RELATOS SOBRE

LOSSENTIDOS

5.A

2012-13

La Fideua Negra

Hace dos años fui con mi ama y mi aita a Gandia, en la costa de Valencia. Fuimos a la playa y a la piscina y los pasamos muy bien.Un día paseando por la calle, me fijé en un matrimonio que estaba comiendo en un restaurante y estaba lleno de gente. Ese matrimonio estaba comiendo una cosa negra en el plato y le pregunté a mi ama:-¿Qué eso que comen?-Eso es fidegua negra- me contestó mi ama. Yo dije que qué asco, aunque nunca lo había probado. Al día siguiente fuimos a ese restaurante a comer.Había mucha variedad para elegir y al final me sacaron unos espaguetis, un filete con patatas fritas y de postre un helado de strachatela. Mi ama y mi aita pidieron fideua y me dijeron que lo probara.Yo dije que no, pero mi aita me contestó:-Pruébalo, que te va gustar. Yo no quería probarlo, entonces cerré los ojos y abrí la boca y me metieron el tenedor en la boca y dije que qué bueno estaba. Al día siguiente les dije a mi ama a ver si podíamos ir al restaurante, quería comer fideua y todos nos empezamos a reír, ja, ja, ja.

Autora: LIERNI AGUADO, 5.A

LAS LENTEJAS ASQUEROSASUn día de verano, mi madre y yo estábamos solos en casa comiendo. Tenía unos seis años y comía muy mal, como ahora. Me tocaron lentejas para comer que entonces, como ahora, no me gustaban.

No las quería comer, porque tenían mucha salsa que estaba muy mala. Eran mejores las del jantoki, aunque no me gusten. Mi madre me dijo:-Pues si no las comes, para merendar.Yo no quería porque no me las iba a comer de ninguna manera. Quería vomitar, no las podía comer y me daban arcadas. Mi madre estaba de los nervios, estaba muy enfadada conmigo. Tal vez sería mi comida menos preferida y mi madre le decía a la gente cuando hablábamos de la comida que era mi comida preferida.

Al final me las comí , pero para cenar. Ahora comemos otras lentejas mejores que me gustan más que aquellas, pero aún así me siguen sin gustar. A veces me suele pasar con algo que no me gusta, que estoy dos horas comiendo.

Autor:Zuhaitz Arribas

El zumo acidulantado

El otro día, en el bar en el que trabaja mi madre estábamos hablando de lo que pasó a la una del mediodía.

El novio de mi madre había comprado un zumo de pomelo rosa, quería probarlo ahí mismo, pero dijo que no, que era para su trabajo. Parecía rico por fuera, pero cuando lo probé estaba tan malo que casi vomité.

Lo que pasaba es que mi madre lo había probado antes y me decía que estaba rico para engañarme.

El trece a la noche estaba haciendo experimentos y como no me gustaba el zumo hice unos experimentos con el zumo. El primer experimento que hice fue el de la coca -cola con el zumo de pomelo rosa. El segundo que hice fue el de el zumo con leche y coca-cola con azúcar.Todo con tal de no probar el zumo.

Autor : Enzo 5.A

LA TARTA DE FRESA

Un día de sábado 6 de enero era el cumpleaños de mi hermana pequeña, cumplía dos años y yo estaba contenta porque pensaba que los 30€ que me dio mi padre eran para mí, pero resultó que los 30 € eran para comprar el regalo y la tarta de mi hermana. Fuimos al Boulebard con mi tía y mi hermana. Mi madre se quedó con mi hermana pequeña, la cual se quedó llorando porque quería ir con nosotros. Le compré ropa bonita y juguetes pero faltaba la tarta. Fui a una tienda de tartas que era muy famosa. Y había una tarta de fresa y el nombre era:

"Cómelo y te acordarás del pasado"Y yo la compré porque el nombre me gustó. Molaba.El cumpleaños lo celebramos y a mi hermana le gustaron los regalos y la tarta . Y mi hermana me dijo:

– ¡¡¡Gracias por todo , este día nunca lo olvidaré. !!!¡¡¡ Es el mejor cumpleaños del mundo !!!

