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Plaguicidas organoclorados L a u r a Ge o r g in a Ca lva yMa r¶³a d e lR o c¶³o To r r e s L a b .D e E c o s is t e m a s Co s t e r o s . D e p a r t a m e n to d e H id r o b io lo g ¶³a .D .C.B .S .U A M{ I. Introducci¶ on Los plaguicidas organoclorados (OC) se encuentran ampliamente distribuidos en el ambiente terrestre y acu¶ atico, como resultado de que en las ¶ ultimas dos d¶ ecadas han sido utilizados constantemente para combatir plagas en la industria, la agricultura, e in- cluso durante las campa~ nas de salud donde son apli- cados para contrarrestar enfermedades como la ma- laria. Sus propiedades ¯sicoqu¶ ³micas los hace muy resistentes a la degradaci¶ on biol¶ ogica, por lo que son altamente persistentes (Iwate et al., 1994). Debido a su espectro de distribuci¶ on y dif¶ ³cil biode- gradaci¶ on, estos contaminantes representan una se- ria amenaza para la salud p¶ ublica y para la mayor¶ ³a de las formas de vida; siendo compuestos altamen- te t¶ oxicos que inducen mutag¶ enesis (alteraci¶ on del ADN o de los cromosomas), teratog¶ enesis (malfor- maciones en el embri¶ on) y alteraciones sobre una gran variedad de funciones metab¶ olicas y de repro- ducci¶ on (Goldberg, 1995). Rese~ na hist¶ orica El empleo de productos qu¶ ³micos inorg¶ anicos pa- ra destruir plagas, principalmente insectos, se re- monta posiblemente a los tiempos de Grecia y Ro- ma cl¶ asicas. Homero menciona la utilidad del azu- fre quemado como fumigante, mientras que Plinio el Viejo recomienda el ars¶ enico como insecticida y alu- de al empleo de sosa y aceite de oliva para tratar las semillas de leguminosas. En el Siglo XVI, los chi- nos empleaban arsenicales como insecticidas y poco despu¶ es, empez¶ o a usarse la nicotina extra¶ ³da del ta- baco. En el siglo XIX se utilizaron el pelitre (plan- ta de sabor salino muy fuerte a la que se le a~ nade ke- roseno) y el jab¶ on para combatir los insectos, as¶ ³ co- mo los lavatorios elaborados a partir de una mez- cla de tabaco, azufre y cal para eliminar tanto insec- tos como hongos (OMS, 1992). Tiempo despu¶ es se utilizaron los compuestos org¶ ani- cos, entre ellos los organoclorados (OC). El primer plaguicida OC y el m¶ as conocido, fue el DDT (di- cloro difenil tricloroetano). Se sintetiz¶ o por prime- ra vez en 1874, pero sus propiedades insecticidas se descubrieron s¶ olo hasta 1939, cuando se le utiliz¶ o pa- ra proteger la lana contra la polilla. Durante la Se- gunda Guerra Mundial result¶ o ser muy efectivo pa- ra combatir el piojo del tifus y evitar la prolifera- ci¶ on de epidemias. Posteriormente fue empleado para enfrentar todo ti- po de plaga artr¶ opoda (Restrepo, 1988). Murty (1986) menciona que en las dos d¶ ecadas pos- teriores a la Segunda Guerra Mundial hubo un uso indiscrimado de compuestos OC, especialmente en Norte Am¶ erica con el DDT, mientras que en Gran Breta~ na y Jap¶ on fueron los ciclodi¶ enicos (aldr¶ ³n y dieldr¶ ³n en particular) y el hexaclorociclohexano (HCH). Aunque en los ¶ ultimos a~ nos el DDT ha te- nido mala fama, la Organizaci¶ on Mundial de Salud (OMS) ha estimado que hasta 1971, m¶ as de l bill¶ on de personas han sido salvadas del riesgo de con- traer malaria por el uso de ¶ este. En M¶ exico, el em- pleo de plaguicidas se inici¶ o en 1946 (Rueda, 1993). >Qu¶ e son los plaguicidas? Una de las de¯niciones m¶ as completas es la propues- ta por la FAO en 1986 (OMS, 1992), la cual establece que un plaguicida es cualquier sustancia o mezcla de sustancias destinadas a prevenir, destruir o contro- lar cualquier plaga, incluyendo los vectores de orga- nismos causantes de enfermedades humanas o de los animales, las especies no deseadas de plantas o ani- males que causan perjuicio o que inter¯eren de cual- quier otra forma en la producci¶ on, elaboraci¶ on, al- macenamiento, transporte o comercializaci¶ on de ali- mentos, productos agr¶ ³colas, madera, productos de esta o alimentos para animales. Asimismo la de¯ni- ci¶ on abarca las sustancias reguladoras del crecimien- to de las plantas, defoliantes, desecantes, agentes pa- ra reducir la densidad de las frutas o agentes pa- ra evitar la ca¶ ³da prematura de la misma y sustan- cias utilizadas antes o despu¶ es de la cosecha, con el prop¶ osito de proteger el producto. Los plaguicidas se pueden clasi¯car de diversas ma- neras: 1. Por su naturaleza qu¶ ³mica: Inorg¶ anicos Org¶ anicos Naturales (bot¶ anicosy microbianos) Sint¶ eticos 2. Por su mecanismo de acci¶ on: Contacto Ingesti¶ on Fumigante 35

pesticidas organoclorados

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Plaguicidas organoclorados

L a u r a Ge o r g in a Ca lva y Ma r ¶ ³a d e l R o c ¶ ³o To r r e sL a b . D e E c o s is t e m a s Co s t e r o s .

D e p a r t a m e n t o d e H id r o b io lo g ¶ ³a . D .C.B .S . U A M{ I.

Introducci¶onLos plaguicidas organoclorados (OC) se encuentranampliamente distribuidos en el ambiente terrestrey acu¶atico, como resultado de que en las ¶ultimasdos d¶ecadas han sido utilizados constantemente paracombatir plagas en la industria, la agricultura, e in-cluso durante las campa~nas de salud donde son apli-cados para contrarrestar enfermedades como la ma-laria. Sus propiedades ¯sicoqu¶³micas los hace muyresistentes a la degradaci¶on biol¶ogica, por lo que sonaltamente persistentes (Iwate et al., 1994).

