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Marzo de 2014
3 EDITORIAL
Gratitud y recuerdo.
P. GIL MARÍA ARIZA
6 EN LA ERMITA
Para que nuestra vida sea una Pascua.
P. ALVISE ZAGO
8 NUESTRAS OBRAS
Aspirantado.
ASPIRANTES
Memoria agradecida a Dios en san Jerónimo
Emiliani.
P. SIMÓN CASTILLO
Encuentro juvenil somasco en Guayaquil.
DIAC. CÉSAR FERNANDO FRANCO
16 ÁGORA SOMASCA
Cuaresma tiempo para comenzar una vida
nueva.
P. JOSÉ RAMÓN PARRA
50 años de intento por seguir el carisma
eclesial de Jerónimo Emiliani.
JOSUE ROMERO (NOVICIO)
Cincuenta años de gracia.
P. FABIO ESTUPIÑÁN
El sacerdocio un regalo de Dios.
DIAC. CÉSAR FERNANDO FRANCO
Carisma somasco con perfume de mujer.
P. MARIO RONCHETTI
¿Cuál es mi Prioridad?
HNO. JOSÉ MONTAÑA
35 CAMINANDO JUNTOS
Pascua Somasca.
P. ALVISE ZAGO
Cronograma de animación provincial del
año 2014.
P. GIL MARÍA ARIZA
PROVINCIA
ANDINA
PROVINCIAL
P. Gil María Ariza
DIRECTOR Y EDITOR
Hno. José Harvey Montaña
ADMINISTRACIÓN
Provincia Andina Curia Provincial
FOTOGRAFÍAS
Archivo Fotográfico Provincia Andina
“NOSOTROS”: “Tenemos y queremos
sembrar esa gran ilusión para que
este medio siga vivo. Es una
invitación a todos los Somascos
(religiosos y laicos) a compartir las
experiencias que a diario se gestan al
interior de cada una de las
comunidades”.
ENVÍA TUS ARTÍCULOS
ORDEN DE LOS CLERIGOS REGULARES DE
SOMASCA
PROVINCIA ANDINA
CURIA PROVINCIAL
www.somascoscolombia.org
CALLE 167 Nº 62-31 TEL. 6705368
3
GRATITUD Y
RECUERDO El equipo de redacción del Nosotros
me ha expresado que sería
importante escribir una acción de
gracias por los 50 años del Carisma
Somasco en Colombia. La idea me
ha sonado pero, acudiendo a mi
propia experiencia, es decir,
expresar los hechos sobresalientes
CÓMO CONOCÍ EL CARISMA Y
por los cuales hoy doy Gracias.
Pero, antes de expresar dicha
gratitud, invito para que cada uno
de ustedes pueda escribir su propia
acción de gracias y la haga circular
en los correos.
Hace treinta y dos años, por primera
vez, escuché la palabra “Somasco”,
pero curiosamente en el bolsillo de
mi billetera cargaba una imagen de
san Jerónimo, que me regaló el
padre Franco Cecchini que se
hospedó, una noche, en la casa cural
de La Paz-Santander en compañía
de Jenaro quienes iban a visitar las
familias de unos seminaristas de La
Aguada. Doy Gracias, porque esa
imagen que yo le dije a mi Mamá
que era de san Idaly, (porque en
pequeño decía Italy) adquirida en
un encuentro casual y que
después descubrí su verdadero
nombre es hoy mi Patrón. Pasó
aproximadamente un año y aparece
un curita chiquito como con cuatro
pulmones, llamado Francisco Patino
4
y, en una Eucaristía en la vereda, mi
Mamá me dijo “confesémonos con
ese padre que no nos conoce” y
como siempre las Mamás pasan de
primero y ella le dijo al Pachito que
ella quería que yo fuera cura; sin
duda que todos los días le doy
Gracias a Dios por el don de mi
Mamá. Pasé a
confesarme (no
me acuerdo de
que…) y
Pachito casi no
me deja
terminar para
decirme “mira
que el Señor te
llama,
respóndele
siendo
Sacerdote con
los Padres
Somascos,
etc.” Gracias
por la valentía, entusiasmo y
alegría con la que Pachito decía:
“Mucho gusto Francisco Patino,
Sacerdote Somasco”.
Quedamos de hablar después de la
Eucaristía y, al otro día, vino a mi
rancho, entre las muchas cosas, a mi
Mamá siempre se le quedó la
curiosidad de la medallita y me dijo
que se la mostrara al padre, que sin
duda él sí sabía, y yo acostumbrado
siempre a hacer caso, la saqué y ¡oh
sorpresa!: “Este es san Jerónimo
Emiliani nuestro Santo Fundador,
dijo Pachito emocionado”; bueno,
y puso todo el
designio
premonitorio
vocacional en el
hecho de la
medallita (como
diría alguien, por
una medallita…) y
me contó toda la
historia de san
Jerónimo y de ahí
en adelante
hicimos un año de
seguimiento con
un Pacho que
escribía mínimo
una vez al mes y durante un año
llegó a la casa como tres veces.
Gracias por la constancia y
dedicación que, con lluvia o calor,
realizaba este humilde campesino
de Rondón (Boyacá) a quien le
5
encomendamos nuestro proyecto
de promoción vocacional.
Al año siguiente, me vine del monte
a la ciudad de Tunja y allí estaba
Pachito, sonriente y pendiente tanto
de los aciertos como de los errores,
pero ahí dando consejos, escuchado
y siempre con la expresión “ánimo
muchacho el Señor te llama, no
dudes… eran las palabras que
decía para despedir a
sus seminaristas
después de sus
constantes coloquios”.
Gracias, Pacho, por esa
forma de acompañar,
compartir y trabajar sin
tregua por el carisma.
Finalmente, cuando
llegó la noticia del fatal
accidente donde perdió
la vida, estuve ahí, me
acuerdo que pasamos la noche de
largo con Rafa (su compañero de
estudios) no lo podíamos creer…
En ese funeral aprendí a no pedir
por los muertos, sino a agradecer
por lo que nos dejaron y tratar de
continuar su legado. Recordando a
Pachito en estos 50 años de
celebración, le agradezco a Dios
porque, por medio de él, me hizo
enamorar del Carisma Somasco,
sin duda, que luego vinieron
muchos Somascos que han
inyectado Pasión, pero Pacho fue
quien sembró.
p. Gil María Ariza
Prepósito Provincial
“ánimo el Señor te
llama, no dudes…”
(P. Francisco Patiño)
6
Para que nuestra vida
sea una Pascua Jesús hizo de su vida una Pascua
porque, en su amor por nosotros,
siendo Dios, se hizo hombre,
pasando de la eternidad a nuestra historia.
Por amor nuestro, “sabiendo que había llegado la hora
de pasar de este mundo al Padre,
habiendo amado a los suyos
los amó hasta el extremo” (Jn 13,1).
Pasó de la muerte en la cruz
a la gloria de la resurrección.
La Virgen María celebró su Pascua,
porque pasó de pensar en sí misma
a una total entrega y consagración a la voluntad del Padre,
diciendo: “Aquí está la esclava del Señor,
hágase en mí según tu palabra” (Lc 1,38).
San Jerónimo, nuestro Padre,
hizo de su vida una Pascua,
porque pasó de pensar en sí mismo
a ocuparse de los niños desamparados,
declarando “con estos hermanos mío,
yo quiero vivir y morir”.
7
Por medio del santo bautismo, todo cristiano
pasa de la muerte y esclavitud del pecado
a la vida de gracia, a la libertad de hijos de Dios.
Por su consagración a Cristo,
todo religioso opta por pasar
de la mentalidad del mundo
a la mentalidad del Evangelio.
Por el voto de pobreza
se compromete a pasar
de poseer las cosas de este mundo
a la confianza en la Divina Providencia.
Por el voto de castidad
elige de pasar
de un amor particular hacia una persona
a un amor total, fiel y definitivo a Cristo,
para servir a los más pobres.
Por el voto de obediencia,
opta por pasar de seguir sus criterios
a aceptar radicalmente la voluntad del Padre,
en todas las circunstancias de la vida,
imitando a Jesús.
Nosotros los religiosos,
estamos llamados
a hacer de nuestra vida una Pascua diaria,
muriendo a nosotros mismos
para pasar a resucitar con Cristo y en Cristo.
¡Que Cristo Jesús Resucitado
sea, cada día, nuestra Pascua!
PAZ
8
ASPIRANTADO
En esta etapa de nuestra vida,
sentimos la necesidad de
encontrarnos a nosotros mismos, y
elegir lo que queremos ser y a
quién queremos servir. Qué mejor
que el camino que hemos elegido, el
de seguir a Jesucristo, tomando
como ejemplo a San Jerónimo
Emiliani, quien nos invita a ser
humildes y a vivir nuestra vida al
servicio de los más débiles y
necesitados.
