcon
unatremendaintensidad.Jadeo...,grito...,intentomoverme,peroEricnomedeja.Observolaescenaatravésdelespejoyenloquezco.Yosuspendidaenelaire,desnudayentregada,conmiamortrasdemíabriéndomelosmuslosyJosefdelantefollándome.Megustaverenelespejocómosutraserosecontraecadavezqueentraenmí,megustatantocomoaEric.
Josefsevuelveunamáquinaentrandoysaliendodemisexo,yyoapenaspuedorespirarperonoquieroquepare.Noquieroqueseacabe.NoquieroqueEricdejedeabrirmelaspiernas.Noquieroquemi amor deje de besarme, pero de pronto Josef tiembla, da un lastimero quejido y, tras unasúltimasypotentesembestidas,sedejairyyoloacompaño.
UnavezJosefsaledemí,Ericacercalabotellitadeaguaylatoalla,melavaydespuésmeseca.—Ahoraquieroquetesientestúenelcolumpio—digo.—¿Yo?Asiento.Sémuybienloquequierohacery,unavezmichicomeayudaaquitarmelascintas,soy
yoquienloinvitaasentarse.Ericsonríe.Leresultacómicoestarélallí.Unavezsesientayvaadeciralgo,apoyolospiessobresusmuslos,mesuboy,mirándolodesde
misitiomásarriba,flexionolaspiernasparaofrecermeaél.Encantado,comienzaaregalarmemilesdebesos,unbonitoreguerodebesosquevandesdemis
rodillashastamismuslos.Esomevuelve loca.DespuésmordisqueamimontedeVenus,yesomevuelve tarumba. Finalmente introduce la nariz entremis piernas y, sujetándome con fuerza por lacinturaparaquenomematenicaigahaciaatrás,sucaliente,inquietanteyjuguetonabocallegahastaelcentrodemiplacer,yyo,alsentirlo,tiembloymeabroparaél.
Memuerde...Mechupa...Mesucciona...Y,cuandocreoquevoyaexplotardecalor, loagarrodelpelo,hagoquememirey,comouna
diosadelporno,medejoresbalarporsucuerpohastaquedarsentadasobreél.Mistalonescuelgantras su traseroy,hechizadapor cómomehace sentir, agarro suduroy tersopenecon lamanoy,
separandolaspiernas,lointroduzcoenmí.Ericjadeaymurmuraalsentirmientrega:—Tequiero,señoritaFlores.Losé.Séquemequiereaunquenuestrasdiscusionesúltimamenteseanundíasíytrestambién.Nos besamos mientras el columpio se mueve. Adoro sus sabrosos besos cargados de amor,
erotismo,complicidad.Adoroesabocaqueesexclusivamentemía.Sinembargo,cuandoabro losojosymiroalespejoquehayfrentealcolumpio,meencuentro
con la mirada de Ginebra, que nos observa desde la parte derecha de la cortina. ¿Cuánto tiempollevaráahí?
Sinquererpensarenellay rompermimomentoconmiamor,decidoolvidarmedeesamujer,sacomipartemalota,hagorotarlascaderasparaencajarmemásenmimaridoy,cuandolosientotemblarporelmovimiento,susurroconsensualidad:
—Tequiero,señorZimmerman.Al oír eso, Eric echa la cabeza hacia atrás. En esta ocasión soy yo la que tiene el poder, y sé
cuánto loexcitaque lo llameasí.Ambos losabemos,peromásmegustasaberqueél losabe.Susmanosestánenmicintura,peroselascojoylohagoagarrarsealcolumpio.
La respiración de Eric se acelera. Lo vuelve loco que saque esa parte mía tan de malota, ymurmuro:
—Ahoramandoyoytemblarásdeplacer.Élsonríe.Meencantaverlosonreírdeesamaneray,dispuestaacumplirloquehedicho,hagoun
rápidomovimientoconlapelvisymiamortiembla.Tiemblapormí.Orgullosa de haber sacado la Judith malota que llevo en mi interior, prosigo con mis
movimientos, primero dulces y acompasados para luego convertirse en duros y arrítmicos. EricdisfrutadejándosellevarmientrasyomirodenuevoalespejoyveoqueGinebrayanoestá.
Conscientedelpoderquetengosobremigrandullónmarido,ondeolascaderasenbuscadesusgemidos.Éstosnotardanenllegar,yaumentancuandopasolalengualentamenteporsucuelloyalfinal,mirándoloalosojos,leexijo:
—Córreteparamí.Mivoz.Mimirada.Loquelepido.TodoellounidohacequeErictiembleyseestremezca,yyo
denuevovuelvoachuparsucuello.Adorosusabor.Adorosuolor.Perorealmente¿quénoadorodeél?Loobservoconlosojoscerrados.Elhombrequemeenamoróhacecasicincoañossiguesiendo
unhombresexi,guapo,varonilycomplacienteenlaintimidad.NadieescomoEric.NadieescomoZimmerman.
Suboca,susdulceslabiosmellaman,megritanquelobese,quelodevore,peroenlugardeeso,meacercoasubarbillay lachupocondelicadezaal tiempoqueoprimolapelviscontra lasuyaysientosupenepresionandoenmiinterior.Surespiraciónmeindicaquedisfrutaconaquelloyvuelvoaapretarlapelvis.Ericvibra,jadea,ymientraslorepitomilvecesmás,laquecomienzaavibraryajadearsoyyo.
TodoelmundosabequeenelinteriordenuestrocuerpohayunpuntollamadoG,peroconmirudoalemán,ademásdeése,sientoquetambiéntengoelpuntoH,elK,elM...¡Dios,creoquetengotodoelabecedario!
Unruidobroncosaleentoncesdelagargantademimaridoyséqueesdegocetotaly,sinquepuedaremediarlo,meagarradelacinturay,trasunsecomovimiento,amboschillamosalunísono.¡Uf...,quéplacer!
Mispiesnotocanelsuelo;megustaríarepetiresesecomovimientoperonotengofuerza.Nosoytancorpulentacomomialemán,porloquebuscoayuda.
Rápidamente la encuentro cuando observo que Josef sigue a nuestro lado mirándonos. Sindudarlo,mecomunicoconélatravésdelamirada.Sinnecesidaddehablar,sabeloquequiero, loquelepido,loqueleexijoy,poniéndosedetrásdemí,posaunadesusmanosenmitraseroyotraenmicinturaymemueveconfuerza.
Ericabrelosojosalsentirlarotundidaddeesemovimientoy,trasunnuevogemidodelosdos,preguntoamiamor:
—¿Tegustaasí?MicariñoasientemientraslasmanosdeJosef,quesonlasquememuevenparaencajarmedemil
manerasenél,nos llevanalséptimocielo.Entregemidoygemido,Josef introduceundedoenmiano.Esopotenciamiplacer.YanosóloquieroquemeaprietesobreelpenedeEric,sinoqueahoraquieroquemeaprietetambiénsobresudedo.
EljuegocontinúayEricbuscamiboca,aunquenomebesa.Sólolacolocasobrelamíaparaqueambosnosahoguemosenlosgemidosdelotro,hastaquedeprontoungruñidobroncoyvaronilsaledesugarganta,meagarraporlacinturaposesivamenteymeempalaporcompletoenélhaciéndomegritar.
ElclímaxnosllegaycaigoderrotadaencimadelcuerpodemiamorcuandosientoqueEric,queestárecostadosobreelcolumpio,separalaspiernas,abrelasnalgasdemitraseroconsusgrandesmanos y, segundos después, Josef unta lubricante en mi ano y termina con el pene lo que hacomenzadoconeldedo.
SusmovimientoshacenqueyotambiénmemuevaencimadeEricmientrasélmeabrelasnalgasparaelhombrequeestádetrásdemí.Misgemidosvuelvenallenarlaestancia,yalmismotiempoEricmurmurasinsoltarmisnalgas:
—Disfrútalo...,así...,así...,gritaparamí.Calor...,elcalorquemesubeporlospiesymellegaalacabezaesinmensoy,cuandoJosefal
finalsecorreysaledemí,caigosobreEricagotada.Muyagotada.Instantes después, Josef me ayuda a bajar del columpio y, tras de mí, lo hace Eric, que
rápidamentemeabrazaypregunta:—¿Todobien?Yosonríoyasiento.Todomejorquebien.Acalorados, los tresnosdirigimosa lasduchas,dondeel frescordelaguaal recorrernuestros
cuerposhacequeelsudornosabandone.Unaveznoshemossecado,nosponemosdenuevonuestrosdisfraces,nosdespedimosdeJosefydecidimosbuscaralgodebeber.Estamossedientos.
Cogidos de lamano, caminamos por los salones donde los invitados practican sexo con totallibertad.Admiroeljuegodelagenteysonríoalsentirquelodisfrutanasumanera.
¡Oléporellos!Alpasarporlasaladondeestánlascrucesylasjaulas,nosdetenemos.Vale,entiendoyrespeto
queesotraformadesexo,peroamíno,no,no,nomellamalaatención.Observoqueenunadelasjaulashayunhombreencerradoyqueotropracticasexoanalconél.Ambosparecendisfrutardesuexperienciay,oye,silesgusta,¿dóndeestáelproblema?
Luegomefijoenunadelascruces.Enellatienenaunamujeratadadepiesymanos,peroaunmismo palo. Con curiosidad, contemplo cómo una pareja le ponen unas pinzas de la ropa en lospezonesyenlavaginaylasmueven.Lamujerdelacruzgrita.¡Uf,quédolor!
Paramíesoesunatortura,peroEricmehacesaberqueparaellaesunplacertanrespetablecomoelquenosotrosacabamosdeexperimentarsobreelcolumpioconJosef.
Losacompañantesdeaquéllasonríen,leponenmáspinzas,peropasadosunospocosminutosselasquitan.Instantesdespués,antemisojosladesatanylavuelvenaatar,peroestavezlesujetanlasmanosylaspiernasapalosdiferentes.Luegopasanunacuerdaalrededordelcuerpodelamujereintroducenunapartedeesacuerdaentresuspiernas,latensan,vuelvenatensarla,ylacuerdaquedaencajadaentresuslabiosvaginales.
—Pero¿esonolehacedaño?—cuchicheoaEric.Miamor,quenomehasoltadodelamano,sonríeymurmuraacercándomeaél:—Cuandoestáahíesporqueesolegustayleproporcionaplacer,cariño.Aquínadiehacenada
quenoquieraonoleguste.Asiento, séqueEric tiene razón.Entonces,unas risashacenquemirehaciaatrásyveoaFélix
juntoaungrupodegente.Concuriosidad,tirodemimaridoparairamirary,cuandollegohastaellugarenelqueestán,meencuentroconGinebratotalmentedesnudayatadaaunasilladeginecólogo.Suspechos,quesevenrojosyamoratados,estánrodeadosporunacuerda,peroellaparecepasarlobienapesardesusgritosmientrasespenetradaporunodeloshombres.
Alrededor deGinebra hay tres personas ademásdel que la penetra: unamujer que la coge delcuelloylabesa,unhombrequeledatoquecitosconunavaraenlospechosyotroquesemasturbaesperandosumomento.
Félix,queestájuntoaellos,animaaotrosaqueseacerquenylatoquen.Variosdelospresentesse aproximan,y entoncesdejodever aGinebra.Miro aEricyobservoque a él lo incomodaesaescenatantocomoamí,peroentoncesFélix,quenoshavisto,seacercaanosotrosynosdice:
—¿Osapetecejugarconmicomplacientemujer?TantoEriccomoyonegamosconlacabezayélinsiste:—Eric,yasabesqueGinebralopermitetodo,ymástratándosedeti.Boquiabierta,voyaprotestarcuandomiamorrespondepormí:—Félix,creoqueesoúltimohasobrado.Oh,sí.Yotambiéncreoquehasobrado.Alentenderquenoshaincomodado,Félixrápidamentecogedeunamesitaauxiliarunajarrade
vinoyunascopaslimpiasy,trasllenarlas,noslasofrece.—Disculpadme—dice—.Micomentariohaestadofueradelugar.Con seriedad,Eric coge una copa, lomira conun gesto que haría temblar almás valiente del
universo,melaentregay,trascogerélotra,replicaconvozneutra:—Tranquilo,nopasanada.Félixmemira,buscamiperdón,yyofinalmentedigo:
—Disculpasaceptadas.—Graciaspor vuestra comprensión—murmuray,mirandohacia el grupoque ríemientras se
oyen los gritos placenteros deGinebra, añade—: Sé que pensaréis quemimujer no debería estaraquí,pero...ellaquieredisfrutardetodomientraspueda.
Oíresomeapena,yentoncesEricdice:—Aunasí,creoquetúpodríashacerladisfrutardeotramanera.Félixsemueve.Sinlugaradudas,laduramiradadeEricloincomoda,yresponde:—Eric,yo...—Déjalo,Félix.Vosotrossabréislasnormasdevuestrapareja.Peroteaseguroque,sifuerami
mujerquienestuvieraenferma,noestaríaaquí.Esotelopuedoasegurar.—PorGinebrasoycapazdecualquiercosa,Eric.Ysiellaquiereestooquierelaluna,lotendrá.Miamor,quenomehasoltadoentodoeserato,clavalamiradaenélyfinalmenteresponde:—Para todo hay límites en esta vida, pero en una cosa estoy de acuerdo contigo: simimujer
quierelaluna,tambiénlatendrá.Semiran.Misextosentidocomomujermegritaqueseestáncomunicandoconlamirada,ytomo
notadeque,encuantotengaoportunidad,lepediréamiamorexplicaciones.En ese instante veo a Björn y aMel salir de las duchas, caminan hacia nosotros. Al llegar a
nuestrolado,FélixregresaconelgrupoyEricdice:—Vayamosabeberalgoquenoseavinodedátilesycosasasí.—¡Nosapuntamos!—exclamaBjörnriendo.Cuandocomenzamosa andar los cuatrohaciaun ladode la casadonde sabemosquepodemos
tomaralgoquenotengaqueverconelImperioromano,Melpregunta:—¿Lafiestecitabien?Encantadaporloocurrido,asientoyellacuchichea:—Amímehasentadoalgomal.Aloírla,meparo.Lamiroyella,bajandolavoz,murmura:—Pero,tranquila,yacomienzoasentirmemejor.Esomepreocupa.Björn,quesabecómoseencuentraMel,pregunta:—Cariño,¿quieresquenosvayamosalhotel?—No,cielo,estoybien.Peromesabemalporti.Noestásdisfrutandolanochequeesperabas.Björnmemira.Yosonríoylooigodecir:—Conestarcontigo,mevale.Ambasreímos.JamesBondesmuygalante.Continuamoscaminandoporlacasaypiensoenmihermana.Siellaestuvieraaquíviendoloque
yoveo,pensaríamuchascosas,ademásdequenosfaltanmásdetrescientostornillos.
Doshorasdespués,estamostiradosenunosalmohadonesquehayenunagransala.Divertidos,charlamosconmásgenteyMelsusurra:
—Tengoqueiralbaño;¿vienes?Asiento.Yotambiéntengoqueiry,trasdarleunbesoamiguapomarido,mealejoconella.Al
pasar por varias salas, algunos hombres nos piropean y nos invitan a sus juegos, pero nosotrassonreímosynegamosconlacabeza:tenemosclaroque,sinEricyBjörn,nojugamosconnadie.
Alllegaralbaño,comosiempre,haycola.¿Porquéelbañodemujeressiempreestáatope?Acostumbradasaesperar,nosapoyamosenlaparedyMelcuchichea:—Jud...,cuandolleguemosalhotel,tengoque...—¿Quétallanoche,chicas?LavozdeGinebranosinterrumpe.Estáanuestrolado,recuerdoloquehevistodeellayloque
ellahavistodemí,yrespondo:—Sindudaalguna,muybien.Latuyatambién,¿verdad?Ginebrasonríe,saludaconlamanoaunamujerquepasapornuestroladoysusurra:—Demomento,estupenda,aunquelanocheesjoven.Melsonríeyyohagolomismo.Durantemásdediezminutos,esperamospacientementenuestra
colay,cuandoMelentraenelbaño,Ginebradicemirándome:—Osvienelcuartonegrodelespejo.—Losé—afirmosabiendodeloquehabla.Ginebraasienteymurmura:—Mevasaodiar,peronecesitodecirteque,cuandoosvisobreelcolumpio,mimenterecordó
muchascosasdelpasadoyquiseseryolaqueestuvierasobreélybesarasucálidaboca.Veraquellaescenatandulceyeróticameexcitócomollevabatiemposinhacerlo...,yhepensadopedirtequemeofrezcasatumarido.
Sorprendida,lamiro.¿Dequéva,lacolega?Pero,comonoquieroenfadarme,respondo:—Ginebra,yasabesqueélnoquierenadacontigo.—Oblígalo.¡¿Qué?!¿Hadichoqueloobligue?Y,atónita,declaro:—No.—¿Ysiloobligoyo?Ojú...,ojú...,loquemeentraporelcuerpocuandolaoigodecireso...Y,sincontenerlamalaleche
queensegundoshacrecidoenmiinterior,ledirijolapeordemismiraditasysiseotajantemente:—Temato.Ginebrasonríey,conungestoquenomegustanada,responde:—Tengopocoqueperderyungranplacerqueganar,¿nocrees?Bueno...,bueno...,bueno...,¡salióelgordodelalotería!Miparte racionaldemadre,mujercasadayadultamedice:«Jud..., respira..., respira»,peromi
parteirracionaldeespañola,jerezanaycatalanamegrita:«Jud...,arrástraladelospelos».Metocolacara—omelatocoyooselatocoaellaconelpuño—y,cuandoconsigodigerirlo
queacabadedecirme,lamiroyreplicollenademaldad:—Paraestarapuntodemorirte,eresmuyzorra,¿no?—¡Quédesagradableesesoquehasdicho!—mecorta.Sí,tienerazón.Loqueacabodedecirnoesalgodeloquedebasentirmeorgullosa,yrespondo
sacandomipartemacarra:—Sientomucholodetuenfermedad,peroaléjatedeEricsinoquierestenerungraveproblema
conmigo.Y,cuandodigograve,esgravísimoporqueyo,cuandomeenfado,pierdolospapelesymedaigualquiénseas,loquetepaseoloquetepuedapasar,¿entendido?
Alvermireacción,Ginebraabrelabocay,porprimeravez,veoenellaunacaraquenoconozco.PorfinhasalidolaGinebradelaqueFridamehabló.
—Ericfuemíoantesquetuyo—siseaellafuriosa.Conlarapidezdelrayo,memuevo.Laagarrodelcuelloy,antelamiradadesorpresadealgunas
mujeres,aclaro:—TencuidaditoconloquedicesynoteacerquesaEricoteaseguroquelovasalamentar.Eneseinstante,seabrelapuertadelbañodeMely,alvernosenesatesitura,miamigagrita:—¡Eh...Eh...¿Quéocurreaquí?!RápidamentesueltoaGinebra,yésta,reponiéndoseendécimasdesegundo,secuelaenelbaño,
cierralapuerta,yyo,boquiabierta,murmuroenespañolparaquenomeentienda:—Ylamuycerdaencimasecuela;¡serádesgraciada!Mel,queeslaúnicaquemehaentendido,sonríeeinsiste:—¿Quéhapasado?Sinpelosenlalengua,lecuentoloocurrido.Lasonrisaseleborradelacarayporsubocasalen
gusarapospeoresquelosmíos.EstáclaroqueMelyyoestábamospredestinadasaconocernosyahacernosamigas.Somoslasdosigualdebrutas,malhabladaseimpulsivas.
CuandoGinebrasaledelbaño,Melleponecaradepocosamigosy,alverqueellamemira,siseocondesagrado:
—Aléjatedemimarido.Diezminutosdespués,regresamosjuntoanuestroschicosyalgrupoconelqueestábamosyno
cuentonadadeloocurrido.CuantomenossepaEricdemiencontronazoconaquellatontadelculo,mejor.
Concuriosidad,veoqueFélixapareceunpardevecesysetomaalgoconnosotros.LoobservoparaversiGinebralehaexplicadoloocurridoenelbaño,peroélparecetranquiloysosegado,esmás,memiraymesonríeconcomplicidad.Esometranquiliza.Significaquesumujernohahabladodenuestrodesafortunadoencuentroysusmenosafortunadoscomentarios.
AlfredyMaggie,convencidosporvariosde los invitados,alfinalhanclaudicadoyhanpuestoalgodemúsicaquenoseanarpas,ytodosseloagradecemos.
¡Estamoshastaelmoñodelasarpitas!Lagentetambiénquierebailarypasarlobien.Entrerisas,bailamos.Bueno,mejordicho,bailo,porqueEricesdelosquesujetaelvasojuntoa
labarra,aunquelopasabien;¡menosmal!Elgrupocreceycreceynosdivertimosmucho.YohabloconLinda, lamujerdeunamigode
Eric, y estamos charlando cuando oigo que lamúsica cambia y comienzan a sonar los primerosacordesdeThinkingOutLoud,[30]deEdSheeran.Sonrío.AEricyamínosencantaesacanción.
Deprontosientoqueunamanoseposaenmicinturay,alvolverme,miguapoyrubiomaridomedice:
—¿Bailamos?Aceptoencantada.
Esostontosdetalles,cuandoséqueélodiabailarenpúblico,sonlosquemedemuestranlomuchoquemequieremiamor.
Agarradaasumano,caminohacialaimprovisadapistaymedejoabrazarporél.Conmicabezacerca de su hombro, cierro los ojos mientras aspiro su perfume, el perfume personal de EricZimmerman.
Bailamosensilencioescuchandocadamaravillosafrase,cuandoseñala:—Como dice la canción, te seguiré amando hasta los setenta. ¿Y sabes por qué, pequeña?—
Emocionada, niego con la cabeza y él añade—: Porque, a pesar de nuestras broncas y nuestrosdesencuentros,meenamorodetitodoslosdías.
Ay,¡quemeda!Ay,¡quemedaunjamacuco!Oír decir eso tan increíblemente romántico al frío y duro Eric Zimmerman me hace sonreír
comounatonta,comounaimbécil,comounañoñay,enamoradahastael infinitoymásalládeél,murmuro:
—Tequiero...,gilipollas.Eric sonríe, me aprieta contra su cuerpo y, en silencio, continuamos bailando aquella bonita
canción,hastaqueacabamosyregresamosconelgrupo.Minutosdespués,veoaFélixhablarconBjörn,Ericyotroshombres.Condisimulo,losobservo
yparecenpasarlobienmientrasbebenjuntoalabarra.Porsuerte,noapareceGinebra.Siveoaesazorrasca,yocreoquemetiraréasuyugular.
Denuevo,lamúsicavuelveacambiar,oigolacanciónUptownFunk[31]deMarkRonsonysalgoalapistaabailarconMel,queyaestámejor,yotrasmujeres.
Meencantalamarchitafunkyquetieneelcolegay,disfrutando,bailoalritmodesuvozcuandomeagarranporlacinturay,alvolverme,veoquesetratadeEric.
Lomiro y, al observar quemueve las caderas al compás de lamúsica,me río y, sorprendidacomonuncaenmivida,bailoconélmientrasledigo:
—Cariño,tejuroquelafechadehoymelatatúoenlapiel.—¿Porqué?—preguntadivertido.Acadainstantemásalucinadadeverquebaila,respondo:—Porqueestásbailandoenlapista.Ericseríe,mecogeentresusbrazosaloOficialycaballeroymebesa.Sinduda,miamorquiere
pasarlobien.Cuandoterminalacanción,EricsemarchayyocontinúobailandoconMelyLinda,hastaquela
sed nos puede y regresamos con el grupo. Al llegar, me doy cuenta de que Eric no está y,acercándomeaBjörn,lepregunto:
—¿YEric?—Nolosé.Habráidobaño—dicemibuenamigo.AsientoyvuelvojuntoaLindaparaseguircharlando.Comenzamosahablardeniñosy,cuando
quierodarmecuenta,hapasadounbuenratoymimaridoaúnnoharegresado.Esomeextraña.Enunafiesta,Ericnuncamedejasolamásdedosminutos;entoncesbuscoconlamiradaaBjörnyMelyveoqueestánbailandoenlapistadivertidos.
Concuriosidad,observoamialrededorporsiestáhablandoconalguienynomehedadocuenta,pero nada, no lo veo, y al final decido ir a buscarlo.Me acerco a la barra por si está allí, perotampocoestá.Pasoporlasaladelosalmohadones,lobuscoduranteunbuenrato,yesohacequemeintranquilicemásymásacadasegundoquepasa.Pero,entonces,medetengodeprontoyelcorazóncomienzaalatirmeconfuerza.
Algopasa.Lointuyo.Ericnuncamedejaríasolaallí.Sientoqueelcorazónsemevaasalirdelpechoymedirijohacialasotrassalas,dondelagente
siguejugandoydisfrutando.Perono.Noquierocreerquepuedaserverdadloquepienso.Ericnomeharíaalgoasí.
Alentrarenunadelassalasveoadistintosgrupos.Unosobservancómoaunhombrequeestáatadoaunamesaselobeneficiatodoelquequiere.Otrogrupoaplaudeyjaleaalrededordeunajauladondeunachicayunchicosonposeídosporvarioshombres,yeltercergruposeconcentraanteunamujeratadaaunasilladeunamaneraque,sóloconverla,séqueyonopodríahacerlo.
Esos juegosdurosnomegustan.Susgestosy susmodosmientras lohacen tampoco,pero losrespeto,comoséqueellosrespetanloqueamímegustaencuantoalsexoserefiere.
PiensoenGinebra,perorápidamentemesacudolaideadelacabeza.Ericnolatocaríaniconunpalo.
Prosigomi camino y entro en la segunda sala. Allí, varias parejas hacen el amor sobre unascamasyotrassobreloscolumpiosdecuero.MetranquilizanoencontrarmeaEricallí,ysonrío.
Pero,quétontasoy,¿cómopuedodesconfiardeél?Sin lugar a dudas estará hablando con alguien, pienso, cuando de pronto, al pasar ante la sala
negradelespejo,observoqueestácorridalacortina,yungemidohacequemedetenga.Mirolacortinanegra.Queestéechadasignificaquenoquierenquenadieentre.Micorazónse
desbocadenuevocuandooigounnuevogemido,ycierrolosojos.No.No.No.Nopuedeser.Sin embargo, incapazdemarcharmede allí sin ver lo que está ocurriendo al otro ladode esa
maldita cortina, la descorro con cuidado yme quedo sin respiración al ver y encontrarme lo quenunca...nunca...nuncaenmividahabríaqueridover.
Enelinteriordelahabitación,sobreelcolumpio,estáEric,miEric,sentadoconGinebraencimadeél.Mellevolamanoalcuello.Laimpresiónmeahoga.
¡Mevaadaruninfarto!Elhombreenelqueyoconfíoyporelquehabríapuestolasmanosenelfuegoclavaentonceslos
dedosenlaespaldadeaquéllamientrasjadeanybuscansuplacer.Voyavomitar,¡tengoganasdevomitar!Boquiabierta,nopuedoapartarlavista,yveoqueellaacercalabocaalademiamorylobesa.Se
devoranconavidez,conurgencia,conpasión,mientrasyo,comounagilipollas,observocómoellaondulalascaderassobreEricyéltiemblaenloquecido.
Cierrolospuñosymirespiraciónseacelera.Creoquenovoyavomitar,¡losvoyamatar!Instintosasesinosaflorandemiinteriormientrasmisojossetorturanviendoaquello.Quieromovermeparairhaciaellos,peromispiernasestánclavadasalsueloysólosoycapazde
mirar,mirarymirar,ydeprontosientoquemisojossellenandelágrimasporlagrandecepciónqueestoysufriendo.
¿Cómopuedehacermeesomiamor?Ericnomeve.Ginebratampoco.Estántancentradosendarseplacerqueelalmasemecaealos
pies.Lasganasdematarlo,demontarleunpollo,dearrancarlelacabezaaEricsemultiplicany,depronto, lo odio. Lo odio con todas mis fuerzas por haberse saltado nuestra primera norma desiemprejuntosenelsexoyporestarconGinebra.
Soyconscientedequelaslágrimascorrenpormirostroydequenopuedomatarlo.Loquierodemasiado.
Todamifuerza,micarácter,mibravurasehandisipadoparadejarmehechauntrapo.Mesientomal,terriblementemaly,cuandomispiernasporfinsedesbloquean,sueltolacortinay,aldarmelavueltaparamarcharme,meencuentroaFélixdetrásdemí.
—Perdóname,Judith—murmura—.Perdóname,peroella...—Ella,¿qué?—consigosisearfuriosa.—Ellalodeseaba.Niquieronipuedoescucharlo.Loempujo,mealejodeallíantesdequemis instintosasesinos
regresenamíyorganicelamatanzadeTexasenMúnich.Dios...Dios...Dios...¡Necesitosalirdeaquí!Mientrascaminoenbuscadeunasalida,nopuedocreerloquehapasado.Nopuedocreerloque
hevisto.Nopuedocreerquemiamormehayatraicionado.¿Cómohapodidopasar?¿PorquéEricmehacealgoasí?Bloqueadapormissentimientosyporlafrustración,observocómolagenteríeamialrededor,
lopasabien,hastaqueMelyBjörn,alvermigesto,preguntan:—¿Quéteocurre?Sinpoderresponder,medoylavueltaycomienzoacaminarhacialapuerta.Necesitosalirdeallí.
Entonces,depronto,sientounamanoquemedetiene.EsBjörn.—¿Quéocurre,Judith?—pregunta.Enfadadaconelmundo,medeshagodesumanoygrito:—¡Túlosabías!BjörnyMelintercambianunamirada.Noentiendenquémepasa,yelpobremepregunta:—¿Elqué?¿Quéesloquesé?Ungemidosaledemibocay,actoseguido,melatapoconlasmanos.Noquierollorar.Nopuedo
llorar.Ericnosemerecequelloreporél.Pero,conlamayorpenademivida,murmuro:—Dilequenolevoyaperdonarloquemehahecho.¡Nunca!Denuevo,veoquesemiran.Enunprimermomento,ningunoentiendedequéhabloy,comounaollaapresión,exploto:—Ese...esegilipollasestáconGinebra.—¡¿Qué?!—exclamanlosdosalunísono.Desesperada,meretiroelpelodelacaraygritosinimportarmequiénpuedaoírme:—Loshevistoenelreservadonegrodelespejoy...y...¡Oh,Dios!Quieroirmedeaquí.Quiero
desaparecer.No...noquierovolveraverloenmivida.VeoqueBjörnfrunceelceñoalucinadoy,dirigiéndoseaMel,sentencia:
—Quédateconella.Sinmás,sedalavueltaysemarchaconpasoacelerado.Melintentaconsolarme,mellevahasta
unlateraldelsalón,yyo,hechaunmardelágrimas,consigodecir:—EricyGinebra...,loshevisto,Mel...,loshevisto.Miamigameabraza.Necesitoeseabrazo,ydejoquelohaga.Me acuna. Me da aliento, intenta consolarme cuando, pasados unos minutos, veo que Björn
aparececongestofuriosoy,acercándoseanosotras,dice:—Vámonos.Ensusojosveoladecepciónporloquehavisto,comolohevistoyoy,abrazándome,murmura:—Estotienequetenerunaexplicación,Judith,yaloverás.Nohablo.Nopuedo.¿Quéexplicaciónvaatenerloquehevisto?¿Quéexplicaciónvaatenerqueelhombrealqueamolocamenteestéconesaperra?Unavezhemosrecogidolascapasdelguardarropa,noslasponemosysalimosdelafiesta.Elairegélidodelanochemedaenlacarayconsigorespirar.Yanohaycuadrigas.Menosmal.Sinhablar,lostresnosmontamosenelcoche.Melsubeatrásconmigo.—Quieroirmeamicasa—consigodecir.Björn,queestátansorprendidocomoyo,memiraydice:—Escucha,cariño,vayamosalhotel.—¡No!—gritofuerademí—.Noquieroiralhotel.MelyBjörnsemiranymibuenaamigamevuelveaabrazar.—Judith,estarde,ycreoquelomejoreshacerloquediceBjörn.Mesientocomosiestuvieraenunanubey,comosoyincapazdereaccionar,finalmenteasientoy
mecallo.Nopuedoolvidarloquehevisto.Todavíanomelocreo.Eric,miEric,elhombreporelqueyodoymivida,mehaengañadoenmicara.Enmiputacara,
conaquellaasquerosa,yyonohepodidohacernadasalvohuir.Alllegaralhotel,pidootrahabitación,meniegoacompartirhabitaciónconEric,peroparami
desgraciaelhotelestácompleto.Entonces,consultoelrelojyledigoalrecepcionista:—Pídameuntaxi.RegresoaMúnich.Aloírme,Björnprotesta.Yacontinuaciónnosenzarzamosenunadiscusiónenlaqueyogrito
descontroladayélintentatranquilizarme.Alfinal,Meltomacartasenelasuntoydicemirándome:—Ahoranovasairaningunaparte.DormirásconnosotrosymañanaregresaremosaMúnich,
¿entendido,Judith?—NoquieroveraEric—suplico.—Noloverás,¿verdad,Björn?—afirmaella.Elpobreasientey,tanconfundidocomoyo,murmura:—Teloprometo.Creoquemevoyadesmayarporlatensiónquesiento,ymedejoguiarporellos.Unavezenla
habitación,sinpudorantemisamigos,mequitoelcortodisfrazdediosaromanay,trasponermeunacamisetayunasbragasqueMelmepresta,memetoenlacama.
Conlacabezabajolaalmohada,vuelvoallorar.MisojossoncomolascataratasdelNiágaraymi
corazónestátotalmentepartido.Misbuenosamigos intentanconsolarme,mehacensacar lacabezadedebajode laalmohaday
dicendetodo.Yolosescuchoy,cuandonopuedomás,replico:—Noquieroverlo.Björn,cuandovenga,noquieroverloojuroquelomato.Élasientey,mirandoaMel,murmuraantesdesalirdelcuarto:—AcuéstateconJudith.EncuantosedécuentadequeJudnoestáenlafiesta,Ericmellamará.Y,
conociéndolo,loraroesquenosehayadadocuentaya.Nocreoquetardemuchoenllamaroveniralhotel.
Recostadaenlacama,observoaMelamilado.Enlaoscuridaddelahabitación,nosmiramosymurmuro:
—Cuántarazónteníamihermana.—¿Aquéterefieres?Secándomelasdescontroladaslágrimasquenoparandemanardemisojos,susurro:—Raqueldijoquequienjuegaconfuegotardeotempranosequema,yyo...yomehequemado.—No,Jud...,no.Esonoesasí.Suspiro,resoployapunto:—Y,sinoesasí,¿porquélohahecho?Melnoresponde.Estátandesconcertadacomoyo,yfinalmentedice:—Nolosé,peroErictequierey...—Nomequiere—lacortoconrotundidad—.Simequisiera,nuncahabríahechoeso,ymenos
conella.Su...subocayanoessólomía,comotampocoloessucuerpoysucorazón.Noscallamos.Esmejorquelohagamosy,sindarmecuenta,mequedodormida.Nosécuántotiempohapasado,peromedespiertosobresaltada.Melestádormidaamilado.Concuidado,meincorporodelacama,cojomimóvilyveoqueson
casilascincodelamadrugada.¿LascincoyEricnomehallamado?Sin lugar adudas, lo estápasando tanbienconaquella asquerosaque leda igualdóndeestéy
cómoesté.Hedejadodeimportarley,furiosa,apagoelteléfono.Tengosed.Melevantoaporaguay,alsaliralsalóncontiguoa lasuite,meencuentroaBjörn
sentadoenelsillóncongestohosco.Yanollevaeldisfrazdegladiadorromano.¡Seacabólafiesta!Ahoravavestidoconnormalidad.Camisayvaqueros.
Nosmiramosy,sinpoderevitarlo,pregunto:—¿Erichallegado?Élniegaconlacabezayesomesorprendemásaún.¿Deverdadqueloestápasandotanbiencon
esazorraquenosehadadocuentaaúndequeyonoestoyenlafiesta?Voyalminibar,cojounabotelladeaguay,trasdarleuntrago,mesientojuntoamibuenamigoy
pregunto:—¿Por qué, Björn? ¿Por qué? —Él no responde, y añado—: Creía que me quería, que era
especialparaél.Yocreíaque...—Tequiereyeresespecial,esonuncalodudes.Noséqué...—Björn—locortoretirándomeelenmarañadopelodelacara—,dejadedefenderloporqueno
selomerece.Yocreíqueledabatodoloquenecesitabatantoanivelafectivocomosexual,peroestá
vistoquenoeraasí.EstávistoqueEricZimmerman,elpoderosoyfolladorEricZimmerman,nuncacambiará.
Björnsepasalamanoporsumorenopelo.Nosabequédecirme.Estátandesconcertadocomoyoy,cuandolovaahacer,deprontosumóvilsuena.Losdosmiramoslapantallayleemos:¡«Eric»!
MicorazónseacelerayentoncesBjörnlocogey,trasescucharunosinstantes,dice:—Está...Sí..., está aquí.Y..., no..., no..., escúchame,Eric.Esmejorqueesta..., ¡joder, escúchame!
Ellaestáconnosotros,yesmejorqueestanochenolamolestes.—Denuevovuelveaescuchar,sugestosecrispay,levantandolavoz,dice—:¿Cómoqueporquéestáconmigo?
Angustiadaporoírsuvoz,lequitoelteléfonoaBjörnysusurro:—Confiéenti,malditohijodeputa.Confiéenloqueteníamos,peroestávistoquetúnoeresla
personaqueyocreíqueeras.—Jud...,cariño...,escúchame...Su voz parece desesperada a pesar de estar gangosa por haber bebido más de la cuenta.
Atormentadaporloquesoyincapazdequitarmedelacabeza,siseo:—No.Novoyaescucharteporquenotelomereces.Teodio.Y,sinmás,lepasoelteléfonoaBjörnyregresojuntoaMelalacama.Tengoquedescansar.
52
Björn,conscientedeldolorqueveíaenlosojosdesuamiga,cuandoelladesapareciótraslapuerta,selevantóypreguntó:
—¿Quécoñohashecho,gilipollas?Alotroladodelteléfono,Ericgritódesesperadomirandoasualrededor.—Nolosé,Björn.¡¿Quiereshacerelfavordecontarmequéhaocurrido?!¿YporquéJudnoestá
aquíconmigo,sinocontigo?Convencidodelamorincondicionalquesuamigosentíaporsumujerydequetodoaquellotenía
unaexplicación,Björnpreguntó:—¿Dóndeestás,Eric?—Enlafiesta.¿Dóndevoyaestar?Elabogadoasintióy,conscientedequelavozdeaquélnoeradenohaberbebido,dijoantesde
colgar:—Notemuevasdeahí.Voyabuscarte.Acontinuación,entródondelaschicasdormíany,alveraJudithconlosojoscerrados,cogiólas
llavesdelcocheysemarchó.Contodalaserenidadquepudo,condujodevueltahastalafiesta.Alllegarallí,seencontróenla
escalinatadeentradaaunajadogladiadorllamadoEricZimmerman.Sugestolodecía todoy, trasaparcar,saliódelcochey,acercándoseaél,antesdequepudieradecirnada, lesoltóunderechazoquehizoqueEriccayeracontralapared.
ElrubioalemánlomirófuriosoyBjörnsiseó:—¿Cómohaspodidohacerlo?¿CómohaspodidohacerleesoaJud?Eric, consciente de que había metido la pata hasta el fondo, aunque no lo recordara, sin dar
importanciaallabioquelesangraba,clavólamiradaensuamigoyvoceó:—¡NoséquélehehechoaJud,peroestáclaroquealgohapasado,ymuygrave!—Y,mirando
fijamenteaBjörn,afirmó—:Mecreasono,mehedespertadohaceunratosentadoenelcolumpiodelahabitaciónnegra.
—¡¿Cómo?!—Alguien debió de echarme algo en la bebida —afirmó Eric—. No recuerdo nada. —Y,
desesperado,insistiótocándoselafrente—:¿Túsabesquéhaocurrido?Björnsesacóentoncesunpañuelodelbolsillo,seloentregóparaqueselimpiaralasangredela
bocayrespondió:—JudtehavistoconGinebraenlasalaenlaquetehasdespertado.Ynosólotehavistoella,sino
queyotambiény,sinotehedichonadahasidoporqueestabasmuyanimadoynoqueríamontarunescándaloenlafiesta.
Aloíreso,Ericsequedóparalizadoy,trassoltarunbramidodefrustración,tiróelpañueloconfuriaalsuelo,diomediavueltayentródenuevoenlamansión.Björnfuetrassuamigoy,cuandoEriclosintióasulado,siseó:
—GinebrayFélix...,¡losmataré!¡Losmataré!—Eric...—Melahanjugado,¡joder!Yyohecaídocomounimbécil.Sinllegaraentenderloquesuamigodecía,comopudoBjörnloparóypreguntó:—¿Aquéterefieres?Con la mirada vidriosa por la rabia que bullía en su interior, Eric miró a su alrededor
buscándolosymurmuró:—Ginebrasemuere...—¡¿Qué?!—Se muere y me pidió tener una última vez conmigo. Le dije que no, pero entonces Félix
comenzóaacosarmesuplicándomequenopodíanegarleaquelloasumujer.Intentéhablarconellosmontonesdevecesparahacerlesentenderquenopodíaserpero,porloqueveo,eseviejozorroylazorra de su mujer han jugado sucio para conseguir su propósito. Frida tenía razón, ¡joder!—Y,tocándoselacabeza,añadió—:LacopadewhiskyalaquemeinvitóFélix...,debiódeecharmealgoenlabebida.
—¡¿Qué?!Horrorizado,aunquenoporloquelehubierandado,Ericselamentó:—Dios,nomeperdonaréenlavidaeldañoqueestoleestáhaciendoaJud.—Deberías hacerte unos análisis —dijo entonces Björn—. Necesitamos saber con qué te han
drogadopara...—Meimportaunamierdaloquemehayandado.—Siqueremosdemandarlosesnecesarioque...—SólomeimportaJud,Björn...,sóloella—replicóEric.Y, trasdarleunpuñetazoa laparedquehizoque le sangraran losnudillos, sedisponíaadecir
algomáscuandoAlfredyMaggiepasaronporsulado.—¿Todobienporaquí?Ericlosmiróypreguntó:—¿DóndeestánGinebrayFélix?—Sehanidohaceunrato—respondióMaggie.—¡Joder!—maldijoéldesesperado.Asustados,losanfitrionesdelafiestainsistieron:—¿Ocurrealgo?—Ocurrequeesosdossehansaltadolaprincipalregladelafiesta:elrespeto,yteaseguroque
melasvanapagar.Y, sindecirnadamásporqueen sumente sóloveía lapalabra«venganza»,diomediavueltay
caminó en dirección a la salida. Tras despedirse de la pareja, Björn corrió hacia su amigo y seapresuróadecir:
—Judnoquiereverte.
—Medaigualloquequiera.AunqueeraconscientedequeibaaserimposiblepararaEric,Björninsistió:—Necesitaríamos hacerte esos análisis antes de que los efectos de lo que te hayan echado
desaparezcandetuorganismo.Piensaque...—Björn,llévamealhotel.SóloquieroveraJud.Esloúnicoquemeinteresa.Unavezllegaronalcoche,Björninsistió:—Eric...Disgustado,furiosoyalterado,aquélmiróasuamigo.Loocurridohabíasidounterribleerror.
Habíasidoengañado,peroconocíaaJudysabíaqueseloharíapagar.—Necesitoverla,Björn—siseó—.Judtienequeescucharme.LosdosmontaronenelcocheyBjörnarrancó.—Estámuyenfadada—insistióéste—,yleheprometidoquenotepermitiríaacercarteaella.Aloíreso,Ericafirmó:—Quieroamimujerporencimadetodaslascosasy,si tengoquepasarporencimadetipara
quemeescucheloharé,¿entendido?Elabogadoesbozóunasonrisaypisóelacelerador.—Eslomínimoqueesperabadeti—murmuró.Cuando,veinteminutosdespués,llegaronalhotelydejaronelcoche,subieronalahabitaciónen
silencio.AlentrarenelsalónseencontraronaMelsentada.EllavioaEric,luegomiróaBjörncongestohoscoysiseó:
—SabesqueJudnoloquiereaquí.—Esmimujer—insistióEric.MelibaadetenerlocuandoBjörn,cogiéndoladelbrazo,seloimpidió.—Tienenquehablar.—Pero¿túestás tonto?...—lereprochóellaalveraEricentraren lahabitación—.¿Quétienen
quehablar?¿Acasotienequeexplicarleloplacenterosquehansidolospolvosquehaechadoconesaguarra?