AUTORA: WISSAL 5.A

LA SALSA FRANCESA

Esta historia me pasó en un día de fiesta. Estaba en un restaurante francés pidiendo una hamburguesa y vi una salsa muy rara, el color era el de la mostaza y parecía que estaba rica.Cuando ya había terminado de pedir la hamburguesa me senté en una mesa al lado de la ventana y probé la hamburguesa. Un sabor extraño me recorrió todo el estómago y de repente me entraron ganas de vomitar. Mi familia dijo:- Esta salsa esta malísima.Toda mi familia quitó la salsa de las hamburguesas.Yo también le quité la salsa y con un dolor de tripa tremendo me comí la hamburguesa y terminé de comer. Yo dije para mis adentros que como no estuviese bueno el postre iba a vomitar. Por fin me trajeron el postre que tenía buena pinta. El postre era un helado de vainilla con un Kit-Kat de adorno. Me lo comí y se me pasaron las ganas de vomitar y también se me pasó el dolor de tripa. Cada vez que le daba una chupada al helado mis papilas gustativas disfrutaban del sabor dulce y rico.Al final me di un paseo por Francia y al terminar ya eran las nueve de la noche y me fui a casa a cenar. La comida estaba tan rica que no me podía resistir y me comí toda la pizza. Al final era la hora de irme a la cama y me dormí con los distintos sabores en la boca.

Autor : Mikel Cuerda 5.A

Haciendo queso (en el caserío) Un desagradable día de abril fui con mis amigos a un caserío a hacer queso. Me acuerdo de que cuando toqué la leche, mis amigos y yo estábamos hablando y de repente cuando nuestras madres se fueron, metimos la mano en la riquísima leche.Entoces mis amigos y yo dijimos:-¡ Qué asco!Porque estaba demasiado rugosa y encima la leche rugosa se nos pegaba a los brazos, por eso dijimos eso. Cuando nuestras queridas madres venían rápidamente fuimos al lavabo a lavarnos las manos porque si nuestras madres nos pillaban... pero cuando abrieron la puerta, todavía no nos habíamos lavado nuestras manos del todo y entoces nos dijeron:- ¿Qué habéis hecho chicos?Y les dijimos a nuestras queridas madres:- Es una larga historia...¡ Seguro que no lo entenderéis, sois tan cabezotas!Y nuestros ojos lloraban pero no de tristeza sino de gracia. Al final tuvimos que confesar la verdad y después de la bronca que nos echaron que fue bastante grande, nuestras diabólicas madres, fuimos a donde las ovejas y en ese momento lloramos de alegria, porque vimos nacer un cordero chuquitín y era muy mono y también muy gracioso. Pero eso...¡ ES OTRA HISTORIA!

Autora: Haizea 5.A

Mi día de suerte

Yo os voy a contar el relato del gusto. En un centro comercial hacía mucho calor. Mi hermano no podía andar por el suelo.

Había una prueba del gusto. Era probar diez cosas y saber qué era. Yo nunca lo había hecho y no quería hacerlo porque me daba miedo lo que me iban a poner. Mi madre me dijo:- Si concursas te compro lo que tú quieras.Yo concursé y quedé el quinto. Los otros adivinaron casi todas. Yo sólo adiviné cinco. Me pareció muy difícil. Después compramos cosas y nos fuimos a otro sitio a comprar lo que yo quería. Me compré un coche teledidigido. Es el más potente y el que más corre de mi casa. Cuando me llaman siempre siempre bajo ese coche.

Yo también quería una moto teledidigida, pero es muy difícil controlarla.

Autor: UNAI 5.A

De vacaciones en la playa

Un día de vacaciones de verano me fui a Ibiza con mi madre y mi hermano.

Cuando estábamos en el hotel yo dije:- Nos vamos a la playa ¿por favor?Ymi madre contestó:- Vale, nos iremos después de comer.Entonces después de comer nos cambiamos, nos pusimos crema de sol y nos pusimos las chanclas y fuimos a la playa. Cuando llegamos me quité las chanclas y empecé a quemarme los pies. Mi hermano también se quitó las chanclas y empezó a quemarse. La verdad es que no pensamos en ponernos las chanclas de nuevo.