Somos cinco los
aspirantes que nos
encontramos en
formación, en la
Parroquia de
Nuestra Señora de
Guadalupe-Bogotá,
aprendiendo a
convivir en
comunidad y
conociendo el carisma somasco. El
trabajo parroquial nos brinda la
oportunidad de ayudar a las familias
más necesitadas de la comunidad,
también, nos permite compartir con
los niños que asisten a los diferentes
grupos pastorales, y sentir que
estamos evangelizando,
transmitiendo y sembrando la
alegría de ser hijos de Dios.
“El dinero hace personas ricas, el
conocimiento hace personas sabias,
pero la humildad hace grandes
personas” (Anónimo).
De Izquierda a derecha en la foto: Brayan Pelayo
(Zapatoca-Santander), p. Nelson Celi (Párroco),
Santiago Ardila (Charalá-Santander), Milton
Márquez (Zapatoca-Santander), José Luis Bocota
(Boyacá), Rotman Afanador (Pamplona-Santander),
p. Artemio Viale y p. Angelo Bertoletti.
9
MEMORIA AGRADECIDA A DIOS
EN SAN JERÓNIMO MIANI En el marco de los 50 años de los
somascos en Colombia, hacemos
memoria agradecida a Dios por
tantos espacios, tiempos, momentos
y anécdotas de este recorrido
histórico. Resalto uno de los
innumerables momentos, en
Bucaramanga, al finalizábamos una
multitudinaria marcha por la Vida y
la Dignidad humana de los barrios
que forman la Parroquia Santa Inés.
En la cancha la Bombonera del
barrio “La Juventud”, a pocos
metros de entidades
gubernamentales: ICBF, IPC,
SENA, ISABU, en un cartulina, tipo
papiro, Dora, joven del coro y
catequista, ayudada por un
megáfono, leyó el DECRETO con
el cual todos los grupos
parroquiales y cívicos, desde ese
momento, se unificaban por
DIGNIDAD como “CIUDAD
NORTE”. El aplausote no se hizo
esperar y unas bombas elevaron la
nueva identidad, hacia el futuro. El
párroco de entonces y su Junta ya
habían firmado el decreto ante
testigos, entre ellos Alipe y Pedrito
(jovencitos especiales, en
chancletas, comprometidos en todo:
tinteros, porteros, aseadores y la
alegría de la casa parroquial). La
respuesta fue inmediata, a los 15
días apareció una ruta de buses
urbanos con dicho título…. Hoy
estos barrios tienen mejor dignidad
y es loable resaltar a muchas
personas y alabar a Dios por ellas,
he aquí una…
La Hermanita ALCIRA
“El ser humano bueno, cuando
muere, no es un mortal que
acaba; es un mortal que empieza”
(Cardenal Baunard- pensador
francés)
Con este pensamiento humano–
cristiano pienso que “Ciudad Norte,
Bucaramanga y sus barrios: la
Juventud, Transición, Villa
10
mercedes entre otros” pueden
resaltar la vida y obra de la querida
Hermana ALCIRA, como
popularmente se la conocía. Con
este pensamiento, Ciudad Norte y la
Parroquia Santa Inés lloran su
natural partida de la “juventud
terrena a la perpetua JUVENTUD”,
de la juventud empobrecida,
problematizada cuyo testigo mudo
es el “Árbol Palo Gordo”, a la
Juventud donde la esperanza
permanece, la libertad se vive en
totalidad, la alegría no tiene límites
y el amor todo lo abarca. De la
juventud transitoria donde el
alimento escasea, las enfermedades
y vejez dominan, la cruz de la
soledad y el sufrimiento extienden
sus brazos, a la juventud de una
Nueva Vida, de una Nueva Luz, de
la Resurrección. “Todo lo hago
nuevo” dice el Apocalipsis. Es obra
del Espíritu Santo, ante El nada
podemos decir.
ALCIRA, monjita de relativa baja
estatura, de pulcro hábito blanco
que vestía con honor mostrando así
“su identidad cristiana consagrada
por el bautismo” en la vida y
comunidad de las “Hermanas de la
caridad de Santa Ana”; Alcira, de
cabeza inclinada de lado, de frente
en alto y de acogedora sonrisa en
medio de su seriedad, silencio
orante y sencillez, se ha ido con su
tic que parecía decir “NO”, pero, en
realidad, por su ejemplo, era un
“SÍ” a la vida y al compromiso de
todos los que la conocimos y
relacionábamos. Su tic, era símbolo
motivador de esperanza para los
muchos enfermos, adultos mayores
postrados y de los que arrastran el
peso del vivir diario. Su tic le hizo
ser una mujer positiva, tesonuda,
arriesgada y comprometida para dar
vida desde el amor de Cristo, a
quien tanto amó y siguió en el
camino del dolor y el desprecio. Era
un “NO” rotundo a la renuncia, a la
marginación, a la enfermedad, a los
vicios, al sinsentido, al
estancamiento, a la muerte… un
“No” a tantas cosa que nos atan y
nos impiden volar y amar…
11
El siempre presente padre Mario
Ronchetti crs dice desde Roma:
“Recuerdo con mucho cariño a la
hna. Alcira y todo el bien que ha
sembrado en Ciudad Norte a lo
largo de muchos años. Su presencia
ha permitido a muchas personas
experimentar la bondad del Señor.
Es ella que ha orientado al grupo
“Ángeles del Norte” hacia la
atención y la ayuda a los ancianos
del barrio Transición y del sector.
Ahora, desde otra dimensión (la
más verdadera), sigue acompañando
nuestro caminar. Les deseo todo
bien, junto con la bendición de Papa
Francisco.”
LA hermanita ALCIRA hizo tanto
bien, no hay que dudarlo, desde su
humilde poquedad, esto permanece
como Universidad de vida para las
nuevas generaciones. “Yo recuerdo,
en mis primeros jocosos 4 años de
sacerdote, cuando visitábamos con
ella a los enfermos y a la pata, ya
estaba pegado el niño acólito de 8 u
11 años ALBERIO quien iba
adelante con su viveza y cariño por
los viejos, los despertaba,
espantaba gallinas, perros, gatos,
pájaros, loros y hasta ratones de los
ranchos, avisado la llegada del
padre y de la hermanita Alcira, que
junto al Pan Eucarístico, ella llevaba
pan, panela, arroz, chocolate u otras
cosas para compartir y así decirle
“Sí a la vida” de sus visitados.
¡Cuánto gozo, a flor de piel,
disfrutaba! en los encuentros en su
casa, con el característico humor y
creatividad del párroco de entonces.
Rindió mucho aprecio a los padres
Somascos, disque cuando aparecían
cambios según la obediencia decía:
“Y, ahora, ¿a quién me van a
enviar?”. Para muchos de nosotros,
fue nuestra Maestra en la pastoral
de la salud, que es una verdadera
penitencia y una luz en el ministerio
de la Unción de los Enfermos. A
ellos no es suficiente llevarles los
signos sagrados; se les debe llevar
cariño, sonrisa, humor, caricias,
chispa de vida, importancia etc.
Lejos de ellos cosas negativas,
desprecios, sentencias, soledad y
12
comentarios de enfermedades y
muerte….
Las vidas positivas y humildes son
universidades, tal vez Albeiro lo
recuerda y reconozca desde su
corazón, Ella, la monjita llena de fe
en Jesucristo, lo llevó de la mano, y
así en muchas otras personas, que
de cerca vivieron su experiencia de
vida, sembró la misma fe y, a la
vez, han respondido; “porque la fe
sin obras está muerta, la fe sin el
amor nos vuelve fanáticos y el amor
sin la fe es puro sentimiento, a
merced de los vientos que soplan en
diversas direcciones” (Mons. Luis
Augusto Castro).
Alcirita, supo “vivir y morir con
ellos” como dice san Jerónimo
Emiliani. Gracias a Dios por tu vida
tan fecunda, tu oración, y por miles
de detalles… por la Mesa
Eucarística que siempre celebraba y
compartía con nosotros su pueblo
hermano de esta Iglesia parroquial.
Gracias porque eras luz y ahora
brilla intensamente entre nosotros.
Ahora empieza a ser inmortal.
“EN CUARESMA, LOS CRISTIANOS
DE VERDAD VIVEN COMUNIDAD”
13
NOTI-NOSOTROS: Ciudad
Norte, los grupos parroquiales, “la
Emisora la Brújula- su Norte con
sentido” los Ángeles custodios y
organización Albeiro, el barrio -el
colegio, los adultos mayores- la
Juventud, las cuatro comunidades de vida
consagradas entre otros sepultaron y
rindieron un estupendo homenaje
póstumo y alabanza a Dios, por su amor
testimoniado en la hermana ALCIRA y
su comunidad las hermanas de la Caridad
de Santa Ana, presidida por nuestro
Párroco y en Bogotá, el funeral por el p.