Björnnegóconlacabeza.—EricafirmaqueGinebrayFélixlodrogaron.—¡¿Qué?!Elabogadoasintió.—Debieron de echarle algo en la bebida y no recuerda nada de lo ocurrido. Sólo recuerda
habersedespertadosentadoenelcolumpioypocomás.Mel se tapó la boca horrorizada. Por desgracia, ese tipo de cosas ocurrían hoy en día. Sin
embargo,lomiróeinsistió:—Síesasí,losiento.PerotúleprometisteaJudquenopermitiríasque...—Séloqueleprometí—lacortóél—.PerotambiénséqueEricdicelaverdad.Yloséporqueél
laquieredemasiadocomoparahacerloquehahecho.Sidealguienmefíoalcienporcien,ademásdeti,esdeEric,ymásenlotocanteaJud.
Melresopló.Allíseibaaarmarunabuena.
53
Sientoquealguienmetocaelpelo.¡Oh,Dios,quégustito!Elplacerquemeproporcionaese suavemasajemehacesuspirar,ymecolocomejor sobre la
almohadaparafacilitarlatarea.Noobstante,deprontoabrolosojos,vuelvolacabezay,alverquiénmeestátocando,mimentesereactiva,doyunsaltoenlacamaymurmuromirándolofijamente:
—Eresundesgraciado.Ericmemira.Siguevestidodegladiadoryveosulabiopartido.¡Esperoqueleduela!Duranteunossegundos,nuestrasmiradaschocanyél,levantándosedelacama,susurra:—Cariño...—Ah,no,gilipollas...—locortocontodalachuleríadequesoycapaz—.Yoyanosoytucariño.Sugestoesconciliador,aunqueledueleloqueacabodedecirle.—Cariño...,nodigastonterías.Tienesqueescucharme.Oíresomerevuelvelastripas.¿Escucharloyo?¿Queyotengoqueescucharlo?Ah,no...,elquemevaaescucharesélamí.Pero¿esteimbécilquésehacreído?Y,bloqueandolossentimientosquepugnandentrodemí,siseo:—Mehasdecepcionado,humillado,avergonzado,ofendido, insultado,despreciadoypisoteado;
¿creesquetevoyaescuchar?—Jud...—Teodio...,teodiocontodomiser.—Nomedigaseso,amor—susurratembloroso.¿Amor?¿Ahoravuelvearecordarquesoysuamor?Y,conelpoderquesientosobrelasituación,afirmo:—Tedirétodoloquemevengaengana,gilipollas...,¡todo!Ericsemueve,seacercaamí,peroyosoyrápidaymecolocodetrásdelsillóndondeestátirado
mivestidoderomana.—Escúchame—insisteél—.Loocurridotieneunaexplicación.Niego con la cabeza.No quiero escuchar.No quiero queme humillemás, por lo que susurro
cogiendounzapatodetacón:—Claro que tiene una explicación. Ginebra te buscó y tú, como buenmachote, no te negaste,
¿verdad?—Su gesto se contrae, y siseo—: Eres un desgraciado. ¿Cómo has podido? ¿Cómo haspodido engañarme? ¿Cómo has podido hacerlo donde horas antes lo habíamos hecho tú y yo?¿Acasoesoteprovocamorbo?¿Osprovocamorboalosdos?
—No,cariño...,no...—Entonces¿porqué?¿Porquéhastenidoquehacerlo?Ericmemira...,memira...,memira.Loconozcoeintentadarmeunaexplicaciónlógicaaloque
pregunto.Pero,entonces,cuandonopuedomás,gritosindejarlohablar:—¡En este instante te odio, Eric! ¡Te odio como creo que nunca te he odiado! ¡Te juro que te
retorcería el pescuezo sin piedad! ¡Pero creo que ni esome quitaría la rabia y la frustración quesientoahoramismo!—Metocolasien.Meduelelacabeza—.Saldeestahabitaciónydesaparecedemivistaantesdequemisinstintosasesinosquieranabrirtelacabeza.
—Pequeña...—¡Nomellamespequeña!—chillosinimportarmequenosoigan.Ericlevantalasmanos.Meenseñalaspalmasparaquemerelajeyrepite:—Jud,cariño,porfavor,escúchame.Déjameexplicarteloocurrido.Incapazdetenerunsegundomáselzapatoenlamano,selolanzofuriosayseloestampoentoda
lacara.Ledaenlafrente,peroEricnosepreocupaporelgolperecibidoeinsiste:—Loquevistenolohiceporgusto...Rabiosaporrecordarloquevi,cojoelotrozapatoyselotirotambién.Éstelepasarozandola
orejaperonoleda.—Jud,debierondeecharmealgoenlabebida.Norecuerdonada,cariño.Tejuroquenorecuerdo
nada,exceptodespertarmesolosobreelcolumpioenlahabitaciónnegradelespejo.Yonuncaharíaalgoquepudierahacertedaño,ylosabes.¡Séquelosabes!
Esome detiene. Recuerdo la conversación quemantuve conGinebra anoche y al Eric bailón.Luego, las palabras de Frida cruzan mi mente advirtiéndome sobre aquella zorra y grito defrustración.
Enajenada y sin ganas de escucharlo, cojo de unamesita elmandodel televisor y se lo lanzo.Después,learrojotodoloquepillosobrelamesitaquehayamiladoyélsemueveparaesquivarlosobjetosmientrasmegritaquepare.Peroyonoparo.Nopuedoy,cuandosóloquedaunalámparadecerámicasobrelamesa,laagarrotambiénylooigodecir:
—Noseráscapaz.Oíresoenciertomodomehacegraciay,trasarrancarelcabledelaparedcomounaposesa,le
lanzolalámpara,quecaealsueloysehacepedazoscuandoéllaesquiva.Elruidoesatroz.EntoncesseabrelapuertadelahabitaciónyaparecenMelyBjörn.Losmiroy,
antesdequeyodiganada,Melgritaendirecciónasunovio:—Tedijequeellanoqueríaverlo,¡telodije!MimiradayladeBjörnseencuentranysiseofuriosa:—Prometistequenolodejaríasentrar.Tampocopuedofiarmeyadeti.—Séquemispalabrasle
dueleny,cuandoveoquevaaresponder,insisto—:¿Quéhaceélaquí?Convencidodequetengorazón,Björnsólosusurra:—Losiento,Jud,pero...—Pero¡¿qué?!—gritocomounaposesamientrasEricsiguemirándome.—ConozcoaEric—prosigue—.Somosamigosdesdehacemuchoycreoenloquedice.Tedije
que todoesto teníaque tenerunaexplicaciónynodudodesupalabra.Eric teadora,Jud,yséque
nuncatetraicionaríahaciendoalgoasí.Comounagacela,meacercoalamesillayarrancoelteléfonodelaparedmientrasgrito:—¡¿Yporquetúlocreashedecreerloyotambién?!Melcaminahaciamí.Nometoca.Séqueseponecercademíparahacermeentenderqueestáde
mipartecuandoBjörnpregunta:—¿Pretendesdestrozarlahabitación?Enrabietada,lelanzoelteléfono.Éstechocacontralaparedcuandoloesquiva,yEricasegura:—Estávistoquesí.Miroamialrededor.Meimportaunamierdaesahabitación.Miqueridomaridotienedineropara
pagarlosdesperfectosdetodoelhotelsihacefalta.Y,acadainstantemásfuriosa,siseomirándolo:—Destrozolahabitaciónpornodestrozarteati,¡gilipollas!Mi amor, el hombre que acaba de romperme el corazón, da un paso al frente y yo exijo
extendiendolasmanos:—Vete.Ahoramismoloúltimoquequieroesverteohablarcontigo.PeroEric,miEric,nosedaporvencidoy,agarrandoelteléfonomóvilconlamano,insisto:—Juroqueteromperélanarizcomonodesaparezcasdemivista.Mialemánsepara.Memira...,memiraymemira.Meconoceysabeque,cuandomepongoasí,
esimposiblerazonarconmigo,porloquefinalmentedice:—Saldrédelahabitaciónparaquetetranquilices,perotenemosquehablar.Norespondo.Séquetenemosquehablar.Losé.Ericvaadarselavueltaperoantes,mirándome,dice:—Te quiero más que a mi vida, Jud, y antes que hacerte daño a ti, cariño, memataría o me
arrancaríaelcorazón.Dichoesto,damediavueltaysemarcha.Ericysusfrasecitaslapidarias.Conel teléfonoen lamano,estoy tentadade lanzárseloa lacoronilla,peromecontengo.Si lo
hago,puedohacerlemuchodañoy,además,atacarporlaespaldaesdecobardes,yovoydefrente.UnavezErichasalidodelahabitación,Björnmemira.Loconozcoyséquevaadeciralgo,pero
éltambiénmeconocey,alvermicarademalaleche,finalmentesedalavueltayseva.Cuando los dos hombres salen de la suite, las piernas me tiemblan. Pierdo toda la fuerza, la
chuleríayelpoderíoquesegundosantestenía,yMelrápidamentemeabrazaymesientaenlacama.Denuevo,laslágrimasmedesbordan.Larabiameconsumeylapenaportodoloocurridome
desespera. Lloro, me aprieto contraMel y cuando, pasado un rato, mi llanto cesa, ésta murmuraretirándomeelpelodelacara:
—Sélodolidaquedebesdeestar.—Mucho—afirmo.—SiyovieraaBjörnenlaactitudenlaquetúhasvistoaEric,estoyseguradequeestaría tan
enfadadacomotú,perocreoque,cuandoestésmástranquila,deberíashablarconEric.Sirealmenteesciertoloquedice,creoque...
—Hablaréconél.Loharé—aseguro—.Peronosésivoyasercapazdeolvidarloquehevisto.Melasiente.Entiendedeloquehabloymeabraza.Sabequenecesitocariño,ymeloda.
54
LavueltaaMúnichenelcochedeBjörnlahacemosensilencio.Tras pagar los desperfectos del hotel, cuando Eric me ve intenta sentarse a mi lado, pero lo
rechazo.Noquierosucontacto,yfinalmentesesientadelantejuntoaBjörn.Parapetadatrasmisgafasdesol,elviajesemehaceeternomientrassoyconscientedecómoEric
mirahaciaatrásparaconectarconmigo.Quierehablarme,losé.Peroyonoquierosabernadadeél.Al llegar a nuestra casa, mi perro Susto acude a saludarnos. Por suerte, ya está totalmente
recuperadodeloquelepasó,apesardequecojea.Elcariñoquemetieneeseanimalnoesnormaly,comosituvieraunradarparasabermiestado
deánimo,secentraendarmelametonessinpararparademostrarmequeestáamiladoalcienporcien.Emocionada,mesientoenelsueloypermitoqueSustomeentreguetodosucariño.Lonecesito.
Ericnosobservaynodicenada.Enotrascircunstancias,mehabríadichoquenomesienteenelsuelonimedejechuperretearporlalenguadelperro,peroenestaocasióncallayobserva.Eslomásinteligentequepuedehacer,elmuygilipollas.
Calamarnotardaenllegartambiénysaludaatodosconcariño,mientrasSusto sigueconmigo.Enunmomentodado,elanimalsepara,memiraynoscomunicamosconlamirada.ConSustonomehacefaltahablar.Eselperromásinteligenteeintuitivodelmundo.Megustamiconexiónconél.
Instantes después, la puerta de la casa se abre y aparecen Simona y Pipa con el pequeñoEric,HannahySami.Estaúltima,alverasuspapis,correhaciaellos,mientrasmisniñosvienena todaprisahacianosotros.
Sentadaenelsuelo,sientosuscuerpecitossobreelmío,ysonrío.Sinlugaradudas,mispequeñosmellenanelalma,aunquesupadremehadestrozadoelcorazón.
UnavezmelevantodelsueloconHannahentremisbrazos,Ericseacercaamíconelniñoentrelossuyosymurmura:
—Cariño...,tenemosquehablar.Y, como no tengo ganas de montarle un numerito delante de todos y consciente de que tiene
razón,susurro:—Estanoche,cuandolosniñosesténdormidos.Eric asiente y sonríe. Yo no lo hago. No quiero sonreír, y sé que eso a mi amor le parte el
corazón.Peromedaigualsucorazón.Bastantetengoyoconhacerqueelmíosigalatiendoapesardelapenataninmensaquesiento.
Con la felicidad que los pequeños nos dan a todos, entramos en la casa. Instantes después,aparecenFlynyPeter.Petervienehastamíymedaunabrazo.Yoloaceptoencantaday,cuandodirijomimiradaaFlyn,éstememiraasuvezybajalavistaalsuelo.
Vale...,nomequiereabrazar.
Segundos después, los chicos suben de nuevo a la habitación para seguir jugando con susordenadores.
Sonia,misuegra,quesehaquedadoalmandodetodoelfindesemana,meobservaypregunta:—Judith,¿estásbien?Prefabricando una bonita sonrisa para ella, asiento. No quiero que los niños ni nadie más se
percatendelgranproblemaquetenemosEricyyo.Asípues,laabrazoyaseguro:—Cansada,peroperfectamente.—Y,sonriendo,pregunto—:¿Cómosehaportadolapandillael
findesemana?SoniaySimonasonríeny,mirandoalosniños,lasegundaresponde:—Todoshansidomuybuenos,incluidoslosmásmayores.Megustasabereso.Entonces,oigoaSoniadecir:—Eric, hijo, qué mala cara tienes. ¿Te encuentras bien? Parece que tienes el labio un poco
inflamado.Meapresuroamirarlo:efectivamente,notienebuenacara.Peromeimportabienpoco,hastaque
Melcuchicheaacercándoseamí:—BjörnacabadedecirmequeEricseha tomadodospastillas.Alparecer, leduele lacabezaa
rabiar.Vale.Losientoporél,peronoestoydispuestaacompadecerme.Eric se acerca a nosotras tras hablar con su madre y, de pronto, noto su mano rodeando mi
cintura.Lomirocondesagradoyél,bajandolavoz,dice:—Discúlpame,perosinoteabrazomimadresospechará,ybastantetengoconloquetengocomo
paraescucharlaaellatambién.—Deacuerdo.Sientoquemidocilidadlegustaymeaprietamáscontraél.Suolor,eseolorquemevuelveloca,
inundarápidamentemisfosasnasalesy,dirigiéndomeaél,leadvierto:—Notepases,gilipollas.Ericmemiray,antesdequelopuedaparar,meplantaunbesoenloslabios.Sutacto,sucontacto,
susabormedalavida.Sinembargo,furiosaporloquehanbesadoesoslabioshorasantes,cuandoveoquenadienosobservasiseo:
—Vuelveahacerloytepateoloshuevosaunqueestétumadredelante.Vale.Meacabodepasartropecientosmilpueblos,peroesloquemehasalido.Ericclavasusojosenmí,yolevantolascejasy,aflojandosuabrazo,hacequetodospasemosal
salónatomaralgocuandoSoniasemarcha.Alentrar,medeshagoconbrusquedaddelabrazodeEricymealejodeél.Minutosdespuésentra
Simonaconunosrefrescosyunascervezas.Rápidamente,todoscogemosunayella,antesdeirse,sevuelvehaciamíydice:
—Estaréenlacocinaporsinecesitáisalgo.Asientoy,cuandosemarcha,mesientojuntoaMelyloscríosyduranteunratointentocentrarme
enmis pequeñines. Ellos son los únicos que semerecen ser tratados como reyes.Mientras tanto,observocondisimiloaBjörnyaEric,quehablanjuntoalaventana.
Alvercómolosmiro,Melseacercaamíymurmura:
—¿HablarásconEric?—Sí.Estanoche,cuandolosniñosduerman.—Jud...—Estoy bien, Mel. Jodida pero bien —digo y, cogiéndole las manos, añado—: Sabes que te
quiero,pero¿porquénoosvaisyaacasa?Melmemira,semuerdeellabioinferiorymurmura:—Ay,Judith,estoytanagobiadapordejarteaquí...—Tranquila—afirmoconseguridad—.Novoyamataranadie.—Losé,perodameotramediahoraydespuésteprometoquenosiremos.—Vale—respondosinmuchaconvicción.YderepenterecuerdoqueMelqueríacontarmealgo
quecontodoestelíohabíaolvidado—.Mel,¿quéqueríascontarme?Mibuenaamiganiegaconlacabeza.Estápreocupadapormí,seloveoenlacara.—Nadaquenopuedaesperar,tranquila.Depronto,ambasvemosqueBjörnsujetaaEric.Rápidamente,sinquenadiemelodiga,séloque
quierehacer.QuiereirenbuscadeFélixyGinebra,ylarabiameinvadedenuevocuandodigo:—Voyalbaño.Esmentira.Novoyalbaño,peronecesitodesapareceromipartemalvadavaaexplotarde tal
maneraqueallínosevaasalvar¡niDios!Sientoquemidestrozadocorazónlateademasiadavelocidad.Mimentenopuededejardepensar
en lazorradeGinebraysumaridoy,cuandoentroenmihabitación, llamoalhoteldondeséqueestán hospedados. Quiero matarlos antes de que Eric los localice. Esto no puede quedar así. Sinembargo,justocuandollamo,elrecepcionistamedicequeacabandemarcharsehaciaelaeropuerto.
Denuevo,micorazónsedesboca.¿Aquellasratasimpresentablessevanairasí,sinmás?Pienso.Pienso...,pienso.Noséenquévuelosaldrány,depronto, ¡semeenciende labombilla!
Corroalsalóny,trashacerleunaseñaaMelparaqueseacerqueamí,murmuro:—Necesitoayuda.Ellamemira.—Loquequieras.Conscientedequeloquevoyapedirlenoestábien,digo:—NecesitoquePeterentreenlosordenadoresdelaeropuertodeMúnichymedigaquévuelovan
acogerGinebrayFélix.Melme contempla boquiabierta. Sin duda, estará pensando que he perdido el norte y el sur y,
cuandocreoquemevaadecirquemetienenqueingresar,susurra:—SiseenteraBjörndequelepedimosesoalchico,¡nosasesina!Selotienemásqueprohibido.
Pero¿sabes?¡QueledenaBjörn!Con disimulo, Mel y yo salimos entonces del salón y subimos a la habitación de los chicos.
Rápidamente,ellasacaaPetery,cuandoleestoyexplicandoloquenecesito,Flynsaletambiénynosmira.
Comonomeapetececompartirnadaconél,lomiroydigo:—Porfavor,¿podríasdejarnosasolas?
Eldesconciertoensugestoes total,yde inmediatodesaparecedentrodesuhabitación.Luego,Petersevuelvehaciamíy,sinpreguntar,dice:
—Encincominutoslosabrás.Su eficienciame supera.Mel regresa al salónmientras yometo a Peter enmi dormitorio, le
entrego mi portátil y el muchacho, de una manera que yo nunca sabré, hace su magia ante elordenadory,trasdarlelosnombresdeaquellosdesgraciados,mediceapuntandoenunpapel:
—SuvueloaChicagosaledentrodedoshoras.Miroelreloj.Simedoyprisa,lospillo.Acontinuación,leentregomitarjetadecréditoydigo:—Sácameunbilleteparaesevuelo.Denuevo,elchicohaceloquelepidoy,cuandomellegalatarjetadeembarqueamimóvil,le
doyunbesoyañado:—Gracias,Peter.AhoraregresaconFlyneinvéntateloqueseacuandotepregunte,¿deacuerdo?Éltambiénmedaunbesoy,sinpreguntarnada,desaparecedemihabitación.Comounaloca,salgodelacasay,paraquenooiganelmotordelcoche,decidocogeruntaxi.
Por suerteparamí,no tardoenencontraruno,ymedirijohacia el aeropuerto cuando recibounallamada.EsMel.
—¿Estáschalada?¿CómotevasairaChicago?—Tranquila..., tranquila.Nocogeré ese avión.Sólohecompradounbilleteparapoderpasary
encontrarlos.—Jud...,Ericyasehadadocuentadequenoestásyestácomounlocobuscándote...Deprontooigojaleoy,segundosdespués,lavozdeEricdice:—Jud,malditasea,¿dóndeestás?Sin ganas de hablar con él, corto la comunicación y apago el teléfono. No me apetece dar
explicaciones.El tráfico enMúnich esedía es garrafal.El tiempopasa rápidamenteymiro el reloj nerviosa.
¡Tengoquellegar!Cuandoeltaximedejaenelaeropuerto,corrocomounaloca.¡Nollego...,nollego!Y,encuanto
dejoatráselarcodeseguridad,buscoenlospaneleselvueloenelquevanaquellosdosyvuelvoacorrerporelaeropuerto.Estarde.Novoyallegar.
Aprietoelpaso.Malditoatascoelquehepillado.Elcorazónsemecaealospiescuandollegoalapuertadeembarqueyveoqueestácerrada.Elvueloestácerrado.
Furiosa,aescasosmetrosdemíveoqueelavióndondevanaquéllosdamarchaatrás.Lacólerame puede, y doy un puñetazo al cristal blindado. La gentememira y soy consciente de que, pormucharabiaquetenga,pormuyfrustradaquemeencuentre,novoyamontarunnumerito,porloquefinalmenteme limito a sentarme para ver cómo el avión se encamina hacia la pista, despega y sealeja.
Duranteunahoramequedoallísentadasumidaenmispensamientosymeconvenzoamímismadeque,silascosashansalidoasí,esporqueGinebrayatienesuverdaderocastigo.
Cuandomedespiertodemispensamientos,decidoregresaracasa.Salgodelaeropuerto,cojountaxi y enciendo elmóvil.Como es de esperar, tengomil llamadas desde el teléfonodeEric, perollamoaMel.
—¿Estásbien?¿Dóndeestás?—preguntaella.Suvozsuenaangustiaday,paratranquilizarla,murmuro:—Estoybienyvoyparacasa.—¿Quéhapasado?—Nada—reconozcoconrabia—.Cuandollegué,yahabíanembarcado.OigoelsuspirodeMely,convencidadequesabequeestoybien,dice:—Quieresquenoestéaquícuandoregreses,¿verdad?—Sí,porfavor—respondosinganasdementir.—Deacuerdo—afirmaella—.Björn,losniñosyyonosmarchamosahoramismoparacasa,y
Eric...—NoquierosabernadadeEric.Ahorano.—Jud...—Vetetranquila—leaseguroconunatristesonrisa—.Mañanatellamoynosvemos.Unavezcuelgo,merecuestoenelasientodeltaxiymelimitoamirarporlaventanilla.Necesito
recobrarfuerzasparaenfrentarmeaEricZimmerman.Cuandoeltaxillegaacasa,pagoymebajo.Sacolasllavesdelbolsoy,alabrirlacancela,oigoel
trotardeSustoyCalamar.Lossaludoconcariñoy,lentamente,llegohastalapuertadeentradademicasa.Demipreciosacasa.
Es tardey,alentrar,senotaquelospequeñosestándurmiendo.Loagradezco.Losadoro,peroestoytanmalqueloúltimoquequieroesveramisniños.Caminohacialacocina,meabrounacoca-colay,enelmomentoenqueleestoydandountrago,oigoamiespalda:
—Jud,¿quéhashecho?Sinvolverme,terminodebebery,cuandoacabo,mevuelvoy,mirandoalhombrequeconsigue
queyosealamujermásfelizoinfelizdelplaneta,respondo:—Nadadeloquepensabahacer.Ericasientey,moviéndomeconrapidez,digo:—Voyaducharme.Al pasar junto a él, veo la tristeza que siente por lo ocurrido. Pienso en preguntarle si se
encuentramejordesudolordecabeza,perono,nolovoyahacer.Asípues,sinquererclaudicarporlodoloridaqueestoy,meencaminoa laplanta superior.Allí, pasoal cuartodemisniños,queyaestándormiditos,ylesdoyunbeso.
AFlynnovoyaverlo.Aél,quevayaaverlosupapaíto.Trassalirdelahabitación,medirijoalamíaymiromimaletacerrada.Sinpararmeapensar,la
abroy loprimeroqueveoesmidisfrazde romana.Mesientoen lacamay,con lamaletaabiertasobreella,resoploeinconscientementerecuerdoaEricyaGinebrabesándoseytocándosemientrassedabanplacer.Nopuedoolvidarlo.
Enfadadaconmigomismaporpensarenello,melevanto,entroenmipreciosocuartodebañoydecidodarmeunaducha.Lanecesito.
Unavezdesnuda,cojomi iPadypongomúsica.Miro lascarpetasquehayy,aunquemimentedicequepongamúsicamarchosa,micorazónpidealgoromántico.
Dudo. Me debato sobre qué hacer y, al final, gana mi parte morbosa. Necesito fustigarme,
flagelarme,azotarmeymaltratarmeescuchandoesamúsica.Ydigoyo:¿porquélohago?¿Porquéenmomentosasínecesitoescucharloquemevaahacersufrir?
Memiroenelespejo.Lamujerqueobservoreflejadasoyyo,ymurmuro:—Judith,erestonta...,muymuytonta.Cuandocomienzanasonar losprimerosacordesdenuestracanción, tengoqueapoyarmeenla
encimera.El dolor, la penay el tormentomedoblan en dosmientras la bonita vozdeMalú cantaBlancoynegro.[32]
Incapazdecontenerlaslágrimas,mesientosobrelatazadelinodoroylloro.Llorodeimpotenciaen soledad comonohepodidohacerlo antesy,mientras escucho la letrade esapreciosa canción,sientoquenovoyapoderpararnuncadellorar.
LeheregaladomividaaEricyélsiempremehadichoquemeregalabalasuya.¿Cómovoyapodersuperareso?CuandolacanciónacabaylavozdeLuisMiguelcomienzaacantarSinosdejan,[33]melevanto
y,hechaunmardelágrimas,recuerdonuestralunademielenMéxico.—Quépena,Eric...,quépena—murmuromirándomedenuevoalespejo.Acongojada,entroenlacabinadeladucha.Abro el grifo y dejo que el agua comience a chorrear por mi cuerpo. Agotada, agobiada y
abatida,meapoyoenlaparedycierrolosojosmientras, inconscientemente, tarareolamúsicaquesuena.Y, tan pronto como comienza a sonarEdSheeran interpretandoThinkingOutLoud,[34]mesientoenelsuelodeladucha,meencojoyrecuerdoqueésafuelaúltimacanciónquebailéconmiamor anoche mientras me decía mirándome a los ojos aquello de «te seguiré amando hasta lossetentaporquemeenamorodetitodoslosdías».
¡Mentiroso!Micabezadavueltasyvueltas.Ericnohaparadodedecirmequelohanengañado.Quedebierondeecharlealgoenlabebida,
peroestoy tanenfadadaconélquesoy incapazderazonaryponermeensu lugar.Nopuedo.SólopuedopensarunayotravezenGinebrasobreélenelcolumpioyenlosdedosdeEricclavándoseensu espaldamientras la besaba,mientras le devoraba la boca como hace conmigo. Esa imagenmetienetotalmentecegada.
Cuandoporfinconsigovolveraseryo,trasregodearmeenmidesesperación,melevantoymedoycuentadequeestoytemblandodefrío.Nosécuántotiempoheestadosentadaenelplatodeladuchallorandoeintentandorecomponerme.
Alsalir,comienzaasonarRibbonintheSky,[35]delmaravillosoStevieWonder.Quécancióntanbonita.SinpoderevitarpensarenlasvecesqueEricyyolahemosbailadoenlaoscuridaddenuestrahabitación,mepongomialbornozymesientodenuevoenelinodoro.Piensoencómoaquéllossebesaban.Piensoquelabocademiamoryanoessólomía,ymaldigocuandolapuertadelbañoseabreyEricmepreguntacongestopreocupado:
—¿Estásbien?Lomiroconodio,yrespondo:—No.Él cierra los ojos.Sabede lo quehabloy, tras levantarme comouna furia, apago lamúsicay
siseo:—Fuerademivista.Miestadodeánimoesunaveleta.Tanprontollorocondesconsuelocomosientounashorribles
ganasdeasesinarlo,yEriclosabe,meconocemuybien.Finalmente,dice:—Cuandoquieras,podemoshablarenmidespacho.Asiento.Nodigonada.Alverquenovoyadirigirlelapalabra,cierradenuevoyseva.Yomequedomirandoalfrente.
Luegomesecoconbrío,medoyaceiteenelcuerpoymepeino.Ataviadaconunvestidodealgodónrosapaloymisbotasdeandarporcasa,bajolentamentesin
secarmeelpelo.CuandoestoyfrentealdespachodeEric,meparo.Quierohuirdeloquevaaocurrirallí,peroséquedeboenfrentarmeaello.Asípues,cogiendo
fuerzas,sacoalaJudithchulitaquesacadequicioaaquelalemány,sindudarlo,entro.Ericestájuntoalachimeneacontemplandoelfuego.Esaestampasuyasiempremehaencantado,
perohoyladetesto.Mifuriamehacedetestarlotodo,hastaelairequerespiro.Cuandoélmeve,memiray,trasunosinstantesenlosqueambosestamosensilencio,murmura:—Losiento,Jud.Losiento,cariño,perotejuroque...—Nomejures.Séloquevi.Ericasiente.Sabequeloquevimehadestrozadoy,caminandohaciamí,susurra:—Simeconoces,comprenderásqueyonuncaharíanadaasí.—Losé—locortoconlavozrotaporeldolor—.Perotevi.Vicómolabesabas,cómo...cómo...Desesperado,vaaagarrarmeyledoyunmanotazo.Élmemira.—Noeraconscientedeloquehacía.Norecuerdonada,peroséque...—Túnosabesnada—digoalzandolavoz—.Túniporasomopuedesimaginarteloqueyohe
sentidoconloquehevisto.Niporuninstantetelopuedesimaginar.Sugestoatormentadomehacesaberquepuedopisotearlo,matarlo,maltratarlo.Estádispuestoa
todopormí,peroinsisto:—Apenasunashorasantes,túyyoestábamosenesasalanegradelespejodisfrutandoy...y...—Pequeña,escúchame.Enfadadalomiro,luegosonríoconmaliciaysiseo:—Noquieroescucharte.Ahorano.—Jud,nodigaseso.Miaclaraciónloenfada,loenvenena,melodicensusojos.Pero,sindejarsellevarporlarabia,
suplica:—Perdóname,Jud,nosabíaloquehacía.¿Perdonar?¿Voyasercapazdeperdonaryolvidarloquevi?Y,mirándoloconfuria,vuelvoa
sisear:—¿Quétalsihacemosusodeloquehabitualmentesellamaojoporojoyahorasoyyolaque...?—¡Niseteocurra!—bramaperdiendolosnervios.Vuelvoareírconmalicia.Enloúltimoquepiensoahoraesenestarconunhombre,perocomo
tengoganasdehacerledaño,insisto:—Lojustoseríaeso.Queyobuscaraalhombrequemásrabiatedéytúloveas,¿no?
—No...—murmuraapretandolosdientes.Quieroherirlo.Quieroquesemartiricecomoyomeestoymartirizandoporél,ygrito:—¡Gilipollas! ¿Cómono te diste cuenta? ¿Cómo, con lo listo que eres para otras cosas, fuiste
incapazdepercatartedeloqueibaaocurrirconesagentuza?Ericmemira.Nosabequédecir.Sedacuentadequetengorazónentodoloquedigoynologradarmeunaexplicación.Elsilencioinvadelaestancia.Ericnosemueve.Nosmiramosalosojosymurmuro:—Estoyenfadada,muyenfadada,yquieroquetevayas.—¿Quemevayaadónde?—¡Quetevayasdeestacasa!—chillofuerademí.ElgestodeEricseacaloray,sinmoverse,cuchicheadespacio:—Estoyenmicasa.Suaclaraciónconmalababamehacerverquecomienzaaperderlosnervios.—Puesmevoyyo—replicoentonces.Sinmás,me doy la vuelta, pero antes de llegar a la puerta, Eric yame ha agarrado entre sus
brazos,medalavueltay,apretándomecontrasí,protesta:—Jud,novasairaningúnlado.—¡Suéltame!—grito.—No.Hastaqueentresenrazón.Larabiameconsumey,sinpensarenloquehago,levantolarodillaylogolpeoconfuerzaen
esapartetannoblequemeencantayqueenotrosmomentosmedaplacer.Eric,quenoesperabaeseataque tanbrutal, caede rodillas al suelo.Se encogededolor antemíyyo, fuerademis casillas,siseo:
—Nuncamásentuputavidavuelvasatocarmesiyonotelopermito.Élnocontesta.Sigueretorciéndoseenelsuelodedolormientrasyoloobservoimpasible.¡Joder...,joder,québestiasoy!Pasanunosminutos y, cuandoveoque su respiración se normaliza, abro la puerta y salgodel
despacho.Meencaminohacialaescalera,peroentoncesmelevantaenvolandasy,rojodefuria,mesueltaenmicara:
—Entuputavidavuelvasahacerloquehashecho.Grito. Intento soltarme, lo llamo de todo y volvemos a entrar en el despacho, donde, una vez
cierralapuertaconelpie,mesueltayyobramo:—¡Teodio!¡Teodiocontodasmisfuerzas!—Ódiamecuantoquieras—replicafurioso—.Perotenemosquehablar.Apartirdeesemomento,nohablamos,sinoque¡chillamos!Le echo en cara todo lo que quiero y más, y él hace lo mismo. Sin escucharnos, ambos
levantamoslavoz,ambosgritamos,amboschillamos.Ladesesperaciónestalqueningunodelosdosestádispuestoaescucharalotrocuando,depronto, lapuertadeldespachoseabreyapareceFlyn.Debemosdehaberlodespertadoconnuestrosgritos.ElcríomiraaEricypregunta:
—Papá,¿quéocurre?Alverlo,Ericdice:
—Flyn,regresaatucuarto.Peroyo,queyaestoycomolaslocas,sonríoymurmuro:—No,hombre,no,dejaquesequedeaquí.Tambiéntengoreprochesparaély,así,aprovechoyse
loshago.Alfinyalcabo,estuniñitoysólosepreocupaporti.—Jud...,cariño.En mi interior se ha formado un tsunami y siento que no voy a ser capaz de frenarlo,
especialmenteporquenoquiero.Tengoantemíamisdosgrandesfuentesdeproblemasyconflictosy necesito gritar y protestar. Necesito que esos dos imbécilesme escuchen y, sin importarme lasformasninada,digo:
—¿Oshabéispuestode acuerdo losdospara sacar lopeordemí?Porque, si es así, lohabéisconseguido.
Y,comoyatodomeimportatrespepinos,prosigo:—Me he dejado la piel por vosotros dos y tengo que deciros que sois unos jodidos
desagradecidos.Túcomomaridoytúcomohijo.Y¿sabes,Eric?,¡claudico!Hetomadoladecisióndeque,siFlynnomequierecomomadre,yonoloquierocomohijo.Bastayadedesplantes,malascaras y malos modos. Estoy harta, ¡harta!, de tener que andar siempre con pies de plomo convosotros. Estoy tan enfadada con los dos que no quiero ser racional, simplemente quiero quemedejéisenpazparapodervivir.Sinlugaradudas,éstaestucasa,EricZimmerman,perolosniñosqueestándurmiendoenlaplantadearribason¡mishijos!,nosólolostuyos,ynovoyapermitirque...
—Jud—mecortaEric—.¿Quéestásdiciendo?Comounremolinoimparable,lomiroysentencio:—Digo que quiero el divorcio.Digo que quiero irme de aquí.Digo quemis hijos se vendrán
conmigo,ydigoque...—Jud...,¡para!Su corte me hace dar cuenta de que Flyn está llorando. Y, aunque sus lágrimas deberían
atormentarme, estoy tan dolida que no siento nada.A continuación, cuandome dispongo a añadiralgo,oigoqueEricdicemirandoalniño:
—Flyn,vetealacama.—No...—Flyn—insisteél.Elcríosesecalaslágrimasypregunta:—¿Osvaisaseparar?—No—respondeEric.—Sí.¿Noesloquequerías?—respondoyo.Ericmemira. Sumirada de Iceman echa chispas, pero nome importa, ya que lamía es puro
fuego;entoncesFlyn,llorando,dice:—No...nopodéishacerlo.Nopodéisestarasípormiculpa.Yo...yo...Reconozcoqueverlotandesesperadomepellizcaunpocoelcorazóny,mirándolo,respondo:—¿Sabes,guapito?,tuactitudhaayudadobastante.¡Gracias,Flyn!—¡Jud!—gritaEric.—¿Jud,qué?¿Acasoesmentira?—replicodesafiante.
Fuerade sus casillas por lo que estoy soltandopormi boquita,Ericmemira con furia.Yo lomiroconrabiaychuleríacuandoélcogealniñodelbrazoymurmuraparaintentarcalmarlo:
—Flyn,notepreocupespornada.Mamáypapáestándiscutiendoporalgoque...—¡¿Mamá?!—memofodolida—.Disculpa,peroélmismomehadejadomuyclaroinfinidadde
vecesquenosoysumadre,quesólosoylamujerdesupadreo,entodocaso,sumadrastra,¿verdad,Flyn?—Elcríonoresponde,yyoprosigo—:Vamos,sévalienteydilea tupapaíto loquemehasdichomilvecescuandoélnoestaba.
—¡¿Qué?!—preguntaEricsorprendido.—Ah,yahoraquenohaynadaqueocultar...—prosigoabriendomipropiacajadePandora—.
¿Quétalsiledicesatupadrelodivertidoqueteresultóprovocarmediarreasconlasgotitasquetusamiguitosterecomendaron?
—¡¿Cómo?!—insisteEricdesencajadoy,echándoleunvistazoalcrío,pregunta—:¿DequéhablaJud?
Pero,sindejarlocontestar,respondoyoporél:—Secretos...,secretos.Entrenosotroshaydemasiadosecretos.—Y,quitándomeelanilloquetanto
adoro,lodejodemalosmodossobrelamesadeldespachoygrito—:¡Y,hablandodesecretos...,mepareciómuymalquemeocultarasquefuetuniñoquiensellevóelanilloparavenderloenunacasadeempeñosyluegomemintierasdiciendoquelohabíasencontradoenelmaleterodetucoche!Pero¿acaso te crees que yo soy tonta? ¿Acaso crees que no iba a enterarmede la verdad?Pues sí,meenteréymecalléparaserbuenaconélycontigo.Soistalparacual.¡LosputosZimmerman!
Eric palidece. Sé que no lo hace por mis palabrotas, sino porque nunca imaginó que yo meenteraríadeaquello.
—Jud...,cariño...,yo...—murmura.—Ahoranoquieroexplicaciones.Yanomevalen.ElniñosiguellorandocuandoEric,conscientedequelascosasseestányendodemadre,insiste:—Porfavor,Flyn.Veteatuhabitación.Elcríomemiraconelrostrodesencajado.Nuncamehavistoperderelcontroldeesamanera.A
continuación,acercándoseamí,susurra:—Mamá...,losiento...,perdóname.¡¿Mamá?!Congestoagrio,lomiroyreplicofuerademí:—Déjameenpaz.Yonosoytumadre.Ericlosacadeldespacho,mequedosolaysientoganasdegritar.Estoyfuriosa.Tremendamente
furiosa.Luego,Ericvuelveaentrareneldespachoy,trascerrarlapuerta,caminahaciamíydice:—EstáspagandoconFlynnuestroproblemay...—Eric—locorto—.Losiento,peroestoydesbordada.Desbordadaportodoslados.Y...yloque
haocurrido, nosgusteono, hahechoquehayaun antesyundespués ennuestra relación. Intentoasumirqueesoshijosdesumadretedrogaronparaconseguirsupropósito,peronopuedoobviarloquevi.¿Acasotúloobviaríassilasituaciónhubierasidoalrevés?¿DeverdadmeestásdiciendoquesiEricZimmermanmevierasobreuncolumpiodesnuda,entregándolemibocaymicuerpoaotrohombre, no se enfadaría conmigo? ¿No me chillaría? ¿No se volvería loco de rabia? —Él no
contesta, y añado—:ElEricZimmermanqueyo conozco estaría tan enfadado comoyo, y elEricZimmerman que yo conozco necesitaría su tiempo para digerir lo ocurrido por mucho que mequisiera.
Porfinparecequemispalabraslecalanhondo.En lugar de acercarse a mí, asiente, se apoya en su mesa y, tras unos segundos en silencio,
murmura:—Siyohubieravistoloquetú,sindudameestaríacomportandopeor.—Losé,Eric—afirmo—.Losé.Mi alemán asiente. Sabe que lo que digo es cierto. La situación en caso contrario habría sido
devastadora.Clavandosusojazoscansadosenmí,acontinuaciónmusita:—Jud,nomedejes.Yonohepropiciadoloquehaocurrido.Sus palabras me paralizan. Por mi cabeza ha pasado de todo, pero ¿realmente soy capaz de
dejarlo?¿Realmentesoycapazdevivirsinél?Al ver que no digo nada y que no me muevo, Eric camina hacia mí y, derrotado por mi
indiferencia,aquelgrandullónalquetodostemencaeamispiesyrepitecondesesperación:—Nomedejes,miamor.Porfavor,pequeña,escúchame,yonoeradueñodemisactos.Nosabía
loquehacíaenesemomento.Susúplica...Sumirada...Sumiedo...Todopuedeconmigo,yentoncesinsiste:—Castígame, enfádate conmigo, fustígame con tu desprecio, pero no hables de divorcio. No
hablesdeseparartedemíporquemividasintinotendrásentido.Sintiysinlosniños,yo...Almirarmeyversusojoscargadosdelágrimas,comosoyunablandengue,memuerdoellabio
inferiorymurmuro:—Levántate,porfavor,levántate.Noquieroverteasí.Mialemánselevantaconpesary,cuandodoyunpasoatrásparaquenometoque,seencamina
hundidohaciasusillay,mirándome,susurra:—Estoydispuestoaloquetúquieras,Jud.Atodo.Asiento.Séqueahorayotengoelpoder.Estoyconvencidadeque,silepidieraquesecortaraun
brazoenesemomento,loharía.—DentrodeunosdíasmeiréalaFeriadeJerez—digo—.Irésinti,peromellevaréaEricya
Hannah.—¿Sinmí?Al oírlo decir eso, siento unas irrefrenables ganas de asesinarlo. Pero ¿no decía que no tenía
tiempoparaesastonterías?Sinembargo,conteniéndome,contesto:—MeiréaJerezconlosniños,ynitúniFlynvendréis.—Cariño...,porfavor...Sonríoconchuleríayreplico:—Nohaycariñoquevalga.Notequieroconmigo.Quieroirsolaconmishijosydisfrutardela
alegríademitierray,contigoamilado,nolovoyadisfrutar.
Susojos...Suvoz...Sumirada...ConozcoaEricZimmermanyséqueloqueestáocurriendoseráalgoqueloatormentaráelresto
desuvida.Seacercaamí,mecogeentresusbrazosy,espachurrándomecontralalibrería,sisea:—Jud,nojueguesconfuegootequemarás.Nosseparanapenasunosmilímetros.Misojosmiransuboca.Quierobesarlo.Necesitobesarlo
comoséqueélnecesitabesarmeamí.Pero la imagendeGinebra tomando loqueyoconsiderabamío pasa entonces por mi cabeza y, tras empujarlo con todas mis fuerzas para separarlo de mí,respondomientrasmeencaminohacialapuerta:
—QueridoEric,yamehequemado;ahoratencuidado,notequemestú.
55
Aldíasiguiente,JudithllamóaMelylepidiótiempo.Necesitaba unos días para ella sola para pensar, recapacitar y saber que estaba haciendo bien
quedándose junto al hombre que amaba pero que le había roto el corazón enmiles de pedacitos.Conscientedetodoloqueestabapasando,suamigaleconcedióesosdías.
Una semana después, Judith se apagaba por momentos. Físicamente estaba bien, peropsicológicamenteestabatocadayhundida,algoqueEricnopodíaevitarverysufríacadasegundodeldía.
Jud habló con su padre.No le contó nada de lo ocurrido, pero le confirmó que el 9 demayollegaríaa Jerezcon losniños.Comoes lógico,Manuel lepreguntóporEricyporFlyn,yella seapresuróaexplicarlequeEricteníamuchotrabajoyqueFlynestabacastigadoporlomalqueibaenlosestudios.Elhombrenopreguntómásysealegróporlavisitadesumorenita.
Duranteesosdías,Erichacíatodoloposibleporacercarseasumujer.Llegabaprontodeltrabajo,pasaba las tardes enteras con ella y con los niños, pero Jud no reaccionaba. Se limitaba a sonreírdelante de los pequeñines pero, cuando éstos se marchaban a la cama, se sumergía en su propiaburbujaytodoloquepasabaasualrededordejabadeexistir.
