Upload
jouyo
View
217
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 1/41
(o
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 2/41
Narraciones suspendidas(O de raras teorías sobre el encuentro)
Andrés Abril
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 3/41
Esta obra está licenciada bajo la Licencia Creative Commons
Atribución-Sin Derivar 4.0 Internacional
Usted es libre para:
Compartir — copiar y redistribuir el material en cualquier medio o formatopara cualquier propósito, incluso comercialmente.
Bajo los siguientes términos:
Atribución
. Usted debe darle crédito a esta obra de manera adecuada,proporcionando un enlace a la licencia, e indicando si se han realizado cam-bios. Puede hacerlo en cualquier forma razonable, pero no de forma tal quesugiera que usted o su uso tienen el apoyo del licenciante.
Sin Derivar
. Si usted mezcla, transforma o crea nuevo material a partir deesta obra, usted no podrá distribuir el material modificado.
© 2016 del texto Andrés Abril
© Fotografía y diseño de portada: Constanza Solórzano
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 4/41
Para aquellos que, en el encuentro, han
hecho otro de mí.
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 5/41
No encontrarse es imposible; los destinostienen su clinamen. Incluso en el umbralde la muerte, incluso en la ausencia connosotros mismos, los otros no dejan de
tropezarse con nosotros sobre el terrenoliminar de la huida.
— Tiqqun, Tesis sobre la
comunidad terrible
les mots me vieillissent ou me font jaillirils me mêlent aux autresils liment nos solitudespour nous rejoindre
—Henri Meschonnic
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 6/41
Índice
Nota introductoria ......................................................................... vi
Ese nombre ..................................................................................... 1
Sobre-escribir .................................................................................. 3
Así lo hizo ....................................................................................... 7
Encuentros dispersos de todos los tipos ........................................ 9
Puro cuento .................................................................................. 12
Culpable ........................................................................................ 18
Contradictio .................................................................................. 20
Pensamientos ciclonopédicos ...................................................... 24
In contra ........................................................................................ 26
Devaneo ........................................................................................ 30
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 7/41
vi
Nota introductoria
Los títulos, esquivos personajes, pueden tardar meses en
aparecer si su voluntariosa personalidad así lo quiere o, por el
contrario, llegar como un trueno brutal que no para de resonar
en mentes y espíritus. Son tan individuales como colectivos, tan
fortuitos como predestinados, tan propios como ajenos. No hay
títulos más adecuados que otros, solo selecciones arbitrarias (unas
más expresivas que otras, eso sí) que zumban en la cabeza del
autor y sus lectores.
Narraciones suspendidas no es el mejor título para este
compendio de cortísimos escritos. Tampoco creo, sin embargo,
que sea el peor. Se trata, simplemente, de un título que me su-
surró al oído que lo usara al tiempo que me señalaba la imposi-
bilidad e improbabilidad de encontrar un cierre satisfactorio para
algunas de las historias aquí publicadas: quedarían en el aire y tal
vez ya nadie continuaría con ellas.
Narraciones suspendidas apela, entonces, a dos de las
principales acepciones del verbo ‘suspender’. Por un lado, a
aquella que denota «levantar, colgar o detener algo en alto o enel aire» y, por otro, al hecho de «detener o diferir por algún
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 8/41
vii
tiempo una acción u obra». Así pues, las historias de esta compi-
lación —si es que historias pueden ser llamadas estas cortas inter-
venciones— han quedado doblemente suspendidas. Están sus-
pendidas en tanto aquello que las sostiene no es más que la vo-
luntad siempre volátil del escritor y el cariño perenne de lectores
y amigos (dos figuras que no pueden y tal vez no deban ser dife-
renciadas). Y han sido suspendidas, ya que la escasa imaginación
y poquísima disciplina del autor han llevado a diferir cualquier
cierre o continuación posible.