Provincial Gil María Ariza T.
Nos sentimos diezmaos sin novicios, se
albergan y esperan grupos o personas que
quieran vivir unos días de descanso y
vivencia espiritual. El hermano Bruno los
orienta.
El Centro Juvenil
Amanecer continúa su
marcha sirviendo a la
juventud con
programas del SENA.
ICBF. Y CENTRO
DE SALUD. y la
pastoral juvenil,
infantil y educativa .
El plan arquidiocesano aterriza en el
plan parroquial en 5 prioridades: “Año
Arquidiocesano de la juventud, visita
misionera a las familias, la conformación
de la CEM (Comunidades Eclesiales
Misioneras) y el acompañamiento de la
diversidad de comités, grupos, zonas y
sectores. Todos ellos han elaborado sus
objetivos, acciones, cronogramas
puntuales y concretos. Han sido
socializados y presentados al Párroco y
luego al Arzobispo.
La pastoral educativa-infantil-juvenil-
vocacional continúa su marcha
organizacional activa con el Movimiento
Juvenil Somasco.
Nuestra comunidad “Somascos Ciudad
Norte” se propone vivir su proyecto
comunitario propuesto
y aprobado bajo la
animación del superior.
Felicitamos en
Jesucristo a la
Arquidiócesis de
Bogotá por sus 450
años. En ella, a la
Parroquia Ntra. Sra. de
Guadalupe por su
método y ejemplo
bandera de “las
hogueras” extendido por el p. Pedro
Cárdenas aquí y en el Ecuador. (nota de
reconocimiento por esta arquidiócesis)
P. Simón de Jesús Castillo
14
ENCUENTRO JUVENIL SOMASCO EN
GUAYAQUIL
“La fe es garantía de lo que se
espera;
la prueba de las realidades que no
se ven” (Hb 11,1.)
Con el acontecimiento del 8 de
Febrero, fecha que nos recuerda la
bondadosa entrega de san Jerónimo
Emiliani, en favor de la juventud
huérfana y desamparada, y
motivados por su estilo de vida,
participamos del encuentro guiado
por el hno. César Franco, para vivir,
más de cerca, la espiritualidad
somasca.
Jerónimo, un joven al igual que tú,
sintió el llamado de Dios para su
conversión, dejándolo todo y
colocándose al servicio de los más
pobres… Este encuentro contribuyó
a la reflexión y a la autoevaluación
de nuestro caminar juvenil, por
medio del legado que nos dejó
nuestro Patrono:
… “Sigan el camino del
Crucificado despreciando el
mundo”, Joven, no tengas miedo,
dale un sí generoso a Jesús, él
necesita de tus manos, ojos, pies,
para llegar a aquellos que
desconocen su gran amor.
… “Ámense los unos a los otros”,
a pesar de tus inquietudes,
fragilidades, abandónate en Cristo,
permite que él sea el centro de tu
vida, guarda sus mandamientos, ten
presente que eres su más hermosa
obra y la razón de que Él se haya
quedado en la Eucaristía.
… “Sirvan a los pobres”, desde tus
posibilidades sirve con alegría,
regálate la oportunidad de ver el
rostro de Dios en tu hermano, cada
gesto, cada palabra de esperanza, te
permite salir de ese letargo en el
cual se encuentra la juventud; que tu
testimonio sea: servir sin medida.
15
Como jóvenes, queremos ser
discípulos misioneros de Cristo,
compartiendo nuestro tiempo y
conocimiento con los que menos
tienen, a través de talleres
formativos, apostolados, actividades
artísticas y participando
activamente de la Liturgia de la
Palabra.
“Vayan y hagan discípulos en todas
las naciones” (Mt 28,19).
Pastoral Juvenil NUGEMI
(Parroquia San Jerónimo
Emiliani) y Pastoral Juvenil
MÚNERA (Parroquia María
Madre de los Huérfanos)
Guayaquil - Ecuador
16 de febrero de 2014
…desde tus posibilidades sirve con alegría, regálate
la oportunidad de ver el rostro de Dios en tu
hermano…
16
CUARESMA TIEMPO PARA
COMENZAR UNA VIDA NUEVA
Al encontrarme en estos lugares
santos del noviciado Somasco de la
Provincia C.A. San Salvador, El
Salvador, me uno a mi Provincia
para celebrar, con gozo y
agradecimiento a Dios, los
cincuenta años de presencia
somasca y le doy gracias al
Dulcísimo Jesús por los religiosos
que, dejando su patria y su familia,
se han entregado con alma, vida y
amor.
A los religiosos, agregados, laicos,
bienhechores, y tantas personas
buenas que siguen sirviendo con
alegría, dando su vida con los más
pobres con su servicio, a ellos mil y
mil gracias. Sigamos trabajando
con alegría, en esta tierra linda del
planeta, como es Colombia y
Ecuador.
Aprovechando este tiempo de
gracia, de bendición y de
conversión para comenzar una vida
nueva, la
Iglesia invita a
cada uno de
sus hijos a
vivir en
intensidad una
renovación interior. Las tres armas
que se nos ofrecen son la oración, el
ayuno y la limosna, que nos ayudan
para estar en contacto con Dios, con
nuestros hermanos y con nosotros
mismos.
Orar significa hablar con Dios;
ayunar significa mortificar un poco
nuestro cuerpo, privándonos de los
alimentos, pero, sobre todo, de las
pasiones pequeñas y grandes; y la
limosna que nos abre a la caridad, al
sentido de correspondencia,
especialmente con nuestros pobres
de nuestros colegios, parroquias e
instituciones y de tantos que están
vacíos de Dios y sumergidos en sus
penas y angustias existenciales.
17
La cuaresma es, para cada cristiano,
una llamada a tener entrañas de
misericordia, de bondad, de
comprensión hacia nuestros
hermanos, comenzando por los de
nuestra casa, siendo buenos y justos
con los que trabajan con nosotros,
pues son nuestra familia.
Sintiéndonos bendecidos por Dios
y amparados por el Espíritu del
Fundador, preparémonos a celebrar
con nuestros religiosos, laicos,
empleados, profesores, secretarias,
voluntarios, bienhechores, el
próximo acontecimiento de los
cincuenta años por los caminos de
Colombia y Ecuador.
También la cuaresma es un tiempo
precioso para meditar la figura
dolorosa de María que estuvo al pie
de la cruz, que padeció la pasión y
muerte de su Hijo y quien recibió su
cuerpo sin vida. De verdad que la
cuaresma es un tiempo para amar a
Jesús en su divina misericordia, y
nos muestra a un Cristo que viene a
salvarnos, purificarnos,
perdonarnos, a darnos el todo.
Cristo entregó hasta su vida, nos
amó hasta el extremo para que
nosotros pudiéramos tener vida y
vida en abundancia, como Él mismo
lo asegura (Jn 10,10).
La Comunidad, donde vivo, está
compuesta por ocho religiosos, un
hermano en Magisterio, tres
teólogos y tres novicios, dos
aspirantes y tres postulantes. El p.
Provincial es el superior y
formador de los teólogos, el p.
Párroco es el responsable del
Santuario de Nuestra Señora de
Guadalupe, el padre encargado del
Internado y el hermano de
magisterio responsable de
aspirantes y postulantes y el p.
maestro con tres novicios, de los
cuales dos salvadoreños y un
hondureño. La experiencia ha sido
buena, aunque la adaptación e
inculturación no ha sido fácil, pero
ahí estamos para lo que sea con la
ayuda de Dios y la intercesión de la
Virgen santa.
Me despido con mucho cariño y
amor. Sigamos sembrando
esperanza, y seamos luz para que el
espíritu de San Jerónimo siga
creciendo en otros países
latinoamericanos, y, al igual que
nuestro santo, podamos seguir
expresando con confianza en cada
encuentro “Dulcísimo Jesús no seas
mi juez sino mi salvador”
p. José Ramón Parra crs.
18
50 AÑOS DE INTENTO POR SEGUIR EL
CARISMA ECLESIAL DE JERÓNIMO EMILIANI
El 24 de octubre de 1964 San
Jerónimo Emiliani se hace presente
en Sur América; por eso, este 2014,
ustedes hermanos de Colombia y
Ecuador están gozosos por
celebrar los 50 años de vida
somasca en la Provincia Andina.
Desde la Provincia Centroamérica,
nos unimos a este evento de gran
magnitud para felicitarles por la
ardua labor de entrega al servicio de
los pobres, realizada durante estos
años.