EricconvocóunareuniónenMüllery,sindudarlo,reorganizósutrabajo.Necesitabatiempoparareconquistar como fueraa sumujer,ydelegó, comoantaño, envariosde susdirectivos, algoqueJudithsiemprelehabíapedido,peroélnohabíahecho.
Recordar aquello lo martirizaba. Debería haber hecho más caso a lo que ella le pedía y, enespecial, a la problemática que tenían con Flyn en casa. ¿Por qué había sido tan gilipollas y tancabezota?
Por su parte, Flyn, asustado por el color que habían tomado los acontecimientos, intentabaacercarseaJudith.Lallamaba«mamá»,lepedíaperdón,leproponíasalirconlamoto,sesentabaconellaaverlatelevisión,peroellaparecíanodarsecuentadelosesfuerzosqueelmuchachohacíaparaqueloescuchara.
Sinembargo,Judithlooía,looíaperfectamenteensusilencio,peroestabatandolidaportodoloocurridoquehabíadecididoignorarlo,comoél lahabíaignoradoaellaenlosúltimosmeses.EsecastigoeralaúnicamaneradehacerleveraFlynqueyanoeraunniño,yque,comosiemprelehabíadicho,todoactoteníaunaconsecuencia.Lasuyaeralaindiferencia.
SimonayNorbert,conscientesdelasituaciónenlacasa,intentabanayudarentodoloquepodían,peroJudithseguíasinreaccionarycastigabaalosdosZimmermanconsudesapego.
Pasadosunosdías,JuddecidióiracasadesuamigaMel.Nadamásverla,ellalaabrazóy,cuandolasoltó,susurró:
—Vayamalacaraquetienes,amiga.
Judithasintió.Eraconscientedequeestabahechaundesastre,yhastahabíaadelgazadoesoskilosquenoconseguíaquitarseantes.
—Pues,pordentro,teaseguroqueestoypeor—replicóconunasonrisa.Melpusolosojosenblancoy,cogiéndoladelamano,ledijo:—Ven.Tenemosquehablar.Juntaspasaronalcomedor.Allí,durantemásdedoshoras,Judithhabló,sedesahogó,dijotodolo
quenecesitabadeciry,cuandoporfinsecalló,Melmurmuró:—Entiendoloquedices,peroloqueocurriófuealgoqueEricnoprovocó.—Lo sé—admitió Jud—. Pero si él sabía que aquellos dos le estaban pidiendo ese encuentro
sexualporqueGinebraasíloquería,¿porquénosealejódeellos?¿Porquépermitióqueestuvierantancercadenosotros?¿Porquénocortóporlosano?
Melasintió.Sinduda,Judithteníasupartederazón.Sinembargo,comoanteshabíahabladoconBjörn,respondió:
—PorqueEricnoesunamalapersonaynuncapensóqueellosseserviríandealgotansucioparaconseguirsupropósito.Apesardenoquerersabernadadeellos,sesintióapenadoporesamujer.Judith,Ginebrasemuere,yesofueloqueaEriclehizobajarlaguardia.
Su amiga resopló. Conocía a Eric mejor que nadie y, si una enfermedad lo descuadraba, unamuertelodescolocabatotalmente.Así,siguieronhablandodurantevariashorashastaquealfinalMeldijo:
—Ahoraqueestásmástranquila,tengoquecontartealgo.—¿Quéocurre?Melse levantó,cogióaJudithde lamanoy la llevóhastasuhabitación.Unavezallí,abrióun
cajóny,enseñándoleunostestdeembarazo,cuchicheó:—Hacetressemanasqueestoyesperandoparahacérmelos,ynomeatrevo.LasorpresadespertóaJudithdesuletargo,yMel,haciéndoleunpuchero,añadió:—Herechazadoelpuestodeescoltaycreo...creoqueestoyembarazada.Rápidamente,Judithsepusoasulado,leagarrólabarbillaconlamanoydijo:—Mel,pero¿cómonomelohabíascontadoantes?Suamigasederrumbócomouncastillodenaipesy,sentándoseenlacama,replicó:—Pero¿cuándoteloibaadecir?Últimamentenohacíanmásquepasarcosasy...y...Perosime
llevélospuñeterostestelfindesemanaque...que...,bueno,quepasólodeEric,peroluegotodoselio y yo no quería preocuparte con más cosas de las que tienes. Pero... el caso es que me estoyvolviendo tarumba. Llevo más de un mes de retraso y estoy tan acojonada que soy incapaz dehacermelapuñeterapruebecita.Yluego...luegoestáqueyaheestadoembarazadaysientoquetengotodoslossíntomas,y...
—¿Björnsabealgo?—Noooooooooo—susurróMel—. Si estoy embarazada es por su puñetera culpa, y lo voy a
matar.—Diosmío,Mel—dijoJudsonriendo—.¡Sevaavolverlococuandoseentere!—¡Cierraelpico!—¿Estáencasa?—añadióemocionada.
—No.Estáeneldespachopero,joder,Jud,¿cómovoyaestarembarazada?Conunacandorosasonrisa,suamigalamiróygesticuló:—Puesporqueunaabejitaplantóunasemillitay...—Juuuuuud...Divertida, ella le retiróel flequillodel rostroa la tenientemásvalientequehabíaconocidoen
todasuvida.—¡Otravez!¿Otravezmetienequevolverapasar?—protestóMelalejándose—.ConSamifui
madresoltera;enestaocasiónquerríahaberlohecho todocorrectamenteparano tenerqueoír losreprochesdemipadreodemiabuela.Mehabríagustadocasarmeantesdetenerotrohijo,pero...
—PeroaparecióunniñollamadoPeterydecidisteposponertuboda,paraintegrarloenlafamiliaantesdecasarteconsupadre,yesotehacemuygrande,Mel.Esonolohacecualquieray...
—Diosmío...Tendremostres...,¡treshijos!—Obvio.Alverelgestodesuamiga,Judithsonrióy,dispuestaaayudarlaentodoloquepudiera,insistió:—Mira,cariño,sitienesatuladoalhombrequetequiere,quetehacefelizyalquetúquieres,un
bebéencomúnesalgoprecioso.Simplementeesel resultadodeunbonitoamor.Piénsaloasíysépositiva.
—Ay,Dios...,siquieroserpositiva,¡peronopuedo!AJudithleentrólarisa.Nolopodíaremediar,yMelalverlagruñó:—Sinoquitasesasonrisitatandetuamiguitodelacara,tejuroquealaprimeraquematoesati.Judithborrólasonrisa,cogióelarsenaldetestdeembarazoquesuamigateníaenlasmanosy
dijo:—Vamos.Tenemosalgoquehacer.Unavezentraronenelbaño,Melcerrólapuertaconpestilloy,señalandoloscincotestquehabía
dejadosobrelaencimera,explicó:—Loshecompradodigitales.Deesosqueanunciandelassemanasqueestás.—¡Genial!—respondióJud,peroalverquesuamiganosemovía, laanimó—:Vamos,venga,
hazteuntest.Mellamiró,acontinuaciónmirólaspruebasdeembarazoysusurró:—Nopuedo,Jud...,nopuedo.SuhisterismolerecordóaJudithelsuyopropiolaprimeravezquesequedóembarazada.Aún
recordabaelmogollóndetestquecompróyseveíaencerradaensubaño,solayconlospiesenaltodelomareadaqueestaba.Porello,yconscientedequeteníaquehacerloquefueraparaquesuamigasetranquilizara,cogióuntest,lodestapó,sebajóelpantalón,lasbragasy,trashacerpisencima,locerróylodejósobrelaencimera.
—Sólotienesquehaceresto—dijo—.Vamos,noestandifícil.Actoseguido,sesentóenelsueloyapoyólaespaldaenlapuertaalaesperadequesuamigase
animaraahacerloqueirremediablementeteníaquehacer.Remolona,Mel cogióun test y sedesabrochóel vaquero. Judith lamiróy, finalmente, cuando
aquéllasebajólasbragas,hizopissobreeltest,locerróylodejósobrelaencimera,murmuró:—Muybien.Lohashechomuybien.
Laextenientesonrió,abrióelgrifodelagua,diountragoy,trassecarseloslabios,afirmó:—MataréaBjörnsiestoyembarazada.—Abesos,¿verdad?Melsonrió.Enestaocasión,fueellalaquenopudoremediarloy,sentándoseenelsuelojuntoa
suamiga,apoyólaespaldaenlapuertaymusitó:—Sevolverálocosiloestoy.—Muyloco—añadióJudithconunatristesonrisaalrecordarcuandoEricsehabíaenterado.—PeroyanopodremosllamarloPeter.YatenemosunPeterenlafamiliay...—Tranquila,haymillonesdenombres.Teaseguroque,sinnombre,elbebénosevaaquedar.
SeguroqueaSamiseleocurrealguno.Melresopló,luegopermanecieronensilenciounosinstanteshastaqueJudithdijo:—Creoquehallegadoelmomentodelaverdad,¿noteparece?La exteniente cerró los ojos y, levantando la mano, cogió los test de embarazo que habían
utilizado.Losmiróy,alverqueeranidénticos,preguntó:—¿Cuáleselquemehehechoyo?Divertida,Judithseencogiódehombrosy,quitándoleuno,respondió:—Sinlugaradudas,elquedépositivo.Lasdosamigasretiraronelcapuchónalostestdeembarazoalmismotiempo,yMelmusitó:—Lomato.Judithsonrióy,mirandoeltestqueellateníaenlamano,afirmó:—Tremendamentepositivo.SonriendoestabaporaquellocuandoMelpusoelPredictorqueellasosteníaante lacaradesu
amigaydijo:—Jud...Al ver lo queMel le enseñaba, de pronto Jud tiró el test que tenía entre lasmanos como si le
quemaraydijo:—¡Joder!—Y,levantándose,repitió—:¡Joder!Melselevantóasuvezy,trascogereltestqueJudithhabíatirado,lomiróycuchicheó:—Joder,Jud...,¿estásembarazada?—Noooooooooooo.Tanbloqueadacomoella,Melleenseñóeltestyafirmó:—Yohehechopisenunoytúenelotro,ylosdosdanpositivo.Judithsedioaireconlamano.Pero¿quéocurríaallí?Y,horrorizada,siseó:—Nopuedeser.¿Cómovoyaestarembarazada?Sinsabersireírollorar,Melmiróasuamigayrespondió:—Unaabejitaplantóunasemillitay...—Esimposible.Yo...yonopuedo...Ericyyonoqueremosmáshijos.Queno,hombre,queno...Conambostestenlasmanos,Mellosmiródenuevoyafirmó:—Puesnoespormetereldeditoenlaherida,peroenunoponede2a3semanas,yenelotro,de
4a6semanas.JudithlosmirababoquiabiertacuandoMel,entregándoleunnuevotest,indicó:
—Repítelo.Sirealmentelapruebahasalidomal,ésteloconfirmará.Judithnorespiraba.Nopestañeaba.Pero¿cómoibaaestarellaembarazada?Alverlobloqueada
queestaba,Melleagarrólabarbillaconlamanoymurmuródivertida:—Cariño,piensaquesiunbebéestácreciendoentuinterioreselresultadodeunbonitoamor.Sé
queEricytúnoestáispasandoporelmejormomento,pero...piénsaloysépositiva.—Cierralabocaza—resoplóJudith,quecogióeltest,sebajódenuevoelpantalón,lasbragas,
volvióahacerpissobreelaparatito,locerróyaseguróaldejarlo—:Estoloresolverátodo.Yonoestoyembarazada.
Melsehizorápidamentetambiénotrotest,peroestavez,enlugardedejarlojuntoaldesuamiga,seloquedóenlasmanosy,mirándola,dijo:
—Jud..., hace poco Björn me dijo que las cosas que merecen la pena en la vida nunca sonsencillas,y...
—No digas nada más. Ahora no, por favor —la cortó ella mientras se tocaba la frente conpreocupación.
En silencio y en tensión, esperaron a que pasaran los minutos que indicaba el prospecto y, acontinuación,Judithabrióelcapuchóndelaparatoymurmuró:
—Estodebedeserunfalsopositivo.Ahorano,ahoranopuedeocurriresto.Trasabrazarasuamiga,cuandoéstadejódetemblar,Melcogiófuerzasparaabrirsutesty,al
leerlapantalla,afirmó:—Estoyde4a6semanas...MataréaBjörnHoffmann.Aldecireso,ambassemiraronsinsabersilloraroreíry,depronto,oyeronlavozdelabogado,
quedecíamientrasgolpeabalapuerta:—Mel,¿conquiéntehasencerradoenelbaño?Rápidamente,lasdosamigasrecogieronlosenvasesdelostest.Judseguardóelsuyoenelbolso,
mientras queMel lo hizo en el bolsillo delantero del vaquero. Una vez comprobaron que ya noquedabaningunapruebadeldelitoalavista,Judmurmuró:
—NiunapalabrasobrelomíoaEricniaBjörn,¡niunapalabra!—Pero,Judith...,unembarazonosepuedeocultar.—¡Prométemelo!Alverelgestodesuamiga,Melfinalmenteasintió.—Teloprometo,siempreycuandotúprometaslomismo.Judithsuspiró,sucasonoeraeldeella,peroasintió.Cuando, segundos después, Mel abrió la puerta del baño, Björn las observó sorprendido y
protestó:—Vaya,perosiestáaquílamujerqueincitóamihijo,menordeedad;porcierto,pirateélalista
depasajerosdelaeropuertodeMúnich.Pero¿cómopudistepedirleesoaPeter?¿Acasotevolvisteloca?
Judithresopló.Sinduda,Björnestabadeseosodeverlaparaecharleaquelloencara.Duranteunpardeminutos,MelyJudescucharonensilenciotodoloqueaquélquisodecirlesenrelaciónconlomalquesesentíaporquehubieranutilizadoalchicoparahacerlodelaeropuerto,hastaqueMel,singanasdequecontinuaramachacandoaJud,seplantóanteélydijo:
—Tengoalgoquedecirte.Al ser consciente de lamala cara de Judith,Björn se arrepintió de todo lo quehabía dicho en
décimasdesegundoy,mirandoalamorenadepelocortoqueanteélllamabasuatención,resoplóydijo:
—Sorpréndeme.Melcogióaire,miróaJudithy,sinquelavozletemblara,dijoaltoyclaro:—¡Estoyembarazadaynovoyatrabajarcomoescolta!Suamigalamiró.Pero¿nohabíadichoqueleguardaraelsecreto?Aloíreso,elabogadoparpadeóy,torciendoelcuello,murmuró:—¿Quéhasdicho?Trassacarsedelpantalóneltestquesehabíahechominutosantes,seloenseñóyafirmóconcara
decircunstancias:—¡Sorpresa!Björn clavó lamirada en la prueba de embarazo. Requeteparpadeó.Miró a Jud y ella asintió.
LuegomiróaMely,cuandoéstaasintiótambiénconcaradeapuro,sellevólamanoalacabezaysusurró:
—Creo...creoquemeestoymareando.Condiligencia,MelyJudcogieronentrerisasaBjörncadaunadeunbrazoy,sentándoloenla
cama,Judithdijoarrodillándoseanteél,mientrasMelledabaaireconlamano:—Vamosaver,JamesBond,respira...respira,queteestásponiendoverde.Duranteunossegundos,Björnhizoloqueselepedíahastaqueconsiguióreaccionary,mirandoa
Mel,preguntósorprendido:—¿Vamosatenerunbebé?Melasintió,sonrióy,encogiéndosedehombros,replicó:—Tevoyamatar.Unbebénosvaadescabalarlavidaalosdos,perosí,vamosatenerunbebé.Tembloroso,Björn laabrazó, labesó, laacunó,mientrasJudithobservabaemocionadaaquella
maravillosademostracióndeamorysentíaqueelcorazónseleibaasalirdelpecho.Björnamabasinningún tipodereservaaMel,adorabaaSami,queríaaPetery,orgullosadesersuamiga,Judsólopudodecir:
—Felicidades,papaíto.Alaterceravalavencida.Su amigo, al entender lo que aquello quería decir, sonrió comoun tontoy, levantándosede la
cama,cogióaMelentresusbrazosycomenzóadarsaltosdealegría.¡Ibaaserpadre!Judithdisfrutódesulocaalegríaycuando,minutosdespués,élseempeñóencelebrarlo,decidió
escabullirsedelacasaparadejarlosbrindarporlabuenanoticia.Sinembargo,antesmiróaMelymurmuró:
—Niunapalabradelomío.Conlamitaddelcorazónapenadoporsuamiga,ellaasintió.Suslabiosestabansellados.
56
Lasemanaesparamíunatortura.Embarazada...¿Cómopuedoestarembarazada?Noconsigodejardepensarenello,peromeconvenzodequenoloestoy.Nopuedeser.Encasa,veoaEricpasarpordelantedemíysaberloqueséynocompartirloconélmeduele,a
pesardequesoyyolaquenolocomparte.Nosécómovaareaccionary,sobretodo,sirealmenteestoyembarazada,¿debotenerestebebéestandocomoestamos?
Pienso...,pienso...,piensoy,cuandoveoaEricyaHannah,elcorazónsemeencoge.Pensarqueenmivientre,quizá,estécreciendounanuevavida,comoesasdosquedelantedemísonríenymehacensonreír,meparteelcorazón.
Elmiércoles,sinpoderaguantarunsegundomás,mevoyaunaclínica.Necesitosabersiloestoyonoparadecidirquéhacer.Mehagounanálisisdesangreyotrodeorinaycuando,horasdespués,voyarecogerlosresultadosyveoesepositivo¡tanpositivo!,creoquemevoyamorir.
¿Cómomepuedeestarpasandoesto?Esedía,Ericllegaprontodeltrabajo,intentaestarcercademíydelosniños,peroyo,encuanto
puedo,meescabulloymesumerjoenmiburbujitadedudasconrespectoaquéhacer.¿Deboonoseguirconeseembarazo?
En silencio, mientras paseo con Susto yCalamar por la noche en la urbanización, pienso...,pienso...pienso...YmedoycuentadequeyanosólomeencuentromalporloquehapasadoconEric,sinoqueahoratambiénmesientomalporlodelbebéypormifrialdadhaciaél.
Por increíble que parezca, durante la cena, Flyn intenta darnos conversación.Como es lógico,Ericleresponde,peroyomemantengocallada.Ahorasíquesoyunmonosabio.Simplementecenoy,cuandoacabo,melevantoydesaparezcodeescena.
SilosZimmermantienenmalaleche,losFlores¡nonosquedamoscojos!El jueves, tras un caóticodíade trabajo, cuando estoy tiradapor la noche en el sofádel salón
totalmente apática con Susto yCalamar repanchingados a mi lado, de pronto Eric entra con unasonrisa,meenseñaunaspizzascongeladasyanuncia,sinquejarseporquelosanimalitosesténallí,apesardequenolegustaporquedicequedejanpelos:
—Estanochehagoyolacena.Vale...,meterunaspizzascongeladasenelhornonoeshacerlacena,perocomonoquierodecir
algoinapropiado,asientoyrespondosinmuchoentusiasmo:—¡Quéilusión!Trasdecireso,continúoviendolatelevisiónmientras,conelrabillodelojo,observocómoEric
memiraparadodondeestá,meobserva, buscauna conexión,pero finalmente seda lavueltay semarcha.
Veinteminutosdespués,entradenuevoenelsalónydicealverqueestoyviendolaserie«TheWalkingDead»:
—Jud,lapizzayaestálista.¿Quieresquecenemosaquíoenlacocina?Estoypordecirlequecenemosaquí.SéqueaélyaFlynleshorrorizalaseriequeveo,yséque
cenaríansinrechistar,peronoquieroquelacenalessientemal,porloqueparolaserieydigo:—Enlacocina.—Puesentonces,¡vamos!Flynyaestáallíesperando.Medesperezoenelsofámientrassoyconscientedecómoélmemiraalaesperadeunasonrisa,
perono.Novoyasonreír.Lovoyaprivardemisonrisacomoélmeprivamilvecesdelasuya;¡quesejorobeysufra!
Con cariño, beso la cabeza de mis animalillos y les ordeno que me esperen allí; no tardarémucho.
Cuandoentroenlacocinaveosobrelamesitatresplatos,doscoca-colasyunacerveza.Flynyaestá sentado. Me guste o no reconocerlo, en los últimos días la actitud del chaval ha cambiado,inclusoSimonamedijoquevuelveahablarseconJosh,elvecino.
¿Lehabrávistolasorejitasallobo?Sinmuchas ganas de cenar, me acerco a lamesa y entonces el mocoso con la nariz llena de
granosmepregunta:—¿Quiereshieloparalacoca-cola?Tomayaaaaaaaa...¿Flynsiendoamableconmigo?Y,conrecochineo,lomiroypregunto:—¿Cuántotehapagadotupadre?—¿Paraqué?—Memiradesconcertado.Amímeentralarisa.MesientocomoCruelladeVilobservandoaundulcecachorritoindefenso
y,conchulería,respondo:—Paraquemehables.Veoqueel críobusca lamiradade suqueridopadrey, sinunápicedehumanidadhacia ellos,
murmuro:—Soistalparacual.Eric no dice nada.Raro en él, pero nime reprende, por lo que cojomi vaso, lo acerco ami
nevera americana y, cuando se llena de hielo, me siento en la silla y abro mi coca-cola. No losnecesito.
Porprimeravezenmuchotiempolesestoydemostrandoqueyotambiénsépensarporyparamí.Porprimeravezlesestoyenseñandoqueyotambiénpuedoseregoístaenloqueamíserefierey,oye,¡megusta!
A través demis pestañas veo cómoEric y Flyn semiran incómodos antemi silencio y sientoganasdesonreír,aunquenolohago.
¿Dóndequedaronesascenasnuestrasenlasqueyohacíatonteríasyellosreían?Después de dar un trago ami coca-cola, cojo una porción de pizza yme la como en silencio
mientras ellos intentanmantenerunaanimadaconversación sobre fútbol.Concuriosidad, losoigohablardelequipodemisamores,elAtléticodeMadrid,peroyonoentroeneljuego.Noquieroseramableconellos.
Tras mi segunda porción de pizza y sin mucho apetito, me levanto como una maleducada y,mirándolos,digo:
—Seguidcomiendo.Mevoyaveramismuertosvivientes.Sonmásinteresantesquevosotros.Y,sinmás,salgodelacocinaconmivasodecoca-colaenlamano.Ellosnodicennada.Nosé
quépensarán,perodecir,loquesedicedecir,nodicennada.Unratodespués,oigoqueEricentraenelsalón,seacercaamíypregunta:—¿Vienesalacama?Meencantaríadecirlequesí.Nadamegustaríamásqueabrazarlo,besarloyhacerleelamorpero,
manteniendomifuerzadevoluntadintacta,respondosinmirarlo:—Notengosueño.Vetú.Cuandosaledelsalón,mesientofatal,perodaigual.Hagoesoporquequiero.Nadiemeobliga,
continúoviendolaserie,yreconozcoquecadavezquesaleMichonneconsukatanaycortacabezasalosmuertoslodisfruto.EsloqueyoquerríahacercondosquevivenenChicago.
Esanoche,encuantomedespiertoenelsofá,sonlascuatrodelamadrugaday,conelcuellorotoporlapostura,unavezsacoalosanimalitosalgaraje,mevoyalacama.Necesitodescansar.
Elviernes,enMüller,meencuentroconEricvariasvecesporlaoficinay,siemprequepuedo,mehagoladistraídaparanosaludarlo,apesardequeséquemeobserva.SentircómomesigueconlamiradameexcitaymehacerecordaraquellosmomentosenMüllerEspaña,cuandoélmebuscabacontinuamenteycuandomeconquistó.
¡Quétiempos!Es mi último día. Hoy finaliza mi contrato y estoy apenada, aunque en cierto modo quiero
alejarmetantodeMüllercomodesudueño.Creoquemevendrábien,ymásporquemevoyaJerez.Necesitolosmimosdemipadre.
Alasocho,cuandoPipasellevaalospequeñosalacamaparadormir,estoyaburridaymevoyalgaraje para mirar mi moto. Al día siguiente quiero salir con ella. Sé que, en mi estado, no esrecomendable,peroestoytannubladaporlaindecisiónyportodo,quemedaigual.Noséquévoyahacerconelbebé.
Mientrasescuchomúsicaenelgarajedesdemimóvil,piensoentodoloquemeestáocurriendoy, cuando comienza la canciónAprendiz,[36] de mi adorado Alejandro, los ojos se me llenan delágrimasypiensoque,simeestoycomportandoconesadureza,esporqueEricmehaenseñadoquelaindiferenciaduele.Élhasidomimaestroenmuchascosasy,ahora,soyyolaquenoquierehablardeamor.
Tanprontocomoeltemaacaba,vuelvoaponerlootravezmás.Necesitoescucharcancionesqueterminen demarchitarme. Siempre he sido así demasoquista y, cuando ya la he escuchado variasveces,apagolamúsicayrumioensilenciomispenas.¡Quédesgraciadasoy!
DeprontoveoquellegaelcochedeEric.Concuriosidad,miroelrelojquehayenelgarajeymesorprendoalverlo.Cadadíallegamáspronto.
Susto,queeselrelacionespúblicasdelacasa,vaasaludarloencuantoabrelapuertadelcoche.DuranteunossegundosescuchocómoEriclehablayesomeagrada.
—Hola,cariño—oigoquediceacercándoseamí.—Hola—respondo.
Elsilenciotomaelgarajedenuevo,yEric,alverquenovoyaañadirnadamás,damediavueltay se dispone a entrar en la casa. Sin embargo, en vez de eso, se mete en el coche y de prontocomienzaasonarunacanción.
No...,no...,¡quenomehagaeso!Yosigoagachada,fingiendoquecompruebolapresióndelasruedasdelamoto,cuandosiento
queEricseacercadenuevoamíypregunta:—Tegustaestacanción,¿verdad?Noesquemeguste,¡meapasiona!EdSheeranysuThinkingOutLoud.[37]—Sabesquesí—digo.Eric,mirubio,cogiéndomedelcodo,hacequemeincorpore.—¿Bailasconmigo,pequeña?Ay...,ay...,ay...,¡quecaigoensuinflujo!Y,negandoconlacabeza,digo:—No.Peroél,queyahaconseguidoquemisojosylossuyosconecten,nomesueltaeinsiste:—Porfavor.Ay...,madre...,ay,madreeeeeeeeeeeeee,¡quemepierdo!Y, antes de que pueda decir nadamás, mi rubio y grandote alemánme acerca a su cuerpo y,
rodeándomeconlosbrazosparahacermesentirchiquitilla,murmura:—Vamos,cariño,abrázame.Sucercanía,suoloryellatidodesucorazónhacenquecierrelosojosy,cuandosientosuboca
enmifrente,yaséqueestoytotalycompletamenteperdidaantemimaestro.Ensilenciobailamoslacanción,mientrasSustoyCalamarsesientanacontemplarnosenmedio
delgaraje.—Teechodemenos,Jud—susurraEricdepronto—.Teechotantodemenosquecreoqueme
estoyvolviendoloco.Suvoz...Su tierna voz tan cerca demi oído hace que todasmis terminaciones nerviosas se pongan en
alertae,incapazdenomimaralhombrealqueadoro,subomisuciamanodegrasahastasunucayselatoco.
Alvermetanreceptiva,miamormeaprietacontrasucuerpo.—Losiento,pequeña.Lomiro...,lomiroylomiro.Cadavezmeparezcomásaélencuantoamiraditasserefiere.—Pídemeloquequieras—diceentonces—y...Nopuededecirmás.LapuertadelgarajeseabrederepenteyentraNorbert.Elpobre,alvernoseneseplan,sequedacomopegadoalsueloconcaradecircunstancias.Ericse
apresuraasoltarmey,alverelapurodeambos,preguntoconnormalidad:—¿Yatevasacasa?—Sí.Simonasehaidohacerato—respondeNorbertsinsaberadóndemirar.Asientoy,comosinopasaranada,pasojuntoaélydigosaliendodelgaraje:—Entonces,buenasnoches,Norbert.Cuando,cincominutosdespués,Ericentraenlahabitación,cruzamosunamirada.Lafrialdadha
regresadodenuevoamí.Vuelvoacontrolarmimenteymicuerpo.LaJudmalotahavueltoy,trasmirarelanilloqueEricdejósobremimesillaconlaesperanzadequemelovolvieraaponer,siseo:
—Novuelvasahacerloquehashechoomeirédeestacasa.
57
Esanoche,Melveíaunapelículadeaccióntiradaenelsofávestidatansóloconunacamisetayunasbragas.
LapequeñaSamiyPeterdormían,yLeyaestabatumbadaasuspies.Aburrida, cogió elmóvil y vio la hora. Las diez y veinte.Björn había salido de cena con los
idiotasdelbufete.Semiróelanillodecompromisoqueéllehabíaregaladoyresopló.Todavíanolehabíacontadolascosasqueaquellosestúpidoslehabíandicho.Cadavezquelointentaba,terminabandiscutiendoy,aunquesupersonalidaderafuerteycombativa,decidiócallar.
Semantendría alejada de ellos y deLouise para queBjörn pudiera cumplir su sueño y asuntoconcluido.
Unahoradespués, justoenelmomentoenque lapelículaacababa, lapuertade lacasasonóe,instantesdespués,Björnaparecióylasaludóguiñándoleunojo.
—Hola,preciosa.Ella sonrió,yel abogado,arrodillándose frenteaella, labesóen los labios,después lebesó la
tripay,divertido,murmuró:—Hola,pequeñín.Papáyaestáaquí.Alveraquello,Melvolvióasonreír.DesdequeBjörnsabíaqueestabaembarazadanopodíaestar
máscariñoso.Alverqueteníaunamanotraslaespalda,preguntó:—¿Quéescondes?Élseencogiódehombrosy,trassacarlamano,dijoenseñándoleunacestaconfresas:—Parati,miamor.Melsoltóunarisotadaalveraquelloy,cuandofueacogerlas increíblesfresas,él lasretiróy,
mirándolaconguasa,murmuró:—Parker,tenemosquehablar.—Buenoooooooooooo—semofóella.—Cariño, el embarazo lo ha cambiado todo —prosiguió él—, y no podemos esperar a
septiembre,porloquequierounafecha.Melsuspiróyprotestó:—Yatehandadolatabarraenlacenita...Aloíreso,Björnrioyrespondió:—No,amor.Estásequivocada.Estoessóloalgoentretúyyo.—Perovamosaver—protestóella—,¿pretendesquemecasecontigosiendounabola?Dispuestoaconseguirloquepretendía,elabogadoafirmó:—Tequiero,ysimplementepretendoquetecasesconmigo.Melnocontestó.
Durantevariossegundossemiraronensilencio,hastaqueellafinalmenteresoplóymurmuró:—Novasapararhastaquetedéunafecha,¿verdad?—Verdad —asintió Björn—. Creo que esperar a septiembre ahora ya no es una buena idea.
Tenemosladocumentaciónpertinentepreparadadesdehacemeses,unamigoenlosjuzgadosquenosreservaeldíaquequeramos,yyopuedoorganizarunapreciosalunademielparalosdosenParís.¿Te imaginas tú y yo caminando por losCamposElíseos cogidos de lamano?—Mel sonrió y, acontinuación, él musitó—: Ya he asumido que nunca vas a querer un bodorrio, por lo que estoydispuestoacasarmecontigoporeljuzgadoyenpantalonesvaqueros;¡hagámoslo!
Laextenienterio.Sinduda,élnoibaapararhastaconseguirsupropósitoy,dándoseporvencida,ymuertadeamorporelhombrequelaadorabaylehacíasusdíasmaravillosos,claudicó:
—El2demayoeneljuzgado,perosóloconlafamiliaylosamigosmásíntimos.—Deacuerdo—afirmóBjörnconunhilodevoz.—Íntimos...,íntimos...—aclaróMel.Aloíreso,elabogadolaentendióalaperfecciónysonrió.Apenasfaltabandiezdíasparalafecha;entregándolelasfresasalamujeralaqueadoraba,Björn
sesacódelbolsillodelachaquetadeltrajeunsobredechocolatealatazaydeclaró:—Vale,el2demayoysóloíntimos,¡acepto!¿Quétalsilovamoscelebrandotúyyo?Divertida,Melsemordióellabioconsensualidadyluego,recuperandolasfresas,afirmó:—ÉsteesmiJamesBond.Éllabesóencantado.Losbesoscomenzaronacalentarsemásymásacadainstante,porloque
Meldejó las fresas sobre lamesita, se levantóy corrió hacia el bañode suhabitación seguidadeBjörn.NoqueríadespertaraPeteroaSami,ysabíaqueallínolosoirían.
Unavezhubieroncerradolapuertadelbaño,Björn,excitadoporlaentregadeaquellamujer,ledio la vuelta colocándola de cara a la puerta ymurmurómientras paseaba lasmanos por la carainternadesusmuslos:
—Voyacastigarteportraviesa.AMelleentrólarisa.Adoraba sus calientes castigos. Si por ella fuera, estaría castigada día sí, día también por su
maravillosoabogado.Björncogióentonceselcinturóndesualbornozy, traspasarloporsusmuñecas, lasuniópara
despuésatarlasalcolgadordelapuertadondeestabanlasbatas.Una vez el abogado sintió que la tenía sujeta y sin posibilidad de escapar, le besó la nuca, la
coronillaylaespaldamientrasellasusurrabagozosa:—Sí...,nopares.—Cariño...,noleharemosdañoalbebé,¿verdad?Aloíreso,Melsoltóunarisotada.—Ningúndaño—replicó—.Vamos...,nopares.Losbesossubierondeintensidadyél,acercandolabocaaloídodeella,musitó:—Estásembarazada.Hedetenercuidado.Acaloradayexcitada,Melcontestó:—Noparesyolvídateahoradelembarazo.
Björn sonrió. Con complacencia, su boca siguió bajando, hasta que Mel la sintió sobre susglúteosyél,divertido,lediounmordisco.Laextenientechilló,seretiróy,volviendoelrostroaladerecha,lomiróatravésdelespejoygruñó:
—¡Seráscaníbal!Björnsonrióy,sacandosuhúmedalengua,lapaseóporlacarainternadelosmuslosdeMelpara
hacerlavibrarmientrasellacerrabalosojosextasiadaymurmuraba:—Nopares,caníbal...,sigue...,sigue.Jadeante,lajovenabandonósucuerpoalplacer.Elcaloryalahabíatomadoy,cuandovioqueél
sesentabaenelsuelo,apoyabalaespaldaenlapuertadelbañoysemetíaentresuspiernas,creyóqueibaamorirdegusto,ymáscuandolooyódecir:
—Veamosquétenemosporaquí.Extasiada por no podermirarlo a los ojos por la postura de él,Mel jadeó acaloradamientras
ondulabalascaderas.—Björn...Sindarleunrespiro,aquélposólasdosmanosenlasnalgasdeellayexigióbajándolelasbragas:—Esoes...,sí...,sí...,quépreciosidad.Mel tembló.Todaella temblabaante loqueescuchabamientras él le sacaba lasbragaspor los
pies.LasgrandesmanosdeBjörnleagarraronconfuerzaeltraseroy,cuandosintiócómosucálido
alientollegabaasuvagina,tiritó.Sualiento,suroce,sumorbosaintenciónlaestabanvolviendolocay,enelmomentoenquesuhúmedalengualatocó,vibrósincontrol.
Sindescanso, el abogado comenzó a chuparla condeleite y sus jugosno tardaron en aparecermientrasélproseguíacondesesperaciónylascivia.
LarespiracióndeMelseacelerócomounalocomotoray,hundiendolacaraentrelosalbornocescolgados de la puerta, jadeó, gritó y vibrómientras su amor continuaba su asolamiento y ella seentregabatotalmenteaél.
ElplacerqueBjörn leocasionabaera increíble,yelestaratadaparaél lo incentivaba.CuandoMel creyóqueyanopodíamásyque iba a explotar, aquel experto amante saliódedebajode suspiernasymurmuróensuoído:
—Míranosenelespejo.Melmiróhacialaderechaysusojoschocaronmientrasellaobservabacómoél,conunmorboy
unasensualidadquedejaríaacualquierafueradeórbita,sequitabalacamisayéstaterminabaenelsuelo.A continuación se abrió lenta y pausadamente el botón del pantalón para después bajarse lacremalleray,trassacardelinteriordelbóxersuimpresionanteerección,selamostrócondescaroy,congestoserioymorboso,lepreguntó:
—¿Estáspreparada,traviesa?Laextenientesemovióagitada.Noestabapreparada,¡estabapreparadísima!Tancalientecomoella,ysinapartarsusojosazulesdelespejodondesemiraban,Björncomenzó
apasearsuduropeneporlasnalgas,losmuslosylavaginadeMelparahacerlesentirsufuerzaysupoderío.Ellavibró.Loqueaquélhacíayloquequeríalaenloquecían.
Durantevariosminutos,eljueguecitodelabogadocontinuó,hastaque,sinhablar,colocósupene
en lamás que humedecida abertura de ella y, lentamente, para no dañarla ni a ella ni al bebé, sehundióensuinterior.
El bronco gemido de Björn ante el electrizante contacto no tardó en llegar, mientras ella seacoplabaasuamor.Permanecieroninmóvilesunossegundos,hastaqueBjörncomenzóamoverlascaderasmuydespacioyluegosusmovimientossefueronacelerando.Melapenassipodíamoverse,élnoselopermitía.Sólopodíaabrirseparaélydejarquesehundieraenellaunayotravez,hastaqueungritodeplacerpugnóporsalirdesubocay,paranoseroídaentodalacasa,enterrólacaraenlosalbornocescolgados.
Comoeldueñoyseñorqueeradelasituación,Björnsonrióaloírlaymurmuró:—Sí...,asímegustasentirte.Mel, sujeta con el cinturón del albornoz al colgador de la puerta, cogió aire. No quería que
aquello acabara.Legustaba sentirseposeídaporBjörny, deseosademuchomás,duranteunbuenratoaccedióa todosycadaunode losdeseosdelalemánmientras looíadecircon lavozagitadacontrasucuello:
—Sí...,córreteparamí.Ellasonrió.Girólacabezadenuevohaciasuderechay,rápidamente,labocadeBjörnlaatrapóy
sus lenguassehicieronelamor,mientras suscuerposnoparabandeacoplarseunayotravezcongustoydesesperación.
Ningunoqueríaacabar.Ningunoqueríaterminar.Estabansegurosdeque,siestuvieransolosenunaisladesierta,viviríancontinuamentebajoaquel
influjodeplacerysatisfacción.Elcalorinundabasuscuerpos,ambossabíanquenopodíanretrasarmáselmomento,yentonceselclímaxlostomó.
Cuando acabaron, ambos jadeaban. Sus ruidosas respiraciones se oían con fuerza en el baño.Luego,Björnlabesóenelcuelloymurmuró:
—Mevuelvesloco,traviesa.Mel asintió. Como pudo, se secó el sudor de la frente en los albornoces que tenía delante y
musitó:—Eresincreíble,cariño.Increíble.Felizporesecomentario,quesubíasuautoestimacomohombre,Björn terminódedesnudarse.
Abrióelcestodelaropasucia,tiróallísusprendasy,cuandoMelvioqueibaameterseenladucha,preguntó:
—¿Aquéesperasparadesatarme?Congestodivertido,elabogadoabrióelgrifodeladuchaydijo:—Estáscastigada.—¡Björn!Elalemánsemetióbajoelchorrodeagua.—Tevoyadejaratadaunashoritasporloquehastardadoendarmeunafechadeboda.Boquiabierta,ellalomiróatravésdelespejo,achinólosojosysiseó:—Niseteocurra.¡Estoyembarazada!Sin contestar, Björn se dio la vuelta y comenzó a enjabonarse mientras silbaba. Mel miró
incrédulasusmanosatadasalcolgadordelosalbornocesygruñó:
—¡Suéltameahoramismo!Pero,portodarespuesta,élcerrólapuertacorrederadeladuchaycontinuósilbando.Acadasegundomásalucinada,laextenientetratódedesatarse,peronada.Björnhabíahechoel
nudoaconciencia.Lamalalechecomenzóentoncesatomarsucuerpo.¿AquéestabajugandoBjörn?Instantes después,Mel oyó cómo el agua de la ducha se cortaba, miró la puerta corredera y,
cuandoéstaseabrióyélsalióempapadoyfresquito,ynosudorosocomoestabaella,siseó:—Tejuropormiabuelaque,cuandomesueltes,tevasatragarlasfresasconelchocolateyel2
demayosevaacasarcontigo¡tupadre!—Guauuu,¡quéinteresante!—semofóél.Laextenientediounpardetironesalcinturónquelamanteníasujeta,conlamalasuertedeque
apretóaúnmáselnudo.Alverlo,Björnsonrióy,poniéndoseasulado,cogiólamanijadelapuertaydijo:
—Mevoyalacama.Estoyagotado.—Björn,¡suéltame!—chillóella.Sinatenderarazones,éllediounrápidobesoenloslabiosy,abriendolapuerta,añadiócuando
ellatuvoquemoverseaunlado:—Buenasnoches,miamor.Estotepasaporsertancombativa.Y,sinmás,saliódelbaño,cerrólapuertayladejóallíatadacomoaunjamón.Gritar era inútil. Si lo hacía, despertaría a los niños, y eso era loúltimoquequería.Pensando
estabaenaquellocuandolapuertaseabriódenuevoyMeltuvoquemoverse.Björnaparecióyellapataleófuriosa.
—Mehascabreadoymehascabreadomucho;¡suéltame!Björnsonrió.Lamirócongestoguasóny,tanprontocomofinalmentelasoltó,alverqueéstaiba
adarleunderechazo,laparóy,convozcargadadeerotismo,murmuró:—Bien...,aquíestálafierademiniña.—¡¿Qué?!Elabogadosonrió, lacogióentresusbrazos, lametióconélen laduchay,sindarleopcióna
decirnada,susurróabriendoelgrifodelagua:—Vamos,fierecilla,hazmetragarlasfresasconelchocolate,peroel2demayo,porfavor,cásate
conmigo.Sinpoderenfadarseconél,Mellobesó,loempujó,hastaquesucuerpodiocontralapareddela
duchayleenseñóquéclasedefieraera.¡Faltaríamás!
58
EnlabodadeMelyBjörnenlosjuzgadosdeMúnichhaceundíaprecioso.Ver amisbuenos amigos tan felices, junto aSami, que estámonísima con suvestidito rosa, y
Peter,tanguapoconsutrajegris,mehaceemocionarmásdeloquepensaba.DeEstadosUnidosvienenlospadresylahermanadeMel;deAsturias,suabuelaCovadonga,y
deLondres, el hermano deBjörn.Como amigos íntimos estamos nosotros, Fraser yNeill con sufamilia.TambiéninvitanamisuegraSoniayamiembarazadísimacuñadaMartaconDrew.
Frida, Andrés, Dexter y Graciela no han podido venir ante la premura de la boda, pero hanprometido que la próxima vez que nos juntemos todos lo celebraremos. Pobres. No saben misituaciónconEric,yyomeapenoalpensarquequizáenesacelebraciónfalteyo.
Melestápreciosaconunbonitovestidoblanco.NosehacasadoporlaIglesia,esonovaconella,perohaqueridodarle lasorpresaaBjörnalaparecerconunpreciosovestidoblancoylargo,yelgestodeélalverlamehaenternecidocomoaunatonta.
Björnestámuyguapoconsutrajeazuloscuro,decirlocontrarioseríamentir.Mientrasobservoaesosamigosalosquetantoquiero,sólodeseoqueseanterriblementefeliceselrestodesusvidas.
Durantelaíntimacelebración,Ericestáamilado.Comosiempreestáimpresionanteconsutrajeoscuro,peroensusojosveolatristezaquesienteporelmalmomentoqueestamospasando.Nonosrozamos.Nonostocamos,perodisimulamosantetodos.Eseldíadenuestrosmejoresamigos,ypornadadelmundoqueremosechárseloaperder.
Traslaíntimacelebraciónenlosjuzgados,todosnosdirigimosalrestaurantedeKlaus,quelohacerradoparalaocasión.Allísecelebraráelbanquete.
BjörnestáradianteyencantadoynoparadebrindarydebesaraMel.Estáfeliz,muyfeliz,ynopuedeocultarlo.
Eric,porsuparte,intentahacermeagradablelacelebraciónhaciéndosecargodelospequeñinesydeFlynparaqueyonomesientaagobiada,peroesoescomplicado.
CuandoKlausponemúsicay tenemosquebailarporpeticióndeSoniauna románticacanción,sientoqueelalmasemecaealospies.
Flyn,porsuparte,mebuscaconlamiradaymellama«mamá»delantedetodos.Sientocómomemiraalaesperadequeyoleguiñeunojoolesonría,perosólomelimitoasercordial,ainterpretarunpapely,cuandonadienosve,elpapelseacabó.