Nos dirigimos al agua lo antes que pudimos pero por el camino al agua había gente, sombrillas, toallas y demás. Mientras esquibábamos las cosas decíamos:-¡¡¡Me quemo los pies!!!Mientras dábamos botes para no quemarnos.

Llegamos al agua y nos alibiamos pero después nos helamos los pies. Mientras nuestra madre se reía un montón,

Autor: Jon Ander 5.A

EL MISTERIO

Un día de verano en mi pueblo con mis primos íbamos a jugar al misterio. Empecé quedando, me pusieron una venda para que no viera nada, me dieron algo suave y adiviné lo que era, era mi perra. Luego le tocó a mi primo y le dimos una piedra.

Era la hora de comer, la una y media, nos tocaba comer una ensalada, la tuve que remover para que la salsa se mezcle por toda la lechuga. Acabé hacia las dos y media, luego queríamos jugar al mismo juego: El misterio. A las tres llegó mi prima y le íbamos a enseñar nuestro juego llamado El misterio, nos metimos en nuestra caseta con la perra y me la empecé quedándola de nuevo, y me escondieron un palo por la hierba para ver si lo encontraba. Tocaba la hierba y estaba muy suave y mojada. Cuando les dije a mis primos que viniesen a tocar la hierba dijo una de mis primas:

- ¿Cómo puede estar la hierba mojada con el calor que hace?

Mi abuelo estaba en la piscina duchándose y mojando toda la hierba y que mi primo se dio un susto pensando que los ovnis le estaban echando agua y todos nos empezamos a reírnos y luego nos metimos al agua.

AUTOR: GORKA FERNANDEZ 5.A

LA FUERZA DEL ANILLO

El 1 de mayo de 2013 estaba en el pueblo con mi madre, mi padre y mi hermano. Hacía un buen día muy bueno y salí a la calle con mi hermano.

Estábamos jugando al fútbol y se me escapó el balón. Y cuando fui a por él oí una cosa que me quede de piedra. Le oí contar a un niño que debajo de una piedra encontró un anillo de diamantes mágico. También decía que el que se pusiera el anillo le daba una fuerza muy grande como la de Hulk.Le dije a mi madre:- Ama, he oído a un niño que un anillo de diamantes te daba una fuerza muy grande.- ¡Cómete el plato de lentejas, que eso sí que te da fuerzas!

Al día siguiente fuimos mi hermano y yo a buscar el anillo y miramos por todas partes, pero no aparecía. Al final del día nos íbamos a ir a casa y lo encontramos debajo de un árbol y nos lo llevamos a casa, pero no nos lo pusimos por si acaso.

Autor: Mikel García 5.A

LA TARTA DE TRES CHOCOLATES

En mi cunple, 23 de Mayo ( estaba en Barrutia y no en Arantzabela ), llevé muchas cosas hasta la tarde.

Ala tarde fue ese momento tan feliz para mí. Llegó Shara y estuvimos viendo la tele, jugando y esas cosas. Ella me contó leyendas, me lo pasé yupi. Jugamos a papás y a mamás. No comía nada, yo sí que comía. Vino Javi, mi mejor amigo, tambien Shara era mi mejor amiga. Javi me regaló un avión y Shara un coche teleredirigido.

Vino la madrina con la tarta. Me tuve que vendar los ojos. No podía verla. ¿De qué era? Al final lo descubrí. Era de tres chocolates distintos. ¡Qué feliz estuve !

Autor: Jowi 5.A

EL AGUA DEL PERRO

Era un día de verano y estábamos en Berganzo, yo era pequeña. Estaba en casa de mi prima segunda, llamada Malen. Su casa no es muy grande, bueno suficiente para cuatro personas.Yo estaba con mi hermana y mi prima jugando con unos correpasillos tirándonos por una cuesta que tienen para ir al garaje. Me entraron ganas de beber agua pero tenía vergüenza de pedirle a mi tía un vaso de agua, entonces me aguante. De repente Malen cogió unos globos de agua y fue a llenarlos a una fuente que tienen en el jardín. Al lado de la fuente vi un cubo de agua. Como no llegaba a la fuente bebí agua del cubo de al lado de la fuente. Mientras bebía agua vi que mi madre entraba por la puerta del jardín. En cuanto mi madre me vio bebiendo agua de aquel cubo me dijo:-!Ayala, qué cerda eres! ¡Estas bebiendo agua del perro!Yo me avergoncé y entonces salió mi tía riéndose y mi ama y todos se reían y yo al final también me puse a reírme, después de escupir el agua de mi boca.