Andrés Abril
Montreal, 25 de abril de 2016
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 9/41
© Ana Paula Durán
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 10/41
1
Ese nombre
Ese nombre, un nombre como tantos otros, se había en-
marañado en su memoria y en su corazón. Por los intrincados
rincones de la mente y el alma se movía y daba vueltas. Viajaba y
se desplazaba en movimientos ondulantes dejando como rastroun aroma dulce y a la vez enérgico. Porque los nombres también
tienen fragancia. Y fue esa fragancia la que se clavó en su memo-
ria, la que lo obsesionaba incesantemente. Pero también lo era su
firme y cadente sonoridad un motivo de obsesión: al pronunciar
aquel nombre se desataba una tormenta de sensaciones impro-nunciables que lo envolvían y lo hacían levitar hasta que sus pies
ya no tocaba n más este mundo frívolo, superficial, inhumano… o
tal vez muy humano, demasiado humano. Nunca la conoció,
jamás en su vida la había visto. Mas sabía su nombre: estaba es-
crito en un libro que alguna vez se topó en una de sus intermina-
bles visitas a la biblioteca. Ninguna otra cosa le interesó, ni el
título del libro ni mucho menos la corta descripción de la contra-
portada. No quiso siquiera saber a quién pertenecía aquel nom-
bre. Le pareció ridículo y vacuo tener ese tipo de información.
Lo único que le importó fue su nombre, un nombre, ese nom-
bre... «Sólo imagínenlo —decía —, imaginen ese nombre».
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 11/41
2
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 12/41
3
Sobre-escribir
Repentinamente, como si una mano invisible le inyectara
un torrente de adrenalina, el ajado cincuentón tuvo deseos de
escribir. No sabía qué, dónde o para qué escribiría, pero necesi-
taba hacerlo. Jalado por este impulso llegó a detenerse y sacar desu maleta el cuaderno que recién había comprado: se veía tan
nuevo e inmaculado que utilizarlo para escribir reflexiones pro-
saicas, por no decir pueriles, le pareció todo un desperdicio, casi
un sacrilegio. Titubeó, reflexionó, divagó. Dudó en atreverse a
desacralizar la pureza de su novel adquisición. Pero dudó, antetodo, de embarcarse en un ejercicio escritural sin objetivo que
eventualmente se tornase en algo superfluo. Entonces decidió no
escribir. En un rápido movimiento, consecuencia más del frío
que entumecía sus manos que de la exhibición de portentosos
reflejos o habilidades, nuestro buen hombre guardó su cuaderno
de notas en la maleta cruzada que llevaba consigo y siguió su ca-
mino.
Era una noche fría como tantas otras en ese invierno: po-
ca gente en la calle, rostros reservados y negocios varios que da-ban la impresión de estar cerrados. Mientras caminaba, se fijó en
tres o cuatro transeúntes —hombres y mujeres por igual— que,
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 13/41
4
por falta de otra expresión más adecuada, exudaban belleza y
encanto. Quiso hacer algo: parar, hablarles, decirles gentil y res-
petuosamente que no podía dejar de apreciar sus ojos, sus labios,
incluso su cuerpo, ese cuerpo escondido por las múltiples y va-
riopintas capas de ropa tan necesarias para estas crueles tempera-
turas. Como podremos imaginar, nada hizo. No era del tipo
tímido aquel hombre; nunca lo había sido y ya entrado en la
adultez tenía aún más razones para no serlo. Pero no hay duda, y
en eso coincidiremos muchos, de que una cosa es no ser tímido y
otra, ya muy distinta, es pararse en medio de la acera para abor-
dar repentinamente a un desconocido cualquiera con el único y
explícito fin de alabar sus atributos.