Comodigo,todoesdifícil.Tremendamentedifícil.Cadadosportrestocomidedodesnudo.NollevarelanilloqueEricmeregalóenelpasadocon
tantoamormeresultadoloroso,peroloconsideronecesarioparaamoldarmeaminuevasituación.Estoybebiéndomeunacoca-cola cuandoSonia,mi suegra,yMarta,mi embarazadacuñada, se
acercanamíylaprimeracuchichea:
—Québien,hija.VeoqueFlynhavueltoalredil.Con una candorosa sonrisa, lamiro. ¡Si ella supiera...! Y, disimulando, asiento, pero vuelve a
preguntar:—¿AcabasteyaenMüller?—Sí—afirmoviendoqueEricsecolocaamilado.Sinduda,sehadadocuentadequenecesito
refuerzos—.Vuelvoaestarsintrabajo.Sonia,queesunamor,sonríeysusurra:—Tranquila.Mihijotedatodoloquenecesitas,¿verdad?Ericyyonosmiramosy,sincambiarelgesto,sigosonriendoyasiento:—Sí.Élmelodatodo.—¿CuándotevasaJerez?—preguntamicuñadaMarta.—Dentrodesietedías.Misuegraasiente,memirayfinalmentedice:—Dalemuchosrecuerdosatupadredemiparte.SinofueraporqueMartaestáembarazadísima,
meibacontigoalaFeriadeJerez.—Mamá,peroveteypásalobien.Todavíaquedaunmesymedio.—No,cariño,losbebéssonimpredecibles,ytúloeresaúnmás—murmuraSonia.—Mamá...—protestaMartaconcariño.Soniayyonosmiramos,yafirmo:—Ledarérecuerdosamipadredetuparte.Leharáilusión.—Ytú—lereprochamisuegraasurubioyaltohijo—deberíasirteconJudith.Unasvacaciones
juntossiemprevienenmuybienalasparejas.¿Porquénovas?Ericmemira.Semueveincómodoantesupreguntayfinalmenteresponde:—Mamá,nopuedo.MequedoconFlyn.Tienequeestudiar.—¿Yporquénosequedaconmigocomoenotrasocasiones?—Mamá—insisteEric—,esmejorqueyomequede.Créeme.MisuegrasevuelvehaciaFlyn,queestáriendoalfondodelasalaconPetermientrasmiransus
móviles,ycuchichea:—FlynZimmerman,quémalloestáshaciendoesteaño,hijodemivida,¡quémal!SentirmerodeadaporlosZimmermanmeponenerviosay,cadavezquesientolamanodeEric
agarrándomelacintura,larespiraciónsemeparalizaymepongonerviosa,no,¡losiguiente!Enloscincoañosquehacequenosconocemoseslaprimeravezque,estandotancerca,estamos
tanalejadoselunodelotro.Quémomentomásextrañoytristeestoyviviendo.EstoyasfixiadaportodoynoveoelinstantedellegaraJerez.Séqueallípodrérespirar.PonertierraentreEricyyoloaclararátodo.
Enestetiempo,hepensadoenloquepasó,yhellegadoalaconclusióndequeEricnotuvonadaque ver en lo que ocurrió; fue engañado por aquellos crápulas. Pero, a pesar de saber eso, soyincapazdeolvidar.Cadavezquecierrolosojos,mimenteseinundaconloqueviynosésivoyasercapazderemontaryolvidar.
Deloquenomepuedoolvidaresdequeestoyembarazada.Nopuedodejardepensarenelloentodoeldía.UnnuevoZimmermansegestaenmiinterior,ysoytodavíaincapazdedigerirloypensar
conclaridadloquehedehacer.No tengo ningún síntoma. Ni mareos, ni vómitos. Si mis dos embarazos anteriores no se
parecieronennada,sindudaéstetampocosevaapareceralosotrosdos.¡Mieditomeda!Yonoqueríamáshijos,conlosquetengosoyfeliz,yestoycasiseguradequeErictampoco.Yo, por no querer, no quería ni el primero, pero ahora no podría vivir sin ellos y, sin duda,
volveríaavivirtodoloquepasésegundoasegundoparaqueEricyHannahestuvieranconmigoyconsupadre.
Porextrañoqueparezca,pensarenminuevobebémehacesonreíraltiempoquemehaceinfeliz.Sinduda,mishormonasyaestáncomenzandoarevolucionarse,ymisojossehumedecenmásdeloqueyoquerría.Pero,bueno,nomevoyaa agobiar.Todo loquemeestápasandoesmuchoparadigerirlosola,peroséqueloharé.Yopuedocontodo.
MiúnicoapoyoesMel.Sinembargo,paraellanoestásiendofácilvercómotodos lafelicitanpor su embarazo y amí nome dicen nada. Sumiradame hace saber que sufre pormí, pero yo,guiñándoleelojo,lemuestroqueestoybien.
Enunadelasocasionesenlasqueambascoincidimosenelbaño,miamiga,queestásensiblonaconel embarazoy la boda, semira emocionada el anillode sudedoy lloriquea.Comopuedo, laconsuelo.Lloradefelicidad,yyo,querápidamentemeunoacualquierlloro,lohagoconella.
¡Loquemegustaundrama!Cuandofinalmente lasdosconseguimosquenuestrosojosdejendedesbordarse,mirándomeal
espejopreguntomientrasmeretocoelmaquillaje:—¿CuándoosvaisaParís?—Elviernes.Nosvamosdeviernes a viernes.El lunes18 tenemosque estar devuelta, yaque
Björntieneunpardejuicios.—Lovaisapasargenial.YaveráslobonitoqueesParís—digo,ysonríocontristezaalrecordar
unviajesorpresaqueEricprogramó.Melasiente,seretiraelflequillodelrostroy,dice:—EsperoqueSamiyPeterseportenbienconmispadreslosdíasquenosotrosestemosfuera.—Seguroquesí—replicoy,suspirando,murmuro—:Sientoquejustamentemepillenesosdías
enJerez,pero...—Nosientasnadaydisfrutade laferia,que te lomereces—contestaella.Luego,mirándome,
pregunta—:Jud,¿nolovasaechardemenos?Sinquedigaelnombre,ambassabemosdequiénhablayafirmo:—Muchísimo,peroahoranecesitoalejarmedeél.Miamigaasiente.Sabelodolidaqueestoy,ymeabraza.Diezminutosdespués,trassalirdelbaño,Klaus,elpadredeBjörn,queestáencantadodelavida
conaquellacelebración,descorchabotellasdechampány,trasllenarlascopas,diceorgulloso:—BrindoporqueelmatrimoniodemihijoBjörnyMelseamuyfeliz,porminietaSami,pormi
nietoPeteryporelnuevoHoffmannqueestáencamino.Todoslevantamoslascopasy,cuandoMelvaabeber,Björnselaquitaymurmura:—Amor...,brindaconzumo.Ellamemira.Sabequeyotampocodeberíabeberaquelloy,sonriendoporversugesto,sueltola
copaydigo:—Comobuenaamigatuya,mesolidarizoybrindoyotambiénconzumo.—¿Porqué?—protestaBjörn.—Tranquila,Jud,yaestoybebiendozumoyotambién—dicemicuñadasonriendoabrazadaasu
marido.—Venga,Jud,¡bebechampán!—insisteelhermanodeBjörn,queesunguasón.Ericmemira.Hundelosdedosenmicinturay,sonriendoasuvez,aclaraparatodos:—AJudithnolegustamuchoelchampán.Aloíreso,yotambiénsonríoy,sindarmecuenta,apoyolacabezaensupecho.Sinembargo,al
serconscientedeloqueestoyhaciendo,meseparolentamentedeélydigo:—Exacto.Nomeva.—Y,llenandomicopalimpiadezumodepiña,digolevantándolaconhumor
—:Venga...,brindemosporelbebédeMelyBjörn.—Yporelmío—exclamamicuñadaMartariendoytocándosesuprominentetripita.Denuevo todos levantansuscopas,yMel,queestá frenteamí,añademientrasse le llenan los
ojosdelágrimas:—Yportodoslosbebésquevayananacerenelmundo.—Pero,cariño,¿quétepasa?—preguntaBjörnalverlatanblandita.Yolamiro.Conlamiradavuelvoainsistirleenqueestoybien,cuandoEric,conmovidoporeso,
dice:—Puesqueestáembarazadayconlashormonasrevolucionadas.
59
Dosdíasdespuésde laboda, lospadresdeMely lahermanadeéstasemarcharonaAsturiasparallevar a la abuela.Covadongaquería regresar a su hogar.Mel los acompañó al aeropuerto y, trasrecibirmilbesosdesuabuela,quedóconsuspadresenqueregresaríanalcabodeunosdíasparaqueellayBjörnsefuerandeviajedenoviosaParís.
Aquella tarde, cuando Mel volvió del aeropuerto, recogió a Sami del colegio y se la llevódirectamentealparqueparaquejugara.
Ensimismada estaba mirando a su hija, mientras pensaba en su luna de miel, que comenzaríadentrodeunosdías,cuandodeprontoLouiseaparecióasuladoyledijo:
—Enhorabuenaporlaboda.Melintentósonreíryrespondió:—Gracias.Louiserápidamentesesentóalladodeellay,trasunossegundosensilencio,declaró:—Sientotodoslosproblemasqueteheocasionado.Mellamiróyseencogiódehombros.—Tranquila—respondió—.Paramisuerte,parecequeyaporfinmehandejadoenpaz.Desesperada,Louisesetocólacabezaeinsistió:—Lo...lohicesinquerer.DiscutíconJohany,sindarmecuenta,lecomentéloquetúmehabías
sugeridoylehicecreerquetehabíacontadomáscosasdelasqueenrealidadteconté.—Louise,deverdad,olvídalo—repitióMely,mirándola,aseguró—:Nopasanada.Durante unos segundos, ambas intercambiaron una mirada a los ojos, y luego Louise afirmó
llorosa:—Lovoyahacer.—¿Quévasahacer?—MevoyaseparardeJohan.Melparpadeó.¿Lohabíaoídobien?Pero,antesdequepudieraabrirlaboca,aquéllainsistió:—Seacabó.Nopuedoseguirviviendoasí.Johanyanoeselqueera.Yanomequiereyyonolo
quiero y, si tengo que luchar por Pablo con uñas y dientes, lo haré.—Luego, tras coger fuerzas,insistió—:Yno...novoyaseguirpermitiendoqueHeidimedominecomohaceconelrestodelasmujeres.Séquepuedoperdermuchascosas, séqueesapandilladebuitresvaa ircontramí,peroestoydecididaapresentarlesbatallaseacomosea.Siquierenjugarsucio,yotambiénloharé.Sivanahacermedaño,quesepreparen,porqueyotambiénpuedohacerlespupa.—Y,clavandosusojosenMel,queestababoquiabiertaporloqueoía,preguntó—:¿CreesqueBjörnquerráasesorarmesobrequétengoquehacer?
La recién estrenada señoraHoffmann, alucinada por la fuerza que de pronto veía enLouise y
convencidadequeBjörnlapodríaasesorarsobreloquenecesitaba,afirmó:—Porsupuesto,Louise.Porsupuesto.Laaludida,alsentirsuapoyo,setapólacaraconlasmanosycomenzóalloraraliviada.
Esatarde,trasdejaralosniñosencasaconBea,cuandoMelentróeneldespachodeBjörnconLouise,elabogadolasmiró.¿Quéhacíaaquéllaallí?Pero,instantesdespués,empatizóconellaylaescuchó.
Aldíasiguiente,traspasarlamañanaconJudithparaintentarlevantarleelánimo,alahoradelasalidadelcolegio,MelesperabaaSamijuntoaBea.Teníanuncumpleañosenunparquedebolas,yMellasibaallevar,cuandorecibióunmensajeenelmóvildeBjörn,quedecía:
Venacasa¡ya!
Sorprendidaporlaurgencia,MelleindicóaBeadóndeeraelcumpleañosy,trasdarleunbesoa
supequeña,seencaminóhaciasucasa.Alentrarenlacocina,Leya,laperra,corrióhaciaellayéstalasaludóencantada.Eneseinstante,
Björnentróporlapuerta,lamiróydijo:—Oficialmentehedejadodeserelcandidatoidóneoparaelbufete,y¿sabesporqué?—Cuando
Mel no respondió, él prosiguió—: Por la sencilla razón de que tu amiguita Louise vino ayer aldespachoy,alparecer,esohallegadoaoídosdeGilbertHeine.
Retirándose el flequillo de la cara, Mel quiso preguntar si aquel mafioso de la abogacía losvigilabapero,omitiéndolo,secentróenelhombrealqueamabaymurmuró:
—Losiento.Losiento,cariño.Sinmuchaefusividad,élasintió,yMel,alverqueolíaaalcohol,dijo:—Cariño,ellosselopierden.Eresunfantásticoabogadoy...—Ynoloheconseguido.Ésaeslarealidad.Mel fue a abrazarlo. Sentía en el alma que su sueño se hubiera evaporado, y al ver que él se
apartabadesulado,fruncióelceño.—¿Quépasa,Parker?—preguntóBjörnalversuexpresión—.¿Porquéponesesacara?¿Acaso
hasayudadoparaqueloconsiguierao,porelcontrario,tehasesforzadoporecharlotodoaperder?—Björn...,no...—¿Noqué? ¿Deverdadno sabías lo importanteque era esoparamí?Pero, claro, la noviade
Thores incapazdeentenderqueunosnosesforzamosporconseguir lascosas,mientrasotrasconllamarapapaítoconsiguenloqueselesantoja.
SuspalabrasnosóloletocaronelcorazónaMel,que,anclandolospiesenelsuelo,siseó:—Björn...,teestáspasando.Entiendotudecepciónylascopasquetehastomadodemás,pero...—¡Cállate!—gritóéldescolocándola.—¡Cállatetú!Pero¿quéleocurría?,pensóMel.Y,enfadadaporsuterriblecomportamiento,lesoltó:
—Mira,pedazodeburro,antesdequesigasdiciendocosasabsurdasporquehasbebidodemás,déjame decirte que yo no tengo la culpa de que esos frikis casposos sean unos mierdas y terechazaran.—Y,omitiendoloqueGilbertHeinelehabíadichoparanoliarlamás,gritó—:¡Yquetequedemuy claro que pienso que lomejor que te ha podidopasar es que no te aceptaran!Eres unabogadoincreíble,elmejorqueheconocidoenmivida,ynonecesitasdeotrosparaquetubufeteseamaravilloso.Túeresmilvecesmejorprofesionalqueesosmafiososdelaabogacía,yahoraloque tienes que hacer es enseñárselo, no emborracharte para lamentarte porque ellos te hayanrechazado.
—Nomeensalces.Nonecesitoquedigascosasbuenasdemídespuésde lapocaayudaquehetenidoportuparte.Ahorano,malditasea.
Melresoplóy,acontinuación,siseódenuevo:—Midetuspalabrasovasatenermuchosproblemasconmigo.AloíresoyveraMelconlospuñoscerrados,BjörnsedisponíaarespondercuandoPeterentró
enlacocinaypreguntó:—¿Quéospasa?Elabogadomiróalmuchachoygritó:—Estoyhablandoconmimujer;¡fueradeaquí!—¡Björn!—exclamóMelaloírlo.Peter,posicionándosejuntoaella,siseóenfadado:—Nohablas,chillas.PorprimeravezdesdequePeterhabíallegadoaaquellacasa,latensiónsepalpóenelambiente.
Melseacercóentoncesasumaridoe,intentandoentenderlo,murmuró:—Cariño,hasbebidodemásyesmejorquehablemosdeestoenotromomento.DeprontoLeya entró en la cocina conunospapelesde colorines rotos en laboca,yBjörn, al
verla,advirtiómirandoalchaval:—Portubien,esperoqueesonosealoquecreo.Sinmirar atrás, el abogado caminó hacia el salón, seguido porMel y Peter y, al entrar y ver
variosdesuscómicshechosañicosasualrededor,vociferó:—¡Nomelopuedocreer!Elmuchacho,queacababadedejar loscómicspara ir averquépasabaen lacocina, sequedó
blancocuandoBjörn,furiosoyfueradesí,gritómirándolo:—¡Tedijequeloscuidaras!¡Fueelúnicorequisitoquetepuse!Parpadeandoalverloscómicsdestrozados,Petermiróalaperra,despuésclavósusojosenMel,
queloobservabacongestoapenado,y,cuandoclavósusojosenBjörn,sólopudodecir:—Losiento...Yo...yo...losiento...Furioso,elabogadosiseótocándosesucabellooscuro:—Claroquelosientes,¿cómonovasasentirlo?Malditocríoymalditaperra.Recogiendoloscómicsdestrozadosconvoztemblorosa,Petermurmuró:—Yo...yo...losbuscaréytelosreemplazaré.Losiento...,yo...yo...—Oh,¡cállate!—bufóBjörn.—Tranquilo,cielo...,tranquilo—susurróMelalvercómolosojosdelmuchachosellenabande
lágrimasendécimasdesegundo.Pero¿quéestabahaciendoBjörn?—¡Quieroqueesamalditaperrasevayaahoramismodeestacasa!—bramóelabogado.—¡Björn!—gritóMel—.Pero¿quédices?Elmuchachorápidamentesecolocójuntoasuperracuandoélvolvióagritar:—¡Hedichoquequieroaesechuchofuerademicasa!Bloqueado,PetermiróaMelenbuscadeayuda.Ella,conlamirada,lepidióquenosemoviera
mientrassevolvíahaciasumaridoydecía:—Elanimalitonosabíaloquehacía.Hazelfavordecomportartecomoeladultoqueeresyno
comounidiotaalqueseleharotounpuñeterojuguetito.Furiosocontodo,élmiróaMelydijo:—¿Idiota?¿Friki?¿Borracho?¿Quémásmevasallamarhoy?Mel,ofuscada,seacercóaélysiseóalverqueelcríosalíadelsalónconlaperra:—Mira,Björn,porllamartetepuedollamarmilcosas,yteaseguroqueningunatevaagustar.Conelrostroensombrecidoporlafrustraciónquesentía,élmaldijo:—Meestáscabreando,Mel.Meestáscabreandomuchoynovoyaconsentirque...—Laquenovaaconsentirquetepasesniunsegundomássoyyo.Pero,vamosaver,¿mepuedes
decirqueesospuñeteroscómicssonmásimportantesqueeldisgustoqueleacabasdedaraPeter?—Elalemánnorespondió,yellaañadió—:Mira,soyadultayséresponderteanteunproblema,peroélesuncrío,pormuymayorquequierahacerseenocasiones.
—Puessiesmayor,sabeque...—¡Björn! —gritó ella mientras sentía ganas de vomitar—. ¡Reacciona! Te acabas de casar
conmigoyestoyembarazada.¿Quéhacescomportándoteasí?PorelamordeDios,¡reacciona!Nosestásdecepcionandoatodos.
Y,sinmás,laextenientesaliódelsalón,fuealbañoyvomitó.EncuantoBjörnapareciótrasella,loempujóconmalaleche,losacódelbañoycerrólapuerta.Necesitabaperderlodevista.
Cuandosalió,alnoveraBjörn,sedirigióa lacocina.Necesitababeberaguayrelajarse,perounavezhubodejadoelvasoenlaencimera,llamósuatenciónlaquietudquehabíaenlacasa.NoseoíanlaspisadasrápidasdeLeya,yMelfueabuscaraPeterasuhabitación.Noloencontróallíy,trasecharunarápidaojeadapor lacasa,sacósumóvily lo llamó.Elcríono locogió,por loquefuecorriendoalsalón,dondeBjörnmirabaloscómicsrotos.
—Amínomehablessinoquieres—lesoltó—,peroquesepasquetuhijoseacabademarchar.LanochellegóyPeternoapareció.LlamaronaJudithyaEric,quienesrápidamenteacudierona
su lado para ayudarlos a buscarlo, pero Peter sabía muy bien dónde esconderse para que no loencontraran.
A Björn se le había pasado la borrachera mientras daba vueltas con Eric por Múnich y,desesperado,noparabadepreguntarsequéhabíahecho.
Alasdosdelamañana,Ericyélregresaronacasaparaversielchavalhabíaaparecido,peronose sabía nada de él. Poco después, al ver llegar aOlaf,Mel se le acercó y,mirándolo a los ojos,preguntó:
—¿Sesabealgo?
Aquélnegóconlacabeza,yMel,desesperada,seangustió.¿DóndeestabaPeter?Björn fue a abrazar aMel, pero ella se apartó; seguía enfadada con él. Finalmente fue Judith
quien,trasintercambiarunamiradaconEricparaquelofrenara,consolóasuamiga.Concariño,lallevóalahabitaciónylahizoacostarse.
—Escúchame...,necesitasdescansar.—Ytú—sollozóMel—.Tútambiénnecesitasdescansar.Judithasintió.Sinduda, aquélla llevaba razónpero,mimándolacomoésta lahabíamimadoen
otrasocasiones,letocóelpeloydijo:—Mira,demomentotevoyaprepararotratilaytelavasatomar.Y,mientraslahago,mevasa
esperarenlacama,¿vale?Agotada y con mal cuerpo, Mel asintió y, tras darle un beso en la cabeza, Judith salió de la
habitaciónysedirigióhaciaelsalón,dondeloshombreshablaban.—Enelmomentoenqueencomisaríasepanqueelmuchachohadesaparecido,intervendránlos
serviciossocialesy...—Esonopuedepasar—cortóJudithaOlaf—.Nopuedenenterarse.—Pues para eso estoy yo aquí—explicó éste—. Björnme ha pedido ayuda para encontrar al
chicoantesdequetengamosquecontarloocurridoaserviciossociales.Porque,siseenterandequeelchavalsehaescapado,habráproblemas.Portanto,relajaosydejadmehacermitrabajo.
CuandoOlaf semarchó,Eric leordenóaBjörnquese sentaraenunode los sillonesy Judith,enfadadaporloocurrido,seacercóalabogadoydijo:
—Mira,nodeberíaseryoquientecontaraesto,perollegadosaestepuntoyenvistadecómotehascomportadohoyconPeteryconMel,hayalgunascosasquetienesquesaber.
Por la expresión de sus caras, Jud entendió que tenía toda la atención tanto de Eric como deBjörn,yprosiguió:
—EsetalGilberttuvolaindecenciadedecirleaMelquetúteníasmalasuerteporhabertesalidounhijodedebajodelaspiedrasyporhaberconocidoaunaproblemáticamadresoltera.
—¡¿Qué?!—exclamóBjörn.—Inclusolerecomendóquedesaparecieradetuvidaporqueteiríamejor.¿Teparecebonitolo
queeseimbécil,pornodecirotracosa,leaconsejó?—¿Cómodices?—bramóBjörnconfuso.—Loqueoyes,Björn,loqueoyes.Elabogadosealterómásaúny,trassoltarporlabocasaposyculebras,preguntó:—¿YporquéMelnomedijonada?—Lointentó,peronoquisisteescucharlayalfinaloptóporcallar.—Joder...,joder...—murmuróéldesesperadomientrasEriclepedíacalma.—Hablardeesebufetesiempreoshacíadiscutir—continuóJud—.Teobcecasteenconseguirtu
maldito sueño sin darte cuenta de las cosas que pasaban a tu alrededor. Ese tal Gilbert es undesgraciado, y su mujer Heidi una zorra. Pero ¿tú ves normal que el día que se llevó a Mel adesayunarconesasimbécilessemetieranconsumaneradevestir,consupeloyhastalepropusieranque debía hacerse un tratamiento láser para quitarse el tatuaje? ¡Pero bueno! ¿Es que esa brujapretendíaqueMelutilizarahastalamismamarcadetámpaxqueellas?Ah...y,yaquetelocuento,te
lovoyacontar todo.Peter,antesdeque tú loconocieras, salióendefensadeMelen lapuertadelcolegiocuandoJohanfueaamedrentarla.
—¿QueJohanhizoqué?—jadeóBjörnfurioso.—Y ya para finalizar —prosiguió Jud sin querer mirar a su marido, que la observaba tan
alucinado como Björn—, la noche que nos detuvieron por prostitución, Johan tuvo algo que verporque, curiosamente, el tipo apareció en los calabozos para decirle aMel que no le volvería arepetirquesealejaradesumujercita.
EncuantoJudterminódedecireso,Björnexplotó.Queríairenbuscadeaquellosmalnacidosyarrancarleslacabeza.¿PorquéMelnolehabíadichonada?Y,sobretodo,¿cómopodíahaberestadoéltanciego?
Veinteminutosdespués,cuandoconsiguierontranquilizaralgigantemoreno,JudithdijonerviosaporlacercaníadeEric:
—Escucha,Björn,ahoranoesmomentodearrancarlelacabezaanadie,sinodeencontraraPetery,después,contranquilidad,hablarconMelyentrelosdossolucionarloquetehecontado.
—Iréahablarconellaahora.—No.Ahorano—replicóJudith—.Estádescansando.Björnhizoademándeirpesealaadvertenciadeella,peroEriclosujetódelbrazo.—Como ha dicho Jud, siéntate. Mel no se va a mover de donde está y tiene que descansar.
Recuerdaqueestáembarazadaynecesitamimosytranquilidad.Aloíreso,Judithsuspiró.¡Siélsupiera!Pero,alsentirsuapoyoenesemomento,sevolvióycon
unatristesonrisadijo:—Voyaprepararunajarradetila.Creoquetodoslanecesitamos.Luegodiomediavueltaydesaparecióenlacocina.Acalorada por todo lo que había contado y por la cercanía de Eric, Jud estaba cogiendo los
sobrecitosdetilacuandooyó:—¿Porquénomedijisteamíloquepasaba?Yopodríahaberhechoalgo.Judithcerrólosojos.Ericestabaaescasospasosdeella,perorespondiósinmirarlo:—Melmeloprohibió.Ensilencio,continuóconloquehacía,perodeprontonotócómoaquelgiganteseacercabaasu
espalday,alsentirloaunosmilímetrosdeella,sepusotensa,ymáscuandooyó:—Jud,tenecesito.Cerró los ojos. Ella también lo necesitaba, pero rápidamente las imágenes deGinebra y de él
sobreelcolumpio,besándose,tocándose,inundaronsumente;sediolavueltaysinmirarlo,replicó:—Apártateparaquepuedasalir.Elalemánnosemovió.Clavólosojosenellaymurmuró:—Jud...—Hedichoqueteapartes—insistió.Convencido de que había perdido la batalla, Eric hizo lo que ella le pedía y ésta, sin querer
conectarconsusojos,semarchó.Desesperado,élseapoyóenlaencimeradelacocinadeBjörn.Lanecesitabatantocomorespirar
pero, consciente de que su situación era la que era y de que estaba allí para ayudar a su amigo,
regresóasuladoy,sentándosejuntoaél,murmuró:—Tranquilo,Björn.Todosesolucionará.LashoraspasabanyPeternoaparecía;¿dóndesehabríametido?Björn y Eric estaban en el salón, yMel y Jud en la habitación. Se hallaban divididos en dos
grupos:ellosyellas.Adiferenciadeotrasocasiones,noestabanjuntosanteungranproblema,ynolepasóporaltoaningunodeellos.
¿Quélesocurría?JudithestabatumbadaenlacamajuntoaMel,tocándosesudedodesnudo,cuandoéstadijo:—Noquieronipensarenlalunademiel.Peterparamíesmásimportantequeesafrivolidad.¿Y
sinoaparece?¿Ysiyanoquierevivirconnosotros?—Tranquila—insistióJudith—.NopiensesenelloysépositivaenrelaciónconPeter.Recuerda
quelapositividadllamaalapositividad.Desesperada,Melselimpiólaslágrimasquelecorríanporlasmejillas.—Tendríasquehabervistosumirada.PeterestabahorrorizadoporcómoBjörngritaba.Elpobre
lepidióperdón,peroBjörnestabafueradesíynoloescuchabay...—Habíabebido,Mel.Noquierojustificarlo,peroBjörnhabitualmentenobebey...—Losé.Eslaprimeravezquelohevistoasí,yesperoquesealaúltimaoestematrimonioestá
abocadoalfracaso.Elsilencioseinstalódenuevoentreellas,hastaqueMelpreguntó:—¿Quédíaeshoy?—Martes—susurróJudith.Melcerrólosojosypensó.RecordabahaberhabladoconPetersobrelugaresadondeélsolíair
cuandovivíaconsuabueloy,mirandoaJud,dijo:—Hehabladomilvecesconél,peroahoranoconsigorecordarlossitiosadondemedijoque...
Estoytotalmentebloqueada.—Tranquila,Mel...Tranquila.Depronto,eliPhonedeMelvibró.Habíarecibidounmensaje.Judyellasemiraronalverlafoto
dePeterenlapantalla.Laextenienteseapresuróacogerelmóvilyleyó:
Mel,estoyenlapuertadelacalleconLeya;¿podemossubirlosdosacasaoBjörnsigueenfadado?
Ambassemiraronylosojosselesllenarondelágrimas.Apesardetodo,elmuchacholosquería
ylosnecesitabay,abrazándose,sonrieronyselevantaronpresurosasdelacama.Al verlas aparecer, Björn y Eric las observaron, y Mel, caminando hacia el abogado, dijo
mientrasleenseñabaelmensaje:—Peterhavuelto.Ahoratododependedeti.Björnloleyóy,emocionado,selevantórápidamente,laabrazóymurmuró:—Cariño,perdóname.Soyunbocazasy...Tapándolelaboca,Melasintió.Sinduda,ellayalohabíaperdonadoy,conunasonrisa,dijo:—Vamos.Veabuscarlo.Sinperderun segundo, elguapoabogadoBjörnHoffmanncorrióhacia lapuerta enbuscadel
muchacho.Alverasuamigosaliryalasdosemocionadasmujeres,Ericlasabrazóymusitó:—Tranquilas,Björnlosolucionará.Elabogadocogióelascensoratodamechay,cuandosalióalacalle,elcorazónleibaamil.Al ver a Peter parado en la acera con la perra, una extraña paz se apoderó de él. Ambos se
miraron,yBjörn,sinperderunsegundo,caminóhaciaelcríoque,alverloacercarse,dijo:—Losiento.Prometoqueteconseguiréesoscómicsy...Peronopudodecirmás.Trasllegarhastaél,Björnloabrazóy,contodosuamor,murmuró:—Nomepidasmásdisculpasyperdónametúamí.ÉstaestucasayladeLeya,ynuncamáslo
vuelvasadudar,¿entendido,hijo?Elmuchacho,conunacálidasonrisa,asintióysiseóporprimeravezensuvida:—Deacuerdo,papá.Aloíreso,elcorazóndeBjörnseinflamóy,trasunosminutosenlosqueambosseprometieron
cientosycientosdecosas,subieronjuntosacasa,dondefueronrecibidospor todosconabrazosypalabrasemocionadas.
Ya amanecía cuando Jud y Eric semarcharon y Peter semetió en la cama. Bea, que se habíaquedadoapasarlanocheparaatenderaSami,lesdijoqueseacostaran,queellallevaríaalaniñaalcolegio.
Agotados,MelyBjörnasintierony,cuandocerraronlapuertadesucuarto,Melcaminóhaciasuladodelacamay,allevantarlamiradayencontrarseconladeél,declaró:
—Sientomuchoquetusueñono...—Cariño—la cortó Björn—, te aseguro que voy a hundir a esos tipos, no por no haberme
aceptado amí en sumaldito bufete, sino por elmal que hayan podido hacerte a ti, amis hijos oinclusoaLouise.
Aloíreso,Melsonrió.Sinduda,Judithhabíadichotodoloqueellallevabamesesguardándoseparasíy,recordandoalgoqueLouiselehabíacontado,murmuró:
—Johan siemprecreyóqueyo sabíamásde loque sé.Hace tiempoLouisemedijoque Johanguarda en su ordenador documentos comprometedores para ese bufete y unas fotos de unasfiestecitasprivadasenlasqueestánGilberty...
—¿Estásseguradeloquedices?Melseencogiódehombrosyafirmó:—EsomedijoLouise.Yonolohevisto.Yayer,cuandohablasteconella,dijoqueteníaunasen
lamanga,¿lorecuerdas?Björnasintió.Recordabamuybienlaspalabrasdeaquéllay,aunquehabíanllamadosuatención,
nohabíaqueridoahondareneltema.Traspensarduranteunossegundosenaquello,afirmó:—PorsuerteparaLouiseyparamí,tengoalmejorhackerdelmundoencasa.—¡Björn!—exclamóellasonriendoaloírlo.—Creoquevoyatenerquepedirleayudaamihijoparahundiraesosbastardos.Ambosrieronhastaqueél,sinpoderesperarunsegundomás,murmuróabatido:—Oye,Mel...,yo...—Eh..., eh..., eh...—lo cortó ella y, cuando vio que la miraba, indicó—: Lo de hoy no puede
volverarepetirseoteaseguroque,igualquemecasécontigo,medescasoperoya,¿entendido?—Él
asintióyMelaprovechóparadecir—:EncuantoalodelviajeaParís,quedaanulado.Noquieroirporque creo que no es el momento. Con lo que acaba de ocurrir, me parece que lo que menosconviene ahora es que tú y yo nos marchemos y dejemos a Peter con mis padres, que son dosextrañosparaél.¿Nocrees?
El abogado sonrió.Él también lo había pensadopero, comono estabadispuesto a renunciar aaquelviaje,propuso:
—¿Ysinos llevamosaPeteryaSamiconnosotros?—Aloíreso,Mel lomiróyélañadió—:PodríamoscambiarParísporunviajeaEurodisney.Podríaserdivertido,¿nocrees?
Melparpadeósonriendo,yél,alsentirquetodoestababienconlamujerqueadoraba,insistió:—Pospondremosnuestrorománticoviajedelunademielparamásadelante.¿Quéteparece?—Mepareceunaideaexcelente—dijoella.Duranteunos segundos ambos semiraron a losojos, y el abogado, pesarosopor loocurrido,
susurró:—Losiento,amor.Sientotodoloquedijey...—Olvídalo.Nomerecelapena.AtormentadoporloqueJudithlehabíacontadoperodispuestoasolucionarlo,bordeólacama,se
pusoasuladoy,cogiéndoleelrostroentrelasmanos,murmuró:—Misueñoerestú.Nada,absolutamentenada,estanimportantecomotúylosniños,yteaseguro
quemañanaGilbertHeinevaatenerqueescucharcuatrocositasquenolevanagustarydespuéslosvoyahundir.Pero,porfavor,prométemequenuncanuncanuncavasavolveraocultarmealgocomoloocurrido.
Melasintióy,conunacandorosasonrisa,susurró:—Teloprometo,peroahorabésameycállate,idiota.Björn,aloíreso,supoquetodoestababieny,cogiendoentresusbrazosalamujerqueamaba,
hizo lo que ella le pedía, sabiendo que al día siguiente, cuando se levantara, Gilbert Heine y sumalditobufeteseibanaenterardequiéneraBjörnHoffmann.
60
Tras un extrañodía en el que duermo a ratos, cuandome levantoSimonamedice queEric se hamarchadomuypronto.
Tanrápidocomomedespejo,habloconMely,entrerisas,medicequeBjörnyEric,juntoconella,han idoalbufeteHeine,DujsonyAsociadosyque laquehan liadoallíentre losdoshasidocomopoco¡impresionante!
Imaginar a Björn y a Eric juntos en un momento así irremediablemente me llena de orgulloporque sé que esos dos titanes, el rubio y el moreno, son indestructibles y peligrosos. Muypeligrosos.
¡Quérabiahabérmeloperdido!Mel tambiénmediceque,antesde iralmalditobufete, trashablarconLouiseyésta facilitarle
cierta información, Peter ha pirateado sin problema alguno el ordenador de Johan y lo que hanencontrado allí, sin duda, le va a hacermucha pupa a esa pandilla. Eso vuelve a hacerme reír, esevidentequeesosfrikisdelaabogacíanosabenconquiénsehanmetido,ynodudodequeBjörnlosvaamachacar.
Durante el resto de la mañana, disfruto de mis niños. Son tan maravillosos que todo,absolutamente todomerece lapenaporverlossonreír,ycuandoestoyconErichaciendounpuzle,suenamimóvily,alverquesetratademisuegra,locojoyescucho.
—¿Quéhaces,hija?Miroamipequeñorubiotanparecidoasupadrey,trasresponderle,medice:—¿PorquénotevienesacasadeMarta?Estamosmontandounadichosacuna,yunadedos,o
nosotrassomosmuytorpes,oalacunalefaltanpiezas.Divertida,despuésdecolgarlepidoaPipaquesesienteconelpequeño,suboamihabitación,me
pongounosvaquerosyunacamisetay,cuandollegoalgaraje,mequedomirandolabonitaBMWdeEricy,sinquererpensarenmiembarazo,susurro:
—Vámonosdepaseo,preciosa.Sindudarlo,cojoelcascogris,lasllavesy,trasarrancarelmotorysalirdelaparcela,doygasy
mevoyatodamecha.Lasensaciónquetengoesmaravillosa.Miraquemegustaconducirunamotoy,sonriendo,me
dirijoalacasadeMarta.Unavezaparco,laporteradeledificiodemicuñadasaledelaporteríaalverme,caminahaciamíydice:
—Noseasuste,Judith,perounaambulanciaseacabadellevaraMartayasumadrealhospital.—Pero¿quéhapasado?—preguntoangustiada.Lamujer,congestoconfuso,murmura:—Alparecer,Martaharotoaguas.
Conmocionada, me preocupo. Marta sólo está de siete meses y medio. Después de darle lasgraciasalamujerporlainformación,doymediavuelta,corrohacialamotoymedirijoalhospitalamilporhora.
Cuandollego,entroatodaprisayconelprimeroquemeencuentroesconEric.Asuladoestásumadre.Paranovariar,mialemánestádescompuesto.Conloqueloasustanloshospitales...Alverme,caminahaciamíydice:
—Martaestáteniendoelbebé.Leestánpracticandounacesáreadeurgencia.Elagobioestálatenteensurostro.Megustaríaabrazarlopero,conteniendomisimpulsos,pongo
unamanosobresubrazoymurmuro:—Tranquilo.Todovaasalirbien.—Perosóloestádesietemesesymedio—insiste.Asiento,sémuybiendecuántotiempoestá.Intentandoquedejedepensarenlopeor,exijo:—Eric,mírame.—Unavezclava losojosenmíyamímeentranunascagalandrasdemuerte,
comopuedodigo—:Martaestáenelmejorsitiodelmundoytodovaasalirbien,¿entendido?Mialemánasiente,enelmomentoenelquemisuegraseaproximacomounamotoymurmura:—Ay,Dios,quéangustia...,quéangustia.Abrazo a Sonia y, tras tranquilizarla como instantes antes he hecho con su grandote hijo, los
animoairalasaladeespera.Sinduda,nopodemoshacerotracosa.Duranteelratoqueestamosallíjuntoaotrosfamiliares,cadavezquesaleunpadreconcarade
orgulloporhabervistoasubebé,misuegramurmuraemocionada:—Nohaynadacomolallegadadeunbebéaunhogar,¿verdad?Yoasiento.Ericmemiray, cuando laspuertas se abrendenuevo, salemi cuñadoconcarade
felicidady,dirigiéndosehacianosotros,dice:—Martaestábienylapequeñinatambién,aunquesólohapesadodoskilosdoscientosgramos.Sonialoabraza,yosonríoy,sinsaberporqué,abrazoaEric.Sentirsuaroma,sucercanía,me
subelamoraly,cuandomeseparodeél,memirahastaqueyodejodehacerlo.Trasfelicitaralpadredichoso,esperamosunratitoyfinalmentenosavisandequepodemospasar
porelnidoparaveralapequeñita,queestáenunaincubadora.Con la felicidad en nuestros rostros, cuando nos dicen quién es la pequeña Ainhoa, todos
sonreímoscomoidiotasy,comosilaniñanosoyera,comenzamosahablarenballeno.¡Vayamaniítaquetenemoslosadultosdehacereso!A través de los cristales, conmimóvil grabo un vídeo de la pequeña para queEric yHannah
conozcanasuprima.Esmuychiquitita,pero la tíanoparademoversey,por loqueoigo,parecetenerunosbuenospulmones.¡OtraHannah!
Eric,queestáamilado,emocionadoporconocerasusobrina,seagachaydice:—Espreciosa,¿verdad?Asiento,sonríoy,debuenhumor,murmuro:—EsunaZimmerman,corazón.¿Corazón?¿Porquéhedichoesotaníntimo?Ambosreímosporaquello,yentoncesnosavisandequeMartayaestáenlahabitación.Alentrar,
micuñadalloriquea,quiereverasupequeña,peronoladejanlevantarse.Lehanhechounacesáreay
estámuydébil.Entonces,meacercoaellay leenseño lagrabaciónquehehechode laniña.Ella,emocionada,lamiraunayotravez.
Traspasarvariashorasenelhospital,Ericyyodecidimosirnos.Martaestáagotadaynecesitadescansar,yallísequedanconellamisuegrayelreciénestrenadopadre.
Ensilencio,Ericyyosalimosdelahabitaciónynosencaminamoshaciaelascensor.Unavezallí,rodeadospormásgente,nuestroscuerposchocany,antelamiradadeEric,memuevoydejoqueunaseñoramayorseinterpongaentrelosdos.
Sucercanía,comosiempre,medesconcierta.Sigotremendamentebloqueadaporloocurridoy,aunqueyalogroentenderqueélnisiquieralorecuerdaniseentregódeformavoluntariaaello,soyincapazdeolvidar.
Unavezllegamosalaplantabaja,caminamosjuntoshacialasaliday,enlapuerta,Ericseparaydice:
—Tengoelcocheaparcadoallí.Yoasientoy,mirándolo,elcorazónmedaunvuelcoyafirmo:—Yotengolamotoalfondo.—¿Hasvenidoenmoto?Asientodenuevoy,conpicardía,meencojodehombrosymurmuro:—HecogidotuBMW.Ericsonríe.Nuncalehaimportadoquecojaesamotoy,clavandosusespectacularesojosenmí,
musita:—Conduceconcuidado.Asiento...,sonríey,cuandomedoylavuelta,mellama:—Jud...Mevuelvo.Nuestrosojosvuelvenaconectar,ydice:—¿Cenasconmigo?Oíresohacequeelvellodetodomicuerposeerice.Enelpasado,nuncahabríarechazadouna
proposiciónasíviniendodeél,peroniegoconlacabezayrespondo:—No.—Porfavor...—insiste—.Iremosadondetúquieras.—No,Eric,no.Noesbuenaidea.Sugestodedecepción lodice todo,perono insistemásy,asintiendo, seda lavueltaabatidoy
caminahaciasucocheconlasmanosmetidasenlosbolsillos.Acalorada,caminohacialamoto.Sinpararmeapensar,abroelbaúltraseroysacoelcasco,me
lopongoy,cuandoarrancoelmotor,salgodelparkingsinmiraratrás.Tengolacabezaembotada.AdoroaEric,perotambiénloodio.Mimenteesincapazdeolvidar
cómosebesaban,cómoseposeían,yesomeestámartirizandoyvolviéndomeloca.Cuandoparoenunsemáforo,deprontounpitidollamamiatención.Almirarhacialaderecha,
veoqueEricmeobservadesde el cocheyme sonríe.Yo sonrío también.El semáforo seponeenverdeyacelerolamotomientrassoyconscientedequeelcochequevadetrásdemíesconducidoporelhombrequeadoroyconseguridadestáobservandotodosycadaunodemismovimientos.
Unnuevosemáforomehaceparar.Miroamiderechaparaencontrarmedenuevoconlacarade
Eric,peroensulugarmeencuentroconladeunmuchachoquenotendrámásdeveinticincoaños.Alverquesoyunamujer,diceagritosdesdesucoche:
—¡Hola,guapa!—Hola—respondoyo.Elchicoadelantaunpocomáselcocheparavermemejor.PorelretrovisorobservoqueEricestá
paradoconsucochedetrásdemíy,alversugesto,sonrío.Yaseestácabreandoconeltipo.—¿Sabesunacosa?—diceelchico.Yolomiroy,conunapícarasonrisa,élmurmura—:Quién
fueramotoparaestarentretuspiernas.Merío.¡Menudodescarado!Menos mal que Eric no lo ha oído o le arranca la cabeza y, mirándolo, le guiño un ojo y
respondoconelmismodescarodeél:—¿Sabes?Demasiadamáquinaparatanpocomotor.Elchicosueltaunarisotada.Sinduda, tienesentidodelhumor.Cuandoelsemáforoseponeen
verde,doygasy,acelerando,mealejodeél.PorelretrovisorobservoaEricy,encuantoveoque,trashacerunquiebroconelcocheadelantaalchicoparaponerseamiderecha,sonrío.Noesperabamenosdeél.
