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Los laboratorios militares secretos de Rusia donde Putin prepara las guerras del futuro... y del presente MSN Noticias, 19 de Marzo 2018
© Proporcionado por THX Medios S.A.
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El Centro de Defensa Biológica en Ekaterimburgo, Rusia, en 2015. Los edificios marcados en amarillos son los que más cambios experimentaron desde 2005. Allí se produce el agente químico para el ántrax (Centro de Estudios para la No Proliferación) Vladimir Putin sabía que la carrera tecnológica sería difícil de igualar. Que Estados Unidos no había detenido nunca su desarrollo militar en defensa de sus fronteras y que los años de ventaja que dio Rusia tras el desmembramiento de la Unión Soviética habían sido demasiado. Fue por eso que el nuevo zar ruso -ayer fue reelegido por tercera vez, convirtiéndose en el segundo jerarca con mayor tiempo en el poder de la superpotencia- ideó un nuevo frente armamentístico: el químico. Lo anunció en 2012 durante su anterior campaña presidencial -otra farsa democrática hacia el mundo- en la que explicó que desarrollaría nuevas armas que confrontarían con las armas tecnológicas de Occidente, sobre todo Estados Unidos. Se basarían en nuevos principios "físicos, genéticos". E incluirían lo que llamó "ciencia psicofísica". "Ese sistema de armas de alta tecnología será comparable en efecto con armas nucleares, pero serán más aceptables en términos de ideología política y militar", había anunciado Putin en un ensayo escrito en Rossiyskaya Gazeta, un diario oficial. Pero, ¿dónde desarrollaría el jefe del régimen esas armas tan temibles? En los antiguos laboratorios secretos que florecieron durante la Unión Soviética y que desde la llegada al poder del ex agente de la KGB tendrían una nueva primavera. Se trata de doce institutos que formaron parte de los entes de armas biológicas y químicas durante la Guerra Fría. Bajo la administración de Putin, fueron ampliados y mejorados con tecnología de avanzada, para poder cumplir los deseos
del jerarca. Todos están bajo el paraguas del Ministeriode Defensa ruso y bajo la lupa de los Estados Unidos. El Kremlin nunca negó la existencia de estos laboratorios genéticos. Pero negó que fueran desarrollados para ataques, sino que fueron pensados para la defensa del país. Son legales, agregan. Las explicaciones rusas parecen insuficientes luego de que se desatara una ola de denuncias mundial contra Rusia por el envenenamiento en el Reino Unido de Sergei Skripal -un ex espía ruso- y su hija Yulia. Skripal fue víctima del uso de un agente nervioso letal desarrollado por científicos militares rusos años atrás: el Novichok. El contraataque propagandístico ruso, también parece salido de un manual. Culpan a Estados Unidos de estar haciendo experimentos con poblaciones enteras al dejar libre enfermedades como el ébola o el zika. Lo cierto es que tanto Skripal como su hija continúan en estado crítico. Estaban refugiados en el Reino Unido desde 2010. Durante la Guerra Fría, los jefes soviéticos destinaron miles de millones de dólares en la creación de once diferentes patógenos en formato de armas masivas. Esos patógenos incluían ántrax y plagas. Fue durante ese tiempo que desarrollaron el Novichok que jaquea la vida de Skripal. Es la cuarta generación de agentes nerviosos más letal que el VX, el que usara Corea del Norte para asesinar al hermano del dictador Kim Jong-un. Pero Moscú despierta sospechas por más acciones deliberadas. Se niega sistemáticamente a dejar ingresar a sus laboratorios a delegaciones internacionales para que puedan observar qué tipo de desarrollos químicos y genéticos están realizando. Tampoco quieren dar pruebas de que el arsenal químico y letal que se levantó durante los años de la Unión Soviética fueron destruidos. Al parecer, esas armas no fueron destruidas. Pero además, hay un factor clave del que Putin no puede escapar. Su apoyo a la dictadura de Siria. Bashar Al-Assad, el jefe del régimen totalitario sirio, ha usado diferentes tipos de armas químicas mortales contra su propia población. Y Rusia ha apoyado esas iniciativas, de acuerdo a Thomas Countryman, ex asistente de Seguridad Internacional del Departamento de Estado durante la administración Obama. "La defensa total de Moscú del uso de armas químicas por parte de Siria y, especialmente, su aparente uso de agentes químicos en asesinatos selectivos solo aumentan las preocupaciones", indicó el experto en diálogo con The Washington Post.
