8/18/2019 Luz Segunda Parte

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-"¡No!"- dijo él, percibiendo su mala intención, -"No te daré la luz, hasta tanto no

esté afuera con mis dos pies sobre el suelo."-

La bruja se molestó, soltó la cuerda y se marchó. l pobre soldado cayó sobre el

hmedo fondo, sin herirse, y la luz azul seu#a iluminando, pero, $%e &ué leser'ir#a eso( )io él &ue no podr#a escapar de la muerte. *e sentó por un rato muy

aconojado, y de pronto e+ploró su bolsillo y encontró su pipa de tabaco, &ue

an estaba a medio llenar.

-"ste ser mi ltimo placer."- pensó.

La sacó, la encendió con la luz azul y comenzó a fumarla. uando el humo hab#a

circulado por toda la ca'erna, sbitamente apareció un duende nero parado

frente a él, &ue le dijo

-"$/ &ue órdenes teno &ue darte("- replicó el soldado, bastante confundido.

-"$/ &ue órdenes teno &ue darte("- replicó el soldado, bastante confundido.

-"/o debo hacer cual&uier cosa &ue me pidas"- dijo el hombrecito.

-"0ien"- dijo el soldado, -"en primer luar, scame de este pozo."

l hombrecito lo tomó de la mano y lo lle'ó por un pasaje subterrneo, pero nool'idó de lle'arse la luz azul consio. n el camino, el duende le mostró los

tesoros &ue la bruja hab#a colectado y escondido all#, y el soldado tomó tanto oro

como pod#a carar. uando llearon arriba, él le dijo al hombrecito

-")e ahora y atas a la bruja, y la lle'as ante la justicia."-

n unos momentos, pasó la bruja, tan rpido como el 'iento, dando escalofriantes

ritos como un ato sal'aje, e inmediatamente reapareció el hombrecito.

-"1odo est hecho"- dijo él, -"y la bruja ya ha sido juzada. $2ué ms se te

ofrece, mi se3or("-

-"4or ahora, nada ms."- contestó el soldado, -"%ebes retornar a tu hoar, pero

mantente siempre disponible a mi alcance, por si te con'oco."-

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-"No necesitas ms &ue encender tu pipa con la luz azul, y yo apareceré ante ti de

nue'o."- dijo el duende, y desapareció de su 'ista.

l soldado retornó al pueblo de donde hab#a 'enido. 5ue a la mejor posada,

ordenó los mejores 'estidos, y pidió al propietario &ue le alistara una habitacióntan preciosa como fuera posible. uando ya estu'o lista y el soldado hab#a

tomado posesión de ella, in'ocó al pe&ue3o nerito y le dijo

-"6ira, yo ser'# muy fielmente a mi rey, pero el me despreció, y me dejó

hambriento, y ahora es mi turno de tomar mi acción."-

-"$2ué debo hacer("- preuntó el hombrecito.