Al doblar a la izquierda para tomar una de las calles que
solía frecuentar durante sus paseos por la ciudad, sintió en su
pecho una especie de opresión. No era, sin embargo, una sensa-
ción angustiosa. Se trataba más bien de una extraña emoción, un
impulso productivo muy parecido al que hacía unos minutos lo
había invadido. Supo entonces que no podía aplazar más lo inevi-
table: tenía que escribir, ¡debía hacerlo cuanto antes! Recordó
aquel café, ese lugar ligeramente místico que parecía guardar y
fundir en una sola atmósfera fragmentos de todos y cada uno de
los clientes que constantemente lo visitaban. Acelerando el paso,
el hombre se dirigió hacia allí y en menos tiempo del que había
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 14/41
5
podido imaginar se encontró en la barra pidiendo un vaso de
cerveza rubia (su predilecta). Solo pensaba en no dar más dila-
ción a la escritura así que maniobró torpemente para sacar el
dinero de su bolsillo y pagar.
De que nuestro cincuentón había olvidado tomar el cam-
bio solo se dio cuenta la barman, quien intentó llamarlo inútil-
mente. El hombre estaba tan absorto buscando su cuaderno quenada escuchó. Se acomodó en una de las dos mesas que queda-
ban libres y dejó que su corazón y su cuerpo entero se desacele-
raran. Justo en ese instante, ya sentado y mirando a su alrededor,
notó que no sabía qué debía o quería escribir. Su deseo había
sido tan intenso que en lo único en que reparó fue en la fuertenecesidad de plasmar algo en un papel. Pero nunca, o como di-
ríamos, jamás de los jamases, pensó en las palabras concretas o
en la temática específica de aquello que escribiría. Titubeó, re-
flexionó, divagó… durante dos segundos. Y escribió: comenzó a
escribir sobre aquella noche en que un fuerte impulso lo llevó a
sentarse a escribir en un café.
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 15/41
6
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 16/41
7
Así lo hizo
Así lo hizo,
tal cual, tal como te digo:
cuestionando el sentido común,
cuestionando su sentido común,haciéndola enfrentarse a sí misma.
No solo en conversaciones, no,
sino por su forma de ser.
A diferencia de la de ella,
esta era una vida insubordinada, intensa, desterritorializada;esa de la que tanto hablamos en las interminables conversaciones
sobre la existencia.
Pura intensidad, inmanencia, vitalidad.
Capacidad de observación, mente inquisidora
y extremadamente analítica…
Todo esto sin las ínfulas que ella y tantos otros,
pretendidos expertos y sujetos de ciencia,
se caracterizan por tener.
¿Cómo lo hizo?, me preguntas
Por eso te digo,
así lo hizo...
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 17/41
8
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 18/41
9
Encuentros dispersos
de todos los tipos
El tema del encuentro, o más bien en plural, de los en-
cuentros, se me sigue apareciendo recurrentemente. Bien se
podría objetar que soy yo el que, voluntariosamente, persigueesta cuestión —como un cazador a su presa. Sin embargo, hay
que decir que más que una mezquina obsesión, mi interés y co-
nexión con aquel tema no es otra cosa que un encuentro: un en-
cuentro con ‘el encuentro’, o mejor aún, encuentros múltiples y
dispersos con ‘el encuentro’. Mi acercamiento al tema, entonces,
debe ser definido no como una cinegética (arte de la caza) sino
como una especie de criptozoología.
El criptozoólogo, curioso por toparse con críptidos —seres
cuya existencia es puesta en duda por la ciencia moderna —, co-mienza una labor de rastreo. Atento a cualquier signo o huella
que lo lleve a confrontar estos seres, el criptozoólogo no desea,
necesariamente, cazar a su presa (para él no hay presa ). Busca,
fundamentalmente, maravillarse con esos seres ‘ocultos’; es presa
—él mismo, curiosamente— de la fascinación hacia los críptidos ,del misterio que estos animales representan. Y si a nadie más
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 19/41
10
parece importarle, o si se pone en duda el propósito de su
búsqueda, eso poco o nada le interesa a la criptozoología. Lo que
importa no es encontrar y cazar al animal, sino utilizar y sacar
provecho de la mayor cantidad de medios e información recolec-
tada para seguir con la labor, para sensibilizarse con la existencia
de aquella ‘bestia oculta’.
