Upload
antoniojuareznunez
View
281
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
8/17/2019 Ordenación Montes en España
1/7
Cuadernos de la
S.E.C.F. N.O
1
octubre 1995, pp.
15-21
«Reunión de ValsaÍn. 17-20 octubre 1994»
L
ORDEN CIÓN DE MONTES EN ESP Ñ
Pío Alfonso Pita
el Arroyo Fresno, 23. 28035 MADRID
1. PLANIFICACIÓN CONCERTADA
Las
características del
medio
forestal
requieren
una
actuación planificada
a largo
plazo, ya que desarrollan su actividad
en
espacios relativamente grandes y en base a
la
utilización
correcta
de
las energías naturales
en
provecho de
las
necesidades humanas.
Vamos
a
tener como
referencia
el
Manuel
D Aménagement de
la Oficina Nacional de
Bosques
de
Francia,
por
la actualidad
de
su
traducción en
la versión
española
de los
profesores
Prieto y
López Quero,
así
como
por sus
posibles
aplicaciones
a
los
montes
españoles
DUBOURDIEU
al.; 1993
La política
forestal
seguida
en
Francia
con
los
montes públicos Estado y
colectivida-
des
se manifiesta
actualmente
en tres nive
les
de
planificación
que pueden tener
aplica
ción
en
España.
- Nivel nacional con directivas y orien
taciones
que fijan
los objetivos generales
sobre
la
gestión
de
los
montes
públicos.
-
Nivel
regional
con
directivas
comunes
a los
montes que forman una unidad
ecoló
gica y económica en
una
amplia región
natural, enclavada en
uno
o
más
Departamentos.
Se ocupa
a tal efecto en:
-
Elementos
comunes
de
análisis:
•
Datos que
caracterizan la
tipología
de
la
estación
•
Datos económicos: mercado de los
productos
forestales
•
Datos
sociales y
humanos
-
Elementos comunes
de decisión:
•
Elección
de especies
•
Elección de edades y dimensiones
óptimas
-
Recomendaciones
técnicas:
•
Modelos
de
selvicultura
• Técnicas
de
actuación
- Nivel a escala monte
o
grupo de
montes
que
analiza las condiciones natura
les
y
administrarivas del
monte
en concre
to en función
de
unos objetivos a cumplir
producción, protección, recreo)
y
de
los
medios económicos disponibles.
A
tal
efecto tenemos:
-
Guía de
gestión
para
un
plazo de
apli
cación
de
lOa
25
años
-
Tratamiento selvícola
y método de
ordenación
-
Programa de
cortas
y
trabajos
-
Balance económico
En
España, de una
manera un tanto desor
ganizada,
se están
redactando textos legisla
tivos a nivel de las autonomías, sin tener en
cuenta
el
carácter
integrador
nacional
y
con
criterios dispares
motivados
por la influencia
perturbadora de
los llamados «ecologistas».
Las
consecuencias
de esta política
disgre
gadora
del
sector forestal
las
estamos
sufriendo en este
año
climatológicamente
seco, con el descontrol
en
la dirección y
empleo
de
medios
eficaces
en la
lucha contra
los incendios forestales, que van camino
de
alcanzar
el
record nacional
de superficie
incendiada en un año.
15
8/17/2019 Ordenación Montes en España
2/7
P.
A
PITA
Sin embargo, seamos optimistas
ante el
futuro, observando que España, país de vieja
historia,
es quizás la
nación europea con
mayores contrastes geográficos y variaciones
climáticas. Así, vemos que en Levante, Sur y
gran parte de la Región Central predomina
el
clima
mediterráneo, con sequías
estivales
superiores a los 3
meses
y en consecuencia
con grave riesgo
de
incendio,
para
el
que
están
preparadas
las especies forestales
de
crecimiento lento del género Quercus con su
resistencia al fuego y capacidad de rebrote.
Por
el contrario, en
el
Norte y Noroeste de
la
Península
tenemos precipitaciones abun
dantes
y
mejor
repartidas, que
junto
con
temperaturas
suaves, permiten obtener las
mayores producciones maderables por hectá
rea de toda Europa. Por tanto, hagamos
viables esas posibilidades potenciales
de
producción, racionalizando su desarrollo y
aprovechamiento con las especies forestales
de
crecimiento rápido y un mejor control del
fuego, tal
como
se
hace actualmente en
Galicia.