Autora: Ayala 5.A

Suerte gracias a la comida A mí me gusta cuando a veces entro en casa de mi abuela y un olorcillo llega a mi nariz. Eso quiere decir que vamos a comerun delicioso bizcocho que ha hecho ella. Cuando empiezo a comer mis macarrones de queso fundido, tomate y carne picada, quiere decir que voy a tener un buen díaporque siempre me suele pasar. Después de comerme los macarrones y beber mi zumo, espero un poco porque estoy muy llena. Después de unos veinte minutos voy a comerme un trozo del bizcocho o más de uno. Ese bizcocho me pareció el bizcocho más rico del mundo. Entonces me comí siete trozos un poco grandes. No sabía que fuera a ser tan rico, así que le pedí a mí abuela que hiciera más, y que la próxima vez que volviera a su casa que me hiciera otro sólo para mí. Pero me dijo que mis padres y mis tres hermanas también querían.Pero mientras me comía el bizcocho me dí cuenta de que era una de las cosas buenas que me iba a pasar, pero esa no es la única cosa buena que me suele pasar también hay muchas cosasmás.

AUTORA: AISHA MANA

UN DÍA EN LA PLAYA

Yo no quiero olvidar cuando en el verano fui a la playa con mi familia. Me acuerdo que cuando cogimos el coche, directamente nos fuimos a la playa .

Cuando me metí a la playa no podía entrar al agua porque estaba helada como el hielo, pero cojí carrerilla y me metí sin pensarlo, mientas mi familia se reía Mi madre me dijo:

– ¡Joe qué valiente , Ane! No sé cómo te has atrevido.Cuando noté un cosqilleo en la suela del pie, pegué un grito que creo que me oyó toda la playa. Mi madre preocupada me preguntó : - ¿Que te pasa?Yo le dije:

– Pásame las gafas de agua .Creo que me ha picado algo en la suela del pie pero aún no sé el qué.Nada sólo eran unas algas. Mi madre me pregunto a ver qué era .

– Solo eran unas algas.Después de acabar de comer me levanté y nada más levantarme me picó un cangrejo en el dedo gordo del pie. Se me hinchó como un tomate. Mi madre me dijo: - Hoy no es tu día. Yo le contesté: - Ya lo sé, vámonos antes de que me pique algo más.Y llegamos a s primos ahí pasamos el verano entero fue uno de los veranos mas marevillosos del mundo , siempre que llega el verano le digo a mi familia que nos vayamos a Peñiscola a casa de los primos con lo bien que me lo pasé podría pasar ahí mi vida y el verane entero . El mejor verano de toda mi vida. Lo mejor de todo fue estar todo el dia con mi maravillosa familia.

AUTORA: ANE 5.A

Mi primer chocolate caliente

Os voy a contar mi relato sobre el gusto. Era un día de invierno y estaba nevando. Estábamos en mi casa, yo haciendo deberes y mi madre estaba doblando la ropa.

Cuando mi madre acabó de doblar la ropa llamó a mi tía para tomar algo y asi mi prima y yo podríamos estar un rato jutas. Llegó la hora de irse a casa y le pregunté a mi madre, si se podía quedar mi prima a dormir. Ella me respondió que sí y mi prima se vino. Al dia siguiente nos despertamos muy pronto y nos pusimos a jugar a la consola. Una hora después se levantó mi madre y nos puso el desayuno. Nos puso un chocolate con churros. Como no sabía lo que era le pregunté a mi madre, y ella me dijo que era chocolate.

Cuando lo probé me encantó. Desde entonces mi madre me puso chocolate todos los inviernos. Hasta que nació mi hermana, que dejó de ponerme porque sino era mucho trabajo para ella.

MAIALEN MARTINEZ 5.A

UNA PEDORRETA

Un día de verano íbamos al Eroski. Al entrar mi hermana y yo vimos una pedorreta. Valía menos de un euro. Entonces pensé que era mi oportunidad. Le pregunté a mi madre a ver si podía comprarla y me dijo que sí.