Así pues, antes que una búsqueda por ‘el encuentro’, mi
recorrido se ha tratado de encuentros con ‘el encuentro’: vislum-
brar huellas, seguir rastros, prestar atención a indicios que apare-
cen en el ambiente y que ‘dicen algo sobre algo’. No es a partir
de una obsesión —como la del cazador— que el tema se mani-
fiesta y se presenta insistentemente. Y tampoco se trata de pasivi-dad pura; sin duda el interés por ‘el encuentro’ existe. Es debido
a que ‘el encuentro’ ha surgido como huella en el camino que, de
una u otra forma, el ya muchas veces mencionado tema ha cauti-
vado mi atención.
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 20/41
11
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 21/41
12
Puro cuento
Estoy pedaleando lo más rápido que puedo para llegar a
tiempo al apartamento de Marcos. El viento ruge violento y pa-
rece quejarse al ser perforado por los contornos de mi cuerpo y
mi bicicleta, un traste viejo que encontré abandonado en la calle yque ha sido mi más fiel medio de transporte en esta ciudad. No
llevo casco pero eso me preocupa poco. En estos momentos solo
quiero llegar chez Marcos. Mientras avanzo por las calles, me
pregunto qué me está jalando tan desesperadamente hacia allá.
Sé cuánto le disgusta la impuntualidad a Marcos, pero ese no esel motivo de mi apuro. Al fin y al cabo, él parece no molestarse
ante mis llegadas tarde. O bueno, al menos no lo evidencia cuan-
do estamos juntos. En el fondo creo que él es realmente capaz de
aceptar, o al menos soportar, cosas de mí que con otras personas
no estaría dispuesto siquiera a negociar; sé que si fuese cualquier
otro el que llegase tarde, Marcos destilaría azufre, cólera pura
(cólera que expele pero que por cierto siempre termina tragán-
dose, pues el muy decoroso mozuelo —¡ah tontín!— no es capaz
de decir las vainas como son).
La cadena de la bicicleta empieza a rechinar. No worries ,
pas de problème , todo bien: ese sonido no es nada más que un
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 22/41
13
tímido gimoteo que mi quejumbrosa bicicleta emite cuando au-
mento revoluciones (la conozco bien); un ruido constante pero
soportable. Si fuese Marcos el pedalero, de seguro este chirrido
le hubiera hecho sudar frío. Cada vez que se subía a una bicicleta
—me confesó un día — moría de angustia al imaginar que los tor-
nillos, arandelas, tuercas y demás elementos que mantienen la
integridad ontológica de estos vehículos pudieran zafarse en
cualquier momento. ¡Hágame el favor: integridad ontológica ! Esa
fue la expresión exacta que Marcos usó (¡ay el Palabritas Ro-
bayo!, en su rostro se dibujaba una sonrisa burlona siempre que
lograba colar indiscriminadamente palabras pomposas en medio
de charlas triviales). La cuestión era que temía: le aterraba que
ese brioso caballo metálico se despedazara y precipitara por los
aires su preciada humanidad, enviándola implacablemente, a su
humanidad claro está, contra el áspero pavimento. Se veía, decía
él, como un desgonzado muñeco de pruebas automovilísticas que
sale volando por los aires y que recibe, o se da, el golpazo de su vida. Mejor dicho, y para no seguir divagando tanto, Marcos se
cagaba del susto al saber que en cualquier momento la bici podía
despedazarse y terminar mandándolo a la mismísima mierda.
Yo no pienso en esas pendejadas. Si me accidento, me
accidento, ¡y ya! Lo más grave que puede pasar es… que me
muera, y en este mundo podrido morirse es más un alivio que
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 23/41
14
una desgracia. La desgracia es para los que se quedan llorándolo
a uno, eso sí. Pero como dice el viejo Jecto’ : «no quiero que na-
die llore si yo me muero mañana / señores no traigan flores para
mí no quiero nada». C’est la vie , y el problema de la vida es que
al final te mata, me mandó a decir un día Don Durito a través del
Sup… ¡Mierda, putos devaneos! «Focus , focus! —me repito».