Estados Unidos tuvo su propio desarrollo de armas químicas, pero fue durante la presidencia de Richard Nixon que el programa se desmanteló. Era 1969. Pero la Unión Soviética nunca creyó que ello fuera cierto y continuó en secreto con su propio desarrollo en absoluto hermetismo. Fue Boris Yeltsin, en 1992, quien reconoció que los laboratorios secretos se habían mantenido en funcionamiento pese a las anteriores negativas y la presión internacional. Tras esa admisión, se ideó un plan de desmantelamiento. Pero Rusia no permitió que observadores vieran los laboratorios ni sus armas mortales. Y con la llegada de Putin al poder, esas intenciones de Occidente se congelaron. En su segunda presidencia, el programa resucitó. Las pruebas más evidentes de esa resucitación son las imágenes satelitales sobre un laboratorio emblemático y con una historia trágica detrás: Ekaterimburgo, donde en 1979 más de 100 trabajadores murieron por el escape de ántrax. Las fotografías muestran que ese sitio experimentó un crecimiento increíble en los últimos años, con nuevos edificios y lugares de testeos. Allí se produce bacillus anthracis, la bacteria que causa el ántrax. Lo mismo ocurrió en Shikhany, al sur de Rusia, donde otras imágenes también dan cuenta de maquinaria destinada a la producción microbiótica. Los ejemplos se multiplican. Y aunque el Kremlin intente ocultarlos, su guerra biológica ya comenzó. VER MÁS EN MSN: Los mayores desastres militares de la historia
© Sovfoto/UIG via Getty Images
Las guerras se ganan y se pierden por genio e ineptitud. Las malas decisiones, descuidos momentáneos o a veces sólo el exceso de confianza pueden cambiar el resultado de un conflicto y provocar la pérdida de miles de vidas inocentes y la derrota de un país. He aquí un vistazo a algunos de los peores desastres militares de la historia.
© SERGEI KARPUKHIN/REUTERS/Reuters
LA INVASIÓN SOVIÉTICA DE AFGANISTÁN (1979)
Una guerra de una década vio a la Unión Soviética apoyar al gobierno comunista afgano en su lucha contra los muyahidines (un grupo insurgente islámico). Sin embargo, los muyahidines tenían el respaldo de Estados Unidos y, como resultado, la guerra se alargó durante años, costando miles de vidas. El fracaso del intento de deshacerse de los insurgentes y el baño de sangre que tuvo como resultado hicieron que finalmente los soviéticos se retirasen después de diez largos años.
© PRENSA LATINA/REUTERS/Reuters
LA BAHÍA DE COCHINOS (1961)
En 1961, el gobierno estadounidense envió a un grupo paramilitar auspiciado por la CIA a Cuba en un intento de derrocar al gobierno comunista de Fidel Castro. Sin embargo, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba, encabezadas por Castro, pudieron con las fuerzas estadounidenses invasoras en el plazo de tres días. La mayoría de los soldados capturados fueron interrogados y metidos entre rejas. La victoria sobre Estados Unidos fortaleció el liderazgo de Castro y forjó lazos más fuertes con la Unión Soviética.
(En la foto) El presidente cubano Fidel Castro (tercera fila, der.) entra en un juicio público a los miembros capturados (sentados) de la fallida invasión de Bahía de Cochinos, en La Habana.
© AP Photo
LA GUERRA DE VIETNAM (1955 - 1976)
Otro ejemplo de la guerra de poder entre el comunismo (Unión Soviética) y el anti-comunismo (Estados Unidos) se prolongó durante más de dos décadas, costando millones de vidas. Vietnam del Norte, con el apoyo comunista, y el Sur, con el apoyo de Estados Unidos, mantuvieron un enfrentamiento de fuerzas respaldadas sin un resultado concreto.
© RCAHMS/PA Archive/Press Association Images/Press Association
OPERACIÓN MARKET GARDEN, SEGUNDA GUERRA MUNDIAL (1939-1945)
En septiembre de 1944, las fuerzas aliadas intentaron sin éxito derrotar a Alemania durante la Segunda Guerra Mundial. El general Bernard Montgomery, de Inglaterra, utilizó operaciones aerotransportadas a gran escala para avanzar en Alemania y también alcanzó un éxito inicial mediante la toma de una serie de puentes. Sin embargo, los británicos subestimaron el contraataque de Alemania y finalmente se vieron obligados a retirarse.
© ullstein bild/ullstein bild via Getty Images/Getty Images
OPERACIÓN BARBARROJA, SEGUNDA GUERRA MUNDIAL(1939-1945)
La Operación Barbarroja fue el resultado de la estrategia de Hitler de dividir su ejército para invadir la Unión Soviética durante la Segunda Guerra Mundial. Más de cuatro millones de soldados alemanes invadieron la Unión Soviética, pero, con el tiempo, los alemanes perdieron la guerra. (En la foto) soldados alemanes reciben una cálida bienvenida por parte de los lugareños después de entrar en una aldea ucraniana.