Denuevo,unsemáforonospara.EstavezesEricquienestáamiderechay,porsugestoserio,yaséloquepiensa,ymáscuandoelmuchachoahoraestádetrásdemíypitaparallamarmiatención.
MisojosylosdeEricseencuentran.Noshablamosconellosy,sincontrolarmilocura,lehagosabercuántoloechodemenos.Lomirocomolohemiradocientosdevecescuandolevoyahacerelamory,alverlarespuestaensumirada,measusto.Deprontomeasustoy,cuandoelsemáforoseabre,aceleroregañándomeamímismaporloqueacabodehacer.
Pero¿porquéloprovocoasí?Esamiradaymisonrisalehandadoesperanzasy,alverquesiguetrasdemíporlacalle,séque
tengoquedesaparecer.Nopodemos llegar juntosacasauocurrirá loquedeseocon todamialmaperonoquieroqueocurra.
Dios,¡nohayquiénmeentienda!Aminoro lamarchaymepongoenelcarrilde laderecha.Ericsecolocadetrásdemíy,unos
metros más adelante,cuando él ya no tiene capacidad de reacción con el coche, hago una pirulabastantearriesgadaconlamoto,mesalgodelcarrilporelquevoyydesaparezcoatodavelocidad,impidiéndoleseguirme.
Nolehevistolacara.Nohesidocapazdemirarlopero,sinduda,elcabreoquedebedetenerenestosmomentoshadesercolosal.
Sinsaberadóndeir,salgoa laautopistayduranteunbuenratomedejollevarpormi locuraycorrocomollevabatiemposincorrer,sinpensarennadamás.Noquieropensar.
Asíestoyhastaque,enunacarretera,doymediavueltahaciendouncambiodesentido.Porsuerte,nomehaparadolapolicía,perosoyconscientedequealgunamultaporexcesodevelocidadllegará.Menudossonlosalemanesparaeso.Pero,mira,¡nomepreocupa!EricZimmermantienepastaparapagarmultasymuchascosasmás.
CuandodenuevoentroenMúnich,enunsemáforomiroelreloj.Espronto.Sólosonlasseisdelatarde.Callejeandoporesaciudad,alaqueadoro,llegocercadelcolegiodeFlyn,paroy,sinmeter
elcascoenelbaúl,decidoiraunbaratomarmealgo.Pidounacoca-cola.Estoysedienta.Entonces,depronto,mefijoenelhombrequehaysentadoa
unadelasmesasysonrío.EsDennis,elprofesordeFlyn,ytrasacercarmeaél,quenomehavisto,pregunto:
—¿Puedosentarmecontigo?Dennis, que está corrigiendo unos exámenes, sonríe al verme; quita su cartera de una silla y
murmura:—Porsupuesto.Unavezmesiento,nosmiramosypreguntaalvermicasco:—¿Motorista?Asientoorgullosay,señalandolaimpresionanteBMW1200RTnegraygrisqueestáaparcadaen
lapuerta,respondo:—Sí.Porsugesto,Dennisparecesorprendido.—¿Ytúpuedessolitaconesamáquina?—pregunta.Aloíreso,frunzoelceñoyrespondo:—Lo de los tíos es genético; ¿te puedes creer que acabas de preguntarme lo mismo que me
preguntóEriclaprimeravezquelepedídarunavuelta?—Dennissonríeyyoaclaro—:Tengounpadrequemeenseñómuybienamontarenmoto,ysoypequeñitaperotengofuerza.
Dennisasiente,vuelveasonreíry,alverquemecalloymequedomirandolamoto,pregunta:—¿TodobienconFlynencasa?Asiento.Noquierohablardelmuchacho,peroélinsiste:—Mealegrasaberlo.Laverdadesqueúltimamentehadadouncambioparabieny loveomás
integrado con sus compañeros y alejado de esas malas compañías. Creo que lo habéis logrado,Judith.Sinduda,launióndecolegio,psicólogoypadreshaconseguidoqueFlynreaccioneysedécuentadesuerror.
Saberaquellodemicoreanoalemánmegusta.Meencantasaberquesuactitudhacambiadoenelcolegio,aunqueintuyoqueelbruscocambiopuedaestaroriginadoporotracosa.
—¿Quéteocurre,Judith?—preguntaentoncesDennis.—Nada —digo y, dando un trago a mi coca-cola para cambiar luego de tema, pregunto—:
¿Tienesnovia?Segúndigoeso,merecuerdoamihermanaRaquel.Pero¿cómoesquesoytancotilla?Entonces,veoqueDennissonríey,guiñándomeunojoconcomplicidad,responde:—Tengo amigas. De hecho, he quedado aquí con una de ellas para ir a tomar algo. Si te soy
sincero,soyuntipodemasiadocomplicadoparaqueunamujerseenamoredemí.Esomeprovocarisa.¿Complicado,él?Y,sinpararmeapensar,respondo:—Puesquesepasquelostiposcomplicadossonlosquenosvuelvenlocasalasmujeres.—Vaya...,esbuenosaberlo—semofa.Acontinuación,trasrecogerlospapelesquetienesobrela
mesa,dice—:HacetiempoquenoosveoaEricyatiporelSensationsy...—Vale—locorto—.Noestamospasandoporelmejormomentodenuestrarelación.Dennismemira.Noesperabaloquehedichoy,clavandosusojazosnegrosenmí,murmura:
—Ericytúhacéisunafantásticapareja,ylasfantásticasparejashandehablarparaentenderse.—Yoresoployélañade—:Cuandoencuentrasatuparejaideal,noquieresdejarlaescaparymásenelmundilloenelquenosotrosnosmovemos.Y...
—Hola,Dennis,¿llegotarde?Allevantarlavista,meencuentroconunamujerrubiaquenosmira.Debedeserlaamiguitacon
laquehaquedado.Dennisseponeenpie,ledaunbesoenloslabiosyresponde:—Tranquila,Stella.Hasllegadoalahora.Lamujermemira.Noentiendequéhagoyosentadaallí,yentoncesDennisdice:—Stella,tepresentoaJudith.Judith,ellaesStella,miamiga.Lasdosnossaludamosconcordialidad,peroveoensusojoslomismoqueotrasdebendeveren
losmíoscuandoseacercanamiEric.Entonces,Denniscogesucarterayseñala:—Hedeirme,Judith.Perohasidounplacerhabertevisto.—Lomismodigo—respondomientrassonríoylomiro.Cuando sevan, sigo tomandomi coca-cola.A travésde las cristaleras, veoa aquellosquehan
salidodel localdirigirsehaciauncoche rojo.Dennis loabre, lachicasubeyél, trasdecirlealgo,caminadevueltahaciaelbar,entraymedice:
—Heconocidoapocoshombresenamoradosdeunamujer,perocréemecuandotedigoqueEricesunodeesospocos.Habladyarregladloqueospase,porqueestoyconvencidodequeunahistoriacomolavuestranoseencuentratodoslosdías.
Dichoesto,meguiñaelojoysemarchadejándomeconcaradetonta.¿TantomequiereEricquelagentelove?Y,depronto,sinsaberporquéllevolasmanoshastamibarriga.Porsupuestoquemihistoriaconelamordemividaesalgoespecial,tanespecialcomoelbebé
que crece enmi interior y al que tengoque comenzar a cuidar.Y, sin poder remediarlo, sonrío ymurmuromirándomemiinexistentetripa:
—Tranquilo,gamusino.Mamátequiere.Variosminutosdespués,encuantoacabomibebidavuelvoalamoto.Lamiro.Laadmiro,pero
me arrepiento de haberla cogido enmi estado; ¿en qué estaba pensando? Sin embargo, como noestoydispuestaadejarlaallí,memontoconcuidadoyregresoacasasincorrernihacerlocuras.
Trasllegarymeterlamotoenelgaraje,estoyquitándomeelcascocuandoEricsaleenmibuscay,sinquitarmelavistadeencima,medice:
—Estabapreocupadoporti.Lomiro,quieroabrazarlo.Élesmibonitahistoriadeamor,peroalgomefrena,ydoyunpaso
atrásparaalejarmedeél.Porincreíblequeparezca,nomeregañaporlapirulaquelehehechoenlacarreteraconlamotoparadespistarloy,encogiéndomedehombros,respondounescueto:
—Yaestoyaquí.Ericnohabla,ensusojosveoqueledueleladistanciaquepongoentrelosdos.Sinagobiarme,
dejaqueentreencasaymedirijoalacocina.Élcontinúasucaminoyoigoqueentraensudespachoycierralapuerta.Aquellonoestásiendofácilparaningunodelosdos.
Simona,queeneseinstanteentraenlacocina,memira;nodiceloquepiensademimiradanideEric,perocomenta:
—Lospequeñinesyaestándormidos.Sonríoencantada.Laabrazoymurmuro:—Gracias,Simona.Graciasporestarsiempreamilado.Lamujerme abraza emocionada.Me aprieta contra su cuerpo y yo sonrío. Todavía recuerdo
cuandoyolleguéaaquellacasayunabrazoeracomopocotabú.CuandosalgodelacocinaypasopordelantedeldespachodeEric,meacercoalapuertay,aloír
queestáescuchandoaNorahJonescantarLoveMe,[38]elcorazónmedaunpellizquito.Apoyo la frente en la puerta oscuramientras escucho esadulce canciónymimentevuela a la
últimavezquelabailéconmiamor.Losojossemellenandelágrimas, losrecuerdosinundanmimente y las lágrimas me desbordan. Eric, mi Eric, está tras esa puerta sufriendo como estoysufriendoyo,peroyosoyincapazdeabrirlapuertayolvidar.
¿Quémepasa?¿Porquéestoytanbloqueada?Estoysumidaenmidesgraciacuando,depronto,oigoamiespalda:—Mamá.Rápidamentemedoylavueltay,alveraFlynmirándome,mesecolaslágrimasquecorrenpor
mismejillasy,cuandovoyadecirunodemisborderíos,elcríomurmura:—Vale.Séquenomerezcollamarteasí,pero...Separándome de la puerta del despacho,me acerco a él y, cuchicheando para queEric no nos
oiga,afirmo:—Exacto,nolomereces;yahora,sinoteimporta,noquierohablarcontigo.DolidaporloquemicorazónsienteporaquellosdosZimmerman,meencaminoalsalónycierro
lapuerta.Quieroestarsola.Mesientoenelsillónquehayjuntoalachimenea,peroentoncesoigoquelapuertaseabrey,segundosdespués,Flyn,sindarmeopción,sesientaamilado.
ComomehanenseñadolosZimmerman,lomiro...,lomiroylomiro,yfinalmentepregunto:—¿Quéquieres,Flyn?Elcríoseretuercelasmanosnervioso.—Perdóname.Ahoraquenomequieres,medoycuentade lomalquemeheportadocontigo,
cuandotúsólointentabasprotegermeyayudarme.Boquiabierta lo observo. ¿Cómo que no lo quiero? Lo quieromás que ami vida, pero estoy
enfadadaconély,cuandovoyaresponder,prosigue:—Fuiuntonto.Medejéllevarpormisnuevasamistadesylacagué...,lacaguécontigo,conpapá,
contodo.Elkemegustabamucho,medejéllevarporellay,queriendoimpresionarla,mevolvíunchulo.Ellaodiaasumadrastra,nuncahatenidobuenarelaciónconella,yyo...yo...quiseodiarteatiparaqueellavieraqueestábamosenlamismasintonía.
Saberlaverdaddetodoloocurridohacequepuedarespirar.Porfinentiendoelporquédetodoaquello,peronopuedohablarcuandoFlynprosigue:
—Terobé,hicecosashorriblescontra tiy tegritéquenoerasmimadrecuandosí loeres.Túereslaúnicamadrequetengoporquesiempremehasqueridoincondicionalmenteapesardelomalqueme he portado contigo. Hablé con papá, le conté toda la verdad, y él me aconsejó que te locontaraati.Dijoque,aunquenomeperdonaras,teníaquehablarcontigoy...y...Porfavor,mamá,sinoquieresperdonarme,nolohagaspero,porfavor,arreglalascosasconpapá.Pormiculpaestáis
mal,yesome...me...Por favor—suplica—.Noospodéisseparar,vosotrososqueréis,osqueréismuchoy,silohacéispormiculpa,EricyHannahnuncamelovanaperdonar.
Conlaspulsacionesadosmilporhora,escucholoqueaqueladolescentealquetantoquierodicemientras el cuello comienza a picarme. La súplica en sus ojosme atormenta,me atormenta tantocomoaél,yrespondo:
—Loquenospasaatupadreyamínoesculpatuya.—Loes—afirmamientraslaslágrimascomienzanacorrerleporlasmejillas—.Todoesculpa
mía.Intentédesesperaros,llevarosallímite,ytodoporqueelpadredeElkeseseparódesumadrastrayyopenséque,siconseguíalomismo,ellame...
—Diosmío,Flyn—murmuroaloírlo.Elcríollora.Lloradesconsoladamentemientrasmesuplicaquesolucionelosproblemasconmi
amor.Lomiro.Ojaláfueranlascosastanfácilescomoélpareceverlas.Diezminutosdespués,incapazdepermitirqueelsigapensandoquetodoesculpasuya,comoen
sumomentolehicecreerconmifuria,suspiroymurmuro:—Flyn,escúchame...—No,mamá,porfavor,escúchametúamí.Yo...yonopuedopermitirquepapáytúosvayáisa
separarpormiculpay...Nolodejocontinuar.Necesitoabrazarlo.QuieroaFlyncontodamialma,apesardeloqueme
hacontado.Esminiño,soysumadre,ytodoesperdonablecuandosetratadeél.Veoquemiabrazolosorprendetantocomomesorprendeamíy,cuandosientoquemeaprietacontrasícondemasiadafuerza,murmuro:
—Flyn...,meahogas.Elcríocedeensufuerza,perosinsoltarmesusurra:—Tequiero,mamá...Perdóname,porfavor... Iréauncolegiomilitarsi túypapáqueréis,pero
perdóname.Sus palabras y cómo lo siento temblar pueden conmigo. Creo que la vida, con lo que nos ha
pasadoaEricyamí,lehadadounrevésalmuchachoquelehaabiertolosojos.Y,comosoyunablandengue,finalmenteasiento.
—Estásperdonado,cariño.Esonuncalodudes.Mispalabrasnosemocionan,ymishormonas,quenoestánmuyserenas,serevolucionan.Para
relajarelmomento,cuchicheoseñalándomeelcuello:—Yahorapara...omellenaréderonchones.Flynmemirayveoensusojoslatranquilidad.Yomerascoelcuello,mepicaunabarbaridad.
Entoncesél,apartándomelamanodelosronchones,dice:—Noterasquesosepondrápeor.Esomehacesonreíry,cogiéndolelabarbillaaminiño,murmuro:—Flyn,yaeresmayor,ycreoquehassidocapazdedartecuentade losquebraderosdecabeza
quenoshaspodidoocasionar.—Élasienteyyosentencio—:Estonopuedevolverapasarnuncamás.Simañanateenamorasdeotrachica,tienesquetenertupropiapersonalidad,porquequientequieratienequequererteporti,noporloqueveareflejadodeellaenti.¿Entendido?
—Heaprendidolalecciónyteloprometo,mamá.Nuncamás.
Asiento.Loabrazodenuevoyéstedice:—Ahora tienes que hablar con papá. Tú no estás bien, él no está bien, y tenéis que hablar. Tú
siempredicesesodequehablandoseentiendenlaspersonas.Sonríocontristeza.—Escucha,cariño.Danostiempoatupadreyamíy,paseloquepase,nuncadudesdequelosdos
tequeremoscontodonuestrocorazónydeseamoslomejorparati.Y,recuerda,túnohastenidonadaque ver en lo que nos ocurre. Los adultos, a pesar de que nos queramos, en ocasiones tenemosproblemasy...
—Peroyonoquieroqueosseparéis.Suspiro.Elcuellomearde.Yotampocoloquieroy,cuandovoyaresponder,lavozdeEricdice:—Flyn,escuchaatumadre.Haremostodoloposibleparasolucionarnuestrosproblemaspero,
porfavor,respetaquedecidamoslomejorparatodos.LavozdeEricysuspalabrasmellegandirectamentealcorazón.Nolohabíavisto.Nisiquierasé
cuándohaentradoenelsalón.Entonces,elcríoasiente,vuelveaabrazarmeymurmura:—Meencantaqueseasmimadre.Dichoesto,selevantay,trasdarleunabrazoaEric,sevadelsalóndejándonosalosdossolosy
descolocados. Mis hormonas pugnan por reventar de nuevo y llorar como una loca —¡necesitollorar!—cuandoEric,sinacercarseamí,susurra:
—GraciasporescucharyperdonaraFlyn.Asiento.Nopuedohacerotracosa,einsiste:—Ahorasólofaltaquemeperdonesamí.Laangustiamepuede.Siabrolaboca,mevoyaecharallorarcomounchimpancé,yEric,quelo
sabe,alverquenodigonadamemiracontristezayfinalmentesedalavueltayseva.Cuandooigoquelapuertadelsalónsecierrayestoysola,cojouncojín,melopongoenlabocayllorocomoelmásfeochimpancépordosmotivos.Elprimeroesdefelicidadporhaberrecuperadoaminiño,yelsegundo,detristezapormiamor.
Al día siguiente, por la mañana, voy con Mel y los pequeños al parque. Allí, entre risas ylágrimas,lecuentoamiamigalohabladoconFlynylasdoslloramos.Estamossensiblonas.
Por la tarde, tras despedirnos porque ambas nos vamos de viaje—ella con toda la familia aEurodisneyyyoaJerez—,cuandollegoacasa,Ericyaestáallí.Salearecibirnosylosniñoscorrenalverasupadre.Flyn,queestáconél,caminahaciamíalvermeymeabraza.Encantada,aceptosuabrazodeoso.
Cuando los abrazos terminan, Eric me mira a la espera de que haga o diga algo, pero yosimplementemelimitoasonreíryaentrarenlacasa.Quierobañaralosniñosyacostarlospronto.AldíasiguientenosvamosaJerez.
Trasdarlesdecenar,Pipaselosllevaalacamayyodecidoentrarenelvestidorparameterlaropaenlasmaletas.
Quieroquemisniñosesténpreciosos,yríoalpensareneltrajecitodeflamencaquemipadrelehacompradoaHannahenrosaconlunaresblancos.Vaaestarparacomérsela.
Mientrasseparolaropa,escuchoamiAlejandro.Sinduda,sumúsicaysusletrassonpartedemivida,ycuandosuenaAquenomedejas,[39]medejocaerenlacamaytarareolacanción,mientras
sientounpellizquitoenelcorazónaldecircosascomo«aqueteenamorounavezmásantesdequelleguesalapuerta».
Oh,Dios..., cómome tocaenestemomento la letra.Ericmequiere.Meadora.Él esquienmearropa,yestoyconvencidadeque,adíadehoy,comodicelacanción,hastamecuentalaspestañasmientrasduermo.
Niquedecirtienequeyoloquieroyloadoro,peroestoytanenfadada,tanbloqueadaportodoloocurridoque,sinsaberporqué,necesitoescapardesuladoyecharlodemenos.
Eric,elduroEric,enlasúltimassemanashavueltoaserelEricquemeenamoró.Porsupuestoquemedoycuentadetodo,perohayalgoenmí,llamémoslocabezonería,decepciónovetetúasaberqué,quenomepermitedarunpasoatrásparavolveraintentarlootravez.
Pero¿quémeocurre?—Hola.Ericirrumpeenlaestanciay,mirándolo,respondo:—Hola.Eric,migrandullónrubio,entraenelvestidorydice:—Hehabladoconelpilotodeljetyhequedadoconélalasnueve;¿teparecebuenahora?—¡Perfecta!—asiento—.Cuantoantessalgamos,antesllegaremos.Ericsesientaenunadelassillas.Atravésdemispestañas,veoquemiraelsuelo,juntalasmanos
ydicemientraslavozrotademiAlejandrosiguecantando:—Siemprenoshagustadoestacanción,¿verdad?—Sí.Uf...,elcuello.Yacomienzaaarderme.—Jud...,yo...Meechoatemblary,antesdequediganadaquehagaresquebrajarmitocadocorazón,lomiroy
replico:—No,Eric...,ahorano.—¿Porquénomedejasintentarlo?Sabesquetequiero.—Ahorano,Eric—repito.—¿Porquénomeperdonas?¿Porquéteempeñasennoentenderqueyonopropiciéloquepasó?
—preguntaclavandosudolidamiradaenmí—.¿Acasoyanomequierescomotequieroyoati?EricpreguntándomeesoymiAlejandro cantando aquellode«Aquenomedejas»;[40] ¡voy a
explotar!SidealgoestoyseguraenestavidaesdequeestoytotalycompletamenteenamoradadeEricysé
que,simeabraza,simetoca,comodicelacanción, todasmismurallascaerán.Perono,nopuedoconsentirlo.Estoydolida,muydolidaporloocurrido.Aunasí,mirándolo,afirmo:
—Claroquetequiero.—¿Entonces?—Eric,cadavezquecierrolosojos,laimagendeGinebraytújuntos,besándoos,aparecey...no...
nomedeja...Ericmemira...,memiraymemira,yfinalmente,dándoseporvencido,asiente.—Yonotengoniunsoloinstantecontigoquequieraolvidar.Cierrolosojosytesientoamilado
besándomeconamorydulzura.Cierrolosojosyteveosonreírconnuestracomplicidaddesiempre,ymedesesperocuandolosabro,teveoysientoquenadadeesoocurreya.
Suspalabrasmetocanelalma.EricZimmermansabellegarme,yséquelacancioncitaysuletraleestátocandoelcorazóncomo
amí.Cuandovoyaresponder,selevanta,caminahaciamíy,parándoseaescasosmilímetrosdemicuerpo,sintocarme,sinrozarme,murmura:
—Comodicelacanción,voyahacertodoloposibleparaquerecuerdesnuestroamoryaprendasaolvidar.Necesitoqueentucabezaestemossólotúyyo.Sólotúyyo,miamor.
Atontada,asiento.Suolor..., sucercanía..., suvoz..., sumirada..., suspalabras..., lacanción, todoesounido,paramí,quesoyunaromanticonaempedernida,esunabombaderelojería,mediceloquetantonecesitoescuchar.Sinembargo,clavándomelasuñasenlaspalmasdemismanos,regresoalarealidadymusito:
—Nosésiloconseguirás.Miamorlevantalamano,lapasaporelóvalodemicara,cogemibarbillacondelicadezaentre
sus dedos y, cuando creo que me va a besar, sus ojos y los míos conectan y murmura antes demarcharse:
—Eresmipequeña,tequieroyloconseguiré.Cuandoaqueltitánrubiodesaparecedemilado,mefaltahastaelaire,ymelodoyconlamano.Ofú,¡quemeda...,quemeda!Sinduda,Eric,elEricZimmermanquemeenamoró,siguesiendoaquelalemány,sinsaberpor
qué,sonrío.Decidido,¡soyunagilipollas!
A lamañana siguiente, a lasochoymediaya estamos en el hangar.Erichabla con el pilotoyobservoquenosonríe.Notienemotivosparasonreír.
Unavezhaestrechado lamanodelpiloto,elpequeñoEriccorrehacia supadreyéste locogeentresusfuertesbrazos,lobesay,caminandohaciamí,looigoquedice:
—Pórtatebienynoledesmuchaguerraamamá,¿entendido?—Vale,papi—oigoquerespondeelmico.Actoseguido,Ericsueltaalpequeñín,quesubealaviónconPipa.Yo,conHannahdormidaenmis
brazos,voyasubirtambiéncuandoEricmeparay,clavandosusojosenlosmíos,dice:—Pásalobien.—Loharé—afirmointentandosonreír.Sientocómonuestroscorazoneschocanalmirarnosy,finalmenteélsusurra:—Tevoyaechardemenos.—Yyoati—asientosinquererocultárselo.Nosmiramos...,nosmiramos...,nosmiramos...,hastaquemiseximaridosusurra:—Memueroporbesarte,peroséquenohedehacerlo.—No.Nolohagas.Pipa sale del avión,mequita aHannahde los brazos y, cuando se la lleva,Eric, que no se ha
movidodemilado,insiste:—LlámamecuandolleguesaJerez.—Deacuerdo—respondocomounaidiota.Dios...¿Porquéelerotismodemimaridopuedeconmigo?Vale.Estoynecesitadadesexoyelembarazonoloestáponiendofácily,encuantosuboelprimer
escalóndelaescalerilladelavión,sientolasmanosdeEricenmicintura.Luegomedalavueltay,acercandolabocaalamía,mebesa.Elbesoduraapenasunafraccióndesegundoy,tanprontocomonuestrasbocasseseparan,parpadeoatontadacuandoélapoyalafrenteenlamíaylooigodecir:
—Losiento,cariño,losiento,perolonecesitaba.Asiento...,asientocomounaimbécily,sindecirnada,mevuelvoysuboelrestodelaescalerilla
mientrasmesientolaabejaMayacantandoaquellode«Enunpaísmulticolor...».[41]Repito:¡soygilipollas!Minutosdespués,yunavezestamostodossentadosenelavión,observodesdelaventanillaami
imponentemaridoapoyadoensucochecongestoserioylosbrazoscruzadossobreelpecho.Y,sinsaberporqué,sonríomientraslaslágrimascorrenpormismejillas.
61
¡VivaEspaña!¡YvivaJerez!Hellegadoamitierray,encuantobajodeljetyveoamipadreesperándomeconmisobrinaLuz,
sonríoycorrohaciaellos.Necesitosuabrazo.Losnecesito.—Mimorenitayallegó—murmuramipadrecuandomeabrazafeliz.Su abrazo lleno de amor y seguridad me hace sentir bien. Eso es lo que preciso para coger
fuerzas.—Ofú,tita,peroquédelgadaestás.Meseparodemipadre, abrazoa la locatisdemi sobrinaLuz,queyaes todaunamujercita, e
intentandosonreír,cuchicheo:—Aversitecreesquesólotúquieresestarguapaenestavida.Luzmeabrazahastaqueveamisniñosy,soltándome,correhaciaellos.ElpequeñoEricsecoge
asucuello.AdoraaLuz,mientrasHannah,enlosbrazosdePipa,losmira.Minutosdespués,cuandotodosestamosenelcochedemipadre,sacóelmóvilyescribo:
YaestamosenJerez.
NopasandossegundoscuandoEricresponde:
Tequieroyteechodemenos.
Leeresomeemociona,ymipadre,alverquemelimpiolaslágrimas,memiraypregunta:—¿Quéteocurre,morenita?Tragándomelaslágrimas,sonrío,meguardoelmóvily,trasponermelasgafasdesol,respondo:—Nada,papá.Sóloqueestoyfelizporestarcontigo.Mipadreasiente,yyocomienzoacantarlacancióndel¡tallarín!Todoslaterminamoscantando.Alllegaracasademipadre,allíestámihermanaconsumaravillosomaridoylospequeñinesy,
alverme,correaabrazarme.Cuandomesuelta,murmura:—Pero,cuchu...,quésecateestásquedando.Perosisólotienestetas.Vale,mihermanaysusdesafortunadoscomentarios.Lamiro.Ellatambiénmiray,sonriendo,dice:—Bueno,pensándolomejor,asílosvestidosdeflamencatequedarándelujo,porqueúltimamente
tehabíaspuestounpococeporrita.Sonrío.Raquelysusrápidasconclusiones.Micuñado,elgrandotemexicano,memiray,abriendosusbrazos,murmura:
—Peroquélindateves,cuñada.Encantada,loabrazoysonrío.Necesitoeso.Mimosypositividad,apesardequeséquemicara
noesloquefueenotrosmomentos.Mipadre,comosiempre, seafanaendarnos lomejor,ya lahoradecomer lamesaparece la
mesadeunconvitedeboda.Nofaltadenada.Sinembargo,cuandoveoeljamón,esequetantomegustayquemipadrecompraparamí,semecontraelabocadelestómago.
Nome jorobes...Nome jorobesqueahora,conelembarazo,mevaadarasco loquemásmegusta.
Miro el jamón con decisión.No voy a permitir lo quemi estómagome dice y, tras coger uncachito,melocomoymipadre,quepasapormilado,dice:
—Yasabíayoqueteibasalanzaraljamón.Eltrozomesaberaro...,raro,ymihermana,queestáamilado,alvermigestopregunta:—¿Quéteocurre?—¿Nohuelemucho,eljamón?Raquelsueltaunarisotaday,metiéndoseuncachitoenlaboca,responde:—Anda,mimadre,¿yaquéquieresquehuela?,¿acalamares?Loqueacabodedeciresunaauténticatontería,ymerío.Sóloesperoquemihermananoledé
vueltasaesodelolor.Tras lacomida,yelcafetito,alquesenosunenelLucenayelBicharrón,cuando losniñosse
echanlasiesta,decidoacercarmeaVillaMorenita,lacasitaqueEricyyotenemosenJerez.Mi hermaname acompaña hasta el garaje y, acercándose a una de lasmotos que tiene allími
padre,dice:—Venga,teacompaño.Mirolamoto.Tengoelestómagoalgorevueltoporeljamóny,señalandoelcoche,respondo:—Pensabairenelcochedepapá.Raquel levantalascejas.Creoqueeslaprimeravezquedigoquenoasubirmeenunamotoy,
dándomecuentarápidamente,afirmo:—Venga,va,vamosenlamoto.Cuandovoyacogerloscascosrojosdelaestantería,mipadreentraenelgaraje.—No cojáis lamoto. Se la llevó el otro día el sobrino del Bicharrón y lo dejó tirado.Mejor
llevaoselcoche.¡Salvadapormipadre!EstoyporcomérmeloabesosporloquehadichocuandoRaquel,sonriendo,cogelasllavesdel
coche,melaslanzaydice:—Conducestú.Asiento, nos despedimos de mi padre y, encantadas, nos montamos en el coche. En el corto
trayectovamoshablandodemilcosas,perocuandoestamosdelantedelapuerta,elestómagosemeencogedenuevo.
EstoyfrentealacasaqueEriccompróparamí.Leoelcartel:«VillaMorenita»,ysonrío.Ericysuslocosdetalles.Sindecirloquepienso,ledoyalmandoadistancia.ElportóndeforjacomienzaaabrirseyRaquelpreguntaensufacetadecotillauniversal:
—¿PorquénohavenidoEric?Mientras observo el precioso y cuidado jardín que ante mí aparece, entro con el coche y
respondo:—SehaquedadoconFlyn.Teníaexámenes.Paroelvehículoy,cuandomebajodeél,mihermana,quesebajatambién,cuchichea:—Esperoquelevayanbien.Asiento.Yotambiénloesperopero,laverdad,lotienedifícil.Haechadotodoelcursoaperder
porsumaldeamores,yseguroquetendráquerepetir.CreoqueEricyyoyacontamosconeso.Conseguridad,llegohastalapuertadelacasay,trassacarlasllavesdelbolsillodelanterodemi
pantalón,abrolapuertablindadaylaluzdelosventanalesmeinunda.—Anoche pasamos JuanAlberto y yo para comprobar que estuviera todo bien, y estamañana
papáhavenidoparaairearlacasa.Seimaginóquevendríasaecharleunojoyqueríaquelavierasllenadeluz—explicaRaquel.Luego,asomándoseaunadelasventanas,murmura—:Uisss...
Ese«Uisss»llamamiatencióny,asomándomeamivez,veosobrelahamacadelapiscinaunparde vasos medio vacíos. Ver aquello me provoca risa y, mirando a mi hermana con una sonrisa,pregunto:
—Vaya..., vaya..., nome digas que tu cucuruchillo y tú habéis estado utilizandomi casa comopolvera.¡Serászorrón!
Raquelabrelaboca,secolocaunmechóndepelotraslaorejay,alejándosedemí,resopla:—Desdeluego,cuchu...,miraqueeres.Bajamosjuntasalapiscinay,trascogerlosvasos,ellaloshueleydice:—Estoescoñac,yestootro...,pacharán.¿Quiénbebepacharán?Divertida,meencojodehombrosylaveoquedesaparecedemivista.Singanasdeseguirpensandoenquiénbebepacharán,memetodenuevoenlacasaymiroami
alrededor.EselugarestáimpregnadodeEricportodaspartes.Nuestrahistoriaenciertomodocomenzóen
esabonitacasay,acercándomealachimenea,cojounafotoenlaqueestamosEricyyosonriendoennuestralunademielymurmuro:
—Québienlopasamosaquí.Emocionada,dejolafotoyobservootrasquehayallado.SonríoalveraHannahyalpequeño
Ericdivertidosconmimaridoenlaplaya,otradeFlynconmipadreuotraenlaqueestamosEricyyobailandoacarameladosenunafiesta.Recuerdos...,recuerdos...,todoallísonbonitosrecuerdos.
Alejándomede la chimenea,medirijohacianuestrahabitación,y al entrar,Ericvuelvea estarallí.Cierrolosojosysoycapazdeverlocorriendodetrásdemíporlaestanciaoriendocuandoennuestroprimercumpleméslellevéunatartayéstaacabóbajomitrasero.
Misojos se llenande lágrimas, pero tanpronto comooigoquemihermana se acerca,me laslimpioyrápidamentesalgoaljardín.Esmejorquemevayadeallí.
Por la noche, cuando terminamosde cenar,Pipa se lleva a los niñosyLuz semarcha con susamigos;micuñado,queesunbenditoymásbuenoqueelpan,nosmiraydiceconsuhabitualbuenhumor:
—¡Tengounasorpresaparavosotrostres!
Mipadre,mihermanayyolomiramos,yél,sacándoseunospapelesdelbolsillo,dice:—HecompradoentradasparaveraAlejandroFernándezenconcierto,el12enSevilla.—¡Tecomocontomate!—gritamihermana.ARaquel leencantaesemaravillosocantante,yyosonrío; tienecancionespreciosas.Mipadre,
quenosabedequiénhablamos,seencogedehombrosypregunta:—¿Yotambiéniré?Micuñado,queestásentadojuntoaél,lomiraydiceconguasa:—Porsupuestoquesí. Iremos loscuatro.Yahehabladocon laPachucayconLuzyellasdos,
juntoconPipa,sequedaránconlosniños.Venga,¡serádivertido!Todosreímos.Sinduda,elmexicanolotienetodocontrolado.
El10demayocomienzalaferiademiJerez,yladisfrutocomounaniña.Reencontrarmeconalgunosdemisviejosamigos,yatodosconniños,escomopocodivertido.
ElpequeñoEricesunterremoto,yHannahestápreciosaconsutrajecitodeflamenca.Duranteeldíalosniñosnosacompañan,peroporlanochemipadreyPipaselosllevanyyome
diviertoconmiantiguapandilla,nopuedoparardereír.Enunmomentodado,nosencontramosconlaPachucaenunadelascasetasymihermanamehaceseñasparaqueveaqueaquéllaestátomandopacharán.
Vale.Loadmito.MipadretienealgoconlaPachuca.Nomehadichonada.Pero,oye,¿quiénsoyyoparameterme
enello?Misamigosmepresentanaotrosamigosyrápidamentemedoycuentadequehayunollamado
Gonzaloquenomequitaojoy,laverdad,estámuybien.Vestidaconmi trajenegroyrojodeflamenca,bailosevillanascomollevo tiemposinhacery,
cuandonoscansamosdeesajuerga,nosvamosatomaralgoaunbaretoajenoalaferiaysaltamoscomodescosidoscuandolepedimosalpinchaquenospongaSatisfaction[42]delosRollingStones.
Agotada,regresoalabarrayentoncessientoquedetrásdemíhayalguien.Elvellodelcuerposemeeriza;¿ysiesEric?PeroalvolvermemeencuentroconlosojosverdesdeGonzalo,elamigodeunamigoque,conunasonrisa,pregunta:
—¿Porquéosgustatantoestaviejacanción?Divertida, le cuento que ese tema de los Rolling Stones nos ha acompañado todos nuestros
veranosy,cuandosientoquememiraconinterés,mepongoenalertaperonomeseparo.Noséquéestoyhaciendo,sóloséquesigofuriosaconEric,yquizáhacerunamaldadsealaúnicamaneradequelafuriasemepase.
Misamigospocoapocosevanmarchando,hastaquesóloquedamosGonzalo,micuñado,quellevaunpeditoconsiderabletrastantofino,mihermanayyo.Raquel,alvermetantotiempohablandoconGonzalo,cuandovequeéstevaalbaño,seacercaamíycuchicheacondisimulo:
—Mira,cuchu,séquenoestáshaciendonadamalo,perotambiénséque...—Venga,va,Raquel,¿sermonesahora?—protesto.Comosiemprehedicho,mihermanadetontanotieneunpelo,peromispalabraslaenfadan,y
susurra:—Deacuerdo,guapita.Tú sabrás loquehaces.Me llevoami cucuruchillo a casaporque, tras
tantofinito,yanosabesivuelaolevita.¿Tevienes?Valoro la posibilidad de irme. Tengo el cuerpo algo revuelto pero, sin ganas de aguantar el
sermónqueseguramentemevaadarlaplastademihermanaenelcocheporcómoestoyflirteandoconaquél,respondo:
—Marchaos.Mequedaréunpocomás.—Judith,siEricseenterade...—¿DequésevaaenterarEric?—preguntomolesta.Micontestacióneneseinstantedebededecirlequealgonovabien.Mihermanasabequeadoroa
Eric,yfinalmentereplica:—Judith...,tencuidadoconloquehaces.Noseasloca.Y,sinmás,sedalavuelta,cogeamicuñadodelamanoysevan.Gonzalo, que en ese instante regresa del baño, me mira al verlos salir y, con un gesto que
enseguidaentiendo,pregunta:—¿Noshemosquedadosolos?Asientoy,dándoleuntragoamicoca-cola,sonríocualmujerfatal:—Sí.Solos,túyyo.Élasiente.Yosonríootravezyélmurmuraacontinuación:—¿Quétalsinosvamostambién?—¿Yadóndequieresir?Gonzalo,quedebedetenermásomenoslaedaddemimarido,acercándoseestavezunpocomás
amí,responde:—¿Quétalsivienesamihotelytomamosallílaúltima?Dudo.Dudoquéhacer.Loquemeproponeesalgoquenodeberíaaceptar.Algoinaceptable.Amo
aEric.QuieroaEric,perotengotantaseddevenganzaporloocurrido,queafirmo:—Vamos.Noiremosatuhotel,peroséadóndeir.Nosmontamosensucoche.TieneunbonitoMazdarojoy,guiándolo,lollevohastaunsitioque
conozcoalasafuerasdeJerez.Cuandollegamosallugar,Gonzaloparaelcoche,memiray,cuandoveoquecomienzaaacercarseamí,abrolapuertaybajo.Élsaleporlaotrapuertaycaminahaciamí.Sinhablar,seacercahastadondeestoyy,endécimasdesegundo,mearrinconacontraelcocheymebesa.Mete la lenguaenmiboca,yyo, cerrando losojos, lepermitoque la asole,mientras sientocómosusmanosrecorrenmicuerpoporencimademivestidodeflamenca.
Elbesoduravarios segundos, estoybloqueada,hastaquedeprontoGonzalo aprieta suduraylatentevirilidadcontramicuerpoparahacermeversucrecientedeseoysoyconscientedeloquevaapasarsinoloparo.
Diosmío...,¿quéestoyhaciendo?Ni él ni yo somosunosniños.Nonos andamoscon rodeosni chiquilladas ante el sexo,y soy
conscientedeloqueestoypermitiendoenmisplenasfacultades.PiensoenEric.Piensoenmiamoryensuspalabraseldíaquemedijoaquellodeque,cuandoocurriólodeGinebra,élnoeradueñodesusactos.
De pronto soy capaz de ver con claridad que lo que ocurrió fue algo que no buscó, que nopropiciócomoloestoyhaciendoyoahora.Yosísoydueñademisactos.¡Soyunzorrón!Y,entonces,deunempujónmequitodeencimaaGonzaloy,mirándolo,murmuro:
—Lo...losiento,peronopuedo.Élmemira.Yomepongoalertaporsitengoquesoltarledosguantazosy,sorprendiéndome,sin
acercarseamípregunta:—¿Yparaquémehastraídoaquí?Tienerazón.¡Soyunzorrón!¡Soylopeor!Loqueacabodehacereselmayorerrordemivida.Pero¿quénariceshagoallíbesandoaesehombre?Mi cara debe de ser de total desconcierto, lo sé por su expresión cuando me mira, así que,
cogiendoaire,digo:—Gonzalo,losiento.Estodoculpamía.Noestoypasandounbuenmomentoconmimaridoy...—Yquisistevengarteconmigo,¿verdad?Oírlo decir eso me hace darme cuenta de lo sumamente gilipollas que soy, y asiento
murmurando:—Losientodeverdad.Duranteunossegundos,ambospermanecemoscallados,hastaqueaquélrodeaelcocheydice:—Sube,quetellevoatucasa.Sindudarlo,lohagomientrasmesientofatal.EnsilencioregresamosaJerezyleindicodónde
vivo.Ningunohablay,cuandoparadelantedelacasademipadre,lomiro.—Deverdad,losiento.Sientoque...—No te preocupes—me corta—. Tus razones tendrás para hacer lo que has hecho, pero ten
cuidado,quizálapróximaveztetopesconuntíoquenosepapararyrespetartecomohehechoyo.Asiento.Tienemásrazónqueunsanto.Luegosonríeymedice:—Venga.Veadescansaryolvidaloocurrido.Mañananosveremosenlaferia.Sinacercarmeaélparabesarloenlamejilla,sonríoamivez.Abrolapuertadelcocheymebajo.
Cuandocierro,Gonzaloacelerasucocheyseva.Desmoralizadapor lo idiota que soy, cuando caminohacia la puerta demi padre lo encuentro
esperándomeallí.Veoqueobservaelcochequesealejay,mirándome,dice:—Meteníasintranquilo.Cuandohevistoatuhermanaregresarconelmexicanoarastrasynote
hevistoati,mealarmé.Entramos en casa,me siento junto a él a lamesa del comedor y, al ver su gesto preocupado,
respondo:—Tranquilo,papá,sécuidarme.Mipadreasiente,serascalacoronillay,mirándome,porfinpregunta:—¿Quéteocurre,morenita?Aloíreso,sinqueyopuedaevitarlo,misojossellenandelágrimas.¡Meocurredetodo!Pero,
tragándomelas,intentosonreír,melevanto,ledoyunbesoenlamejillayrespondo:—Nada,papá.Sóloqueestoycansada.Y,sinmiraratrás,desaparezcodelsalón.Pasoaveramisniñosyveoqueestándormidoscomo
angelitos. Cuando me dirijo a mi habitación, me desvío a la de mi hermana y, entrando en laoscuridad,meacercohastaella,ledoyunostoquecitosenelhombroymurmuro:
—Raquel...,Raquel.Mihermanarápidamenteabrelosojosy,llevándoselamanoalcorazón,susurra:—Ay,leches,cuchu,¡quésustomehasdado!Actoseguido,comienzoallorar.Medesmorono.¿Cómopuedosertancabrona?¿CómopuedohaberlehechoesoaEric?Mihermanaseasustay,sentándomeenlacamajuntoaella,meconsuela,mientrasoímosami
cuñadoroncarcomounbendito.EndécimasdesegundolecuentoaRaquelqueEricyyoestamosmal,lodemiembarazoylatonteríaqueacabodehaceresanocheconGonzalo.Omitoelmotivodenuestroproblema.SiRaquelseenteradelporqué,nosécómopuedereaccionar.ValequeasumióenMéxicoloquevio,perocontarlelaverdadséquelavaadescuadrar.
Ellameescucha,meabraza,medaaireconlamanocuandovequemeacaloroporloslloros,meretiralamanodelcuelloparaquenomelorasquecuandosemellenaderonchonesy,enelmomentoen que mi estómago me avisa de que voy a vomitar, corre conmigo al baño y sujeta mi cabezamientrasdemicuerposaledetodo,exceptomipena.
—¿Quéocurre?Lavozdemipadrenosalertay,alvolverme,loveoenlapuertadelbañomirándonos.Sientoque
loestoydecepcionandotambiénaél,ymihermanaseapresuraacontestar:—Tranquilo,papá.Tumorenitasólohabebidodemás.Mi padre no dice nada.Memira, sacude la cabeza y se va, y yome alegro porqueRaquelme
guardelossecretosymipadreclaudiqueynopreguntemás.Pocossegundosdespués,denuevoaparecemipadreenelbañoy,entregándoleamihermanauna
manzanilla,dice:—Queselatome.Estoletemplaráelcuerpo.Sugestoseriomerompeelcorazón.SéqueintuyequemepasaalgoconEric,peroyonopuedo
contarlequées,ymeechoallorardenuevootravez.Raquelsueltalamanzanillay,sentadasenelsuelodelbañodelacasaqueadoro,meabraza.