Siento la necesidad de llegar ya a donde Marcos así que man-
tengo el ritmo de pedaleo. Me muevo rápido, tal vez muy rápido
para los estándares de la mayoría de mis amigos. Sé, no obstante,
que tengo buenas habilidades ciclísticas y un estado físico envi-
diable. Zigzagueo ágilmente entre lentos ciclistas y evado uno que
otro obstáculo que se va presentando: semáforos, peatones des-
cuidados, latas de cerveza, botellas de agua y hasta ardillas que de
tanto en tanto emprenden la riesgosa, por no decir mortal tarea,
de cruzar la calle. «Es una suerte haber sido criada con una bici
siempre a mi lado —me digo a mí misma en voz alta, creo… no lo
sé—. Además, gratuitos no pueden haber sido tantos años de na-tación y danza, algún beneficio trae tanto revoloteo».
Al parecer voy bien de tiempo: ¡buenísimo, carajo! ¿Pero
cuál es el maldito afán, las ganas de cumplir horario? ¿No que
Marcos no se emputaba si llego tarde? ¿Será que estoy tratando
de demostrarme a mí misma que soy capaz de encarnar tan mag-
no valor: la puntualidad? No lo sé, y ya en últimas ni me importa.
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 24/41
15
De pronto es que simplemente quiero ver a Marcos cuanto antes.
Puede que de eso se trate todo este frenesí: ansias de encuentro.
Puede, incluso, que estas ansias sean la substancia primigenia de
la vida. A fin de cuentas, es el magnetismo entre los seres lo que
nos mueve siempre, lo que mueve este cosmos delirante. Ya me
falta poco para llegar a mi destino. Última pendiente: la más em-
pinada, señal que anuncia el tramo final del recorrido. Último
esfuerzo — y perdón la palabrota —: el más hijueputa.
Pequeñas perlas de sudor empiezan a escurrir por mi
frente; bajan danzando hasta mis mejillas o mi cuello y se des-
prenden de la piel siguiendo los golpes caprichosos de Eolo (no
me juzguen, quise decir ‘el viento’ pero me sonó más poético
así). La verdad, nunca he sudado mucho y no es que sea cuerpo
glorioso, como decía mi mamá, pero qué le voy a hacer: sudo
poco. Aparte, cada vez que voy en bicicleta el viento (o Eolo,
como quieran) se encarga generalmente de secar mi piel. Con
esta pendiente las cosas son a otro precio. Pienso en Marcos,
debe sudar como caballo el pobre. «¡A pobretear a otro! —res-
pondería bruscamente—. Si hay que sudar, pues se suda». ¡Ay
Marcos! En fin, de tripas corazón y a dar los últimos pedalazos.
Si me apuro lo suficiente, seguro que llego puntualmente, incluso
unos minutos antes. ¡In your face Marquitos! ¡Te voy a llegar
temprano! Cero reproches, si es que por casualidad pensabas
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 25/41
16
armarme algún show en caso de que me demorara. ¡Pero qué
putas! Otra vez lo de ser puntual con Marcos.
Como sea, no me tomará más de tres minutos estar en la
puerta del edificio, y seguramente no más de uno en subir las
escaleras; en total cuatro minutos. Haciendo cuentas alegres, den-
tro de cuatro minutos y un pelín estaré abalanzándome sobre
Marcos para darle un beso; dentro de cinco estaré curiosa inda-gando sobre su día; y dentro de seis minutos, mientras seguimos
actualizándonos sobre acaecimientos y nuevas varias, nos senta-
remos en aquel viejo pero endemoniadamente cómodo sofá a
tomar una cerveza bien f… «¡Shit —grito bruscamente— las putas
cervezas!». Mi alarido es tan agudo que el ciclista que iba delante y a quién estaba a punto de sobrepasar, voltea azarado. ¡Se me
olvidaron las malparidas polas! Y tan sencilla que era la cuestión:
Marcos compraba lo necesario para preparar la cena, yo las mal-
ditas cervezas ¡Era fácil! Ahora, a buscar un fucking dépanneur y
a decir adiós a mis planes de llegar a tiempo.