En
consecuencia,
no
es correcta a efectos
interpretativos
la
comparación global
de
nuestra riqueza forestal
con
la
de
los paises
de nuestro entorno, tal
como
hacen los auto
res
de
la versión
española en
los datos
que
resumimos
en la
tabla 1
Asimismo, lamentamos discrepar
de la
versión
pesimista de
los traductores sobre los
métodos de ordenación vigentes
en
España,
de
los que dicen que ya eran historia
en
otros
países en el
año 1969;
todo ello,
como
si los
métodos
de
ordenación
franceses
tuvieran
Tabla 1
Paises Superficie arbolada Existencias
(10
6
ha) (%) (%)
España 100 100
Francia 12
114 423
Alemania
8
77
250
Italia 5
50
125
16
«La ordenación
de
montes
en
España»
poco
que
ver
con
los que
se
practican
en
nuestro país.
Especialmente grave consideramos
la
afir
mación
de
que
por desconocimiento de los
métodos modernos se recomienda, por algu
n?s
.forestales españoles, el empleo de proce
dllll1entos «conocidos por todos»; añadiendo,
que tal postura es mantenida
por
algunos jóve
nes ingenieros, «viejos en ideas dasocráticas».
En
realidad, los
métodos de ordenación
como
tales, han variado
poco
en Europa
los últimos 30 años. Lo que sí ha sufrido una
~ r a n transformación logística es la disponibi
lIdad y actualización de los datos descripti
vos
de la
masa
forestal
en
el inventario
,
tomando
como
apoyo la fotografía aérea y el
empleo de ordenadores; ello ha permitido un
mejor estudio del medio ambiente
en
rela
ción con
las
comunidades vegetales y sus
capacidades
de producción
con medios de
explotación altamente tecnificados.
2.
METODOLOGÍA
DE
LA ORDENA-
CIÓN
2.1. Generalidades
Centrándonos en el tema asignado a mi
conferencia,
hagamos un poco de historia
sobre
el
desarrollo de los métodos de orde
nación que, en
base
al tratamiento selvícola
.
orgamzan
la producción final en el tiempo y
en el espacio,
de
acuerdo con unos determi
nados
objetivos de producción, protección o
recreo.
Para ello
haremos
una
breve
exposición
sobre
la
historia de los
métodos de
ordena
ción, siguiendo los clásicos textos de
O ~ Z Á B L (1883)
y
~ C K Y 1944 Y 1949),
as como
las
InstruccIOnes
de
Ordenación
españolas, que vieron la luz respectivamente
en los años
1890, 1930
y
1970.
Los métodos de ordenación aplicables a
las masas regulares los clasificaba
OL ZÁB L
(1883)
en:
- Métodos de división
-
Métodos
de
distribución
=
«Ordenar
transformando»
8/17/2019 Ordenación Montes en España
3/7
uadernos
de la s.E.c.F. N.o
1
octubre 1995
- Métodos racionales
- Pressler-Judeich
2 2 étodos de división
Los métodos de división, aplicados racio
nalmente en Alemania desde el siglo XVIII,
los refiere
en
exclusiva OLAZÁBAL 1883) a
nuestros montes bajos, divididos bien en
áreas iguales, en áreas inversamente propor
cionales a la calidad y,
en
ciertos casos que
aprovechan pero no ordenan), en áreas inver
samente proporcionales a la producción, al
objeto
de
conseguir
la
constancia
de
ingresos
en los años de su aplicación.
Al referirse
a estos
métodos, MACKAy
1949) propugna un alargamiento
de los
tumos de los montes bajos en busca de mejo
res
posibilidades
y rendimientos. Además,
en contraposición a Olazábal, admite la apli
cación del método de división a los montes
altos
con
especies de
crecimiento rápido
Pinus pin ster y
P.
radiata), con ayuda
en
su caso de la repoblación artificial.
En
la
actualidad, las plantaciones
de
euca
lipto
con
destino a las empresas celulósicas
se aprovechan
en
régimen de monte bajo,
después de la primera corta, durante dos o
más tumos sucesivos. Las grandes plantacio
nes,
realizadas
principalmente por dichas
empresas y
por
particulares,
favorecen
un
suministro
continuo
de
madera,
en base a
turnos de aprovechamiento de lOa 15 años.