Muchas cosas nos unen.
Comencemos por la parte histórica,
como dijo Oscar Wilde: “El único
deber que tenemos con la historia es
rescribirla”, por tanto, creemos que
vale la pena hacer una breve
recapitulación de algunos lazos
comunes entre nosotros:
a) En el campo misionero:
- Los pioneros de la obra
somasca en Colombia, los padres
Bernardo Vanossi, Domingo
Framarin y Bruno Schiavon, antes
de partir a Colombia, el 17 de
octubre de 1964, estuvieron
alrededor de tres meses en la actual
casa del noviciado de La Ceiba de
Guadalupe, San Salvador-El
Salvador, en un período de
adaptación al ambiente, al idioma,
etc.
- En septiembre del 2013, se
inauguró solemnemente la
fundación San Jerónimo Emiliani,
para beneficio de los más
desposeídos de Haití y Rep.
Dominicana en el Caribe, con el
apoyo del oficio misionero de la
Congregación, representado por el
hno. Antonio Galli, obra en la cual,
desde el principio, se situó al frente
el p. Orlando Barajas, colombiano.
Luego se sumaron los sacerdotes
Centroamericanos Juan Carlos
González y Antonio Manuel
Cordero.
b) En el campo formativo:
19
- En 1972, los primeros novicios
somascos de Colombia, entre ellos
el padre Ramón Parra, actual
maestro de novicios en nuestra
Provincia Centroamericana,
llevaron a cabo su año de noviciado
en la Ceiba de Guadalupe con el
recordado p. Ángel Cossu (qepd).
Luego, durante varios años jóvenes
aspirantes de Centroamérica han
realizado su año de
noviciado en
Colombia; los más
recientes fueron
ocho jóvenes
profesos simples,
durante los años
2011 y 2012.
Y por último y no
menos importante:
c) En el campo
geográfico -
histórico- cultural-
político, etc.
Ambas Provincias somos parte de
Latinoamérica, geográficamente
vecinos, Panamá sirve de lazo de
unión. El patriota colombiano
Simón Bolívar intentó formar la
Gran Colombia y otros importantes
líderes, más recientes, nos hablan
de la los pueblos Bolivarianos.
En la parte histórica religiosa, fue
famosa la segunda reunión del
CELAM (Conferencia del
Episcopado Latinoamericano) en
Medellín, Colombia, en 1968, que
contó, en la apertura en Bogotá, con
la presencia del Papa Pablo VI; la
cual tuvo como objetivo, encarnar
los textos del Vaticano II en
Latinoamérica. Los frutos de este
Sínodo no se hicieron
esperar y se
expendieron rápido
como llama de fuego
por toda la región.
Entre otros frutos
podemos mencionar
la importancia que
tomaron los laicos,
por ejemplo, como
delegados de la
Palabra (Honduras y
otros países); muchos
pastores se
preocuparon por
llevarlos a la práctica
y, entre otros, podemos mencionar a
los Arzobispos de San Salvador,
Luis Chávez y González y Oscar
Arnulfo Romero, y Mc Grath de
Panamá, etc. Para llevar adelante
este importante Documento de
Medellín, algunos sellaron sus
vidas hasta con el martirio como
Monseñor Romero y el p. Rutilio
Grande en El Salvador, el p.
20
Guadalupe Carne en Honduras y
otros numerosos sacerdotes,
religiosos (as) y miles de laicos y
laicas. Hoy, con la llegada al
Vaticano del Papa Francisco, como
latinoamericano, nos llegan nuevos
aires de renovación cristiana para la
región.
Apreciamos la cultura Colombiana
sintetizada en el premio Nobel
literario: Gabriel García Márquez,
muy conocido en Centroamérica y
que incluso ha tenido emuladores
contemporáneos de la talla de
Roberto Sosa en Honduras, Ernesto
Cardenal en Nicaragua, Miguel
Ángel Asturias en Guatemala,
también premio Nobel literario,
Roque Dalton en El Salvador, etc.
Y en el campo meramente político,
Colombia, en estos momentos,
celebra pláticas de paz con el grupo
insurgente de las FARC, al igual
que lo hizo Centroamérica en los
años ochenta-noventa del siglo
pasado con los grupos insurgentes
de El Salvador aglutinados en el
FMLN (Frente Farabundo Martí
para la Liberación Nacional) y en
Guatemala con la URNG (Unión
Revolucionaria Nacional de
Guatemala).
Para terminar, recordemos que, en
tiempos recientes, hubo intentos de
llevar a cabo una unión de
principios latinoamericanos
somascos a través del ESLA
(Encuentro Somasco
Latinoamericano). Es por esto que
hoy, como cristianos y como
somascos, nos sentimos
orgullosamente unidos a su alegría
por la unidad de criterios que hemos
tenido. Les animamos en el amor de
San Jerónimo para que
permanezcan firmes y unidos en la
misión que nuestro Padre nos
heredó.
Josué Romero
Novicio
21
CINCUENTA AÑOS DE GRACIA “Sin cuenta” son
las gracias y
bendiciones que
ha recibido del
Señor nuestra
comunidad, por
su presencia en
medio de los
pobres en
Colombia y
Ecuador; motivo
por el cual
debemos elevar
constante acción
de gracias al
Creador, a san Jerónimo por
haber enviado soldados valientes,
a estas tierras de los cuales
algunos ya, gozosamente han
muerto en el surco, dejándonos
como legado un gran ejemplo de
fe, de entrega, de generosidad sin
límites.
Gracias hermanos, sembrado del
carisma de san Jerónimo; gracias
a los que ya están en el cielo, que
como seres de luz siguen
acompañando nuestra fatiga;
gracias a los que siguen
incasablemente entregándolo
todo; gracias a los que en alguna
ocasión han hecho parte de
nuestra consagración, porque su
paso no ha sido inútil, alguna
semilla de bien han dejado y
muchas otras semillas se han
llevado para seguirlas
esparciendo allí desde donde han
decido luchar.
Al inicio de este mandato, el
padre Provincial, nos daba unas
palabras claves para continuar el
22
comino, palabras positivas que
ojalá se convirtieran en el léxico
motivador de nuestro cotidiano,
para no seguir anclados en lo
negativo, en lo pesimista, para
que imitemos a Dios quien es un
empedernido optimista en el
cambio, en la superación del
hombre, su obra de creación y
por eso con infinita largueza cada
día nos ofrece su amor, su
perdón. Permítanme, proponer
algunas palabras, algunas
actitudes, que nos han de ayudar
a seguir mirando el futuro como
un horizonte de esperanza, como
un espacio en el cual nuestra
utopía todavía tiene, espacio y
los sueños cabida, para que sigan
siendo sueños, sueños de Dios,
los sueños de los pobres.
Saludaré cada día, cada nuevo
amanecer en mi comunidad con
amor en mi corazón:
Porque este es el secreto más
grande de éxito en todas las
personas. La fuerza podrá partir
un escudo y aun destruir la vida,
pero sólo el poder invisible del
amor puede abrir el corazón del
hombre y hasta que no domine
este arte no seré más que un
vendedor en un mercado. Haré
del amor mi arma más poderosa
y nadie a quien yo encuentre en
este día, podrá defenderse de su
fuerza. Podrán contradecir mi
razonamiento; podrán desconfiar
de mis discursos; podrán
desaprobar mi manera de vestir;
podrán rechazar mi rostro y hasta
podrán sospechar de mis
acciones, de mis proyectos y sin
embargo mi amor les derretirá el
corazón, al igual que los rayos
del sol entibian la más fría
arcilla.
¿Y cómo lo haré? De aquí en adelante contemplaré
todas las cosas con amor y
naceré de nuevo. Amaré al sol
porque me calienta los huesos;
pero también amaré la lluvia
porque purifica mi espíritu.
Amaré la luz porque me indica el
camino; pero también amaré la
oscuridad porque nos enseña las
estrellas. Acogeré la felicidad
porque engrandece mi corazón,
pero también soportaré la tristeza
porque descubre mi alma.
Reconoceré la recompensa
porque constituye mi pago, pero
también daré acogida a los
obstáculos porque constituyen
para mí un desafío. Lucharé con
todas mis fuerzas para que el
carisma de san Jerónimo se siga
extendiendo en este contexto
23
andino, ya que se escucha la voz
del pobre, del oprimido que me
interpela.
¿Y cómo hablaré? Elogiaré a mis enemigos y se
convertirán en amigos míos.
Animaré a mis amigos y se
volverán hermanos míos.