Debido a su espectro de distribuci¶on y dif¶³cil biode-gradaci¶on, estos contaminantes representan una se-ria amenaza para la salud p¶ublica y para la mayor¶³ade las formas de vida; siendo compuestos altamen-te t¶oxicos que inducen mutag¶enesis (alteraci¶on delADN o de los cromosomas), teratog¶enesis (malfor-maciones en el embri¶on) y alteraciones sobre unagran variedad de funciones metab¶olicas y de repro-ducci¶on (Goldberg, 1995).

Rese~na hist¶oricaEl empleo de productos qu¶³micos inorg¶anicos pa-ra destruir plagas, principalmente insectos, se re-monta posiblemente a los tiempos de Grecia y Ro-ma cl¶asicas. Homero menciona la utilidad del azu-fre quemado como fumigante, mientras que Plinio elViejo recomienda el ars¶enico como insecticida y alu-de al empleo de sosa y aceite de oliva para tratarlas semillas de leguminosas. En el Siglo XVI, los chi-nos empleaban arsenicales como insecticidas y pocodespu¶es, empez¶o a usarse la nicotina extra¶³da del ta-baco. En el siglo XIX se utilizaron el pelitre (plan-ta de sabor salino muy fuerte a la que se le a~nade ke-roseno) y el jab¶on para combatir los insectos, as¶³ co-mo los lavatorios elaborados a partir de una mez-cla de tabaco, azufre y cal para eliminar tanto insec-tos como hongos (OMS, 1992).

Tiempo despu¶es se utilizaron los compuestos org¶ani-cos, entre ellos los organoclorados (OC). El primerplaguicida OC y el m¶as conocido, fue el DDT (di-cloro difenil tricloroetano). Se sintetiz¶o por prime-ra vez en 1874, pero sus propiedades insecticidas sedescubrieron s¶olo hasta 1939, cuando se le utiliz¶o pa-ra proteger la lana contra la polilla. Durante la Se-gunda Guerra Mundial result¶o ser muy efectivo pa-ra combatir el piojo del tifus y evitar la prolifera-ci¶on de epidemias.

Posteriormente fue empleado para enfrentar todo ti-po de plaga artr¶opoda (Restrepo, 1988).

Murty (1986) menciona que en las dos d¶ecadas pos-teriores a la Segunda Guerra Mundial hubo un usoindiscrimado de compuestos OC, especialmente enNorte Am¶erica con el DDT, mientras que en GranBreta~na y Jap¶on fueron los ciclodi¶enicos (aldr¶³ny dieldr¶³n en particular) y el hexaclorociclohexano(HCH). Aunque en los ¶ultimos a~nos el DDT ha te-nido mala fama, la Organizaci¶on Mundial de Salud(OMS) ha estimado que hasta 1971, m¶as de l bill¶onde personas han sido salvadas del riesgo de con-traer malaria por el uso de ¶este. En M¶exico, el em-pleo de plaguicidas se inici¶o en 1946 (Rueda, 1993).

>Qu¶e son los plaguicidas?Una de las de¯niciones m¶as completas es la propues-ta por la FAO en 1986 (OMS, 1992), la cual estableceque un plaguicida es cualquier sustancia o mezcla desustancias destinadas a prevenir, destruir o contro-lar cualquier plaga, incluyendo los vectores de orga-nismos causantes de enfermedades humanas o de losanimales, las especies no deseadas de plantas o ani-males que causan perjuicio o que inter¯eren de cual-quier otra forma en la producci¶on, elaboraci¶on, al-macenamiento, transporte o comercializaci¶on de ali-mentos, productos agr¶³colas, madera, productos de¶esta o alimentos para animales. Asimismo la de¯ni-ci¶on abarca las sustancias reguladoras del crecimien-to de las plantas, defoliantes, desecantes, agentes pa-ra reducir la densidad de las frutas o agentes pa-ra evitar la ca¶³da prematura de la misma y sustan-cias utilizadas antes o despu¶es de la cosecha, con elprop¶osito de proteger el producto.

Los plaguicidas se pueden clasi¯car de diversas ma-neras:

1. Por su naturaleza qu¶³mica:

Inorg¶anicos

Org¶anicos

Naturales (bot¶anicosy microbianos)Sint¶eticos

2. Por su mecanismo de acci¶on:

Contacto

Ingesti¶on

Fumigante

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F ig ura 1 . Estruc tura de a lg uno s o rg a no c lo ra do s.

Sist¶emicos

3. Por el tipo de organismos que afectan:

Insecticidas

Acaricidas

Fungicidas

Herbicidas

En la categor¶³a de plaguicidas org¶anicos sint¶eticosest¶an inclu¶³dos los OC, los cuales se clasi¯can por suestructura qu¶³mica en:

I.- Derivados halogenados de hidrocarburosalic¶³clicos ( HCH, lindano)

II.- Derivados halogenados de hidrocarburos aro-m¶aticos (DDT, p,p'DDT, p,p'DDE)

III.- Derivados halogenados de hidrocarburos ciclo-di¶enicos (aldr¶³n, dieldr¶³n). (Fig. 1).

De los anteriores, los m¶as estudiados son el DDT (di-cloro difenil tricloroetano) p,p'DDE, endr¶³n,p,p'DDD, hexaclorociclohexano (HCH), lindano(Gamma HCH), toxafeno [canfeno clorinado t¶ecnico(67{69% cloro)], heptacloro, aldr¶³n, ep¶oxido de hep-tacloro, endosulf¶an I y II, dieldr¶³n, endr¶³n y sulfa-to de endosulf¶an.

Todos los OC son considerados sustancias persisten-tes, ya que su tiempo promedio de degradaci¶on es de5 a~nos (Fig. 2). Lo anterior obedece a que sus estruc-turas qu¶³micas son muy estables y se degradan len-tamente bajo condiciones ambientales extremas. En-tre los compuestos m¶as persistentes destacan el to-xafeno (11 a~nos), el DDT y endr¶³n (10 a~nos), clorda-no (8 a~nos), dieldr¶³n (7 a~nos), aldr¶³n (5 a~nos), hep-tacloro (4 a~nos) y lindano (2 a~nos).