Por
otra parte, la reducción del pastoreo en
nuestros montes de frondosas hace viable
actualmente
una
ordenación incipiente hacia
el tratamiento de monte medio,
que
reserva
en la corta periódica de la sarda los resalvos
de porvenir
para
futuros aprovechamientos
de maderas, leñas y frutos en
conversión
hacia el «monte alto sobre cepas» en un
segundo tumo ALLuÉ HERNÁNDEZ 1991).
2 3 étodos de distribución
Los métodos
de distribución
inician
su
andadura
en Alemania a finales del
siglo
«Reunión de
Val
saín. 17-20 octubre
1994»
XVIII,
con
autores que aprenden a estudiar
lo que es el monte con sus diferentes clases
de edad.
Sin embargo
tratan de no alterar
sustancialmente
su
constitución actual: están,
por así decirlo, «a la defensiva».
El paso decisivo lo dará Hartig a comien
zos del siglo XIX, dividiendo el
tumo
en
clases de edad, períodos en los que vacía
ordenadamente el vuelo. Hay
un
cambio en
la
estructura del vuelo, que se ajustará a un
Plan General de aprovechamiento para todo
el tumo y que se completará
en
detalle
con
el
Plan Especial del primer periodo. Esta meto
dología sirvió de base a las Instrucciones de
Ordenación del año 1819
para
los montes de
Prusia.
Sin embargo, las prescripciones de un Plan
General
para
todo un tumo, con especies de
crecimiento relativamente lento, eran una
pretensión exagerada de imposible
cumpli-
miento, tal y como
pusieron
de manifiesto
los primeros fracasos de aplicación
que
dieron paso a los métodos racionales, donde
no se exigía un plan previo de actuación.
N o obstante, la
crítica
experimental,
distinguiendo
la
verdad de fondo del método
de Hartig de sus defectos superficiales, abor
dó la reforma con afán constructivo, bajo la
dirección
de
Cotta. Para ello,
empezó por
aceptar la división del
tumo
en periodos y la
subordinación de los aprovechamientos al
orden de
éstos,
pero,
en
vez de
distribuir
directamente el vuelo entre dichos periodos,
como hacía
Hartig,
distribuían
el
suelo,
renunciando a la constancia de
la renta
en
favor del orden de actuación.
Un
paso
más en
esta tendencia simplifica
toria lo dió KIapstein, reduciendo el plan de
aprovechamientos al tramo del primer perio
do y evaluando con un ligero aforo las exis
tencias para el resto del cuartel.
2 4 étodos racionales
Como alternativa a la
distribución
del
cuartel en períodos y tramos aparecieron los
llamados métodos racionales,
que
fijaban la
posibilidad
en volumen mediante
fórmulas
17
8/17/2019 Ordenación Montes en España
4/7
P
A PIT
algébricas que
trataban
de cuantificar el
volumen de
las cortas en
base
a
conseguir
el
llamado monte
normal.
Para ello, el fin
de
fines
de la
Dasocracia,
de acuerdo
con
OLAZÁBAL
1883),
es el de
disponer el monte de
modo que
dé la renta
máxima
anual
constante, dentro
de
la
espe-
cie,
método de
beneficio turno adoptado,
ello
se alcanza cuando
tenga
tantas clases
de
edad como
años
correspondan al turno, y
de
forma que cada clase de
edad
ocupe áreas
inversamente proporcionales a la calidad.
Se guía
el
vuelo
del
monte hacia el
«estado
normal», enderezando el aprovechamiento
mediante
correcciones deducidas
de
las rela
ciones
que se
hallan
entre
su
situación actual
y
la utópica
pretendida. Se trata
de
aprove
char el cuánto que la corrección pide, sin
mayores
preocupaciones
sobre el
dónde
cómo de su
realización.
A título
de
ejemplo, citamos las fórmulas
de
cuantificación de
la
posibilidad
más
cono
cidas:
•
Tasa
austríaca
de
1788
P=CN
ER
-
EN
T
donde CN es
el
crecimiento
normal, T el
turno,
EN
las existencias normales y
ER las
existencias reales.
•
Fórmula de Hundeshagen
de
1821
P
=
CNx
ER
EN
•
Fórmula de
Breyrnann
de
1855
.
Sk
ik
PNx 2 m
p=
·
m
k
T
s
donde PN
es
la
posibilidad normal,
sk
y
lk
la cabida
y
edad
del rodal k, respectivamen
te, y S
la
superficie del cuartel.