Cuando me tranquilizo, juntas vamos a mi habitación, donde durante horas y entre susurroshablamos.RaquelrápidamentesacasusconclusionesycreequeestamosasíporqueErichaelegidoeltrabajoantesqueamí.
Con mimo y paciencia, mi hermana, la gran dramática de la casa, sabe relajarme y hacermesonreír.NoreírconRaquelylascosasquediceesimposible;peroentoncescuchichea:
—Judith,tienesquedecirlelodelembarazoaEric.Asiento.Tienerazón.Mesientofatalpormilcosas,yafirmo:—Loharé.PerotambiéntengoquecontarlelacagadaqueacabodehacerconGonzalo.—¿Estásloca?¿Dequévaaservircontarlequetehasbesadoconél?Sé que tiene razón. Contarle eso sólo va a servir para liar más las cosas, pero yo no puedo
mentirleaEric.AEric,no.—Serviráparasentirmebienconmigomisma—afirmo—.Nopuedoocultarlealgoasí.
Mihermanamenealacabezaysuspira.—Tienesrazón,cuchu...,antetodo,sinceridad.Suspiroyotambién.Sihehechoalgomal,tengoqueseradultayasumirmierror.Ungranerror
quequizápaguemuy...muycaro.Trasesasúltimaspalabras,lasdosnosrecostamosenmicamaynosquedamosdormidascogidas
delamano.Al día siguiente, cuando me despierto, estoy hecha unos zorros. Para dejarme descansar, mi
hermanasehallevadoatodoslosniñosdepaseoconmicuñado.Cuandome levanto, la casa está en silencio.Mi padre tampoco está, y decido ducharme. Una
duchasiempresientabien.Porlatarde,animadapormihermana,vuelvoaponermeotrodemistrajesdeflamenca.Enesta
ocasión,elazulyamarillo,ynosvamosalaferia.Eslomejorquepuedohacer.Allímeencuentrocon Gonzalo y los amigos, aunque esta vez Gonzalo se mantiene al margen. Hablamos, nosdivertimos,peronovuelveaponermeundedoencimaniainsinuarse.Seloagradezcoenelalma.
El lunes por la mañana aparece Fernando en mi casa. Cuando nos vemos, nos abrazamos.Fernandoyyonosqueremosmucho,apesardeloquesucedióentrenosotrosenelpasado,yapesardeloquelecostóaceptarmirelaciónconEric.
Encantado,mepresentaasumujerylesdoylaenhorabuenaalvereltripotetanenormequetienelapobre.Estádesietemesesy,cuandoveoaquellaenormebarriga,suspiro.Dentrodeunosmeses,yoestaréasítambién.
Fernando bromea conmis pequeños y, cuando éstos semarchan corriendo trasmi padre y sumujersealeja,mepregunta:
—¿YEric?Conlamejordemissonrisas,rápidamenterespondo:—SehaquedadoenMúnich.Estáatopedetrabajo.Fernandomemirayyolevantolascejascuandodice:—Dalerecuerdosdemiparte.Tumaridoesungrantipo.Asientoynopierdolasonrisa.Sinlugaradudas,mimaridoloes.EsatarderecibovarioswasapsdesdeEurodisneyysonríoalveraMelyaBjörnjuntoaSamiy
PeterrodeadosporlaprincesaBella,MickeyMouseyPluto.Sufelicidadmehacefeliz.Elmartes, trasdejara laPachuca,aPipayaLuzmil teléfonosporsi tienenqueavisarnos,mi
padre,mihermana,micuñadoyyonosmontamosenelcocheynosvamosaSevillaalconciertodeAlejandroFernández.
Trasaparcarelcoche,loscuatronosdirigimosalEstadioOlímpicodeLaCartuja.Mipadre,quenosueleacudiraesetipodeeventos,estáalucinado.Nuncahavistoatantagentejunta.
Cuandocomienzaelconcierto,mihermanayyonosponemosacantarcomodescosidas.Reímos,gritamos,cantamos,saltamos,aplaudimosylopasamosbien.Muybien.
Enmitaddelconcierto,AlejandroFernándezempiezaahablardeunabonitacanciónenlaquehacolaboradoymequedosinpalabrascuando,instantesdespués,veosaliralescenarioamiAlejandro.
—¡Ay,cuchufleta!—gritamihermana—.¡PerosiestuamadoAlejandroSanz!Emocionada,aplaudo.
Esosíqueesunagransorpresaparamíyparatodoslosasistentes,queaplaudenenloquecidos.CuandocomienzaasonarlacanciónAquenomedejas,[43]elcuerposemerevolucionacomounalavadora, pero la canto a pleno pulmón sumergiéndome en mi propia burbujita de sentimientosencontrados.
Sinembargo,mientrascanto,misojossellenandelágrimas...,no,¡delagrimones!SoycomolascataratasdelNiágaradesbordadasmientraslaletradeesemagníficotemamepegadirectaenelalmayenmidespedazadocorazón.
Comodicelaletra,soyconscientedequenopuedodejaraEric.Plantearmelaexistenciasinélesdoloroso, inconcebiblee imposible.Mividasinélnoseríaviday, lomejor,séqueaél lepasa lomismo.Estamosirremediablementeenganchadoselunoalotroatravésdeunlocoamor.
Él,EricZimmerman,eselamordemivida.Quieroqueseaélquienmeacariciecadamañana,elquemecuentelaspestañas,elquemearrope
cuandoduermoy,porsupuesto,elquemebeseelalmayelcorazón.Navegarcontracorriente,enmicaso,esimposible.AmoaEric.Loadoroporencimadetodoy,paravolveraserconscientedeello,hetenidoquehacerlamayortonteríadelmundo.HetenidoquefallarleapropósitoconGonzalo.
Pero¿cómosoytanidiota?¿Porqué?¿Porquéhetenidoquefallarleyoparaverlarealidad?CuandolacanciónacabaymiAlejandroabandonaelescenarioentremilesdeaplausos,miroa
mipadreconlosojosllenosdelágrimasy,alversucaradealucinetotal,sinsaberporquécomienzoareír.Lloroyrío.Ríoylloro.Nohayquienmeentienda,ymipadre,abrazándome,murmuraenmioído:
—Cuandoquieras,puedescontarmeloquetepasa,morenita.Asiento. Sin duda, mi padre necesita una explicación, y sé que tengo que dársela. Mi
comportamientoescomopocoparapensarqueestoycomouncencerroy,aunqueescierto,noloesdelmodoquemipadrepodríapensar.
Elconciertocontinúaylopasobien,apesardequemipenanopuedesermásgrande.Alejandro Fernández, tras cantar varios de sus grandes éxitos, se cambia de ropa y aparece
vestidodemariachi juntoaotrosenelescenario.Micuñado,comobuenmexicano,silvamientrasgrita:
—¡VivaMéxico!Mihermana,mipadreyyosonreímos.Sinduda,dependiendodóndeestés,lamúsicatellegamás
omenosalcorazón,yaélelhechodeestarenEspañayescucharmúsicadesutierraleestácalandohondo.
Durante un rato,mi cuñado se desgañita cantando rancheras y cancionesmexicanas y, cuandoAlejandroFernándezcomienzaacantarconsuvozarrónaquellode«SiDiosmequitalavidaantesqueati»,[44]mihermanayyonosmiramos.Oh...,oh...
Clavamoslosojosenmipadrey,alversugestoemocionadomientrastarareaesacanción,quemimadreadorabayqueélsesabealdedillo,nopodemosremediarloynosemocionamosconél.
Raquelyyoagarramosamipadreylostrescantamosmientrassentimosamamáanuestroladocantandoconnosotros.
Emocionadaporloquemipadrepuedeestarsintiendomientrascantaconlosojosencharcados
en lágrimas, sollozo.Sólopiensoque, siDiosmequitaraaEric,yomemoriría,memoriríaparairmetrasél.
Mi cuñado, al vernos tan emocionados, sonríe y grita para que lo oigamos por encima de lamúsica:
—¡Quéchingóncantaesecabrón!Suspalabrasnoshacenreíralostresynossacandenuestrapena.Micuñadoesmexicano...,pero
mihermana,soltandoamipadre,protesta:—Cucuruchillo,noseastanmalhablado.JuanAlberto le guiña un ojo ami padre, abraza ami hermana y prosigue cantándole aquella
maravillosacanciónmientrasmiRaquelitaselocomecontomate,conensalada,conaceitunasycontodoloqueellaquiera.
PorDios,¡cómocantaAlejandroFernández,yquémaravillosaeslacanción!Veramihermanayasumaridotan...tan...tanenamoradosmehacereír.Esincreíblecómonos
puede llegar ymanejar la letra de una canción, y tengo bien claro que, si Eric apareciera en esteinstante,melanzaríaasusbrazosymelocomeríaabesosparanosepararmenuncadeél.
Tras dos horas y diez de concierto, el espectáculo termina y los cuatro salimos felices yencantados. Esa noche, cuando llegamos a Jerez, lo primero que hago al entrar es ir a ver amisniños.EricyHannahduermendulcemente,ylosbeso.Losbesopormíyporsupadre.
62
Elmiércoles,enMúnich,Ericestabasentadoenlasilladesudespachomirandoalinfinito.Sindecirnadaanadie,habíahechounviajerelámpagoaChicagoyacababaderegresar.Allí,sehabíaencontradoconalgoquenoesperaba:Ginebraestabahospitalizada,puestoquesu
dura enfermedad había dado por fin la cara. Pero Eric, que no tuvo ni un ápice de piedad por elhundidoFélix,selollevóaparteylesoltócondurezatodoloqueteníaquedecirle.Éstenohabló,sóloasintióy,cuandoEricterminó,sinesperaraqueaquélabrieralabocaydemostrándoleselodioquelestenía,diomediavueltaysemarchó.
Agotado,elalemánintentabaolvidarseahoradesusproblemasycentrarseeneltrabajo.Peroeraimposible,sólopodíapensarenJudith.Enlamujeralaqueadorabayquenoloestabaesperandoencasa.
Vestidoconsuimponentetrajegrisyunacamisablanca,girósusillaparamirarlacalleatravésdelventanal,mientrasensucabezasólohabíaespacioparaunapersona:supequeñaJud.
AntesdesuviajeaChicago,cadatarde,cuandollegabaasuhogartrastrabajarmáshorasdelasque debía y veía a Susto, una sonrisa le iluminaba el rostro. Aquel animal era el orgullo de supequeñay,concariño,lomimabatodocuantopodíaahoraqueellanoestaba,einclusolometíaenlacocinaparadarlejamóndeYork,oenelsalónparaquelehicieracompañía.
DesdequesemarchóJudith,cuandoporlasnochesFlynseibaadormirySimonayNorbertseretiraban,Ericpaseabaporlacasabuscandoalgoquenoestabaallí.Eraincreíblelovacíaqueestabasinella.
Salíaalgarajey,sentándoseconunacervezaenlamanojuntoaSustoyCalamar,observabacondetenimientolamotodeJude,irremediablemente,sonreíaalimaginarlaconlacarallenadegrasaosaltandocomounaloca.
Encuantoentrabaencasa, los recuerdos lomataban.Cuandohabía llegadoallí, Judith lahabíatransformadoporcompleto.Anteseraunacasagrisyaburridacomoél,yella, sóloella, lahabíallenadoderisas,luzycolor.
Judlehabíaenseñadoaconfiarenlaspersonas,adarsegundasoportunidadesyaescucharalosdemás.Ellaeratodo.Ellaerasuvida.
Aquellatarde,mientrasobservabalacallesentadoenelsillóndesudespacho,Ericmiróelreloj.Eranlasocho,peronoteníaningúnalicientepararegresaracasa.Entonces,suteléfonomóvilsonóy,alverquesetratabadeBjörn,contestóconunasonrisa:
—¿Quépasa,tío?DesdeEurodisney,mientrasMelduchabaaSamiyPeter jugabaa laGameBoyen lahabitación
delhotel,Björnpreguntó:—¿Cómolollevas?
Ericsuspiróymurmuró:—Bien...,bien...—Bienjodido,¿no?—insistióaquél.Ericsonrió.Lapreocupacióndesuamigoporéleraincreíbley,haciéndolesaberqueestababien,
bromeó:—Tranquilo.Deverdadqueestoybien.—¿QuétalenChicago?Necesitadodehablarconalguien,Ericsesinceróconsubuenamigoy,cuandoterminó,singanas
deseguirmetiendoeldedoenlaherida,Björnpreguntó:—¿Dóndeestás?Ericmiró a su alrededor.Pensómentir, pero ¿paraqué?Y, observandounospapelesque tenía
sobrelamesa,respondió:—Enlaoficina.Rápidamente,Björnsemiróelrelojygruñó:—¿Yquénariceshacestodavíaenlaoficina?—EricresoplóyBjörnañadió—:Vamosaver,no
mecabrees,queestoydelunademiely...—Eh...¡Relájate!¡Noseaspesadito!Elabogado,aloíreso,sonrió:esafraseeradeJudith,yentoncesoyóquesuamigoañadía:—Yahastahablocomoella.Suvozdesesperadalehizosaberlomalqueestabae,intentandohacerleolvidarsusproblemasal
menosdurantevariosminutos,BjörncomenzóacontarlecosasdivertidasdeSamienEurodisney.Ericloescuchó.Saberdetodosellosalmenoslohacíasonreír;peroentoncesdijo:—Tedejo,Björn.BesaaMelyalosniñosdemiparte.Y,sinmás,colgódejandoasuamigodescolocadoalotroladodelteléfono.UnavezEric soltó sumóvil, estaba tocándose el cuello cuandodepronto el teléfonovolvió a
sonary,alverqueeraelpadredeJudith,contestóextrañado:—Hola,Manuel;¿pasaalgoconJudolosniños?Manuel,quehabíaesperadoaquesushijassefueranconlosniñosalaferia,respondiósentado
enunsillóndesucomedor:—Tranquilo,Eric.Judithylosniñosestánbien.Su respuesta hizo que el alemán volviera a respirar y, acomodándose en su sillón de cuero,
preguntó:—¿Loestáispasandobienenlaferia?—Sí,muchacho. Increíblementebien,aunquecreoquemihija lopasaríamejor si túestuvieras
aquí.Aloíreso,Ericseincorporóensuasiento,cuandoaquélprosiguió:—Noséquéhapasadoentrevosotros,peroséquealgoatormentaamimorenitaynomegusta
verlaasí.Eric,tocándosesupelorubio,cerrólosojosymurmuró:—Manuel,escucha,yo...—Eric,no—locortósusuegro—.Nollamoparaquemecuentesquéhaocurridoentrevosotros.
Sólollamoparadecirteque,silaquieres,debeshacérselosaber.Séquemimorenitapuedellegaraserirritanteyconseguridadtesacarádetuscasillas,peroella...
—Ellaeslomejorquetengo,Manuel.Lomejor.AManuellegustóoíreso.—¿Yquéhacesquenoestásaquí,muchacho?—preguntóentonces.Ericsuspiró,sacudiólacabezayrespondió:—Ellanoquiereverme,ynoseloreprocho.Melomerezcopor...,comodiríaella,porgilipollas.Manuelsonrióy,dispuestoaquesuhijafuerafeliz,dijoechandounpoquitodeleñaalfuego:—Yoquetú,memoveríaantesdequeotromáslistolahagasonreír.OíresofueelrevulsivoqueEricnecesitabay,cuadrándoseensusilla,murmuró:—¿Quéestásintentandodecir,Manuel?Conunasonrisadeexperienciaysabiduría,éste,trasdaruntragoasucervecita,respondió:—Yonodigonada.Peromimorenitaesunamuchachamuybonitaysaladay,silavensolaenla
feria...,yasabes,bailecitoporaquí,rebujitoporalláy...—Mañanaestaréallí—sentencióEric.Manuelasintióy,antesdecolgarelteléfono,musitó:—No esperabamenos de ti,muchacho, y, por cierto, esta llamada nunca se ha producido, ¿de
acuerdo?Ericsonrióyreplicóconcomplicidad:—¿Quéllamada,Manuel?Cuando la comunicación se cortó, Eric respiraba con dificultad. Imaginar a Judith con otro
hombreleresultabainconcebible.Mirólafotoqueteníaenlamesadeellaymurmuró:—Nopuedeshabermeolvidado,corazón.Aldecireso,sonriósinsaberporqué.Esaspalabrassólopodíahaberlasaprendidodelamorde
suvida,desupequeña.Y,dispuestoarecuperarla,cogióelteléfonoy,trasmarcar,dijo:—Frank,mañanadespuésdecomervolamosaJerez.Esanoche,cuandollegóacasa,fueaveraFlynasuhabitación.Elchicomiróasupadreysonrió
cuandolooyódecir:—Mañanaavisaenelcolegiodequeelviernesnovas.NosvamosaJerez.—¡Guay,papá!—aplaudióelcrío.
En Jerez, esa noche Judith se divertía con sus amigos. Sin embargo, sobre las diez, se sintiócansadayregresóconlosniñosyPipaacasa.Tantobaileytantajuergaagotabanacualquiera,ymásaella,queestabaembarazada.
Tras acostar a los niños, que llegaron reventados, Judith se quitó su vestido de flamenca y, almirarporlaventana,vioasupadresentadoenelbalancíndeljardín,juntoalaspreciosasfloresdehibiscoquehabíaplantadosumadremuchosañosatrás.
Después de ponerse ropa cómoda, pasó por la cocina, cogió una coca-cola de la nevera y,saliendoaljardín,sonrióalverquesupadrelamiraba.
Alacercarseaél,cuchicheódivertidaalcomprobarqueésteestabaescuchandomúsica:
—Vaya, papá.No sabía yo que utilizaras el regalo que te hice paraNavidad.—Y, al oír quiéncantaba,rio—.AlejandroFernández,vaya...,vaya...,veoquetegustóelconciertodeayer.
Manuelsonrióy,haciéndolehuecoasuhijaenelbalancín,preguntó:—¿Quétalenlaferia?—Bien.Comosiempre,genial.—¿Ytuhermana?Trasdaruntragoasulatadecoca-cola,Judithrespondió:—SehaquedadoconJuanAlbertoylosniñosenlaferia.—Ytú,queereslafiesteramásfiesteradetodas,¿quéhacesencasatanpronto?—EricyHannahestabancansados,yprefieroguardarfuerzasparaelfindesemana.Manuelasintióy,mirandoasuhija,añadió:—¿NomevasacontarloquetepasaconEric?Al oír eso, Judith puso los ojos en blanco y, cuando se disponía a decirle de nuevo que no le
ocurríanada,viocómolamirabaélyfinalmenterespondió:—Noesgrave,papá.Essólounadiscusión.Elhombreasintióy, trasdarun traguitodesucopadecoñac,apoyólacabezaenelbalancíny
murmuró:—Estoy convencido de que a Eric no le gustaría saber que la otra noche te trajo en coche un
hombreenvezderegresarcontuhermana.—Papá,nomeseasantiguo.Noocurriónada—protestóellaaloírloysentirseculpable.—¿Sabes, morenita? Tu madre y yo discutíamos todos los días. Había momentos en que me
sacabatantodemiscasillasque...¡Ofú,quécabezotaera!—Sonrió—.Y,cuandonoeraella,erayo.Nuestrostemperamentoschocabancontinuamente.Imagínateaunacatalanayaunandaluz.—Ambossonrieronporaquelloyluegoélsusurró—:Perodaríaloquefueraporqueellasiguieraamiladoconsucabezoneríaysusdesplantes.
—Papá...—Escucha,cariño,lavidaenparejasecomponedemalosybuenosmomentos.Silosmomentos
malossontanterriblesqueeresincapazdesalvarlos,lomejorescortarporlosanoydejardesufrirpormuchoquetecueste;perosinadaesrealmentetanterrible,miconsejoesquenodesaprovechesniunsolodíadetuvidaporque,pordesgracia,nuestrotiempoenestemundoeslimitadoy,eldíaquetefalteesapersonaalaqueadoras,maldecirásporhabermalgastadoesosmomentosconenfadosymalascaras.
Judithsonrió.Sinduda,supadresiempredabaenelclavo.—Séquetienesrazón,papá,peroenocasiones,aunsabiendoquenopuedesvivirsinesapersona,
elenfadotebloqueay...—Nopermitasqueelenfadotebloquee—lacortóManuel—.Sélistaydisfrutacadainstantedetu
vida, porque cada instante perdido es un instante que nunca... nunca volverás a recuperar. Tendrásotrosinstantes,peroesosperdidosnuncaserecuperan,mivida.Mira,noséquéhapasadoentreEricytú,niquierosaberlo,perosíséqueosqueréis.Sólotengoqueverosjuntosparadarmecuentadelaconexióntanespecialquehayentrevosotros.¿Oacasoyanoloquieres?
Judithsuspiróy,sonriendo,murmuró:
—Papá,yoaEricloquieroconlocura.Al oír eso, Manuel se tranquilizó. Si él la adoraba y ella a él, el problema tenía solución y,
sonriendo,cuchicheó:—En ocasiones, los hombres somos complicados, hija. Dicen de las mujeres, pero nosotros
tambiéntenemosnuestrascosillas.Y¿sabesqué?Nohaynadaquelegustemásaunhombrequeunamujer que presente batalla. Cuanta más batalla nos presente, más nos gusta y nos atrae. Aunque,cuidado,tampocotepasesconlabatallaporquepodríasperder.
—Desde luego, papá —murmuró Judith divertida—, como consejero matrimonial ¡no tienesprecio!
Ambosrieron,ylajoven,aprovechandoelmomento,preguntóacontinuación:—Bueno,¿ytúquétienesconlaPachuca?Aloíreso,Manuelsepusorojocomountomate.Suhijalomiróriendoymusitó:—Escucha,papá.Séqueamabasamamáyquelaamaráselrestodetuvida,peroyahapasado
muchotiempodesdequeellamurióyentiendoquerehagastuvida.Portanto, tengasloquetengasconlaPachuca,meparecebien,yteaseguroqueaRaqueltambién.Esosí,hazlopúblicooRaquel,ensufacetadeinspectora,semetecualquierdíaenlacamaconvosotros.
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Sigosinnáuseasmatutinas,aunquepor lasnocheselestómagosemerevuelve.Pero,claro,coneljupequememetotodoslosdíasabailarenlaferia,¡comoparaquenosemerevuelva!
Paramidesgracia,elolordeljamón,ycuantomásbuenoes,peor,meponemalcuerpo.¿Porquétengoquetenertanmalasuerte?¿Nomepodríahaberdadoascolalechuga?Conmi sobrinaLuz, a las seis de la tarde llevo a losniños a los cacharritos, ymispeques se
diviertendelolindo.Megustamirarlos.Verlossonreírmehaceverquesonfelices,yesoparamíesungranmotivodedicha.
Ericnomellama.Sólomeenvíamensajesparapreguntarmesitodovabien,yyo,escuetamente,lecontestosíono.
Memueroporoírsuvoz,comoestoyseguradequeélsemuereporoírlamía,peroestoytanavergonzadaportenerquecontarlelodeGonzaloquenomuevoundedoparallamarlo.Noquieromentirley,si lo llamoyomitomigranerror,mevoyasentir fatal.Porello,decidoposponeresacharla para cuando regrese aMúnich. Sin duda, en esta ocasión voy a ser yo quien tenga que serperdonada.
Mientrasestamosenloscacharritos,observotambiénamisobrinaLuz.Mipequeñinayaesunajovencitapreciosa,ymequedoboquiabiertacuandoveocómosemanejaante los jovencitosdesuedadyéstoslamiranembobados.
Pero¿dóndesehametidolaniñaquejugabaalfútbolydecíapalabrotascomounmachote?SonriendoestoyalserconscientedeloquevaatenerquepadecermihermanaconLuzcuando
éstaseacercaamíconsupreciosovestidodeflamencaazulcieloyblancoylediceaunmuchachoquelamiraalucinado:
—Desdeluego,Pepe,tienesmenosartequeunboquerón.Yomeríoaloírlo,peronopreguntoaquéviene.Mejornosaber.—Peromarichochooooooooooooooooooo,¿quéhacesaquí,miarma?Aloírelgrito,medoylavueltaymeencuentroconmiamigoSebas.Comosiempre,el tíova
comounpincelvestidoypeinado,ynosabrazamos.Cuandonosseparamos,mepreguntamirandoaloslados:
—¿DóndeestátucuadradoGeyperman?Sueltounarisotada.—EnMúnich.Nohapodidovenir.Sebassuspiray,guiñándomeunojo,cuchichea:—Quépena.Conloquemealegralavista,otravezquemisojosverdesseprivandeeseadonis
rubioyseductor.DuranteunratohablamosdemilcosasmientrasSebas,cadavezquevepasarauntipoguapo,me
guiñaunojoygrita:—¡Tesoro,venaquí,quetedesentierro!Divertida,observocómolosotroslomiran.Sebasesuncaso.Ahoraquevuelveaestarsoltero,vaalosuyo,yloquepiensenlosdemás,comosiempredice,¡se
labufa!Mishijossiguendandovueltasenloscacharritoscuando,depronto,pasaunguapohombreandaluztanmaqueadocomoSebasy,encuantonosmira,miamigodice:
—Tedejo,miarma.Eldebermellama.Conscientedeloqueélllama«deber»,agarroaSebasdelbrazoycuchicheodivertida:—PedazodecaballodePeraltaquetehasechado,¿no?—Uno,quetieneclaseysabeloqueesbueno,niña—afirmaélguiñándomeunojo.Ambossonreímosy,segundosdespués,SebassevatrassucaballodePeralta.Sinduda,lovaa
pasarmejorqueyo.Cuando terminamos en los cacharritos, al entrar en la caseta donde sé que nos esperan mi
hermanaymipadre,veoqueRaquelcaminahaciamíy,cogiéndomedelamano,dice:—Confirmado.PapáylaPachuca,¡juntos!Mirohaciaellugardondeseñalansusojosysonríoalveramipadreconaquellabuenaamigade
todalavidamarcándoseunasevillanaymásacarameladosdelonormal.Vaya...,vayaconmipadre,¡quéartetiene!Megustaver quenuestra conversación le sirviópara algoy entonces,mirando amihermana,
pregunto:—Vamosaver,Raquel,papállevaviudomuchosañosysemereceteneraalguienasuladoquele
alegrelosdíascomotúoyolotenemos.¿Dóndeveselproblema,reina?Amiexageradahermanaletiemblaelmorrillo.Séqueesdifícilveramipadreconotramujer
quenoesmimadre.Vale...,laentiendo,peropensandoenmipadreysindarleopciónalalloronaacontestar,prosigo:
—Escucha,Raquel,túteenamorastedeJesús,tecasasteyelamorseacabó.Cuandoteseparasteytequedastesola,decíasquetuvidaerasosaypatéticahastaque,depronto,undíaaparecióturollitoferoz. ¿De verdadme estás diciendo que no hamerecido la pena darte esa oportunidad con JuanAlberto?
—Ay,cuchu...,claroquehamerecidolapena.—Puespapásemerecetambiénunanuevaoportunidadenelamor,Raquel.Ambassabemosque
amaráamamáelrestodesuvida,quelarecordaráatravésdenosotrasydemilcosasmás,peroélnecesitaaalguienasulado,comolonecesitamostúoyoymediahumanidad.Ysi,encima,esamujeres laPachuca,una señoraque siemprenoshaqueridoyambas sabemosqueesbuenagenteyquecuidaráapapá,¿nocreesquedeberíamosestarcontentas?
Raquellosmira.Sumorrillosiguetemblando,hastaquefinalmenteasienteydice:—Tienesrazón.Tienesrazón...,¡claroquesí!¿YquiénmejorquelaPachuca?Sonrío.Adoroamihermanay,abrazándola,afirmo:—Exacto,tontorrona,nohaynadiemejorparaélquelaPachuca.Abrazadas estamos cuandomi padre, que ha dejado de bailar, se acerca a nosotras con la tan
mencionadaPachuca.Raquel,encuantolave,pasademisbrazosalossuyosymurmurahaciéndonos
reíratodos:—Bienvenidaalafamilia,Pachuca.La mujer, encantada, me mira y yo le guiño un ojo. Luego, mientras abraza a mi hermana,
murmura:—Ojú,miarma,gracias.Acontinuación,mipadremeabraza,medaunbesoenlafrentey,mirándome,dice:—Hedejadodeperderinstantes,ahoratetocaatidejardehacerlo.Asiento.Tiene razón.Loquepasa esqueyo tengoque regresar aMúnichpara resolver cierto
temitaque,sinduda,mevaadarmásdeunquebraderodecabeza.Esanochedejueves,laferiaestáarebosar,ybailocomounaloca.Hanllegadomásamigosque
llevotiemposinver,ylosreencuentrossondivertidosyestánllenosdefelicidad.Desdemiposición,observoamipadreconlaPachucaocuparsedeEricydeHannah,estáncon
ellosquenomean,yyofelizdeverlo.Unahoradespués,trasmuchobailecitoconmisamigos,pedimosalgodecomery,rápidamente,
delante de nosotros ponen unos tomatitos, queso curado, papas aliñás, gazpacho, chocos fritos yjamón.
Todomepareceestupendo,aunque, cuandomiroel jamón,el estómagomedaunvuelcoyyomaldigo.Pero¿porquémetienequedarascoeljamón?
Mi hermana se acerca amí y, al ver que tengo un vaso en lamano,memira y yo cuchicheoentoncessinquenadiemeoiga:
—Escoca-colamondaylironda.Raquelasiente,mequitaelvasodelasmanos,dauntragoy,trascomprobarqueesciertoloque
digo,cuandovoyaprotestarreplica:—Mira,cuchu.Unfetitoestádentrodetutripay,comomeenteredequelecaealgodealcohol,te
juroquetetragaselvaso.—Shhhh—gruñomirándola—.¿Tequierescallaryserdiscreta?Y,antesdequesigasflipando,si
tengo un vaso en lasmanos es para no levantar sospechas. Si no bebo, la gente preguntará, y noquierocontestarpreguntasindiscretas.
Mihermanaasientey,trasmirarmeconsucaradedemonio,repite:—Quedasadvertida.Cuandosealejaconsumarido,entrerisasbrindoconmisamigosy,mientrasrulanbotellasde
Canasta, Solera y Pedro Ximénez, animados comenzamos a dar palmas y a cantar «Vámonos,vámonos,pa Jerez,pa Jerez, de la Frontera, que la feria del caballo llega enmayo como flor deprimavera».[45]
Ojú,québienmelopasoconmisdivertidosamigos.Esoesloquenecesitoparacogerfuerzas.Cantandoestoycuandodeprontooigogritar:
—¡Abuelo!Esavoz...Y,alvolvermeparamirar,mequedobloqueadaalveraFlyn,quecorrehaciamipadre.Parpadeo...,parpadeoy,apretandoelvasoquetengoenlasmanos,vuelvoaparpadearyconfirmo
que loqueveoesunarealidadynounaalucinación,yentoncesoigoamisobrinaLuzdecirami
lado:—Hombre,JackieChanZimmermanenpersona.—Y,antesdequeyopuedareaccionar,suelta—:
Levoyadeciraesepedazodemojónque,sisecreequeporhabermebloqueadoenFacebookmehajorobado,estámuyequivocadoporque...¡TitoEric!
Oíresode«TitoEric»yasíquemedejasinrespiración.¡Ay,quemeda...,peroquemedadeverdad!¿EnserioEricestáaquí?Y,mirandoallugarhaciadondehasalidocorriendomisobrina,meencuentroalamordemivida
juntoamipadreylaPachuca,cogiendoaEricyaHannah,mientrasFlynbesaamihermanayamicuñado.Mirespiraciónseaceleraydejodeoírtodoloquesuenaamialrededor.Yanooigocómomisamigoscantan,ni laspalmas,ni lasguitarras,ninada.Sólooigoelsonidoenloquecidodemicorazón.
Eric.MiEric,micaballodePeralta,estáenJerez.Laideamegusta,megustamucho,perorápidamentemeacojona.¿Quéhaceaquí?Nohepensado
cómovoyadecirleloquehice,ynoestoypreparada.Mientras observo cómo mi cuñado y mi hermana lo saludan con afecto, mis hormonas se
revolucionanymeacaloro.Notounterriblesudorportodoelcuerpocuandosoyconscientedequeélyamehalocalizadoynoapartalamiradademí.
Ofú,¡quéfatiguita!Mihermanavienehaciamíymurmuracontodoeldisimulodelqueescapaz:—Ay,cuchufleta...,quehavenido.Asiento...,asiento...,comienzaapicarmeelcuelloy,alrascarme,mihermanameparalamanoy,
entregándomeunacopitadefinoLaIna,dice:—Bebe.Éstaelfetitonoslaperdona.Asiento.Vuelvoaasentiry, trascoger lacopitaquemeentregamihermana,me labebodeun
tirón.¡Dios,quéricoestá!—Aver,miniña.Ahorarespira.Eric,tumarido,estáaquíy...—Diosmío,Raquel...—lacorto—.Erichavenidoyyonoestoypreparada.—Y,alvercómolo
miran unas chicas del fondo de la caseta, añado siseando—:Ni siquiera estoy preparada para vercómolomiran,ycomosiganmirándoloasí,aésaslesarrancoelmoño.
—Cuchu...,relájate,queteconozcoyencincominutoslosfarolillosvuelan.Tiene razón. Sin duda, el embarazo revoluciona mis hormonas, y la presencia de Eric me
revolucionaamí.Pienso. Pienso rápidamente qué hacer y, cuando creo tener una buena idea para salir del paso,
digo:—Ericnopuedesospechardemiembarazo,nomeacerqueseljamónyprocuraquetengatodoel
ratounvasodeloqueseaenlamano.—Pero,Judith...,¡túnopuedesbebermás!—Y no lo voy a hacer —siseo viendo cómo Eric no me quita ojo—. Pero al menos no
sospechará,nisepreguntaráporquénobeboenplenaferia...,queEricesalemánperoesmuylisto,Raquel.
—Vale...,vale...,serétusuministradoradebebidas.—Tengo... tengoquehacerle creer que estoy algo contentilla y, así, noquerrá hablar conmigo
de...denuestrosproblemas.—Ay,madre...Ay,madre...—suspiramihermanaaloírme.Almirarhaciaelgrupo,veoqueFlyntambiénmehavisto,haceademándeaproximarseamí,
peroentoncesmedoycuentadecómomipadrelodetienemientrasEricseacerca.—Lo siento, cuchu..., pero esto tienesque torearlo tú sola—murmuramihermana alejándose
rápidamentedemícomoalmaquellevaeldiablo.Quiero hablar, quiero respirar, pero estoy tan bloqueadapor su presencia aquí después de una
semanasinverloquedebodeparecerunpececilloboqueando.Eric, que es pura sensualidad vestido con una camisa blanca y unos vaqueros, se acerca..., se
acerca...,seacercay,cuandoyaestájustoenfrente,amísólosemeocurredecir:—Hola,gilipollas.Ostras,¿yohedichoeso?Madremía...,madremía...,¡siesqueesparamatarme!Debodeparecerunaborrachilla,nounamaleducada.¡Malditashormonas!Pero¿porquélohabrésaludadoasí?Porsuerte,elgestodeEricnocambia,sindudavienepreparadoparaesoyparamásy,cuando
veoquesumanovaderechaamicintura,murmuro:—Niseteocurra.Élsonríey,sinmiraratrás,elmuycanallacuchicheamientrasescaneaamisamigos:—Cariño..., nos está observando media feria. ¿Quieres cotilleos que le pongan a tu padre la
cabezacomounbombo?No.Noquieroeso,porloque,dejandoquemeacerqueaél,nosbesamos.¡Oh,Dios,quémomento!Unomislabiosalossuyosy,depronto,unaembriaguezponzoñosaentraenmicuerpoyséque
élesmihogar.Micasa.Cierrolosojosydisfrutodelapasionadobesoqueelamordemividamedaantecientosdeojosquenosmirancuriosos.Cuandoseseparademí,misamigosaplaudenysilban,yyo,comounatonta,sólopuedomurmurar:
—Vale...,vale...Enese instante,Fernando,Rocíoy losamigosque loconocenseacercanasaludarlo,mientras
misojosylosdeGonzaloseencuentranyésteniseinmuta.Daporhechoqueaquelgrandullónrubioesmimaridoynoquiereproblemas.Yoseloagradezco.
Durantevariosminutos,Eric saludaamis amigosy, cuandoacabadehacerlo,memira, luegomiraelvasoquetengoenlasmanosypregunta:
—¿Québebes?—Ahoramismo,unSolera.Ericasientey,cuandovaapedirunwhisky,misamigosloanimanaquesetomeunTíoPepe.¡Laocasiónlomerece!Lajuergacontinúa.Intentoseguirconmibulliciosogrupo,peroyanadaesigual.Ericestáaquí
intentandointegrarseenalgoqueséqueaélnolegusta.Durantemediahorasequedaconnosotroshastaqueleveoenlacaraquenopuedemásysealeja
parasentarseconmipadreylosniños.¡Pobre!Mihermana,quesehaunidoalajuerga,cadaquinceminutosmetraeunabebidatalcomohemos
quedado.Yo la sostengoen lamanoconscientedecómoEricmemiray, encuantodirige lavistahaciaotrolado,vacíoelvasoenunaplantadeplásticoquetengoamilado.
Lanocheavanza,milvasitospasanpormismanosy,riendoestoyporloquecuentaunodemisamigos,cuandooigoenmioído:
—¿Nocreesqueestásbebiendodemasiado?Su cercanía, su voz rápidamente me enloquecen y, mirándolo con una de mis espectaculares
sonrisas,respondomientrasmehagolaachispada:—Tranquilo,yocontrolo,colega.Ericasiente,conlamiradamehacesaberquenolegustaquebebatantoy, trasdarselavuelta,
regresaconmipadre.¡Bien!Loestoyengañando.Misamigosvuelvenapedirotrarondadecomida,hayquecomersiqueremosbebertanto.Pero,
con toda lamala suerte delmundo, dejan el jamón justo delante demí.El olor que despide aquelmanjarqueadoroyqueahoranopuedoniverinundamisfosasnasalesymiestómagodaunsalto.
Bueno...,bueno...,bueno,¡laquevoyaechar!Rápidamente, me llevo la mano a la boca y, antes de que nadie pueda hacer nada, cojo una
botellitadeaguaysalgodelacasetaatodaprisa.Acontinuación,enunlateraldondenohaynadie,echounabuenavomitona.
Nopasannidossegundosyyatengoamialemándetrás,sujetándomeypreocupándosepormí.CuandoporfinmicuerpoparaycojolaservilletaqueEricmetiende,melimpiolabocay,tras
abrirlabotellitadeaguaquetengoenlasmanos,doyuntragoparaenjuagarmelaboca.—Ofú,quépenadejamón—murmuro.Ericmeretiraelpelodelacara,mesujetaantemidebilidady,mirándome,dice:—Creoqueporhoyyahasbebidobastante.Sinpoderremediarlo,sonrío.Siélsupieraquenohebebidomásqueaguaycoca-cola—yun
vasitodefinoporlosnervios—,fliparíapero,dispuestaautilizaraquellabazaesanocheconél,mehagolaborrachilla.
—Pero¿quédices?¡Lanocheesjoven!Ericasiente.Sinduda,élnopiensacomoyoy,cuandovaadeciralgo,mihermanaRaquelllega
hastanosotrosconcaradecircunstanciasyEriclepidecogiéndomeentresusbrazos:—Raquel, ¿puedes quedarte con Eric y Hannah?—Mi hermana asiente y él añade—:Gracias,
cuñada,yahoradileatupadrequeJudithsevieneconmigoaVillaMorenita.—No...,no...,no...,¡nidecoña!—replico.Mi hermanamemira. Yo lamiro.No puedo quedarme con Eric a solas o al final tendré que
contarle lo que todavía no he preparado. Asustada, intento zafarme de sus brazos cuando Raquelmurmuraacercándoseamí:
—Aisss,cuchu...,pero¿quéhasbebido?
—Detodo—gruñeEric.Aloírlo,mihermanasonríeydice:—Lomejoresquelallevesacasa,laacuestesyqueduermalamona.—Sí,serálomejor—afirmaEric.Lalocademihermanameguiñaunojo.¡Peroquébrujaes!Cuandollegamoshastauncochequenoconozco,lomiroy,alverelpreciosoBMWgrisclaro,
memofo:—Quéartetienes,Iceman,¡andaquetealquilasalgodiscretito!Eric no responde. Le da al mando del vehículo, éste se abre y me sienta en el asiento del
acompañante.Alhacerlo,laflorquellevoenlacabezaseaflojaylasientoenlafrente.Rápidamentemeponeelcinturóndeseguridady,cuandoloajusta,cierralapuerta.
Ensilencio,veocómo rodeaelvehículo, se sientaami ladoy, encuanto lohacey seponeelcinturón,lomiroydigo:
—Meacabasdecortarelrollo,coleguita.Estamosenferiayquieropasarlobien.Ericno responde.Arrancaelmotoryyomeapresuroaponer la radio.Necesitomúsica,yme
concentroentaladrarlelosoídosconmisgritos.Porsuerteparaél,VillaMorenitanoestámuyalejadadelaferiay,cuandolaspuertasdenuestra
bonitamansiónseabrenconelmandoadistanciaqueEricllevaenelbolsillo,silboypregunto:—NohabrástraídoaSustoyaCalamar,¿verdad?—No—respondeEricconunamediasonrisa.Refunfuño.Esosemedadelujo.Aparca,medesabrochoelcinturóny,enelmomentoenquevoyasalirdelcoche,Ericmedetiene
y,congestohosco,dice:—Notemuevas.Yotesacaré.Aisss,pobre;¿deverdadcreequeestoyborracha?Joder...,puessíquesoybuenaactriz.Sinmoverme,esperoaquemesaquedelvehículoy,agarradaaél,caminamoshastalacasa.Su
olor, su cercanía, el sentir sus manos en mi cintura me excitan y, una vez Eric abre la puerta yentramos,deseosadesucontacto,loabrazo,loarrinconocontralapuertadeentradaymurmuro:
—Vale.Estoyalgoachispaíllacontantofinitova,finitoviene.—¿Sóloalgo?Oíresomehacereíry,conunamaquiavélicasonrisa,preguntomientrassientocómomivagina
selubricaantesucercanía:—¿Vasaaprovechartedemí?¿Mevasaquitarlaropa,mevasaarrancarlasbragasymevasa
haceresoquetantasganastienesdehacerme?Porque,siesasí...,mal...,mal...,¡harásmuymal!Susojoscalibranloquedigo.Sinduda,loquemásleapeteceeseso,peroresponde:—No,cariño.Sólotevoyallevarhastalacama.Sonrío.Esono se locreeélni locoy, acercandomibocaa suboca,paseomis labiospor los
suyoscondesesperaciónysusurroparaponerlotancardíacocomoloestoyyo:—¿Noquieresfollarme?...—Jud...
—¿Noquieresabrirmelosmuslosymeterteenmi interiorunayotrayotravezparahacermegritar de placer?—Él no contesta, no puede, y, hechizada por lo quemehace sentir, yo añado—:Seríasunchicomuymalositeaprovecharasdemí,¿nocrees?
Ericnosemueve.Nomequitadeencimadeél,yyo,gustosaporesacercaníaquetantonecesito,contodoeldescarodelmundollevolamanohastasuentrepiernay,tocándolo,murmuro:
—Medeseas...,teconozco,gilipollas...,medeseas.La respiración de Eric se vuelve irregular, cierra los ojos hasta que, de pronto,me agarra la
mano,laquitadesuyalatenteereccióny,cogiéndomeenbrazos,dice:—Alacama.Noquierocargarmañanaconmásculpas.Río. Me echo hacia atrás y Eric tiene que hacer equilibrios para que no terminemos los dos
estampadoscontraelsuelo.Sinencender las luces, llegamoshastanuestrahabitación,esahabitación tanpreciosaen laque
tantohemosdisfrutadohaciendoelamor.Acontinuación,sentándomeenlacama,dicetrasquitarmelasbotasquellevo:
—Túmbate,cariño.Mi cuerpo encendido se niega a hacerle caso y,mirándolo con la flor por encima demi ojo,
murmuromientrasmemuevocomounacosaca:—Tengo que quitarme el vestido. —Y, arrugando la nariz, añado—: Huele a potaza; ¿no lo
hueles?Ericmiraelmanchurróndevómitoque tengosobreelpechoderechoy, suspirando,sedapor
vencido.Me levanta, me da la vuelta y comienza a bajarme la cremallera del vestido. Como en otras
ocasiones,séquesusojosestánclavadosenlapieldemiespalday,cuandolacremallerallegaabajo,rápidamentedejoqueelvestidoseescurrapormicuerpo.Acontinuación,medoylavueltaylomirovestidasóloconbragasysujetador.