Generalmente los OC se utilizan como insecticidas,acaricidas espec¶³¯cos, herbicidas y fungicidas. Estospesticidas se aplican durante la siembra de algod¶on,

F ig ura 2 . V ida me dia de lo s princ ipa le s pla g uic ida s.

trigo, ma¶³z, frijol, arroz, soya, sorgo y c¶artamo; enlos frutales como la naranja, mango, mel¶on, sand¶³ay pi~na, as¶³ como en las plantaciones de caf¶e, ca~na deaz¶ucar y henequ¶en (Fig. 3).

F ig ura 3 . C a mpo de c ultiv o de trig o , a lfa lfa y a lg o d¶o n alo s q ue se a plic a o rg a no c lo ra do s.

El endosulf¶an es uno de los m¶as utilizados, por ejem-plo, en Puerto Kingston (Jamaica), aunque su uso le-galmente est¶a restringido para emplearse s¶olo en lasplantaciones de caf¶e (Mansingh y Wilson, 1995). EnAustralia se utiliza extensivamente para una gran va-riedad de actividades de agricultura, principalmen-te en la industria del algod¶on (Peterson y Batley,1993); mientras que en Brasil es un insecticida apli-cado en las cosechas de cocoa, caf¶e, algod¶on y fri-jol de soya (Jonsson y Toledo, 1993).

En M¶exico, los principales cultivos a los que se apli-can OC son los de ma¶³z, ca~na, frutales, c¶³tricos, frijol,arroz, trigo, chile y coco. En las regiones agr¶³colasaleda~nas a las lagunas costeras de Tabasco y Campe-che destacan los cultivos de ma¶³z, ca~na, frijol, sand¶³a,sorgo y hortalizas. En lo que respecta al control devectores de enfermedades humanas, principalmen-te paludismo, en el pa¶³s durante 1992 se program¶o laaplicaci¶on de alrededor de 100,000 kg. de ingredien-

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Plaguicidas organoclorados. Laura Georgina Calva y Mar¶³a del Roc¶³o Torres. 37

tes activos siendo el m¶as usado el DDT (99% del vo-lumen total), el cual se utiliza disuelto en agua so-bre las paredes internas de las viviendas en dondese ha noti¯cado un enfermo de paludismo. Los ma-yores vol¶umenes de plaguicidas usualmente, se apli-can en los estados de Veracruz (50%), Tabasco (25%)y Campeche (25%); en relaci¶on con la super¯cie es-tatal, los valores de uso de ¶estos son m¶as signi¯ca-tivos en Tabasco. La aplicaci¶on de plaguicidas pa-ra el control de vectores (especie que transmite elorganismo pat¶ogeno), no representa una estacionali-dad de¯nida, dise~n¶andose las campa~nas de acuerdocon los casos reportados de paludismo y en un mis-mo a~no pueden repetirse para una localidad (Ben¶³tezy B¶arcenas, 1996).

El uso generalizado de los OC se debe a dos razo-nes principales, la primera de ellas es su persistencia,ya que al ser sustancias estables sus ingredientes per-manecen activos durante un per¶³odo largo de tiem-po; sin embargo, esta misma persistencia resulta per-judicial al dar como resultado una degradaci¶on len-ta del compuesto. La segunda raz¶on es el hecho deque la mayor¶³a de los OC son muy econ¶omicos, so-bre todo el DDT (com¶unmente, el plaguicida m¶ast¶oxico tiene un precio menor).

En M¶exico, actualmente se usan alrededor de 900principios activos de plaguicidas formulados apro-ximadamente en 60,000 preparaciones comerciales.El pa¶³s fabrica 36 ingredientes activos entre los quese encuentran el DDT, HCH, toxafeno y endr¶³n(Rueda, 1993). Comercialmente el DDT se ven-de como \Agrit¶an"y \Gerasol", el endosulf¶an como\Thiod¶an"y \Endof¶an"y el lindano se encuentra co-mo \Lincide".

>Qu¶e es una plaga?Una plaga es cualquier especie animal que el hom-bre considera perjudicial a su persona, a su propie-dad o a su medio. Cualquier organismo molesto yda~nino para el ser humano y sus intereses. Algu-nos de los principales tipos de plagas son: las male-zas que compiten con las plantas cultivadas; los orga-nismos que perjudican el bienestar y la salud del serhumano como los causantes de la malaria (Plasmo-dium vivax), ¯ebre amarilla (virus), tifus (riquetsias)y peste bub¶onica (Yersinia pestis). Algunos de es-tos organismos llegan al hombre por v¶³a directa, pe-ro la mayor¶³a son transmitidos por vectores o por-tadores, es decir, hay una v¶³a indirecta como el ca-so de la hembra del mosquito Anopheles, que depo-sita a trav¶es de su picadura las esporas de Plasmo-dium vivax, agente causante del paludismo o mala-ria, en un nuevo hu¶esped (humano u otro mam¶³fero)(Fig. 4). Cuando se elimina el vector por medio delplaguicida, el hombre puede erradicar las enfermeda-des (Stainer et al. 1986). Tambi¶en est¶an las llamadas

F ig ura 4 . M o sc o A nopheles c a usa nte de l pa ludismo .

plagas urbanas (ratas, piojos, cucarachas) y las pla-gas agr¶³colas.

