Upload
hoangmien
View
215
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
Los textilomas son iatrogeniasquirúrgicas, cuya incidencia real sedesconoce, pues habitualmente no sereportan.
Los textilomas son eventos adversosprevenibles, responsabilidad conjunta ecirujanos, ayudantes, instrumentistas ycirculantes, como parte del equipoquirúrgico.
Presentar un caso de textiloma, su
manejo y revisión de la literatura,
para formar conciencia en la
comunidad quirúrgica sobre el riesgo
latente, a pesar de las medidas
aparentemente efectivas.
Mujer de 27 años, con antecedentes de cesárea
realizada en otra institución, nueve meses previo
a su actual ingreso.
Acudió a una clínica por presentar dolor
abdominal y tumoración en mesogastrio de tres
semanas de evolución asociado a hiporexia,
nauseas, astenia y adinamia, realizando
diagnostico de quiste intra-abdominal y hernia
umbilical.
No presento fiebre ni escalofrío.
El dolor continúo por lo cual se le realizaplaca simple de abdomen la cual muestrala presencia de una cintilla radiopaca queindicaba la presencia de un textil en
abdomen.
Se ingresa, se programa para cirugía previa valoración
cardiovascular y análisis de laboratorio, se realizacirugía y se encuentra una masa, formada por unacapsula densa, a la cual estaban adheridas asas delintestino y epiplón.
Se intento disecar la asas de intestino, de la capsula, locual resulto muy difícil, por lo que se opta por abrir lacapsula de la cual sale liquido de aspecto purulento yde olor muy penetrante visualizándose el textil(compresa), el cual se extrae, se lava el interior de lacapsula , se deja drenaje y se cierra.
La evolución de la paciente fue satisfactoria, sin dejar aparentemente
secuelas.
Los textilomas son una iatrogenia del personal
medico en actos quirúrgicos; sus
complicaciones comprometen la salud de los
pacientes generando eventos adversos de
gravedad diversa incluso la muerte, si no se
detecta atiende con oportunidad.
El estudio del olvido de compresas en actos
quirúrgicos, tiene implicaciones ética y legales
por lo que sus causas con difíciles de
documentar y estudiar.
Si bien es cierto que losmédicos cirujanos son lamáxima autoridad en el
procedimiento quirúrgico, elconteo de las gasas es unaactividad propia del equipode enfermeras, en particularla instrumentista y lacirculante.
No obstante un error de esta naturalezarecae en la persona del cirujano en términoslegales.
A nivel internacional se ha
estimado una frecuencia de
olvido de gasas en 1 de cada
1000 a 1500 cirugías. Y otros
hablan de 1-100 Y HASTA 1 EN
5000.
En México, como en todo el mundo se
desconoce la incidencia real de este
evento, pues es un acto poco reportado.
32 % Reconoce haber dejado una gasa o compresa.
80% Afirma haber manejado aluna vez un textiloma.
94% Admite conocer algún colega que había incurrido en este error
técnico.
Cuando habían olvidado
alguna gasa o compresa.CIRUJANOS
RESPONSABLES:
INSTRUMENTISTA
RESPONSABLES:
Cuando los cirujanos no
habían olvidado nunca
una gasa o compresa.
Concluye el autor que la responsabilidad es compartida
Responsabilidad del médico
Responsabilidad del instrumentista
Cuenta de gasas incompleta.
Negativa a revisión y agotar
medios diagnósticos.
Conteo completo y hubo olvido
de gasas.
Cambio en la exposición del campoquirúrgico que facilita el ocultamientode cuerpos extraños.
Los cambios de personal de enfermería durante los actos quirúrgicos.
Las cirugías de urgencia
Que la cirugía se practique de noche o de madrugada.
Que la cirugía sea prolongada.
Que la cirugía curse con una
hemorragia.
Cuando el paciente este muy grave y
la técnica empleada por el cirujano
sea mas complicada.
Edad promedio 36.6 años
Sexo Femenino 53.3 %
Sexo masculino 46.7 %
Abdominal 40 %
Ginecología 40 %
Oncología 6.7 %
Otras cirugías 13.3 %
El diagnóstico de los textilomas no es fácil, sebasa en la clínica y en la imagenología.
El tratamiento es la extracción quirúrgica,cuando se realiza antes de los 15 días(extracción precoz) es técnicamente fácil ytiene mejores resultados. En casos crónicos seproduce un proceso adherencial que involucraórganos vecinos, tornando la cirugía máscompleja que puede requerir inclusoresecciones viscerales, las cuales se asociancon una morbilidad y mortalidad mayores.
Se debe sospechar la existencia de un cuerpoextraño en aquellos pacientes que presentanevolución postoperatoria atípica y diferente ala relacionada con la probable moralidad delprocedimiento que se haya realizado.
La encapsulación aséptica del materialquirúrgico retenido como una gasa puedeocurrir y el paciente permanece asintomáticopor muchos años; hay reportes hasta de 30años después del evento quirúrgico.
Es indudable que todas las medidas que se
tomen para evitarlos van a ser bienvenidas,
sabiendo que no existe ningún método cien por
ciento seguro.