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 26/41
17
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 27/41
18
Culpable
Dicen que nunca es bueno comenzar pidiendo perdón.
Pero hoy es necesario, hoy usted va a tener que perdonarme. Es
inaceptable lo que intenté hacer y es hora de confesar… Quise
robar de su rostro el contorno de sus labios para así trazar sobrelas paredes formas danzantes y sinuosas. Con alevosía y premedi-
tación, pretendí guardar en un pequeño tarro el brillo de sus ojos,
como un niño que atrapa una luciérnaga. Ambicioné capturar en
un celuloide intangible, con nulo éxito, la manera en que sus me-
jillas hacen que sus ojos se entrecierren cada vez que sonríe.Traté, incluso, cual lingüista curioso, de registrar el sonido de su
voz, sus tonos, sus silencios, sus armonías y síncopas.
Soy culpable, de esto y más. De buscar memorizar la co-
reografía que su cuerpo confecciona con cada movimiento: alcaminar, al sentarse, al bailar, y aun al permanecer en quietud.
De extasiarme con su mente curiosa y sagaz. De elucubrar un
plan para recolectar y catalogar en un interminable libro (de pasta
gruesa, claro está) sus pensamientos, sus perspicaces preguntas y
sus agudas bromas (todo un reto editorial sin duda). De desearque su silueta y la fragancia de su espíritu quedasen impregnadas
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 28/41
19
en mi mente. Sí, soy autor intelectual de estas fechorías nunca
cumplidas y de otras tantas.
Pero heme aquí buscando absolución. Porque la vitalidad
de su ser y los afectos que la atraviesan son irreductibles. Porque
si alguien llegase a apartar de usted eso que le es tan suyo, todo
un mundo se extinguiría. Porque es en el despliegue de las sin-
gularidades, y no a través de la apropiación de mundos, que elencuentro adquiere sentido. Y es solo en la inmanencia del en-
cuentro, en la posibilidad de ir a su encuentro, al encuentro de su
mundo, donde yace toda mi fascinación.
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 29/41
20
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 30/41
21
Contradictio
Lejos de lo que más quería, allí se encontraba. Otra no-
che en un lugar que le era tan familiar como extraño. Vibraba
con los atardeceres, con la música, los sueños y los deseos, con lo
lejano, lo inconmensurable, lo aún no escrito, con aquello quetodavía está por venir… o que nunca llegará. Pero cada mañana al
despertar, en ese momento en que el alma regresa de su largo
viaje a otros mundos, el hirsuto hombre adquiría conciencia del
lugar en que se encontraba y un sinfín de cuestionamientos llega-
ban a su mente: dónde debería estar, qué había hecho, qué nohabía hecho, qué debería haber hecho, qué debería hacer. Inten-
taba responder pero estas preguntas no dejaban ser contestadas; a
pesar de su insistencia, ellas no se lo permitían. Y tal vez lo mejor
sería no complicar las cosas: algunas preguntas, como bien sabe-
mos, pueden ser bastante obstinadas.
En ocasiones cuando reflexionaba y miraba atrás, veía
simplemente malas decisiones, errores y acciones a destiempo.
«¿Es esa mi vida? —se preguntaba — ¿Una serie de eventos que de
no haber ocurrido me hubiesen llevado a otro lugar?». Tal vez asíera, «pero acaso, ¿no consisten en eso todas las vidas? —se de-
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 31/41
22
cía». Y aún así, por más que fuese consciente de ello, este hom-
bre de rostro seco y maneras poco agraciadas se reprochaba
constantemente: «si tan sólo hubiese obtenido ese trabajo; si mis
primeros años en el colegio los hubiera aprovechado tanto como
los últimos; si en lugar de estar con ella hubiera conocido otras
personas; si tan sólo en mi viajes hubiese sido menos rígido, más
humilde, más abierto…». Pero así no fue, y allí se encontraba. Ya
no importaba lo que hubiese hecho, mucho menos lo que dejó
de hacer.