Los plaguicidas organoclorados en el ambien-te acuaticoLos plaguicidas OC al ingresar al sistema acu¶aticopor diversos mecanismos, ocasionan problemas decontaminaci¶on ya que deterioran la calidad del medioambiente y provocan efectos nocivos sobre la biota(organismos vegetales y animales) acu¶atica y la sa-lud humana. Entre las rutas de entrada est¶a el arras-tre, in¯ltraci¶on y erosi¶on de los suelos, principalmen-te de los agr¶³colas que fueron rociados con plaguici-das, el lavado de dichos suelos hace que ¶estos al-cancen los r¶³os y ecosistemas costeros y marinos;tambi¶en est¶a el agua utilizada para lavar el mate-rial de rociado y que es vertida en estanques, r¶³osy lagunas; otra ruta es a trav¶es de la precipita-ci¶on proveniente de la atm¶osfera o por transporteatmosf¶erico; se debe destacar que en la Isla Rossen la Ant¶artida, a pesar de que hay pocas activi-dades antropog¶enicas, a ¯nales de los 60's se de-terminaron varios OC, concluy¶endose que la presen-cia de ¶estos se deb¶³a al transporte atmosf¶erico. Enlos a~nos 1988 a 1990 tambi¶en se identi¯caron lin-dano y p,p'DDE en peces y zooplancton en la mis-ma regi¶on, pero las concentraciones han disminui-do (Larsson et al., 1992).

Otros mecanismos por medio de los cuales los pes-ticidas llegan al medio acu¶atico incluyen los restosde plaguicidas que se dispersan en el agua despu¶esdel rociamiento, derrames accidentales de OC y porla aplicaci¶on directa de ¶estos en plantaciones situa-das en las orillas de los sistemas acu¶aticos o cuandose a~naden a r¶³os o estanques para matar peces. Unavez que los OC est¶an en el ecosistema acu¶atico pue-den ser transportados en el agua por advecci¶on (mo-vimiento horizontal de los contaminantes disueltos),dependiendo de la velocidad y direcci¶on de las co-rrientes o por dispersi¶on, que involucra la mezcla deestas sustancias en la columna de agua donde experi-mentan reacciones f¶³sicas, qu¶³micas o biol¶ogicas que

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incluyen fot¶olisis, oxidaci¶on, hidr¶olisis, volatiliza-ci¶on, transformaciones biol¶ogicas, adsorci¶on y bioa-cumulaci¶on.

En la fot¶olisis hay una oxidaci¶on fotoqu¶³mica del pla-guicida que puede verse limitada por la concentra-ci¶on de ox¶³geno presente y por la cantidad de luz; sinembargo, ¶estos no suelen ser factores limitantes enlas lagunas costeras. Durante la oxidaci¶on hay unareacci¶on lenta del pesticida con el ox¶³geno disuelto,si en el medio existen concentraciones altas de ma-teria org¶anica disuelta y compuestos h¶umicos (sus-tancias derivadas de la descomposici¶on de la vegeta-ci¶on podrida), se libera per¶oxido de hidr¶ogeno quetambi¶en es oxidante. Cabe se~nalar que en aguas na-turales las oxidaciones a menudo son procesos me-diados por microorganismos. En lo que se re¯ere alos mecanismos de hidr¶olisis, ¶estos son degradacio-nes de primer orden que pueden estar catalizadaspor un ¶acido o por una base y puede incrementar-se en presencia de sustancias h¶umicas en el agua.

La volatilizaci¶on, al ser el °ujo del contaminante atrav¶es de la interfase agua{aire, da como resultadoel reingreso de ¶este a la atm¶osfera.

Las transformaciones biol¶ogicas se re¯eren a la de-gradaci¶on de estos compuestos arom¶aticos tanto porhongos como por bacterias, dicho proceso abarcareacciones de dehalogenaci¶on, alquilaci¶on, hidr¶olisis,oxidaci¶on, reducci¶on y reacciones de condensaci¶ondurante el metabolismo y el co{metabolismo, ¶este¶ultimo se re¯ere a la degradaci¶on de los pesticidaspor microorganismos cuando el microbio no es ca-paz de utilizar el plaguicida como substrato para elcrecimiento (Schnoor, 1992).

Adem¶as de estar reaccionando en el agua, gran par-te de estos compuestos se depositan paulatinamen-te en los sedimentos donde pueden experimentarhidr¶olisis, degradaci¶on anaerobia o se adsorben enpart¶³culas h¶umicas, minerales y arcillas, como elDDT y sus metabolitos, constituyendo as¶³ una fuen-te de sustancias t¶oxicas que pueden estar disponi-bles para los organismos asociados a los sedimentos(bentos) de los sistemas costeros (Goldberg, 1976)(Fig. 5).

Cuando los organismos incorporan estas sustanciasno nutritivas a trav¶es de la membrana branquial y eltejido epitelial y las almacenan en sus tejidos, se pre-senta el proceso de bioconcentraci¶on, si ¶este contin¶uaa trav¶es del tiempo da lugar a la bioacumulaci¶on.Cuando los OC no s¶olo se incrementan en los orga-nismos de un nivel tr¶o¯co inferior, sino que alcanzana los de niveles tr¶o¯cos sucesivos dentro de un eco-sistema, se origina la biomagni¯caci¶on (Fig. 6). Es-te fen¶omeno es particularmente importante en los ni-veles tr¶o¯cos elevados en donde se incluye al hombre.

La presencia de OC en las cadenas alimenticias, porejemplo, en el mar del Artico han sido descritas ennumerosos estudios de plancton, peces, aves mari-nas y mam¶³feros marinos. El oso polar (Ursus ma-ritimus) es un carn¶³voro en el que se ha demostra-do un alto grado de biomagni¯caci¶on de OC debi-do a que es el principal depredador ya que se ali-menta de focas, las cuales a su vez capturan pe-ces y crust¶aceos (Espeland et al. 1997).

Resumiendo, los plaguicidas en el medio acu¶aticopueden ser degradados, permanecer sin cambios, re-gresar a la atm¶osfera por volatilizaci¶on, depositar-se en los sedimentos, bioconcentrarse en los organis-mos de dichos ecosistemas e incluso biomagni¯carse.

Distribuci¶on de organoclorados en ecosiste-mas costerosBen¶³tez y B¶arcenas (1996) mencionan que las prin-cipales rutas de entrada de plaguicidas al Golfo deM¶exico son los r¶³os: Bravo, Soto la Marina, P¶anuco,Tuxpan, Cazones, Tecolutla, Actopan, La Antigua,Papaloapan, Jamapa, Coatzacoalcos y Grijalva; asi-mismo se ha determinado la presencia de OC en lossistemas estuarinos de Alvarado{Camaronera (Vera-cruz), Carmen{Machona y T¶erminos (Campeche).