Descubriré siempre nuevos
motivos para elogiar, nunca me
prestaré en buscar excusas para
el chisme. Hay palabras que
hieren que matan la dignidad de
mi hermano, ¿qué derecho me
asiste para hacerlo? ¿He venido
acaso a mi comunidad para ser
un fratricida? Cuando sienta la
tentación de criticar a mis
hermanos, me morderé la lengua;
cuando me sienta inspirado a
elogiar, lo proclamaré a los
cuatro vientos. ¿No sucede que
los pájaros, el viento, el mar y la
naturaleza toda hablan con la
música de la alabanza para su
creador? ¿Y yo por qué no lo he
de hacer que soy su hijo? ¿No
puedo acaso hablar con la misma
música a mis hijos, mis
semejantes, mis hermanos? De
aquí en adelante recordaré este
secreto que me ayudará en la
vida y construirá comunidad.
¿Y cómo procederé?
Amaré a todos mis hermanos de
comunidad, así como a toda clase
de personas, porque cada una
tiene cualidades dignas de ser
admiradas aunque quizás estén
ocultas. Derrumbaré la muralla
de sospecha y de odio que han
construido alrededor de sus
corazones y, en su lugar,
edificaré puentes para llegar por
ellos a sus almas. Amaré al que
tiene ambiciones porque podré
inspirarme; amaré a los que han
fracasado porque pueden
enseñarme. Amaré a los reyes y
gobernantes porque son
solamente humanos; amaré a los
humildes porque son los
preferidos de Dios y yo me
siento seducido por el Dios de
los pobres.
Amaré a los ricos porque sufren
soledad; amaré a los pobres
porque necesitan mi solidaridad.
Amaré a los jóvenes por la fe a
que se aferran; amaré a los
ancianos por la sabiduría que
comparten. Amaré a los que se
creen felices porque en sus ojos
hay tristeza; amaré a los feos
porque su alma está repleta de
paz.
24
Pero ¿Cómo reaccionaré ante la
conducta de los demás?
Con amor. Porque así se
comportó el Maestro del Amor,
el amor es el arma con la que me
propongo abrir el corazón del
hombre, el amor es también mi
escudo para resistir los dardos de
la envidia, del odio y las lanzas
de ira. La adversidad y el
desánimo me azotarán cual
huracán, pero yo con mi nuevo
escudo, los reduciré finalmente
en una fina lluvia. Mi escudo, el
amor, me protegerá en el
mercado, me sostendrá cuando
estoy solo. Me estimulará en
momentos de desánimo, pero
también me calmará en épocas de
gozoso transporte. Con el uso, mi
escudo, me protegerá cada vez
más, hasta que mi nombre sea
enarbolado en la pirámide de la
verdadera vida.
¿Cómo me relacionaré conmigo
mismo?
Principalmente tendré en cuenta
amarme a mí mismo. “Yo soy yo
y mis circunstancias, si no las
salvo a ellas no me salvo a mí
mismo”. Por tanto vigilaré
celosamente todo lo que entra en
mi cuerpo, en mi mente, en mi
alma, en mi corazón. No
permitiré que mi mente sea
atraída por el mal y la
desesperación, sino que más
bien la estimularé con los
conocimientos y la sabiduría de
los siglos. Nunca le permitiré a
mi alma que se vuelva
complaciente y satisfecha. Por el
contrario, la alimentaré con la
meditación y la oración. No
permitiré nunca que mi corazón
se empequeñezca o se amargue,
sino más bien lo compartiré y
crecerá y alegrará la tierra.
Estos cincuenta años, no son un
punto de llegada, son un punto
más en el devenir de la historia
de la salvación, de la tierra
prometida que el Señor nos sigue
mostrando, por eso requieren de
una nueva actitud, una nueva
mirada, la mirada de Dios, la
mirada de las águilas, que no se
saben satisfechas como los pollos
en el corral de su derrotismo, de
su enfado de su fracaso. Prefiero
ser soñador, que matador de
ilusiones, prefiero hacerme a un
lado antes que ser obstáculo en
el devenir proyectivo de nuestra
Congregación, sin ser talanquera
o pozo de hiel, porque la vida
como el río va hacia adelante no
hacia atrás.
p. Fabio Estupiñán
25
EL SACERDOCIO:
UN REGALO DE DIOS
“Mi experiencia de fe”
Desde que tengo uso de razón, he
podido experimentar lo que se siente
recibir un regalo. ¡Aunque claro!,
mucho antes de desarrollar mi razón,
es decir, desde el vientre de mi madre,
ya comenzaba a recibir regalos.
Recuerdo que de niño, en cada
cumpleaños, mi mamá me organizaba
una pequeña fiesta o “piñata” como
solíamos llamar; en ella la alegría y la
algarabía se hacían presentes junto a
esos detalles o regalitos que, como
todo niño, le hacían sentirse
emocionado y feliz.
Al cabo de unos años, ya no había
fiestas, y no porque mi mamá no
quisiera, sino porque, al pasar el
tiempo y dejar la etapa de la niñez, el
pensamiento me iba llevando por un
nuevo camino. Cumpleaños, amor y
amistad, navidad: eran tiempos
especiales que traían consigo muy
buenos momentos, eran tiempos de
regalos, ya no era necesario hacer
una fiesta de niños, también podía
recibirlos en otros momentos de mi
vida.
Con todas esas emociones envueltas
en papel y cintas de color crecí, y sé
que, en vez de estancarme, me
ayudaron a madurar. Pero, había un
regalo que aún no había sido
destapado, es más, era un regalo que,
al parecer, estaba escondido desde
siempre y hasta ahora comenzaba a
descubrirlo: es el regalo de mi
vocación, y dentro de ella está el ser
religioso y ahora sacerdote. El
pensamiento de san Agustín que dice:
“Tarde te amé, Oh Belleza siempre
antigua, siempre nueva. Tarde te amé.
Tú me has llamado, y me has llamado
26
insistentemente, y has suprimido mi
sordera. Tú has brillado con luz y has
puesto mi ceguera a volar. Tú has
emanado fragancia, y me he quedado
sin aliento, y he suspirado por Ti. Te
he conocido, y he tenido hambre y sed
de Ti. Tú me has tocado, y he sido
encendido por tu paz”. (Confesiones,
Capítulo 1), me lleva a recordar que
en un momento importante de mi vida
conocí a Dios más de cerca y entendí
cuánto me ama y cuánto lo amo, eso
me conduce a estar más cerca de Él.
En estos momentos, siento un gran
gozo y una inmensa felicidad me
embarga, porque sé que el sacramento
del Orden Sacerdotal que voy a recibir
de parte Dios a través de la imposición
de manos del Arzobispo, no es un
simple título o un cargo o grado como
en el ejército, sino que es la acción de
Dios en su plenitud la que viene sobre
mí, es el Espíritu Santo el que me
lleva, junto al pueblo de Dios, a unir y
estrechar mis lazos de amor al Padre y
a mis hermanos, especialmente los
más necesitados, los niños y jóvenes.
El sacerdote es un hombre común y
corriente, del mundo, pero es un
hombre que ha sido llamado e invitado
por Dios a seguirle para amar
incondicionalmente, para servir
desinteresada e incansablemente y
para vivir plenamente feliz. El Papa
Juan Pablo II en su exhortación
apostólica “Pastores Dabo Vobis”
tiene un clara intención: el sacerdocio
ha de ser asumido con entereza y
valentía, con amor y pasión, con
fidelidad y responsabilidad, con
libertad y conciencia, con fe y caridad,
con alegría y perseverancia, pero
sobre todo con el corazón bien abierto
y dispuesto para que Dios habite en él
conduciéndolo por el camino de la
santidad.
“Vosotros, pues, sed perfectos, como
es perfecto vuestro Padre (Mt 5, 48).
Con estas palabras de Jesús contenidas
en el evangelio, el Decreto Conciliar
sobre el ministerio y vida de los
presbíteros manifiesta: Ahora bien, los
sacerdotes están obligados de manera
especial a alcanzar esta perfección, ya
que, consagrados de manera nueva a
Dios por la recepción del Orden, se
convierten en instrumentos vivos de
Cristo, Sacerdote eterno, para
proseguir en el tiempo la obra
admirable del que, con celeste
eficacia, reintegró a todo el género
humano”1.
Es una gran labor y una gran tarea la
que realiza el sacerdote, pero lo más
importante es que todo lo que haga, lo
desarrolle con amor, sencillez y
humildad, aquellos valores que
caracterizaron a Jesús y que muchos
santos a lo largo de los siglos 1 Exhortación Apostólica Postsinodal Pastores Dabo
Vobis. De su Santidad Juan Pablo II al Episcopado, al
Clero y a los fieles sobre la formación de los
sacerdotes en la situación actual. Numeral 20. p. 51.