18
•
Fórmula de
Heyer
P = C R E R - E N
T
«La ordenación
de
montes
en
España»
Esta fórmula
deriva
de
la
tasa
austríaca, al
emplearse el crecimiento real
CR en lugar
del
normal CN.
Estas posibilidades se
aprueban
en
un plan
de cortas
para
un primer periodo del Plan
General de
aprovechamiento,
buscando
rela
cionarse con los métodos de distribución
a
efectos
de
establecer el
dónde
el cómo
de
la corta. Sin embargo, sigue teniendo su
punto
débil
en la
determinación
de
las exis
tencias
normales
en
base
a tablas
aplicables
al monte
y al conocimiento
de
calidades.
2.5. Método Pressler Judeich
Recogido en algunas líneas por
las
Instrucciones
para la Ordenación de montes
arbolados
del
año
1970,
trata
de
evitar el
turno único
del cuartel
cuando
éste
presente
diferencias notables
de producción entre las
calidades del suelo
las
especies arbóreas
que lo pueblan,
que
afectan a la edad en
que
se
produce
el
máximo
crecimiento medio.
En tal caso, la
unidad
dasocrática sería la
clase
de
calidad,
que con
su
correspondiente
especie principal estaría gobernada
por
su
propio
tumo y tratamiento.
2.6. Métodos modernos
La segunda parte
del
tratado de
MACKA
1949)
diferencia los
métodos
de
ordenación
anteriores al
año
1850, a los
que nos
hemos
referido al
comentar el
texto
de OLAZÁBAL
1883),
de
los correspondientes a la
normati-
va
posterior,
llamados métodos
modernos.
Estos
métodos
toman
como base
los trata
mientos de
corta,
que
el
autor
diferencia en :
- Cortas continuas a
hecho
o a matarra
sa,
con edades
anuales localizadas y
forma
regular de
masa
-
Cortas de
aclareo, con clases
de
edad
localizadas forma semirregular
de masa
-
Cortas de
entresaca, correspondientes a
la
forma
de
masa
irregular,
sin edades ni
clases
de edad
localizadas
Las
cortas continuas
encuentran
su aplica-
8/17/2019 Ordenación Montes en España
5/7
uadernosde la S
E
c.F.
N.o
1 octubre 1995
ción actualizada en los antiguos métodos de
división, sobre los cuales no insistiremos.
Los
métodos de
dotaciones periódicas,
a
los
que
corresponden las diversas variantes
de las cortas
por
aclareo, los divide en:
- Tramos permanentes
-
Tramos
revisables
- Tramo único: fijo o móvil
Es de observar
que
en el método de tramo
único hay una
cierta confusión
en lo
que
respecta a la composición del tramo en desti
no y sus posibles alteraciones para tener en
cuenta las dificultades de la regeneración.
En
todo caso, y con arreglo a la normativa
actual del año
1970,
consideramos que
en
tramo único se produce la regeneración en el
curso del periodo, mientras que
en
el de
tramo móvil, de
mayor
extensión superficial,
cabe una demora en ciertos rodales dificiles,
aunque tratando de
dar por
regenerada
en
el
periodo de aplicación la superficie teórica
correspondiente. Por tanto, el
tramo móvil
estaría compuesto por:
- Rodales cuya regeneración
ha
comen
zado en el
período precedente
y
no
está
aún acabada.
- Rodales que entran en regeneración en
el período la concluyen en el mismo.
- Rodales que entran en
regeneración
en
el período y continuan en el tramo
hasta su
completa realización.
2.7. Métodos para masas irregulares
Para
la
ordenación de montes
en masas
irregulares propugna MACKA 1949) las
cortas por
entresaca pura
o
localizada
en
tramos recorridos con arreglo a un ciclo
dependiente de las características ecológicas
del monte y de las exigencias del mercado en
cuanto a la viabilidad de los aprovechamien
tos.
A efectos de fijar la cuantía de las cortas,
en la determinación de la posibilidad son de
utilidad orientadora las siguientes expresio
nes:
«Reunión
de
Valsaín.
17-20 octubre 1994»
- Fórmula de
Von
Mantel.
Parte
del
supuesto de que la curva de evolución de la
masa
es
una recta que pasa por el
origen
en
relación
con
el tiempo.
En
tal caso:
PN=ENx l
T
donde
PN es la posibilidad
normal EN
las existencias normales.