En el Golfo de M¶exico, la laguna Alvarado se carac-teriz¶o por tener mayores concentraciones de OC to-tales en sedimentos, con respecto a El Carmen y Ma-chona; de ¶estos el endr¶³n tuvo niveles promedio de7.8 ng/g, destacando el hecho de que se detect¶o enlos tres cuerpos lagunares mencionados. En el casode organismos, el osti¶on, registr¶o las mayores concen-traciones promedio en Alvarado (17.65 ng/g) y aun-que los niveles todav¶³a no sobrepasan los l¶³mites esta-blecidos por USFDA (1984) de 500{700 ng/g peso se-co como m¶aximo en alimentos para consumo huma-no, dichas concentraciones son estables y se encuen-tran en niveles subletales en los organismos de es-tas tres lagunas (Rueda, 1993).

En la laguna de T¶erminos, tanto en peces como ensedimentos hay un claro predominio de p,p'DDT yendosulf¶an en el ¶area de Candelaria y Palizada. LosOC en esta laguna est¶an asociados a los cultivos dechile, arroz, ma¶³z y a su empleo en las campa~nas desalud (D¶³az, 1992; Ben¶³tez y B¶arcenas, 1996).

En la porci¶on del Pac¶³¯co, en el Estado de Chia-pas diversas ¶areas se dedican a la agricultura de plan-taciones de caf¶e, pl¶atano, mango, soya, sorgo y al-god¶on, por lo mismo, se utilizan extensamente losagroqu¶³micos incluyendo los OC, ¶estos ingresan alos ambientes costeros principalmente por medio delaporte °uvial, detect¶andose niveles importantes deOC. en los sistemas lagunares Chantuto{ Panzaco-la y Carretas{Pereyra, Chis. Rueda et al. (1997) con-cluyeron que en los sedimentos las mayores concen-

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F ig ura 5 . Ruta y tra nspo rte de pla g uic ida s.

F ig ura 6 . Eje mplo de bio ma g ni c̄ a c i¶o n de D D E y T o x a fe no e n siste ma s a c u¶a tic o s.

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traciones de OC se presentaron en Carretas{ Perey-ra (71.59 ng/g { 157 ng/g), predominando el hepta-cloro, ¶epoxido de heptacloro y aldr¶³n, mientras queen Chantuto{Panzacola las concentraciones fueronde 25.77 ng/g a 72.07 ng/g, sobresaliendo el endo-sulf¶an II, p,p'DDE y ep¶oxido de heptacloro. Cabese~nalar que la mayor¶³a de esos compuestos han sidorestringidos y prohibidos para su empleo en M¶exicodebido a su alta toxicidad. Tambi¶en se determina-ron OC en organismos de importancia comercial,entre ellos el camar¶on, registr¶andose las concentra-ciones promedio m¶as altas en Chantuto{ Panzaco-la (21.42 ng/g), mientras que en Carretas{Pereyra elpromedio fue de 8.72 ng/g; en tanto que para el pes-cado \pargo prieto"en este mismo sistema, los nive-les cuanti¯cados fueron de 93.9 ng/g; dichos nive-les se encuentran por debajo de los l¶³mites permiti-dos para consumo humano de acuerdo con las nor-mas establecidas por las diferentes agencias interna-cionales (USDFA 1984, Mugachia et al. 1992).

En un estudio reciente en la costa noroeste de Ba-ja California se concluy¶o que los plaguicidas m¶as fre-cuentemente detectados fueron el p,p'DDE, lindano,y clordano y que las concentraciones de OC tota-les estuvieron en un intervalo de 0.2 a 4.5 ng/g (Gu-ti¶errez et al. 1998).

Efectos de los organoclorados en los organis-mosLos contaminantes org¶anicos como los OC en el am-biente marino y estuarino, pueden afectar el desa-rrollo de los organismos e inclusive la salud huma-na, sobre todo a trav¶es del consumo directo de es-pecies como el osti¶on, camar¶on, mejill¶on, langosti-no, jaiba y peces.

Debido a que los OC son compuestos org¶anicos hi-drof¶obicos, tienden a acumularse en el tejido adi-poso de los organismos. Como todos los organis-mos contienen l¶³pidos, captan facilmente plaguici-das lipof¶³licos del suelo y del agua de los ambien-tes. En ciertos ambientes los organismos pueden bio-concentrar estos OC solubles en grasa de 10 a 1000veces los niveles detectados en los ambientes (Tar-di®, 1992). La bioconcentraci¶on de los plaguicidasse lleva a cabo por inhalaci¶on, absorci¶on d¶ermica,ingesti¶on y acci¶on sist¶emica a trav¶es de las super-¯cies de las plantas y ra¶³ces, y super¯cies celula-res de los microorganismos; la ingesti¶on de alimen-to o agua son de particular importancia, siendo losjuveniles los organismos de mayor riesgo. El prin-cipal impacto de los plaguicidas es sobre las llama-das especies no{blanco (una especie no{ blanco se re-¯ere a las especies ben¶e¯cas de las tramas de la na-turaleza) ya que entre ¶estas se encuentran depreda-dores que funcionan de manera natural como contro-les biol¶ogicos de las poblaciones de insectos{plaga.

Espina y Vanegas (1996) citan que algunos OC sonparticularmente t¶oxicos y sus efectos sobre la bio-ta pueden ser letales o subletales ya que alteran pro-cesos biol¶ogicos como la tasa de crecimiento y el in-tercambio de los iones de Na y K o bien, puedenprovocar la muerte de los organismos. En los mo-luscos y crust¶aceos, el endosulf¶an provoca una dis-minuci¶on de los amino¶acidos libres en la hemolin-fa (l¶³quido sanqu¶³neo de los invertebrados), as¶³ co-mo la inhibici¶on de la NA{K{ATPasa branquial. Ta-les perturbaciones alteran los procesos de osmoregu-laci¶on y el consumo de ox¶³geno de los organismos,lo que a su vez repercute en su actividad normal.Tambi¶en se presentan alteraciones en la reproduc-ci¶on y el crecimiento de crust¶aceos y moluscos (bi-valvos).