27
siguieron, asumiendo su cruz y
caminando con Jesús. Entre ellos está
san Jerónimo Emiliani, quien, aun sin
ser sacerdote, para mí ha sido un
testimonio y ejemplo de vida. Siendo
solamente un hombre con ideales y
metas terrenas, llegó a ser un hombre
humilde convertido y comprometido
y, más adelante, un santo con la gracia
divina y el amor pleno para proteger a
quien más lo necesitara, especialmente
los niños y jóvenes abandonados,
tristes, solos.
Lo que comenzó con regalos
materiales, ahora se ha transformado
en un regalo espiritual. Dios me ha
bendecido con su llamada, y sé que Él
está agradecido con mi entrega. Ahora
este regalo tan grande y maravilloso
que voy a recibir, lo quiero compartir
con todo el mundo, con mi familia,
mis amigos, mis compañeros,
conocidos y, sobre todo con los niños
y jóvenes con los que he compartido
mi vida, pues, gracias a ellos, he
descubierto una misión encomendada
por el Señor. ¿Qué sería de la vida del
religioso, del sacerdote sin una
misión? Por eso “la misión no es un
elemento extrínseco o yuxtapuesto a la
consagración, sino que constituye su
finalidad intrínseca y vital: la
consagración es para la misión”2.
Si me preguntan: ¿por qué ser
sacerdote, a estas alturas de la vida 2 Ibid., Numeral 24. p. 61.
tanto personal como religiosa?, puedo
decir, con mucha alegría, entusiasmo y
seguridad, que he recibido el mejor de
los regalos: mi vocación a servir, a
amar y a perseverar en Cristo Jesús el
Señor en este carisma somasco, del
cual me siento cada día más
identificado, orgulloso y
comprometido.
Ahora, mi mamá ya no me hace
“piñatas” porque está convencida que
el niño de ayer va a tener la mejor de
las fiestas: su entrega al Señor a través
del Orden Sacerdotal; una fiesta donde
los invitados somos todos y donde la
comida no se acaba, pues es “el
alimento que perdura para la vida
eterna”.
Que el Señor nos bendiga y siga
derramando su gracia sobre todos
aquellos que quieran seguirlo, y que
toda Ordenación Sacerdotal sea un
motivo para animar a muchos jóvenes
a entregar su vida por el único amor
que no falla, el amor de Cristo Jesús.
Hno. César Fernando Franco Núñez.
CRC.
28
…CARISMA SOMASCO CON
PERFUME DE MUJER …carisma somasco
con perfume de mujer
Un mensaje, un desafío
En la clausura del Concilio Vaticano II
el Papa Pablo VI dirigió un mensaje a
las mujeres del mundo entero.
“Llega la hora, ha llegado la hora en
que la vocación de la mujer se cumple
en plenitud, la hora en que la mujer
adquiere en el mundo una influencia,
un peso, un poder jamás alcanzado
hasta ahora.
Vosotras, las mujeres, tenéis siempre
como misión la guarda del hogar, el
amor a las fuentes de la vida, el
sentido de la cuna. Estáis presentes en
el misterio de la vida que comienza.
Consoláis en la partida de la muerte.
Nuestra técnica corre el riesgo de
convertirse en inhumana. Reconciliad
a los hombres con la vida. Y, sobre
todo, velad, os lo suplicamos, por el
porvenir de nuestra especie. Detened
la mano del hombre que en un
momento de locura intentase destruir
la civilización humana.
Mujeres, vosotras, que sabéis hacer la
verdad dulce, tierna, accesible,
dedicaos a hacer penetrar el espíritu
de este Concilio en las instituciones,
las escuelas, los hogares, y en la vida
de cada día. Mujeres del universo
todo, cristianas o no creyentes, a
quienes os está confiada la vida en este
momento tan grave de la historia, a
vosotras toca salvar la paz del
mundo”.
Después de 50 años, estas palabras no
han perdido nada de su verdad,
incisividad y profecía. Hoy, gracias a
Papa Francisco, se percibe una fuerte
exigencia por encontrar respuestas
concretas para este desafío. En varias
ocasiones el Papa ha manifestado la
necesidad de profundizar una teología
de la mujer, para definir mejor su lugar
y papel en la vida de la Iglesia y en el
mundo.
La insistencia del Papa
"Las cualidades de delicadeza,
peculiar sensibilidad y ternura,
de las cuales es rica el alma
femenina, representan no sólo
29
una fuerza real para las vidas de
las familias, sino una realidad
sin la cual la vocación humana
sería irrealizable".
“Quisiera subrayar como la
mujer tiene una sensibilidad
particular para las “cosas de
Dios”, sobre todo en ayudarnos
a comprender la misericordia, la
ternura y el amor que Dios nos
tiene. A mi me gusta pensar que
la Iglesia no es “el” Iglesia, es
“la” Iglesia. La Iglesia es mujer,
es madre, y esto es bello.
“En la Iglesia resulta importante
preguntarnos: cuál presencia
tiene la mujer? Sufro, y os digo
la verdad, cuando veo en la
Iglesia o en algunas instituciones
eclesiales que el papel de la
mujer queda relegado a un papel
de servidumbre y no de servicio.
Veo mujeres que hacen cosas de
servidumbre y no de servicio”.
"Las mujeres están formulando
cuestiones profundas que
debemos afrontar. La Iglesia no
puede ser ella misma sin la
mujer y el papel que esta
desempeña. La mujer es
imprescindible para la Iglesia.
María, una mujer, es más
importante que los obispos. Digo
esto porque no hay que
confundir la función con la
dignidad".
"Es indispensable la aportación
de la mujer en la sociedad, en
particular con su sensibilidad e
intuición hacia el otro, el débil,
el indefenso".
“Creo que no hemos hecho aún
una profunda teología en la
Iglesia. Sólo un poco de eso, un
poco de aquello, lee la lectura,
mujeres monaguillo, es la
presidenta de Cáritas... Pero hay
más, hay que hacer una
profunda teología de la mujer.
Esto es lo que pienso”.
La mujer en el Evangelio
Un camino concreto para comenzar a
“hacer una profunda teología de la
mujer”, según la insistencia del Papa,
lo podemos hacer desde ya, a partir de
un enfoque y una sensibilidad distinta
cuando leemos el Evangelio.
Evidentemente supone un cambio de
mentalidad y de perspectiva, como
modalidad para captar el femenino del
Evangelio. Tiene que ver con la
constante mirada de Jesús y su acción
que pone siempre al centro lo que es
dejado al margen, no atendido o
insignificante a los ojos de muchos.
30
- Será una mujer, la sencilla
muchacha de Nazareth, la
protagonista del sueño de Dios,
con su “sí”.
- En Betania, en la
casa de Simón el
leproso, Jesús
confía a una mujer
el sentido de su
muerte.
- Será a los pies de la
Cruz donde se
descubre la
profundidad de la
misión eclesial y se
recupera en toda su
plenitud el aspecto
femenino del
Evangelio (“Mujer
ahí está tu hijo”).
- Más tarde, será la
voz de una mujer
que anunciará a Cristo
resucitado.
Lo femenino del carisma somasco
No podemos más cerrar los ojos frente
a la realidad actual de la situación de la
mujer en el mundo. Los religiosos y
los laicos somascos que operan en las
distintas comunidades y programas
educativos en los cinco continentes, lo
pueden testimoniar con cifras e
historias concretas.
El carisma de nuestro Fundador,
declarado “patrono universal de los
huérfanos y de la juventud
desamparada”, nos empuja todavía hoy
con fuerza a
confrontarnos con
situaciones que van
en contra de la lógica
del Evangelio, los
Derechos Humanos,
el respeto y el
cuidado que merece
todo ser humano.
La ONU señala que
las mujeres
representan el grupo
más marginado y
discriminado. La
violencia en contra de
ellas asume distintas
formas, que
conocemos: abandono, prostitución
obligada, violaciones en los conflictos
armados, trata de seres humanos,
esclavitud sexual y graves violencias
generalizadas.
Papa Francisco, en la Exhortación
apostólica Evangelii gaudium (103),
manifiesta su vivo y profundo deseo:
“La Iglesia reconoce el indispensable
aporte de la mujer en la sociedad, con
una sensibilidad, una intuición y
algunas capacidades peculiares que
generalmente son más propias de las
mujeres que de los hombres. Hay
todavía necesidad de ampliar los
31
espacios para una presencia femenina
más incisiva en la Iglesia. Porque el
genio femenino es necesario en todas
las expresiones de la vida social”.
Acogiendo la invitación del Papa,
queremos afirmar que: “hay todavía
necesidad de ampliar los espacios
para una presencia femenina más
incisiva en la familia somasca”,
nacida del don del Espíritu concedido a
san Jerónimo, laico y animadores de
laicos.