Además, admite
que
el tanto
PRlER
posibilidad real a exis
tencias reales) de aprovechamiento
en
el
cuartel efectivo
es
igual al del cuartel normal
y que las existencias a considerar son las V
de la masa cubicable. En este supuesto:
- 2
PR
=
-
T
- Fórmula de Melard, también conocida
como
fórmula del método francés
de
1883 y
recogida en las actuales instrucciones de este
país. Para su aplicación se
supone
que los
árboles inventariados se distribuyen en tres
clases,
establecidas de
acuerdo
con su
diámetro de cortabilidad D:
- Árboles gruesos,
de
volumen
VI
y
diámetro superior a
2D/3
- Árboles medianos, de volumen V2 y
diámetro comprendido entre
D 3 2D/3
-
Árboles
delgados,
de
volumen
V3
y
diámetro inferior a D/3
Admite
la correspondencia de
los diáme-
tros con las edades y supone que la
recta
de
las existencias, en una representación volú
menes-edades, pasa por el origen
de
coorde
nadas. En tal caso,
los
volúmenes de
las
existencias correspondientes
a
estos
tres
bloques estarían en la relación
1:
3: 5.
La fórmula de la posibilidad para los T13
primeros años estaría formada por la realiza
ción total de las existencias de
pies
gruesos
más sus crecimientos r1> a los que se añadiría
una fracción 1/n de los crecimientos
r2
de los
pies medianos.
por
10 tanto, la
posibilidad
anual P sería:
19
8/17/2019 Ordenación Montes en España
6/7
P. A
PITA
3.
MÉTODOS
DE ORDENACIÓN EN LA
NORMATIVA OFICIAL ESPAÑOLA
3.1. Las instrucciones de
ordenación
de
1890
Las primeras instrucciones de ordenación
españolas, que datan del año 1890, se encon
traron
en
su aplicación
con
que tenían que
organizar masas en variado grado de regula
ridad y espesura, donde era dificil encontrar
rodales homogéneos que sirvieran de refe
rencia dasocrática
para
establecer clases de
edad y fijar un turno de aprovechamiento.
Por
otra
parte las cortas en el tramo en
destino tenían que compatibilizarse
con
las
cortas de extracortables y moribundos de los
restantes tramos, 1 que introducía una gran
confusión ordenadora. A pesar de ello, de
aquella época
datan
notables trabajos de
ordenación en los núcleos arbolados de las
provincias de Segovia y Cuenca
en
el centro
de España
y de las Sierras de
Cazorla
y
Segura
en el sur,
que han preservado
sus
masas arboladas de una ruina completa.
La aplicación
del llamado
método
de
«ordenar transformando» para llevar
las
masas naturales hacia los modelos de distri
bución, señaló la normativa oficial, llevada
con
mayor
o menor éxito según las dificulta
des encontradas en la regeneración del suelo
y
en
el necesario control localizado del gana
do. Una defensa documentada del método
puede encontrarse en el trabajo de
MARTÍNEZ
DE PISÓN 1948).
3.2. Las
instrucciones
de ordenación
de
1930
Apuntan a
un
escalonamiento de la actua
ción dasocrática en los dos niveles siguien
tes:
20
- Las comarcas de explotación, a las que
dedica 45 artículos,
que apenas
tuvieron
viabilidad administrativa
por
los avatares
políticos que sucedieron a la Dictadura de
Primo de Rivera, precisando su puesta en
marcha de una necesaria coordinación
con
otras áreas económicas y asociaciones de
propietarios.
«La
ordenación de montes
en
España»
- La ordenación propiamente
dicha
a
nivel de
monte o
grupo
de montes que
tomaba como unidad dasocrática funda-
mental
el
cuartel de
corta
capaz
de ser
organizado con
un
plan independiente.
La ordenación del monte alto corresponde
ría,
en
el caso más general a un sistema
mixto de los métodos de división y distribu
ción, que se materializaría en la división del
turno en períodos en correspondencia super
ficial con los tramos, y que debían propor
cionar
una vez
regularizado
el vuelo la
misma
cantidad de productos principales.
Como concesión máxima el art.
119
admite
reformas en la composición de
los
tramos por graves mermas del vuelo, origi
nadas
por
accidentes destructores tales como
incendios o huracanes.