—Bésame...—susurro.Denuevo,Eric lopiensa..., lopiensay lopiensa, loque lehepedidodebedeserunaurgencia
paraély,trasacercarsuslabiosalosmíos,mebesa.Micuerposemidesnudosepegaalsuyo.Dios...,Dios...,¡quéplacer!Rápidamentemeamoldoaély,cuandosulenguadevoratodoslosrecovecosdemibocaysus
manosrodeanmicintura,doyunsalto,enredolaspiernasensucinturay,tanprontocomosientoquemesujeta,melocomo.Lodevorocomounatigresa.
Calor..., el calor inundami cuerpo en cero coma tres segundos y lo beso posesivamente, condevociónynecesidad,mientrasélmesujetaconsusgrandesmanosysientocómosurespiraciónseaceleramásymásacadasegundo.
Medesea.Losé.Medeseatantocomoyoaél.Pasadosunosminutos,cuandonuestrasbocasseseparanpara tomaraire,en laoscuridadde la
habitaciónmurmuroquitándomelajodidaflordelpeloqueamenazacondejarnostuertosaéloamí:—Eric...,¡hazlo!Éllopiensa.Piensamiproposición.Nosabequéhacer,perofinalmente,soltándome,dice:
—No,Jud.Esmejorqueteacuestesyteduermas.Intentovolveraabrazarlo,peroélmeparayrepite:—Mañana,cuandohablemos,siestásdeacuerdoteharéelamor,peroahorano.Noquieroque
mañanapuedasecharmeencaraqueteforcéalestarbebida.Noquierojorobarmáslascosas,cariño.Oíresohacequemisojossellenendelágrimas.Sialguienhaestropeadoalgoentrenosotrosy
sigueestropeándoloconeseabsurdoengañosoyyoy,avergonzadaportodo,metumboenlacamaynodigomás.
Unavezmehetumbado,Ericsesientaenelbutacónquehayfrentealacama.Ensilencio,durantemuchotiempo,loobservoatravésdemispestañas.Ericmemira,memiraymemira,yséqueestápensandoquédecirmealdíasiguiente.AsíestamoshastaqueirremediablementecaigoenlosbrazosdeMorfeo.
Cuando la luz entra por la ventana, de pronto abro los ojos y, al mirar a mi alrededor, soyconsciente de dónde estoy.Miro a los lados y Eric no está.Memiro y veo que sigo en bragas ysujetador.Maldigo,maldigoymaldigo;pero¿quéhehecho?
Estoysumidaenmisdudascuandolapuertaseabreyelhombrequemehacehervirlasangreentodoslossentidosaparecetanguapocomosiempreconunabandejadedesayuno.
—Buenosdías,pequeña—diceconunasonrisa.Su alegría me hace daño. Soy una mala persona. ¿Cómo puedo estar engañándolo así? Y,
tapándomeconlasábana,preguntoparadisimular:—¿Puedesdecirmequéhagoaquí?Eric rápidamente deja la bandeja de desayuno sobre unamesita y, tras dedicarme unamirada,
respondecontranquilidad:—Escucha,cariño,ayerteencontrastemalenlaferia,vomitasteytetrajeacasa,perotejuropor
loquetúquierasquenotehicenada.Lomiro...,lomiroylomiro.Yaséquenomehizonadapero,interpretandomipapel,pregunto:—¿Estásseguro?—Segurísimo—afirmarápidamente.—¿Yporquéestoymediodesnuda?¿Porquémehasquitadoelvestido?Enseguida Eric cogemi vestido de flamenca, que está hecho un asco, y dice enseñándome el
manchurrón:—Porqueolíaavómito.Deprontomefijoenlacamisetaquellevapuesta.Eslaqueyolecomprécuandonosconocimos
enelRastrodeMadrid,ésaenlaquepone«LomejordeMadriderestú»,ypreguntomientrasintentonoemocionarme:
—¿Cuántotiempollevabassinponerteesacamiseta?Élsonríe.Sesientaenlacamay,retirándomeelpelodelacara,responde:—Demasiado.Suvozysumanerademirarmememuestranquepuedohacerconélloquequieray,cuandove
quenodigonada,declara:
—Escúchame,cariño,estoyaquíporquenopuedoestarsinti,yteaseguroquevoyahacertodoloposibleporquenuestrosrecuerdosinundentumenteparaqueolvidesesoquenuncadeberíahaberpasado.—Y, sin darme tiempo a responder, añade—:He hablado con tu padre y tu hermana y seocuparándelosniñoshastamañana,queregresemos.
—¡¿Qué?!¿Cómoquehastamañana,queregresemos?Miamorsonríey,señalandounabolsaquehaysobreelbutacón,indicamientrascogelabandeja
dedesayunoparadejarlaantemí:—Desayuna.DespuésvísteteconlaropaqueJuanAlbertomehatraídotuyaysi,deverdad,aún
mequieresycreesquelonuestromerecelapena,megustaríaquemeacompañasesaunsitio.Mi respiración se acelera.Claroque loquiero,y creoque lonuestromerece lapena,peromi
culpabilidadyloquetengoquecontarlemejorobaesemomentotanlindo.—Eric...—digo—,tenemosquehablary...Élponeunamanosobremiboca.Nomedejacontinuar.—Hablaremos—asegura—.Porsupuestoqueloharemos,perohoydéjamehacerterecordar.Asiento.Conesoyamehaganado,ydecidodejarmellevarmientrasélsaledelahabitación.Unavezterminoeldesayunoquehadejadodelantedemíyque,porcierto,mesabedivinamente,
bajodelacama,medoyunaduchitarápidaymevisto.Mihermanamehamandadounosvaqueros,unacamiseta,zapatillasdedeporteyunacazadora;¿adóndevoyair?
Cuandosalgoalcomedor,Ericmeestáesperando.Visteinformalcomoyoy,cogiéndomedelamano,meguiñaunojoymurmura:
—¿Preparada?Atocinada,asímedejaalversusganasdeagradarmey,sonriendo,afirmo:—Sí.Delamanosalimosalexterior,nosmontamosenelcochey,cuandoarranca,suenalavozdemi
AlejandroSanzy,sonriendo,Ericdice:—Unavez,unapreciosajovencitamedijoquelamúsicaamansabaalasfieras.Aloírlodecireso,sonrío.Sinduda,Ericsabehacermesonreír.Cuando,veinteminutosdespués,
salimosalacarreterayveouncartel,lomiroypreguntosorprendida:—NomedigasquevamosaZaharadelosAtunes...Élasiente,sonríeymurmura:—Acertaste.Encantada,merepanchingoenelasientodelvehículoyríoporvolverairaesepreciosolugar.Unahoradespués, en cuanto llegamos, dejamos el coche enunparkingde la playa.Elmismo
sitiodondedejéyoelcochelanochequesalíconFridahaceañosytuvequedarlesunatundaaunosborrachines.Alrecordarlo,Ericyyoreímosy,delamano,nosdirigimoshaciaunrestaurantedelazona.
Cuando caminamos por la calle pasamos al lado de una floristería yme quedomirando unasflores.Sonhibiscos,unaflorquemipadretieneeneljardínyqueamímeencanta.
—¿Quémiras?AloírlavozdeEric,señalolasfloresdecoloresydigo:—Esas flores..., mi madre las plantó en el jardín hace muchos años y, a día de hoy, siguen
saliendo.—Sonmuybonitas—afirmaEric.Ambossonreímos.Entonces,mirubioseacercaalflorista,quenosmira,ydice:—Desearíaunpreciosoramodehibiscosparamimujer.Elflorista,unhombremayor,memiraconunasonrisaypregunta:—¿Dealgúncolorespecial?Encantadaporelbonitodetalle,sonríoyafirmo:—Rojo.Elhombreseafanaenhacermeunbonitoramoconhibiscosrojos,yyo,felizporaquello,miroa
Ericymurmuroconelcorazónlatiéndomeamil:—Gracias.Miamormemira...,memira...,memira.Séquedeseabesarmetantocomoyodeseobesarloaél,
peronoseatreve.Sóloesperaaqueyodéelprimerpaso,perodemomentonolodoy.Esmejorquehablemosantes.
Diezminutosdespués,conunpreciosoramodehibiscosrojosenlasmanos,nosdirigimoshaciaun restaurante. Allí comemos un riquísimo cazón en adobo y una espectacular ensaladilla rusacuandoEricproponepedirunaracioncitadejamóndelbueno.Sólooírlapalabra«jamón»yasemerevuelveelestómagoy,comopuedo,lequitolaideadelacabeza.Élmemirasorprendidoperonoinsiste.Estáclaroquenoquierellevarmelacontrariaennada.
Cuando terminamosde comer, nosquitamos los zapatosy caminamospor la playa.Eric sehapropuestohacermerememorartodosnuestrosbonitosrecuerdosy,enelmomentoenquemehabladelMoroccioydecuandomehicepasarporsumujerymediunacomilonaconmiamigoNachodejándolelacuentaaél,losdosnosreímos.¡Quémomento!
Recordamosinstantesirrepetibles,comocuandomihermanaentróenmicasadeMadridconmisobrinaynospillóenelpasilloliadosymipequeñitaLuzlecantólascuarenta,ocuandoloengañéenelcircuitodeJerezhaciéndolecreerquenosabíallevarunamoto.
Recuerdos...Recuerdospreciososnosinundanynopodemosdejardehablardeellos;entoncessueltoelramo
dehibiscosenlaarenaynossentamosenlaplaya.RecordamosdenuevoentrerisaselcomplicadoembarazoquetuvedelpequeñoEricylaprimeravezquelevimoslacaritaaéloaHannah,ocuandoFlyndiosuprimersaltoenmoto.
¡Québonitosrecuerdos!Tambiénnos tronchamosalpensarenBjörnyMelensus facetasdeJamesBondy lanoviade
Thor.¡Quégraciososeran!Todo loque recordamos sonmomentosúnicose irrepetiblesquenoshacen felices,ymibuen
humor crece y crece y crece, hasta que no puedo más y, sin previo aviso, me siento sobre él ahorcajadasenlaplayay,acercandosubocaalamía,lobeso.Lobesocondeseoyamor.
Necesitosucercanía...Necesitosuboca...Necesitoamiamor...A diferencia de la noche anterior, Eric no rechaza nada de lo que le pido o le ofrezco y,
encantada, lo disfruto mientras siento que aquellos irrepetibles recuerdos nos han hechoreencontrarnos.
Besos...,besos...,cientosdebesosseapoderandenosotrosy,cuandoparamos,Ericmemiraconsuspreciososojoscelestesymurmura:
—Nuncateengañaríaconnadie,miamor.Tequierotantoqueparamíesimposibleestarconotraquenoseastú,yteaseguroqueloquepasóconGinebraesloúltimoquehabríadeseadoquepasara.
—Losé...,losé,corazón—susurromientrasenredolosdedosensupelorubioymepierdoensumirada.
¡Oh,Dios,cuántoheechadodemenoseso!—Fui un idiota al no darme cuenta de su plan. Frida tenía razón. Yo creí que Ginebra había
cambiado,peronoesasí.Sigue jugandosucio.Excesivamentesucio.Meutilizósinmipermiso, tehizodañoa ti y, ante eso, sólopuedopedirteperdónel restodemividapor loquevisteynuncadeberíahaberocurrido.—Ericcogeunademismanosyprosigue—:EstasemanafuiaChicagoylosvi.
—¿FuisteaChicago?—Ericasienteyyopregunto—:¿Porqué?Miamormenealacabezay,traspensarsurespuesta,dice:—Porquequeríahacerleselmismodañoqueellosnoshicieronanosotros.Poresofui.Alllegar
meencontréaGinebraingresadaenmalestado,peromedioigual,ledijeaFélixloquehabíaidoadecirsinimportarmesussentimientos,comoaélnoleimportaronlosmíos.
Oíresomesubleva.EstoyconEric:siyoloshubieravisto,habríaprocedidoigual.Esaasquerosa,nauseabundayzorramujerysumaridoutilizaronasuantojoamiamorsinsu
permiso,nielmío,paraunfinquenunca...nuncalesperdonaré.Suscircunstanciaspersonalesmedanigual,comoaelloslesdieroniguallasmías.Esdurodecirlo,perolopiensoasí.
EstarenlaposicióndeEricnodebedeserfácil.Amínomegustaríaqueningúnhombremedrogaseporelsimplehechodedarseuncaprichito
conmigoobviandomissentimientosymisdeseos.OdioaGinebrayaFélix,ylosodiaréelrestodemivida.
Pero,deseosadedejardeladoaquelloquetantosufrimientonoshaocasionadoamimaridoyamí,sonríoymurmuro:
—Escucha,corazón,notengonadaqueperdonarte.Comomedijohacepocounabuenaamiga,lascosasquemerecenlapenaenlavidanuncasonsencillas.Olvidémonosdeesasmalaspersonas.Loquenosqueremosynuestrosrecuerdosymomentosjuntossonmuchomásfuertesyverdaderosquenadadeloquehayapodidopasar.
—Tequiero...—Yotambiéntequiero,Eric,peromeobcequéenloquevisinponermeentulugarniunsolo
instante.Mevolvióloca.Vercómolabesabas,cómo...—Losiento,miamor...,losiento—murmurapegandosufrentealamíaparahacermecallar.Sentadossobrelaarena,nosabrazamos.Nuestroscuerposjuntossoncapacesderecomponerse.Nuestrasalmasjuntassoncapacesdeamarse.Ynuestroscorazonesjuntossoncapacesdeconseguirloinimaginable.
Sólonecesitábamosabrazarnos,entendernosyhablar.Sóloeso.Apasionada,lobeso.Élmebesa.Nosdevoramoshambrientosdecariño,amor,dulzura,mientras
soy consciente deque ahora soyyo la que tieneque confesar algo; dispuesta a hacerlo,murmuromientrasEricsigueconlanarizhundidaenmipelo:
—Eric,yotengoque...Miamorponelamanoenmibocay,mirándome,dice:—Memueroporhacerteelamory,aunquesabesquenomeimportaquenosmiren,estamosa
plenaluzdeldíaypodemosterminarenelcalabozodetenidosporescándalopúblico.—Yosonríoanteaquelloyélañade—:Detrásdenosotroshayunhotely...
—Sí—afirmoconrotundidad.Rápidamentenoslevantamos.Ambossabemosloquequeremosy,trasagarrarmipreciosoramo
dehibiscos,miamormecogeentresusbrazosy,haciéndomereír,correhaciaelhotel.Sinduda,estátandeseosocomoyo.
En recepción,mi rubiopideuna suitepara esanoche.El recepcionistamira en elordenadoryambossonreímoscuandonosentregaunospapelesparafirmar.Trasdarlenuestrasidentificaciones,nos da una tarjeta en la que se lee «326» y nos encaminamos hacia el ascensor. Una vez dentro,comenzamosabesarnosynoparamoshastallegaralahabitación.Laurgencianospuede.
Alcerrar lapuerta, tiroel ramode floressobre lacamayempezamosadesnudarnosmientrasnuestrashambrientasbocasnoseseparan.
Nosbesamos,nosdevoramoshastaque,depronto,Ericseparay,enseñándomealgo,dice:—Estuyo.Póntelo.Alvermipreciosoanillo,sonrío.Locojoy,sindudarlo,melopongo.Entonces,Ericmearranca
lasbragasdeuntirónymurmura:—Ahorasí,pequeña.Ahoravolvemosasertúyyo.Entrerisas,caemossobrelacamaysientocómolasmanosdemiamorrecorrenmicuerpo,se
detienenenmispechosyacabanenmientrepierna.Nos miramos. Nos tentamos. Nos provocamos y, cuando Eric arranca un hibisco del ramo y
comienzaapasarsusuaveflorpormicuerpo,yojadeo...,jadeoydisfrutodelmomento.Sinpararse,pasealaflorportodomisery,cuandonotoqueelrabitodelhibiscorozamisexo,
abrolabocaparacogerairey,encuantonuestrasmiradaschocan,miamormurmura:—Pídemeloquequierasyyotelodaré.Perosóloyo,miamor.Sóloyo.Suspalabrasmellenandelocura,defuegoydeesperanza.Sin duda,mi rubio alemánha venido a reconquistarme, a hacerme recordar lomuchoqueme
quiereyahacermeolvidarloquenuncadeberíahaberocurrido,ylohaconseguido.Séqueélmedaráloqueyolepida.Meama,meamatantocomoyoloamoaély,deseosade
tenerlodentrodemí,lepido:—Fóllame.Ericsonríe.¡Dios,quésonrisademalote!Sinduda,lovaahacer,cuandolocojodelpeloysusurroconvoztrémulaporlapasión:—Fóllamecomounanimalporqueasítelopido.Miamormebesa.Mispalabras eran loquedefinitivamentenecesitabaoírpara saberque todo
está bien y, olvidándose del hibisco, asolami boca ymi cuerpo,mientras yome entrego a él encuerpoyalma,deseosadequehagaconmigoloquequiera.
Nuestraextrañaexclusividadesalgoquesólonosotrosentendemos.Nuestralocaexclusividadesalgoquesólonosotrosdisfrutamos.Meabrodepiernascondescaromientrasmeagarroalosbarrotesdelacamaymearqueopara
él. Sin tiempoque perder y gozoso pormi invitación,mi amor introduce su dura y aterciopeladavirilidadenmihúmedavaginadeunasolaestocadaquenoshacejadearalosdos.
Un, dos, tres..., siete... Eric entra y sale sin perder el ritmo y yo grito de placer. Lo echaba demenos,mucho...,mucho...,muchísimo,ydisfrutodecómometoma,decómomefolla,decómomehacesuya.Extasiada,cierrolosojoscuandolooigodecir:
—Mírame,pequeña...,mírame.Hagoloquemepide.Lomiroy,mientrasacercasuslabiosalosmíos,looigomurmurar:—Tubocaessólomíaylamíaessólotuya,yasíserásiempre.—Sí...,sí...—consigodecirmientrastodaslasterminacionesnerviosasdemicuerpodisfrutancon
loqueestáocurriendo.Mitsunamiparticular llamadoErictomamibocaposesivamente,perodeprontoelsentimiento
deculpaporloquehiceconGonzalocruzamimente.Dios...,Dios...,nolehecontadoloocurridoydeberíahaberlohecho.¿Porquésoytanmalapersona?Pero,gozosa,deunplumazomeolvidodeaquello.Enlahabitaciónsóloestamosmiamoryyo,
mimaridoyyo,mihombreyyo,ynadaninadienosvaaromperelmomento.Agarrada a los barrotes de la cama, siento las embestidas deEric.Él se entierra enmí con su
fuerzaanimalyyogritodegustoporsufortalezamientrasmesumerjoenunacadenade intensosorgasmosquemehacenperderlanocióndeltiempoydelarealidad.
Disfruto...Disfruta...Disfrutamosdetodoloqueacontecemientrasuncalorintensonosempapadenuestroelixir;Eric
noparadehundirseunayotravezenmíyyosientocómosustestículosrebotancontramisnalgas.Calor...,elcaloresintensohastaqueelclímaxnopuederetrasarseunsegundomásynosllegaa
losdosalavez,provocándonosunosgritosmajestuosossinimportarnosquenosoiganhastaenlaChina.
Traseseprimerataque,vienenotrosmás,enladucha,sobrelamesa,contralapared.Denuevoycomo siempre, volvemos a ser los insaciablesEric y Jud, que necesitan hacerse el amormás querespirar,ylosdossonreímos.Sonreímosdefelicidad.
Tras una noche en la que nos comportamos como los animales sexuales que somos, cuandoestamosabrazadosenlacamasudandotrasunúltimoasalto,Ericpregunta:
—¿Todobien,pequeña?Supreguntitamehacesonreír.Nohayunasolavezquenotengamossexoynolopregunte.—Mejorimposible—respondo.Estoyabrazadaaélcuandomiestómagoruge.SientoaEricreíramiladoe,incorporándose,me
miraydice:
—Creoquetengoquedardecomeralaleonaquehayentioalapróximamedevorarás.Sonrío.Meencantacuandoloveotanfeliz,yasiento:—Sí.Laverdadesquetengohambrecilla.Desnudo,michicoselevanta.Madredelamorhermoso,quéculomásduroyprietoquetiene.Lo
mirocondescaro.Lomiroconlasciviaysonrío.EricZimmermanesmío.Sólomío.Sinpercatarsedemismásquelujuriososylibidinosospensamientos,michicocogeunpapelque
hay sobreunamesita y, tras regresar a la cama, donde estoydesnuda, se sienta ami lado, pasa elbrazopormicinturaparaacercarmeaélypregunta:
—¿Quéteapetece?Mmm..., apetecerme, apetecerme, tengo muy claro lo que me apetece. Mis hormonas están
descontroladas y, sonriendo, decidomirar la carta para dejar quemimarido se reponga ome locargarétrasnuestraincreíblereconciliación.
—Salmorejo, pechugasVillaroy con patatas fritas y, de postre, un helado de vainilla con natamontadaysiropedechocolate—respondo.
Ericasiente.Sonríe.Sinduda,sepercatademigranapetito,perosorprendidopregunta:—¿Noquieresjamoncitodelrico?Ay,Dios,¡jamón!Rápidamente, mis jugos gástricos me juegan una mala pasada al pensar en aquel manjar que
ahora mi embarazo me niega y, sin querer retrasarlo un segundo más, me siento en la cama y,mirándolo,digo:
—Eric,tengoquecontarteunacosa.Miamormemira.Alvermigesto,sealarma.Meconocemuybieny,olvidándosedelacartade
comida,musita:—¿Quépasa,cariño?Resoplo,elcuellocomienzaaardermey,concaradecircunstancias,murmuro:—Eljamónmedaasco.Perounascoqueniteimaginas.Ericparpadea.Noentiendeaquévieneesocuando,finalmente,confirmo:—Estoyembarazada.Ericseparaliza.Yanoparpadea.Sientoquedejaderespirar.¡Ay,pobre!Memira...,memira...,memiray,cuandoyanopuedomás,digodecarrerilla:—Lo siento..., lo siento..., lo siento..., no sabía cuándo decírtelo. Sé que es algo que no
esperábamos,quenoprogramamosyqueesunalocuratenerotrohijo.Diosmío,Eric,queyaseráncuatrohijos,¡cuatro!—Desesperada,merascoelcuelloy,cuandoélmequitalamanoparaquenolohaga,murmuromirándolo—:Meenterédelembarazodespuésdequepasaratodo,yyome...me...
No puedo decir más; mi Iceman me levanta de la cama, me abraza y, con todo el mimo delmundo,murmura:
—Cariño...,cariño...,¿estásbien?—Yoasiento,ymiamor,sinsoltarme,pregunta—:Pero¿cómonomelohabíasdichoantes?
—Nopodía,Eric.Yo...yoestabatanenfadadayconfundidaportodoloqueestabapasandoquenosuperazonar.
—¿Otrobebé?Alverlafelicidadensurostro,medoycuentadelodichosoquelohacelanoticiay,sonriendo,
afirmo:—Sí,cariño,otrobebé,ydesdeyatedigoque...—Litrosylitrosdeepidural...,losé—terminaélmifrase.Ambos soltamos una carcajada por aquello y, luego, feliz y sin dejar de abrazarme, Eric
murmura:—Te voy amatar a besos, señorita Flores.—No digo nada, y añade—:Te he estado follando
comounbruto,comounanimal.¿Cómomelohaspermitido?Ahoralaquesonríesoyyo,yrespondo:—Elbebéesmuypequeñoyyotenecesito.Además,túmismomedijisteesode«Pídemeloque
quierasyyotelodaré»,yyosimplementetehepedidoloquequería.Ericmebesa.Estánervioso.¡Vamos,niquefuerasuprimerhijo!Depronto piensode nuevo en que tengoque contarlemi granmetedura de pata conGonzalo,
peroloveotanfelizyyoestoytandichosa,quenopuedo.Mientrasmeabrazayasumequevaaserpadredenuevo,Ericnopuedeparardesonreír,ypienso
enloquemihermanamedijo:quizáseamejornodecirnada.Alfinyalcabo,sólofueunbeso.Nadamás.
Elsábado,traspasarunanocheincreíbleenlaquetodosnuestrosproblemasseresuelvenyEricsabequevaaserpadreotravez,regresamosaJerez.Miamorsequedaráconmigohastaellunes,eldíaqueyopensaba regresar con losniños aMúnich.Saber aquellomeencanta.Adoroquequieraestarconmigo.
Alvernosaparecertanradiantes,mipadreymihermanasonríenysientoquerespiranaliviados.Pobres,¡quémalselohagopasaraveces!Sin duda, estaban preocupados por nosotros, y todos, excepto Raquel, se quedan con la boca
abiertacuandolesdamoslanoticiadelbebé.Flyn,miniño,mitesoro,meabrazaymeaprietacontrasí,mientrasmisobrinamemiraydice:
—Tita,erespeorqueunaconeja.Esamisma noche, tras pasar el día con los niños en la feria y dejarlos con Pipa para que se
acuesten en casa demi padre, Eric y yo nos vamos a VillaMorenita. Allí me pongomi traje deflamencablancoyrojoy,cuandosalgoalcomedor,dondeestámimaravillosomaridoesperándome,meacercoaélymurmuro:
—SeñorZimmerman,¿seríatanamabledesubirmelacremallera?Ericsuspira,dejaunvasodeaguasobrelamesa,memiracondeseoy,cuandomedoylavuelta,
pasealamanopormiespaldaydice:—SeñoritaFlores,¿estáseguradequenoprefierequeseloquite?Ambossonreímos.Nosencantaesejuegoquenostraemosconesosnombrecitosquetanbuenos
recuerdosnostraeny,trassentirquemebesaenelhombrodesnudo,insisto:—Prometoque,cuandoregresemos,asíserá.SientoqueEricsonríe.Mebesaenelhombrodenuevoy,subiéndomelacremallera,afirma:—Tetomolapalabra.
Satisfechaporcómosehasolucionadotodo,doyunsorboalvasodeaguaquehadejadosobrelamesacuandoél,enseñándomealgo,dice:
—Corazón,conesetrajedeflamencanotepuedefaltartuflorenelpelo.Almirarsumanoveounhibiscorojofuego.¡Diosmío,siesquemelovoyacomerabesos!Y
él,alvermisorpresa,dice:—Locogídeljardíndetupadre.Sonrío,no lopuedo remediar; agarro la flor, lehagounapañoy, tras sacardemibolsounas
horquillas,laprendoenellateraldemicabellerasueltaypregunto,muyandaluzayo:—¿Quétal,miarma?Mirubiomemira...,memiraymemira,yfinalmentedice:—Seráslamásbonitadelaferia.Encantada,lobeso.Aisss,loquemegustaquemeregalelosoídos.Felicesydichosos,nosdirigimoshacialaferia.Hemosquedadoconmihermanaymicuñadoen
elTemplete.Cuandollegamos,Raquelymicuñadoyaestánallí,yjuntosvamoshastalacasetadondeséquesehallannuestrosamigos.
Durantehoras,doypalmas,bailorumbitasymediviertoconmichicoallado.Comosiempre,élnobaila,perodaigual,contenerloamiladoséquetodoestábien.
Enunmomentodado,apareceSebasjuntoasucaballodePeraltay,trasdarungritodelqueseenteratodalaferia,selanzasobresuGeypermanparabesuquearlo.Eric,comosiemprequelove,esamableyatentoconél,ySebas,tambiéncomosiempre,loensalza,lopiropeaylehacesonreír.
Luego,loshombressevanaporalgodecomeryyoaprovechoparairconmihermanaaunodelosbañosde lacasetapero,al llegar,elbañode laschicascomosiempreestáa rebosar; ¡menudacolaquehay!
—Vayamosalosdefuera—dicemihermanadandosaltitos—.Quizáhayaalgunolibre.Sindudarlo,lehagocaso.Raquelesunameonay,cuandosemea,¡semea!Llegamoshastalosaseosportátiles.Hayvariosy,porsuerte,unparestánlibres.Raquelsemete
enuno,peroalosdossegundossaleydice:—Cuchufleta,entrayayúdameaaflojarmelafaja.Sueltounarisotada,entroenelbañoy lasdos,vestidasdeflamencas, la liamospardaenaquel
cubículo tan pequeño para aflojarle la puñetera faja. Cuando termino de hacerlo, abro la puertaacaloradayella,aúnriéndosecomounatonta,dice:
—Sujetalapuerta,quenocierrabienynomeapetecequemeveanelpotorro.—Vale—respondoriendoaloíramilocahermana.Conpaciencia,esperomientrascantounasevillanaquesuenaavozengritoydoypalmas.¡Qué
artetengocuandoquiero!Cuandomi hermana sale, con su faja bien puesta y el vestido colocado, entro yo y, tras hacer
malabaresparanotocarelváteryparaquemivestidonosemanche,enelmomentoenquesalgo,miRaqueldice:
—Vaya,vaya...,veoquevatodobiencontualemán,¿verdad?Encantada,afirmopensandoenél:—Todogenial.
Raquelsonríey,sinmoversededondeestá,pregunta:—Lodelembarazoyaveoqueselohatomadobien,pero¿cómosehatomadoqueteliarascon
ese tío laotranoche?Yaséque fueunbesoypocomás,perocon locelosoyposesivoquees tumarido,¿quétedijo?
Oíresomedestroza.Mehacesentir fatalporhaberobviadoesedetalleconEricy,deseosadeolvidarlo,respondo:
—Noselohedicho.Estábamoslosdostancontentospornuestrareconciliaciónylodelbebéquefuiincapazdecontárselo.
—Ay,cuchufleta...—Me martirizo por ello, Raquel —resoplo—. Me siento fatal. Se me fue la cabeza. Quise
vengarmedeEricportodoloqueestabapasandoy,bueno...,pasólodelbesoypocomás.Yluegoél...élhavenidoareconquistarmeyhepensadoquequizá...
De pronto se abre la puerta del aseo que está junto a nosotras y, al mirar, me quedo sinrespiración.Eric,miEric,mi rubio enfurecido,memira con sucaradeperdonavidasy sisea a laesperadequedigaalgo:
—Judith...Elcorazónmealeteahorrorizado.¡Vayamarrón!Lomiro,memiraymepongotannerviosaquesólopuedodecir:—Fueunatontería,cariño,yo...—¡Cállate!—gritaEric.Y,sindarmetiempoadecirnadamás,saledelaseoycomienzaacaminarhaciaelparkingdonde
hemosdejadoelcoche.Asustada,miroamihermana.Lapobreestáblancacomolacera,ymusita:—Conrazónpapásiempredicequecalladitaestoymásguapa.—Joder...,joder...—murmuroapuntodellorar.—Losiento—diceRaquel—.Nosabíaqueestabaahí.Resoplo.Me pica el cuello y, sin dudarlo,me recojo el vestido de flamenca con lasmanos y
comienzoacorrerdetrásdemiamor.Tengoqueexplicarleloqueocurrió.Tienequeescucharme.Loalcanzocuandoyacasiestállegandoalcochey,poniéndomedelantedeél,digosinaliento:—Escucha,cariño,fue...fueunatontería.Sinotelohecontadoha...hasidoporque...—Una tontería... ¡Una tontería! —grita fuera de sí—. Te enfadaste conmigo y casi rompiste
nuestro matrimonio cuando pasó algo que sabes muy bien que yo no busqué y que hiceinconscientemente.Ytú,acambio,comovenganza,hacesalgosiendoconscientedeelloyencimameloocultas.Pero¿quéclasedepersonaeres?
Madremía,madremía...,madremía,¡laqueheliado!Erictienemásrazónqueunsanto.Esnormalqueseenfadeconmigoymegrite.Hehechoalgo
quenoestábienyencimaloheocultado.—Eric,cariño.—Mevoy.RegresoaMúnich.—Porfavor...,porfavor...,escúchame.Perono,noquiereescucharmey,quitándomedesuladoconfuerza,sisea:—Déjameenpaz,Judith.Ahorano.
Y,sinmás,sesubealcocheyarrancadejándomeenelparkingsinsaberquéhacer.Asíestoydurantevariosminutoshastaquereaccionoyséquetengoqueirensubusca.Ericno
puedemarcharsesinhablarconmigo.Alveraunodemisamigos,quevahastasucoche,lepidoquemeacerquehastaVillaMorenita.Allílolocalizaré.Miamigo,encantadoysinsaberloquepasa,lohace.
Unavezllegamosamicasa,medespidodeaquély,aliraentrar,veoquenotengolallave.Maldigo.Mecagoendiez,enveinte,¡entreinta!Pero como amí no hay quienme pare ni estando embarazada,me recojo el vestido y decido
saltarlavalla.Noeslaprimeravezquesaltouna.Sinembargo,cuandoestoyentodoloalto,medoycuentadequeelcochenoestáallí.Vuelvoamaldecirymebajodelavalla.
Erichabráidoacasademipadre.La calle está oscura, no se ve ningún coche, y decido correr.De nuevome agarro la falda de
volantes y, como puedo, corro sin matarme. Por suerte, para la feria siempre me pongo bajo elvestidounasbotascamperasparapoderbailar,yesomepermitecorrerconmayorfacilidad.
Enunpardeocasiones,tengoqueparar.Mefaltaelaire,momentoenelquemarcoelteléfonodeEricdesdemimóvil,peroéldirectamentenomelocoge.
¡Malditasea!Laangustiacrecemásymásenmiinterioracadasegundoquepasa,perosigocorriendo.Tengo
quellegaradondeesté.En elmomento en que rodeo la esquina de la calle demi padre y veo el coche allí aparcado,
respiro. Me paro, me doblo en dos para tomar aliento y, en cuanto siento que puedo continuar,continúo.Rápidamenteabro lapuertade lacalley,alentrar,mipadrememiraymepreguntacongestoextrañado:
—¿QuélepasaaEric?Voy a responder cuando mi marido aparece en el comedor con Flyn y Luz. Mi sobrina
rápidamente se coloca junto ami padre, no dice nada, yEric, tras entregarle una bolsa a Flyn, leindica:
—Vealcoche.Yosalgoenseguida.Elniñomemira.BuscaunaexplicaciónaaquelloypreguntamientrasErichablaporelmóvil:—Mamá,¿quépasa?Sinsaberquéresponderle,lomiro,lobesoenlacabezaydigoconscientedequeaEricyanolo
paraniDios:—Hazloquetupadredice.Tranquilo,nopasanada.—Pero,mamá...Sindejarloacabar,locojodelabarbillae,intentandoquemelealamirada,insisto:—Cariño,notepreocupes.NosvemosenMúnich.Mipadre,queestátandesconcertadocomoFlynyLuz,vaadeciralgocuandoañado:—Papá,¿puedesacompañaraFlynalcoche?Luz,veconellos.Mipadrelopiensa,peroalfinal,trassacudirlacabeza,cogeamisobrinadelamano,queestá
boquiabierta,ydesaparecedelsalónconlosdoscríos.Ericmedalaespaldamientraslooigohablarporelmóvil.Bueno,másquehablar,¡ladra!Sabe
queestoytrasél,peronoquierenimirarme.Mesientofatal.Depronto,terminasuconversación,cuelgalallamadaconfuerzay,dándoselavuelta,memira
conojosacusadores.Cuandovoyadeciralgo,siseaensupeorversióndeIcemanmientrastiralasllavesdeVillaMorenitasobrelamesadelcomedor:
—MellevaríaaEricyaHannahconmigo,peronoquieroasustarloslevantándolosahora.—Eric...—Mehasdecepcionadocomonuncapenséquepudierasllegarahacerlo.Mipechosubeybaja.Elcuellomeardeyestoyseguradequelotengollenoderonchonespero,
olvidándomedeél,comopuedomurmurointentandotocarlo:—Eric,notevayas.Hablemosdeello.Hecometidounerror,pero...—¡Error!—sisearetirándosedemí—.Tugranerrorhasidohacerloconscientedeloquehacías
ydespuésnocontármelo.Asiento. Sé que tiene razón e, intentando llegarle al corazón, insisto interponiéndome en su
camino:—Lo ocurrido fue una tontería, cariño. Sólo te pido que lomedites y entiendas que, si yo he
sabidoolvidarloquepasó,túdebessaberolvidarestotambién.La rabia en el rostro de Eric me hace saber que ahora no quiere escucharme. Entiendo su
desconcierto.Nohacemuchoyoestabatandesconcertadacomoél.Se siente traicionadopormíy, sinunápicedepiedad, acerca su rostroalmíoy, clavandosus
impactantesojazosazulesenmí,gruñe:—Dijistequetehabíasquemadoy,sinduda,ahoramehequemadoyotambién.Ysí,Judith,estoy
terriblemente cabreado. Tan cabreado que esmejor queme vaya antes de quemontemos un buennumeritodelantedenuestroshijosydetufamilia.Yahora,sitequitasdeenmedio,meiré,porqueelquenoquiereverteahorasoyyo.
Nomemuevo,nopuedo.Alfinal,elamordemividamequitademalosmodosdesucamino,saledelacasademipadreyyosientoquemefaltalarespiración.Ericestámuy...muyenfadado,yyolahecagadoperobien.
Pocosminutosdespués,mipadreyLuzentran,memiran,ymisobrinamurmura:—Tita,comosediceporFacebook,¡laquehasliado,pollito!Esaapreciaciónmehaceresoplar.Sinduda,laheliadobienliada.Mipadre,que,porsugesto,no
estápararisas,envíaaLuzasuhabitacióny,cuandonosquedamoslosdossolos,memiraydice:—Noséquéhapasado,perointuyoqueestavezlaculpablehassidotú.Misojossellenandelágrimasendécimasdesegundoymederrumbosobreunasilla.Mipadre
meabrazaynomepermitellorar.
64
Demadrugada,cuandomedespiertoenmicama,Raquelestátumbadaconmigo.Tanprontocomovequeabrolosojos,elmorrillolecomienzaatemblar.—Losiento...,losiento.Todohasidoculpamíaporsertancotilla.Losiento.Meestiroylaabrazo.Sialguientieneallílaculpasoyyo.Sóloyo.YosoylaquebeséaGonzaloytambiénlaquenoselocontóaEric.Soyunamalapersonayvoy
atenerquecargarconesetontoerrorelrestodemivida.Abrazadasestamoshastaquesientoquesequedadormidaylentamentemelevanto.Alhacerlo,se
mecaelaflordelpeloquehorasantesEricmeharegaladoy,cogiéndola,labesoconamoryladejosobrelamesilla.
Cuandosalgoalcomedornohaynadie.SonlasseisymediadelamañanaypiensoqueEricyFlynyahabránllegadoaMúnich.
Miromimóvil.No tengoningúnmensajedeEric, ymequieromorir.Estoypor llamarloporteléfono,peronoséquédecirle.
Todavíaconmitrajedeflamenca,caminoporlacocinademipadrecomounaleonaenjauladay,cuandoveo las llavesdeVillaMorenitasobre lamesa, lascojo, juntoa las llavesdelcochedemipadre,salgodelacasaahurtadillasparaquenadiemeoigaymedirijohaciaallí.
Alentrarenlaparcelayaparcarelcoche,suspiro.Nohacenidocehorasyoestabaallímásfelizqueunaperdizconelhombredemivida.Conpesar,abrolapuertadelacasayentro.
Elsilenciodellugarmedestroza,peroentroenelpreciosoygransalónyloprimeroqueveoeselvasodeaguaqueEricdejósobrelamesacuandolepedíquemeabrocharaelvestidodeflamenca.Atraídacomounimán,caminohastaél,locojoy,sindudarlo,pasoelbordepormislabiosybebo.Saberquesuslabioshanrozadoelbordedeesevasoysusmanoshantocadoelcristalmereconforta.
Unavezacaboelagua,dejoelvasosobrelamesaycaminohacianuestracama.Estásinhacer,conlassábanasrevueltascomoladejamos,ymesientoenella.
¿CómopuedosertanmalapersonaparahaberlehechoesoaEric?¡¿Cómo?!Elolordesucoloniallegaentonceshastamíy,alagacharme,medoycuentadequeprovienede
lassábanas.Echándomesobreellas,aspirosuperfumemientrascierrolosojosymepermitollorar.Necesito llorarsinquenadiemeparemientrasposo lasmanossobremi tripay lepidoamibebéperdónporelmalmomentoqueleestoyhaciendopasar.
Nosécuántotiempollevoallícuando,alabrirlosojos,meencuentroconmihermanasentadaenelbutacónquehayfrentealacama.Nosmiramosduranteunossegundoshastaqueelladice:
—Hola,cielo.—Hola—murmuro incorporándome y, al ser consciente de todo lo que ha pasado, vuelvo a
tumbarmeypregunto—:¿Quéhoraes?—Lastresyveintedelatarde—dicey,conunhilodevoz,añade—:Losiento...,sientohabersido
tanbocazasy...—Losé,Raquel—lacorto—.Dejadedisculparteporqueyaestásdisculpada.Comodiríamamá,
lasmentirastienenlaspatitasmuycortasyalfinaltodosesabe.—Perosiyonohubierahabladodeesetemanohabríapasadonada.Suspiro.Tienerazón,perorespondo:—Ysiyonohubierapropiciado lodeGonzalo tampocohabríapasadonada.Pero lascosasse
hicieron,salieroncomosalieron,ymigranerrorfuenocontarlelaverdad.Silohubierahechoelotrodía,séquesehabríaenfadadoperomelohabríaperdonado.Elproblemaesqueahoranosésimelovaaperdonar.
Raquelselevanta,caminahaciamíy,mirándome,afirma:—Tevaaperdonar.Erictequiere.Quemequiere, lo sé.Claroque lo sé,nunca lohedudado.Sinembargo,comonomeapetece
seguirhablandodeeso,murmuro:—Creoquemevoyaquedarelrestodeldíaenlacama.—Deesonada,cuchu.Tevasalevantaryvasacomeralgo.Porsilohasolvidado,dentrodeti
creceunavidaynecesitaalimentarse.Olvidarlo...¿Cómoolvidareso?Y,sinapetito,miroamihermanaypregunto:—¿Quéhago,Raquel?Estoytanconfundidaqueahoranoséquéhacer.Tengotantomiedodeque
noquieravermeque...—Nodigastonterías.¿Cómonovaaquererverte?RecordarelgestoduroconelquememiróEricantesdeirsemehacesuspirar.—Túnoloconoces.Cuandoseenfada,esmuycabezón.—¿Cabezón?¿Ytúnoerescabezona?Miroamihermanaysonrío,yacontinuaciónelladiceconcaritadepena:—Debesregresaratucasayhablarconély,sinoquiereescuchar,tejuroquevoyyoylemonto
ladeDios.NoséquépasóparaqueErictuvieraqueveniraquíparaqueloperdonaras,perositúlohasperdonado,¿porquénopuedeperdonarteélati?
Nodigonimu,mihermananoentendería loquepasó.Depronto, suenamimóvily, alverelnombredeMelenlapantalla,respondo:
—Hola,Mel.—Pero,vamosaver:¿Ericytúoshabéispropuestovolvernoslocos?Oíresomehacesonreír.Noséporquélohago,peroelcasoesquelohagoy,traspedirleami
hermanaunpocodeintimidad,éstasaledelahabitación.—Mel,hicealgoterrible—respondo.—Losé.—EstabafuriosaconEricyenJerez,unamadrugada,beséaotrohombre.Perosólofueunbeso,
ytejuropormishijosque,albesarlo,medicuentadelerrorqueestabacometiendoyparé.Oigoamiamigasuspiraralotroladodelteléfonoyfinalmentepregunta:—¿Regresasmañana?
—Sí,mañana.Aunquequizácuandolleguenotengacasa.—Nodigastonterías,mujer.Ericescabezón,peronoesunserirracional.Asiento,séquetienerazón.Ericnuncamedejaríaenlacalle,aunquenoquisieraverme.—¿Quétaltuviaje?—preguntoporcortesía.—Bien.Yatecontaré.—Melnoquierehablardeella,sóloquieresabercómoestoy,ypregunta—:
¿Túestásbien?Larespuestaesno.Estoyfatal,yrespondo:—No.¿Lohasvisto?—preguntoacontinuación.—No,cielo.Yono lohevisto,peroBjörnsí.Sonóel teléfonoa lasseisde lamadrugada.Era
Flynasustado.Alparecer,cuandollegarondeviaje,Ericdecidióredecorarsudespacho.Enterarmede esomehace cerrar los ojos.PobreEric ypobreFlyn.Lo asustadoquedebíade
estarminiño.Sinduda, la furiapudoconEricy,horrorizada,voyadeciralgocuandoMelsemeadelanta:
—Pero,notepreocupes,porqueBjörnsefueparaalláy,trashablarconél,Ericsetranquilizó.Haceunashorassemarchóa trabajaraMülleryFlynestáconmigoyconPeterencasa.Björnharegresadohaceunratoconélyporesoséloquehapasado.