San Jerónimo se dejó ayudar por la
presencia femenina para llevar a
cumplimiento su llamada hacia un
inmenso proyecto de caridad (“vivir y
morir con ellos”).
Reflexionar sobre el aspecto
“femenino” del carisma de san
Jerónimo y el papel de la mujer en él,
lleva seguramente a su entendimiento
más profundo, rico y fecundo y a un
enlace más concreto con la vida y el
compromiso cristiano.
Todo carisma no es un mero vestido
elaborado que se recibe del pasado y
“...hay de quién lo toca o trata de
modificarlo”, por el contrario todo
carisma es algo vivo que, en
cumplimiento sustancial del regalo
recibido por el Espíritu, tiene que
necesariamente inculturarse y
enriquecerse siempre más en sintonía
con la historia que camina y en la
escucha atenta de los signos de los
tiempos.
Todo carisma, don para la Iglesia
universal, tiene “sensibilidades”
masculinas y femeninas. Un carisma
dividido o faltante de una de las dos
partes resulta incompleto. En
particular, el carisma de san Jerónimo
tiene muchos elementos que tienen que
ver con la mujer (...guarda del hogar,
amor a las fuentes de la vida, sentido
de la cuna, sensibilidad maternal,
acogida, cuidado, etc.).
Papa Benedicto, en ocasión del Jubileo
somasco, así escribe al Prepósito
general refiriéndose al Fundador: “En
él el amor superaba el ingenio, y como
era un amor que brotaba de la misma
caridad de Dios, estaba lleno de
paciencia y de comprensión: vigilante,
tierno y dispuesto al sacrificio como el
amor de una madre” (20 julio 2011).
Es también el tema (“Avrò cura di te”
- Te tendré cuidado) que será abordado
y profundizado en el 7° Convenio del
Laicado Somasco (Albano Laziale -
Roma, 29-31 de agosto 2014).
Una cita preciosa que ciertamente nos
ayudará a todos, religiosos y laicos
somascos, a tomar conciencia que
“llega la hora... ha llegado la hora”.
p. Mario Ronchetti
32
¿CUÁL ES MI PRIORIDAD?
“Dios sigue siendo la gran cuestión
de nuestro tiempo”, o Él inicia a ser
el gran olvidado, “aun sabiendo que
para Dios no hay fronteras”.
Entiéndase que la dificultad no es
Dios, sino la inmediatez nuestra; no
permitamos que el agua se siga
desperdiciando oh ¿hasta cuándo
seré permisivo? Hasta que me
concientice que soy parte de la
aventura de Dios, que mi
compromiso es ahora y urgente. El
Somasco consagrado “no es el que
ha encontrado plácidamente a Dios y
dedica su vida a disfrutarlo; sino el
que, diariamente, sale a buscarlo
para compartirlo en las veredas de la
vida, en los caminos, siempre
nuevos, que van configurando la
realidad de la revelación”3.
Aunque no haya iniciado, hace 50
años, este fascinante camino que
propuso y recorrió san Jerónimo
Emiliani en sus seguidores,
diciéndoles: “Seguid el camino del
crucificado despreciando el mundo y 3GONZALO, Diez, Luis A., cmf., “De la abundancia
del corazón habla la boca”, Vida religiosa Vol. 114 (2014), Madrid, p. 7
sirviendo a los pobres”, me encontré
con esta vía, y he aprendido que el
somasco debe saber que, el “salir
hacia los demás para llegar a las
periferias humanas, no implica
correr hacia el mundo y sin sentido;
muchas veces, es más bien detener
el paso, dejar de lado la ansiedad
para mirar a los ojos y escuchar, o
renunciar a las urgencias para
acompañar al que se quedó al
costado del camino”4.
No son, 50 años inútiles; son 50
años de mucho testimonio, de
muchos frutos de servicio y entrega,
de muchas caídas y y también de
gratos triunfos. Es de feliz memoria
recordar y agradecer a todos
nuestros cohermanos italianos que,
dejando su amada patria, llegaron a
la médula de nuestra querida tierra.
El 17 de octubre de 1964, los
primeros padres somascos italianos
hacen presencia en Colombia,
4 SS. FRANCISCO, “Exhortación apostólica Evangelii
Gaudium”, Instituto Misionero Hijas de San Pablo, Bogotá, p. 47.
33
oliendo sus aires, tocando, palpando
y recorriendo sus tierras.
El carisma somasco, en la Provincia
Andina, debe arder con más fuerza;
es un nuevo “aggiornamento”
(amanecer), que debe despertar
visión y proyección, para prestar un
mejor servicio a una población que
en busca de un futuro más digno, es
cada vez más exigente en normas y
derechos. Por consiguiente, lo
importante no es la celebración de
los 50 años, sino los frutos que
deben brotar y ser verosímiles de la
celebración, en sí misma; pues,
“cuando preguntamos la hora, no
queremos saber cómo se construyen
los relojes”5.
La tarde del 24 de octubre de 1964,
los padres Bernardo Vanossi,
Domingo Framarín y Bruno
Schiavón, procedentes de Italia,
animados con un gran espíritu de
humildad y de obediencia, celebran
su primer encuentro con los
feligreses del Barrio Rionegro-
Bogotá. En 1967, la Comunidad
Somasca abre un seminario menor
en Zetaquira (Boyacá).
En 1972, contemporáneamente se
dan dos respuestas precisas a la 5 LICHTENBERG, Georg, “Aforismos”, Breviarios del
fondo de cultura, México, 2004, p. 189.
problemática de desamor de tantos
niños. En enero de este año, en
Bogotá se construye el Centro San
Jerónimo Miani y, en diciembre del
mismo año, en Tunja, acogiendo la
invitación del señor Arzobispo,
Monseñor Augusto Trujillo Arango,
se da vida a una Institución en favor
de la juventud, transformando “El
Oratorio Festivo”, de los padres
Salesianos en el “Centro Juvenil
Emiliani”.
En 1977, la Comunidad llega a la
Parroquia de Santa Inés, ubicada
al norte de la ciudad de
Bucaramanga, un sector “de extrema
pobreza”; allí se da inicio al
“Centro Juvenil Amanecer”, lugar
de capacitación para los jóvenes.
En 1983, la comunidad camina
hacia tierras antioqueñas iniciando
una labor educativa en el “Jesús
Infante” en Rionegro. En 1986,
nace el internado “Villa San
34
Jerónimo” en la vereda El Tablazo,
con la colaboración de don Mario
Toro y Margarita Henao.
En 1988, en Pinchote (San Gil) se
da vida al aspirantado Somasco
“Lugar de Paz”.
En 1994, después de muchas
solicitudes, se asume el reto de
animar y dirigir en la ciudad de
Pasto (Nariño) el Instituto de
Protección Especial “Santo
Ángel”, una cárcel para menores
infractores y contraventores de la
ley. Esta obra se cerró en el 2005.
En 1997, la Comunidad Somasca
inicia su presencia en el vecino país
de Ecuador, animando la vida
parroquial de la Isla Trinitaria; en
el 2002 se asume la dirección del
“El Cenáculo”, un centro educativo
para la población de Guayaquil y la
animación de la “Parroquia Madre
de los Huérfanos”.
El 21 de enero de 2010, la
comunidad da inicio a una nueva
obra al sur de Bogotá, en la
localidad de Ciudad Bolívar, barrio
el Paraíso, llegando a la Parroquia
san Pedro Julián Eymard, integrada
en gran mayoría, por familias
desplazadas.
Sí, “Eudemonía y areté” (felicidad y
virtud), principio que buscaron los
griegos para la salud del alma;
principio que falta en nuestra
actualidad, principio que se desvanece
en la frialdad y la angustia del devenir
ajetreado del consumismo y la
explotación laboral de nuestra
sociedad. “La batalla más contundente
del hombre no es contra los demás
hombres, sino contra la tiranía de sus
sentidos que lo dirigen hacia un mundo
de ilusiones engañosas. “No hay mayor
señorío que el señorío de sí mismo, de
las propias pasiones, porque es en
últimas, el triunfo moral de la voluntad
sobre los instintos”, dijo Baltasar
Gracián al interpretar la intuición
socrática. Dentro de un orden de
prioridades, quien no puede vivir a
gusto consigo mismo ¿Cómo puede
vivir con los demás?”6.
¿Cuál es mi prioridad, cuando nuestro
santo Fundador se desgarraba diciendo
“nuestro fin es Dios o cuando Jesús me
interpela, a actuar ante las realidades
mediatas?
“En esto conocerán todos que son Mis
discípulos, si se tienen amor los unos a
los otros” (Jn 13, 35).
Hno. José Montaña.