En los peces tambi¶en los efectos se presentan gene-ralmente durante el ciclo reproductivo, por ejemplo,el DDT y sus derivados alteran el preferendum ¯-nal de la temperatura de reproducci¶on en los peces,dando como resultado que la poblaci¶on no pueda al-canzar el ¶area donde normalmente ocurre el deso-ve; otro efecto es que los plaguicidas alteran el tiem-po en el que el saco vitelino es absorbido. Adem¶asde in°uir sobre la reproducci¶on, algunos OC oca-sionan da~nos en diferentes ¶organos de los peces co-mo el h¶³gado, ri~n¶on, cerebro, branquias, m¶usculo, in-testino y g¶onadas (Jonsson y Toledo, 1993). Al res-pecto destacan los trabajos de Urdaneta et al. (1995)quienes han con¯rmado la existencia de anormalida-des en el esqueleto, necrosis en h¶³gado y tumores be-nignos y malignos en peces de granjas acu¶³colas en elEstado de Zulia, Venezuela. Cabe se~nalar que la to-xicidad de los pesticidas es mayor en los peces queen los invertebrados.

En las aves, el principal efecto de los OC (Tardi®,1992) es sobre la reproducci¶on, estableci¶endose queprincipalmente el p,p'DDE ocasiona adelgazamien-to de los cascarones de huevos (Fig. 7) en varias es-pecies como el halc¶on (Fig. 8) y el ¶aguila, as¶³ co-mo una disminuci¶on de la tasa reproductiva, dan-do por resultado un declinamiento de la poblaci¶on.

En lo referente a mam¶³feros marinos (ballenas, del-¯nes, focas, entre otros), una gran proporci¶on de lamasa de su cuerpo es grasa, que le sirve como ais-lante t¶ermico y almacenaje de energ¶³a. Debido a lanaturaleza lipof¶³lica de los OC el transporte y losniveles de ¶estos est¶an asociados con el metabolis-mo de los ¶acidos grasos. La transferencia de resi-duos de OC durante los per¶³odos de lactancia y ayu-no es particularmente importante en estos organis-mos, la primera, como una ruta de excreci¶on de va-rios OC en las hembras de foca, no obstante, se des-conocen las consecuencias para la descendencia (Es-peland et al. 1997).

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Plaguicidas organoclorados. Laura Georgina Calva y Mar¶³a del Roc¶³o Torres. 41

F ig ura 7 . C ro ma to g ra ma q ue c o n¯rma la pre se nc ia deD D E, re spo nsa ble de l a de lg a z a mie nto de lo s c a sc a ro ne sde la s a v e s.

F ig ura 8 . El D D E a l a de lg a z a r lo s c a sc a ro ne s de lo s ha l-c o ne s o c a sio na q ue ¶ e sto s se ro mpa n f¶a c ilme nte y la s a v e smue ra n.

F ig ura 9 . A plic a c i¶o n de o rg a no c lo ra do s c o n ta nq ue a lae spa lda .

Efectos de los organoclorados en el hombreExisten diversas fuentes de exposici¶on humana a losplaguicidas, que circunscriben las agudas o cr¶onicas,las profesionales o no profesionales y las intencio-nales o no intencionales. La exposici¶on del hom-bre a los plaguicidas provoca que ¶estos sean acu-mulados a partir de tres formas, la oral (por inges-ti¶on), la inhalaci¶on (a trav¶es de las v¶³as respirato-rias) y la d¶ermica (a trav¶es de la piel).

En cuanto a la exposici¶on accidental, ¶esta pue-de presentarse cuando los OC est¶an depositadosen armarios de la casa, almacenados en recipien-tes sin se~nal distintiva, guardados junto con produc-tos alimenticios; al usar plaguicidas agr¶³colas con ¯-nes dom¶esticos, colocar agua potable en recipien-tes vac¶³os donde anteriormente se guardaban pla-guicidas, por el tratamiento de productos alimen-ticios con estas sustancias y por ¶ultimo, el transpor-te de alimentos y plaguicidas en un mismo veh¶³culo.

Por otra parte, la exposici¶on profesional se re¯ere alos obreros que est¶an relacionados directamente conla fabricaci¶on y la formulaci¶on de OC, a los vende-dores, transportistas, mezcladores y cargadores im-plicados en su distribuci¶on; as¶³ como a los operariosdel equipo de aplicaci¶on (Fig. 9), cultivadores y re-colectores (Fig.10); socorristas y personal de limpie-za relacionados con la industria de los plaguicidas.

Una vez que los OC son incorporados en el organis-mo humano se almacenan en en el tejido graso don-de suelen ser inactivos. En las ¶epocas de nutrici¶on de-¯ciente o de relativa inanici¶on, los dep¶osito adipo-sos se movilizan y los OC se liberan, pasando al to-rrente sangu¶³neo, con posibilidad de producir efec-tos t¶oxicos si la concentraci¶on alcanza un nivel su¯-cientemente elevado. En los seres humanos los pla-guicidas (principalmente DDT y lindano) provocandiversos efectos, entre los que se incluyen los de ti-po cut¶aneo caracterizados por reacciones al¶ergicas y

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42 ContactoS 30, 35{46 (1998)

F ig ura 1 0 . Re c o le c to re s de sa nd¶ ³a c o nta mina da c o n o r-g a no c lo ra do s.

exantemas. Frecuentemente todos los OC producenalteraciones metab¶olicas al desencadenar la forma-ci¶on de enzimas y cloracn¶e; asimismo tienen efectosneurol¶ogicos que abarcan lesiones del sistema ner-vioso central (OMS, 1992).