¿Se arrepentía? Sí. Se arrepentía de no haberse extasiado
con cada experiencia que tuvo, de no hacer lo que debería haber
hecho, de que la razón tomara control sobre él, de que las emo-
ciones tuvieran un papel secundario. El problema era, no obs-
tante, que también deploraba que las emociones lo hubieran lle-
vado a desperdiciar su tiempo. Curioso. Pensaba que debía sen-
tir, sentía que debía pensar. Veía la vida de los otros, ¡y parecía
tan simple! La suya, sin embargo, no podía ser así. Tan compli-
cado, tan exigente, tan insensato. A veces sentía que no debería
pensar tanto, pero cuando empezaba a sentir, concluía que de-
bería pensar mejor las cosas…
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 32/41
23
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 33/41
24
Pensamientos ciclonopédicos
En medio de los impasibles metales que sostienen una
gran valla en lo alto de un edificio, veo una pequeña y solitaria
sombra humana. Se ha alejado, quiero pensar, de la venenosa
sociabilidad contemporánea que impone distorsionadas formasde estar-con, comunidades y ‘comunalidades’ prefabricadas que
vinculan sin vincular. Soledad proliferante la de esta enigmática
figura: encuentros y conexiones consigo mismo, con materiales
anónimos, con seres inventados, con pensamientos bizarros y
confusos, con imágenes y perspectivas, con uno y muchos mun-dos. Estar solo sin estarlo… Pienso en nuestra amistad y por eso
te escribo. Para que estando solo no lo estés, para que una parte
de mí esté ahí sin estarlo, para que en la ausencia haya presencia
y en la soledad, vínculos.
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 34/41
25
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 35/41
26
In contra
Las calles le empezaron a parecer espléndidas, llenas de
luces y de personas que creía haber visto ya en algún lugar pero
que sin duda no podría llamar por nombre propio; familiaridad
en el anonimato. Sentado en una banca, el mundo entero seguíasu marcha mientras él, poco a poco, se perdía en la densa opaci-
dad de su espíritu. Ensimismado, constreñido por la pesadez de
sus pensamientos, se preguntaba por su propia existencia y la del
mundo que habitaba. Tan importante y a la vez insignificante le
pareció la vida —la suya, la de los otros, la del mundo— que en undestello de lucidez pudo entrever el cosmos. Vio que todo terres-
tre era tan cósmico como aquel habitáculo planetario que lo ro-
deaba o como las estrellas más lejanas de las que aún no sabemos
nada. Pensó en los rayos del sol y en el magma volcánico, en el
plancton casi infinito y en los abismos oceánicos, en el trazado
geométrico de los cristales de nieve y en las untuosas sustancias
subterráneas. Pero divagó, también, sobre el disgusto con su
hermano, sobre la felicidad de volver a ver a su mejor amiga, so-
bre el dolor de la lejanía. Todo, lo personal y lo cósmico, le pa-
reció tener la misma naturaleza: todo, absolutamente todo, era
tan constitutivo como banal.
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 36/41
27
La mirada perdida, absorta en pensamientos, volvió a las
calles de la ciudad. Vio entonces unos pies moviéndose en su
dirección. Se fijó en ellos, luego en las pantorrillas, en las rodillas.
Subió los ojos y vio los muslos, la cadera, el abdomen, el pecho.
Se detuvo en el cuello para evitar confrontar la potencia del ros-
tro (ese sistema pared blanca-agujero negro). No creía necesario
llevar a cabo este gesto, un gesto de reconocimiento. Además,
¿qué objetivo ulterior podría tener esto? De seguro esa persona
seguiría de largo, trazaría otra ruta o, en el mejor (¿o peor?) de
los casos, se sentaría en la banca en espera de alguien más. Quiso
entonces desviar la mirada y retornar a sus existenciales medita-
ciones. Pero segundos antes de hacerlo, por motivos que no po-
demos atribuir a la consciencia voluntariosa y mucho menos al
caprichoso inconsciente —solamente, tal vez, a la intensidad del
afecto—, su cabeza se levantó por completo y vio el rostro de
aquel cuerpo. ¡Lo conocía! Conocía ese rostro: sus particulares
rasgos y la cautivante mirada no podían ser de nadie más... Seconocían, se reconocieron. Los cuerpos se tornaron casi inmóvi-
les y el tiempo era ya otro: su mundo y el mundo iban a des-
tiempo.