La ordenación por entresaca quedaría
reservada a montes en circunstancias que
afectan a su carácter protector, dificultades
de regeneración natural
o
temperamento
delicado
de la especie. El desarrollo de la
ordenación
por entresaca se seguirá
por
un
recorrido de los tramos en rotación periódica
fijada
por
el temperamento de la especie y
exigencias de la corta para
que su
oferta
encuentre rematante.
Por último la
ordenación
de los montes
bajos sigue la normativa general, ya explica
da, aunque se recomienda el alargamiento de
los
turnos que en
el
caso de
robledales
quejigares y encinares no debía bajar de 20
años.
3.3.
Las
instrucciones generales
para
la
ordenación
de montes
arbolados
de 1970
Esta normativa tuvo la misma inoportuni
dad de aparición que las anteriores, ya que se
presentaron en
un
momento de cambio polí
tico, ajeno a los intereses forestales a largo
plazo de la nación.
No
obstante, sostenemos que, en
1
refe
rente a métodos de ordenación, estas instruc
ciones pueden ser homologadas perfecta-
mente
con
la versión
simplificada francesa
del año 1989.
En
efecto, el método francés
8/17/2019 Ordenación Montes en España
7/7
Cuadernos
de la S.E.C.F. N.o
1
octubre 1995
de grupo de
regeneración estricta para
la
ordenación del monte
alto
en
masa
regular
engloba la
subdivisión española
en tramos
permanentes,
tramos revisables
y
tramo
único. Por otra parte, el método
español
de
tramo
móvil
en regeneración
encaja
perfec-
tamente
con el
método
francés
del grupo de
regeneración
ampliado.
Por lo que respecta a la entresaca, la meto-
dología francesa establece distinciones entre
los
montes
tratados
en futaie
jardinée y
los
montes
tratados
en futaie irréguliere que
pueden enriquecer la aplicación de la entre
saca
a los montes españoles
más en
termino-
logía que en modus operandi.
Por
último,
la
ordenación
por
rodales
en
masa regular del
arto
86 de las Instrucciones
españolas, poco empleada hasta la fecha,
tiene su
utilidad en la ordenación de montes
de especies
variadas
de crecimiento rápido
en la España
húmeda, donde por las dimen-
siones
reducidas de
las
plantaciones y
las
diferencias de calidad
en
el suelo no es posi
ble el cuartel de tumo único.
Para
terminar, sí quisieramos
decir que nos
producen envidia los
logros
alcanzados por
la
Administración Forestal
Francesa que,
en
actuación escalonada, ha dispuesto de los
medios
técnicos y económicos precisos para
acometer la ordenación del
80 de
sus
montes.
El gobierno francés, amparando
esa
políti
ca,
nos
da
un
ejemplo a seguir
para emplear
«Reunión de Valsaín. 17-20
octubre
1994»
racionalmente los
fondos de
la
Comunidad
en
la recuperación
por
el
sector
forestal
de
las
tierras agrícolas abandonadas, así como para
proveer una mayor atención
a
nuestros
montes arbolados de la actualmente existente.
REFERENCI S BIBLIOGRÁFIC S
ALLUÉ
M. E.
HERNÁNDEZ;
1991. Montes
medios de
Quercus pyrenaica
Willd.
en
la
Sierra
de
Guadarrama
y el Macizo de
AyIlón. Montes 26: 26-32.
DUBOURDIEU
J.,
A.
PRIETO
M.
LÓPEZ
QUERO;
1993. Manual
de
Ordenación
de
Montes.
Editorial Paraninfo.
Madrid.
MACKAY E.; 1944. Fundamentos
y Métodos
de la Ordenación de Montes. Primera Parte.
Sección
de
Publicaciones
de
la Escuela
Especial
de
Ingenieros
de
Montes. Madrid.
MACKAY E.; 1949. Fundamentos
y
Métodos
de la Ordenación de Montes. Segunda Parte.
Sección
de
Publicaciones
de
la Escuela
Especial de Ingenieros de Montes. Madrid.
MARTÍNEZ
DE
PISÓN
M.;
1948. Defensa
del
método denominado
«ordenar
transforman-
do». Sección de Publicaciones
de la
Escuela
Especial de Ingenieros de Montes. Madrid.
OLAZÁBAL L. DE;
1883.
Ordenación
y
Valoración de Montes. Imprenta de Ricardo
Rojas. Madrid.
21