Cuando íbamos en el coche mi hermana y yo nos íbamos divirtiendo. Estábamos en casa y yo seguía jugando con la pedorreta. La pedorreta era rara, estaba muy dura. Era tarde y me tenía que ir a la cama a dormir, entonces sin darme cuenta dejé la pedorreta en el sofá.

Al día siguiente me fui a el colegio. Cuando volví me senté en el sofá a ver la televisión pero me senté en el sofá equivocado y en el sitio equivocado. Justo me senté donde estaba la pedorreta. Se había puesto blandita. Encima llevaba vaqueros y con los vaqueros se pega mucho pero no se quita. Ni con agua, ni con jabón, ni con nada. Por mucho que quisiera no podía. Intenté redondear la pedorreta pero tanpoco se quitaba del sofá. Al final llegó la hora de volver al colegio y mi madre todabía no me había visto cómo tenía el pantalón. Al final como no se podía quitar me lo vio y me echó la bronca. Yo no podía volver a ponerme ese pantalón.

AUTOR: Joseba Merino 5.A

VISIÓN NOCTURNA

Se supone que este relato era para el olfato... pero parece que es mejor para la vista.Este día (mejor esta noche), era una noche cálida de agosto, pero si estás en mi pueblo... es una noche oscura y fría. (bueno, fresca)Aún así, a mí me gusta dar por el pueblo un paseo nocturno acompañada de quien sea y esta noche fui con mi tía, mi amona y el perrito de mi tía.En las afueras del pueblo hay una fila de casas, y ahí está la nuestra. Una noche dimos un paseo.Entonces, al volver del paseo, al pasar por ahí, vimos un gato que estaba tranquilamente sentado al pie de una cuesta que llevaba a la terriblemente oscura pieza.Dimos unos pasos y el gato escapó cuesta arriba. Como era blanco y brillante, el perrito lo vio subir y, como iba suelto, no pudo evitar subir a por él.Pasó un momento y vimos que no volvía, por mucho que gritásemos:-¡Vuelve, vuelve!Pero no funcionaba, así que yo discutí con mi tía y mi amona para subir a por él. No es que ganase la discusión, pero cogí la correa de emergencia que llevábamos y subí la cuesta. Era empinada y resbaladiza, pero pude subirla, tropezándome torpemente con la tierra suelta.Ahí arriba se veía un poco, pero no lo suficiente para ver a un perrito corriendo de aquí para allá.De repente, me dio un golpe de esperanza cuando vi al perrito dirigirse hacia mí. Pero luego se volvió a alejar.Pero se me ocurrió agacharme y ver a trasluz su cola, y funcionó: ¡Lo ví ! Estaba olisqueando como un sabueso con la cola hacia arriba.Lo llamé como pude, él vino y el resto fue como la seda.Con él atado, intenté bajar la cuesta con él a tirones, y para mi suerte, no me rompí nada.Pero me parece raro:¡subió a por un gato, se quedó olisqueando y luego no huyó de mí! ¡Maldito gato!!!!

AUTORA:Jone 5.A

UNA COMIDA EN EL GINOS

El 21 de abril de este año fue un día muy especial para mí. Ese día era el cumpleaños de mi madre y para celebrarlo, mis padres, mis hermanas y yo fuimos a mi restaurante favorito: el restaurante Ginos. Es un restaurante italiano que está situado en el centro comercial Boulevard.

Como no había mucha gente, nos dejaron elegir la mesa que queríamos y escogimos una redonda. Nos sentamos cómodamente y empezamos a ojear la carta. Casi todo me gustaba, pero yo tenía muy claro lo que quería desde el principio: piadina. La piadina es un pan plano elaborado con harina de trigo de origen italiano. Por dentro tenía bacon, champiñón y queso. Estaba bien acompañada porque llevaba dos salsas: una de tomate y la otra con un sabor agridulce cuyo componente principal era la mostaza. Entre las dos salsas esta última era mi preferida ( esto me pareze curioso porque el sabor amargo de la mostaza sola no me gusta ). No solo comí piadina. Ese día también comí pizza de la que habían pedido mi padre y mis hermanas. Además probé por segunda vez en mi vida el pan de ajo ( se trataban de grandes tostadas con aceite y sabor a ajo ). No recordaba que este pan me gustara tanto. Entre plato y plato nos sirvieron unas aceitunas en su salsa y fue lo único de toda la comida que no me gustó. Bueno, tampoco me gustó el tiempo que tuvimos que esperar hasta que nos trajeran los menús. Al final me trajeron el helado de yogur que había pedido de postre, decorado con una pequeña galleta. Mis hermanas habían pedido de chocolate y de fresa, pero ninguno superaba al mío: estaba delicioso.