6 REYES, Posada, Mauricio, “Sócrates y sus
predecesores”, Colección profesores N° 60, Pontificia Universidad Javeriana, Grupo Editorial Ibañez, Bogotá, 2013, p. 43.
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PASCUA SOMASCA
CELEBREMOS LA PASCUA
CON EL CORAZÓN DEL DULCÍSIMO JESÚS
Y DE SAN JERÓNIMO, NUESTRO PADRE Celebremos con fruto los 50 años de
presencia somasca en Colombia,
elevando dos miradas: una hacia el
pasado y la otra hacia el futuro.
Miremos hacia el pasado con
agradecimiento.
“El Señor ha estado grande con nosotros
y estamos alegres” (Sal 126).
Le agradecemos al Señor todas las
bendiciones que ha derramado sobre cada
uno de los religiosos quienes, con su vida
generosa, nos han dejado ejemplos de
sacrificios, de entusiasmo, de amor a
Cristo, a la Virgen, Madre de los
huérfanos, a san Jerónimo, nuestro Padre,
a la Iglesia, representada, sobre todo, por
el rostro de tantos niños y jóvenes
marcados por el dolor.
Miremos hacia el futuro con optimismo.
“He aquí que hago nuevas todas las
cosas” (Ap 21).
Cada Pascua
es la ocasión
para
descubrir
que el Señor
nos está
indicando nuevos caminos, que la Virgen
María nos está llevando de la mano así
como acompañó a nuestro Padre
Jerónimo, el cual nos invita a salir al
encuentro de los que sufren con amor
compasivo y misericordioso.
Los religiosos Somascos en Colombia y
en Ecuador hemos de celebrar la Pascua
dejándonos guiar por Jesús. Él nos abre
nuevos caminos, invitándonos a
reconocer que, cada día, es una nueva
oportunidad para triunfar y hacer de
nuestra vida un éxito. El religioso
somasco guarda siempre un sano
optimismo en su corazón.
Sea nuestro propósito renovar ese empuje
de amor y sacrificio que fue propio de
nuestro santo Fundador.
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Queremos ser religiosos Somascos,
que recorren los caminos
de Colombia y de Ecuador,
con un corazón grande
para amar a todo niño y joven;
con los brazos abiertos
para abrazar a quienes nadie socorre;
con los ojos luminosos
para reconocer el rostro de Cristo
en cada hermano o hermana;
con los oídos atentos
para escuchar el grito de quienes sufren,
o han perdido la esperanza.
Comprometámonos a irradiar el carisma somasco
en Colombia y en Ecuador,
al estilo de nuestro Padre Jerónimo.
Que nuestra vida somasca
se convierta en una Pascua siempre nueva. PAZ
Que Jesús Resucitado acoja en
su Paraíso al p. Pietro
Righetto, de 79 años de edad,
fallecido en Somasca–Italia, el
14 de febrero de 2014. Fue un
gran catequista.
El 01 de febrero, de 2014 en la
parroquia de Zapatoca-
Santander, el Obispo de la
diócesis de Socorro y San Gil,
Mons. Carlos German Mesa,
ordena presbítero a nuestro
cohermano Juan Pablo Pelayo
Rueda. ¡Le deseamos ser un
verdadero apóstol de Jesús!
En la Basílica san Juan de Girón
de Bucaramanga, el señor
Arzobispo Ismael Rueda Sierra
ordena presbítero a nuestro
cohermano César Fernando
Franco Núñez.
¡Que Jesús sea su ideal!
“Les pido que
garantice que la
riqueza sirva a la
humanidad y no que la
gobierne”
(Papa Francisco)
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CRONOGRAMA DE ANIMACIÓN PROVINCIAL AÑO 2014
FECHA ACTIVIDAD RESPONSABLE LUGAR
01 de febrero Ordenación presbiteral de Juan
Pablo Pelayo.
Comunidad de
Lugar de Paz
Zapatoca-Santander
02 al 22 de feb Elaboración de proyectos,
balances y presupuestos.
Comunidades
locales
Comunidades locales
08 de febrero Solemnidad de san Jerónimo
Emiliani.
Comunidades
locales
Comunidades locales
22 al 28 de
febrero
Revisión y retroalimentación de
los proyectos, balances y
presupuestos.
Coordinadores de
área
Sedes de los
coordinadores
07 y 08 de marzo Reunión del Consejo
provincial.
Consejo provincial Curia provincial-
Bogotá
12 al 15 de
marzo
Encuentro fraterno p. Provincial C. Villa San
Jerónimo
22 de marzo Ordenación presbiteral de
César Fernando Franco.
Comunidad de
Bucaramanga
Catedral de Girón
27 al 30 de
marzo
Encuentro fraterno. p. Provincial C. Centro San
Jerónimo-Bogotá
04 al 06 de abril Encuentro de superiores. Padres superiores
locales
CRC- Bogotá
14 al 15 de abril Encuentro fraterno. p. Provincial C. Altos de San
Jerónimo
24 al 27 de abril Encuentro fraterno. p. Provincial C. Centro Juvenil
Emiliani
27 de abril Día natalacio de la
Congregación.
Padres Superiores Comunidades locales
28 al 29 de abril Encuentro fraterno. p. Provincial C. Lugar de Paz-
Pinchote
01 al 04 de mayo Congreso sobre la vida
religiosa.
Coordinador de La
formación
CRC- Bogotá
05 de mayo Reunión del equipo CIS. Coord.
Instituciones
Centro San Jerónimo
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15 al 18 de mayo Encuentro fraterno. p. Provincial C. Parroquia de
Guadalupe
22 al 25 de mayo Encuentro fraterno. p. Provincial Comunidad de
Bucaramanga
07 al 15 de junio Encuentro fraterno. p. Provincial Cenáculo e Isla
Trinitaria
23 al 28 de junio Retiros grupo I (menores de 45
años).
p. Provincial Por definir
30 de junio al 04
de julio
Retiros grupo II (mayores de 45
años).
p. Provincial Por definir
05 de julio Encuentro con los superiores
locales.
p. Provincial Lugar por definir
10 al 13 de julio Encuentro para equipos
interdisciplinarios por áreas.
Coordinador de
Instituciones
Lugar por definir
según estrategia
01 de agosto Inicio de la visita canónica. Curia General Comunidades locales
01 de septiembre Inicia mes mariano somasco y
actividades especiales de
celebración de los 50 años.
Comunidades
locales
Comunidades locales
27 de septiembre Fiesta de María Madre de los
huérfanos.
Comunidades
locales
Comunidades locales
05 de octubre Eucaristía de apertura del mes
de celebración de los 50 años a
nivel provincial.
p. Provincial Altos de San
Jerónimo
05 al 11 de
octubre
Olimpiadas somascas. Estudiantado y
amigos de san
Jerónimo
Bogotá
19 al 23 de
octubre
Semana de reflexión somasca
por áreas.
Coordinadores de
área
Varias sedes por
definir
24 de octubre Bodas de oro en Colombia. Consejo
Provincial
Parroquia de
Guadalupe
25 de octubre Encuentro con los familiares de
los religiosos.
p. Provincial Centro San Jerónimo
26 de octubre Encuentro con ex somascos y
exalumnos.
Consejo
Provincial
Lugares por definir
13 al 18 de nov. Paseo provincial. p. Provincial Lugar por definir
28 de noviembre Asamblea general de la
provincia.
Consejo provincial Lugar por definir
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Diciembre 2014
y enero 2015
Inicia primer ciclo de visita a
las casas de las familias de los
religiosos de la Provincia.
p. Provincial y
coordinador de la
formación.
Ciudades de los
hnos. en formación:
Cúcuta, Güicán,
Tarqui, Charalá y La
Vega.
Viracachá (p.
Numael), Tame (p.
Pedro), Duitama (p.
Simón), Aquitania
(hno. José) La Paz
(p. Hermelindo) y
Santa Rita (hno.
Leonel).
NOTAS:
1. En el transcurso del año pueden aparecer algunas actividades
de encuentros o visitas a las comunidades que son
competencias de los coordinadores de área (Parroquias,
Formación, Laicos y administración).
2. Al inicio de cada mes, se enviará la reflexión comunitaria para
el capítulo local de la comunidad y los encuentros de los
equipos interdisciplinarios.
3. Tener presente el recordatorio del 8 y 27 de cada mes,
utilizando el material que nos prepara el padre Alvise Zago en
su rol de animador espiritual de la Provincia.
4. Para hacer otro tipo de presencia esporádica por eventos o
actividades en las comunidades, basta que nos comuniquemos
y, si el cronograma lo permite, no hay problema.
5. El segundo semestre prácticamente está abordado por la visita
canónica y la celebración de los 50 años de presencia del
Carisma Somasco en Colombia, por eso no hay programación
de encuentros fraternos en las comunidades locales.
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