Las siguientes son algunas recomendaciones,
adaptadas de las medidas propuestas por algunos
autores, para la prevención de los textilomas y que
involucran el actuar de los diferentes integrantes del
equipo quirúrgico y de las salas de operaciones.
a) Contar cuidadosamente todo el material que
coloca en la mesa de instrumental para la
operación, especialmente los textiles que se van
a utilizar, durante la apertura de los paquetes de
gasas y compresas al inicio de la cirugía y cada
vez que recibe un nuevo paquete.
b) Mantener un número constante y conocido por
paquete, que en general es de 4 compresas y 10
gasas, pero que puede variar para cada
institución.
c)Desechar las gasas y compresas
sobrantes, al igual que los paquetes
incompletos.
c)Mantener una mesa de instrumentos
prolija durante toda la intervención
para facilitar los recuentos y evitar las
pérdidas de material.
e) Realizar recuentos intermedios durante laintervención, sobre todo si ésta es larga o se usanmuchos textiles, en la medida que la situaciónquirúrgica y general del paciente lo permitan. Elcirujano debe ser consciente de la importancia deestos recuentos y no molestarse por lasinterrupciones que puedan determinar, en la medidaque buscan un beneficio para todos.
f) Llevar conteos independientes de las gasas ycompresas que los cirujanos le dicen van dejandodentro del campo operatorio, y que le debe serdevuelto.
g) Proceder al recuento de todo el material
antes del cierre del campo quirúrgico.
h) Repetir el conteo final por lo menos una vez.
i) Informar al cirujano el resultado del conteo.
j) Realizar un recuento final de todo el material
y del instrumental, una vez terminada la cirugía.
a) Mantener el campo operatorio lo más prolijoposible, de acuerdo con las circunstancias.
b) Minimizar el uso de gasas y compresassueltas en el campo operatorio. Se debenutilizar material quirúrgico radiopaco.
c) Utilizar los textiles de mayor tamaño posible yreferidos con pinzas, si se requiere dejartransitoriamente el material en la zonaoperatoria, ya sea para separar o proteger opara realizar la hemostasia por compresión.
d) Informar inmediatamente al resto del equipoquirúrgico cuando deje materiales en la zonaoperatoria, indicando dónde deja el materialy cuántas unidades usa. Eso facilitará laatención de todos, facilitará su extracción y sifuere necesario su búsqueda en caso defaltantes al finalizar.
e) Avisar al equipo quirúrgico cuando retira ese material que había dejado, diciendo qué tipo es y cuántas unidades retira, para mantener el conteo controlado de los mismos.
f) Esperar a que el instrumentista lecomunique el resultado y número deconteos realizados antes de proceder acerrar el campo operatorio.
g) Tener en cuenta lo que le informa lainstrumentista y si es necesario procedera la búsqueda del material faltanteaunque “le parezca estar seguro” de queno haya nada dentro del paciente
h) Documentar siempre el resultado del conteo finalen el dictado de operación y en la notaposquirúrgica, aunque éste haya sido correcto yespecialmente si no lo fue. Si la cuenta fueincompleta, debe señalarlo explícitamente,indicando además todas las maniobras realizadaspara la búsqueda del material faltante y losresultados de las mismas.
i) Evitar exponer al paciente a nuevos riesgosdurante la búsqueda del material faltante,teniendo en cuenta su situación clínica en esemomento, de acuerdo a la valoración delanestesiólogo.
a) Entregar las gasas y compresas al instrumentista yasegurarse que sean contadas y que el conteosea correcto.
b) Anotar en un lugar visible y adecuado todo elmaterial que entregó y su cuenta.
c) Controlar todo el material utilizado por elanestesiólogo y otros integrantes del equipoquirúrgico para evitar que se confunda o mezclecon los textiles de la mesa del instrumentista yasegurarse que una vez usado, vaya al lugarasignado para el recuento final del materialutilizado en la operación.
d) Disponer de un lugar adecuado para larecolección del material utilizado quese va descartando.
e) Extender cada textil uno por uno paraevitar que los mismos quedenadheridos y mezclados entre sí yagruparlos en pilas de unidadesconstantes y conocidas (por ejemplo10 unidades) para facilitar sus conteos.
f) Retirar rápidamente todo material oinstrumental que accidentalmente caigaal piso, evitando que se “pierda” o sepegue a los zapatos de los integrantes delequipo o de otras personas o equipos oinstrumentos que salgan de la sala dondese está operando.
g) Realizar cuidadosamente todos los conteosque le soliciten el instrumentista ycomunicarle los resultados de los mismospara que los coteje con el material quetiene en la mesa de instrumental.
El textiloma es poco frecuente, pero siempre
embarazoso e involucra consecuencias médicas
y legales potencialmente peligrosas.
Ante una evolución post operatoria atípica,
debería considerarse la posibilidad de un
textiloma. Una placa simple de abdomen en por
lo menos dos proyecciones es de mucha utilidad.
Dado que hasta en un 88% en conteo fue
completo y de que los estudios radiológicos
trans-operatorios pueden ser falsos negativos, lo
mejor es tener buenos hábitos en el quirófano
para prevención.
A veces es necesario estudios imagenológicos
como tomografía o resonancia para poder hacer
un diagnostico todo textiloma debe operarse
debido a complicaciones potenciales. La cirugía
de extracción debe ser siempre la más sencilla.