Al despedirnos nos regalaron un globo y un chupa-chups a cada uno. Yo elegí el de Coca-cola. Todos estábamos satisfechos y contentos de haber ido, por lo que mis hermanas y yo continuamente repetiamos:

- ¡Queremos volver! , ¡Queremos volver!

AUTOR: IKER OCHOA DE RETANA 5.A

LAS BOMBAS FÉTIDASLAS BOMBAS FÉTIDAS

Cada vez que me acuerdo de lo que pasó aquel día me troncho de risa. Estábamos en verano, en el pueblo de mi abuela que se llama La Albuera (Badajoz). Era un día de mucho calor. Estaba con mi primo y unos amigos. Eran las fiestas de mi pueblo.Un día fuimos a unos chinos y compramos bombas fétidas y petardos. Luego fuimos a la casa de mi abuela que tiene una piscina enorme. Nos estábamos bañando y mi primo salió de la piscina porque se había picado. Se secó y se encerró en el baño, diciendo: - ¡Aquí no me podéis molestar, jajajajaja!Planeamos un plan y le tiramos bombas fétidas y se las pusimos en la ventanilla del baño, sin que él se diera cuenta. De repente dijo:- ¡Qué mal huele!Luego nos pusimos empujando la puerta y no podía salir.Al final, cuando se pasó el olor,, le dejamos salir.Todos le pedimos perdón y el también a nosotros, y seguimos jugando. Aunque yo me sigo llevando mal con él.

AINHIZE REÑONES 5.A

UN DÍA PROBANDO COSAS

Un día en mi pueblo a la hora de comer me dijieron mis padres:- Ixone, pruebra la tarta condesa.Es una tarta de nata con chocolate negro arriba y entre la nata.Cuando la probé repetí porque estaba buenísima. Y le dije a mi madre:- Mamá, tienes razón !está buenísima! - y mi madre me dijo:- Es que tienes que probar las cosas, si no sabes lo que te pierdes.Un día de pequeña fui al trabajo de mis padres y probé las aceitunas y me puse como loca porque están riquísimas y les pedía todo el rato más aceitunas hasta que me dijeron que no tenían más, pero era broma para que no como más aceitunas.En verano en mi pueblo como hace mucho calor me como un flan que está riquísimo.Cuando como cosas que me encantan pues repito dos o tres veces y dijo:- Mmmmmmmmmmmmmm !Qué rico, papá o mamá!Y me dicen:-¡Gracias, Ixone! Cómo se nota que lo hemos hecho nosotros ¿eh?

ESCRITORA : IXONE 5. A

LA GRAN MARISQUERÍA

Un día, mi madre, mi padre, sus amigos y amigas, los hijos de los amigos y yo nos fuimos a una gran marisquería por Haro.

En la marisquería, a la izquierda había una mesa de billar en un bar; a la derecha un escaparate para pedir lo que quisieras comer y su cantidad, con una plancha al lado para que te preparen la comida y atrás la cocina, en el medio sillas y mesas. Al fondo estaban las sillas y mesas con sus cubiertos, vasos y servilletas; todo muy elegante. Y, al pagar, antes de comer, mi padre dio dinero como si yo fuera un mayor y todos sus amigos decían:- ¡Cómo vas a pagar por el niño! ¡Que es un niño! ¡No comerá tanto!Pero mi padre dijo que si no lo cogían que se iban a arrepentir, y, tantoinsistir aceptaron el dinero.A la hora de comer me dijo un hombre que era demasiado pequeño para comer tanto, y yo le dije:- ¡Ja, ja, ja! Verás que no soy un niño como tú crees.Empezamos a comer y la comida estaba buenísima y al final de la cena el hombre estaba alucinando porque comí más que él y todos los amigos de mi padre acabaron animándome para que comiera más y diciendo:-¡Adrián, Adrián, Adrián!Todos gritaban intentando hacer que coma más, aún así lo importante es que todo lo que comí estaba buenísimo.