© LAPI/Roger Viollet/Getty Images
LA LÍNEA MAGINOT (1935-1969)
Poco después de la Primera Guerra Mundial, Francia comenzó a fortificar sus fronteras para evitar invasiones, especialmente de Alemania e Italia. La Línea Maginot era una línea de obstáculos y armas que se construyó a lo largo de las fronteras de Francia con Alemania y Luxemburgo. Sin embargo, no se hizo ninguna fortificación en la frontera con Bélgica, lo que permitió a las fuerzas alemanas invadir y conquistar Francia en la Segunda Guerra Mundial en cuestión de sólo seis semanas.
© General Photographic Agency/Getty Images
LA BATALLA DE VERDÚN (1916)
La batalla entre Alemania y Francia, que duró de febrero a diciembre de 1916, durante la Primera Guerra Mundial, tuvo como resultado más de 700.000 víctimas. Las fuerzas alemanas comenzaron el asalto a Francia, con intensos bombardeos, en un intento de conquistar los altos del Meuse, en el noreste de Francia. Sin embargo, el ejército francés se apresuró a adaptar sus tácticas y luchó hasta que los alemanes fueron derrotados.
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LA BATALLA DEL SOMME, PRIMERA GUERRA MUNDIAL (1914-1918)
Se llevó más de 100.000 vidas, por lo que se considera una de las batallas más sangrientas de la historia. Las fuerzas francesas y británicas lucharon contra el imperio alemán durante más de cuatro meses en el río Somme, en Francia. La Fuerza Expedicionaria Británica (BEF) y el ejército francés fueron criticados por su batalla ofensiva.
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LA CARGA DE PICKETT (1863)
La carga de Pickett, que toma el nombre del mayor general George Pickett, fue un asalto de infantería ordenado por el general confederado Robert E. Lee contra posiciones de la Unión de George G. Meade en el cementerio Ridge. Pero el ataque no pudo acabar de forma efectiva con la batalla de Gettysburg, que costó más de 28.000 vidas.
© AP Photo/Timothy Jacobsen
LA BATALLA DE ANTIETAM, GUERRA CIVIL ESTADOUNIDENSE (1861-1865)
Una simple decisión del general Ambrose Burnside de cruzar el río Potomac con sólo 12.000 hombres provocó uno de los días más sangrientos de la guerra civil estadounidense. A pesar de saber que sus tropas serían fácilmente superadas en número, el general Ambrose fue a luchar contra la Confederación.
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EL LIDERAZGO DEL GENERAL BENJAMIN FRANKLIN BUTLER (DÉCADA DE 1860)
Durante la guerra civil estadounidense, el principal general del Ejército de la Unión, Benjamin Franklin Butler, tomó decisiones muy polémicas con respecto al contrabando de esclavos en servicio a los objetivos militares. Esto llevó al auge político de la idea de incluir la liberación y la abolición de la esclavitud como objetivos oficiales de la guerra para el ejército de la Unión.
© mj0007/Getty Images
EL ÁLAMO (FEBRERO DE 1836)
Ebrio de poder, el general mexicano Antonio López de Santa Anna quiso arremeter contra el Álamo en su camino a través de Texas. Su decisión superflua dio una oportunidad a las fuerzas texanas para reunirse y luego provocó su derrota ante Texas, lo que condujo al nacimiento de la República de Texas.
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LA BATALLA DE WATERLOO, ÚLTIMA GUERRA NAPOLEÓNICA (1815)
Cometiendo errores tácticos, Napoleón pidió al mariscal Michel Ney que tomara las riendas de la batalla de Waterloo a causa de su mala salud. La decisión llevó a su derrota final en la guerra y el fin de su era. Michel Ney era incompetente para llevar a cabo una estrategia ganadora y repitió los mismos ataques en numerosas ocasiones, lo que condujo a la derrota francesa.
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LA INVASIÓN FRANCESA DE RUSIA (1812)
El emperador de Francia Napoleón Bonaparte trató de invadir Rusia durante el invierno. Un error en la elección de la temporada para combatir a los rusos causó una derrota aplastante que tuvo como resultado la retirada de las tropas francesas de Rusia.
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LA DERROTA DE LA ARMADA ESPAÑOLA (1588)
Otro caso de exceso de confianza en una guerra. El duque de Medina creía que podría derrotar a la pequeña flota inglesa durante la guerra, pero la pequeña armada inglesa se las apañó para cambiar el resultado final.
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BATALLA DE CARRAS (44 A.C.)
La batalla de Carras dio lugar a una de las peores derrotas de la historia de Roma. Craso, el hombre más rico de Roma, decidió invadir Partia sin el consentimiento del Senado. Craso estaba seguro de que la superioridad numérica del ejército romano daría como resultado una derrota fácil del Imperio Parto. Pero el ejército partiano mostró un gran resistencia bajo los mandos del general Surena y ganó la batalla.
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