¿Cómo era posible? ¿No era absurdo, acaso irreal y no-
velesco, ver por cuarta vez y de la forma más azarosa a alguien
con quien él no había intercambiado más que tímidas pero inten-
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 37/41
28
sas miradas (eso y un par de balbuceos)? ¿Podría ser tan capri-
chosa la vida como para llevar a dos desconocidos a verse en más
de una sola ocasión y en las condiciones menos pensadas? ¿Es-
taría un travieso demiurgo detrás de los encuentros más fortuitos
entre los seres? ¿Se trataba de pura contingencia? ¿O acaso la
contingencia, el azar, no era otra cosa que una deliberada profa-
nación cometida por una deidad en contra del destino, del orden
establecido? Sea como fuere, la inminencia del encuentro no
daba espacio para responder a tan metafísicas cavilaciones. Se
encontraban frente a frente, sorprendidos los dos de haberse
cruzado en el menos probable de los escenarios.
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 38/41
29
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 39/41
30
Devaneo
Lo poco que nos une es suficiente para sentir por él una
atracción indefinible. Mis amigos —tan sensatos ellos— me dicen
que no es más que un capricho. «¿Qué te interesa tanto de ese
tipo —reclaman—, si al fin y al cabo no es tu paradigma de hom-bre: no es pelinegro ni ojiclaro, no es literato o artista, y más aún,
no es extranjero?». Y debo reconocerlo: no sé qué responder.
Siempre había proyectado la imagen de ser una persona intere-
sada exclusivamente por esos fenotipos otros: aquellos que ejer-
cían sobre mí una fascinación que rayaba con la exotización másabsurda. Igualmente, en cuanto a profesiones y modos de ganar-
se la vida se trataba, siempre prefería aquellas personas que ha-
bían trasegado, y que en esa medida habían sido estropeadas por
los escabrosos senderos de las letras y las artes. Pero este no era
el caso; él no poseía ninguna de estas características. Y aún así,
desde que lo conocí no pude dejar de pensar en él.
Ahora, meses después de habernos visto por primera
vez, la fascinación por ese hombre no ha disminuido. Todo lo
contrario. Cuando estamos juntos no soy capaz de negarme a suspedidos, favores o exigencias, y a pesar de que no me atrevo a
decirle cuánto me atrae su mente perspicaz y su sonrisa, cuánto
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 40/41
31
me excitan sus piernas y lo que daría por compartir con él una
noche, aunque sea solo una noche, tampoco me atrevo a alejarlo
de mi vida para ya no tener que acunar su fragancia en los días de
soledad. Pero, ¿por qué lo deseo tanto? ¿Dónde quedan esos
atributos que yo imaginaba absolutamente necesarios para sen-
tirme atraído por una persona, esos que yo juzgaba definitorios y
decisivos para cualquier tipo de interacción? Creo que no impor-
tan. Tal vez lo único necesario en toda relación humana sea un
pequeño hilo, un frágil tejido conector y transmisor de pulsiones
deseantes, de mareas infinitas de deseos. Es la existencia de esa
minúscula fibra, y solamente eso, lo que nos lleva a sentirnos tan
cercanos a los otros como si lo que nos uniese fuese una irrom-
pible cadena de hierro.
8/16/2019 Narraciones Suspendidas O de Raras Teorías Sobre El Encuentro Andrés Abril
http://slidepdf.com/reader/full/narraciones-suspendidas-o-de-raras-teorias-sobre-el-encuentro-andres-abril 41/41