El endosulf¶an altera las concentraciones de sodio ypotasio y disminuye los niveles de calcio y magnesioen el plasma sangu¶³neo (Naqvi y Vaishnavi, 1993).En el caso de la exposici¶on a HCH, ¶este puede ocasio-nar una enfermedad llamada por¯ria; mientras que elDDT y sus metabolitos como el p,p'DDT, p.p'DDEse reporta que tienen efectos estrog¶enicos. El hepta-cloro aumenta el riesgo de leucemia y des¶ordenes enel h¶³gado en ni~nos contaminados por ingesti¶on de le-che (Fig. 11) que conten¶³a heptacloro (Nasir, 1998).

De igual forma, adem¶as del tejido adiposo, se han re-portado OC (dieldr¶³n, DDT, DDE, HCH y ¶epoxidode heptacloro) en el suero y la leche materna (Tar-di®, 1992). Un ¶area de preocupaci¶on relacionada conla persistencia de plaguicidas en el cuerpo huma-no ha sido la transferencia de OC al infante a trav¶esde la placenta y la leche materna. Los OC se trans¯e-ren desde el tejido graso a la grasa de la leche duran-te la lactancia y las concentraciones determinadas enlos reci¶en nacidos son comparables con las evaluadasen el medio. Estos insecticidas tambi¶en pueden tras-locarse (trasladarse) al feto por medio del cord¶onumbilical. El heptacloro ocasiona nacimientos pre-maturos y que los reci¶en nacidos tengan un peso ba-jo y un desarrollo cerebral atrasado e incluso tie-ne potencial teratog¶enico. La presencia de compues-tos del DDT en altas concentraciones en la sangrede una mujer embarazada puede aumentar el meta-bolismo del estr¶ogeno y la progesterona, lo que pue-de provocar un aborto (Nasir et al. 1998).

Uno de los pa¶³ses en donde se han registrado al-tos niveles de OC (DDT y sus metabolitos y he-xaclorociclohexano) en leche materna ha sido Jorda-

F ig ura 1 1 . La le c he c o nta mina da c o n he pta c lo ro a ume ntae l rie sg o de le uc e mia e n ni~no s.

nia (en Valle Jord¶an) donde se usan extensivamen-te estos contaminantes para el control de mosqui-tos, re°ejando la contaminaci¶on ambiental por es-tos insecticidas (Nasir et al. 1998).

En un estudio presentado por Prado et al. (1998)sobre la presencia de OC en leche pasteurizada enla Ciudad de M¶exico, se reportaron los siguientesresultados:

Re s id u o ¹g/g L M R¤

H C H 0 .2 2 4 8Linda no 0 .3 8 8A ldr¶ ³n + D ie ldr¶ ³n 0 .2 5 4 0H e pta c lo ro + Ep¶o x ido de he pta c lo ro 0 .1 5 2 4Endr¶ ³n 0 .0 5 3 8D D T + me ta bo lito s 0 .1 2 0

¤(% de mue stra s q ue so bre pa sa ro n la no rma )

Este trabajo fue realizado por la Universidad Aut¶o-noma Metropolitana{Xochimilco y dada su relevan-cia motiv¶o a la Red de Acci¶on sobre Plaguicidas y Al-ternativas en M¶exico (RAPAM) a demandar una in-vestigaci¶on seria y a fondo sobre la contaminaci¶oncon OC en la leche pasteurizada de vaca y otros pro-ductos l¶acteos. Esta convocatoria se present¶o a Ins-tituciones de Investigaci¶on y Educaci¶on Superior pa-ra que se incluya un muestreo m¶as extenso, con el¯n de determinar qu¶e marcas comerciales a¶un pre-sentan concentraciones de residuos de OC que vio-len las normas sanitarias, se informe a la poblaci¶on y

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se tomen las medidas correctivas para evitar que es-te caso se repita en el futuro y se sancione a los res-ponsables conforme a derecho. Finalmente, aunqueno se ha reconocido de manera o¯cial, se mencio-na que la leche marca \LALA"procedente de La La-guna, fue una de las leches donde se detectaron re-siduos de OC (RAPAM, 1998).

RestriccionesEn la reglamentaci¶on referente al empleo de pla-guicidas destacan dos t¶erminos \Prohibido"y \Seve-ramente Restringido". Se de¯ne como \Prohibidoa

aquel plaguicida cuyos usos registrados han sidoprohibidos en su totalidad por decisi¶on guberna-mental, o cuyas solicitudes de registro o una acci¶onequivalente para todos sus usos no han sido otor-gadas por motivos de salud humana o ambientales.Se considera \Severamente Restringidoa aquel pla-guicida del cual virtualmente todos sus usos regis-trados han sido prohibidos por acciones reglamenta-rias gubernamentales, no obstante, se autorizan al-gunos usos registrados espec¶³¯camente. En E.U.A.en la clase de los plaguicidas \Prohibidos"est¶an elaldr¶³n, DDT, dieldr¶³n y DDE; y entre los \Severa-mente Restringidos"se ubican el clordano y el hepta-cloro, (EPA, 1992). Cabe se~nalar que Velsicol Che-mical Corporation en 1991 export¶o 750 toneladas declordano y heptacloro a varios pa¶³ses del mundo, apesar de que en E.U.A. desde 1978, la EPA prohi-bi¶o el uso agr¶³cola de ¶estos (Jewell, 1993).

Aparte de establecer restricciones para el uso de losplaguicidas a principios de 1993 la EPA dio a cono-cer su nueva pol¶³tica sobre la exportaci¶on de ¶estos,siendo los Estados Unidos el ¶unico pa¶³s del mun-do en exigir una noti¯caci¶on de exportaci¶on de pla-guicidas no{registrados. Antes de exportar un pla-guicida de este tipo, los exportadores deben enviar asus clientes una \Declaraci¶on de aceptaci¶on de com-prador extranjero"que informa a dichos comprado-res que el producto no ha sido autorizado para suuso en E.U.A. El comprador debe remitir la decla-raci¶on al exportador, quien luego la env¶³a a la EPA;quien a su vez, enviar¶a las declaraciones a la \Au-toridades Nacionales Designadas"de los pa¶³ses im-portadores as¶³ como a las de los pa¶³ses de destino ¯-nal o uso intencional, tal como lo ha de¯nido el Prin-cipio de Informaci¶on y Consentimiento Previos delPrograma de las Naciones Unidas para el Medio Am-biente (Marquardt, 1993).