Laangustiacreceycreceenmí.¿Cómohepodidoserunatontavengativa?TrashablarunpardeminutosmásconMel,quedoenverla aldía siguiente.Después llamoal
teléfono del piloto de nuestro jet privado, quedo con él en que al día siguiente me recoja en elaeropuertodeJerezalasochodelamañanay,cuandocuelgoysalgoalsalón,miroamihermanaRaquely,sentándomeenunasilla,afirmo:
—MañanaaprimerahoraregresaréaMúnicheintentarésolucionarlo.Alamañanasiguiente,alassieteyveinte,yaestoyconmipadre,mihermana,Pipaylosniñosen
el aeropuerto.Mi padre se deshace con el pequeñoEric,mientras queHannah está dormida en sucochecito.
Cuandoporfinnosdejanentrarenelhangarprivado,mipadrebesaaloschiquillos.Ensucaraveolapenaqueledasepararsedeellosy,enelmomentoenquePipayRaquellossubenaljet,mipadrememiraydice:
—Escucha,mivida.Estoysegurodequeloarreglaréispero,siporuncasual,vesquelacosanosesoluciona,noolvidesqueaquísiguesteniendotucasa,¿entendido?
—Vale,papá.Mipadrememiraconsusojosbonachonesy,abriendolosbrazos,murmura:—Tequiero,morenita.Yoasiento,loabrazoynodigonadaollorarécomounmono.Mihermanabajadeljet,seacercaanosotrosydecidodarporfinalizadaladespedida.Nuncame
hangustadoy, trasdarlesunbesoaambos,caminohaciael jetenelqueleoengrandeelapellido«Zimmerman». Una vez subo la escalerilla, me vuelvo, sonrío a esas dos personas que tanto mequierenyquiero,ydesaparezcoenelinteriordelavión.HederegresaraMúnich.
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MillegadaaMúnichmeprovocaciertaalegríaapesardelatormentaquehay.Rayos,lluviaytruenosasolanlaciudad,ysuspiromientraspiensoqueelcielosehaconfabuladoconelestadodeánimodeEric.
CuandobajodeljetprivadoenelhangardondeEricsueletenersiempreelavión,sonríoalveraMelapoyadaenelcochejuntoaNorbert.Sutripitayacomienzaanotarse.Caminahacialosniñosylos abraza, mientras yo abrazo a Norbert, que, como siempre, se queda parado, aunque luegoreaccionaytambiénmeabrazaconcariñomientrasdice:
—Bienvenidaacasa,Judith.UnavezmeseparodeNorbert,mientrasPipayélmetenalosniñosenelcoche,Melmemiray
murmurasonriendo:—Anda,dameunabrazo,tontorrona.Sin dudarlo, me tiro a los brazos de mi gran y buena amiga y, sin querer hablar delante de
NorbertydePipa,Melmemiraydice:—Venga,vayamosatucasa.Asiento.Nopuedonihablar.Cuando llegamos, al entrar en la parcela sonrío al ver a Susto y aCalamar correr hacia el
vehículo y, cuando Norbert estaciona en el garaje y abro la puerta, acepto encantada los besosbabososdeSusto,mientrasCalamardavueltascomoun locode locontentoqueestáporvernosatodos.
Felizpormiregresomiroamibichitoy,cuandosusojosylosmíosconectan,murmuro:—Hola,Susto,teheechadomuchodemenos.Comoeradeesperar,unlengüetazomecruzalacara,yyosonríofelizpormicuchufleto.Cuandoentramosencasatruena,ySimonavienehacianosotrasconlosbrazosabiertos,mientras
mis niños corren hacia ella y ésta los abraza y los besa.Una vez acaba con ellos,memira ymeabrazatambiénamí.Feliz,aceptosucariñoylamujermurmuramirándome:
—Otrobebé.Esoesmaravilloso,¡enhorabuena!Sorprendidaporquesepalanoticia,lamiroyelladiceguiñándomeunojo:—Flynnoslodijo.Estámuycontentoconlallegadadesunuevohermano.Sonríoymetocolabarriga.Comosiempredecimos,unbebéesmotivodefelicidad,peroaeste
pobrenohagomásquedarledisgustosdesdequeloengendré.Pobrecitomío.Traspasarporlacocinaparabeberalgo,cuandoPipasellevaalosniños,Simonaseacercaamí
ydice:—Ay,hija,eldespachodeEricestácomosihubierahabidounterremoto,peromehaprohibido
entraryrecogernada.Anoche,cuandollegó,trashablarconFlyndeloocurridoyelchicosefuea
dormir,sepasóhorassentadoenlapuertadeentradaconlosanimales.—Simona,noseaschismosa—lareprendeNorbert.Aloíreso,miroalhombrequetantoquieroyrespondo:—Noeschismosa,Norbert.Simplementemeestáinformandodecómoestálasituación.Élrefunfuñaalgoy,cuandosaledelacocina,Simonamurmuramirándolo:—Hombres,¡quiénlosentiende!Ese comentario me hace sonreír y cuando, segundos después, ella desaparece, me levanto y,
cogiendoaMeldelamano,digo:—Vamos.MiamigayyocaminamoshaciaeldespachodeEricy,encuantoabrolapuertayveoelcaos,voy
adeciralgoperoMelsilbaysemeadelanta:—Sinduda,elrubiocomodecoradordedesastresnotieneprecio.El despacho deEric es un descalabro: papeles por el suelo, ordenador hecho añicos, vasos de
cristalrotosysillaspatasarriba.Imaginarme a Eric furioso haciendo esome parte el corazón; agachándome para comenzar a
recogerelestropicio,digo:—¿Qué hago, Mel? No sé qué hacer. Tengo tanto miedo de que no quiera perdonar que soy
incapazdellamarlooenviarleunsimplemensajealmóvil.Miamiga,que,sindudarlo,meayudaalimpiareldesastre,murmura:—Creoquetienesquedarleuntiempoyhablarconéldentrodeunosdías.—¿Ysinoquierehablar?—Tendráquequerer.Asiento.Tienerazón.Erictienequequererhablarconmigo.Ensilencio,durantevariosminutosrecogemosylimpiamosaqueldesastrey,cuandoporfinel
despachovuelveaestaralmenossincristalesypapelesenelsuelo,apunto:—Mel,porprimeravezenmividaestoyacobardada.Aldecireso,Melmemiray,poniéndoselasmanosenlascaderas,dice:—Notecreo,Judith.¿Ysabesporquénotecreo?—Yoniegoconlacabezayellaprosigue—:
Porque si algo te caracteriza y te hace especial es que eres una valiente guerrera que no se rindenuncaantenada.Y,siquieresaesehombrecomoséqueloquieres,tienesquelucharporél,comoélenotrosmomentoshaluchadoporti.Vale.Túhascometidounerror,besasteaesetipoynoselodijiste a Eric, pero una vez él tenga unos días parameditarlo, debes plantarte ante él y saber quépiensa, qué quiere y qué puedes esperar de él. ¿O acaso pretendes volver a vivir como vivías sinapenashablarosnimiraros?
—No.Claroquenoquieroeso.Imaginarmedenuevoviviendoasímeencogeelcorazón.Esonoseríabueno,niparalosniñosni
paranosotros.Esonoesvida,ymenosparadospersonastantemperamentalescomonosotros.Durante unos segundos pienso..., pienso..., pienso.Rumiomis penas,me las como, las digiero.
Calibrolosprosyloscontrasdetodoloocurridoytomounadecisión.Hayquecogereltoroporloscuernosparasalirdelatolladero.SiEricmequierecomoséquemequiere,hablaráconmigoy,sinolohace,almenossabréaquéatenerme.
Porello,mirandoamiamiga,asientoydigo:—MevoyaMüllerahablarconél.—¡¿Ahora?!—Sí,ahora—asientodecidida.—Perosiestádiluviando...—Noimporta.Melmemiray,perdiendopartedelafuerzaqueteníasegundosantes,dice:—¿Nocreesqueseríamejordejarpasarunpardedíasparaque...?—No.Nolocreo.Miamigaasiente,seencogedehombrosy,abrazándome,murmura:—Deacuerdo,comamosalgoy,después,vayamosaMüller.Media hora después, estamos cruzando Múnich. Hay un atasco considerable. La tormenta lo
ralentizatodo,exceptomiansiedadporllegarallí.Miromirelojyveoquesonlasdosdelatarde.Aesahora,Ericyahabrácomidoyestaráeneldespacho.Sinduda,levoyadarladigestión.
Nerviosa,meretuerzolosdedosyledoyvueltasalanilloquetantosignificaparanosotrosyqueélmellevóaJerez,mientrasMelconduceyyopiensoquédecirparanocagarlaunavezmás.
CuandollegamosaMüller,pasamosdelargoymetemoselcocheenunparkingpúblico.Sidejomicocheenelparkingdelaoficina,rápidamentesabráqueestoyallíporqueloavisarán.
Mientrascaminamosporlacalle,parapetadasbajonuestroparaguas,Mel,queestátannerviosacomoyo,hablayhabla.Medaánimosymerepitemilvecesqueestoyembarazadaydebocanalizarlasemocionesparaqueelbebénosufra.
Asiento.Nosemeolvidaqueesperandounhijo,peroenestemomentomiprioridadesotra.CuandollegamosalhalldeMüller,Melseparay,mirándome,dice:—Creoqueesmejorqueyonosuba.Mequedaréen recepción.AEricno legustaráhablarde
vuestrosproblemasconmigodelante.Sonrío.Tienerazón.—Deséamesuerte.Miamigameabraza,meaprietacontrasucuerpo.—Latendrás.Erictequieretantocomotúaél.Convencidadequeesverdad, sonrío,medoy lavueltayGunnar,elvigilante jurado, sonríeal
vermeydiceabriendounapuerta:—Paseporaquí,señoraZimmerman.Rápidamente paso por donde él me indica y, mirándolo con una de mis más encantadoras
sonrisas,cuchicheo:—Gunnar,noavisesalasecretariademimarido.Quierodarleunasorpresita.Elvigilanteasientey,trasguiñarleelojo,medirijohacialosascensores.Hechaunmardenervios,memetoenelascensorconotraspersonas.Pulsoelbotóndelaplanta
presidencial y los demás aprietan los suyos. Mientras el ascensor se mueve, oigo la músiquitaambientalysonríoalidentificarlacanciónLachicadeIpanema,[46]ymentalmentelatarareo.
Cuando por fin el ascensor llega a la planta donde mi amor tiene que estar, tomo aire y,levantandoelmentón,meencaminohaciasudespacho.Porsuerte,susecretariaestáescribiendoalgo
y,encuantomeve,sindarletiempoareaccionar,pasoporsuladoydigo:—Nohacefaltaqueloavises,Gerta.Yaentroyo.Y,sinmás,agarrolospomosdeldespachopresidencialyabrolapuerta.Ericlevantalacabezaparamiraryveosuceñofruncido.Malo...Malo...Vequesoyyoysuceño
seendurecemás.Meentranlasfatiguitasdelamuertepero,levantandoelmentón,cierrolapuertadeldespachoycaminohastaél.
—¿Quéhacesaquí?Laspiernasmetiemblan,todayotiemblo.CuandoEricquiereintimidar,esparaecharteatemblar,
perosacandoesa fuerza interiorqueséque tengo,meacercohastasumesay,parándomefrenteaella,digomientrasobservocómollueveporlosgrandesventanales:
—Losé.Nolodigas.Séquenodeberíahabermepresentadoaquí,pero...—Puessilosabes—mecorta—,¿porquéhasvenido?Nosmiramosduranteunossegundosyveoelsufrimientoensusojos.—Eric,tenemosquehablar.El amor de mi vida cierra los ojos y se levanta de su sillón como un león enfurecido. Sin
embargo,antesdequeabralaboca,endurezcoeltonoysiseoseñalándoloconeldedoíndice:—Comoseteocurraecharmedeldespacho,tejuroquelovasalamentar.Amímeestácostando
tantocomoatiestaraquí,ymássabiendoquenoquieresverme,peronoestoydispuestaavolverapasar por la tortura de vivir en la misma casa sin mirarnos, ni hablarnos. Así pues, sólo vas aconseguir echarmede aquí por la fuerza, y no creoque sea bonito que tus empleados vean cómoechasatumujerdeldespacho.¿Osí?
Elcorpulentoperdonavidas rubioquehaydelantedemíencaja lamandíbulay, trassentarsedenuevo,serecuestaensuimponentesillóndecueronegro.Suhumorestátanoscurocomoeldíaquehacey,mirándome,dice:
—Muybien.Habla.Duranteunossegundosmequedocongeladaanteél.¿Quédigo?¿Quépuedodecirparaquedejedemirarmeasí?Y,trasmeditarlo,apunto:—Eric,tienestodalarazóndelmundoparaestarenfadadoconmigoporloquehiceyteoculté.
Perocréemequeloquehicefuefrutodeldespechoyque,encuantobeséaGonzalo,medicuentademigranerroryloapartédemilado.Tejuropornuestroshijosquenohubomás.Sólonecesitéunmalditobesoparadarmecuentadetodo.
Ericnocontesta.Memira...,memiraymemiraconsucaradeperdonavidasyyo,conlosnerviosamil,prosigo:
—Medijisteaquellode«Pídemeloquequierasyyo te lodaré».Pues loquequieroesquemeperdones.VinisteaJerezdispuestoareconquistarmeyhacermeolvidaryparaello,conseguistequerecordara todo lobuenoquehemosvivido,yesoes loqueyoahorapretendo también.Hevenidodispuestaaquemeperdonesyahacerterecordarnuestrosbonitosmomentosparaqueolvidesalgoquenuncadeberíahabersucedido.
Miamorsiguesindecirnada.Sinduda,sabecómomartirizarme,peroyo,comounalocomotora,prosigo:
—Eric,tequiero.Tequierocomonuncavolveréaquereraotrohombreenmividay,comocreo
quelonuestromerecelapena,poresoestoyaquí.CuandoestabaenJerez,unanoche,charlandoconmipadre,hablamosacercadequelavidamuchasvecesesinjustaynohaynadapeorqueperderaalguien y luego lamentarte de lo que podrías haber hecho y no hiciste por absurdos enfados yorgullos. Sé que soy cabezota, testaruda, obstinada, terca, burra, persistente, incorregible, perotambiénséquesoytolerante,transigente,tiernaycariñosa.
Tengolabocaseca.Eric,consuimpolutotrajeoscuro,nodicenaday,mirandounvasoqueéltieneasulado,pregunto:
—¿Esagua?—Élasienteyyoinsisto—:¿Puedobeber?Ericporfinsemueve,cogeelvasoymelotiende.Locojo,nuestrosdedosserozany,exaltadaporelmalmomentoqueestoypasando,bebo,beboy
beboymeacaboelvasoentero.Unavezdejoelvasovacíosobrelamesa,sinapartarlamiradadelhombrequesehapropuesto
nodecirniunasolapalabra,mientrassientoquelamalalechecomienzaacrecerenmí,digocuandosuenauntrueno:
—¿Sabes?Creoquelavidanoslopusodifícilparaencontrarnos.TúnacisteenAlemania,yoenEspaña, pero el destino quiso que nos encontráramos a pesar de ser dos personas tan diferentes.Desde que estamos juntos, nos ha pasado de todo, hemos aprendido uno al lado del otromuchascosas,ynuestravidaenparejahaestadosiempre llenadeamorydepasión,apesardeque,comodicenuestracanción,cuandotúdicesblanco,yorespondonegro.—Denuevo,tomoairey,dispuestaaterminarconmimonólogo,murmuro—:Eric,ahorasoyyolaquetediceesode«Pídemeloquequierasyyotelodaré».Piensaentodosesosbonitosmomentosquehemosvividojuntos,cierralosojosypregúntatesi temerecerá lapenaperdonarmeparaseguir recopilandomomentos increíblesconmigojuntoaFlyn,Eric,Hannahyelbebéquecreceenmiinterior.
Mecallo.Esperoquedigaalgo,peromiduroalemánnohabla.Joder,dequémalalechemeponequehagaeso.SimplementememiraconsugestodeIcemancabreado,ydeprontodigo:—Tedoyunahora.—¿Quemedasunahora?—veoqueporfinpreguntasorprendido.Asiento.Noséporquéhabrédicholatonteríadelahora.Comosiempre,hablosinpensarpero,comonoquierodarmarchaatrásalapuñeterahoraquele
hedado,afirmoconlamayorseguridadquepuedomientrasmiroelreloj:—Cuandosalgadetudespacho,meiréalacafeteríaaesperarytúsabrássimerezcolapenaono.
—Sucaraesunpoema—.Sonlasdosymediadelatarde;sialastresymedianohasidoabuscarme,significaráquenoquieresque lonuestro se solucioneyentoncesbajaréhasta la recepción,dondeMelmeestáesperando,ymeirédeMüllerydetuvidaparasiempre.
Sugestoseendurece.Madremía...,madremía...,cómomelaestoyjugando.Pero,sinbajarmedelaburraalaqueyamehesubidocontodosmistrastos,insistocaminando
hacialapuerta:—Tienesunahora.—Judith.
Mellamaporminombrecompleto.Malasunto.Nomevuelvo.Siquiere,queselevanteyvayaenmibusca.Cierrolapuertay,duranteunossegundos,esperoaquelamalditapuertaseabrayélaparezca,
perocuandoveoqueesonoocurre,conelcorazóndesbordadoporlalocuraqueacabodeproponer,medespidodeGertaconunasonrisaymeencaminohaciaelascensor.Locojoybajoalacafetería.
Unavezllegoallí,saludoconafectoaalgunosempleadosqueconozco;esperoquenonotenlomalquemesiento.Acabodejugarmeenunahoraelrestodemivida;pero¿quéhehecho?
Conlapocaseguridadquemequeda,meacercohasta labarraypidounacoca-colaconhielo.Estoysedienta.
Cuandomesirven,mesientoaunadelasmesasjuntoalventanal,sacomimóvil,lodejosobrelamesaylomiromientraspiensosiEricllamaráovendrá.
Angustiada,observocómolosminutospasanyEricnoaparece.Miroalexterior.Elcielotieneunatonalidadgris,tangriscomomipuñeterodía.Alastresdelatardeestoyqueechofuegoporlasorejas.¿Deverdadnovaavenir?Alastresycuarto,tengoelcuellohechounCristoderonchones.¡Malditocabezón!A las tres y veinticinco, miro la puerta, tiene que aparecer de un momento a otro, ¡tiene que
aparecer!Mimalalechecrece,creceycrece,ymesientoidiota,imbécilporloquehehecho,mientrasunas
irrefrenablesganasdellorarmetoman,peromeaguanto.Nohedellorar.Alastresymedia,sinesperarunsegundomás,melevantoy,conladignidadquemequeda,me
encaminohaciaelascensormientrasmecagoenEricZimmermanyentodasucasta.Alllegar,veoqueunodelosdosascensoresestáfueradeservicio.Joder.Tendréqueesperarmás.Mientras espero a que llegue el único ascensor que funciona en la empresa, soy incapaz de
razonar.Elamordemividaacabademetermeunfatídicogolazodelosterriblesyasoladoresportodalaescuadra.Leheabiertomicorazónyalmuygilipollaslehadadoigual.
Elascensorllega.Estápetadodegente,ypulsoelbotónquemellevaráalaplantabaja,queyaestáaccionado.
Las ganas de llorar regresan amí y vuelvo a tragarme las lágrimasmientrasmi cabeza es unbarullo de preguntas sin respuesta y siento que mi corazón se ralentiza dolorido por la crudarealidad.
Depronto,elascensorseparaentredospisos,laslucesseapaganyseenciendenyunasmujeresquehayamialrededorseasustan.
Joder...¿Yahoraesto?Duranteunossegundostodoslosqueestamosenelascensoresperamosaquevuelvaafuncionar,
peropasados unos treinta segundos, unade lasmujeres comienza a apretar todos los botones conurgencia.
Alverqueaaquéllalevaadarunataquedeunmomentoaotro,lamiroy,llamandosuatención,digo:
—Aver...,tranquila.¿Cómotellamas?—Lisa.
Sucaranomesuenay,mirándola,pregunto:—¿TrabajasenMüller?—No.Hevenido...hevenidoaunaentrevista.Variasdelaspersonasquehayallícomienzanacomentarquehanvenidoaesaentrevistay,alver
queyahanentabladounaconversación,digo:—Escuchad.Elascensorsehaparadoporquesehabráidolaluzconlatormenta,perosinduda
losconserjesqueestánenlaprimeraplantayasehabrándadocuentayprontolosolucionarán.A lamujer le tiemblan hasta las pestañas. Pobrecita. Sin embargo, parece que poco a poco se
tranquiliza.Pasan los minutos y, cuando soy consciente de dónde estoy, cómo estoy y encima encerrada,
sientoquevoyaexplotardeunmomentoaotro.Estarencerradaenunascensornuncamehagustado,ycomienzoasudar.Porsuerte,llevoelmismobolsoquehetraídodeJerez,ydentroestáelabanicodefloresqueTiaré,unaamiga,meregaló.Rápidamentelosacoycomienzoadarmeaire.
Madremía...,madremía,quécalorazoquemeestáentrando,yquéangustiadeestarencerrada.Joder...,joder...,¿aquememareo?—¿Teencuentrasbien?Aloíresavoz,ralentizolosabanicazosquemeestoydandoy,dándomelavueltaparamirar,me
quedosinhablacuandomeencuentroalhombrequeyanosésimeharotoelcorazón,elalmaoqué.Duranteunossegundoslomirocongestooscuro.Quieroquenotelodecepcionadaqueestoycon
ély, alverquenodicenadamás,mevuelvodenuevoy sigoabanicándome.Pero,depronto,merascoelcuelloyoigoenmioído:
—No,pequeña...,esosóloloempeorará—ysientocómoretiramimanoysoplasobremicuello.Eso...Elairequesaledesubocaydaenmipielerizatodoelvellodemicuerpo,cuandolooigo
decir:—¿Sabes?Hace años, el destino hizo que te conociera en un ascensor que se paró justamente
como éste enEspaña.En pocomenos de cincominutosme enamoré locamente de timientrasmecontabasque,siteentrabaelnervio,erascapazdeecharespumarajosporlabocayconvertirteenlaniñadeElexorcista.
Oíresomedalavida.Eric,miEric,vuelveatirardenuestrosrecuerdos.Aunasí,nodigonada.Nopuedo.Sientoquemialemánseacercaunpocomásamíy, tras soplarmedenuevoenmienrojecido
cuello,prosigue:—Túmehas dadounos hijos preciosos ymevas a dar otro igual de bonito, pero sin lugar a
dudaslomejordemividaerestú.Mipequeña.Mipreciosamorenaalaqueleencantaretarmetodoslosdíasyalaqueadoroversonreír.—Notoquetomaaireycontinúa—:Medijistequelascosasquemerecenlapenaenlavidanuncasonsencillas.Ytienesrazón.Nitúniyosomossencillos,peronosqueremosynosqueremostantoqueyanopodemosestarelunosinelotro.
Ay,quemeda...Entreelcalorquehaceaquíyelataquederomanticismoquelehaentrado,creoquedefinitivamentemevoyadesmayar,cuandodeprontosientoqueunadesusmanosmecogedelbrazo,medalavueltaparaquelomirey,enseñándomeunpaquetedechiclesdefresa,dice:
—¿Quieresuno?
Comounatonta,ysinimportarmecómonosmiran,asiento.Conunaencantadorasonrisa,Ericsacaunchicle,lequitaelpapelydirectamentelometeenmiboca.
Acto seguido, yo cojo otro, lo abro y se lometo a él en la boca.Qué bonito recuerdo aquél.Luego,ambossonreímosyélafirma:
—Ahíestá.Ésaeslasonrisaenlaquepiensoacadamomentodeldía.Vale,yametiene.Yavuelveatenermedondeélquería,yentoncespregunto:—¿Quéhacesaquí?Apoyandoelhombroenlapareddelascensorparaestarmáscercademicara,murmura:—Queríadarteungolpedeefectotrasloquemehasdichoyllevomásdemediahorametidoen
elascensorsubiendoybajando.Teníamiedodequetefuerasantesdelahorayporesoinutilicéunodelosascensoresparaquenoteescaparasdemí.—Y,acercándoseamí,afirma—:Porcierto,quesepasque,cuandosalgadeaquí,Björnmevaadegollar.
—¿Porqué?—preguntocuriosa.Mialemánsonríey,acercándoseaúnmás,cuchicheaconcuidadodenoseroído:—ComomedijistequeMelestabaesperándoteenrecepción,lallaméylepedíquetrajeraaPeter
paraquepiratearaelsoftwaredelosascensoresparapoderquedarmeaquíencerradocontigo.Esomeprovocarisa.Pero¿quéhahechoeseloco?Yyopensandoquehabíasidolatormenta.De pronto comienza a sonar por el altavoz del ascensor nuestra canción.Malú cantaBlanco y
negro,[47]yEricmemiraconunaponzoñosasonrisa,meguiñaelojoymurmura:—Sifallabaelgolpedeefectoalverme,sindudanuestracanciónmedaríaotraoportunidad.Vuelvoasonreír.Eric,miamor,elhombredemividaydueñodemicorazón,estáhaciendolo
quenecesito.Haceloquecualquiermujernecesitaverparasentirqueelhombrealqueamaestátanenamoradocomoella.
—Nomehahechofaltaunahoraparasaberquenoquierovivirsinti—susurraentoncesconvozronca—,perosíparapreparar todoesto.Pornadadelmundovoyadejarque tevayasdemividaporquetequieroyporquelosrecuerdosquetúyyotenemosjuntosylosquevamosaatesorarennuestro camino son mucho más importantes que las tontas piedras que tenemos que saltar paracontinuarconnuestroamor.
—Vaya... —murmuro boquiabierta por sus palabras mientras Malú relata nuestra increíblehistoriadeamor.
Desde luego, cuando mi Iceman quiere, tiene un don de la palabra y de la improvisaciónimpresionante.
—Porcierto—continúasin importarle laspersonasquenosmiranycuchichean—.YalohabíahechoantesdeiraJerez,peroquieroquesepasquehedelegadoenvariosdemisdirectivosmuchascosasy,enadelante,túyyovamosadisfrutardenuestrasvidasporque,comobiendijistehacepoco,¿dequésirveeldinerosinolodisfrutamos?Y,porúltimo,peronomenosimportante,quierodecirtequeantes,enmidespacho,hasolvidadodecirque,ademásdetodasesascosasquehasmencionado,eres mi amor, eres apasionada, besucona, maternal, hogareña, malhablada, loca, interesante,apetecible,dura,divertida,sexi,guerrera,pasional,ypodríaseguiryseguiryseguirdiciéndotelosmillonesdecosasbuenasypositivasquetienes,peroahoranecesitobesarte.¿Puedo?
Enamorada,lomiro.Sinduda,somostalparacualy,negandoconlacabeza,murmuro:
—No.Sugestodesorpresamehacegracia.—¿Porqué?—pregunta.Sonrío divertida. Mi corazón va a estallar de felicidad y, acoplándome más a él, susurro
acercandomibocaalasuya:—Gilipollas,porquetevoyabesaryo.Nuestrasbocasseencuentran.Nuestroscuerposserecuperan.Nuestroscorazonesvuelvenalatiralunísonoy,cuandonuestraslenguaschocanysedevorancon
auténticapasión,deprontomeatragantoy,separándomedeél,cuchicheo:—Joder,cariño,acabodetragarmeelchicle.Ericsueltaunarisotada,nosabrazamosantelacaradetodoslosquenosmiranyluegomurmura
condisimulo:—CreoqueesmejorqueaviseaPeterparaquehagaqueelascensorsemueva.Atontada por la locura quemi amor ha hecho pormí en la empresa, afirmo olvidándome del
chicle:—Sí.Saquemosaestaspersonasdelascensor.Ericpulsaunbotóndesumóvily,pasadosunossegundos,elascensorsemueveylaspersonas
quehayanuestroalrededorsemiransorprendidasyaplauden.Cuandoelascensorllegaalaplantabajaytodossalen,Ericmedalamano,yoselaagarrocon
fuerza y seguridad y, encantados y felices, salimos del ascensor, sabiendo que a partir de ahora,unidos, somos indestructibles y que nada ni nadie podrá con nuestro auténtico, loco y apasionadoamor.
Epílogo
Múnich,unañodespués
Loquemegustanlasfiestas...Sihayalgoquemeencantaestenermicasarepletadegentecelebrandoloquesea.Laprimavera,
laNavidad,oinclusoquemehasalidoungranoenlaoreja.¡Cualquierfiestaessiemprebienrecibida!Pero,enestecasoenconcreto,celebramoselbautizodePaul,mipequeñín,ydeJasmina,lahija
deBjörnyMel.Desdeunlateraldelsalón,observoemocionadaatodaslaspersonasqueallíestányquesontan
importantesparamí.Flyn,PeteryLuzríencercadelachimenea.Comojóvenesqueson,noseseparan,confabulan,
cuchichean,yyaloshemosbautizadocomo«eltríocalavera».El pequeño Eric, Hannah, Sami, Glen, Lucía y Juanito corretean por el salón persiguiendo a
Susto, aCalamar y a Leya, que disfrutan de la agobiante atención. Son niños, son traviesos, soninocentes,ypiensoquesuscarasdealegríasonunadelascosasmásbonitasquehevistoenmivida,mientraslospreciososmellizosdeDexterduermenenelcochecito.
MipadreylaPachucabrindanconmisuegra,elpadreyelhermanodeBjörn.Lafelicidadqueveo en sus ojosmientras lo haceny los niños los rodean es tan gratificante que consigue quemeemocione.
Sentadosenelsofá,mihermanayJuanAlbertoríenconDexteryGraciela.Losdosmexicanosjuntossondosguasones,mientrasBjörnyMelcuchicheanconFridayAndrésy,porsus risas,yaimaginoloqueplanean.
SimonayNorbert hablan conmis cuñadosDrewyMarta,mientrasDrew tiene enbrazos amidivinasobrinita.EstedíalesheprohibidoaSimonayaNorbertquetrabajen.Sonunosinvitadosmásdelafiestay,aunquealprincipioaEricyamínoscostóconvencerlos,alfinalsehandadocuentadequeellossontanfamilianuestracomolosdemás.
—¿Quépiensas?LavozdeEricmehaceregresaralarealidady,dejándomeabrazarporél,respondo:—Piensoenlagranfamiliaquetenemos.Eric,miamor,migranamor,miraanuestroalrededor.Trasloocurridoaqueldíaenelascensor
de Müller, nuestra vida ha ido a mejor. Tanto él como yo sabemos lo que queremos, y lo quequeremos es estar juntos a pesar de nuestras peleas. ¿Qué sería de nosotros sin pelear yreconciliarnos?
Encantadaestoydetenerloamiladocuandomichicarrónrubiomebesaenelcuelloyafirma:
—Ytodoestoesgraciasati,pequeña.Sitúnohubierasentradoenmivida,nadadeestoseríahoyendíarealidad.
Enamorada,medoylavuelta,lomiro,lobesoy,encuantonuestrobesoacaba,afirmo:—Estoesgraciasalosdos.Atiyamí.Eric sonríe, va a decir algo, pero entonces Björn lo llama y, tras guiñarme un ojo, se aleja
prometiendoregresar.Eneseinstante,misobrinaLuzseacercaamíy,mirándome,dice:—Madremía,tita,¡meencantaPeter!Raquel,queseacercatambién,gruñealoírla:—Luz,porelamordeDios,bajalavozynoseasdescarada.Mihermanaymisobrina.Misobrinaymihermana.Sinduda,ellassonunahistoriaparacontar
apartey,cuandovoyadeciralgoparaquehayapaz,lasinvergüenzadeLuz,quenosecortaniconunacuchilla,cuchichea:
—Mamá,perosiesqueesigualitoaHarryStylesdelosOneDirection.—Y,dandounsuspirodelomásteatral,añade—:¡Estábuenísimo!
Sueltounarisotada,nopuedoremediarlo,mientrasaquellasdosseenzarzanenunaconversaciónmadreehijayyodecidoquitarmedeenmedioomesalpicará.
Sedienta,meacercohastalamesitaprincipal,dondehepreparadounagrancomilona,ydondeeljamoncitodelricovuelveaserelprotagonista,ymepongomorada.¡Vivaeljamón!
Cojo un vaso, lo lleno hasta arriba de hielo yme sirvo una coca-cola. Feliz, le doy un trago.¡Mmm,quéricaestá!Desdeluego,simepreguntanporlosdosgrandesplaceresdemivida,tengomuyclaroqueelprimeroesEricZimmermanyel segundo lacoca-cola.Disfrutandoestoydemisegundoplacercuandoelprimeroregresadenuevoamilado,pasalamanopormicinturayacabopegadaasucuerpo.Feliz,voyabesarloperoenesemomentoBjörnyMellleganhastanosotrosyelguasóndemiamigosemofa:
—Chicos...,chicos...,¿quétalsidejáisalgoparaestanoche?Ericyyosonreímos,yMel,guiñándomeelojo,cuchichea:—Estanoche,findefiestaenelSensations.¿Quéosparece?MiroaEric,élmemiraypregunta:—¿Teapetece,morenita?Encantada,asientoydigo:—Porsupuesto,rubito.La puerta del salón se abre en ese instante y aparecen Pipa con el pequeño Paul y Bea con
Jasmina,yencerocomatressegundoslosorgullosospadresdelascriaturitas,EricyBjörn,yaseloshanquitadodelosbrazosylesestánhablandoenballenomientrasloscríossepartenderisa.
Seguroquepiensanquelesfaltamásdeuntornillo.Al ver a aquellas dos preciosidades, todos los asistentes se arremolinan alrededor de ellos
mientrasMel y yo sonreímosorgullosas.Nuestros hijos son preciosos y unas calcomanías de susguapos papaítos. Paul es rubio comoEric, y Jasmina esmorena comoBjörn, con unos preciososojazosazulescomolosdesuspapis.
Raquel,queesmuyniñera,alveraquelloseacercaaMelyamíymurmura:
—Quépadrazos...,quépadrazossonesosdosalemanes.Nosotrasasentimos—¡nolosabeellabien!—,cuandodeprontoelguasóndemicuñadosenos
acerca,leentregaamihermanaunacopitadechampánydicesincortarseunpelo:—Mireina,estanoche,cuandolafiestaacabe,quieroquemeesperescontodobiencalienteenla
cama,exceptoelchampán.Aloírlo,Raquellomiraboquiabierta,pestañeaymurmura:—JuanAlberto,porelamordeDios,pero¿quétepasa?Mi cuñado, que ya debe de haberse enterado de que esta noche nosotros vamos al Sensations,
agarraamihermanaporlacinturaysusurracomobuenmachomexicano:—Quememueroportushuesitos,mireina.Dichoesto,lasueltaysevadejándonosaMelyamísinsaberquédeciry,cuandocreoquemi
hermanavaagruñirporsudescaro,depronto,lamuydivamemiray,trasdaruntraguitoasucopitadechampán,murmuraalejándosedenosotras:
—Ojú,quéarteyquépoderíotienemirollitoferoz.Melyyonoscarcajeamosaloírla,yveoquemihermanaríetambién.¡Lamadrequelaparió!Durante un buen rato, mi amiga y yo hablamos. Me cuenta que Louise, tras su divorcio, ha
encontradounbuen trabajoenunacompañíadeseguridad,yqueBjörn,conunamigodeEricdelTribunalSuperior,estánmachacandoaaquelbufete.Depronto,seinterrumpeycuchichea:
—Jud...,Jud...,miraalaprincesaenacciónynotelopierdas.RápidamentebuscoalapequeñaporelsalónylaencuentroparadamirandocómoBjörnledice
cosasalapequeñaJasmina.Björn,otropadrazo.Sami se separa del grupo de los niños, que continúan correteando y, acercándose hasta él, lo
llama:—Papi...,papi.VeoqueBjörnenseguidadejademiraralbebéquetieneenbrazosypregunta:—¿Quépasa,princesa?La cría pone morritos, ojitos de pena y, cuando Björn se agacha para estar a su altura, dice
señalándoselarodilla:—Medueleaquí,papi.Mel y yo sonreímos al oír eso. A Sami le está costando compartir su trono con la pequeña
Jasmina;supapierasólosuyoyaúnnollevabientenerquecompartirlo,aunqueestamossegurasdequelosuperará.
Tras intercambiarunamiradadivertidaconMelyconmigo,elabogado leentregaelbebéa laPachuca,queseapresuraacogerlo,ylevantaenbrazosalarubitaquelomiracongestodetriunfo.Luego,lasientaenunasilla,sesacaunatiritadeprincesasdelbolsillodelpantalóny,poniéndoselaconmimoenlarodilla,murmura:
—Recuerda,Sami: laBellaDurmiente tecurarámágicamenteyeldolor se irá, tachán..., chan...chan...,¡paranovolvermás!
Elgestodelacríacambiadeinmediato.Tenerlaatencióndesupapiesloquebuscaba,yyalatiene.DespuésdedarleunabrazoyBjörndeshacerseenbesosconella,sevadenuevoajugarconlosniños;¡esloquetoca!
Mel y yo nos miramos. Sonreímos ante aquello, y Björn, acercándose a nosotras, cuchicheaabrazandoaMel:
—Quélevamosahacer.Todasquierenestarconmigo.—Eh,007,¡noseastancreído!—respondeMelriendo.De pronto comienza a sonar por los altavoces del salón a toda lecheSeptember,[48] de Earth,
Wind&Fire,unacanciónllenadepositividad,buenrolloyencanto.¡Madremía,cómomegusta!Miroamisuegra;ellahasidoquienlahapuestoyhasubidoelvolumen,sécuántolegustaesa
canción.Me guiña un ojo y, al ver que comienza a bailar, no lo dudo y, como he hecho en otrasocasiones, bailo con ella sin ningún sentido de la vergüenza. Al vernos, Marta da un grito defelicidad,senosacercabailandoy,pocossegundosdespués,senosunenMel,Raquel,Graciela,Luz,laPachucay¡hastaSimona!PipayBeadesaparecendespavoridasconlosbebés.
Todaslasmujeres,rodeadasdelosniños,bailamosaquellaalegrecanción,hastaquemisuegra,queesunterremoto,miraaloshombresyexigeagritos:
—Estoesunafiesta,venga,¡todosabailar!Y, dejándome flipada como siempre cuando se lo propone, el primero en acercarse a mí
moviendolascaderasesmimarido.Miguapo,atractivoysensualEricZimmermanhacequetodosaplaudan,yyosonríoamásnopoder.
¡Diosmío,cuántoloquiero!Trasél, todos loshombrescomienzanamoverse,ycuando todos,absolutamente todos losque
estamosenelsalónbailamos,incluidoDexterconsuGraciela,sentadasobreél,meagarroalcuellodemiamorymurmuroencantada:
—Tequiero,gilipollas.Decirqueloquierosequedacorto...,muycorto,ylomejoresquesécuántomequiereélamí.Estáclaroquelascosasimportantesenlavidanuncasonsencillas.Peronosotrosnosqueremosy
deseamosseguirsumandopreciososrecuerdosanuestravidaencomúny,sinduda,elqueestamosviviendorodeadosporlafamiliaseráunomásquesumar,ymáscuandomiamormemiray,conunadesusincreíblessonrisas,diceantesdebesarme:
—Pequeña,pídemeloquequierasyyotelodaré.
Notas
[1]Aquenomedejas(Feat.AlejandroFernández),UniversalMusicSpain,interpretadaporAlejandroSanzyAlejandroFernández.(N.delaE.)
[2]Véaselanotadelapág.17.(N.delaE.)
[3]Radioactive,UniversalMusicSpainyKIDinaKORNER/InterscopeRecords,interpretadaporImagineDragons.(N.delaE.)
[4]CryMeaRiver,143Records/Reprise,interpretadaporMichaelBublé.(N.delaE.)
[5]Memuero,Ariola,interpretadaporLaQuintaEstación.(N.delaE.)
[6]Véaselanotadelapág.57.(N.delaE.)
[7]Quando,Quando,Quando,143Records/Reprise,interpretadaporMichaelBubléyNellyFurtado.(N.delaE.)
[8]Véasenotaanterior.
[9]Soyunataza,DAY1,interpretadaporGrupoEncanto.(N.delaE.)
[10]Véaselanotadelapág.17.(N.delaE.)
[11]Demons,UniversalMusicSpainyKIDinaKORNER/InterscopeRecords,interpretadaporImagineDragons.(N.delaE.)
[12]Blancoynegro,Ariola,interpretadaporMalú.(N.delaE.)
[13]Ja,Back2BackRecords,interpretadaporSilbermond.(N.delaE.)
[14]HotelRoomService,Mr.305/PoloGroundsMusic/JRecords,interpretadaporPitbull.(N.delaE.)
[15]Honranosdarás,DisneyRecords,interpretadaporCeliaVergara/Chorus–Mulán/MartaMartorell/MaríaCaneda/PaulaBas.(N.delaE.)
[16]BadtotheBone,EMI,interpretadaporGeorgeThrorogood&TheDestroyers.(N.delaE.)
[17]Asturias,patriaquerida,FonográficaAsturiana,interpretadaporlaBandadeGaitasCiudaddeOviedo.(N.delaE.)
[18]HighwaytoHell,Epic/Legacy,interpretadaporAC/DC.(N.delaE.)
[19]LookingforParadise(Feat.AliciaKeys),WarnerMusicSpain,interpretadaporAlejandroSanzyAliciaKeys.(N.delaE.)
[20]Lavidaesuncarnaval,RMMRecords,interpretadaporCeliaCruz.(N.delaE.)
[21]537C.U.B.A.,Surco/EMIMusicPublishingSpainS.A.UnderExclusiveLicenseToSurcoRecordsJ.V.,interpretadaporOrishas.(N.delaE.)
[22]Véaselanotadelapág.149.(N.delaE.)
[23]YouandI,143Records/Reprise,interpretadaporMichaelBublé.(N.delaE.)
[24]TalkDirty,BelugaHeights/WarnerBros.,interpretadaporJasonDerulo.(N.delaE.)
[25]LoveMe,EMI,interpretadaporNorahJones.(N.delaE.)
[26]Véasenotadelapág.50.(N.delaE.)
[27]AChangeIsGonnaCome,WarnerBros.,interpretadaporSeal.(N.delaE.)
[28]Véaselanotadelapág.149.(N.delaE.)
[29]Convénceme,SonyMusicLatin,interpretadaporRicardoMontaner.(N.delaE.)
[30]ThinkingOutLoud,AtlanticRecordsUK,interpretadaporEdSheeran.(N.delaE.)
[31]UptownFunk(Feat.BrunoMars),Columbia,interpretadaporMarkRonson.(N.delaE.)
[32]Véaselanotadelapág.149.(N.delaE.)
[33]Sinosdejan,WEALatina,interpretadaporLuisMiguel.(N.delaE.)
[34]Véaselanotadelapág.530.(N.delaE.)
[35]RibbonintheSky,Tamla-Motown,interpretadaporStevieWonder.(N.delaE.)
[36]Aprendiz,WarnerMusicLatina,interpretadaporAlejandroSanz.(N.delaE.)
[37]Véaselanotadelapág.530.(N.delaE.)
[38]Véaselanotadelapág.470(N.delaE.)
[39]Véaselanotadelapág.17.(N.delaE.)
[40]Véaselanotadelapág.17.(N.delaE.)
[41]Enunpaísmulticolor,ParlophoneSpain,interpretadaporLasSeriesDeTuVidaPerformers.(N.delaE.)
[42](ICan’tGetNo)Satisfaction,ABKCOMusic&RecordsInc.,interpretadaporTheRollingStones.(N.delaE.)
[43]Véaselanotadelapág.17.(N.delaE.)
[44]SiDiosmequitalavida,ColumbiaRecords,interpretadaporAlejandroFernández.(N.delaE.)
[45]VámonospaJerez,ParlophoneMusicSpain,S.A,interpretadaporCantoresdeHispalis.(N.delaE.)
[46]LachicadeIpanema,Musart-Balboa,interpretadaporGloriaLasso.(N.delaE.)
[47]Véaselanotadelapág.149.(N.delaE.)
[48]September,SonyColumbia,interpretadaporEarth,Wind&Fire.(N.delaE.)
PídemeloquequierasyyotelodaréMeganMaxwell
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Primeraediciónenlibroelectrónico(epub):noviembrede2015
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