A partir de entonces, a mi padre nunca más le han rechazado el dinero.

Autor: Adrián Santacruz Alonso

UN BUEN DIA DE PLAYA

Un día de verano me fui con mi abuela, mi tío, mi madre y mi abuelo, a un apartamento de Isla con forma de seta. Tenía dos habitaciones y cuatro camas, con vistas al mar y una terraza.

Cuando fui a la playa vi que la marea estaba muy baja, así que me costó poco cruzar la ría de agua salada, pero a mi madre se le mojaron varias cosas. Cuando llegamos mi tío se acordó de que había una balsa en el apartamento y volvió rápidamente.

Hasta que volvió me divertí tocando las diferentes formas que tenían las conchas y cuando encontré una concha de un tamaño considerable fui rápidamente donde mi madre gritando.- Mira, mira qué concha tan chula.En un momento me puse a coger cangrejos pero al ir descalzo por las rocas me corté un trozo del pulgar y fui rápidamente a donde mi madre y ella me dijo que aunque me escociese me metiera en el agua para que me curara un poco. Cuando llegó mi tío con la balsa me monté y fui navegando por la ría, mientras que con la red iba intentando coger algún pez, pero no conseguí coger ningún pez.

Al final del día me fui a casa y me di una ducha caliente, cené y me fui a la cama para estar listo para el siguiente día.

Autor: MARCO SANTANO 5.A

Un día especial para el gusto

Eran fiestas de San Prudencio,el viernes. Esa mañana era soleada.Yo ya estaba despierta, por el pío-pío de los pajaritos. Mi hermana y mi prima también estaban despiertas, así que empecé a hablar en voz alta. Entonces mis padres se despertarón y fuimos a desayunar. Al acabar el desayuno, fui al bar de mis tíos.Yo le ayudé a mi tía a servir las bebidas, limpiar los vasos, los platitos y a recopilar los vasos en las baldas de cristal en tres líneas.Como no había mucha gente, mi tía llenó un plato de cacahuetes para que nos los comiéramos. Nos sentamos en una mesa. Cuando estábamos acabando los cacahuetes vino un chico y mi tía se levantó para servirle. Al minuto vino una pandilla de ocho chicos y mi tío se levantó y le ayudó a mi tía. Entonces yo, que no estaba ocupada, fui y limpié la mesa y les ayudé.Yo le pregunté a mi tío:- Nos hemos quedado sin vasos de cerveza.¿Qué vamos a hacer?Mi tío no se preocupó, pero yo sí. Cuando entró un cliente, a casa. Mi madre y mi abuela habían hecho barbacoa, con distintas carnes: panceta, chorizo y morcilla.Todo estaba muy rico, pero la panceta y el chorizo más que la morcilla. Al final volví al bar. Me tomé un kas de limón porque tenía sed e hice todo lo que había hecho en la mñana. Cuando acabó el día dormí en la casa que iba al lado del bar.

Autora: Sarah 5.A

EL RUIDO

Un día en clase, me di cuenta de que el ser humano tenía cinco sentidos:El olfato, el gusto, la vista, la vista y el oído. Hoy os voy a hablar del oído.

Un día por la noche le dije a mi padre que, qué era ese ruido, y él también lo estaba escuchando el ruido, y lyo le dije :- ¿Nos levantamos?Y él me dijo- ¡Vale¡ Entonces nos levantamos y descubrimos que era el agua que caía al fregadero y hacía ruido. En ese momento decidimos entre los dos buscar una solución. La primera que se nos ocurrió fue cortar el agua, porque no dejaba de caer aunque cerráramos el grifo. La segunda fue taparnos con las almohadas bien bien fuerte los oídos, para no escuchar nada, tampoco resultó. Tras mucho pensar decidimos llamar a un fontanero.

Al final después de llamar a un fontanero pudimos dormir bien sin ruidos, por eso a la mañana me sentí más descansado y con más energía y mejor. AUTOR: IBAI 5.A