No obstante lo anterior, en 1993 Velsicol ChemicalCorporation en E.U.A. a¯rm¶o que seguir¶a producien-do los insecticidas extremadamente t¶oxicos, clordanoy heptacloro para la exportaci¶on \siempre y cuandolos compre la gente". Esta compa~n¶³a es la ¶unica pro-ductora de estos dos compuestos cuyos mercados van

disminuyendo r¶apidamente en el mundo industriali-zado debido a que se ha demostrado que son carci-nog¶enicos en animales de laboratorio. Velsicol vendelos plaguicidas particularmente a los pa¶³ses del ter-cer mundo (Jewell, 1993).

En Europa la Regulaci¶on sobre Exportaci¶on e Im-portaci¶on de Ciertas Sustancias Peligrosas de 1992prohibe la importaci¶on de productos t¶oxicos en otrospa¶³ses. Este procedimiento se basa en el princi-pio de que los env¶³os internacionales de sustanciasqu¶³micas prohibidas o severamente restringidas nodeber¶³an hacerse sin el acuerdo del pa¶³s importa-dor, entre dichas sustancias est¶an los OC: aldr¶³n (29pa¶³ses), DDT (33 pa¶³ses), dieldr¶³n (32 pa¶³ses), en-dosulf¶an (9 pa¶³ses), endr¶³n (31 pa¶³ses), hexaclorohe-xano (21 pa¶³ses), lindano (18 pa¶³ses) y heptacloro(21 pa¶³ses). No obstante, la Comunidad Econ¶omicaEuropea (CEE) permite a los exportadores venderproductos t¶oxicos obsoletos o prohibidos en otrospa¶³ses, de tal manera que en Italia y Holanda pue-den exportar si siguen el procedimiento de \Consen-timiento previo al pa¶³s importador"(PIC), que dic-ta su legislaci¶on. Gran Breta~na noti¯ca voluntaria-mente al pa¶³s importador sobre los productos prohi-bidos o severamente restringidos, mientras que enFrancia, simplemente no hay restricciones para la ex-portaci¶on de plaguicidas, ni siquiera de los altamen-te t¶oxicos. As¶³ pues, todos los productos prohibi-dos en Europa, tales como el DDT y endr¶³n se pue-den comercializar libremente en el extranjero (Res-trepo, 1988).

Este comercio indebido se ve facilitado por la inca-pacidad o la renuencia de los gobiernos importado-res por proteger a sus ciudadanos de los venenos ex-tranjeros (Fig. 12). Por ejemplo, en 1991, comer-ciantes de desechos de Alemania recibieron autori-zaci¶on del Ministerio de Agricultura de Albania pa-ra enviar a ese pa¶³s, cinco cargamentos de plaguici-das vencidos y prohibidos (incluyendo toxafeno) co-mo \ayuda humanitaria"para uso agr¶³cola. Seg¶un laregulaci¶on este comercio t¶oxico es perfectamente le-gal (Jewell, 1993).

M¶exico manufactura la mayor¶³a de plaguicidas queconsume y tambi¶en es un pa¶³s exportador, particu-larmente de DDT el cual est¶a controlado por la cor-poraci¶on gubernamental FERTIMEX. ¶Esta tambi¶enproduce plaguicidas para venta a corporaciones tras-nacionales que regresan los productos a M¶exico alpor menor, bajo docenas de nombres comerciales.Existen casi tres docenas de plantas p¶ublicas y priva-das para la formulaci¶on de plaguicidas, las que ope-ran en una fracci¶on peque~na (5{15%) de su capaci-dad y est¶an buscando activamente inversionistas pa-ra su expansi¶on (Wright, 1991).

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44 ContactoS 30, 35{46 (1998)

F ig ura 1 2 . Sin pa la bra s . . .

Por otra parte, en nuestro pa¶³s, el Cat¶alogo O¯cial dePlaguicidas (Diario O¯cial de la Federaci¶on, 1991),tiene registrados 250 ingredientes activos que pue-den ser empleados en el pa¶³s. En el mismo cat¶alogotambi¶en se indica el uso de los diferentes insectici-das, as¶³ como los compuestos suspendidos, restrin-gidos y prohibidos para su uso en la Rep¶ublica Me-xicana; sin embargo, no est¶a establecido un l¶³mitede tolerancia espec¶³¯co de los plaguicidas en alimen-tos. Por lo anterior los niveles de OC detectados en¶estos se eval¶uan y comparan con base en las regula-ciones adoptadas por agencias internacionales, en es-pecial las determinadas por el gobierno de EstadosUnidos, las cuales establecen los l¶³mites m¶aximos deOC permisibles en alimentos para consumo huma-no (USFDA).

ComentariosLos OC est¶an siendo reemplazados por plaguicidasorganofosforados o carbamatos en los pa¶³ses desa-rrollados para evitar posibles problemas de conta-minaci¶on, puesto que en los sistemas acu¶aticos losefectos de ¶estos ya han sido ampliamente demostra-dos.

La presencia de OC en regiones pr¶³stinas resul-ta principalmente del transporte atmosf¶erico desde¶areas industrializadas, por lo que este grupo de pro-ductos qu¶³micos ha sido reconocido desde hace variasd¶ecadas como contaminante ambiental global (Espe-land et al. 1997).

La detecci¶on de OC en leche materna, fetos y otrasmuestras biol¶ogicas ilustran la necesidad del manejoy evaluaci¶on de las exposiciones que ocurren, debidoa que los residuos pueden persistir en el ambiente,en las cadenas alimenticias y en el cuerpo humano

por largo tiempo incluso despu¶es de que el uso delqu¶³mico ha sido descontinuado.

Por ¶ultimo, Suecia es uno de los pa¶³ses en los que seha determinado que los niveles de OC empezaron adisminuir considerablemente desde la decada de losa~nos 70 a pesar de que en los a~nos 60 estaba muycontaminado por DDT y HCH, lo que demuestra quelas medidas de protecci¶on ambiental implementadastuvieron un efecto positivo (Bignert et al. 1998).

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